i Precio $ 0,70 (70 m /n .) M artes 10 de agosto de 1971 $ 1,50 (150 m /n .) Contra la Represión - Por los $ 2 0 0 0 0 P o r la Tendencia Sindica! de C la s e Por e l F re n te U n ico Antiimperialista Todos al Plenario de Córdoba ^iimiiiiiiiiiiiiiiiiim iiiiiiiiiifm iiim iiMiiiiiiim iiiim iiiiiiiiiifm iiiiii': j CONCURRIR: j E ------------- ------------------------------------------------------------------------- | 13 de A gosto | ACTO D E “SINDICATOS COM BATIVOS” E N | 1 í ] i \ de A gosto REU NION D E D ELE G A D OS Y ACTIVISTAS EN APOYO A L PLENARIO D E CORDOBA ACTO D E VOM-VM E N A POYO A L PLENARIO D E COR DOBA D E L 28 | 2 6 de Agosto SAN LORENZí | | | I 2 0 de Agosto 1 EJEMPLO DE | L A FEDERACION D E B O X 14 SEGUIR EL = i ¡ GRAN TRIUNFO EN EL COLEGIO 1 \ buenos aíres Página 2 i ACTO CONTRA L A REPRESION CON VOCADO § 1 POR E L C.E.C.E. ¡ | 2 S de Agosto | I GRAN PLENASUO I I CLASISTA! EN I ( CORDOBA { ^iiiim iiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiH iiiiiiiiiiiiiiiiiiiniiiiiiii......... . Lanusse-Allende Acuerdo Contra­ revolucionario P á g in a 2 _______________________________ • P O L I T IC A O B R E R A Resonante Triunfo E studiantil El Buenos Aires M arc a el C am in o E l jueves 22, en base a.tina actividad Conjunta de las tres agrupaciones que m ilita n en el colegio V (C A E M , F L S , JTERS) se realizó un im portante acto de repudio a l nuevo rector de la U n i­ versidad, a la intervención y a la dic­ tad u ra. L á agitación en los cursos durante la semana obligó a l rector del colegio, H ernández, a suspender las clases por­ que estaba en peligro la propia realiza­ ción del acto de asunción (que se reali­ zó en el salón de actos del Buenos A i­ re s ). Los estudiantes fueron dispersa­ dos de da puerta del colegio por la po­ lic ía , llamada por Hernández, la que detuvo a un estudiante y a otra perso­ n a que salió a defenderlo. E l viernes 23, por iniciativa de la T E R S , se realizó una formidable asam­ blea — con cerca de 1.2 00 compañeros— en repudio a las detenciones, que apro­ bó la constitución del Centro de Estu­ diantes del colegio. Ese mismo d ía fue­ ron elegidos delegados en prácticamen­ te todas las divisiones, aprobándose mandatos para el centro. E l coflegio es­ tu vo prácticamente ocupado. Los estu­ diantes deliberaron y se organizaron durante todo el día. A n te esta situación el rector resolvió a p lica r sanciones a los compañeros que intervinieron en la asamblea del día an­ te rio r (siete fueron echados del colegio) y suspendió las clases hasta el jueves siguiente, para desorganizar el movi­ miento. Las divisiones se reunieron durante e l f in de semana (más de cuarenta di­ visiones lo hicieron) aprobando manda­ tos y propuestas para lograr la rein­ corporación de Jos sancionados. E L PRIMER CENTRO D E COM BATE EN EL COLEGIO L a reacción inmediata de los estu­ diantes ante la represión p olicial fue la organización de su Centro de Estudian­ tes;. E s ta vez el colegio, rompió con la v ie já tradición reformista de construir “ centros” m inoritarios y no basados en la movilización estudiantil. 1 Las represalias del rector no estuvie­ ro n motivadas tanto por el acto de re­ p u d io a Quartino y la Intervención, si­ no que fueron dirigidas contra el cen: t r o de Estudiantes recién nacido. L a M artes 10 de agosto de 1971 . dres y a postergar la resolución del pa*~ ro. E l P L S asumió, el lunes, igual po*~ sieión, oponiendo a la m oción de T E R S de efectivizar el p aro la de pasarlo para.', alrededor de las medidas que d eb ía n adoptarse contra las sanciones. L a T E R S postulaba la n ecesidad de resolver el paro p a ra cuando se reln iciaran las clases, citaT u n a in m e d iata asamblea p a ra votarlo y o rganizarlo, ex­ tender la lucha a los demás colegios, y dar un funcionamiento re g u la r a l C en ­ tro (con boletín de inform aciones, reu" fundamentación de estas sanciones de­ muestra que el problem a p rin c ip a l para el rectorado era la organización del Centro. Hernández sostuve que las san­ ciones se aplicaban porque la “ organi­ zación de Centros es co n traria a l reglamento, del colegio y a las leyes de la Nación”’. Los estudiantes del colegio, como los de los demás colegios de la cap ital, al movilizarse contra las sanciones estaban defendiendo a este centro de estudian­ tes. E l planteo deil C entro se impuso co­ niones sistemáticas, etc.). E l F L S y la C A E M , con oscilaciones, (e incluso divergencias in tern as) desa­ rro llaro n toda una labor obstruccionis­ ta de las medidas concretas de lu c h a y organización. Los argumentos dados p ar a no convocar la asamblea (en e l cuer" po de delegados) fueron que hacía, f a lta el acuerdo de das dos terceras p a rte s de • las divisiones, etc. Cuando fin a lm e n te se hizo la asamblea — el sábado 31— p r o ­ pusieron que no fu e ra resolutiva, y que m o una superación del petardismo y el reformismo. E l prim ero estuvo siempre, como norma general, contra la organi­ zación de masas del movimiento estu­ d ia n til; el segundo postuló también siempre, la organización de Centros de aparato, vacíos de combatividad, con el único propósito de u s u fru ctu ar los se­ llos de goma, y las siglas. Ambos fueron enemigos de los centros u nitarios, com­ bativos, democráticos y de masas. E l movimiento del Buenos A ire s hizo surgir, en 'la movilización contra Quartin o , un centro de combate. F u e p o r eso que tanto el P L S como la C A E M , el viernes (antes de la asam blea), soste­ n ía n que no había que sacarla, “ que las condiciones no estaban dadas ’ \ el paro se vo tara en la p u e rta m is m a del colegio, el lunes, ¡j, la h o ra de e n tra r. Se opusieron a la extensión de la lucha a los otros colegios (aceptan solamente que se saque un boletín m eram en te in­ e l miércoles o jueves. E l verdadero problem a que se escon­ día, tanto detrás de la a c titu d a as u m irante las negociaciones con los padres,, como detrás de las discusiones sobre la s medidas a tom ar, era la C O N C E P ­ C IO N D E L A S D IS T IN T A S C O ­ R R IE N T E S S O B R E E L C E N T R O . L o que se in ten tab a eon todas las ma­ niobras dilato rias, eon los argumentosseudodemocrátieos con q u e se quería, im p e d ir la resolución d el p aro , era que el movimiento no triu n fa r a con los mé­ todos de la m ovilización d e masas. Sa­ q uería e v ita r que el C en tro se co n v irtie ra en u n verdadero organismo de m a­ sas y de combate. E L TRIUNFO D E L M O VIM IENTO E l lunes 2, a la mañana, no se logró» ^ fectivizar el p aro. E l colegio estaba su­ mamente desorganizado, y la asamblea del sáhado no había tom ado la resolu­ ción exp líc ita de p a ra r y organizar los piquetes. Sin embargo, ig ualm ente, durante to" da la m añana se v iv ió en las aulas unt clim a de agitación y descontento. A l a salida de ese tu rn o, en asamblea con­ Los Secundarios en Ascenso L a lucha del colegio B uenos A ires determ inó u n nuevo ascenso en la combatividad y organización délos secundarios de la C ap ital. A lreded o r ele 30 colegios in tervin iero n , de una u o tra manera, en el movim iento de solidaridad con el Buenos A ire s , merced, fundam entalm ente, a la actividad de agitación desplegada por la T E R S . C o n tra 1» disposición esgrim ida para p ro h ib ir el centro en el Buenos Aires, otros colegios contestaron . . .con el avance en la construcción de su propio centro. L a movilización alcanzó sus puntos culminantes en e l M it r e , en el M oreno y en el Liceo N 9 1>. Colosal p olitización de alumnos, in c lu id o s hasta los de segundo año. E n el M itre los compañeros polem izaron e n "tribuna abierta con el rector. E n el Liceo 1 se contestaron p o r es crito las diatribas de los directores. L a moviliza­ ción culminó el martes o de agosto; más de 2 0 0 compañeros se concentraron en un acto fin alm en te asegurado por la T E R S , en Cicncas Económicas. V e­ n ían a re p u d ia r las sanciones e n el Buenos A ire s y term inaro n ^celebrando el triu n fo y haciendo e l ba’iance político .correspondiente. A d e la n te ! ¡Cons­ t r u ir la Federación E s tu d ia n til d e Masas! Este problema decisivo de la cons­ trucción del C entro fu e lo que opuso a la T E R S , de u n lado, y a¡ C A E M y P L S , del otro, respecto a como encarar la lucha contra los sancionados. P a ra la prim era era fu nd am en tal d esarrollar e l método de las movilizaciones más am­ plias, p a ra asegurar la existencia com­ b ativ a del C entro reeién iniciado. P a ra los segundos, h abía que h acer ab o rtar ese centro. Por eso se plegaron a los mé­ todos negociadores de los padres, que tampoco se interesaban p o r el fu tu ro del Centro de Combate. L A SEMANA D E L CIERRE E l rector, además, resolvió c e rra r el i colegio por tres días (que luego se ex­ tendieron a cinco) p a ra “ estud iar las medidas a t o m a r P a r a desorganizar a l movimiento. D urante esa semana se desarrollaron importantes discusiones en el. seno del Centro (en el cuerpo de delegados, en los cursos, en e l ejecutivo) que giraban Represión Contra Secundarios L a lucha en el Buenos Aires y la agitación -en los colegios secundarios de ’a C apital han desatado las iras represivas dfel gobierno. L a T E R S nos ha transm itido la denuncia de que compañeros secundarios de la agrupación h an sido seguidos por policía de civil, detenidos e interrogados. A sim is­ mo se han producido arrestos, allanamientos y una campaña de in tim idación en u n im portante colegio del* centro. L o mismo ha ocurrido en un colegio de la provincia. Las fuerzas represivas han captado el ascenso irre fren a ble que se opera en secundarios. Pretenden paralizarlos con diversos métodos. E¡< me­ nester que los militantes secundarios adopten1 medidas- de seguridad que vuelque de inmediato a los colegios todo tipo de denuncia, que estim ulen la reacción en masa de los compañeros. H ay que darle u n a lección a (los •esbirros. Creen que obtendrán sus fru to s intim idatorios especulando con la corta, edad de los militantes, con la presión de los padres, etc. Se rom perán la cabeza contra la pared, contra la madurez y la conciencia de la ju v en tu d revolucionaria, orgullo del proletariado todo. v fo rm ativ o) por considerar ‘ ‘ descabellado” y “ descolgado ’’ proponer la d is cu" sión d el paro general en los otros eole- ju n ta con los compañeros d e la tarde, sov otó el paro, que se efectivizó masiva­ gios. E l martes, n uevam ente, solo T E R S im pulsó la realización d e l paro. L as otras agrupaciones se “ olvidaron .1v (es? t a vez no fu ero n democráticas) la reso­ lución del cuerpo de delegados, adopta­ da el d ía lunes a la tard e, de organizar los piquetes. Los piquetes de la T E R S fueron débiles, las agrupaciones no apo­ yaro n el paro. Los estudiantes entraron». LOS P AD RES “PROGRESIST A.S’’ CONTRA EL CENTRO D u ran te esa semana se realizaron, además, numerosas reuniones de -padres citadas por una “ Comisión de padres del Buenos A ire a ’ ’, ( “ p ro g res is ta s” ) con él f in de encarar las negociaciones con Hernández;. P o r u n lado, los padres e x ig ía n e l le­ vantam iento de todas las sanciones, y, para no “ p ertu rb ar’1’ las negociaciones y ev itar que se “ rompa el d i á l o g o h i ­ cieron reiterados llamados a los e s tir diantes p ara que no adoptaran m edidas de Hucha. L o que p retend ía esta Comisión, de padres, en coincidencia con los pe­ tardistas y reformistas, era e v ita r que las sanciones fu e ra n le v a n ­ tada^ p o r los métodos de l a mo­ vilización e s tu d ia n til.. E r a e v it a r la del colegio y de, todos los secundarios. L a C A E M llamó co n s ta n te m en te a j co n fiar en las negociaciones de lo s pa­ mente. Pero el d ía an terio r, y e l propio m ar* tes, numerosos colegios resolvieron p a­ r a r en apoyo a la lucha d e l Buenos A i­ res y contra el D ecreto Jo rg e de L a To­ rre , la “re fo rm a” , (la represión, y p o r i la legalidad de los centros de estudian.* tes, respondiendo al llam ado y a la fo r­ midable agitación lanzada p o r la T E R S en fa v o r del p aro general. Esé día, p o r orden del M inistro d© Educación, an te la ola huelguística'qu® se desarrollaba en los colegios, el re cto r H ern án dez resolvió reincorporar a los sancionados. EL M O V IM IE N T O T R IU N F Q (Continúa en la Pág. 10)] H a rte s 1C de agosto de 1971 P O L I T IC A O B E E R A P á g in a Cmntr* tu Bletm dura Cmpitalittm. P o r una N u eva B ire ce ió n O b rera de Cíate. Movilizarse por ei Congreso Clasista Convocado por SITRAC ■ SITRAM L a p olítica capitalista actual hacia lío s trabajadores y sus activistas de van g u ard ia puede ser d efin id a de un : ánodo m u y sim ple: avalancha de mise­ ria y represión. Aunque nos basare­ mos solo en las mentirosas estadísticas • oficiales, ¿qué es lo que podemos ver? U n desbordante aumento del costo de y id a , que y a ha subida a u n 4 0 % anual, ; y que el más optimista de los economis­ tas oficiales no vacila en elevar a un •50% p ara el término del presente año. U n a desocuación que supera el 6 % de la población ocupada, lo que significa rmás de 600.000 compañeros en la calle, ■o sea más de un 15% del to ta l de la cía:«e obrera. compañeros d e Sitrac-Sitram, llam an a trucciones y consignas, explicando el u n congreso d e “sindicatos combativos, carácter y el f in dc cada u n a, la opor* agrupaciones y obreros clasistas y re ­ tundidad de su u tilización, las form as volucionarios*, a realizarse en Córdo­ organizativas convenientes a cada uno ba el 28 de agosto. Llam an a este con­ de los métodos de lucha que se propug­ nan. Deberá m ostrar l a xuiidad entre greso p ara organizar el combate por los métodos de combate contra el ca­ la “ lib e rtad d e Flores. Tosco, On' pitalismo y el gobierno con aquellos garó y dem ás rehenes de la dic­ que ayudan a la superación por las ma­ tadura ; por e l levantamiento d el es­ sas de la burocracia traid o ra. A d ife­ tado de sitio y derogación de la legisrencia de los famosos “ plames secretos” lación re p res iva , en especial' las leyes de los burócratas, éste será discutido, que imponen l a pena de m uerte, la p e r rcelaborado y vigilado p o r las bases. secusión por motivos ideológicos y el L a elaboración del p la n de lucha empleo de las fuerzas armadas en la re ­ ayudará a dar una respuesta nacional presión del pueblo contra la cares' única a los problemas q u e se les p re­ t ía de la vida y por un aumento salarial sentarán a los trabajadores en la lucha de em ergencia de $ 20 .0 0 0 retroactivo de clases en el período próximo inm e­ al l 9 de j u l i o ; por la derogación de la ¿Cuál es la respuesta de la dicta’ diato. U n p lan dc lucha d e este caráe* le y de a lq u ileres ; solución in teg ral al ■dura capitalista? A p licació n del arb i­ ter, único merecedor de t a l nombre, de­ problem a de lo s jubilados; am nistía a t r a je obligatorio y la in tim id ació n conbería in tro d ucir la consigna de A U — *tra cu alq u ier intento de obtener contodos los procesos por razones grem ia' M E N T O S A L A R IA L C O N E S C A L A ■ ven ios superiores al 25%'. les, D evaluación políticas o estudiantiles” . E l lla ­ M O V IL , fren te a la m iseria y la in fla ­ mado cuenta y a con el apoyo de la In •constante de la moneda en beneficio de ción ; la consigna de O C U P A C IO N D E tersindical de San Lorenzo. los capitalistas que atesoran dólares o F A B R IC A S Y C O N T R O L O B R E R O , ¿ Por qué convocan a este congre­ •que los tienen asegurados con el ex­ contra los despidos masivos y la deso* so? ¿No existe, acaso, la CG T? ¿No te ' tra n je ro . Facilidades im positivas á to­ cupación; la consigna de PA R O A C ­ nemos miles d e sindicatos? P o r supues­ ados los ladrones de la clase burguesa T IV O Y O R G A N IZ A C IO N D E D E S to que la CGT.existe, por supuesto que■que se han llevado d in ero h acia e l ex­ TACAM óNTOS O BREROS D E COM­ el p ro le ta ria do argentino no ha p erd i‘ t e r io r p o r una suma de 8 .0 0 0 millones B A T E , p ara la generalización de la lu ­ •de dólares, a través del mercado negro. do los miles d e sindicatos que eon san­ cha huelguística y la defensa contra la gre logró e d ific a r contra el im perialis' -Negociados constantes con el im p eria­ mo y contra l a burguesía. E l congre­ ! represión; el planteo de U N A N U E — lism o, como los empréstitos que se es­ V A D IR E C C IO N S IN D IC A L R E ­ so clasista del 2 8 en Córdoba va a dis­ tá n a p u n to de lan zar en E u ro p a y V O L U C IO N A R IA Y E L C O N G R E S O c u tir cómo sa ca r a los sindicatos y a [E E U U , como la compra de locomoto­ D E B A S E S , contra la usurpación y la C G T de la parálisis, como recuperar ra s con la General M otors, como la ley freno burocráticos, por l a aplicación nuestras organizaciones .hoy .usurpa•que favorece la radicación de los ca­ del plan de lucha, por l a democracia das por u n a . burocracia traid o ra a los p itales extranjeros. E l gobierno lanus* sindical p le n a ; PO R L A S X IB E R T A — intereses de l a clase obrera. Solamente sista está desangrando económicamente D ES D E M O C R A T IC A S , FUERA uniendo estrechamente el p rogram a dc a toda la n ación trab a jad o ra y explota­ LA D IC T A D U R A C A P IT A L IS T A , combate co n tra la avalancha de repre­ d a, in ten tan d o someter a los cañeros POR E L G O B IE R N O O B R E R O Y sión y m iseria de la dictadura capita­ •tucumanos, a los pequeños campesinos P ° P U L A R . Estos son algunos de los lis ta con la lu c h a por erradicar a los de todo e l país, tolerando la evasión de puntos principales que deberían ser de* burócratas agentes de la patro n al den­ divisas, favoreciendo a la burguesía tenidamentc explicados e n los despa­ tro de los sindicatos, solamente así, po­ «on subsidios, lo que h a elevado a cifras chos que se presenten a resolución. dremos im p o n e r resonantes victorias sin precedentes el d éfic it del presu­ contra los enemigos de clase de las m a­ puesto nacional. T E N D E N C IA C L A S IS T A sas trab ajad o ras. N A C IO N A L E l terrorism o económico co n tra las F re n te al sindicalismo de colabora­ anasas se complementa con e l terrorisL a aprobación de los lincamientos ción de clases y* de paz social de los a n o -polítieo y m ilita r contra los traba* del plan de lucha debería dar lu g ar a burócratas traidores, el congreso de ¿adores. Desde mediados de jn lio , los la inmediata centralización nacional de Córdoba d eb e ría discutir la construc­ cuerpos 29 y 3? del ejército se encuen­ todos los que participen en el congre­ ción ele u n sindicalismo de clase, pro* t r a n en operaciones de búisqueda y cap­ so y a la formación de centenares de letario, basado en el principio de la t u r a de todo m ilita n te an tiim pe ria lis­ filiales. Es evidente que esta cen trali­ lucha de clases contra los explotadores. t a activo, de todo activista an tib u ro ­ zación no será posible sin un objetivo F re n te a l sindicalismo burocrático que crático consecuente. Se cuenta ya por unificador, el p lan de lucha, y solo se colabora con lo s gobiernos p roim peria­ centenares los detenidos y torturados; podrá soldar a través dtr m ía firm e de­ listas, que colabora con las agencias del tam b ié n se cuentan los muertos. N o pa­ mocracia interna, p ro p ia ele una organi­ imperialismo yanqui en A rg en tin a, que sa u n solo día sin que la d ic ta d u ra no zación de fre n te único de agrupaciones colabora con lo s partidos burgueses de "haga re cordar su disposición a u t ili­ obreras. vocación proim perialista, el congreso z a r los métodos de la g u erra civil con­ E s ta estructuración deberá ser el de Córdoba debería discutir la lucha t r a las masas. prim er paso en la conformación de una por la independencia p olítica de los Los trabajadores en fre nta n con f i r ‘ tendencia nacional sindical de clase trabajadores y por la construcción de m e za el malón de la d ictad ura en todo basada en el fren te único de todos los ¡ u n fre n te ú n ic o antiim perialista lid e­ e l país. E n miles de fábricas la patro­ que se reivindican dc una línea cla­ rado p o r las organizaciones de clase n a l debe recu lar. L o mismo ocurre en sista. E s ta estructuración es fundam en­ del p ro le ta ria d o . facultad es y colegios. Recientemente, tal y será la verdadera piedra de to* PLA N D E LUCHA e l victorioso paro regional en San Lo­ que que d e fin irá a l congreso. No debe­ renzo ha ratificado el surgim iento de mos o lv id ar que fu e ju stam ente ante E l p rim e r deber del congreso debe u n nuevo polo de combate clasista en ésto donde más de un burócrata seuser, en n u es tra opinión, la de discutir e l país. doizquierdista con pose combativa ca­ y aprobar un p la n de lucha. ¿Qué es un pituló. ¿Qué pasó sino con la C G T de p lan de lu c h a ? Un plan de lucha es el L A C O N V O C A T O R IA D E los A rgentinos? ¿Qué pasó sino eon el planteo de la s medidas de agitación, S IT R A C -S IT R A M reciente plenario de “ gremios comba­ propaganda y organización, que deberá tivos1’7 que concluyó, segün el p erió di­ Es -e n estas circunstancias que los ser resuelto p a r a alcanzar las re ivin d i' co de S IT R A C , “ en una asamblea to­ compañeros de los sindicatos F ia t Concaciones p revistas en la convocatoria. talmente inofensiva” t Deberá c o n s istir en una c a rtilla de ins­ cord y . F ia t M aterfe r de C órdoba, los Es indudable q u e existe u n cercamiento conciente y premeditado de l a dictadura contra S itra c y S itra m , con el f in de aplastarlas. La respuesta n o puede ser otra que e l plan de lu cha, l a organización centralizada de f r e n t e úlnico, la construcción de u n a co rrien te clasista de masas a nivel nacional, tam ­ bién basada en el frente único. E s ta estructuración perm itirá separar la ci­ zaña del trigo: disciplinará a los ele­ mentos combativos y de clase y deslin­ dará posiciones con quienes se m ueven en el reformismo o a l margen d e la s organizaciones obreras combativas. F R E N T E U N IC O A N T I IM P E R IA L IS T A L a estructuración de la corriente sindical clasista a escala nacional p la n ­ tea. objetivamente, l a organización de todas las masas trabajadoras no sin di­ cal izadas. no fabriles, cu un fren te ú n i­ co de lucha contra e l imperialismo y sus aliados. Este solo hecho prueba la justeza y la perentoriedad de la cons­ trucción de la tendencia clasista. P ara atra er a las masas no obreras y a las obreras más atrasadas hacia el ‘‘G ran Acuerdo Nacional” , la d ictad u ­ ra m ilita r ha venido cobijando y tole­ rando la formación! dc los frentes antiobreros como “ L a Hora de los Pue­ blos’ ? y el “ Encuentro'de los A rg e n ti­ n o s ’. L a especial im portancia que t ie ­ nen ambos para los militantes clasistas es que están impulsados, el p rim e ro , p o r el p rin cip al partido de masas, e i peronismo y el segundo, por el p rin c i­ p al partido que se reclama pro letario , el comunista. Si no se brinda a las m a­ sas trabajadoras un canal de supera-, ción de ambas variantes burguesas y progubernamentales, los sectores clasis­ tas quedarán condenados a l aislam iento y la dictadura aprovechará u n n uevo respiro. A los m ilitantes peronistas y comu­ nistas debemos indicarles: es posible rom per con las variantes burguesas; es posible ab rir una perspectiva indepen­ diente. antiim perialista, motorizada p o r el proletariado, sin caer en la fo rm a­ ción de organizaciones minoritarias, de cuadros, sectarias. ¿Cómo? R o m piendo con el frentism o burgués, estructuran­ do el fren te úmico an tiim perialista im ­ pulsado por los sindicatos y ag m p aeiones clasistas, al que se podrán in te g ra r los partidos que se reivindiquen obre­ ros y antiim perialistas. * Puede una corriente sindical p la n ­ tearse este problema -de naturaleza po­ lític a y revolucionaria? Es la v id a m is­ m a la que plantea el problema y la q u e exige su solué?