i^ ^ Núm. 21-75 HD ^i^^^ ^ HORMIGONADO DE CALLES EN POBLACIONES RURALES ALEJANDRO TOMAS ESPINOSA Ingeniero Agrónomo MINISTER I ODEAGRICULTURA HORMIGONADO DE CALLES EN POBLACIONES RURALES La frecuencia con que se produce la operación de hormigonar las calles en poblaciones rurales nos ha invitado a preparar las notas que siguen, las cuales van encaminadas, precisamente, a dar una orientacíón sobre los puntos de vista técnicos que habrán de tenerse en cuenta en el caso concreto en que se haya decidido la pavimentación de algunas calles de una población rural con tal solución. HORMIGON Es la mezcla formada por los siguientes elementos : - Grava y arena ( áridos ), que van a hacer la función de soporte o estructura. - Cemento, que actuará como conglomerante. - Agua, que da fluidez inicial a la masa y permite que se lleven a cabo las reacciones químicas correspondientes. La formación del hormigón lleva las fases que se indican a continuación. Amasado Consiste en la unión de los componentes, en las dosis previstas, mezclándolos hasta conseguir una masa plástica lo más homogénea posible. Para lograrlo es imprescindible el usa de una máquina hormigonera, pues la preparación ma:^ual, además de un trabajo enorme, no permite alcanzar la calidad debida. En cuanto a tiempo de amasado, para las hormigoneras que se vienen utilizando en este tipo de obras, el mínimo es un minuto. Kg/cm2 6 00 A 500 400 300 200 100 DIAS I 28 21 14 7 2 3 Kg/cm2 3001 200^ 100 } 3 6 I_ meses anos 2 3 4 5 6 7 8 9 10 Fig. l.-Aumento de resistencia del hormigón: A, durante el primer mes; y B, a lo largo de diez años. Fraguado Antes de transcurrida una hora de finalizado el amasad^ comienza el proceso de fraguado; normalmente se completará en menos de doce horas. IIurante este tiempo la pasta pierde su fluidez, se consolida y alcanza el aspecto definitivo, perc no así las propiedades que debe adquirir. Endurecimiento Estas propiedades irán afirmándose con el tiempo. En particular la rESistencia, muy baja al terminar el fraguado, aumenta de una forma rapidísima durante los primeros días, y mucho más lentamente a continuación. Aunque se ha observado que dicha resistencia sigue creciendo con el tiemp^^, -4- incluso después de años de haber sido hecho el hormigón, la que se considera en la práctica es la que adquiere en un me^, aproximadamente. La figura 1 muestra gráficamente el aumento de resistencia del hormigón a medida que pasa el tiempo. 'I'anto en el fraguado como durante los tres primeros días del endurecimiento, hay que cuidar extraordinariamente humedad y temperatura. Un exceso de humedad produce una masa muy fiuida, que si bien tiene la ventaja de poderse manejar con facilidad, a la larga provoca el que no se alcancen las propiedades previstas; por el contrario, si falta el agua las reacciones químicas no se producen y no hay fraguado ni endurecimiento. Las temperaturas altas favorecen estos procesos, aunque se debe tener en cuenta que provocan también la evaporación del agua, la cual, si es necesario, ha de reponerse. En el extremo opuesto, el frío es uno de los mayores peligros para el hormigón. En general, detiene la marcha normal de su formación, y si el agua llega a congelarse se produce un aumento de volumen y las consiguientes grietas. El hormigonado debe suspenderse si se prevé que vaya a haber heladas en las próximas cuarenta y ocho horas, salvo que se adopten medidas adecuadas, entre las que podemos citar: - Calentar el agua para el amasado, pero no a más de 40° C., porque entonces perjudica al cemento. -- Empleo de anticongelantes. - Protección del hormigón, una vez vertido, usando materiales aislantes. LOS ARIDOS Grava Es frecuente que, próximo al pueblo que se va a pavimentar, exista un depósito natural de grava, cuyo aprovechamiento supondría, lógicamente, un ahorro en el coste. Sin embargo, antes de tomar la decisión de utilizar este material hay que examinar si reúne las condiciones necesarias. -5- Fig. 2.