Repertorio Americano

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Alegría, Claribel (seud.) 1. (1951). ¿Estoy viva o ya ... 2
Repertorio Americano, 47(1), 12.
¿ESTOY viva o ya he muerto acaso?
Nadie parece verme.
Todos hablan, hablan, hablan
cosas que yo no entiendo.
Ceñida de crepúsculos y lunas
oigo pasar el tiempo.
¿Lo oyes tú, amado?
Es como el mar en fuga por aldeas dormidas.
Mis oídos retumban
Y un afán de misterio me roe el corazón.
No puedo abrir la sombra.
Manos recién abiertas me golpean las sienes.
Tiemblo por dentro, tiemblo…
El miedo silencioso se me arrolla a la lengua
y se pueblan mis ojos de fantasmas.
¿De qué sirve mi grito si no me escucha nadie?
Van y vienen las gentes
(hombres, mujeres, niños).
Todas pasan sin verme.
Debajo de mi frente la soledad me abrasa.
Groveton, Alexandria, Va. U.S.A. 1950
1 Nombre de la autora: Clara Isabel Alegría Vídes, 19242 Poesía inédita.
Alegría, Claribel (seud.)1. (1952). 3 sonetos. Repertorio
Americano, 47(24),370.
3 Sonetos
¿De qué lejana y encendida altura
bajó el amor hasta tocar mi puerta?
Surgió desnudo entre la sombra yerta
y amaneció en mis labios su dulzura.
Su palabra cuajada de ternura
es en mi sangre tibia flor abierta.
Arcángel que en mis venas se despierta
y borra de mi voz toda amargura.
Atada estoy al mástil de su nave
por la húmeda caricia de hondos lazos…
Al filo de su voz salta la llave
que guardaba la angustia de mi verso.
Por él arrullo al mundo entre mis brazos
y aspiro en una rosa el universo.
II
Celebremos Amor esta alegría
de asomarnos los dos a la ventana
y oír al mismo tiempo la campana
que anuncia con su canto un nuevo día.
Todo nace otra vez en armonía
con la primera luz de la mañana.
A pesar de sentirme tan humana.
hay algo de celeste en mi alegría.
Abre mi corazón, ahí la sombra
sus nocturnos propósitos anida
en un rincón que la tristeza escombra.
1 Nombre de la autora: Clara Isabel Alegría Vídes, 1924-
Pero míralo bien. Llega hasta el fondo
en un remanso oculto de tan hondo
se aclara el arroyuelo de mi vida.
III
Amo tu condición de hombre sereno
y ese gesto que llevas escondido
en una zona oculta del sentido
como llevó su llanto el Nazareno.
Es un humilde gesto de hombre bueno
que llena de jilgueros el olvido.
Vence mi corazón escarnecido
Y transforma en amor todo veneno.
A veces se te pierde y no se asoma
a iluminar tu rostro con su aroma
de clara serranía o de campana.
Yo lo puedo atisbar con alegría
cuando en tus ojos su temblor me espía
y nacen rosas de mi sombra humana
México, D.F., 1952
Alegría, Claribel (seud.)1. (1942). A veces siente.
Repertorio Americano, 39(6), 88.
A veces siente
A veces siente el alma la tristeza del día,
de los días que están en profunda agonía,
de los días que pasan sin dar nada a la vida,
ni siquiera el impulso de alguna ala tendida.
Tristeza de bejuco que en el pecho se enreda,
y que sube hasta el alma por sangrienta vereda,
tristeza de los días que no tienen calor,
que no dejan un gozo ni una herida con flor.
Es tan honda y amarga que no cabe en un canto,
más honda que el abismo, más amarga que el llanto,
la tristeza del día que pasa por la vida,
sin dejar el aroma de una rama florida.
Santa Ana, 1942
1 Nombre de la autora: Clara Isabel Alegría Vídes, 1924-
Alegría, Claribel (seud.)1. (1943). Al fondo del estanque… Repertorio Americano, 40(20), 316-317.
Al fondo del estanque veo brillar mi anhelo,
pez de plata agitado en fantástico vuelo,
brilla tanto la llama de su mágica vida.
que parece que incendia hasta el agua dormida.
Quiero pescarlo a veces con mi atrevido anzuelo,
mas es hondo el estanque, tan hondo como el cielo,
no baja hasta su fondo mi red atormentada,
pero siempre que baja regresa iluminada.
Espero que mi anhelo tenga alas algún día
y suba hasta mis manos radiante de alegría,
yo no puedo pescarlo con mi atrevido anzuelo,
porque el estanque es hondo, tan hondo como el cielo.
Setiembre 22. 42.
1 Nombre de la autora: Clara Isabel Alegría Vídes, 1924-
Alegría, Claribel (seud.)1. (1946). Alma mía, despierta...
Repertorio Americano, 42(18), 276.
Alma mía, despierta,
despierta de tu sueño y mira hacia la vida,
yo he visto hace un momento de la cumbre del día,
el corazón del mundo destrozado y abierto.
En sus heridas hondas corre sangre de fuego,
que arrasa troncos fuertes y árboles en flor,
sangre del hombre mismo, alma mía pequeña,
del hombre que es tu hermano y es el hijo de Dios.
Al escuchar sus gritos sentí un temblor extraño,
un temblor aguzado que me inundó de llanto,
la misma tierra dura se estremece al oírlo,
y tú estás ignorando su profundo dolor.
Despierta ya, despierta,
no puedes dormir más en esta hora de angustia,
es la sangre del hombre la que grita en el suelo,
y no tienes derecho a ignorar su lamento.
Despierta de tu sueño, alma mía pequeña,
y vela con el mundo que está rojo y abierto.
Hammond, N. O., 1944.
1 Nombre de la autora: Clara Isabel Alegría Vídes, 1924-
Alegría, Claribel (seud.)1. (1942). Alma mía,... Repertorio
Americano, 39(12), 183.
