ANEXO METODOLOGÍA: Abordaje cuantitativo: La investigación aquí presentada contó con dos partes diferenciadas: una de abordaje cuantitativo y otra de abordaje cualitativo. En este informe se presentan los resultados de la primer etapa y un primer avance de la segunda; el carácter preliminar del mismo permite, a su vez, que sea utilizado para realizar una revisión y ajustes metodológicos que permitirán pulir el proceso de investigación y realizar un informe final exhaustivo y confiable. Objetivo El objetivo fundamental del abordaje cuantitativo fue dimensionar y caracterizar exhaustivamente las poblaciones objeto de esta investigación a través de la realización de diferentes cruces de variables, referenciándolas con datos de la población carcelaria global. Las principales fuentes con las que contó esta investigación fueron la Dirección Nacional de Política Criminal, el Servicio Penitenciario Federal y la Procuración Penitenciaria. La información se recabó a través de técnicas de tipo cuantitativo sobre la población carcelaria alojada en instituciones de encierro dentro del ámbito nacional – federal, a septiembre del año 2001. Este recorte, al 2001, permitió contar con datos relativamente recientes que dan cuenta de una composición similar a la actual; dicho recorte también evita las dificultades que presentan la construcción y recolección de datos en el mismo período en que se realiza la investigación. A efectos de conocer mejor el contexto del universo a investigar, se indagó sobre la estructura institucional del Servicio Penitenciario Federal en cuanto a organismos, dependencias, misiones, funciones y cantidad, ubicación y tipificación de establecimientos carcelarios. La población A septiembre del año 2001 la cantidad de mujeres privadas de libertad era de 876 y la de jóvenes-adultos de 523, mientras que la población encarcelada general era de 8472. La investigación, como ya fue mencionado, se desarrolló siguiendo dos abordajes metodológicos diferentes: uno cuantitativo y uno cualitativo. El primero permitió construir, elaborar y analizar información sobre la totalidad del universo poblacional y de las poblaciones específicas. En la etapa cualitativa se confeccionó una muestra del 10% del total de la población de jóvenes adultos y de la de mujeres, distribuida en cada una de las unidades (esto promueve confiabilidad y exhaustividad, requisitos indispensables en los procesos de investigación). La información de la población carcelaria total y de la población específica de esta investigación fue desagregada, en primer término, según localización en las diferentes unidades carcelarias según regímenes específicos. Luego se trabajó con diferentes variables de carácter demográfico (e.o. ‘sexo’, ‘edad’, ‘nacionalidad’) y realizando diferentes cruces entre las mismas. Posteriormente se trabajaron variables vinculadas al proceso penal (e.o. ‘tipo de delito’, ‘situación procesal’, ‘tiempo de condena’, ‘régimen de progresividad’) y sus combinaciones con las variables mencionadas. Esquemáticamente los ítems iniciales mencionados, que permitirán cruces diversos, se pueden desglosar del siguiente modo: A) Construcción de un Mapa de Establecimientos Carcelarios Federales, clasificados de acuerdo a criterios de seguridad, régimen y ubicación de la población carcelaria global en cada uno de ellos. B) Población carcelaria global, destacando sexo, edad, y su distribución en los distintos establecimientos carcelarios. C) Población carcelaria global, según nacionalidad. D) Población global de jóvenes-adultos encarcelados, destacando edad, nacionalidad, tipo de delito, situación procesal, tiempo de condena y régimen de progresividad. E) Población global de mujeres encarceladas, destacando edad, nacionalidad, tipo de delito, situación procesal, tiempo de condena y régimen de progresividad. Depuración de la base y procesamiento de datos Buena parte de la información derivada del trabajo cuantitativo que aquí se presenta surgió del análisis de datos sobre las personas privadas de libertad en dependencias del Servicio Penitenciario Federal. Dado que se trata de una base de datos de registro continuo que tiene por objetivo la actualización permanente de información individual de las personas detenidas en dichas dependencias, la indagación estadística de esta información derivó en algunos escollos metodológicos que se debieron resolver. En primer lugar, la información presentó algunos errores e inconsistencias que se resolvieron consultando, en cada caso, al SPF para corregir los datos erróneos. En algunos casos la fecha de nacimiento era errónea (por ejemplo: 20 de enero de 2000) o no constaba: la mayor parte de estos problemas en los datos logró corregirse consultando a referentes del Servicio Penitenciario Federal. En otros casos tuvo que ser modificado el dato de la variable sexo; tras un cotejo cuidadoso se detectó que el dato ingresado (Masculino o Femenino) no coincidía con el nombre de pila de la persona detenida; tras una revisión minuciosa se notó que todos los datos con error pertenecían a una unidad penitenciaria específica: en lugar de clasificarse como ‘F’ de “Femenino” a las mujeres presas, se utilizó el código ‘M’ de “Mujer” que se superpone con la referencia utilizada para clasificar sexo “Masculino”. Esto obligo a revisar cada uno de los datos para corregir inconsistencias y que una buena parte de las mujeres presas no aparecerán como hombres. Una vez depurada la información básica se presentó un problema más complejo: una de las variables a trabajar presentaba serias dificultades: la variable ‘delito’ (que contenía el delito que se le imputaba o por el cuál se hallaba condenada una persona). Esta variable no estaba codificada ni normatizada, sino que consistía en un texto de descripción. Esta característica obstaculizaba el abordaje cuantitativo, y obligó a una lectura de cada uno de los textos (que en principio deberían ser tantos como personas encarceladas, esto es: 8472) para poder construir una codificación pautada que facilite su análisis. De este modo, para obtener información estadísticamente viable fue preciso codificar la variable; para ello se decidió un agrupamiento de los delitos y, dada la gran cantidad de registros, se intentó una codificación automática: esta tarea se realizó informáticamente, utilizando ‘palabras clave’ que aparecían en el texto del delito, y agrupando aquellos ítem que contuvieran dichas palabras (e.o. lesiones, robo, homicidio, ley 23.737). Una vez realizado ese primer agrupamiento fue necesario trabajar con el conjunto de los delitos que presentaban ambigüedades para la codificación automática; los mismos fueron codificados posteriormente en forma manual. Al finalizar la codificación se confeccionó y analizó una muestra a fin de chequear la calidad del resultado, verificándose una muy buena calidad en la asignación de códigos. Sin embargo, a pesar de haberse logrado una codificación fiable, la calidad del dato utilizado se ve afectada por algunos problemas de la información original: en primer término, alrededor de un 20% de los presos tenían el campo ‘delito’ en blanco o tenían en ese campo información distinta del delito1: casi la totalidad de estos casos corresponden a presos aún sin condena (específicamente al 38 % sobre el total de los procesados). Por su parte, la variable ‘Ocupación’, si bien se encontraba codificada, los códigos utilizados no derivaban de un nomenclador estadístico estándar. Algunas categorías se superponían, otras presentaban excesivo detalle, y otras categorías resultaban poco específicas (tales como “Empleado”, “Comerciante” o “Changarín”) concentraban un alto porcentaje de los casos. La defectuosa calidad de esta información justifica las limitaciones de las conclusiones que pueden obtenerse acerca de la ocupación de los presos opacando, de este modo, las posibilidades de análisis de un tema tan importante como el referido a la trayectoria laboral de las personas privadas de libertad y limitando la construcción de un perfil socioeconómico de la población encarcelada. Por otra parte, se revelaron algunos problemas metodológicos a raíz de las diferentes unidades de análisis con las que funcionaba el sistema de datos analizado: dicha base manejaba dos ejes, relativamente autónomos, que referían, por un lado, a datos personales sobre las personas detenidas (datos siempre únicos) y, por otro, datos referidos a las causas judiciales de las personas detenidas (que en muchas ocasiones son más de una por detenido). Para este estudio se analizaron datos que representan atributos de las personas, mientras otras se refieren a las causas judiciales de esas personas: las variables ‘Delito’ o ‘Tiempo de Condena’, por ejemplo, se presentaban como atributos de la causa y no de la persona, es decir que un preso podía tener más de un valor para esas variables. En efecto, a 8472 presos que forman nuestro universo de análisis, les correspondían 10019 causas judiciales2. Surgió entonces la pregunta de cómo seleccionar una causa entre varias, en los casos de 1228 presos que presentaban dos causas o más a fin de no tener bases de datos heterogéneas (una de personas, otra de causas). Se acudió a un proceso parcialmente automático para la selección, (tal como se hizo para la codificación de los delitos): se recorrían las causas correspondientes a cada persona y: 1. Si todas las variables tenían valores idénticos, se suprimían los datos repetidos. 2. Si todas las variables tenían valores idénticos excepto ‘Fecha de Detención’, se seleccionaba la causa con fecha de detención anterior. 1 2 Como por ejemplo el N° de causa, o los textos “Por orden del juzgado” o “Captura”. Se alcanzaron estos valores luego de depurar registros duplicados en las bases. 3. Si todas las variables tenían valores idénticos excepto ‘Fecha de Detención’ y ‘Delito’, y había un sólo delito no vacío, se seleccionó la causa correspondiente a ese delito. 4. Si había una causa que contuviera menos variables en blanco que todas las demás, se seleccionaba esa causa. 5. Si había al menos seis variables en blanco, y el delito era el mismo en todas las causas, se seleccionaba la causa con fecha de detención anterior 6. Si había al menos seis variables en blanco, y los datos referidos a los delitos eran todos iguales (en aquellas causas en las que constaba el dato), se seleccionaba la causa con fecha de detención anterior. 7. Finalmente, las causas que no cumplía con ninguno de estos requisitos pasaban a selección manual. Terminando el procesamiento automático, se seleccionaron manualmente las causas (correspondientes a 53 presos) que no pudieron escogerse automáticamente. En el proceso manual se eligió en cada caso la causa correspondiente al delito de mayor gravedad. 2.b) Abordaje cualitativo El abordaje cualitativo busca conocer e identificar las condiciones de vida de las poblaciones objeto de esta investigación en las instituciones carcelarias y su situación socio-familiar pre-detención y post-detención. Para ello se utilizaron estrategias cualitativas de investigación tales como: - Análisis de contenido de la legislación y reglamentación penitenciaria, particularmente la relacionada con la planificación resocializadora de la población objeto. - Descripción y caracterización actual de los Centros Penitenciarios en cuanto a condiciones edilicias y de funcionalidad. - Elaboración de una encuesta sobre condiciones de vida intra-muros y extramuros (encuesta que se presenta a continuación de este apartado) - Elaboración de una muestra representativa en cada una de la Unidades carcelarias, en cuanto a jóvenes- adultos y mujeres a fin de realizar dicha encuesta. - Entrevistas en profundidad a distintos actores involucrados: presos, familiares y funcionarios penitenciarios, sobre las condiciones de vida intramuros. - Reconstrucción de historias de vida de seis mujeres y seis jóvenes- adultos. - Recolección y análisis de documentos internos, planos, reglamentos, etc. Al inicio de la investigación se trabajó en la recolección de material documental que fue debidamente clasificado para su posterior análisis. Este material comprende: documentos que permiten la reconstrucción histórica del surgimiento y desarrollo del Servicio Penitenciario Federal y de las Unidades Penitenciarias comprendidas dentro su órbita; leyes y reglamentos vinculados a la "cuestión penitenciaria"; documentos institucionales y planos de cada una de las unidades que integran el universo de esta investigación (Unidad 3 y Unidad 31 de Mujeres, Unidades 24, 26, y Centro Federal de Tratamiento “Malvinas Argentinas”, y Módulo IV de Jóvenes Adultos del Complejo Penitenciario Federal I). Asimismo, durante el año 2002 se ha realizado un trabajo de descripción edilicia y de distribución espacio-funcional, en cada una de las unidades penitenciarias que integran nuestro universo. Se ha tomado como referente de análisis los planos originales y los objetivos espacio-funcionales al momento de su inauguración, para contrastarlos con los cambios que se registraron en el transcurso de los años. Para ello se realizaron entrevistas a informantes clave tales como funcionarios y detenidos, y a su vez, se hicieron recorridos exhaustivos por las unidades visitadas. También, hemos realizado entrevistas a funcionarios del Departamento de Arquitectura del Ministerio de Justicia a fin de indagar sobre los objetivos y criterios que fundamentaron la construcción del Complejo Penitenciario Federal I, las Unidades 3 y 31 de Ezeiza y el Complejo Federal para Jóvenes Adultos de Marcos Paz (que comprende las Unidades 24, 26 y el Centro Federal de Tratamiento “Malvinas Argentinas”), atento a que los mismos responden a un modelo de construcción diferente a la estructura carcelaria vigente hasta ese momento en el país. Estos complejos responden a los modelos de construcción norteamericanos lo que implica otra concepción de política penitenciaria y, por tanto, reflejan una diversa concepción del denominado "régimen y tratamiento penitenciario" llevados a cabo en los mismos y una evidente jerarquización de criterios de máxima seguridad que comporta un endurecimiento extremo de las condiciones de detención. 2.b.1) La encuesta - Objetivo de la encuesta semi estructurada El objetivo de esta herramienta dentro del abordaje cualitativo consiste en acceder a mayor información y a un nivel de profundidad de dicha información con el que no se cuenta hasta este momento. Vale la pena aclarar, que las personas privadas de su libertad, en general no tienen vías de conexión con instituciones ubicadas en el exterior, excepto aquellas que naturalmente se relacionan con el ámbito judicial. Es extraordinaria la situación en la cual son invitados a narrar sus experiencias acerca de su vida antes de ingresar a la cárcel, así como su rutina diaria, su salud, sus actividades, etc., una vez ingresados en el ámbito carcelario. Por ello este primer acercamiento es innovador en cuanto incorpora de manera directa los relatos de las personas detenidas, ampliando significativamente las posibilidades de investigación y análisis de la vida intramuros. La encuesta fue elaborada tomando en cuenta aquella utilizada por los investigadores Juan Carlos Ríos Martín y Pedro José Cabrera; quienes realizaron un importante estudio de las condiciones de detención en cárceles del Estado español3. En nuestro caso hemos variado la propuesta metodológica teniendo en cuenta el diseño del proyecto mismo y las características del Servicio Penitenciario Federal en cuanto a su estrategia obstaculizadora para producir y facilitar información. Hemos sumido nosotros mismos el trabajo de campo y fuimos los entrevistadores, renunciando a la facilidad que hubiera supuesto remitir por medio de un correo interno las encuestas y esperar las devoluciones para posteriormente procesarlas como sí se hizo en el proyecto español mencionado. - La puerta de entrada El acceso a los distintos penales tuvo lugar en el marco del convenio realizado entre el Instituto de Investigaciones Gino Germani de la Facultad de Ciencias Sociales y la Procuración Penitenciaria. El hecho de ser profesionales integrantes de la Procuración Penitenciaria agilizó notablemente los pasos a seguir a la hora de ingresar en las distintas cárceles y poder interactuar con las personas allí detenidas. Parte de las estrategias obstaculizadoras del SPF se basan en innumerables trabas burocráticas que, en nombre de la "seguridad interna del penal", hacen que sea muy complicado tener contacto directo con las personas privadas de su libertad. Esto contexto tiñe, desde la posibilidad misma de acceso, todo el proceso de realización de las encuestas. 3 Los resultados de dicha investigación conforman un libro de vital importancia: Mil Voces Presas (1998), publicado por la Universidad Pontificia de Madrid. - Condiciones de realización de las encuestas Describiremos brevemente aquí las condiciones en que se realizaron las encuestas. Se accedió a cada uno de los penales siempre en conjunto: los miembros del equipo de investigación integrantes de la Procuración y los miembros del IIGG. De este modo no se exigió ningún tipo de requisito previo al ingreso de estos últimos más allá del anuncio previo realizado por los profesionales de la Procuración. Las cuotas que se buscaba cubrir contemplaban unidad y condición procesal, por lo que en cada una de las unidades (nos referimos ahora específicamente a las Unidades donde se alojan mujeres) se solicitó un determinado número de condenadas y de procesadas. Previamente se confeccionó un listado con los nombres de presas que cubrieran dichas cuotas, el que se entregó al personal del SPF para que citara a las presas. Así, las celadoras a cargo buscaban a cada una de las presas solicitadas y las trasladaban al lugar de encuentro con el equipo de investigación. En general (y sobre todo las primeras presas llamadas) no sabían cuál era el motivo de la cita; sólo se les informaba que eran requeridas por la Procuración. Hubo algunas mujeres que, cuando fueron llamadas por las celadoras al encuentro, se negaron (firmando una constancia de ello). Sin embargo el número de estos casos no fue significativo y una vez presentadas al equipo de investigación ninguna de las presas se negó a ser encuestada. Las sesiones tuvieron lugar en un cuarto (que podía ser desde una oficina administrativa hasta un aula desocupada dentro de un patio interno) sin mayores inconvenientes y sin una custodia presente dentro del lugar. Esto permitió establecer un clima más distendido a la hora de tener que hacer preguntas que por ejemplo involucraran el accionar del personal del SPF. De este modo se respetaron las condiciones de privacidad, individualidad y anonimato requeridas. El tiempo estimado de duración de cada una fue de una hora, dependiendo de cuánto se explayaran las encuestadas en las respuestas a las preguntas abiertas, o en otros temas surgidos en el diálogo fluido que se establecía. Finalizadas las reuniones con cada una, ellas eran reintegradas a sus pabellones. El personal del SPF no fue informado por parte de los miembros del equipo de investigación acerca del motivo de las reuniones ni el contenido de las encuestas. Fundamental para la validez de esta investigación era la imagen que tuvieran los distintos entrevistados respecto de la Procuración y la Universidad de Buenos Aires. El hecho de que tal imagen fuera positiva garantizaba la sinceridad de las respuestas. Debía quedar absolutamente clara la ausencia de vínculo de dichas instituciones con el SPF en cuanto a los fines que persiguen. Este aspecto, no se podía descuidar a la hora de brindarle al entrevistado la absoluta certeza de que todo lo que pudiera relatar constituiría una herramienta para dar a conocer la realidad de su vida cotidiana intramuros a los responsables de turno. Así se crearía una vía de acceso para denunciar aquellos maltratos que inexorablemente quedan silenciados, debido a la imposibilidad que tienen de hacer oír sus reclamos en el exterior. No obstante, vale la pena aclarar que en la Unidad 31 varias de las entrevistadas tuvieron una actitud menos abierta al diálogo con los entrevistadores, cuyo observable empírico fue la ausencia de descripciones acerca de sus condiciones de vida, de su relación con la administración penitenciaria, y fundamentalmente la ausencia de reclamos de todo tipo que fueron numerosos en los discursos de las detenidas de la U. 3. Encontramos tres motivos posibles a esta actitud. El primero y más superficial de ellos es el hecho, relatado por una de las entrevistadas, de que se generó entre ellas cierta desconfianza hacia los entrevistadores y los fines de la investigación. El segundo de los motivos fue que, objetivamente, en la Unidad 31 ciertas condiciones materiales de vida son superiores a las de la Unidad 3. El tercero de los motivos responde a lo que entendemos es uno de los elementos que el servicio utiliza para lograr la gobernabilidad de la cárcel: el miedo. Miedo, por un lado, a un posible traslado a la Unidad 3 ya que, como adelantamos, las condiciones de vida son mejores en la Unidad 31. Esta diferencia se utiliza como una de las herramientas de amenaza, cuya efectividad reside en el hecho de que la totalidad de las presas han pasado previamente por la Unidad 3. Por el otro, y de manera más general, se percibe en la actitud de las detenidas de la Unidad 31, más cautela, reticencia y desconfianza, a la hora de contestar el cuestionario, y eso, entendemos es producto de un real temor a represalias por parte del SPF. Respecto de las actitudes de las presas durante las entrevistas, podemos destacar dos tipos diferentes de acuerdo con el perfil de la entrevistada. Aquellas que tenían una larga trayectoria institucional, combinaban durante la charla la respuesta puntual a las preguntas con pedidos de todo tipo (de asesoramiento legal, de ayuda social, etc.). Otros perfiles eran aquellos que sólo se atenían a responder con monosílabos, sin poder dar ningún detalle de su situación. La imposibilidad de describir las condiciones de vida dentro de la cárcel mostraba la ausencia de resistencia y la anulación de todos los sentidos que, dejan a las personas en un estado de abulia permanente. - Descripción de las etapas desarrolladas En primer lugar se realizaron, en el Módulo IV del Complejo I de Ezeiza, entrevistas a una de las poblaciones-objeto de investigación, a saber jóvenes-adultos varones. Esta instancia tuvo la ventaja de sustentarse en un trabajo previo desde la Procuración Penitenciaria que, atento a sus funciones y atención de esta población, facilitó el acceso y la confianza de los presos durante la encuesta. Trabajamos de acuerdo a lo previsto en la propuesta metodológica basándonos en una muestra del 10% de la población-objeto alojada en esa unidad carcelaria, respetando la distribución porcentual de procesados y condenados, que en octubre-noviembre del año en curso ascendía a 276 jóvenes-adultos. Como los ingresos y egresos de privados de libertad son muy dinámicos, y son más frecuentes los ingresos que los egresos, resolvimos redondear la cantidad en 30 encuestas, las que ya fueron completadas. Luego se continuó en el mes de febrero en las Unidades 24 y 26 de Marcos Paz, concluyendo con este tipo de población. En una segunda etapa se realizaron las encuestas en las Unidades 3 y 31 de Ezeiza, durante los meses de abril y mayo de 2003. En las mismas se encuestó a un total de 69 mujeres, cubriendo un poco menos del 10% del total de la población y respetando los porcentajes de procesadas y condenadas. Al momento de la presentación del presente informe han sido informatizadas y procesadas la totalidad de las encuestas a mujeres, quedando pendiente el procesamiento de las realizadas a jóvenes adultos. Es por ello que a continuación se añaden ciertos comentarios sobre el contenido de estas últimas, mientras que el resto del análisis se basa en los casos de las mujeres. Los pasos de la etapa cualitativa que restan realizar son las entrevistas en profundidad y las historias de vida, para sendas poblaciones estudiadas. - Algunos adelantos del análisis a las encuestas a jóvenes adultos Algunas observaciones en relación a las entrevistas realizadas en el Modulo IV del Complejo Penitenciario Federal I: Un 78% de los jóvenes-adultos han estado previamente en el circuitos de la Justicia de Menores y reconocen situaciones de internación en institutos de seguridad de menores. Según la información recabada, el 100% es ingresado al Complejo l con la "ceremonia bautismal" de golpes y malos tratos por parte del personal penitenciario. Asimismo, y en este sentido destacamos la importancia de que quiénes elaboramos, diseñamos y analizamos la información, seamos quiénes además realizamos el trabajo de campo, porque ello permitió observar durante las mismas que un porcentaje interesante de jóvenes-adultos condenados lo habían sido por medio del cuestionado instituto del juicio abreviado. Ante esta situación, y sobre la marcha de la investigación, decidimos elaborar otras tres preguntas y anexarlas a la encuesta y realizarlas a la totalidad de los jóvenes adultos condenados en el Modulo IV. El resultado contundente y alarmante es que de 74 jóvenes-adultos condenados, el 60% ha sido juzgado por el instituto del Juicio Abreviado, con condenas en años muy significativas que analizaremos en una segunda etapa; además es necesario destacar que esta modalidad se establece por igual tanto para aquellos que cuentan con abogado particular como con defensor oficial. Esta situación confirma nuestra hipótesis en cuanto a la sobre-vulneración de sus derechos que padece esta población en particular, ya que (si bien no contamos, todavía, con cifras precisas) en caso de los adultos varones condenados, el porcentaje de quienes han firmado juicio abreviado no superaría el 30 %. Una aclaración importante es que el S.P.F. informó que la cifra de condenados jóvenesadultos en el Módulo IV al momento en que se realizó la encuesta era de 22 personas, confirmándose luego, tras la insistencia para ver a cada uno de ellos, que el número ascendía a 74: se confirma una vez más, la precariedad y desajuste de la información que registran. - Evaluación general de la herramienta Evaluando la herramienta empleada en esta etapa de la investigación, al menos para el caso de las mujeres (dado que las encuestas a jóvenes adultos aún no han sido procesadas) podemos afirmar que la misma cumplió la función esperada. Hubo dos preguntas que deberían haberse realizado de otra manera, y una que debía obviarse. Asimismo, algunas de las preguntas no podían ser respondidas cabalmente por las encuestadas por los siguientes motivos: el tiempo con el que se contaba era relativamente reducido, el carácter semi estructurado de las preguntas limitaba la amplitud y profundidad de las respuestas, la confianza generada por el encuestador en el primer contacto podía no ser suficiente para que las presas expresaran cuestiones dolorosas y conflictivas para ellas, el contexto de encierro podía quitar interés a las presas para hablar de las condiciones mismas del encierro, etc. Aquellas preguntas que requieren otro tipo de registro o instrumento se realizarán con todo el detalle que corresponda por medio de entrevistas en profundidad e historias de vida. Aquellas cuestiones a las que hacemos particular referencia son, por ejemplo, las consecuencias que las presas creen que tiene o tendrá para sus vidas el hecho de haber estado presas. Otra de las preguntas sobre la que se deberá profundizar en las entrevistas en profundidad es aquella referida a los malos tratos. Particularmente los malos tratos más sutiles o “psicológicos”, que son los más cotidianos, por lo que pueden naturalizarse o generar acostumbramiento y volverse superficialmente más imperceptibles. - Características del procesamiento de la información A continuación describiremos brevemente las principales características del procesamiento de las encuestas semi estructuradas. Por un lado, se procesaron todas las preguntas abiertas o cualitativas seleccionando los relatos más ricos y representativos para la investigación (algunos de los cuales se citan en el presente informe como testimonios). Por el otro, se utilizó el programa informático de estadísticas para ciencias sociales “SPSS” para las variables o preguntas cerradas, siguiendo los parámetros descriptos a continuación. 1- 234- Datos generales La variable “Edad” se recodificó de dos maneras diferentes, de acuerdo al tipo de análisis. Por un lado se crearon los siguientes grupos: 18-20 (grupo en el que están contemplados los “jóvenes adultos”); 21-24; 25-29; 30-34; 35-39; 40-44; 45-49; 50-59; 60-69; 70 años y más. Por otro lado, se agrupó la población en los grupos de 18-30; 31-50; 51 años y más. Esto permitió la confección de cuadros y cruces de variables con valores significativos para cada categoría. La variable “Lugar de nacimiento” se codificó de la siguiente manera: Capital Federal; Provincia de Buenos Aires; Otras Provincias; y Extranjero. Para la variable “Nacionalidad” se crearon cuatro grupos en base a los casos existentes en la muestra: Argentina, Bolivia, Perú, y Otros. La pregunta acerca de la distancia entre domicilio y lugar detención se trabajó colocando el lugar de procedencia de las visitas y el punto donde se encontraba la unidad carcelaria. El resultado las respuestas, más que resaltar las distancias físicas (en muchos casos existentes) señala el hecho de que en la mayoría de los casos resulta muy complicado acceder a los penales. Esto se debe a falta de dinero, inexistencia de medios de transporte hacia los sitios en que se encuentran los penales, poca flexibilidad en los horarios en que se permiten las visitas, etc. Situación procesal 1- La variable “Tiempo que lleva detenido” se cuantificó inicialmente en cantidad de meses y luego se agrupó del siguiente modo: menos de 1 año, entre 1 y 2 años, y más de 2 años. 2- En cuanto al tiempo de detención para las presas que aún están procesadas, también se ingresaron los datos cuantificados en meses y luego se utilizaron los mismos grupos que en la variable anterior. 3- La variable “Tiempo de procesado hasta la condena” se registró del mismo modo que las dos anteriores. 4- El “Tiempo de condena” fue ingresado en años y meses y luego se agrupó del siguiente modo (en años): 1-5; 5.1-10; 10.1-20; más de 20. 5- La pregunta sobre el “Tiempo de condena que lleva cumplido” se anuló debido a que se superponía con la pregunta N º 16 del cuestionario. 