Universidad Metropolitana Latin Campus DERECHO AGRARIO EN MEXICO OSCAR ARTURO GUTIERREZ ONTIVEROS 1 INTRODUCCIÓN GENERAL El hacer la compilación general de varios temas de derecho agrario mexicano lleva por objetivo el dar a conocer desde su origen y hasta lo posible en nuestra actualidad el proceso y el objetivo es el interés que se tiene por mejorar las condiciones que existen en el campo mexicano. Se acepta de manera general, de manera tácita o expresa que los que habitan el medio rural mexicano sufren realmente de pobreza extrema, la llamaría yo miseria, y por lo tanto también sufren de la discriminación, así como el que la última manera de combatir esa miseria en forma real es por medio de la generación de riqueza. Todas las propuestas son variadas, pues son muy vastos los aspectos del medio rural, aquí se menciona algo de su historia y su desarrollo a través de los tiempos, para identificar su inicio y de dónde venimos y la realidad de por qué el campo mexicano se vive de tal manera. Otros presentan propuestas más concretas para mejorar las supuestas figuras jurídicas que en su letra dicen una gran justa demanda de mejorar dicho medio rural y las condiciones generales de vida, que puedan cambiar la triste realidad actual. Lo que hay que destacar en mi percepción al retomar los temas agrarios en México es que hay una pobreza generalizada en este medio rural mexicano que resulta que gran parte de la población nacional que se encuentra en dicho estrato socio-económico (casi 31 millones de personas), vivan en Estados Unidos. Esto es provocado por que hay dos situaciones en nuestro México lindo y querido; una que no se brindan las suficientes oportunidades para que sus pobladores puedan por lo menos vivir dignamente en su medio rural y la otra es que el sistema jurídico de Los Estados Unidos de Norteamérica proporciona las figuras jurídicas necesarias para que las personas puedan desarrollarse en forma individual, sin ninguna distinción de si son inmigrantes o nacionales. La mitad o más de la mitad de la población de nuestro país vive en el campo o está relacionada con este sector, y que también la humanidad depende de los alimentos productivos del campo. Y es importante dar a conocer y señalar las actividades de tipo jurídico para no ser ignorantes del derecho agrario, de que existen leyes, reglamentos, reformas a dichos artículos en benéfico nada más y nada menos de los actores directos del campo, pero en la práctica no pasa, ni siquiera se enteren de que hay estancias que asesoran y apoyan a la gente del campo, para elevar, cambiar, ayudar a tener una mejor calidad de vida. 2 La necesidad de hacer mejores leyes recae en el poder legislativo, el cual poco y casi nada se preocupa por hacer leyes agrarias en el país, mucho menos en dar a conocer por medio del ejecutivo todo ese mar de ideas y leyes que otorgarían ese mágico estado de la conciencia de conocer las leyes. Es un derecho y una gran necesidad de legislar y cambiar el rumbo del Municipio, del Estado y de la Nación con nuevas opciones y más que en letras muy bien escritas, accionar y trabajar conjuntamente los tres poderes de la nación y coadyuvar en generar más empleos, más que apoyos paternalistas desde que nace el derecho agrario en nuestro país, es hacer digno al campesino no con regalos, dádivas o endeudamiento con bancos para poder tener semilla, fertilizantes, etc., si no con educación y ser solidario, subsidiario y así identificar al campo no como gente pobre, humillada, mal comida, mal vestida, maltratada por otros estratos social. En este texto se podrá encontrar desde el inicio como una necesidad de crear un derecho agrario en México, pasando por la época pre-colonial, Colonial, México Independiente, Posrevolucionario, y Contemporáneo, se observan los cambios y las creaciones de las necesidades de regular al campo mexicano, con todas sus bondades y su problemática social, como conocer los tipos de autonomía del derecho, en su estrato agrario, y que en un gran porcentaje del crecimiento depende su economía el país, aunque han cambiado los tiempos y su actividad preponderante no es la agricultura, ya es la industrias, bienes y servicios. Todo gracias a la apertura comercial del famoso Tratado de Libre Comercio de América Latina, y donde se concentraron los grandes monopolios comerciales que desencadenaron y saturaron los grandes mercados entre los países miembros de dicho tratado. Han sido años de lucha social y en su momento de guerras tal vez, todo esto con el fin de que la tierra tenga el marco jurídico que permita a los que desean tener la seguridad necesaria para trabajarla. El derecho es el espíritu de un pueblo, el poder convivir los seres humanos en armonía total, su bandera para defender a la nación o al hombre que se agrede física o económicamente. El derecho agrario como producto social, es dinámico y en realidad aunque no lo pareciera en la práctica está en constante movimiento, en transformación, ha sido un grave error considerarlo que existe un sentido de identidad entre el derecho agrario y la reforma agraria y entre ésta y el reparto de tierras. Se destaca el estudio de las formas de asociarse para la producción, que regula la legislación agraria, como instrumentos que permiten conjuntarse los esfuerzos para el mejor 3 aprovechamiento de las tierras ejidales y comunales, así como para su comercialización de servicios y otros objetos que les permitan a los ejidatarios y los comuneros, así como a los ejidos y comunidades, el óptimo desarrollo de sus actividades. De nada sirve hacer estas compilaciones sobre al agro mexicano si verdaderamente no hay cambio y nuevas formas de legislar, de dar un giro total y que así renazca el agro mexicano, que cada trabajador del campo se sienta apoyado, digno. La lucha continúa y leyes… leyes hay muchas y para muestra un botón, y sea el tipo de derecho que sea, si no se acatan y aplican al 100% esas leyes que en letra son perfectas… difícilmente nuestro país va a poder llegar a latitudes de gran poder. Agradezco a la Universidad Metropolitana el poder crear esta antología para dar a conocer y promover como una obligación para el alumno de derecho y dejar a tras si no totalmente, si un poco la ignorancia de dichas leyes. 4 CAPITULO I EL DERECHO AGRARIO EN MEXICO INTRODUCCION Se remontará este tema a los inicios de la época pre colonial y presentar de forma un tanto global de esta rama del derecho, a fin de identificar los conceptos básicos que dan la forma y el surgimiento y que permitan su fácil comprensión, para que ya adentrados en el tema observemos su evolución hasta llegar a nuestros días actuales, de acuerdo con las modalidades que le han impuesto a todos esos reclamos sociales y todo lo relativo a la modernidad de los tiempos requerida. Se escriben de manera general los diferentes aspectos generales que permiten identificar y conocer la esencia del derecho agrario sin hacer un análisis tan exhaustivo que no lleva a nada, solo nos apoyaremos en sus ideas y así poder expresar puntos de vista muy particulares. 5 1.1 ANTECEDENTES HISTORICOS “Los antecedentes históricos, sociológicos y políticos en México, le han dado a su Derecho Agrario una importancia progresiva que se desarrolló paralelamente con su devenir social. Con cuánta razón afirma el agrarista internacional Bernardino C. Horne que “la tierra es el punto de partida. Su distribución, la forma en que se divide y explota, repercute sobre la economía y organización de cada país. A ello se vincula la prosperidad o el bienestar de los habitantes y hasta su sistema político. La tierra es la base principal de la producción que da vida a los pueblos. De ahí que su régimen se vincule a las luchas sociales de todas las naciones, en distintas épocas. En México nuestros problemas agrícolas y agrarios, no constituyen la cúspide angulosa de una situación cuya gravedad fue repentina; por el contrario, el programa agrario se desenvuelve lenta, pero estrechamente ligado a la singular trayectoria histórica de México. 1.2 ÉPOCA PRECOLONIAL La gente del pueblo poseía tierras en pequeñas extensiones, pues el Calpulli era una pequeña parcela y pertenecía al Calputlalli como comunidad. Cuando los conquistadores europeos en el siglo XV arribaron continente americano y lo sometieron, el contraste de razas y culturas motivó polémicas condenando o defendiendo a los indígenas. Teóricamente los juristas, teólogos y moralistas comprendieron y tratar de proteger las mejores instituciones indígenas; pero prácticamente, desde la llegada de Cristóbal Colón a la Española y de Cortés a la Nueva España, las necesidades políticas y fiscales desvirtuaron las buenas intenciones y las órdenes de los reyes españoles. 1.3 ETAPA COLONIAL Recién realizada la conquista era lógico que los españoles se vieran obligados a vivir en los pueblos y ciudades aborígenes y que en recompensa a sus hazañas e inversiones personales exigieran las poeínas, caballerías, mercedes, tierras de común, repartimiento, propios y dehesas, que necesitaban tomando las tierras de los pueblos conquistados. Las órdenes legislativas indianas positivas eran justas; pero en la realidad se acataban, pero no se cumplían. La encomienda no fue provisional y con el tiempo se concedieron hasta cinco vidas”. “Cuando las ideas independistas aparecieron, la corona española intentó resolver rápidamente la situación reinante n contrastada, pero a pesar de sus bandos, la población indígena rural ingresó a las filas independientes. 6 1.4 LA CONFORMACION DE LOS LATIFUNDIOS “En España, y específicamente en Castilla, la encomienda existió, hasta el momento en que se establecieron los grandes señoríos que marcaron el punto de ruptura entre las pequeñas explotaciones territoriales y la formación del territorio señorial de corte feudal. La unión de reino de Castilla con el de Aragón marco la entrada de España en el capitalismo moderno, cuya necesidad de expansión mercantil requirió de oro y su transformación en un sólido sistema monetario. El descubrimiento de las Indias occidentales y su conquista aporto a la Metrópoli Española los metales necesarios para la consolidación de su sistema monetario así como los productos agrícolas que en abundancia le dieron la riqueza para consolidar el sistema capitalista. Ello constituyo una primera etapa en la época de capitalización de España, independientemente de que las formas de producción fueran las encomiendas y los repartimientos indianos. Según señala Guadalupe Rivera, la forma de consolidación de la gran propiedad fue siempre la misa: los hispanos se convirtieron de encomenderos en hacendados en virtud de la obtención de mercedes y gracias y de la compra ilegal de tierras mercedadas a favor de terceros. La condición de la mano de obra obtenida primero en la encomienda, después en los repartimientos y finalmente como fuerza de trabajo cautiva, bien por el control de la paga a los peones, bien por los adeudos contraídos por los mismos, permitió la acumulación de propiedades y el control de una agricultura monopólica apoyada en los grandes latifundios. 1.5 MEXICO INDEPENDIENTE Y CONTEMPORANEO El gobierno del México independiente encontró problemas agrarios ya definidos, pero todas las soluciones que legisló se fundaron en planteamientos incompletos y erróneos de funestas consecuencias, pues remitieron la solución a colonizaciones agrícolas en terrenos baldíos, no propios para cultivo. Toda la legislación parte del falso supuesto de que la sola distribución poblatoria resolvería la mala distribución territorial. Sin embargo, la experiencia obtenida no fue sistematizada para provecho de futuras soluciones de hecho o legislativas; por lo contrario, se dictaron más decretos sobre colonización, pero los de 1875 y 1883 autorizaron a compañías particulares para que realizaran los deslindes territoriales. Cuando el embate revolucionario de 1910 triunfó en México era ya clara una Doctrina Agraria que en su más pura esencia conjugaba los derechos individuales con una necesidad de justicia social. Así llegó a los artículos 27 y 123 7 constitucionales el 5 de febrero de 1917. Las tendencias sociales, los anhelos populares transformaron en formas jurídicas fundamentales, pero esto no sucedió en México a la manera tradicional, sino que se crearon innovaciones de fondo con Tras cuatro siglos de tanteos desordenados, las adicciones al Plan de Guadalupe hechas en Veracruz el 12 de diciembre de 1914, la ley del 6 de enero de 1915, y la Constitución Federal del 5 de Febrero de 1917, iniciaron en el siglo XX una nueva era para el derecho social y un derrotero autónomo para el Derecho Agrario Mexicano.” 1.6 RAZONES JURIDICAS QUE FUNDAN ESTE ESTUDIO Las razones históricas que explican el Derecho son solo acicates que despiertan nuestro interés jurídico conduciéndonos de la periferia hacia el centro. Todavía a los argumentos jurídicos, podrían agregarse las razones legislativas que señalan una larga lista de leyes que integran la Reforma Agraria en México a partir de 1915”. 1 1.7 CONCEPTO DERECHO AGRARIO Es más cierto que “el Derecho es producción a la vez que conocimiento del espíritu humano” y que “el derecho responde a una necesidad del hombre y es inseparable de la vida humana”. Lucio Mendieta y Núñez sostiene que el derecho agrario es el conjunto de normas, leyes, reglamentos y disposiciones en general, doctrina y jurisprudencia, que se refieren a la propiedad rústica y a las explotaciones de carácter agrícola. “Según el diccionario de la Real Academia Española, lo rural o lo agrario es lo perteneciente o relativo al campo; el derecho agrario es pues, el conjunto de normas que regulan el ejercicio de las actividades agrarias, o sea el cultivo del fundo, la forestación, la ganadería y las actividades conexas. Martha Chávez Padrón proporciona la siguiente definición: Parte del sistema jurídico que regula la organización territorial rústica, todo lo relacionado con las explotaciones y aprovechamientos que este sistema considera como agrícolas, ganaderos y forestales y algunos otros aprovechamientos colaterales, y la mejor forma de llevarlas a cabo.”2 “Conforme al nuevo marco jurídico, el derecho agrario es el conjunto de normas legales, principios jurídicos, doctrina y criterios jurisprudenciales que regulan las relaciones surgidas entre los sujetos dedicados a la actividad campesina. Esas relaciones derivan de la tenencia de la tierra cuyo destino (agrícola, pecuario o forestal) sea explotarla en forma racional y respetuosa del medio, y mejorar la 8 calidad de vida de las familias rurales mediante una mayor redituabilidad en la producción del sector primario. Para lograr esto, el Estado otorga seguridad jurídica en la tenencia de la tierra, a la vez que permite el esfuerzo asociado entre sujetos agrarios con terceras personas. 1.8 CONCEPTO DE AGRARIO El derecho agrario o derecho rural, como lo llama Eduardo García Máynez, “es la rama del derecho que contiene las normas reguladoras de las relaciones jurídicas concernientes a la agricultura”.3 “Para el doctor Mendieta y Núñez, “la palabra mencionada viene del latín Agrarium, de ager, campo, en consecuencia designa todo lo relativo al campo”. Nótese que la palabra, en su origen, peca de amplia y que el mismo sentido tiene ruri que significa en el campo y campus, campo; la palabra agrario nos facilitara tanto determinar el contenido o la materia del derecho agrario, como la palabra compuesta agrícola. Como más adelante veremos, el Lic. Ángel Cazo, dice que la palabra agrario tiene dos acepciones: “En su acepción restringida agrario debe ser tomado como sinónimo de reparto de tierra, tomando este vocablo a su vez, como sinónimo de suelo”. 4 1 Chávez Padrón, Martha, El Derecho Agrario en México, ed. Porrúa, México 2012, p3 2 Rivera Rodríguez, Isaías, El Nuevo Derecho Agrario Mexicano, ed. Mc Graw Hill, 2ª edición, México 2013, p3 3 González Navarro, Gerardo N. Derecho Agrario, ed. Oxford, México 2013, p11 9 1.9 CONTENIDO DEL DERECHO AGRARIO “El contenido del derecho agrario lo forman sus normas jurídicas vigentes que regulan lo relativo a la propiedad rustica incluyendo toda institución que se relacione con este concepto ya su explotación, a colación de la cual y teniendo en cuenta la planificación agraria, debe incluirse la agricultura, ganadería, silvicultura y actividades que permiten al campesino el aprovechamiento de todos sus recursos, y aquellas que coadyuvan a que dichas actividades den mejores resultados como son las referentes a los aprovechamientos hidráulicos, créditos y sociedades agrícolas, educación rural y agrícola, vías de comunicaciones rurales, seguros agrícolas, seguro social en el campo, higiene y salubridad rural, industrialización agrícola, derecho laboral rural, contratos y concesiones rurales, etc., hasta la organización productiva con todos los renglones que este implica”. 1 1.10 EL DERECHO AGRARIO COMO DERECHO SOCIAL 1.10.1 CLASIFICACION DEL DERECHO “Desde la antigua Roma, al derecho se ha clasificado en público y privado, pero a partir de las modernas constituciones sociales se ha elaborado una nueva clasificación tripartita que lo divide en público, privado y social”: 1.10.2 CLASIFICACION TRADICIONAL: “Desde el punto de vista material, el derecho se divide en dos ramas: la del derecho público, cuando se trata de relaciones de orden público, y la del derecho privado que se refiere a las relaciones, entre particulares. A su vez, el derecho público se le subdivide, en ramas constitucionales, administrativas, penales, procesales e internacionales; dentro de esta subclasificación se incluye es derecho agrario. Por su parte, el derecho privado se subdivide en ramas civiles y mercantiles. 1.10.3 CLASIFICACION MODERNA: Esta clasificación del derecho pugna para una separación entre el derecho público y el derecho social, tomando como base el caso de los grupos sociales más desprotegidos. Estos, que en teoría conservan sus derechos (públicos y privados), en la realidad se encuentran en un plano de desventaja frente al resto de la población para hacer valer tales derechos, debido a sus desigualdades educativas, culturales o económicas. Por ello, esta teoría establece que le conjunto de normas sociales se enfocaran específicamente a garantizarles a esos grupos el acceso a la justicia, elevándolos a un plano de igualdad compensatoria, 10 de manera que se ve la necesidad de una clasificación tripartita del derecho: público, privado y social. El derecho agrario atendiendo al punto de vista de los sujetos a quien va dirigido, también puede clasificarse en individual y colectivo. El derecho agrario individual es aquel que se refiere a todas las disposiciones que consideran al productor agrícola, pecuario o forestal desde el punto de vista interpersonal. A su vez, el derecho agrario colectivo se da sobre la base de todas aquellas relaciones entre núcleos agrarios (ejidos, comunidades) o también entre estos y los productores individuales. 1.11 PRINCIPALES CARACTERISTICAS DEL DERECHO AGRARIO El derecho agrario es eminentemente social, tutelado por la Constitución general de la Republica, y se dirige a proteger los derechos de los individuos más desamparados dedicados a la actividad primaria (agropecuaria y forestal). Su objetivo es otorgar seguridad y certeza jurídica a la tenencia de la tierra; asimismo, por medio de los procesos de reforma agraria y desarrollo rural busca la superación dedicado a esta actividad. 1.12 FUENTES DEL DERECHO AGRARIO Fuentes de derecho es el origen de donde emana el conocimiento jurídico, sus principios, sus fundamentos valores y procedimientos, es decir el origen de las normas jurídicas Las fuentes de derecho son tres: formales, reales e histórica. Las fuentes formales se originan mediante el proceso legislativo; también las conforman la jurisprudencia, la investigación científica del derecho y la costumbre. Por fuentes reales se entiende el acto retirado (consuestudo inveteretea) que se produce en la sociedad (fenómeno social) y que dará origen a la legislación. Las fuentes históricas se integran con la ley derogada o abrogada, con todos aquellos documentos pasados y también con la jurisprudencia superada. Las fuentes formales en materia agraria son la legislación agraria vigente, como la ley agraria. Supletoriamente son también fuentes formales: el código civil federal, el código federal de procedimientos civiles, los reglamentos de la ley agraria, etc.; 11 la jurisprudencia dictada por los tribunales del poder judicial de la federación, los usos y costumbres de las comunidades (en términos del artículo 2° de la constitución). 1.12.1 FUENTES FORMALES Las fuentes formales, como sabemos, son los procesos tradicionales de manifestación de las normas, conformadas por la ley, la costumbre, la doctrina y la jurisprudencia, a las que se agregan los principios generales del derecho. 1.12.2 FUENTES REALES Las fuertes reales son las circunstancias efectivas, reales, como el verdadero alcance del contenido de las normas, las necesidades económicas y culturales, el bien común y, de más actualidad, los requerimientos indispensables de capitalización del campo evitar y revertir el minifundismo y, en general, toda la problemática agraria que se gestó ya cumulo a lo largo del periodo de la llamada fase del reparto agrario y que a la postre fue la causa de la reforma constitucional de 1992. 1.12.3 FUENTES HISTORICAS Las fuentes históricas están constituidas por vestigios y documentos tales como murales, artesanías, códices, papiros, libros, que contienen el texto de una o más normas. A lo anterior agregaríamos también la experiencia histórica, muy cercana a la real, peor que está conformada por el efecto directo e indirecto de la aplicación de la norma en un momento y ligar determinados. 1.13 EL PROCESO LEGISLATIVO REALIZADO POR LA AUTORIDAD POLITICAMENTE AUTORIZADA PARA FORMAR NORMAS VIGENTES Mediante este proceso legislativo, obtenemos la ley con sus características típicas y con su validez extrínseca. Cualquiera de las leyes reglamentes circulares, etc.; que integran la legislación agraria mexicana ha pasado por este proceso legislativo hecho por el Poder Legislativo o el Ejecutivo, según el caso para convertirse de proyecto jurídico en ordenamiento legal recordemos que le proceso legislativo típico se integra de diversas etapas que son: la iniciativa, la discusión, la aprobación, la publicación y la iniciación de la vigencia de determinada ley. 12 1.14 LA COSTUMBRE La costumbre puede constituir normas pero solo cuando la fuente formal inmediata, o sea la ley de un sistema positivo la reconoce como tal y la engloba en lo legal, por eso se dice que es mediata. La costumbre secundum legem es el resultado consecuencia de la aplicación de una ley; la costumbre contra legem es la que va contra la ley y la deroga, situación que no se admite en nuestro sistema jurídico; la costumbre praeter legem o delegada es la que suple a la ley en la medida en que esta lo permite, caso que se da en nuestro sistema jurídico. 1.15 EL PROCESO JURISPRUDENCIAL DE INTEGRACION NORMATIVA La ley admite en nuestro sistema jurídico el proceso jurisprudencial para crear normas de aplicación colectiva; de esta manera la jurisprudencia obligatoria puede equipararse a la ley y con las características de esta, siempre y cuando cumpla con los requisitos integrándose de cinco ejecutorias consecutivas, en el mismo sentido, pues solo así será obligatoria para los Magistrados y de Circuito, Jueces de Distrito, Tribunales de los Estados, Distrito Federal y juntas de Conciliación y Arbitraje. 1.16 PROCESO RESOLUTORIO PRESIDENCIAL EN MATERIA AGRARIA En el concepto, también el proceso mediante el cual se dictaba una resolución agraria definitiva en materia agraria, era fuente mediata formal, pues creaba normas que contribuían a regir de manera general, la situación de un grupo determinado de campesinos. 1.17 PRINCIPIO GENERAL DEL DERECHO Indudablemente los conceptos jurídicos fundamentales deben observarse en cualquier manifestación externa y formal del derecho; pero el problema aparece cuando la ley nada dice para resolver un caso concreto, o sea cuando estamos frente a una alaguna legal, o cuando un precepto resulta obscuro y es menester recurrir a la interpretación de el mismo. Es en estos casos cuando la fuente inmediata, la ley, permite que los principios generales del derecho sean fuentes formales, ya que siempre lo serán de la parte esencial de la norma jurídica. La justicia, pero ya con el calificativo de social, resulta principio especifico del derecho agrario así como a otros principios singulares como su concepto de propiedad, a cuyo espíritu deberán aclararse las normas del derecho agrario y llenarse las lagunas legales”.2 13 DERECHO AGRARIO DERECHO AGRARIO CLASIFICACION DERECHO AGRARIO del PUBLICO SOCIAL Jurídico FOFORMALES FUENTES DEL DERECHO REALES HISTORICASJ 1 González Navarro, Gerardo N. Derecho Agrario, ed. Oxford, México 2013, p17 2 Chávez Padrón, Martha, El Derecho Agrario en México, ed. Porrúa, México 2012, p100 14 PRIVADO 1.18 EL PROBLEMA AGRARIO Y LAS NORMAS AGRARIAS EN LA EPOCA PRECOLONIAL Los aztecas tenían una organización político-social y un régimen de tenencia de la tierra que se encontraba en plena evolución, pero también es cierto que las culturas indoamericanas no eran iguales a la de los pueblos europeos contemporáneos. Entre los aztecas hubo un problema agrario porque en el mejor de los casos el pueblo azteca libre podía detentar un pequeño pedazo de tierra a través del Calpulli; pero la inmensa mayoría de los aztecas no libres y de los pueblos sojuzgados labraban las tierras que en grandes extensiones habían sido repartidas graciosamente entre los principales, los guerreros y los sacerdotes; de todas maneras y en el mejor de los casos como dijimos, de lo que sembraban tenían que dar una medida de cada tres en calidad de tributo. Por todo lo anterior notamos que había una defectuosa distubuci0on territorial, pues la tierra se encontraba concentrada en pocas manos que había también una injusta explotación agrícola, porque quienes trabajaban la tierra normalmente no eran dueños de ella y pagaban altos tributos. No es pues de extrañarnos que los pueblos sojuzgados por los mexicas estuvieran inconformes con esta situación y que fueran factor propicio y determinante para ayudar a los españoles a derrocarlos. Así se explica que el 24 de Abril de 1519 llegara Hernán Cortes con un puñado de hombres a San Juan de Ulúa y apenas dos años después el 13 de agosto de 1521 cayera en sus manos Tenochtitlán, diezmada por la peste de viruela traída por los europeos, y con ella todos los pueblos aborígenes. Por otra parte debemos observar que los aztecas tenían sus leyes agrarias para regir esa maravillosa institución llamada Calpulli y que en nuestra legislación de 1915 a 1992 se conservaran aquellas normas de residencia para darle parcela a alguien. Trascendental fue que los aztecas tuvieran un problema agrario respecto de los pueblo sojuzgados y que no lo hubieran resuelto con el sentido social con que trazaron el Calpulli, porque esa fue una de las causas fundamentales de la caída de su imperio ya que como dice Mendieta y Núñez, l agricultura en la época pre colonial por lo que respecta a los pueblos sedentarios, a las monarquías o cacicazgos establecidos definitivamente, era a la industria principal… la agricultura era la base de sustentación de los pueblos del Anáhuac”. 1.19 DISTINTOS TIPOS DE TENENCIA DE LA TIERRA Entre los aztecas solamente el Señor (Tzín) podía disponer de la tierra como propietario y ejercer la plena in rre potestas (derecho de usar, del fruto y de 15 disponer de una cosa). El Señor podía dejar las tierras para sí, llamándose entonces Tlatocalli (tlatoa, mandar; calli, casa) o la repartía entre los Principales (pipíltzin), siguiendo por regla general sus costumbres, pero estas tierras podían volver a poder del Señor cuando este lo desease. Veamos cuales son los tipos de propiedad que emanaban de la voluntad del señor: 1. Pillalli. Clavijero escribió que eran posesiones antiguas de los pipiltzin, transmitidas de padres a hijos, o concedidas por el rey en galardón de los servicios hechos a la colonia. 2. Teotlalpan. Los productos de esta tierra llamada Teotlalpan (tierra de los dioses) estaban destinadas a sufragar los gastos del culto. 3. Milchimalli. Estas tierras estaban destinadas a suministrar víveres al ejército en tiempo de guerra, las cuales se llamaban milchimalli o cacalomilli, según la especie de víveres que daban. 4. Altepetlalli. Había tierras cuyos productos se destinaban a sufragar los gastos del pueblo y Clavijero escribió que el altepetlalli, esto es, de los comunes de las ciudades, se dividían en tantas partes cuantos eran los barrios de aquella población y cada barrio poseía su parte con entera exclusión e independencia de los otros. Esta institución tuvo perfiles similares a la que los españoles llamaron Propios. 5. Calpulli. El Calpulli, como su génesis nominativa lo indica (calli, casa; pulli, agrupación) era una parcela de tierra que se le asignaba a un jefe de familia para el sostenimiento de esta, siempre que perteneciera a un barrio o agrupación de casas, aunque muy al principio el requisito más que de residencia era de parentesco entre las gentes de un mismo barrio. Los requisitos para que una persona tuviera el calpulli y no fuera molestado en el goce del mismo, consistía en ser residente de le barrio del que se tratara y continuar viviendo en él mientras se deseara seguir conservando el calpulli pero además y esto si se dejaba de cultivar un ciclo agrícola, el jefe de familia que detentara el calpulli era llamado y amonestado por el jefe del barrio o calputlalli y si el amonestado reincidía de tal manera que el calpulli dejara de cultivarse durante dos ciclos agrícolas, el jefe de familia perdía el calpulli y este se le asignaba a otra familia que quisiera cultivarlo; en caso de que hubiera conflicto y que se dudara de la equidad de la resolución del jefe de un barrio éste llevaba el asunto al tribunal correspondiente para que se resolviera el caso. 1 1 Chávez Padrón, Martha, El Derecho Agrario en México, ed. Porrúa, México 2012, p126 16 CUESTIONARIO 1.- Menciona como se le nombra a la pequeña parcela de la gente del pueblo en la época pre colonial. 2.- ¿Cuál es la clasificación del derecho como derecho social? 3.- Menciona la clasificación tradicional del derecho 4.- Menciona las principales características del derecho agrario. 5.- Mencione los distintos tipos de tenencia de la tierra época colonial. 6.- ¿Considera importante el estudio del derecho agrario? Explique ¿por qué? 7.-Desde el punto de vista histórico, ¿Cuál es la importancia del estudio del derecho agrario? 8.- ¿Cuál es el ámbito de desarrollo profesional del abogado en esta materia? 9.- En relación al ámbito social, ¿Por qué se debe estudiar el derecho agrario? 10.- ¿Por qué se considera al derecho agrario una disciplina autónoma del derecho? 11.- ¿Qué es el Pillalli? 12.- ¿Qué es el Milchimalli? 13.- ¿Qué es el Teotlalpan? 14.- ¿Qué es el Altepetlalli? 15.- ¿Que es el Calpulli? 17 CAPITULO II LA PROPIEDAD RURAL DURANTE LA COLONIA INTRODUCCIÓN En este pequeño capítulo de la propiedad rural durante la época colonial se describen las diferentes tipos de propiedad y desde el descubrimiento del nuevo continente los Reyes católicos habían acudido al papa Alejandro VI con el objetivo de pedirle que con la autoridad que le confería legitimara su actuar en las tierras que recientemente se habían descubierto y ganado Cristóbal Colón para la Corona de Castilla y mediante diversos documentos que se les conoce como Bulas alejandrinas, se legitima la actuación de la Corona de Castilla en las tierras descubiertas, de que si Dios es el creador de las cosas terrenales y el papa es el representante terrenal de Jesús, entonces ello resulta ser un justo título para legitimar esas dichas tierras. Entonces en esa época la Iglesia imperaba y controlaba la tenencia de la tierra, lo cual afectaba totalmente y eso se ve hasta nuestros tiempos, los dueños realmente de la tierra no son los que la trabajan. En el desarrollo del texto se irá observando cambios, evolución de la tenencia de la tierra, y con ello las leyes apoyaran a este rubro social económico para según elevar la calidad de vida, cosa que no pasa, aun con todo y los levantamientos de fuerzas armadas ya cansadas de maltrato y robo total de su vida misa. 2.1 LA PROPIEDAD RURAL DURANTE LA COLONIA “Durante la época colonial la división de la superficie territorial conquistada estuvo sujeta a las hazañas o inversiones realizadas por los españoles. Así, los pueblos avasallados vieron como sus tierras fueron a dar al patrimonio del Estado peninsular. En tal forma legitimadas las tierras a favor de la Corona española, se constituye la propiedad de ésta así como la personal del monarca, con los que surgen las tierras realengas, que pertenecían al tesoro real e incluían tierras de siembra, montes, pastos y aguas. De ahí se deriva la propiedad inmueble que rige durante el coloniaje y que desde el punto de vista individual incluía: 18 Las mercedes reales. Eran tierras dadas a los conquistadores y colonizadores, cuya superficie variaba en cuanto a su extensión por los méritos del solicitante o la calidad de las tierras. Las mercedes eran provisionales, ya que el titular tenía que cumplir con los requisitos de residencia y de explotación agrícola que se imponían para obtener la propiedad. La caballería. Medida de tierra que se le entregaba el merced a un soldado de caballería. La poenía. Consistía en la tierra entregada en merced a un soldado de infantería Las suertes. Solares de labranza que se daban a los colonos por medio de una capitulación o una merced. La compra venta. El Tesoro Real podía vender las tierras avasalladas por medio de la compra venta a particulares. En cuanto a los medios que disponían tanto las personas morales como las personas físicas para adquirir la propiedad, estos eran: 1. Confirmación. Era un procedimiento por el cual el rey “confirmaba” la tenencia de la tierra a alguien que carecía de títulos sobre ella, o bien cuando su título tuviera algún vicio. 2. Usucapión. Las tierras realengas podían usucapiarse (prescribir) y el termino para ello variaba. 3. Composición. En 1631 los cabildos dispusieron que aquellos que hubieren introducido y usurpado más de lo que les perteneciera, fueran admitidos en cuanto al exceso o moderada composición, despachándole nuevos títulos. Las capitulaciones consistían en los contratos que celebraba la Corona con particulares para la realización de determinadas empresas; así el particular financiaba la empresa a cambio de ciertas prestaciones. Las capitulaciones podían ser de descubrimiento, de explotación o de colonización y mediante este contrato, a la persona que se comprometiera a colonizar se le daba en pago determinada cantidad de tierra, no sin antes deducir los olares del pueblo, el excido, la dehesa, así como otro tanto para los propios del lugar. Las tierras sobrantes se dividían en cuatro partes: Una para el comprometido a hacer el pueblo y las otras tres para repartirse en suertes iguales entre los pobladores. En cuanto a la propiedad colectiva, existían las siguientes: las reducciones, el fundo legal, los ejidos, la dehesa, las tierras de repartimiento, los propios.1 19 Las reducciones. Consistían en pueblos de fundación indígena cuyo objeto era concentrar a los indios para que fueran instruidos en la santa fe católica y sometidos a un orden legal. El fundo legal. Estaba constituido por terrenos disponibles para el asentamiento del pueblo, inicialmente el fundo media 500 varas hacia los cuatro vientos, pero posteriormente por Cédula real del 4 de Junio de 1687 se aumentó la extensión a 600 varas y una superficie de 1 400 000 varas cuadradas, como mínimo ya que se abría la posibilidad de repartirlas a los indios mucha más cantidad según pareciera suficiente al Rey. Los ejidos. Felipe II, por disposición del 1º de diciembre de 1573, ordenó que los sitios en que se formaron los pueblos y las reducciones tuvieran comodidad de aguas, tierras y bosques, entradas, salidas y labranzas y un ejido de una legua de largo, donde los indios pudieran criar sus ganados sin que se revolvieran con otros españoles. Así el ejido español estaba constituido por las tierras que se hallan a la salida del lugar, era común a todos los vecinos y en él no se podía plantar ni labrar. La dehesa. Era un lugar a donde se llevaba a pastar al ganado y, al igual que el ejido, se encontraba a la salida del pueblo. No se podía labrar ni plantar en él. Las tierras de repartimiento. Por disposición de Cédula del 19 de febrero de 1560, los indios que se fueran a vivir a los pueblos de nueva fundación deberían continuar en el goce de las tierras que antes de ser reducidas poseían, las cuales se les dieron por disposición y mercedes especiales, constituyéndose en parcialidades indígenas y de comunidad, es decir, estas tierras de repartimiento se daban en usufructo a las familias que habitaban los pueblos, con la obligación de utilizarlas , y si quedaban vacantes las parcelas, éstas eran repartidas entre quien las solicitaban. Los propios. Tanto los pueblos españoles como los indígenas tenían determinados terrenos que se destinaban a cubrir los gastos públicos. Los ayuntamientos eran los encargados de su administración y los daban a censo enfitéutico o los arrendaban entre los vecinos del pueblo”.1 1 González Navarro, Gerardo N. Derecho Agrario, ed. Oxford, México 2013, p23 20 CUESTIONARIO 1.- Durante la Colonia, ¿quiénes tuvieron sujeta la decisión de usar las superficies territoriales? 2.- ¿Qué es una merced real? 3.- ¿Qué es una caballería? 4.- ¿Qué es la poenía? 5.- ¿Qué son las suertes? 6.- ¿Qué es la compra-venta? 7.- ¿Qué es la confirmación? 8.- ¿Qué es la usucapción? 9.- ¿Qué es la composición? 10.- ¿Qué son las reducciones? 11.- ¿Qué es el fundo legal? 12.- ¿Qué es un ejido? 