Clásicos escolares Ponemos en vuestras manos esta colección de Clásicos Escolares, que responde al compromiso de la Consejería de Educación de la Junta de Andalucía por impulsar la lectura en el ámbito escolar y poner en marcha la publicación de ediciones escolares de obras clásicas en lengua castellana, con propuestas didácticas y dinamizadoras. El objetivo de esta colección de Clásicos Escolares es doble, por una parte fomentar el hábito lector en nuestro alumnado y por otra, llevar a las bibliotecas escolares andaluzas parte del riquísimo y variado acervo literario que poseemos. Es cierto que puede haber títulos infantiles y juveniles más cercanos a los intereses y gustos de los y las estudiantes, pero es importante que descubran la belleza de estas obras literarias clásicas por ser la herencia escrita que hemos recibido. Carlos García Gual dice: «Los clásicos deben estar en las aulas, porque a ningún ciudadano, ni a ningún grupo social le debemos sustraer el cono- 1 cimiento de un patrimonio cultural que es propiedad de todos…». La amplia nómina de escritoras y escritores seleccionados de distintos géneros literarios y diferentes etapas de la literatura en lengua castellana recogida en esta colección, y la aportación de las guías didácticas, harán de este trabajo un instrumento valioso y contribuirán al desarrollo de las competencias básicas y del gusto por la lectura. En este empeño, la labor del profesorado es de una enorme importancia al ser pieza fundamental en la formación presente y futura de lectores y lectoras, pudiendo acompañar a su alumnado a descubrir nuevas formas de creación literaria. Animamos e invitamos a toda la comunidad educativa a disfrutar con la lectura de esta obra, Mi ventana al mundo, al igual que nosotros lo hemos hecho con la gestión de este proyecto. La Consejería de Educación de la Junta de Andalucía 2 GUÍA DIDÁCTICA M.ª José Aguilar Orozco MI VENTANA AL MUNDO (Una antología) FRANCISCO AYALA Clásicos escolares © Guía didáctica: M.ª José Aguilar Orozco © Edición: Consejería de Educación de la Junta de Andalucía Coordinan: Dirección General de Ordenación y Evaluación Educativa y Asociación de Editores de Andalucía (Alicia Muñoz) Diseño gráfico: Forma Comunicación Maquetación: Ángel González Edición NO VENAL Depósito legal: MA-1521-2010 Impreso en España IMAGRAF IMPRESORES - Málaga Queda prohibida cualquier forma de reproducción, distribución, comunicación pública y transformación de esta obra sin contar con autorización de los titulares, salvo excepción prevista por la Ley. Para fotocopiar o escanear algún fragmento de esta obra, diríjase a CEDRO (Centro Español de Derechos Reprográficos www.cedro.org). INTRODUCCIÓN La presente propuesta didáctica pretende facilitar al profesorado y al alumnado de Educación Secundaria y Bachillerato un material de trabajo que propicie un estudio integrador del hecho literario, como expresión artística inserta en la compleja semiosfera cultural en la que nace y dialoga con otros discursos, a partir de la selección de relatos que integran esta antología. Esperamos que este acercamiento contribuya a que sus potenciales lectores y lectoras conozcan mejor la obra narrativa de Francisco Ayala. AYALA Y LA GENERACIÓN DEL 27 Francisco Ayala es uno de los principales narradores españoles contemporáneos. Vinculado al grupo poético del 27, siguió escribiendo a lo largo del siglo XX. El último relato, «El filósofo y un pirata», data de 1999. Su narrativa, no sujeta a encasillamientos, trata los temas universales: la condición humana, el origen de la vida, la reflexión sobre el poder, la muerte, el amor... Entronca con la gran narrativa del siglo XIX, nos ofrece los mejores relatos de la vanguardia hispánica, ilustra con Los usurpadores (1949) el camino de la narrativa de posguerra y nos ofrece en El jardín de las delicias un singular ejemplar de la narrativa posmoderna. La mayor parte de su obra literaria está formada por relatos cortos, agrupados y reagrupados