TEMA 4: LOS DERECHOS SUBJETIVOS 1. Norma jurídica y libertad de los sujetos El ordenamiento jurídico se compone por el conjunto de reglas establecidas para la organización de la convivencia en comunidad. Pero el ordenamiento jurídico no persigue asfixiar la libertad y capacidad de decisión de las personas, sino crear cauces y garantías para que esa libertad pueda ser adecuadamente ejercitada y establecer criterios para que los conflictos, que surgen cuando se vive en una sociedad de hombres libres, puedan ser adecuadamente resueltos, estableciéndose una jerarquía de los valores que deben prevalecer los unos sobre los otros en caso de conflicto, y las medidas de composición de intereses que mayor satisfacción reporten a las personas. 2 Derecho subjetivo El poder que el ordenamiento otorga o reconoce a los particulares para que satisfagan sus propios intereses, se conoce técnicamente como Derecho Subjetivo. Los diferentes poderes concretos que integran un derecho subjetivo suelen conocerse con el nombre de facultades, esto es, posibilidades concretas en la actuación que se le atribuyen a una persona en el ejercicio de un derecho subjetivo más amplio. El ejemplo por excelencia del derecho subjetivo se encuentra en el derecho a la propiedad privada. 3. Las potestades Se habla de potestad en referencia al poder concedido por el ordenamiento a un sujeto para que lo ejercite en beneficio de los intereses de otra u otras personas. 4 Derecho subjetivo y deber En Derecho, no sólo existe el deber de respetar las normas, sino que también existe el deber de respetar los derechos de los demás individuos de la colectividad social. Así, cuando alguien ostenta un derecho, un poder, lo ostenta frente a otra u otras personas, generando así un deber de sumisión en el sujeto pasivo del mismo. Luego todo derecho subjetivo tiene un lado pasivo: los sujetos que se encuentran sometidos o vinculados al poder que el derecho subjetivo confiere. Se suelen distinguir, en función de la amplitud de sujetos pasivos que ostenten cada poder subjetivo, entre derechos relativos o derechos absolutos (erga omnes) Se dice que un derecho es absoluto cuando el sujeto pasivo comprende a todos los demás, dentro claro es del círculo espacial y temporal del ejercicio del derecho, por eso se dice de ellos que son erga omnes, frente a todos. En el caso de derechos relativos, encontramos que su poder solo puede ser ejercitado frente a determinadas personas. Dentro del derecho subjetivo encontramos la siguiente estructura: -Sujeto: Persona a la que se le atribuye el poder -Objeto: Realidad social sobre la que se atribuye el poder -Contenido: Conjunto de facultades atribuidas a la persona respecto del objeto de ese derecho, y se manifiesta en el deber de todos de respetarlas. 5. Relación jurídica El ordenamiento jurídico regula las relaciones entre personas. Cuando las relaciones sociales con contempladas jurídicamente, se habla de relaciones con transcendencia jurídica o relaciones jurídicas. Las posiciones del poder no son concebidas como posiciones aisladas, sino que, de acuerdo con lo que sucede en la relación social, las personas se encuentran ligadas por un conjunto complejo de relaciones, integradas por situaciones de poder y de sumisión que, de algún modo, se contrarrestan y sirven de contrapeso. 6. La autonomía privada El poder que tiene los particulares de establecer reglas aplicables para lograr sus fines, no es ilimitado, pero existe. El poder de autorregulación y autogobierno de los particulares recibe el nombre de autonomía privada. El reconocimiento de la autonomía privada supone que las relaciones entre particulares se encuentran sometidas no sólo a normas jurídicas en sentido estricto, sino también a reglas creadas por los propios particulares. 7 El acto y el negocio jurídicos Los actos jurídicos son conductas de los particulares realizadas de forma voluntaria pero cuyos efectos proviene de la propia ley. Así el particular podrá actuar voluntariamente recibiendo por contraposición una consecuencia jurídica frente a la cual no existe actitud de voluntariedad y que simplemente por la observancia del comportamiento del sujeto ha surgido al amparo de la ley. En otras ocasiones, sin embargo, se reconoce a los particulares el poder de configurar lo efectos que su comportamiento produzca, de acuerdo con sus deseos, en cuyo caso hablaremos de negocios jurídicos. En resumen, el Derecho subjetivo regula las relaciones entre las persona creando a menudo cauces para que esas persona puedan ejercitar su libertad y capacidad de decidir. Para eso tiene que atribuirles el poder de decidir o impones sus decisiones (derechos subjetivos y potestades), creando como consecuencia la sumisión de otros sujetos (deberes jurídicos); todo lo cual se integra en el seno de las relaciones sociales que el ordenamiento jurídico regula (relaciones jurídicas) La libertad y la capacidad de decisión de los sujetos significa también que los comportamientos voluntarios realizados por las personas son tomados en consideración por el ordenamiento, que le puede atribuir efectos, queridos o no por los intervinientes (actos jurídicos); o bien, como manifestación de la autonomía privada de los sujetos, puede el ordenamiento reconocer la eficacia vinculante de una decisión de los particulares, que serán así capaces de configurar el contenido de sus relaciones jurídicas (negocios jurídicos) 8 Adquisición y extinción de los derecho