Alma mía,…
Alma mía, sombra de lo desconocido,
mariposa de luz, perfume de la rosa,
dime: cuando yo duermo tú abandonas mi nido,
cuéntame adónde vas, mi leve mariposa.
¿Vas a pescar ensueños a una isla ignorada
o viajas por el mundo conociendo el dolor?
dí si has ido al oriente, mi mariposa alada,
si conoces el alba y el país de la flor.
A veces yo te siento llegar de un viaje largo
y aletear en mi pecho con un latido intenso
y otras veces yo escucho que tu acento es amargo,
mas no entiende mi oído tus palabras de incienso.
Habla claro a mi cuerpo, pajarita de sueño,
mariposa de luz, perfume de la rosa,
haz que entienda tu voz mi corazón pequeño,
cuéntame adónde vas, mi leve mariposa.
Santa Ana, El Salvador, mayo de 1942.
1 Nombre de la autora: Clara Isabel Alegría Vídes, 1924-
Alegría, Claribel (seud.)1. (1945). Antes de que la
noche... Repertorio Americano, 42(17), 261, 268.
Antes de que la noche, bajara hasta la tierra
fuí hasta ti, Madre mía, cortando las distancias.
Nunca te había visto más bella que ese instante,
tenías la frente en alto, y la mirada ausente.
Yo contemplé en silencio tu silueta alargada,
que parecía a veces, la voz de una oración
y me acerqué en puntillas, para hablarte al oído
y embriagarme al aroma de tus cabellos sueltos.
Toda tú estabas llena de una esencia sagrada,
nunca te había visto más bella que ese instante,
casi no pude hablarte, no encontré las palabras,
un estupor inmenso me cerraba los labios.
¿No sentiste mi aliento, cuando estuve a tu lado?
Yo no sé cuánto tiempo te contemplé en silencio,
tengo los ojos llenos de tu imagen profunda,
y el anhelo infinito de estrecharte en mis brazos.
Quiero besar tus manos, Madre mía del alma,
y apoyar en tu pecho mi cabeza cansada,
Nueva Orleáns, 1944.
1 Nombre de la autora: Clara Isabel Alegría Vídes, 1924-
Alegría, Claribel (seud.)1. (1947). Aquí estoy otra
vez... Repertorio Americano, 43(13), 208.
Aquí estoy otra vez,
encerrada en mi anillo de silencio…
Queriendo adivinar la voz del mundo
que llega a mí confusa.
Oigo de lejos al dolor,
no sé el canto del gozo.
Una pared de niebla me rodea
y es de fuego mi angustia.
Ven a mi ayuda, viento,
rompe mi cárcel leve
y llévame a una isla sin murallas
donde pueda escuchar todas las voces.
1 Nombre de la autora: Clara Isabel Alegría Vídes, 1924-
Alegría, Claribel (seud.)1. (1942). Canto al amor.
Repertorio Americano, 39(6), 88.
Canto al amor
Tu voz en el alma, suena a maravilla,
es canto que arrulla y nos da calor,
es canto que tiene la gracia sencilla,
del ala y la nube y el árbol en flor.
Todos en el mundo, te anhelan, amor,
la raíz dolida y el tallo que sube,
el niño y el hombre y tal vez la nube,
quieren que sus vidas se inflamen de amor.
Amor que llenas de ensueño y que engrandeces la vida,
Amor que te has aprendido de una ronda del astra,
ya despertaste mi alma con tu canto de cristal
y te siento sobre el pecho como rama florecida.
Santa Ana, 1942.
1 Nombre de la autora: Clara Isabel Alegría Vídes, 1924-
Alegría, Claribel (seud.)1. (1945). Coge entre sus manos… Repertorio Americano, 42(17), 261, 268.
COGE entre sus manos, divino alfarero,
este vaso roto que tú modelaste,
y llena sus bordes del mágico vino,
que embriaga por dentro y enciende la vida.
Pobre vaso oscuro, sediento y vacío,
hoy lo ví al pasar caído en el suelo,
no brilla en su fondo ni una luz pequeña,
ni tiembla ante el canto del agua y del viento.
Nada lo conmueve, ni el beso de un niño,
ni el vuelo infinito de la noche azul,
ni las nubes blancas, ni el ala tendida,
ni el milagro inmenso de la tierra en flor.
Está como muerto en la sombra intensa,
sólo tú lo puedes despertar, Señor,
sólo tú le puedes encender la vida,
con el vino fuerte de una honda emoción.
Cógelo en tus manos, divino alfarero,
y vuelve sus ojos a la luz del sol.
1 Nombre de la autora: Clara Isabel Alegría Vídes, 1924-
Alegría, Claribel (seud.)1. (1947). ¿Cómo podré escaparme de la sombra?...Repertorio Americano,
43(13), 208.
¿Cómo podré escaparme de la sombra?
¿Hallar un asidero en qué apoyarme?
Se escurre de mis labios la oración
y no tengo otra cosa que mi llanto.
Como un cáliz vacío está mi cuerpo.
Voy sin rumbo en la tierra. ¿Y hacia dónde?
Soy fantasma extraviado, en agonía,
y espero la presencia de la luz.
La luz como una hostia que me llene,
una puerta de escape en las tinieblas.
Daré por ella lo que yo más quiero,
el tesoro caliente de mi sangre.
1 Nombre de la autora: Clara Isabel Alegría Vídes, 1924-
Alegría, Claribel (seud.)1. (1942). Danza de sangre y
de colores... Repertorio Americano, 39(6), 88.
Danza de sangre y de colores…
Danza de sangre y colores
lleva sobre el mundo, el fuego,
que va retorcido y ciego
repartiendo sus fulgores.
Fuego, elástico y ritual,
despierta mi corazón,
quémalo y no le hagas mal,
haz florecer su emoción.
Tú, que eres dueño del mundo,
Tú, que eres viva oración,
despierta mi corazón
y házmelo fuerte y fecundo.
Mi corazón que es sencillo,
hoy te presiente y te clama,
fuego que te haces ovillo
y te largas en la llama.