6- Sobre la cantidad de veces que fue visitada por el abogado defensor los grupos fueron los siguientes: 0; 1; 2-10; más de 10. Ingreso 1- La primer pregunta acerca de la situación en ingreso, se refería a quién entrevistó a la encuestada por primera vez. De acuerdo con las frecuencias encontradas se crearon las siguientes categorías: celadora; nadie/ no sabe; otro empleado del SPF; judiciales; seguridad interna; médico. 2- Acerca del “Tiempo de permanencia en ingreso” los datos se registraron en meses, y luego se agruparon así: menos de 15 días; entre 15 días y un mes; entre 1.1 y 3 meses; y más de tres meses. 3- La pregunta en la que se solicitaba una breve descripción del pabellón de ingreso y su situación allí se procesó de manera cualitativa, por ser una pregunta abierta. 4- La cantidad de cambios de pabellón se recodificó en: 1; 2-3; más de 3. Traslados La totalidad de este apartado fue trabajada de manera cualitativa por ser preguntas abiertas. Es necesario mencionar que la última pregunta respecto a los traslados se prestó a diversas interpretaciones por haber sido ambiguamente formulada: en algunos casos los entrevistadores sólo preguntamos acerca de las condiciones de los traslados hacia otros penales, dejando sin registro otros tipos de traslados: hacia sedes judiciales, comparendos, hospitales, etc. Clasificación y tratamiento En este grupo de preguntas nos encontramos con la dificultad de recabar correctamente la información acerca de las calificaciones de las presas, debido al desconocimiento que las mismas tenían en muchos casos (algunas presas procesadas decían tener calificación para conducta y concepto, algunas condenadas sólo mencionaban una de las dos calificaciones y otras olvidaban o desconocían sus calificaciones en general). Por otro lado, fue fácticamente imposible procesar la pregunta acerca de la frecuencia y el tiempo promedio de duración de los encuentros con los profesionales del equipo de tratamiento. Es por ello que los importantes resultados que arrojó este set de preguntas se procesaron cualitativamente. La pregunta acerca de la manera en que se notifican las calificaciones se agrupó bajo las siguientes categorías: firmando/ por escrito; verbalmente; cuando pregunta; no la notifican; otros. Régimen disciplinario 1- El motivo de la sanción se codificó del siguiente modo: conflictos con las reglas o el personal del SPF; conflictos entre presas; otros. 2- Al preguntar acerca del tipo de sanción impuesta se evidenciaron las características del “tratamiento resocializador” propuesto por el SPF; las opciones son las siguientes: aislamiento; cambio de pabellón; baja de calificación; suspensión del uso del teléfono; suspensión de salidas del pabellón; suspensión de actividades (escuela, deporte, etc.); reflexión; otro. Condiciones de vida 1- La primer pregunta codificada de este apartado es la referida al trato recibido en enfermería, agrupada del siguiente modo: muy bueno; bueno; regular; malo; muy malo; otros. 2- Sobre los tipos de conflictos existentes en el pabellón surgieron las siguientes categorías producto del análisis de frecuencias de las respuestas obtenidas: por limpieza; por el uso del teléfono; por parejas; por objetos compartidos; por ruidos nocturnos; otros; no hay conflictos; conflictos con el personal del SPF. 3- Respecto de las formas de resolución de los conflictos, emergieron las siguientes categorías: dialogando; por violencia física; discutiendo; avisando al celador para que medie; otros. Relación con el exterior 1- La primera de las preguntas acerca de esta temática se refiere a los diversos miembros de las familias de las presas y a cuáles de dichos miembros las visitan. La utilidad de esta pregunta consistió en averiguar qué parientes mantienen mayor vínculo o contacto con las presas. 2- Para la pregunta acerca de la frecuencia con que las presas recibían visitas, surgió el siguiente inconveniente: no hubo uniformidad en la forma de preguntar acerca de aquello que se consideraba como visita “habitual, ocasional, especial y extraordinaria”. El significado de cada una de estas categorías quedó sujeto a aquello que los entrevistados entendieran en el momento. Sin embargo, la siguiente pregunta carece de los inconvenientes de la presente por lo que la frecuencia de las visitas se pudo medir confiablemente. 3- Como frecuencia de las visitas se tomaron los siguientes grupos (los tiempos son estimados): más de una vez por semana; una vez por semana; una vez cada 15 días; una vez por mes; una vez cada 2-3 meses; menos de una vez cada 3 meses. 4- La duración de las visitas se codificó bajo las categorías: una hora; entre 2 y 3; entre 4 y 5; y más de 5 horas. En algunas entrevistas faltó aclarar debidamente si la pregunta se refería al tiempo formalmente establecido para las visitas, o al tiempo que las mismas duran de hecho, que suele ser menor (por demoras en las requisas, en permitir el acceso a las presas o la visita, etc). 5- La siguiente pregunta recodificada fue la referida a las condiciones en que se realizan las visitas. Las categorías utilizadas fueron: muy buenas; buenas; regulares; malas; muy malas. 6- Respecto de las visitas íntimas se codificaron la duración y frecuencia de las mismas. La primera se codificó en: hasta una hora; entre 1 y 2 horas; más de 2 horas. La segunda se agrupó en: una vez por semana; una vez cada 15 días; una vez por mes; menos de una vez por mes. Requisa La descripción de la situación de requisa se refiere a dos instancias diferentes: aquella que se realiza a la visita, y la que se le practica a la interna una vez concluida la visita. La respuesta sobre la primera de las situaciones se obtuvo del relato que de las presas, y no de los protagonistas directos. Esta mediación implicó que en ocasiones las presas desconocieran detalles acerca de lo preguntado (esto se debe a que los familiares prefieren evitar contar determinados vejámenes de los que son objeto). 1- La pregunta sobre cómo trata la requisa a la visita se codificó con el siguiente criterio a raíz de las respuestas obtenidas: muy mal; mal; regular; bien; muy bien; selectiva de acuerdo con el perfil de la familia; depende de la requisa. 2- De la descripción de la requisa que se realiza a las personas que visitan a las presas surgen las siguientes categorías: desnudo total y flexiones; desnudo total; desnudo parcial; cacheo; otros; no la requisan. 3- El mismo criterio se utilizó para codificar las respuestas sobre la requisa a la que se somete a la interna después de la visita. Comunicación con el exterior Las formas directas que las presas tienen de comunicarse con el exterior son la correspondencia y el teléfono. Respecto a la correspondencia, las condiciones en que la reciben fueron categorizadas de la siguiente forma: abren las cartas delante de ella; buenas; con atraso o no llegan. En lo que a comunicación telefónica se refiere, por un lado se estimó la frecuencia de las llamadas resultando las siguientes categorías: más de una vez por día, una vez o por día, de 2 a 3 veces por semana; una vez por semana, una vez cada 15 días; una vez por mes; menos de una vez por mes. Por otro lado, se tuvo en cuenta la duración de cada llamado resultando: 10 minutos o menos; entre 11 y 20 minutos; media hora o más. Para este último caso vale aclarar que tanto la frecuencia de los llamados como la duración de los mismos se refieren a las comunicaciones efectivamente concretadas. Más allá de la regla escrita, en muchos casos el derecho a mantener comunicaciones telefónicas no existe de hecho, por ejemplo, por falta de dinero para comprar tarjetas, teléfonos rotos, etc. Actividades diarias La descripción de las actividades diarias se registró de manera exhaustiva: se consultó acerca de la ocupación del tiempo, hora por hora, a lo largo de toda una jornada para un día típico. Esa información, debido a su complejidad, es imposible de ser cuantificada y codificada (razón por la cual se la utilizó para la otra parte del informe de análisis cualitativo). Otras actividades dentro de la cárcel 1- Los tipos de trabajo a los que acceden las presas fueron agrupados del siguiente modo: fajina; tejido/ costura; carpetería; huerta; otros. 2- En lo relativo a la frecuencia con que las presas realizan alguna actividad de tipo educativo o de formación laboral, las categorías fueron las siguientes: todos los días; entre 3 a 6 veces por semana; entre 1 y 2 veces por semana; una vez cada 15 días; una vez por mes; menos de una vez por mes. Malos tratos Los tipos de malos tratos encontrados sugieren la siguiente codificación: físico; verbal; físico y verbal; otros. La categoría otros está mayoritariamente integrada por los llamados “maltratos psicológicos” o por las conductas del SPF percibidas como tales. Esta descripción por parte de las presas resulta inabordable por la herramienta metodológica aplicada en esta instancia, por lo que constituye uno de los elementos a indagar con mayor detalle en las entrevistas en profundidad. Consecuencias de la privación de libertad Este apartado será tratado en su totalidad de modo cualitativo. La aclaración metodológica obligada acerca de esta pregunta debe mencionar que esta última resultaba muy densa y profunda como para ser respondida en el marco de la encuesta en cuestión (tiempo relativamente breve y contexto de preguntas más estructuradas). Formulario de la Encuesta A continuación se presenta el modelo de encuesta con el que se recabó buena parte de la información cualitativa con la que actualmente se está trabajando. La encuesta que aquí se presenta fue elaborada a partir de la jerarquización de temas de interés para los objetivos de esta investigación. También resultó de suma utilidad el análisis de instrumentos similares elaborados y utilizados en investigaciones realizadas en otros países: tal es el caso de la encuesta utilizada por el equipo español de investigación dirigido por Ríos Martín antes mencionado. Así también se analizó el trabajo realizado por el grupo italiano Antigone, y especialmente los instrumentos metodológicos utilizados; este grupo llevó adelante un estudio sobre las cárceles italianas, de similares características al trabajo español4. 4 El estudio mencionado se encuentra publicado bajo el titulo ‘Il carcere trasparente’ ENCUESTA A LAS PERSONAS PRIVADAS DE SU LIBERTAD EN CÁRCELES FEDERALES ARGENTINAS Septiembre de 2002 • MOTIVO DE LA ENCUESTA: Esta encuesta se realiza en el marco del Convenio entre la Procuración Penitenciaria y el Instituto de Investigaciones Gino Germani de la Facultad de Ciencias Sociales de la Universidad de Buenos Aires con el objeto de conocer las condiciones de vida de los jóvenes privados de libertad en las cárceles del sistema federal. Necesitamos su colaboración para poder hacer oír su voz ante los responsables políticos, ante la sociedad e intentar lograr las mejoras que se necesiten. ENCUESTA Datos Generales: 1. SEXO: Varón - Mujer 2. ¿ CUÁL ES SU SITUACIÓN CONYUGAL? Soltero/a Casado/a Viviendo en pareja estable Separado/a Legalmente Divorciado/a Viudo/a Separado/a de hecho 3. ¿DÓNDE NACIÓ? - En Argentina: Capital Federal - En un país extranjero Provincia y Localidad: ¿En cuál? .............................................................. 4. LOCALIDAD EN LA QUE VIVÌA AL SER DETENIDO/A __________________________ 5. NACIONALIDAD______________________ * EDAD_____________ años 6. NIVEL DE ESTUDIOS: - Analfabeto/a - Sin estudios Sabe leer - Primarios completo - EGB: completo - - incompleto incompleto Grado alcanzado _____ Año alcanzado _______ - Polimodal: completo - incompleto Año alcanzado _______ - Secundario: completo - incompleto Año alcanzado _______ - Terciario: completo - incompleto - Universitario: completo - incompleto 7. ¿ESTUDIABA AL MOMENTO DE LA DETENCIÓN? ... SI......NO - ¿QUÉ ESTUDIABA? __________________________________ 8. ¿REALIZABA OTRA ACTIVIDAD AL MOMENTO DE SU DETENCIÓN? .... SI NO - ¿Qué hacía? ________________________________________ 9. ¿TRABAJÓ ALGUNA VEZ? __SI NO ¿En Qué? (trabajo más prolongado) __________ 10. ¿TRABAJABA AL MOMENTO DE SU DETENCIÓN? __ SI ¿En Qué? ____________ __ NO ¿Buscaba trabajo? SI NO 11. ¿TIENE ALGÚN OFICIO O CAPACITACIÓN? __ SI NO - ¿CUÁL? _____________ 12. ¿ALGUNA VEZ FUE BENEFICIARIO TITULAR DE UN PLAN SOCIAL?......... SI NO ¿Cuál?____________________________________________________________ 13. ¿INGRESÓ A INSTITUTOS DE MENORES ALGUNA VEZ? ..................... SI - ¿Cuántas veces ingresó? _______ - ¿Por qué causa (1º ingreso)? - NO ¿A qué edad fue el primer ingreso? ____ Asistencial - Penal - Ambas - ¿Cuánto tiempo permaneció Internado (total)? ________________________________ 14. ¿ESTUVO EN ALGUNA OTRA CARCEL ALOJADO CON ANTERIORIDAD?.... SI NO ¿En cuál/es? ____________________________________________________________ 15. ¿A QUÉ DISTANCIA DE SU DOMICILIO O EL DE SU FAMILIA ESTÁ LA CARCEL EN LA QUE ESTÁ ACTUALMENTE ALOJADO? _____________________________________ Situación procesal 16. ¿CUÁNTO TIEMPO LLEVA DETENIDO/A?____________________________________ 17. ¿ESTÁ PROCESADO/A O CONDENADO/A? ____________________________________ 18. EN CASO DE ESTAR PROCESADO/A, ¿CUÁNTO TIEMPO LLEVA EN ESA SITUACIÓN? _________________________________________________________________________ 19. EN CASO DE ESTAR CONDENADO/A, ¿CUÁNTO TIEMPO ESTUVO PROCESADO/A HASTA QUE LO CONDENARON? _____________________________________________________ 20. ¿QUÉ CONDENA LE IMPUSIERON? ________________________________________ 21. ¿CUÁNTO TIEMPO DE CONDENA LLEVA CUMPLIDO? ________________________ 22. ¿TIENE OTRAS CAUSAS? ...... SI NO - ¿CUANTAS? ______________________ 23. EN CASO DE QUE TENGA VARIAS CAUSAS PENDIENTES, SON ANTE: - Juzgado y/o Tribunal de Menores 24. TIENE: Defensor/a oficial Juzgado y/o Tribunal de Mayores Ambos - Abogado/a particular 25. ¿SE PUSO EN CONTACTO CON USTED?........................................... SI NO 26. ¿CUÁNTAS VECES VINO A VERLO/A DESDE SU DETENCIÓN? __________________ 27. ¿PUEDE COMUNICARSE TELEFÓNICAMENTE CON SU DEFENSOR/A ... SI NO 28. ¿ENTRÓ EN PERIODO DE LIBERTAD CONDICIONAL O DE LIBERTAD ASISTIDA SIN ESTAR INCORPORADO AL RÉGIMEN DE CONDENADOS? ............................SI NO Situación en la cárcel: INGRESO: 29. ¿CUÁNDO LLEGÓ A LA CÁRCEL, QUIÉN LO/A ENTREVISTÓ POR PRIMERA VEZ? _________________________________________________________________________ 30. ¿CUÁNTO TIEMPO ESTUVO EN INGRESO? __________________________________ 31. HAGA UNA BREVE DESCRIPCIÓN DEL PABELLÓN DE INGRESO Y DE SU SITUACIÓN ALLÍ _____________________ ________________________________________________________ 32. ¿ A QUÉ PABELLÓN LO/A TRASLADARON? ___________________________________ 33. TUVO CAMBIOS DE PABELLÓN?....... SI NO - ¿Cuántos? _______________________ TRASLADOS: 34. ¿SOLICITÓ UN TRASLADO? NO ..... SI ...... ¿SE LO CONCEDIERON? ........SI NO 35. ¿POR QUÉ MOTIVO LO SOLICITÓ? __________________________________________ 35. RELATE BREVEMENTE LAS CONDICIONES DE LOS VIAJES/ TRAYECTOS EN QUE SE REALIZARON LOS TRASLADOS (hora en que se inició el traslado y tiempo que duró, medios de sujeción, cuántas personas viajan en el vehículo de traslado, posición física, si se les provee algún alimento, tiempo de espera, destino) ____________________________________________________________________________ ____________________________________________________________________________ ____________________________________________________________________________ ____________________________________________________________________________ ____________________________________________________________________________ ____________________________________________________________________________ ____________________________________________________________________________ __________________________________________ CLASIFICACIÓN Y TRATAMIENTO: 36. EN CASO DE ESTAR PROCESADO/A: ¿ESTÁ INCORPORADO/A AL REGIMEN DE EJECUCIÓN ANTICIPADA VOLUNTARIA? ........................................ SI NO 37. EN CASO DE ESTAR CONDENADO/A: ¿EN QUE FASE DE LA PROGRESIVIDAD SE ENCUENTRA? Tratamiento: Prueba : - Observación - - Socialización - Consolidación Con salidas transitorias - - Confianza Sin salidas transitorias 38. ¿ QUE CALIFICACIONES TIENE? Conducta__________ Concepto _______________ 39. ¿CUÁL FUE SU ÚLTIMA CALIFICACIÓN COMO PROCESADO/A? _________________ 40. ¿CUÁL FUE SU PRIMERA CALIFICACIÓN COMO CONDENADO/A? _______________ 41. DESDE QUE LO INCORPORARON AL RÉGIMEN DE CONDENADOS, ¿CUÁNTO TIEMPO TARDARON EN CALIFICARLO/A? __________________________________________ 42. ¿LE HICIERON UNA PROPUESTA DE TRATAMIENTO INDIVIDUALIZADO? ....SI NO 43. DESDE QUE ESTÁ EN ESTA UNIDAD ¿CUÁNTAS ENTREVISTAS TUVO CON ALGÚN MIEMBRO DEL EQUIPO DE TRATAMIENTO (PSICÓLOGO, CRIMINÓLOGO, EDUCADOR)? - ¿Con quiénes? ______________________________________________ 44. ¿CUÁNTO DURA APROXIMADAMENTE CADA CONVERSACIÓN CON CADA UNO DE ELLOS? MIEMBRO DE FRECUENCIA TIEMPO PROMEDIO DE EQUIPO CON QUE LO VE DURACIÓN DE LA ENTREVISTA 45. LE NOTIFICAN REGULAMENTE LAS CALIFICACIONES?.............................. SI NO 46. ¿DE QUÉ MANERA LO HACEN? ___________________________________________ 47. ¿LO HAN RETROGRADADO EN LA PROGRESIVIDAD?.................................. SI NO ¿Por qué motivo? ________________________________________________________ 48. ¿CUANDO PIDE AUDIENCIA, ¿CUÁNTO TIEMPO TARDAN EN ATENDERLO? ______ REGIMEN DISCIPLINARIO 49. ¿FUE SANCIONADO/A ALGUNA VEZ? ............................................................... SI NO - ¿Por qué motivo lo/a sancionaron? (¿Qué tipo de infracción constituye: grave, media o leve?) ______________________________________________________________________________ 50. ¿QUÉ TIPO DE SANCIÓN LE IMPUSIERON? __________________________________ - ¿ Si fue por un plazo determinado, cuanto tiempo duró? _________________________ 51. ¿APELÓ LA SANCIÓN? ........ SI NO - ¿Sabía cómo y cuándo hacerlo? ........ SI NO CONDICIONES DE VIDA SALUD: 52. ¿CÓMO DEFINIRÍA SU ESTADO DE SALUD? Bueno - Regular - Malo - Muy malo 53. ¿CUÁNTAS VECES SOLICITÓ ATENCIÓN MÉDICA EN EL ÚLTIMO SEMESTRE? ___________ - ¿Cuántas le fue brindada? ________________________________ 54. ¿CUÁNTAS VECES SOLICITÓ ATENCIÓN ODONTOLÓGICO EN EL ÚLTIMO SEMESTRE? ____________________ - ¿Cuántas le fue brindada? _____________________ 55. ¿TIENE ALGUNA/S ENFERMEDAD/ES SERIA?... SI NO ¿CUÁL/ES? ________________ 56. ¿TENÍA ESA ENFERMEDAD ANTES DE ENTRAR A LA CÁRCEL?................... SI 57. ¿CONTRAJO ALGUNA ENFERMEDAD EN LA CÁRCEL................................... SI NO NO ¿Cuál? ____________________________________________________________________________ 58. ¿RECIBE TRATAMIENTO ESPECÍFICO POR TAL DOLENCIA? ...... SI NO -En el penal ڤ- En el exterior ڤ - Se cumple el tratamiento indicado ......... SI NO - ¿Por qué? ______________________________________________________ 59. ¿LE INFORMAN PERIÓDICAMENTE SOBRE SU ESTADO DE SALUD? ....... SI NO 60. ¿CÓMO CALIFICARIA EL TRATO EN ENFERMERÍA? _______________________________ 61. ¿RECIBE ATENCIÓN PSIQUIÁTRICA? ..... .... SI NO ¿Lo/a medican? .......... SI NO - ¿Sabe que le dan? _________________________________________ . 62. ¿CREE QUE EN LA CÁRCEL EXISTE RIESGO DE CONTRAER UNA ENFERMEDAD INFECCIOSA? ......... SI NO - ¿Cuál? __________________________________ VIDA EN PRISIÓN: 63. ¿CUÁNTOS PRESOS/AS HAY EN SU PABELLÓN? ___________ 64. ¿CUÁNTOS PRESOS/AS HAY EN SU CELDA? _______________ 65. DESCRIBA LAS CONDICIONES DE LA CELDA: - inodoro - ventilación - calefacción - - iluminación artificial ventanas - mobiliario - iluminación natural - colchón 66. ¿ QUÉ TIPO DE CONFLICTOS SON MÁS FRECUENTES EN SU PABELLÓN? _______________________________________________________________________ _______________________________________________________________________ 67.¿ CÓMO SE RESUELVEN HABITUALMENTE LOS CONFLICTOS? __________________________________________________________________________ __________________________________________________________________________ Parentesco TIENE SI LO VISITA NO SI NO Padre MadreCON EL EXTERIOR: RELACIÓN Esposa / Pareja Hijo/s 68. ¿CÓMO ESTA COMPUESTA SU FAMILIA? Hermano/s Otros (especificar) 69. ¿ RECIBE VISITAS? - habituales - ocasionales - especiales extraordinarias - ¿Quién lo/a visita? _____________________________________________________ - ¿Con qué frecuencia? ________________ - ¿Cuánto tiempo dura la visita _________ - Le gustaría que lo visiten otros? .... SI NO ¿por qué motivos no lo visitan? ________ 70. ¿EN QUÉ CONDICIONES SE REALIZAN LAS VISITAS? (PRIVACIDAD, COMODIDADES) ___________________________________________________________________________ 71. ¿RECIBE VISITAS ÍNTIMAS? ....... SI NO - ¿TIENE PRIVACIDAD? ............... SI NO 72. ¿CONDICIONES DE HIGIENE? .... SI NO - ¿LE DAN PRESERVATIVOS? ....... SI NO 73. ¿CUÁNTO DURA LA VISITA ÍNTIMA? (desde que se encuentra con la persona hasta que se despiden)? __________________________________________________________________ - ¿Con qué frecuencia tiene visita íntima? _____________________________________ 74. ¿CÓMO TRATA LA REQUISA A LAS PERSONAS QUE LO VISITAN? _________________ 75. CUÁNDO SU FAMILIA DEPOSITA ‘PAQUETES’: ¿TIENE PROBLEMAS PARA RECIBIRLOS? .... SI NO - ¿Cuáles? _____________ ________________________________________________________________________ 76. DESCRIBA BREVEMENTE LA REQUISA _______________________________________ 77. ¿CÓMO ES LA REQUISA QUE LE REALIZAN DESPUÉS DE CADA VISITA? __________ ______________________________________________________________________________ 78. ¿ TIENE ALGÚN FAMILIAR PRESO? ....NO ....... SI – Tiene Visita de penal a penal o intermodular? - ¿Con quién? ______________________ - ¿En qué unidad? ______________ - ¿Con qué frecuencia? _________________________________________________ 79.¿RECIBE VISITA DE ORGANIZACIONES OFICIALES U ONG’S? .......................... SI - Cuáles? ________________________________________________________________ 80. ¿RECIBE CORRESPONDENCIA? .... SI NO - ¿En qué condiciones recibe su correspondencia? ____________________________ 81.¿PUEDE HABLAR POR TELEFONO?.... SI NO - ¿Con qué frecuencia? _____________________ ¿Cuánto tiempo? _______________ ACTIVIDADES DIARIAS: Horario 7 a 8 hs. 8 a 9 hs. 9 a 10 hs. 10 a 11hs. 11 a 12 hs. 12 a 13 hs. 13 a 14 hs. Actividad NO 14 a 15 hs. 15 a 16 hs. 16 a 17 hs. 17 a 18 hs. 18 a 19 hs. 19 a 20 hs. 20 a 21 hs. 21 a 22 hs. 22 a 24 hs. OTRAS ACTIVIDADES DENTRO DE LA CÁRCEL 82. ¿REALIZA ALGÚN TRABAJO DENTRO DE LA CÁRCEL?...SI NO - ¿cuál? ____________ - ¿cobra peculio por ello?.... SI NO 83.¿REALIZA ALGUNA ACTIVIDAD EDUCATIVA O DE CAPACITACIÓN LABORAL? SI NO - ¿Cuál/es? ________________________________________________________________ - ¿Con qué frecuencia? _____________________________________________________ 84. ¿LE GUSTARÍA REALIZAR ALGUNA OTRA ACTIVIDAD EDUCATIVA O DE FORMACIÓN LABORAL? ........ SI NO - ¿Cuál? ____________________________________ 85. REALIZA ACTIVIDAD DE TIPO RELIGIOSO? ..... SI NO - CUÁL? _________________ 86. OTRAS ACTIVIDADES ____________________________________________________ MALOS TRATOS: 87. ¿LO/A SOMETIERON A MALOS TRATOS EN ESTA U OTRA UNIDAD? ..... SI NO - ¿Qué tipo de malos tratos? ________________________________________________ - ¿Los denunció? ...... SI NO - ¿Ante quién? _______________________________ -¿Qué respuesta obtuvo? __________________________________________________ CONSECUENCIAS DE LA PRIVACIÓN DE LIBERTAD: 88. ¿ QUÉ CONSECUENCIAS CREE QUE TIENE O TENDRÁ EN SU VIDA HABER ESTADO PRESO/A? a) Laborales:___________________________________________________________ ____________________________________________________________________ ____________________________________________________________________ ____________________________________________________________________ ____________________________________________________________________ ____________________________________________________________________ _ b) Económicas:_________________________________________________________ ____________________________________________________________________ ____________________________________________________________________ ____________________________________________________________________ ____________________________________________________________________ _ c) Familiares:___________________________________________________________ ____________________________________________________________________ ____________________________________________________________________ ____________________________________________________________________ ____________________________________________________________________ ____________________________________________________________________ d) Para su salud física: ____________________________________________________________________ ____________________________________________________________________ ____________________________________________________________________ ____________________________________________________________________ ____________________________________________________________________ ____________________________________________________________________ e) Psicológicas:_________________________________________________________ ____________________________________________________________________ ______________ _____________________________________ PREGUNTAS A POBLACIONES ESPECÍFICAS- JOVENES PRIVADOS DE LIBERTAD – METODOLOGÍA PEDAGÓGICA RESOCIALIZADORA ¿CUÁNTO TIEMPO LLEVÁS INCORPORADO AL PROGRAMA? ____________________ ¿QUÉ REQUISITOS TUVISTE QUE CUMPLIR PARA INGRESAR? __________________ _______________________________________________________________________ ¿CUÁLES SON LAS ACTIVIDADES ESPECIALES QUE CUMPLÍS POR ESTAR EN EL PROGRAMA? DESCRIBÍLAS BREVEMENTE __________________________________ _______________________________________________________________________ ¿SE LES APLICA UN RÉGIMEN DISCIPLINARIO ESPECÍFICO, ADEMÁS DEL DIPUESTO POR EL DTO. 18/97? ....................... SI NO ¿QUÉ DIFERENCIAS ENCONTRÁS ENTRE ESTAR INCORPORADO EN EL RÉGIMEN DE LA MPS, O EN EL RÉGIMEN COMÚN? MUJERES PRIVADAS DE LIBERTAD: • ¿TIENE COMPAÑERO/A DE CAUSA? ........................................... SI NO - ¿Qué tipo de relación la vincula con él/ella? -Parentesco: Madre/padre Otro - Marido/pareja - Hijo/hija/s - Hermano/a/s ............................................... - Amistad - Ocasional • ¿TIENE HIJOS MENORES DE 18 AÑOS? .............................. SI NO ¿Cuántos y de qué edades? ________________________________________ ¿Con quién viven en la actualidad? ___________________________________ JÓVENES ADULTOS PERTENECIÓ ALGUNA VEZ AL PROGRAMA MPS ................ SI NO EN CASO AFIRMATIVO: ¿EN ALGÚN MOMENTO FUE EXPULSADO DEL PROGRAMA? SI NO ¿POR QUÉ MOTIVOS? ___________________________________________________________________ ___________________________________________________________________ ___________________________________________________________________ ¿CÓMO Y POR QUÉ LO REINCORPORARON? ___________________________________________________________________ ___________________________________________________________________ ___________________________________________________________________ NORMATIVA CONVENIO MARCO ENTRE LA FACULTAD DE CIENCIAS SOCIALES –UBA Y LA PROCURACIÓN PENITENCIARIA NACIONAL Entre la Facultad de Ciencias Sociales a través del Instituto de Investigaciones Gino Germani, en adelante "La Facultad", representada en este acto por su Decano, Dr. Federico Schuster y el Director del Instituto de Investigaciones Gino Germani Lic. Pedro Krotsch, por un lado; y la Procuración Penitenciaria Nacional, en adelante "La Procuración", representada en este acto por el Procurador Penitenciario Dr. Francisco Miguel Mugnolo, por el otro, acuerdan firmar el presente convenio marco de cooperación, asistencia técnica y científica, sujeto a las siguientes cláusulas: PRIMERA: El objeto del presente convenio es la investigación y prestación mutua de cooperación, realización de actividades conjuntas, asesoría y asistencia técnica en los temas de su respectiva competencia entre los organismos firmantes, en particular, respecto de la población carcelaria que se encuentre en establecimientos federales. SEGUNDA: A los fines de alcanzar los objetivos propuestos, las partes acuerdan articular esfuerzos en la promoción de acciones tendientes a la optimización de las condiciones humanas y materiales de los lugares de detención y del respeto por los derechos humanos de las personas privadas de la libertad. TERCERA: Para efectivizar las actividades a llevarse a cabo en el marco del presente convenio, se suscribirán convenios específicos entre ambas instituciones. En ellos se fijarán los campos de cooperación y asistencia, así como los términos, modalidades, condiciones financieras, procedimientos de ejecución y certificación. Dichos convenios específicos serán oportunamente elevados para su consideración y posterior aprobación por las instancias directivas de cada institución. CUARTA: Los resultados de las investigaciones que se desarrollen en el marco del presente convenio se presentarán como insumos para la diagramación y el diseño de políticas en el área pertinente. QUINTA: La propiedad intelectual de las publicaciones que surjan de las actividades en el marco del presente convenio deberá ser propiedad de las partes intervinientes. No obstante lo cual deberá dejarse constancia de las personas intervinientes en dichas publicaciones y de su grado de intervención en las mismas. Los resultados obtenidos, parciales o totales, definitivos o transitorios que surjan de cualquiera de las actividades a llevarse a cabo serán propiedad común de las partes. En el caso que dichos resultados sean susceptibles de ser utilizados en el proceso productivo y adquieran por ello valor económico se deberá celebrar a la brevedad un convenio especial a efectos de reglamentar la propiedad de dichos resultados y fijar las medidas tendientes a la protección de los mismos. SEXTA: A los efectos de la implementación del presente convenio se creará una Unidad de Coordinación integrada por dos (2) representantes por "La Procuración", y dos (2) por "La Facultad”. Los representantes por “La Procuración” serán el Procurador Penitenciario Dr Francisco Mugnolo y la Subprocuradora Penitenciaria la Dra. Claudia Valeria Anguillesi , en tanto que serán representantes por "La Facultad" la Secretaria de Cultura y Extensión Universitaria, Lic. María Felicitas Elías y la Lic. Alcira Daroqui del Instituto Gino Germani. SEPTIMA: La Unidad de Coordinación tendrá las siguientes atribuciones y funciones: a) actuar como Tribunal Arbitral a los fines de dirimir las controversias que pudieran suscitarse; b) elevar a las partes un informe de las actividades cumplidas, c) supervisar las actividades derivadas de la aplicación del presente convenio. OCTAVA: Las instituciones se comprometen, si surgiere la necesidad, a requerir financiamiento para el desarrollo de las actividades que se propongan, a organismos públicos y privados, nacionales o internacionales. NOVENA: Las partes, de común acuerdo, podrán invitar a participar de las investigaciones específicas que se encaren, bajo los términos del presente convenio, a organismos con interés en los temas objeto de investigación. DECIMA: El presente convenio tendrá una vigencia de 2 (dos) años desde la fecha de su firma, renovándose en forma automática de no mediar objeción explícita de cualquiera de las partes. Así mismo, podrá ser rescindido por cualquiera de ellas con el solo aviso por escrito a la contraparte con 30 (treinta) días de anticipación. Los trabajos en curso de ejecución no podrán ser afectados por esta rescisión, en tanto y en cuanto se cuente con los recursos para finalizar las tareas en ejecución. DECIMO PRIMERA: Se considerará como información confidencial toda la que reciba o llegue a conocimiento de las partes relacionada con las actividades que realiza "La Procuración", a las que tengan acceso sea directa o indirectamente, fuera durante o después de la finalización de las actividades. DECIMO SEGUNDA: Las partes se comprometen a solucionar amigablemente sus diferencias a través de sus representantes técnicos. En caso de no ser posible arribar a un acuerdo, las partes designarán un mediador siguiendo el presente mecanismo: propondrán dos mediadores cada una de las partes, de donde se sorteará uno. De persistir el desacuerdo luego de su mediación y a todos los efectos del presente convenio, las partes se someten voluntariamente a la competencia de los Tribunales Federales de la Capital Federal. Las notificaciones se efectuarán en los domicilios mencionados al cierre del presente convenio. DECIMO TERCERA: Para todos los efectos que pudieran corresponder, las partes constituyen sus domicilios legales en: la Facultad de Ciencias Sociales -UBA-, Marcelo T. de Alvear 2230, CP 1122, Ciudad Autónoma de Buenos Aires; la Procuración Penitenciaria Nacional, en Av. Belgrano 1177 piso 2º, CP 1092, Ciudad Autónoma de Buenos Aires. En conformidad, se firman, ad referéndum" del Consejo Superior de la Universidad de Buenos Aires, dos (2) ejemplares de un mismo tenor y a un solo efecto, en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires a los 14 días del mes junio de 2002. Dr Francisco Miguel Mugnolo Procurador Penitenciario Dr. Federico Schuster Decano de la Facultad de Ciencias Sociales UBA LEY 24660 EJECUCIÓN DE LA PENA PRIVATIVA DE LA LIBERTAD Publicada en B. O. el 16 de julio de 1996 Capítulo I Principios básicos de la ejecución Artículo 1 - La ejecución de la pena privativa de libertad, en todas sus modalidades, tiene por finalidad lograr que el condenado adquiera la capacidad de comprender y respetar la ley procurando su adecuada reinserción social, promoviendo la comprensión y el apoyo de la sociedad. El régimen penitenciario deberá utilizar, de acuerdo con las circunstancias de cada caso, todos los medios de tratamiento interdisciplinario que resulten apropiados para la finalidad enunciada. Artículo 2 - El condenado podrá ejercer todos los derechos no afectados por la condena o por la ley y las reglamentaciones que en su consecuencia se dicten y cumplirá con todos los deberes que su situación le permita y con todas las obligaciones que su condición legalmente le impone. Artículo 3 - La ejecución de la pena privativa de libertad, en todas sus modalidades, estará sometida al permanente control judicial. El juez de ejecución o juez competente garantizará el cumplimiento de las normas constitucionales, los tratados internacionales ratificados por la República Argentina y los derechos de los condenados no afectados por la condena o por la ley. Artículo 4 - Será de competencia judicial durante la ejecución de la pena: a) Resolver las cuestiones que se susciten cuando se considere vulnerado alguno de los derechos del condenado; b) Autorizar todo egreso del condenado del ámbito de la administración penitenciaria. Artículo 5 - El tratamiento del condenado deberá ser programado e individualizado y obligatorio respecto de las normas que regulan la convivencia, la disciplina y el trabajo. Toda otra actividad que lo integre tendrá carácter voluntario. En ambos casos deberá atenderse a las condiciones personales, intereses y necesidades para el momento del egreso, dentro de las posibilidades de la administración penitenciaria. Artículo 6 - El régimen penitenciario se basará en la progresividad, procurando limitar la permanencia del condenado en establecimientos cerrados y promoviendo en lo posible y conforme su evolución favorable su incorporación a instituciones semiabiertas o abiertas o a secciones separadas regidas por el principio de autodisciplina. Artículo 7 - El condenado podrá ser promovido excepcionalmente a cualquier fase del período de tratamiento que mejor se adecue a sus condiciones personales, de acuerdo con los resultados de los estudios técnicocriminológicos y mediante resolución fundada de la autoridad competente. Artículo 8 - Las normas de ejecución serán aplicadas sin establecer discriminación o distingo alguno en razón de raza, sexo, idioma, religión, ideología, condición social o cualquier otra circunstancia. Las únicas diferencias obedecerán al tratamiento individualizado. Artículo 9 - La ejecución de la pena estará exenta de tratos crueles, inhumanos o degradantes. Quien ordene, realice o tolere tales excesos se hará pasible de las sanciones previstas en el Código Penal, sin perjuicio de otras que le pudieren corresponder. Artículo 10. - La conducción, desarrollo y supervisión de las actividades que conforman el régimen penitenciario serán de competencia y responsabilidad administrativa, en tanto no estén específicamente asignadas a la autoridad judicial. Artículo 11. - Esta ley, con excepción de lo establecido en el artículo 7, es aplicable a los procesados a condición de que sus normas no contradigan el principio de inocencia y resulten más favorables y útiles para resguardar su personalidad. Las cuestiones que pudieran suscitarse serán resueltas por el juez competente. Capítulo II Modalidades básicas de la ejecución Sección primera Progresividad del régimen penitenciario Artículo 12. - El régimen penitenciario aplicable al condenado, cualquiera fuere la pena impuesta, se caracterizará por su progresividad y constará de: a) Período de observación; b) Período de tratamiento; c) Período de prueba; d) Período de libertad condicional. Artículo 13. - Durante el período de observación el organismo técnico-criminológico tendrá a su cargo: a) Realizar el estudio médico, psicológico y social del condenado, formulando el diagnóstico y el pronóstico criminológico, todo ello se asentará en una historia criminológica debidamente foliada y rubricada que se mantendrá permanentemente actualizada con la información resultante de la ejecución de la pena y del tratamiento instaurado; b) Recabar la cooperación del condenado para proyectar y desarrollar su tratamiento. A los fines de lograr su aceptación y activa participación, se escucharán sus inquietudes; c) Indicar el período y fase de aquel que se propone para incorporar al condenado y el establecimiento, sección o grupo al que debe ser destinado; d) Determinar el tiempo mínimo para verificar los resultados del tratamiento y proceder a su actualización, si fuere menester. Artículo 14. - En la medida que lo permita la mayor o menor especialidad del establecimiento penitenciario, el período de tratamiento podrá ser fraccionado en fases que importen para el condenado una paulatina atenuación de las restricciones inherentes a la pena. Estas fases podrán incluir el cambio de sección o grupo dentro del establecimiento o su traslado a otro. Artículo 15. - El período de prueba comprenderá sucesivamente: a) La incorporación del condenado a establecimiento abierto o sección independiente de éste, que se base en el principio de autodisciplina; b) La posibilidad de obtener salidas transitorias del establecimiento; c) La incorporación al régimen de la semilibertad. Artículo 16. - Las salidas transitorias, según la duración acordada, el motivo que las fundamente y el nivel de confianza que se adopte, podrán ser: I. Por el tiempo: a) Salidas hasta doce horas; b) Salidas hasta 24 horas; c) Salidas, en casos excepcionales, hasta setenta y dos horas. II. Por el motivo: a) Para afianzar y mejorar los lazos familiares y sociales; b) Para cursar estudios de educación general básica, polimodal, superior, profesional y académica de grado o de los regímenes especiales previstos en la legislación vigente; c) Para participar en programas específicos de prelibertad ante la inminencia del egreso por libertad condicional, asistida o por agotamiento de condena. III. Por el nivel de confianza: a) Acompañado por un empleado que en ningún caso irá uniformado; b) Confiado a la tuición de un familiar o persona responsable; c) Bajo palabra de honor. Artículo 17. - Para la concesión de las salidas transitorias o la incorporación al régimen de la semilibertad se requiere: I. Estar comprendido en alguno de los siguientes tiempos mínimos de ejecución: a) Pena temporal sin la accesoria del artículo 52 del Código Penal: la mitad de la condena; b) Penas perpetuas sin la accesoria del artículo 52 del Código Penal: quince años; c) Accesoria del artículo 52 del Código Penal, cumplida la pena: 3 años. II. No tener causa abierta donde interese su detención u otra condena pendiente. III. Poseer conducta ejemplar o el grado máximo susceptible de ser alcanzado según el tiempo de internación. IV. Merecer, del organismo técnico-criminológico y del consejo correccional del establecimiento, concepto favorable respecto de su evolución y sobre el efecto beneficioso que las salidas o el régimen de semilibertad puedan tener para el futuro personal, familiar y social del condenado. Artículo 18. - El director del establecimiento, por resolución fundada, propondrá al juez de ejecución o juez competente la concesión de las salidas transitorias o del régimen de semilibertad, propiciando en forma concreta: a) El lugar o la distancia máxima a que el condenado podrá trasladarse. Si debiera pasar la noche fuera del establecimiento, se le exigirá una declaración jurada del sitio preciso donde pernoctará; b) Las normas que deberá observar, con las restricciones o prohibiciones que se estimen convenientes; c) El nivel de confianza que se adoptará. Artículo 19. - Corresponderá al juez de ejecución o juez competente disponer las salidas transitorias y el régimen de semilibertad, precisando las normas que el condenado debe observar y efectuar modificaciones, cuando procediere. En caso de incumplimiento de las normas, el juez suspenderá o revocará el beneficio cuando la infracción fuere grave o reiterada. Artículo 20. - Concedida la autorización judicial, el director del establecimiento quedará facultado para hacer efectivas las salidas transitorias o la semilibertad e informará al juez sobre su cumplimiento. El director podrá disponer la supervisión a cargo de profesionales del servicio social. Artículo 21. - El director entregará al condenado autorizado a salir del establecimiento una constancia que justifique su situación ante cualquier requerimiento de la autoridad. Artículo 22. - Las salidas transitorias, el régimen de semilibertad y los permisos a que se refiere el artículo 166 no interrumpirán la ejecución de la pena. Artículo 23. - La semilibertad permitirá al condenado trabajar fuera del establecimiento sin supervisión continua, en iguales condiciones a las de la vida libre, incluso salario y seguridad social, regresando al alojamiento asignado al fin de cada jornada laboral. Para ello deberá tener asegurada una adecuada ocupación y reunir los requisitos del artículo 17. Artículo 24. - El condenado incorporado a semilibertad será alojado en una institución regida por el principio de autodisciplina. Artículo 25. - El trabajo en semilibertad será diurno y en días hábiles. Excepcionalmente será nocturno o en días domingo o feriado y en modo alguno dificultará el retorno diario del condenado a su alojamiento. Artículo 26. - La incorporación a la semilibertad incluirá una salida transitoria semanal, salvo resolución en contrario de la autoridad judicial. Artículo 27. - La verificación y actualización del tratamiento a que se refiere el artículo 13, inciso d), corresponderá al organismo técnico-criminológico y se efectuará, como mínimo, cada seis meses. Artículo 28. - El juez de ejecución o juez competente podrá conceder la libertad condicional al condenado que reúna los requisitos fijados por el Código Penal, previo los informes fundados del organismo técnicocriminológico y del consejo correccional del establecimiento. Dicho informe deberá contener los antecedentes de conducta, concepto y dictámenes criminológicos desde el comienzo de la ejecución de la pena. Artículo 29. - La supervisión del liberado condicional comprenderá una asistencia social eficaz a cargo de un patronato de liberados o de un servicio social calificado, de no existir aquél. En ningún caso se confiará a organismos policiales o de seguridad. Sección Segunda Programa de pre-libertad Artículo 30. - Entre sesenta y noventa días antes del tiempo mínimo exigible para la concesión de la libertad condicional o de la libertad asistida del artículo 54, el condenado deberá participar de un programa intensivo de preparación para su retorno a la vida libre el que, por lo menos, incluirá: a) Información, orientación y consideración con el interesado de las cuestiones personales y prácticas que deba afrontar al egreso para su conveniente reinserción familiar y social; b) Verificación de la documentación de identidad indispensable y su vigencia o inmediata tramitación, si fuere necesario; c) Previsiones adecuadas para su vestimenta, traslado y radicación en otro lugar, trabajo, continuación de estudios, aprendizaje profesional, tratamiento médico, psicológico o social. Artículo 31. - El desarrollo del programa de pre-libertad, elaborado por profesionales del servicio social, en caso de egresos por libertad condicional o por libertad asistida, deberá coordinarse con los patronatos de liberados. En los egresos por agotamiento de la pena privativa de libertad la coordinación se efectuará con los patronatos de liberados, las organizaciones de asistencia post-penitenciaria y con otros recursos de la comunidad. En todos los casos se promoverá el desarrollo de acciones tendientes a la mejor reinserción social. Sección Tercera Alternativas para situaciones especiales Artículo 32. - El juez de ejecución o juez competente confiará la supervisión de la detención domiciliaria prevista en el artículo 10 del Código Penal a un patronato de liberados o servicio social calificado, de no existir aquél. En ningún caso estará a cargo de organismos policiales o de seguridad. Artículo 33. - El condenado mayor de setenta años o el que padezca una enfermedad incurable en período terminal, podrá cumplir la pena impuesta en detención domiciliaria, por resolución del juez de ejecución o juez competente, cuando mediare pedido de un familiar, persona o institución responsable que asuma su cuidado, previo informes médico, psicológico y social que fundadamente lo justifique. Si lo estimare conveniente, el juez podrá disponer una supervisión adecuada en la forma prevista en el artículo 32. Artículo 34. - El juez de ejecución o juez competente revocará la detención domiciliaria cuando el condenado quebrantare injustificadamente la obligación de permanecer en el domicilio fijado o cuando los resultados de la supervisión efectuada así lo aconsejaren. Artículo 35. - El juez de ejecución o juez competente, a pedido o con el consentimiento del condenado, podrá disponer la ejecución de la pena mediante la prisión discontinua y semidetención, cuando: a) Se revocare la detención domiciliaria prevista en el artículo 10 del Código Penal; b) Se revocare la detención domiciliaria prevista en el artículo 33 de esta ley en el caso de condenado mayor de setenta años; c) Se convirtiere la pena de multa en prisión, según lo dispuesto en el artículo 21, párrafo 2 del Código Penal; d) Se revocare la condenación condicional prevista en el artículo 26 del Código Penal por incumplimiento de las reglas de conducta establecidas en el artículo 27 bis del Código Penal; e) Se revocare la libertad condicional dispuesta en el artículo 15 del Código Penal, en el caso que el condenado haya violado la obligación de residencia; f) La pena privativa de libertad, al momento de la sentencia definitiva, no sea mayor de seis meses de efectivo cumplimiento. Artículo 36. - La prisión discontinua se cumplirá mediante la permanencia del condenado en una institución basada en el principio de autodisciplina, por fracciones no menores de treinta y seis horas, procurando que ese período coincida con los días no laborables de aquél. Artículo 37. - El juez de ejecución o juez competente podrá autorizar al condenado a no presentarse en la institución en la que cumple la prisión discontinua por un lapso de veinticuatro horas cada dos meses. Artículo 38. - Se computará un día de pena privativa de libertad por cada noche de permanencia del condenado en la institución. Artículo 39. - La semidetención consistirá en la permanencia ininterrumpida del condenado en una institución basada en el principio de autodisciplina, durante la fracción del día no destinada al cumplimiento, en la medida de lo posible, de sus obligaciones familiares, laborales o educativas. Sus modalidades podrán ser la prisión diurna y la prisión nocturna. Artículo 40. - El lapso en el que el condenado esté autorizado a salir de la institución se limitará al que le insuman las obligaciones indicadas en el artículo 39, que deberá acreditar fehacientemente. Artículo 41. - La prisión diurna se cumplirá mediante la permanencia diaria del condenado en una institución basada en el principio de autodisciplina, todos los días entre las ocho y las diecisiete horas. Artículo 42. - La prisión nocturna se cumplirá mediante la permanencia diaria del condenado en una institución basada en el principio de autodiscipina, entre las veintiuna horas de un día y las seis horas del día siguiente. Artículo 43. - Se computará un día de pena privativa de libertad por cada jornada de permanencia del condenado en la institución conforme lo previsto en los artículos 41 y 42. Artículo 44. - El juez de ejecución o juez competente podrá autorizar al condenado a no presentarse en la institución durante un lapso no mayor de cuarenta y ocho horas cada dos meses. Artículo 45. - El juez de ejecución o juez competente determinará, en cada caso, mediante resolución fundada, el plan de ejecución de la prisión discontinua o semidetención, los horarios de presentación obligatoria del condenado, las normas de conducta que se compromete a observar en la vida libre y la obligación de acatar las normas de convivencia de la institución, disponiendo la supervisión que considere conveniente. Artículo 46. - En el caso del inciso f) del artículo 35, si el condenado se encontrare privado de libertad, previo a la ejecución de la resolución judicial, participará del programa de prelibertad, establecido en el artículo 30, con una duración máxima de treinta días. Artículo 47. - El condenado en prisión discontinua o en semidetención, durante su permanencia en la institución, participará en los programas de tratamiento que establezca la reglamentación, en la que se consignarán las obligaciones y limitaciones que deberá observar. Artículo 48. - El condenado podrá, en cualquier tiempo, renunciar irrevocablemente a la prisión discontinua o a la semidetención. Practicado el nuevo cómputo, el juez de ejecución o juez competente dispondrá que el resto de la pena se cumpla en establecimiento penitenciario. En tal supuesto la pena se cumplirá en establecimiento semiabierto o cerrado. Artículo 49. - En caso de incumplimiento grave o reiterado de las normas fijadas de acuerdo a lo previsto en el artículo 45 y previo informe de la autoridad encargada de la supervisión del condenado, el juez de ejecución o juez competente revocará la prisión discontinua o la semidetención practicando el cómputo correspondiente. La revocación implicará el cumplimiento de la pena en establecimiento semiabierto o cerrado. Artículo 50. - En los casos de los incisos c) y f) del artículo 35, cuando se presente ocasión para ello y el condenado lo solicite o acepte, el juez de ejecución o juez competente podrá sustituir, total o parcialmente, la prisión discontinua o la semidetención por la realización de trabajo para la comunidad no remunerado fuera de los horarios habituales de su actividad laboral comprobada. En tal caso se computarán seis horas de trabajo para la comunidad por un día de prisión. El plazo máximo para el cumplimiento de la pena con esta modalidad de ejecución será de dieciocho meses. Artículo 51. - El juez de ejecución o juez competente confiará la organización y supervisión del trabajo para la comunidad del artículo 50 a un patronato de liberados o a un servicio social calificado, de no existir aquél. Artículo 52. - En caso de incumplimiento del plazo o de la obligación fijada en el artículo 50, el juez de ejecución o juez competente revocará el trabajo para la comunidad. La revocación, luego de practicado el cómputo correspondiente, implicará el cumplimiento de la pena en establecimiento semiabierto o cerrado. Por única vez y mediando causa justificada, el juez de ejecución o juez competente podrá ampliar el plazo en hasta seis meses. Artículo 53. - El condenado en cualquier tiempo podrá renunciar irrevocablemente al trabajo para la comunidad. Practicado el nuevo cómputo, el juez de ejecución o juez competente dispondrá que el resto de la pena se cumpla en prisión discontinua, semidetención o en un establecimiento penitenciario. Sección cuarta Libertad asistida Artículo 54. - La libertad asistida permitirá al condenado sin la accesoria del artículo 52 del Código Penal, el egreso anticipado y su reintegro al medio libre seis meses antes del agotamiento de la pena temporal. El juez de ejecución o juez competente, a pedido del condenado y previo los informes del organismo técnicocriminológico y del consejo correccional del establecimiento, podrá disponer la incorporación del condenado al régimen de libertad asistida. El juez de ejecución o juez competente podrá denegar la incorporación del condenado a este régimen sólo excepcionalmente y cuando considere, por resolución fundada, que el egreso puede constituir un grave riesgo para el condenado o para la sociedad. Artículo 55. - El condenado incorporado al régimen de libertad asistida deberá cumplir las siguientes condiciones: I. Presentarse, dentro del plazo fijado por el juez de ejecución o juez competente, al patronato de liberados que le indique para su asistencia y para la supervisión de las condiciones impuestas. II. Cumplir las reglas de conducta que el juez de ejecución o juez competente fije, las cuales sin perjuicio de otras que fueren convenientes de acuerdo a las circunstancias personales y ambientales del condenado, podrán ser: a) Desempeñar un trabajo, oficio o profesión, o adquirir los conocimientos necesarios para ello; b) Aceptar activamente el tratamiento que fuere menester; c) No frecuentar determinadas personas o lugares, abstenerse de actividades o de hábitos que en el caso, se consideren inconvenientes para su adecuada reinserción social. Salvo expresa indicación en contrario, siempre regirá la obligación señalada en el inciso a) de este apartado. III. Residir en el domicilio consignado en la resolución judicial, el que podrá ser modificado previa autorización del juez de ejecución o juez competente, para lo cual éste deberá requerir opinión del patronato respectivo. IV. Reparar, en la medida de sus posibilidades, los daños causados por el delito, en los plazos y condiciones que fije el juez de ejecución o juez competente. Estas condiciones regirán a partir del día de egreso hasta el de agotamiento de la condena. Artículo 56. - Cuando el condenado en libertad asistida cometiere un delito o violare la obligación del apartado I del artículo 55, la libertad asistida será revocada. El resto de la condena se agotará en un establecimiento semiabierto o cerrado. Si el condenado en libertad asistida incumpliere reiteradamente las reglas de conducta impuestas, violare la obligación prescripta en el apartado III del artículo 55 o se sustrajere, sin causa, a lo prescrito en el apartado IV de ese artículo, el juez de ejecución o juez competente podrá revocar su incorporación a la libertad asistida o disponer que no se le compute en la condena todo o parte del tiempo que hubiere durado la inobservancia. En tal supuesto se prorrogarán los términos, hasta tanto acatare lo dispuesto en el plazo que se le fije, bajo apercibimiento de revocatoria. En los casos de revocatoria, deberá practicarse nuevo cómputo no considerándose el tiempo que haya durado la libertad. Capítulo III Normas de trato Artículo 57. - La persona condenada sujeta a medida de seguridad que se aloje en instituciones previstas en esta ley, se denominará interno. Al interno se le citará o llamará únicamente por el nombre y apellido. Artículo 58. - El régimen penitenciario deberá asegurar y promover el bienestar psicofísico de los internos. Para ello se implementarán medidas de prevención, recuperación y rehabilitación de la salud y se atenderán especialmente las condiciones ambientales e higiénicas de los establecimientos. Artículo 59. - El número de internos de cada establecimiento deberá estar preestablecido y no se lo excederá a fin de asegurar un adecuado alojamiento. Todos los locales estarán siempre en buen estado de conservación. Su ventilación, iluminación, calefacción y dimensiones guardarán relación con su destino y los factores climáticos. Artículo 60. - El aseo personal del interno será obligatorio. Los establecimientos deberán disponer de suficientes y adecuadas instalaciones sanitarias y proveerán al interno de los elementos indispensables para su higiene. Artículo 61. - El interno deberá cuidar el aseo de su alojamiento y contribuir a la higiene y conservación del establecimiento. Artículo 62. - El alojamiento nocturno del interno, en lo posible, será individual en los establecimientos cerrados y semiabiertos. En las instituciones o secciones basadas en el principio de autodisciplina se podrán utilizar dormitorios para internos cuidadosamente seleccionados. Artículo 63. - La Administración proveerá al interno de vestimenta acorde al clima y a la estación, para usarla en el interior del establecimiento. En manera alguna esas prendas, por sus características podrán resultar humillantes. Deberá cuidarse su mantenimiento en buen estado de conservación e higiene. Cuando el interno hubiere de salir del establecimiento, en los casos autorizados, deberá permitírsele utilizar sus ropas personales. Si no dispusiere de ellas, se le facilitará vestimenta adecuada. Artículo 64. - Al interno se le proveerá de ropa suficiente para su cama individual, la que será mudada con regularidad. Artículo 65. - La alimentación del interno estará a cargo de la administración; será adecuada a sus necesidades y sustentada en criterios higiénico-dietéticos. Sin perjuicio de ello y conforme los reglamentos que se dicten, el interno podrá adquirir o recibir alimentos de sus familiares o visitantes. La prohibición de bebidas alcohólicas será absoluta. Artículo 66. - A su ingreso al establecimiento el interno recibirá explicación oral e información escrita acerca del régimen a que se encontrará sometido, las normas de conducta que deberá observar, el sistema disciplinario vigente, los medios autorizados para formular pedidos o presentar quejas y de todo aquello que sea útil para conocer sus derechos y obligaciones. Si el interno fuere analfabeto, presentare discapacidad física o psíquica o no comprendiese el idioma castellano, esa información se le deberá suministrar por persona y medio idóneo. Artículo 67. - El interno podrá presentar peticiones y quejas al director del establecimiento y dirigirse sin censura a otra autoridad administrativa superior, al juez de ejecución o al juez competente. La resolución que se adopte deberá ser fundada, emitida en tiempo razonable y notificada al interno. Artículo 68. - El dinero, los objetos de valor y demás prendas propias que el interno posea a su ingreso o que reciba con posterioridad y que reglamentariamente no pueda retener consigo serán, previo inventario, mantenidos en depósito. Se adoptarán las disposiciones necesarias para su conservación en buen estado. Conforme los reglamentos, el interno podrá disponer de su dinero y otros objetos. Los efectos no dispuestos por el interno y que no hubieren sido retenidos o destruidos por razones de higiene, le serán devueltos a su egreso. De todo depósito, disposición o devolución se extenderán las correspondientes constancias y recibos. Artículo 69. - El interno deberá cuidar las instalaciones, el mobiliario y los objetos y elementos que la administración destine para el uso individual o común y abstenerse de producir daño en los pertenecientes a otros internos. Artículo 70. - Para preservar la seguridad general, los registros en las personas de los internos, sus pertenencias y locales que ocupen, los recuentos y las requisas de las instalaciones del establecimiento, se efectuarán con las garantías que reglamentariamente se determinen y dentro del respeto a la dignidad humana. Artículo 71. - El traslado individual o colectivo de internos se sustraerá a la curiosidad pública y estará exento de publicidad. Deberá efectuarse en medios de transporte higiénicos y seguros. La administración reglamentará las precauciones que deberán utilizarse contra posibles evasiones, las cuales en ninguna circunstancia causarán padecimientos innecesarios al interno. Artículo 72. - El traslado del interno de un establecimiento a otro, con las razones que lo fundamenten, deberá ser comunicado de inmediato al juez de ejecución o juez competente. Artículo 73. - El traslado del interno de un establecimiento a otro será informado de inmediato a las personas o instituciones con las que mantuviere visita o correspondencia o a quienes hubieren sido por él designados. Artículo 74. - Queda prohibido el empleo de esposas o de cualquier otro medio de sujeción como castigo Artículo 