Mitos del Agua - H4H Initiative

Anuncio
INDICE
Propósito del documento Mitos del Agua
Identificación de las creencias
Pág. 1
Mito 1: Para cuidar el corazón,
debo cuidarme del sodio de las aguas
Pág. 2
DR. RICARDO IGLESIAS
Mito 2: Para cuidar que los chicos no engorden,
hay que controlar más lo que comen que lo que toman
Pág. 3
DR. ESTEBAN CARMUEGA
Mito 3: Cualquier bebida hidrata por igual,
no es necesario tomar agua
Pág. 5
LIC. LUCIANO SPENA
Mito 4: Hay que tomar agua sólo cuando se tiene sed
DR. CÉSAR CASÁVOLA
Pág. 6
Mito 5: Tomar agua durante las comidas
dificulta la digestión
Pág. 7
DR. CÉSAR CASÁVOLA
PROPÓSITO DEL DOCUMENTO MITOS DEL AGUA
Identificar y desterrar, a través de la evidencia científica disponible, creencias erróneas que tienen influencia sobre la
ingesta de agua, con el objetivo de educar y promover una hidratación más saludable.
IDENTIFICACIÓN DE LAS CREENCIAS*
Para la selección de creencias sobre hidratación, se tuvieron en cuenta investigaciones previas de Aguas Danone, sobre
mitos y barreras de consumo, a partir de las cuales se obtuvo un listado de creencias vinculadas a la hidratación. Para
evaluar la influencia de estas creencias respecto a la ingesta de líquidos en la población argentina, se solicitó a TNS Argentina la realización del trabajo de campo. Es por ello que, durante el mes de marzo 2013 se realizaron 1014 entrevistas
con una cobertura nacional. Las entrevistas fueron directas, domiciliarias a individuos de ambos sexos mayores de 18
años de edad. Se aplicó un muestreo probabilístico, polietápico y estratificado con cuotas de sexo y edad en el hogar.
* Adaptado de: Iglesias R., Carmuega E., Spena L., Casávola C. Creencias, mitos y realidades relacionadas al consumo de agua. Rev
Insuficiencia Cardíaca, 2013, vol 8, N° 2.
PORCENTAJE DE INFLUENCIA SOBRE LA INGESTA
DE LÍQUIDOS SEGÚN LA CREENCIA (n: 1014)
MITO 1. Para cuidar el corazón, hay
que tomar agua baja en sodio
77%
MITO 2. Para cuidar que los chicos
no engorden, hay que controlar más
lo que comen que lo que toman
74%
MITO 3. Cualquier bebida hidrata por
igual, no es necesario tomar agua
MITO 4. Hay que tomar agua sólo
cuando se tiene sed
MITO 5. Tomar agua durante las
comidas dificulta la digesitión
70%
65%
60%
MITOS DEL AGUA
|
1
MITO Nº 1:
PARA CUIDAR EL CORAZÓN,
DEBO CUIDARME DEL SODIO DE LAS AGUAS
DR. RICARDO IGLESIAS
Médico Cardiólogo
Ex Presidente de la Sociedad Argentina de Cardiología
Ex Presidente de la Fundación Cardiológica Argentina
Fellow American College of Cardiology
FALSO. La enfermedad cardiovascular continúa produciendo devastadoras consecuencias en la salud
de la población mundial. En Argentina es la primera
causa de muerte, con una tasa bruta de mortalidad
de 250 personas cada 100.000 habitantes; le sigue la
mortalidad por enfermedades tumorales con 1481.
La hipertensión arterial es sin duda una de los factores de riesgo más prevalente. Un tercio de la población argentina mayor de 18 años la presenta. La
presión arterial elevada explica el 62% de la enfermedad cerebrovascular y el 49% de la enfermedad
coronaria2.
Existe una estrecha relación entre la ingesta de sal
en la dieta y la presión arterial. Con un alto consumo
de sal se detecta un claro incremento de la presión
arterial con las consiguientes complicaciones que
esto acarrea.