13.- ¿Qué es la dehesa? 14.- ¿Qué son las tierras de repartimiento? 15.- ¿Qué es un propio? 21 CAPITULO III LA EXPLOTACION AGRICOLA EN LA EPOCA COLONIAL INTRODUCCION La explotación como siempre en nuestro país, en este caso la explotación agrícola y más aún en la época colonial, no era tanta pues las siembras y las cosechas en las haciendas y en los ranchos eran de poca cantidad, y se necesitaba contratar gente que se dedicara exactamente a las actividades agrícolas, los indígenas se contrataban de vez en cuando, esporádicamente, eran los peones de temporada. Todo cambia a partir de la ley del 6 de junio de 1523 sobre el trato a los naturales, que ordenaba que los indios nos e encomendaran, ni depositarlos a ellos en rancho o haciendas, se dispuso que entre ellos y los españoles hubiese una contratación y el comercio de forma voluntaria. Se crea con esto la encomienda para la explotación agrícola de todas las tierras repartidas en la Nueva España, mucho más por esos indios encomendados que por los esclavos o el llamado trabajo de libre concierto, lo cual es explicado en este capítulo. Se explica que hubo cédulas creadas para la protección de los indígenas, la encomienda se sostuvo y así con esto se creaban conflictos entre el principio de libertad y las encomiendas de por vida. Cuando se exceptúa al indígena de la esclavitud también se sostuvo la dicha encomienda, pues así se creía se respetaba el derecho de libertad del indígena, pero en la realidad se le utilizaba para el trabajo agrícola que necesitaba la Nueva España, por medio de la conciencia religiosa y la gran necesidad de satisfacer todo el trabajo que se requería desde el nacimiento y el desarrollo de la Nueva España. 22 3.1 LA EXPLOTACION AGRICOLA “Si la Nueva España tuvo como actividad predominante la agricultura, muy importante resulta investigar de qué manera se realizó y quienes ejecutaron dicho trabajo. Puede sintetizarse entre las instituciones mediante las cuales se llevó a cabo la explotación agrícola en la época colonial y que son: el trabajo agrícola de libre concierto, la encomienda y la esclavitud. 3.3 EL TRABAJO AGRICOLA DE LIBRE CONCIERTO Es probable que esta forma de explotación agrícola fuera la menos usada en etapa colonial, porque en los ranchos y haciendas en la época de recoger la cosecha y en poca cantidad, necesitaron emplear trabajadores agrícolas, ya que los indios encomendados realizaban las faenas rusticas durante todo el año. Desde la ley del 6 de junio de 1523 sobre trato de los naturales (ley XXIV, título I, libro VI) en la cual se ordenaba que los indios no se encomendaran, ni se hiciera depósito de ellos, se dispuso que entre los dicho indios y españoles hay contratación y comercio voluntario, se requería la intervención al principio de loa colonia de la audiencia para evitar la explotación inmoderada. 3.4 LA ENCOMIENDA Es posible que los indígenas encomendados se convirtieran en los llamados peones acasillados de las haciendas, los cuales mencionó nuestra legislación agraria desde 1929 a 1992. En cuanto a la Nueva España, se señala que Carlos V el 26 de junio de 1523 instruyo a Hernán Cortes sobre el trato que debía de darles a los naturales y para que no hiciera repartimiento de hombres en la Nueva España viendo el gran daño que con dichos repartimientos se había hecho a los indígenas; y en la ley I, título V libro VI de las Leyes de Indias, fechada del 26 de junio de 1523, se dispuso que ya que los indios no iban a repartirse, rindieran vasallaje pagando una moderada cantidad de frutos de la tierra, como antes lo habían hecho con sus jefes teules. Con la ley de sucesión del 26 de mayo de 1526 se crearon las encomiendas por más de dos vidas. Desde un principio en relación con la encomienda, Fray Bartolomé de las Casas, tomo la defensa aborigen y para tal efecto desde 1515 se trasladó a las cortes españolas, reiterando repetidamente su protesta contra los abusos de los encomenderos como consecuencia de esto, se quiso evitar que en la encomienda de las islas se trasladaran a Nueva España posteriormente en las juntas de Valladolid y Barcelona, Bartolomé de las Casas expuso sus famosos 20 argumentos a consecuencia de los cuales en 1542 se dictaron las leyes nuevas en 23 las cuales se intentó suprimir la encomienda substituyéndola por el sistema de empadronamiento, tasación y tributación general de los indígenas a favor de la corona y se ordenó que los españoles no tengan mano ni entrada en los indios, ni poder, ni mando alguno, ni haya más del gozar de su tributo con forme a la orden que él, Audiencia o Gobernador, dieren para la cobranza del. 3.5 LA ESCLAVITUD La esclavitud de los indígenas solo fue permitida en dos casos y muy a raíz de la conquista; las dos causas de esclavitud fueron, el cautiverio por guerra justa y el cautiverio por rebelión religiosa. Esta institución fue la causa de la trascendental polémica entre Fray Bartolomé de las Casas y Ginés de Sepúlveda en 1550. Precisamente porque se exceptuó la indígena de la esclavitud, se sostuvo la encomienda, institución en la cual se creía respetar el derecho de libertad del indígena, pero se le utilizaba para que realizara el trabajo agrícola que necesitaba la Nueva España, conciliándose así la exigencia de la conciencia religiosa de esta etapa y la necesidad de satisfacer todo el trabajo que requería el nacimiento y desarrollo de la Nueva España. Todo lo anterior explica porque en la época de la independencia, Don José María Morelos, el 17 de noviembre de 1810, dictó una orden en el cuartel general de Aguacatillo, diciendo que nadie pagaría tributo y que no habría esclavos en lo sucesivo. Por esta disposición deducimos que otra de las causas que explican la guerra de la independencia, fue la esclavitud. El 19 de octubre de 1810 Don Miguel Hidalgo dicto un Bando mediante el cual declaro la abolición de la esclavitud.” 1 1 Chávez Padrón, Martha, El Derecho Agrario en México, ed. Porrúa, México 2012, p177 24 EXPLOTACIÓN AGRICOLA EXPLOTACIÓN EPOCA COLONIAL LIBRE CONCIERTO LA ENCOMIENDA Jurídico LALA ESCLAVITUD CUESTIONARIO 1.- ¿Qué es el libre concierto? 2.- ¿Qué es la encomienda? 3.- ¿Qué es la esclavitud en la época de la Colonia en México? 25 CAPITULO IV LA PROPIEDAD DE LOS ESPAÑOLES, DE LOS INDIGENAS Y DEL CLERO INTRODUCCION Hay que reconocer que se incorpora la institución de la propiedad privada en la Nueva España que le otorgó desde su origen un carácter social, ya que para concederla mediante merced, exigía la residencia del beneficiario y el cultivo de la tierra, bajo pena de revocación. España fundamenta su derecho territorial en una gran diversidad de precedentes jurídicos, entre ellos los fueros. Como antecedente inmediato a la conquista encontramos la estructura de tenencia de la tierra existente en los pueblos que conformaban la triple alianza: mexicas o aztecas, tecpanecas y alcohuas. Existían muy marcadamente las diferentes propiedades de esa época, los españoles como siempre, se adueñaban de la mayor parte de la tierra, el clero también contaba con su gran poderío y tenencia de la tierra, y por último escalón dejaban a los indígenas, y mentira desde mi punto de vista que la tierra era de quien la trabajaba, desde ese entonces y hasta nuestros días sabemos que eso no es verdad, y que hay cambios en la ley, sí, pero en la realidad no hay ese desarrollo, esa libertad para hacer de la tierra un gran proyecto de nación de comercialización si monopolios de los productos de esa actividad agrícola. En comparación solo cambiaron los roles de los tenedores de las tierras, de los españoles a los estadounidenses, de los del clero a los gobiernos, y de los indígenas a los más pobres de México. 4.1 LA PROPIEDAD DE LOS ESPAÑOLES “Los españoles en la época colonial ocuparon al principio, por lógica necesidad, las ciudades y pueblos aborígenes, apoderándose de estas tierras que ya habían tenido dueño, que estaban cultivadas o por lo menos que se encontraban situadas en zonas pobladas; fue en fechas posteriores a la conquista cuando ellos y sus descendientes, que formaron las castas de los peninsulares y los criollos, se aventuraron a colonizar en territorios no poblados utilizando para ello el sistema; esto explica que aun cuando legalmente se reconoció y protegió al propietario indígena, en la realidad las leyes no se cumplieron. 26 Solamente los españoles y sus descendientes gozaron libremente del sistema educativo colonial y sobre todo de los centros de alta educación; las castas y los indígenas no tenían a su alcanza la educación laica en general y menos en sus fases superiores. Desde un principio Hernán Cortes dicto providencias que dicen por resultado el desarrollo de la agricultura, hiso llevar de Cuba de Santo Domingo y de las demás islas dominadas por España, ganado mayor y menor, la caña dulce que Colon había llevado de las Canarias a las Antillas; pidió al emperador que enviase labradores con toda especie de semillas, que diese orden para que cada barco que marchase de España hacia Méjico llevase cierta cantidad de plantas, pues era el medio mejor de engrandecer al país, y que se dignase allanar los obstáculos que le gobernador de Cuba ponía para que saliesen de ella caballos y yeguas hacia el nuevo reino. Lorenzo de Zavala indico que la inquietud social a finales de la Colonia y principios del siglo XIX se explicó porque las haciendas de ganado mayor lanar eran posesiones de príncipes, pues tenía desde 20 a 30 mil cabezas; las de cultivo, aunque atrasada la agricultura, producían trigo, cebada, maíz, frijol y demás granos alimenticios. En la tierra caliente se cultivaba la caña de azúcar y el café y estos ramos preciosos formaban la riqueza de los propietarios, cuya mayor parte eran españoles y frailes. 4.2 LA PROPIEDAD DE LOS INDIGENAS La idea de destruir la idolatría aborigen y del derecho de conquista dio causa a los españoles conquistadores para que se repartiera entre ellos y de inmediato aquellas propiedades indígenas pertenecientes al Señor (tlatocalli), a los Principales que fueron enemigos (pillalli), a los dioses (teotlalpan) y a los guerreros (milchimalli). Sin embargo, aún los calpullec pasaron a manos de los españoles porque eran propiedades situadas dentro de la ciudad y los conquistadores se asentaron primero en los lugares ya poblados adueñándose de las tierras de esos pueblos. Las leyes del 15 de octubre de 1754, ordenaba Fernando VI ordena que las comunidades de indios se les restituyeran sus tierras de pastos y ejidos; la Real Instrucción del 23 de febrero de 1781 obligó a los indígenas a que obtuvieran una licencia del Juzgado General de Naturales o de la Real Audiencia para que pudieran vender sus propiedades; las instrucciones para evitar la usurpación de las tierras de indios de 11 de febrero de 1791; el Informe del Virrey del 29 de mayo de 1806 del Consulado de Guadalajara que ordenó l distribución de tierras para los padres de familia y los indígenas: Ley del 26 de mayo de 1810 que eximió de tributos a los indios y ordenó se les repartieran tierras de inmediato; la ley del 9 de febrero de 1811 que reconoció el derecho de los naturales y habitantes de 27 América y sembrar y cultivar; el 9 de noviembre de 1812 se ordenó el reparto de tierras a indios casados mayores de veinticinco años y prohibió la encomienda; y el 14 de enero de 1813 se ordenó dotar de terrenos para cultivo a los pueblos y a los vecinos necesitados de tierras. Las leyes citadas nos hacen ver que durante la Colonia, el indígena continuó legalmente siendo el propietario mediante el reconocimiento de sus propiedades hicieron los Gobernantes Españoles; pero la realidad fue otra, lo cual quiere decir que las leyes no se cumplieron. Además, hubo en la Nueva España una diferencia entre los españoles que reservaron privilegios para sí, y los indios y castas que eran los obligados a pagar los tributos, a la servidumbre y esclavitud; así se explica por qué en la Guerra de Independencia don Miguel Hidalgo y Costilla dictó decreto sobre abolición de la esclavitud y los tributos para los indios y las castas, y por qué Morelos en su Bando del 23 de marzo de 1813 declaró la abolición de las calidades de indios, mulatos o mestizos, para que todos se llamasen americanos, que en consecuencia nadie pagase tributo y que los naturales de los pueblos fueran dueños de sus tierras. Así pues, la mayor parte de la población de la Nueva España, indígena o de castas, estaba desposeída de tierras, pues las pocas que tenían eran insuficientes para satisfacer sus necesidades y no eran de tipo privado, todavía tenían tributos a su cargo y sin embargo, eras lo que labraban los campos sin ser dueños de los mismos y sin tener una retribución justa que sirviera para resolver sus problemas económicos. 4.3 PROPIEDAD DEL CLERO Junto con los conquistadores vinieron los frailes, pues el Capítulo de los Descubrimientos de las Leyes de Indias ordenaban que vinieran “con cada uno de los navíos que fueren a descubrir, dos sacerdotes o clérigos, o religiosos, para que se empleen en la conversión de los indios a nuestra Santa Fe Católica”, tal disposición se explica recordando los términos en que se dictaron las Bulas Alejandrinas, la unión entre el Reino y la Iglesia y la obligación de los Reyes Españoles tanto de pacificar y poblar, como de propagar y defender la fe católica. En 1767 Carlos III expulsó a los jesuitas; luego mediante cédula del 26 de marzo de 1769, Carlos III dispuso la enajenación de los bienes de los jesuitas entre los cuales se contaban en la Nueva España 126 haciendas y ranchos; la cedula del 27 de agosto de 1796 grabo con un 15% como derechos por traslación de 28 dominio, los bienes raíces que adquiriese el clero; la cedula del 19 de septiembre de 1798 ordeno la venta de los bienes de cofradías, hospitales, hospicios, casas de expósitos, memorias pías, para pagar las deudas contraídas por Carlos IV y la Nueva España produjo por este concepto 10.500, 000.00 pesos; el citado monarca en 1805 ordeno en calidad de préstamo y con convencimiento del papa Pio VII la enajenación de bienes eclesiásticos que produjera anualmente una cantidad de 200 000 ducados de oro; y en 1808 Napoleón suprimió la inquisición.” 1 4.4 EL PROBLEMA AGRARIO Y LAS NORMAS AGRARIAS EN EL MEXICO INDEPENDIENTE HASTA 1910 4.4.1 LA PROPIEDAD RURAL Y SU EXPLOTACION EN ESTA EPOCA “El México independiente se inició el 20 de septiembre de 1821 con la entrada a la ciudad de México del ejército trigarante; pero en materia agraria, la nueva república tenía que enfrentarse a los hechos que le heredo la Colonia: una defectuosa distribución de tierras y una defectuosa distribución de habitantes, como factores principales, pero no únicos, de un problema agrario único y definido. En los lugares poblados el problema agrario se apreciaba observando una propiedad indígena individual y comunal casi desaparecida y una propiedad siempre creciente en manos del clero y de los españoles y sus descendientes; en los lugares despoblados el aspecto era diverso, pues se trataba de regiones de tierras de mala calidad, sin cultivo y sin pobladores. Las colonizaciones podían ser fomentadas por el estado, por particulares o por empresas privadas y ser internas con elementos nacionales, típicas con extranjeros, y mixtas. A mediados de siglo XX, presenciamos otro cambio en estos conceptos, con la acción de creación de nuevos centros de población, equidad que existió hasta 1992. Durante la etapa comprendida entre 1821y el 23 de junio de 1856 observamos que el problema agrario continuo agravándose en su configuración; se reconoció la existencia de una defectuosa distribución de tierras, pero se legisló para resolver dicho aspecto solo con redistribuir la población, promoviendo la colonización en los terrenos baldíos principalmente de las fronteras y zonas despobladas, desde luego, era inadecuado tratar de resolver un problema agrario ya plenamente formado y compuesto de muchas facetas, tan solo con colonización; y todavía más, de colonización en terrenos no cultivables, como eran los baldíos. 29 Este es el panorama ambiental que nos presenta al existencia de un problema agrario, que el tiempo, el crecimiento poblatorio, los erróneos planteamientos técnicos y las ineficaces leyes agrarias, agudizaron más durante la primera etapa del México independiente”. 2 “En 1810, aprovechando razones coyunturales de índole política exógenas y sumarla a la descomposición socio-económica endógena de la Colonia, se inició la lucha por la independencia de la Nueva España. En efecto, aquí conviene decir, aunque esto podrá generar algún escozor, que gracias al activismo político, intervención y fuerte presencia de Napoleón Bonaparte en los asuntos internos de algunos países de Europa y en nuestro caso, específicamente en España, es decir de una situación política externa, a la nueva España producida, en el océano Atlántico, aunados los elementos de descontento y descomposición domestica que ya se presentaban de naturaleza política, social y económica, se gestó el caldo de cultivo para que se produjera la Independencia de nuestro país, y en cascada, las de los demás que estaban bajo el control de la Corona Española. Siguiendo los pasos y la ruta atrasada por Hidalgo, en esta misma línea de pensamiento se ubica Morelos y Pavón al señalar en uno de los párrafos del Bando, por el cual suprimió las castas y abolió a la esclavitud fechado el 17 de noviembre de 1810, que no hay cajas de comunidad y los indios percibirán los reables, de su tierras como suyas propias. Dos años más tarde, el 29 de enero de 1913, dispuso que los naturales de los pueblos sean dueños de sus tierras y rentas, sin el fraude de entrada en las casas. Que estos puedan entrar en constitución, los que sean aptos para ello, y meses después, cuando el numeral 17 de Los Sentimientos de la Nación, del 14 de septiembre de 1813 determino que a cada uno se le guarden sus propiedades y respete en su casa, como en un asilo sagrado, señaland0 penas a los infractores”. 3 4.4.2 NUEVA ESPAÑA AL MEXICO INDEPENDIENTE “Ahora bien, cerrada al etapa pre colonial de nuestra historia, con el advenimiento de la conquista española de los pueblos primigenios que habitan en estas tierras mesoamericanas, y por ende, de la adjudicación de sus tierras podemos decir que la propiedad originaria de la tierra no cambia en cuanto a la figura gobernante se refiere, es decir en el rey, aunque sí de casa reinante, trasladándose ahora a la corona española, en otras palabras el origen de la propiedad de la tierra paso a ser del rey español mediante la adjudicación a través del mecanismo de la conquista. Las autoridades crearon las figuras de la encomienda y repartimiento a favor de los españoles, en la que estaban consideradas no solo grandes superficies 30 territoriales si no también la asignación de personas nativas para que entre otras cosas, trabajaran la tierra y los adoctrinaran en la religión católica de ahí que a través de mercedes reales, se favorecieran a los súbditos españoles y a sus hijos otorgándoles tierras en propiedad. Un retrato de la situación imperante en esta época, nos la da la pluma del obispo asturiano Manuel Abad y Queipo, quien en 1799, envió al rey una representación sobre la inmunidad personal del clero, la cual controvertí a la real cedula emitida en el mes de Octubre de 1795 en la que defendía la inmunidad de los ministros de la iglesia y de sus templos. Al final de la representación escribía el estado en que se encontraba la nueva España en ese tiempo, calculando su población en aproximadamente 4.5 millones de habitantes. Asimismo señalaba que la Nueva España se dividía en tres clases sociales: Españoles, indios y castas”. 2 LA PROPIEDAD EN MEXICO PLA PROPIEDAD EPOCA COLONIAL ESPAÑOLES INDÍGENAS Jurídico LACLERO 1 Chávez Padrón, Martha, El Derecho Agrario en México, ed. Porrúa, México 2012, p177 2 Pampillo Baliño, Juan Pablo, Munive Paez, Manuel Alexandro, Derecho Agraria y Desarrollo rural, Editorial Porrúa, México, 2013 p. 123 3 Pampillo Baliño, Juan Pablo, Munive Paez, Manuel Alexandro, Derecho Agraria y Desarrollo rural, Editorial Porrúa, México, 2013 p. 126 31 CUESTIONARIO 1.- ¿Quién dictó las providencias que dicen por resultado del desarrollo de la agricultura en Santo Domingo? 2.- ¿Quiénes gozaban del sistema educativo y centros de alta educación en la época colonial? 3.- ¿Qué ley ordenaba a los frailes vinieran con navíos a descubrir los indios y convertirse a la fe católica? 4.- ¿Qué ley y de qué fecha ordenaba Fernando VI que se restituyeran a los indígenas sus ejidos? 5.- ¿Quién expulsó a los jesuitas de la Nueva España? 6.- ¿Quién suprimió la inquisición en 1808? 7.- Explica brevemente cual es la propiedad del clero 8.- Menciona las principales características de la propiedad de los españoles 9.- Has un cuadro sinóptico y muestra en él como se encontraban en la época colonial divididas de acuerdo a la propiedad social, divide al clero y sus propiedades, a los españoles y a los indígenas. 32 CAPITULO V PANORAMA DE LAS DIVERSAS LEGISLACIONES INCIDENTES EN EL MOVIMIENTO ARMADO DE 1910, ASI COMO EN EL TEXTO DEL ART. 27 DE LA CONSTITUCION DE 1917 INTRODUCCION En el amplio panorama de las legislaciones que surgieron del movimiento armado del año 1910 se desprenden las ideas sociales las cuales llevaron a este movimiento revolucionario, y la redacción del art. 27 de la Constitución de 1917, decreto de la ley sobre Ocupación y Enajenación de Terrenos Baldíos, el Decreto sobre Colonización de 1883, y así estas leyes nacen por la gran necesidad de regular el desorden de esa época para poder tener el control en venta a corto y largo plazo del precio de terrenos o de propiedad nacional, quitar impuestos excepto los establecidos para mejoras de la nación, logrando con estas acciones la apertura a la concentración ilimitada de tierras y a grandes injusticias para millones de mexicanos, sus efectos que en casos se intentaron ser suspendidos, y que no se pudieron poner algunas legislaciones en práctica debido al movimiento armado de aquel entonces. Siempre y con el mejor propósito de beneficiar a los habitantes del país a mejorar sus condiciones de trabajo, de tenencia de la tierra y llegar a buen puerto en las relaciones de Estado y civiles dedicados a la parte agraria de la Nación. 5.1 LA LEY DE DESAMORTIZACION “Al hecho de poner en circulación los bienes inmuebles que por alguna razón no pueden ser vendidos se le llama desamortización. Los bienes inmuebles que se hallan amortizados es decir fuera del mercado, se dice que son de manos muertas. El diccionario jurídico dice lo siguiente sobre la desamortización: Desde el siglo X la iglesia prohibió la enajenación de sus propios bienes, salvo en los casos de necesidad (pagos, deudas, redimir cautivos, alimentar a los pobres). Las corporaciones dedicadas a la realización de obras de beneficencia e instrucción también obtuvieron el beneficio de tener sus bienes amortizados. Las llamadas cartas de amortización eran expedidas por los obispos y abades de monasterios de otra parte, por diversas razones, los bienes comunes de los municipios pueblos, villas y lugares, y en México los de las comunidades indígenas, también gozaran del beneficio de la amortización. 33 El presidente Comonfort y su ministro de Hacienda, Miguel Lerdo de Tejada expidieron la Ley de Desamortización del 25 de junio 1856, también llamada ley de Lerdo, la cual si bien tenía por objetivo fundamental dar movimiento a la propiedad inmueble, también originó el despojo de tierras colectivas aun cuando no existía el interés de ocasionar perjuicio alguno a las comunidades, ya que al fraccionarse su superficie debía de ser adjudicada a los condueños en caso de las tierras comunales y no a terceras personas ( a esta razón obedece la actual redacción de la fracc. VIII del art. 27 de la actual Constitución. 5.2 EL ARTÍCULO 27 DE LA CONSTITUCIÓN DE 1857 En 1857 se promulgó la Constitución Política, que en su art. 27 establecía la protección a favor de la propiedad particular. La propiedad de las personas no puede ser ocupada sin un consentimiento, sino por causa de utilidad pública y previa indemnización. De este modo, la propiedad individual solo podía ocuparse por causa de utilidad pública y previa indemnización. Esta redacción fue uno de los obstáculos con los que inicialmente se enfrentó el reformador agrario, porque el gobierno carecía de los recursos suficientes para afrontar dicha responsabilidad. Por ello se suscitó el cambio, al texto actual que en la redacción del Constituyente señala “mediante” y no previa “indemnización”, con lo que se sugiere que puede darse primero la ocupación y con posterioridad el señalado el señalado pago. El segundo párrafo del art. 27 de la Constitución de 1857 establecía: La ley determinará la autoridad que deba hacer la expropiación y de los requisitos con que ésta haya de verificarse. El tercer y último párrafo reviste una gran importancia por su intención de elevar a rango constitucional la incapacidad de las corporaciones civiles y eclesiásticas para administrar bienes y, por ende, para comparecer a juicio a defender su propiedad, retomando el texto del art. 25 de la Ley de Desamortización de 1856. El contenido del citado párrafo es el siguiente: Ninguna corporación civil o eclesiástica, cualquiera que sea su carácter, denominación u objeto, tendrá capacidad legal para adquirir en propiedad o administrar por sí bienes raíces, con la única excepción de los edificios destinados inmediata y directamente al servicio u objeto de la situación. De esta manera y ya elevada a rango constitucional la incapacidad legal de las comunidades, entre otras corporaciones, para defender su patrimonio, llegaron a multiplicarse los despojos de tierras. Esto sirvió como un medio para incrementar, 34 si no ilícita, sí injustamente las desproporcionadas ganancias de las compañías deslindadoras, al abrigo de ordenamientos tales como la Ley de Baldíos de 1863 o el Decreto sobre Colonización y Compañías Deslindadoras del 15 de Diciembre de 1883, pero ante todo la Ley de Ocupación y Enajenación de Terrenos Baldíos de 1894. 5.3 LEY DE NACIONALIZACIÓN DE BIENES ECLESIASTICOS Dicha ley fue promulgada cuando era presidente interino Benito Juárez García el 12 de julio de 1859. Tenía por objeto desaparecer las ordenes monísticas y declarar la separación de la Iglesia y del Estado. En su art. 1º señalaba que entrarían al dominio de la nación todos los bienes del clero secular y regular había estado administrando con diversos títulos, sea cual fuere la clase de predios, derechos y acciones en que consistieran, el nombre y la aplicación que hubieren tenido. Por su parte, el art. 4º impedía que las ofrendas y la indemnización por los servicios que les pidieran los creyentes, pudieran efectuarse con bienes raíces. El art. 5º suprimió las órdenes religiosas regulares, y el art 12 prevenía que los libros, impresos, manuscritos, pinturas, antigüedades y otros objetos pertenecientes a las comunidades religiosas se aplicarían a los museos, liceos, bibliotecas y demás establecimientos públicos.1 5.4 SURGIMIENTO Y UBICACIÓN DEL CONTEXTO CONSTITUCIONAL MEXICANO DERECHO AGRARIO EN EL El derecho agrario se encuentra inmerso desde 1917 en el contexto jurídico de nuestra Carta Magna como un derecho del individua para gozar de los beneficios del reparto agrario. Ello se observa en los debates parlamentarios del Constituyente de Querétaro, en voz de Juan de Dios Bojórquez, diputado constituyente que en su discurso sobre el dictamen del art. 27 constitucional señaló: Necesitamos buscar a todos los hombres de buena voluntad y darles un pedazo de tierra. Antes vi esto como un quijotismo; tenía la idea que en el artículo 27 se colocara un precepto en esta forma: todo mexicano que desee dedicarse a la agricultura, tiene derecho a que el gobierno le proporcione la tierra que necesite. Cabe recordar que en ese entonces la noción del derecho agrario era prácticamente desconocida tanto para el constituyente Queretano, como para los abogados; por ello, no es difícil suponer que haya atraído más la idea de equiparar 35 esta garantía no como social, sino como una prerrogativa individual, es decir, a un derecho del individuo para acceder a la propiedad rural como un medio que le permita subsistir de manera honrada y a la vez, por qué no, resolver el problema de la distribución territorial al elevar a rango constitucional el derecho del individuo a obtener de forma gratuita una dotación de tierras agrícolas, e insertarlo en el contexto. Cabe destacar que la nulidad de las enajenaciones realizadas en contravención a la ley del 25 de junio de 1856, (ley de desamortización) procede cuando no se hubiere hecho el fraccionamiento conforme a esta ley, es decir, dicha normatividad no pretendió despojar de sus tierras a las comunidades, sino que el fraccionamiento de las tierras de los pueblos debía realizarse y adjudicarse a favor de sus moradores, por lo que si la enajenación se realizó a personas extrañas a los pobladores, resulta procedente dicha nulidad, conforme al referido texto constitucional, que en la actualidad se conserva en la fracc. VIII del art 27 del Pacto Federal”.1 5.5 EL PORFIRIATO Y LA REVOLUCIÓN Haremos un breve resumen de los antecedentes y el panorama de la situación en que se encontraba México a principios de nuestro siglo en cuanto a la tenencia de la tierra: a) A partir de la Independencia, la nación se subroga en los derechos de propiedad de la Corona española sobre la Nueva España. b) Al ocurrir la subrogación de derechos, la propiedad inmueble estaba muy concentrada en virtud del sistema de las mercedes reales que concedía la Corona, situación que continúo luego de la Independencia. c) Prácticamente sin tocar los intereses de los grandes terratenientes, durante el periodo de Reforma se impuso a la desamortización de los bienes de las corporaciones civiles y eclesiásticas, incluidos los ayuntamientos y comunidades, y después de la nacionalización de los bienes del clero, lo que incrementó la concentración de tierras en manos de los particulares. d) Con base en objetivos colonizadores, se permitió a ciertas compañías localizar, deslindar y medir los terrenos baldíos a cambio de tierra, lo cual generó toda suerte de despojos, una mayor reconcentración y el latifundismo. e) Cuando la inconformidad social era más que evidente, el gobierno de la República pretendió atenuarla mediante tibias disposiciones, regalando lotes de tierra a los necesitados, pero sin tocar los intereses de los grandes propietarios de tierras, ya metamorfoseados en latifundistas. 36 5.6 PLAN DE AYALA El 28 de noviembre de 1911, Zapata declara traidor a Madero, y elabora este plan que representa la expresión más clara del agrarismo mexicano, que ya contaba con objetivos muy definidos, aunque no muy radicales. Para muchos este plan vendría a complementar la reforma democrática incluida en el plan de San Luis. Antonio Díaz Soto y Gama señaló que contenía tres grandes propuestas: a) Restitución de ejidos: debían reintegrarse las tierras de que hubieren sido despojados los poblados, los cuales debían contar con sus títulos primordiales; la toma de posesión debería ser inmediata y el procedimiento se ventilaría ante tribunales especiales. b) Fraccionamiento de latifundios: debido a la miseria de la gran mayoría de los pueblos y ciudadanos, se ordenaba la expropiación, previa indemnización, de un tercio de dichos latifundios para otorgar ejidos, colonias, fundos legales y campos para siembre. De lo anterior se desprende, que para Zapata, deberían convivir la parcela y la mediana hacienda. Como se puede apreciar, el caudillo de Amecameca nunca consideró la necesidad de soluciones radicales para el problema de la concentración de la propiedad agraria. c) Confiscación de propiedades: Todas las tierras de aquellos que se opusieron al plan deberían ser confiscadas y luego destinadas al pago de indemnizaciones de guerra. En su parte pertinente, el Plan disponía: Plan libertador de los hijos del Estado de Morelos, afiliados al Ejercito Insurgente que defienden al cumplimiento del Plan de San Luis Potosí, con las reformas que ha creído conveniente aumentar en beneficio de la Patria Mexicana…4.- La junta Revolucionaria del Estado de Morelos manifiesta a la Nación bajo formal protesta: Que hace suyo el Plan de San Luis con las adiciones que a continuación se expresan…6.-Que los terrenos, montes y aguas que hayan usurpado los hacendados, científicos o caciques a la sombra de la tiranía y justicia venal, entrarán en posesiones de éstos bienes y muebles desde luego los ciudadanos que tengan sus títulos correspondientes a esas propiedades,, de los cuales han sido despojados de mala fe de nuestros opresores…7.- En virtud de que la inmensa mayoría de los pueblos y ciudadanos mexicanos, no son más dueños del terreno que pisan… por estar monopolizadas en unas cuantas manos las tierras , montes y aguas, por esta causa se expropiaran, previa indemnización de la tercera parte de esos monopolios a esos propietarios de ellas, a fin de que los pueblos y ciudadanos de México tengan ejidos, colonias, fundos legales para 37 pueblos o campos de sembradura de labor y se mejore en todo y para todo la falta de prosperidad y bienestar de los mexicanos…8.- Los hacendados…que se opongan directa o indirectamente al presente plan, se nacionalizarán sus bienes…9.-Para ajustar los procedimientos respecto a los bienes antes mencionados, se aplicarán leyes de desamortización y nacionalización según convengan. El primer acto de dotación de tierras lo realizó el General Lucio Blanco en la hacienda “Los Borregos” de Matamoros, Tamaulipas, el 30 de agosto de 1913, el expediente culminó en resolución presidencial el 26 de octubre de 1938. Como reflejo directo del pensamiento de Emiliano Zapata y sus asesores se sancionó una ley agraria del 26 de octubre de 1915, en la que en forma concreta se especifica el tratamiento que deberá dársele a la propiedad con el motivo del Plan de Ayala. 5.7 EL CONGRESO CONSTITUYENTE DE 1917 En virtud de la relevante personalidad que significó para la consolidación del México moderno, haremos una breve referencia al ideario presentado por Venustiano Carranza en su discurso pronunciado el 24 de septiembre de 1913 ante el ayuntamiento de Hermosillo, Sonora: Aprovecho la ocasión de encontrarme ante tan selecta concurrencia y distinguidas personalidades revolucionarias para expresar, aunque someramente, mis ideas políticas y sociales…Ya es tiempo de no hacer falsas promesas al pueblo…por esto señores, el Plan de Guadalupe no encierra ninguna utopía…sepa el pueblo de México, que terminada la lucha armada a que convoca el Plan de Guadalupe, tendrá que principiar formidable y majestuosa la lucha social…las nuevas ideas sociales tendrán que imponerse en nuestras masas: y no es solo por repartir las tierras y las riquezas nacionales, no es el sufragio efectivo, no es abrir más escuelas, no es igualar y repartir las riquezas nacionales , es algo más grande y más sagrado, es establecer la justicia y buscar la igualdad, la desaparición de los poderes, para establecer el equilibrio de la conciencia nacional. Tendremos que removerlo todo… nos faltan leyes que favorezcan al campesino y al obrero, pero éstas serán promulgadas por ellos mismos, puesto que ellos serán los que triunfen en esta lucha reivindicatoria y social. Antonio de Ibarrola extrae algunas conclusiones específicas; entre ellas señala que la función del Estado es única y exclusivamente la de velar por el cumplimiento pleno de la función social del derecho de propiedad, regular el aprovechamiento de los elementos naturales susceptibles de apropiación, así 38 como respetar íntegramente la iniciativa privada; acepta tácitamente el fraccionamiento de los latifundios, diferenciándolos de los que él denomina “grandes emporios agrícolas”2 RESULTADO DE LEYES DE MOVIMIENTO ARMADO DE 1910 HASTA LA CONSTITUCION DE 1917. LEY DE DESAMORTIZ ACION ART. 27 DE LA CONSTITUCI ON DE 1857 LEY DE NACIONALIZACIO N DE BIENES ECLESIASTICOS PORFIRIATO Y REVOLUCION PLAN DE AYALA CUESTIONARIO 1.- ¿Qué es amortizar? 2.-Explique que es la desamortización 3.- ¿En qué fecha se expidió la Ley de Desamortización? 4.-Explica que establecía el primer párrafo del art.27 de la Constitución de 1857 5.- Explica que establecía el segundo párrafo del art. 27 de la Constitución de 1857. 1 González Navarro, Gerardo N. Derecho Agrario, ed. Oxford, México 2013, p43 2 Rivera Rodríguez, Isaías, El Nuevo Derecho Agrario Mexicano, ed. Mc Graw Hill, 2ª edición, México 2013, p53 39 CAPITULO VI AUTONOMIA DEL DERECHO AGRARIO INTRODUCCIÓN El estudio del derecho agrario es de gran importancia, tomando en cuenta que más de la mitad del país es suelo regulado por normas jurídicas agrarias, sin aun contar con las superficies correspondientes a colonias agrícolas y ganaderas, ni a los terrenos baldíos o terrenos nacionales. Por lo tanto por los que estudien el derecho corporativo, como asesores en asuntos de desincorporación o de la privatización de la propiedad social, privatización destinada a los asentamientos humanos, a la constitución de empresas agrícolas, expropiaciones, y ese gran universo de asuntos agrarios, como para los abogados sociales que luchan por la justicia de los más desprotegidos. También día a día, se requiere de la asesoría más especializada en la materia, sobre todo si se toma en cuenta que los tribunales agrarios encargados de aplicar esta rama jurídica son de estricto derecho y no permite ningún descuido, por eso hay que conocer sus autonomías del derecho agrario, como son las que se presentan en este capítulo. Además, la relación del derecho agrario con otras materias es muy variada, pues hay normas de derecho de carácter social agrario inmersas en el derecho constitucional y en el civil, así como en la materia de amparo, administrativo, mercantil, penal, en el medio ambiente entre otras. “El doctor Ordoñez Carasa, autor de la voz “derecho agrario" en la Enciclopedia Jurídica Omeba, reflexiona sobre la autonomía de esta rama jurídica y señala que es común que se crea< que nació como un apéndice del derecho civil, evolucionando hasta obtener su completa separación, pero que ello sólo es parte de la verdad en la conformación del derecho agrario moderno, ya que el derecho romano de la primera época fue más agrario que civil, por lo que en algunos casos esta evolución se realizó en sentido contrario. La conquista y la colonización de América provocaron una fusión de conceptos que en algunos casos aún prevalece; después, la Revolución francesa desmontó las estructuras feudales y consolidó la propiedad individual y absoluta. Sin embargo, la intervención del Estado en las convenciones privadas acentúo la importancia del carácter social del derecho, lo cual restringió la naturaleza ilimitada de la propiedad y fundamentó la función social de la misma. 