lo primero es lo primero

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Afio X I .
MADRID I.» DE DICIEMBBIB DE 1903.
Núdi. 4ft.
Se publica los días l . ' j ' S , 16 y 2 4 d e cada meis.
PRECIOS DE SUSCRIPCIÓN
<PAGO A D E L A N T A D O )
• • Sapt&a: • • mu, 1 poeta.—Vn aemMtre, 6.—Un «Ss, 10.—Cltritmar, un «Sa, 15.—Extnu^tro, M., I».
Rt i,ccióii: Calle del Pez, ntim. 40.—Madrid.
DISECTOR
EXCMO. SR. D. RAMIRO ALONSO DE V I L L A P A D I E R N A
L a e*rr<W|MMé«>H«l« mm atrígiri
¿ I » . C E F E R M O H Ó D É Í Í A H HljftOZ,
A d m i a l s t r a d a r <l« ente |»erl«4le«, e a l l e 4 e l P e s , náat, MO.
S U M A R I O
I. Lo primero es lo primero—II. Sección oficial.—III. Sueltos y ooticias.
LO PRIMERO ES LO PRIMERO
<ConolDSÍóu)()).
Después de negar al recluso suficiente aire para sus pulmones, tras de
no proporcionarle trabajo con que moralizarse y con que mejorar su escaca
alimentación, no pe le concede lo necesario para su aseo, se fija ai vestuario una duración que en manera alguna puede alcanzar, y se le somete, por
economizar una peseta, á <5tras privaciones.
Pensar en Escuelas eomme ilfmt cuando en vez de Prisiones eólo existen jpetrera*; cuando no hay suficiente número de Vigilantes para evitar
fugas y colisiones; cua' ^o falta al recluso trabajo y aun jabón suficiente
para lavarse; cuando e .>s enfermerías escasean las medicinas y es imposible mudar las sábanas con la frecuencia que requiere la higiene; cuando
el escaso y antiquísimo petróleo y aceite, con detrimento de la vigilancia,
impiden distinguir los bultos; cuando, en fin, faltan tantas cosas de im
prescindible necesidad, no resulta cuerdo destinar el dinero á reformas que,
como la Escuela, no entra en la categoría de las indispensables.
Cuando se medita que de 1.600 individuos de que se componejgl Cuerpo
hay 920 Vigilantes terceros, ó sea más del 66 por 100 de todo.el Cuerpo,
que perciben menos de l.OOO pesetas de sueldo anual, y que iswtre estos
funcionarios hay algtínus que tienen 250 peseíasde haber; cuando se piensa
que más del 87 por lOO del número total de empleados de Prisiones no al(1)
Véase el nfim. 44, pág, 4*77 y «iguientes.
,
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canzan el sueldo de 1.500 pesetas y más del 93 por 100 el de 2.000 pesetas;
cuando se considera que tan mezquina retribución es percibida en muchos
casos con un atraso inconcebible, y mermado por frecuentes y costosos
traslados; cuando se reflexiona que no bastan diecisiete años de antigüedad en la categoría para pasar de 1.500 pesetas de sueldo á 2.000 ó de 1.000
á 1.250; cuando se tiene presente todo esto, el duro y peligroso cometido
de los funcionarios, etc., etc., no pueden menos de sentirse indignados á
la vez, los pobres empleados de Prisiones y los contribuyentes, á la vista
de proyectos tales como el de la Escuela.
Dice el Sr. Canalejas en el preámbulo del decreto de que es autor,
decreto que está muy lejos de parecerse al del Sr. Dato, que el Cuerpo de
Prisiones «no tiene cumplido desenvolvimiento, porque falta en él la función inspectora, que es la verdaderamente selectiva, la que depura, la que
crea instinto de conservación y forma ideales de colectividad»
No negaremos que existe alguna otra reforqpa tan urgente como la Inspección; pero ésta ee precisa en tanto que la Escuela, según sus más e
siastas partidarios — excepción hecha del Sr. Dato,— no pasa de ser'iveniente.
aA ninguna persona conocedora de las verdaderas necesidades dei ÍB
Prisiones, se le ocurriría anteponer la Escuela á la Inspección.
