COMISION NACIONAL DE ARBITRAJE MEDICO ! # EMITIDO EN EL JUICIO ARBITRAL PROMOVIDO POR " LAUDO GABRIELA CAROLINA MANCERA ISLAS $%& MEXICO, D.F. NOVIEMBRE, 2007 R12-CONAMED-POPSecc.-7.5.1-21/Rev.03 # * +, EXPEDIENTE N°1414/06 () INSTITUTO DE SEGURIDAD Y SERVICIOS SOCIALES DE LOS TRABAJADORES DEL ESTADO ' & VS. GABRIELA CAROLINA MANCERA ISLAS VS. INSTITUTO DE SEGURIDAD Y SERVICIOS SOCIALES DE LOS TRABAJADORES DEL ESTADO EXPEDIENTE N° 1414/06 En México, Distrito Federal, a veintinueve de noviembre de dos mil siete, vistos para el juicio arbitral indicado al rubro en estricto derecho. RESULTANDO I.- La actora presentó queja en contra del demandado. Refirió, en síntesis: • El 30 de julio de 2006 acudió al Servicio de Urgencias del Hospital Regional “Dr. Fernando Quiroz Gutiérrez” del ISSSTE, aproximadamente a las 23:40 horas, debido a que tenía un fuerte dolor abdominal y vómito, deciden dejarla en observación, realizándole estudios de sangre y ultrasonido, además de colocar suero y administrar medicamentos intravenosos. • Se diagnosticó que tenía piedras en la vesícula, pero el médico le indicó que como estaba muy inflamada, no podían operar en ese momento, por lo que deciden darla de alta para acudir a control en la Consulta Externa y programar la cirugía posteriormente. • El alta fue el 1º de agosto del 2006; sin embargo, al día siguiente se volvió a poner mal, con el dolor más fuerte y vómitos, por ello fue llevada al Hospital San Francisco para solicitar otra opinión. El médico que la valoró informó que podía operarse la vesícula, aun estando inflamada, pues se podía reventar, por ello la tuvieron que operar ese mismo día por vía laparoscópica, evolucionando favorablemente a la fecha. A su queja acompañó, entre otros documentos: Resumen clínico de Dr. Cayetano Pompa de la Rosa, de 4 de agosto de 2006. La paciente asistió a consulta al Sanatorio San Francisco, A. C., el 2 de agosto de 2006 a las 2:00 a.m., con cuadro de colecistitis aguda, padecimiento que por su naturaleza ameritó tratamiento quirúrgico, el cual se llevó a cabo el mismo día, se realizó colecistectomía laparoscópica encontrándose como hallazgos: vesícula biliar con múltiples adherencias de epiplón mayor a vesícula biliar y pared abdominal, las cuales se liberaron y se encontró vesícula biliar a tensión con natas de fibrina, se efectuó disección de triángulo de Calot, identificándose conducto y arteria cística, se extirpó la vesícula biliar. La paciente cursó postoperatorio, sin complicaciones y se decide su egreso el 4 de agosto de 2006. 2/23 LAUDO EXP. _______ R12-CONAMED-POPSecc.-7.5.1-21/Rev.03 II.- El demandado presentó expediente clínico y tres informes médicos Dr. Sergio Valderrama León, Hospital General “Dr. Fernando Quiroz Gutiérrez”. Ingresó al Servicio de Urgencias el 30 de julio del 2006, por cuadro de dolor abdominal en epigastrio, posteriormente en fosa ilíaca derecha, náusea, vómito en tres ocasiones, disuria y polaquiuria. A la exploración física inicial consciente, orientada, hidratada, campos pulmonares sin compromiso, abdomen blando, sin megalias, peristalsis normal, doloroso a la palpación en marco cólico, no datos de irritación peritoneal. Ingresa a Urgencias ese mismo día, con diagnóstico de síndrome doloroso abdominal, probable enfermedad ácido-péptica, cólico-renoureteral, descartar litiasis, descartar infección de vías urinarias. Horas después de su ingreso, el personal médico de Urgencias establece los diagnósticos de probable colecistitis crónica litiásica y enfermedad ácido-péptica, solicitando ultrasonido de hígado y vías biliares, exámenes de laboratorio, así como valoración por cirugía general. El ultrasonido reportó colecistitis crónica litiásica discretamente agudizada. Sus exámenes de laboratorio en límites normales a su egreso, biometría hemática con cuenta de glóbulos blancos en límites normales. La interconsulta de cirugía general, efectuada a las 20:00 horas del 31 del julio de 2006, menciona paciente con mejoría franca del dolor, tolerando la vía oral, afebril. La exploración física: consciente, tranquila, cooperadora, anictérica, abdomen plano, blando, depresible, doloroso a la palpación en epigastrio, Murphy (+), peristalsis presente sin datos de irritación peritoneal, sugiriendo que la paciente sea manejada con antibiótico, analgésico, dieta sin colecistoquinéticos, así como cita a consulta externa de cirugía general, para revaloración el 3 de agosto, con médico adscrito. Su evolución se describe favorable en las notas subsecuentes de valoración médica en el servicio de urgencias. El primero de agosto por la mañana, se revalora y se encuentra en buenas condiciones generales, sin datos de irritación peritoneal, Murphy (+), sin compromiso cardiopulmonar. A su egreso se encuentra sin dolor abdominal, signos vitales estables, indicándose tratamiento farmacológico y recomendaciones dietéticas. Seguimiento por cirugía general, cita consulta externa el 3 de agosto de 2006. Continuar manejo en Clínica de Medicina Familiar. Acudir a urgencias adultos en caso necesario. Dr. Gregorio Bernal Magaña, Residente 3 General Hospital General “Dr. Fernando Quiroz Gutiérrez” El 31 de agosto del año en curso a las 20:00 horas, se nos solicitó interconsulta por diagnóstico de colecistitis crónica litiásica agudizada. Acudiendo en ese momento a la valoración de la paciente, se le había iniciado vía oral con líquidos, los cuales había 3/23 LAUDO EXP. _______ R12-CONAMED-POPSecc.