La Alhambra de Granada • • • INTRODUCCIÓN Alhambra de Granada, recinto emplazado en una colina sobre la ciudad de Granada, en cuyo seno se encuentra uno de los palacios más relevantes de la arquitectura islámica. El nombre de Alhambra procede del color rojo de sus muros, en árabe Al-Hamrá, construidos con la arcilla del propio terreno. En la actualidad acoge numerosos edificios, entre los que destacan el palacio y la alcazaba originales y el palacio de Carlos V, construido por encargo del emperador y para cuya obra se demolió parte de la zona oficial del palacio musulmán. En 1984 fue declarada Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO. Patio de los Arrayanes, Granada Ésta es una de las imágenes más emblemáticas del palacio Nazarí de la Alhambra, en Granada. En primer término se observa el patio de los Arrayanes, con los dos setos de arrayanes o mirtos que flanquean la alberca, sobre la que se reflejan los soportales de la sala de la Barca y la monumental torre de Comares. Palacio de la Alhambra • • • Muhammad I (1237-1273), primer rey de la dinastía Nazarí, comenzó la urbanización de la colina junto al río Darro y construyó la alcazaba, una impresionante fortaleza que domina la ciudad de Granada desde un espolón. Su sucesor Muhammad II (1273-1302) concluyó el recinto amurallado, asegurando así la paz interior del palacio-ciudadela de los monarcas granadinos. El palacio real que hoy se conserva, sin embargo, fue construido por Yusuf I (1333-1354) y Muhammad V (1354-1358 y 1362-1391). La casa real vieja es un conjunto de construcciones agrupadas de forma irregular, pero al mismo tiempo con un extraordinario sentido del rigor espacial. Las distintas estancias se articulan por medio de patios, comenzando por el de ingreso y el de Machuca —desaparecidos casi por completo— que conducían al mexuar o salón de justicia. Entre éste y el patio de los Arrayanes aparece una pequeña obra maestra, el patio del Cuarto Dorado, cuya sorprendente fachada al cuarto de Comares sirvió de modelo para numerosas obras hispanomusulmanas posteriores. Pasadas estas estancias se abre el patio de los Arrayanes, una de las piezas fundamentales de la Alhambra gracias a sus prodigiosas proporciones, tensadas por la alberca longitudinal que divide su planta. En uno de los extremos del patio se alza la torre de Comares, cuya majestuosa mole cuadrada preside el espacio público del patio y cuyo interior ocupa, precedido por la sala de la Barca, el magnífico salón de Comares, un espacio de gran altura que constituye la parte más solemne del palacio granadino. A la derecha del patio de los Arrayanes se encuentra el patio de los Leones, considerado uno de los momentos culminantes del arte islámico y construido por Muhammad V a semejanza del paraíso soñado por los fieles musulmanes. Junto con los baños, situados en el piso inferior, constituye el centro de la vida íntima de la corte, organizada alrededor del agua en una exaltación del refinamiento espacial y decorativo. Entre las estancias que rodean al patio de los Leones destacan la sala de Dos Hermanas, que repite la composición espacial del patio y se ilumina de luz natural a través de una excepcional cúpula de mocárabes; la sala de los Abencerrajes, cubierta por una cúpula similar a la anterior, y la sala de los Reyes, sorprendente por sus pinturas figurativas inusuales en el arte islámico medieval. El conjunto de palacios y estancias de la Alhambra se sucede en los restos del antiguo palacio y los jardines del Partal, y más adelante en algunas torres de sus murallas, como la de la Cautiva o la de las Infantas, guardianas de un misterioso encanto estrechamente relacionado con las leyendas que les dan nombre. La Alhambra se convirtió en palacio de los reyes cristianos desde la toma de Granada por los Reyes Católicos, en 1492. Su nieto, Carlos I, mandó construir junto al palacio musulmán un edificio renacentista Partes de la Alhambra • Mexuar: • Es la sala más primitiva. Era la audiencia y justicia para casos importantes. Tenía una cámara elevada cerrada por celosías donde se sentaba el sultán a escuchar sin ser visto. No existían las ventanas laterales. Tenía el techo abierto en su parte central. Al fondo, una pequeña habitación desde donde se divisa el Albaycín. Parte superior con un friso escrito. Es un oratorio. A continuación se entra en un patio con fuente en el centro y una cámara a la izquierda. • Patio del Mexuar o del Cuarto Dorado: • Con alero original de madera de cedro, decoración de piñas y conchas. Bajo él, ventanas cerradas con celosías. Dos portadas rectangulares bordeadas de cenefa de cerámica. Es la entrada al