FICHA El Cobre y la Salud 1 El consumo de cobre es esencial para mantenernos sanos los metales y la salud del ser humano la función protectora del cobre Los metales están presentes en el planeta desde su formación. Fueron parte del medio donde evolucionaron los organismos vivos. Por lo tanto, éstos desarrollaron, a lo largo de su historia evolutiva, mecanismos fisiológicos que les permitieron vivir en un medio que los contenía, llegando algunos de ellos a ser indispensables para la vida. El cobre y el zinc, por ejemplo, son micronutrientes esenciales para todos los seres vivos, no sólo para el hombre. El cobre y el latón (aleación de cobre y zinc) tienen un efecto bactericida respecto del Escherichia coli 075. El Centro de Investigación de Gran Bretaña realizó estudios sobre la propiedad bactericida de los materiales de las superficies en que se manipulan alimentos. Los resultados indicaron que a temperatura ambiental, la sobrevivencia de E. Coli 075 sobre una superficie depende del material con que esté hecho. Es así como esta bacteria vive 34 días en el acero inoxidable; 4 días, en una superficie de latón y sólo 4 horas en una de cobre. Como ocurre con todas las sustancias (incluidos el agua y el oxígeno), existen umbrales de concentración por sobre los cuales los mecanismos regulatorios del organismo se ven sobrepasados, dando paso a toxicidad. Los metales esenciales participan en una diversidad de funciones celulares, generalmente como partes activas de enzimas, los catalizadores biológicos que hacen posible el metabolismo celular. Por ejemplo, el cobre está involucrado, entre otras funciones, en la respiración celular, la remoción de radicales libres, la neurotransmisión y la biosíntesis de tejido conectivo. Hay al menos doce enzimas que requieren cobre para su función, entre ellas, la lisil oxidasa, la citocromo C oxidasa, ferroxidasas y tirosinasas. El mismo experimento realizado en salas refrigeradas demostró que un 10% de las bacterias aún sobrevivían 34 días sobre acero inoxidable; mientras que en latón habían desaparecido a los 12 días y sobre cobre a las 14 horas. El Escherichia coli es un patógeno altamente infeccioso, presente en alimentos y agua potable, que provoca diarrea, dolores, náusea, colitis hemolítica, daño renal e incluso la muerte. El origen más frecuente de infección es la contaminación del alimento con materia fecal del intestino de vacunos en los mataderos. Los cuerpos de animales contaminados pueden infectar las superficies donde se faenan otros y así sucesivamente, en un proceso conocido como contaminación cruzada. De ahí la importancia de manipular estos alimentos sobre materiales con efectos bactericidas, como el cobre. www.codelco.com/educa EL COBRE EN EL AGUA El cobre es un elemento indispensable para el buen funcionamiento de nuestro organismo y su carencia crea problemas que pueden llegar a ser muy graves. A su indiscutido valor nutricional, el cobre suma otro beneficio para la salud pública: la reducción de organismos patogénicos presentes en el agua potable. Ensayos controlados de laboratorio demuestran que ciertos virus y bacterias, tales como el virus de polio y Legionella pneumophilia (bacteria que causa la enfermedad del Legionario) son inhibidos por las cañerías de cobre. En estas pruebas, el paso del agua por cañerías de cobre envejecidas redujo el virus del Polio tipo 1 en un 97%, y el tipo 2, en un 96%. En cañerías nuevas de cobre, el virus Polio tipo 2 se redujo en un 80% en 3 horas, eliminándose completamente a las 24 horas. Los experimentos también demuestran que no se necesitan concentraciones altas de cobre en el agua para reducir los virus. En condiciones que simulan el estancamiento nocturno en cañerías de cobre, apenas 0,6 mg de cobre lixiviaron por cada litro de agua, nivel significativamente inferior al máximo recomendado por la Organización Mundial de la Salud. Esto sugiere que el uso de cañerías de cobre significa un claro beneficio para la salud pública. Por un lado, entrega dosis de cobre necesarias para el organismo y, por otro, ayuda a eliminar organismos patógenos. EL COBRE NECESARIO PARA LOS SERES VIVOS Los metales son elementos químicos naturales y con frecuencia esenciales para la vida humana, animal y vegetal. El hombre no puede crearlos ni hacerlos desaparecer, sino concentrarlos, diluirlos, moverlos de un compartimento ambiental a otro o acomplejarlos con otras moléculas. En un estudio realizado en 1998 por la Organización Mundial de la Salud, denominado “Environmental Health Criteria 200 Copper”, se asegura que “de los datos existentes sobre exposición humana en el mundo, particularmente en Europa y las Américas, se deduce que hay un riesgo mayor de efectos de salud por deficiencia de consumo de cobre que por su ingesta excesiva”. Otros estudios de esta misma organización mundial establecen como “mínimo aceptable de ingesta oral de 20 microgramos de cobre por kilo de peso corporal”. En otras palabras, lo mínimo aceptable para la OMS es que una persona de 70 kg. de peso ingiera 1,4 miligramo de cobre al día. Una dieta balanceada asegura la ingestión de este mínimo. Por ejemplo, una palta grande contiene un tercio de esta cantidad; un buen pedazo de carne, un décimo; una porción de arroz, un centésimo; mientras que un buen plato de porotos cocidos llega a contener casi 1 mg de cobre. El agua potable, en general, aporta un mínimo en comparación con los alimentos. Por otra parte, en conejos, perros y ganado la deficiencia de cobre causa pérdida de queratinización y pigmentación. Otras manifestaciones observadas incluyen fallas reproductivas y problemas óseos. Hay pocos datos sobre el efecto de deficiencia de cobre y otros metales en organismos silvestres, pero es de suponer que su carencia puede ser tan severa como en humanos y animales domésticos. PARA MAYOR INFORMACIÓN SOBRE ESTOS TEMAS: Gerencia de Desarrollo Sustentable Codelco-Chile Huérfanos 1270 e-mail: [email protected] Teléfonos: 6903912 ó 6903597 Página web: Codelco Educa: www.codelco.com/educa