preguntas

Anuncio
e
2011
ANDALUCÍA INNOVA • especial BOSQUES
¿Cuál es la superficie total de bosques del planeta?
¿Qué tipos existen en la Península Ibérica?
¿Puede un bosque absorber la niebla?
¿Cómo les afecta la lluvia ácida?
100
PREGUNTAS
RESPUESTAS
Andalucía InNOVA. FEBRERO 2011
100 preguntas, 100 respuestas
e
100 Preguntas, 100 Respuestas
Especial Bosques
Programa de Divulgación Científica
Consejería de Economía, Innovación
y Ciencia
Secretaría General de Universidades,
Investigación y Tecnología
Avda. Albert Einstein s/n
41092 Sevilla
Tel.: +34 954 995314 / +34
954995317
Fax.: +34 954 995161
E-mail: [email protected]
Web: www.andaluciainvestiga.com
100 PREGUNTAS, 100 RESPUESTAS
Consejero de Economía, Innovación y
Ciencia
2011, Año Internacional
de los Bosques
Antonio Ávila Cano
Secretario General de Universidades,
Investigación y Tecnología
Francisco Triguero Ruiz
Directora General de Investigación,
Tecnología y Empresa
María Sol Calzado García
Directora General de Universidades
María Victoria Román
Coordinador
Ismael Gaona Pérez
Técnicos
Manuel Enrique
Figueroa Clemente
E
vez más mermados, del Planeta
estructura y función, su papel glo-
puestas sobre los Bosques, una
mundial en la necesidad de con-
Tierra, pero también es cierto que
bal en la Sostenibilidad Terrestre,
relevante iniciativa del Plan de
servar y proteger los bosques,
nunca hubo más codicia en nues-
sus servicios a la comunidad uni-
Divulgación Científica de Andalu-
despertar la conciencia política
tro planeta que en el marco de la
versal, su relación con la cultura y
cía, dependiente de la Consejería
y pública en lo relativo a los recur-
globalización que nos invade. La
forma de vida diversa de la Tierra.
de Economía, Innovación y Cien-
sos forestales, identificar los facto-
destrucción de los bosques, con
Del conocimiento a la protección
cia de la Junta de Andalucía. Desde
l 20 de diciembre de
res que amenazan a estos recursos
todo lo que significa, es un expo-
real, decidida, que permita la
preguntarnos qué es un bosque a
2006, la Asamblea Ge-
forestales, poner de manifiesto su
nente de primera magnitud de la
persistencia de estas Catedrales
descubrir qué bosques representan
neral de las Naciones
papel en la conservación de la bio-
posición que determinados secto-
de la Vida, monasterios de bio-
los bosques élficos de El Señor de
Unidas aprobó la resolución (A/
diversidad global y sensibilizar a
res tienen con estos importantes
diversidad, reductos de la gran-
los Anillos, o poner en valor pelí-
RES/61/193) por la que se decla-
la población para que participase
ecosistemas. Una sociedad debe
deza de la Biosfera. No estamos
culas como Avatar, o preguntarnos
raba 2011 como Año Internacio-
en actividades orientadas hacia
ser consciente de si su modo de vi-
legitimados para dañar el Plane-
sobre el papel de los bosques como
nal de los Bosques. Esta celebra-
la protección de los mismos, para
da generará su colapso.
ta como lo hacemos. No estamos
sumidero de dióxido de carbono:
ción resulta indispensable para
lograr una Cultura de Sostenibili-
Cada año, se pierden más de
legitimados para tomar lo que
en estas Cien preguntas caben
tomar una conciencia real de que
dad de los Bosques encaminada a
150.000 km² de bosques debido a
queramos y donde queramos. Es-
muchas cuestiones que esperamos
los bosques son parte imprescin-
la preservación de las importantes
la deforestación, cada año se nos
ta situación nos debe causar una
ayuden a poner de manifiesto el
dible del desarrollo sostenible
masas forestales de la biosfera de
muestran con mayor crudeza los
indignación colectiva hacia la
crucial papel que tienen los Bos-
integral del Planeta Tierra, de-
nuestro planeta, esenciales para la
efectos de los Cambios Globales
Vida y los Pueblos dañados con la
ques en el mantenimiento de los
bido a los beneficios ecológicos,
vida en la Tierra.
web)
Carolina Moya Castillo (Publicaciones)
Análisis y documentación
Carmen Gavira
Han participado en la elaboración de
esta publicación:
Departamento de Biología Vegetal y
Ecología, Universidad de Sevilla:
Enrique Figueroa Clemente, Sara
Muñoz Vallés, Jesús Cambrollé
Silva, Mª Teresa Luque Palomo,
Enrique Figueroa Luque, Mª Cruz
Díaz Antúnez-Barradas, Julia Toja
Santillana, María Zunzunegui
González, Luis Andrades Moreno, Aída
Arroyo Solís, José Luis López Sánchez,
Alejandro Ávila Villares, Alfredo E.
Rubio Casal, Alfonso de Cires Segura,
Antonio Puerto Marchena, Mª José
Leiva Morales, Juan Manuel Mancilla
Leytón, Ángel Martín Vicente, Rocío
Fernández Alés, Jesús Castillo Segura.
Departamento de Sociología,
Universidad de Sevilla:
Inducidos: el Cambio Climático, el
destrucción de los Bosques. Los
Ciclos Globales Biogeoquímicos de
ambientales, económicos, socia-
Desde entonces hasta 2011 han
Calentamiento Global, la destruc-
Bosques de la Tierra constituyen
la Tierra y, en definitiva, en la Vida
les, culturales y paisajísticos que
pasado más de 25 años y hemos
ción de la Capa de Ozono, la pérdi-
un importante ecosistema gene-
y Cultura de un Planeta, el nuestro,
proporcionan. La Secretaría del
perdido miles de kilómetros cua-
da acelerada de Biodiversidad, la
rador de vida y mantenedor de
nuestra casa, en peligro por la ava-
Foro de las Naciones Unidas so-
drados de bosques. Esta resolu-
Desertificación, las Migraciones
procesos globales inherentes al
ricia y el desconocimiento.
ción de declaración de Año Inter-
Ambientales. Estos cambios en la
funcionamiento del Planeta como
Sirva esta publicación colectiva
nacional de los Bosques llega en
forma natural de vida del Planeta
un Sistema Ecológico. La toma de
para ayudar a la sensibilización
Carlos A. Antonietty Adame, Antonio
Gallardo Cano, Agustina Jiménez Pino,
Miguel Villagrán Pinteño.
un momento crítico ante muchas
Tierra se verán reforzados por la
conciencia y la ayuda a la sensibi-
global hacia la protección de los
Coordinación
cuestiones que no tienen ya tiem-
pérdida de nuestros bosques, de
lización universal del problema,
Bosques y la preservación de sus
po para ser demoradas. Estamos
nuestras grandes extensiones de
de las fortalezas naturales de los
Valores, una realidad que hay
ante un escenario de Cambios
árboles, auténticos custodios de
bosques como ecosistemas y de
que lograr si deseamos un Plane-
Globales Inducidos por el Ser Hu-
los ciclos globales de la Tierra.
las debilidades que generamos en
ta Sostenible, en su pura esencia,
Sara Muñoz, Jesús Cambrollé, Jon
Jauregui.
bre los Bosques (FNUB) será el
centro de coordinación para el
desarrollo de los principios y acciones de este Año Internacional
de los Bosques. Es la segunda vez
que se asigna a las formaciones
boscosas del Planeta Tierra su
propio Año Internacional.
La primera vez fue en 1985,
cuando el Consejo de la FAO pidió un reconocimiento especial
a los bosques del planeta, con la
2
finalidad de centrar la atención
Lucrecia Hevia Bertrand (Contenidos)
Ana María Pérez Moreno (Servicios
¡
Manuel Enrique Figueroa
Clemente es
catedrático
de Ecología y
Director de la
Oficina de Sostenibilidad de
la Universidad
de Sevilla.
Mª Teresa Rojo López.
Departamento de Biología Celular,
Universidad de Sevilla:
Inmaculada Sánchez Aguayo.
Departamento de Fisiología y Zoología,
Universidad de Sevilla:
M. Enrique Figueroa Clemente, Sara
Muñoz Vallés.
Imágenes
mano como nunca antes hubo. Es
La celebración del Año Inter-
el planeta con nuestra forma de
desvestida de oportunismo y moda,
nacional de los Bosques nos debe
Diseño
cierto que hay mayor conciencia-
actuar sobre él son absolutamente
una Sostenibilidad Ecológica, Eco-
Servicio Telegráfico
ción y que se ponen medios polí-
hacer tomar conciencia de la ne-
necesarias.
nómica y Social. Nuestros Bosques
ticos, legislativos y económicos
cesidad de conocer y proteger los
Sirva como ejemplo esta publi-
para preservar los recursos, cada
bosques del planeta. Conocer su
cación, Cien preguntas, cien res-
nos necesitan hoy y nosotros necesitamos nuestros Bosques.
3
Andalucía InNOVA. FEBRERO 2011
100 preguntas, 100 respuestas
1
¿Qué es un bosque ?
DD
Según el Diccionario de la Lengua Española de la R.A.E.,
un bosque es un “sitio poblado de árboles y matas”. Los
Acuerdos de Marrakech definen el bosque como “la superficie mínima de tierras de entre 0,05 y 1,0 hectáreas
(ha) con una cubierta de copas que excede del 10 al 30%
y con árboles que pueden alcanzar una altura mínima
de entre 2 y 5 metros en su madurez”. La definición concreta adoptada por España establece como parámetros
básicos mínimos una cubierta de copas del 20%, una superficie mínima de 1 ha y una altura de los árboles en su
madurez de 3 metros. Sin embargo, y partiendo de estas
definiciones claras aunque simplistas, debemos construir
una explicación más amplia que profundice en la realidad
de lo que es un bosque desde el punto de vista ecológico.
El bosque no es una simple extensión de terreno cubierta
de árboles, sino un complejo ecosistema, imprescindible
para la vida, con una rica biocenosis, en la cual se producen numerosas y variadas relaciones en equilibrio con los
factores abióticos del medio. Las especies de árboles que
dominan en cada bosque les da, muchas veces, el nombre
con el que lo denominamos: pinar, pinsapar, encinar, etc.
Aparecen bajo una amplia gama de climas, tanto fríos
(Bosque Boreal o taiga) como templados (Bosque Caducifolio Templado, Bosque Mediterráneo) y tropicales (Bosque Tropical), y son responsables de gran parte de la biodiversidad del planeta. Constituyen el hábitat de multitud
de seres vivos, regulan el ciclo del agua, conservan el suelo y la atmósfera y proporcionan multitud de productos
y servicios útiles para el ser humano. Los bosques de la
Tierra, con su complejidad sistémica y su funcionamiento
natural, son, en gran medida, responsables y cuidadores
del conjunto de la vida en ella.
2
¿Qué son los bosques
primarios?
DD
Una definición de bosque
primario podría ser “aquel que
persiste natural, no alterado
por perturbaciones (humanas)
significativas durante periodos
4
que exceden el tiempo de vida
normal de los árboles más maduros”. En contraposición, se llama “bosque secundario” a aquel
que, aún siendo muy antiguo, sí
presenta indicios evidentes de
intervención humana. La principal diferencia entre unos y otros
es el elevado grado de complejidad (en estructura y funcionamiento) de los primeros frente
a los segundos. Las principales
áreas de bosque primario en el
mundo se distribuyen por Brasil,
Congo e Indonesia (bosques tropicales); en latitudes templadas,
algunos ejemplos se hallan en
la Patagonia, Tasmania, Canadá o Polonia. Muchos de estos
bosques deben su persistencia
al amparo que les brindan diferentes figuras de protección. Sin
embargo, la superficie planetaria de bosques primarios se ha
reducido mucho, en más de 40
millones de hectáreas durante
la última década (especialmente en América del Sur, África
y Asia). Este tipo de bosque es
especialmente valioso, acoge
gran parte de la biodiversidad
mundial y son hogar de muchos
pueblos indígenas que prefieren
vivir al margen del resto del
mundo civilizado. Sin embargo,
su superficie aún continúa disminuyendo, debido en gran medida a su conversión en terrenos
agrícolas (p.e., soja y palma
aceitera en América del Sur).
5
Andalucía InNOVA. FEBRERO 2011
100 preguntas, 100 respuestas
3
6
¿Qué es un árbol?
DD
Los árboles son formas de
vida vegetal que se desarrollan
en el medio terrestre, compuestas de una raíz, un tronco
(leñoso) más o menos uniforme, ramas que parten del mismo y que se desarrollan a cierta
altura del suelo, y hojas de morfología variada que, junto con
las ramas, forman una copa
diferenciada. Además, y según
diferentes criterios, deben
alcanzar en la madurez una altura mínima que oscila entre los
2 y los 6 metros. Son las formas
de vida vegetal más longevas
del planeta, pudiendo vivir hasta
varios miles de años. La estructura que poseen los árboles tiene un importante sentido funcional en el medio terrestre. El
desarrollo de una verdadera raíz
les permite anclarse al sustrato,
explorarlo y extraer de él el agua
y los nutrientes que precisan
para vivir; la formación de tejidos conductores, de transporte
de sustancias (xilema, floema),
y de epidermis cutinizadas que
los protegen de la desecación
les permiten aumentar de tamaño, producir hojas y asimilar
el dióxido de carbono del aire.
Además, los tallos leñosos les
permiten alcanzar grandes alturas y el desarrollo de sus ramas
hacen de las copas verdaderas
estructuras colectoras de luz.
Los árboles son los principales
responsables de la estructura
de los bosques, son elementos
valiosos en el paisaje, desarrollan el suelo, previenen la erosión, son refugio y/o alimento
de fauna variada (incluida el
hombre) y son capaces de determinar el establecimiento de
otras especies vegetales, además de ser fuente de variados
recursos para el hombre.
4
¿Qué es la fotosíntesis?
DD
Probablemente sea el proceso biológico más importante que se dé en el planeta.
Mediante la fotosíntesis, las
plantas y algunos otros pocos
organismos son capaces de
6
¿Por qué no hay árboles en el Ártico?
DD
La palabra “tundra” es finlandesa y significa “tierra sin árboles”. No hay bosques en la tundra; quedan limitados hacia el
norte ártico por el denominado Bosque Boreal, que se extiende como un anillo a lo largo de Norteamérica y Eurasia. Esto
no se debe sólo a la congelación permanente del suelo sino,
posiblemente, también a la brevedad de la estación de crecimiento vegetal, debido al corto periodo de verano ártico. Las
plantas árticas subsisten con muy escasas provisiones, por lo
que deben economizar el uso de sus calorías alimenticias. Esto
puede resultar complicado para un árbol, que debe mantener
un cuerpo de gran tamaño, en su mayoría improductivo para sí
mismo. Pero, si en el Ártico existen estructuras horizontales…
¿por qué no las hay verticales? Durante el día, una planta se
encuentra expuesta a la radiación solar, sin posibilidad de ocultarse o protegerse del calor, salvo por mecanismos fisiológicos
y metabólicos tales como la irradiación y la evaporación; si no
lo eliminara o disipara, se cocería.
El mantenimiento de una temperatura adecuada, acorde con
sus procesos biológicos, resulta vital para equilibrar su balance
energético. Por otro lado, los arbustos y el resto de plantas de
la tundra ártica viven pegados al suelo, inmersos en una delgada capa límite de aire inmóvil. Un poco más arriba están los
fríos vientos árticos; mientras el arbusto esté pegado al suelo
puede equilibrar su presupuesto calórico, si se yergue ya no. El
presupuesto calórico no se equilibra si una estructura arbórea
se eleva sobre el suelo en esas zonas heladas.
5
¿Existen bosques en todos los continentes?
DD
Excepto en la Antártida, existen bosques en todos los continentes de la
Tierra. Sin embargo, puesto que son necesarios ciertos factores como la presencia de agua líquida un mínimo de meses al año para que los árboles puedan
crecer, más que de continentes debemos hablar de zonas climáticas. De esta
forma, los árboles están ausentes en las regiones polares, donde el agua se
encuentra en estado sólido la mayor parte del año, y en las zonas desérticas,
donde las comunidades de árboles (que no llegan a formar bosques) se concentran en torno a los puntos con agua. Aparte de los límites latitudinales,
existen límites de altitud que también dependen del clima, y que son más altos
cuanto más cálido sea éste. Al ascender una montaña, las condiciones climáticas son demasiado duras para el desarrollo de los árboles y sólo permiten la
supervivencia de plantas con unos requerimientos de mantenimiento menores, llegando a extremos donde sólo resisten las formas vegetales más simples
(líquenes y musgos).
obtener compuestos orgánicos
ricos en energía a partir de
sustancias inorgánicas como el
agua, utilizando la energía del
sol. Prácticamente, todos los
seres vivos del planeta utilizarán directa o indirectamente
estos compuestos orgánicos
para su crecimiento y desarro-
llo. En la fotosíntesis oxigénica,
a expensas de la energía contenida en la luz solar, el dióxido
de carbono es absorbido desde
la atmósfera por las plantas y
asimilado en compuestos reducidos de carbono que irán a
parar a sus estructuras. Como
subproducto de la reacción se
produce oxígeno. Ambos fenómenos son esenciales para la
vida en la Tierra. Nuestros bosques, con millones de organismos fotosintéticos, actúan por
tanto como grades sumideros
de dióxido de carbono y una
fuente de oxígeno esencial para
la vida.
7
¿Por qué se habla de las
naciones-estado de los
bosques?
DD
Los grandes viajeros de los
siglos dieciocho y diecinueve
trajeron de vuelta a las universidades europeas de sus
respectivos países la noticia
de que los árboles del planeta,
y con ello muchas especies
vegetales asociadas, estaban
organizadas en los continentes en algo que podría denominarse naciones-estado.
Sobre grandes extensiones de
cada parte de los continentes
se extendían bosques cuyos
miembros tenían formas
similares. Cuando nuestros
viajeros ilustrados recorrían
el planeta de norte a sur, de
zonas cálidas a gélidas, observaban formaciones vegetales
distintas, que se fijaban en
sus memorias como naciones ocupando, cada una, su
región en el planeta. Fue entonces cuando se crearon los
grandes mapas de formaciones vegetales del mundo, los
mapas de biomas, y quedaron
ubicados los grandes bosques
del planeta.
El mapa del mundo resultante tras estos viajes, bajo
una óptica biológica, mostraba a todas las plantas de
la Tierra percibidas como
“árboles y sus matas acompañantes”, agrupadas en
grandes divisiones que acabaron por ser denominadas
formaciones. Éstas se fueron
dibujando como naciones-estado en las que los individuos,
parecían, se conformaban
en algún plan común. Tal fue
la visión de los viajeros y lo
que nos transmitieron, como
primera visión de los bosques
del mundo.
De igual forma se observó
una relación igual con los
suelos a nivel mundial y una
dependencia entre suelos y
grandes formaciones vegetales en cada zona estudiada.
El clima es el gran árbitro de
los suelos y de esas nacionesestado de los árboles que
son los bosques, con toda
su biodiversidad asociada.
