SPANA 1918 V IID«IINI8T»ACI6N: CALLE OBt |t._ APARTADO OB CORREOS, HÜM- 139 • • « • » * rteciotOB «OTctwcioic «AORIO V p«<m». - ^ . « «.MniK. S f o e n a — O H AIÍO, M i MSCTAt.—«T«JUIlUO. 0 « A»0. 20 KS0M «OíMANARlO DE LA VIDA NACIONAL MA»RID, 26 DICIEMBRE ASO IV.—NuM 194 MJVlAlNrtTUV' i * " DE LA FARSA A L A TRAGEDIA LA AUTONOMÍA CATALANA ES YA UN HECHO PRONTO SERÁ UN DERECHO í nente? ¿Comisión extraparlamentaria? ¡Vana paSe organiza la manifestación de los tenderos de labrería todo ello para encubrir la negativa! emisarios de las diputaciones castellanas. TerPero Cataluña no puede, no quiere esperar. El I A esencia de la política española es la chala- cera posición: como remate, se inicia en el Parproblema es sencillo: si el Gobierno piensa L nería, el sistema de transacciones concena- lamento una «sesión patriótica», una de estas lealmente conceder la utonomía, ¿a qué detedas con un intento de mutuo engaño, unos sesiones donde la estupidez y la mala fe hunpiden más de lo que quieren; otros ofrecen den a España un poco más en el pantano de nerse? Si se detiene, ¿no habrá motivos paras menos de lo que están dispuestos a dar. un su decadencia. Habla Maura, el hombre del suponer que no es la autonomía lo que quiere denso velo de insinceridad cubre «as ultimas caballo blanco y de las ideas turbias, antigua- preparar, sino la burla de la autonomía? Si intenciones. La chalanería tDma^a ve«s carac- lla de museo propensa a sacrificar el bien pú- quiere otorgar la autonomía, pero no tiene teres de munificencia. El chalán Pol"«^o "° blico a un éxito de histrionismo. Le abraza fuerza parlamentaria para ello, ¿por qué no tiene reparo en ofrecer un Prog^fJ^^^f*'" Romanones, la gran ardilla chalanesca. Se reti- abandonar un gobierno impotente y disolver ran los catalanes del Parlamento, tomando por unas Cortes inútiles? si ello le ayuda a encaramarse en ^^f°'^"'° Cataluña no quiere prestarse al juego de la sincera repulsa de su petición autonómica la presentar leyes radicaHsimas cuando sabe a chalanería madrileña. Los acuerdos de la Asamhistérica y casi unánime adhesión de la Cámaseguro que va a desplomarse del gobierno blea de la Mancomunidad, tomados el sábado ra de los diputados a la flatulencia oratoria del pata que la gente se embauque con la lüea de la semana pasada, son termtn ntes. ConsideSr. Maura. Cuarta posición: rectifica un poco que ha caído por su radicalismo. S^^e que ra «inaplazable» la instauración, no ya la conla chalanería. No, no; el Gobierno, a pesar del das sus palabras son estériles, pero le basta que cesión por parte del Gobierno, de una autonoabrazo de su jefe al senecio Mesías balear, no engañen, por efímeramente que sea, a ^ op'^ se opone a la autonomía de Cataluña; está dismía integral en Cataluña. Esto no significa seniín pública. Y así se prostituye de masen puesto a concederla, pero siempre que perparatismo; es grandemente plausible que la más la política española, los chalanes sundo manezca intacta la soberanía inmanente del EsMancomunidad catalana haya adoptado el puncada día más chalanes unos con otros y mas tado nacional ¡Soberanía inmanente! Garruleto de vista de que la cuesiión de la autonqmía cínicos con la nación entera. ría. Se buscará—prosiguen los chalanes—una de Cataluña no es un conflicto territorial entre Pero en este juego de universal ta'sia ínter fórmula. La fórmula, en lenguaje chalanesco, es una región y el resto del país, sino un conflicto viene a veces una parte que es smce a, que algo así como el principio metafísico de la far- entre dos sistemas de Gobierno; de este modo quiere lo que pide ni ^^^^1^1X1^::'^ sa política, el punto de coincidencia de los enpueden estar y están con Cataluña todas las relate menos, e identifica lo que se le q gañadores, la ficción de que se han engañado giones y todos los españoles descontentos del con lo que se le ofrece. Entonces la cojnedia ci^ mutuamente sabiendo que no han podido enpresente régimen político nacional. Cataluña los chalanes puede convertirse en ""« ^^^S^Jf gañarse. Es la sombra de la sombra. Quinta de hombres. Los chalanes ven en los hombres posición: encomiéndese el hallazgo de la fór- no quiere salvarse sola, sino «despertar y señasinceros propósitos de engaño Y "OJ^f/" ° mula a una comisión extraparlamentaria. Pero lar el'camino de salvación a todos los pueblos ceden con lenta astucia, y los hombres sinceros si esa comisión no puede ser parlamentaria, de España». A ese fin, la Asamblea ha encargado al Consejo de la Mancomunidad «que preven en los chalanes apariencias de veracidad y ¿para qué sirve el Parlamento? Si tan inepto es para la redacción del primer estatuto de la aual contemplarlos renuentes y advertir que nada que no están en él los hombres capaces de tonomía, tome los acuerdos necesarios para pueden esperar de grado, se deciden a toma construir un proyecto de autonomía para Cata- asegurar su implantación y cuide de la organiSor la fuerza lo que desean. De este modo su luña, ¿para qué no aventarlo y elegir otro? Si zación de los servicios de que haya de hacerse ge la tragedia, el choque violento, cuando el mismo Gobierno no puede pergeñar ese pro cargo, en definitiva, el Gobierno de Cataluña». voluntad de ambas partes era P/^J". ^^^ yecto, ¿para qué existe? De esta suerte la cha- En rigor, este acuerdo es una aceptación del término conduce fatalmente la táctica de cha lanería lleva gradualmente al suicidio político espíritu y casi de la letra de una proposición de lanería cuando una de las partes es sincera. Marcelino Domingo, que dice así: «La AsamLas posiciones de de los chalanes. Las posiciones blea de la Mancomunidad acuerda declararse la i n s i n c e r i d a d de la realidad en Asamblea constituyente, con el pnmer mannsTO es lo que va a acontecer con Cataluña. ERO Cataluña, puesta en su senda de since- dato de redactar el estatuto de la autonomía de h Llega la petición de autonomía. Primera ridad, avanza fatalmente, trágicamente de Cataluña. La Asamblea delega la redacción del posición de los chalanes de la meseta castdlana: unas realidades en otras, mientras los chalanes proyecto de estatuto de autonomía, y, provisioesa petición-piensan-es u n a ^ ^ ^ ^ ^ ^ ^ ^ ' ^ castellanos se mueven de un fraude en otro. A nalmente, la formación de Gobierno para la regionalistas, no un deseo colectivo de Catalulas palabras falsas responde con palabras rea- ejecución de sus acuerdos, en el Consejo de la fií! Segunda petición: esa demanda la ahuyenles; a promesas insinceras, con aspiraciones Mancomunidad, con los parlamentarios adjuntaremos con un par de alg iradas espanohstas. tos». Lo que no ha aceptado la Asamblea es la Se organiza la manifestacióa de los tenderos de inequívocas; a actos ficticios, con hechos evi- fecha del día 10 de Enero de 1919, en que MarMadrid; se movilizan los parásitos caciquiles dentes. ¿Autonomía limitada? ¿Soberanía inmaChalanería política P ESPAÑA l y ^ . - 4» celino Domingo había fijado el límite máximo para la instauración formal de la autonomía. Pero aunque no se haya puesto fecha para la solemnización jurídica de la autonomía, ¿quién puede dudar que, desde el sábado, rige en Cataluña, de hecho, un Gobierno provisional de autonomía? Pues, ¿qué son sino funciones de Gobierno provisional las de redactar una Constitución, tomar acuerdos encaminados a su implantación y organizar los servicios de que debe hacerse cargo el Gobierno de Cataluña? Así, con una autonomía de hecho contesta Cataluña a los equívocos de los chalanes de la meseta. Y ¿cómo ha contrarreplicado el Gobierno español? Atropellada y torpemente ha supuesto que esa real declaración de autonomía es toda- vía una farsa, que la «cree improbabIe>. Pero, si no lo^fuera—al Gobierno, sin embargo, «no se escapa esa posibilidad»—«lo impediría con toda la serenidad precisa, pero con toda la energía que corresponde a su obligación y a los altos intereses de que es depositario». La farsa toca aquí en los confínes de la tragedia. La chalanería, no pudiendo ya engañir, amenaza. Cuando la amenaza no baste, ¿qué hará? Todo es preferible a una «fórmula», a uno de estos pactos fraudulentos c jn que los chalanes de la política española acaban sus transacciones de picaresca. Cataluña tiene ya su autono mía embrionaria. Nada podrá destruírsela. Ni la guerra civil. Pero, si la guerra civil fuera al asalto, no dejaría de ir tras ella, a salvar a Cataluña, la Revolución. NOTAS DE UN VIAJE A BARCELONA LA AUTONOMÍA SIN SANGRE POR Luis Bello de Barcelona, el viernes, víspera de la VOLVÍ gran asamblea de la Mancomunidad. Los nomía ni se distrae ni se detiene. —No ha pasado nada. No hemos llegado a la revolución. amigos, ávidos de sensaciones fuertes, me pre- Ha sido un fracaso, una nueva decepción de guntaban: —¿Cómo ?stá aquéllo? ¿Qué va a las esperanzas nacionales, esta junta de la Manpasar allí? Yo contesté que, a juzgar por lo que comunidad ''atalana—. Así hablan, como los pude ver en un viaje rápido a través de todas enemigos, cuantos hubieran querido ver en el las opiíiiones, desde la «Luga» hasta La Lu- movimiento autonomista de Barcelona el princicha, me parecía que no iba a pasar nada. El pio de un gran movimiento revolucionario en pulso de Barcelona, que puede tomarse en la toda España. No; no ha llegado a tanto la efiRambla, era normal, o casi normal. En Junio cacia de la asamblea; todos los que excitan desde 1917, la Asamblea de parlamentarios le hizo de Madrid las pasiones separatistas y les dicen latir con fiebre. Sólo podían provocar sucesos a los catalanes que hablen claro, que no se esgraves las a'garadas patrióticas militares y las condan detrás de la hipocresía autonomistj, manifestaciones de barretina y «¡Visca laCatalu- que luchen cara a cara, que justifiquen la grannya!». Es decir, la vieja contienda entre soldados deza de su causa por medio de su sacrificio, ya y paisano?, imprudentemente complicada con que ninguna empresa grande se logra sin holola política local. Si en algún encuentro entre causto de héroes; todos los que habían acogido esos militares que hacen gritar a los transeún- con despecho y animosidad la solicitud de Cates ¡Viva España! y esos muchachos que van taluña interpretándola como una maniobra pocantando «Els segadors» ocurre algo irrepara- lítica de un partido local, repetirán también ble, nadie puede decir hasta dónde llegarían —No ha pasado nada. No se han atrevido. Deberían ver todos estos señores! si el pleito las consecuencias. Me parecía que lo prudente por parte del gobierno y de cuantos tuvieran de la autonomía de Cataluña está hoy como en interés en no agravar, esíúpidamente, la situa- Julio de 1917, o si ha caminado y con qué veción de Barc lona era aconsejar a esos buenos locidad. Puesto que concentran sus tiros en españoles que se estuvieran quietos. De todos Cambó y él es responsable de toda la política modos, gran pap 1 juegan en la Historia estos autonomista, vean si Cambó ha ganado o ha incidentes^ peiu su fuerza depende siempre de perdido terreno desde la Asamblea de parlala situación interior, de lo que hay por debajo mentarios. Para Cataluña ¿de qué se trataba de los sucesos del día, en el fondo de los espí- concretamente? De la autonomía. Pues ya está ritus. Por eso nie pareció que la fecha del 19 ofrecida de un modo amplio en la Gaceta, y si de Diciembre del 18 iba a ser menos memora- no la tiene ya, es más por dificultades formularias que por oposición fundamental. No se ble que la del 19 de Junio de 1917. Lo importante es la continuidad y la escasa diga que el compromiso del conde de Romadistancia que media entre una y otra. Deben nones está hecho a título precario y que sabrá considerarse momentos distintos de una misma olvidarlo quien le sustituya. Ese compromiso acción, y quien no vea la