el boletín del ejercito.
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MADRID 10 DE ENERO DE 1845. ' Nú*. 251. PRECIOS DE SUSCRICIOX. Madrid En las Provincias. . En Ultramar 8 rs. . . 10 12 AÑO TERCERO). PRECIOS DE INSERCIÓN. Los comunicadas y anuncios que admita la Redacción á precios convencionales. * EL BOLETÍN DEL EJERCITO. PERIÓDICO MILITAR OFICIAL. Esle pérlAdlcn Míe los tañes, miércoles y fiemes.—Se suscribe en IB Redacción calle del Pez, nnií. 6, euairtn bajo, adonde se tliriji á |a correspondencia y reclamaciones, franco el porte: en las librerías de titAfecU, en la Concepción Gerónima; y MONCE» , Carrera de Snti Gerónimo.—Todos los señores suscritores que lauden de resitlemñ* se servirán pasaraviso anticipado a, esla Redacción. i• : t»/VBTE' OFICIAL, SS. M.M., la Reina Doña Isabel II y su augusta Madre, y S|. A. R. la Serma. Señora Infanta Doña María Luisa Fernanda, continúan en esta corte sin novedad <>|i su importante salud. MINISTERIO DE LA GUF.RBA. Id. id. á don Manuel López Vadillos, 2.° Comandante del rejimie*to del Principe. Negando ej eH»pleo de subteniente á don José Torres cadete que fuí del Tejimiento del Infante. Caballería. (En 7.) Concediendo Volver al servicio activo al alférez don Fernando de la Lanza. Sanidad militar^ S. M. se ha servido dictar las resoluciones (En 7.) Revalidando el empleo de 2.° ayudante de siguientes: cirujia , y declarando escedeute á don Cesáreo Fernanr Artülería. (En 7.) Promoviendo á capitán del batallón de Filipinas al teniente don Manuel Resmas ¡ v ai eiBpleo de teniente al subteniente don Juan Dionisio Gómez. dez VHUuau, procedente del convenio de Vergara. Monte pió militar. (En 6.) Concediendo real licencia para casarse á don Rafael GonideZ Asarta, capitán graduado de infantería. Id. á don Benito Rubio Aulí, capitán de infantería. Injenieros. Retirados. (En 7.) Admitiendo la renuncia que don José Moreno Elorza, hace de la asesoría deljttügado de injenie(En 6.) Concediendo don Agustín Deldon, priros de Castilla la Nueva, encargando de ella á don José mer ayudante qUcfué de áfarmacia del ejército, su vuelLaplana. ta alservicio en la primera vacante q«eocurra de los de Infantería. su dase en el cuerpo de Sanidad militar. Negando á don Rufo Evaristo Carranque, subtenien(En 6.) Aprobando te colooarion dada á los capitanes don Juan de Nicolás y don Tomás Labayen, en el te de infantería licchcíadja, su vuelta al servicio activo de las armas. tejimiento del Infante. ^ Nombrando ayudante del rejimiento de Zamora ádoh Francisco Punto, teniente del propio rejimiento. INSPECCIÓN JBSKUAL DE LA tíUARÜIA « T I L . Disponiendo que el teniente del rejimiento de Mallorca don Tomás Llac, pase al de Soria, y el deigusjctase El gefe del 2." tercio con fecha I. 6 de enero me rede este mismo «íerpo don Juan Fernandez Gamboa ¡ al mite el diario de servicios prestados por la fuerza de espresado de Mallorca. su mando en la segunda quincena del mes próximo paConcedierido real licencia á don FrancÍ9co4llere«íéVi sado que á la letra copio, leui*;ntodel r«jirniento de la Reina Gobernadora. Id. id. á,do£ Grabiell'oná, teniente del rejimieflto Relación de lot férvidos que ha prestado la Guardia Isabel H ; ! Civil de este tercio en la segunda quincena del mes Negando el grado de primer comandante A don Isidro detafecta. Diaz, capitán de reemplazo. Concediendo real licencia á don Ramón Castelló, gubDía 16 de diciembre. LoS guardias de segunda clateniente del rejimiento de Navarra. se Francisco Gómez y Roque Canales prerimer»» á lo» — 2 paisanos Cayetano Navarro y José Jiménez, por riña, simado herido el primero de un dedo, los mismos que se entregaron al comisario de Policía. Dia 17. El guardia de primera clase don Pedro Ten-res, acompañado del de segunda Ramón Carreras, premdieron á los paisanos Poncio Roque y Juan Hcrnamdez, naturales de Barcelona, por haberlos delatado ciertas personas por asesinos del Excmo Sr. Capitán jeneral y del Excmo. Sr. Gefe político, diciendo á nuas sabían donde habia armas escondidas. Dia 18 y 19. Sin novedad. IDia 20. El 2.° capitán de la misma don Domingo Roig, acompañado de los guardias de primera clase José Martí y Domingo Codorniu con el señor alcalde de barrio, dieron ausilio á los vecinos que ocupan la fabrica de Saboya, en términos que por el arrojo de dichos guardias (metiéndose agua 'hasta el pecho) se debe la existencia de dos señoras y 'cuatro niños que indudablemente quedaban víctimas de la lluvia y torrente del agua de seis á siete de la noche. En el mismo dia el,teniente don Cayetano Sentig, con los sarjentos 1.° don Nicolás Viciana y el 2." José Soler con veinte y cinco guardias mas, pasaron al esterior de la puerta de S. Antonio á eso de las siete de la noche, con el objeto de reconocer el campa, resulttando haber salvado varios efectos y personas que indnidablemente hubieran sido víctimas de la tempestad,, cuyos trabajos presenció el señor gefe político y otros señores del ayuntamiento.—En ídem los guardias de segunda clase Francisco Ganéja, Antonio Continente , José Folé y Manuel Vecino, ausiliaron al señor alcalde de barrio don Antonio Gslauset en trabajos muy útiles con el grande aguacero de su barrio. Dia 21. El guardia de primara clase Gabriel París, dio ausilio al señor rejidor 1). José Prat, por haberse robadlo en una casa y herido á un bornhre que fue conducido al hospital sin poder ser habido el agresor. Dia 22. El guardia de primera clase José Martí sorpreindió á José Roca que jugaba al cañé junto con otros en una azotea, y de cuyo punto se fugaron los otros.