Nuestro planeta está cubierto
de un enorme mosaico dinámico y complejo de climas y
el dibujo de este mosaico se
ve fielmente reflejado en la
distribución de los bosques
de la Tierra.
7
Andalucía InNOVA. FEBRERO 2011
100 preguntas, 100 respuestas
cia un matorral, éste hacia un
bosque joven y finalmente éste
alcanzará el estado de bosque
“maduro”, si el clima y otros
agentes perturbadores (p.e.
fuego, sobrepastoreo, deforestación, obras de ingeniería…) lo
permiten.
11
¿Qué animales
dependen de los
bosques para vivir?
8
¿Cuáles son nuestras especies animales forestales más
emblemáticas?
DD
De las especies que viven en los bosques mediterráneos y cantábricos, muchas de las más emblemáticas
son, al mismo tiempo y por desgracia, las más amenazadas. Entre ellas encontramos al oso pardo o el urogallo, como especies más representativas de la costa cantábrica. En Andalucía podemos citar otras especies
singulares como el lince ibérico, el águila imperial o la tortuga mora. El quebrantahuesos, el bucardo, el pico
menor, el samaruc, la paloma zurita, el lirón careto o el tritón ibérico, son otras especies de gran singularidad
faunística con un grado de protección considerable.
9
¿Qué percibimos en el
paisaje de los bosques?
DD
El paisaje que percibimos es
un producto de la Naturaleza y
de la percepción humana, y nos
muestra una realidad múltiple,
fuente de una gran riqueza
de percepciones espaciales y
temporales: hay tantos paisajes
como observadores que lo admiren. El paisaje es una fuente
de información acerca de la
Naturaleza y de nuestra interacción con ella, así como una
fuente de emociones, sensaciones, sentimientos, ideas y significados para el ser humano. Es
un sistema de signos abiertos
polisémico e incompleto. El
Convenio Europeo del Paisaje
lo considera un bien colectivo,
perceptual, perceptible, dotado
de carácter natural y cultural,
que incardina la naturaleza
material del espacio concreto,
el territorio y la realidad física
con la respuesta emotiva y
estética que suscita su percepción. En este sentido, el paisaje
de los bosques es la percepción
multisensorial de su sistema de relaciones ecológicas
subyacentes. El paisaje, como
8
información que el ser humano
recibe de su entorno ecológico,
tiene dos componentes: el fenosistema y el criptosistema. El
fenosistema es el conjunto de
componentes del paisaje que
son perceptibles por nuestros
sentidos (formas, tamaños,
color, textura, líneas). El criptosistema está constituido por
los elementos imperceptibles
del paisaje (microorganismos,
flujos de energía, ciclos de materia, interacciones poblacionales, relaciones de explotación),
cuyo conocimiento sólo se
alcanza con instrumentos de
medida u observación científica: nos permite comprender un
paisaje, su pasado y su posible
evolución. Nuestros bosques
son un recurso paisajístico de
primera magnitud que necesita
ser conservado.
10
¿Si abandonamos un
trigal, se convertirá en
bosque?
DD
En ecología se llama sucesión a la secuencia de cambios
que transforman la estructura
y función de un ecosistema a
lo largo del tiempo, que son
ordenados, direccionales y predecibles, y que llevan al mismo
hacia etapas avanzadas, más
maduras. Eugene P. Odum,
eminente biólogo americano,
considerado uno de los padres
de la ecología contemporánea,
abordó la teoría de la sucesión
ecológica desde un punto de
vista funcional, no simplemente estructural. Según Odum,
la madurez de un ecosistema
implica una mayor estabilidad,
mayor acumulación de la biomasa (los nutrientes se encuentran principalmente formando
parte de la materia orgánica
-p.e. árboles-, asimilados, más
que en el medio en forma inorgánica) y mayor eficiencia en
el uso de la energía (debido a
una complejidad mayor de interacciones simbióticas). Estas
cualidades aumentarán con el
tiempo en un ecosistema que
no sufra perturbaciones que
lo hagan “retroceder” hacia
estadíos más jóvenes dentro de
esta evolución (es decir, sufrir
“regresión”). Así, a través de
un largo proceso inabarcable
para la duración de una sola
vida humana, hipotéticamente
un pastizal evolucionará ha-
DD
Entre los ecosistemas terrestres, los bosques (incluidos los
tropicales lluviosos o selvas)
constituyen los de mayor complejidad estructural. Desde la
cima, a varios metros de altura,
hasta el suelo, las hojas, ramas,
troncos y raíces, así como la
propia variedad de árboles,
propician una gran diversidad
de ambientes y condiciones de
vida que ofrecen a la fauna un
gran abanico de posibilidades
de alimentación y refugio. En
consecuencia, las comunidades de animales y plantas que
conforman los bosques son
variadas y hacen de los mismos
sistemas de alta biodiversidad.
Ya sea porque se han especializado a lo largo de su evolución
adaptativa a vivir en ellos o de
ellos, la existencia de ciertos
animales depende de los bosques. En Andalucía podemos
citar, como ejemplos, los pájaros carpinteros, que hacen sus
nidos agujereando los troncos;
el gavilán, especializado en la
caza de aves en zonas boscosas;
la jineta y el gato montés, depredadores especializados de
los bosques; o el corzo andaluz,
una subespecie de cérvido exclusivo de nuestros bosques.
12
¿Cuál es la superficie
total de bosques del
planeta?
DD
Según datos del “Informe
sobre bosques 2011” elaborado por la FAO, la superficie de
bosques del planeta asciende
a 4.000 millones de hectáreas.
Esta cifra se corresponde con
un 31% de la superficie total.
Los cinco países con mayor
13
¿Cuál es la biodiversidad de vertebrados de
los bosques mediterráneos?
DD
La cuenca mediterránea, donde se incluyen nuestros bosques, está considerada uno de los llamados puntos calientes de biodiversidad mundial. En
los más de veinte puntos calientes repartidos por todo el globo, que suponen tan sólo el 1,4% de la superficie terrestre, tenemos aproximadamente
el 35% de los vertebrados terrestres conocidos, lo que supone más de
22.000 especies catalogadas. Sólo en la cuenca mediterránea existen unas
226 especies de mamíferos, 489 especies de aves, 230 de reptiles, 79 de anfibios y 216 de peces de agua dulce.
superficie de bosques son, por
orden: Rusia, Brasil, Canadá,
EEUU y China. Juntos representan más de la mitad de la
superficie total de bosques
en la Tierra. Europa posee
un 25% de los bosques del
mundo, cubriendo el 45% del
continente y el 73% de algunos países como Finlandia.
Esto contrasta con la situación
del Principado de Mónaco,
donde la superficie forestal es
0. Sólo Rusia ya posee el 80%
de los bosques europeos y su
superficie permanece relativamente estable. En los últimos
diez años, en Europa se da
una particularidad; mientras
la superficie total de bosques
del planeta está en retroceso,
los europeos aumentamos la
nuestra a razón de 700.000
hectáreas por año. Aproximadamente una séptima parte de
este incremento anual se debe
a España (118.500 hectáreas
por año). Aunque, claro está,
estas cifras deben ser tomadas
con cautela, puesto que no
distinguen bosques primarios
de secundarios, ni refieren la
calidad ecológica o biológica
de los mismos, su nivel de
complejidad o la biodiversidad
que acogen.
9
Andalucía InNOVA. FEBRERO 2011
100 preguntas, 100 respuestas
14
¿De quién son los
bosques del mundo?
DD
Se reconoce cada vez más
que uno de los problemas
clave causantes de la creciente degradación forestal es la
inseguridad de los derechos
de propiedad que caracteriza a
la mayor parte de los bosques
del globo. Según la Evaluación
de los Recursos Forestales
Mundiales de la FAO en 2010,
el 80% de los bosques en
el mundo son de propiedad
pública, gestionados por las
administraciones a diferentes
niveles. Sin embargo, existen
notables variaciones por regiones respecto a la proporción de
bosques “no públicos” (que no
“privados”), es decir, que están
a cargo de comunidades (indígenas), individuos o incluso
empresas privadas. Esta proporción es mayor en América
del Norte y Central (algo más
del 35%), América del Sur (en
torno al 25%) y Oceanía (algo
más del 35%), y es menor en
África (en torno al 5%), Asia
(algo menos del 20%) y Europa (excluida la Federación de
Rusia; en torno al 10%). La cantidad de bosque “no público”
está aumentando a nivel global,
debido en muchos casos a la
participación de propiedad pública en la ordenación y gestión
de los bosques existentes.
15
¿Qué tipos de bosque
existen en la Península
Ibérica?
DD
La vegetación que crece en
un lugar concreto depende en
gran medida del clima (además
de factores como el tipo de
suelo o la orografía). La Península Ibérica es rica en contrastes en este sentido, encontrándose un gradiente de humedad
desde el noroeste (elevada
precipitación: Galicia) al sudeste (muy baja precipitación:
Almería). Nuestros principales
bosques naturales son mediterráneos, bosques de árboles
perennifolios con hoja endurecida, adaptados para soportar
10
la acentuada sequía veraniega:
encinares, alcornocales, quejigares, melojares, dominados
por árboles del género Quercus
(encinas, alcornoques, quejigos,
robles melojos), acebuchales,
enebrales, sabinares y pinares
(p.e. de pino negro y albar). Siguiendo los cauces de los ríos,
encontramos bosques de ribera (de hoja caduca): alisedas,
saucedas, fresnadas, olmedas,
choperas. En la costa (sobre
suelos arenosos) se establecen
sabinares y enebrales costeros
y pinares de pino piñonero.
Principalmente en la zona norte
atlántica (incluidos los Pirineos
centrales y occidentales), encontramos bosques propios
de ambientes más húmedos y
fríos, todos ellos caducifolios:
robledales, hayedos, abetales,
abedulares; fresnadas y avellanares en los fondos de valles.
Además, dos tipos de bosque
únicos en la Europa continental se hallan en Andalucía: los
pinsapares (abeto andaluz o
pinsapo, una verdadera reliquia
botánica), en algunas Sierrras
de Cádiz y Málaga, y los bosques en galería de los canutos
(Cádiz), de tipo subtropical o
laurisilva, con especies relictas
de este clima existente hasta el
final de la era terciaria.
17
¿Qué es el bosque
mediterráneo?
DD
El clima condiciona el tipo de
vegetación de un lugar, tanto
en cuanto a las especies como
en cuanto a la estructura de
la misma formación vegetal.
Las plantas que viven en clima
mediterráneo, caracterizado
por inviernos suaves y húmedos y veranos secos y cálidos,
poseen una serie de adaptaciones que se relacionan principalmente con la resistencia
a la sequía estival. Los bosques que se dan bajo este tipo
de clima son, por lo general,
diversos en especies vegetales, presentan varios estratos
vegetales (son multiestratificados) y un desarrollo vertical
18
¿Qué es un bosque de coníferas?
16
DD
Los bosques de coníferas pertenecen al grupo de los llamados “bosques templados”. Sin embargo, a pesar de su denominación, están presentes en ambientes muy
rigurosos, aunque mantienen una alta productividad. Se llaman así porque los árboles que los forman (principalmente distintas especies de pinos y abetos) tienen un tipo
específico de crecimiento que les da un porte característico en forma de cono. Estos
bosques pueden presentar diferentes estructuras según las características de la especie predominante y su densidad. Estas diferencias pueden provocar que la bóveda
de copas de árboles permita que la cantidad de luz que llega al suelo sea mayor o menor, lo que condiciona la existencia de sotobosque (arbustos), helechos y/o musgos.
A los bosques de coníferas aparecen asociadas determinadas especies de aves como
carboneros, herrerillos comunes, herrerillos capuchinos, zorzales, mitos, abubillas, jilgueros, picos picapinos, pitos reales, verderones, luganos, verdecillos o currucas de diferentes especies. Los bosques de pinos constituyen una de las principales fuentes de
madera y muchos de ellos no son naturales, sino plantaciones simplificadas y monocultivos de origen antrópico. Muchos de estos bosques han sido fragmentados para
construir pistas de esquí, carreteras y pistas de acceso. Estas actividades compactan
el suelo, eliminan los árboles y destruy en el medio natural.
¿Qué es un manglar?
19
DD
En latitudes tropicales encontramos un tipo de bosque llamado manglar. Se encuentran en la zona de influencia de las mareas, en la costa. Sus árboles (mangles)
apenas asoman la copa por encima del agua durante la pleamar, y sólo son visibles las
partes inferiores de sus troncos y raíces durante la bajamar. La vegetación de los manglares está adaptada a tolerar la alta concentración de sal en el agua y las inundaciones
recurrentes. De hecho, las especies se ordenan desde la costa al interior en bandas más
o menos definidas según el grado de tolerancia que presenten. Las especies predominantes en estos bosques son las llamadas halotolerantes (tolerantes de salinidad)
y halófitas (que necesitan cierto grado de salinidad para vivir), expertas en sobrevivir
y competir por los recursos en medios con salinidad elevada. Estos mecanismos de
tolerancia son objeto de estudio por la comunidad científica para desarrollar biotecnologías que permitan su aplicación al crecimiento de cultivos en zonas muy salinas,
no aptas para cultivar. Los manglares presentan un elevado valor ecológico, una gran
riqueza faunística y una singular combinación de vida marina y terrestre. Sin embargo,
este tipo de bosque han sido y están siendo destruidos por actividades humanas de aterramiento y drenado para el desarrollo de puertos deportivos y apartamentos. La mayor
destrucción masiva de manglar (100.000 hectáreas) se llevó a cabo durante la guerra
de Vietnam por pulverizado de herbicidas; estos manglares jamás se han recuperado.
DSi
Dnavegamos por el curso de ciertos ríos, arroyos o canales, veremos cómo la
vegetación se concentra de forma más o menos frondosa en las orillas, formando
bandas paralelas al cauce, y en muchas ocasiones nos podremos ver envueltos en un
verdadero túnel verde. Esta vegetación, denominada riparia o ribereña, depende de la
humedad del cauce para sobrevivir y da lugar a los llamados bosques de ribera o bosques en galería. Este tipo de bosque “lineal” es frecuente en climas con sequía estival,
como el mediterráneo, y se desarrollan ceñidos a los cursos de agua. La vegetación
se encuentra muy bien ordenada en sentido transversal al cauce, desde las zonas
más cercanas al agua hasta las más alejadas, según la capacidad de las especies para
tolerar las inundaciones temporales. Las alisedas, las fresnadas, olmedas, alamedas y
tarayares son ejemplos típicos de formaciones boscosas que siguen este modelo en
galería. El sotobosque lo forman especies de arbustos normalmente espinosas, juncos y carrizos, y la fauna en ellos es rica, sobre todo en especies de aves. Estos bosques
son recursos paisajísticos de valor único, normalmente son enclaves de turismo en la
naturaleza y de actividades recreativas en general, y cumplen funciones muy importantes para el ecosistema como prevenir contra la erosión del suelo y filtrar sustancias del suelo, mejorando la calidad del agua.
¿Qué es un bosque en galería?
limitado. En el territorio andaluz encontramos una gran
variedad de bosques mediterráneos naturales, debido a las
variaciones climáticas locales
por la cercanía o lejanía al
mar, la presencia de sierras, de
ríos, la naturaleza geológica
de los suelos y también la historia de manejo humano. Dentro de esta heterogeneidad,
los bosques mediterráneos
andaluces se pueden caracterizar por una especie de árbol
predominante, aunque en la
mayoría de los casos se trata
de bosques multiespecíficos,
donde existe más de una especie de árbol dominante. Así,
encontramos encinares, alcornocales, quejigares, robledales, acebuchales, algarrobales,
pinares, pinsapares, sabinares
y bosques de ribera.
20
¿Existen bosques en las
costas andaluzas?
DD
No, no nos referimos a si
algunos de los bosques de
nuestras sierras acaban casi
a pie de playa, sino a bosques
específicos de los ambientes
costeros, que se desarrollan
sobre suelos arenosos y bajo
condiciones duras de alta
temperatura e insolación,
escasez de agua y nutrientes
e incidencia de la brisa salada
del mar, con especies que viven ahí y no en otros hábitats.
En nuestras costas encontramos los enebrales y sabinares
costeros, también pinares de
pino piñonero, con su típica
copa en forma de paraguas
(aunque muchos de éstos son
el resultado de plantaciones
históricas para frenar las dunas). En ellos viven animales
de especies singulares como
el camaleón, protegido por
ley. Los enebros y sabinas costeros son especies amenazadas, protegidas actualmente
por legislación estatal y autonómica. Entre las principales
amenazas de estos bosques
están su degradación y desaparición debido al desarrollo
urbano y turístico.
11
Andalucía InNOVA. FEBRERO 2011
100 preguntas, 100 respuestas
América, Europa y Asia. La taiga
está dominada por un clima frío
continental, con fuertes variaciones estacionales. En verano
está coloreado de verde, gris y
marrón; en otoño añade salpicaduras de amarillo y rojo; y el
largo invierno norteño convierte
el bosque en un paisaje de blanca soledad. En algunos de estos
bosques, el suelo está influenciado por el permafrost, una gruesa
capa de hielo que permanece
helada durante parte del año,
conservando la humedad del
mismo pero disminuyendo la
tasa de descomposición y la
disponibilidad de nutrientes, por
lo que suelen ser poco fértiles. El
silencio de un bosque boreal se
rompe por algunos sonidos de
animales: el aullido de un lobo, el
ulular de una lechuza, la estampida de un caribú y acompañado
por el viento incesante que cruza
los árboles. El hombre ha empezado a impactar de forma severa
en este paisaje desde los últimos
2 siglos, extrayendo minerales y
turba, deforestando y con el “saqueo” de especies animales.
21
¿Por qué algunos bosques se visten
de colores en otoño?
DD
Durante los meses de otoño, en latitudes templadas, gran
cantidad de árboles pierden todas sus hojas: son las llamadas
especies caducifolias. Por el contrario, otros las mantienen
durante todo el año: son las especies perennifolias. Pero, ¿qué
ventaja hay en desprenderse de materia que le ha costado a la
planta conseguir, y que le sirve además para seguir “alimentándose”? Los bosques de hoja caduca, como los hayedos del norte
de la Península Ibérica, tiran sus hojas durante el invierno como
una defensa frente a las condiciones adversas de esta estación.
Durante este periodo, los árboles crecen o se desarrollan poco,
ya que no pueden “alimentarse” realizando la fotosíntesis. Sin
embargo, durante la estación primaveral lo compensan produciendo hojas que suelen ser de mayor tamaño que las de las
especies perennifolias, y presentando una actividad fotosintética mayor. Durante el otoño, los árboles caducifolios reabsorben
toda la materia útil de las hojas antes de desprenderse de ellas.
Las diferencias de color se deben a diferentes pigmentos, tales
como los carotenoides, que provocan las hojas de color amarillo, o las antocianinas, principales responsables de los colores
rojizos y anaranjados. Esto da lugar a la gran variedad y belleza
de tonalidades que podemos observar en algunos de nuestros
bosques, como hayedos, robledales, castañares o las choperas
y otros bosques en galería. El paisaje se enriquece, además, con
el gran contraste cromático entre especies caducifolias y las
perennifolias en otoño.
25
22
¿Funciona un bosque
como una máquina?