En hipertensión arterial se indica un consumo diario
menor a 2,4 g de sodio (6 g de sal). Las dietas muy
hiposódicas son difíciles de mantener y podrían aumentar el riesgo, por activación del sistema reninaangiotensina-aldosterona y aumento de actividad
simpática3.
Se indica severa restricción (menos de 400 mg de
sodio) en muy contadas situaciones clínicas, hipertensión arterial severa y refractaria, insuficiencia
cardíaca en CF IV y en pacientes con ascitis por insuficiencia hepática descompensada4.
Es frecuente en la población e inclusive en el profesional de la salud la restricción en el consumo de
aguas de mineralización media para dietas hiposódicas.
Realmente esta creencia no se enmarca en ninguna
evidencia científica. La Organización Mundial de la
Salud indica que el agua no contribuye significativamente en la ingesta total diaria de sodio, excepto
en aquellas personas que requieran dietas muy res-
tringida para este mineral
(< 400 mg)5. Incluso asevera, que no hay conclusiones firmes sobre la posible asociación entre el sodio
en el agua y la hipertensión arterial. En consideración a ello es que no proponen guías para regular
este tema6.
La fuente más importante de ingesta de sodio se
incorpora con los alimentos procesados. De hecho,
en los Estados Unidos, más del 75% del sodio en la
dieta proviene de alimentos envasados y comida en
restaurantes7.
Las aguas minerales envasadas con un contenido de
sodio menor de 20 mg/l se denominan -agua baja en
sodio-, y son dirigidas específicamente a la población de sujetos con hipertensión arterial, sin embargo las evidencias actuales indican que debería ser
revisada esta denominación.
Como reflexión final creo que es necesario preguntarnos si ¿sabemos dar el mejor consejo? y recordar
que los mitos ahogan la verdad.
1. La salud es una decisión política. Iglesias R. Rev Arg Cardiol; 77
N2: 141-42. 2009.
2. Encuesta nacional de factores de riesgo 2009: Evolución de la
epidemia de enfermedades crónicas no transmisibles en Argentina. Estudio de corte transversal. Rev Argent Salud Pública, 2011;
2(6):34-41.
3. Guías Latinoamericanas de Hipertensión Arterial. Grupo Latinoamericano de Expertos. Rev. Chil. Cardiol. 2010; 29: 117-144.
4. Practice quideline: Management of adult patients with ascitis
due to cirrhosis. Hepatology 2004;39. 841-56.
5. Nutrients in Drinking Water. World Health Organization 2005.
6. Guidelines for drinking-water quality - 4th ed. Publications of
the World Health Organization are available on the WHO web site
(http://www.who.int) 2011
7. Howard G. et al. Healthy villages: A guide for communities and
community health workers. Geneva, World Health Organization
(http://www.who.int/water/sanitation/health/ hygiene/settings/
hvintro.pdf). (2002)
MITOS DEL AGUA
|
2
MITO Nº 2:
PARA CUIDAR QUE LOS CHICOS NO ENGORDEN,
HAY QUE CONTROLAR MÁS LO QUE COMEN QUE
LO QUE TOMAN
DR. ESTEBAN CARMUEGA
Médico Pediatra
Director del Centro de Estudios
sobre Nutrición Infantil (CESNI)
FALSO. Hay que controlar por igual tanto lo que se
come como lo que se bebe.
Es equivocado pensar que las calorías de los líquidos pueden engordar menos que las que provienen
de los alimentos sólidos. Por el contrario, la evidencia nos muestra que sucede lo inverso.
Se ha demostrado que las calorías ingeridas en bebidas producirían menores señales de saciedad que
las provenientes de alimentos sólidos1,2. Por ello,
resulta más fácil excederse en la ingesta de calorías cuando las bebidas contienen azúcar y de allí
que tienen un mayor riesgo de obesidad3,4. Cómo a
lo largo del día consumimos por igual tanto alimentos sólidos como alimentos líquidos, es importante
tomar conciencia de las calorías que contienen las
bebidas e infusiones.
