justicia interamericana y tribunales nacionales

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justicia interamericana y tribunales
nacionales
DIEGO GARCIA-SAYAN 1
SUMARIO: I. lntroducci6n. II. Estandares internacionales y derecho interno. Ill. Sentencias de Ia Corte lnteramericana y tribunales nacionales. IV. Las amnistfas y las prescripciones. V. Deber de investigar las violaciones a los derechos humanos. VI. Debido
proceso y derecho a un recurso efectivo. VII. Comentario final.
I. INTRODUCCION
A traves de este articulo, en esencia, se pone enfasis en la viva relacion
que se viene vertebrando entre decisiones de la Corte Interamericana de
Derechos Humanos y el derecho internode los pafses de la region, particularmente en lajurisprudencia de algunos tribunales relevantes, como son
algunas de las cortes o tribunales constitucionales. Nose podrfa decir aun
que la mayorfa de tribunales han incorporado ya las sentencias de la Corte
Interamericana en sus razonamientos, pero sf que importantes tribunales
latinoamericanos vienen nutriendose de la jurisprudencia de la Corte en
un proceso que podrfamos Hamar de "nacionalizacion" del derecho internacional de los derechos humanos.
II. ESTANDARES INTERNACIONALES Y DERECHO INTERNO
La armonizacion del derecho intemo y de la actuacion de las autoridades del Estado con las estipulaciones de un tratado como la Convencion
Americana sabre Derechos Humanos es uno de los elementos centrales del
objeto y fin de un tratado como el mencionado. Ella se encuentra expresado en las normas contenidas en el artfculo 1.1, y precisadas en el articulo 2
de la Convencion, contextualizados par un principia basico de interpretacion de los tratados de derechos humanos, que es el de asegurar el maximo
de proteccion al ser humano, como lo estipula su articulo 29. La Corte
Presidente de la Corte lnteramericana de Derechos Humanos
806
DIEGO GARCIA-SAYAN
Europea de Derechos Humanos h .
Iugar para limitaciones implicita a m~e~retado con claridad que no hay
te Interamelicana de Derech ~en e mismo sentido lo ha hecho Ia Corinvocar situaciones excepcion~~ umano.s, .a~ establecer que no se pueden
es en pelJUICIO de los derechos huma
Esa compatibilizacion entre los
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y su deber de organizarse ena~pectosdese~Ciales de Ia funcion del Estado
cionales. En ese ambito es eseno~clodr anCI~ con sus obligaciones interna.
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tnbuyendo -o no- a establ
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organos de prot ·' ·
diseilados para expresarse en I d
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En efecto, los Estados que por deci . ,
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1 ,
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En efecto, a traves del articulo I I I
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os. 1. Los Estados Partes en esta Congarantizar su libre y pleno e'
.. r os erechos y libertades reconocidos en ella y a
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1
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I ucwna es y a las disposiciones de
hacer efectivos tales derechos y libertade~'. e otro canicter que fueren necesarias para
jnsticia interamericana y tribunales nacionales
807
y libertades3 . En todo esto esta claro que un papel medular le corresponde a los tribunales nacionales. Que, como parte del aparato de Estado, se
encuentran en la obligacion de articular las normas y comportamientos de
las autoridades del Estado con los compromisos internacionales del Estado
del que forman parte activa .
En esa perspectiva, los tribunales nacionales tienen un papel crucial
como garantes de los derechos establecidos en los compromisos internacionales. Tanto porque el acceso a los organos internacionales de proteccion
esta styeto al previa "agotamiento de los recursos internos" como porque
en la puesta en practica de las decisiones vinculantes de un organa como
la Corte Interamericana, los tribunales nacionales tienen una funcion capital que desempenar. Por cierto que el componente "normativo" es de
singular relevancia, pero el dato historico es que la mayorfa de las fuentes
de discriminacion y desproteccion se encuentran mas en la conducta de
los distintos aparatos de Estado que en el plano de las regulaciones legales.
Por ello, cuando se habla de "derecho interno" se debe estar pensando,
basicamente, en su proceso de aplicacion en la viva dinamica del conjunto
de instituciones publicas y, en particular, de los tribunales nacionales.
III: SENTENCIAS DE LA CORTE INTERAMERICANA Y
TRIBUNALES NACIONALES
Con cargo a un examen amplio y minucioso que hay que hacer de la
jurisprudencia de todos los paises de la region, si se puede afirmar que se
vienen produciendo 1mportantes avances en este terreno. Crecientemente
altos tribunales de varios paises de la region se nutren de lajurisprudencia
de la Corte Interamericana en asuntos sustantivos muy complejos y crfticos.
En este proceso dialectico de interaccion entre el derecho internacional y
el derecho interno es fundamental el papel de jueces y abogados para que
los organosjurisdiccionales aseguren la implementacion a nivel intemo de
los estandares y normas internacionales.
En ese orden de ideas, se han marcado hitos claros y reiterados en algunos tribunales de determinados paises, como es el caso de los tribunales
En una de sus primeras decisiones Ia Corte Interamericana interpret6 sabre este articulo 2 que e1 Estado parte " ... tiene el deber jurfdico de adoptar las medidas necesarias
para cumplir con sus obligaciones conforme a! tratado, sean dichas medidas legislativas o de otra indole" (opinion consultiva 7-86, parrafo 30).
808
DIEGO GARciA-SAYAN
constit.ucional~s
de Bolivia, Colombia y Peru, asf como en la Corte Supre~a Y Ciertos .tnbunales superiores de Argentina y algunos tribunales supenores de Ch1le.
..La tra~cendencia de los casos resueltos por la Corte en sus mas de veinticmco an~s de existencia se da e~ una doble dimension. Por una parte, al
haber.podido c~nocery~:onunc1arse sobre materias graves que, en consecuencm, mereCian atencwn en sf mismas. Por otra parte, e1 hecho de que
muchos de los casos conocidos eran y son representativos de tendencias
Yl_o de numerosos o~os cas~s ~ situaciones semejantes, lo que le da a los
m1sm?~ una relevancia cuahtatxva que trasciende ei caso mismo. Ello ha
permiti~o que e? muchos casos se llegue a conclusiones jurisprudenciales
de un Cierto caracter emblematico.
En
e~a
doble dimension la Corte ha tornado decisiones relevantes en
de temas dentro de los que des taco para este articulo los tres
sxgmentes: a) deber de adoptar disposiciones de derecho interno4· b) deher de investigar y sancionar a los responsables de violaciones de d;rechos
humanos 5, Y c) derecho al debido proceso y a un recurso judicial efectivo6. Mu:hos d~ l~s criterios definidos por la Corte en estos tres grupos de
temas VIenen sn;1endo de gufa de interpretacion a tribunales nacionales
relev~nte~ de vanos pafses de la region, particularmente cortes 0 tribunales
constituCionales.
~na. sene
. Como es evidente, los desarrollos jurisprudenciales en estas materias
txene~1, per s~, enorme significado conceptual y jurfdico. Esa importancia se
acrecxenta SI se toman en cuenta dos asuntos. Primero, que resulta relativamente notable cons_tatar el grado de cumplimiento de las sentencias de la
?orte en I~ que atane a aspectos como las modificaciones en Ia Iegislacion
mterna, as1 como el pago de las indemnizaciones y otros pagos conectados
a los proce~os (costas ,Y gastos, principalmente). Segundo, que mas alia del
cas? espeClfico,. ~os tnbun~le~ nacional~s han sido artifices de una significativ~ repercuswn de esa JUnsprudenCia para resolver situaciones o casos
semepntes a los conocidos por la Corte Interamericana.
En~~e los cas.os ~as de~tacados cabe mencionar el correspondiente a "La Ultima Tentacwn de Cnsto , Castillo Petruzzi, Paniagua Morales ("Panel Blanca") V'll
, M
, 1 agran o"N'- d 1 c 11 ,
ra les ( mos e a a e ) , Bamaca y Bulacio.
En.tre o~ros, Velasq~ez Rodriguez vs. Honduras, El Amparo vs. Venezuela, Garrido
y
Ba1gorna vs. Argentma, Castillo Paez vs. Peru y "Barrios Altos" vs p '
, M l
. eru.
V'll
1 a~ran o=a es Y.otros ("Niiios de la Calle"), Loayza Tamayo vs. Peru, Castillo Petruzzi ~s. Peru, Cest1 Hurtado vs. Peru, Cantoral Benavides vs. Peru, Durand y u garte
vs. Peru.
justicia intemmericana y tribunales nacionales
809
En ese orden de ideas, Ia Corte Suprema de Argentina, por ejemplo,
7
habfa establecido pioneramente en 1995, en el caso Giroldi , que lajurisprudencia de la Corte In teramericana deb fa " ... servir de gufa para la
interpretacion de los preceptos convencionales en la medida en que el
Estado Argentino reconocio la competencia de la Corte Interamericana
para conocer en todos los casos relativos ala interpretacion y aplicacion
de la Convencion". El Tribunal Constitucional del Peni, al calificar a la
Corte Interamericana de Derechos Humanos como "guardian ultimo de
los derechos en la Region" 8 , establecio que no era suficiente acudir a las
normas internacionales, sino que era preciso tomar en consideracion lainterpretacion que sobre tales normas ha realizado la Corte Interamericana
de Derechos Humanos.
Pero tribunales muy relevantes de la region no solo han establecido que
la Corte es una via de interpretacion de la Convencion, sino que han sentado con precision el principia de que las sentencias de la Corte son de obligatorio cumplimiento por todos los tribunales nacionales. La Corte Constitucional de Colombia, por ejemplo, ha establecido de manera constante
e1 caracter vinculante de lajurisprudencia de la Corte Interamericana de
Derechos Humanos a traves de sentencias como las T-568 de 1999, C-010
de 2000 y C-200 de 2002. En esta perspectiva, es particularmente notable
la sentencia del Tribunal Constitucional del Peru del19 de junio de 2007 a
proposito de Ia accion de inconstitucionalidad interpuesta por el Colegio
de Abogados del Callao contra la ley 28642.