ón. N o eyiste en el p a ís ninguna organización obrera con au to ri­ dad para lid e rar y a misino estjj t a r e a impostergable fuera cEe la que tien e q u e surg ir del plenario cordobés convocado p o r Sitrac-Sitram . Las condiciones s o n inmejorables p a­ ra hacer del congreso de Córdoba e l in icio de un nuevo período histo rico (ContiníLa en la Pág. 12) Página 4 . • Con Este Método Aplastaremos a la Dictadura Gran Paro en San Lorenzo E l paro del 29 de julio últi* mo, decretado por la Intersin.dical de San Lorenzo, es un nuevo paso revelador del j>roceso de acumulación de fuer* zas, en la zona más importante d el proletariado rosarino, en reí combate contra la dictadura y el capitalismo. L a clase obrera de esta “ zo­ n a in d u stria l” confirmó nue­ vamente su carácter de van* guardia del proletariado rosa* riño, ya evidenciado en el an­ terio r paro efectuado en soli* d arid ad coa los obreros cordo­ beses, el 29 de marzo. Reflejo re lativ o de esta situación es el desarrollo de la Intersindical de la zona. L a importancia fundamental de todo ésto radica en que el* pro letariado sanlorencino ac­ tú a cada vez más como claro polo de atracción de los sector res más combativos del movi­ m iento obrero de la ciudad de 'Rosario y d el movimiento estu­ d iantil. E n este sentido, San Loren­ zo comienza a alinearse con SI* T R A C -S IT R A M y el proleta lia d o cordobés, abriendo un ¡nuevo fren te de vanguardia sindical. “ CORDOBAZO” E l no m u y lejano proceso de instalación en San Lorenzo, Pu erto San M artín , Capitán B erm M e z y Granadero Baigo" rria , de grandes fábricas quí* micas, petroquímicas, de trac­ tores y destilerías, dio naci* m iento a u n a importante zona proletaria, que basa su comba­ tiv id a d en su juventud y con­ centración. San Lorenzo no ha sufrido : derrotas, n i tampoco el mano­ seo de las direcciones burocrá­ ticas peronistas, a diferencia del resto de la clase obrera rosarina, vinculada mayoritariamente a sectores industriales en crisis (metalúrgicos), atra­ sados (carne, yerbateros) o dis­ persos por su carácter semiaitesanal. Sobre esta base se fue gesr» tando en la zona de San Loren­ zo un im portante proceso de radicalización y organización, que se fu e evidenciando más claramente a p a rtir del “ Cor" dobazo’ Este proceso se fue manifes­ tando en el paulatino surgi­ miento y afianzamiento de a l­ gunas direcciones sindicales combativas (sindicatos de em­ presa, internas, delegados), y en el cumplimiento masivo dé los paros nacionales y regiona­ les de los dos últimos años.Es" to confirmaba que algunas de­ rrotas sindicales parciales ante­ riores a mayo del 69, no habían aplastado a la vanguardia san" lorencina, sino que la templa­ ro n p a ra fu tu ra s experiencias. U n im portante paso adelante fue la constitución en 1970 de una Intersindical de la zona, integrada, entre otros, p o r los sindicatos de Químicos, Q u ím i­ cos Papeleros, Petroquím icos, Aceiteros, etc. E l rol de la In ters in d ic al re ­ fle ja el paulatino, p ero firm e y constante, proceso de m adu­ ración p olítica de los obreros sanlorencinos. D u ran te todo un período la In ters in d ic al se li­ mitó a ser la “ iz q u ie rd a ” del Bloque Gremial Peronista de la C GT rosarina, de clara ins­ piración gozzerista, oposición burocrática a la camándula neovandorista del G alván (U . . O.M .) y Patalagoitía (v id rio ). Este año la evolución de la L a dictadura parece p a rti­ cularmente interesara en rea­ firm a r su reaccionria vocación corutinuista en m a te ria educa" cional: en el 5V aniversario de la Intervención m ilita r a las Universidades Nacionales ha colocado en el rectorado de la Universidad de Buenos A ires a Bernabé Quartino, p rim e r interventor de la F a c u lta d de Ciencias Exactas, la más ata­ cada y reprim id a p o r e l on" ganiato en 1966. Luego de 5 años de intervención universi­ ta ria — cumplidos el 29 de ju ­ lio— el ascenso de Q u artino constituye u n a reafirm ación de los objetivos lim itativo s, re­ presivos y p roim perialistas de la dictadura m ilita r. Con ejemplar cinismo, luego de ha­ blar de “ p articipación es­ tu d ia n til”, el nuevo rector comenzó el ejercicio de su car* go aprobando la represión de­ satada en el Nacional Buenos Aires con la expulsión de 7 compañeros. 5 AÑOS D E IN T E R V E N C IO N M I L I T A R L a intervención m ilita r a las universidades nacionales en 1966 constituye u n salto cualitativo reaccionario en el ataque a las conquistas sub­ sistentes de l,i “ re fo rm a u n i­ versitaria1•" (gobierno t r ip a r t i­ to, semi autonomía, semi lib e r­ tad de cátedra, abolición m u y lim itada (antiperonismo) de la discriminación ideológica, cá­ tedra paralela) con el objetivo de desarrollar a fondo la su­ bordinación d irecta d e l ap ara­ to educacional a las necesida­ des d e los grandes monopolios imperialistas. Cinco años de intervención han provocado una profunda crisis en to d a la .estructura educativa*. L as u n i­ versidades se h allan en u n as­ tado de grave deterioro, las clases en casi todas ilas fa c u l­ tades del país se dan en fo rm a Martes 10 de agosto de 1971 P O L IT IC A O B R E R A situación p o lític a n acional y el ejemplo de la clase o b rera cor-, dobesa, fu ero n acelerando l a radicalización de San L o ren zo . E s ta situación hace que la I n tersindical se va ya “ despegan" do7’ de la ó rb ita del B lo q u e G re m ia l; este despegue es im ­ pulsado por los sectores de la In ters in d ic al que se re cla m an marxistas. L a heterogeneidad p o lític a de las direcciones sindicales d e i organismo sanlorencino, ( r a d i­ cales, peronistas “ duroá” , co­ munistas, socialistas revo lu cio ­ narios, sindicalistas in depen­ dientes combativos) se e x p lic a p o r el hecho de que San L o ­ renzo no ha culminado aúai su proceso de evolución com bativa en el plano sindical. C O N T IN U ID A D C O M B A T IV A E l paro del 29 es la continui” dad del p aro an terio r efe ctu a­ do en solidaridad con Córdoba. S in embargo, este paro del 2Í) de ju lio supera al an terio r p o r su m ayor audacia y p o r la m a ­ y o r p artic ip ac ió n p o lític a d e bases, T A Q U E • F U E R E ­ FRENDADO P O R ASAM ­ B L E A S F A B R IL E S . XJn extrao rd in ario operativo represivo de miles, de policías de la G u a rd ia de In fa n te ría de Rosario y de civil y G en dar­ mería Nacional, im pidió la rea­ lización. masiva de la Asam­ blea' convocada para la tarde, cuyo propósito era debatir uníprograma de lucha a presentar en el próxim o plenario de C ó r­ doba. L a sistemática tarea poli" cial de detener a los obreros y estudiantes que llegaban a SanLorenzo y el p a tru lla je de los accesos a la Asamblea, logró* que solo concurrieran 70 com:pañeros. E l saldo de la repre­ sión fu e de más de un centenar de detenciones, entre ellas lar del secretario ad jun to d el S IT R A C . Muchos obreros tu vie­ ron que volverse sin poder pau­ sar el cerco policial. L a Asam blea luego de denunciar las detenciones pasó a cuarto interm edio. Es necesario realizar una g ran tarea de agi" tación y organización para ga* Universidad: Cinco Años de Intervención Militar El Nom bramiento de Quartino absolutamente p re c a ria : sin aulas, sin m ateriales, s in n iv e l cien tífico y pedagógico. E l desmantelamiento de n u m ero ­ sos centros de 'investigación, la extranjerización de la c u ltu ra , e l agravam iento de ias re s tric ­ ciones presupuestarias, comple­ ta n el cuadro de descalabro y desquiciamiento de la ensezan" za superior en nuestro país. E s ta secuela de consecuen­ cias absolutamente reacciona­ rias es inevitable y es in h e ­ re n te a l domino im p e ria lis ta en el terreno de la educación p ública. P o r ello la “ reestru c tu rac ió n u n iv e rs ita ria ” no •conforma u n marco de su p e­ ración d e los vicios de la U n i ­ versidad reform ista, lib eral, si" no u n avasallamiento de los lim itados rasgos democráticos que aún eonsrevaba. A sí es co­ mo lim ita el acceso a la ense­ ñanza superior, promueve la ’ descalificación del p rofesional u niversitario, impone el oscu­ rantism o ideológico y represi­ vo. L a p o lític a educacional de l a d ic ta d ura m ilita r es u n e n ­ gendro reaccionario en toda la lín e a. S IT U A C IO N A C T U A L Con Q u a rtino se impone en la dirección u n ive rs ita ria el a la más derechista y p ro iim p e. ria lis ta ddl actual espectro p r o ­ fesoral burgués, dispuesto a desarrollar a fondo los p ro ye c­ tos lim itativo s y represivos d el gobierno lanussista. E n lo im nediato se abre u n período de enfrentam iento a la reaccio­ naria p o lític a educacional ofi­ cial y u n a -etapa de agrava­ miento de la crisis educacional. La clausura d ire cta de algunas instituciones u n iversitarias co­ mo producto de la f a lt a de p re­ puesto es u n a amenaza latente, y vuelve a comentarse el des" mantelaaniento de algunas ca­ rreras como en el caso de So­ ciología y Psicología de B ue­ nos A ire s. L a táctica de la trenza ad icta a Q u artino con­ siste en p a r t ir de la actual si­ tuación de desquiciamiento y de su p rofundización para promover u n reordenamiento educativo a favor del im p eria­ lismo. E l préstamo de 40 m i­ llones de dólares del B ID , a punto de aprobarse en el Con" sejo de Rectores, está destinado a las facultades “y a organiza­ das, esto es, donde ya h a co­ menzado a desarrollarse la reestructuración dictatorial. (“L a O p in ió n ” 21 de ju lio ). Sobre la base de este programa proimperialista, el “ nacionalista’’ Q u a rtin o tiende a vin cu ­ larse con sectores de tin te desarrollista d el cuerpo profeso­ ral (como la trenza dirig ida por A rg en tato en Ciencias Económicas de Buenos A ire s ). Con este objetivo se in te n ta ría cambiar la a c tu a l L e y U n iv e r­ sitaria en fa v o r de un instru" mentó lega’l más “fle x ib le ’" y menos “ reglam en tarists” . Sin ra n tiza r la m asiva concurren­ cia a la p ró xim a asamblea de los obreros sanlorencinos. Si bien el conjunto de las o r' ganizaciónes- políticas de ízquierda (con exclusión de F E N y F r a n ja M o ra d a que 3 la misma hora realizaban u n a conferencia con Rodolfo P u ig grós sobre “ el intelectual y la realidad n acio n al” ) concurrie* ron a la asamblea, solo el So* cialismo Revolucionario y nues­ tro p artid o y la T E R S , trab a1'jaro n a fondo por la p ropagandizaeión del acto. La combatividad del proleta-* riado de la “ zona in d u stria l” ; erigido hoy claramente en va n ’ guardia rosarina, abre enormes, perspectivas a l desarrollo de la lucha regional contra la repre* sión policial y m ilita r (en meó­ nos de 15 días fu ero n declara" das “ zonas de em ergencia’* Gálvez, Funes y San Lorenzo) y puede ju g a r u n im p o rtan te rol im ifie a d o r en torno a los conflictos latentes en F erro v ia­ rios, Carne, docentes y otroa gremios. embargo, no h ay n in g ú n p ro ­ grama ca p italista capaz d e u n ificar y homogeneizar a la. direcrión u n iversitaria burgue­ sa: e^ embate de las masas, en im período de radicalización. obrera, p ara liza u n a y o tra vez la ofensiva reaccionaria tam ­ bién en el ám bito ed u c ac io n al ABAJO L A L E Y U N IV E R S IT A R IA La crisis en todos los nive* les educativos, p rim a rio , se­ cundario y u n iversitario se acentúla d ía a d ía a u n ritmovertiginoso. Los docentes eon* tinúan sumergidos en la mise­ ria s a la ria l; los no docentes en’ frentan el saboteo guberna­ mental a la sanción d e fin itiv a del esca:ifón que la d ic ta d u ra •dice no estar en condiciones, ide solventar; los auxiliaresdocentes han reiterado sus de~ mandas salariales luego de va­ rias medidas de fu erza d u ra n te ei cuatrimestre; Q u artino h a desatado la represión ab ierta •contra el N acional Buenos A i- ' res. Los enfrentamientos con- N tra el gobierno que se presen­ tan cotidianamente se combina­ rán en un estallido huelguísti­ co generalizado en u n futuroinmediato. L a un id ad de acción, la •unidad de combate y la fé rre a centralización de todas la » movilizaciones actuales está a la ordert dtíl día. H a y que ex­ tirp a r ol petardismo liq u id a d o r L a lucha estudiantil, la lucha docente, la lucha uo docente no pueden desarrollarse p o r separado. H a y que co n s tru ir Centros de Estudiantes de m a­ sas. combativos y an tiim pe ria ilieita» en todos los colegios y facultades. H a v que co n s tru ir n n c iran F R E N T E D E T O ­ DOS LOS S E C T O R E S D E L A E D U C A C IO N contra la ‘ ‘reforma educativa” , la rees*tructuración u n ive rs ifa ria’y i ' í l represión d ictato rial. Marios 10 de agosto de 1971 P O L IT IC A O B R E R A Página 5 LA SITUACION POLITICA ¿ n Jos últimos d ía s -h a recrudecido d e una manera n o to ria la ac tivida d re­ presiva de la d ic ta d ura m ilita r, p a rti­ cu larm en te en Córdoba, Rosario y T u cmnán. Decenas y decenas de ciudadanos han sido detenidos, torturados y puestos a disposición del Poder E jec u ­ tivo. También en la C a p ita l y en L a P la ta estos operativos han adquirido u n a g ran envergadura. U n reciente co­ municado del 3? cuerpo de ejército, que comanda López A u fra n c , pone bien en claro la n atu raleza de estos aconteci­ m ientos: '“ Según el comunicado del comando del 3’ cuerpo dc ejército, d el 16 de ju lio pasado, éste viene desarrollan­ do operaciones m ilita re s de seguridad, .en cum plim iento de la le y 19.081 que prevé la represión de la subversión in­ terna, el terrorism o y demás hechos co­ nexos. Con t a l motivo en la m adrugada de h o y (3 de agosto) se realizaro n d i“ versos procedim ientos en las ciudades de Córdoba y T ucum án que dieron p o r mesTtltado la detención de ciudadanos...’ ’ /.Q ué sig nifica este comunicado? Es •ev. dente que las P F .A A . han salido a reem plazar la acción de los comandos paralelos y han tomado directam ente a su cargo el secuestro dé las personas con fin es intim ida-torios y represivos. T a l acción no se ha lim itad o contra los acusados de terrorism o, sino que lo ca­ racterístico de los últimos días es la re­ presión contra activistas sindicales, co­ mo lo prueban las detenciones en. San Lorenzo y la ofensiva que hemos com* probado en diversas fábricas de la Ca­ p ita l y el G ran Buenos Aires. "extremando la lucha de clases a n iv el nacional y m undial. \ La represión b ru tal que se desenvuel­ ve en la actualidad está ligada a l “ a" cuerdo nacional’ \ E l gobi erno lanussis­ t a no puede desprenderse de su táctica de ncuerdismo con P e ró n en el marco Se una salida electoral negociada. Los gorilas en el poder necesitan f o rja r el reagrupámiento más am plio posible de 3as distintas capas de la. "burguesía. Se ven obligados a lle va r adelante esta orientación en medio de una mayúscula crisis económica, ligada a la crisis f i ­ nanciera del capitalismo m undial, y del ascenso y radicalización d e las masas. Debido a esta situación antagónica, ol lanussismo im pulsa u n a política de ma­ niobras y negociaciones estrechamente unida a un incremento de- la represión. Pretende fre n a r el ascenso con métodos policiales y con el reforz a miento de su base de sustentación. Asimismo, me­ diante la exacerbación de los métodos •del Estado policial im pulsa la depura­ ción de las fuerzas, políticas legalizadas, dentro de los partidos solo quedan co­ m o potables y bien vistos los incondi­ cionales del gobierno. Es lo que ocurre, _ por otra parte, con Paladino y con B al* bín. Aunque Lanusse no puede retornar al totalitarismo onganiano. es mucho más audaz en la puesta en marcha de los métodos de la guerra c iv il, como lo prueba la situación ac tua l. Onganía, en realidad, gracias a las posibilidades que Iró n icam en te, m ientras los diarios anunciaban que se estaba discutiendo la elerogación de la ley anticomunista, la p olicía ra tific ó sil vigencia, prohibió el acto del P .C ., h a cerrado sus locales re­ cientemente abiertos, se acaba, de san­ cionar u n a condena en función de esa Jey, etc. E s que la le y mencionada no va a desaparecer: M o r R oig le d ijo a P a­ noram a ( ju lio 27 ) que se piensa en el dictado de u n a “le y su s titu tiv a” y el general Sánchez de Bustam ante precisó (el 30 de j u l i o ) .