Tú eres látigo de amor,
eres el dios danzarín,
apura, fuego carmín,
ven a darme tu calor.
Santa Ana, 1941.
1 Nombre de la autora: Clara Isabel Alegría Vídes, 1924-
Alegría, Claribel (seud.)1. (1942). Danza del dolor.
Repertorio Americano, 39(19), 300.
Danza del dolor
Danza el dolor en el suelo
con paso rojo y fecundo,
danza el dolor sobre el mundo
y es su danza como el vuelo.
Danza lóbrega y profunda,
eres un grito del cielo,
un grito rojo de anhelo
sobre la tierra fecunda.
Con paso firme y letal,
trazas círculos de fuego
y eres danza, como un ruego
que se eleva en espiral.
Danza roja de dolor…
clama el mundo tu presencia,
eres la mágica esencia
de la herida y de la flor.
Danza lóbrega y profunda,
eres un grito del cielo,
un grito rojo de anhelo
sobre la tierra fecunda.
1 Nombre de la autora: Clara Isabel Alegría Vídes, 1924-
Alegría, Claribel (seud.)1. (1949). De mí nace la angustia… Repertorio Americano, 45(20), 308.
De mí nace la angustia…
Surge así de improviso,
con sus raíces de aire,
su cintura de fuego
y los brazos informes como ramas sin hojas.
¡Quisiera asesinarla!
Ella me ahoga el canto.
Desbordando agonía,
me escondo entre la sombra
y tropiezo con voces,
cadáveres de voces
que hieren como dagas.
Desamparada, exhausta,
sin lágrimas que ardan en mi pupila insomne
me dejo a la intemperie.
El viento conmovido,
estremece a la tierra.
En los EE.UU. Agosto 1949.
1 Nombre de la autora: Clara Isabel Alegría Vídes, 1924-
Alegría, Claribel (seud.)1. (1943). De ti, tierra sangrienta...
Repertorio Americano, 40(20), 316-317.
De ti, tierra sangrienta,
tierra sonora y muda,
de ti se ha levantado un viento enardecido,
un viento de alas anchas que lleva entre sus dedos,
la dolorosa flecha de tu infinito llanto.
Este día se siente volar sobre nosotros
y cada ser del mundo le lleva tu mensaje,
tu mensaje sangriento, indefinido y húmedo,
se lo lleva a los hombres, y a las bestias con hambre,
y a la nube que pasa,
y a las plantas del bosque que en su retiro largo también se despedazan.
Se lo lleva a los ríos que corren hacia el mar,
a la dicha inocente del pájaro que vuela
y a los lagos ocultos en su silencio gris.
A todos nos reclama, oh tierra grande y rota,
algo que nunca has visto a través de los siglos,
un minuto de paz para tu seno abierto.
Un minuto de paz pide la voz del viento que es hijo de tu pena,
del fondo de ti misma se levantó cantando,
tiene las alas anchas y trae entre sus dedos,
la dolorosa flecha de tu infinito llanto.
Santa Ana, marzo de 1943.
1 Nombre de la autora: Clara Isabel Alegría Vídes, 1924-
Alegría, Claribel (seud.)1. (1949). Debo partir…
Repertorio Americano, 45(20),308.
Debo partir, amado,
En mi esquife de luz me internaré en la sombra.
He tocado en mis sueños inmensas lejanías.
Mi corazón se afana.
Me llevo tu recuerdo.
Podré verte en el oro de las tardes de otoño,
en los grandes navíos que vienen de la aurora,
en las riberas hondas del silencio.
Espera mi retorno.
Voy a volver a ti en la danza del mar.
Con tu estandarte de gritos y de lágrimas
me golpeas el alma.
En los EE.UU. Agosto 1949.
1 Nombre de la autora: Clara Isabel Alegría Vídes, 1924-
Alegría, Claribel (seud.)1. (1942). Dentro de mí...
Repertorio Americano, 39(6), 88.
Dentro de mí
Dentro de mí se agita un pensamiento extraño,
quisiera darle vida y expresarlo en canción,
pero es asustadizo mi pensamiento huraño,
no quiere ver la vida, no quiere ser canción,
Yo quisiera entregarlo a la tierra fecunda,
yo quisiera que el fuego le enseñara a ser fuerte
y que el agua le diera su poesía profunda
y lo llevara el viento más allá de la muerte.
Pero es asustadizo mi pensamiento huraño,
no quiere ver la vida, no quiere ser canción,
dentro de mí palpita como un temblor extraño
y siento que en mi cuerpo hay otro corazón.
Santa Ana, 1942
1 Nombre de la autora: Clara Isabel Alegría Vídes, 1924-
Alegría, Claribel (seud.)1. (1945). Dentro de ti…
Repertorio Americano, 42(17),261, 268.
DENTRO de ti, gran tiempo,
tiempo enorme y fugaz,
dentro de ti la vela que dormía en mi cuerpo,
hinchó sus velas claras y despertó a la vida
temblando de esperanza ante el azul misterio,
ante el misterio inmenso que se estremece en ti.
y que vibra escondido en todo lo que existe,
en el hombre, en el árbol, en el viento que silba
y hasta en la piedra tosca que adorna los caminos.
En busca de él va mi nave, tiempo enorme y fugaz,
en busca de él va mi nave envuelta en tu soledad.
envuelta en el largo abrazo de tus días sin calor,
que pasan en remolino sin escuchar su gemido.
Hondo gemido de miedo el de mi nave pequeña,
que se desgarra de angustia ante la noche fantasma,
hondo alarido alargado que rompe a veces la niebla
y se estremece de dicha ante la luz de un instante.
Dentro de ti gran tiempo,
tiempo enorme y fugaz,
dentro de ti navega mi fugitiva nave,
dentro de ti se hincharon sus asombradas velas,
en busca del misterio que palpita en tu seno,
del misterio infinito que se estremece en ti,
y que vibra escondido en todo lo que existe,
en el hombre, en el árbol, en el viento que silba
Y hasta en la piedra tosca que adorna los caminos.