trayectoria que va si- no es de un presidente del Consejo sino de toguiendo el pleito de la autonomía catalana en do un régimen. Podrán cantar triunfo en Mala Asamblea de parlamentarios, en las crisis an- drid los que se consideran vencedores porque gustiosas de Marzo y de Noviembre, y, por últi- Cambó no ha lanzado sus gentes a la calle para que arranquen la autonomía de las bocas de mo, en la asamblea de la Mancomunidad, será los cañones. Es un júbilo inocente. Cambó no porque esté ciego. lo necesita. La autonomía ya la tiene. Podrán Lo importante es que la petición de la auto- también los elementos que a favor de las aspí'raciones regionales pensaban trabajar por I» revolución, llatnarse a engaño diciendo que Cambó se entrega a las clases conservadoraspor temor a la violencia. Pero la causa de Cambó es distinta; lo que a él le conviene es conseguir su propós'to mediante una exhibición de fuerzas, sin necesidad de utilizar as. Amenaza con la ruptura, con la revolución; pero sU' ideal es conseguir la autonomía sin sangre. Olvidemos ahora de qué costa oriental han salic'c» las naves de este maravilloso piloto, pero reconozcámosle un gran dominio de las olas y de los vientos. No será él quien muera ahogadoen el Mediterráneo. ¡La autonomía sin sangre! ¿Qjién no se alegrará de que Cataluña consiga lo que juzga> preciso para su me jor gobierno sin un desgar rrón violento, que sería tan fatal para ella como para Es,jaña? Sepan además todos, los d& Barcelona y los de Madrid, que cuando se haya obtenido esa autonomía habrá sido sin sangre,, cierto, sin sangre española, pero que íún estaría muy lejana sin el trastorno espiritual que han producido los torrentes de sangre vertida en las trincheras de la guerra grande. Sin la guerra, la solicitud de Cataluña hubiera sidO' definitivamente rechazada. La guerra ha dado otra dirección a la energía de los Estados, una percepción másfinapara apreciar el valor de Irs sentimientos regionales. DI ríase que la guerra ha hecho posisles muchos imposibles y entre ellos el de que oigamos hablar del Gobierno y de las Cortas catalanas sin que lancemos contra esa fórmula la otra bien conocida: «antes la última peseta y la última gota de sangre> La guerra ncs ha enseñado, qup ha de buscarse el acuerdo, la armonía de voluntades y que todo otro fundente para constituir naciones no sirve. La gierra, pues, ha favorecido las pretensiones autonómicas de Cataluña. ¡Bastante sangre se ha derramado yat Lo que Cataluña busca hoy, es una nueva postura. Qjízás el DÓder central no tenga todas las cu'pas, pero Cata uña se las atribuye a éL Dejémosla que ensaye. Por la violencia no podremos imppdirlo, no porque el resultado de \& lucha ofreciera dudas, si no por que una guerra interna sería tan desastrosa como vergonzosa. Vale más por consiguiente que den.la autonomíj un gobierno y unas cortes con personalidad plena que puedan hacer a la región que se eman ipa una despedida solemne y que sepan luego atraerla por medio de la fuerza moral. Pero este es un segundo pleito distinto del de la autonomía. UNIÓN DEMOCRÁTICA ESPAÑOLA L domingo por la noche se reunieron en eí Eel círculo teatro Benavente, amablemente cedido por francés que lo tiene arrendado, los señores adhrridos en Madrid a la Unión Democrática Española. El doctor Simarro expuso el objeto de la Unión Democráti a Española para la Liga de la Sociedad de Naciones y sugirió la conveniencia de celebrar otra reunión en la primera decena del mes de Enero próximo, con asistencia de todos los adheridos de Madrid y, si fuera posible, de toda España. En lai reunión del domingo leyó el Sr. Azaña los es- E, ¿3 M: X» X-» X-» el Parlamento ni siiquiera los jefes de los partidos estén, no ya de acuerdo, sino en conocimiento de sus fines? ¿Se pueden contraer tal vez compromisos que la nación debe cumplir sin haber sido consultada sobre ellos ni tener la menor sospecha de su naturaleza? ¿No es esto un signo de la trivialidad con que todo se hace en España? Pero no sólo ha sido arbitrario el viaje del conde de Romanones a París sin revelar a nadie sus propósitos, como si más que un gobernante constitucional fuese el irresponsable canciller de una autocracia; ha sido también indisROMANONES A PARÍS dreb al no consultar con personas o partidos responsables ^obre la convetíiencia del momento de la visita. A mi juicio, el momento no ha podido ser más desfavorable. Los estadistas aliados trabajan afanosamente por ponerse de POR aéuérdo sobre los preliminares de la paz. Po~ demos imaginarnos la displicencia que debe Luis Araquistáin suscitar en ellos la visita de un señor de un país neutral que viene a hablarles o de fastidiosas vaguedades o de problemas tan accesorios para . Pero no, tal vez no era un acceso de locura ADA suceso español es como un prisma en lo que arrancaba los vítores al conde de Ro- el mundo como Marruecos, Tánger, tratados de que aparecen desdobladas las diversas manones, sino una pérdida absoluta de nuestro comercio con España y tal vez Cataluña. La modalidades de nuestro temperamento nacio- orgullo clásico. Porque lo que se aplaudía en inoportunidad de la visita se trasluce por la aunal. Fijémonos en un hecho cualquiera, por nuestro primer ministro no era ningún gran sencia de representación cfícial aliada en la esejemplo: en el viaje del conde de Romanones propósito, ninguna gran ambición para España tación de París al llegar el conde de Romanoa París. ¿Qué se desprende de ese suceso? Lo —se ignoraba el objeto del viaje—, sino el nes. La entrevista con Wilson quedó despachada en una hora —¿valía la pena emprender primero que se deduce, al examinar las cir modestísimo hecho de que Wilson se dignara cunstancias iniciales de esa expedición, es que concederle una entrevista. Esta entrevista no para eso un viaje tan largo y estrepitoso?— Por los españoles padecemos una especie de histe- fué solicitada por Wilson, como se ha dicho cierto que al conté de Romanones le sorprenrismo. Si no. ¿cómo se explica esa gárrula al- —¿para qué había de solicitarla?—; fué pedida dió que Wilson no fuera «como los hombres garabía de la mayor parte de la prensa, que por el propio conde de Romanones por medio que estamos acostumbrados a tratar en la política», esto es, que no fuera un sinvergüená. empezó por querer hacernos creer que el viaje de un enviado a París. Ante tan extremoso re de nuestro primer ministro a París tenía casi querimiento, no hubiera sido diplomático ni «Sus ideas—ha dicho el condedeRomanones— tanta importancia para España como la prime- cortés en Wilson negarse a recibir al priiner son bien definidas y nada en el mundo las hara salida de Colón para América? Un pueril ministro de España. La distinción es tan hon- rá cambiar». ¡Nada hará cambiar las ideas » sensacionalismo y una morbosa falta de medida rosa como se quiera y podría enorgullecer Wilscn! ¿Pero es que nuestro magnífico conde pretendía rectificárselas? La entrevista con Cleimprimen a nuestros periódicos -salvo honro- cualquier ciudadano particular; ¿pero no desmenceau debió ser agitada, pues a nuestro prisas y contadísimas excepciones— un carácter entona de la categoría histórica de una nación mer ministro le pareció que el primer ministrode fatua y plebeya hinchazón. Insensibles a los como España ese alborozo un poco lugareño francés no era un tigre, sino un ejército de tigrandes acontecimientos humanos, hacen de por ver recibido al presidente del consejo de gres. ¿Y el familiar recibimiento del conde de una montaña un grano de arena y de un grano ministros de un pueblo de veinte millones de Romartones por el rey de Italia, en mangas de habitantes por un jefe de Estado extranjero de arena, una montaña. , camisa, como a un secretario de su séquito?" La marcha del conde Romanos ha servido cuyo carácter democrático concuerda impro¿Y ese inceremonioso coronel House, consejero para revelar una vez más nuestra impotencia piamente con toda lisonja y servilismo? ¿No ímimo de Wilson, que debía visitar a Romanopara la valoración de caracteres. He ahí un hay en esto un olvido de la sobria dignidad nes, pero que, sintiéndose cansado, prefirió hombre que ha sido escarnecido como ningu- con que todo Estado, por decaído que esté, qufl Romanones fuera a visitarle? no otro en España. Los móviles más bajos, ios deba presentarse al mundo? procedimientos menos nobles, los fines mas (Tomo estos datos de 'os irónicos tele'onemss El viaje del conde de Romanótíes a París inconfesables: a ninguna sospecha, a ningún ha hecho además patente la ligereza con que de Corpus Barga a El Sol; el cáustico humodenuesto, a ninguna acusación ha escapado_es^ es hábito conducirse en España. Ha bastado rismo de nuestro querido amigo y colaborador te hombre, en cuya imperfección física ha vi o tener noticia de ese suceso y que el Gobierno nos ha dado unos cuantos vislumbres íntimos la inmensa mayoría de sus conciudadanos un pidiera una ttregua patriótica* —siempre salen del viaje del conde de Romanones; si quisiera: trasunto de su imperfección moral. Por mi a relucir los llamamientos al patriotismo cuan- escribir la historia interna de este viaje, que él parte, creo que los contemporáneos han siao, do se trata de hacer algo arbitrario o irrespon- seguramente conoce a fondo, sin mixtificacioen general, injustos con este político de nuestra sable— para que, con candida generosidad, le nes y en toda su desnudez, aportaría una regodecadencia. Grandes han sido sus pecados concediéramos carta blanca al primer ministro cijada contribución a la historia española coasobre todo sus pecados de pusilanimidad mas viajero. ¿Por qué? Su intención —a parte ga- temporánea). no sería lícito, ni por su int«»J=""* " \ P°'p,'" nar a García Prieto y Alba la carrera de aliaEl momento de la visita era indiscreto, a to^ sensibilidad histórica, confundirle co" «s Da dofilia— puede ser nobilísima. Pero, con bue- das luces, no sólo por los abrumadores quehato, los García Prieto, los Alba y demás neptos nas intenciones, se pueden cometer daños irreceres de las personas visitadas, s*no también, lo de nuestra infinita fauna política. Pero el hecho parables. Hubiera ido el conde de Romanones que es más grave, por su prc bable estado de es que nadie ha tenido tan gj^^des y numero- a París como individuo particular o como jefe animó respecto de España. El conde de Romasos detractores. Pues he ahí ^"^ f f "'°' o subjefe del partido liberal, y nada habría nones cuidó de crear ese embeleco oficial o coapenas se conoce su viaje a París casi toda que decir. Pero ha ido como presidente del misión encargada del estudio de la Sociedad de EsDBña ve en este hombre una criatura provi- consejo de ministros y cómo ministro de EsNaciones y se cuidó también de haber resuelto deí ial e> salvador de la nación, el estupendo tado, y ¿no tenía la nación derecho a saber las la expulsión del principe de Ritibor. ¿Pero basestadista a quien el monarca despide con un razones de ese viaje? ¿Cree el conde de Romata eso para borrar el sordo desagrado con que' autógrafo, Maura estruja entre sus brazo con nones y cree nadie, por muy afecto que le sea, las potencias aliadas han seguido la política de lágrimas en los ojos y una ""«^hedumbre de que a estas horas, cuando todo conspira contra España durante la guerra? El principe de Ratilevita aclama en el andén de la estación, a la la vieja diplomacia secreta, se puede iniciar bor aiín pisa nuestro territorio, y la España'(^üe par de Wilson. ¿No hay en todo esto signos de una política internacional sin que la nación, ni este personaje deshonró —la política, la pério* demencia colectiva? tatutos de la nueva asociación, que fueron aprobados y pronto se presentarán a las autoridades correspondientes para que la Unión Democrática Española tenga existencia