En una sobresimplificación de un proceso muy complejo como es el balance energético, podría decirse
que cuando la ingesta de calorías supera el gasto
energético, el exceso de energía se deposita en forma de triglicéridos, especialmente en el tejido adiposo, conduciendo al sobrepeso y a la obesidad. En
este sentido, todas las calorías en exceso, provengan de alimentos sólidos o de bebidas e infusiones,
pueden conducir por igual a la obesidad cuando su
aporte energético supera la disipación de energía.
En consecuencia, es necesario cuidar tanto lo que
los chicos toman como lo que comen, y varios estudios científicos demuestran que el riesgo de obesidad aumenta acorde aumenta la ingesta de bebidas
calóricas5,6.
Por otro lado, en una investigación que realizamos
en CESNI7 (estudio HidratAR) sobre una muestra representativa de la población urbana de nuestro país,
demostramos que los niños y adolescentes tienen
un consumo relativo a su ingesta proporcionalmente mayor de bebidas e infusiones con azúcar (entre
55% y 68% vs. 47% adultos) que los adultos.
1. DellaValle DM, Roe LS, Rolls BJ: Does the consumption of caloric and non-caloric beverages with a meal affect energy intake?
Appetite. 2005 Apr;44(2):187-93.
2. Stookey JD, Constant F, Gardner CD, Popkin BM.
Replacing sweetened caloric beverages with drinking water is associated with lower energy intake. Obesity 2007 Dec;15(12):
3013-22.
3. Ludwig DS, Peterson KE, Gortmaker SL: Relation between
consumption of sugar-sweetened drinks and childhood obesity: a prospective, observational analysis. Lancet. 2001 Feb
17;357(9255):505-8.
4. Te Morenga L, Mallard S, Mann J.
Dietary sugars and body weight: systematic review and metaanalyses of randomised controlled trials and cohort studies. BMJ.
2012 Jan 15;346:e7492.
5. Malik VS, Schulze MB, Hu FB Intake of sugar-sweetened beverages and weight gain: a systematic review. Am J Clin Nutr. 2006
Aug;84(2):274-88
6. Bray GA, Popkin BM. Calorie-sweetened beverages and fructose: what have we learned 10 years later. Pediatr Obes.
2013 Apr 29.
7. www.cesni.org.ar consultado 7 de mayo de 2013-05-07
MITOS DEL AGUA
|
3
PORCENTAJE DE LA INGESTA DIARIA DE LÍQUIDOS SEGÚN
TIPO DE BEBIDA Y RANGO ETARIO
50%
Bebidas con
sabor e infusiones
azucaradas
58.8%
55.8%
67.2%
47.8%
(B,D,E)
(D,E)
(A,B,D,E)
(E)
31.1%
29%
Bebidas con
sabor e infusiones
sin azúcar
17.3%
46.9%
33.0%
(A,B,C)
(A,B,C,D)
21.1%
20.1%
21.3%
(A,C)
19.5%
(A)
21%
Agua pura
23.9%
22.9%
(C,D,E)
13.2%
(C,E)
Pre- Escolares
Escolares
Adolescentes
Adultos
Mayores
A
B
C
D
E
(C,D,E)
(C)
() con diferencias significativas al 90%
Fuente: Tomado de Chamorro MV, Valletta A, Carmuega E. Perfil de ingesta de agua y bebidas no alcohólicas en Argentina.
Centro de Estudios sobre Nutrición Infantil, 2010.
Una razón adicional, pero no por ello menos importante, es que los hábitos se construyen en los primeros años de vida y, en este sentido, cuando los
niños se acostumbran a calmar la sed con agua y no
con bebidas azucaradas, logran incorporarlo como
hábito desde la infancia
Por lo tanto, al menos en nuestro país, como profesionales debemos recordar a los padres la importancia de controlar tanto lo que los chicos comen
como lo que toman.
MITOS DEL AGUA
|
4
MITO Nº 3:
CUALQUIER BEBIDA HIDRATA POR IGUAL,
NO ES NECESARIO TOMAR AGUA.