En busca de él va mi nave, tiempo enorme y fugaz,
en busca de él va mi nave envuelta en tu soledad.
1 Nombre de la autora: Clara Isabel Alegría Vídes, 1924-
Alegría, Claribel (seud.)1. (1942). Elogio del cuerpo.
Repertorio Americano, 39(6), 88.
Elogio del cuerpo
Mi cuerpo es un vaso cálido y sagrado,
que jamás el lodo debe profanar,
es un don precioso que me han otorgado
para que mi alma se pueda expresar.
Crece en él mi vida, crece y se desliza,
mi vida es un fuego que me hace vibrar,
no dejes, Señor, que sople la brisa
y apague la llama que quiere volar.
Mi cuerpo es un vaso con sed de belleza,
cálida vivienda me has dado, Señor,
para dar refugio a la gran tristeza
que va por el mundo sin sentir calor.
Es deuda de siglos esta deuda mía,
es deuda del cuerpo para ti, Señor,
deja que la cumpla, dame la alegría
de hacer de mi vida, hoguera de amor.
Santa Ana, 1941,
a mis 16 años.
1 Nombre de la autora: Clara Isabel Alegría Vídes, 1924-
Alegría, Claribel (seud.)1. (1943). En medio de la
noche… Repertorio Americano, 40(20), 316-317.
En medio de la noche palpitante de gozo,
llora mi corazón el más hondo sollozo,
llora suave, en silencio por el dolor del mundo,
quiere romperse a veces en un grito profundo.
Llora mi corazón el más amargo llanto
y se sabe impotente para lanzar su canto,
está presa en el alma la canción dolorida
y con dedos de fuego le destroza la vida.
Quiere salir del alma por una herida abierta,
quiere salir volando por la sangrienta puerta,
y en medio de la noche palpitante de gozo
llora mi corazón el más hondo sollozo.
Santa Ana. (El Salvador,) febrero de 1943.
1 Nombre de la autora: Clara Isabel Alegría Vídes, 1924-
Alegría, Claribel (seud.)1. (1951). Este poema…
Repertorio Americano, 47(9), 142.
Este poema…
¿Qué angustia, Oh Dios, es ésta?
¿Qué angustia de neblina me turba el corazón?
Día a día me acecha.
Día a día la siento: obstinada, segura,
entre un duelo creciente de auroras y crepúsculos,
hundirme su estilete
y proyectar su frío.
Es antigua mi angustia!
Me vino de mis padres en fuga secular.
La llevarán mis hijos!
Y mecida en un fondo de lágrimas y cruces
seguirá su trayecto sin que falte jamás.
Angustia del pecado!
De aquel primer pecado que nos hizo ser hombres.
…Ser hombres y no Dioses!
Como un hondo suspiro me cuelga de los ojos.
¿La ves, Madre, la ves?
Ni el agua del bautismo,
ni el oro de la infancia,
ni la savia ardorosa del cuerpo adolescente,
ni la cita secreta que tuve con el canto,
ni el grito del amor,
ni la eterna alegría de haber creado un hijo
han podido borrarla.
Angustia del pecado.
De aquel primer pecado por el que soy humana.
Me desfleca los sueños,
y engendra en mi vida raíces de humedad.
1 Nombre de la autora: Clara Isabel Alegría Vídes, 1924-
¿Dónde iré con mi angustia?
Mirándome de adentro me empuja hacia el dolor.
Si pudiera matarla,
precipitarla,
hundirla,
pero hace tanto tiempo que la amo!
México, Junio, 1951
1 Nombre de la autora: Clara Isabel Alegría Vídes, 1924-
Alegría, Claribel (seud.)1. (1946). Estoy fatigada...
Repertorio Americano, 42(18), 276.
ESTOY fatigada,
anoche en mis sueños anduve por largos caminos,
escalé montañas profundas
y llené mis manos del oro que había dejado la tarde.
Amanecía a mi regreso,
El viento,
un viento alegre,
se guardaba en los pliegues las estrellas de plata.
Todo estaba en calma,
sólo yo corría con el pelo suelto
y los labios húmedos de cantos silvestres.
No me hables ahora,
quizás en silencio recuerde mi salto a la tierra.
1 Nombre de la autora: Clara Isabel Alegría Vídes, 1924-
Alegría, Claribel (seud.)1. (1945). Gracias, Dios mío…
Repertorio Americano, 42(17), 261, 268.
GRACIAS, Dios mío, por haber nacido,
gracias por el milagro de la vida,
por el ala tendida, por el viento,
y por la llama roja y palpitante.
Gracias te doy porque me diste un cuerpo,
que expresa a medias lo que el alma siente,
y por la flecha aguda de mi anhelo,
que vibra de emoción a cada instante.
Yo soy feliz porque nací en el mundo,
y poseo en mis manos su tesoro,
es mía la riqueza de la tarde,
y el canto del mar y de la aurora.
También es mío el árbol florecido,
y los astros azules de la noche,
la profunda embriaguez de las montañas
y la voz del silencio en la llanura.
Toda esa maravilla está a mis plantas;
porque tú la creaste para el hombre,
y en nombre de él vengo, Dios mío,
a darte gracias por haber nacido.
1 Nombre de la autora: Clara Isabel Alegría Vídes, 1924-
Alegría, Claribel (seud.)1. (1946). Hay días en que
siento... Repertorio Americano, 42(18), 276.
HAY días en que siento en la distancia
la voz de un canto que responde al mío,
tiene el ritmo profundo de los mares
y es ingenuo y dorado como el trigo.
Yo lo busco anhelante en el espacio,
y tiendo a él mi tembloroso ruego,
pero es inútil mi inquietud, inútil
y se pierde en la sombra mi lamento.
Hay noches que lo siento en mi amargura
y voy tras él llamándolo sin tregua,
pero es en vano mi ansiedad, en vano,
y el alma sigue sola entre la niebla.
A veces me pregunto con angustia,
si nunca ha de llegar hasta mi vida,
y si yo iré tras él eternamente,
sonámbula de llanto y de fatiga!
