REFLExIONES ENTORNO A LA ÉTICA Y EL MILITAR

Anuncio
238
Ética y milicia
(Reflexiones
entorno a
La ética y
El militar)
El deber, ese oscuro sentimiento
más fuerte que el de amar.
F a curso gurméndez
André Gide
ferrol ana lisis 25.indd 238
La ética militar se apoya, para empezar, en una
contradicción: La profesión militar es la única cuya
función principal es inmoral. La ética militar es una
paradoja, que trata de establecer una relación
entre los dos conceptos antitéticos de la
moralidad y del uso de la violencia. Para
justificar la existencia de esta curiosa
profesión hay quien dice que es necesaria en un mundo imperfecto dónde
hace falta defenderse y garantizar
la seguridad frente a los enemigos exteriores, de la misma
forma que se considera que la
policía es necesaria para protegerse de los crímenes dentro
del propio Estado. Otros, pacifistas radicales, niegan cualquier
justificación a su existencia.
Miguel Fernández y Fernández. 2010.
Según Konrad Lorenz es el hombre
con cabeza de Jano el único ser capaz
de comprometerse con los más altos
valores éticos y morales pero que
necesita para ello un mecanismo de
comportamiento filogenético adaptado, cuyas propiedades animales conllevan el peligro de que
mate a su hermano, convencido de que lo está haciendo
en aras de altos valores.
De acuerdo con la visión de Hobbes no hay
cura para la violencia,
solo la civilización es el
modo en que nos organizamos para reprimirla. Grossman,
sin embargo, se opone a esta teoría y mantiene que civilización y
9/11/10 17:07:34
Miguel Ángel Fernández
La Milicia es un elemento más que
tiene el estado, al servicio de la sociedad, es la herramienta que ejerce
la violencia legítima. Solo es justa
esa violencia racionalizada, proporcionada y moderada que está
monopolizada por la fuerza legítima del poder político democrático.
Esta es la fuerza que el militar tiene
el deber de ejercer en nombre de su
gobierno democrático, éticamente.
A esto trataré de referirme a continuación.
¿TODAVÍA EXISTE EL DEBER?
Abrimos el periódico y nos encontramos la crónica diaria de transgresiones, abusos sexuales, violencia de género, niños maltratados,
discriminación racial, y otras ignominias. Pasamos las hojas y somos testigos de más ejemplos que
contribuyen a conformar negativamente el carácter del asombrado
lector tales como el afán de enriquecimiento sin esfuerzo en casos
que, aunque podrían parecer envidiables, rara vez suceden por medios legales; el placer sin conciencia; la ciencia sin humanidad; la
religión sin sacrificio o el ejercicio
de profesiones como el periodismo,
la justicia, la política o la docencia,
sin principios morales.
Parecería de necios tratar de aplicar normas éticas y vivir de acuerdo con ellas en este ambiente degradado donde conceptos como la
integridad personal ni se conoce y
el sacrificio por los demás es visto como estúpido. Pero después de
tantos años de profesión sigo pensando que, en este ambiente de menosprecio social a los valores éticos, de mofa a los comportamientos
honestos y de infravaloración del
liderazgo responsable, es cuando
ferrol ana lisis 25.indd 239
debemos esforzarnos en
nuestras profesiones para,
con el cumplimiento del
deber y con el ejemplo,
dar una respuesta ética
que ayude a conformar un
mundo mejor.
Damos gracias a Dios
por el más noble de sus
dones, el sentir que hemos cumplido con nuestro deber.
W. Churchill
Roosevelt y Churchill. Foto: CIFRA. 1944.
Deber, honor: Algo parecido a esto decía el general MacArthur en West Point hace
tiempo: Estas dos palabras sagradas
dictan lo que ha de ser el comportamiento. Son las armas para tener
coraje cuando los que ladran tratan
de que no sigas cabalgando, para
recobrar la fe cuando la fealdad de
lo visible oculta la invisible utopía,
para recuperar la esperanza cuando el futuro se desdibuja; es eso
que te hace fuerte cuando te hacen
dudar de tu recto comportamiento.
Demagogos e hipócritas dirán que
son simples palabras, solo un eslogan, una frase afortunada y tratarán
de devaluarlas hasta el extremo de
la burla y el ridículo. Pero el deber
y el honor personal son las virtudes
que integran el carácter deseable
en una persona responsable, en un
ciudadano. Son algo más que palabras, son atributos morales, que si
se practican, hacen que entre todos
construyamos un mundo donde valga la pena vivir… con dignidad.
Martin Garzo, hace poco, en el País,
citaba a Sanchez-Ferlosio afirmando
que no cabe ninguna duda, hay que
hablar de una crisis moral, de un
mundo sin honor. “El sentimiento
de honor perdido, no es un conflicto
psicológico. El honor es una relación de lealtad con los demás”. De
forma que el deshonor no es tanto
“haberse fallado a uno mismo”, sino
“haberles fallado a los otros”.
Alfredo de Vigny afirmaba que el
honor es la poesía del deber. Él, que
tanto caviló sobre la servidumbre y
grandeza de la Armas, escuchaba,
siendo un muchacho y prisionero
francés, a bordo del buque insignia
inglés del almirante Collingwood,
de boca del propio almirante estas
palabras:
El sentido del deber acaba por
dominar de tal modo el espíritu
que entra en el carácter y se convierte en uno de sus rasgos principales.
Alfredo de Vigny. Ilustración: M. Fernández. 2010.
F a curso gurméndez
tecnología es lo que utilizamos para
poder matar millones por todo el
mundo apretando simplemente un
botón.