=En ídem el guardia de segunda clase Bernardo Terreras, prendió á la parte esterior de la puerta Nueva ¿Francisco Jordana y Lucio Comillas, poralropelllar y robar á Paula Sierra, habiéndose fugado el Jprdana al conducirie preso ,á la'alcaldía. D>ia 23. Sin novedad. .<Dia 24. Se dieron'íiSO.¡guardias con un oficial á la santa iglesia catedral y demás iglesias, para las funciones de la Misa del gallo. Pia 2Í*. El guardia de primera clase Ramón Canais>, con dos guardias mas , prendieron á las diez y medlia de la noche al corneta Antonio Barrueco y Mig;uel Piquer, por ir armados de una bayoneta y haber abandonado la guardia de la cárcel y "la de su cuerpo.—En ídem los guardias Bernardo Ferreres y Migruel Casanova, dieron auxilio al celador de barrio don Antonio Horman , por haber sido atropellado por dos paisanos.=En idem el guardia de primera cías* José Martí, arrestó á Francisco Baquer, de naciom francés , por no tener pasaporte.—En idem el teniiente de la misma don Cayetano Sentís , prendió en lia calle de la Union á Francisco Quitmerá, paisano framees, por querer este apoderarse de una señora que roa á su casa á las diez de la noche, y fue preso a la geftiitura. primero para prender á Juan Illa qu? robó un saca de lana. . , , , Dia 28. El guardia de primera clase Domingo C<£dorniü, arrestó en el teatro de Monlesion á José Maesas , que en unión de N. Torres, Pedro Bordas, y Bartolomé Grau , insultaron de obra al encargado de las lunetas, cuyo Masas quedó á disposición del señor alcalde don José Prats. > Dia 29. El guardia de primera clase José Martí, arrestó á José Pérez por borrachera y que alborotaba los vecinos de la calle de Tréintaclaus." Dia 30. Dos guardias auxiliaron al alcalde del cuartel tercero , barrio primero, para conducir dos homares sospechosos de ladrones á la alcaldía. Dia 31. El guardia de primera clase José Martí, arrestó á José Rafart, por verter cspresion.es de blasfer mía en pübIico.=Barcelona 31 de diciembre de 1844.= Excmo. Sr.=Francisco Palmés.=Excmo. Sr. Inspector jeneral de la Guardia civil. MADRID 9 DE ENERO En el discurso de la Corona al abrir la presente lejislatura, y en el párrafo referente al ministerio de la Guerra se hacia mención de "haber mandado comisiones científicas de oficiales ál estranjero. Poco ó nada se ha dicho desde entonces acerca de sus resultados, porque realmente era imposible no estando terminadas, y ni arnila ruta y estaciones 3e estas espediciones ha sido fácil consignar: hoy sin embargo podemos decir algo sobre los oficiales del cuerpo de E. M. que se hallan cerca del cuartel jeneral francés en el África. Fueron nombrados durante el ministerio Mazarredo para estudiar las campañas de la Arjelia juntamente con la colonización del pais, el comandante de E. M. don Crispin Giménez Sandoval y el capitán dan Antonio Madera, que después de permanecer en París el tiempo preciso para adquirir noticias , libros y relaciones al objeto, embarcados en Tolón llegaron á Arjel en los últimos dias de agosto último, desgraciadamente después de la batalla de Isly. Desde luego y presentados al gobernador jeneral, mariscal Bujeaud, de quien merecieron el mas distinguido recibimiento, asi como de los principales jefes de su ejército, se dedicaron á recorrer gran parte del pais y á conocer cuanto á la comisión que desempeñaban concernia, deteniéndose especialmente en la proDia 26. Salió el segundo capitán don domingo Roix con diez guardias mas, á poner orden en la vi- vincia de Constantina. lla de Esparraguera. En seguida y hasta tanto que den princiDia 27. Los guardias de segunda clase Pedro Boch y Miguel Roda auxiliaron al señor alcalde del barrio pio las operaciones militares de la primase- — 3 — hacia ese movimiento continuo; es* irritaoioin del injenio por hallar la perfeetivilidad de todos ellos y á su lado vé la irregularidad, la disonancia y la completa inacción del cuerpo sanitario dle é!; de ese instituto tan antiguo como las armas;, ne menos necesario á la existencia social que cada uno de aquellos, á cuyo instituto ha visto ein los primeros ejércitos europeos marchar á la par de los dernas y encuentra tan atrasado en el nuestro , no puede menos de esclamar: ó el gobierno español no ha conocido la importancia del servicio médico-militar, ó ño lo necesita. Uno y otro seria un absurdo el suponerlo. Un ejército para llenar el complexo de sus deberes, necesita poner en acción ese conjunto de instrumentos., bárbaro padrón de la especie h u mana; ha de hacer abnegación de todas las comodidades de la vida, como dije otra ocasión (1), cuya privancia le sumerjeen medio de las epidemias de los contajios y de todas las enfermedades que cual otra remora, siguen á los ejércitos. Se vé asediado de tanta calamidad en todas las actUudes de su carrera; en las guarniciones, en las marchas, en los campamentos, en las batallas, en las victorias y en las derrotas. Si pues , toda operación que. el ejército emprenda , ya reunidas HUÍ ENE MILITAR. todas sus armas, ya cada una de ellas en detali, lian de sufrir el anatema de su destino, ha de teRK0BSAJIIZAC1ON MEDICO-MILITAR. ñir sus-laureles con sangre, h a d e arrostrar tas asechanzas de la muerte, ¿no seria una decepTratados ya en los artículos anteriores ( i ) (por niotivos de oportunidad) las cuestiones que habían cion suponer constituido un ejército con solo dividido en los ocho últimos años á los profesores aquellos ele«nentos * Toda vez que el hombre de militares, puestos de acuerdo en la base capital, de armas cae unjido con su sangre ó agobiado con el que todo» los facultativos que sirvan en el ejér- peso de los males que le cercan ha concluido su cito y sus hospitales sean