Des taco el Tribunal peruano en esta ocasion que " ... las sentencias de la
Corte Interamericana de Derechos Humanos son vinculantes para todos los poderes
publicos y que esta'vinculatoriedad nose agota en su parte resolutiva, sino
que se extiende a la ratio decidendi, incluso en aquellos casos en los que el
Estado peruano no haya sido parte en el proceso" 9 • Algo mas, enfatiza que
.. ,las sentencias de Ia Corte lnteramericana de Derechos Humanos ... y sus opiniones consultivas sobre Ia misma materia 10, resultan vinculantes para el Estado peruano, y que al formar parte del ordenamiento juridico nacional, segCm el articulo 55
de Ia Constituci6n Polftica del Peru, desconocer dichas resoluciones internacionales
podrfa significar una infracci6n constitucional o, peor aun, un delito de funci6n,
11
conforme al articulo 99 de Ia Norma Fundamental •
10
11
Giroldi H s/recurso de casaci6n. 7 de abril de 1995.
Sentencia del expediente 218-02-HC/TC, publicada el 3 de agosto de 2002.
Ibidem, p. 22, subrayado en el original.
Nota: se refiere ala materia del derecho a un recurso efectivo.
Ibidem, p. 24.
810
]usticia interamericana y tribunates 1wcionales
Esta conducta basicamente
··
.
Estados es en r
posi~IVa de tnbunales relevantes en varios
promiso e~ el c~:at g~nerales, estimulante como seiial efectiva de comdiccional interame~~:~eontEonde las decisiones vinculantes del 6rgano jurisun contexto global
1
.
y se constatan conductas
. .
en e que se oyen voces
multilateralismo es propi;~e ~otidianamente socavan y buscan mellar el
gi6n,
q~e fortale~e el derech~~:~:~:~~~~~:~cst~~r:~~so~~~~:n~:.Ia re-
De smgular relevancia puede ser destac
I.
no a tres temas fundamentale .
.ar~e Impacto generado en tordeb d .
.
s. a) las ammstias y las prescripciones· b) el
er e mvestigar las violaciones a los derechos h
' .
proceso y derecho a un recurso efectivo.
umanos, y c) debido
IV. LAS AMNISTiAs Y LAS PRESCRIPCIONES
rei~::d~~~~~~~~I;e~a~!~~s~ripcio.nes han .sido seiialadas porIa Corte en
plimiento del deber de gar:~f:d~~=~~~:i~mportantes par~ :I ~lena cum0
nal La Corte ha establ 'd
como obhgacwn mternacio.
eCI o que no son admisibl I
· ·
amnistfas " 0 cu 1 ·
b ~
es as prescnpcwnes o las
"·
a qmer o staculo de derech 0 · t 0
d'
En lo que respecta a amnistfas, el caso de mayor impacto hasta la fecha
ha sido el de Barrios Altos; es decir, el de las denominadas Ieyes de autoamnistfa dictadas en el Peru en 1995. Lo es en una doble vertiente. Primero,
por los pasos dados en el Peru para dar plena cumplimiento a una sen tencia de la Corte que se tradt~jo en acciones efectivas contra la impunidad de
graves violaciones de derechos humanos. Adicionalmente, por el impacto
que ha tenido 14 en el razonamiento y desarrollo conceptual en varios altos
tribunales de la region en la crucial cuesti6n de la impunidad.
Tres at'ios antes del caso Barrios Altos la Corte habfa establecido que con
las amnistfas dictadas en Peru en 1995 se " ... obstaculiza la investigaci6n y el
acceso a la justicia e impide a los familiares de la vfctima conocer la verdad
y recibir la reparaci6n correspondiente" 15 • La Corte no extrcyo de esa consideraci6n, en esa ocasi6n, una consecuencia jurfdica explfcita. Eso lo hizo
con toda claridad cuando conoci6 el caso Barrios Altos, un grave hecho
en el que fueron asesinados en 1991 en el centro de la ciudad de Lima 15
personas por el paramilitar "Grupo Colina".
En este caso la Corte consider6 que las leyes de amnistfa dictadas por
Fujimori en 1995
... impidieron que los familiares de las vlctimas y las vlctimas sobrevivientes en
el presente caso fueran oldas por un juez, conforme a lo sefialado en el articulo 8.1
de Ia Convenci6n; violaron el derecho a Ia protecci6n judicial consagrado en el
articulo 25 de Ia Convenci6n; impidieron Ia investigaci6n, persecuci6n, captura, enjuiciamiento y sanci6n de los responsables de los hechos ocurridos en Barrios Altos,
incumpliendo el articulo 1.1 de Ia Convenci6n, y obstruyeron el esclarecimiento de
los hechos del caso. Finalmente, Ia adopci6n de las !eyes de autoamnistfa incompatibles con Ia Convenci6n incumpli6 Ia obligaci6n de adecuar el derecho interno
consagrada en el articulo 2 de Ia misma 16 •
:'J:c~~~e~a~~n~~!~l:~sh;:'~~~:~:~~~ Y
tnci6~ ~~ 1: :e;~n::~~se~:~~
mas, que "De acuerdo c
. . . on en asis se ha establecido, adelos Estados ninguna disp~1· ~~~ obl~ga~wnes convencionales asumidas por
Ia rescri '. ~
~
sicton o mstituto de derecho interno, entre ellos
p
pcwn, pod~Ia oponerse al cumplimiento de las decisiones d I
Corte en cuanto a Ia mvesti
.~
.,
e a
laciones de los derechos hu;:~~~~'~3~ancwn de los responsables de las vio-
12
13
Caso Trqjillo Oroza, reparaciones su ra not 30 ,
supra nota 3, parrafo 4I; y caso Ba~rio~AI
~ ' parra~? I06; caso "Barrios Altos",
(articulo 67 Convencion Am .
b tos, mterpretacwn de Ia sentencia de fondo
'
encana so re Derechos Hu
)
,
manos , sentencia del 3 de
septiembre de 200I serie C num
£ I
'
'
ero 83 , parrafo I5 Caso Bul ·
A
·
o I6, sentencia del I8 de septiembre d 2003 C . "
acw. vs. rgentma, parra5 de julio de 2004, serie C numero 109 e, c. a7so I9 ComerCiantes", sentencia del
p
·
.
'
, parra1o I 5 262 y ss C
"H
,
aqmyaun", sentencia del 8 de julio d 2004 , ,
. aso
ermanos Gomez
, parrafo 232 y ss. Caso "Tibi", sentencia
del 7 de septiembre de 2004 serJ' C e,
•
e , numero 114 parra£0 259
· )
. '
Ysus c1tas . Caso "Masacre Plan de Sanchez" sentenc' d 1 I 9 d
parrafo 95 y ss. Caso "Hermana~~ e
~ no~Jembre de 2004, serie C, numero 116,
serie C, numero I20 parrafo I68 yerssranCo ~~Hz '.Isentencia del Io. de marzo de 2005,
'
· aso
m ca Tecse" sent
· d 13 d
d e 200 5, se:ie C, numero
I21, parrafo 05 y ss.
,
enCia e
e marzo
Caso Bulacw vs. Argentina, parrafo II7, sentencia del I8 de septiembre de 2003.
811
Mas alia de ella se estableci6 que " .. .las leyes de autoamnistfa conducen
a la indefensi6n de las vfctimas y a la perpetuaci6n de la impunidad, por
lo que son manifiestamente incompatibles con la letra y el espfritu de la
Convenci6n Americana" 17 .
14
15
16
17
Esto se refiere tanto a Ia sentencia misma como a Ia interpretacion posterior que hizo
Ia propia Corte a traves de Ia sentencia de interpretacion del3 de septiembre de 2001.
Allf se establecio que " ... dada la naturaleza de Ia violacion constituida por las !eyes de
amnistfa No. 26479 y No. 26492, lo resuelto en Ia sentencia de fondo en el caso Barrios
Altos tiene efectos generales".
Caso Castillo Paez vs. Peru, sentencia de reparaciones del 27 de noviembre de 1998,
parrafo 105.
Caso Barrios Altos vs. Peru, sentencia del14 de marzo de 2001, parrafo 42.
Ibidem, parrafo 43.
812
DIEGO GARciA-SAYAN
Como
consecuencia
de estas consideraciones ' la Corte estableci6 qu e
.
.
a1ser mcompatibles con la Convenci6n " .. .las leyes de amnistfa No. 26479
Y No. 26492 son incompatibles con la Convenci6n Americana sobre Derechos Humanos y, en consecuencia, carecen de efectos jurfdicos" 18 .
" En una posterior sentenci~ de ~~terpretaci6n 19 , la Corte estableci6 que
... dada la naturaleza de la V10lac10n constituida por las leyes de amnistfa
N?. 26479 ~No. 26492, lo resuelto en la sentencia de fondo en el caso Barnos Altos .tiene efectos generales" 20 . AI privar de efectos jurfdicos estas leyes, Antomo Cassese resalt6 la trascendencia de este paso al seiialar que21:
. ...c'est Ia premiere fois qu'une jurisdiction internationale declare que des lois natlonales sont depourvue.s d'effets juridiques a l'interieur du systeme etatique ou elles
?nt e~e adopt:es, et oblige par consecuente I'Etat a agir comme si ces lois n'avaient
Jamals ete ed1ctees22.
~e particular ~ inmediata significaci6n fue el impacto que tuvo en el
Peru esta sentenna de la Corte. Una sucesi6n de decisiones de los tribunales peruanos puso fin a la impunidad derivada de las "autoamnistfas"
de 1995. En_ noviembre de 2000 cay6 el regimen de Ft~jimori23, dentro del
cual se habm generado al denominado "Grupo Colina", sindicado como
resp~n.s~ble de.l~s hechos ocurridos en "Barrios Altos". El gobierno de
transiciO~, pres1d1do por Valentfn Paniagua, y en el que me correspondi6
desempenar la tarea de ministro de Justicia, reconoci6 la responsabilidad
internacional del Estado en los hechos2 4 . Solo qm;d6 pendiente el tema
d~ las leyes de "autoamnist~a" que el propio Fujimori habfa conseguido se
d1~tar~n en 1995. Este_asunto nolo podfa resolver el Poder Ejecutivo, que
mas bwn se lo traslado a la Corte, que venfa conociendo del caso "Barrios
Altos" desde junio de 2000.
