Asociados numerarios de El Colegio de Jalisco Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología Gobierno del Estado de Jalisco Universidad de Guadalajara Instituto Nacional de Antropología e Historia Ayuntamiento de Zapopan Ayuntamiento de Guadalajara El Colegio de México, A.C. El Colegio de Michoacán, A.C. Subsecretaría de Educación Superior-sEP José Luis Leal Sanabria Presidente Carlos G. Velasco Picazo Secretario general Los comandantes realistas y la guerra de independencia Jaime Olveda Coordinador EL COLEGIO -de- JALISCO 972.03 C728 Los comandantes realistas y la guerra de independencia 1 coord. Jaime Olveda -- P ed. -- Zapopan, Jal.: El Colegio de Jalisco, 2010. 264 p.; 22 cm.-- (Colección 2010) Contenido: Introducción /Jaime Olveda -- l. Las campañas de Félix María Calleja contra la insurgencia y la lucha interna por el poder en el gobierno virreina! (1808-1816) 1Héctor Cuauhtémoc Hernández Silva -- 2. José de la Cruz y la guerra en la intendencia de Guadalajara, 1811-1821: entre el exterminio y el indulto 1Jaime Olveda --3. Con el septentrión en un puño. Joaquín de Arredondo y las provincias internas de oriente durante la guerra de independencia 1Octavio Herrera Pérez --4. Alejo Garda Conde y la crisis .del imperio español. De la guerra de frontera a la guerra civil, 1808-18221 José Marcos Medina Bustos -- 5. Melchor Álvarez Thomas, comandante general de 1~ intendencia de Oaxaca, 1813-1818 1Luis Alberto Arrioja Díaz Viruell y Carlos Sáríchez Silva. Bibliografía: pp. 253-263. ISBN 978-607-477-092-6 (Colección 2010) ISBN 978-607-7770-28-2 l. México - Historia - Guerra de independencia, 1810-1821. 2. México - Guerra de inde- pendencia, 1810-1821- Historia militar. 3. México- Guerra de independenda, 1810-1821 - Biografía. 4. Militares realistas. 5. Grupos de presión - México - Historia - Siglo XIX. 6. Calleja del Rey:, Félix María, conde de Calderón, virrey de México, 1759-1828. l. Olveda Legaspi, Jaime, coord. CooRDINADORES DE LA CoLECCIÓN 2010 Héctor Cuauhtémoc Hernández Silva (UAM Azcapotzalco) Carlas Sánchez Silva (UABJO) Jaime Olveda (El Colegio de Jalisco) Diseño de colección: Guadalupe Urbina Martínez Primera edición, 2011 © D.R. 2011, El Colegio de Jalisco, A.C. 5 deMayo321 45100, Zapopan, Jalisco Esta publicación no puede ser reproducida, ni en todo ni en parte, ni registrada en o transmitida, por un sistema de recuperación de información, en ninguna forma ni por ningún medio, sea mecánico, fotoquímico, electrónico, magnético, electroóptico, por fotocopia o cualquier otro, sin el permiso previo, por escrito, de los editores. ISBN de la colección: 978-607-477-092-6 ISBN de la obra: 978-607-7770-28-2 Impreso en México/ Printed in Mexico ÍNDICE INTRODUCCIÓN .............................................................................................................. 7 Jaime Olveda l. Las campañas de Félix María Calleja contra la insurgencia y la lucha interna por el poder en el gobierno virreina! (1808-1816) ..................................21 Héctor Cuauhtémoc Hernández Silva 2. José de la Cruz y la guerra en la intendencia de Guadalajara, 1811-1821: entre el exterminio y el indulto........................................................... 63 Jaime Olveda 3. Con el septentrión en un puño. Joaquífl de Arredondo y las provincias internas de oriente durante la guerra de independencia ................................. 109 Octavio Herrera Pérez 4. Alejo García Conde y la crisis del imperio español. De la guerra de frontera a la guerra civil, 1808-1822....................................... .175 José Marcos Medina Bustos 5. Melchor Álvarez Thomas, comandante general de la intendencia de Oaxaca, 1813-1818............................................................. 219 Luis Alberto Arrioja Díaz Viruell Carlos Sánchez Silva BIBLIOGRAFÍA GENERAL ............... ............................................................................ 253 5 MELCHOR ÁLVAREZ THOMAS, COMANDANTE GENERAL DE LA INTENDENCIA DE OAXACA, 1813-1818 Luis Alberto Arrioja Díaz Viruel[I Carlos Sánchez Silva2 Mañana sale para Chile el general don Melchor Alvarez, a quien cogió el carro de la .ley por haber nacido en alta m~r. Este vino de coronel de Saboya, hizo sus fechorías en la expedición de Oaxca que ejecutó en el mes de marzo de 1814, pero desde la época de la independencia se ha conducido cuerdamente y obrado en buen sentido. Diario histórico de Carlos María de Bustamante 8 de abril de 1829 Introducción El propósito de este ensayo es examinar el desempeño militar del general de brigada Melchor Álvarez Thomas (1775-1847) en un · momento coyuntural de la historia de México: la emergencia y el desarrollo de la insurgencia en el sureste .de la Nueva España. Para ello, echaremos un vistazo a tres aspectos que, a nuestro parecer, ayudan a explicar el devenir de este personaje: su estirpe militar, sus diversos vínculos con la burocracia colonial y las adversas condiciones que imperaban en las milicias apostadas en Oaxaca. 1 2 Universidad Autónoma Metropolitana Instituto de Investigaciones en Humanidades de la Universidad Autónoma Benito Juárez de Oaxaca-Universidad Autónoma Metropolitana Luis Alberto Arrioja Díaz Viruell y Carlos Sánchez Silva De entrada, resulta preciso señalar que Melchor Álvarez Thomas perteneció a esa pléyade de hombres que, durante los primeros lustros del siglo XIX, engrosaron la cúpula del ejército realista novohispano, reformaron la estructura de las fuerzas regulares y, por ende, combatieron los brotes insurgentes en el sureste del virreinato. Lo que vale la pena resaltar es que, a diferencia de aquellos criollos y peninsulares que hicieron una carrera en tomo de la guerra insurgente, Álvarez Thomas se distinguió por haberla hecho en el viejo continente, misma que lo llevó de una posición periférica en la metrópoli y a un lugar privilegiado en la Nueva España. La explicación de cómo sucedió esto es compleja; sin embargo, algunos especialistas han planteado ciertas respuestas al respecto. La primera de ellas sugiere que la misma guerra de independencia amplió las posibilidades de muchos burócratas para hacer carrera dentro del ejército, especialmente por las oportunidades que se abrieron con el éxodo y la muerte de los viejos mandos peninsulares. 3 La segunda advierte que el progresivo posicionamiento de jóvenes militares peninsulares en la estructura virreina! tuvo que ver con la relativa flexibilidad del ejército como institución. En el caso novohispano no sólo se distinguió por trascender como una base de organización del Estado, sino por ser un círculo flexible e incluyente que, a cada momento, aceptó personajes de diversa estirpe y origen. 4 Obviamente, el sector con mayor cabida estuvo representado por los peninsulares. Si bien es cierto que muchos de ellos tuvieron una estancia efímera, también es verdad que otros corrieron con mejor suerte y lograron posicionarse en la plana mayor, arriesgando poco y ganando mucho. En opinión de Linda Amold, los militares que se posicionaron dentro delsistema colonial lo hicieron desplegando capacidad, disponibilidad de servicio y lealtad a la corona.5 Una tercera explicación tiene que ver con las reformas que experimentaron los ejércitos realistas entre 1761 y 1810, las cuales buscaban engrosar, organizar y profe- 5 220 Velázquez, El estado de guerra en Nueva España; Harnnett, "Oaxaca: las familias principales", pp. 51-69; Amold, Directorio de burócratas, pp. 197-200. Archer, El ejército en el México borbónico, pp. 45-55; Amold, Burocracia y burócratas en México, pp. 15-16,47-48, 79-80. Amold, Burocracia y burócratas, pp. 184-185. Melchor Álvarez Thomas, comandante general sionalizar -poco a poco- las fuerzas regulares del virreinato. Hasta donde puede observarse, dichas reformas exigieron la creación de nuevos regimientos de infantería y caballería que fueron agrupados en tomo de mandos peninsulares, la renovación periódica de dichos mandos mediante el envío continuo de hombres instruidos, la creación de milicias disciplinadas y la presencia de mandos peninsulares que integraran una elite capaz de dirigir las fuerzas armadas, tanto en tiempos de paz como de guerra. 6 De hecho, uno de los funcionarios cuya trayectoria guardó una estrecha relación con dicha reforma fue el general brigadier Melchor Álvarez Thomas, un personaje que permitirá matizar la visión que se tiene sobre las milicias realistas antes y durante la guerra de independencia, así como repensar las funciones y los atributos que acumularon dichos personajes durante los primeros lustros del siglo x1x. Debemos mencionar que buena parte de la trayectoria de los militares realistas ha sido documentada por aquellos estudiosos interesados en las políticas e instituciones que marcaron el periodo 1810-1821. En el ámbito hispanoamericano, por ejemplo, sobresale una serie de estudios dedicados a los generales que encabezaron las fuerzas reales en Perú, Argentina, Bolivia y Chile, tal es el caso de José Fernando Abascal (1743-1821), Manuel Belgrano (1770-1820), José María Paz (1791-1854), Joaquín de la Pezuela (1761-1830), José Manuel de Goyeneche (1776-1846), entre otros;7 mientras que en el ámbito novohispano destacan las investigaciones sobre los generales Félix María Calleja, Manuel Merino, Agustín de Iturbide y Fernando Pérez Marañón. 8 Estas investigaciones, en su conjunto, permiten vislumbrar el desempeño militar de los mandos realistas y sus múltiples vínculos con los jerarcas españoles. En este trabajo, por Mcfarlane, "Los ejércitos coloniales y la crisis del imperio español", pp. 232-235 y 247; Archer, El ejército en el México borbónico, pp. 50-51; Albi de la Cuesta, Banderas olvidadas, pp. 39-53. Hamnett, "La política contrarrevolucionaria del virrey Abascal;" Díaz Venteno, Las campañas militares del virrey; Alberdi, Grandes hombres del Plata; Franco, El general Paz; Fisher, El Perú Borbónico. Archer, "New Wars and Old: Félix Calleja and the lndependence"; Ortiz Escamilla, "Félix María Calleja"; Juárez Nieto, "El intendente Manuel Merino y la insurgencia", Serrano Ortega y Terán (eds.), Las guerras de independencia ... ; José Antonio Serrano Ortega, "La jerarquía subvertida"; Arteaga, El héroe olvidado. 