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Introducción
El milagro del nacimiento de la vida humana comienza con un encuentro preparado
por la naturaleza en forma perfecta. Uno entre 400 espermatozoides encontrará un óvulo
fecundado a la espera. A eso le llamamos FECUNDACIÓN.
El tiempo que demora el crecimiento de este huevo fecundado dentro del organismo
de la madre es lo que se conoce como el periodo de EMBARAZO.
Al respecto, siempre ha habido mitos o dudas que hacen ver a este periodo casi
como si fuese una enfermedad. Como sabemos, eso no es así, pero hay que tener ciertos
cuidados.
Es por eso que aquí podremos informarnos de qué se trata este proceso natural y ver
los cuidados que requiere y las posibles complicaciones y así despejaremos algunas dudas
que posiblemente tenemos. Además veremos todo lo relativo al PARTO, en qué consiste,
cuánto dura, etc.
¿QÚE ES EL EMBARAZO?
Es el estado de la mujer que comprende el periodo desde la fecundación del óvulo
hasta el parto. En la mujer tiene una duración de 280 días o 9 meses aproximadamente. Los
casos que sobrepasan los 300 días son excepcionales.
Este estado puede detectarse fácilmente, aún por la madre, mediante algunos
malestares normales, propios del embarazo. Estos son:
1) Malestares matutinos: probablemente debido al efecto de algunas hormonas del
embarazo sobre el estómago. Ocasiona nauseas y vómitos en algunos casos.
2) Frecuentes deseos de orinar: se debe al crecimiento del útero, el cual presiona a la
vejiga. Esto es normal mientras no haya dolor.
3) Hinchazón y dolor de los pechos: aumenta la sensibilidad en esta zona en los
primeros meses.
4) Acidez: debido a la regurgitación de los jugos gástricos, lo que ocasiona ardor en la
boca del estómago.
5) Pigmentación en la piel: pueden aparecer manchas en la cara, en los pezones y en
la línea media del abdomen. Generalmente desaparecen después del parto.
6) Calambres en las piernas: debido a una falta de calcio en la sangre o a la retardada
circulación sanguínea en las piernas de la embarazada.
7) Cese de la menstruación: debido a que el óvulo no se libera, ya que se ha
fecundado.
8) Várices: la compresión de los casos sanguíneos puede causar dilatación de las
venas de las piernas y, por ende, la aparición de las várices.
9) Hemorroides: es otro efecto de mala circulación sanguínea. Generalmente
desaparecen después del parto.
10) Dolor en la espalda: debido al peso del abdomen de la embarazada combinado con
la relajación de las articulaciones pelvianas.
11) Dolores inguinales: debido a la distensión de los ligamentos que soportan al útero y
que se introducen en los canales inguinales..
12) Estrías: otro signo de distensión.
13) Desmayos y mareos: producidos por la insuficiencia de sangre venosa al corazón y,
por lo tanto, disminuye la irrigación al cerebro.
14) Insomnio: el embarazo aporta muchas ideas y preocupaciones nuevas a lamente de
la madre y en los últimos meses el sueño se altera por no encontrar una posición
cómoda para dormir por los movimientos del bebé.
15) Falta de aire: producida por un esfuerzo, ya que el útero presiona al diafragma y lo
hace mucho menos móvil.
Además de estos síntomas de la embarazada, debe cuidarse mucho para no
perjudicar al ser que lleva dentro. A continuación hay algunas indicaciones para el cuidado
de la futura madre:
a) Consultar a un médico apenas sospeche un posible embarazo.
b) Dormir por lo menos 9 horas cada noche con las ventanas abiertas y, en lo posible,
descansar al medio día.
c) Hacer ejercicios al aire libre, evitando los ejercicios bruscos.
d) Usar zapatos bajos y ropas sueltas.
e) Alimentarse en forma completa, por lo tanto, no hacer régimen.
f) No fumar, no consumir alcohol en exceso ni drogas.
g) No se aconsejan los baños muy calientes o saunas muy largos.
h) Cuidado con la fiebre alta, sobre todo en los primeros 4 meses.
i) Nunca vacunarse contra la rubéola.
j) No exponerse a los rayos X, por la posibilidad que éstos destruyan los genes de un
embrión o feto, lo que provocaría un aborto espontáneo.
k) No se aconsejan los viajes en avión desde los siete meses en adelante.
