artículo - Valeria Román

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VIERNES 15 de marzo de 2013 clarin
Sociedad
Ciencia
Elusiva. Así recrearon la imagen del bosón de Higgs en la Organización Europea para la Investigación Nuclear (CERN), donde está la “máquina de Dios”, dedicada a su búsqueda. afp
Descubrimiento histórico
La “máquina de Dios” halló
la partícula más buscada
uEs el bosón de Higgs o “partícula divina”, pieza clave para entender los orígenes del Universo. Fue
pronosticada en 1964 y el año pasado anunciaron que había pistas de su existencia. Ahora lo confirman.
Valeria Román
[email protected]
“Si uno comienza con certezas,
terminará con dudas; pero si se
acepta empezar con dudas, llegará
a terminar con certezas”, sostenía
el filósofo inglés Francis Bacon.
Más de 200 investigadores empezaron con la duda sobre la existencia de una partícula relacionada
con el momento del origen del
Universo, llamada bosón de Higgs (o popularmente, “partícula
de Dios”). Ayer –justo en el día
del cumpleaños del físico Albert
Einstein– presentaron las evidencias más sólidas. Ya no quedan
dudas. Existe esa partícula que
interactúa con otras para darles
masa. Y sin masa, el Universo sería muy diferente En julio del año
pasado, más de 2.000 científicos
de la Organización Europea para la
Investigación Nuclear (más conocido como CERN, el mismo lugar
donde se inventó Internet y que
está situado en la frontera entre
Suiza y Francia) habían mostrado
las evidencias preliminares de la
partícula, que fue predicha principalmente por el físico escocés Peter
Higgs en 1964.
Desde aquel año, los físicos acariciaban el sueño de encontrar evidencias para corroborar que Higgs
estaba en lo cierto. La partícula no
se puede observar en la naturaleza,
sino que había que producir experimentos con mucha energía para
detectarla. Y eso es lo que se hizo:
se construyó el gran colisionador
de hadrones (es el más grande del
mundo y se lo conoce como LHC o
“máquina de Dios), que empezó a
funcionar en 2008, con algunas intermitencias, y empezó a producir
choques de partículas. Como esos
choques producen decaimientos,
se hacen mediciones que indican
la existencia del bosón.
Durante la primera etapa de construcción, un equipo de trabajo
argentino del Laboratorio de instrumentación y control, de la Universidad Nacional de Mar del Plata,
encabezado por Mario Benedetti,
contribuyó a generar circuitos eficientes de conversión de potencia.
También hubo aportes de inge-
nieros del laboratorio de electrónica industrial de la Universidad
Nacional de La Plata (UNLP). Una
vez que empezaron los choques de
partículas, los investigadores de
la UBA y la UNLP, dirigidos por
Ricardo Piegaia y María Teresa
Dova, con apoyo del Ministerio de
Ciencia de la Nación, estuvieron
involucrados en el proyecto del experimento ATLAS.
“El año pasado, ya teníamos la
cantidad suficiente de información para demostrar que el bosón
de Higgs”, dijo a Clarín Daniel De
Florian, investigador de la Facultad de Ciencias Exactas y Naturales
de la UBA, que participa en el proyecto internacional desde Buenos
Aires. Desde julio hasta ahora, los
investigadores pudieron analizar
dos veces y media más registros de
colisiones que confirman la partícula. Aunque surgió otra pregunta: “Ya no podemos decir ‘el’ bosón
de Higgs, sino que existe la posibilidad de que haya diferentes tipos
de bosones de Higgs”, comentó De
Florian. Ya tienen la certeza de al
menos 1 bosón de Higgs, pero nadie se dormirá en el CERN en el
logro. Los próximos dos años, se
harán reparaciones y actualizaciones del colisionador, y luego se lo
intentará que se más energético.
Mientras duren las reparaciones,
los investigadores seguirán analizando y chequeando un montón de
información que ya tienen por los
experimentos que hicieron. w
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