semana santa 2008 - La Opinión de Zamora

Director: Francisco García Alonso
SEMANA
SANTA 2008
www.laopiniondezamora.es
La alcaldesa reivindica a la mujer
en la ofrenda ante el Injuriado
Valdeón pide la igualdad para «los
menos visibles a los ojos del hombre» Pág. 3
Jueves, 20 de marzo de 2008 / 1 euro
EL TIEMPO
Prob. Precipitaciones
Hoy DVD sobre la
Pasión por sólo
4 € + periódico
0%
Temperatura máxima
13º
Temperatura mínima
-1º
Honores y
ausencias
■
La bandera y
pebeteros del Silencio
llevaron crespones
negros en señal de
duelo por la muerte
del presidente Payá
NOVENARIO
●
C
Marisol López
Pábilos
inertes
uántas veces acusan a
los zamoranos de ser
como pábilos de vela
inertes que pierden la fuerza
de la llama ante los vientos de
la despoblación, de los retrasos acumulados en la construcción de vías que nos hagan
caminar al mismo ritmo que
tierras vecinas más prósperas.
Los zamoranos escriben desde
hace siglos de emigración páginas individuales de epopeyas de supervivencia en tierras
extrañas que los devuelven a
casa para manifestar con fuerza una tradición secular. Nos
falta firmeza en ese ejercicio
colectivo que tan bien sabemos expresar unos cuantos
días al año para llevar a la provincia a una auténtica revolución, a una resurrección de su
espíritu más luchador.
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Semana Santa
de Zamora
4 €+ el periódico
UN HERMANO DEL SILENCIO INTENTA PRENDER LA VELA DE SU HACHON EN LOS MOMENTOS PREVIOS A LA PROCESION
Jueves, 20 de marzo de 2008
II
ZAMORA
Jueves, 20 de marzo de 2008
SEMANA SANTA
Procesión
2008
FOTOS DAVID RODRIGUEZ
Los hermanos en la Plaza de la Catedral, momentos antes de comenzar la procesión
Luto en rojo
La Cofradía del Silencio recorrió ayer las calles de la capital
recordando a su presidente, Jesús Payá, recientemente fallecido
La procesión, como de costumbre, avanzó deprisa por las calles del
casco antiguo realizando sólo los
fondos que requieren los pesados
pebeteros que avanzan con el ritmo
sordo del tambor y dejan en la calle
un fuerte aroma a incienso.
La impresionante talla del Cristo de las Injurias volvió ayer a dej-
ANDREA RODRIGUEZ
Salió el Silencio, sin su presidente, el fallecido Jesús Payá. Su
lugar, junto a la directiva lo ocupó
su hijo Juan. En el pebetero grande,
el más pesado, su hijo mayor Jesús.
Sus compañeros “bailaron” el gran
incensario en honor del presidente
muerto al comienzo de la procesión.
Y tanto en la bandera como en los
pebeteros, crespones negros en
honor del presidente muerto.
Un comienzo triste para una procesión histórica ya que, por primera vez, una mujer, como alcaldesa,
realizaba el juramento de la ciudad
ante el Cristo de las Injurias. La
alcaldesa, Rosa Valdeón fue sola, de
riguroso luto y falda por debajo de
la rodilla como manda el protocolo
detrás del Crucificado.
A medida que avanzaba la noche
el frío descendía, pero se alejaban
las nubes que permitían ver la luna,
casi llena ya. Momentos antes, por
la Rúa, las carreras de los hermanos
que no llegaban al juramento.
Los clarines anunciaban el
comienzo de la procesión que lentamente, debido al alto número de
hermanos, comenzó a avanzar por
la Plaza Pío XII y la Rúa de los
Notarios.
La alcaldesa, de
negro riguroso, fue la
única representación
oficial en la
procesión
■
El viento no permitió
que ni una sola
de las velas se
mantuviera
encendida
La procesión a su paso por la Rúa
ra muda a la ciudad. Hasta los más
chiquitines, bien aleccionados por
sus mayores procuraban hacer sus
preguntas en tono bajito. En las filas
también había niños, pocos, más
creciditos que acompañaban a sus
padres.
A medida que pasaba el tiempo
el frío y el aire se iban recrudeciendo. Absolutamente todas las velas
de los hermanos iban apagadas.
En cuanto a la estética de la procesión, perfecta. Salvo por el color
rojo apagado de alhunos caperuces
que contrastaba con el rojo fuerte
de las capas.
ZAMORA
III
Jueves, 20 de marzo de 2008
SEMANA SANTA
La ceremonia del Juramento
MARISOL LOPEZ
2008
Poética reivindicativa
Tuvo que hacer frente a los nervios y al intenso frío que acompañó
la tarde del Miércoles Santo. La
alcaldesa, Rosa Valdeón, ha dejado
huella propia en la Pasión de Zamora como máxima autoridad de la
capital. De luto riguroso, con la
medalla del Ayuntamiento destacando sobre el negro de la vestimenta y el pelo recogido, la regidora realizó la ofrenda de la ciudad de
pie, ante la impresionante imagen
del Cristo de las Injurias. Fue un discurso poético en el tono pero en el
que subyacía el contenido reivindicativo. Reivindicación de igualdad
en derechos para las mujeres en el
ámbito semanasantero «que también
queremos caminar a su lado (del
Cristo). Mujeres visibles e iguales a
los ojos de Dios». De esta forma,
Rosa Valdeón expresaba abiertamente su parecer sobre la penúltima
polémica que acompaña a la celebración semanasantera.
Y reivindicación para una Zamora más próspera, donde la emigración nunca esté forzada por la búsqueda de un mejor porvenir al expresar que «solo queremos vivir en esta
tierra» como deseo ante la imagen
del Crucificado.
A medida que el discurso avanzaba, también lo hacía el aplomo en
el discurso en el que no faltó la cita
a la «ciudad del alma» del poeta
Claudio Rodríguez y el recuerdo La alcaldesa, Rosa Valdeón, durante su discurso ante el Cristo de las Injurias
La alcaldesa, Rosa Valdeón, defendió la incorporación de las mujeres en las cofradías:
«También queremos caminar al lado de Cristo, visibles e iguales a los ojos de Dios»
S
ilencio. Un año más,
Cristo de las Injurias,
nuestro silencio... el silencio que lo dice todo.
Aquí estamos, todos los zamoranos, fieles a nuestra tradición,
y en la primera ocasión para una
mujer. Todo igual y todo distinto.
Con lealtad venimos a recordar
nuestro compromiso, el compromiso de todo un pueblo. Pueblo
de mujeres y hombres a los que
Cristo mira y habla. Y habla y
mira, de una forma especial, a los
menos visibles a los ojos del hombre, a los que nosotros no oímos.
Habla y mira a los que sufren a las
víctimas de la violencia a los refugiados a los sin techo a los niños
sin derecho a ser niños a las mujeres, que también, queremos caminar a su lado. Mujeres visibles e
iguales a los ojos de Dios.
¿Alguien ha olvidado que Cristo
tuvo entre sus discípulos mujeres? ¿Alguien cree que Cristo no
amó por igual a hombres y mujeres?
Cristo también lloró. Por eso
hoy estamos todos aquí. Zamora
ciudad, Zamora templo, Zamora
fortaleza y lugar de encuentro,
Zamora que sabe, como nadie,
expresarse con el silencio. Silencio del que ya sólo nos separan
estas palabras, que quieren ser la
conjura de los recuerdos, del respeto, pero también de los sueños...
Hablamos con una única voz
que quiere ser la voz de todos. Y
si no lo fuera, Cristo de las Injurias, perdónanos. Somos débiles.
para el fallecido presidente de la
Cofradía del Silencio, Jesús Payá
Grau, «desde hace pocos días junto
a ti, su “Chiquito”», apelativo, este
último, con el que el semanasantero
desaparecido aludía al Cristo de las
Injurias. Tras finalizar la ofrenda,
Valdeón se arrodilló para jurar al
mismo tiempo que los hermanos del
El obispo alertó a los
fieles de que no
sustituyeran «a Dios
por los ídolos de
barro de esta vida»
FOTO DAVID RODRIGUEZ
Ofrenda del Silencio
Texto íntegro de la ofrenda de la ciudad realizada por la alcaldesa
de Zamora, Rosa Valdeón, durante la ceremonia del Juramento
que precede a la procesión de la tarde del Miércoles Santo
Porque tú te mereces que hablemos de perdón, de perdón y de
esperanza en la humanidad.
Humanidad...¡Qué bella palabra!...
Estoy, en nombre de nuestra
“ciudad del alma” para ofrecer
este silencio, que no es sólo eso...
Es mucho más. Es el silencio más
sonoro que existe, es el silencio
que dice todo, el que aprendemos
a oír desde niños el que une nuestros sentimientos, el de nuestros
padres, nuestras madres, abuelos…El de tantos y tantos que fuimos somos y seremos y que
siguen aquí, con nosotros. La
muerte siempre tan intempestiva,
¡Cuántos jóvenes que no deberían morir! Danos fuerza Señor
para soportar tantas ausencias. Te
has llevado ya a muchos de los
nuestros. Hoy los recordamos en
Jesús, desde hace pocos días junto a ti, su “Chiquito”, el Cristo del
Silencio. Allí nos iremos encontrando todos y... ese día, también
será Miércoles Santo con el cielo
cubierto de rojo y blanco.
Mi voz, nuestra voz, no puede
callar ante la injusticia del hambre, de las guerras. ¡Cuántas
muertes sin sentido! ¡Cuánto
dolor evitable! Por eso debernos
unirnos, con la fuerza de un pue-
blo. Con la fuerza que nos da el
Cristo de los Zamoranos, ¡Qué
gran pueblo!, un pueblo de emigrantes que sabe acoger a otros,
que hace hermanos, hermanos de
“su paso” de vida a quienes vienen de lejos. Pueblo de iguales,
de todas las mujeres y de todos
los hombres de Zamora.
Al oír tu nombre en silencio
nos estremecemos. Entramos en
tu dolor ... dolor que nos duele a
todos, que comprendemos como
sólo los madres sabemos hacerlo.
Dolor del que surge la esperanza,
dolor del amor, del que nacen
todas las familias.
Y también venimos a dar, a dar
lo que una tierra austera y generosa, reconoce. Tierra del pan y
del vino, tierra en la que se ha
ocultado este sol que, ya en retirada, consuma nuestro juramento de silencio...
Por eso te mostramos nuestras
manos... Te pedimos que nos ayudes a saber tenderlas... Por eso
caminamos a tu lado y queremos
que entres en nuestras almas por
eso te damos nuestra oración en
forma de silencio pero esperamos
que nos enseñes a saber amar.
No somos ricos, ni lo pretendemos. Pero sí somos generosos.
Sólo queremos vivir en esta tierra. Tierra de cosecha, tierra de
libertad y compromiso que contigo será más justa, más solidaria.
La mejor. Porque esta es nuestra
búsqueda de la verdad en la vida
Silencio. Antes había escuchado las
palabras del obispo, Gregorio Martínez Sacristán, quien en su alocución, pidió a los fieles que «no sustituyáis a Dios por los ídolos de barro
de esta vida», por ser la actitud «más
arrogante, la aventura más peligrosa» y rogó a Dios la bendición de un
pueblo que pone en pie los Misterios
de la Pasión, Muerte y Resurrección
«con fe, gallardía y orgullo».
y de la vida en la verdad. Al ver
tu rostro, bello y misterioso, nos
preguntamos ¿quién te hizo?
¿quién? Y tu silencio nos susurra.... Dios. ¡Tuvo que ser Dios!.
Cristo de las Injurias, Cristo de
todos, Cristo de los zamoranos,
nos presentamos con humildad y
te pedimos lo único que necesitarnos: en nombre de todas las
mujeres, de todos los hombres,
danos ese amor que siempre has
tenido, con eso, y sólo con eso,
nos sentiremos recompensados.
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IV
ZAMORA
Jueves, 20 de marzo de 2008
SEMANA SANTA
La ceremonia del Juramento
T. SANTOS
Silencio, recogimiento, religiosidad... Y las palabras de la alcaldesa Rosa Valdeón en la ofrenda
de la ciudad, “haciendo” historia.
La de la primera mujer, la primera
mandataria, que realiza el ofrecimiento al Cristo de las Injurias.
Hacía frío, pero seguro que la
munícipe sintió el calor de los
suyos. La comitiva que partió del
Ayuntamiento hacia la Catedral
estaba encabezada por el ex ministro Jaime Mayor Oreja. También
junto a la alcaldesa, arropada por
todos los concejales del equipo de
Gobierno municipal, estaban las
consejeras de la Junta de Castilla
y León Isabel Alonso, responsable
de Administración Autonómica; y
María José Salgueiro, titular de
Cultura y Turismo. Y Bruno Peters,
el presidente de la Europeade, o
Mario Amilivia, el presidente del
Consejo Consultivo de Castilla y
León, con sede en Zamora. «Ya era
hora de que una mujer» estuviera
al frente de «un acto tan significativo», manifestó el leonés camino
de la Seo zamorana.