Es sensible, altamente sensible, que en vez de dedicar el tiempo al estudio de proyectos cuya utilidad se discute, no dediquen los Ministros su
actividad á otras reformas cuya bondad es univerealmente reconocida, tales como la reorganización del trabajo, la reforma de los edificios, el aumento del personal, el establecimiento del Patronato, la clasificación de las
Cárceles, el turno para la provisión de cargos, la creación de la Inspección, etc.
Si en las cuestiones oficiales procediesen los Ministros con Igual prudencia que en sus asuntos particulares, la Escuela ocuparía en la lista, de
las reformas el vigésimo lugar. Si en las cuestiones administrativas imperase igual criterio que en las cosas ordinarias de la vida, antes de pensar
en la creación de escuelas, se trataría de poner remedio al estado de crónica rebelión en que, por falta de medios, ee halla alguna Prisión,
Para que pueda ser un hecho la Escuela, el Sr. Dato quisiera privar al
Cuerpo de Prisiones de los derechos que adquirieron sus individuos raediante examen, vulnerando para esto:
El art. 15 del Decreto de creación del Cuerpo.
El art. 2." del Real decreto de 13 de Junio de 1886.
El art. 12 del Real decreto de 13 de Diciembre dé 1886,
El art. 13 del Real decreto de 11 de Noviembra de 1889,
El art. 8.' del Real decreto de 16 de Marzo de 1891.
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El decreto de que es autor el Marqués de Teverga (no recordamos ahora
«1 articulo).
El decreto del Sr. Dato ha producido un efecto deplorable en el Cuerpo
•de Prisiones, que á pesar de la sennatez de que ha dado elocuente prueba, no
se aviene á ser desposeído de sus derechos. En cualquier otro Cuerpo donde
se rinde menos culto á la disciplina, el acto del ex Ministro de Gracia y
Justicia hubiera dado lugar á protestas ruidosas.
Por no hacer interminable este escrito no repetiré aquí lo dicho en el
número de esta publicación correspondiente al día 8 de Junio del año
•actual.
Si el Estado no se declara en bancarrota, no puede dignamente dejar
de cumplir las concesiones que ha hecho, y menos todavía lo que convino
•en las convocatorias.
Es tan extraño todo cuanto pasa en este asunto, desde el principio
hasta el fin, que confieso no me ha producido* extrañeza una carta que
acabo de recibir y queme obliga á copiar aquí el art. 30 del Código civil,
<|ue dice así:
tPara los efectos civiles sólo se reputará nacido el feto que tuviere
figura humana y viviere veinticuatro horas enteramente desprendido del
fieno materno.»
No soy Abogado é ignoro, por lo tanto, si en Derecho administrativo
hay embriones con derechos adquiridos, aunque bien pudieran existir
«stos monstruos merced á un sistema de compensación.
Ruego al benévolo lector me dispense si trato en tono humorístico
«iertas cosas. Las hay que sólo tienen de serias lo que tienen de tristes,
GREGORIO Y A G Ü E .
Tarragona y Noviembre, 1908.
SECCIÓN OFICIAL
B e a l decreto de 9 de Noviembre de 1903, autorizando á la Dirección
general de Prisiones para el establecimiento de Economatos administrativos destinados á facilitar á los empleados y reclusos los
suministros suplementarios de alimentación y mercancías que se
estimen necesarios (1).
REGLAMENTO DE ECOlVOMWüS ADMINISTRATIVOS DE LAS PRISIONES
CAPÍTULO PRIMERO ,
De la gestión del
Economato.
Artículo 1.° Cuando la Dirección general de Prisiones acuerde establecer un Economato administrativo, lo comunicará al Director ó Jefe de la
(1) Véase el iiúmero anterior, pág. 481.
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Prisión en que haya de implantarse, para que inmediatamente proceda á>
constituir la Junta del Economato.