en diferentes libros y en antologías como ésta. 5 • Para abordar la lectura con más claves sobre su autor, resulta de interés seleccionar aquellos datos sobre la vida y el contexto literario de su obra que sean significativos para la interpretación de cada relato. Para ello, si se dispone de acceso a Internet, se pueden consultar páginas web tales como la de la Biblioteca Nacional de España (http://www.bne.es), la de la Biblioteca Virtual Cervantes (http://www.cervantesvirtual.com) o la nueva página de su fundación (http://www.ffayala.es). En ellas se encontrarán interesantes datos. EL MUNDO NARRATIVO DE F. AYALA Breve semblanza de la selección y de su sentido El hecho de que el autor haya seleccionado estos relatos, pertenecientes a diversos libros, para conformar esta antología ya supone una orientación para su lectura, pues cada uno de ellos es complementado en su sentido por el resto, al enriquecerse su significación por la influencia del contexto literario, así como por el continuo diálogo con otras obras de arte en las frecuentes referencias culturales que pueblan sus páginas. 1. Antes de empezar... • Ayala poseía un dominio extraordinario del lenguaje y de los recursos narrativos, con un vocabulario culto capaz de describir desde las más sencillas anécdotas a los más complejos sentimientos con una impecable propiedad. Por esta razón, antes de iniciar las actividades propuestas a propósito de cada relato, tras una primera 6 lectura, es conveniente resolver todas aquellas dudas que impidan una total comprensión del texto. Para ello, además de leer con atención el glosario de términos que cierra esta guía, el alumnado debe consultar tanto diccionarios impresos como electrónicos en Internet (http://www.rae.es) para aclarar el significado de palabras y expresiones que desconozca, sustituyéndolas a continuación por sinónimos. • El título de la antología Mi ventana al mundo es acaso el paratexto más revelador y simbólico de esta obra. Don Francisco desde su particular «observatorio» nos presenta su visión sobre aspectos diversos del mundo. Procede ahora descubrir el sentido que encierra el título de cada uno de los relatos que la integran. 2. Leemos... Analicemos en primer lugar la forma de estos relatos: ¿coinciden en su estructura y secuencias con el relato tradicional? • Es necesario señalar cuál es el estado inicial de cada relato. Identificar y explicar el cambio (o cambios) que experimentan sus personajes. ¿Cuáles son las causas de estos cambios? En cuanto al final de cada relato: El escritor opta en la mayoría de los casos por dejarlo abierto o por dotarlo de una cierta circularidad, que incide en el carácter cíclico de la historia. • En el caso de «Un caballero granadino» lo hace 7 mediante una pregunta retórica. ¿Qué sentido tiene utilizar tal procedimiento? Elaborar individualmente otro final para este relato. • Raquel Gold, «La niña de oro», ¿seguirá enfadada con su viejo amigo? En grupo, continúan la historia de manera que cambie el sentido del relato. • ¿A qué dedicarán la siguiente jornada de turismo en Sevilla los protagonistas de «Postrimerías»? Ayala, como hemos comentado al principio, utiliza un lenguaje culto cargado de simbolismo y de registros diversos. Tras analizar cómo hablan los personajes del primer relato, se observa si éstos utilizan alguna palabra o expresión en desuso. En caso afirmativo, se procede a su sustitución. • En «Latrocinio», texto en el que desde la adultez se recuerda un episodio infantil: ¿qué registros (familiar, descriptivo, literario, simbólico...) utiliza el autor? Ilustrar la respuesta con ejemplos extraídos del relato. • Resulta significativa la destreza del escritor en el empleo de singulares metáforas que sintetizan magistralmente el sentido del relato. En «No me quieras tanto», ¿cómo se puede interpretar la respuesta del perrito, que «movía melancólicamente el muñón de su cola» a su dueña? El espacio Como relatos modernos, Ayala a veces sitúa la acción en un