Hojas perdidas - Actividad Cultural del Banco de la República

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BANCO DE LA RCP:.:BUCA
.
BIBLIOTECA LUIS· ANGEL ARANC-'
,
Este Libro Fue Digitalizado
por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la
República,Colombia
CAT ALOGACIQts
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Colombia
lIOJ.AS P}jRDIJlA~.
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HOJAS
PERDIDAS
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Colombia
HOJAS PERDIDAS ..
Elllllmhre socml debe lle .•.:u
la mentira en el corazón.
Rn nna do [t(¡uellas tardes en qne el sol se
ù'e~picle del hori7.0nte COli llanto de pÚrpura,
y dice UII aùiós al Orionto mustio que va (~
ostclItar entre sombrías cortillas
do lIieyc la
pÚl¡dll lllï. de la romálltica
luna; ('II ~mo do
aquollos dí~s Cll quo el sol f!(l hunùo Olltn:
esper¡\Uzas, y la esperanza
~e marchit.a en el
earaz0n, s:tli (10 cnsa s(¡lo con mí pensamionto, devorado pOI' 01 p\'ofunùo te(Lo (¡no abriga nn cOnlZólldo 23 alitos, que tiello mnortas
Ins ilusione!l, y (rnO 110 ftaHá ~lOOC1'ni CO'l1tento en la hipocrosh.socia1.
Este Libro Fue
Digitalizado
por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la
l)ero,
(¡ llúllllil ir quu nol1ovo ('~e mart~rÍ'o1
República,Colombia
-,,1. cora7,Ó1I•. A d~ndc buscar pll\ccr~ cuanEste Libro fue Editado por la Biblioteca Luis Àngel Arango del Banco de la Republica.
Colombia
<dola sociedad es el pecado encendido de là
:civilización! Allí martiriza el amigo, porque
al trav(>s do su Ilourisa se OOlloce que tul vez
manana ser.íi.el asesino del honor, si entre
las relaciones amistosas se levanta la imagen
vil del intel'6s. Alli la mujer, <tuo incendia
eon su rOJlaje do ángel, quo se deshace al
'tocarIa, como tierna rosa al soplo del ,-endabal, que de lejos tieno 'Corazón do paloma,.
do serafín, y do cerca noes más que ..• Ulla
mujer !l!.., A dónde ir, cuando el mayor
mart.irio ell ver csos fantasmas sociales tan
slltisleclros, tan con-tentoe, que no milan nil
ápice 'más allá de Sll destino, que parece han
cumplido su misión, porqu-c tlcscansaJ~ sn
cabeza en cI almohadón de los cngallos!
Pobl'es necios! No sabcn qne la mentira (;S
la fl', qllC la hipocresía es la primera do las
virtudes 8OCltlffis·!
En\'uelt-o iba en tan juiciosas meditaciones, cuando·á mis 'OídOll Hegaron, casi mari.
bundas, lOtI ú!tfmos ncentos de la Casta
Divin'l. Aquella era 'la YO"¿ del consuelo, que
tranquila
venía ti reíl'escar mi alma con
rfludales de amor! Aquel-cll1lto
me llegaba.,..
al corazón, como lapl'Îtncl'a
sonrim que se
pinta en los labios de la 'mujer 'qne se 8ma, 1
,'Como ]a voz del perlMn en la cárcc] de la
desesperación,
como la luz d'CllIlT{'penti~
miento en el corazón -(lei crimilia]! Dulcc~
tierno y 'armonioso, 'el ClltltO ('S la última
Este Librocuord·a
Fue Digitalizado
por rompe
la Biblioteca
del Banco de la
'que se
deLuis
]a Ángel
lira Arango
'del ("{Jr3zón,
República,Colombia
,(lorque la esrenIDz3 cs sn Último cuntar. LA
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-5mujer qne canta magnetiza el sentimieuto,
y Sil \'oz es el ceo de }los coros celestiales.
Extasiado a~pj·raba· unn á \Ina las notas
italianas, clI:mdo recordé que la cantora no
podía ser otra qne María, aql1ella-1rIal'Ía, por
mi mal falltÍldicn, (le quien he hablado otra
oCllsiúu, y que cs el rellejo del espi¡itualismo .
.Por un movimiento,
casi in,oluutario,
pisé él dintel de Ia-cusa de María, y por una
- especie de magnetismo subí tÍ. l:1 picza do
donde partían los arnlOni<Jsos acentos, Nopensaba; scntía con aquel blllllOO sentimiento fjne rdrcsc:l el alma.. llena de pesar, Pero
CHillido '\[nl'í:t se pr~l!ntÚ {t mi vista, me
tl':\"I'\lrtl' :i ulla atmósfera quc jumás había.
adivill:lI}O,
,
La pi'-:'\;1 estaba Boncilla y lujúsamente
adorllllda, La luz suave y misteriosa. penetraba ul tnl.\-(·:-\ de los crishlles
de
di versos
co-
lores, vel;lllos Call cortinas bfallcas y trasp:tl'cntes ¡Je tejido persa; lIlla alfombra e~ipcia
adomau:¡, el paviml'llto;
Jas parcde¡;¡ e~taban
decorailas con clladros famosos de :Espana é
Ital ia; los espejos y sofás eran ¡Jo e xq li isi to
gllót •..•
, y soilre !lna mes:! c:ireular de mármol
sc levantaban
~llll'à\'damente los ricos vasos
<.leG rccia,
se confundíaflc
amoroy azucenas,: los azahares v los lirios. En. uno ùu los lados so
encontraLa
!lllli mo~
esoritol'io, y sobre
cIJa, e~parcido8 cn desorden
y' abiürtos alEste Libro Fue Digitalizado por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la
gunos
libJ'Os (le República,Colombia
delicado gusto,
Allí la!\.
Cf }lp.Îfl'c.jl. c6!e)Jrol'." Ilbi\,rtp.
en .Jas:soJltj~.
Cl)
donde
Sf>mCll te Jas ell'lllÚtidas
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ac
"'Páginas
Lucila Desmoulins; acá (:1 u Liùro de los ,Oradal'e8," Bena~fido en el lugar
-q.ue ocupa DantOtl; roña kjos la" Geogl'3fIe. "de Malte-Brun, en clondesc hace (lomprenderIas bellezas de Mingrelil\ y Georgía;
en otra parte los "Viajes eentimentales d"c
Stern pal' Francia é Halia," "Sallta Teresa
de J osÚs," el canto" A 'l\resll" do Espronceda, ci "Adiós" deBJ1'on,
el "Rufael"
de Lamartine, "La Jerusalem" t1CJ TaMso,
"El Paraíso" de"·}tiltQD, las "Fantasías"
del Dante, y las má!> escogidas obra~ de la
]itel'aturamode1'1lu, Del otro laùo so hallaba
¡lll piano de la fábrica
de Allison, y allí ne
f;e hallaban ui polkas, lli redowas, IIi schottish, ni varsoviallDs; toùas eran oberturas de .
Mozart, cavatin~s de Donizetti, urias de
'Veber, é b6nidad de piezf\s sentimentales
en donùe el cOra2.ón se cxtasía,-y lacaheza
se pierùe al eco de la melodía,
La atmósfera estaba impregnac1a de perfumes. :Mal ía, reclinada en unasilJa otomtlna, parecía la imagen de lamcditaciÚn
en el
altar del pensamiento. El pelo negro peinado en capricllOsoS ùucles bUBcaba asilo en el
ser.O palpitantc; los ojos qe. ébano rasgados
en losanje, alumbrab~n .. ·~.e pensamientos
y se apagaban entl'e fi
,JOncs; las pesta.
:ilIIB y cejas sedosas
'.
~<>¿"'h '\,~. ~~)h ".1'.".
lilt mirai'; la boca era una rosa entreabierta,
por"los
dientes
ùe marfil
vagabn
laBanco
vo-de la
Este LibroSFue
Digitalizado
por la Biblioteca
Luis Ángel
Arango del
luptuosidad más
delicada, Vestía un tmjo"
República,Colombia
,de
.trasparentogasa,
t:l Arango
Ilíe dodelalabastro:lo
Este Libro fue
Editado
por la Biblioteca LuisyÀngel
Banco de la Republica.
Colombia
--'1 calzaba en un botín de raso encarMdo. :N"lJ
era la. Venus de Praxitoles, porque no em la
imagen del Amor; ni la :Magdalena de Angelo, porque sobre su frente no s.e cernía el
remordimiento;
ni la Lucr€cia del pincel
,l'ornano, porque 'rarquine de rodillas habría
caído al posar su impura mano sobre au
limpia existencia: era 1:\ imugen del desdén
alumbrada por los relÚmpagos del amor.
Absorta en tristes meditaciones tenía aún
pintadas en 10&labias las últimas notas de
su canto. N o se .apercihió de mi llegada, y
movida como }lor tUl resorte secreto se acerc6
al escritO! io, tomó un liuro que tenía este
mote-.Mis Pl'lIsam¡'Cllf08-Y se puso ell actitud de escribir. Apagué el leve ruido de
mis pasos; como un asesino me acerqué á
Muría y espié sus movimientos.
La pluma
corría ligera, mi aliento mcc;a sus ondeantes
hueles, mi coraZón hacía cI ruido ùc ;a cascada que Sll p¡'ecipita; pero cIJa era una pura
estatua que eeutía sin vivir; el mundo pudo
habcrse ùesplomado y .María habría continuado cscribienùo sua pensamientos. A la
ptí!ida luz de la tarde que espiraba leí los sigUlentc!! trozos:
"Dios mío, tú que pisas en oro y en diamante; que eret> el Bol ae los 801~ el alma
de Jas mundos, tienes á tus pl~fl
á la huilianidud, la humanidad es eI- sarcasmo de
IllS bellezas de tu creación!
Este Libro Fue
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la Biblioteca
Arango del
Banco de la
"TÚ
das el por
corazón
y élLuisseÁngel
pervierte
para
República,Colombia
poder "iv-ir en este
fango; pero ¡hay del coraEste Libro fue Editado por la Biblioteca Luis Àngel Arango del Banco de la Republica.
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a.611 que no puede mancharse!el
martirio cs'
su existencia, es ana flpr colocada entre, las
olas, una paloma en garras de un mHano, una
codorníz al alcance de asesino cazador!'
"Ea el mundo el vioio 8S la fe, la religión
el oro, el medio la mentil'a. Y, esta trinida<l
escandalosa eg el pet'íume que eJ hombre incendia en tus altares!
"Las pompssde .10B munùos me arrebatan; el tachonado azul del firmamento me
enoanta; los ardientes rayos del sol me des.,
lumbran; levanto mi amor en las alai de la
noche al pálido alumbrar de la luna; COlltemplo la espumar:to catarata que ie destrenza en lindos hilos de lU!Jiente plats; me SOt.,
pr~ndo al ver ci, rayo en. ardienl;~8 espirales"
rasgar esas cartillas de eterna nieve que coJ'onan lag cimas de las montañas, y venir á
bautizar su corazón virgen &1sol con torrentes dc luz!. .. por todas partes te ad mi 110,
Gran Dios; pero el hombre es un monstruo,
la mujer un cadáver que no tiene ni conciencia. de su existencia; y tan tri,¡¡lics galas no
convienen á la obra de tu perfecc-ión.
~El hombre BC lanza en el torbellino social
á bnscaroro, y POC? le import~n los medíos;c(}n tal qQ8 lo oonslga scrá deificado, á dos-:-;,
pccbo de S1tbriminal existencia.
Para êl
belleza, la virtud, la inocencia, lOB encantos
de una mujer Bon ni{'lbla que desbarata un
rayo de luz, moneda que no se cambia, merEste Libro
Fue Digitalizado
la Biblioteca
Arango del Banco
cancía
que no por
tiene
precio.Luis Ángel
Desgraciada
la de la
República,Colombia
mujer que no tiene oro, porque ella no pisará
la
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-9los lujosos snloneB, no Berá im'itada á los
l'icos Buraos, y en todas partes la illllUltarán
con la recopilación de loa crímenes-Es
pobre,
es pobre! !
"Y la mujer mil vecea más criminal, Be
arrlmClJ, el ::orazón y pone en remate público
!lU amor y sus encantos.
Recostada en un
halcón ó asomada á una ven talla, ve d('slizal'
á.los que la pretenùcn.
Aquél es \Ill bello
joven, BU figura es interesante,
el buril do
Fídias no habría hecho un modelo más pero.
fecto; pero qué tiene? es hacendado, propietario? Nó. Pues pùS!', es pobre! Aquel otro
de traja negro, de mirada pensaùora? .Es un
poeta. Pues pase, cs pobrc! Maldita raza que
U0 tiene más Dios que el interés~
"Y yo que siento con el corazón, que Hora
con mis lágrimas, BOY una arista arrebatnda
por los viento>" Ulla estrella apagada entro.
los munùos, un rclámpago qnc s610 alumbra.
lOB antros del dolor! Yo ¡¡ola estoy en el
mundo-las
mu;eres SOil mercancías y J08
hombreg ridículos traficantes, que no mere.
<:en ni siqHiel'll mi desprecio. No tengo una
mnjer á quicn hablar, Ull hombre á quien
entregar mi corazón. Amo, sicnto amor,
pero 1\0 hallo objcto; si lo hallara, yo enscharía {¡ csa turha ùe coqIH,tas:i ama!'; cnton(;CS no scría una
pasión ridícula, eomo <'fi
ahora, sino el reflejo de Dios. Pero IIh! nadie
mc ama, nadie me comprende! !"
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l\[arw. arrebatada
por la exaltación del senRepública,Colombia
timientQj~Jlace
tl'izas
entro lu «.lelicllda mnno
.:":
...
-:.=~~:
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-.lO....:.;.,·.
'la. pluma
con que; trazara estos renglones. :La
cabeza so dobló como cllil'Ío desgajado pOl'
la gota de agua que lo inclina; 108 cabellos
S6 esparcieron
confusos, por la hoja escrita,
y todo su sér expres(¡ lo que jamás ha
pintado el.pincel humano: la imágoa de la
inocencia ca~H;ada do sn "irtud !
