Hoja vocacional. Septiembre 2015

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QUEDATE CON NOSOTROS
LECTURA: Lc 24, 13-35
(leemos esta oración personalmente, para luego destacar
alguna frase)
Quédate, Señor, que se hace ya tarde, que el camino es
largo y el cansancio grande.
Quédate a decirnos tus palabras vivas, que aquietan
la mente y encienden el alma.
Mantén en ascuas nuestros corazones torpes, disipa nuestras dudas y temores.
Míranos con tus ojos de luz y vida, devuélvenos la ilusión perdida.
Quédate y límpianos rostro y entrañas; quema la tristeza, danos esperanza.
Quédate y renueva valores y sueños; danos tu alegría y tu paz de nuevo.
Quédate Señor, que se hace ya tarde, que el camino es largo y el cansancio
grande.
SILENCIO-COMPARTIR
(todas juntas)
Jesús Buen Samaritano has venido a nosotras y
con la fuerza de tu Espíritu nos has llamado a ser
portadoras de la Hospitalidad de tu Corazón.
Abre el nuestro para acoger y dejar que sea cauce, para que otros puedan encontrarte y beber
del manantial que brota incansablemente de tu
Corazón abierto.
Somos hospitalarias, y queremos que otras vivan y se abracen a ella como
signo de unión contigo, servicio a nuestros hermanos que sufren, haciendo
visible la fraternidad que nos llamas a vivir.
Abre nuestro corazón y nuestra mente a los signos de los tiempos, para descubrir y seguir el camino que tus nos muestras , y así sea nuestra pastoral una pastoral abierta a las vocaciones, abriéndonos a una “cultura vocacional.”
Amén
La mirada de Jesús nos levanta siempre; nos
eleva, nos alza; nunca nos deja a ahí, donde
estábamos antes de encontrarle.
Ni tampoco quita algo: nunca te abaja, nunca
te humilla, te invita a alzarte, y haciendo oír
su amor da el valor necesario para poder seguir (Papa Francisco)
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Acabado el verano nos volvemos a encontrar y nos alegra poder ofreceros estas paginas desde la Pastoral Juvenil Vocacional, con solo un objetivo compartir
un sentir y dar respuesta, primero a una llamada eclesial., y luego congregacional.
El Papa nos anima
“considerar la realidad actual de los jóvenes europeos con la mirada
de Cristo”. Es Él quien “nos enseña a ver no solamente los desafíos y
los problemas, sino a reconocer las muchas semillas de amor y de
esperanza esparcidas en el terreno de este continente, que ha dado a
la Iglesia un gran número de santos y santas, ¡y muchos de estos son
jóvenes!” IV Congreso Europeo de Pastoral Juvenil
Pidámosle
a quien nos ha metido en esta
siembra, que nos haga partícipe de
su mirada, la del sembrador bueno
y “derrochón” de ternura. Para que
sea una mirada confiada y de largo
aliento” “¡Salgan a buscar corazones!” (Papa Francisco)
Es evidente que queda mucho por hacer. Los apoyos sociales-familia y escuela
en particular– que antes favorecía una cultura vocacional mostrando entonces
su eficacia, hoy no existen. Hay que rehacerlos. Por eso es tan urgente recrear la
cultura vocacional…
Colaborar a la expansión de la cultura vocacional
… hoy la verdadera urgencia es seguir proponiendo la cultura vocacional. “Es el
primer objetivo de la pastoral vocacional, o quizás de la pastoral general” Ahí
debe centrarse nuestros esfuerzos. Desde tiempos del pontificado de Juan Pablo II hasta hoy se viene dirigiendo una llamada urgente orientada a promover
auténtica cultura vocacional, exhortando a que todos se involucren en esa empresa
Llamamos cultura vocacional a un ambiente social, un hábitat, una atmosfera que propicia y favorece la vocación, porque reúne las condiciones aptas para su nacimiento y desarrollo. A partir de la definición de cultura podemos decir
que ésta es vocacional cuando genera un conjunto de valores, creencias y comportamientos, formas de expresión, estructuras sociales,
etc. Que favorecen y promueven los
valores vocacionales y sus condiciones
de posibilidad.
Y la Congregación nos lo pide….
