Terapia de grupo cognoscitivo

Anuncio
JLH PSYCHOLOGY
Terapia de grupo cognoscitivo-conductual
autor Jorge Leiva Hernández
jueves, 12 de febrero de 2009
Modificado el sábado, 19 de diciembre de 2009
La Terapia de grupo cognoscitivo-conductual en las Adicciones.Msc. Jorge Leiva Introducción. El término terapia
conductual en la literatura psicológica fue creado por Arnold A. Lazarus, para describir la disciplina que intentaba aplicar
los hallazgos y métodos de la psicología experimental (en especial de las teoría del aprendizaje), a los trastornos en la
conducta humana. Posteriormente la proliferación de los estudios clínicos y experimentales en esta área resultó ser tan
extensa que, en la actualidad, la terapia conductual contemporánea engloba una diversidad de puntos de vista y una
amplia variedad de procedimientos (Franks y colaboradores, 1998; Lazarus y Fay, 1984 a) En 1970, fue importante en la
psicología, la creciente aceptación de que los procesos cognoscitivos pueden representar un papel significativo en la
generación y mantenimiento de los afectos disfóricos y de las conductas disfuncionales, como señalaron por ejemplo,
Lazarus 1971, Mahoney 2002, Meichenbaum 2001. En esta teoria se destacan los efectos recíprocos de la conducta,
cognición y afecto y se evalúan y modifican los patrones de respuesta desadaptativa en cada uno de estos terrenos.
Cuando se utiliza el término "conducta" o "terapia conductual" se hace en el sentido mas amplio que comprende una
metodología y una, combinación de técnicas que tienen un impacto directo en cada uno de estos campos. La aplicación
más completa a la que se hace referencia como “teoría del aprendizaje social” se funda en el concepto de
terapia Multimodal de Lazarus, donde la conducta, afecto, experiencia sensorial, imaginería, cognición, relaciones
interpersonales y procesos biológicos, se evalúan y enfocan en términos terapéuticos de una manera directa y
sistemática. El acrónimo BASIC ID engloba estas siete dimensiones de la personalidad. Psicoterapia de grupo Cognitivo
Conductual en Adicciones. El desarrollo moderno de la terapia conductual, provoco que comenzaran a aparecer los
informes acerca de su aplicación en los contextos de grupo, pareja y familiar al igual que en ambientes diversos como
clínicas, hospitales para Internos y externos y otras Instituciones de salud mental, salones de clase, ambientes laborales,
prisiones y hogares de los pacientes. La aplicación de la terapia conductual a los grupos de pacientes se ha vuelto, de
hecho, casi un área separada de especialización y han aparecido muchos libros acerca de la materia en años recientes
Rose, 2002; Upper y Ross, 2000. El programa de grupo ha tenido importancia y pertinencia particulares para la terapia
conductual debido al papel central de la influencia social en la generación y mantenimiento de respuestas desadaptativas
(por ejemplo las adicciones) y el uso del modelamiento y reforzamiento en su corrección. Existen cuestiones similares en
los grupos de terapia conductual para las adicciones, como en los de otras orientaciones: tamaño de los grupos,
equiparación con respecto a la naturaleza y gravedad del problema (heterogéneos u homogéneos), edad de los
pacientes, abiertos o por tiempo limitado, un sólo líder o colíderes, tratamiento individual concurrente para los miembros
del grupo, cuestiones de confidencialidad y reglas de conducta dentro y fuera del grupo. Debido a la naturaleza a corto
plazo, de la terapia conductual enfocada en el problema la mayoría de los grupos se conducen a intervalos semanales
durante 8 a 12 sesiones de una y media a dos horas de duración, para cada problemática, aunque pueden ser de mayor
durabilidad en los casos de tratamientos de las adicciones. Se utiliza un gran número de grupos con sesión fija o grupos
abiertos para pacientes con problemas múltiples o complejos que requieren trabajo más extenso. Con respecto a otras
políticas, la practica varia de manera amplia. En el grupo "tradicional", que dirige un líder profesional, existe una discusión
inicial, acerca del propósito del grupo, que consiste en promover el alivio de la angustia, aumentar la satisfacción y
compartir la experiencia, información y retroalimentación unos con otros, a fin de lograr estas metas para todos los
miembros del grupo. Es claro que, como en otras orientaciones no se tolera la violencia física y los individuos