75. - Sólo podrán adoptarse medidas de sujeción en los siguientes casos: a) Como precaución contra una posible evasión durante el traslado del interno; b) Por razones médicas, a indicación del facultativo, formulada por escrito; c) Por orden expresa del director o del funcionario que lo reemplace en caso de no encontrarse éste en servicio, si otros métodos de seguridad hubieran fracasado y con el único propósito de que el interno no se cause daño a sí mismo, a un tercero o al establecimiento. En este caso el director o quien lo reemplace, dará de inmediato intervención al servicio médico y remitirá un informe detallado al juez de ejecución o juez competente y a la autoridad penitenciaria superior. Artículo 76. - La determinación de los medios de sujeción autorizados y su modo de empleo serán establecidos por la reglamentación que se dicte. Su aplicación no podrá prolongarse más allá del tiempo necesario, bajo apercibimiento de las sanciones administrativas y penales que correspondan por el funcionario responsable. Artículo 77. - Al personal penitenciario le está absolutamente prohibido emplear la fuerza en el trato con los internos, excepto en los casos de fuga, evasión o de sus tentativas o de resistencia por la fuerza activa o pasiva a una orden basada en norma legal o reglamentaria. Aun en estos casos, todo exceso hará pasible al responsable de las sanciones administrativas y penales que correspondan. Artículo 78. - El personal que habitualmente preste servicios en contacto directo con los internos no estará armado. Deberá recibir un entrenamiento físico adecuado que le permita actuar razonable y eficazmente para superar situaciones de violencia. El uso de armas reglamentarias quedará limitado a las circunstancias excepcionales en que sea indispensable utilizarlas con fines de prevención o por peligro inminente para la vida, la salud o la seguridad de agentes, de internos o de terceros. Capítulo IV Disciplina Artículo 79. - El interno está obligado a acatar las normas de conducta que, para posibilitar una ordenada convivencia, en su propio beneficio y para promover su reinserción social, determinen esta ley y los reglamentos que se dicten. Artículo 80. - El orden y la disciplina se mantendrán con decisión y firmeza. No se impondrán más restricciones que las indispensables para mantener la seguridad y la correcta organización de la vida de los alojados, de acuerdo al tipo de establecimiento y al régimen en que se encuentra incorporado el interno. Artículo 81. - El poder disciplinario sólo puede ser ejercido por el director del establecimiento, quien tendrá competencia para imponer sanciones, suspender o dar por cumplida su aplicación o sustituirlas por otras más leves, de cuerdo a las circunstancias del caso. Artículo 82. - El reglamento podrá autorizar, con carácter restrictivo, que un miembro del personal superior legalmente a cargo del establecimiento, pueda ordenar el aislamiento provisional de internos cuando existan fundados motivos para ello, dando inmediata intervención al director. Artículo 83. - En ningún caso el interno podrá desempeñar tareas a las que vaya unido el ejercicio de una potestad disciplinaria. Artículo 84. - No habrá infracción ni sanción disciplinaria sin expresa y anterior previsión legal o reglamentaria. Artículo 85. - El incumplimiento de las normas de conducta a que alude el artículo 79, constituye infracción disciplinaria. Las infracciones disciplinarias se clasifican en leves, medias y graves. Los reglamentos especificarán las leves y las medias. Son faltas graves: a) Evadirse o intentarlo, colaborar en la evasión de otros o poseer elementos para ello; b) Incitar o participar en movimientos para quebrantar el orden y la disciplina; c) Tener dinero u otros valores que lo reemplacen, poseer, ocultar, facilitar o traficar elementos electrónicos o medicamentos no autorizados, estupefacientes, alcohol, sustancias tóxicas o explosivos, armas o todo instrumento capaz de atentar contra la vida, la salud o la integridad propia o de terceros; d) Intentar introducir o sacar elementos de cualquier naturaleza eludiendo los controles reglamentarios; e) Retener, agredir, coaccionar o amenazar a funcionarios u otras personas; f) Intimidar física, psíquica o sexualmente a otra persona; g) Amenazar o desarrollar acciones que sean real o potencialmente aptas para contagiar enfermedades; h) Resistir activa y gravemente al cumplimiento de órdenes legalmente impartidas por funcionario competente; i) Provocar accidentes de trabajo o de cualquier otra naturaleza; j) Cometer un hecho previsto como delito doloso, sin perjuicio de ser sometido al eventual proceso penal. Artículo 86. - El interno estará obligado a resarcir los daños o deterioros materiales causados en las cosas muebles o inmuebles del Estado o de terceros, sin perjuicio de ser sometido al eventual proceso penal. Artículo 87. - Sólo se podrá aplicar como sanción, de acuerdo a la importancia de la infracción cometida y a la individualización del caso, alguna de las siguientes correcciones, sin perjuicio de lo dispuesto en el artículo 89; a) Amonestación; b) Exclusión de las actividades recreativas o deportivas hasta diez (10) días; c) Exclusión de la actividad común hasta quince (15) días; d) Suspensión o restricción total o parcial de derechos reglamentarios de hasta quince (15) días de duración; e) Permanencia en su alojamiento individual o en celdas cuyas condiciones no agraven ilegítimamente la detención, hasta quince (15) días ininterrumpidos; f) Permanencia en su alojamiento individual o en celdas cuyas condiciones no agraven ilegítimamente la detención, hasta siete (7) fines de semana sucesivos o alternados. g) Traslado a otra sección del establecimiento de régimen más riguroso; h) Traslado a otro establecimiento. La ejecución de las sanciones no implicará la suspensión total del derecho a visita y correspondencia de un familiar directo o allegado del interno, en caso de no contar con aquél. Artículo 88. - El sancionado con la corrección de permanencia en su alojamiento habitual no será eximido de trabajar. Se le facilitará material de lectura. Será visitado diariamente por un miembro del personal superior del establecimiento, por el capellán o ministro de culto reconocido por el Estado nacional cuando lo solicite, por un educador y por el médico. Este último informará por escrito a la dirección, si la sanción debe suspenderse o atenuarse por razones de salud. Artículo 89. - El director del establecimiento, con los informes coincidentes del organismo técnico-criminológico y del consejo correccional del establecimiento, podrá retrotraer al período o fase inmediatamente anterior al interno sancionado por falta grave o reiterada. Artículo 90. - Cuando la falta disciplinaria dé motivos para sospechar la existencia de una perturbación mental en su autor, el director del establecimiento deberá solicitar asesoramiento médico, previo a la decisión del caso. Artículo 91. - El interno debe ser informado de la infracción que se le imputa, tener oportunidad de presentar sus descargos, ofrecer prueba y ser recibido en audiencia por el director del establecimiento antes de dictar resolución, la que en todos los casos deberá ser fundada. La resolución se pronunciará dentro del plazo que fije el reglamento. Artículo 92. - El interno no podrá ser sancionado dos veces por la misma infracción. Artículo 93. - En caso de duda se estará a lo que resulte más favorable al interno. Artículo 94. - En ningún caso se aplicarán sanciones colectivas. Artículo 95. - La notificación de la sanción impuesta debe estar a cargo de un miembro del personal directivo del establecimiento. El interno será informado de sus fundamentos y alcances y exhortado a reflexionar sobre su comportamiento. Artículo 96. - Las sanciones serán recurribles ante el juez de ejecución o juez competente dentro de los cinco días hábiles, derecho del que deberá ser informado el interno al notificársele la resolución. La interposición del recurso no tendrá efecto suspensivo, a menos que así lo disponga el magistrado interviniente. Si el juez de ejecución o juez competente no se expidiese dentro de los sesenta días, la sanción quedará firme. Artículo 97. - Las sanciones y los recursos que eventualmente interpongan los sancionados, deberán ser notificados al juez de ejecución o juez competente por la vía más rápida disponible dentro de las seis horas subsiguientes a su dictado o interposición. Artículo 98. - En el supuesto de primera infracción en el establecimiento, si el comportamiento anterior del interno lo justificare, el director, en la misma resolución que impone la sanción, podrá dejar en suspenso su ejecución. Si el interno cometiere otra falta dentro de plazo prudencial que en cada caso fije el director en la misma resolución, se deberá cumplir tanto la sanción cuya ejecución quedó suspendida, como la correspondiente a la nueva infracción. Artículo 99. - En cada establecimiento se llevará un "registro de sanciones", foliado, encuadernado y rubricado por el juez de ejecución o juez competente, en el que se anotarán, por orden cronológico, las sanciones impuestas, sus motivos, su ejecución o suspensión y el cumplimiento de lo dispuesto en el artículo 88, dejándose constancia de todo ello en el legajo personal. Capítulo V Conducta y concepto Artículo 100. - El interno será calificado de acuerdo a su conducta. Se entenderá por conducta la observancia de las normas reglamentarias que rigen el orden, la disciplina y la convivencia dentro del establecimiento. Artículo 101. - El interno será calificado, asimismo, de acuerdo al concepto que merezca. Se entenderá por concepto la ponderación de su evolución personal de la que sea deducible su mayor o menor posibilidad de adecuada reinserción social. Artículo 102. - La calificación de conducta y concepto será efectuada trimestralmente, notificada al interno en la forma en que reglamentariamente se disponga y formulada de conformidad con la siguiente escala: a) Ejemplar; b) Muy buena; c) Buena; d) Regular; e) Mala; f) Pésima. Artículo 103. - La calificación de conducta tendrá valor y efectos para determinar la frecuencia de las visitas, la participación en actividades recreativas y otras que los reglamentos establezcan. Artículo 104. - La calificación de concepto servirá de base para la aplicación de la progresividad del régimen, el otorgamiento de salidas transitorias, semilibertad, libertad condicional, libertad asistida, conmutación de pena e indulto. Capítulo VI Recompensas Artículo 105. - Los actos del interno que demuestren buena conducta, espíritu de trabajo, voluntad en el aprendizaje y sentido de responsabilidad en el comportamiento personal y en las actividades organizadas del establecimiento, serán estimulados mediante un sistema de recompensas reglamentariamente determinado. Capítulo VII Trabajo Artículo 106. - El trabajo constituye un derecho y un deber del interno. Es una de las bases del tratamiento y tiene positiva incidencia en su formación. Artículo 107. - El trabajo se regirá por los siguientes principios: a) No se impondrá como castigo; b) No será aflictivo, denigrante, infamante ni forzado; c) Propenderá a la formación y al mejoramiento de los hábitos laborales; d) Procurará la capacitación del interno para desempeñarse en la vida libre; e) Se programará teniendo en cuenta las aptitudes y condiciones psicofísicas de los internos, las tecnologías utilizadas en el medio libre y las demandas del mercado laboral; f) Deberá ser remunerado; g) Se respetará la legislación laboral y de seguridad social vigente. Artículo 108. - El trabajo de los internos no se organizará exclusivamente en función del rendimiento económico individual o del conjunto de la actividad, sino que tendrá como finalidad primordial la generación de hábitos laborales, la capacitación y la creatividad. Artículo 109. - El trabajo del interno estará condicionado a su aptitud física o mental. Artículo 110. - Sin perjuicio de su obligación a trabajar, no se coaccionará al interno a hacerlo. Su negativa injustificada será considerada falta media e incidirá desfavorablemente en el concepto. Artículo 111. - La ejecución del trabajo remunerado no exime a ningún interno de su prestación personal para labores generales del establecimiento o comisiones que se le encomienden de acuerdo con los reglamentos. Estas actividades no serán remuneradas, salvo que fueren su única ocupación. Artículo 112. - El trabajo del interno estará basado en criterios pedagógicos y psicotécnicos. Dentro de las posibilidades existentes el interno podrá manifestar su preferencia por el trabajo que desee realizar. Artículo 113. - En el caso de internos que ejerciten o perfeccionen actividades artísticas o intelectuales, éstas podrán ser su única actividad laboral si fuere productiva y compatible con su tratamiento y con el régimen del establecimiento. Artículo 114. - La capacitación laboral del interno, particularmente la de los jóvenes adultos, será objeto de especial cuidado. El régimen de aprendizaje de oficios a implementar, será concordante con las condiciones personales del interno y con sus posibles actividades futuras en el medio libre. Artículo 115. - Se promoverá la organización de sistemas y programas de formación y reconversión laboral, las que podrán realizarse con la participación concertada de las autoridades laborales, agrupaciones sindicales, empresarias y otras entidades sociales vinculadas al trabajo y a la producción. Artículo 116. - Los diplomas, certificados o constancias de capacitación laboral que se expidan, no deberán contener referencias de carácter penitenciario. Artículo 117. - La organización del trabajo penitenciario, sus métodos, modalidades, jornadas de labor, horarios, medidas preventivas de higiene y seguridad, atenderán a las exigencias técnicas y a las normas establecidas en la legislación inherente al trabajo libre. Artículo 118. - La administración velará para que las tareas laborales se coordinen con los horarios destinados a otros aspectos del tratamiento del interno. Artículo 119. - El trabajo y la producción podrán organizarse por administración, bajo las formas de ente descentralizado, empresa mixta o privada, por cuenta propia del interno o mediante sistema cooperativo. En cualquiera de esas modalidades la administración ejercerá la supervisión de la actividad del interno en lo concerniente al tratamiento. Un reglamento especial establecerá las normas regulatorias de los aspectos vinculados a la organización, funcionamiento, supervisión y evaluación de los entes oficiales, mixtos, privados o cooperativos. Las utilidades materiales percibidas por la administración penitenciaria se emplearán exclusivamente en obras y servicios relacionados con el tratamiento de los internos. Artículo 120. - El trabajo del interno será remunerado, salvo los casos previstos por el artículo 111. Si los bienes o servicios producidos se destinaren al Estado o a entidades de bien público, el salario del interno no será inferior a las tres cuartas partes del salario mínimo vital móvil. En los demás casos o cuando la organización del trabajo esté a cargo de una empresa mixta o privada la remuneración será igual al salario de la vida libre correspondiente a la categoría profesional de que se trate. Los salarios serán abonados en los términos establecidos en la legislación laboral vigente. Artículo 121. - La retribución del trabajo del interno, deducidos los aportes correspondientes a la seguridad social, se distribuirá simultáneamente en la forma siguiente: a) 10 % para indemnizar los daños y perjuicios causados por el delito, conforme lo disponga la sentencia; b) 35 % para la prestación de alimentos, según el Código Civil; c) 25 % para costear los gastos que causare en el establecimiento; d) 30 % para formar un fondo propio que se le entregará a su salida. Artículo 122. -. El salario correspondiente al interno durante la semilibertad, prisión discontinua o semidetención podrá ser percibido por la administración penitenciaria o por el propio interno. En todos los casos deberá ser aplicado al cumplimiento de lo dispuesto en los incisos 1, 2 y 4 del artículo 11 del Código Penal. Artículo 123. - Cuando no hubiere indemnización que satisfacer, la parte que correspondiere a la misma según el artículo anterior acrecerá el porcentaje destinado a la prestación de alimentos. Artículo 124. - Si el interno no tuviere indemnización que satisfacer, ni hubiere lugar a la prestación de alimentos, los porcentajes respectivos acrecerán al fondo propio. Artículo 125. - Si el interno tuviere que satisfacer indemnización, pero no prestación alimentaria, la parte que pudiere corresponder a ésta, acrecerá el fondo propio. Artículo 126. - En los casos previstos en el artículo 122, la parte destinada para costear los gastos que el interno causara al establecimiento, acrecerá su fondo propio. Artículo 127. - La administración penitenciaria podrá autorizar que se destine como fondo disponible hasta un máximo del 30 % del fondo propio mensual, siempre que el interno haya alcanzado como mínimo la calificación de conducta buena. El fondo disponible se depositará en el establecimiento a la orden del interno para adquisición de los artículos de uso y consumo personal que autoricen los reglamentos. Artículo 128. - El fondo propio, deducida en su caso la parte disponible que autoriza el artículo anterior, constituirá un fondo de reserva, que deberá ser depositado a interés en una institución bancaria oficial, en las mejores condiciones de plaza. Este fondo, que será entregado al interno a su egreso, por agotamiento de pena, libertad condicional o asistida, será incesible e inembargable, sin perjuicio de lo establecido en el artículo 129. Los reglamentos establecerán en casos debidamente justificados y con intervención judicial, la disposición anticipada del fondo de reserva. En el supuesto de fallecimiento del interno, el fondo de reserva será transmisible a sus herederos. Artículo 129. - De la remuneración del trabajo del interno, deducidos los aportes correspondientes a la seguridad social, podrá descontarse, en hasta un 20 % los cargos por concepto de reparación de daños intencionales o culposos causados en las cosas muebles o inmuebles del Estado o de terceros. Artículo 130. - La muerte o los accidentes sufridos por internos durante o con motivo de la ejecución del trabajo, así como las enfermedades profesionales contraídas por su causa, serán indemnizables conforme la legislación vigente. Artículo 131. - La indemnización, cualquiera fuere el monto de la efectiva remuneración percibida por el interno, se determinará sobre la base de los salarios fijados en los convenios o disposiciones vigentes, a la fecha del siniestro, para las mismas o similares actividades en el medio libre. Artículo 132. - Durante el tiempo que dure su incapacidad, el interno accidentado o enfermo percibirá la remuneración que tenía asignada. Artículo 133. - Desde su ingreso se asegurará al interno el ejercicio de su derecho de aprender, adoptándose las medidas necesarias para mantener, fomentar y mejorar su educación e instrucción. Capítulo VIII Educación Artículo 134. - La enseñanza será preponderantemente formativa, procurando que el interno comprenda sus deberes y las normas que regulan la convivencia en sociedad. Artículo 135. - Se impartirá enseñanza obligatoria a los internos analfabetos y a quienes no hubieren alcanzado el nivel mínimo fijado por la ley. El director del establecimiento podrá eximir de esta obligación a quienes carecieren de suficientes aptitudes intelectuales. En estos casos, los internos recibirán instrucción adecuada, utilizando métodos especiales de enseñanza. Artículo 136. - Los planes de enseñanza corresponderán al sistema de educación pública para que el interno pueda, a su egreso, tener la posibilidad de continuar sus estudios sin inconvenientes. Artículo 137. - La administración fomentará el interés del interno por el estudio, brindándole la posibilidad de acceder a servicios educativos en los distintos niveles del sistema. Cuando el interno no pueda seguir los cursos en el medio libre, se le darán las máximas facilidades a través de regímenes alternativos, particularmente los sistemas abiertos y a distancia. Artículo 138. - Las actividades educacionales podrán ser objeto de convenios con entidades públicas o privadas. Artículo 139. - Los certificados de estudios y diplomas extendidos por la autoridad educacional competente durante la permanencia del interno en un establecimiento penitenciario, no deberán contener ninguna indicación que permita advertir esa circunstancia. Artículo 140. - En todo establecimiento funcionará una biblioteca para los internos, adecuada a sus necesidades de instrucción, formación y recreación, debiendo estimularse su utilización. Artículo 141. - De acuerdo al tipo de establecimiento y a la categoría de los internos alojados, se organizarán actividades recreativas y culturales, utilizando todos los medios compatibles con su régimen. Artículo 142. - El tiempo libre deberá ser empleado para organizar programas de recreación con propósitos educativos, apropiados a las necesidades de los internos que aloje cada establecimiento. El programa recreativo comprenderá prácticas deportivas, preferentemente de equipo. Capítulo IX Asistencia médica Artículo 143. - El interno tiene derecho a la salud. Deberá brindársele oportuna asistencia médica integral, no pudiendo ser interferida su accesibilidad a la consulta y a los tratamientos prescriptos. Los estudios diagnósticos, tratamientos y medicamentos indicados, le serán suministrados sin cargo. Artículo 144. - Al ingreso o reingreso del interno a un establecimiento, deberá ser examinado por un profesional médico. Este dejará constancia en la historia clínica de su estado clínico, así como de las lesiones o signos de malos tratos y de los síndromes etílicos o de ingesta de drogas, estupefacientes o cualquier otra sustancia tóxica susceptible de producir dependencia física o psíquica, si los presentara. Detectadas las anomalías aludidas, el médico deberá comunicarlas inmediatamente al director del establecimiento. Artículo 145. - La historia clínica en la que quedará registrada toda prestación médica, se completará con la incorporación de los estudios psicológico y social realizados durante el período de observación, previsto en el artículo 13 inciso a), y la actualización a que aluden el artículo 13 inciso d) y el artículo 27. Copia de la historia clínica y de sus actuaciones integrará la historia criminológica. Artículo 146. - Cuando el interno ingrese o reingrese al establecimiento con medicamentos en su poder o los reciba del exterior, el director conforme dictamen médico decidirá el uso que deba hacerse de ellos. Artículo 147. - El interno podrá ser trasladado a un establecimiento penitenciario especializado de carácter asistencial médico o psiquiátrico o a un centro apropiado del medio libre, cuando la naturaleza del caso así lo aconseje. En el segundo de los supuestos se requerirá previa autorización del juez de ejecución o juez competente, salvo razones de urgencia. En todos los casos se comunicará la novedad de inmediato al magistrado interviniente. Artículo 148. - El interno podrá requerir, a su exclusivo cargo, la atención de profesionales privados. La autoridad penitenciaria dará curso al pedido, excepto que razones debidamente fundadas aconsejen limitar este derecho. Toda divergencia será resuelta por el juez de ejecución o juez competente. Artículo 149. - Si el tratamiento del interno prescribiere la realización de operaciones de cirugía mayor o cualquiera otra intervención quirúrgica o médica que implicaren grave riesgo para la vida o fueren susceptibles de disminuir permanentemente sus condiciones orgánicas o funcionales, deberá mediar su consentimiento o el de su representante legal y la autorización del juez de ejecución o juez competente, previo informe de peritos. En caso de extrema urgencia, bastará el informe médico, sin perjuicio de la inmediata comunicación al juez de ejecución o juez competente. Artículo 150. - Está expresamente prohibido someter a los internos a investigaciones o tratamientos médicos o científicos de carácter experimental. Sólo se permitirán mediando solicitud del interno, en enfermedades incurables y siempre que las investigaciones o tratamientos experimentales sean avalados por la autoridad sanitaria correspondiente y se orienten a lograr una mejora en su estado de salud. Artículo 151. - Si el interno se negare a ingerir alimentos, se intensificarán los cuidados y controles médicos. Se informará de inmediato al juez de ejecución o juez competente solicitando, en el mismo acto, su autorización para proceder a la alimentación forzada, cuando, a criterio médico, existiere grave riesgo para la salud del interno. Artículo 152. - Los tratamientos psiquiátricos que impliquen suspensión de la conciencia o pérdida de la autonomía psíquica, aunque fueran transitorias, sólo podrán ser realizados en establecimientos especializados. Capítulo X Asistencia espiritual Artículo 153. - El interno tiene derecho a que se respete y garantice su libertad de conciencia y de religión, se facilite la atención espiritual que requiera y el oportuno contacto personal y por otros medios autorizados con un representante del credo que profese, reconocido e inscrito en el Registro Nacional de Cultos. Ninguna sanción disciplinaria podrá suspender el ejercicio de este derecho. Artículo 154. - El interno será autorizado, en la medida de lo posible, a satisfacer las exigencias de su vida religiosa, participando de ceremonias litúrgicas y a tener consigo objetos, libros de piedad, de moral e instrucción de su credo, para su uso personal. Artículo 155. - En cada establecimiento se habilitará un local adecuado para celebraciones litúrgicas, reuniones y otros actos religiosos de los diversos cultos reconocidos. Artículo 156. - En todo establecimiento penitenciario se celebrará el culto católico, en forma adecuada a las posibilidades edilicias de que disponga. La concurrencia a estos actos será absolutamente voluntaria. Artículo 157. - Los capellanes de los establecimientos tendrán a su cargo la instrucción religiosa y moral y la orientación espiritual de los internos, incluso de los no católicos que la aceptaren. Capítulo XI Relaciones familiares y sociales Artículo 158. - El interno tiene derecho a comunicarse periódicamente, en forma oral o escrita, con su familia, amigos, allegados, curadores y abogados, así como con representantes de organismos oficiales e instituciones privadas con personería jurídica que se interesen por su reinserción social. En todos los casos se respetará la privacidad de esas comunicaciones, sin otras restricciones que las dispuestas por juez competente. Artículo 159. - Los internos de nacionalidad extranjera, gozarán de facilidades para comunicarse con sus representantes diplomáticos y consulares acreditados. Los internos nacionales de Estados sin representación diplomática o consular en el país, los refugiados y los apátridas, tendrán las mismas posibilidades para dirigirse al representante diplomático del Estado encargado de sus intereses en el país o a cualquier autoridad nacional o internacional que tenga la misión de protegerlos. Artículo 160. - Las visitas y la correspondencia que reciba o remita el interno y las comunicaciones telefónicas, se ajustarán a las condiciones, oportunidad y supervisión que determinen los reglamentos, los que no podrán desvirtuar lo establecido en los artículos 158 y 159. Artículo 161. - Las comunicaciones orales o escritas previstas en el artículo 160, sólo podrán ser suspendidas o restringidas transitoriamente, por resolución fundada del director del establecimiento, quien de inmediato, lo comunicará al juez de ejecución o juez competente. El interno será notificado de la suspensión o restricción transitoria de su derecho. Artículo 162. - El visitante deberá respetar las normas reglamentarias vigentes en la institución, las indicaciones del personal y abstenerse de introducir o intentar ingresar elemento alguno que no haya sido permitido y expresamente autorizado por el director. Si faltaren a esta prescripción o se comprobare connivencia culpable con el interno, o no guardare la debida compostura, su ingreso al establecimiento será suspendido, temporal o definitivamente, por resolución del director, la que podrá recurrirse ante el juez de ejecución o el juez competente. Artículo 163. - El visitante y sus pertenencias, por razones de seguridad, serán registrados. El registro, dentro del respeto a la dignidad de la persona humana, será realizado o dirigido, según el procedimiento previsto en los reglamentos por personal del mismo sexo del visitante. El registro manual, en la medida de lo posible, será sustituido por sensores no intensivos u otras técnicas no táctiles apropiadas y eficaces. Artículo 164. - El interno tiene el derecho a estar informado de los sucesos de la vida nacional e internacional, por los medios de comunicación social, publicaciones o emisiones especiales permitidas. Artículo 165. - La enfermedad o accidentes graves o el fallecimiento del interno, será comunicado inmediatamente a su familia, allegados o persona indicada previamente por aquél, al representante de su credo religioso y al juez de ejecución o juez competente. Artículo 166. - El interno será autorizado, en caso de enfermedad o accidente grave o fallecimiento de familiares o allegados con derecho a visita o correspondencia, para cumplir con sus deberes morales, excepto cuando se tuviesen serios y fundamentados motivos para resolver lo contrario. Artículo 167. - Los internos que no gocen de permiso de salida para afianzar y mejorar los lazos familiares podrán recibir la visita íntima de su cónyuge o, a falta de éste, de la persona con quien mantiene vida marital permanente, en la forma y modo que determinen los reglamentos. Capítulo XII Asistencia social Artículo 168. - Las relaciones del interno con su familia, en tanto fueren convenientes para ambos y compatibles con su tratamiento, deberán ser facilitadas y estimuladas. Asimismo se lo alentará para que continúe o establezca vínculos útiles con personas u organismos oficiales o privados con personería jurídica, que puedan favorecer sus posibilidades de reinserción social. Artículo 169. - Al interno se le prestará asistencia moral y material y, en la medida de lo posible, amparo a su familia. Esta asistencia estará a cargo de órganos o personal especializado, cuya actuación podrá ser concurrente con la que realicen otros