OSORIO ALONZO Jaime - tesina FINAL

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UNIVERSIDAD RAFAEL LANDÍVAR
FACULTAD DE CIENCIAS JURÍDICAS Y SOCIALES
UNIVERSIDAD DEL PAÍS VASCO/EUSKAL HERRIKO UNIBERTSITATEA
FACULTAD DE DERECHO
MÁSTER UNIVERSITARIO DE INVESTIGACIÓN EN DERECHO
“SOCIEDAD DEMOCRÁTICA, ESTADO Y DERECHO”
PRIMERA FASE FORMATIVA DEL DOCTORADO EN DERECHO
ALGUNOS FACTORES QUE CONDICIONAN LA INSTITUCIONALIZACION DE LOS
PARTIDOS POLITICOS EN GUATEMALA
TESIS DE POSGRADO / TRABAJO FIN DE MÁSTER
JAIME FERNANDO OSORIO ALONZO
CARNET 2423310
GUATEMALA DE LA ASUNCIÓN, JULIO DE 2014
CAMPUS CENTRAL
UNIVERSIDAD RAFAEL LANDÍVAR
1 UNIVERSIDAD RAFAEL LANDÍVAR
FACULTAD DE CIENCIAS JURÍDICAS Y SOCIALES
UNIVERSIDAD DEL PAÍS VASCO/EUSKAL HERRIKO UNIBERTSITATEA
FACULTAD DE DERECHO
MÁSTER UNIVERSITARIO DE INVESTIGACIÓN EN DERECHO
“SOCIEDAD DEMOCRÁTICA, ESTADO Y DERECHO”
PRIMERA FASE FORMATIVA DEL DOCTORADO EN DERECHO
ALGUNOS FACTORES QUE CONDICIONAN LA INSTITUCIONALIZACION DE LOS
PARTIDOS POLITICOS EN GUATEMALA
TESIS DE POSGRADO / TRABAJO DE FIN DE MÁSTER
TRABAJO PRESENTADO POR
JAIME FERNANDO OSORIO ALONZO
PREVIO A CONFERÍRSELE
EL GRADO ACADÉMICO DE MAGÍSTER UNIVERSITARIO DE INVESTIGACIÓN EN
DERECHO “SOCIEDAD DEMOCRÁTICA, ESTADO Y DERECHO”
GUATEMALA DE LA ASUNCIÓN, JULIO DE 2014
CAMPUS CENTRAL
UNIVERSIDAD RAFAEL LANDÍVAR
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4 DOCTORADO EN DERECHO DE LA
FACULTAD DE CIENCIAS JURÍDICAS Y SOCIALES DE LA
UNIVERSIDAD RAFAEL LANDÍVAR Y DE LA
FACULTAD DE DERECHO DE LA
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TRIBUNAL QUE PRACTICÓ LA EVALUACIÓN DE DEFENSA PÚBLICA
DR. FRANCISCO JAVIER CABALLERO HARRIET
DR. FRANCISCO JAVIER EZQUIAGA GANUZAS
DR. LARRY AMILCAR ANDRADE-ABULARACH
5 6 7 8 AGRADECIMIENTOS
Agradezco a Dios por ser el motor e impulsor de mi vida a cada momento, llevándome a
nuevas alturas cada día. También agradezco a la familia Osorio Portillo, su apoyo y
ánimos me dieron las energías y creatividad para llegar a éste puerto.
Agradezco a todas aquellas personas e instituciones que, de alguna forma, fueron parte
del proceso y consecuentemente la finalización del presente trabajo de fin de máster.
9 DEDICATORIA
Esta tesis de posgrado está dedicada a Dios, piedra angular inmovible en mi espíritu,
en dónde fundamenté los sueños familiares, profesionales y académicos que recibí de
Él.
También a mis padres, Jaime Osorio Estrada y Esperanza Alonzo de Osorio, los
arquitectos y constructores de quién soy.
Dedico también este triunfo a mi confidente y amada esposa Alby de Osorio, copiloto en
todos nuestros proyectos desde hace más de treinta años.
A mis hijos Gaby, Brisy y Jaime, y a los nietos José Alejandro y José Andrés, para que
sean motivados a trascender y brillar dónde Dios les demande.
10 Resumen del trabajo
A nivel general, la política y los partidos políticos, atraviesan una crisis de falta de
credibilidad y, en el caso guatemalteco, carecen de institucionalización como auténticos
representativos de las intereses de los ciudadanos. Luego de la puesta en vigencia de
la Constitución Política de la República en 1985, y la firma de los Acuerdos de Paz, en
1996, se generó un efecto de crecimiento multi y pluripartidista. Pero en esa misma
medida, se puede observar la alta volatilidad y falta de institucionalización de los
partidos políticos. En el presente trabajo, se pretende analizar brevemente, algunos de
los factores que condicionan esa falta de institucionalización y volatilidad de los partidos
políticos. Entre esto factores se encuentran la herencia histórico-política, el
financiamiento, el transfuguismo, el intervencionismo internacional, las alianzas
electorales, una oferta electoral pobre y carente de confiabilidad y el impacto de los
medios de comunicación en política, entre otros.
Adicionalmente, se hace un análisis de las prohibiciones constitucionales vigentes, para
optar al cargo de Presidente de la República que, en su mayoría han sido puestas a
prueba por el sistema político guatemalteco, y que han generado jurisprudencia de la
Corte de Constitucionalidad y Corte Suprema de Justicia de Guatemala, con sus
correspondientes efectos diversos en el ámbito de la política nacional. Asimismo, se
hacen consideraciones respecto a cuánta repercusión e impacto tiene la acción de los
“parientes” de los partidos políticos que, desde la perspectiva de la sociedad civil,
también inciden en el quehacer político nacional.
Finalmente, se incluyen algunas conclusiones que motivan el debate, respecto a qué es
necesario considerar y ejecutar, para fortalecer y coadyuvar en la institucionalización de
los partidos políticos en Guatemala, a efecto que los mismos dejen de ser simples
“maquinarias” electorales, y pasen a convertirse en auténticas instituciones que
fortalezcan la democracia y se sirvan de antídoto a eventuales nubarrones antidemocráticos, que pueden exponer a la sociedad guatemalteca y, a nivel general de
Latinoamérica, a tolerar, anhelar o consentir, eventuales involuciones que nos lleven a
autoritarismos ya superados cronológicamente.
11 Abstract
At general level, the partier and the politics, are living one crisis of unbelieved. In the
Guatemalan case, those to lack institucionalization like authentics representatives of the
citizens. After the start the new Constitution at 1985, and the signed the “Agreement of
Peace” in 1996 exist one effect of growing multi and pluri parties.
But in identical measurement, is possible observer high vapourize and no
institucionalization of the parties. In this work, we wish analize some conditional factors
in the historic-political heritage, the financial of the partier, the deserter, the international
intervention elector alliances, poor political offering and the impact of mass media in the
politics.
Additional, we will analyze the constitutional prohibitions to be a President. This
prohibitions are subject to proof for Guatemalan political system. This proof produce
jurisprudence by the Supreme Court and the Constitutional Court; their effects in the
political environment and the activities of the civil society in politics.
Likewise, we included some conclusions about what is necessary changes in the
political system to aid de institutionalization the parties in Guatemala. All actions for the
parties not to be “political machines” but antidote for autoritarism in the Guatemalan
society or in general level in Latin American continent.
12 ALGUNOS FACTORES QUE CONDICIONAN LA INSTITUCIONALIZACION DE LOS
PARTIDOS POLITICOS EN GUATEMALA
13 Índice:
Introducción …………………………………………………………………………
16
La política en el entorno guatemalteco ………………………………………….
17
Partidos políticos numerosos y volátiles ………………………………………..
24
Hacer política en la “Patria del Criollo” …………………………………….......
25
Breve análisis de os partídos políticos …………………….…………………...
39
Desencanto con los partidos políticos ………………………………………….
41
Democracia electoral versus democracia participativa…………………….....
48
El dilema de los partidos ………………………………………………………...
51
Prohibiciones constitucionales para optar a la Presidencia …………………
55
Los movimientos sociales y la clase empresarial
ejerciendo el poder político……………………………………………………….
81
El entorno internacional y su influencia en la política local …………………..
84
El influjo de la globalización y su impacto en la política……………………….
89
Los partidos políticos frente a la sociedad “líquida” …………………………...
91
¿Cuál debe ser la respuesta de la política ante la
encrucijada de la sociedad “líquida”? …………………………………………...
92
El proceso electoral guatemalteco ………………………………………………
108
Primavera árabe, cultura y política ………………………………………………
112
Una democracia importada ………………………………………………………
114
¿Qué hacer con la legislación electoral guatemalteca?.................................
128
El contrato social y el poder político …………………………………………….
136
Otros factores condicionantes en la política guatemalteca …………………..
139
I. De la invasión del derecho penal en el ámbito electoral …………………...
139
II. Principales debates pendientes en
el sistema de partidos políticos ………………………………………………….
III. Pluripartidismo y multipartidismo …………………………………………. 150
IV. Las alianzas electorales y la institucionalidad de los partidos ………... 153
V. Una oferta electoral pobre y carente de confiabilidad ………………….. 157
VI. La fiscalización de los partidos políticos ………………………………… 159
14 150
VII. El fenómeno del transfuguismo ………………………………………….. 161
VIII. Los medios de comunicación y el proceso político ……………….... 168
IX. Crisis de credibilidad e institucionalidad de los partidos …………….. 172
Conclusiones …………………………………………………………………. 178
Bibliografía ………………………………………………………………….. 181
Anexo …………………………………………………..……………………… 192
15 Introducción:
El presente trabajo pretende dar una breve percepción de cuáles son los algunos de los
factores más determinantes, para la institucionalización de los partidos políticos y con
ello, provocar el debate no desde la óptica de la comodidad de analistas desvinculados
de la actividad político-partidaria, sino con la percepción del quehacer político
pragmático.
Nuestro país tiene muchas problemáticas que afrontar en materia política, sin embargo
por la naturaleza y alcances de esta tesina, el contenido se concentra en factores tales
como la volatilidad de los partidos políticos, el multipartidismo existente, la participación
de otros actores sociales en el proceso político, la invasión del derecho penal en el
ámbito electoral, el financiamiento público para los partidos, el transfuguismo
parlamentario, etc.
La problemática que se plantea entonces, es de trascendencia para el destino del país,
no sólo en su propio devenir histórico sino tomando en cuenta las circunstancias
globalizadotas que se afrontan, así como la creciente insatisfacción con la democracia,
los reclamos de una juventud desempleada y relativamente desideologizada, y
existencia de graves riesgos de una involución autoritaria, derivado de dicha
insatisfacción social.
Se incluye una revisión histórico-social de los elementos y conceptos sobre los cuales
fue fundado el Estado guatemalteco, el desarrollo de la política en el siglo XX en los
cuales el país experimentó una revolución democrática y un conflicto armado interno,
hasta llegar al período democrático que se inicia en 1985 con la instauración del primer
gobierno civil democráticamente electo. Evidentemente, quedan más preguntas que
respuestas, pero en todo caso, el énfasis es poder individualizar esos factores
condicionantes de la falta de institucionalización de los partidos políticos y del sistema
democrático como tal para que, a partir de la reflexión de éstos, se pueda aportar ideas
para la consolidación de la democracia en nuestro país.
16 La política en el entorno guatemalteco:
La política es una auténtica caja de sorpresas. Contiene en su interior un cúmulo de
ideales, un enjambre de frustraciones y conflictos. También acumula los anhelos de
búsqueda de satisfactores para las exigencias de la sociedad. Por ello, no se puede
hacer política, ni concebir planteamientos políticos, si estos permanecen desvinculados
del estrato social, grupo o sociedades a la que van dirigidos los pensamientos y
acciones políticas. De igual manera, es fundamental la conexión y contexto históricosocial en que el país se ha desarrollado, desde su independencia de España,1 y ese
hilo conductor perverso que ha tenido el sistema político guatemalteco –y los partidos
políticos-2 con las condiciones contrastantes que el país experimenta.
Quizá por ello, en un país tan pequeño como Guatemala,3 que es un estado republicano
con un territorio de 108,889 Km2, y se ubica en la parte Norte del istmo de América
Central, se hayan vivido feroces dictaduras,4 y padecido más de treinta y cinco años de
conflicto armado interno que degeneró en la existencia de poblaciones desplazadas5 y
1
“En el Acta de ese día –la independencia- la palabra “república” no aparece ni una sola vez.” GARCIA
LAGUARDIA, Jorge Mario: “Política y Constitución en Guatemala”. Serviprensa Centroamericana.
Guatemala, 1977. Pág. 15
2
“Un partido es cualquier grupo político que se presenta a elecciones y que puede colocar mediante
elecciones a sus candidatos en cargos públicos.” SARTORI, Giovanni. “¿Qué es la democracia?”. Alianza
Editorial, S.A. Madrid, 2009. Pág. 101
3
“Geografía Ilustrada de Nuestro Mundo”. Editorial Sopena. Barcelona, 1991. Pág. 139.
4
Nuestro Premio Nobel de Literatura, refleja estas condiciones dictatoriales, de aniquilación de la
dignidad de los guatemaltecos de la época, de manera magistral: ”Como ciudadanos libres, conscientes
de la obligación en que estamos de velar por nuestros destinos, que son los destinos de la Patria, y como
hombres de bien, enemigos de la Anarquía, ¡¡¡proclamamos!!! Que la salud de la República está en la
REELECCION DE NUESTRO EGREGIO MANDATARIO Y NADA MAS QUE EN SU REELECCION! ¿Por
qué aventurar la barca del Estado en lo que no conocemos, cuando a la cabeza de ella se encuentra el
Estadista más completo de nuestros tiempos, aquel a quien la Historia saludará Grande entre los
Grandes, Sabio entre los Sabios, Liberal, Pensador y Demócrata??? ¡El sólo imaginar a otro que no sea
El en tan alta magistratura es atentatorio contra los Destinos de la Nación, que son nuestros destinos, y
quien tal osara, que no habrá quien, debería ser recluido por loco peligroso y de no estar loco, juzgado
por traidor a la Patria conforme a nuestras leyes!!! CONCIUDADANOS, LAS URNAS OS ESPERAN!
VOTAD! POR! NUESTRO! CANDIDATO! QUE! SERA! REELEGIDO POR EL PUEBLO!!!” ASTURIAS,
Miguel Ángel: “El Señor Presidente”. Editorial Losada, Buenos Aires, 2009. Pág. 366 y 367
5
“Las poblaciones desplazadas, como lo señaló Myrna en sus estudios, son objeto de disputa política por
parte del Estado y las fuerzas insurgentes. En sus comunidades de origen tuvo lugar, a inicios del
decenio de 1980, una cruenta guerra en la cual, como población civil, fueron las víctimas. Para salvar sus
vidas, tuvieron que refugiarse en zonas selváticas y montañosas. Las condiciones de sobrevivencia de
cada aldea y/o grupo fueron muy duras, y la suerte que cada uno de ellos tuvo fue desigual.”FLORES,
17 cementerios clandestinos. Además, hasta antes de la promulgación de la actual
Constitución Política de la República, y el respectivo “bloque de leyes de
constitucionalidad”6 (Ley de Amparo, Exhibición Personal y de Constitucionalidad, Ley
Electoral y de Partidos Políticos, Ley del Procurador de los Derechos Humanos, etc.),
en la historia nacional se registran múltiples golpes de Estado, una revolución en el
siglo XIX y otra en el siglo XX.7
Todo lo anterior, ha ocurrido, como parte de ese esfuerzo de ir tratando de poner en
orden esa caja de sorpresas, y que las sigue generando de tiempo en tiempo. Y a pesar
de sus contrastes sociales, económicos y políticos, de manera simplista, “Guatemala,
en una expresión muy generalizada, es un país de cuya población la mayoría se dedica
a la agricultura. En efecto, casi el ochenta por ciento de sus habitantes se dedica a
actividades llamadas primarias, es decir, a la agricultura.”8
Así por ejemplo, el actual gobierno encabezado por el General Otto Fernando Pérez
Molina, hubo de reconocer el hecho que Guatemala tiene uno de cada dos niños
menores de cinco años, padeciendo desnutrición, lo cual le hace ocupar un quinto lugar
a nivel mundial en el índice de pobreza.9 Ante esto, en pleno tercer milenio, San Juan
José: “Myrna y Helen. Su Historia”. Editora Estudiantil Fénix. Cooperativa de Ciencia Política. Universidad
de San Carlos de Guatemala. Guatemala, 1995. Pág. 60 y 61
6
En España, indica María Luisa Balaguer Callejón, “Se trata de las leyes que integran el bloque de
constitucionalidad, que no sólo pueden ser objeto de interpretación desde el punto de vista de su
constitucionalidad (como el resto de las leyes) sino que, además, pueden ser utilizadas como criterio de
interpretación de la constitucionalidad de otras leyes.” BALAGUER CALLEJON, María Luisa.
“Interpretación de la Constitución y Ordenamiento Jurídico”. Editorial Tecnos, S.A. Madrid, 1997. Pág.
118
77
“La Revolución de Octubre de 1944, trajo grandes cambios al país y una apertura democrática sin
precedentes, lo que permitió el surgimiento de agrupaciones políticas representativas de una variada
gama de posiciones ideológicas, que iban desde las expresiones liberales de la época ubiquista, pasando
por aquellas surgidas de la modernidad; el anticomunismo y otras nuevas, tales como el socialcristianismo, el socialismo y el comunismo.” DIAZ LOPEZ, Gustavo Adolfo: “Guatemala en Llamas. Visión
Política-Militar del Conflicto Armado Interno 1960-1996. Editorial Oscar de León Palacios. Guatemala,
2008. Pág. 35
8
FLORES ALVARADO, Humberto: “Grupos sociales HOY. ¿Quién es,…Qué?”. Ensayos de Sociología
Guatemalteca. Guatemala, septiembre 2000. Pág. 93 y 94
9
En cuanto a las razones para que haya pueblos pobres, Montesquieu, indica que existen dos clases de
pueblos pobres: “…los empobrecidos por la dureza del gobierno y los que nunca han tenido aspiraciones
por no conocer o por desdeñar las comodidades de la vida.” MONTESQUIEU: “DEL ESPIRITU DE LAS
LEYES”. Editorial Heliasta, S.R.L. Buenos Aires, 2005. Pág. 331
18 Atitán,10 en el occidental departamento de Huehuetenango, fue reconocido como uno
de los municipios más pobres del mundo.11 Un panorama tan desalentador, nos hace
reflexionar y darnos cuenta que, como país, nos hemos movido pendularmente. A
veces entre la extrema violencia y a veces entre la extrema pobreza. Obviamente, estas
condiciones nos han anclado en el subdesarrollo y la poca competitividad como país.
Pero viviendo en un auténtico país de contrastes. Somos una caja de sorpresas que, de
tanto en tanto, nos pone al borde del colapso, a pesar de ser un país pequeño,12 en el
sentido que Monteforte Toledo nos caracteriza, podemos ver que afrontamos
problemáticas enormes.
La vida no es un hilo continuo. Es más bien una suma de mosaicos13 que se van
incrustando, uno a la vez, con paciencia y determinación. En ese sentido, nuestra
historia política nacional, debe ser entendida sobre la forma del mosaico, más que del
hilo continuo. Total, la autora Yourcenar, en su novela del imperio romano y las
memorias de Adriano, advierte que “La vida era para mí un caballo a cuyos
movimientos nos plegamos, pero sólo después de haberlo adiestrado.”14 Quizá por eso,
nuestro héroe nacional Tecún Umán, es ridiculizado porque “…descabezó con su lanza
el caballo de Pedro de Alvarado, convencido de que formaba parte del conquistador:
Alvarado se levantó y lo mató.”15 De esa cuenta, nuestro país, intentando dominar ese
10
El programa de Gobierno “Hambre Cero”, pretende disminuir la desnutrición infantil en 2016 en un
10%. En Guatemala el 52% de sus 14 millones de habitantes vive en condiciones de pobreza y extrema
pobreza.” www.noticias.emisorasunidas.com/multimedia/video/Guatemala-lucha-contra-tasa-desnutricioninfantil-mas-alta-america-latina. Fecha consulta: 25 de marzo 2012
11
San Juan Atitán, Huehuetenango, es el municipio más pobre del departamento de Huehuetenango y
uno de los 20 más pobres de Guatemala, con 91.4% de desnutrición crónica. Derivado de lo cual el
programa “Hambre Cero” arranca en 2012 con Q3 mil 362 millones, que fueron transferidos de varios
ministerios y secretarias, hacia el nuevo Ministerio de Desarrollo Social, para reducir los índices tan
dramáticos
que
presenta
el
país.
Diario
Prensa
Libre.
www.prensalibre.com.gt/noticias/comunitario/Lucha-hambre-Q3-mil-millones_0_6773732641.html. Fecha
de consulta: 31 marzo 2012
12
“GUATEMALA. Un país pequeño. Ser de un país pequeño es tener vida pequeña, sueños pequeños,
destinos pequeños.” PERDOMO ORELLANA, J.L. y GUINEA DIEZ, Gerardo: “MARIO MONTEFORTE
TOLEDO- Diccionario privado.” Magna Terra editores. Guatemala, 2002. Pág. 99
13
“Por esto, porque la vida está constituida de un lado por la fatalidad pero de otro por la ineludible
libertad de decidirnos frente a ella.” ORTEGA Y GASSET, José: “Meditación de Nuestro Tiempo”. Fondo
de Cultura Económica. México, 2006. Pág. 243
14
YOURCENAR, Marguerite: “Memorias de Adriano”. 6a. Edición. Debolsillo. Editorial Sudamericana,
S.A. Buenos Aires, 2009. Pág. 46
15
GALEANO, Eduardo: “Las venas abiertas de América Latina”. Siglo XXI Editores. México, 1971. Pág.
25
19 corcel indómito que es la política criolla, ha pasado por revoluciones liberales, y
levantamientos populares16 que culminaron en eventos revolucionarios de de 1944 en el
cual el dictador Jorge Ubico Castañeda “…cayó de su pedestal, barrido por los vientos
de una revolución de sello liberal que encabezaron algunos jóvenes oficiales y
universitarios de la clase media.”17, y el aborto de esta Revolución que degeneró en un
conflicto armado interno, que duró más de treinta años, entre otros movimientos
político-sociales.
Hoy, luego de quince años de haberse suscrito el Acuerdo de Paz Firme y Duradera,18
que constituyó el sustento para el cese al fuego definitivo y la puesta en marcha de una
serie de acuerdos diversos, nos encontramos aún en el debate de la falta de
institucionalización de los partidos políticos. Es frecuente que en las diversas consultas
de opinión y medición de percepciones, la sociedad guatemalteca tenga un porcentaje
de casi 40% de insatisfechos con la democracia, lo cual es entendible a través del
16
El 20 de octubre de 1944, relata Polo Sifontes, el sustituto del dictador Jorge Ubico Castañeda –que
había gobernado 22 años dictatorialmente, mediante “reelecciones,”- el general Ponce Vaides, enfrentó el
accionar de la sociedad guatemalteca y “Este día estallaron las pasiones reprimidas durante muchos
años. Fue un levantamiento popular en que participaron: políticos, abogados, maestros, obreros,
estudiantes universitarios y una parte del Ejército, sobre todo la oficialidad joven.” POLO SIFONTES,
Francis. “Historia de Guatemala”. EDITORIAL EVERGRAFICAS, S.A. León, España. 1991. Pág. 271
17
GALEANO, Eduardo: “Las Venas Abiertas de América Latina”. Siglo XXI Editores. México, 1971. Pág.
181
18
Con fecha 29 de diciembre de 1996, el Gobierno de la República de Guatemala, presidido por Álvaro
Enrique Arzú Irigoyen y la Unidad Revolucionaria Nacional Guatemalteca (URNG), suscribieron el
Acuerdo de Paz Firme y Duradera, “…quedan integrados todos los acuerdos suscritos con base en el
Acuerdo Marco sobre Democratización para la Búsqueda de la Paz por Medios Políticos, suscrito en la
ciudad de Querétaro, México, el 25 de julio de 1991 y a partir del Acuerdo Marco para la Reanudación del
Proceso de Negociación entre el Gobierno de Guatemala y la Unidad Revolucionaria Nacional
Guatemalteca, suscrito en la Ciudad de México el 10 de enero de 1994. Dichos acuerdos son: El Acuerdo
Global sobre Derechos Humanos, suscrito en la Ciudad de México el 29de marzo de 1994; el Acuerdo
para el Reasentamiento de las Poblaciones Desarraigadas por el Enfrentamiento Armado, suscrito en
Oslo el 17 de junio de 1994; el Acuerdo sobre el Establecimiento de la Comisión para el Esclarecimiento
Histórico de las Violaciones a los Derechos Humanos y los Hechos de Violencia que han Causado
Sufrimientos a la Población Guatemalteca, suscrito en Oslo el 23 de junio de 1994; el Acuerdo sobre
Identidad y Derechos de los Pueblos Indígenas, suscrito en la Ciudad de México el 31 de marzo de 1995;
el Acuerdo sobre Aspectos Socioeconómicos y Situación Agraria, suscrito en la Ciudad de México el 6 de
mayo de 1996; el Acuerdo sobre Fortalecimiento del Poder Civil y Función del Ejército en una Sociedad
Democrática, suscrito en la Ciudad de México el 19 de septiembre de 1996; el Acuerdo sobre el Definitivo
Cese al Fuego, suscrito en Oslo el 4 de diciembre de 1996; el Acuerdo sobre Reformas Constitucionales
y Régimen Electoral, suscrito en Estocolmo el 7 de diciembre de 1996; el Acuerdo sobre Bases para la
Incorporación de la URNG a la Legalidad, suscrito en Madrid el 12 de diciembre de 1996; el Acuerdo
sobre Cronograma para la Implementación, Cumplimiento y Verificación de los Acuerdos de Paz, suscrito
en la Ciudad de Guatemala el 29 de diciembre de 1996.” Universidad Rafael Landívar- Instituto de
Investigaciones Económicas y Sociales: “ACUERDOS DE PAZ”. Guatemala, 1998. Pág. 239, 242 y 243
20 principio del óptimo de Pareto19 y, colateralmente, descalifique20 a los partidos políticos
y la política. Incluso, cuando se consulta a la ciudadanía respecto a sus percepciones
de otras entidades o instituciones públicas, los partidos políticos salen en los últimos
puestos, detrás de la Iglesia, los bomberos y otros grupos.
De esa cuenta, el cuadro siguiente, refleja las manifestaciones y percepciones de la
sociedad latinoamericana, respecto al apoyo de la democracia, o los niveles de
satisfacción con ésta como sistema de gobierno. Siendo positivos, asumimos que los
porcentajes expresados, obedecen más que a un rechazo a la democracia, son solo la
expresión de la insatisfacción que la sociedad (inputs)21 tiene con la respuesta a sus
necesidades y exigencias (outputs),22 vía un gobierno democrático.
19
Esto tiene su fundamento en la aplicación del principio de unanimidad, “basado en el criterio del
“óptimo de Pareto”, según el cual una política es “buena” si alguno o algunos les va “mejor” (en términos
de bienes capaces de satisfacer las necesidades) con dicha política a ninguna le va “peor”. Una versión
estricta del óptimo de Pareto implica unanimidad: toda persona aceptará una acción gubernamental con
la que cree que le irá mejor o, en todo caso, no peor.” ROTHBARD, Op. Cit. Pág. 278
20
Informe
2010
de
LATINOBAROMETRO-PNUD:
www.pnud.org.gt/data/publicacion/Estudio_Latinob_2010.pdf. Fecha consulta: 11 marzo 2012
21
CAMINAL BADIA, Miquel (Editor): “Manual de Ciencia Política”. Editorial Tecnos. Madrid, 2005. Pág.
398
22
Ibid. Pág. 398
21 Ese apoyo tan bajo a la democracia, que para autores como Hayek, simplemente sea
un “método para toma de decisiones”.23 Quizá tenga una de sus explicaciones, en lo
que el ex presidente español Aznar24 afirma, luego de su experiencia de gobierno, que
“Un país fuerte es un país que tiene instituciones sólidas.” Pero si una de las
instituciones básicas para el sostenimiento de la estructura del estado –los partidos
políticos-, sale tan mal percibida y calificada por la ciudadanía, evidentemente hay
necesidad de reflexionar y retomar el rumbo tanto en materia política, como en el
ámbito del derecho positivo25 que la integra y sustenta.
Pero el fenómeno no sólo tiene su origen en el permanente desgaste y erosión del
quehacer político y los propios partidos políticos. Sumado a ello, existe la competencia
“informal” que ejercen en su contra, entre otros competidores, la autodenominada
“sociedad civil”, que coadyuvan a que Guatemala, prácticamente en materia política se
encuentre instalado un horno de microondas, que produce partidos políticos a granel. A
tal grado llega esta condición que, luego de la avalancha de democratización y
fecundidad de partidos políticos, hay desconcierto, confusión e insatisfacción en los
guatemaltecos.
Derivado de haberse facilitado inicialmente, en 1985, la inscripción de los partidos
políticos, en los dos últimos procesos electorales (2007 y 2011), la boleta electoral
presidencial, es casi un cartón de lotería, con colores, figuras y símbolos a granel. Y,
aunque sea un defecto del sistema, la ciudadanía aún no ejerce presión suficiente para
cambiar dicha condición. Existe pues, multiplicidad de candidaturas, un evidente
23
HAYEK, Friedrich A. “DERECHO, LEGISLACION Y LIBERTAD”. Volumen III. El Orden Político de una
Sociedad Libre. Unión Editorial, S.A. Madrid, 1982. Pág. 22
24
AZNAR, José María: “Ocho Años de Gobierno- Una visión personal de España”. Editorial Planeta, S.A.
Madrid, 2004. Pág. 25
25
“Si el marbete “derecho positivo” se aplica al orden vigente en determinada sociedad, es decir, al
conjunto de preceptos creados de acuerdo con reglas preestablecidas, que son comúnmente cumplidos
por los particulares o aplicados por los órganos jurisdiccionales…” GARCIA MAYNEZ, Eduardo.
“Positivismo Jurídico, Realismo Sociológico y Iusnaturalismo”. Universidad Nacional Autónoma de
México. México, D.F. 1968. Pág. 10
22 multipartidismo, atomización de posturas u ofertas políticas, o lo que es una auténtica
eclosión incontrolable de surgimiento de partidos políticos.26
Quizá en Guatemala estemos cayendo en el síndrome de “vamos adelante”27 al
promover la formación de multiplicidad partidaria, pretendiendo con ello desarrollar la
institucionalidad política en el país, pero obteniendo efectos inversos. El crecimiento
anormal del número de partidos políticos se encuentra evidenciado plenamente, toda
vez que “En la última elección participaron 22 partidos políticos, durante el período de
1985 a 2007, se formaron alrededor de 58 partidos políticos, de los cuales únicamente
la Democracia Cristiana Guatemalteca (DGC, vigente desde 1955)28 permaneció hasta
las elecciones de 2007.”29
26
“De hecho, pueden establecerse los principios legales de toda sociedad por tres diferentes caminos: a)
siguiendo las costumbres tradicionales de la tribu o de la comunidad; b) obedeciendo la voluntad
arbitraria y ad hoc de quienes dirigen el aparato del Estado; o c) utilizando la razón humana para
descubrir la ley natural –resumidamente: por conformismo servil a la costumbre, por arbitrio caprichoso o
por el uso de la razón humana. Estas son, en esencia, las únicas vías posibles para establecer la ley
positiva.” ROTHBARD, Murray N. “La Ética de la Libertad”. Unión Editorial, S.A. Madrid, 1995. Pág. 43
27
A ese respecto es interesante el pensamiento de Deutsch: “La rapidez del cambio desconcierta a viejos
y jóvenes por igual. ¿Cómo van a orientarse en el mundo y en su sociedad? Su situación nos recuerda la
historia de las tropas de un barco alcanzado por un torpedo por la noche, durante la segunda guerra
mundial. Los soldados, la tripulación y el capellán tomaron sus cintos salvavidas y empezaron a nadar, y
el capellán, para animar a los hombres, les gritaba a voz en cuello: < ¡Hacia adelante, muchachos, hacia
adelante!> De la oscuridad llegó una interrogante quejumbrosa: <Pero, padre, ¿Hacia dónde es
adelante?>” DEUTSCH, Karl W. “Política y Gobierno”. Fondo de Cultura Económica. México, 1998. Pág.
558
28
“El Partido Democracia Cristiana Guatemalteca (DCG) es el más antiguo de las organizaciones
políticas…Fundado en agosto de 1955 por un grupo de jóvenes profesionales, técnicos y militantes de la
Juventud Obrera Católica, así como estudiantes provenientes de ambientes cercanos a la jerarquía de la
Iglesia Católica, ha tenido una gran influencia en la historia política reciente de Guatemala. Después de
una larga lucha de oposición democrática y popular, en la que su dirigencia nacional y local sufrió
diversas manifestaciones de represión, en 1985 conquistó la presidencia del país y la mayoría absoluta
en el Congreso de la República. Sin embargo, a partir de 1990 ha venido perdiendo paulatinamente el
respaldo popular…Entre los fundadores del PDCG se encontraban Larry Andrade, Roberto Carpio
Nicolle, René de León Schlotter…” ASOCIACION DE INVESTIGACION Y ESTUDIOS SOCIALES –
ASIES-. “Monografía de los partidos políticos 2000-2004”. Guatemala, 2004. Pág. 15
29
PROGRAMA DE NACIONES UNIDAS PARA EL DESARROLLO –PNUD- “Informe Nacional de
Desarrollo Humano 2009/2010. Pág. 231 y 232
23 Partidos políticos numerosos y volátiles:
Ante la alta volatilidad electoral,30 la inconsistencia de los planteamientos políticos, y la
ineficiencia en la ejecución gubernamental, los ciudadanos demandan más de los
políticos y de la política.31 Total, es el único camino racional y universalmente aceptado,
para la convivencia pacífica y la administración de las sociedades. Pero la disyuntiva
siempre estará presente entre lo que la gente demanda y lo que los candidatos le
ofrecen, pero más aún, entre lo que les ofrecen y que lo que les cumplen.
Pero la volatilidad de los partidos políticos en Guatemala, no sólo obedece a que la ley
permite y facilita su constitución y registro. También existe otro elemento que la
alimenta. En la generalidad de sociedades, podemos observar que “Muchos de los
políticos tradicionales creen que el mundo comienza y termina en el culto a su
personalidad”,32 y esto genera un divorcio entre necesidades y demandas sociales,
versus efectividad y cumplimiento de promesas de campaña y ejercicio serio del poder.
En nuestro caso, la alta volatilidad y mortalidad de los partidos políticos, y su poca
perdurabilidad o vida institucional se refleja plenamente en la participación de la
mayoría de éstos, se reduce únicamente a una elección. Luego en la siguiente, -que es
cada cuatro años- sólo sobrevive y participa un 50% de los partidos. Al cabo del cuarto
evento eleccionario, participa el mínimo de ellos. Existe pues, un síndrome de “única
participación” en la mayoría de partidos políticos. Casi todos los partidos, luego de su
primera aparición y participación están condenados a desaparecer, como lo muestra la
gráfica siguiente.
30
PNUD.
Ibid.
Versión
electrónica:
www.desarrollohumano.org.gt/sites/default/files/docs/informes/capítulos/AF_capítulo 9.pdf fecha consulta:
11 de marzo 2012
31
“Los ciudadanos de un país no sienten interés por explorar los defectos del sistema por el que se rigen
mientras tengan la sensación de que funciona aceptablemente bien.” ROTHBARD. Op cit. Pág. 359
32
DURAN BARBA, Jaime y NIETO, Santiago. “Mujer, Sexualidad, Internet y Política”. Editorial Fondo de
Cultura Económica. México, D.F. 2006. Pág. 325
24 Resulta entonces interesante, preguntarnos si esta volatilidad político-partidaria, es un
fenómeno temporal, es circunstancial y remediable mediante reformas electorales, o
bien, si es una más de las herencias culturales fruto del devenir histórico de la nación. A
veces se bromea entre amigos, que en el país tenemos dos frustraciones nacionales o
dos maldiciones por resolver. Una, nuestra selección nacional de futbol jamás ha
llegado a un campeonato mundial. Otra, ningún partido político que arriba al poder logra
la reelección. Este fenómeno podría tener múltiples enfoques o explicaciones. Sin
embargo, por la brevedad de este trabajo, únicamente trataremos de centrarnos en
considerar como elementos que podrían dar respuesta a esa volatilidad partidaria, a
que existe una herencia histórico-social que cuenta y pesa para la poca certidumbre y
débil institucionalización de los partidos políticos en nuestro país.
Hacer política en la “Patria del Criollo”
Así como son determinantes los factores genéticos para la calidad de la salud de los
individuos. Y que ésta se encuentra condicionada a aquellos, atávicamente. Estimamos
que al analizar la política en Guatemala, tenemos también una herencia con elementos
genético-políticos, que son casi inevitables en las instituciones políticas a lo largo del
tiempo. Esto exige asomarnos y remontarnos a las condiciones en que se fundó el
Estado guatemalteco.
25 No podemos obviar ni dejar de considerar qué herencia institucional, doctrinaria e
ideológica obtuvimos del proceso de conquista, colonización e independencia, hasta el
nacimiento de la actual república. Es importante conocer cuál fue el germen histórico
que nos heredaron desde la época colonial los propios conquistadores. Solo así
podremos comprender esa reacción electoral pendular entre las expresiones y ofertas
políticas, que asume el guatemalteco en las urnas cada cuatro años. 33
Inicialmente, los peninsulares y los criollos establecieron, luego de la Independencia de
España, una especie de “Estado criollo”. Con ello no sólo pretendieron consolidar su
poder y control del territorio que mediante encomiendas y repartimientos habían
recibido, sino que les posibilitara constituir un estado-nación excluyente y racista.34 A tal
extremo que, aún en la actualidad, ese racismo se refleja aún en cosas simples. Se usa
despectiva y racistamente el término “indio” como sinónimo de haragán (“huevón” es el
sinónimo que se usa como guatemaltequismo). O bien, respecto de una persona terca o
testaruda, se usa la expresión racista: “no seas indio”. Esto para estigmatizar y
descalificar al indígena, frente a un grupo ladino o mestizo.
33
“El 4 de noviembre de 2007, Guatemala presenció un hecho insólito para lo que ha sido su historia. El
candidato del partido Unidad Nacional de la Esperanza (UNE), Álvaro Colom Caballeros, de filiación
socialdemócrata, ganó la Presidencia de la República en una reñida segunda vuelta al contabilizar poco
más de un millón y medio de votos (52.82% de los votos emitidos). Su contendiente, el general Otto
Pérez Molina sumó casi un millón 250 mil sufragios (47.18%), lo que significó una diferencia de 5.64% y
casi 200 mil votos (Inforpress, 2007b). Las dos guatemalas enfrentadas durante la segunda mitad del
siglo XX, lo estuvieron de alguna manera en los dos contendientes que llegaron a esa segunda ronda
electoral.” FIGUEROA IBARRA, Carlos: “¿En el Umbral del Posneoliberalismo? Izquierda y Gobierno en
América Latina. Editorial F&G Editores y Facultad Latinoamericana de Ciencias Sociales, FLACSO. 2ª.
Edición. Guatemala, 2010. Pág. 73 y 74
34
El tema del indio, la discriminación y la carga descalificadora que conlleva, tiene su explicación en el
pasado colonial. A tal extremo, que no sólo se les consideró inferiores, menos que personas, sino que se
implantó como una de las prioridades “desindianizar”, como lo refleja Guzmán Böckler quien, va más
lejos, y afirma que incluso se buscó su proletarización, por lo que. “De ahí que la meta de todos, desde
Pedro de Alvarado, el cruel conquistador extremeño, hasta la izquierda ortodoxa contemporánea, se
propongan como meta desindianizar al indio. Así, se trate de sojuzgarlo y bestializarlo, como pretendieron
los encomenderos, de despersonalizarlo y proletarizarlo como intentan los capitalistas de hoy, o de
exigirle su autonegación para ingresar a la revolución única y exclusivamente como proletario rural, a fin
de que no contradiga una teoría sobrecargada de economicismo y que se reclama marxista (sin aplicar
los principios del marxismo), la condición sine que non es que deje de ser indio. O sea, que tanto para ser
un buen colonizado como para ser un buen descolonizado, tiene que dejar de ser indio.” GUZMAN
BOCKLER, Carlos: “Donde Enmudecen las Conciencias. Crepúsculo y Aurora en Guatemala”. Secretaría
de Educación Pública. SEP/CIESAS. Frontera. México, 1986. Pág. 27
26 Pero Guatemala es un país de diversidad cultural y enormes contrastes. Irónicamente,
resulta que en la gran mayoría de hogares urbanos, generalmente, es una mujer
indígena la que apoya con el trabajo doméstico y sirve de nana de los hijos del patrono.
Este tipo de trabajo doméstico, prácticamente no goza de protección social, laboral, ni
de ninguna otra clase. Lo único que tiene garantizado este trabajo, es su dosis de
discriminación y racismo. Eso sí, el doce de diciembre de cada año, las familias racistas
pasan a ser travestis culturales. Para conmemorar el día de la Virgen de Guadalupe,
disfrazan a sus pequeños de “inditos”, para llevarlos a recibir la bendición en el misal
propio del día. Las fotografías que se toman ese día, luego constituyen motivo de mofa
y vergüenza para cuando estos chicos crecen. Para entonces, han aprendido
culturalmente a descalificar, despreciar y minusvalorar al indígena.
