XXXI CONFERENCIA INTERAMERICANA DE CONTABILIDAD TRABAJO NACIONAL T Í T U L O “AUDITORÍA FORENSE APLICADA EN EL SECTOR PÚBLICO” ÁREA TEMÁTICA 3: SECTOR PÚBLICO SUBTEMA: La corrupción en el Sector Público y las responsabilidades penales de los servidores públicos. AUTORES: Maestra: LUCÍA LORENA DE SANTIAGO GONZÁLEZ Maestro: JOSÉ LUIS MERCADO IBARRA PAÍS QUE SE REPRESENTA MÉXICO 1 LA AUDITORÍA FORENSE APLICADA EN EL SECTOR PÚBLICO Resumen Se propone priorizar la formación de auditores especializados en materia forense aplicable al sector público para llevar a cabo la investigación pertinente que permita determinar la existencia de delitos, identificar al presunto responsable y cuantificar el daño ocasionado en el patrimonio y en el erario de las entidades gubernamentales; así como establecer las medidas adecuadas y oportunas para evitar o por lo menos disminuir la incidencia de corrupción, fraudes, el enriquecimiento ilícito y los mecanismos de lavado de dinero como consecuencia de estas prácticas ilegales. Los informes y dictámenes que emita el auditor forense serán prueba contundente con los que las autoridades administrativas y judiciales apoyarán los procesos legales y penales para enjuiciar a los delincuentes, se reintegre a las finanzas públicas el dinero erogado en forma ilícita, y a la ciudadanía se le otorgue la opción de recuperar un poco la confianza en las instituciones encargadas de velar por la seguridad y protección de los bienes públicos, mediante la atención de los casos en los que se llevaron a cabo actos u omisiones que implicaron alguna irregularidad o conducta ilícita en el ingreso, egreso, manejo, custodia y aplicación de fondos y recursos públicos, dando seguimiento puntual a los procedimientos utilizados en la impartición de la justicia y lograr que ésta sea pronta y expedita. Palabras clave: Auditoría forense Corrupción en el sector gobierno Responsabilidades penales de los servidores públicos Enriquecimiento ilícito Lavado de dinero 2 DESARROLLO DEL TEMA INTRODUCCIÓN La sociedad, en su vida diaria, enfrenta un sinnúmero de dificultades de todo tipo: económicos, administrativos, de reglamentaciones, de exceso de trámites burocráticos, problemas generados por escasa instrucción educativa, por la afectación de sus derechos humanos, por soportar obligaciones tributarias excesivas, etc.; de esto se desprende que los temas más importantes y delicados son los que se refieren a la afectación en su persona, bienes y derechos, derivada por conductas antisociales que en muchos de los casos quedan impunes, sin castigo. En tiempos remotos, para investigar algún presunto delito, se utilizaba sólo la intuición, se recababan algunas evidencias o se obtenían testimonios para intentar descubrir al delincuente; no existían técnicas ni procedimientos profesionales para esclarecer los hechos por los cuales se abrían averiguaciones previas; tampoco se contaba con las herramientas procedimentales ni existían especialistas en las disciplinas adecuadas para acreditar la existencia de los elementos del tipo penal del delito de que se tratara. No se tenía la certeza que la sentencia dictada ya fuera condenatoria o absolutoria, era justa y legal. En los últimos años se han descubierto herramientas de tipo científico que permiten probar la inocencia o la culpabilidad de un acusado mediante pruebas psicológicas y de personalidad, entre otras. En todos los casos que se presentan conductas irregulares, el delincuente hará todo lo posible para evitar que se descubran sus malas acciones. En la mayoría de los países existen instituciones a las que les corresponde la investigación de los delitos; en México y en sus entidades federativas, existe la figura del Ministerio Público, a quien le compete ejercer la acción penal ante los tribunales, y sólo en algunas excepciones, los particulares pueden ejercer dicha acción ante la autoridad judicial quien es la encargada de vigilar que las normas jurídicas se cumplan. La imposición de las penas, su modificación y duración, son propias y exclusivas del Poder Judicial. Sin embargo, cuando los delitos los cometen servidores públicos, en muy pocos casos estas personas son sancionadas en proporción con la magnitud de los daños causados; en la mayoría de estas situaciones, la autoridad judicial y las administrativas son débiles en la imposición de los castigos, lo cual permite que se sigan presentado los actos de corrupción y se perfeccionen los métodos para llevar a cabo los ilícitos, es decir, no se aplica la justicia. De acuerdo con el sitio Wikipedia (http://es.wikipedia.org/wiki), La justicia (del latín iustitĭa) es la concepción que cada época y civilización tiene acerca del sentido de sus normas jurídicas. Es un valor determinado como bien común por la sociedad. Nació de la necesidad de mantener la armonía entre sus integrantes. El propósito de la justicia es garantizar que no se está condenando a un inocente o se ha liberado a un culpable. La contaduría pública está inmersa en la búsqueda de herramientas que provean elementos de juicio y aporte pruebas contundentes para demostrar los ilícitos que se cometieron en materia administrativa y financiera. Para ello, se ha desarrollado la especialidad denominada Auditoría Forense la que aplicada en el sector público y utilizando métodos y técnicas de la criminalística ha coadyuvado para prevenir la corrupción y detectar fraudes. De la recopilación de las evidencias y las conclusiones plasmadas en el dictamen correspondiente resultan los elementos indubitables para que las autoridades administrativas (Contraloría y la Auditoría Superior de Fiscalización, ambas a nivel federal y 3 estatal), así como el ministerio público y el juez, sometan al delincuente a los procesos pertinentes. Para el desarrollo del tema se considera entender varios conceptos que a continuación se enuncian: Auditoría. Es el examen crítico y sistemático que