lega!. En la próxima reunión se presentará a discusión él programa que ha de áervir de pauta de propaganda. La Unión Democrática Española ha recibido de la Liga de la Unión de Naciones, de Inglaterra, una carta de saludo y ofrecimientos de cooperación entre ambos organismos. Como se sabe, el presidente de la Liga de la Unión de Naciones es lord Orey, el ex ministro de Negocios Extranjeros, y está constituida por los hombres más ilustres en las letras, la ciencia y la política de Inglaterra. • UN VIAIE LAMENTABLE C distica, la opinión pública, el espionaje, los crímenes de piratería—es la que ha representado el conde de R imanones en París, este mismo conde de Romanones que fué arrojado del poder por ese mismo príncipe de Ratibor que aun goza de nuestra hospitalidad. En e>tos instantes, ¿qué autoridad moral, personal o nacional, po día exhibir nuestro primer ministro en Francia? España debe purificarse en un largo proceso de . attjición para, que sus representantes puedan andar con la frente alta por el mundo. Y ni aun entonces será el conde de Romanones el hombre que tenga títulos para representarnos a todos los españoles. No andamos tan sobrados de dignidad y orgullo para dilapidarlos banalmente por el arbitrario capricho de un gobernante a quien más le importa la teatralería personal que la realidad dramática del mundo y de España. Luis Araquistáln autoridades navales inglesas, la conferencia de la paz decidirá en definitiva sobre la ajjlicación de dichos barcos a resarcirá los aliados de las pérdidas infringidas por la piratería submarina. A este propósito conviene recordar, que los barcos alemanes y austríacos refugiados en los puertos españoles, representan un total de toneladas 360.000. EL PARTIDO SOCIALISTA FRANCÉS CRÓNICA INTERNACIONAL contaba el partido socialista francés ENcon191472.000 adheridos. En la Cámara tenía. 100 diputados elegidos por LOOO.OOJ de sufragios. La guerra ha rebajado el número de losadheridos a 34.000. Sin embargo, parece que últimamente esta c.fra ha tenido un aumentoconsiderable. Con ocasión de la desmovilización, intensiñ" cara el partido la propaganda, y se espera, dado el ambiente creado por la guerra, que el número de adheridos llegue pronto a 100.000. culto militar. Pero la necesaria supresión del servicio militar obligatoiio, no impone el ejército profesional, y algo pretoriano, «de homHARiES Maurras, y León Daudet,se pronun- bres que tienen gusto al oficio». El problema cian en L'Action francaisepor la abolición de rectificación militar que se impondrá, una del servicio militar obligatorio. Parecerá extra- vez firmada la paz, seguramente derivará hacia ño que el órgano naciona ista y monárquico otros cauces y es posible que el ejercicio de la francés adopte esta actitud. Pero lo que carac- función militar pierda todo carácter de «oficio», .teriza al grupo de Msurras, frente al viejo mo- y de privilegio, y de jurisdicción. narquismo de Le Gaulois es laflexibilidadde ALEMWIA Y LAS CARconcepción y ta habilidad política. GAS DE LA GUERRA LOS BOLCHEWIKIS Maurras y Daudet piden la abolición del servicio obligatorio en toda Europa. Claro, que L gran periódico liberal inglés Manchester E ha constituido en Londres una Comisión» el supuesto de ello es la disolución de la uniGuardian que con tanta imparcialidad ha inter-aliada para el estudio de la capacidad dad alemana y de su instrumento: el ejército, publicado los artículos de su corresponsal en económica de los Imperios centrales, en vista at «Nación en Armas» de von der Qoltz. Esto es Rusia, Mr. Philipp Price, se defiende de los pago de las compensaciones que las Potenciasuna ventaja de la victoria integral obtenida: ataques de que ha sido objeto, por cierta parte victoriosas piensan reclamar. asegurar la paz suprimiendo el ejército' de de la Prensa, y a la par que rechaza la aplicaEsta cuestión es discutida en los periódicos^ conscripción obligatoria. Una paz defectuosa, ción de la teoría bolchew ki a la Europa occi- alemanes. La Frankfurter Zeitung le ha dedicoja, de concierto, que no suprimiera la servi- dental, que sería desastrosa y subversiva, dice: cado una serie de artículos: «El resultado de la dumbre militar, sería tan sólo una tregua, y «Es un hecho. Su poder (el de los bolchewi- guerra y la Hacienda del Imperio». En ellos se Francia no puede volver a desangrarse dentro kis) no disminuye. Todos los informes veraces calcula en 2.750 millones de pesetas tipo de inde unos años. tienden a demostrar que el bolchcwikismo terés de 5 por 100 deun impuesto perpetuo el Para Daudet, la Sociedad de naciones es una gana en fuerza. Qje ha conseguido asegurar total de la carga anual que la guerra ha echado .quimera de que Alemania podría aprovecharse las subsistencias a los 80 millones de personas sobre Alemania. dentro de cierto tiempo. sometidas a su régimen. Los bolchcwikis no De esta cantidad se invertirán anualmente Lloyd George al proclamar la abolición del son ángeles. Como todos los revolucionarios 750 millones en pensiones y retiros, y só'O' han ejecutado a gran nú ñero de sus enemigos, 2.000 millones en la propia reconstitución, y servicio militar obligatorio,comete, según Dau det, un grave error si no declara la necesidad pero la mayoría de estas ejecuciones han suce^ en saldos a pagar a los enemigos y aliados. dido d2sde que la intervención de los aliados de deshacer la unidad alemana. La cantidad asignada es modesta, pues pareDaudet critica los ejércitos obligatorios como ha envalentonado los contra revolucionarios y ce ser que en principio Alemania sé verá comobra democrática, igualitaria y revolucionaria, los ha hecho más fuertes. Y Mr. Litvinow, que petida a restaurar Bélgica y el Nirte de Franperfeccionada por Napoleón y Prusia. Este ejér- es una persona honorable, y tolstoiano antes de cia, restablecer el tonelaje hundido desde 1.° de cito que impone a te dos ks ciudadanos, sin dis- ser bolchew ki, estima en 400 el total de ejecu- Febrero de 1917, sin contar otras indemnizatinción de clases, ni de profásiones,ni degustos, cuciones del régimen bolchewiki, siendo la mi- ciones. el empuñar el fusil y gozar del trato de cuartel es tad de los ejecutados criminales vulgares». Reconociendo implícitamente el diario aleel mayor de los absurdos. Un absurdo econóEl Manchester Guardián cree esta cifra muy mán la obligación de indemnizar, viena a demico que deja los servicios de producción sin por bajo de la realidad, y se lamenta de la falta cir, que la carga calculada sería soportable hombres que los atiendan. La crítica de Daudet de informes veraces sobre Rusia, que permitie- siempre que no se pusieran trabas ni al co.coincide con la antimilitarista. ran precisar la situación del país, en vez de mercio ni a la industria de Alemania. Ya el memorándum atribuido a Ballín afirmaba que el «Es absurdo exigir el sentimientoyla abnega- dar crédito a manifiestas exageraciones. tonelaje hundido puede ser resarcido con un ción militares al artista, al artesano, al sabio, al nuevo tonelaje construido en los astilleros alepastor, al labrador, al escritor, al peón, para EL PORVENIR DE LA manes, y el Berlíner Tageblatt sügeríaihi poco quienes la discip'ina es una cadena y el cuartel MARINA MERCANTE la idea de que Alemania podía pagrr parte de una cárcel.» jNo! Q je sean soldad is tan sólo ALEMANA su indemnización de guerra en carbón, deque aquellos que tengan gusto por el oficio. son ricas sus minas de Wespalia. Daudet y JVlaurras no sólo tienen en vista la NA noticia de Trier aseguraba, que el madisolución de Alemania, sino piensan que la riscal Foch, a instancias del comisario La citada Frankfmter Zeitung, enumera servidumbre militar engendra el descontento y americano de abastecimientos, Mr. Hoover, ha- también una serie de compensaciones que deel antimilitarismo, y, en consecuencia, el anti- bía contestado a la petición alemana sobre uti- berían reconocer los aliados, co no son el vabr patriotismo. Y todo ello puede traer grandes lización de los 2.500.000 barcos de carga de los aereoplanos, cañones, ametralladora» y trastornos a la nación. anclados en los puertos de Alemania, diciendo barcos de guerra entregados al enemigo, el de Juzgúese lo hábil de la táctica de los nacio- que este tonelaje colocado bajo el control aliado las propiedades alemanas en Polonia, pago por la red ferroviaria de Alsacia y Lorena, por el nalistas franceses. Ellos persiguen sus fines. se destinaría al abastecimiento de Alemania. Coinciden con los antimilitaristas en la crítica Esta decisión no prejuzga que los 2 500.000 aumento de la riqueza de estas provinciasdebi^ del sistema actual. Quieren un ejército, que no toneladas, continúen en su integridad siendo da al trabajo alemán, pago por la riqueza colo< $ea pn peligro revolucionario, y sí huerto del propiedad alemana. Según manifiestaciones de nial alemana y otros capítulos análogos. LA SERVIDUMBRE MILITAR UN VOTO NACIONALISTA C E U S Núm. 1 9 4 , - 7 . ESPAÑA nocer la validez de esas transferencias y una de las condiciones requeridas para que el abanderamiento de un buque bajo otro pabellón tenga eficacia, es el verificarla de acuerdo con las prescripciones legales vigentes en el país cedente y en el Estado cesionario—en este caso POR las legislaciones alemana y española—.Un ejemplo aclarará nuestra tesis: supongamos que el Gobierno español—como lo realizó el neerCamilo Barcia landés—decreta, temporalmente, que no podrán ser vendidos a extranjeros buques nacionales; toda transferencia verificada estando en los 19, 40, 52 y 53, estatuye: <La transferencia EPETIDAMENTE, y atribuyéndosenos una comvigor esa disposición sería nula, con arreglo a de pabellón, posterior a la guerra, es nula si el petencia de que carecemos, se nos ha las leyes españolas. No es otro el caso de Alevendedor se reserva una parte del buque, o si planteado la siguiente cuestión: Si un ciudadamania; no basta con llenar los requisitos de las . se estipula un derecho de reversión, para desno español o liuna entidad financiera nacional leyes que regían en materia de venta de bupués de las hostilidades >. El Reglamento de adquiere, mediante compra, alguno de los buques, ya que esas leyes hállanse en suspenso. Presas ruso, de 1895, artículo 7° «El cambio ques alemanes surtos en los puertos españoles Tal es nuestra opinión acerca del particular; de nacionalidad de un buque enemigo en neu¿prosperará esa venta? ¿Será válida, jurídicafundándonos en las precedentes considerado tral, verificado después de comenzada la guemente considerada? ¿A qué contingencias se nes, nosotros creemos que los negociai^tés esrra, es nulo». Parecidas disposiciones—que no exponen los que adquieran esos buques alemapañoles no deben de aceptar las ofertas germácitamos para no fatigar al lector—en los regla • nes? España—no está demás recordarlo a este nicas, caso de que existan. Lamentamos que mentos de Presas japonés y francés. Con estos pueblo desmemoriado—ha perdido como conestas conclusiones no coincidan con los intereantecedentes a la vista, nadie pondrá en tela de secuencia de la guerra submarina, el 25 por 100 ses de España; pero de poco serviría si, llevajuicio, cómo la comedia incautatoria de Agosto de su tonelaje mercante. Cuando la paz sea un dos de un buen deseo, sostuviésemos una tesis es ineficaz. Razón tenía el diputado que daba hecho nos daremos exact» cuenta de lo que opuesta; las cosas son como son y no como por perdido el pleito. Queda un último recuresa merma signifi:a; suplir esas pérdidas no es nosotros desearíamos que fuese. Todo lo que so para suplir las deficiencias de nuestro tonecuestión de meses, aún intensificando nuestras actualmente acontece se hubiese evitado si los Ipje; la acción de los particulares. No es otro el •construcciones navales. No cabe