1 Nombre de la autora: Clara Isabel Alegría Vídes, 1924-
Alegría, Claribel (seud.)1. (1943). Hermanos de Europa… Repertorio Americano, 40(20), 316-317.
Hermanos de Europa,
yo soy un alma amiga que sufre con vosotros,
he sentido en el viento vuestras voces profundas,
en el viento que viene de jugar con los cuerpos sangrientos y tostados,
he sentido el lamento, y el golpe de hierro y el grito de angustia
que a todos os desgarra y os une en abrazo.
Me desangro por dentro,
y a veces le confío con manos temblorosas mi fraternal mensaje
a la proa infinita del viento de la noche,
otras veces lo digo llorando a las estrellas,
a las altas estrellas que nos miran a todos,
y me quedo vibrando al calor infinito de una vaga esperanza,
talvez hay un oído que recoja mi canto.
Me desangro por dentro,
no puede haber ahora un corazón sin llanto,
une más a los hombres el dolor que la dicha,
somos almas amigas, hermanos de Europa,
nos ha traído el viento vuestras voces profundas
y el golpe de hierro y el grito de angustia
que nos desgarra a todos, en doloroso abrazo.
Setiembre 22. 42.
1 Nombre de la autora: Clara Isabel Alegría Vídes, 1924-
Alegría, Claribel (seud.)1. (1947). Me escaparé. Repertorio
Americano, 43(13), 208.
Me escaparé
¿De qué otro mundo vengo?
Recuerdo una playa lejana…
Cuando me acerco al mar
mi corazón se ensancha.
Soy extraña en la tierra
(¿Lo adivinas?)
Vine a buscar mi canto.
Aléjate de mí…
Cuando encuentre la voz de las cosas eternas,
me escaparé, sin huellas, con el viento.
1 Nombre de la autora: Clara Isabel Alegría Vídes, 1924-
Alegría, Claribel (seud.)1. (1943). Mi corazón arquero… Repertorio Americano, 40(20), 316-317.
Mi corazón arquero embriagado de fuerza,
disparó al infinito su flecha milagrosa,
has de llegar, le dijo, en delirante salto,
hasta tocar los astros de música radiosa.
Y la flecha subió rompiendo las distancias
y aprendió de los astros la celeste lección,
vió los mundos de sueño, palpitantes de gracia,
se embriagó de colores y vibró de emoción.
Sintió cerca el misterio, lo quiso atravesar
y se rompió en pedazos, la flecha enardecida.
Hoy no importa que llores, mi corazón arquero,
sólo el amargo llanto refrescará tu herida.
Santa Ana, noviembre de 1942.
1 Nombre de la autora: Clara Isabel Alegría Vídes, 1924-
Alegría, Claribel (seud.)1. (1946). Mi esperanza de
oro... Repertorio Americano, 42(18), 276.
Mi esperanza de oro
salió a ver la tarde,
un vuelo azul de palomas
ceñía el aire dormido.
Mi esperanza de oro
se asomó a la noche,
un incendio de luceros
se estremecía en la tierra.
Mi esperanza de oro
quiso ver el alba,
una campana atrevida
adelgazaba el silencio.
1 Nombre de la autora: Clara Isabel Alegría Vídes, 1924-
Alegría, Claribel (seud.)1. (1942). Mi secreto. Repertorio
Americano, 39(12), 183.
Mi secreto
Yo guardo en mi vida un hondo secreto,
lo supe en la playa, lo escuché al azar,
estaba jugando con un amuleto
y oí cuando el viento se lo dijo al mar.
La voz le temblaba al viento poeta,
de sus labios finos voló como un canto,
tenía el embrujo de una luz discreta
y estaban sus notas pobladas de llanto.
¿Quién se lo diría al viento andariego,
el agua del río, la luna curiosa,
las nubes errantes, el árbol, el fuego,
o sería el alma sutil de la rosa?
Yo no sé quién fué, no lo dijo el viento,
sólo sé que es mío mi secreto de oro,
del fondo de mi alma emerge su acento,
sólo yo lo escucho, es mi gran tesoro.
Por eso es tan puro mi hondo secreto,
porque no es del mundo, lo supe al azar,
estaba jugando con un amuleto
y oí cuando el viento se lo dijo al mar.
Santa Ana, El Salvador, mayo de 1942.
1 Nombre de la autora: Clara Isabel Alegría Vídes, 1924-
Alegría, Claribel (seud.)1. (1946). No cierres la puerta… Repertorio Americano, 42(18), 276.
No cierres la puerta,
ven a ver el agua saltando descalza,
ven a ver el agua que baja del cielo profundo
y enciende en el viento su canto!
Yo siento algo hermoso este día,
como si un temblor subiera de adentro a mis labios
y quisiera abrirse en palabras hondas
y danzar, danzar con la lluvia blanca
que da su mensaje a los hombres.
Estoy embrujado oyendo el secreto que me dice el agua!
Todo tiembla afuera,
todo está en suspenso esperando el signo que ya se presiente.
Abre las ventanas,
y mira la lluvia corriendo descalza en la tierra.
1 Nombre de la autora: Clara Isabel Alegría Vídes, 1924-
Alegría, Claribel (seud.)1. (1946). No me sigas, sombra… Repertorio Americano, 42(18), 276.
NO me sigas, sombra,
iré sola con el viento,
iré a regiones altas donde tú no subes.
iré hablar con el silencio.
Espera mi regreso.
Volveré, sí, volveré,
espera mi regreso aquí en la orilla.
¿No sientes en la playa una presencia de alas?
Mira el mar cómo se abre,
se adivinan en sus aguas corredores invisibles.
Espera, sombra, espera,
volveré con el día, iluminada.
1 Nombre de la autora: Clara Isabel Alegría Vídes, 1924-
Alegría, Claribel (seud.)1. (1942). Oye mi voz, Señor…. Repertorio Americano, 39(20), 319.
