CENTRO UNIVERSITARIO DE BAJA CALIFORNIA DOCTORADO EN DERECHO. ALUMNO: JOSÉ LUIS CASTAÑEDA CARRILLO. TIJUANA, BAJA CALIFORNIA. INDICE PÁGINA. SUCESION TESTAMENTARIA. I. CONCEPTOS 1 I.I SUCESIÓN TESTAMENTARIA 2 I.II HERENCIA 3 I.III FACULTAD DEL TESTADOR 4 II. CAPACIDAD DE TESTAR 5 II.I MODALIDAD DE LAS DISPOSICIONES TESTAMENTARIAS 8 II.II INVALIDEZ E INEFICACIA DE LOS TESTAMENTOS 9 2 INTRODUCCIÓN. Durante el tiempo de vida las personas adquieren patrimonio, mismo que puede ser transmitido de diferentes maneras, pero la pregunta es que ocurre con dicho patrimonio después de la muerte, el patrimonio que deja una persona a su muerte no puede traer como consecuencia la incertidumbre de no saberse a ciencia cierta quienes se harán cargo de dicho patrimonio. Este trabajo desarrolla uno de los temas del Derecho de Sucesiones, el cual es “La Sucesión Testamentaria”. Teniendo como base para el mismo el Código de Procedimientos Civiles para el Estado de Distrito Federal. 3 SUCESIÓN TESTAMENTARIA Conceptos. Es importante conocer de manera generalizada de que trata este ensayo por lo que debemos conocer el marco conceptual; saber bajo que conceptos esta sustentado y estos son los siguientes: Acreedor: Elemento personal activo de una relación obligatoria. Acreedor hereditario: titular de un crédito cuyo pago grava sobre sobre los bienes de la herencia. Capacidad: aptitud para adquirir un derecho, o para ejercerlo y disfrutarlo. Aptitud o idoneidad para ser sujeto de relaciones de esta naturaleza. Fideicomiso: es un servicio bancario por medio del cual una persona denominada fideicomitente, destina ciertos bienes o derechos a un fin lícito determinado, encomendando la realización de este fin a una institución fiduciaria. Se denomina fideicomisario al ó las personas señaladas para recibir el provecho que este fin implica. Este se formaliza mediante un contrato irrevocable. Heredero: sucesor en una herencia a titulo universal, declaración de herederos. v. institución de heredero. v. sustitución de heredero. Institución de heredero: designación hecha por el testador de quien o de quienes han de sucederle a titulo universal. El testamento otorgado legalmente en nuestro sistema positivo, es valido aunque no contenga institución de heredero y aunque el nombrado no acepte la herencia o sea capaz de heredar. Revocable: susceptible de revocación. // Acto jurídico en virtud del cual una persona se retracta del que ha otorgado en favor de otra, dejándolo sin efecto, siendo posible únicamente en los de carácter unilateral, como el testamento o el mandato. Substituciones: puede ser llamada segunda o ulterior institución de heredero. Ha sido definida como la disposición testamentaria en virtud de la 4 cual una persona es llamada a suceder en defecto de otra o después de ella. Sucesión: sustitución de una persona en los derechos transmisibles de otra. // Inter vivos, la que se produce como consecuencia de los contratos traslativos de los bienes y derechos. // Mortis causa, subrogación de una persona en los bienes y derechos transmisibles dejados a su muerte por otra. Sucesión testamentaria: es la que se basa en la existencia de un testamento valido, otorgado en cualquiera de las formas admitidas por el legislador. Testador: persona que hace o ha hecho testamento. // Autor de la herencia. Testamento: acto jurídico, unilateral, individual, personalísimo, libre solemne y revocable, mediante el cual quien lo realiza dispone, para después de su muerte de lo que haya de hacerse de sus bienes y derechos transmisibles, y expresa su voluntad sobre todo aquello que, sin tener carácter patrimonial, pueda ordenar, de acuerdo con la ley. Voluntad: se define como la expresión del querer de un sujeto o de varios, dirigido a la realización de un determinado acto jurídico. Ahora bien, una vez vistos los conceptos que anteceden entraremos en el tema. Sucesión testamentaria. “La sucesión testamentaria es una especie de la sucesión mortis causa, que se produce mediante la expresión de la última voluntad de un causante, manifestada en cualquiera de las formas previamente establecidas por el legislador”.1 La sucesión se abre en el momento en que muere el autor de la herencia y cuando se declara la presunción de muerte de un ausente. La sucesión testamentaria se rige por la voluntad del testador o testadores manifestada consciente y libremente en testamento otorgado 1 BINDER, Julius, Derecho de sucesiones. Traducción y notas conforme al Derecho español de J. L. Lacruz, Labor, S.A., Barcelona, 1953. 