lugar real (Granada, Sevilla) y otras, en cualquier espacio posible. Se propone al alumnado que clasifique 8 los relatos según se sitúen en uno u otro espacio y que reflexione sobre en cuáles se dota a la trama de mayor verosimilitud. Los primeros años de Francisco Ayala se desenvolvieron entre su casa, el parvulario del Colegio de Niñas nobles y las casas de sus tíos Rafael y José García Duarte. Este último poseía también una farmacia (botica), en la que se desarrollará el relato «Latrocinio». • Resumir brevemente su argumento y explicar por qué ese lugar era una auténtica «cueva de las maravillas» para el niño. • Dada la huella indeleble que Granada dejó en la obra ayaliana, proponemos una visita a esta monumental ciudad, incluyendo en ella la ruta literaria que da a conocer los lugares en los que transcurrió su infancia y adolescencia. Un recorrido que parte de la calle Rector García Duarte (abuelo de don Francisco y protagonista del relato «Retrato de un caballero») y finaliza en la sede de su fundación. Para preparar la visita, sugerimos rescatar de su web (http://www.ffayala.es/uploads/media/planoGranada_Ayala.pdf) un plano de la ciudad que destaca los lugares vinculados con el autor. • A propósito de algunos de los relatos que se sitúan en Sevilla, se puede organizar una visita al Alcázar, una residencia mandada a construir en 1364 por Pedro I, protagonista de «El abrazo», y al Hospital de la Caridad, cuyo recorrido turístico es ficcionado por Ayala en su relato «Postrimerías», y en el que cabe la posibilidad de contemplar los cuadros de Murillo y de Valdés Leal, 9 objetos de admiración de sus protagonistas. • Resulta asimismo interesante buscar referencias a estas ciudades andaluzas en los relatos de esta antología y explicar la imagen asociada a ellas: realista, mítica, idealizada... • El jardín es un lugar de especial significación en la narrativa ayaliana. Nos recuerda al Edén bíblico al que todo ser humano anhela volver. Se insta al alumnado a que relacione el espacio en el que se desarrollan los relatos «A las puertas del Edén» y «Nuestro jardín» con aquel espacio mítico. El tiempo, en su transcurrir, constituye un tema central en la obra ayaliana. De hecho, el conjunto de su obra narrativa –según la crítica y el mismo Ayala– puede considerarse como un viaje que el escritor realiza en el tiempo, no sólo en el suyo sino en el del ser humano y en el cíclico de la humanidad. Pasado y presente van de la mano en su obra narrativa, unas veces por medio del recuerdo del personaje-narrador que nos traslada a la infancia; otras, desde una experiencia adulta. • El alumnado debe localizar indicaciones temporales precisas, que le permitan, si no fijar la fecha exacta en que transcurre el relato, relacionar su trama con el tiempo que pasa. • ¿Cómo logra el autor, sobre todo en aquellos relatos nostálgicos en los que remite a la niñez, la tensión temporal «presente-pasado»? En «Lloraste en el Generalife», el narrador en primera 10 persona (supuestamente el autor) predica a Carolyn: «El tiempo huye, lo sabes, [...] el tiempo no se deja capturar en una fotografía, como tampoco cabría encerrarlo en las estrofas de un soneto, ¿para qué, entonces, tanto afanarse en vano?». • ¿A qué tópico literario hace referencia el contenido de este relato? • Este tema ha sido preocupación constante en muchos escritores de todas las épocas. Centrándonos en la poesía de Antonio Machado, seleccionar poemas que expresen esta angustia temporal. Personajes e instancia narrativa. A nuestro autor le atrae especialmente el uso de la primera persona, pues le permite jugar con la ambigüedad entre narrador y autor, tanto más cuando somos conscientes de la frontera tan difusa que separa la experiencia vivida de la creación poética. Por otra parte, el uso del «yo» responde a la visión ética que inspira su narrativa, pues presenta al ser humano como un ser «moralmente» responsable. • ¿Qué tipo de narrador emplea en cada relato? En aquéllos narrados