pensar tampoGobiernos españoles, que ocuparon el Poder . problema que planteamos, ¿es válida la compra co.en que pueda prosperar la incautación tardesde 1914, no hubiesen aceptado tain sumisade buques alemanes surtos en puertos españoles? día y vergonzosa realizada en d mes de Agosmente lo que Melquíades Álvarez, con frase fe-, Lo hemos dicho y toda insistencia nos pareto. El Fígaro, rebatió nuestras afirmaciones. liz, llamó la Regencia de Ratibor. En un país ce poca; la cuestión de la transferencia de buRomanones, califi:ó de antipatriota la afirmamenos insensible que el nuestro, a estas horas, ques mercantes beligerantes a pabellón neutral, ción de un Diputado, que daba por perdido el los Ministros que integraban el Gabinete cordipleito de las incautaciones. No acertamos a jira en torno de este principie: «Una venta es llera (que por su actuación más bien parecían o no nula, según con ella se pretenda o no se comprender, cómo aún existe quien pueda poMinistros del Kaiser) no disfrutarían unos lá ner en tela de juicio la ineficacia del acto reali- intenten eludir las consecuencias que para los tranquilidad que dan el reposo y la impunidad, buques mercantes beligerantes implica el estazado por el Gabinete cordillera, y nuestra exni ocuparían otros el Poder. Pero los pueblos trañeza fué aún mayor, cuando vimos sosteni- do de guerra». Las disposiciones hgales que tienen los gobernantes que se merecen. España hemos citado, el caso práctico ex?u;sto, coincida una parecida tesis por un diplomático neuni siquiera nos parece una expresión geográfica, tral, autoridad, al decir dt El Fígaro, en mate- den en lo fundamental; con aquéllas y éste, se ahora que combate una hipotética escisión catapersigue una idéntica, finalidad: evitar que un das de Derecho marítimo internacional. Aun lana, después que ella se ha separado del munsuponiendo que el ya reiteradamente citado contendiente se sustraiga a las consecuencias do civilizado y ha caído envuelta en el descrédito de la guerra. Ahora bien, los particulares o artículo 56 de la Declaración de Londres, carez de un Imperio de derecho divino que hemos ca de valor, por no haber sido ratificado, con compañías de navegación alemanas que se avie- adorado durante cuatro años, a expensas de nen a vendernos sus buques surtos en España muestra tesis coincide la práctica délos Estados y nuestra dignidad nacional. las legislaciones de Presas, vigentes en los paí- ¿quieren eludir las consecuencias de la guerra? Indudablemente que sí; en la cláusula XXXIII sesbeligerantes. Al comienzo de la guerra iteloturca, los veleros Vasillos y Aghios Georghios, del armisticiofirmadopor los delegados francoDIPLOMÁTICOS ESPAÑOLES hasta entonces de nacionalidad otomana, ha- alemanes, el 11 de Noviembre pasado, se esta blece: Aacun transferí de navires marcfiands bían sido adquiridos por ciudadanos griegos y autorizados por el Ministerio de Marma ate- allemands de íoat espece sous pavillon neufre niense, para navegar con pabellón helénico. quelconque ne poarra avolr lleu aprés la Una vez transformados, navegaban con rumbo signature de üarmlstice. ¿Qué significación L Journal de Dehats ha publicado un artícua Pálermo y Taranto; las autoridades italianas, tiene esta cláusula? La siguiente: los Gobiernos lo encomiástico de la obra del marqués de . aliados, como consecuencia de la guerra sub • considerando fraudulenta la transferencia de Villalobar, ministro de España en Bruselas, y el. marina, se encuentran, actualmente, con su topabellón, procedieron a la,captura de ambos Ayuntamiento de esta ciudad ha nombrado alveleros, y sometieron el caso a la Comisión de nelaje mercante muy reducido; hasta donde sea calde ( ?) honorario al Marqués. Presan, que por decisiones de 13 y 17 de Mayo posible, quieren resarcirse de esas pérdidas, a Esto demuestra que la cortesía internacional de 1912, d-cretó la confiscación de los buques expensas de la marina mercante alemana; a fin se sobrepone a las hazañas privadas. Recuérdese citados. Fíjese el lector: se trataba entonces de de que ese propósito no pueda ser burlado, el artículo documental de Pablo Almarza puuna venta sin reservas, ni disimulados pactos han exigido de Alemania que no permita trans- blicado en nuestro número anterior sobre las andanzas del ministro de España y asombrémonos de retroventa; ello no fué obstáculo para decla- ferencias de pabellón. Si los pn pietarios de del honor que al Marqués se le hace. Porque si buques alemanes venden éstos a entidades es rar fraudulenta la transferencia; con mayor raen el caso del Journal de Vebats puede caber enzón habrá de considerarse nula la incautación, pañolas, recibirán el precio estipulado, mien gaño, no se reirá poco el pueblo de Bruselas de ya que, segúa se desprende de la Nota oficial, tras que los aliados exigirán una parte determi los méritos de su nuevo alcalde. Seguro que al trátase de una medida que no tiene carac er nada del tonelaje alemán sin indemnización. Marqués le falta la satisfacción interior. No es definitivo. Veamos ahora lo que disponen las La diferencia entre uno y otro supuesto salta a posible que un honor cortés haga olvidar la grila vista; en el segundo caso, los navieros ale- tería de las muchedumbres ah.te el edificio de legislaciones de Presas. La Deatschi Pñsenordnung, dice en su pá- manes tendrán que dirigirse a su Gobierno que la Legación, ni el ruido de las piedras que caían al arroyo después de rebotar en las paredes. rrafo 12: «Serán considerados como buques les indemnizará o no de los buques cedidos; en Pero frente a nosotros, españolee, no puede el primer supuesto, recibirán el precio de la enemigos, aquellos que, después del comienzo invocar el marqués de ViUalobar estos homenaventa, disponiendo, ilegalmente, de esos bu de las hcstilidades se transfieren a otro pabejes de la cortesía internacional, con el doble llón, si se reserva un derecho de retroventa o ques, ya que Alemania, por el hecho de firmar objeto de darse un bombo y de presentarse libre la cláusula XXXIII, se comprometió a rio reco«reversión». El Naval Pricelaw en sus artícu PROBLEMA QUE INTERESA A ESPAÑA LA COMPRA DE BUQUES ALEMANES R VI LL ALO BAR E ESPAÑA NÚM. 194.—8. <i© culpa. Honores convencionales no lavan culpas ni torpezas. El marqués de Villalobar es un corteeano. Acaso lo sea por obligación que le impone su calidad de gentilhombre, y esta circunstancia no la olvida en su cargo. Cuando algún viajero retornaba de Bruselas a la patria del ministro, no olvidaba recomendarle «Decid al Rey, mi amo, cuan, suyo soy en esta y en todas las ocasioiies». Citamos esta frase favorita del Marqués, no parra caracterizar su política general, ni siquiera para recordar la clave telegráfica especial que toda Legación o Embajada tiene para comunicarse con el Monarca. La citamos sólo de pasada, para dar una idea del personaje. Sin embargo, cuando los intereses nacionales no sufren mengua, y el Marqués tiene ocasión de brindar una amabilidad a Alguien lo hace. Por ejemplo, en la cuestión del monumento a Perrer. Por fin la ocupación alemana permitiría arrin<»nar ese testimonio antiespañol. ¡ Qué idea! Corre el Marqués a visitar a von Bissing y ¡Ah... muy, bien! Y el general se frota las manos. Pero sé enteran los belgas y acuden al mismo minstro. A él incumbe la protección de los intereses de la población. El Marqués se cala el-sombrero y va a protestar de t^l determinación ante.von Bissing. Ambos cavilan, «j Na... ich habe es schon!», dice el general. ¡ Embadurnamos el monumento. Prohibimos que se •eankadwane. Lo volvemos a emba,dumar... y luego lo quitamos, como peligrosa ocasión de ' discordia.» HACIA LA FEDERACIÓN DE TODAS LAS RUSIAS LA ABDICACIÓN DEL ATAMÁN DE UKRANIA POR Fabián Vidal LA COALICIÓN DERECHISTA ACE algún tiempo, el atamán de Ukranía Skoropatsky celebró una entrevista con el general Krasnqw, atamán de, Ips cosacos del Don. Esa entrevista fué un acto de aproximación de los ukranianos conservadores y germanófiios al movimiento uniñcador de las Rusias. En Kiew, los periódicos afectos a Skoropatsky declararon que la política de éste sería en lo sucesivo no separatista, sino inspirada en las ideas federativas y autonómicas. El ideal de los ukranianos amigos del orden debía ser la reconstitución de la gran Eslavia sobre bases federales. Cada organismo natural ruso —Moscovia, Rusia Báltica, Lituania,.Ukrania, Cáucaso, Siberia, Rusia Blanca, etc.— tendría su vida propia, su gobierno peculiar, sus Cámaras y Y así se hizo. De este modo desapareció el sus [particulares estatutos regionales. Y todo monumento de Ferrer... ese conjunto de poderes jurídicos aceptaría la ¡ Esto es ser diplomático ! superestructura de un ministerio central, con Pero esta diplomacia reviste a veces carácter trágico, macabro y ridículo. Porqup en una oca- un Parlamento panruso encargado de las tareas siói^ qse costó la vida a cinco españoles, a los uniñcadoras. Mas téngase en cuenta que este movimiento hermanos Oliver, comerciantes de Lieja, y a sasi dependientes asesinados por los alemanes, el es reaccionario. Hay en la Rusia del Sur nuMarqués no mostró tan diligente celo, i No eran merosas organizaciones militares que aspiran ciertos loa fusilamientos! Calumnias del Ayun- a una'vuelta al antiguo orden de cosas. Los taaniento de Lieja, radical, socialista y sinver- cuerpos de voluntarios del general Denikine, güenza. ¿ No fueron estas las palabras ? ¿ No reel ejército de Astrakán, el ejército meriodional ousó el Marqués a la única persona, a un primo de los fusilados, que identificó los cadáveres? del general Znalow y el ejército septentrional ¿ N9 ¡tuyi? el teniente coronel alemán Renner, del general de caballería Keller se han unido y han nombrado generalísimo a Denikine y coque decirle que no cabía duda que los fusilados eran los hermanos Oljver? Y aquel radiograma mandante en jefe de las fuerzas ukranianas a del ministerio de Estado, que ordenaba al MarKeller. Skoropatsky, al adherirse a todos esos qués que no se empeñara en negar el fusilamien- elementos, era portavoz de los grandes terrateto de nuestros compatriotas, ¿ qué tal le sentó nientes de Ukrania, que no sienten el nacionaal gentilhombre? lismo sub-ruso y que suspiran por la instauraSe ha dicho que Villalobaí; era germanófilo. ción de un régimen que les devuelva sus privi No hay tal. El marqués de ViUalobar no era legios y les libre de leyes agrarias y de reivinnada„ Nada má^ que, un hombre muy bien ardicaciqnes plebeyas. tícala4.o, oomx» decía el N\incio, y esta flexibiliSkoropatsky hizo un Ilatnamiento a todos los dad articular se traducía en libre juego polítioficiales, cosacos y soldados. Dedicóse febrilco. S í ; le convenía estar bien con los alemanes, de aquí su germanofilia de gran apariencia, no mente a formar losi cuadros de los nuevos reporque ardiera en su pecho, como en el del pobre gimientos. Pero tropezó con tres clases de señor D. Luis Polo de Bernabé y Pilón, un oposición y no ha podido resistirlas. órgano cardíaco teutón, sino por echar, como en lenguaje de los diplomáticos se dice, «la zancadilla» a este último señor. Nadie mejor que el oortesano Marqués sabía que el Sr. Polo no gozaba, por oposición a cierta intervención en enlaces reales, la confianza de las esferas que hacen, a los embajadores y los deshacen. Pero no se salió con la suya. A Polo le ha deshecho la victoria y ViUalobar se ha quedado en alcalde honorario en vez de Uegar a embajador efectivo... ¡ Lástima que la realidad se empeñe en rebajarle este galardón! A ios señores que nos honran envlándonos espontáneamente trabajos de colaboración, les recomendamos que guarden copia, pues no respondemos de su devolución en caso de no utilizarlos, ni sostenemos correspondencia sobre ellos. H LOS ORÍGENES DEL ATAMÁN ECORDEMOS brevemente los antecedentes de Skoropatsky. Austria y Alemania inventaron en Brest-Litowsky, una Ukrania independiente. No la dieron la Ruthenia o Galitzia oriental, que la corresponde étnicamente. La dieron, sí, diversos territorios que los polacos jozgan suyos. Sirviéronse de los nacionalistas ukranianos, partido de intelectuales que tiene una gran analogía con la izquierda catalana, que acaudilló Corominas después de la solidaridad. Ese partido, apoyado en algunos grupos socialistas an • tibolchewikis, organizó su Rada o Gobierno independiente, fué a Brest-Litowsky y ñrmó R una paz separada, poco decorosa. Mientras sus delegados se prestaban a la indecorosa comedia, los bolchew.kis entraban en Kiew y lo pasaban todo a sangre y fuego. Mas Austria y Alemania querían aprovecharse de su invención. Una ukranía mediatizada por ellas : signiñcaba la anulación deñnitiva de Rusia. Eidchorn, nombrado mariscal, marchó sobre Kiew y expulsó a los maximalistas, y bien pronto sus soldados llegaron al Mar Negro. 