LIC. LUCIANO SPENA
Director de la Lic. en Nutrición de la Universidad de Morón.
Miembro de Comision Directiva de la Asociación Argentina de Nutricionistas (AADYND)
Dpto. de Nutrición Quilmes Atletic Club (1º division AFA).
FALSO.En términos de calidad, cualquier bebida no
hidrata por igual, es decir, los aportes son variables
según el tipo de bebida. La cantidad y la calidad de
los líquidos ingeridos generan un impacto en el estado nutricional. Un estudio1 que describió el perfil
de ingesta de líquidos de la población argentina demostró que el 50% de los líquidos ingeridos correspondía a bebidas e infusiones azucaradas, mientras
que los hidratos de carbono simples representaron
el 9-15% del valor calórico diario, superando en la
mayoría de los casos la recomendación de la Organización Mundial de la Salud2.
Asimismo, existen evidencias3,4,5,6,7 que indican que
la energía consumida a través de las bebidas azucaradas no se compensaría con una menor ingesta de
alimentos sólidos, resultando un balance energético positivo, y aumentando el riesgo de padecer sobrepeso u obesidad. Por otro lado, no es importante
dejar de lado las calorías aportadas por las bebidas
alcohólicas.
Por estas razones, es fundamental la adquisición de
hábitos de hidratación saludables durante la primera infancia, etapa en la que se fijan los hábitos alimentarios. Es por ello que la educación alimentaria
nutricional a padres y a niños es un factor clave.
1. Chamorro MV, Valletta A, Carmuega E. Perfil de ingesta de agua
y bebidas no alcohólicas en Argentina. Centro de Estudios sobre
Nutrición Infantil, 2010.
2. WHO technical report series. Diet, Nutrition and Prevention of
Chronic Diseases. Report of a Joint WHO/FAO Expert Consultation,
2003.
3. Schulze MB, et al. Sugar-sweetened beverages, weight gain,
and incidence of type 2 diabetes in young and middle-aged
women. JAMA 2004, 292:927-34.
4. Pan A, Hu FB. Effects of carbohydrates on satiety: differences
between liquid and solid food. Curr Opin Clin Nutr Metab Care.
2011, Jul;14(4):385-90.
5. McKiernan F, Houchins JA, Mattes RD. Relationships between
human thirst, hunger, drinking, and feeding. Physiol Behav. 2008
Aug 6;94(5):700-8.
6. Almiron-Roig E, Drewnowski A. Hunger, thirst, and energy
intakes following consumption of caloric beverages. Physiol
Behav. 2003 Sep;79(4-5):767-73.
7. DiMeglio DP, Mattes RD. Liquid versus solid carbohydrate:
effects on food intake and body weight. Int J Obes Relat Metab
Disord. 2000 Jun;24(6):794-800.
MITOS DEL AGUA
|
5
MITO Nº 4:
HAY QUE TOMAR AGUA
SÓLO CUANDO SE TIENE SED
DR. CÉSAR CASÁVOLA
Médico Especialista en Nutrición y Especialista en Cardiología
Actual Presidente de la Sociedad Argentina de Nutrición (SAN)
Jefe del Servicio de Nutrición y Soporte Nutricional
del Hospital Alemán
FALSO. La sed aparece cuando ya existe deshidratación1,2. La sed se desencadena por mecanismos
fisiológicos (incremento de la osmolaridad plasmática y reducción del volumen plasmático) y perceptivos (sabor, color y temperatura de las bebidas). La
sed aparece cuando las pérdidas de líquidos corresponden a una disminución del 3% del peso corporal
o más, con lo cual ya existe deshidratación3.
La deshidratación tiene diversos efectos; entre
ellos: menor rendimiento físico, alteraciones en la
termorregulación y el apetito, oliguria, dificultad en
la concentración, somnolencia, dolor de cabeza, y,
en casos extremos, puede conducir a la muerte3.