Oye mi voz, Señor…
Oye mi voz, Señor, mi voz estremecida,
que se eleva hasta ti por la escala del viento,
recógela en tus manos y escucha su acento
que es triste como el canto de una tórtola herida.
Escúchame, Señor, mi alma está vacía,
yo siento que la duda ya me tiene vencida,
tengo miedo de mí, de perder mi alegría,
quiero un poco de fe que me encienda la vida.
Una gota, Señor, de tu fe milagrosa
derrama sobre mi alma que ahora está vacía,
y verás como se abre como cálida rosa
y eleva hasta ti sus notas de alegría.
Oye mi voz Señor, mi voz estremecida,
que es triste como el canto de una tórtola herida.
Santa Ana. El Salvador.
Setiembre de 1942.
1 Nombre de la autora: Clara Isabel Alegría Vídes, 1924-
Alegría, Claribel (seud.)1. (1947). Por el mundo.
Repertorio Americano, 43(13), 208.
Por el mundo
¡Qué distraída voy por el mundo,
por esta feria inmensa!
Sigo el canto del viento
y me detengo emocionada ante las cosas.
Mi corazón aventurero
no descansa jamás.
A él le gusta asomarse por las almas
y percibir su brillo.
La luz lo transfigura,
él espera un milagro a cada instante.
Entre las voces hondas del espacio,
ha escuchado su eco y lo persigue.
1 Nombre de la autora: Clara Isabel Alegría Vídes, 1924-
Alegría, Claribel (seud.)1. (1946). Qué estrecha se me
hace el alma… Repertorio Americano, 42(18), 276.
QUÉ estrecha se me hace el alma
para guardar a mi dicha,
a mi dicha que es tan vasta
que en el mundo no cabría.
A veces siento deseos
de gritarla por la vida,
y de dársela a los vientos
para que alumbren el día,
pero es tan honda, tan honda
que no me atrevo a decirla,
porque la tierra es angosta
y de gozo se abriría.
1 Nombre de la autora: Clara Isabel Alegría Vídes, 1924-
Alegría, Claribel (seud.)1. (1942). Quiere escuchar mi
oído… Repertorio Americano, 39(19), 300.
Quiere escuchar mi oído…
Quiere escuchar mi oído la palabra secreta,
que se agita en el mundo misteriosa y latente
hace años me persigue, mi corazón presiente,
su tenue resplandor de lámpara discreta.
Hay días que percibo su voz estremecida,
como el leve rumor de un ala que se agita,
ya creo adivinar su música infinita,
cuando otra vez el viento la aleja de mi vida.
Vuelve otro[sic] vez a mí, cerca de mí palpita
oh celeste palabra de voz estremecida,
que no te aleje más el viento de mi vida,
quiere escuchar mi oído tu música infinita
Santa Ana, El Salvador
1 Nombre de la autora: Clara Isabel Alegría Vídes, 1924-
Alegría, Claribel (seud.)1. (1942). Quiero cantarte a
ti… Repertorio Americano, 39(19), 300.
Quiero cantarte a ti…
Quiero cantarte a ti, luminoso silencio,
sagrado confidente de pensamientos hondos,
red mágica de asombros en la noche dorada
y barquita de luz que navega en el alma.
Quiero cantarte a ti, esta noche de invierno,
que con tu voz de sombra consuelas mi tristeza.
Por ti conoce el alma el misterio del verso.
Y palpita en el hombre la palabra de Dios.
Silencio, mi silencio, único y universal,
sagrado confidente de pensamientos hondos,
quiero cantarte a ti, esta noche de invierno
la canción más hermosa que florezca en mi huerto.
Junio 17 de 1942.
1 Nombre de la autora: Clara Isabel Alegría Vídes, 1924-
Alegría, Claribel (seud.)1. (1947). Quiero desde mi
infancia... Repertorio Americano, 43(13), 208.
Quiero desde mi infancia
escalar climas nuevos,
y esta noche de angustia
voy a emprender el viaje.
Vivo algo intenso, grande…
En mi nave de ensueño
subiré hasta los astros.
Tendré al viento de guía,
y mi silencio oscuro
se llenará de canto.
Quizá ya vuelva, espera…
Con el alma encendida
podré romper las sombras del regreso.
1 Nombre de la autora: Clara Isabel Alegría Vídes, 1924-
Alegría, Claribel (seud.)1. (1942). Romance del verso que
quisiera hacer. Repertorio Americano, 39(19), 300.
Romance del verso que quisiera hacer
Yo quiero escribir el verso
que tengo vivo en mi sueño,
tiene la voz de campana
y es alado como el viento.
Verso que amasa mi sangre,
verso azul de terciopelo,
eres humilde, sencillo
y grandioso como el vuelo.
Yo te siento sobre el alma
como un mensaje agorero,
yo presiento tus palabras,
oigo tu canto en mi pecho,
es el canto de la estrella,
del río andariego y suelto,
de la alondra, de la flor
y de las nubes en vuelo.
Eres un gozo amargado
sobre mi pecho pequeño,
una tristeza gozosa
que me gusta y me da miedo.
Verso que amasa mi sangre,
verso azul de terciopelo
algún día he de cantarte
con voz cálida de fuego.
Junio 1 de 1942.
1 Nombre de la autora: Clara Isabel Alegría Vídes, 1924-
Alegría, Claribel (seud.)1. (1943). Señor, la luz que Tú
me diste… Repertorio Americano, 40(20), 316-317.
Para Alberto Guerra Trigueros,
con gran cariño y admiración.
Señor, la luz que Tú me diste para alumbrar mis pasos,
la he dejado perdida por el ancho camino,
desde entonces me siento inmensamente sola
y a través de la noche oscura y sin estrellas,
voy buscándola a tientas, sonámbula de llanto
y me tropiezo siempre con dolorosas piedras
que hacen sangrar más fuerte mi atormentada herida.
Estallo de dolor, y a mi hondo alarido,
sólo responde a veces el grito de otras almas
que como yo han perdido la luz que Tú nos diste.