Profundamente
cOllmoyido al ver aquella
alma que no tenía semejante, y que armonio
zaba conwis ideas, sentí l'orlar.por mi mejiHa lma lágrima! la primel:.a que me hací!l.
dCHurnar UIlU mujer! Jr.ígrima ardiente que
llució mi~l!ralJJe y qllc tuvo por tumba el
seno de María!
DelJió qllcmarla.
Se estremeció como la
.palmera sacuùiùa por cll'uyo, como el ángel
rleslumbrado por la luz de Dios; levantó
4u1cia. mi sus dos océanos Je lágrimas, y a1
través do csa cortmll de llanto, conoció mi
alma, comprendió mi corazóll. 'l'cndióme la
liùJ.a. mano, y de rodillas hubiera ~spcl'a(lo
el})erdún de mi falta si 110 llie hllbJèl'U perdonado sin oírmo.
-Ahora poco, me dijo, buscaba. un corazón ~l1C me comprendiera, yel tuyo que latía
L'ill cerca, si nó me adivinaba, al mellos me
compaùecía.
-y yo, :María, buscaba UM alma digna.
de mi tennll'3, y tu voz mo dcspertó de un
lfJtu.rgo l'IO[U/lÙO
pura haCCl'IDC vivir en uu
delirio arrobador.
Este Libro
la Bibliotecapensamientos
Luis Ángel Arango csdel Banco de la
-¿EsFue Digitalizado
decir quepornuestros
República,Colombia
taban en consonancia,
que nuestros corazones
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Colombia
latían
.bajo
la misma
presión?
Qué feliz
soy!. ..
-.María, Marín, por Dios, no prosigas, me
l1arÚs l~l muerte! Si hay en tu alma lllgúll
afecto, mátalo; porque la sensibilidad es el
combustible de la desesperación.
-Sí, vivamos como el hombre en sociedad,
sill scntil'; ~'i\"amos con cálculo y ùc:jemos el
sen timiento l'lora las fiel'as y los IIl0nHtruos.
¿lias interpretado
el l(!ognaje tntlllo ùe 108
l\lIimaleo?
.El arrullo
de la paloma es no himno
Ile a:nor; el ll:\llto de la tórtola cs el cpieeyo
del sentimiento; el tigre lame á su eonsorw
y Lrama de furor cu:;¡ndo alguno le hiere levelUen~e; elleóu acaricia
á la leolla con su
garra, y ¡ hay del <Jue intl'n\e pcr;;{'gllirla
en su guarida! el canario, el lmpiallllucren
de amo, y el homure, la razón por cxcclellci,t, ama con Ulla (;llSnCa, atÚnc10se Ulla corbala, por rcciLil' una hercllcin,
pal'u. cngrosar sn forln na; poco Ic í ru jlOl't:~ el cDr:¡ZÓn;
ama y ,;0 ellSlI, y l'l mundo al hablar de su
eah\ce Üiee: " Se wllan con deliriv." Qué casualid:Hl! Los eapitalcs se bun entendido, las
convcnil'\leias se hun cnamorado y los cora·
ZOllCS también!
-María, cicrtassoll tus palabras. Yo miro
entre nosotros m:llal'cs de lUlIjCl'<'S lindas y
virtuosas, que se marehi tan sin ser cùlloeiùus .. Flores sin prima\"cra, que viven coronaùas de mirto y de ciprés, que vegetan trisEste Libro Fue Digitalizado por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la
temente al República,Colombia
lado do esos jóvenes de todas
condiciones, que en su inmoralidacl no pieD- ..
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-12san más qne en enlazar sns capit'11es con más-
renta, cándidamente nos hacen crcer que sn
pal:liDO nos ffilutil'iz/\ y mata.
Pel'O si el
hombre es criminal, la mujer es mil veces
;;máa·aü1incuente;. apenas pisa el mundo sc
~:·arranca el cOI'azón, lo arroja entre el loùo, y
i:jlolojos ansía una lnz,-el mah'tmonio social •.
. el en Ieee de 138 conveniencias.
-TU8
palabra!! como IllS mías destilan
.¡ota á gota la hiel del sentimiento.
Has
&mado il-Como tÚ, María, sin saber á quién.
·-Desgraciada
la mujer que siembra cspelanzas
para
COW'I' martirios!
Cuando
mil'6
~I mundo al través del límpido cristlll dtJ
nil'lcz, toùo el':\ bello como el albor de la manana, como ]¡\ csperan:w. de una virgen,
!liorna como el canto del auracntre los lil'io~.
Los r(>sp!andor('s de mi jl1\entud
HOrles:lJ'rollaron cntre csperanZllè y se apacentaron
entl'e
descnganos . .Era una tlor amenazuda
pOI' el
rliente del áspid, nna. crisálida cambi:mdo al
hldo ,Je una hoguel'Q~ ansiaba salil' al mnllno
para tencl' horizonte,
y muy pronto I'legn&
mís pobrcs alas fatigadas de volar! Quise UII
amante, lo busqué y en toùas partes tropecó·
con necios! Ah! Nuestros hombres! L\uestros
homhres! Si la Illnjer tuviera una chispa ~
~entimiento.
J'echazarít~ indignada. esas galantt'rías frívoluFI vulgarct'l y de tan mal gusto
con que nos regrdanlos hóroes de la galanteEste
Fue Digitalizado
la Biblioteca
Ángel Arango
ría Libro
bogotana.
¿Tú por
sahes
cómoLuis
galantea
esadel Banco de la
República,Colombia
iuventud" e8pumade las i.uventudcs? O,y:esu.
Este=-"::'-_",-,".
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Colombia
- 18llistoria.
Después de iníormarse de nuestrô
'estado pecuniario y de lluestra posición social¡.
80 entretienen CHostcntarse á nuestro8ojoB,
'hora por hora., instante porinstuute-: salimos
al ùalcón, allí pasa él; vilmos á ulla visita, en
'cI tránsito trope7.amos con BU figura; vamos
al tcmplo, detrás lo encontrámos también do
rodIllas; en él teatro dos ojos SObl'C nosotras,
fijos é inmóviles, espían nuestros movimientos, y por todas paltes llevamossom bras, martirios; porque los nN:ios no comprenden que
el corazón humano 8C eumu ùe tod'\) lo que
frecllcnta. DeS}IUeSyá el:itá ùc visitu, su penF.amiento lo tiene en su vestido, su corazón
Cil SllS movimicntos.
Comprende bien á la
mujer. En un baile es uún mús ridículO";
tad as lus pie¡r",\slas baila con su dama, empieza pó!' upret:u- la malla y conclu)'c COll un
diccionario de frases qua todos Bauen, lue
todos oyen, que todoll n'piton, frases vulgares glle Jú hall desceudido á las tabernas y
no por eso dejan los salones ùe gran tono.
Otrus veces coando ci amante es de IIlla esiera
un poco superior, hace versos de aquellos en
quo campean las flores, los ruisellores, JOB canarios, cI relámpago, el rayo, el querube, la
muerte y l'l daIm'; baec SUs versos y los colo.
cu Cil 1111 periódico, como aviso al público,
para decir que está enamorado, que es inlE;.
liz; y se conside/'ft después cI hombre máb
Este Libro Fue
Digitalizado porde
la Biblioteca
Luis Ángel
Arango del Banco de la
interesante
]a &ociedad
bogotana.
República,Colombia
A todos les da por ellcribirámOl'<>eN .aqUél•••
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'-y deapu~~1t~e_ren
Colombia preusa Ell POR8.1n~èll.t~:h
-14-esbrellaudo- las- frentes contra ·108 saucee- ie·
k alamcdlL: ó III bris&-de occidente, toman l.
pluma
"La~t.ildet"
"La Paulina," IlEl
-J:udio/ "El Espía" y otras novolas contribuyen con un pènsamicnto, UD reU&!ÓII, nil
párrafo.
Asi logran ponerse en inteligell~ia}. Y
cuando liada se ha .em-pœado,.todo Ile ha COll~luído,
-Maldi\.\> el homb!El' que coge·desconsuclo
cuando ofrece las flores de su jovell cúrazón ~
Yo he examinado el amor <le la mnjer, y li
fuorza de desenganoB Ic he pagado COll et
desùén. ¿~lIbos cómo se dejan amar las mu·
jcres? Pues bien: la figura ha oe ser lo más
cle~ante,. el porvenir de metllllu" de BOl' ex.tenso, y el.arrojo y la descortesía !le hau de
llovar al último grado. ¡Ay del tímido y- del
l'ce'petuoso,- porquc (¡I nil cos(){;ll.arú sus urna-res! ~I atida~ cs el dueuo d-e la mujer, poro
1)81'8 que su Rnùucia le sea pcnlonu.d'l, es
preciso fundirIa. cn uner·iaal de 01'0, Ellaa
110 piensan sino en su figura,
nadu 11':5 imo
~porta culti val' sU corazón: la figura, ese
burro mj~el'llùle, que la. suert.c, el ti.cmpo y
la tumba trocarán en· polyol Se exponen {í.
lus galanterías, como la flor á. los rayos del
!ol; contestan necedl'.d po\' necedad, Bonrisa
por 8onriëa. y CHalAdo dicen si, ya lo hhn
manifestaùo. con los. Oj~B, eDil lw~ mauos Y
Este Libro
por laI>ero
Biblioteca
Ángel
del Banco de la
eon Fue
8118Digitalizado
l\urebatos.
unoLuis
8610
noArango
disfruta.
República,Colombia
ae.,.",q.u:icÍ)Ul, es e!.Últímo. que llega y eJ.
Este Libro
Editado por
la Biblioteca Luis
Àngel Arango del Banco de
la Republica.
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Colombia
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»ajer que dijo,ñ¡,una.vœ, al repetirIo
ùt:})ía
lI1orÍl8e. porque olla, tan pllra, tanjnoccute,..
BO debía manchar sus labIOs con una mentira; el amOl' es uno como Dios,_ inmortal como
la etemidad, y. cuando hay d08, ó el primero
desaparece, Ó. la. luz ~o II.l.faltlÍa alumbra en_
zenit.
Y.o tamb~o
q,uise ¡¡RUIr,. y, eu mis 801.0:tosas peregl'inaci,(j)ne8,
cSf>in81J. U1El.clavaron el corazón. AÚn recuerdo mi pastrer dcsengu110. Er,l nna mujcr aérea, .aporosa,
linda como tÚ, dulce como nn beso ùe umol'.
Yo la seguí b-úmulo. dcslumbl'lldn,
como un
nillo las visioncs de ulla noche, como un
.u
ciego
la luz
quo
Hilo-ría. dado por
última
palpitación,
sdivina
en
:ill IIlJJor
el. horizonte!
ml vida hllsta. ,m
mi porvenir
hasLa su Úl-
tima esp~ralJza!
Ulla nadie tropecó con
ella cn Ull baile. li uír de Sil fascinación hauría
sida imposiblc;:busqué.cn
mi c:\beza un }lellsamicnLo y enCtlntn'j un sepulcro; quise ofreeerIc un paraíso en mi coraz("n y no temfa
sino lin illfiel'lJo!)Le
accl'qutí á ella como eri.
minai lllTqJClltiÙO,
mis ojo;; lanzaban fuego
de amo!'; mi sonrisa ficticia remec1aba d
placeI' al borde ùe la tnl11ba; mi COl'lIzon snltaba del pecho y mi almaestubaen
1I1l :¡lJi&/I1(J~
"Señ.ora," le dije, '~.una vez he amaùo de una
manera honiblt', espantosa, deme us~cd la
esperallzll Ú el infil'I'Do." l.evan.tó hacia mí
Este Libro
Digitalizado
por la Biblioteca
Ángel
Arango del Banco
liU~Fue
ejos
V me COlJt.eet~
con.Luis
lUlU
carcajada!
.. de la
República,Colombia
Ya yó sabia las
fórmulas comunes do conEste Librotestar
fue Editado
la Biblioteca "liQ·
Luis Àngel
Banco de
la Republica.
lu., pormnjcrCL.
Jo. Arango
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Colombia
hJZCo," "Es faVOI," "Hllble eon mí mamá,"
"Lo pCDSllré."-Pero,~
carcajaJa es la hi·
ll~rbole do la galantería.. :ExaminéaqueUa
fisonomía, y con gran placer me convet1ci
-que lo que creía un ángel eN1 tina niujer.
_y ot1'llS vocos COll la facilidad 'que el
-hombro dice "te amo;" como si esta pasión
no fuera un volcán que abrasa y muta.
_ y con la candidez que la mujer croe que
la aman y con la cordialidad quo contesta:
'4'Yo también."
-Infumes! Si yo amara, bebería inspiración en los qjos de mi -amante, sería la luz
de su horizonte, la lira de BU canto, la reli-g!ón de su alma! Vivi~ía con su vida, ç~zatIa con BUSgoces, sutruía 'con SUBtn8t'tlnOl!,
lloraría con flUS lágrimas!
.
__
y yo, María, si amara, no adivino el
a~
porvot1Ïr .... '.....•........
- - -' ; •..••....
~
-Amarías
COlGO ,yo, con profundo
senli·
'
'
.
miento, can delirante adoración, y sin cm-,
oog.o •....: •.y sin embarg~ el mundo nos UIl<lDtmaNdíl!ulos t! J
La lUlla, que entraba 1nistcriosa al través
de lOB encaj"s, -platro ~on su luz dos lágri-
mas que Be dC8112ardnpor sU -quemant~
Dle-
.jílls; pero en lugar .~ refrescarIa re ùlCron
un tint9 mós; también eràn de fu("go! •...
J unto fi esa mujer, á. mis ojos tan bella,
Este Libro Fue
por la Biblioteca
Luis Ángelen
Arango
del Banco
de la
noDigitalizado
podía estar
on momento
estáti<la
conRepública,Colombia
\emplaciQD, porque la r~
86 pierde.a\tap.do'
Este Libro fue Editado
la Biblioteca
Luis Àngel
Arango del
Banco de la Republica.
'tiene porpor
.ela~··
'áuttó~
imp\l'b.M~
Colombia
-17 :María era un misterio, y yo quería vivir en·
YI!Clto en ül recllerdo de su misteriosa existencia.
lluí de ella, y al pisar la puorta de la calle,
entonaoa la ária .lc "Belisario:"
pero aqueIIliS lIotas t.iernas se confundieroll
COllla bacanal de las calles de Bogotá.