221 Luis Alberto Arrioja Díaz Viruell y Carlos Sánchez Silva el contrario, trataremos de trazar una visión biográfica del general Melchor Álvarez Thomas entre 1813 y 1816, que permita conocer sus relaciones políticas y sociales, y su desempeño militar durante su paso como comandante intendente de la provincia de Oaxaca. Los años formativos A juzgar por los registros que documentan la vida de Melchor Álvarez Thomas, éste nació en 1775 en los mares más australes del continente americano, cuando sus padres viajaban en un navío de bandera española que había zarpado del Callao (Perú) y tenía como destino el puerto de Santa María en Cádiz (España). 9 Hay que advertir que tanto por su filiación como por las condiciones de su nacimiento --en alta mar-, Álvarez Thomas fue considerado peninsular. Sobre esto último, se debe señalar que la legislación indiana fue muy precisa, ya que contempló que todos los generales y religiosos que viajaban en las embarcaciones reales eran los encargados de "hacer oficios de capellán, examinar las dimisorias, confesar a la .gente, cuidar de los enfermos y de sus bienes, procurar los testamentos de los difuntos ... y presentar vivos y bautizar a los recién nacidos en el primer puerto de tierra ·firme que toque la nave .. ·." .10 En el caso que nos ocupa, Álvarez Thomas fue bautizado en la iglesia de Nuestra Señora de la Encamación en el puerto de Cádiz y, por ende, sus cartas credenciales siempre lo mostraron como un peninsular de cepa. 11 Tenemos noticias de que su padre fue el general brigadier Antonio Francisco Álvarez y Jiménez Sánchez del Valle y Mendoza, un hombre oriundo de Vigo (España) y miembro de la casa de los condes de Coyñas. Después de ocupar diversos cargos en tierras españolas, Álvarez y Jimé- 10 11 222 AHSDN, .Cancelados, xr/m/1-16, vol. 1, f. 148. "Licencia otorgada al General de División don Melchor Álvarez para salir del país ...". Por su parte, el Diccionario de insurgentes anota que una vez consumada la guerra de independencia intentó hacerse pasar por peruano, pero que en realidad nació en el puerto de Santa María en Cádiz, España. Véanse respectivamente, Diccionario de insurgentes, p. 26, y Diccionario Porrúa, p . 140. Recopilación de Leyes de los Reinos de las Indias, tomo m, Libro rx, Título xv, Leyes xxxx, XXXXII, LII y LXII. AHSDN, Cancelados, xr/m/r-16, vol. n, f. 264. "Registro de bautizo de la niña Piedad Isabel Isidoro Álvarez (1846)" . · Melchor Álvarez Thomas, comandante general nez llegó al virreinato de Perú a la edad de 45 años como funcionario del Consejo de Indias, y hacia 1785 fue nombrado gobernador-intendente y vicepatrón real de la provincia de Arequipa, en reemplazo del general José Menéndez Escalada, quien fue transferido a la intendencia de Huamanga. 12 Al momento de su arribo a tierras peruanas Álvarez y Jiménez lo hizo como capitán del regimiento de Galicia, en el marco de las reformas militares que impulsaron los Borbones en Indias y como parte de la elite militar que fue integrada para defender los intereses de la corona en tierras americanas. De hecho, durante su estancia en Arequipa, se distinguió por implementar la Real Ordenanza de Intendentes, administrar algunas haciendas productoras de vid, fomentar l.a crianza de ganado mayor y llevar a cabo una minuciosa visita por el sur peruano, ·misma que quedo plasmada en la Memoria legalizada de la visita que en cumplimiento de las Ordenanzas de intendentes hizo a la provincia de Arequipa el gobernador intendente don Antonio Álvarez y Jiménez. En 1796 fue llamado por el Servicio Real para desempeñarse como mariscal de campo en el virreinato del Río de la Plata y, dos años después, pasó a enlistarse en las Guardias Reales de Madrid, quedando parte de su familia en la porteña ciudad de Buenos Aires. Su estancia en la península ibérica duró tres años, ya que luego fue nombrado gobernador-intendente del archipiélago e isla de Chiloé (Chile). 13 Por las fuentes disponibles se sabe que la madre de Melchor Álvarez Thomas fue María Isabel Thotnas y Ranze, una mujer oriunda de Barcelona, descendiente de una acaudalada familia de empresarios textiles y emparentada con el reformista y adinerado abate de Trapa, Armand Jean Le Bouthillier de Ranze (1626-1700), miembro de la orden cisterciense. 14 Todo indica que María Isabel Thomas fue una mujer muy involucrada en las actividades políticas y económicas de su esposo, ya que, parafraseando a Víctor M . .Barriga, la "señora gobernadora intendente" siempre estuvo al tanto de las políticas encaminadas a cuidar, sanear y embellecer la ciudad de Are12 13 14 Albornoz, El Perú más allá de sus fronteras, pp. 91-92; Barriga, Memorias para la historia de Arequipa, pp. Ix-x; Chambers, The Many Shades of the White City, pp. 55-56. Albornoz, El Perú más allá de sus fronteras, pp. 91-92. Idem. 223 Luis Alberto Arrioja Díaz Viruell y Carlos Sánchez Silva quipa, así como dotar de suficientes escuelas a los diversos pueblos de aquella intendencia; por si esto no bastara, colaboró con la causa realista en la recaudación de fondos para librar la guerra contra los ingleses, combatir la invasión francesa a la península y perseguir a los indios insurrectos, enemigos de la patria. 15 De la unión marital Álvarez-Thomas nacieron siete hijos, cinco varones y dos mujeres: Melchor, Ignacio, José Antonio, Manuela, Pascual, María y Antonio. Es de advertir que todos los varones se distinguieron por tener una trayectoria de vida muy semejante, ya que a muy temprana edad iniciaron su instrucción en el regimiento de milicianos de Arequipa, luego pasaron a formar parte de la plana mayor del ejército realista y, posteriormente, destacaron como altos mandos en los ejércitos de México, Perú, Argentina y España. Tan sólo Pascual Álvarez se desempeñó como mariscal de campo en La Coruña (1830) y como gobernador y capitán general en el Puerto de San Sebastián, España (1840); José Antonio fungió como mariscal de campo en las fuerzas realistas de Arequipa, y luego como coronel, comandante y general del ejército peruano, hasta llegar a ser ministro de Guerra del Perú en 1834; Antonio fue gobernador y capitán general de la ciudad de Granada, España (1845); Ignacio perteneció a las milicias patriotas de Buenos Aires (1806), participó en la revolución de mayo de 1810 y fue designado director interino de las Provincias Unidas del Río de la Plata (1815), cargo que desempeñó hasta 1816; posteriormente, entre 1825 y 1835, fungió como embajador de la provincia de Buenos Aires en Perú y Chile; en 1836, su oposición al gobierno de Juan Manuel de Rosas lo llevó a la cárcel y al destierro. 16 Como puede observarse, la ascendencia paterna de Melchor Álvarez Thomas estuvo integrada por hombres que hicieron de la carrera militar una profesión y un negocio familiar. Hay que hacer notar que durante el periodo colonial existió la costumbre de que las familias acomodadas ofrecieran'en cada generación uno o varios de sus vástagos al ejército con el propósito de preservar cierta continuidad en su gobierno. Esto significó para las instituciones castrenses un ingreso 15 16 224 Barriga, Memorias para la historia de Arequipa, t. m, pp. 342-346. Albornoz, El Perú más allá de sus fronteras, pp. 91-93. Melchor Álvarez Thomas, comandante general permanente de voluntarios. A cambio, dichas familias esperaron que el ejército las tratara con cierta preferencia y que les proporcionara · una serie de prerrogativas militares, políticas y económicas. 17 Obviamente, la traza de estos hechos presentó varios niveles. La familia Álvarez Thomas, por ejemplo, tuvo representatividad en todas las esferas de la estructura militar, desde los más elevados cargos hasta los más bajos. Tan sólo el primo hermano de Antonio Álvarez y Jiménez fue el general brigadier Mariano Álvarez de Castro (1749-1810), un hombre que ingresó a la Guardia Real Española cuando tenía 19 años; luego pasó a la Academia Militar de Barcelona, donde recibió su formación castrense hasta 1775. Hacia 1793 recibió el rango de coronel de infantería y, un año después, por sus méritos en la guerra del Rosellón fue nombrado capitán supernumerario, alcanzando el grado de brigadier en 1795. Participó activamente en la expedición a Portugal desde 1801 hasta 1807. Su buen desempeño como estratega y jefe de armas lo llevaron a ocupar en 1808 el mando del Castillo de Montjuic (Barcelona), lugar donde le tocó instruir militarmente a su sobrino Melchor Álvarez Thomas en el sitio contra las tropas napoleónicas. Evadido de Barcelona, fue nombrado general de la vanguardia del ejército de Cataluña y gobernador de la plaza de Girona, lugar donde se cubrió de gloria. Se tiene conocimiento de que cayó prisionero de las tropas francesas después del sitio de 1808. Ese mismo año fue encarcelado en Perpignan y N arbona (Francia); un año después, las tropas francesas lo trasladaron al Castillo de Figueres (Girona), donde murió por su mal estado físico. 18 Ante estos antecedentes, cabe preguntarse, ¿cómo fueron los primeros años de Melchor Álvarez Thomas dentro de la milicia española y en qué medida esta experiencia condicionó su paso hacia el Nuevo Mundo? Es de advertir que la viva inteligencia, los rudos modales y la estirpe familiar de Álvarez Thomas fueron factores que condicionaron en buena medida su carrera militar. Con tan sólo diez años de edad, su padre lo enlistó como cadete en el regimiento de milicianos de Arequipa, iniciando con ello su formación castrense. Tras una estancia de doce meses en las fuerzas arequipeñas, fue 17 18 Bazant, Antonio Haro y Tamariz y sus aventuras políticas, pp. 16-17. Revolución burguesa, oligarquía y constitucionalismo, pp. 56-57. 