Localización y variedades

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En el mundo, según datos de la FAO para 2005, existían 7.455.049 hectáreas de
olivares, de las cuales 1.199.093 hectáreas se encontraban en España, lo que
supone aproximadamente un 16% de la superficie total mundial, seguido de Italia
con 1.132.464 hectáreas, y Grecia con 765.000 ha.
En cuanto a producción, en 2005 se produjeron un total de 14.511.779 Mt, de las
cuales un 26% se produjo en España, un 28% en Italia y un 15% en Grecia.
Las principales áreas olivareras españolas se podrían clasificar del siguiente
modo:
1. ANDALUCÍA
OCCIDENTAL
Superficie olivar:
240.000 ha.
Localización y
variedades:
Comprende las
provincias de
Sevilla (excepto la
comarca de
Estepa), Huelva y
Cádiz, así como la
comarca cordobesa
de La Carlota. Se
cultivan diversas
variedades, tanto de almazara (Verdial, Zorzaleña y Lechín) como de mesa
(Manzanilla, Gordal, etc.).
Clima: Inviernos cálidos.
Características particulares: Gran cantidad de explotaciones de verdeo. Se están
creando plantaciones intensivas de manzanilla y otras variedades con riego por
goteo.
2. ANDALUCÍA ORIENTAL
Superficie olivar: 70.000 ha.
Localización y variedades: Comprende las provincias de Almería, málaga (salvo
la comarca de Archidona) y las del norte de Granada (excepto las comarcas de
Iznalloz y Loja). Además de Picual y Hojiblanca, se cultivan dos variedades
típicas de la zona: Verdial de Vélez-Málaga, para almazara, y Aloreña, buenas
para mesa y aceite.
Clima: Los inviernos son muy suaves.
Características particulares: El índice de concentración olivar es muy bajo.
3. ARBEQUINA
Superficie olivar:120.000 ha.
Localización y variedades: Comprende Cataluña (excepto el sur de la provincia
de Tarragona) y Baleares. La variedad principal es Arbequina.
Clima: En las comarcas leridanas el clima es agreste. En el resto de la zona es
más templado.
Características particulares: Los árboles son de escaso porte. En las comarcas
de Tarragona y Lérida se dan aceites de gran calidad. Existen las
Denominaciones de Origen de aceite Les Garrigues y Siurana.
4. CENTRO
Superficie olivar: 300.000 ha.
Localización y variedades: Comprende las provincias de Ávila, Madrid, Toledo,
Ciudad Real, Guadalajara, Cuenca y Albacete. La variedad más importante es la
cornicabra, que produce un aceite de excelente calidad.
Clima: En invierno, las zonas llanas están expuestas a las heladas.
Características particulares: La densidad de plantación es baja. Los aceites de la
variedad Cornicabra en la zona son de buena calidad. Se está extendiendo la
variedad Picual sobre otras.
5. HOJIBLANCO
Superficie olivar: 380.000 ha.
Localización y variedades: Comprende la provincia de Córdoba (a excepción de
las comarcas de Bujalance y Carlota) así como las comarcas de Archidona y
norte de Málaga, Loja (Granada) y Estepa (Sevilla). La variedad predominante es
la Hojiblanca, destinada tanto a la almazara como a la mesa.
Clima: El clima suele ser templado en invierno y excesivamente caluroso en
verano.
Características particulares: Existen varias cooperativas de producción de
aceitunas para mesa. Es de reconocido prestigio la Denominación de Origen de
aceites Baena.
6. LEVANTE
Superficie olivar: 60.000 ha.
Localización y variedades: Comprende las provincias de Murcia, Alicante y
Valencia. Las variedades suelen ser locales, como por ejemplo, la Villalonga y la
Blanqueta.
Clima: Las variaciones de temperatura suelen ser bastante bruscas.
Características particulares: Los aceites de las zonas altas son de buena calidad.
7. OESTE
Superficie olivar: 250.000 ha.