Serían las doce de la noche. La luna casi
~n el zcnit, parecía iluminar llIl cÏ!:lo orielltal-imágen "Viva de la esperanza, cuanclo colora con sus rayos el horizonte del coruzón.
Las aul'llS impn'gnudus
del aroma {Ie hIS
flores rizaban blandamente la cahellora de
los sauces. El ciclo de un azul brillaute se
dilataba hermoso y resplandeciente, como la
morada del Altísimo. Un silencio sepulcral
,'cinuba por dor¡uicrfl~ y al1ad:a ¡:ucvos cllcantos (t la ir.ajestad imponente dll la noell!!.
Toùo Olil arrolJador, todo era sulJlimo: Hubiéruse dicho qne la naturaleza muda, absorta, se contemplaba á sí misma.
Q.u(~espcctáculo t.an grandioso ofrece l111ft
noche de verano con su lllna, su gllirnalc1a
Este Libro
DigitalizadoSil
por soledad
la Bibliotecaromántica,
Luis Ángel Arango
Banco de la
deFue
estrellas,
snsdel misRepública,Colombia
teriosas armonías! El alma. desolada pOI' la
Este Libro fue Editado por la Biblioteca Luis Àngel Arango del Banco de
2 la Republica.
Colombia
- 18fiebre de Jas pasiones, vaga de espacio en espacio y de ahismo en abismo para elevarse
en éxtasis divino hasta Dios; y el corazón
...-ibra ct.mo una arpa de mil Evnidos, en pulsaciones de sublime melancQlía. Es cntonccs
cuando eJ recuerdo de nuestra8 espemnzas
perdidas-pedazos de ese cielo de ventura qlle
BCnso halagó nuestrajuventud-sellgolpa
á la
memoria
Cún todos Jos encantos
de la volleza,
y en toda la plenitud de la ilusión.
Abrumaùo de pensamientos de amargura
y lleno de pesar el (,ol'llzón, Pllscábame al
l'(~sp]andor de la luna, cntregado:i mil meditaciones solm! el Ílonrlo cáos que llamamos
11orvcnir, cuundo <1epronto algul~as palabras
en trccortanas por un suspiro profundo detnvieron el curso de mi pensamiento. Sorpn'l1dido dirigí Ja mirada hacia el punto de donde provenían, y reconoci á mi amigo Adolfo,
l!entaùo sobre una tosca piedm que sambrcl!ba un sance, J la cabeza apoyada en la mano
derecha, semejante al genio de la dosesperacióll en la trÍ podo del infortnnio.
Adolfo es \lU hermoso jOven ùe lcinticnatro anos, lleno de juvcntuù y de talento. De
alta estatura, frente despejada, nariz perfecta, cabello derramado en largos ulIcIes, su
fisonomía OIrCCCun conjunto agradahle. Sus
gr<7nrJeS ojos Il eg ros dotzdos de unll extremada vivacidad, revelan la aristocracia de Sil
y elpor
fllrgo
de sus
No-Banco de la
Esteinteligencia
Libro Fue Digitalizado
la Biblioteca
Luispasiones.
Ángel Arango del
República,Colombia
ble pOI' su ClIna, educación
y sentimientos,
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- 19€S uno de los más bcllos adorDos del mundo
('Il'gante.
-Adolfo!
exclamé, mirándolo en UDa actituù tan melancólica, ¡Parece qU{) estás
tri~t(J !
-l'a
te cngal1as, me replicó COlI acento
<le f.llll:lrgUl"a. La Pnrvidencia
te cnvía, sin
dUlla, para qno recojas en Jacopa de tu amistail hi; gota:> do veneno quo ùestila mi
corllzún!
-Pero (Iué to aflige? Cuál es la causa de
tUA
sufrimientos:
-Estoy
triste, porque siento que mi o.lmll.
languidece bajo el peso de las decepciones
del mundo; porque
alguna hoja pálida
cada hora qne pusa, lleva
y marchita
do la pobra
corona ùe llli jnventud. :Mi alma IHllla en
un ir.llIcnao,piélago u{\ dudas, y el aliento
mefítico Je la wciednù la asfixia. Oh! viviera JO (>11la soledad de las mOlltut'tas, sin
más inspiración que la naturaleza, sin otro
nÚmen quo Vias, escuchando la armonía salvajo del torrente y d brurniào de la C!ltarl}ta
quo se lanza en 108 abismOB, im{¡gcn ao 1u
loca juventud en la pcndiente de la ·'¡ida.
Viviera
el ramaje
yo
ell las g-rieta8, de 11\5l'oca8 6 bajo
de los ál'bol~' en el dêsierto, sin
fJue llegase nunca á mí retiro el bullicio <le
los bombl'os-de eSllS fieras sociales, que insultan Ú la Dirinidad y se devoran ÍI si misEste Libro Fue Digitalizado por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la
mas. AnimalesRepública,Colombia
carnívoros que so arropan
0011 el manto de la h~ïmlmdlld,
para estam-
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Colombia
par por donde quiera
20las huollas
de la dest)-
lación y ci exterminio.
-Ah! tÚ eres demasiado injul'to: tu imaginación ardiente
te con vierte en misántropo
y
haee que mires la sociedad.:d
.través de
prisma engafloso, en que la uptWll de la8
ilusiones extravía tus ojos de poeta.
llll
-Xo;
miro ida sociedad frente (~ frente,
y el corazón
desnudo
do ilusiones.
Contemplo
sn mon¡¡trno¡¡Ïi1ad
informe
y palpo
sus mentiras
ii. la luz de la razón. Cuando el
hombre e~ feliz. Cl18ndo la alg:¡;;ul'll del placer le encanta, la poesía le urr"ùata :i las re·
g!ones del ideaIÜ;mo; pero crlundo ci pesar[ e
ùevora y envuelve
la desgracia
su existencia, ci fuego de la imaginación
se apaga y la
iilosafía impera.
-J"os poct~s son siempre falaces.
Dicho·
infelices dan á sn estrella un colorido
fÚneùrc, y lloran pesares que no sienten ó que
exageran
demasiado. Los son iel os de HU arpa
son caRi siempre la. exprcsión
de ]:[ mentira.
-Sí; ese es el grito que incesalltell1ente
BOS Ó
CRctlcho en derredor-oTito de ellJurnnia
,..,.
''1'
que
l'epercu t c en c If onda de ml corazon.
liS pa·
labras son el eco de la sociedad, cuya defensa abrazuH.
¡Los acentos dellloeta snn la eYjJi'csiún de
la mentira! Old esas pab\ml.'i> \;<\\\ d sacrifl.
cio ùe la poesía sobre d altar de la injustí.
cial Eso es profanar con inmolaciollcs
sacrí·
Este Libro Fue Digitalizado por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la
legas el santuario República,Colombia
del pensamicnto!
i Que cl pocta -no s1~fre
Ó q1ee
exagera. S1IR
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suj'rimientos.'
yù
21-
Ah! su nombro 8óJo constitu-
delito ~' es la sentencia de Sil ostracismo social.
Míl'alc en tortas 10J0; )leríol1os de
la vida y eu los diíerenteiO círcu\o\l que frecucnta.
Siglle sus huellas y escnch~\ l~n todas p:ll'tes á sn paso, como un acenLO de
mal,lieión:
Es poeta."
Sí ; eS poet", l'l'plicu el ulto l113gi'ltrado,
sí su apoyo Ilece~iL;1 PUI'n. trepar los' altos escaloncs ùe la canem pÚblica.
Sll
II
"E, Hada," contesta e1l'ico comcrciantc á
qnien ríuiz:í piJe 1111 asilo en su oficina, para
comprar ('Oil HU inteligcllcia
y su trabajo el
£1:::1 qa\! le sustcntr.
,,;.;; ~',,('b," sc oye en el baile, Cll el eDilciCtL'" (':I ('I pasco.
"}:s poeLa," grita el pueLlo si hace
su n)~
SOllal'
la tribuna.
".E~ pocta," mUl'UlUm el periodista.
t'n
y Ri aca~o lu fibra de las afecciones l'-C (,stremece Gil Sil cora'l.ónj si el amor invndc las
potcncia"
de "n alma, eXalt:~ sn j1cll"amil'n,
to \' mina eon la fuerza <1Pl volC'Ú" la. Sl'l\<:'¡'
bilidad .1c Sil espíritu,
J¡~hiel <It' la ùes:.;n\c\\t
10 envenena, y pl infol'tllnio cuore con 8U:;
¡¡ombras f>l horizonte
del porv('nil'. :\r;l'ale
nrrodill;u1o (¡ l()~ piestlc \lna mujer in"ell~iblc,
con la son "is;~ <lel despecho
cu lo,.; labios, Jas
nieblns C]('l C]olM l'nI:! frente. Mírall' con 1:1
mano sobre h~ sien conteniendo
los lati<]o,. de
Este Libro Fue
Ángel Arango
Bancolar.
de la
la Digitalizado
arteri;~ por
<¡HCla Biblioteca
parece Luis
próxima
Ú delesta'
República,Colombia
-"l':!! poda,
Ci:
.poda;' rcsucna(:ll sus OíÙOH,
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- 22como el cántico de la muerte que solemniza.
los funerales de su corazón .....••....
Las mujeres se ~nbsiasmnn con lo••versos,
poro no aman al poeta. Para ellas SIIS afl'cciones más íntimas, SIlS promesas, 811S juramentos, todo ~s mentira. Y si alguna ve?
alguna sonrisa dulce y hah1güel1a parece prodigarl/} sns favore¡r, es parll que arrastre victorioso el caITO de SIIS gracilis y ensall;e SlI
henllosura
.
El poeta es un huésped sobranto en el
banquete de la sociedad. La suciedad proscribe al poeta, porqne midiendo las acciones
en la uaJanzlL del interés, sn deformidad resalta ante la pureza d.ol sentimiento. El poe. ta se retrae de la soclCdad, porqlle tenien\! (~
su trono en lag regiones do Dios, mal pudiera amalgilmar con la mezquindad de la materia la sublimidad del espiritu.
Esta lucha tenaz no pnerte dar por resultado, sino al triunfo del n(¡IUCI'O quo trae
consigo la tiraníi' <le la fuen:a. L1 sociedad
victoriosa levanta. sn caùeza invulnerable
SOUl'.) las ruínas de su adversario.
BI poeta
desfallece en lid desventajos\l, y cs f\lcrz:~
'lue sucamba á la ley del venclHlor.
Ovidio, el bardo de I~ tristeza, condonado
por el furor de un Césal' á comeI' el amargo
pan del desterraùo, a!.ellta exti nguirse la an·
torcha <Íe su gcnio
()ntt'e
Jas
bl'umas
ùe uu
cielo nebuloso, y rompe su lira coutl'U las 1'0Esteca~
LibroerizadaS.
Fue Digitalizado
por la Biblioteca
Luis Ángel Arango del Banco de la
del Ponto
Euxinio.
D-c\nte, eluutor República,Colombia
de la nivina Comedia,
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-
23-
acariciado al prinCipIO por la8 auras de la
corte, abrumado más tardo por el peso de
una mano de hierro, abandona sus hogarell y III uere bajo UD techo
extranjero. Sus
conciudadanos persiguen hasta 8U memoria
y los rayos del Vaticano calientan sus cenizas.
'rasso, el hijo mimado de las musas, el
cautor do Solirna, aherrojado en las tinieblas
de oscuro calabozo, siu luz, sin amigos y
prendido de una memoria ingrata,
siente
3gostarse el pensamiento, que en Yano se
estrella. contra 108 murOB de granito del palacio de Sil tirano.
Chenier, sublime como el Tasso y como él
infortulludo, es envuelto en torrente revolucionario. 8us verdugos lo cargan de cadenas
y arraneuu los laureles de su frente para
adornar la guillotina.
Byron, el divino Byron, proscrito de las
riberas ùe Albión, da BUSÚltimos adioses il
BU patria, y errante
y desolado corre á le!.
campoB de la Grecia, par:~ acallar Cil el estruendo de los combates 108 gritos de BU
corazón ..•...••.........••.......••..•....
El poeta es un sér infeliz. Arrebatado por
el ardor de la juventud se lanza al mundo
con un corazón puro y ansioso de emoeiones.
Su imaginación matiza. toùoa los objetos con
su paleta do fuego. A todo presta encantos
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y colores. A República,Colombia
todo imprimo el sello de las
inspiraciones del gonio. Mas pronto las nu-
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Colombia
- 24bes se aglomeran en montones on el cielo de
sueiíos; el frío aquilón del desengaño ùesutu sus furores, y rasguda la vcnda va.porosa, se encuentra. en presencia del esqueleto
Bocial. Entonces el urpa estremecida Lrola
soniùos de despecho, que se apagan en bs
plantas del coloso. Alza á los ciclos su plegaria, y los cielos enmudecen. Arroja al sellO
de la Bocieùu(l f;US quejas, y la sociedad ríe
con la risa del sarcusUJo
¿ Qlléhacer?
Ah! tÚ no saùes hasta dónde alcanza mi
desventura! Tú DO saLes cuántos sufrimientos devoro en el silencio de mi soledad! POI'
eso te ofenden mis palabras y me [¡cusas de
inj usticia.
Al doeit· esto, las facciones ùe A¿o)fo se
inmutaron;
su cabeza, como agobiada por
un pensamiento horrible. se inclinó melancólica SOUt·oel pecho, y su voz murió en la
garganta como apagad:L por el aliento de la
8US
lUucrte .
.Est[Ltico, indeciso y fluctuante en presencia de semejante eRpectáculo y honùamento
conmovido por las palabras enérgicas de
Adolfo, yo permanecía inmóvil, murmuranQO Cil mi interior:
"Este joven tieno razóu.
Ell'oeta cs un sér infeliz."
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República,Colombia
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-
25 -
En un sOl'LerLio gaLinete,
donde el ~tBto
oriental
parece haber ::lCulllulu(lo sn fujo y
sus primorcs,
vestiùa
con la elegancia
de
una bijfl deI Sena y mnellemente
recostada
soLre un magnífico
sofá de Damasco, está
una mnjer encántadora.