9/11/10 17:07:35
É TI C A Y MI L I C IA
240
Collingwood permaneció embarcado 45 años durante los cuales le fue
denegado por su Gobierno el derecho a regresar a tierra, a ver tan
siquiera a su familia.
El deber y el honor los reflejó con
maestría A. Pérez Reverte, con la
ayuda de ese gran actor que es Vigo
Mortensen en la escena final de su
película, cuando el francés con cortesía de buen enemigo, le invitaba
a rendirse, ante una derrota inminente y evidente. La cansada mirada del Alatriste y la lenta, precisa y
lacónica respuesta reflejan ambos
sentimientos: “Este es un Tercio español…”
LAS REFERENCIAS ÉTICAS
DE LOS LÍDERES CIVILES Y
MILITARES
F a curso gurméndez
Woodrow Wilson algunos años más
tarde de la manipulada guerra de
EEUU con España, tras la explosión
espontánea en el Maine, manifestaba: “¿Hay algún hombre en esta
habitación o alguna mujer, quiero decir, hay
ferrol ana lisis 25.indd 240
algún niño, que no sepa que la semilla de la guerra en el mundo moderno es la rivalidad económica o
comercial?
Las aventuras bélicas en las que se
mueven nuestros militares están,
en su mayoría, promovidas por intereses económicos, pero firmadas
y auspiciadas por líderes políticos
que consideran que así contribuyen
a garantizar el bienestar y la seguridad de los ciudadanos. Es inevitable, pues, que si se juzga la presencia y actuación de un militar en
un conflicto bélico haya de ser en
el marco ético de la decisión de los
gobernantes.
Las guerras recientes se hacen para
reivindicar supuestamente los derechos de un pueblo, de un grupo social. Se bombardea Irak y se afirma
que se hace para afirmar el derecho
a la democracia del pueblo iraquí.
Parecería más ético ayudar a los
iraquíes a rebelarse contra el dictador, pero cuando lo pidan, cuando
comiencen a hacerlo ellos mismos.
No se puede decir “nosotros sabemos lo que es bueno para ustedes”
y a continuación comenzar a tirar bombas. Decía Georges Orwell
que el lenguaje político es empleado para que las mentiras parezcan
verdades y el crimen respetable, y
para dar apariencia de solidez a lo
que es puro humo.
Los atentados del 11 de Septiembre
de 2001 conmocionaron las bases
del orden internacional y suscitaron
importantes interrogantes sobre la
mezquindad del liderazgo actual en
el ámbito político global y desataron quejas generalizadas que nos
llevan a una añoranza de los grandes líderes del pasado.
La crisis financiera y económica
que comenzó el pasado año hace
que se considere este año 2010 un
punto de inflexión para
Victoria Martos. Saber Leer 10, 1987.
9/11/10 17:07:36
Miguel Ángel Fernández y Fernández
la historia del mundo y que, para
abordar nuestro futuro, los líderes
deberían estar reformulando nuestros valores, remodelando nuestros
sistemas y reconstruyendo nuestras
instituciones, con responsabilidad
social y medioambiental, adaptándolos a las necesidades de la sociedad del siglo XXI, configurando
nuevas estructuras políticas y económicas globales, más limpias, más
transparentes y más abiertas. Con
ética, en dos palabras. No estoy seguro de que esto esté sucediendo, a
pesar de la gesticulación diaria de
políticos o banqueros.
Son esperanzadores los últimos gestos del presidente norteamericano,
primero en su discurso ante la nación de hace pocos meses y recientemente (27 mayo) en la Estrategia
de Seguridad Nacional presentada
ante su Congreso, que rompe de
forma clara con la de su antecesor.
Va más allá de la idea hegemónica
y unilateral de Bush y apuesta por
el derecho internacional, el diálogo,
la diplomacia, la defensa, el desarrollo, las operaciones de mantenimiento de paz, la estabilización
y la prevención de conflictos alejándose de las guerras preventivas.
241
Eleanor Roosevelt (EE UU) y el jurista francés René Cassin fueron los padres de la declaración, que reconoce en su primer artículo que todos nacemos libres e iguales.
En la foto Eleanor con un copia del texto en 1949.
ferrol ana lisis 25.indd 241
9/11/10 17:11:41
ÉTICA Y MILICIA
242
Independientemente de sus buenos
deseos y de sus futuros resultados,
parece que la ética vuelve a figurar en las intenciones de esa gran
potencia.
Para contribuir a ese mundo mejor,
una buena referencia, un buen punto de partida para los líderes políticos, los que ordenan las guerras
donde actúan los militares, sería la
Declaración de Derechos Humanos
que establece en su Art. I que
“Todos los seres humanos nacen libres e iguales en dignidad
y derechos y, dotados como están de razón y conciencia, deben
comportarse fraternalmente los
unos con los otros”.
La ética del dirigente, en España,
debe de estar enmarcada por estos
principios y por la Constitución española. La ética del militar, también
por la Constitución española y las
Reales Ordenanzas (RROO), que
son las referencias que nos ayudan
a construir nuestro código ético
F a curso gurméndez
La Constitución en el Art.30 hace
constar que ”los españoles tienen
el derecho y el deber de defender
a España” y en su artículo 8 establece que:
ferrol ana lisis 25.indd 242
“Las Fuerzas Armadas, constituidas por el Ejército de Tierra,
la Armada y el Ejército del Aire,
tienen como misión garantizar
la soberanía e independencia
de España, defender su integridad territorial y el ordenamiento constitucional. Una ley orgánica regulará las bases de la
organización militar conforme
a los principios de la presente
Constitución”.