palacio oficial. La estancia está decorada con pinturas góticas y escudos y emblemas de los Reyes Católicos. A continuación: • Patio de la Alberca o de los Arrayanes: • Es el recinto central de Palacio de Comares. Los arrayanes están plantados a ambos lados de la alberca, que ocupa gran parte del patio. En este patio ya podemos observar una de las constantes de la Alhambra: la presencia del agua. Y no sólo actuando como tal, es decir, agua, sino también como espejo. Precisamente en esta alberca se refleja la imponente Torre de Comares. En un extremo hay una galería a lo ancho del patio y en sus extremos, alcobas de tertulia. Desde la galería se entra en la antecámara llamada: • • Sala de la Barca: El Generalife • • • El Generalife fue construido por Mohamed VII fuera del recinto de la Alhambra como finca agropecuaria emplazada en una de las laderas del cercano Cerro del Sol. Las dependencias del Generalife se establecían alrededor del famoso patio o jardín de la Acequia. Al norte de este patio se conserva el núcleo palatino más importante del Generalife. Se abre mediante pórtico de cinco arcos, más ancho el central y contiene dos alcobas laterales y torre interior. Torres de Comares • En sus laterales hay 9 alcobas y ventanas cerradas antiguamente por celosías de madera y vidrieras de colores llamadas cumarias, (de ahí el nombre de comares). Todas las paredes están estucadas con motivos de conchas, flores, estrellas, escrituras. Sala policromada: oro en el relieve, colores claros en lo profundo. Zócalo decorado con azulejos. El suelo original era de cerámica vidriada en blanco y azul con escudos de armas como motivos ornamentales. El techo es una representación el Universo, quizás una de las mejores representaciones de la Edad Media. Realizado en madera de cedro con incrustaciones de maderas de diferentes colores, va formando estrellas superpuestas que forman diferentes niveles. En el centro y lo más elevado está el Escabel ( )عرشsobre el que se establece Dios-Alláh según los relatos coránicos. Desde éste se van repitiendo las figuras geométricas que dividen el techo en siete espacios, que representan los 7 cielos que descienden consecutivamente hasta este mundo: el 7 es uno de los números simbólicos por excelencia. Entre todos ellos configuran el Trono ()كرس, que es el símbolo de la creación entera. Este uso simbólico de cosmologiá coránica -con tantas alusiones al Escabel, el Trono, al Rey que se asienta sobre él- tiene una clara intención de legitimizar al soberano como Palacio de los Leones • Data de 1377 con Mohamed V, hijo de Yusuf I. De planta rectangular, rodeado por una esbelta galería con 124 columnas de mármol blanco de Almería. Alrededor, las alcobas, salas privadas del sultán y esposas con piso alto abierto, falta de ventanas que miren al exterior, pero con jardín interior como corresponde a la idea musulmana del paraíso. Lo que hoy es tierra en el patio, fue jardín. De cada sala fluyen 4 arroyos que van al centro: los 4 ríos del paraíso. Las columnas se unen con paños calados que dejan pasar la luz. Fustes cilíndricos muy delgados, anillos en la parte superior, capiteles cúbicos sobre los que corren inscripciones. Las planchas grises de plomo son amortiguadores para los terremotos. Los dos templetes que avanzan a los dos lados opuestos del patio son como un recuerdo de la tienda de campaña de los beduinos. Son de planta cuadrada, decorados con cúpulas de madera que se apoyan en pechinas de mocárabes. El alero es obra del siglo XIX. Toda la galería está techada con artesonado de lacería. ARTE Y ARQUITECTURA HISPANOMUSULMANA INTRODUCCIÓN Arte y arquitectura hispanomusulmanas, la arquitectura islámica española ofrece edificios que son esenciales para la comprensión del arte musulmán, tanto por ser creadora de formas originales, como por el papel que desempeña en la difusión de formas y técnicas orientales. Periodo cordobés y de taifa • El arte hispanomusulmán se inicia con el periodo cordobés, que comienza a fines del siglo VIII hasta comienzos del siglo XI debido al establecimiento de la capitalidad en Córdoba. En el arte cordobés hay una clara influencia de los edificios visigodos e hispano-romanos, ya que se aprovecharon muchos elementos arquitectónicos de edificios ya construidos. Por tanto es muy característico el uso del arco de herradura semicircular, heredado de la arquitectura visigoda. Para las cubiertas se utilizan diferentes tipologías de bóvedas, entre las que sobresalen la de gallones y la de crucería. Su edificio más importante es la mezquita de Córdoba. • Mandada construir por Abd al-Rahman I en el 786 sobre el solar de una antigua