:-Jus ojos Hon el te.
légrafo de su coraz{¡Il,
Ell ellos il'l':Hlia el
fuego ùe Ja pasión qlle JUClla, qlle encucntra
obstáculos;
pero que ua cc(le, que Jo ¡¡fl'OIILa
todo. SIl C¡¡!¡Cl!O lll'gl'O se dOl'l':i':w ùestronzado
f}1I gracioso
abandono
sobre la espalda; y en BU frellte despejada y terHa resalta la
bluncura de la lIieH,
Su seno Sf. alza turgente, como para dar mayor expansión
rI Jas
sccrctas semaciones
r¡ue conmucven
Sil cora;¡¡Úll. Su talle es flexiblc (:OlllO el junco yelegante como la pnlrnerll. La lIaidca de Bj'l'on
ell las playas del mar, aùormcci(J:¡ en UI'a%Qs
dc Illl a-:nfllltc sobrc ulla roca, al reHp!allclor
de la I~na; Haidea COll toùos los enC'untDs i'le
la juvelltud
y del amor
es mcnos iutl·l't'sante quo _1Iatildc.
'
El! Slltl preciosas lUana!! de alauastro
Sf;
desliza una curta, cuyo sello rompe con ligereza y cnyas línea/; devom con ansiedaù.
Dicol\sí:
Este Libro Fue
Digitalizado por
la Biblioteca
"Matilde:
cuatro
aflos Luis
h!LÁngel
'IlleArango
l'on del
JosBanco
(¡s- de la
República,Colombia
culos de la il1occlI~iay
los abrazos
fraternales
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Colombia
26 del cariño noa scparámos en las pnertas del
Colegio. TÚ, para alumbl'llr con los resplandores de Ill. belleza los salones ùel gran
mundo, Yo, para celli,' en la soledad ùel
claustro là mortaja de n\Ï juventud.
Cuatro
allas que han pasado COll la lentitud que imprime al tiempo el sufrimiento, qUI; han secado la fuente de las lágrimas en Illis ojos y
cnvejeciù!) el corazón.
"Antos, cuando los sromas de la infancia
perfumaban
cI fácil
scnnero
de
mi vida,
cnando e: crepúsculo naciente de mis primeros afias víbraba blandamente sus rayos sobre mi sien, yo em feliz. Yo gozaba con \a
canùidez del niiio, con los dulces arrobamientos de 1:1 pureza del corazón. Yo no conocía
otras
penus
que
las
que
acompaflan
siempre á los goces infantile~, penas rápidas
v leyes que no dejan Dunca unll huellrl profunùa en cI corazón. Mi vida em un risueño
paraíso, Cil donde tú me prodigabas toùas
las caricias de ulla tiel'lllL cOlnpaflera.
"Pero lllégo, destinada por el voto de mis
paùl'es como ofrenda á los altares de Dios,
me arrancaron del sueiïo de mis encantos
para
sepultarmo
viva
er. los antros
de
una
tumba. Infe\iz\ Yo vino con lu sonrisa de la
inoceucia, !lin sabel' que las sombras de b
muerte se cernían ~e-mi
('·abeza. Oh! mil
veces ,enturosa si las Últimas palabras que
dí
al
mundo,
hubieJ'àn
sido
mis
Últimas
Este Libro Fue Digitalizado por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la
palabras en la tierl'll.
Pero nó, la suerte me
República,Colombia
tenía reservados pesares más profundos!
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Colombia
-
27-
HAJucinada
por el hllen tratamiento
de
lORprimeras diaR, seutí pasarse un afio, Bill
que Ulla pcna grave cmpoFlzoñase lJ. paz del
corazón. Cegados por la vcncla del candor,
mis ojos no pudieron adivinar los negros
CUUÙl'OS que bc;uían
(\ aquella primera csceUII.
Después
Ah! después llegó un
día en que sill s~uel' Jo que hacía, juró ante
Dios y el mundo m~tar mi coraz0n, ahogar
lllis scntimieutos y enlutar mi juventud.
"Pasaron algunos días, y rL me(liùa que
mis facultades intelectuales cedían Ú ley dbl
desarrollo, va cmpeZab¡l á sentil cie otra malIera. Yo cómpl'endia que en lo íntimo d,} mi
corazón había serpicntes cncerradas que
anhelaban el cspacio y luchab;,¡n pOI' salir;
<lue mi alma oomenzaba ÍI sentir el peso de
sus cadcnas; q~e había en mí nlla íuerzà
llli~tel'iosa que me impulsaba al movimiento.
En fin, yo mo sClltía con animación, con
"ida, y cstaba en un sepulcro! Dios mío!
Era yá demasiado tarde. La llegl'll imÚgen
delrcmol'dimiellto
velaba mis congojas y yo
em infeliz!
"Tú, entregada Íl lOllplat-cl'cs ùel mundo
y emuriaguù:L por sus goces, no comprelldes
quizá mis pesares; no aùivinas que en el coruzÓn ùe llIJtIl"eligiosa puede uHlcl'garsc el SIlfrimiento. 1£ll11u11l1olias crec felices, porque
:la escucha nuestras qucjas; porque 11uestms
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l(¡grimas 110 empañan
el cristal de SUll placeRepública,Colombia
l'CS. Ah! Los sollaz'Js do una monja Sl;l :Lpa-
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Colombia
-
28 --
gan en su celda, y sus lágrimas
en tre los pliegues de sn s¡tya!.
se pierden
"Yo vivo triste, porque tengo ojos que
no ven la luz de la libertad que anhelan, oídos qne no oyen otra otra mÚ5ica que el
acento de los fllneralcs, pensamiento que
muere en un estrecho y lóbrego recinto de
murallas, corazón qne se estrell¡¡ Contra los
hierros de una celosía.
" A 11:'(, cn mis snerros infantiles, yo oía
hablar de amol'; palabra para mí desconocida qllC, no obstante, sin turbar la quietnd do
mis enwl'Îio~, me hacía adivinar tin no sé
qué de (linno y. celestial en un munùo dE:
deliciô:s. Hoy aun, no sé lo que es amor, no
sé si all1O. :-;{.]o sé que en Ias profundiùades
(Je mi alma hay un ¡;entimiento SlwtO y \lo.
deroso q lie lucha por hllllar en otra alma
otr,) igual, idéntico scntimiento.
~ólo séq lie en l!li coruzón hay 11na voz sonOI':1y delicada qlle vibraría r1ulccllIente, si otra VOl.
lL¡;US ceos respondierlA. Yo sien to afcecion{·s
inùeflnihlès que Ille elevan iL Iln muudo superior. Pero en vano! Tall gratas emocioncs
BO a¡lOgan al instanto de Ilaccr! ~í ; todo
cuanto siento de sublime, cuanto halaga mi
alma, murre; porr¡,lC ]a toea cs la mortaja
de] selljmieT,to.
Tengo ajas para volar y TIll'
falta el espacio; 1I1lsiola luz y me ahogo Cil
Jas tinieuJas ; quiero perseguir Ia imágen de
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1:\ dicha, y meRepública,Colombia
hallo envultlta en la. desventura. Yo soy comO una fiar arrancada pre-
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Colombia
- 29matnramente <le su tallo y arrojada
losa de Ull sepulcro.
sobre la
" Dd gran libro de la vida sólo conozco
la primera p:ígina:
Jas demús est(m èn
blanco pam mí. Apenai:l cn Il> aurora de mis
afias, hasta la luz tlù la esperanza se apagó
cu el corazón!
" Matilde! Para mí el ayer y cll/wilanlt
• son ilusiones qU(\ crea el deseo, quimeras
que no halagan ni un instante. Aquí no hay
más (lue e1j)re"IJute;
parque las huras en QI
cJau:stro !la SOIlmás que una pesadilla COfltinuillla. El pasado es la historia de un EUCíio sin visiones, do un suono que \lo llora ni
la luz de la mentira; y el }Jol'veltir es nna
noche eterna de tormenta,
LIlla sornl)ra levantada súbrc UD abismo de somuras. Ayuí,
cula lubregucz do la cdda, los reeuerdOi:l
muen'n ; y si :>.Iguna vez el pens¡ullionto
evoca su memoria, brillan pálidos y 80mbíos
como los Últimos reflejos <leun cre¡JÚsculo <le
invierno.
"En el silencio de la noche, cuando los
falltasm:¡s del delirio asaltan la illllwinaeiÚn,
cuanùo la materia ÙeSCllIlS¿)
l'Il UIl"'Jecho cIe
tablas y el cspíl'it:l rc!Jl'lde se Jan::::! ÍL travús
de los ]¡icrr~s y paredrs (t las rcg-iolll'S del
mundo, 1110 Hllagino á tu lado c')gi~ndo Ins
flores del jard ín, ó aeomada á tu~ balcones
la .juventu~
eleganteLuis quo
desfiladeláBanco de la
Esteviendo
Libro Fue Digitalizado
por la Biblioteca
Ángel Arango
nuestros pIes. Me República,Colombia
tlguro que montadas ell
~aballos veloces como el viento y orgulloso!
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de
carga,
8'.1
30
cruzamos
aiados en la hellcza
la csplauada,
de los campos.
exta-
Me crco
contigo en el piano, hablanùo ese lenguaje
dIvino y misterioso, jnté~'prete del sentimien-.
to, esc lengullje
de los ciclos que llaman
mÚ-
sica, qne arroba el alma, quc conmueve y
electriza. Otras l'cces .... ···.··
l'CI'O
ay!
'l'an hermos:~ ilnsi6n desaparece pan. dejllrme sumida
pierto,
hnir
cn las
tiniehllls
y al palpar
de mi
lecho.
del dolor.
mi desengailo,
In~ens3ta!
'rendría
Des-
quiero
que
huír ùc mí misma, tenùría qne morir, porque cI corazón (S mi más cruel verdugo.
"(¿né
bello debe ser (>1 mundo,
.Matilde
1
sus placcre~ ! Cuán interesantes
sus hom bres! Cuán ulacentern. será la socieCUlll:
VIVOS
dad! Ouán dclicioso~ sus festines,
sus conciertos, sus saraos!
QIlÓ dulce
8CI'(L aspirar
el aura vespertina,
ó contem).!l:\!' la blanda
claridad de la lnna en el paseo! Qué grato
dl'b~ ser el incienso quemaùo
por la mano
del horn brc en los ultarl'S de Ill. belleza!
" A mis oídos llega la mÚsica del baile y
8US sonidos
electrizan
mi coruzón,
COmo la
fucrza galvúnica comunicada
á un cadávcr.
La imaginación se picrùe en un munùo Je
y IlCSCOF. Allí, la uelda<l arrancará slIspiros de entusiasmo.
Allí, los COl'UZOnes evaporados en de:jq\\~oS ùe amQ\" volarán unidos á las notas de la III úsica hasta el
trono del Altísimo.
AIIí, las fibras ciel Ren·
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timiento scagitarán
dUlcemente nI contacto
República,Colombia
del amor I Allí todo scrá felicidad! Mieuilusiones
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Colombia
- 31-
tras que aquí. ...
aquí sólo se cscncha el
taí1ido de ]a campana quc rernecia Jos :ICcntos de ]a muerte, y los gritos de] arrepentimiento que se pierden <:n Jas inmensos
vaCíOB del alma.
" Matilde!
yo soy muy infeliz, y más me
considc:o,
cuando com paro tu e:tistencia con
]a mfa, l~llen Dios 1 qué difel'cneia!
Ambas l:acimos para ser dichosas,
y un houdo
~ ~
precipi(~¡o sepal'll 11ue~tras sllertes. Como dos
arroyos de lin mismo origen, que al empezar,
O ~
su curso toman
diversas
vías para l111ncat,' ;:ri O
llllirse;
el \lila salta bullicioso
formaudo
' ~
lindas cascada~, y ,sc anastra
a] trar~~ ¡Jo ; ~~ ~
las rosas y do los lirJOs, y ci otro corre ¡gno-,
Vi
rado entl'e penan es, para perùerse luégo :l "":
entre las ¡¡guu de un estanque,
" ,~;, :;o
"Tú, rcclinTndn en el seno ùe Iln espoao,~
~ m
tierno qne to illlllHla de caricias,
no sicntes i:; J> ~
ni las horliS que rlleùnn ~C)r tu frcnte. ,Para tí
''::? O'
ia vida es un s\leiio sin maliana, un paraíso
~
velado por JOB ángeles del bien, ùonùe no
~
lIay una serpiente que envenene tns plac('re~,
dOllde 1:J!l flores más exóticas se renuevan
Il
mcrced de tu Cllpl ¡cha, y donùe caùa SOli ¡(la
eR un himno
II tu Yentma. ~i tu corazón
palpita,
¡lilY ob'o corazón qne responde ÍL SU!!
latidos;
si tu mano I3C mneve,
hay atm
mano <¡1I0 la estrecha;
y si una lágrima
empaiian¡
tu mirada, tendrías Ilna mano cari!iosa qne cnjugam
tu pupila. TG corazón
Estees
Libro
Digitalizado
por la Biblioteca
Ángel Arango
del Banco de la
un Fue
centro
de placeres
y deLuisencanto!',
donoo.
~»
ç;
República,Colombia
ù':) se refleja en toda
Sll
Lelleza el sol de la
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Colombia
- 32esperanza, yes como un muro inaccesible {~
]0'; a~alt0s llel dolor.
" Pero yo, Matilde, condenaria en la primavera de mis años á la vindc;" del alma v
encerrada cn una jaubla ùe parcdes, donàc
la flor de la juvcntuù se marchit.a antes de
tiempo, arrastro Ulla existencia miserable ....
Qué digo? una existencia! No, yo no vivo:
La yida de un!\ monja es el suello de la
In nerte, el claustro un cementerio, y cada
celda una tumb:J..
"Dios mío ! Yo armstro las cadenas de
una prisionera criminal, y soy inocente, porque la pnre7.~les la única flor que no ha agostado el infortunio en mi c01"as6n. Soy una.
planta SiDcultivo en la soledad de un yermo, cuando debiera ser un árbol frondoso
lle~o de savia y de perfumes en ]a alameda
.(le un jardín. Soy una l:í.mp:H·;L funeraria
y
vacilante que alumbra un calflho7.0, cuando
debiera ser un solresp\all(¡eciente en el ciclodcl mundo
··
··
" Ay!