'Los nacionalistas ukranianos creyéronse seguros y se dedicaron ala organización de una República popular. Pero la broma había durado bastante. El militarismo centro europeo no podía permitir que surgieran, en sus fronteras, estados democráticos. Eidchorn, nombrado presidente general austro-alemán en Ukrania, púsose de acuerdo con un viejo general ruso, pariente suyo, que había sido en su juventud paje del padre de Nicolás Romanoff. Ese viejo general se apellidaba Skoropatsky, y era profundamente conservador y^eaccionario. Y un día la Rada fué dísuelta por las tropas alemanas, y Skoropatsky quedó nombrado atamán de Ukrania. ¡De Mazeppa a Skoropatsky..! Verdaderamente la burla pasaba de cruel. Desde el golpe de Estado que acabó con la República Popular ukraniana, Skoropatsky se ha mantenido en el poder gracias a las bayonetas alemanas y austro húngaras. Ha sofocado sangrientamente varias insurrecciones obreras y campesinas y ha dominado una gigantesca huelga de ferroviarios. Mas como Eidchorn fué asesinado y los austro-alemanes vencidos, Skoropatsky, uniéndose a los partidarios de una restauración más o menos templada del czarismo, pretendió sostenerse en Kiew por sus propios medios. LA CAÍDA A hemos dicho antes que luchaba con tres clases de oposición. Vamos a explicar cuáles eran éstas. Primero, los bolchevikis. Derrotados en Ukrania por Eidphorn, han continuado perturbando las comarcas del norte. Sus batidos mantienen una perpetua agitación y sirven de apoyo a las revueltas proletarias contra los terratenientes y los funcionarios del gobierno kiewino. Luego hay que contar a los demócratas que anhelan la incorporación incondicional de Ukrania a Rusia. Son en su mayoría progresistas y constitucionales. Hay también algunos restos del octobrismo. Pero la fuerza verdadera estaba en los demócratas ukranianos. Proceden del nacionalismo. Han organizado un ejército que manda el general Petjura. Dicho ejército viene guerreando hace unos meses, pero nunca pudo vencer al del atamán Y rtum. 194.—y. ESPAÑA porque éste contaba con la cooperación militar de Austria y Alemania. Firmado el armisticio de Austria con Italia y de Alemania con Foch, la divisiones alemanas y austríacas de Ukrania se declararon neutra les. Y Skorcpat-ky viose reducido a unos miles de voluntarios. Petjura adueñase del centro ferroviario de Fastow y luego avanzó sobre 'Kiew, arrollando a las columnas atamánicas, Y el sábado antepasado entró en la gran ciudad, capital de Ukrania, casi sin resistencia. Skoropat ky, abandonado por los suyos, invocó el auxilio de las brigadas alemanas y aus triacas. Estas se negaron a prestárselo. Su ministerio, que presidía Gerbel, dimitió y el atamán tuvo que abdicar. ' El directorio democrá'ico federativo ukraniano se compone de los políticos bien caraC" terizados, Winitschenko, Siets y Andrcjewski. Petjura forma parte de él, aunque sobre todo, tiene a su cargo las cuestiones militares.'^S^ nosa, iporque la desorganización industrial ha llegado a extremos inconcebibles... El escrito del Gobernador debiera unirse a los autos de una causa criminal, contra el Gobierno y la Administración españoles en general. Son siempre los mismos ineptos, los mismes oligarcas granjeros, los mismos gobernantes de aventura, los que frivolamente juegan con los intereses del pueblo español, y le impiden asociarse a h marcha del mundo fomentando su comunión con Afiica. FIGURA CONTEMPORÁNEA MADAME DE NOAILLES RESUMEN UEDE decirse, pues, que Ukrania ha dejado de existir corno nación indep^ndi£n^teJLos vencedores quierenquefseiTun estado federal de la gran Rusia. Ahora comienza una nueva fase de esta lucha confusa y terrible, salvaje y caótica. Keller, caudillo de los conservadores del sur, se opondrá, seguramente, a la victoria democrática. Es inminente un choque entre él y Pitjura. ¿Qué actitud adoptarán las masas profundas del pue!blo ukraniano? Hay que hacer también otra pregunta. En la Rusia del sur, como en la del norte, se diseñan tres corrientes ideológicas. Existe una extrema izquierda, que ha culminado en el bolchevi ikismo, un centro progresista y democrático burgués y una derecha czarist?. ¿Por cuál de ellas se pronunciarán los aliados? Creo sinceramente que por la segunda, es decir, por el justo medio, por el progreso , posible, factible y pacíñco. Fabián Vidal P LA FÁBRICA DEL GAS INEPCIA MUNICIPAL L Ayuntamiento de Madrid se había incautado de la Fábrica del gas. La municipalización de servicio público tan importante, parecía, que df biera ser el p'incipio de una poética comunal, que respondiera al criterio dominante en el mundo, de que la colectividad administre en beneficio de los ciudadanos o de los munícipes los servicios púbücos, eliminando el factor Empresa y el tributo de ganancia rendido al capital. Pero el Ayuntamiento de Madrid, que había conseguido sin gran trabajo la ad-rinistrac ón de la fábrica del gas, ha fracasado con ignominia en este intento de nueva política'municipal. El Gobernador de Madrid, en un escrito que sólo tiene el defacto de una retórica ampulosidad, ha revocado la incautación. Las r^zones son terribles: Porque el pueblo de Madrid, a causa de la gestión municipal, se ha visto privado de sus servicios de alumbrado y calefacción, porque el sistema de distribución de subproductos ha provocado quejas unánimes y «clamorosas, porque la incautación ha sido rui- E la Academia. Pero, si no lo está, las páginas académicas de la «Ite;vue des Deux Mondes •» se engalanan frecuentemente desde hace años, con páginas suyas. En su vida de gran señora y de princesa de las letras hay distintos influjos: la venerable figura de Mistral, entrevista en la adolescencia, agasajado por todos en el castillo familiar de Amphion, en Sabaya, donde los Brancovan solían aposentarse unos meses al año; la lectura apasionada de los poetas románticos y de los filósofos positivistas; el contacto espiritual de Mauricio Barres. Uno de sus biógrafos, Eené Guillouin, ha explicado con gran tino lo que caracteriza a esta poetisa: «.Lo nuevo que aporta. Madame de Noailles, aquello en que se manifiesta como muy de este tiempo en que Baiidelairc y los naturalistas han juntado sus influencias con la de los grandes románticos, es una sensualidad inagotable unida a una, extremada precisión descriptiva n. En los primeros versos de la Condesa, las evocaciones naturalistas de las cosas humildes los materializaban sin perjuicio de su agudn, espiritualidad; sus deseos, sus fervores, tomaban cuerpo real y se hacían una cosa misma con el mun- . (lo exterior. En su panteísmo, flores y frutas, legumbres y hortalizas, asumían tanto de alma comq en las heroicas naturalezas muertas de un ('ézanne. Si recordamos los versos humorísticos de liubén Darío . N. ' Calabazas y nabos para ofrecer asuntos A Madama Noailles y Francis Jammes juntos, correremos, sin duda, riesgo de empequeñecer esta fisonomía de mujer poeta y fijamos en lo más llamativo y accidental. Aquello que sus guirnaldas de hojas verdes y frutas decoran es un amor casi desenfrenado a la vida, un ansia de gozar, un terror de la muerte, que llenan las tres colecciones poéticas tituladas «El corazón innumerables, «La Sombra de los Díasn y «Los Deslumbramientos n: •le voudrais n'étre plus qu'v/ne amoureuse bouche Qui gáute et qui boit l'univers. Ahora que la sonrisa de la victoria toma en los labios de las mujeres francesas el puesto ^ue dejó la serenidad firme del sufrimiento aceptado, es grato unir a ésta galeria de figuras contemporáneas la de una mujer en quien no sólo se revelan características de su país -nativo, sino que, por influjo acaso de su ascendencia, une a ellas cierto voluptuoso sensualismo oriental, a Ayer vinisteis —le decia Barres dedicándole «El viaje de Espartan— del Danubio como Bonsard y de Bizancio como Chénier, a ofrecemos, viva del todo, pero enternecida por siglos de destierro, esa delicadeza griega de que los arqueólogos nos dan solamente una idea lánguida yi. De estirpe rumana y griega viene, en efecto, Ana de Noailles, por su •nacimiento princesa de Brancovan, es hija de los Bibesco y los Musurus. Nació en París, en 1877. En 1901, casada ya con el conde Mathieu. de Noailles, dio a la imprenta su primer libro: «El corazón innumerable-». El éxito que alcanzaron sus versos fué grandísimo. De un lado, la circunstancia de ser su autora dama de una de las más ilustres casas de Francia, y de otro la jugosa y niieva poesía, que daba a leer, contribuyeron a distinguirlo y exaltarlo. Igual entusiasmo, la misma curiosidad acompañó a los libros sucesivos, hasta el punto de que no faltó quien lo atribuyera o, manejos y sintetizara sus insinuaciones llamando a la autora mMadame Beclamierv. Los críticos mejor situados le dedicaban inmediatamente, en sus diarios, columnas y folletones. De no haber sido mujer, la condesa de Noailles estaría ya en l'ubticddas de 1901 a 1907, entre ellas y «Los Vivos y ios Muertos», aparecida poco antes de la guerra, hay un espacio de producción más lenta, un reposo de ánimo, después de un dolor profundo, que hace surgir en su poesía un tono de meditación antes desconocido para la exaltada glorificadora del vivir: Vislumbres de religiosidad que, al caer sobre la paganda de antaño no la ensombrecen. Allí estaba la verdadera poetisa, la que aportaba algo nuevo; en esta otra manera, son muchos los que se le adelantan. Señalam los críticos en la condesa de Noailles un desorden lírico, una falta de selección, un predominio de las sensaciones sobre la razón directora que han tachado, aun haciendo justicia a su talento, con una aborrecida palabra: romantieismo. El primero de todos, Charles Maurras. Ya, en una cita anterior, hemos visto los cruces que a su ronianticismo se señalan. Por ellos tiene quizá la condesa de Noailles algo de romántica a la española. Su frenesí vital no está muy lejos del de nuestro Zorrilla en sus mejores momentos, cuando se olvidaba de que era «cristiano y españolíi para no ser más que un hombre arrebatado por la corriente de la vida. Pero no hay que extremar mucho la comparación. Zorrilla, como poeta, se acabó a mediados del siglo XIX y la condesa de Noailles es plenamente del nuestro, y además es mujer. Es una de las mujeres que han osado hablar como tales, sin imitar a los hom. bres: George Sand era todavía un hombre; Marcelina Desbordes-Valmore, era ya una mujer, y como mujer hablaba de amor; Madame de Noailles, y otras poetisas con ella, hablan más que de amor, al traer a la poesía las sensaciones inéditas de su alma de mujer. ESPAÑA Núm. 194 — 1 0 Voco nuevo añaden a los rasgos señalados ya 'SUS tres novelas: íLa Dominación«^ tuLa Nueva Esperan<iay>, «EZ Bostro maravillado^, JEsta última, cuya heroina es una religiosa enamorada, «s la