40 Como se puede apreciar, la mayoría de los tratadistas reconoce la existencia de un derecho agrario autónomo con respecto a las otras ramas, que le permiten existir por sí mismo. Su autonomía se divide en: 6.1 AUTONOMIA HISTORICA El derecho agrario mexicano tiene un origen propio, independiente del derecho romano, aun cuando después adopta principios de éste. Por ello podríamos afirmar que es un derecho autóctono, de profunda raigambre mexicana, a diferencia de las demás ramas que en general son adaptaciones locales del tronco común que se localiza en el derecho romano y el Código Napoleónico. Aun hoy, a pesar de haber sufrido una importante merma conceptual que beneficio al derecho civil conserva conceptos e instituciones propias. Martha Chávez afirma “que todas nuestras actuales instituciones agrarias, se explican claramente por nuestros antecedentes históricos, así como por la importancia de las mismas para la resolución de nuestros grandes problemas nacionales”. 6.2 AUTONOMIA JURIDICA El derecho agrario mexicano posee principios propios, normas jurídicas particulares que nacen en la época prehispánica, entre las cuales podemos mencionar la regulación de los calpulli y las normas para asignar y aprovechar los calpullalli, distribuir los frutos y productos, el respeto legislativo de la Corona a la propiedad comunal indígena, las Leyes de Indias, las mercedes reales, cédulas y ordenanzas, las disposiciones libertadoras de la Independencia, las leyes de Reforma de colonización y baldíos y, durante el movimiento revolucionario, la ley del 6 de enero de 1915 y el artículo 27 constitucional. Todas ellas y muchas otras que lo conformaron, especialmente a partir de su constitución como derecho agrario revolucionario, le dieron un perfil específico y diferente al de otras ramas del derecho. 6.3 AUTONOMIA CIENTIFICA Por su materia tan original, autóctona, especial y compleja, el derecho agrario requiere una constante investigación de naturaleza técnico-jurídica. Es una rama que no ha dejado de evolucionar y, de acuerdo con este característico dinamismo, la investigación debe adaptarse también. Existe una gran controversia acerca de la existencia de esta autonomía. La niegan quienes sostienen que los intereses rurales no son diferentes de los urbanos o que, de existir, carecen de homogeneidad. A favor de la autonomía podemos asegurar que las actividades agropecuarias presentan problemas específicos, cuentan con instituciones especiales y sus principios pueden ser sistematizados. 41 Además, dicha autonomía tiene un objeto propio: regular las relaciones jurídicas de la empresa agraria. Por si ello no fuera suficiente, su estudio ha exigido el desarrollo de un método especial. 6.4 AUTONOMIA LEGISLATIVA En el derecho precolombino de Mesopotamia, normalmente consuetudinario y solo en algunos casos escrito, parte de la normatividad en materia de la tenencia de la tierra fue rescatada y aun respetada, incorporándose incluso, a las Leyes de Indias. Fiel a este proceso, el derecho agrario continua alimentándose de la evolución constitucional, en un Estado independiente, buscando su propia identidad a través de las Leyes de Reforma hasta llegar a la ley agraria del 6 de enero de 1915, al artículo 27 constitucional, a los códigos agrarios de 1934, 1940 y 1942, a la Ley Federal de la Reforma Agraria, hoy en vigencia transitoria, y finalmente la ley agraria y sus diversas disposiciones conexas. 6.5 AUTONOMIA DIDACTICA Existe unanimidad entre los investigadores sobre este aspecto, ya que sostienen que debe estudiarse por separado de las demás ramas jurídicas porque se trata de un complejo conjunto de elementos históricos, sociológicos y jurídicos. En México, el derecho agrario adquiere autonomía prácticamente desde el primer Código Agrario de 1934 y se conforma como materia especial a impartir en las universidades en 1939 en virtud del cúmulo de disposiciones jurídicas y de sus problemas especiales; su estudio se separa de las otras materias y se considera que debía cursarse al final de la carrera por ser indispensables para su conocimiento otras asignaturas estrechamente relacionadas. 6.6 AUTONOMIA SOCIOLOGICA Martha Chávez nos dice que la autonomía sociológica deviene de la imperiosa necesidad de establecer reglas específicas para la clase campesina de origen indígena. Por su parte, Mario Ruiz Massieu sostiene que, dada la clara definición y amplitud del sector rural mexicano, es necesario otorga un trato especial a las normas jurídicas agrarias, atendiendo a las características de los sujetos de las mismas, y nuestro caso es más específico, ya que en México es una nación de profundas raíces en el campo, además de que la mitad del territorio nacional es propiedad social. 6.7 AUTONOMIA ECONOMICA Nunca tanto como ahora se ha podido asegurar la existencia de esa autonomía: la situación imperante en el campo impulsó la reciente reforma constitucional en materia de dominio y tenencia de la tierra, cuyo objetivo primordial es otorgar las 42 bases para el despegue económico del agro. Existen fundadas razones, como incrementar la producción agrícola, base de una economía sana, para lograr la redistribución de la propiedad. Por ello, un adecuado enfoque del derecho positivo sobre la propiedad agrícola permitirá reactivar la economía al propiciar una mayor y mejor producción en el campo.”1 6.8 CONSTITUCIÓN FEDERAL DE LA REPUBLICA MEXICANA DEL 5 DE FEBRERO DE 1857. Desde febrero de 1856 se había reunido el Congreso de la Unión para dar a la nación una nueva Constitución Política, Ley Fundamental que fue expedida el 5 de febrero de 1857. Rabasa opinó que “los autores de la Constitución, a parte de las dificultades con que tropezaron para plantear libremente sus ideas, estuvieron siempre sometidos a poderosas causas que perturbaban su criterio. Cuando los días no eran serenos, no podían estar serenos los espíritus. Los errores de la Ley de 57 no son precisamente numerosos, los errores son pocos, pero hieren puntos esenciales que producen el desconcierto general de todo sistema.” Esta Constitución se decretó “en el nombre de Dios y con la autoridad del pueblo mexicano” pues como ya vimos originalmente no consignó la libertad de cultos, suscitándose al respecto acalorados debates. El artículo 27 de la Constitución de 1857 declaró por una parte su concepto de propiedad como garantía individual y, por otra, reiteró los principios de desamortización en contra de las corporaciones civiles y eclesiásticas, loables en relación con las últimas, pero de graves consecuencias en relación con las primeras. El artículo que nos ocupa dispuso textualmente: “La propiedad de las personas no puede ser ocupada sin su consentimiento, sino por causa de utilidad pública y previa indemnización. La ley determinará la autoridad que deba hacer la expropiación y los requisitos con que esta haya de verificarse. Ninguna corporación civil o eclesiástica, cualquiera que sea su carácter, denominación u objeto, de la institución. Cabe señalar que en relación con esta Constitución, un hecho notorio en aquella época; se expidió una ley para que los empleados y funcionarios públicos juraran guardar y hacer guardar la Constitución y ante tal ley, el clero declaró excomulgados a quienes cumplieran sus preceptos, negando incluso los sacramentos de extremaunción a quiénes habiéndolo hecho no se retractaran del mismo. Este hecho solo tiene importancia a fin de objetivizar la pugna política que existió en forma franca y abierta, entre el Clero y el Gobierno. 43 Los anteriores son los puntos fundamentales de la Constitución de 1857 que, en mayor o menor grado, explican la trayectoria creciente del problema agrario durante aquellos años. Efectivamente, al reiterarse constitucionalmente la incapacidad de las corporaciones civiles para adquirir o administrar bienes raíces, los pueblos dejarán de ser dueños definitivamente de sus ejidos, desapareciendo la propiedad inalienable, imprescriptible e inajenable de las comunidades agrarias confirmándose la entrega de estas tierras en manos de quienes as detentaban ,pero en calidad de propiedad particular. Y en los años subsecuentes, poco a poco nos daremos cuenta que, cuando desaparece el sistema proteccionista del indígena al suprimirse el régimen jurídico de las tierras de comunidad agraria, se propiciará su despojo, por miseria o ignorancia, y se contribuirá a gravar el problema agrario. Aconteció entonces la Guerra de Reforma de 1857 a 1860, a la que a su vez siguió la del Segundo Imperio de 1862 a 1867. 6.9 LEY SOBRE OCUPACION Y ENAJENACION DE TERRENOS BALDÍOS DEL 20 DE JULIO DE 1863. Esta ley de baldíos dictada por Benito Juárez en San Luis Potosí, definió los mismos como “todos los terrenos de la República que no hayan sido destinados a un uso público por la autoridad facultada para ello por la ley, ni cedidos por la misma a título oneroso o lucrativo, a individuo o corporación autorizada para adquirirlos. A excepción del Reglamento del 4 de diciembre de 1846 las leyes anteriores no habían consignado una definición legal de baldíos; y este punto es sumamente importante porque el concepto de baldíos de México, durante el siglo pasado, evolucionó desde el simple sinónimo de terreno eriazo, hasta el concepto estricto de terreno no amparado por un título primordial, transformación que se hará para perjudicar a la gente de poca potencialidad económica, porque bajo ésta argumentación, será desposeída. Así, pues no debemos perder de vista el análisis de esos años que fue retirado el articulo 9 usado en perjuicio del más pequeño y pobre campesino; en cambio los preceptos que favorecían la adjudicación de baldíos y cuyo contenido era bondadoso, no se aplicaron, como consta en la Memoria que el secretario del Ramo dirigió al Congreso de la Unión el año de 1896, en donde admitió que no obstante los vigorosos esfuerzos que se hicieron para habilitar baldíos, no se logró realizar ni la inmigración, ni la colonización nacional en dichos terrenos. 44 6.10 OTROS DATOS CORRESPONDIENTES AL FINAL DE LA EPOCA ENTRE 1907 a 1910. Las inquietudes provenían no sólo de los campesinos, sino también de los obreros, sin embargo, aunque son muy conocidas las huelgas obreras que fueron ahogadas en sangre, de Cananea el 1º de junio de 1906 y la de Río Blanco del 7 de enero de 1907, el movimiento obrerista será corolario, pero no determinante en la lucha social de la Revolución. Mientras que en la mayoría de los países del proletariado ha sido factor fundamental para lograr los derechos sociales, en México lo será el campesinado, como se verá más adelante. Es curioso observar cuando el 19 de mayo de 1909, se fundó el Centro Anti reeleccionista de México, que entre sus fundadores se encontraban Francisco I. Madero y el licenciado Luis Cabrera unidos por el ideal político de la No Reelección, y cómo ambos observarán posteriormente posturas ideológicas diferentes frente a la resolución del problema agrario. Sin embargo, será la causa política la que mueva primero a los mexicanos hacia una Revolución; esto es explicable desde muchos puntos de vista, uno de ellos sería la opinión de Morales Jiménez, quien nos dice que para el 4 de octubre de 1910, mientras se promulgaba el Derecho que declaraba electos a Porfirio Díaz y Ramón Corral para presidente y Vicepresidente de la República, respectivamente, setenta mil personas estaban prisioneras en diversos lugares del país. En relación con el régimen territorial rustico observamos que en esta época el Clero fue excluido definitivamente como poseedor de bienes raíces, pero a este gran terrateniente no vinieron a suplirlo los miles de labradores pobres que así debieron hacerlo, sino que sus haciendas enteras, o varias de ellas aumentaron el caudal de los grandes hacendados que de esta manera se convirtieron en latifundistas. Así los tipos de propiedad llegaron a grandes superlativos y las grandes haciendas se enfrentaron a las pequeñas propiedades, con desigualdad social, cultural, política y económica; y ante la desigualdad, el Gobierno se cruzó de brazos dejando que sus ciudadanos se movieran en el libre juego de sus desiguales poderes patrimoniales, porque las doctrinas liberalistas le inspiraban tal actitud abstencionista; por la misma razón, se abolieron los límites en la propiedad dejando que el poderoso adquiriera tantas que sabes que una quinta parte de la propiedad se encontraba en manos de cincuenta propietarios y es célebre la frase del general Terrazas de “Yo no soy de Chihuahua, Chihuahua es mío”. La situación del indígena campesino llegó a ser desesperante, pues muchos perdieron aquella pequeña propiedad que antes había sido de la comunidad agraria, que luego al desamortizarse se le concedió en propiedad privada, pues con la complicidad de las compañías deslindadoras y con la interpretación de las 45 leyes frente a las cuales no podía mostrar un título primordial y perfecto, su pequeña propiedad se vio absorbida por el gran latifundio colindante. Todo esto anterior explica fácilmente por qué la mayoría de los historiadores a excepción de don Toribio Esquivel Obregón y de don Emilio Rabasa, se inclinaron a considerar el descontento campesino y el problema agrario existente, como causas determinantes de la Revolución Mexicana de 1910. Los regímenes gubernamentales del México Independiente hasta noviembre de 1910 habían intentado resolver el problema colonizando en terrenos baldíos, pretendiendo en esta forma, ahogar las voces visionarias de los precursores de la Reforma Agraria , pero los fracasos de las Leyes de Colonización y Baldíos con sus desaciertos e ineficacias dieron la razón a Hidalgo, Morelos y a Ponciano Arriaga, cuyas ideas cobraron nueva vigencia señalando que el problema agrario debería resolverse conforme a un ancestral concepto de propiedad en función social y de que la tierra debería estar repartida en manos de muchos, en pequeñas porciones que cada quien atendiera directamente con su trabajo, en forma constante, para beneficio familiar, social y nacional y que bastara para el sostenimiento de una familia.1 1 Chávez Padrón, Martha, El Derecho Agrario en México, ed. Porrúa, México 2012, p229 46 AUTONOMIAS DEL DERECHO AGRARIO AUTONOMIA HISTORICA AUTONOMIA JURIDICA AUTONOMIA CIENTIFICA AUTONOMIA LEGISLATIVA AUTONOMIA DIDACTICA AUTONOMIA SOCIOLOGICA CUESTIONARIO 1.- ¿Por qué considera importante el estudio del derecho agrario? 2.- ¿Cuál es la importancia del estudio del derecho agrario desde el punto de vista histórico? 3.- ¿Cuál es la relevancia del derecho agrario desde el punto de vista de la globalización? 4.- Menciona cuál es el ámbito de desarrollo del abogado en materia agraria. 5.- ¿Por qué al derecho agrario mexicano se considera una disciplina autónoma del derecho? 6.- Explica la relación que hay entre el derecho agrario con otras materias. 7.- menciona brevemente las autonomías del derecho agrario. 47 AUTONOMIA ECOLOGICA CAPITULO VII DISPOSICIONES RELATIVAS AL DERECHO AGRARIO DE 1911 A 1917 INTRODUCCION Las instituciones agrarias comenzaron a surgir en el periodo de 1911 a 1917, respondiendo a la gran necesidad del movimiento armado de esa época, mediante planes y pactos es que se fue delineando este movimiento armado que inició Madero, en la lucha por el poder tras las elecciones presidenciales de 1910. Madero inicia después de la reelección de Porfirio Díaz, La Revolución Mexicana con el Plan de San Luis. Y en este plan comienza a exponer las condiciones sociales de los mexicanos, donde defiende los ideales de libertad y justicia, y por medio de este plan Madero es cuando declara nulas las elecciones Presidenciales y comienza un movimiento político social muy importante en México. Pero desgraciadamente madero no cumplió los postulados revolucionarios incluidos en el plan de San Luis. Se hace el Plan de Texcoco cuando triunfa Madero y se sigue sin cumplir y dar prioridad a los tema agrarios. Todo esto siempre el que se llevaba la peor parte, el títere de todos, el campesino, el medio rural. 7.1 LA POLITICA AGRARIA DE MADERO “En la práctica, el presidente Madero incumplió los postulados revolucionarios incluidos en la proclama del Plan de San Luis, entre otros lo referente a restituir a sus antiguos poseedores los terrenos de que se les despojó, por lo que diversas formas de inconformidad surgieron ante lo que se consideró la traición de Madero a los ideales revolucionarios. Esta situación provocó una lucha de grupos por el poder y en otros casos, como el de Zapata, por el cumplimiento de los anhelos de justicia y libertad.”1 “Durante los últimos años del Gobierno del Presidente Porfirio Díaz Mori, la sociedad ya venía exigiendo un gobierno electo demócratamente. La entrevista Díaz-Creelman celebrada en 10908, marcó el comienzo de la lucha política por la Presidencia de la República. Después del proceso electoral de 1910, Francisco Ignacio Madero demandó la nulidad de las elecciones en las que Porfirio Díaz se proclamó nuevamente Presidente de la República para el siguiente periodo Presidencial y promulgó el Plan de San Luis, el 5 de octubre de 1910. Para el propósito que nos anima se debe destacar que ya desde el Plan de San Luis en su art.3, tercer párrafo, se estipuló la necesidad de que las tierras despojadas fueran devueltas a sus legítimos poseedores, por lo mismo, estimamos que este fue el primer 48 pronunciamiento político agrario desde la edad temprana de la Revolución Mexicana. Francisco I. Madero, en el Plan de San Luis, pronunciamiento político con el cual se da banderazo de salida para el comienzo de las actividades políticas de la Revolución Mexicana, avanzó la idea de la restitución de las tierras a los antiguos poseedores, los campesinos, a quienes les habían despojado.”2 7.2 PLAN DE TEXCOCO Al triunfo del maderismo, Andrés Molina Enríquez es uno de los que se adhiere a la lucha, en 1911, porque no se le da la prioridad al problema de la tierra. Lanza entonces el Plan de Texcoco, que si bien parecía dirigido al gobierno interino de León de la Barra, en realidad era la expresión de inconformidad por el incumplimiento de algunos planteamientos del Plan de San Luis enarbolado por Madero. Desde su trinchera, Molina Enríquez luchó por el fraccionamiento de los grandes latifundios, por la desaparición del cargo de jefe político y por el mejoramiento de los salarios. El Plan de Texcoco es el documento antecesor del Plan de Ayala, elaborado el 23 de agosto de 1911, donde se plantea la necesidad de una reforma agraria a fondo”.1 49 7.3 PANORAMA DE LAS LEGISLACIONES AGRARIAS DE MÉXICO EN EL PERIODO POSREVOLUCIONARIO “Las disposiciones constitucionales del periodo posrevolucionario surgieron diversas leyes reglamentarias, tales como la Ley de Ejidos de 1920, la Ley de Dotaciones y Restituciones de Tierras y Aguas de 1927, la Ley Agraria del 6 de Enero de 1915, la cual creó, entre otras instituciones, la Comisión Nacional Agraria y estableció las figuras jurídicas de la restitución y dotación de tierras y aguas, como un medio de equilibrio en la distribución territorial. Posteriormente se promulgaron los códigos agrarios de 1934, 1940 y 1942, así como la Ley Federal de Reforma Agraria en 1971, regulaciones que establecían diversas normatividades proteccionistas en cuanto a la prescripción, la venta y la asociación, entre otras figuras, respecto de la propiedad social. En la vigencia de estos códigos, la protección de la propiedad social tenía determinadas características; algunas de éstas continúan en vigor, pero otras cayeron en desuso en algunos periodos y en otros fueron retomadas. Como ejemplo tenemos el art. 140 del Código Agrario de 1934, el cual establecía que los derechos agrarios individuales eran imprescriptibles, mientras que el artículo 128del Código Agrario de 1940 disponía la prescripción sobre los derechos agrarios a favor del poseedor quieto y pacífico que tuviera dos años de posesión en la unidad parcelaria; en la Ley Federal de la Reforma Agraria, dicho concepto se redefinió como paso al juicio privativo de derechos agrarios y nuevas adjudicaciones. 7.4 DISPOSICIONES AGRARIAS DE 1920 A 1934 La ley del 6 de enero de 1915 siguió vigente hasta el decreto que la abrogó, del 9 de enero de 1933, publicado en el Diario Oficial de la Federación del 10 de enero del mismo año, aunque en este periodo se expidieron diversas disposiciones entre ellas: Ley de ejidos de 1920 Ley de dotaciones y restituciones de tierras y aguas del 23 de abril de 1927 Decreto que reforma el art. 10 de la ley del 6 de enero de 1915 Códigos agrarios de 1934, 1940 y 1942 Código agrario del 23 de septiembre de 1940 50 Código agrario del 30 de diciembre de 1942”1 DISPOSICIONES RELATIVAS AL DERECHO AGRARIO DE 1911 A 1917 LA POLITICA AGRARIA DE MADERO PLAN DE TEXCOCO PANORAMA DE LA LEGISLACION AGRARIA DE MEXICO POSREVOLUCIONA RIO DISPOSICIONE S AGRARIAS 1920-1934 CONSTITUCION DE LOS ESTADOS UNIDOS MEXICANOS DE 5 FEB DE 1917 1 González Navarro, Gerardo N. Derecho Agrario, ed. Oxford, México 2013, p51 2 Pampillo Baliño, Juan Pablo, Munive Páez, Manuel Alexandro, Derecho Agrario y Desarrollo Rural, Edit. Porrúa, México 2013, p.133 51 CUESTIONARIO 1.- Explica las condiciones agrarias del país señaladas en los considerandos de la ley del 6 de enero de 1915. 2.- ¿Cuál fue brevemente la política de Madero? 3.- ¿Por qué nace el Plan de Ayala? 4.- ¿Cuándo nace el Plan de Texcoco y que contenía? 5.- Molina Enríquez ¿Por qué luchó incansablemente en la época de Madero? 6.- ¿Cuándo se promulgó el Plan de San Luis? 7.- ¿Qué plan antecedió al Plan de Ayala? 8.- Menciona tres de las disposiciones agrarias del periodo 1920 a 1934. 52 CAPITULO VIII LA CONSTITUCIÓN DE LOS ESTADOS UNIDOS MEXICANOS, DEL 5 DE FEBRERO DE 1917. INTRODUCCIÓN El derecho agrario se encuentra dentro del contexto jurídico desde 1917 de la Constitución, llamada también nuestra Carta magna como un derecho de la persona para poder gozar de los beneficios del reparto agrario. Hubo debates del parlamento del Constituyente de Querétaro. Nace al mundo un 5 de febrero de 1917 la primera Constitución social, cuyo artículo 27 consagra el derecho de propiedad social rural. En este apartado se exponen los motivos que hacen al Derecho como una parte fundamental e importante en la vida de los individuos que vivimos en sociedad. Más que ver al derecho como una imposición del Estado en nuestra vida diaria es imprescindible que lo hagamos como aquella herramienta complementaria de nuestra actividad y es que no basta realicemos ciertas conductas que nos obligue o nos generen derechos ya que por sí solas estas nos producirían efectos o bien el sentido en que resultaran estaría fuera del contexto de nuestros intereses y la pregunta es ¿qué hacer si en la celebración de un acto alguno no cumple con lo que le corresponde? y si alguien me causa un daño ¿cómo hago para que lo repare? Estas cuestiones y muchas más hacen necesaria la existencia del Derecho en nuestra vida diaria y le revisten de importancia. El objetivo de esta unidad será dar a conocer la importancia que tiene el derecho en nuestra sociedad, y que el alumno o el lector tengan el conocimiento básico necesario para entender la esencia del derecho en lo sucesivo, es decir de dónde viene y hacia dónde va la tendencia jurídica de las diversas sociedades. 53 8.1 CONCEPTO ROMANO DE PROPIEDAD “Desde la época de los romanos, se había considerado que el derecho de propiedad constaba de tres beneficios: el jusutendio usus, facultad de servirse de una cosa y de aprovecharse de los servicios que rinda, además de sus frutos: el jusfruendi o fructus, derecho sobre frutos o productos; y el jusfruendi o fructus, derechos sobre frutos o productos; y el jusabutendi o abuso, el poder de disponer hasta la consumación o destrucción de la cosa o su enajenación; la persona que reunía los tres beneficios tenía sobre su cosa, un poder absoluto. A través de muchas centurias, desde el primitivo derecho romano, casi hasta principios de este siglo, muy pocas variantes sufrió el citado concepto de propiedad, y esta historia podía sintetizarse en: la suspensión de diferencias entre ciudadanos romanos y extranjeros; luego durante la época feudal, el derecho de propiedad implico el imperio y el dominio, y el propietario de la tierra gobernó así sobre sus vasallos; después, durante la revolución francesa de 1789, en la declaración de los derechos del hombre y del ciudadano, se señaló que toda sociedad debían parar y reconocer los derechos naturales del hombre que son la propiedad y la libertad del primer término, derechos que el hombre trae consigo desde su nacimiento y que de estado solo reconoce, pero que no los crea; esto explica el concepto individualista del código de Napoleón que reafirmo los atributos romanos de la propiedad y protegió sus intereses personales. Así nos explicamos el problema agrario tratara de resolverse en el México independiente anterior a 1917, siempre a través de la colonización de terrenos baldíos, del respeto del derecho de propiedad de los latifundistas, de la desaparición de las comunidades agrarias y la privación de su personalidad jurídica para tener tierras, de la conversión de los comuneros en propietarios individuales, etc.; y que fueron inútiles las precursoras voces de los que pedían la explotación de tierras y su reparto gratuito a los campesinos desposeídos y pobres, como la de Ponciano Arriaga, Emiliano Zapata y Luis Cabrera. El diputado constituyente, Heriberto Jara diría que: “La formación de las constituciones no ha sido otra cosa sino el resultado de la experiencia, el resultado de los deseos, el resultado de los anhelos del pueblo, condensado de eso que se ha dado en llamar Constitución”. 8.2 TEORIAS SOBRE PROPIEDAD CONSTITUYENTE DE 1917 QUE SE DISCUTIERON EN EL Desde fines de noviembre de 1916, en Querétaro se iniciaron las discusiones para proponer, discutir y aprobar, la nueva constitución política, de los Estados Unidos 54 Mexicanos; el periodo fijado para terminar los debates se había señalado para el 1 de febrero de 1917, pues el día 5 del mismo mes y año, debía iniciar su vigencia en la citado constitución. Muchos temas se debatieron en aquellos azarosos días y estos transcurrían ya cercanos al final del término señalado, sin que el problema de la tierra se discutiera; fue hasta el lunes 29 de enero de 1917 cuando se presentó el proyecto del Artículo 27 constitucional, firmado por Pastor Rouaix, José N. Macías, E. A. Enríquez y otros diputados , proyecto que se discutiría tan apasionada, como sumariamente, pues el Articulo 27 se aprobó el 30 de enero a las 3.30 de la madrugada, y al hacerlo consideraba “que la ley constitucional, fuente y origen de todas las demás que habrán de dictarse, no eluda como lo hizo la de 1857, las cuestiones de propiedad por miedo a las consecuencias”. La ley del 6 de enero de 1915 tuvo un carácter provisional, y era la fin y al cabo, una ley secundaria, por eso el diputado, Magallón considero que ese “Congreso constituyente no terminara debidamente su obra, si no diera cima a la labor relativa de poner al poner la base para asegurar de manera definitiva la cuestión Agraria en la República Mexicana. Por su parte el diputado Bojorquez señalo al iniciarse la discusión del Articulo 27 que “en estos momentos se ha iniciado el debate más importante de ese Congreso… ha sido una magnífica idea la de la Comisión al sostener como precepto constitucional el Decreto del 6 de enero de 1915… en mi concepto el Decreto del 6 de enero de 1915 fue uno de los que trajeron mayor contingente al seno de la Revolución. El Artículo 27 constitucional desde que se discutió en 1917, se proyectó teniendo en cuenta todas las doctrinas que aun actualmente ocupan la atención de juristas y políticos; por eso resulta anacrónico pretender reconsiderarlo nuevamente frente a esas mismas doctrinas. En efecto, debe deducirse que los legisladores constituyentes estaban al día en las varias corrientes doctrinas que podrían influir para decidir sobre el concepto de propiedad que debía consagrarse en la constitución; y así se comprueba, cuando al discutirse previamente los artículos 95, 96 y 97 relativos a la forma de integrarse al Poder Judicial, el diputado Hilario Medina dijo que “El Diputado, señores, puede sostener ante aquellos a quienes pide el voto, que en el Parlamento sostendrá la idea socialista, la idea democrática, la idea comunista, etc., puede sostener las ideas que estime que son las más aceptadas al pueblo a quien ofrece”, lo cual nos indica claramente que entre los legisladores había claridad de conceptos y actualidad en el conocimiento de las diversas doctrinas que sostenían. Por eso no son extrañas las diversas proposiciones que pretendieron hacerse. Podríamos localizar en un primer grupo, quienes manifestaron que “El estudio del 55 Artículo 27 del proyecto de la Constitución como derecho natural”. O porque de ser así “fuerza será convenir en que la propiedad es un derecho natural, supuesto que la apropiación de las cosas para sacar de ellas los elementos necesarios para la conservación de la vida, es indispensable… como consecuencia de lo expuesto, la Comisión después de consagrar la propiedad como garantía individual, poniéndola a cubierto de toda expropiación que no esté fundada en la utilidad pública, ha fijado las restricciones a que está sujeto ese Derecho Más bien dentro de esta corriente se reconocen las necesidades y exigencias del pueblo, pues más adelante el citado diputado acepto la admisión del derecho de propiedad cuando señalo que “ yo pediría a la comisión que reformara este inciso diciendo: que la nación es la única dueña de los terrenos de la república, de las tierras, aguas y bosques, pero que de aquí en adelante ella se reserva el derecho de vender y que las propiedades adquiridas por medio de despojos, por medio de infamias, deben desaparecer de nuestra constitución , y que en lo sucesivo, todo el que quiera adquirir un pedazo de terreno, deberá adquirirlo conforme a las bases que establezcamos aquí. Una tercera corriente se manifestó a través de la misma comisión redactora, pues creyeron que le derecho de propiedad debía compaginarse al trabajo de la tierra, cuando manifestaron que sería pueril buscar las solución del problema agrario convirtiendo en terratenientes a todos los mexicanos, lo único que puede hacerse, es facilitar las condiciones para que puedan llegar a su propiedad todos los que tengan voluntad y actitud para hacerlo. Pero en donde no cabe lugar a dudas, de que campeaba en la comisión y en todo el congreso constituyente la idea de consagrar el derecho de propiedad con una función social, es en la parte del proyecto, aprobado sin discusión, que dijo desde ese texto original, que “la nación tendrá en todo tiempo el derecho de imponer a la propiedad privadas modalidades que dicte el interés público; así como el de regular el aprovechamiento de los elementos naturales susceptibles de aprovechamiento, para hacer una distribución equitativa de la riqueza publica y cuidar de su conservación. La estructuración de este concepto base del artículo 27 constitucional, a cuya luz e intención tendrá que interpretarse dicho precepto y estructura las leyes secundarias, poco a poco se impondrá aun contra las confusiones de la propia comisión redactora que deseaba resolver el problema agrario al exterminar los latifundios, respetando los derechos de los dueños, por medio de expropiación.” 1 8.3 CONSTITUCION DE 1917 Y SU CAPITULO AGRARIO “En muy buena medida en toda la historia de México y en especial en los grandes acontecimientos nacionales, ha estado presente el renglón agrario, a grado tal que en el congreso constituyente de la cual emano nuestra Constitución uno de los 56 grandes debates legislativos, que se significaron fue precisamente el relativo al campo, rubro que finalmente quedó plasmado en el artículo 27 constitucional cuya filosofía, juntamente con la contemplada en otros numerales, hiso posible que fuera, en la Constitución Mexicana, donde se consagraran por primera vez en los derechos sociales, en la historia constitucional del mundo. Así, el 5 de febrero de 1917 se publicó en la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos, cuyo artículo 27, recogiendo en buena medida el pensamiento agrario de las diversas corrientes revolucionarias y basándose en la Ley Agraria, del 6 de enero de 1915, estableció las bases y lineamientos que regularía el proceso de reforma agraria, la cual ha pasado por varias etapas y con diversos toques distintivos en su contextura y larga trayectoria centenaria. Con la promulgación de la constitución política de 1917 dio inicio pues, la transformación social de México. Así, hoy en el contenido del artículo 27 constitucional se describen las riquezas del suelo, del subsuelo, de las aguas y de los mares; que la nación puede ceder a los particulares el derecho de propiedades de la tierra y de la explotación del subsuelo, pero también del derecho de expropiación que puede ejercer; de la organización social de la propiedad de la tierra, pero también compatibilizado con el cuidado del medio ambiente, entre otras importantes líneas normativas.”1 1 Chávez Padrón, Martha, El Derecho Agrario en México, ed. Porrúa, México 2012, p289 57 8.4 CONCEPTO DE PROPIEDAD CON FUNCION SOCIAL En todas las opiniones expuestas en el constituyente de 1917 se notó, que aunque inspiradas en doctrinas originariamente diversas, todas ellas tendrían y coincidían en darle al concepto de propiedad una función social, en hacer que el propietario ya no lo fuera solo para sí, en ejercicio de un derecho exclusivamente individual, si no el que lo fuere también para su sociedad, manteniendo en constante explotación la tierra, y en que era necesario que aunque se consagrara el derecho de propiedad, este se sujetara a las modalidades que dictaran el interés público y estuviera originalmente en manos del estado. Surgió así un nuevo concepto dinámico de propiedad, con función social, sujeto a las modalidades que fuere dictando el interés público como garantía individual para el pequeño propietario; ya no lo fuera solo para si en ejercicio de un derecho exclusivamente individual, sino en que lo fuera también para su sociedad, manteniendo en constante explotación la tierra, y en que era necesario que aunque se consagrara el derecho de propiedad este se sujetara a las modalidades que dictara el interés público y estuviera originalmente en manos del Estado. Surgió así un nuevo concepto dinámico de propiedad, con función social, sujeto a las modalidades que fuera dictando el interés público como garantía individual para el pequeño propietario; pero también como garantía social para los núcleos de población que tuvieran tierras o que no las tuvieran en cantidad suficiente; el concepto de justicia se modificó al establecerse legalmente la posibilidad de expropiar los latifundios gratuitamente entre los campesinos , apareciendo el moderno concepto de justicia social distributiva; con todo ello, los conceptos jurídicos, ramas fundamentales del derecho y subramas del mismo, se verán modificados, pues el nuevo concepto de propiedad con sentido y dinamismo social supera al caduco concepto rígido romanista, la justicia y las garantías individualistas se ven forzadas a hacerles un lugar y equilibrarse con la justicia social y las garantías sociales; y junto a las tradicionales ramas del Derecho Público Privado se colocó el Derecho Social amparando a los núcleos de población campesinos desvalidos, desde la propia Constitución y apareció, asimismo la nueva subrama del Derecho Agrario.. Este nuevo concepto de propiedad tiene mucho de antecedentes en la antigua forma azteca de tendencia de la tierra, en donde el calpulli se otorgaba solo al vecino de un barrio , jefe de familia, que lo trabajara personalmente, en forma constante, pues de lo contrario se le revocaba dicha tenencia de la tierra, en donde el calpulli se otorgaba solo al vecino de un barrio, jefe de familia, que lo trabajara personalmente, en forma constante, pues de lo contrario se le revocaba dicha tenencia; es una forma mediante la cual se mantiene la propiedad con una función social, concepto que lógicamente implica el dominio originario en manos 58 del Estado y la facultad necesaria para vigilar, cuidar y distribuir equitativamente los elementos naturales susceptibles de apropiación. A la luz de la historia afina sus perfiles propios nuestro singular concepto de propiedad, nos abre un camino por donde transitar seguros en medio de contiendas y nos coloca como sucesores y continuadores de una doctrina indiscutiblemente nuestra, por aborigen, que aflora a la conciencia nacional y se consagra en las Ley Fundamental, por voluntad y acción del mismo pueblo. 