obviamente psicóticos o los pacientes que manifiestan conducta destructiva en extremo o grave inestabilidad de afectos,
no se consideran como candidatos adecuados para la terapia de grupo. Se destaca la cuestión de la confidencialidad, en
el sentido de que se espera que los pacientes concuerden con que no habrá revelaciones acerca de otros miembros
del grupo, sin su explícito consentimiento, a pesar de que con frecuencia se recomienda en gran medida la apertura,
siempre y cuando ésta sirva para el propósito de promover la facilidad social y no sea compulsiva y abrumadora para el
receptor. En la terapia conductual de grupo, una persona o personas intentan modificar las conductas desadaptativas de
dos o más individuos no relacionados, mediante la aplicación sistemática de procesos y procedimientos validados en
términos empíricos. Por lo común, se reúnen datos para evaluar el impacto de estos procedimientos sobre los
miembros del grupo. De inicio, los principios y técnicas conductuales que se han desarrollado en ambientes individuales
se aplicaron a los grupos Lazarus 1978, 2001; Pauly Shannon, 1966; mientras que después el grupo en si se consideró
como un contexto útil para modificar la conducta que podía no ocurrir, o que seria difícil de modificar en una relación uno
a uno (Lazarus, 1974; Rose, 2002; Upper y Ross, 1981). En los grupos cognoscitivo-conductuales se da a los miembros
un conjunto de aprendizaje apropiado a un modelo diádico de cambio conductual y se emplea el contexto grupal para
aumentar al máximo el desarrollo de habilidades interpersonales adaptativas. Se muestrean las conductas de manera
mas verídica que en la situación uno a uno y los miembros del grupo aprenden y practican nuevas conductas en un
contexto de apoyo que proporciona la retroalimentación y reforzamiento apropiados. El programa de grupo conductual
proporciona un campo inmediato para el cambio y la practica. Goldstein y colaboradores 2001, identificaron una serie de
37 habilidades específicas y mostraron que no son conductas aisladas sino que forman la base de un repertorio
completo de respuestas necesarias para enfrentar muchas de las demandas cotidianas. Así diversos procedimientos de
entrenamiento en habilidades son una parte integral de la terapia conductual de grupo. Como en cualquier otra forma de
terapia, existe un proceso de evaluación, otro de intervención y uno más de valoración. A la mayoría de los pacientes se les
entrevista antes de la primera sesión de grupo. En algunos casos después de una discusión con el terapeuta que hace la
http://www.jlh-psychology.com
Motorizado por Joomla!
Generado: 6 December, 2010, 20:39
JLH PSYCHOLOGY
referencia y un breve contacto telefónico con el paciente, se arregla la admisión al grupo. En la primera reunión grupal se
pide a los pacientes que mencionen el problema qué presentan y sus metas con respecto a éste. Se exploran otras
áreas vitales al igual que los patrones desadaptativos o las deficiencias en habilidades que puedan interferir con la
satisfacción de los pacientes. Se revisan las medidas utilizadas antes por el paciente para enfrentar el problema, ya sea
dentro o fuera de terapia, sean exitosas o no. Se identifican las conductas blanco y se caracterizan con respecto a
frecuencia, intensidad, duración y contexto. Una parte esencial del proceso de evaluación conductual es a determinación de
estímulos provocadores de respuestas conductuales (afectivas, cognoscitivas) y las consecuencias de tales respuestas.
Los estímulos provocadores pueden ser eventos ambientales externos o experiencias internas (cognoscitivas o
sensoriales). El elemento más esencial en el aprendizaje de una habilidad es la práctica de las respuestas
adaptativas, facilitadoras. Es de la mayor relevancia para los pacientes en el enfoque conductual, brindar una gran
cantidad de apoyo lo mismo que reacciones espontáneas y retroalimentación correctiva. El grupo es un laboratorio para
someter a prueba nuevas conductas en un contexto de apoyo. Otros miembros del grupo proporcionan el reforzamiento
para alentar la práctica en sí y también apoyan las aproximaciones sucesivas para obtener el nivel de destreza
deseado. Se desarrollan y se llevan a cabo estrategias para promover la generalización de resultados en contextos
externos a la terapia y el mantenimiento de la mejoría terapéutica a través del tiempo, destacan Lazarus y Fay, 1984 b.