Realmente este artículo concentra
la razón de ser del militar. La Ley
reguladora que cita son las RROO
que se renovaron en Feb 2009 y que
están inspiradas en la Constitución
y en la Declaración de Derechos
Humanos.
Los principios de comportamiento
de las Naciones Unidas se reflejan
en las RROO, recogidos en el “código de conducta de los militares
en operaciones”, tanto en combate
o de paz, de ayuda humanitaria o
de apoyo a la población civil etc.
En ellas se habla del uso gradual y
proporcionado de la fuerza, la distinción entre civiles y combatientes, y entre bienes de carácter civil
y objetivos militares para evitar en
lo posible las pérdidas ocasionales
de vidas, sufrimientos físicos y daños materiales, así como de la prohibición de tortura a prisioneros o
detenidos.
Las RROO conforman esos principios éticos que regulan el uso de
la fuerza y, en verdad, son un extraordinario marco de valores, quizás en ocasiones demasiado detallados. Las actuales han perdido un
tanto la elegancia de la prosa de las
de Carlos III, víctima de inevitables
imposiciones partidistas coyunturales.
Tratan las RROO de la disciplina,
y de los límites de la obediencia
debida, concepto del que se habla
mucho ahora pero que, por primera
vez fue introducido en las ordenanzas de 1978, por Gutiérrez-Mellado
y Martinez de Galinsoga. Ahora
dice...
reacción airada en muchas guarniciones militares que rechazaban
este artículo. Este artículo tuvo una
clara influencia, solo tres años después, en el proceso que siguió al intento de golpe de estado del 23 F,
en el que se aplicó con mucha dificultad. Era difícil, en aquella época,
mantener una actitud democrática
en aquel ambiente de desafueros
verbales y descalificaciones personales en donde los que más alzaban
la voz, descompuestos, alegando
que: ”¡Antes que la disciplina está
el honor¡” solían ser los profesionales con menos prestigio personal.
No podemos quedarnos con la definición del diccionario de la Real
Academia que encasilla a la disciplina en la “Observancia de la leyes
y ordenamientos de una profesión o
instituto”. Tampoco con las actuales ordenanzas que la definen, de
una forma que me deja algo perplejo, como “Factor de cohesión que
obliga a mandar con responsabilidad y a obedecer lo mandado”. Así
que trataré de ampliar ese rígido
concepto con estos dos enfoques
clásicos de la literatura militar y del
Management, en otros países:
“Es la facultad o cualidad
mental que mueve o permite a
una persona a reconocer y aceptar sus responsabilidades, y bajo
condición de fatiga, así como bajo
condiciones normales, a seguir
un código aceptado de comportamiento ético”.
”Si las órdenes entrañan la
ejecución de actos constitutivos
de delito, en particular contra la
Constitución, y contra las personas y bienes protegidos en caso
de conflicto armado, el militar
no estará obligado a obedecerlas.
En todo caso asumirá la grave
responsabilidad de su acción u
omisión”.
“Es la facultad individual o
colectiva que garantiza la obediencia pronta a las órdenes o
provoca la iniciación de la acción
correcta en ausencia de órdenes.
Es un estado mental que produce
una disposición hacia obediencia
inteligente y voluntaria y hacia la
conducta apropiada”.
Cabe recordar también que en ese
momento, en 1978, surgió una
Esta idea de estado mental existe solo cuando hay un deseo de
9/11/10 17:11:41
Miguel Ángel Fernández y Fernández
243
responder de una manera y, al
aceptar un código de conducta se
aleja mucho de posturas basadas
en el castigo y la obediencia ciega.
Estoy hablando de la aceptación voluntaria del deber, que fundamenta
el poder vivir en un marco de relativa libertad, en paz contigo mismo
dentro de una comunidad militar. Al
menos a mí me sirvió. El deber, ese
oscuro sentimiento más fuerte que
el de amar, decía A. Gide…
De esto hablaba Saint-Exupery,
el heroico piloto postal y piloto
de guerra, escritor y poeta cuyas
obras deberían ser estudiadas en
las Academias militares. El propio
André Gide, sobre Saint-Ex, afirmaba que el hombre no encuentra la
felicidad en la libertad, sino en la
aceptación de un deber.
El último escalón de los principios éticos antes de llegar a la
ferrol ana lisis 25.indd 243
responsabilidad última del militar
son las Reglas de Enfrentamiento
(ROE). Estas reglas determinan
cuándo, dónde, cómo y contra
quién debe usarse la fuerza.
Las ROE proporcionan una norma
de actuación y suelen estar elaboradas meticulosamente antes del
enfrentamiento. Contribuyen, además, a la sintonía entre militares,
diplomáticos y políticos en el desarrollo de una estrategia. Se podría
adivinar sin mucho esfuerzo que la
primera regla de enfrentamiento es
la defensa propia.
Pueden hacerse públicas pero,
normalmente, solo son conocidas
por la fuerza que las ha de usar.
Naturalmente estas reglas no vinculan al enemigo y el conocimiento de las mismas por el adversario
pondría en peligro a nuestras propias fuerzas.
La OTAN cuenta con una amplia y
aceptada relación de ROEs que están elaboradas para los comandantes de nivel Batallón o superiores y
para los Comandantes de buques.
En estos tiempos de terrorismo y
piratería, o sea, situaciones definidas como no pertenecientes a guerra declarada, las ROE cobran una
importancia relevante.
En pocas palabras: Declaración de
Derechos Humanos, Constitución
Española, Reales Ordenanzas,
Reglas de Enfrentamiento, esos son
los condicionantes del comportamiento ético del militar español.