Art. 2 •* La Junta del Economato sifi demora alguna, acordará: la designación del local, las obras de instalación, las adquisiciones del utensilionecesario y el plan general de organización de este servicio en todos los extremos que deba comprender.
Art. 3.° Acordará igualmente la Junta el sistema de aprovisionamientoque mejor le parezca de entre los más beneficiosos y la cuantía de las adquisiciones, fijándose para esto último en el cálculo probable del consumoen un determinado tiempo y en la posibilidad de conservación de los géneros de comercio.
Art. 4.° Previsto lo que anteriormente se indica, procederá la Junta á<
la designación del personal.
Será este: un empleado del Establecimiento que reúna las mejores condiciones y aptitudes para este servicio á juicio de la Junta; y
El número de auxiliares reclusos que se conceptjSe indispensables, de
signándolos la Junta teniendo en cuenta los antecedentes que los abonen
Art. 5.° Una vez en función el Economato, estará todo lo que á este
servicio se refiera bajo la inmediata dependencia de la Junta, cuyos acuer
dos, en todas las incidencias y pormenores, serán siempre efectivos dentro
de las prescripciones reglamentarias.
Art. 6.° La Junta se reunirá en los días 1.°, 10 y 20 de cada mes, y
cuantas veces se conceptúe necesario á juicio de su Presidente, para tratar
de cuanto se relacione con el funcionamiento del Economato y de la formalización y rendición de cuentas.
Art. 7.* Los acuerdos de la Junta se tomarán por mayoría de votos,
consignándose, de igual modo que las deliberaciones, en el acta, insertaen el correspondiente libro, firmada por el Secretario y autorizada conel V.° B.° del Presidente.
Art. 8.° Las reclamaciones respecto del empleado y auxiliares del Eco
nomato, se harán á la Junta, que resolverá lo procedente, y dará cuenta,,
según la importancia de las resoluciones, ó á la Junta local ó á la Dirección general de Prisiones.
Art. 9.° Independientemente de lo que en otros artículos de este Reglamento se especifica, la Junta dará conocimiento á la Dirección general:
a) De la constitución del Economato y del plan que se establezca.
6) Del nombramiento y separación del empleado y de los reclusos auxiliares.
Art. 10. El Negociadft de suministros de la Dirección general de Prisiones entenderá en cuanto se refiera á la organización y funcionamiento d&
los Economatos.
Art. 11. Anualmente la Junta de cada Economato enviará á la Dirección general de Prisiones un informe detallado que abarque todo el deseo-
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volvimiento de este servicio, y con estos informes redactará el Negociado
de Suministros una Memoria general.
CAPÍTULO II
Del procedimiento para la venta.
Art. 12. El Economato se instalará de modo que los reclusos, para hacer las compras, no puedan salir de rastrillos, ni entrar en la Prisión las
personas extrañas á la misma.
Art. 13. El Economato funcionará tan sólo en las horas que se conceptúen indispensables para el suministro diario, señalándolas previamente
la Junta, quedando terminantemente prohibida la expendición de géneros
fuera de esas horas.
í
Art. 14. Podrán comprar en el Economato:
1.° Los reclusos que tengan tarjeta de abono, ya por sí, ya por un encargado autorizado para ello.
a.» Los empleados del Establecimiento ó sus familias, que tengan tarjeta de abono.
Art. 15. Queda terminantemente prohibido vender géneros del Economato á otras personas que las autorizadas en el artículo anterior, y vender
por otro procedimiento que el de la tarjeta de ai>ono.
Art. 16. Las tarjetas de abono que se facilitarán á los reclusos, serán de
tres coloree: azul, verde y encarnado.
Estarán divididas en todo su alrededor ó en círculos numerados correlativamente para ser taladrados, ó en partes trepadas, con igual numeración»
para ser escindidas.
La división de cada tarjeta será en veinte partes, equivaliendo cada
parte de la azul á 5 céntimos, la de la verde á 10 céntimos y la de la encarnada á 25 céntimos.
En el centro de la tarjeta se consignará el nombre y apellidos del abonado, y otras indicaciones necesarias si así lo acordase la Junta.