Las estrategias de prevención de recaídas, plantea Marlatt 1985, se integran a esta terapia. Implicar a otras personas
significativas en el ambiente del paciente, tener contacto telefónico intermitente con el terapeuta y las sesiones grupales
de seguimiento quizás en el primer y sexto mes después de la "terminación" pueden contribuir a tal fin. Más que nada,
se desea evitar una de 1as mayores trampas de la terapia do grupo, o sea aquella de desarrollar un grupo de individuos,
que tan sólo son buenos en terapia de grupo. Postulados básicos del Modelo terapéutico cognitivo conductual. La terapia
conductual depende de un conjunto de aseveraciones fundamentales acerca de la naturaleza de los seres humanos y
sus problemas. Entre ellas se encuentran las siguientes (Lazarus y Fay, 1984 a): 1- Los trastornos psicológicos
representan cierta combinación de determinantes biológicos y factores de aprendizaje. Ejemplos de los últimos serian el
aprendizaje por ensayo y error y el aprendizaje vicario. 2- La conducta anormal es un producto de los factores de
aprendizaje, se adquiere y mantiene de acuerdo con los mismos principios que la conducta normal. 3- Las disfunciones
atribuibles al aprendizaje deficiente o Inadecuado, e incluso las muchas perturbaciones con fuertes entradas de
información biológica pueden aliviarse mediante la aplicación de técnicas derivadas de los principios del aprendizaje. El
campo de trabajo incluido bajo el término "medicina conductual" atiende gran variedad de problemas médicos que
pueden mejorarse en parte o de manera sustancial o que pueden prevenirse (reducción de riesgo) mediante métodos
cognoscitivo-conductuales. La adherencia del paciente a los regímenes terapéuticos prescritos es uno de los principales
focos de atención en medicina conductual. 4- Los problemas presentados se consideran como problemas reales y se
investigan por mérito propio, más que considerarlos como síntomas de algún problema o proceso subyacente. 5- El
foco de atención se centra en el presente más que en los antecedentes remotos o en los procesos inconscientes. Se
enfatizan los antecedentes inmediatos los factores actuales que mantienen la conducta. Esto no contradice de ninguna
manera la importancia de las primeras experiencias vitales o de la operación de los procesos mentales externos a la
conciencia. El punto de vista conductual simplemente sostiene que para tener éxito en el tratamiento de la mayoría de
los problemas psicológicos, es innecesaria la exploración extensa dentro de estas áreas y cuestiona la necesidad o
deseabilidad de invocar modelos o intervenciones explicatorias de naturaleza psicodinamica. 6- La evaluación implica la
investigación de todas las áreas de funcionamiento conductual, cognoscitivo e interpersonal para descubrir problemas o
deficiencias que no se presentan de manera inmediata. 7- Se prefieren las descripciones conductuales sencillas a las
etiquetas diagnósticas. Así, en lugar (o ademas) de referirse a los pacientes como "limites", se especificarla una descripción
precisa de las respuestas conductuales, cognoscitivas y afectivas del individuo y de los contextos en los que tales
respuestas se manifiestan. 8- A pesar de que se reconoce que en cierto grado la terapia implica la transmisión de valores,
los terapeutas conductuales tienden a minimizar las afirmaciones de valor. En lugar, de que se etiquete a la conducta en
si como buena o mala o sana o enferma, lo que se especifica son sus consecuencias. 9- El terapeuta es activo e
interactivo y con frecuencia asume el rol de un maestro y sirve como modelo. 10- Se considera que el locus de
resistencia se encuentra de manera principal, en la terapia y en el terapeuta, más que en el paciente. Esto no tiene la
intención de ser una afirmación dogmática sino, tan solo, una manera de colocar toda la posible responsabilidad de
encontrar las intervenciones apropiadas en el terapeuta, en lugar de atribuir el fracaso al paciente y a su patología. 11Se enfatiza el automanejo. Se enseñan a los pacientes técnicas específicas de automanejo de modo que se aumente al
máximo la probabilidad, de funcionamiento autónomo en las áreas problema y se reduzca la dependencia en el
terapeuta. La asignación de tareas es una parte esencial del enfoque conductual señalan Shelton y Ackerman 1984. 12Es deseable, y con frecuencia necesaria, la participación de la red social del paciente. Esto permite que el terapeuta
estructure un ambiente óptimo de reforzamiento y resuelva los conflictos interpersonales a través de enfoques como el