Motivar y animar la vivencia vocacional en las comunidades facilitando su apertura para la acogida de los jóvenes
en las comunidades “Objetivo General”
Las palabras del Papa Francisco son siempre una llamada a la confianza, reforzando el animo y la ilusión ante la tarea de ser portadores de la Buena Noticia…
nosotras desde nuestra vivencia de mujeres consagradas a la Hospitalidad.
CANTO: “Voy contigo, Señor”
Voy, Señor, contigo voy, voy contigo, Señor:
Hoy Señor, confirmo hoy mi vocación.
1.-El Señor en la orilla del mar, llamo a Pedro, Santiago y a Juan:”Pescadores de
hombres seréis”. Le siguieron dejando la red.
2.-El Señor a los doce eligió, por su nombre a uno a uno llamó: “Mis amigos
por siempre seréis, donde vaya vosotros vendréis”.
3.-Hoy Señor, nos has vuelto a llamar, nuestro nombre en tus labios está, desde
ahora contigo, Señor, nos tendrás a cumplir tu misión.
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Hospitalidad que nace de lo profundo del Corazón de Cristo manantial inagota“No basta con repetir que la pastoral es urgente. Necesitamos recordarnos con
frecuencia las razones nítidas y convincentes para que nos empujen al compromiso con más decisión. No podemos cerrar los ojos ante los vestigios de cansancio y desgana que nos arrastran hacia la apatía y el escepticismo. Frente a la
frustración por los exiguos frutos cosechados a pesar de tanto esfuerzo realizado; frente a la tentación de dejarlo estar para tiempos mejores; frente a nuestras
elevadas edades, a nuestros decrecientes recursos humanos, y en un mundo tan
complejo como el nuestro… ¿dónde encontrar razones convincentes para seguir
apostando por la animación vocacional? ¿Es razonable invertir en futuro?
A pesar de todo, creemos que si. Contamos con muchas razones que podríamos
colocar sobre la mesa; y no todas ellas limpias. Pero como no se trata de abrumar, sino de motivar, me centrare en cinco de las más contundentes.
Porque Dios sigue llamando
… Él es el que lleva la iniciativa en el amor y la vocación. En Él ponemos nuestra
esperanza… no buscamos ante todo la supervivencia de nuestras obras y proyectos, sino obreros para realizar el proyecto de Dios. Por eso seguimos confiando… Si esto es así, ¿Quién somos nosotros para pensar que Dios ha dejado
de llamar o pone límites geográficos, temporales o sociales a su llamada?...
Porque anunciar el Reino y la vocación siempre van unidos
Porque la llamada de Dios sigue siendo atendida con generosidad
Por que la vida religiosa es obra de Dios
Porque la Iglesia es cuna de vocaciones
ble de la misericordia de Dios, pero no solo nosotras estamos llamadas a ello,
sino todo aquel que descubre en la hospitalidad, una manera de ser y estar en
la vida, reforzando desde ella la unión con Dios y con los hermanos, sintiéndose vacacionados a la Hospitalidad.
Por ello, y sin dejar de escuchar los texto que hemos elegidos del Papa, vamos a
reflexionar a profundizar en la MIRADA DE JESÚS y ha pedirle su mirada, para
nuestros ojos a veces cansados, cerrados, ciegos…
Llegaron a Jericó. Y cuando ya salía Jesús de la ciudad seguido de sus discípulos y de
mucha gente, un mendigo ciego llamado Bartimeo, hijo de Timeo, estaba sentado
junto al camino. Al oír que era Jesús de Nazaret, el ciego comenzó a gritar: –¡Jesús,
Hijo de David, ten compasión de mí! Muchos le reprendían para que se callara, pero
él gritaba más aún:
–¡Hijo de David, ten compasión de mí! Jesús se detuvo y dijo: –Llamadle. Llamaron al ciego y le dijeron: –
Ánimo, levántate. Te está llamando. El ciego arrojó
su capa, y dando un salto se acercó a Jesús, que le
preguntó: –¿Qué quieres que haga por ti? El ciego le
contestó: –Maestro, quiero recobrar la vista. Jesús le
dijo: –Puedes irte. Por tu fe has sido sanado. En aquel
mismo instante el ciego recobró la vista, y siguió a
Jesús. Mc 10, 46-52
Leamos a Pagola en una reflexión sobre este Evangelio, de su libro <Grupos de
El articulo sigue con la pregunta: CÓMO DEBEMOS HACER HOY PV?