Que por primera vez una mujer
pronuncie la ofrenda anterior al
juramento del silencio es observado por Mayor Oreja «con naturalidad», como «un signo de nuestro
tiempo». ¿Ha tardado en llegar ese
momento? «Eso es lo que los
zamoranos han querido. La presencia de la mujer se está acelerando en las últimas décadas y
seguro que todo eso ha tardado
2008
«Ya era hora»
Personalidades políticas observan como «un signo del cambio experimentado
por la sociedad» la primera ofrenda del silencio realizada por una mujer
FOTOS DAVID RODRIGUEZ
El ex ministro Mayor Oreja y la consejera de la Junta María José Salgueiro siguen el acto, entre otros cargos políticos del PP
Mayor Oreja recibió
ayer la «terrible
noticia» de la muerte
de Payá y llamó
enseguida a la viuda
■
«Habrá tardado en
pasar, pero ya no
es noticia que una
mujer sea
alcaldesa»
demasiado tiempo». Pero que una
mujer sea alcaldesa «ya no es noticia, gracias a Dios». La presencia
de Mayor Oreja el Miércoles Santo en Zamora es ya habitual, sin
haberse perdido ni una sola procesión del Silencio en los trece últimos años. Ayer llegó acompañado
de toda su familia. El político
nacional, jefe de la Delegación
Española y vicepresidente del grupo popular europeo en la Eurocámara, es fiel a la Semana Santa
zamorana y a la procesión del
Silencio. Pero el que fuera ministro de Interior recibió ayer una
«terrible noticia», de la que nadie
antes le había informado: el reciente fallecimiento de Jesús Payá, el
presidente de la Hermandad del
Santísimo Cristo de las Injurias. Mayor Oreja, hermano mayor de la Hermandad del Cristo de las Injurias, saluda a un directivo de la cofradía
Mayor Oreja no perdió el tiempo
en llamar cuanto antes a la viuda
para mostrarle su solidaridad en
momentos tan dolorosos. «Jesús
era Zamora y su Semana Santa y
la procesión del Silencio».
Ayer, todas las miradas se centraban en la alcaldesa Rosa Valdeón. Cerca de ella, su amiga la consejera Isabel Alonso se mostraba
«emocionada y contenta» por compartir con ella el momento en
medio de un acto presidido por el
sobrecogimiento, en el que «se te
encoge el corazón».
Para María José Salgueiro, la
consejera de Cultura, la ofrenda y
posterior juramento previo a la procesión del Silencio tiene un «significado especial». Que el ofrecimiento de la ciudad lo pronuncie
por vez primera una mujer revela
«el cambio de la sociedad». Salgueiro recordó ayer su participación en el desfile procesional del
Silencio, cuando hace tres años su
hija pudo presumir de que su
madre, en su época de presidenta
del Consultivo, fuera la única
mujer en la procesión del Cristo de
las Injurias, tras haberle cedido el
entonces alcalde, Antonio Vázquez, el bastón de mando.
El actual responsable del Consejo Consultivo, Mario Amilivia,
reconoció «cierta emoción personal» por asistir por primera vez a
un acto tan significativo para los
zamoranos, que este año adquirió
especial interés por escuchar, por
primera vez en la historia de la
Semana Santa, el ofrecimiento del
silencio con voz de mujer.
ZAMORA
V
Jueves, 20 de marzo de 2008
SEMANA SANTA
Cofrades en activo
2008
Miradas desde el Silencio
GERMAN RUIZ MARTIN
Angel Rodríguez y Jesús Luis González, dos testimonios del
cariño por el Cristo de las Injurias
«La devoción al Cristo
de las Injurias te ayuda a
mantener la penitencia»
ANA MARIA CAVERO
Fue allá por el año de 1930
cuando, a la edad de 14 años,
Angel Rodríguez Rodríguez empezó a acompañar al Cristo de las
Injurias en la procesión del Silencio.
El cuenta que fue su padre,
Claudio Rodríguez, uno de los fundadores de la Hermandad del Santísimo Cristo de las Injurias quien,
desde que era un crío, le inculcó la
devoción por el Cristo. Un cariño
que a su vez él ha sabido transmitir a sus hijos y nietos.
En los más de 70 años que lleva formando parte de la cofradía,
Angel Rodríguez puede decir con
orgullo que tan sólo ha faltado a la
cita con el Cristo de su devoción
en dos oportunidades: «una fue durante la guerra civil y la otra por
una enfermedad que me postró en
cama».
El es actualmente el hermano
número 1 de la cofradía del Silencio y se siente muy feliz de poder
seguir procesionando. «Al principio, cuando era más joven, muchas
veces salía descalzo, y ahora aunque esté en una silla de ruedas, le
pido a mi nieto Juan que me lleve
para acompañar al Cristo aunque
sea un momento».
Precisamente es su nieto Juan
Durán quien sostiene que es tanta
la devoción que tiene su abuelo por
el Cristo de las Injurias que no sólo
no ha querido dejar de salir en la
procesión, sino que además a lo
largo del año les pide a sus familiares que lo lleven a la Catedral
para rezar a los pies de la imagen.
«Voy a visitarlo para agradecerle
tantas cosas buenas que a hecho
por mí y también para pedirle
por la familia», puntualiza Angel
Rodríguez.
Jesús Luis González Santander
Hernández, a sus 13 años, es uno
de los cofrades más jóvenes de la
Hermandad del Santísimo Cristo
de las Injurias. «Esta es la segunda vez que procesiono y claro que
estoy un poco nervioso, pero sobre
todo muy contento», comenta.
Jesús Luis González cuenta que
desde que era un crío lo que más
le ha gustado de la Semana Santa
es el Juramento del Silencio: «Me
parece muy impactante, pero también por los caballos y por la imagen del Cristo que es preciosa».
Por todo ello decidió inscribirse en
la cofradía «soy el primero de mi
familia en pertenecer a ella y si
antes le tenía devoción al Cristo,
desde que procesiono mi cariño hacia El es mucho más grande», puntualiza.
Otro de los momentos que más
lo conmueven es cuando el Cristo,
tras ser entregado a la Cofradía
del Santo Entierro hace su entrada
en el Museo de Semana: «Ese mo-
Mayordomo de la Cofradía del Silencio
■
«Es emocionante encontrar a hermanos
que no ves hace mucho tiempo»
ANA MARIA CAVERO
ANGEL
RODRIGUEZ
RODRIGUEZ
Hermano número 1
de la Cofradía del
Silencio
■
«Llevo en la Hermandad 78 años y
sólo he dejado de procesionar en dos
ocasiones»
JESUS LUIS
GONZALEZ
Uno de los
hermanos más
jóvenes que desfila
en el Silencio
■
«El momento del Juramento es
realmente impactante»
«Cuando era joven
salía a procesionar
descalzo, y ahora lo
hago en silla de
ruedas, lo
importante es
desfilar»
mento, con el sonido de los tambores de fondo, impresiona».
A pesar de su juventud, Jesús
Luis González sostiene que no le
resulta difícil honrar el juramento
de guardar silencio durante toda la
procesión: «Es la devoción la que
te ayuda a guardar el silencio. Por
eso pienso que para salir en esta
procesión hay que ser creyente y
no sólo salir porque apetezca. Se
debe tener en cuenta que son casi
tres horas de recorrido y no es nada
fácil mantener el juramento».
El cuenta que la primera vez que
acompañó al Cristo en su recorrido por las calles de la ciudad no le
resultó nada fácil mantenerse en
completo silencio: «Me costó bastante, pero me esforcé al máximo
y la recompensa fue grande. La satisfacción que uno siente al terminar la procesión y no haber roto el
juramento, es algo que no puedo
describir con palabras, es muy
emocionante», explica.
Jesús Luis González está seguro de que su trayectoria dentro de
esta cofradía será muy larga y
apunta que en un futuro le gustaría procesionar como vara, o quizás como cargador, aunque tampoco descarta ocupar un cargo directivo si llegaran a ofrecérselo».
— ¿Cuándo ingresa a formar
parte de la Hermandad del Santísimo Cristo de las Injurias?
— Ingresé al cumplir ocho
años, incluso recuerdo que fue el
mismo año en que hice la Primera Comunión.
— ¿Cómo empezó su vinculación con la cofradía?
— Fue mi hermana, Carmen
quien me inscribió. Además, fue
ella también quien me hizo la primera túnica.
— ¿Qué significa para usted
haber llegado a ser mayordomo?
— Es, sin duda, un deseo largamente anhelado. Llegar a vivir
este momento significa mucho
para mí, es muy emocionante. Le
tengo una enorme devoción al
Cristo de las Injurias, tanto así
que todos los domingos que estoy
en Zamora voy a verlo.
—¿Cuáles momentos son los
más emotivos de la procesión
del Silencio?
— Sin duda el momento del
juramento es el más emotivo.
Además, es emocionante encontrarte con hermanos que tal vez
no has visto durante mucho tiempo, porque a todos los cofrades
nos une un cariño muy especial.
— ¿El recorrido de la procesión, bajo ese juramento de guardar silencio, se hace muy difícil?
— Durante el recorrido de la
procesión no podría mencionar
un momento que sea más significativo que otro. Es muy emotiva
y especial en general. Y es la devoción que uno siente por el Cristo de las Injurias la que te ayuda
a mantener la penitencia.
— ¿Qué hace especial a la
procesión del Silencio?
FOTO JAVIER DE LA FUENTE
Germán Ruiz Martín
— Todo. En realidad todo es perfecto en la cofradía. Como ya dije
los hermanos nos tenemos mucho
cariño y todos en la directiva son
muy trabajadores, están muy pendientes de que todo salga perfecto.
— ¿Ha sido dura la pérdida
de Jesús Payá?
— Así es. Jesús fue muy amigo mío, era muy trabajador y claro que lo vamos a echar de menos.
— ¿Tiene hijos que continúen su tradición en la cofradía del Silencio?
— Tengo un hijo, Germán, al
que le he transmitido el cariño
por el Cristo de las Injurias y por
esta cofradía. Tiene 11 años y está
apuntado pero todavía no ha procesionando.
— ¿Cómo vive usted la Semana Santa?
— Soy muy semanasantero,
disfruto mucho de esta semana de
Pasión, salgo en varias procesiones pero, definitivamente para mí,
la más especial, y a la que más
cariño le tengo es a la del Silencio.
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VI
ZAMORA
Jueves, 20 de marzo de 2008
SEMANA SANTA
Cofrades en activo
2008
Pasión que se hereda
Avito Blanco Hernández desfila por primera vez junto a su
nieto Alberto Blanco Santos en la Hermandad de Penitencia
ANA MARIA CAVERO
Cuando la procesión de las capas pardas salió a recorrer las calles de Zamora por primera vez,
allá por el año de 1956, Avito
Blanco Hernández ya estaba ahí.
«No llegábamos ni a 40 hermanos
y aunque en un principio la gente
no vio esta procesión con buenos
ojos, incluso llegaron a insultarnos o a llamarnos “ahí van los de
Alibabá y sus 40 ladrones”, poco
a poco, la estética que tiene fue
cautivando no sólo a los zamoranos sino también a los que vienen
de fuera», cuenta. El también comenta que fue invitado a formar
parte de esta cofradía por su origen alistano y recuerda que la primera capa con la que procesionó
era una auténtica capa de pastor.
«Nunca, ni una sola vez he dejado
de salir en la procesión. Hubo un
tiempo en que tenía que viajar mucho así que llevaba la capa en el
coche y llegaba con el tiempo justo para cambiarme y salir».
Avito Blanco sostiene que aunque han sido muchos los momentos entrañables que ha vivido en
los más de 50 años que lleva procesionando, sin duda el día más
emocionante fue cuando pudo salir
al lado de su hijo. «El día que nació lo apunté en la cofradía pero
como los estatutos señalaban que
los hijos debían heredar a los padres no me hacía ilusiones de que
saliéramos juntos hasta que se produjo la primera ampliación, él pudo ingresar y se cumplió mi sueño de que los dos cargáramos al
Cristo juntos».
Este año, Avito Blanco ha vuelto a sentir esa emoción pues ha
podido desfilar junto a su nieto
Alberto Blanco Santos, de 18
años. «Mi hijo ya no puede seguir
procesionando por enfermedad y
nos dieron la oportunidad de que
él le deje su lugar a su hijo, que
también fue inscrito en la cofradía
el mismo día que nació, así que
este Miércoles Santo ha sido muy
especial para toda la familia»,
cuenta emocionado.
Alberto Blanco Santos, señala,
por su parte, que es para él un
orgullo poder ocupar el lugar de
su padre en la procesión y, sobre
todo, poder llevar su capa con la
misma pasión. «Desde pequeño he
visto a mi padre vistiéndose para
la procesión, recuerdo que al principio me daba un poco de miedo,
incluso a veces el nos jugaba bromas, a mi hermana y a mí, asustándonos. Luego lo acompañábamos hasta la iglesia. Pero lo más
bonito es que a la mañana siguiente, encontrábamos junto a nuestra
cama uno de los cardos del Cristo», cuenta.