realiza una persona o grupo de personas independientes del ente auditado, que puede ser una persona, organización, sistema, proceso, proyecto o producto. También se considera a la auditoría como rama o especialidad de la contabilidad, que se encarga de la verificación, corrección de la información financiera y evalúa la gestión administrativa. Auditoría externa de estados financieros. Es una revisión realizada por un profesional experto en contabilidad, de los libros y registros contables de una entidad, para opinar sobre la razonabilidad de la información contenida en ellos y sobre el cumplimiento de las normas contables. En términos generales, las auditorías se clasifican en: 1. De estados financieros (determina si las cifras y datos plasmados en estos documentos del ente auditado, son razonables); 2. De cumplimiento (verifica que las operaciones efectuadas por el ente estén adecuadas a las leyes, normas y procedimientos aplicables a dicha entidad); 3. Operacionales (evalúa el grado de economía, eficiencia y eficacia); 4. Forense (se utiliza para prevenir o descubrir actos de corrupción en los sectores público y privado). FORENSE La palabra forense viene del adjetivo latino forensis, que significa "perteneciente o relativo al foro o plaza pública en las antiguas ciudades romanas". En dicho foro se llevaban a cabo juicios para determinar si una persona a la que se acusaba de algún delito era o no culpable. Este término está relacionado con el derecho y la aplicación de la ley. El trabajo forense lo lleva a cabo un profesional especializado para asistir al juez en asuntos legales para lo cual éste tenga competencia, y en el caso del sector gobierno, proporciona los informes y el dictamen correspondiente para motivar y probar los hechos delictuosos que se hubiesen cometido. Forense es: "El que ejerce su función por delegación judicial o legal". Si aplicamos este vocablo a la rama contable y a la de auditoría como parte de sus procedimientos, concluiremos en que la auditoría forense es la investigación que se realiza con el propósito de encontrar pruebas y evidencias de tipo penal para demostrar un fraude o delito cierto. Ciencias Forenses: Aplicación de las leyes de la naturaleza a las leyes de los hombres. 4 Principales objetivos de las ciencias forenses: 1. Efectuar la investigación pertinente con el propósito de descubrir el origen e identificar al presunto responsable de algún delito o irregularidad; 2. Identificar, reconstruir y determinar la forma, las herramientas y el método utilizados con los cuales el responsable llevó a cabo una acción u omisión tipificada y penada por las leyes; 3. Cuantificar el daño, detrimento, perjuicio o menoscabo causado en el patrimonio o en la persona; 4. Descubrir las vulnerabilidades en el control interno que provocaron o permitieron el delito, y establecer las medidas de corrección adecuadas para evitar nuevos fraudes o irregularidades; Estos objetivos están dirigidos para exponer al asunto a las autoridades administrativas y judiciales competentes, para que procedan a verificar la verdad real de los hechos y apliquen las sanciones que correspondan. CRIMINALÍSTICA Es una disciplina que aplica conocimientos, métodos y técnicas de investigación de las ciencias naturales; analiza los documentos y las evidencias involucradas con un presunto delito con el propósito de reconstruir los hechos, demostrarlos e identificar al responsable. El conjunto de disciplinas auxiliares que la componen se denominan ciencias forenses. Cualquier ciencia se convierte en forense en el momento que sirve al procedimiento judicial. Causa y origen de la Auditoría Forense. El “Código de Hammurabi”, redactado por el rey de Babilonia aun cuando no es una norma completa, es el primer documento conocido por el hombre que trata sobre leyes; en ellas el legislador estableció normas y reglas básicas sobre diversas actividades; contiene además las acciones y omisiones que se consideraban delitos y define también las penas correspondientes aplicables al delincuente. LA AUDITORÍA FORENSE. Es una especialidad de la Criminalística, toda vez que aplica métodos y procedimientos de investigación de presuntos hechos ilícitos, con fundamento en los principios criminalísticos. De igual forma, se le considera como una especialidad de la auditoría, ya que aplica métodos y procedimientos de investigación de hechos, con fundamento en técnicas y normas de auditoría. Auditoría forense es un examen crítico y sistemático especializado en descubrir fraudes y otros delitos en el desarrollo de las funciones públicas y privadas. Estudia las acciones u omisiones que se han sometido a investigación criminal, con el propósito de descubrir a los responsables del delito y analizar científicamente los hechos investigados. En el ámbito del sector público, la auditoría forense utiliza procedimientos de investigación para reunir y presentar información financiera, contable, legal, administrativa, documental e impositiva, de una manera que puedan representar pruebas y evidencias contundentes en 5 contra de los perpetradores de un crimen económico, y determinar la cuantificación de los perjuicios económicos causados. Los especialistas en este campo llevan a cabo la investigación pertinente y recopilan información para comunicarla a todos aquellos entes que no participan en la gestión, como por ejemplo, las entidades que le efectúan aportaciones (gobierno federal o en su caso gobierno estatal, donadores, entidades no gubernamentales extranjeras, apoyos económicos de fondos internacionales, etc.), proveedores, servidores públicos, autoridades fiscales, y los órganos de fiscalización (Contralorías y Auditoría Superior), los cuales necesitan la información que se deriva de la auditoría para determinar si existe fraude o cualquier otro tipo de delito. La auditoría forense es aplicable también, además del fraude, en la investigación del