También es necesario y fundamental que se le de asistencia inmediata al bebé al
momento de nacer. A continuación veremos algunos de estos cuidados:
o Si el niño está en buenas condiciones generales hay que colocarlo de lado, con la
cabeza más abajo que los pies, en una cuna temperada.
o Al minuto de haber nacido debe aplicársele el test de Apgar, que se utiliza para
saber si el niño nace sin problemas graves.
o Se debe mantener una diferencia de temperatura de un grado y medio entre el medio
ambiente y el recién nacido, secándolo y arropándolo con frazadas estériles.
o La piel de todo el cuerpo y el cordón umbilical deben ser aseados con un algodón
estéril para evitar una infección y luego se debe enjuagar al bebé con agua estéril a
la temperatura de su cuerpo, y con una solución de nitrato de plata se procede de
igual forma sobre los ojos del bebé para limpiarlos.
o Para evitar hemorragias se le inyecta vitamina K.
o En los 30 primeros minutos de vida hay que medirlo y pesarlo desnudo.
o Hay que asegurarse de que el ano esté abierto y comunicado con la última porción
intestinal.
o Luego debe ser llevado junto a su madre.
DESARROLLO Y CAMBIOS DEL EMBRIÓN O FETO
Del primer al tercer mes:
Comienza a formarse el sistema nervioso, vértebras y músculos. Aparece la cabeza que
contiene al cerebro. Terminando el primer mes el embrión es 100.000 veces más grande
que el huevo fecundado. Se están formando los intestinos. Aparecen piernas y brazos en
forma primitiva, de la misma forma que el mentón, la
nariz, la garganta y el rostro. El corazón, que aún es
un tubo en forma de U formado por 2 vasos
sanguíneos, comienza a latir. Ya tiene dedos y uñas y
a fin de mes perderá la cola. Su piel es transparente.
Se originan las orejas, ojos y los primeros síntomas de
dientes de leche, rodillas y codos. En la quinta
semana aparece el cordón umbilical. En la séptima
semana comienza a formarse el esqueleto. Ya tiene
intestinos, hígado, estómago y rudimentarios órganos sexuales. El embrión mide 3 cm.
aproximadamente. El tercer mes, el embrión es elevado a la calidad de feto, porque ahora se
puede determinar su sexo, ya que sus órganos son fácilmente visibles (mediante ecografía).
La placenta funciona perfectamente, disminuyendo el peligro de aborto y resistiéndose ante
agentes peligrosos. Ahora los órganos sexuales se perfeccionan. Aparecen las cuerdas
vocales y los primeros pelos sobre labios y ojos, terminan de desarrollarse los párpados.
Los brazos se alargan más rápido que las piernas. Después de 11 semanas el embrión tiene
el tamaño de un pulgar (7cm. a 9 cm.).
Cuarto mes:
Crecen los cabellos, la mayoría de sus órganos
están en funcionamiento, su cabeza aún es grande
comparada con su cuerpo, el corazón lata 2 veces
más rápido que el de un adulto, las articulaciones
están en funcionamiento. El feto mide
aproximadamente 18 cm. y pesa alrededor de 225
gr., pero si continuara creciendo de esta forma
nacería un gigante de 250 Kg.
Quinto mes:
La madre siente los movimientos del feto
y éste siente los ruidos externos y se asusta
con aquellos que son muy violentos. Tiene
reacciones táctiles, guiña los ojos y agita los
dedos, deglute y digiere muy bien. Tiene
pulmones, pero si naciera, no sobreviviría,
porque aún saca el oxígeno de la sangre de la
madre. Ahora el feto pesa 550 gr.