organismos estatales y personas o entidades privadas con personería jurídica. Artículo 170. - En defecto de persona allegada al interno designada como curador o susceptible de serlo, se proveerá a su representación jurídica, en orden a la curatela prevista en el artículo 12 del Código Penal. Artículo 171. - En modo particular se velará por la regularización de los documentos personales del interno. A su ingreso se le requerirá información sobre los mismos. La documentación que traiga consigo, se le restituya o se le obtenga, se depositará en el establecimiento, para serle entregada bajo constancia, a su egreso. Capítulo XIII Asistencia postpenitenciaria Artículo 172. - Los egresados y liberados gozarán de protección y asistencia social, moral y material pospenitenciaria a cargo de un patronato de liberados o de una institución de asistencia pospenitenciaria con fines específicos y personería jurídica, procurando que no sufra menoscabo su dignidad, ni se ponga de manifiesto su condición. Se atenderá a su ubicación social y a su alojamiento, a la obtención de trabajo, a la provisión de vestimenta adecuada y de recursos suficientes, si no los tuviere, para solventar la crisis del egreso y de pasaje para trasladarse al lugar de la República donde fije su residencia. Artículo 173. - Las gestiones conducentes al cumplimiento de lo dispuesto en el artículo 172, se iniciarán con la debida antelación, para que en el momento de egresar, el interno encuentre facilitada la solución de los problemas que puedan ser causa de desorientación, desubicación o desamparo. A tales efectos se le conectará con el organismo encargado de su supervisión en el caso de libertad condicional o asistida y de prestarle asistencia y protección en todas las demás formas de egreso. Capítulo XIV Patronatos de liberados Artículo 174. - Los patronatos de liberados concurrirán a prestar la asistencia a que se refieren los artículos 168 a 170, la asistencia pospenitenciaria de los egresados, las acciones previstas en el artículo 184, la función que establecen los artículos 13 y 53 del Código Penal y las leyes 24316 y 24390. Artículo 175. - Los patronatos de liberados podrán ser organismos oficiales o asociaciones privadas con personería jurídica. Estas últimas recibirán un subsidio del Estado, cuya inversión será controlada por la autoridad competente. Capítulo XV Establecimientos de ejecución de la pena Artículo 176. - La aplicación de esta ley requiere que cada jurisdicción del país, en la medida necesaria y organizados separadamente para hombres y mujeres, posea los siguientes tipos de establecimientos: a) Cárceles o alcaldías para procesados; b) Centros de observación para el estudio criminológico del condenado y planificación de su tratamiento de acuerdo con lo previsto en el artículo 13; c) Instituciones diferenciadas por su régimen para la ejecución de la pena; d) Establecimientos especiales de carácter asistencial médico y psiquiátrico; e) Centros para la atención y supervisión de los condenados que se encuentren en tratamiento en el medio libre y otros afines. Artículo 177. - Cada establecimiento de ejecución tendrá su propio reglamento interno, basado en esta ley, en su destino específico y en las necesidades del tratamiento individualizado que deban recibir los alojados. Contemplará una racional distribución del tiempo diario que garantice la coordinación de los medios de tratamiento que en cada caso deban utilizarse, en particular la enseñanza en los niveles obligatorios, la atención de las necesidades físicas y espirituales y las actividades laborales, familiares, sociales, culturales y recreativas de los internos, asegurando ocho horas para el reposo nocturno y un día de descanso semanal. Artículo 178. - Las cárceles o alcaldías tienen por objeto retener y custodiar a las personas sometidas a proceso penal. Su régimen posibilitará que el interno pueda ejercer su derecho al trabajo y afrontar la responsabilidad de asistir a su grupo familiar dependiente e incluirá programas y actividades que permitan evitar o reducir, al mínimo posible, la desocialización que pueda generar la privación de libertad. Artículo 179. - Los establecimientos destinados a procesados no podrán alojar condenados. Artículo 180. - En las cárceles y establecimientos de ejecución de la pena no se podrá recibir, bajo ningún concepto, persona alguna, que no sea acompañada de una orden de detención expresa extendida por juez competente. Artículo 181. - Para la realización de las tareas técnico-criminológicas que dispone el artículo 13, según las circunstancias locales, se deberá disponer de: a) Una institución destinada a esa exclusiva finalidad; b) Una sección separada e independiente en la cárcel o alcaidía de procesados; c) Una sección apropiada e independiente en una institución de ejecución de la pena. Artículo 182. - Según lo requiera el volumen y la composición de la población penal y las necesidades del tratamiento individualizado de los internos, deberá contarse con instituciones abiertas, semiabiertas y cerradas. Artículo 183. - Los establecimientos de carácter asistencial especializados podrán ser: a) Centros hospitalarios diversificados cuando sea necesario y posible; b) Institutos psiquiátricos. La dirección de estos centros asistenciales sólo podrá ser ejercida por personal médico debidamente calificado y especializado. Artículo 184. - Los centros de reinserción social deben ser instituciones basadas en el principio de la autodisciplina destinados a la recepción de condenados que se encuentren en semilibertad, prisión discontinua y semi detención. Serán dirigidos por profesionales universitarios con versación criminológica y, cuando las circunstancias lo posibiliten, podrán estar a cargo de un patronato de liberados y, de no existir aquél, de un servicio social calificado. Artículo 185. - Los establecimientos destinados a la ejecución de las penas privativas de libertad, atendiendo a su destino específico, deberán contar, como mínimo, con los medios siguientes: a) Personal idóneo, en particular el que se encuentra en contacto cotidiano con los internos, que deberá ejercer una actividad predominantemente educativa; b) Un organismo técnico-criminológico del que forme parte un equipo multidisciplinario constituido por un psiquiatra, un psicólogo y un asistente social y en lo posible, entre otros, por un educador y un abogado, todos ellos con especialización en criminología y en disciplinas afines; c) Servicio médico y odontológico acorde con la ubicación, tipo del establecimiento y necesidades; d) Programas de trabajo que aseguren la plena ocupación de los internos aptos; e) Biblioteca y escuela a cargo de personal docente con título habilitante, con las secciones indispensables para la enseñanza de los internos que estén obligados a concurrir a ella; f) Capellán nombrado por el Estado o adscripto honorariamente al establecimiento; g) Consejo correccional, cuyos integrantes representen los aspectos esenciales del tratamiento; h) Instalaciones para programas recreativos y deportivos; i) Locales y medios adecuados para alojar a los internos que presenten episodios psiquiátricos agudos o cuadros psicopáticos con graves alteraciones de la conducta; j) Secciones separadas e independientes para el alojamiento y tratamiento de internos drogadependientes; k) Instalaciones apropiadas para las diversas clases de visitas autorizadas. Artículo 186. - En las instituciones de ejecución no se alojarán internos comprendidos en el artículo 25 del Código Penal mientras subsista el cuadro psiquiátrico y a quienes padezcan enfermedad mental crónica. Con intervención del juez de ejecución o juez competente, serán trasladados para su atención a servicios especiales de carácter psiquiátrico o servicios u hospitales psiquiátricos de la comunidad. Artículo 187. - Los internos que padezcan enfermedades infectocontagiosas u otras patologías similares, de tal gravedad que impidan su tratamiento en el establecimiento donde se encuentren, serán trasladados a servicios especializados de carácter médico asistencial o a servicios u hospitales de la comunidad. Artículo 188. - En los programas de tratamiento de todas las instituciones y con particular énfasis en las abiertas y semiabiertas, se deberá suscitar y utilizar en la mayor medida posible los recursos de la comunidad local, cuando resulten provechosos para el futuro de los internos y compatibles con el régimen de la pena. Artículo 189. - En los establecimientos de ejecución no podrán alojarse procesados, con excepción de aquellos recibidos en virtud de sentencia definitiva y que tengan otra causa pendiente o posterior a su ingreso. Artículo 190. - Las internas estarán a cargo exclusivamente de personal femenino. Sólo por excepción podrán desempeñarse varones en estos establecimientos en tareas específicas. La dirección siempre estará a cargo de personal femenino debidamente calificado. Artículo 191. - Ningún funcionario penitenciario del sexo masculino ingresará en dependencias de un establecimiento o sección para mujeres sin ser acompañado por un miembro del personal femenino. Artículo 192. - En los establecimientos para mujeres deben existir dependencias especiales para la atención de las internas embarazadas y de las que han dado a luz. Se adoptarán las medidas necesarias para que el parto se lleve a cabo en un servicio de maternidad. Artículo 193. - La interna embarazada quedará eximida de la obligación de trabajar y de toda otra modalidad de tratamiento incompatible con su estado, cuarenta y cinco días antes y después del parto. Con posterioridad a dicho período, su tratamiento no interferirá con el cuidado que deba dispensar a su hijo. Artículo 194. - No podrá ejecutarse ninguna corrección disciplinaria que, a juicio médico, pueda afectar al hijo en gestación o lactante. La corrección disciplinaria será formalmente aplicada por la directora y quedará sólo como antecedente del comportamiento de la interna. Artículo 195. - La interna podrá retener consigo a sus hijos menores de cuatro años. Cuando se encuentre justificado, se organizará un jardín maternal a cargo de personal calificado. Artículo 196. - Al cumplirse la edad fijada en el artículo anterior, si el progenitor no estuviere en condiciones de hacerse cargo del hijo, la administración penitenciaria dará intervención a la autoridad judicial o administrativa que corresponda. Artículo 197. - Los jóvenes adultos de dieciocho a veintiún años deberán ser alojados en instituciones especiales o en secciones separadas o independientes de los establecimientos para adultos. En su tratamiento se pondrá particular empeño en la enseñanza obligatoria, en la capacitación profesional y en el mantenimiento de los vínculos familiares. Artículo 198. - Excepcionalmente y mediando los informes favorables del organismo técnico-criminológico y del consejo correccional del establecimiento, quienes hayan cumplido veintiún años podrán permanecer en instituciones o secciones especiales para jóvenes adultos hasta cumplir veinticinco años. Luego serán trasladados a un establecimiento para adultos. Artículo 199. - Cuando medien fundadas razones que justifiquen la medida, el Estado podrá disponer la privatización de servicios de los establecimientos carcelarios y de ejecución de la pena, con excepción de las funciones directivas, el registro y documentación judicial del interno, el tratamiento y lo directamente referido a la custodia y la seguridad de procesados o condenados. Capítulo XVI Personal Artículo 200. - El personal de las cárceles y establecimientos de ejecución debe ser cuidadosamente seleccionado, capacitado y especializado, teniendo en cuenta la importancia de la misión social que debe cumplir. Artículo 201. - La ley y los reglamentos determinarán un adecuado régimen de selección, incorporación, retribuciones, estabilidad, asignación de funciones, ascensos, retiros y pensiones, teniendo en cuenta el riesgo, las exigencias éticas, intelectuales y físicas y la dedicación que su misión social requiere. El contenido de esas normas legales y reglamentarias deberá considerar las Reglas Mínimas de las Naciones Unidas sobre Tratamiento de los Reclusos, las Recomendaciones de las Naciones Unidas sobre la Selección y Formación del Personal Penitenciario adoptadas en Ginebra, 1955 y la Resolución 21 A del Octavo Congreso de las Naciones Unidas, celebrado en La Habana en 1990. Artículo 202. - La conducción de los servicios penitenciarios o correccionales y la jefatura de sus principales áreas así como la dirección de los establecimientos deberán estar a cargo de personal penitenciario con título universitario de carrera afín a la función. Artículo 203. - Las funciones comprendidas en el artículo anterior se cubrirán por concurso interno. Entre los requisitos se exigirá, además, experiencia y capacitación administrativa, un adecuado perfil para el cargo y otras condiciones que fijen los reglamentos. Cuando por dos veces consecutivas un concurso interno se declarase desierto, se llamará a concurso abierto de antecedentes y oposición. Artículo 204. - En cada jurisdicción del país se organizará o facilitará la formación del personal, según los diversos roles que deba cumplir, así como su permanente actualización y perfeccionamiento profesional. Artículo 205. - Los planes y programas de enseñanza en los cursos de formación, actualización y perfeccionamiento, con contenido predominantemente criminológico, deberán incluir el estudio de las Reglas Mínimas de las Naciones Unidas para el Tratamiento de los Reclusos y el Código de Conducta para los Funcionarios Encargados de Hacer Cumplir la Ley, aprobado por Resolución 34/169 de la Asamblea General de las Naciones Unidas, del 17 de diciembre de 1979. Artículo 206. - El personal de organismos oficiales y de instituciones privadas con personería jurídica, encargado de la aplicación de las diversas modalidades de ejecución de la pena privativa de la libertad y de las no institucionales, será seleccionado y capacitado teniendo en consideración las Reglas Mínimas de las Naciones Unidas sobre Medidas no Privativas de Libertad, Reglas de Tokio 15-19. Artículo 207. - Para cumplir tareas en las cárceles o establecimientos de ejecución, las personas presentadas por el contratista de servicios privatizados deberán contar con una habilitación individual previa. Esta será concedida luego de un examen médico, psicológico y social que demuestre su aptitud para desempeñarse en ese medio. Capítulo XVII Contralor judicial y administrativo de la ejecución Artículo 208. - El juez de ejecución o juez competente verificará, por lo menos semestralmente, si el tratamiento de los condenados y la organización de los establecimientos de ejecución se ajusta a las prescripciones de esta ley y de los reglamentos que en su consecuencia dicte el Poder Ejecutivo. Las observaciones y recomendaciones que resulten de esas inspecciones serán comunicadas al ministerio competente. Artículo 209. - El Poder Ejecutivo dispondrá que inspectores calificados por su formación y experiencia, designados por una autoridad superior a la administración penitenciaria efectúen verificaciones, por lo menos, semestrales con los mismos propósitos que los establecidos en el artículo 208. Capítulo XVIII Integración del sistema penitenciario nacional Artículo 210. - A los efectos del artículo 18 del Código Penal, se considerará que las provincias no disponen de establecimientos adecuados cuando los que tuvieren no se encontraren en las condiciones requeridas para hacer efectivas las normas contenidas en esta ley. Artículo 211. - El Poder Ejecutivo nacional queda autorizado a convenir con las provincias la creación de los establecimientos penitenciarios regionales que sean necesarios para dar unidad al régimen de ejecución penal que dispone esta ley. Artículo 212. - La Nación y las provincias y éstas entre sí, podrán concertar acuerdos destinados a recibir o transferir condenados de sus respectivas jurisdicciones, a penas superiores o menores de cinco años, cuando resultare conveniente para asegurar una mejor individualización de la pena y una efectiva integración del sistema penitenciario de la República. Artículo 213. - La transferencia de internos a que se refiere el artículo 212 será a título oneroso a cargo del Estado peticionante. Artículo 214. - El gobierno nacional cuando no disponga de servicios propios, convendrá con los gobiernos provinciales, por intermedio del Ministerio de Justicia, el alojamiento de los procesados a disposición de los juzgados federales en cárceles provinciales. Dictada sentencia definitiva y notificada, el tribunal federal, dentro de los ocho días hábiles, la comunicará al Ministerio de Justicia con remisión del testimonio de sentencia en todas sus instancias, cómputo de la pena y fecha en que el condenado podrá solicitar su libertad condicional o libertad asistida a fin de que adopte las medidas necesarias para el cumplimiento de la pena en una institución federal. Artículo 215. - El condenado con sentencia firme trasladado a otra jurisdicción por tener causa pendiente será sometido al régimen de penados. En este caso las direcciones de los establecimientos intercambiarán documentación legal, criminológica y penitenciaria. Artículo 216. - El Ministerio de Justicia, por intermedio de la Secretaría de Política Penitenciaria y de Readaptación Social, organizará anualmente una reunión de los ministros de todo el país con competencia en la problemática carcelaria y penitenciaria. Estas reuniones tendrán por objeto evaluar todos los aspectos vinculados a la aplicación de esta ley. Podrán ser invitados representantes de instituciones oficiales y privadas que participen en la ejecución de la condenación condicional, libertad condicional, libertad asistida, semilibertad, prisión discontinua, semidetención y trabajo para la comunidad o brinden asistencia pospenitenciaria. Artículo 217. - El Ministerio de Justicia, por intermedio de la Secretaría de Política Penitenciaria y de Readaptación Social, organizará y dirigirá la compilación de la estadística nacional relativa a la aplicación de todas las sanciones previstas en el Código Penal. A tal fin convendrá con los gobiernos provinciales el envío regular de la información. Artículo 218. - El Ministerio de Justicia, por intermedio de la Secretaría de Política Penitenciaria y de Readaptación Social, organizará un centro de información sobre los organismos estatales o instituciones privadas de todo el país vinculados a la reinserción social de los internos o al tratamiento en el medio libre. Los patronatos de liberados y los institutos oficiales y privados deberán suministrar la información que a tales efectos se les requiera. Artículo 219. - Las provincias podrán enviar a su personal para que participe en los cursos de formación, actualización y perfeccionamiento que se realicen en el orden nacional. Capítulo XIX Disposiciones complementarias Artículo 220. - Las inhabilitaciones del artículo 12 del Código Penal quedarán suspendidas cuando el condenado se reintegrare a la vida libre mediante la libertad condicional o la libertad asistida. Artículo 221. - De acuerdo a lo previsto en los convenios y tratados internacionales: a) Los extranjeros condenados por los tribunales de la República podrán cumplir la pena impuesta en su país de origen; b) Los argentinos condenados en el extranjero podrán cumplir su pena en nuestro país. Artículo 222. - En las actas de nacimiento, matrimonio y defunción ocurridos en un establecimiento de los previstos en esta ley no se dejará constancia alguna que permita individualizar tal circunstancia. Artículo 223. - En supuestos de graves alteraciones del orden en un establecimiento carcelario o de ejecución de la pena, el ministro con competencia en materia penitenciaria podrá disponer, por resolución fundada, la suspensión temporal y parcial de los derechos reconocidos a los internos en esta ley y en los reglamentos dictados en su consecuencia. Esta suspensión no podrá extenderse más allá del tiempo imprescindible para restablecer el orden alterado. La resolución deberá ser comunicada, inmediata y fehacientemente al juez de ejecución o juez competente. Artículo 224. - Hasta tanto no se cuente con los centros de reinserción social a que se refiere el artículo 184, el condenado podrá permanecer en un sector separado e independiente de un establecimiento penitenciario, sin contacto alguno con otros alojados que no se encuentren incorporados a semilibertad, prisión discontinua o semidetención. Capítulo XX Disposiciones transitorias Artículo 225. - Las disposiciones de los artículos 202 y 203 comenzará a regir a partir de los diez años de la entrada en vigencia de esta ley. La administración penitenciaria brindará el apoyo necesario para que el personal actualmente en servicio pueda reunir el requisito del título universitario en el plazo previsto en el apartado anterior, a cuyo efecto podrá celebrar convenios con universidades oficiales o privadas. Artículo 226. - Dentro de los ciento ochenta días de la vigencia de esta ley el Poder Ejecutivo nacional, por intermedio del Ministerio de Justicia, procederá a revisar los convenios existentes con las provincias a fin de que puedan asumir las funciones que constitucionalmente le pertenecen respecto a los procesados y condenados por sus tribunales. Artículo 227. - El Ministerio de Justicia convocará dentro de los noventa días de la vigencia de esta ley a la Primera Reunión de Ministros a que se refiere el artículo 216 con la finalidad de examinar los problemas que pueda suscitar su cumplimiento. Capítulo XXI Disposiciones finales Artículo 228. - La Nación y las provincias procederán, dentro del plazo de un año a partir de la vigencia de esta ley, a revisar la legislación y las reglamentaciones penitenciarias existentes, a efectos de concordarlas con las disposiciones contenidas en la presente. Artículo 229. - Esta ley es complementaria del Código Penal. Artículo 230. - Derógase el decreto ley 412/58 ratificado por ley 14467. Artículo 231. - Comuníquese al Poder Ejecutivo. REGLAMENTO GENERAL DE PROCESADOS DECRETO 303/96 Publicación B.O.: 1//IV/1996 Artículo 1.- Apruébase el Reglamento General de Procesados que como Anexo I, se incorpora al presente, el que será aplicable a los procesados alojados en unidades carcelarias dependientes de la Dirección Nacional del Servicio Penitenciario Federal. Artículo 2.- Derogase el Decreto N° 1.787 del 18 de julio de 1983. Artículo 3.- Comuníquese, publíquese, dése a la Dirección Nacional del Registro Oficial y archívese. Carlos S. Menem - Eduardo Bauzá - Rodolfo C. Barra ANEXO 1 REGLAMENTO GENERAL DE PROCESADOS Texto ordenado por la resolución 13/97 de la Secretaría de Política Penitenciaria y de Readaptación Social (Publicación B.O.: 20 - 1 - 1997). TITULO I Principios Generales Artículo 1.- Este reglamento es aplicable a toda persona mayor de Dieciocho (18) años de edad sometida a proceso penal por la Justicia Nacional o Federal, que se encuentre detenida en cárceles o alcaidías dependientes de la Dirección Nacional del Servicio Penitenciario Federal. Artículo 2.- En las cárceles o alcaidías dependientes de la Dirección Nacional del Servicio Penitenciario Federal no se alojará bajo ningún concepto persona alguna sin orden de detención extendida por el Juez competente, ni menores de Dieciocho (18) años de edad. Artículo 3.- Los detenidos sometidos a proceso penal serán alojados en establecimientos distintos a los de condenados. Excepcionalmente, cuando las condiciones existentes no lo permitan, ocuparán secciones separadas e independientes de establecimientos de condenados. Artículo 4.- Toda persona detenida se denominará interno, a quien se citará únicamente por su nombre y apellido. Artículo 5.- El régimen carcelario aplicable durante la detención tendrá por objeto, además de retener y custodiar a las personas comprendidas en el artículo 12, procurar que éstas mantengan o adquieran pautas de comportamiento y de convivencia aceptadas por la sociedad. Artículo 6.- Mediando conformidad del procesado, sin afectar el principio de inocencia ni la defensa en juicio, podrá ser incorporado a las normas vigentes para condenados. Artículo 7.- A los efectos del artículo anterior se desarrollarán programas que brinden a los internos oportunidades de ejercer sus derechos a la salud, a la educación y al trabajo. Deberán respetarse sus derechos al afianzamiento de sus lazos familiares y sociales, a la libertad de pensamiento y a la información. Artículo 8.- El interno está obligado a acatar en su integridad las disposiciones de este reglamento y las normas que se dicten en su consecuencia, que en todo caso deberán respetar el principio de inocencia y el derecho a defensa. Artículo 9.- El régimen carcelario aplicable a los detenidas estará exento de tratos crueles, inhumanos o degradantes. Quien realice o tolere tales excesos, se hará pasible de las sanciones previstas en el Código Penal, sin perjuicio de otras que le pudieren corresponder. Artículo 10.- Las disposiciones de este reglamento serán aplicadas sin hacer entre los internos otras discriminaciones o diferencias que las que resulten del trato individualizado aplicable. Artículo 11.- Las actividades que conforman el régimen carcelario serán de competencia y responsabilidad administrativa, en tanto no estén específicamente asignadas a la autoridad judicial competente. Artículo 12.- En las cárceles o alcaidías funcionará un Centro de Evaluación presidido por el Subdirector e integrado por el Jefe de cada una de las áreas relativas a la aplicación del régimen carcelario. Son funciones de este Centro: a) Emitir dentro del plazo improrrogable de Quince (15) días hábiles desde el ingreso del interno, un dictamen único e integral, asesorando a la Dirección sobre el lugar de alojamiento y las pautas del régimen aplicable al caso, b) Calificar el comportamiento del interno. c) Producir los informes solicitados por la autoridad judicial o penitenciaria. d) Informar sobre la conveniencia de que permanezcan en los lugares de alojamiento los jóvenes adultos que hayan cumplido la mayoría de edad y hasta los Veinticinco (25) años y en el supuesto del artículo 141. e) Informar en los pedidos de los procesados para su incorporación anticipada al régimen de ejecución de la pena. TITULO II Ingreso Artículo 13.- El ingreso del detenido sometido a proceso penal se efectuará en el Centro de Recepción de Procesados, donde se procederá a verificar la orden judicial de detención, la nota o formulario de remisión de la autoridad competente con los datos filiatorios y las fichas dactiloscópicas, a efectos de su identificación, dejándose constancia del día y la hora en que se realiza. Cuando fuera posible se acompañará una fotografía de frente, cuerpo entero. La orden judicial consignará el número de causa y el delito imputado. Artículo 14.- Con los elementos señalados en el artículo anterior se iniciará o actualizará la confección del legajo personal del interno, cuyo modelo, confidencialidad y uso, reglamentará la autoridad penitenciaria superior. El legajo personal de cada interno deberá consignar filiación, situación legal, datos de salud, familiares, educativos, laborales, nómina de las personas cuya visita desee recibir y los antecedentes judiciales y criminológicos. Al mismo se agregará o se dejará constancia de toda documentación o dato posterior de interés para el caso. Artículo 15.- Se recibirán los documentos de identidad personales del interno, los que quedarán en depósito en el establecimiento para serle reintegrados, bajo constancia, a su egreso, Si manifestare que se encuentran retenidos por la autoridad judicial o policial, se dejará constancia en acta y se procederá a su requerimiento. Cuando se comprobare que el interno carece de ellos, se procederá a su tramitación. Artículo 16.- A su ingreso o reingreso, el interno deberá ser examinado por un médico del establecimiento, para certificar su estado general y para dispensarle, si correspondiere, el tratamiento necesario. El facultativo dejará constancia en una historia clínica individual, cuyo modelo dispondrá la autoridad penitenciaria superior, del estado clínico del interno así como de las lesiones o signos de deterioro físico o psíquico y de los síndromes etílicos o de ingesta de drogas, estupefacientes o cualquier otra sustancia tóxica susceptible de producir dependencia física o psíquica, si los presentare. Detectada alguna de las anomalías aludidas u otras que considere de importancia, el médico deberá informarlas inmediatamente al Director del establecimiento, quien lo comunicará al Juez de la causa. Artículo 17.- El interno y sus pertenencias serán sometidos a requisa, para evitar el ingreso de objetos o sustancias no autorizados por razones de seguridad y de orden en el establecimiento. Artículo 18.- Conforme lo establezcan las disposiciones emanadas de la autoridad penitenciaria superior, la Dirección del establecimiento autorizará los elementos personales que podrá ingresar o retener el interno. El dinero y otras pertenencias no dispuestos por el interno y que no hubiesen sido decomisados o destruidos por razones de higiene, le serán devueltos a su egreso. De todo depósito, disposición o devolución se extenderán las correspondientes constancias o recibos. Artículo 19.- Cuando el interno ingrese o reingrese a la cárcel o alcaidía con medicamentos en su poder o los reciba del exterior, el Director, conforme dictamen médico, decidirá el destino que se les dará. Artículo 20.- Se requerirá al interno el nombre, apellido y domicilio de sus familiares y de sus allegados, con quienes desee mantener comunicación. Se le permitirá comunicarse en forma inmediata con un familiar o allegado. Artículo 21.- A su ingreso y bajo constancia el interno recibirá explicación oral e información escrita acerca del régimen a que se encontrará sometido, las normas de conducta que deberá observar, el sistema disciplinario vigente, los medios autorizados para formular pedidos o presentar quejas, la posibilidad de solicitar su incorporación anticipada al régimen de ejecución de la pena y de todo aquello que sea útil para conocer sus derechos y obligaciones. Si el interno fuere analfabeto, presentare discapacidad física o psíquica o no comprendiese el idioma castellano, esa información se le deberá suministrar por persona y medio idóneos. Artículo 22.- El interno podrá presentar peticiones y quejas al Director del establecimiento y dirigirse sin censura a otra autoridad administrativa superior o al Juez de la causa. La resolución que adopte el Director, deberá ser remitida, conforme la urgencia del caso en un lapso no mayor de Cinco (5) días hábiles, y notificada al interno. Artículo 23.