lavado de dinero, actos de corrupción, declaraciones falsas, discrepancia fiscal, falsificación o alteración de documentos, reclamaciones a entidades públicas por daños patrimoniales falsos, enriquecimiento ilícito, etc. LA CORRUPCIÓN EN EL SECTOR PÚBLICO. El artículo 108 de la Constitución Política de Jalisco obliga a todos los servidores públicos del Estado y de los municipios, para que antes de asumir el desempeño de sus cargos, rindan protesta formal de cumplir y vigilar el cumplimiento de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos, la Constitución local y todas las leyes que de ellas emanen. Para los efectos de las responsabilidades, la Constitución Política de Jalisco considera servidores públicos en general, a toda persona que desempeñe un cargo o comisión de cualquier naturaleza en la administración pública del Estado o de los municipios, así como a quienes presten servicios en las paraestatales, los cuales serán responsables en materia política, penal, administrativa y civil, por los actos u omisiones en que incurran por el desempeño de sus respectivas funciones. Tanto nuestra Carta Magna como la Constitución de Jalisco establecen que ninguna persona podrá hacerse justicia por sí misma, ni ejercer violencia para reclamar su derecho; sin embargo, en ambos documentos se consigna que todo ciudadano tiene derecho de denunciar, ante la autoridad competente y bajo su más estricta responsabilidad, aportando elementos de prueba, las conductas ilícitas en que hubiese incurrido cualquier servidor público. El tema que nos ocupa es “la corrupción” y en el ámbito de las instituciones públicas tiene que ver con prácticas de acción u omisión de funcionarios que utilizan su puesto para obtener beneficios y recompensas personales, que traen como consecuencia el olvido de los intereses colectivos. Es un uso arbitrario del poder. Es un fenómeno social a través del cual un servidor público es impulsado a actuar en contra de las leyes, de la normatividad y de las prácticas implementadas, a fin de favorecer intereses particulares. La Real Academia Española define este término de la siguiente manera: “En las organizaciones, especialmente en las públicas, corrupción es la práctica que consiste en la utilización de las funciones y medios de aquellas en provecho, económico o de otra índole, de sus gestores”. También se le ha definido como: el uso ilegítimo del poder público para el beneficio privado. Es todo uso ilegal no ético de la actividad gubernamental como consecuencia de consideraciones de beneficio personal o político. 6 De igual manera, la corrupción puede ser considerada como una forma de abuso de poder, material o simbólico, de uno sobre de otro. En la acción de corromper participan los siguientes factores: dos personas, un problema a resolver y un objeto material o simbólico, real o prometido que intermedia esta relación. La corrupción se manifiesta de diversas formas, como son: el uso de influencias, el soborno a funcionarios, la apropiación indebida de recursos públicos, la extorsión de parte del servidor público, el cohecho, el tráfico de influencias, la malversación de fondos, el enriquecimiento ilícito, el encubrimiento; la obstrucción de la justicia; el mal uso de un cargo o función con fines no oficiales, el nepotismo, el fraude, el pago de dinero a los funcionarios del gobierno para acelerar trámite o investigaciones, el desfalco, entre otros. El dinero es factor fundamental, tanto como fin o como medio generalmente está presente en las prácticas de corrupción. En la aplicación de la justicia encontramos casos de funcionarios que no solamente no respetan la ley, sino que utilizan la amenaza (velada o descarada) para perjudicar a un ciudadano (jueces, agentes del ministerio público, secretarios, etc.). Con la promesa de evitar dicho perjuicio, se solicita una “recompensa”, monetaria o en bienes materiales o personales. El hecho de que el funcionario público actúe transgrediendo la ley se puede calificar como acto de corrupción. El fenómeno de la corrupción conlleva múltiples efectos, ya que por ejemplo: desalienta la inversión y trae consecuencias económicas distorsionadoras de la producción, la comercialización y el consumo; jurídicamente afecta el proceso legal que debe llevarse para la impartición de justicia, alterando su equidad formal y el incumplimiento del tercer párrafo del artículo 1º., de la constitución federal respecto a que: todas las autoridades tienen la obligación de promover, respetar, proteger y garantizar los derechos humanos. Políticamente, deslegitima a los organismos públicos. Socialmente, afecta la integridad de los individuos y su propia condición humana. Financieramente, genera alteración en los presupuestos y el control del gasto público. Asimismo, el artículo 8 de la constitución federal en México, determina que los funcionarios y empleados públicos respetarán el ejercicio del derecho de petición, siempre que esta se formule por escrito, de manera pacífica y respetuosa al cual recaerá un acuerdo escrito de la autoridad a quien se le dirigió, dándola a conocer en breve término al peticionario. En estas solicitudes también se presenta el fenómeno de la corrupción porque algunos servidores públicos pretenden obtener beneficios particulares condicionando la emisión de los acuerdos o documentos solicitados a la entrega de dádivas u otro tipo de favores particulares. En el segundo párrafo del artículo 17 del mismo ordenamiento constitucional se determina que toda persona tiene derecho a que se le administre justicia por tribunales que estarán expeditos para impartirla en los plazos y términos que fíjen las leyes, emitiendo sus resoluciones de manera pronta, completa e imparcial, su servicio será gratuito, quedando en consecuencia, prohibidas las costas judiciales. Un ejemplo del incumplimiento de este precepto constitucional por parte de la autoridad, ocurre frecuentemente