Devuélveme, Señor, la luz que Tú nos diste,
nos desgarra, nos muerde y estamos con miedo en medio de la noche,
de la noche fantasma, helada y sin estrellas,
interminable noche para las almas solas.
Devuélvenos, Señor, la luz que Tu nos diste,
la mía la guardaba en un rincón del alma
y la dejé perdida por el ancho camino.
Desde entonces me siento inmensamente sola
y tropiezo en las piedras de la noche sin astros.
Devuélvela, Señor,
me quedaré con ella en medio de la noche
y será un faro inmenso que brillará en la sombra.
Santa Ana, abril de 1943.
1 Nombre de la autora: Clara Isabel Alegría Vídes, 1924-
Alegría, Claribel (seud.)1. (1952). Siempre Solo!.
Repertorio Americano, 47(16), 254.
Siempre solo!
¡Oh Dios!
¿Dime por qué está el hombre abandonado?
¿Por qué lo dejan solo
y se pierde su grito
entre gélidas voces de fantasmas?
Hoy tropecé con él…
Estaba acurrucado
junto al duro temblor de su conciencia
y había un dolor de lágrimas quemadas
en su mirada oscura.
¿Por qué lo dejan solo?
¡Cercado está de espectros!
y baja hasta su abismo,
y sube a las estrellas
y se desgarra el alma para oír la respuesta
que le pesa en la carne.
Desde todos los tiempos
siempre el hombre está solo…
Prometeo en la roca,
Job en su estercolero,
Sócrates y Jesús
predicando en el mundo.
¿Es su delito acaso buscar la luz total?
¿Interrogar la sombra?
¿Escarbar su silencio
y sentirse las vísceras siempre henchidas de amor?
1 Nombre de la autora: Clara Isabel Alegría Vídes, 1924-
Aún no encuentra albergue
para su voz que es recia
y acusa la verdad.
¡Qué pocos han sentido su férrea amargura
y ese jadear caliente que atraviesa el insomnio!
Es inútil su grito…
Nadie quiere entenderlo.
Cada vez más lejano
se le oye cabalgar en las crestas del aire.
¡Ay de su acento humano!
¡Ay de su queja antigua!
Desde todos los tiempos
siempre el hombre está solo!
México, D.F., 1951
1 Nombre de la autora: Clara Isabel Alegría Vídes, 1924-
Alegría, Claribel (seud.)1. (1949). Soy un barco olvidado... Repertorio Americano, 44(20), 306.
1
Soy un barco olvidado2.
En el viento del sur,
como una torre sola
se alza mi tristeza.
Tu voz es flauta de oro en la noche infinita
yo siempre te respondo llorando entre la sombra.
No debo verte más.
Cuando regrese a ti,
quiero ofrecerte el alba.
2
Me llaman de lo alto las estrellas.
Grito, sufro, deseo…
No puedo alzarme sobre mis múltiples cadenas.
Me siento el más débil de los seres humanos.
Voces desconocidas pueblan la noche inmensa.
El viento duro me castiga.
Estoy sedienta de alba.
Con los brazos abiertos mi dolor,
golpea contra el muro de la sombra.
3
Mis sueños sólo se abren en la sombra.
Como un embudo el viento,
se los lleva al nacer.
1 Nombre de la autora: Clara Isabel Alegría Vídes, 19242 Son tres poemas sin titulo.
No puedo detenerlos con mí llanto.
Todo se mueve, retrocede y se deshace.
La ilusión, cubierta de sollozos me abandona.
¿Qué sería de mí sin el silencio?
Sostenida en la vida y en la muerte
caminaré sus playas.
Arlington, Va., Novbre. 1948.
Alegría, Claribel (seud.)1. (1943). Soy una sola vela…
Repertorio Americano, 40(20), 316-317.
Soy una sola vela dentro del mar inmenso,
una pequeña vela mecida por el viento,
Mi camino ignorado lo alumbran las estrellas
y en las noches oscuras la esperanza me enciende.
Casi me rompo a veces de tantas emociones
y las dejo que vuelen con las alas abiertas
y son gaviotas blancas sobre el mar infinito.
Soy una vela sola presintiendo el futuro,
una pequeña vela en busca de poesía,
mi camino ignorado lo alumbran las estrellas,
en las noches como ésta la esperanza me enciende
y estoy iluminada dentro del mar inmenso
Soy una vela sola mecida por el viento.
Santa Ana, enero de 1943.
1 Nombre de la autora: Clara Isabel Alegría Vídes, 1924-
Alegría, Claribel (seud.)1. (1943). Tengo sed de la
vida… Repertorio Americano, 40(20), 316-317.
Tengo sed de la vida, mi corazón se inflama,
tengo sed de embriagarme de su cálido vino,
quiero arder toda entera en fantástica llama,
ser yo misma la antorcha y alumbrarme el camino.
Y así, lentamente, con el cuerpo incendiado,
bajar hasta el abismo de tenebrosa arcilla
y sacar de la sombra el tesoro ignorado
y cantarle a la vida con voz honda y sencilla.
Tengo sed de vivir, mi corazón se inflama,
tengo sed de vivir plenamente la vida,
quiero arder toda entera en fantástica llama
y subir a lo alto con el alma encendida.
Diciembre de 1942.
1 Nombre de la autora: Clara Isabel Alegría Vídes, 1924-
Alegría, Claribel (seud.)1. (1946). Toda la tarde he
pasado... Repertorio Americano, 42(18), 276.
TODA la tarde he pasado
viendo como corre el río,
y adivinando el secreto
que dice el viento a mi oído.
Supe del milagro blanco
que se estremece en el lirio,
y en las campánulas claras
que se asoman al camino.
Estoy ebria de frescura
como las ramas del pino,
ya va estallar en un canto
mi corazón encendido.
Toda la tarde he pasado
viendo como corre el río,
y adivinando el secreto
que dice el viento a mi oído
1 Nombre de la autora: Clara Isabel Alegría Vídes, 1924-
Alegría, Claribel (seud.)1. (1943). Tú dejarás mi cuerpo…
Repertorio Americano, 40(20), 316-317.