5 conforme a la ley. En el testamento, el causante puede expresar su voluntad no sólo en orden a la sucesión de sus bienes sino también, en cuanto sea legalmente posible, respecto de relaciones de carácter familiar, por eso las disposiciones testamentarias pueden ser de carácter patrimonial y no patrimonial, e incluso pueden ser sólo de esta última.2 La institución de heredero en el testamento no constituye una exigencia legal, pero habitualmente es la cláusula principal del mismo. Junto a ella, aparecen los legados, el nombramiento de fiduciarios, las disposiciones en orden a la tutela de parientes menores o a normas sobre administración y disposición de los bienes que puedan llegar a heredar menores de edad sean o no parientes del testador. La sucesión testamentaria es, pues, la que se basa en la existencia de un testimonio válido, hecho en cualquiera de las formas legalmente autorizadas. Herencia. La herencia es la sucesión en todos los bienes del difunto y en todos sus derechos y obligaciones que no se extinguen por la muerte. La herencia se defiere por la voluntad del testador o por disposición de la ley. La primera se llama testamentaria, que es la que en este trabajo nos ocupa. El testador puede disponer del todo o de parte de sus bienes, la parte de que no disponga quedara regida por los preceptos de la sucesión legítima. Diversos autores han debatido ampliamente acerca del contenido del testamento, habiendo formulado al respecto opiniones tan variadas como contradictorias. El testamento no es, simplemente, un acto de transmisión de bienes, puesto que es evidente que puede tener y tiene, en la generalidad de los casos, un contenido mucho más complejo. Facultades del testador 2 FOSAR BENLLOCH, Enrique, Estudios sobre la sucesión "mortis causa", AAMN, XXVI, 1985, págs. 35-87 (= RCDI, 1983, págs. 823-870). 6 El testador puede, en efecto, nombrar tutor testamentario, reconocer hijos, confesar deudas, aconsejar y orientar a sus familiares respecto a lo que sea conveniente para ellos hacer en relación con determinados negocios pendientes o con la educación de los hijos, disponer sobre su entierro, etc., expresiones de voluntad que, si bien no tienen todas la misma fuerza legal, no por ello dejan de ser disposiciones de última voluntad y cuya eficacia, según las enseñanzas de la experiencia, es en todo caso innegable.3 No se puede decir con exactitud, por consiguiente, que el testamento es un acto de naturaleza exclusivamente patrimonial, puesto que es susceptible de admitir disposiciones de carácter bien distinto. En relación con este tema se distingue entre contenido típico del testamento y contenido atípico. El contenido típico está constituido, desde luego, por las disposiciones de naturaleza patrimonial; pero esto no excluye el reconocimiento en el testamento de un contenido atípico, constituido por las disposiciones que carecen de esta naturaleza. Generalmente, en el testamento coexisten ambos contenidos, si bien la falta de cualquiera de ellos no priva al testamento de su significado de acto de última voluntad. Capacidad de testar: Pueden testar todas las personas físicas que al tiempo de otorgar el testamento sean mayores de catorce años y no carezcan de su capacidad natural, de lo anterior se desprende que: a) Que la capacidad es la regla general y la incapacidad la excepción, puesto que la capacidad condiciona la validez del testamento. b) Que para apreciar la capacidad del testador debe atenderse a la que tenga al tiempo de otorgarse el testamento. 3 LORENTE SANZ, José, Dictamen (sobre Derecho de sucesiones), ADA, XII, 1963-64, págs. 379-391. 7 c) Que no pueden otorgar testamento las personas jurídicas. d) Que el testador debe tener lo que la ley llama capacidad natural. Supone esta que el testador tenga la inteligencia suficiente para entender y querer precisamente las disposiciones que establece y para apreciar los motivos que tiene para hacerlas, lo que incapacita al sujeto con falta de discernimiento tanto habitual como accidental, bastará para ello una situación de anomalía psíquica o trastorno patológico aunque sea transitorio que impida el cabal juicio. La expresión libertad de testar significa la posibilidad de parte del testador de transferir su patrimonio a aquella o aquellas personas a quienes, según su criterio, le parezca más