18
19
20
21
22
23
24
Parrafo resolutivo mimero 4, sentencia caso Barrios Altos (Chumbipuma Aguirre y
otros vs. Peru) del14 de marzo de 2001.
Sentencia del3 de septiembre de 2001.
Parrafo resolutivo 2.
Cas~es~, Antonio, Crimes intemationaux et jurisdictions internationales, Parfs, Presses Uni-
versltaires de France. 2002.
fbidem, P: 16. Traducci6n libre al castellano: " ... es !a primera vez que unajurisdicci6n
~nter~acwna~ declara que !eyes nacionales sean desprovistas de efectos jurfdicos al
mtenor del sistema estatal e11 el que han sido adoptadas y obliga, en consecuencia, al
Estado a actuar como si esas1!eyesjamas hubieran sido dictadas"
Noviembre de 2000.
.
Comunicaci6n del agente del Estado del19 de febrero de 2001.
justicia interamericana y tribunates nacionales
813
Sobre esa base, la Corte seiial6 que " ... el alfanamiento del Peru constituye una contribuci6n positiva al desarrollo de este proceso y ala vigencia
de los principios que inspiran la Convenci6n Americana sobre Derechos
Humanos" 25 , y detennin6 que habfa cesado la controversia entre el Estado
y la Comisi6n en cuanto a los hechos que dieron origen al caso, abriendo
paso a las reparaciones. Dentro de otros puntos resolutivos, la Corte determin6 lo crucial de esa sentencia: que las leyes de amnistfa 26479 y 26492
caredan de efectosjurfdicos por ser incompatibles con la Convenci6n 26 •
El gobierno de transici6n peruano, al ser notificado de la sentencia de
la Corte Interamericana, la remiti6 de inmediato ala Corte Suprema de
Justicia. El presidente del tribunal supremo, a su vez, la envi6 el mismo dia
a varias instancias judiciales 27 , set'ialando que crl proceso penal por los sucesos de Barrios Altos 28 debfa ser reabierto dehido al canicter "vinculante
e inexorable" de la sentencia de la Corte Inter4tmericana. El mismo dfa, la
Fiscalia Especializada solicit6 y obtuvo un mandato de detenci6n contra las
trece personas implicadas en la matanza, dentro de los que se encontraban
dos generales del ejercito. En los dfas siguientes los implicados fueron detenidos y sometidos a los correspondientes prbcesos penales en los tribunales ordinarios, que continuan desarrollandose al momento de escribirse
estas lfneas.
En paralelo se dieron pasos y razonamientos muy interesantes en la
justicia militar que rompieron la sujeci6n que habia tenido respecto de
Fujimori y Montesinos y, ademas, la inercia de decadas en las que su razonamiento no habfa estado muy apegado a hils estandares democraticos.
A las pocas semanas de recibida la sentencia de la Corte Interamericana,
e1 Consejo Supremo de Justicia Militar29 , en sus dos instancias 30 , resolvi6
declarar nulos los sobreseimientos que el propio fuero militar habfa decretado en beneficio de Vladimiro Montesinos Torres y personal del ejercito,
y se dispuso que lo actuado se remitiera aljuzgado penal especial del fuero
ordinario.
25
26
27
28
29
30
Caso Barrios Altos vs. Peru, sentencia dell4 de marzo de 2001, parrafo 40.
Ibidem, parrafo resolutivo 4.
Salas Penales y Corte Superior de Lima. Un mes despues, el 24 de abril, se envi6 a!
Consejo Supremo deJusticia Militar.
Los hechos de Barrios Altos se produjeron en 1991, y las autoamnistfas las dict6 el
gobierno de Fujimori en 1995.
Maximo 6rgano de lajusticia militar peruana.
Sala plena en fallo dell de junio de 2001 y sala revisora en decision del 4 de junio del
mismo afio.
814
DIEGO GARciA-SAYAN
El razonamiento de la Sala Plena del Consejo Supremo de Justicia Militar es muy rico y consistente desde el punta de vistajuridico. Ademas de
remitirse al articulo 27 de la Convencion de Viena sabre Derecho de los
Tratados, establecio que " ... el Consejo Supremo de Justicia Militar, como
parte integrante del Estado Peruano, debe dar cumplimiento ala sentencia
internacional en sus propios terminos y de modo que haga efectiva en todos sus extremos la decision que ella contiene ... ".Lasala revisora reafirmo
y desarrollo semejantes consideraciones siendo explicita en considerar que
" .. .la Corte Interamericana de Derechos Humanos en su sentencia declaro
que las acotadas leyes de amnistia son incompatibles con la Convencion
Americana sabre Derechos Humanos yen consecuencia carecen de efectos juridicos ... ". Agrego la sala revisora que los sobreseimientos dictados
vulneraban " ... claramente la quinta decision 31 de la sentencia de la Corte
Interamericana de Derechos Humanos, que ordena al Estado investigar los
hechos para determinar las personas responsables de las violaciones de los
derechos humanos".
A partir de estos avances y de la posterior sentencia interpretativa de
la Corte Interamericana, en la que esta determino que lo resuelto en la
sentencia de fonda en el caso "Barrios Altos" tenia efectos generales, se
sucedieron una serie de decisiones importantes en varios tribunales de la
region.
Por ejemplo, la Corte de Apelaciones de Santiago de Chile, al resolver32
la casacion presentada por los procesados en la detencion y posterior desaparicion de Miguel Angel Sandoval Rodriguez 33 , producida en 1975 por
accion de agentes de la DINA, considera como interpretacion fidedigna y
suprema de la Convencion Americana de Derechos Humanos aquella emanada de la Corte lnteramericana de Derechos Humanos. Asume explicita-
justicia interamericana y tribunates nacionales
mente los parametros interpretativos de la Corte lnteramericana citando
· sob re "B arnos
. Altos "34 ·
integra el parrafo 41 de la sentenoa
En la Argentina los desarrollos han sido diversos. Destaco dos que son
especialmente rel~vantes. Por un lado, el fallo de la Camara Federal ~e
Salta, Argentina, del 29 de julio de 2003. Por otro lado, el caso de Juho
Hector Simon, que culmino en un fallo muy relevante de la Corte Suprema
de Argentina dictado enjunio de 2005.
En la decision de la Camara Federal de Salta se declaro la inco~stitu­
cionalidad y nulidad de las leyes de Obediencia Debida Y Punt~ Fmal,, Y
ordenola detencion de los imputados Carlos Mulhall y Miguel Raul Gentil,
a efectos de que presten declaracion indagatoria e~ la causa caratula~~
"Cabezas, Daniel Vicente y Otros s/ Denuncia-Palomitas-Cabe.zas de Buey .
La Corte lnteramericana de Derechos Humanos y la sentenoa ~or el caso
Barrios Altos son ingredientes muy importantes en el razonam1ento de la
Camara Federal:
Sobre el tema Ia Corte lnteramericana de Derechos Human~s, se ~ronunci6 ~n el
caso 'Barrios Altos' del14 de marzo de 2001, seiialando qu~... . La ~~r~u,nstanCia de
ue tales afirmaciones se realicen con referenda a leyes de autoamnistia en ~ada le
~stan valor antes bien son plenamente aplicables, toda vez que, como se VIO, e~ta
Cimara co~sidera que teniendo en cuenta c6mo fueron 7estadas, .Ia~ ~~res de o ediencia debida y punto final se asimilan a una verdadera autoammstia ·
Por otro lado, se tiene el caso de Julio Hector Simon, qui en llev~ su reclamacion por supuesta privacion ilegitima de libertad por tod.a~ _las n~sta~l­
cias hasta llegar a la Corte Suprema de Argentina, la q~e e_rm~w en JU1110
de 2005 un fallo de enorme importancia y trascendenoa. S1mon, ex subo-
34
31
32
33
"5. Declarar que el Estado del Peru debe investigar los hechos para determinar las personas responsables de las violaciones de los derechos humanos a los que se ha hecho
referenda en esta sentencia, asi como divulgar publicamente los resultados de dicha
investigaci6n y sancionar a los responsables".
Falla del 5 de enero de 2004 dicta do por la Quinta Sala de la Corte de Apelaciones de
Santiago de Chile.
Vease al respecto el articulo de Humberto Nogueira Alcala, "Una senda que merece
ser transitada: la sen ten cia definitiva de casaci6n de la Quinta Sala de Ia Corte de Apelaciones de Santiago, Rol11.821-2003, caso Miguel Angel Sandoval Rodriguez", Revista
Ius etPraxis, 2003, vol. 9, num. 2.
815
35
36
·
· d m1s1
· 'bles 1as d'tspo siciones de amnistia
"41. Esta Corte constdera
que son ma
. .' las disposiciones de prescripci6n y el establecimiento de excluyentes de responsab~hda~ que
retendan impedir la investigaci6n y sanci6n de los resp~nsab~es de las Vl?lacwnes
~raves de los derechos humanos tales como la tortura, las ejecucw.n~s sumanas, extralegales 0 arbitrarias y las desapariciones forzadas, todas elias prohtbtdas por contravenir derechos inderogables reconocidos por el Derecho Internacional de los Derechos
Humanos".
.
En esta parte la Camara cita la sen ten cia Barrio~ Alto.s:. "Esta Corte co~s~~:ra que so~
inadmisibles las disposiciones de amnistia, las dtspostcwnes d~ pres~np~wn Y.el e~:a
blecimiento de excluyentes de responsabilidad que pretendan tmpedtr la mvestlgacwn
sanci6n de los responsables de las violaciones graves de l?s d:rechos human?s. tales
~omo la tortura, las ejecuciones sumarias extral~gales o arbt~ranas y las desapanCl~nes
forzadas, todas elias prohibidas por contravemr derech~s mderogabl~.s rec?noe1do~
or el Derecho Internacional de los Derechos Humanos [CIDH, caso Barnas Altos
~Chumbipuma Aguirre y otros vs. Peru), sentencia del14 de marzo de 2001, P· 41] ·
Parrafo IX.