Tú dejarás mi cuerpo, espíritu inmortal,
celeste mensajero de cálida poesía,
mi cuerpo que amas tanto lo dejarás un día
en las lóbregas manos de la muerte ancestral.
Las puertas del misterio se abrirán a tu asombro,
dulcemente han de abrirse al toque de tu canto,
mientras mi pobre cuerpo, triste y pálido escombro,
se pudra lentamente en la tierra del llanto.
No volverá a encenderse mi pecho de fanal
ante el mensaje azul de tu clara poesía,
mi cuerpo que amas tanto lo dejarás un día
en las lóbregas manos de la muerte ancestral.
Octubre 4. 42
1 Nombre de la autora: Clara Isabel Alegría Vídes, 1924-
Alegría, Claribel (seud.)1. (1942). Un vuelo de nubes...
Repertorio Americano, 39(12), 183.
Un vuelo de nubes…
Un vuelo de nubes blancas se detiene a ver el día,
día embriagado de aromas y florecido de canto,
día celeste de mayo, día claro de alegría,
por ti siento que es más dulce la amargura de mi llanto.
Como imagen de la gracia te veo yo sobre el mundo,
día celeste de mayo, clara sonrisa del cielo,
lindo collar de la vida, canto de ritmo profundo,
eres árbol florecido y flor en ansia de vuelo.
Para cantar a tu gloria se hizo alondra mi emoción,
día embriagado de aromas y florecido de canto,
día celeste de mayo, húmeda y viva canción,
por ti siento que es más dulce la amargura de mi llanto.
Santa Ana, El Salvador, mayo de 1942.
1 Nombre de la autora: Clara Isabel Alegría Vídes, 1924-
Alegría, Claribel (seud.)1. (1951). Ven a mi encuentro...2 Repertorio Americano, 47(1), 12.
VEN a mi encuentro, amado.
Brilla el alba en mis hombros
y un enjambre de alondras me aprieta la garganta.
Quiero exprimir mi gozo gota a gota en tus labios
y ceñirte la frente de corolas abiertas.
La raíz de tu voz florecerá en mi sangre
y te hablaré del mar,
de la rosa en el tiempo,
de soledades claras
y de silencios rotos.
Por andamios de luz y sobre el haz del viento
te llevaré conmigo adonde empieza el canto.
¿Me escuchas en la ausencia?
Vuelve hacia mí tu rostro y embriágate en mi huerto.
La sonrisa de un niño se alza ya entre mis venas.
Groveton, Alexandria, Va. U.S.A. 1950
1 Nombre de la autora: Clara Isabel Alegría Vídes, 19242 Poesía inédita.
Alegría, Claribel (seud.)1. (1945). Ven al mando de tu
barca… Repertorio Americano, 42(17), 261, 268.
VEN al mando de tu barca,
fatigado marinero,
que ya es hora de que vuelvas
sobre los mares abiertos.
El viento te está esperando
a la orilla de tu puerto,
para llevarte a regiones
donde se tocan los sueños.
Allí verás islas verdes
en que hace nido el silencio,
y golfos de maravilla
florecidos de luceros.
Deja la tierra sangrienta,
que te hace daño su duelo,
y vigoriza en los mares
la fatiga de tu aliento:
A tu regreso has de hablarme
de los fantasmas del miedo
y de las lindas sirenas
embrujadas de misterio.
Mil aventuras te esperan,
date prisa, marinero,
que esta noche hay un incendio
en las aguas del estero.
Nueva Orleáns, 1944.
1 Nombre de la autora: Clara Isabel Alegría Vídes, 1924-
Alegría, Claribel (seud.)1. (1947). Viento atrevido.
Repertorio Americano, 43(13), 208.
Viento atrevido
Deja ya de perseguirme,
viento atrevido del norte,
déjame que estoy cansada,
quiero tenderme en el monte.
¿Quieres mi cinta de seda,
quieres mi anillo, mi broche?,
ténlos, viento, pero déjame,
quiero estar sola en el bosque.
He corrido tanto, tanto,
desde el día hasta la noche,
salté ríos en mi huída
y atravesé el horizonte.
Deja ya de perseguirme
viento atrevido del norte,
déjame que estoy cansada,
quiero tenderme en el monte.
1 Nombre de la autora: Clara Isabel Alegría Vídes, 1924-
Alegría, Claribel (seud.)1. (1942). Yo siento en esta
noche… Repertorio Americano, 39(19). 300.
Yo siento en esta noche…
Yo siento en esta noche un aliento profundo,
un celeste mensaje de las playas del mundo,
es surtidor de canto que florece en mi huerto
y pájaro encendido sobre mi pecho abierto.
Por él veo más clara la noche constelada,
comprendo que las cosas son de esencia sagrada,
siento el dolor inmenso del mundo en agonía
y oigo el canto del viento en las rejas del día.
Aliento del alma, mi profundo aliento,
celeste mensaje que me trajo el viento,
surtidor y pájaro en mi pecho abierto,
por ti la poesía florece en mi huerto.
Junio 17 de 1942.
1 Nombre de la autora: Clara Isabel Alegría Vídes, 1924-
Alegría, Claribel (seud.)1. (1942). Yo vi una vez...
Repertorio Americano, 39(6), 88.
Yo vi una vez…
Yo vi una vez de cerca al gran dolor humano,
oí su voz quebrada y respiré su aliento,
yo quise ser su amiga y le tendí la mano,
pero él me dió la espalda y se fué con el viento.
Algún día descalzo, va a llegar a mi pecho,
porque es humilde, humilde, tiene humildad de niño,
mi corazón de níspero le servirá de lecho
y abrigaré su frío con ropas de cariño.
El dejará en mi alma la huella de su herida,
y otra vez como entró, humilde como un niño,
se me saldrá del pecho y dejará en mi vida
un recuerdo que sea suave como el armiño.
Santa Ana, El Salvador, 1942.
1 Nombre de la autora: Clara Isabel Alegría Vídes, 1924-
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