entrenamiento en comunicación y la formulación de contratos por ejemplo, Gurney, 1977 y Stuart, 1990. Técnicas y
procedimientos. Es muy extenso y ventajoso el repertorio de la terapia conductual, en general muchas de las técnicas
específicas pueden agruparse de acuerdo con el modelo de aprendizaje del cual se derivan. Los clínicos conductuales
trabajan dentro de un marco conceptual sometible a prueba, emplean tratamientos que están abiertos a la medición
objetiva, aplican criterios de resultado que pueden validarse y enfatizan la necesidad de evaluar la efectividad de
métodos específicos aplicados a problemas particulares. La terapia cognoscitiva tiene que ver de manera específica con
la identificación y reto de las creencias, valores, percepciones, atribuciones y autoconversación desadaptativos. Esto lo
informan los pacientes o se infieren a partir de sus declaraciones verbales o de otro tipo de conducta abierta. Con
frecuencia es útil la reestructuración semántica. Esta incluye sugerir formas alternativas para referirse o expresar
sentimientos o cogniciones. Los terapeutas conductuales están interesados en los mecanismos mediante los cuales se
adquieren y mantienen los patrones disfuncionales, lo mismo que en las maneras mas facilitadoras de desaprender
http://www.jlh-psychology.com
Motorizado por Joomla!
Generado: 6 December, 2010, 20:39
JLH PSYCHOLOGY
respuestas desadaptativas y adquirir respuestas mas adaptativas. Para lograr esto se postulan diversos mecanismos
para explicar la conducta aprendida. Uno de estos mecanismos es el “modelo de condicionamiento
clásico” (Pavloviano) donde los estímulos intrínsecamente neutros, por ejemplo palabras se asocian
temporalmente con estímulos intrínsecamente nocivos (castigo físico o gritos) y entonces adquieren la capacidad de
producir por si mismos respuestas desadaptativas como temor o respuestas depresivas. Entonces, con frecuencia estas
respuestas se perpetúan por otros mecanismos. Este modelo de condicionamiento clásico ha generado varias tónicas,
de las cuales la mas conocida y estudiada es la “desensibilización sistemática". La proposición fundamental del
“modelo de condicionamiento operante” (Skinneriano) es que la conducta es una función de sus
consecuencias. La conducta a la que le siguen de manera cercana consecuencias placenteras tendera a fortalecerse y
aquella a la que le siguen consecuencias aversivas, o no tiene consecuencias, se atenuara o eliminara. El organismo
actúa y el ambiente responde de una manera que influye la conducta futura. La aplicación sistemática de tales
condiciones de consecuencia para modificar la conducta se conoce como Manejo de contingencias. El
“aprendizaje vicario u observacional o aprendizaje de ensayo cero” utiliza la técnica del modelamiento,
implica la adquisición o inhibición de una respuesta, mediante observar a otros realizar o fracasar al llevar a cabo ciertas
conductas y observar las consecuencias que tiene para esa persona. Dependiendo de si la conducta es deseada y si las
consecuencias para el modelo son positivas o negativas. Se tiende a facilitar el aprendizaje cuando el "modelo" es
alguien a quien el paciente (sujeto) admira y con el que comparte ciertas características raza, sexo, edad, etcétera. Con
frecuencia, la desensibilización, el reforzamiento positivo y el modelamiento se combinan para producir cambios
terapéuticos poderosos. Una de las técnicas más importantes, que tiene una función de evaluación lo mismo que una
terapéutica es “la autovigilancia”. La observación de la propia conducta (desadaptativa y adaptativa) y el
registro de estás observaciones constituyen una de las piedras angulares del enfoque conductual. Esta tónica
proporciona información mas precisa acerca dé la frecuencia, intensidad y duración de un problema, que lo que lo hacen
las impresiones subjetivas. En general, es más efectivo vigilar los esfuerzos terapéuticos que la conducta
disfuncional. El “reforzamiento Diferencial” se refiere a la aplicación de consecuencias positivas para la
conducta deseada y la falta de atención para la conducta desadaptativa o no deseada. Los procedimientos de castigo se
utilizan con relativamente poca frecuencia, excepto como herramienta de automanejo. El autoreforzamiento como por
ejemplo, la autoalabanza, comprar algo deseado o realizar de modo deliberado una actividad placentera no
programada, se utiliza por lo común al ocurrir mejoras en el funcionamiento adaptativo o para los pasos terapéuticos
que se llevan a cabo, como resistir los impulsos destructivos de consumir.