- Finalizado el procedimiento del ingreso, para conformar grupos homogéneos y a fin de impedir la posible influencia negativa de unos internos sobre otros, se dispondrá su alojamiento teniendo en consideración sexo, edad, estado físico y mental, educación, antecedentes y naturaleza del delito que se le atribuye. En consecuencia, se alojarán separadamente: a) Los hombres de las mujeres, debiendo éstas ocupar establecimientos o secciones independientes con organización y régimen propios. b) Los jóvenes adultos de los adultos. c) Quienes presenten enfermedad o deficiencia física o mental u otros factores personales que no les permitan adaptarse al régimen normal del establecimiento. d) Los drogadependientes que deban seguir un tratamiento asistencial específico. TITULO III Cuestiones Procesales Comunicación del Ingreso Artículo 24.- El ingreso del detenido a la cárcel o alcaidía, se comunicará inmediatamente al Juez de la causa y a la Dirección General de Régimen Correccional, con indicación del número de legajo personal asignado. En su caso, se incorporará la información a que se refiere el artículo 16. Incomunicación Artículo 25.- Cuando el Juez hubiere dispuesto la incomunicación del interno, el funcionario que recibiere la orden la pondrá de inmediato en conocimiento del Director del establecimiento, quien será responsable de su estricto cumplimiento. Sin que se quebrante la incomunicación, cuando sea posible, se le permitirá al interno un recreo al aire libre de, por lo menos, una hora diaria. Artículo 26.- Se permitirá al incomunicado el uso de libros u otros objetos que solicite siempre que no puedan servir para eludir la incomunicación, atentar contra su vida o la ajena, facilitar una evasión o generar un peligro común. Previa autorización del Juez de la causa podrá realizar actos civiles impostergables, que no disminuyan su solvencia ni perjudiquen los fines de la instrucción. Artículo 27.- La incomunicación de la interna no le impedirá el contacto con el hijo que retenga consigo por lo dispuesto en el artículo 119. Defensa Artículo 28.- El interno deberá indicar nombre, apellido, domicilio y teléfono de su o sus abogados, como asimismo todo cambio posterior de defensor. Artículo 29.- Los abogados defensores y otros profesionales vinculados con el proceso, deberán acreditar su identidad y su condición de tales con la certificación extendida por el juzgado correspondiente. Cuando el interno no hubiere aún designado defensor, se le autorizarán hasta dos entrevistas previas con el o los abogados que indicare. Artículo 30.- En todos los casos, el personal penitenciario dispensará al abogado en el ejercicio de su profesión, la consideración y respeto debidos a los magistrados, según lo dispone la Ley N° 23.187, artículo 5°. Artículo 31.- En ejercicio de su derecho de defensa, el interno deberá comunicarse libre y privadamente con su o sus defensores, ya sea mediante entrevistas personales o comunicaciones escritas u orales, confidenciales. Durante las entrevistas con su abogado, el interno podrá ser controlado visualmente, sin que la conversación pueda ser escuchada o captada. Artículo 32.- Las entrevistas con los abogados y otros profesionales vinculados al proceso, podrán mantenerse durante todos los días de la semana, entre las Ocho (8) horas y las Veinte (20) horas. Ello no obstará a que en caso de excepción se pueda autorizar la visita fuera del horario establecido. Salidas y Egreso Artículo 33.- Toda salida o egreso definitivo del interno deberá ser dispuesto por el Juez de la causa, excepto en el caso previsto en el artículo 64. Artículo 34.- Cuando el Juez de la causa ordenare la comparecencia del interno y éste se negare a su cumplimiento, el Director del establecimiento lo informará de inmediato al magistrado requirente. Sólo se empleará la fuerza pública para hacer efectiva la comparecencia, cuando así lo ordenare el Juez mediante oficio. TITULO IV Ejecución Anticipada Voluntaria Artículo 35.- El procesado que en el último trimestre calificado haya merecido comportamiento Muy Bueno, trabaje con regularidad, si hubiere ocasión, y asista a los cursos que tenga pendientes para cumplir con la educación legalmente obligatoria podrá solicitar, por única vez, su incorporación anticipada al régimen de ejecución de la pena. Artículo 36.- El pedido del interno será considerado e informado por el Centro de Evaluación de la cárcel o alcaidía dentro del término de Quince (15) días y será resuelto por el Director en igual lapso. Si la decisión fuere favorable será incorporado al régimen de ejecución de la pena, dando cuenta al Juez de la causa. Artículo 37.- Mientras no recaiga sentencia condenatoria firme, el procesado podrá ser promovido sólo hasta la última fase del período de tratamiento de la progresividad del régimen de ejecución de la pena. Artículo 38.- El interno podrá renunciar en cualquier momento a su incorporación anticipada al régimen de ejecución de la pena. Artículo 39.- Si el procesado se amparase en su incorporación al régimen de ejecución anticipada de la pena para impedir o perturbar la realización de actos procesales de su causa, el Juez de la causa podrá disponer la suspensión temporal o definitiva de dicho régimen comunicándolo al Director de la cárcel o alcaidía. Artículo 40.- La Dirección Nacional del Servicio Penitenciario Federal, con aprobación del Ministerio de Justicia - Secretaría de Política Penitenciaria y de Readaptación Social, dictará las normas complementarias para la aplicación de este régimen. TITULO V Régimen Carcelario Organización Artículo 41.- El régimen carcelario se organizará sobre la base del equilibrio entre los derechos y los deberes individuales de cada interno y los del conjunto de los alojados promoviendo, al mismo tiempo, el orden, la seguridad y la posibilidad de acceder, por lo menos, a la enseñanza y al aprendizaje en los niveles obligatorios, la adecuada y oportuna atención de las necesidades psicofísicas y espirituales, el mantenimiento de los vínculos familiares y el desarrollo de las actividades laborales, sociales, culturales y recreativas. Para ello, el reglamento interno de cada cárcel o alcaidía, aprobado por el Ministerio de Justicia - Secretaría de Política Penitenciaria y de Readaptación Social, a propuesta de la autoridad penitenciaria superior, contemplará la racional distribución del tiempo diario, que asegure Ocho (8) horas de reposo nocturno y Un (1) día semanal de descanso. CAPITULO I Condiciones de Vida Alojamiento Artículo 42.- El alojamiento del interno, en lo posible, será individual. No obstante, se podrán utilizar dormitorios compartidos para internos cuidadosamente seleccionados. Higiene Artículo 43.- El régimen carcelario deberá asegurar y promover el bienestar psicofísico de los internos. Para ello se implementarán actividades de prevención, recuperación y rehabilitación de la salud y se atenderán especialmente las condiciones ambientales e higiénicas del establecimiento. Artículo 44.- El número de internos de cada sección del establecimiento deberá estar preestablecido y no se lo excederá a fin de asegurar un adecuado alojamiento. Todos los locales estarán siempre en buen estado de conservación. Su ventilación, iluminación, temperatura y dimensiones guardarán relación con su destino y los factores climáticos. Artículo 45.- El aseo personal del interno será obligatorio. El establecimiento deberá disponer de suficientes y adecuadas instalaciones sanitarias y le proveerá de los elementos indispensables para su higiene. Artículo 46.- El interno deberá cuidar el aseo de su alojamiento y contribuir a la higiene y conservación de todas las instalaciones del establecimiento. Alimentación Artículo 47.- La alimentación del interno estará a cargo de la administración, será adecuada a sus necesidades y sustentada en criterios higiénico-dietéticos. Sin perjuicio de ello y conforme a las disposiciones que dicte la autoridad penitenciaria superior el interno podrá adquirir ciertos alimentos o recibirlos de familiares o visitantes, no estando permitida su cocción en los lugares de alojamiento. La prohibición de bebidas alcohólicas será absoluta. Vestimenta y Ropa Artículo 48.- La administración proveerá al interno de vestimenta acorde al clima y a la estación, para usarla en el interior del establecimiento. En manera alguna, esas prendas, por sus características, podrán resultar humillantes. Deberá cuidarse su mantenimiento en buen estado de conservación e higiene. Cuando el interno saliere del establecimiento, en los casos autorizados, deberá utilizar sus ropas personales. Si no dispusiere de ellas, se procurará facilitarle vestimenta adecuada. Artículo 49.- Al interno se le proveerá de ropa suficiente para su cama individual, la que será mudada con regularidad. Cuidado de Bienes Artículo 50.- El interno deberá cuidar las instalaciones, el mobiliario, los objetos y elementos que la administración destina al uso individual o común y abstenerse de producir daño en los pertenecientes a otros alojados. Caso contrario se dispondrán las actuaciones administrativas ido judiciales que correspondieren. CAPITULO II Procedimientos de Seguridad Registro de Internos y de Instalaciones Artículo 51.- Para preservar la seguridad general, los registros en las personas de los internos, sus pertenencias y locales que ocupan, los recuentos y las requisas de las instalaciones del establecimiento, se efectuarán con las garantías que determine la autoridad penitenciaria superior y dentro del respeto a la dignidad humana. Traslado de Internos Artículo 52.- El traslado individual o colectivo de internos se sustraerá a la curiosidad pública y estará exento de publicidad. Deberá efectuarse en medios de transporte seguros, higiénicos y adecuados. Las medidas de precaución que se utilizarán para evitar posibles evasiones, en ninguna circunstancia causarán padecimientos innecesarios al interno, Al efectuar el traslado se cumplirán las disposiciones judiciales o indicaciones de carácter médico dictadas al efecto. Artículo 53.- Todo traslado de internos a otro establecimiento será informado de inmediato a las autoridades judiciales y administrativas competentes y al familiar o allegado con los que mantuvieren visita o correspondencia o a quienes hubieren sido designados al efecto. Medidas de sujeción Artículo 54.- Queda prohibido el empleo de esposas o de cualquier otro medio de sujeción como castigo. Artículo 55.- Sólo podrán adoptarse medidas de sujeción en los siguientes casos: a) Como precaución contra una posible evasión durante el traslado de¡ interno. b) Por razones médicas, a indicación del facultativo, formuladas por escrito. c) Por orden expresa del Director o del funcionario que jerárquicamente lo reemplace en caso de no encontrarse éste en servicio, si otros métodos hubieran fracasado y con el único propósito de que el interno no se cause daño a sí mismo, a un tercero o al establecimiento. En este caso el Director o quien lo reemplace, dará de inmediato intervención al servicio médico y remitirá un informe detallado al Juez de la causa y a la autoridad penitenciaria superior. Artículo 56.- La determinación de los medios de sujeción y su modo de empleo serán los que establezca el Ministerio de Justicia Secretaría de Política Penitenciaria y de Readaptación Social, a propuesta de la autoridad penitenciaria superior. Su aplicación no podrá prolongarse más allá del tiempo necesario bajo apercibimiento de las correcciones administrativas y penales que correspondan para el funcionario responsable. Resistencia a la Autoridad Penitenciaria Artículo 57.- Al personal penitenciario le está absolutamente prohibido emplearla fuerza en el trato con los internos, excepto en los casos de fuga, evasión o de sus tentativas o de resistencia por la fuerza activa o pasiva a una orden basa da en norma legal o reglamentaria. Aún en estos casos, todo exceso hará pasible al responsable de las sanciones administrativas y penales que correspondan. Artículo 58.- El personal que habitualmente preste servicios en contacto directo con los internos no estará armado. Deberá recibir un entrenamiento físico adecuado y una capacitación específica en técnicas de persuasión para intervenir en situaciones que así lo requieran. CAPITULO III Disciplina Objeto Artículo 59.- El orden. la disciplina y las pautas de convivencia se mantendrán con decisión y firmeza. La disciplina no impondrá más restricciones que las que requieran la seguridad y la correcta organización de la vida de los alojados. Infracciones y Sanciones Artículo 60.- La infracción a las normas de conducta a que se refiere el artículo 8° serán investigadas, encuadradas y sancionadas de conformidad con lo dispuesto en el Reglamento de Disciplina para los Internos, aprobado en el artículo 1° del Decreto N° 18 del 9 de enero de 1997. Calificación del Comportamiento Artículo 61.- El Centro de Evaluación calificará el comportamiento del interno trimestralmente en la siguiente forma: a) Ejemplar: cuando el interno no registre correcciones disciplinarias durante Dos (2) trimestres consecutivos. b) Muy Bueno: cuando el interno no registre correcciones disciplinarias durante el trimestre. c) Bueno: cuando el interno registre hasta Dos (2) correcciones por infracción leve durante el trimestre. d) Regular: cuando el interno registre hasta Dos (2) correcciones por infracción media o hasta Cinco (5) correcciones por infracción leve durante el trimestre. e) Malo: cuando el interno registre Una (1) corrección por infracción grave o hasta Tres (3) correcciones por infracción media o hasta Seis (6) correcciones por infracción leve durante el trimestre. f) Pésimo: cuando el interno registre Dos (2) o más correcciones por infracción grave o más de Tres (3) correcciones por infracción media o más de Seis (6) correcciones por infracción leve durante Dos (2) trimestres consecutivos. Artículo 62.- Los elementos de juicio relativos a la valoración subjetiva del comportamiento del procesado, serán consignados en el Libro de Actas del Centro de Evaluación y en su legajo personal, a los efectos de ser utilizados, si resultare condenado en definitiva, por el organismo técnico-criminológico para la individualización de su tratamiento. TITULO VI Asistencia Médica Artículo 63.- El interno tiene derecho a la salud. La administración deberá brindarle oportuna asistencia médica gratuita, sin perjuicio de la atención que el interno pueda procurarse a sus expensas en las condiciones que establezca el reglamento respectivo, que dictará la autoridad penitenciaria superior con aprobación del Ministerio de Justicia - Secretaría de Política Penitenciaria y de Readaptación Social, Artículo 64.- Por orden judicial y con los recaudos de seguridad que ésta disponga, el interno podrá ser trasladado aun establecimiento penitenciario especializado de carácter asistencial médico o psiquiátrico o aun centro especializado del medio libre, cuando la naturaleza del caso así lo aconseje. Si mediaren razones de extrema urgencia, el Director de la cárcel o alcaldía, basándose en informe médico, podrá disponer el traslado y las medidas asegurativas adecuadas, informándolo de inmediato al Juez de la causa. Artículo 65.- Cuando se constatare la existencia de enfermedad infectocontagiosa, se dispondrá inmediatamente, si correspondiere, el aislamiento del enfermo y su posterior internación en medio especializado. Artículo 66.- Si el interno se negare a ingerir alimentos, se intensificarán los cuidados y controles médicos. Se informará de inmediato al Juez de la causa solicitando en el mismo acto su autorización para proceder a la alimentación forzada, cuando a criterio médico, existiere grave riesgo para la salud del interno. TITULO VII Asistencia Espiritual Artículo 67.- El interno tiene derecho a que se respete y garantice su libertad de conciencia y de religión, se facilite la atención espiritual que requiera y el oportuno contacto personal y por otros medios autorizados con un representante del credo que profese, reconocido e inscripto en el Registro Nacional de Cultos. Artículo 68.- El interno será autorizado, en la medida de lo posible, a satisfacer las exigencias de su vida religiosa, participando de ceremonias litúrgicas y a tener consigo objetos, libros de piedad, de moral e instrucción de su credo, para su uso personal. Artículo 69.- En cada establecimiento se habilitará un local adecuado para celebraciones litúrgicas, reuniones y otros actos religiosos de los diversos cultos reconocidos, Artículo 70.- En todo establecimiento penitenciario se celebrará el culto católico, en forma adecuada a las posibilidades edilicias de que disponga. La concurrencia a estos actos será absolutamente voluntaria. Artículo 71.- Los Capellanes de los establecimientos tendrán a su cargo la instrucción religiosa y moral y la orientación espiritual de los internos, incluso de los no católicos que la aceptaren. TITULO VIII Asistencia Social Artículo 72.- Las relaciones del interno con su familia, en tanto fueren convenientes para ambos, deberán ser facilitadas y estimuladas. Asimismo se lo motivará para que continúe o establezca vínculos útiles con personas u organismos oficiales o privados con personería jurídica cuyo objeto social sea concordante a ese fin, que puedan favorecer su integración al grupo familiar y a su subsistencia. Artículo73.- Al interno se le prestará asistencia moral y material y, en la medida de lo posible, amparo a su familia. Esta asistencia estará a cargo del servicio social de la cárcel o alcaidía, cuya actuación podrá ser concurrente con la que realice otros organismos estatales y personas o entidades privadas con personería jurídica. Artículo 74.- Personal del servicio social a partir de su ingreso entrevistará al interno a fin de elaborar su historia social para incorporarla a se legajo personal. TITULO IX Relaciones Familiares y Sociales Artículo75.- El interno tiene derecho a comunicarse periódicamente, en forma oral o escrita, con su familia, amigos, allegados, abogados y apoderados, así como con representantes de organismos oficiales e instituciones privadas con personería jurídica que se interesen por su reinserción social conforme las disposiciones del reglamento respectivo. Artículo 76.- Los internos de nacionalidad extranjera gozarán de facilidades para comunicarse con sus representantes diplomáticos y consulares acreditados. Los internos nacionales de Estados sin representación diplomática o consular en el país, los refugiados y los apátridas, tendrán las mismas posibilidades para dirigirse al representante diplomático del Estado encargado de sus intereses en el país o a cualquier autoridad nacional o internacional que tenga la misión de protegerlos. Artículo 77.- En todos los casos se respetará la privacidad de las comunicaciones, sin otras restricciones que las impuestas por el Juez de la causa, Artículo 78.- La autoridad penitenciaria superior, con aprobación del Ministerio de Justicia - Secretaría de Política Penitenciaria y de Readaptación Social, reglamentará las modalidades de las visitas ordinarias, extraordinarias, especiales o íntimas; sus requisitos; autoridad competente para el otorgamiento y la verificación de la identidad de los visitantes. Artículo 79.- La correspondencia que remita el interno y las comunicaciones telefónicas que realice o reciba estarán a su cargo o al de sus familiares. Artículo 80.- Las visitas y la correspondencia que reciba o remita el interno y las comunicaciones telefónicas, se ajustarán a las condiciones, oportunidad y supervisión que determine el reglamento interno de la cárcel o alcaidía, el que no podrá desvirtuar lo establecido en los artículos 75, 76 y 77. Artículo 81.- La correspondencia y las comunicaciones telefónicas no podrán interceptarse, salvo por orden judicial. Artículo 82.- En el caso que un interno haya afectado o intente alterar el orden y la seguridad de la cárcel o alcaidía, o se sospeche fehacientemente que hubiere impartido o recibido instrucciones para la comisión de delitos valiéndose de comunicaciones orales o escritas, el Director podrá suspenderlas, informando de inmediato al Juez de la causa. La autoridad judicial podrá disponer en lo sucesivo, el control de la correspondencia a cargo el Director de la cárcel o alcaidía, quien lo retendrá y remitirá al Juez. Artículo 83.- La correspondencia deberá ser distribuida o despachada inmediatamente. La que reciba el interno deberá ser sometida a sensores u otros medios eficaces para evitar la introducción de objetos o sustancias no autorizadas. El mismo procedimiento se observará en el contralor de paquetes que se envíen al interno. Artículo 84.- La administración deberá informar en forma clara y precisa al visitante, las normas que deberá observar, la nómina de alimentos, ropas y otros objetos que pueda introducir para el interno y la forma en que éstos deban ser presentados para facilitar su registro sin que sean dañados, Artículo 85.- El visitante deberá respetar las normas reglamentarias vigentes en la institución, las indicaciones del personal y abstenerse de introducir o intentar ingresar elemento alguno que no haya sido permitido y expresamente autorizado por el Director, Si faltare a esta prescripción o se comprobare la cooperación a esos efectos con el interno, o no guardare la debida compostura, su ingreso al establecimiento será suspendido, temporal o definitivamente, por resolución del Director. Artículo 86.- El visitante y sus pertenencias, por razones de seguridad, serán registrados. El registro, dentro del respeto a la dignidad de la persona humana, será realizado o dirigido, según el procedimiento previsto en los reglamentos, por personal del mismo sexo del visitante. El registro manual, en la medida de lo posible, será sustituido por sensores no intensivos u otras técnicas no táctiles, apropiados y eficaces. Artículo 87.- El grave estado de salud o el fallecimiento del interno, será comunicado de inmediato al Juez de la causa, a su familia, allegados o persona indicada previamente por el propio interno y al representante de su credo religioso. Artículo 88.- En caso de grave estado de salud o fallecimiento de un familiar el interno podrá ser trasladado para cumplir con sus deberes morales, previa autorización y conforme las condiciones que establezca el Juez competente. Artículo 89.- El interno tiene el derecho a estar informado de los sucesos de la vida nacional e internacional, por los medios de comunicación social, publicaciones o emisiones especiales permitidas. TITULO X Educación Artículo 90.- Se asegurará al interno el ejercicio de su derecho a aprender adaptándose las medidas necesarias para mantener fomentar y mejorar su educación e instrucción. A tales efectos, se le requerirá a su ingreso, certificado o constancia que acrediten el nivel de instrucción alcanzado. De no cumplimentarse tal requisito, se efectuarán las pruebas evaluativas pertinentes. Artículo 91.- Se impartirá enseñanza obligatoria a los internos analfabetos y a quienes no hubieren alcanzado el nivel mínimo fijado por la Ley. El Director de la cárcel o alcaidía podrá eximir de esta obligación a quienes carecieren de suficientes aptitudes intelectuales y psicofísicas. En tales supuestos se utilizarán métodos especiales de enseñanza, Artículo 92.- La administración fomentará el interés del interno por el estudio, brindándole la posibilidad de acceder a otros niveles del sistema educativo. Se le darán las máximas facilidades a través de regímenes alternativos, particularmente los sistemas abiertos y a distancia. A los efectos de rendir los exámenes correspondientes, si fuera indispensable el traslado del interno a la sede educacional, el mismo será efectuado previa autorización del Juez competente y con los medios y las medidas de seguridad que expresamente éste determine. Artículo 93.- Las actividades educacionales podrán ser objeto de convenios con entidades públicas o privadas. Artículo 94.- Los certificados y diplomas expedidos por la autoridad educacional competente, durante la permanencia del interno en una cárcel o alcaidía, no contendrán ninguna indicación que permita advertir esa circunstancia. Artículo 95.- En toda cárcel o alcaidía funcionará una biblioteca para uso de los internos, adecuada a sus necesidades de instrucción, formación y recreación debiendo estimularse su utilización. Artículo 96.- En cada cárcel o alcaidía se organizarán, durante el tiempo libre, actividades recreativas y culturales apropiadas a las necesidades de los internos, empleando los medios compatibles con el régimen carcelario. El programa recreativo comprenderá prácticas deportivas, preferentemente de equipo. TITULO XI Trabajo CAPITULO I Bases Artículo 97.- El trabajo debidamente remunerado constituye un derecho del interno. Siendo el trabajo un elemento social relevante, el Ministerio de Justicia - Secretaría de Política Penitenciaria y de Readaptación Social reglamentará los beneficios adicionales a que podrán hacerse acreedores los procesados que trabajen. Artículo 98.- El trabajo estará condicionado a la aptitud física y mental del interno y propenderá a que mantenga o adquiera hábitos de trabajo, actualice la capacitación profesional que facilite su futura inserción en el mercado laboral y mediante su salario contribuya, en lo posible, a su mantenimiento y al de su grupo familiar dependiente. Artículo 99.- La ejecución del trabajo remunerado no exime a ningún interno de su prestación personal para labores generales del establecimiento o comisiones que se le encomienden. Estas actividades no serán remuneradas, salvo que fueron su única ocupación, CAPITULO II Formación Profesional Artículo 100.- La capacitación laboral del interno será objeto de especial cuidado. El aprendizaje de oficios será concordante con sus condiciones personales y sus posibles actividades futuras en el medio libre. Artículo 101.- Se promoverá la organización de sistemas y programas de reconversión laboral los que podrán realizarse con la participación concertada de las autoridades laborales, agrupaciones sindicales, empresarias y otras entidades sociales vinculadas al trabajo y a la producción. Artículo 102.- Los diplomas, certificados o constancias de capacitación laboral que se expidan, no deberán contener referencias de carácter carcelario. CAPITULO III Organización Artículo 103.- El trabajo se programará teniendo en cuenta las aptitudes y condiciones psicofísicas de los internos, las tecnologías utilizadas en el medio libre y las demandas del mercado laboral. Se deberá respetar la legislación laboral y de seguridad social vigentes. Artículo 104.- El trabajo estará basado en criterios pedagógicos y psicotécnicos. El interno podrá manifestar su preferencia por la tarea a realizar, quedando a criterio de la autoridad penitenciaria la factibilidad y conveniencia de acceder a ella, conforme las posibilidades y necesidades del establecimiento y la individualización del caso. Artículo 105.- En el caso de internos que ejerciten o perfeccionen actividades artísticas o intelectuales, éstas podrán ser su única actividad laboral si fuere productiva y compatible con el régimen del establecimiento. Artículo 106.- La administración velará para que las tareas laborales se coordinen con los horarios destinados a otras actividades. Artículo 107.- El trabajo no se organizará exclusivamente en función del rendimiento económico individual o del conjunto de la actividad, sino que tendrá como finalidad primordial la generación de hábitos laborales, la capacitación y la creatividad. Artículo 108.- El trabajo y la producción podrán organizarse por administración, bajo las formas de ente descentralizado, empresa mixta o privada, por cuenta propia del interno o mediante sistema cooperativo. En cualquiera de esas modalidades la administración ejercerá la supervisión de la actividad del interno a los fines establecidos en el artículo 5°. El Ministerio de Justicia -Secretaría de Política Penitenciaria y de Readaptación Social- reglamentará las normas sobre organización, funcionamiento, supervisión y evaluación de los entes oficiales, mixtos, privados o cooperativos. Las utilidades materiales percibidas por administración penitenciaria se emplearán exclusivamente en obras y servicios relacionados con la atención de los internos. CAPITULO IV Salario Artículo 109.- El trabajo del interno será remunerado, salvo los casos previstos por el artículo 99- Si los bienes o servicios producidos se destinaren al Estado Nacional o a entidades de bien público, el interno percibirá el salario mínimo vital móvil debiéndose realizar las previsiones presupuestarias pertinentes. En los demás casos o cuando la organización del trabajo esté a cargo de una empresa mixta o privada la remuneración será igual al salario de la vida libre correspondiente a la categoría profesional de que se trate. En todos los casos se deducirá el veinticinco por ciento (25 %) en concepto de reintegro de los gastos que causare el establecimiento. Los salarios serán abonados en los términos establecidos en la legislación laboral vigente. Artículo 110.- No habiéndose trabado medidas precautorias sobre los bienes del procesado y comunicadas a la Dirección de la cárcel o alcaidía, deducidos los aportes correspondientes a la seguridad social y al reintegro de los gastos que el interno causare en el establecimiento de acuerdo con lo normado en el artículo anterior, el salario será distribuido en la siguiente forma: a) Ochenta por ciento (80 %) de libre disposición por el procesado. b) Veinte por ciento (20 %) para formar un fondo de reserva que le será entregado al ser puesto en libertad sin que medie sentencia condenatoria definitiva. Si resultare condenado, ese fondo se aplicará conforme lo dispuesto en los incisos 1°, 2° y 412 del artículo 11 del Código Penal. Artículo 111.- Del salario del interno, deducidos los aportes correspondientes a la seguridad social y al reintegro de los gastos que el interno causare en el establecimiento de acuerdo con lo normado en el artículo 109, podrá descontarse, en hasta un veinte por ciento (20 %), los cargos por concepto de reparación de daños intencionales o culposos causados en las cosas muebles o inmuebles del Estado Nacional o de terceros. CAPITULO V Accidentes de Trabajo y Enfermedades Profesionales Artículo 112.- La muerte o los accidentes sufridos por internos durante o con motivo de la ejecución del trabajo, así como las enfermedades profesionales contraídas por su causa, serán indemnizables conforme la legislación vigente. Artículo 113.