Por estas condiciones discriminatorias e histórico-sociales, autores como Severo
Martínez Peláez35 ya no consideraron que la nuestra sea una sociedad injusta e
inequitativa. Este fue aún más lejos, al etiquetar dicho status quo bajo la denominación
peyorativa de “Patria del Criollo”.36 Con ello se explica y queda caracterizado que el
nuevo estado y sus instituciones que le apuntalaron, estuvieron desvinculados, desde el
principio, del contexto social. Nunca fueron fruto de un sueño incluyente o de nación. Se
observa que, inicialmente, fue el acomodamiento utilitario que los sectores dominantes
de la época37 fraguaron en su exclusivo beneficio. Por supuesto, haciendo total
abstracción de la población indígena, a quienes calificaron de engendros del demonio.
Ahondando más en esta apreciación, así como en la connotación que tuvo la
discriminación y la exclusión en la conformación del naciente Estado, autores como
35
MARTINEZ PELAEZ, Severo: “La Patria del Criollo”, Editorial Universitaria Centroamericana. San José,
Costa Rica. 1983. Pág. 23
36
“¿Fue la Independencia un hecho revolucionario o fue la implantación de la patria de los criollos?
Comentario: fueron las formas que tomaba la pugna de criollos y peninsulares en torno al patrimonio de
los primeros.” MARTINEZ PELAEZ. Ibid. Págs. 127 y 128
37
“Ser rubio, de ojos azules, muy blanco y con clase será ahora una ventaja mayor, aunque siempre lo
ha sido. Ese es el verdadero tipo del legítimo guatemalteco en la patria del criollo y de la recordación
florida. Los demás son engendros del demonio, como decía el buen cura Fray Francisco Ximénez, y su
color y su aspecto serán admitidos por compromiso y demagogia, pero será una verdad a medias…”
MARIO ALBERTO CARRERA, artículo: “Relevo en el Poder de las batuecas”, publicado en diario Siglo
XXI, Guatemala, miércoles 10 de enero de 1996. Pág. 10
27 Casaús Arzú, registran que incluso se impuso el criterio racista de “limpieza de
sangre”,38 para preservar status, poder e influencia en la sociedad post-independentista.
En otras palabras, a diferencia de lo que hoy sucede con Europa que, sufre un discurso
político e ideológico casi antieuropeo, en el período fundacional del Estado
guatemalteco, era totalmente lo inverso. Se privilegiaba el origen peninsular, incluso
sobre el de los criollos y, por supuesto, esencialmente sobre los mayas reciénconquistados. En la práctica, para éstos últimos, esos niveles de dominación y
discriminación han de haber constituido la flotación de Xibalbá,39 y el cumplimiento del
final de los tiempos.
Y hoy, quinientos años después de la Conquista, y de haber dejado de ser la Capitanía
del Reino de la Nueva España,40 Guatemala tiene la capital más poblada de
Centroamérica, sigue reconocida como el “Corazón del Mundo Maya,” y pese a los
efectos del calentamiento global, aún ostenta una geografía nacional incomparable.41
Pero, a la luz de los resultados actuales, es evidente que, como pueblo, no tuvo el
control de su temporalidad histórica, es decir, no pudo darse a sí mismo un proyecto
colectivo propio. La dominación ibérica, al igual que en el resto del continente, basada
en estrategias económicas, sociales, políticas y misioneras, le despojó totalmente de
consolidar una identidad propia y un proyecto de nación.
Como fruto del postmodernismo, ahora la nación está expuesta al neo-colonialismo. El
poder, dominio e influencia de las transnacionales mineras, petroleras y otras, es
38
CASAUS ARZU, Marta: “Guatemala: Linaje y Racismo”. Editorial F&G Editores. Guatemala, 2007. Pág.
14
39
“Para los quichés Xibalbá era la región subterránea habitada por enemigos del hombre”. RECINOS,
Adrián: “Popol Vuh. Las antiguas historias del Quiche”. Traducción del texto original con introducción y
notas por: ADRIAN RECINOS. Fondo de Cultura Económica. México. 6ª. Edición. Julio de 1963. Pág.169
40
“La Capitanía General de Guatemala se convirtió, en 1821, en república independiente sin un proceso
previo de guerra de liberación; España no opuso resistencia, en la agonía de su régimen colonial, como
lo hizo en el resto del Continente. El mantenimiento del dominio político en un territorio que no vital para
la economía de la Metrópoli se quebró entonces, cuando España perdió el control sobre el Virreinato de
México. Las luchas por la independencia en esta Capitanía General fueron siempre brotes aislados de
una élite intelectual, criolla o mestiza, las que no lograron articular una insurgencia popular a largo plazo.
TORRES RIVAS, EDELBERTO “Interpretación del Desarrollo Social Centroamericano”. Editorial
Universitaria de Centroamérica, EDUCA. San José Costa Rica, 1975. Pág. 37
41
El literato guatemalteco Mario Monteforte Toledo, elogia la geografía nacional que “Guatemala fue un
país de una belleza estrepitosa y lo sigue siendo. El que no se enamora de la geografía de este país no
tiene buenos sentimientos.” PERDOMO ORELLANA y GUINEA DIEZ. Op. cit. Pág. 98
28 innegable. Aún más, ha llegado a tener una dependencia de países donantes de la
“comunidad internacional”, y sometida a procesos de aculturación y transculturación.
Pero siendo positivos, aún es conocida por su clima tan especial, que se llama “El país
de la eterna primavera”. Esto a pesar que el cambio climático ha ido haciendo estragos
y nos ha ubicado entre los tres primeros países más vulnerables a los desastres
naturales a nivel mundial. Cuenta con casi 14 millones de habitantes, una población
esencialmente joven, y de cara al tercer milenio, enfrenta sus retos de autogobernarse y
consolidar su estado de derecho y el sistema político.
Como datos relevantes, es interesante destacar que el país alcanza los 14 millones 361
mil 66 habitantes en el territorio nacional. Cuenta con una población rural que ronda el
53.9% y un promedio de 85% catalogada como pobre.42 En ese contexto y con las
condiciones materiales de existencia y subsistencia de los guatemaltecos, cabe
preguntarnos cuánto influye la política, la politización de la sociedad y el derecho que
rige a la política, para mantener ese status quo nacional. Stuart Mill, sentencia que
“Algunas veces un pueblo se libera porque antes se había enriquecido, o se enriquece
porque antes se había liberado. Las creencias y las leyes de un pueblo ejercen una
poderosa influencia sobre su situación económica; y ésta, a su vez, por su influencia
sobre su desarrollo mental y sus relaciones sociales, influye en sus creencias y leyes.”43
De todas maneras, estimamos que es necesario llenar de más política a la sociedad, y
saturar de más sociedad a la política. De esta sinergia, podrá surgir el escenario y
condiciones para que Guatemala se desarrolle integralmente, en lo económico, político
y social.
Adicionalmente a los factores histórico-sociales considerados, el desarrollo económicosocial de los guatemaltecos, también ha determinado el tipo de creencias y leyes que
han perfilado el sistema político que se observa históricamente. De allí que la política,
como producto supra estructural, también está condicionada a dicho entorno. Esto nos
42
PRODATOS, S.A. Investigación publicada en Revista “D”, número 369, Diario Prensa Libre.
Guatemala, 7 de agosto 2011. Pág. 4. [email protected] y www.prensalibre.com
43
STUART MILL, John: “Principios de Economía Política”. Fondo de Cultura Económica. México, 2006.
Pág. 29
29 permite visualizar cuánto grado de responsabilidad e incidencia, tiene la política en el
desenvolvimiento económico, político y social de Guatemala. Es innegable que en pleno
siglo XXI, se mantienen condiciones de miseria, exclusión, racismo,44 falta de cohesión
de la sociedad guatemalteca y, en alguna medida, una especie de “colonialismo
interno”45 como el que denuncia la guatemalteca y Premio Nobel de la Paz, Rigoberta
Menchú. Al final de cuentas, esa superestructura, construida por la elite dominante,46
que contiene los pensamientos políticos, filosóficos, jurídicos, religiosos, artísticos, etc.,
tiene un solo origen: “La clase dominante crea, de acuerdo con sus conceptos, las
instituciones llamadas a defender sus intereses clasistas.”47
Pero a pesar de las condiciones precitadas, podemos afirmar que Guatemala es una
tierra verde y exuberante, de la cual nuestro Premio Nobel de Literatura Miguel Ángel
Asturias escribió que: “…sobre las selvas pasaban las nubes con forma de lagarto
llevando en los lomos tesoros de luz.”48 Pero también es un lugar de enormes
desigualdades,49 historia política turbulenta y sometida casi permanentemente, a un
44
“El racismo constituye un elemento justificador de la ideología dominante para asegurar su cohesión
como clase y justificar su dominio frente al indígena. De este modo, la oligarquía se afianza en el poder
desde la época colonial hasta nuestros días. El racismo constituye un elemento histórico en la ideología
de la clase dominante guatemalteca, que se manifiesta de diversas formas en las distintas etapas
históricas y funciona como mecanismo legitimador de la clase dominante, como factor de diferenciación
social, valorizando las diferencias reales e imaginarias y convirtiéndolas en estereotipos.” CASAUS
ARZU, Marta Elena: “Guatemala: Linaje y Racismo”. Editorial F&G Editores. Guatemala, 2007. Pág.258
45
BURGOS, Elizabeth: “Me llamo Rigoberta Menchú y así me nació la conciencia”. Editorial Siglo XXI.
México, D.F. 1987. Pág. 10
46
Al referirse a quienes detentan el poder real en los países, el eminente economista SMITH, cita que: “El
país pertenece a sus dueños, y éstos no pueden desentenderse del todo de la protección que deben en
justicia a los pueblos que les obedecen…Si los dueños entienden su interés real, no podrán dejar de
reconocer que éste es el mismo que anima a sus pueblos, y si los oprimen, es casi siempre por
ignorancia o por preocupaciones nacidas del caprichoso sistema mercantil.” SMITH, Adam: “Riqueza de
las Naciones”. Publicaciones Cruz O., S.A., México, D.F. 1977. Pág. 258
47
NIKITIN, P. “Economía Política” Editores Mexicanos Unidos, S.A., México, 2005. Pág. 10
48
ASTURIAS, Miguel Ángel: “El Señor Presidente”. Losada. Buenos Aires, Argentina, 2009. Pág. 291.
49
“Es Guatemala una sociedad de desigualdades extremas y sus índices de pobreza son notables.
Según datos de la Secretaría de Planificación y Programación de la Presidencia de la República
(SEGEPLAN), el 51% de la población viven en estado de pobreza y otro 15-16% vive en pobreza
extrema, lo que arrojaría un total de 66-67% viviendo en precariedad. Las medianas y grandes
corporaciones empresariales que en 2005 representaban el 1.35%del total de empresas registradas en el
país, concentraban casi el 40% de PIB. Los asalariados reciben el 32% del ingreso nacional, lo cual
puede ser entendido si lo comparamos con un país vecino, Costa Rica cuyos asalariados perciben el
48%, o España país en el cual perciben el 42%.” FIGUEROA IBARRA, Carlos. “¿En el Umbral del
30 proceso de prueba, ensayo y error en materia de institucionalización y democratización.
Esto se explica, si partimos que se percibe en la sociedad guatemalteca, profundas
desigualdades, enormes exigencias sociales y, por consiguiente, se manifiesta
hartazgo, desinterés y hasta rechazo explícito y agresivo, hacia la política, los políticos
o la acción política. Obviamente, el actuar de auténticos demagogos, también ha
contribuido a erosionar la imagen del político y su credibilidad. No obstante autores
como Michels, advierten que “El demagogo, ese fruto espontáneo del suelo
democrático, desborda de sentimentalismo, y se conmueve profundamente ante las
penurias del pueblo.”50 Y, lo más preocupante, la existencia de un rechazo indirecto de
la democracia. Ello nos puede llevar a pensar, como creen algunos pesimistas, que
podríamos estar expuestos al riesgo de un proceso de involución político-social,
retroceso al autoritarismo que se vivió en períodos históricos ya superados.
Pero quizá el guatemalteco no esté rechazando per sé la democracia como sistema de
gobierno. Quizá su rechazo sea contra las insatisfacciones y carencias que enfrenta y
de las cuales hace responsables al sistema democrático de gobierno. Ejemplificando
esta actitud de añoranza por regímenes autoritarios, puede considerarse que durante el
ejercicio de gobiernos autoritarios, presididos por militares, se construyó gran parte de
la infraestructura nacional. Prácticamente, es la única con que cuenta el país y en fase
de deterioro parcial o total. Carreteras, puentes, puertos, silos, hidroeléctricas,
acueductos y sistemas agrícolas de riego, etc., fueron desarrollados en períodos de
gobiernos de corte militar51 y autoritario. También la apertura democrática de 1985, fue
dirigida por gobiernos militares sucesivos de facto. Incluso la suscripción del Acuerdo
de Paz, obedeció, entre otras causas a que “Las fuerzas guerrilleras fueron derrotadas
porque subestimaron la fuerza y organización del ejército. Vale decir, porque
sobrevaloraron las propias, en un pecado de soberbia inadmisible en estos asuntos. Su
Posneoliberalismo? Izquierda y Gobierno en América Latina”. F&G Editores y Facultad Latinoamericana
de Ciencias Sociales, FLACSO. 2ª. Edición. Guatemala, 2010. Pág. 124
50
MICHELS, Robert: “Los partidos políticos I. Un estudio sociológico de las tendencias oligárquicas de la
democracia moderna” 2ª. Edición. Buenos Aires. Amorrortu, 2008. Pág. 62 y 63
51
“El Ejército surgió, profesionalmente y con carta ciudadana de identidad en 1873 con el afianzamiento
de la BURGUESIA OLIGARQUICA cuando los liberales de Justo Rufino Barrios se erigieron en dueños,
amos y señores del país, desde junio de 1871…a la fecha…” FLORES ALVARADO, Humberto. Op. cit.
Pág. 263
31 presencia continuó, pero dejaron de constituir esa amenaza militar cuyo punto
culminante había ocurrido entre 1980 y 1982.”52
Es evidente que estas obras se heredaron de los regímenes autoritarios y
antidemocráticos. Quizá por ello la sociedad compara, y por ello resiente, que en los
casi veintisiete años de período democrático, prácticamente lo que se tiene sea una
herencia de corrupción, ineficiencia, burocratización y abandono. Pero lo negativo es
que se asuma que es el sistema democrático el responsable. Pero no perdamos de
vista que “El mejor gobierno es el que gobierno lo menos posible.”53 Hoy que proliferan
en nuestro país las “marchas campesinas” exigiendo tierra, condonación de deuda
agraria por fincas que fueron entregadas a excombatientes de la guerrilla, petición de
nuevos créditos, que se aprueben leyes agraristas, cabe recordar que no obstante el
proceso de “colonización” de los gobiernos militares, para dotar de tierra a campesinos,
que arrancó con el Decreto Número 559, antítesis del Decreto 900 (Reforma Agraria),
derivó en que desde 1964, estuviese el “…62% de la tierra cultivable en manos del
2.1% de la población.”54
Ello implica que el quehacer político en Guatemala, no puede desarrollarse al margen, o
en abierto soslayo, de las condiciones de país en lo económico,55 social y político,
propiamente dichos, y los intereses en juego, tanto de los políticos, las corporaciones y
los movimientos sociales como los movimientos campesinos pro-tierra que se observan
en Guatemala. De allí que Francisco Letamendía, afirme que: “-Una diferencia entre
partidos y movimientos que no exige demasiadas explicaciones es la que describe
cómo se representan los intereses de uno y otro. El partido prioritariamente canaliza
52
TORRES RIVAS, Edelberto y AGUILERA, Gabriel: “Del Autoritarismo a la Paz”. Facultad
Latinoamericana de Ciencias Sociales –FLACSO-. Guatemala, 1998. Pág. 68
53
THOREAU, Henry David: “Desobediencia Civil”. Editorial Universitaria. S.A. Santiago de Chile, 1970.
Pág. 18
54
JONAS, Susanne y TOBIS, David: “Guatemala Una Historia Inmediata”. Editorial Siglo XXI, México,
1976. Pág. 49
55 “…la clase dominante en Guatemala moderna en términos empresariales, es tributaria del
oscurantismo reaccionario en lo que ideología se refiere. Procedente de una tradición expoliadora y
represiva que arranca desde la colonia, acaso sea mucho más reacia a reformas que muchas de sus
congéneres.” Figueroa Ibarra. Op. Cit. Pág. 105
32 electoralmente los intereses, y el movimiento lo hace, también prioritariamente, con
medios no convencionales –huelgas, manifestaciones, acciones violentas, etc.-y en
ningún caso por medio de la vía electoral.”56
Obviamente, estos nuevos actores sociales, ejercen su acción y beligerancia en contra
del Estado, con temas diversos en los ámbitos social, cultural, educativo, legislativo y,
por supuesto, activan sus protestas en lo político. Gozan, entre otras, de una ventaja
esencial: todo su actuar no está sometido al desgaste al que se ven sometidos los
partidos políticos como instituciones de derecho público. Amparados en esa fortaleza,
puede observarse que en las últimas dos décadas, estas expresiones o actores
sociales, hacen política, sin pertenecer formalmente a un grupo o partido político. Estos
inciden en algunas decisiones de Estado y a veces, logran direccionar las agendas
legislativas, en su caso.
Pero el fenómeno no es nuevo. Niemeyer, al prologar la obra Heller, desde la década
de los años 30, ya advertía que “…la decadencia presente de las ciencias políticas, y
también, en parte, la crisis política actual, se deben a la falta de relación de las teorías
políticas con la realidad y al carácter relativo de sus afirmaciones causado por su
manera subjetiva de plantear los problemas.”57 Si la política es calificada
coloquialmente como “el arte de lo posible”, o “el poder de poder ejercer poder”,58 se
impone en las sociedades un clamor porque aquella esté íntimamente conectada con
las realidades sociales en que se ejecuta.
En el caso de los ciudadanos y los movimientos sociales, y su relación con la política, el
Dr. Letamendía,59 advierte y amplia acerca de la posición de los “free rider”, que de
acuerdo al dilema olsoniano, los coloca como meros receptores de beneficios del
56
CAMINAL BADIA, Miquel (Editor): “Manual de Ciencia Política”. Editorial Tecnos. Madrid, 2005. Pág.
388.
57
HELLER, Hermann: “Teoría del Estado”. 6ª edición. Fondo de Cultura Económica. México, 1968. Pág.
8.
58
Pero como dice YOURCENAR, en cuanto a qué es lo que debe prevalecer frente al poder, “En cuanto
a mí, busqué la libertad más que el poder, y el poder tan sólo porque en parte favorecía la libertad.” Op.
cit. Pág. 46
59
CAMINAL BADIA, Miquel (Editor). Ibid. Pág. 396.
33 sistema, sin involucrarse ni pagar el costo por los mismos. Para efectos del desarrollo
de este trabajo, estimamos muy completa la caracterización que de los partidos
políticos, hace Pablo Oñate, especialmente en lo referente a que un “pueblo amorfo”60 y
su relación con el Estado, no es posible. Es decir, los partidos políticos son
consustanciales a la sociedad misma.
El presente trabajo pretende reflejar una parte esencial del sistema de partidos
políticos, la crisis que han sufrido y la legislación que se ha producido al respecto en
Guatemala. Al respecto, podemos observar que en los diferentes períodos a veces ha
existido anomia de ideas y legislación, otras con exceso de legislación, otras con
exceso de legislación y con franco sesgo ideológico,61 otras más, con exceso de
normativa reglamentaria que raya en la inmovilización del proselitismo partidario, so
pretexto de guardar las formas electorales.
Pero sea cual fuere la óptica con que analicemos el fenómeno político en nuestro país,
no podemos obviar, como lo afirma Deutsch, que “El agua que bebemos, el aire que
respiramos, la seguridad de nuestras calles, la dignidad de nuestros pobres, la salud de
nuestros ancianos, la educación de nuestros jóvenes y la esperanza de nuestros grupos
minoritarios, están ligados a las decisiones políticas tomadas en el Palacio Municipal,
en la capital del Estado o del país.”62 Por ello, el mismo autor concibe al Estado como
“una maquinaria organizada para la elaboración y ejecución de decisiones políticas y
para la imposición de las leyes y reglas de un gobierno.”63
En ese sentido, prácticamente todo lo que pasa en la sociedad, está condicionado y
pasa por decisiones políticas. Ya sea por acción u omisión, los partidos políticos, los
líderes que los dirigen y el sistema político en que estamos inmersos, dispone desde la
calidad del aire que respiramos, hasta el tipo de educación que reciben los escolares.
Actualmente el país posee un subcampeonato mundial en analfabetismo y tres de los
60
DEL AGUILA, Rafael (editor): “Manual de Ciencia Política”. Editorial Trotta, S.A. Madrid, 2009. Pág.
251
61
GARCIA LAGUARDIA. Op. Cit. Pág. 35.
62
DEUTSCH W. Karl: “Política y Gobierno”. Fondo de Cultura Económica. México 1998. Pág. 15.
63
Ibid. Pág. 120
34 municipios más pobres del mundo se ubican en él. De la eficiencia y eficacia en la
conducción
de
las
políticas
públicas
depende
entonces,
el
ser
tildado
internacionalmente como enclave bananero o simplemente una república bananera, o
más eufemísticamente, como parte de los “países emergentes”. No obstante, el atraso
o el desarrollo de los países, no sólo depende de los políticos. El mercado y la
empresarialidad, también tienen su cuota de participación en la insatisfacción o
satisfacción de la sociedad con las condiciones de vida y con el sistema democrático,
indistintamente.
Quizá por eso, hoy que estamos inmersos en el desarrollo de ciudades cosmopolitas,
globalizadas, postmodernas y de alta productividad, cobran vigencia los pensamientos
de Adam Smith, al prevenir acerca de que “El gobierno civil y la soberanía deben estar
siempre en distinta mano que el manejo de los intereses mercantiles.”64 Smith ya
preveía que ser juez y parte, en el caso de los empresarios, debilita al gobierno y
castiga a la sociedad. Pero, de igual manera, en ese sano equilibrio de separación de
poderes, y de libertad65 de comercio e industria, Smith también enseña que “No hay
reglamento ni estatuto mercantil capaz de aumentar la cantidad de industria, en
cualquier sociedad, a más de lo que su capital pueda mantener y emplear.”66
Pero no obstante ello, a tal grado llega la influencia del quehacer político que una
cadena televisiva como CNN,
67
en una de sus viñetas acostumbra a decir, ampliando
un poco más el radio de influencia de las multinacionales, el poder corporativo, la
política y los políticos, que <<cada minuto en Washington pasa algo que afectará más
tarde o temprano nuestras vidas>>.
64
SMITH, Adam: “Riqueza de las Naciones”. Volumen II (Libros IV y V) Publicaciones Cruz O., S.A.
México, D.F. 1977. Pág. 259
65
Al respecto de qué es ser libre y cómo se debiera manifestar la libertad política propiamente dicha, en
una sociedad abierta, Rothbard, lo plantea en términos que “Soy libre en la medida en que ningún otro
ser humano interfiere en mis actividades. En este sentido, la libertad política es sencillamente el área
dentro de la cual cada persona puede hacer lo que desea.” ROTHBARD. Op. cit. Pág. 294
66
SMITH, Adam: Ibid. Pág. 28
67
“En ese sentido, el problema parece radicar no tanto en lo que se dice sino en lo que se calla u oculta,
es decir, en lo que Rafael del Águila ha llamado efecto CNN…Este efecto, como es conocido, designa
esa característica de la globalización de acuerdo con la cual la realidad existe exclusivamente en
términos de medios de comunicación de masas. Lo que aparece en pantalla es relevante, lo que se
oculta al ojo de la cámara desaparece.” WALDO ANSALDI. Op. Cit. Pág. 111.
35 Desde esta perspectiva, se estima fundamental la consolidación del proceso
democratizador, para no caer en el riesgo de sacrificar la incipiente democracia, versus
la insatisfacción de las necesidades68 de la sociedad guatemalteca que, dicho sea de
paso, son insoslayables e innegables. Y, aunque a veces la percepción sea que en
Guatemala, apenas tenemos una democracia representativa,69 no debemos perder de
vista que el contar con elecciones periódicas, es un ejercicio enriquecedor y constructor
de un sistema democrático en permanente perfeccionamiento. Esto, sin perjuicio que la
sociedad guatemalteca se caracteriza, entre otras cosas, por ser muy cortoplacista y
con poca memoria histórica.
Solo así se explica que, periódicamente, manifieste inconformidad, poca credibilidad,
menosprecio o apatía, por el sistema de gobierno democrático y que, al igual que la
generación de la tercera edad, aún añore la dictadura ubiquista, o que se perciba cierto
grado de nostalgia por los gobiernos autoritarios. Pero en el caso de la existencia de
apatía en las masas o la sociedad, por la participación política, conlleva un doble riesgo.
Primero, deja libre el camino para que líderes o pseudo-líderes dispongan
unilateralmente, de espaldas al ciudadano. Segundo, que con su desdén por la política,
terminen como dice Michels, despertando en los líderes políticos “un apetito natural de
poder.”70
Esa actitud del guatemalteco es entendible, si consideramos que a partir de la
suscripción del Acuerdo de Paz, se efectuaron transformaciones en diversos ámbitos de
la vida nacional. Se produjo la desmilitarización del país, la “modernización” policial, la
puesta en vigencia de una nueva legislación procesal penal, la reducción del Estado,71 68
SARTORI, advierte que “La democracia es un sistema político. Planificación, mercado y capitalismo
son en cambio expresiones que aluden a un sistema económico. Por muy entrelazadas que estén las dos
cosas, un sistema político y un sistema económico no son la misma cosa. Y si previamente no las
diferenciamos, nunca llegaremos a comprender cómo se relacionan.” SARTORI, Giovanni: “¿Qué es la
democracia?”. Santillana Ediciones Generales, S.A. de C.V. México, 2007. Pág. 247
69
“Diccionario de Historia y Política del Siglo XX”. Editorial TECNOS. Madrid, 2001. Pág. 205.
70
MICHELS, Robert: “Los partidos políticos II. Un estudio sociológico de las tendencias oligárquicas de la
democracia moderna”. 2ª. Edición. Buenos Aires: Amorrortu, 2008. P. 11
71
“El llamado, por John Williamson, Consenso de Washington, no es otra cosa que una estrategia de
estabilización económica definida por el gobierno estadounidense, el Fondo Monetario Internacional y el
36 como efecto de la influencia globalizadora y de las fuerzas del mercado, actuando como
políticos y ejerciendo el gobierno- y la institucionalización de la Procuraduría de los
Derechos Humanos,72 prácticamente se ha generado en los últimos quince años una
mínima o nula presencia del Estado en el territorio nacional. Así por ejemplo, antes
había toda una presencia de autoridad (sin entrar a calificar su legitimidad ni legalidad),
que posibilitaba que en las comunidades más lejanas y rurales, fungieran los “alcaldes
auxiliares”, los “comisionados militares”, los “comisarios municipales”, las “alcaldías
indígenas”, y otras formas de poder local. Con ello, se tenía una percepción de cercanía
a la población, por parte del aparato del Estado, principalmente en las áreas rurales.
Hoy, las comunidades urbanas y rurales, han quedado en estado de orfandad de
autoridad. El Estado ha perdido presencia en el interior de las comunidades del país.
Una simple denuncia por delitos menores, conlleva todo un engorroso y burocrático
procedimiento en el Ministerio Público. Los juzgados de paz penal se han convertido en
meros receptores de solicitudes, que no resuelven casi nada. Y, en casos de naturaleza
civil –juicios sumarios de desahucio-, por ejemplo, no hay certeza jurídica. Aunque se
cuente con las órdenes de desalojo, basta con la presencia de delegados de la
Procuraduría de Derechos Humanos, para que las órdenes judiciales se posterguen y
en el peor de los casos, se dejen de cumplir, so pretexto de garantizar derechos
humanos de los vencidos en juicio. En ese sentido, Habermas, al analizar la lucha de
los poderes de las creencias, hace referencia al programa con el que se funda la ONU,
que es fruto del pacto mundial, en aras de hacer que todas las naciones estén
obligadas al respeto de los derechos humanos, y por consiguiente, de la democracia
misma. Pero advierte que, en la perspectiva estrictamente de carácter cultural, puede
darse lo que él denomina un “choque de pueblos y culturas”.73
Banco Mundial, que persigue, según sus propulsores, reducir el “tamaño” del Estado mediante la
privatización (desestatización) de empresas y servicios públicos, terminar con el déficit fiscal y abrir los
mercados nacionales con el objetivo de acrecentar inversiones de capital externo que posibiliten un
mayor crecimiento económico.” Waldo Ansaldi. 0p. Cit. Pág. 99
72
Numeral II, del Acuerdo Global Sobre Derechos Humanos, suscrito en México, D.F., 29 de marzo de
1994, entre el Gobierno de la República y la Comandancia de la Unidad Revolucionaria Nacional
Guatemalteca. UNIVERSIDAD RAFAEL LANDIVAR: “Acuerdos de Paz”. Guatemala, 1998. Págs. 45 a 56
73
HABERMAS, Jürgen: “Fragmentos filosófico-teológicos”. De la impresión sensible a la expresión
simbólica. Editorial Trotta, S.A. Madrid, 1999. Págs. 39 y 40
37 Para el ciudadano de a pie, no hay justificaciones ni explicaciones que valgan. A este
únicamente le interesa y fija su atención en algunos de los frutos negativos de la
democracia: el libertinaje, excesos de manifestaciones, bloqueos de carreteras, “tomas
pacíficas” de inmuebles o áreas públicas, y demás abusos en que se cae, por la
ineficiencia del sistema judicial. No en vano, hay autores, severos en su análisis de la
democracia, que la catalogan como un sistema frágil, en su esencia.74 Quizá por eso, el
abstencionismo en los procesos de elección es creciente en cada evento electoral.
En el caso guatemalteco, esa fragilidad del sistema democrático llega a tal extremo
que, en el tema penitenciario, para no violar supuestos derechos humanos, las requisas
en cárceles y el control de los internos, constituye toda una odisea judicial el obtener las
órdenes correspondientes. Todo ello, so pretexto de no incurrir en violaciones a los
“derechos humanos” de los requisados-internos. O bien, en el tema del delito de
extorsiones, los jueces demoran tanto en analizar las solicitudes de escuchas
telefónicas u obtención de desplegados de llamadas, que las bandas de delincuentes,
tienen tiempo para moverse de los lugares en puedan ser ubicados, y cambiar líneas
telefónicas. Con esto se desalienta el trabajo de los fiscales, se pierde el esfuerzo de
fomentar una cultura de denuncia y, por consiguiente, se incrementa el desencanto con
la democracia.
Para comprender mejor el desencanto de la una buena parte de la sociedad
guatemalteca con la democracia, hay que agregar también que se usa un vocabulario
matizado de eufemismos: En vez de delincuentes menores de edad, se les denomina
“menores en riesgo” o “menores en conflicto con la ley”, las invasiones de tierras son
denominadas “reivindicaciones ancestrales”, “conquistas sociales”. Y, en el ámbito de la
universidad estatal, se confunde autonomía académica, administrativa y legal, con la
existencia de un estado libre, dentro del propio Estado nacional.
74
Para tal caso, SARTORI, llega aún más lejos y afirma que “La democracia cría personas viciadas que
la convierten en un sistema frágil. Un cataclismo climático y medioambiental puede enterrar, junto a todo
lo demás, también a la ciudad de la buena vida, incluso a la ciudad liberal-democrática. El desarrollo
insostenible está claro que no sostiene a la democracia.” SARTORI, Giovanni: “¿Qué es la Democracia?”.
Op. cit. Pág. 397
38 Cuando acaecen hechos delictivos en el campus central de la universidad estatal, o en
sus sedes regionales, las fuerzas de seguridad no pueden actuar en la prevención ni
persecución ante la comisión de asesinatos, linchamientos, tráfico de drogas, etc. El
argumento falaz es que al permitir el ingreso de fuerzas de seguridad para la
prevención y persecución de hechos delictivos, es que “se violaría la autonomía
universitaria”. Con esto, se hace un símil peligroso al “vaticanizar” un territorio, y todo
mediante una interpretación extensiva del término autonomía, cuando se trata del
territorio del campus universitario. Condiciones como las planteadas contribuyen a que
el Estado prácticamente no tenga presencia para imponer orden y garantizar la
integridad física de la comunidad universitaria y de sus bienes etc., al igual que ocurre
con el resto de la población.
Breve análisis de los partidos políticos:
Al referirnos a los términos partidos políticos, o políticos, fácilmente vienen a nuestra
mente varios estereotipos que paulatinamente han anidado en ella. Algunos de estos
son producto de la experiencia personal. Otros, de carácter referencial y la mayoría,
confirmados por las evidencias y vivencias nacionales conocidas. En el imaginario
nacional guatemalteco, existen una serie de experiencias y anécdotas relacionadas con
el quehacer político.75 Estas van desde la corrupción, la eliminación física, el
compadrazgo, violaciones a los derechos humanos, el tráfico de influencias y la
ineficiencia de sucesivos gobiernos, civiles o militares, hasta escándalos de dilapidación
de fondos públicos, entre otros.
No en vano, varias expresiones de la sociedad civil,76 han desarrollado acciones
judiciales externas que, en varios casos, el país ha recibido condenas por parte de la
Corte Interamericana de Derechos Humanos, por violaciones de tales derechos. En
75
La Constitución Política de la República de Guatemala, en el artículo 223, establece el régimen político
electoral.
76
Pablo Oñate, de la Universidad Autónoma de Madrid, en su trabajo “Los Partidos Políticos”, deja
plasmada una interesante reflexión, respecto a que “…En los últimos años ha ido ganando adeptos la
teoría de que los partidos políticos están en un proceso de crisis que podría llevarles a desaparecer y ser
sustituidos por otras organizaciones de carácter no partidista.” DEL AGUILA, Rafael (editor): “Manual de
Ciencia Política”. Editorial Trotta, S.A. Madrid, 2009. Pág. 252
39 contrapartida, ante el actuar de los políticos en el ejercicio del gobierno, nuestro país ha
tenido una serie de presiones internacionales, exigiendo que se pueda promulgar leyes
en contra del enriquecimiento ilícito, búsqueda de transparencia, ruptura del secreto
bancario,77 establecimiento de comisiones de postulación para nombramiento de ciertos
funcionarios de alto nivel, etc.
Los partidos políticos en Guatemala, no se diferencian tanto de sus similares en otros
países. Así, por ejemplo, la Universidad de Vanderbilt,78 a través del Proyecto de
Opinión Pública en América Latina –LAPOP- por sus siglas en inglés, estableció que en
2008, en la sociedad guatemalteca, apenas un 30% cree que los partidos políticos
escuchan a la gente. Y, el fenómeno no es propio de países subdesarrollados, o latinos
propiamente dicho, porque Barómetro de Las Américas (LAPOP), cita que en Estados
Unidos de América, únicamente un 29.8% cree que los partidos políticos escuchan a la
gente, en Brasil, el porcentaje es del 24.7%.
La pérdida de credibilidad y confianza es un elemento generalizado. El ejercicio político
y la conducción de la cosa pública y el poder formal, es prácticamente tan difícil como
desplumar una gallina, y pretender volver a emplumarla. La corrupción corroe la
confianza en las instituciones. Pero impacta de igual manera la baja tasa de
recaudación tributaria.79 Esto impone que a la cuestión tan discutida y dimensionada,
como lo es la pérdida de credibilidad y confianza, se le deba aplicar la regla del “arte
práctico de gobernar.” Al respecto John Stuart Mill, concibió que consista en establecer
77
En cuanto a esta temática, es interesante la información que aporta respecto al problema del secreto
bancario, la entidad INSTITUTO CENTROAMERICANO DE ESTUDIOS FISCALES, ICEFI, que reporta la
existencia a nivel mundial de 60 jurisdicciones secretas, en materia de manejo de cuentas bancarias y
depósitos con riesgos de lavado de dinero. Entre estos no figura Guatemala, sin embargo, derivado de
presiones internacionales globalizantes, se le exige modificar su legislación en materia de secreto
bancario, así como la normativa de las sociedades anónimas, en el sentido que únicamente se autorice la
emisión de acciones nominativas, suprimiendo las acciones al portador, etc. www.icefi.org/categorias/43.
Fecha consulta: 31 de marzo 2012
78
Ver: www.vanderbilt.edu/lapop/insights/I0812es.pdf. Fecha consulta: 6 de abril 2012
79
La Organización para la Cooperación y el Desarrollo –OCDE-, en el cuadro 24, de los índices de
captación de impuestos por país, refleja que Guatemala en 2009, recauda fiscalmente Q.37, 566
millones. Sin embargo, el presupuesto general de la nación, sobrepasa los Q.50, 000 millones, por lo que
es deficitario, desfinanciado y sujeto a completarse con la adquisición de deuda pública interna externa.
Ver.
www.keepeek.com/Digital-Asset-Management/oecd/taxation/revenue-statistics-in-latinamerica/country-tables-1990-2009-tax-. Fecha de consulta: 1 abril 2012
40 “los límites que deben fijarse a las funciones y a la acción de los gobiernos.”80 Al
respecto, las cifras que cita Ansaldi, de la imagen de los partidos políticos en
Latinoamérica, son lapidarias: “…para Latinobarómetro, el Poder Judicial (33%), el
Congreso Nacional (27%) y los partidos políticos (20%) son las tres instituciones con
menos confianza ciudadana… la Iglesia católica (72%), y la televisión (60%) aparecen
como instituciones con mayor grado de confianza.”81 El poder judicial se estima que
obtiene un alto porcentaje, debido a la independencia que goza, en el ejercicio de su
función. Su neutralidad, es la única que garantiza que la justicia sea pronta, cumplida,
justa e imparcial.
Desencanto con los partidos políticos:
Para ilustrar ese desencanto82 de la ciudadanía con el sistema democrático, cabe
destacar que, en nuestro país, en materia de delegación de competencia administrativa,
descentralización y apoyo al poder local, derivado de la democratización, lo que se
percibe que se ha dado es un proceso de involución, con los resultados negativos
reiteradamente comentados en este trabajo.
Recuerdo que cuando era niño, la mayoría de municipalidades tenían sus propias
plantas hidráulicas para la generación de energía eléctrica de su cabecera municipal.
Un ejemplo lo fue el municipio donde nací al Norte del territorio. Una bien montada
planta de generación hidráulica abastecía al pequeño poblado de Rabinal,83 en el
departamento de Baja Verapaz, que fue fundado por los conquistadores españoles y
frailes dominicos en el siglo XV, aproximadamente entre 1630 y 1670, y que constituye
80
STUART MILL, John: “Principios de Economía Política”. Fondo de Cultura Económica. México, 2006.
Pág. 681
81
ANSALDI, Waldo (Director): “La Democracia en América Latina, un Barco a la Deriva”. Fondo de
Cultura Económica. México, 2007. Pág. 107
82
LAPOP- Universidad Vanderbilt. Ibid. www.vanderbilt.edu/lapop/insights/I0812es.pdf. Fecha consulta: 6
abril 2012
83
HERNANDEZ GOMEZ, José Efraín: “Rabinal de mis Recuerdos”. P. Amenábar- Editor. Primera
edición. Guatemala, 1991. Pág. 17
41 la cuna del folklore nacional y de ballet-drama “El Rabinal Achí” y que el abate Charles
Etienne Brasseur de Bourbourg descubriera en 1855.
El mantenimiento, producción, comercialización de la energía eléctrica eran totalmente
municipales. Resalta el hecho que en esa época el gobierno central no hacía ninguna
transferencia presupuestaria a los poderes locales. Ni siquiera se dependía de los
precios del crudo a nivel internacional. Se aprovechaba perfectamente la autonomía
municipal y los recursos locales. Y hasta se gozaba de las pequeñas cascadas y
manantiales que nutrían la planta hidroeléctrica.
Hoy, esa misma comunidad, recibe con resignación un servicio eléctrico deficitario,
pobre y sin rostro. La transnacional que lo sirve, ni siquiera tiene una oficina local para
atender a los usuarios. Cualquier gestión requiere viajar a la cabecera departamental,
para intentar obtener respuestas. Son las leyes del mercado, que ha acaparado las
competencias administrativas del estado en el tema de los servicios públicos y es la
postmodernidad. Pero así como hay efectos muy positivos, también es la ocasión, para
repensar el rol de los partidos políticos, la democracia y el sistema democrático, para
responder a la demanda societaria desencantada con éstos.