DD
Según la RAE, las máquinas
son un conjunto de aparatos
combinados para recibir cierta
forma de energía y transformarla en otra más adecuada, o para
producir un efecto determinado.
Sustituyendo “aparatos” por
“elementos biológicos y no
biológicos”, podemos observar
bastante coincidencia entre
ambos conceptos (máquinas y
bosques), ya que en el bosque
los elementos biológicos (hongos, bacterias, fauna del suelo,
árboles y todo tipo de plantas,
animales vertebrados e invertebrados, etc.) y los no biológicos
(rocas, sales minerales disueltas
en el suelo, agua, CO2, O2, N2 y
otros gases) interactúan entre sí,
recibiendo energía solar que se
transforma en energía química
(materia orgánica) y en calor. En
realidad, el término que mejor
define a ambos es el de siste-
12
mas, biológicos y mecánicos
respectivamente. Sin embargo,
los bosques, al contrario que
las máquinas, no están concebidos para producir “un efecto
determinado”, aunque de su
existencia derivan “consecuencias” de relevancia para la vida
humana. Estas consecuencias
trascienden de la simple existencia de una masa de árboles más
o menos extensa a un sistema
complejo de interacciones entre
organismos de muchos niveles
afectando a numerosos procesos vitales.
23
¿Pueden nadar los
peces en el suelo de los
bosques?
DD
Cualquier habitante de
nuestras latitudes contestaría
que no, pero, si se lo preguntamos a un habitante de Manaus
(Brasil), la respuesta sería bien
distinta. En realidad, los peces no nadan en el suelo sino
sobre el suelo de los bosques
inundados. Los ríos tropicales
(Amazonas, Orinoco, Congo,
etc.) tienen normalmente dos
fases anuales marcadas por el
caudal: las “aguas bajas”, en
las que las aguas están dentro
del cauce del río, y las “aguas
altas”, en las que el nivel del
agua sube e invade la selva adyacente. Ésta segunda dura varios meses y ha sido recurrente durante el tiempo suficiente
para que muchas especies de
peces (al menos en el Amazonas) se hayan adaptado a una
dieta frugívora, en un proceso
de coevolución con muchos
árboles y arbustos. Así, los peces tienen un importante papel dispersor de la vegetación;
las frutas caen al agua y son
tragadas por los peces, y sus
semillas, que son resistentes a
los ácidos gástricos, son transportadas lejos. Lo llamativo es
que muchas de estas especies
de peces (p.e. muchas pirañas,
algunas otras especies enormes como el pirarucu, el tambaqui o el pacú) son depredadoras de otros peces durante
el resto del año. Sin embargo,
durante las “aguas altas”, el
desbordamiento del río hace
que las presas potenciales se
dispersen tanto que sean difíciles de localizar. Sin embargo,
el bosque pone a disposición
de estas especies un nuevo recurso trófico, la fruta.
24
¿Cómo son las últimas
formaciones boscosas
que veremos si
caminamos hacia el
Polo Norte?
DD
La formación vegetal más
extensa de la Tierra es el bosque
boreal o taiga. Se encuentra
formando un cinturón que se
extiende por las latitudes altas
del hemisferio norte y cubre un
11% de la superficie del planeta,
existiendo en tres continentes:
¿Puede un bosque
frenar un huracán?
DD
En latitudes tropicales, la
vegetación costera natural está
caracterizada por una línea de
dunas con plantas arbustivas
y distintas especies de palmeras, que protegen a un sistema
intermareal dominado por
el manglar, formado a su vez
por árboles muy resistentes a
altas concentraciones de sal y
encharcamiento. Este tipo de
vegetación tiene una función
clave de protección frente a los
huracanes y tifones tropicales
y ofrecen una gran resistencia
y capacidad de regenerarse
frente a este tipo de perturbaciones periódicas. La retirada
o la destrucción parcial de la
vegetación costera y la construcción de diques artificiales
para la protección de los núcleos urbanos representan una
amenaza potencial para las poblaciones costeras. El caso más
conocido fue el de la ciudad de
Nueva Orleáns donde, además
de sufrir una gran devastación
a causa de los fuertes vientos,
sus diques de protección no
resistieron al paso del huracán
Katrina, y el agua del lago y los
canales cercanos inundaron la
ciudad. El 2 de septiembre de
2005, el 85% de la ciudad de
Nueva Orleans estaba bajo el
agua, donde en algunas zonas
llegó a 7 m de profundidad.
26
¿Puede un bosque
absorber la niebla?
DD
Los árboles presentan una
estructura ramificada, con
ramas y hojas orientadas en
distintos ángulos y, a veces,
pinchos o incluso otras plantas
(epifitas) que pueden actuar
como elementos condensadores de la humedad atmosférica
y/o conductores de la niebla
hacia el suelo, para ser usada
posteriormente por la vegetación. En las islas macaronésicas
como Canarias, la acumulación
de nieblas en las laderas de las
montañas, cuando los vientos
alisios cargados de humedad
ascienden por ellas, es un fenómeno típico. En estos lugares
se pueden desarrollar bosques
característicos, con vegetación provista de hojas anchas
y brillantes que actúan como
conductores de la niebla, y que
producen “lluvia” en su interior.
Existen además bosques y plantas que dependen de la niebla
para subsistir. Los llamados
bosques de niebla andinos que
se encuentran en Colombia y
Venezuela son ecosistemas frágiles que se desarrollan en zonas de alta montaña. Son áreas
muy húmedas, cubiertas por un
manto de nubes casi a diario, y
se caracterizan por poseer una
gran riqueza de plantas epífitas
que absorben directamente el
agua de la atmósfera. Por otro
lado, se ha demostrado que las
Sequoias (Sequoia sempervirens) utilizan diariamente la
niebla que se acumula en las laderas de las montañas rocosas,
sobre todo durante la estación
estival.
13
Andalucía InNOVA. FEBRERO 2011
100 preguntas, 100 respuestas
27
¿Atraen los bosques la
lluvia?
DD
La respuesta sencilla es “sí”,
aunque hay que explicarlo:
Los bosques son en sí un gran
almacén de agua, ayudan a
retenerla y son importantes
reguladores del ciclo hídrico
de las regiones. Los suelos de
los bosques son capaces de
absorber 4 veces más agua de
vegetación, que la retiene sobre
el terreno), forma los mantos
freáticos y los acuíferos. El
bosque permite la retención
de agua y la bombea a la atmósfera a través de los árboles,
desde sus profundos sistemas
de raíces hasta las hojas que la
liberan al aire, propiciando humedad y con ello la posibilidad
de lluvia (dependiendo de la
disminución de la temperatura
las arrastran lejos, reduciendo
las posibilidades de lluvias. La
humedad del bosque, la cubierta constante de nubes y la
transpiración (pérdida de agua
a través de las hojas), crean una
intensa humedad local. Cada
árbol del dosel transpira más de
500 litros de agua al año, que se
traduce como 50,000 litros por
cada hectárea, como valor de
referencia, a determinar en cada
Los animales (heterótrofos),
por ejemplo, los obtienen de
formas biológicas ya construidas: los llamamos alimentos.
Las plantas (autótrofos) los
obtienen del suelo y, junto con
el carbono proveniente del
CO2 atmosférico, la luz y el
agua, generan los hidratos de
carbono, y con ellos su biomasa, que puede ser muy grande
como en el caso de los árboles.
zal mediterráneo (fase inicial) y
un bosque mediterráneo noble
cerrado y denso (fase madura):
en el primer caso, el ciclo de
nutrientes es más abierto y se
escapan más allá de los límites
del sistema considerado (un
pastizal o un matorral poco
denso). Cuando el ecosistema evoluciona hacia una fase
más madura (el bosque noble,
cerrado, denso), el ciclo de nu-
30
¿Cómo afecta la lluvia ácida a los bosques?
28
¿Están conectados entre sí los
árboles de un bosque?
DD
Efectivamente, los árboles de un bosque pueden
estar interconectados a nivel de las raíces, ya sean o
no de la misma especie. Ésta es una de las funciones
más importantes que cumple el micelio micorricico, es
decir, la red de tejido que forman las raíces de las plantas con la masa de hilillos que constituye el cuerpo vegetativo de los hongos en el suelo. La transferencia de
carbono en especies de pinos (Pinus spp.), hayas (Fagus
spp.) y alisos (Alnus spp.) a través de este micelio está
comprobada, tanto entre especies similares como entre especies diferentes. Así, también se ha comprobado
la transferencia de fósforo en pinos interconectados
o la de nitrógeno en abetos conectados con hayas y
alisos. La transferencia puede ocurrir de forma bidireccional, como se ha visto para el carbono entre árboles
lluvia que los suelos cubiertos
por pastos o matorral, y 18 veces más que el suelo desnudo.
Por ello, tienen la propiedad de
retener grandes cantidades de
agua. Además, son los ecosistemas que más agua producen:
al caer, la lluvia es captada y
asimilada por la espesa vegetación, cae al suelo como “agua
madre”, se capta por la raíces
y se evapora nuevamente para contribuir a formar nubes
sobre la propia formación boscosa, si ésta es de envergadura
y la dinámica de la atmósfera
lo permite. Al filtrarse en el
subsuelo (con la ayuda de la
14
en bosques de abedules y abetos. En este último caso,
se ha podido estimar que la ganancia neta de carbono
del abeto, en comparación al abedul, representa el 6%
de la cantidad que fija este último por fotosíntesis, y
que la transferencia neta de carbono entre ambos varía según el grado de sombreado del abedul: a mayor
cantidad de luz recibida, menor transferencia neta. Mediante este tipo de procesos, un bosque funciona como
un todo; el carbono puede pasar de plantas bien iluminadas a plantas sombreadas, influyendo en la dinámica
del ecosistema, ya que promueve la coexistencia y la
diversidad de especies. Bajo esta óptica, las ectomicorrizas (micorrizas que se desarrollan sin penetrar en el
interior de las células de las raíces de los árboles) son
un importante elemento en el mantenimiento la biodiversidad vegetal en los bosques. Como dato curioso, en
el año 2000 se descubrió uno de los organismos vivos
más grandes que se conocen, un hongo micorrícico
(Armilaria ostoyae) que se extiende unas 900 hectáreas en un bosque de Oregón.
con la altura en la atmósfera).
Así, esta reserva subterránea y
constante de agua es liberada
lenta y gradualmente, ayudando
a evitar las inundaciones y sequías estacionales. Este bombeo
de agua es esencial en el ciclo
del agua a nivel global. A mayor
vegetación, mayor presencia
de lluvia. Cuando se condensa
la humedad generada por el
bosque a baja altura, como
sucede en las zonas selváticas
y bosques de montaña, se incrementa la lluvia; en cambio en las
zonas deforestadas, las nubes
se forman a gran altura y son
presa fácil de los vientos, que
enclave. Los grandes bosques
lluviosos (y su humedad) contribuyen a la formación de nubes
de lluvia y generan alrededor
del 75 por ciento de su propia
precipitación. El bosque lluvioso
del Amazonas es el responsable
de crear el 50 por ciento de su
propia lluvia.
29
¿Son egoístas los
árboles de los bosques
con los nutrientes
minerales?
DD
Todos los seres vivos necesitamos nutrientes para
construir nuestra biomasa.
DD
Aunque generalmente hablamos de “lluvia ácida”, es más general usar el concepto
de “deposición ácida”, que incluye además niebla, bruma o nieve con más acidez de lo
normal (con un pH inferior a 5,5). Asimismo, se llama genéricamente “precipitación
ácida” a la combinación de deposición y caída de partículas ácidas secas que también
existen en la atmósfera. Se origina cuando las emisiones de dióxido de azufre y óxidos
de nitrógeno, generados fundamentalmente por la actividad industrial, reacciona con
los radicales hidroxilos y el vapor de agua de la atmósfera, formando sus ácidos respectivos. Origina un problema transnacional, ya que sus desencadenantes se originan
en un lugar pero pueden afectar a otros debido al movimiento de las masas de aire.
Mucho del daño de la precipitación (lluvia) ácida a los bosques se debe a reacciones
químicas en los suelos: la deposición ácida libera aluminio (tóxico) a los suelos al bajar el pH del suelo; el agua ácida disuelve determinados nutrientes minerales (como
calcio y magnesio) y los arrastra consigo antes de que los árboles y otras plantas
puedan usarlos para su crecimiento. Además, ocasiona la pérdida de nutrientes en las
hojas y disminuye la resistencia de los árboles a los daños producidos por otros factores ambientales, por ejemplo, el frío del invierno o la sequía veraniega. Con mucha
frecuencia, los daños que sufren los árboles son consecuencia no sólo de los efectos
negativos de la lluvia ácida, sino de su combinación con uno o más factores agresores
que los debilitan. La deposición ácida ocasiona el crecimiento retardado, el daño, degradación o muerte de bosques terrenos de muchas regiones industriales del planeta,
y está muy relacionada con la declinación mundial de los bosques actuales.
Los bosques acumulan gran
cantidad de biomasa y, por tanto, muchos nutrientes que no
quedan a disposición de otros
seres vivos. Por esto ¿debemos
considerarlos egoístas? De
forma natural, los ecosistemas
evolucionan desde fases juveniles (p.e. un herbazal) hasta fases
maduras (p.e. un bosque), en un
proceso que puede durar cientos o miles de años. Con respecto los nutrientes minerales,
existe un importante cambio en
el funcionamiento del ecosistema desde una fase a otra. Por
ejemplo, entre un matorral colonizador, incipiente, con pasti-
trientes es más cerrado y se escapan menos nutrientes hacia
otros ecosistemas limítrofes.
El bosque constituye un almacén de nutrientes que permite
un procesado eficiente de los
mismos, en equilibrio con una
alta biodiversidad y una elevada estabilidad. La retención de
nutrientes del bosque, tanto en
la selva como en la zona mediterránea, permite un eficiente
uso de los mismos y genera un
“mercado sostenible” de ellos a
largo plazo. Cuando un bosque
se quema o tala, los nutrientes
retenidos circulan por fases no
biológicas y se pierden para
una gran parte de los ecosistemas, además de generar cantidades no procesables por los
sistemas biológicos y con ello,
un desaprovechamiento de nutrientes que irán a sumideros
alejados en tiempo y espacio de
la vida como, por ejemplo, los
fondos oceánicos.
31
¿A todos los árboles
les “cuesta” lo mismo
hacer una hoja?
DD
Las hojas constituyen un
elemento fundamental en los
bosques, son el gran aparato
fotosintético. Sin embargo, no
son gratuitas; exigen nutrientes para su construcción y tienen un gasto de mantenimiento. Por otro lado son sensibles
a los factores ambientales, por
eso existen especies de hoja
perenne y de hoja caduca. Las
especies caducifolias eliminan
sus hojas tras recibir una señal
preceptiva, antes del invierno,
ya que no pueden mantener el
gasto que supone su persistencia en una estación limitante
para la fijación de carbono. Este
tipo de plantas vuelve a generar todas las hojas que precisa
tras el paso de la estación. En
forma de carbono y nitrógeno,
es más “barato” tirar las hojas
cada año y hacerlas de nuevo
que mantenerlas. Las especies
perennifolias son capaces de
fijar carbono sin perder agua
ni sufrir por frío excesivamente
durante el invierno, por lo que
sí pueden permitirse el gasto
de mantenimiento. Aunque no
pierden el total de hojas una
vez al año, las especies perennifolias también renuevan sus
hojas, pero lo hacen poco a
poco. La vida de las hojas no
es igual en todas las especies y
también varía con las condiciones limitantes del medio. Como
ejemplo, en un bosque de pinos en las dunas de la cuenca
mediterránea, donde el medio
es escaso en nutrientes, la
producción de hojas es “cara” y
las acículas pueden durar en el
árbol varios años para “amortizar” su construcción.
15
Andalucía InNOVA. FEBRERO 2011
100 preguntas, 100 respuestas
32
37
¿De dónde obtienen
nuestros árboles el
agua?
¿Qué ocurre cuando
se rotura la selva
tropical?
DD
En el complejo mundo del
suelo, los árboles pueden obtener el agua de fuentes diversas:
de la lluvia que se infiltra, de
bolsas acumuladas, de niveles
freáticos más o menos profundos, de la niebla o condensación del agua atmosférica, o de
cauces de agua más o menos
permanentes. En un mismo
bosque pueden coexistir árboles que utilicen distintas fuentes de agua, pero ¿cómo hacen
los científicos para conocer de
qué fuente obtiene el agua una
planta? La solución la dan las
recientes técnicas de análisis
de isótopos estables, es decir,
de diferenciar elementos químicos de la tabla periódica que
presentan el mismo número de
electrones y protones, pero que
difieren en el número de neutrones en su núcleo y, por tanto,
en su peso molecular (las llamadas formas isotópicas de los
elementos, o isótopos). Estos
isótopos sirven de marcadores
naturales, de forma que podemos comparar la proporción
de isótopos de hidrógeno y oxígeno de las diferentes fuentes
de agua del entorno con la del
agua de los vasos conductores
de las plantas (xilema), e identificar la fuente que la, planta
utiliza en cada momento.
33
¿Por qué en los bosques
boreales hay mucha
materia orgánica
sobre el suelo y en los
bosques tropicales muy
poca?
DD
Resulta llamativo caminar
por un determinado bosque
boreal, o por ciertos bosques
de montaña, o por los bosques
sobre dunas de la costa oeste
europea y percibir como nuestros pies se hunden en una
masa de materia orgánica sin
descomponer o en estadios
variables de descomposición.
Sin embargo, si caminamos por
un bosque tropical no existe
16
34
35
DD
Para que exista un fuego forestal hace falta que coincidan tres elementos que son: calor
(temperatura ambiente), comburente (oxígeno) y combustibles (biomasa forestal); juntos
forman el denominado triángulo del fuego. En estas condiciones, basta un pequeño foco de
ignición para que se desencadene un fuego. La forma de combatir el fuego es atacando alguno de estos tres elementos. Para combatir el calor se utiliza el agua, debido a su elevado
calor específico y calor latente de evaporación, que se puede incrementar además mediante retardantes químicos. Para combatir el comburente se utilizan distintas técnicas de sofocación, como son arena, espuma y batefuegos y, finalmente, se trata de eliminar con medios
manuales o mecánicos los combustibles cercanos al incendio, evitando así su propagación
y extinguiéndose el incendio por falta de éste. El fuego se puede atacar de forma directa,
por ejemplo, mediante el avión que vierte agua sobre el incendio, o de forma indirecta, por
ejemplo, limpiando el monte y creando cortafuegos. Otra técnica de ataque indirecto es el
contrafuego o utilización de un fuego controlado para sofocar el incendio.
DD
INFOCA es el acrónimo de Plan de Prevención y Extinción de Incendios de Andalucía
y pertenece a la Consejería de Medio Ambiente. Este plan conlleva tres tipos de acciones:
prevención, extinción y labores complementarias a la extinción. Las principales acciones
de prevención son las actividades vinculadas a la selvicultura preventiva, que es conveniente realizar en los terrenos forestales para manejar su combustible vegetal mediante la
creación y mantenimiento de áreas o líneas cortafuegos y fajas auxiliares a lo largo de los
caminos. El plan INFOCA posee una infraestructura especializada que le permite desarrollar
labores de extinción muy eficaces, como son las instalaciones propias que realizan funciones de coordinación y movilización de los medios disponibles, así como la formación, adiestramiento y permanencia de los medios humanos, el almacenamiento de materiales y un
sistema muy desarrollado de medios terrestres y aéreos. Dentro de las labores complementarias están la investigación de las causas del incendio y la participación en la restauración
de zonas incendiadas.