8.5 ASPECTOS FUNDAMENTALES DEL ARTÍCULO 27 CONSTITUCIONAL El nuevo concepto de propiedad con función social, sujeta a las modalidades que dicte el interés público, hizo posible que en 1917 la Nación recuperara definitivamente y reafirmara su propiedad originaria no solo como un derecho, sino acaso más como una obligación de conservar y de regular el adecuado uso de los recursos naturales, obligando a que éste estableciera las formas jurídicas para evitar el acaparamiento e inmoderado o indolente aprovechamiento de las tierras; así se hace posible la redistribución de la tierra rustica, acatando el viejo ideal de Morelos, de que ésta estuviera en manos de muchos, en pequeñas parcelas, que cultivaran personalmente; en consecuencia, el latifundio se proscribió y la mediana propiedad se limitaron, y se vio sujeta a una vida transitoria, las extensiones de propiedad y del ejido; la afectación de las tierras por causa de utilidad social se fundó y éstas se empezaron a repartirse gratuitamente a los núcleos de la población necesitados que no tenían tierras o que no las tenían en cantidad suficiente. Este sistema duró vigente hasta 1992. El artículo 27 constitucional rigió así, con su mismo concepto de propiedad, que es uno solo con modalidades y no varios conceptos, tanto a la pequeña propiedad, como al ejido; tanto a la propiedad rural, como a la propiedad urbana. De esta manera del Artículo 27 constitucional derivan: I.- Las propiedades particulares, que se rigen por los Códigos Civiles de cada Entidad Federativa. II.- La propiedad de la Nación. III.- La propiedad social de las comunidades agrarias y de los ejidos”.2 1 González Navarro, Gerardo N. Derecho Agrario, ed. Oxford, México 2013, p93 2 Chávez Padrón, Martha, El Derecho Agrario en México, ed. Porrúa, México 2012, p289 59 CUESTIONARIO 1.- En el contexto constitucional, ¿en qué artículo se ubica al derecho agrario? 2.- Conforme al texto original del artículo 27 constitucional, en su origen, ¿a quién le corresponde la propiedad de las tierras? 3.- Mencione las principales figuras jurídicas en materia agraria, según texto original del art. 27 constitucional 4.- Mencione cuantas reformas principales ha tenido el artículo 27 constitucional en materia agraria 5.- ¿Cuándo se publicó el artículo 27 constitucional en materia agraria? 60 CAPITULO IX EL EJIDO EN EL NUEVO MARCO LEGAL INTRODUCCIÓN En este apartado del ejido, institución centenaria en el país actual que inició hace más de trece siglos en los reinos, ahora españoles, trasladado por las leyes de Indias desde 1523, en su devenir histórico, posee hoy más del 54% del territorio nacional: esto es 105.9 millones de hectáreas, una superficie mayor que la de toda América central; de Guatemala a Panamá y también mayor a la de Francia, el mayor territorio nacional de Europa de Occidente. Desgraciadamente al adentrarse en el estudio de los ejidos en México se llega a la muy triste realidad conociendo datos para dar vergüenza y más como mexicanos; más del 51% de los ejidatarios del país no tiene ni siquiera la mitad de un salario mínimo de ganancia, les llegan según los gobiernos de cualquier color que estén en el poder, miles de millones de pesos en apoyos con los que en solamente teoría deberían de cubrir sus necesidades básicas como comer, vestir, de habitación, salud y educación por no nombrar más, que ni siquiera se puede llegar a pensar se puedan lograr. ¿Qué es lo que sucede en los ejidos mexicanos? Es cuestión de las malas políticas públicas de inversión en el campo y su comercialización, al mal funcionamiento de las dependencias y el mal o nefasto manejo de las leyes agrarias para no lograr la justicia rural, y estos ejidatarios ya no siembran al no creer en sus gobernantes y prefieren irse a los Estados Unidos a buscar mejor suerte, porque en sus ejidos, no encuentran absolutamente nada. La realidad también nos dice que la gente del medio agrario no puede colarse en los créditos institucionales ni el financiamiento agrario, y esto es porque los ejidatarios no son propietarios explícitamente de sus tierras, por lo tanto, no tiene las garantías para poder solventar esos créditos. Ojalá que tu como estudiante de derecho pienses y tomes conciencia en esta nueva era de jóvenes que aún creen en el país, en las leyes y que estas leyes en el ejido son para logra así armonía en la nación. Es tu obligación y derecho hacerlo posible. 61 9.1CONCEPTO “La palabra ejido proviene del vocablo latino exitus, que significa “salida”. Al consumarse la Conquista en lo que hoy es nuestro territorio nacional, recibían este nombre las tierras que se encontraban a la salida de los pueblos españoles que se iban fundando. Durante la Colonia se crearon pueblos indígenas a los que se les dotó de ejidos, tierras que se fueron perdiendo en virtud de las leyes de colonización, o bien ante la obligatoriedad que impuso la ley de Desamortización de que las tierras o ejidos de los pueblos fueran fraccionados y adjudicados a sus miembros. El ejido resurgió a propuesta de Luis Cabrera, quien, en su célebre discurso del 3 de diciembre d e1912, planteó la necesidad de reconstituir los ejidos. 9.2 DEFINICIÓN Y PATRIMONIO El ejido puede definirse como una sociedad de interés social, con personalidad jurídica y patrimonio propio, integrado por el conjunto de tierras, aguas y bosques y, en general, por todos los recursos naturales que lo constituyen. Su finalidad es el mejoramiento de la vida campesina mediante el uso y la explotación lícita, integral y respetuosa del medio ambiente y de las tierras de su propiedad que hubieren sido entregadas por dotación o se hayan adquirido mediante cualquier otro título. (Art. 9º de la). 9.3 DIFERENCIA ENTRE EJIDO Y COMUNIDAD La diferencia entre el ejido y la comunidad estriba en que ésta presupone una existencia previa del carácter comunal (la supervivencia del pueblo al que se le hubiere privado de sus tierras), anterior a su reconocimiento como tal, a través de una restitución, jurisdicción voluntaria o de la resolución correspondiente, si dicha vía se controvierte. Por su parte, el ejido surge a la vida jurídica mediante el procedimiento de dotación, ampliación o creación de nuevos centros de población ejidal, conforme a la derogada Ley Federal de la Reforma Agraria y en la actualidad en términos del art. 90 de la Ley Agraria. 62 9.4 OBJETO Estriba en considerar el ejido como una empresa social, puesto que lleva como fin la satisfacción de las necesidades del núcleo de la población, a la vez que se busca una redituabilidad del terreno ejidal mediante formas de unidades productivas; por ello, se otorga a los núcleos agrarios y a los sujetos individuales agrarios la protección legal sobre sus tierras, al mismo tiempo que se brinda seguridad jurídica en las relaciones con terceros, por medio de las formas asociativas permitidas por la ley. 9.5 PROTECCION DE LA PROPIEDAD SOCIAL El espíritu de diversas legislaciones agrarias ha dado distintas modalidades a la tenencia de la tierra. En nuestro país se impuso el principio de cultivo directo de la tierra, proceso que culminó con el decreto del 6 de enero de 1992, el cual, si bien permite la libre asociación y disposición sobre las tierras ejidales, aplica ciertos candados legales para proteger la propiedad social. Así, desde la Ley del 6 de enero de 1915, pasando por legislaciones como la ley de ejidos del 28 de diciembre de 1920, el Decreto del 22 de noviembre de 1921, el Reglamento Agrario del 10 de Abril de 1922, la Ley de Dotaciones y Restituciones de Tierras y Aguas del 23 de abril de 1927, los Códigos de 1934, 1940 y 1942, y la Ley Federal de Reforma Agraria de 1971, se han establecido diversas protecciones legales a la propiedad social. 9.6 REGLAMENTO INTERNO En su acepción genérica, el reglamento es la colección ordenada de reglas o preceptos que una autoridad competente (o una persona moral) da para la ejecución de una ley o para el régimen de una corporación, una dependencia o un servicio, o para cualquier actividad. El reglamento interno es el conjunto de reglas organizativas al interior del ejido y tiene como fin establecer las bases generales para la organización económica y social del mismo, así como los requisitos para admitir nuevos ejidatarios, las normas para el aprovechamiento de las tierras de uso común y los demás aspectos que los ejidatarios consideren pertinentes o que conforme a la ley deban ser incluidos. (Art. 10 de la). El reglamento es un complemento muy importante del desarrollo rural, ya que en él pueden establecerse los mecanismos para la realización de la asociación productiva; es decir, mediante el reglamento los ejidatarios podrán adoptar 63 mecanismos alternos de tipo jurídico que protejan los intereses de los más desamparados, a la vez que les permitan establecer la forma de explotación más adecuada a sus suelos, así como las reglas con las cuales deberán participar las personas físicas o morales interesadas en el esfuerzo productivo asociado. 9.7 CONSTITUCIÓN DE NUEVOS EJIDOS La Ley Agraria en su art. 90 establece los requisitos necesarios para la constitución de un ejido: I.- Un grupo mínimo de veinte personas que participen en su constitución. II.- Que cada individuo aporte una superficie d tierra. III.- Que el núcleo cuente con un proyecto de reglamento interno y que éste se sujete a lo dispuesto por la Ley Agraria. IV.- Que tanto la aportación de tierras como el reglamento interno consten en escritura pública y se solicite la inscripción de su testimonio en el Registro Agrario Nacional. Establece además, como prohibición, la aportación de tierras en fraude de acreedores, bajo pena de declararse nula. Con esta disposición legal se trata de evitar que los propietarios de tierras constituyan ejidos en los cuales se busque incumplir con las obligaciones crediticias en perjuicio de sus acreedores, ya que de constituirse un ejido con tierras aportadas en fraude de acreedores, éstos podrán ejercitar la acción correspondiente (similar a la acción pauliana) a efecto de retrotraer las cosas al estado que antes guardaban. 9.8 MODOS DE EXTINCIÓN La Ley Agraria dispone como formas de terminar el régimen ejidal el que no existan las condiciones para su permanencia, o bien, cuando proceda su liquidación. 9.8.1POR QUE NO EXISTAN LAS CONDICIONES PARA SU PERMANENCIA Establece el artículo 23, fracción XII, como facultad de la asamblea general de ejidatarios, la terminación del régimen ejidal, cuando previo dictamen de la Procuraduría Agraria, se determine que ya no existen las condiciones para su permanencia. 64 Ello, obviamente, se dará cuando no exista el objeto o motivo por el que fue creado, es decir, cuando el ejido carezca ya de tierras para el sustento de sus miembros, sea por desincorporación de éstas del régimen ejidal o por aportación a sociedades o expropiación por causa de utilidad pública. 9.8.2POR LIQUIDACIÓN El art. 29 de la Ley Agraria dispone que cuando la asamblea resuelva terminar el régimen ejidal, el acuerdo respectivo se publicará en el Diario Oficial de la Federación y en el periódico de mayor circulación de la localidad en que se ubique el ejido. Lo anterior, previa liquidación de las obligaciones subsistentes del ejido. Una vez asignadas las tierras ejidales, se otorgará el pleno dominio de sus miembros, de acuerdo con los derechos que les correspondan; se exceptúan de ello los bosques o las selvas tropicales. La superficie asignada por este concepto a cada ejidatario no podrá rebasar los límites señalados a la pequeña propiedad. Si después de la asignación hubiera excedentes de tierra o se tratare de bosques o selvas tropicales, pasarán a ser propiedad de la nación. Los órganos de dirección y representación ejidal comunal son: La asamblea; El comisariado ejidal, y El consejo de vigilancia La asamblea es el órgano supremo del ejido o la comunidad es la asamblea. Ésta, genéricamente, es un órgano integrado por personas con un fin común, el cual no funciona en forma permanente, sino sólo cuando se convoca y sus miembros se reúnen para deliberar y votar los asuntos correspondientes. La asamblea en materia agraria, es una reunión temporal de los miembros integrantes de un mismo núcleo agrario, celebrada para deliberar y votar los asuntos para los cuales fueron convocados conforme a los procedimientos señalados por la Ley Agraria. Los artículos de la Ley Agraria que regulan lo relacionado con la asamblea son el 11 y del 22 al 31 de dicho ordenamiento. Los asuntos de la exclusiva competencia de la asamblea son los que señalan las 15 fracciones del artículo 23 de la Ley Agraria. 65 En cuanto a periodicidad de la asamblea, la Ley Agraria dispone que deberá reunirse por lo menos una vez cada seis meses, o con mayor frecuencia cuando así lo determine el propio núcleo a través de su reglamento o su costumbre. La convocatoria deberá expedirla el comisariado ejidal o comunal, o el consejo de vigilancia, ya sea a iniciativa propia o a solicitud de al menos 20 ejidatarios o 20% o más del total de ejidatarios que integren el núcleo. Para la validez de la asamblea, la Ley Agraria realiza una distinción respecto a los asuntos para los cuales es convocada, dependiendo de si se encuadran o no las fracciones VII a XIV de su art. 23, ya que para los asuntos comprendidos en estas fracciones se requiere de mayor formalidad. 9.9 EL COMISARIADO El comisariado ejidal es el órgano encargado de la ejecución de los acuerdos de la asamblea, así como de la representación y gestión administrativa del ejido. Lo integran un presidente, un secretario y un tesorero, con sus respectivos suplentes. Si el reglamento interno no dispone la forma y extensión de sus funciones de cada miembro del comisariado; si nada dispone, se entenderá que sus integrantes funcionarán conjuntamente y no en forma separada o individual, criterio que también ha sido definido por el Tercer Tribunal Colegiado del Segundo Circuito. Por ello la representación del comisariado ante una autoridad jurisdiccional deberá efectuarse de manera conjunta por los tres integrantes, ya que de faltar uno de ellos; se tendrá al núcleo agrario como que no compareció ante la autoridad respectiva; o de lo contrario, si la autoridad no realiza el emplazamiento o una notificación personal con los tres integrantes, el acto es ilícito y procede su reposición. Se ha pronunciado al respecto el Tribunal Colegiado del Vigésimo Circuito. Por otra parte, ante la actuación judicial no requiere el comisariado un mandato especial por otra parte de la asamblea para actuar en algún procedimiento jurisdiccional, dado su carácter implícito de representante legal de núcleo agrario respectivo. Así lo afirmo el Tribunal Colegiado del Vigésimo Segundo Circuito. También es de resaltar que el comisariado contara, en su caso, con las comisiones y los secretarios auxiliares que señale el reglamento interno. Las facultades y obligaciones del comisariado ejidal son las siguientes: 66 I. II. III. IV. V. Representar al núcleo de población ejidal y administrar los bienes comunes del ejido, en los términos que fije la asamblea, con las facultades de un apoderado general para actos de administración, pleitos y cobranzas. Procurar que se respeten estrictamente los derechos de los ejidatarios; Convocar a la asamblea en los términos de la ley, así como cumplir los acuerdos que dicten las mismas; Dar cuenta a la asamblea en los términos de la ley, así como cumplir los acuerdos que dicten las mismas. Las demás que señalen la ley y el reglamento interno del ejido. 9.10 EL CONSEJO DE VIGILANCIA Se constituye por un presidente y dos secretarios, con sus respectivos suplentes. Si el reglamento no dispone nada en cuanto a su función, se entenderá que sus integrantes lo harán conjuntamente. 1. Vigilar que los actos del comisariado se ajusten a los preceptos de la ley y a lo dispuesto por el reglamento interno o a la asamblea; 2. Revisar las cuentas y operaciones del comisariado a fin de darlas a conocer a la asamblea y denunciar ante esta las irregularidades en que haya incurrido el comisariado; 3. Convocar a asamblea cuando no lo haga el comisariado 4. Las demás que señalen la ley y el reglamento interno del ejido. Ahora bien, conforme al art.39 de la Ley Agraria los integrantes de los comisariados y de los consejos de vigilancia duraran en sus funciones tres años. En adelante, no podrán ser electos para ningún cargo dentro del ejido, sino hasta que haya transcurrido un lapso igual a aquel en que estuvieron en ejercicio. Si al término del periodo para el que haya sido electo el comisariado ejidal no se han celebrado elecciones, sus miembros propietarios serán automáticamente sustituidos por suplentes. El consejo de vigilancia deberá convocar a elecciones en un plazo no mayor de 60 días contados a partir de la fecha en que concluyan las funciones de los miembros propietarios. Al respecto del Tercer Tribunal Colegiado del Octavo Circuito. 67 9.11 REMOCION En lo que concierne a la remoción de los miembros del comisariado y del consejo de vigilancia, el art. 40 de la Ley Agraria precisa que podrá ser acordada por voto secreto en cualquier momento por la asamblea que al efecto se reúna que sea convocada por la Procuraduría Agraria a partir de la solicitud de por lo menos 25% de los ejidatarios del núcleo. 9.12 INCAPACIDAD PARA ADQUISISION DE TIERRAS Y DERECHOS El art. 34 de la Ley Agraria establece que los miembros del comisariado ejidal en funciones estarán incapacitados por adquirir tierras u otros derechos ejidales excepto por herencia. Este articulo resulta oscuro respecto a la asignación de derechos y tierras dentro del procedimiento de delimitación de las tierras ejidales, ya sea que se lleve a través del Programa de certificación de derecho ejidales y titulación de solares o bien en forma independiente, puesto que al delimitarse y asignarse derechos sobre tierras de uso común o bien en la asignación de parcelas, surge la siguiente pregunta: ¿los integrantes del comisariado ejidal se quedarán sin la correspondiente adjudicación? Al respecto, consideramos que los derechos correspondientes deberán ser adjudicados en proporción igual que a cualquier otro ejidatario, y si existe, conforme a la fracc. III del art. 56 de la Ley Agraria, algún derecho a una superficie superior a razón de las aportaciones materiales, de trabajo y financieras, deberá justificarse plena y debidamente este hecho, ya que existen casos como el de la ignorancia de sus miembros, la presidenta del comisariado se las arregló para que la asamblea aprobara una distribución inequitativa de parcelas con superficies de más de tres mil hectáreas a favor de una minoría, entre las que se encontraba ella misma, mientras que la media superficie del resto de los integrantes fue de 30 hectáreas, con excepción de 50 ejidatarios a quienes no se les entregó superficie cuando en forma gratuita el Estado otorga este servicio a través del PROCEDE”.1 1 González Navarro, Gerardo N. Derecho Agrario, ed. Oxford, México 2013, p163 68 CUESTIONARIO 1.- ¿Qué es el ejido? 2.- ¿Cuándo resurgió el ejido por Luis Cabrera en su gran discurso? 3.-según el Código Agrario de 1942, ¿Qué debían comprobar los núcleos agrarios para que procediera la restitución? 4.- ¿Cómo se integra la comisión mixta de un ejido? 5.- ¿En la propiedad social, que modalidades imponía? 6.- De acuerdo al ejido, ¿qué es la posesión? 7.- ¿A qué órganos consideraba el Estado la Ley de Reforma Agraria como autoridades agrarias? 8.- ¿Cómo se integraba la Comisión Agraria Mixta? 9.- ¿A partir de cuándo se consideraba el núcleo de población como propietario? 10.- ¿Qué facultades tenía el consejo de vigilancia en el ejido? 11.- ¿cuáles son los requisitos para ser constituido un ejido? 12.- menciona el concepto de comisariado ejidal 13.- ¿qué es la remoción, cuando procede? 14.- Establezca la diferencia entre ejido y comunidad 15.-explique que significa PROCEDE 16.- ¿Cuáles son los modos de extinción de un ejido? 17.- ¿Cuál es el objeto de considerar el ejido como una sociedad de interés social? 69 CAPITULO X SISTEMAS AGRARIOS EN ALGUNAS REGIONES DEL MUNDO LA LEY Y LA HISTORIA EN EL AGRARISMO MEXICANO. SIMILITUDES CON LAS DE OTRAS LATITUDES LEJANAS A LAS NUESTRAS INTRODUCCIÓN Es histórico y de importancia el poder investigar y conocer los demás sistemas agrarios de otros países de diferentes continentes para así poder comparar y compartir experiencias, el poder mejorar la vida de los habitantes de un país por medio de su producción más preponderante, como alguna vez lo fue en nuestro país, la agrícola, entender el desarrollo de otros países como Los Estados Unidos de Norteamérica donde la agricultura incorpora una variedad y riqueza difícil de encontrar en el resto del mundo. Esto se debe en gran parte a lo vasto que es ese país y además a la generosidad de su naturaleza, por ejemplo que solo en el oeste, un área relativamente pequeña, existan desiertos pequeños debido a las escazas de lluvias, y de nevadas. Por ejemplo en un principio los agricultores araban más de la cuenta la tierra y con ello agotaban los elementos nutritivos sin reponerlos con fertilizantes, los surcos se hacían a lo tonto, de modo que cuando llovía mucho, el agua formaba arroyos profundos en el campo. Esto provocaba consecuencias graves que los agricultores negligentes, como hay muchos en México, pues no les importaba y se podía ir de marcha a otro pueblo. Y así se puedo uno dar cuenta de los logros o de los retrocesos en los sistemas desde la forma de sembrar, el tipo de tierras a cultivar, los tiempos de lluvias, los tipos de semillas que sembrar y saber en comparativo de las bondades de cada región, de cada país, aunado al proceso legislativo de dichos países, unos más ignorantes que otros, unos más fuertes que otros, por eso da como resultado, un mejor país por lo menos en la forma de llevar a cabo si actividad agrícola en todos sus aspectos. 70 “Considero en verdad que para diseñar nuestro futuro, —de especial manera en el campo mexicano, hijo de tantos debates, de tantas carencias, de tanta hambre y de tanta sangre—, debemos conocer e interpretar a fondo nuestro pasado, bajo pena de repetir por ignorancia o superficialidad, los errores cometidos por nuestros abuelos. No basta repetir con superficial frialdad y falta de convencimiento que "la Historia es la maestra de la vida" sin creerlo siquiera. Si lo es, hay que aprender lecciones de ella y ponerlas en práctica; si no lo fuera: ¿a qué repetir tonterías inexistentes? Igualmente estoy cierto de que para entender el entramado de la convivencia social, son indispensables el conocimiento sólido de la Historia y el del Derecho; ambos, se necesitan e implican mutuamente; que la Historia, sin el Derecho, es anarquía; y que el Derecho, sin la Historia, es utopía. No creo en los dogmatismos filosóficos ni económicos. Ninguno es perenne y ambos han probado su volatilidad. Creo, sí, en la fuerte incidencia de la Historia que nos impone los hechos de los que nuestro "hoy" y nuestro "mañana" se ven, ciertamente, influidos a tal grado, que con frecuencia podemos encontrar en ella la razón última de situaciones que sin conocerla, nos resultaría imposible entender. Si no actuamos conscientemente en estos términos, habremos de trabajar sin fundamento, sin bases sólidas, con una ligereza ajena del todo a la reciedumbre intelectual y a las necesidades del país. ¿Cuáles han sido pues las razones históricas y jurídicas de la existencia actual en México de millones de campesinos depauperados, millones también en la miseria, como he dicho y conociéndolos, faltos de fe y huérfanos de esperanza? ¿Cuál es la razón final de que las parcelas ejidales y las tierras comunales, la llamada "propiedad social", hayan fracasado como figuras económicas productivas, como rescate de la secular miseria campesina, como real elemento factor de una vida económicamente sana, atendiendo a la dignidad de la persona humana, como sustento de una clase media agrícola y agropecuaria holgada, como unidades económicas eficientes, concurrentes con sus productos al mercado nacional, exporta doras incluso? Por la calidad de su autoría, por su experiencia, por su actualidad vale la pena tomar en cuenta la siguiente opinión crítica: Si queremos ser sinceros con nosotros mismos, tenemos la obligación confesar, los hijos de la revolución, que el agrarismo, tal como lo han entendido y practicado hasta ahora, es un fracaso. Común denominador de la miseria de millones de campesinos mexicanos: 71 Los campesinos pobres de México, nunca han sido propietarios, ni de sus tierras ni de sus destinos. La propiedad privada, ha demostrado hoy a nivel universal, [díganlo las actuales economías de la Europa del Este, las de Asia, la economía china en lo particular y que los señores economistas den rumbo, contenido y cifras a mi dicho], en el tiempo y en el espacio, que es el sistema más propicio para la creación y la distribución de la riqueza, sin que el Estado se abstenga nunca de su esencial responsabilidad de promover la auténtica justicia social, conmutativa, distributiva y legal; y aún más lejos, la equidad, como aplicación de la justicia al caso concreto, según decía Aristóteles. La propiedad colectiva de las tierras, vía ejidos o comunidades, ha mostrado históricamente en nuestra patria su rotundo fracaso económico, social y cultural. Y lo mismo ha sucedido en México que en la antigua Europa socialista del Este, en Vietnam, en Corea del Norte, en China. Es una regla general, probada a nivel universal. Aquí, he reproducido, en cuanto nos son aplicables, las reflexiones de un hombre político del otro lado del mundo, de la talla de Shimon Pérez. Me impactaron desde hace años, su visión de la pobreza y la agudeza de sus juicios, tan aplicables a nuestras realidades. Lo dicho por Plutarco Elías Calles, es a mí entender irrefutable. Nuestra historia y la realidad, le han dado la razón, aunque no deja de haber quienes negando la luz del sol, nieguen esos fracasos. "Estultorum est infinitos nu meros", decían los viejos, sabios romanos. El número de los tontos | infinito. 10.1.1ESTADOS UNIDOS DE AMERICA Evolución “Al igual que para otros descubridores de la época, el principal argumento jurídico de los inmigrantes ingleses para la ocupación de las tierras en América fue a la llegada del marino italiano Cabot a la Isla de Labrador en 1497, sólo cinco años después que Colón. También consideraron legal practicar la guerra justa, resistiendo la violencia con más violencia; el mismo principio se aplicó para el sojuzgamiento de los indios y la apropiación de sus tierras si renegaban de la fe cristiana una vez convertidos. Los colonos sostenían que los indios habían recibido de Dios sólo el derecho natural de posesión, no el derecho civil, que implicaba el mejoramiento del suelo, la cría de ganado y la multiplicación de los frutos y cosechas, derechos que los puritanos sí habían recibido de Jehová. En 1603 se fundó la colonia de Virginia y en 1620 la de Massachusetts, cuya prosperidad permitió la fundación de Connecticut en 1639, Maine y New 72 Hampshire en 1650 y Carolina en 1663, así como de otras hasta llegar en 1732 a la de Georgia. De esta manera se conformaron las colonias iniciales como asentamientos a lo largo de las costas orientales. En el norte, integrado por las primeras colonias, la agricultura era poco productiva, por lo cual se desarrolló la pesca y el comercio marítimo en general, en el centro (Nueva York), New Jersey y Pensilvania) la tierra era de mejor calidad, lo que permitió la constitución de productivas haciendas; en el sur, desde Virginia hasta Georgia, se formaron las más grandes plantaciones trabajadas por esclavos negros; en esa región casi todos vivían de la agricultura a manera de pequeños estados comerciales. La cultura social estaba conformada por los grandes terratenientes, la gran masa de los “blancos pobres”, pequeños propietarios o empleados y jornaleros y, finalmente, los negros. Segregado se encontraba un grupo de hombres, casi una especie, llamados squatters, quienes sin ocuparse de las reglamentaciones concernientes a la propiedad se establecieron donde quisieron, específicamente a partir de la zona limítrofe que se extendía a lo largo de la frontera occidental de las colonias, avanzando hacia la gigantesca llanura que se abría al oeste. Independencia. Con la declaración de independencia de 1776las colonias se separaron de la metrópoli y se constituyeron en república autónoma, conforme se desprende de su Constitución de 1787. Sin embargo, ya desde 1780 las 13 colonias, como estados independientes, poseían constituciones propias en las cuales se reflejaba el sentimiento individualista propio de la colonización inicial y que pronto se incrementó exponencialmente con base en el ideal de Jefferson de constituir un país poblado por propietarios de pequeñas haciendas agrícolas. Como consecuencia directa de la independencia, innumerables grandes posesiones, sobre todo las pertenecientes a la corona inglesa, fueron subdivididas y repartidas en pequeñas haciendas agrícolas, con lo que hasta entonces arrendatarios se convirtieron en propietarios. Leyes de Homestead. Este grupo de disposiciones instituyó una ficción jurídica concebida para proteger la posesión y disfrute del propietario de la tierra ante reclamos de sus acreedores. El predio que debe ser la residencia permanente del jefe de una familia incluye la tierra y las edificaciones que rodean la casa habitación. Entre otros aspectos, esta ley prohibió la ejecución y venta forzada de la tierra, protección que dura en tanto ésta sea domicilio y único patrimonio del titular. Así, 73 implica el derecho personal al aprovechamiento pacífico, ininterrumpido, de la propiedad domiciliaria, libre de afectaciones o acreedores. Estructura fundamental de la tenencia de la tierra. La mayor parte del derecho angloamericano no está codificada ni en forma de leyes escritas. Una de las características fundamentales de este sistema jurídico es la que se conoce como case law, o sea derecho del caso, cimentado en la adhesión a los precedentes. La organización agraria se asienta sobre la pequeña y mediana propiedad. La incidencia porcentual de los grandes latifundios es de escasa significación. La extensión de las explotaciones agrícolas debe ser suficiente para satisfacer las necesidades materiales y culturales del hogar campesino. Además, se garantiza la comercialización de sus productos, a fin de beneficiar a la colectividad y se estimula su progreso poniendo a su alcance los adelantos de la técnica moderna. 10.1.2 FRANCIA Este país ha logrado la más amplia distribución de la propiedad territorial. La agricultura se encuentra agobiada por la preeminencia de la industria, que abate los precios de la producción agrícola hasta límites intolerables. Por ello, el gobierno otorga fuertes subsidios a los pequeños agricultores. 10.1.3 CHINA La información con que se cuenta es realmente escasa. Ni siquiera la representación diplomática de esta nación posee material documental actualizado de la situación agraria. Sin embargo, es por todo conocido que el sistema chino está estructurado con base en el colectivismo comunista. Así, la ley del 28 de junio de 1950, sancionada por el Gobierno Central de la República Popular China, establece la colectivización de la tierra y de los instrumentos de producción agrícola, necesaria para impulsar la industrialización. Se confisco a los terratenientes sus tierras (excepto las correspondientes a los templos y a las empresas), bestias de tiro, material agrícola y excedentes de grano. La citada ley estableció la pequeña propiedad, inafectable por la confiscación, cuando su titular la trabaja por si o con ayuda de mano de obra asalariada. El terrateniente afectado conservo una extensión de tierra igual a la otorgada a cada campesino, destinada a su sostenimiento, cuyo trabajo lo “reformaría”. 74 Tanto la tierra como los medios de producción confiscados fueron puestos a disposición de las federaciones de agricultores de las comunidades rurales, para que estas procedieran a la entrega de las unidades de tierra según determinadas prioridades. Se reconoce la propiedad individual, ya que su colectivización no es obligatoria, sino únicamente fomentada para fines productivos. La ley establece que el gobierno entregara a los campesinos los títulos de posesión de la tierra repartida, lo cual les permitirá ejercer el derecho de libre explotación, de compra y de venta. Con la finalidad de fiscalizar este proceso se instituyeron autoridades agrarias y se creó un Tribunal Popular para juzgar y sancionar toda controversia surgida con motivo de la aplicación de la ley. 10.1.4 ARGENTINA Argentina sufre una gran dispersión legislativa, ya que no existe una codificación especial unificada de las normas jurídicas agrarias. Por una parte encontramos normas generales y comunes, y por la otra, normas especiales para ciertas clases de dominio agrario, sobre todo en materia de colonización. Aquellas han logrado derogar una significativa cantidad de normas civiles, lo cual no significa que pueda prescindirse del Código Civil para poner en práctica, desarrollar y solucionar las relaciones jurídicas que regulan la propiedad rural. Según algunos tratadistas argentinos, el problema reside en que la Constitución, caracterizada por su liberalismo y su desconocimiento de los valores agrarios, solo contiene algunas normas específicas sobre la materia. La inexistencia del derecho agrario como una rama autónoma obliga a acudir a esta normatividad dispersa ya, respetar el orden jerárquico conformado por la constitución Nacional, el Código Civil, las leyes agrarias nacionales y las constituciones y leyes provinciales. Sustancialmente, el esquema del dominio agrario vigente se estructura sobre las tres normas señaladas en primer lugar, que por razones de brevedad serán las que rápidamente abordaremos. NORMAS CONSTITUCIONALES El artículo 17 señala que la propiedad es inviolable, por lo que nadie puede ser privado de ella sino mediante sentencia fundada en la ley. La expropiación solo se podrá aplicar por causa de utilidad pública fundada y previa indemnización. Está prohibida la confiscación de bienes y los cuerpos armados no pueden hacer requisiciones. El artículo 14 indica que los habitantes gozan del derecho de usar y disponer de su propiedad. Por su parte, el 20 concede a los extranjeros los mismos derechos que a los ciudadanos, incluyendo la posesión, compra y 75 enajenación de bienes raíces. El numeral 11 prohíbe aplicar impuestos por el tránsito de ganado de una provincia a otra. Ley 20.518 Mediante esta ley Suspensión de Desalojos en Arrendamientos Rurales del 31 de julio de 1973, se pretende evitar que se abandonen los predios o se afecte su producción, para lo cual se establecen líneas de crédito del Banco de la Nación para adquirir el inmueble, previo trámite ante el Consejo Agrario Nacional. 10.1.5 CUBA Los principios de la propiedad territorial cubana están contenidos en la ley de Reforma Agraria expedida el 17 de mayo de 1959, la cual admite la pequeña propiedad de hasta 30 caballerías, ya que se considera que esta extensión es suficiente para el mantenimiento de la burguesía agraria. La ley respeta las fincas rústicas de mayor extensión si son ganaderas o están sembradas con caña de azúcar. Arroz o cultivos de altos rendimientos. También dispone que solo los cubanos podrán ser propietarios de la tierra y otorga parcelas de dos caballerías de tierras fértiles, como mínimo, para las familias de cinco miembros. Este proceso está cargo del Instituto Nacional de la Reforma Agraria; la entrega es gratuita y se indemniza a los afectados. Por otro lado, ante la difícil situación en la economía cubana, consecuencia del cese de los apoyos económicos y los embargos, en 1993 se constituyeron las Unidades Básicas de Producción Cooperativa en tierras estatales administradas por antiguos obreros asalariados. 10.1.6 PERÚ Disposiciones constitucionales La Constitución política de Perú, promulgada el 12 de julio de 1979, contiene importantes principios en materia agraria. El título I trata de los derechos y deberes fundamentales de la persona; el título III se refiere al régimen económico, cuyo capítulo 3º se dedica a la propiedad, a la cual asigna una esencia social liberal, en tanto que el capítulo 7º, denominado Del régimen agrario, contiene los lineamientos estructurales de la reforma agraria; el capítulo 8º otorga un tratamiento especial a las comunidades campesinas y nativas a la par que crea un seguro agrario para protección contra calamidades y desastres. Estructura agraria 76 El decreto ley número 17.716, promulgado el 24 de junio de 1969, regula la reforma agraria en las regiones de la costa, sierra y ceja de la selva del Perú, definiéndola como un proceso integral e instrumento de transformación de la estructura agraria para sustituir el régimen de latifundio y minifundio por un sistema más justo de propiedad, tenencia y explotación de la tierra, que garantice la justicia social en el campo y el aumento de la producción y productividad del sector agropecuario. La región de la selva queda por entero sujeta a la aplicación del decreto ley número 20.653, relativo a Comunidades Nativas y de Promoción Agropecuaria de Regiones de Selva y Ceja de Selva. Esta ley establece límites a la extensión de la propiedad, bajo pena de afectación. En la costa, la inafectabilidad agrícola se fijó en 150 hectáreas, en tanto la ganadera asciende 1.500 hectáreas, límites que sin embargo pueden ser incrementados bajo ciertas condiciones. En las zonas de la sierra y ceja de selva, los límites varían de acuerdo con cada provincia, a las cuales corresponde la facultad de establecerlos según sus propias circunstancias entre 15 y 55 hectáreas. La reforma agraria peruana se basó en el principio de que la tierra es de quien la trabaja. En consecuencia, prohibió toda forma de tenencia indirecta, incluyendo la posibilidad de arrendamiento, así como toda forma de cesión de predios a título oneroso o gratuito. La ley prevé una propiedad inafectable, sujeta a los límites de extensión mencionados y a su explotación directa y eficiente. Cabe mencionar que la afectación se realiza por la vía de la expropiación y mediante indemnización, para cuyo cumplimiento se creó la Deuda Agraria, ya que se expiden bonos para dicho fin. 10.1.7 ISRAEL Características de la agricultura Recursos básicos limitados. Sólo la cuarta parte del territorio es cultivable, los recursos hidrológicos son limitados y el régimen de lluvias desfavorable, el clima es semiárido y ardió, los suelos están erosionados por el abandono y la tala anterior. Israel goza de precipitaciones pluviales solo durante los tres o cuatro meses de invierno, y 80% del territorio cuenta con 20% de los recursos hidrológicos, en tanto que 80% restante se halla en el extremo norte del país, en un área que no supera 20% de su territorio. 