225 Luis Alberto Arrioja Díaz Viruell y Carlos Sánchez Silva enviado a España para enrolarse en la Academia Militar de Santa María (Cádiz) y perfeccionar su instrucción como cadete, casualmente bajo la tutela de un hombre que, años después, fungiría como virrey de Nueva España y comandante de los ejércitos realistas, el general brigadier Félix María Calleja del Rey. Por el momento desconocemos las razones y los motivos que posibilitaron el ingreso de Melchor Álvarez a tan prestigiada academia; no obstante, se tiene la impresión de que siendo su padre un alto mando del ejército español no fue difícil que gestionara ante la junta de generales de España que uno de sus vástagos recibiera la anuencia para enlistarse como cadete al servicio de la corona. A juzgar por el expediente que de él se resguarda en el Archivo Histórico de la Defensa Nacional, se sabe que hacia 1788 salió de la citada Academia y se incorporó como porteguión de la Guardia Real Española19 y, posteriormente, como oficial de clase en la goleta Santa Ana. Derivado de los registros que se encuentran en el Archivo Municipal de Arequipa, Perú, se sabe que su padre·ofreció diversos recursos a la corona para combatir la guerra contra Francia. Así, en la sesión de cabildo del 28 de noviembre de 1793, el mismo intendente entregó " ... gustoso el donativo de ocho mil reales de bellón por una vez; y a nombre de la Señora Gobernadora Intendenta doña María Isabel de Thomas, dos mil reales de bellón que ambas partidas hacen diez mil ... ". Para remarcar su acendrada fidelidad a España, en la, misma reunión Antonio Álvarez y Jiménez ofreció también seis hijos menores que tiene, el mayor nombrado Melchor Álvarez y Thomas, porta-guión de Su Majestad del Regimiento de Caballería provincial de esta Ciudad de edad competente para poder servir en la presente guerra, instruido cabalmente en el manejo de armas para cualquier servicio del ejército, sirva en él costeado, armado y mantenido de cuenta del señor su padre durante la presente guerra; cuyo propósito se apresta desde luego a remitirlo a España costeando enteramente su viaje, siempre que su Majestad se digne admitir su servido, y esta oferta, para lo que protestaba 19 226 Dentro de la jerarquía militar, el portaguión fue un cargo que recayó en oficiales recién graduados que se encargaron de portar el guión o estandarte en los regimientos de artillería. Melchor Alvarez Thomas, comandante general escribir a su apoderado en la Corte la haga presente. Y en entre tanto que su Majestad resuelva en el particular suplica la Excelentísimo sf!ñor Virrey se sirva emplearlo en lo que tuviere a bien en Servicio del Rey, y en los propios términos ya expresados ... 20 Fue su valor e inteligencia lo que lo llevó a ocupar el cargo de capitán en 1795 y desempeñarse como director de Enseñanza y Táctica Militar del regimiento suizo Reading en la ciudad de Madrid. Hasta donde puede distinguirse, sus labores docentes fueron muy bien evaluadas e incluso duraderas, ya que ocupó este cargo hasta 1807; incluso, durante este año, como es sabido que pasó al virreinato del Perú a servir como miembro de las fuerzas realistas apostadas en la intendencia de Arequipa. No obstante, la invasión napoleónica a España en 1808 lo sacó de su quietud indiana y lo obligó a enlistarse en la compañía de voluntarios del estado y luchar en la defensa de Madrid y Toledo. 21 Su participación en la campaña de Madrid lo hizo acreedor a diversos ascensos dentro de la jerarquía militar. Entre septiembre de 1808 y octubre de 1809 recibió los grados de sargento mayor, teniente coronel, comandante de batallón y coronel, lo que lo llevó a enrolarse como oficial en uno de los batallones que comandaba su tío paterno, Mariano Álvarez, en el norte de España. Este cambio·sería fundamental en la carrera militar de Melchor Álvarez y el tiempo lo demostraría con creces. En principio, intervino en las acciones contra los franceses en el reino de Valencia y en el condado de Cataluña ..Tan sólo entre 1808 y 1809 participó en la defensa del castillo de Montjuic y en los sitios de Santa Coloma, Sarría y Gerona. En este último lugar formó parte de los 5 600 soldados que resistieron por espacio de siete meses la ofensiva de los 15 mil hombres que encabezaba el general Saint Cyr; asimismo, cayó prisionero ·y fue miembro de la junta militar que firmó la capitulación de Gerona en 1809. Tras un cautiverio de seis meses en Francia, 20 21 "Arequipa, 20 de noviembre de' 1793, Archivo Municipal, Libro de Acuerdos, folio 79", documento citado en extenso en Barriga, Memorias para la historia de Arequipa, tomo m, pp. 342-346. AHSDN, Cancelados, XI/m/1-16, vol. 1, ff. 1-4. "Hoja de servicios del General Brigadier don Melchor Álvarez (1840)". 227 Luis Alberto Arrioja Díaz Viruell y Carlos Sánchez Silva escapó y volvió a enlistarse en los regimientos Ibernia y Borbón que combatieron a los franceses en las ciudades de Valencia, Alcalá de Henares y Zaragoza. Por cierto, esto hechos le valieron las palmas laureadas de la corona, el ascenso a coronel de efectivos y el mando del regimiento de infantería de Saboya, todo esto entre mayo y junio de 1810.22 Según se desprende de su hoja de servicios, entre 1810 y 1813· se ocupó de la comandancia general del reino de Valencia, puesto que también sería fundamental en su carrera profesional, ya que le permitió vincularse con la plana mayor del ejército e incluso participar en la selección de mandos y la elaboración de programas de guerra para combatir el movimiento insurgente en América. Por si esto no bastara, estrechó lazos con los mandos madrileños para ascender al grado de brigadier de los reales ejércitos y, de paso, obtener el mando de la comandancia general de .la tercera división de operaciones del ejército en Nueva España y la gobernación de la intendencia de Oaxaca. Así, el27 de febrero de 1813 recibió la orden para embarcarse con destino a la Nueva España, llegando al puerto de Veracruz el19 de abril del mismo año. Haciendo un balance de lo antes expuesto, bien puede decirse que Melchor Álvarez llegó a la Nueva España con 38 años de edad, y en su haber sumaba sesenta batallas, más de diez ascensos, cinco condecoraciones y una palma real, aparte de los vínculos muy estrechos con la plana mayor del ejército español. 23 Sobre esto último, las fuentes registran que desde 1812 mantuvo una relación de amistad con el general brigadier Félix María Calleja del Rey, quien lo invitó a formar parte de la hueste que se encargó del virreinato novohispano a partir de 1813. En este sentido, la historiografía militar española revela que Calleja participó con Mariano Álvarez de Castro en el sitio de Gibraltar y Mahón entre 1782 y 1783, y que conoció al joven Melchor Álvarez durante su paso por la academia militar de Santa María, luego volvió a tener contacto con él por medio del consejo de 22 23 228 AHSDN, Cancelados, XI/m/l-16,vo1.,1, ff.1-4. "Hoja de servicios del General Brigadier don Melchor Álvarez (1840)"; Queipo de Llano, Historia del levantamiento, p. 188. Entre las condecoraciones que refiere su hoja de servicios, destacan la cruz concedida a los que se hallaron en la batalla de Bailén (Jaén), el escudo de distinción a los que clavaron la batería de Montjuic (Cataluña), la cruz de los defensores de Gerona (Cataluña) y las palmas laureadas por su constancia y tenacidad. Melchor Alvarez Thomas, comandante general regencia de Madrid. Tal vez por estos tratos y, sobre todo, por la estirpe de Álvarez Thomas, el recién designado virrey decidió acompañarse en su aventura novohispana de uno de los estrategas más laureados en el arte de la guerra e incluso -como llegó a señalarlo en su momento- de "un general capaz de combatir a los enemigos del rey y de la patria con pleno vigor e inteligencia ... " .24 Pero, ¿en qué contexto se dio el paso de Melchor Álvarez Thomas al territorio novohispano? Si bien es cierto que la llegada de este brigadier al virreinato se explica a la luz de los vínculos políticos y militares que tejió con la plana mayor del ejército español, también es verdad que se dio dentro del marco de una reforma militar que implementaron los Borbones en las Indias; reforma que, como se ha señalado, implicó la organización de un ejército regular que fue dirigido por soldados peninsulares de alto rango y, sobre todo, experimentados en el arte de la guerra. Hombres que, en su mayoría, acumularon práctica y mando militar en las campañas contra las tropas británicas y los ejércitos napoleónicos en la península, y que tenían el oficio suficiente para instruir a los mandos provinciales y hacer de las fuerzas ~ealistas un cuerpo profesionalizado de guerra, capaz de cuidar, y no de sangrar, los intereses de la corona en Nueva España. 25 La experiencia oaxaqueña Cuando Melchor Álvarez Thomas llegó a la Nueva España en 1813 ostentaba el rango de coronel de efectivos del regimiento de infantería de Saboya y era reconocido como uno de los colaboradores más cercanos del recién nombrado virrey Félix María Calleja. Tan pronto desembarcó en Veracruz fue designado comandante de armas de la villa de Jalapa, nombramiento que le permitió relacionarse con diferentes personajes e instituciones de la vida novohispana. Con mayor precisión, Álvarez Thomas estuvo en Jalapa desde abril de 24 25 AGN, Operaciones de Guerra, vol. 1, ff. 254-256. "Comunicaciones entre Melchor Álvarez, el Virrey Calleja y el capitán general de Guatemala (1815)". Archer, El ejército en el México borbónico, pp. 243-246. 229 Luis Alberto Arrioja Díaz Viruell y Carlos Sánchez Silva 1813 hasta enero de 1814; no obstante, dicha permanencia se distinguió por estar cargada de ires y venires ya que debió atender múltiples comisiones y emprender varias campañas militares. Se sabe que, entre junio y octubre de 1813, Álvarez Thomas comandó las acciones del regimiento de .i nfantería de Saboya en las cercanías de Tehuacán (Puebla), Perote y el antiguo cantón de.Cosamaloapan (Veracruz); asimismo, emprendió' dos viajes a la ciudad de Santiago de los Caballeros (Guatemala) para asesorar las estrategias .desplegadas contra los insurgentes en las subdelegaciones de Quetzaltenango y Huehuetenango. 