más original, aunque no sea la mejor; en todas hay rasgos de autobiografía ideal; en todas el mismo gusto de la vida que se nota en los versos. Completan la obra de la condesa Mathieu de Noailles otro libro en prosa, aDe la orilla de Europa a la orilla de Asia-n y varios prólogos: uno a Alfredo de Musset, otro a Saadi, concretan lo que hay de francés y lo que hay de oriental en el alma de esta mujer llamada a perdurar en su^ libros y en el retrato que de ella juntó Igna•cio Zuloaga. actual si nos propusiéramos parodiar una obra de Galdós, o de Benavente, o de los Quintero, no sabríamos cómo evitar que nos saliese una obra del Sr. Linares Rivas. De igual modo, si despojamos aLavenganzadeDonMendo de los rasgos caricaturescos en que abunda, nos encontraremos con un drama romántico, de Hartzenbusch o de Romero Larrañaga, nunca de Zorrilla o del Duque; y nunca con un drama clásico, por ningún estilo. Lavenganza de Don Mendo no es irrespetuo sa ni echa nada por tierra. Antes al contrario: ha adolecido nuestro 'reciente teatro en verso de varias y terribles enfermedades crónicas. Los que Verlaine llamó les torts de la rime, lo con vencional de los tipos, lo invariable de las situaciones, todo ello lo ha cogido el Sr. Muñoz Seca en su caricatura. Si se lo ha llevado para siempre ¡tanto mejor! ¡Dichoso el día en que los personajes de un drama en verso no lleguen a condes, y más dichoso aun aquel en que no se diga «en suma», ni «en conclusión», ni «enojos», ni «agravios», ni anhelos»! Viniendo ahora a La venganza de Don Mendosa sí mism3,no vacilaremos en declararla superior a otras muchas producciones del señor Muñoz Seca. Sin disimularnos ciertas insistencias y largura inútiles, hemos de manifestar que es, tanto por la trama como por la versificación, divertida e ingeniosa en grado sumo. Claro está que les versos no son exquisitos y que, a pesar de su gracia innegable, son ciaramente de hombre inexperto en achaques de versificación; pero esta circunstancia, que sería imperdonable si no se tratara de una parodia, viene a disimularse aquí por el tino con que están apresados los tranquillos y lañas de la versificación corriente en el teatro. Hay, además, escenas y detalles que acusan verdadera maestría. Los actores de la Comedia hacen primorosamente esta parodia: Bonafé, de modo especial. Aquí están bien, en cómico, los latiguillos y actitudes que el Sr. Calvo dedica, en serio, a su público del Español. El actor de la Comedia no descuida matiz ninguno. Los trajes, decoraciones y servicio de escena cuidados y lujosos. Pero, viéndolos, se confirmaba nuestra opinión de que La venganza de Don Mendo podría hacerse en serio a poca eos ta. A nadie se le ha ocurrido complementar el efecto cómico acudiendo a los recursos de la escenografía moderna. En^cambio hay, en el acto último, una cascada de nacimiento que está hablando. Critilo luego, a pesar de los actores, de los trajes, de la decoración. Y es que la obra ha sufrido de los años el irreparable ultraje, como dicen en Alalia. Estrenada la comedia el año 54 pintando costumbres del año cuarenta y tantos, sin valor humano, sino únicamente soci I y político, su interés ha pasado al tiempo que han pasado las preocupaciones de la época. Los dramas que nacen en un tiempo det;rminado y para un momento determinado no pueden perdurar. Su fondn es tan accidental que se desvanece rápidamente, y sólo puede sujetar la atención del curioso de épocas ya muertas. Son documentos útiles para el historiador; que tiene encanto para el rebuscador del pasado, pero sólo para éste. En un sentido histórico; sea para recordar COMEDIA: La venganza de Don Mendo. los modos de discurrir y de obrar de nuestros /-^UANDO parecía que el Sr. Muñoz Seca antepasados; sea para examinar cómo ha evo^ había agotado las posibilidad del astrakán, lucionado el teatro en cuanto género literario, se ha entrado por un terreno que hasta hoy no las comedias de Augier son interesantes. Como había sido explotado en gran escala y justo es obras de arte,, con poder de emoción para decir que el éxito le ha acompañado. En La hombres del siglo xx su valor es escasísimo. venganza de Don Mendo hay las mismas cosas A nuestra sensibilidad más avivada, más fique en las astrakanadas vulgares; retruécanos, na, a nuestro pensamiento más iiealiíta, o más nombres y apellidos sugeridores, acentos regioindustrializado, no les atraen ni les sugestionan nales, etc. Pero hay, además, versos. los principios ni las costumbres de los perso Bien ha visto el Sr. Muñoz Seca que el verso najes del reinado de Luis Felipe. le podía ofrecer mina inagotable de hallazgos. La burguesía del rey Orieans, era una burLa rima, ensazada por unos, denostada por gueiía de comerciantes y de propietarios; la otros, empleada por muchcs, es, en diestras burguesía de hoy es de grandes capitales, de manos, juguete ingenioso llego de sorpresas; grandes negocios y de gran industria. no es la poesía, ni siquiera «su vestidura regia», Todas las fortunas de entonces sa hacían a pero no es tampoco el timbre que avisa el final fuerza de ahorro, de trabajo menudo; si se esde un verso, como en una máquina de escribir; peculaba era en pequeñas proporciones; coes algo que tiene valor propio y substancial, y menzaba el agio. puede ser elemento cómico de gran precio. A estas fortunas corresponde una ideología, Esto no lo ha descubierto sin duda el Sr. Muñoz no de ave de rapiña, sino de minucias, de peSeca ni pretenderá descubrirlo el autor de estas queneces. Pequeñas ambiciones, más bien valíneas; es un mediterráneo por el que navegan nidades. hace siglos barcos de todas las naciones. En este mundo en que el liberalismo tamTampoco el género a que pertenece La venbién surgía con caracteres negativos: de malganza de Don Mendo ha sido inventado por el querencia y'de envidia a la nobleza; de deseo Sr. Muñoz Seca. Es una parodia, pero no de de elevarse a una posición política, aparecieron una obra determinada, como, por ejemplo, una las comedias de Augier. de las infinitas que se han hecho del Tenorio. El ellas, se juzgaban y se ridiculizaban los Se pretende con ella parodiar todo un género. principales defectos externos, a flor de piel de Y sí el Sr. Muñoz Seca ha declarado en la inelos burgueses, pero se juzgaban porunburgués. vitable interview que es una parodia de nuestro «Burgués es todo aquel que piensa y obra sin teatro clásico —el de Lope y Tirso, Calderón y elevación», decía Fiaubert. La definición, al Morete— una de dos: o se ha equivocado al examinar hoy las obras de Augier nos parece decirlo o no leyó jamás una obra de estos granexcelente. Pero es prescindiendo del vd'or que des autores. Lo que resulta parodiado, según en su momento tuvieron. Valor merecido, y, verán todos los que lo vieren, es el teatro que, por lo demás, se reconoce siempre al esromántico; el dtamón sangrientoy descabellado tudiar la historia del teatro francés. <iue ios imitadores no ya de Lope y Calderón, ESLAVA: La felicidad de Anionieta, de Augier Hoy, aquellos personajes, que ni sienten ni smo del Duque de Rivas y de Zorrilla pro ligacomprenden la vida como nosotros; que se y Sandeau. ron en la escena española. Todavía se sacan a mueven pDr prejuicios que no son ya los nuesL año último tuvo el Sr. Martínez Sierra un tros, nos aburren o nos dejan indiferentes. luz algunos de esos dramas, y sirva de ejemplo, buen éxito en su teatro con la representaya que alguien lo ha citado con referencia al • 4: * pseudónimo que usa Critilo para andar por el ción de La dama de las camelias. Quizá el El Sr. Mirtínez Sierra ha hecho una buena mund j , / os Amantes de Teruel. No nos empe- aplauso con que fué acogida la obra de Dumas ñemos en respetar lo que no merece respeto. le ha impulsado este año a presentar una nueva adaptación de la obra; sólo el título creo que El teJro ciáiico, el teatro romántico, en gene- traducción de la comedia de Augier y Sandeau es un error. A mi ver, tiene El yerno del señor Poirier una significación precisa del penral, son nspetables porque han producido «El yerno del Sr. Poirier», El Sr. Martínez Sierra ha cuidado la escena samiento del autor: se marca claramente la poobras maestras. Pero las de segundo y tercer orden que en ninguna época faltan ¿qué respeto y los trajes, en esta ocasión, tan bien como la siciói de Augier en el conflicto entre el suegro merecen? Son como caricaturas de las obras vez pasada. Los actores, todos, sin excepción, burgués y el yerno noble. Lo que no me explico es el porqué de la remayores, y las parodias de éstas, más que a las han comprendido perfectamente los papeles. obras parodiadas se parecen a aquellas carica- La reducción de los cuatro actos a tres ha sido surrección de la obra. Na entiendo los motivos artísticos que han movido al Sr. Martínez Sierra turas hechas en serio. Para aclarario con un conveniente. El público se divierte al principio y se cansa para ello. ejemplo vivo, diremos que en nuestro teatro SEMANA TEATRAL E CACIQUISMO TRIUNFANTE sia, la Sismología, la Meteorología y la Vulcanología. Han sido votadas también disposiciogenerales aplicables a la constitución de EL ÉXITO DE D. ABILIO nes todas las asociaciones científicas internacionales. A Audiencia de Palencia ha condenado, en Se han fijado por último —aunque no se el proceso caciquil, al Sr. Carreño. Triundan a conocer— las condiciones bajo las cuafan D. Abilio Calderón, la oligarquía y el caciles los neutros podrán ser admitidos en las asoquismo libre. El Sr. Carreño tendrá que salir para el destierro, pagar 5.000 pesetas y su libro ciaciones internacionales, una vez constituidas. Creemos que nuestra Real Academia de Cienserá confiscado. cias, a la que en el anterior artículo aludíamos, D. Abilio ha conseguido que su nombre, reseguirá con atención esta labor de sus similares basando los límites del feudo palentino, reen los países aliados. Y es de esperar que en el suene por España. España entera verá en de n momento oportuno y en la forma que estime Abilio la encarnación de San Cacique. Él se ha más digna y eficaz, reclamará para la Ciencia empeñado en considerarse como idéntico con española el lugar a que tiene el derecho y aua el cacique perverso que aparece en el libro del el deber de aspirar. Sr. Carreño, y ha encontrado un tribunal de Critias. justicia que le ha dado la razón. CERVANTES: La sangre del Leopardo. D. Abilio Calderón ha aumentado su celeOLO una noche se ha representado esta obra de D. Mariano Alarcón ya impresa y estre- bridad. El Sr. Carreño tiene la simpatía de las SEMANA ARTÍSTICA nada en provincias. El público la acogió mal gentes honradas. Esta es justicia que vale más que derecho hechura de magistrados. desde las primeras escenas y no la dejó oír. t:s EXPOSICIÓN obra noblí de sentimiento y sana de intención, pero carece del menudo interés de intriga que ARIZMENDI-PLANES CUESTIONES CULTURALES atrae a los espectadores. Esta escasez de acción El pintor Arizmendi y el escultor Planes exy una interpretación descuidada prcd jeron MAS SOBRE LA FUTURA ponen en el Salón del Ateneo una colección aquel resultado y el autcr no pudo sumar nuede obras. Arizmendi es un pintor sevillano que vos aplausos a los que recientemente le otorgo ASOCIACIÓN INTERNAha pasado largos años en Suiza. Su orientación el mismo público por su obra El Castillo en ei CIONAL DE ACADEMIAS es moderna y oscila entre los modernos pintoInfanta Isabel.