Los partidos políticos nacieron con una concepción europea, para hacer posible la
intermediación entre sociedad civil y poder republicano. Es interesante entonces
conocer la conceptualización que tiene en sus inicios el término partido político. Como
articuladores y catalizadores de los intereses y necesidades de la sociedad, los partidos
políticos con sus diferentes matices y énfasis, han estado presentes a lo largo de la
historia y civilización humanas. Según Cárdenas Gracia, “…los partidos modernos
tuvieron su origen en el siglo XVII, evolucionaron durante el XVIII y se organizaron, en
el pleno sentido del término, a partir del XIX, concretamente después de las sucesivas
reformas electorales y parlamentarias iniciadas en la Gran Bretaña en 1832…fueron
condicionados por los procesos de formación de los Estados nacionales.”84
84
BACA OLAMENDI, Laura, compilador (y otros): “Léxico de la Política” Editorial Fondo de Cultura
Económica, México, 2000. Pág. 512
42 En el caso del tratadista Duverger,85 aparte de clasificar los sistemas políticos en
bipartidistas, de partido único y multipartidistas, además distingue cuatro tipos
sociológicos diferentes, a los cuales se les puede denominar partidos, entre los que
destacan: a) “…los partidos “burgueses” del siglo XIX, que sobreviven en forma de
partidos conservadores y liberales: en los Estados Unidos siguen ocupando solos la
escena política...Su actividad está orientada totalmente hacia las elecciones y las
combinaciones parlamentarias…; b) Los partidos socialistas de la Europa continental
tienen una estructura diferente, que descansa en abarcar masas populares lo más
numerosas que sea posible; c) los partidos católicos y demócrata-cristianos…que
ocupan una posición intermedia entre los partidos antiguos y los partidos socialistas; d)
Los partidos de tipo arcaico y prehistórico, finalmente, que encontramos en algunos
países de Oriente, del Medio Oriente, de África, de la América Latina o de Europa
Central (antes de 1939), simples clientelas agrupadas alrededor de un personaje
influyente, clanes constituidos alrededor de una familia feudal, camarillas reunidas por
un jefe militar…”. Ejemplos latentes de estos gobiernos y sistemas políticos arcaicos,
autoritarios y desfasados, los tenemos en gobiernos como el de Myanmar (antigua
Birmania). En este país la opositora Aung San Suu Kyi,86 Premio Nobel de la Paz,
“acaricia su entrada en el Parlamento de Myanmar”, luego de encarcelamiento,
represión y aislamiento. Todo ello, con el agregado que se incrementan estos abusos,
en países con gobiernos fundamentalistas, o bien típicamente autoritarios que
restringen, limitan o tergiversan el ejercicio, goce y disfrute de libertades
constitucionales, o de los propios derechos humanos, en general.
Es ineludible hablar de la democracia, sin que se tenga que hacer referencia a los
partidos políticos. De hecho, pueden considerarse antinomias. Se asume que
constituyen los principales catalizadores de los intereses sociales. Podríamos incluso
afirmar que los partidos han estado presentes desde tiempos sumamente antiguos. Ya
85
DUVERGER, Maurice: “Los Partidos Políticos”. Fondo de Cultura Económica. México, 2000. Pág. 31
Diario
El
País.
Madrid,
España.
Edición
1
de
abril
2012.
www.prensaescrita.com/adiario.php?codigo=S&pagina=http://www.elpais.com. Fecha consulta: 1 de abril
2012
86
43 en Grecia “encontramos grupos organizados para luchar por fines políticos, mientras
que en Roma, la historia de los hermanos Graco y la guerra civil entre Mario y Sila son
ejemplos de ese tipo de partidos.”87 Puede decirse entonces, que los partidos políticos
constituyen un paradigma de la democracia representativa, tuvieron su origen en el
siglo XVII, evolucionaron durante el XVIII y se organizaron plenamente en el XIX,
habiendo dominado la historia del siglo XX. Pero que hoy en el siglo XXI se tiene la
percepción que puedan estar en relativa crisis de identidad, credibilidad y
perdurabilidad.
A pesar de ello, la democracia representativa, ha dependido con exclusividad del
nacimiento, desarrollo, institucionalización y eficacia de los partidos políticos, para
afianzarse y establecerse. Tal como lo afirma el PNUD “el principal mecanismo que
posee la democracia para alcanzar que el pueblo se gobierne a sí mismo es el sistema
electoral.”88 Y éste se desarrolla y consolida con el actuar de los partidos políticos.
Pero partiendo de las leyes de la dialéctica, la antítesis de los partidos políticos, a lo
largo de la historia han sido los que Max Weber,89 citado por Cárdenas García,
denominó “grupos de interés encubiertos”. En esta concepción, los grupos de interés
tienen la función de articular intereses y los partidos políticos la de su agregación. Por
ello, Duverger al referirse a partidos, clubes, comités, organizaciones populares, y en
general, a lo que hoy llamaríamos sociedad civil, les atribuye a todos cierto parentesco
profundo, cuando pregunta: “¿no desempeñan todas esas instituciones un mismo
papel, que es conquistar el poder político y ejercerlo?”90
Esto nos sirve para comprender los períodos en que, como en el caso guatemalteco,
sumado al desgaste normal e inherente al ejercicio del poder, existe una fuerte
presencia desigual, impacto y evolución de otros competidores en la escena pública,
87
CARDENAS GRACIA, Jaime “Partidos Políticos” LEXICO DE LA POLITICA. Fondo de Cultura
Económica. México, D.F. 2000. Pág. 512
88
PROGRAMA DE LAS NACIONES UNIDAS PARA EL DESARROLLO –PNUD- “Guatemala: hacia un
estado para el desarrollo humano” Informe nacional de desarrollo humano 2009/2010. Pág. 222
89
Ibíd. Pág. 513
90
DUVERGER, Maurice: “Los Partidos Políticos”. Fondo de Cultura Económica. México, D.F. 2000. Pág.
15
44 entre los denominados “<<parientes>> lejanos”91 y sus semejanzas, frente a los
partidos políticos. No obstante el parecido de estos competidores, entre ambos existe la
diferenciación en base al género próximo (genus proximun) y la diferencia específica
(differentia specifica),92 que los distingue: los primeros mueven a la sociedad y
canalizan sus demandas frente al Estado. Los segundos, luchan por acceder al ejercicio
del poder y la conducción del Estado, para responder a las demandas. Inevitablemente,
en el camino de ambos existen colisiones y enfrentamientos o, en el peor de los casos,
“competencia desleal”, por cuanto los “parientes lejanos” no sufren el desgaste del
ejercicio de poder de los partidos políticos y, en consecuencia, casi siempre manejarán
un discurso <políticamente correcto>.
Históricamente, según Duverger,93 la estructura de los partidos se caracteriza por su
heterogeneidad. De allí que en el siglo XIX se hablara de “partidos burgueses”, luego
surgieron los partidos fascistas, comunistas, obreros,94 católicos y demócrata cristianos,
y hasta algunos de tipo arcaico y prehistórico, que se encuentran en países de Oriente,
del Medio Oriente, de África, de la América Latina o de Europa central (antes de 1939).
Los partidos a lo largo de la historia, han pasado de ser partidos de notables, partidos
91
IBARRA y LETAMENDIA. Artículo incluido en “Manuel de Ciencia Política”. Caminal Badia, Miquel
(editor). Op. cit. Pág. 381
92
HABERMAS, Jürgen: “Fragmentos filosófico-teológicos” De la impresión sensible a la expresión
simbólica. Editorial Trotta, S.A. Madrid, 1999. Pág. 27
93
DUVERGER. Ibid. Pág. 33
94
En el caso de los partidos obreros del mundo socialista, el autor Zizek, tiene un controversial punto de
vista respecto al papel que jugaron en la caída de estos regímenes autoritarios, siendo dichos partidos la
base misma de sustentación –aparentemente- de aquellos, y lo explica de esta manera: “De este modo,
uno puede seguir soñando que la Revolución está a la vuelta de la esquina: sólo necesitamos un
verdadero liderazgo que sepa organizar el potencial revolucionario de los trabajadores. De creer tal cosa,
cabría entender que Solidarnosc (Solidaridad) fue originariamente un movimiento obrero, <<traicionado>>
luego por sus líderes, vendidos a la Iglesia y a la CIA…Desde luego, algo de verdad hay en este modo de
pensar: lo más irónico de 1953, Hungría en 1956, Solidaridad en Polonia) fueron en origen
levantamientos obreros que solo más adelante desbrozaron el camino a los movimientos
<<anticomunistas>> al uso; antes de sucumbir ante el enemigo <<externo>>, el régimen supo de su
falsedad por aquellos a quienes tales <<Estados de obreros y campesinos>> evocaban como su propia
base social. Sin embargo, eso mismo también demuestra que la revuelta de los trabajadores carecía de
todo compromiso socialista sustancial: en todos los casos, cuando el movimiento explotó, la ideología
<<burguesa>>al uso (libertad política, propiedad privada, soberanía nacional, etc.) se apoderó de él sin
levantar revuelo.” ZIZEK, Slavoj: “En defensa de causas perdidas”. Ediciones Akal, S.A. Madrid, España.
2011. Pág. 122 y 123
45 de masas, y diversos tipos que Duverger,95 distingue entre sistemas de partido único,
bipartidistas y multipartidistas, partidos de masas y de cuadros.
Es evidente que la historia confirma, con diversos matices, énfasis y estructuras, que
los partidos políticos han determinado con su actuar el destino de las naciones, a través
de sus líderes y otras élites de poder, que constituyen una poliarquía moderna, “tanto si
ejercen como si no ejercen la profesión de la política.”96 El debate es largo, pero para
los fines del presente trabajo, estimamos pertinente afirmar que tampoco se puede
prescindir de la mediación de los partidos para la organización de las sociedades
modernas. Es imprescindible, entonces, que la humanidad cuente con la “clase
política”, que posibilite los procesos de gobierno e intermediación y la vida en común,
pero como parte de un esfuerzo de la misma humanidad. No basta con que se haya
consumado una república, sino debemos anhelar vivir en una democracia.97 Total,
“nadie nace siendo demócrata. La democracia debe aprenderse.”98
En palabras del Doctor Jáuregui Bereciartu “…la gobernanza es un modelo a seguir si
queremos tener gobernabilidad y viceversa…”99 Visto así, podemos inferir que los
partidos políticos son “un mal necesario”100 que estará presente en las sociedades,
quizá con menos carga ideológica, pero igualmente incidirá y determinará la
organización de la vida democrática de nuestro tiempo. No obstante, de igual manera
despiertan animadversión, rechazo, pasiones y, paradójicamente, son a la vez
95
Op. Cit. Pág. 93
CAMINAL BADIA, Miquel: (editor). Op. cit. Pág. 33
97
Al respecto, Michels, advierte que “La burguesía victoriosa de los Droits de l´Homme consumó
ciertamente la república, pero no la democracia. Hoy podemos leer las palabras Liberté, Egalité,
Fraternité sobre los frontispicios de todas las prisiones de Francia.” MICHELS, Robert. “Los partidos
políticos I. Un estudio sociológico de las tendencias oligárquicas de la democracia moderna”. 2ª. Edición.
Buenos Aires. Amorrortu, 2008. Pág. 63
98
THESING, Josef: “Del Pensamiento de Josef Thesing”. Revista Asociación de Investigación y Estudios
Sociales, ASIES. No. 3. Guatemala, 2009. Pág. 58
99
JAUREGUI BERECIARTU, Gurutz. Clase curso “Retos del Constitucionalismo en el S. XXI.”
Universidad del País Vasco-Universidad Rafael Landívar. Guatemala, 26 de marzo 2011
100
El escritor OPPENHEIMER, al citar un estudio del Consejo Nacional de Inteligencia de los Estados
Unidos, el CNI, dice que: “Para el 2020…Viviremos en un mundo poco menos occidental, y un poco más
oriental, afirma. Al mismo tiempo, la política mundial tendrá cada vez menos que ver con ideologías y
cada vez más con identidades religiosas y étnicas, según el pronóstico del CNI.” OPPENHEIMER,
Andrés: “Cuentos Chinos. El engaño de Washington, la mentira populista y la esperanza de América
Latina”. Primera edición en Debolsillo, México, D.F. 2006. Pág. 8
96
46 generadores de esperanzas y frustraciones. Pero en este punto negativo, según BouzaBrey, existe co-responsabilidad de la elite política, “…constituida por un grupo reducido
de individuos que se caracteriza por su posibilidad de acceso al gobierno y su función
mediadora entre aquél y la sociedad…”101
Aún con las connotaciones negativas que pueda haber respecto a los partidos, el poder,
y los políticos, todo esto siempre será mejor que el uso de la fuerza para el
sometimiento a la autoridad, a los poderes constituidos o la conducción de la cosa
pública. Razón tenía Bonaparte102 cuando afirmó que “lo que más me extraña de este
mundo es la impotencia de la fuerza. De los dos poderes, fuerza e inteligencia, es
siempre la fuerza la que acaba por ser vencida.” De allí que la política nos apasione a
los hombres, a tal grado que en el caso del célebre Winston Churchill, según su
biógrafo, a este político “…ni la agricultura ni la pintura ni las carreras ni la literatura le
proporcionaban la satisfacción única que le producía la política.”103 La democracia, y
por ende los partidos políticos, no serán el mejor método o sistema creado por el
hombre, pero es lo máximo que el ser humano ha concebido para organizar al estado y
la sociedad, y el ejercicio del poder legítimo y legal.
En este breve esbozo histórico-doctrinario, considero pertinente incluir otra clasificación
adicional que aporta Sartori, con respecto a los partidos políticos. Obviamente, sin
hacer abstracción del factor de constante evolución y transformación que tienen los
partidos políticos. Sartori,104 citado por Cárdenas Gracia, los enlista así: “de partido
único (Albania y Unión Soviética hasta 1989), de partido hegemónico (México hasta
1988), de partido predominante (Japón y Suecia hasta antes de la crisis de Partido
Liberal Democrático Japonés y del Partido Social-demócrata Sueco), de bipartidismo
(los Estados Unidos y Reino Unido), de pluralismo moderado (Alemania y los Países
Bajos), de pluralismo polarizado (Italia hasta antes de su más reciente reforma
101
BOUZA-BREY, Luis: “El Poder y los Sistemas Políticos”, publicado en “Manual de Ciencia Política”.
CAMINAL BADIA, Miquel (editor). Ibid. Pág. 65
102
VILA, Samuel: “Enciclopedia de Citas Morales y Religiosas”. Editorial CLIE. Barcelona, 1976. Pág. 360
103
BLACK, Edgar: “Churchill”. Editorial Grijalbo, Barcelona 1966.Pág. 293
104
CARDENAS GRACIA, Jaime: “Partidos Políticos” LEXICO DE LA POLITICA. Ibíd. Cárdenas. Pág. 514
47 electoral) y de atomización (Malasia).” En esta última clasificación podría ubicarse el
espectro político latinoamericano, en el cual se evidencia una atomización de partidos.
Para una mejor comprensión de la evolución y desarrollo de los partidos políticos, es
interesante la afirmación de Lijphart105 que “varios países han experimentado
tendencias duraderas hacia un mayor multipartidismo, en especial Bélgica, pero
también Austria, Colombia, Dinamarca, India, Italia, Noruega y Suiza. En Alemania,
Israel y Japón, el número efectivo de partidos descendió primero gradualmente,
aumentando de nuevo a lo largo de las pasadas dos o tres décadas… De hecho, los
números efectivos de partidos más bajos y más altos se obtuvieron en elecciones
sucesivas en no menos de siete países, a saber, Botswana, Canadá, Costa Rica
España, Estados Unidos, Francia y Nueva Zelanda.”
La tendencia que se refleja es que desde la década de los 90, varios países han
experimentado multipartidismo. Pero este proceso ha generado su antítesis que es la
atomización de los partidos políticos, y su poca o nula incidencia en la opinión pública y
la voluntad colectivas. Los partidos políticos en Guatemala, por ejemplo, nacen, crecen,
se desarrollan (algunos gobiernan) y mueren. Este es un ciclo perverso y dañino para el
fortalecimiento institucional de la democracia y el quehacer político, como lo veremos
en párrafos siguientes.
Democracia electoral versus democracia participativa:
El partido político entonces, desde sus inicios, ha sido concebido tanto como un
vehículo electoral, pero también como un difusor de determinada doctrina o ideología.
Al final, busca acceder al poder por medios legítimos y asumir así la conducción de un
gobierno propiamente dicho. Diríamos que en esencia ese es el ideal, la estructura y
concepción formal, o el diseño original de un partido político.
105
LIJPHART, Arend. “Modelos de Democracia”. Editorial Ariel, S.A. Barcelona, 2000. Págs. 83 y 84
48 En la práctica, por lo menos en el caso guatemalteco, los partidos políticos, en los
últimos veinticinco años, han entrado en un círculo vicioso. Nacen, crecen, gobiernan
(algunos), otros para sobrevivir se fusionan y mueren. Nadie ha logrado en la historia
política guatemalteca alcanzar la reelección.106 De todos los partidos políticos que
accedieron al poder antes de 1985, con la vigencia de la actual Constitución Política de
la República107 y la Ley Electoral y de Partidos Políticos, no sobrevive ninguno de ellos.
Incluso el caso particular de Democracia Cristiana Guatemalteca, que ejerció el poder
como el primer gobierno de la era democrática, no se reeligió y fue directo al
cementerio de partidos políticos. En Guatemala, desde 1985, el fenómeno ha sido
prácticamente un ciclo fatal para los partidos políticos. Por una parte, ni uno sólo de
ellos ha alcanzado la reelección como partido de gobierno, ni en lo individual, ni en
alianza o coalición. Además, la mayoría, han contado con fuerte número de diputados al
Congreso de la República pero, sintomáticamente, todos en los primeros seis meses de
ejercicio de poder legislativo y ejecutivo, terminan sufriendo transfuguismos, disidencias
y pérdida de sus cuadros principales. Al final del ejercicio del gobierno, algunos se
mantienen vigentes hasta una o dos elecciones más, y luego desaparecen de la escena
política nacional.
Luego de la consumación de dos golpes de Estado (uno el 23 de marzo de 1982 y otro
en agosto de 1983), el General José Efraín Ríos Montt es depuesto por otro golpista, el
General Oscar Humberto Mejía Víctores (en agosto de 1983), quien “…en esa situación
de ilegitimidad, represión y crisis, convocó a elecciones para asambleas constituyentes
(1984) y presidenciales (1985). La crisis del poder militar-autoritario creó también aquí,
posibilidades democráticas…”108 Y, curiosamente también, entidades políticas históricas
106
En Guatemala, es prohibida constitucionalmente la reelección presidencial. En este caso, nos
referimos a la reelección de un mismo partido político ejerciendo el poder.
107
En este sentido, el desarrollo de los partidos políticos, está condicionado a la normativa constitucional
vigente y la ley específica de la materia que, también es de rango constitucional. Pero, como dice el
actual Presidente de la Corte de Constitucionalidad, “La Constitución tampoco está congelada. Como
obra de cultura la Constitución vincula el pasado con el futuro generacional. Este carácter histórico le da
significación de viviente; por ello el intérprete debe ser realista para entender la época de su
promulgación con el proceso que el nuevo tiempo demande.” MALDONADO AGUIRRE, Alejandro:
“Nuestra Constitución”. Centro Impresor Piedra Santa. Guatemala, febrero 2001. Pág. 62
108
ANSALDI. Op. Cit. Pág. 504
49 y arraigadas como el Partido Revolucionario, el Movimiento de Liberación Nacional
(extrema derecha), el Partido Institucional Democrático, con un promedio de vigencia de
treinta años, ni siquiera sobrevivieron el cambio de legislación derivado de la
Constitución Política de la República de 1985.
Lo anterior, nos lleva a pensar respecto a cuáles son las principales causas para la
existencia de esa volatilidad, debilidad institucional y poca coherencia de los partidos
políticos guatemaltecos. Esta relación de causalidad tiene su origen en varios factores
determinantes, entre los cuales se considera que sobresalen:
a) la falta de una formación ideológica sólida;
b) el clientelismo y oportunismo de la mayoría de sus afiliados y dirigentes; c) la
temporalidad y focalización de su actuar, casi exclusivamente para desarrollar
campañas políticas;
d) haber nacido y haberse desarrollado en medio de un conflicto armado interno que
surgió desde el año 1962 y prevaleció hasta 1996;
e) existencia de una situación “anfibia”, entre afrontar una situación predemocrática,109
como la denomina Torres Rivas, y el ejercicio del poder civil, propiamente dicho;
f) el no contar con organización partidaria en todo el país;
g) La pérdida de credibilidad de los partidos políticos frente a la sociedad.
El Nobel de Literatura García Márquez,110 evidencia dramáticamente esta situación de
pérdida de credibilidad de los partidos políticos, por parte de la sociedad. En el caso de
la situación colombiana de hace algunos años, y la imagen del gobierno y partido de
turno versus uno de los capos del narcotráfico, afirma que “En cambio, Pablo Escobar
había logrado una credibilidad que no tuvieron las guerrillas en sus mejores días. La
gente llegó a creer más en las mentiras de los Extraditables que en las verdades del
gobierno.”
109
ANSALDI. Op. cit. Pág. 505
GARCIA MARQUEZ, Gabriel: “Noticia de un Secuestro”. Editorial Sudamericana. Buenos Aires, 1996.
Pág. 157
110
50 El dilema de los partidos políticos:
Para nadie pasa desapercibido que desde su fundación, con el avance de los medios
masivos de comunicación, la disponibilidad de capitales financistas de campañas
políticas, el crecimiento de las masas de votantes, etc., los partidos políticos en
Guatemala, se fueron perfilando y perfeccionando más como simples maquinarias
electorales o electoreras, en su caso. Su actuar, en esencia, se tornó desvinculado de
las exigencias societarias. Unas veces, conviviendo y dependiendo del poder militar y,
hasta 1980, llevando directamente a militares a la presidencia de la República, vía
eventos electorales sin ninguna credibilidad, observación ni control. El dilema de los
partidos políticos los pone ante la disyuntiva: ¿Seguir siendo maquinarias electorales o
pasar a ser auténticas instituciones democráticas? De la respuesta que se de a esta
interrogante y otras colaterales, dependerá la visión, percepción y juicio que se tenga
de los partidos como instituciones públicas.
La actividad política fue desarrollada en los últimos 50 años bajo normas electorales111
y una faceta que únicamente guardaba la forma “democrática”, no necesariamente la
esencia de ésta. En gran medida, en la real politik,112 los partidos y los políticos, vieron
en la política un modus operandi, casi única y exclusivamente, como instrumento de
arribismo, conquista del poder y control de la cosa pública, per se. Los grupos y
partidos políticos, actuaban bajo el mecenazgo de los militares y los grupos oligárquicos
que, junto al poder militar, coyunturalmente cooptaron el poder absolutamente en los
últimos cincuenta años, abierta o encubiertamente. Todo esto so pretexto de la
existencia de una amenaza insurgente auspiciada por el comunismo internacional de la
época.
111
En ese sentido, resulta interesante que, conforme el planteamiento de García Máynez, las normas
electorales aplicadas en los últimos 50 años, podrían ser derecho vigente, derecho intrínsecamente
válido, pero nunca tuvieron la tercera especie, que se corresponde recíprocamente con estas dos, o sea,
constituir un derecho eficaz. GARCIA MAYNEZ, Eduardo. “Positivismo Jurídico, Realismo Sociológico y
Iusnaturalismo”. Op. cit. Pág. 166
112
Carlos Fuentes, describe de manera muy particular este punto cuando describe que ““la realpolitik,
sabes, es el culo por donde se expele lo que se come caviar o nopalito, pato á l´orange o taco de nepil-.
Los principios, en cambio, son la cabeza sin ano. Los principios no van al excusado. La realpolitik atasca
los inodoros del mundo y en el mundo del poder tal como es, no tienes más remedio que rendirle tributo a
la madre naturaleza.” Op. Cit. Pág. 20
51 Por ello es importante destacar que diversos autores, que han analizado el problema de
las instituciones políticas y su concurrencia con el grado de democracia, no sólo
política, sino una democracia integral en lo económico,113 cultural y social, establecen
factores clave que consolidan la democracia como sistema. Este el caso de Galvis
Gaitán, que al citar a Schumpeter, enumera cuatro condiciones para lograr el éxito del
“método democrático”,114 como él lo denomina, y partiendo de este análisis,
intentaremos aplicar, a manera de test, dichas premisas a la política guatemalteca, para
poder contar con elementos de juicio en el análisis de la consolidación o no de un
sistema de partidos políticos, de auténticas instituciones políticas y de genuinos
intermediarios entre la sociedad y el Estado. Estas condiciones schumpeterianas son:
a)
La primera condicionante visualizada, es que los hombres que integran las
entidades políticas, “…deben ser de buena y suficiente calidad…”
b)
La segunda condición, para el éxito de la democracia, “…consiste en que el
dominio efectivo de las decisiones políticas no debe ser exageradamente extenso.”
c)
Un tercer factor, consiste según Schumpeter, en que las sociedades modernas y
un gobierno democrático, “…debe disponer de una burocracia bien entrenada que goce
de buena reputación y que se apoye en sólidas tradiciones, dotada de un sentido
vigoroso del deber.”
d)
Finalmente, la cuarta condición, es “…el autocontrol democrático…Los cuerpos
electorales y los parlamentos deben situarse en un nivel intelectual y moral
suficientemente elevado para resistir proposiciones de oportunistas y de locos…”
Aplicando cada una de estas condiciones necesarias para el buen funcionamiento de la
democracia guatemalteca, o sistema político. Este último término con el agregado y la
113
Al respecto, y sin hacer referencia al contexto ideológico, propiamente dicho, es interesante considerar
el pensamiento de Mao, en cuanto a la importancia del trabajo político que, según él, incide hasta el
ámbito económico mismo, ya que “El trabajo político es la arteria vital de todo nuestro trabajo económico.
Esto es particularmente cierto en el período en que el sistema socio-económico experimenta un cambio
fundamental.” MAO TSE-TUNG: “Citas del Presidente Mao Tse-Tung” Nota de introducción al artículo
“Una grave lección” (1955). El auge socialista en el campo chino. Versión en español. China, marzo 2001.
Pág. 141 y 142
114
GALVIS GAITAN, Fernando: “Manual de Ciencia Política”. 2ª. Edición. Editorial Temis, S.A. Bogotá,
Colombia. 2005. Pág. 67 a 69
52 connotación de cohesión y covarianza, como los desarrolla Deutsch,115 podemos ver en
el ambiente político guatemalteco cómo se aplican las condiciones de Schumpeter, así:
1)
Que los hombres que integran las entidades políticas, “…deben ser de
buena y suficiente calidad…”
Los requisitos que la Constitución Política de la República y la Ley Electoral y de
Partidos Políticos, establecen para postularse a cargos de elección popular, y por ende,
para ejercer cargos en los comités ejecutivos de los partidos políticos, son casuísticos,
concebidos en un entorno de conflicto armado interno, con una tradición de gobiernos
militares y golpistas. A eso se debe que los únicos requisitos formales,116 para optar a la
Presidencia de la República, sean simples: a) ser guatemalteco de origen; b) ser
ciudadanos en ejercicio; y c) ser mayores de cuarenta años. Los requisitos son simples
y escasos. Cabe aclarar que el derecho de petición en materia política,117 está
garantizado exclusivamente para los guatemaltecos.
No obstante, el artículo 145 constitucional, considera “guatemaltecos de origen”
también, a los nacionales por nacimiento, de las repúblicas que constituyeron la
Federación de Centroamérica, si adquieren domicilio en Guatemala y la nacionalidad
correspondiente. Respecto a ser ciudadanos en ejercicio, el artículo 5 constitucional,
reconoce la libertad de acción. Toda persona tiene derecho a hacer lo que la ley no
prohíbe. Por lo tanto las únicas limitaciones para ejercer este derecho político de
postularse como candidato sería: 1. Quienes se encuentren privados de su libertad
115
Para el profesor Karl W. Deutsch, en todo sistema político, se deben reconocer dos extremos básicos:
la cohesión y la covarianza del sistema que se trate, por ello considera que “un sistema político es una
colección de unidades reconocibles que se caracterizan por su cohesión y covarianza. Cohesión significa
permanecer unidos o formar un todo. Dos unidades tienen cohesión si muchas de las operaciones sobre
una de ellas produce resultados definidos sobre las otras…Covarianza significa cambiar juntos. Si una
unidad cambia, la otra lo hace también.” DEUTSCH, Karl W. “Política y Gobierno”. Fondo de Cultura
Económica. México, 1976. Pág. 149 y 164
116
Artículo 185 de la Constitución Política de la República: “Requisitos para optar a los cargos de
Presidente o Vicepresidente de la República. Podrán optar al cargo de Presidente o Vicepresidente de la
República, los guatemaltecos de origen que sean ciudadanos en ejercicio y mayores de cuarenta años.”
117
Artículo 137 de la Constitución Política de la República.
53 mediante sentencia firme y ejecutoriada;118 2. En los casos en el aspirante a candidato,
haya sido declarado en estado de interdicción, mediante resolución definitiva de
tribunal.
Al respecto de quienes privación de libertad, en el último proceso electoral de 2011,
para elegir Presidente y Vicepresidente de la República, Alcaldes Municipales,
miembros de consejos municipales, diputados al Congreso de la República y diputados
al Parlamento Centroamericano, dicha condición o requisito constitucional se puso a
prueba. Mediáticamente se tuvo una insinuación que creó morbo político en los
guatemaltecos. Se especuló que el ex presidente Alfonso Antonio Portillo Cabrera
(partido FRG), que gobernó el país de 2000-2004, y quien se encuentra pendiente de
dilucidar su virtual extradición hacia los Estados Unidos de América, que lo acusa de
haber lavado dinero en bancos de ese país, sería postulado por una fuerza política para
lograr un escaño en el Congreso de la República.
Por no estar sujeto a una sentencia firme y ejecutoriada, y que los derechos
constitucionales sólo pueden ser limitados durante la vigencia de estados de excepción
(Artículo 138 Constitucional), por el principio de presunción de inocencia (Artículo 14
Constitucional) y, toda vez que el requisito constitucional para optar al cargo de
diputado, contenidos en el artículo 164 Constitucional, no incluye limitación por estar
sujeto a proceso penal, sin que exista sentencia firme y ejecutoriada, prácticamente era
imposible vedarle tal derecho. Con esto se evidencia la debilidad de nuestro sistema
democrático, puesto que pudo haber sido postulado, incluso ser electo, y dejar en
suspenso su juramentación al cargo, en tanto o dilucidaba su situación jurídica, o se
declaraba la vacante de su puesto. Tal como lo establece el artículo 164 de la
Constitución Política de la República.
118
Actualmente, el ex presidente Portillo Cabrera, aún se encuentra guardando prisión, a la espera que
se defina su situación legal en cuanto a enfrentar una extradición a los Estados Unidos de América.
54 Prohibiciones Constitucionales para optar a la candidatura a la Presidencia de la
República:
Además de lo considerado en párrafos precedentes, también existen otros requisitos
que aplicarían en esta primera condición que Schumpeter plantea. En su aplicación
legal y práctica al sistema democrático guatemalteco, serían los que se encuentran
calificados como “prohibiciones” para optar a los cargos de Presidente o Vicepresidente
de la República. Estos se encuentran taxativamente enumerados en el artículo 186 de
la Constitución Política de la República. Pero, con base a los derechos constitucionales
de petición y de legítima defensa, tales prohibiciones han estado sujetas a
interpretación judicial y constitucional,119 en su caso. Y no ha faltado quien haya soñado
con suprimir o modificar tales obstáculos constitucionales. Sin embargo, el artículo que
las establece, se encuentra clasificado entre los no reformables o normas pétreas que
clasifica el artículo 281 Constitucional.
La mayoría de estas prohibiciones han sido puestas a prueba. Algunos aspirantes a la
Presidencia de la República, han acudido tanto a la interpretación de las mismas por el
Tribunal Supremo Electoral, TSE, la Corte Suprema de Justicia, CSJ, o la Corte de
Constitucionalidad, CC, como máximo tribunal en materia constitucional en nuestro
país. Algunas prohibiciones han sido consideradas más que obvias. Otras un tanto
complejas en su aplicación, por la interpretación que de las mismas se haga.
Pero sea cual fuere el tipo de interpretación que se le aplique a las prohibiciones
constitucionales o los intereses en juego, el sentido literal de la redacción es claro. La
premisa mayor consiste en que no podrán optar al cargo de Presidente o
Vicepresidente de la República, quienes encuadren su conducta o sus condiciones
119
Por lo complejo de la temática interpretativa constitucional, también debe evaluarse que: “La
trascendencia de la interpretación constitucional sólo se explica desde la interrelación entre la
Constitución y el ordenamiento jurídico y, por ello, la interpretación constitucional adquiere unos perfiles
propios que permiten diferenciarla de la interpretación de la Constitución. En efecto, para poder cumplir
su función unificadora del ordenamiento, la interpretación constitucional no puede ceñirse a los límites
estrictos de la interpretación de la Constitución: esta última es tan sólo el núcleo de la primera.”
BALAGUER CALLEJON, María Luisa: “Interpretación de la Constitución y Ordenamiento Jurídico”.
Editorial Tecnos, S.A. Madrid, 1997. Pág. 24
55 personales en cualquiera de tales prohibiciones, contenidas en el artículo 186 de la
Constitución Política de la República se resumen así:
a)
El caudillo ni los jefes de un golpe de Estado, revolución armada o
movimiento similar, que haya alterado el orden constitucional, ni quienes como
consecuencia de tales hechos asuman la Jefatura de Gobierno.
Esta prohibición es una auténtica puesta a prueba del buen funcionamiento, vitalidad y
fortaleza del sistema democrático nacional. El ejemplo más representativo de ello, lo
tenemos en el ex jefe de Estado y general golpista José Efraín Ríos Montt quien,
echando mano del poder que su partido Frente Republicano Guatemalteco, FRG,
ejercía desde la Presidencia de la República, vía el binomio presidencial Alfonso
Antonio Portillo Cabrera y Juan Francisco Reyes López. Además contaba con una
numerosa bancada en el Congreso y contar con influencia a nivel de la Corte de
Constitucionalidad, se aventuró a solicitar su inscripción como candidato a la
Presidencia de la República. Ante la negativa que recibió por parte de la autoridad
electoral, promovió acción constitucional de amparo ante la Corte Suprema de Justicia,
en contra del fallo del TSE que le denegó su inscripción. La Corte Suprema de Justicia,
denegó el amparo.
El postulante apeló ante la Corte de Constitucionalidad, y ante dicho órgano colegiado
“logró”, a pesar de la prohibición expresa, postularse para optar al cargo de Presidente
de la República, en la elección de 2003. Se invocó, por la vía de la acción constitucional
de amparo, que se le estaba violando el derecho de optar a la presidencia al ex
presidente golpista, conforme a la norma pétrea del artículo 186 CPR, y su
inelegibilidad. El Tribunal Supremo Electoral, TSE, le denegó inscripción.
La Corte Suprema de Justicia le denegó el amparo en sentencia del 4 de julio 2003 y el
interesado apeló ante la Corte de Constitucionalidad. Este tribunal constitucional,120 con
120
69.
Sentencia: Expediente No. 1089-2003, Gaceta Jurisprudencial de la Corte de Constitucionalidad No.
Sentencia
No.
1089-2003
de
fecha
14
de
julio
2003.
56 dos votos razonados en contra, declaró con lugar el amparo y, por consiguiente,
procedente la inscripción para la candidatura presidencial, aún en contra de la
prohibición específica ya citada. En el evento electoral, el votante ejerció su voto de
rechazo121 y diríamos que se impuso la voluntad soberana del pueblo. A pesar del mal
gobierno eferregista en el poder en 2003, el candidato Ríos Montt, incrementó las
presiones para inscribirse. Incluso se acudió a las acciones violentas expresadas a
través de la manipulación de turbas traídas de los departamentos a la capital. El
bloqueo de calles y avenidas, ataques a periodistas y otros destrozos materiales, y de
haber dado lugar a hechos violentos conocidos como “Jueves Negro”, el votante
guatemalteco, no se turbó y ejerció su voto de castigo, puesto que el candidato violador
de la Constitución perdió la elección.
b)
También se prohíbe expresamente optar al cargo de Presidente o
Vicepresidente de la República a la persona que ejerza la Presidencia o
Vicepresidencia, cuando se haga la elección para dicho cargo, o que la hubiere
ejercido durante cualquier tiempo dentro del período presidencial en que se
celebren las elecciones.
Esta prohibición o “condicionante necesaria para el buen funcionamiento de la
democracia”, como las denomina Schumpeter,122 aún no ha sido puesta a prueba en el
sistema electoral y político guatemalteco, de manera formal y expresa. Esto no significa
que no existían intereses e intenciones de pretender violarla por parte de algunos ex
vicepresidentes.
Este aparente respeto por la prohibición, tiene su explicación en el hecho que,
prácticamente, desde 1985, todos los presidentes electos han viajado al extranjero y,
obviamente, han traspasado el cargo en calidad de “Presidente en Funciones”, a sus
www.cc.gob.gt/siged2009/mdlWeb/frmConsultaWebVerDocumento.aspx?St_DocumentoId=798305.html.
&S. Fecha de consulta: 18 de marzo 2012.
121
Ya el pensador THOREAU, advertía en ese sentido. “Si un hombre deja su pensamiento correr en
libertad, igual que su imaginación, si no da importancia a lo efímero y pasajero, ni malos gobernantes ni
reformadores lograrán perturbarle.” Op. Cit. Pág. 74
122
GALVIS GAITAN, Op. Cit. Págs. 67 a 69
57 respectivos vicepresidentes. Quizá lo obvio de esta circunstancia, ha detenido
aspiraciones de más de algún ex vicepresidente, a postularse para la Presidencia de la
República. A pesar que esta prohibición ha sido respetada hasta ahora, no implica que
en el futuro, algún el vicepresidente con aspiraciones presidencialistas, argumente en
contra de la observancia de dicha prohibición, que “…la constitución no es un cuerpo
dogmático cerrado en sí mismo que se impone como una verdad revelada y única sobre
el conjunto de los operadores jurídicos, sino el resultado de un proceso de conciliación
de intereses que se desarrolla y se extiende para renovar, de manera constante esa
conciliación y pacificación social.”123 Aunque esto, eventualmente, pondría al sistema
jurídico y ordenamiento constitucional guatemalteco, ante un problema de legitimidad y
certeza jurídica. Sobre todo, porque el artículo 281 Constitucional, es una norma pétrea
o no modificable, por mandato del mismo texto constitucional.
Los constituyentes al fijar tales prohibiciones, no sólo tuvieron en cuenta el momento
histórico y contexto específico, y la larga tradición golpista en el país, para el ejercicio
del poder que, evidentemente, tuvieron una intencionalidad prohibitiva.124 Precisamente,
fueron fijadas tales prohibiciones, para resguardar la legitimidad y concordancia de la
norma con el contexto histórico social del país. La voluntad del constituyente, además,
fue plasmada en medio aún de un conflicto armado interno, y que se pretendió poner
las bases de un sólido sistema democrático y su correspondiente institucionalidad
coherente con éste.
c)
Asimismo, tienen prohibición para optar al cargo de Presidente o
Vicepresidente de la República, los parientes dentro del cuarto grado de
consanguinidad y segundo de afinidad del Presidente o Vicepresidente de la
123
BALAGUER CALLEJON, Op. cit. Pág. 24
Aquí equivale a que esas prohibiciones constitucionales nacidas de la Asamblea Nacional
Constituyente, como en el caso guatemalteco, se establecen: “En un momento inicial, se considera al
poder constituyente como transcendente al Derecho, sin integración en el orden establecido, sino como
un fenómeno anterior a lo que precede y que una vez realizado el hecho, desaparece para dar paso al
Derecho formalmente constituido…Al constituirse el poder, la Constitución se repliega en sí misma y se
muestra como organismo, y el poder constituyente queda de alguna forma absorbido por ella.” Ibid. Pág.
27
124
58 República, cuando éste último se encuentre ejerciendo la Presidencia, y los de las
personas a que se refiere el inciso primero de este artículo.
Al inicio de este trabajo se dice que la política es una caja de sorpresas. De tanto en
tanto nos sorprende y rompe la cotidianidad y a veces hasta la propia gobernabilidad.
Pero esto no sería tan grave, si no fuese porque en esa constante expulsión de
sorpresas, cada vez el ingenio, la astucia, o la inmoralidad se perfeccionan pero no
para afianzar el sistema. Todo lo contrario, se agudiza la creatividad para asumir pautas
y actitudes que tiendan a quebrar la institucionalidad y la débil o mediana fortaleza, en
este caso, del sistema democrático.
Derivado de lo anterior, esta prohibición constitucional, tuvo su prueba formal y real en
el evento electoral de 2011. El tema central y de fondo en discusión giró en torno al
parentesco entre el Presidente de la República y su en ese momento aún esposa. El
entonces Presidente Álvaro Colom Caballeros, quien es fundador del partido Unidad
Nacional de la Esperanza –UNE-, fue señalado desde el inicio de su ejercicio
gubernamental, de haber sucumbido ante la arrolladora personalidad de su esposa
Sandra Julieta Torres Casanova de Colom. Este poder paralelo o “presidencia de facto”
que ejerció la cónyuge presidencial, que vía la creación de un Consejo de Cohesión
Social, usurpó funciones y atribuciones de los propios Ministros de Estado.