El joven sostiene que en un futuro le gustaría ser cargador,
ANGEL SESMA SUTIL
Mayordomo de la Hermandad de Penitencia
«No me imagino “Las
Capas” con 300
cofrades, se rompería
su estética»
«Para mí es correcto que no se
admitan mujeres en la Cofradía»
■
«Ese día me gusta desfilar
adelante, al lado del bombardino»
■
A. M. C.
AVITO BLANCO HERNANDEZ
ALBERTO BLANCO SANTOS
Abuelo y nieto cofrades de “Las Capas”
■
«Mi deseo es seguir procesionando,
junto al Cristo del Amparo, hasta que
las fuerzas me acompañen»
■
«En un futuro me gustaría llegar a ser
cargador, tal y como lo fueron en su
día mi abuelo y mi padre»
como lo fueron su padre y su
abuelo «porque aunque se que no
es fácil, que se requiere mucho
esfuerzo, especialmente al sacar
al Cristo de la iglesia y al volver-
«Lo más bonito era
encontrar, a la
mañana siguiente,
un cardo del Cristo
junto a nuestra
cama»
lo a meter al templo, es mi deseo
continuar con esa tradición»,
apunta.
Abuelo y nieto coinciden al señalar que el momento que más les
gusta de toda la procesión es cuando se reza el Miserere castellano
mientras la imagen regresa al templo de San Claudio de Olivares.
«A veces, cuando era cargador,
al final del recorrido sentías que
las fuerzas te abandonaban, pero
cuando empezaba el Miserere era
como si una nueva energía te invadiera para poder meter al Cristo en
el templo», comenta Avito Blanco.
Por su parte, Alberto Blanco
sostiene que es «toda la estética de
la procesión la que cautiva, es más
recogida que las demás y eso gusta mucho».
Ambos se confiesan muy devotos del Cristo del Amparo y esperan seguir acompañándolo en su
recorrido por Zamora durante mucho tiempo: «Yo saldré a procesionar hasta que las fuerzas me acompañen, ese es mi deseo», puntualiza Avito Blanco.
— ¿Y cuál es su opinión
sobre la incorporación de las
mujeres?
— Pienso que se ha creado
demasiada polémica alrededor
de este tema. En mi opinión
creo que es perfectamente posible que puedan coexistir tres
tipos de cofradías: de hombres,
de mujeres y mixtas. Para mí es
correcto que en las Capas no
— ¿Desde cuándo forma
parte de la Hermandad de
Penitencia?
— Desde el año 1984, así que
llevo 24 años procesionando con
el Cristo del Amparo.
— ¿Por qué decidió formar
parte de la cofradía?
— Porque la estética de esta
procesión me gusta
muchísimo. Por lo general, no sólo en esta,
sino en la mayoría de
cofradías se ingresa
porque es una tradición
en la familia, pero en
mi caso no ha sido así.
Yo soy el primero de
mi familia que se ha
apuntado.
— ¿Pero espera
que su hijo siga con
esta tradición que
usted ha iniciado?
— Mi hijo tiene
ocho años, y aunque
está apuntado en las
Capas desde que nació,
sé que nunca vamos a
poder desfilar juntos,
porque cuando él pueda entrar seguramente
Angel Sesma Sutil
yo ya no estaré aquí.
— ¿Qué opina de las listas
desfilen mujeres, como no lo
de espera?
— En general no me gustan hacen los hombres en la Solelas listas de espera. Estoy en dad y que hayan otras donde
contra de que en las cofradías en puedan ir tanto hombres como
las que se puede hacer un ingre- mujeres como las Siete Palaso controlado, cada dos o tres bras, por ejemplo.
— ¿Qué significa para
años, los nuevos hermanos tengan que esperar muchos años usted ser mayordomo?
— Me ha hecho mucha ilupara ingresar. Sin embargo, creo
sión. Soy muy semanasantero,
que “Las Capas” es diferente.
pertenezco a varias cofradías pe— ¿Por qué?
— Porque su estética y su ro esta es la primera vez que soy
significado se estropearían con mayordomo así que es un sentiuna masificación. Ahora mismo miento especial.
— ¿Qué es lo que más le
somos 150 cofrades, un número que quizás podría crecer a gusta de la procesión de las
200 pero más no. No me imagi- Capas?
— Tal vez el momento de la
no a “Las Capas” con 300 ó 500
cofrades. Masificarla sería un salida del templo, el recorrido
error, arruinaría toda la belleza junto al río. Además siempre me
que tiene precisamente por ser gusta salir adelante, junto al
bombardino.
tan recogida.
ZAMORA
VII
Jueves, 20 de marzo de 2008
SEMANA SANTA
Procesión
2008
Noche austera
Agustín Lorenzo Gómez extrae las últimas notas del bombardino que acompaña el desfile de la
Hermandad del Santísimo Cristo del Amparo, que buscará un sucesor para el año que viene
Mª JESUS FERNANDEZ
Medianoche en la iglesia parroquial de San Claudio de Olivares.
Recogimiento y austeridad de los
150 miembros de la Hermandad
de Penitencia del Santísimo Cristo del Amparo que se preparan
para comenzar el desfile procesional en un riguroso silencio, sólo
interrumpido por el sonido roto de
las matracas y del cuarteto de
metales que acompaña a la congregación. Sin embargo, es el
inconfundible sonido emitido por
el bombardino el que imprime la
sobriedad propia de este desfile.
Ayer fue tocado por última vez
por Agustín Lorenzo Gómez, que
durante los últimos 40 años se ha
encargado de extraer las graves y
apagadas notas de este peculiar
instrumento. Ahora pasará el relevo al sucesor que a partir del año
que viene seguirá tocando el bombardino en el transcurso del trayecto procesional. La elección del
nuevo intérprete quedó sobre la
mesa en la asamblea que celebró
la Hermandad el pasado mes de
febrero, en la que se acordó que
La imagen del Cristo del Amparo, en un momento del recorrido procesional por el casco histórico zamorano
Siete jóvenes
hermanos reforzaron
la carga del paso
del Cristo
Crucificado
■
El recorrido concluyó
con el tradicional
miserere castellano
a la puerta de San
Claudio de Olivares
será un tribunal compuesto por tres
profesionales de la música ajenos
a la provincia zamorana el que se
encargará de elegir al nuevo bombardino, al que de momento optan
dos candidatos. Agustín Lorenzo
seguirá participando en el desfile
portando el mismo farol de hierro
forjado que el resto de cofrades.
Ayer se mantuvo la tradición iniciada por el veterano bombardino
de entregar tres botones charros
de plata a tres hermanos de la
cofradía, cuya entrega se hace por
orden de lista. Una costumbre que
se espera que conserve su sucesor.
Este es uno de los pocos cambios que experimentará la cofradía, que mantiene la sobriedad y
austeridad que caracteriza a la procesión desde sus inicios, a la que
ayer se sumaron siete nuevos cargadores jóvenes para portar el paso
del Santísimo Cristo del Amparo
Músicos del cuarteto de metales que acompaña a la procesión
Perspectiva del desfile procesional
ante la petición realizada por la
junta directiva para ayudar a los
cargadores existentes.
Uno de los momentos álgidos
de la procesión se vivió en la plaza de San Ildefonso, donde los
hermanos rezaron el Vía Crucis
sin detener su paso. Otro de los
instantes más llamativos tuvo lugar
al término del desfile, a las puertas de la iglesia de San Claudio de
Olivares. Allí, los hermanos del
coro entonaron el miserere caste-
llano, mientras los hermanos de
paso, en cuclillas o casi de rodillas bajan las andas para que el
Crucificado entre en la iglesia de
San Claudio de Olivares.
Las bajas temperaturas registradas durante la noche de ayer no
desanimaron al numeroso público existente a lo largo del desfile
procesional por el casco antiguo
de la ciudad, sobre todo en la
cuesta de Pizarro o el arco de San
Ildefonso.
El Crucificado, a su paso por una de las calles que forman parte del itinerario
VIII
ZAMORA
ZAMORA
SEMANA SANTA
Pequeñas procesiones
IX
Jueves, 20 de marzo de 2008
Jueves, 20 de marzo de 2008
2008
SEMANA SANTA
Pequeñas procesiones
2008
Un adelantado Jueves Santo en el colegio Amor de Dios de Pinilla
Los escolares del Colegio Amor de Dios de Pinilla
representaron un año más la procesión de Jueves
Santo. NIños y niñas iban ataviados como si de
cofrades y damas de la Sección de la Virgen de la
Esperanza se tratara. Como novedad, este año los
pasos llevaban a su respectivo jefe de paso y hasta
la Policía Municipal (todo en pequeño, claro) acompañó el desfile que se realizó por el patio del centro escolar.
Las Siete Palabras, en el
San Vicente de Paúl
En el Corazón de María,
procesión propia
El Vía Crucis,
en la Medalla
Milagrosa
En el Colegio Corazón de María representaron ayer su propia procesión
en la que mezclaron elementos de varias cofradías distintas. Por un lado,
las túnicas negras recordaban a los cofrades de Jesús Nazareno, pero
también llevaban caperuz, creando una nueva túnica a tener en cuenta
por los mayores. Como paso, un crucificado, llevado a hombros, tanto
por niños como por niñas.
El colegio San Vicente de Paúl realizó una completa procesión, con itinerario impreso y todo, de las Siete Palabras. Los
cofraditos de verde y blanco hicieron la ruta por el parque de
San Martín y calles cercanas al centro y cuando llegaron al
colegio rezaron las Siete Palabras.
De morado y blanco se
vistieron ayer las calles
adyacentes al colegio
Medalla Milagrosa. Los
más chiquitines del centro,
animados y aleccionados
por las profesoras de
infantil, representaron la
procesión de la Cofradía
de Jesús del Vía Crucis. El
“espectáculo” congregó
casi a tanta gente como
una procesión de verdad,
aunque en el público había
una mayoría de padres,
madres y abuelos que
miraban con orgullo a sus
retoños.
Jesús Nazareno en la Divina Providencia
Más imágenes en laopiniondezamora.es
Con banda de tambores y todo comenzó en el colegio de
la Divina Providencia la procesión de Jesús Nazareno.
Con unos caperuces muy peculiares, los escolares procesionaron una imagen de la Virgen de la Soledad en
andas. No faltó ni el barandales, y eso que este personaje nunca sale la madrugada del Viernes Santo. Los cofraditos recorrieron, muy en su papel, el patio del colegio
eso sí, portando tulipas con velas en lugar de cruces de
madera. Pero lo de menos es la forma y lo que importa es
la intención. Bien por los profesores que quieren inculcarles desde pequeños el amor por la Semana Santa de
Zamora.
VIII
ZAMORA
ZAMORA
SEMANA SANTA
Pequeñas procesiones
IX
Jueves, 20 de marzo de 2008
Jueves, 20 de marzo de 2008
2008
SEMANA SANTA
Pequeñas procesiones
2008
Un adelantado Jueves Santo en el colegio Amor de Dios de Pinilla
Los escolares del Colegio Amor de Dios de Pinilla
representaron un año más la procesión de Jueves
Santo. NIños y niñas iban ataviados como si de
cofrades y damas de la Sección de la Virgen de la
Esperanza se tratara. Como novedad, este año los
pasos llevaban a su respectivo jefe de paso y hasta
la Policía Municipal (todo en pequeño, claro) acompañó el desfile que se realizó por el patio del centro escolar.
Las Siete Palabras, en el
San Vicente de Paúl
En el Corazón de María,
procesión propia
El Vía Crucis,
en la Medalla
Milagrosa
En el Colegio Corazón de María representaron ayer su propia procesión
en la que mezclaron elementos de varias cofradías distintas. Por un lado,
las túnicas negras recordaban a los cofrades de Jesús Nazareno, pero
también llevaban caperuz, creando una nueva túnica a tener en cuenta
por los mayores. Como paso, un crucificado, llevado a hombros, tanto
por niños como por niñas.
El colegio San Vicente de Paúl realizó una completa procesión, con itinerario impreso y todo, de las Siete Palabras. Los
cofraditos de verde y blanco hicieron la ruta por el parque de
San Martín y calles cercanas al centro y cuando llegaron al
colegio rezaron las Siete Palabras.
De morado y blanco se
vistieron ayer las calles
adyacentes al colegio
Medalla Milagrosa. Los
más chiquitines del centro,
animados y aleccionados
por las profesoras de
infantil, representaron la
procesión de la Cofradía
de Jesús del Vía Crucis. El
“espectáculo” congregó
casi a tanta gente como
una procesión de verdad,
aunque en el público había
una mayoría de padres,
madres y abuelos que
miraban con orgullo a sus
retoños.