subjetivos El estudio de las modalidades y condiciones para adquirir los derechos, debe remitirse al tratamiento de los diferentes derechos, o categorías de derechos. Baste aquí señalar la distinción básica que se hace entre la adquisición originaria y derivativa de los derechos, siendo la primera la adquisición de un derecho ex novo y la segunda por transmisión del anterior particular. Los derechos además, se pierden por múltiples motivos, por ejemplo, si poseyendo una cosa y ostentando derecho real frente a ella, la cosa perece; o bien los derechos sobre los sujetos de hacer algo, que cuando este algo queda hecho, se extingue; etc… Un particular modo de extinción contemplado por el Código Civil es la llamada renuncia de derechos. Si el derecho subjetivo es un poder que se ostenta para satisfacer los propios intereses, parece razonable que sea posible renunciar a este poder. Así, el propietario de un bien puede renunciar al mismo, sin que para ellos sea preciso que lo transmita a otra persona. Sin embargo, en ocasiones la renuncia de derechos puede causar perjuicios a terceras personas, como por ejemplo en el llamado alzamiento de bienes, por lo que ésta posibilidad, admitida con carácter general, encuentra sus límites en el debido respeto de los derechos de otras personas y en el interés y el orden público. 9 El ejercicio de los derechos y sus límites Ejercitar un derecho es hacer uso del poder que comporta. No es preciso que sea el propio titular del derecho el que lo ejercite. Cabe por el contrario que los derechos de una persona sean ejecutados materialmente por otra. Esto ocurre cuando el titular es incapaz de ejercitar sus derechos, por ejemplo, por no haber alcanzado la edad precisa. 9.1 La colisión de derechos Es claro que nuestros derechos llegan hasta donde empiezan los derechos de los demás. Por ejemplo, el propietario de una finca no podrá hacer uso de sus derechos si por ello perjudica al vecino de la finca colindante, al igual que no podrá hacer reformas si por ellos perjudica a la persona a la que tiene arrendada la finca. 9.2 La buena fe El Código Civil dice que los derechos deberán ser ejercitados conforme a las exigencias de la buena fe. Con eso se quiere indicar que los derechos que se ostentan deben ejercitarse de conformidad con el modelo de conducta socialmente considerado como honesto y adecuado; sin que sea permitido realizar actos de ejercicio que, aunque quepan dentro de las facultades del sujeto, se aparten de ese canon de lealtad en las relaciones sociales. Además el ordenamiento jurídico suele tomar medidas para evitar estos comportamientos y actos contrarios a la buena fe. 9.3 El abuso del derecho Existe abuso del derecho, y entendemos como tal, cuando se producen actos de ejercicio de derecho que sobrepasan los límites socialmente considerados normales en cuyo caso ha de cesarse en la realización de actos abusivos. Además si el comportamiento repercute en otras personas ocasionando daños y perjuicios, el sujeto que hizo un uso abusivo de sus derechos deberás resarcir de dichos daños y perjuicio a los sujetos afectados. 10 Límite temporal al ejercicio de los derechos. La prescripción y caducidad El titular de un derecho tiene la posibilidad de ejercitar los poderes que su derecho le confiere. Tales poderes o facultades serán ejercitados en un momento concreto o a lo largo de un plazo concreto. La precisión del tiempo durante el cual pueden ejercitarse las facultades que se poseen varía de acuerdo con la naturaleza del derecho que se trate. 10.1 La prescripción extintiva Por el transcurso del tiempo, al igual que se adquieren, también se pierden derecho. En el caso de la prescripción extintiva, el derecho para el que se fijo un límite temporal de ejercicio del mismo desaparece, se extingue, tras cumplirse ese plazo. A/Presupuestos de prescripción -Que el derecho sea prescriptible. -Que el derecho permanezca inactivo pudiéndolo haber sido, así se requiere la falta de ejercicio del derecho de que se trate. -Que transcurra el plazo señalado por ley sin ejercitarse el derecho -Que producido un acto extemporáneo de pretendido ejercicio del derecho, el sujeto pasivo, contra el cual se ejercita, alegue la prescripción producida y no haya renunciado a ella. B/Cómputo del plazo de prescripción El plazo comenzará justo en el momento en que el derecho pudiere ejercitarse. C/Interrupción del plazo prescriptivo Dado que el plazo de prescripción de un derecho debe transcurrir en su totalidad, puede ocurrir que exista algún movimiento por parte del sujeto que ostenta el derecho que haga que el presupuesto de inactivada quede invalidado, por lo que el plazo de prescripción se ve interrumpido y vuelve a comenzar de nuevo. Esto es la llamada interrupción del plazo prescriptivo. D/Alegabilidad y renuncia de la prescripción El sujeto pasivo, beneficiario de la prescripción, puede renunciar a ella y quedar así condenado a cumplir a pesar de la prescripción. 10.2 La caducidad En ocasiones, para el ejercicio del Derecho, la ley considera que debe ejercitarse en un período predeterminado necesariamente, por lo que se fija un plazo llamado de caducidad. Este plazo suele ser más breve que el de la prescripción, limita temporalmente la posibilidad del ejercicio del derecho o facultad de que se trate, extinguiéndose ambos a la decadencia del plazo y sin que quepan posibilidades de interrupción. Ésta caducidad no está contemplada en el Código Civil.