-7.5.1-21/Rev.03 tolerado bien. Se empieza el interrogatorio directo del padecimiento actual, refiriendo que había iniciado el 30 de julio de 2006, aproximadamente a las 15:00 horas, con dolor abdominal tipo cólico, localizado en epigastrio, de intensidad de 4/10, irradiaba hacia hipocondrio derecho, al cual se agrega náusea, llegando al vómito de contenido gastroalimentario y posteriormente gastro-biliar, con aumento de intensidad del dolor abdominal 8–9/10 y fiebre no cuantificada, automedicándose en una ocasión con butilhioscina, sin mejoría del cuadro, motivo por el cual acude al servicio de urgencias en ese momento. Refiriendo, al momento del interrogatorio mejoría franca del dolor, así como remisión completa de náusea y vómito, tolerando la vía oral. Sin otra sintomatología agregada. A la exploración física: temperatura 37.3° C., frecuencia cardiaca 90 por minuto, frecuencia respiratoria 20 por minuto, tensión arterial 100/60; consciente, tranquila, cooperadora, sin facies característica, bien hidratada, buena coloración de piel y tegumentos (descartando ictericia clínica). Cardiorrespiratorio sin compromiso aparente. Abdomen blando, depresible, Murphy positivo (cabe aclarar que la paciente refiere a su llegada no toleraba la presión en región subcostal derecha y al momento de la exploración, era significativamente menor), peristalsis presente, sin datos de irritación peritoneal. Resto de la exploración sin datos relevantes. Se revisaron laboratoriales y gabinete, encontrando leucocitos 9.5, hemoglobina 13.5, hematocrito 40.2, plaquetas 394,000 con tiempos dentro de parámetros normales, ultrasonido de hígado y vías biliares, reportando colecistitis crónica litiásica, discretamente agudizada. Dado que por notas previas y por interrogatorio directo la paciente refirió ser portadora (dos años previos) de colecistitis crónica litiásica, y por las características clínicas con las que había cursado hasta el momento de la valoración, por mejoría en la sintomatología, (prácticamente nula), no contar con factores de riesgo para complicación de la misma, laboratorios dentro de parámetros normales, y ultrasonido reportando agudización leve; se comentó a la paciente que sería candidata a ser controlada en ese momento con analgésico, antibiótico y antiespasmódico vía oral, con dieta libre de colecistoquinéticos y manejarla de manera ambulatoria, haciendo énfasis en que una vez egresada, debía ser revalorada para colecistectomía electiva por el servicio del informante y por encontrarse en ese momento rotando con el médico adscrito al servicio de cirugía. De manera verbal (tanto a la paciente como a los médicos de urgencias de guardia) y por escrito, como consta en las indicaciones, se solicitó cita a consulta externa de cirugía general. Dr. Bernardo Pérez Aguilar, del Hospital General “Dr. Fernando Quiroz Gutiérrez” Fue atendida en el Servicio de Urgencias el 31 de julio de 2006, siendo realizada valoración clínica por médicos residentes del servicio de cirugía general a las 20:00 horas, según consta en nota de expediente, se diagnosticó colecistitis crónica litiásica, por medio 4/23 LAUDO EXP. _______ R12-CONAMED-POPSecc.-7.5.1-21/Rev.03 de ultrasonido, del cual no se tiene reporte, solo lo anotado en el expediente, donde refiere probable agudización del cuadro vesicular (no hay dimensiones del grosor de la pared vesicular). Así mismo, en las notas se asienta la mejoría clínica de la paciente, por lo que se decidió darla de alta y enviarla a consulta externa de ese hospital. III.- Se llevó a efecto audiencia de conciliación, no llegaron a un convenio y se sometieron al arbitraje. IV.- En el compromiso arbitral se fijó como objeto del arbitraje: • Establecer, si “EL PRESTADOR DEL SERVICIO MEDICO”, actuó o no, con negligencia, impericia o dolo, en la atención proporcionada a la paciente. • Determinar, si “EL PRESTADOR DEL SERVICIO MEDICO”, por la atención que estima irregular “LA PARTE INCONFORME”, en términos de ley, en especial a lo previsto por los artículos 1915, 2108, 2109, 2110 Código Civil Federal, deberá acceder a lo pretendido en su escrito de queja y que consiste en que el ISSSTE, otorgue una indemnización. • Establecer si, por el contrario, “EL PRESTADOR DEL SERVICIO MEDICO”, actuó correctamente en la atención brindada; o el efecto adverso que presentó la paciente, no guarda relación de causa efecto con la atención que le brindó; y por ello debe ser absuelto del cumplimiento y pago de la prestación reclamada. V.- La partes ofrecieron pruebas y el demandado presentó escrito de alegatos. Por lo anterior, es procedente dictar laudo. CONSIDERANDO I.- Esta Comisión Nacional de Arbitraje Médico, está facultada para conocer y resolver el presente juicio arbitral en términos de los artículos 1°, 2°, 4°, fracciones III y V y 11°, fracciones I, V, IX, X, XI y XII de su Decreto de Creación, 1°, 8°, 10, 22, 23, 34, 35, 36, 37, 47, 48, 73, 74, 76, 78, de su Reglamento de Procedimientos para la Atención de Quejas Médicas y Gestión Pericial, en relación con los artículos 609, 610, 611, 612, 615, 616, 617, 618, 619, 620, 621, 622, 628, 631, del Código de Procedimientos Civiles para el Distrito Federal. 5/23 LAUDO EXP. _______ R12-CONAMED-POPSecc.-7.5.1-21/Rev.03 II.- RESUMEN CLINICO Expediente Clínico, Hospital General “Dr. Fernando Quiroz” del ISSSTE: 30 de julio de 2006, 23:40 horas, Hoja de Urgencias: Femenino de 29 años de edad, inicia padecimiento el día de hoy a las 15 horas aproximadamente, con dolor abdominal en epigastrio, posteriormente en fosa ilíaca derecha, náusea, vómito en 3 ocasiones, disuria, polaquiuria. Niega alergias, diabetes Mellitus, hipertensión arterial sistémica. Exploración física: consciente, orientada, hidratada, cardiopulmonar sin compromiso, abdomen blando, sin megalias, peristalsis en parámetros normales, doloroso a la palpación en marco cólico, no datos de irritación peritoneal. Diagnóstico: síndrome doloroso abdominal; probable enfermedad ácidopéptica, cólico reno-ureteral, descartar litiasis ureteral, infección de vías urinarias. Indicaciones médicas: Observación en Urgencias, ayuno, solución glucosada al 5% 1000 ml para 8 horas, omeprazol 40 mg intravenosos cada 12 horas; butilhioscina 10 mg intravenosos cada 8 horas, lisina 40 mg intravenosos cada 8 horas, metoclopramida 20 mg intravenosos cada 8 horas. 