en el caso de algún automóvil que participó en un incidente de tránsito del cual se derivó una 7 averiguación previa y posterior consignación ante el juez penal. Éste, argumentando exceso de trabajo y otros motivos, retrasa la emisión de los oficios para solicitar los peritajes; fijar el monto de la fianza; definir las fechas de las audiencias; liberar el vehículo; etc.; esto ocasiona que el automóvil pueda durar más de 18 meses de depósito en algún “corralón” o depósito a cargo del gobierno con los respectivos costos en tiempo y dinero para su propietario. Caso contrario, si se acepta la pretensión del servidor público deshonesto, los referidos oficios se emiten en forma pronta y se resuelve el problema. Las causas que originan o propician la corrupción pueden ser, entre otras, las siguientes: a) Sueldos bajos de los servidores públicos; b) Exceso de trámites, regulaciones y requisitos para obtener licencias, autorizaciones, copias, cumplimiento de obligaciones, etc.; c) Discrecionalidad en la interpretación y aplicación de las normas y procedimientos; d) Falta de programas de capacitación profesional permanente a los servidores públicos e insuficientes planes de estímulos y recompensas; e) Nula vigilancia del cumplimiento de los valores éticos y morales; f) Legislación insuficiente, deficiente y omisa respecto a las responsabilidades y consecuencias de tipo penal y administrativo para quienes incurran en delitos; y la débil aplicación y/u omisión de las sanciones establecidas en las leyes; g) Inexistencia de un registro nacional de servidores públicos sancionados por incurrir en actos de corrupción. La fiscalización de la gestión y el uso de los recursos públicos por parte de los ciudadanos es muy limitada o prácticamente nula; los mecanismos de revisión que utilizan los entes fiscalizadores (Auditoría Superior federal, los estatales y los órganos internos de control) no han resultado ser los adecuados y en algunos casos el personal actuante es sobornado o amenazado; por lo tanto, es impostergable modificar los códigos penales para establecer sanciones más fuertes e intimidatorias para inhibir o por lo menos disminuir la práctica de la corrupción. RESPONSABILIDADES PENALES DE LOS SERVIDORES PÚBLICOS, EN JALISCO El Código Penal de Jalisco define al delito como el acto u omisión que concuerda exactamente con la conducta que, como tal, se menciona expresamente en dicho Código o en las leyes especiales del Estado. Los delitos pueden ser: Dolosos: cuando el agente quiere que se produzca total o parcialmente el resultado o cuando actúa, o deja de hacerlo, pese al conocimiento de la posibilidad de que ocurra otro resultado cualquiera de orden antijurídico. Culposo: cuando se comete sin dolo, pero por imprudencia o negligencia. Graves: aquellos que afecten de manera importante los valores fundamentales de la sociedad, con acciones u omisiones que generan mayor riesgo o con resultados de mayor peligro para la persona, bienes y familia del ofendido. 8 Son responsables de los delitos todos los que tomen parte en su concepción, preparación o ejecución, así como los que inducen o compelen directa o indirectamente a otro a cometerlo. También los que presten auxilio o cooperación de cualquier especie al autor del ilícito, por intervención posterior a su ejecución, siempre que ello sea consecuencia de un concierto previo que le haya dado impulso a la infracción penal. Si el servidor público forma parte de una asociación o banda de tres o más personas unidas con el propósito de delinquir, se considerará que participa en “Asociación Delictuosa” lo cual conlleva a penalidades graves. Para la individualización de las sanciones, el juez tomará en cuenta si el servidor público es trabajador de base o de confianza; su antigüedad en el empleo; sus antecedentes de servicio; sus percepciones; su grado de instrucción; y las circunstancias especiales de los hechos constitutivos del delito. Sin perjuicio de lo anterior, la categoría de servidor público de confianza será una circunstancia que podrá dar lugar a una agravación de la pena. Adicionalmente a las demás penalidades que se determinen, se impondrá al responsable la sanción de destitución de su empleo, cargo o comisión; y se le inhabilitará para trabajar como servidor público, hasta por seis años, notificando tal resolución al órgano del poder público que corresponda. Se considera que incurren en el delito de ejercicio indebido del servicio público, los servidores públicos que ejerzan las funciones de su empleo, cargo o comisión, sin haber tomado posesión legítima o sin llenar todos los requisitos legales; cuando continúe ejerciendo las funciones de un empleo, cargo o comisión, después de notificado sobre la revocación de su nombramiento o de la suspensión o destitución decretada, por quien tenga facultades para hacerlo; cuando fue nombrado por tiempo limitado, y continúe ejerciendo sus funciones después de cumplido el término por el cual se le nombró. Lo anterior, no comprende el caso en que al servidor público que deba cesar en sus funciones, se le ordene que continúe con ellas, entre tanto se presenta la persona que haya de substituirlo, siempre que la ley no lo prohíba; asimismo, incurre en este delito cuando ejerza alguna comisión, empleo o cargo, distinto del que realmente tuviese. El código punitivo en Jalisco califica como delito de abuso de autoridad cuando el servidor público pida auxilio a la fuerza pública o la emplee con el objeto de lograr el cobro de un impuesto o el cumplimiento de una resolución judicial; asimismo, cuando indebidamente, retarde o niegue a los particulares la protección o servicio que tenga obligación de prestarles, o impida la presentación o el curso de una solicitud; también, cuando ejecute, autorice o permita cualquier acto atentatorio a los derechos garantizados por la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos, y por la del Estado. De igual forma se catalogará en este tipo de delito cuando obtenga de un subalterno parte o todo el sueldo de éste, o le exija dádivas u otro servicio indebido; así como cuando, a sabiendas, autorice o contrate a quien se encuentre legalmente inhabilitado para desempeñar un empleo, cargo o comisión en el servicio público. Si la comisión del hecho no reporta beneficio económico se impondrá al responsable, de uno a cinco años de prisión. Si el beneficio económico no excede del equivalente a 196 días de salario mínimo, la penalidad es de 1 a 5 años de prisión y multa de 2 a 20 días de salario; si excede al monto referido, la pena es de 3 a 8 años de prisión y multa de hasta 196 días de salario. 