¿Cómo se combate un incendio forestal?
tal sensación. Pero vemos los
grandes árboles de las selvas
y nos peguntamos, si no hay
materia orgánica en el suelo,
¿de dónde sacan los nutrientes
para su biomasa? La clave está
en la rapidez del proceso de la
descomposición en los bosques
de los trópicos. Existe abundancia de nutrientes pero está
concentrada en la biomasa de
los grandes árboles. La materia orgánica en estos casos se
descompone por una actividad
enorme de organismos descomponedores y detritívoros,
facilitada por la alta humedad y una temperatura alta y
estable. Los árboles generan
mucha materia orgánica, que
va al suelo, se descompone y es
captada de nuevo rápidamen-
te por los propios árboles del
bosque a través de las raíces.
De esta forma, el suelo no es
fértil; la fertilidad se halla en
los árboles, gracias a un rápido y eficiente reciclado de los
nutrientes en el suelo. Este
proceso de devolución de los
nutrientes minerales al suelo es
la mineralización, que es rápida
en la zonas tropicales pero lenta en las altas latitudes. En las
zonas de latitud más elevada, el
frío impide tal proceso y la materia orgánica permanece en el
suelo sin descomponerse, o con
una descomposición lenta. La
biodiversidad de descomponedores y detritívoros, así como
su grado de especialización, es
mucho menor en estas zonas,
lo cual empobrece la capaci-
¿Qué es el INFOCA?
dad de procesamiento de la
hojarasca y otros restos y su
incorporación al suelo como
nutrientes minerales.
36
¿Por qué crecen setas
en los bosques?
DD
Los bosques mantienen las
condiciones de humedad y
temperatura precisas que las
setas necesitan para crecer,
por lo que son más abundantes en ellos. Las setas no son
más que el tipo de fruto que
dan los hongos, los cuales viven dentro del suelo en forma
de finos filamentos o hilillos
llamados hifas, y que crecen
como una red finísima que se
alimenta descomponiendo la
materia orgánica. Entre los
hongos productores de setas, los hay específicos de la
madera, que crecen sobre los
troncos en descomposición.
Otros crecen sobre otros tipos
de materia orgánica, tales
como excrementos o simplemente sobre suelos orgánicos
(humus). Otros son capaces de
establecer relaciones simbióticas con las raíces de ciertas
especies de plantas, formando
lo que se llaman las micorrizas. Entre estos últimos,
algunos establecen relaciones
con una sola especie de árbol,
por lo que las setas o frutos
que producen sólo se encuentran debajo de ellos: es el caso
del níscalo y los pinos, de los
faisanes y los robles, o de las
trufas y las encinas.
DLa
D evolución de los suelos
depende en gran medida del
clima. En las zonas tropicales, de
temperaturas elevadas y abundantes precipitaciones repartidas a lo largo de todo el año, se
encuentran los llamados suelos
lateríticos. Éstos se caracterizan
por una intensa meteorización
química (es decir, una fuerte
desintegración y descomposición de la roca madre que forma el suelo como consecuencia
de su exposición a los agentes
atmosféricos y la participación
de agentes biológicos) y una
intensa actividad microbiana.
Esto impide la acumulación de
materia orgánica o humus. Así,
estos suelos carecen de lo que
se llama horizonte A, donde se
acumulan los nutrientes, debido a un intenso lavado por las
lluvias. En ausencia de ácidos
húmicos, ciertas sustancias como los sesquióxidos de hierro y
aluminio son insolubles y precipitan formando una costra rojiza muy dura llamada laterita en
el llamado horizonte B (superficie de suelo que se forma bajo
el horizonte A). Estos suelos
lateríticos, donde se desarrolla
la selva tropical, se caracterizan por su baja fertilidad y los
nutrientes se encuentran retenidos fundamentalmente en
las plantas. Cuando se rotura la
selva para utilizarla como área
de cultivo, la materia orgánica
y los nutrientes que quedan se
pueden aprovechar durante un
periodo de tiempo muy corto.
Pasados dos o tres años, como la
cantidad de nutrientes es baja y
la actividad microbiana es tan intensa, todo se ha perdido y donde existía una selva con multitud
de estratos vegetales (árboles
de diferentes altura formando
grandes bóvedas, pequeños
árboles y arbustos, hierbas de
tamaño descomunal y otras más
pequeñas, viviendo en el suelo o
sobre los árboles) y rica en biodiversidad, se ha convertido en un
desierto..
17
Andalucía InNOVA. FEBRERO 2011
100 preguntas, 100 respuestas
38
¿Se estresan los
árboles?
DD
Por supuesto, como cualquier otro ser vivo. La falta de
agua o su exceso, las altas o
bajas temperaturas, los niveles
de iluminación, la disponibilidad de elementos minerales, el
crecimiento conjunto con otras
plantas y animales o las continuas agresiones que la actividad
humana provoca sobre el medio
natural, pueden convertirse
en condiciones desfavorables
para el crecimiento y desarrollo
de las comunidades vegetales
boscosas. Estas circunstancias negativas se consideran
situaciones de estrés, ante las
cuales los vegetales reaccionan
poniendo en marcha diversos
mecanismos de defensa que
les permiten sobrevivir. Activar
estos mecanismos le supone un
alto gasto de energía a la planta
y, por tanto, compromete su
desarrollo. Actualmente se lleva
a cabo un gran número de investigaciones que intentan arrojar
luz sobre los mecanismos de
defensa de las plantas frente a
situaciones de estrés. Su conocimiento nos permite entender
mejor el funcionamiento vegetal
en su contexto comunidadecosistema-bosque y, además,
permite aplicaciones prácticas
como el desarrollo de cultivos
más resistentes.
39
¿Pueden vivir centenas
de especies sobre un
solo árbol?
DD
En la selva amazónica, uno
de los puntos calientes de mayor biodiversidad del planeta,
podemos encontrar árboles
que ofrecen nichos para más
de una centena de especies de
escarabajos y arañas, específicas
de cada especie de árbol, y que
dependen estrechamente de
la supervivencia de éstos. Estas
especies llegan a ser casi mil si
contamos las que pueden vivir
sobre cualquier otra especie
arbórea. Si a esto sumamos las
especies de aves que anidan, los
mamíferos, reptiles e incluso
18
40
¿Cuántas hectáreas de
bosque se destruyen al
año?
DD
Actualmente se estima que cada año
desaparecen más de 13 millones de hectáreas de bosques en todo el mundo. Según
datos de WWF (World Wildlife Fund), solamente en la pasada década se produjo una
pérdida neta de superficie forestal de 93,9
millones de hectáreas. Durante este mismo
periodo se transformaron bosques naturales en plantaciones agrícolas y forestales a
un ritmo de 16,1 millones de hectáreas al
año, el 94 % en zonas tropicales, siendo las
plantaciones agrícolas (p.e. monocultivos
de soja y palma aceitera) las responsables
del 70% de esta transformación. Imagen
capturada por un satélite de observación
de la NASA.
anfibios que desarrollan su vida
sobre los árboles de la selva,
además de otras especies de
plantas (epífitas -como las bromelias o la costilla de Adán- y
lianas), seguramente la cifra
supere el millar (de especies, el
número de individuos seguramente fuera mayor). Por tanto,
la pérdida de árboles selváticos,
no sólo supone un descenso en
la masa forestal sino también, la
pérdida de especies singulares
que no se encuentran en ningún
otro sitio.
41
¿Qué puede hacer una
pequeña planta en un
bosque cerrado para
alcanzar la luz del sol?
DD
Las plantas utilizan la luz como una fuente de energía para
convertir el dióxido de carbono
y el agua en compuestos orgánicos de carbono. La cantidad
de luz que llega al suelo de un
bosque varía con la cantidad y la
posición de las hojas en el estrato vegetal, principalmente de los
árboles. Así, en cubiertas vegetales muy densas, las “lloviznas”
de luz que llegan al suelo deben
servir para que determinadas
plantas sobrevivan. Las plantas a
las que llega poca luz hacen más
eficiente la escasa fotosíntesis
que realizan y crecen más lentamente, pudiendo responder
eficazmente durante cortos periodos de tiempo a salpicaduras
de luz. En las regiones templadas, la luz que llega al suelo varía
dependiendo de la caducidad
de las hojas de las especies más
altas. Si existe un aumento de la
luz debido a la perdida de hojas
de los árboles más grandes, las
plantas pequeñas completan
su ciclo vital en este tiempo. Sin
embargo, existe una estrategia
llamativa que cumplen las denominadas plantas epífitas. Éstas
crecen sobre otras plantas, “trepando” sobre ellas para captar
más luz, y por lo general no perjudican a la planta sobre la que
viven. Es así como sobreviven el
90% de las especies de orquídeas en las selvas tropicales, o
plantas trepadoras como las
lianas, que buscan soporte en
los troncos de los árboles para
poder ascender a lugares más
iluminados.
42
¿Qué es un sumidero
natural de carbono?
DD
El CO2 no es más que una de
las formas que toma el carbono
dentro de lo que se denomina
el Ciclo Biogeoquímico del Carbono. Éste está compuesto por
una serie de compartimentos o
almacenes en los que el elemento
puede aparecer en nuestro planeta (rocas, océanos, atmósfera,
estructuras vivas, etc.) y una serie
de circuitos o flujos de paso entre
compartimentos (difusión entre
atmósfera y océano, emisión de
CO2 por volcanes y combustión
de materia orgánica y fósil o
43
¿Cuáles son los principales países del mundo
involucrados en el comercio de madera?
DD
Anualmente, se cosechan en el mundo unos 1.600 millones de m3 de madera
industrial. Este recurso proviene principalmente de bosques (y otras superficies
forestales) de coníferas, que se procesa para obtener pulpa, madera aserrada
y tableros. En la última década y según datos de la FAO, Japón ha sido el principal importador mundial de recursos madereros. Principalmente, los japoneses
importan madera de la zona del sudeste asiático y su destino final suele ser la
decoración del hogar. En la lista de principales importadores de madera, tras
Japón, encontramos a la Unión Europea, Corea del Sur, Tailandia (país exportador
hasta hace poco) y EEUU Estos países ejercen esta presión comercial sobre África, además de sobre América Latina en el caso de EEUU Algo más del 60 % de la
exportación de madera procedente de los bosques tropicales tiene como destino
diferentes países industrializados del hemisferio norte. En los últimos cuarenta
años, este consumo de maderas tropicales se ha multiplicado en más de dieciséis
veces. Los bosques tropicales proporcionan alrededor del 30% de las exportaciones en tronco, el 10% de tableros y el 60% de madera contrachapada. En los
últimos años, estas corrientes comerciales se están viendo reguladas por ciertas
normativas, cada vez más estrictas, sobre la ordenación forestal, así como por las
fluctuaciones en los costes de producción, los tipos de cambio monetario y las
inversiones en tecnología e infraestructura.
secuestro de carbono por seres
vivos como corales u organismos
fotosintéticos). Durante la fotosíntesis, las plantas toman CO2
de la atmósfera, asimilándolo
en sus estructuras. El tiempo
de residencia del carbono en la
vegetación puede ser de decenas,
centenas e incluso millares de
años. En el momento actual, esta
función tiene especial interés
porque ayuda a frenar los efectos
negativos del exceso de emisiones de CO2 de origen humano,
que están provocando el efecto
invernadero. De esta forma, se
suele decir que los bosques son
sumideros de dióxido de carbono,
cumpliendo un importante papel
en el ciclo de este elemento. El
proceso de captación de carbono
por fotosíntesis es además un
proceso natural y sostenible,
frente a otros modelos de captación artificial que implican
importantes costes y riesgos ambientales asociados.
44
¿Qué importancia
tienen los bosques en el
protocolo de Kioto?
DD
El protocolo de Kioto fue
esbozado en la llamada Cumbre
de la Tierra de Río de Janeiro
(1992), dentro de la Convención
Marco de las Naciones Unidas
sobre el Cambio Climático. Los
países industrializados lo firman
en 1997 y, en febrero de 2005,
la mayoría de ellos (entre ellos
España) ratifican los compromisos adquiridos y el protocolo entra en vigor. Su estrategia base
es asignar a cada país firmante
ciertos límites (a alcanzar antes
de 2012) de emisión de gases
de efecto invernadero de origen
humano (principalmente CO2),
responsables del calentamiento
global. Así, uno de los mecanismos que propone es potenciar y
mejorar los sumideros naturales de CO2 como forma de compensar el exceso de emisiones,
evitando reducir el desarrollo
económico y buscando un horizonte de sostenibilidad. Las
plantas (y debido a su tamaño,
especialmente los árboles) retiran cantidades de ingentes de
CO2 de la atmósfera, liberando
en cambio O2 en su proceso fotosintético. Los bosques son por
tanto potentes sumideros de
este gas de efecto invernadero,
convirtiéndose en elementos vitales en la lucha contra el cam-
bio climático. Actualmente, una
infinidad de estudios científicos
indagan en las consecuencias
presentes y posibles del calentamiento global a diferentes
niveles, buscando cómo atenuar
sus efectos y cómo potenciar
aquellos factores que lo mitiguen. Entre estos factores se
encuentran, sin duda alguna, los
bosques en su función de sumideros naturales de CO2.
45
¿Cuánto gas de efecto
invernadero retiran al
año de la atmósfera los
bosques andaluces?
DD
Ciertos gases acentúan
la capacidad que tiene la atmósfera para dejar pasar los
rayos del sol hacia la superficie
terrestre pero dificultar su
salida en forma de radiación
infrarroja (calor). El aumento
de concentración de estos
gases en la atmósfera conduce a un calentamiento global
más acusado de lo natural
(“efecto invernadero”). Aunque
existen diferentes gases de
efecto invernadero (metano
-CH4- , óxidos de nitrógeno
-NxOy-, también ozono -O3-,
hidrofluorocarbonos -HFCs-,
perfluorocarbonos -PFC- o
derivados del azufre como el
hexafluoruro de azufre -SF6-),
la contribución del dióxido de
carbono (CO2) a dicho efecto
se estima en un 60% del total, por lo que se lo considera
la estrella del calentamiento
global. De la cantidad que se
emite a la atmósfera cada año,
el ser humano es responsable
del 70%. Los bosques, como
sumideros naturales de CO2,
son capaces de absorber y
retener en sus estructuras cantidades considerables de este
gas. Se estima que las masas
arbóreas forestales andaluzas
(entre ellas los bosques) retiran
anualmente alrededor de 7,5
millones de toneladas de CO2,
lo equivalente a las emisiones
de 1.386.501 coches que consuman unos 5,7 l de gasoil/100
Km, recorriendo un total de
100 Km todos los días del año.
19
Andalucía InNOVA. FEBRERO 2011
100 preguntas, 100 respuestas
46
¿Existen bosques en las
ciudades?
DD
Más bien, existen ciudades
rodeadas de bosques, aunque
sean reforestaciones como en
el caso de ciudades alemanas
como Frankfurt o Colonia. Sin
embargo, la presencia de numerosos árboles y plantas en
nuestras ciudades (lo que se denomina el sistema verde urbano)
nos conecta de alguna forma
con nuestra parte natural. Los
parques urbanos, periurbanos,
plazas y jardines se configuran
como retales de pequeños “bosques” artificiales, en los que el
arbolado viario se comporta
como una red de “corredores
verdes”, no sólo para la fauna
urbana, sino para uso y disfrute de todos los ciudadanos:
viandantes, ciclistas o usuarios
de vehículos automóviles. Los
sistemas verdes urbanos, bien
desarrollados y articulados, nos
proporcionan una importante
fuente de oxígeno, son potentes
sumideros de CO2 atmosférico
(principal gas responsable del
efecto invernadero), interceptan
las partículas contaminantes del
aire, conservan la humedad del
ambiente y atenúan las temperaturas extremas, suavizando
las consecuencias del cambio
climático, conducen el agua de
lluvia hasta el suelo, mejoran la
calidad paisajística y estética
de las calles y son importantes
puntos de contacto con la naturaleza en la misma ciudad. En
este argumento se basa la línea
de acción del proyecto “Bosques
por Ciudades”, de la Consejería
de Medio Ambiente, que plantea
la evaluación y mejora de los
sistemas verdes de 8 municipios
repartidos por toda Andalucía,
como modelos de gestión para
el secuestro de CO2 en términos
de mitigación y atenuación de
los efectos del cambio climático.
necesario asegurar el “pago
por servicios ambientales” de
los bosques y otros ecosistemas, de cara a frenar la pérdida
de biodiversidad en Europa. Esta herramienta, que constituye
una fuerte inversión pública en
el sector forestal, se ha aplicado de forma pionera en Costa
Rica y se viene desarrollando
en muchos otros países. Se
basa en “contratos” “voluntariamente” establecidos entre
productores y administración
con pagos “condicionados” a su
cumplimiento.
48
¿Son bosques las dehesas?
DD
La definición actual de bosque que acepta la mayoría de ecólogos trasciende la simple estructura de formación vegetal con una condición suficiente de cobertura arbórea
y altura de árbol determinadas (donde se pueden incluir plantaciones y monocultivos
pobres en estructura, diversidad y funciones). Así, la dehesa es un bosque manejado,
transformado: han sido creadas por el hombre a partir de bosques mediterráneos originales, aclarando el número de árboles (principalmente encinas y alcornoques) y eliminando o minimizando el estrato arbustivo para poder aprovechar el sotobosque herbáceo (pastoreo y cultivo esporádico) y los propios árboles (fuente de leña y alimento para
el ganado). Como resultado, las dehesas tienen una estructura similar a la de las sabanas (árboles dispersos y sotobosque herbáceo, que son en origen formaciones naturales
pero no se consideran bosques). En este sistema agrosilvopastoral, modelo de gestión
sostenible, está perfectamente integrado el aprovechamiento de los recursos naturales
con la conservación de sus valores ambientales y ecológicos. Este aprovechamiento ha
consistido, tradicionalmente, en la obtención de pastos y frutos para la alimentación de
una ganadería extensiva (productora de alimentos) y de recursos cinegéticos. Además,
proveen de una gran variedad de productos forestales como el corcho. Actualmente
se están desarrollando otros usos como el agroturismo y la obtención de productos
ecológicos (miel, polen, setas,...). La gestión y manejo de las dehesas ha generado, por un
lado, renta y empleo en las zonas donde se encuentran, contribuyendo a evitar el despoblamiento de territorios en los que apenas hay otras alternativas productivas. Por otro,
permite la conservación de la diversidad biológica, donde se incluyen algunas de nuestras especies más amenazadas tales como el lince, el buitre negro o el águila imperial
ibérica. Las dehesas forman, inevitablemente, parte de nuestro paisaje y tradición. En
2002 se declararon Reserva de la Biosfera a las Dehesas de Sierra Morena que, con sus
424.000 hectáreas, se convierte en la mayor de España.