en primera persona, intentar relacionar esta focalización con el supuesto carácter autobiográfico del texto. • En «La barba del capitán» y en «Postrimerías», la mujer (narradora en el primer caso y uno de los personajes más compasivos de la narrativa ayaliana; interlocutora de la instancia narrativa y figura central de la pintura de Murillo, en el segundo) representa el amor en su 11 vertiente compasiva. En grupo, el alumnado ilustra esta afirmación con ejemplos extraídos de estos relatos. • El escritor opta en cada caso por un tipo de personaje: histórico, literario, o creación ficcional propia. Se justifica la elección en relación con el sentido último de cada relato. Formas textuales: la descripción y el diálogo. Como en el caso de la obra cervantina, es constante la presencia del diálogo en los relatos de Ayala, que no solo permite presentar diversos puntos de vista sino que da dinamismo a la narración. • Sintetizar los rasgos característicos de un buen diálogo. • Por su parte, el relato «Nuestro jardín» se abre con la descripción de un cuadro pintado por la madre del autor, en el que se plasma la imagen de un jardín de especial significación para el granadino. El alumnado aportará fotografías o cuadros de algún rincón emblemático de la localidad y hará una descripción, que posteriormente encuadrará en un relato en el que protagonice alguna aventura juvenil. • En el caso de «Retrato de un caballero», se razona si se muestra realmente un retrato de su protagonista. Cada alumno/a elaborará una etopeya de una persona a la que admire. Imágenes recurrentes y tono. «La barba del capitán», relato perteneciente a Historia de macacos, posee 12 un evidente carácter cómico-grotesco. • Se analizan los procedimientos empleados (comparaciones, hipérboles, juegos de palabras...), prestando especial atención a la acumulación de rasgos caricaturescos y deformantes así como al empleo de adjetivos. • En «La niña de oro» el texto se muestra bastante irónico en sus planteamientos. Identificar qué mecanismos emplea el autor para transmitir esa ironía. • El origen y el sentido de la existencia humana han constituido la raíz de mitos y religiones y un motivo recurrente en la narrativa ayaliana. Concretamente, ciertos episodios bíblicos son especialmente fecundos en su obra: nos referimos a los capítulos del Génesis que aluden a aquel paraíso perdido, al que desde entonces todo ser humano desea retornar. Relacionar los relatos «Nuestro jardín» y «A las puertas del Edén» con ese paraíso terrenal, símbolo de la felicidad y del bienestar. • También en el invernadero de aquel Edén familiar había un árbol: un naranjo enano, cuyos frutos solo pueden ser contemplados. Conectar las características de este singular ejemplar con ese otro árbol plantado en el Edén: el Árbol de la Ciencia o del Conocimiento del bien y del mal. • El motivo de la enemistad entre hermanos es casi tan antiguo como la humanidad. Caín y Abel no solo son hijos de la primera pareja, sino que simbolizan la naturaleza humana, el bien y el mal. Explicar cómo «El abrazo» ilustra varios momentos de aquella sagrada historia, así como los sentimientos que provocaron el fratricidio. 13 • Por otra parte, la Biblia ha dejado también sus huellas en la lengua, en multitud de giros y frases hechas: «ganar el pan con el sudor de la frente», «Doctores tiene la Iglesia...», «ser el ombligo del mundo». El alumnado explicará el sentido de estas frases y buscará al menos dos más de uso frecuente. • La cabeza, la mano y la mirada son imágenes recurrentes y de gran valor simbólico en estos relatos. Detallar el significado de estos motivos tras la lectura de «La barba del capitán» y «El abrazo». • La influencia de la personalidad de la madre deja una huella imborrable en Ayala, influencia que se hace patente a lo largo de su obra. Tras la lectura de los relatos de esta antología, seleccionar aquellos pasajes en los que esta figura cobra protagonismo. 