11 1"1''1:1
816
DIEGO GARciA-SAYAN
ficial de la polida federal, estaba procesado con prision preventiva par el
secuestro y posterior desaparicion en 1978 de Jose Liborio Pobrete Rosa y
su esposa, Gertrudis Marta Hlaczik. En el dictamen del procurador general
del Estado, Nicolas Eduardo Becerra, del 29 de agosto de 2002, se enfatizaba el deber internacional del Estado argentino de investigar y sancionar las
violaciones de los derechos humanos y los crimenes contra la humanidad
citando in extenso para este efecto el caso Velasquez Rodriguez. La referenda al caso "Barrios Altos" es muy amplia y detallada. Enfatiza el deber de
investigar, y pone enfasis en la Corte Interamericana como referente jurisprudencial fundamental para negar efectos juridicas a las disposiciones de
olvido y perdon al tratarse de graves violaciones a los derechos humanos.
En concordancia con el dictamen del procurador, el 14 de junio de
2005 la Corte Suprema de Justicia emitio una sentencia trascendental a
traves de la cual privo de efectosjuridicos las !eyes 23.492 y 23.521 ("Punta
Final" y "Obediencia Debida") y las declaro inconstitucionales. El solido y
extenso razonamiento de la sen ten cia esta basado en Ia jurisprudencia de
la Corte Interamericana, con especial enfasis en el caso "Barrios Altos",
que se reseiia y analiza de manera amplia y minuciosa. En la sentencia de
la Corte Suprema se establece "Que la traslacion de las conclusiones de Ia
Corte Interamericana en 'Barrios Altos' al caso argentino resulta imperativa, si es que las decisiones del Tribunal internacional mencionado han de
ser interpretadas de buena fe como pautas jurisprudenciales"37, y que " ...
las leyes de pun to final y de obediencia debida presentan los mismos vicios
que llevaron ala Corte Interamericana a rechazar las Ieyes peruanas de
'autoamnistia'. Pues, en identica medida, ambas constituyen Ieyes ad hoc,
cuya finalidad es la de evitar la persecuci6n de lesiones graves a los derechos humanos"3 8 •
La Corte Constitucional de Colombia, por su parte, ha sido clara a traves
de reiteradajurisprudencia en cuanto ala inadmisibilidad de las amnistias
y "autoamnistias" basando sus razonamientos en la Corte Interamericana.
Con ocasion de la demanda de inconstitucionalidad presentada contra el
articulo 13 de la Ley 733 de 2002, que establece que los autores o participes
de los delitos de terrorismo, secuestro, extorsion, no podian ser beneficiados con amnistias e indultos, la Corte Constitucional se remitio al derecho
internacional y a las sentencias de la Corte Interamericana de Derechos
Humanos para establecer que, tratandose de "delitos atroces" no se puede
admitir " ... el otorgamiento de autoamnistfas, amnistias en bla~c~, leyes
de punta final o cualquiera otra modalidad que impida a las VIcl1mas el
ejercicio de un recurso judicial efectivo como lo ha subrayado la Corte
Interamericana de Derech os H umanos "39 .
Resulta interesante el razonamiento de la misma Corte Constitucional a
proposito de la aprobacion por Colombia del Estatuto de Roma de .la ~orte
Penal Internacional que se efectuo a traves de la Ley 742, del 5 de JU~110 ~e
2002. A traves de una sentencia por media de la cualla Corte Constltucwnal declaro constitucional dicha ley40 , basandose en lajurisprudencia de la
Corte Interamericana de Derechos Humanos, re1tero que 41
•
38
Corte Suprema de Justicia de la Nadon, sen ten cia del 14 de junio de 2005. "Recurso
de hecho deducido por la defensa de Julio Hector Simon en la causa Simon, Julio
Hector y otros s/ privacion ilegftima de la libertad, etc. -causa No. 17. 768-", parrafo
24.
Idem.
>
... los principios y normas de derecho internacional aceptados. po~ Colombia (~r­
tfculo g CP.), el Estatuto de Roma, y nuestro ordenamiento constttucton~l, que ~olo
permite Ia amnistfa o el indulto para delitos politicos y con el pago de las .mdemntzaciones a que hubiere Iugar (artfculo 150, numeral 17 de Ia CP.), n~ admtten el o.torgamiento de auto amnistfas, amnistfas en blanco, !eyes de punto ft~al ? .cualqut~ra
otra modalidad que impida a las vfctimas el ejercicio de un recurso JUdtctal efecttvo
como lo ha subrayado Ia Corte lnteramericana de Derechos Humanos 42 •
En Io que respecta a las prescripciones, los concep~os de la Co~te Interamericana tambien han sido recogidos por diversos tnbunales nanonales.
La mayorfa de las decisiones jurisdiccionales sabre la materia a nivel nacional sustentan la imprescriptibilidad de la accion penal en la gravedad
misma de ciertas violaciones a los derechos humanos; algunas de esas decisiones desarrollan espedficamente ese enfoque con relacion a las de.sapariciones forzadas por su cankter continuado y p~rmanente. Hay va.r:os
ejemplos relevantes de decisiones adoptadas por ~nbunale~ de la .regwn.
Ciertos casas de Argentina y Bolivia resultan espeoalmente llustrat1vos.
39
40
41
42
37
817
Justicia interamericana y tribunates nacionales
Corte Constitucional de Colombia, sentencia C-695/02, 28 de agosto de 2002.
Corte Constitucional de Colombia, sentencia C-578/02, 30 de julio de 2002.
Idem.
·
d
· d e pa',,.
rrlna de la propia Corte Constitucional: "La Corte .Interamencana
C't
1 a a p1e
,
'ble
Derechos Humanos ha seiialado las condiciones para que una ammstm ~?a comp~t1 e
con los compromisos adquiridos por los Estados Partes en Ia Convencwn Amenc~na
de Derechos Humanos. Por ejemplo, en el caso Barrios Altos (Chumbi~uma Agu.Ir:?
y otros vs. Peru), sentencia de 14 de marzo de 2001la Corte I~;eramencana dec1d1o
que las !eyes de amnistfa peruanas eran contrarias ala Convencwn y que el Estado era
responsable por violar el derecho de las vfctimas ~ con~cer Ia verdad sobre los hechos
y obtenerjusticia en cada caso en el contexto nacwnal .
1111
818
Justicia interamericana y tribunales nacionales
~f, en la apelaci6n presentada en Argentina por el ex dictador Augusto Pmochet en la causa en la que se investigaba el homicidio del general
Carlos Prats y su esposa, la representaci6n del procesado aleg6, entre otros
argumentos, la ~rescripci6n del delito. El tribunal cit6 completo el parrafo
41 de la sentencm de la Corte Interamericana en el caso "Barrios Altos", en
~1 ~ue se consider.an ."~nadmisibles" las disposiciones de amnistfa, las dispos~cwnes de prescnpn.on y el establecimiento de excluyentes de responsabihdad que pretendan Impedir la investigaci6n y sanci6n de los responsables
de las violaciones graves de los derechos humanos. Concluy6 la Camara
Criminal y C~rreccional Federal que "NO HACE LUGAR al planteo de
PRE~CRIP90N de la acci6n penal formulado en beneficia de AUGUSTO
JOSE RAMON PINOCHET UGARTE ... "43.
En seguimiento de lo dictaminado por la Corte Interamericana de De-
r~~hos Hu~anos, la Corte Suprema de Argentina, por su parte, ha sido enfat1Ca ~ consisten~e en. establecer el deber del Estado de prevenir, investigar
y sancwna~ las VIOlanones a los derechos humanos. Un paso de singular
tmportanna es el de la sentencia con la que culmin6 en la Corte Suprema
en agos~o de 2004 recurso de hecho deducido por el Estado argentino
Yel gobterno de Chile en la causa seguida en el caso de Enrique Lautaro
Arancibia Clavei44.
e!
Aran.cibia Clave!, de acuerdo con lo establecido en la correspondiente
sentenna penal por la que se le conden6 a prisi6n perpetua, habfa sido
parte, desde marzo de 1974 hasta noviembre de 1978, de la Direcci6n Nacional de Inteligencia Nacional (DINA) chilena. De acuerdo con la sentencia, la actividad de Arancibia Clave! consistfa " ... en la persecuci6n de
opositores politicos al regimen de Pinochet exiliados en Argentina". Entre
otros crfmenes se le consider6 responsable del asesinato en Buenos Aires
de quien fuera comandante en jefe del ejercito de Chile, general Carlos
Prats, Ysu esposa. En la instancia superior la Camara de Casaci6n cuestion6 el tipo penal aplicado para la condena y determin6 que la acci6n penal
habfa prescrito.
Derechos Humanos" no eran aplicables las normas ordinarias de prescripci6n. El maximo tribunal argentino reafirm6 los principios fundamentales
del deber de garantfa establecidos por la Corte Interamericana citando
in extenso la sentencia del caso Velasquez Rodriguez vs. Honduras 45 , concluyendo que a partir de dicho fallo " ... qued6 claramente establecido el
deber del Estado de estructurar el aparato gubernamental, en todas sus estructuras del ejercicio del poder publico, de tal manera que sus instituciones sean capaces de asegurar la vigencia de l?s derechos.hu~~nos, lo cual
incluye e1 deber de prevenir, investigar y sancwnar toda vwlac10n de los derechos reconocidos por la Convenci6n"46 • La Corte Suprema expresa muy
claramente el enfoque de que la imprescriptibilidad emerge ante t~do de
que los crfmenes contra la humanidad son " ... generalmente pract1eados
por las mismas agendas de poder punitivo operando fuera .~el ~o~t~ol ,~el
derecho penal, es decir, huyendo al control y a la con ten ciOn JUndtca . Y
que teniendo en cuenta que las desapariciones forzadas de personas las cometieron en Argentina " ... fuerzas de seguridad o fuerzas armadas operando en funci6njudicial ... " no puede " ... sostenerse razonablemente q.ue sea
menester garantizar la extinci6n de la acci6n pen~l. por el paso del ~~mpo
en crfmenes de esta naturaleza". Basandose exphntamente en deCisiOnes
de la Corte Interamericana, concluy6la Corte Suprema en este caso 47 que
" ... la aplicaci6n de las disposiciones de derecho in terno sobre prescripci6n
45
La Corte Suprema, con base en los actos criminates atribuidos a Arancibia Cla~e~! probados en el proceso (homicidios, torturas y tormentas
y desapancwn forzada de personas), determin6 que "en funci6n de los
principios que emanan de lajurisprudencia de la Corte Interamericana de
43
44
Camara Criminal y Correccional Federal de Argentina, causa 17.439, "Pinochet Ugarte, Aug~sto s/ prescripci6n de Ia acci6n penal". Maylisculas en el original.