—C. res franceses y alemanes. Busca, como los priPRICE: Kip Sanders, por el Sr. Doncso Corté?. N las columnas de ESPAÑA (número de 25 de meros, la riqueza de color y, como los segunNoviembre) dimos un toque de atención dos, la solidez constructiva. Esa conjunción no LSr.Caralt, continúa estrenando todas las acerca de la futura asociación de Academias la ha conseguido aún realizar completam-nte, semanas; procura con la renovación rapiaa científicas proyectada por los aliados, [de que y de ahí que algunas v^ces su pintura nos deje del cartel atraer a un público reacio. podrán formar parte eveniualmente las Acade- la impresión de inmadurez. Posee Arizmendi En estos últimos días ha puesto en escena mias de países neutrales. Hace unos días que sentido agudo de la probidad artística, y cuanuna comedia policíaca del Sr. Donoso Cortes. en El Sol se ha ocupado también de este asun- do consiga eliminar los influjos excesivamenteKip Sanders es un nuevo ataque contra la poto Federico de la Fuente, en términos que to- realistas y afine los temas y realice sus sensalicía. En la h sto.ia de los dramas de este genetalmente suscribimos. ciones con más afinamien:o, tendremos de él ro hay tres fases: una el policía listo y el ladrón obras de mucho interés. Es probable que su En la primera reunión que tuvieron en Lontonto; otra, el policía tonto y el ladrón lisobra estuviera mejor dotada del sentido de la dres los representantes de las Academias de los to y ot, a, en la que el policía y el ladrón son fineza, si se despojara totalmente de los elepaíses aliados se convino en que la segunda el mismo personaje, y, por conjiguieote, ma mentos que sin duda ha recogido en el ambiensesión tendrá lugar en París. La reunión se ha bien tont \ puesto que al final sale cogido. te artístico de Suiza. Los artistas alemanes, o verificado del 26 al 29 Je Noviembre, con asisPero, como en todas esas obras hace falta un de origen alemán, se empeñan en llevar su artencia de delegados de Bélgica, Brasil, Estados personaj; simpático, desde el momento en que te por derroteros franceses modernos, siendo los jisticias y los ladrones son unos mismos, Unidos, Francia, Inglaterra, Italia, Japón, Poloasí que ellos, generalmente, no sienten lo croes preciso agregar una tercera categoría: ios an- nia, Portugal, Rumania y Servia, no habiendo mático y sí lo puramente estructural. De ahf llegado a tiempo la delegación de Grecia. El cionados. mrtí? relato de la sesión puede verse en el núm. 24 una discordia entre lo que les dicta el genio Así, en la co-nedia del Sr. Donoso Cortes (9 de Diciembre) de los Compte Rendu, de la propio y los gustos adquiridos. Arizmendi ha quien descubre todo, es una muchacha oe Academia de Ciencias del Instituto de Francia. sido cogido entre esa discordia, ysu labor fumejor sociedad, que siente predilección por y En esta sesión se aprobaron proposiciones tura será probablemente zafarse de ella y, sidetectivismo. . referentes a la creación de diversas asociacio- guiendo derroteros franceses, intentar nacionaEn esta prolucción, estrenada por e' ^enur nes internacionales, a la bibliografía, al nom- lizarlos. Esa es, a nuestro juicio, la tarea de un Caralt hay cierto interés, a'guna amemüaa y bramiento de agregados técnicos, a los labora- artista español dolado de sensibilidad moderun truco escenográfico de gran lucimiento. torios internacionales, a las patentes, a los cam- na, la que está realizando, verbi graria, de un modo magistral y sin ejemplo en la historia Con estos elementos en otra época se hubie- bios internacionales, etc. ra perpetuado en el cartel, pero pare:e que el Se ha creado un Comité ejecutivo al que han del arte moderno español, que se ha nutrido género ya no atrae bastante al público. sido entregadas las anteriores proposiciones y en todas sus fases con elementos galos, el pinA mi e: t.-nder, sa debe este fenómeno al ci- otras varias para su más profundo estudio. Di- tor Juan de Echevarría. nematógrafo, que expío a un género semejante cho Comité está formado por E. Picard (franEl escultor Planes es un artista hábil que con mucho más interés y lujosísima presenta- cés, presidente), Hale (yankee), Lecointe (bel- modela con gracia y soltura.—J. DE LA E. " Hoy no creo que ya sean posibles estas ga), Volterra (italiano) y Schuster (inglés, secretario). Para el mejor desempeño de su misión obras iin una empresa poderosj. EL PROBLEMA AGRARIO podrá el Comité requerir el concurso de las J. b. personas u organismos que estime conve EN ANDALUCÍA niente. El hecho de que esta revista publique un \.ÑANA viernes, a las siete -de la tarde, dará en la Escuela Nueva (Los Madrazos, 14) trabajo firmado, no significa necesariamente Se han creado desde luego dos asociaciones para realizar obra científica que necesita la una conferencia sobre «El problema agrario en. que se solidarice con él. cooperación; son la Unión Astronómica y la Andalucía» nuestro querido amigo el catedráPapel fabricado expresamente para ESPA- Unión Geofísica, esta última encargada de cues- tico de Granada D. Femando de los Ríos. La entrada será pública. tiones internacionales que afectan a la GeodeÑA por la PAPELERA ESPAÑOLA. Puesto a traducir obras francesasdel xix,¿por qué no representan Antony como curiosidad, o cjalquiera de lascomedias deM jsset,oalguna dé Dtimas hijo, por ejemplo Demi-mnnde o ya, más cercanas a nosotros La parisiense o Los Cuervos? Y si quiere mostrar su escrupulosidad al presentar obras ¿por qué no desenterrar obras españilas: ese admi,rEble Sí de las niñas, algo de Bretón, de Ventura de la Vega? Todo esto sería muy interesante y el público le demostraría su agradecimiento acudiendo. En est' s últimos desgraciadcs años de el Teatro Españo',solo los clásicos antiguos o modernos han llevado gente al teatro municipal. Juan Scrvlen L S E E M i^um. J . ^ %^ X iy4—1^. .CnL X'^ A » FIGURAS CONTEMPORÁNEAS ODILON REDON ^ ^ : (1840-1916) WH^BBaBKmBfU^A. naturales; mas a medida qu^ asen esa realidad, que se apoderan de los datos que los conocimientos positivos ponen a su alcance, entonces sien-ten que eso que parecían certidumbres! apenas hace retroceder un punto lo desconocido, su ansia ¡de verdades transcendentes les conduce suavemente a la creación de un mundo fantasmagórico construido con lógica perfecta. Poe razona matemáticamente sus fantasías; Odilon Bedon ejecuta sus obras con tan afinado sentimiento de las relaciones, que se las pudiera calificar de obras maestras de lógica formal. AUTORRETRATO La musiquc souvent me prend comra* une ijier!.—BAUDELAIHE. La lámina al aguafuerte que había de servir de portada a los «Caprichos» de Goya. llevaba esta inscripción: «lili sueño de la razón produce monstruos». El arte de Odilon 'Redan pertenece a aquella categoría estética en la que si la. razón no duerme, por lo menos toma los giros y caminos de las figuraciones de la fiebre. El sueño de la razón produce monstruos; y la razón del soñador bardales, estando despierta y viva, construye su fauna y flora teratológicas con fino rigor discursivo y sutil comprensión de la armonía. Es UM artista de la línea melodiosa y conturbada de Poe. Visitándole una vez nuestro Darío de Begoyos, le oyó decir que no gustaba del gran poeta americano. Begoyos hubo de extrañarse de la declaración, y en el cuaderno en que apuntó las iTnpresiones de la visita se lee: — S i n embargo no parece posible que lo diga por pose—. Quizá estuviera en lo cierto el pintor franciscano al no dudar de la sinceridad de las palabras de Bedon; pero gustando a éste, o no gustándole Poe, es cosa que reviste caracteres de certidumbre el parentesco espiritual de entrambos. Se ha dicho de la música que es una matemática sublime. En ese sentido son también las obras de Odilon Bedon hijas de una matemática imponderable. Huysmans ha dicho que representan una transposición de un arte a otro: de la poesía y la músico, a la pintura. En el curso del arte moderno hallamos continuamente más o menos acentuada semejante transposición. Tin Whistler, un Carriere, un Beardley, un Bodin y un Fantin-Latour — e n ocasiones— son claros ejemplos. Si en tiempos del Bomanticismo la literatura se filtró dañosamente en las artes, poco después comenzará la música a sustituirla con menos daño, en efecto, y aun con beneficio. Con pocas, excepciones, los grandes artistas modernos han padecido y padecen de melomanía. Pero ninguno como Odilon Bedon representa lo musical en la pintura. Pasó su niñez y parte de su juventud en el campo bórdales. Tuvo un hermano —según él declara en carta-biográfica a Edmond Picará, publicada por este crítico en el número 34, Agosto de 1894, de «L'Art Moderne-ii de Bruselas— que era niño prodigio de la tnúsica. Desde muy joven oyó en la soledad de los campos en que vivía las sonatas de Beethoven y las composiciones de Bach. «Je suis né —escribe a su amigo— sur une onde sonare. Pus un sauvenir de la premiere enfance que ne se méle a un chant • musical, a • une musique de qualitén. Esas primeras impresiones dejaron en su espíritu huella permanente. El inundo de las formas y colores se identificó para él can el mundo m.usical. Las cosas y el espectáculo humano se le aparecieron coma sustancias de indo- Viven los dos la vida de la fantasía en la seguridad que «toda certidumbre está en los sueños-n; buscan tras la realidad positiva y superficial otra más honda, la que circunda y engendra en el misterio que no alcanza la razón esa pobre realidad cotidiana de las figuraciones de nuestros sentidos; sutilizan del mismo modo la materia, las imágenes materiales, hasta trocarlas en a modo de fluidos espirituales dotados de personalidad, que viven por manera extraña y subyugante todas las emociones y dramas qu'e traen en vilo a los humanos: son como las ideas puras y madres de éstos. La ciencia es para los dos punto de arranque de inspiraciones, y en lugar de ser la negadora del misterio y lo transcendente —como lo fué para los Mrs. Homais de su tiempo—, la ciencia les' condujo a los umbrales donde el raciocinio es una forma del ensueño. Porque el poeta y el pintor son dos espíritus analíticos dotados de rara capacidad lógica y discursiva. La realidad inmediata, la que se palpa con las manos y ve con los ojos de la carne, les atrae del mismo modo que a un curioso petulante de las ciencias i. J.x''"* •rjjragj^HBMiJ • : ' • • ' ' • >' ^&^^^\ Wlm^¡matÍtX''^S¿L'^' ^j^j^jSj^í'ISjffl •••••ral<'K# ''"r-'P' ' ••• ••>'^~¿M''- P'-'-'^J^^ñ ''jí^^^M • ^-:=^IÍMStÍÍ^ • H » 1 ' '^WHBÍ • . • ^ ' • ' - • • ' • • • " i • ¿.•, ..,. •V'->"í-7'"' ' '>! vv'^wWrSMEaafiíi,¿íeSlii '58^^ :^; •. -^ l&i'r'H Wm • ^ ^ ^ / / i í " , . ; . ' , • • ;-ffl ' ^ r\¿s»^k¿!^ ^ K i ? 1 Wt'^'^-:'' •• 1 ^ ^ v i / ^ ws^mLl ^ • • 'r- • '•'1 , • M¿. \ •i•f ' '.