médico-cirujanos, for- deber , ni su instituto, ni las leyes, ni la sociedad mando una sola sección, y traída la cuestión de entera exijen mas de él. De otra naturaleza son intereses personales al terreno mas aproximado ya los sentimientos que el guerrero inspira : resá la justicia, preciso es entrar en otro jénero de tañarle su sangre, endulzar sus dolores, consolar•discusiones que afectan tan de cerca al servicio le en su desgracia, volverle la salud. ¿Y esta médico-militar , que de s» acierto pende que es- misión , señores, este complemento de las glorias te servicio adquiera el grado de perfección nece- de Marte , no merece formar el canon de un inasario para qnu el cuerpo «ncargado de é l , llene tituto que se consagre todo él á Henar tan sagrados y humanitarios deberes? «tetudamente sus sagrados deberes. Diráseme acaso que los ejércitos españoles lle-Al proponérsela reforma de un instituto, preciso es tener presente su objeto, sus funciones y varon siempre, como todos los pueblos guerreles medios que se han empleado para en su vista ros, ese elemento salvador. P e r o , qué es lo que poder encontrar los que faciliten las ventajas que representa la edad y vida de las corporaciones? de la nueva ley se prometan: puntos de los cua- Su posición social. Compárese, pues, la que les, concretándome al cuerpu de medicina mili- tiene el cuerpo de sanidad militar con la de ios tar, voy á tratar, si no con la estension que por demás institutos «le nuestro ejército, y se verá • s u importancia merecen . poseído al menos de los tan pigmeo é insignificante que equival* ala nuraas fervientes deseos de contribuir coo estos lidad. Remarcable aflomalía , si se reflexiona bien apuntes, á q u e se mire esta cuestión bajo su ver- sobre las funciones de este cuerpo y su vital interés. dadero punto de vista. Peculiar del cuerpo de sanidad militar e s , la Cuando por un momento dirije el filósofo su mirada contemplativa hacia la trabazón, enlace consulta en la parte médica de las leyes de reemy perfecta armonía que tienen entre s í , los dife- plazo ; suya la elección de hombres para el serrentes institutos que componen nuestro ejército vicio en jeneral y particular de las diferentes a r mas , base fundamental de todo ejército y á cuya ra, alas qué asistirán sin duda, han marchado á Túnez donde el bey les ha hecho un cordial recibimiento mandando se les franqueasen los cuarteles de la guardia de su palacio y demás fortalezas que quisiesen ver, acompañados del Cónsul de S. M. C. , á quien han debido enuméradísimas atenciones, de un coronel, otro jefe de dia y del Basei-Casacca ó sea uno de los intérpretes secretarios del príncipe. S. A. les ha facilitado ademas un firman para los alcaldes de los pueblos con objeto de que reconozcan, como deseaban, las antigüedades del Saguan, y les ha obsequiado personalmente con toda distinción: pn los primeros dias de noviembre se habrán dirijido á Bona á bordo de un vapor francés. De cuantas noticias podamos adquirir de aquellos países procuraremos tener al corriente á nuestros lectores. (i) Véanse los números 185, 201, 202, 203 201, 208, 213, 220, 227, 250 y 231 de estu perió«Ako. : ( í ) VJans«s los números, 184 y 188 de esle pe Módico. ríjida observancia atribuyen todos los autores médicos y militares esos asombrosos hechos que nos revela la historia de las armas romanas, y suyo éíl reconocimiento de inútiles , porque ademas de lías nociones jenerales necesarias para ello, tienen las particulares de la vida militar y la convicción piráctica que han adquirido viviendo con el soldlado. Atribución de este cuerpo es también dirijiir la educación física del soldado , dando consejos médicos sobre el uniforme, equipo y armamento; sobre la policía médica individual del soldado , la de los cuarteles, fortalezas, cantones, vibacs, campamentos, y sobre las marchas mismas- Suva é» la dirección y asistencia de los hospitales permanentes , provisionales , ambulantes , y de sanglre, para proveerlos con oportunidad y acierto dio los medios que estén mas en consonancia con las enfermedades del ejército , atender á cuanto se juzgue mas conducente para el mejor servicio d« ellos y obtener asi pronto y eficaz remedio. S'uyoes en fin, proponer sobre todos los puntos arriba enunciados, cuanto crea mas en armonía con lai salud, robustez y libre desarrollo del hombre d«e armas ; porque como dice Maizeroy ño basta le'.ner soldados jóvenes de buen temperamento, rohtustos ó en estado de hacerse tales, hijos de padres que les hayan inspirado la providad, el honor , lix religión y subordinación , y que estos soldados no repugnen el estado militar ; también se requiere mantenerles y fortificarles el temperamento' , y formarlos para desempeñar sus obligaciones, dei manera que su talud padezca lo menos que se pueda. pues, y esclusMvo del cuerpo de Sanidad hiiVit-ar, porque emana de esa ciencia egpecial.de esa carrera literaria que tiene sus profesores consagrados al estudio de la naturaleza para aconsejar al hombre lo que es nocivo á su salud y socorrerle cuando enferma. La reunión de estos profesores que sirven en los ejércitos , constituyen en las primeras naciones de Europa un cuerpo facultativo como parle integrante de ellos. ¿Y no lo habían de formar teniendo atribuciones tan marcadas, tan distintas, en cierto modo de las de todos tos demás, que componen un ejército, que no puede ser sustituido por ninguno de ellos , y cuya cooperación es absolutamente necesaria para que todos y cada uno llenen su cometido? Porque ¿qué laurel de Marte no lleva prendida una hoja por la mano del médico-militar? Nuestro cuerpo de medicina