31 de julio de 2006, Urgencias Adultos, turno matutino: Diagnóstico: dolor abdominal, probable enfermedad ácido-péptica. Refiere disminución del dolor abdominal, intolerancia a colecistoquinéticos desde hace dos años, en esta ocasión inicia dolor posterior a la ingesta de grasas (birria). Exploración física: sin compromiso cardiopulmonar, bien hidratada, buena coloración de tegumentos, abdomen blando, doloroso en epigastrio, Murphy (+), peristalsis disminuida, sin datos de irritación peritoneal, extremidades sin compromiso. Se solicita ultrasonido de hígado, vías biliares y pruebas de función hepática, así como valoración por Cirugía General. Impresión diagnóstica: colecistitis crónica litiásica, enfermedad ácido-péptica. 18:00 horas, Nota de Evolución: Persistencia del dolor abdominal, con febrícula (37.7º C), resultado de ultrasonido reporta colecistitis crónica litiásica agudizada. Permanece encamada en el servicio, se solicita valoración por parte de Cirugía General. 6/23 LAUDO EXP. _______ R12-CONAMED-POPSecc.-7.5.1-21/Rev.03 31 de julio de 2006, 20:00 horas, Nota de Valoración, Cirugía General: Se nos solicita interconsulta por dolor abdominal (probable colecistitis crónica litiásica agudizada), Niega crónico degenerativos, apendicetomía a los 13 años de edad, niega alergias. Inicia su padecimiento el día de ayer (30 de julio de 2006), aproximadamente a las 15 horas con dolor abdominal localizado en epigastrio, tipo cólico, intensidad 4/10, siendo de mayor intensidad hasta llegar a ser 8-9/10, que se irradia hacia hipocondrio derecho, acompañado de náusea llegando al vómito de contenido gastro-alimentario y posteriormente gastro-biliar, supuesta fiebre no cuantificada, automedicándose en un ocasión el día de ayer con butilhioscina. En este momento con franca mejoría del dolor, tolerando vía oral a líquidos. Exploración física: tranquila, cooperadora, afebril, bien hidratada, anictérica. Cardiorrespiratorio sin compromiso aparente. Abdomen plano, blando, depresible, doloroso a la palpación en epigastrio, Murphy (+), peristalsis presente, sin datos de irritación peritoneal. Resto sin alteraciones. Cuenta con biometría hemática, química sanguínea, tiempos de coagulación dentro de parámetros normales. Ultrasonido de hígado y vías biliares, reporta colecistitis crónica litiásica, discretamente agudizada. Se considera que la paciente puede ser manejada con antibiótico analgésico y antiespasmódico, así como dieta sin colecistoquinéticos, y ser vista para realizar colecistectomía en fecha posterior. Queda a cargo del servicio de Urgencias. 31 de julio de 2006, Nota de evolución nocturna, Urgencias: Consciente, intranquila, poco cooperadora, hidratada, buena coloración de mucosas, cardiopulmonar sin compromiso aparente, abdomen depresible, Murphy presente, puntos ureterales presentes, peristalsis disminuida, sin megalias, extremidades no edema ni cianosis, pulsos conservados. Revalorada por Cirugía General con ultrasonido que muestra lito en vesícula, sugieren se maneje con antibiótico y analgésico, esperar remisión del cuadro y posteriormente egresar para ser vista y manejada en la consulta externa, mismo que se especifica a la paciente que se muestra muy agresiva por no ser dada de alta, se comenta puede egresar por alta voluntaria manteniendo una actitud negativa, se manda con trabajo social. Inicia 7/23 LAUDO EXP. _______ R12-CONAMED-POPSecc.-7.5.1-21/Rev.03 ceftriaxona y metamizol por Cirugía General. De acuerdo a evolución se normará conducta a seguir. 00:15 horas, Reporte de Laboratorio: Hemoglobina 13.5 gramos, hematocrito 40.2%, leucocitos 9,500; neutrófilos 68.2%, sin bandas, plaquetas 394,000. Examen general de orina: densidad 1,020, pH 7.0, leucocitos, sangre, glucosa negativos. 9:09 horas, Reporte de Laboratorio: Hemoglobina 11.9 gramos, hematocrito 34.9, leucocitos 13,000, neutrófilos 78.6%, plaquetas 346,000. Reporte de ultrasonido de hígado y vías biliares: Hígado, páncreas, y riñón derecho sin alteraciones ecográficas, datos de colecistitis crónica litiásica discretamente agudizada al momento del estudio. 1º de agosto de 2006, Nota de egreso, Urgencias Adultos: Antecedente de intolerancia a colecistoquinéticos; ingresó con diagnóstico de dolor abdominal posterior a ingesta de grasa e irritantes. Exploración física: tensión arterial 105/70, frecuencia cardiaca 92 por minuto, frecuencia respiratoria 20 por minuto, temperatura 36º C, Murphy (+), sin datos de irritación peritoneal, ni compromiso cardiopulmonar, se realiza ultrasonido de hígado y vías biliares reportándose: colecistitis crónica litiásica agudizada leve. Valorada por Cirugía General, quien indica tratamiento médico y seguimiento por consulta externa. Actualmente se encuentra con mejoría, tolera la vía oral, sin dolor abdominal, signos vitales estables. Se egresa con tratamiento y seguimiento por Cirugía General. Dieta sin grasas, no lácteos ni irritantes. Ranitidina una tableta cada 12 horas; butilhioscina una tableta cada 8 horas por 5 días, Gel de Aluminio y Magnesio una cucharada 30 minutos antes de las comidas por 5 días. Continuar manejo en Clínica de Medicina Familiar y solicitar pase para servicio de Cirugía General. Acudir a Urgencias en caso necesario. Incapacidad por dos días. 8/23 LAUDO EXP. _______ R12-CONAMED-POPSecc.-7.5.1-21/Rev.03 Expediente Clínico, Sanatorio San Francisco. 