LOS DILEMAS ÉTICOS DEL
MILITAR
Los militares son uno de los medios
de que los países disponen para garantizar su seguridad. Para ello se
precisan militares preparados, con
F a curso gurméndez
Miguel Fernández y Fernández. 2010.
9/11/10 17:11:42
ÉTICA Y MILICIA
244
el carácter y con la formación ética
necesarios para esta tarea.
F a curso gurméndez
Mucha gente cree que los militares
constituyen una organización que
existe solo para matar y son incapaces de conciliar esa visión incorrecta con la existencia de unos
principios éticos o morales porque
para la mayoría de la sociedad matar es un acto inaceptable. La gente
no entiende cómo puede haber alguien fundamentalmente diferente
de ellos mismos. Si creen que alguien es diferente lo más sencillo
es demonizar a ese grupo o persona, tratar de excluirlos de su comunidad, pero la ética del militar,
normalmente se refleja en el espejo
de la ética de la sociedad a la que
pertenece y evoluciona con el tiempo y las circunstancias sociales. Así
que, en el ambiente antibelicista de
la sociedad, mantener que las fuerzas armadas deben continuar siendo una comunidad de camaradas de
ferrol ana lisis 25.indd 244
armas con altos ideales, puede no
ser considerado como políticamente correcto, porque inculcar valores éticos tradicionales es una tarea
considerada como inherentemente
conservadora.
En verdad, una democracia tiene,
por naturaleza, una gran dificultad
moral en el uso de la fuerza armada. Porque, para los ciudadanos,
confortablemente protegidos por
sus FAS o las de sus países aliados,
a las que denuncian, resulta fácil
apelar a los derechos humanos y
al pacifismo, ya que eso siempre te
proporciona una atractiva etiqueta
progresista. Además, un Estado, al
haber suscrito los acuerdos internacionales debe respetar los términos
legales y éticos que en ellos se reflejan. Es decir, por un lado tiene que
decidir el uso de la violencia una
sociedad que, al menos en apariencia, la repudia radicalmente y, por
otro, hay que hacerlo respetando
las leyes y acuerdos internacionales
suscritos, precisamente para usar la
violencia, de forma legal, ética.
Esto está muy bien, pero ¿cuál es el
modo de proceder ahora?, cuando la
bestialidad de los ataques terroristas
se ha cargado de un plumazo todas
las leyes, cuando los que amenazan
a nuestra sociedad, actúan sin respeto a las vidas ajenas o propias,
se inmolan por cientos en actos terroristas que matan por miles, secuestran y degüellan a rehenes, sin
escrúpulo, ante la mirada complaciente de las cámaras de TV.
Ante esta confusión es inevitable
que se contemple con cierto escepticismo la eficacia de las leyes
de los conflictos armados, la ley
internacional del mar, el trato a
prisioneros y heridos de guerra, la
distinción entre combatientes y no
combatientes, el respeto a los derechos humanos. Combatir con estos
Un soldado de la fuerza internacional en Afganistán protege el despegue de un helicóptero. Foto: AFP. 2010.
9/11/10 17:11:43
Miguel Ángel Fernández y Fernández
Las reglas de enfrentamiento, son
de gran ayuda en estas situaciones,
pero sé por experiencia que nunca
se adaptan exactamente a la situación que se presenta, por lo que es
inevitable que el juicio personal y
moral de los líderes militares tenga
que estar, a la hora de tomar decisiones en la zona de operaciones,
fundamentado en una sólida formación ética a lo largo de su carrera.
Ejemplo de esta continua evolución de las normas que fundamentan una actuación ética es que, recientemente, España levantó los
“caveats”, las restricciones al uso
de las tropas en Afganistán, gesto
que fue celebrado por el general
James Jones, hoy jefe de seguridad
del Presidente de los EEUU y antiguo SACEUR (Comandante Supremo
Aliado en Europa) en Bruselas hasta
2004. Esto se refiere a que las fuerzas estén disponibles para intervenir y lo hagan a una petición directa
de los mandos OTAN en la escena
de acción, sin tener que pasar por
la cadena nacional.
Jones me preguntaba, en el
Mediterráneo, a bordo del “Galicia”
en 2003: Miguel por qué España no
me da seis H/C de combate. No entendía las razones que yo le argumentaba: Autorización del Congreso,
contingente muy superior a seis,
apoyo logístico nacional organizado, relevos, fuerza de autoprotección… Entre todas éstas, la de los
“caveats”, era una muy principal.
Sigamos con el militar. Ese mismo
militar, de vuelta a casa, tiene el
ferrol ana lisis 25.indd 245
rostro de nuestro vecino, es un buen
ciudadano, una persona honesta,
que actúa de forma ética y que está
de acuerdo con las libertades civiles.
Por ello que no es difícil pensar su
duda metafísica cuando en el futuro se le exija tener que violarlas. En
él han depositado los ciudadanos,
el Estado, parte de la responsabilidad que tiene en el uso de la fuerza. Una responsabilidad que le lleva
a mandar a unos hombres que han
jurado servir a la patria, para lo que
quizás tengan que matar y morir.
El militar hace este sacrificio moral
consciente de los riesgos que conlleva, precisamente para proteger
aquellos valores de la sociedad, de
su sociedad, que se niega a sí mismo. Esta resignación de ciertas responsabilidades morales y derechos
de los que disfrutan sus paisanos ha
de ser voluntariamente aceptado de
forma ética y considerado como un
sacrificio necesario.