militar, comparado con el de los primeros ejércitos de Europa, puede decirse que no existe, ano ser que se tome por tal ese conjunto de profesores diseminados por los Tejimientos y hospitales, sin apoyo, sin estímulo y sin porvenir ; y á esa parodia de jefes , con menos acción y prestijio que sus subalternos mismos, como demostré en otro artículo. (1) ¿Pues qué, tan negados , se dirá, han sido los individuos de este cuerpo que no han llegado á granjearse mejor posición en el ejército? Ah ! la corporación no ha podido , pero el ejército español ha tenido siempre profesores que han hecho honor á su clase. Desde Lo vera de Avila y Daza Chacón , médicos del Emperador Carlos V en sus espediciones militares y conquistas , hasta Morejon y Rodríguez , inspectores del cuerpo de sanidad militaren 1836, ¡cuántos ilustres y distinguidos profesores no ha tenido el ejército que han merecido y aun obtienen la confianza de los Reyes, que han patentizado su erudición y talentos y aun brillan sus luminosas lumbreras en las cátedras de la facultad ! Fuertes'y muy poderosos obstáculos han debido ser los que se han opuesto al desarrollo del cuerpo de sanidad militar del ejército español, cuando tan esclarecidos profesores no han podido dar cima á la organización completa de un cuerpo cuyos importantes servicios y brillantes resultados no son dudosos. (i>e continuará.) Funciones son estas en verdad, que tienen demasiada importancia para que no se las atienda consagrando un instituto solamente á su observancia: porque en la sujeción de todas ellas á lois preceptos hijiénico-militares , están lospreseirvativós y curación de la tisis, del tifus, de la disenteria y aun del venéreo, que desvastan nuestros ejércitos; en ellas están los de la sarna y demas enfermedades cutáneas, que entretienen fuera de filas un número de bajas siempre perjudicial y asombroso ; en ellas el medio de evitar esa tuirba de hospitalarios que empezando por padecirmientos leves concluyen por inutilizarse ; en elüas en fin está el secreto de tener ejércitos sanois , robustos y bien conformados , que es lo que tienden los consejos de Vejecio, Maizeroy, MonUsrsuscRiroR AL BOLETÍN. teeuculi y cuantos autores militares han tocado este punto en sus tratados déla guerra , apoyándose en su esperienoia y en los conocimientos de Cellso, Catón, Pringle, Monró, Calombier y de todios los médicos que han dirijido sus estudios liáícia el hombre de armas. Orense 2. En esta provincia y en las demás de Ga¡¿ Y á quién sino al médico le es dado juzgar licia reina el mayor sosiego , y nada se ofrece que parcon conocimiento de causa en una materia , que ticipar áVds, si se esceptúa la llegada de nuestra Guarpor tratar de los primeros intereses del hombre dia civil, que acaba de verificarse con gusto de todos se ha erijido por un asentimiento común , por los buenos. Apesar de la batida que sufrieron en esto un convencimiento profundo, en una ciencia es- verano anterior los facinerosos de esta provincia, en pecial cuyo medio es la naturaleza y la salud el objeto? Ese conjunto de funciones es peculiar, (t) Numero 208 de este periódico. 5 Tittud de )A cual quiedólimpia de ellos la parte que confina con el vecino reino;> teatro de sus continuos robus Ír graneles eseesos, creemos sin«mbargo, que los soas 54 individuos de dicha Guardia, que el gobierno pudo enviarnos, nbí bastan para llenar el objeto de su ins"titnto, atendiendo particularmente ala circunstancia de ser fronteriza esta provincia. Es de esperar, que por lo mismo se aumente esta fuerza protectora , y que ademas se nos mande alguna caballería, la que consideramos muy necesaria para conseguir el lin que se propuso el gobierno de S. SI., no obstante lo quebrado y montuoso del pais por muchas partes. Acaso el gobierno tropeüará en la dificultad de aclimatar en este sudo húmedo los caballos criados bajo otro clima; pero tle semejante dificultad saldrá muy bien, echando mano de las yeguas y potros de la Limia , los cuales harán indudablemente" e\ servicio mejor que ningún otro caballo, . de donde quiera que venga. para siempre tal vez, condenados como estaban á nao pocos años, de presidio. fca autoridad militar de esta provincia, brigadier Ay— nat, ha estado tan dilijente y activo en el despacho dej las causas para la aplicación del indulto, como dias antes y desde su llegada le vimos incansable para que aquellas caminasen con toda celeridad á su fin. De un día á otro se esperan los presos del juzgadoi de primera instancia de Nájera, á cuya mayor parta alcanza el indulto. Fuera de él quedan unos 12 entre jefes, oficiales, funcionarios públicos y promovedores; principales. Por no haber reunido el suficiente número de votos; ninguno de los candidatos para diputado á Cortes y suplente, se va á proceder á segundas elecciones entre los Sres. Concha (don José) , Orobio, Jiménez, Navarro y otros. l^a cosecha del aceite ha sido* mediana. El campo se presenta muy bien. Murcia 4. Esta tarde á las dos y media Tía llegado —-Dicen de Huesca con la misma fecha: de Valencia el jeneral Roncali, con su escolta de uuos «Con mucha satisfacción hemos visto el indulto quei 50 caballos y miñones: salieron á recibirlo las autoridades todas, y se haalojado en casa del Excmo. Sr. conde S. M. la Reina ha tenido á bien conceder á los subledo Roche, alcalde de esta capital. Dícesc llega de un vados en las provincias de Logroño y Huesca. Satisfedta á otro un batallón de infantería, y aun aseguran es cha la justicia en los verdaderos criminales, muy digno era de la magestad ese rasgo de clemencia que vuelde Almansa. El ex-Calejio de la Purísima se está