¿Qué papel tiene la ganadería en nuestros
bosques?
DD
Nuestros bosques, al igual que el resto de nuestros ecosistemas, son el reflejo de
una larga interacción entre el hombre y el medio natural. El aprovechamiento ganadero
de los montes es una práctica ancestral y muy extendida en nuestro territorio. Se denomina cría extensiva cuando la mayor parte de la dieta proviene del pasto en el medio
natural. Es lo que ocurre con los rebaños de ovejas o cabras que son conducidos por los
pastores en busca de los pastos más adecuados, rotando entre unas parcelas y otras para permitir un aprovechamiento que no comprometa su regeneración. Su expresión más
extrema lo constituye la trashumancia, que implica el recorrido de cientos de kilómetros,
hacia el sur en invierno y hacia el norte en verano. La acción del ganado en los montes
mantiene el pasto corto, reduciendo la cantidad de material inflamable en el verano. Bien
dirigidos, los rebaños son una manera barata y eficiente de mantener los cortafuegos
de las zonas forestales para que cumplan su función. También pueden ayudar a mantener controlada la vegetación del sotobosque para evitar la propagación del fuego en un
eventual incendio. Aunque una presión de ganadera excesiva puede perjudicar a ciertas
especies vegetales y a la calidad de los suelos, la ausencia de ganado en los montes y
bosques obliga a realizar labores de limpieza de cortafuegos y de sotobosques.
47
¿Qué son los servicios
ambientales de los
bosques?
DD
Los bosques producen múltiples beneficios a los seres huma-
20
nos, reconocidos como servicios ambientales o servicios de
ecosistema. Dichos servicios se
pueden dividir en cuatro grupos: de provisión (alimentos,
madera y fibras); de regulación
(del clima, inundaciones, enfermedades y calidad del agua);
culturales (valores espirituales,
estéticos, recreación y educa-
ción), y de apoyo (formación de
suelos, producción primaria y
reciclaje de nutrientes). Desde
la Conferencia Europea de Biodiversidad (2007), se considera
51
¿Qué recursos generan
los bosques?
¿Qué relación existe
entre la estructura
microscópica
de la madera y
sus diferentes
propiedades?
DD
Las ventas de productos
forestales son un indicador
deficiente del uso total que las
personas hacen de los bosques.
A nivel mundial, las cuatro
quintas partes de los ingresos
de las comunidades a partir de
los bosques proceden de productos que nunca entran en el
mercado. Los bosques, además
de la madera y de productos
forestales comerciales no
maderables, tienen otro valor
no monetario o valor de consumo para la población local
(leña, fruta, bayas, setas, frutos
secos, hortalizas, forraje para
el ganado doméstico, carne,
productos medicinales...), ya
para consumo personal o para
un comercio muy local (ferias),
que proporcionan apoyo diario
a las familias que viven en las
zonas próximas, llegando a ser
en ocasiones un medio suplementario para la obtención de
ingresos. Como ejemplo, los
productos forestales vegetales que se extraen en China
(fundamentalmente semillas
aceitosas, nueces y brotes de
bambú) suponen el 74% de
su alimentación. En la India, la
mitad de las extracciones de
materias primas vegetales están destinadas a la fabricación
de medicamentos o productos
aromáticos. Según la Evaluación de los Recursos Forestales
Mundiales 2010 de la FAO,
durante el periodo 2005-2010
DD
Las características que definen la madera como materia
prima dependen en gran medida de la organización histológica del xilema, tejido leñoso encargado del transporte de agua
y solutos formado por células
muertas huecas (tráqueas)
y fibras, que dan fortaleza al
cuerpo de las plantas, con compuestos acumulables asociados
(taninos, gomas y resinas). Entre las propiedades básicas de
la madera podemos destacar la
densidad, fortaleza, durabilidad
y flexibilidad. La densidad depende de la proporción de células huecas, grosor de sus paredes y cantidad de fibras. Por
ejemplo, el género Diospyrus
(ébano) se caracteriza por tener
una madera densa, y Ochroma
(madera de balsa) sumamente
ligera, con células de paredes
muy finas y pocas fibras. La
fortaleza se debe fundamentalmente a la abundancia de
fibras leñosas. La durabilidad
depende de la resistencia al
ataque por bacterias y hongos
determinada, en parte, por la
presencia de resinas, taninos,
etc. Así, las Secuoyas (Sequoia
spp.) poseen madera muy
resistente mientras que la de
álamos y chopos (Populus spp.)
es sensible a las infecciones. La
flexibilidad se asocia a una estructura histológica (de tejidos)
homogénea, con fibras largas y
alta capacidad de retener agua.
50
49
la leña constituyó más del 70%
de la madera extraída en Asia
y el Pacífico y más del 90%
en África. La Organización
Mundial de la Salud calculó en
2008 que en algunos países de
África y Asia, al menos el 80%
de la población depende de la
medicina tradicional derivada
de productos de los bosques
y otros ecosistemas para su
atención primaria.
21
Andalucía InNOVA. FEBRERO 2011
100 preguntas, 100 respuestas
52
¿Qué importancia tiene
adquirir muebles y
productos procedentes
madera certificada?
DD
Como respuesta a la preocupación sobre la presión a la que
están sometidos los bosques y
las comunidades dependientes
de los mismos a escala mundial, surge el sistema de “certificación” de madera, un aval
que garantiza al consumidor
que los productos que adquiere
han sido obtenidos de bosques bien gestionados desde
un punto de vista económico,
social y ambiental, asegurando
que la compra de muebles,
papel, tableros o carbón, no ha
contribuido a la destrucción de
las masas arbóreas o a la explotación laboral de otras personas. El sistema de certificación
de madera más destacable es
el de la organización internacional sin ánimo de lucro FSC
(Forest Stewardship Council).
El consejo surge en 1993 como
un forum de consenso integrado por países del Norte y del
Sur y organizaciones grandes
y pequeñas (miembros representantes de grupos sociales y
ambientales, de comerciantes
de madera y forestales, organizaciones de pueblos indígenas,
grupos comunitarios de forestales y organizaciones certificadoras de productos forestales
de todo el mundo), y aplica las
directrices de sus miembros
para desarrollar sistemas de
manejo y formas de custodia
de los bosques. El FSC ratificó
en 1996 los principios que definirían la gestión y uso responsable de este recurso natural.
La etiqueta o marca registrada
del FSC permite identificar el
origen de un producto e incentiva la conciencia ambiental
sobre la gestión responsable
y preservación de los recursos
naturales. Además, el Consejo
desarrolla procedimientos de
vigilancia y acredita a las agencias certificadoras a escala
mundial que, a su vez, certifican
bosques y plantaciones mediante técnicos especializados.
22
Está representado en más de
50 países, entre ellos España, y
es miembro de organizaciones
de conservación de la naturaleza como la UICN.
túan juntos ni de igual forma
sobre las diferentes masas de
quercíneas enfermas, sin embargo, en ocasiones dan lugar
a los mismos síntomas: defoliación, muerte de ramas, abundante emisión de renuevos,
necrosis del sistema radical y,
finalmente, la muerte del árbol
completo.
53
¿Qué es una plaga
forestal?
DD
El concepto de plaga forestal, se refiere a todos los animales, plantas y microorganismos
que tienen un efecto negativo
sobre la producción de bosques
y otras superficies forestales.
Este concepto es antropocéntrico e incluye el elemento
económico para determinar
cuándo una especie puede ser
considerada como plaga. Es
decir, podemos tener en un
bosque un millón de individuos
de un insecto pero éste no será considerado insecto-plaga
hasta que no ejerza un daño
que percibamos desde el punto
de vista económico. Según la
FAO, una plaga es “cualquier
especie, raza o biotipo vegetal
o animal o agente patógeno
dañino para las plantas o productos vegetales”. Así, las plagas no siempre son insectos;
existen muchos mamíferos y
aves (p.e. el rabilargo) que son
consideradas como tal. Directamente proporcional a la diversidad y cantidad de especies
arbóreas que hay en el bosque
mediterráneo es casi también
la cantidad de plagas que habitan en ellos. Con respecto a las
variedades de plagas forestales
de insectos, la FAO, en su programa de Manejo Integrado de
Plagas, registraba hasta 2002
que un 80% de los registros
de intercepciones de plagas
correspondía a insectos del orden Coleópteros (escarabajos),
seguido en importancia por el
orden Hymenópteros (avispas y
similares).
54
¿Qué es la seca o
decaimiento de los
Quercus?
DD
La seca es una enfermedad
que sufren varias especies de
árboles del género Quercus,
56
55
¿Cuál es la madriguera
preferida del lince
ibérico?
DD
Los grandes huecos de troncos viejos
de alcornoques y encinas, típicos del
bosque mediterráneo, son los preferidos
por este gran felino como zona de cría y
descanso. Precisamente, una de las actuaciones más importantes que se están
llevando a cabo para la recuperación del
lince ibérico en la Reserva Biológica de
Doñana, es colocar troncos de alcornoques huecos a fin de aumentar el número de madrigueras y favorecer así que
más individuos consigan reproducirse
a salvo, lejos de carreteras y cazadores
furtivos. La colocación de este tipo de
madrigueras posee una importancia
capital, no sólo para el caso de Doñana, sino también para las gestiones de
conservación llevadas a cabo en Sierra
Morena, donde se encuentra el núcleo
poblacional más importante de esta
especie. El felino más amenazado del
planeta se enfrenta hoy día a la prueba
más difícil para su especie; evitar la
endogamia causada por los pocos individuos que quedan, y conseguir que la
cría efectiva de cachorros sea cada vez
más común en la naturaleza, gracias en
parte a este tipo de estructuras seminaturales.
principalmente la encina y el
alcornoque. Se define como un
síndrome cuyas causas son numerosas y complejas, resultado
de la confluencia de factores
bióticos y abióticos que producen, en fin, un debilitamiento
de los árboles afectados que
puede causar su muerte, ya de
forma gradual o súbita. Durante los últimos años se han realizado estudios para determinar
los factores más importantes
que actúan sobre los árboles y
causan el decaimiento de las
masas forestales. Entre estos
cabe destacar: el ataque de
hongos como Phytophthora
cinnamomi, que provoca la
podredumbre radical; alteraciones climáticas (tales como
sequías severas y recurrentes,
encharcamientos estacionales
y contaminación atmosférica)
y cambios en el uso tradicional
de las dehesas y montes. Todos
estos factores no siempre ac-
¿Son todos los
tratamientos
fitosanitarios positivos
para los bosques?
DD
La sostenibilidad de ciertos
bosques depende del tipo de
relación que establezcamos
con ellos. En este sentido, debemos partir del hecho de que
los tratamientos fitosanitarios
(tratamientos para mejorar la
salud de las plantas) se realizan
en aquellos bosques sujetos a
explotación o uso social. Así, el
aumento de la rentabilidad de
los bosques puede favorecer el
desarrollo rural y el cuidado del
propio ecosistema que genera
los beneficios. El problema
surge cuando intentamos gestionar únicamente la parte de
bosque que nos interesa (es
decir, sólo la ganadería, sólo la
producción de madera, sólo la
conservación de ciertas especies, etc.) sin considerar el ecosistema en su conjunto. Es entonces cuando cualquier decisión que tomemos sobre el manejo del bosque, por ejemplo
la aplicación de tratamientos
fitosanitarios contra determinadas plagas o enfermedades,
puede generar cambios en el
sistema. Sin embargo, ¿qué es
un cambio positivo: aquél que
sólo favorece la disminución
de una plaga, aquél que únicamente beneficia a una especie
protegida?, ¿tenemos suficiente conocimiento del medio
forestal como para saber qué
cambios son positivos o negativos, especialmente a medio y
largo plazo? La sostenibilidad
de los bosques depende de que
sepamos responder a estas
preguntas a través de la investigación y el conocimiento.
23
Andalucía InNOVA. FEBRERO 2011
100 preguntas, 100 respuestas
60
¿Cuáles son los bosques más amenazados de
nuestro planeta?
DD
La deforestación, la explotación incontrolada de recursos, el fuego, las plagas
y enfermedades, la introducción de especies invasoras y los efectos derivados del
cambio climático se encuentran entre las principales amenazas para los bosques
que pueblan nuestro planeta. Un informe reciente de la fundación Conservation International destaca los diez puntos calientes forestales más amenazados del mundo
(ecosistemas con gran diversidad, gran cantidad de especies únicas y fuertemente
amenazados). En primer lugar se encuentran los bosques de Indo-Birmania, donde
se hallan el lago Tonle Sap y el río Mekong, y cuyas amenazas principales son el
avance incontrolado de los cultivos de arroz, la sobreexplotación del río y la transformación de los manglares. En segundo lugar se encuentran los bosques de Nueva
Zelanda, que alberga una gran cantidad de fauna exclusiva de dicha zona y cuya
principal amenaza es la proliferación de especies invasoras (comadrejas, cabras y
conejos, entre otras). El tercer lugar entre los bosques más afectados lo ocupa La
Sonda (un grupo de islas situado entre Indonesia y Malasia), que se hallan fuertemente amenazados por el avance de la selvicultura industrial, la extracción ilegal de
madera y la comercialización de especies salvajes (como tigres, monos y tortugas).
La destrucción de los bosques de La Sonda implica una importante amenaza para la
conservación de las poblaciones de orangutanes y rinocerontes.
57
58
¿Qué es un pinsapar?
¿Qué ocurre en
un bosque tras un
incendio?
DD
Los pinsapares son uno de
los bosques más amenazados
del mundo. En todo el planeta,
tan sólo podemos encontrarlo
en el sur de la península ibérica, concentrado en pequeñas
manchas en las serranías
de Cádiz y Málaga. Según
una parte de la comunidad
científica también podemos
encontrarlo en el norte de
África. Estos bosques están
compuestos por una de las
joyas botánicas españolas,
el pinsapo (Abies pinsapo).
Los pinsapos son verdaderos
supervivientes del periodo
glacial y se encuentran en la
tierra desde hace más de 15
millones de años, habiendo
sobrevivido hasta nuestros
días refugiados en las cumbres sombrías de algunas
montañas de Sierra Bermeja,
Sierra de las Nieves y Grazalema. Estos grandes abetos
pueden alcanzar los 30 metros
de altura y pueden vivir hasta
400 años. Los pinsapares son
testigos de un lejano pasado
más frío y húmedo, y constituyen una fascinante historia de
supervivencia y adaptación.
24
DD
Tras un incendio forestal se
pierde la capa vegetal y la fauna
presente queda muy perjudicada, y se necesitará mucho tiempo para recuperar el sistema
original que barrió el fuego.
El suelo queda desprotegido
frente a erosión y pérdida de
nutrientes; además, las elevadas temperaturas alteran la
composición química y biológica del suelo, y se favorece en
ocasiones el establecimiento y
expansión invasiva de ciertas
plantas. La recuperación de la
vegetación tras un incendio
recibe el nombre de sucesión
secundaria. En el bosque mediterráneo existen dos estrategias de respuesta al fuego:
los árboles rebrotadores y los
germinadores. Los primeros
(p.e. alcornoques, encinas o
madroños) son capaces de sobrevivir a los incendios regenerando la parte aérea (tronco, ramas, hojas), mediante la
existencia numerosas yemas
durmientes en lugares protegidos y a la acumulación de almidón (en órganos de reserva)
que les proporciona energía.
Los árboles germinadores no
resisten la acción del fuego;
mueren pero sus poblaciones
se regeneran gracias, exclusivamente, a la germinación
de semillas que permanecen
latentes en el suelo (formando un banco de semillas) que
resisten (e incluso se activan)
con el fuego. Entre éstas se
hallan las denominadas especies serótinas, capaces de
mantener las semillas en la
propia planta hasta que un incendio provoca la apertura de
los frutos (piñas) la dispersión
de las semillas. En el mundo
mediterráneo, Pinus halepensis es la única especie que presenta esta estrategia (muy común en Sudáfrica y Australia).
Sin embargo, los árboles que
no son capaces de rebrotar y
sus semillas son sensibles al
paso del fuego, terminan por
desaparecer cuando los incendios son muy abundantes.
59
¿Puede un alcornoque
resistir un incendio?
DD
El corcho es la corteza del
alcornoque (Quercus suber, árbol que se distribuye alrededor
del mediterráneo Occidental) y
posee unas características únicas que protege al árbol frente
a las condiciones adversas del
clima mediterráneo, como son
la sequía, las altas temperaturas estivales y los incendios. El
corcho está formado por células
muertas cuyas paredes están
cubiertas fundamentalmente
por suberina, un biopolímero
cuyo interior se llena de un gas
similar al aire. Esto confiere al
corcho sus propiedades de baja
densidad, baja permeabilidad a
los gases y agua, baja conductividad del calor (por lo que protege al árbol frente a incendios),
resistencia a plagas, alta elasticidad y estabilidad química. Tras
un fuego, el tronco se mantiene
vivo y es capaz de rebrotar a
partir de yemas epicórnicas,
característica única en nuestros
árboles. Además, el corcho es
uno de los principales recursos
del bosque mediterráneo. Sólo
tiene valor industrial cuando los
árboles alcanzan 35-40 años
y ee obtiene descortezando el
árbol, con cuidado de no dañar
el tejido que lo regenera (casca).
La extracción o saca del corcho
se produce en verano, causando un fuerte estrés hídrico a la
planta, la cual tiende a reponer
el corcho extraído y aumentando enormemente la fijación de
dióxido de carbono y, con ello,
el papel de sumidero de gas de
efecto invernadero del bosque
mediterráneo. El corcho se regenera por completo al cabo de 9
años y su aprovechamiento, entre otros, permite mantener un
tipo de paisaje mediterráneo, así
como de especies amenazadas
que tenderían a desaparecer con
cultivos industrializados.
61
¿Por qué los eucaliptos
tienen tan mala fama?
DD
Los eucaliptos (Eucalyptus
spp.) son árboles y arbustos
pertenecientes a la familia
Mirtáceas. Aunque la mayoría
es oriunda de Australia, actualmente se pueden encontrar
por todo el mundo, debido a
su cultivo para aprovechar su
madera para la obtención de
pasta de papel y de sus aceites
esenciales a partir de sus hojas.
Son precisamente estos aceites
esenciales los que, por sus propiedades bactericidas y fungicidas, pueden afectar negativamente a la composición de las
comunidades microbianas del
suelo. También se ha asociado
a la acidificación de suelos en
relación a la descomposición
de la hojarasca, aunque ciertos
estudios desechan esta teoría.
Sin embargo, la principal característica que ha dado mala
fama a estos árboles es su alta
capacidad de absorción de agua
del suelo, gracias a su sistema
radicular. Por esta razón, especies tan frecuentes en Andalucía
como Eucalyptus globulus, fueron empleadas desde finales del
siglo XIX para detener la erosión,
regular los caudales de los ríos y
desecar los humedales para evitar la propagación de enfermedades transmitidas por mosquitos. Posteriormente, comenzó a
cultivarse para la obtención de
pasta de papel.
62
¿Favorece el fuego
forestal el Cambio
Climático?