- La indemnización, cualquiera fuere el monto de la efectiva remuneración percibida por el interno, se determinará sobre la base de los salarios fijados en los convenios o disposiciones vigentes, a la fecha del siniestro, para las mismas o similares actividades en el medio libre. Artículo 114.- Durante el tiempo que dure su incapacidad laboral, el interno accidentado o enfermo percibirá el salario que tenía asignado al momento de producirse la contingencia. TITULO XII Grupos Diferenciados CAPITULO I Mujeres Artículo 115.- Las internas alojadas en cárceles o alcaldías para procesadas o en secciones independientes de otros establecimientos, estarán al cuidado de personal femenino. Sólo por excepción podrán desempeñarse varones en estos establecimientos, en tareas específicas. La Dirección de la cárcel o alcaidía o la Jefatura de las secciones independientes de otros establecimientos siempre estarán a cargo de personal femenino debidamente calificado. Artículo 116.- Ningún funcionario penitenciario del sexo masculino ingresará en dependencias de una cárcel o alcaidía o sección para mujeres sin ser acompañado por un miembro del personal femenino designado por la Directora o por la Jefa de la Sección. Artículo 117.- Para la atención de las internas embarazadas y de las que han dado a luz deben existir dependencias especiales. Se adoptarán las medidas necesarias para que el parto se lleve a cabo en el servicio de maternidad de la cárcel o alcaidía, si lo hubiere; en su defecto en otro servicio público del medio libre. La interna podrá optar por un servicio privado, a sus expensas. Artículo 118.- La interna embarazada será eximida de toda actividad perjudicial e incompatible con su estado, cuarenta y cinco (45) días antes y después del parto. Con posterioridad a dicho período, se evitará interferir con el cuidado que la interna deba dispensar a su hijo. Artículo 119.- La interna podrá retener consigo a sus hijos menores de Cuatro (4) años, En lo posible, se procurará la concurrencia de esos niños a un jardín maternal a cargo de personal especializado. Artículo 120.- En caso de ser necesaria una prestación médica externa para su hijo, previa autorización judicial, la madre podrá acompañarlo. Artículo 121.- Al cumplirse la edad fijada en el artículo 119, si el progenitor no estuviere en condiciones de hacerse cargo del hijo, la administración penitenciaria dará intervención a la autoridad judicial o administrativa que corresponda. Artículo 122.- No se aplicarán a las internas procesadas, madres, medidas de sujeción en presencia de sus hijos. Artículo 123.- No podrá ejecutarse ninguna corrección disciplinaria que, a juicio médico, pueda afectar al hijo en gestación o lactante, La corrección disciplinaria será formalmente aplicada por la Directora y quedará sólo como antecedente del comportamiento de la interna. CAPITULO II Jóvenes Adultos Artículo 124.- Los jóvenes adultos de dieciocho (18) a veintiún (21) años deberán ser alojados en instituciones especiales o en secciones separadas e independientes de las cárceles o alcaidías. Se pondrá particular empeño en el mantenimiento de los vínculos familiares, en la enseñanza legalmente obligatoria, en la capacitación profesional y en la práctica de deportes. Artículo 125.- Conforme lo previsto en el artículo 12 inciso d) quienes hayan cumplido veintiún (21) años podrán permanecer en instituciones especiales o en secciones para jóvenes adultos hasta cumplir veinticinco (25) años. Con posterioridad serán trasladados a un establecimiento para adultos. CAPITULO III Casos Especiales Enfermos Mentales y Personalidades Anormales Graves Artículo 126.- Los procesados que presenten signos y síntomas de enfermedad mental con grave alteración del juicio serán alojados en establecimientos diferenciados o en secciones especiales de las cárceles o alcaldías y tratados por un equipo interdisciplinario. Artículo 127.- Los procesados con graves trastornos de conducta que alteren la convivencia normal con los otros internos serán alojados en establecimientos diferenciados o en secciones especiales de las cárceles o alcaidías y tratados por un equipo interdisciplinario. Artículo 128.- Los tratamientos psiquiátricos que impliquen suspensión de la conciencia o pérdida de la autonomía psíquica, aunque fueran transitorias, sólo podrán ser realizados previa autorización del Juez de la causa. Drogadependientes Artículo 129.- Los internos con antecedentes en el abuso o dependencia de estupefacientes serán alojados en establecimientos diferenciados o en secciones especiales de las cárceles o alcaidías donde se les brindará un tratamiento interdisciplinario específico, En todos los casos se procurará persuadir a los internos con antecedentes en el consumo de estupefacientes para que consientan o cooperen con un tratamiento específico. Artículo 130.- Para la admisión, permanencia y exclusión de un procesado a un programa de comunidad terapéutica regirán las normas establecidas en un reglamento específico aprobado por la autoridad penitenciaria superior. Infecto-contagiosos Artículo 131.- Los internos que padezcan enfermedades infectocontagiosas u otras patologías similares de tal gravedad que impidan su tratamiento en la cárcel o alcaidía donde se encuentren, serán trasladados a servicios penitenciarios especializados de carácter médico asistencial o a servicios u hospitales de la comunidad. Internos en Tránsito Artículo 132.- Los internos citados a comparecer por la autoridad judicial, se alojarán en alcaidías. Cuando un interno cometiere una infracción disciplinaria durante su alojamiento en ella, la aplicación y el cumplimiento de la corrección, se efectivizará en la cárcel de destino. Artículo 133.- Las previsiones de los artículos 12, 72, 79, 90, 92, 94, 95, 96, 98, 117, 124, 129 y 130 y del Título IV no serán aplicables en las alcaidías que alojen internos en tránsito o por períodos inferiores a los Diez (10) días. Internos Arrestados Artículo 134.- Los arrestados por el Poder Judicial deberán ingresar acompañados con la resolución pertinente y con su documentación personal. Quedarán sujetos a las instrucciones que imparta el Tribunal interviniente. TITULO XIII Disposiciones Complementarias Restricción Documentaria Artículo 135.- En las actas de nacimiento, matrimonio y defunción ocurridos en una cárcel o alcaidía, no se dejará constancia alguna que permita individualizar tal circunstancia. Manuales Artículo 136.- En cada cárcel o alcaidía se elaborarán manuales de procedimiento, aprobados por su Director, los que incluirán acciones detalladas y secuenciales que necesariamente deban ser ejecutadas para asegurar la correcta aplicación de leyes y reglamentos. Estos manuales serán accesibles al personal, revisados y actualizados, por lo menos, anualmente, Suspensión de Derechos Artículo 137.- En supuestos de graves alteraciones del orden en una cárcel o alcaidía, sin perjuicio de las medidas de urgencia que deba adoptar su Director, el Ministro de Justicia podrá disponer, por resolución fundada, la suspensión temporal y parcial de los derechos reconocidos a los internos en este Reglamento General y en las reglamentaciones dictadas en su consecuencia. Esta suspensión no podrá extenderse más allá del tiempo imprescindible para restablecer el orden alterado. La disposición precedente no podrá afectarlos derechos enumerados en el artículo 27.2 de la Convención Americana sobre Derechos Humanos -Pacto de San José de Costa Rica- incorporada a la Constitución Nacional, artículo 75, inciso 22, La resolución deberá ser comunicada, inmediata y fehacientemente, a la Cámara Nacional de Apelaciones en lo Criminal y Correccional competente. Procesados Federales en Cárceles Provinciales Artículo 138.- El Gobierno Nacional cuando no disponga de servicios propios, convendrá con los Gobiernos Provinciales, por intermedio del Ministerio de Justicia - Secretaría de Política Penitenciaria y de Readaptación Social - el alojamiento de los procesados a disposición de los Juzgados Federales en las cárceles o alcaidías provinciales. REGLAMENTO DE MODALIDADES BÁSICAS DE EJECUCIÓN Decreto 396/99 Publicación B.O.: 5/V/1999 y Fe de Erratas B.O.: 24/V/1999.- Artículo 1.- Apruébase el Reglamento de las Modalidades Básicas de la Ejecución, que como Anexo l forma parte integrante del presente por el que se reglamentan las Secciones Primera, Progresividad del Régimen Penitenciario, y Segunda, Programa de Prelibertad, del Capítulo II y disposiciones vinculadas de la Ley de Ejecución de la Pena Privativa de la Libertad, N° 24.660. Artículo 2.- Déjense sin efecto todas las disposiciones administrativas en la materia que se oponen a lo dispuesto en el Reglamento que se aprueba por el Artículo 1° del presente decreto. Artículo 3.- El Reglamento de las Modalidades Básicas de la Ejecución comenzará a regir a los Sesenta (60) días de publicado el presente Decreto en el Boletín Oficial de la República Argentina. Artículo 4.- Comuníquese, publíquese, dése a la Dirección Nacional del Registro Oficial y archívese. Carlos S. Menem - Jorge A. Rodríguez - Raúl E. Granillo Ocampo. ANEXO l Reglamento de las Modalidades Básicas de la Ejecución (Progresividad del Régimen Penitenciario, Programa de Prelibertad y principales disposiciones relacionadas) I. Progresividad del Régimen Penitenciario Principios Básicos Artículo 1.- La progresividad del régimen penitenciario consiste en un proceso gradual y flexible que posibilite al interno, por su propio esfuerzo, avanzar paulatinamente hacia la recuperación de su libertad, sin otros condicionamientos predeterminados que los legal y reglamentariamente establecidos. Su base imprescindible es un programa de tratamiento interdisciplinario individualizado. Artículo 2.- El tratamiento interdisciplinario individualizado deberá atender a las condiciones personales y a los intereses y necesidades del condenado durante su internación y muy especialmente para el momento de su egreso. Las acciones a adoptar para su desarrollo deberán estar dirigidas a lograr el interés, la comprensión y la activa participación del interno. Artículo 3.- En la aplicación de la progresividad, se procurará limitar la permanencia del interno en establecimientos cerrados. En lo posible, conforme su evolución favorable en el desarrollo del tratamiento, se promoverá su incorporación a instituciones semiabiertas o abiertas o a secciones separadas regidas por el principio de autodisciplina. Artículo 4.- La promoción excepcional a cualquier fase del Período de Tratamiento, en el marco de lo previsto en el artículo 7° de la Ley N° 24.660, requerirá, sobre la base de la Historia Criminológica actualizada, la propuesta del Servicio Criminológico. Previo dictamen del Consejo Correccional, el Director del establecimiento adoptará la resolución pertinente. La propuesta del Servicio Criminológico, el dictamen del Consejo Correccional y la resolución del Director del establecimiento, deberán estar debidamente fundados. Artículo 5.- La progresividad del régimen penitenciario en todos sus períodos o fases, sólo es aplicable a los condenados con sentencia firme y a los procesados que se hayan incorporado a la Ejecución Anticipada Voluntaria prevista en el Título lV del Reglamento General de Procesados, aprobado por Decreto del Poder Ejecutivo Nacional N° 303 del 26 de marzo de 1996, con la limitación prevista en su artículo 37. Artículo 6.- Reunidos todos los requisitos legales y reglamentarios pertinentes, las decisiones operativas para el desarrollo de la progresividad del régimen penitenciario serán tomadas por: l. El responsable del Servicio Criminológico del establecimiento, en lo concerniente al Período de Observación; planificación del tratamiento, su consideración con el interno, su verificación y su actualización; ll. El Director del establecimiento en el avance del interno en la progresividad o su eventual retroceso, en los Períodos de Tratamiento y de Prueba; II. El Director General de Régimen Correccional, cuando proceda el traslado del interno a otro establecimiento de su jurisdicción; IV. El Juez de Ejecución en los siguientes casos: a) Cuando proceda el traslado del interno a un establecimiento de otra jurisdicción; b) Cuando el interno se encontrare en el Período de Prueba y deba resolverse la incorporación, suspensión o revocación de: 1) Salidas Transitorias; 2) Régimen de Semilibertad; c) Cuando corresponda la incorporación al Período de Libertad Condicional. Período de Observación Artículo 7.- El Período de Observación consiste en el estudio médico-psicológico-social del interno y en la formulación del diagnóstico y pronóstico criminológicos. Comenzará con la recepción del testimonio de sentencia y del cómputo de la pena en el Servicio Criminológico, no pudiendo exceder los Treinta (30) días. Recabando la cooperación del interno, el equipo interdisciplinario confeccionará la Historia Criminológica. Artículo 8.- En la Historia Criminológica deberán constar, además, las fechas en que el interno, previo cumplimiento de los requisitos legales y reglamentarios, podría acceder a: a) Período de Prueba; b) Salidas Transitorias y Semilibertad; c) Libertad Condicional; d) Libertad Asistida; e) Programa de Prelibertad; f) Egreso por agotamiento de la pena, Estas fechas deberán ser actualizadas si se modificare el monto de la pena a cumplir. Artículo 9.- Cuando el interno, por un ingreso anterior como condenado en el Servicio Penitenciario Federal, ya tuviere Historia Criminológica, ésta deberá ser remitida de inmediato al Servicio Criminológico del establecimiento en que aquél se encuentre alojado durante el Período de Observación, para su agregación como antecedente de los estudios interdisciplinarios a realizarse. En el caso en que el interno ingrese, en virtud de los artículos 212 y 215 de la Ley N° 24.660, si no se los hubiere recibido, el Director del establecimiento gestionará de inmediato, de la autoridad pertinente, la remisión de sus antecedentes criminológicos y penitenciarios. Artículo 10.- En el proyecto y desarrollo del programa de tratamiento se considerarán las inquietudes, aptitudes y necesidades del interno, a fin de lograr su aceptación y activa participación. A tales efectos, los integrantes del Servicio Criminológico deberán mantener con el interno todas las entrevistas que sean necesarias, explicándole las condiciones para ser promovido en la progresividad del régimen y el mecanismo para la calificación de la conducta y el concepto. Artículo 11.- Al término del Período de Observación, el responsable del Servicio Criminológico, elevará al Director del establecimiento un informe proponiendo la fase del Período de Tratamiento para incorporar al interno, el establecimiento, sección o grupo a que debe ser destinado y su programa de tratamiento. Este deberá contener las recomendaciones respecto a: a) Atender a su salud psicofísica; b) Mantener o mejorar su educación; c) Promover su aprendizaje profesional o actividad laboral; d) Posibilitar las exigencias de su vida religiosa; e) Facilitar y estimular sus relaciones familiares y sociales; f) Desarrollar toda actividad de interés, de acuerdo a las particularidades del caso, teniendo en cuenta la fase propuesta y lo dispuesto en los artículos 15, 19 y 22. En el supuesto en que el Servicio Criminológico propiciare la permanencia del interno en el establecimiento en que se encuentre y la Dirección compartiere ese criterio, ésta lo incorporará de inmediato a la fase propuesta. Artículo 12.- Cuando el Servicio Criminológico recomendare el traslado del interno a otro establecimiento o el Director del establecimiento no compartiere el criterio de que permanezca en el que se encuentra, éste elevará un informe con los antecedentes a resolución del Director General de Régimen Correccional, previa intervención del Instituto de Clasificación. Artículo 13.- En el caso de cambio de establecimiento, simultáneamente con el traslado del interno deberá remitirse su Historia Criminológica al Servicio Criminológico del nuevo destino. Período de Tratamiento Artículo 14.- El Período de Tratamiento, consistente en la aplicación de las determinaciones del Consejo Correccional a que se refiere el artículo 17, será fraccionado en tres fases sucesivas: a) Socialización; b) Consolidación; c) Confianza. Fase de Socialización Artículo 15.- La Fase de Socialización consiste, primordialmente, en la aplicación intensiva de técnicas individuales y grupales tendientes a consolidar y promover los factores positivos de la personalidad del interno y a modificar o disminuir sus aspectos disvaliosos. Artículo 16.- La Fase de Socialización se iniciará con la incorporación del interno al establecimiento, sección o grupo indicado en el Periodo de Observación. Los primeros Quince (15) días deberán ser destinados a la facilitación de los medios apropiados en cada caso para que el interno pueda incorporarse naturalmente al programa de tratamiento. Artículo 17.- Dentro del plazo de Quince (15) días de la incorporación del interno a la Fase de Socialización, el Consejo Correccional deberá reunirse en pleno a fin de considerar cada una de las recomendaciones formuladas por el Servicio Criminológico para el tratamiento y examinar su factibilidad en concreto. A su término, el Consejo Correccional adoptará las determinaciones pertinentes respecto a: a) Salud psicofísica; b) Capacitación y formación profesional; c) Actividad laboral; d) Actividades educacionales, culturales y recreativas; e) Relaciones familiares y sociales; f) Aspectos peculiares que presente el caso. Artículo 18.- Establecido el programa concreto de tratamiento, el Consejo Correccional lo informará verbalmente al interno, escuchará sus inquietudes y procurará motivar su participación activa. En caso necesario se harán las eventuales rectificaciones que se estimaren convenientes. Esta fase se cumplirá en el marco de una supervisión continua del interno. Fase de Consolidación Artículo 19.- La Fase de Consolidación se iniciará una vez que el interno haya alcanzado los objetivos fijados, en el programa de tratamiento para la Fase de Socialización. Consistirá en la aplicación de una supervisión atenuada que permita verificar la cotidiana aceptación de pautas y normas sociales y en la posibilidad de asignarle labores o actividades con menores medidas de contralor. Artículo 20.- Para ser incorporado a la Fase de Consolidación el interno deberá reunir los requisitos y haber alcanzado los objetivos siguientes: a) Poseer Conducta Buena Cinco (5) y Concepto Bueno Cinco (5); b) No registrar sanciones medias o graves en el último período calificado; c) Trabajar con regularidad; d) Estar cumpliendo las actividades educativas y las de capacitación y formación laboral indicadas en su programa de tratamiento; e) Mantener el orden y la adecuada convivencia; f) Demostrar hábitos de higiene en su persona, en su alojamiento y en los lugares de uso compartido; g) Contar con dictamen favorable del Consejo Correccional y resolución aprobatoria del Director del establecimiento. Artículo 21.- La Fase de Consolidación comportará para el interno: a) La posibilidad del cambio de sección o grupo dentro del establecimiento o su traslado a otro apropiado a la fase alcanzada; b) Visita y recreación en ambiente acorde con el progreso alcanzado en su programa de tratamiento; c) La disminución paulatina de la supervisión continua, permitiendo una mayor participación en actividades respecto de la fase anterior. Fase de Confianza Artículo 22.- La Fase de Confianza consiste en otorgar al interno una creciente autodeterminación a fin de evaluar la medida en que internaliza los valores esenciales para una adecuada convivencia social, conforme la ejecución del programa de tratamiento. Artículo 23.- Para la incorporación a la Fase de Confianza se requerirá reunir los requisitos y haber alcanzado los objetivos siguientes: a) Poseer en el último trimestre conducta Muy Buena Siete (7) y concepto Bueno Seis (6); b) No registrar sanciones disciplinarias en el último trimestre calificado; c) Trabajar con regularidad; d) Estar cumpliendo las actividades educativas y las de capacitación y formación laboral indicadas en su programa de tratamiento; e) Cumplir con las normas y pautas socialmente aceptadas: f) Contar con el dictamen favorable del Consejo Correccional y resolución aprobatoria del Director del establecimiento. Artículo 24.- En el caso de promoción excepcional del interno a esta fase, según lo previsto en el artículo 4°, se deberá dar cumplimiento a las disposiciones de los artículos 17 y 18. Artículo 25.- Esta fase consistirá, según las características de cada establecimiento, en: a) Alojamiento en sector diferenciado; b) Mayor autodeterminación del interno; c) Ampliación de la participación responsable del interno en las actividades; d) Visita y recreación en ambiente acorde al progreso alcanzado en su programa de tratamiento; e) Supervisión moderada. Período de Prueba Artículo 26.- El Período de Prueba consistirá básicamente en el empleo sistemático de métodos de autogobierno, tanto durante la permanencia del interno en la institución como en sus egresos transitorios como preparación inmediata para su egreso. Comprenderá sucesivamente: a) La incorporación del interno a establecimiento abierto o sección independiente que se base en el principio de autodisciplina; b) La posibilidad de obtener salidas transitorias; c) La incorporación al régimen de semilibertad. Artículo 27.- La incorporación del interno al Período de Prueba requerirá: l. No tener causa abierta donde interese su detención u otra condena pendiente; ll. Estar comprendido en alguno de los siguientes tiempos mínimos de ejecución: a) Pena temporal sin la accesoria del artículo 52 del Código Penal: Un Tercio de la condena; b) Pena perpetua sin la accesoria del artículo 52 del Código Penal: Doce (12) años; c) Accesoria del artículo 52 del Código Penal: cumplida la pena. lll. Tener en el último trimestre conducta Muy Buena Ocho (8) y concepto Muy Bueno Siete (7), como mínimo. lV. Dictamen favorable del Consejo Correccional y resolución aprobatoria del Director del establecimiento. Salidas Transitorias y Régimen de Semilibertad Salidas Transitorias d) Estar cumpliendo las actividades educativas y las de capacitación y formación laboral indicadas en su programa de tratamiento; e) Cumplir con las normas y pautas socialmente aceptadas; f) Contar con el dictamen favorable del Consejo Correccional y resolución aprobatoria del Director del establecimiento. Artículo 28.- La frecuencia de las salidas transitorias según su motivo, podrá ser la siguiente: l. Para afianzar y mejorar los lazos familiares y sociales: a) Interno al que le faltare más de Dos (2) años para solicitar su libertad condicional, artículos 13 y 53 del Código Penal, o la libertad asistida, artículo 54 de la Ley N° 24.660: Dos (2) salidas transitorias de hasta Doce (12) horas y Una (1) de hasta Veinticuatro (24) horas por bimestre; b) Interno al que le faltare menos de Dos (2) años para solicitar su libertad condicional, artículos 13 y 53 del Código Penal, o la libertad asistida, artículo 54 de la Ley N° 24.660: Una (1) salida transitoria de hasta Veinticuatro (24) horas y Una (1) salida excepcional de hasta Cuarenta y Ocho (48) horas por mes. ll. Para cursar los estudios previstos en el artículo 16, ll, inciso b) de la Ley N° 24.660: salidas de hasta Doce (12) horas con la frecuencia que los estudios específicos que curse el interno requieran, previa comprobación documentada de su necesidad. lll. Para participar en el Programa de Prelibertad, que será dividido en dos fracciones iguales: a) En la primera fracción Una (1) salida transitoria de hasta Doce (12) horas quincenal; b) En la segunda fracción salidas transitorias de hasta Doce (12) horas con la frecuencia que requiera el caso particular. Artículo 29.- Las salidas transitorias de carácter excepcional de hasta Setenta y Dos (72) horas podrán ser concedidas para afianzar y mejorar los lazos familiares y sociales en casos debidamente documentados, principalmente por razones de distancia, con la siguiente frecuencia: a) Interno al que le faltare más de Dos (2) años para solicitar su libertad condicional, artículos 13 y 53 del Código Penal, o la libertad asistida, artículo 54 de la Ley N° 24.660: Una (1) salida por bimestre; b) Interno al que le faltare menos de Dos (2) años para solicitar su libertad condicional, artículos 13 y 53 del Código Penal, o la libertad asistida, artículo 54 de la Ley N° 24.660: Una (1) salida por mes. Estas salidas transitorias excepcionales no son acumulables con las previstas en el artículo 28, l. Artículo 30.- Al hacerse efectiva cada salida transitoria, el Director del establecimiento le entregará al interno una constancia para justificar su situación ante cualquier requerimiento de la autoridad, en la que se consigne: a) Datos de identidad del portador; b) Fecha y hora de salida del establecimiento; c) Lugar a donde se dirige y, en su caso, donde pernoctará; d) Fecha y hora de regreso al establecimiento. Régimen de Semilibertad Artículo 31.- La semilibertad consiste en permitir al condenado, que reúna los requisitos establecidos en el artículo 34, trabajar fuera del establecimiento sin supervisión continua en condiciones iguales a la vida libre, incluso salario y seguridad social, regresando a su alojamiento al fin de cada jornada laboral. El salario se aplicará según lo dispuesto en los artículos 122 y 126 de la Ley N° 24,660. La incorporación al Régimen de Semilibertad incluirá la concesión de una salida transitoria semanal de hasta DOCE (12) horas, salvo resolución en contrario de la autoridad judicial. Artículo 32.- Para la incorporación al Régimen de Semilibertad se requerirá una información a cargo de la Sección Asistencia Social en la que se constate: a) Datos del empleador, si correspondiere; b) Naturaleza del trabajo ofrecido; c) Lugar y ambiente donde se desarrollarán las tareas; d) Horario a cumplir; e) Retribución y forma de pago, según disposiciones del artículo 122 de la Ley N° 24.660. El Asistente Social que realice la constatación acerca del trabajo ofrecido, emitirá su opinión fundada sobre la conveniencia de la propuesta a los efectos de su valoración por el Consejo Correccional según lo previsto en el artículo 34, inciso e). Artículo 33.- A cada interno incorporado al Régimen de Semilibertad el Director del establecimiento le entregará una constancia para justificar su situación ante cualquier requerimiento de la autoridad, en la que se consigne: a) Datos de identidad del portador; b) Fecha y hora de salida del establecimiento; c) Fecha y hora de presentación en su lugar de trabajo, el que deberá precisarse; d) Fecha y hora de finalización de sus tareas; e) Fecha y hora de regreso al alojamiento asignado. Disposiciones Comunes Artículo 34.- Para que el interno se encuentre en condiciones legales y reglamentarias de ser incorporado a Salidas Transitorias o al Régimen de Semilibertad, deberá reunir, previamente, la totalidad de los requisitos que se enumeran: a) Encontrarse en el Período de Prueba; b) Haber cumplido el tiempo mínimo de ejecución de la pena según el artículo 17 de la Ley N° 4.660; c) No tener causa abierta donde interese su detención u otra condena pendiente; d) Poseer conducta Ejemplar; e) Merecer del Servicio Criminológico y del Consejo Correccional del establecimiento concepto favorable respecto de su evolución y sobre el efecto beneficioso que las Salidas Transitorias o el Régimen de Semilibertad puedan tener para el futuro personal, familiar y social del interno; f) Ser propuesto al Juez de Ejecución por el Director del establecimiento mediante resolución fundada, a la que acompañará lo requerid 0 en el artículo 18, incisos a), b) y c) de la Ley N° 24.660. Artículo 35.- A efectos de la resolución judicial, el Director del establecimiento deberá proponer la concesión de Salidas Transitorias o la incorporación al Régimen de Semilibertad propiciando en forma concreta: a) Frecuencia y duración de las salidas propuestas; b) Lugar y distancia máxima a que el interno podrá trasladarse. Si debiera pasar la noche fuera del establecimiento, se le exigirá declaración jurada del sitio preciso donde pernoctará; c) Las normas que deberá observar con las restricciones o prohibiciones que estime convenientes; d) El nivel de confianza que deberá adoptarse. Artículo 36.- El Juez de Ejecución establecerá las normas de conducta que deberá observar el interno durante las Salidas Transitorias y el Régimen de Semilibertad. Dichas normas podrán ser modificadas por el Juez de Ejecución de oficio o a propuesta fundada del Director del establecimiento. Artículo 37.- El Director del establecimiento deberá informar, de inmediato, al Juez de Ejecución: a) El cumplimiento de la autorización conferida; b) La supervisión, en el caso de que así lo resolviera, a cargo de profesionales de la Sección Asistencia Social. Artículo 38.- Cuando el interno no regresare al establecimiento en el día y a la hora preestablecidos o cuando se constatare el quebrantamiento de las normas de conducta impuestas por resolución judicial, el Director del establecimiento lo informará de inmediato al Juez de Ejecución acompañando todos los antecedentes probatorios a fin de que éste adopte la decisión que resulte pertinente, según lo previsto en el artículo 19 de la Ley N° 24.660. Verificación y Actualización del Tratamiento Artículo 39.- El Servicio Criminológico, cada Seis (06) meses o antes, si fuera necesario, verificará si se han alcanzado o no los objetivos contenidos en el programa de tratamiento adoptado por el Consejo Correccional. Cuando los objetivos no se hubieren logrado, deberán determinarse sus motivos y se procederá a la reformulación del programa de tratamiento. Período de Libertad Condicional Artículo 40.- A partir de los Cuarenta y Cinco (45) días anteriores al plazo establecido en el Código Penal el interno podrá iniciar la tramitación de su pedido de libertad condicional, informando el domicilio que fijará a su egreso. La firma del interno o la impresión de su dígito pulgar deberán ser autenticadas por la autoridad penitenciaria pertinente. Artículo 41.