Siguiendo estas ideas, creo que, en
ocasiones, las manifestaciones oficiales de duelo, con altos representantes del Gobierno, por los caídos
en combate que vemos actualmente
en los medios, me parecen algo exageradas y solo pueden entenderse
en el marco de la auto-propaganda
obscena de los políticos. Vamos
como siempre, dando bandazos, de
un extremo a otro y hay que recordar que morir está en el, en el programa de la vida de todos nosotros
y además en el contrato del militar,
por lo que la milicia ha de entenderse como lo que es: una profesión
con riesgos pero con valores que se
cifran en que el militar ha de situar
su sentido del deber por encima del
interés personal, su sacrificio en el
amor y la lealtad a su país y en la
lealtad al compañero.
Recientemente, en el anteproyecto
de ley de Mayo 2010, que se remitirá al Consejo de Estado, se regulan
los derechos de libertad de expresión, reunión, asociación e intimidad
y dignidad personal. Eso sí, dentro
de los límites establecidos derivados de los principios de unidad,
jerarquía, disciplina y neutralidad.
Se crean el Consejo de Personal de
las FAS y el Observatorio de la vida
militar. ¡Un observatorio! Vamos a
vigilar la vida militar como diligentes ecologistas vigilan las aves de
Doñana. Así se podría crear un observatorio de la vida política, diplomática, doméstica… en fin, el Gran
Hermano y volvemos de nuevo al
lúcido Georges Orwell.
245
George Orwell.
Ilustración: M. Fernández y Fernández. 2010.
EL SIGLO XXI, ¿OTRA
MILICIA CON OTRA ÉTICA?
La ética del ciudadano y la del ciudadano con uniforme evoluciona
con la historia y las circunstancias.
Es lógico deducir que habrá cambios importantes en el siglo XXI.
Podemos intuir lo que nos espera,
o más bien, ya sabemos lo que está
pasando ahora mismo en el mundo
y que está cambiando para siempre las formas clásicas de entender la guerra, la vida y la muerte,
obligando a una evolución de nuestros principios éticos para adaptarlos a la situación. En un juego de
F a curso gurméndez
principios en la mano contra quienes no los respetan es como hacerlo con una mano atada, un suicidio,
la crónica de un fracaso anunciado.
Pero habrá que hacerlo y agudizar
la imaginación para afrontar estos
nuevos combates, porque sino la
barbarie se apoderaría aún más de
este mundo.
9/11/10 17:11:44
ÉTICA Y MILICIA
246
apariciones y desapariciones veamos algunos ejemplos:
— Desaparición de las distancias:
Estamos a la distancia de un clic
del ratón del ordenador de todo el
mundo. Para un militar esto significa tener a su disposición un nivel
de información extraordinario, pero,
al mismo tiempo, un mayor control
sobre sus decisiones por los mandos que no están en la escena de
acción y, por lo tanto, un recorte
importante en la libertad de actuación y una demora (lo que no deja
de ser paradójico) en la toma de decisiones que será realizada (o no)
por el político al mando, después de
múltiples consultas multidisciplinares y de echar un vistazo al calendario electoral.
F a curso gurméndez
Cuando yo estudiaba en EEUU, en
1976, un master en management y
sistemas de información en tiempo
real, solo hace de ello 34 años, ya
se planteaba con respecto al mando y control, la pregunta de si los
sistemas modernos iban a coartar
la libertad del mando en la mar y,
en el futuro, se llegaría al colmo de
dar la orden de caer a estribor o a
babor desde la metrópoli.
ferrol ana lisis 25.indd 246
información. Hoy, la dinámica de la
sociedad e incluso la presión, muchas veces inoportuna, de la prensa
hace que los tiempos de reacción,
ante un hecho en concreto sean
muy cortos y, en cuanto a planificación, lo que antes nos llevaba
meses o años su preparación, ahora lo hacemos en días, o semanas.
La toma de decisiones, al acelerarse
obliga a tener menús preplaneados
para adaptar en poco tiempo a la situación. Esta idea obligó a la creación de las ROEs.
También obligó a inventar sistemas
de transporte por tierra, mar y aire
más eficaces para responder con
más rapidez a las emergencias y a
la creación de las unidades de intervención rápida.
La prensa en sus noticias en “tiempo real” está obligada asimismo a
actuar con ética para no poner en
peligro la seguridad de soldados o
civiles en aras de una información
rápida que puede ser más valiosa
para el enemigo que para las fuerzas propias.
Tenemos próximo un ejemplo reciente en el secuestro del Alakrana.
Los marinos estaban dispuestos
para actuar en fuerza desde el helicóptero contra la embarcación que
huía de los secuestradores pero,
o bien no había reglas de enfrentamiento claras, o la orden llegó
deliberadamente tarde… si llegó.
Lamentablemente cuando se muestra la fuerza y no se utiliza, la disuasión pierde el crédito totalmente y los profesionales de la Armada
también y no por culpa de ellos.
— Desaparición de las personas.
No habrá cosa más ética que librar
batallas sin arriesgar la vida de las
personas. Para ello se tratará de
hacer buques, aviones y carros de
combate no tripulados de forma de
exponer al peligro el menor número
de personas. Esta es una realidad
que está haciendo modificar dramáticamente el diseño de nuestros
vehículos militares. En los EEUU se
pretende que en este año 2010 la
mitad de los aviones de ataque sean
no tripulados y en 2015 un tercio
de todos los vehículos de combate
de infantería.