26 Ya desde esta primera etapa en tierras novohispanas dio muestras de su carácter autoritario y severo, que incluso para muchos a veces rayó en la crueldad. A este personaje le tocó poner en práctica las primeras medidas contradictorias del virrey Calleja, ya que éste, por un lado, decía ser, teóricamente, fiel seguidor de la Constitución gaditana en esos momentos vigente y, por la otra, aplicar tajantemente el reglamento político-militar del S de marzo de 1813 que él mismo había expedido para combatir a los insurgentes, en esos momentos posesionados de varios puntos clave en el territorio novohispano. Los excesos-a los que llegó Álvarez Thomas fueron múltiples: imposición de préstamos con lujo de violencia, detenciones y encarcelamientos para quienes no quisieran cooperar con la causa realista, excesos de bagajes para las tropas y un sinfín de tropelías contra los vecinos y comerciantes veracruzanos. Los abusos de los militares destacados en Xalapa llegaron a tal grado que el ayuntamiento de aquella ciudad se vio obligado a expedir un acuerdo señalando los deberes que debía cumplir cada vecino con los militares: "ningún soldado podrá exigir en el alojamiento que obtuviere otra cosas que cama; luz, agua, vinagre, sal y asiento en la lumbre, y el que maltrate á su patrón será castigado á proporción al exceso cometido .. .'' .27 Todo parece indicar que su estancia jalapeña terminó en enero de 1814, fecha en que el virrey Calleja lo comisionó para ocupar la 1 26 27 230 AGN, Operaciones de guerra, vol. 2, ff. 32-38. "Comunicaciones entre Melchor Álvarez Thomas y el capitán general de Guatemala (1813)". Sobre sus excesos cuando estuvo en Jalapa, Veracruz, confróntese Rivera, Historia antigua y moderna de Jalapa, pp. 410-416. Melchor Alvarez Thomas, comandante general comandancia general de la tercera división del ejército del sur y, a su vez, desempeñar el cargo de gobernador intendente de Oaxaca. 28 Es de advertir que este nombramiento no sólo afianzó los lazos políticos que mantenía con Calleja, sino también sirvió para posicionar estratégicamente a uno de los generales más adiestrados en el combate contra los partidarios de Morelos en los Valles Centrales de Oaxaca, la Mixteca Alta y Baja, la Sierra Norte, la Costa y las inmediaciones del Istmo de Tehuantepec. Se debe señalar que el hecho de que un militar peninsular se hiciera cargo de una intendencia en esta época era parte de las acciones reformistas que emprendieron los Borbones en las Indias. Aunque en tiempos de guerra esta medida buscaba que los hombres más leales a la corona resguardaran los intereses reales en el ámbito regional y combatieran los brotes insurgentes, por otro lado procuraban mantener las relaciones entre el ejército y la Real Hacienda, especialmente en lo correspondiente a pagos~ abastos y provisiones, impuestos y hospitales. 29 Con todo esto, no es casualidad que Álvarez Thomas emprendiera su campaña oaxaqueña al mando de seis regimientos de infantería -Saboya, Lovera, San Carlos, Usares, Provincial de Oaxaca y Artillería- que, en su conjunto, integraban la denominada Séptima Brigada de Oaxaca, cuyos efectivos sumaban cerca de 3 mil y operaban con un presupuesto anual de aproximadamente 188 852 pesos. 30 En este orden de ideas resulta trascendente precisar la coyuntura en que Álvarez Thomas fue enviado a Oaxaca. Primero, que bajo el manto del constituc;ionalismo gaditano y las restricciones impuestas al poder del rey en España, en la Nueva España las huestes insurgentes encabezadas por Morelos crecieron de manera significativa entre 1812 y 1814. Lejano se veía en el horizonte el hecho de que entre 1810-1812 la provincia de Oaxaca se había mantenido "libre de insurgentes", situación que llevó al obispo de Antequera, Antonio Bergosa y Jordán, en junio de 1811, a pregonar a los 1 28 29 30 AGN, Operaciones de guerra, vol. 3, f. 95. "Comunicaciones entre Melchor Álvarez Thomas y el Virrey Calleja (1814)". AGN, Operaciones de guerra, vol. 3, f. 95. Archer, El ejército en el México borbónico, pp. 154-155. AGN, Operaciones de guerra, vol. 1, f. 73. "Estado de los cuerpos militares que conduce el General Melchor Álvarez (1814)". 231 Luis Alberto Arrioja Díaz Viruell y Carlos Sánchez Silva 11 cuatro vientos que Oaxaca era la casi única Provincia libre del contagio de la insurrección en esta Nueva España". 31 Pero las cosas cambiaron radicalmente en el bienio 1812-1814, cuando los insurgentes tomaron y controlaron sitios tan importantes como Oaxaca, Acapulco y Morelia. Aunque desde la toma de Guadalajara en 1810 los insurgentes no se habían posesionado de una capital provincial, Brian Hamnett cuestiona la importancia del apoderamiento de la capital oaxaqueña y lo califica más bien como un refugio temporal.32 Sin embargo, muy diferente es la idea que Morelos se formó de esta toma, ya que en su opinión: esta hermosa Provincia merece su atención, y en ella tengo por cierto que fundamos la conquista de todo el Reyno: ya por ser la primera capital que se toma con masizes, ya por estar defendida con poca gente, y ya que en fin por los recursos que encierra de hombres útiles, minas, tabacos, puertos, y granas que convertiremos en fuciles". La misma opinión compartió años más tarde Lucas Alamán cuando afirmaba que "la ocupación de Oaxaca y de su rica provincia cambiaba enteramente el aspecto de la revolución". 33 Sin embargo, a partir de 1814, con la derogación de la Constitución de Cádiz y el restablecimiento de Fernando vn como monarca absoluto, se reinició la contraofensiva realista comandada por el virrey Calleja, y donde su correligionario Álvarez Thomas fue una pieza clave, haciendo un llamado a todos los habitantes de Oaxaca para informarles que deberían congratularse por el regreso del monarca español al trono. 34 Esta coyuntura, en nuestra opinión, concluye con el fusilamiento de Morelos en diciembre de 1815. ••• 11 ••• 31 32 33 34 232 "Pastoral del obispo de Oaxaca á sus diocesanos", 30 de junio de 1811 Hemández y Dávalos, Historia de la guerra de independ~ncia, p. 323. Una descripción de la época sobre la torna de la ciudad de Oaxaca por los insurgentes la realizó la señora María Micaela Frontaura en 1813. Al respecto, véase "Relación de lo que observé en la Ciudad de Oaxaca entre los insurgentes desde 25 de noviembre último (de 1812) que se apoderaron de ella hasta el2 de Enero de 813 que salí", Hemández y Dávalos, Historia de la guerra de independencia, t. rv, pp. 842-848. Véanse, respectivamente, Harnnett, Raíces de la Insurgencia, p. 197; la afirmación de Morelos en "El Sr. Morelos manifiesta al Sr. Rayón, la importancia de la torna de Oaxaca.Diciembre 16 (de 1812)", en Hemández y Dávalos, Historia de la guerra de independencia, t. rv, p. 690; y Alarnán, Historia de México, vol. m, p. 156. Al respecto consúltese la Proclama de Mekhor Álvarez titulada Ciudad capital de Antequera; Habitantes del Valle de Oaxaca y de todos los partidos dependientes de aquella, no ignoráis ya, Melchor Alvarez Thomas, comandante general Así, desde finales de 1813 y principios de 1814, las tropas realistas fueron ganando poco a poco terreno. En Oaxaca, después de la salida de Morelos, las diferencias entre los jefes insurgentes que se habían quedado para comandada provocaron el decaimiento de la insurgencia. Esto explica que cuando el congreso insurgente determinó en 1814 enviar como jefe militar de Oaxaca, Puebla y Veracruz a Ignacio López Rayón, en realidad sólo buscaba poner orden entre los jefes insurgentes. Pero en lugar de calmar los ánimos, Rayón fue presa del enfrentamiento entre los partidarios de la independencia. Por ello, cuando el secretario de Morelos le preguntó las causas por las que se había perdido Oaxaca "sin haber disparado un tiro", Rayón, molestó, pero seguro, afirmó: se perdió Oaxaca porque, residiendo allí el mariscal Anaya, . el canónigo y mariscal Velasco y otros dignos émulos de Rosains, persuadieron y aun instaron al intendente, tribunales y oficinas que no se debía obedecerse al Congreso, á mi ni á otro alguno que no fuese el Sr. Morelos, con lo cual carecía de auxilios que podía franquear para su defensa aquella desgraciada capital" .35 En abril de 1814 Melchor Álvarez escribió un comunicado al comandante de armas· de los insurgentes acantonados en la ciudad de Oaxaca, en el que advirtió cómo iba a actuar en su calidad de gobernador intendente de la provincia. En él se expresó con estas palapor la menor gota de sangre que se derrame ·en esa ciudad bras: de mis tropas, correrán por ella arroyos vuestros; al menor insulto á cualquiera habitante lo castigaré con el último suplicio". 36 La entrada final de tropas leales al rey comandadas por Álvarez Thomas a la ciudad de Oaxaca se llevó a cabo el29 de marzo de 1814. Esta acción se inscribe, por un lado, dentro de una ofensiva relista más amplia, ofensiva que había obtenido sus primeros frutos, ya que.una buena parte del territorio oaxaqueño estaba bajo su control. 37 Pero, por el JI JI • • • 35 36 37 que nuestro soberano, sí, nuestro amado, suspirado y deseado Fernando de Barbón ocupa su trono; etc., suscrita en Oaxaca, 17 de septiembre de 1814. Gay, Historia de Oaxaca, t. n, pp. 452-453. "Melchor Álvarez intima rendición al comandante de armas de Oaxaca.-Abril de 1814", Hemández y Dávalos, Historia de la guerra, vol. v, pp. 311-312. Una descripción del apoteótico recibimiento que se lo· dio a- Álvarez en la ciudad de Oaxaca en Gay, Historia de Oaxaca, t. n, pp. 443-444. 233 Luis Alberto Arrioja Díaz Viruell y Carlos Sánchez Silva otro, en los deseos de la clase política local que veía en la llegada de las tropas realistas a Oaxaca su tabla de salvación. Así, el25 de marzo de 1814 los cabildos de la capital oaxaqueña -civil y eclesiástico-le dirigieron un comunicado a Álvarez Thomas, en el cual enumeraron el rosario de penalidades que habían pasado desde noviembre de 1812 por la invasión insurgente. Con bastante exceso en sus juicios, concluyeron el comunicado con estas palabras: "el pueblo todo sin exageración, como Vuestro Superior lo sabrá, se consume en medio de los más ardientes deseos de recibir al ejército; y es tal el terror que el insurgente le ha causado, que suplica a Vuestro .Superior rendidamente fuerce sus marchas en todo lo posible para que logre.la tranquilidad en día y noche que tanto ha menester Por su parte, Álvarez Thomas contestó desde el pueblo de San Pablo Huitzo al día siguiente, precisando "que mis deseos unidos a los del gobierno de la península, son el hacer feliz á todos los habitantes, y que con la benevolencia borren algún tanto de sus corazones heridos, las llagas que les ha causado el cautiverio .. . 