Jesús>
Y sugiere:
“… ¿Nos reconocemos de alguna manera en este mendigo? Cristianos <ciegos>
Evitar actitudes infundadamente alarmistas… el primer objetivo seria infundir
aliento para creer que podemos. Lo que necesitamos no son criticas demoledoras que nos agobien, sino palabras de animo, aliento que reavive el entusiasmo.
Y desde ahí recrear un tejido comunitario y apostólico donde la pastoral vocacional pueda ser más valorada y mejor aplicada con la esperanza de que algún
día se vean frutos abundantes.
de fe apagada, sin ojos para mirar la vida de Jesús. Cristianos sentados instalados en una vida más o menos cómoda, acostumbrados a vivir de manera rutinaria nuestra religión, cansados de nosotros mismos, sin fuerzas para seguir a Jesús. Cristianos situados <fuera del camino> de Jesús, sin ponerle a él como
meta, horizonte y guía de nuestra vida… A pesar de su ceguera, el ciego se entera de que está pasando Jesús.
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No ve nada, pero percibe su paso. Intuye que Jesús le puede curar. No puede
dejar escapar la oportunidad y se pone a gritar: “Hijo de David, Jesús, ten compasión de mi”. Algunos le reprenden para que se calle y deje de molestar. Pero
el grita todavía con más fuerza: ¡Ten compasión de mí! Él no puede darse a sí
Él ha pasado, esta en nuestra vida, nos ha mirado, a dado luz a nuestros ojos…
nuestro ser de mujeres consagradas para la Hospitalidad nos lleva y nos impulsa
ha gritar a proclamar con fuerza que su amor ha estado grande con nosotras y
por eso estamos alegres… y de ese gozo nace la necesidad el deseo de compartirlo y vivirlo con otras y otros
mismo la vista. Necesita de Jesús… Esta oración humilde, incansable, repetida
“Hemos recibido el don de la vocación, lo vivimos
con gozo y deseamos que otras lo compartan, sintiéndonos comprometidas en la tarea de despertar y
consolidar vocaciones” (Cont. 69)
una y otra vez con fuerza, desde lo hondo del corazón, va a ser el comienzo de
su transformación. Jesús no pasa de largo”
Podríamos preguntarnos personalmente
¿Podremos crear en nuestros grupos comunitarios la misma actitud de Bartimeo ante el paso de Jesús por nuestras vidas?.
Animación vocacional
Las superioras mayores, primeras responsables de la animación vocacional, la
promuevan y coordinen:
-procurando sensibilizara a las comunidades… teniendo en cuenta que es obra de
todas, que exige esfuerzo y que debe haber algunas Hnas. más comprometidas a
las que todas hemos de apoyar.
Meditemos esta oración en silencio:
Aquí estoy Señor;
Como el ciego al borde del camino,
A nivel comunitario:
-oremos y revisemos nuestra vida consagrada para ver si expresa la alegría de la
donación.
-acojamos en las cdads. A las jóvenes que deseen conocernos…
A las Hnas. dedicadas directamente a la labor:
-presenten a las jóvenes el ideal de la vida hospitalaria.
-traten de insertarse en la pastoral vocacional diocesana…
-acepten a la juventud y busquen formas de establecer contactos frecuentes y
continuados con las jóvenes.
-utilicen medios adecuados de difusión (Direct.69)
Cansado ,sudoroso, polvoliento;
mendigo por necesidad y oficio.
Pasa a mí lado y no te veo.
Tengo los ojos cerrados a la luz.
Costumbre, dolor desaliento… sobre ellos
han crecido duras escamas
Cuando estaba preparando estas paginas ha llegado a mis manos un escrito de
Juan Carlos Martos, cmf conocido por quienes trabajamos en pastoral, ya que
estuvimos en Roma en un encuentro con él, me ha parecido interesante y quiero
trascribiros algunas ideas que pueden ayudarnos en esa animación vocacional a
la que estamos llamadas. (os enviamos fotocopiado la ponencia entera y os animamos a que la leáis)
que me impiden verte…
Ah, qué pregunta la tuya!
¿Qué desea un ciego sino ver?
¡Qué vea, Señor!
Que vea Señor, tus sendas.
Que vea Señor, los caminos de la vida.
Que vea Señor, ante todo, tu rostro,
Tus ojos, tu corazón
(F. Ulíbarri)
Aquí va algunas pinceladas del sugestivo y esperanzador articulo
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