DD
Todas las plantas verdes
actúan como elementos que
secuestran el dióxido de carbono (CO2) de la atmósfera. En
el caso de los árboles y el resto
de vegetación que forma un
bosque, este carbono puede
quedar acumulado en la madera durante siglos en forma de
biomasa forestal, reduciendo
la acumulación de dióxido de
carbono atmosférico, que es
el principal gas que favorece
el efecto invernadero. El fuego
forestal produce una oxidación
violenta de los compuestos
reducidos (tales como el carbono asimilado por las plantas),
liberando de forma rápida
grandes cantidades de dióxido
de carbono y vapor de agua a la
atmósfera. Si el fuego alcanza
unas dimensiones importantes,
el efecto es doble: por un lado
se eliminan de golpe grandes
extensiones de árboles capaces
de fijar el CO2 y, por el otro, se
liberan grandes cantidades de
gases con efecto invernadero
que estaban secuestrados, y
que incrementan la absorción
de radiación infrarroja y, por
consiguiente, contribuyen al
cambio climático.
25
Andalucía InNOVA. FEBRERO 2011
100 preguntas, 100 respuestas
63
¿Es siempre positivo
repoblar los montes
con árboles?
DD
De manera general se puede
decir que sí. La cubierta vegetal
arbolada proporciona servicios
ambientales valiosos, como
una mayor capacidad de secuestro de carbono, protección
del suelo frente a la erosión,
capacidad de retener agua de
nieblas, refugio de biodiversidad, etc. Por otro lado, el bosque constituye el ecosistema
de la máxima complejidad que
puede alcanzarse en el medio
terrestre y es el fin de los procesos de sucesión, lo que se
llama el clímax. La repoblación
acelera la sucesión natural,
anticipando la implantación de
las especies que constituirán
esta estructura compleja. No
obstante, una repoblación adecuada debe hacerse eligiendo
las especies idóneas y con una
determinada densidad y distribución de los pies, para que el
resultado se acerque en lo posible a un bosque natural. Ciertas
repoblaciones con especies
exóticas, altas densidades y
gran homogeneidad se parecen
más a un monocultivo exento
de diversidad, sin sotobosque
por la falta de luz y con poca
oferta de nichos para la fauna,
que a un bosque sano.
64
¿Cuáles son las mejores
especies de árboles
para reforestar?
DD
La elección de la mejor
especie de árbol para una
reforestación dependerá del
objetivo que se persiga con ella.
Si se busca una explotación
comercial para producir pasta
de papel o biomasa para producción de energía eléctrica,
las mejores especies son las de
crecimiento rápido, como el eucalipto, la paulonia o el chopo.
Si se busca producir madera
para muebles, la elección serán
especies como el nogal, el roble, el cerezo, etc. Sin embargo,
las repoblaciones realizadas
con especies exóticas (euca-
26
65
¿Qué es la
ecofisiología de los
bosques?
DD
La ecofisiología es una disciplina
científica que estudia las adaptaciones fisiológicas de los organismos vegetales a su medio natural. Mediante
el conocimiento de los mecanismos
fisiológicos de las plantas que constituyen una comunidad boscosa,
podemos explicar su distribución,
abundancia e incluso los procesos de
sucesión ecológica. La ecofisiología
moderna es una ciencia de síntesis,
puesto que hace uso de los conocimientos en ecología, botánica, fisiología, bioquímica y biología molecular o
física para describir los mecanismos
fisiológicos que subyacen a cualquier
observación ecológica: “¿porqué las
especies de un bosque de ribera no
se encuentran en un bosque de encinas?”. La ecofisiología describe qué
mecanismos poseen estas especies
para soportar o no suelos encharcados, altas o bajas tasas de iluminación, etc. Pero además, se utiliza
para “tomar el pulso” a las plantas y
comparar su “estado de salud” bajo
diferentes condiciones, de forma que
podemos detectar los factores que
las afectan negativamente e, incluso,
adaptar y controlar dichas condiciones cuando se realizan actuaciones
de restauración de bosques y recuperación de poblaciones de especies
amenazadas y protegidas.
lipto, paulonia, pino insigne...)
conllevan los riesgos asociados
a la introducción de especies
exóticas y generalmente también al del monocultivo, que
implican una simplificación
del ecosistema, reduciendo su
biodiversidad y haciéndolo más
sensible a desequilibrios poblacionales de insectos-plaga.
Una reforestación con fines de
proteger una cuenca hidrográfica, una restauración tras un
incendio o un fin paisajístico
o recreativo debe utilizar especies autóctonas, por ser las
de mejor adaptación al clima y
suelo existentes, y también las
que la fauna autóctona reconoce. En cualquier caso, debe
utilizarse una variedad de especies, y no una sola, para buscar
la mayor biodiversidad posible
en el sistema.
66
¿Cuánto cuesta
reforestar un área
de bosque que se ha
perdido?
DD
Actualmente, se estima que
el coste de una reforestación
está entre los 1.000 y 3.000
€ por hectárea de terreno en
España. A esto habría que sumar el coste de mantenimiento
tras la reforestación, que está
alrededor de los 200 € por
hectárea y año. Estos costes
hacen frente a la mano de obra
necesaria para realizar las
diferentes fases de actuación,
destacando la producción de
las plantas o semillas (las cuales necesitan ser de calidad y
riqueza genética), el desbroce
o limpieza del área a reforestar
(para eliminar la competencia
entre especies de plantas), la
preparación del suelo, mejorando las características del
mismo, y la siembra (desde
semillas) o plantación (desde
plantas jóvenes o adultas), dependiendo esto último de las
características del medio y del
tipo de reforestación, además
de las continuas labores de
mantenimiento. Pero ésta es
una aproximación exclusivamente económica y no contempla otro tipo de gastos, tales
como el coste temporal hasta
llegar a recuperar la madurez
de un bosque, con toda la fauna
y flora asociada, que puede ser
de siglos, o la pérdida de los recursos que de él se extraían.
67
¿Puede una flor criar ranas en su interior?
DD
Los fitotelmata (del griego fhyto = planta y telma = pantano; en singular fitotelma y en plural fitotelmata) son
ambientes formados por algunas estructuras de plantas (como hojas modificadas, partes florales, axilas florales,
etc.), capaces de almacenar agua (desde unos pocos mililiteros hasta, incluso, un litro) y materia orgánica, lo que
permite el desarrollo de una compleja comunidad de organismos acuáticos (bacterias, algas, pequeños crustáceos, ácaros, larvas y adultos de insectos e, incluso, renacuajos de muchas ranas arborícolas), algunos de ellos
exclusivos de estos ambientes. Aunque se pueden encontrar en todo el mundo, los fitotelmata son particularmente abundantes y diversos en las selvas tropicales (se han reconocido hasta 1.500 especies como posibles fitotelmata). Además de su capacidad de soportar una alta biodiversidad, son muy importantes en diversos procesos
ecológicos, especialmente en la dispersión, colonización e interacción entre especies y, también, como elementos
estructurales de los bosques tropicales. Con el metabolismo de todo estos ecosistemas, las plantas (casi todas
epífitas, como las Bromeliáceas) obtienen nutrientes inorgánicos que les permiten sobrevivir en el ambiente extremadamente pobre en que se desarrollan (troncos de los árboles a muchos metros de altura sobre el suelo). Sin
embargo, si se revisa la bibliografía sobre los fitotalmata, se obtiene una imagen muy negativa ya que, entre las
muchas especies que se desarrollan en ellos, también lo hacen algunos mosquitos trasmisores de enfermedades
como la malaria y el dengue.
68
¿De verdad es
importante reutilizar y
reciclar el papel usado?
DD
Antes de hablar de papel reciclado, es importante mencionar que el papel es el resultado
de un determinado proceso
de fabricación que se inicia
con la muerte de un árbol.
Actualmente, los árboles que
se utilizan para hacer papel
son expresamente plantados
para tal fin, esencialmente
pinos y eucaliptos debido a
su riqueza en celulosa. Para
hacer un paquete de 100 folios se necesitan alrededor de
300 litros de agua, unos 15
kilovatios de energía y unos
3 kilogramos de madera. En
contraste, obtener un paquete
similar de folios reciclados
sólo requiere un 15 % del
agua y un 50 % de la energía
necesaria en la elaboración de
papel a partir de pasta virgen,
es decir, se ahorra el 85% del
agua, el 50% de energía y el
100% de los kilos de papel
recuperados. Por esto es tan
importante utilizar el papel de
forma responsable y reciclar el
ya usado: se salvan arboles, se
reduce la necesidad de plantar
grandes extensiones de monocultivo arbóreo que podrían
sustituir a un bosque natural
y se reduce el consumo de
agua y de energía, así como la
contaminación asociada a su
fabricación.
27
Andalucía InNOVA. FEBRERO 2011
100 preguntas, 100 respuestas
69
¿Cuántas hectáreas de
bosque necesita un oso
durante su vida?
DD
Al espacio que un mamífero
ocupa o utiliza a lo largo de su
vida, los científicos lo denominan área de campeo. Este área,
en el caso de los osos, es muy
extensa y varía en función de la
edad y del sexo. Por ejemplo, un
macho adulto posee un territorio más extenso que el de uno
joven. Entre los osos pardos
existen unos fuertes rangos de
jerarquía cuyos puestos más
elevados suelen ocupar, precisamente, los machos más fuertes y de mayor experiencia. Por
otro lado, un solo macho puede
además entrar y salir de varias
áreas ocupadas exclusivamente
por hembras, ya que los territorios de éstas suelen ser más
pequeños y, en muchos casos,
quedar dentro del territorio de
un solo macho. Algunos datos
recogidos de osos macho que
viven en la Cordillera Cantábrica muestran una extensión
de su área de campeo de unos
2447 Km2 (casi toda la cordillera), pudiendo recorrer más
de 80 Km2 en una sola estación
del año. Esta gran necesidad de
expansión de los individuos hace que esta especie sea sumamente sensible a la destrucción
de los bosques.
71
¿Nos dan los bosques
una lección de
sostenibilidad?
DD
Los ecosistemas naturales
funcionan de una forma similar
a una máquina en la que los
elementos o piezas (seres vivos)
interactúan entre sí y con el
medio como si de engranajes
se tratara, aprovechando los
recursos y reutilizando los productos de su utilización de una
forma más o menos eficiente.
Por ejemplo, una flor, que es
muchas veces un despliegue
de diseño y color enfocado a
atraer a los polinizadores que
van a permitir la reproducción
de la planta, deja de ser útil una
70
¿Cómo afecta el bosque en galería a la
diversidad y cantidad de fauna acuática?
DD
Se llama bosque en galería a la franja de vegetación (compuesta de árboles y arbustos), propia de las riberas de los ríos. Este ecosistema, en franca
regresión en la mayor parte de nuestros ríos, es importantísimo para el
funcionamiento correcto de los ecosistemas fluviales. Si visitamos un río
estrecho que conserve este bosque de forma que cubra completamente el
cauce con un dosel de ramas y hojas, observaremos que llega muy poca luz
al agua. Debido a esto, observaremos que hay muy poca vegetación acuática (apenas una leve capa de algas encima de las piedras). Pero si levantamos estas piedras o pasamos una red adecuada, capturaremos una enorme
cantidad de macroinvertebrados (gusanos, moluscos, crustáceos, larvas y
adultos de insectos) que son las presas normales de los peces. La pregunta
que nos haríamos sería: ¿Qué comen?. Pues más del 70% de la especies la
hojarasca y las flores que caen de los árboles, unas masticándolas, otras filtrando las partículas que dejan escapar las primeras. El resto serían depredadores que se alimentarían de esta diversa y densa comunidad de comedores de hojas. Por lo tanto la desaparición de bosque en galería lleva consigo la desaparición de más de la mitad de las especies. Y desgraciadamente,
en nuestro país, estos bosques han desaparecido de la mayoría de los ríos
debido a la invasión de sus márgenes con diversas actividades humanas.
28
vez esto ocurre. La flor se marchita y la planta se deshace de
ella, pues no necesita invertir
más materia y energía en mantenerla. Cae al suelo, donde los
organismos descomponedores
y saprófitos la procesan y descomponen, obteniendo energía
y dejando la materia restante
reducida en moléculas sencillas y nutrientes que quedan en
el suelo para ser reutilizados.
Las diferentes formas de vida
han evolucionado ocupando
“nichos” de aprovechamiento
de recursos, es decir, si en algún lugar se acumula materia
y energía, allí se asentarán y
evolucionarán formas que consigan aprovecharlas. Cuanto
más complejo y maduro es el
ecosistema, más eficiente es
además en el uso, recuperación
y reutilización de sus recursos,
y éste es el paradigma de funcionamiento de los bosques
maduros, cuyo culmen lo exhiben los bosques tropicales
primarios. El ser humano, en su
relación con el medio natural,
se ha ido desligando progresivamente de este funcionamiento, creando formas de
extracción de recursos a gran
escala, que además no son eficientemente utilizados (¿cuántas lechugas deben producirse
para que hayan lechugas frescas en los estantes de los supermercados todos los días, las
compremos o no?). Devolvemos
al sistema natural desechos
(muchas veces no biodegradables) en cantidades y a una
velocidad que no son asumibles
por el funcionamiento natural
de los ecosistemas de la Tierra.
Quizá debemos aprender de los
bosques, y adoptar formas de
explotación de los recursos que
no comprometan el bienestar
de las generaciones venideras.
72
¿Por qué conservar los
bosques?
DD
Son muchas y variadas las
amenazas que ponen en grave
peligro la supervivencia de
nuestros bosques y las princi-
pales son, sin duda, derivadas
de las actividades humanas. Pero ¿por qué conservarlos bosques? Si nos paramos a pensar
durante un instante, teniendo
en cuenta que los bosques que
hoy pueblan nuestro planeta
son el resultado de millones
de años de ajustes y evolución,
podríamos acogernos exclusivamente a principios morales
para contestar a esta pregunta.
O, de manera más sencilla,
podríamos responder a dicha
cuestión con otra pregunta:
¿qué derecho tenemos a destruir los bosques? Además de
los propios criterios morales,
hemos de ser conscientes de
que los bosques nos aportan
innumerables beneficios: son
una importante fuente de oxígeno y, a la vez, sumideros de
CO2 atmosférico (principal gas
responsable del calentamiento
global); constituyen el hábitat
de multitud de seres vivos y
son capaces de determinar
el establecimiento de otras
especies vegetales, siendo por
tanto responsables de una
gran parte de la biodiversidad
del planeta; son reguladores
del ciclo del agua; producen y
conservan el suelo y previenen
la erosión; nos proporcionan
multitud de productos como
alimentos, recursos medicinales o madera, entre muchos
otros; además, son enclaves de
incalculable valor paisajístico
y, por tanto, de gran interés
para bel turismo de naturaleza, lo que supone un recurso
potencial de gran valor para el
desarriollo socioeconómico de
muchas áreas.
73
¿Qué instrumentos
legales protegen
nuestros bosques?
DD
Con el objetivo de preservar
los valores y servicios que nos
proporcionan los bosques, se
ha creado una serie de instrumentos legales a diferentes
niveles. Por un lado, existen
leyes y acuerdos internacionales: por ejemplo, en octubre
del año 2000 se creó el Foro
de las Naciones Unidas sobre
los Bosques (FNUB), que trata
de promover la conservación,
manejo y desarrollo sostenible
de todo tipo de bosques. En el
ámbito internacional es también destacable la Conferencia
Ministeral sobre Protección
de Bosques de Europa (Forest
Europe), donde los Ministerios
responsables de los bosques
de 46 países europeos y la
Comunidad Europea cooperan
para emitir recomendaciones a
favor de la protección y gestión
sostenible de los bosques de
Europa. Por otro lado, a nivel
nacional y autonómico, existe
una serie de leyes que contribuyen a la protección y conservación de estos ecosistemas. La
actual Ley de Montes española
designa a las administraciones
autonómicas (como la propia
Junta de Andalucía) como las
responsables y competentes
en materia forestal, de acuerdo con la Constitución y los
estatutos de autonomía. Dicha
Ley se constituye como un
instrumento para garantizar
la conservación de los montes españoles, así como para
promover su restauración,
mejora y racional aprovechamiento. Hay que destacar que
una parte importante de la
superficie boscosa del planeta
tiene asignada alguna figura
de protección legal, ya internacional, nacional o autonómica.
Por ejemplo, una gran parte de
los bosques andaluces se encuentra incluida en la Red de
Espacios Naturales Protegidos
de Andalucía (RENPA) y/o en
la Red Natura 2000 (una red
ecológica europea de áreas
para la conservación de la
biodiversidad). A pesar de todo, son muchas y variadas las
problemáticas que amenazan
nuestros bosques. Es por ello
que, en muchos casos, no bastan los instrumentos legales
de protección existentes en la
actualidad y se hace necesaria
la creación de nuevos instrumentos que regulen y dirijan
de manera concreta el uso y
manejo de las zonas boscosas.
29
Andalucía InNOVA. FEBRERO 2011
100 preguntas, 100 respuestas
74
¿Es lo mismo un bosque
de 100.000 hectáreas
que 100 bosques de
1.000 hectáreas?
DD
Matemáticamente hablamos
de la misma superficie, sin embargo, en términos ecológicos
no son lo mismo. La relación
existente entre la superficie y
el perímetro de un área natural
(p.e. un bosque) determina el
grado de exposición a múltiples
interferencias procedentes de
los hábitats periféricos (mayor
a mayor relación perímetro/
superficie), conocidos genéricamente como “matriz” (p.e.,
campos de cultivo o núcleos urbanos). Así, un bosque pequeño
va a estar sometido a perturbaciones externas con mayor
probabilidad que uno grande
que tenga una forma similar. La
fragmentación de los bosques
se origina por la formación de
claros, que pueden ir creciendo con el tiempo dando lugar
a una matriz diferenciada. El
tamaño de estos claros, su
forma, la distancia entre manchas de bosque y el grado de
conectividad entre éstas (que
difiere según el tipo de matriz
y la habilidad de las especies
para cruzarla) son factores muy
a tener en cuenta: sus efectos
quedan reflejados en las condiciones microclimáticas de los
fragmentos originados, sobre
la flora, fauna e interacciones
biológicas. Nuestra matriz natural ha ido transformándose a
medida que han ido creciendo
las áreas de cultivo, los núcleos
urbanos e industriales y las infraestructuras como carreteras
y autovías, quedando invertida:
hemos pasado de unos cuantos
núcleos rurales inmersos en
una matriz natural poco explotada, a una matriz antropizada
salpicada por manchas de vegetación natural y unos cuantos
espacios naturales protegidos.
En la actualidad, en términos de
conservación, se ha avanzado
un paso más y los esfuerzos se
centran en conectar estos hábitats mediante lo que se llaman
“corredores ecológicos”.
30
pierdan su papel benefactor. La
industrialización desmesurada
y descontrolada es otro Cambio Global que afecta a los bosques a través de, por ejemplo,
la lluvia ácida. El crecimiento
urbanístico es otro Cambio
Global en muchas regiones del
planeta. Tala desproporcionada, incendios, carreteras innecesarias, salvo por intereses
concretos, parciales e inicuos,
son también Cambios Globales que afectan a los bosques.