Sexto mes:
El feto se mueve y desarrolla sus músculos.
Su cerebro continúa desarrollándose. Ya se
colocó de cabeza en posición fetal, posición en
la que debe nacer. Se le adelgaza la nariz. Ahora
el feto mide aproximadamente 30 cm. y pesa
más de 1 Kg.
Séptimo mes:
Desarrolla sus nervios, sus movimientos se
ponen más coherentes. El bebé puede girar
sobre sí mismo, tiene los pelos más
desarrollados al igual que sus sentidos, se
separan los párpados y descubren los ojos.
Adquiere el 75% de las proteínas totales, el 93%
de la gordura, el 65% del calcio, el 68% del
fósforo y el 80% del hierro. Ahora el feto mide
35 cm. y pesa alrededor de 1,5 Kg. Si naciera en
esta etapa de su desarrollo tendría el 60% a 70%
de probabilidad de sobrevivir.
Octavo mes:
La grasa estira la piel arrugada, la pelusa que
lo cubría es sustituida por un endotelio
proveniente de las glándulas cebáceas. Se le
hace difícil dar piruetas y moverse, por eso, su
principal distracción es chuparse los dedos,
generalmente el pulgar. Mide alrededor de 45
cm. y pesa casi 2 Kg. Si nace en esta etapa tiene
un 90% de probabilidad de sobrevivir.
Noveno mes:
En esta etapa el feto adquiere peso y fuerza
para afrontar el trabajo que le espera: engordará
más de 700 gr. y medirá 50 cm.
aproximadamente. Realizará unos 200
movimientos por día con algunos intervalos de
descanso, abre y cierra los ojos, duerme y
despierta esperando nacer, sus uñas sobrepasan
las extremidades de los dedos, su piel está lisa y
rosada. A partir de los 10 primeros días del
último mes su cabeza comienza a descender por
la cavidad uterina, preparándose para el parto.
En general, la madre en este periodo no sufre muchos cambios, excepto el cambio
físico (su abdomen crece a medida que el futuro bebé también lo hace) y el cambio
hormonal.
La progesterona es una hormona que al comienzo del embarazo se produce en el
ovario y luego en la placenta. Ésta actúa como relajadora de una serie de fibras musculares
que se encuentran en el útero. Debido a esto las paredes del útero pueden crecer y
estrecharse para acomodar el crecimiento del feto, lo que garantiza que el feto no será
expulsado prematuramente. Esta hormona también ayuda a la buena circulación de la
sangre relajando los vasos sanguíneos. Durante el embarazo la sangre se incrementa en un
40%.
El estrógeno es otra hormona que se encarga del crecimiento del feto y del
desarrollo de la placenta y los senos.
La prolactina es esencial en el embarazo. Aún cuando su función no está bien definida,
se sabe que actúa en el parto mismo y en la producción de leche. La produce la glándula
pituitaria y aparentemente el feto y la placenta contribuyen. En el primer tiempo de
embarazo, la prolactina aumenta su nivel y sube notablemente durante el parto. Luego baja
suavemente aumentando cada vez que el recién nacido succiona la leche materna.
La oxitocina es producida por la pituitaria y es muy importante en el trabajo de
parto, ya que estimula las contracciones. También ayuda en la expulsión de la placenta y en
la producción de leche.
Algunas alteraciones al desarrollo embrionario pueden ser causados por:
Antibióticos:
La tetraciclina afecta el crecimiento de los huesos y el esmalte dentario del feto. Las
sulfonamidas en las últimas semanas del embarazo puede dañar el sistema nervioso del
feto. La estreptomicina puede causarle sordera.
Pastillas para dormir:
Las grandes dosis de barbitúricos pueden provocar depresión respiratoria en el recién
nacido; el bebé resulta dopado, al igual que la madre.