9 Soborno: el funcionario recibe dinero o beneficios de un particular a cambio de brindar o facilitar un servicio público o hacer una excepción favorable a esta persona. Soborno también significa corromper a uno con dádivas para conseguir de él una cosa. Es cuando un ciudadano o una organización, entrega directa o indirectamente a un servidor público, determinada cantidad de dinero, con el propósito de obtener una respuesta favorable a un trámite o solicitud, independientemente si cumplió o no con los requisitos legales establecidos. Un ejemplo es el de un ex Contralor de cierto municipio de Jalisco, quien pidió dinero por autorizar ciertos trámites; renunció al cargo, sin embargo, no hubo acusación formal. En esta misma situación incurrió un ex Secretario de Obras Públicas del mismo municipio. Se tipifica como abandono del servicio público quien sin habérsele admitido la renuncia de una comisión, empleo o cargo, lo abandone sin causa justificada; y cuando, intencionalmente, abandone los servicios de vigilancia o custodia propiciando la comisión de un delito por ausencia, independientemente de la penalidad que le resulte como coautor. Colusión. El funcionario se asocia ilícitamente con proveedores, contratistas o arrendadores para adjudicar contratos o asignarlos directamente a cambio de beneficios y recursos ilícitos, o en ocasiones mediante concursos amañados. Esto es común no obstante la ley o normatividad correspondiente lo prohíba. Colusión se define como el convenio o pacto que se realiza en prejuicio de un tercero. En Jalisco se conoce el caso de un ex Secretario del Congreso de Jalisco quien autorizó contratos irregulares; en vista de que se publicitó dicha anomalía, renunció a su puesto y no se levantaron cargos en su contra. Misma irregularidad se presentó con un ex Secretario General de Gobierno mediante la compra a sobreprecio de chalecos antibalas. Fue exonerado por el Congreso local. De igual forma está el caso de un ex Alcalde en Jalisco quien adjudicó contratos de adquisiciones con sobreprecio a empresas de sus familiares. Pidió licencia a la alcaldía y más tarde fue exonerado por el Congreso. Peculado. El funcionario se apropia, mediante desvío o falsificación de documentos, de recursos o bienes del erario o el patrimonio público para su uso particular. Delito que consiste en el hurto de caudales del erario, hecho por aquel a quien está confiada su administración. Es la apropiación ilegal de bienes por parte del servidor público que los administra. Ex Gobernador de Coahuila fue acusado de peculado por desvío de recursos. Un ex Gobernador de Baja California Sur fue señalado de cometer este mismo ilícito por disponer de recursos públicos por 55 millones de pesos; estuvo detenido durante seis meses en el año 2012 y fue inhabilitado para ocupar cargos públicos por un periodo de seis años. Un ex Gobernador de Tabasco fue acusado por desvío de recursos, se puso a disposición de las autoridades; no hay proceso en su contra. Extorsión. Se refiere a las acciones que lleva a cabo el servidor público, cuando aprovechándose de su cargo y bajo la amenaza, sutil o directa obliga al usuario de un servicio público a entregarle también, directa o indirectamente, una recompensa. Extorsión es la acción y efecto de arrebatar y usurpar por la fuerza una cosa. Un ejemplo reciente lo conocemos de un ex regidor de cierto ayuntamiento en Jalisco quien exigió y recibió sobornos para gestionar la operación de un motel. Fue desaforado pero ganó el juicio interpuesto en su contra. Enriquecimiento ilícito. El tipo penal de enriquecimiento ilícito opera cuando se trata de un funcionario o servidor público al que no se le ha podido probar que haya cometido delito 10 contra la administración pública, pero sí se demuestra el incremento patrimonial no justificado significativo que se presume el mismo produjo. En el artículo 109 de la constitución política de México se establece: “las leyes determinarán los casos y las circunstancias en los que se deba sancionar penalmente por causa de enriquecimiento ilícito a los servidores públicos que durante el tiempo de su encargo, o por motivos del mismo, por sí o por interpósita persona aumenten su patrimonio, adquieran bienes o se conduzcan como dueños sobre ellos, cuya procedencia lícita no pudiesen justificar. Las leyes penales sancionarán con el decomiso y con la privación de la propiedad de dichos bienes, además de las otras penas que correspondan”. Fraude. El funcionario vende, alquila o hace uso de un bien cuya administración le es confiada. Los servidores públicos, entre otras acciones, venden o hacen uso ilegal de bienes del gobierno que les han confiado para su administración. Ejemplos de tipos de fraude cometidos por servidores públicos. a) Mal manejo en la recepción y custodia de los bienes que reciben de los proveedores del gobierno, lo que ocasiona el deterioro y la no utilización de los materiales; por ejemplo; materiales de construcción (cemento, cal, varilla, arena, yeso, etc.) (Alimentos frescos como carnes, verduras, pan, tortilla, etc.) (Medicamentos e instrumental médico quirúrgico, etc.); b) Adquisición de mercaderías no necesarias y utilizables en la