Una de l
manejo de contingencias es la “Formulación de Contratos”.Aquí las técnicas operantes se incorporan en un
contrato formal en el que se asocia la realización de una conducta especificada a un cierto nivel con una consecuencia
específica positiva o negativa. En terapia de grupo con personas que pueden no tener una alta motivación, podría
utilizarse el “depósito reembolsable”. La “economia de fichas” se aplica en general en
sistemas institucionales cerrados y en familias, donde se dan fichas a los pacientes, niños o internos, cuando realizan
conductas adaptativas. La terapia grupal cognoscitivo conductual puede discutirse en término de las habilidades que se
enseñan, los problemas que se atienden, o las técnicas conductuales específicas que se utilizan. Existen diversas
habilidades críticas que se enseñan a grupos de personas, quienes pueden tener o no disfunciones o impedimentos
psiquiátricos psicológicos, pero que sufren de las consecuencias de deficiencias en habilidades y que pueden
experimentar un incremento en bienestar y gratificación a partir de la adquisición de tales habilidades. Ejemplos de
habilidades que pueden impartirse en un contexto cognitivo conductual de terapia grupal son: habilidades en la
búsqueda de empleo, de negociación, de cuidado paterno y de comunicación, asertivas, de autocontrol, manejo de
conductas, etc. Algunas de estas habilidades se incluyen en parte en otras y existe un claro grado de traslape. Estas
habilidades son de amplia aplicación y su adquisición puede ser útil en gran variedad de estados psiquiátricos, en
particular en los trastornos depresivos y por ansiedad. El “entrenamiento en Asertividad” se utiliza como un
ejemplo de un conjunto de habilidades que tiene pertinencia universal para el funcionamiento adaptativo de los seres
humanos en los contextos sociales. Es posible que sea el conjunto de habilidades más importantes para promover la
satisfacción de necesidades. La asertividad abarca una variedad de habilidades que conducen a la conducta a pedir lo
que uno desea, resistir las peticiones inoportunas o la explotación de parte de otros, iniciar conversaciones y relaciones y
realizar estas conductas sin vergüenza, culpa o ansiedad indebida y sin comprometer los sentimientos de otras personas
o actuar de manera aprovechada. En un grupo de “habilidades para conservación de citas” se define el
objetivo conductual y el criterio de éxito. Una variedad de Cogniciones disfuncionales pueden interferir con la conducta
de búsqueda de citas. Las dos prescripciones básicas son la imaginería de enfrentamiento y la implosión por imaginería.
Se utilizan varios procedimientos de imaginería ademas de poner en duda las cogniciones irracionales y disfuncionales
según Lazarus 1994. Se utiliza tambien una técnica de auto vigilancia que se describió hace muchos años en un
manual de autoayuda de Lazarus y Fay, 1992. Para la ansiedad, asociada con las citas anticipadas, se recomiendan
ejercicios de relajación. Se prescribe un ejercicio paradójico, de Fay 1988. El tratamiento cognoscitivo-conductual de los
“trastornos por ansiedad” ha estado sujeto a una enorme actividad de investigación durante más de 20
años (Barlow, 1998; Beck y Emery, 1995). El núcleo de este enfoque implica el entrenamiento en relajación, meditación y
auto hipnosis, la exposición a los estímulos temidos, (en vivo, a través de imaginería, o ambas, ya sea en grados o
masiva), la Reestructuración cognoscitiva (identificación y reto de las cogniciones irracionales, autoderrotantes, y la
sustitución por conversación benigna, no catastrófica, de las afirmaciones internas generadoras de ansiedad), Prevención de
respuestas (bloqueo de la conducta de evitación), Entrenamiento en asertividad, solución de problemas y Reforzamiento
positivo y No reforzamiento para respuestas adaptativas y desadaptativas, respectivamente. La piedra angular del
manejo conductual de los trastornos por ansiedad comprende una variedad de técnicas diseñadas para amortiguar la
excitación del sistema nervioso central El enfoque cognoscitivo-conductual de los trastornos del estado de animo ha
http://www.jlh-psychology.com
Motorizado por Joomla!
