FRANCISCO GINER DE LOS RÍOS

Anuncio
FRANCISCO GINER DE LOS RÍOS
(1917-1995)
“La hondura emocionante y clara de los poemas recientes de un
Moreno Villa auténticamente nuevo; la humanísima ternura de
Prados; la fuerza tremenda, desatada al fin, en su hora, de un
León Felipe; la apasionada retórica, clara y nueva también, de
un Domenchina; el verso libre y puro, cada vez más maravilloso,
de un Cernuda, y la severa gracia andaluza de un Rejano, del
todo poeta del destierro”.
Francisco Giner de los Ríos.
LA VOZ DEL POETA ENAMORADO DE NERJA
Los temas reiterados en la obra poética de Francisco Giner de los Ríos, estudioso de
poesía, antólogo, tipógrafo... y, sobre todo, poeta, nacido en Madrid, que siempre se
consideró nerjeño, son: el amor, la muerte, la preocupación religiosa, España, la
amistad... Su amor hacia una tierra -su tierra- no le impide mirar otras tierras: México o
las ciudades por las que en algún momento discurre su existencia. En su bello poema A
Juan Rejano clama: “Querría que sintieses este llanto contigo / y supieras ahora que no
creo en tu muerte / porque vives conmigo / y entre lo nuestro todo se me enreda...” En
su Elegía en la muerte de Miguel Hernández nos grita: “No has muerto, que te han
muerto entre unos muros / asesinando el vuelo de tu pájaros, / la voz de tu garganta
amordazando.” Y en Llanto con Emilio Prados escribe: “Y todo, Emilio, todo / se
mezcla con España y para España / -aquella ira amorosa, tú te acuerdas- / que nos hace
y deshace, / que nos encuentra y nos pierde por el mundo...”
Francisco Giner de los Ríos Morales nace en Madrid el 30 de diciembre de 1917. Hijo
de Bernardo Giner de los Ríos que fue ministro con Azaña. Desde niño veranea en
Nerja. Hasta los catorce años vive dentro de la Institución Libre de Enseñanza que había
fundado su tío abuelo don Francisco Giner. Inicia sus estudios de bachillerato “por
libre” en el Instituto Cardenal Cisneros. En el verano de 1932 escribe sus primeros
poemas. Termina sus estudios de bachillerato en el Instituto Cervantes. En 1935 ingresa
en la Universidad, Facultad de Filosofía y Letras. Colabora en las Misiones
Pedagógicas. Tras la sublevación militar del año 1936, participa en la guerra, en el
frente de Teruel. Terminada la guerra se exilia con ayuda de Fernando de los Ríos a
Estados Unidos. El 24 de mayo de 1939 entra en México, el 19 de julio de ese año, se
casa con Maria Luisa Díez-Canedo, hija del crítico literario Enrique Díez-Canedo.
Reinicia sus estudios de Filosofía y Letras. En 1944 inicia en México con Moreno Villa,
Prados, Altolaguirre y Rejano la tercera época de la revista Litoral. Colaboró en Taller,
revista mensual mexicana de poesía y crítica, dirigida por Octavio Paz, en Cuadernos
Americanos, y, posteriormente, en el Boletín de la Unión de Intelectuales Españoles en
Francia y en L'Espagne Républicaine /L'Espagne. Perteneció a la primera Junta
Directiva del Ateneo Español en México. A mediados de 1945 se constituye en México
el Gobierno de la República en el Exilio y colabora con Fernando de los Ríos –Ministro
de Estado (Relaciones exteriores)- como Jefe de Gabinete. En enero de 1946 viaje a
Europa, Londres, Oxford, París... en ese año aparece su antología Las cien mejores
poesías españolas del destierro. En 1948 regresa a México. En 1953 acepta un contrato
permanente para organizar la Sección Editorial de la CEPAL (Comisión Económica
para América Latina), dependencia de las Naciones Unidas en Chile. Diez años más
tarde ocupa primero la secretaría y luego la subdirección de la CEPAL en México.
Vuelve a Santiago de Chile para ser director de publicaciones de Instituto
Latinoamericano Económico y Social (ILPES) desde 1967 a 1972. Se vuelve a
reintegrar en la CEPAL para desempeñar finalmente el cargo de director de su división
de documentos y conferencias, en la que permanece hasta 1975, que regresa a España,
para vivir entre Nerja y Madrid. Colabora en muchos periódicos y revistas: ABC,
Araucaria, Heliópolis, Ínsula, Litoral, El País, Pueblo, Sur, Trilce... En 1987 el
Ayuntamiento de Nerja nombra hijos adoptivos de Nerja a Francisco Giner de los Ríos
y a su esposa María Luisa Díez Canedo “por demostrar muchísimo amor y dedicación a
Nerja”.
Su obra Jornada hecha. Poesía: 1934-1952 (1953) pone ante nosotros un panorama
muy completo de su creación hasta ese momento, en los años siguientes publicará
nuevas colecciones y poesía suelta. En mayo de 1940 publica La rama viva, que lleva
un prólogo muy entusiasta de Juan Ramón Jiménez. “ Con su ardor constante-nos dice
el poeta de Moguer-, cruce del fuego de loa amores eternos. Francisco Giner de los Ríos
(¡qué fortuna. Ausente entero, jeneroso y libre, que lleve hoy tu nombre quien lo lleva!)
un poeta joven, cuya vida interior, hermoso clavel español en apretada ascua, estalla con
lengua de poesía verdadera y amor verdadero, única redimidora posible de nuestra sorda
vida”. Estos versos juveniles fueron, en parte, escritos antes del exilio del poeta y
editados en México. Pasión primera y Romancerillo de la fe vieron la luz en 1941. En
1948 publica los Laureles de Oaxaca. Más tarde verán la luz Poemas mexicanos (1958),
Llanto con Emilio Prados (1966), Elegías y poemas españoles (1966), Por Algarrobo y
el Tabo, con las luces de Valparaíso (1980) y Borrador de Año Nuevo (1986), Junto con
su mujer María Luisa Díez-Canedo tradujo El imperio bizantino de Norman H. Baynes.
Y como dijo el poeta que sufrió la amargura y la soledad del exilio pero que nunca fue
vencido en su amor a Nerja: “No me quitéis el aire / ni me robéis la rosa, / ni me
escondáis el cielo. / Sobre un monte de España / quiero volver a verlos”.
Francisco Arias Solís
El mundo es nuestra patria, nuestros hermanos los que defienden en todas partes
la libertad... (Frase de Fermín Salvochea glosada en el libro: 102 razones para
recordar a Salvochea)
Portal de Internautas por la Paz y la Libertad y de Foro Libre.
URL: http://www.internautasporlapaz.org
Descargar