••••'I •• / ' v.''i, -••••' i • • .;. / •• • V *•,'•' REDON:' LITOGRAFÍA le sonora. Todo se le metamorfoseaba —cdmO u los que nacen verdaderamente músicos— en sonidos, y el busilis de su arte fué dar la vuelta a esa m^itamorjosis y traducir sus emotvimét mttr sicalzs en formas lineales y cromáticas. El músico por educación fortuita y propensión natural era a su vez y primordialmente un artista que necesitaba expresarse por imágenes plásticas. Si sus emociones se elevan y desarrollan como ondas sonoras, par un extraño fenómeno psicológico, en lugar de plasmarse en formas musicales revestían las modalidades de las artes representativas. Su espíritu había sin duda menester de representaciones más concretas que las puramente musicales. Y así nos cuenta cómo sus admiraciones de aprendiz y maestro fueron Leonardo y. Bembrand, y cómo en lugar de ir a copiar al Louvre se pasaba las horas en el Museo de Historia Natural, estudiando ostiología. Como a Carriere, los esqueletos llenábanle de emoción y le harían intuir algo así como las Víyes na formuladas y quién sabe si acaso jamás formulables del mundo. Inquería la ley de las formas —algo así como las intenciones y método creadores de la Naturaleza—, para a su vez — e n función de verdadero artista— intentar crear •—«sur le clavier de Vosteologie, como él dice—• seres imaginarios, que si no son, en efecto, los de la Naturaleza tal y como la conocemos, pudieran serlo. La necesidad de observación y conocimiento concretos, como base objetiva de sus escapadas por los vericuetos de la subjetividad, se manifiesta en su prurito de «copiar la Naturaleza en sus objetos menudos, particulares, fortuitos o accidentales». «Solamente después —escribe— de un esfuerzo de voluntad para representar minuciosamente una brizna de hierba, una piedra, l<^ faz de un viejo muro, es cuando me siento poseído de la tortura de crear lo imaginario. «La naturc exterieure —concluye— ainsi re^ue et dosée, devient, par transformation, ma source, mon ferment.» ^ REDON: ESFINOE NEGRA. Odilon liste»—, sinfonista. perseguía música». el modo Bedon —escribe Mellerio, «L'Art Idease llamó a sí mismo al comienzo pintor «Dando a entender así que el fin que era en cierto sentido el mismo de la De ahí que sus medios de expresión, o de usarlos, tengan un caráeter partieu- ESPAÑA f' lar. Bedon ha usado mucho para expresar sus fantasías y emociones del carbón, la litografía, el pastel y el óleo. Sa hecho una especie de estética y apología del carbón. Hs para él esta materia artística, «que no posee en sí ninguna helle:^iiyi, un medio perfectamente adecuado a la inquisición del claro-oscuro y lo invisible. «Tout ce que ne sugere pds a Vesprit quelque chose -dice—, ne vaut rien qui vaille avec le charbonti. Añade: nElle exige de l'artiste qui l'emploie, a, la minute heureuse ou l'agent passionnel fournit, une egale dose de clairvoyance et de logique, un tact, un gout minutieux toujours en eveil et presentn. En sus composiciones al carbón o litográficas Odilon Bedon hace verdaderos prodigios expresivos. Posee un tan sutil sentido de los «.valores-n que esas obras monocromas adquieren un caráoter realmente sinfónico. —No hay otro término mejor para expresar la sapientísima y archisutil gradación de claro-oscuro continuo—. La estampa ejecutada por esos procedimientos es una masa unificada de luz que teje y desteje mi-üeriosamente sus rayos en la trama de la obscuridad absoluta. ¿Qué nos importa, pues, el tema objetivo? ¿Qué la vaguedad y aun la obscuridad en que a veces se presenta? Lo importante, lo c-apital, en estas obras no son ciertamente las formas en su semejanza con las Q"ite vemos con nuestros ojos carnales —la intención del artista trasciende de lo puramente objetivo, y lo que él busaa es comunicarnos una emoción de misterio, de vida que se organiza lenta y ÍÍ"»" gicamente, en un perenne dolor— algo del turbador tWerdenii de los alemanes, el devenir y desvanecerse continuo de las cosas. Pero este «.Werden-n, que es la emoción básica de todo el sistema estético de Odilon Bedon, no es por cierto el telar infinito y el huso y lanzadera, que tejen el manto luminoso del universo, según Goethe. Es ese tal vez un concepto optimista para un artista reflexivo moderno. Quizá lo admitieran e hicieran suyo los grandes paisajistas intuitivos del Impresionismo. Pero Uailon Bedon, como dice certeramente Melleno, establece como mhase continua de todo —ignorancia, bestialidad, perversidad, sublimidad , el dolory>. Lleva metido muy en lo hondo de su pensamiento la doctrina «.darviinianat de la evolución; y de la lucha por la existencia y el predominio ha hecho, a su modo, «"« especie de filosofía emocional, si así podemos expresarnos. REDON: PEOASO BLANCO iNuiii. Lo mismo cuando describe el drama de los infusorios—lo que se ve a través del microscopio—, que cuando hace tema de su fantasía la leyenda amorosa de Salomón o las narraciones del martirologio cristiano se exprese sólo con las variaciones de blanco y negro o recurra a ricas y complejas armonías cromáticas, en toda ocasión nos mostrará sobre místico fondo de tinieblas un continuo reguero de sufrimiento sin lenitivo, que corre desde la célula protoplasmática a los tipos supremos de humanidad: el héroe y el santo. Arte extraño y refinado, hijo de una época positivista, nutrido de positivismo y ciencia, pero al mismo tiempo expresión de un momento humano en que el conocimiento positivo ha oprimido los permanentes anhelos transcendentales y éstos surgen de nuevo con violencia de resorte en busca de horizontes espirituales que no pueden ser los de la mera clasificación y organización científica de realidades concretas!... Juan de la Encina DE ENSEÑANZA UN NUEVO ESCÁNDALO MINISTERIAL L diputado Sr. Azcárate descubrió en el Congreso un gazapo ministerial: una Real orden dictada arbitrariamente por el Sr. Burell, mediante la cual se reconoce a D. Vicente Goyanes aptitud para concursar cátedras de Histología. No piensen nuestros lectores que este Sr. Goyanes es el eminente cirujano —a quien sobran méritos para ser catedrático y por eso no lo es—; no, señor; se trata de otro Goyanes desconocido en el mundo científico, pero muy conocido, en cambio, de algunos caciques más o menos enmascarados (ya nos ocuparemos otro día de descubrir estas máscaras) que ac • túan en Santiago y en su Universidad. El Sr. Goyanes obtuvo hace años, por concurso, la cátedra de Técnica anatómica de una Universidad andaluza, y al poco tiempo fué se • parado de ella por abandono de destino. El caciquismo andaluz no conocía, sin duda, los méritos relevantes del Sr. Goyanes y por eso no lo amparó; pero el gallego sí los conoce y en cuanto queda en la Facultad de Medicina de Santiago una cátedra vacante, apoya la inmediata pretensión de este hombre omnisciente a quien[tanto le da explicar Técnica anatómica, como Higiene, como Hist: logia. Hace un par de años tuvimos que alzar nuestra protesta para que no se le diese por ccncurso la cátedra de Higiene con grave perjuicio de la Enseñanza y de los candidatos que habían estado pre parándose durante muchos años para hacer oposiciones a dicha cátedra. Ahora, cumpliré mos el deber de hacer lo mismo. Carece, en absoluto, el Sr. Goyanes de condiciones legales para obtener por concurso cá tedras de Histología y Anatomía patológica, porque esta asignatura no tiene analogía alguna con la de Técnica anatómica que dicho señor desempeñó. Tan evidente es esto, que el propio Sr. Burell, autor de la arbitraria Real or. den, al contestar un artículo sobre este asunto de nuestro colega El Sol, no empleó una sola palabra en defensa del contenido de su disposición ministerial y hubo de limitarse a transferir la culpa al Consejo de Instrucción pública. ¡Pobrecito Sr. Burell, que no supo lo que hacía! Pero hay algo más que el aspecto legal. E iy4.—1¿. o Nosotros debemos y queremos hacer públic lo que en Santiago sabe todo el mundo: que el Sr. Goyanes, no solamente no está preparado para explicar la asignatura de Histología, sino que, por el contrario, carece de los conocimientos más elementa'es en esta ciencia; que nunca frecuentó, ni hasta, acaso, visitó un laboratorio de Histología; que no podría diagnosticar, de entre cien que se le presentasen, aiez preparaciones histológicas, y que si para obtener esta Cátedra se le pidiese como prueba una conversación de quince minutos con nuestro sabiO' Cajal, no se atrevería a someterse a ella. ¡Soleen nuestro desgraciado país puede darse el caso de un tal candidato para una cátedra! Vean el Const jo y el Ministro de I strucción pública lo que hacen. Ya nadie ignora que todo el problema de la enseñanza es tan sólo una< cuestión de personal, y ni uno ni otro querrán echarse sobre sí la responsabilidad de elegir, conscientemente y burlando la ley, a una persona no idónea. Más, si lo hacen, cuenten con la protesta airada de toda la gente nueva que, llena de ansias de regeneración, trabaja calladamente en España y fuera de España para levantar núes tro nivel científico y aspira, naturalmente, a ingresar en la Universidad por medios nobles y legítimos, que se le cerrarían si prevaleciese el sistema inaugurado por el Sr. Burell. Y cuenten también conque los estudiantes ya saben que tienen derecho a exigir que se les enseñe y no habrán de soportar que la Cátedra de Histología de Santiago funcione coíi el laboratorio cerrado y limitada toda la labor docente a que el profesor, con el lib o de texto abierto ante sí, tome la lección a sus alumnos. PANORAMA GROTESCO SALAVERRIA SUBTERRÁNEO. A denigrante derrota teutona hace que el señor Salaverría, el gran ingenio abecedil, se refugie bajo tierra. Hay que reconocer lo justificado de esta determinación. Pero el optimismo le induce a cantar en el subterráneo a los «unánimes rieles» del metropolitano madrileño. ¡ Regocijémonos con la figura ! Sabíamos de «cisnes unánimes» del maestro Rubén, y aun de «gansos unánimes», que es frecuente dar con ellos. Pero al admirable optimismo del Sr. Salaverría estaba reservado el proclamar la «unanimidad» de los rieles paralelos... ¡ Oh empeño tenaz el de nuestro agridulce amigo, que no puede resignarse al olvido, en que, para no incurrir en la pesadez de la reiteración, le tenía nuestro «Panorama»...! L GASSET PRECURSOR DE WILSON AKÍs 22 (9 n.).—En una entrevista con un redactor del New York Rerald, Romanones declaró: — «La idea del Congreso de las Naciones para perpetuar la paz del mundo no es nueva para España. La constitución de la Sociedad de las Naciones fué tema de discusión favorita de los hombres de Estado' españoles y de la Prensa mucho antes del programa de Wilson. Principalmente, el Sr. Gasset, esperado en París entre los miembros de la Misión española para la paz, ha dedicado toda su vida al estudio de estas cuestiones. España lo honra como iniciador de esta idea.» P iNum. ESPAÑA 194.—14 BANCO HISPANO - AMERICANO E L Consejo de Administración de esta Sociedad, en vista de las utilidades del ejercicio 1918, ha acoi'dado repartir un dividendo activo de doce pesetas cincuenta céntimos por acción, que, con el distribuido a cuenta en el mes de Julio último, forma un total equivalente al nueve por ciento del capital desembolsado, libre de todo impuesto. E l pago de este dividendo quedará abierto desde el día 2 de Enero próximo, en las oficinas centrales de este Banco, en las de sus Sucursales y Agencias de Alcoy, Alicante, Ante- quera, Badajoz, Barcelona, Bilbao, Cádiz, Coruiia, Ejea de los Caballeros, Granada, Huelva, Logroño, Málaga, Ronda, SeviUa, Valdepeñas, Valencia, VaUadolid, Villafranca del Panados y Zaragoza, y en los siguientes Establecimientos : En Oviedo : Banco Herrero. E n Gijón: Banco de Gijón. En Santander: Banco de Santander y Banco MercantiL E n San Sebastián: Banco Guipuzcoano. En Burgos: Banco de Burgos. Madrid, 20 de Diciembre de 1918.—El secretario general, Mamón A. Valdés. COLECCIONES DE ESCUELA NUEVA CLASE DE TAQUIGRAFÍA Desde el día 15 de Diciembre ha quedado abierta en la Secretaría de la Escuela Nueva (Los iV\adr;^zos, 14), la matrícula para la clase de taquigrafía que comenzará el 2 de Enero. P.ofesor: D. Francisco Martín Eztala. Cuota mensual. 3 pesetas. Horas de clase de 8 y media a 9 y media de la noche. AHat Orifica! MATEU.—Psie* del Prado, 14, Uadrí* ESPAÑA 1 91 7 Se han puesto a la venta las colecciones de «España 1917» elegantemente encuadernadas, al precio de 10 pesetas incluidos los gastos de envío y certificado. El precio para Madrid es de 9 pesetas. Los pedidos diríjanse al Admi—— nistrador de ESPAÑA, Prado, 11, acompañados de su importe t^ CENTRO GRÁFICO ARTÍSTICO CALZADOS GARCÍA Y PORTÓLES TALLERES DE FOTOGRABADO PARA BICOLOR, La Imperial TRICOLOR, FOTOLITOGRAFÍA, DIRECTO V LÍNEA Los mejores de Esípaña MADRID • BILBAO Ruiz, 15, bajo-Madrid SAN SEBASTIAN - L E Ó N Pedid C a t á l o g o APARTADO NUMERO SBg CRISTALERÍA ESPAÑOLA SOCIEDAD ANÓNIMA Capital: 4.500.000 pesetas BONIFACIO ECHEVERRÍA FABRICA DE PISTOLAS AUTOMÁTICAS M A R C A STAR DOMICILIO SOCIAL EN BILBAO: Plaza de D. Diego López de Haro, 8 Apartado 101 E I B AR ' Calibres: 6,35, 7,65 V ESPAÑA FABRICA EN A R I J A Linea de la Robla (Bargos) y 9 m/m