habilitando para ve al seno de sus familias á muchos que mas por imque se aloje la Guardia civil, que no tardará en llegar. prudencia que por malicia se agregaron á los revolucionarios que.desde la cumbre del Pirineo osaron atentar —i-El día'4 salió 3e Bilbao el general Concha para Vi- contra el gobierno de S. M. Varios eran los que poi esta causa estaban ausentes de sus hogares, y se vieron oblitoria. El pais seguía tranquilo. gados á andar errantes por aquellas breñas con gran desconsuelo de sus familias; pero ya á esta hora habrán —•Leemos en los diarios barceloneses: - Se nos ha dicho que se está trabajando con asidui- tenido la dulce satisfacción de verlos en su compañía dad á fin de plantear cuanto antes en las cuatro pro- habiendo reconocido en la desgracia la necesidad quo vincias catalanas un nuevo sistema para el servicio de todos debemos de obedecer al gobierno constituido. Desbagajes. Parece que aprovechando las indicaciones de de esta hora, no lo dudamos , los habitantes de Hecho algunas empresas que se han ofrecido á prestar este y Ansó que por un momento se vieron separados del servicio mediante una moderada retribución, se apro- camino de la subordinación y del orden , serán el mas vecharán las ventajas que ofrece la concurrencia y se (irme apoyo del gobierno, á cuyo frente está una Reina librará el asiento al que mejores condiciones ofrezca. que con su clemencia sabe volver la alegría á los que Los pueblos por medio de una corta contribución se en un tiempo lloraron en su desgracia.» librarán de uno de los servicios mas vejatorios que les exnia el Estado, Trinidad de Cuba noviembre 21 de 1844.—El marCon todas veras aplaudimos esta idea y anhelamos tes último, dia de nuestra augusta Reina Doña Isarerla pronto llevada á efecto. Hemos tocado los enor- bel II, juró el lucido Tejimiento de España que guarmes abusos á que ha dado lugar el completo desorden nece esta ciudad, la nueva bandera que en lo adelante quescobserva en este ramo ; mas deuna vez nos halle- ha de servirle de insignia con arreglo á la real orden nado de indignación ver las vejaciones y atropellamien- de 13 de octubre del año próximo pasado. EJ[ acto de tos que por causa de los bagajes sufrían los alcaides y bendición se celebró en la iglesia parroquial con misa ayuntamientos de los pueblosNde corto vecindario, y nos solemne y todo el brillo religioso que demanda su imrepugnaba sobre todo la injusta desigualdad que en la portancia, habiendo asistido el M. I. ayuntamiento y prestación de este servicio reinaba entre ¡as diversas co- demás corporaciones civiles y militares, como también marcas de una misma provincia. La organización salva- un crecido número de personas de primer rango que rá, si no todos, la mayor parte de estos inconvenientes. fueron convidadas por esquelas de atención. La. conSon tantos los sacrificios que se exijen de los infelices currencia a esta función fue lucidísima; baste decir que pueblos y tan mala su estrella, qucciialquicraalivioquc no se cabía en el templo. Concluida la misa tuvo lugar se les procure en la pesadísima carga que los abruma, el juramento de la tropa que formaba en la plaza ink> miramos coma un beneficio de la Providencia, y has- mediata de Fernando VII, y después de la descarga de ta verlas realizadas dudamos siempre délas promesas que ordenanza se retiró como á las diez de la mañana.—El señor coronel de dicho Tejimiento obsequió en su.pars* les hacen de mejorar su suerte. ticular á la oficialidad y á cuantos pudo invitar, con un refresco que improvisó en su propia casa.—La. tropa —De Logroño escriben con fecha 5 del actual: tuvo un dia de júbilo y.se sirvió de un abundante y Ayer por la mañana se publicó el bando mandando esquisito rancho. levantar el estado escepcional en que se hallaba esta proRefiriéndonos de nuevo á la fiesta no podemos mevincia , y el día antes se recibió el indulto concedido por S. M. á los comprendidos en las causas que se seguían nos de manifestar el gusto con que fueron oídas las composiciones de música vocal é instrumental que papor consecuencia de la rebelión Zurbano. En dos dias nada mas, 60 familias han gozado del in- ra dicho objeto compuso y ensayó el profesor: y mútsplicable placer de hallarse reunidas con sus hijos, pa- sico mayor del mismo Tejimiento D. Manuel María CaT dres , esposos y hermanos, á los que creían perdidos tala , y fueron ejecutadas de una manera tal como p»- - 6 _ , deseo de hacer pública su contraríacion para baldón eterno de los que se opusieron y nos privaron de tanto bien. En cuanto al seguido punto ú objeto político . que impugna mi antagonista , lejos y muy lejes de mí la idea de aprobar ni defender el hecho de la deposición del vencedor de Vilcapujio , Ayoburna y Viluma, porque este paso insubordinado, como le califica la historia , acarreó males que no es de mi propósito enumerar, pero la razón que da el 9r. Peruano no destruye en manera alguna mi aserto. El señor jeneral Pezuela dejó el mando del vireinato en mediados del año de 1821 y la guerra continuó hasta 1824. en cuyo mes de diciembre sucumbió el ejército español. En estos tres años se dieron algunas batallas que mantuvieron nuestro poder en aquellos dominios, y si es verdad que lesde la separación del virey Pezuela nadd se reconquistó, al menos se sostuvo y acaso se hubieran visto adelantos si el jeneral de la vanguardia hubiera permanecido fiel y subordinado al nuevo virey su defección precipitó la catástrofe, y esto no se puede negar cuando los hechos hablan, sin que tampoco sea mi ánimo analizar las causas de esta defección , porque buscando el orijen nos apartariamos del hecho que es únicamente á lo que me contraigo en mi narración. Por lo demás yo agradezco sinceramente al SeSrc». Redactores del BOLETIS BEL EJERCITO' ñor Peruano el encomio que hace de mi pobre Muy Sres» niies y compañeros.