conveniente, sin traba alguna, salva la obligación de dejar alimentos a otras, que tienen una indicación expresa.4 En el fondo, la libertad de testar supone la confianza que el legislador tiene, deducida de las máximas de la humana experiencia, de que nadie se encuentra en mejores condiciones para una justa distribución de sus bienes que el propio testador, y que ni el reconocimiento de que puedan presentarse casos de excepción en el buen uso de esta facultad autoriza para hacerlo. La libertad de testar, de acuerdo con el pensamiento de sus partidarios, robustece la autoridad paterna y el principio de la familia, hace más equitativa la distribución de la herencia, permitiendo al padre premiar méritos o aptitudes, al mismo tiempo que suplir o compensar de efectos naturales e involuntarios, que justifiquen una protección especial y facilita el dar satisfacción a toda clase de deberes morales. El Código de Civil para el Estado del Distrito Federal se inspira en el principio de la libertad de testar, desconociendo el sistema de legítimas, que 4 FUENTE PERTEGAZ, Vicente de la, La libertad de testar por Fuero, en "Estudios críticos sobre la Historia y el Derecho de Aragón", Madrid, 1885 8 supone el reconocimiento a determinados herederos, llamados forzosos, del derecho a una porción de la herencia de la que el testador no puede disponer de la libremente. El sistema de la libertad de testar fue implantado en México por el Código Civil de 1884 contrariando el sistema anterior establecido por el de 1870, que consagraba el de las legítimas que supone una limitación a la facultad de disponer de los bienes para después de su fallecimiento, mas o menos rigurosa, de parte del testador. o La única limitación impuesta al testador, en relación con la libre disposición de sus bienes, es la de dejar alimentos a las personas siguientes: Descendientes varones menores de dieciocho años. o A los descendientes varones que estén imposibilitados de trabajar, y a las hijas que no hayan contraído matrimonio y vivan honestamente, unos y otras aun cuando fueren mayores de veintiún años; Al cónyuge supérstite, cuando esté impedimento de trabajar y no tenga bienes suficientes. Salvo otra disposición expresa del testador, este derecho subsistirá en tanto no contraiga matrimonio y viva honestamente; o A los ascendientes, o A la persona con quien el testador vivió como si fuera su cónyuge, durante los cinco años que precedieron inmediatamente a su muerte o con quien tuvo hijos, siempre que ambos hayan permanecido libres de matrimonio durante el concubinato y que el superviviente esté impedido de trabajar y no tenga bienes suficientes. Este derecho solo subsistirá mientras la persona de que se trate no contraiga nupcias y 9 observe buena conducta. Si fueren cónyuges, ninguna de ellas tendrá derecho a alimentos. o A los hermanos y demás parientes colaterales dentro del cuarto grado, si están incapacitados o mientras que no se cumplan dieciocho años, si no tienen bienes para subvenir a sus necesidades. o No hay obligación de dar alimentos sino a falta o por imposibilidad de los parientes más próximos en grado. Tampoco existe esta obligación con respecto a las personas que tengan bienes; pero si teniéndolos su producto no iguala a la pensión que debería corresponderles, la obligación se reducirá a lo que falte para completarla. Para tener derecho a ser alimentado se necesita encontrase al tiempo de la muerte del testador en alguno de los casos expresamente señalados al efecto y cesa ese derecho tan luego como el interesado deje de estar en las condiciones dichas. Observe mala conducta o adquiera bienes.5 El Código Civil considera como irrenunciable el derecho a pedir alimentos. Este derecho no puede ser tampoco objeto de transacción. La pensión alimenticia a que se hace referencia se fijará de acuerdo a lo dispuesto, en general, para los alimentos entre parientes y por ningún concepto excederá de los productos de la porción que en caso de sucesión intestada corresponderían al que tenga derecho a dicha pensión, ni bajará de la mitad de dichos productos. Cuando el testador haya fijado la pensión alimenticia subsistirá su designación, cualquiera que sea, siempre que no baje del mínimo antes establecido. 5 RAMS ALBESA, Joaquín: "Libertad civil, libertad de testar", en Estudios de Derecho civil en homenaje al Prof. Dr. J. L. Lacruz, vol. 1º, 1992, pp. 695-712. 