Diccionario de términos de Derecho Parlamentario

Anuncio
Diccionario de
términos de Derecho
Parlamentario
Coordinadoras:
Rosa Ripollés Serrano
Raquel Marañón Gómez
Diccionario de
términos de Derecho
Parlamentario
Coordinadoras:
Rosa Ripollés Serrano
Raquel Marañón Gómez
CONSEJO DE REDACCIÓN
Pedro GONZÁLEZ-TREVIJANO (Presidente)
José María ASENCIO MELLADO
Julio BANACLOCHE PALAO
Pilar BLANCO-MORALES LIMONES
Antonio CAYÓN GALIARDO
Guillermo GUERRA MARTÍN
Eugenio LLAMAS POMBO
MANUEL LÓPEZ PARDIÑAS
Blanca LOZANO CUTANDA
José Luis MARTÍNEZ LÓPEZ-MUÑIZ
Francisco PÉREZ DE LOS COBOS ORIHUEL
Jesús-María SILVA SÁNCHEZ
Enrique ARNALDO ALCUBILLA (Secretario)
DICCIONARIO DE TÉRMINOS DE
DERECHO PARLAMENTARIO
Coordinación de la edición
RAQUEL MARAÑÓN GÓMEZ y MARÍA ROSA RIPOLLÉS SERRANO
Autores
JOSÉ MARÍA CODES CALATRAVA
Letrado de las Cortes Generales
Director de Asistencia Técnico-Parlamentaria del Senado
Profesor de Derecho Administrativo de la Universidad Pontificia Comillas (ICADE)
LUIS DE LA PEÑA RODRÍGUEZ
Letrado de las Cortes Generales
Doctor en Derecho
Interventor de las Cortes Generales
MANUEL DELGADO-IRIBARREN GARCÍA CAMPERO
Letrado de las Cortes Generales
ESTEBAN GRECIET CARCÍA
Letrado de la Asamblea de Madrid
MERCEDES JULIANI AGUADO
Archivera-Bibliotecaria de las Cortes Generales
RAQUEL MARAÑÓN GÓMEZ
Letrada de las Cortes Generales
Secretaria General de la Asamblea de Madrid
Profesora de Derecho Internacional Público en la Universidad Alfonso X el Sabio
ALMUDENA MARAZUELA BERMEJO
Letrada de la Asamblea de Madrid
MARÍA ROSA RIPOLLÉS SERRANO
Letrada de las Cortes Generales
Doctora en Derecho
Profesora de Derecho Constitucional ICADE
XOSÉ ANTÓN SARMIENTO MENÉNDEZ
Secretario General de la CALRE
Letrado Oficial Mayor. Parlamento de Galicia
Profesor Derecho Público y Teoría del Estado. Universidad de Santiago de Compostela
IGNACIO TORRES MURO
Catedrático de Derecho Constitucional de la Universidad Complutense de Madrid
Miembro del Cuerpo de Letrados del Tribunal Constitucional
JOSÉ TUDELA ARANDA
Doctor en Derecho
Letrado de las Cortes de Aragón
© Wolters Kluwer España, S.A., 2014
Edita: LA LEY
Edificio La Ley
C/ Collado Mediano, 9
28231 – Las Rozas (Madrid)
Tel.: 902 42 00 10 – Fax: 902 42 00 12
http://www.laley.es
1.ª edición: octubre 2014
ISBN: 978-84-9020-277-7
Depósito Legal: M-27458-214
Todos los derechos reservados. A los efectos del art. 32 del Real Decreto Legislativo 1/1996, de 12 de abril, por el
que se aprueba la Ley de Propiedad Intelectual, Wolters Kluwer España, S.A., se opone expresamente a cualquier
utilización del contenido de esta publicación sin su expresa autorización, lo cual incluye especialmente cualquier
reproducción, modificación, registro, copia, explotación, distribución, comunicación, transmisión, envío, reutilización, publicación, tratamiento o cualquier otra utilización total o parcial en cualquier modo, medio o formato de
esta publicación.