2 de agosto de 2006, 7:00 horas, Nota de valoración, Cirugía: Femenino de 29 años de edad con dolor abdominal de tres días de evolución. Refiere haber iniciado el padecimiento hace tres días, caracterizado por presentar dolor abdominal tipo cólico, de aparición brusca, localizado a epigastrio y posteriormente en hipocondrio derecho con irradiación a la escápula del mismo lado, dolor acompañado por náusea y vómito en dos ocasiones de contenido gastro-biliar con lo que no se modifica el dolor. Tensión arterial 110/60, frecuencia cardiaca 95 por minuto, frecuencia respiratoria 18 por minuto, temperatura 36.0º C. Mucosa oral bien hidratada. Campos pulmonares ventilados; ruidos cardiacos en parámetros normales; abdomen con cicatriz quirúrgica en fosa ilíaca derecha, blando, depresible, doloroso a la palpación media y profunda en epigastrio e hipocondrio derecho, Murphy positivo, peristalsis presente, disminuida. Cuadro compatible con colecistitis litiásica agudizada que amerita cirugía de urgencia. Se prepara para colecistectomía por hidrocolecisto. Pasar a quirófano en cuanto se solicite. Resultados de laboratorio, Laboratorio Clínico “Cafetales”: Tiempo de protrombina 12,7”; glucosa 92, urea 15.5, creatinina 0.8. Hemoglobina 12.4 gramos, hematocrito 36.8 %, leucocitos 8,470, segmentados 54%, bandas 0, plaquetas 317,000. 2 de agosto de 2006, 11:30 horas, Nota postoperatoria: Diagnostico preoperatorio: colecistitis crónica litiásica aguda. Operación proyectada: colecistectomía laparoscópica. Técnica y hallazgos: bajo efectos de anestesia general, se realiza incisión a nivel de cicatriz umbilical, introducción de aguja de Veress. Se realiza punción hasta ingresar a cavidad peritoneal, realizando neumoperitoneo con CO2 hasta alcanzar presión intra-abdominal de 12 mm de Hg., se retira aguja de Veress y se introduce trocar de 10 mm. Se introduce cámara de 0º bajo visión directa, se coloca segundo trocar de 10 mm, realizando incisión por debajo del apéndice xifoides (un centímetro), introduciéndose el trocar, un tercer puerto de cinco mm a nivel de línea medio clavicular por debajo de parrilla costal derecha. Se revisa cavidad encontrándose adherencias de epiplón a pared abdominal por cirugía antigua, las cuales se liberan, así como adherencias 9/23 LAUDO EXP. _______ R12-CONAMED-POPSecc.-7.5.1-21/Rev.03 de epiplón gastro-hepático a vesícula biliar, la cual se encuentra a tensión, múltiples adherencias que son liberadas, se continua disección haciendo tracción pinza Graspper y disección pinza Maryland del triangulo de Calot, identificándose triángulo, conducto, y arteria cística, conducto colédoco. Se aplican dos grapas en sentido distal y proximal a conductos cístico y arteria cística, cortándose estos, se comienza disección de vesícula biliar de su lecho con disector bipolar con corte y coagulación de vasos sangrantes hasta extirparla en su totalidad; se realiza lavado y aspiración del lecho, dejando Penrose a hiato de Wislow. Cuenta de gasas e instrumental completos. Se da por terminado el acto quirúrgico. Sale la paciente con efectos residuales de anestesia y pasa a recuperación en buenas condiciones generales. 3 de agosto de 2006, 7:00 horas, Nota de evolución: Refiere dolor abdominal intenso, nausea sin vómito. Tensión arterial 110/70, temperatura 36.5º C., frecuencia cardiaca 82 por minuto, frecuencia respiratoria 18 por minuto. Abdomen con apósitos limpios, Penrose drenando escaso material serohemático, se retira; peristalsis en parámetros normales. Ha evolucionado satisfactoriamente. 4 de agosto de 2006, 7:00 horas: Refiere mejoría; tensión arterial 110/70, frecuencia cardiaca 80 por minuto, frecuencia respiratoria 16 por minuto, temperatura 36.5º C. Cardiopulmonar sin compromiso; abdomen blando, depresible no doloroso, se retira Penrose. Herida quirúrgica en proceso de cicatrización sin datos de infección, peristalsis presente. Evolución satisfactoria. Plan: Alta hoy. 7 de agosto de 2006, Reporte de estudio histopatológico, Patología Quirúrgica y Citología Exfoliativa: Espécimen.- Vesícula biliar. Diagnóstico: Colecistitis aguda y crónica; colelitiasis (un cálculo de composición mixta de predominio de colesterol); ganglio cístico con hiperplasia sinusal. 10/23 LAUDO EXP. _______ R12-CONAMED-POPSecc.-7.5.1-21/Rev.03 III. ANALISIS DEL CASO Antes de proceder al abordaje del caso planteado por las partes, esta Comisión Nacional de Arbitraje Médico estima pertinente hacer algunas precisiones de orden metodológico imprescindibles, no sólo para la cabal comprensión del asunto motivo de arbitraje, sino para evitar falsas apreciaciones en cuanto al criterio de la Comisión, el contenido y alcances del presente laudo. Atendiendo a la correcta interpretación de la lex artis médica, hemos de ponderar, que si bien pueden plantearse objetivos médicos para cada etapa del proceso de atención e incluso a título de finalidad del tratamiento, no puede hablarse de la exigibilidad de resultados; la medicina es una ciencia rigurosa, pero no exacta, por ello es imprescindible esclarecer, en el caso, y atendiendo a las circunstancias de modo, tiempo y lugar del acto médico en concreto, si los medios empleados son los exigibles y aceptados, en términos de la literatura médica y si existieron desviaciones atribuibles al demandado. Se sigue de lo anterior que, para el análisis del caso, ha de atenderse a los elementos objetivos del acto médico, y esto se reduce a la valoración de la idoneidad de los medios empleados, esto es, al análisis de los procedimientos instaurados en la atención médica reclamada. La ley sólo obliga a adoptar las medidas necesarias para alcanzar el objetivo planteado, en términos de la literatura médica; es decir, con arreglo a la lex artis médica, más no a obtener el objetivo, esto es un criterio universalmente aceptado en el derecho sanitario. Así, tanto la legislación como la doctrina, coinciden en que las obligaciones de medios o diligencia vinculan, no la promesa de un resultado, sino la exigibilidad de atención médica como tal. El paciente espera el resultado y podrá obtenerlo pero no exigirlo, aunque sí puede exigir (según reconoce la legislación) que la atención médica sea prestada con pericia y diligencia. En las obligaciones de medios, como el deudor no puede 11/23 LAUDO EXP. _______ R12-CONAMED-POPSecc.