iglesia visigoda. La sala de oración está precedida por el alminar y el patio de abluciones o sahn, y en su centro se halla la catedral del siglo XVI y la cubierta de la capilla real de la primitiva catedral de Santa María. A la izquierda del muro del fondo o quibla, se encontraba el palacio del califa. Una vez en el interior nos encontramos con once naves perpendiculares a la quibla (al contrario de la mezquita de Damasco) y una arquería doble de arcos de medio punto en la parte superior y de herradura en la inferior con Palacio de Medinat alZahara • La ciudad y palacio de Medinat al-Zahara fue una de las construcciones más emblemáticas del califato Omeya. Abd-alRahman III ordenó el inicio de las obras en el 936 a Maslama ibn Abd Allah. Posteriormente fue ampliado por AlHakam II. Ubicado en las afueras de la ciudad y entonces capital del califato de Córdoba, es considerado precedente artístico del palacio granadino de la Alhambra y una de las obras cumbres de al-Andalus. PERIODO ALMORÁVIDE, ALMOHADE Y NAZARÍ • A partir del siglo XI, se inaugura la segunda etapa en el arte islámico con la presencia de pueblos bereberes (almohades y almorávides) en al-Andalus. El arte almorávide se caracteriza por un predominio de lo decorativo sobre lo constructivo, que recurre al uso del ladrillo en columnas o pilares, así como arcos más complejos (polilobulados y mixtilíneos) y bóvedas más variadas como las esquifadas o de mocárabes, y la decoración de red de rombos o sebka. Corresponden a este periodo el mihrab de la mezquita de Almería. La siguiente invasión da origen al arte almohade, año 1153, que establece su capital en Sevilla hasta su derrota frente a los cristianos en la batalla de las Navas de Tolosa (1212). En esta fase prima lo constructivo tanto en las bóvedas como en los arcos y se origina la tipología de mezquitas en forma de T. Así mismo se edifican construcciones de tipo defensivo como las torres albarranas, (como la célebre torre del Oro) las alcazabas o La Kutubiyya, mezquita de Marrakech. Finalmente, el arte hispanomusulmán culmina en su etapa Nazarí, reino de origen independiente creado a raíz de la conquista de Granada en 1238. Arte en cierto modo ecléctico, se caracteriza por la profusa decoración a pesar de la pobreza de los materiales que emplean. Sus características principales son la columna de fuste cilíndrico con un capitel de dos cuerpos, el inferior decorado con cintas y el superior con ataurique. La elegante inscripción epigráfica que a veces decora sus cimacios sirve de base a los arcos angrelados y peraltados. Se enriquecen las cúpulas de mocárabes y se utilizan techumbres que complementan la rica ornamentación en uno de los máximos momentos de declive del arte hispanomusulmán. Su edificio más emblemático es la Alhambra de Granada, que comprende todo un conjunto residencial amurallado. Sus orígenes se remontan a la alcazaba que mandó construir Muhammad I, el fundador de la dinastía de los Nazaríes, quien abasteció de agua la colina y levantó la torre de la Vela y la del Homenaje. El palacio que se conserva hoy día fue construido por Yusuf I (1333-1354) —el salón del trono y el patio de los Arrayanes en el espacio público— y por Muhammad V (1354-1391), que completó la zona privada. Destacan los baños, quizá de los más ricos hallados en la península, y el patio de los Leones, donde Planta de la Alhambra • El palacio de la Alhambra de Granada, residencia de varios reyes Nazaríes, se compone de un conjunto de construcciones agrupadas de forma irregular en torno a un serie de patios. Entre las estancias más representativas sobresalen las siguientes: 1) entrada; 2) mexuar; 3) oratorio; 4) cuarto Dorado; 5) patio de los Arrayanes; 6) sala de la Barca; 7) salón de Comares; 8) patio de los Leones; 9) sala de los Abencerrajes; 10) sala de los Reyes; 11) sala de Dos Hermanas; 12) sala de los Ajimeces; 13) baños. Patio de los leones • En torno al Patio de los Leones (en la fotografía) se agrupan los aposentos privados del palacio de la Alhambra en Granada (España). Es una de las zonas donde mejor se aprecia el carácter paradisiaco de la vida cortesana Nazarí. Su planta rectangular está surcada por pequeñas acequias que parten de la fuente marmórea que ocupa el centro del patio. Palacio de la Alhambra • La Alhambra, que en árabe significa ‘el castillo rojo’, es el único ejemplo de arquitectura musulmana medieval que ha llegado intacto hasta nuestros días. Está situado en lo alto de una colina desde la que se divisa la ciudad de Granada. En su interior se encuentra el bellísimo palacio real que pertenece a la etapa Nazarí del arte hispanomusulmán.