Mlitilde! Mis ojos se oscurecen
por las ](\grirnas. mi mano titnbea, mi cabeza se pierde al tra;r,arte el negro euaclro ùe
mis amarguras.
" .Adios! Y si al oído de nna mujer eli·
chosa rnede Ilegal' lu. voz de IIna monja infoctcwada; si eu media de la a\~a7.ara ùel
mundo puetlen escucharse los lamentos de
la proscripción y ]30 desgracia, consag¡':l un
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pensamiento áRepública,Colombia
tu infeliz amig:l. de infancia,
:MARGAltlTA."
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Colombia
- 33Al terminar
tilde parocía
la lectura
atraveèar
de csta c3.lta, ".\1a.
una crisis montaI
que ]a ilacía presa. ùe !ln vértigo horrible.
ae
Un torrente
de lágrimas,
desprendillo
lo m(Ls hondo del corazÚn, se derramó
por
sns mejillas, y su labio murmuró
con despecho:
"Cuán
infelices somos las mujeres!
En el claustro nos Masa la ùe8e~pûración;
y en el rouudo. '
t.ambién.
Oh! /li
.Hargarit:l supiera lo que es el mundo!"
-Mat:lJe I
-Margarita!
-Adies,
}Iatilde mía! me escribirás;
no
es ver(lad ?
-Sí,
l~IUl'garita, te escribiré,
y tú tamo
hién ; nos comunicaremos
nuestra suerte, y
felices ó desgraciadas
nos volveremos á. 'i~T_
Adios!
El sol lle una tarde do Diciembre,
alumbraba lÍ. aquellas ¿os lindas nifias qnc se citaùan pam el porvenir,
en las puerta~
Llol
Colegio
de la :l\fcrccd.
Adios Be dijüron
tiernamente,
y lágrimas dulces platea ron
Este Libro
Digitalizado por
la Bibliotecapuras,
Luis Ángellas
Arango
del Banco de la
sus Fue
mejillas.
Lágrimas
Únicas
República,Colombia
que se derraman
en la vida, porque
sólo la
Este Libro fue Editado por la Biblioteca Luis Àngel Arango del Banco
3de la Republica.
Colombia
-
3'* -
nillez es inocente;
desptlés, el llanto es
mentira, unu. ficci6n !
l.Jas dos nifias atravesaron por la alameda
de 8:LUCeSy dieron sn primer paso ell la resbaladiza alfombra dd mundo. Eran ninas
llevaban esperanzas; cran bellas, llevaban
porvonir.
Los 8iiù8 rodaron sobre el tiempo. I.as
alas dd mundo Sepl\r8rún á las dos amigas.
L1 socieùaù li cada una ele ellas regaló un
sepu lera, y (leI fondo ele' él, l\1argarita, leyantanùo
su suda:'io,
dirigió
á Matilde la
carLa
zando
ésta estruja entre
por sus ojos centellas
qU3
sus manos,
de dolor.
lan-
-TamLiéu
desgraciada! exclam6, y sus
ojos se llenaron ele llanto: las lágrimas son
el cOlls11£!lo, pero :Matilde no tenía esperanza.
De un armario ele nácar embutido de martomó Ull pliego
de papcl dll seda, fino
fil,
como
SlIS
manos,
blanco
Cailla
su
corazón.
Heconcentró su pensamiento en un s()lo PUllto: tomó sentimiento de su alma, fuego <.le
su imaginnc,iÚn, y escribió :
" }Ial'gaJ'l t:i :
" Cuatro auos hace quI' salimos ú yolar.
Cuatro años pÚjaros perdiJ·)s
no habíamos
tropezado e~
I!l
e~pacio ! Al fin tu voz ,ha
llegado fi nil con el acento de la desgracia;
l)ero ella ha ("llcontrado \ln ceo hermano
en
109
torrentes
del infortunio.
También
soy
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infeliz!
República,Colombia
H
DOB olas sa apOdelal'On de nosotras al
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Colombia
-
3r.¡-
;:;a11r ael Colegio
y nos estrellaron cOlltr:\
dos rocas eSClirpadas :-el claustro y el matrimonio
!
"Pisum<Js el dintel ùe la esc:lla social;
con ojo limpío y sereno desa1Îamos
sn pendiento tortuosa y lenta;
quisimos
nna posición y el abismo so hunùió á nuestl'OS pies;
quisimos
nlla corona,
y espinas
cluvaron
llUestms ;rente~ ; r¡uisimos nu trono, llegamos ii. fi, pero bajo el solio encontramos
la
llcscspel'alltc
cBtatU.1. ùel arrepentimiento.
" Ah<Jru cuntl'o afias úramos
sornas infelices:
ras qne Ilarnall
él
tÚ en csn jaula
claustro,
Ja de ùesesperu.ciõn
ql\C
dichosas, hoy
(le amargu-
y yo en esta
jau-
llaman el matri-
monio!
" La suerte yn tejió nuestras guirnaldas ~
A tí te adornó
Call
la COl'Onu. de ciprés y
rosas de la cllterrada
viva;
y soLI'O mis sicllCS colocó la guirnrrlda
de mirtos,
deshojaLl:l por la mano de la esposa 1
" ",lonja y esposa, hoy tl'OpczanlOs en el
campo Úc las confiùencias
; tÚ Call lu toca,
yo con mi anillo;
tÚ con tu hábito,
yo con
mis gains;
tÚ
siera cscollller
cflyidías roi suerte y yo quimi coraz.jn en los pli-egues ùe
tu sudario.
" Ah 1 Cuánto me: atormentan los recuerdos de llnc~tra primera edu(l !
"¿ TIeclll'l'(lus, 1Iargarita, cuando dulcemor.tc cogj(hs de la mano, nos dábamos tíEste Libro Fue Digitalizado por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la
millas y amorosas
besos, y cual ùos am~ntes
República,Colombia
uos pel'\¡íall1o~ cm las seh-as del -corazo~ y
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Colombia
- 36tú lUe llamaùns
/~,[i'I:llS y yo te llamaba la más
lucicnte estrella de la constelación C/tariot}·
recuerdas, :Margari ta ?
" ¿ Recuerdas, cuando leyendo" LOB amores do I@sángeles" de 1I100re, pedíamos al
Ciclo dos vara d~rles tronos en lluestros corazones: i'eeuerd¡ts, Margarita?
"¿ R(~cuerùas, cuando 'al ruído del allm
matinal, j bamos Il examinar el cáliz ùe las
tiares, para busc~r en ellas ci símbolo del
amor, reprl'sentado en dos gotas de rocío:
recuerdas, Margarita?
" Y cuando oíamos el acento dl.: los tnrpiales y canarios, suponíamos quo alguna
callsa les inspiraba el canto; y nosotraR,
cúnùidas, esperábamos ser las musas de los
turplllles Clue halláramos en el mundo: recuerdas, j\Iar¡!;a.rita ?
" Y rceucrllus en el piano, cómo latía el
corazón
eU:lIHlo cantábamos?
Recucrdas
cuando ejeeut.tibamos el Juo de II Uiuramento, y qne tÚ hacías de Vizcanlo, y yo
de gluíza, y quo llucstros corazoncs adivinaban 01 amor? Cuanùo tú decías:
"I/adorava qual s'adora
D'un suo Nnme augusta imago,
Era íl ciel, cui aspirava
La mia sreme, il mio tosar."
y yo te respondía:
({ D' Elaiza il COl' l!in.mm\\i
D'un <1110 ing¡'ato è-onnoscesti
Este Libro Fue Digitalizado
por la
Ángel Arango del
Che mai.
.. Biblioteca
,che el Luis
il' potl'esti!.
... Banco de la
-A mia República,Colombia
morte lo saprai."
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37 -
" y tÚ mI' <lccía~, ni i E;aiza, y yo te contestaba, mi Vi7.carùo, y 1l0S d:JJ.Hlmo~ un ós(:ulo de amor;
recuerdas,
i\rargarita?
" ¿ Recuerdas, cuanùo al páliùo alumbrar
<lc la luna, adivináhamos
nuestro
porvenir
£on nubes de zetaro y pht:! : rccuerùas,
:l\Iargarita?
"Oh!
Hccllerdos
de placer perdido!
1\0
los recuerdes,
:!tlurg:ll'ita, si no quieres Il lIL
te ciegue 1:1 c1escspcnwión !
"El llluudo me recibió con uua fiesta.
Con l,lac{:l'cs recibcn
á la 'l"irgLu 'lue va {.
desg9.rral'
su corolla y su espcran7.u. y CO'1
llanto
la colocan cn la tumua cuauùo va :'l
volar al seno ùe 811 Dios.
" 1\[ i ma 1re IllC scntó
soure sn ¡'('gaza.
ae;l! ici,', mi caucllera;
estampó
su, labios
ell " : :;·L·:'t..~. 'Ercs linJa, me dijo, eaeontr:lrÚ:, tll1 lJuen acoll1oùo.'
" lli,wustóme
aquella frase <¡uc no cntcn(lL YO~1O uecesitaha
acomoùo : ];¡ ]la7. ,1"
mi cor:lz(Jn. los resplandoJ'('s
de m: illocl'u,;ia eran
!:Ji mejor eon'oc1idad,
Pl'ro ay!
la sociedad
exigía
de mí uu ~;lcrificio, Ill)
qUCl'í:t Ull :lngel,
querí:l
lllHL esposa;
Ill;
r¡llPl'Í:\ uua fiar que adornara
los j:lr:liut:s s()ciah's, quería un (lrùol (F~e ù¡er:L frulo, \lila
:llma 8in selltimiento.
"]lebíarnos
asistir et un baile;
mi ('01'<17.(>11s.) estrel1leció de contento,
porriue ignol"¡ùa:o quI' flleru, esta ù iver~iúll y sn idea
Este Libro Fue Digitalizado
por la Biblioteca
Luis Ángel
del Banco
la
me le\',lIItaba
(. regiones
deArango
placCl',
?lrúsdetarRepública,Colombia
de adivinÓ sus cnc¡\n1,03.
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-38"Un baile es la careta de contento con
que se cubre la indiferencia.
Alli so apaga
~I pudor con los usos sociales; allí se pierde el pensamiento al compás de la mÚsica;
allí III mujer trata de ostentar sn belleza,
nada más; y el hombre sus movimientos,
eso es todo.
"Un murmullo de admiraci6n levantóse
á mi presencia, semejante á Jas olas que cncrespa el aquilón, 'Qué hermosa! Linda
mlljer ! Elegante joven !' Esto llegó á mis
oídos.
" Infinidad do gal'anteadorcs me citaron á
bailar; todos me Ilenaban de flores, me decían lue sería feliz, pUE'Sera hermosa, Cuando oí tantas veces esb ridícula profecía recordé aquellos lindos verllOSde Espronceda,
que juntas leíamos debajo de los sauces:
•• Oh ~ ]a belleza, infame rnerrllncia,
Que una pobre mujer por oro tl'ueca ~"
"Sí, mí belleza era mi porvenir, y yo
debía ser rica porque era hermosa!
" Entre Jas que me citaron á bailar, toc6me en la cuadrilla uno cuyo recuerdo mo
asesina. Era de regular estatUl'a, de carácter fino y afable, do dulce mirada, de sonrisa franca. Después dcl solo, en que sen ti
centenares de ojos ÍLvidos sobl'e mis movimientos, en que el ruuor del p·tacer tiñ6 do
púrpura mis mejillas, y en el que sentí mi
seno crecer
y decrecer
enArango
olas del
de,Banco de la
Esteturgento
Libro Fue Digitalizado
por la Biblioteca
Luis Ángel
plata; dcsputJs deRepública,Colombia
aquel instante eu que 11.\
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-
3D-
mujer reposa sobro sus encantos, dirigiómu
la palabra, y su voz produjo en mi cora~ón
el efecto que produce el viento, que UII niño
an oja en sus juguetes de armonía.
-" 'Matilde,
mo di~o: es argentada su
voz, encantadora su mIrada ! Feliz sería, si
roe abriera su ahnll y me dejara depositar en
ella una hoja sin escribir-la
historia de mi
corazón. '
" Levanté hacia él mis ojos, y ùeùí COI1testarle con una de aquellas miradas que sólo
el corazón puode adivinar.
" Sus ojos espiraron 011 los míos, y yo hubiera q'lerido en los suyos sepultar mi mirada.
" Al) ucl joven tan espiritual, tan franco,
que 5e salía de las galanterías vulgares, me
llamó la atención. Pero i ay ! quo m:1S tarde debía ser la espina miLScruel do mi corona de mártir!
"Siguió
visitándome:
nuestras relacioIles subieron como espnma, y como rspllma
el viento las disipó. Ofrecióme su esperanza,
su porvenir; y yo, incauta, por un capricho
lastimé Sil orgullo.
_" ,Matilde, me dijo: (¡uisiel'll usted ser
mi esposa?
" Su voz tenía el timbre del oro, su mirada era do amor, su sonrisa de temor, y su
ansiedaù era ùescsperación.
_" 'No cs pogible, le contesté, hay un
serLuis
su Ángel
esposa.'
Este Libro obstáculo,
Fue Digitalizadono
por puedo
la Biblioteca
Arango del Banco de la
" EntoIlces República,Colombia
SUi:) labios se rozaron COll des·
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-
40
<lén, !lll mirada tomó la altivcz del águila,
Sil frente so tornó ru~o¡;a con b 80mùra del
pesaI, BUSmejillas Ile cubrieron do palidez,
su orgu\lo cstaba herido.
_" 'ilien, señora, mC,replicó. Ol'\idc IlSted mi arrojo, que yo nunca ohillaré mis
afectos.'
"En el acto me urrepentí. Era tardo!
" Parociúmc tan hcrll1oso . en su alti vez
que do rodiJ111s habría implorado pel'rlún, si
yo tamùién11() hubiera sido altiva. El hombre orgulloSGl domina ú b mujer, el humildo
so ridiculiza; el .,primero merece amor , 01
segundo compaswn.
"En adelante, Sll truta era finísimo, y delicado, sus manos oran un rrproeho pum mí,
tenía que huír de Sil pre~cncia porque B~
finura mo martirizabn.
" Imposible cra aplacaJ'lo : el lImor os la
primera de las pasionos, y el amor propio cs
el primero do los aIDores. :Me amaba, lo conocía; pero aparentaba scr una estatua do
biela, que para movel'la se necesitaùl' tener
el fuego del infierno .