- “ u n a ley de defensa de la democracia” . Estamos ante un co­ losal desarrollo de la represión y d el Estado policial. Es in dudable que el lanussismo está perdiendo los estribos y q u e .la repre­ sión m ontada y desencadenada tiene mayor viru len c ia que la conocida bajo el onganiato. S ería u n erro r, sin embar­ go, suponer que estamos retornando al totalitarism o d el gobierno de la morsa. E l equilibrio sobre e l que reposaba el gobierno de Onganía, cuyos tres compo­ nentes básicos eran el retroceso de la clase obrera (hasta e l “ cordobazo” de mayo del 6 9 ” ) , la ofensiva m u n d ial del im perialismo (hasta la ofensiva “ T e t ” de febrero de 1968 y el m ayo francés de. 1968) y la atenuación de las diver­ gencias interburguesas dentro del país" -'fbastar,-aproxim adamente, p rincipios de 1969; crisis presupuestaria y de car­ nes), este eq uilibrio h a sido quebrado, Según se díee, los mandos supues­ tam ente golpistas habrían llegado a la conclusión de que a Lanusse se le está yendo la mano en las negociaciones con Perón, de que a corto plazo todo el maniobrerismo va a llevar hacia u n ca­ lle jó n sin salida, de que Lanusse — en su política dc equilibrio con los dis­ tintos sectores burguesse— está de­ jando que la situación económica que­ de fu e ra de control, de que, en d e fin i­ tiva, no es lo suficientemente d uro eu m ateria represiva, etc. Además, temen -q u e u n a seria política comprometa a todos los altos mandos y dé paso a un golpe de coroneles nacionalistas. E l carácter del eventual golpe, tie­ ne dos variantes. Que se tra te de una acción concertada entre los mandos de la Aeronaútiea, -con in flu en cia onganiana, y el ejército. E n este caso, podría quedar en suspenso el planteo electo­ ra l, a b rir un período d ic ta to rial neto del tipo formulado por el documento del “ C o m a n d a n te d ifu n d id o en mayo último. E n caso de que se realice bajo insipiración to ta l de los mandos lan u sistas, éstos fija ría n inm ediata fecha de elecciones — p a ra n eu tralizar oposicio­ nes en los partidos— y acen tu arían la represión y los mecanismos p ro sc rip tivos. Gruneisen, presidente del Banco C entral, y Aísogaray habrían dado su visto bueno a l planteo y h abrían asegu­ rado la obtención de empréstitos exter­ nos. E s que, en suma, el o bjetivo del golpe sería descargar la crisis económi­ ca. sobre das masas, con los métodos del acuerdismo contrarrevolucionario y la represión semifascista. E n este planteo no quedarían derogados n i el “ A c u e r­ dó’ ' n i la represión, ingredientes del cóctel lanussista. tero R u iz , que hacen agitación entre u n sector d e pensionados y los taxistas d e la C a p ita l Federal, respectivamente; o P a la d in o y Balbín. E s ta caracterización exp lica el desenvolvimiento de los métodos de la g u erra civil que ya tienen expresión dentro del lanussismo, y a l que “ L a Prensa ” no puede acusar de demagogia sindical como a Onganía. C u alq u ier desviación seria de esta línea p recipita­ r ía el golpe contra Lanusse p o r p a rte de los propios mandos lanussistas. Es ante esta situación que un im ­ p o rta n te ala de la burocracia, los 60, vuelven. Lacia el planteo del “ partido obrero laborista” , en función de inte­ grarse a un nuevo m ilita r bonapartista. y, en es te caso, disolverse. E s que el proyecto lanussista no se basa en -la» organización de las prebendas para la b u rocracia sindical. F R E N T E UNICO A N T I IM P E R IA L IS T A B O N A P A R T IS M O Y G U ER R A L IV IL B E P R E S IO N Y “ A C U E R D O N A C IO N A L ” cusiones sobre los ascensos. P e ro cabe n o tar que ju n t a a estos rum ores se ha notado u n endurecim iento en los voce­ ros de la burguesía gorila ( L a Prensa, la Cám ara d e Comercio, A C IE L , etc.) respecto a l gobierno. t m p para imponer un disciplinamiento d e l proletariado en frío , no necesitó eje­ c u ta r en la misma medida’ la represión e n caliente. E s que el período actual es d e una agudeza mucho m a y o r de la luc h a de clases. R E P R E S IO N Y N U E V O GOLPE 1 Durante la semana pasada se han vuelto a escuchar rumores- de golpe m ilita r, el que estaría encabezado por López A u fra n c y el general Sánchez co n el apoyo de la mayoría del general a t o hasta ahora lanussista. Existen quienes sostienen que estos rumores son apenas chimentos que se elevan en vo­ lum en cada vez que se acerca el f in de a ñ o y comienzan en el ejército las dis­ E l gobierno de Onganía 'fue u n gobierno que intentó estructurarse como bonapartistas, -lo que se evidenció en su propósito de estructurar un p artid o o ficial, corporativo, con la burocracia sindical. A ugusto Vandor, que había postulado un 4 ‘ partido obrero laborista “ bajo el gobierno de Illia , no volvió a hablar del tem a bajo Onganía, eon el que firm ó una tregua entre octubre de 1966 (convenio m etalúrgico), y más precisamente marzo de 1967 (d erro ta del plan de lu cha), y mayo de 1969. E l gobierno de Lanusse, fie l conti­ nuación del aramburismo, ha desecha­ do el intento bonapartista, aunque no deje de prom over la neu tralid ad de la burocracia sindical. Su objetivo se orienta, no hacia la burocracia obrera, sino hacia los partidos pequeño-burgueses. L a represión 'lanussista se comple­ m enta con la demagogia social entre las capas interm edias; por eso están en auge hombres como M an riq u e y M o n ­ L a represión y el acuerdismo lanusistas no serán contrarrestados n i por el terro rism o , que alim enta la represión, n i por e l frente electoral de izquierdas, que fortalece al acuerdismo. L a fo rja de una alternativa independiente de los fre n te s políticos burgueses debe ser a l mismo tiempo un instrum ento que sirva p a r a romperlos. H a y que organi' za r un F ren te que arrastre y organice a las masas peronistas y a los sectores que siguen al stalinismo, contra la H o ra y contra el E N A . P o r su n aturaleza, debe sen combativo y de masas, esto es, antiim perialista. H a y que lla m a r a los sectorcs d e la izquierda peronista a qne rompan efectivamente con la H o ra , in ­ tegrando un frente único an tiim peria­ lista, c u y a hegemonía la deb erán tener las organizaciones obreras representa­ das por sus congresos de bases. E l p le­ n ario clasista convocado p o r S I T R A C S I T R A M para el 2S de agosto es u n a o p ortunidad inmejorable para constit u ir la tendencia sindical basada en e l fre n te único y la -lucha d e clases, y p ara la n z a r la constitución de-1 fren te único antiim periaista como propuesta del sindicalismo de clase. Página 6 HAY QUE TERMINAR CON E l DESATINO PETARDISTA LA PLATA: LA BATALLA CONTRA LA REPRESION E l asesinato de Maestre, con la ola de repulsa p o p u lar que provocó, coincidió en L a Pliata, en los últim os veinte días, con u n a vasta represión contra el activismo estudiantil y obrero de la zona. Los allanamientos y detenciones de estudiantes, de activistas, de astilleros, el secuestro por la policía de la estudiante AJIac, la ocupación m ilita r de L a P lata y la represión co n tra los huelguistas de Petroquímica, incrementaron aún más la indigna" ció n an tidictatorial. Se dabajn las condiciones, entonces, p a ra re­ to m ar con vig o r las luchas de la zona, por las libertades demo­ cráticas, luego d el impasse producido por el (levantamiento de la huelga de Petroquím ica y el receso universitario d e invierno. ( E X IG IR L A R E N U N C IA D E M O R -R O IG Y Martes 10 de agosto de 19711 P O L IT IC A O B R E R A Los trabajadores de P e tr o ­ quím ica tien en u n récord e n cuerpos de delegados e ■in te r­ nas despedidos en los úiltimos tres años; lo que prueba que esta fá b ric a no h a podido ser d errotada nunca en to da la l í " nea. L o mismo esta vez: des­ pués de cérea de 70 días d e hueílga la p atro n al logró su propósito de cesantear a 7 4 compañeros pagando el precio de u n aumento sa la ria l del o rNden del 45-50 por ciento. A p e ­ sar de la derrota, e l ánimo de la fáb ric a está predispuesto, una vez más, ya mismo, a e n ­ ca ra r la reorganización. Sabemos perfectamente (lo hemos documentado en este p e ­ riódico en todos los números) que la causa de la derrota h a sido el aislamiento a que con­ denó el conflicto la 'burocracia sindical nacional y regional. Sugestivamente, dos semanas después de le va n ta d a la h u e l­ ga de Petroquím ica, los b u ró ­ cratas de la zona h an decidido reunirse para re ñ o ta r la regio ­ nal p aralizada. H acerlo d u ran - A P E S A R IPE LrA D E R R O T A Retroceso Limitado en Petroquímica te e l conflicto, durante la huel* ga; les resultaba “ peligroso” , en función de u n a eventual he­ gemonía de los sectores comba­ tivos. Fue esta situación crítica la que in c id ió en fo rm a decisiva para que el 60 por ciento de los compañeros asistentes a la asamblea del sábado 17 de ju ­ lio decidieran v o ta r por el le ­ vantamiento de la huelga. O tro 40 por ciento, sin embargo, se decidió p o r la continuación. La S ecretaría de T ra b a jo h a­ bía aconsejado a la p a tro n a l que “ soportara ” los aumentos salariales mencionados p a ra “ ablandar” la situación. No podemos o m itir otros fac¡tores que in flu yero n en la vo­ tación fin a l: el desgaste de la política petardista de u n sec- C A C E R E S M O N IE A C T O C O N T R A L A R E P R E S IO N E L J U E V E S 29 Pa ra nuestro partido se trataba de promover u n a vasta movilización de todos los sectores explotados d irig id a contra la dictadura en uno de sus aspectos más im portantes: la represión icontra el movimiento obrero y las masas. P a ra e'llo propusimos objetivos concretos de movilización: ¡ Que renuncien M o r-R o ig y e l je fe de Po licía ! ¡Que declaren públicamente los responsables de los organismos de seguridad p ara investigar los órganos p arapoliciales de secuestro y asesinato! E sta orientación fue atacada por las corrientes petardistas .con-la siguiente fundamentaeión.- “no se tra ta d e p e d ir la mo­ dificación p arcial de la dictadura, sino de hacer la revolución p a ra d erro ta rlan . .. Lo que el sectarismo (p etard is ta o re fo r­ m ista) no “ entendió” ; es que hay que tra b a ja r p o r lias condi" ciones que harán posible derrotar a la dictadura, im pulsando efectivamente, en cada momento, el movimiento de masas por1 las libertades democráticas. Las masas están dispuestas a b ata­ lla r contra la represión y por las llibertades públicas, a ú n antes de sentirse capaces de tomar el poder en sus manos. ¿Quiénes son M or-Roig y Cáceres Montó ? E l m inistro “ civil!^ de la dictadura m ilita r es el agente de negociación del lanussismo ante Perón y el radicalismo, p o r el ‘ ‘Acuerdo N acio n al” . E l otro, capitoste de confianza del p re­ sidente, es la cabeza del gorilismo represivo. A l cen trar la lu ­ cha contra estas figuras, nuestra intención era d arle una ex­ presión A L M O M E N T O C U L M IN A N T E de indignación p opular co n tra el asesinato de Naestre, ligar este momento culm inante a ia lucha contra el estado policial, y lig a r esto u ltim o a l combate contra el capitalismo mismo. E l petardismo no entiende nada de esto porque su objetivo es suplantar a l proletariado por la pequeña burguesía despla­ zada, lo que le impide entender los métodos y las consignas de una lucha de masas. E L S E C T A R IS M O Y LA S L U C H A S C O N T R A L A R E P R E S IO N L a lucha de masas para frenar el ueóhorde represivo ¡solio puede avanzar mediante él método de la U N ID A D D E A C ­ C IO N . Petardistas y reformistas que ignoran esto hicieron del faccionalismo el; eje de su accionar. E l ju icio público a la repre­ sión fue una flag ran te demostración de este método pequeño burgués. Su misino llamamiento faceionalista marcó el carác­ te r sectario con que se lo concibió. E n su transcurso, 300 u n i­ versitarios sufrieron una maratón de intervenciones que n i ro­ zaron la necesidad de organizar la lucha de masas contra la represión. E!i P C R se obsesionó con “ n i golpe n i elección, re" volueión, ’, los maoístas atacaron a las F U A S y exhortaron, “ a 3a calle'’, el T A R reivindicó la “ guerra revolucionaria’’ y sa­ ludó a la g u errilla peronista, T A R E A finalm ente atacó a los chinófilos por el viaje de Nixon y exigió a*; Rucci un paro na cio n a l Como si el manoseo y la chicana no bastaran, los mato­ nes de1! F .U R N provocaron e insultaron a to da la izquierda, re i­ vindicando p a ra sí la lucha de Maestre “ compañero peronista'” . J A n te la agitación de la T E R S en fa v o r de u n acto de masas contra la represión, se fo rm ó u n a comisión de tendencias que debía organizarlo. ju n to a l a FU UP, que aceptó la propuesta. L a discusión p rin c ip a l resid ió en é carácter d el acto. P a r a tia T E R S debía organizarse u n vasto plan de trab a jo p o r u n acto de masas. Con agitación so b re fábricas, sindicatos y oficinas, llam ando a co n c u rrir y a pronunciarse p o r u n p la n de lu c ha regional. P o r u n a g ran concentración p o p u lar coincidente, m e­ todológicamente, con lia necesidad de reorganización d el m o vi­ miento sindical zonal, en u n a línea independiente. Propusim os que en el acto1 se vo tara u n a declaración púlblica contra los se­ cuestros y to rtu ra s, por la re n u n c ia de Iob agentes gubernamen­ tales de la represión y a fa v io r d e'la reorganización regional mediante u n Congreso de Bases. P etardistas y re fo rm istas se opusieron fro n talm en te. U n a vez más, opinaron que lo im p o rtan te e ra “ sa lir a la caÜfle” (con esta consigna, la F U L P . in ic ió e l acto), que n ada debía resol­ verse en el acto. E s ta concepción petardista fu e apoyada p o r maoístas, P C R y foquistas d e todo tipo. E l M O R , en u n v ira je para c o n c ita rla sim p atía d e l petardismo, acordó con “ la calle'’ ’ y fu e más aML, abogó p o r l a tom a de la U n iversid ad y p o r la exclusión de todo orad o r a excepción d e l d e Ea F U L P . T A R E A , [ consecuentemente centrista, sugirió u n acto sin resoluciones n i debates. U n acto simbólico y^c&emoeratista donde todos h ab laran pero sin objetivos precisos. Ptopuso organizar, con p o sterio ri­ dad, una Asam blea de la U niversidad p a ra discu tir el segundo cuatrim estre. E l sectarismo reform ista ignora^ también la m o vi­ lizació n de masas y se re fu g ia e n las reivindicaciones académicas. E L A C TO Los sucesos posteriores fu ero n , p o r lio tanto, previsibles. E l acuerdo p o r lia agitación en l a zona fue tomado burocráticamente y se lim itó a volanteadas en La Universidad. Sólo la T E R S ac­ tiv ó a fondo con l]a orientatíSón de la u n id ad de acción. L ib ró u n a vasta lu cha po lític a en la universidad. Rea'iizó habladas y levantó cursos en A rq u ite c tu ra . Activó en la p u erta de las f á ­ bricas convenidas y realizó u n a vasta, tare a de nucleamiento de compañeros secundarios que aportaron al acto un grueso contin­ gente con su propio orador. E l acto, con 500' asistentes no fue utilizad o p a ra avanzar en la organización, sino fue cortado p a ra “ sa lir a la callé”. Unos 200 manifestantes recorrieron dos1cuadras y se dispersaron ante el ataque a tiros de la policía, la que h irió a dos estudiantes. Este hecho s a lv a je contra u n grupo de estudian' tes indefensos debe d ejar, nuevamente, u n a enseñanza. Sólo los aventureros que subestiman la acción de masas, pretenden en­ fr e n t a r !la a rb itra rie d ad de lo s aparato.^ represivos de la d ic ta ­ d u ra con actos callejeros m inoritarios. H a y que retom ar en L a P la ta la lu c h a de masas c o n tra ’lj£ represión, en repu d io a l a ta­ que a mansalva contra la manifestación que dejó dos estudian* tes heridos de bala, p o r la reorganización cla¡sista cLe?L movim ien­ to sindical y an tiim p e ria lis ta regional m ediante el Congreso de t o r de las agrupaciones repre’ en e l comité de huel­ ga, que a esta a ltu ra no daba l a más m ín im a salida, y las ilu ­ siones fomentadas p o r los “m u ­ chachosv de A van zad a respec­ t o a la benignidad d el “ la u d o " m inisterial. N i más n i menos. E l planteo de estos t r a fic a n tes era: “ que Spada (fu n cio ­ n ario gubernam ental) eonsti" tu y a su asiento en L a P la t a " y “ que garantice que entren todos los compañeros” . (L a . "Verdad, 14-7). L a liquidación de lá organi­ zación in tern a de la fá b ric a constituye u n a d erro ta que nopuede “ eq u ilib rarse” con loa; aumentos conseguidos; u n au­ mento es un aildvio transitorio* de la miseria, la organización obrera es el p o rve n ir del pro­ letariado, es la perspectiva dela abolición de la explotación, •del hombre por el hombre. Los traficantes del tro tk is­ mo nos hab lan de u n “ empa­ te” , asimilando la conquista, del aumento a la quiebra de la. Organización obrera. C on tin ú an con la lín ea ca p itu lad o ra queobservaron du ran te la huelga. ^ A pesar de la derrota, el re ­ troceso es lim ita d o y se atis b a el movimiento h acia la reorga­ nización sindical de la fábrica^ E n la misma asamblea que vo” tó la finalización d e la huelga, los compañeros se pronuncia­ ro n masivamente contra la dic­ tadura, la p atro n al y la buro­ cracia. M w ¿Cómo se explica este fenó­ meno? L a fáb ric a salió de la huelga derrotada sindicalmen­ t e , pero más p o litiza da que cuando entró en ella. D u ra n te 1 los 67 días no amainó en n a d a su combatividad y , por medio» de diversos pronunciamientos», se ligó a la. perspectiva sindi­ cal de S IT R A C -S IT R A M . E n la base de la situación a c tu a l está el hecho de que la derro­ ta no h a roto los lazos de los trabajadores de Petroq u ím ica con el resto del p ro le ta ria do en ascenso en todo el país. H o y menos que nunca se puede en­ tender el carácter re al de l a evolución de u n sector del p ro ­ letariado al m argen del conjun­ to de la clase obrera. T rinchera T e x til está p a rti­ cipando en la tare a de reorga­ nización fa b ril, sobre la base del activismo de fáb ric a y lo» despedidos. E s p o r ello que p articipa de lia Comisión Obre­ ra de Reorganización de Pe tro ­ química, que puede constituir­ se en el núicleo in ic ia l de la reorganización clasista y demo­ crática de la fáb ric a. E s ta n o es una perspectiva lejan a. L a radicalización obrera, el espí­ r it u de combate demostrado en¡ 67 días v a a resu rg ir nuevas mente. L a reorganización d e Petroquím ica está a l a .orden— del día. Martes 10 de agosto de 1971 P O L IT IC A O B R E R A Manifiesto de SITRAC-SITRAM S IT R A C -S IT R A M A LO S T R A B A -, JA D O R ES Y A L PU EB LO A R G EN ­ T IN O E l Sindicato T rabajadores Concord ( S IT R A C ) y el Sindicato dc T ra b a ja ­ d o res de M a te rfe r ( S IT R A M ) gremios ■que nuclean a los obreros y empleados •de las fábricas de F ia t de F e rre y ra , Córdoba, M A N I F I E S T A N : I ) A R B IT R A J E O B L IG A T O R IO : E l M in isterio de T rab a jo de la Nación, ■a través d el funcionario P. V . García, iha hecho conocer los laudos recaídos «obre los convenios colectivos de trab a­ jo de S IT R A C y S IT R A M . L as reso­ luciones consisten en una reproducción «e rv il y te x tu a l de las propuestas de IF ia t Concord S .A .I.C . que habían sido categóricamente rechazadas por los re ' presentantes sindicales en la Comisio­ nes Pa ritarias . L a d ictad ura impuso por vía del a r ­ b itra je obligatorio el exclusivo criterio «de la empresa monopolista, que concre" tamente sig nifica: saíiarios de hambre jpara más de 5.000 trab a jad o re s; le ga­ lización por u n nuevo período de 18 meses del esclavizante sistema de tra ­ b ajo incentivado a través del llamado "“ premio a la producción” ; jo rn a d a de horas para F o rja . Revestimiento de 'Vagones y demás Secciones en que se • cumplen tareas insalubres;, convalida" «ción de los turnos y horarios ilegales, vigentes en las dos fáb ricas; manteni" miento de las condiciones de superes* •plotación que caracterizan a los con' •tratos de trab ajo en los establecim ien­ tos de F ia t. D e t a l manera, los arbitra je s fueron •■el eco de la voz d e l a p atro n al y la in* disim ulada ra tific ac ió n de la id e n tifi­ cación to ta l de los intereses de ]a dictad u ra burguesa con 'ios de los monopo* lios y clases dominantes. I I ) A N T E C E D E N T E S : L a nueva agresión d el régim en y de la p atronal -contra los sindicatos clasistas de F ia t •es u n eslabón más de una larga cadena -de atropellos. Seguidamente se señalan algunos de los antecedentes correspon­ dientes a *os últim os meses: a ) E n carcelam iento de decenas de activistas y dirigentes, permaneciendo a ú n confinados en l a cárcel' de General JRoca (R ío N e g ro ), a disposición d el P .E .N ., los compañeros Gregorio F L 0 R E S , Pedro S A R A V I A . R aú l A R G U E ­ L L O y V icente C A M O L O T T O , y en la cárcel de Encausados de Córdoba «1 compañero José F E R R E R O . b ) Ordenes de captura y persecu­ ción p o lic ial contra numerosos compa­ ñeros de S IT R A M y S IT R A C , invo­ cándose el Estado de Sitio (E n tre ellos, M asera, D íaz, V illa lb a , B iz z i, Pagnani" n i, Páez, Castelo, Clavero, Suárez, Arr g añaraz, Torres, O r o p e l); apaleamien­ tos y vejámenes (A lta m ira , Gal'n, C ió •ccia, M éd ici, F ro n te ra, C o rté z ); agre­ sión a balazos (J im é n e z ); intentos de secuestro ( S u f f i ) ; y atentados con bombas (Asesor letrado C urutehet, ase­ sores médicos Moscovich y Bronstein, colaboradora en la asistencia de presos, D ra . A g u a d ). c) Despidos de representantes g re­ miales, allanamientos e intervención a los dos sindicatos, medidas dejadas lu e­ go sin efecto por la firm e resistencia obrera, con excepción de Üas arb itra ria s .