Art. 17. Las tarjetas de abono serán facilitadas conforme al servicio de
Depositarla ertablecido por el Real decreto de 22 de Abril último, solicitándolas los interesados y acordando la Junta local su concesión.
Art. 18. La Junta de Economato acordará qué clase de tarjetas de abo
no se han de facilitar á los empleados y la manera de adquirirlas.
Art. 19. El Economato cobrará los géneros que expenda al por menor,
taladrando ó escindiendo el valor representativo de cada parte de la tarjeta
de abono, y éstas serán recogidas por el Economato cuando se agote todo
BU valor.
Art. 20. El Economato hará las liquidaciones definitivas con la Depositaría y consignará en la Caja de la Administración del Establecimiento
la parte correspondiente á Rentas públicas ó á la Hacienda municipal 6
provincial.
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Art. 21. Para la liquidación á que se refiere el artículo anterior y para
la justificación de las cuentas del Economato, el empleado encargado de la
expendeduría anotará diariamente en un libro las ventas que realice, con
indicación de géneros, cantidades é importe, remitiendo^ diariamente un
resumen de esta anotación & la Junta del Economato, para conocimiento de
la misma y fines sucesivos.
Art. 22. También llevará el empleado encargado de la expendeduría
otro libro en que consten inscritos todos los abonados, teniendo correspondientemente á«su nombre las numeraciones de cada una de las tarjetas de
abono, á fin de tachar el número correspondiente al taladro ó escisión de
ló vendido.
Con las anotaciones de este libro se formalizará quincenal ó mensualmente la cuenta con la Depositaría.
Art. 23. En igual forma que el anterior, se llevará un libro para los
empleados, sin más efectos que el de conocer el estado de extinción de las
tarjetas de abono.
Art. 24. Toda venta se verificará previa presentación de la tarjeta ó
tarjetas de abono, que serán inmediatamente taladradas ó escindidas en la
parte correspondiente á lo vendido, prohibiéndose en absoluto hacerlo sin
«Btos requisitos.
Art. 26. El empleado 'encargado de la expendeduría, podrá valerse,
para todas las operaciones de la misma, de los auxiliares reclusos, pero
presenciando y vigilando él las distintas operaciones.
Art. 26. La Junta del Economato podrá nombrar un empleado suplente
para que sustituya al encargado de la expendeduría en ausencia y enfermedades.
Art. 27. Los pesos y medidas que se empleen en la expendeduría del
Economato estarán debidamente contrastados.
Art. 28. En la expendeduría del Economato se establecerá el servicio
4 e estanco, solicitándose á este efecto la oportuna autorización,
CAPÍTULO III
De las mercancías autorizadas y de las prohibidas.
Art. 29. Como regla general, podrá expenderse en el Economato todo lo
que el recluirlo necesite para necesidades verdaderamente legítimas y le
pueda ser reglamentariamente proporcionado, lo mismo en artículos de comer, beber y arder, que en otra clase de géneros.
Art. 30. También habrá en el Economato los artículos que necesiten
los empleados y sus familias, no siendo esos artículos de los que les esté
prohibido adquirir á los reclusos.
(Continuará).
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SUELTOS Y NOTICIAS
J u n t a de Prl«l«ne« de Htadrld.
En su última sesión acordó dicha Junta conceder gratificación á los empleados de las Prisiones de esta Corte, con sueldo inferior á 1.500 pesetas,
que no tienen habitación en los Establecimientos, así como á los emplea
dos de la Secretaría de dicha Junta, é invertir 15.000 pesetas en vestuario,
utensilio y equipo para los reclusos.
líO, n u e v a Cárcel de mujeres»
El digno Director de Prisiones, Sr. Conde de San Simón, sigue sus activas gestiones encaminadas á que la nueva Cárcel de mujeres se construya.
Ha oficiado á la Junta manifestando que el Estado contribuirá á los
gastos de edificación, con la cantidad que sea posible, y preguntado con
qué cuota podrá contribuir dicha Junta, la cual ha manifestado que facilitará 5.000 pesetas anuales durante el tiempo que se emplee en las obras.