— Desaparición del tiempo: Antes
los medios de comunicación, información y transporte establecían
un ritmo más lento, donde cabía
la respuesta meditada, la gestión
diplomática, el intercambio de
Hoy en día, hasta 47 países compran
aviones no tripulados (UAV ) a los
israelíes, que han visto multiplicarse la demanda mundial. La dotación
adicional a esos vehículos de armamento letal es algo que depende
del país comprador y un tema muy
delicado. Los ataques desde el aire
son un asunto tan opaco en EE UU
como en Israel. Desde el Ministerio
de Defensa español explican que los
Searcher que usan en Afganistán
se utilizan solo para inspeccionar
el territorio, no para disparar. En el
uso o abuso de estos medios entran
cuestiones éticas y desde la ONU ya
se alerta del peligro de la mentalidad “playstation” que pueden generar este tipo de aparatos, manejados con un simple mando desde
alguna oficina a miles de kilómetros
del campo de batalla. La asepsia
que rodea a las muertes a distancia
las convierte además en más digeribles para la opinión pública y, por lo
tanto, para el lavado de las propias
conciencias.
Por otro lado, el lógico objetivo de
hacer desaparecer al enemigo, a los
combatientes, se está poniendo difícil pues la población civil se lleva
la peor parte por el hecho de que
los combatientes, con frecuencia,
se esconden entre los civiles, para
evitar los ataques. Aunque esto no
se nuevo es una muestra más del
desprecio por la vida humana y la
trasgresión de las leyes y de lo difícil, en consecuencia, que es para
un militar evaluar con ética sus responsabilidades. Ético será utilizar
la información o inteligencia para
atacar solo objetivos sin civiles,
aunque desgraciadamente siguen
llegando noticias de “bajas colaterales” por errores en la asignación
de blancos.
Esta desaparición de los soldados,
supondrá la aparición de un nuevo
orden económico-militar internacional que se está imponiendo y es el
de la aparición de las fuerzas mercenarias y los robots, que nos harán
meditar sobre la ética de su empleo
y que se trata más adelante.
— Aparición de la guerra cibernética: Surgirán especialistas para el
9/11/10 17:11:44
Miguel Ángel Fernández y Fernández
ataque y la protección de los sistemas informáticos y el intercambio de los recursos de inteligencia.
No hay duda que resulta más ético
cargarse los sistemas informáticos
del enemigo que provocar el caos
destruyendo personas y medios de
transporte, energía, comunicaciones, sanidad etc. soportados por la
informática.
LA ETICA DE LOS ROBOTS
Ya se han inventado los generadores
automáticos de discursos políticos,
enlazando obviedades, lugares comunes y muletillas deformantes del
lenguaje con la pretensión de no decir nada con sentido y confundir al
ciudadano. Ya se ha inventado el robot-periodista que redacta noticias
con el sesgo político que se desee.
No podía ser menos que los robots
entrasen en el campo de lo militar.
La disminución de los soldados hará
necesario el empleo de robots. Esto
tendrá como consecuencia que los
robots militares que combatirán en
las guerras del futuro deberán ser
programados de acuerdo con un
estricto código militar para evitar
desmanes y atrocidades... propias
de seres humanos. O sea, programados con ética.
El Pentágono ha contratado a un
científico británico como asesor en
la construcción de robots soldados que no violen el convenio de
Ginebra, no torturen y se ajusten
“a las nobles normas del arte de la
guerra”. Según los expertos es hora
de aplicar la teoría ética y crear un
software que asegure que los robots
actúen correctamente de forma autónoma”. El Gobierno de los EEUU
se gastará en ello 4.000 millones de
dólares este año 2010.
247
Los técnicos hablan del riesgo de
que estos robots pudiesen volverse
en contra de los humanos ya que la
inteligencia acumulada en su interior está programada por muchas
personas que no conocen el programa completo y no pueden, por
tanto, predecir como interactuarían estos programas parciales en
el futuro. Están preocupados por la
creación de un “Robocop” que se
vuelva loco, no distinga civiles y
combatientes y mate a todo el que
Ángeles Maldonado. Saber Leer 17, 1988.
ferrol ana lisis 25.indd 247
9/11/10 17:11:45
ÉTICA Y MILICIA
248
se mueva. También se afanan para
proteger a los robots de los hackers, y les desvela el hecho de si
los robots deben ser programados
para defender su “vida” o tendrán
programas de auto-inmolación.
Hay, como se intuye, muchos asuntos éticos, legales, sociales que irán
al paso del progreso tecnológico en
este campo.
LOS MERCENARIOS,
LAS PMCs Y LA ÉTICA
Hoy en día, aceptamos la existencia de policías privados, servicios
privados de correos, agencias privadas que avituallan al Ejército en la
guerra, y tantos servicios públicos
más. Hemos “privatizado” precisamente todas aquellas responsabilidades que el Estado moderno echó
laboriosamente sobre sí en el curso
de los siglos XIX y XX.
F a curso gurméndez
La externalización de los servicios
básicos del Estado en relación a la
Defensa supuso un cambio en la estructura de los ejércitos. Los EE. UU.
y sus aliados con su escalada de acciones militares en la región de Asia
Central, desde el ataque a Afganistán
en Octubre de 2001, reformularon
los modos de actuación.
ferrol ana lisis 25.indd 248
En este sentido, la falta de reclutas,
las limitaciones de las leyes humanitarias y de la guerra, y las contradicciones internas de las sociedades
occidentales hacia el envío de sus
ciudadanos a combatir, llevaron a tener que emplear soldados privados,
principalmente para operaciones especiales, tareas de inteligencia y actividades policiales en zonas hostiles.
Yo me pregunto si se ha hecho esto
realmente impulsados por principios éticos o hubo intereses oscuros involucrados con las compañías
que establecieron ese gran negocio
que mueve montañas de dinero. Me
pregunto si es ético que para hacer
frente a las “contradicciones internas” de sus países, o sea: el antibelicismo, los mismos dirigentes que
toman la decisión de reducir los
militares profesionales y hacerse
la foto correspondiente, lleven las
riendas de los lucrativos negocios
de contratar mercenarios.