Esta dirigió de facto programas sociales como “Mi Familia Progresa”125 y “Bolsa
Solidaria”, que terminaron convirtiéndose en la caja chica de ésta, para su promoción
personal en búsqueda de una candidatura presidencial en 2011. Toda una campaña
política oficial anticipada, ilegal e ilegítima. Uno de los ministros de turno, que vivieron el
embate de esta condición artificiosamente creada, fue el ex ministro de Finanzas
Públicas, en su propio “mea culpa” documentado, reconoce que “…mientras que el
Consejo de Cohesión Social llegó a ser más importante que el propio gabinete y es lo
125
Al respecto, JOHN STUART MILL, considera los límites de los funcionarios y empleados públicos, con
respecto a su labor de atender la caridad o ayuda social pública, y advierte: “Pero a los administradores
de un fondo público no se les debe exigir que hagan por nadie más de aquel mínimo que están obligados
a dar incluso al peor de los necesitados. Si se les exige, la condescendencia se convierte pronto en regla
y la negativa en excepción más o menos caprichosa o tiránica.” MILL, John Stuart. Op. cit. Pág. 828
59 que mejor ejemplifica la función informal de “primer ministro” que ejercía la primera
dama.”126
Y este mismo ex funcionario reconoce que hasta su propio hijo le hizo un comentario
perspicaz y revelador: “-Parece una monarquía. Había parecidos. El primer mensaje
visual que recibimos estaba claro: la primera dama no solo iba a estar en el gabinete
sino que estaría a un nivel equivalente al del vicepresidente…Su participación en el
gabinete sería determinante y cogobernaría.”127 Por si fuera poco la detentación del
poder que hizo esta ex primera dama de la nación, también generó toda una estrategia
para postularse como candidata presidencial en 2011, a pesar de la prohibición
contenida en el artículo 186, literal c). Los medios de comunicación, reflejaron esas
intenciones de la ahora ex primera dama y ex cónyuge presidencial que, incluso, llegó a
afirmar: “Soy la primera mujer que se divorcia por amor a Guatemala.”128
En la legislación ordinaria del país, el Decreto Ley 106, Código Civil, en el artículo 192,
establece el parentesco por afinidad, que es el vínculo que une a un cónyuge con el
otro y sus respectivos parientes consanguíneos.129 De inmediato esta prohibición
genera dudas razonables respecto a sus alcances y efectos, para terceras personas a
quienes se les limita su participación electoral, como consecuencia de prohibición
constitucional basada en el parentesco con otra. Esto porque previamente, el artículo
190 de la misma norma sustantiva, establece que: “…Los cónyuges son parientes, pero
no forman grado.”
El nivel de debate se incrementó a tal grado que se percibía que hasta el propio
Presidente de la República, estaría violando la Constitución Política de la República. Al
126
FUENTES KNIGHT, Juan Alberto. Op. Cit. Pág. 187
FUENTES KNIGHT. Op. Cit. Pág.177 y 178
128
Matutino
“El
Periódico”,
Guatemala,
24
de
marzo
2011.
www.elperiodico.com.gt/es/20110324/?tpl=64110. Fecha de consulta: 18 de marzo 2012.
129
Obviamente, expertos en la interpretación constitucional, como Balaguer Callejón, advierten al
respecto de ese tipo de prohibiciones de rango constitucional: “Que ese pacto podrá ser reformulado en
el futuro y hasta sustancialmente alterado por la voluntad social, resulta evidente. Pero, al mismo tiempo,
es preciso constatar que su transformación sólo podrá manifestarse en el orden jurídico, por medio de la
reforma de la Constitución, pues, de otro modo, estaríamos hablando de un nuevo acto constituyente, de
naturaleza política.” BALAGUER CALLEJON. Op. cit. Pág. 28
127
60 avalar una solicitud de inscripción de su cónyuge, al existir prohibición expresa
constitucional para dicha candidatura, era obvio que la máxima autoridad del país, y
representante de la unidad nacional, estaba del lado de los violentadores del orden
constitucional. Indudablemente, estábamos frente a un caso que en interpretación
jurídica Ezquiaga Ganuzas clasifica como “de controversia”.130 Finalmente, se fragua un
divorcio “exprés”,131 para que en fraude de ley, que para Sartori es un “fraude
político”,132 se pudiese evadir la prohibición aludida y con ello, consumar su inscripción.
Tanto el Tribunal Supremo Electoral, la Corte Suprema de Justicia y, finalmente, contra
todo pronóstico, la Corte de Constitucionalidad, denegaron la inscripción, no obstante
haberse consumado un divorcio fraudulento133 no en su forma, sino en su fondo. Los
partidos políticos que ejercían gobierno en 2011, la Unidad Nacional de la Esperanza,
UNE y la Gran Alianza Nacional, GANA, pretendieron inscribir como candidata a la
cónyuge presidencial. Tanto el Tribunal Supremo Electoral, como la Corte Suprema de
Justicia denegaron dicha solicitud con base en la prohibición expresa constitucional ya
citada.
En apelación de la sentencia de amparo de la CSJ, las entidades políticas precitadas,
acudieron a la justicia constitucional. Básicamente, la Corte de Constitucionalidad, al
130
Conforme lo explica Ezquiaga Ganuzas, este tipo de situaciones que afectan al intérprete, en este
caso la Corte Suprema de Justicia de Guatemala, inicialmente, y posteriormente la Corte de
Constitucionalidad, se generan cuando “el significado indubitado de un enunciado es discutido”, y
además se trata de utilizar en el contexto de justificación y “en la motivación el significado elegido será
presentado como el único correcto.” Pero yendo más lejos, Ezquiaga Ganuzas, afirma que “En la
situación de controversia, por el contrario, el intérprete no tiene duda alguna sobre el significado a asignar
a un enunciado, pero se encuentra con que el sentido elegido sin ningún género de duda, es discutido o
no compartido, por lo que debe acudir a las reglas para la interpretación para emplearlas como
argumentos que justifiquen el significado seleccionado.” EZQUIAGA GANUZAS, Francisco Javier: “La
argumentación interpretativa en la justicia electoral mexicana”. Tribunal Electoral del Poder Judicial de la
Federación. México, D.F., 2006. Pág. 68
131
Matutino
“El
Periódico”.
Guatemala,
11
agosto
2010.
www.elperiodico.com.gt/es/20100811/opinion169119. Fecha de consulta: 18 de marzo 2012
132
Al respecto Sartori de manera por demás gráfica refleja el “fraude político” en estos términos:
“Añádase que la competencia económica está sujeta a control legal, que el fraude comercial está penado,
mientras que el <<fraude político>> queda legalmente impune. El comerciante que vende verlas falsas
por verdaderas va a la cárcel, el político que vende humo a menudo consigue venderlo de verdad y de
todas formas no va a la cárcel.” SARTORI, Giovanni: “¿Qué es la democracia? Taurus, México, 2008.
Pág. 69
133
Diario: PRENSA LIBRE. Edición: 6 de agosto 2010. www.prensalibre.com/noticias/Congreso-facilitatramite-divorcio_0_311968842.html. Fecha consulta. 18 de marzo 2012
61 emitir su sentencia, privilegió el principio de alternabilidad en el ejercicio del poder para
el cargo de Presidente de la República, y la formación de la voluntad política del pueblo.
Es decir, que se hizo aplicación de una interpretación constitucional bajo el argumento
teleológico que, según Ezquiaga Ganuzas, es el argumento que “se acerca mucho al
criterio sistemático.134 En ese sentido, se consideró el derecho comparado con
España135 y Alemania,136 respectivamente. Y, no obstante, existir un divorcio contenido
en sentencia 3975 del Juzgado Segundo de Familia del departamento de Guatemala,
de fecha 7 de abril 2011, tuvo en cuenta que la aspirante a ser inscrita, admitió que
“…ejecutó el divorcio para evitar incurrir en la prohibición del artículo 186, literal c) de la
Constitución Política de la República. La sentencia del tribunal constitucional se dictó
denegando137 la petición de amparo y, en consecuencia, no se inscribió la candidatura.
El orden y respeto constitucional prevalecieron. No obstante, el potencial electoral y
recursos del Estado, fueron endosados en el evento electoral 2011 a otra candidatura,
pues el partido oficial Unidad Nacional de la Esperanza, únicamente pudo inscribir sus
candidatos a diputados y alcaldes. Fruto de esa maniobra electoral, el candidato
Manuel Baldizón alcanzó el segundo lugar en los comicios. El día de la elección hubo
acarreo de votantes, reparto de “vales” para ser canjeados por láminas de zinc,
supuestos pagos en efectivo a cambio de votos, etc. Pero no obstante, prevaleció la
prohibición constitucional, a pesar del divorcio en fraude de ley.
d)
El que hubiese sido ministro de Estado, durante cualquier tiempo en los
seis meses anteriores a la elección.
134
EZQUIAGA GANUZAS, Francisco Javier: “La argumentación interpretativa en la justicia electoral
mexicana”. Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación. México, D.F. 2006. Pág. 144
135
En este sentido, la sentencia de la Corte de Constitucionalidad, tomó en cuenta el derecho
comparado, en materia constitucional electoral de España, contenido en el artículo 6º., de la Constitución
Española, que establece que: “Los partidos políticos expresan el pluralismo político, concurren a la
formación y manifestación de la voluntad popular y son instrumento fundamental para la participación
política…” LOPEZ GUERRA, Luis. (editor) “Constitución Española”. DECIMOTERCERA EDICION.
EDITORIAL TECNOS (GRUPO ANAYA, S.A.). Madrid, 2004. Pág. 29.
136
De igual manera, se consideró el derecho comparado constitucional de Alemania, en cuanto a la
voluntad política del pueblo, en el cual se privilegia que “…Los partidos cooperarán en la formación de la
voluntad política del pueblo.” Artículo 21 de la Ley Fundamental de la República Federal de Alemania.
Impreso por Industriedruck, Essen-Werden, marzo 1981. Pág. 16
137
CORTE DE CONSTITUCIONALIDAD: sentencia del 8 de agosto 2011. Expediente No. 2906-2011.
www.cc.gob.gt/siged2009/frmConsultaWeb.aspx. Fecha de consulta: 18 de marzo 2012.
62 Esta prohibición, por su facilidad de cumplimiento, no ha sido objeto de discusión legal
o cuestionamiento de la opinión pública. Generalmente, los candidatos que se han
postulado para la Presidencia o Vicepresidencia de la República, y que hayan fungido
como Ministros de Estado, renuncian con anterioridad al mínimo de tiempo que la
Constitución establece.
En términos generales, podríamos decir que esta es una norma vigente y positiva.
Incluso, el último ex presidente, Álvaro Colom Caballeros, recibió la renuncia de
ministros que se postularon a candidaturas de diputaciones distritales. Estos ministros,
así como el resto de candidatos, deben contar además del comprobante de renuncia en
tiempo, con la constancia de solvencia en el manejo de los fondos públicos que hayan
tenido a su cargo. Dicho documento lo expide la Contraloría General de Cuentas, bajo
la denominación de “finiquito”.
No obstante, dicho documento ha generado problemas en varias candidaturas. Por
mandato de la Ley de Probidad y Responsabilidad de Funcionarios y Empleados
Públicos y del Reglamento de la misma,138 el finiquito que en determinado momento se
expida a favor de un ex funcionario o ex empleado público, es esencialmente revocable.
En el país la prescripción de responsabilidad penal es de 20 años, y la civil de 10 años.
Eso en la práctica, implica que, en tanto en lo futuro se efectúen nuevos hallazgos de
malos manejos, por parte de la Contraloría General de Cuentas, por asuntos pendientes
derivados de la calidad del gasto público o de la calidad de la gestión pública, en su
caso, ese ex funcionario o ex empleado nunca tendrá certeza de su solvencia, durante
los 20 años siguientes a haber desempeñado el cargo, a pesar de haber recibido, en
algunos casos un finiquito.
La caja de sorpresas de la que hemos hablado figuradamente en este trabajo, trajo otra
más: varios candidatos participaron con finiquitos falsificados o alterados, y esto obligó
138
Artículo 3, Acuerdo Gubernativo 613-2005 del Presidente de la República, Reglamento de la Ley de
Probidad
y
Responsabilidad
de
Funcionarios
y
Empleados
Públicos.
www.sica.int/busqueda/busqueda_archivo.aspx?Archivo=leys...1... Fecha consulta: 7 abril 2012
63 al Tribunal Supremo Electoral a anular adjudicaciones de cargos, en algunos casos.
Además, se corre el riesgo en el sistema político y electoral nuestro que, tan sólo para
entorpecer la candidatura de alguna persona, un oponente o rival político, puede
solicitar una “contra-revisión” o “contra-auditoría” a la Contraloría General de Cuentas.
Esto ya le impide poder obtener el finiquito, que es requisito impuesto por el Tribunal
Supremo Electoral, para inscribir un candidato, entre otros. Con ello, pueden causarse
dos efectos negativos, prácticamente irreparables. Por una parte, se veda el derecho de
ser electo al ciudadano solicitante. Y, por otra parte, en caso luego de la elección en la
que no se le permitió participar, se establece que nunca tuvo hallazgos de malos
manejos en los fondos públicos, nadie le reparará ni el daño moral causado, ni mucho
menos el no haber podido acceder a ser electo.
e)
Los miembros del Ejército, salvo que estén de baja o en situación de retiro
por lo menos cinco años antes de la fecha de convocatoria.
Hasta antes de la existencia de la Constitución Política de la República en 1985, la
persona que ejercía el cargo de Ministro de la Defensa Nacional, prácticamente tenía
asegurada la presidencia de la República. De hecho el último ministro que hizo uso de
ese privilegio de facto, fue el general Ángel Aníbal Guevara quien, probablemente ganó
la elección, pero ya no pudo tomar posesión toda vez que se produjo el golpe de Estado
del 23 de marzo de 1982.
La distorsión del poder político guatemalteco, se materializó en décadas de represión,
violación de los derechos humanos, manipulación de procesos electorales, abusos
policiales, saqueo de las arcas públicas, partidos políticos atados al poder militar que se
fortaleció en los años 60´, como fruto de la reacción del Estado ante el nacimiento de la
insurgencia armada. Irónicamente, los primeros líderes guerrilleros guatemaltecos, en
los años 60´, eran oficiales militares como Marco Antonio Yon Sosa y Luis Turcios Lima
que en diciembre de 1962, hicieron surgir la nueva organización guerrillera Fuerzas
64 Armadas Rebeldes (FAR).139 Sin embargo, la participación de las fuerzas armadas, aún
en los procesos de paz, ha sido determinante.140
Asimismo, la connivencia y alianza informal -pero sólida- entre poder militar y poder
económico, produjeron una amalgama perfecta. Los efectos fueron la confrontación, el
abuso, la corrupción y la no existencia de un estado de derecho, la implantación de un
estado de legalidad. Con este marco histórico de fondo, los constituyentes que
concibieron la Constitución Política de la República en 1985, tuvieron muy presente
estas circunstancias que habían debilitado y distorsionado el sistema político
guatemalteco. Eso les llevó a dejar taxativas normas prohibitivas en contra de militares
que deseen acceder al poder mediante elecciones libres y democráticas.
Cabe destacar a esta altura algunas anécdotas que recordamos al respecto de lo que
eran los eventos electorales en el pasado. En la región de las Verapaces podíamos,
siendo aún niños, ver como transcurría un evento electoral. En lugares donde este tipo
de situaciones, rompían la monotonía y el hastío. El consejo municipal coordinaba con
una junta electoral municipal todos los detalles. Al finalizar la jornada electoral, se
procedía al conteo de los votos. En lo que correspondía a autoridades municipales, las
cifras, datos y ganadores siempre o casi siempre coincidían.
En cuanto a los votos para elección presidencial y diputados del departamento de Baja
Verapaz, las cajas con las papeletas, eran enviadas, por ejemplo del municipio de
Rabinal, a la cabecera departamental, Salamá, y del resto de los municipios.
Posteriormente, en camiones del Ejército todo era trasladado al entonces denominado
“Registro Electoral” en la capital de Guatemala. Luego, era el Congreso de la
República, quien hacía el conteo de los votos, y de allí se conocía al nuevo Presidente
de la República. Mientras este escrutinio se realizaba, generalmente la radio oficial
139
JONAS, Susanne y TOBIS, David: “GUATEMALA: UNA HISTORIA INMEDIATA”. Siglo XXI Editores,
S.A. México, 1976. Págs. 299 y 300
140
“Aunque en 1996 se firmó la paz definitiva, el proceso se inició en 1983. El gobierno del General Oscar
Humberto Mejía Víctores fue un firme impulso del naciente proceso de paz. Cuando –en 1986- la
delegación militar se incorporó al proceso, hizo importantes contribuciones en búsqueda del equilibrio de
fuerzas en la región.” DIAZ, LOPEZ, Gustavo Adolfo. Op. Cit. Pág. 331
65 TGW, invadía al resto de emisoras con música de marimba continua, en lo que se
denominaba “cadena nacional”, durante los días inmediatos a la celebración de la
elección. Tiempo después, el Congreso de la República daba el “resultado oficial” de la
elección. Los datos del candidato ganador, casi nunca coincidían con los que se
contabilizaban en las juntas electorales municipales. Era la democracia tropical en
plena acción y, quien se opusiera, era calificado de subversivo o agitador social. De
nada servía la participación ciudadana en las juntas electorales municipales, puesto que
el ganador de la elección, ya estaba previamente establecido: el próximo militar que
gobernaría como fruto de elecciones “libres y democráticas”. ¡Una auténtica “banana
republic” viviendo un sistema democrático y delegando su representación!
Han sido varios gobernantes militares que ejercieron el poder “legalmente”, bajo las
circunstancias en que se desarrollaban los eventos electorales antes de la Constitución
de 1985.141 Hoy, veinticinco años después, en 2011, accede al poder por primera vez
un militar durante la era democrática142 y en plena vigencia de la actual Constitución.
Este es el caso del actual Presidente Constitucional de la República de Guatemala,
General retirado Otto Fernando Pérez Molina. El hoy gobernante, fue postulado por el
partido político Partido Patriota, PP, asumió la presidencia el 14 de enero 2011.
También se postuló para la elección anterior, toda vez que su baja del Ejército la
efectuó con el tiempo exigido constitucionalmente.
f)
Los ministros de cualquier religión o culto:
141
Aún en estos eventos electorales se votaba con la cédula de vecindad, para acreditarse e identificarse
en las mesas. Por lo tanto el padrón electoral era poroso, opaco y manipulable. Sin perjuicio que los
trabajadores agrícolas eran llevados como si fuesen ganado, en camiones a los centros de votación con
la consigna que el patrono les deba a efecto de garantizar los resultados electores que las cúpulas militar,
empresarial y política habían previamente pactado.
142
Al respecto de la herencia española de inestabilidad versus respeto al constitucionalismo y la
democracia, Aznar afirma: “Mi posición a este respecto es muy clara. Yo estoy convencido de que vale la
pena continuar el proceso que se inició con la Constitución de 1978. En los últimos doscientos años, los
españoles hemos vivido una historia caracterizada por la inestabilidad, que nos ha llevado a problemas
de todas clases, a desigualdades muy profundas dentro del país, y a conflictos a veces extremadamente
dolorosos. Incluso se ha llegado a poner en duda la continuidad histórica de nuestro país.” AZNAR, José
María. Op. cit. Pág. 233
66 Guatemala es un país laico. No obstante, la Constitución Política de la República es
confesional. El preámbulo del texto constitucional inicia diciendo: “Invocando el Nombre
de Dios”. Más adelante, en el artículo 36, reconoce que el ejercicio de todas las
religiones es libre. Y, como un resabio Colonial143 en el artículo 37, reconoce la
personalidad jurídica de la Iglesia Católica, como derecho constitucional adquirido.
Respecto de lo que denomina “otras iglesias, cultos, entidades y asociaciones de
carácter religioso”, les da la opción de obtener el reconocimiento de su personalidad
jurídica conforme las reglas de su institución.
En cuanto a la propiedad de bienes inmuebles de la Iglesia Católica, la Constitución
Política de la República, impone al Estado la obligación de extender los títulos de
propiedad sin costo alguno. Esto, esencialmente, obedece a que derivado de la
Reforma Liberal144 promovida por Miguel García Granados y Justo Rufino Barrios, la
cual inicia en 1871, se promulgó la Constitución de 1879 y, adicionalmente, un cúmulo
de leyes ordinarias tales como: el Decreto No. 59, que estableció la extinción de la
Compañía de Jesús y se produjo la nacionalización de sus bienes. Luego mediante
Decreto No. 64, se extinguieron las comunidades religiosas (católicas) y se ordenó la
nacionalización de sus bienes. Obviamente, esas disposiciones generaron tal debate,
respecto a su justicia o injusticia.145 Al día de hoy, la efigie del Reformador, se
encuentra en la mayoría de plazas de los pueblos del país, en honor a su movimiento
reformador. Pero siempre está dicha efigie de espaldas al templo católico que,
generalmente, integra el entorno de cada plaza.
143
“Durante la colonia hubo una relación estrecha entre la Iglesia y el Estado. Se puede decir que la
Iglesia manejaba el Estado cuando el Estado aceptaba la injerencia de la misma en sus asuntos. Con la
instauración del gobierno liberal se produjo una separación progresiva entre el Estado y la Iglesia. Esta
separación se ve en el establecimiento de la enseñanza laica, la creación del Código Civil, que permitía la
inscripción de los niños que nacían, la secularización de los cementerios que antes habían estado bajo el
control de la Iglesia, el matrimonio civil y la anulación del Concordato. Este hecho sucedió más tarde, ya
que Barrios respetó dicho Concordato. El matrimonio civil fue decretado en 1879.” IGLESIA
EVANGELICA NACIONAL PRESBITERIANA DE GUATEMALA: “Apuntes para la Historia”. Guatemala,
1982. Pág. 19
144
GARCIA LAGUARDIA, Jorge Mario: “La Reforma Liberal en Guatemala”. Editorial Universitaria. San
José, Costa Rica. 1985. Pág. 130 a 167
145
Al respecto, los defensores de la legalidad declaran que: “las leyes deben ser cumplidas y aplicadas
porque son leyes, no porque sean justas. De ello se colige que el deber de cumplirlas o aplicarlas existe
incluso cuando son justas.” GARCIA MAYNEZ, Eduardo: “Positivismo Jurídico, Realismo Sociológico y
Iusnaturalismo”. Universidad Nacional Autónoma de México. México, D.F. 1968. Pág. 28
67 Y, como corolario de esa laicidad implantada por la Reforma Liberal, se emite el
Decreto No. 93, que establece la Libertad de Cultos.146 No obstante, antes de la
promulgación de este decreto que establecía la libertad de cultos, existieron esfuerzos
de misioneros que, como el caso de Federico Crowe147 (1841-1846), ingresaron al país,
no precisamente con esa característica. A veces estos misioneros estuvieron en el país
como empleados de compañías comerciales extranjeras, aunque después se
generaban expulsiones del país, por sus convicciones religiosas. Pero, irónicamente, en
el caso de Crowe, hasta fue apoyado por sacerdotes católicos liberales, en la
distribución de Biblias y Nuevos Testamentos, en el área del departamento de Baja
Verapaz.
El artículo 2 del Decreto Número 93 ya citado, constituyó un parteaguas definitivo e
histórico, pues disponía: “Es libre en la República el ejercicio de todas las religiones, y
en consecuencia, los que las profesen podrán edificar templos y tener los servicios del
culto externo.”148 De aquel tiempo para esta parte, Guatemala ha tenido un crecimiento
sustancial de las iglesias evangélico-protestantes,149 y otros grupos religiosos diversos
que, paulatinamente, han llegado a desarrollarse durante más de un siglo de operar en
el país, cuyo Centenario se celebró en 1982.
146
Ibid. Pág. 183
Al respecto Virgilio Zapata, relata que en el caso de Federico Crowe, que fue uno de los precursores
del movimiento protestante en Guatemala, que era un belga hijo de ingleses, y que se dedicó a recorrer
el área de las Verapaces, resalta que: “En esa labor de “Colportaje” fue asistido por tres sacerdotes
católicos liberales, y el Corregidor, quienes le ayudaron a diseminar Biblias y Nuevos Testamentos en
castellano por la Vera Paz así como a enviarlos a diferentes partes de la República, lo cual le trajo
críticas y ataques por ser tan activo propagandista “protestante”. Cuenta Crowe que el primer fruto de su
ministerio fue una muchacha indígena muy hermosa llamada Juana Mendía, quien a pesar de sus doce
años ya se dedicaba a la prostitución. Por intermedio del Alcalde, Crowe y su esposa la recibieron en su
hogar, donde Juana aprendió a leer y escribir y a comprender el mensaje transformador del Nuevo
Testamento. Debido a ultrajes que sufrió, murió en forma prematura.” ZAPATA ARCEYUZ, Virgilio:
“Historia de la Iglesia Evangélica en Guatemala”. Serviprensa Centroamericana. Guatemala, 1982. Págs.
11 y 12
148
Ibid. Pág. 184
149
“Cuando se decretó la libertad de cultos en 1873, no se produjo un gran movimiento a favor del
protestantismo. La presencia protestante fue hasta 1882, y el primer misionero que llegó vino con muchas
limitaciones. La tolerancia estaba más en la mente del Reformador que en la mente de la Misión que
enviaba misioneros. Ellos mandaron a explorar el terreno a Juan Clark Hill. No estaban seguros de lo
conveniente, gracias a Dios, todo cambió con el tiempo.” IGLESIA EVANGELICA NACIONAL
PRESBITERIANA DE GUATEMALA. Op. Cit. Pág. 38
147
68 A tal grado es el crecimiento no solo en cuanto a miembros sino a posesiones que
disputan liderazgo150 con la tradicional Iglesia Católica.151 Y, sin entrar en cuestiones de
discusión del ethos económico puritano contra el ethos económico burgués
weberiano,152 puede decirse que hoy cuentan con medios escritos, radiales, televisivos,
enormes edificaciones religiosas, universidades confesionales, escuelas, colegios,
seminarios, etc.
En el plano político-partidario, dos ex gobernantes, uno de facto –General José Efraín
Ríos Montt-, y otro legítimamente electo, el Ingeniero Jorge Antonio Serrano Elías,
públicamente manifestaron su afinidad religiosa evangélico-protestante.153 En este
sentido, detractores de este régimen de facto, van un poco más Alejos y afirman que:
“Entre 1982 y 1983, un miembro exaltado de una secta fundamentalista californiana, el
general Efraín Ríos Montt, mientras usurpó la presidencia de la república lanzó a sus
correligionarios –en el papel de comisarios político-religiosos- a conducir al lado del
ejército la guerra santa evangélica contra los indios.”154 Y tomando en cuenta
advertencias de John Locke, podemos decir que el efecto ha sido, en lo político y en las
150
Al respecto del liderazgo, autores como Michel, consideran que “El liderazgo es un fenómeno
necesario en toda forma de vida social. En consecuencia, no es tarea científica inquirir si este fenómeno
es bueno o malo, o más bien bueno que malo.” MICHELS, Robert: “Los partidos políticos II. Un estudio
sociológico de las tendencias oligárquicas de la democracia moderna”. 2ª. Edición. Buenos Aires.
Amorrortu, 2008. Pág. 190
151
“Desde la Reforma Liberal de 1871, el protestantismo, por medio de algunas de sus sectas, ha
intentado penetrar en la población india con el fin de dislocar sus instituciones básicas y lograr adeptos
para el dios de los cristianos de los países industriales capitalistas. Tratan de oponer el individualismo al
espíritu y a las prácticas colectivistas ancestrales de la población y, mediante la entrega limitada de
objetos y dinero, aliviar una pequeña parte de su pobreza.” GUZMAN BOCKLER, Carlos: “Donde
Enmudecen las Conciencias. Crepúsculo y Aurora en Guatemala”. Secretaría de Educación Pública,
SEP/CIESAS. Frontera. México, D.F., 1986. Pág. 197
152
WEBER, Max: “Ética Protestante”. Editorial Gradifco. Buenos Aires, Argentina. 2007. Pág. 225
153
“El retorno de estas redes familiares al poder se realiza, en parte, por el apoyo de un nuevo sector
social, los grupos evangélicos pentecostales, que les proporcionan una nueva base social, con la cual
realizan alianzas matrimoniales e interclasistas, con el fin de no perder la hegemonía y seguir
conservando el poder. Tal sería el caso de las redes de los Bianchi, Falla, Alejos y Zepeda Castillo. No es
casual que la anterior contienda electoral estuvo encabezada por dos miembros de las élites familiares
tradicionales: Álvaro Arzú y Fernando Andrade Díaz Durán y un evangélico, Efraín Ríos Montt, la alianza
neo pentecostal-oligárquica vuelve a funcionar como en 1990. La actual coalición de gobierno (20042008) estuvo liderada por las redes familiares de los Berger, Aceña Durán, Castillo Monge, etcétera.”
Casaús. Op. Cit. Pág. 257 y 258
154
GUZMAN BOCKLER, Carlos: “Donde Enmudecen las Conciencias. Crepúsculo y Aurora en
Guatemala”. Secretaria de Educación Pública. SEP/CIESAS. Frontera. México, D.F., 1986. Pág. 197
69 relaciones de poder, por cuanto: “Los hombres unidos bajo alguna fe religiosa tienen
muy poco interés en oponerse al gobierno…Estoy seguro que son menos
peligrosos…”155
Pero al considerar la prohibición constitucional de carácter confesional, también es
necesario dejar asentado que desde las colonias, las estructuras de poder de larga
duración, no sólo en Guatemala, sino en Centroamérica, han estado manejadas por lo
que Casaús Arzú denomina: “redes familiares”. Estas están ligadas por cinco factores,
“A saber: a) Las alianzas a través del matrimonio; b) Las alianzas a través de los
negocios; c) La proximidad geográfica y el factor socio-racial; d) La participación en
asociaciones políticas, religiosas o socio-culturales; e) La formación de sus propios
intelectuales orgánicos.”156 Y, es en este marco histórico, social y político que, por
primera vez, se cuestiona y limita la participación electoral de un candidato a la
Presidencia. Precisamente el debate se suscitó en observancia a la prohibición
constitucional contenida en el artículo 186. El abogado Harold Osberto Caballeros
López, fundador y pastor de la Iglesia Evangélica El Shaddai, Centro de Adiestramiento
Cristiano,157 propietaria de más de veinte frecuencias radiales, colegios de nivel
preparatorio y fundador de la Universidad confesional privada San Pablo.
Este líder religioso solicita su inscripción ante el TSE, para participar en el evento
electoral de 2011, habiendo previamente fundado su partido político Visión con Valores,
VIVA. La inscripción le fue denegada. El argumento de fondo del Registro de
Ciudadanos del TSE, para la denegatoria de inscripción fue que el solicitante tiene
impedimento constitucional, con base en la literal f), del artículo 186 de la Constitución
Política de la República.
La coalición de partidos Visión con Valores –VIVA- y Encuentro por Guatemala –EG-,
interpusieron acción constitucional de amparo ante la Corte Suprema de Justicia,
alegando que su candidato, quien también se apersonó como tercero coadyuvante, no
155
LOCKE, John: “Carta Sobre la Tolerancia”. Editorial Gradifco, Buenos Aires, Argentina. 2007. Pág. 101
CASAUS ARZU, Op. Cit. Pág. 8
157
www.elshaddai.net. Fecha de consulta: 23 de marzo 2012
156
70 tenía el impedimento ya indicado, porque había renunciado al pastorado religioso desde
2006.
La Corte Suprema de Justicia, en sentencia158 dictada dentro del expediente de amparo
número: 1014-2011 de fecha 16 de agosto 2011, otorgó el amparo definitivo. En
consecuencia, el amparado Harold Osberto Caballeros López, fue inscrito como
candidato presidencial, e integró binomio con Efraín Medina Guerra. En síntesis, la
Corte Suprema de Justicia, resguardó la prohibición constitucional. No obstante, dio
valor probatorio de descargo de la misma, la renuncia previa que hizo el amparista en
2006 al ejercicio de la función de ministro de culto.
Guatemala, tiene una historia constitucional de larga data, en materia de prohibición de
candidaturas a la presidencia que no sean del estado seglar, el cual según el DRAE “Es
aquel que no tiene órdenes clericales”. Esta limitante la tuvieron la Constitución de
1945, (artículo 130 literal d), la de 1956, (artículo 160 literal d), en ambas bajo el término
“…ser del estado seglar”. La Constitución de 1965, prohibió en el artículo 184, numeral
5, que opten a la Presidencia de la República “los ministros de cualquier religión o
culto.”159 Todo, en idéntico sentido como actualmente está dispuesto en la Constitución
Política de la República al día de hoy. De acuerdo a ello, podemos decir que en la
interpretación constitucional que se hizo en el caso concreto analizado, prevaleció el
argumento histórico,160 como lo considera Ezquiaga Ganuzas.
158
SENTENCIA CORTE SUPREMA DE JUSTICIA: AMPARO No. 1014-2011. Se consideró que pudiese
existir fraude de ley, al haber renunciado el cargo de pastor evangélico, única y exclusivamente para
poder postularse a la candidatura presidencial, admitiendo tener impedimento constitucional, conforme
literal f) del artículo 186 de la Constitución Política de la República. Asimismo, se hizo énfasis en que
dicha prohibición no viola derecho humano alguno, puesto que busca hacer congruente la laicidad del
Estado. www.oj.gob.gt/amparos/. Fecha de consulta: 23 de marzo 2012
159
LOCKE, advierte que “Cristo no ha establecido nada con su ley…no mandó a establecer ningún
Estado en particular, no introdujo ninguna nueva forma política para su pueblo, no armó a ningún
magistrado con una espada con la que obligar a los hombres a la fe y al cuto que se propuso a sus
seguidores, o con la que alejarles de otra religión.” “Carta Sobre la Tolerancia”. Op. cit. Pág. 59
160
A ese respecto, Ezquiaga Ganuzas, indica que “La Escuela histórica encuentra su justificación en que
al igual que no es posible ninguna existencia humana completamente individual, cada período de la
historia de un pueblo es continuación y desarrollo de las edades pasadas…En definitiva, el Derecho sería
fruto de una ininterrumpida tradición… La existencia de un legislador personificado e intemporal tiene el
efecto de que el ordenamiento jurídico esté regido por el principio de la continuidad” EZQUIAGA
GANUZAS. Op. cit. Pág. 146 y 149
71 g)
Los magistrados del Tribunal Supremo Electoral.
Esta prohibición implica que no se puede ser juez y parte en un evento electoral
determinado. La excepción es que al revés, el Tribunal Supremo Electoral, tuvo como
Presidente de dicho órgano colegiado electoral al abogado Arturo Herbruger Asturias161
quien luego, de manera inusual y excepcional, llega a ser Vicepresidente de la
República con el ex presidente Ramiro de León Carpio, para completar el período
presidencial de 1993 a 1996. Este dúo presidencial asumió la conducción del Ejecutivo,
luego del denominado “Serranazo”.162
El autogolpe ilícito,163 aunque se trató de justificar con la publicación del documento
denominado “Normas Temporales de Gobierno”, del entonces Presidente Jorge Antonio
Serrano Elías y su Vicepresidente Gustavo Espina Salguero, no lograron su legitimidad
anhelada. En cambio, enfrentaron la paralización del país, el desplante de los medios
masivos de comunicación, y la falta de unidad en el mando del Ejército, para respaldar
al régimen auto-golpista.
Lo que sí legitimó y posibilitó el aprendiz de dictador, fue que el Congreso de la
República con 101 votos, dispusiera que De León Carpio y Herbruger Asturias,
completaran el período presidencial hasta el 14 de enero de 1996.164 Fuera de esta
excepción histórico-política y coyuntural, esta prohibición no ha sido objeto de análisis o
resolución judicial alguna, como prohibición. No obstante, la misma ha tenido
repercusiones en el devenir político del país. Mediante sentencia de la Corte de
161
Autogolpe de Estado: 25 de mayo 1993; es.wikipedia.org/wiki/Serranazo. Fecha consulta: 23 de marzo
2012
162
El autogolpe del 25 de mayo 1993, fue denominado “Serranazo” y por virtud del cual el aprendiz de
dictador, inspirado en el efecto Fujimori (Perú), suprimió por decreto presidencial la Corte Suprema de
Justicia y el Congreso de la República.
163
“Una cosa es sostener que el poder político no puede ser únicamente fuerte en el sentido de que no
es posible, y otra cosa muy diferente es que no puede ser solamente fuerte en el sentido de que no es
lícito.” BOBBIO, Norberto: “Estado, Gobierno y Sociedad”. Editorial Fondo de Cultura Económica. México
2002. Pág. 117
164
www.eltiempo.com/archivo/documento/MAM-140062. Fecha consulta: 23 de marzo 2012
72 Constitucionalidad, y “Tras un intenso cabildeo, en la madrugada del 6 de junio fue
nombrado Presidente de la República el hasta entonces Procurador de los Derechos
Humanos, Ramiro de León Carpio, para cumplir el período que le falta a Serrano, en
tanto el insigne jurista Arturo Herbruger Asturias, era nombrado para asumir las
funciones de vicepresidente.”165
h)
Reelección Presidencial:
A pesar del sistema presidencialista que rige en el país, por el contexto histórico-social,
los constituyentes dejaron plasmado el artículo 187 constitucional, establece la
prohibición de reelección, para la persona que haya desempeñado durante cualquier
tiempo el cargo de Presidente de la República por elección popular, o quien la haya
ejercido por más de dos años en sustitución del titular, no podrá volver a desempeñarlo
en ningún caso. Sin embargo, dos ex presidentes, Álvaro Arzú y Vinicio Cerezo,166
directa o indirectamente, abierta o subliminalmente, han intentado medir posibilidades
de postularse nuevamente al cargo de Presidente de la República, lo cual ha sido
rechazado por la ciudadanía.
2)
La segunda condición, para el éxito de la democracia, en el pensamiento de
Schumpeter, “…consiste en que el dominio efectivo de las decisiones políticas no debe
ser exageradamente extenso.” En este aspecto, habría que considerar que los límites al
poder,
también
contribuyen
o
destrozan
la
democracia.
Si
el
Estado
usa
institucionalmente la fuerza pública, y el monopolio de la violencia,167 puede atentar
contra la garantía individual y colectiva de los derechos fundamentales, aunque es la
165
DIAZ LOPEZ, Gustavo Adolfo: “Guatemala en Llamas. Visión Política-Militar del Conflicto Armado
Interno 1960-1996”. Editorial Oscar de León Palacios. Guatemala, 2008. Pág. 291
166
“La modestia no me impide señalar que yo era un buen candidato.” MONTEFORTE TOLEDO, Mario:
“Vinicio. Entrevista de Mario Monteforte Toledo”. Artemis & Edinter. Guatemala, 1998. Pág. 42
167
“Pero, por encima de todo, el monopolio crucial del Estado radica en el control del uso de la violencia:
desde la policía y las fuerzas armadas a los tribunales, que son el lugar del poder decisivo último en las
discusiones sobre los delitos y los contratos. El control de la policía y del Ejército es de singular
importancia para reforzar y asegurar todos los restantes poderes del Estado, incluido el más
trascendental de todos ellos, el de extraer las rentas de los ciudadanos mediante coacción.” ROTHBARD,
Murray N. “La Ética de la Libertad”. Unión Editorial. Madrid, 1995. Pág. 227
73 única manera de asegurar los restantes poderes del Estado.168 Pero también se puede
producir el efecto inverso en contra de la democracia. Cuando se tiene un ejercicio de
poder con opacidad, carente de eficacia y sin mayor presencia del Estado, esta
debilidad también termina atentando contra la misma democracia que pretende
resguardar. Y, por supuesto, ambos extremos en el ejercicio del poder son riesgosos, y
sus resultados impredecibles.
Lo ideal es que todas las decisiones políticas, para contribuir a una democracia exitosa,
cumplan con ser manifestaciones del poder de proteger. Recordemos que “La
democracia sólo puede surgir y existir si las fuerzas concurrentes para implantarla son
democráticas.”169 Caso contrario, se puede obtener el efecto inverso. La legitimación
del poder coercitivo del Estado, está sujeta a un ejercicio sano del mismo, sin
exageraciones ni abusos. Por ello, autores como Locke, van más lejos. Insiste en que
“Tanto en América como en Europa, los derechos civiles no deben ser violados o
cambiados por la religión.”170 Y, ahonda en esta temática de los excesos, cuando
plantea la diferencia de las competencias entre la esfera religiosa y la política,
precisamente, para respaldar sus ideas acerca del gobierno civil, con ello establecer las
bases del liberalismo político.
El pensamiento de Locke es claro en el sentido que “La sociedad política,
definitivamente, ha sido instituida con el fin de asegurar a cada hombre la propiedad de
los bienes de esta vida, y con ningún otro motivo.”171 Tan pragmático es el
planteamiento lockiano que se puede decir que el Estado y el sistema democrático, sólo
debieran tener intervención en garantizar al individuo172 tres valores: vida, libertad173 y
168
Bodenheimer, lo define como “la fuerza coactiva” que goza el Estado al afirmar que: El estado es el
portador de la fuerza coactiva organizada y disciplinada. Es la institución que tiene el monopolio del
derecho a obligar.” BODENHEIMER, Edgar: “Teoría del Derecho”. Fondo de Cultura Económica. México,
1983. Pág. 311
169
Bodenheimer. Ibid. Pág. 216
170
LOCKE, John: “Carta Sobre la Tolerancia”. Gradifco. Buenos Aires, 2007. Pág. 57
171
Ibid. Pág. 65 y 66
172
Al respecto, MILL, va aún más lejos en su concepción del valor del individuo y que debe prevalecer
frente al gobierno, el Estado y la sociedad misma, cuando expresa: “El individuo puede ser un niño, un
loco o un imbécil. La ley tiene que velar por los intereses de estas personas, sin que tenga que hacerlo
por necesidad con intervención de sus propios funcionarios. Existe una multitud de casos en los cuales
los gobiernos, con la aprobación general, se atribuyen poderes y ejecutan funciones a los cuales no
74 propiedad. Todo lo demás será excesivo y redundará en daños para la libertad
individual y la sociedad misma en conjunto. O, como también lo concibió Montesquieu y
otros, que desarrollaron la doctrina de la división de poderes, o el comúnmente
conocido sistema de “frenos y contrapesos” y “controles”.174 En palabras de Savater,175
“…las cualidades objetivas de las diferentes cosas son percibidas por mis sentidos y
producen cualidades subjetivas, es decir, ideas simples, en mi entendimiento.”