«..cesantías, de los-delegados P alada y Y an ez, quienes aú n no han sido re in ­ corporados. d ) Promoción por a n te los T rib u ­ n ales de la Provincia de u n a causa pe­ dos de dirigentes y varios centenares n a l y c ivil contra los 3.000 trabajado­ de ac tivistas; nuevos procesamientos r e s que ocuparon la fá b ric a de Mecá­ penales masivos y encarcelamientps; n ic a de Automóviles el 14’ y 15 de ene­ re tiro de la personería g rem ial de S Ir o del corriente año, m aniobra perse­ T R A C y S IT R A M ; inclusión p o r de­ cutoria sin precedentes co n tra la clase creto de los trabajadores de F ia fT d e obrera mediante la cua'i se pretende F e rre y ra en la jurisdicción g rem ial de no sólo el procesamiento pen al sino o tra organización, cuya dirección está también el resarcimiento c iv il de los da­ ligada a i partieipaciionismo y a Rubens ñ o s y pérdidas de producción alegados San Sebastián. p o r la empresa F ia t, es d ec ir e l embar­ L a dictad ura, la patronal monopolis­ go y ejecución sobre las escasas perte­ t a y las burocracias sindicales traid o ­ nencias de los obreros; iniciación por ras atacan constantemente a los obre­ a n te !a Justicia Fed eral d e un juicio ros de F ia t porque éstos, desde l a re­ pexia'i eontra el compañero Curutehet, cuperación de sus sindicatos con las abogado de los sindicatos, p o r exclusi* Asambleas y tomas de fáb rica de marzo, v o s motivos de represión po lític a y gre­ ab ril, m ayo y junio de 1970, h an asu­ m ia l. mido decididamente la defensa d e sus III ) L O S P R O P O S IT O S D E L Aintereses de ¿la-se y han resistido l a po­ lític a de hambre, entrega y represión D IC T A D U R A : Los términos extrema­ de la dictadura. damente injustos e irrita n te s de los landos oficiales dictados sobre los con­ L a provocación de los enemigos del venios constituyen una deliberada pro­ pueblo a S IT R A C y S IT R A M es un vocación. Se quiso o rig in ar la reacción ataque al conjunto de la elase obrera d e los obreros de F ia t, en e l momento argentina, que realiza a. través d e los preciso elegido por el régim en y !ia pa­ sindicatos de F errey ra u n a de sus más tronal p ara descargar la inm ediata y profundas experiencias de democracia violenta represión m ediante las fu er­ p roletaria. F ren te a la concertada z a s de polieía, gendarm ería y ejército agresión, S IT R A M y S IT R A C manten­ drán in alterable su conducta sindical­ q u e se tenían a l apresto desde varias horas antes de la n otificación de las re­ mente clasista y políticamente revo lu ­ soluciones. cionaria, apoyándose en la fé rre a u n i­ La otra p arte del p'ian represivo dad, conciencia y combatividad de sus contra el movimiento obrero de F ia t bases y en la indisoluble alian za con h a sido ya denunciada por S IT R A C y los trabajadores y capas sociales opri­ S IT R A M y corroborado p o r diversos midas que a lo largo y ancho de la pa­ órganos de prensa conforme eon sus tria luchan por la liberación nacional propias fuentes de información. E n y la construcción del socialismo, p o r la síntesis, el plan es el siguiente: despi­ edificación de una sociedad más justa, C O N V O C A T O R IA ,'ITRAC y S IT R A M C O N T O C A N A L O S S IN D IC A T O S C O M B A T IV O S , A LAS A G R U P A C IO N E S Y O B R E R O S C L A S IS T A S Y R E V O L U C IO N A ­ RIOS D E T O D O E L P A IS , A Ü N C O N G R E S O , A R E A L IZ A R S E E N C O R ­ DOBA, E L S A B A D O 2 8 D E A G O S TO D E L C O R R EEN T E A Ñ O , A L A S 9 HORAS, A F I N D E C O N S ID E R A R E L S IG U IE N T E T E M A R IO : A ) A N A L IS IS D B E jA S IT U A C IO N E C O N O M IC A , P O L IT IC A Y SOO L & L D E L P A IS , V IS T A D E S D E L A P E R S P E C T IC A D E L P R O ­ L E T A R IA D O . B1 S IT U A C IO N A C T U A L D E L M O V IM IE N T O O B R E R O , IN F O R M E S S O B R E L O S A V A N C E IS D E L A IN T E R V E N C IO N E S T A T A L Y L A C O R R U P C IO N D IR E C T A D E L O S C U A D R O S S IN D IC A L E S P O R L A B U R G U E S IA : D E N U N C IA D E L A IN M E N S A L IS T A D E T R A ID O R E S Q U E SE H A N E N Q U IS T A D O E N E L M O V IM IE N T O O B R E R O , A LiO TjA RGO Y A L O A N iC H O D E L P A IS , D E S D E L A C G .T . N A C IO N A L H A S T A L A M A Y O R IA D E R E G IO N A L E S Y S IN D IC A T O S . IN F O R M E S O B R E E L D E S P E R T A R A C T U A L D E L A C O N C IE N C IA D E C L A S E E N L O S T R A B A J A D O R E S , Y SO­ B R E SUS L U C H A S P A R A R E C U P E R A R E L M O V IM IE N T O S IN ­ D IC A L . C) C O O R D IN A C IO N N A C IO N A L D E L A S P R O T E S T A S Y L U C H A S D E L A C IA S E O B R E R A Y L O S S E C T O R E S P O P U L A R E S P A R A C O N T R A R R E S T A R L A E X P L O T A C IO N , L A E N T R E G A D E L A N A C IO N A L O S . C A P IT A L E S IM P E R IA L IS T A S Y L A A C E N T U A ­ C IO N D E L A P O L I T IC A R E P R E S IV A . S O L ID A R ID A D O R G A N I­ Z A D A C ON L O S T R A B A J A D O R E S Q U E ENT C A D A G R E M IO . L U ­ C H A N P A R A IM P U D O R A L M O V IM IE N T O S IN D IC A L U N A L I ­ N E A C L A S IS T A Y R E C U P E R A R P A R A L A C LAS E O B R E R A S U S O R G A N IZ A C IO N E S . ESTA C O N V O C A T IR IA E S T A A B IE R T A A T O D A S L A S O R G A N IZ A ­ C IO N ES G R E M IA L E S Y A G R U P A C IO N E S O B R E R A S D E B A S E QUiE L L E V E N A D E L A N T E U N A L IN E A A N T IP A T R O N A L , A N T ID IC T A T O K IA L Y A N T IB U R O O B A T IC A . Q U E C O IN C ID E N E N R E P U D IA R L A S O P C IO N ES Q U E O F R E C E L A B U R G U E S L A : N I L O S G O L P E S D A D O S POR M IL IC O S S A L V A D O R E S , N I L A S E L E C C IO N E S D IR IG ID A S P O R N U ESTR O S E N E M IG O S D E C L A S E , SO N C A M IN O S P A R A E L P R O ­ L E T A R IA D O , Y Q U E N O C O M P A R T A N L A A C T IT U D C O M P L IC E D E "L A H O R A D E L P U E B L O ” ( O F IC IA L IS T A ) Y D E L “ E N C U E N T R O N A C IO N A L D E L O S A R G E N T IN O S ” ( A P A R E N T E M E N T E O P O S IT O R ), > CON L A F A R S A L L A M A D A “ G R A N A C U E R D O N A C IO N A L " , M O N T A - l ÜA C O N T R A E L P U E B L O . ¡ Página 7 que no adm ita explotadores ni explo­ tados:IV ) Consecnentes con b u irre n u n ciable d eb e r proletario de re a liza r los mayores aportes posibles a 'la continui­ d ad de l a lucha por las leg ítim as re i­ vindicaciones obreras, S IT R A C y SI" T R A M h a n dispuesto las siguientes me­ didas de aplicación inmediata: C O N V O C A T O R IA A P L E N A R IO D E G R E M IO S L O C A L E S : S IT R A C y S IT R A M solicitaron con carácter de urgencia a la C GT dc Córdoba la con­ vocatoria a un plenario de gremios con­ federados para elaborar un p la n de lu ­ cha con '.os siguientes objetivos inme­ diatos: a ) Libertad de G R E G O R IO F L O R E S , A G U ST IN T O S C O , R A I­ M UNDO ONGARO y demás rehenes de la dictadura; b) Levantamiento d el estado d e sitio y derogación d e la- l e" gislación represiva, en especial las le­ yes que imponen la pena de m uerte, la persecusión por motivos ideológicos y el em pleo de las fuerzas arm adas en 'ia represión, del pueblo; c) C o n tra la ca ­ restía d e la vida, y por un aumento sa­ la ria l de emergencia de m $n 2 0 .0 0 0 re ­ tro ac tiv o al l f de ju lio ; derogación de la ley d e alquileres; solución in teg ral a l problema de los ju b ila d o s; am istía a todos los procesados por razones gre­ miales, políticas o estudiantiles. C O N V O C A T O R IA A R E U N IO N N A C IO N A L : S IT R A M y S IT R A C convocan a los sindicatos combativos, agrupaciones clasistas y obreros revolu­ cionarios de todo eíi país a u n Congre­ so a realizarse en la ciu dad <3o Cor do* ba, el sábado 28 de agosto d el corrien­ te año, a. las 9 horas., a fin de t ra ta r el siguiente tem ario: a) A n álisis de la situ a ció n económica, social y po lític a del país j b) Problemas del movimiento obrero y repudio a f.a pasividad de José R ucoi y su camarilla sindical tra id o ra de la C G T de A zopardo; e ) C oordina­ ción naeional de la protesta cLe la elase obrera y sectores populares eo n tra los salarios de hambre, üa en trega de la nación a fos capitales im perialistas y la acentuación de la política represiva de ’l a dictadura. Se in v ita a co n cu rrir a todas las organizaciones gremiales y agrupaciones obreras de base- que com­ p artan l a presente declaración. Las ad­ hesiones pueden hacerse lle g a r a la se­ de de S ITR A C y S IT R A M , calle San José d e Caíasanz N 9, 390. Los sind'catos clasistas d e F e rre y ­ ra solicitan la reproducción y d ifusión de] te x to de esta solictada a todos los compañeros que hayan emprendido la gran ta re a común de la lib eració n de los trabajadores y el pueblo argentino. C A R LO S M Á S E R R A Scer. G ra l. S IT R A C . F L O R E N C IO D I A Z S ecr. G ral. S IT R A M . Córdoba, ju lio 20 d e 1971. Í 55 E ITIC A . - OBRERA P igin * 9 Página 8 SITRAC: Documentó Valeroso, Antipefardisto, Pero Insúfleteme . Balance de la Paritaria 1 D u ran te tres meses luchamos por¡ ¡conseguir en las p aritarias un aumento ¡digno y condiciones de trabajo huma¡xaa. Y estábamos convencidos de que, jai triunfábamos, los beneficios iban a alcanzar también a l conjunto de los trabajadores: u n a vez rotos los topes, hu b iera sido más fác il que una lucha fle conjunto obtuviera aumentos gene­ rales. 1 Conseguimos hacer aprobar un con­ genio de trabajo. Antes, no teníamos n in g ú n instrumento orgánico que nos sirviera para defender nuestros dere* ichos en Üa fábrica. Cada vez que invo­ cábamos un artículo del convenio me­ talúrgico, se nos contestaba con un acuerdo de p artesv , firmado por LoEano, que retaceaba los pocos derechos ¡consagrados por la U O M . Hoy hemos arrancado 62 artículos, que por cierto son mejorables, pero que nos sirven de p u n to de apoyo en la lucha diaria. Pero todo lo que quedó para laudo, es decir, lo que se refiere más direc­ tam en te 9, 'los pesos, fue sancionado en jeontra de nuestros intereses: el aumen •to es miserable (sobre todo porque muestros sueldos anteriores eran ya más bajos que los anteriores de los mecánicos), el incentivado quedó redu­ cido a u n año $ medio en lugar de tres años, pero quedó, y nos laudaron en co n tra con la insalubridad de F o rja y con los horarios ilega'les. ; D u ran te la discusión de las p arita­ ria s el esfuerzo del gobierno y la par tro n al, y las transfugadas de los buró­ cratas, tuvieron como f in dejamos so­ los. Y lo consiguieron'. Arreglaron las fechas, firm a ro n antes casi todos los convenios grandes, nos impusieron pe­ ríodos de conciliación y el laudo obli­ gatorio. Pero también hubo errores e i 1) Peleamos bravamente en la calle, ¡en actos relámpago y manifestaciones, y presionamos a lia patronal en la fá ­ b rica, con paros y retiros de colabo­ ración. T o d o s estábamos conven­ cidos de la ju s tic ia de nuestra lucha y lo probamos con riesgo y sacrificio. Pe­ ro no nos convertimos en una gran or­ ganización de propaganda, que difu n ­ d ie ra en todas partes (puertas de fá ­ brica, barrios, comunidades cristianas, «te .) los problemas de nuestra lucha, y que hiciera conocer a todos, desde Üa base, por qué peleábamos. 2 ) E n consecuencia, no pudimos mo­ v iliz a r a las bases de otros sindicatos, n i canalizar organizadamente un apo­ y o que — estamos seguros— se hubiera ¡brindado como en enero, si nosotros lies hubiéramos sabido proponer pasos concretos. Es cierto que a llí hubiéramos ten i­ do que pelear eontra la resistencia ac­ tiv a de los traidores que, desde algunas direcciones, fren a n la lucha. Pero no es menos cierto que la clase obrera no se pod rá-lib rar de ellos S I N O SE M O ­ V I L I Z A , tras banderas justas. Las ma­ sas barren a los traidores no por el hecho de barrerlas, sino cuando ellos se les atraviesan en una lucha. H o y, después de la batalla dejl con­ venio, podemos sacar algunas conclu­ siones: : | \y (en o tras -partes -del país— ;hicieron .co'iectas, firm a ro n .declaraciones, -se .lan>zaron,a .la >calle enfrentando ;a ,la\rqpresión, propagandearon .nuestro conflicto. L o que conseguirnos está en re la­ ción eon la m o vilización de masas que fuimos capaces d e obtener. Y lo pode­ mos demostrar analizando cada cosa. Obtener u n convenio es m u y im por­ tante p ara los trabajadores, pero sus cláusulas no p e rju d ica n p a ra n ad a a l Gobierno (que sale ganando si hay convenio porque d ism inuyen en cierta forma los conflictos). Tampoco sig nifican u n a p érd ida D IR E C T A en pesos n i p ara la F ia t n i para otros capita­ listas. Po r eso, conseguimos los 62 a rtíc u ­ los del convenio poniendo en la pelea solamente n u estra p ro p ia fu erza y nues­ tra p ropia u n idad. P o r cierto que ju gándonos a fondo, porque F ia t no huhiera aflo ja d o si no h u b iera visto que la cosa ib a en serio. . E n cambio, e l problem a dc F orjja, y los horarios, se traducen directamen­ te en muchos pesos, que ten d ría n que haber salido del bolsillo d e F ia t p ara p a ra r en los nuestros. Y , además, estos problemas in teresan a otras empresas, que también tien en p in t a s de F o r ja o realizan abusos similares, porque los podrían haber puesto en conflicto con sus respectivos sindicatos. E n cuanto a la ru p tu ra en los nuevos topes p a ra los aumentos (a todos los gremios se les dio d el 26 a l 30 por c ien to ), ademas de pesair sobre la s ganancias de F ia t, p odría haber tra íd o otras consecuen­ cias. Porque s í nosotros hubiéramos con­ seguido, a través de la lucha, aumen­ tos mayores que los topes, se hubiera desatado inm ediatam ente ¡una cadena de reclamos, peleas y conmociones, ya que otros trab ajad o res p o d rían haber adoptado nuestros métodos. E sto hu­ biera puesto en peligro, de entrada, la “ pacificación’’ y e l p lan “ acuerdista”’ de la dictadura. Así, en la pelea p o r estos puntos, teníamos fre n te a nosotros a la F ia t, más los otros capitalistas, más el Go­ bierno. P a ra triu n fa r, entonces, ten­ dríamos que haber M U L T IP L IC A D O nuestra fu e rz a p ropia, en proporción, a la d el enemigo: solamente la agita­ ción y la movilización de am plias ca­ pas de trabajadores le h ubiera t a l vez hecho pensar a la d ic ta d ura que era m e jo r p a ra r la movilización A H O R A , cediendo, y no ten er que en fre n ta r una' nueva crisis como la del 69, la del ferreyrazo y el viborazo. Y esa agitación y movilización general no supimos lle ­ va rla a cabo. Es cierto que alcanzamos, en el ú l­ tim o mes, a suscitar u n a espléndida campaña de solidaridad en numerosos lugares del país. N u estra lín ea fu e y es bandera p a ra trabajadores de los lu ­ gares más distantes, y su apoyo y el establecimiento de relaciones fra te rn a ­ les con eÜlos es u n a de las conquistas más valiosas de nuestro combate. Pero, por u n a parte, esa solidaridad no desembocó en movilizaciones, por­ que no fuim os capaces de d arle U N P L A N Y U N P R O G R A M A . Y , p o r la otra, en Córdoba mismo, Ja solidaridad no integró a las bases obreras. E n este momento de reflexió n, que­ remos expresar nuestro más profundo reconocimiento a todos los que — a q u í- A .ellos, y a nosotros mismos, los *obreros d e F ia t, debemos .esta .a utocrí­ tic a , y el compromiso de asu m ir .m^jor .las tarcas ^que el balance nos señala como necesarias: l 9,) vO fre c e r .u n plan ,y <un pro g ram a .de ¡ lu cha, que sean u n instrum ento d e ! .M O V I L IZ A C IO N Y D E O R G A ­ N IZ A C I O N p a ra .capas .cada vez más .amplias ;de la .clase .obrera ;y d e l ,pueblo. ^ | :2°) B r in d a r ,todo muestro ¿apoyo s o li­ d ario y .nuestra experiencia vpara:[ [im p u ls a r a nuestros hermanos .de •.c'iase ;a .limpiar ,el m ovim iento .sin>di c a l d e los parásitos y .traidores: .que ¡frenan las luchas proletarias, ¡pava que muestras declaraciones sobre la necesidad de recuperar los '.'■sindicatos ipara la .clase obrera se transform en .en hechos. Ufando ruai ¡primer ¡paso en esífcas ta" reas, los ítrabajaclores de .Concord aban­ donamos e l 2 0 de jú 'iío la p lanta, a l ' ssaaiidlo <el «siguiente ¡programa : • P;a&o ojamediaifco <de la quincena y te. E s ta es la. ¡breve pero in s tru c tiva his­ to ria <de da Comisión de S o lid arid ad .con } S I T R A C -S IT B A M en Buenos Aires. ' L IQ U ID A C IO N D E L A S O L ID A R ID A D P .O . es invitada a p a rtic ip a r por L a V e rd a d re cié n en la tercera reunión de la C o m isió n. Allí, m artes 13 de ju lio , se en c u en tra ante los siguientes hechos ' consum ados: la Comisión no actúla en fu n c ió n de la solidaridad con la L U ­ C H A de F ia t por e l convenio y con la H U E L G A de Petroquím ica contra los despidos; actúa en base a la solidaridad ID E O L O G IC A con determinados pos­ tulados d el programa que S IT R A C -S IT R A M presentaran ante ilos £‘ gremios combativos’ Por lo tanto, la reunión se basa e n discutir, no a quién traemos, sino a q u ié n echamos. L a ju g a d a de las exclusiones la em­ p u ja n P C R y VC en olímpico acuerdo o p o rtu n is ta , ya que (ve r artículo “ A n á­ lisis d el b alan ce .. . ” ’ ) el prim ero acusa a l segundo do aislar la lucha de F ia t. E l P R T L a Verdad se pliega a todas las m anio bras .con vulgares poses demagó­ gicas. E l P C R y V C deciden hacer un acto sin in c lu ir oradores de PQ . y de L V , p o rq u e ambos representan ‘ ‘lo vie­ jo ’’ f re n te a “lo nuevo ’ ’. Si se pudo d i­ la ta r la solidaridad duran te 2 semanas p o r cu lp a d e estos métodos ello se debió a la p o lític a capituladora de L V . P O d efendió e l derecho de T O D A S las tendeneias q u e apoyan las luchas de F ia t y Petroquím ica a presentarse con sus o rad o re s; L V solo se defendió a si mis­ ma. E s ta diferencia es p o lític a: nos­ otros defendíamos a todos los que en la p rá c tic a defendían a F ia t y Petroq u í­ mica con independencia de lo que pen- '• • • • retroactividad;.en .los .aumentos y Ja p a r te proporcional, .d e l aguinaldo. Desistim iento p o r .'la E m p re sa JFiat C oncord d el ju ic io jp e na l y civüi S m t r a los 3.000 ¡trabajadores que \ 0£.u" p aro n la p la n ta , en . enero.Cesación inm ediata.de las trabas im ­ puestas por la je atro n al a la fu n c ió n g rem ial dentro -de .la p la n ta . R ep u d io a!i alza .incesante del¡ «casto de l a vida. E x ig en c ia de u n ¿aumento inm ediato de emergencia -de .m $n 2 0 .0 0 0 men­ suales para todos .los trab ajad o res .del país. Derogación de l a “‘ Uey de alquileres»” 1 ,, que es una le y de (desalojos. L ib e rta d inm ediata .a todos los p re- *'»• Derogación de la leg islació n repre­ siva , y erradicación (de todos los pro­ cedimientos “ legales’'’ e ilegales que a te n ía n contra los ¡derechos humanos, practicados p o r lass ¡fuerzas de “ segu­ r id a d ” . Denuncia, de lia actividad de las ban-das fascistas que pretenden in tim i" ■ d a r a la clase obrera y a los m ilita n ­ tes revolucionarios eon bombas, se­ cuestros, apaleamientos y vejámenes, -y exigencia que el Gobierno term ine inm ediatam ente con su actividad. D enuncia de la pasividad cómplice de l a CGT local y nacional, que con -esa actitud prueban su to ta l compli­ c id ad eon la ofensiva antiobrera y an tip o p u lar. PO R E S T O L L A M A M O S A L U C H A R !! Análisis del “ Balance de SITRAC IPnMieamos <en (estas ¡mismas .páginas ron im portante .documento de S IT R A C — editado .en el -número e x tra de su pe. xíocEico .sindical. N o sabemos si los com­ pañeros que elaboraron este balance de Ha lucha p o r e l ¡convenio .coincidirán en .que se tra.ta .de u n doeum ento.antipetar.dista, aun q u e in suficiente en sus conteksiones. Pero p a ra nosotros sí tien e .un. .carácter an tip e ta rd ista , .y ello tiene >su im portancia: el petardismo, el fo .qiüsmo, o cu alquiera :de sus variantes, ■es nana .concepción .a jena 7 .contraria a l a ¡concepción de ¡elase -de las luchas proletarias, y constituye lio y él p rinci" rpafl! peligro -eontra la p o lític a d e constfcrair un vasto movim iento de masas de±rás de los sindicatos y agrupaciones 'que se reclam an clasistas. E l documento es u n doeumento an ti­ p etardista porque plantea de m ía m a­ c e ra inequívoca que la derrota de la p atro n al y. el triu n fo de éste .o ¿aquél seetar del movimiento obrero solo pue­ d e ser arrancado por u n a m ovilización d e conjunto del proletariado, y porque p lantea que e»l desplazamiento de las burocracias traid o ra s no se conseguirá mediante la lu cha faeeío n al co n tra ellas, m ediante la creación de “ sindicatos paralelos” puros, sino en e l mareo de la lucha an tip atro n al, en la lu cha Porqué se Disolvió la Comisión de Solidaridad en Buenos A ires Los Petardistas en Acción sa ra n de ta l o cu a l consigna de SI" T R A C -S IT R A M . L V concordaba eon los exclusionistas en hacer de tales con­ dignas u n fac to r de exclusión y pros­ crip ció n . Sintom ático; el periódico de L V n o inform a siquiera de nuestra p re­ sencia (no digamos ya de nuestras po­ siciones!) en sus larguísimqs artículos sobre el tema. ¿Resultado? Solo P O hace u n a cam­ p a ñ a sin límites p o r el acto. E,1 d ía del ac to , el 20 a la m añana, el resto, sin habernos invitado, decide no hacerlo. Y a q u í terminó lia so lidaridad concreta de los “ nuevos” . G R A N A C TO D E P.O ., V O M -V M Y TERS E s e día 20 hubo en Buenos A ire s un p aro total de transporte, la p o licía ha­ b ía prohibido el acto y n i los “ nuevos” mi lo s “ viejos” se presentaron a la hora f ija d a a comunicar la desconcentración. E s e n estas circunstancias que las orga­ nizaciones consecuentes H A C E N I* GUAJL E L A C T O , ligándolo a l repudio a l asesinato de M aestre. Más de tres­ cientos compañeros se concentran en Ciencias Económicas donde se realiza un vib ran te m itin . A h í tenemos a los Iiquidacionistas y a los trotkistas conse­ cuentes, comparativamente, en acción! Observen compañeros trab a jad o re s! L IQ U ID A C IO N D E L A C O M IS IO N ¿Se autocriticaron los “ nuevo»” ? E l jueves 22 nos quisieron echar dc la co­ m isión. L V , más “ benevolente” , solo nos pidió u n a “ au to crítica’’ ¿ P o r qué? P O R H A B E R H E C H O E L A C T O . A sí es, n i más n i menos. PCR y V C se vieron obligados, f i ­ nalmente a r e tir a r e l pedido de exclu­ sión. L V propuso, luego, hacer una “ conferencia de prensa”. P O insistió en hacer el acto. ( L V sigue, sin h ablar d e PO en sus larguísimos artícu lo s)1. E l lunes 26 todo term in a p o r acla­ rarse negativamente. P C R — V C (recor­ demos que en grave bloque oportunis­ t a ) declaran que nada quieren |saber con los trotkistas. E l E R P , que habla *en esta reun ión , llam a a ex clu ir a quienes 110 están eon las “ vanguardias armadas” (qué despelote, |n o?). L V d e ja ila conferencia de prensa y ju n to con PO propone un g ran acto asamblea e n A P O Y O A L P L E N A R IO D E L 28. Y a para esta fecha, los conflictos de F ia t y Petroquím ica habían term inado s in que en Buenos A ire s nadie, salvo P O , hiciera nada en este período. ¿ L V H A C IA U N A N U E V A C A P IT U L A C IO N ? L V y P O acuerdan, entonces, en lla­ m a r al Acto-Asamblea, en prin cip io "eontra el capitalismo. D ice e l documen­ to : .la clase obrera 110 se podrá l i ­ b r a r de ellos (los burócratas, traidores) s i n o se moviliza tras banderas justas. L a s masas barren a los traid o re s 110 por e l hecho de barrerlos, sino cuando