- Habiendo de composición, en cuya parte novelesca ó fabulosa no contestar cumplidamente al artículo remitido por dejan de consignarse hechos positivos y sucesos El Peruano, que Vds. insertan en «u número 249 históricos , sin mas alteración que los nombres de del lunes 6 del corriente, necesitaría tener á la los actores. El pais que describo ha sido el teatro Vista muchos documentos de que carezco y mas de mis servicios militares , trabajos, glorias y emfresca la memoria de los hechos; pero com > han presas juveniles por espacio de diez, años, en los trascurrido mas dé veinte años, ni unos ni otros que he tenido lugar de hacer un estudio de las cosvienen hoy en mi ayuda : no obstante , como aun tumbres que describo, y protesto sinceramente que • «tamos dentro de la jenéracion a que nos referi- el dulce recuerdo de aquellos diez años , hace las mos, y como tenemos muchos tistigosy aun fun- delicias de mi vida presente , llenando mi imajinacionarios de aquel tiempo entr« nosotros, á ellos cion de afectuosos sentimientos y de agradables R- S. y á la historia me remito; y dígase si aun en el memorias. tita no hay un jener.il Conocimiento de que todos los americanos tanto del Perú como de Méjico y Costa-firme, no ansiaron siempre y manifestaron muchas veces el deseo de que se estableciesen tronos en aquellos países, y que los príncipes de la sangre real de España lo¿ ocupasen- tMgasenie si PODEh MILITAR 1»E KUSU. no estuvieron indicados para ellos el infinite Don Carlos y el principe de Luca, y ojala.s« hubie(Continuación.) se aecedido á este deseo, qrte mas valdrían hoy aquellos países y mas valdríamos nosotros. VerRéstanos examinar la cuestión de la fuerza numérica dad es que después de la promulgación del códi-t real del ejército ruso. Una de las causas que han hecho go constitucional en el Perú ya no pensaron los considerar á la Rusia, aunque sin razón, como la poperuanos en tener Rey, y que diríjieron sus cona- tencia militar mas jigantesca de Europa, es el que la tos al establecimiento de repúblicas dividiendo el mayor parte de sus fuerzas, la parte mas completa bael punto de vista de la disciplina y del material, esterritorio Como se halla eto el dia con poca varia- jo tá acantonada en las fronteras; resultado de una polítición; pero aunque rni novela se concreta á los cin- ca que data del reinado de Isabel, cuyo ministro Bes'.•» últimos años de nuestra dominación, quise tuchef empobreció el reino y debilitó su centro por su consignar en ellas esta circunstancia tan útil como tenacidad en mantener fuerzas demasiado considerables mal aprovechada por nuestro gobierno de entonces, en los estreñios del reino. porque al tamaño de los bienes que yo calculo co Debe observarse también que estaba ya en otro tiemmo reportados á España con esta medida, es mi po en uso (uso que por otra parte existia aun hace trein- M<¡ veres hélttOS tenido el placer de oír en esta ciudad, siéndonos muy grato ver que varios jóvenes aficiona-1 tíos, con sus instrumentos, tomaron parte en la ortjnestii. Por 1* noche hubo retreta en la plaza de Carrillo, y «ñ lucido baile en la morada del señor intendente honorario administrador dd rentas reales D. Mariano f'ontcuberta, cuya fachada adornada con colgadura1? de damaseo fornlahdo pabellones de la bandera nació-nal, estaba iluminada eon multitud de faroles y vasos de rotores. En el frontis de la sala principal se miraban los re-* tratos de SS. MftL bajo un magnífico dosel de tercio-* peló Con flecos de oro, y lucían muchas bujías en mag-níficvfá Candelabros. El Sr. Fontcuberta, en unión de algunos amigos empleados y militares, costearon un abundante y lu-cido íefreSco y ambigú en drts salas adornadas é ilu-' minadas al propósito, y no faltó como era consiguien-* te el sustancioso jigote hecho de pechugas de aves, jamón etc., Según se acostumbra en el pais. El baile filé lucido y asistieron todas las bellezas y notabilidades del pueblo, que en repetidos brindis "saludaron á nuestra amada Reina con entusiasmo y verdad. La reunión duró hasta las seis del siguiente dia. COMUNICADO. T&EUBDAB2S. ta años) d considerar como incorporado al ejército todo _ 7 individuo que recibía sueldo en virtud de un titulo militar ; y si se recuerda que la mayor parte de los títulos conferidos por el emperador son de naturaleza mas ú menos militar, se concebirá fácilmente cómo se hallan abultados los estados del personal de los ejércitos rusos'. Los estados Oficiales hacéh subir las fuerzas numéricas de la Rusia al enorme total de 1.020,000hombres, y sin la reservas, á 862,000, Cierto es que algunos escritores han pretendido reducir esta suma á 400,000, pero es un error evidente; ademas, semejante total no guardaría ninguna proporción con la inmensa estension de territorio que ocúpala Rusia, con su población , con el estado de su hacienda, ni con sus recursos materiales de toda especie.'Creemos no alejarnos mucho de la verdad avaluando las fuerzas reales del ejército ruso en 640,000 hombres .distribuidos como sigue : Guardia imperial. . . . . . . . . . Infantería Caballería Artillería Ejército de Polonia 50,000 330,000 170,000 40,000 50,000 V 640,000 tividad un inmenso número de oficiales. Algunas veces se les concede ciertos privilejios; tienen el uso de uniforme y solicitan y consiguen entrar en las diferentes comisiones militares, navales y civiles. En Rusia no es necesario que un