• e ~li
madro me urgía para que tomara estado; mis gracias las marchItaba el hielo
del tiempo, so apagaùa mi primavera, se secaban mis rosuùas labios . .Entonces dí á otro
la mana ùo esposa.
" Se rue vistió de trl't)~ bhn~\), 'j "ffi'rs beciones las cu briel'on con un velo traspal'cnEste Libro
Digitalizado
por la Biblioteca
Luis Ángel
del Banco
te;Fuecn
mis sienes
colocaron
nna Arango
corona
dl) de la
frescas flores, República,Colombia
y con ostentosas galas me
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Colombia
- 41á entrar en esa tumba doné1e se
lcnLart1ent<" sin consuelo,
Sill espe-
preparam:-.
agoniza
ranza.
"Prometeo
sentía
al buitre desgarrarlo
sns entraftas
renaeientes;
Túnta!o
abordael agna refrescante
ú sus qnci~ante,; labios, y ésta se deslizaba,
cruel,
sin refrescarlos:
llélso;ras somos Promcteos
soeiules;
el buitrc llll~istro esposo, Túnt,tlos nue<tros
cora7.0nc~, y el agua pérfida, el amor.
oa
"Cllan(lo
de t'Il media de la nestlL mi esposo me '.endió b mano para separanne
<lel
mundo, !evnnté 5. élloB ojos, y en Sll rostro
conod las scihtes ùe! vcrùugo.
"1Ilisterio del corazÓn, :l\Iargarita ! Yo
apreeialm al (lue debía acompuîwl'l1w en la
peregrinación
dû )1.1 vida, pao ci Pl'imer
día de Illlestr:l unión fué el primero .le mi
odio lwein mi dueno.
"Soy sn forzada eompaücrn,
no St. amiga ; soy su esclava, no su esposa. Los by-os
que lias atall llO~ unen socialrncIltc
f nos
separan Cil Jas misterios del amor.
"Y nhOl':l continúo
at:Hla
un !umbrc
qno abonczco;
estoy une ida al c:.trr<> (Jo la
(IcsespenlCiÚn, combato cOlltra. Jai! olts del
inforttnio,
y sin Ilna estrella Cil el ci(,lo, sill
una luz on el horizoJ1te, mi eS1Jcl':Lllza so
Hwlvo cs puma, y coUla Ja cspuma fO ùes-
:t
barata!
Este Libro Fue Digitalizado
la
Bibliotecata!ll
Luis Ángel
del Banco
la
"Y miporRepública,Colombia
esposo
poco Arango
mr. ama,
soyde sn
infierno.
Se casú conmigo
por L1l50ar como-
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diùad en mi esoll\,itud, y temprano le cansó
su imperio.
" En días paaados le sorprendí rugiendo
como un león encadeul\do : de SUB ojoa brotaban torrentes de fuego, sus dieutes crugian con desesperación,
trlltaba ele ahogar
su voz y lanzaba gritos de furor. Eutre sus
uumOS tenia un retrato. No era el mío 1
_" Matilde, me dijo, escondiendo el retrato Y aplacando su temblorosa voz. Eres
mi cielo, mi felicidad, feliz el instante en
que te amé, y m:H¡ feliz aún el momeuto en
que el matrimonio para siempre unió nuestl'a existencia. Somos muy feliccs, no es
verdad?
_" Sí, le contesté. Enjugd una l(tgri.
ma qnc rebelde asomó á mIs pupilas, salí de
su cuarto y en la puerta besé Ull clavd blanco que en tiempos felices me habla dado el
oùjeto de mi aùoración.
"y sin embargo, estamos unidos; ambos
l1clamos la indiferencia en el corazón! Qué
di~o? El odio; pero nuestra educación nos
hlwe cubrir cou cll'opaje de las satisfacciones, y el munùo envidia. nuestr:¡. enc:mtado-
l'a suertc !
"Somos dOB cautivos atados á un cadáver
corrompido y yerto; dos vivoras mordiendo
Hl mismo acero; dos naves pcrdidus CD Hna
misma borrasca, Y dos almas COll Ull s6\0
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illticrno, con
un mismo roal'tiriG, un'l roiaRepública,Colombia
, ma expiación.
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- 43" y Ú pesar de esta, unidos, unidos desl10
el altar y hasta la tum bn. ! ! !
" Yo he desg-arrado la mortaja de mi corazón, y dando rienda al sentimiento, he vudto á ver al joven que mi alma adoJ'[l; pero
ay ! que {,I tan s610 me tiene compasión ! ~!
" Castiga(la está mi superficialidad;
pero
la eternidad del castigo me atormE::nta !
"Los luzas eternos, Margarita,
no los
•• acepta Dios y el corazón no los comprende,
porque es un globo de sangre voluble como
la humaniùad. Dios colocó III alcance del
horn bre el amor y el odio, el cri men y el
arrepentimiento,
la quietud yel remordimiento; y puso el corazón fluct.uando entre
estas males, porque ea la. varian te voleta ùe
las acciono!1 hltmanas.
"Analiza, Margarita, los lazos humanos,
y todos los hallarás rotos por la llllturaleza.'
"Alli dos amigoa naufl'agan, una sola tabla es Sll salvación, cad:lllno Je ellos con su
punal trata de dC811nirsc de su :l,nigo. Los
1l1zosde ia amistad Jas rompe el interés de
la existencia!
" U na joven estrecha entre !ltlS bl'azos â
RU anciano
padre, Jo cuLre con su llanto,
Jo rcft'csca con sus labios; ùe repente RtlS
manoa
so separan
(.!ei cuello
de on padre,
sus ojos se tornan (t otra p:¡¡"tc; sobre SllS
labios se pinta el amor, tin joven I:t tIende
la mano, y ella se la estrecha. Los tizas ùe
flLlniiia
los ha por
quebran
tarloLuis
elÁngel
amor.
Este Libro
Fue Digitalizado
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República,Colombia
" Allí un amante
le dice aùios á Sll ama.
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-
44-
da, con llanto en los ojos y amurgura en el
corazón: cruza en el mar, atravieSlllas
mOIltallas, rcgresà iL su patria,-los
amantes
no se conoeon. Los lazos del amor 108 desgarró el tiempo .
•, Dos criminalcs, elnno en la carecI, de
rodillns delante de lil imagen de :María, y el
otro en la emùoscada, oguzando RU pnrral,
han puesto en medía de sí la. valia inmensa
del arrepentimi.:mto.
" y l~s esposas y las monjas romperían
sus Jazus en él fOTIlIo ùe la tumba!
" Margarita!
mi tumba tiono flores y placere~; la tl1ya sudarios y crespones: :í. I1lis
oídos llega la mÚsica <Id baile; tL los tuyos
arrullan
los cantares de la muerte!
Toma
mis jOY¡I~, IlalllO tus cilieios; toma (!sta alga. zara, -: d:llne la soleded de tu selda; ;)lurgarita, ~f:¡r,""ri(:l, si tÚ fueras esposa te tendrín COJJl¡;:,SiÚll.
umi¡;a mí:t" tú cO,mo y~
mI COr¡¡Zdr" IJldclc a
Dias, si iJlIOIIes urar. Ille de rcsig!HlCión, que
yo tambi(.lI le pediré porq'l() baíïe tu alma
call raudales de paz.
"Orl'lHŒ, :Margarib, humildemente,
hasta que ;:ba:ldollaudo
esta cri8;Uica miscrable
l'Il la orilla
de la tuud);!, mari pesas volemos
"CompaJ{,eeme,
sufres,
eom¡llendes
al sellO de] Sl'lIl>r.
,jL\TILnr:."
Cou ulla lágrima
}wgv esta carta,
y con
UIl beso la sl'lló;
contempló un rato el doEste Libro Fue
Digitalizado
la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la
~¡lcs,
y <'fcripor
Lió:
República,Colombia
.' .'1 J/t/rgari/a, en la tumba."
Este Libro fue Editado por la Biblioteca Luis Àngel Arango del Banco de la Republica.
Colombia
'- 15-
HISTORIA DE UNA COQUETA
Hrgistranùo }03 papelrs <le Ill1eRtroescritorio fijamos íllvoluotariamente
los ojoB ell
un p]i('go cerrado con la mÚs exrJuisita ccqueterÍa. Despedía un agradaLle perfume,
y una oblea que había robado rú'eo color,
indicaba qnc soLre ella hahían (lrscans:lllo
108 laLios (le IIna mujer.
Hornpimos d sobrescri to qlle misteriosamente rllcrrrauu u II
I,c,nsamiento l1alagÜefio; y '\'Cd aquí la relación que encontramos, qne sin duda ntlS
habb sido dirigida para que dánclole publi·
cidad produjera SUB efectos:
"UNA
PROPUESTA.
" Deseo unir mi mano Ii otra mano, mi
corazlln á otro corazón. Venciùa de mis
amorosas peregrinaciones,
quiero apagar el
fuego de] arGor romántico, para vivir en el
c](\sico infi('l'llo de la unióll de lOBsexos.
Quiero vivir, porque hueta ahora mi cxi~tencia ha :>idotempestuosa:
la agonía de la
soltem que ye marchitar
sus encantos, ha
Bido la mús escogida flor del vergel de mis
ansueDos.
" Quiero hacer de mí ulla pálida pintura,
y ojalá <¡ne esta corta relación ::;irva de algo
tÍ. mis hermanas;
{~ las confhlentes de mis
amores y á todas aqúellas que sin conocerse
Este Libro
Digitalizado por
Biblioteca
Luis Ángel Arangoaldelque
Banco de la
~e Fue
eneuentran
en laignal
predicamento
República,Colombia
rue hallo yo en este
instante. Oh! quien hnEste Libro fue Editado por la Biblioteca Luis Àngel Arango del Banco de la Republica.
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-
46-
hiera tenido la cducación bastante para mirar el mundo corno es en realidad- Vanidad-Jle¡¡tim-lIvmo
y Jfiscria! ....
" Apenas cuento veintiÚn abriles. Nací el
1.o de Febrero de 1833, preciaamen te li la
hora en que el sol, envianùo sus Últimos
rayos {L las argentadas lluLeR del Oriente,
iba á hundir Sil ígneu carro en CSl: lecho de
ancLol que el Occidente le prepara. Feliz,
mil veces feliz. si se hubiera apagac10 pam
siempre! Feliz, si su disco de plata no hubiera vuelto tÍ asomar por la cima del l\fonserrate ~
"Soy p:'dida y tengo los aios azulcs, color
del puro y limpio aZ111del ciclo en el más
lozano día de Diciembre;
mi mirada es
triste y deslurnuradora; mi talle cs delicado
y flexible como el mimbre; mi clIltura es la
deunanifla de diez allas, y mi cuerpo airoso
descansa sebre el pie mÚs fino y elegante.
Arrojo mi somis:L por entre (1.)s hileras de
provocativas perIas, Cll tanto que vaga pal})itanto en dus labios ùe coral sangriento,
en dOl:de retoza la fugaz imagen del más
vol uptuoso atractivo.
" Mis cabellos, color clari-oscUl'@l,cacn en
ondeantes rizos sobre mis ebÚrncos hombros, y mis bloodas y relucientes pestafías
"elan
mi mirada
azul.
" Soy la figura (M idealismo, rodeada del
más exquisito deleite. llero todas eatas beEste Libro
Fue Digitalizado
la Biblioteca Luismerced
Ángel Arango
Banco de la
llezas
se han por
marchit.ado,
al del
trato
República,Colombia
que en la vida yo me diera. Sobre ellá.ngniEste Libro fue Editado por la Biblioteca Luis Àngel Arango del Banco de la Republica.
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-17 ~h f'(,br 'Je mis mejillas puse el precipit:1rla
, rojo; slJlm: mi" labios que desaíh.ball la púrIlttra co\;r;u~ el carmín; mis sedosos bucleR,
á fue:'zâ de pomadus odoríficllS, han perdido
aIgl1nas dn sns heùras; mi mirada pcrùiú HLl
Iu7. virê:;"';!l,para
dill' lugar (t la vaciedad
é
hip,".;r",;"
y mi sonrisa
de ángcl se troeó
ell h :,,;'1;; 1'l1lgar mercancía
de nna mlljûr
cfJlItÚr:. Ah! Todo casi la he perdido!
Pero
!Sobre todo, lo que más hace hincar ci diente
del dolor cn mi tm'epelltill0
corazón,
es la
pérùida de aquel no se qué incxplicable
<¡Ut!
forma la más brillante
corona
del heeb izo
de una mujor!
" Era nilla, y á los nacicntes
albores de
mi juvcntu,l
se me e.rraneó del laelo ele mis
padres
para
encerrarme
en un colegio.
Nllnca debe la mujer abandonar
el cuidado
de la madl'c, ni la ~ariflosa protección
de BU
padre.
Los padrcs, si tuvieran
más juieio,
jamÚs RolUuían
á sus hijas (~ la merceJ ùe
un extrallo; si ellos fueran bastante grandes
para educarias,
la educación
ùo la lU'ljer
sería el reflejo de sus corazones, y la luz qne
se dos prende
del corazón (le 11n padre pa \':l
cdycar li su hija, aunque aquel padro ~ca un
tigre, se puede decir que es la lU3 pura Je
la virtud.
La Ilaturalcza
tiene sus lpycs, y
hay algun~\s tan impel'ioslls,
que la voz ùel
crimen no uasta ]lara desvial'lr.s.
"Sola
y abandonada
en media
de mis
Estecompaiíeras,
Libro Fue Digitalizado
Biblioteca Luis Ángel
Arango del Banco de la
en por
las laparticulares
eonversacioRepública,Colombia
,nos con eUas empecé
á Rùl'il' los ojos al
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- 48 .genio ùel mal, qne sin cesar agib sns abs :
sobre la vida ~ocial. No todas teníamos la
pureza del corar-ón, y las que nos hallábamos en ese estado, éramos la flor que se
siembra entre las espinas, la luz <¡ne á lo
lejos se pierde en medio de la oscuridad.