Localización y variedades: Comprende las provincias de Badajoz, Cáceres y el
sur de Salamanca. En Badajoz predominan las variedades Morisca y
Carrasqueña, buenas para almazara y mesa respectivamente, y en Cáceres la
Cacereña, apta para mesa.
Clima: El medio es muy bueno. La altitud es la adecuada, aunque las pendiente
son demasiado acentuadas en las zonas altas.
Características particulares: Los cultivos de aceituna de mesa son muy extensos
en las comarcas cacereñas.
8. PICUAL
Superficie olivar: 580.000 ha.
Localización y variedades: Comprende las provincias de Jaén y algunas
comarcas de Granada y Córdoba ( Iznalloz y Bujalance, respectivamente).
Predomina la aceituna de almazara, sobre todo Picual.
Clima: Excelente.
Características particulares: Buen rendimiento de los olivares. Denominación de
Origen Sierra del Segura.
9. TORTOSA-CASTELLÓN
Superficie olivar: 80.000 ha.
Localización y variedades: Comprende el sur de la provincia de Tarragona y la
de Castellón. Las variedades, en su mayoría, son autóctonas, como Farga,
Sevillenca y Morrut.
Clima: Excelente.
Características particulares: Se han introducido nuevas plantaciones en las que
se cultivan otras variedades.
10. VALLE DEL EBRO
Superficie olivar: 60.000 ha.
Localización y variedades: Comprende las provincias de Álava, Navarra, La
Rioja, Huesca, Zaragoza y Teruel. La variedad más común es la Negral, aunque
la Empeltre es cada vez más frecuente.
Clima: En las zonas bajas son frecuentes las heladas.
Características particulares: Plantaciones de carácter intensivo, con
introducción de nuevas especies
La élite del oro líquido
Están en lo más alto de la pirámide olivarera española: las firmas Marqués de
Griñón (Toledo), Dauro (Girona y Mallorca), Abbae de Quiles (Navarra),
Marqués de Valdueza (Badajoz) y La Boella (Tarragona) son los cinco miembros
del selecto club Grandes Pagos de Olivar. Comparten pasión -oleícola- y misión:
desarrollar la cultura del aceite de alta gama en España y colocar sus productos
en los grandes escaparates internacionales.
"Empezamos siendo tres empresas y cada año intentamos sumar un nuevo
miembro, nos llegan bastantes solicitudes pero nuestra asociación se basa en el
autocontrol y, además, nuestras normas son muy rigurosas", explica Alfredo
Barral, el presidente. Los aspirantes deben ser aceites de oliva virgen extra,
proceder de olivares propios y de aceitunas recolectadas en el punto óptimo de
maduración, haber sido molturados en almazaras propias y elaborados mediante
sistemas con un adecuado control de calidad en todas las fases del proceso de
extracción. Y, por último, su principal actividad de la almazara tiene que ser la
elaboración y embotellado en envases de primera calidad. En definitiva, aceites
fieles al concepto vinícola del chateau. "Nuestro aceite es un Vega Sicilia",
señala Barral. "En realidad, sólo buscamos la excelencia. La calidad en oposición
a la cantidad", concluye.
Tras tres años de andadura, el balance no podría ser más positivo: "En estos
momentos somos referentes en vírgenes extra de alta calidad en España y en el
exterior". Incluso amenazan con destronar a los aceites italianos. "Hace seis años
los vírgenes españoles eran casi desconocidos en el mercado gourmet
internacional y se vendían a mitad de precio que los italianos, hoy competimos al
mismo precio y prestigio, estamos conquistando el sector exterior". Ya han
cumplido uno de sus objetivos: situar el aceite español en el lugar que le
corresponde. A diferencia de Italia, donde sienten idéntica devoción por el vino y
el aceite, en España aún queda mucho por hacer. "La cultura del aceite de alta
calidad no tiene precedente, por eso es nuestra prioridad. Queremos prestigiar los
vírgenes, educar a la gente y estamos avanzando". La mitad de la producción de
los cinco magníficos se queda en España, el resto vuela a Estados Unidos, Suiza,
Reino Unido.