Ese relacionamiento y codependencia, entre los poderes del Estado, sus respectivas
fiscalizaciones recíprocas, así como los diferentes métodos para ejercer un equilibrio de
fuerzas, son percibidos por la sociedad de manera simple. A tal grado que le permite
discernir entre los excesos y abusos, y entre el orden y la razonabilidad del ejercicio del
poder. Ya en 1776, Adam Smith,176 advertía esta problemática, proponiendo lo absurdo
de establecer restricciones en el comercio, vía reglamentos que impone el Estado,
puesto que sugiere que la economía existen los mecanismos de auto regulación.
Resulta interesante entonces, la advertencia que hace Miquel Caminal Badía, respecto
al peligro de la despolitización, porque “De hecho no hay nada más político que los
constantes intentos de excluir cierto tipo de problemas de la política.”177
3)
Un tercer factor condicionante, consiste según Schumpeter, en que las
sociedades modernas y un gobierno democrático, “…debe disponer de una burocracia
bien entrenada que goce de buena reputación y que se apoye en sólidas tradiciones,
dotada de un sentido vigoroso del deber.” Irónicamente, tanto el proceso de
democratización guatemalteco, como el abortamiento de crisis en el período
puede asignarse otra razón que la muy simple de que conducen al bien general.” MILL, John Stuart. Op.
Cit. Pág. 685
173
Al analizar el término “libertad”, es interesante que para HAYEK, ésta “…es un artefacto levantado por
la civilización en virtud del cual el ser humano logra librarse de las exigencias que el grupo de reducida
dimensión le impone, a cuyos caprichosos impulsos hasta las propias jerarquías tenían que rendir
pleitesía. La libertad deriva del respeto de los seres humanos a la disciplina de la civilización, que es al
propio tiempo la de la libertad.” HAYEK, Friedrich A.: “DERECHO, LEGISLACION Y LIBERTAD”. Unión
Editorial, S.A. Volumen III. El Orden Político de una Sociedad Libre. Madrid, 1982. Pág. 283
174
DEL AGUILA, Rafael (Editor): “Manual de Ciencia Política”. Editorial Trotta, S.A. Madrid. 2009. Pág. 74
175
SAVATER, Fernando. “La Aventura de Pensar”. DEBATE. Random House Mondadori, S.A. de C.V.
México, 2008. Pág. 111
176
SMITH, Adam. Op. cit. Pág. 93 y ss.
177
CAMINAL BADIA, Miquel: “La política como ciencia”, publicado en “Manuel de Ciencia Política”.
Editorial Tecnos (Grupo Anaya, S.A.). Madrid, 2005. Pág. 29
75 democrático, y la protección de la democracia por nuevas amenazas (narcotráfico,
atentados fronterizos, etc.), han estado sujetos a la participación de la burocracia militar
guatemalteca, y por consiguiente al deterioro de la libertad del individuo.
Pero, como parte del mundo occidental, Guatemala como país tercermundista, y parte
de la esfera de influencia del hemisferio occidental, está expuesta a acatar decisiones
que no puede discutir. Para Pellicani, citado por Sartori, esta influencia de la civilización
occidental, tiene incluso la capacidad de agredir “el código genético de otras
culturas”,178 estamos bajo las directrices del orden económico capitalista.179 Incluso, el
mismo proceso de paz, y la firma del Acuerdo respectivo, dependieron de la
participación directa de las fuerzas armadas, del sector empresarial y de la
comandancia de la insurgencia,180 todo para “evitarse el surgimiento de nuevos
conflictos sociales, que desemboquen en tragedias como la vivida en Guatemala entre
1960 y 1996.”181
Ante la queja de algún sector de la población que el Acuerdo de Paz, fue un “pacto de
élites”, cobra sentido tal afirmación, si partimos que “La dirección real de la política en
cualquier régimen (y también en uno democrático) está en manos de minorías y élites
178
SARTORI, “¿Qué es la democracia? Op. Cit. Pág. 381
“El orden económico capitalista actual es como un cosmos extraordinario en el que el individuo nace y
que, al menos en cuanto individuo, le es dado como un edificio prácticamente irreformable en el cual
debe vivir, y que le impone las normas de su comportamiento económico, dado que se halla implicado en
la trama de la economía. El capitalismo actual, amo absoluto en la vida de la economía, educa y crea por
la vía de la selección económica los sujetos, empresarios y trabajadores, que necesita.” WEBER, Max:
“Ética Protestante”. Gradifco SRL. Buenos Aires, 2007. Pág. 51 y 52
180
Similar contexto de negociación de élites, se vivió en el proceso de paz que se tuvo en la república de
El Salvador, donde el Frente Farabundo Martí para la Liberación Nacional, FMLN, operó y negoció con
realismo. Todo ello dicho por uno de los comandantes guerrilleros guatemaltecos que transnacionalizaron
su labor de combatientes, afirma: “La dirección guerrillera de los salvadoreños optó por llevar a cabo un
último esfuerzo militar, la Ofensiva Final, en noviembre de 1989. Nosotros nos empeñamos en ello. Pero
también se consideraba en el horizonte la búsqueda de una solución negociada. Eso imponía un costo
político. Había que pagarlo. Y así se hizo. Lo que se logró en El Salvador, por medio de los Acuerdos de
Paz de Chapultepec, el 16 de enero de 1992, no era todo lo que hubiéramos deseado, pero fue lo
posible. Hubo que dejar postergados los sueños y poner los pies sobre la tierra; nuestros postulados
sufrieron un desgarramiento necesario, objetivo, impostergable. El realismo se impuso al idealismo.
Tampoco lo que se obtuvo en Nicaragua era lo que deseábamos. Pero fue lo que pudieron negociar y
obtener los nicaragüenses. El difícil proceso de paz nicaragüense sirvió de norte para El Salvador. Los
ejemplos nicaragüense y salvadoreño deben servir de aguijón para Guatemala.” MACIAS, Julio César:
“La Guerrilla fue mi Camino-Epitafio para César Montes”. Editorial Piedra Santa, Guatemala, 1997. Pág.
383 y 384
181
DIAZ LOPEZ, Gustavo. Op. Cit. Pág. 330
179
76 selectas, de modo que la división entre gobernantes y gobernados es permanente e
ineludible, y la <<palabrería democrática>> al respecto solo encubre una fórmula para
legitimar lo que de hecho no es más que dominio.”182 Nuestra democracia se ha ido
perfeccionando en todos los ámbitos, a medida que ha sido sometido a prueba el
sistema político y el entorno constitucional vigente. El anhelo es contar con una
burocracia bien capacitada que facilite el proceso de institucionalización de la
democracia. Pero siempre sobre la base que ésta no es un estanque, donde debe
reposar agua tranquila y sin agitaciones. Si así fuese, se correría el riesgo que ésta se
enturbie, pierda sus elementos y termine por ser no potable. Por el contrario, la
democracia es dinámica, cambiante y debe correr libremente, como los ríos de agua
fresca y cristalina.
4)
Finalmente, la cuarta de las condiciones, schumpeterianas, hace referencia al “…
autocontrol democrático…Los cuerpos electorales y los parlamentos deben situarse en
un nivel intelectual y moral suficientemente elevado para resistir proposiciones de
oportunistas y de locos…” El deber ser del Estado es ser estructural y teleológicamente
democrático. Su antítesis lo constituye el autoritarismo.183 En el caso particular
guatemalteco, y especialmente en la era democrática que arranca en 1985, podemos
ver que sí se evidencia la existencia de “autocontrol democrático”. Pero como es en
condiciones extremas y anormales, que se prueba la esencia, densidad y solidez de las
cosas, el sistema democrático se encuentra –y debe estar- sujeto a los riesgos como
los que se han venido analizando.
Nuevamente, hacemos referencia al autogolpe que provocó el ex gobernante Jorge
Antonio Serrano Elías, el sistema se puso a prueba. Idéntico nivel de prueba tuvieron
las instituciones llamadas a preservar la democracia y el estado de derecho. En ocasión
182
DEL AGUILA, Rafael (editor). Op. Cit. Pág. 148
“Se suele llamar autoritarios a los regímenes que privilegian el aspecto del mando y menosprecian de
un modo más o menos radical el del consenso, concentrando el poder político en un hombre o en un solo
órgano y restado valor a las instituciones representativas: de ahí la reducción a la mínima expresión de la
oposición y de la autonomía de los subsistemas políticos y la anulación o la sustancial eliminación de
contenido de los procedimientos y de las instituciones destinadas a transmitir la autoridad política desde
de la base hasta lo alto.” BOBBIO, Norberto, MATTEUCCI Y PASQUINO: “Diccionario de Política”. Siglo
Veintiuno Editores. Madrid, 2000. Pág. 125
183
77 de los eventos desencadenados por el autogolpe o “Serranazo”, la Corte de
Constitucionalidad, dictó sentencia de inconstitucionalidad general184 en contra del
decreto que contenía “Normas Temporales de Gobierno”.185 Emulando a Fujimori,
Chávez y otros gobernantes latinoamericanos, con el cual suspendía la Constitución
Política de la República. Además, el autogolpe dictó normas con las que “destituía” a la
Corte Suprema de Justicia, y el ex gobernante asumía los poderes legislativos,
anulando al Congreso de la República.
El control democrático y de respeto y observancia a la Constitución, se vio reflejado en
la sentencia de la Corte de Constitucionalidad. El fallo reiteró la nulidad ipso jure de
cualquier norma que se oponga a la carta magna, la sujeción de los órganos del
Estado, al derecho, y le ordenó al golpista publicar la sentencia en el Diario Oficial. De
igual manera, el 4 de junio 1993, se pronuncia la misma Corte, en el sentido de afirmar
que el entonces Vicepresidente Gustavo Espina Salguero, tampoco podía asumir la
presidencia. Esto luego que el ex presidente huyó rumbo a Panamá, porque se estimó
que dicho vicepresidente también participó notoriamente en el autogolpe.186
184
CORTE DE CONSTITUCIONALIDAD DE GUATEMALA: SENTENCIA AUTOGOLPE “SERRANAZO”.
Expediente
No.
225-93
del
4
de
junio
1993.
www.cc.gob.gt/siged2009/mdlWeb/frmConsultaWebVerDocumento.aspx?St_DocumentoId=791733.html&
S. Fecha de consulta: 24 de marzo 2012
185
FERNANDEZ CAMACHO, Carmen: “La Oposición al Autogolpe de Serrano Elías: Eficacia de las
Relaciones Públicas”. Publicado en: “AMBITOS”, Revista Andaluza de Comunicación. Universidad de
Sevilla. www.redalyc.ua.emex.mx/pdf/168/16801213.pdf. Fecha consulta: 7 de abril 2012
186
“La crisis política estalló el 25 de mayo, cuando el Presidente Serrano, acorde a su tendencia
dictatorial e influido por el autogolpe de Estado realizado por Alberto Fujimori en Perú, emitió el Decreto
Gubernativo 1-93, Normas Temporales de Gobierno, a través del cual dejó en suspenso cuarenta y siete
(47) artículos de la Constitución y anunció la disolución del Congreso, organismo al que acusaba de estar
extorsionándolo, la Corte Suprema de Justicia y la Corte de Constitucionalidad, y amenazó con similares
medidas al Procurador General de la Nación y al Procurador de Derechos Humanos, licenciado Ramiro
de León Carpio, funcionarios que lograron evadir los intentos de captura que hicieron las fuerzas
policiales. El Ministro de Gobernación, Francisco Perdomo, fue el artífice del autogolpe, pero contó con la
complicidad del alto mando militar, a quienes Serrano informó de sus planes, sin que aquellos
manifestaran oposición Esto provocó el rechazo de otros oficiales liderados por el Director y Subdirector
de Inteligencia, quienes se manifestaron contrarios al rompimiento del orden constitucional y se pusieron
en contacto con diferentes sectores de la sociedad civil y especialmente manifestaron su apoyo a los
Magistrados de la Corte de Constitucionalidad, quienes sabiéndose apoyados decidieron actuar. Las
acciones de Serrano fueron rechazadas por la Corte de Constitucionalidad, que ese mismo día declaró
inconstitucional el decreto de marras. No hacía mucho, en el Congreso se había integrado la alianza
entre MLN, UCN y DC, la que el negro humor popular denominaba La trinca infernal, debido a que sus
integrantes buscan realizar todo tipo de negocios a espaldas del pueblo y en algunos casos con la
complicidad del gobernante.“ DIAZ LOPEZ, Gustavo Adolfo. Op. Cit. Pág. 289 y 290
78 Lo interesante es que ese autocontrol democrático fue aún más lejos, puesto que la
Corte de Constitucionalidad estableció: a) adicionalmente emplazó al Congreso de la
República para que en 24 horas pudiese designar Presidente y Vicepresidente de la
República, para completar el período constitucional faltante; b) declara golpista al
binomio presidencial refugiado en Panamá y declaró que ambos actuaron de facto. En
otras palabras, ese autocontrol democrático, en nuestro país, implicó reconocer que
“Los hombres hacen su propia historia, pero no la hacen a su voluntad bajo condiciones
elegidas por ellos mismos, sino bajo condiciones directamente existentes, dadas y
heredadas.”187 Podemos con certeza afirmar que se produjo en Guatemala el 25 de
mayo de 1993 una estabilidad democrática, sin necesidad de acudir a una estabilidad
autoritaria,188 como sí ocurrió el 30 de marzo de 1982, en que el Ejército quien tomó el
control del Estado.
Nuestra democracia ha transitado desde una estabilidad extrema (1985), generada por
la promulgación de la Constitución Política de la República. Luego enfrenta la crisis del
autogolpe (1993), hasta llegar a la inestabilidad extrema que, precisamente, motiva la
reacción de las instituciones encargadas de preservar el orden democrático dentro del
sistema democrático. Tal fue el costo de superar esta crisis dentro del plano
democrático e institucional que, incluso, costó la vida del entonces Presidente de la
Corte de Constitucionalidad Epaminondas González Dubón.189 Por cierto, el asesinato
del magistrado quedó en absoluta impunidad.
En esencia, la estabilidad no es intrínseca a la democracia. Tampoco constituye una
forma de gobierno “paradisíaca” o ideal y estáticamente funcionando. A más
democracia, mayor cantidad de expresión y demandas de la sociedad. En esa misma
dimensión, el poder ejercido se siente amenazado y puede reaccionar vía una
gobernabilidad democrática, o bien, privilegiar una gobernabilidad autoritaria. En ambos
casos, la sociedad enfrenta crisis en su propio sistema político.
187
MARX, Karl: “El Dieciocho Brumario de Luis Bonaparte”. Alianza Editorial. Madrid, 2009. Pág. 33
BACA OLAMENDI, Laura (y otros compiladores): “Léxico de la Política”. Facultad Latinoamericana de
Ciencias Sociales. Fondo de Cultura Económica. México, D.F. 2000. Pág. 214 a 221
189
“Marzo´94. Es asesinado el presidente de la Corte de Constitucionalidad, Epaminondas González
Dubón.” TORRES RIVAS, Edelberto y AGUILERA, Gabriel. Op. Cit. Pág. 203
188
79 Respecto a la inestabilidad política, Facundo González Bárcenas, afirma que puede
hablarse de estabilidad democrática y estabilidad autoritaria, y que “La estabilidad
democrática se logra gracias a la combinación de diversos factores entre los que
destacan culturas políticas, instituciones, legalidad y prácticas democráticas en una
articulación virtuosa que mantiene la relación demandas y satisfactores y los conflictos
políticos dentro de ciertos límites que no amenazan el funcionamiento del sistema…Los
mecanismos de la estabilidad autoritaria y los de la totalitaria han sido poco estudiados
en comparación con los de la democrática, pero en ambos destaca como recurso el
control social y político, ya sea mediante procedimientos como los partidos de Estado,
el clientelismo y el corporativismo190 o bien aquellos menos sutiles de carácter
abiertamente represivo.”191
190
Al respecto del “corporativismo” actuando en el sistema político guatemalteco, es interesante conocer
cómo está estructurado actualmente. ““Las más poderosas dentro de las 21 corporaciones empresariales
que constituyen la “supercúpula” parecen ser las siguientes: a) CORPORACION MULTI-INVERSIONES.
Alimentos, banca, energía, construcción, bienes raíces. Más de 300 empresas y 32 mil empleados en
Centroamérica, República Dominicana, Ecuador, Estados Unidos de América, México, España, Indonesia
y China. Familias Gutiérrez Mayorga, Bosch Gutiérrez. B) GRUPO PANTALEON. Azúcar, café, energía,
banca, telecomunicaciones con inversiones en Nicaragua Familia Herrera.
C) CORPORACION CASTILLO HERMANOS. Alimentos, bebidas, cerveza, banca, centros comerciales.
83 empresas con operaciones en toda Centroamérica. Familias Castillo Love y Monge Calderón.
d) GRUPO COBAN. Café, hule, cardamomo, banca y seguros, lácteos y calzado. Familia Torrebiarte.
e) GRUPO CEMENTOS PROGRESO. Cemento, construcción, energía y transporte. Asociados al grupo
suizo Holcin, sus intereses sean expandidos a Honduras y El Salvador. Familias Novella, Torrebiarte
Novella, Melville, Lemcke, Springmuhl y Dougherty.
f) GRUPO CAMPOLLO. Azúcar, banca, energía, petróleo, bienes raíces, palma africana, etanol.
Inversiones en Costa Rica y República Dominicana. Familia Campollo Codina.
G) GRUPO BOTRAN. Azúcar, finanzas, energía, bienes raíces y licores. Familia Botrán.
H) GRUPO LA FRAGUA. Supermercados, banca y bienes raíces. Asociados ahora a Wal-Mart Stores
Inc. Familia Paiz.
i) GRUPO MOLINA. Aceite Vegetal, banano, ganado, piña y palma africana. Se encuentra entre los
mayores exportadores de banano y palma africana de Latinoamérica. Exportaciones a toda
Centroamérica y el Caribe. Plantaciones bananeras en Guatemala y Costa Rica. Familias Molina, Molina
Botrán.
j) GRUPO GONZALEZ. Televisión, radio, cines, restaurantes. Más de 30 canales de televisión y cadenas
de radio en América Latina a través de Televide Services Inc., con sede en Miami.
k) CABCORP (Central American Beverage Corporation). Bebidas y cerveza. Primos y competidores de la
Corporación Castillo Hermanos. Se han expandido a El Salvador, Honduras y Nicaragua y asociados con
la mayor cervecería del Brasil, la AmBey. Familias Castillo Monge, Castillo Sinibaldi.
l) GRUPO BUENA. Importación de pollo, carne de res, azúcar. Es la principal competencia de los
Gutiérrez-Bosch, a quienes les arrebató el 15% del mercado avícola nacional les compite en toda
Centroamérica. Familia García Granados.
A las anteriores corporaciones hay que agregar nueve más: Familia Leal Pivaral (azúcar, energía y
etanol, banca, café, ganadería, bienes raíces); Corporación AG, familia Abularach (acero, banca y
energía), Grupo Köng Hermanos (jabón, detergentes, shampoo, cosméticos); Familia Vila (azúcar,
80 Los movimientos sociales y la clase empresarial ejerciendo el poder político.
Un factor que a nuestro juicio, deriva en descrédito de la clase política y del ejercicio del
poder en Guatemala, es el hecho que en nuestro medio algunos dirigentes o personajes
vinculados con los movimientos sociales y la clase empresarial, terminan ejerciendo
poder político directamente. A tal grado llega esta participación que Ortega y Gasset
consideraba, décadas atrás, que estábamos en presencia de una “hiperdemocracia”.192
Este doble discurso, de plantear conflictos, de aparentar equidistancia del poder político
y de la participación político-partidista, no solo habla de una doble moral, sino de un
efecto nocivo para la institucionalización de los partidos políticos y el fortalecimiento del
sistema político. Con la revisión objetiva de ese comportamiento, en los últimos 25
años, se estima que tanto la clase empresarial y algunos movimientos sociales, han
terminando contradiciendo lo afirmado por autores como Ibarra y Letamendía, en el
sentido que “el partido está orientado a ejercer el poder y el movimiento a cambiar
cómo y lo que se hace desde el poder político.193 En la práctica, muchas veces, los
partidos políticos son utilizados por la “hiperdemocracia” para la consecución de sus
fines muy particulares. Total si las cosas no van bien, el único señalado será el grupo o
la clase política.
energía, banca, bienes raíces); Grupo Liztex, familia Habie (textiles, energía, banca, hotelería, centros
comerciales, bienes raíces), Grupo Koramsa, familias Klose y Arias Maselli (maquila, banca y bienes
raíces); Familia Neutze Aycinena (seguros, bienes raíces y empresas de taxi); Familia González (café,
banca, exportación de flores, bienes raíces), Francisco Alvarado Macdonald (agricultura, lácteos y
aceites, finanzas, bienes raíces, distribución de autos)” ibíd. Carlos Figueroa Ibarra. Pág. 108, 109 y 110
191
BACA OLAMENDI, Laura (y otros compiladores): “Léxico de la Política”. Facultad Latinoamericana de
Ciencias Sociales. Fondo de Cultura Económica. México, D.F. 2000. Pág. 214 a 221
192
“Hoy asistimos al triunfo de una hiperdemocracia en que la masa actúa directamente, por medio de
materiales presiones, imponiendo sus aspiraciones y sus gustos. Es falso interpretar las situaciones
nuevas como si la masa se hubiese cansado de la política y encargarse a personas especiales su
ejercicio…Ahora, en cambio, cree la masa que tiene derecho a imponer y dar vigor de ley a sus tópicos
de café. Yo dudo que haya habido otras épocas de la Historia en que la muchedumbre llegase a gobernar
tan directamente como en nuestro tiempo. Por eso hablo de hiperdemocracia.” ORTEGA Y GASSET,
José: “Meditación de Nuestro Tiempo”. Fondo de Cultura Económica. México, D.F. 2006. Pág. 299
193
IBARRA y LETAMENDIA. Documento publicado en “Manual de Ciencia Política”. CAMINAL BADIA,
Miquel. Op. cit. Pág. 383
81 Aquí, se observa que no sólo estos grupos han ejercido presión al Estado para
determinados cambios, sino que además han gobernado o co-gobernado, ejerciendo el
poder directamente. Todo esto como fruto de un adelgazamiento y permanente
“satanización” o descalificación del Estado. Así, por ejemplo, en el país ha habido
imposición de candidaturas de empresarios para la Presidencia de la República (Álvaro
Arzú y Oscar Berger –por ejemplo-). Otras veces, vía la inserción de ex presidentes de
cámaras empresariales o de ex directivos del sector o clase empresarial para dirigir
ministerios de Estado (entre los ministerios más utilizados para esta cuota de poder que
obtienen las corporaciones o los movimientos sociales están el de salud pública,
comercio, comunicaciones, infraestructura y vivienda, o agricultura), o el ente rector del
turismo, entre otros.
Casi podemos afirmar que la constante de los últimos 25 años ha sido tener gobiernos
electos popular y democráticamente. Pero de igual manera, ha sido la constante que las
casillas privilegiadas en la lista nacional de diputados de los partidos más fuertes, o con
mayores posibilidades de incidir en la elección, son “reservadas” para asesores,
empleados o directivos de las distintas cámaras empresariales.
Esto, obviamente, se presume que constituye en la práctica el pago de las cuotas de
financiamiento privado que, individual o colectivamente, ese mismo sector empresarial
hace a diversos partidos políticos. En el caso de los movimientos sociales, activistas de
derechos humanos han asumido carteras ministeriales, o han sido nombrados
“comisionados presidenciales” en ciertas cuotas de poder en ministerios como
gobernación (que dirige entre otras cosas, la seguridad ciudadana), educación, o salud
y otros.
Si partimos que la rendija por donde los partidos políticos se dejan filtrar esos cuadros o
personajes provenientes de la clase empresarial194 o de los movimientos sociales, es
194
Al respecto, ya Marx, advertía de esta tentación de la oligarquía, diciendo que “El afán por satisfacer
sus intereses económicos llevaba a la burguesía a aniquilarse políticamente, a minar las instituciones del
parlamentarismo liberal y a sucumbir a gobiernos fuertes.” MARX, Karl: “El Dieciocho Brumario de Luis
Bonaparte”. Op. cit. Pág. 25
82 porque éstos aún dependen de las aportaciones de financiamiento a las campañas,
producto del sector privado. Pero lo anterior es valedero para los primeros, pero no para
los segundos. Entonces podríamos decir que, eventualmente, los mismos partidos,
promueven, toleran o consienten esas “cuotas” de poder político, o porque les pueden
generar además de financiamiento algo de marketing político, o que les da algún baño
de pureza o prestigio, aunque no aporten financieramente.
Así hemos visto candidaturas presidenciales, vicepresidenciales o diputaciones de
dirigentes religiosos (Vitalino Similox –del movimiento de iglesias ecuménicas-), de
activistas o de exguerilleros (Jorge Soto, alias Pablo Monsanto, Pedro Pablo Palma
Lau, Rigoberta Menchú, etc.), o de activistas sindicales (Nery Barrios o Alfonso Bauer),
o populares, ex dirigentes empresariales (los ex presidentes Álvaro Arzú, Oscar Berger
y Álvaro Colom). Al igual han figurado en listados electorales diversos activistas de
movimientos pro-justicia o de derechos humanos (Adela de Torrebiarte, dirigente del
movimiento social “Madres Angustiadas”, fue postulada a la Presidencia de la República
en 2011), o la misma Premio Nobel de la Paz, Rigoberta Menchú.
Y, finalmente, sin ser exhaustivos, hay casos de dirigentes de derechos humanos que
han alcanzado cuotas de poder político formal y real, sobre la base de la permanente
estigmatización de la política: Hellen Mack, comisionada para la reforma policial. O el
caso de Frank Larrue, que fungió comisionado de derechos humanos, en el gobierno de
Oscar Berger, etc. Todos estos, auténticos “free rider”, como los denominan Ibarra y
Letamendía,195 que han gravitado en la política, a la que tanto han descalificado desde
los movimientos que les sirven de plataforma de lanzamiento.
Con los elementos y consideraciones del autor González Bárcenas, y algunos
elementos agregados por nosotros, hemos diseñado una gráfica que muestra las crisis
que se viven en un sistema político. Estas pueden ser resueltas vía las transiciones
políticas. Obviamente, se puede notar en la misma que, dependiendo de los énfasis de
195
IBARRA y LETAMENDIA. Documento publicado en “Manual de Ciencia Política”. CAMINAL BADIA,
Miquel. Op. cit. Op. Cit. Pág. 396
83 los actores, y de sus posturas menos o más democráticas, hablaremos de lo que este
mismo autor denomina estabilidad democrática o, en su caso, de estabilidad autoritaria,
según sea el caso en una situación determinada. Véase anexo 1, al final de este
trabajo.
El entorno internacional y su influencia en la política local:
La gobernabilidad democrática como se aprecia en la gráfica que precede, depende de
varios factores y fuerzas a considerar. Es con ese panorama, que cabe a esta altura
analizar si hacemos justicia o no, al responsabilizar esencialmente a los partidos
políticos del desencanto con la democracia, de la ineficiencia en la conducción del
Estado y la cosa pública y del malestar e inconformidad o desencanto de los
ciudadanos con la política. Para ello, también es necesario ver qué ocurre en el ámbito
internacional, y cuanto influye en la política local. Pero más propiamente, a lo largo de
la historia, cómo ha determinado el sistema político nacional ese entorno internacional.
Guatemala registra en su historia el golpe de Estado de 1954, que depuso a un
gobierno legal y legítimamente electo presidido por Jacobo Arbenz Guzmán.196 Esto
con la participación del Coronel Carlos Castillo Armas, y el apoyo de la Agencia Central
de Inteligencia de los Estados Unidos de América, CIA,197 por sus siglas en inglés.
Puede decirse que, a partir de esa época hasta 1985, en la nación se institucionalizó la
existencia de partidos políticos, cooptados o auspiciados solapadamente desde el
Estado, que era conducido esencialmente por el mando militar, aunque en la práctica
existían dos ejércitos,198 en la época del golpe de Estado.
196
No obstante, hay autores militares que afirman que Arbenz trató de imitar a las milicias populares de
España en la guerra civil, puerto que: “Un suceso muy importante para la posteridad, lo constituye el
hecho que el gobierno de Arbenz, tomando como modelo las milicias populares utilizadas durante la
Guerra Civil Española (1936-1939), intentó organizar y armar a la población, para lo cual había recibido
un barco procedente de Checoslovaquia, cargado con moderno armamento capturado por los soviéticos
a las tropas alemanas durante la Segunda Guerra Mundial. Sin embargo, dichas amas fueron
decomisadas por el Ejército y trasladadas a los depósitos militares, por lo que no pudieron ser utilizadas
por las milicias en referencia.” DIAZ LOPEZ. Op. Cit. Pág. 41
197
JONAS, Susanne y TOBIS, David. Op. Cit. Pág. 101
198
“El Ejército de Liberación Nacional hizo su ingreso a la ciudad de Guatemala el 3 de Julio de 1954,
siendo instaurado un nuevo gobierno, que desde el principio se vio enfrentado al problema de tener que
conciliar los sentimientos e intereses de dos ejércitos que se rechazaban mutuamente. La crisis no se
84 Con la justificación de la existencia desde 1962 de un movimiento guerrillero, Estados
Unidos de América, como potencia hemisférica hegemónica, que en ese entonces
libraba una “guerra fría” con el bloque del Este, implantó en nuestro país lo que para
autores como Sharckman denominan la “vietnamización”199 de Guatemala. Se impuso
el desarrollo de la doctrina contrarrevolucionaria o “contrainsurgencia”, y se aportaron
las armas y adiestramiento a los militares de turno. El sistema político no tenía cabida
en las prioridades del Estado. Solo contaba para guardar las formas democráticas.
De esa cuenta, es comprensible la anomia y falencias del sistema de partidos políticos
en Guatemala, la escasez de desarrollo ideológico y de corrientes de opinión. La
radicalización del conflicto armado interno, trajo destrucción del tejido social, pero
además produjo anemia y atrofias el quehacer político. Militares e insurgentes, vaciaron
el tejido social y crearon vacío ideológico y rezago político.200 Irónicamente, éste mismo
conflicto armado, se usaba para justificar su alzamiento insurgente para alcanzar el
poder por medios violentos. En el ámbito político partidario entonces, nunca se tuvo un
auténtico proceso democrático.201 La izquierda, o el movimiento insurgente en
Guatemala,
no
formaron
cuadros
políticos
para
contar
con
partido
político
ideológicamente consistente.202 A diferencia del movimiento guerrillero en El Salvador,
hizo esperar y el 2 de Agosto de 1954, en defensa de su honor, los cadetes de la Escuela Politécnica
(Academia Militar), apoyados por algunas unidades de la Base Militar La Aurora, atacaron al Ejército de
Liberación que se encontraba acantonado en los terrenos del Hospital Roosevelt (Zona 11, al occidente
de la capital), situación que después de algunos combates fue resuelta con la mediación del Arzobispo
Metropolitano, Monseñor Mariano Rossell y Arellano, lo que posteriormente dio lugar a la disolución del
Ejército de Liberación.” DIAZ LOPEZ. Ibid. Pág. 42 y 43
199
Ibid. Pág. 321
200
“Los ejércitos gobernaron América Central durante décadas, en el interior de un amplio continuum que
desde las sangrientas dictaduras militares de Guatemala y El Salvador hasta gobierno civiles bajo control
militar, como en Honduras y Panamá.” TORRES RIVAS. Ibid. Pág. 518
201
De allí que ALEJANDRO URIZAR, en el artículo “Las fuentes de financiamiento de los partidos
políticos y sus efectos en la democracia centroamericana”, se pregunta: “¿Por qué la democracia logró
instaurar el respeto y ejercicio de los derechos civiles y políticos, pero no ha logrado lo mismo en cuanto
a los derechos económicos, sociales y culturales?” y finalmente, responde afirmando que: “En principio,
una razón es que el retorno, el desarrollo y la consolidación democrática es un proceso, dicho de otra
manera, la historia no ha terminado.” Revista Análisis Político. “Escenarios de la reforma política”. Vol. 1.
Año 2. Fundación Konrad Adenauer Stiftung. Guatemala, enero-abril 2008. Pág. 31
202
“La URNG es víctima de sus pecados originales; las guerrillas, en Guatemala, se unificaron en 1983,
después de su derrota táctica, de la que no se rehicieron estratégicamente. En las elecciones han ido
divididos y juntos no suman el 6 por ciento.” TORRES RIVAS, Edelberto. “¿Qué Democracias Emergen
85 donde el desarrollo y fortalecimiento ideológico de sus cuadros dentro o fuera de la
clandestinidad, parece haberle redituado mejores perspectivas al movimiento
insurgente, a tal grado, que alcanzó la Presidencia de la República con el periodista
Mauricio Funes, y que ejerce el poder actualmente.
Adicionalmente en nuestro país, tampoco se contó con un marco constitucional que
garantizara el libre juego de ideas políticas y la participación ciudadana o el acceso
efectivo de la ciudadanía plena. Menos aún, nunca se contó con procesos electorales
que tuviesen certeza, periodicidad y credibilidad, a pesar de las circunstancias tan
especiales.203
Ahondando un poco en los efectos del conflicto armado interno y la débil
institucionalidad político partidaria derivada, hay autores que van más lejos en sus
apreciaciones. Así por ejemplo, se dice que “Aquí no hubo guerra civil sino una guerra
contra los civiles, un conflicto armado de desigual intensidad con dos alzamientos
guerrilleros, uno de corta vida (1965-1968), animado por la versión debreyana del
foquismo; y otro, de más largo aliento, impulsado por tres organizaciones guerrilleras,
que sufrió una derrota estratégica a manos del Ejército en 1982 y que mantuvo una
presencia endémica por catorce años más. Se unificaron después de la derrota, en
1983, con el nombre de Unión Revolucionaria Nacional Guatemalteca (URNG). El
llamado “conflicto armado interno” dio paso a un Estado con rasgos terroristas, que
asesinó sistemáticamente a la oposición democrática, civil y pacífica, por largos años
(desde 1963-1964 hasta 1996).”204
Obviamente, con esas condiciones políticas y sociales, podemos decir que la normativa
constitucional carecía de congruencia con esa problemática. Así llegamos al presente
siglo XXI, se cuestiona no sólo la rigidez de los preceptos fundamentales que incluye,
de una Guerra Civil?”, publicado en “La Democracia en América Latina, un Barco a la Deriva”. Director.
WALDO ANSALDI. Fondo de Cultura Económica. México, D.F. 2006. Pág. 523
203
“Los demócratas reconocen enfrentarse a una clase privilegiada, pero ellos, con el restante entorno de
la nación, forman el pueblo. Lo que representan es el derecho del pueblo; lo que les interesa es el interés
del pueblo.” MARX, Karl: Op. Cit. Pág. 79
204
ANSALDI. Op. Cit. Pág. 504
86 sino que aún se cuestiona, a lomo de la globalización, su imperio y sobrevivencia
derivado de la limitación y vaciamiento que sufre el Estado y la soberanía de cada
pueblo frente a las fuerzas y el poder del mercado.205 Y como afirma Caballero Harriet,
la creación del Estado moderno, constata la tesis que “la economía determina la forma
del estado político.”206 Y más aún ahora con los avances de la globalización y el avance
del neoliberalismo, el mismo autor, agrega que es en “Este modelo en el que el
subsistema político está definitivamente sometido al subsistema económico.”207
Es un hecho que la democracia política, derivada de nuestras constituciones, ha
constituido, y constituye, una necesidad insoslayable para garantizar que no seamos
gobernados despótica y autocráticamente. Y la pregunta sería ¿Será suficiente ante la
avasalladora fuerza del mercado, el neoliberalismo y la globalización? Ante esto, en
palabras de Sánchez Agesta, la respuesta la tiene el constitucionalismo visto como
“doctrina del poder constituyente a los poderes constituidos”,208 al constituir todos los
poderes, han de estar sobre los poderes que constituyen y que sólo son reformables
por la misma nación que ha establecido las leyes fundamentales, que a su vez permite
la existencia de leyes ordinarias, con sus defectos209 y virtudes.
En términos del surgimiento, reconocimiento, accionar e institucionalización de los
partidos políticos, es importante que la Constitución será quien marque la concordancia
con el medio. El cruce de fuerzas políticas, sociedad, estado, derecho y la expresión de
la voluntad general, pasa por el tamiz de las normas fundamentales que rijan en un
205
“El FMI ha cambiado profundamente a lo largo del tiempo. Fundado en la creencia de que los
mercados funcionan muchas veces mal, ahora proclama la supremacía del mercado con fervor
ideológico… Hoy el FMI típicamente aporta dinero sólo si los países emprenden políticas como recortar
los déficits y aumentar los impuestos o los tipos de interés, lo que contrae la economía. Keynes se
revolvería en su tumba si supiese lo que ha sucedido con su criatura…El cambio más dramático de estas
instituciones tuvo lugar en los años ochenta, la era en la que Ronald Reagan y Margaret Thatcher
predicaron la ideología del libre mercado en los Estados Unidos y el Reino Unido.” STIGLITZ, JOSEPH E.
“El Malestar en la Globalización”. Santillana Ediciones Generales, S.L., Madrid, 2004. Pág. 55
206
CABALLERO HARRIET, Francisco Javier: “Algunas Claves para Otra Mundialización”. Editorial
FUNGLODE. Santo Domingo, República Dominicana, 2009. Pág. 49
207
Ibíd. Pág. 176
208
Op. Cit. Pág. 332
209
MILL, al respecto de los defectos de las leyes, y el antídoto para evitar los mismos, señala que
“Además de las buenas cualidades o de los defectos que tengan las leyes y la judicatura de un país como
un sistema de disposiciones para alcanzar fines prácticos, mucho depende también, incluso desde el
punto de vista económico, de la influencia moral de las leyes.” Op. cit. Pág. 759
87 momento y lugar determinados. Podemos decir entonces, que fuera del orden
constitucional, conforme el influjo del orden capitalista,210 cuyo centro es el mercado, el
neoliberalismo y la globalización, el equilibrio de fuerzas puede crear un orden
“falseado”. Es decir, reducir a los partidos políticos en simples maquinarias o vehículos
electorales, pero no en auténticos intermediadores entre la sociedad y el poder del
Estado.
Es frecuente que la avalancha neoliberal denomine peyorativamente a la Constitución.
A veces le denominan “constituciones de papel”, “formas constitucionales”, “apariencias
constitucionales”, como afirma Sánchez Agesta.211 Y en la medida en que se demerita,
atenúa y desvaloriza la majestad de las normas constitucionales, los partidos políticos
también pierden credibilidad, no sólo por sus propios actos, sino porque interesa la
entronización de un nuevo poder.
El poder del mercado, que dicte normas, incluso que pretenda modificar los preceptos
constitucionales. En nuestro caso, el fallecido fundador de la Universidad Francisco
Marroquín, Doctor Rafael Ayau Cordón, impulsó hasta los últimos días de su muerte,
insistentemente reformas constitucionales
212
tendentes a legitimar una reestructuración
del Estado y sus instituciones, desde la óptica neoliberal. El proyecto se denomina “ProReforma”,213 y que provocó largas discusiones en el seno de las distintas comisiones
del Congreso de la República. Aunado a esto, la Constitución Política de la República
de Guatemala, también se encuentra bajo el asedio de descalificación y de imputación
210
“La cuestión relativa a las fuerzas impulsoras del capitalismo moderno no radica en el origen de las
disponibilidades de dinero utilizable en las empresas, sino más bien en el desarrollo del espíritu
capitalista que, cuando despierta y logra imponerse por sí mismo, se crea las posibilidades monetarias
que le sirven de medio de acción, y no a la inversa.” WEBER, Max: “Ética Protestante”. Op. Cit. Pág. 64
211
SANCHEZ AGESTA. Op. Cit. Pág. 375
212
En el caso español, respecto a las reformas constitucionales, resulta interesante lo que el ex
presidente Aznar afirma: “Pero ahora lo único que sabemos es que se dice que hay que cambiar la
Constitución porque eso es lo moderno, y lo otro inmovilista. Pero no se trata de discutir sobre
calificativos. Lo que hay que explicar es para qué se quiere cambiar la Constitución, es decir, a qué
necesidad nueva, no prevista o bien obstaculizada en el texto constitucional, responde esa hipotética
reforma.” Aznar. Op. Cit. Pág. 245
213
www.proreforma.org. Fecha consulta: 27 marzo 2011
88 de todos los males del país, por parte de una “sociedad civil”214 que se escuda en
discursos y recetas de los organismos internacionales, pero con el fin de restar poder a
los políticos y a los partidos políticos, en la conducción de la cosa pública. Pero
tampoco quiere asumir el rol y los costos de participar políticamente.
Aún así, en el pasado evento electoral de 2011,215 a pesar de ser la segunda elección
presidencial nacional, impropiamente denominada “segunda vuelta”, el Tribunal
Supremo Electoral, TSE, reporta que conforme el padrón electoral y los votos emitidos,
hubo una participación ciudadana del orden del 60.83%. Esto comparado con el
porcentaje de 1995: 47%, por ejemplo, es una muestra que los guatemaltecos sí
participan activamente en los eventos electorales y que, contrario a todo, aún creen en
la democracia como sistema de gobierno.