3. Ayala, un escritor «comprometido» La función primordial de la obra ficcional era para Ayala la expresión artística de una visión de la realidad y, entendida la lectura como una experiencia vital que nos configura al igual que otras, los relatos de esta antología nos permiten reflexionar sobre la condición humana, con sus miserias y sus valores, sobre el paso del tiempo, sobre la libertad, sobre el poder... • El alumnado ha de expresar con brevedad el tema de cada relato, tras resumir oralmente su argumento a partir de la selección de los hechos más importantes. • Tras la lectura de los relatos «Un caballero granadino», «Retrato de un caballero» y «Postrimerías», se 14 subrayan los valores humanos que don Francisco destaca. • El alumnado presentará los modelos humanos a quienes les gustaría imitar por sus cualidades personales o por su éxito social. • Ayala nos recuerda constantemente que el ser humano se animaliza cuando se abandona a sus instintos. Ilustrar esta afirmación tras la lectura del relato «La barba del capitán». • Como reconoce el autor en la introducción a esta antología, abundan en sus escritos las intervenciones de personajes caninos, en muchas ocasiones sujetos o testigos de hechos degradantes. ¿Qué simbólica protesta protagoniza la relación posesiva que viven los personajes de «No me quieras tanto?». • Partiendo de que la libertad es la condición esencial del ser humano. ¿Cómo se entiende la decisión de la protagonista de comprar un animal de compañía? • Ella teme a los ladrones. ¿El temor a la delincuencia que hay en las calles limita nuestra libertad? • Tras consultar la Carta Universal de los Derechos Humanos y la Constitución Española en vigor, extraer aquel articulado en el que se hable expresamente de la libertad. «El poder ejercido por el ser humano sobre su prójimo es siempre una usurpación». Esta afirmación podría sintetizar el tema de Los ursurpadores, obra a la que pertenece el relato «El abrazo», y que viene a recordarnos cómo la guerra civil vive en el corazón del ser humano, 15 incapaz de comprender al prójimo. Un tema que trasciende a toda la humanidad. • Describir los personajes históricos que intervienen en este relato. • Seleccionar algún texto que, como el caso de «El abrazo», ficcione momentos especialmente convulsos en la historia de la humanidad. • ¿Por qué Ayala opta por ficcionar este tema a partir de sucesos históricos lejanos y no desde la Guerra Civil, un conflicto fratricida del que fue testigo directo? • Investigar las razones que hicieron que no pocos escritores españoles, entre los que se halló Francisco Ayala, tuvieran que exiliarse tras la guerra civil de 1936-39. • ¿Se advierte en estos relatos, como en otros escritores, una toma de partido del autor ante la realidad que ficciona? 4. Referentes culturales e interdiscursividad Un escritor de estirpe cervantina Ayala es un escritor que se inspira en la tradición literaria española. Precisamente, el relato «Un caballero granadino» nos remite a la obra de este otro insigne escritor español. • Tras localizar la referencia, se procede a establecer la relación que los vincula. Para ello, se puede acceder a la obra cervantina en http://cervantesvirtual.com, o en http://cervantes.alcala.es/obras.html • Después de consultar una edición de El Quijote y de 16 leer el episodio en el que aparece don Álvaro Tarfe, coprotagonista de «Un caballero granadino» (capítulo LXXI. De lo que a don Quijote le sucedió con su escudero Sancho yendo a su aldea), se compara el encuentro narrado en este capítulo con el del relato ayaliano. • ¿Qué personajes dialogan? ¿De qué hablan? ¿Son personajes históricos, literarios o ficcionales creados por Ayala? • Analizar los sentimientos que les embargan y los valores éticos que resalta el autor, a partir del perfil con que se nos presenta don Álvaro Tarfe, el personaje creado por Avellaneda. • Azorín narra en «Al margen del Quijote» lo que pudo ser la vida de don Álvaro tras el encuentro con don Quijote. Imaginar un destino para