RENDIMIENTO DE GRANO DE HÍBRIDOS DE MAÍZ (Zea mays L.), SEMBRADOS A HILERA SENCILLA E HILERA DOBLE EN TEMASCALCINGO, ESTADO DE MÉXICO. TESIS JUAN JOSÉ ENCASTÍN DIONICIO 1. INTRODUCCIÓN La producción de cereales tiene un papel predominante en la actividad agrícola mundial. De todos los cultivos agrícolas los cereales son generalmente considerados como los más importantes. Se siembran en cerca de 75% de la superficie cultivada del mundo y suministra cerca de dos tercios de la energía y la mitad de la proteína de las necesidades del mundo, indirectamente suministra grandes cantidades de comida cuando se convierte en carne, leche, huevo, etc. Si bien la producción de cereales logro un incremento importante a partir de la revolución verde por un mejor manejo de los cultivos y el uso de nuevos materiales con el incremento de la población humana, la demanda de cereales se incrementara considerablemente para el año 2030 (Santoyo y Quiroz, 2004). En México el maíz es por mucho el cultivo agrícola más importante en cuanto a producción y superficie de siembra, forma la base de uno de los más grandes mercados agropecuarios. La importancia del maíz va más allá del aspecto económico, industrial, político y alimentario, se entrelaza con siglos de cultura, a través de los cuales se ha enriquecido la diversidad genética en nuestro país. Desde el punto de vista económico, el maíz se siembra en más de 8 millones de hectáreas, que representa 39% de la superficie agrícola nacional y 63% de la superficie sembrada con granos y oleaginosas; contribuye con 8% del producto interno de la agricultura y es el cultivo que más fuerza de trabajo ocupa. No obstante, se importaron 8 millones de toneladas de grano de maíz en 2006 y 10 millones de toneladas en 2010, lo que pone a este alimento a la cabeza de las importaciones de productos agrícolas de México. (González et al., 2008). En años recientes este déficit se incrementó debido a la inadecuada estrategia gubernamental que prefería importar grano en lugar de producirlo, bajo el argumento de que el precio internacional en términos relativos era menor al costo nacional. (Espinosa et al. 2008). Actualmente la adopción de tecnologías se está convirtiendo en un requisito para que los productores de maíz mejoren su competitividad, esto se puede llevar a cabo mediante la aplicación de tecnología de producción, variedades y prácticas de cultivo disponibles, desarrolladas por instituciones públicas nacionales de investigación y de educación superior (Turrent, 2009). Una de las técnicas agrícolas son las de hibridación que se han usado para crear combinaciones genéticas que, de otra manera hubieran sido muy difíciles de obtener. Este mejoramiento ha llegado hasta la aplicación de la ingeniería genética, con el objetivo primordial de ayudar a resolver problemas tales como el fitomejoramiento para elevar el rendimiento de producción o aumentar el contenido de algún compuesto en específico, mejorar la resistencia a plagas, enfermedades y condiciones adversas como la sequía y heladas (Rodríguez et al., 2007). El proceso de transferir tecnología es complejo, más aún cuando el usuario tiene limitados recursos y no puede correr riesgos aceptando innovaciones tecnológicas para él desconocidas; por lo que se hace necesario involucrarlo dentro del proceso de generación y validación de la tecnología a transferir. La transferencia de tecnología es un tema de gran consideración en el ámbito de investigación agrícola, en este sentido se ha demostrado que la adopción de la tecnología se facilita considerablemente cuando se logra vincular la participación directa entre productores, asistencia técnica e investigación (Tosquy et al., 1995). En los Valles Altos de México a 2200-2600 msnm, hay un área potencial de uso de híbridos de maíz superiores a 300 000 hectáreas para las cuales se requieren 7500 toneladas se semilla. Recientemente han iniciado actividades en esta región diferentes empresas trasnacionales y nacionales de semillas con la intención de obtener y ofrecer maíces mejorados, además de las instituciones que ya realizaban mejoramiento genético, dentro de las cuales destacan: El Instituto Nacional de Investigaciones Forestales y Agropecuarias (INIFAP), una institución del Estado de México denominada ICAMEX así como el Colegio de Postgraduados y la Universidad Autónoma de Chapingo (Espinosa et al., 1995). Calva (1982) menciona que, el uso de semilla mejorada es un elemento estratégico y clave para lograr incrementos en la productividad de maíz y la elección de una buena semilla es el primer paso para aprovechar de forma óptima los recursos disponibles. Los híbridos comerciales de maíz difieren, entre otras características, en términos de ciclo, potencial de rendimiento, tamaño y arquitectura de planta, y prolificidad. La combinación de todas o algunas de estas características podría otorgarle al cultivo estrategias vegetativas y reproductivas que permitiría incrementar los rendimientos de maíz por unidad de superficie. Año con año se siembra en el Estado de México alrededor de 610 000 mil hectáreas del cultivo de maíz, sin embargo, solo tiene potencial productivo alrededor de 345 000 mil hectáreas donde constituye un reto la aplicación oportuna de de la tecnología disponible para incrementar los rendimientos por unidad de superficie. Dentro de la diversidad de problemas que tiene la producción de maíz los principales son la baja densidad de población y la mala distribución de las plantas. El arreglo de siembra a doble hilera en maíz es una opción viable para incrementar los rendimientos unitarios de grano por hectárea en Sinaloa, pero esto es válido sólo para ciertos genotipos (Luque, 2009). El sistema de doble hilera en el Estado de México tiene el objetivo de mantener una densidad óptima con plantas bien distribuidas en una topología equilibrada en espacio para obtener incrementos en la producción de maíz. Evaluar el rendimiento de once híbridos de maíz para grano en un arreglo de siembra de doble hilera en comparación con la siembra tradicional de hilera sencilla en los Valles Altos de México, particularmente en el municipio de Temascalcingo, Estado de México.