dependencia u organismo gubernamental; c) Exceso en el volumen de compra, lo que ocasiona que se requiera almacenamiento en gran escala en bodegas rentadas y en consecuencia en gasto por este concepto; d) Aceptación o solicitud de sobornos o cohechos ya sea por emitir el pedido o por autorizar el pago en menor tiempo que el establecido en el reglamento de adquisiciones; e) Conflicto de intereses por tratarse de proveedores con los cuales el servidor público tenga parentesco, asociación, estimación o interés; f) Llevar a cabo pedidos de bienes o servicios ficticios o alterados en cantidad y/o en calidad y precio; g) Pagar facturas ficticias a proveedores registrados en el padrón de gobierno, por mercancía o servicios no recibidos; h) Pagos duplicados a proveedores con el propósito de recibir algún beneficio de tipo económico o en especie; i) Préstamo para uso personal de herramientas, instrumental médico quirúrgico, computadoras, automóviles, inmuebles e instalaciones, mobiliario de oficina y de otros muebles; j) Utilización de recursos financieros en cuentas personales con el propósito de ganar intereses y posteriormente devolver sólo el capital; 11 k) Aparecer en nómina, cobrar sueldos y gratificaciones sin llevar a cabo ningún trabajo; a estas personas se les denomina “aviadores”; l) Disfrutar aguinaldo y vacaciones sin tener derecho a ellas, y permisos por enfermedad no reales; m) Alteración o falsificación de documentos de ingresos por importes menores a los realmente cobrados por concepto de contribuciones o donaciones; n) Adquisición fraudulenta de terrenos que fueron donados con motivo de la autorización de fraccionamientos nuevos; o) Sustracción constante de diversa mercancía (alimentos, medicamentos, uniformes, artículos de oficina, computadoras, vales de gasolina, etc. p) Autorizar el cambio de uso de suelo para la construcción de casas, condominios, centros comerciales, instalaciones deportivas, giros negros, etc. q) Enajenación de bienes de derecho privado y de derecho público, ya sea en forma indebida o a precios más bajos que los del mercado. Ejemplos de tipos de fraude cometidos por proveedores del gobierno. a) Mercancía entregada con faltantes; b) Manipulación de licitaciones en las que existe colusión con algún servidor público involucrado en el proceso de adquisición; c) Facturación incorrecta respecto de las unidades, la calidad, los precios, espesor, dimensiones, etc. d) Envío de mercancía a domicilios particulares de algún servidor público, con cargo al gobierno respectivo. Otros fraudes. Recientemente se han presentado casos de personas que defraudan a las autoridades fiscales mediante la solicitud de devolución de impuestos por supuestos saldos a favor del impuesto sobre la renta. El modus operandi de los delincuentes se basa en la suplantación de la identidad de algún contribuyente, a través del uso indebido de la contraseña de su firma electrónica (FIEL) o de su clave de identificación electrónica confidencial fortalecida (CIECF) y presenta en forma anticipada la declaración anual de ese impuesto, con el objeto de reportar saldo a favor con información ficticia y solicitar que el depósito respectivo se haga a la cuenta bancaria del defraudador. Lamentablemente cuando el contribuyente afectado de la suplantación de su identidad se da cuenta del fraude, el depósito ya está efectuado a la cuenta del delincuente, colocándolo en un estado de inseguridad jurídica, pues ya no puede obtener su devolución. El auditor forense, contratado por el ente público afectado, está capacitado para llevar a cabo la investigación pertinente, cotejando los datos declarados por el delincuente y los reportados por el patrón o por los clientes del contribuyente que supuestamente resultó con saldo a favor; asimismo, el auditor verificará que la cuenta bancaria que se manifiesta en la 12 solicitud, corresponda efectivamente a dicho contribuyente. De las conclusiones que dictamine el auditor forense, se desprenderá la acción fraudulenta que servirá de base para interponer la querella. CONTABILIDAD GUBERNAMENTAL En México se expidió la Ley General de Contabilidad Gubernamental, la cual en su artículo 2 determina que: “Los entes públicos aplicarán la contabilidad gubernamental para facilitar el registro y la fiscalización de los activos, pasivos, ingresos y gastos y, en general, contribuir a medir la eficacia, economía y eficiencia del gasto e ingresos públicos, la administración de la deuda pública, incluyendo las obligaciones contingentes y el patrimonio del Estado”. “Los entes públicos deberán seguir las mejores prácticas contables nacionales e internacionales en apoyo a las tareas de planeación financiera, control de recursos, análisis y fiscalización”. Por tanto, el auditor forense utilizará como herramienta lo establecido en esta ley y le servirá de base para llevar a cabo su trabajo de investigación. Por su parte, el artículo 16 de dicho ordenamiento define que: “El sistema, al que deberán sujetarse los entes públicos, registrará de manera armónica, delimitada y específica las operaciones presupuestarias y contables derivadas de la gestión pública, así como otros flujos económicos. Asimismo, generará estados financieros, confiables, oportunos, comprensibles, periódicos y comparables, los cuales serán expresados en términos monetarios”. Con esta información, el auditor forense podrá planear y definir las partidas presupuestales que revisará dando prioridad a las que sean de mayor cuantía y a las que de manera específica le hubiesen indicado revisar o le parezcan necesarias o convenientes darles seguimiento en búsqueda de fraude o delito. En México se promulgó y está vigente la Ley Federal para la Prevención e Identificación de Operaciones con Recursos de Procedencia Ilícita, cuyo objetivo es establecer las reglas para prevenir y detectar actos u operaciones que involucren recursos de procedencia