este particular personaje y relatar su historia. • Resultaría interesante crear un foro de debate sobre «La trascendencia del Quijote», en el que cada alumno/a participe, tras redactar su intervención apoyándose en la presencia del Quijote en Internet. • Localizar el romance del duque de Rivas sobre el fratricidio del campo de Montiel y señalar semejanzas y diferencias con el relato «El abrazo». • A partir de la siguiente afirmación: «Las coincidencias temáticas de la obra de Ayala con la de otros señalan una experiencia verdaderamente humana», en grupo, el alumnado realizará un informe en el que diferencien los conceptos de recreación, influencia y plagio. 17 Interrelación de las artes. El cine es un subgénero narrativo, al que Francisco Ayala dedicó ya a principios del siglo XX un brillante estudio, Indagación del cinematógrafo (1929). En el relato «El abrazo», la narración literaria se contamina de la cinematográfica. • Localizar los fragmentos en que esta contaminación cobra mayor entidad. • El cine se ha ocupado en multitud de ocasiones de conflictos bélicos y de sus consecuencias. Proponemos la descarga de Youtube y el visionado del cortometraje: 1939, del realizador andaluz J. Antonio Barrero, adaptación del relato ayaliano que sirve de epílogo a Los usurpadores: «Diálogo de los muertos». A continuación, el alumnado puede buscar información sobre esta adaptación y establecer las relaciones entre ambos discursos artísticos en un debate, en el que además ilustren el tema con otras películas que aporten datos interesantes para el conocimiento de la historia y de la literatura. • Otro discurso artístico omnipresente en la narrativa ayaliana es la pintura, por la que desde pequeño se siente especialmente atraído, gracias a la influencia materna. Varios de los relatos de esta antología incorporan alusiones a obras pictóricas. Después de localizarlas, explicar las relaciones interdiscursivas que se establecen entre cada relato y las pinturas contempladas. • Tras la lectura de «Postrimerías», nos situamos en la Sevilla de Valdés Leal y de Murillo (siglo XVII) para justificar por qué fue una de las grandes ciudades de aquel momento. 18 En este relato, los turistas protagonistas contemplan el cuadro Finis gloriae mundi (1672) de Valdés Leal y Santa Isabel de Hungría de Murillo. Por grupos, el alumnado buscará información sobre estos cuadros y sobre sus respectivos autores para exponerla en clase. El cuadro de Valdés Leal está inspirado en el Eclesiastés, libro que lleva a la reflexión sobre lo pasajero de los bienes temporales. Teniendo en cuenta que Ayala no incorpora de forma gratuita las referencias artísticas, procede conectar los mensajes de ambos cuadros con el del relato. Relación con otros autores. Nuestro escritor conoció a Juan Ramón Jiménez y a Federico García Lorca, a los que califica: de reservado, cauteloso e intelectualmente complicado al primero y de espontáneo, eruptivo e infantil al segundo. • Se sugiere la selección de algún poema o fragmento de la obra de estos poetas para ilustrar esta aproximación ayaliana al perfil de estos dos andaluces universales. Para profundizar en ellos, recomendamos la consulta a las webs de sus respectivas Casas Museo. Ayala en su libro de memorias relata cómo llegó por primera vez a la tertulia de Ortega y Gasset y cómo a partir de entonces acudiría asiduamente y en ella conocería a María Zambrano, Victoria Ocampo, Ramón Gómez de la Serna, entre otros. • Resultaría interesante la búsqueda de información sobre las tertulias literarias y, en especial sobre la de 19 Ortega y algunos de sus contertulios, para elaborar, posteriormente, una exposición del tema dirigida al alumnado de otro grupo. Finalmente, se puede conectar esta información con los actuales foros virtuales y las redes sociales. • Otro destacado escritor con el que el granadino tuvo relación fue con J. L. Borges. El portal Amigos de Borges (http://amigos-de-borges.net/site/espanol/hacedor/noticias.php) recuerda esta relación. Se comenta lo que resulte más significativo de esta literaria «amistad». • En la web: http://www.literatura.org/Borges, podemos descargar el relato «Fundación mítica de Buenos Aires» y comentar la importancia de esta ciudad en el exilio de F. Ayala. ¿En qué otras ciudades vivió en ese tiempo? 