-7.5.1-21/Rev.03 prometer un resultado, sólo será responsable cuando obró sin la pericia, diligencia o el cuidado que la naturaleza de la obligación exigen tener (según ordena la legislación en vigor). Conforme a lo previsto en el artículo 51 de la Ley General de Salud, el paciente puede exigir que los medios empleados sean los idóneos, en términos de la lex artis médica (es decir el conjunto de reglas aceptadas para el ejercicio médico contenidas en la literatura generalmente aceptada, en las cuales se establecen los medios ordinarios para la atención médica y los criterios para su empleo). En igual sentido, puede hacerlo por cuanto hace a los principios éticos de la práctica médica (el conjunto de reglas bioéticas y deontológicas generalmente aceptadas para la atención médica). En esos términos, la apreciación subjetiva del paciente (que siempre ha de entenderse como la aspiración de recobrar la salud) sólo es un parámetro que sirve para establecer sus necesidades y calificar su afección, pero no la obligatoriedad del resultado, y debe contrastarse con las posibilidades científicamente demostradas. Dicho en otros términos, no es admisible para el correcto análisis, atenerse a la aspiración del paciente, sesgar el análisis a los resultados, ni confundir la volición e intención de las partes (incluso la del prestador) con lo jurídicamente exigible, pues, por regla general, tienen por objeto defender su caso. Tal criterio, ha sido sostenido expresamente en el artículo 2615 del Código Civil Federal, que indica como únicas fuentes de responsabilidad a la negligencia, la impericia y el dolo. Al efecto, es importante hacer notar que ninguna libertad es ilimitada y tratándose de la libertad prescriptiva sólo pueden emplearse medios aceptados en la lex artis médica, para el padecimiento específico. Es decir, los medios, técnicas y procedimientos deben ser aceptados para la atención del padecimiento, de otra suerte, la atención médica habrá de ser tenida por ilegítima, esto, claro está, sin perjuicio de evaluar en su caso, la existencia de los daños y perjuicios. 12/23 LAUDO EXP. _______ R12-CONAMED-POPSecc.-7.5.1-21/Rev.03 En esos términos, atendiendo al criterio aceptado por ministerio de la ley, cuando se obra con negligencia, impericia o dolo, (en el caso de atención médica dejando de observar obligaciones de medios o diligencia) causando un daño a otro, se está obligado a repararlo; a menos que se demuestre que el daño se produjo a consecuencia de culpa o negligencia inexcusable del paciente, incumplimiento obligacional, y el caso fortuito o fuerza mayor. Para ello, es imprescindible probar primero el daño, su naturaleza y alcances, para luego evaluar sus repercusiones jurídicas. Siendo necesario caracterizar la patología del caso, esta institución procede a plantear las siguientes precisiones: Según refiere la literatura especializada, la litiasis biliar en México constituye 30% de los ingresos a Servicios de Cirugía General; la litiasis vesicular, predispone la presentación de colecistitis aguda, coledocolitiasis y adenocarcinoma de vesícula biliar. Así mismo, atendiendo a la literatura especializada, la colecistitis sintomática se presenta en forma aguda o crónica; la aguda es la complicación más frecuente, produce cuadro de dolor súbito y signos de inflamación en cuadrante superior derecho del abdomen, a menudo se acompaña de fiebre, leucocitosis, náusea y vómito. La evolución de la colecistitis aguda varía desde un cuadro clínico leve, hasta complicaciones graves como perforación de la pared vesicular, pancreatitis, entre otras. Al impactarse los cálculos en el antro vesicular o en el conducto cístico, existe dolor agudo y cólico intermitente, debido a la contracción brusca de la vesícula en un intento por expulsar los litos o el lodo biliar. Si en la colecistitis un cálculo se impacta en el conducto cístico, el pigmento biliar puede absorberse, transformándose el material en moco con sales de calcio, de color blanco, espeso, entidad denominada hidrocolecisto. 13/23 LAUDO EXP. _______ R12-CONAMED-POPSecc.-7.5.1-21/Rev.03 La obstrucción parcial o completa de la bilis, favorece la proliferación bacteriana y la inflamación de la pared vesicular, con el consiguiente cuadro de colecistitis aguda; al persistir la inflamación, se produce empiema vesicular (piocolecisto), septicemia e incluso choque séptico. En estas condiciones, la erosión que producen los litos y el cuadro infeccioso agregado, llevan a gangrena y necrosis de la pared con perforación de la misma, vaciándose el contenido vesicular hacia la cavidad abdominal con producción de peritonitis. El diagnóstico, debe fundamentarse en una historia clínica completa, examen físico minucioso, así como la correcta interpretación de estudios de laboratorio y gabinete. En términos de la literatura de la especialidad, el cuadro clínico de la colecistitis aguda (95% de los casos) se manifiesta por dolor tipo cólico que dura más de 6 horas, localizado en el área epigástrica o al cuadrante superior derecho, con irradiaciones a espalda, por obstrucción del conducto cístico, distensión e inflamación vesicular; el inicio es súbito. Generalmente se presenta postprandialmente, durante la noche, y se relaciona con ingesta de alimentos grasosos; puede presentarse náusea, vómito, diaforesis y febrícula. A la exploración física hay dolor en el hipocondrio derecho, signo de Murphy positivo (se manifiesta cuando se palpa la región subcostal derecha y se indica al paciente realizar inspiración profunda, la cual suspende bruscamente por dolor, ello indica inflamación vesicular), puede tener ictericia leve y plastrón palpable en 20% de los casos. En caso de colecistitis aguda el laboratorio puede mostrar leucocitosis, elevación de fosfatasa alcalina y discreta hiperbilirrubinemia. Las radiografías no son de utilidad para establecer el diagnóstico de colecistitis aguda, pero sí para el diagnóstico diferencial, pues permiten identificar aire libre en cavidad (perforación de úlcera péptica), litiasis renal, calcificaciones pancreáticas (pancreatitis crónica), etc. 14/23 LAUDO EXP. _______ R12-CONAMED-POPSecc.