ilícita, así como recabar elementos útiles para investigar y perseguir los delitos de operaciones con recursos ilícitos, e identificar las estructuras financieras de las organizaciones delictivas y evitar el uso de los recursos para su financiamiento. Como parte de las herramientas que el auditor forense tiene para investigar los patrones de conducta que pudieran estar relacionados con operaciones con recursos de procedencia ilícita, se encuentran las guías y manuales técnicos para la formulación de dictámenes en materia de análisis financiero y contable que requieren los agentes del Ministerio Público, en el cumplimiento de sus funciones de investigación y persecución de los delitos de operaciones con recursos de procedencia ilícita. Para reforzar las facultades del gobierno federal en materia de combate a la corrupción, en el artículo 113 de la constitución federal mexicana se establece la figura del Sistema Nacional Anticorrupción, la cual es la instancia de coordinación entre las autoridades de todos los órdenes de gobierno competentes en la prevención, detección y sanción de responsabilidades administrativas y hechos de corrupción, así como en la fiscalización y control de recursos públicos. Por otra parte, en el artículo 81 de la Ley General de Transparencia y Acceso a la Información Pública se define que las personas físicas o morales que reciban y ejerzan recursos públicos o realicen actos de autoridad, cumplirán con las obligaciones de 13 transparencia y acceso a la información directamente o a través de los sujetos obligados que les asignen dichos recursos o, en los términos de las disposiciones aplicables. Estas normas son una oportunidad para hacerlas valer ya que con motivo de las campañas políticas en las que los candidatos manifiestan promesas de honestidad, transparencia en el manejo de recursos públicos, rectitud en su actuación como servidores públicos, cercanía con la ciudadanía, e infinidad de “atributos personales” que ellos mismos se auto aplican, es cuando más se requiere la vigilancia aplicada por profesionales en auditoría forense, para escudriñar el pasado de dichos candidatos y también de los integrantes de sus equipos políticos, con el propósito de conocer cuáles han sido los resultados de su gestión en cada uno de los puestos burocráticos que han desempeñado y cuál ha sido el crecimiento de su patrimonio, de esta forma, estaremos en posibilidad de tener elementos de prueba sobre los actos de corrupción, de fraudes, de enriquecimiento ilícito y en no pocos casos, de lavado de dinero, y evitaremos que esas personas permanezcan en el sector público de manera impune. En consecuencia de lo anterior, en México tenemos la oportunidad y los fundamentos legales para que el auditor forense especializado en el sector público, lleve a cabo su trabajo en la investigación de los delitos que atentan contra el patrimonio y erario de los entes de gobierno y presente dictámenes y las pruebas correspondientes con las cuales se apoye el ministerio público y el juez penal para castigar las conductas antisociales de los delincuentes que intervinieron en los delitos. La sociedad confía en que el trabajo eficiente y profesional del contador público especialista y experto en esta materia, le dé la seguridad necesaria para que los políticos dejen de realizar sus acciones corruptas y que los recursos públicos verdaderamente se destinen para lo que fueron aprobados en los presupuestos de egresos y etiquetados para partidas específicas. Como resultado de lo comentado en este trabajo, se requiere que los órganos internos de control, los entes fiscalizadores y los auditores forenses especializados en sector gobierno, realicen su trabajo de manera profesional sin importar de cuál servidor público se trata, determinando el daño patrimonial y las conductas antisociales en que incurrieron, aportando los elementos de prueba, contundentes, para que el agente del ministerio público correspondiente disponga del material suficiente y competente para consignar la averiguación previa al juzgado y éste a su vez cumpla con las etapas del procedimiento aplicable y emita la sentencia condenatoria que resulte. Por último, la auditoría forense aplicada en el sector gobierno debe incluir dentro de sus herramientas y procedimientos, entre otros, los siguientes: a) Revisión de los formatos para presentar la declaración anual de los servidores públicos sobre su situación patrimonial para determinar si los datos y cifras que ahí se consignan, son suficientes para llevar a cabo la verificación y su vinculación con lo manifestado en años anteriores y con la demás información recabada por otros medios; de tal suerte que todos los bienes, deudas, ingresos y egresos tengan secuencia y puedan ser auditables. b) Deberá ponerse especial atención en la posible discrepancia patrimonial entre los ingresos; los egresos; las inversiones en bienes muebles e inmuebles efectuadas 14 año con año incluyendo acciones y partes sociales de personas jurídicas; la enajenación de este tipo de bienes; la continuidad y apertura de cuentas bancarias y de inversión a plazo a nombre del funcionario público y de su parentela, la adquisición de moneda extranjera, los viajes dentro del país o al extranjero, el número de dependientes; los gastos ordinarios de manutención de un hogar y las erogaciones para sufragar vehículos (colegiaturas, gasolina, pólizas de seguros, mantenimiento, accidentes, etc.). c) Como documentos fundatorios para sostener una posible discrepancia entre el total de los ingresos familiares y las erogaciones, pueden mencionarse, entre otros, a los siguientes: la declaración patrimonial presentada ante el órgano interno de control; la declaración fiscal presentada ante la autoridad hacendaria; los estados de cuenta bancarios; los datos del registro público de la propiedad y del comercio; y las demás pruebas y evidencias que se obtengan para