5. Re-Creaciones • A partir de uno de los relatos, se propone que el alumnado realice varias reinvenciones de la historia, alterando alguno de los elementos constituyentes: el narrador, el espacio, el tiempo, algún personaje... • Cada alumno/a elige el relato que más le haya gustado y elabora un marca-páginas alusivo. • El centro puede convocar un Certamen literario, cuyo lema sea: «Ayala y yo», en el que participe el alumnado con recreaciones literarias a partir de relatos ayalianos o con relatos que integren la referencia a alguna obra de arte. • Como cierre al certamen literario, se pueden trabajar 20 aleluyas a la vida y muerte de Francisco Ayala, para ser recitadas o distribuidas en forma de pergamino en el acto de entrega de premios. • Cualquier hecho cotidiano sirve a Ayala para plantear el sentido último de nuestra existencia, como hemos podido comprobar con la lectura «La niña de oro». En su libro de memorias Recuerdos y olvidos son innumerables las anécdotas que el escritor relata. Sugerimos la elaboración de un anecdotario ilustrado con los casos más curiosos. POR SI QUERÉIS SEGUIR LEYENDO... Esta antología puede ser el punto de partida o un alto en el camino para la lectura de otras obras de Francisco Ayala. En todas ellas, se encontrá una prosa elegante y rica, además de la reflexión en torno al misterio de la existencia del ser humano y de la condición humana. Invitamos a que se sigan leyendo, en primer lugar, sus relatos vanguardistas: «Susana saliendo del baño», «Polar, estrella», «El gallo de la pasión»..., cuyo lirismo y tono hemos podido apreciar ya en algunos de los relatos de esta antología. También animamos a leer algunas de las novelas ejemplares cervantinas y su obra magna, Las aventuras del ingenioso hidalgo Don Quijote de la Mancha; así como pasajes del Génesis que están en la base de nuestro imaginario colectivo y que encierran importantes claves de nuestra cultura, omnipresentes —como hemos podido comprobar— en la narrativa ayaliana. 21 GLOSARIO DE TÉRMINOS Y EXPRESIONES Un caballero granadino • Aldaba (p. 13): pieza metálica de hierro o bronce que sirve de llamador, golpeándola sobre la puerta. • Apócrifo (p. 13): falso, supuesto, fingido, que se le atribuye a un autor «sagrado», sin que pertenezca a su pluma. • Justas (p. 13): combate en el que dos contendientes se enfrentaban a caballo y con lanza, que se celebraron para amenizar la fiesta de San Jorge. • Vuesa merced ( p. 12): tratamiento de cortesía. Equivale al actual «usted». La barba del capitán • Alusiones procaces (p. 25): referencias atrevidas, desvergonzadas, que se hacen de algo de forma indirecta y breve. • Andaba medio corrido (p. 20): andaba avergonzado. • Aversión (p. 23): antipatía o repugnancia exageradas hacia algo. • Burda (p. 16): que no tiene delicadeza ni sutileza. • Castrense (p. 21): relacionado con la vida o la profesión militares. • Chacota cuartelera (p. 16): broma, burla de mal gusto. • Denostar (p. 22): desacreditar u ofender gravemente y de palabra. 22 • Desopilante (p. 24): divertido o que causa risa. • Francachelas de hombres (p. 21): reuniones para comer, beber y divertirse de forma ruidosa y desordenada. • Inconciliable (p. 16): que no se puede armonizar o conciliar. • Rechifla (p. 17): burla o ridiculización de algo. • Regocijo (p. 24): alegría, satisfacción manifiestas. No me quieras tanto • Atusar (p. 28): alisar o arreglar el pelo. • Gabancillo (p. 28): abriguito. • Tentaciones libidinosas (p. 27): impulsos relativos a los placeres sexuales. La niña de oro (En la memoria, prevalece el espíritu sobre la carne) • Mal fisonomista (p. 31): que no tiene facilidad para recordar a las personas por el aspecto de su rostro. • Prevalecer (p. 31): dominar o tener superioridad o ventaja. • Volátil (p. 31): inconstante, mudable. Retrato de un caballero • Camafeo (p. 35): figura tallada en relieve en una piedra preciosa de gran dureza. • In illo tempore (p. 35): en aquel tiempo, en otro tiempo. • Self-made man (p. 34): hombre que se ha hecho a sí mismo. 