^Aspecto y detalle de los elementos integrantes de la grava. Veremos, en primer lugar, si la grava está limpia. Si está mezclada con otros elementos se estudiará la facilidad de separación. Comprobaremos, después, su naturaleza y la tendremos que eliminar si procede de rocas blandas o fácilmenexfoliables. R,especto a la forma, será tanto mejor cuanto más se acerque a la esférica y peor si es aplanada. Recogiendo varias muestras podemos tener una idea de si la granulometría ( distribución por tamaños ) es buena; para que fuese perfecta habríamos de encontrar toda la gradación, entre el máximo que admitamos y el límite con la arena, el cual se puede establecer en unos 5 mm. El tamaño máximo ha de ser inferior a la cuarta parte del espesor de la losa que se vaya a construir. Naturalmente, si falta algún tamaño se puede completar la granulometría adquiriendo la cantidad necesaria de él. En las graveras en las que se obtiene el árido por machaqueo es fácil de conseguir esta gradación de tamaños ; además de las mismas consideraciones anteriores en lo referente a la naturaleza de la piedra, hay que tener en cuen- -6- ta en este caso que la figura ideal es el cubo, y será tanto mejor cuanto más se acerquen a ella y. peor si se ven trozos muy astillados. Otro factor que hay que sopesar a la hora de decidir si empleamos un depósito natural o árido machacado es que, en este último caso, por tener los trozos caras planas, se acoplan mucho mejor, ocupan un volumen menor y ambas cosas llevan consigo el que las cantidades de cemento se pueden reducir. Arena Se denomina así a los áridos de tamaño inferior a 5 mm. Es frecuente ver que no se presta demasiada atención a la arena, lo cual no está justificado, ya que su calidad influye de forma esencial en el hormigón ; quizá se deba a que la más utilizada, en general, la de río, suele ser limpia y posee condiciones buenas para este fin, pero, de todas maneras, la comprobación de su calidad es muy sencilla. Deben eliminarse las que a simple vista presentan residuos de materia orgánica en abundancia, aunque convendrá hacer una determinación más exacta en caso de duda. La presencia de partículas de tamaño muy pequeño, limo y arcilla, e incluso arena muy fina,. perjudican la calidad del árido. Una primera comprobación es la clásica de apretar en la mano un puñado de arena húmeda ; cuando cruje y se desprende de la mano sin dejar partículas adheridas a ella, es señal de que es apropiada. También, en este caso, si estas primeras pruebas no son muy claras, habrá que determinar con exactitud la cantidad de finos para tomar una decisión. El cemento Prácticamente en todos los casos el cemento que se utiliza es F'ortland, ya sea el P-250 ó el P-350, según las circunstancias lo aconsejan. La letra P es la inicial de Portland y el número que va detrás se refiere a la resistencia que alcanza, a los veintiocho días, un mortero hecho en las condiciones que especifica el ensayo. -7- El agua En general, la mayor parte de las aguas son aptas para este uso, pues los límites que se establecen a las sustancias perjudiciales son bastante altos ; sin embargo, ante el menor indicio de que puede no ser buena, debe recurrirse al análiQis, porque las consecuencias sobre el hormigón son muy graves. Las Instrucciones Oficiales para obras de hormigón señalan que deben rechazarse las aguas: - Con un pH inferior a 5. - Con sustancias totales disueltas superiores a 15 gramos por litro. - Con contenido en sulfatos, expresado en SO„ mayor de 1 gramo por litro. ('Usando cemento PAS puede ampliarse este límite hasta 5 gramos por litro ). - Con ión cloro en una proporción superior a 6 gramos por litro. - Con sustancias solubles en éter ( grasas y aceites) en más de 15 gramos por litro. - Con presencia de hidratos de carbono ( azúcares ) en cualquier cantidad. Fig. 3.