38 Unos días después, y ya instalado en la capital oaxaqueña, Álvarez Thomas lanzó una proclama en la que informó a los oaxaqueños que debido a las muestras de paz que había recibido en dicha tierra estaba seguro de encontrar en aquellos pueblos "la dulce complacencia de que la malicia y la fascinación no habían penetrado en la constancia de vuestros corazones ... de igual forma, les comunicó que en su persona no encontrarían un gobernante que los "trate con ceño, sino un protector, un gran amigo, un padre, un amante que os abrigará os consolará y enjuagará vuestras lá . . grimas vertidas copiosamente en vuestro dilatado cautiverio ... a manos de estos rebeldes ... De paso, advirtió que bajo su mando perseguiría toda muestra de división o rivalidad y castigaría las "funestas ideas de revolución y de infidencia, propias de las almas viles y cobardes ... ". 39 11 ••• • 11 • 11 ; 11 • 38 39 234 Ambos documentos como apéndice tercero en ibid., pp. 549-551. AGN, Operaciones de guerra, vol. 2, f. 40. "Comunicación que dirige el General Melchor Álvarez a los oaxaqueños (1814)". También aparece como Apéndice tercero en Gay, Historia de Oaxaca, t. n, pp. 551-552. Melchor Alvarez Thomas, comandante general Tan pronto se hizo cargo del puesto, tuvo que hacer frente a las acusaciones de infidencia que cayeron sobre los integrantes del cabildo eclesiástico de la capital oaxaqueña. El asunto arrancó en 1814 y duró incluso cuando Álvarez Thomas ya no estaba al frente de la intendencia de. Oaxaca. Al primero que acusaron fue a José Mariano de San Martín, a la sazón canónigo lectora! de Oaxaca, por sus ligas con los insurgentes, a pesar de. que se plegó al indulto que este mismo año ofreció Melchor Álvarez. 40 El caso fue tan enredado que muchos españoles llegaron a declarar a favor del inculpado, destacando su fidelidad al rey, pero otros se manejaron de una manera contradictoria y al final la documentación deja el "sabor de boca" de que San Martín fue como el "chivo expiatorio" del cabildo oaxaqueño. Su caso se llevó a diferentes instancias y por su contradictoria actuación cuando Morelos y sus huestes insurgentes ocuparon Oaxaca y otras partes de la Nueva España, la controversia sobre su caso seguía en el tapete de la discusión, incluso hasta 1821.41 En 1815 se abrió la causa por la misma acusación de infidencia contra todo el cabildo eclesiástico de la capital oaxaqueña. Al igual que en el caso anterior, el proceso se prolongó también por varios años, llegándose a concluir hasta 1819, cuando el mismo monarca español emitió la ejecutoria real absolutoria en la que precisaba: Tanto en el tiempo anterior como en el posterior de la ocupación de aquella Ciudad por las armas de los Insurgentes y que antes por el contrario manifiesta el Expediente que dicho Cabildo é lbáñez de Corvera, han dado repetidas pruebas de su patriotismo y adhesión á mi real persona y gobierno lexitimo i que quanto al tiempo de la ocupación de la referida Ciudad de Oaxaca por los Rebeldes tampoco había motivo ni merito alguno legal que pueda perjudicarles ofenderles atendida la irresistible fuerza y notoria biolencia y opresión que sufrieron entonces todos los habitantes de Oaxaca. 42 m 40 41 42 !barra, Clero y política en Oaxaca, p. 99. La documentación sobre el caso de San Martín en Hemández y Dávalos, Historia de la guerra, vol. VI, pp. 290-460. Sobre las actividades de este personaje puede verse !barra, Clero y política en Oaxaca. "Ejecutoría real absolviendo al cabildo y al señor lbáñez.-12 de julio de 1819", Hemández y Dávalos, Historia de la guerra, vol. VI, p. 636. 235 Luis Alberto Arrioja Díaz Viruell y Carlos Sánchez Silva Sobre las acciones militares de Álvarez Thomas, los registros resguardados en el AHSDN y el AGNM revelan que. su primer año en Oaxaca fue sumamente difícil, ya que las múltiples correrías contra los insurgentes se combinaron con una progresiva merma de los recursos públicos y, por ende, en la tropa de a pie. Bien puede decirse que su bautizo de plomo ocurrió entre marzo y abril de 1814, lapso en que los regimientos Saboya y Provincial combatieron a los partidarios de Morelos en la ciudad de Oaxaca hasta recuperarla y ponerla bajo los mandos realistas. Tras rescatar la ciudad, Álvarez Thomas se dio a la tarea de integrar un gobierno provincial en el que predominaron los militares de origen peninsular, tal es· el caso del coronel Francisco Rendón, el sargento mayor Valentín de Raygadas y los comandantes Manuel Fernando Dombrine, Francisco París y José Sánchez Pareja, quienes se encargaron de la Secretaria del ·Despacho, la comandancia ·de la séptima división de infantería y las tres ·compañías o divisiones que operaron en el Istmo de Tehuantepec, la Mixteca Alta y la Costa, respectivamente. También incluyó a algunos criollos que le probaron lealtad y respeto, tal es el caso de los tenientes Francisco Velasco, Ignacio Fagoaga y Manuel Callejas, quienes se ocuparon de la custodia militar de la ciudad; asimismo, echó mano de algunos funcionarios y comerciantes para administrar política y económicamente la ciudad, como Joaquín Pimente!, Nicolás Bustamante y Joaquín Villasante, quienes fungieron como tesorero, presidente de la junta protectora y subdelegado de la verde Antequera, respectivamente. Asimismo reestructuró en su conjunto ·el cabildo de la ciudad de Oaxaca, amén que en un gesto similar al llevado a cabo por el virrey Calleja, el12 de abril de 1814, juró la Constitución gaditana, devolvió sus propiedades y bienes a los que h?bían sido despojados por los insurgentes y dictó órdenes para que .se recogieran las armas y mUniciones dispersas en varios puntos. Todo ello con lujo de arbitrariedades, violencia y excesos. 43 Si bien es cierto que el programa político-militar de Álvarez Thomas implicó restaurar a la brevedad el orden público en Oaxaca 43 236 AGN, Operaciones militares, vol. 1, f. 30. ''Usta de hombres indultados al tiempo de tomar la ciudad de Oaxaca (1814)". Sobre romo procedió y el descontento de la población civil de la capital oaxaqueña y en la intendencia en general, véase Gay, Historia de Oaxaca, t. u, pp. 445-488. Melchor Alvarez Thomas, comandante general y desplegar acciones militares contra los insurgentes, también es verdad que dicho programa se enfrentó con un sinnúmero de obstáculos, siendo el de mayor envergadura la falta de recursos financieros y humanos para sostener a la tropa. Ante esto, Álvarez Thomas reiteró constantemente que el problema financiero era producto de la parálisis que enfrentaba la economía regional lo que provocaba, a su vez, la rebaja en las operaciones mercantiles, la caída en captación de impuestos y la "imposibilidad de contar con auxilios para la tropa realista ... y ya sin auxilios continúa la deserción y el desorden que es consiguiente, faltando al soldado el presto y la ración ... " .44 Para damos una idea de la grave situación económica que prevalecía en 1814, basta decir que tras la retirada de los insurgentes, el general Álvarez hizo un inventario de las obras pías y capellanías que había en la ciudad. Obviamente, durante la rebelión no se pagaron los intereses sobre 318 496 pesos que se habían consolidado y, por lo tanto, el gobierno real debía esta suma a los primeros prestatarios. Esto causó muchos contratiempos entre los comerciantes de la ciudad. A esto se sumaba la cantidad de 217 349 pesos que, según cálculos del intendente, habían sido las pérdidas sufridas por las haciendas trigueras y ganaderas que poseían los peninsulares de los fondos obtenidos por préstamos piadosos. 45 Ante la falta de recursos y las exigencias de la guerra, Álvarez emitió una serie de medidas para exigir préstamos con el propósito de prorratear los gastos militares. Una prueba de ello fue la orden de 13 agosto de 1814, en la que presionó a todos los vecinos y religiosos españoles a sufragar la manutención de la tropa realista cada vez que pasara por sus poblados; asimismo, obligó a los comerciantes españoles de Jicayán a repartir algodones entre los pueblos de indios para que tejieran las mantas que requería la tropa para su vestimenta. 46 44 45 46 AGN, Operaciones de guerra, vol. 1, f. 57. "Comunicación que dirige el General Melchor Álvarez al Virrey Calleja (1814)". Hamnett, Política y comercio en el· sur de México, pp. 167-168. AGN, Operaciones de guerra, vol. 1, ff. 96-99. "Informe del General Melchor Álvarez sobre las finanzas de la tropa (1814)". 237 Luis Alberto Arrioja Díaz Viruell y Carlos Sánchez Silva En cuanto a la carencia de recursos humanos, el comandante intendente reveló que la tropa apostada en ·Oaxaca era tan imaginaria como inútil, ·ya que carecía de uniformes, parque, entrenamiento; hombres capaces y mandos profesionalizados; además, señaló que los pocos hombres aptos, regularmente, desertaban, puesto que al ser desprendidos de sus pueblos la economía de sus familias solía quebrantarse,.situación que los obligaba a regresar a su "querencia" ante el menor descuido de los mandos superiores; incluso, sobre estos últimos, confirmó que pocas veces cumplían sus ~siones, ya que la falta de bastimentas y recursos restringían sus acciones, aunado al hecho de que su convivencia con el pueblo raso los orillaba a perder rápidamente su vocación, por lo cual era costumbre que se inclinara hacia la odosidad, la pereza, la embriaguez, el robo y otros vicios que reinaban en el mundo indígena; factores que sólo promovían la discordia y la disensión en las filas de las milicias provinciales.47 Un análisis más atento de la. documentación permite afirmar que la etapa más beligerante de- Álvarez Thomas en Oaxaca se dio desde octubre de 1814 hasta mayo de 1815. Durante este lapso,- las comunicaciones que mantuvo con el virrey Calleja revelan que las acciones de los insurgentes lo obligaron a mantener un estado de sitio y violencia permanente en los pueblos de los Valles Centrales, la Costa y la Mixteca Baja. Lo anterior fue registrado por el mismo Carlos María de Bustamante en su Diario Histórico: N o es poco de~engaño el que la fortuna le acaba de dar a este caballéro; que coteje este' desaire con los favores "q ue locamente le prodigó este caballero en los años cuando fue 'el árbitro soberano de la provincia de Oaxaca, cuando ·dispuso de la vida y de la muerte de -sus habitantes; cuando los decapitaba ·p or un capricho en la plazuela de San Juan de Dios, al son de un pito y de un ronco tambor; cu~~o sembró el terror en todos los pueblos inermes o mal defendidos que atacó etc. Si hubiera sido entonces moderado, Oaxaca fuera ahora su asilo y hallaría en sus habitantes otros tantos amigos generosos. 