Nuestros bosques planetarios
están en peligro, nos han cuidado hasta ahora, sabemos
más sobre su funcionamiento,
sabemos lo que implica su destrucción, ¿seremos capaces de
protegerlos?
75
¿Qué información nos
dan los anillos de los
troncos de los árboles?
DD
Los anillos de los troncos de los
árboles no son más que círculos de
crecimiento que representan un año de
vida de la planta, formados fundamentalmente por el leño de primavera (de
amplias traqueidas) y el de verano (más
resistente, con elementos conductores
de menor calibre y paredes más gruesas). En cada periodo vegetativo se produce la formación de una nueva serie
de células, las cuales forman un círculo
concéntrico alrededor de las del año
anterior, por lo que en un corte transversal del tronco aparecen visualmente
una serie de anillos concéntricos cuyo
número se corresponde con los años
de vida del árbol. Las capas o anillos no
son iguales todos los años debido a las
variaciones climáticas dentro de la estación. Así, un anillo ancho se identifica
con ambientes cálidos y lo contrario
significa que las condiciones idóneas
de crecimiento duraron poco o bien se
redujo significativamente el aporte de
agua. Por ello, se considera que estos
anillos tienen la capacidad de registrar
información climática de su entorno. De
hecho, proporcionan un registro anual
que reflejan las condiciones climáticas
durante el crecimiento del árbol.
76
¿Cómo afectan los
Cambios Globales a los
bosques?
DD
Los Cambios Globales son
aquellas alteraciones en los sistemas naturales, físicos, biológicos o sociales cuyos impactos
afectan al conjunto de la Tierra,
pudiendo tener además impactos localizados a escalas muy
diferentes. Reflejan la creciente
77
¿Se están regenerando
nuestros bosques?
influencia de ciertas actividades humanas, en un marco
globalizado, sobre las estructuras (formas, infraestructura)
y procesos naturales y sociales
(superestructura, ideología),
percibida como negativa para
la Naturaleza y para las propias
sociedades humanas y los individuos que las integran. Esta
influencia revela una realidad
muy compleja. Los bosques,
aunque maduros y con un alto
grado de estabilidad evolutiva,
son frágiles ante la actividad
destructiva del ser humano.
Alguien dijo que la única forma
de acabar con un bosque es
destruyéndolo. El ser humano
tiene esa capacidad. Algunos
de los Cambios Globales que
vivimos, iniciados por nuestra
actividad depredadora alejada
del bien común y del bienestar
del planeta, tiene una gran incidencia. El Cambio Climático
es un buen ejemplo de Cambio
Global y las consecuencias
sobre los bosques han sido ya
anunciadas y expuestas en todos los medios de difusión. El
Cambio Climático podría acabar con bosques completos o
disminuir la extensión de otros,
acabar con su funcionalidad
global o regional, hacer que
DD
La regeneración de los bosques depende del éxito del
reclutamiento de nuevos árboles que sustituyan a los más
viejos. Para que esto ocurra
de forma natural, deben cesar
las perturbaciones que puedan
impedir que jóvenes plantones
lleguen a ser árboles adultos,
entre las que se encuentran las
cargas ganaderas excesivas, las
roturaciones de bosques para
agricultura o para repoblaciones, los incendios forestales o
las urbanizaciones. La realidad
en Andalucía es diferente según
las zonas. En términos generales, podemos afirmar que en las
zonas en las que han restringido u ordenado las actividades
mencionadas, se está produciendo un avance del bosque.
Así sucede en algunos espacios
naturales protegidos, como los
pinsapares de la Sierra de Grazalema, los alcornocales del Parque Natural de los Alcornocales
o los pinares del Parque Natural
de los Montes de Málaga. Por
el contrario, en otros lugares,
los bosques no se regeneran,
como en algunas dehesas de
Sierra Morena, que además de
sobrepastoreadas se enfrentan
a mortandades de árboles por la
enfermedad de la seca.
31
Andalucía InNOVA. FEBRERO 2011
100 preguntas, 100 respuestas
81
¿Cuántas especies de
aves rapaces podemos
encontrar en un bosque
mediterráneo?
78
¿Dónde podemos encontrar los
bosques élficos que aparecen en
El Señor de los Anillos?
DD
En la versión cinematográfica de la obra de J.R.R. Tolkien “El Señor de los Anillos”, y específicamente en la
primera entrega, “La Comunidad del Anillo”, cuando los
miembros del grupo abandonan Moria deprimidos por la
pérdida de su amigo Gandalf, se ven obligados a atravesar
el bosque de Lothlorien, dominado por los elfos, cuya reina es Galadriel. La pregunta del espectador curioso puede
ser: “¿existen de verdad esos bosques tan densos y húmedos, llenos de árboles profusamente ramificados y de
líquenes, o no son más que una fantasía virtual que el cine
de hoy nos ofrece?”. Pues, efectivamente, esos bosques
existen, desde latitudes templadas a frías, o en las montañas del hemisferio austral. Se trata de bosques de hoja
caduca dominados por especies del género Nothofagus,
el haya del hemisferio sur. El género Nothofagus comprende cerca de 35 especies distribuidas principalmente
en Australia, Nueva Zelanda, Nueva Caledonia, Nueva Guinea, Chile y Argentina. Algunos como el N.pumilio (lenga)
pueden alcanzar los 30 m de altura, otros como el N. antárctica (ñire), que es uno de los más australes, tienen un
porte más arbustivo. Son árboles muy antiguos de los que
se han encontrado bosques fósiles petrificados. Su distribución actual a lo largo del Pacífico sur hace pensar que
se originaron en un continente único, Gondwana, cuando
América del Sur, Australia y la Antártida estaban unidas.
79
¿Qué relación existen
entre el fuego y la
vegetación de los
bosques?
DD
El fuego, ya originado por
causas naturales (favorecido
por el clima, tormentas eléctricas y erupciones volcánicas),
ya provocado, ha estado presente desde siempre y ha sido
considerado en muchas áreas
del mundo un elemento activo
en la dinámica ambiental, así
como regulador del crecimiento y renovación de múltiples
asociaciones vegetales y
ecosistemas naturales. En los
bosques mediterráneos, donde
los veranos son calurosos y
sin lluvias, la acción del fuego
queda patente principalmente
en las plantas, las cuales han
ido amoldando sus estructuras
32
morfológicas y fisiológicas a
lo largo del tiempo. Así, en los
bosques mediterráneos aparecen plantas suculentas, como
la pita, con un alto contenido en
agua que le permite resistir las
altas temperaturas; árboles de
corteza gruesa, como el alcornoque, que protege de esta manera los tejidos vivos internos;
arbustos con alta capacidad de
rebrotar, como el enebro; plantas bulbosas con alta capacidad
de protección de las yemas;
plantas con alta capacidad de
diseminar sus semillas, como la
jara y el pino y otras muchas respuestas adaptativas que hacen
que plantas con características
similares se consideren pirófitas
o plantas de fuego. Entre éstas
se hallan las coníferas: muchos
pinos (p.e. el pino carrasco -Pinus halepensis-), poseen piñas
que permanecen cerradas hasta
que el calor de un incendio las
abre, expulsando las semillas a
veces a gran distancia; la gruesa
capa del piñón supone además
una buena protección frente al
fuego.
80
¿Disminuirá la
diversidad de insectos
de un bosque si
disminuye el número
de árboles?
DD
La pregunta que hemos formulado no tiene siempre una
respuesta fácil y puede depender de cada caso concreto. En
bosques de latitudes medias,
una disminución de la densidad
de árboles puede suponer el
aumento de la diversidad del
sotobosque, antes limitado
por la falta de luz. Teniendo en
cuenta que la gran mayoría
de insectos son consumidores
primarios, una mayor diversidad vegetal fomentará un
aumento en la diversidad de
insectos ya que, al tiempo que se
mantendrían aquéllas especies
asociadas al estrato arbóreo, aumentaría el número de especies
asociadas al nuevo sotobosque.
En el caso de los bosques tropicales, cada árbol de forma individual puede constituir un ecosistema único que puede albergar
tanto plantas (epífitas) como
animales. Un sólo árbol puede
alojar hasta 400 especies de
insectos diferentes, por lo que
resultaría difícil cuantificar si la
pérdida de diversidad asociada
a una deforestación podría ser
compensada por la asociada
a la regeneración del espacio
liberado.
DD
Debido al gran tamaño de sus
alas, muy pocas aves rapaces
diurnas son capaces de volar
por el interior de los bosques
mediterráneos. Aún así, existe
una especie, de vuelo maniobrable, que es capaz de cazar
a sus presas y perseguirlas
mientras repliega y extiende
sus alas con asombrosa habilidad, para pasar entre los
huecos de los árboles. Se trata
del azor, un ave de gran tamaño y fuertes garras. El gavilán
es otro ejemplo de cazador
habilidoso. Sin embargo, podemos también encontrar
otras especies que, si bien no
son capaces de volar de esta
forma, sí que las podremos ver
sobrevolando los bosques, como los busardos ratoneros, las
aguilillas calzadas, las águilas
culebreras, los milanos o los
elanios azules. No obstante,
por la noche existen otros cazadores, algunos de ellos de
gran tamaño, como los búhos
reales, que cazan desde los riscos verticales que rodean los
bosques; o el ave de sonidos
fantasmagóricos nocturnos, el
cárabo. El mochuelo, por otro
lado, de mucho menor tamaño, usa las zonas de bosque
más dispersas.
82
¿Para qué recolectan
hojas las hormigas
cortadoras de hojas?
DD
Muchos piensan que estas
hormigas recolectan hojas para
luego llevárselas al hormiguero
y comérselas. Nada más lejos
de la realidad. Lo más asombroso de esta cuestión es que
se trata de uno de los pocos
invertebrados agricultores del
reino animal, cuya tarea difiere
muy poco a la nuestra en lo
que respecta al cultivo de un
huerto o a la recolección de los
frutos. Se trata de hormigas
agricultoras de hongos, que
usan las hojas de la misma for-
ma que un agricultor humano
usa la tierra para hacer crecer
sus frutas y hortalizas. Los
hormigueros de estos insectos
suelen disponer de una cámara
húmeda y resguardada de la
luz, donde son depositadas las
hojas cuidadosamente. Con
el tiempo, diversas especies
de hongos crecen sobre los
lechos de hojas y es entonces
cuando las hormigas pueden
disponer de alimento seguro,
protegido y casi ilimitado. Se
puede decir que esta cámara
es una despensa tan grande
que puede ser comparable a un
supermercado.
83
¿Por qué no hay árboles
en las zonas abiertas
de océanos y mares?
DD
La vida vegetal en zonas de
mar abierto es, en general, de
pequeño tamaño. En áreas costeras poco profundas, en contacto con la tierra y bajo régimen de mareas, existen árboles
y otras plantas de gran tamaño
(formando bosques como los
manglares). Sin embargo, en
mar abierto donde las especies
se verían obligadas a flotar, las
condiciones cambian y la ventaja de la pequeñez es determinante. Una planta que flote
sufrirá una deriva por viento
o corrientes y se alejará de su
nicho natural. Sin embargo, las
plantas diminutas son capaces
de dejarse hundir y dejarse
arrastrar por las corrientes, ya
para permanecer en sus “aguas
familiares”, ya para recorrer los
océanos y regresar a ellas de
nuevo. Una planta grande, incluso un tipo de árbol, flotando
por bolsas de aire o aceite, no
lograría volver a su comunidad cuando fuese alejada de
la misma por alguna fuerza de
los fluidos donde está inmersa
(océano y atmósfera). De esta
forma, no es la escasez de nutrientes lo que limita la existencia de las grandes formaciones
vegetales en el mar, sino el incansable movimiento del fluido
oceánico que las arrastrarían
lejos para no volver jamás.
33
Andalucía InNOVA. FEBRERO 2011
100 preguntas, 100 respuestas
84
¿Existen parejas,
tríos o cuartetos de
interdependencia en
un bosque?
DD
Algunos hongos componentes de las micorrizas no salen
a la superficie terrestre para
dispersar sus esporas, sino que
forman sus cuerpos fructíferos
bajo tierra, como por ejemplo
las trufas. Por otro lado, existen animales que se sienten
atraídos por este hongo y que
se convierten en distribuidores de esporas; éstas llegan al
intestino de los mismos y son
expulsadas en sus excrementos (dispersión), como ocurre
con las ardillas voladoras en
los bosques de coníferas de la
costa del Pacífico. Este dúo de
interdependencia (coníferas/
trufas) se convierte en un trío:
la ardilla consigue agua y nutrientes del hongo y cobijo del
árbol (las coníferas); el hongo
consigue hidratos de carbono
(entre otros compuestos) del
árbol y transporte de esporas
por las ardillas. En ocasiones
este trío armonioso puede
convertirse en un cuarteto, por
ejemplo, en el caso de la planta
herbácea Monotropa uniflora
(Familia Pyrolaceae), con un pálido tallo fantasmal, que vive en
las partes más oscuras del bosque. Esta planta está tan falta
de pigmentación que a veces
se le llama flor cadáver (más
común, pipa india). Al carecer
de clorofila no puede realizar la
fotosíntesis; sus raíces se unen
a la estera fúngica, de la que
absorben todo el alimento que,
por supuesto, no ha producido
el hongo sino que proviene de
las coníferas (sin dar nada a
cambio ni al hongo ni al árbol).
88
¿Cuáles son los bosques más
antiguos del mundo?
DD
Los primeros bosques de la Tierra se desarrollaron en el Devónico superior (Era primaria o Paleozoico, unos 380 millones
de años atrás), formados por helechos arborescentes de hasta
30 m de altura. Muchas de estas especies desaparecieron a
final del Paleozoico, quedando únicamente representantes de
pequeño tamaño. Los grupos más antiguos de árboles, supervivientes de esta Era, son las ginkgoáceas y pináceas (Carbonífero
superior), a las que pertenecen especies como el actual ginkgo
o las actuales coníferas (pinos, abetos). En el Ártico canadiense
existen los restos de un bosque fósil datado de unos 55 millones de años atrás, cuando Norteamérica, el norte de Groenlandia y Europa se encontraban unidas formando parte de un
mismo continente bajo un clima mucho más cálido. Algunos
de los árboles petrificados se encuentran todavía en pie como
cuando tenían vida y formaban una densa selva. En la actual
estepa patagónica encontramos los bosques petrificados de
araucarias que se extinguieron con la actividad volcánica que
levantó la cordillera de los Andes: hablamos de más de 50 millones de años. En el norte de España se han hallado bosques
fósiles de secuoyas de hace tres millones de años, similares a las
del litoral de California, al oeste de Norteamérica, o en los bosques de China. Pinos de especies que ya no existen en la cuenca
mediterránea, cipreses y hasta gigantescas secuoyas poblaban
entonces la cornisa cantábrica. Pero el árbol vivo más antiguo
identificado en el planeta lo encontramos en Dalarna (Suecia):
se trata de una pícea (Picea abies) cuya parte aérea, de apenas
4 m de altura, está datada en 600 años de edad, mientras que
sus raíces presentan una edad de 9.550 años y la capacidad de
producir nuevos troncos cuando los viejos mueren.
poder de penetrabilidad en el
aire que el agudo, pudiendo ser
oído desde mayores distancias.
Los sonidos agudos, en cambio,
rebotan con mayor asiduidad
contra los árboles y arbustos
del bosque, siendo más utilizados por los animales que
habitan zonas abiertas. Como
ejemplo de este fenómeno podemos citar el grave canto de
la paloma torcaz, el urogallo o
la perdiz.
85
87
¿Cómo son
generalmente
los sonidos de los
animales que viven en
los bosques?
¿Desprenden los
bosques un aroma
especial?
DD
Los animales de ecosistemas
boscosos densos emiten, generalmente, sonidos graves. Este
tipo de sonido tiene un mayor
34
86
DD
Los olores que desprenden los
bosques se deben, entre otros
motivos, a la gran diversidad
de compuestos volátiles que
pueden desprender las plantas
que los componen. La emisión
de estos compuestos volátiles
representa un gran tesoro de
la biodiversidad de nuestros
bosques. Entre estos compuestos aparecen sustancias
tales como terpenos, isopreno,
ácidos orgánicos, metanol o
acetona. Este tipo de compuestos son producidos en una gran
variedad de tejidos vegetales
y en procesos fisiológicos distintos. Entre las funciones que
pueden tener, destacan las de
defensa frente a patógenos o
herbívoros, reconocimiento
entre plantas o con diferentes
animales y microorganismos,
o defensa frente a fenómenos
que les causan estrés. Incluso
se ha comprobado que algunos
de estos compuestos, como los
terpenos, pueden estar íntimamente relacionados con el desarrollo de incendios forestales.
¿Cómo se formó el carbón?
DD
El carbón procede de restos vegetales leñosos del período geológico
denominado Carbonífero, hace entre 360 y 286 millones de años. El material que permitió a las plantas formar estructuras que las levantaran
del suelo y competir por la luz es la lignina, un polisacárido complejo que
constituye el leño o madera. Se conoce que el desarrollo evolutivo de la
lignina se produjo hace 400 millones de años. Sin embargo, los primeros organismos con herramientas químicas (enzimas) para degradar
eficientemente la lignina (hongos) no se desarrollaron en cantidad suficiente hasta hace 200 millones de años, es decir, unos 100 millones de
años después del periodo de máxima deposición de carbono orgánico.
Debido al lapso de tiempo que pasó entre el periodo en que el contenido en lignina de la materia vegetal era máximo y la aparición de estos
orga¬nismos capaces de degradar estas ligninas, se formó una inmensa
reserva de materia orgánica. Esta reserva se transformó, con el tiempo,
en combustibles fósiles que constituyen la mayor parte de los recursos
actuales de carbón.
muchos problemas a las especies. Son productos generados
en el gran laboratorio de la vida
que no entiende patentes ni
multinacionales, ni de accionistas: sólo de salud. Los bosques
son un paradigma de biodiversidad, madurez y estabilidad,
su equilibrio se ha logrado en
un largo proceso evolutivo.
A lo largo de dicho proceso,
especialmente en las selvas
ecuatoriales (hoy en peligro por
la actividad humana), se han
generado, de forma evolutiva,
los mayores supermercados
farmacéuticos del planeta. Deberíamos conocerlos, respetar
a sus moradores y legítimos
dueños y establecer con ellos
una cooperación que permita
conocer sus recursos farmacológicos de forma cohesiva y solidaria, generando riqueza para
ellos, compatible con el mantenimiento de sus ecosistemas y
salud para el resto del planeta
sin codicias.
90
¿Existe una mística
relativa a los árboles?
La duración en el ambiente de
estos compuestos, desde que
una planta los produce, puede
ser desde unos pocos minutos
hasta incluso horas.
89
¿Por qué se dice
que los bosques son
el supermercado
farmacéutico del
planeta?
DD
Los bosques son un ejemplo de estadio climax de la
sucesión ecológica, es decir,
constituyen una etapa madura
de la evolución de los ecosistemas. Por ello, muestran una
compleja y rica y estable red
trófica, ordenada en compartimentos (compartimentación).