Entre las ventajas de la utilización
de estos ejércitos privados, se encuentra el vacío legal al respecto,
pues formalmente son civiles y no
pueden ser juzgados por la Justicia
militar. Al mismo tiempo, en sus
contratos se les asegura que no
pueden ser sometidos a la justicia
civil de los países en los que actúan.
Prácticamente se crea un campo de
impunidad.
Sin duda, este proceso de privatización de las guerras tiene una explicación lógica. Económicamente es
más rentable un soldado de fortuna,
al cual se le paga un buen sueldo
pero en caso de muerte no se da
indemnización a sus familiares.
Desde el punto de vista del reclutamiento y el entrenamiento, los gobiernos reciben al personal ya entrenado. Por su parte, al terminar
el contrato rompen el vínculo sin
tener que pagarles un retiro o jubilación de guerra o por invalidez.
La industria de las Compañías
Militares Privadas (PMCs) es muy
compleja y requiere, desde el punto de vista legal, administrativo, logístico y operativo, de profesionales
con años de experiencia en el sector y sólidas redes internacionales
de apoyo, basadas en la confianza
de los clientes que suelen ser, gobiernos democráticos legítimos.
Las PMCs son empresas legalmente
establecidas que obtienen un lucro
por facilitar ciertos servicios que
incluyen el ejercicio potencial de
la fuerza armada de un modo sistemático o la transferencia de ese
potencial a determinados clientes
mediante el adiestramiento y otras
prácticas, como el apoyo logístico,
provisión de equipos o la recolección
de inteligencia. Son funcionalmente
ejércitos mercenarios, no guardias
de seguridad o asesores. La mayoría
de los individuos utilizados por estas
empresas, son ex militares, policías,
agentes y analistas de inteligencia, y
personas capacitadas en diferentes
áreas de seguridad, planificación y
manejo de armas, aptitudes que los
trasforman en un recurso humano
adiestrado y apto para ser transformado en mercenario.
Las PMCs tienen su propia ética
profesional y según su “declaración de principios éticos y legales”,
la empresa” prestará servicios de
Defensa sólo a gobiernos legalmente constituidos y reconocidos” y no
los prestará a quién esté condenado por… narcotráfico, el terrorismo,
crímenes contra la humanidad, racismo o xenofobia, etc, etc.
Nuestra admiración por mantener
tan altos principios éticos flaquea
un tanto cuando nos enteramos de
que suelen instalarse estas PMCs
en paraísos fiscales como Gibraltar
donde existen cerca de 70.000 empresas concentradas en los 6,5 kilómetros cuadrados que ocupa el peñón (desde junio de 2000, Gibraltar
figura, por fin, oficialmente, en la
lista negra de los 35 paraísos fiscales identificados por la OCDE). En
fin, un negocio lucrativo, una industria que mueve anualmente 100 mil
millones de dólares. Entre las 90
empresas que realizan estas tareas
encontramos a algunas tan opacas
como Blackwater USA o Global Risk
Strategies. Actualmente en Irak hay
unos 18.000 mercenarios, de un total de tropas aliados de 190.000.
David Morales, antiguo Cabo de
Infantería de Marina, que fue mi
escolta personal en Bruselas, del
año 2001 al 2004, gran profesional
9/11/10 17:11:46
Miguel Ángel Fernández y Fernández
LA TORTURA
Al final de la segunda GM el ejército aliado denunció, juzgó y castigó
a los criminales de guerra, entre
los que estaban los torturadores.
También intelectuales, pensadores,
científicos denunciaron las torturas
de la Gestapo. Esto contribuye a la
idea de que no se puede justificar la
tortura ni en circunstancias de guerra ni por razones de seguridad. No
hay tortura oficial sin el cinismo y
la abyección de los dirigentes por
mucho que se refugien en la seguridad del estado.
De una forma general, desde el
punto de vista de los psicólogos,
se podría decir que nadie comete
una agresión en forma de vejación
homosexual si no lo es él mismo,
al menos de forma potencial. Este
individuo suele proceder de situaciones familiares que le provocaron el no haber acabado de manera
Un descerebrado en el mosaico ético y político del Líbano. 2010.
ferrol ana lisis 25.indd 249
normal y armónica su desarrollo,
así que las personas que adoptan
estilos de comportamiento anormales es porque eran ya anormales
con anterioridad. El acto de tortura
es parte de un estilo de vida en el
que la enfermedad está en el germen de esa violencia, dentro del
torturador.
249
Estas notas podrían terminar aquí
pero no sería ético por mi parte obviar el “otro” problema: el hecho
de que bajo la presión y del estrés
de la guerra, cualquiera puede ser
torturador. Esta es la conclusión
del estudio que se realizó sobre los
torturados de Abu Ghraib, motivado
por la perplejidad de los ciudadanos
norteamericanos que se preguntaban cómo se pudo llegar a eso.
F a curso gurméndez
muy condecorado, es hoy gerente
de UC Global, única PMC española y
cuenta con 30 colaboradores. Él se
fue porque un ascenso a sargento le
condenaba a un despacho aburrido,
tal como me dijo. Todos sus colaboradores dejaron las FAS por tres
motivos fundamentales: falta de acción, escasa promoción o progreso profesional y menguado salario.
Cada uno cobra en misión alrededor
de 10.000 dólares al mes. No demasiado, si se tiene en cuenta que se
juegan el físico, un riesgo algo más
elevado del que corren los que los
contratan, los que hacen negocio
con ellos.