"Es paradójico, pero en un país con una tradición olivarera como España la gente
entiende muy poco de aceite, ni siquiera saben distinguir un extra de un
refinado", continúa, "es un verdadero zumo de frutas, que se cata igual que el
vino, en boca se mezclan sabores a manzana y plátano verde, aromas cítricos. Es
una delicia". Grandes Pagos de Olivar organiza catas por las que han pasado ya
más de 1.000 personas -la sorpresa es la reacción más generalizada- y, en estos
momentos, ultima el diseño de una copa apropiada para la degustación de aceites.
Agosto 20 de 2007
DEBILIDADES, FORTALEZAS Y LINEAS DE ACTUACIÓN.
DEBILIDADES
Falta de cultura empresarial y de sistemas de gestión adecuados, sin planificación
a largo plazo y con una escasa formación de los productores.
Escaso poder negociador de los productores de materias primas dado su reducido
tamaño, incluso en las fórmulas cooperativas.
Dedicación casi exclusiva de las cooperativas hacia
la transformación primaria, sin desarrollar productos acabados de mayor valor
añadido y sin integrarse en la distribución.
La mayoritaria producción en secano y el déficit hídrico natural limitan la
obtención de producciones agrícolas abundantes, estables y de calidad
homogénea, lo que, entre otras cosas, dificulta la implantación de industrias
transformadoras propias y el acceso a contratos plurianuales con terceras.
Escasa presencia en el mercado nacional e internacional de productos
diferenciados y elaborados: ello impide su reconocimiento por parte de los
consumidores y la demanda específica de los mismos.
Limitada actividad de I+D+i en todas las fases del proceso productivo.
Falta de proactividad frente a la exportación de producto terminado.
La mayoría de las exportaciones obedecen a pedidos de materias primas de los
importadores debido al escaso desarrollo de la industria transformadora.
Estructura productiva olivarera excesivamente tradicional y poco modernizada.
Comercialización mayoritaria de aceite “a granel”.
.
FORTALEZAS
Alta calidad reconocida de las materias primas producidas así como de los
productos elaborados a partir de las mismas, especialmente frutas y hortalizas,
ternasco, vino y aceite de oliva.
Actitud favorable y proactiva de los agentes implicados hacia la producción de
calidad diferenciada (DOP, IGP, sellos de calidad alimentaria).
Disponibilidad de mano de obra joven procedente de terceros países, que
adicionalmente favorece el rejuvenecimiento de la población rural.
Saldo positivo de la balanza comercial entre exportaciones e importaciones del
sector agroalimentario en su conjunto.
Tradición y experiencia en el sector agroalimentario.
Tendencia alcista de las inversiones en agroindustria, principalmente en la
ampliación de la capacidad productiva.
Producción de aceites de oliva de calidad reconocida por el mercado.
Reconocimiento nacional e internacional de los aceites, especialmente los de
Andalucía.
Demanda creciente del mercado “gourmet” de aceites de elevada calidad.
LINEAS DE ACTUACIÓN
En el sector del aceite, aunque la campaña (2005/06) experimentó una
disminución de la producción debido a la sequía, la tendencia de la superficie
cultivada y la producción es claramente alcista. Ello se debe, en gran medida, a la
gran calidad del producto final que se obtiene, de manera que encuentra fácil
penetración en los mercados.
Los hábitos de consumo se caracterizan por la profunda modificación sufrida en
los últimos años, debido a una diversidad de factores interrelacionados como la
incorporación de la mujer al mundo laboral, el retraso en la maternidad, el
envejecimiento poblacional y el aumento de la esperanza de vida, el crecimiento
de hogares monoparentales y unipersonales, el aumento del poder adquisitivo en
todos los estratos sociales, la búsqueda de rapidez y comodidad, la sensibilidad a
la dieta, la salud y lo natural, la exigencia de información en los productos, la
demanda de nuevos productos ecológicos y enriquecidos, la aceptación de
avances tecnológicos en los alimentos, la satisfacción con la oferta actual y la
búsqueda de nuevas sensaciones y la identificación de la compra y consumo
como una actividad de ocio.
