216028. . Tribunales Colegiados de Circuito. Octava Época. Semanario Judicial de la Federación. Tomo XII, Julio de 1993, Pág. 279. PRUEBAS EN SEGUNDA INSTANCIA. SU FALTA DE DESAHOGO, CUANDO FORMAN PARTE DE LOS HECHOS QUE CONSTITUYEN LA LITIS EN APELACION. Si bien el artículo 448, fracción I, del Código de Procedimientos Civiles del Estado de Jalisco, permite el ofrecimiento y admisión de pruebas en la alzada cuando por cualquier causa inimputable al que la solicitare no hubiere podido practicarse en primera instancia toda o parte de la que hubiese propuesto; también lo es, que este dispositivo no cobra aplicación cuando la falta de desahogo de las probanzas forma parte de los hechos que constituyen la litis de segunda instancia, ya que en esta hipótesis la cuestión planteada debe ser materia de estudio al dictarse la sentencia en la apelación, que de acuerdo con lo dispuesto por el artículo 427 del citado código, de llegar a prosperar, traería como consecuencia que se revocara la sentencia combatida y se ordenara la reposición del procedimiento a fin de que se recibieran las pruebas cuya práctica quedó inconclusa. PRIMER TRIBUNAL COLEGIADO EN MATERIA CIVIL DEL TERCER CIRCUITO. Amparo directo 857/92. Alfonso Manuel Veraza Matos. 25 de enero de 1993. Unanimidad de votos. Ponente: José de Jesús Gudiño Pelayo. Secretario: Alfredo López Cruz. Nota: Por ejecutoria de fecha 23 de junio de 2004, la Primera Sala declaró inexistente la contradicción de tesis 146/2003-PS en que participó el presente criterio. -1-