El influjo de la globalización y su impacto en la política:
Es innegable que la vida en sociedad, la gobernanza y la estructuración de las
sociedades democráticas, hace insustituible contar con un pacto social que, traducido a
un texto constitucional, establezca el andamiaje que sustente todo el sistema político,
social y económico determinado. Es en ese entorno de convivencia social organizada,
donde no podemos perder de vista que para alcanzar ese pacto o acuerdo social, hay
que renunciar a la libertad absoluta, y empezar a gozar de libertades, derivadas que
nacen con ese pacto. Porque “Lo que pierde el hombre por el contrato social es su
libertad natural y un derecho ilimitado a todo lo que intenta y puede alcanzar; lo que
gana en él mismo es la libertad civil y la propiedad de todo lo que posee.”216 Sin
embargo, actualmente, el mundo presencia enormes avances de democratización,
como la caída del Muro de Berlín, o la caída de la ex URSS. Este hecho es de tal
214
El gobierno de turno, acepto la inclusión de una “pre-comisionada de seguridad”, que supuestamente
es la encargada de la modernización y depuración de la Policía Nacional Civil. Esto porque la activista
Helen Mack Chang, desde una ONG, ha cobrado un protagonismo mediático enorme, luego de llevar a
juicio al supuesto autor material del asesinato de su hermana Myrna.
215
Fuente: www.resultados2011.tse.org.gt. Fecha de consulta: 15 de marzo 2012
216
ROUSSEAU, Jean Jacques: “El Contrato social”. Edición Integra. Ediciones Escolares, S.L. Madrid,
1999. Pág. 33
89 magnitud que como afirma Rothbard, constituye “…el acontecimiento más sorprendente
e increíble del siglo XX: el derrumbe revolucionario y la <<implosión>> del socialcomunismo en la Unión Soviética y en la Europa del Este. Esta Revolución de 1989-90
es incontestablemente un <<momento revolucionario>> de la Historia.”217
Pero no obstante estos hitos históricos, se levantan “nuevos muros” en la Franja de
Gaza y en la frontera de Estados Unidos de América con México. Este último por el
aumento de los flujos de los inmigrantes latinoamericanos y so pretexto también de una
amenaza “terrorista”. En el caso particular guatemalteco, la caída del bloque soviético y
del Muro de Berlín,218 leudaron la masa guerrillera, y dejó de verse como una amenaza
seria para el Estado. Coincidentemente, se tuvo la penetración de los nuevos
paradigmas –globalizadores-, que en el plano puramente doméstico, se tradujeron en
una nueva consolidación del poder oligárquico. Esto no sólo frente al Estado
propiamente dicho, sino ante la sociedad y los sectores empresariales se vieron
legitimados como factores de desarrollo. Pero con grandes temores aún, puesto que no
se había consolidado el cese al fuego definitivo, y aún el país vivía años de
incertidumbre política.
Al analizar la historia, respecto de esas grandes transformaciones sociales, económicas
y políticas, autores como Deutsch advierten que, en el pasado, también se tuvo
incertidumbre y visualiza que “La política presente, y quizá de los años próximos,
parece caracterizarse por un sentimiento de gran temor, un vago terror ante grandes
cambios que se avecinan (éste no es sólo un fenómeno moderno. En vísperas de la
Revolución, los campesinos franceses experimentaron un “gran temor” semejante).”219
217
ROTHBARD, Murray N. “La Ética de la Libertad”. Unión Editorial. Madrid, 1995. Pág. 368
Sabino, relata vívidamente este hito histórico: “Los prodigiosos acontecimientos de ese año
culminaron, de algún modo, la noche mágica del 9 de noviembre de 1989 cuando cayó por fin el
oprobioso Muro de Berlín. El hecho fue precedido por un éxodo de alemanes orientales y de checos que
comenzó en agosto, gracias a la apertura de las fronteras húngaras, y se fue intensificando durante el
final del verano y el comienzo del otoño.” SABINO, Carlos: “Todos nos equivocamos”. 1ª. Ed. Buenos
Aires, 2007. Grito Sagrado. Pág. 303
219
DEUTSCH, Karl W. Op. Cit. Pág. 553
218
90 Los partidos políticos frente a la sociedad “líquida”:
Derivado del avance y consolidación del proceso GLOBALIZADOR, que conlleva la
postmodernidad, según Zygmunt Bauman,220 la sociedad ha ido transitando de una fase
“sólida”, a una “líquida”. Todas las instituciones y el Estado-nación incluido, han venido
diluyéndose, atomizándose y perdiendo densidad y papel protagónico el cual, según
Barman, es sustituido por las leyes del mercado.221
En esa vorágine de cambios nos lleva a una transición de una “sociedad abierta” de
Karl Popper, a una “sociedad cerrada”, sobre la base de la instauración del miedo. Esto
se refleja en el pensamiento de Bauman222 en que las personas viven resguardadas por
muros, contratan vigilantes, usan vehículos blindados, llevan botes de aerosoles, armas
y acuden a clases de artes marciales. Además de esta psicosis, las sociedades líquidas
Baumanianas, se perfilan como aquellas que más limitan, restringen y atentan de los
derechos constitucionales y las libertades que éstos garantizan.
Pero ese miedo baumiano, no sólo incide en la estructura de la sociedad, sino también
en el tejido básico de la misma: la familia y por consiguiente en el individuo. En la
medida en que el Estado se minimice, y que vaya abandonando o renunciando al
asistencialismo, la educación, la salud y otras subsidiaridades, y se incremente el
proceso de pérdida de puestos de trabajo, con el acentuar de la crisis monetaria global,
grandes cantidades de jóvenes se ven sin posibilidades de empleo. En el caso de los
inmigrantes, incluso no solo pierden acceso al trabajo y educación, sino también a la
asistencia médica.
Este fenómeno de desempleo a nivel global, ha generado movimientos como el de los
“indignados” que transcontinentalmente se expresa exigiendo empleo, trato humano y
220
BAUMAN, Zygmunt: “Tiempos Líquido”. Editorial Ensayo Tus Quets. Editores. España. Pág. 7.
Ibid. Pág. 9.
222
Ibid. Pág. 18
221
91 que el mercado laboral se amplíe. Coincidentemente, hemos conocido que el último día
del mes de octubre 2011,223 nació el habitante siete mil millones en el planeta.
¿Cuál debe ser la respuesta de la política ante la encrucijada de la sociedad
líquida?
La tesis del sacerdote inglés Malthus,224 que es una teoría reaccionaria formulada en
1798, está fincada en que, según él, desde el surgimiento de la sociedad humana, la
población aumenta en progresión geométrica (1, 2, 4, 8, etc.). Pero en cambio, los
medios de subsistencia, debido a la limitación de las riquezas naturales, aumentan en
progresión aritmética (1, 2, 3, 4, etc.). Esa es, según Malthus,225 la causa que grandes
masas humanas se consideren “sobrantes” en la Tierra, de que no puedan encontrar
trabajo ni alimento. A juicio de ese autor, el proletariado no puede liberarse del paro
forzoso, de la miseria y del hambre liquidando el régimen capitalista, sino mediante el
celibato y el control de la natalidad. Lo primero ya es prácticamente imposible aún para
la Iglesia, y lo segundo ha sido ensayado en Europa, con resultados que están
pendientes de evaluarse ante el envejecimiento de las poblaciones.
Hoy, en pleno siglo XXI, nuevamente surgen corrientes inspiradas en el Maltusianismo,
que propugnan por el control natal y la reducción de la familia, a lo que se conoce como
la “familia nuclear”. De hecho, esto ha generado que los diversos países europeos
tengan poblaciones longevas y envejecidas. Se han reducido al máximo los índices de
natalidad, aún cuando a mediados del siglo XX, no existían las crisis económicas y
laborales que hoy enfrentamos.
Ante esto, sociedades reconocidas históricamente como fundadas en la familia, y el
entorno que implica, hoy sucumben ante la escasez de empleos, carencia de vivienda,
223
www.lahora.com.gt/index.php/nacionalguatemala/actualidad/146413/-a-fin-de-mes-nacera-elhabitante-7-mil-millones.
225
NIKITIN, P. “Economía Política”. Editores Mexicanos Unidos. México, 2005. Pág. 89.
92 poco acceso a la productividad y al crédito, etc. Así por ejemplo, en sociedades
latinoamericanas como Guatemala, las últimas generaciones ya marchaban a corta
edad de casa. Últimamente el fenómeno observado es que hoy la edad promedio para
abandonar la casa es a una edad promedio de 28 años.
Con el avance del proceso globalizador, y el desplazamiento de millones de
desempleados, el vaciamiento del estado en cuanto a asistencia educativa y para
vivienda, y la crisis económica en general, se puede percibir un efecto “boomerang”.
Cada día, los hijos están regresando a casa de sus padres, prácticamente por techo y
comida. Esto a pesar que dirigentes europeos como Berlusconi, se atrevieron a decir, al
inicio de la crisis de desempleo, que “…era mucho alboroto por nada. <Los restaurantes
están llenos y es difícil conseguir pasaje en un avión…y los centros de vacaciones
están reservados a pleno>”226
Sólo en Estados Unidos de América, más del 50% de jóvenes entre 18 y 24 años aún
viven con sus padres. Este índice aumentó en los últimos 6 años en un 9%, y constituye
el nivel más alto desde 1960 por lo menos, según la Oficina del Censo de Estados
Unidos.227 Los jóvenes o no encuentran fuentes de empleo, o bien ahorran viviendo en
casa, ante la falta de oportunidades en el mediano y largo plazo.
Es así como a la juventud se le ha clasificado de diversas maneras desde 1940 al 1953,
los “baby bommer”; la generación Z de 1995 a 2004, y de allí surgieron la “generación
pobre” y la generación “Dinky” (Double Income No Kids Yet), parejas que están
casados, ambos trabajan pero no procrean, porque nos les alcanzaría para mantener
su nivel de vida. Están los “mileuristas”, en España, que no ganan más de 1000 euros,
y no pueden buscar su independencia real. Y, últimamente, los “indignados” que incluso
viven en las calles o posan en casas de familiares. Estos últimos han generado todo un
movimiento social internacional, que ya no puede ser obviado.
226
COHEN, Roger: “La generación Boomerang”. Artículo publicado en The New York Times. Suplemento
dominical diario Prensa Libre. Guatemala, 13 de noviembre 2011. Pág. 2.
227
www.elmundo.es/america/2011/11/03/estados_unidos/1320355644.html. Fecha consulta. 25 abril
2012
93 Este panorama descrito pone a los jóvenes ante una encrucijada, en la que recurren de
nuevo al seno de la familia. Por ello, es importante ver que todo esto tendrá, a nuestro
juicio algunas implicaciones tales como:
a)
Irónicamente, los efectos negativos de la globalización, obligará a esta
generación228 de jóvenes, forzados a quedarse en casa hasta los 30 años, a aprender a
compartir, a comprometerse con las tareas y los costes de casa, y aprender un poquito
de menos “yo” y más “nosotros”.
b)
La familia puede ser un buen amortiguador para que se enfrente la frustración y
el desamparo que sienten los “indignados”, y esto los haga más conscientes y creativos
para generar cambios sociales estructurales futuros.
c)
Esta permanencia de los jóvenes más tiempo en casa, puede darle más
consistencia a la sociedad, que se ha vuelto líquida, en el pensamiento de Bauman, y
volver a sus valores, principios, visiones y prioridades. Obligará a repensar el trabajo, la
creatividad y el ingenio podrán agudizarse, ante la escasez de oportunidades y medios
para la subsistencia.
d)
Este fenómeno puede provocar, como lo afirma Bauman que las sociedades más
ricas entiendan que, “una unidad de la humanidad”, ya que según cita Bauman229 a
Milan Kundera, “nadie puede escapar a ninguna parte”.
e)
El alargamiento de la vida en casa paterna de los jóvenes, puede contraer aun
más la producción de vivienda, y reducir el flujo de capitales mundiales. Pero a la vez,
plantea la posibilidad que se ensanchen aún más las redes sociales.
f)
En lo referente a la seguridad social y el asistencialismo del Estado, la
permanencia de los hijos por más tiempo, agudizará el reclamo de los pensionados por
más y mejores cuotas, para compartir con sus hijos desempleados, o subempleados.
Irónicamente hoy, los países del Sur de Europa, sufren las consecuencias de la enorme
228
Para Ortega y Gasset, el desafío generacional es poder transformador, sobre la base de un anhelo
constante de búsqueda de un margen de decisión a la vida, y “El desear ser esto o lo otro es aquella
porción de nuestra vida que tiene un carácter de libertad.” ORTEGA Y GASSET, José: “Meditación de
Nuestro Tiempo”. Fondo de Cultura Económica. México, D.F. 2006. Pág. 243
229
BAUMAN. Op. cit. Pág. 14
94 carga del estado de bienestar, lo endeble de sus economías nacionales, la insostenible
estructura administrativa autonómica y la frustración de sus ciudadanos.
g)
Ante la volatilidad de la riqueza, la comodidad y las “conquistas sociales”, el
ciudadano podrá buscar más refugio en la familia y la religión. Estos se pueden apreciar
como compensadores internos y externos, del debilitamiento del espíritu de libertad e
independencia real, que no podrán gozar, en tanto no seamos capaces de pensar
propuestas y estrategias que indiquen posibles caminos para trascender esa realidad.
h)
Esta generación de jóvenes, se verá forzada a conservar sus amistades de
niñez, a no migrar de vecindario, a mantener más solidaridad y a compartir más
cercana y directamente con sus semejantes. El efecto globalizador dialécticamente
atrajo para la familia una fuerza centrípeta, que la cohesionará y endurecerá, contrario a
lo líquido de la estructura social que afirma Bauman.
i)
Quisiera terminar citando a Ezequiel Ander-Egg,230 que advierte acerca de cuatro
grandes formas de deshumanización: 1) Una economía salvaje, que maximiza las
ganancias frente a la cual la vida de las personas y la naturaleza poco o nada valen. 2)
Una política ocupada por corruptos e ineptos; 3) Una cultura de masas que entretiene a
la gente en frivolidades y cursilerías; 4) Un estilo de vida que alienta el consumismo, el
hiperindividualismo y una especie de darwinismo social del “sálvese quien pueda”.
j)
Al respecto, hoy podemos ver con perplejidad como economías europeas como
Grecia, Irlanda, España, Italia (y muy probablemente Francia), han sucumbido a las
burbujas financieras y economías de celofán que habían exhibido en los últimos treinta
años. Lo grave es que aparejado al desplome financiero, viene el derrumbe del Estado
de bienestar y con él la pérdida de “conquistas sociales” que ahora son insostenibles.
Quizá por no tener todo este nivel de conquistas y beneficios, economías y países
como el nuestro –subdesarrollados- nos vemos expuestos a escuchar de nuestros
gobernantes que no pasaremos las crisis del Sur de Europa.
Como siempre, nuestros países entran a fases y estadios socio-económicos pero dando
saltos no de calidad, sino obviando períodos o experiencias que otros países han tenido
230
ANDER-EGG, Ezequiel: “Globalización-El proceso en el que estamos metidos”. Editorial Brujas.
Córdoba, Argentina, 2010. Pág. 333.
95 y que les han fortalecido en su institucionalidad y madurez política. En fin, el derrumbe
en Europa del Estado de bienestar –o benefactor como preferimos llamarlo- es
inexorable. Obvio, se rehúsa a morir, y pretende “vitaminar” al moribundo Estado
benefactor, vía procesos electorales pendulares –que van de la extrema derecha a la
extrema izquierda- tal como queda reflejado en el elector en mayo 2012 en Francia. No
obstante, ningún moribundo necesita vitaminas sino que cirugía mayor, los franceses
votaron por su Estado benefactor, más que por la democracia o la estabilidad de la
misma economía. Y, menos aún, votaron por la alternativa gubernamental que pueda
encontrar respuesta a las enormes contradicciones socio-raciales que les agobian.
Evidentemente, estas condiciones de derrumbe del Estado benefactor, generan
impactos a grandes masas de la población. Estas se victimizan y exigen el rescate
contra viento y marea del sistema. Por ello, para completar estas ideas, considero que
algo positivo de la crisis es que, dentro del pensamiento de Bauman, ya no nos
preguntaremos “¿Qué tenemos que hacer?” sino “¿Quién puede hacerlo?”. Para dejar
de ser lo que éste autor identifica como “víctimas colaterales”231. Total, la globalización
vino para quedarse. El capitalismo únicamente está en otra nueva fase de reconversión,
y lo que nos queda es enfrentar la realidad con inteligencia, astucia e ingenio. Ahora,
pueden ocurrir milagros, teniendo a los hijos hasta los 30 años en casa… Y ante esto,
los partidos políticos y la política, no pueden permanecer aislados o ignorantes de ese
vacío existencial que producen las sociedades líquidas y el fenómeno globalizador que,
conforme a las leyes del mercado, obligan a pensar en que “A medida que fragüemos
interacciones democráticas más amplias, debemos distanciarnos de los aliados a las
pasadas estructuras de poder y también de las nuevas estructuras de poder de los
oligarcas –al menos en la medida que lo permita la realpolitik-.“232
Para ello, es importante tener en cuenta que ese accionar político y propuesta ante la
problemática tan compleja, depende de la calidad y eficiencia de la “acción
comunicativa” que Habermas plantea al afirmar que “… la estructura de la
231
Ibid. BAUMAN. Pág. 33
STIGLITZ, Joseph E. “El Malestar en la Globalización”. Editorial Santillana Ediciones Generales, S.L.
Madrid, Octubre 2004.Pág. 366
232
96 comunicación deja de generar coacciones sólo si para todos los participantes en el
discurso está dada una distribución de las oportunidades de elegir y ejecutar actos de
habla (…) Las situaciones ideales de habla tienen que cumplir, primero, dos
condiciones triviales: 1) Todos los participantes potenciales en un discurso tienen que
tener la misma oportunidad de emplear actos de habla comunicativos (…) 2) Todos los
participantes
en
el
discurso
tienen
que
tener
igual
oportunidad
de
hacer
interpretaciones, afirmaciones, recomendaciones, dar explicaciones y justificaciones y
de problematizar, razonar o refutar las pretensiones de validez de ellas, de suerte que a
la larga ningún prejuicio quede sustraído a la tematización y a la crítica.”233 Porque tanto
filósofos como políticos, deben generar las propuestas que ilustren y den rutas de salida
a las problemáticas existenciales del individuo y de la sociedad, partiendo de lo que el
mismo Habermas optimistamente propone: “Lo que idea un filósofo no siempre tiene
que ser el sueño de un visionario y quedarse en novela. Una visión también puede
convertirse en realidad.” 234
Ante este panorama, es pertinente revisar qué papel juega el pacto social para
enfrentar semejante problemática. El contrato social rousseauniano deja muy claro que
cada estado se afirma sobre la base de un gran pacto. Este contiene “Las leyes que
ordenan esta relación se conocen con el nombre de leyes políticas, y se llaman también
leyes fundamentales, no sin razón cuando éstas son sabias; pues, si no hay en cada
Estado más que un modo apropiado de orden, el pueblo que ha sabido encontrarlo
debe mantenerse en él; pero, si el orden establecido es malo, ¿por qué se había de
tomar por fundamentales unas leyes que impiden que aquél sea bueno? Además, en
todo Estado, un pueblo es siempre dueño de cambiar sus leyes, por muy buenas que
sean; pues, si aquél le agrada hacerse daño a sí mismo, ¿quién es el que tiene derecho
a impedírselo?235
233
HERRERA, Asunción: “Jürgen Habermas. El filósofo en el siglo XXI”. Editorial Losada, S.A. Buenos
Aires. 2004. Pág. 22
234
Ibid. Pág. 64
235
ROUSSEAU, Jean Jacques: “El Contrato Social”. Ediciones Escolares, S.L. Madrid, 1999. Pág. 69
97 Así pues, todas las formaciones económicas o modos de producción, y su
correspondiente tipo de Estado, han implantado su propio derecho electoral, su propio
sistema de partidos políticos. Aún sociedades etiquetadas como antidemocráticas como
Cuba,236 tienen su propio “sistema” de representación popular, contemplada en su
normativa constitucional. De igual manera, el estalinismo237 y su “democracia popular”,
impusieron un régimen despótico que gobernó la URSS, de manera férrea y que
terminó rebasado por las circunstancias históricas y los anhelos de democracia y
libertad.238
Esto no obsta que se considere que “También existen partidos políticos en sistemas no
democráticos, no competitivos y no pluralistas, aunque sólo comparten algunas de las
características, funciones y elementos de los partidos…propios de los sistemas
competitivos…” como lo afirma Pablo Oñate.239 Es decir que el quehacer político es
concomitante con las condiciones estructurales de cada país y de cada formación
económica o modo de producción. De allí que autores como Nikitín,240 ubican como un
producto de la superestructura, incluyendo junto con el derecho, a “…los pensamientos
políticos, filosóficos, jurídicos, artísticos, religiosos, etcétera, de la sociedad y las
instituciones que les corresponden. En la sociedad dividida en clases, la
superestructura se caracteriza por su formación clasista. La clase dominante crea, de
236
Artículos 103 y 104 de la Constitución de la República de Cuba. Editorial Ciencias Sociales, La
Habana, 2001. Pág. 52 y 53
237
“Democracia ya quiere decir <<poder popular>>. Por lo tanto, la fórmula democracia es una
redundancia que se repite. Traducida, dicha fórmula quiere decir <<poder popular popular>>, o sea poder
bipopular. Por ese camino podemos acuñar <<democracia popular del pueblo>>, que sería tres veces
tautológica, sin añadir con ello nada al puro y simple concepto de democracia…la aparición de la
planificación estalinista creaba un inmenso sistema de exclusividad burocrática de presuntos
<<competentes>> llamados a decidir por los incompetentes. Por lo tanto, <<democracia popular>> fue
puro y simple camuflaje. Dejémosla descansar en el cementerio de las patrañas al que pertenece.”
SARTORI, Giovanni: “¿Qué es la democracia?”. Taurus. Santillana Ediciones Generales, S.A. de C.V
México, D.F. 2007. Págs. 284 y 285
238
“Es preciso recordar, sin embargo, cómo especialmente a partir de 1936 Stalin instauró un régimen
despótico que propició numerosas violaciones a la misma “legalidad socialista”, lo que produjo varios
millones de víctimas, inclusive entre los más fieles partidarios del régimen, como lo reveló Jruschov en el
XXI Congreso del Partido Comunista de la Unión Soviética celebrado en el año 1959.” BISCARETTI DI
RUFFIA, Op. Cit. Pág. 346
239
DEL AGUILA, Rafael (editor). Op. Cit. Pág. 251
240
NIKITIN, P. “Economía Política”. Editores Mexicanos Unidos. México, D.F. Octubre 2005.
98 acuerdo con sus conceptos, las instituciones llamadas a defender sus intereses
clasistas.”241
Y, en contraposición a esta concepción, autores como Zizek,242 afirman que “…No se
debe comprender el concepto marxista de <<base>> (en contraste con el de
<<superestructura>>) como fundamento que determina y, por tanto, constriñe el
alcance de nuestra libertad (<<pensamos que somos libres, pero, en realidad, estamos
determinados por la base>>), más bien, cabe concebirlo como la propia base (el marco,
el terreno, el espacio) de y para nuestra libertad.” Por ello, el mismo autor afirma que
“…el multiculturalismo occidental no es absolutamente neutral, sino que privilegia
valores específicos, es la de que hay que aceptar por completo esta paradoja: la de que
la propia apertura universal tiene sus raíces en la modernidad occidental.”243 Es decir
que la cultura dominante, o “Leitkultur”,244 impone también qué tipo de valores,
prioridades, visiones y proyecciones se le den a la política, al sistema de partidos
políticos y al quehacer político, en función de hacer posible la convivencia social. .
Pero yendo un poco más lejos, a medida que se han ido restringiendo las libertades
individuales, y que el crimen se amplía y se vuelve más ingenioso, las sociedades
también se han visto exigidas a marchar a tono con los tiempos y las circunstancias.
Siempre, partiendo de la premisa del respeto a los Derechos Humanos, tal como lo
privilegia Naciones Unidas, al afirmar que “Desde la cuna hasta la tumba, los seres
humanos están gobernados por –y por medio- de normas y políticas públicas
particulares, ya sea concernientes a la salud pública, a las prácticas de empleo,
educación, seguridad nacional, regímenes fiscales, “buen gobierno”, igualdad de
oportunidades, o a legislaturas sobre relaciones interétnicas.”245
241
Ibid. Cuello Calón. Pág. 10
ZIZEK, Slavoj: “En Defensa de las Causas Perdidas”. Ediciones Akal, S.A. Madrid, 2011. Pág. 26
243
ZIZEK. Ibid. Pág. 28
244
Ibid. Pág. 28
245
PROGRAMA DE LAS NACIONES UNIDAS PARA EL DESARROLLO, PNUD: “Guatemala: Hacia un
estado para el desarrollo humano. Informe Nacional de Desarrollo Humano 2009/2010. Guatemala, 2010.
Pág. 55 y 56
242
99 Entre las funciones principales e inherentes del Estado, se encuentra el mantenimiento
del orden público. Esto como ya se dijo, es lo que asegura la sobrevivencia pacífica de
la sociedad, de acuerdo con la ley. Es interesante que para el sistema de Naciones
Unidas, esta función incluye “…la función de impartir justicia (sistema judicial) y las
tareas de hacer cumplir la ley (sistema judicial) y las tareas de hacer cumplir la ley (el
personal que guarda el orden público como la policía, cárceles, Ejército) y otras
funciones de dar seguridad.”246
Con el impacto de la globalización, el derrumbe de la ex URSS, el aparente desplome
de las grandes ideologías que dominaron el siglo XX, cabe preguntarnos cómo se debe
considerar la sobrevivencia pacífica de la sociedad, versus la libertad. Resulta pues
interesante el pensamiento de Hayek,247 al afirmar que “...la libertad sólo puede
conseguirse por un precio y que, como individuos, tenemos que estar dispuestos a
hacer importantes sacrificios materiales para salvaguardar nuestra libertad.” Pero
metafóricamente ese “precio de la libertad,” usando términos prestados de la economía,
nos exige hacernos algunos cuestionamientos, tales como:
¿Se habrá inflacionado o deflacionado ese precio de la libertad como consecuencia de
los fenómenos mundiales apuntados?
¿Somos en realidad más libres en la actualidad en relación a cómo éramos antes del
acaecimiento de estos fenómenos?
¿Estaremos a las puertas de un nuevo proceso de militarización de la política248 y de la
sociedad guatemalteca?
¿Se habrá sacrificado el precio de la libertad por el de la seguridad o el desarrollo
económico que impone el “fundamentalismo del mercado”?249
246
PNUD. Ibid. Pág. 50
HAYEK, Friedrich A. “Camino de Servidumbre”. Alianza Editorial, S.A. Madrid, 2010. 7ª. Reimpresión.
Pág. 172
248
“Tampoco puede ignorarse que los militares, a partir de la independencia en 1821, se mantuvieron
muy cerca del poder, pero fue en el siglo XX, a partir de los años sesenta, que tomaron en sus manos las
riendas del gobierno y asumieron funciones que no les correspondían, lo que dio lugar al surgimiento del
fenómeno social, al que algunos sociólogos denominaron “la militarización de la política”, actualmente
superado. A lo anterior debe agregarse que los gobiernos militares fueron, en gran medida, producto de
la injerencia y planes estratégicos de las potencias hegemónicas durante la confrontación este-oeste.”
DIAZ LOPEZ. Op. Cit. Pág. 326 y 327
247
100 ¿Estaremos asistiendo al pago de libertad individual, por el mantenimiento de una
potencia hegemónica y unipolar?
¿El mercado y las transnacionales, han devaluado el precio de la libertad, y lo han
intercambiado por consumismo y acumulación de riqueza?250
¿Será la globalización251 un catalizador del precio de la libertad, o su antítesis y mayor
grande amenaza?
Para
interrogantes
tan
complejas,
autores
como
Zizek,252
responden
con
planteamientos poco convencionales. Este afirma que “Dentro de este horizonte, la
respuesta, por tanto, no es ni el liberalismo radical de un Hayek ni el conservadurismo
puro y duro, ni mucho menos el mantenimiento de los viejos ideales del Estado de
bienestar, sino una mezcla de liberalismo económico con un espíritu comunitario
mínimamente <<autoritario<< (que ponga el énfasis en la estabilidad social, en los
<<valores<<, etc.), para contrarrestar los excesos del sistema; dicho de otro modo, lo
que los socialdemócratas de la Tercera Vía, como Blair, han fomentado.”
Por ello, a esta altura, podemos cuestionarnos acerca de si Guatemala tiene una
legislación electoral respetuosa de la dignidad humana, de los derechos humanos y de
las formas y principios de la democracia. En principio, y en un plano muy general y
ampliado, el Estado guatemalteco se funda en el uso y observancia universal de los
derechos políticos, mediante la observancia de la Declaración Universal de los
249
STIGLITZ, Joseph E. Op.cit. Pág. 158
“La riqueza, puede, pues, definirse como todas las cosas útiles o agradables que poseen valor de
cambio; o, en otros términos, todas las cosas útiles o agradables excepto aquellas que pueden
obtenerse, en la cantidad deseada, sin trabajo o sacrificio alguno.” JOHN STUART MILL. “Principios de
Economía Política”. Fondo de Cultura Económica. México, D.F. 2006. Pág. 35
251
GLOBALIZACION: “El proceso de universalización de la economía y des-territorialización conforme
con el cual las distancias físicas y las fronteras han perdido buena parte del significado que habían tenido
en los últimos siglos…Así, se habla de globalización económica, globalización en lo político y
globalización cultural.” ANDER-EGG, Ezequiel: “Globalización el proceso en el que estamos metidos”.
Editorial Brujas, Córdoba, Argentina. 2010. Pág. 16
252
ZIZEK, Op. Cit. Pág. 8
250
101 Derechos Humanos y lo dispuesto en el artículo 46 de la Constitución Política de la
República.253
Esta disposición constitucional ha estado cuestionada, a lo largo de los 26 años de su
vigencia. Lo que implica que éstos no han sido respetados plenamente. Pero, en
esencia, se respetan dos fundamentales: el derecho a votar y a ser electo.254 Esto
último crea una percepción societaria guatemalteca que, en materia democrática,
únicamente hemos avanzado en cuanto a las formas democráticas, o en lo que se
denomina como la democracia representativa,255 pero muy poco en la democracia
participativa. Esta carencia de democracia participativa, es lo que finalmente se
convierte en el elemento ausente para que la sociedad valore y aquilate la política, los
partidos políticos y el sistema de partidos políticos.
253
En el caso de la candidatura presidencial del ex Jefe de Gobierno de facto y general golpista, JOSE
EFRAIN RIOS MONTT, ante la negativa a inscribirle como candidato por parte del Tribunal Supremo
Electoral, argumentó en cortes que “…se le estaba violando su derecho humano de ser electo…” Para lo
cual, invocó el artículo 46 de la Constitución Política de la República de Guatemala, que dispone que “Se
establece el principio general de que en materia de derechos humanos, los tratados y convenciones
aceptados y ratificados por Guatemala, tienen preeminencia sobre el derecho interno.” Esto genera duda
interpretativa, por cuanto las prohibiciones constitucionales contenidas en el artículo 186 de la
Constitución, no constituyen derecho ordinario, leyes ordinarias o comunes. Por lo tanto la inelegibilidad
tiene, como la afirma la Corte de Constitucionalidad, no es simplemente de incompatibilidad. Y, dicho
texto, tiene un blindaje que lo declara como uno de los artículos no reformables, conforme el artículo 281
de la misma Constitución. (Opinión Consultiva emitida por la Corte de Constitucionalidad, a solicitud del
Congreso de la República. Gaceta No. 14, expediente No. 212-89, página No. 6, resolución de fecha: 1611-89).
En ese sentido, el derecho comparado, específicamente el artículo 10.2 de la Constitución Española,
reconoce que los tratados y acuerdos internacionales ratificados por España, serán observados en la
observancia de las libertades y que se interpretarán con apego a la Declaración Universal de Derechos
Humanos. No obstante, la autora BALAGUER CALLEJON, advierte que para el Tribunal Constitucional,
“Los Tratados y Acuerdos internacionales no pueden constituirse en canon autónomo de validez de las
normas…Por ello, en lugar de contrastar dos normas, es necesario realizar la actividad interpretativa
conjunta de tres normas, el artículo 10 de la Constitución, el precepto constitucional aplicable, y el
precepto legal sometido a enjuiciamiento.” BALAGUER CALLEJON. Op. cit. Pág. 142
254
Constitución Política de la República. Ibid. Art. 136, literales b), c), d) y e).
255
Al respecto, Miquel Caminal Badía, menciona el riesgo de caer en un reduccionismo, en la ciencia
política, si solamente definimos a la democracia representativa, “… como un sistema político en que los
gobernantes están legitimados por las elecciones periódicas y pluralistas realizadas mediante sufragio
universal, libre, igual, directo y secreto. Sin embargo, desde el punto de vista de la ciencia política sería
un reduccionismo excesivo conceptuar como gobernantes, sólo a aquellos que ejercen esta función
según el ordenamiento jurídico, olvidando a los que ejercen influencia, poder o autoridad (utilizando los
conceptos de Dahl) sobre las decisiones políticas adoptadas para el gobierno de la sociedad o una parte
de ella. Stricto sensu no son gobernantes los que presiden instituciones financieras, industriales,
religiosas o de la comunicación, ni tienen la legitimidad que otorga la elección, pero pueden ejercer mayor
influencia política que el político que dirige los destinos del Estado.” “Manual de Ciencia Política”. Op. Cit.
Pág. 30 y 31
102 Al no existir una auténtica democracia participativa, el guatemalteco se convierte en un
mero votante, y cada vez es menos elector. Sucumbe ante el influjo de campañas
políticas, partiendo que padece anomia ideológica. Vota con evidente carencia de
identidad con el sistema democrático y lo más grave mantiene una actitud escéptica y
desvinculada del quehacer político. Prácticamente el votante (que no elector), cada
cuatro años ejerce un acto de fe. Al ejercer el voto no tanto por convicción ideológica, ni
por conocimiento político, ni mucho menos por compromiso en la democracia y su
consolidación.
Esencialmente, el guatemalteco cada vez que acude a las urnas, lo hace más bien en
función de un chantaje al que se ve sometido por las ofertas electorales (por ejemplo
cuando se apela a la seguridad ciudadana, el hambre, etc.), o la presión que sufre
derivado de la presa de necesidades insatisfechas.256 Pero, en palabras de Saramago,
“Llorar sobre la leche derramada no es tan inútil como se dice, de alguna manera es un
hecho instructivo porque nos muestra la verdadera dimensión de la frivolidad de ciertos
procedimientos humanos.”257
Y si tenemos tan consolidados en el texto constitucional los derechos políticos, cabe
preguntarnos:
¿A
qué
obedece
la
existencia
de
una
situación
de
poca
representatividad, debilidad de los partidos políticos, poca credibilidad, no inclusión de
grupos mayoritarios por razones de género o etnia? El padrón electoral está
mayoritariamente integrado por indígenas, analfabetas y pobres. De todas maneras,
hay queja en algunos sectores que alegan que nuestra democracia consiste en la
256
El autor José Ramón Montero, argumenta que: “Es evidente que la presencia de vínculos psicológicos
entre los partidos y el electorado supone un componente fundamental de la competencia partidista. Pese
al debate sobre la pertinencia del concepto y la dificultad de su medición empírica, es también notorio que
las posibilidades electorales de los partidos aumentan en proporción directa a su éxito para desarrollar
mecanismos de identificación en amplios sectores del electorado y para mantener su intensidad de forma
duradera. En el caso español, los estudios existentes sobre la identificación partidista han utilizado
distintos criterios empíricos para medirla, pero todos han compartido la misma conclusión de su
debilidad.” DEL AGUILA, Rafael (editor). Op. Cit. Pág. 409
257
SARAMAGO, José: Caín”. Alfaguara. México, D.F. 2009. Pág. 45
103 <<tiranía de la mayoría>>.258 En ese sentido, Engels259 advirtió que “Cada beneficio
para unos es por necesidad un perjuicio para otros; cada grado de emancipación
conseguido por una clase es un nuevo elemento de opresión para otra.”
Coloquialmente se dice que un pueblo que no conoce su historia, está condenado a
repetirla. Por ello, en el caso particular guatemalteco, desde la colonia, la desigualdad y
la discriminación, han estado latentes. El sojuzgamiento a que fueron sometidas las
poblaciones ha sido factor determinante en el propio devenir histórico. Y, por supuesto,
el movimiento independentista de 1821, no generó un ambiente de libertad para las
mayorías. Fue la búsqueda de libertad para la minoría criolla y peninsular, lo que
viabilizó el proceso independista. Lejos de hacer surgir una nación de iguales, sin
privilegios, se institucionalizó exactamente lo contrario.
De allí que con el estatus colonial establecido por España desde 1524, hasta el
surgimiento del Estado republicano, independiente y nacional, siempre ha existido la
expresión de una élite. Esto último en el pensamiento marxista, autores como Nikitín
denominan la “clase dominante”,260 como el grupo social que determina los cambios o
el status quo en las sociedades. Esto nos llevó luego al Estado liberal261 en 1871, hasta
que, de manera tardía, en 1944, llegó la Revolución de Octubre que marcó la transición
entre el Estado Liberal y el Estado desarrollista. Y, en palabras de García Laguardia,
“Esta Constitución rigió durante el proceso de la llamada <<revolución guatemalteca>>
258
Según Sartori, “En el contexto constitucional, tiranía de la mayoría significa violar, legislando o
gobernando, los derechos de las minorías: en sustancia, es la aplicación absoluta del principio
mayoritario.” SARTORI, Giovanni: “¿Qué es la Democracia?” Op. Cit. Pág. 111
259
ENGELS, Federico: “Origen de la Familia, la Propiedad Privada y el Estado”. Editores Unidos. México,
1990. Pág. 204.
260
Ibid. NIKITIN, P. Pág. 10
261
Al respecto, el autor FERNANDO VALLESPIN, en “El Estado Liberal”, advierte que “el liberalismo ha
tenido cierta flexibilidad para ir adaptándose a las mutaciones de la vida social y política. En esto el
liberalismo no es, pues, original. Su mayor peculiaridad reside, sin embargo, en haber sabido mantener la
vigencia de un importante núcleo de principios que desde siempre han estado ligados a su filosofía y se
proyectan sobre un determinado cuerpo institucional. No hay que olvidar que la misma idea de
constitucionalismo moderno, con todos los contenidos que abarca –declaraciones de derechos,
separación de poderes, Estado de derecho, etc.- es ya una aportación liberal. Su contingencia en tanto
que mera ideología política se ve compensada así por el <<trato de favor>> que en cierto sentido ha
recibido por parte de la tradición política occidental. Lo queramos o no, el liberalismo es la ideología
creadora de las reglas de juego en las democracias modernas.” DEL AGUILA, Rafael (editor). Op. Cit.
Pág. 53
104 y en ella se ampararon los dos gobiernos –Juan José Arévalo (1945-51) y Jacobo
Arbenz (1951-54)- para impulsar su programa de reformas.262 Esto último, le costó el
derrocamiento por parte de la Agencia Central de Inteligencia –CIA- de los Estados
Unidos de América.263
En el caso guatemalteco, el sistema económico y tributario impuesto por el reino
español, impactó tanto a peninsulares, como a criollos. Por consiguiente, sin estar
directamente reconocidos como sujetos sociales, también a los propios indígenas. Por
consiguiente, el efecto también llegó a la propia estructura política e institucional total. A
tal grado llegó el efecto del régimen impuesto por la Corona española que, como afirma
Sabino, “Distribuidos en repartimientos y encomendados, a los nuevos conquistadores
para que trabajaran en sus tierras –las tierras que, de algún modo, ellos mismos habían
poseído antes-, los indígenas se convirtieron pronto en los trabajadores de los campos
y de las minas, obligados a pagar puntualmente los impuestos que sólo sobre ellos
recaían, sometidos a un régimen de trabajo servil. Esto sucedió así en todos los
territorios de las Indias, pero especialmente en los sitios donde habían florecido las
civilizaciones precolombinas más importantes, en amplias zonas de los virreinatos…en
áreas que hoy corresponden a regiones de las actuales Guatemala, Colombia, Ecuador
y Bolivia.”264
Todo proceso de conquista y fundación de Estado, implica el sometimiento y
sojuzgamiento de un territorio y una población, con la consiguiente imposición de un
sistema tributario y de gobierno que para efectos prácticos de ejercicio de poder son
antinomias. A ese respecto, John Stuart Mill, define claramente que es el trabajador
262
GARCIA LAGUARDIA, Jorge Mario: “Política y Constitución en Guatemala”. Serviprensa
Centroamericana. Guatemala, 1977. Pág. 30
263
“El día anterior a la invasión, la CIA despachó varios aviones DC-3 (a razón de 400 dólares por carga)
para descargar las tropas restantes de Liberación en las poblaciones hondureñas fronterizas de Copán,
Macuelizo y Nueva Ocotepeque. Luego en la mañana del 18 de junio, Carlos Castillo Armas, portando su
acostumbrada camisa a cuadros y chaqueta de cuero, subió a su vehículo de mando, una destartalada
camioneta y dirigió una hilera de camiones a través de la frontera y entró en Guatemala.”