Así, se puede concluir que el sector presenta una interesante capacidad de
expansión basada en la calidad de sus materias primas, si bien el escaso
desarrollo de la industria transformadora y la inexistencia de estructuras de
comercialización eficaces impiden la generación y retención de valor añadido.
La atomización que caracteriza al sector y los múltiples intereses entre los
diferentes actores, no siempre coincidentes, pueden dificultar la formulación de
una estrategia unitaria.
Por ello, a continuación se presenta un decálogo de medidas para fomentar el
desarrollo, crecimiento y competitividad del sector aceitero.
1) Promocionar la denominada “cultura del aceite”, comunicando los
beneficios que aporta su consumo para la salud.
El aceite de oliva es un componente esencial de la dieta mediterránea, cuyas
cualidades saludables son mundialmente reconocidas. El aceite de oliva virgen
tiene propiedades beneficiosas para la salud, como la prevención y disminución
del riesgo de enfermedades cardiovasculares, la protección del aparato digestivo,
etc. Por ello, la comunicación de dichas propiedades se posiciona como un
instrumento de márketing para la promoción de este producto.
2) Remodelación de la estructura productiva del sector del aceite, mediante
la reordenación del olivar y la modernización de los sistemas de riego.
Con el fin de que los recursos naturales y los medios productivos sean utilizados
con la máxima eficacia tecnoeconómica, la reordenación del olivar junto con la
introducción de mecanismos de riego por goteo se convierten en herramientas
fundamentales para el logro de una mayor competitividad. Así, estas acciones se
encaminan a la adaptación de las producciones al mercado, compatibilizando los
procesos productivos con la ordenación general de la economía, los intereses
socioeconómicos de la región y la conservación de los recursos naturales.
3) Necesidad de valoración de nuevas formas de comercialización del aceite:
aceite envasado frente a aceite a granel, especialmente con destino a
mercados exteriores y producción de aceite ecológico.
La tradicional venta de los aceites a granel con destino a mercados exteriores
para su envasado y reventa impide la generación de mayor valor añadido en el
territorio e imposibilita la creación de imagen de marca.
Esta situación se corregiría con el incremento de las exportaciones de aceite
envasado, pero las exigencias de inversión en infraestructura y comercialización
que ello requiere no han encontrado respuesta entre unos productores que carecen
de excedentes.
La consideración del aceite ecológico como nicho emergente aconseja la
realización de estudios que valoren su potencial demanda en términos
cualitativos y cuantitativos.
4) Desarrollar nuevas formas de comercialización asociadas al sector
turismo, mediante iniciativas de oleoturismo y enoturismo que agrupen
aspectos culturales, gastronómicos y lúdicos.
Los nuevos desarrollos y conceptos del sector turístico permiten la existencia de
sinergias comerciales de cara a su comercialización bajo nuevos e innovadores
formatos.
EN GENERAL
1) Desarrollo e implantación de una industria transformadora, que debería
ser favorecida mediante el
apoyo institucional, ayudas comunitarias o entradas de capital externo
Uno de los principales retos reside en ganar poder en la cadena agroalimentaria,
de forma que el gasto efectuado por el consumidor permita la suficiente
remuneración para los productores y su desarrollo posterior.
El sistema de generación de valor incluye las cadenas de producción de clientes y
proveedores (coordinación vertical), los cuales proporcionan factores tales como
materias primas, componentes y servicios a la cadena de producción de valor de
la empresa.
Por lo tanto, junto a los acuerdos que han dado origen a nuevas formas de
interacción y colaboración entre diferentes partes de la cadena de valor, cuya
principal finalidad es coordinar actividades o interfases del proceso productivo,
resulta de alto interés estratégico la existencia de apoyos para el logro de una
plena industria transformadora.
2) Fomento del asociacionismo/cooperativismo. Evaluación y desarrollo de
fórmulas de integración horizontal y vertical, con el fi n de rentabilizar las
producciones, maximizar la competitividad y retener el valor añadido de los
productos.
