Los nuevos anuncios de la DGT –“Únete a nosotros. Únete a la vida”– más impactantes LA CAMPAÑA, PASO A PASO DISTANCIA DE SEGURIDAD J.I.R./M.L. Paul Alan PUTNAM Fotos: La campaña de la DGT para 2004, “Únete a nosotros. Únete a la vida”, trata de concienciar con sus cinco espot sobre velocidad genérica y específica, distancia de seguridad, cinturón y casco, de que la seguridad vial es una labor de todos y de que cumpliendo las normas se pueden evitar los accidentes o, al menos, sus peores consecuencias. Junto a imágenes impactantes, mostramos otras del rodaje, aderezadas con trucos y efectos especiales. erder la paciencia mientras se conduce puede llevar a un desenlace fatal. El joven de la imagen se arrima al coche que le precede y presiona para que le deje paso. Una maniobra inesperada de un tercer vehículo le obliga a frenar y, literalmente, se estampa –lo hace un especialista, claro– contra el coche que va delante. Pero, como en los demás espot, hay una segunda oportunidad: consciente de su nerviosismo, se separa del que le precede y así puede frenar a tiempo y continuar felizmente el viaje. ◆ P TRÁFICO 20 Mayo-junio 2004 CASCO rneses, colchonetas... la especialista repite saltos inversosímiles. El resultado final es muy creíble: dos jóvenes que viajan en moto se golpean la cabeza contra el suelo: una muere y la otra queda herida... no llevaban casco. Minutos antes se planteaban no ponerse el casco: “Pasando ¿no?...si son diez minutos... a mí es que me agobia muchísimo Uffff...” En la segunda oportunidad, la conductora le responde: “Ya, pero...póntelo, en serio”. Gracias al casco, aunque salen despedidas al interponerse un coche en su trayectoria, se salvan. La voz en off es común a todos los espot: Antes de poner excusas a tu seguridad, piénsalo. ◆ A CINTURÓN Y SILLITAS b r o c h a r correctamente al niño con el cinturón de seguridad, o no, –lo mismo que sus padres– es la diferencia que marca dos resultados distintos. El niño protesta cuando le colocan en la sillita para abrocharle el cinturón. “¡Déjalo!... si vamos aquí al lado” , señala el padre, que tiene prisa. Primero, la madre desiste y el niño sale despedido como un proyectil al chocar contra otro coche... y muere. Afortunadamente, hay otra posibilidad, el ejemplo a seguir: la madre hace caso omiso del “consejo” del padre y del llanto del niño y le sujeta en la sillita con el cinturón. Resultan ilesos. En las imágenes puede apreciarse distintas secuencias, la más espectacular la del muñeco que simula al niño, cuando sale catapultado. ◆ A TRÁFICO 21 Mayo-junio 2004 VELOCIDAD GENÉRICA aquillaje para la muerte, muertos que son muñecos, rampas para volar, grúas para elevar el ojo de la cámara... todo se pone a punto para la función: Una pareja viaja por la autovía con sus dos niñas pequeñas, de vacaciones. El padre quiere llegar cuanto antes y protesta cuando una de sus hijas pide agua: “Hemos parado ya tres veces... ¡Así no vamos a llegar nunca!”. Acelera, se pone a 150 km/h y trata de adelantar, mientras se escucha a la niña “¡Joooo! ¡...es que quiero agua!”. El giro de volante es demasiado brusco: roza el muro de la mediana y vuelca. Sólo sobrevive el padre, que respira con dificultad, mientras se escucha su voz: “¡Así no vamos a llegar nunca!”, palabras con las que se vuelve, tras un fundido, al momento en que estaba acelerando: levanta el pie del acelerador para acomodar la marcha al límite de velocidad permitido y adelanta sin problemas. ◆ M VELOCIDAD ESPECÍFICA na pareja viaja por una carretera secundaria mientras charla de forma distendida. Encuentran una señal de curva y de velocidad limitada a 60 km/h, pero el coche sigue a 90. “¿No has visto la señal?... ¿y si vas un poco más despacio?” , señala la chica. “Este camino me lo hago yo con los ojos cerrados...” , responde el conductor que, con cierto orgullo, encara la curva sin reducir la velocidad.... En el rodaje, el coche encara una rampa con las ruedas del mismo costado, lo que permite la filmación del coche dando varias vueltas de campana. La cámara enfoca a la pareja malherida, mientras se oye “...este camino me lo hago yo con los ojos cerrados...” y se vuelve a la escena de la señal, pero esta vez el conductor aminora la marcha –“...tranquila...”– y el coche se aleja sin problemas.◆ U TRÁFICO 22 Mayo-junio 2004