SCHELESINGER, Stephen y KINZER, Stephen: “Fruta amarga la C.I.A. en Guatemala”. Siglo Veintiuno
Editores. 1ª. Edición en español. México, 1982. Pág. 193 y ss.
264
SABINO, Carlos: “El Amanecer de la Libertad. La Independencia de América Latina”. Unión Editorial,
UFM. Madrid, 2010. Pág. 65
105 quien soporta los impuestos en toda sociedad.265 También, la implantación de una
“tipología de los tres poderes”,266 como le denomina Bobbio, el cual incluye el
económico, ideológico y político. O, como lo explica a la luz del análisis marxista, tanto
estructura como superestructura, fueron cooptadas totalmente, desde el principio. Y los
frutos aún se viven en el país.
Resulta necesario entonces, al hablar de derecho penal objetivo y subjetivo. Hay
destacar que la herencia colonial, no sólo incidió en el escaso desarrollo institucional,
sino también en el poco o nulo acceso de las grandes mayorías en la consolidación del
Estado nación correspondiente. Y, en el ámbito político propiamente dicho, el sector
oligárquico está estructurado por el Comité Coordinador de Agrupaciones Agrícolas,
Comerciales, Industriales y Financieras (CACIF),267 fundado por instrucciones de la
Agencia Internacional para el Desarrollo de los Estados Unidos de América, AID.268 De
esa cuenta dicho Comité funge de ente organizado del sector privado con incidencia
económica, social, política y legislativa. “La oligarquía agro-exportadora que se
consolidó –como hemos apuntado- con motivo del triunfo de las revoluciones liberales
permanece aún como la fuerza más importante por la supervivencia de la estructura
agraria de la región. Pero su liderazgo se ha visto discutido por el surgimiento de una
nueva clase emergente empresarial.”269 A tal grado ha llegado la influencia y
competencia de poder entre la oligarquía270 y el Estado como tal, que Fuentes Knight, al
265
“No hay duda de que si gravar lo que se gasta en adquirir los productos del trabajo es gravar a los
trabajadores, son éstos lo que soportan todos los impuestos.” JOHN STUART MILL. “Principios de
Economía Política”. Fondo de Cultura Económica. México, D.F.2006. pág. 101
266
BOBBIO, Norberto: “Estado, Gobierno y Sociedad. Por una Teoría General de la Política”. Fondo de
Cultura Económica. México, 1994. Pág. 110
267
“Creado en 1957, fue apoyado por la AID y la ROCAP (agencias financieras norteamericanas en el
exterior de la metrópoli) y propició la formación de la FEDERICA, que agrupa a asociaciones similares de
los otros países centroamericanos. Tanto una como la otra tendían a fortalecer a las clases dominantes a
fin de garantizar su enfrentamiento con los movimientos populares revolucionarios.” GUZMAN
BOCKLER, Carlos. Op. Cit. Pág. 181
268
“Cuando la AID (el poder del desarrollo) tose algo se mueve en Guatemala. Sus deseos se convierten
en órdenes. Empresarios, terratenientes, militares, políticos e intelectuales al servicio del poder adoptan
la posición de firmes ante sus órdenes. No en vano la Agencia Internacional para el Desarrollo es, junto a
la blindada embajada, la representante directa del gobierno de los Estados Unidos. Y lo dicho por
Washington tiene carácter de voluntad divina.” XAVI ALBESA. “Amarga Máscara”. Op. cit. Pág. 195
269
GARCIA LAGUARDIA. Ibid. Pág. 38
270
Al respecto el sociólogo Humberto Flores Alvarado, al referirse a lo que es el CACIF, cómo opera, y
quiénes lo constituyen, dice: “Ellos, el CACIF, mueven todos los hilos de la telaraña estructural de la
sociedad nacional, y la mayoría a ellos lo hace, cosa extraña, sin buscar ostentación, figuración,
106 referirse a las vicisitudes que vivió como Ministro de Finanzas para negociar reformas
fiscales, afirma que este poder corporativo tiene “…la capacidad de <veto> que
históricamente había tenido el CACIF o los grandes empresarios en relación con el
tema fiscal al estar dispuestos a acudir a casi cualquier acción para evitar reformas.”271
Como la problemática ha sido latente, el tema también fue parte de los contenidos
consensuados en los Acuerdos de Paz.272 En ellos se reconoció que era ineludible
efectuar reformas a la Ley Electoral y de Partidos Políticos,273 mediante el Acuerdo
Sobre Reformas Constitucionales y Régimen Electoral,274 y posteriormente efectuar
reformas al Código Penal, creando los denominados “delitos electorales”, por
modificación o supresión de los ya existentes en el Decreto Número 17-03. Guatemala,
en el ámbito de la extradición, tampoco la reconoce ni concede por delitos políticos.275
La razón fundamental de esta disposición es que la delincuencia solamente afecta al
régimen político contra el que se dirige y que sólo para éste son peligrosos sus
autores.276
Pero autores como Casaús Arzú,277 advierten que a pesar de la génesis constitucional,
de los Acuerdos de Paz, de las reformas a la Ley Electoral y de Partidos Políticos y la
creación de nuevas figuras delictivas en materia electoral. “Durante la etapa de
transición política se ha producido una recomposición del bloque hegemónico, en donde
el núcleo oligárquico tradicional no se ha visto desplazado del poder sino más bien se
notoriedad ni, ¡menos!, poder… o trabajo, pues éste lo realiza la corte aquélla de servidores, y lo otro lo
tienen en demasía y lo preservan incluso más que su propia vida…El CACIF es administrador y
coordinado por los miembros de la BURGUESIA DE SERVIDUMBRE, no por miembros de la
BURGUESIA OLIGARQUICA. Es su órgano de expresión, pero su voz y opinión se hace conocer por
interpósita persona: sus servidores.” FLORES ALVARADO, Humberto. Op. cit. Págs. 234 y 235
271
FUENTES KNIGHT, Juan Alberto: “Rendición de Cuentas”. Editores F y G. Guatemala, agosto 2011.
Pág. 48
272
“Acuerdos de Paz” Editorial Rafael Landívar. Guatemala, 1998. Pág. 177-182.
273
LEY ELECTORAL Y DE PARTIDOS POLITICOS, Decreto Número 1-85 de la Asamblea Nacional
Constituyente. Publicación del Tribunal Supremo Electoral. Guatemala, mayo 2007
274
UNIVERSIDAD RAFAEL LANDIVAR: “Acuerdos de Paz”. Guatemala, 1998. Pág. 169-178
275
Constitución Política de la República de Guatemala. Artículo 27. Derecho de asilo. “…La extradición se
rige por lo dispuesto en tratados internacionales. Por delitos Políticos no se intentará la extradición de
guatemaltecos, quienes en ningún caso serán entregados a gobierno extranjero…” Ibid. Pág. 39
276
CUELLO CALON, Eugenio: “Derecho Penal” Editora Nacional. México, 1976. Pág. 231
277
CASAUS ARZU, Marta Elena: “Guatemala: linaje y racismo”. F&G Editores. Guatemala, 2007. Pág.
257.
107 recicla, se mimetiza y llega de nuevo al gobierno
278
por la vía de las urnas; presenta
una nueva imagen de empresarios modernizantes y vuelve a reforzar, de este modo, el
poder de las redes familiares. Tal sería el ejemplo de redes tradicionales como los Arzú,
Aycinena, Beltranena, Díaz Durán, Berger, y de algunas redes secundarias como los
Viteri y González.”
El riesgo de ese status quo que refleja Casaús Arzú, en el caso guatemalteco, a lo largo
de su desarrollo histórico-social y político, es que Deutsch279 advierte que “un Estado es
una maquinaria organizada para la elaboración y ejecución de decisiones políticas y
para la imposición de las leyes y reglas de un gobierno. Sus apéndices materiales no
sólo incluyen a los funcionarios y edificios de oficinas, sino también soldados, policías y
cárceles.” Y, en esta última parte del pensamiento citado se enmarca plenamente lo
referente a la legislación penal en materia político-electoral, ya sea para consolidar un
estado desarrollista y que responda a las necesidades de la población, o para apuntalar
y fortalecer un estado que guarde el orden hegemónico y oligárquico ya descrito.
El proceso electoral guatemalteco:
El reto latente que nuestro país tiene, es el de alcanzar una auténtica democratización.
En párrafos precedentes hemos insistido en que el marco jurídico, social y político que
vivimos hoy, es el que surgió de la negociación de la élite militar y la élite oligárquica. La
explicación de esa alianza es que, frente a la agresión del Estado por parte de la
guerrilla guatemalteca, se privilegió y se ejerció la voluntad política para posibilitar un
proceso de democratización del país.
Es así como, al hablar de legislación electoral guatemalteca, partimos de la base que la
Ley Electoral y de Partidos Políticos, Decreto Número 1-85 de la Asamblea Nacional
278
“…el acto de instituir el gobierno no es en absoluto un contrato sino una ley, que los depositarios del
poder ejecutivo no son los amos del pueblo, sino sus funcionarios, que el pueblo los puede instituir y
destituir, cuando le plazca…” ROUSSEAU, Juan Jacobo: “El Contrato Social”. Editorial Universitaria
EDUCA. San José, Costa Rica. 1996. Pág. 169
279
DEUTSCH. Ibid. Pág. 120
108 Constituyente. Esto constituye un parteaguas entre el autoritarismo280 y la democracia.
Además se perfiló este esfuerzo como el puente que permitió transitar desde las
dictaduras civiles281 y militares282 hasta los gobiernos electos democráticamente, a
partir de 1985. Esto sin perjuicio que posteriormente, en 1987 se instalara la Comisión
Nacional de Reconciliación, luego que la Comandancia de la Unidad Revolucionaria
Nacional Guatemalteca –URNG-283 que luego pasó de la clandestinidad a formar un
partido político,284 reiterara el 11 de agosto de 1987 su voluntad política de negociar285
con el gobierno del entonces Presidente de Guatemala Marco Vinicio Cerezo Arévalo.
En el anecdotario nacional al Presidente Cerezo se le calificaba irónicamente como
“sandía”: verde por fuera y rojo por dentro. Esto tan solo para atizar la confrontación
280
Según BOUZA-BREY, el sistema autoritario, “se limita al control del poder, sin pretender dominar
todas las esferas de la vida social.” Documento: “El Poder y los Sistemas Políticos”, publicado por
CAMINAL BADIA, Miquel (editor). “Manual de Ciencia Política. Editorial Tecnos (Grupo Anaya, S.A.),
Madrid, 2005. Pág. 74
281
Así, por ejemplo, se tuvo la dictadura de Manuel Estrada Cabrera, que duró treinta años, y quien
“…gobernó al principio con prudencia y mano suave, procurando ganar amigos y partidarios; no fue sino
hasta después del atentado de 1907, conocido como La Bomba, cuando hizo su aparición el tirano.”
POLO SIFONTES, Francis: “Historia de Guatemala”. Everest Guatemala. León, España. 2ª. Edición,
1991. Pág. 251
282
“La fórmula “dictadura militar con elecciones constitucionales”, proporcionaba un manto de legitimidad,
que a las clases dominantes y al Ejército les convenía conservar. Convencidos de que la fórmula política
era conveniente para sus intereses, nuevamente repitieron el ensayo en 1970, 1974 y 1978.” XAVI
ALBESA. “Amarga Máscara”. Editorial Imprenta del Centro. Guatemala, 1998. Pág. 24
283
“El Frente Unitario. Reunió a más o menos 150 combatientes de las tres organizaciones subversivas
(EGP, FAR Y ORPA), con el propósito principal de potencia a quienes representaban a la guerrilla en la
mesa de negociaciones de paz, mantener la moral de sus combatientes bajo la premisa de que para ellos
“el diálogo, era lucha no rendición”. MERIDA, Mario: “Venganza o… Juicio Histórico. 2ª. Edición.
Guatemala, octubre 2006. Pág. 101
284
“La Unidad Revolucionaria Nacional Guatemalteca (URNG) se constituyó inicialmente en la
clandestinidad, como una entidad político-militar coordinadora de las cuatro organizaciones guerrilleras
que desde principios de la década de los años 70 se habían alzado en armas contra el Estado de
Guatemala. En 1982 el Ejército Guerrillero de los Pobres (EGP), las Fuerzas Armadas Rebeldes (FAR),
la Organización del Pueblo en Armas (ORPA), y el Partido Guatemalteco del Trabajo (PGT), decidieron
conformar la URNG, en su afán de tomar el control del poder del Estado y llevar a cabo una revolución
política y social en Guatemala…En el contexto de lo establecido en tales acuerdos, la URNG se convirtió
el 9 de diciembre de 1998 –después de un arduo esfuerzo- en un partido político, lo cual la habilitó para
participar en el proceso electoral de 1999…La URNG aspira a responder orgánicamente a las
peculiaridades del contexto histórico guatemalteco y centroamericano, sistematizando su planteamiento
teórico e ideológico, sobre la base de la experiencia pasada y presente, como el análisis de la realidad
actual para prever el futuro…La URNG sigue considerándose una organización revolucionaria, de
acuerdo con la connotación de “transformación democrática” que el término “revolucionario” tiene en
Guatemala desde 1944…La ideología del partido URNG es democrática, revolucionaria y socialista…”
ASOCIACION DE INVESTIGACION Y ESTUDIOS SOCIALES –ASIES-: “Guatemala: Monografía de
Partidos Políticos 2000-2004”. Guatemala, 2004. Págs. 89-93
285
TORRES RIVAS, Edelberto: “Del Autoritarismo a la Paz”. Editorial Facultad Latinoamericana de
Ciencias Sociales –FLACSO- Guatemala, 1998. Pág. 167
109 ideológica, en ese gobierno de transición entre poder militar y poder civil. En la época
del conflicto armado, se denominaba “rojos” peyorativamente a los de pensamiento de
izquierda, y verdes a los de pensamiento de derecha. Hay dos hechos que, relatados
por un militar en situación de retiro, tienen una explicación en esa descalificación
ideológica del régimen democristiano: a) por orden de la entonces esposa y primera
dama del Presidente Cerezo, “en enero de 1986, fue retirado el personal de seguridad
del Palacio Nacional y del exterior de la Casa Presidencial…”286 b) “el 11 de abril de
1986, cuando la Cancillería informó que había reconocido y establecido relaciones
diplomáticas con la República Árabe Saharaui…en realidad se trataba de una
organización subversiva conocida como Frente Polisario, con bases en Argelia,
combatiendo en territorios de Marruecos y Mauritania.”287
En ambos casos, se ponía en riesgo la naciente democracia guatemalteca. En el
primero, existía el antecedente que Edén Pastora, “Comandante Cero”, había hecho
una toma espectacular en Nicaragua, del Palacio Legislativo y se corría el riesgo que la
Unidad Revolucionaria Nacional Guatemalteca, URNG, hubiese intentado tomar el
Palacio Nacional de Guatemala. En el segundo, si el gobierno guatemalteco reconocía
a un grupo subversivo extra continental, se abría la puerta para que otros gobiernos, en
reciprocidad y otro tipo de correlación de fuerzas, hubiesen reconocido a la guerrilla
guatemalteca y, sumado a estos dos hechos, el gobierno guatemalteco hizo un llamado
al retorno de los refugiados y exilados288 guatemaltecos, garantizándoles su seguridad.
Pero
este
esfuerzo
democratizador,
el
régimen
democrático
instalado
y
la
institucionalidad derivada, como todo producto humano, con las condiciones histórico 286
DIAZ LOPEZ. Op. Cit. Pág. 246
Ibid. Pág. 247 y 248
288
“La primera vez que yo retorné al país fue el 18 de abril de 1988. En esa ocasión fui detenida por
órdenes del presidente Vinicio Cerezo en el aeropuerto guatemalteco. ..Había más de cuatrocientos
policías en el aeropuerto para detenernos a Rolando Castillo Montalvo, a mí y a otros compañeros de la
RUOG, porque en ese entonces yo era parte de la Representación Unitaria de la Oposición
Guatemalteca. Habíamos decidido venir porque a un embajador guatemalteco ante la ONU en Ginebra
se le fue la mano y nos había hecho una invitación en nombre de su Gobierno. Era demagogia porque en
realidad no era esa la intención del Gobierno sino sólo hacer propaganda de la supuesta buena voluntad
de Cerezo, evitar que fuera condenado por la comunidad internacional.” MENCHU, Rigoberta-con la
colaboración de Dante Liano y Gianni Miná: “Rigoberta: la Nieta de los Mayas”. El País, S.A.-Santillana,
S.A. México, 1998. Pág. 62
287
110 sociales y exigencias societarias, se le debe dar el beneficio de la duda, y considerarlos
como un producto esencial e inevitablemente perfectible. Aún más, debe seguir siendo
fortalecido el proceso democratizador, mediante reformas a otras leyes colaterales que
garanticen el ejercicio pleno de los derechos políticos y de lo que algunos llaman
“ciudadanía plena”, pero antes debemos pagar el precio de construir una “cultura
democrática”. Entendida esta última como “un juego de valores y normas referentes al
lugar y el papel del individuo frente a la sociedad y al Estado en una democracia, que al
estar internalizados oriente de manera natural sus actitudes en los distintos ámbitos de
la vida diaria, más allá de las declaraciones políticas, y que facilita la implementación de
las reglas del nuevo juego político.”289
Si bien es cierto, hoy prácticamente nadie propugna por la lucha armada contra el poder
establecido para resolver los problemas. Pero también lo es que el Estado enfrenta otro
tipo amenazas. El narcotráfico, el crimen organizado y el crimen transnacional, las
migraciones, etc., y por consiguiente en general, la democracia también tienen
amenazas diversas. Ahora, en vez de la amenaza del poder militar o insurgente, que se
tuvo en el pasado, existen otros poderes que atentan contra la sociedad, el Estado y la
democracia misma. Adicionalmente se ciernen la amenaza terrorista, la narco-guerrilla,
el narcotráfico de los Zetas, el crimen organizado, el poder oculto o paralelo. Cada uno,
coludidos o no, pretenden cooptar las instituciones y el Estado mismo, lo cual exige el
fortalecimiento de las instituciones democráticas.
Es decir, que el paso de una democracia formal a una democracia real, está
condicionado por el sistema jurídico electoral y sistema de partidos políticos que se
tenga. De igual manera, la coyuntura o el momento histórico en que se genera la
legislación, incide en la visión y énfasis que se ponga en la misma. Podemos decir que
la legislación electoral guatemalteca, fue diseñada, pensada e implementada, en un
contexto de existencia de un conflicto armado interno.
289
AREVALO DE LEON, Bernardo: “Sobre Arenas Movedizas: Sociedad, Estado y Ejército en Guatemala
1997”. Facultad Latinoamericana de Ciencias Sociales, FLACSO. Guatemala, 1998. Pág.70
111 En 1985, aún existía la confrontación armada y, precisamente, el gobierno de facto de
encabezado por Oscar Humberto Mejía Víctores que depuso al también golpista Efraín
Ríos Montt,290 fue el que generó la convocatoria a la Asamblea Nacional Constituyente
que produjo la actual Constitución Política de la República y, había tomado el poder, sopretexto de contener el avance de la insurgencia.291 Es así como, entre otras leyes que
aportó dicha Constituyente, está la Ley Electoral y de Partidos Políticos, Decreto 1-85, y
la correspondiente estructura del Tribunal Supremo Electoral y la normativa de los
partidos políticos, propiamente dichos.
Primavera árabe, cultura y política:
Es innegable que, aparte de la revolución producida por la tecnología, la información
electrónica y la globalización, también en el mundo y los países, se han visto grandes
cambios socio-políticos. Se aprecia un aumento en la participación política, cambio de
cultura política292 e incluso procesos violentos de sustitución de regímenes dictatoriales
por movimientos democratizadores.293 Ejemplo de esto último lo tenemos con los casos
de Egipto, Túnez, Yemen y últimamente Libia, cuyos gobiernos y regímenes autoritarios
fueron
rebasados
y
arrollados
por
las
exigencias
sociales
en
materia
de
democratización y respeto a los derechos políticos.294 Sin pasar de pesimistas o
extremadamente optimistas respecto a esto último, hace falta ver si las divisiones
sectarias295 pueden truncar los sueños democráticos de las sociedades árabes. Se
corre el riesgo que solo sea un relevo de élites dirigenciales pero con idéntico
planteamiento fundamentalista.
290
Ibid. Pág. 85
TORRES RIVAS, Ibid. Pág. 59 a 62
292
Para MARIANO TORCAL, “La cultura política constituye un intento de crear un instrumento que sirva
para conectar causalmente la micropolítica (componentes psicológicos individuales) con la macropolítica
(los sistemas políticos).” DEL AGUILA, Rafael (editor). Op. Cit. Pág.231 y 232
293
Autores como Touraine, hablan de una reivindicación de la política frente a la globalización, porque
ven a ésta “…reducida hoy o bien a la adaptación de cada economía nacional al sistema de los
intercambios mundiales, o bien a la resistencia de los intereses amenazados por esa globalización,
¿podrá volver a ser representativa?” TOURAINE. Op. cit. Pág. 314
294
Diario
El
País,
Madrid,
25
de
septiembre
2011.
Edición
digital.
www.elpais.com/artículo/internacional/Yemen/hunde/violencia/vuelta/Saleh/elpepuint/20110924elpepuint_
8Tes.
295
THE NEW YORK TIMES. Edición “Prensa Libre”, Guatemala, 4 de septiembre 2011. Pág. 1.
www.prensalibre.com.
291
112 Haciendo abstracción de los intereses petroleros y hegemónicos de Estados Unidos de
América y sus aliados, en las invasiones de Irak o Afganistán,296 por ejemplo, podemos
ver que la democracia no es susceptible de cocinarse en horno de microondas, ni nace
como efecto de la bota del invasor. Y, sobre todo, ver el impacto o choque de
civilizaciones a que alude Gallo297 al afirmar que: “El Occidente trata de imponer al
mundo su “proyecto técnico”, con instrumentos matemáticos y una economía
mercantilista capilar.” De igual manera, Habermas, en su análisis del choque de
culturas entre el mundo del islam y el Occidente judeo-cristiano, sugiere con visión muy
positiva que “La tolerancia militante puede ocupar el lugar de la brutalidad armada.”298
Pero sea cual fuere el destino que tomen estas nuevas estructuras políticas, mantiene
vigencia el pensamiento de Heller,299 al afirmar que “La exigencia de seguridad jurídica
justifica plenamente el que los actos estatales entrañen la presunción de legalidad que
remedia los vicios de la validez jurídico-positiva… Si se dejara al parecer del hombre de
la calle, en cada caso concreto, hacer depender su obediencia de su apreciación
personal…se llegaría fatalmente a la disolución del orden jurídico.” En ese sentido, no
hay que perder de vista que se corre el riesgo que al zafar la alfombra a un régimen,
autoritario o no, inevitablemente se crea un efecto dominó o de castillo de naipes. Basta
sustraer uno, para que el resto se venga abajo. Y ese será otro desafío para Occidente
296
En el caso de las invasiones de Estados Unidos de América y sus aliados a estos países, so-pretexto
de constituir amenaza terrorista para esta potencia hegemónica unipolar, MONTESQUIEU, al referirse a
las “ventajas del pueblo conquistado”, ya admitía que bajo el argumento que “Un gobierno que ha llegado
al punto de no poder reformarse por sí mismo, ¿qué perdería en que una invasión lo refundiera?”, con lo
cual, prácticamente, se puede justificar cualquier invasión y aunque los verdaderos motivos puedan ser
de apoderamiento de reservas de petróleo, tierra, recursos, etc. MONTESQUIEU. “DEL ESPIRITU DE
LAS LEYES”. Traducción del francés por: Nicolás Estevanez. Editorial Heliasta, S.R.L. Buenos Aires,
2005. Pág. 167
297
GALLO, Antonio: “Sociedad Multi-racial y Convivencia, Identidad y Prejuicio”. Publicado en: Revista
Estudios Sociales del Instituto de Ciencias Políticas y Sociales: Universidad Rafael Landívar. Guatemala,
enero 1985. Pág. 32.
298
HABERMAS, Jürgen: “Fragmentos filosófico-teológicos”. De la impresión sensible a la expresión
simbólica. Editorial Trotta, S.A. Madrid, 1999. Pág. 40
299
Ibid. HELLER. Pág. 245
113 y las sociedades que, como la nuestra, se esfuerzan en construir y consolidar un
sistema democrático300 y una institucionalidad política partidaria.
Una democracia importada:
Como efecto de la postmodernidad, se han ensanchando las comunicaciones, se han
acortado distancias. Asistimos a la “imposición” de la democracia como sistema de
gobierno. De igual manera, se puede notar el derrumbe de todos aquellos gobiernos
que no encajen en los moldes que el mercado o las transnacionales consideren
peligrosos o no aceptables para el status quo que implantan para garantizar sus
intereses e inversiones. Y, como lo cuestiona Del Águila, “…existen aquí problemas y
preguntas bastante complicadas: ¿existe un umbral económico de la democracia?,
¿hay posibilidades de establecer unos mínimos económicos para el surgimiento de las
democracias?, ¿se trata de condiciones necesarias o suficientes?”.301
En adición, se ha implantado, especialmente en Latinoamérica, y de manera particular,
en Guatemala, una especie de Santa Inquisición. Esta se disfraza o de “ayuda
internacional” o de “países cooperantes”, o más eufemísticamente “la comunidad
internacional”. Esta Santa Inquisición postmoderna, también certifica gobiernos,
auspicia a unos y sataniza a otros. Para operar lo hace a través de una auto-etiquetada
“observación internacional institucionalizada u organizada. Esta observación incluye
entre otros a: organismos internacionales como la Organización de Estados
Americanos, OEA, la Organización de Naciones Unidas, ONU, Comunidad Europea
(CE), y las ONG.”302 Asimismo, la Iglesia Católica,303 ha jugado un papel preponderante
300
Según BOUZA-BREY, “El sistema democrático se caracteriza por su autoridad participativa y la
existencia de un único valor último de carácter secular, consistente en la realización de la voluntad
popular, sea cual sea ésta.” Op. Cit. Pág 75.
301
DEL AGUILA, Rafael (editor). “La Democracia”, en “Manuel de Ciencia Política”. Op. Cit. Pág. 152
302
CARRERA DAMAS, Germán: “Sobre Democracia en las Sociedades Latinoamericanas
Contemporáneas (Comentarios para una Discusión)”, compilado en: “La Democracia en América Latina,
Un Barco a la Deriva”. ANSALDI, WALDO (Director). Fondo de Cultura Económica. México, D.F. 2006.
Pág. 157
303
“lo que en el Estado está permitido no puede ser prohibido por el magistrado en la Iglesia.” LOCKE,
John: “Carta Sobre la Tolerancia”. Editorial Gradifco. Buenos Aires, 2007. Pág. 54
114 en los asuntos públicos, incluso en la propia insurgencia,304 ya sea formando parte de
foros multisectoriales, o desde las homilías dominicales de los jerarcas religiosos, o
respaldando o canalizando fondos a entes como la Oficina de Derechos Humanos del
Arzobispado, ODHA, por ejemplo, y con línea directa e instrucciones desde el
Vaticano,305 vía la Nunciatura Apostólica, instalada en Guatemala. Esto incluso, en
época del conflicto armado interno, le hizo ser vulnerable institucionalmente, no sólo a
señalamientos de colaborar con la guerrilla, sino de ser calificada de “subversiva”. 306
En ese sentido, sería injusto y poco objetivo, negar que la participación directa o
indirecta de esa pléyade de entidades, en el apoyo y acompañamiento de los procesos
democratizadores latinoamericanos, como el caso guatemalteco, tengan también una
parte positiva. Por ejemplo, en nuestro país, fruto de esa presencia internacional, se
desarrolló el Programa de Valores Democráticos y Gerencia Política de la OEA. El
principal aporte fue la conformación del FORO PERMANENTE DE PARTIDOS
POLITICOS, que se abrevia y en lo sucesivo será denominado simplemente FPPP.
304
“El papel desempeñado por la Iglesia católica y la interpretación que de la TL hicieron algunos
sacerdotes, no admite discusión. Empero, quizás si es conveniente citar algunos casos suscitados en
nuestro país para terminar de evidenciar su utilidad para la guerrilla. Uno de ellos es el surgimiento del
movimiento llamado “CRATER”, que estuvo a cargo del religioso Thomas Melville (1966-1967), ampliado
en la constitución de la Conferencia de Sacerdotes Diocesanos de Guatemala (CODESGUA), quienes
desarrollaron una serie de cursillos y congresos eucarísticos, para dinamizar la socialización y el
reclutamiento de jóvenes de ambos sexos provenientes de colegios católicos. Más adelante se deja
constancia de la participación con la guerrilla (EGP) en la esfera de mandos superiores, de los jesuitas
Fernando Hoyos, alias “Comandante Carlos”, Ricardo Falla, alias “Marcos”, y Enrique Corral, alias “Abel”.
MERIDA, Mario: “Venganza o Juicio Histórico”. Op. cit. Pág. 78
305
En la encíclica Centesimus Annus, No. 23 (1991.05.01), el Papa Juan Pablo II, advertía del riesgo que
“Existen, además otras fuerzas sociales y movimientos ideales que se oponen al marxismo con la
construcción de sistemas de <<seguridad nacional>>, que tratan de controlar capilarmente toda la
sociedad para imposibilitar la infiltración marxista. Se proponen preservar del comunismo a sus pueblos
exaltando e incrementando el poder del Estado, pero con esto corren el grave riesgo de destruir la
libertad y los valores de la persona, en nombre de los cuales hay que oponerse al comunismo.”
www.vatican.va/holy_father/john_paul_ii/encyclicals/documents/hf_jp-ii_enc_01051991_centesimusannus_sp.html. Fecha consulta: 7 abril 2012
306
“…Ríos Montt y oficiales del Ejército, quienes no escondieron su recelo hacia la Iglesia Católica por la
acción social que había desempeñado con anterioridad y que fuera calificada de acción “subversiva.”
FLORES, José: “Myrna y Helen. Su Historia”. Editorial Estudiantil Fénix. Cooperativa de Ciencia Política,
Universidad de San Carlos de Guatemala. Guatemala, 1995. Pág. 88
115 El autor participó como miembro del mismo, y Vicepresidente de la Comisión de
Reforma Electoral del FPPP,307 en representación del partido político Unión
Democrática, UD.308 A nuestro criterio, el FPPP, es un espacio bastante académico,
ilustrativo y productivo en la búsqueda de consensos sobre la base del disenso.
Constituye un espacio para el desarrollo político integral en Guatemala y para el
fortalecimiento y credibilidad en el sistema de partidos políticos. En el FPPP se tuvo la
visión mantener un alto nivel de diálogo, negociación e intercambio inter-partidario,
tratando que las grandes decisiones de Estado dejen de ser aisladas políticas del
gobierno de turno, y hacerlas trascender como políticas de Estado. El FPPP,
actualmente mantiene su actividad, y será el tiempo quien juzgue sus frutos. Entre las
experiencias más gratificantes de ese esfuerzo estuvo:
a)
El que se generara una propuesta de reformas electorales que se presentó al
Congreso de la República, el seguimiento a la implementación de cambios sustanciales
durante los años 2004 y 2006,309 las que sufrieron el síndrome legislativo de
307
OSORIO ALONZO, Jaime Fernando: “Las Reformas de Segunda Generación a la LEPP: La Visión
desde el Foro Permanente de Partidos Políticos.” Publicado en: “Gobernabilidad Democrática y Reformas
de Segunda Generación a la ley Electoral y de Partidos Políticos.” Asociación de Investigación y Estudios
Sociales, ASIES. XX Sesión Anual. Guatemala, 12 agosto 2004. Pág. 77 a 82
308
“El partido Unión Democrática (UD) surgió de una corriente de antiguos militantes del Partido Social
Demócrata (PSD), encabezados por José Luis Chea Urruela y su esposa Patricia de Chea. El partido fue
inscrito como tal el 15 de julio de 1993. Su primera participación electoral tuvo lugar en los comicios
generales de 1995, habiendo logrado el quinto lugar de la votación, llevando como candidato presidencial
a José Luis Chea y al dirigente indígena Juan León como candidato vicepresidencial…En el año 2000 se
integró al partido un grupo de empresarios y profesionales provenientes algunos de la Democracia
Cristiana Guatemalteca y otros del Partido de Avanzada Nacional. En la Asamblea Nacional del 25 de
febrero del 2001 algunos de ellos fueron electos, juntamente con dirigentes fundadores para integrar el
Comité Ejecutivo Nacional. En dicha oportunidad fue electo como Secretario General Rodolfo Ernesto
Paiz Andrade y como secretarios generales adjuntos José Mauricio Rodríguez Weber y Norma
Quixtan…Sostiene, además, que profesa lo que denomina ideología popular progresista: “popular porque
exige reformas estructurales capaces de ensanchar los derechos y los beneficios de la mayor parte de la
población guatemalteca y ”progresista” porque pretende propiciar, con fuerza y de conformidad con la
realidad nacional, tanto el cambio como la modernización del orden político, social y económico de la
sociedad guatemalteca…” ASOCIACION DE INVESTIGACION Y ESTUDIOS SOCIALES –ASIES“Guatemala: Monografía de Partidos Políticos 2000-2004”. Guatemala, 2004. Pág. 55 y 56
309
“En el último trimestre de 2003, especialmente a partir del final de las elecciones generales de ese
año, el Foro Permanente de Partidos Políticos de Guatemala, por su lado, y la Comisión Específica de
Asuntos Electorales del Congreso de la República, por el otro, activaron procesos de debate para retomar
la reforma electoral y acordar una reforma parcial pero estratégica.” NUÑEZ VARGAS, Eduardo:
“Reforma al régimen electoral y de partidos políticos en Guatemala: una tarea inconclusa”. Artículo
publicado en: “Escenarios de la Reforma Política”. Análisis Político. Volumen 1. Año 2. Fundación Konrad
Adenauer. Enero-abril 2008. Guatemala. Pág. 52
116 “Frankenstein”. Casi siempre, pareciera ser, que la política310 no crea obras de arte,
sino monstruos de los cuales es también víctima. Y, dado el relato de la historia de un
monstruo como el de la novela del mismo nombre, “…como es obvio, el monstruo
reanimado por Víctor es un compuesto mecánico de partes, no un organismo
armonioso.”311
Una cosa fue lo consensuado y discutido, con participación de sociedad civil, políticos,
autoridades electorales, comisiones parlamentarias, etc. Otra diferente fue lo aprobado
en el Pleno del Congreso de la República. Aunque las mismas fueron propuestas en
dos cuerpos, o “paquetes”. Una constituyó la reforma original y la otra fue denominada
de “armonización”. Obviamente, las partes no armonizaban un todo integral. Era como
si alguien “penetra en el espíritu del monstruo y le pregunta cómo se siente al verse
etiquetado, definido, oprimido, excomulgado e incluso físicamente deformado por la
sociedad.”312 Al final, se tuvo 152 cambios en la Ley Electoral313 y de Partidos Políticos.
Entre éstos, estimo que uno de los más trascendentales lo constituye la
descentralización de las juntas receptoras de votos. En el evento electoral de 2007, el
Tribunal Supremo Electoral, reportó que llegó al 60.46%, superando el 57% del proceso
electoral de 2003,314 lo que la participación de votantes ha permitido un juego político
310
Ortega y Gasset, al referirse a la política en general dice que “Lo que ayer si apenas absorbía energía
de atención está hoy en el alma de todos los hombres hincado como un lábaro imperial. En los siglos
XVII y XVIII es la política y con ella la economía cosa que sólo preocupa a unos pocos hombres de la
corte en cada Estado: la norma es kameralismo y la política camarilla. El arte y la danza y la teología y el
galanteo eran labores de mayor momento para aquella sociedad.” ORTEGA Y GASSET, José:
“Meditación de Nuestro Tiempo”. Fondo de Cultura Económica. 70 años. México, 2006. Pág.106
311
ZIZEK, Slavoj. Op. cit. Pág. 80 a 87
312
ZIZEK. Ibid. Pág. 84
313
En el 2004, mediante el Decreto Número 10-04 del Congreso de la República, el 21 de abril de 2004,
se logra consolidar un primer gran esfuerzo de establecer nuevas condiciones o reglas de juego político.
Y, por primera vez se hace un esfuerzo serio para fortalecer a los partidos políticos, partiendo de la
democratización del sistema político guatemalteco. Pero como todo producto humano perfectible, se tuvo
necesidad de impulsar otras reformas a la Ley Electoral y de Partidos Políticos, y a este segundo
esfuerzo se le denominó coloquialmente “normas de armonización”, con las cuales se pretendió subsanar
algunas incongruencias Es así como se aprueba el 19 de octubre de 2006, por parte del Congreso de la
República, el Decreto Número 35-2006, publicadas en el Diario de Centroamérica el 17 de noviembre
2006.
314
El abstencionismo se vio seriamente amenazado en su cuota tradicional, y el electorado guatemalteco
rompió paradigmas en cuanto al ejercicio del voto, en la elección de 2007.
117 más amplio y más accesible a las masas de votantes rurales. En esencia, se tuvo un
mercado competitivo.315
b)
Además se impulsó un esfuerzo semanal de diálogo y concertación
multipartidario, sobre temáticas nacionales. También se compartieron diversas
iniciativas de ley consensuadas, para ser trasladadas a las respectivas bancadas en el
Congreso de la República, políticas de Estado, y diversas reflexiones para la
institucionalización de los partidos políticos y el fortalecimiento del sistema de partidos,
e impulso de la democracia,316 frente a las amenazas de neo-populismos317 y neoautoritarismos.
c) En el plano de la negociación y búsqueda de gobernabilidad política también hubo
ocasión de probar lo positivo de este esfuerzo. Cuando acaecieron hechos violentos
conocidos como “Jueves Negro”, en que se trató de imponer la candidatura del ex Jefe
de Estado José Efraín Ríos Montt, el FPPP, jugó un papel quizá poco valorado, pero
que fue importante. Su propio partido, el Frente Republicano Guatemalteco, FRG, era
miembro del Foro, y se le exhortó a que se respetara la institucionalidad y el estado de
derecho, es decir, se le aplicó el principio de legalidad.318 Superada la crisis, sus
315
“De hecho, la partida política se juega en términos de competencia injusta caracterizada por una
escalación incesante. Y la política de la superoferta lleva –por invertir la analogía económica- a algo muy
parecido al desequilibrio inflacionario: una situación en la que los competidores <<tratan de arrancarse el
apoyo los unos a los otros mediante llamamientos más estentóreos y promesas mayores>>, de modo que
aumenta la competencia por la oferta disponible, pero la oferta no aumenta.” SARTORI, “Partidos y
Sistemas de Partidos”. Op. Cit. Pág. 183
316
Para el autor RAFAEL DEL AGUILA, “La democracia es una fórmula política para resolver el hecho de
la pluralidad humana. Esta pluralidad engloba todo tipo de particularidades y diferencias entre los seres
humanos: pluralidad de intereses, valores, ideologías, poder, riqueza, prestigio, pluralidad nacional,
cultural, social, ideológica, religiosa, de orientaciones sexuales, de modos de vida, de concepciones del
bien, etc.” Op. Cit. Pág. 154
317
Para muestra de estos neopopulismos, tenemos la decisión unilateral del gobierno de la República
Argentina, que dispuso intervenir YPF, S.A., la subsidiaria de la petrolera española REPSOL. Esto no
sólo constituye una muestra de neopopulismo, sino de la eventual confrontación que espera a las
transnacionales y la globalización que, en el mediano o largo plazo, deberán aceptar que el mundo no es
una finca particular, y que los gobiernos, pequeños o no, están recibiendo presiones insostenibles de sus
ciudadanos por el rescate de sus recursos naturales renovables y no renovables y una reconversión y
replanteamiento de la explotación de éstos a nivel global. Véase edición del diario EL PAIS, de España:
www.prensaescrita.com/adiario.php?codigo=S&pagina=http://www.elpais.com. Fecha consulta: 16 de
abril 2012
318
“De hecho, pueden establecerse los principios legales de toda sociedad por tres diferentes caminos: a)
siguiendo las costumbres tradicionales de la tribu o de la comunidad; b) obedeciendo la voluntad
arbitraria y ad hoc de quienes dirigen el aparato del Estado; o c) utilizando la razón humana para
descubrir la ley natural –resumidamente: por conformismo servil a la costumbre, por arbitrio caprichoso o
118 delegados retornaron al seno del Foro y, a diferencia de otros períodos pasados, los
políticos pudieron dialogar y zanjar diferencias al más alto nivel. A tal grado llegó la
institucionalización del Foro, que incluso se firmó un pacto ético, previo al evento
electoral de 2004. Se pretendió con ello, evitar la confrontación directa y violenta que
caracterizaba las campañas políticas antes y después del proceso democrático que
inició en 1985.
Lo anterior es una muestra positiva del efecto de la presencia internacional en la
agenda política nacional. Sin embargo, hay también algún tipo de impacto negativo, por
la cual la denomino la Santa Inquisición Política, en nuestro país, Existen casos y
eventos políticos que la han desnudado, a nuestro juicio, en su lado más negativo. Por
ejemplo, en lo referente a la consolidación del proceso de paz firme y duradera, luego
de la firma de los Acuerdos de Paz, en 1996, la cooperación internacional319 alentó y
apoyó con fondos algunos juicios paradigmáticos. Por ejemplo, con ocasión de la
presentación del informe de Recuperación de la Memoria Histórica, REMHI,
denominado “Guatemala Nunca Más”, se concluía en que el 90% de los hechos de
violencia ocurridos durante el conflicto armado interno (1960-1996), eran imputables a
las fuerzas del Estado.