Jesús Nazareno en la Divina Providencia
Más imágenes en laopiniondezamora.es
Con banda de tambores y todo comenzó en el colegio de
la Divina Providencia la procesión de Jesús Nazareno.
Con unos caperuces muy peculiares, los escolares procesionaron una imagen de la Virgen de la Soledad en
andas. No faltó ni el barandales, y eso que este personaje nunca sale la madrugada del Viernes Santo. Los cofraditos recorrieron, muy en su papel, el patio del colegio
eso sí, portando tulipas con velas en lugar de cruces de
madera. Pero lo de menos es la forma y lo que importa es
la intención. Bien por los profesores que quieren inculcarles desde pequeños el amor por la Semana Santa de
Zamora.
X
ZAMORA
Jueves, 20 de marzo de 2008
SEMANA SANTA
Liturgia
2008
De comunión, promesas
y corresponsabilidad
«No os conforméis con la mediocridad de hacer
y estar de cualquier forma», asegura el obispo
JESUS HERNANDEZ
«No os conforméis con la mediocridad de hacer, de estar y de pasar
de cualquier forma». Como lo pensó, lo dijo. Llanamente. El tono
grave, pero el matiz humilde. Gregorio Martínez, obispo de Zamora,
presidió ayer la Misa Crismal, en la
Seo, con la asistencia y participación del presbiterio diocesano. Símbolo de la intensa participación en
la misma fe y de la corresponsabilidad entre el prelado y sus clérigos.
«Es una experiencia fundamental
de comunión», añadió, «que nos
hace grandes, que nos renueva por
dentro y por fuera». La homilía
constituyó una reflexión, sin apuntes o escrituras repensadas, sobre el
sacerdocio y los sacramentos. La
eucaristía acogió la consagración
del Santo Crisma (con él se unge a
los que reciben el Bautismo, la Confirmación y el Orden) y la bendición de los óleos (de los catecúmenos y de los enfermos), actos que
vivimos juntos». Lo sabe, lo señaló: el prelado «no puede realizar el
misterio para el que ha sido ungido
sin sus hermanos sacerdotes».
Símbolos. Signos: los sacramentos, «señales por excelencia».
No son cualquier cosa. «Son los
gestos de Cristo por la Humanidad.
Su cuerpo resucitado en medio de
nosotros». Signos. Símbolos: «los
sacerdotes, somos otros Cristo en
medio de este mundo. No sólo
actuamos». Recordó, porque a
veces hay que avivar la memoria,
que tal cosa «forma parte de la teología y de la espiritualidad más
genuina y más tradicional del ser
sacerdotal». Por eso invitó «a recordar, a vivir y a gozar, en esta mañana, para que podáis gozar después,
durante todo el año, cuando apa-
FOTO JAVIER DE LA FUENTE
El obispo de Zamora, a la izquierda, en el momento de la consagración del Santo Crisma
El prelado
diocesano preside
la Misa de la Cena
del Señor
en la Catedral
habían sido precedidos por la renovación de las promesas sacerdotales.
«Toda celebración cristiana está
cargada de signos». El prelado se
encuentra acatarrado, y comenzó a
toser. Más y más. «Esto es cosa de
las procesiones», se disculpó. Distendidamente. Y ya pudo continuar.
«Y la Misa Crismal tiene una simFOTO JAVIER DE LA FUENTE
FOTO JAVIER DE LA FUENTE
bología especial». Porque se oficia Dos religiosas llevan los óleos en ánforas
Juan González, deán de la Catedral (a la izquierda), antes de la lectura del Evangelio
en la Catedral, que «es la madre de
todas las iglesias», y lo hace el pres- rezcan las sombras, los miedos, los monseñor madrileño apuntó: «Esta- referencia: la que viene del Prime- puesta, una llamada, un recuerdo.
biterio «unido a su obispo y éste desánimos, aunque sean única- mos para que, a través nuestro, Dios ro, el Unico. Sólo existe ése. Y no «Para crecer en Cristo, por Cristo y
sea conocido, amado, seguido. Nos puede serlo si no es en comunión para Cristo», justificó. Por lo visto,
unido a aquel». Así, señaló, «es la mente de tejas para abajo».
Los curas no deben olvidar «lo ha elegido pobres, limitados..., pero plena con El». Ya sólo le quedaba es «la gran renovación» a la que se
expresión más fuerte, más cálida,
de todo nuestro ser y de toda nues- que son». Y, también, «gozar lo que nos ha elegido». El «otro Cristo, una cosa: «os invito a la santidad», invita a todos los curas. No sirve el
tra misión como sacerdotes de Dios, son» y «exteriorizarlo de cara al aquí y ahora», expresó con convic- cosa que tiene mucho que ver con conformismo, que no compromete
consagrados enteramente a su ser- pueblo». Sin modificar el tono, el ción, «sólo tiene un camino y una las (buenas) obras. Era una pro- pero tampoco eleva. Humilde,
demandó a los laicos: «acogednos
vicio».
como lo que somos, ayudadnos».
Sólo en ese momento, ni antes ni
Porque de aquéllos «depende, tamdespués del tiempo litúrgico, se
bién, esa experiencia fundamental
celebra y se vive «lo que ahora estamos celebrando y viviendo». Y lo
La fe vivida es servicio, como se manifiesta en de que nuestra entrega no ha sido
Gregorio Martínez Sacristán, obispo diocede «ahora forma parte de la entrasano, preside hoy —a las 17 horas— la eucaris- el Lavatorio. «El amor le lleva a arrodillarse ante el en balde».
La liturgia, que se inició con la
ña misma de nuestro ser». Por eso,
tía de la Cena del Señor Jesucristo, en la Cate- pequeño y el pobre». Porque no había venido a ser
recalcó, «nunca podemos olvidar
dral. Uno de los grandes simbolismos de esa servido, sino a lo contrario. No obstante, «para ser- procesión —partió de la capilla de
este instante: el obispo con su presliturgia es el “Lavatorio de los pies”, acción que vir a los pobres hay que hacerse pobre», ha escrito San Ildefonso y se dirigió a la
biterio y el presbiterio con su obisel prelado efectúa a doce creyentes de la dióce- Rafael Prieto. El Nazareno, que «era grande se hace Mayor—, permitió escuchar, en
po». Se trata de «una experiencia
sis. En el día del “Amor fraterno”, la Iglesia pequeño, el que era Señor se hace siervo». El man- algunos momentos, los hermosos
fundamental», renovadora, engranrecuerda que la solidaridad con el prójimo — damiento del amor —grandeza y sacrificio— «es cánticos del “viejo” latín eclesiásdecedora, vivificadora. Porque
enfermo, pobre, atribulado, perseguido...— es señal que distinguirá a sus discípulos», se ha dicho. tico. El obispo, al final, dijo:
«estamos en las raíces profundas de
deber esencial del cristiano. En Cuaresma y en La historia revela la existencia, en algunos momen- «Podéis ir en paz», tan distinto, eso
todo lo que somos, de todo lo que
Pascua, en los días de gozo y también en los de tos, de algunos que han pasado por discípulos sin sí, de aquel “Ite missa est”, que
hacemos». Así, sólo cabe el gozos
sombras. «Que os améis como yo os he amado», acreditar ese don. El que no se entrega, el que no parecía que hablaba de función y
no de celebración.
«por este misterio de comunión que
ayuda, «el que no ama...está muerto».
proclamó El. Fue mandato.
Amor fraterno y “Lavatorio de los pies”
ZAMORA
XI
Jueves, 20 de marzo de 2008
SEMANA SANTA
Opinión
Cambio
2008
La soledad de Beslán
GAUDIO
A
fines de los años sesenta del
pasado siglo la Semana Santa
de Zamora atravesó uno de sus
muchos periodos decadentes.
La manifestación de esta
decadencia en lo externo
la ofrecían unas procesiones sin mucho orden,
un patrimonio imaginero
ajado, y unas filas mermadas de cofrades. Tan
delicada situación se haJOSE-ANDRES cía más evidente en las
CASQUERO
cofradías depositarias de
FERNANDEZ
la secular tradición. Las
causas inmediatas de lo
dicho obedecían al paulatino envejecimiento de sus cofrades, a la testimonial
incorporación de jóvenes, a todas luces
insuficiente para asegurar su continuidad,
así como a la pérdida del celebrado costumbrismo popular, al que contribuyó la
reforma litúrgica del Concilio Vaticano II,
recibida con indisimulada satisfacción
por los entonces gobernantes de la Junta
de Fomento. La construcción del Museo
de Semana Santa coadyuvó asimismo al
propósito, sirviendo de coartada para
asestar un golpe definitivo a la indócil y
bulliciosa celebración popular, toda vez
que al colocar ruedas a la mayoría de los
pasos, la presencia de las procesiones en
la calle se redujo considerablemente, acabándose con ello el “problema” de los
hermanos de paso. Se imponía así el modelo de orden y recogimiento propuesto
en los años duros del nacionalcatolicismo,
aunque la unificación no fue completa al
resistir tenazmente la Cofradía de Jesús
Nazareno - en aquellos años sin gobierno
ni rumbo - a la que no obstante se intentó
reducir por todos los medios sin éxito.
Todo habría de cambiar al ritmo de los
cambios que vivió nuestro país al final de
la dictadura del General Franco. Y lo hizo
paradójicamente a contra corriente de la
secularización de las costumbres que por
entonces experimentó la sociedad española.
Ya con anterioridad algo pareció moverse cuando en 1968 se fundó la Hermandad Penitencial de las Siete Palabras,
si bien la extracción social de sus promotores – jóvenes estudiantes de las clases
medias – no posibilitó una aceptación popular, que llegaría años después auspiciada por la incorporación de la mujer. Más
resolutiva al respecto fue la fundación,
también por jóvenes, de las hermandades
del Espíritu Santo y Buena Muerte, en especial la primera, precisamente por situarse al margen del aparato oficial. Pero
cuando de verdad los cambios se hicieron
palpables fue en los años de la transición
democrática, que propició un nuevo redescubrimiento de la celebración, en el
que la juventud tomó la iniciativa frente a
los sectores que representaban el pasado.
Fue un momento de especial efervescencia, de movilización y participación, de
febril dialéctica en las asambleas, y de
importantes reformas, a las que debe buena parte de lo que es la actual Semana
Santa.
El banderín de enganche de estas reformas basculó principalmente sobre la recuperación de la vieja costumbre de llevar los pasos a hombros, lo que permitió
en poco tiempo fortalecer las cofradías
del Santo Entierro y Vera Cruz. Otros factores que ayudarían a su consolidación
fueron el afianzamiento y extensión de la
identidad local, asumida sin contradicción por el conjunto de la sociedad zamorana.
De esto hace ya un cuarto de siglo, y
los que protagonizamos aquella peculiar
“revolución” ahora se nos señala con el
puntero acusador de “caciques”, al igual
que nosotros hiciéramos con los directivos de antaño. El mundo semanasantero
desde entonces ha dado muchas vueltas,
quizás demasiadas. Los vehementes debates de las asambleas de antaño han sido
sustituidos por el fuego indiscriminado
de las nuevas tecnologías, en cuyos oscuros callejones se agazapan a la caza de su
presa sicarios y adocenados gacetilleros
que ocultan su rostro con el pasamontañas del seudónimo. Son gentes de las que
se ignora todo: desde como piensan, hasta
cuáles son sus creencias, o donde aprendieron esa jerga casposa cuajada de faltas
de ortografía que exhiben sin pudor.
Lo que sí sabemos es que son sumamente piadosos, pues, tras asestarte una
puñalada en la yugular, no tienen reparos
en invocar el amparo de Cristo o su Santa
Madre.
Espero que estos descerebrados –
nuestra particular kale borroka - sigan
chapoteando en la ciénaga, y dejen a los
muchos jóvenes honestos y capaces coger
responsablemente el testigo del cambio
generacional, en el que la mujer por derecho debería participar. Nada ni nadie lo
impedirá, pese a los que tozudamente han
optado por atrincherarse en el cargo.
lga Soskieva: No te conozco, pero te admiro. Veo en
ti, en la serena expresión
de tu dolor, a todas las madres que en el mundo han sido. No te
conozco. Sólo te he visto en una fotografía de portada del ABC, del 3 de
septiembre de 2004, tras la masacre
de Beslán, tu casa en el corazón del
Cáucaso, cuando unos terroristas salvajes y dañinos violentaron la vida
de más de trescientas personas, de las
cuales 186
eran niños.
Uno de ellos el
tuyo, tu pequeño.
Olga Soskieva, Olga casi niña: muchas veces remiro tu foto,
enmarcada en
un recuadro en
una esquina de
mi ordenador,
y siento que
me ajirona la
piel el dolor
contenido, el
sufrimiento
impalpable de
la carne arrancada a tirones
secos, a cuchilladas de metralla y explosivos. Miro tu
foto y me pregunto cómo es posible
que en tus ojos no haya espacio para
la desesperación, aunque aparecieras
un día a los ojos del mundo como la
viva imagen del desconsuelo.