·
SentenCia del24 de agosto de 2004.
'819
46
47
"36) Que en virtud dl':l precedente mencionado, tomando en cuen:a que el Estado
argentino ha asumido frente a! orden jurfdico interamericano no s_olo, un d~be.r ~e
respeto a los derechos humanos, sino tambien un deber de .garantla: en prmc1p_w,
es imputable al Estado toda violaci6n a los derechos reconoc1~os por la .convencwn,
cumplida por un acto del poder publico o de personas que actuan pre~ahda~ de ~ode­
res que ostentan por su caracter oficial. No obstante, no se agota_n al11 las s~tuac~ones
en las cuales un Estado esta obligado a prevenir, investigar y sancwnar las vwlacwnes
a los derechos humanos, ni los supuestos en que su responsabilidad pued~ ~e:se ~om­
prometida por efecto de una lesion a esos derechos. En efe~to, un hech.o lhCito vwlatorio de los derechos humanos que inicialmente no resulte Imputable d1rectamente a
un Estado, por ejemplo, por ser obra de un particular o porno haberse identificado al
autor de la transgresi6n, puede acarrear la responsabilidad ~~tern~cional del Est~do,
no por ese hecho en sf mismo, sino por falta d~ la debida d1hgenCI.a, p~;a prevemr la
violaci6n 0 para tratarla en los terminos requendos por la Con:encwn (CIDH, .caso
"Velasquez Rodriguez", sentencia del29 de julio de 1988, cons1derando 172, sene C,
numero 4).
Sentencia del 24 de agosto de 2004, parrafo 36.
, .
.
Parrafos 23 y 36 de la sentencia de la Corte Supr~~~ de 1~ Repubhca ~ge.~tl~a, ~n la
causa Arandbia Clave!, Enrique Lautaro s/ hom1c1d10 cahficado y asoCiacwn lhCita y
otros Causa numero 259 C. Buenos Aires, 24 de agosto de 2004.
I
,,I '
820
DIEGO
GARcfA-8AYAN
constituye una violacion del deber del Estado de perseguir y sancionar,
consecuentemente, compromete su responsabilidad internacional"48.
y
De especial interes resulta la decision adoptada por el Tribunal c
ti'
.
1d B I' .
ons tucwna ~. o IVIa a partir de la demanda presentada por la madre de Jose
Carlos Trupllo. Oroza cuya desaparicion forzada en 1972 habfa derivado en
la sentenCia dtctada por la ~orte Interamericana de Derechos Humanos
el 26 de enero de 2000. Parttendo del reconocimiento de responsabilidad
~resentado por el Esta.do boliviano, la Corte Interamericana habfa establectdo en la correspondtente sentencia de reparaciones49 "3 Que el E t d
db .
.
'd
.
.
sa o
e. e mvestigar, 1 enttficar y sancionar a los responsables de los hechos
lesiVos de que trata el presente caso ... ".
En el proceso penal seguido en Bolivia -a partir de la sentencia de Ia
~orte In.tera~ericana~ contra los supuestos responsables, se habfa declal~~o exti~gmda ~a accton penal por prescripcion. Primero por determinaCI~n deljuez Qumto de Instruccion en lo Penal y luego porIa Sala Penal
Pnmera del Distrito Judicial de Santa Cruz.
Sabre !a base del r~curso presentado por la madre del desaparecido
~nte el Tnbunal Con~tttucional, este determino que se estaba ante un dehto permanente, debtdo a que " ... enla ejecucion de Ia accion delictiva el
o los autores, estan con el poder de continuar 0 cesar Ia acct'o'n u" ~d'· · , 'I
.
an ~un 1
ca (pnvaCion 1 eg~l de hbertad) y que mientras esta perdure, el delito se
reproduce
a cada" mstante en
. su accion consumativa"50 . El Trt'b una1 d e ter. ,
ll_l~n~ que esta~a · · .establ~ctdo el canicter permanente del delito de privaCI?n tlegal de hbertad, dehto por el cual se juzga a los imputadosJusto Sarmtent~ Ala~es, Pedro ~ercy Gonzales Monasterio, Elias Moreno Caballero,
Antomo ?"1-ull~rmo Eho, Ernesto Morant Lijeron, Oscar Menacho y Rafael
~oayza (falleCido), Y que la vfctima no ha recuperado hasta el presente su
hbertad; consecuentemente, no ha comenzado a correr Ia prescripcion;
49
50
La Corte cita como referencias el caso "Barrios Altos" sentencia del 14 d
d
2001· 1
"T "11 0
'
e marzo e
'e caso n~Jl o roza vs. Bolivia", reparaciones, sentencia del27 de febrero de
200~ y el caso "Benavides Cevallos", cumplimiento de sentencia, resoluci6n del 9 de
septiem~re .~e 2003. Debe mencionarse que razonamientos contra la aplicaci6n de
la prescnpnon e~ casos de graves violaciones a los derechos humanos ya habfan sido
1
efectuados por tnbunales argentinas con anterioridad Asf por e'iemplo
d
1 ·, ·
·
,
"
, en e recurso
e ap~ ~~1011 m.terpuesto por Emilio Eduardo Massera -expediente 30514-- contra
la decisiOn .~el JUez ~ue le habfa denegado la excepci6n de prescripci6n, la Camara
se pronuncw en s~p.t~embre de 1999 estableciendo el caracter imprescriptible del crimen de la desapancwn forzada de personas.
27 de febrero de 2002.
Sentencia constitucionalll90/01-R del12 de noviembre de 2001, parrafo 16.
Justicia interamericana y tribunales nacionales
821
puesto que para computar la prescripcion de los delitos permanentes se
debe empezar a contar desde el dfa en que cesa la ejecucion del delito (en
el deli to que nos ocupa, cuando la persona recupera su libertad)" declarando, como consecuencia, procedente el recurso.
V. DEBER DE INVESTIGAR LAS VIOLACIONES A LOS
DERECHOS HUMANOS
Ha sido constante la jurisprudencia de la Corte Interamericana de Derechos Humanos en enfatizar la importancia del deber de garantfa traducido en la obligacion de prevenir, investigar y sancionar las violaciones graves
a los derechos humanos. Los principios asf establecidos vienen teniendo
progresiva y consistente aplicacion por importantes tribunales de la region
en una sucesion de decisiones que afirman la obligacion del Estado de investigar y sancionar esas violaciones a los derechos humanos.
El deber del Estado de que se investiguen las graves violaciones a los
derechos humanos ha sido reiteradamente tratado por la Corte Constitucional de Colombia con base en jurisprudencia de la Corte Interamericana. Asf, en el proceso de tutela instaurado por una ciudadana que
demandaba que se "investigue prolijamente" el fallecimiento de su hijo,
Nelsonjoaqufn Peiiaranda Guerrero, soldado voluntario en el Batallon de
Contraguerrillas mimero 16 de la Brigada Movilm:imero 2, fallecido el 7
de septiembre de 1993, a consecuencia de un disparo recibido dentro de
las instalaciones del Batallon Mecanizado n(lmero 5 en C(lcuta, la Corte
Constitucional reivindico en 1994 el derecho de los familiares a la verdad.
Asf, establecio que "Los peljudicados tienen derecho a saber que ha ocurrido con sus familiares, como lo ha establecido la Corte Interamericana
de Derechos Humanos" 51 .
La misma Corte Constitucional colombiana se ha pronunciado en diversas ocasiones sobre el "derecho ala verdad" y el "derecho a lajusticia", remitiendose siempre a sentencias de la Corte Interamericana. Asf, por ejemplo, en la sentencia C-282 de 2002 enfatizo el sustento de tales derechos,
entre otros aspectos, en sentencias de la Corte expresamente referidas 52 •
1111111
51
52
Corte Constitucional de Colombia, sentencia T-275/94, 15 dejunio de 1994.
Citan expresamente los casos Velasquez Rodriguez (fundamento 166) y Barrios Altos
(fundamento 43).
822
DIEGO GARciA-SAYAN
Frente a otra demanda de inconstitucionalidad -esta vez contra el artfculo 220, numeral 3o. del C6digo de Procedimiento Penal- la Corte
Constitucional reafirm6 y desarrollo principios importantes conectados al
deber de investigar y sancionar graves violaciones de derechos humanos.
En la demanda se objetaba que no existfa raz6n para que en el C6digo de
Procedimiento Penalla revision del fallo al surgir hechos o pruebas nuevas
no conocidas por el juez durante el proceso, solo opere para absolver al
procesado o declarar su inimputabilidad. Ello dejarfa por fuera, al decir
de la demanda, " .. .la posibilidad de hacer justicia frente a los hechos o
pruebas nuevas que puedan aparecer y que lleven a revisar el fallo para una
responsabilidad penal mucho mas grave y una mayor indemnizaci6n frente
a quienes padecieron algun perjuicio con el hecho daiioso" 53 , Estaban en
discusi6n, pues, principios como el non bis in idem y la cosa juzgada.
Justicia interamericana y tribunates nacionales
nulidad de las sentencias absolutorias "contrariando evidente y flagrantemente la Convenci6n Americana de los Derechos Humanos".