funcionario tenga la menor aptitud para las funciones especiales de que está investido; asi se ve á veces un mayor jeneral que nunca ha visto un navio puesto á la cabeza de una administración de marina , ó bien á un almirante metamorfoSeado en teniente jeneral; y en prueba de estas májicas transformaciones operadas por la omnipotente virtud de un ukase, citaremos al príncipe Menzikoff gobernador do Finlandia , y al príncipe Tchitchakoff que fue enviado contra Napoleón. También se coloca en las colonias á los soldados retirados: sus hijos nacim libres y gozan el privilejio, menos ilusorio, de ser educados en las escuelas de los rejimientos á espensas del gobierno. Las escuelas militares deben su oríjen al jeneral Arachicf. Siendo sarjento instructor en el reinado de Catalina , se le encargó el mando de la artillería del gran duque Pablo , que se componía de dos piezas, y al advenimiento de este imperial, fue promovido al grado de jeneral. Empleado por Alejandro citándola, invasión francesa , llegó á ser el favorito de este príncipe y en su virtud el hombre mas poderoso del imperio después del emperador; en la actualidad ha caído en desgracia y vive oscurecido en un rincón , presentando el ejemplo bastante común en Rusia como en Oriente, de la elevación y la caida délos favoritos. El objeto de las colonias militares era la creación de una especie de milicia destinada á reemplazar el sistema de quintas que está en uso. Esta milicia estaba diseminada en pueblos en los terrenos de la corona: doscientos hombres formaban un pueblo, y cuatro pueblos un batallón. Cada soldado tenia una cabana con un trozo de terreno, y se le daba una mujer : los hijos varones debian cubrir las bajas del ejército , y las hijas estaban destinadas á casarse con los nuevos colonos. Este ejército se recluta por medio de una conscripción , ó raas bien en virtud de un ukase que determina cj numero de siervos exijido á cada propietario noble. Este número, que lomas ordinariamente es de dos hombres por 500 cada tres años, varía necesariamente según las necesidades del servicio. Si una ó muchas propiedades no reúnen el numero suficiente de hombres para suministrar el continjente prefijado, se designa por suerte el propietario que debe completar este continjente, y este propietario recibe délos otros una indemnización pecuniaria. Ademas, no se pierde nada en que le saquen sus siervos para el servicio, en atención á que los otros siervos que le quedan deben satisfacerle los, .mismos tributos: cada pueblo tiene también una caja común para el vestuario y equipo de los reclutas. Un siervo queda.nominalmente libre al entrar en el ejército, lo cual equivale á Estos colonos debian dedicarse á la agricultura y decir que se convierte en propiedad del emperador; se proporcionar la subsistencia a su familia con el producle corta la barba,'y sus amigos le miran como perdido to de su trabajo, de manera que no costase nada al para ellos. Para el servicio militar siempre elijen los gobierno, y hasta debian ocuparse algunos días en el propietarios á los hombres peores. La paga del soldado trabajo de los caminos y obras públicas. Todo estaba ruso es ademas tan débil, está tan mal tratado y es tan organizado militarmente. Habíase calculado que cologrande la diferencia de climas de un estremo del impe- nizando asi 100,000 hombres, al cabo de 40 años derto á otro (porque hayla costumbre en Kusia, como en bia tener el Estado una enorme masa de soldados ya Austria , de enviar los reclutas de un país á otro lo mas disciplinados. Pero no se permitía á los colonos cultidistante posible), que al cabo de cinco años se hallan var las tierras á su antojo , pues estaban sometidos á muchos nombres inhábiles para el servicio, y sucede á un réjimen tan severo que se sublevaron en masa dos menudo que los siervos se mutilan para eximirse de él, ó tres veces, especialmente en 1831 después de la gueresponiéndose á ser condenados á trabajos forzados en ra de Polonia. Las colonias de Europa eran las de NoSiberia. gorod, en donde se contaban 40,000 hombres de infantería , y los de Cherson y Poltawa , cada una de las El tiempo regular de servicio dura veinte años en la cuales tenia 1500 caballos. Estos establecimientos han guardia y veinte y cinco en el ejército de linca; sin desaparecido: ya no se trata hoy de las colonias miliembargo un soldado que ha observado buena conducta tares, y ni siquiera permite el gobierno que se hable puede obtener su licencia absoluta al cabo de diez y de ellas. ocho años en el primer caso y de veinte en el segundo. Un soldado de la guardia desempeña durante sus diez Todo oficial del ejército ruso debe servir por algún años de servicio las funciones de sub-oíicial, lo cual tiempo de simple soldado, y solo se ha hecho una esen seguida lo asciende á la clase de oficial. En el ejérci- cepcion de esta regla en favor del principe Paskewitch, to de línea, un paisano que sabe leer y escribir puede que en consideración á los servicios de su padre reciascender en su carrera al cabo de doce años de servi- bió el diploma de oficial cuando aun estaba en la escio , pero esto sucede raras veces. Para los veteranos cuela ; y todo oficial, antes de llegar á esta clase, deretirados con pequeñas pensiones están reservados al- be desempeñar las funciones de abanderado ; pero si gunos destinos en los hospitales militares y en las ad- está graduado en alguna universidad, cualidad que se ministraciones públicas; ventaja de que están privados adquiere con un año de permanencia en ella, el tiem)«s oficiales, pites cuando estos llegan á la clase de jene- po d« prueba- no