23 Nuestro jardín • Balaustrada (p. 45): muro de media altura que sirve de elemento decorativo o barandilla. • Oblonga (p. 45): forma alargada, elíptica, ovalada. A las puertas del Edén • Anodino (p. 55): insustancial, insignificante. • Cavilar (p. 52): Pensar de forma profunda y minuciosa, a veces con preocupación. • Matinée (p. 51): prenda de abrigo confeccionada en lana. • Orondo (p. 50): de mucha concavidad, hueco o barriga. • Ponderaciones (p. 50): exageraciones de algo. Latrocinio • Aprensión (p. 60): miedo exagerado a contagiarse de alguna enfermedad o a sufrir algún daño. • Biselados (p. 58): con bisel: corte oblicuo en el borde de una superficie. • Latrocinio (p. 61): hurto o robo. • Ominosa (p. 60): azarosa, de mal agüero, abominable. • Postergar (p. 63): aplazar, posponer • Rebotica (p. 59): pieza o habitación que está detrás de la principal en una botica o farmacia. Lloraste en el Generalife • Admonición (p. 65): amonestación 24 • Futilidad (p.65): cosa inútil o de poca importancia. • Prédica (p. 65): sermón o plática. Postrimerías • Postrimerías (p. 66): último período o últimos años de vida de una persona.Final. El abrazo • Acíbar (p. 95): amargura (sentimientos). • Admoniciones (p. 73): advertencias. • Angostura (p. 70): estrechamiento. • Anuencia (p. 80): consentimiento o conformidad. • Arcediano (p. 87): en la religión católica, canónigo con categoría de dignidad, que ejercía jurisdicción delegada del obispo en determinado territorio. • Ayo (p. 87): persona encargada en una casa principal del cuidado o educación de un niño o joven. • Bailes sarracenos (p. 104): bailes de los musulmanes. • Baldón de ignominia (p. 80): afrenta u ofensa de deshonor o vergüenza pública. • Barranca (p. 70): barranco. • Belleza tan fementida (p. 91): belleza tan engañosa o falsa. • Bregar (p. 83): trabajar con esfuerzo. • Brida (p. 87): abrazadera, ligadura. • Cohonestar su usurpación (p. 105): justificar o hacer parecer como buena una acción reprobable: la usurpación. 25 • Debelando a su hermano (p. 102): venciendo a su hermano. • Deferente (p. 77): respetuoso, amable. • Delación de su falsía (p. 79): acción de delatar su falsedad. • Desdorar (p. 98): deslucir o menoscabar la reputación o el prestigio. • Estupor (p. 81): asombro. • Exangüe (p. 78): que está sin sangre. • Facinerosos (p. 86): delincuentes habituales. • Gajes (p. 79): compromisos (de palabra). • Giraba su balumba sobre una perinola (p. 104): giraba el bulto de cosas sobre una peonza pequeña. • Harpía o arpía (p. 89): persona mala o perversa. • Jaeces de escarlata (p. 80): adornos de las caballerías de color rojo intenso. • Justillo (p. 90): prenda interior femenina sin mangas, que ciñe el cuerpo hasta la cintura. • Lascivia (p. 91): inclinación de una persona habitualmente dominada por un deseo sexual exagerado. • Llorar hieles (p. 100): llorar de irritación o de amargura. • Maceros (p. 81): hombres que en las ceremonias llevan la insignia de dignidad semejante a una maza. • Magín (p. 90): imaginación. • Mujer artera (p. 90): mujer astuta. • Plática (p. 73): charla. • Prerrogativas (p. 79): privilegios o derechos que alguien tiene en razón de su cargo o condición. 26 • Prevenciones (p. 89): advertencias, preparaciones anticipadas para evitar un riesgo. • Risa extemporánea (p. 94): risa que se produce en un momento inadecuado, inconveniente. • Tábano (p. 71): insecto parecido a la mosca, de mayor tamaño, que suele picar a las caballerías. • Talabartero (p. 86): persona que fabrica y vende correajes y guarniciones de cuero. • Turba azacaneada (p. 86): muchedumbre de gente agitada, movida (violenta). 27