10 Cuando el caudal hereditario no fuere suficiente para dar alimentos a todas las personas que tienen derecho a ellos se observarán las reglas siguientes: a) Se ministrarán a los descendientes y al cónyuge supérstite a prorrata, b) Cubiertas dichas pensiones se ministrarán a prorrata a los ascendientes. c) Después se ministrarán igualmente a prorrata a los demás parientes colaterales dentro del cuarto grado. La pensión alimenticia constituye una carga de la masa hereditaria, excepto cuando el testador haya gravado con ella a alguno o algunos de los partícipes de la sucesión. La obligación de dejar alimentos en los casos que quedan señalados constituye realmente un deber moral, al mismo tiempo que una obligación jurídica. Modalidad de las disposiciones testamentarias. Término.- Consiste en el establecimiento de un día en que hayan de comenzar o cesar los efectos de la institución. La institución a término no se encuentra autorizada en nuestro sistema sucesorio y, consecuentemente, la fijación de día en que deba comenzar o cesar la institución de heredero se tendrá por no puesta. Condición.- Las disposiciones testamentarias pueden someterse a condición. Ahora bien, la falta de alguna condición impuesta al heredero o al legatario no perjudicará a éstos, siempre que hayan empleado todos los medios necesarios para cumplir. La institución de heredero o de legatario se llama condicional cuando sus efectos se encuentran subordinados a la realización o no de un acontecimiento futuro e incierto. 11 Los tratadistas han formulado diferentes clasificaciones, a nuestro juicio, destacar las siguientes: a) Suspensivas y resolutorias.- Las suspensivas son aquéllas de las que depende la adquisición de derecho a la herencia o al legado; las resolutorias por el contrario, son aquéllas que produce su extinción. b) Potestativas, casuales y mixtas: Las potestativas son aquellas que dependen de la voluntad del heredero o legatario; casuales las que dependen del acaso; y mixtas las que dependen, a la vez. De la voluntad del heredero o legatario y del azar y de la voluntad de un tercero. c) Causa.-Es aquella que contiene el motivo determinante de la misma. Por lo que respecta a la expresión la causa contraria a derecho, aunque sea verdadera, se tendrá por no puesta. d) Modo.- Impone una obligación o carga. La carga de hacer alguna cosa es considerada por el Código Civil como una condición resolutoria, como ya se ha dicho.6 Invalidez e ineficacia de los testamentos. Son causas de nulidad insanable la infracción de requisitos esenciales en relación a los sujetos, contenido o forma. Así, por razón del testador o testadores, es nulo el testamento otorgado por un menor de catorce años. Por la forma: la falta de autografía en el testamento ológrafo, la ausencia de notario autorizante en testamentos abiertos, el incumplimiento de los artículos 687 y 715 del Código Civil en relación al testamento abierto y cerrado respectivamente. 6 RIERA AISA, Luis, Voz "Elección de heredero", NEJSeix, t. VIII, 1956 12 En el supuesto de nulidad o inexistencia, el testamento no existe y por tanto no produce efectos sin perjuicio de que los instituidos adquieran los bienes poseídos por vía de usucapión. 13 CONCLUSIÓN. El trabajo que anteriormente se tuvo a la vista nos deja claro que a través del tiempo los testamentos, las herencias ó sucesiones, han sufrido distintos cambios, ya que la sociedad cambia constantemente y a la vez nosotros como sociedad también vamos evolucionando, y por lo tanto todos los demás factores, y fue el testamento una muy buena forma de darle sentido al patrimonio que las personas adquirían en vida, es así que la sucesión testamentaria es la voluntad del causante de un testamento, que su definición fue como un acto jurídico solemne, de última voluntad, por el cual una persona disponía de sus bienes para después de su muerte. 14 BIBLIOGRAFÍA Morineau, Martha, Derecho Romano, 1986, cuarta edición, 271 p. Código de Procedimientos Civiles para el Estado del Distrito Federal, V BINDER, Julius, Derecho de sucesiones. Traducción y notas conforme al Derecho español de J. L. Lacruz, Labor, S.A., Barcelona, 1953. LORENTE SANZ, José, Dictamen (sobre Derecho de sucesiones), ADA, XII, 1963-64, págs. 379-391. RAMS ALBESA, Joaquín: "Libertad civil, libertad de testar", en Estudios de Derecho civil en homenaje al Prof. Dr. J. L. Lacruz, vol. 1º, 1992, pp. 695712. RIERA AISA, Luis, Voz "Elección de heredero", NEJSeix, t. VIII, 1956 15