programa mexicano

PROGRAMA MEXICANO
Como ya es tradicional en la Tercera Temporada de la OFUNAM, el 12 y el 13 de
septiembre disfrutaremos el Concierto de Música Mexicana, siempre cercano a
nuestras fiestas Patrias, que no sólo se limita a los tradicionales éxitos que tanto
gustan y que por supuesto no estarán ausentes del mismo. Pero en su permanente
intención de difundir las obras de nuestros compositores la OFUNAM hace una
importante labor de difusión de autores y obras poco difundidos, tratándose en
ocasiones de verdaderos rescates musicales.
Este concierto cumple como pocas veces esa doble misión: difundir y divertir.
GONZALO CURIEL
¿Quién no ha escuchado maravillosas canciones populares de GONZALO CURIEL?
¿Quién no ha tarareado en la regadera la famosísima Vereda Tropical, una de las
canciones más cantadas y grabadas por diferentes intérpretes? Para generaciones tal
vez no tan recientes, las canciones compuestas por CURIEL acompañaban la vida
cotidiana, se escuchaban en la radio, después en la TV y en todo tipo de fiestas y
reuniones. Por suerte, sus grandes méritos en la creación de boleros y otros géneros,
fueron reconocidos durante su vida y, como otros autores de su tiempo, componía
canciones que unos días después estarían en boca de todos: Incertidumbre, Un gran
amor, Traicionera, Morena linda, Calla tristeza, Caminos de ayer y una lista
interminable. Además, Curiel musicalizó cerca de 200 películas, incluso algunas muy
populares en su tiempo, que incluyen varias con el inolvidable Cantinflas. Pero lo que
pocos saben es que GONZALO CURIEL tuvo estudios musicales desde su niñez y
que las circunstancias de vida lo llevaron al mundo de la música vernácula, antes que
al de la música clásica. Pero a lo largo de su vida, cuando podía escribía música de
concierto. Tal vez las más notorias de ellas son nada menos que ¡Tres conciertos para
piano! Elaborados en tres movimientos cada uno, es decir, concebidos como obras
mayores y no un pequeño divertimento.
El pianista RODOLFO RITTER, uno de nuestros más destacados intérpretes
actuales, está realizando un loable proyecto de investigación, rescate, interpretación y
grabación de obras para piano y para piano y orquesta de compositores mexicanos
que por diversas circunstancias han permanecido guardadas u olvidadas en archivos,
se han perdido, a veces para siempre, o permanecieron inconclusas o necesitadas de
una edición crítica; incluso obras y autores que habían sido ignorados por las
programaciones habituales. La labor de RITTER comienza a rendir frutos, pues
además de hacer obtenido un apoyo fundamental en una marca disquera
internacional cada vez más importante, Sterling, ha editado ya los primeros
ejemplares de este proyecto, con obras de Manuel María Ponce y de Ricardo Castro,
en ambos casos, difundiendo música que para muchos interesados en la música
mexicana pertenecían más a la leyenda que a la realidad musicológica. Ahora
RITTER nos ofrece como solista de la OFUNAM una de las mayores sorpresas de la
temporada: el Concierto para piano núm. 2 de GONZALO CURIEL . El
compositor era un músico inquieto que lo obligaba a estar esterado del acontecer
musical de su tiempo y sin olvidar su propio mundo musical, el que conocemos por
sus canciones, era evidente que absorbía el lenguaje de otros compositores
internacionales de su tiempo. De ahí que algunos encontrarán la influencia de los
compositores rusos más importantes de su tiempo y cuya influencia podría sentirse
levemente en obras como está. De ahí que se trata de una música de gran atractivo
musical para el oyente y sin duda, de grandes dificultades de virtuosismo para el
solista. Uno de los reestrenos más importantes de estos tiempos y una obra obligada
para todos los interesados en la música.
El Concierto Mexicano de la OFUNAM ofrece otras dos sorpresas especiales,
ubicadas en los extremos del acontecer musical:
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ARMANDO LUNA
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ARMANDO LUNA fue uno de los nuevos compositores más importantes de México.