- Con el pedido del interno se abrirá un expediente en el que se deberá consignar: a) Situación legal del peticionante de acuerdo a la sentencia condenatoria, la pena impuesta, su vencimiento, fecha en que podrá acceder a la libertad condicional y los demás antecedentes procesales que obren en su legajo; b) Conducta y concepto que registre desde su incorporación al régimen de ejecución de la pena y de ser posible la calificación del comportamiento durante el proceso; c) Si registrare sanciones disciplinarias, fecha de la infracción cometida, sanción impuesta y su cumplimiento; d) Posición del interno en la progresividad del régimen detallándose la fecha de su incorporación a cada período o fase; e) Informe de la Sección Asistencia Social sobre la existencia y conveniencia del domicilio propuesto; f) Propuesta fundada del Servicio Criminológico, sobre la evolución del tratamiento basada en la Historia Criminológica actualizada; g) Dictamen del Consejo Correccional respecto de la conveniencia social de su otorgamiento, sobre la base de las entrevistas previas de sus miembros con el interno de las que se dejará constancia en el Libro de Actas; h) Contenido, aplicación y resultados de su Programa de Prelibertad. Artículo 42.- El informe del Consejo Correccional basado en lo dispuesto en el artículo anterior se referirá, por lo menos, a los siguientes aspectos del tratamiento del interno: a) Salud psicofísica; b) Educación y formación profesional; c) Actividad laboral; d) Actividades educativas, culturales y recreativas; e) Relaciones familiares y sociales; f) Aspectos peculiares que presente el caso; g) Sugerencia sobre las normas de conducta que debería observar si fuera concedida la libertad condicional. Artículo 43.- Con la información reunida por el Consejo Correccional y la opinión fundada del Director del establecimiento sobre la procedencia del pedido, éste remitirá lo actuado a consideración del Juez de Ejecución. Artículo 44.- El Director del establecimiento arbitrará las medidas necesarias para que la remisión del expediente a la autoridad judicial se efectúe como mínimo Diez (10) días antes del término en el que legalmente el interno podría obtener su libertad condicional. Artículo 45.- El interno será inmediatamente notificado bajo constancia de la elevación de su pedido al Juez de Ejecución. Artículo 46.- El condenado no podrá renovar la solicitud de libertad condicional antes de Seis (06) meses de la resolución denegatoria, a menos que ésta se base en no haberse cumplido el término legal. En todos los casos deberá respetarse lo dispuesto en el artículo 41 respecto del inicio de la tramitación. Artículo 47.- Cuando de acuerdo a la documentación existente en el establecimiento, el interno no se encontrare en condiciones de obtener la libertad condicional por estar comprendido en los artículos 14 ó 17 del Código Penal o no hubiese cumplido el tiempo mínimo de los artículos 13 ó 53 del Código Penal, el Director del establecimiento remitirá la solicitud a consideración del Juez de Ejecución y se procederá conforme a las instrucciones que éste imparta. Si el juez considerase atendible lo peticionado y dispusiere el envío de los informes previstos, se procederá de acuerdo con los artículos 41 a 43. Artículo 48.- Si el pedido de libertad condicional se iniciare directamente en sede judicial, el Director del establecimiento dará cumplimiento a lo requerido por el Juez de Ejecución. l l. Conducta y Concepto Procedimiento Artículo 49.- El Consejo Correccional calificará trimestralmente, la conducta y el concepto de cada interno. Artículo 50.- A los finos del artículo anterior el Consejo Correccional sesionará en pleno dentro de los primeros Diez (10) días hábiles de los meses de Marzo, Junio, Septiembre y Diciembre de cada año. Artículo 51.- La calificación de conducta y de concepto se formulará de acuerdo con la siguiente escala: a) Ejemplar: Nueve (09) y Diez (10); b) Muy Buena: Siete (07) y Ocho (08); c) Buena: Cinco (05) y Seis (06); d) Regular: Tres (03) y Cuatro (04); e) Mala: Dos (02) y Uno (01); f) Pésima: Cero (0). Artículo 52.- Para calificar la conducta y el concepto, el Consejo Correccional podrá entrevistar y escuchar al interno, practicar las consultas que estime necesarias y solicitar información a cualquier miembro del personal, quien deberá producirla dentro del plazo requerido. Cuando el interno lo peticionare deberá ser escuchado por el Consejo Correccional. Artículo 53.- El interno no podrá ser calificado con conducta o concepto inferior a Bueno, sin que previamente lo haya entrevistado el Consejo Correccional en pleno. Artículo 54.- El Secretario del Consejo Correccional procederá a notificar personalmente a cada interno, bajo constancia, su calificación de conducta y de concepto, dentro de los Tres (3) días hábiles de producida la misma. Artículo 55.- El interno podrá interponer recurso de reconsideración por escrito ante el Consejo Correccional, dentro del lapso de Tres (3) días hábiles desde su notificación. El Consejo Correccional resolverá en definitiva dentro de los Tres (3) días hábiles siguientes. Ello, sin perjuicio del recurso que le cabe ante el Juez de Ejecución. Conducta Artículo 56.- La calificación de conducta del interno se basará en la observancia de las normas reglamentarias que rigen el orden, la disciplina y la convivencia en el establecimiento y durante las salidas transitorias, el régimen de semilibertad o los permisos de salida. Artículo 57.- La calificación de conducta tendrá valor y efectos para determinar la frecuencia de las visitas, la participación en actividades recreativas y otras que los reglamentos establezcan. Artículo 58.- El responsable de la División Seguridad interna, el último día hábil de cada mes, deberá formular la calificación de conducta del interno teniendo en cuenta lo dispuesto en el artículo 56. Las evaluaciones mensuales deberán ser presentadas en forma trimestral al Consejo Correccional para la calificación de la conducta del interno. Incidencia de las sanciones disciplinarias en la calificación de conducta. Artículo 59.- En atención a las infracciones disciplinarias sancionadas, respecto de la calificación vigente a ese momento podrán efectuarse las siguientes disminuciones: a) Faltas leves: Ninguna o hasta Un (01) punto; b) Faltas medias: Hasta Dos (02) puntos; c) Faltas graves: Hasta Cuatro (04) puntos. A tal efecto el Consejo Correccional deberá tener a la vista y examinar los expedientes disciplinarios correspondientes. Concepto Artículo 60.- El interno será calificado de acuerdo al concepto que merezca, entendido como la ponderación de su evolución personal de la que sea deducible su mayor o menor posibilidad de adecuada reinserción social. Artículo 61.- La calificación de concepto servirá de base para la aplicación de la progresividad del régimen, el otorgamiento de salidas transitorias, semilibertad, libertad condicional, libertad asistida, conmutación de pena e indulto. Artículo 62.- Los responsables directos de las Divisiones Seguridad Interna y Trabajo y de las Secciones Asistencia Social y Educación, el último día hábil de cada mes, requerirán del personal a sus órdenes, las observaciones que hayan reunido sobre cada interno respecto de: l. División Seguridad Interna: a) Convivencia con los otros internos y trato con el personal; b) Cuidado de las instalaciones, mobiliario, objetos y elementos provistos para uso personal o para uso común; c) Cumplimiento de los horarios establecidos; d) Higiene personal y de los objetos de uso propio o compartido. ll. División Trabajo: a) Aplicación e interés demostrado en las tareas encomendadas; b) Asistencia y puntualidad; c) Cumplimiento de las normas propias de la actividad laboral que desempeña. lll. Sección Asistencia Social: a) Trato con sus familiares, allegados u otros visitantes; b) Comunicaciones con el exterior. lV. Sección Educación: a) Asistencia a la Educación General Básica u optativa, la instrucción a distancia o en el medio libre; b) Dedicación y aprovechamiento; c) Participación y actitudes en las actividades recreativas, culturales o deportivas. Artículo 63.- El personal de las Divisiones Seguridad Interna y Trabajo y de las Secciones Asistencia Social y Educación en contacto directo con el interno completará semanalmente una planilla con las observaciones que realicen. Artículo 64- El responsable de cada área integrante del Consejo Correccional, el último día hábil de cada mes, deberá formular su calificación de concepto, teniendo en cuenta sus propias observaciones y las que haya realizado el personal a sus órdenes, ponderando además los actos meritorios del interno. Artículo 65- Los informes mensuales deberán ser presentados por el responsable de cada una de sus áreas en la reunión trimestral del Consejo Correccional para que éste califique el concepto. Disposiciones Comunes Artículo 66.- El Director del establecimiento, en su carácter de Presidente del Consejo Correccional, verificará personalmente antes del día Quince (15) de cada mes, que los responsables de cada una de sus áreas hayan cumplido con lo dispuesto en los artículos 58 y 64, durante el mes anterior, visando las planillas correspondientes. Artículo 67.- El procesado que se incorpore al régimen de condenado por haber recaído sentencia condenatoria firme, hasta ser calificado en conducta y en concepto en la primera reunión trimestral del Consejo Correccional, gozará de los beneficios correspondientes a su calificación de comportamiento. Artículo 68.- El procesado incorporado al régimen de Ejecución Anticipada Voluntaria, mantendrá la calificación de conducta y de concepto alcanzados al momento de recibirse la sentencia condenatoria firme. Artículo 69.- El interno trasladado a otro establecimiento del Servicio Penitenciario Federal, mantendrá sus calificaciones de conducta y de concepto. Artículo 70.- El interno ingresado a un establecimiento del Servicio Penitenciario Federal procedente de otro de distinta jurisdicción mantendrá las calificaciones de conducta y de concepto, si las poseyere, y será incorporado al nivel de la progresividad que hubiere alcanzado conforme las prescripciones del presente reglamento. Artículo 71- Todo otro interno que se incorpore al régimen de condenado, no será calificado hasta la primera reunión trimestral del Consejo Correccional, mientras tanto gozará de los beneficios correspondientes a la calificación de Conducta Muy Buena. Artículo 72- El interno del Servicio Penitenciario Federal trasladado a un establecimiento penitenciario especializado de carácter asistencial médico o a un centro similar y apropiado del medio libre, mantendrá las calificaciones de conducta y de concepto que tenía al momento de su traslado, siempre que no fuera objeto de sanción disciplinaria, la que será formalmente aplicada y su ejecución suspendida hasta su reintegro al régimen de ejecución de la pena. Artículo 73.- Serán suspendidas las calificaciones de conducta y de concepto del interno alojado en un establecimiento penitenciario especializado de carácter psiquiátrico o en un centro similar y apropiado del medio libre. Artículo 74.- La calificación de conducta y de concepto no requiere una permanencia predeterminada en cada tramo de la escala del artículo 102 de la Ley N° 24.660. lll. Programa de Prelibertad Destinatarios Artículo 75.- El Programa de Prelibertad se iniciará, según lo determine el Consejo Correccional, entre Sesenta (60) y Noventa (90) días antes del tiempo mínimo exigible para la concesión de la libertad condicional, de la libertad asistida o el egreso por agotamiento de la pena. Acciones Artículo 76.- Con Ciento Veinte (120) días de anticipación el responsable de la División Judicial del establecimiento hará saber al Consejo Correccional los internos que deberán participar del Programa de Prelibertad. En cada comunicación individual se hará constar: a) Nombre y apellido del interno; b) Situación legal; c) Fecha del probable egreso por libertad condicional o libertad asistida; d) Fecha de egreso por agotamiento de la pena. Artículo 77.- Con la recepción del informe del artículo 76, la Sección Asistencia Social procederá a la apertura de un expediente individual de incorporación al Programa de Prelibertad, al que se agregará la documentación correspondiente a las acciones realizadas durante ese lapso y se clausurará al egreso del interno. Copia de todo lo actuado se agregará a la Historia Criminológica del interno. Artículo 78.- Cada caso será colocado desde su iniciación hasta su cierre bajo la tuición de un asistente social de la institución, responsable de la coordinación y seguimiento de las acciones a emprender quien actuará junto con un representante del patronato de liberados o, en su caso, con organismos de asistencia postpenitenciaria u otros recursos de la comunidad cuya oportuna colaboración deberá solicitar. Artículo 79.- El Programa de Prelibertad se iniciará con una entrevista del interno con el asistente social designado, quien le notificará, bajo constancia, su incorporación al programa y le informará sobre el propósito del mismo, orientándolo y analizando las cuestiones personales y prácticas que deberá afrontar al egreso, con el objeto de facilitar su reincorporación a la vida familiar y social. A dicha entrevista se invitará a participar al representante del patronato de liberados o de organismos de asistencia postpenitenciaria o, en su caso, de otros recursos de la comunidad. En esa ocasión se solicitará al interno que exprese, bajo constancia, sus principales necesidades ante el egreso respecto a: a) Documentación de identidad indispensable y actualizada; b) Vestimenta; c) Alojamiento; d) Traslado y radicación en otro lugar; e) Trabajo; f) Continuación de estudios, aprendizaje profesional, tratamiento médico, psicológico o social; g) Cualquier otro requerimiento que resulte pertinente. Artículo 80.- El asistente social encargado del caso evaluará la factibilidad de las necesidades expuestas por el interno con el representante del patronato de liberados o de organizaciones de asistencia postpenitenciaria o de otros recursos de la comunidad, este último se encargará de verificar, fuera del ámbito penitenciario, la información suministrada por el interno respecto de sus posibilidades y necesidades. Cuando fuere necesario, el asistente social requerirá la intervención de los profesionales del equipo interdisciplinario. Artículo 81.- El asistente social promoverá una reunión del interno con sus familiares y allegados a fin de suscitar su cooperación y de evaluar su actitud ante el egreso de aquél. Esta reunión se realizará en presencia del asistente social, del representante del patronato de liberados o de organismos de asistencia postpenitenciaria o de otros recursos de la comunidad y de los profesionales del equipo interdisciplinario que hubieren sido requeridos. De lo actuado se labrará un acta suscripta por todos los intervinientes. Artículo 82.- El asistente social encargado del caso elevará el expediente del Programa de Prelibertad al responsable de la Sección Asistencia Social del establecimiento, informando en concreto las acciones que se propone desarrollar juntamente con el representante del patronato de liberados o de organizaciones de asistencia postpenitenciaria o de otros recursos de la comunidad. Conocida la decisión del responsable de la Sección Asistencia Social del establecimiento, ambos serán responsables de su cumplimiento. Cualquier modificación sustancial del Programa de Prelibertad sólo podrá realizarse con conocimiento y aprobación del responsable del área. Artículo 83.- Finalizado el plazo fijado por el Consejo Correccional para el Programa de Prelibertad, el asistente social y el representante del patronato de liberados o de organizaciones de asistencia postpenitenciaria o de otros recursos de la comunidad a cargo del caso informarán, en el expediente, el contenido y aplicación efectiva del programa evaluando su eficacia. lV. Organismos de Aplicación Servicio Criminológico Artículo 84.- En los establecimientos de ejecución de la pena funcionará el organismo técnico-criminológico a que se refiere el artículo 185, inciso b) de la Ley N° 24.660, con la denominación de Servicio Criminológico. Artículo 85.- El Servicio Criminológico es el organismo multidisciplinario que tiene la misión esencial de contribuir a la individualización del tratamiento del interno conforme lo dispuesto por el artículo 1° de la Ley N° 24.660. Artículo 86.- Son funciones del Servicio Criminológico: a) Realizar las tareas correspondientes al Período de Observación; b) Verificar y actualizar el programa de tratamiento indicado a cada interno; c) Informar en las solicitudes de traslado a otro establecimiento, de libertad condicional, de libertad asistida y, cuando se lo solicite, de indulto o de conmutación de penas; d) Proponer: 1) La promoción a salidas transitorias o la incorporación al régimen de semilibertad; 2) La permanencia en instituciones o secciones especiales para jóvenes adultos, de internos que hayan cumplido veintiún (21) años; 3) El retroceso del interno al período o fase que correspondiere; 4) El otorgamiento de recompensas; e) Producir los informes médicos, psicológico y social previstos en el artículo 33 de la Ley N° 24.660; f) Propiciar la promoción del interno, en casos excepcionales, a cualquier fase del Período de Tratamiento; g) Participar en las tareas del Consejo Correccional; h) Coadyuvar con las tareas de investigación y docencia del Instituto de Clasificación mediante la remisión, a ese solo efecto, de los informes producidos; i) Participar en las actividades de investigación o docencia programadas por el Instituto de Clasificación. Artículo 87.- El Servicio Criminológico estará constituido por profesionales con título habilitante que acrediten, además, su especialización o versación en criminología y en disciplinas afines. Formarán parte de él, por lo menos, un psiquiatra, un psicólogo y un asistente social, a los que se incorporará, en lo posible, entre otros, un educador y un abogado. Artículo 88.- El responsable del Servicio Criminológico será el profesional universitario que acredite especialización universitaria en criminología o en ciencias penales. Artículo 89.- Cuando la cantidad de internos a considerar lo requiera, se aumentará el número de profesionales para que el Servicio Criminológico pueda funcionar en equipos, ya sea durante el Período de Observación o para el seguimiento del tratamiento del interno. Artículo 90.- Los estudios, informes y propuestas a que se refiere el artículo 86 serán fundados, previa entrevista personal con el interno, por cada uno de los profesionales por especialidad que integren el Servicio Criminológico. Artículo 91.- El Servicio Criminológico de cada establecimiento llevará un Libro de Actas foliado y rubricado por el Director del establecimiento, en el que se asentarán los casos considerados y las resoluciones que se adopten. Consejo Correccional Artículo 92.- En los establecimientos de ejecución de la pena funcionará el Consejo Correccional a que se refiere el artículo 185, inciso g) de la Ley N° 24.660. Artículo 93.- El Consejo Correccional es el organismo colegiado que efectúa el seguimiento continuo del tratamiento del interno y la evaluación de su resultado, a fin de adoptar decisiones en los casos de su competencia o de asesorar a las autoridades pertinentes, de acuerdo a las leyes y a los reglamentos vigentes. Artículo 94.- El Consejo Correccional es competente para: a) Calificar trimestralmente la conducta y el concepto del interno, de acuerdo a lo dispuesto en los artículos 58 y 64; b) Proponer al Director del establecimiento el avance o retroceso del interno en la progresividad del régimen penitenciario; c) Dictaminar en los casos de: 1) Salidas Transitorias; 2) Régimen de Semilibertad; 3) Libertad Condicional; 4) Libertad Asistida; 5) Permanencia en instituciones o secciones especiales para jóvenes adultos, de internos que hayan cumplido veintiún (21) años; 6) Ejecución de las sanciones disciplinarias de cambio de sección o traslado a otro establecimiento; 7) Otorgamiento de recompensas; 8) Traslado a otro establecimiento; 9) Pedidos de indulto o de conmutación de pena, cuando le sea solicitado, d) Determinar en cada caso y con la anticipación suficiente la fecha concreta en que debe iniciarse el Programa de Prelibertad de cada interno; e) Considerar las cuestiones que el Director presente para su examen en sesiones extraordinarias. Artículo 95.- El Consejo Correccional será presidido por el Director del establecimiento e integrado por los responsables de: a) La División Seguridad Interna; b) La División Trabajo; c) El Servicio Criminológico; d) La Sección Asistencia Social; e) La Sección Asistencia Médica; f) La Sección Educación. Artículo 96.- El Consejo Correccional contará con un Secretario permanente, designado por el Director del establecimiento, que será el encargado de coordinar las actividades, reunir los informes, redactar la documentación pertinente, llevar el Libro de Actas, preparar el temario de cada reunión de acuerdo a las directivas del Presidente y realizar toda tarea que éste le asigne. Artículo 97.- El Consejo Correccional realizará las siguientes sesiones: a) Trimestrales: dentro de los Diez (10) primeros días hábiles de los meses de Marzo, Junio, Septiembre y Diciembre de cada año, para calificar la conducta y el concepto del interno; b) Mensuales: dentro de los Cinco (05) primeros días hábiles de cada mes, para considerar la promoción en la progresividad del régimen penitenciario en cada caso concreto y para dictaminar acerca de la permanencia en las instituciones o secciones especiales para jóvenes adultos de internos que hayan cumplido Veintiún (21) años; c) Semanales: por lo menos Una (01) vez a la semana, para dictaminar en los pedidos de libertad condicional, libertad asistida, indultos, conmutaciones de pena, en los casos de ejecución de las sanciones disciplinarias de cambio de sección o traslado a otro establecimiento; para considerar las modificaciones a la calificación de conducta prevista en el artículo 59 y para determinar la iniciación del Programa de Prelibertad; d) Extraordinarias: convocadas por el Director del establecimiento, en cualquier oportunidad, para el tratamiento de cuestiones inherentes a sus funciones. Artículo 98.- Las sesiones del Consejo Correccional se llevarán a cabo con la totalidad de sus integrantes, caso contrario se producirá la nulidad de lo actuado. La asistencia a las sesiones del Consejo Correccional, a que se refiere el artículo 97, constituye una obligación prioritaria y personal de cada uno de sus integrantes. En caso de imposibilidad justificada el ausente deberá ser sustituido por su reemplazante natural. Disposiciones Transitorias Artículo 99.- Todos los casos serán tratados individualmente. Cuando el Consejo Correccional lo estime necesario podrá realizar las consultas y solicitar información a cualquier miembro del personal, quien deberá producirla dentro del plazo requerido. Artículo 100.- Todos los integrantes del Consejo Correccional tienen voz y voto en el tratamiento y resolución de los casos, debiendo cada uno de ellos emitir opinión fundada con relación al área específica de su función. Las decisiones se adoptarán, en lo posible, por consenso. En caso de disidencias, se resolverá por mayoría simple. En todos los supuestos, las opiniones serán fundadas, dejándose constancia en el acta respectiva. Artículo 101.- Los dictámenes que emita el Consejo Correccional se elaborarán sobre la base de los informes producidos por cada una de sus áreas, del resultado de la entrevista personal con el interno y cuando corresponda, de las consultas e informaciones del personal requerido. Artículo 102: Los dictámenes que emita el Consejo Correccional, en los casos de salidas transitorias, régimen de semilibertad, libertad condicional, libertad asistida, indultos o conmutaciones de pena deberán contener como mínimo: a) Nombre y apellido del interno, número de legajo personal, establecimiento en que está alojado e índole del pedido o motivo de su intervención; b) Informe Criminológico: motivación de la conducta punible, perfil psicológico, tratamientos psiquiátricos o psicológicos aplicados y su resultado, resumen actualizado de la Historia Criminológica precisando la trayectoria del interno en la progresividad del régimen y pronóstico de reinserción social; c) Informe Educacional: Educación General Básica cursada y en su caso, educación polimodal, superior o académica de grado, otros estudios realizados, posibilidad de continuarlos, aprendizaje profesional y participación en actividades culturales, recreativas y deportivas; d) Informe Laboral: vida laboral anterior y especialidad si la tuviere, oficio, arte, industria o profesión, su aplicación en la vida libre, posibilidad de solventarse a sí mismo y al grupo familiar dependiente, actividades realizadas en el establecimiento; e) Informe Médico: estado general psicofísico actual, antecedentes clínicos, mención de patologías de especial significación, atención médica en curso y necesidad y posibilidad de su continuación; f) Informe de División Seguridad Interna: situación legal, especificando si tiene declaración de reincidencia, fecha de ingreso, lugar de procedencia, información de los establecimientos en que haya estado alojado, conducta y concepto, sanciones disciplinarias, si las registrare, señalando fecha y motivo, acciones meritorias y recompensas; g) Informe Social: lugar y fecha de nacimiento, estado civil, núcleo familiar o de convivencia al que se reintegraría y perfil socioeconómico, vinculación con su familia, ayuda que puedan prestarle familiares, allegados u otras personas o instituciones, y cómo se estima que asumirían el egreso del interno. En los casos de libertad condicional o libertad asistida contenido y aplicación efectiva del Programa de Prelibertad evaluando su eficacia; Conclusiones: evaluación de los informes producidos por cada uno de los integrantes del Consejo Correccional, del tratamiento y sus resultados, el pronóstico de reinserción social y la opinión concreta sobre la cuestión en examen. Artículo 103.- Cuando se considere el otorgamiento de salidas transitorias o la incorporación al régimen de semilibertad, el Consejo Correccional presentará al Director del establecimiento las recomendaciones necesarias para dar cumplimiento a lo dispuesto en los artículos 18, 23, 25 y 26 de la Ley N° 24.660. Artículo 104.- El Libro de Actas a que se refiere el artículo 96 deberá ser foliado, encuadernado y rubricado por el Director del establecimiento. En él se asentarán cronológicamente las Actas que se labren de cada reunión del Consejo Correccional, las que deberán ser suscriptas por su Presidente y por todos los integrantes que hayan participado en ella. V. Disposiciones Complementarias Artículo 105.- La Dirección Nacional del Servicio Penitenciario Federal, dentro de los Treinta (30) días de publicado este reglamento en el Boletín Oficial, proyectará y elevará para su aprobación por la Secretaría de Política Criminal, Penitenciaria y de Readpatación Social. a) Los lineamientos de la Historia Criminológica a que se refiere el artículo 13, inciso a) de la Ley N° 24.660 y las instrucciones para su empleo por los Servicios Criminológicos; b) Los modelos e instrucciones para completar las planillas a que se refieren los artículos 62 a 64; c) Los modelos de constancias para Salidas Transitorias y Régimen de Semilibertad previstas en los artículos 30 y 33. Artículo 106.- La Dirección Nacional del Servicio Penitenciario Federal adoptará, de inmediato, las medidas que estime convenientes a los efectos de: a) Instruir debidamente a todo el personal de la institución y en particular a los integrantes de los Servicios Criminológicos y de los Consejos Correccionales sobre las normas de este reglamento; b) Informar por los medios más adecuados a los internos de los establecimientos de su dependencia sobre estas nuevas disposiciones; c) Incorporar, de inmediato, el estudio y la comprensión del Reglamento de las Modalidades Básicas de Ejecución a las asignaturas pertinentes tanto en los cursos de formación de personal previa al servicio como en los de perfeccionamiento durante el servicio. Artículo 107.- La Dirección Nacional del Servicio Penitenciario Federal informará a la Secretaría de Política Criminal, Penitenciaria y de Readaptación Social, antes de la vigencia de este reglamento, en forma detallada, las disposiciones y acciones que haya implementado para dar cumplimiento al artículo anterior. Artículo 108.- La Dirección Nacional del Servicio Penitenciario Federal designará, atendiendo las circunstancias de cada caso, al responsable del Servicio Criminológico de cada establecimiento. A tal fin solicitará opinión de la Dirección del Instituto de Clasificación. Artículo 109.- Cuando el traslado del interno a otro establecimiento se fundamente en razones médicas de urgencia se prescindirá de la intervención del Servicio Criminológico y del Consejo Correccional. Artículo 110.- La Dirección Nacional del Servicio Penitenciario Federal propondrá a la Secretaría de Política Criminal, Penitenciaria y de Readaptación Social para su aprobación las características que tendrá la Fase de Confianza en cada establecimiento, según lo previsto en el artículo 25. Artículo 111.- La Secretaría de Política Criminal, Penitenciaria y de Readaptación Social celebrará con los patronatos de liberados, las organizaciones de asistencia pospenitenciaria u otros recursos de la comunidad los convenios que resulten necesarios para implementar el Programa de Prelibertad, previsto en los artículos 75 a 83. Artículo 112.- El interno que a la vigencia de este Reglamento se encontrare en la Fase de Orientación del Período de Tratamiento de la Progresividad del Régimen Penitenciario será incorporado a la Fase de Socialización y aquel que estuviere en la Fase de Preconfianza se incorporará a la Fase de Consolidación. Artículo 113.- Hasta tanto sea posible cumplir con el artículo 179 de la Ley N° 24.660, en las cárceles o alcaidías que alojen condenados, su Centro de Evaluación tendrá las funciones y responsabilidades que este Reglamento atribuye al Consejo Correccional. Artículo 114.- Las disposiciones del artículo 88 comenzarán a regir a partir de los cinco (5) años de la entrada en vigencia de este Reglamento. Artículo 115.- La Dirección Nacional del Servicio Penitenciario Federal en el empleo de los recursos humanos y otros que tiene asignados, dará toda la prioridad que, en cada caso, resulte necesaria a fin de asegurar la constitución y eficaz funcionamiento de los Servicios Criminológicos y de los Consejos Correccionales. Dentro de los Treinta (30) días de publicado este reglamento en el Boletín Oficial informará a la Secretaría de Política Criminal, Penitenciaria y de Readaptación Social las medidas puntuales que haya adoptado a tales efectos en cada establecimiento.-