AI resolver, la Corte Constitucional enfatiz6 que" ... conviene acotar que
la jurisprudencia constitucional viene reivindicando los derechos que en
el proceso penal tienen las victimas y petjudicados del hecho punible a la
reparaci6n econ6mica, ala verdadya lajusticia" 55 , precisando que
... Ia Corte lnteramericana de Derechos Humanos ha dicho que las vfctimas de
violaciones a los derechos humanos tienen derecho a Ia verdad, justicia y reparaci6n,
por lo que el Estado debe cumplir el deber de investigar esos hechos, sancionar a
los responsables y restablecer, en lo posible a las vfctimas en sus derechos ..En este
sentido ha hecho enfasis en que Ia investigaci6n "debe emprenderse con senedad y
no como una simple formalidad condenada de antemano a ser infructuosa", pues de
lo contrario puede afirmarse que el Estado ha incumplido el deber de garantizar el
libre y plena ejercicio de los derechos a las personas sujetas a su jurisdicci6n, lo cual
comprometerfa su responsabilidad internacional 56 •
La Corte Constitucional, hacienda referenda expresa al caso "Barrios
Altos", destac6 que
... los derechos de las vfctimas desbordan el campo indemnizatorio pues incluyen el derecho a Ia verdad y a que se haga justicia en el caso concreto. Particular
importancia tiene en este aspecto Ia sentencia del 14 de marzo de 2001 de Ia Corte
lnteramericana de Derechos Humanos, Caso Barrios Altos ... en donde ese tribunal
decidi6 que las !eyes de amnistfa peruanas eran contrarias a Ia Convenci6n lnteramericana y que el Estado era responsable por violar el derecho de las vfctimas a conocer
Ia verdad sobre los hechos y obtener justicia en cada casos4.
La Corte enfatiz6 que se estaba ante tres derechos relevantes para analizar la norma demandada: el derecho a la verdad (para lo cualla Corte se
remiti6 a los casos Velasquez Rodriguez y Barrios Altos); el derecho a que
se hagajusticia en el caso concreto, y el derecho ala reparaci6n del daiio a
traves de una compensaci6n econ6mica. La Corte Constitucional ampar6
la pretension contenida en la demanda.
Ante otra demanda de inconstitucionalidad de un aspecto del C6digo
de Procedimiento Penal, la Corte Constitucional reafirm6 los principios
establecidos en su propia jurisprudencia, y se sustent6 en la Corte Interamericana en cuanto al deber de investigar. En la demanda se ponfa de
relieve en este caso el principia non bis in idem seiialando que las personas
absueltas tienen el derecho a no ser sometidas a juicio por los mismos
hechos. Los demandantes seiialaban que la norma impugnada del C6digo
de Procedimiento Penal posibilita la revision y posterior declaratoria de
53
54
Idem.
Idem,.
823
Como es 16gico, el razonamiento expuesto llev6 ala Corte Constitucional a no amparar la demanda reafirmando los principios ya contenidos
en la sentencia C-004 de 2003 en cuanto al deber de investigar, cuya prevalencia sobre el non bis in idem qued6 claramente definida por la Corte
Constitucional.
Finalmente, la misma Corte Constitucional colombiana se remiti6 ala
Corte Interamericana y su jurisprudencia para declarar inconstitucional
parte de la tipificaci6n de la figura de las desapariciones forzadas contenida en el articulo 165 de la ley 599 de 2000, por la cual se expidi6 el Cadigo Penal57. En la demanda se explicaba que el segmento demandado en
cuanto exigfa como requisito sine qua non para la configuraci6n del delito
de desaparici6n forzada que el particular o el servidor ptlblico autor del
punible debe pertenecer a un grupo armada al margen de la ley, deja de
tipificar la conducta del particular o del servidor publico que actua individualmente o que pertenece a un grupo que no tiene la particularidad de
55
56
57
Corte Constitucional de Colombia, sentencia G-871/03, 30 de septiembre de 2003.
Idern
,
El articulo en cuesti6n era el siguiente (se subraya la parte impugnada): "ARTICULO
165. DESAPARlCION FORZADA. El particular que perteneciendo a un grupo armado
al margen de la ley someta a otra persona a privaci6n de su libertad cualquiera que
sea la forma, seguida de su ocultamiento y de la negativa a reconocer dicha privaci6n
o de dar informacion sobre su paradero, sustrayendola del amparo de la ley, incurrira
en prisi6n de veinte (20) a treinta (30) aiios, multa de mil (1.000) a tres mil (3.000)
salarios mfnimos legales mensuales vigentes yen interdicci6n de derechos y funciones
publicas de diez (10) a veinte (20) aiios".
' '
824
DIEGO GARciA-SAYAN
ser armada o que ni siquiera esta par fuera o al margen de la ley. A juicio
de la demandante no resultaba admisible que solo se penalice al particular
o al servidor publico que ejecuta la desaparicion forzada cuando pertenece
a un grupo que ademas sea armado, y que tal grupo armado este por fuera
de la ley. Es decir, que si es un grupo no armado, no hay tipicidad, o si no
se pertenece a n~ngun grupo no hay delito, o si el grupo es armado, pero
dentro de la ley, 1gualmente Ia conducta es atipica.
AI analizar la demanda, la Corte Constitucional tomo en cuenta y cito
larga~ente la sentencia de Ia Corte Interamericana en el caso Velasquez
Rodnguez, destacando que en dicha decision jurisdiccional se habfa efectu~do " .. .la primera descripcion exhaustiva del crimen de desapariciones
senal~ndo. ~ue s_e .trata d? ~n delito de lesa humanidad que constituye
una vwlacwn multiple a d1stmtos derechos consagrados en la Convencion
como la vida, la libertad y la dignidad humana"5s.
La Corte Constitucional enfatizo, a su vez, que con dicho fallo la Corte
Interamericana dejo en claro que
... en principia, es imputable al Estado toda violaci6n a los derechos reconocidos
porIa ,<=onvenci6n cumplida por un acto del poder publico ode personas que actlian
prevalidas_ de l~s po.deres que ostentan por su caracter oficial, y que aun asf no se
agotan. alii las Slt~aclo.nes en las cuales un Estado esta obligado a prevenir, investigar
y sanc1?~ar las V1olac1ones a los derechos humanos, ni los supuestos en que su responsabdidad puede verse comprometida por efecto de una lesion a esos derechos. En
efecto, un he:h~ ilfcit?, como violatorio de los derechos humanos que inicialmente
~o resulte atnbu1ble d1re~tam~~te a un Estado, por ejemplo, por ser obra de un particular o por no haberse 1dent1f1cado al autor de Ia transgresi6n, sin embargo puede
acarrear su re:pon~a.bilid~d internacional, no por ese hecho en sf mismo, sino por
falta de Ia deb1da dd1gencla para prevenir Ia violaci6n o para tratarla en los terminos
requeridos porIa Convenci6n 59 •
E~ s~s- consideraciones, la Corte Constitucional establecio que por la
descnpcwn de la conducta contenida en la norma impugnada " ... noes valida Ia afirmacion de la accionante de que los miembros de las Fuerzas Armadas estan excluidos de ser stBetos activos de la desaparicion forzada"6o.
En cuanto que el StBeto activo del delito de desaparicion forzada y la exigencia que ~ert~nezca a un "gn1po armado al margen de la ley", para la
C.orte 'ConstitUCIOnal e.sta expresion es inconstitucional, por reducir sigmficativamente el sentido y alcance de la proteccion de las vfctimas. En
58
59
60
Corte Constitucional de Colombia, sentencia C-317 /02, 2 de mayo de 2002.
Idem,
Idem.
]usticia interamericana y tribunates nacionales
825
ese orden de razonamiento, la Corte Constitucional reafirmo el sentido
del tratamiento de la desaparicion forzada contenida en la Constitucion
(articulo 12), que
... consagra una protecci6n mas amplia que Ia regulada en los instrumentos internacionales ... toda vez que conforme a Ia jurisprudencia de Ia Corte lnteramericana
de Derechos Humanos citada anteriormente Ia simple omisi6n de los Estados de prevenir Ia desaparici6n forzada cometida por particulares o de controlar a los grupos
armadas irregulares que ejecutan dichos aetas, implica que el Estado respectivo no
ha cumplido con su obligaci6n de prevenir y castigar a los responsables de tales aetas
siendo, en consecuencia, merecedor de las condignas sanciones61 •
Por su parte, el Tribunal Constitucional del Peru ha reafirmado en varios casos los principios fundamentales del deber de investigar y de accion
contra la impunidad. En el recurso extraordinario interpuesto por Gabriel
Orlando Vera Navarrete, quien consideraba que existia una detencion arbitraria en su caso, y solicitaba su inmediata excarcelacion, el Tribunal se
refirio a la naturaleza compleja de los procesos penales seguidos contra
Vera Navarrete como miembro del denominado "Grupo Colina" por los
delitos de homicidio calificado, secuestro agravado y desaparicion forzada
de personas62. Con ese telon de fondo, remitiendose al caso Velasquez Rodriguez, el Tribunal Constitucional reafirmo y desarrolla los principios del
deber de garantfa establecidos en las normas internacionales y contenidos
en las sentencias de la Corte Interamericana63 . En la misma sentencia el
Tribunal desarrollo el sentido y seriedad de dicha obligacion de investigar
basandose en el caso Bulacio vs. Argentina64 •
61
G2
63
Idem,
Senten cia del 9 de diciembre de 2004 (exp. 2798-04-HC/TC). Vera Navarrete era procesado tambien por su supuesta participaci6n en las matanzas de "Barrios Altos" y "La
Cantuta".
"10. La obligaci6n de garantfa ha sido desarrollada en la jurisprudencia de la Corte
Interamericana de Derechos Humanos. As!, en la sentencia sobre el caso Velasquez
Rodriguez, del 29 de julio de 1988 (parrafo 164), la Corte indica que el deber de garantfa implica que el Estado debe prevenir, investigar y sancionar toda violaci6n de los
derechos reconocidos, y procura1~ ademas, el restablecimiento, si es posible, del derecho conculcado y, en su caso, la reparaci6n de los dafios producidos por la violaci6n
de los derechos humanos. La obligaci6n del Estado consiste en el ejercicio de la acci6n
penal correspondiente contra aquellos funcionarios publicos, o cualquier individuo,
que sea presuntamente responsable de la violaci6n alegada. El Derecho Internacional
de los Derechos Humanos, de esta manera vela por la protecci6n de los derechos de
las personas, pero simultaneamente exige la intervenci6n del Derecho Penal contra
aquellos que resulten responsables de la infracci6n".