Fallecido hace unos meses, a los 50 años, en plena ebullición creadora, creó un
mundo propio, usando y reinventando los lenguajes de su tiempo, pero aportando un
sentido lúdico, divertido (“neo-desmadrista”, decía él mismo) que lo mismo le
permitía utilizar ritmos y temas de la música popular, sobre todo mexicana, que
romper con los conceptos habituales de creación, incluso de los más modernos y
vanguardistas. Collage es una obra singular, que como su nombre sugiere está
conformado con múltiples sonoridades y géneros, así no nos extrañe escuchar un
Revueltas con ritmos del jazz o al Romeo y Julieta de Tchaikovski impedidos por
Varese de consumar su amor. Y por supuesto, un Collage no puede ser sino libre,
variado, disperso, en una mezcla de los elementos más heterogéneos y eso es la obra
que escucharemos de ARMANDO LUNA, donde los más variados pasajes
musicales, sin relación entre sí suceden unos a otros, se anteponen, se enfrentan
luchando por sobresalir para ser reconocidos entre un aparente pero divertido caos;
algunas piezas serán irreconocibles, otros momentos serán inconfundibles. El propio
Luna decía, refiriéndose a otra de sus obras, pero que pareciera aludir a ésta: “es
como un aquelarre de brujas que hicieran una orgía musical”; por supuesto, un
compositor de una eterna visión juvenil de la música con un gran sentido del humor,
casi siempre ausente de la música. Y, por encima de todo, el talento unificador de
ARMANDO LUNA, una de las mayores pérdidas que ha tenido recientemente la
música mexicana y de quien esperábamos aún las mayores aventuras de su
prodigiosa y divertida mente creativa.
JOSÉ ROLÓN
En cambio, con JOSÉ ROLÓN, compositor jalisciense, activo sobre todo en la
primera mitad del siglo XX, estamos en terrenos aún casi nacionalistas, influido, sin
embargo por la enseñanza de Paul Dukas y Nadia Boulanger y rezagos de Maurice
Ravel. ROLÓN no fue demasiado prolífico, sin embargo, su catálogo incluye algunas
obras mayores que es imprescindible que sean más difundidos. Hay al menos una
sinfonía, un Concierto para piano (grabado hace demasiados años para que se pueda
escuchar bien actualmente y que pronto volveremos a escuchar bien, pues es parte de
los planes del ya mencionado proyecto de RODOLFO RITTER. Compuso también
un importante cuarteto de cuerdas y varios poemas sinfónicos: El festín de los
enanos, y es el que ha corrido con mayor suerte, hay varias grabaciones y
ocasionalmente aparece por las salas de concierto. En este programa tendremos la
suerte de escuchar Zapotlán, obra de orígenes nacionalistas, pero como se dijo,
pasada por el tamiz de la gran imaginación musical de ROLÓN además del
maravilloso colorido de su orquestación. El mundo nacionalista mexicano pasado por
los hallazgos sonoros de la música europea del siglo XX. Otra obra novedosa, que
pocos habremos tenido la oportunidad de escuchar anteriormente y que no hay que
perderse ante la novedosa idea de OFUNAM de programarla en su Tercera
Temporada 2015.
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REVUELTAS Y CHÁVEZ
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Y por supuesto en este programa de música mexicana no podrían faltar dos de los
grandes triunfos de nuestra música. La obra más genial y brillante de SILVESTRE
REVUELTAS, Sensemayá, que una vez más desata su prodigioso arsenal de
percusiones, sus ritmos frenéticos y comienza un ritual obsesivo que, siguiendo el
singular poema de Nicolás Guillén en el que se basó REVUELTAS, emprender por
los bosques la persecución y muerte de la peligrosa culebra Sensemayá. Y
finalmente, la OFUNAM interpretará la obra más conocida y “popular” de CARLOS
CHÁVEZ, otra de las figuras tutelares de la música mexicana. La Segunda de sus seis
sinfonías, que recibió el sobre nombre de Sinfonía india y en raras ocasiones es
nombrada por su orden numérico. La obra está basada en temas de diferentes
culturas indígenas de México, huicholes, seris y yaquis, unidos de manera muy
especial, logrando CHÁVEZ una unidad singular, pues independientemente de la
unidad que posee la obra en un aparente único movimiento, posee internamente la
estructura en las tres partes obligadas de una sinfonía. Además, la obra tiene temas
genéricos de la cultura musical mexicana en general y algunos pasajes que,
obviamente, fueron compuestos plenamente por CHÁVEZ. Destaca la obra
también, como en el caso de la Sensemayá de Revueltas, por su gran cantidad de
percusiones, en este caso muchos que son auténticos instrumentos indígenas como
teponaxtles, tlapanhuéhuetl, cascabeles, guiros y otros; pero también por su frenético
y obsesivo final, todo un dechado de ritmos y manejo orquestal.
El concierto estará dirigido por IVÁN LÓPEZ REYNOSO el talentoso director
asistente de la OFUNAM y los conciertos serán como de costumbre, en la
esplendorosa SALA NEZAHUALCÓYOTL, los sábados a las 20:00 horas y los
domingos a las 12.00 horas.