77 Suelo y agua propiedad de la nación Más de 95% de la tierra es propiedad de la nación, así como todos los recursos del subsuelo y los recursos hidrológicos. Al agricultor se le asigna una determinada cuota anual de agua que debe aprovechar para obtener el mayor beneficio posible. Cooperativismo Su organización es predominantemente cooperativa (kibutz, moshav, etc.), como se verá más adelante. Planificación Esencialmente planificada desde el plano nacional hasta el individual respecto de cada unidad de explotación. Participación Participación integral del gobierno y organizaciones. Tecnificación La explotación agrícola y ganadera es esencialmente intensiva, lo cual incrementa los índices de productividad. Limitaciones del mercado El mercado interno ha quedado cubierto, por lo cual la capacidad de expansión del sector depende del mercado externo. Instituciones rectoras de la agricultura Se ocupa de la producción, precios, crédito de avío, presupuestos de fomento para aldeas ya consolidadas, importación de productos agropecuarios, servicios veterinarios y fitosanitarios, investigación, conservación de suelos, desarrollo de recursos hidrológicos, etc. Fondo agrario nacional Creado a comienzos del siglo con el propósito de adquirir tierras en la Palestina de ese entonces y habilitarlas para la agricultura y la silvicultura, ha coordinado sus tareas con el Ministerio de Agricultura y actualmente se dedica a la adquisición y habilitación de tierras, su registro y arrendamiento, así como la silvicultura. Régimen de tenencia de la tierra 78 Israel es uno de los pocos países del mundo cuyo proceso de reforma agraria concluyó, ya que el mismo inició antes del mandato británico sobre Palestina y culminó con su constitución en Estado independiente en 1948. Bajo este esquema, más de 95% de su territorio es de propiedad nacional; el uso de suelo está totalmente planificado. La ley bíblica del “jubileo” regula la tenencia de la tierra (ésta retorna a su propietario al cabo de 49 años). De esta forma, el Estado renta al agricultor por 49 años, de acuerdo con un planteamiento socioeconómico de nivel profesional, científico y social. El agricultor no es propietario del suelo; no puede por lo tanto, especular con él o subdividirlo entre sus herederos (lo que lleva al antieconómico minifundio), o acumular grandes extensiones de suelo (lo que lleva al ineficiente e injusto latifundio). Básicamente el origen de la propiedad de la tierra emana de tres afluentes: El primero conformado por la compra formal por conducto del Fondo Agrario Nacional; principalmente, y en menor medida, a título particular; el segundo, constituido por una expropiación anterior a la creación del Estado (independiente de la expropiación por razones de seguridad pública o motivos socioeconómicos); y el tercero, a partir de las tierras abandonadas por los aldeanos árabes como consecuencia de la guerra. En este último caso, la ley impone la obligación de indemnizar plenamente al dueño de la propiedad abandonada. Como índice de la situación que se encuentra la tenencia de la tierra en Israel, a continuación se incluye un cuadro informativo: Propiedad y explotación colectiva 95% Kibutz, Moshav ovdim, Moshav shitufi Propiedad y explotación particular 5% Moshavá Aldea árabe Kibutz Esta institución es una sociedad de carácter voluntario, asentada sobre una forma de vida colectiva basada en la propiedad, producción, trabajo, consumo y educación de los hijos, comunes. 79 En ella se aplica el principio de “cada uno según sus posibilidades, a cada uno según sus necesidades”. Las tierras son propiedad nacional, la vivienda es propiedad del kibutz, el comedor es colectivo, cuentan con servicios médicos asistenciales (kupat jolim); la educación es colectiva, por lo cual los niños pasan gran parte del día en una casa especial común; la cultura, producción y sus medios, consumo, trabajo, organización para el trabajo, son colectivos; la herencia pertenece al kibutz, no hay remuneración y solo se proporciona dinero para pequeños gastos; se conceden 10 días anuales de vacaciones a cuenta del kibutz; la afiliación y retiro de éste son voluntarios; la Ley de Cooperativas los reconoce como sociedad cooperativa; además, quienes lo integran, no realizan aportaciones a la sociedad. Moshav ovdim Constituye una forma de colonización agrícola intermedia basada en dos principios fundamentales: el individual y el colectivo. La educación, así como la producción, son privadas, pero los medios de producción son tanto particulares como colectivos; el trabajo y su organización son particulares; el consumo se realiza mediante cooperativas. La estructura administrativa del moshav se compone de una asamblea general, un consejo de administración, el secretario interno y el externo, y diversas comisiones. Moshav shitufí Éste es un tipo de colonización agraria en el que todos los miembros, propietarios colectivos de los bienes de la colonia, participan en la administración, en el trabajo, en la ayuda mutua y asumen una responsabilidad común, en tanto que la familia conserva su existencia unitaria en el marco de un hogar individual donde desarrolla su vida privada. Moshavá Aldea de tipo privado, no difiere mucho de las poblaciones rurales existentes en otras partes del mundo desde el punto de vista de su estructura social, económica y organizativa. Es la forma de colonización más antigua en la historia de la colonización judía en Israel. Estableció sobre tierras privadas, se basan en el principio de la granja individual; no se ajustan al principio del trabajo personal, pero no prohíben el empleo de asalariados en general y judíos en particular. Además, no exigen a los agricultores organizarse en asociaciones cooperativas para la compra y venta de sus productos. 80 Aldea árabe Suministra cerca de 12% de la producción agrícola de Israel y se basa por entero en los principios de la explotación privada.”1 CUESTIONARIO 1.- En qué consiste la ley Homestead? 2. ¿Cuáles son las medidas de protección para la producción agrícola en los Estados Unidos? 3.- ¿Qué es el Moshavá? 4.- Menciona que es un Kibutz 5.- ¿Cuáles son las leyes pre-Emption? 6.- ¿Qué ley en China establece la colectivización de la tierra y de los instrumentos de producción agrícola? 7.- ¿Qué artículo en Argentina menciona que la propiedad de la tierra es inviolable? 1 Rivera Rodríguez, Isaías, El Nuevo Derecho Agrario Mexicano, ed. Mc Graw Hill, 2ª edición, México 2013, p106 81 CAPITULO XI LEGISLACIÓN DE LA REFORMA AGRARIA, DERIVADA DEL ARTÍCULO 27 CONSTITUCIONAL INTRODUCCIÓN En el trabajo de formar una legislación agraria intervienen actores políticos que muchas de las veces, la mayoría, nada tiene que ver con el agro, y no tienen la más remota idea de lo que van a trabajar en cuando elaboran este tipo de leyes. Para empezar se debe conocer que ejidatario es todo aquel ser humano hombre o mujer con derechos titulares ejidales, y desde ese problemas jurídico de saber cuál es el concepto de que es ejidatario y de que es un comunero, y se ha centrado este concepto en la persona moral de la cual forman parte cada individuo. Esto es tan solo el inicio para poder legislar en materia agraria, redefiniendo los conceptos de cada actor jurídico. Ya establecido esto, pues se procede a definir los derechos agrarios individuales , sus bienes en materia, su calidad de ejidatario, con su adquisición y acreditación, y la pérdida legalmente del mismo título, derecho y responsabilidad. Debe ser muy precisa y directa esta legislación, puesto que la mayoría de los ejidatarios o comuneros no saben por lo menos leer ni escribir, y a veces el hacer leyes de poco entendimiento entre el medio de los abogados, su uso en el medio agrario es complicado y nada práctico en la vida diaria del campo mexicano. 82 11.1 LEY DE EJIDOS DEL 30 DE DICIEMBRE DE 1920 a) “Antecedentes. Como el sistema de expedir Circulares por la Comisión nacional Agraria, resultó un tanto caótico porque las Circulares eran casuistas, con frecuencia contradictorias y no respondían a un sistema interno, se utilizó la experiencia obtenida a través de ellas para expedir un ordenamiento legal que respondiera a un plan sistemático jurídico; así nació la primera Ley Agraria, la Ley de Ejidos del 30 de diciembre de 1920, bajo el régimen presidencia del general Álvaro Obregón, que recapituló la experiencia adquirida a través de las Circulares, pero que adicionó otros lineamientos más sobre conceptos fundamentales. Por otra parte los campesinos que habían luchado por la Revolución de 1910 por conquistar y consagrar un artículo 27 constitucional, exigieron el cumplimiento de éste como realidad que los convenciera de que su lucha ya había terminado porque habían triunfado; pero la generosidad del artículo 27 constitucional y sus grandes lineamientos aún debía de ponerse en juego con la dinámica social y crearse su legislación secundaria que, respetando sus grandes principios, llegara hasta los detalles de la Reforma Agraria, en consonancia con las necesidades nacionales del momento para que sus acciones, procedimientos e instituciones resultaran eficaces . Hasta ese año Venustiano Carranza logró repartir 132,639/87-02 hectáreas entre 59,848 beneficiados y Adolfo de la Huerta 33,695/87-24 entre 17,355 beneficiados. b) Contenido. Esta ley constó apenas de 42 artículos y 9 transitorios. Respecto de la capacidad jurídica estableció que tienen derecho a obtener tierras por dotación o restitución, en toda la República…I. Los pueblos; II. Las rancherías; III. Las congregaciones; IV. Las comunidades y V. Los demás núcleos de población de que se trata esta ley (artículo 1). En otras palabras la capacidad jurídica se determinó por la categoría política de un núcleo de población (artículo 3). c) Respecto de la capacidad individual el artículo 3º mencionó a los “vecinos, jefes de familia”, concepto aplicado por igual a varones y mujeres, pues la Circular número 48 de la Comisión Nacional Agraria, en su regla número 12 dijo que las mujeres solteras o viudas que tengan a su cargo familia que atender, serían consideradas también como “jefes o cabezas de familia”. El artículo 13 estableció que “la tierra dotada a los pueblos se denominará ejido”, explicándose así legalmente el cambio de significación de la palabra 83 ejido en la etapa contemporánea. Más adelante el citado precepto explicó la extensión de los ejidos diciendo que el “mínimo de tierras de una dotación sería tal, que pudiera producir a cada jefe de familia una utilidad diaria equivalente al duplo del jornal medio de la localidad”, para hacer esta determinación a toda solicitud deberían acompañarse datos varios, sobre salarios, precios de artículos de consumo, de objetos necesarios para la vida, etc. (artículos 7 y 34, fracc. II, inciso d). Respecto de la dotación (artículo 34), la solicitud también se presentaba ante el Gobernador (fracc. I), quien la transcribía a la Comisión Local Agraria; ésta levantaba informaciones de oficios sobre los datos necesarios, y en cuatro meses debía formular dictamen sobre las conveniencias o necesidades de la dotación (fracs. II, III y IV), notificándoselo a los presuntos afectados; el expediente se turnaba a la Comisión Nacional Agraria la que en un mes debía formular su dictamen y el Ejecutivo fallaría en definitiva. (Fracs. V, VI, VII y VIII del artículo 34). d) Efectos. La Ley de Ejidos duró vigente sólo once meses, pues fue derogada por el Decreto del 22 de noviembre de 1921, y lógicamente en tan poco tiempo, sus efectos fueron bien pocos; ésta simple observación indica que resultó muy defectuosa en relación con la imperiosa necesidad de aquellos años de llevar a cabo el reparto agrario; el trámite era dilatado, los términos se prolongaron más allá de lo estableció, pues tan solo para determinar la extensión de la parcela, los estudios previos sobre salarios, precios de los artículos de consumo, etc., eran realmente engorrosos y dilatados, de tal manera, que los expedientes tardaban en llegar a la resolución final y sólo hasta entonces, en caso favorable, había posesión definitiva de tierras para los pobladores necesitados, los que urgentemente requerían las tierras; en consecuencia , la Ley de Ejidos, no respondió a la realidad para la cual se expidió y pronto hubo de derogarse. Por otra parte, se comprendió que la ley solo se preocupara de los ejidos, pues era la inmensa mayoría del pueblo, desposeído de tierras quienes exigían su reparto, por eso no encontramos en dicha ley ninguna preocupación por la pequeña propiedad. 11.2 DECRETO DEL 22 DE NOVIEMBRE DE 1921 a) Antecedentes. El Decreto del 6 de enero de 1915 fue reformado en sus artículos 7, 8 y 9 por el Decreto preconstitucional del 19 de septiembre de 1916, que a su vez fue derogado por la Constitución de 1917; en consecuencia fue necesario aclarar que los artículos precitados del Decreto del 6 de enero de 1915 recobraron su validez con que aparecieron en su 84 texto original, el que, fue incorporado a la propia Constitución; y así lo hizo el Decreto del 22 de noviembre de 1921, en su artículo segundo, Decreto expedido por Álvaro Obregón y que vino a derogar en su artículo 1º la Ley de Ejidos del 28 de diciembre de 1920. b) Bases que dio. I. El artículo tercero estableció una nueva corriente en la forma de integrar las leyes agrarias, propiciando la creación de las normas de tipo material expedidas por el Poder Ejecutivo de la Nación para que dicte todas las disposiciones convenientes a reorganizar y reglamentar el funcionamiento de la autoridades que para su aplicación creó el Decreto preconstitucional del 6 de enero de 1915. Hoy observamos una gran cantidad de normas de tipo material en la Legislación Agraria, y estas facultades y tendencias se iniciaron con el Decreto que nos ocupa. La facultad se extendió, continuaba diciendo el artículo tercero, “a todas las demás disposiciones agrarias que se hayan expedido o se expidan en lo sucesivo, de acuerdo con el programa político de la Revolución sobre las bases siguientes” (éste artículo explicó, además, la estrecha vinculación entre Derecho Agrario. La Legislación Agraria, la Reforma Agraria, la Política Agraria y la Revolución de 1910). c) Efectos. Este Decreto de 1921 inició la técnica legislativa material, de acuerdo con la cual, el Poder Legislativo autorizó al Poder Ejecutivo para que reglamente las leyes que expide. Bajo la vigencia del Decreto que creó las bases de la legislación Agraria, los procedimientos se activaron, acelerándose en consecuencia la restitución y dotación de tierras a los pueblos necesitados de ellas y se estableció que este hecho era una necesidad inaplazable para nuestra estabilidad interna. El 29 de mayo de 1922 se expidió un Decreto que aclaró la fecha correcta de expedición del Derecho de las Bases Agrarias, señalando el 22 de noviembre de 1922 como la fecha correcta. El artículo 1º transitorio de la Ley de Dotaciones y Restituciones de Tierras y Aguas de 1927 derogará este Decreto exceptuando su artículo 4º. 11.3 REGLAMENTO AGRARIO DEL 10 DE ABRIL DE 1922 a) Antecedentes. Este reglamento se expidió por Álvaro Obregón, utilizando las facultades señaladas por el artículo 3º del decreto de las Bases Agrarias del 22 de noviembre de 1921. En relación con la Ley de 85 Ejidos de 1920, se utilizó su experiencia, pero asimismo, trató de superarse, introduciendo novedades. b) Contenido. Este reglamento constó de veintiocho artículos y dos transitorios. Aun cuando se había visto que el sistema de determinar capacidad jurídica de los poblados por la categoría política de los mismos, implicaba problemas, pues muchos de ellos no tenían le denominación señalada por la ley y si la necesidad de obtener tierras para labrarlas, el Reglamento continuó con éste sistema intentando remediar el defecto tan solo con adicionas a las cuatro categorías más, los condueñazgos, “ los núcleos de población existentes en las haciendas que hayan sido abandonadas por sus propietarios y que tuvieren necesidad de cultivar terrenos de las inmediaciones, a fin de poder subsistir; y las ciudades y villas cuya población ha disminuido considerablemente o hayan perdido la mayor parte de sus fuentes de riqueza, así como carácter de centros industriales, comerciales o mineros”, (artículo 1º). En cuanto a la capacidad individual, el artículo 9º señaló al jefe de familia o individuo mayor de 18 años, iniciando el abandono del concepto familista que inspiró la legislación Agraria desde la época colonial. c) Efectos. La ley estaba redactada sin técnica en cuanto a la ordenación de los preceptos. Su contenido siguió ocupándose sólo del reparto de tierras para constituir ejidos, pero no de los otros aspectos del ejido, ni de la pequeña propiedad; el problema agrario seguía pues sin ser atendido en muchas de sus fases. Por otra parte, la estructuración defectuosa del procedimiento permitía que la mayoría de los presuntos afectados se amparan utilizando el recurso a que se refería el artículo 10 de la Ley del 6 de enero de 1915, y muchas veces, cuando el amparo procedía por deficiencia del procedimiento, el recurso de amparo venía a nulificar la Legislación Agraria, retrasando el reparto de la tierra. Otro de los efectos notorios de este Reglamento Agrario fue permitirles a los Comités Particulares Administrativos atender a la administración y mejoramiento de los ejidos; véase la Circular número 51 del 11 de octubre de 1922 que, además, establecía que se debía procurar la organización cooperativa para la explotación ejidal y organizar en cooperativas a todos los pueblos, congregaciones o rancherías. El reglamento duró vigente cinco años. Hasta que lo derogó la Ley Bassols. De aquí para adelante surge también: La primera Ley Reglamentaria sobre Repartición de Tierras Ejidales y Constitución del Patrimonio Parcelario Ejidal del 19 de diciembre de 1925. 86 La Ley de Dotaciones y Restituciones de Tierras y Aguas del 28 de abril de 1927. La Ley del Patrimonio Ejidal del 25 de agosto de 1927. Ley de Dotaciones del 21 de marzo de 1929. Decreto del 23 de Diciembre de 1931 que prohibió el amparo en Materia Agraria a los Propietarios Afectados. Decreto del 10 de Enero de 1934 que Reformó el Artículo 27 Constitucional Primer Código Agrario de los Estados Unidos Mexicanos del 22 de marzo de 1934. Código Agrario del 23 de septiembre de 1940. Decreto que reformó el artículo 27 constitucional del 30 de diciembre de 1946. El juicio de amparo en materia agraria. Código Agrario del 30 de diciembre de 1942. Ley Federal de Reforma Agraria del 16 de marzo de 1971. Ley Agraria de 1992”.1 1 Chávez Padrón, Martha, El Derecho Agrario en México, ed. Porrúa, México 2012, p325 87 LEY DE EJIDOS 30 DIC 1920 LEGISLACIÓN DE LA REF AGRARIA ART 27 CONSTITUCIONAL DECRETO 22 NOV 1921 REGLAMENT O AGRARIO 88 CAPITULO XII LAS COMUNIDADES INTRODUCCION Este es un pequeño tema que no se puede dejar de atender, por la importancia dentro del patrimonio de la agricultura en México, la comunidad está protegida por leyes agrarias, así como su forma de explotarlas, y debe de tener una serie de cumplimientos a los requisitos para que exista. Hay diferentes procedimientos necesarios para la constitución y más que nada reconocimiento legal como por ejemplo exista una acción agraria de restitución para una comunidad despojada de su propiedad. Cuentan con un órgano de representación y gestión legal que es el comisariado de bienes comunales el cual se rige en los términos que establezca un estatuto comunal o por costumbre. “La propiedad comunal es el patrimonio constituido por un inmueble y sus derechos sobre el mismo, mediante los procedimientos establecidos en la ley Agraria, aprovechando por el conjunto de los habitantes de un pueblo, que lo tienen como parte indivisa entre sí. La tenencia de los terrenos propiedad de las comunidades, su protección, así como sus formas de explotación están contenidas en el capítulo V, en los artículos 98 al 107 de la Ley Agraria en vigor. 12.1 RECONOCIEMIENTO LEGAL Y SUS EFECTOS El reconocimiento de una comunidad puede derivarse de cualquiera de los procedimientos siguientes: 1. Una acción agraria de restitución para las comunidades despojadas de su propiedad; 2. Un acto de jurisdicción voluntaria promovido por quienes guardan el estado comunal cuando no existe litigio en materia de posesión y propiedad comunal. 3. La resolución de un juicio promovido por quienes conserven el estado comunal cuando exista litigio u oposición de parte interesada respecto a la solicitud del núcleo, o 4. El procedimiento de conversión de ejido a comunidad (art.98 de la LA). 89 12.2 EXLCUSION DE PEQUEÑAS PROPIEDADES En los casos señalados por el artículo 193 de la Ley Federal de Reforma Agraria, de ser la hipótesis del que reconocimiento se hubiera iniciado durante su vigencia, las pequeñas propiedades enclavadas en las comunidades deberían ser respetadas y excluidas del reconocimiento cuando: se trate de tierras y aguas tituladas en los repartimientos hechos conforme a la ley del 25 de junio de 1856, o se poseen hasta 50 hectáreas de tierras, siempre que hayan estado poseídas en nombre propio, a título de dominio, por más de 10 años anteriores a la fecha de la notificación inicial del procedimiento que se haga al propietario o poseedor, en los términos de la ley vigente en la fecha de la solicitud. Respecto de la exclusión por razón de la sustitución de autoridades, corresponde conocer en primera instancia a los tribunales agrarios. 12.3 PROTECCIÓN JURIDICA Las tierras comunales se caracterizan por ser inalienables, imprescriptibles e inembargables, excepto que la comunidad determine la asociación con terceros, para de este modo ceder el uso y disfrute de sus bienes de manera temporal y transmitir el dominio de áreas de uso común a sociedades civiles o mercantiles en los casos de manifiesta utilidad, así como encargar la administración a terceras personas sobre dichas tierras. 12.4 ORGANOS DE REPRESENTACIÓN Su órgano de representación y gestión es el comisariado de bienes comunales, que se rige en los términos que establezcan el estatuto comunal y la costumbre. 12.5 DIVISION DE TIERRAS El art. 100 del mismo ordenamiento faculta a la comunidad para que esta determine el uso de sus tierras, su división en distintas porciones según diversas finalidades y la organización para el aprovechamiento de sus, bienes. La misma comunidad podrá construir sociedades civiles o mercantiles, asociarse con terceros encargar la administración o ceder temporalmente el uso y disfrute de sus bienes para su mejor aprovechamiento de sus bienes. La misma comunidad podrá constituir sociedades civiles o mercantiles, asociarse con terceros, encargar la 90 administración o ceder temporalmente el uso y disfrute de sus bienes para su mejor aprovechamiento. Por otra parte, conforme al art. 101 del ordenamiento que nos ocupa, la comunidad implica el estado individual de comunero y, en su caso permite a su titular el uso y disfrute de su parcela y la cesión de sus derechos sobre la misma den favor de sus familiares y avecinados del lugar, así como el aprovechamiento y beneficio de los bienes del uso común en los termino que establezca el estatuto comunal. El beneficiado por la cesión de derechos de un comunero adquirirá la calidad del comunero. Cuando no exista litigio, se presume como legitima la asignación de parcelas existentes de hecho en la comunidad. En los casos en que exista asignación de parcelas individuales, según el art. 102 de la ley agraria, se presumirán iguales los derechos correspondientes a los comuneros, mientras no se pruebe o contario. 12.6 CONVERSION DE EJIDO A COMUNIDAD Los ejidos que decidan adoptar el régimen de comunidad podrán hacerlo mediante la aprobación de la asamblea general de ejidatarios, cumpliendo con los requisitos de asistencia y votación previstos en la fracc. IX del art. 23 de la ley agraria. La asignación parcelaria de los ejidos que opten por la calidad comunal será reconocida como legitima. A partir de la inscripción de la resolución respectiva en el registro agrario nacional, el ejido se tendrá por legalmente transformado en comunidad. Por su parte, las comunidades que quieran adoptar el régimen ejidal podrán realizarlo por medio de su asamblea, con los requisitos previstos en los arts. 24 a 28 y 31 de dicha ley, por lo que a partir de la inscripción de la resolución respectiva en el Registro Agrario Nacional, la comunidad se tendrá por legalmente transformada en ejido. Cuando los inconformes con la conversión al régimen ejidal sean como mínimo 20 comuneros, estos podrán mantenerse como comunidad con las tierras que les correspondan. Para su administración las comunidades podrán establecer grupos o subcomunidades con órgano de representación y gestión administrativa, así como adoptar diversas formas organizativas sin prejuicio de las facultades de los 91 órganos generales de la asamblea. Esta podrá establecer el régimen de organización interna de los grupos comunales o subcomunales. 12.7 REGLAMENTACION SOBRE LA PROTECCION DE TIERRAS INDIGENAS Conforme al art.106 de la ley agraria, las tierras que corresponden a los grupos indígenas deberán ser protegidas por las autoridades, en los términos de la ley que reglamente el art.4º. Constitucional y el segundo párrafo de la fracc. VII del art. 27 constitucional. Mediante decreto de 3 de agosto de 2001 se suprimió dicha disposición del art. 4º, y el segundo párrafo de la fracc. VII del art. 27 constitucional. Mediante decreto del 3 de agosto de 2001 se suprimió dicha disposición del art 4º. Constitucional y se derogo el 2º. para establecer en él lo relativo a la protección de los pueblos indígenas. De acuerdo al actual texto del art 2º, constitucional, los pueblos indígenas tienen derecho para aplicar sus propios sistemas normativos en la regulación y solución de sus conflictos internos, pero deben sujetarse a los principios generales de la constitución, respetando las garantías individuales, los derechos humanos y, de manera relevante, la dignidad e integridad de las mujeres. Se prevé el establecimiento de los casos y procedimientos de validación por los jueces o tribunales correspondientes. Asimismo, se encuentran facultados para elegir de acuerdo con sus normas, procedimientos y prácticas tradicionales, a las autoridades o representas para el ejercicio de sus formas propias de gobierno interno, garantizando la participación de las mujeres en condiciones de equidad frente a los varones, en un marco que respete el pacto federal y la soberanía de los estados, así como la preservación de la integridad de sus tierras en los términos establecidos en la constitución. Se encuentran facultados los pueblos indígenas para acceder al uso y disfrute preferentemente de los recursos naturales de los lugares que habitan y ocupan sus comunidades, ello con respeto a las formas y modalidades de propiedad y tenencia de la tierra establecida en la constitución y a las leyes de la materia, así como a los derechos adquiridos por terceros o por integrantes de la comunidad, salvo los derechos adquiridos por terceros o por integrantes de la comunidad, salvo aquellos que corresponden a alas áreas estratégicas, en términos de la constitución, permitiendo a las comunidades para estos efectos asociarse en términos de ley. 92 También se les garantiza el acceso pleno a la jurisdicción del Estado y, para garantizar ese derecho, en todos los juicios y procedimientos en que sean parte individual o colectivamente, se deberán tomar en cuenta sus costumbres y especificidades culturales, representando los preceptos de la constitución; asimismo, los indígenas en todo el tiempo gozaran del derecho de ser asistidos por intérpretes y defensores que conozcan su lengua y cultura”.1 LAS COMUNIDADES RECONOCI MIENTO LEGAL Y SUS EFECTOS EXCLUSION PEQUEÑAS PROPIEDADE S PROTECCI ÓN JURIDICA ORGANOS DE REPRESE NTACIÓN DIVISION DE TIERRAS CONVERSION DE EJIDO A COMUNIDAD 12. 8 DISPOSICIONES COMUNES A LOS EJIDOS Y COMUNIDADES Son aplicables a las comunidades todas las disposiciones que para los ejidos prevé la Ley agraria en lo que no contravenga lo dispuesto en su capítulo quinto título tercero. Como se advierte, los terrenos comunales están protegidos de manera similar a los terrenos ejidales de uso común; así, la ley les impone como características ser no enajenables, imprescriptibles e inembargables, pero señala como salvedad que pueda transmitirse el uso y aprovechamiento de áreas comunales para el establecimiento de asociaciones o sociedades civiles y mercantiles, de conformidad con los dispuesto por el art. 100, en relación al 75 de la ley agraria”.1 93 CUESTIONARIO 1. Defina comunidad. 2. ¿Mediante que procedimientos se deriva el reconocimiento de comunidad? 3. Explique cuáles son los efectos jurídicos del reconocimiento de la comunidad 4. ¿Cómo protege la Ley Agraria la propiedad de las comunidades? 5. ¿Cuál es el órgano de representación de la comunidad? 6. Explique en qué consistió el Decreto del 3 de agosto de 2001 7. ¿Cómo protege a las comunidades indígenas el actual art. 2º. Constitucional? 94 CAPITULO XIII LOS SUJETOS AGRARIOS INDIVIDUALES INTRODUCCIÓN En esta parte de la antología se da a conocer a las personas hombres y mujeres del territorio nacional que se dediquen al agro y tengan derechos ejidales, así se le conoce en forma general a los titulare del derecho social, enunciando aquí también todos sus derechos que tienen a los mismo, de tal forma que al terminar de estudiar este capítulo el alumno de derecho deberá además de saber quiénes son los sujetos agrarios individuales, analizar y explicar los requisitos y los procedimientos para poder adquirir dicha calidad de sujeto agrario, y así también las formas de perderla. 13.1 LOS EJIDATARIOS Y COMUNEROS “Los sujetos ejidales, del orden individual, según la definición que proporciona el art. 12 de la ley agraria, son todos los hombres y las mujeres titulares de derechos ejidales. Corresponde a los titulares o ejidatarios, de conformidad con el art. 14 de la ley agraria, el derecho de uso y disfrute sobre sus parcelas, los derechos que el reglamento interno de cada ejido les otorgue sobre las demás tierras ejidales y en general los que legalmente les pertenezcan. 13.2 LA CAPACIDAD AGRARIA En cuanto su capacidad legal, la ley no distingue en razón de sexo, religión o estado civil, pero si en lo que se refiere a la nacionalidad y edad. Así en la fracc. I del art. 15 se establece que para poder adquirir la calidad de ejidatario se requiere ser mexicano y mayor de edad (además del requisito de ser avecinado del lugar). 13.3 REQUISITOS PARA ADQUIRIR LA CALIDAD DE EJIDATARIO O COMUNERO En el art. 15, la Ley Agraria prevé los requisitos para adquirir la calidad de ejidatario o comunero: 1. Ser mexicano, mayor de edad o de cualquier edad si tiene familia a su cargo o se trate de heredero ejidatario 95 2. Ser avecinado del ejido correspondiente (no es necesario si se trata de heredero) o cumplir con los requisitos que establezca cada ejido en su reglamento interno). 13.4 NACIONALIDAD En lo que se refiere a nacionalidad, la ley agraria no es clara, por lo que puede haber confusión sobre cómo debe de entenderse: si ha de ser mexicano por nacimiento, como lo especificaba la derogada Ley federal de reforma agraria o basta que sea por naturalización. Para resolver el problema debemos recurrir al art.27 de la constitución política, la cual establece su en su fracc. I que solo los mexicanos por nacimiento o naturalización tienen capacidad y el derecho para adquirir el dominio de las tierras y las guías de la nación. En lo que concierne a la naturalización, el art. 7 de la ley de naturalización establece que son mexicanos por naturalización: “los extranjeros a quienes de acuerdo con la presente ley, la secretaria (de relaciones exteriores) otorgue carta de naturalización, y a la mujer o varón o establezcan su domicilio conyugal dentro del territorio nacional. 13.5 MAYORIA DE EDAD Y REPRESENTACION La ley agraria dispone que la mayoría de edad sea un requisito necesario para formar parte de un ejido, excepto en el caso de que el aspirante tenga familia a su cargo o se trate de heredero de ejidatario. Ante ello, cabe reflexionar acerca de la minoría de edad en cuanto a la capacidad para contratar y obligarse. Esta se divide en capacidad de goce y de ejercicio. La primera no reviste mayor dificultad dado que es la capacidad del goce y de ejercicio. La primera no reviste mayor dificultad dado que es la capacidad de ser receptor de derechos; en cambio, la capacidad de ejercicio estriba en la capacidad del individuo para asumir responsabilidades legales. Durante la vigencia del código agrario de 1934 ello no representaba ningún problema por la disposición establecida en su art.140, el cual facultaba al consejo de vigilancia para que designara persona que en representación del menor de 16 años, incapacitado para dirigir la explotación, cuidara de la parcela, cuando conforma a la lista de sucesión de un ejidatario la parcela debiera transmitirse a un impúber. 96 Al no haber disposición al respecto en la actual Ley agraria, cabe analizar si el ejidatario menor de edad es sujetos de derechos obligaciones y de no ser así, quien tendría la representación legal. De esto se desprenden dos posibilidades: la primera es la del menor ejidatario con familia a su cargo, y la segunda, la del menor sin familia a su cargo, heredero de los derechos ejidales. En el primer caso encontramos como figura central la emancipación, y el art. 641 del Código Civil Federal dispone: El matrimonio del menor de dieciocho años produce de derecho la emancipación. Aunque el matrimonio se disuelva, el cónyuge emancipado, que sea menor no recaerá en la patria potestad. En cuanto a sus bienes, el art. 623 del citado ordenamiento establece: El emancipado tiene la libre administración de sus bienes, pero siempre necesita durante su menor edad: 1. De la autorización judicial para la enajenación, gravamen o hipoteca de bienes raíces; 2. De un tutor para negocios judiciales. Para el segundo caso, el art.646 del precitado ordenamiento jurídico establece que la mayoría de edad comienza a los 18 años cumplidos. Entonces, todos aquellos menores de 18 años herederos de derechos ejidales por disposición del art.15 fracc. I de la Ley Agraria, de conformidad con el numeral 23 del Código Civil Federal, no podrán contraer obligaciones directamente: “La minoría de edad, el estado de interdicción y las demás incapacidades establecidas por la ley son restricciones a la personalidad jurídica...” Pero, a su vez, la segunda parte del mismo párrafo establece la manera de poder contraer obligaciones: “Los incapaces pueden ejercitar sus derechos o contraer obligaciones por medio de sus representantes” Ahora bien, en las dos hipótesis los menores deberán ser representados en todo acto jurídico por un tutor, tutoría que puede ser testamentaria, legitima o dativa de conformidad con el Titulo Noveno del Código Civil Federal. 97 El procedimiento de nombramiento de tutor, en caso de no existir, habrá de realizarse en la forma establecida por la ley común y ante la autoridad competente del orden familiar, porque ante un juicio o tramite agrario el menor no emancipado deberá comparecer por medio de su tutor, aun cuando lo sea para el reconocimiento de los derechos agrarios por la vía de sucesión, no obstante estar designado mediante lista de sucesores. Además, sin tutor no podrá participar ni en la vida productiva asociativa del ejido ni en las decisiones de las asambleas. Cuando se trata de un menor sujeto a la patria potestad, quienes la ejercen son los legítimos representantes de los que están bajo ella y tienen la administración legal de los bienes que les pertenecen, conforme a la ley. La patria potestad sobre los hijos, dispone el art. 414 del Código Civil Federal se ejerce por los padres. Cuando por cualquier otra circunstancia deje de ejercerla alguno de ellos, corresponderá su ejercicio al otro. A falta de ambos padres o por cualquier otra circunstancia prevista en ese ordenamiento, ejercerán la patria potestad sobre los menores los ascendientes en segundo grado en el orden que determine el juez de lo familiar, tomando en cuenta las circunstancias del caso. 13.6 AVECINADOS Por lo que hace al requisito avecindad, el art. 13 de la Ley Agraria define a los avecinados como “aquellos mexicanos mayores de edad que han residido por un año o más en las tierras del núcleo de población ejidal y que han sido reconocidos como tales por la asamblea ejidal o el tribunal agrario competente”1 98 LOS SUJETOS AGRARIOS INDIVIDUALES LOS EJIDATARIOS Y LOS COMUNEROS REQUISITOS PARA SER EJIDATARIO O COMUNERO LA CAPACIDA D AGRARIA MAYOR DE EDAD SER MEXICANO 1 González Navarro, Gerardo N. Derecho Agrario, ed. Oxford, México 2013, p201 99 SER AVECINADO DEL EJIDO CUESTIONARIO 1.- Mencione que es un ejidatario 2.- Enumere los requisitos para ser ejidatario 3.- Mencione las formas para poder adquirir la calidad de ejidatario 4.- ¿Cuándo aplica la prescripción negativa? 5.- mencione las tres formas para perder la calidad de ejidatario 6.- ¿Qué es la enajenación? 7.