-Es importante guardar la debida proporción entre los componentes del hormigón. -S- Hay que hacer notar que perjudica más la utilización de aguas inapropiadas para el curado del hormigón que par:^ el amasádo. La limitación en cuanto a ión cloro, en el caso concreto de pavimentaciones, no tiene mucha importancia, puesto que está puesta pensando en la posible corrosión de armaduras en hormigón armado. Por tanto, podemos admitir hasta tres o cuatro veces la cifra indicada. DOSIFICACION DEL HORMIGON Las cantidades de cada elemento se dosifican en función de las propiedades que se quieran conseguir. Existen muches procedimientos para averiguar la proporción en que debe entrar cada uno de los componentes. Los puntos fundamentales a considerar son: la relación agua/cemento y la granulometría de los áridos. La primera es el facter que más influirá en las propiedades del hormigón. Concretamente, con respecto a la resistencia a compresión, se puede observar en el gráfico adjunto cómo se alcanz.a el máxizno para valores de 0,2 a 0,3 ( relación en peso ). Sin embargo, no siempre es posible, ni siquiera conveniente, llegar a relaciones tan bajas, porque las cantidades de agua serían entonces pequeñas, tanto más ^i Fig. 9.-Gráfico que expresa la influencia de la relación entre el agua y el cemento en la resistencia del hormigón. 0,1 0,3 0,4 0,2 0,5 RELACION AGUA/CEMENTO -9no queremos emplear una cantidad elevada de cemento, y resultaría una pasta tan poco fluida que casi no se padría manejar. Se sabe que una parte del agua se utiliza en las reacciones químicas del fraguado, pero que es necesario que quede otra parte dentro de la masa. Con todo lo anterior, lo que se pretende es llamar la atención sobre la importancia que la reláción agua/eemento tiene en la fabricación del hormigón. En las Instrucciones Oficiales para obras de hormigón se dan unos cuadros de dosificaciones, suponiendo condiciones medias y en las hipótesis más corrientes. De ellos, y escogiendo, a su vez, los casos más aplicables al problema que nos ocupa, hemos sacado los datos que se dan a continuación, válidos para las obras con las siguientes características : - Cemento utilizado : P-250 ó P-350. - Arido utilizado: Rodado o machacado. - Consistencia adecuada para vibrar. - R.esistencia característica en obra : 120 kg./cmz. - Tamaño máximo del árido: 20, 40, 80 mm. (Hay que tener en cuenta, como ya hemos indicado, que este tamaño máximo debe ser inferior a 1/4 del espesor de de la losa, el cual normalmente no va a ser mayor de 20 cm., por lo cual el caso de 80 mm. no se utilizar.i,, en general. ) Las dosificaciones se expresan en peso, por ser así más exactas; para pasar a volumen se determinará la densidad de cada árido, siempre en la misma obra y con muestras de los que se van realmente a emplear. DO.SIS DE CADA COMPONENTE EN KILOGRAMOS, PARA OBTENER UN METRO CUBICO DE HORMIGON 1. Cemento P-250 - Arido rodado Tarnaño del árido Cemento Agua Arena Crava 20 mm . ... ... ... ... ... ... ... ... 40 mm . ... ... ... ... ... ... ... ... 80 mm . ... ... ... ... ... ... ... ... 350 310 270 180 160 140 650 675 710 1.300 1.350 1.420 - lo 2. 3. 4. Cemento P-250 - Arido machacado Tamaño del árido (;emento Agua Arena Crava 20 mm . ... ... ... ... ... ... ... ... 40 mm . ... ... ... ... ... ... ... ... 80 mm . ... ... ... ... ... ... ... ... 280 250 230 200 180 160 650 675 700 1.300 1.350 1.400 Cemento P-350 - Arido rodado Tamnño del árido Cemenlo Agua Arena Grcrva 20 mm . ... ... ... ... ... ... ... ... 40 mm . ... ... ... ... ... ... ... ... 80 mm . ... ... ... ... ... ... ... ... 290 250 220 180 160 140 670 690 720 1.340 1.380 1.440 Cemento P-350 - Arido machacado Tarnaño del árido Cernento Agun Arena Grava 20 mm . ... ... ... ... ... ... ... ... 40 mm . ... ... ... ... ... ... ... ... 80 mm . ... ... ... ... ... ... ... ... 240 220 190 200 180 l60 660 685 710 1.320 1.370 1.420 Por último, a la hora de dosificar en obra hay que vigilar la humedad de los áridos, en especial de la arena; tengamos en cuenta que todas las proporciones dadas para un hormigón específico se refieren siempre a áridos secos, y si bien, en el caso de la grava, el error no tiene gran importan- Fig. 5.-La hormigonera consigue que la mezda de componentes acl quiere homogeneidad. Fig. 6.