-7.5.1-21/Rev.03 El estudio de elección para el diagnóstico de colecistitis aguda en 95% de los casos, es la ultrasonografía. Dicho estudio permite identificar distensión de la vesícula, así como litos en su interior; el grosor de la pared vesicular (3 mm o más es indicativo de inflamación), líquido perivesicular, Murphy sonográfico y dilatación del árbol biliar. El manejo inicial debe ser mediante ayuno, soluciones intravenosas, analgésico, antibiótico, y en caso de vómito, colocación de sonda nasogástrica. Una vez que el paciente se estabiliza, el tratamiento de elección es la colecistectomía, abierta o laparoscópica en las primeras 24 a 48 horas de hospitalización. Mediante esta conducta, se disminuye el número de infecciones y no aumenta el número de complicaciones. Es decir, el índice de morbilidad y mortalidad es menor con la cirugía temprana, pues el retraso en la cirugía, favorece aparición de nuevos brotes de colecistitis, así como el paso de cálculos al colédoco, pancreatitis y otras complicaciones. En el presente caso, con el propósito de su análisis y resolución, en adición al resumen clínico ya referido, y en términos de la literatura de la especialidad, es necesario precisar el estudio del acto médico reclamado, con apego al objeto del arbitraje establecido por las partes y de acuerdo con lo probado en autos por las mismas, de la siguiente forma: De autos se desprende, que la paciente Gabriela Carolina Mancera Islas, acudió al Servicio de Urgencias del Hospital General “Dr. Fernando Quiroz Gutiérrez” del Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado, el 30 de julio de 2006, por presentar dolor abdominal de localización a epigastrio, desencadenado por ingestión de alimento con alto contenido de grasa. La hoja de Urgencias de las 23:40 horas, refiere que el dolor se irradió hacia fosa ilíaca derecha; así mismo, que la paciente presentó náusea, vómito, disuria y polaquiuria, integrándose diagnósticos de síndrome doloroso abdominal, probable enfermedad ácido-péptica, cólico reno-ureteral, litiasis ureteral, infección 15/23 LAUDO EXP. _______ R12-CONAMED-POPSecc.-7.5.1-21/Rev.03 de vías urinarias. Por tal motivo, la paciente ingresó a observación, indicándose manejo mediante analgésicos y procinéticos intravenosos. En ese sentido, se observan elementos de mala práctica, por negligencia, atribuibles al personal médico, pues no cumplió sus obligaciones de medios de diagnóstico y tratamiento, al indicar analgésicos a la paciente, sin haberla estudiado suficientemente. En efecto, en términos de la literatura médica, el empleo de analgésicos puede enmascarar el cuadro clínico. En el expediente existen dos resultados de laboratorio con fecha 31 de julio, el primero de las 00:15 horas, reporta 9,500 leucocitos con 68% segmentados, por su parte el segundo (9.09 horas) reporta leucocitosis (13,000) con aumento en la diferencial de segmentados (78.6), lo cual fue soslayado por los médicos que atendieron a la paciente. En efecto, en las notas clínicas, se reporta laboratorio en parámetros normales, y no se establece interpretación ni correlación alguna de los citados datos. Ahora bien, el 31 de julio de 2006 se detectó signo de Murphy positivo y se solicitó ultrasonido, el cual reportó que se trataba de colecistitis crónica litiásica discretamente agudizada. Sobre el particular, es menester señalar, que en el reporte del citado estudio, se establece que la paciente presentaba vesícula biliar acodada, aumentada de tamaño (96x36x37 mm), paredes de 5 mm de grosor y discreto halo hipoecóico en relación a edema perivesicular, con múltiples imágenes ecogénicas en su interior, de 8 a 12 mm de tamaño que proyectan sombra sónica posterior y se desplazan al cambio de posición de la paciente. Lo anterior, indica que la paciente presentaba datos francos de colecistitis aguda, la cual fue interpretada como discreta. La nota de evolución del 31 de julio de 2006 a las 18:00 horas, señala que la enferma presentaba febrícula (37.7º C), y que el resultado de ultrasonido corroboró la colecistitis crónica litiásica agudizada, solicitándose valoración por el Servicio de Cirugía General. 16/23 LAUDO EXP. _______ R12-CONAMED-POPSecc.-7.5.1-21/Rev.03 Así las cosas, la nota de Cirugía General de las 20:00 horas refiere que a la exploración física, la paciente presentaba dolor en epigastrio y signo de Murphy positivo; estudios de laboratorio clínico en parámetros normales, ultrasonido con reporte de colecistitis crónica litiásica discretamente agudizada, concluyendo que la paciente podía ser tratada médicamente y con dieta libre de colecistoquinéticos, para posteriormente ser enviada a Consulta Externa del Servicio para programación de colecistectomía, dejándola a cargo del Urgencias. Por lo antes expuesto, se observan elementos de mala práctica, por negligencia e impericia, atribuibles al personal médico, pues quedó demostrado que su atención no se ajustó a lo establecido por la lex artis especializada. Durante el presente asunto arbitral, fue demostrado, que se incumplieron las obligaciones de medios de diagnóstico y tratamiento. En efecto, la paciente presentó elevación de la temperatura corporal, lo cual fue