- Mencione los requisitos para ser ejidatario o comunero 100 CAPITULO XIV OTRAS FORMAS DE TENENCIA DE LA TIERRA AGRICOLA INTRODUCCIÓN En este capítulo se explica cómo distinguir y precisar todos los conceptos que rigen la propiedad privada, se explica el gran problema de latifundismo, los criterios que determinan los límites y las calidades de la pequeña propiedad en México. Así como la venta de los excedentes por virtud a la reforma del artículo 27 de la Constitución de 1917, se enuncian las condiciones y los requisitos para las sociedades propietarias de tierras. De igual manera se mencionan los terrenos baldíos y nacionales, mencionando el procedimiento de deslinde y sobre las colonias agrarias y ganaderas del país y sus formas de organización. “Además de las tierras ejidales y comunales ya enumeradas, hay otras formas que si bien no se encuentran sujetas, en sentido estricto, al régimen de propiedad social, la legislación agraria las contempla, como es el caso de la pequeña propiedad, los terrenos baldíos y nacionales y las colonias agrícolas y ganaderas. 14.1 LA PROPEDAD PRIVADA En su primer párrafo, el art.27 de la Constitución establece que la propiedad de las tierras y aguas comprendidas dentro de los límites del territorio nacional corresponde originalmente a la nación, la cual tiene el derecho de transmitir el dominio de ellas a los particulares, constituyendo así la propiedad privada. La propiedad social es la constituida por la de ejidos y comunidades, y se encuentra totalmente regulada por el derecho agrario. La propiedad privada rustica se rige por el derecho civil; en cuanto a los límites de superficie y fraccionamientos descendentes que constituyan latifundios, la propiedad privada se regula por la materia agraria. 101 14.2 LATIFUNDIOS El termino latifundio proviene de los vocablos latinos latos, “amplio” y fundus, “fundo”. Significa fundo o terreno amplio o extenso. En México, los latifundios están prohibidos por disposición de primer párrafo de la fracc. XV del art.27 constitucional. Por otra parte, si en 1992 se argumentó que debía cancelarse el reparto de tierras porque ya no las había, entonces tampoco se puede justificar la existencia de latifundios, por lo que de haberlos debe establecerse un procedimiento para su reincorporación al dominio de la nación, a fin de que el Estado le dé el destino correspondiente y así se satisfagan eventuales necesidades agrarias. 14.3 ENAJENACION DE EXCEDENTES Y ORDEN DE PREFERNCIA Las tierras que excedan de la extensión de la pequeña propiedad individual deberá fraccionarlas y enajenarlas el propietario; si no lo hiciere, los excedentes serán enajenados en publica almoneda. En caso de comprobarse un excedente de la propiedad individual rural se deberá determinar, en la opinión que al respecto formule la Procuraduría Agraria, la superficie que presumiblemente rebase los limites; así mismo, deberá ordenarse que el expediente se remita a la autoridad estatal correspondiente, para que esta aplique el procedimiento previsto ene l art. 124 de la ley (art. 56 del citado reglamento). 14.4 LA PEQUEÑA PROPIEDAD INDIVIDUAL, LIMITES DE PROPIEDAD Y CALIDAD DE TIERRAS La pequeña propiedad individual es la superficie de tierras agrícolas, ganaderas o forestales cuya propiedad recae en un solo individuo y sin que exceda los límites permitidos por la ley (art. 115 y 116 de LA) Se entiende por tierras agrícolas los úselos utilizados para el cultivo de vegetales; por tierras ganadera, lo suelos empleados para la producción y cría de animales mediante el uso de su vegetación, sea esta natural o inducida; por último, tierras forestales son los suelos utilizados para el manejo productivo de bosques y selvas. 102 Se reputan como agrícolas las tierras rusticas que no estén dedicadas en realidad a alguna otra actividad económica. 14.5 LA PEQUEÑA PROPIEDAD AGRICOLA Se considera péquela propiedad agrícola a la superficie de tierras agrícolas de riego o humanidad de primera que no exceda los siguientes límites o sus equivalentes en otras clases de tierras: I. II. III. 100 hectáreas si se destina a cultivos distintos de los señalados a continuación: 150 hectáreas si se destina al cultivo de algodón; 300 hectáreas si se destina al cultivo de plátano, caña de azúcar, café, henequén, hule, palma, vid, olivo, quina, vainilla, caco, agave, nopal o árboles frutales. (Art. 117 de LA) 14.6 LA PEQUEÑA PROPIEDAD FORESTAL Es la superficie de tierras utilizadas para el manejo productivo de bosques, de cualquier clase, que no exceda de 800 hectáreas. (Art. 119 de la LA) 14.7 SOCIEDADES PROPIETARIAS DE TIERRAS AGRICOLAS, GANADERAS O FORESTALES Las disposiciones del Título Sexto de la Ley Agraria son aplicables a las sociedades mercantiles o civiles que tengan en propiedad tierras agrícolas, ganaderas o forestales. Asimismo, serán aplicables a las sociedades que se constituyan con la participación de ejidos o comunidades, aportando tierras para la constitución de las sociedades en los términos de los arts. 75 y 100 de la Ley Agraria, excepto cuando las sociedades se dediquen a actividades distintas de las agrícolas, ganaderas o forestales. Las disposiciones de dicho título se encuentran reguladas por los arts. 125 a 133 de la Ley Agraria. 14.8 SOCIEDADES MERCANTILES Y CIVILES Las sociedades mercantiles y civiles propietarias de tierras agrícolas, ganaderas o forestales, afirma Víctor Aguilar Molina: 103 Quedan sujetas a las disposiciones de la ley de su fuente, Ley General de Sociedades Mercantiles, o Coditos Civiles, así como a la Ley Agraria y a la Ley de Inversión extranjera. Estas sociedades deben considerarse como sociedades de fin específico, en tanto que es la ley, en este caso la agraria, la que establece disposiciones relativas al objeto social, a la vigilancia de la sociedad, tenencia accionaria, respecto de series e acciones, así como derechos especiales en caso de liquidación dependiendo, del origen de la tierra, si es de uso común o si es de dominio pleno. 14.9 TERRENOS BALDIOS Y NACIONALES Recordemos que, conforme al art.27 de la Constitución, la propiedad originaria corresponde a la nación, que puede transmitirla a los particulares, con las modalidades que la propia ley le imponga. En tales términos, en el transcurso de los años esta propiedad de la nación ha venido siendo enajenada a particulares y por ello, cuando esta no ha salido del dominio de la nación, se entiende que no ha sido medida ni deslindada; es decir, son terrenos baldíos, por lo que, una vez hecho lo anterior, los terrenos, previo cerciora miento de que no son propiedad particular, se declaran terrenos nacionales. 14.9.1 TERRENOS BALDIOS Los baldíos de conformidad con la Ley Agraria, son los terrenos de la nación que no han salido de su dominio por título legalmente expedido y que no han sido deslindados ni medidos. 14.9.2 TERRENOS NACIONALES Los nacionales son los terrenos baldíos deslindados y medidos de acuerdo con los procedimientos establecidos por la ley, así como aquellos terrenos que recobre la nación en virtud de nulidad de los títulos que respecto de ellos se hayan otorgado (art. 158 de la LA). 14.10 LA EXPROPIACION EN MATERIA AGRARIA CONCEPTO Expropia consiste en desposeer legalmente de una cosa a su propietario, por motivos de utilidad pública, mediante una indemnización. La expropiación, según el Diccionario jurídico, es una facultad del poder público por lo cual impone a una particular cesión de su propiedad mediante ciertos 104 requisitos, de los cuales el principal es una indemnización, por razones de utilidad pública, para realizar obras de interés general o de beneficio social. Con base en tal definición, expropiar es la privación de los bienes propiedad de una persona física o moral a favor de una entidad pública, por causa de utilidad colectiva, mediante el procedimiento previamente establecido por la ley y que realiza la autoridad correspondiente a cambio de un pago indemnizatorio.”1 . CUESTIONARIO 1.-Define la pequeña propiedad 2.- ¿Qué se entiende por tierra agrícola? 3.- ¿A qué se le llama la propiedad forestal? 4.- Da la definición de pequeña propiedad forestal 5.- ¿Quién determina el coeficiente de agostadero? 6.- Concepto de terreno baldío 7.- Concepto de terreno nacional 8.- ¿Cuál es la autoridad facultada para enajenar los terrenos nacionales? 1 González Navarro, Gerardo N. Derecho Agrario, ed. Oxford, México 2013, p261 105 CAPITULO XV EL DERECHO PROCESAL 15.1 EL DERECHO PROCESAL EN EL ENTORNO DE LA CIENCIA JURIDICA “El proceso o derecho del procedimiento, como también podríamos llamarlo, está constituido por las reglas que deben garantizar una verdadera igualdad entre los contendientes y cuya observancia han de cumplir tanto los justiciables como el propio juzgador. De acuerdo con el Diccionario jurídico mexicano, el derecho procesal es: “el conjunto de disposiciones que regulan la sucesión concatenada de los actos jurídicos realizados por el juez, las partes y otros sujetos procesales, con el objeto de resolver las controversias que se suscitan con la aplicación de las normas del derecho sustantivo. Para Eduardo B. Carlos, el derecho procesal es: “una ciencia que estudia el conjunto de las normas jurídicas que regulan el proceso por cuyo medio el Estado, ejercitando la función jurisdiccional, asegura, declara y realiza el derecho”. 15.2 JUSTICIA CONMUTATIVA Es la relación jurídica entre sujetos iguales. De acuerdo con este principio, la ley no establece diferencias, tal como sucede en el derecho civil, en el que los contendientes se encuentran en un plano de igualdad, de igual a igual (aunque en realidad en muchos casos no lo sean). 15.3 CONCEPTO DE DERECHO PROCESAL AGRARIO Luis Ponce de León Armenta indica que el derecho procesal agrario “es el sistema de normas jurídicas, principios y valores que regulan las relaciones humanas que se dan con motivo de la realización de la justicia agraria, la integración de los órganos y autoridades jurisdiccionales agrarias, su competencia, así como la actuación de los juzgadores y las partes en la substanciación del proceso.” A su vez, Gonzalo Armenta Calderón señala que el derecho procesal o adjetivo es el conjunto de normas jurídicas que regulan el proceso (agrario); mediante el cual los particulares obtienen los medios jurídicos para ejercitar sus acciones, hacer valer excepciones y defensas, probar su dicho e impugnar sentencias, resoluciones o actos de autoridad”1 1 González Navarro, Gerardo N. Derecho Agrario, ed. Oxford, México 2013, p337 106 CUESTIONARIO 1. 2. 3. 4. 5. Defina el derecho procesal en general. ¿Qué es justicia distributiva? ¿Qué es justicia conmutativa? ¿En qué consiste la igualdad por compensación? Defina el derecho procesal agrario. 107 CAPITULO XVI LA ADMINISTRACION DE JUSTICIA AGARIA INTRODUCCIÓN En el inmenso mundo de la justicia se encuentra el apartado de la administración de la justicia, y en específico de la justicia agraria en este capítulo se explica para poder identificar a las instituciones encargadas de la impartición de la justicia en materia agraria, y se explica a groso modo las facultades de conocimiento que le competen. Se menciona a los tribunales agrarios como órganos federales que están dotados de su plena jurisdicción y autonomía, la competencia para no salirse de sus límites, y de la competencia del tribunal superior agrario; su competencia ordinaria y su competencia transitoria. “La palabra jurisdicción proviene del latín iuris, “derecho” y dictio o decire, “decir”, lo que significa decir el derecho. La noción moderna de jurisdicción nos la da el procesalista Hugo Alsina, quien la concibe como la potestad conferida por el Estado a determinados órganos para resolver, mediante sentencia, las cuestiones litigiosas que les sean sometidas y hacer cumplir sus propias resoluciones. 16.1 LOS TRIBUNALES AGRARIOS COMO ORGANOS FEDERALES DOTADOS DE PLENA JURISDICCION Y AUTONOMIA El art. 1 de la Ley Orgánica de los Tribunales Agrarios los conceptúa como órganos federales dotados de plena jurisdicción y autonomía para dictar sus fallos, a los que corresponde, en los términos de la fracc. XIX del art. 27 de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos, la administración de la justicia agraria en todo el territorio nacional. Así como órganos federales, los tribunales agrarios se crearon mediante el decreto que reformo el art. 27 constitucional, publicado en el Diario Oficial de la Federación el 6 de enero de 1992. Son parte de la organización política de la administración pública federal, pero con plena autonomía, entendida esta como la facultad de gobernarse por sus propias normas, respecto del Ejecutivo y las secretarias de Estado, con la función específica de impartir justicia en el ámbito social agrario en todo el territorio nacional. 108 16.2 LA COMPETENCIA Dentro de la función jurisdiccional se halla la competencia, como limitación en las facultades impuestas a los órganos del Estado, sea judicial, administrativa o legislativa. En el ámbito jurisdiccional, la competencia la hay en formas diversas; así puede ser por ámbito federal o local, por materia, instancia o grado, por cuantía o por territorio. 16.3 EL JUICIO AGRARIO CONCEPTO De acuerdo con la ley agraria, el juicio agrario es el conjunto de pasos regulados jurídicamente con el objeto de sustancia, dirimir (averiguar, indagar por medio de las pruebas) y resolver las controversias que se susciten con motivo de la aplicación de la legislación agraria. Es necesario destacar que las “controversias” a que se refiere la definición anterior deben de ser entendidas como un sinónimo littigio. Carnelutti conceptúa la controversia en su definición de littigio en los siguientes términos: “Llamo littigio al conflicto de intereses calificado por la pretensión de uno de los interesados y por la resistencia del otro”. 16.4 LA DEMANDA De conformidad con el art.170 de la Ley Agraria, el actor puede presentar su demanda por escrito o por simple comparecencia; en este caso, en su coadyuvancia la Procuraduría Agraria podrá auxiliarlo en la formulación de la demanda por escrito y de manera concisa. Los requisitos de la demanda, en supletoriedad, que establece el art. 167 de la Ley Agraria, están dispuestos en el Código Federal de Procedimientos Civiles, cuyo art. 322 señala que en la demanda se expresara lo siguiente: el tribunal ante el cual se promueve; el nombre del actor y el del demandado, con la salvedad de que si se ignora quién es el propietario o contra el que deba enderezase la demanda, no será necesario indicar su nombre, sino que bastara con la designación confundible del inmueble para que tenga por señalado al demandado, y el emplazamiento será mediante edictos. 109 16.5 LOS MEDIOS DE COMUNICACIÓN PROCESAL Los medios de comunicación entre el juzgador y los particulares pueden ser por estrados o de forma personal. Son por estrados cuando la notificación sea de mero trámite cuando no se encuentren en los casos señalados por la ley, como aquellos que deban ser personales. Las notificaciones serán personales, conforme al art.309 del Código Federal de Procedimientos Civiles: I. Para emplazar a juicio al demandado, y en todo caso en que se trate de la primera notificación en el negocio Cuando dejare de actuare durante más de seis meses, por cualquier motivo (siempre y cuando no se esté en el caso del art. 190 de la Ley Agraria); en este caso, si se ignora el domicilio de un aparte, se le ha la notificación por edictos Cuando el tribunal estime que se trata de un caso urgente, o que, por alguna circunstancia, deban ser personales, y así lo ordene expresamente En todo caso , al procurador de la Republica y agentes del Ministerio Público Federal, y cuando la ley expresamente lo disponga II. III. IV. La notificación personal comprende las siguientes formas: La notificación en estricto sentido, que se limita a dar a conocer una resolución judicial El emplazamiento, que supone la fijación de un plazo para comparecer (contesta la demanda dentro del plazo). La citación, que implica un llamamiento para concurrir a la presencia judicial en lugar, día y hora determinados (para que se presente en el término señalado) El requerimiento, que contiene una intimación judicial para que una persona haga o deje de hacer alguna cosa. 110 16.6 EL PROCEDMINIENTO AGRARIO Una vez practicado el reemplazamiento, la copia de la demanda se entregara al demandado o ala apersona con quien se practique dicho emplazamiento. Por su parte, el demandado deberá contestar la demanda a más tardar en la audiencia; puede realizarlo por escrito o mediante su comparecencia. En este último caso, el tribunal solicitara a la Procuraduría Agraria que coadyuve en su fórmula por escrito, lo que deberá ejecutar en forma concisa. En su actuación, dicho organismo se ha de apegar a los principios de objetividad e imparcialidad. Sera optativo para las partes acudir asesoradas. En caso de que una de las partes se encuentre asesorada y la otra no, se suspenderá el procedimiento, y se solicitara de inmediato los servicios de un defensor de la Procuraduría Agraria, quien, para enterarse del asunto, gozara de cinco días contados a partir de la fecha en que se apersone al procedimiento. Si al ser llamado a contestar la demanda el demandado no está presente y consta que fue debidamente emplazado, acción que el tribunal debe comprobar con especial cuidado, continuara la audiencia, y en caso de presentarse durante ella el demandado, podrá intervenir según el estado en que se halle dicha diligencia y nos e le admitirá prueba sobre ninguna excepción si no demuestra el impedimento de caso fortuito o fuerza mayor que le impidió presentarse a contestar la demanda. Confesada expresamente la demanda en todas sus partes y explicados sus efectos jurídicos por el magistrado, u cuando la confesión sea verosímil, se encuentre apoyada en otros elementos de prueba y este apegada a derecho, el tribunal pronunciara sentencia de inmediato; en caso contrario, continuara con el desahogo de la audiencia. Una vez presentada la demanda o realizada la comparecencia, el tribunal del conocimiento examinara y si hay irregularidades en la misma o se hubiera omitido en ella alguno de los requisitos previstos legalmente, prevendrá al promovente para que lo subsane dentro del término de ocho días. Si el demandado opone reconvención, lo efectuara precisamente al contestar la demanda y nunca después. El mismo escrito o comparecencia deberá ofrecer las pruebas que estime pertinentes. En este caso, se trasladara el actor copia de la reconvención y anexos, para que esté en condiciones de contestar lo que a su derecho convenga y el tribunal diferirá la audiencia por un término no mayor de 10 días, excepto cuando el redefiniera la audiencia por un término no mayor de 10 días, excepto cuando el reconvenido este de acuerdo en proseguir el desahogo de la misma. 111 SI al iniciarse la audiencia no está presente el actor pero si el demandado, se impondrá a aquel una multa equivalente al monto de uno a diez días de salario mínimo de la zona de que se trate. Si no se ha pagado la multa no se emplazara de nuevo para el juicio. Si al iniciarse la audiencia no están presentes ni el actor ni el demandado, se tendrá por no practicado el emplazamiento y podrá ordenarse de nuevo si el actor lo pide. Lo mismo se observara cuando no concurra el demandado o reo, y en determinados casos los terceros procesales. Las partes. Estas son el actor (quien demanda), el demandado o reo, y en determinados casos los terceros procesales. Terceros procesales. Sobre estos, el art. 78 del Código Federal de Procedimientos Civiles regula la figura jurídica del tercero en el proceso, interviniente o tercerista, y consiste en que cuando un tercero tenga una controversia con una o varias partes en juico y la sentencia que en este se haya de pronunciar deba influir en dicha controversia, pueden las partes interesados hacer venir al tercero, siempre que en el juicio aún no se celebre la audiencia final. Las partes puedan hacer venir al tercero con interés realizando su petición en la demanda y dentro del mismo por eso sujetándose a las reglas ordinarias; también puede el tercero realizarlo por si, formulándola en los mismos términos, con la finalidad, en ambos casos, de que se resuelva la tercería conjuntamente con la reclamación primitiva, para lo cual se suspenderá el procedimiento den el juicio inicial hasta que la tercería se encuentre en el mismo estado. Cabe agregar que si el tercerista se adhiere a una de las partes, será coadyuvante; si no, será interviniente principal. También puede comparecer dentro del proceso a deducir sus derechos o bien en la ejecución, como en el caso que al pretender ejecutar una sentencia resulte que la propiedad corresponde al tercero, lo que sería la tercería excluyente de dominio. Litis consorcio. Consiste en la pluralidad de personas que pueden actuar en un juicio, ya como actores o como demandados. Esta figura jurídica procesal se hallan en el texto del art. 5 del Código Federal de Procedimientos Civiles, donde se establece que siempre que una parte, dentro de un juicio, este compuesta de diversas personas, deberá tener una sola representación, para lo cual nombrara los interesados un representante común. También indica que si se trata de la actora, el nombramiento de representante se efectuara en la demanda o en la primera promoción, sin lo cual no se le dará curso. Si fuera la demandada, el nombramiento se formulara en un plazo que concluirá a los tres días siguientes al vencimiento del término del último de los emplazados para contestar la demanda, y cuando la multiplicada de personas surja en cualquier otro momento del juicio, se nombrara representante común en el plazo de cinco días a partir del primer ato 112 procesal en que se tenga conocimiento de esa multiplicidad. SI el nombramiento no lo realizan los interesados dentro del término correspondiente, lo hará de oficio, el tribunal de entre los interesados mismo. Por su parte, el representante está obligado a hacer valer todas las acciones o excepciones comunes a todos los interesados y las personales de cada uno de ellos; pero si estos no cuidan de darlas a conocer en forma oportuna al representante común tendrá todas las facultades y obligaciones de un, mandatario judicial. Cabe destacar que será litis consorcio activo cuando se trate de los actores y litis consorcio pasivo cuando se refiere a los demandados. 16.7 LOS MEDIOS PROBATORIOS EN MATERIA AGRARIA La prueba, en general, puede definirse como los actos desarrollados por las partes, los terceros y el propio juzgador, con el objeto de lograr el cercioramiento judicial sobre el hecho controvertido cuyo esclarecimiento resulte necesario para la resolución del conflicto sometido a proceso. Los principales medios probatorios contemplados por el Código Federal de Procedimientos Civiles (CFPC), de la aplicación supletoria de la Ley Agraria, son los siguientes: 1. 2. 3. 4. 5. 6. 7. La confesión Los documentos públicos Los documentos privados Los dictámenes periciales El reconocimiento o inspección judicial Los testigos Las fotografías, escritos y notas taquigráficas y, en general, todos aquellos elementos aportados por los descubrimientos de la ciencia. 8. Las presunciones”.1 1 González Navarro, Gerardo N. Derecho Agrario, ed. Oxford, México 2013, p2341 113 CUESTIONARIO 1. 2. 3. 4. 5. Mencione el concepto de juicio agrario Explique qué significa controversia como sinónimo de litigio Enuncie el concepto de derecho procesal agrario ¿Qué requisitos debe contener la demanda? Señale las formas que comprenden los medios de comunicación procesal. 6. Precise que efectos causa el emplazamiento 7. Indique donde se podrá efectuar el emplazamiento 114 CAPITULO XVII REGISTRO AGRARIO NACIONAL INTRODUCCIÓN Se enuncia y explica las facultades de las autoridades administrativas en materia agraria, así como sus procedimientos administrativos. La noción jurídica de autoridad presupone la idea de una potestad o facultad concedida por la ley, que le otorga poder o la capacidad para modificar una situación jurídica existente. En el orden jurídico otorga a los individuos investidos como órganos del Estado a quien se les llama autoridades, los faculta de obligar a los demás mediante actos de coercitividad, propiciando así la posibilidad de imponer la voluntad de uno a la conducta de los demás. Es entonces cuando los funcionarios públicos están dotados de autoridad para estar cumpliendo las funciones de regularización de la propiedad, e intervenir en su caso dependiendo del origen del problema sobre la planeación y programación y coordinación con las unidades administrativas del sector agrario. Por lo que hace al Registro Agrario Nacional(RAN), su función es esa registrar mediante actividades de calificación, inscripción y certificación de los actos y documentos en los que consten las operaciones relativas a la propiedad ejidal y comunal. En esta introducción menciono que para el ejercicio de sus funciones y el despacho de los asuntos de su competencia debe contar con sus unidades administrativas. “El Registro Agrario Nacional es la institución encargada de llevar el registro de la tenencia de la tierra y la seguridad documental derivada de la aplicación de la Ley Agraria. En él se inscriben los documentos donde constan las operaciones originales y las modificaciones que sufra la propiedad ejidal y comunal, la inscripción de las figuras asociativas, así como asistencia técnica y catastral. A lo largo de su historia, el RAN ha tenido el control de las inscripciones de las acciones derivadas del reparto agrario, lo mismo que sus efectos en la constitución de derechos sobre las tierras repartidas, tanto de respecto de los ejidatarios o comuneros, como de los pequeños propietarios que surgieron a raíz de la redistribución del territorio que se llevara a cabo con la promulgación de la Ley Agraria de 1915 y la Constitución de 1917. De acuerdo a la Ley Agraria, el RAN tiene diversas atribuciones, como la delimitación y destino de las tierras ejidales y la expedición de certificados de derechos parcelarios o sobre tierras de uso común, que serán previamente 115 inscritos en esa institución. De igual forma, de conformidad con el artículo 47, tiene atribuciones para dar aviso a la Secretaria de la Reforma Agraria sobre la identificación de titulares de derechos agrarios en una superficie que exceda el 5% del total del ejido. A partir de 1997, el RAN es el órgano encargado de velar por la seguridad jurídica documental de la tenencia de la tierra ejidal y comunal del país, así como responsable de la operación de programas especiales, como el Programa del Fondo de Apoyo a Núcleos Agrarios sin Regularizar (FANAR) y el Programa de Modernización del catastro Rural Nacional, que incluye la modernización del Archivo General Agrario. Contar con un sistema permanente y actualizado del Catastro Rural de la Propiedad Social, permitirá garantizar la protección de los derechos de propiedad y alcanzar plena certeza jurídica en la tenencia de la propiedad social, ya que con la sistematización y con la vinculación de la información catastral y registral se dispondría de información certera y específica de la situación jurídica de la propiedad de la tierra. Este instrumento fortalecería la transparencia y el acceso a la información pública, mejorando la calidad del servicio. Al concentrar toda la información de la propiedad social en una plataforma tecnológica, con datos registrales, catastrales, geográficos, socio-económicos y ambientales, se podrían realizar consultas de manera ágil y dinámica. El presente documento plantea 2 acciones indispensables para garantizar la actualización permanente del Catastro Nacional: la aprobación de la Junta de Gobierno del INEGI, de considerar información registral y catastral como de Interés Nacional, con las implicaciones normativas y tecnológicas que contuviera y la modificación a la Ley Agraria, con la inclusión de mecanismos de control que den seguimiento a los límites de la pequeña propiedad, el usufructo de los derechos parcelarios, y la propiedad de tierras en sociedades agrícolas, ganaderas y forestales.” 1 “Por lo que hace al Registro Nacional, su reglamento interno, en el art. 3º. Dispone que con el objeto de lograr el control de la tenencia de la tierra y la seguridad documentada respecto de los predios rústicos, el Registro tendrá a su cargo las funciones registral, de asistencia técnica y catastral, de conformidad con lo dispuesto por la ley y sus reglamentos. Asimismo, el Registro tendrá a su cargo las funciones de resguardo, acopio, archivo y análisis documental del sector agrario, necesarias para el conocimiento 116 de los problemas, la identificación de las acciones y la evaluación de la gestión agraria. 17.1 SECRETARIA ALIMENTACION DE AGRICULTURA, GANADERIA, PESCA Y Es una dependencia del Poder Ejecutivo Federal que tiene entre sus objetivos proporcionar el ejercicio de una política de apoyo que permita producir y aprovechar mejor las ventajas comparativas de nuestro sector agropecuario, integrar las actividades del medio rural a las cadenas productivas del resto de la economía y estimular la colaboración de las organizaciones de productores con programas y proyectos propios, así como con las metas y objetivos propuestos, para el sector agropecuario, en el Plan Nacional de Desarrollo. 17.2 LA PROCURACION DE JUSTICIA AGRARIA 17.2.1 LA PROCURADURIA AGRARIA COMO INSTITUCION DE ASESORIA Y PROCURACION DE JUSTICIA La procuraduría Agraria es el organismo facultado por el art. 27, fracc XIX, de la Constitución, así como por la Ley Agraria, para que ejerza ante los tribunales la representación de cada interesado en un juicio. Según disposición del art. 2º, del Reglamento Interior de la Procuraduría Agraria (RIPA), la dependencia tiene a su cargo funciones de servicio social, mediante la defensa de los derechos de los sujetos agrarios y de su asesoramiento, derivado de la aplicación de la ley. El art. 1º. Del referido reglamento precisa que los sujetos agrarios son: los ejidos y comunidades; ejidatarios, comuneros y posesionarios y sus sucesores pequeños propietarios ; avecinados; jo9rnaleros agrícolas; colonos; poseedores de terrenos baldíos o nacionales, y campesinos en general. 17.2.2 DE LAS DELEGACIONES Conforme al art. 29 de su reglamento interior, las delegaciones y residencias, se establecerán en número, lugar y con la circunscripción territorial que determine el procurador. Al frente de cada delegación habrá un delegado, quien será auxiliado 117 para el despacho de los asuntos por los subdelegados, residentes, jefes de departamento, abogados agrarios, visitadores y demás personal que permita el presupuesto autorizado”2. 1 Pampillo Baliño, Juan Pablo, Munive Paez, Manuel Alexandro, Derecho Agraria y Desarrollo rural, Editorial Porrúa, México, 2013 p. 235 2 Chávez Padrón, Martha, El Derecho Agrario en México, ed. Porrúa, México 2012, p325 118 CAPITULO XVIII ANALISIS SINTETICO DE LA REFORMA AGRARIA MEXICANA INTRODUCCION A grandes rasgos se puede decir que en este tema se trata de los logros de la reforma agraria desde sus inicios y sus grandes y fallidos logros también, de que las leyes son creadas y estipuladas de una manera, pero que en la realidad son tristemente otra. Pues los beneficios de esta reforma agraria siempre es la de mantener en orden y lograr una mejor distribución de la tierra, y de comercializar los productos de la misma obteniendo mejores mercados y llegar a niveles más altos en la producción agraria, en resumen fue: El reparto de la tierras legalmente afectables; el apoyo a la producción mediante una infraestructura económicoproductiva y una infraestructura de bienestar social rural. 18.1 OBSERVACIONES PREELIMINARES “Si ya históricamente hemos visto que el Derecho Agrario comprende el estudio del régimen de explotación, después de las reformas constitucionales al Artículo 27, fechadas del 2 de febrero de 1983, en sus fracciones XIX y XX, vino a clarificarse que desde el pináculo del rango constitucional, y desde sus orígenes, la Reforma Agraria Integral era todo un proceso y que sus normas e instituciones deben interpretarse dentro de este contexto general. A esta altura del capitulado desarrollado en este libro, podemos observar que desde el principio la Reforma Agraria se desenvolvió, junto con el proyecto de desarrollo nacional, y solo como parte de uno mismo, etapa por etapa, cultivo por cultivo, región por región, acción agraria tras acción agraria, apoyo tras apoyo, servicio tras servicio, etc.; hasta desembocar en la etapa contemporánea de la organización productiva, de la protección a la organización productiva, de la protección a los productos básicos y en la organización de cada vez mayor de los productores rurales e implicada en el abasto popular y, por último en la política internacional. Todo este vasto proceso parte desde la frase inicial del Artículo 27 constitucional que dispone que “la Nación tendrá en todo el tiempo el derecho de… regular el aprovechamiento de los elementos susceptibles de apropiación, para hacer una distribución equitativa de la riqueza pública y para cuidar de su conservación. A muy grandes rasgos podríamos decir que la Reforma Agraria de 1915 y 1917 cubriendo las necesidades más inmediatas y urgentes posteriores a la Revolución de 1910, que fue la del reparto agrario. Esta etapa comprende un periodo que 119 abarca de 1915 a 1970, y este gran periodo otras subetapas como fueron aquella en que se fijaron los lineamientos jurídicos fundamentales del ejido como institución predominante del campo mexicano, tarea que ocupó una era que va desde 1915 a 1934, fecha del primer Código Agrario que subsumió duchos lineamientos dispersos; después de esa fecha, comenzó la etapa consolidada del gran reparto agrario con Lázaro Cárdenas, era que se extendió en cifras de magna consideración hasta finales del sexenio del licenciado Gustavo Díaz Ordaz, en 1970. La ley de la Reforma Agraria de 1971, abrió otra etapa de la Reforma Agraria al incluir un nuevo capítulo sobre organización agraria; desde entonces, en la historia rural hasta finales del siglo XX, reciente se observó la búsqueda de las formas organizativas para campesinos; así como en 1915 se inició la búsqueda de los lineamientos jurídicos de los derechos agrarios. Dicho en otras palabras, el acento de la Reforma Agraria se transfirió del reparto agrario a la organización rural. En esta búsqueda, desde 1970se ha caminado un trecho que también nos condujo a calificar de integral a la organización rural y a consagrar dicho calificativo en la Constitución, pues se vio que no solo era organizar a los campesinos en formas societarias adecuadas, sino también organizarlos para la comercialización, el almacenaje, el transporte, los precios-salarios, los insumos, el señalamiento de productos básicos, etc., hasta que por fin se llegó a la estructuración de un Programa Nacional de Alimentación, con un subprograma de Abasto Popular. En síntesis, podríamos decir que el proceso de la Reforma Agraria Integral fue comprendido sucesivamente: I. II. III. El reparto de la tierras legalmente afectables; El apoyo a la producción mediante una infraestructura económicoproductiva y una infraestructura de bienestar social rural, y El apoyo al desarrollo integral, desde: 1. La organización productiva de los campesinos y de los productos; 2. La comercialización, el transporte y el almacenamiento; hasta 3. La distribución y el abasto popular nacional; 4. La comercialización internacional de los productos agropecuarios y forestales. La fase marcada como numero I relativo al reparto de la tierra hemos tratado ya en páginas anteriores; en especial nos remitimos a la edición VI de este libro titulado entonces, el Derecho Procesal Social Agrario y su Procedimiento, capítulo relativo al procedimiento dotatorio, en donde citamos el Acuerdo del 26 de enero de 1916 120 que expresamente señaló que la “aplicación de la Ley del 6 de enero de 1915 se encuentra en su primera fase” ; razón por la cual, desde el inicio de la Reforma Agraria mexicana siempre se le llamó a la etapa del reparto agrario, la primera fase de dicha Reforma. Por tanto, dedicaremos este capítulo a tratar sobre la estructura de apoyo a la organización productiva y al desarrollo y los Ordenamientos Legales que rigen estas actividades. En relación al punto marcado como II, señalaremos que, la producción rural debe apoyarse en: 1. Una INFRAESTRUCTURA DE BIENESTAR SOCIAL RURAL, que contribuya al arraigamiento del campesino y a su incorporación al proceso de desarrollo nacional, como son: a) La educación rural, agrícola y técnicas agropecuarias y forestales, así como la investigación científica sobre esos temas; b) La atención médica social rural con sus correspondientes centros hospitalarios generales y especializados; c) Una política poblacional rural, con programas específicos de arraigamiento, movilidad rural y planeación familiar; d) De vivienda rural, establecimiento y mejoramiento e) De agua potable; f) De electrificación rural; g) De letrinización y alcantarillado rural, h) De servicios generales en los pueblos rurales; i) De programas de huertos familiares, para la unidad agrícola, industrial de la mujer y de la juventud y para parcelas escolares; j) De productividad con estímulos, k) De comercialización y trueque de productos; l) De distribución de productos agropecuarios, con programa de almacenes convenientemente ubicados; y de transportación rural; etc. 2. Una INFRAESTRUCTURA PRODUCTIVA ECONÓMICA que incluye: a) El aprovechamiento de los recursos hidráulicos y el total aprovechamiento de las aguas; b) Caminos rurales y caminos de producción rural; c) Crédito rural suficiente, honesto y oportuno; d) Desmontes mancomunados a la conservación ecológica; 121 e) Semillas mejoradas; f) Aseguramientos rurales que cubran el proceso total de la producción; g) Fertilizantes suficientes; h) Sanidad fitopecuaria; y control de plagas; i) Régimen fiscal rural; j) Servicios de asistencia técnica agrícolas, ganaderos, forestales, de sanidad y varios, suficientes, como son los campos experimentales, los servicios meteorológicos, etc.; k) La organización adecuada en tiempos y gastos de insumos para fijar una política satisfactoria de precios a los productos campesinos. l) Señalamiento de zonas de conservación ecológica. En relación al punto III relativo a los apoyos para el desarrollo rural integral, podemos observar en relación a: 1. La organización productiva de los campesinos y de sus productos, lo siguiente: a) Qué hay organización no básica; b) Para exportación; y c) Organización básica. Dentro de ésta área se comprenden: 1. Medidas de organización básica: a) Regularización de la tenencia de la tierra; b) Documentación básica: de resoluciones presidenciales; plano proyecto aprobado; y censo actualizado; c) Cambios actualizados de autoridades ejidales; d) Estudios socioeconómicos y sociogramas para detectar líderes y necesidades; e) Organización de asambleas; f) Organización del Reglamento Interno. 