Generado: 6 December, 2010, 20:39
JLH PSYCHOLOGY
aplicado de manera amplia a los pacientes con depresión bipolar. El entrenamiento en asertividad es un componente
esencial. Se expresa con frecuencia en la depresión un reforzamiento positivo insuficiente. Se pide a los pacientes que
identifiquen cualidades valiosas en ellos mismos y se les asignan tareas que implican la recitación y ejercitación de
cualidades positivas escritas en una lista que ha compuesto el grupo. Las formulaciones cognoscitivo-conductuales
acerca de la etnología y tratamiento de la depresión, mas conocidas se reflejan en el trabajo de Beck y Lewinsohn. Se
alienta a los pacientes a compartir estas técnicas con los miembros de la familia y con amigos y a intentar que ellos les
brinden ayuda para evitar el reforzamiento de la "conducta depresiva". En la mayoría de los grupos se expone a los
pacientes al “concepto multimodal” de la BASIC ID, al que se hizo referencia en Lazarus, 2000. A pesar de
qué en términos generales, no se prescriben medicamentos en los grupos cognoscitivo-conductuales, a las personas
con ansiedad, depresión u otra patología grave, la cual les impide adecuado contacto social, se les informa que puede ser
de gran beneficio el uso de algún medicamento durante un tiempo hasta que se pueda practicar de manera suficiente la
habilidad requerida. Desventajas principales de la terapia cognitiva conductual. - A la mayoría de los grupos que utilizan
técnicas de terapia conductual los conducen legos más que terapeutas profesionales. Los más populares entre estos
son los que atienden problemas de obesidad, tabaquismo, alcoholismo, adicción y abusos de sustancias, juego
compulsivo. - Debido a la naturaleza didáctica de gran parte de la terapia conductual, con frecuencia existe un límite
oscuro entre las clases educativa y la terapia grupal. CONCLUSIONES. Presentando el punto de vista de la terapia
cognitiva conductual de grupo, se ha hecho el intento de subrayar la naturaleza sistemática, amplia y flexible de este
modelo y su utilidad en el tratamiento de las diferentes adicciones. El empuje psicoeducativo de los grupos conductuales
ayuda a los pacientes a adquirir muchas habilidades y hábitos que alivian la angustia psicológica, promueven el
bienestar, posibiliten un nivel mas alto de funcionamiento adaptativo, promueven los tratos interpersonales mas
efectivos, y sostiene la abstinencia. El enfoque cognoscitivo-conductual, ha surgido como una de las fuerzas mas
importantes en la corriente principal de la psicoterapia de los distintos trastornos psicológicos. Jorge Leiva Hernández.
Master en psicología clínicaLic. Psicología clínica y SocialEspecialista en Adicciones Derechos de propiedad. JLH
Psychology © 2008. Referencias Bibliograficas. Abrahms Eliot, Abell R & Woldenberg L. Técnicas modernas: Análisis
transaccional, terapia cognoscitiva y terapia del sentimiento. American Psychiatric Association. 1988.Alberti R, Emmons
M L. Your Perfect Right. Ed. San Luis Obispo, Ca, Impact Publishers, 1996.Bandura, Albert. Los principios de la
modificación de conducta. Nueva York: Holt, 1999. Bandura Albert. Social Foundations of Thought and Action. Englewood
Cliffs, Prentice Hall, 1996.Barlow D H. Anxiety and Its Disorders. New York, Guilford, 1998.Beck A, Emery G. Anxiety
Disorders and Phobiass: A Cognitíve Perspective. New York, Basic Books, 1995.Beck A T, Rush A j, Shaw B F, et aI.
Cognitive Therapy of Depression. New York Guilford, 1999.
Bellack A S, Hersen M. Dictionary of Behavior Techniques.
Elmsford, NY. Pergamon, 1985.Daitzman R j. Clinical Behavior Therapy and Behavior Modification. New York, Garland
STPM Press, 2000.Ellis, Albert. Replica: TRE adecuada e inadecuada. Counseling Psychologist, 1997.Ellis Albert,
Abrahms E. Terapia Racional Emotiva. Editorial Pax. Mexico. 2000.Fay Allen. La Modalidad de la Droga. Nueva York.