-Banco de hormigón en e! centro de una calle, que divide el hormigonado en dos franjas. cia, con la arena tiene un doble efecto, pues estamos echando más agua de la debida, con el consiguiente aumento d-e la relación agua/cemento y los perjuicios que hemos visto que lleva consigo, mientras que, a la vez, la cantidad de arena es menor que la indicada en la dosis; por ello, si la humedad de la arena vemos que es alta, debemos determinarla y corregir las proporciones según este resultado. SECCION TKANSVERSAL Salvo en unas condiciones muy especiales del suelo, en cuanto a homogeneidad y estabilidad, la losa de hormigón no debe estar en contacto directo con él. En la mayoría d^ los casos, habrá una capa que los separe, que va a tener como función, entre otras, el aislar de la humedad al pavimento. Fara esta capa de separación se emplea grava, zahorra o piedra machacada y recebada, que se apisona con varios pases de rodillo. Con esta base se procura, además, eliminar todas las desigualdades, de manera que, una vez compacta da, la superficie sobre la que se apoyará la losa sea lo más uniforme posible. - 12 - El cálculo del espesor del pavimento es bastante delicado y requiere unos datos suficientemente exactos sobre la estabilidad de la explanación y sobre el tráfico que se espera tenga que soportar en un amplio plazo. A modo de orientación, damos el siguiente cuadro, extraxdo de "Road Note 29 Gran Bretaña - Revisión 1968", para las circunstancias más frecuentes en el tipo de obras que estamos tratando. ^ TxaFrco Pavimentos de hormigón en masa Explanada Espesores /cm.) Número de vehículos de lara 1,5 Tm., en día medio, veinte años ^lespués de su construcción y considerando los dos sentidos de circulación 1.500-150 150-45 45 Muy estable Losa Base 18 0 15 0 13 0 Normal Losa Base 20 8 18 8 15 8 Muy susceptible a movimientos diferenciales Losa Base 23 15 20 8 18 8 Hay que pensar también en que la losa no va a tener su superficie superior horizontal, sino que habrá que darle pendiente, a fin de encauzar las aguas hacia los puntos de recogida. Si existe alcantarillado y en él se van a recoger las aguas de lluvia, se dispondrán a modo de planos inclinados que viertan a los sumideros. Sin embargo, en el medio rural es frecuente encontrarse con redes de alcantarillado preparadas sólo para aguas negras, y cuya sección es insuficiente para llevar también las de lluvia. En tal caso ha.bremos de disponer el pavimento de manera que estas últimas corran superficialmente. ( Recordamos que, si no existe alcantarillado, esta obra debe s°r p.revia a la de pavimentación. ) Varias son las soluciones que pueden adoptar. La más sim- - 13 - HORMIGON .. .. tC. ^i^ 0 ZAHOR RA , ; • , . ^^,^ _ ' . v ,•^ f ^•^ ^ i:: ^^^•• ..^•.^ f . •• Fig. 7.-Diferentes tipos de secciones transversales. ple y útil, válida cuando la superficie de recogida no es grande, es dar a la sección transversal forma de V, de manera que el vértice inferior vaya por el centro de la calle. Siempre hay que tener en cuenta que las aguas deben evacuarse por el camino más corto. de la forma más rápida y sin que cau^en molestias a nadie; por ello, si la superficie de recogida es grande, y dado que las pendientes longitudinales van a ser casi fijas, el anterior sistema podía ocasionar el problema de formar una lámina de agua demasiado alta, que, sobre todo en las curvas, si llegase a desbordar la acera, penetraría en los portales situados en dirección perpendicular a la corriente. Habrá en tales casos que construir cunetas, con las cuales, al poder variar la pendiente, ya se pueden solventar los anteriores inconvenientes. Según lá anchura de la calle y el caudal máximo que se prevea para - 14 - una tormenta, se podrán establecer dos cunetas, una a cada lado de la calle, dando entonces a la losa una sección de tejado a dos aguas, o bien una sola cuneta lateral y sección de plano inclinado hacia ella. Otras veces convendrá conjugar estos sistemas. Para pasar de un tipo de sección a otro se harán imbornales, consistentes en pequeñas zanjas cubiertas por una reja de hierro. En la figura se hace el esquema del caso de pasar de una sección en V a otra con pendiente a un solo lado. Los imbornales también nos pueden servir para recoger todas las aguas de un sector y llevarlas al punto final de desagiie ; bastará canalizarlas a partir de la arqueta en la que vierts la zanja. Por supuesto, habrá que tener previstos los puntos finale:^ de desagiie y la conducción desde el pueblo hasta ellos. Fig. S.