La posición estratégica en el centro de la cadena agroalimentaria, su seguimiento
de productos y procesos que garantizan la trazabilidad y la seguridad, su labor
canalizadora de intereses de muchos productores y su aportación de estabilidad al
mercado, principalmente vía precios, hacen que estas fórmulas deban ser
fomentadas y desarrolladas.
3) Las necesidades y demandas de los consumidores, el desarrollo de los
procesos industriales, la propia innovación de productos, así como diversos
aspectos relacionados con la sostenibilidad y las tecnologías de la
información, hacen precisa la planificación y ejecución de políticas de
inversiones en I+D+i:
a. Investigación básica y aplicada para la mejora de la calidad y el rendimiento de
las especies agrícolas y ganaderas.
b. Investigación y desarrollo de nuevos procesos y productos. Automatización de
la producción, conservación y envasado.
c. Tratamiento de residuos. Prevención, recuperación y reciclado.
d. Modernización y/o mecanización de las explotaciones. Trazabilidad y gestión
integral.
4) Formación y profesionalización en técnicas productivas y en gestión
administrativa y comercial.
El déficit formativo debe paliarse con acciones dirigidas, por un lado, a aspectos
puramente técnicos de la explotación y, por otro, a aspectos relacionados con la
gestión empresarial propiamente dicha, siendo las áreas de administración y
comercial aquellas en las que hay que hacer una mayor inversión.
5) Implantación de medidas de revitalización del entorno rural.
Para la consecución del asentamiento y fijación de la población en medios
rurales, se precisa la existencia de infraestructuras y servicios que permitan su
sostenibilidad, siendo prioritarias en este sentido las siguientes medidas:
a. Aplicación de planes europeos.
b. Medidas de apoyo a jóvenes agricultores y ganaderos.
c. Desarrollo de políticas integrales para el asentamiento de la población
inmigrante.
6) Fomento de la calidad y de la diferenciación de los productos -D.O.,
I.G.P., Sellos de Calidad, productos artesanales-, así como de su posterior
promoción y comunicación fuera de la Comunidad.
La existencia de las diferentes figuras de calidad alimentaria no sólo favorece la
calidad objetiva de los productos, sino que dichas fi guras cumplen un papel
fundamental en su comercialización y en su posicionamiento en el mercado.
7) Valoración de producciones y usos alternativos -productos ecológicos,
bioenergía, aprovechamiento de residuos…-, que fortalezcan la estructura
comercial subyacente del sector agroalimentario.
La necesidad inminente de mantener un entorno sostenible, unido a la cada vez
mayor sensibilización y respeto hacia el medio ambiente, hace imprescindible el
uso alternativo de subproductos como materia prima para la obtención de
bioenergía, así como la gestión racional de los residuos.
8) Desarrollo de nuevas fórmulas de comercialización
a. Comercialización conjunta de productores.
b. Lanzamiento de marcas propias.
c. Comercio electrónico. Tienda por Internet.
d. Especialización en mercados “gourmet” y “delicatessen”.
e. Cadenas de venta directa al consumidor fi nal.
f. Actividades comerciales asociadas a turismo rural -pequeño comercio
especializado, enoturismo,
oleoturismo, granjas escuela,…-.
g. Actividades de comunicación: promoción y publicidad.
h. Promoción y desarrollo del comercio exterior.
9) Fomento de cultivos en regadío para obtener mayores productividades y
cosechas más rentables y homogéneas, mediante la introducción de técnicas
de riego eficientes y/o la modernización de las técnicas actuales.
La obtención de cosechas homogéneas y estables a lo largo del año mediante el
uso del regadío se traduce en una mayor competitividad de los productores en el
mercado globalizado.
10) Implantación generalizada de sistemas de trazabilidad y seguridad
alimentaria, mediante ayudas de la Administración.
Además de la importancia que por sí mismos tienen los elementos de seguridad
alimentaria, la aparición de un gran número de medidas en materia de política de
seguridad e higiene alimentarias provenientes de la Unión Europea hacen
imprescindible su implantación.
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