se les atraviesan en una lu e lia ” (el subra­ y a d o es nuestro. P. O . ) . E l do­ cumento, entonces, levanta los princi­ p io s que el leninismo le va n ta ra eontra e l infantilismo de izq u ierd a, en boga h o y en nuestro p aís: las masas 110 supe­ r a n sus direcciones reaccionarias n i sus form as de organización atrasadas ni sus concepciones limitadas, sino a través de la E X P E R IE N C IA , es d ec ir las E X I ­ G E N C IA S , del combate d ia rio contra la reacción capitalista. PROPAG ANDA E ’I prim er punto de autocrítica que fo rm u la el documento es el siguiente: “ ... n o nos convertimos en uua gran organización de propaganda,, que d ifu n ­ d ie ra en todas partes (puertas de fá b ri­ ca, barrios, comunidades cristianas, e t c .) los problemas de nuestra lucha, y q u e hiciera conocer a todos, desde la ba­ se, por qué peleábamos”. L a primera omisión de este punto au­ tocrítico es no denunciar la parálisis d e la Comisión de So lid arid ad de C ór­ d o b a. los métodos destructivos de los para e l viernes 20 de agosto. P e ro ojo: el períodico L V sigue sin h ab la r de P O , s i n comentar nuestras posiciones, • etc. S e acuerda con que la trib u n a del acto sea abierta, que la consigna sea p o r l a independencia po lític a de los trabajadores; contra todo acuerdismo b u rg u és y burocrático; eontra la . Hora y el E N A : y se resuelve in v ita r a pero­ nismo, Mucs, etc., a todos. Como el acto-asamblea es de solidaridad políti­ ca las consignas son precisas; se re­ suelve in v ita r a peronistas y stalinistas p ara indicarles la posibilidad dc un. am plio acuerdo con las corrientes cla­ sistas s i rompen eon las alternativas burguesas. E n una pailabra, la táctica le n in is ta del F R E N T E U N IC O A N T I­ IM P E R I A L IS T A . E l martes 3 de agosto. L V rompe su acuerdo con P O porque la Interna d e l Banco Nación convoca a un plena­ rio p ara , el sábado 14. Pero además se n iega a dar ninguna explicación a su posición, n hacer tanto el acto-asamblea el 20 como el plenario el 14. Es eviden­ te que quienes acusaron a P .O . en el pasado, con falsificaciones, por supues­ ta 'inconsecuencia nuestra con eíl fren­ te lín ic o , tomaron la decisión con cíente de ro m p er este im portante aeuerdo, en vísp e ras del plenario del 2S, L a explicación sería una so la: L V , fre n te a los petardistas, 110 quiere apa­ recer e n bloque con los trotskistas. ¿ Se­ rá por esto que el períodico L V sigue ocultando a sus lectores esta historia de la ^omisión? ¿Se alineará L V , una vez m á s, en el fren te antitrotskista, a h o ra que está coqueteando con el E R P *? Acontecimientos m uy próximos, de g ran im portancia, darán el veredicto. grupos petardistas, la negativa a orga­ n iza r un acto eentral de masas, el con­ gelamiento d e esta Comisión, p rin c ip a l instrumento para ta l propaganda, lu e­ go de los actos en las facultades de In ­ geniería y Económicas, y la oposición a crear filia le s en toda la ciudad. S i se quiere realmente “ b rin d a r n u estra ex­ periencia p ara impulsar a nuestros h er­ manos de clase"’, es necesario denun­ ciar el faccionalismo destructivo y lle­ v a r la comprensión sobre la necesidad irrem plazablo del F R E N T E U N IC O en­ tre las corrientes que se reclam an de elase y revolucionarias, en relación a los objetivos comunes. E l segundo aspecto del problem a es que nunca l a mera acción de propagan­ da hubiera podido gestar la m oviliza­ ción de las grandes masas de los otros gremios. A p a rte del program a, que ve­ remos más adelante, hacía f a lta u n a M E T O D O L O G IA de m ovilización de elase, que 110 podría haber sido suplan­ tada por la influencia su p e rficia l p ro ­ p ia de la propaganda. E sa metodología no p o d ría ser otra que la intervención organizada y- conciente de la base de de­ legados y activistas de los otros gre­ mios, sintetizada en la consigna de C O N G R E S O D B B A S E S . E s ta consig­ na, de propaganda, agitación y organi­ zación, adquiere su plena vigencia en los momentos culminantes de la lucha. E 11 tales momentos, la burocracia gol­ peada desde u n sinfín de lados se dis­ loca ante la presión del ascenso obrero, quien puede imponer, entonces, directa­ mente, nuevas formas de organización. Es decir, lo que se le hizo a Lozano en F ia t, pero a escala de toda la Regional. Como esto n o se puede im p rovisar, su preparación exige una p revia labor a fondo de propaganda, agitación y orga­ nización. PEOOüRASLA. Dice el doeumento: “ ...e s a so lid ari­ dad 110 desembocó en movilizaciones, porque 110 fuimos* capaces de d arle u n P L A N Y TJN P R O G R A M A ” . M ás ade­ lante define al plan y al program a co­ mo “ u n instrumento de m ovilización y de organización para capas cada vez más amplias de la elase obrera y el pue­ b lo”. Es in dudable que sin u n program a que re fle je las aspiraciones de los diver­ sos sectores d e trabajadores no se puede im aginar siquiera una am plia acción de lucha c o n tra e l capitalismo. E l docu­ mento, sin embargo, no fo rm u la n i p la n n i p rogram a, sino que lo p rom ete para más adelante, posiblemente, pensamos nosotros, pana el plenario combativo del 28 de agosto. N o tendríamos respecto a esto n in ­ guna objeción si no fu era que en pleno ■conflicto, durante «los días 22 y 23 de mayo. S IT R A C -S IT R A M sí presenta­ ron u n programa en el plenario de “ gremios combativos” . ¿Qué pasó, en­ tonces? ¿No había program a o el que había no servía 1 ¿Tenía razón P O L I­ T IC A O B R E R A cuando eritieó a ese programa porque no era P R O G R A M A D E C O M B A T E o, dicho con otras p ala­ bras, “ de movilización y de organiza­ ción* y q u e, lejos de re fle ja r ese pro­ gram a la experiencia de lu cha de los compañeros de F ia t, era u n p rogram a 51 al margen de tal experiencia y de las perspectivas inmediatas d e lucha ? I n ­ dudablemente, el doeumento que esta­ mos comentando constituye el m ejo r re ­ conocimiento de . que P O L I T IC A 0 “ B R E R A era fio! a la clase trabajadora y su s luchas cuando adoptó una posi­ ción crítica hacia el programa de S I" T R A C -S IT R A M . E l p le n a rio del 28 de­ be se rla oportunidad p a ra un salto co­ lectivo en esta dirección, hacia un P R O ­ GRAMA D E C O M BA TE. E N E R O -M A R Z O Y M A Y O * J U L IO Desde enero a marzo de este año, los compañeros dc S IT R A C -S IT R A M fue" ro n l a vanguardia de los combates más •importantes, y victoriosos, de la elase ob rera argentina d urante 1971. R e in ­ corporaron sus despedidos, deshicieron la provocación del pulpo F ia t, obliga” ron a l levantamiento de la intervención, al gremio, etc. E sta lu c ha fue p ro ta­ gonizada por amplios sectores de trab a­ ja dores de diversos gremios. NFo existe en el doraunento n in g u n a explicación sobre las razones que con" ‘ dujeron del alza aquélla a l aislamiento actua l; del ferreyrazo, p o r ejemplo, a l sabotaje del paro p ara éL 28 de ju n io u ltim o por la dirección d e la R egional cegetista. S o n varios los elementos que explican, este retroceso transitorio; uno m u y im ­ portante, por ejemplo, en que P e ró n se ha jugado eon todo a im poner m ía tre ­ gua sindical en Córdoba como p a rte d el “g r a n acuerdo naeional”. P e ro la pregunta es: ¿se pudo en ene­ ro-marzo echar a los “ lozanistas” de l a C G T 3 estructurar una GGrT de bases? Nosotros que entendemos que sí, soste” nemos, por ello, que en enero-m arzo p u ­ do haberse dado el paso que h u b ie ra ¡hecho imposible la situación p o sterio r de aislamiento. E n el período enerotuarzo,en cambio, S IT R A C -S IT R A M se negaron a asistir a varios plenarios de la C*GT (con barra p o r su p u esta!) y,, en u n caso, a d ivid ir un aeto de la C G T (e l 2 9 de enero), que la b u ro cracia lla ­ mó eontra su voluntad, presionada p o r la intervención de las bases. Es decir, ana línea contraria a la del Congreso de Bases, lo que perm itió .que la buro­ crac ia superara aquella crisis. E s muy probable que eu un Congreso de Bases, las actuales direeciones t r a i­ doras 110 sean eliminadas d e inm ediato y q u e haya-que “ convivir 9 eon ellas u n tiem po; pero es indudable que se t ra ta ­ r ía d el principio del f in de los b uró­ cratas. ^ E l balance del S IT R A C no recoge es­ te ertíocjue por lo que fracasa en f i j a r una clara perspectiva a la situación ac" tu al, de reaparición de crisis en la Re­ g io n al, y cae en el m ito d e l p ropaganclisino, de la exageración d e l valor de la propaganda. D 01 5L E P O D E R Y P IQ U E T E S Unso y otro aspecto m u y im p o rtan te al qute no hace referencia e l documento es a l problema de la 110 construcción de piquetes de combate de l a fábrica du­ r a n te el conflicto. E s to asmito es m uy im p o rtan te p o r lo siguiente: durante el período de con(Sigue en la p á g in a 12) Págin» M Insistim os cu nuestro planteo sobre estos sucesos : se tra ta de una provoca­ ción. A nosotros, tanto o menos ,que a n ad ie, no se nos escapa que Sanmartino fu e e l que pistola eu mano arengaba y m atoneaba durante la represión del fe* rre y ra zo y que, por lo tanto, fue el ver­ dadero autor del asesinato, del conipañ ero Cepeda. Tampoco se nos escapa que más de una vez a'ardeó con Bas tor* tu ras que se cometían en la policía pro­ v in c ia l de Córdoba. No fuimos nosotros los que dijimos que Sanmartino era del a la “ blanda” del régimen; una tal afir­ mación solo sería coherente en quienes entendieron como “ progresivo” el ascenso tle Lanusse, o en quienes han atri­ buido a “ las luchas populares” la sustitu c ió n del vacilante Levingston por e l actual promotor, milico-policial, del “ acuerdo nacional” . Sin embargo, el “ajusticiamiento” es una provocación, ya que es producto, no de la lucha de clases, sino del te­ rrorism o individual, ya que refuerza los . pretextos represivos del Estado policial y d ebilita la lucha que la vanguardia p ro le ta ria lib ra para vo'car a das gran­ des masas al combate contra la repte", i LA LIQUIDACION PO L IT IC A O B K E K A DE SANMARTINO sión, por las libertades democráticas, contra el Estado policial, contra el ca­ pitalismo. Una reciente resolución de los sindi­ catos S IT R A C -S IT R A M declaraba que no existían condiciones p a ra en fre nta r el laudo impuesto en las tratativ as de convenio, el cual constituía una provo­ cación de la d ictad ura para fo rzar un enfrentamiento prem atu ro con tíos obre­ ros de F ia t y lograr el descabezamien­ to de su vanguardia. Es justam ente en estas circunstancias en que el petardis­ mo terrorista organiza el atentado con­ tra Sanmartino, lo que h a p erm itido a la dictadura in stru m e n ta r u n a im pre­ sionante avalancha represiva contra to­ da la población tra b a ja d o ra de Cór­ doba. P O L IT IC A O B R E R A está p ráctica' S IT R A M Pcró Conlra la Compra de Locomotoras en Esta do s Unidas ¿En Defensa d e 9a Dmdmstri® Nacional? E l viernes 23 de ju lio , el sindicato M a te rfe r realizó paros de tres horas p o r turno contra la compra de locomo­ toras en E E . U U ., en defensa de 'la in­ d ustria nacional, y las fuentes de tra­ bajo. Este paro fue realizado en base a un fundamento de clase equivocado y en función de una perspectiva fal­ sa. P o r esto, no fue comprendido por los trabajadores, que lo miraron cou desconfianza. L a cuestión es la siguiente: el go­ bierno ha contratado la radicación en el país de una fábrica de locomotoras de la General Motors, comprándole, vía im portación, el p rim er grupo de má­ quinas. F ia t M aterfe r y la Asociación de industriales de Córdoba elevaron su protesta, mientras que la Cámara de F abricantes Ferroviarios expresó su acuerdo con la medida. Como se ve, se tra ta de una lucha intermonopalista, a la que se han acoplado dos sectores del llam ado empresariado nacional. L a AD I C está con F ia t porque ésta adquiriría las partes en la industria cordobesa; la Cám ara está con la G M porque ésta se las compraría a los industriales radica­ dos en Buenos Aires. E l presidente de l a C ámara es el brigadier Rojas Silveyra , hoy em bajador en España, lanus­ sista consecuente. Como se puede ap reciar, aq u í no hay nin guna. in d u stria nacional que defen­ der, puesto que se t r a t a de u n a lucha interimperialista. Asim ismo, la burgue­ sía nacional no observa u n a posición independiente en el entrevero, sino que actúa como agente del cap ital ex tran ­ jero en sus respectivas alas. E 11 re ali­ dad, oponerse a G M , en nombre de la Momentáneamente, la radicación de G M y la importación d el prim er grupo tración im p erialista porque ésta nos venga a d ar nuevas fábricas y , p o r lo tanto, más trab ajo — como lo sostienen los frigeristas. E s que en este caso, co­ mo lo prueba la experiencia, el im peria­ lismo penetra destruyendo las viejas fuentes de trab ajo y , apenas conquista una posición de supremacía monopóiica, reduce la producción, racionaliza y despide. defensa de la in d u stria nacional, es de­ fender la p u ja de F ia t p a ra quedarse con la parte del íleon en el festín. Debemos ir más a llá : a ú n cuando la burguesía nacional m a ntu viera una po­ ch'cunstanciolm ente indepen­ sición diente fren te a l im perialism o, lo que no ocurre en este caso, el planteo obrero 110 debería consistir tampoco en defen­ der “ la in d u stria n acionalT' porque es inevitable la inm ediata capitulación de ésta, ante el im perialismo. E n la lucha contra e'i im perialismo, e l proletariado debe observar una rigurosa p olítica de clase, d irig ida co n tra el ca p ital ex tran ­ jero y contra la burguesía n ativ a alia­ da con el prim ero. Lo que interesa a l proletariado, a es-^ te respecto, es la defensa de “ la fuente de trabajo’’, pero entendida como r e ­ a l defensa de las conquistas sociales y _políticas de los trabajadores. N o po­ dríamos apoyar, p o r ejemplo, la pene­ de locomotoras no afecta la fuente de trab a jo porque se basa en un programa de expansión de lá producción para la renovación del material férreo de E F A . Todo esto va a ser un extraordinario ne­ gociado. como la prueba el visto bueno del Banco M undial, el que ya acordó 90 millones de dólares en concepto de adelanto. F ia t 110 va a quedar fuera del Esto que acabamos de describir festín:^ como se lo prometió el presi­ ha sido la historia concreta del dente de E F A , particip ará en las otras pulpo F ia t, verdadero cáncer que p artes del pilan. ¡ paraliza el desarrollo económico mente sola en la lu cha consecuente con­ t ra el Estado po licial (lu d ia de masas, concreta) y contra e l terrorismo in d i­ vid u a l (lu ch a id e o ló g ica ). Los re fo r­ mistas temen una lu c h a a fondo contra <\n represión porque t a l lucha lleva en su seno la lucha c o n tra e l capitalismo, por un “ cordobazo” nacional; por esto mismo, omiten toda c rític a a l terroris­ mo, del cual son su antípoda de dere­ cha, o “ d ep lo ra n ” los “ sucesos” y p i­ den “ paz social*" y elecciones. Los pe­ tardistas se niegan casi por principios a la Sacha de masas c o n tra la represión, debido a que éstas — dicen — es un pro­ ducto “ in e vitab le” (inevitable si las masas lo p erm ite n ) d e l régimen y sub­ sistirá hasta su derrocamiento. P o r esto, oponen a l terrorismo de triase de la dic­ tadura el terrorism o in d iv id u al de los grupos pequeño burgueses. y será eí de la f á b r ic a de la Ge­ neral M otors (como y a lo es la de au­ tom óviles). D e todos modos, 110 se tra ta del fenómeno de t a l o cual “ fá b ric a ”, sino del im perialism o como sistema, a l cual está subordinada la burguesía na­ cional. ¿ C u ál :>s, en síntesis, la posición del m arxism o revolucionario? C o n tra la domvnaaién im p e ria lis ta : 110 solo con­ t r a la penetración sino por la expro­ piación del im p e ria lis m o ; contra el con­ tra to con la General M otors, p o r la ex­ propiación de F ia t — s in pago y bajo control obrero— y p o r la centralización estatal de toda la in d u s tria ferro v iaria biajo eontroi] obrero en e l mareo de la lucha de masas contra e l imperialismo. L a lucha contra la penetración imperialüsta es inseparable d e la lucha con- |I Martes 10 de agosto de 1971 D u ran te su reciente estadía, López R ega a firm ó : ‘ ‘N o veo p o r qué se in ­ siste en que P e ró n sugiera, a los g ru ­ pos especiales q u e levanten la g u ard ia .. T odavía n a se h a visto nada que per­ m ita ta l decisión. Quien debe, d ar los primeros pasos es el gobierno’ ’ (Cilarín,. 31-7)'. E s ta cita vien e al caso: los g ru ­ pos peronistas q u e se ad jud ica ro n el “aju sticiam ien to ’’’ forman p arte in te­ g ral de la tác tic a acuerdista de Perón y serán desautorizados — desprovistos de la “ camiseta” , en relación a las m a­ sas peronistas— apenas Lanusse, quien “ tiene la p a la b ra ” , concrete la manio­ bra electoral. L a liq u id a ció n de Sanm artino debe hacer re fle xio n a r ai peronismo “ de iz­ quierda’’ o “revo lu cio n ario ”, que m ili" ta en la base d e l movimiento obrero. Sobre la base del terrorismo es imposi­ ble e d ific a r u n a alte rn ativ a que derro­ que a la d ic ta d u ra , es imposible supe­ ra r y rom per l a “ H ora de los Pu e­ blos” , es im posible estructurar el F re n ­ te U n ico A n tiim p erialista, que p ara ser t a i debe basarse en la movilización organizada de las masas. tr a la dom in ació n im perialista, contra sus aliados, p o r e l control obrero, por el gobierno obrero. E sta es la flnica. posición le g ítim a desde e l punto d e vista, del p ro letaria¡do; el problem a d e parar o no, con esta posición, es u n problema tácito. L o ocurrido dem uestra, de todos modos, la vigencia del p ro g ram a de tran s ició n : en la época de decadencia del im p erialis­ mo, el sindicallismo está obligado a plan­ tearse problem as que rebalsan el m a r­ co sindical y p lantean el problem a -del control obrero y del gobierno obrero. L a posición de S IT R A M , de defensa de la ‘in d u stria nacional”, retoma la po­ sición del sindicalismo peronista y n a cionalista. E s necesario rom per, p o r lo tanto, con este pasado program ático. P o r el p rogram a de transición. 'El ¡Buenos A ires M arra ... (V ie n e de la Pág. 2 ) G R A C IA S A L A M O V IL I Z A C IO N D E T O D O S L O S E S T U D IA N T E S S E ­ C U N D A R IO S . “B AL A N CE S ” QUE N O SON BALA NCES Luego de esto, las agrupaciones sacan sus “ teorías’? sobre las •causas del t r i­ u nfo. L a C A E M in s iste en que “ debe­ mos destacan el ro l ju g ad o p o r las ne­ gociaciones de los p ad re s ” , E l F L S sos­ tiene (como ya lo h a b ía planteado du­ rante la semana a n te r io r) que “debe­ mos te n e r en cuenta las diferencias en­ tre H ern án dez y Q u artino , las fisuras dentro del M in iste rio ”’. N ad ie , salvo la T E R S , proclama que este triu n fo es la v ic t o r ia del método de la O R G A N IZ A C IO N Y M O V IL I Z A ­ C IO N D E M A S A S D E L í E S T U D IA N ­ T A D O . Om iten el r o l jugado p o r las re­ soluciones de paro d e varios colegios, que varios noticiosos (confirm ando) d i' cen que. fu e el m o tivo d el recule de la dictad ura. Estas posiciones, como balance, son u n miserable in te n to d e expropiar a l m ovim iento de su t r iu n f o . De expropiar a l Centro, y a todos los secundarios de Capital! de S U v ic to ria . Soa u n intento de o m itir, y esconder, el indudable ro l de va n g u ard ia ju g a d o p o r la T E R S en todos lo colegios d e la C apital llam ando a discutir y organizar el p aro (cuando ellos no hicieron n ad a ). Pero estas posiciones van mucho más a llá de u n bálance. Son toda u n a d efi“ n ició n de cuál v a a ser su ac titu d ante la etapa que se a/bre ahora donde la ta ­ rea fu nd am en tal es consolidar a l Cen­ tro del Buenos A ire s . E S T E es e l e je d e la c rítica y la ac­ tividad; de la T E R S en e l Buenos A ires, Las agrupaciones intentan escapar a es­ ta crítica , a l combate p o lítico, dicien­ do que la T E R S -s c hace autobombo res­ pecto a su rol. A l margen del indiscutible ro l que ju “ gó esta ag ru p a ció n , reconocido p o r to* dos los estudiantes de todos los cole­ gios ; de lo que se trata es de d efinirse a fa v o r o en co n tra de la organización y movilización d e masas. A fa v o r o en co n tra de la consolidación del centro d el colegio, y d e la continuidad de la lucha. L a T E R S está, comprometida con el camino de la lucha, con el fo rta lec i­ m iento d el centro, con la organización de todos los colegios p ara el combate contra la d ic ta d u ra. Martes 30 de agosto de 1971 P O L IT IC A O B R E R A 'El domingo' 19 de ju lio fu e hallado e i cuerpo sin vid a de Ju an Pablo M a ­ estre. Los diarios de los días 21 y 22 coincidían en señalar la existencia de una verdadera crisis p olítica dentro del gobierno con motivo de la p ro fu n d a impresión pública que causara el asesinato. E n este momento culm inante, nin guna de las organizaciones de masas se lanzó a canalizar el odio p o p ular, lo que hubiera profundizado 'la crisis ab ierta. Conciente de la situación, L a ­ nusse buscó superar el momento, exa­ cerbando las actitudes demagógicas d ir rante el encuentro eon A llende, el vier" nes 23. Los diarios se sumaron a l ju e­ go, hablando de la desaparición de 'las “fronteras ideológicas*”, de “ populis" m o” , etc. E l presidente