Miro esa foto y la llenas tú, Olga,
madre joven, delgada, morena, vestida de negro, barruntando luto. Los
brazos desnudos y la vista perdida en
el vacío de la muerte. La mano derecha acariciando el rostro en sangre
de tu hijo inerme que reposa en el
suelo, tapado como un difunto hasta
el cuello, muerto anónimo en una
morgue improvisaba de hileras de
cadáveres que alguien tendrá que
identificar, a modo de macabro inventario.
Tu mano derecha, Olga, se posa
serena sobre la frente inerte, gesto
amoroso y maternal de la mujer que
O
acaricia al retoño que ya duerme. Si
no fuera por la sangre que salpica
parte del encuadre conmovedor de
esa fotografía de agencia, se diría que
la instantánea muestra el momento
universal y doméstico que se repite
cada noche en cada cada casa de cada
país y en cada tiempo. Tu mano izquierda, mientras, se te enreda en el
cuello, amago de enredadera, tal vez
para desmadejar la lazada del nudo
de la angustia, tal vez para cerrar el
paso al alma
desgarrada, que
pelea por huir
de tu delgadez,
y rehabilitar con
su hálito la geografía inanimada de tu hijo
muerto. No hay
lágrimas ni tensión en tus rasgos, si acaso un
decaimiento
que parece descrito por la gubia sublime de
un imaginero.
El fotógrafo de
agencia que cubrió la tragedia
de Beslán, en
Osetia del Norte, esculpió esa
imagen y tal vez
sin saberlo levantó un monumento universal a la ternura. Ternura
de madre, fuerza imparable que desde hace milenios hace mover los astros del firmamento.
Veo, Olga, en tu mirada perdida
pendiente del hijo, a otra Madre del
dolor sereno y resignado, a la Soledad afligida, pero entera, que expía
la pérdida de su Hijo por callejas oscuras de Zamora pintadas de tiniebla
en la noche interminable del Sábado
Santo. Veo reunida en tu estampa
maternal a toda la piedad que cabe
en el universo.
No te conozco, Olga Soskieva,
Soledad de Beslán, pero miro a
Nuestra Madre y te veo a ti, sola, doliente, dueña serena de laxitud compungida. Digna, por lo demás, a los
pies del patíbulo, mortaja tus brazos
de tu hijo muerto.
XII
ZAMORA
ZAMORA
SEMANA SANTA
Viejas imágenes
2008
SEMANA SANTA
Viejas imágenes
2008
Cuando en Toro ardió la Pasión
REDACCION
El pasado año se cumplió el 50º
aniversario de un suceso que los toresanos de mayor edad aún recuerdan y que conmocionó a la ciudad
de las Leyes, herida desde entonces
en las entrañas de su esencia semanasantera: el incendio que el 13 de
abril de 1957, Sábado de Dolores,
arrasó la iglesia de Santa María de
Roncesvalles y Santa Catalina, sede de la Cofradía del Dulce Nombre de Jesús Nazareno, Nuestra Señora de las Angustias y Animas de
la Campanilla, y que convirtió en
cenizas la mayoría de las imágenes
y pasos procesionales de la Semana Santa toresana.
El fuego se declaró cerca de las
cuatro de la tarde y de inmediato
las iglesias de la ciudad comenzaron a sonar para alertar del suceso y
llamar a la población a sofocar el
incendio, ya inevitable. Hombres y
mujeres acudieron a la llamada con
mangueras y calderos, hasta que
llegaron a la ciudad bomberos procedentes de Zamora y Valladolid.
Cuentan que el incendio se inició
por la llama de una vela que alcanzó unos paños negros de Cuaresma. Gente hubo que intentó entrar
en el templo por la ventana de la sacristía para intentar salvar, sin éxito, la imagen de Jesús Nazareno.
Al día siguiente de la terrible catástrofe, pese a los ofrecimientos
de algunas cofradías de Zamora y
de la idea inicial de solicitar algunas imágenes a las Madres Mercedarias, se acordó en asamblea salir
en procesión con una cruz de madera y el Ecce-Homo. También se
acordó solicitar una suscripción
popular para la compra de nuevas
imágenes. La procesión de ese
Viernes Santo en Toro, tras el desastre, fue multitudinaria. Al pasar
el desfile frente a las ruinas de
Santa Catalina, muchos hombres
y mujeres de la localidad derramaron lágrimas por los pasos desaparecidos, patrimonio que eran del
sentimiento religioso de Toro y
sus hijos. Las fotografías adjuntas
muestran algunos de los pasos
que se perdieron en aquel trágico
suceso.
XIII
Jueves, 20 de marzo de 2008
Jueves, 20 de marzo de 2008
Los toresanos no
olvidan el trágico
incendio del 13 de
abril de 1957
■
El fuego se inició
en Santa Catalina
al quemar una vela
unos paños
■
Los vecinos
llegaron con
calderos para
sofocar las llamas
LUTO DE RESURRECCION.- El Resucitado también pereció pasto de las llamas
LA MADRE.- La Soledad, que permanece en el corazón semanasantero de los toresanos
SIEMPRE PRESENTE.- El Ecce Homo, rodeado de fieles y cofrades
DE LOS MAS QUERIDOS.- El Nazareno, una de las imágenes toresanas más queridas, que intentaron salvar sin éxito
DE MARFIL.- El Cristo de Marfil, emblema que fue de la Pasión toresana
DEVOCION.- El paso de La Lanzada, que tenía gran devoción en Toro
XII
ZAMORA
ZAMORA
SEMANA SANTA
Viejas imágenes
2008
SEMANA SANTA
Viejas imágenes
2008
Cuando en Toro ardió la Pasión
REDACCION
El pasado año se cumplió el 50º
aniversario de un suceso que los toresanos de mayor edad aún recuerdan y que conmocionó a la ciudad
de las Leyes, herida desde entonces
en las entrañas de su esencia semanasantera: el incendio que el 13 de
abril de 1957, Sábado de Dolores,
arrasó la iglesia de Santa María de
Roncesvalles y Santa Catalina, sede de la Cofradía del Dulce Nombre de Jesús Nazareno, Nuestra Señora de las Angustias y Animas de
la Campanilla, y que convirtió en
cenizas la mayoría de las imágenes
y pasos procesionales de la Semana Santa toresana.
El fuego se declaró cerca de las
cuatro de la tarde y de inmediato
las iglesias de la ciudad comenzaron a sonar para alertar del suceso y
llamar a la población a sofocar el
incendio, ya inevitable. Hombres y
mujeres acudieron a la llamada con
mangueras y calderos, hasta que
llegaron a la ciudad bomberos procedentes de Zamora y Valladolid.
Cuentan que el incendio se inició
por la llama de una vela que alcanzó unos paños negros de Cuaresma. Gente hubo que intentó entrar
en el templo por la ventana de la sacristía para intentar salvar, sin éxito, la imagen de Jesús Nazareno.
Al día siguiente de la terrible catástrofe, pese a los ofrecimientos
de algunas cofradías de Zamora y
de la idea inicial de solicitar algunas imágenes a las Madres Mercedarias, se acordó en asamblea salir
en procesión con una cruz de madera y el Ecce-Homo. También se
acordó solicitar una suscripción
popular para la compra de nuevas
imágenes. La procesión de ese
Viernes Santo en Toro, tras el desastre, fue multitudinaria. Al pasar
el desfile frente a las ruinas de
Santa Catalina, muchos hombres
y mujeres de la localidad derramaron lágrimas por los pasos desaparecidos, patrimonio que eran del
sentimiento religioso de Toro y
sus hijos. Las fotografías adjuntas
muestran algunos de los pasos
que se perdieron en aquel trágico
suceso.
XIII
Jueves, 20 de marzo de 2008
Jueves, 20 de marzo de 2008
Los toresanos no
olvidan el trágico
incendio del 13 de
abril de 1957
■
El fuego se inició
en Santa Catalina
al quemar una vela
unos paños
■
Los vecinos
llegaron con
calderos para
sofocar las llamas
LUTO DE RESURRECCION.- El Resucitado también pereció pasto de las llamas
LA MADRE.- La Soledad, que permanece en el corazón semanasantero de los toresanos
SIEMPRE PRESENTE.- El Ecce Homo, rodeado de fieles y cofrades
DE LOS MAS QUERIDOS.- El Nazareno, una de las imágenes toresanas más queridas, que intentaron salvar sin éxito
DE MARFIL.- El Cristo de Marfil, emblema que fue de la Pasión toresana
DEVOCION.- El paso de La Lanzada, que tenía gran devoción en Toro
XIV
ZAMORA
Jueves, 20 de marzo de 2008
SEMANA SANTA
Reportaje
NATALIA SANCHEZ
Cincel, 200 kilos de chocolate
Valrhona y más de 250 horas de
trabajo de un maestro pastelero
suponen los ingredientes que conforman un nuevo merlú de la ciudad. Los dulces cofrades miden
75 centímetros de alto, pesan 80
kilos cada uno y se exhiben en una
céntrica pastelería de la ciudad.
Con motivo de Pascua, cuando
en otras zonas como Cataluña se
elaboran “las monas”, el artesano,
Isidro Pérez Alvaro, se planteó
elaborar un elemento significativo de la Semana Santa. Este pastelero benaventano, cuarta generación de confiteros, decidió ejecutar una réplica del merlú que
Antonio Pedrero hizo en bronce y
él que ha elaborado «el que es
considerado el mejor chocolate
del mundo tanto por pasteleros
como por cocineros. El chocolate Valrhona con un 77 por ciento
de pureza».
Tras analizar las proporciones
que debía de cumplir sus congregantes, Pérez realizó una caja de
cacao de un metro de altura que,
poco a poco, fue rellenado
mediante múltiples capas de chocolate logradas tras fundirlo, descender su temperatura hasta 29
grados, «para que cristalizara y, a
continuación, elevarlo hasta los
32 grados centígrados». Este fase
de la creación duró diez días, debido a que el pastelero «trabaja a
ratos», testimonia.
Completado el bloque macizo
de 200 kilos de chocolate, el pastelero, cincel en mano, comenzó
a dotar de forma a las dos figuras
que ocuparon cuatro cuadrados
durante el tallado «porque saltaba constante el chocolate», reconoce Pérez Alvaro, quien incide
en que, a su dedicación se sumó
en de «algunos ayudantes en
momentos puntuales».
Paralelamente, y antes de concluir con el brazo del cofrade que
porta la percusión, el artesano rea-
2008
Congregantes muy dulces
El pastelero Isidro Pérez Alvaro realiza un Merlú
de 70 centímetros de altura y 160 kilos de chocolate
FOTO JAVIER DE LA FUENTE
La pareja de congregantes del Merlú de chocolate en un establecimiento de la capital
Las figuras durante el proceso de elaboración
lizó el tambor. El instrumento está
hueco «porque, sino se elevaría el
peso de la figura» y ha sido efectuado a partir de un patrón. «Las
distintas láminas las pegué también con chocolate hasta darle la
forma adecuada y el cilindro
resultante lo situé con cacao atem-
FOTO DAVID RODRIGUEZ
perado», precisa. En cuanto a la
trompeta, el profesional la moldeó a partir de un cono y una bola
de Valrhona. También sus dedos
han surgido los cordones que porta el tambor.
En el momento de abordar el
acabado, Isidro Pérez Alvaro, se
planteó «o pintar con una pistola
en color negro» a los congregantes para que se asemejaran con los
hermanos que desfilan el Viernes
Santo; o bien por un remate que
similar al barro, opción que, finalmente, primó. El efecto lo consiguió «templando el cacao y untándolo ante de que se secara»,
misión en la que empleó dos jornadas.
Una vez finalidad la ejecución
de los hermanos del merlú, quedaba su transporte desde el obrador benaventano. «Lo hicimos en
una furgoneta un día que no hacía
calor. Los envolvimos en plástico
de burbujas», concreta. Luego
situaron las dos piezas en el escaparate de la pastelería que la familia posee en la capital, donde también han ubicado un vídeo que
explica todo el proceso, puesto
que Isidro Pérez Alvaro pretender:
«aproximar el obrador al público,
como ya se está haciendo en la
cocina», y enseguida apostilla:
«estará expuesto hasta después de
Semana Santa».
Isidro Pérez Alvaro, que hace
dos años realizó en chocolate una
réplica de Catedral de Zamora,
indica que la mayor dificultad de
la iniciativa ha residido en «guardar las proporciones». Reconoce
que la elaboración del merlú ha
supuesto una inversión de los
2.000 euros, por lo que «el chocolate lo reutilizaré para la elaboración de otras figuras», entre las
que baraja la posibilidad de hacer
una estatua a escala de Viriato o
quizá se aventure con algún paso.
FOTO JAVIER DE LA FUENTE
Preparativos de Jesús Nazareno
Comida de despedida del bombardino
Responsables de la Cofradía de Jesús Nazareno prepararon ayer las varas y medallones para los celadores así como los tambores de los Merlús se procesionarán
en la madrugada del Viernes Santo. Asimismo, recuerdan a los interesados que
deberán recoger los elementos a las 3.30 horas en la Panera de la Cofradía.