Parrafo 19 de la sentencia.
,'
I
I.
827
justicia interamericana y tribunates nacionales
826
VI. DEBIDO PROCESO Y DERECHO A UN RECURSO EFECTIVO
Es interesante constatar como los principios fundamentales del debido
proceso y del derecho a un recurso efectivo, establecidos en los artfculos
8 y 25 de la Convencion Americana sobre Derechos Humanos, han sido
reforzados por tribunales nacionales a partir de decisiones de la Corte Interamericana de Derechos Humanos. Tambien han sido impactados asuntos
especfficos vinculados a la administracion de justicia como el tratamiento
a los reclusos. Hay decisiones interesantes adoptadas, por ejemplo, por tribunales de Argentina, Bolivia y Colombia, que ejemplifican esto.
Asf, en el caso de Argentina, en un recurso de casacion resuelto en 2004
por la Camara Nacional de Casaci6n Penal (Sala 4a.), en el recurso de quejade Fernando Daniel Lopez, se estaba ante un sentenciado por homicidio
culposo al que se le negaba el recurso de casacion. La Camara hizo lugar
al recurso sustentando su conclusion en que " ... toda persona que resulte
condenada debe tener acceso -como derivacion del derecho de defensa- a una nueva discusion de la cuestion (en principia, lomas amplia posible)" en la sentencia dictada en julio de 2004 por la Corte Interamericana
de Derechos Humanos en el caso "Herrera Ulloa vs. Costa Rica" 65 •
En un fallo relevante de la Corte Suprema argentina se destaco el principia del derecho a un recurso sencillo y rapido. En el recurso de hecho
deducido por Victor Hermes Brusa se baso el tribunal supremo -entre
otros componentes de su razonamiento- en la opinion consultiva numero
9, de 1987 (OC-9/87) de la Corte Interamericana. Con oqjeto de precisar
que la inexistencia de un recurso efectivo contra las violaciones a los derechos reconocidos por la Convencion constituye una transgresion de la
misma, la Corte Suprema preciso que la garantfa prevista en el articulo
25.1 de la Convencion "se aplica no solo respecto de los derechos contenidos en la Convencion, sino tambien de aquellos que esten reconocidos por
la Constitucion o por la ley". Citando el caso "Castillo Petruzzi" conocido
por la Corte Interamericana, seiiala que dichas garantias implican que" ...
ademas de ser indispensables de ben ser judiciales, lo cual implica la intervencion de un organa judicial independiente e imparcial, apto para determinar la legalidad de las actuaciones que se cumplan dentro del estado de
excepcion".
. .
Bolivia or su parte, ha desarrollado
El Tribunal Consutucwnal de
' p
u' de diversas senten1 d b' do proceso a par r
rincipios fundamentales d e e 1
. 1020/2004--R del 2 de
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un medio para asegurar, en la mayor me
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· · · d 1
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El mismo Tribunal Constltuc
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'uez natural en otras sentencta
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de la Corte Interamenca~a e
002 ue resolvia un habeas corpus
1364/2002, del 7 de novtembreRdeb2 t L'qandivar Roca a traves del cual
· Fernando o er10 l'b tad a no ser detem'do S111
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alegaba vulneracion de los derechos a a 1 elrt 'b,unal se bas6 en la Corte
1 d b' do proceso, e n
formalidades legales Y a e 1 .
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Al fallar medmnte sentenoa
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se otorg6la tutela sohotada basan I
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" 1 Corte nteramer
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nos cuya jurisprudenoa es vmcu a(Cn e PT 'b al Constitucional del Peru,
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parrafo 77)' ha esta, eo o q stado debera con tar con la garanti~ de que
naturaleza ante un organo del~ d endiente e imparcial"'. SemeJante dedicho organo sea competente, 111 ep
'1 1111
65
Buenos Aires, Camara Nadonal de Casaci6n Penal (Sala 4a.), recurso de casaci6n resuelto el 15 de octubre de 2004.
828
DIEGO GARciA-SAYAN
sarrollo conceptual se encuentra en otras sentencias del Tribunal Constitucional de Bolivia66 .
El principia de presunci6n de inocencia, a prop6sito de una disposici6n
del C6digo Penal cuestionada a traves de una demanda de inconstitucionalidad, fue desarrollado por Ia Corte Constitucional de Colombia, con base
en la jurisprudencia de Ia Corte Interamericana de Derechos Humanos.
La norma cuestionada es Ia que penaliza Ia comercializaci6n de autopartes
usadas sin demostrar su procedencia lfcita67 . Segun Ia demanda, Ia norma penal demandada viola el principia de presunci6n de inocencia, por
cuanto ordena al procesado o imputado que demuestre Ia procedencia
lfcita de las autopartes usadas de vehiculos automotores. Ello impondrfa al
ciudadano investigado -se alegaba- demostrar su inocencia, invirtiendo
Ia carga de Ia prueba.
En las consideraciones de su fallo, Ia Corte Constitucional recurri6 a
distintos precedentes propips sobre el referido principia de presunci6n de
inocencia, asf como ajurisprudencia de la Corte lnteramericana, remitiendose a las sentencias de la Corte Interamericana en los casos Suarez Rosero
vs. Ecuador (noviembre de 1997) y Cantoral Benavides vs. Peru (agosto de
2000).
La misma Corte Constitucional de Colombia, en una acci6n de tutela
para proteger los derechos de internos del Pabell6n de Maxima Seguridad
de C6mbita, se nutri6 de decisiones de la Corte Interamericana para resolver. En Ia acci6n correspondiente se daba cuenta de una larga relaci6n de
hechos al interior de dicho centro penal que constituirfan violaci6n de los
derechos de los reclusos. En la parte considerativa de su sentencia, la Corte
Constitucional resefi6 Ia le~slaci6n nacional e internacional y destac6 la
importancia " ... del asunto Castillo Petruzzi contra Peru, fallado porIa Corte Interamericana de Derechos Humanos el 30 de mayo de 1999"68 • Concluye Ia Corte Constitucional que "En los terminos de lajurisprudencia de
la Corte Interamericana de Derechos Humanos y del Tribunal Europeo
de Derechos Humanos, es preciso que se abstengan de cometer 'practicas
66
67
68
Por ejemplo, sentencias 1730/2003, del28 de noviembre de 2003 y 0009/2004, del28
de enero de 2004.
El artfculo cuestionado era el siguiente: "Artfculo 447A. Quien comercie con autopartes usadas de vehfculos automotores y no demuestre su procedencia lfcita, incurrini en
la misma pena del artfculo anterior".
Corte Constitucional de Colombia, sentencia T-1030/03, 30 de octubre de 2003.
829
justicia interamericana y tdbunales naciotiales
administrativas'' es decir, comportamientos analogos 0 similares que supo69
.
nen violacwnes
a los derec h os f un d amentales " .
En conexi6n directa con e1 respeto al debidq proceso se dict6 por la Corte Interamericana de Derechos Humanos el 2 de julio de 2004la sentencia
en el caso Herrera Ulloa vs. Costa Rica, a traves de la cual se estableci6 que
el Estado habfa violado el derecho a las garantfas judiciales consagrado
en los artfculos 8.1 y 8.2 de la Convenci6n Americana sobre De~ech~s H~J­
manos, motivo por el cualla Corte dispuso qt;e el Estado deb1~ deJar sm
efecto en todos sus extremos, la sentencia em1tida e112 de noVIembre de
1999 ~or el Tribunal Penal del Primer CircuitoJudicial de SanJose, a traves
de la cual conden6 al senor Mauricio Herrera Ulloa.
A las pocas semanas, en cumplimien~o de ~~ch~ sente~~ia de la Cort~
Interamericana el Tribunal Penal del Pnmer C1rcmto JudiCial de San Jose
dispuso que se ~ancelara la inscripci6n deljuzgamiento del senor M~uricio
Herrera Ulloa, que se dejaran sin efecto las penas de multa y ~e dano moral impuestas, asf como Ia orden de publicaci6h de la sentenoa.
Otro aspecto vinculado directamente al debido proceso es el de. la acci6n de la justicia y la detenci6n preventiva, tema en el que el Tnbu"?al
Constitucional peruano se ha nutrido expresamen~e -y de manera reiterada- de la jurisprudencia de la Corte Intenynencana d~>Derechos .Humanos para reafirmar el caracter excepcional <fe la detencwn preventiva.
Basandose en el caso Suarez Rosero70 , el Tribunal estableci6 en el caso
Vicente Silva Checa, que
69
7o
Decaux, Emmanuel, La Crtnvention Europeenne des Droits de l'Hmnme. Commentaire article
par article, Paris, 1995, p. 168.
.
,
Caso Suarez Rosero vs. Ecuador, sentencia del12 de novten:~re de.1997, p~rrafos 77
78: "77. Esta Corte estima que en el principio de presuncwn de mocencta sub~ace
~1 prop6sito de las garantfas judiciales, al afirmar la idea de que una persona es mocente hasta que su culpabilidad sea demostrada. De lo d~sp~esto .en el artfculo 8.2. de
la Convenci6n se deriva la obligaci6n estatal de no restnng1r la hbert~d del ~e-temdo
mas alla de los lfmites estrictamente necesarios para asegurar que no 1mped1ra el desarrollo eficiente de las investigaciones y que no eludira la acci6n de lajust~cia, pues la
prisi6n preventiva es una medida cautelar, no punitiva. Este concepto esta expresado
en m{tltiples instrumentos del derecho internacion~l. de los d?~echos hun:anos y, entre otros en el Pacto Internacional de Derechos CIVlles y Politicos, que dispone que
la prisi6~ preventiva de las personas que hayan de ser jt.lzgadas no. d.ebe.
la r~gla
general (articulo 9.3). En caso contrario se estarfa cpmet1endo una lllJUStlcta al pnv~r
de libertad, por un plazo desproporcionado respecto ~e l.a pena que .correspond~na
al delito imputado, a personas cuya responsabilida~l cnmmal n~ ha s1do estable~Id~.