De acuerdo con su clima (climax climácica), su madurez
representa la máxima comple-
jidad del enclave natural. En
el bosque, la biodiversidad, el
nicho, el mutualismo, la compartimentación han generado
una compleja comunidad con
muchas especies. Esto significa que hay una multitud de
soluciones metabólicas para
solucionar el “problema ambiental” de cada especie en un
marco de máxima diversidad
posible, especialización, utilización temporal compartida
de recursos, minimización de
la competencia y sus efectos,
control depredativo y un largo
etcétera de procesos ecológicos. Las especies responden
metabólicamente con lo que
se llaman productos de metabolismo secundario. Por ello,
es posible encontrar muchas
formas químicas generadas
biológicamente que solucionan
DD
Desde los tiempos más remotos de la historia de la humanidad, el árbol ha sido fuente de
beneficios y misterio. Hay una
mística alrededor del árbol. Por
ejemplo, todos los dioses griegos y romanos tenían un árbol
o un tipo de bosque dedicado
a su mayor gloria. A Júpiter, la
encina, y a Baco, la higuera.
Los más antiguos santuarios
germánicos eran los bosques
naturales. Entre los celtas, es
familiar el culto de los druidas
a los bosques de robles. En el
África Oriental, la cultura wonika imagina que cada árbol,
especialmente los cocoteros,
tienen su propio espíritu, de
modo que “la destrucción de un
árbol es equivalente a un matricidio, pues el árbol les da vida y
alimento igual que una madre
a su criatura”. Los monjes de
Siam creen que hay almas por
todas partes, por lo cual “no hay
que romper una sola rama de un
árbol, como no se rompería el
brazo de una persona inocente”.
35
Andalucía InNOVA. FEBRERO 2011
100 preguntas, 100 respuestas
posible, es extensible al conjunto de los bosque del planeta:
una vida mejor para todos de
una forma gratuita y solidaria:
el oxígeno que nos dan es gratis para todos, la biodiversidad
que nos suministran no es objeto de control multinacional,
está en el jardín y es para todos.
91
¿Cómo contribuyen las grandes
masas arbóreas a nuestro bienestar
personal?
DD
El efecto que la naturaleza ejerce sobre cualquier persona,
ya sea un bosque, un río, una cadena montañosa o todo un
ecosistema marino, repercute positivamente sobre su salud
física y mental. Tal es la hipótesis de la biofilia, enunciada por el
sociobiólogo E. O. Wilson (1984): difícilmente alcanzaremos la
felicidad mientras vivamos sumergidos en un entorno artificial
que nos separe o aliene de la naturaleza. Así, una humedad relativa y concentración de oxígeno adecuadas o un ambiente libre
de partículas nocivas son ejemplos de factores que, desconozcamos o no, influyen positivamente en nuestra salud y bienestar.
Las grandes masas arbóreas, nuestros bosques, nos aportan oxígeno, purifican nuestro aire, regulan los ciclos del agua y la temperatura en el planeta aunque no los visitemos. La conservación
de los bosques, con toda su complejidad y biodiversidad, nos
aportan además toda una exposición de vida natural al alcance
de cualquier visitante. De esta forma, cualquier persona que
camine por un lugar así, notará que se siente bien por el mero
hecho de estar allí: la naturaleza nos atrae de forma consciente
y/o inconsciente porque éste es el entorno en el que nos hemos
desarrollado como especie durante cinco millones de años.
Los ilocanos de Luzón, piden
perdón a los árboles que cortan,
siempre por necesidad. En Australia, en la tribu Dicri, se consideran muy sagrados ciertos
árboles en los que se suponen
se han transformado sus padres. En Corea, las almas de los
cuerpos que han muerto de una
determinada forma van a habitar los árboles, mientras que en
China se plantan árboles sobre
las tumbas para fortalecer las almas de los fallecidos. En Europa
también tenemos ejemplos del
misticismo sobre los árboles: el
culto al “árbol mayo” está muy
generalizado. Se trata de una
especie de ofrenda de primavera
para pedir bendiciones, que se
materializa con la plantación de
un árbol joven en un lugar de
honor en las aldeas. Por tanto,
desde tiempos inmemoriales,
todas las culturas del mundo
profesan un respeto reverencial
al árbol. Hoy en día sabemos, de
forma científica, algo que otras
culturas intuyen desde hace
miles de años, es decir, que los
árboles nos cuidan. ¿Si nosotros
lo sabemos científicamente, por
36
qué tenemos tan poco respeto
por nuestros árboles?
92
¿Jardín del Edén o
Bosque del Edén?
DD
El Jardín del Edén o Paraíso Terrenal era mostrado, en
aquella Enciclopedia Álvarez
con la que muchos estudiamos,
con un dibujo que no era exactamente un jardín, sino algo
parecido a una selva ecuatorial,
tanto por la riqueza de la flora
como por los animales mostrados (incluidos algunos de sabana como alarde imaginativo).
En las ilustraciones se erguían
imponentes los árboles de la
Vida y, entre ellos, el Árbol del
Bien y del Mal. El Jardín Simbólico de toda la literatura universal nos evoca algo ordenado,
protector, el premio definitivo,
el hortus conclusus, aislante
de turbulencias externas: el
Paraíso se representa como un
Jardín Deseable. Sin embargo,
su representación (como la de
la entrañable Enciclopedia Álvarez) era una selva, un bosque,
quizás un complejo bosque
93
¿Qué películas son una
epopeya a la defensa de
los bosques?
tropical. Resulta interesante la
conjunción de la riqueza de la
selva con ese deseable Jardín
Eterno, ese Paraíso Perdido:
riqueza y biodiversidad, seguridad y premio. Al margen de
lecturas más espirituales, el
mensaje, cercano y material,
es que el Paraíso se encuentra
en la Tierra, nuestro Jardín del
Edén, representado en forma
material por nuestros bosques,
verdaderos protectores de la
vida en el planeta y también
del bienestar humano. Encontramos la misma idea en la
magnífica película “Los últimos
días del Eden”: un lugar de paz
y abrigo, con todo lo que se
necesita, incluido el remedio
contra el cáncer. A pesar de
todo, nuestra civilización lo
destruye (en el caso de esta
película, con la construcción de
una carretera). El protagonista
(un formidable Sean Connery)
expone que la avaricia humana
va a destruir el supermercado
farmacéutico más grande del
planeta. Esta idea de “Jardín del
Edén” donde, si no es posible la
vida eterna, al menos la hace
DD
La protección de la selva
amazónica y de sus tribus
indígenas frente al avance de
la deforestación, movida por
los intereses económicos, son
el tema de dos películas muy
significativas: “La selva esmeralda” y “Los últimos días del
Edén”. En esta última se realza
también el valor terapéutico
de algunas plantas desconocidas, a través del Doctor Robert
Campbell, que vive con una tribu nativa de Brasil y descubre
accidentalmente un extracto
de una flor que cura el cáncer.
Si destruimos la selva, esa riqueza potencial, desconocida
hasta la fecha, se perderá para
siempre. Un mismo similar, la
defensa del bosque frente a las
potencias industrializadas, se
puede trasladar a un planeta
imaginario, Pandora, habitado
por tribus indígenas de humanoides azules y animales extraños, en la película “Avatar”. En
ella, estas potencias ambicionan explotar un mineral valioso
cuyas minas están situadas por
azar exactamente por debajo
del árbol sagrado que establece conexiones con los habitantes del planeta. Pero el himno
al bosque también se puede
contar de una forma mucha
más sencilla en “Dersu Uzala”
de Akira Kurosawa. En el inicio
de la película, 1910, el capitán
ruso Arseniev vuelve a la taiga
en busca de la tumba de su
amigo. Al llegar encuentra que
el bosque ha sido talado y se ha
instalado en su lugar un poblado en nombre de la civilización.
Entonces hace un viaje en la
94
¿Qué relación existe entre una mesa de caoba
y un chimpancé?
DD
Se calcula que, a principios del siglo XX, había dos millones de chimpancés
salvajes distribuidos por 25 países africanos: actualmente apenas quedan
unos 200.000 ejemplares en una veintena. El hábitat principal del chimpancé
y otros primates (gorilas, bonobos…) son las selvas tropicales centroafricanas, la mayor superficie de bosque tropical después de la Amazonía (172
millones de hectáreas) y el lugar de África con mayor biodiversidad. A pesar
de su enorme importancia, sólo el 8,5% de estas selvas, que se extienden a
lo largo de Camerún, República Centroafricana, Congo Brazzaville, República
Democrática del Congo, Guinea Ecuatorial y Gabón, cuentan con algún tipo
de protección. Según Greenpeace, esta desprotección legal ha permitido que
las empresas madereras hayan conseguido concesiones forestales en unos 50
millones de hectáreas de selva, un área del tamaño de España. Las autopistas
que se construyen en mitad de la selva para la extracción selectiva de maderas
nobles, como la caoba, son la punta de lanza de la deforestación y la caza comercial furtiva de grandes mamíferos. Los chimpancés se ven así doblemente
afectados por el comercio de madera: destruye su hábitat y favorece su caza
indiscriminada e ilegal. El Instituto Jane Goodall (célebre primatóloga y activa
ecologista) denuncia la responsabilidad de los países importadores de madera
de bosques tropicales, entre los que se encuentra España. De este modo, el
consumo irresponsable de muebles de caoba termina afectando a la extinción
de los chimpancés.
memoria y recuerda cómo en
una expedición cartográfica conoció a Dersu, el viejo cazador,
que le enseñó a comprender la
naturaleza, a amar el bosque
que ya no existe y a sobrevivir
en las condiciones más adversas.
95
¿Quién dijo “Hispania
puede ser cruzada de
punta a punta por una
ardilla sin pisar el
suelo”? (267 palabras)
DD
Una de las primeras descripciones de la Península Ibérica
se la debemos al geógrafo e
historiador griego Estrabón
quien, basándose en escritos
de otros autores que sí nos
visitaron, la refiere como “una
gran extensión de montañas y
bosques” (“Geografía” III, Siglo
I a.C.). Más tarde, Plinio el Viejo la describe en parte como
montes “áridos y estériles y
en los que ninguna otra cosa
crece” (“Historia Naturalis”
XXXIII, 67). Pero ni Estrabón,
ni Plinio el Viejo ni su sobrino,
Plinio el Joven, dejaron al pare-
cer en sus escritos frases que
relacionasen ardillas y bosques
hispanos: la famosa cita sobre
una ardilla que es capaz de
cruzar la península saltando de
árbol en árbol parece ser apócrifa. Pero ¿pudo ser realidad?
Algunos estudios indican que
la etapa de la cultura de los
Castros (siglos V a.C. - I d.C.) fue
presumiblemente la de menor
masa forestal en el noroeste
peninsular de los últimos diez
mil años. Por otro lado, parece
que el clima húmedo y templado de la fachada atlántica en
el Bajo Guadalquivir, algunos
milenios a.C., era propicio para
grandes extensiones forestales,
habiéndose encontrado restos
polínicos de especies poco propias de la zona como fresnos,
serbales, robles, alisos y chopos. Al margen de la situación
pasada, la mayoría de nuestro
territorio se halla deforestado
en la actualidad, ocupado por
pueblos, ciudades, carreteras
y extensiones de monocultivo.
Sin embargo, según los datos
del III inventario Forestal Nacional, la superficie arbolada
37
Andalucía InNOVA. FEBRERO 2011
100 preguntas, 100 respuestas
en España ha aumentado al
menos en los últimos 20 años.
Pero hemos de ser cautos: no
todas las áreas forestales son
bosques naturales ni poseen
las cualidades de éstos (complejidad, longevidad, funcionamiento, biodiversidad…).
100
¿Cómo podemos
disfrutar de nuestros
bosques?
96
¿El bosque es cultura?
DD
Si tenemos en cuenta la definición de tradición como noticia de cosa antigua que se trasmite de padres a hijos, vemos
que actualmente en los bosques
existen pocos usos que se puedan llamar “tradicionales”. Si
además tenemos en cuenta que
el concepto de tradición se suele
basar en análisis elaborados por
élites cultivadas, habitualmente
con poca atención al sentido que
pudiera tener entre los propios
agentes de la tradición, los usos
tradicionales de los bosques es
pura entelequia. Los bosques
se han usado para cosas harto
diversas y unos usos han perdurado más que otros, pero en
todo caso han ido variando a lo
largo del transcurso del tiempo.
Por ejemplo, la extracción de
madera es uno de los usos más
claros y típicos de un bosque. Sin
embargo, ésta ha pasado de ser
una extracción de combustible
y material de construcción a la
extracción de pasta de papel o,
más recientemente, de biomasa
para obtención de energía (que
en el fondo también es combustible pero gestionado de otra
manera muy diferente). Por otra
parte, ciertos usos tradicionales
han llevado a la destrucción
de los bosques, frente a otros
que los han conservado más o
menos bien. Actualmente los
bosques han pasado a ser uno
de los símbolos de “Naturaleza”
digna de ser conservada a toda
costa. Es más, se han creado
nuevos bosques con el objeto
de conservar esa “Naturaleza”,
consiguiendo en muchas ocasiones lo contrario. Actualmente
se piensa que es preciso “reinventar” tanto los bosques como
sus usos tradicionales, es decir,
transformar sus especies en
38
especies en peligro de extinción y, sus espacios, en valores
positivos para la identidad del
ser humano. Es decir, para ser
conservados, los bosques necesitan ser construidos como
“invenciones” culturales; más
allá de éstas, no hay ninguna
ética universal que sea capaz
de asegurar su conservación.
97
¿Qué profesionales
cuidan de los bosques?
DD
Aunque no hay una disciplina específica para el estudio de
los bosques, existe una variedad de especialidades dentro
de la biología que estudia los
bosques desde diversos puntos
de vista: por ejemplo, la ecología, ecofisiología, biogeografía,
fitosociología, botánica, etc.
Además, una ingeniería específica (de montes o forestal, según la universidad), los estudia
desde el punto de vista de su
aprovechamiento y regeneración, sobre todo en lo referente
a técnicas de manejo. Desde
el punto de vista práctico de la
actividad cotidiana, los agentes
forestales se encargan de la
vigilancia y labores de mantenimiento, especialmente en lo
relativo a los incendios. En este
sentido, también los pastores
pueden considerarse respon-
sables de cuidar bosques por
cuanto dirigen los rebaños que
controlan el crecimiento del
pasto en cortafuegos y sotobosques. Finalmente, aunque
no de manera remunerada,
todos podemos cuidar de nuestros bosques, manteniendo
actitudes responsables y sostenibles con ellos y con el medio
natural en general.
98
¿Moriríamos si
talásemos todos los
bosques?
DD
Para contestar a esta pregunta necesitamos plantearnos la función de los bosques
a nivel global y local, y si esta
función puede ser sustituida
por el resto de los ecosistemas
o por nuestra tecnología. “Moriríamos” es un término globalizante conjugado en tiempo
futuro, ¿a quién nos referimos?
Pensemos que razonamos sobre el ser humano, entonces
¿qué seres humanos? Por otro
lado, ¿qué es morir?¿es perder
la vida o cambiar a niveles
míseros un tipo de calidad de
vida? Retomemos la pregunta
inicial: ¿moriríamos si talásemos todos los bosques? Una
comunidad local, por ejemplo,
de la selva ecuatorial, es absolutamente dependiente de
su bosque. Si se lo talamos, su
calidad de vida desaparece;
podríamos decir que mueren
como humanos y quizá como
seres vivos. Y existen muchos
otros casos en el planeta de dependencia de poblaciones locales de sus bosques. Pensemos
ahora en las funciones globales
de los bosques: generar oxígeno, secuestrar dióxido de
carbono, almacenar nutrientes,
estabilizar los ciclos hídricos,
retener la erosión, mantener la
biodiversidad, estructural como paisaje, recursos directos,
suministradores de nutrientes
alóctonos a ecosistemas acuáticos, atenuación de extremos
climáticos, almacén farmacológico. Si deforestamos el
planeta ¿cómo se sustituirían
estas funciones? No hay sistema tecnológico ni artefacto
humano que pueda hacerlo. La
sustitución de funciones por
otros ecosistemas es más que
dudosa. Por ello podemos decir
que si destruimos los bosques
podríamos morir como individuos. Recordemos los versos
de J. Doone: “por eso, nunca
preguntes por quién doblan las
campanas; doblan por ti”. Con
que una sola comunidad muera
o desaparezca por la pérdida
de sus bosques, todos morimos
con ella. Quizá no desaparecié-
semos como especie si talamos
los bosques pero ¿en qué condiciones viviríamos?
99
¿Qué puedo hacer
yo para ayudar a
conservar nuestros
bosques?
DD
Aparte de los esfuerzos
realizados por la comunidad científica, los gobiernos,
administraciones, agencias
estatales, organizaciones y
comunidades locales, debemos
ser conscientes del papel individual que podemos desempeñar
en la conservación de nuestros
bosques: Trata de comprar muebles, papel, tableros y otros productos derivados procedentes
de madera certificada, lo cual
garantiza que los bosques de los
que proceden dichos productos
han sido bien gestionados desde
un punto de vista económico,
social y ambiental; minimiza
el consumo de agua y energía,
contribuyendo así a disminuir
los efectos del calentamiento
global; recicla y reutiliza tu papel; participa activamente en
la protección de los bosques,
manteniéndolos limpios y extremando precauciones contra el
fuego en tus visitas, y contribuye
directamente a su conservación
a través de grupos de volunta-
DD
Muchos de nuestros bosques se hallan
incluidos dentro de espacios naturales
protegidos, pertenecientes a la RENPA
(Red de Espacios Naturales Protegidos
de Andalucía). En estos casos, es la administración autonómica la encargada de
gestionarlos y protegerlos. Cada espacio
protegido contempla un PUP (Plan de Uso
Público), que tiene como finalidad acercar
a los visitantes a los valores naturales
y culturales, de una forma ordenada y
segura, que garantice la conservación
y difusión de tales valores a través de
la información, la educación y la interpretación ambiental. Las ofertas de uso
público relacionadas con nuestros bosques son numerosas: senderos, puntos de
información, observatorios, miradores,
campings… La accesibilidad a nuestros
bosques puede estar a veces restringida,
debido por ejemplo a que se trate de zonas de reserva dentro del espacio protegido. En estos casos, si el ciudadano desea
disfrutar de estos valores naturales, puede dirigirse a las oficinas de los parques
y obtener un permiso especial de visita.
Los beneficios más palpables de nuestros
bosques (frutos, madera, esparcimiento y
otros) no nos deben hacer olvidar que son
sistemas que mejoran nuestra calidad de
vida, ya que sus constituyentes vegetales
purifican el aire que respiramos, entre
otros beneficios. No debemos olvidar que
hemos recibido un legado que debemos
mantener heredable para generaciones
venideras.
riado (reforesta, informa y educa
a los más jóvenes).
“Al final, solo protegemos lo
que amamos; solo amamos lo
que entendemos; y solo entendemos lo que nos ha sido enseñado”. Así resume el conservacionista senegalés Baba Dioum
la importancia del conocimiento
en la conservación. Sólo a través
de la información y la educación
se podrán alcanzar los objetivos
de conservación en el futuro. Seguramente el primer paso para
conservar nuestros bosques sea
conocerlos.
39
Descargar