Springer, 1998.Fay Allen. Making Things Better by Making Them Worse. New York, Hawthorn, 1988.Fay Allen. PQR.
Prescription for a Quality Relationship. New York, Simón & Schuster, 1996.Frank C M, Wilson G T, Kendal P C et aI.
Review of Behavior Therapy: Theory and Practice Vol 12. New York, Guilford, 1998.Goldstein A P, Sprafkin R P,
Gershaw N J. Skill Training for Community Living. New York, Pergamon, 2001.Gurney B G. Relationsnip Enhancement:
Skill Training Programs for Therapy, Problem Prevention and Enrichment. San Francisco, CA, Jossey-Bass,
1977.Jakubowski P, Lange A J. The Assertive Option. Champaign, IL Research Press, 1998.Lazarus A A. New methods
in psychotherapy a case study. South African Medical Journal 32;660-664, 1958.Lazarus A A. Group therapy of phobic
disorders by systematic desensitization. Journal of Abnormal and Social Psychology "3:505-510, 1971.Lazarus A A.
Behavior therapy in groups, in Basic Approaches to Group Psychotherapy and Group Counseling. Edited by Gazda G M.
Springfieid, IL Charles C Thomas, 1978, pp 149-175.Lazarus A A. Behaviour Therapy and Beyond. New York, Mc GrawHill, 2001.Lazarus A A. Understandíng and modifying aggression in behavíoral groups, The Group as Agent of Change.
Edited by jacobs A, Spradlin W. New York, Behavíoral publications, 1974, pp 87-99.Lazarus A A. La Terapia de conducta
multimodal. New York Springer, 2000. Lazarus A A. In the Mind's Eye. New York, Guilford, 1994.Lazarus A A, Fay A.
Behavorial therapy in The Psychiatric Therapies. Edited by Karasu T B. Washington D C, American Psychiatric
Association, 1984a, pp 485-538.Lazarus A A, Fay A. Some strategies for promoting generalization and maintenance.
The Cognitive Behaviorist 6: 7 – 9, 1984 b.Lazarus A A, Fay A. I can if I want to. New York. Morrow,
1992.Mahoney M J. Modificacion Cognitiva y conductual. Cambridge, M A, Ballinger, 2002.Marks I M. Review of
behavioral psychotherapy 1: Obsessive compulsive disorders. Am j Psychiatry 138:584-592, 1981.Marlatt G A. Relapse
preventions: theoretical rationale and overview of the model, in Relapse Prevention: Maintenance Strategies in The
Treatment of Addictive Behaviors. Edited by Marlatt G A, Gordon J R. New York, Guilford, 1985, pp 3-70.Meichenbaum
D. La modificación cognitiva conductual. New York, Plenum, 2001.Paúl G L, Shannon D T. Treatment of anxiety through
systematic desensitization in therapy groups. J Abnorm Psychol 71:124-132, 1966.Rose S. Terapia de Grupo: El
enfoque conductista. Englewood Cliffs, Prentice-Hall, 2002.Shelton J L, Ackerman J M. Homework in Counseling and
Psychotherapy. Springfield, IL, Charles C Thomas, 1984.Stuart R B. Helping Couples Change: A Social Learning
Approach to Marriage Therapy. New York, Guildford, 1990.Skinner, B F. Beyond Freedom and dignity. New york knopf.
2001Upper D, Ross S M (eds). La Terapia de grupo conductual. Champaign IL, Research Press, l981.Upper D, Ross SM
(eds). El libro de la terapia conductual de grupo. New York, Plenum, 2000.Wolfe Janet L. La terapia Racional Emotiva
como eficaz terapia feminista. Ed. Rational living. 2001.Wolpe Joseph. Psicoterapia por inhibición reciproca. Stanford
University Press, 1958.Wolpe Joseph. La practica de la terapia del comportamiento. New York, Pergamon, 2001. Jorge
Leiva Hernández. Master en psicología clínicaLic. Psicología clínica y SocialEspecialista en Adicciones Derechos de
propiedad. JLH Psychology © 2009.
http://www.jlh-psychology.com
Motorizado por Joomla!
Generado: 6 December, 2010, 20:39
JLH PSYCHOLOGY
http://www.jlh-psychology.com
Motorizado por Joomla!
Generado: 6 December, 2010, 20:39
Descargar