Cigarrillo:
La nicotina disminuye el paso de oxígeno y sustancias nutritivas de la madre al feto; se
ha comprobado que el feto tose y se incomoda. Las madres que fuman tienden a tener
hijos más pequeños y de un menor peso. El cigarrillo aumenta las posibilidades de
aborto y de sangramientos excesivos durante el parto.
Analgésicos:
Si se toman regularmente antes del parto (cada 4 a 6 horas) puede dificultar la
coagulación sanguínea del recién nacido y de la madre. En exceso, el ácido
acetilsalicílico puede dañar el sistema nervioso del bebé.
Drogas:
Los efectos de la marihuana dependen de las semanas de embarazo y de la cantidad que
se fume. La ingestión de LSD (dietilamida del ácido lisérgico) produce alteraciones
probadas en el desarrollo del feto. El diazepán o valium podría producir fracturas en los
cromosomas del feto durante el primer trimestre del embarazo; además le puede
acarrear problemas respiratorios, alimentación tardía en el recién nacido y baja
temperatura en las primeras horas de vida. Los tranquilizantes, como la clorpromazina,
pueden afectar el sistema nervioso del feto e incluso los ojos del niño.
NOTA: Las drogas teratogénicas son las que causan cualquier tipo de anormalidad. Su
ingestión en el período más temprano del embarazo podría impedir que el huevo se
establezca firmemente en el útero y la mujer ni siquiera se daría cuenta que estuvo
embarazada y que sólo tuvo un “atraso menstrual”. En cambio si se ingieren en una
etapa más avanzada, probablemente causarían un aborto. En una etapa posterior, el
embarazo puede continuar, pero existiría el riesgo de que el feto fuese dañado.
¿CUÁNDO SE DICE QUE UN NIÑO ES PREMATURO?
Se denomina a un niño “prematuro” cuando nace a las 26 semanas (6 meses y
medio) o si el feto pesa menos de 2 Kg. y medio.
En estos casos el bebé tiene menos del 50% de posibilidades de sobrevivir y es
necesario que apenas nazca lo lleven a una incubadora.
¿QUÉ ES EL PARTO?
El parto es la expulsión del feto, de la placenta y las membranas. Se produce
normalmente alrededor de los 280 días de la gestación, es decir, a los nueve meses.
En un parto normal, el tiempo que demore en salir el bebé depende de la relajación
feto-pélvica, de la elasticidad de los tejidos de la madre, de la intensidad de las
contracciones y de la mayor o menor eficacia de los pujos. En cambio, en una cesárea, la
duración promedio de la operación es de una hora, pero el tiempo se puede dilatar hasta 3 o
4 horas si surgen complicaciones.
En el parto se distinguen 3 etapas:
I.
Trabajo de parto
Comprende el período de la aparición de las contracciones hasta la dilatación
completa. Las contracciones de parto son más frecuentes e intensas que las del
embarazo (de 2 a 4 en 10 minutos). Ellas tienen los siguientes efectos: expulsión del
tampón mucoso que cierra el cuello uterino para impedir el ascenso de microbios
que puedan contaminar al feto; desaparición y dilatación del cuello; y descenso y
acomodación del feto.
La bolsa de agua, al ponerse tensa por la presión del líquido amniótico, empuja los
bordes del cuello uterino y ayuda a que éste se dilate. La bolsa puede romperse
prematuramente o espontáneamente durante el trabajo de parto. Si esto no sucede,
se procede a romperla artificialmente cuando la dilatación alcanza cierto grado.
II.
Parto o período expulsivo
Para el parto el niño debe ubicar su cabeza en la cavidad pelviana, denominándose
las posiciones OIIA u OIDA (occisito iliaca izquierdo o derecho anterior). El parto
se produce por las contracciones uterinas, contracciones de los músculos
abdominales, ayudados por la sensación de pujos, que son el resultado de la
compresión de la ampolla rectal por la cabeza del feto y la acción del niño en su
salida. Al descender la cabeza por el canal pelviano, la vejiga se dilata. Cuando esto
no ocurre, se le hace a la madre una ampliación quirúrgica.
