Senado de la Nación Secretaría Parlamentaria Dirección General de Publicaciones (S-1689/08) PROYECTO DE DECLARACION El Senado de la Nación DECLARA: La necesidad de fomentar la investigación, estudio y difusión de la obra de Hipólito Bouchard, Capitán de la fragata “La Argentina”, portadora de los colores de la bandera Argentina, que a los cuatro años de su visita a Centroamérica, fue adoptada en forma oficial por la Constituyente de las Provincias Unidas del Centro de América, ratificando así el común origen de las banderas Centroamericanas, inspiradas en el pabellón del 25 de Mayo. Sonia Escudero. FUNDAMENTOS Señor Presidente: A principios del siglo pasado, buques argentinos llevaron por los mares del mundo la Bandera Argentina, como un símbolo de liberación. Cuando se independizaron, los países centroamericanos adoptaron el pabellón de Belgrano. En 1812 el primer triunvirato, a petición del mismo Belgrano, oficializó el uso del pendón bicolor, que al año siguiente se adoptó como insignia del Director Supremo de las Provincias Unidas y que estaba definido en éstos términos: “una banda bicolor blanca al centro y azul a los costados”, diseño original adoptado por Guatemala y que es su pabellón hasta la fecha. El 24 de Julio de 1816 el Congreso de Tucumán que proclamó la Independencia de las Provincias Unidas, establecía que “elevadas las Provincias Unidas de Sur América al rango de Nación después de la declaración de la independencia, será su peculiar distintivo la bandera celeste y blanco que se ha usado hasta el presente, y se usará en lo sucesivo exclusivamente en los ejércitos, buques y fortalezas, en clase de bandera menor, ínterin decretada al término de las presentes discusiones la forma de Gobierno más conveniente al territorio, se fijen conforme a ella los jeroglíficos de la bandera nacional mayor” Atendiendo esa disposición, Hipólito Bouchard se hizo a la vela y ya surcando los mares, el 25 de Febrero de 1818 el Congreso, establecido ya en Buenos Aires, dictó el siguiente decreto: “Que sirviendo para toda bandera los dos colores blanco y azul en el modo y forma hasta ahora acostumbrados sea distintivo peculiar de la bandera de guerra un sol pintado en medio de ella”. A decir de Bartolomé Mitre, ninguna de las animadas y brillantes odiseas marítimas que se llevaron a cabo desde 1815 hasta 1821 presentan el interés de lo que fue el crucero de la fragata “La Argentina” al mando del capitán Hipólito Bouchard. Hipólito Bouchard nació el 15 de enero de 1780 en Bormes una localidad francesa, en 1798 se enroló en la armada francesa y terminó emigrando al Río de la Plata en 1809 desilusionado con el curso de la Revolución Francesa. En septiembre de 1815 le otorgan la patente de corso a Bouchard, en una expedición financiada por Vicente Anastasio Echeverría, un abogado rosarino de dilatada vida pública. Después de un primer viaje, el 25 de junio de 1817 parte su recorrida al mundo la fragata “La Argentina” Los mares de la India y del Pacífico fueron su teatro de acción, dominando en ellos la Polinesia, la Malasia y las costas de California y Centroamérica, destruyendo el comercio español en las Filipinas y después de recios combates, largos trabajos y proezas dignas de memoria, dando la vuelta al mundo desde las costas argentinas, doblando por el Cabo de Buena Esperanza, hasta las de Chile, atravesando los mares de Oceanía. Cabe destacar como hecho distinguido que el 24 de noviembre de 1818, habiendo llegado a California, con los hombres rescatados del barco “Santa Rosa” (barco apresado en Hawai) Hipólito Bouchard desembarcó con 200 infantes y marineros, armados de fusiles o lanzas, además de algunos cañones. Las primeras respuestas de los guardias fueron repelidas. Los apenas 25 soldados españoles huyeron asustados. Uno de los guerreros hawaianos que integraban la tripulación arrió la bandera española y enarboló la enseña Argentina. Desde esa noche del 24, hasta el 29 de noviembre, California fue Argentina. La aventura de Hipólito Bouchard en el pacífico Norte terminó con un bergantín que cañoneó la fragata “Santa Rosa” y al enterarse de que San Martín estaba por lanzar su campaña marítima contra el poder español en Perú, decidió dar por finalizada la expedición y dirigirse hacia Valparaíso. Ante los daños sufridos, tanto la fragata “La Argentina”, como la fragata “Santa Rosa” solo hacían transportes de carga para los ejércitos libertadores, desembarcados en Perú en septiembre de 1820. Luego de que San Martín proclamara la independencia de Lima el 28 de Julio de 1821, organizó la marina de guerra peruana y le dio a Bouchard el mando de la fragata “Prueba”, la nave más importante de la flota, cargo que realizaría hasta 1828. Nosotros apenas conocemos por tradición el nombre del Capitán “Buchardo” (como le decían en aquella época), el primero y el último que hizo dar triunfalmente la vuelta al mundo a nuestra bandera; y el único que hasta hoy haya llevado tan lejos nuestras armas, haciendo pronunciar el nombre de la República Argentina en los más remotos mares, por la ardiente boca de sus cañones. A este capitán, al hombre que exalta la narración histórica, es al que deben los colores de su bandera y el estímulo a la libertad, los pequeños países del istmo centroamericano. Por ello, es que vemos la necesidad de fomentar el estudio y la transmisión sobre Hipólito Bouchard y la influencia de su obra en los países centroamericanos. Por las razones expuestas, señor Presidente, solicito a mis pares la aprobación del presente proyecto. Sonia Escudero.