48 47 48 238 AGN, Operaciones de guerra, voL 1, ff. 96-99. "Informe del General Melchor Álvarez sobre las finanzas de la tropa (1814)". Bustamante, Diario histórico (24 de junio de 1823), edición digitaL Melchor Alvarez Thomas, comandante general Lo interesante es que esas comunicaciones confirman que las ocho compañías destinadas a dichas operaciones padecieron a cada momento los estragos de la guerra, al grado que hacia febrero de 1815 se encontraban incomunicadas, abatidas fisicamente, desprovistas de parque y mermadas por los ataques de los insurrectos. 49 Ante esta situación, Álvarez Thomas solicitó al virrey Calleja autorización para que las guarniciones destacadas en Tehuacan (Puebla) y Perote (Veracruz) coadyuvaran en la lucha contra los rebeldes; de igual forma, solicitó el apoyo de 300 artilleros a la capitanía general de Guatemala para que sus hombres entraran por el camino del Soconusco y bloquearan la desbandada insurgente en las .inmediaciones de Tehuantepec. A pesar de su reiterada insistencia, las peticiones de Álvarez Thomas fueron rechazadas debido a que las tropas requeridas se encontraban en campaña y carentes de recursos para efectuar el traslado hasta Oaxaca. 50 Si bien es cierto que Álvarez Thomas fue promovido a general brigadier el año de 1815, también es verdad que ese año sufrió el mayor número de derrotas a "manos del enemigo del Rey y de la patria ... ". Lo anterior lo plasmó él mismo en un pequeño panfleto que dirigió a su amigo el doctor Francisco Moreno de Velasco, en el que le señalaba que estaba plenamente convencido de la ineptitud de los rebeldes insurgentes, pero que "en medio de sus vicios y defectos ... y aplicándoles la fábula del asno que tocó la flauta por casualidad o porque su corazón atendió una y otra vez los clamores de la humanidad ... les he visto acciones muy buenas y sanguinarias . . . con caracteres fundidos en los moldes de Atila y Rayón ... ". 51 Claro está que las mermas causadas por los rebel49 50 51 Las destacadas en la Mixteca eran la primera compañía de Gueguetán, la segunda compañía de Copala, la tercera compañía de Ayutla y la cuarta compañía de Cruz Grande, todas bajo el mando del comandante Francisco París. Las destacadas en la Costa eran la primera compañía de Tututepec, la segunda compañía de Juquila, la tercera compañía de Pinotepa, la cuarta compañía de Guajolotitlán y la quinta compañía del Cortijo, todas bajo la comandancia de José Sánchez Pareja. AGN, Operaciones de guerra, vol. 1, ff. 100-120, 235-260. "Informe del General Melchor Álvarez sobre las campañas y sucesos de Oaxaca (1814)", AGN, Operaciones de guerra, vol. 1, ff. 100-120,235-260. AGN, Operaciones. de guerra, vol. 2, f. 64. "Comunicación que dirige el General Melchor Álvarez al doctor Francisco Moreno de Velasco (1815)". 239 Luis Alberto Arrioja Díaz Viruell y Carlos Sánchez Silva des iban más allá del ámbito militar, incluso habían repercutido con cierto rigor en las actividades productivas y comerciales de los pueblos. Al respecto, Álvarez puntualizó que el principal rubro de la economía oaxaqueña, la grana cochinilla, había padecido una contracción en sus niveles productivos y en sus valores durante el periodo 1811-1814, y. que dicha disminución era resultado de la interrupción en las vías de comunicación, la caída sistemática de las ventas y la escasez de recursos públicos y privados para fomentar la producción y el comercio del tinte. En este mismo orden, subrayó que la producción añilera de Tehuantepec había decaído en más de 70 mil arrobas anuales por los saqueos y los hechos armados que protagonizaron los insurgentes en aquella subdelegación; de igual forma, dejó ver que la producción algodonera de Jamiltepec se encontraba en ruinas debido a los saqueos que realizaron los rebeldes a su paso por este lugar; algo parecido sucedía con la producción textil de Villa Alta y con los campos trigueros de la Mixteca. Por si esto no bastara, refería que las villas de Huajaupán y Tiaxiaco se encontraban en ruinas y desprovistas de comerciantes, mientras que el comercio de la ciudad de Oaxaca se encontraba paralizado ya que todos los circuitos tanto internos como externos que alimentaban dicho mercado, estaban bloqueados. Ante esto, Álvarez Thomas instó al virrey Calleja a tomar una medida que solucionara "esta precaria situación que se padece en esta ciudad ... y que cada día hace que su vecindario se agonice ... ya con el temor o con el hambre que se apodera de ellos ... ".52 Conviene hacer notar que los informes acerca de la insurrección y las dificultades económicas en Oaxaca fueron pasadas por alto en repetidas ocasiones; es decir, el general Álvarez Thomas tuvo que resistir la ofensiva insurgente por espacio de quince meses con arcas vacías, un ejército mermado, incomunicado y desprovisto de parque, y una sociedad oaxaqueña que no perdió el tiempo en recriminarle la ruina que padecía el comercio de la grana cochinilla, el desabasto constante de granos y los abusos con que eran llevadas a cabo las· acciones militares. Precisamente, debido a sus ·excesos, 52 240 AGN, Operaciones de guerra, vol. 2, ff. 78-83. "Comunicación que dirige el General Melchor Álvarez al Virrey Calleja (1815)". Melchor Álvarez Thomas, comandante general cuando llegó el virrey Juan Ruiz de Apodaca en sustitución de Calleja, fue llamado a la capital del virreinato para rendir cuentas de su proceder. Así, en noviembre de 1816 tuvo que presentarse ante el conde del Venadito, quien ante los excesos registrados lo encarceló por un tiempo, pero al no tener, según la documentación oficial, jefes capaces que comandaran las provincias insurrectas, se le restituyó en su puesto de comandante gobernador intendente de Oaxaca. 53 En los últimos años de su gestión en tierras oaxaqueñas, Álvarez Thomas fijó como una de sus metas combatir a los insurgentes apostados en la mixteca y la cañada, particularmente en las poblaciones de Yanhuitlán y Teotitlán del Camino. Así tenemos que el principal bastión de los insurgentes desde 1815 había sido el fuerte situado en Teotitlán, y Melchor Álvarez con sus fuerza militar logró tomarlo en enero de 1817. Por lo que respecta a Yanhuitlán, desde 1815 Melchor Álvarez mandó construir el fuerte de San Fernando con la finalidad de proteger a los mixtecos de las tropas insurgentes. Tal era su convencimiento del control que ejercía en la zona que en mayo de 1817 le escribió al virrey Apodaca, no con poca presunción, para comunicarle que la presencia realista serviría para detener cualquier avance del"traidor" Javier Mina en su amenaza de avanzar sobre el sur novohispano. 54 Sin embargo, Álvarez y Thomas no varió su forma arbitraria y despótica de proceder en cada una de sus acciones. En 1818 fue relevado de la intendencia de Oaxaca en medio de múltiples acusaciones y reproches de la sociedad oaxaqueña por los abusos que cometía. Al parecer, dicha salida fue promovida por el mismo virrey Ruiz de A poda ca, primero para calmar los reclamos de varios sectores oaxaqueños; y, en segundo lugar, con el propósito de posicionar a uno de los hombres de "línea dura" del ejército realista en un espacio que había sido secuestrado por las fuerzas insurgentes: la intendencia de Querétaro. Así, Álvarez Thomas fue designado comandante gene53 54 Gay, Historia de Oaxaca, t. n, pp. 488-489. AGN, Operaciones de guerra, vol. 536, exp. s/n, ff. 141v-142. "Plano de la planta de la fortificación insurgente en Teotitlán del Camino, Oaxaca (1 de enero de 1815)"; "Plano de la planta alta de la Fortificación de San Fernando, ubicada en Yanhuitlán, Oaxaca (17 de mayo de 1817)", Ibid., vol. 53, exp. 13, f. 121; y "Plano de la planta alta y frente situado en Teotitlán, Oaxaca (17 de mayo de 1817)", Ibid., vol. 53, exp. 13, f. 122. 241 Luis Alberto Arrioja Díaz Viruell y Carlos Sánchez Silva ral de aquella jurisdicción.55 Se sabe que permaneció en dicho cargo hasta el 9 de marzo de 1820, fecha en que fue sustituido y recibió las gradas por su desempeño. 56 Después de esta remoción, Álvarez Thomas continuó fiel a la causa realista, incluso intervino en veinte acciones de guerra en las inmediaciones de México, Guanajuato, San Luis Potosí y Querétaro. Epílogo. De realista a republicano Haciendo una breve recapitulación, puede decirse que Melchor Álvarez Thomas fue un personaje que nació en el seno de una familia española bien posicionada política, militar y económicamente en el virreinato de Perú, situación que le permitió enlistarse, formarse y desarrollarse dentro de las filas del ejército español. Por si esto fuera poco, fue un hombre que acumuló experiencia militar en el viejo continente, especialmente combatiendo a las tropas inglesas y francesas; puso en práctica sus conocimientos en los virreinatos americanos, y se instaló en la plana mayor del ejército realista novohispano, ya sea como parte de los mandos que arribaron con el virrey Calleja para combatir la insurgencia o en las filas de la hueste que remitieron los Barbones a América con el propósito de reformar las fuerzas armadas en todos sus niveles. Si bien es cierto que Álvarez Thomas fue un hombre con conocimiento y experiencia militar, también es verdad que su desempeño en la intendencia de Oaxaca estuvo lleno de limitaciones y derrotas, ya sea por las adversas condiciones en que se encontraban las tropas a su mando, por el desconocimiento que tenía de sus enemigos y de los campos de batalla, o bien por la continua escasez de recursos 55 56 242 AHSDN, Cancelados, XI/m/1-16, vol. 1, f. 4. Aunque Calleja estaba enterado de los múltiples abusos y quejas en contra de su proceder, no se animó a deponed o de su puesto en Oaxaca, ya que desde agosto de 1816 el mismo Calleja le había ofrecido un puesto similar en Querétaro. Véase Gay, Historia de Oaxaca, t. n, p. 488. Según su hoja de servicio, Álvarez Thomas fue designado como intendente de Querétaro el16 de agosto de 1818. Véase "Hoja de servicios del General Brigadier don Melchor Álvarez (1840)". Sobre su actuación en Querétaro, confróntese "Historia ambiental: Santiago de Querétaro y la basura, dos casos en el virreinato". Memoria del r coloquio de Estudios Regionales. Melchor Álvarez Thomas, comandante general militares, económicos y humanos que enfrentó a cada momento; limitantes que, a nuestro parecer, propiciaron que el grueso de sus acciones estuviera signado por el exceso y la violencia, y de paso fuera el marco de una lucha que, en palabras del mismo brigadier, no sólo era "difícil sino sanguinaria e interminable ... ". 