Luis Felipe Delgado, Luis Jaramillo, Francisco Gustavo Cuesta de Reyna y
“Pipo” Labajo acompañaron a Agustín Lorenzo —el que está un poco apartado
de la mesa— en su comida de despedida como bombardino de la Hermandad
Penitencial del Cristo del Amparo.
ZAMORA
XV
Jueves, 20 de marzo de 2008
SEMANA SANTA
Jueves Santo
2008
LO QUE NO HAY QUE PERDERSE
SALIDA EN CABAÑALES
PUENTE DE PIEDRA
SALVE EN LA CATEDRAL
Las damas inician el recorrido
procesional en el convento de las
Dominicas en Cabañales en donde
permanece la talla de Víctor de los
Ríos desde el pasado Martes, cuando
desfiló en el Vía Crucis.
El tránsito de la procesión por el
viaducto supone uno de los
momentos más bellos del
recorrido al poderse contemplar la
zona ribereña y la bella cúpula
bizantina de la Catedral.
El cortejo procesional concluye en
la Catedral, donde la Virgen de la
Esperanza recibe culto en la capilla
de San Nicolás. En el atrio de la
seo las féminas entonarán la salve
en honor de la imagen titular.
Cofradía de Jesús del Vía Crucis. Sección Damas de la Esperanza
Damas durante un itinerario
Las estrellas del manto de la Virgen
La imagen de la Esperanza flanqueada por hermanos
EL PASO
Virgen de la Esperanza
Víctor de los Ríos (1950)
LA HERMANDAD
FUNDACION: 1961
HERMANOS: 1.500 damas y
400 varones
Jóvenes cofrades en un punto del Casco Antiguo
Nace para acompañar a
la Virgen de las Dueñas
a la iglesia de San Andrés
Detalle de las campanas de barandales
DAMAS Y
COFRADES
VESTIMENTA
Ellas visten abrigo negro, zapatos
y medias negras, mantilla y
peineta. Portan una tulipa con la
vela, además de llevar la medalla
de la cofradía. Ellos, túnica y
caperuz de raso blanco, fajín y
capa verde.
La Sección de Damas de la Virgen de la Esperanza hace su primer desfile en la mañana del Jueves Santo de 1961. Filial de la
Cofradía del Vía Crucis surge con
la intención de devolver la Virgen
de Víctor de los Ríos a la iglesia
de San Andrés, pues desde allí
salía la Cofradía del Vía Crucis en
sus inicios, la cual depositó a la
Virgen en el Convento de las
Dominicas Dueñas la noche del
Martes Santo. Desde 1954, la Virgen recibía culto en la Iglesia
Nuestra Señora de Lourdes, de la
cual salió hace unos años para fijar
su sede en la capilla de San Nicolás de la Catedral de Zamora. La
Esperanza viste manto de terciopelo verde con estrellas bordado
por las monjas Marinas, que fue
ampliado y mejorado en 1994.
XVI
ZAMORA
Jueves, 20 de marzo de 2008
SEMANA SANTA
Jueves Santo
2008
LO QUE NO HAY QUE PERDERSE
ESTACION EN LA CATEDRAL
REVERENCIA DE LOS PASOS
RECORRIDO CASCO ANTIGUO
El recorrido procesional hace una
parada de 20 minutos en las
inmediaciones de la Catedral, donde
se interrumpe el recorrido para que
los cofrades puedan descansar y
disfrutar de una breve y distendida
merienda.
El desfile vive uno de sus
momentos culminantes a las
puertas de la Catedral donde los
pasos hacen una reverencia a las
imágenes de la Dolorosa y del
Jesús Nazareno.
Las calles del casco antiguo de la
capital zamorana sirven de marco
incomparable para el desarrollo del
desfile, que comienza a las 16.45
horas desde el Museo de Semana
Santa y se prolonga hasta entrada
la noche.
Cofradía de la Santa Vera Cruz
Hábito de los cofrades
Imagen del Jesús Nazareno
La imagen de la Dolorosa a la entrada de la Catedral ante la mirada de los cofrades
La cofradía más antigua
integra una docena de
pasos procesionales
La Cofradía de la Santa Vera
Cruz, fundada a finales del siglo
XIV, se convierte en la más antigua de la Semana Santa de Zamora y forma parte de los desfiles
que integran un mayor número de
pasos procesionales: un total de
una docena. En la actualidad su
imagen titular es el Nazareno de
la Vera Cruz, talla anónima del
siglo XVII. Junto a él desfilan la
Santa Cruz, el Lavatorio de los
pies, la Santa Cena, la Oración
del Huerto, la Coronación de
Espinas, la Fragelación, La Sentencia, el Prendimiento, el Ecce
Homo, la Dolorosa del Calvario
y el Cristo de la Laguna. Su recorrido comienza y termina desde
el Museo de Semana Santa.
LA HERMANDAD
FUNDACION: Finales del s. XIV
HERMANOS: 1.800
COFRADE
VESTIMENTA
Túnica y caperuz de terciopelo
morado, con cíngulo amarillo y
guantes negros.
Los cofrades: Portan una vara
rematada en una cruz
LOS PASOS
Santa Cena
Higinio Vázquez (1999)
El Prendimiento
Anónimo (siglo XVII)
Santa Cruz
Fernando Mayoral (1991)
La Flagelación
Miguel Torija (1898)
Dolorosa del Calvario
Julio Gómez y José
Fernández (1918)
Varios autores, entre ellos,
Sánchez de la Guerra (1691) Ramón Alvarez
Ecce Homo
Ricardo Segundo (1942)
Gil de Rouza (Siglo XVI)
Cristo de la Laguna
Nuestro Padre Jesús
Nazareno
Rouza y su hijo David
(siglo XVI)
Oración del Huerto
Lavatorio de los pies Coronación de
Espinas
Higinio Vázquez (2001)
La Sentencia
Ramón Núñez (1925)
ZAMORA
XVII
Jueves, 20 de marzo de 2008
SEMANA SANTA
Jueves Santo
2008
LO QUE NO HAY QUE PERDERSE
LA BAJADA DE BALBORRAZ
VISITAS DE EXCEPCION
RETRANSMISION DE COPE
Los sonidos de las esquilas
acompañan al reflejo del Yacente por
la empedrada Balborraz, por donde
los hermanos, con caperuz y túnica
de estameña blanca, acompañan la
talla de Francisco de Fermín, datada
en el siglo XVII
Entre otras autoridades, los
embajadores de EE UU y Portugal,
Eduardo Aguirre y Jose Filipe
Morales Cabral, respectivamente,
presenciarán el Miserere desde el
Palacio de la Encarnación
Un año más, la Cadena Cope
retransmitirá en la medianoche
para toda España el miserere con
la narración del director regional,
Luis Jaramillo. La cadena ofrecerá
otras procesiones de Valladolid y
la salida de la Ronda de León
Penitente Hermandad de Jesús Yacente
Un cofrade arrastra la cruz
Detalle de un farol portado
EL PASO
Jesús Yacente
Francisco Fermín (s. XVII)
LA HERMANDAD
FUNDACION: 1941
HERMANOS: 994
COFRADE
VESTIMENTA
Túnica de estameña blanca, al
igual que el caperuz, con faja
morada. Es obligatorio el uso de
sandalias.
La procesión desfila por la plaza de Viriato momentos antes del canto del Miserere por el coro de la Hermandad del Jesús Yacente
El coro de la cofradía
entona el tradicional
“Miserere” desde 1953
La procesión desfila por primera vez en 1941
desde la antigua iglesia de la Concepción
Parte a las once de la noche de
la iglesia de Santa María La Nueva y, tras un amplio recorrido,
alcanza la plaza de Viriato, donde el coro interpreta el canto del
Miserere. Constituye el acto central, uno de los momentos más
importantes de la Semana Santa
de Zamora desde 1953. Tras la
pieza, a la que acuden numerosos
espectadores tanto zamoranos
como visitantes, el desfile procesional continúa por las Damas
rumbo al templo de partida. Las
esquilas aportan aún mayor sobriedad al itinerario de la procesión, que sale por primera vez a
la calle en el año 1941, desde la
antigua iglesia de la Concepción,
actual Biblioteca Pública.
1-Iglesia de Santa
María la Nueva. 2Corral Pintado. 3-Plaza
Mayor. 4-Balborraz. 5San Juan de las
Monjas. 6- Corredera.
7-Pza. Santo Tomás. 8Pza. Zumacal. 9-Plaza
de la Horta. 10-Pza.
Sta. Lucía. 11-Cuesta
de San Cipriano. 12Doncellas. 13-Damas.
14-Pza. Viriato
13
14
12
11
10
9
XVIII
ZAMORA
Jueves, 20 de marzo de 2008
SEMANA SANTA
Viernes Santo
2008
LO QUE NO HAY QUE PERDERSE
BAILE DEL “CINCO DE COPAS”
ESTACION Y REVERENCIA
MUSEO DE SEMANA SANTA
En el interior de la iglesia de San Juan
y minutos antes del inicio de la
procesión, los cargadores bailan el
paso del Camino del Calvario,
conocido como “Cinco de copas” por
la semejanza en la distribución de las
figuras con el naipe.
En las Tres Cruces la procesión
efectúa un receso de 35 minutos,
se comen las sopas de ajo y al
iniciarse el recorrido todos los
pasos hacen la reverencia a la
Virgen de la Soledad
La despedida de la Soledad en
San Juan, y la entrada del resto de
conjunto al Museo de Semana
Santa. A las puertas del centro los
cargadores redoblan esfuerzos y
bailan los pasos ante cientos de
personas.
Cofradía de Jesús Nazareno
Paso de La Elevación
Cofrades en un desfile
La Virgen de la Soledad en un desfile hacia su templo, San Juan de Puerta Nueva
Nace en 1651,
reemplaza a una
homónima y
procesionan unos
5.000 cofrades
LOS PASOS
La Congregación de Jesús
Nazareno nace en 1651, sustituyendo a una anterior con la misma avocación, con sede en la
iglesia de San Vicente, que nació
en 1610, e iba a adorar la Cruz
de Carne al Convento de San
Benito. Desde el comienzo, se
asienta en San Juan, tenía como
fin el costear los enterramientos
de sus cofrades y familias, y aplicar por ellos misas para la salvación de sus almas. La cofradía, que ronda los 5.000 congregantes, sale de San Juan hacia
la plaza Mayor. Los numerosos
pasos que procesionan regresan
al museo, excepto la Soledad, a
la que se le rinde culto en el templo de salida.
Redención
Jesús Camino del
Calvario o Cinco de
Copas
Autor desconocido y donado en
1802. Algunas de sus tallas
fueron realizadas en 1893 por
Justo Fernández.
La Caída
Ramón Alvarez (1866)
Mariano Benlliure (1931)
Las Tres Marías y San
Juan
Hipólito Pérez Calvo (1971)
La Verónica
Ramón Alvarez (1885)
La Desnudez
José María Garrós (1901)
La Crucifixión
Ramón Alvarez (1884)
La Elevación de la Cruz
Aurelio de la Iglesia (1889)
La Agonía
Juan Ruiz de Zumeta (1604)
Virgen de la Soledad
Ramón Alvarez (1886)
Jesús Nazareno
Antonio Pedrero (1999)
COFRADE
VESTIMENTA
Túnica de laval negro
con caperuz romo,
con cíngulo de
esparto y decenario.
Los hermanos:
Portan una cruz
negra de madera al
hombro
El paso de la Verónica
ZAMORA
XIX
Jueves, 20 de marzo de 2008
SEMANA SANTA
Radiografía de la Pasión
2008
Camino del Calvario
La Santa Cruz
Considerada la mejor talla y el más claro exponente de lo que supone el estilo de las
mesas procesionales en la Semana Santa de Zamora. Es obra de Alfonso Pastor
Cadierno y fue realizada en madera de nogal en 1962. Sigue los gustos renacentistas, con talla muy fina y delicadamente ejecutada. Entre la iconografía de la Pasión
representada, resalta la corona de espinas central.
La Vera Cruz fue la primera cofradía que dio continuidad a la renovación estética
iniciada por el Santo Entierro. En 1918 encarga a Julio Gómez “El Chepa”, la talla
de su paso titular. Si la cruz siguió el estilo neogótico imperante en la época, la mesa
se acerca a posicionamientos más clásicos. Tallado en madera de haya, es el único
grupo que no es una imagen.
MARISOL LOPEZ
Los zamoranos están acostumbrados a hacer de la necesidad virtud. La talla viva en madera no responde exactamente a una intención
expresa de las cofradías: la escasez
de ingresos fue determinante para
que las mesas donde procesionan
los grupos escultóricos no se doraran, aunque existan incrustaciones
de bronce, marfil o plata. Excepciones pueden considerarse el trono del Cristo de las Injurias y el realizado para la Esperanza en la década de los 90 «que no caló» entre los
zamoranos.