9/11/10 17:11:47
ÉTICA Y MILICIA
F a curso gurméndez
250
ferrol ana lisis 25.indd 250
Agentes de seguridad fuertemente armados. 2010.
9/11/10 17:11:49
Miguel Ángel Fernández y Fernández
La sociedad exige que los individuos sean responsables de sus acciones pero la responsabilidad y la
ética social sugiere que también deberíamos exigir la misma responsabilidad de los superiores de esos individuos, los torturadores, que son
los únicos que son acusados de
comportamientos no-éticos.
La relación entre torturado y torturador la estudia magistralmente
Mario Benedetti en el drama teatral
“Pedro y el Capitán”, en el que la
actitud firme del desgraciado torturado provoca el derrumbamiento
psicológico del torturador.
En el año 2007 el Gobierno estonio retiró de su emplazamiento una
estatua que conmemoraba a los
muertos soviéticos en la II Guerra
Mundial. Piratas informáticos atacaron los servicios electrónicos de ese
pequeño estado Báltico en un ciberataque masivo que colapsó bancos
y organismos oficiales, impidiendo el acceso de Estonia a Internet.
Por supuesto que no hubo forma
de demostrar si detrás del ataque
estaba el Gobierno ruso o fue una
iniciativa espontánea. Supongo que
el daño causado habrá sido grande
pero siempre menor que si entrase
una legión de tanques destruyendo la bella y antigua ciudad de la
Hansa, Tallin. O sea, que, después
de todo, hay que estar agradecidos
al uso de estos nuevos principios
ético-cibernéticos.
El Centro fué visitado por SSMM los
Reyes de España el pasado año. La
idea de la creación del centro se
ofreció, bien lo sé, a las autoridades
españolas de defensa en 2004 , que
no se dignaron a considerar la propuesta. Sin embargo, hoy hay militares españoles trabajando allí, en
ese frío y lejano país de gente rubia
y de alta latitud.
También cuando en 2008 las tropas
rusas entraron en Georgia sus movimientos fueron precedidos semanas
antes por un ataque a las pag web
del gobierno georgiano, correspondiéndoles el dudoso honor de ser
el primer conflicto acompañado por
un ataque informático.
La situación mundial nos lleva a la
triste conclusión de que, para un
país como el nuestro, es imprescindible estar preparados, con nuestros aliados, para defendernos de
las amenazas, para un conflicto bélico de mayor o menor intensidad.
Desgraciadamente, la fuerza legítima del poder político democrático,
proporcionada y moderada, la que
ejerce el militar, sigue siendo necesaria. La milicia, por lo tanto, es un
grupo social necesario. Constituye
uno de los baluartes de la ética y
de la moral de un pueblo. Sus fines son altruistas, sus códigos están basados en el honor, el deber,
la disciplina, el espíritu de equipo,
el compañerismo. A este respecto,
es como un oasis en un desierto
social yermo de buenos sentimientos. Habrá que hacerles sentir que
su esfuerzo tiene un objeto, que su
sacrificio no es estéril. Habrá que
exigirles que actúen con ética pero
respaldarlos y sentirse orgullosos
de ellos, que sirven y mueren por
España, orgullosamente.
¿ÉTICA CIBER-N-ÉTICA?
Las amenazas cibernéticas son una
muestra de la vulnerabilidad de los
sistemas de la sociedad moderna y
por ende de sus fuerzas armadas.
Las infraestructuras vitales de un
país son muy vulnerables a un ataque informático, tal como la energía eléctrica, las finanzas, las telecomunicaciones, la sanidad, los
transportes, el agua etc.
De la prensa se lee que España sufrió más de 40 ataques informáticos
el año 2009, incluído el CNI. Hay un
punto de inflexión a partir del caso
Google que desveló la pugna que
mantienen, en la red, China y los
EEUU. El ordenador de J. Solana fue
violado cuando era Mr. PESC, por
“una gran potencia”.
ferrol ana lisis 25.indd 251
No deja de ser curioso que en 2004
Estonia, puso en marcha un ambicioso plan para crear un “Centro de
Excelencia” en guerra cibernética y
ponerlo a disposición de la OTAN,
como contribución agradecida al
reciente ingreso de ese país en la
Alianza. Por cierto que ese año, apenas diez años después de la caída
del muro, ese pequeño país, Estonia,
lleno de gente joven e inteligente,
superaba ya a España en número de
ordenadores por habitante. Dicho
Centro de Excelencia en cyber-defence se estableció en Tallin, con el
objeto de mejorar las capacidades
y coordinación de la OTAN y de sus
naciones. Fue puesto en marcha en
Mayo y bendecido por la OTAN en
Octubre del 2008, con el estatus de
Organización Militar Internacional.
251
España sigue ante el reto de su
protección ante un ciber-ataque
que pueda paralizar el país. Parece
que, oficialmente, todo el esfuerzo
se concentra en elaborar un manual de emergencia… En realidad,
un país como éste al que tanto repugna el uso de la violencia tendría
que estar en condiciones de usar la
cibernética como alternativa “ética”
al uso de la fuerza armada.
F a curso gurméndez
En el caso de Abu Ghraib se dieron
todas la condiciones de estrés, peligro, insultos de los civiles a quienes
aparentemente les protegen, camaradas muertos en ataques bárbaros,
imprevisibles, exigentes expectativas de los superiores interesados en
obtener resultados con urgencia y,
algo muy importante, que los torturadores creían en la legitimidad de
las órdenes superiores.
9/11/10 17:11:49
Descargar