57 Por lo demás, sólo resta decir que hada 1820, fecha en que se gestó un plan independentista dentro de las filas del ejército realista, Álvarez Thomas era un general brigadier de alto rango que se distinguía por tener cierta fama debido a sus acciones en Oaxaca y Querétaro. No obstante, en 1821 desertó de las fuerzas realistas y se unió al Ejército Trigarante bajo el amparo de su credo seudoamericano. Incorporado a dicho Ejército, asistió a las reuniones secretas de los jefes que dirigían el movimiento y fue nombrado primer jefe del Estado Mayor del mismo ejército, participando en la toma de la ciudad de México. 58 Es importante señalar que estos cambios tan radicales fueron comunicados por Melchor Álvarez Thomas a sus parientes, especialmente a su hermano Ignacio y a sus padres. Con el primero intercambió diversas comunicaciones en las que se informaban mutuamente de la crisis realista en América y de las posibilidades de pactar con las elites criollas que simpatizaban con la autonomía y que promovían una salida relativamente pacífica a la lucha armada. Incluso su hermano fue el primero en ponerle el ejemplo de romper con el ejército español y pactar con las elites americanas, ya que en 1810 se adhirió a las tropas del general Belgrano que proclamaron la independencia en Argentina y Uruguay. Ciertamente, estas comunicaciones y estrategias continuaron entre ellos con el paso de los años, puesto que hacia 1830 el mismo Ignacio le recomendaba lo siguiente a su hermano: "Querido Melchor, concluyo rogándote me des una idea del estado y la perspectiva que ofrece el Perú en su organización, pues estoy dispuesto a que ofrezcamos nuestros servicios, quizás no perderían en admitir a dos veteranos que han 57 58 AGN, Operaciones de guerra, vol. 2, f. 64. "Comunicación que dirige el General Melchor Álvarez al doctor Francisco Moreno de Velasco (1815)". Sobre su participación en esta coyuntura véanse los números 5 y 10 del Diario político militar mejicano, México, 5 y 10 de septiembre de 1821, respectivamente. Ambos números reproducidos en García (comp.), Documentos históricos mexicanos, t. rv, pp. 17-20 y 41-44, donde se cita este Diario. 243 Luis Alberto AÍ'rioja Díaz Viruell y Carlos Sánchez Silva combatido por la libertad, han desempeñado grandes cargos y se ven obligados a pedir el sustento a su patria querida" .59 La comunicación con sus padres, por el contrario, fue más controvertida, ya que el general Antonio Francisco Álvarez y Jiménez, quien fuera uno de los jefes realistas más destacados en Sudamérica, siempre reprochó el cambio de actitud de sus vástagos y sus relaciones con la clase gobernante de las naciones independientes; dichos reproches llegaron al grado de tacharlos de traidores, con especial énfasis en Melchor e Ignacio, refiriéndoles que "si por desgracia se separan de este ilustre modo de pensar (como no espero), olvídense de quien les dio el ser después de Dios; considérense después de aquel desgraciado momento abandonados de los suyos, los que continuaremos con firmeza defendiendo hasta la muerte los sagrados derechos de nuestra Santa Religión, Rey y Patria". 60 Dichos reproches también fueron pronunciados por doña María Isabel Thomas y Rancé, ya que a juzgar por las memorias de Ignacio Álvarez Thomas, "siempre tuvo predilección por mí y por Melchor, hizo los mayores esfuerzos por arrancamos de la revolución ofreciéndonos ventajas en el ejército realista, luego que nos comunicamos con ella, pero cuando conoció nuestra resistencia cortó toda comunicación". 61 Así, como muchos peninsulares que comandaron el virreinato novohispanq, Melchor Álvarez Thomas se encubrió en las filas del Ejército Trigarante, incluso en la estructura gubernativa del Imperio de Agustín de Iturbide, con el objeto de mantenerse como un militar de alto rango dentro de las ambiguas y amorfas instituciones del México independiente hasta 1847, fecha en que falleció. 62 59 60 61 62 244 Albornoz, El Perú más allá de sus fronteras, p. 393. Idem., pp. 94-95. Idem. Se sabe que murió el 17 de enero de 1847 en la ciudad de México y fue sepultado en la iglesia del convento de San Francisco. Diccionario Porrúa, p. 140. Melchor Álvarez Thomas, comandante general ANEXO 1 HOJA DE SERVICIOS DEL GENERAL MELCHOR ÁLVAREZ 1 En España: En todas las que han ocurrido en sus regimientos anteriores ha desempeñado sus funciones con conocida aplicación; se embarcó en el navío Santa Ana para guarnecerlo en 23 de julio y en 30 de septiembre del mismo año fue desembarcado por enfermo; durante el tiempo que estuvo en tierra hizo cinco salidas con el bote armado para el apostadero de la Caleta. En los ataques que hicieron los enemigos en distintas ocasiones a la plaza de Cádiz, cuando su bombardeo, habiendo desempeñado toda constancia y amor al servicio de las funciones de su empleo y acreditado la pericia militar ha hecho constar por certificaciones del brigadier de la Real Armada don Baltasar Hidalgo de que se halló en la epidemia grande que sufrió la ciudad de Cádiz el año de 1800. Se le nombró director para enseñar la nueva táctica al regimiento suizo Reading. Se halló en la defensa del parque en Madrid el 2 de mayo de 1808. En la batalla de Bailén, ataque de Cataluña de 26 y mismo mes y año en el Hospitales donde hicieron retirar a los enemigos hasta Barcelona; el 6 de diciembre sosteniendo a los que fueron a los que fueron a clavar las baterías del castillo de Mon~uic del14 y 16 del mismo, en cuyo último día salió mandando el segundo batallón de Hibernía hacía Sarria para reforzar aquel punto que estaba atacado. Retirado al puente de Mon~uic atacó desde este punto y se retiró a Tarragona. El16 de febrero de 1809, habiendo sido atacado el regimiento en la posesión de Torre de Barra en que fue preciso retirarse, la sostuvo con las fuerzas de guerrilla haciendo retroceder al enemigo que seguía el ataque tomando la posesión que se peleaba. En 20 de mayo, en la acción de .Casa Serratosa salió herido. El9 de agosto, mandando a los hombres, hizo abandonar a los enemigos todos los puestos avanzados de Santa Coloma. En la acción de Bañolas mandó una columna. En 14 de septiembre, en el ataque de Barcasa, también salió herido. Salió mandando la vanguardia del ejército por orden y comisión del Excelentísimo Superior Comandante General de dicho reino en 24 de febrero de 1810. Sostuvo la plaza de Albentosa desde 1 de marzo hasta el dos del mismo, en que lo atacaron por tres posiciones, teniendo que abandonarla por las crecidas fuerzas del enemigo en cuya acción fue herido por un casco de granada. Se halló en la defensa de la plaza de Valencia, desde el5 de mayo AHSDN, Cancelados, XI/m/I-16, vol. I, ff. 7v-8v. "Hpja de servicio del General Melchor Álvarez (1840)". 245 Luis Alberto Arrioja Díaz Viruell y Carlos Sánchez Silva hasta el15 del mismo mes de 1810, haciendo el servicio que se correspondía en la acción de Murillo en junio de dicho año. Tomó el mando de la Segunda División del ejército de Valencia y se dio ello en la acción de agosto en el Cerboll, donde cogió 200 cabezas de ganado y prisioneros. En la retirada de Venicarlo hasta Alcalá, el 7 del mismo, acción y retirada del18. Fue a Aragón a una expedición importante con la división de su mando y se hizo jefe de la vanguardia y con ella estuvo en el ataque de Oldacona, en septiembre, de donde se retiró enfermo de resultar un golpe en el pecho. El 6 de mayo de 1811, en el ataque de la torre de Codoñol. El 11 y 12 del mismo en el de .. . donde fue herido en la batalla de Puzol. En la de 25 de diciembre en la del sitio de la plaza de Valencia, donde fue hecho prisionero en enero de 1812, habiéndose fugado se presentó al gobierno en octubre del mismo año, quien lo destinó en el regimiento de Saboya en enero de 1813. Se embarcó en Cádiz en 27 de enero de 1813 para este reino, desembarcó en Veracruz en 15 de abril del mismo año. En esta república: Al poco tiempo de su llegada se le nombró jefe político, gobernador, intendente y comandante general de Oaxaca. El16 de agosto de 1818 fue trasladado de dicha comandancia a la de Querétaro reuniendo el mando político. El 9 de marzo de 1820 se relevó de aquel destino, dándole las gracias por su buen desempeño. Durante este tiempo se halló en veinte acciones de guerra. En 2 de septiembre se presentó al ejército trigarante. En el mismo mes fue nombrado Jefe del Estado y Mayor General de dicho ejército. Asistió al sitio y toma de la capital. En 12 de diciembre de 1821 se le concedieron letras de servicio. En 7 de enero de 1822 ascendió a mariscal de campo. En 8 del mismo fue nombrado capitán general propietario y jefe superior político de la provincia de Yucatán. En 3 de marzo de 1823 hizo que el ejército de aquella provincia se adhiriera al Plan de Casa Mata. En 4 de marzo hizo lo propio con la Excelentísima Diputación Provincial que presidía y todas las autoridades. Regresó de Yucatán en junio de 1823. En 22 de julio del mismo año fue nombrado Vocal de la Junta Consultiva para el Repartimiento de Bienes y Adjudicaciones de Tierras a los seis soldados de cada cuerpo que más se hubiesen distinguido conforme prevenía el soberano decreto del Congreso General dado sobre esta materia. En 5 de agosto del mismo año fue nombrado Vocal de la Junta de Generales que debían arreglar el ejército cuyo empleo desempeñó hasta la organización. En 1823 fue nombrado 246 Melchor Alvarez Thomas, comandante general presidente del Supremo Tribunal de la Guerra y Marina, cuyo destino desempeñó hasta 15 de marzo de 1827 en que por las enfermedades pidió cuartel y le fue concedido según consta en el oficio del Excelentísimo Superior Secretario de Guerra de igual fecha. El 27 de octubre de 1823 fue nombrado General de División con la antigüedad de 7 de enero de 1822. En 1 de diciembre de 1824 fue uno de los generales nombrados para la solución de los problemas propuestos por el gobierno sobre la demarcación de esta república. En 1 de agosto de agosto de 1823 fue nombrado por el supremo gobierno Vocal de la Junta de Generales para la formación del Plan General de Defensa de la Nación, el que se presentó concluido en septiembre