1. La necesidad de establecer formas organizativas como las siguientes: a) Las sociedades civiles mercantiles a que se refieren los artículos 75, 100 y 23 fracc. IX de la Ley Agraria-92. b) Las uniones de ejidos y de comunidades agrarias que se especifican en los artículos 108 y 109 de la Ley Agrsria-92. c) Las asociaciones rurales de interés colectivo mencionadas en los artículos 110 y 92 de la Ley Agraria-92. d) Las sociedades de producción rural señaladas por los artículos 11 y 113 de la Ley Agraria-92. 122 Hasta 1992 se le dio mucha importancia a un Plan nacional de Alimentación y un complejo sistema de Abasto Nacional básico que implicó muy diversas actividades que iban desde la producción de determinado bien agropecuario o forestal, hasta sus financiamientos, transporte, almacenaje y acopio; la comercialización, información de mercadeo; y sobre todo, la planeación de la alimentación nacional para diseñar satisfacción con eficacia y distribución y precios con equidad. 18.2 TRATADO DE LIBRE COMERCIO DE AMERICA DEL NORTE (E.U.A., CANADÁ Y E.U.M., 1994.) A partir de la entrada en vigor del Tratado de Libre Comercio entre Estados Unidos de América, Canadá y los Estados Unidos Mexicanos el 1º de enero de 1994, la producción agropecuaria y forestal de nuestro país también se ha enfocado hacia su comercialización internacional y la producción para la exportación. En el punto relativo a la agricultura se elaboró una síntesis del programa de liberación comercial del que citamos lo siguiente: (Acordada por los tres Gobiernos participantes) “Se reconocen las asimetrías entre los países y se brindarán plazos adecuados a las características de las distintas ramas del sector. “Estados Unidos de América y Canadá desgravarán de inmediato productos que representan el 51 y 88%, respectivamente de las exportaciones mexicanas a esos mercados. “México sólo desgravará de inmediato fracciones que comprenden el 36 y 47% de las importaciones provenientes de E.U.A., y Canadá respectivamente. “el 60% de las importaciones provenientes de E.U.A, serán desgravadas en 10 y 15 años. El maíz, el frijol. La leche en polvo y algunos productos forestales estarán sujetos al plazo más largo de desgravación, 15 años. Se reconoce explícitamente el derecho del Gobierno mexicano para respaldar al campo a través del desarrollo de la infraestructura, así como programas sanitarios, fitosanitarios, de asistencia técnica y de investigación dirigida, entre otros. México podrá introducir un sistema de pagos directos que sustituya la producción comercial. 123 Se establecerán disciplinas estrictas para la aplicación de subsidios a la producción “1 1 Chávez Padrón, Martha, El Derecho Agrario en México, editorial Porrúa, 19ª edición, segunda reimpresión, México 2012, p391 CUESTIONARIO 1.- Menciona algunos logros de la Reforma Agraria 2.- ¿En qué debe apoyarse la producción rural, según el ordenamiento legal en su punto II? 3.- Menciona 3 medidas de organización básica de la Reforma Agraria 124 CAPITULO XIX DERECHOS AGRARIOS FUNDAMENTALES Y PRINCIPIOS GENERALES DE DERECHO APLICABLES AL CAMPO MEXICANO 19.1DUALIDAD DE SISTEMAS DE PROPIEDAD, PRIVADA Y COMUNITARIA EN LA TENENCIA DE LA TIERRA “Históricamente, la lucha entre los sistemas de explotación colectiva de la tierra y los sistemas basados en el derecho de propiedad, provenientes del derecho Romano con sus características esenciales de uso, disfrute y disposición, se remontan a nuestro nacimiento como Nación. Muy recién lograda la pacificación de las tribus indígenas del Altiplano, se manifestó el afán de la Corona por ordenar la convivencia entre las comunidades nativas y los colonizadores europeos. Las leyes de Indias y sus instituciones como las Mercedes Reales y Virreinales, los Mayorazgos, las Cofradías, etc., trataron de reconocer, delimitar y proteger la propiedad comunal. Ambas figuras jurídicas, las relativas a la propiedad privada y a la de la propiedad comunal, convinieron, no sin tensiones, hasta mediados del siglo XIX, cuando las leyes de Reforma, la Desamortización de Bienes de la Iglesia y de Instituciones y la Constitución del 57, en la práctica afectaron la propiedad comunal y promovieron su privatización junto con las propiedades del clero. La Revolución institucionalizada, sobre todo a partir del sexenio del Gral. Cárdenas, privilegió al reparto agrario más inspirado en criterios sociales, (Ejidos y comunidades) que en la propiedad personal y familiar, manteniéndose sobre el primer tipo de tenencia, (denominada social), hasta el día de hoy, una serie de limitantes, como las de ser mera posesión de sus titulares, con solo derecho al uso y al disfrute, sin llegar a ser “dominio pleno” o sea propiedad completa, resultando por tanto inembargable, inalienable, ingravable e imprescriptible, ( como su modelo del Medievo español), amén a sujetar al ejidatario y al comunero a órganos de decisión y administración colectiva , como asambleas, comisariados ejidales y comunales, comités, grupos de trabajo, etc., con elevada dependencia de éstos órganos de gobierno colectivo, así como a entidades oficiales de supervisión, como la Secretaría de la Reforma agraria. Esta dualidad de sistemas de propiedad rural en México, se ha vivido con singular pasión en nuestra historia, especialmente y como dije a partir del sexenio del general Lázaro Cárdenas, no ajena en muchos casos a violencia también a derramamiento de sangre; por una parte, los ejidatarios y comuneros, o quienes 125 pretendían serlo y que, ya durante la vigencia de la Constitución de 1917, entablaban una acción agraria ante el gobierno y sus instituciones agrarias para obtener que se les restituyera o dotara de ejidos, se les reconocieran y confirmaran posesiones anteriores, se ampliaran éstos, o se crearan nuevos centros de población con nuevas tierras ejidales por lejos que estuvieran, cuando se agotaron las tierras cercanas a sus lugares de origen; por la otra, los propietarios de tierras privadas, que defendían sus terrenos, primeramente en la vida jurídica, pero, en ocasiones, también en las vías de hecho. Por último tenemos las tenciones y gravísimos problemas entre generados por los ejidos entre sí, por existir en la realidad ejidos superpuestos con otros, por los ejidos contra las comunidades o por ejidatarios contra comuneros o por ejidatarios o por comuneros entre sí, en demanda y en defensa de sus respectivas tierras, o de los terrenos que pretendían les pertenecieran, que fueron y siguen siendo aún en ocasiones, fuentes de discordias, de disputas y, también, de gravísimos actos de violencia.” 19.2 EFECTOS DE LA DUALIDAD DE LA TENENCIA DE LA TIERRA EN EL FINANCIAMIENTO Otro tema bien conocido es la falta de financiamiento en general al sector agropecuario, y muy particularmente, a la propiedad social del mismo sector. El sector agropecuario en su conjunto, recibe cerca del 2% del financiamiento total del país. Sólo que esos créditos van a dar a la propiedad privada agropecuaria y agroindustrial, que tiene los bienes reales necesarios para garantizar a las instituciones financieras el cobro de sus créditos, mientras que el financiamiento de las instituciones del sector bancario a los ejidos y a las comunidades y específicamente a los ejidatarios y comuneros, es, en los hechos, nula. Resulta que pues más de la mitad del territorio nacional, no es sujeto de crédito, ni puede ser otorgado en garantía, problema enorme que no ha sido debidamente dimensionado en el conjunto del país. Como una hipótesis de trabajo para dimensionar la enorme magnitud de lo que significaría un correcto financiamiento al sector social, supongamos que siendo ya propiedad privada y en consecuencia garantía real, se financiara con dos mil pesos promedio por hectárea en un año, 106,000,000 de hectáreas ejidales y comunales del país: nos arrojaría un financiamiento total de $212´000,000,000 doscientos doce mil millones de pesos, como palanca básica de una producción proporcional a ese financiamiento. Eso, contra hoy, prácticamente nada. Sinceramente hay que replantearnos estas realidades para tomar decisiones a fondo que alivien la pobreza, la falta de producción y las carencias del campo, 126 como condición previa a una producción nacional cada vez más urgente en un mundo que agota sus encarecidos productos agropecuarios. 19.3 LA DUALIDAD EN LA TENECIA DELA TIERRA Y LA INVERSIÓN Dentro del entorno de economía de mercado del que hemos hecho referencia, también se dan diferencias fundamentales en cuanto se hace a la inversión aplicada al sistema de tenencia de la tierra privado y social. En efecto; cualquier inversionista, independientemente del monto de sus inversiones, pretende, dentro de los riesgos propios de la inversión, tener el máximo de seguridades en razón de la recuperación de la misma. Si se invierte, digamos, en un edificio en una ciudad, se tendrá especial cuidado primero en que el terreno sobre el que se construye, no tenga gravámenes, etc., solo entonces, se aportará la inversión. De aquí que en nuestra realidad, se dé un porcentaje inmensamente mayoritario de inversiones en tierras de propiedad privada y un mínimum minimorum de tales inversiones de tierras de propiedad social encontrándonos de nuevo con el mismo problema original, la mera tenencia de la tierra en posesión, de la propiedad social, no es garantía de recuperación de la inversión que sobre ellas se realice. 19.4 EFECTOS DE LA DUALIDAD EN LA TENENCIA DE LA TIERRA EN LOS VALORES DE LA MISMA En primer término, el predio en propiedad privada. Se encuentra sujeto, en lo jurídico, la legislación civil, y, en lo aplicable, a la mercantil. El predio se encuentra en el mercado y sujeto a las leyes del mismo. Puede ofrecerse y enajenarse libremente y, su valor o precio, está sujeto precisamente al mercado de tierras del lugar, y, también, sujeto a la ley de la oferta y la demanda. Otra cosa muy distinta resulta para el predio ejidal o comunal, aunque sean vecinos o colindantes. En primer lugar, estos bienes se encuentran en el mercado. Su enajenación o venta, se encuentran expresamente prohibidas en nuestra legislación. En consecuencia, si se enajenan, tal operación es ilegal y nula. Y, además, para ejercer sobre tal operación la acción de la nulidad, la Ley Agraria no marca término alguno, por lo que esa acción, viene siendo eterna. Y el riego igual. 127 En consecuencia, no se puede vender en el mercado este predio, por lo que siendo su operación de venta, por así llamarla, ilegal, prohibida expresamente por la ley aplicable, el comprador sabrá que está comprando un enorme riesgo; que no es válido el contrato correspondiente, que es eminentemente nulo. En consecuencia nos encontramos como siempre con la gran injusticia jurídica y económica estructural, de que más de la mitad del territorio nacional, se encuentra enormemente subvaluado, además de que también cualquier operación de enajenación sobre la misma y es ilegal y nula. Esos son algunos efectos de la dualidad de la tenencia de la tierra en cuanto hace a sus valores. Las tierras de los que menos tienen en el campo mexicano, son las que menos valen, en un gran círculo vicioso que afectan, injustamente, a millones de titulares de las tierras de propiedad social. 19.5 EFECTOS DE LA DUALIDAD DE LA TENENCIA DE LA TIERRA EN LA PRODUCCIÓN AGROPECUARIA. Tenemos producción agropecuaria y específicamente agrícola, en los dos sistemas de tenencia de la tierra; y aquí también tenemos grandes diferencias a las que sustancialmente me quiero referir. Por una parte, en la propiedad privada, tenemos tanto las tierras, como los recursos económicos, financieros, técnicos, de maquinaria agrícola, de fertilizantes, de insumos, etc., necesarios de acuerdo a los diferentes tipos de tierra, e igualmente se cuenta con criterios de tipo empresarial de los propietarios, en donde se advierte la relación inversión-retorno, necesidad de alta producción, la propiedad, la siembra de productos con mejor mercado, la exportación de productos de calidad, etc. En algunas zonas del país y en cuanto hace a la producción, a la productividad, al retorno de capitales, a la calidad de productos, a la exportación, a la búsqueda y retención de los mejores mercados, etc., no tenemos nada que envidiar a los mejores productores agrícolas a nivel mundial. Encontramos por tanto una diferencia a veces abismal, entre la producción del campo de propiedad privada en nuestro país, muchas de ellas a los mejores niveles del mundo, con la producción de los ejidos y comunidades, sumamente atrasada y sus recursos ni económicos, ni técnicos y sin criterio empresarial, muy baja, de no buena calidad sin concurrir al mercado y básicamente de autoconsumo. 128 Y en ese tenor de producción, México tiene más de la mitad de su territorio, en sus tierras que explotables agrícola, pecuaria y forestalmente. Tenemos que ir a fondo para corregir esos enormes desniveles que afectan estructuralmente alrededor de 5, 700,000 ejidatarios y comuneros en el país, para modernizar las estructuras jurídicas, económicas, sociales, de los titulares de la propiedad social. 19.6 LA DUALIDAD EN LA TENENCIA DE LA TIERRA Y SUS EFECTOS EN EL PATRIMONIO DE LOS TITULARES DE LA PROPIEDAD SOCIAL Si analizamos someramente las dos realidades que conviven en nuestro país, la propiedad privada y la propiedad social en relación con el patrimonio que una y otra generan para sus titulares, nos llevaremos una ingrata sorpresa. Los propietarios privados, siempre cuentan con un patrimonio: mayor o menor, apoyado en créditos o libre de gravámenes pero cuentan, siempre, repito, con un patrimonio para ellos y para sus familiares. En el caso de los ejidatarios y de los comuneros, nos encontramos con que más del 60% de ellos, simplemente carecen de patrimonio, ni para ellos ni para sus familiares. Y el porcentaje que si cuenta con el patrimonio, se da porque tienen en propiedad u otras tierras, o vehículos, o una tiendita o cualquier otro bien susceptible de ser propiedad privada. Podemos decir, por tanto, que la propiedad social en sí, no otorga un patrimonio a sus titulares; y que cuando un porcentaje menor de éstos obtiene un patrimonio, es que de alguna manera pudo tener acceso a la propiedad privada de bienes muebles o inmuebles, ajenos, siempre, a sus parcelas ejidales o comunales. 19.7 LA ORGANIZACIÓN DE LOS PRODUCTORES SOCIALES EN EL SISTEMA DUAL DE TENECIA A mi juicio, al tener un sistema dual de tenencia de la tierra se impone una barrera a la organización de los productores, pues es muy difícil la asociación entre un ejidatario y un pequeño propietario, o con un inversionista externo al medio agropecuario porque la asociación se da entre semejantes, entre pares y aquí en México, las condiciones de uno y otro, son esencial y legalmente diferentes; por ejemplo: en su capacidad de obligarse frente a terceros y de tomar decisiones en forma ágil y con seguridad económica y jurídica para todas las partes. 129 Al día de hoy, no sabemos a ciencia cierta si el ejido es una forma de tenencia o una figura asociativa. En el primer caso, sus facultades de dominio están restringidas y, en el otro, sus mecanismos de gobernabilidad y toma de decisiones son poco prácticos para desempeñarse con eficiencia en la parte productiva o comercial. 19.8 LA DUALIDAD EN LA TENENCIA DE LA TIERRA Y SUS EFECTOS EN LA CONSERVACIÓN DEL MEDIO AMBIENTE Dada la dificultad para obtener financiamiento y para tomar decisiones en el largo plazo, es difícil que un ejidatario en lo individual, o un ejido como unidad jurídica, comprometa recursos en mejoras territoriales, ya que no tiene manera de capitalizarlas en el futuro, reflejándolas en el valor de venta de los inmuebles. Por ser tan limitada su capacidad de ahorro, es tan común que este universo de productores este continuamente recurriendo al gobierno para la construcción, operación y mantenimiento de su infraestructura física, como nivelaciones, canalizaciones, drenajes, caminos, obras de mantenimiento de suelo, control de avenidas, control de erosión, etc. Tanto en este caso como los anteriores, estoy partiendo de un principio indeclinable y aplicable universalmente: el del absoluto respeto a la libertad a la libertad y a la dignidad individual de toda persona en nuestro territorio patrio, mismo principio que no autoriza a nadie tampoco a restringir o a limitar los derechos de más de cinco millones de ejidatarios y de comuneros y que nos mueve a velar con un verdadero acto de justicia social, económica , histórica y política, por nivelar la situación de esos millones y millones de mexicanos, a fin de que encuentren en su camino y en su destino las posibilidades reales de salir de su pobreza y de su postración, a las que hasta hoy injustamente a mi entender, se le ha relegado, accediendo a la hoguera y a la prosperidad de las que ahora carecen. 19.9 LA DUALIDAD EN LA TENENCIA DE LA TIERRA Y EL EMPLEO En caso de la propiedad social con la estructura del minifundio, con baja productividad, sin rentabilidad real, sin financiamiento, sin patrimonio, sin ahorro, sin criterio empresarial, con producción básicamente de auto-consumo, nos encontramos con que en la gran mayoría de los casos es el titular de la parcela ejidal, con la ayuda de los miembros de su familia, quien ejecuta todas las labores de explotación de su parcela 130 Por otra parte, nos encontramos con aquellos predios rústicos de propiedad privada, cuando sus tamaños son suficientemente grandes para que se requiera una mano de obra más allá de la del propietario y su familia, cuando, como en tantos casos cuentan con financiamiento, técnica, insumos, fertilizantes, etc. Y el manejo de esas propiedades se da con criterio empresarial, si requieren de ayuda y mano de obra ajena, creándose fuentes de trabajo y empleos, que mucho ayudan en sus respectivas zonas y, en ocasiones, incluso provocan que campesinos de zonas lejanas, vayan a trabajar en las épocas de cosecha a sus predios. 19.10 LA DUALIDAD DE LOS SITEMAS DE TENENCIA DE LA TIERRA Y LA VIDA INSTITUCIONAL DEL PAIS Con frecuencia, las autoridades ejidales se muestran ignorantes e incapaces de hacer cumplir reglamentos de construcción, vocación o uso de suelo, con el consiguiente efecto en la planeación y desarrollo armonioso del territorio. Tema ancestral es también la dependencia de estados y municipios con respecto a la federación en materia económica. El proceso impositivo en México está fuertemente centralizado a nivel federal y, de éste, se desprenden recursos económicos hacia abajo, a través de las participaciones a las órdenes inferiores de gobierno. En la práctica los ayuntamientos acaban gobernando los centros urbanos y dejando a la federación la parte no urbana de sus jurisdicciones. Además, de la mencionada escases de recursos materiales, la legislación que regula la tierra, el agua, los bosques, los recursos naturales, el medio ambiente es de índole federal (Ley Agraria, Federal de Aguas, Forestal, Minería, hidrocarburos, etc.), originándose en ocasiones conflictos entre las jurisdicciones federales, estatales y municipales y también con la realidad práctica. Por ello, decir que más de la mitad del territorio nacional, que es de propiedad social es la que se encuentra inmovilizada no corresponde plenamente a la realidad, pues un elevado porcentaje de predios privados, rústicos o urbanos, también enfrenta serios limitantes en su ordenamiento, por los elevados costos de transacción que impone el estado a sus propietarios y poseedores. 19.11 LA LEY AGRARIA VIGENTE DESDE 1992 “El 26 de febrero de 1992 se publicó, en el Diario Oficial de la Federación, una nueva Ley Agraria que vino a substituir casi totalmente a la anterior Ley Federal de Reforma Agraria. 131 Este nuevo cuerpo normativo reconoce que los núcleos de población tienen personalidad jurídica y patrimonios propios, así como el de que son los propietarios absolutos de las tierras que le han sido dotadas. Como se puede inferir de lo señalado arriba, una cuestión medular, es la clasificación de las tierras ejidales las que, por su destino, se dividen en las de asentamiento humano son inalienables, imprescriptible e inembargables, sin embargo, una vez que la asamblea asigne solares individuales en presencia de un representante de la Procuraduría Agraria, e inscriba el acta respectiva en el registro Agrario nacional, constituirán títulos oficiales y serán de propiedad plena de sus titulares, los que se regularán entonces por el Derecho Común. En cuanto a los derechos parcelarios que tienen los titulares agrarios, una vez que hayan sido asignadas las parcelas por la asamblea, consiste únicamente en el uso y usufructo personal por parte de sus titulares, o su explotación a través de terceras personas sean del núcleo o ajenos a él, mediante contratos de asociación o aprovechamiento o en plazos no mayores a treinta años. En cuanto a lo que se refiere a la propiedad de las parcelas, como ya se había señalado, se puede adquirir por los titulares, siempre y cuando se tome la resolución por la asamblea extraordinaria de características especiales y, que de conformidad con el actual contexto legal, trámite que puede llegarse a tardar un tiempo aproximado de cuatro años y medio. En cuanto a las tierras de uso común son aquellas que no son de asentamientos humanos ni parceladas, mismas que, la ley no deja lugar a dudas, son inalienables, imprescriptibles e inembargables salvo que se aporten a sociedades mercantiles en proyectos productivos por parte de la asamblea ejidal. 19.12 LA POBREZA COMO CAUSA DE DISCRIMINACIÓN SOCIAL 19.12.1 LA POBREZA EN MEXICO Hay temas de profunda injusticia e inequidad, como son las desequilibradas leyes fiscales, la economía informal, el contrabando y otras cuestiones similares que son reflejo de nuestro atraso en el mundo jurídico. Por otra parte, existe un tema de gran urgencia, que es el de la seguridad pública, tema que se entila por todos a todas horas; basta ver los noticieros, oír a políticos y organizaciones sociales de todo tipo, reuniones y charlas de café, todas éstas señalan diariamente lo urgente de su atención, así como la gravedad de su desatención. Muertos, secuestros, delitos contra la integridad física de los habitantes con todos los grados de 132 crueldad que es imaginable y no imaginable. Por estos temas, podrían no ser de la mayor trascendencia (aunque sean de la mayor urgencia), pues resolviéndolos no necesariamente mejorarán sustancialmente el nivel jurídico y/o económico de éste país. Sin querer ahondar en estas materias, se podría señalar que su carácter se limita exclusivamente a cuestiones operativas de políticas públicas. Una de las principales formas en que se patentiza la pobreza en México, sobre todo en las zonas rurales, es la miseria de la gente del campo. Sus padecimientos económicos son indescriptibles y solamente viendo tales carencias se puede entender que hay algo que no está bien en el país. Sus padecimientos económicos son indescriptibles y solamente viendo tales carencias se puede entender que hay algo que no está bien en el país. Basta con salir a cualquier población pequeña en cualquier lado del territorio nacional para poder constatar esta circunstancia (…) niños con hambre, sin bañar, probablemente, en años, pésimamente alimentados, sin casa, durmiendo bajo árboles, mezquites, o jacales que pocamente cubren del calor, frío, lluvias o tempestades, (…) todas estas carencias y la falta de todos los factores que permiten tener algo de dignidad son los principales lastres del país. Debido a la pobreza no es difícil entender por qué las más de las gentes que habitan en México buscan irse a los Estados Unidos de Norteamérica, siendo éste otro de los efectos más vergonzosos e indignos que se tiene de la miseria. La emigración que los estudiosos no quieren analizar ni las autoridades relacionar con la pobreza, principalmente en el medio rural, es algo similar al “ dont´t ask, dont’t tell” norteamericano- que hoy por hoy está muy en boga en aquel país por la política militar respecto de las preferencias sexuales de los militares _ pero que, en el caso de México respecto de la miseria de la población, es una de las peores consecuencias de nuestras defectuosas leyes tanto agrarias como económicas, pues refleja las más sorda y ciega dela injusticias sociales y económicas que impera en este país, como es la expulsión del país de millones de connacionales por causa de hambre y falta de oportunidades. El caminar cientos kilómetros por desiertos y zonas áridas agrestes, arriesgando la vida por razones naturales y policiacas o militares, con motivo de leyes antiinmigrantes de los Estados Unidos, además del ahora riesgo que tienen los migrantes con los grupos de delincuencia organizada a lo largo de toda la frontera, son cuestiones que son absolutamente indígenas y que no hay nada que pueda justificarlas en el Sistema Jurídico Mexicano pues el mismo lo ha propiciado sin paliativo alguno. La pobreza en México, causa de muchos males nacionales, esta medida por un organismo especializado que se denomina Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social, mismo que nos indica que el 46.2% de la población mexicana se encuentra en pobreza, siendo de este el porcentaje 10.4% en 133 pobreza extrema y el 35.8% en pobreza moderada, así como el de la clasificación de vulnerables por carencias sociales que es del 28.7% y un5.8% de vulnerables por ingreso, las cifras de pobres y que se encuentran en circunstancias de pobreza y debilidad económica es de aproximadamente el 80.7% de mexicanos. No sobra señalar que el CONEVAL es un organismo público descentralizado creado por la Ley General de Desarrollo Social y regulada por decreto de fecha del 27 de julio de 2005, que tiene por objetivo estratégico el mejorar la eficacia y eficiencia, así como la rendición de cuentas de la política de desarrollo social, mediante la evaluación y el monitoreo de programas y políticas sociales y la medición de la pobreza. En cuanto a la población que reside en las zonas rurales, de conformidad con el censo practicado en el año 2010, es un23.2% de la población que vive en las localidades de menos de 2,500 habitantes por lo que se puede considerar que 25 millones de personas habitan en las poblaciones ubicadas fuera de las zonas urbanas. Pareciera que esto ya no requiere mayor explicación: Es indispensable dar solución jurídica para generar riqueza y mejorar a este país pues, de no hacerlo, se continuará con las abismales diferencias económicas, la injusticia y las inequidades sociales que tanto duelen a la Nación, a pesar de políticas públicas que tanto se encaminan contra los efectos que produce la pobreza, así como el multimillonario dispendio de recursos económicos o el supuesto debate de iniciativas de reformas legales que solo van dirigidas a combatir las consecuencias de un país con diferencias abismales en su sociedad. 19.13 LA PROPIEDAD SOCIAL EN MEXICO Como se desprende de lo señalado en los apartados arriba mencionados, la Constitución Política de los Estados Unidos mexicanos vigente reconoce actualmente, como una rama del derecho aplicable al campo Mexicano, al Derecho Agrario, específicamente por lo que se refiere a la tenencia de la tierra en el medio rural, siendo su principal aspecto a destacar el de la propiedad social. Como contrapartida podría señalarse que es el derecho común el que contempla a la propiedad privada individual. Por lo que se refiere a tierras parceladas, éstas son delimitadas y asignadas a los titulares de derechos agrarios del núcleo de población que corresponda y gozan exclusivamente del uso y usufructo de las mismas. La vigente Ley Agraria permite la adquisición de propiedad (nuda-propiedad) siempre y cuando la asamblea general de ejidatarios así lo decida, conforme a las formalidades espaciales que también establece el mismo cuerpo legal. 134 En lo relativo a las tierras de uso común, en tanto éstas no sean divididas por un parcelamiento, la ley es tajante al señalar que, de acuerdo a las cifras del INEGI, según el IX censo Ejidal, la superficie que corresponde a tierras de uso común es de 69´29,522 hectáreas, o sea aproximadamente el 65.4% de las tierras de los ejidos no tienen asignación individual de las mismas, en comparación la tierra parcelada y asignada es de 33´631,739 hectáreas lo que significa un 31.7% del total de la propiedad social. 19.14 LOS DERECHOS HUMANOS Y/O FUNDAMENTALES Como es de conocimiento generalizado, actualmente en México se ha hecho la regulación de los Derechos y/o Humanos, tanto por las reformas constitucionales que han perfeccionado últimamente como por la fuerza e importancia que se han perfeccionado últimamente tanto como por la fuerza e importancia que han adquirido en los derechos individuales a proteger. Los derechos humanos de primera generación son aquellos que se refieren esencialmente a derechos individuales frente al Estado y los derechos políticos de participación en el Estado, abarcando su reconocimiento desde el modelo norteamericano y las constituciones liberales de Europa y América Latina hasta las Primera Guerra Mundial de 1914. Nuestro Sistema Jurídico Nacional, como ya se señaló, ha reconocido estos derechos humanos y/o fundamentales en la Carta Magna y, es en el año de 2011 que ha establecido los de tercera generación expresamente, así como su defensa ampliando su protección a los señalados en los tratados internacionales de los que México es parte. 19.15 UNIVERSO SOCIAL RURAL Aunque tantos mexicanos lo ignoren, de manera culpable o no, más allá de las banquetadas de nuestras grandes ciudades, existe todo un universo de millones de hombres y mujeres, de ancianos y niños, que tiene derecho natural y jurídico a un destino feliz; al menos, a un destino digno de personas humanas, tan humanas y tan personas como cualquiera de nosotros, a los que poco volteamos a ver, a los que poco o nada conocemos y de quienes somos, en tanto, tan poco solidarios. También existe más de la mitad del territorio nacional, que de alguna manera les debiera pertenecer y no es suyo; tierras en las que han nacido, de las que mal viven y en las que probablemente han de morir, de las que son meros poseedores sin ser propietarios; que les sirven para mal darles de comer en una producción de mala calidad, bajísima y que para ellos es su único patrimonio, frutos pendientes como se les llama en Derecho, al no tener un patrimonio real propio y que, en la 135 inmensa mayoría de los casos es sólo producción de auto-subsistencia: el maíz que utilizan para sus tortillas y el frijol que consumen para sus tacos. Normalmente no les alcanza su producción para concurrir con ella al mercado. Estos son unos breves datos que nos actualizan y nos recuerdan la existencia real, aquí y ahora, en nuestro México del 2012, de esas decenas de millones de compatriotas, mas sus familias, mas su pobreza, mas su hambre, mas su insalubridad, mas su ignorancia, en el vastísimo territorio nacional, llamado por vocación a ser grande, con un destino tantas veces frustrado: Ejidos y comunidades: 31,518 (más de 28,000, ejidos, más del 90%; menos del 10%, comunidades; problemática muy similar) Superficie: 105´900,000 Hectáreas. (INEGI, Censo Ejidal 2007). 54% del Territorio Nacional Más del 60% de la superficie agropecuaria y silvícola explotable. Habitantes totales del sector rural: Según los parámetros del INEGI: 24´300,000 Según los parámetros de la OCDE: 38´400,000”1 1 Pampillo Baliño, Juan Pablo, Munive Paez, Manuel Alexandro, Derecho Agraria y Desarrollo rural, Editorial Porrúa, México, 2013 p. 3 136 DERECHOS AGRARIOS FUNDAMENTALES Y PRINCIPIOS GENERALES DE DERECHO APLICABLES AL CAMPO MEXICANO DUALIDAD DE SISTEMAS DE PROPIEDAD, PRIVADA Y COMUNITARIA EFECTOS DE LA DUALIDAD DE LA TENECIA D ELA TIERRA EN EL FINANCIAMIENTO EFECTOS DE LA DUALIDAD EN LA TENENCIA D ELA TIERRA EN LOS VALORES D ELA MISMA EFECTOS DE LA DUALIDAD DE LA TENENCIA DE LA TIERRA EN LA PRODUCCIÓN AGROPECUARIA LA DUALIDAD EN LA TENENCIA DE LA TIERRA Y SUS EFECTOS EN EL PATRIMONIO D LOS TITULARES DE LA PROPIEDAD SOCIAL LA DUALIDAD EN LA TENENCIA D ELA TIERRA Y SUS EFECTOS EN LA CONSERVACIÓN DEL MEDIO AMBIENTE LA DUALIDAD DE LOS SISTEMAS DE TENENCIA DE LA TIERRA Y LA VIDA INSTITUCIONAL DEL PAÍS 137 CAPITULO XX LOS HABITANTES DEL CAMPO MEXICANO. UN GRAVE ERROR DE DIAGNÓSTICO, DE NUMEROS Y DE REALIDADES INTRODUCCIÓN México por desgracia y por la mala administración y mal reparto de las tierras, sufre de pobreza y de pobreza extrema, pues generalmente en el mundo se tiene esa idea, pero México es un país muy rico en cuestiones de recursos naturales. Aquí el problema es el más manejo de esos recursos donde están o mal distribuidos o mal manejados, asegurados en monopolios de unos cuantos gobernantes, y es difícil así poder crecer en materia agraria, también a mi punto de vista se debe a gobiernos paternalistas que todo o por lo menos “obsequian” a los ejidatarios dineros públicos que no alcanzan para poder realizar siembras y cosechas dignas, no es posible avanzar de tal manera esperando que gobierno de todo lo necesario para cubrir necesidades básicas mínimas. En México no hay pobreza, hay miseria. “La mayoría, acepta sin ningún análisis que los habitantes del campo mexicano suman 24´300,000 personas. Estudiando esta situación, caemos en la cuenta de la existencia de dos pesas y dos medidas: por una parte, los parámetros y los números del INEGI, que arrojan en total 24´300,000 habitantes rurales. Por la otra, los parámetros y resultados de la OCDE, a la que pertenece México y que nos dan un total de 38´400,000 personas en el medio rural. Con estos últimos parámetros se mide la población rural de naciones avanzadas como Francia, Alemania, España, Brasil, Canadá, Australia y los demás países avanzados. Existe un breve estudio del Dr. Marco Antonio Galindo, destacado economista, investigador y estudioso del campo mexicano, que nos demuestra que los parámetros de la OCDE, que sigue casi todo el mundo occidental, son los verdaderos y aplicables a nuestro país: ¿Qué es lo rural?: Lo rural, como una comunidad de análisis, no se define precisamente como un concepto y mucho menos, como un territorio específico, dado que la frontera entre lo rural y lo urbano, en la mayoría de los países, no se identifica fácilmente. Se utilizarán dos distintas definiciones de lo rural, aunque complementarias entre sí. La primera, basada en el tamaño de la población, coincide estrechamente(o se acerca mucho) con las categorías más frecuentemente utilizadas entre los 138 hacedores de políticas y los académicos en México: rural disperso (poblados con menos de 2,500 habitantes), rural semiurbano (entre 2,500 y 15,000), urbano intermedio (entre 15,000 y 100,000) y urbano o urbano metropolitano (más de 100,000). La definición de la OCDE de lo rural, se basa en la evaluación de que las regiones rurales cuentan con densidad poblacional baja y no tienen un centro urbano importante. Las regiones no clasificadas como rurales o urbanas, pero dependiendo de la fracción de población que vive en comunidades rurales, están clasificadas como predominantemente rural (PR), intermedio (IN) y Predominantemente Urbano (PU). Parte de la dificultad de definir lo rural yace en el hecho de que la definición depende del niel territorial del análisis. La definición proporcionada a nivel territorial más bajo es el que informa el INEGI, Instituto Nacional de Estadística, Geografía e Informática, instituto que hace una distinción entre localidades rurales y urbanas utilizando un umbral de nivel poblacional, 2,500 habitantes. De las próximamente 199 mil localidades, 196 mil tiene menos de 2,500 habitantes, lo que constituye casi 90% del territorio nacional. La definición de la OCDE de lo rural, se basa en la evaluación de que las regiones rurales cuentan con densidad poblacional baja y no tienen un centro urbano importante. Las regiones no se clasifican como rurales o urbanas, pero dependiendo de la fracción de población que vive en comunidades rurales, están clasificadas como predominantemente urbanas, predominantemente rurales e intermedias usando los 3 criterios siguientes: 1. Densidad de población. Una comunidad se define como rural si su densidad poblacional es menor a 150 habitantes por km2 (500 habitantes para Japón, tomando en cuenta el hecho de que su densidad poblacional nacional excede los 300 habitantes por km2). 2. Regiones por porcentaje de población en comunidades rurales. Una región se clasifica como predominantemente urbana si menos de 15% de la población vive en comunidades rurales; e intermedias si la parte de población que vive en comunidades rurales está entre 15% y 50%. 