-Imbornal (rejilla) para pasar de una sección en V a otra con vertido a una sola cuneta. SECCION - AB - 15 - EJECUCION DE LA OBRt1 En cuanto a la explanación, para decidir hasta qué profundidad se debe llegar, tenemos que tener en cuenta la altura de las aceras, el espesor de la losa de hormigón y la base de zahorra o de piedra machacada. Una vez realizada la excavación necesaria, se comenzará a extender la base. Conviene no olvidar que la cantidad necesaria de zahorra o piedra es superior a1 volumen que hallaríamos al multiplicar la superficie que va a ocupar por e1 espesor de la capa, ya que este espesor lo debe alcanzar una vez compactada y, por ello, el volumen a transportar será mayor. Como dato práctico, podemos aumentar en un 30 por 100 la cifra obtenida por el razonamiento anterior. Para la puesta en obra del hormigón debe atenderse en especial a que ne se produzcan segregaciones en sus componentes; ello se evita acortando en todo lo posible su transporte desde la hormigonera y procurando que en ninguna de las operaciones se le vierta desde alturas superiores a 1,5 metros. El orden en que se aconseja verter los materiales en la hormigonera es: 1° Aproximadamente, la mitad del ag^ua. 2.° Cemento y arena simultáneamente. Si no es posible, se verterá una fracción del primero, la que proporcionalmente corresponda de la arena, y así sucesivamente hasta completar el total previsto. 3.° Grava. Si está dividida en dos o más fracciones, se seguirá un procedimiento análogo al descrito para el cemento y la arena. 4.° El resto del agua del amasado, a ser posible no de una vez, sino poco a poco, de forma que parezca más un chorro continuo. La forma más conveniente de organizar el trabajo es ir hormigonando en superficies que se acerquen, en lo posible, a cuadrados de 4 m. de lado. En la práctica, las calles se suelen dividir por un banco de hormigón de la altura del - 16 - pavimento (maestra) que va a lo largo de su eje central; quedan así dos franjas, que rara vez tendrán más de 4 m. Tomando entonces otros tantos a lo largo, tenemos las superficies idóneas. El hormigón sufre dos fenómenos de signo contrario : - Retracción, por el cual tiende a disminuir de volumen. - Entumecimiento, durante el curado absorbe agua, con lo cual aumenta de volumen. Ambos se compensan en cierta manera, si bien, en general, suele predominar el primero, dando lugar a la formación de fisuras. Generalmente se adopta el sistema de hormigonar por zonas, que se van alternando, o sea hacer un cuadrado y dejar en blanco el siguiente. Una vez que los primeros han alcanzado consistencia, se rellenan los intermedios. Con este sistema la retracción es menor y quedan mejor las líneas de unión. Para que éstas salgan bien, debe limpiarse la superficie de contacto, pero procurando que quede rugosa, para que se efectúe mejor el agarre. Respecto a juntas de dilatación, en la ya citada publicación inglesa se recomienda : "Para árido silíceo y espesores de 20 a 13 cm. : separación de juntas de dilatación cada 27 m., y reducir esta longitud a 18 m. si se hormigonó en tiempo muy frío." En ocasiones, a fin de evitar el desgaste y dar un aspecto más brillante, se puede extender sobre la losa un mortero rico en cemento, en un espesor no mayor de un centímetro ; ello es conveniente, pero deja una superficie resbaladiza, por lo que se tomará la precaución de rayarlo para darle cierta rugosidad. MAQUINARIA Ya la hemos ido enumerando ; además de la necesaria para la excavación, transporte y compactado, en lo que se refiere exclusivamente al hormigón, hace falta : - 17 - I-Iormigoneras Una o varias, según la organización del trabajo, pero recordando siempre que todo el amasado debe hacerse a máquina. Agarato vibrador Fuede ser una bandeja o una regla vibradora. Esta última parece que se adapta mejor a este tipo de obras, por su mayor anchura de trabajo, que, además, se puede variar cambiando las barras. La operación de vibrar se está imponiendo, pues supone una majora indudable en las condiciones del hormigón, distribuyendo de forma más adecuada los áridos, compactando la masa, todo lo cual se traducirá en un aumento de la resistencia. Como efecto secundario, está el de facilitar el igualado y alisado. Fig. 9.