Cualquier forma de reproducción, distribución, comunicación pública o transformación de esta obra sólo puede
ser realizada con la autorización de sus titulares, salvo excepción prevista por la Ley. Diríjase a CEDRO (Centro
Español de Derechos Reprográficos, www.cedro.org) si necesita fotocopiar o escanear algún fragmento de esta
obra.
El editor y los autores no aceptarán responsabilidades por las posibles consecuencias ocasionadas a las personas
naturales o jurídicas que actúen o dejen de actuar como resultado de alguna información contenida en esta publicación.
El texto de las resoluciones judiciales contenido en las publicaciones y productos de Wolters Kluwer España, S.A.,
es suministrado por el Centro de Documentación Judicial del Consejo General del Poder Judicial (Cendoj), excepto
aquellas que puntualmente nos han sido proporcionadas por parte de los gabinetes de comunicación de los órganos
judiciales colegiados. El Cendoj es el único organismo legalmente facultado para la recopilación de dichas resoluciones. El tratamiento de los datos de carácter personal contenidos en dichas resoluciones es realizado directamente por el citado organismo, desde julio de 2003, con sus propios criterios en cumplimiento de la normativa
vigente sobre el particular, siendo por tanto de su exclusiva responsabilidad cualquier error o incidencia en esta
materia.
Diseño, Preimpresión e Impresión Wolters Kluwer España, S.A.
Printed in Spain
Prórroga
Las propuestas de resolución serán en principio votadas por el orden de
presentación sin perjuicio de lo que resulte por la facultad de acumulación
de la votación de todas las propuestas de resolución de un Grupo Parlamentario.
El debate de las propuestas de Resolución se realiza con una intervención
de todos los Grupos Parlamentarios ordenados de menor a mayor para la
defensa de las propuestas de resolución que su grupo haya presentado y
también para fijar posición sobre las presentadas por los restantes Grupos
Parlamentarios.
En este debate no está prevista la intervención del Presidente del
Gobierno si bien podría hacer uso de la facultad que le confiere el Reglamento en el artículo 70.5 del Reglamento del Congreso y que ha utilizado
de manera muy restringida tan solo en los Debates del Estado de la Nación
de 1984 y 2005.
Raquel Marañón Gómez
PRÓRROGA
(Véase además: Plazo)
I. Concepto. Por plazo se entiende un período de tiempo determinado
por una disposición para producir un resultado. Las normas establecen con
frecuencia plazos y tal es el caso del ordenamiento parlamentario en el que
abunda la determinación de períodos de tiempo para ejercitar una iniciativa,
llevar a cabo una competencia o determinadas facultades, o producir un
determinado resultado; normas de carácter procedimental y por ello necesariamente garantistas. Por prórroga se comprende la ampliación de un
determinado plazo.
II. Contenido. Los plazos reglamentarios en ocasiones son plazos constitucionales que el Reglamento desarrolla, como por ejemplo el plazo establecido en el Art. 90 CE de dos meses con que cuenta el Senado para introducir enmiendas u oponer su veto a las iniciativas que llegan a la Cámara
Alta desde el Congreso de los Diputados; o el de cuarenta y ocho horas tras
la primera votación en que no se hubiera obtenido mayoría absoluta, para
llevar a cabo la segunda votación de investidura del candidato a Presidente
del Gobierno (Art. 99 CE).
882
© LA LEY
Prórroga
En otros supuestos es el Reglamento parlamentario el que determina un
plazo, caso del «no superior a treinta días» de las administraciones públicas
para entregar los informes o documentos solicitados por un Diputado o Senador o manifestar al solicitante las razones fundadas en derecho que lo impidan (Art. 7 RCD y 20.3 RS); o el plazo de enmiendas de quince días en el
Congreso o diez días en el Senado (Art. 110 RCD y 107 RS); o el plazo de
quince días para solicitar comparecencias informativas relacionadas con una
iniciativa legislativa que establece el Art. 112 del R P Andalucía.