soslayado, pues en la citada nota de Cirugía General, sólo mencionan supuesta fiebre. Así mismo, si bien existió disminución del dolor, éste no desapareció, lo que se corrobora en las notas clínicas, la cuales reportan persistencia del signo de Murphy y dolor en epigastrio, ello pese al empleo de analgésicos y antiespasmódicos. Lo anterior hace evidente la mal praxis, observada por el personal médico del Instituto demandado, pues ante una manifestación clínica reiterada, se ignoró el cuadro clínico agudo de la enferma, por incumplimiento de las obligaciones de diligencia. A mayor abundamiento, de las notas de enfermería, se desprende que la enferma presentaba dolor abdominal, incluso antes del egreso hospitalario. Cabe mencionar, que de las constancias aportadas en autos, se desprende que la paciente fue valorada por personal en formación del Servicio de Cirugía General, sin que aparezca demostrada la participación del personal de base de dicha especialidad. Lo anterior denota incumplimiento a la Norma Oficial Mexicana NOM090-SSA1-1994, para la organización y funcionamiento de residencias médicas, la cual, entre otras cosas, establece que los residentes deben cumplir las disposiciones 17/23 LAUDO EXP. _______ R12-CONAMED-POPSecc.-7.5.1-21/Rev.03 internas de la unidad médica receptora de residentes de que se trate, informando a su inmediato superior el resultado de las acciones médicas que estén a su cargo, y en correspondencia con las responsabilidades del grado académico que cursen. Así mismo, la citada norma establece, que durante su adiestramiento clínico o quirúrgico, los médicos residentes participarán en el estudio y tratamiento de los pacientes que se les encomienden, siempre sujetos a las indicaciones y la supervisión de los médicos adscritos a la unidad médica receptora de residentes. Esto es un elemento más para tener por cierta la mal praxis, por negligencia e impericia, en que incurrió el personal médico del Instituto demandado. Más aun, la conducta de delegar la atención de la paciente al Servicio de Urgencias, para su posterior envió a Consulta Externa, muestra incumplimiento al deber de cuidado, por parte de Cirugía General. La nota de evolución nocturna del 31 de julio de 2006, establece que la paciente estaba intranquila, con signo de Murphy y puntos ureterales presentes. De igual forma, la nota de egreso del Servicio de Urgencias del 1° de agosto de 2006, reportó signó de Murphy positivo; sin embargo, la enferma fue dada de alta con tratamiento médico, indicación de acudir a Urgencias en caso necesario y a su Unidad de Medicina Familiar para envió a Cirugía General. En esos términos, está demostrado, que el egreso de la paciente fue precipitado, pues fue dada de alta con signo de Murphy positivo, lo que indica inflamación aguda de la vesícula biliar y resultado de biometría hemática con elevación de la cuenta de glóbulos blancos (13,000) a expensas de neutrófilos 78.6%. Así las cosas, debido a las omisiones observadas por la Institución demandada, la paciente asistió a hospital privado, donde recibió la atención quirúrgica que el caso ameritaba. El expediente clínico del Sanatorio San Francisco, A.C., demuestra que el 2 de agosto de 2006, se efectuó a la paciente colecistectomía laparoscópica. Así 18/23 LAUDO EXP. _______ R12-CONAMED-POPSecc.-7.5.1-21/Rev.03 mismo, demuestra que la evolución ulterior de la paciente fue satisfactoria, siendo egresada de dicho nosocomio el 4 de agosto de 2006. El estudio histopatológico de vesícula biliar, fechado el 7 de agosto de 2006, reportó intenso infiltrado linfoplasmocitario y leucocitario, congestión vascular, concluyendo que se trató de colecistitis aguda y crónica. En esos términos, fue demostrado que la atención que se otorgó a Gabriela Carolina Mancera Islas, en el Hospital “Dr. Fernando Quiroz Gutiérrez” del Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado, no se ajustó a la lex artis de la especialidad, pues además egresaron a la paciente sin haber solucionado la colecistitis aguda que presentaba, motivo por el cual fue necesario que la paciente asistiera a hospital privado para recibir la atención quirúrgica que el caso ameritaba; sin que en modo alguno haya justificado el demandado el argumento de que se solicitó alta voluntaria, como lo plasma en sus alegatos, pues tal manifestación no aparece en las constancias de autos. Luego entonces, las excepciones y defensas interpuestas al efecto por la parte demandada, derivadas de los informes médicos rendidos, resultan improcedentes, conforme a lo precedentemente considerado, por lo cual debe responder por su mal praxis; es decir, el demandado debe cumplir la pretensión reclamada por la parte actora, consistente en el pago de una indemnización. El criterio de esta institución arbitral está soportado, además, en las referencias bibliográficas señaladas a continuación, las cuales integran los principios generalmente aceptados por la lex artis médica. BIBLIOGRAFÍA • Flasar, M. Goldberg, E. Acute Abdominal Pain Med Clin N Am. Vol 90 (2006) pp 481 – 503 • Delacore, R. Cheung, L Acute abdominal Pain. ACS Surgery principles & practice 1st Ed pp. 222 – 237 • Schwartz, S. Gallbladder and Extrahepatic Biliary System, chapter 29 in Principles of Surgery, 7th ed pp. 1437– 1457 19/23 LAUDO EXP. _______ R12-CONAMED-POPSecc.