Serfa lo mismo que anticipar una pena ala sentenc1~, lo cual esta en contra de pnnopios generales del derecho universalmente reconoodos.
s:r
llj•,
831
830
DIEGO
GARciA-SAYAN
. .. .por el hecho de. tratarse de una medida que restringe Ia libertad locomo o
mJentras no
sentencia condenatoria firme, al
debe considerars: ~u~~~~:~~~~a ~u moce~cia; cualquier restricci6n de ella siempre
de dictarse solo en circunstan'ci~ ~~udeadeel rJUmzgadtor debe apelarl, esto es, susceptible
,
.
a en e excepCJona es y no como
1
genera I.... [Esa es] Ia mterpretaci6n que ... ha expresado Ia C t I t
. reg a
Derechos Humanos (caso Suarez Rosero. Ecuador, parrafo 77
n eramencana de
~~f:~d:l ~~~::h~ue,
exist~
procesa~or~
~~)~1.
Otro caso.interesante es el vinculado ala sentencia dictada por la Corte Interamencan~ de D~rechos Humanos en el caso Fermfn Ramirez vs.
Guatemala.
G
1 Fermm Ramirez habfa sido condenado a Ia pena d e muerte en
uatema
a. La Corte Interamericana establ ec10
. , que en e I proceso pen 1
.
segmdo contra Ramfrez se habfa violado Ia Convenci6n Am ·
ba
Derecho H
encana so re
.
s umanos y que, en consecuencia, la pena establecida or los
guatemaltecos " ... fue arbitraria por haber incumplido u!itaciones mfranq~~~bles para la imposici6n de dicha pena en los pafses ue aun
la preservan . Sobre esa base, la Corte determin6 que "El Estado debe
llevar ~cabo, e~ un pl~zo razonable, un nuevo e~uiciamiento en contra
~ela~enor Fermm Ramir,ez, que sa?sfaga las exigencias del debido proceso
g , con plenas garantias de aud1encia y defensa para el inculpado"73.
tnb~nales
Alllegar esta _sentencia a conocimiento de la Corte Suprema de Justi .
pronunci6 enfaticamente en enero de 2006 en
:e~ti~o ~e. ~ue en VIrtud del sometimiento del Estado de Guatemala a
a JUnsdiccwn contenciosa de Ia Corte Interamericana de Derechos H los fall?,' que Csta emita en cuanto a intcipretaci6n y
. e a onv;,~cwn ~encana sobre Derechos Humanos son definitivos e
~apelabl~ , resolVIendo que, en aplicaci6n de Ia referida sentencia de la
R ort:, seEebia llevar a cabo un nuevo proceso penal en contra de Fermfn
amirez. se proceso, en efecto, se llev6 a cabo, esta vez en seguimiento de
de
~uatemala, ~~ta s~
~";'o~
c~~
aplicaci6~
justicia interamericana y tribunates nacionales
los estandares del debido proceso, y el imputado fue condenado a cuarenta alios de prisi6n.
El derecho a la protecci6n judicial de los derechos humanos ha sido
un aspecto importante tratado en diversas ocasiones por la Corte Constitucional de Colombia y por el Tribunal Constitucional del Peru. En efecto,
la Corte Constitucional colombiana ha consolidado ciertos principios importantes a prop6sito de una demanda de inconstitucionalidad contra la
norma del C6digo de Procedimiento Penal de ese pafs, en el que se regula
la constituci6n del agraviado en parte civil75 . En su decision, la Corte Constitucional afianz6 los principios que amparan los derechos de las victimas;
citando la OC-9/87, enfatiz6 que la inexistencia de un recurso efectivo
contra las violaciones a los derechos reconocidos por la Convenci6n constituye una transgresi6n de la misma. Cita in extenso la sentencia de la Corte
Interamericana en el caso "Barrios Altos", para senalar que son " ... contrarias a Ia Convenci6n Americana de Derechos Humanos, las leyes que deja76
ban a las vfctimas sin la posibilidad de saber la verdad y obtener justicia" .
Por su parte, el Tribunal Constitucional del Peru, basandose en la jurispruden cia de la Corte Interamericana de Derechos Humanos, ha reafirmado, entre otros aspectos, el derecho a recurrir ante un tribunal competente
frente a todo acto u omisi6n que lesione un derecho fundamental. Enfatizo que este derecho "De conformidad con la jurisprudencia vinculante
de la Corte Interamericana de Derechos Humanos, constituye parte del
nucleo duro de la Convenci6n Americana de Derechos Humanos y, en ese
sentido, no puede obstaculizarse irrazonablemente su acceso o simplemen77
te inipedirse su cabal goce y ejercicio" .
75
71
72
73
74
78. La Corte
considera
" preventiva del senor Suarez
Rosero
se vi'olo'
1 . que
. . con 1a pro1ongad a d etencwn
'
e pnnCipiO de presun · ' d ·
·
nido del 23 de junio de 1992 al28 d ~~~1 d e ;~~cenCia, por cuanto permaneci6 detedea n. e
6 ~ la orden de libertad dictada en su
favor el 10 de julio de 1995
todo lo expuesto la Corte dnol pu o serlejecutada smo hasta casi un aiio despues. Por
.
"
'
ec ara que e Estado viol6 el articulo 8 2 de la Convenci'o'n
·
Am encana,
Sentencia
del
expediente
1091
200
HC/TC
.
2
to de 2002.
' caso VIcente Silva Checa, del 12 de agosParrafo 79.
Parrafo 138.7.
Corte Suprema de Justicia de Guatemala ' acuerdo 96-2006 , d e 1 23 d e enero d e 2006.
76
77
En la demanda se seiialaba que a traves del articulo 137 del C6digo de Procedimiento
Penal se vulneraba el principio de la igualdad, en lo que respecta al acceso a lajusticia,
pues la ley concede al sindicado "la libertad de actuar directamente en la defensa de su
causa ... y no obligatoriamente a traves de abogado", mientras que "impone al denunciante o al perjudicado ... el deber de actuar por intermedio de apoderado judicial,
lo cual viola el principio de igualdad". Ademas, se seiialaba que " ... ala parte civil se
le imposibilita conocer de las actuacionesjudiciales durante la etapa de investigaci6n
preliminar, por no ser parte en el proceso y por cuanto esa informacion esta cobijada
por la reserva sumarial". Ajuicio del demandante, esto resulta contrario a los artfculos
93 y 95, numeral 4, de la Constituci6n.
Idem.
Sentencia del expediente 1941-2002-AA/TC (caso Luis Felipe Almenara Bryson), publicada el 20 de marzo de 2003, y la sentencia del expediente 2209-2002-AA/TC (caso
Mario Antonio Urrelo Alvarez), publicada el15 de mayo de 2003. Citado por Huerta
Guerrero, Luis Alberto, cit.
833
832
DIEGO GARciA-5AYAN
En esta materia es de particular relevancia la sentencia del Tribunal
Constitucional del Peru, del 19 de junio de 2007, a proposito de la accion
de inconstitucionalidad interpuesta por el Colegio de Abogados del Callao
contra la ley 28642. Dicha ley estableda la improcedencia de las acciones
de garantia contra resoluciones del Jurado Nacional de Elecciones. Esta
sentencia, por la que se declaro fundada la demanda, tiene especial significacion tanto en lo que respecta ala reafirmacion del derecho a un recurso
efectivo como por las consideraciones mas amplias que hace el Tribunal
sobre las sentencias de la Corte Interamericana.
En lo que respecta al derecho a un control jurisdiccional sobre decisiones que contravengan los derechos de las personas, el Tribunal citolargamente la sentencia de la Corte en el caso Yatama vs. Nicaragua, dictada
en 2005. Establecio claramente que deben operar los remedios internos, y
que es " ... obligacion del Estado peruano adecuar su derecho interno a los
principios derivados de la Convencion Americana de Derechos Humanos,
segun lo dispone su articulo 2" 78 . Para esta reafirmacion del derecho a un
recurso efectivo se basa centralmente enla consideracion de que
... tal como lo ha establecido Ia Corte lnteramericana de Derechos Humanos, no
cabe, en ninguna circunstancia (ni aun durante los estados de excepci6n), desconocer el derecho de toda persona a recurrir a los procesos constitucionales de amparo y
habeas corpus frente a toda vulneraci6n de los derechos fundamentales reconocidos
en Ia Constituci6n del estado, como manifestaci6n concreta, a nivel interno, del
derecho humano de toda persona 'a un recurso sencillo y rapido o a cualquier otro
recurso efectivo ante los jueces o tribunales competentes, que Ia am pare contra aetas
que vi olen sus derechos fundamentales ... 79
Mas alia del caso espedfico, es interesante enfatizar la importancia de
otras consideraciones mas generales del Tribunal, que en su razonamiento
establece importantes lineamientos conceptuales sobre interpretacion al
destacar la conveniencia "reparadora de interpretar los derechos fundamentales ... ala luz de las decisiones de la Corte, [pues] queda optimizada
la posibilidad de dispensarsele una adecuada y eficaz proteccion" 80 •
justicia interamer·icmw y tribttnales nacionales
VII. COMENTARIO FINAL
. .
. de los instrumentos internacionales de d~reLa operatlVldad Yefica~l~
a ue los Estados adopten las medtdas
chos hu_manos estan c?ndtctonada~ ~r los derechos protegidos. En ello le
necesanas para cumpitr y ~:~:: ~~ottribunales nacionales.
corresponde un pape me
.
. , .
t, construyendo
1 viva dmamtca que se es a
En estas lineas se expone a
.
de Derechos Humanos
1
. de la Corte Interamencana
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.
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de tradunr en os procesos
mental en e proceso
.
11 . 'd' os e institucionales internaal interior de los paises los desarro os JUrl tc
. d derechos humanos.
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1
nistias el deber de garantla, e e
En temas cntlcos, como as am. d' . '1 £ tivo es notable como ellos
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Bolivia Colombia y Peru, ast como en
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I'
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II
78
79
80
Resoluci6n dell9 dejunio de 2007, 00007-2007-PI/TC, p. 23.
Ibidem, p. 24.
Ibidem, p. 17.
ll"l,
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