chileno, repre­ sentante del bloque de los partidos obreros trasandinos, se sumó eonciente- LA N U SSE A LLE N D E El Acuerdo Contrarrevolucionario mente a l juego, puesto que venía, jus­ tamente, a d ar 'los prim eros pasos de u n acuerdo contrarrevolucionario con la dietadura m ilita r argentina. E l repre* sentante dél reformismo antiproletario 'de Chile no tuvo ningúfn problema en acompañar la farsa demagógica en me­ d io del desencadenamiento d e la barba* r ie policial en nuestro país. “ FRO N TERA S IDEOLOGICAS* “ E l secretario de Estado p a ra Asun­ tos Interam ericanos, Charles M eyer, di“ jo hoy a la agencia L a t ín que el sisteíma hemisférico no acepta la existencia de países comunistas, pero sí la presen" cia de presidentes m arxisías en A m éri" ca L atin a’ Este sugestivo cable fu e p u ­ blicado en todos los d iarios el viernes 23 de ju lio . Es sabido que M e y e r no es m arxista, pero sabe m e jo r que muchos m arxistes “ cuál es la d iferen cia entre u n gobier” Ino obrero-campesino y u n gobierno “po­ p u la r5”, “ d irig id o ” p o r los trab ajad o ’ res, o como dice A lle n de , “ u n gobierno d e trabajadores”. L o p rim ero , p a ra M e­ yer, es comunismo, porque sig nifica la expropiación política, y económica de la burguesía; lo segundo no, porque signi­ fica el mantenim iento de1! Estado bur­ gués con gobiernos ejercidos p o r p arti" d o s obreros y partidos pequeño burgue­ ses. Esto es compatible, según el impe­ rialismo norteamericano, com el “ siste­ m a hemisférico’'’. Rodolfo Terragno, de “ L a Opinión” coincide: “ A llen de es u n a figura id eal: se confiesa marxista p e ro aceptó las reglas de juego de la democracia burguesa” (25 de ju lio ). E s fácil de ver que Lanusse y el ul" trag o rila de Pablo Pardo, m inistro de relaciones exteriores, no se han desviado u n centímetro de la p o lític a yanqui y de los propios intereses de l a burguesía argentina en m ateria de p o lític a latino­ americana. L a política lanussista hacia C h ile está en plena consonancia con' la afirm ación contenida en la declaración em itid a p o r el comité central de nuestro p artid o , el ú ltim o 9 de a b r il: “ E l gol­ p e m ilita r e s .. .u n guardaespaldas de la burguesía chilena” . “ ESTATUTO DE GARANTIAS DEMOCRATICAS INTERNACIONALES” E l d ia rio ‘ ‘L a P ren sa’ ’ envió a Salta a l periodista B úfano, su g o rila más consecuente. Según éste, “ se abordaron muchos temas que escapan a la decla­ ración co n ju n ta y que se analizaron no solo con franqueza* sino diríamos, con crudeza” . Veamos lo que se d ijo a cal­ zón quitado. “ Allende puso énfasis eu re ite ra r, y dio seguridades en este sentido (obsér‘ vese que el desconfiado periodista gori­ la dice que A llen de fue- enfático, re ite ' rativo y dio reaseguros), de que en Chi­ le se va a m antener el p luripartidism o y que cualquier determ inación que se tome en cualquier terreno se h a rá sienr p re en el terreno de la le galidad, es de­ cir que no será u n a determ inación a rb i' tra ria del Poder E je e u tiv o ” . E n otras palabras, A lle n de le garantizó- a L an u ­ sse lo que ya le había g arantizado a la burguesía chilena en octubre del año pasado: que no h abrá “ desbordes”, que ino existe la más m ín im a in tención de propugnar o de a d m itir la emergencia de un gobierno obrero-campesino. E l en­ cuentro h a servido p a ra o ficia liza r ante el im perialismo las intenciones contraxevolucionarias 'ultimas del gobierno re* form ista de Chile. Según Búfano, A llen de “ expresó que -comprende-perfectamente bien la deter-, minación y el camino elegido p o r las Página 11 Fuerzas Armadas y el gobierno para devolver a la A rg en tin a su v id a demo­ c rá tic a ”. Esta observación, y a adelan­ t a d a por Allende cuando agradeció la bienvenida de Lanusse ( “l a vo luntad de los pueblos, in terp retad a por- nosotros” — d ijo : “ sa lu d o .. .a las F F .A A . argén" tin a s , hermanadas con las nuestras en la a lta significación de defender nues­ t r a soberanía’1’) es reveladora, de la con" d u c ta del conjunto del stalinismo sud­ americano en relación a la dictadura m ilita r argentina. Según “ L a Nación” , d el 25 de ju lio , A llende “ elogió los es­ fuerzos de gobierno argentino- por alcan­ z a r e l denominado G ran A cuerdo Nacio­ n a l que cu lm inará eon el retorno de la A rg en tin a a l régimen institucional’ '. E s evidente que A llende lia .venido a f ir m a r el “ estatuto de garantías"’ con Lanusse, sellando u n acuerdo de defen" sa d e la burguesía del continente, eont r a las masas, a l margen d e los roces que puedan existir con el imperialismo norteamericano en relaeión a los mon" tos de indemnización de tale s o cuales nacionalizaciones en el Queda ra tific a d a entonces la a f ir ­ mación contenida en la “ resolución so­ b re América L a tin a ” (v e r P O N 9 9 2 ), aprobada por la reunión internacional trotskista, respecto al gobierno de Allen­ de: “ L a m isión que le h a asignado la . burguesía es contener y usar la combativida d de las masas y p rep a rar la s eon- | diciones d e la contraofensiva de la b u r" guesía y e l imperialismo contra el proletariád o y sus organizaciones” . B R A S IL • Se h a mencionado que 1$, diplom acia argentina habría manifestado contra" dicciones profundas eon la brasileña a propósito de l a entrevista Lanusse-A" lleude. Los comentaristas h an indicado que A rg en tin a lia abandonado la teo ría de las “ fro n te ras ideológicas’ *, según la cual se debería combatir el ascenso de gobiernos comunistas incluso me" diante la intervención armada. T a he­ mos visto que la entrevista no p ru eb a nada de esto en el caso A rg e n tin a -C h i­ le, y a que A llen de no es tip ific a d o co­ mo “ comunista’’, lo mismo ocurre eon Brasil, quien mantiene relaciones d i­ plomáticas |con Allende. Este ú ltim o acaba de ordenar lg, compra de barcos en astilleros brasileños. Las contradicciones entre la burgue­ sía argentina y la brasileña deben en" tenderse en p rim e r lugar, en relaeión al im perialismo norteamericano. R iva liza n ambas en el propósito de ser las semico■lonias “ preferidas"' y privilegiadas res" pecto a l tra to que les otorga el cap ital extranjero. P e ro en relación a l tem a es­ pecífico de la s relaciones que deben guardarse con el gobierno de A lle n d e , y también en función de la evolución de la situación uruguaya, la contradicción es de otro tipo. Brasil se h alla inmerso en una b ru tal crisis social y en condi" ciones agudamente prerrevolucionarias. L a ferocidad d e la dictadura brasileña es un reflejo de tremendas contradiccio­ nes a punto d e estallar. E l gobierno sanguinario no puede p erm itirse la más elemental lib eralid ad ; lo que atestigua su debilidad, Esta situación crea, obje­ tivam en te. un potencial volcán In te rn a ­ cional en Sudamerica: el gobierno b ra“ sileño no podría tolerar la mas m ín im a evolución democrática en sus fronteras, concretamente un eventual tr iu n fo d el “ F ren te -Amplio” en la B an d a Orien­ tal. Estamos en presencia no solo d e una polarización política aguda dentro de los distintos países latinoamericanos, sino también en presencia de u n a pro" yección Ínterestatal de esa polarización. E l acuerdo Lanusse-Allende tien d e a ev itar u n a. explosión política in tern a " cional, brindando los reaseguros al ré ­ gim en brasileño. Este es el sentido ge* neral de la s sucesivas entrevistas de L a ­ nusse. Garrastazú Médici y A lle n d e , eon los gobiernos de Perú, Ec u ad o r, Co­ lombia, Paraguay, Guatemala, etc. Se buscaría u n reordenamiento po lítico de la situación continental. C o n tra el as­ censo de la s masas. Indudablemente, el sentido f in a l de este rompecabezas apunta contra la Asamblea Popular boliviana. C o n toda justicia, e l POR boliviano señaló que Allende y Telazeo se verían obligados a cuidar las espaldas de la revolución pro" •letaria en el Altiplano. Pero d e todas, estas entrevistas surge también que se las cu idarían igualmente a los fu tu ro s agresores que p artirían del suelo a r­ gentino, paraguayo y brasileño. Des" pués de todo, el poder obrero e n B oli­ via no será equivalente a “ un presiden­ te m a rxis ta en un país lathioameriea" C U B A N o cabe ninguna duda que todo, este ajetreo diplomático persigue el propó" sito de fo rz a r a Cuba hacia la diplom a­ cia del “ ping-pong:”, hacia u n a reap ro xim ación hacia el “ sistema in teram eri" cano” . E l gobierno de A llen de está ac­ tivando una ofensiva diplomática, p ara lo g ra r el reingreso de Cuba a la O E A . E n la conferencia de prensa que b rin ­ d a ra al periodismo en Sa lta, A lle n de pu n tualizó q u e él nunca estuvo de. acuerdo con lia ee r de la O L A S u n “ Es­ tado M a y o r Estratégico p ara A m érica L atin a . L a d e fin í siempre, d ijo , como un organismo d e información, de soli" darid ad con las íuclias populares” . Con estas observaciones delim itó claram ente sus relaciones con Cuba respecto al pro­ blema de la lucha revolucionaria en la" tinoamérica, en el pasado, en el'p resen­ te y en el fu tu ro . Los términos de un acuerdo yanqui" cubano, del tip o del que se negocia en P ekín, serían m u y peligrosos p a ra las conquistas revolucionarias de las masas cubanas, p o r la. mayor vu lne ra bilid ad del régimen eastrista en el marco de un toma y daca con el imperialismo. E n su discurso del xiltimo 26 d e ju ­ lio , F id e l desechó todo tipo de reacerca­ miento con los yanquis. Recogió' positi­ vamente e l planteo de re an u d ar reía" ciones efeetuado por la Asam blea Popu­ la r boliviana. Adoptó, sin em bargo, una posición d e apoyo hacia el reform ism o y el petardismo uruguayos, sin d ife re n ­ ciarse de la alternativa burguesa que postulan. Pareciera que Castro h a deja" do en suspenso una respuesta d e fin iti­ va a las maniobras allendistas e n fu n ­ ció n de cómo se desenvuelva la. situación Uruguaya ¡hasta f in de año y d e la ac" titu d respectiva que adopten lo s regímenes de Brasil y A rg en tin a fre n te a ello. F id e l ha., declarado en el pasado que jamás ingresará.a la. O E A o lle g ará a acuerdos con el imperialismo, en. la me­ dida que estos significan u n condicio­ namiento ele la actitud de C u b a hacia A m érica L atina: lo ra tific ó el 26 de ju lio . Indudablemente, in g re sa r a l a O E A es integrarse a ' la fala n g e de l a contrarrevolución. Pero no es ¡suficien­ te con e s to : si bien el castrismo debe sostener diplomáticamente a l allendismo contra el imperialismo, su posición de identificarse con el gobierno chileno o.eon el frente amplio u ru g u ay o equi­ vale a apoyar una altern ativa h is tó ric a' mente contrarrevolucionaria. Martes 10 de agosto de 1971; PO LIT IC A O B R E R A Página 12 Telefónicos: Por una Lista de Combate L a dictadura y sus personeros interventores en el Sindica" to C ap ital de F O E T R A , lian convocado a elecciones “ norm alizadoras” para el 7 y 8 de septiembre. A n te todo, esta convocatoria se da en el mareo de una total parálisis dol gremio frente a la In tervención, por la recupera" ción del Sindicato y por la aplicación del ú ltim o convenio (pago atrasado y parcial de los aumentos conquistados), paral'.sis producto de la pasi" vid ad y boicoteo de la buro­ cracia do Guillan. Esta “nor­ malización’ ’ surge en el marco del acuerdo de conjunto de la burocracia •cegetista y el. pero­ nismo con la dictadura, ( “ a cuerdo n ac io n al’ y tregua sin­ d ical) . L a burocracia de Guillán ha 'entrado de Heno en la manio­ b ra, que hace depender la re­ cuperación de la organización ■sindical de Üa normalización regimentada y condicionada de ia dictadura. L a verborragia izquierdizantc y los rimbombantes y dema­ gógicos “ estados'de a l e r t a ’ 'y planes de lucha sin fechas n i medidas, decretados ú ltim a ­ mente, no son más que u n a cO“ bertura de esta maniobra. L a burocracia de G u illan tiende así ju nto al Gazzerismo, a l Peppismo, etc. a ju g a r de sector de izquierda en' el acuerdo L a nusse-Perón y de puente p ara enganchar a la izq u ierd a pero­ nista y a los burócratas de los gremios combativos. E l M U C S (lista vio le ta ), por su lado, ha entrado tam bién en la maniobra. Tras p lantearle una lista “ u n ita ria ” a G u i­ llán, y antd la negativa de éste, decidió retirarse y d arle sus votos a la M arró n . E ’i. M U C S se mueve entre el aeutrdismo m anijero y el oportunismo proburocrático. L a A grupación A vanzada (lis ta rosa) ha tomado la in i­ cia tiv a de lla m a r a co n stitu ir una lis ta de bases, representa­ tiv a de todos los lu g arts de trab ajo , en base a la elección de los candidatos p o r asam­ bleas de edificio. Respondiendo a este llamado se ha constitui­ do ya u n fren te electoral de tendencias y activistas comba" tivos. Este fre n te h a convoca­ do a u n plenario g eneral de ac­ tivistas p ara eleg ir la lis ta y v o tar el programa. L a lim itació n fundam ental del llamado de A vanzada y del fren te es su planteam iento pu" ramente electoral. E'i. program a que p lantea Avanzada constituye u n con' ju n to de reinvindicaeiones jus­ tas pero expresadas no como planteo de combate inm ediato sino como p latal-form a electo­ ra l. Esto, en momentos en que el gremio ve burladas sus con­ quistas salariales eon e l pago atrasado y p arc ia l dc los au­ mentos acordados, en que exis" te una g ran insatisfacción por e l brutal aumento en el costo d e la vida, por1la ab ierta a rb i­ traried ad en la evaluación de tareas y an te el intento de E N " te'i de im poner el aumento de las horas de trabajó. A vanzada n o formula el ¡llamado a un inmediato F ren te Unieo de los delegados y activistas de la M arrón, de'i Mucs e in depen­ dientes p a ra romper la tregua y la maniobra de G uillán en el plano de la unidad de acción de todos los telefónicos p o r to­ das estas reivindicaciones y p o r la recuperación del sindi­ cato y la expulsión de la inter" vención y eontra todo acuerdi'smo con la dictadura, incor­ porando la s elecciones como un fren te más de lucha. E n esto A vanzada m a ntie­ n e un inmovilismo como el que tuviera d u ran te el conflicto, al no jugar nin g ú n ro l alte rn a ti­ v o auto 'ias continuas m anio ­ b ra s de G u illán , lo que, ante la traición de éste, la condenó a una to ta l parálisis. Así, el conjunto del progra­ m a pierde su sentido fu n d a ­ m e n ta l : servir como m otor p a ­ r a l a movilización u n id a y, com bativa de !ias bases, y de, p u e n te para la ru p tu r a de los telefónicos con su dirección burocrática y proburguesa, y p o r su organización indepen­ diente. L a consigna de la indepen­ dencia política de los tra b a ja ­ dores, por ejemplo, adquiere un carácter declamatorio, se esteriliza, al no estar re fe rid a a l a ruptura d e !ia treg u a y el mainobrerismo de G u illan , que es la expresión concreta en telefónicos de la p o lítiea del acuerdismo Perón-Lanusse. Nuestro p artid o apoya la constitución de este fre n te -p a ­ ra desarrollar en su seno-una f ir m e lucha p o r dotarlo de un p ogram& firm em ente antiburocrática y clasista, en la lí­ nea del F ren te U n icó A n tiim ­ p erialista, el Congreso de B a ­ ses y el Gobierno Obrero. A si­ mismo hacemos un llam ado a ''os activistas combativos de la M a rró n y del M U C S a incorpo­ ra rs e al debate y la organiza­ ción. de este F ren te. I M P O R T A N T E A C TO U N IT A R IO E N R O S A R IO A nálisis del B alance Contra ía Hepresión de S IT R A C (Viciio do la página 9) ciliación obligatoria, la combatividad de Sos compañeros dc Fiat-llegó a un pun­ to tan alto que el control patronal de los supervisores quedó prácticamente superado; se estableció un virtu al do­ b le poder en fábrica. En este momento, nosotros sugerimos formar los piquetes de combate, organizando a l‘90 o|o de los obreros. ¿C uál era el valor de la medida? Es sabido que aunque el 100 o|o de los tra­ bajadores coticen a l sindicato, la p arti­ cipación real se reduce a mcuos del 25 ojo en el mejor de los casos. Nuestra ■proposición iba dirigida a darle una participación m ilitante a la inmensa mayoría. ¿ Con qué objetivos ? Con el objetivo •de g aran tizar realmente una lucha, si ■ésta se desencadenaba. Sea una huelga, sea una ocupación de fábrica, esta vez, d ad a la postura de López Aufranc, iba a ser muy necesaria, la actividad móvt l de miles de cuadros obreros. Y, con un crite rio preventivo, también hubiera quizás' llevado a l gobierno a recular. Además, hubiera sido una valiosísima ay u d a a la Comisión de Solidaridad — si ésta iubiera funcionado. Y en defin iti­ va, hubiera sido una escuela militante, de educación clasista, preparatoria de próximos grandes combates. P. C. R. ¿C uál es la diferencia entre una au­ to crític a de un sindicato obrero y la c rític a de uu grupo político? L a dife­ rencia consiste en que el primero revis t a y balancea la conducta práctica que observó, mientras que el scguudo tiene el deber de confrontar sus posiciones críticas actuales con las posiciones que sostuvo antes. ¿H ace esto el P C R en su artículo en N ueva H o ra de la 2* quince­ na de ju lio? N O . Achaca las culpas a los “ otro:t” . A sí d ic en : “ creemos que la dirección sobreestimó sus-fuerzas y subestimó las del enemigo” . A p a rte del hecho de que este pensamiento no sirve para nada, este grupo, que fren ó todo lo que fu e ra la extensión de la lucha, quebrando las comisiones de solidaridad no dice una p alab ra sobre sus propias posiciones petardistas y liquidadoras. Form ula, sin embargo, graves denun­ cias. Acusa a “ V a n g u a rd ia Comunista” de “ aislar a F e rr e y ra de'i conjunto de la clase obrera cordobesa y de todo el país ' y de “ b oicotear durante tres me­ ses la convocatoria a l fre n te sindical clasista revolucionario'” ( ¡ M U Y G R A ­ V E ! ) . ¿Echarán a V C de algún p ró xi­ mo plenario o comisión de solidaridad? Acusa también a “ los grupos armados revolucionarios de la pequeña burguesía radicalizada como E R P , F A L , M O N ­ T O N E R O S , etc. que absolutizaron el terrorismo como fa c to r del triu n fo de los obreros dc S I T R A C - S IT R A M ”. Es­ to es m uy grave. Pero nada de centrear n i de oscilar. ¡ Rompan con el p e tard is­ mo ! ¡ Que el plenario del 28 resuelva la formación de la corriente clasista, en base a l fren te único, y delim ite su po­ sición de quienes se mueven a l margen de las organizaciones obreras combatí" E S T E A R T IC U L O E S U N I N T E N ­ TO M A S D E N U E S T R A P A R T E P A ­ RA C O N IR IR U IR AL E X IT O DE C L A S E D E L P L E N A R IO D E L 28. E l d ía martes 3 se realizó en la fa c u ltá d de derecho de Rosario u n im portante a c to dc repudio al asesinato de J. P . M aestre y eontra la repre­ sión y las to rtu ra s . E l é x ito del acto — o-asi 200 compañeros— se debe, en p rim e r lu g ar, a la in ic ia tiv a , empeño y vigor puesto p o r los compañeros de la T E R S ’ de Rosario, quienes realizaron una p ro fun d a campaña, de agitación y propa­ ganda en f a v o r del misino. A l lla m a d o de la T E R S se ad h iriero n en p rin c ip io M O R y T A R E A y posteriorm ente se agregaron F E N , U E L , F r a n ja M o ra d a y los S.R , U u o ra d o r déla T E R S abrió el acto, rem arcando que solo a través de la u n idad de acción, y la organización masiva com bativa y m ilitan te de todos los sectores antidictaloriales y antiim perialistas se p u ed e enfrentar la p o lítiea de represión y tortura del “ G ran Acuerdo Nacional n. H a b la ro n , asimismo, oradores dc U E L , FIEIN, S .R ., M O R y T A R E A ; y de la F ed eració n Juvenil Comunista y el P .R .T . ( L a V e rd a d ), lo que dio al acto un m aread o carácter de unidad en la lucha contra la represión. P a ra fin a liz a r e l acto hizo uso de la p a la b ra un compañero de P o é ­ tica Obrera, q u ie n además de demostrar la im p o rtan cia del m itin , aclaró que PO . fie l a l p rin e ip io revolucionario de la lu cha de clases no iba a separar nunca, el com bate contra los desbordes crim inales d e l capitalismo y del lanusismo, de la lucha de las masas por el derrocam iento revolucionario de la d ictad ura y la imposición de su propio gobierno, el gobierno obrero y p opular. Movilizarse por ei Congreso... (V ie n e de la página 3 ). del p ro le ta ria d o nacional. Las masas acompañan a l a vanguardia, e incluso la superan, en to da s las movilizaciones últim as. E l capitalismo se debate en una crisis agónica. La clase obrera in ­ ternacional, está en ascenso. Los m ine­ ros y campesinos de B o liv ia indican u n ru mbo claro h ae ia el gobierno obre­ ro y campesino. Solo el sectarismo, el ultraizquierdism o y el reformismo pue­ den llegar a entorpecer. N o debemos p erm itirlo . Q U E S IT R A C -S IT R A M S E D E C L A R E N C O M IT E P R O V IS O R IO L a d ic ta d u ra v a a tratar de im pedir el congreso. V a a blanquear las rutas, v a a im p e d ir e l funcionamiento de la reun ión . Proponem os que S itrac-S itram , en fu n c ió n de. esta eventualidad, se tran sfo rm an y a en comisión p rovi­ sional d el nucleamienlio y re ú n a n -de in ­ mediato a los delegados de las agrupa­ ciones adheridas. C ompañero : Debes m ovilizarte a fo n ­ do p o r este Congreso. Debes m o vilizarte en tu fá b ric a y discu tir las perspecti­ vas del Congreso. Asimismo, debes con­ c u r r ir con to do al acto del 13 de agos­ to, en la Federación de Box, acto orga­ nizado p o r los “ sindicatos combativos” que ad h ie re n a l congreso; debes concu­ r r i r a l p le n a rio convocado p o r la in ter­ n a del B an c o Nación, en apoyo del con­ greso, p a ra e l sábado 14 ; debes concu­ r r i r a l m it in de V O M -V M el viernes 20, con el m ism o fin ; debes co n cu rrir al ac­ to contra la represión, el jueves 26, convocado p o r el Centro de Ciencias Económicas y que está im pulsado por la T E R S ; debes hacer una campaña pa­ r a ju n ta r fondos que p erm ita n fin a n • c ia r el v ia je de nutridas delegaciones obreras a Córdoba p ara el plenario del 28. i V I V A L A C O N V O C A T O R IA D E S IT R A C -S T T R Á M !............ V O M - V M unificadas — 7-8-71. Martes 10 de agosto de 1971 PO L IT IC A O B R E B A A R T IC U L O D E .“ C O R R E S P O N D A S !C E IN T E R N A C IO N A L '’ (T R O T S K Y S T A ) LA CRISIS I N T E R N A C I O N A L ¡ ¿ Qué es Jo que lia pasado en el ú l­ tim o congreso de la U IE , realizado en B ratislava, en la Checoslovaquia ocu­ p ad a p o r los tanques de la burocracia deÜ K re m lin , del 3 a l 10 d e febrero ú l­ timos? E s en cierto modo vergonzosamente que la burocracia ha organizado este congreso, con dos años de retraso. No le h a sido dada nin g u n a pub licid ad a los debates; n i siquiera la prensa staOinista se- hizo presente, con excepción de la Komsomolskaiia Pravd a. EL con­ greso no ha publicado n in g u n a Üista oficia l de las delegaciones y , segúin pa­ rece, no h ab ría alcanzado quorum. Solo fu e conocida u n a votación, la de la co­ misión de mandatos, cuyo inform e fue aprobado por 49 contra 1 y 1 absten­ ción, m ientras que la U I E reividicaba 86 afiliados antes de!l congreso. E l desarrollo entero de este con­ greso b a estado colocado bajo1 e l signo del terrorism o ejercido p o r e l aparato del K re m lin , preocupado p o r elim inar toda oposición en e l seno de la "UIE. Es así que la delegación del Congo-Iuns" basa fu e rechazada, é'l representante de ilos estudiantes griegos expulsado en la vísp era de la a p e rtu ra del congreso. A la U N E F . (F ra n c ia ), a los estudiantes de Guadalupe y de M artin ic a, les fu e ­ ro n rehusadas las visas p o r p arte de H usak, quien “ o m itió ” hacer llegar los pasajes a 'las delegaciones de Guate­ m ala y de H onduras. Con dos delega­ dos belgas tu vie ro n lu g a r provocacio­ nes policiales y fu e ro n arrestados e in ­ terrogados por la po'licía checoslovaca. L a burocracia no h a podido im pe­ dir, sin embargo, que se exprese oposición en e l seno de este coi adulterado. “ Estas prácticas anticl^ oráticas — dice el semanario Po litiqu e Iie b d o del 25-2— no tien e n nada de sorprendentes. :E 1 hecho nuevo ,•— e im ­ portante— es que han encontrado en el congreso u n a oposición no despreciable. Desde el segundo d ía, u n a docena de delegaciones (A rg e n tin a . M éxico, España, E l Salvador, B lgica (valones y flamencos-), Irla n d a , la Federación de Estudiantes de A fr ic a del N o rte en F ran c ia y Estudiantes malgaches cu F ra n c ia ) protestaron ante la presiden” cia por medio de u n a resolución com ún; plantearon ocho cuestiones, retomando los hechos que liemos relatado, y mos­ tran d o que el quorum no h abía sido alcanzado como p a ra que el congreso pudiera deliberar’'’. L A B U R O C R A C IA S T A L IN IS T A E N L A C O N F U S IO N E l congreso h a demostrado que no fue so'io en F ra n c ia que la burocracia stalinista no vaciló en d iv id ir las or­ ganizaciones estudiantiles. In te n tó im ” poner el reconocimiento de la organizalión divisionista de la F U A (llam ada F U A de'l 15-11, de L a P la t a ) , que no representa más que 9 centros, mientras que la F U A estatutaria, que realizó su congreso el 15 de diciembre en Córdo­ ba, representa 60. Pero es precisamente a propósito de la escisión de la F U A que la burocra­ cia" ha "tenido que p la n te ar la cuestión de la U N E F en el Congreso de la U IE . DE LA DE U N I O N ESTUDIANTES “ Los delegados soviéticos y sus p a rti­ darios remarcaron que l a historia de la U N E F «demostraba claramente el error de aquellos que ere-en que el mo­ vimiento de 'ios estudiantes es una po­ tencia social extraordinaria y autosufieiente». Hablando siempre de la U N E F , subrayaron que lia re n u n c ia del grupo dirigente socialista en enero — y la pa­ rálisis actual de esta organización — no era más que el resultado inmediato de •la acción de «elementos anarquistas» y la consecuencia de la vo luntad de este movimiento de «escapaT a la autoridad de ’a clase obrera». P e ro esta manera ■de apoyar tan claram ente !la autoridad de partido comunista ortodoxo irritó precisamente a la F IJ A y a diversas otras delegaciones. Es así que tres de­ legaciones — el Y V ¡> '(Bélgica), el 1V1UBEF (Bélgica) y la S D E E (Espa­ ña) — presentaron u n a resolución so­ bre «el movimiento estudiantil en E u ­ ropa occidental! y en otros países capí* talistas"', que deploraba el hecho de que «la U IE no jugó u n ro l de vanguar­ dia en la lucha llevada e a estos países», y reprochaba a la U.1E e l no haber te* nido «ninguna envergadura ni eficacia» en Europa occidental desde 1967. E sta resolución fue evidentemente rechaza­ da”. (In fo rm ació n ex traíd a de la revis­ t a del In s titu to In tern acio n al de Estu­ dios sobre la Educación, que se edita en Bruselas). La burocracia lia denunciado a la U N E F , que combate el participacionis­ m o con el gobierno, como queriendo «escapar a la autoridad de la clase obrera», es decir a’i stalinismo, que su' bordina el movimiento obrero y estu­ d iantil a la burguesía. P e ro reconoce, d e este modo, la a m p litu d de la crisis d e su “au to rid ad ” internacional. . . Politique Iie b d o escribía el 25 de F e ­ brero: “ Ciertamente, se ha guardado u n lugar en el Comité E jecutivo para China Popular, para la U N E F y para España (cuya delegación ha abando­ nado espectacularmente e t congreso en l a sesión fin a l de «elección» de los or­ ganismos dirigentes impuestos p o r el K r e m lin ) . .. Queda por -saber s} esos lugares serán ocupados y có m o .. Im porta rem arcar que contraria­ mente al caso de la F iU A , la. dirección d e h U IE no ha tomado posición aún e n lo que respecta a la U N E F , g uar’ dando silencio sobre la división organi* zada por los staiinistas era Franeia. A p a rtir de.aquí está claro que la U N E F , cuyas tradiciones intemacionalistas le d a n una m uy grande audiencia ante las organizaciones estudiantiles y de la ju ­ ventud mundiales, que lig a n su comba­ te al de la oíase obrera, tiene la posi­ b ilid a d , de encarar la lucha contra la “norm alización” de la U IE y de encon­ t r a r u n m u y grande eco en las Asocia­ ciones y Uiiiones que componen la U IE . Antes aun que la dirección de la U N E F torne una in iciativa en este sen­ tido, cuatro organizaciones estudianti­ les han toma.do> posición, desde e l 26 de marzo, 41deniniciando el 1 0 ? congreso de la U IE como no representativo del mo­ vimiento antiim perialista m u n d ia l’ \ L a Asociación General de Estudiantes de M a rtin ic a , la Asociación General de Estudiantes de Guadalupe, la U n ió n de Estudiantes de Guyana y la Confede­ ración U n ive rsita ria Boliviana, declaran en u n comunicado común: “ Las Aso­ ciaciones y Uniones que suscriben de­ n uncian estas maniobras burocráticas (del congreso de la U I E ) y antidemo­ cráticas; (contrarias a los estatutos de la U I E ) como lo es la vo luntad del se­ cretariado d e la U IE y de las au to rid a­ des checoslo-vacas de a p a rta r del 1 0 ° congreso de l«i U IE a las corriente'? po­ líticas susceptibles de denunciar la normalización en Checoslovaquia y la ¡línea revisionista de la U I E ” . Después d e este p rim e r paso en la v ía del reagrupamiento de las organizacio­ nes estudiantiles que no aceptan los dic­ tados que - a burocracia d el K re m lin quiere im p o n er en las condiciones de álegaílidad estatutaria mareadas, la U N E F ha .tomado la in ic ia tiv a de d iri­ girse a todas las organizaciones miem­ bros de la U3E, como tam bién & su d i­ rección, por el respeto de las condicio­ nes de libre discusión y de fu ncio n a­ miento democrático de la organización estudiantil internacional. E n un memorándum hecho público a comienzos d el mes de mayo, el B ureau N atio n al de l a U N E F subraya que “va­ lora altam ente la pertenencia de la U N E F a la U IE (cu ya ) adhesión fu e arrancada en 1956 contra la reacción1’\ “ Considera que sería hoy de una im por­ tancia vita l para el m ovim iento estu­ d ia n til a eseala m undial e l que exista u na U n ió n Internacional cuyo fu ncio ­ namiento democrático perm ita asegu­ r a r u n a verdadera coordinación y em­ p u je a escala mundial de las luchas que lib ra en todas los países contra el im ­ perialismo, como también de las luchas que lib ra co n tra su propia burguesía en el conjunto de los países capitalistas avanzados o atrasados; que p erm ita asegurar, p o r otra parte, en el cuadro de los paíscs= que hayan escapado al control d el imperialismo, el respeto, por el gobierno d e estos países, del derecho de los estudiantes a organizarse lib re ­ mente, en to ta l independencia con re la­ eión a l p a rtid o y al Estado y asegurar en estos países la defensa de los estu­ diantes co n tra las medidas de repre­ sión que sufren, como es el caso hoy en Checoslovaquia” . E l-m em orándum de la X J N E F hace enseguida el "balance conocido, p o r esta fecha, de los hechos e irregularidades de toda clase que han mareado el de­ sarrollo del congreso de B ra tis la v a y “ declara que este conjunto de lieelios ha quitado a :la s decisiones tomadas todo Página 13 ca rá cter de representatividad _de posi­ ciones reales de- las organizaciones m iembros de la U IE ”, E l B .N . de la U N E F condena la escisión operada en el seno de la F U A y la n eg a tiva de los' dirigentes de la U IE de reconocer coma m iem bro a la F U A estatutaria, y raayorita ria , en beneficio de una organiza­ ción q u e no representa sino sd aparato staüniano. H a c e “notar que el secretario de la U I E n o lia osado aun hacer lo mismo con la U N E F y ha preferido p rudente­ mente, recurrir a la intervención d el g o b iern o checoslovaco p a ra exclu ir a la U N E F del Congreso. Denunesa, sin em­ bargo, por adelantado, to d a ten tativa de acreditar la representatividad de la UNEF-jRenouveau, organización d iv i* •sionista* ’. A p a rtir del p rim er reagTupamien" to de Üas cuatro organizaciones estu­ d ia n tile s opuestas a los métodos y a l a p olítica utilizados y adoptados en B r a ­ tislava, el memorándum de l a U N E F concluye: “ E l B N se d irige a íias ins­ tancias estatutarias de la U n ió n p a ra e x ig ir que se haf a la luz. Q u e las o r­ ganizaciones miembros de la Unión to­ men posición en relación a est os hechos. Que estas prácticas sean solemnemente repudiadas por las organizaciones miem bros de i¿a U IE . Es hoy necesario que se reagrupon todas las organizacio­ nes miembros de la U IE . decididas a organizarse eon vistas a im poner la con­ vo cato ria de un congreso democrático, representativo de las posiciones d el movimiento estudiantil an tiim pe ria lis­ ta m undial, para lo que prop-one to m ar contacto' a todas las organizaciones dis­ puestas a discutir estas proposiciones’ E L LLAMADO DE L A U N E F S E R A ESCU C H A D O E'i llamado de la U N E F n o puede si­ no ser escuchado por la inmensa mayo­ ría de la s organizaciones estudiantiles, muchas de las cuales h an podido expre­ sarse e n Bratislava, a pesar d e las m a­ niobras de aparato. L a lucha conciente comprometida p o r la U N E F contra la dirección sta'linista de la U IE es parte in tegrante d e l reagrupamiento a eseala in tern a cio n a l de una fuerza política en la ju v e n tu d , que p o n e en el eentro de su combate l a reivindicación de !¿a independencia do las organizaciones de la ju v en tu d y d e l estudiantado respecto a los Estados v de la burocracia contrarrevolucionaria. E s ta lu e lia se inscribe, pues, p lenam en­ te en e l cuadro del reagrupamiento d e los militantes que ponen a la orden d el día la construcción de la IN T E R N A ­ C IO N A L . R E V O L U C IO N A R IA D E L A J U V E N T U D , condieión po lític a in~ dispensadle que p erm itirá su p e rar e l obstáculo del stalinismo en e l seno do las organizaciones dé la ju v e n tu d y. p o r ello misino, es herram ienta fu n d a m en ­ ta l p a r a la lucha de los trab a jad o re s contra e l imperialismo. STartea 10 de agosto de 1971 PO LIT IC A O B R E R A Página 14 Textiles S a n M a r t i n FRENAR LA RACIONALIZACION EN PRODUCTEX ¥ SAN ANDRES * M e t a l ú r g i c o s V ic e n t e L ó p e z E l 5 de ju lio e l precio del «ervicio do comedor atendido por un concesionario trepó a $ 200. F u e el terc er aumento en u n año. en que pasó suce­ sivamente de 95 a 135 y a 160. A p a rtir de ese d ía el personal obrero ha m antenido u n u náni­ me boicot en repudio a l au­ mento y a la cada vez peor calidad de la. comida. Los a r­ gumentos de los compañeros son contundentes: E l salario- H a y que señalar que ambas r a se lia lanzado eontra los fábricas, tradicionalm ente opo­ sitoras a la dirección textil, obreros de estas dos fábricas, convenio aumentó e'i 32% y el fueron “ limpiadasr ’ hace pocos ia» textiles más importantes do comedor más del 1 0 0 p o r cien­ meses y e'i sindicato logró im ­ San M a rtín . Aumento de tela* to. Además es u n m isterio ab" poner listas adictas en las elec* res por obrero en Productex y soluto saber cuánto pone la p a­ ciones internas (ve r P .O . N? de lados de continuas (hilado­ tro n al pero los rumores in d i­ 84). Con lo cual se demuestra ras) en San Andrés, son los ob* can que mientras m antiene su que no hizo fa lta mucho tiem ­ jetivos inmediatos de ’ias paaporte aum enta el de los obre­ po para que se recompusiera el •onales, y es un reflejo en ros. agrupamiento de los activistas. pande de lo que ocurre p e r Es en este resurgim iento, toda* L a firm eza con que se m an­ lanontemente en las fábricas vía incipiente y esporádico, tiene el boicot.es una expresión ledianas (IN T A . W E L L S ) y que debería basarse u n a cam­ d irecta del p rofundo repudio c*i los “ boliches” . paña dc reorganización-fabril, obrero al alza de’i costo de v i­ L a patronal cuenta para ello que es lo que está 'impulsando da. E n esto se ve hasta qué con la subordinación,de la bu­ i.a agrupación clasista T rin c h e ­ punto son las burocracias ce­ rocracia te x til al proceso de ra Textil dc la zona. E n P ro ­ getista y de la U O M las que racionalización, institucionali­ ductex no sólo están los p ro ­ -bloquean e im piden u n a lucha blemas dc racionalización sino zada eon el articuló 3? del con­ efectiva por el aumento salaque T O D A V IA no se pagó el venio, que fue invocado tanto ria l.P o r eso es totalm ente inco* aguinaldo y el retroactivo, lo en Productex como en San A n ­ . rrecto que üa m ayo ría de los cua'i provocó g ran repudio y : drés para im pedir, toda resis* delegados, que inicialm ente im ­ te n cia. Pero las ofensivas ra­ un clim a de deliberación en pulsaron el boicot, se laven toda la fábrica. cional izadoras no fueron aeep" Las tareas inmediatas pasan tadas pasivamente por 'ios obre­ por la exigencia de elección de ro s: los tejedores de Produedelegados en continuáis de San te x se convirtieron en un ejem­ Andrés y en T ejed u ría dc P ro ­ plo de firm eza p a ra toda 1 a ductex y, ju n to a ello, la orga* «seccional, resistiendo durante nización dc l'as secciones para meses el aumento de los telares, mantener la resistencia a la ra ­ el que solo fue impuesto hasta cionalización. E n Productex, ahora en un reducido sector especial de la sección. En San además, hay que exig ir a los Andrés, la patronal pudo irndelegados la realización de jponer el aumento sólo después asambleas de sección p ara re­ solver medidas de lucha, paros de desbaratar la resistencia Los compañeros ele Sasson obrera, despidiendo sucesiva­ escalonados por ejemplo, p ara acaban de desarrollar u n a lu ­ mente dos delegados (que fue' imponer el pago de todo lo cha contra una ofensiva de des­ ron electos con la lista probuadeudado y el pago a l d ía de pidos de la patronal, la compli­ las quincenas, que desde hace ro crátiea) y a activistas que cidad de la burocracia del ves­ tiempo se retrasan. encabezaban la resistencia. tido y el petardismo in d iv id u a­ lista desorganizador. Contra la sistemática ac titu d represiva de la p atrona, apoya­ G e n e r a l M otors S a n M a r t i n da incondieionalinente p o r el accionar de u n a burocracia gangsteril (representada en la fábrica por la rep u d ia d a A u ­ ro ra ), se venía operando un lento proceso de agrupam iento de activistas, que apu n tab a a j organizar y u n ific a r a l conjun­ to de la fáb rica tras u n a serie Nuevamente el pulpo impe­ 'despidos en General M otors es de reivindicaciones, y que se ria lis ta resuelve sus problemas necesario que la vanguardia de de súper beneficios despidien­ la fábrica se encuentre p ro fu n ­ do obreros. Todos los días hay damente articulada, sección listas de despedidos en la puer­ por sección. L a experiencia dc ta. F ren te a ésto, la comisión la ocupación de-noviembre del in tern a llamó a asamblea con­ año pasado contra los despidos ju n ta de ambas plantas, la que demostró que este proceso era fu e m inoritaria y en la cual no aún insuficiente y desde enton­ se resolvió nada. Esto no po- W OBRON: Boicot a l C o m ed o r ahora las manos con el a rg u ­ mento de que no se tra ta de un problema grem ial. A lo que le esquivan e l bulto es a to m ar el problema del comedor como p a rte de la cuestión salarial y a exigir que sea tomado p o r la seccional. Temen, en ese caso, q u e el problema del comedor se extienda a muchas otras fá b ri­ cas de la seccional, donde re ­ cientes aumentos provocaron mucha bronca (B e n d ix, por ejemplo). Esto h a hecho de que la in i‘ ciativa recaiga cada vez más en los activistas de base de la fá ­ brica. F u e su intervención la tju p decidió que se repudie en abrum adora una pro­ puesta d el concesionario de mantener los 2 0 0 pesos y “ pro­ m e te r” (verbalm ente) m ejo­ r a r la calidad, propuesta fren te a la cual el cuerpo de delega* Frenar los Despidos preparaba p ara d ar la b atalla p o r la democracia sindical in ­ te rn a y p o r la elección de de­ legados antipatronales. A mediados de ju n io , la p a­ tro n al intentó ab o rtar este pro­ ceso, despidiendo a rb itra ria ­ m ente a la única delegada com­ bativa c iniciando una vasta ofensiva in tim id a to ria. Pero e l proceso de ag ru p a­ miento clasista sufrió otro gol­ p e en la semana últim a , f a c ili­ ta d o por la acción aven tu rera y petardista de la agrupación I o dc Mayo. Con menos de tres meses en fáb rica, con método in d ivid u alista y pequeño-bur* gués, al m argen de la organi- Reorganizo!’ Sea Fábrica p a ra P arar Sos Despidos I . d ía sorprender, pues la fáb ri­ ca quedó muy desarticulada después de la d errota de no­ viembre del año pasado, y los nuevos delegados poco y nada es lo que hacen p ara reorgani­ zarla. Son pocos para el nútme" ro de obreros que representan, a lo cual se suma que son en su mayoría inoperantes y adic­ tos a Kloosterm an. No apare­ cen por >las secciones y dejan de lado los problemas de cate­ gorías, racionalización, etc., que aparecen cotidianamente _ en fábrica. E s que para enfrentar los ces la debacle fue m u y g ran ­ de. Es necesario, por lo tanto, volver a artic u la r y organizar al conjunto del activismo fab ril. E n esta tarca están empeñados 1111"conjunto de activistas que cuentan con el apoyo de la agrupación clasista V a n g u a r­ dia °b rera Mecánica. P a ra ello distribuyen un boletín fa b ril (esta semana aparece el núme­ ro 1 0 ) que denuncia los proble* mas de cada sección y orienta parjj, enfrentarlos. A p o yar la actividad de estos .compañeros para reorganizar la fáb ric a es la tarea de la hora. i dos no había tomado posición. L a labor del activismo de f á ­ b ric a debe consistir, en p rim e r lu g a r, en asegurar el m anteni­ m ie n to del bo:cot, E n segundo lu g a r, se debe p la n ific a r una la b o r para ganar a l sector de . í-a administración que aún com pra la comida. E n terc er Jugar, se debe exig ir a la Co­ m isió n Interna que tome ab ier' tam en te el problem a en sus manos v organice la entrega de u n petitorio exigiendo que la patr-ona’i se haga cargo de los $ 40 de aumento. Lo im p o rtan ­ te, además, es extender el ejem" pío a l conjunto de fábricas del gremioi y de la zona donde se lia planteado^ el problem a y em palm arlo eon la exigencia de'i aumento de $ 20 .0 0 0 que plantearo n el S IT R A C - S ITR A M . zació n obrera, irru m p ió con g rito s en las secciones ante el fra u d e burocrático p a ra la elec­ ción de delegados. L a respues­ ta p atro n al no se hizo es p era r: un espontáneo paro de 20 m i­ n u to s fue quebrado por la in ti­ m id ació n p atronal y po lic ial y el despido de 5 activistas más. L o s compañeros nucleados en Activistas del Vestido vienen bregrando por m antener la or­ ganización del activismo y por u n ific a r a la fáb ric a p a ra re­ s is tir nuevos despidos y por la elección democrática de los de­ legados. P a ra lle va r alelante esta tarea es fundam ental com­ b a t ir los planteos petardistas de lia l 9 de M ayo, que con su accionar aventurero f a c ilita la represión p atronal y burocrá­ tic a . H ay que acentuar el tr a ­ bajo clandestino, y ce n trar la agitación y organización en dos puntos claves: fre n a r los despidos y p o r la elección de­ m ocrática de los delegados. TEXTILES MATANZA Triunfo en MDunwiM® L a suspensión de un teje­ dor por b aja producción col­ mó los ánimos de los compa* ñeros de D anubio, donde la producción es insostenible con hilado m ajísim o y má­ quinas obsoletas. L a oposición a la suspen­ sión se convirtió rápidam en­ te en la oposición a todas las condiciones de trabajo. Paros de sección con asam- bleas perm anente durante dos días, solidaridad de otros sectores de fáb ric a, movilizaciones dc unos 80 compañeros a las audiencias d el ministerio, fueron los métodos utilizados. CON E S T O S M E T O D O S S E T R IU N F O . Se levantó l a suspensión a l compañero, se quedó en d is cu tir todos los problemas de produc- ción, más el pago de las lio ras caídas. A d ela n te compañeros de D a n u b io ! Es necesario exte n d e r estos métodos ail conju n t o de la fáb ric a p o r to dos los problemas de producción, y contra la m iseria s a la ria l. Hagamos de D an u bio u n bastión en la lucha s a la ria l y contra la racionaliza c ió n en M atanza. | I =j = = = = =j E E E E ,= "= rallllIlIlIMIMIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIiiilllllllllllllllllllllllllllllllllllIllllllllllllllIlllllllllllllIlllllllllllllHllllllllIllllllllllllllir; ___ ~__ M a rte s 1 0 <de agosto de 1971______________________________________________ P O L IT IC A O B R E R A . 