determinar dicha discrepancia. En consecuencia de lo anterior, el total de los egresos dará la pauta para definir los ingresos presuntos. CONCLUSIÓN Todos los ciudadanos estamos obligados a denunciar los actos de corrupción, más aun cuando se trata de los que incurren los servidores públicos; lamentablemente y tomando como referencia todos los casos que nos hemos enterado y luego vemos cómo han terminado (sin sanciones), es cuando sentimos frustración tanto de los ordenamientos legales vigentes como de las autoridades que tenemos; en consecuencia requerimos proponer los ajustes a la normatividad administrativa y penal para endurecer los castigos. Los gobernantes de la mayoría de los países están conscientes que la corrupción es un problema muy grande y difícil de erradicar; y para tomar acuerdos conjuntos, organizan reuniones cumbre, establecen programas anticorrupción, promulgan nuevas leyes, etc., pero la realidad es que no existen resultados favorables tangibles y contundentes que muestren la disminución de este fenómeno. Una parte de la solución es denunciando estas acciones y evitar caer en ellas ya que los causantes de este problema somos la población que accede a estas prácticas. El Código Penal Federal en México, así como el código punitivo vigente en el estado de Jalisco, incluye los delitos en que incurren las personas, ya sea de manera dolosa o culposa, por acción u omisión y cuyas penas y medidas de seguridad pueden ser prisión, tratamiento en libertad, trabajo en la comunidad, sanción pecuniaria, amonestación, apercibimiento, suspensión o privación de derechos, decomiso de bienes correspondientes al enriquecimiento ilícito, etc. No obstante que dichos ordenamientos contemplen las conductas que derivan en delito y que estén establecidas las penalidades, son muy pocos los casos en los que los servidores públicos han sido sentenciados a la pena corporal y/o a la restitución de los bienes que dispusieron para su provecho; esto es así como resultado de averiguaciones previas mal integradas por el ministerio público; por trabajo deficiente en los juzgados penales; por amenazas a quienes imparten la justicia; por arreglos políticos; por encubrimientos, etc. 15 GUÍA DE DISCUSIÓN 1.- ¿Cómo se lleva a cabo la Auditoría Forense en sus Países? 2.- ¿Qué sanciones administrativas se aplican a los servidores públicos cuando cometen alguna conducta indebida? 3.- ¿Se presentan declaraciones anuales de los servidores públicos y se revisan a fondo para detectar el posible enriquecimiento ilícito? REFERENCIAS BIBLIOGRÁFÍCAS (vigente en el año 2015) Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos. http://www.diputados.gob.mx/LeyesBiblio/ref/cpeum.htm Constitución Política del Estado de Jalisco. http://congresoweb.congresojal.gob.mx/BibliotecaVirtual/LeyesEstatales.cfm Código Penal Federal. http://www.diputados.gob.mx/LeyesBiblio/ref/cpf.htm Código Penal del Estado de Jalisco. http://congresoweb.congresojal.gob.mx/BibliotecaVirtual/LeyesEstatales.cfm Ley Federal para la Prevención e Identificación de Operaciones con Recursos de Procedencia Ilícita. http://www.diputados.gob.mx/LeyesBiblio/ref/lfpiorpi.htm Ley General de Transparencia y Acceso a la Información Pública. http://www.diputados.gob.mx/LeyesBiblio/ref/lgtaip.htm Ley General de Contabilidad Gubernamental. http://www.diputados.gob.mx/LeyesBiblio/ref/lgcg.htm Dirección de Correo electrónico: [email protected]; [email protected]; [email protected]; 16 CURRÍCULUM VITAE DE AUTORES: LUCÍA LORENA DE SANTIAGO GONZÁLEZ Maestra en Impuestos en la Universidad de Guadalajara y CPC por ANFECA Docente en la Universidad de Guadalajara impartiendo materias de Tributación y Fiscales Miembro de la Comisión del Sector Gobierno en el Colegio de Contadores Públicos de Guadalajara Socio del Colegio de Contadores Públicos de Guadalajara, Jalisco, AC. Socio Fundador del despacho Prieto de Santiago y Asoc, S.C. Miembro de la Comisión del Sector Gobierno en la Asociación Interamericana de Contadores, Bienios: 2007-2009, 2011-2013, 2013-2015 JOSÉ LUIS MERCADO IBARRA Contador Público y Auditor, egresado de la Universidad de Guadalajara. Y Licenciado en Derecho, en la Universidad del Valle de México. Maestro en Impuestos, de la Universidad de Guadalajara. Miembro del Instituto Mexicano de Contadores Públicos, A. C., con registro de Contador Público Certificado. 17 Socio del Colegio de Contadores Públicos de Guadalajara, Jalisco, AC. Presidente de la Comisión Sector Gobierno del Contadores Públicos de Guadalajara, Jalisco, AC, periodo 2003 y 2004. Coordinador General en el 2003 y 2004, del Diplomado en Auditoría Gubernamental Estatal y Municipal que a partir del año 2003 se imparte en el Contadores Públicos de Guadalajara, Jalisco, AC. De 1981 a 2012 profesor de tiempo parcial en el Centro Universitario de Ciencias Económicas Administrativas (CUCEA) de la Universidad de Guadalajara. Profesor de la materia Contabilidad Superior en el Instituto Tecnológico de Estudios Superiores de Occidente (ITESO), durante 2 dos semestres. Director de Auditoría a Dependencias del Ejecutivo y Empresas Paraestatales, de la Contaduría Mayor de Hacienda de Jalisco, durante el periodo de junio de 1995 a mayo de 1997. Asesor externo del Contador Mayor de Hacienda del Congreso del Estado de Jalisco de agosto 2001 a diciembre 2002. Expositor en diferentes cursos, seminarios y Diplomados en materia fiscal y en contabilidad y auditoría gubernamental. Socio de Despacho Mercado Ibarra, SC, Contadores Públicos, Auditores y Abogados. Esta firma ha llevado a cabo, entre otros trabajos, auditorías a entidades públicas, estatales y municipales. Perito en materia contable, fiscal y auditoría, en el Poder Judicial de Jalisco, durante 6 años. Expositor en la UNIVA, UAG, Sindicatos, Contraloría de la Universidad de Guadalajara, Auditoría Superior del Estado de Jalisco; y varias entidades más. SEUDÓNIMO: JOLULO 18