La tradición de las mesas talladas arranca también con esa nueva
concepción plástica que nace a partir de 1860 en la Pasión zamorana.
«En épocas anteriores no sabemos
si hubo algún vestigio de mesa
tallada. A partir de la segunda mitad
del siglo XIX, hay mesas que presentan partes talladas y doradas a
imitación de los retablos que contenían las imágenes en el templo»,
afirma el escultor Ricardo Flecha.
La revolución estética la protagonizaría, una vez más, la Cofradía
del Santo Entierro en 1892 cuando
emprende la renovación de su imagen titular y la talla de una nueva
urna. Se tomó un modelo de catálogo de una prestigiosa fábrica de
ornamentos religiosos, la de Maurice Lenain. El modelo era de madera dorada y presenta cristales y
un remate con la figura del Salvador. La directiva, sin embargo,
introduce variaciones y presenta el
dibujo a varios artesanos. Justo Fernández será quien realice el trabajo en madera de nogal, siguiendo
el estilo neogótico del catálogo,
aunque los remates serán más artísticos. La falta de medios descartará el dorado de la urna. Así se introduce el estilo que calará y que se
convierte en otra peculiaridad de la
Semana Santa de Zamora.
En 1918 la Vera Cruz daría un
Singularidad en vías de extinción
La talla en madera viva de las mesas procesionales, característica
de Zamora, se queda sin artesanos por ser un oficio poco valorado
La Urna de
El Entierro
de Cristo
La Urna fue la pionera y la que
dio inicio a la tradición de la
madera viva en los tronos. Fue
tallada en nogal por el artista
zamorano Justo Fernández, tomando como modelo la contenida en el catálogo de la Casa
Maurice Lenain. A partir de
entonces, se impondrá el gusto por la talla frente a las mesas
doradas y policromadas. Costó mil quinientos noventa y
ocho reales que fueron sufragados mediante suscripción
popular. Se estrenó en 1892 y
descansa sobre una mesa realizada por Valentín Vaquero y
Manuel Rivas en 1956.
paso más allá al encargar su imagen titular a Julio Gómez, “El Chepa”. La Santa Cruz es el único grupo procesional que es pura talla en
madera, sin ninguna imagen. A partir de entonces la tendencia se generaliza con excepciones como la
mesa diseñada por Mariano Benlliure para Redención. Tras la Guerra Civil llega el apogeo de las
mesas talladas como recurso para
poder llevar a cabo una renovación
plástica sin que eso suponga un
excesivo coste para el escaso patrimonio de las cofradías.
En esa época funcionan en la
ciudad dos escuelas, tal y como dis-
tingue Ricardo Flecha. «Por un lado
se encuentran los talleres abiertos
en los barrios que circundan al Duero y donde el más importante es el
de Julián Román Alonso, “Alito”.
De este taller salieron las mesas de
La Despedida, la Oración en el
Huerto, La Caída o Las Tres Marías y San Juan, entre otras». La
segunda fue una escuela de profesores de talla en la Universidad
Laboral. Allí destaca la labor de
Alfonso Pastor Cadierno, autor de
la que porta el “Cinco de Copas”.
Manuel Rivas y Angel Zúñiga son
otros representantes de este oficio
que ha ido decayendo en Zamora
hasta quedar en claro peligro de
extinción. Una sola excepción mantiene la tradición, José Antonio
Pérez, que sigue realizando trabajos para la Semana Santa zamorana.
Porque, a pesar de la reivindicación de la madera viva como característica propia, «el oficio de tallista es continuamente vilipendiado»,
opina Flecha. «Se introducen
maderas oscuras que se comen la
visión de las imágenes. Hay grandes problemas de estética en la
Semana Santa que no son resueltos
acertadamente por los asesores
artísticos de las hermandades».
Tampoco existe una conciencia
sobre el valor del trabajo artesano:
«No se pueden cortar mesas y añadir otra talla para ampliarlas y meter
debajo más cargadores. Son reformas que sólo deberían hacer los
propios autores de las mesas. Lo
que se está haciendo, según la Ley
de la Propiedad Intelectual, es un
delito que se sigue cometiendo».
Los precios de las mesas distan
mucho, además, de lo que se pagan
en otras celebraciones de la misma
categoría, como en Sevilla, donde
sí se mantiene con buena salud el
tan noble oficio de tallista, a diferencia de lo que ocurre en Zamora.
XX
COMARCAS
Jueves, 20 de marzo de 2008
SEMANA SANTA
La pasión en la provincia
La Procesión del
traslado de
Pasos y el Jueves
de Cena, hoy en
Villalpando
2008
Silencio y recogimiento
en la noche saucana
Actos previstos para
hoy en la provincia
La cofradía del Santo Ecce-Homo desfiló anoche por la
villa acompañada por numeroso público
BELEN ALONSO
(VILLALPANDO)
A. R. (FUENTESAUCO )
La Procesión del traslado
de Pasos y la del Jueves de
Cena son hoy las protagonistas de la Pasión de Villalpando.
La primera cofradía desfilará por las calles a partir
de las 13.00 horas acompañando a Jesús Nazareno, San
Juan y la Soledad. Los cofrades ataviados con capa castellana, corbata negra y cruz
de madera saldrán de la iglesia de San Pedro, Puerta
Villa, Calle de la Amargura,
plaza de San Nicolás para
terminar en la iglesia de San
Nicolás.
Las cofradías de la Santa
Vera Cruz, La Dolorosa, La
Soledad y el Santo Entierro
protagonizan la Procesión
del Jueves de Cena llevando
en su desfile los pasos de
Jesús Nazareno, La Dolorosa , La Soledad y el Crucificado del Santo Entierro . El
itinerario parte a las 20.30
horas de la iglesia de San
Nicolás para seguir por la
calle de la Amargura, Puerta
Villa, Olleros, plaza de la
Feria, calle Condado, Liceo,
plaza Mayor, Real para concluir de nuevo en la iglesia
de San Nicolás. La villa
cuenta con una importante
imaginería con tallas, como
el Jesús Nazareno, que data
del siglo XVI y “La Dolorosa” perteneciente a la escuela de Juan de Juni.
En la noche de ayer se celebraron en Fuentesaúco dos procesiones que con el paso de los
años han ido ganando fuerza: la
del Santo Ecce-Homo y la del
Silencio.
La hermandad del Ecce-Homo,
procesionó por la Villa acompañando al espectacular busto de
Cristo adornado con gran variedad de flores y con asistencia de
numeroso público. A las doce de
la noche tuvo lugar la del Silencio, presidida por una espléndida
talla del Cristo de la Agonía acompañada por los cofrades del mismo nombre, que congrega a un
numeroso público a las puertas de
la iglesia para ver salir la impresionante imagen del crucificado.
La imaginería de la Semana
Santa en Fuentesaúco es muy rica
tanto si atendemos a la cantidad
de sus pasos como si tenemos en
cuenta su calidad. Un total de diez
pasos desfilan durante estos días
por la villa: La Oración del Huerto, Cristo Flagelado en la Columna, el Ecce-Homo, el Nazareno,
Cristo de la Agonía, la Piedad, la
Dolorosa, el Yacente, Virgen de la
Resurrección y el Resucitado.
El nivel medio de estos pasos
es elevado, pero destacan de
manera sobresaliente la Piedad,
atribuida a al conocido escultor
Montejo. También hay que destacar el Yacente, el Ecce-Homo y
el Cristo de la Agonía. Tallas todas
ellas relacionadas con la esplendorosa escuela barroca de escultura religiosa. En cuanto al Ecce-
Manganeses de la
Lampreana. Cofradía de
Jesús Nazareno. A partir
de las 19.00 horas la hermandad realizará el recorrido tradicional por las
calles de la localidad. La
imagen es obra del escultor Ramón Alvarez. Los
cofrades desfilan con túnica blanca y caperuz morado.
■
Villaralbo. Procesión
del Nazareno. El desfile
parte a las ocho y media
de la tarde. Su imagen
titular es el Nazareno,
además del Crucificado y
la Santa Cruz, a las que
acompañan los hermanos
de una cofradía que ya
cumplió su cuarto de siglo
de vigencia.
■
Morales del Vino. La
procesión del Nazareno
parte a las siete de la
tarde de la iglesia de
Nuestra Señora de la
Asunción para hacer un
pequeño recorrido antes
de retornar a la iglesia.
■
Fermoselle. Procesión
del Nazareno.
■
Alcañices. Procesión de
la Vera Cruz.
■
FOTO A. R.
La cofradía del Ecce-Homo durante su recorrido por las calles de la villa
Homo hay que decir que es un
busto que contiene un expresionismo dramático que se ve reforzado por la particular forma que
tienen los mozos de marcar el
paso a la hora de trasportarlo, por
otra parte es de las pocas imágenes que se transportan a hombros,
ya que el resto son carrozas de
rueda.
Hoy, jueves, se realiza la procesión de la Pasión a partir de
las 18.30 horas con los Nazarenos portando sus pesadas cruces.
Por la noche, a las 23.00 horas,
el vía crucis cantado por los
nazarenos con sus cruces a cuestas discurrirá por las calles del
pueblo rezando y cantando las
estaciones.
■ Carbajales de Alba.
Procesión de la Carrera.
Castronuevo de los
Arcos. Procesión del Salvador.
■
Puebla de Sanabria.
Procesión del Encuentro.
■
■ Villarrín de Campos.
Procesión de la Carrera.
Villardeciervos . Procesión Cristo de las Injurias.
■
Corrales inicia su Pasión con
la procesión de la Cofradía del
Santísimo Cristo Corralino
S. RAMOS (CORRALES)
La Semana Santa adquiere
especial relevancia en la localidad
de Corrales, donde la Cofradía del
Santo Cristo Corralino es la encargada de organizar la procesión de
hoy, que parte a las siete de la tarde de la iglesia de Santa María
Magdalena para seguir por el itinerario oficial como la calle de la
Cruz, José Antonio, La Plaza, la
calle Nueva o el Pual.
Por la noche, a partir de las
diez, la procesión homónima de
la hermandad hace un recorrido
similar por donde marchan los
cofrades ataviados con hábito
monacal de estameña blanca,
acompañando a los distintos pasos
entre los que se encuentran en
Ecce Homo, la Flagelación, el
Huerto de los Olivos, el Yacente
y la imagen de Nuestra Madre de
las Angustias. Unos pasos que
desfilan prácticamente todos con
ruedas debido a la falta de gente
joven para cargar con las andas o
peanas. Mañana, Viernes Santo,
tendrá lugar en la localidad la procesión en honor a Nuestra Madre
de las Angustias, donde decenas
de mujeres enlutadas y portando
velas desfilan, como en otros pueblos de la zona, acompañando a
la Virgen.
FOTO S. RAMOS
El Santo Cristo corralino acompañado por numeroso vecinos
COMARCAS
XXI
Jueves, 20 de marzo de 2008
SEMANA SANTA
Opinión
2008
Bercianos, un duelo íntimo
en medio del
Aliste profundo
L
o íntimo, aquello que se
agarra a las entrañas y dura
siempre porque tizna lo
más profundo con una
substancia que cambia las formas y
genera sentimientos, es lo que hace
al ser humano como es. Cuando llega la vejez y se
acelera el desgaste, lo que suele
perdurar hasta el
final son las obsesiones, los flaxes
CELEDONIO emocionales que
PEREZ
han ido llenando
de nudos el cajón
de la vida. Uno de los recuerdos
que nunca muere y se pega a uno
hasta el final, hasta que la caña
pensante de Pascal se torna nada,
es el momento de la desaparición
de los seres queridos. Nadie olvida
el instante en que se rompe la cabeza de su cordón umbilical, la muerte de sus familiares más allegados.
Esos golpes vitales son los más
íntimos y hasta al más insensible
quedan marcados por su pulsión,
siempre dolorosa. El catolicismo
ha ahormado una liturgia particular
para que el momento de la desaparición de un ser cercano, o sea
cuando se esfuma parte de uno,
porque eso es la muerte de los demás, el doliente no esté solo, esté
unido a la comunidad. Ahí entronca la parafernalia de los funerales,
la manifestación pública de dolor,
para que el sufrimiento se diluya
en muchos, para que sea menor: la
colectividad cristiana como bálsamo.
Pero una cosa son los duelos
públicos y otra los privados, los que
quedan para el interior de cada cual,
los que se sufren en silencio, sin
bastones. Esos que duelen si doler,
los que resecan el cuerpo y lo tornan pesado, como un tronco agrietado que no tiene ni el consuelo del
descanso del sueño. La muerte sin
bálsamo, el sentimiento descarnado, sin medicinas, sin clavos donde
colgar el desarraigo y la desesperanza.
Así veo yo la representación
que los vecinos de Bercianos de
Aliste hacen todos los Viernes Santos de la muerte de Cristo, un entierro sin aristas, descargado de farfolla, puro dolor, intima pulsión de lo
que significa la desaparición de un
ser querido, el más amado para los
cristianos.