Cuando el niño sale es necesaria la inmediata impermeabilización de la vía
respiratoria. Antes de cortar el cordón umbilical se debe esperar a que pase toda la
sangre que aún circula por él.
III.
Alumbramiento
Es la salida de la placenta y membranas ovulares. Se produce 30 minutos
aproximadamente después. En algunos casos es necesaria la extracción artificial.
Dilatación del parto normal
En el parto participan hormonas, como son los estrógenos y la oxitocina. Los
primeros sensibilizan el útero para que se produzcan las contracciones, al igual que la
oxitocina.
Según la posición del feto, un parto puede ser normal o autósico (son los partos de
cabeza, partos de nalgas y cuando viene de cara; aunque en este último caso la salida del
feto se complica) o anormal o distósico (aquellos en que el niño tiene una posición alterada
que le impide descender por el canal del parto). En los partos distósicos se resuelve que el
bebé nazca por cesárea, fórceps o vaccuun.
También existen otros tipos de parto, que son:
i.
El parto inducido
Se recomienda cuando la madre sufre de alta presión arterial o cuando hay
problemas causados por incompatibilidad de sangre entre madre e hijo. Tienen la
ventaja de ser previstos para una fecha determinada y no se ven imprevistos de
última hora (que el doctor no se encuentre, etc.).
No se recomienda en caso de que la pelvis de la mujer sea demasiado estrecha.
Se realiza normalmente con la ruptura artificial de la bolsa de agua y la aplicación
de oxitocina para estimular las contracciones. Luego se desarrolla igualmente que el
parto normal.
ii.
El parto por cesárea
Se recomienda cuando el parto normal es riesgoso para la madre o su bebé (en caso
de placenta previa, bebés prematuros, etc.).
Se realiza administrando algún tipo de anestesia y realizando una incisión
transversal o vertical en la parte baja del abdomen a fin de acceder directamente al
útero. Primero se rompe la bolsa de agua y luego se saca la cabeza del bebé.
Después se le inyecta oxitocina a la madre para estimular la expulsión de la
placenta.
iii.
El parto seco
Se produce por la escasez de líquido amniótico y el feto debe ser extraído
rápidamente mediante cesárea.
iv.
El parto lento
Dura más de 12 horas. Se debe a una insuficiente contracción del útero o a que el
bebé está en posición incorrecta. También puede ser al estrechamiento del canal del
parto.
Puede solucionarse con la aplicación de oxitocina.
Al momento de nacer es importante que el bebé llore, ya que mediante su llanto los
especialistas pueden confirmar la existencia de trastornos respiratorios, los cuales pueden
ser tratados con prontitud y así poder evitar complicaciones a futuro.
Pero no sólo para los médicos es importante que el bebé llore, sino que también lo
es para la madre, ya que deberá desarrollar la capacidad de distinguir si el llanto de su hijo
se debe a que tiene hambre, pañales mojados, sueño, cólicos, necesidad de succionar,
exceso de ropa, etc.
CONCLUSIÓN
Este trabajo nos fue muy útil, ya que además de aclarar ciertas dudas con respecto al
embarazo y al parto, nos dio la oportunidad de haber conocido todo lo relacionado al tema.
Así, en un futuro próximo, esta parte teórica podremos llevarla a la práctica en el momento
en que nos toque vivir esta experiencia; para tener los cuidados necesarios y vivir un
embarazo y un parto sin problemas.
BIBLIOGRAFÍA
Revista “Nacer” (primera edición), fascículos nº 1, 2, 3 y 4, editorial Cochrane.
Enciclopedia “EVA”, Educación sexual.
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