"Nada qtH'ría nprencler qne no tuviera
relación con el amor. Todo lo que tiende a
educar la inteligencia mo parecía frío, pesado y de mal gnsto; todas aquellas galas '
superficialcfll, que, si bien Bon UII adorno, no
sirven más que para dcsC'ansar de las fatigas
de la vida, me parecían magníficos entretenimientos. :Me disgustaba aplicar el cálculo
á las matemáticas,
la memoria ii. la geografía, la filo¡;ofía ú la historia, la atención á los
idiomas. Y LOn cuánto placer pasaba rápidas
mis delicadas manos por las temblorosas teclas del piano, tocando Jas fantasías
de
'Wcber y de Donizetti! nOli cuánto placer
levantaha la voz cantando la sontida uria
de ,. Belísario,"
la subljmo cav~Üina de
" Macbetel)," la "Lucía," y todos aquc]]oe
ecos con que Verdi y J\Iozm't han ellliquecido el munùo lírico' Ah! todavía siento
las dulces emociones que me producían tan
dulces acentos! Y cosa rara! Yo sentía con
sus sentimientos,
lloraba con BUS lágrimas,
á pesar de ùstar la letm. en italiano, Ilorql1e
la voz del corazón sc despertaba al ruido .Je
la melodía!
.
Este Libro Fue"Digitalizado
la Biblioteca Luis
Ángel
Arango
del Banco de la
Aquellosporinstantes
de mi
edad
primera.
República,Colombia
fugaces pasaron!
Yasí como el vienbo
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Colombia
....•.
~9borra la huella. que dejara el pie de h
peregrina ell los arenale8 ardientes de
Ara.\lia, asi el soplo del mundo barri6 b
i~'
huella que el lIentimiento debía dejar tI'_
adelante en mi joven corazón!, ....
"Apenas saH dei colegio, ya qUise t-en,-,l'
11n amante, pues enrolada en la Elooiedad,
les ofa hablar íí. mis amigas de /lUS CalCi'.o
amoro~a8, de sus billetes, de BUS cFa,;, <i\:
I:US temores, de sus esperanzas,
y consilii)
l'abu incompleta á. la mujer que DO tuviera
un necio que de flores repletara BU altar.
~l~odavía sentia en el pecho latir el corazón;
:r si hubiera encontrado un joven que amara
en realidad, una alma que me comprendiera,
llabría levantado el amor hasta BU apote6sis,
habría amado con el amor de la Julia do Lamartine, habría sentiùo el torrente de la
virtud, y mí corazón se habría apacentado
entro los perfumcll del espiritualismo.
IIekía eido para mi amante el objeto de su
gl'andeza, como lo fué Laura para Petrurca,
Elvira para Macías, Beatriz para el Dante y
Ll30nor para 01 Tasso; pero la carencia de un
objeto digno me scl'íaló nn fiu distante de la
grandeza do mi corazón! ..... , . ,
HEn la calle, en el teatl'o, en los bailes, y
por todos partes oía decir constantemente:
Qué hermosa! Sonrisa da ángell ojoa celestia.JeB, y todas aquellas necedades con que
los Fue
galanteadores
mal gusto
los de la
Este Libro
Digitalizado por lado
Biblioteca
Luis Ángelsalpican
Arango del Banco
República,Colombia
oídos dl una mnjer.
A fuerza dG oírlo tanto,
linda,
este del
fuéBanco
el de
pl'ÏEste Libroempecé
fue EditadoplJr
por lacreerme
Biblioteca Luis
Àngel y
Arango
la Republica.
Colombia
4
-
50
1-
!11er pase de mi coquetería,
DlJ~graciada la
Plujer qne no tiene una chislm de intcligenc; a, para conocel' que la belleza está en In
cabeza y en el cornón, y no en 1:1 forma do
ese blllTO vil y cambiante qHe se llama figura!
"Una vez que me crcihermosll,
mc consideré con derecho para SH malcr¡'ada. Me
saludaba un jovon flllO no era de mi agrado,
110 contestaba. sn at¡mto saludo, )10 invitaba
á bailar otro que no tenía reloj y bot.,} de
charol, le decía quo estaba indispucsta;
mo
daba la mano alguno
paru pusar ulla acequia, tornaba á otra parte mi vista:
era el
á los ojos de toùos, y
ente mú, desagradable
;:0 lo comprcnùía.
Ahom, quo veo mi vida
[L la In;', de la razón, mo con ••.enzo de que
vale ll1(LSsel' perVel'Btl q uc desaten ta. Una
lUujel' mala cs UIl mO:lstruo;
:,;in cultura
cs el más
seres que reciben
"La
dulzura
['rincipales
pero nHa mujer
despreciablc
de los
la luz del sol!
y la amabilidad
hechizos
son
los
que dol ciclo rccibimos.
COll ellos á nucstras
plantas postramos al
más altivo <le los hombres: la pupil<l. dulcc
de la tigl(: llace que su feror. compaiícro,
COll sus sangrientas
garras, se finastre por
d loùo; también hechiza la pantera; la paloma COll Sll dulce arrullo, de duLwl'a desespera [L su palomo; y la circasiãna con su
tierno canto, ad uermc sobre su seno palpitante al ficro Sultán, quo por ser Sultán no
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tiCllC
un rasgoRepública,Colombia
de sentimiento
en el co~·uzóu ....••
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Colombia
- 51"Cuando desde mi balcón veía pasar las
docenas de mis adoradores, tí. todos les sonrcía, los miraba con amol', los seguía con la
vista, y no comprendía
qne estava arrojando al viento mis cariuias. Erl el paseo vol.ía ú. mil'll!' para atrás centenares de veces,
cadu. ocasiÚn que por d<:Jante d/J mí pasaba
algÚn galanteador.
En el teatro fijaba los
gemelos formando caprichosos eírculoEl • .En
la iglesia ¡¡J¡:aba lus esteras eu donde ti galanteaùor del día me ponía entro el paho
su billete de amor. Y en el baile .... Ah!
en el baile era el sér mÚs raro del ffilWdo.
"Apenas
pisaba el dintel de la sala,
cnn.ndo una turbu. do bailarines se preeipitaba sobre mí. como Ulla bandada de cuervos 8e precipita 80brc un cadÚYcl' para deVOl'arlo. Yo creía fIue era 1101' mi mí·rito
personal, y los protegía con mis sonrisas;
más tarùe lile he convencido ùe la ,erùlulera
caU!la, p~cs las coquetas tenemos una época
en qne todoB quieren tomar un retaso do
lluestro amOl', Epoca veloz, en quo, cuando
cada Ulla se engulana con Ulla pluma, y no
!lOS queda ya qne 1wodigal', nos dejan euvueltas en ci arrepentimiento
yel ùolor
.
"A óste le daba un fuerto apretón ùe
mUllOS: ai otro lo llenaba de amor con mí
sonriôa; más lejos miraba con intor~s-ú
aq net 'te !lmo '-nI otro, (te adoro, bien
mío.'
'Angel
mío, esporo.'
'l'onlad la
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contestación.'
'.El
último billeto estaba sin
República,Colombia
iirma.' • Aùio9, hasta mananll,' y otra in.
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- 52finidad de distintas oraciones, eran dirigidas á distintos sujetos. Todos estaban de
mí satisfechos; todos me ama.ban; me creían
y yo los engañaba. !
u Enganar
á un hombre! .•.. Necia pre8unción de la mujer. Cuando el hombre juega con nosotras, como el viento con la débil arista que el torrente precipita! Enganar á un hombre .... Cuando él finge una
creencia, para más tarde desgarrar con la
mi8ma arma el débil raso que cubro á su adversaria! Yo creía enganarias, y mi buena
fama hacía ruído en las fondas, paseos, billares, y por doquicra mo llamaban J,A coQUETA.!!!
" La. coqueta!!! ('s decir, mujer sin corazón, festín del audaz primero que se IUll7.l1,
viento que 80pla en todas direcciones, belleza adornaù&. del lodo é ignominia
.
. ..... . . ~
,
.
"Ell'ubio
me parecía hechicero; el moreno picante; el pálido, romántico;
el de
colorido fresco, interesante;
todos me gustaban en tod:!s ù:rcccioncs, y bastaba que
uno me floreara para que Je expiùiera el
título de acreedor de mi cora7.ón. 'renía u~
amante diario y cien suplentes; y en caso de
pr~8e!]tJll'sa éstos al rnisl~o tiempo que el
pnnclpal, para todos habla, y poco me im-
portaba
un disgusto,
queArango
tenía
nna de la
Este Libro
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Luis Ángel
del Banco
brillante retaguardia.
Estaba encantada, y
República,Colombia
al mismo tiempo que era la burla
de mi!
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-
53-
amantes, me consideraba
resante de la creación.
la mujer mlÍ.Binte-
" En tre la multitud de mis pasajeros
amantes, hallé uno que es el que forma la
página más lamentable de mi historia. Su
figura. no interesa, pero su parte moral teníll mucbo de parecido á la mía. También
había teniùo eorazón, no había encontrado
una alma que lo comprendiera, y se había
lanzado á la sociedad sin un reflejo de sentimiento: me decía que me amaba, yo se lo
repetía: él no me creía, yo de él no dudaba.
El en realiùad no me amaba, y el desdén
que á vecee me manifeshba,
me hacía l'endírmele sin corazón. Era elocuente y audaz, y Lstas dos cualidades me vencieron
sin comprenderlo.
" U na noche que bailábamos una 1Jar801,'iana, me dijo que lo recibiera un billete.
Qué coqueta no lo recibe? Lo acepté, yen
él l;'ncontré el veneno que debía matarme.
Era lacónico, pero audaz J decisivo, ùecía
así:
" , Sufro mucho sin verla, sin estrecharla
contra. mi corazón! En BUB manos está. el
problema de la esperanza ó muerte de nuestro amor. Resuélmlo. Manana á.las doce de
la noche, el ruido de u na serenata le dirá
que la espero-Adios.'
"Leí y releí este billete, qoe había intra·
,lucido entre mi guante, y con la mILno
Este Libro
Fue Digitalizado
por lacorazón,
Biblioteca Luis
Ángel Arango
del Banco
puesta
sobre mi
contesté
al pie
de de la
República,Colombia
la letra:
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-
54-
" • Espero-hasta
las doce.'
" Había, purs, aceptado una cita peligrosa, mi coqueter:a me arrastraba á 1111
abismo de remordimientos y prsures! I.Al coqueta tiene un pic en 1:1.de~honra y nua
mano en la desesperación.
Yo pisaba el
borde del precipicio, y la desesperaci6n se
preparaha á abrirme las puertas ùe sus oscuros antros.
" A la hora cor.venida se dejó oír iL lo
lejos el dulce ceo del bien pulsado vinlín de
Patifio; sns blandas armoníus. en alas de la~
ráfagas nocturnas, ih:m li espirar Cil el fOIldo de mi corazón. La V07. sonora de Hernández bautizaba el silcur.io de la nocho con
raudales de cadencias! Todo dormfa, hasta
la voz de mi conciencia! ....
" Puso sobre mis hombros un ligero cobertor, apagué en la alfombra l'1 ruido de
mis paSaR; y prensando los latidos del corazón, marché á la cita! Oh, si mi amor hubicra sido cspiritual, si huùiera sido como
en mis primcros afias lo adivillaba cI Corazón, habría ido á <,!la Call la frente pura,
con el alma tranqll1la: habría ido &intemor
ni remordimicnto, y el Creador de los munÙl.!l habría
sido el guard ián de mi inocencia! .... Pcro ahol'a, ahora <,on el amor de
la coqueta ... , Perdón, Vios mío, perdón!
{( A pocos instantes me encontre en ùIazos dû mi amante, que, frenético,
me estrechaùa
contra por
su lalaticll
te Luis
èorazóll!
Este Libro
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Biblioteca
Ángel Arango del Banco de la
-" • HermosaRepública,Colombia
mía! '
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Colombia
-
55
_" , AmaJo mío!'
" La YOZ dt' Hernández, á lo leios, sc oia
cllntando la lágrIma de 13yron, de eso poet:'
sublimo de ht dcsesperaci61l!
< l'Ytármol no quiero
yo pam lUi tumba,
}lOllumento
du v;>.n'l oSII'nt"d0n,
Que \e'l<\n\;>'l\ los llijos del Ol1zu!Jo
A la ¡¡nagen fngaz de su 11')]01'.'
" :Fué
ent0?CeS
Ijlle
recordé
Ijue
l1ant:J
tenía en los OJOS, y que trataha de (lesprcu!lorse, arrastranùo
en cada
Ilota elulliverso
Jel remordimiento!
l'obre Iljí'la, abando!lada, sin quien cuitlam
(lo mi cdl1c:lciú!~
moral,
me luncé c:C'ga á mi
rUilJ'\~ ~I:lri-
J)osa descuidada,
la llama lIIU tu"tó Jas alas!
:\ll1jer sin peuEumientu,
ell elllll1ndo busqué
altar y lll<.QPqnetería rile rC'g:lló
ba! lnfclÜ (7~ gue ¡¡((G(} I/('/';IIO,'(I!
lIll
\lila
tumInfeliz
de la (ll\l) Hl crce intercsalltc,
y que por puro
})asutiClll'0 rinde su tCrJlura al prilllc:o quc
JtI solie ia!
"Al lin apareció la luz (h,] desenp:aÙo.
:!Ilis amantes cansados óe mis e::uíeias, sc
TcLirarc'll ~in llevar de mí llllaligera
huella.
"En todas {'::Irtcs me miraban con desprecio, y )"0 arùía de slntimiento.
Aquí aprctaba la mano de un joven lleno de vid:!, 'j
lu. sentia
cad(lver. Allá lanzaha
incenùios
de amol' con mis ojos, y sc apagaLun en uu
mar de dcsdencs. Vios mío! Hna n11ljer tan
galauWtda como yo, encontró el fiu:l\ de la
....
ulgariè.d-e1
desprecio ...
Ayer apareEste Libro Fue Digitalizado por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la
ció mi orienteRepública,Colombia
salpicado de estrellas y de luz.
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Colombia
-f}t)
--
y hoy con la ambiIJión de la juventud, todo
mi ocaso, oscuro, tempcstuoso.