de dicho año. En 1834 fue nombrado Presidente del Tribunal de Guerra. En 1835 fue nombrado inspector general de las tropas permanentes que desempeñó hasta ellO de octubre de 1836 que fue nombrado comandante general del departamento de México. En 1837 fue electo Ministro de la Suprema Corte Marcial y obtuvo del superior gobierno el permiso que designa la constitución para quedar desempeñando la Comandancia General hasta que por falta de salud renunció a dicha comandancia el 6 de septiembre de 1838. El 7 de dicho mes le fue admitido, dándoles las gracias expresivas por el tiempo que la desempeñó. Fue nombrado por el supremo gobierno, con los señores generales Morón y Orbegoso, para formar un proyecto de armas para el ejército, el que presentado se les dieron las gracias por sus buenos trabajos. Pasó a la Corte Marcial en 11 de diciembre de 1838. Certifico bajo mi palabra de honor que la hoja que antecede es copia de los originales que existen en mi poder. México, 3 de junio de 1840. Melchor Álvarez 247 Luis Alberto Arrioja Díaz Viruell y Carlos Sánchez Silva ANEXO 2 PRONUNCIAMIENTO DEL GENERAL MELCHOR ÁLV AREZ THOMAS A LOS OAXAQUEÑOS2 Amados oaxaqueños, vuestras públicas demostraciones de amor y de fidelidad me tienen sorprendido ... Desde que puse los píes en esta leal provincia, comencé a sentir la dulce complacencia de que la malicia y la fascinación no habían penetrado la constancia de vuestros corazones ... Entre tanto, contad que en mí tenéis no un jefe que los trate con ceño, sino un protector, un amigo, un padre, un amante que os abrigará, os consolará y enjuagará vuestras lagrimas vertidas copiosamente en vuestro dilatado cautiverio ... , pero lejos de vosotros, el espíritu de partido, de división y de rivalidad propio de almas viles: borrad de vuestra memoria las funestas ideas de revolución y de infidencia, y que reine en vuestros generosos pechos el espíritu de paz, de confraternidad, de unión y de benevolencia que caracterizan al hombre de bien, noble y generoso ... · Oaxaca, a 30 de marzo de 1814. Melchor Álvarez AGN, Operaciones de guerra, vol. 2, f. 40. "Pronunciamiento del general Melchor Álvarez a los oaxaqueños (1814)". 248 Melchor Alvarez Thomas, comandante general ANEXO 3 NoTA DE LA AUDIENCIA GOBERNADORA AL VIRREY DE NuEVA EsPAÑA SOBRE EL CORONEL MELCHOR ÁL V AREZ THOMAS 3 Excelentísimo señor: Que dolor debe dar a un jefe militar cuyo conocimiento por constitución ha de ser el honor al verse en el estrecho de justificarse porque si no lo ha perdido todo, la opinión sobre él parece que ya vacila. Pero cuanto dolor mayor deberá tener el coronel Melchor Álvarez, quien no dudando que el buen nombre debe preferirse a la propia existencia, como lo han hecho sus progenitores y entre ellos más recientemente el defensor de Gerona, el excelentísimo señor don Mariano de Álvarez, se ve hoy no en aquella reputación honorífica que antes ha logrado en la superior recomendable justificación de Vuestra Excelencia ... México, agosto de 1814. AGN, Operaciones de guerra, vol. 1, f. 48. "Nota de la audiencia gobernadora acerca del Coronel Melchor Álvarez Thomas (1814)". 249 Luis Alberto Arrioja Díaz Viruell y Carlos Sánchez Silva ANEX04 EXPOSICIÓN DE LOS MILITARES QUE SE MANDÓ INSERTAR A LA LETRA, CON ARREGLO A LO PEDIDO POR LA COMISIÓN, 27 DE OCTUBRE DE 1821• Señor- Los militares que abajo subscriben, con el mayor respeto hacen presente á V. M. que en las sesiones públicas de la Soberana Junta, han oído decir que reclamarían el fuero que les quita el nuevo reglamento de libertad de imprenta. Los exponentes se glorían de haber abrazado el partido de la Independencia por ser justo, y el único medio de que el Imperio goce un gobierno sabio y liberal: y si para el logro de estos objetos ofrecieron sus vidas gustosos en el campo del honor ¿cómo no sacrificarán ahora un fuero apetecible solo á los que delinquen? Antes fueron ciudadanos que militares, y si para la, felicidad de los primeros, es necesario que los segundos pierdan sus prerrogativas, al que ofrece su vida no le es sensible perder lo demás, y nosotros-A V. M. rendidamente pedimos que cuando se trate de la felicidad pública no sea obstáculo nuestro fuero, de que gustosamente nos desprenderemos en su obsequio. México, 27 de Octubre de 1821. Señor.- Luis Quintanar, Nicolás Bravo, Melchor Álvarez, Pedro Zarzosa, José Joaquín Herrera, Joaquín Ramírez y Sesma, Antonio Valero, Tomás Yañez, Juan Bautista Miota, Pablo Unda, Francisco Manuel Hidalgo, Eulogio Villaurrutie, Juan Ceballos, Francisco Palacio de Miranda, Mariano José Giral, Antonio Barreda, José Navarro, Rafael Volla, José Rafael Espinosa, José Haboli, Pedro Miguel Monzon, José Ignacio de Basadre, José María de la Portilla, José María Barberi; Matías González, José María Garmendia, Luis de las Piedras, Ramón Hemández, Santiago de Argeasto. Juan de Dios Arzamendi, Francisco Linarte, José Urbina, Manuel Ceballos, José María Fariña, Mariano Morlet, Gregorio Aran:?, Pablo Mouliaa, Andrés Huete, Juan Domínguez, Fernando Mangino, José Tolsá, Manuel José Robledo de Vejar, Francisco Sánchez, Nicolás Acosta, Juan Francisco Azpíros, Francisco de Aragón, Luis Castrejón, Pablo Ortiz de Rosas. Feliciano Rodríguez, Antonio de Castro, Manuel de Bocarano. José de Porras, José M. Ordóñez, Francisco Tello de Meneses, Alexandro Quijano Ladrón de Guevara, José de la Sierra, Patricio Documentos Históricos Constitucionales de las Fuerzas Armadas, p. 107. 250 Melchor Alvarez Thomas, comandante general Angé, Ramon Rey, José Campillo, José Vicente de Robles, Manuel de Alegre, José Diez, Pedro Alvarado, Manuel Ortega Calderón, Manuel Cirilo Tolsa, Cristóbal Tamaríz, Mariano de·Aranda, José María Torne! y Mendivil, Pedro Peralta, Francisco Moreno, Manuel Arrati, Luciano Azcárate, José Gaviño, José Villaverde de Hurtado, Lúcas Condelle, Francisco Antonio Madejo, José de Saravia y Pastor, Fernando Bello, Gregorio Ortega, Fernando Franca, José Carretero, Joaquín Fernández del Campo, Estanislao Ortega, José Mayoli, Miguel Barragán. Manuel Romero, Manuel Carmona, Manuel Andonaegui, José Joaquín Vera, Juan Tablada, Manuel de Flon, Félix María de Surbarán, José Ramirez de Sesma, Joaquín Illanez, Mariano Arista, Henrique Bosada, José María Fernández, Juan Arago, Manuel de Andrade, Juan José Pruna, Juan Dávis Bradbun, Ramón Morales, Sebastián Betancourt, Macario Patiño, Francisco de Torres, Miguel del Portal, José Ignacio Sobreada, Vicente Domínguez, Juan José Meave, Miguel José Bellido, Luis Díaz de Vivar, Anselmo Rodríguez, Honorato de Riaño, Antonio de Villaurrutia, Mariano de Villaurrutia, José Miguel Barreiro, Pablo Erdozain, José Antonio Mateandi, José Mariano Guerra, Juan de Horbegoso, Juan José de Andrade, Epitacio Sánchez, Jorge Moreno, Manuel de Al faro, Carlos Benavides, Luciano Montes de Oca, Mariano Bargas, Félix Ximénez, Francisco Pardo, Juan de Dios Márquez, Pedro Ortiz, Rafael Rayo, José Manuel Alfaro, Ignacio de la Peña, José María Picazo, Desiderio Coronel, Francisco Barrón, José María Ramírez, Luis Valderas, Joaquín de Miramón, Pánfilo Rodríguez, José María Martínez, Eugenio Torre, José Ángel Guzmán, Tomás Moreno. 251 Luis Alberto Arrioja Díaz Viruell y Carlos Sánchez Silva ANEXO 5 ANOTACIONES ACERCA DEL GENERAL MELCHOR ÁLVAREZ, TOMADAS DEL DIARIO HISTÓRico DE CARLos MARÍA DE BusTAMANTE, 1823.5 México, 24 de junio de 1823 En la Gaceta de hoy número 86, se anuncia que en la isla del Sacrificio ancló la cañonera nacional"Chapala", que transporta al excelentísimo señor capitán general de Mérida, don Melchor Alvarez ... No es poco desengaño el que la fortuna le acaba de dar a este caballero; que coteje este desaire con los favores que locamente le prodigó el año de 1814 cuando fue el árbitro soberano de la provincia de Oaxaca, cuando dispuso de la vida y de la muerte de sus habitantes; cuando los decapitaba por un capricho en la plazuela de San Juan de Dios, al son de un pito y de un ronco tambor; cuando sembró el terror en todos los pueblos inermes o mal defendidos que atacó, etc. Si hubiera sido entonces moderado, Oaxaca fuera ahora su asilo y hallaría ert sus habitantes otros tantos amigos generosos. México, 12 de agosto de 1823 Hoy ha hecho su cuarto de guardia en la puerta del Congreso el brigadier don Melchor Álvarez, capitán general que fue de Yucatán, con su fusil al hombro de soldado raso cívico. Este era aquel jefe terror de Oaxaca en 1814, que corría por la ciudad con bátidores y tiros largos, escoltado de muchos húsares, y estos tan decentes y bien equipados, que después los tomó para su guardia Iturbide. Lo más raro es que habiéndose presentado los diputados de Yucatán contra él, por haber infringido la Constitución en el arresto que hizo del diputado Rivas, hoy oyó de la boca del presidente del Congreso señalar el día de pasado mañana para examinar el expediente y declarar si ha o no lugar a la formación de causa. ¡Qué cambiamientos tan raros y caprichosos tiene la fortuna! Los hombres más grandes son su juguete en las crisis revolucionarias. No se hallan en igual predicamento en España el general Cruz y Liñán, pues habiendo tomado partido con los serviles, al primero-lo ha hecho el rey gobernador de Burgos, y al segundo de Madrid, ¡Ay de ellos si triunfan los liberales! Bustamante, Diario histórico. 252 BIBLIOGRAFÍA GENERAL Archivos AAG ACM ADN AGI AGMS AGN AHCH AHMG AHSDN ASMG BM BNAH MAAS Archivo de la Audiencia de Guadalajara. Guadalajara, Jalisco Archivo de la Casa Morelos. Morelia, Michoacán Archivo de la Defensa Nacional. México, DF Archivo General de Indias. Sevilla, España Archivo General Militar de Segovia. Segovia, España. Archivo General de la Nación. México, DF Archivo Histórico de Chihuahua. Chihuahua, Chihuahua Archivo Histórico Municipal de Guadalajara. Guadalajara, Jalisco Archivo Histórico de la Secretaría de la Defensa Nacional. México, DF Archivo del Sagrario Metropolitano de Guadalajara Biblioteca Mathes de El Colegio de Jalisco. Zapopan, Jalisco Biblioteca Nacional de Antropología e Historia. México, DF Microfilm del Archivo del Arzobispado de Sonora. Hermosillo, Sonora Alamán, Lucas. Historia de Méjico: desde los primeros movimien-tos que prepararon su independencia en el año de 1808 hasta la época presente. 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