En cuanto a las recomendaciones de líquidos, cada
país tiene sus recomendaciones. En Argentina, según las Guías Alimentarias para la Población Argentina4, la recomendación es de 2 litros de agua/día. En
Europa, la European Food Safety Authority (EFSA)3,
recomienda una ingesta adecuada de 2,5 litros/día
para hombres y 2 litros/día para las mujeres. Considera de un 80% de la ingesta adecuada proviene de
bebidas y un 20% restante de alimentos, por lo que
la ingesta de líquidos sería de 2 litros y 1,6 litros/día
para hombres y mujeres respectivamente.
1. Armstrong LE. Hydration assessment techniques. Nutr Rev.
2005;63:S40-54.
2.Ivan Tack. Effects of water consumption on kidney function an
excretion. Nutr Today, 2010;45(6S):S37–S40.
3. European Food Safety Authority, Panel on Dietetic Products,
Nutrition, and Allergies. Scientific Opinion on Dietary Reference
Values for water. EFSA Journal 2010; 8(3):1459
4. Guías Alimentarias para la Población Argentina. Asociación
Argentina de Nutricionistas y Nutricionistas Dietistas (AADyND)
2001.
MITOS DEL AGUA
|
6
MITO Nº 5:
TOMAR AGUA DURANTE
LAS COMIDAS DIFICULTA LA DIGESTIÓN
DR. CÉSAR CASÁVOLA
Médico Especialista en Nutrición y Especialista en Cardiología
Actual Presidente de la Sociedad Argentina de Nutrición (SAN)
Jefe del Servicio de Nutrición y Soporte Nutricional
del Hospital Alemán
FALSO. Beber agua durante las comidas no dificulta
los procesos digestivos.
El aparato digestivo se extiende desde la boca hasta el ano. Además, más allá del tubo digestivo en sí
mismo, son de gran importancia las funciones que
desempeñan la vesícula biliar y el páncreas durante
los procesos digestivos. Asimismo, en el aparato digestivo se producen diversas funciones como masticación y formación del bolo alimenticio, secreción
de: enzimas, ácido clorhídrico y bilis, digestión y,
posterior absorción y transporte de nutrientes, y excreción de desechos.
Si bien beber agua durante las comidas ha generado
controversias, no dificulta los procesos digestivos;
su evacuación gástrica es rápida y tampoco posee
ninguna interacción que dificulte la absorción de un
macro o micronutriente. Los líquidos se vacían del
estómago de acuerdo a un patrón exponencial, la
proporción o tasa de vaciamiento es equivalente al
volumen remanente en estómago. Por el contrario,
los sólidos tienen un patrón de vaciado lineal en el
tiempo1.
Los líquidos dejan el estómago por medio de un
gradiente de presión gastroduodenal (en un individuo sano). La gravedad puede influir en ese patrón,
pero esta influencia es mínima. El tono del estómago proximal se modifica a fin de realizar este vaciamiento gástrico.
Aunque la temperatura del líquido puede influir en
este proceso, el factor de mayor influencia es el volumen de líquidos presente en el estómago.
Sólo en ciertas patologías gástricas, como por ejemplo reflujo gastro-esofágico, y dispepsia funcional,
se recomienda tomar líquidos fuera de las comidas.
Debido a que la ingesta de agua es un hábito difícil de instaurar en la población, una estrategia para
ayudar a construir esta práctica y promover una hidratación saludable, sería fomentar la presencia de
“agua en la mesa” durante las comidas. Además,
podría favorecer a una mayor percepción de los sabores propios de los alimentos por su característica
de ser insípida, lo que contribuiría a no enmascarar
otros sabores.
1. Kenneth L. Koch. Gastric Neuromuscular Function and
Neuromuscular Disorders. En: Sleisenger and Fordtran’s.
Gastrointestinal and Liver Disease-2 Volume Set , 9th edition ,48
Chapter, p 789-815.
MITOS DEL AGUA
|
7
Este documento fue desarrollado con la colaboración de Aguas Danone de Argentina.
Descargar