Sólo lo he vivido una vez, una
tarde plomiza de abril, que lloró
bendiciones para el campo durante
la mañana y después se abrió entre
Los cofrades de Bercianos procesionan con Cristo Muerto durante la procesión del Santo Entierro el Viernes Santo
nubes dibujadas con óleo, con trazos fuertes, como los que sólo se
perfilan en primavera.
No fue fácil llegar a Bercianos.
Huyendo de la N-122 y buscando el
laberinto del Aliste más profundo,
ese que se pierde en la encrucijada
granítica untada de pizarra que dibuja el Esla y una despoblación
sempiterna, el periodista se perdió
varias veces. La lluvia enredó cru-
❛
❜
Los cofrades
acompañan a Cristo
muerto. El
momento no tiene
más aderezos que
el puro sentir
ces y señales, hasta borrar carteles e
inundar mojones. Sólo la mujeruca
asomada a la vida para ver el espectáculo mágico —e insólito— del
agua recondujo al despistado al
buen camino. El viaje de varias decenas de kilómetros se convirtió en
una aventura de dos horas largas, líquidas y espesas. Mereció la pena
perderse en las entretelas más rurales de Zamora, las que juntan el pasado con el presente sin saltos, la
transición suave con la vaselina que
aporta el estoicismo propio de tierras del interior del interior.
Fue otear el valle donde respira
Bercianos y su historia y abrirse el
cielo, que cambió de tono: del uniforme gris plomizo, al de las formas de las nubes preñadas de espadas resplandecientes, yermas de
agua de lluvia.
Ya estaba el pueblo reunido, los
cofrades del Santo Entierro apiñados junto a la iglesia. Y allí en el
centro, un crucificado de haya gastado por los años, por la atmósfera
ligeramente humedecida del templo de San Mamés. Alguien desclavó sus manos y después sus pies,
recogido con el cariño que presta la
devoción y la transcendencia. Los
hombres, de blanco riguroso, envueltos en sudarios de lino, como
espectros, con las aristas de los
años y la artritis marcadas en la tela
que más pegada está a la muerte, la
mortaja que lucirán en la eternidad.
Este es tu hijo yacente, le muestran
a la Madre que parece que mira, rodeada de mujeres que sienten el
momento, algunas con los ojos humedecidos, otras expectantes ante
la muchedumbre poco respetuosa
que respira flaxes como espadas.
El Crucificado es introducido
en la urna de cristal fijada con madera, seguramente de nogal. El
muerto en parihuelas, transportado
a hombros hasta el Calvario, que así
se llama el lugar del término muni-
cipal hasta donde sube el corteje fúnebre a paso lento, recreándose en
la transcendencia del momento.
La luz que se filtra entre las nubes tiene un color diferente, yo nunca la había visto hasta esa tarde y no
la he vuelto a ver desde entonces.
El centenar de hermanos acompaña
a Cristo muerto. El momento no
tiene más aderezos que el puro sentir. La tragedia por quien ha dejado
de existir. Sus amigos se reúnen en
torno al cadáver e interiorizan su
dolor. Ellos mismos vestidos con el
traje de la última morada.
La comitiva sube hasta el Gólgota. Los sufrientes, que lo viven y
los curiosos, muchos, demasiados
que nos mezclamos entre las mujeres y hombres de la zona, que intentamos, obscenamente, robar el alma de quien vive intensamente el
pasaje.
Son poco más de las cinco. Varios mozos portan los pendones teñidos de luto, de negro y morado,
cofrades amortajados de blanco,
hermanos de capa parda. La fila enfila la tarde y camina por una senda empinada; las mujeres, de negro. El Crucificado y su Madre
son llevados a hombros, avanzando a ritmo cansino pero uniforme.
A mitad del camino, alguien empieza a cantar. Sigue toda la comitiva. Las notas gastadas, prietas,
salen a borbotones de las gargantas. Misericordia, Señor, Misericordia. Los intrusos no sabemos
que decir, los japoneses, que no se
han perdido entre el verde recio
del trigo, disparan sus cámaras a
ritmo vertiginoso. El chisporroteo
mecánico chirría y golpea la
transcendencia del momento. Un
poco de respeto, por Dios. Pero
nadie hace caso. El desfile, ya
cansado, llega al Calvario, frente
al camposanto. La mujeres silabean mecánicamente, rezan por sus
muertos, también por los vivos.
Salud, eso es lo importante. Brotan las Cinco Llagas del Señor.
Los de fuera nos miramos y como
no sabemos qué decir, otra vez los
flaxes. A degüello.
La tarde va ya vencida. El cortejo regresa, ahora ya más rápido.
El Santo Entierro es historia. La
Carrera del Jueves Santo también.
La Soledad espera, con el Stabat
Mater, con estrofas en latín entonadas por los hombres y en castellano por las mujeres.
Bercianos vuelve a difuminarse en un valle que sólo es visible
una semana al año, el resto es olvido. Bercianos vive solo cuando
llega la muerte. Es entonces
cuando resurge, cuando respira.
El fin es el principio, un nacimiento que lleva en su vientre el
final, una vida efímera que dura
días. La metáfora pintiparada del
ámbito rural. Zamora sólo brilla
cuando es sombra, cuando escenifica la muerte y la siente. Como
ahora.
XXII
TORO
Jueves, 20 de marzo de 2008
SEMANA SANTA
Procesión
M. B.
Hacia ayer noche un frío intenso en las calles toresanas, pero ello
no desanimó a cientos de personas,
muchos forasteros ya, a salir y contemplar el bello desfile procesional del Vía Crucis Penitencial que
organiza la Asociación del Santo
Sepulcro y la Soledad. La procesión partió a las once de la noche
de la iglesia del Santo Sepulcro,
sede de la cofradía, a la que regresó el año pasado tras un prolongado y exitoso proceso de restauración del magnífico templo durante el que permaneció cerrado.
Eran numeroso los fieles que a
las puertas de templo aguardaban
con expectación la salida del Cristo de la Expiración que ayer estre-
Cientos de personas
soportan gélidas
temperaturas para
ver uno de los
desfiles más bellos
2008
Devoción y frío en el Vía Crucis Penitencial
Numerosos fieles aguardaron con expectación la salida del Cristo
de la Expiración, que ayer noche estrenó mesa
La Diputación
concede una ayuda
para Santa Catalina
El presidente de la Diputación,
Fernando Martínez Maíllo, se
comprometió ayer a hacer entrega a la Junta Pro Semana Santa
el próximo año de una ayuda
para reparar el pórtico de la iglesia de Santa Catalina, atendiendo así a la petición hecha por el
presidente del colectivo, Angel
García. Lo hizo en el transcurso del acto en el que se inauguró en la iglesia del Santo Sepulcro la nueva mesa del Cristo de
la Expiración, adquirida con
otra ayuda de la institución.
FOTOINFO
■
La Colegiata,
abarrotada de público
para entonar con los
cofrades el rezo de
las Cinco Llagas
naba mesa. El trabajo realizado por
el tallista zamorano José Antonio
Pérez mereció el reconocimiento
de los toresanos, que celebraron
tanto las nuevas dimensiones de las
andas, que han permitido aumentar el número de cargadores, además de dotar de mayor espectacularidad a la imagen, como la decoración , que cuenta con policromía
en algunas zonas.
Tras recorrer las calles más antiguas y pintorescas de la Ciudad de
las Leyes, haciendo las paradas
establecidas y cantando las estaciones del Vía crucis, los cofra-
Actos para hoy
FOTOINFO
Hoy, Jueves Santo, tiene
lugar uno de los actos más
populares de la Semana Santa de Toro, la bendición de
los conqueros o “cagalentejas”. Será a las 12 del mediodía a las puertas de la
iglesia de Santa Catalina,
organizada por la cofradía
de Jesús y Animas. Por la
noche, a las 21.00 horas, en
el barrio de Tagarabuena tendrá lugar la procesión del
Santísimo Cristo de la Vera
Cruz, que partirá de la iglesia de San Juan Bautista.
Un momento del desfile procesional por el centro de la ciudad
des, ataviados con túnica negra y
caperuz blanco con el emblema de
la Cruz de Malta o de los Caballeros de Jerusalén, orden a la que per-
teneció el templo, rodearon la Plaza Mayor, donde, ante una gran
cantidad de público, entonaron el
Miserere. A continuación se diri-
gieron a la Colegiata, donde no
cabía ya un alma y donde cofrades
y fieles unieron sus voces para
entonar el bellísimo y conmovedor
rezo de “Las cinco llagas”. Al finalizar, los toresanos desfilaron ante
la impresionante imagen del Jesús
Yacente.
FOTO M. B.
FOTO M. B.
Las imágenes quedaron dispuestas
Los abades comieron el bacalao
A las siete de la tarde de ayer los miembros de la Junta Directiva de la Cofradía
de Jesús y Animas de la Campanilla se reunían en la iglesia Santa Catalina de Roncesvalles para proceder, con afán y devoción, a limpiar y vestir las imágenes, dejándolas preparadas para procesionar el Viernes Santo.
Los ocho abades en ejercicio de la cofradía del Dulce Nombre de Jesús Nazareno,
Nuestra Señora de las Angustias Soledad y Animas de la Campanilla obsequiaron ayer
tarde a los abades “viejos” con el tradicional bacalao en la sacristía de Santa Catalina, a donde acudieron autoridades municipales y de la Junta Pro Semana Santa.
BENAVENTE
XXIII
Jueves, 20 de marzo de 2008
SEMANA SANTA
Procesión
2008
FOTO CLAUDIO DE LA CAL
El desfile procesional entra en la Plaza de San Juan
Voto de silencio ante el Cristo de la Salud
La procesión estrena itinerario y para en la Plaza Mayor, donde con las luces apagadas
el Coro del Carmen entona el “Nazareno” y el himno de la cofradía
MONICA CORDERO THOMSON
PROGRAMA
La Procesión del Silencio
estrenó ayer itinerario nuevo y
pasó por la Plaza Mayor. Este
fue, precisamente, uno de los
momentos más emotivos. Los
cofrades hicieron una parada. Se
apagaron las luces y el Coro de
la parroquia del Carmen entonó
dos cánticos: el “Nazareno” y el
Himno del Silencio, de la propia cofradía titular de la procesión.
La hermandad luce
su nuevo estandarte
bordado por las
Monjas Pasionistas
de Oviedo
FOTO CLAUDIO DE LA CAL
Varios cofrades, con el paso del Cristo de la Salud al fondo, en la Plaza del Grano
La hermandad también estrenó anoche un nuevo estandarte,
donado por dos hermanos. El
bordado es obra de las Monjas
Pasionistas de Oviedo, mientras
que el varal que lo sujeta es de
Avelino Martínez, un artista que
ya realizó las andas de Cristo
Flagelado y del Cristo de la
Salud, las dos figuras que procesionaron anoche.
Este año la procesión del
Silencio contó con veintisiete
nuevos miembros. Tras el tercer
día de Triduo, celebrado a partir
de las ocho de la tarde de ayer se
procedió al Juramento de Silencio ante el Santísimo Cristo de
la Salud, otro de los momentos
más emocionantes de la noche. Los hermanos reunidos en la iglesia del Carmen antes del inicio de la procesión
FOTO CLAUDIO DE LA CAL
■ A las 21 horas de hoy comienza la Procesión de la Santa
Vera Cruz. Partirá de la Iglesia
de San Juan del Mercado y
recorrerá las Plaza de San
Juan, las calles del Hospital de
San Juan, los Herreros, la
Plaza de la Madera, calle de
Sancti Spiritus, Plaza Juan Carlos I, calle Doctor García
Muñoz, Plaza de Santa María,
calle la Rúa, Corrillo de San
Nicolás, calle Santa Cruz para
finalizar en la Plaza de San
Francisco. En frente del Hospital de la Piedad se cantará una
Salve y se rezará una oración
por los enfermos de la ciudad.
Después comenzó la procesión,
saliendo de la parroquia del Carmen donde se celebró el Triduo,
para ir por la calle Ancha, Corrillo de Renueva, calles de Cervantes, Vera Cruz, Encomienda
para pasar y parar en la Plaza
Mayor y después ir por la calle
de las Carnicerías, Corrillo de
San Nicolás, calle Zamora,
Corrillo de Renueva, calle Ancha
para finalizar en la misma iglesia. Otro de los momentos más
intensos de la noche fue cuando
los cofrades se arrodillaron ante
el Cristo de la Salud.
RECICLEME
SEMANA
Como era en un
SANTA 2008
principio
COLECCION PRIVADA
El barandales de la Vera Cruz
Una imagen de principio de siglo en la que se puede contemplar la procesión de la Vera
Cruz. En primer término el popular barandales, que entonces era toda una institución,
con su gorra de plato y su traje. Junto a él, cofrades, escasos y al fondo, el paso insignia
de una de las cofradías más antiguas de Zamora.