-El uso de aparato vibrador mejora las condiciones del hormigón. - 18 - PRESUPUESTO El presupuesto es el resultado de tomar unas decisiones en la forma de ejecutar la obra, de tomar mediciones al re:^pecto y, finalmente, de aplicar unos precios, datos estos últimos que son fáciles de conseguir para la época, lugar y condiciones concretas de cada obra. Aun para un mfsmo tipo de obra, las circunstancias varían los presupuestos extraordinariamente, y tanto más cuando, como en el hormigonado de calles de poblaciones rurales, se aprovechan frecuentemente al máximo los recursos propios de la comunidad en mano de obra, transporte, etc. Por esta razón, en lugar de elaborar un presupuesto con una.s hipótesis arbitrarias, que daría un resultado poco orientativo, es preferible dar una serie de datos prácticos que faciliten su elaboración para cada caso concreto. EXCAVACION En lo que se refiere a este apartado, se hacen tres grandes grupos: a) Tierra.-La excavación se puede hacer con pico ^^ pala o bien usar diferentes tipos de excavadoras y traíllas. Para excavación a mano: - Un metro cúbico y su carga a una altura de 1,20 m. Terreno suelto : 0,45-0,70 horas-peón. Terrenó flojo ( arena-arcilla ): 0,70-1 horas-peón. Terreno duro (arcilla-media) : 1,5-2 horas-peón. Terreno muy duro ( arcilla fuerte ): 2-3 horas-peón. Si se utiilzan máquinas, los rendimientos pueden variar extraordinariamente, no ya sólo por la naturaleza del terreno, sino por la humedad de éste, la habilidad del operario, la capacidad de la máquina, etc. Pero, además, en los núcleos rurales se suele presentar la dificultad de que, debido a].a estrechez de las calles, no se puede maniobrar bien, lo cua.l disminuye mucho los rendimientos e incluso llega a hacer imposible el uso de la maquinaria, en ocasiones. - 19 - b) Tránsito.-Cuando se hace necesaria una desintegración previa utilizando la barra. -- A mano, el rendimiento oscila, para un metro cúbico y su carga a 1,20 m. de altura : Tránsito, 3-4,5 horaspeón. c) Roca.-Hay que utilizar explosivos. Los rendimientos se resumen en el siguiente cuadro : CON POLVORA Clase de roca 1 m3 Blanda ... . Dura ... ... . Muy dura ... ... C<^N DINAMITA ,11ano de o}^ra Horas E^plosivos Kg. Mano de obra Floras Explosivos Kg. 4- 5 5- 7 9-10 0,2-0,3 0,3 0,5 0,8-1 2,5-4 4,5 5 8-9 0,10-0,15 0,15-0,25 0,30-0,40 Fig. 10.-EI empleo de máquinas hace más rá^ida y económica la realización del hormigonado. -zoEJECUCION Damos a continuación los rendimientos de hormigoneras de distinta capacidad, así como la mano de obra necesaria: Capacidad Rendirniendel tambor to en m3/hora en litros 125 150 180 200 300 350 1,40 1,70 2,00 2,25 3,40 3,95 Obreros horntigonera Obreros t^ara arena cernento Obreros ^ara grava 1 1 1 1 1 ] 2 2 2 2 2 2,5 1 1 I 2 2 2,5 Ubreros Total para obreros agua 1 1 ] 1 4 4 5 6 6 7 Para terminar, es necesario hacer notar que en el hormigonado de calles en peblaciones rurales no se trata de echar hormigón hasta en el último rincón del pueblo; habr^^ que respetar en todo lo posible la anterior imagen de éste y, en todo caso, dejar previstos algunos lugares para jardines o paseos, que no sólo scn necesarios para la pobla ^ión, sino que contribuirán a romper la gris monotonía del hormigón. PUBLICACIONES DE ^XTENSION AGRARIA Bravo Murillo, 101 - Madrid-20 Se autoriza la reproducción íntegra de esta publicación mencionando su origen: ^<Hojas Divulgadoras del Ministerio de Agriculturau. I.S.B.N.: 84-341-0406-7 - Depósito Legal: M. 40.091-1975 (20.000 ejemplares) Neografis, S. L. - Santiago Estévez, 8- Madrid-19