Pues bien la prórroga de un plazo como ampliación del período de tiempo
inicial depende de lo que se establezca en cada ordenamiento y, así en el
ámbito jurídico público administrativo la prórroga se contempla con la denominación de «ampliación», en el Art. 49 de la LRJAP y PAC (L. 30/1992); con
ciertos requisitos relativos a que no haya precepto en contrario; requisitos
temporales, como son que no supere la mitad del plazo, «si las circunstancias
lo aconsejan», concepto jurídico indeterminado que equivale a discrecionalidad en este caso y siempre que se den los demás requisitos, y que no se
perjudiquen derechos de tercero.
En el ordenamiento parlamentario encontramos plazos preclusivos en los
que no cabe prórroga, (sería el caso, por ejemplo del plazo de dos meses
para levantar el veto del Senado previsto en el Art. 122 del RCD; o el plazo
de dos meses que tiene el Senado para concluir el debate legislativo, Art. 118
RS), bien porque esta no se permite o porque se trata de plazos constitucionales respecto de los que el Reglamento lleva a cabo una tarea de desarrollo.
Este sería el supuesto de los plazos contenidos para la investidura en el Art.
99 CE y desarrollados por los Arts. 170 a 172 RCD. Junto a estos hay plazos
que, conforme a lo que dispone con carácter general el Art. 91 RCD pueden
ser «prorrogados o reducidos», por Acuerdo de la Mesa de la Cámara, lo que,
salvo casos excepcionales, implica que «las prórrogas no serán superiores a
otro tanto del plazo inicial ni las reducciones a su mitad». O, concretamente
caben también ampliaciones o reducciones en casos como la emisión de
dictamen legislativo por las Comisiones del Senado, acordado por el Presidente, de acuerdo con la Mesa «cuando así lo aconseje el desarrollo del
trabajo legislativo de la Cámara» (Art. 113.2 RS). Disposición reiterada en
otros ordenamientos Parlamentarios autonómicos, como, a título de ejemplo,
el Art. 120 del RP de Asturias.
Estos preceptos han de entenderse referidos a los plazos reglamentarios,
como es el caso de las frecuentes prórrogas de los plazos de enmiendas en
© LA LEY
883
Proyecto de Ley
el Congreso de los Diputados, hasta el punto de que las dos primeras prórrogas en la práctica son automáticas, requiriéndose para las restantes que la
solicitud se corresponda con GP que tengan la mayoría absoluta de los
miembros del Congreso de los Diputados o cuenten con tal apoyo. Distinta
es la cuestión en los plazos constitucionales en los que, como ya se ha indicado, salvo previsión en contrario, el incumplimiento entrañaría la sanción
de nulidad por contravención constitucional.
III.Antecedentes. la prórroga de los plazos reglamentarios incorporada
por precedentes Parlamentarios y más tarde en los Reglamentos es una circunstancia común debida al manejo del tempus parlamentario que requiere
pausas para posibilitar la obtención de acuerdos. Durante la transición política no era infrecuente recurrir a una elusión consistente en «para el reloj»
para tratar de resolver por medio del dialogo parlamentario espinosas cuestiones políticas.
Bibliografía: SIEIRA MUCIENTES. S. «Art. 91» En: Comentarios al RCD. Ed D Publ
Congreso de los Diputados. Impr Closas Orcoyen Madrid 2012.
María Rosa Ripollés Serrano
PROYECTO DE LEY
(Véase además: Proposición de ley)
Reciben la denominación de «proyectos de ley» las iniciativas legislativas
provenientes del Gobierno, de acuerdo con lo previsto en el artículo 87.1 de
la Constitución.
La iniciativa legislativa gubernamental puede versar sobre cualquier
materia y es, además, desde un punto de vista cuantitativo, la más importante
a lo largo de la Legislatura. La inmensa mayoría de las leyes que se aprueban
en España proviene de proyectos de ley. En Derecho Comparado es habitual
distinguir igualmente entre las iniciativas legislativas gubernamentales y no
gubernamentales, reservándose igualmente una nomenclatura específica
para las iniciativas provenientes del Gobierno (bill, en Inglaterra, project de
loi en Francia o disegni di legge en Italia).