'Página 1 BONAPARTISMO BURGUES Y BONAPARTISM O SO V IET IC O Po r L E O N -Ciertos .críticos nos fo rm u la n la. •queja .de .hacer uso demasiado am plio y demasiado diverso del térm ino B O N A P A J & T IS M Q . Estos crítieos no señalan q u e lo mismo o cu rre con el empleo de otros términos .del vocabulario político, tales como “ democracia” , “ dictadura:” , sin h ab la r .y.a .de “ E stad o ” , “ sociedad/” , “ gobiernos” , etc. Hablamos de demo~ cracia a n tig u a (q ue reposaba sobre la esclav itu d ), d e l a democracia de las corporaciones medievales, de la demo­ crac ia burguesa, d e la democracia p ro le ta ria (en el sentido de E s­ ta d o ), tam bién d e la democracia en e l in te rio r de los partidos, de los sin­ dicatos, de las corporaciones, etc., etc. E l marxismo no puede re n u n c iar a ta ­ lles nociones estables, conservadoras, y no puede negarse a ap licarlas a fenó­ menos nuevos: sin esto la transm isión d el pensamiento humano sería en ge­ n e ra l imposible. Pero el marxismo está, obligado, so p en a de erro r, a d e fin ir ■cada vez el contenido social d el con­ cepto y el sentido de su evoÜución. Re" cordemos que M a r x y En g els h an ca­ lific ad o de bonapartismo no solamente a l régim en de N apoleón I I I , sino tam ­ bién. a l de Bism arck. E l 12 de a b ril de 1890, Engels escribía a Sorge: “Todo gobierno actual deviene, bonapartista” . Es to fu e cierto entonces p o r u n largo período de crisis a g ra ria y depresión in d u s tria l. E l nuevo auge del capitalismo a p a rtir de 1895, aproxim ada­ mente, deb ilita las tendencias bonapar' tistas, la declinación del capitalismo después de la guerra las refo rzó extre­ madamente. E n .su “ H is to ria de la g ran revolu* ción rusa” , T ehernov refiere declara­ ciones de L e n in y de T ro tsky, presen’ tan d o ia!i régim en de K ere n sn y como u n em brión de bonapartismo, y, recha­ zando esta calificación, señala con to* n o sentencioso: “ E l bonapartismo to­ m a vuelo con las alas de la g lo ria ”. Es" te “ vu elo ’ ’ teórico está, enteramente, e n el ,estilo de Tehernov, p ero M arx , Engels, L e n in han definido a!l b onapar­ tismo no p o r alas sino p o r u n a re la ­ ción, específica de clases. P o r bonapartismo entendemos un régim en donde la clase económicamen­ te dom inante, preparada, en los méto­ dos democráticos de gobierno, se en­ cuentra obligada, a f i n de salvaguar­ d a r lo que posee, a to le ra r p o r enci­ m a de efca el dominio incontrolado de u n ap arato m ilita r y policial, de u n “ salvador” coronado. U n a t a l situación £e c*rea en los períodos donde las eon* íradiceiones d e clases se han vuelto particularm ente ag u d as: el bonapar­ tismo tiene como objetivo im pedir la explosión. L a sociedad burguesa ha atravesado más de una. vez tales perío­ dos. Pero esto, por a s í decirlo, no ha sido más que repeticiones. L a declina­ ción ac tua l del capitalismo no solo ha socavado la democracia d efin itiv a­ mente, sino que ha revelado también to­ da la insuficiencia del bonapartismo de viejo tip o : en su lu g a i ha venido el Fascismo. S in embargo, como un puen­ te entre la democracia y el fascismo (en Rusia, en 1917, como u n “ puente"5 en­ tre la democracia y el bolchevismo) apa­ rece u n “ régimen perso n al” que se ele­ va por encima de la democracia, oscila entre los dos campos y salvaguarda al mismo tiempo los intereses de la cías* dominante: basta dar esta definición para que el término bonapartismo esté plenamente fundam entado. de “ bonapartismo soviético' \ **Xo. ex­ claman nuestros críticos, y a h a y dema­ siado “ bonapartismo” , la palab ra se hace extensible hasta u n punto in ad­ m isible” , etc. llab itu aln ie n te . se hacen objeciones de este género, abstractas, forma'ies, gramaticales, cuando no h ay que decir sobre e l fondo d el asunto. S in nin guna duda, n i M a rx , n i E n gels, n i L e n in han empleado e l térm i­ no bonapartismo p ara u n Estado obre­ ro ; esto n o tiene n ad a de asombroso, no han tenido oportunidad de em plear­ lo (que L en in no ha vacilado en em­ plear, con las reservas necesarias, p ara el Estado obrero términos usados para el régim en burgués, 'io atestigua, por ejemplo, sil expresión de “ capitalismo de Estado- Soviético” ) . ¿Pero qué ha­ cer en los casos en que los buenos vie­ jos libros no dan las indicaciones nece­ sarias? H a y que p ro cu rar deducirlas con la propia cabeza. TROTSKY tendencia del desarrollo. E u éste como en otros dominios la ca n tid a d se tra n s ­ fo rm a en calidad. Toda democracia burguesa lleva los rasgos d el bonapar­ tismo^. Podemos también, con razón, descubrir elementos de bonapartism o en e'¿ régimen soviético bajo S ta lin . Pero el arte del pensamiento c ie n tífi­ co es determinar dónde precisamente la cantidad se transforma en una n u e ­ va calidad. E n la época d e L en in , el bonapartismo soviético e ra una posibi­ lid ad ; en la época de? S ta lin se h a he­ cho u n a realidad. E l término bonapartism o descon­ cierta a un pensamiento sim ple ( a la Tehernov). Puesto que evoca el mode­ lo histórico de Napoleón « 1 igual que el término de eesarismo evoca el mode­ lo d e Julio César. D e hecho, estos dos términos están desligados, desde hace tiem p o , de las figuras históricas que fie han. dado su nombre. Cuando h ab la­ mos d e bonapartismo, sin artículo de­ D e todos modos, constatamos: terminativo, tenemos en v is ta no la an alo g ía histórica sino la d efin ic ió n so¿Qué .significa el “ régim en perso­ 1) Nin guno de nuestros críticos ha eioógic-a. A s í.. el término d e chovinis­ n a l ’ de Stalin y de dónde toma su hecho el esfuerzo de seÜalar el carácter mo tiene un carácter tan general co­ origen ? E s , en últim o análisis, el pro­ (específico de los gobiernos prefascismo el de nacionalismo, aunque e l p r i­ ducto de an a viva lucha de clase entre tas; GioÜitti y P a c ta e n Ita lia , Bru" el proletariado y la burguesía. Con la : mero venga dei apclíiido d e l burgués ning, Papón y S chleiclier en Alem ania, fra n c é s Cliauvin y el segundo de na" ayuda del aparato burocrático y poli­ Dollfus en A u stria , Domnergc y P lan * ción. > cial, el poder del “ sa lv ad o r’ * y de din en Francia. á rb itro d e la burocracia (en tan ­ to que casta dirigente)se eleva por Sin embargo, en cierto caso, a l ha* 2) N adie ha propuesto otro término encim a de la burocracia soviética, re ­ blar d e bonapartismo. tenemos en vis­ duciéndola a su propia sombra. L a fu n ­ hasta ahora. Respecto a nosotros, no le ta una aproximación histórica más con~ ción objetiva del “ salvador” es la de vemos para nada la necesidad: el té r­ creta. Así. el régimen de Stalin , que salvaguardar las nuevas form as de p ro ' mino de M arx , de E ngels, de Lenin, nos representa la traducción d e l bonapar­ piedad, usurpando la fu nció n p olítica satisface plenamente. tismo eu el lenguaje d á Estado sovié­ de la clase dominante. • E s que esta ca­ tico, revela, al mismo tiem po, un cier~ racterística precisa del r¡ égimen socia' to número de rasgos suplementarios de lis ta no es, al mismo tiem po, l a d e fin i­ ¿Por qué insistimos en esta cues­ p arecido con el régimen d e l consulado ción sociológica, cien tífica de:i bona* tión? Porque tiene m ía im portancia co­ (o d e l imperio, pero s in corona partismo ? losal tanto teórica como política. Se a u n ), y no es por casualidad: estoa puede decir que desde e l momento en regímenes han surgido a continuación que el conflicto de clases separadas en de graneles revoluciones y h a n sido sus E l v a lo r incomparable del término dos campos hostiles eleva el eje del usurpadores. es el de p erm itir descubrir de u n golpe poder p o r encima d e l parlamento, se aproximaciones históricas extrem ada­ abre oficialm ente en e’i p a ís mi período mente instructivas y d eterm in ar las prerrevolucionario (o prefaseista). Así, Vemos cómo un empleo correcto, es que fo rm a n sus raíces sociales. Surge el bonapartismo caracteriza el últim o decir dialéctico, dei térm in o bonapar­ ésto: la ofensiva de Jas fu erzas plebe­ tismo no solo no nos conduce a l es­ período en el curso del cual la van­ yas o proletarias contra la burguesía quematismo. esa íilleera del pensamien­ guardia p ro le ta ria puecle tomar carre­ dirigente y , asimismo, la ofensiva de to, sin o que. por el contrario, p en n ite ra p ara lanzarse a l a conquista deli po' las fuerzas burguesas y peqneño-bur* caracterizar los fenómenos q u e nos in der. N o comprendiendo la naturaleza guesas contra el proletariado pueden teresan dé una manera tax i coucret; del régimen bonapartista, los stalinisconcluir en regímenes políticos comple­ como hace falta, no tom ando el fenú ias son llevados a hacer el diagnóstico tam en te análogos (sim étricos). T a l es el meno aisladamente, como -único, sin> siguiente: “ N o hay situación revolucio' hecho incontestable que el térm ino bo­ en ligazón histórica con numeroso^ napartismo permite, y no puede me­ naria” . Y pasan al lado de una sitúa* . otros fenómenos ligados a él. «*,Qué nos, hacer aparecer. ción prerrcvo’Iucionaria más podemos reclam ar de u n térm ino científico? La cósase complica cuando emplea' mos el térm ino bonapartismo p a ra el régimen de S talli-, y cuando hablamos I Cuando Unge'ls escribía q u e “ Todo gobierno ac tua l deviene bonapartista" no ten ía en vista, seguramente, siuo la 1*[2|1935. B oletín de la -F f Oposición. PO L IT IC A O B R E R A íágina. 10 DOCUMENTO Martes 10 tlp agosto de 1971- DE L A 3“ I N T E R N A C E s ta d o Socialistas de Publicamos a continuación un ex­ tracto tic las directivas del Comité E je ­ cutivo de la 39 Internacional al p arti­ do comunista mejicano. Estas dire cti­ vas tiene fecha del 21 de agosto de 1928 y el extracto que damos a conocer está titu lad o “ El Partido Comunista de M éxico y los países oprim idos de A m é­ rica C e n tra r'. E l valor de este docu­ mento consiste en que subraya las ta­ reas ' revolucionarias para los países atrasados dc Am érica L atin a y fo rm ir la , ya en 192!5, la idea de los Estados Unidos Soc'alistas de Am érica L atina, que la -P Internacional aprobaría en sus conferencias preparatorias en 1934. Como e.s sabido, los trotskistas re i­ vindicamos como propias las resolucio­ nes de 'los cuatro primeros congresos de Üa 3? In ternacional. Lo que se v a a leer .mo es doeumento eongresal sino una .resolución del Comité Ejecutivo . Es ■posterior al 49 Congreso, que se realizó en noviembre de 1922, pero es an terio r «1 desastre dé fines de 1923 en A lem a­ nia, que íprcó el punto dc viraje anti■intemacionalista (1c la 39. Como la íir •tir documentos sobre A m érica Latin a , ten el período de sus prim eros cuatro congresos, el presente documento es de u n valor remarcable. “E n conclusión, deseamos decir a l­ gunas palabras acerca del significado de 5ia lucha nacionalista y revoluciona­ r ia por la libertad en los países de Cen­ tro América. E l desarrollo capitalista de Norteam érica y el desarrollo econó­ mico y social atrasado de los países de A m érica L a tin a determina la actitud po’iífciea de los Estados Unidos hacia los VERANO EN condiciones de esclavitud medieval, son estrujados hasta la médula ,v controla- obrera es suprim ida, las fro n teras son controladas, la censura es severa — ya que el mundo no debe descubrir cómo el capitalismo americano está asesinan­ do a los negros e indígenas de éstos países. L a A m érica que invocó los 14 puntos de W ilso n (p lan de “ paz y de' m o c ra m ’’ form ulado por los yanquis al fin de la p rim e ra guerra m u n d ial — P O ) ha estado violando d u ran te años la lib ertad nacional de ias Repúblicas de las In d ia s Occidentales y de A m é­ rica C entral. Los derechos más elemen­ SALVAJE A L E M A N IA ( E l artículo que presentamos a con­ tin uación pertenece a la revista burgue­ sa francesa “ L e Nouvel Observateur’’ d el 12 de ju lio último. E l interés de su transcripción reside en el panorama que ¡brinda sobre la agitación sindical en A lem an ia ). ; "países d el Su r. E l agotamiento del po­ der de compra de E u ro p a está empu­ jando los productos americanos hacia los mercados de Sud Am érica. E n la prensa capitalista norteam ericana se nota, en mayor medida que antes, una fu erte tendencia im p erialista hacia el Sur. Lo que han hecho en las In d ia s Occidentales y en A m érica C en tral ( in ­ vasiones de ‘ ‘marines ’ ’ — P O ), pueden llegar a in ten tarlo en M éxico y Sud A m érica también. E n Cuba, H a ití, San­ to Domingo; en Guatemala. Costa R i­ ca, H onduras y Panamá, el “ sistema” norteamericano, 'la más despiadada ex­ plotación del proletariado, reina su­ premo. Los obreros revolucionarios son perseguidos y arrojados a la prisión. Las organizaciones opuestas a Gompers (d irig en te sindical norteamericano, agente de la burguesía im perialista — P O ) son dislocadas, traicionadas y des­ truidas violentamente por los agentes de los gobiernos locales y norteam eri' cano. Los campesinos, mantenidos en Dos años después de sus prim eras huelgas salvajes, A lem ania Occidental acaba de conocer, nuevamente, un grave conflicto social y se esperan próximos meses difíciles. E s ta nueva crisis comienza por uua demanda de los sindicatos químicos (650.000 adherentes). Reclaman u n au ­ mento del 11% . Los potentes patrones de la B ayer, IToechst y B .A .S .F . re tru ­ can enseguida: “ L a revaluación del marco nos ha hecho s u frir pérdidas im ­ portantes. No podemos ir más a llá de u n 6 % de aumento’'’. No es bastante. P a ra hacer ceder a los “ gigantes” de la in d u stria quím ica, los obreros, que no quieren soportar las consecuencias del alza de precios y que piensan que “los patrones deben p ag a r’", desencadenan acciones de u n nuevo estilo. Acosan a los empleadores con huelgas repentinas. Así, algunas decenas de miles <ie obre­ ros se lanzan al ataque por sorpresa. E n Ham burgo 3.000 obreros se ponen en huelga. E n F ra n c fo rt serán 5.000. E n Ludwisghafen, el sindicato solicita a la población que testim onie su solida­ rid ad con los obreros químicos. L A A M E N A Z A D E LOS METALURGICOS Cese de trab ajo , reducción de la pro­ ducción, rechazo a hacer horas extras, ésta es la nueva táctica empleada por Latina tales de existencia de estos pueblos es­ tán siendo pisoteados. Estados Unidos espera, “ en e! momento ap ropiado” , desmembrar a México en territorios “ independientes4’. Y a está abogando abiertam ente por la anexión te rrito ria l a los Estados Unidos de '-a f é r t il B aja C alifo rn ia . E n Y u c atán y en el Estado de Chiapas, los norteamericanos están -em p u jan do las llamas de movimientos separatistas. Pero los tiempos están cambiando. A ú n en estas zonas a tra ­ sadas, el proletariado está, despertan­ do, se está organizando y está comen­ zando a comprender su condición dc clase. E n Cuba el movimiento sindical revolucionario está nuevamente levan­ tando cabeza después de la derrota que su friera en 1921 a manos de la reac­ ción. E n Guatem ala h a sido fundado un Pa rtid o Comunista de A m ériciT C m t r a l ; en México, el movimiento traba­ ja d o r revolucionario tiene tan tuertes raíces que n i las garras del capital norteam ericano nj las de ningún otro capital puede despedazar. Poro aun so carece de una concepción de ludia por 3a libertad para todas la^i masas, opri­ midas en las In d ia s Occidentales, en A m érica C entral y en Sud A m érica, eontra el im perialismo de los m agna­ tes petroleros y los barones in d u stria­ les de W a ll Street. Los obreros y cam­ pesinos de México y A m érica C en tral deben mantenerse estrechamente' u n r dos. E l objetivo de la lucha común de­ be ser 'la creación de la L IG A D E R E ­ P U B L IC A S O B R E R A S Y C A M P E S I­ N A S D E A M E R IC A C E N T R A L . Es el deber del P a rtid o Comunista de M é x r eo anunejar este slogan a las' masas los sindicatos, que quieren p ertu rb ar la producción sin p ara liza rla verdadera­ mente y que, por prim era vez, orques­ tan u n a huelga salvaje. P o r p rim era vez tam bién en A lem an ia, la reacción será b ru tal. E n Wiesbaden, la policía ataca los piquetes de huelga. U n poco en todas partes, se asiste a choques vio­ lentos entre las. “ fuerzas del o rd en /’ y los huelguistas. L a com batividad de los obreros sorprende, incluso, a los d i­ rigentes del sindicato. D u ra n te se­ dos manas, se continúa con huelgas ro tati­ vas. Sin embargo, bajo la doble presión del gobierno “ socialista” y de los pa­ trones, quienes amenazan con u n “ lock out’"1, los sidicatos va n a ceder, f in a l­ mente. Aceptan, u n aumento del 7,8%. Desde su instalación- en el poder, K . S cliiller, -m inistro socialista de Eco­ nom ía y Finanzas, p a rtid a rio . de la “ economía de mercado” , había enca­ rado una p o lítiea de eoncertaeión. E n este conflicto tomó la defensa de 'los pa­ trones: “ la economía alemana — d ijo — no p odría soportar aumentos de sala' rios irrazonables” . Desde entonces, los oprim idas de A m érica C entral con todo ferv o r revolucionario. E l P a rtid o M e­ xicano debe tra ta r exhaustivamente la cuestión que apenas hemos esbozado aquí. E n conjunción con el P a rtid o Co' m unista de A m érica C en tral y el grupo comunista en Cuba debe prepararse un program a de trab ajo y de acción. Pero los comunistas deben ser coneientes del hecho de que esto no es solo u n asunto de la mayor d ificu lta d y p eli­ gro sino de la más grave responsabili' dad. Los capitalistas americanos no mi; ra rá n en silencio. M o vilizará n todos süs verdugos burgueses, sus mercena" rios, espías y agentes p ara ahogar vuestras voces. Los mejores de ustedes serán arrojados a la prisión o asesina­ dos traidoram ente. Pero vuestra lucha es la lucha del amanecer contra la no­ che; es la lucha del fu tu ro cercano, que pertenece al pro letariado ” . “ L a Revolución Rusa es el p re h r dio heroico de la Revolución M u nd ia l. L a victoria de la elase obrera on los países más im portantes d e Eu ro p a ase* «lira la victoria d ci proletariado en todos los países. Pero la destrucción de la ú ltim a forta'leza del capitalismo im pe­ ria lis ta , el derrocamiento de la b u r guesía norteam ericana, es la tarea de los obreros y campesinos de todos los países americanos. L a In tern acio n al Comunista, el P a r­ tido M u n d ia l del proletariado revolu’ cionario, está convencida que los obre­ ros y campesinos de M éxico combati­ rá n hombro a hombro eon la clase obrera In tern a cio n a l hasta que la vic­ to ria de la revolución m u n d ial sea al' eanzada' \ sindicatos no desean más esta concerta* ción. “ Los patrones, dicen, no tie ­ n en más que una sola preocupación: salvar sus beneficios, haciendo pag ar a los obreros el alza de los precios” . E s un hecho sin precedentes en A le­ mana F e d e ra l; los sindicatos h an roto las alianzas tácitas que habían concluí* do con la socialdemocracia. D en tro de algunas semanas vence la convención colectiva de los m etalúrgicos (dos m i­ llones de adherentes). S¡ se tiene p re­ sente que los metalúrgicos fu ero n los prim eros en desencadenar huelgas sal­ vajes, puede esperarse u n conflicto m uy im portante. A rriesg a ap lica r un golpe severo a l gobierno de W illy B ra n d t y ‘ a la socialdemocracia. Los responsables del sindicato metalúrgico y a anuncia­ ro n : “ exigiremos u n aumento sustan­ cial de salarios; si Üa patro n al rechaza pasaremos a acciones violentas’ La po lític a de Sehiller aparece fuertem ente comprometida. U n a d u ra prueba espera a l hombre del flo ta n te” . “marco