3. Centros urbanos. Una región que podría clasificarse como rural con base en la regla general, se clasifica como intermedia si cuenta con un centro urbano con más de 200,000 habitantes (500,000 para Japón), representando no menos del 25% de la población regional. Una región que 139 pudiera clasificarse como intermedia con base a la regla general, se clasifica como predominantemente urbana si cuenta con un centro urbano de más de 500,000 habitantes (1´000,000 para Japón), representando no menos de 25% de la población regional. Criterio en México para definir “rural” CONCEPTO UNIDADES Rural disperso Rural semiurbano Urbano intermedio Urbano Menos de 2,500 habitantes Entre 2,500 y 15,000 habitantes Entre 15,000 y 100,000 habitantes Más de 100,000 habitantes Criterio de la OCDE para definir “rural” CONCEPTO Predominantemente Rural Intermedias Predominantemente Urbanas UNIDADES Más del 50% de la población vive en comunidades rurales Del 15%-50% de la población vive en comunidades rurales Menos del 15% vive en comunidades rurales Es común agrupar estas dos categorías, dado que las condiciones de vida de la población en asentamientos de menos de 15,000 habitantes cuentan con características más parecidas al ambiente “rural” que al “urbano”. Utilizando este umbral, la población rural actual de México, asciende a los 38.4 millones de personas o 37% de la población total. 20.1 LOS MAS POBRES ENTRE LOS POBRES Según los datos estadísticos más confiables, desgraciadamente la pobreza en México ronda alrededor del 50% de la población o más. Y de todos los grupos humanos que conforman a los habitantes de nuestro país, el campesino es el más pobre entre los pobres., en frase de la M. Teresa de Calcuta, como se demuestra aquí: En el campo mexicano viven poco más de 38 millones de mexicanos en condiciones de pobreza: alimentaria 32.3%, de capacidades 39.8%, y patrimonial 140 61.8%, con el riesgo de que se vaya incrementando del 2009 en adelante por efectos de la crisis laboral. Este es el resultado de raquíticos ingresos, ya que el 84% de sus habitantes percibe menos de dos salarios mínimos; el 65% percibe menos de un salario mínimo y el 51% percibe menos de medio salario mínimo. ($28.75 diario). Las actividades agropecuarias son la principal fuente de empleo e ingreso en el medio rural; en 2009 dieron trabajo al 13.3% de la población ocupada en el país, mientras que sólo generó el 3.8% del Producto Interno Bruto Nacional. En esas condiciones, el campo mexicano no es atractivo a nuevas inversiones; sólo el 0.9% de la formación de capital se destina a las actividades agropecuarias y pesqueras; las asociaciones con ejidatarios y comuneros, es casi inexistente por falta de seguridad jurídica en la recuperación de la inversión. Esta situación se agudiza por: Falta de crédito: sólo el L8% de los recursos crediticios disponibles se canaliza al campo y lo más grave, de la banca de desarrollo sólo el 0.5% y este financiamiento es esencialmente para la propiedad privada. El financiamiento institucional a ejidos y comunidades es prácticamente nulo, en cifras, se puede decir que no existente. Inseguridad en la tenencia de la tierra. Muy baja productividad del trabajo en ejidos y comunidades, insuficiente simplemente para que los titulares de esas tierras, obtengan el sustento indispensable para tener una vida digna. Baja rentabilidad por falta de e financiamiento, carencia de maquinaria y de técnica, mala calidad y bajos precios de sus productos y altos precios de los insumos. A pesar de que lo anterior es tan grave, no se menciona mucho en la prensa ni en los medios masivos de comunicación y menos aún por parte de instancias gubernamentales, pero ésta es nuestra triste, vergonzosa pero inocultable realidad: un sector paupérrimo dentro de un pueblo pobre. Nuestra pregunta, necesaria conclusión de lo anterior: ¿qué hacen nuestros diputados y senadores, (ganando cientos de miles de pesos mensuales cada uno de ellos), para aliviar, de fondo y en verdad, esta situación tan injusta y delicada, tan grave y riesgosa y cuyo alivio está en sus manos como legisladores? Nada. 141 Los miembros del IFE, ganan, de nuestros impuestos, más de diez mil pesos diarios, equivalentes a 350 veces lo que obtiene el 51% de la población campesina del país, ¡cerca de veinte millones de personas! Y algún Ministro de la Suprema Corte de "Justicia", casi mil veces lo que ingresa ese paupérrimo 51% de la población en el campo mexicano, todos ellos con un rostro humano, con un nombre, con una familia, con una inmensa necesidad, con el estómago vacío, sin pan en su mesa, sin saber leer ni escribir tantos, sin ningún auxilio de asistencia sanitaria, faltos de fe y huérfanos de esperanza, ¡francamente indignante! Recordemos de los romanos: "Venter non patitur dilationem". Lo que hoy es nuestro país, inició la modernidad siendo la Nueva España y en muchos datos, a contrapelo de la modernidad europea. La modernidad en Europa, en general, se distinguió por sus conceptos de libertad, de tolerancia, de apertura. Hija fue en mucho del cisma de Occidente. Díganlo si no los holandeses y los pobladores ingleses de los actuales territorios de los Estados Unidos. Políticamente hablando, en Europa sobresalen como primer dato, el nacimiento y el crecimiento de los Estados Centrales fuertes, a expensas del poder de provincias, de los poderes periféricos de lo que anteriormente fueron los señoríos feudales de la nobleza, la Iglesia, los gremios, las armadas, que cada día se sujetan más al poder central. La propiedad privada, ha demostrado hoy a nivel universal, díganlo las actuales economías de la Europa del este, las de Asia, la economía china en lo particular y que los señores economistas den rumbo, contenido y cifras a mi dicho, en el tiempo y en el espacio, que es el sistema más propicio para la creación y la distribución de la riqueza, sin que el Estado se abstenga nunca de su esencial responsabilidad de promover la auténtica justicia social, conmutativa, distributiva y legal; y aún más lejos, la equidad, como aplicación de la justicia al caso concreto, según decía Aristóteles. Me preocupa ante la fría cripticidad de los números de tantos sabios economistas, el hambre en el estómago de millones de mexicanos en el campo sea tan palpable, sensible. Terrible. Y, repito, el dicho de los viejos romanos que de Derecho sabían tanto y de Historia también, que “Venter non patitur dilationem”. “el vientre no admite espera, en resumen. Y los mexicanos decimos que el “hambre es mala consejera”, pero hacemos poco o nada en la historia y en nuestra realidad, para remediarla. Tenemos miedo, tenemos miedo al cambio. Aquí de manera esencial, se requiere de la organización social, institucional, económica, productiva, comercializadora. De poco servirá el régimen de propiedad, si no se completa con figuras asociativas voluntarias que den a las parcelas ejidales reunidas, privadas, la posibilidad de conformarse en unidades de producción jurídica, económica, social, ecológica y técnicamente rentables. 142 Después de más de 40 años conociendo, viviendo y estudiando el derecho, la conflictividad y la problemática agraria en México, no encuentro mejor forma de aliviar el hambre, la ignorancia, el desamparo y la miseria de millones de familias mexicanas, proveyendo una autentica justicia social que la adopción de la propiedad plena; de la “plena propiedad”, como querían el decreto de Venustiano Carranza el 6 de enero 1915 y el artículo 27 de la Constitución del 5 de febrero de 1917. 20.2 ALGUNOS APUNTES SOBRE LA PROPIEDAD “SOCIAL”, EJIDOS Y COMUNIDADES La producción agropecuaria está sujeta a riesgos climatológicos, biológicos y de mercado, que en caso extremo puede significar la pérdida total de los activos, especialmente cuando no se encuentran con un seguro que ampare la infraestructura y el capital de la unidad productiva. Además, se enfrenta una competencia desleal ante los subsidios de otros países; en México un productor recibe en promedio un 13% de ingreso bruto en subsidio(ESP); mientras el promedio de los productores de los países de la OCDE es del 23%, los de la Unión Europea 27%, y los de Suiza, Corea del Sur y Noruega más del 60%. La rentabilidad de las actividades agropecuarias se ha venido reduciendo en los últimos años debido a que: Un menor crecimiento de los precios de los productores primarios, en relación con los del resto de la economía, debido que se han utilizado como instrumento en el control de la inflación; de 1993 a la fecha ha sido menor el 22% respecto al crecimiento de los precios y, Un aumento mayor de los precios de los insumos agropecuarios y pesqueros, que los de sus productores finales, las materias primas han aumentado un 19% más que los precios recibidos por los productores agropecuarios. La inversión en el campo es marginal lo que no permite aumentar los niveles de productividad y competitividad. En el periodo 2000-2004 en promedio solo el .09% de la inversión (formación bruta de capital fijo) fue el sector agropecuario y pesquero y representa el 3.4% del PIB sectorial, mientras que los países de la OCDE el promedio es del 32% y el total de la economía fue del 21.5%. Características de la propiedad social. 143 En México existen 31,514 ejidos y comunidades agrarias que ocupan una superficie de 105.9 millones de hectáreas, 54.1% del territorio nacional; las tierras de uso común abarcan 69.3 millones de hectáreas y la superficie parcelada tiene 33.6% millones de hectáreas, 65.4% y 31.7% de la propiedad social respectivamente. Podría decirse que los actuales campesinos pobres, son tan pobres casi como lo eran los indígenas del mundo rural mesoamericano de antes de la conquista. Ni unos, ni otros, tienen ni tenían propiedad sobre las tierras que trabajaban, de las que viven y de las que probablemente morirán. Antes de la Conquista Española, las tierras eran del barrio, de los reyes, nobles, dioses, etc., no de los campesinos; hoy las tierras son del ejido o de la comunidad, no son tampoco de los campesinos, de los ejidatarios, de los comuneros. Ni unos ni otros cuentan con un patrimonio propio. Antes, eran macehuales; hoy, peones y campesinos sin tierra. Ni unos ni otros pueden heredar tierras que trabajan. 20.3 SITUACIONES REALES ACTUALES: NECESIDAD URGENTE DE LOS CAMBIOS PARA OTORGAR EL DOMINIO PLENO SIN TRABAS A LOS EJIDATARIOS QUE ASI LO DESEEN, CUMPLIENDO CON LA CONSTITUCIÓN Dependemos de la importación de productos agrícolas del exterior en un creciente porcentaje mayor hoy al 50%. Anteriormente existían excedentes productivos en el exterior y los bienes agrícolas eran relativamente baratos; hoy, por la demanda excedente de China, India y otros países, así como por la extraordinaria demanda industrial para producir bio-energeticos entre otras razones, se da una escasez de productos agrícolas a nivel mundial y los precios han escalado en más del 60% en ocasiones en un solo año los “stocks” o existencias físicas de esos productos en los Estados Unidos, se encuentran en niveles del 15% de sus existencias anteriores. Estamos llegando a la disyuntiva cada vez más cercana de la necesidad de producir lo que os comemos, o no lo encontraremos en los mercados internacionales, o lo habrá precios y con condiciones imposibles de acceder. Esto es conocido por todos los que conocen del tema. Es por ello que requerimos de los políticos, los diputados y senadores y la administración pública, se responsabilicen de modernizar la estructura jurídica, social y económica de la propiedad social en México, para no quedarnos, pronto, sin alimentos, además, debemos comprender que las parcelas ejidales no sean de dominio pleno o propiedad plena de sus titulares, conlleva, entre otros, los siguientes efectos que se están, ya hoy, viviendo y padeciendo: 144 a) Creación de un patrimonio propio. El que los ejidatarios solo sean poseedores y no propietarios de sus parcelas, implica necesariamente una falta de patrimonio real propio en ellos. Si se facilita al máximo su acceso a adoptar el dominio pleno de sus tierras, automáticamente y sin costo alguno por su parte, adquirían millones de ellos, un patrimonio del que hoy carecen. b) Posibilitarles un financiamiento que hoy no tienen: No teniendo en la actualidad los ejidatarios el dominio pleno sobre sus parcelas, les impide ofrecerlas como garantía real en los créditos institucionales que les son completamente indispensables y por tanto el financiamiento institucional a ejidos y comunidades, es en la práctica totalmente nulo. Si se facilita al máximo su acceso a adoptar el dominio pleno de sus tierras, automáticamente millones de ellos, tendrán acceso al financiamiento del que hoy carecen. c) Revaloración automática y multiplicadora de sus tierras. El valor de las tierras de una parcela ejidal, por no ser de dominio pleno, propiedad privada, es de entre un 10 y un 20% del valor de las tierras campesinas de pequeña propiedad. d) Seguridad para la asociación con otros propietarios o con inversionistas. Actualmente y como los ejidatarios no son propietarios de sus tierras, no hay seguridad para ningún inversionista para asociarse con ejidatarios, pues no tienen ninguna seguridad en recuperar su inversión. Si se facilita al máximo el acceso del ejidatario a adoptar el dominio pleno de sus tierras, automáticamente y sin costo alguno por su parte, serán sujetos plenos de coinversión, por la seguridad que ofrecerían, como cualquier propietario privado de bienes inmuebles en cualquier país. e) Idoneidad y posibilidad real e conformar, con otros propietarios, grandes o pequeños, unidades de producción económicamente rentables. Hoy, dependientes en tanto como los ejidatarios de sus comisariados ejidales y de la asamblea ejidal no tienen seguridad real en la tenencia de su tierra. Esa es una razón principalísima, para no poder conformar en la realidad, libremente, unidades de producción, eficientes y económicamente rentables. Además aun si las formasen, no tendrían ni valor económico, ni acceso al crédito, pues esa unidad no seria de propiedad, si no solo de posesiones. f) Liberación del ejidatario que adopte la propiedad o dominio pleno de su parcela, de la ominosa tutela del comisariado ejidal, de la asamblea y , en ocasiones, de las organizaciones que dicen representarlo: en la experiencia histórica y personal de los ejidatarios mexicanos, ha pesado siempre el depender de una o de otra manera, sea el comisariado ejidal, de la asamblea y , en ocasiones, de las organizaciones agrarias a alas que pertenece y que, también en ocasiones, medra a su costa y hasta lo exima y se queda con su tierra. Entiendo también que por ello mismo, la situación planteada tendrá enemigos, dentro y fuera del gobierno; pero la aposte, tendrá que vencer la mejoría económica de millones de ejidatarios, su desarrollo social, el adquirir su propio patrimonio y su independencia de os órganos 145 internos del ejido: su plena libertad personal y el respeto que se le debe en verdad, como mayor de edad y no como el trato a un discapacitado. g) Falta de circulación de las tierras y de ejidos y comunidades: En el año 2010, hoy 150 años después, 105.9 millones de hectáreas no tienen por ley el movimiento o libre circulación de una gran parte de la propiedad raíz, base fundamental de la riqueza publica, se repite, el 54% del territorio nacional 106 millones de hectáreas, que se encuentran distribuidas entre ejidos y comunidades vienen siendo, casi bienes de manos muertas.” 1 1 Pampillo Baliño, Juan Pablo, Munive Paez, Manuel Alexandro, Derecho Agraria y Desarrollo rural, Editorial Porrúa, México, 2013 p. 3-120 146 CUESTIONARIO 1.- ¿Qué es lo rural? 2.- ¿En qué se basa la OCDE en México para definir lo rural? 3.- ¿Cuál es el porcentaje de pobres en México, según estadísticas? 4.- ¿Por qué no les dan cerdito o financiamiento a los ejidatarios en las instituciones crediticias? 5.- ¿Cuántos ejidos hay en México, según la OCDE? 147 CAPITULO XXI TEMAS AGRARIOS PROPUESTA DE ADICION A LA LEY AGRARIA QUE REGULE EL RÉGIMEN DE PROPIEDAD DE LAS COLONIAS AGRÍCOLAS Y GANADERAS INTRODUCCIÓN La colonización en México inició después de la Independencia y continuó hasta después de la revolución, ésta no tuvo un fin propiamente agrario, es decir; no respondía a una política orientada a resolver necesidades agrarias de grupos campesinos sin tierra o de restituir a los pueblos indígenas los terrenos de que fueron despojados durante la Colonia. El propósito de esa acción colonizadora consistió en una política deliberada de redistribución de la población hacia zonas deshabitadas principalmente en el norte y zonas fronterizas del país, ordenada por el gobierno a favor de grupos sociales para establecer comunidades locales, fijando en dichos terrenos las moradas de sus cultivadores, con intención de permanencia, en una clara expansión de la población y del comercio. Las colonias que se encuentran vigentes, fueron creadas formalmente a partir de la Ley General de Colonización de 1926 y a partir de 1962, fecha en que es abrogada la Ley Federal de 1947(que sustituyó a la Ley de 1926), la normatividad del régimen de colonias se plasma en Reglamentos Generales en los que se establecen principalmente, facultades, y atribuciones para la administración de las colonias, así como las normas para la organización interna de las mismas. En especial el Reglamento General de Colonias Agrícolas y Ganaderas de 1980, abrogado el 4 de enero de 1996, contemplaba como sujetos de derecho, tanto colectiva como individualmente, además de las colonias a los distritos de riego, mismos que siguen prevaleciendo sin que la actual normatividad haga mención de ellos. 21.1 CONCEPTOS GENERALES DE LAS COLONIAS AGRICOLAS Y GANADERAS “Para entender la Colonización, debemos comenzar por establecer el significado del término colono, el cual tiene su raíz en las voces latinas “colunus, colonis, colonii”, que quiere decir agricultor, granjero, aparcero. Entendiendo entonces que es aquel labrador que cultiva una heredad por arrendamiento y vive en ella. Durante la época del México Independiente Implicaba dos aspectos: 1. Humano. Motivaba a los nacionales o a ciudadanos extranjeros a través de estímulos económicos para que participaran en la política gubernamental emprendida; y 148 2. Territorial. Respondía a la mala distribución de la población en el territorio nacional, lo que trajo como consecuencia, centros de población que aglomeraban a la mayoría de habitantes y zonas totalmente deshabitadas y ociosas. La colonización en México se inició en 1824, persiguió diversos propósitos como son: a) poblar al territorio nacional; b) fortalecer los límites o zonas fronterizas de un país; c) retribuir a los militares o a quienes prestaron servicio a la patria; y d) fomentar la producción agrícola y el ingreso nacional. 21.2 LA COLONIA CONCEPTO DE COLONIAS Es el conjunto de lotes y el grupo humano que los trabaja organizados en comunidad o en explotaciones de tipo familiar. Las Colonias como tales no constituyen entes Jurídicos, aunque sean un grupo social y se consideran como al grupo de personas, principalmente campesinos que emigran a un territorio en el cual es propicia la producción de la tierra, organizándose en su interior y cumpliendo con las formalidades que exige la ley para su creación. Las Colonias Agrícolas y ganaderas no fueron consideradas originalmente como formas de tenencia de la tierra y no existen estudios jurídicos minuciosos de las mismas, lo cual hace difíciles profundizar en cuanto a su naturaleza jurídica, misma que trataremos de desentrañar de las disposiciones legales que las han regido. 21.3 ORGANIZACIÓN COLECTIVA El régimen de Propiedad de las Colonias Agrícolas y ganaderas, combina la propiedad privada y a la Organización Colectiva para la toma de decisiones en común. Actualmente los lotes rústicos que conforman el territorio de una colonia representan una modalidad de tenencia que corresponde a la propiedad privada, y que a su vez se encuentra limitada, ya que mientras se mantenga en el régimen de colonias, deberá notificar a la Secretaria de la Reforma Agraria de todos los traslados de dominio a fin de mantener vigente el padrón de colonos. Se rigen por su Reglamento Interno y el Reglamento de la Ley Agraria en Materia de Ordenamiento de la propiedad Rural el cual establece los lineamientos que deben seguir los integrantes de una colonia, así como las que se ubiquen en los asentamientos humanos, es de concluirse, que se rigen por el Derecho Civil de la Entidad Federativa de que se trate; aplicando diversas disposiciones 149 jurídicas de dicha rama en cuanto a lo que concierne en materia de contratos, propiedad, accesión, servidumbre, fianza, hipoteca, responsabilidad civil entre otras; puesto que hacen uso del derecho real que poseen. 21.4 FEDERALES Se derivan de la colonización promovida por el Estado a través del otorgamiento de concesiones, creadas mediante Acuerdos, Decretos o Declaratorias emitidos por el Ejecutivo Federal, los cuales determinaban la colonización en terrenos nacionales y/o particulares, previamente expropiados, los cuales en su gran parte eran tierras susceptibles de cultivo y de cría de ganado; fomentando el movimiento de un grupo de población a diversos lugares , mediante los recursos y medios implementados por el mismo. 21.5 VOLUNTARIAS La colonización promovida por el Gobierno Federal se podía dar también en tierras de propiedad privada, de conformidad con lo dispuesto por la Ley Federal de Colonización de 1946, que estableció la modalidad de que los propietarios de latifundios podían ampararse en la colonización voluntaria de sus propiedades cuya petición tenía en el efecto inmediato de que la entonces Secretaría de Agricultura y Ganadería, decretara la inafectabilidad definitiva del predio por un periodo de cinco años, para darle la oportunidad de colonizarlo, con derecho a obtener la inafectabilidad definitiva de las superficies que comprendieran la colonización proporcionada que se hubiere realizado, (artículo 6º). Por lo que las colonias voluntarias son aquellas propiedades privadas que por un acto de la administración pública federal quedaban afectadas al régimen de colonización a petición de los mismos propietarios. 21.6 PREDIOS INDIVIDUALES Lotes inmersos en un Distrito de Colonización, los cuales no cuentan con una organización interna o colectiva pero que se les considera dentro del Régimen de Colonias Agrícolas y Ganaderas por su ubicación, regularizándose de manera individual y no colectivamente. En la Secretaría de la Reforma Agraria, actualmente se tienen localizados Distritos de Colonización solo en los estados de Baja California, Baja California Sur y Sonora. 150 21.7 PROGRAMA BGANADERAS DE REGULARIZACIÓN DE COLONIAS AGRÍCOLAS Y Según lo dispuesto por la Ley de Planeación, el Presidente de la República debe expedir dentro de los primeros seis meses de su periodo el Plan Nacional de Desarrollo, el cual será eje sobre el cual girarán las acciones gubernamentales tendientes a respetar las garantías individuales y a defender los principios políticos de la nación. El programa Sectorial Agrario 1995-2000 parte del afán de preservar el estado de derecho y de mejorar las condiciones de vida de los hombres y mujeres del campo, constituyendo la regularización y ordenamiento. Por lo antes señalado y derivado de lo establecido en el Artículo Octavo Transitorio de la Ley Agraria se implementó el Programa de Regularización de Colonias Agrícolas y Ganaderas, resultando lo siguiente: 21.8 SOLUCIÓN DEL PROBLEMA De lo antes expuesto y una vez realizado un breve estudio relacionado con la figura jurídica denominada Colonia Agraria y Ganadera, se propone como parte medular del presente ensayo la adición a la Ley Agraria del tema de las Colonias Agrarias y Ganaderas, principalmente debido a que forman parte de la Política de Ordenamiento y Regularización de Colonias Agrícolas y Ganaderas, principalmente debido a que forman parte de la política de Ordenamiento y Regularización de la Propiedad Rural del Programa Sectorial Agrario. Al formar parte de la política de ordenamiento y regularización desde el año de 1996, se implementó el Programa la regularización de las colonias, y dentro de él se consideró el Procedimiento operativo para la regularización de las colonias agrícolas y ganaderas cuyo objetivo principal era identificar a los sujetos de derechos, la superficie real que conformaba a las colonias y a los lotes, así como, el número de lotes que la integraba, otorgando certidumbre jurídica y documental a los sujetos de derecho en posesión de tierras en su interior. Una ley y su correspondiente Reglamento tienen como fin regular una determinada situación jurídica, estableciendo en ellas los principios de equidad y justicia. En el caso de las leyes agrarias pugnan por el derecho de la tierra la cual se considera una garantía individual de todo mexicano en este caso de los colonos. Por lo que de lo anterior el Gobierno Federal debe instrumentar leyes que lo protejan de cualquier afectación hecha por terceros o por el mismo Estado, en su derecho de propiedad; en las Colonias nos encontramos que los conflictos se han presentado por diversas causas, básicamente por la falta de legislación específica, muchos de ellos ni siquiera saben a qué ley sujetarse. 151 Todas las cuestiones antes mencionadas nos hacen llegar a la conclusión de que es conveniente seguir con la regularización de las Colonias, las cuales hasta el momento continúan con el problema de carácter legal en su interior, los cuales han tenido que ventilar ante los Tribunales Agrarios y las autoridades civiles en los Estados. En otras palabras, toda ley, reglamento y demás ordenamientos legales de aplicación general, deberán apegarse a lo establecido en la Constitución, no contraviniéndola y sin ir más allá de lo que establece. Es importante mencionar que la Ley Agraria no contempla a las Colonias, sólo en lo que respecta al artículo octavo transitorio, y derivado de este artículo el Reglamento de la Ley Agraria en Materia de Ordenamiento de la Propiedad Rural; el cual es muy escueto en cuanto a las generalidades de las Colonias”.1 1 Pampillo Baliño, Juan Pablo, Munive Paez, Manuel Alexandro, Derecho Agraria y Desarrollo rural, Editorial Porrúa, México, 2013 p. 253 152 CUESTIONARIO 1. 2. 3. 4. 5. ¿Qué es una colonia agrícola o ganadera? ¿Cuál es su régimen legal de una colonia agrícola o ganadera? ¿A través de que decretos fueron creadas las colonias agrícolas y ganaderas? La ley Agraria contempla a las colonias agrícolas. ¿sí o no? ¿Qué artículos constitucionales fundamentan y regulan a las colonias agrícolas y ganaderas? 6. ¿Cuándo nacen las colonias agrícolas y ganaderas? 7. Menciona los tipos de colonias agrícolas y ganaderas que existen en nuestro país 153 CAPITULO XXII LAS EXCEDENCIAS A LA PROPIEDAD EN EL DERECHO AGRARIO MEXICANO INTRODUCCIÓN El ejido y la comunidad agraria en México, son dos modalidades ya tradicionales de propiedad de la tierra y mecanismos idóneos implementados por el Gobierno Mexicano, para procurar el acceso a la titularidad agraria al mayor número posible de campesinos, así como a su aprovechamiento productivo. A esta capa de la población el Constituyente de Querétaro no sólo reconoció el derecho a la propiedad de la tierra, sino también el de participar de los beneficios de cultivos y de sus frutos según su vocación, en su condición de usufructuarios directos y primarios, y no únicamente como mano de obra, como sucedió con el Virreinato y en los años decimonónicos de nuestra Independencia, cuyo trabajo esforzado y sacrificado, sólo estaba orientado a incrementar la riqueza de poderosos hacendados y propietarios particulares de considerables extensiones territoriales. “Como exigencia inflexible de los diputados constituyentes radicales, pero de pensamiento social muy avanzado para su época, la Constitución de 1917 estableció en la parte inicial del texto primitivo del Artículo 27, que la propiedad de las tierras y aguas comprendidas dentro de los límites del territorio nacional, corresponde originariamente a la nación, la cual ha tenido y tiene el derecho de transmitir el dominio de ellas a los particulares, constituyendo la propiedad privada. Luego entonces, las tierras de nuestra geografía completa son propiedad de la Nación, esto es, del pueblo de México, sin distinción alguna para que todos vivamos en armonía y para que las tierras rurales obtengamos cultivos, productos de insumos para atender nuestras necesidades materiales, y, por qué no, también recreativas, culturales y espirituales. 22.1EQUIDAD EN LOS EJIDOS Y SOCIEDADES: 22.1.1 FINALIDAD DE EVITAR LAS EXCEDENCIAS Sobre el tema específico que nos ocupa, debemos decir que en las fracciones IV y VII, párrafo quinto del mismo artículo constitucional, se prevé la situación de posibles “excedencias”, expediente este que, por cierto, fue una novedad su instauración en la última modificación que se le hizo al citado numeral, ya que desde la gestación, nacimiento y desarrollo modificatorio que ha tenido nuestra actual y nonagenaria Súper Ley, no se había contemplado esta figura agraria. En efecto, conforme a la disposición, al interior de los ejidos ningún ejidatario puede ser titular de una superficie mayor de la equivalente al 5% del total de las tierras del ejido. Si, 154 bajo cualquier título, el ejidatario posee una parcela mayor a ese porcentaje, se dice que tiene una excedencia de tierras, y, por lo tanto, al sobrepasar el máximo autorizado por la Constitución, ya sea por decisión propia, o a instancia a parte interesada y de la Secretaría de la Reforma Agraria , debe proceder a la enajenación de la porción excedida en su parcela, habida cuenta de que para llegar a este supuesto, el Reglamento de la Ley Agraria en Materia de Ordenamiento de la Propiedad Rural, establece los lineamientos para la instauración del procedimiento de denuncia, investigación, integración y resolución de los casos de excedentes de la propiedad al interior de ejidos, así como de las sociedades civiles y mercantiles propietarias de acciones serie T y los de la pequeña propiedades. 22.1.2 TIPOLOGIA DE EXCEDENCIAS AGRARIAS Según la categoría de las excedencias agrarias, se dan o se contemplan tres tipos de excedentes a los límites de la propiedad rural, y se determina el área competencial a la que cada uno queda sujeto, a saber: Ejidatarios que excedan el límite de la propiedad social de su respectivo núcleo agrario la cual equivale al 5% de la superficie total de la tierra con que fue beneficiado Socios y sociedades civiles y mercantiles que detenten más acciones o partes sociales de la serie (T), que equivalen a la extensión de la pequeña propiedad individual (100 hectáreas de riego o humedad de primera, una hectárea de riego por dos de temporal, por cuatro de agostadero de buena calidad y por ocho de bosque, monte o agostadero en terrenos áridos, o sus equivalentes) y, por lo que se refiere a las sociedades, consideradas como entes colectivos, no deberán rebasar 25 veces la propiedad privada. Propietarios de predios rústicos de propiedad privada que rebasen los miles de tierra establecidos en la Constitución y en la Ley Agraria. Cabe puntualizar o enfatizar que en los dos primeros casos, la Secretaria de la Reforma Agraria, tiene la responsabilidad de vigilar que no se excedan os límites permitidos por la constitución general del país, por la ley agraria y por su reglamento, mientras que, en el tercero de los supuestos dicha obligación recae en la Procuraduría Agraria. Como se podrá advertir por todo lo expuesto, no se trata de despojar de sus tierras a todos los ejidatarios, ni de actos de injusticia; si no de cumplir con la finalidad del ejido: Constituir núcleo de población rural dotados de tierra, distribuida equitativamente entre sus miembros en parcelas que, al procurar cultivos agropecuarios, forestales, de producción minera, de explotación turista o de cualquier otra vocación productiva que tenga la tierra, contribuya al 155 proceso y bienestar de las familias del propio núcleo de población, elevando su calidad de vida y , con ello, coadyuvar al desarrollo del municipio al que pertenecen, al de su estado y al de su país en general. Evitar las excedencias de tierra en los núcleos agrarios, es una forma de evitar la inequidad entre ejidatarios y mediante la protección, a estos núcleo de población agraria y el respeto a la propiedad ejidal, al de las sociedades mencionadas, y ala pequeña propiedad, se procura evitar la concentración de tierra, por lo tanto, el resurgimiento de latifundios que, por sus nefastas e injustas consecuencias registradas en la memoria histórica de México, prohíbe tajantemente la ley suprema del país. Regularizar la tenencia de la tierra, atender las solicitudes de campesinos para constatar la posible existencia de excedentes y resolver conforme a la ley, es un postulado de la constitución y de la legislación agraria; un imperativo del gobierno federal; una preocupación, ocupación y vocación de las autoridades agrarias; una forma de brindad y blindar la seguridad y certeza jurídica al campo y, por consiguiente, de contribuir a realizar nuestro anhelo político: el pleno estado de derecho y, en este caso particular , el completo estado de derecho agrario.” 1 1 Pampillo Baliño, Juan Pablo, Munive Paez, Manuel Alexandro, Derecho Agraria y Desarrollo rural, Editorial Porrúa, México, 2013 p. 383 156 CAPITULO XXIII LA JUSTICIA AGRARIA EN MEXICO, IMPORTANCIA Y PERSPECTIVAS INTRODUCCIÓN El asunto de la tierra en México, forma parte de la historia y de su desarrollo; de ello, se realizaran en forma enunciativa mas no limitativa algunos comentarios sobre el surgimiento y evolución de la tenencia de la tierra y, particularmente, de la impartición de justicia agraria; principalmente, a partir del surgimiento constitucional y legal de los tribunales agrarios, instancia jurisdiccional que forma parte de la nueva institucionalidad agraria, así como de sus atribuciones, lo que les permite conocer y resolver la muy diversa problemática agraria que es sometida a su consideración a lo largo y ancho del país. No menos significativo, es referir la importancia de la revolución mexicana, en el establecimiento de un nuevo México rural, ha sido considerada con justicia, como la primera de carácter social en el mundo del siglo XX; con ella además de iniciar la democracia en México, se impulsaron las principales necesidades de la clase campesina y de la trabajadora; de ahí su carácter social; consecuentemente, haciendo suyos los asuntos más sentidos de la clase campesina y obrera, se incorporaron en la constitución general de la república, los artículos 27 y 123. 23.1SURGIMIENTO Y EVOLUCION DE LA TENENCIA DE LA TIERRA Han sido diversos momentos por los que ha pasado la tenencia de la tierra en el medio rural; en principio, la sociedad azteca, antes de la llegada de los españoles, no solamente tenía una verdadera estratificación social; más aún, contaba con una ordenada y se han distribución de la tierra; por su importancia y trascendencia a lo largo de más de 500 años, se hace referencia únicamente del Calpulli y del Altepetlalli; como parte de sus formas de tenencia de la tierra; ambos, son el antecedente más remoto del ejido y comunidad, respectivamente. Los dos constituyen lo que se conoce como la propiedad social. Tanto el ejido, como la comunidad, han tomado ese carácter, en razón de que a través del establecimiento de una política de reparto agrario, sea creado y reconocido material y jurídicamente. A diferencia de la propiedad en general, por más de siete décadas; ambas formas de propiedad eran inalienables, inembargables, imprescriptibles e indivisibles; es decir, tenía como principal objetivo en los distintos sujetos agrarios, comuneros y ejidatarios, únicamente tenían el uso y disfrute, mas no la libre disposición del bien. Atendiendo a su antecedente y naturaleza jurídica, cabe mencionar que el artículo 52 de la derogada ley federal de reforma agraria, estableció las características de la propiedad de 157 los núcleos de población; a este respecto señalaba lo siguiente: Los derechos que sobre bienes agrarios adquieren los núcleos de población serán inalienables, imprescriptibles, inembargables y ´por tanto, no podrán en ningún caso ni en forma legal alguna enajenarse, cedérseme transmitirse, arrendarse, hipotecarse o grabarse, en todo o en parte. 23.2 EL DERECHO AGRARIO Y SU IMPORTANCIA Con el objeto de contar con los elementos necesarios, antes de desahogar lo relativo al tema que nos ocupa, se estima conveniente referir algunos aspectos a partir de la definición de derecho agrario, para quien esto se escribe, se define en los términos y explicación siguientes: Como el conjunto de normas jurídicas, doctrina y jurisprudencia de caracteres sociales tendentes a reguilar las diversas formas de propiedad en el medio rural así como su producción, distribución y comercialización de sus productos. Sin embargo hoy en día la ley agraria permite que se puedan combatir dificultades del pasado, porque en la actualidad, los productores podrán participar con propuestas para mejorar la producción e impulsar los canales de comercialización. No se puede pasar por alto, que dicho desarrollo puede ser posible con acciones comprometida de los sujetos agrarios, contando con el apoyo del poder ejecutivo federal, todo ello, lo podemos señalar como aspectos necesarios para lograr un verdadero desarrollo rural sustentable; cabe recordar, que a la fecha se cuenta con la ley reglamentaria de la fracción XX, del artículo 27 constitucional, de nominada ley de desarrollo rural sustentable. Actualmente se han observado cambio de paradigmas en esta materia; en consecuencia, la materia agraria es eminentemente jurisdiccional, a través del juicio agrario particularmente, para la solución de la diversa problemática agraria.”1 1 Pampillo Baliño, Juan Pablo, Munive Paez, Manuel Alexandro, Derecho Agraria y Desarrollo rural, Editorial Porrúa, México, 2013 p. 383 158 BIBLIOGRAFIA Chávez Padrón, Martha, El Derecho Agrario en México, Editorial Porrúa, México, D.F. 2012 González Navarro, Gerardo N., Derecho Agrario, Editorial Oxford, México, D.F. Junio2013 Rivera Rodríguez, Isaías, El Nuevo Derecho Agrario Mexicano, Editorial McGraw-Hill, 2013 Pampillo Baliño, Juan Pablo; Munive Páez, Manuel Alexandro, Derecho Agrario y Desarrollo Rural, Editorial Porrúa, México, D.F. 2013. 159