Los requisitos que debe reunir un proyecto de ley se recogen en el artículo
88 de la Constitución, según el cual los proyectos de ley serán aprobados en
884
© LA LEY
Proyecto de Ley
Consejo de Ministros, que los someterá al Congreso, acompañados de una
exposición de motivos y de los antecedentes necesarios para pronunciarse
sobre ellos. De esta regulación destaca lo siguiente:
— Los proyectos de ley se aprueban en Consejo de Ministros. Su elaboración en el seno de Gobierno se regula en el artículo 22 de Ley 50/1997,
de 27 de noviembre, del Gobierno.
— Se remiten en todo caso al Congreso de los Diputados, lo cual es una
muestra más del bicameralismo imperfecto existente en nuestro país.
— Deben ir acompañados de una exposición de motivos y de los antecedentes necesarios para pronunciarse sobre ellos. La exposición de motivos
consiste en una descripción global de las razones políticas, económicas,
sociales o técnicas que justifican la presentación del correspondiente proyecto de ley. Una vez que se apruebe la ley, la exposición de motivos pasa
a ser el preámbulo de la misma.
Respecto a los antecedentes, el artículo 22.2 de la Ley del Gobierno establece que, al menos, los proyectos de ley deben ir acompañados de la
memoria, los estudios o informes sobre la necesidad y oportunidad del
mismo, un informe sobre el impacto por razón de género de las medidas que
se establecen en el mismo, así como por una memoria económica que contenga la estimación del coste a que dará lugar. Además, deberán incluirse los
dictámenes de los órganos constitucionales o consultivos que sean preceptivos en función de la materia (Consejo de Estado o Consejo General del
Poder Judicial, por ejemplo).
Sobre si la ausencia de estos antecedentes puede implicar la inconstitucionalidad de la ley, la mayoría de la doctrina entiende que, al no pertenecer
propiamente la elaboración del proyecto de ley al procedimiento legislativo,
dicha ausencia no debería implicar la inconstitucionalidad de la ley salvo
que se hubiese privado a la Cámara de un elemento importante de decisión
y, por tanto, se hubiesen vulnerado los derechos de los Parlamentarios. En
este sentido, el Tribunal Constitucional, en su Sentencia 109/1986, en relación con la falta de un informe preceptivo del Consejo General del Poder
Judicial, señaló que «la ausencia de un determinado antecedente sólo tendrá
trascendencia si se hubiere privado a las Cámaras de un elemento de juicio
necesario para su decisión, pero en este caso el defecto, que tuvo que ser
conocido de inmediato, hubiese debido ser denunciado ante las mismas
Cámaras… No habiéndose producido esa denuncia es forzoso concluir que
© LA LEY
885
El Diccionario de términos de Derecho Parlamentario, a través
de sus casi quinientas voces, recoge de manera rigurosa todos los
aspectos esenciales del funcionamiento de las cámaras legislativas,
permitiendo conocer los reglamentos parlamentarios de una manera cercana y directa. Entre ellas, se ha dado entrada a voces históricas y a explicaciones de símbolos y usos tradicionales de nuestro
Parlamento.
La obra está realizada por una pluralidad de autores, conocedores y aplicadores del Derecho Parlamentario, con una dilatada
experiencia en la materia. Entre ellos encontramos Letrados de
las Cortes, Letrados de Parlamentos autonómicos, ArchiverosBibliotecarios de las Cortes Generales y Catedráticos de Derecho
Constitucional. Este heterogéneo elenco aporta una mirada amplia
a la obra, incorporando las prácticas y usos de los diferentes parlamentos autonómicos, lo que se refleja tanto en las voces como en
las diferentes definiciones.
Es ésta una obra de consulta para estudiantes, opositores y
estudiosos en general del Derecho Parlamentario, así como para
profesionales, Letrados y Parlamentarios de Cortes Generales y
autonómicas. Pero también para ciudadanos que deseen conocer
mejor el funcionamiento del Parlamento de una manera sencilla
pero rigurosa.
El libro se complementa con una tabla de equivalencia de los
términos en inglés y francés, que resultará muy útil para el lector.
9
788490
202777
www.laley.es
3652K23189
ISBN: 978-84-9020-277-7
Descargar