Remedo del
ajusticiado
que contemplando su ataÚd,
quiere scirse á la tabla de la vida, la sociedad lo precipita on 811 sepulcro por una pendiente escurridiza y rápida! ...•
"Hoy me encuentro despreci~da hasta
por el héroe de mis aventuras. El no me
amaba, me abandon6 .•.. y ni aun siquiera
le puedo decir Jo que la cautiva ùe Espronceda:
, Supe amar como ninguna;
Supe umar correspondida!
Despreciada, aborrecida,
No sabré también odiar?
'
"Si, ni esto, porque ni odio esprime ya
mi coraz6n! .......•....................
.
.
•. •. •. •. •. •. •. •. •. •. •. •. .. •. •. •. •. •. •. •. •. •. •. •.
.
" Esta. es, poco más 6 menos, la historia
de mi vida. Me ofrezco, pues, en matrimo_
nio al que quiera aceptarme. Pero ¡ay! tal vez
todos lo huiréis á la coqueta, como debe
huirle todo ente racional! Mas Bi hayalguM
compasivo, si en algo aprecia el lloro del
-arrepentimiento,
perdóneme y r.o me Condene á continuar atada il la cadena de la
soledad ....
" E¡¡ta es mi propuesta: 'Espero como el
cjego Ja luz, coma ol moribu ndo la vida,
como el muerto la reaurrección.''Ya
tenía
las Fue
e8peranzasmuertas,
pero_iuTitación
Este Libro
Digitalizado por la Biblioteca
Luis Ángel Arango del Banco de la
.de nuevo las ha República,Colombia
hechoreto"f~ .
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" Ojalá haya alguno que la acepte, que
haga renacer la vida en el corazón de una
coqueta, y entonces hará una acción más
gl'sndio88 que la resurrección
de I .•ázaro."-***
Esto decís el pliego que abrimos; (\1cual
(lamas gustosos publicidad,
suprimiendo el
nombre y apelliùo para evilar duelos y comentarios.
"BóIo en la paz de los sepulcral! creo,"
ESPROl<ClIDA..
Qué se hicieron las horas de ventura.
Que llora el corazón entristecido!
Por qué dejaron mi pecho herido
La lava dol dolor?
Por quó eBe Bol alumbra
mi existencia
Si el mundo me prodiga 8US enojos?
Ay: que derramen mis llorosos ojos
Su llanto quemador!
Llorad falta que nnnca cometiera,
De haber nacido con Bensible pecho!
el corazón
Este Libro FueLlorad,
Digitalizadollorad
por la Biblioteca
Luis Ángeldeshecho,
Arango del Banco de la
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Ojos llorad, llorad!
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Savia del corazón, lágrimas frías,
Si dcjais CI mi espírit:I el reposa,
Corred, y en vuestro curso silencioso,
Mis ojos apagad.
Que no vea la luz: la luz me ciega,
y atormenta mi alma desgarrada!
Pero secos mis ojos! ~ada:
Nada!. ..
ürüel agonizar!
Martirio atroz! Horrible sufrimiento
Dad una Bola l:ígrima á mis ojos!
\. cdlos erran tos, vagos, turbios, rojos,
Sin gota que llorar!
Piedad, piedad! Oh lágrimas amargas,
Mi placer, mi esperanza, mi contento!
renid, venid, ahogad mi pensamiento,
l'or Dios, venid, nmid!
y vosotros fantasmas del infierno,
Que en prensa colocais el alma mía,
Huíd! Volved ti la región sombría,
Génios del mal! Huid!
:Nollorar, no llorar! Eso es h<lrribl~!
Cuando el pesar tala.dl';t nuestra frente!
Eso es secar del corazón la fuente!
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Ay! eso no es vivir!
República,Colombia
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59
N ací infeliz! ~Ii cuna fué al tormento:
~Ii corona rompió mi triste suerte;
!'eru ùe ho,)' mils h.s sombras de ]a muerte
Serún mi porvenir!
:Me lanzaré, me lanzaré tras ella,
Como cansado, crrante peregrino!
De la existcncin. dejaré el cam:110 ~
Traspasaré
su '!HU'!
)Je estrellaré cn las rucas (Id Sllíc;dio
HOllll'icndo
el COl'llZÚn CJl loil pcdaztls;
Quc sólo de III lUl1(,rte Cl1l1C'JS
brazos
Kipero dCSCal!sar!
Descnr morir y rdiOsnr de vida!
\ ser la muerte l'I único consuelo ~
:\[as ay! que sit'nto por piedad del Cielo
Del vértigo ci placcr!
Justa Cielo! Tal vcz cn tUF; bondades
lIabn:s trocado sangre por VCl1C'llO,
Sin dejar cn la boguem dc mi seno
i'\i sangre (lllC verter 1
:!\Ias tSIn. tumba reali<lad sombría,
idlí reclinaré mi ar<lid¡t fn:ntc;
seré, mi
delincuente,
Este Libro}lera
Fue Digitalizado
por la Dios,
Bibliotecagran
Luis Ángel
Arango del Banco de la
República,Colombia
..
Coma lo fué Catún.
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-
60-
Sí, seguiré las hueUas luminosas
Que trazaron suicidas á millares,
y ofrendaré rendido en BUSaltares
Mi yermo corazón.
Allí diviso entre celajes de oro,
Coronada de mirto y siemprevin
La virgen del pesar, la. Safo altiva,
Idilio del amor j
Que en Léucades hundió su pensamiento
y el corazón que destrozó su amante;
La que volvió ardorosa y delirante
Espuma su dolor !...
A tí también, Buicida pudorosa,
Afecto del Romano Cola tino,
Lucrecia! Fué un monarca tu asesino!
y Bruto el vengador! .. .'
Al romper del impuro el férreo yugo,
Santa hicisteis la ley del regicidio,
El pueblo rey bendijo tu suicidio,
y á Bruto el matador!
Entre nubes de pólvora y metralla,
Rica'llrte alcanzó gigante gloria,
Este Libro Fue
Biblioteca
Luis Ángel
Arango del Banco de la
y Digitalizado
escribió por
enla el
espacio
s1lcmemoria
República,Colombia
Con letras de volcán!
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Colombia
- 61Cuando Marat y Robespierre un día
Alzaron el pendón del despotismo,
Hundióse del suicidio en cI abismo
El genio de Rolan(l.
Tú, Valezé! Tú, mártir de una idea,
No delante del Juez, elel ascsino,
Te di.te muerte, 110blegirondino,
y santo fué tu fin.
Girondinos alzaron tu cadávcr,
Sagrado altar en sn prisión te dieron,
y por cantos dElmuerte te ofre':lieron
Los cantos del festín !.•
La"ra inmortal! También el desengaño
Vertió en tus labios su fatal yeneno !
Madrastra sQCwdad lleyó á tu seno
El riego de la hiel ! .
Buscarte por el mundo una corona
Con que adornar tu frente esplcndoroall<
Corona de jazmines y de rosa,
Carona de laurel!
y al llevar á tUBlabios convulsivos
La copa del dolor que te of)Oecieron,
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Los frescos República,Colombia
lamos de tu sica cayeron
Marchitos á tus pics.
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Colombia
- 62Entonces vió la España entristœida,
Su sol más bello hundirse en Occiclente!
Entonces adornó tu yel'ta frente
Cou
l'a11lOS
de ciprér.! !
Yo también bU8CO en mis marchitas sieues
Cùrollu de oro qlle soñara un día,
y esttí. dc¡;ierto cllal la tumba fría,
Desierto el corazón! ...
Adios! Mas ay ! ii quién? nadie me ama!
Dejo el mUll(1o falaz sin scntimiento !
Quo muem mi martirio-el pensamiento!
hrdón, mi Dios, perdón:
AMISTAD Y AMOR.
El corazón del hombre es Ull inficrno
Abierto Sill cesar á la. pasióll,
Abismo interminable, escollo cterno
Do se estrella el poder de la 1'!l.zón.
Hoguera
que consume
la existencia,
el alma. está,
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Do la. virtu4l esRepública,Colombia
humo y la. inocencia
Do en cont;nuo tormento
Chispa. que '¡apenas brilla. y que se va.
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- 63 'y qué es la yida? De radiante
Al virginal destcllo despertar:
¡Sufrir V padecer hora tras ham
Yen inquietu,t sin término vagar.
Qué es la yida? Por
Sin rumbo fijo y entre
Hin llegar 11 unúa de la
Ni del bien las riberas
aUfora
piélago desierto
Bomuras ir,
dicha n! puerb),
doscubrir.
AI capricho forjar de la fortuna
Cadena vil do horrible esclavitud,
Cuyo eslabón primero está en lu. CUUl1
y el último cu el funcure ataúd .
.¿ Qué ,son ,",tIP0r, . placcre~, .:sp,cranza,
DlCha, \ïrtu(f y glona y fimÙ¡CWn ?
Sueîios que el hombre il reaJiL.ar lia alcanza
Porque lo!; sueños del delirio son:
En vértigos Je amor arrebatados
Levantamos la copa del festín,
"Il' de dicha fantÚsLiea
embriagados
Volamos por espacios sin.oonfín.
y apuramos torrentes do veneno
Don<le el licor creímos occontrar ;
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Soñamos entre flores
y en el cieno
República,Colombia
Nos hallamos tal ve~ a~ despertar.
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-64.A.llí,como una. virgen carifiosa,
N os brinda SUB favores la ÂmÍ8tad
y al desgarrar la venda. vaporosa
Sólo TemOBengáfio, falsedad •
.A.mistadI Amistad! Palabra santa,
Inspiraci6n magnífica de Dias,
'ru nombre sólo al coraz6n encanta
y el alma vuela de tu nombre en pos.
lIIas ddónde hallarte?
Dónde encontraremos
La. luminosa huella de tu pie?
Dónde tu frente descubrir poèremos,
Arida. el alma, el coraz6n sin fe 1
En vano por el mundo te buseamos,
Inagotable manantial del bien;
Delirantes por tí, tras tí volamos
y el desengaño hiela nuestra sien
.
Que si acallOte hallamos vez alguna
Atada á la riqueza. y al poder,
're vemos al vaivén ,-;"~.• fortuna
Como sombra fugaz desparecer.
Mendaz el hombre con ardor te invoca
Para
poblar su negra soledad,
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Yes tu nombre
purísimo en su boea
República,Colombia
Símbolo
de
traici6n
y desleaJtad.
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-
G.'5-
Herido de dolor, por tí suspira,
T.) lovanta un altar en su aflicciÓn;
y te quema sn incienso--Ia ?nentÚ'(t-OFrcnda do su im puro corazón,
Santa Amistnd: Sublime sentimiolltc>,
~),jlo del alto cielo morador!
~ .quí eros uada m:ís que un pel1samiento
'\ ue vulgarÜ:a nn labio engañador:
Al![ el Amo/'! Crepúsculo precioso
Oe las bellas mai1nnas del Edén!
.\fisterio incompronsible ! Sueño hc'-nlO~1)"
Arrullado on la cuna de Belén ~
Amo?'! Amo?" !Imag(J. ilusoria
arrebata la ardiente juventud,
')risma falaz de encantos y de glol'Ía
hlO nos miente el placer y la virtud:
~\I0
••
~ Amor: Tamùién en vano nos laDzamol'!
~:on frenético arrojo tras de tí ;
necios sorprcudcrte imaginamos
~ Eutre lecho do rosa y a.lelí.
r\~
!""{
••
En vano te buscamos Con locura_
-l¡stico,
noble,por pUf
o, espiritual;
• del Banco de la
Este Libro
Fue Digitalizado
la Biblioteca
Luis Ángel Arango
República,Colombia
anhelamos gozar
de tu ventura.
T
~
ùn Luis
tu Àngel
MlitoArango
vital
Este Libro,Y
fue embriagarnos
Editado por la Biblioteca
del rBanco de la Republica.
t.
,,li
Colombia
-
fiB -
lJoquier hallamos almas SiTI ta fuego,
Corazones perjuros por doquier,
Que nos roban la «alma y el sosiego
y envenenan la fuaute del placer.
Amor! i acaso la mujer primera
Tu fuego celestial emponzoñó
y eu lus divioas llamas do tu hoguera
1; n combustible del infierno echó ~
Por todas partos marcan tu camine;
Lágrimas de amargura. y aflixión ;
Que CU medio de la zarza y el espino
Arrojas illdolen.ta el corazÓn.
i Quién DO recuerda con pesar la histolit\
Del gran libro del alma abierto (~ti?
'
i QtliÚl DO maldico ardiente
tu mUlIlori(\,
y al maldecirla se maldico á sí 1
'Tras tus huollas elllant.o se divisa;
Doquier g ne naces el dolor so ve r
y U(;Cll ¡,.llí A belardo y Eloísa !
~f:jrtires salltos fueron de tu fe !
.
Auúlalqo
r Eloísa r Majestuoso
nobleLuisabnegación
~ Banco de la
Este Libro FueMOnllllll'uto
Digitalizado por lade
Biblioteca
Ángel Arango del
República,Colombia
EpisodÜ' :mblime
y prodigioso
pc por
o';ela Jrama
fin. del
COl."azÚn
~
Este Libro fue Editado
Biblioteca sin
Luis Àngel
Arango
del Banco: •..••
de la Republica.
Colombia
Allí Léucade
est'¡ judo
:1108 mar ••s,
Cual pírámir!e aL-:uda :í tu poder,
Donde ea v<J sepulcro
{Í sus pesares
El Lmvo corazr'JU ùe una mujer'
Ah: L{.(lcadc íllmoital!
Reea ~n~rJdtl
Allí fué, Am')!', allí tu ¡[ltimo altar':
.Allí donde eu tu" llamas ahra~;ada
('antigo ~ufo se (uuz:) iL la mal' :
Sus aguns fueron uroa mis!l~rios¡1
ALierta por la mano Jel dolor,
Do la cautiva ardiente y geDero.,:.'.
I>ara siempre so huu<liú COll su ;;ej:or,
De euto!:ces más, eu ';~1l0 desolado,'
tu fuerro revivir
y Jocos, delirantes
cngaiT:tIios
Entrcvemo~; r¡~lleíIo el porrellir!
Pretendemos
y
y si,lo hallamos aJlnas ;;in tu hl.'!!(;.
Corazoncs pcrjuros por doquict,
'.'
Que liOS l'O' lall la calnJa y el ;:osie,!.!(J
C'nl'CIIl'n:lU
la fuellte rlpl pla('~r '
,r
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