dura mas que seis meses. En otro r-tles, rzeiben el retiro, sin cuya medida habría en ac- tiempo , tí rango del padre era el que determinaba la _ 8 - posicion del hijo al entrar en la carrera militar': asi yior ejemplo , si un jcneral había tenido un hijo cuando no era aun mas que cabo, este hijo no podia entrar en el servicio sino como cabo, mientras que su hermano menor nacido cuando el padre era ya teniente , entraba como noble; y por una razón análoga, el hijo de un oficial general tenia el derecho de entrar desde luego en clase de oficial superior. Todas las veces que el ejercito pasa la frontera , se Je paga en rublos de plata, y como estos rublos valen cuatro veces mas que el rublo en papel, que solo vale un franco , tiene siempre cierta popularidad la guerra esterior , y es al mismo tiempo muy dispendiosa para él gobierno. La paga ordinaria del soldado de la guardia son 38 rublos (38 francos) anuales pagados de cuatro en cuatro meses. En los Tejimientos de línea la paga varia de 21 á 27 rublos: en su orijen eran 6 rublos. Un abanderado tiene 450 rublos de paga, y 300 id. por indemnización de alojamiento: un coronel 1,200 rublos , 600 por indemnización y 3,000 para su mesa, á la cual comen sus ayudantes de campo : un mayor general cobra 7,500 rublos. • En la guardia la paga de todos los grados es mayor; aunque en este último cuerpo no se admite ningún oficial que no justifique tiene medios de susistencia independientes de su paga. Muchos oficiales gastan la mayor parte de su paga en regalar á su tropa cuando están de servicio ; las sobras entran en los gastos de regimiento , comprendiendo el médico, el capellán, la música y las mejoras del uniforme del soldado. Ademas se esplota bastante felizmente la vanidad de los hijos de familia encargándoles las remontas de la caballería : y al efecto les conceden una licencia de un año con promesas de ascenderlos á su vuelta , pero se entiende tácitamente qjue deben traer al cuerpo caballos de un valor doble del que se les pasa, y que deben pagar ellos el eseeso: estas comisiones tan costosas para el mandatario, son á pesar de esto muy solicitadas. (Continuará.) Origen del caballo Babieca. mariscal Moncey al frente de 33,000 infantes y 2,700 caballos. 10 id. 1709. Creación de los empleos de teniente jcneral , mariscal d ; campo jr brigari ier. CALENDARIO MILITAR, ILUSTRADO, HISTÓRICO Y NOTICIOSO. Para ti año de 1845. POR EL CSRONEL DE CABALLERÍA D. RAHÍO* SOLER. La redacción del Boletín oficial, que no perdona medios ni gastos para dar al ejército cuantas noticias 6 instrucciones puedan Serle útiles y convenientes, ha dispuesto para el présente año un Calendario tan completo y noticioso, que comprende las épocas célebres , las estaciones, una noticia cronológica dej ejército y guardia real de España» otra de todas las órdenes militares, una relación circunstanciada de todas las secretarías y oficinas militares de secretario inclusive á último oficial , con sus negociadosy horas de despacho incluyéndose en ellas las de carabineros de Hacienda y Guardia civil, una relación de todos los cuerpos del ejército, carabineros y Guardia civil.—LQS doce meáes con las horas del dia y de la noche, fases de la luna. Santos, fíestas y dias de gala y media gala; con efemérides diarias y relación de los docunientos que los cuerpos remiten á las inspecciones respectivas, terminando cada uno con una anécdota ó discurso crítico ó moral, concluyendo con las plazas y puntos fuertes, hospitales y raciono? que corresponden á las pla/as montadas del ejército. Estas y mas noticias contiene el Calendario militar que puede prestar mucha utilidad á nuestros compañeros de armas ; y si este pensamiento nuevo tiene l.iacojida que merece y esperamos de nuestros suscritores, procuraremos establecerlo para todos los años con las mejoras dé que sea susceptible. Consta de un tomo de 152 páginas de buen papel y buena impresión. PRECIOS. Para los suscritores al Boletín por todo el año (adelantado) de 18Í5 , Gratis. Para los suscritores por seis meses 4 r s . Para los demás suscritores , á 5. Para los no suscritores , á 6. Los Sres. suscritores ó cuerpos que quieran recibirle oportunamente , se servirán pasar nota á nuestros corresponsales de las provincias en que se hallen , para que remitiéndola á esta redacción se les envien sin retardo. Se vende en Madrid en la redacción del BOLETÍN DEL Un clérigo fueel padrino de bautismo del Cid, á quien este pidió un potro de sus yeguadas. El padrino le mandó que elijiese el mejor, y el Cid escojió uno sarnoso y feo. El clérigo enfadado le dijo : «mal escojiste Babieca.» «Este ha de ser buen caballo, replicó el Cid, y Babieca sera su nombre.» El iiempo acreditó que Rodrigo de Vivar no se engañó. Babieca fue el mejor de su época. A su muerte lo legó el Ckl á su valido Gil Diez, y luego que murió Babieca , lo enterraron en la puerta del monasterio de San Pedro de Cárdena, en cuya iglesia estaba el cadáver del Cid. . —Servia en la guerra al rey don Alfonso un soldado llamado N. Rostro, y encontrándolo una noche el rey puesto de centinela con una virreta encarnada á ma- EJERCITO, calle del Pez núm. 6, y en las librerías nera de cresta, queriendo motejarles le-dijo: á qué hora de García, Concepción Geronima , Monier, Carrecantará el gallo esta noche? Respondió el soldado: muy ra de S. Gerónimo. tarde, señor, porque aun no ha cenado. En provincias.=Encasa délos corresponsales al BOLETÍN DEL EJERCITO. (Sfrmmfrs. 9 de cner» de 1S07. Entra en el territorio español el Editor responsable D, RAFAEL PAZOS DE Liiunf S. Imprenta de J. M. Ducascal, calle del Pez , núm. 6.