-7.5.1-21/Rev.03 • Martindale, R. Gadacz, T. Operative management of cholecystitis and cholelithiasis, Chap 13 en Shackelford’s Surgery of the Alimentary Tract, 5th edition, 2002 pp. 184 –195 • Zucker K. Curet, M Laparoscopic surgery of the biliary tract and liver, Chap 14 en Shackelford’s Surgery of the Alimentary Tract 5th edition 2002 pp 196 -206 • Townsend. Sabiston Textbook of Surgery, 17 Ed. Cholecystectomy indications and technique, Chapter 52. • Feldman. Sleisenger & Fortran’s Gastrointestinal and Liver Disease 8th edition, 2006 Chapter 63 Indications for treatment of asintomática gallstones • Stevens, K. et all Immediate laparoscopic cholecystectomy for acute cholecystitis. No need to wait. The American Journal of surgery vol 192 (2006) pp 756 – 761 • Roe, J. Clinical assessment of acute cholecystitis in adults Annals of emergency medicine. Vol 48 no 1 July 2006 pp 101 -103. • Giger, U. et all Risk Factors for perioperative complications in patients undergoing laparoscopic cholecystectomy. 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Resultado de estudio de laboratorio, de Hospital General Dr. Fernando Quiroz Gutiérrez, de 31 de julio de 2006. Cuatro imágenes de ultrasonido. Tres resultados de estudio, de Laboratorio Clínico Cafetales, de 2 de agosto de 2006. Dos placas radiográficas. 20/23 LAUDO EXP. _______ R12-CONAMED-POPSecc.-7.5.1-21/Rev.03 Informe médico, de Dr. Cayetano Pompa De la Rosa, de 13 de diciembre de 2006. Presuncional. Las anteriores probanzas, en su conjunto, concatenadas con los demás elementos de prueba, en especial con los expedientes clínicos exhibidos en autos, valoradas conforme a las reglas de la lógica y la experiencia por tratarse de un arbitraje en estricto derecho, para efectos del presente asunto, favorecen a su oferente y acreditan que la atención brindada a la paciente no se ajustó a lo establecido por la lex artis médica de la especialidad, tal y como se ha razonado, de manera fundada y motivada, en los considerandos de este laudo. Copia de factura 10574 y de estado de cuenta, de Sanatorio San Francisco A. C., de 4 de agosto de 2006, por $15,450.45. Copia de dos facturas, de Farmacias San Pablo, de 4 de agosto de 2006, por un total de $630.00. Copia de factura 1105, de Laboratorio Clínico Cafetales, de 15 de agosto de 2006, por $1,000.00. Copia de factura 3045, de Ingeniería Biomédica Especializada, de 18 de agosto de 2006, por $2,300.00. Copia de recibo de honorarios 620, de Dr. Cayetano Pompa De la Rosa, de 4 de agosto de 2006, por $13,000.00. Copia de recibo de honorarios 0001, de Dr. Carlos Ramírez Toledo, de 4 de agosto de 2006, por $2,000.00. Copia de recibo de honorarios 573, de Dr. José Miguel Eugenio Trejo, de 4 de agosto de 2006, por $4,000.00. Copia de recibo de honorarios 575, de Dra. Ma. Esther Gutiérrez Díaz Ceballos, de 15 de agosto de 2006, por $300.00. Copia de recibo de honorarios 40, de María de Lourdes Rodríguez Alonso, sin fecha, por $6,000.00. Estas documentales, concatenadas con las constancias médicas mencionadas anteriormente, demuestran que las cantidades y conceptos que en los mismos se señalan corresponden a los gastos que se realizaron en la atención médica de la actora, con facultativos distintos al demandado, la cual se tuvo que realizar posteriormente, debido a la mala práctica del Instituto demandado, 21/23 LAUDO EXP. _______ R12-CONAMED-POPSecc.-7.5.1-21/Rev.03 haciendo un total de $44,680.45 (cuarenta y cuatro mil seiscientos ochenta pesos 00/100 M.N.). B) Pruebas del demandado: • Copia del expediente clínico. • Instrumental de actuaciones. • Presuncional legal y humana. Las anteriores probanzas, en su conjunto, concatenadas con los demás elementos de prueba, en especial con las constancias de atención médica que exhibe la parte actora, valoradas conforme a las reglas de la lógica y la experiencia por tratarse de arbitraje en estricto derecho, para efectos del presente asunto, no favorecen a su oferente, por el contrario, acreditan que la atención brindada a la paciente no se ajustó a lo establecido por la lex artis médica de la especialidad, tal y como se ha razonado, de manera fundada y motivada, en los considerandos de este laudo. Por todo lo anterior y con fundamento en lo dispuesto en los artículos 2104, 2108 y 2110 del Código Civil Federal, al no cumplir el demandado con su obligación de proporcionar atención médica a la actora en términos de lo establecido en la lex artis de la especialidad, motivando con su mala práctica que la paciente fuera atendida en medio privado y causándole un menoscabo en su patrimonio, como consecuencia inmediata y directa de dicha falta de cumplimiento obligacional, resulta procedente condenar al Instituto a indemnizar a la actora por la afectación producida, debiendo, por tanto, condenarle al pago del monto de los gastos realizados en su atención médica privada, conforme a lo probado en autos. Por lo expuesto, fundado y motivado, en términos de los artículos 80, 81 y 82 del Código de Procedimientos Civiles para el Distrito Federal, es de resolverse y se 22/23 LAUDO EXP. _______ R12-CONAMED-POPSecc.-7.5.1-21/Rev.03 RESUELVE PRIMERO.- Fue procedente el arbitraje para resolver el presente asunto. SEGUNDO.- GABRIELA CAROLINA MANCERA ISLAS, acreditó su acción. TERCERO.- El INSTITUTO DE SEGURIDAD Y SERVICIOS SOCIALES DE LOS TRABAJADORES DEL ESTADO no probó sus excepciones y defensas. CUARTO.- Se condena al demandado a pagar a la actora $44,680.45 (cuarenta y cuatro mil seiscientos ochenta pesos 45/100 M. N.). QUINTO.- El Instituto demandado deberá exhibir la cantidad antes mencionada mediante cheque certificado o de caja, ante esta Comisión Nacional de Arbitraje Médico, en un término de treinta días hábiles, contado a partir del siguiente al en que se le notifique este laudo, para que se entregue a la actora. SEXTO.- Esta Comisión actuó por el concurso de voluntad de las partes. SEPTIMO.- Se recuerda a las partes que este proceso arbitral es confidencial, sólo podrá darse a conocer a terceros para el cumplimiento forzoso del laudo. OCTAVO.- Notifíquese personalmente. Así lo determinó la COMISION NACIONAL DE ARBITRAJE MEDICO y firma el COMISIONADO NACIONAL DE ARBITRAJE MEDICO DR. GERMAN ENRIQUE FAJARDO DOLCI 23/23 LAUDO EXP. _______ R12-CONAMED-POPSecc.-7.5.1-21/Rev.03