Exámenes.
Hoy han concluido los exámenes para ingreso en el Cuerpo de Prisiones. El Tribunal hará en seguida la calificación definitiva y en el número
próximo podremos publicar la lista de los aprobados.
Cla«lfloaeión.
El Real decreto relativo á la clasificación de Cárceles, se halla en poder
del Presidente del Consejo de Miftistros, que en breve lo pondrá á la firma
de S. M., según Se nos ha dicho.
Escueta de criminología.
El Con|;re80 de los Diputados ha aprobado los créditos para la instalación de la Escuela de criminología.
d u a r d i a penitenciarla.
También ha aprobado lo relativo á guardia penitenciaria.
Se nos ha dicho que existe el propósito de respetar los derechos adquiridos á los Ayudantes\y Vigilantes. Creemos que es de estricta justicia, y
mucho nos alegraríamos de que la noticia resultara cierta.
«Diccionario*.
Ha terminado la publicación del segundo tomo del Diccionario de Le0slación penal, procesal y de Prisiones.
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'
BEVISTA DK LAS PRISIONES
Por expreso encargo del autor, nuestro querido compañero D. Fernando
Cadalso, no hacemos, respecto á la obra, articulo bibliográfico, limitándonos á dar noticia de Ja terminación de dicho tomo, y de que ee puede adquirir en la Administración de la REVISTA, en el Centro editorial de Góngora, San Bernardo, 43, y en Jas principales librerías.
Razones de delicadeza, por los estrechos vínculos de compañerismo y
amistad que con el Sr. Cadalso nos unen, motivan el encargo que nos hace,
y que respetamos, sintiendo mucho no poder elogiar cual se jaerece un libro tan ütil, que representa una labor y una asiduidad verdaderamente extraordinarias, que viene á llenar el gran vacío que en nuestra Administración penitenciaria se siente, y donde la legislación es la más abigarrada, la
más confusa y la más contradictoria que existe.
Como, por otra parte, es conocido de los lectores de la REVISTA, ellos
podrán apreciar su mérito, aunque nosotros nos abstengamos, por las razones expuestas, de la grata tarea de juzgarle.
Concluida la publicación en la REVISTA del índice y portada del segundo tomo, comenzaremos la publicación del tercero en la misma forma que
lo hemos hecho hasta ahora con el primero y segundo.
A los suscriptores á nuestro periódico que adquieran los referidos tomos
en esta Administración, se les hará la rebaja del 30 por 100, según se hace
en los demás libros del mismo autor.
OBRAS Qm t m a m ADQUIRIRSE En LA ADMINISTRACIÓN DE ESTA «REVISTA»
Pe>euB.
DE D. FERNANDO CADALSO
Diccionario de Legislación Penal, Procesal y de Prisiones, tomo primero (1.000 páginas) letras A , O y C » . . . . . .
. . 15
ídem Id. tomo segundo, en publicación, publicadas 788 páginas,
letras D á K
.10
(El Diccionario se publica en la REVISTA, y puede adquirirse
por suscripción á la misma. Ja parte que falta por publicar. En
la parte ya publicada se hace á los suscriptores Ja rebaja del 30
por 100, tanto en el Diccionario, como en las demás obras del mismo autor).
Estudios penitenciarios.—Presidios españolee y Escuelas clásicay positiva, un volumen
6
Principios de la colonización y colonias penales, un volumen. . . ,
4
La pena de deportación y la colonización por penados.
1,50
Memorias de la Prisión Celulur de Madrid, dos folletos. . . .
. 1
El anarquismo y los medios de represión
2
Tribunales, Juzgadi)s y Prisiones, un folleto. . . ,. . . . .
. 2
La mujer en la Historia, un folleto
1
Novísima Legislación de Prisiones, publicado por la REVISTA; un
folleto
'. . .
1
J. GóKooRA, iHFRSftos — Sjiif EsBUáEDO, vúM, 8S — MADBID: 1908.
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