Poco tiempo después de la presentación del REMHI este informe, muere lapidado en la
casa parroquial del templo de San Sebastián, en la zona uno de la ciudad de
Guatemala, el obispo Juan Gerardi Conedera. A escasos doscientos metros de la Casa
Presidencial y, por consiguiente, prácticamente en inmediaciones de toda la seguridad
perimetral que incluye esta residencia oficial. Esto hizo que el presidente de turno,
Álvaro Arzú Irigoyen, caracterizado por Rico320 como poseedor de un “…carácter
taxativo…su cabezonería legendaria, atribuida a sus raíces vasco-navarras, su falta de
diplomacia y su lenguaje directo, que rompía con los cánones del habla perifrásica y
por el uso de la razón humana. Estas son, en esencia, las únicas vías posibles para establecer la ley
positiva.” ROTHBARD. Op. Cit. Pág. 43
319
De allí que al ex presidente Dr. Juan José Arévalo Bermejo, se le atribuye la frase célebre: “En
Guatemala no hemos recibido empréstitos, porque sabemos muy bien que cuando se reciben dólares con
la mano derecha, con la izquierda se entrega soberanía.” POLO SIFONTES. Op. cit. Pág. 276
320
RICO, Maite y DE LA GRANGE, Bertrand: “¿Quién Mató al Obispo?-Autopsia de un Crimen Político”.
Editorial Planeta. México, D.F. 2003. Pág. 28
119 llena de fórmulas de cortesía del guatemalteco, habían ido asentando su fama de
prepotente…El asesinato de Gerardi no sólo rompía la buena dinámica de su gestión,
sino que volvía a meter en la escena a dos instituciones que él había querido mantener
a distancia: la iglesia y el ejército.” Todo esto derivó en que vía la Oficina de Derechos
Humanos del Arzobispado, ODHA, se canalizaran recursos y estrategia, con suficiente
apoyo internacional, y la aparente manipulación de fiscales y jueces, por parte de la
todopoderosa Misión Internacional de Naciones Unidas en Guatemala, MINUGUA
(antecedente de la actual Comisión Internacional Contra la Impunidad en Guatemala –
CICIG), para llevar a condena a dos militares de alto rango, el Coronel Byron Lima
Estrada321 y su propio padre.
Otro caso negativo, ha sido la intervención de la Comisión Internacional Contra la
Impunidad en Guatemala, CICIG, que es fruto de un convenio entre el Gobierno de la
República y la Organización de Naciones Unidas. Esta presencia de misión
internacional, tuvo como antecedente la Misión Internacional de Naciones Unidas,
MINUGUA. Si bien es cierto, la comunidad internacional ha contribuido generosamente
en este esfuerzo, también lo es que el país ha puesto su cuota equitativa. Con ocasión
del asesinato del Abogado guatemalteco Rodrigo Rosenberg Marzano,322 que fue
difundido mundialmente por Internet y los medios masivos de comunicación, dicha
entidad y su entonces Jefe y máxima autoridad, el abogado español Carlos Castresana
Fernández,323 cobraron un protagonismo exagerado, en un tema que no era de su
incumbencia.
321
Al respecto, el militar Lima Estrada, se expresaba así del Obispo asesinado: “Este Gerardo, cuando
fue obispo del Quiché, alentó la subversión. El es el responsable de la muerte de muchos indígenas que
no sabían en qué se involucraban. Y ahora, este mismo señor y sus amigos comanches hacen un
informe para ´recuperar la memoria histórica´, nada menos. Es pura mierda. La iglesia habla de
reconciliación, pero quiere continuar la guerra por otros medios”. Ibid. Rico. Pág. 11
322
El columnista Alfred Kaltschmitt reflejo este hecho bajo el título “Violencia con rostro”, en el matutino
PRENSA
LIBRE
de
Guatemala.
www.prensalibre.com.gt/opinion/NOTAS-Violencia-rostro
0_41397296.html. Fecha consulta: 7 abril 2012
323
Matutino PRENSA LIBRE: edición 7 junio 2010. “Perfil de Carlos Castresana Fernández”.
www.prensalibre.com/noticias/Carlos_Castresana_cicig_0_275972632.html. Fecha consulta: 19 marzo
2012
120 Este ex jefe de la CICIG actualmente, ha anunciado que se dedica a escribir una
novela.324 En Guatemala no se duda de su talento creativo e inventivo,325 como el que
mostró en 2010. La misión de la CICIG, es contribuir al traspaso de técnicas de
investigación y ataque al crimen organizado y los grupos paralelos que atentan contra el
Estado mismo o la seguridad de los guatemaltecos. Sin embargo, éste por ser un
crimen típicamente común, tuvo la connotación especial que entre los señalados del
asesinato, por el propio Rosenberg, estaban el entonces presidente de la República
Álvaro Colom Caballeros y su esposa Sandra Julieta Torres Casanova, en ese
momento, aún “de Colom.” Asimismo, estaban señalados otros altos funcionarios de su
gobierno. Oficiosamente, la CIGIG se constituyó en defensor de oficio de la pareja
presidencial acusada. Contrario a sus fines, y traspasando los fines y funciones que le
asigna el mandato de la ONU.
La experiencia de imposición de un sistema por otro, o la intromisión de la “comunidad
internacional” en asuntos nacionales, en su caso, ya la hemos padecido como nación
en varias ocasiones. En el caso de la CICIG, y específicamente del cuestionado Carlos
Castresana Fernández, una de sus últimas actitudes peliculescas fue afirmar que la
causal de su renuncia al puesto de Comisionado de la ONU era porque: “Había una
trama para matarlo en Guatemala”.326 Por el contrario, siempre fue uno de los
funcionarios con los más altos niveles de equipos de seguridad y personal a su servicio.
Lo que sí fue vox populi, era que tenía problemas por contrataciones anómalas de
ciertas damas en el seno de la CICIG. Su ex esposa, una periodista mexicana, hizo
declaraciones fuertes en su contra, no solo en cuanto a incumplimiento de sus
responsabilidades alimenticias de padre, sino el aprovechamiento de su posición con
324
Diario “El Periódico”: “Rodrigo Rosenberg: del heroísmo ¿a una trama de telenovela?”. Edición del 13
de enero 2010. www.elperiodico.com.gt/es2110013/pais/132309. Fecha consulta. 19 de marzo 2012
325
Ya en su propio país, España, como Fiscal, en su edición del 11 de diciembre de 2000, el diario EL
PAIS, da cuenta que Castresana Fernández, junto a otro fiscal, fue señalado de “pérdida de la
imparcialidad
objetiva”.
Diario
El
País,
España,
edición
del
11
diciembre
2000.
www.prensaescrita.com/adiario.php?codigo=S&pagina=http.//www.elpais.com. Fecha consulta: 20 de
marzo 2012
326
Diario
EL
PAIS,
edición
del
24
de
octubre
2010.
www.prensaescrita.com/adiario.php?codigo=S&pagina=http.//www.elpais.com. Fecha consulta: 20 de
marzo 2012
121 cuestiones sentimentales. Todo esto minó su imagen institucional y personal. Quienes
tuvimos alguna ocasión de visitar al Comisionado en su bunker, pudimos constatar que
era un dispositivo de seguridad más extremo que el de un aeropuerto. Sin exagerar, era
más fácil pasar los controles de la Casa Presidencial, que la sede del comisionado de la
CICIG. Así que fue un mero “tirar la toalla en Guatemala”,327 y no una trama, como
pretendió justificar para excusarse este personaje. Su ineficiencia y sesgo lo ahogaron
a él como persona, y a la entidad institucionalmente.
Yendo un poco atrás en el tiempo, podemos ver que como consecuencia del golpe de
Estado de 1954 en Guatemala, y ante una intervención extranjera, el segundo gobierno
de la Revolución sucumbió ante la invasión desde Honduras, por parte de las fuerzas
mercenarias de Castillo Armas, y como elemento de ataque extranjero hubo
“…bombardeos aéreos de la CIA…”.328 De allí hasta 1985, la historia política fue
turbulenta, accidentada, antidemocrática y convulsa. Es interesante que, en el ínterin
entre el derrocamiento de Jacobo Arbenz Guzmán329 en 1954, y el cese al fuego vía el
Acuerdo de Paz de 1996, mediaron más de 3 décadas de conflicto armado interno en el
cual, se pudo evidenciar la “…militarización del poder que implica el ascenso del
ejército hasta la toma de decisiones políticas sin que el poder de la burguesía
agroexportadora desaparezca; por el contrario éste se consolida, ya que el ejército
tiende a preservarlo y a fortalecerlo, sirviéndose para ello de la guerra especial, que es
contrainsurgente, contrarrevolucionaria y contrapopular, tal como fue definida en
Vietnam.”330
327
Diario
EL
PAIS,
edición
del
9
de
junio
2010.
www.prensaescrita.com/adiario.php?codigo=S&pagina=http.//www.elpais.com. Fecha de consulta: 20 de
marzo 2012
328 JONAS Susanne y David Tobis. Op. Cit. Pág. 24 y 45
329
El perfil de este gobernante, visto por uno de los grandes literatos guatemaltecos, Mario Monteforte
Toledo, es el siguiente: “Jacobo Arbenz Guzmán. Estuvo en todas las revueltas, con una absoluta frialdad
y eficacia. Nunca estaba asustado ese hombre. Tenía ideas claras. Era muy modesto. No era gente de
muchos amigos. Era cordial, pero desconfiado, discreto, callado. Nunca entenderé cómo pudo caer como
cayó.” PERDOMO ORELLANA, J.L. Y GUINEA DIEZ, Gerardo: “MARIO MONTEFORTE TOLEDODICCIONARIO PRIVADO”. Op. cit. Pág. 42
330
GUZMAN BOCKLER. Op. Cit. Pág. 183
122 Y, desde de la instauración del sistema democrático y el régimen de partidos políticos,
podemos decir que se percibe una historia política que contiene tres elementos que
Galvis Gaitán los sintetiza así: “La debilidad del sistema político, la distorsión del poder
político y la debilidad de la administración pública.”331 No se borra de la memoria
histórica, la intromisión extranjera en la política guatemalteca, vía la participación,
incluso, de diplomáticos como el caso del ex Embajador de España, Máximo Cajal y
López. Este orquestó o bien consintió una “ocupación pacífica”332 de la sede
diplomática de su país, con resultados mortales.
No obstante, poco más de treinta años después, dicho ex diplomático, insiste en que el
hecho no fue planificado para tener los resultados mortales que tuvo.333 Aunque, desde
la perspectiva de la izquierda guatemalteca, relatado por uno de sus ex comandantes
guerrilleros, solo fue una denuncia pacífica, ante la falta de atención por parte de los
organismos oficiales y los medios de comunicación.334
Esto último, respecto a los medios de comunicación,335 tiene su explicación en que en
ese período de la historia de nuestro país, éstos se encontraban con serias limitaciones
331
GALVIS GAITAN, Fernando: “Manuel de Ciencia Política”. Editorial TEMIS, S.A. Bogotá, Colombia,
2005. Pág. 122
332
“Al llegar a la embajada, fueron recibidos por el embajador Máximo Cajal, quien les facilitó el acceso,
tomando como rehenes a los otros visitantes, quienes habían sido engañados y junto con otros miembros
de la misión diplomática fueron trasladados al segundo nivel del edificio, aunque supuestamente se
trataba de una “ocupación pacífica”. Esta acción delictiva avalada por el embajador Cajal, constituyó un
claro acto de secuestro premeditado, violento y terrorista, respaldado por el uso de armas de fuego,
armas blancas y bombas incendiarias.” DIAZ LOPEZ. Op. Cit. Pág. 159
333
Este diplomático rindió su declaración testimonial ante la justicia guatemalteca, el 25 de abril 2012, vía
videoconferencia. Sus declaraciones testimoniales constan en la edición del vespertino diario “La Hora”,
en la edición de la misma fecha. www.lahora.com.gt/index.php/nacional/guatemala/actualidad/157290maximo-cajal-ofrece-su-testimonio-desde-españa-por-l. Fecha consulta: 25 abril 2012
334
“Ese mismo jueves 31 de enero, a las once de la mañana, 27 personas, la mayoría de ellas indígenas
representantes de organizaciones populares de Quiché y algunos estudiantes, ingresaron de forma
pacífica en la Embajada de España…Esa indiferencia determinó que realizaran la ocupación de dicha
sede diplomática, para así difundir las causas, propósitos y peticiones que los motivaban. La respuesta
del gobierno de Lucas García fue brutal. Las fuerzas de seguridad asaltaron la residencia y provocaron
un incendio causando la muerte de 37 personas, entre campesinos, estudiantes, pobladores, personal de
la embajada y visitantes. La masacre de la Embajada de España mostró al mundo la esencia criminal de
un régimen que había iniciado una estrategia contrainsurgente despiadada e indiscriminada.” SANTA
CRUZ MENDOZA, Santiago: “Insurgentes. Guatemala, la paz arrancada”. Tipografía Nacional.
Guatemala, 2008. Segunda Edición. Pág. 27 y 28
335
“La estructura de los medios de comunicación que caracteriza a las democracias –yendo a la cuestión
central- es una estructura policéntrica, de muchos centros. El grado y la configuración de este
123 para la libertad de expresión, so pretexto de la seguridad nacional y el conflicto armado
interno que prevalecía en el país. En ese evento trágico fallece incluso el padre de la
ahora Premio Nobel de la Paz Rigoberta Menchú, un ex canciller y otras
personalidades. La intervención extranjera en asuntos internos ha sido nefasta para
nuestro país.336
Y, finalmente, en 2012, documentalmente se ha probado la injerencia de esa Santa
Inquisición, a través de las donaciones y apoyos financieros internacionales. El
Gobierno de Suecia, vía su embajador Michael Fruhling, ha efectuado a favor de
delincuentes y asesinos sujetos a prisión. En este caso, so pretexto de estar “en contra
de la minería” y en defensa de las “invasiones pacíficas de tierras”, o de territorios
“ancestrales”, se han canalizado recursos para la defensa de asesinos y delincuentes.
Bajo el camuflaje de “activistas”, ya sea “eco-histéricos”, “patrulleros”337 o caciques de
invasiones de tierras, incluso han acabado con la vida de otros guatemaltecos que no
se pliegan a sus consignas eco histéricas, con el apoyo de los fondos de la “comunidad
internacional”.
Otro ejemplo del influjo globalizador, y condicionamiento internacional de nuestro país
deriva en intromisión vía el ataque permanente de uno de los <<nuevos>> movimientos
sociales: el ecologismo. Como ejemplo tenemos el caso de muerte de un campesino
guatemalteco en el municipio de San Juan Sacatepéquez. Esta es una comunidad en la
policentrismo varía, y mucho, de un país a otro, pero quien pretenda negar su existencia <<real>> tiene
que hacerlo –y todos los que lo niegan se sustraen siempre a esa prueba- comparándolo con el
monopolio de estructura monocéntrica característico de los totalitarismos y las dictaduras. Es cierto que
también los medios de comunicación de las democracias merecen todo tipo de reservas y acusaciones;
pero negar su policentrismo y su centralidad sería equivocarse de negación.” SARTORI, “¿Qué es la
democracia? Op. Cit. Pág. 83
336
La propia Rigoberta Menchú, también da su particular versión de los hechos: “Por supuesto, sabíamos
que iba a haber una tensión, pero pensamos que era posible que a todos los que tomaron la embajada,
les concedieran una salida del país, como refugiados políticos, para que también pudieran dar a conocer
su lucha afuera. El objetivo era precisamente informar al mundo entero de lo que pasaba en Guatemala e
informar también la misma gente interna. Fueron quemados y lo único que se puedo sacar fueron sus
cenizas. Ante esta situación, un golpe tremendo. De mi parte no era lamentar la vida de mi padre. Para
mí era algo fácil que mi padre muriera porque le tocó una vida tan salvaje y tan criminal como nos ha
tocado a todos. Mi padre estaba dispuesto, estaba claro que su vida tenía que darla. Entonces para mí no
era tanto dolor de aceptar la muerte de mi padre…” BURGOS Elizabeth: “Me llamo Rigoberta Menchú y
así me nació la conciencia”. Siglo Veintiuno Editores. México, D.F. 1987. Pág. 210
337
Ver: Diario “Siglo XXI”. Edición 20 marzo 2012: www.s21.com.gt/nacionales/2012/03/20/pdhpatrulleros-son-ley-san-juan-sacatepequez. Fecha consulta: 2 abril 2012
124 que ni siquiera existe una explotación minera. Dista treinta minutos de la ciudad capital
de Guatemala. La muerte de este campesino, por parte de turbas que se “oponen a la
minería” que se proyecta desarrollar en el área, es el más vivo ejemplo de lo pernicioso
de uno de los movimientos postmodernos, violentos y sesgados, en la mayoría de
casos.338 Pero los asesinos cuentan con el apoyo financiero del gobierno sueco para su
defensa. No solo es intromisión internacional, además es violación de los derechos de
los contribuyentes suecos, y defender causas injustas.
Sumado a lo anterior, el condimento perfecto para la violencia que los “nuevos
movimientos” imponen, esta la cooperación internacional. Los países donantes, o
comunidad internacional, como eufemísticamente suele autodenominarse en nuestro
país, son un ejemplo de la intromisión extranjera en asuntos internos y de soberanía
nacional. Si los movimientos nacionalistas, en otras latitudes pugnan por oponerse al
control centro y periferia,339 no hay duda que en el caso precitado, la cuestión es por
demás oprobiosa para nuestro país.
Pero la presencia internacional no sólo impacta en las decisiones de Estado, en la
productividad nacional, sino también en contra de la vida340 de guatemaltecos. Pero no
es de sorprenderse, por cuanto el fallecido Olof Palme,341 también apoyaba al
movimiento guerrillero en El Salvador y al Sandinismo en Nicaragua.342 Esto no es más
338
PEDRO IBARRA Y FRANCISCO LETAMENDIA, definen un movimiento social como “una red de
interacciones informales entre individuos, grupos, y/o organizaciones que, en sostenida y habitualmente
conflictiva interacción con autoridades políticas, élites y oponentes –y compartiendo una identidad
colectiva- demandan públicamente cambios en el ejercicio o redistribución del poder a favor de intereses
colectivos.” “Manual de Ciencia Política”. Op. cit. Pág. 372
339
Ibid., IBARRA Y LETAMENDIA. Ibid. Pág. 373
340
En ese sentido, la vida de los partidos políticos, según Michels, “…debe demostrar necesariamente
una tendencia aún más fuerte hacia la democracia que la manifestada por el Estado. El partido político se
funda, en la mayor parte de los casos, sobre el principio de la mayoría, y siempre sobre el principio de la
masa.” Michels, Robert. Tomo I. Op. cit. 50
341
“PALME, OLOF (Estocolmo 1927-íd., 1986) Político sueco. Miembro del Partido Socialdemócrata
desde 1956, dos años después obtuvo un escaño en el Parlamento. Ministro sin cartera entre 1963 y
1965…Fue reelegido jefe del Gobierno en 1970 y 1973, pero tras la derrota de su partido en las
elecciones de 1976 dimitió de su puesto se hizo cargo de la dirección de la oposición parlamentaria. En
las elecciones generales celebradas en septiembre de 1982, el Partido Socialdemócrata se alzó con la
victoria consiguiendo una mayoría absoluta, por lo que volvió a ser elegido primer ministro, cargo que
desempeñó hasta su asesinato el 28 de febrero de 1986.” Diccionario de historia política del siglo XX”.
Editorial Tecnos (Grupo Anaya, S.A.). Madrid, 2001. Pág. 541
342
Ver: www.vimeo.com/37977312. Fecha de consulta: 2 abril 2012
125 que pura y simple injerencia internacional en asuntos nacionales o internos, que no
abona ni contribuye al fortalecimiento de las instituciones y el sistema político. El
fenómeno no es nuevo. Durante el conflicto armado interno en Guatemala, una parte de
la comunidad internacional financió a la guerrilla y otra al Ejército. El país puso los
muertos y el territorio. En el caso nuestro, todas estas características analizadas, de
subdesarrollo político343 o incipiente democracia, producen efectos que, sin ser
exhaustivos, se resumen así:
a) deslegitimación de los partidos políticos;
b) percepción de altos grados de anomia ideológica;
c) evidente carencia, o escasez parcial, de institucionalidad de los partidos políticos;
d) rechazo e insatisfacción de la ciudadanía con el sistema democrático y con el
sistema de partidos políticos;
e) incontrolable, pero legal facultad del Organismo Ejecutivo, para designar funcionarios
de alto nivel, sin ningún control o auditoría social;
f) la compra de voluntades y control sobre funcionarios públicos, por parte de
intermediarios, financistas y empresas nacionales o extranjeras, para obtener cuota de
poder en adjudicación de contratos de obra pública;
g) prevalencia de una débil o ausente capacidad del Estado para fiscalización y
transparencia, excepto los casos en que la sociedad civil344 denuncia directamente,
tráfico de influencias;
h) existencia de nepotismo, directo o indirecto;
i) ausencia de la carrera administrativa y por lo tanto carencia de una tecnocracia; j)
existencia de políticas de gobiernos pero carencia casi total de políticas de Estado;
k) tráfico de influencias;
l) injerencia directa o indirecta de la “comunidad internacional” ó países donantes, en
las decisiones y políticas de gobierno;
343
Monteforte Toledo, afirma que “Cuando un país como Guatemala es subdesarrollado, está
subdesarrollado todo; desde el arzobispo, hasta el presidente de la República. El subdesarrollo es el
estado rural de una sociedad, la civilización al revés.” PERDOMO ORELLANA y GUINEA DIEZ. Op. cit.
Pág. 197
344
Sin embargo, no debe perderse de vista, que autores como TOURAINE, advierten que “…la sociedad
civil se descompone cuando las demandas sociales se subordinan al programa político.” TOURAINE,
Alain: “¿Podremos Vivir Juntos?". Fondo de Cultura Económica. México, D.F. 2000. Pág. 107
126 m) invasión de roles de intermediación de la sociedad civil,345 en la esfera política de
manera vedada;
n) socavamiento de los partidos políticos por el capital346 “emergente”, grupos paralelos,
o poder oculto;
ñ) autoridades electorales con poca formación y experiencia en dicha especialidad;
o) inexistencia de financiamiento público para los partidos políticos;
p) mínima o poca capacidad de los órganos jurisdiccionales para dirimir conflictividad
electoral o político-partidaria;
q) escasa formación y capacitación ideológico-partidaria, etc.;
r) hasta ahora, el sistema democrático muestra poca capacidad para generar bienestar
a las grandes mayorías;
s) debilidad ante el avance del poder de las transnacionales, que dictan agendas y
leyes en su beneficio, y con mayor incidencia en países pequeños y democracias
incipientes como la nuestra;
t) prevalencia de formalismos, burocratización, corrupción347 y nepotismo en la esfera
gubernamental;
u) inexistencia de una tecnocracia que afiance la gestión pública y la calidad del gasto
público;
v) condicionamiento, sometimiento o dependencia de los gobiernos de turno, respecto
al poder económico y grupos paralelos, y la “comunidad internacional” o países
donantes;
w) injerencia de algunos países, vía cooperación internacional, para incidir en la justicia,
el sistema político y la política guatemalteca.
345
Según Caminal Badía, “La sociedad civil tiene que ver con la generación de influencia a través de la
vida de las asociaciones democráticas y de la esfera pública cultural.” Op. cit. Pág. 32
346
Al respecto del capital, un clásico de la economía como John Stuart Mill, considera que “Toda adición
al capital proporciona a los trabajadores o bien empleos adicionales o bien una remuneración adicional,
enrique al país o a la clase trabajadora.” Op. Cit. Pág. 83
347
Al referirse al tema de la corrupción, el autor Carlos Fuentes, en uno de sus diálogos en que refleja el
ejercicio del poder en el gobierno mexicano, dice: “Mi querido Nicolás: no hay gobierno que funcione sin
el aceite de la corrupción.” FUENTES, Carlos: “La Silla del Águila”. Op. cit. Pág. 50
127 ¿Qué hacer con la legislación electoral guatemalteca?
Pero haciendo abstracción de las coyunturas históricas y las condiciones particulares
de los países, es necesario retomar el punto de los factores que condicionan la
institucionalización de los partidos políticos guatemaltecos. Es innegable que siempre
es necesario contar con un conjunto de normas para actualizar y armonizar la
legislación electoral en general. Y sobre todo, privilegiar el sistema democrático de
gobierno, porque de momento históricamente, no existe otro sustituto mejor. Podrá
tener el sistema democrático todo tipo de falencias e imperfecciones, pero no
podríamos imaginar retroceder a períodos en que los ciudadanos no elegían, sino
únicamente se imponían los regímenes de turno.
De allí que, en determinado momento, para preservar el orden democrático y la
institucionalidad político-partidaria, como un presupuesto para preservar una paz firme y
duradera, autores como Del Vecchio,348 adviertan acerca de la necesidad que “En
materia de delitos, la justicia rectificadora se ejercita, de un modo necesario e inmediato
en la forma judicial, porque se trata cabalmente de reparar contra la voluntad de una de
las partes, un daño injustamente producido…”
Pero en la práctica tiene vigencia la aseveración de Gómez de Liaño,349 cuando al
referirse a la paz dice que: “La paz sin libertad y sin seguridad jurídica es, como tantas
veces se ha dicho, la paz de los cementerios.” Nuestro país ha pagado una alta cuota
en vidas humanas, a lo largo de su accidentada historia política. Hoy, luego del cese
definitivo del conflicto armado interno, sufrimos los embates de la violencia con gran
cauda de muertos. Unicamente que ahora el verdugo no es ideológico, sino tiene tinte
delincuencial común, narco-criminalidad y delincuencia organizada transnacional y
local. Seguimos teniendo entonces, como dice Gómez Liaño, una “paz de los
cementerios”.
348
349
DEL VECCHIO, Giorgio: “Filosofía del Derecho”. Editorial Bosch, Barcelona. 1974. Pág. 14 y 15.
GOMEZ DE LIAÑO, Ignacio: “Recuperar la Democracia”. Ediciones Siruela. Madrid, 2009. Pág. 31
128 Nuevamente, es importante destacar que, en el pensamiento de Rousseau, la
Constitución posibilita el denominado “pacto social.”350 Es la fuerza que somete la
voluntad general, pero que a la vez de su obediencia y observancia, depende el grado
de libertad que la sociedad goce. La Constitución entonces, en palabras de Sánchez
Agesta,351 constituye una “…superley escrita, que tiende a limitar el poder mediante su
división, para garantizar una esfera de autonomía de libertad.” El mismo autor, ahonda
en el tema al considerar que a la Constitución se le puede conceptuar como una ley
trascendente, como un pacto constitutivo, como un hecho normativo, como un plan de
una voluntad política –del pueblo o de la nación- y como el pacto social, por el que se
constituye la comunidad, mediante el pacto de gobierno, lo articula y, en algún caso, lo
limita.352
Tratadistas como Bobbio, explican que hay dos concepciones negativas del Estado,
“una débil y otra más fuerte: el Estado como mal necesario y el Estado como mal no
necesario; únicamente esta segunda lleva a la idea del fin del Estado.”353
Parafraseando esta afirmación, podríamos decir que en materia del sistema política y
de los partidos políticos en sí, estos también constituyen “un mal necesario”. Por lo
tanto, los Estados necesitan de la existencia de un sistema político, instituciones y
legislación contextual respectiva, que le permitan sustentar una democracia y una
adecuada representación de los intereses ciudadanos.
Nuestro país, cuenta hoy con una institucionalidad en materia política, que tuvo su
origen en el trabajo desarrollado por la Asamblea Nacional Constituyente, cuyos
miembros fueron electos mediante convocatoria del último gobierno de facto, fruto del
“único partido de hecho que opera en el país”, como afirma Guzmán,354 y que pasó a
350
ROUSSEAU, Jean Jacques: “El Contrato Social”, Ediciones Escolares, S.L. Madrid, 1999. Pág. 32
SANCHEZ AGESTA, Luis. “Principios de Teoría Política”. 6ª. Edición. Editora Nacional, Madrid, 1976.
Pág. 330
352
SANCHEZ AGESTA. Ibíd. Págs. 331 y 332
353
BOBBIO, Op. Cit. Pág. 179
354
“…un relevo más se hacía necesario, acordaron privilegiar a la facción que, dentro del ejército,
encabeza el General Oscar Humberto Mejía Víctores, quien el 8 de agosto de 1983 dio un nuevo golpe
de mano y pasó a ser, por designación propia y de los suyos, el jefe de Estado. Durante su gestión se ha
confirmado, cada vez más, el carácter del ejército como único partido político de hecho que opera en el
país. Con su anuencia funcionan pequeños grupos políticos pertenecientes todos a las diferentes
351
129 ser en la historia nacional, el último que ésta registra. Guatemala tiene un texto
constitucional relativamente joven, garantista y que privilegia a la persona y al bien
común. La Constitución Política de la República, fue promulgada en mayo de 1985, y en
mayo 2012, cumple 27 años de vigencia.
Entre las instituciones novedosas que surgieron derivadas del texto constitucional
destaca, entre otras, el reconocimiento en el artículo 46 de la preeminencia del derecho
internacional.
355
Y, además, no puede obviarse que el quehacer político-partidario en
nuestro país, obedece a una instauración democrática, que se efectuó sobre bases
políticas bastante débiles, cuestionables y de muy poca incidencia y arraigo político.
Lapidariamente, autores como Torres Rivas, sentencian que en nuestro país, la era
democrática, se redujo a que “El ejército retuvo el poder y cedió la administración.” 356
Y, yendo más lejos, el Informe Nacional de Desarrollo Humano, da cuenta que la
estabilidad, institucionalidad y pervivencia de los partidos políticos en Guatemala, es
prácticamente inexistente.357 Pero esto tiene varios elementos a considerar, para tratar
de buscar las causas, no tanto los efectos. La carencia de financiamiento público para
los partidos políticos, permite que éstos obtengan los recursos de grupos oligárquicos,
capitales “emergentes”, y hasta se duda si en algunos casos, se reciba financiamiento
de grupos paralelos, ilegales o poder oculto.358
facciones en que está dividida la derecha urbana y ladina. Coludidos con el ejército, han integrado una
Asamblea Nacional Constituyente, elegida entre opciones derechistas que afirma dará un paso hacia una
supuesta democratización…” GUZMAN BÖCKLER. Op. Cit. Pág. 187
355
Al respecto el artículo 46 de la Constitución Política de la República de Guatemala, establece que:
“Preeminencia del Derecho Internacional. Se establece el principio general de que en materia de
derechos humanos, los tratados y convenciones aceptados y ratificados por Guatemala, tienen
preeminencia sobre el derecho interno.”
356
Como afirma Edelberto Torres Rivas. Prólogo de: “Rendición de Cuentas” – Juan Alberto Fuentes
Knight. F y G Editores. Guatemala, 2011. Pág. XVI
357
PROGRAMA DE NACIONES UNIDAS PARA EL DESARROLLO: “Informe Nacional de Desarrollo
Humano 2009/2010. Pág. 231
358
ROBLES MONTOYA, Jaime:”El poder Oculto-Serie de Ensayos Sobre los Poderes Ocultos”.
Fundación Soros y Fundación Myrna Mack. Guatemala, 2002. Pág.313 a 316
130 El analfabetismo359 que sigue prevaleciendo como una maldición ha descendido de un
37.46% en 1995 a un 17.46% en 2011, a nivel nacional. Evidentemente, este factor
determina que haya ejercicio de voto poco instruido,360 la ruralidad en la que viven
grandes masas361 de votantes, incide en el acceso y participación en las mesas
electorales, lo extendido del período autorizado para campaña362 electoral y la poca
diferenciación entre ésta y la propaganda363 partidaria, la conformación del Tribunal
Supremo Electoral y el tipo de sanciones a partidos políticos, así como los requisitos
para el nacimiento de un partido político, entre otros, son elementos a considerar
ineludiblemente, para entender el cuadro tan desolador que presenta Naciones Unidas,
en el informe precitado.
Como elemento que se estima importante para entender esta volatilidad de los partidos
políticos en Guatemala, y el poco desarrollo de formación política, se tiene también una
aparente “doble moral” de la autodenominada “sociedad civil”.364 Esta, cuando ejerce
funciones de auditoría social en el tema político-partidario, no avala ni ve con buenos
ojos, que se promueva el financiamiento público para los partidos políticos. Es frecuente
359
Comité Nacional de Alfabetización, CONALFA. www.conalfa.edu.gt/estadis.html fecha consulta: 26
febrero 2012
360
En cuanto a los alcances y efectos del analfabetismo, Mario Monteforte Toledo, ironiza respecto a la
generación presente, cuando dice: “Antes se leía; ahora reina un analfabetismo de los que saben leer
pero no leen.” PERDOMO ORELLANA, J.L. Y GUINEA DIEZ, Gerardo. Op. cit. Pág. 167
361
ORTEGA Y GASSET, cuestiona acerca de cuál debe ser la condición de las masas, y se pregunta:
“¿Cuál es, pues, la condición humana? El reconocimiento de que la misión de las masas no es otra que
seguir a los mejores, en vez de pretender suplantarlos. Op. Cit. Pág. 154
362
CAMPAÑA: “…Podría compararse la campaña electoral moderna con un concierto para instrumento y
orquesta: el candidato representa al instrumento, cuyo sonido tiende a perderse cada vez más, en medio
del estruendo de la orquesta.”DUVERGER. Op. Cit. Pág. 392
363
PROPAGANDA: “…la propaganda del partido…que tiende a difundir su doctrina, a extender su
radiación, a multiplicar sus miembros. Los primeros partidos fueron organizaciones puramente
electorales, cuya función esencial consistía en asegurar el éxito de sus candidatos: la elección era el fin;
el partido, el medio. Luego, el desarrollo de las funciones propias del partido, como organización capaz
de actuar directamente en la vida política, condujo a utilizar la elección al servicio de la propaganda
partidista. DUVERGER, Op. Cit. Pág. 392.
364
En la contraposición sociedad civil-Estado, “…se entiende por s. civil la esfera de las relaciones entre
individuos, entre grupos y entre clases sociales que se desarrollan fuera de las relaciones de poder que
caracterizan a las instituciones estatales. En otras palabras, la s. civil es representada como el terreno de
los conflictos económicos, ideológicos, sociales y religiosos, respecto de los cuales el estado tiene la
tarea de resolverlos ya sea mediándolos o suprimiéndolos; o como la base de la que parten las
demandas respecto de las cuales el sistema político está obligado a dar respuestas; o como el campo de
las varias formas de movilización, de asociación y de organización de las fuerzas sociales que se dirigen
hacia la conquista del poder político.” BOBBIO, Norberto, MATTEUCCI, Nicola y PASQUINO Gianfranco:
“Diccionario de Política”. 12a. edición. Siglo Veintiuno Editores. México, 1983. Pág. 1523
131 manejar el argumento ad-misericordiam que en un país con tantas carencias en salud,
educación, seguridad, etc., no es justo subsidiar las campañas políticas. Pero
contradictoriamente, también sataniza y magnifica el efecto del financiamiento privado
para las campañas políticas, con o sin razón.
Con esto se obvia, deliberadamente, que se lanza a los partidos políticos y sus
dirigencias, directamente a los brazos del financiamiento privado –con los consiguientes
compromisos de pago de facturas políticas de los financistas-. Y, por otra parte, se
limita el desarrollo de otras expresiones políticas, quizá más genuinas o mejor formadas
política e ideológicamente, que podrían oxigenar el sistema político guatemalteco y
evitar el anquilosamiento político, la anomia y la atonía365 política, la improvisación de
cuadros partidarios y el secuestro del quehacer político por el mercado, y su
consiguiente proceso de globalización.
Esto último, para autores como Ander-Egg, se atreven a afirmar que esta globalización
no es más que un proceso de mundialización/planetización, o la “…prolongación del
capitalismo
a
escala
internacional…o
que
constituye
la
fase
superior
del
imperialismo…”366 También es necesario atacar la ineficiencia aparente o real de la
democracia, para responder a las exigencias sociales. Sólo así se puede prevenir caer
en nuevos conflictos sociales de dimensiones inimaginables, y que no se cumpla lo
afirmado por el ex comandante guerrillero alias César Montes,367 quien advierte que
“…ahora es necesario encontrar por medios pacíficos, el camino para corregir las
desigualdades. Si nos dejan. Porque la lucha continúa.”
Podemos decir que esta concepción del constitucionalismo es la que se impone a lo
largo de los siglos XIX y XX. Sin embargo, en el presente siglo XXI, se cuestiona no
sólo la rigidez de los preceptos fundamentales que incluye, sino que aún se cuestiona,
a lomo de la globalización, su imperio y sobrevivencia derivado de la limitación del
365
ZIZEK. Op. Cit. Pág. 38
ANDER-EGG, Alexander: “Globalización- El proceso en el que estamos metidos”. Editorial Brujas.
Córdoba, Argentina. 2010. Pág. 17
367
MACIAS, Julio César: “La Guerrilla fue mi Camino- Epitafio para César Montes”. Editorial Piedra
Santa. Guatemala, 1997. Pág. 390
366
132 poder político368 y vaciamiento que sufre el Estado y la soberanía de cada pueblo frente
a las fuerzas y el poder del mercado. Y como afirma Caballero Harriet, la creación del
Estado moderno, constata la tesis que “la economía determina la forma del estado
político.”369 Y más aún ahora con los avances de la globalización y el avance del
neoliberalismo, el mismo autor, sentencia que “Este modelo en el que el subsistema
político está definitivamente sometido al subsistema económico.”370
Es un hecho que la democracia política, derivada de nuestras constituciones, ha tenido
una búsqueda permanente de satisfacer la necesidad, insoslayable, de garantizar que
no seamos gobernados despótica y autocráticamente, por las fuerzas postmodernas
que se disputan el control social global.371 Esto no implica que los políticos y la política
no sean repugnados históricamente, en todas las culturas.372 Y la pregunta sería ¿Será
suficiente ante la avasalladora fuerza del mercado, el neoliberalismo y la globalización?
Ante esto, en palabras de Sánchez Agesta, la respuesta la tiene el constitucionalismo
visto como “doctrina del poder constituyente a los poderes constituidos”,373 al constituir
todos los poderes, han de estar sobre los poderes que constituyen y que sólo son
reformables por la misma nación que ha establecido las leyes fundamentales.
En términos del surgimiento, reconocimiento, accionar e institucionalización de los
partidos políticos, es importante que la Constitución será quien marque la concordancia
con el medio. El cruce de fuerzas políticas, sociedad, estado, derecho y la expresión de
368
Si bien es cierto, hay autores como Recaséns Siches, que de manera puntual señalan que “La
organización del poder por medio del Derecho implica una limitación de ese poder…y consiguientemente,
no puede ir más lejos de lo establecido en el Derecho, en tanto quiera permanecer como poder jurídico y
no quiera intentar ser un poder arbitrario.” RECASENS SICHES, Luis: “Tratado General de Filosofía del
Derecho”. Editorial Porrúa, S.A. México, D.F. Pág. 231
369
CABALLERO HARRIET, Op. cit. Pág. 49
370
Ibíd. Pág. 176
371
Al respecto, de manera puntual y a nuestro juicio de latente actualidad, TOURAINE, advierte que “El
liberalismo económico es tan destructor del individuo como el nacionalismo cultural…Uno y otro procuran
imponerle sus leyes, que el primero afirma impersonales y el segundo define como la afirmación de una
identidad particular, e incluso de una vocación histórica.” TOURAINE. Op. cit. Pág. 299
372
“Pica, a la verdad, en historia la unanimidad con que todas las clases españolas ostentan su
repugnancia hacia los políticos. Diríase que los políticos son los únicos españoles que no cumplen con su
deber ni gozan de las cualidades para su menester imprescindibles…Los políticos actuales son fiel reflejo
de los vicios étnicos de España.” ORTEGA Y GASSET, José: “España Invertebrada”. Revista de
Occidente, Madrid, 12ª edición en castellano. Madrid, 1962. Págs. 74 y 75
373
Op. Cit. Pág. 332
133 la voluntad general, pasa por el tamiz de las normas fundamentales que rijan en un
momento y lugar determinados. Podemos decir entonces, que fuera del orden
constitucional, conforme el influjo del mercado, el neoliberalismo y la globalización, el
equilibrio de fuerzas puede crear un orden “falseado”. O como lo denomina Caballero
Harriet, que se produzca “la materialización de <<la gran utopía neoliberal>>, tras la
redistribución de tareas entre los diferentes <<actores>> sociales bajo el imperativo de
la ley del mercado, es el llamado <<Estado mínimo>>.”374 Es decir, reducir a los
partidos políticos en simples maquinarias o vehículos electorales, pero no en auténticos
intermediadores entre la sociedad y el poder del Estado.
Es frecuente que la avalancha neoliberal denomine peyorativamente a la Constitución.
A veces le denominan “constituciones de papel”, “formas constitucionales”, “apariencias
constitucionales”, como afirma Sánchez Agesta.375 Y en la medida en que se demerita,
atenúa y desvaloriza la majestad de las normas constitucionales, los partidos políticos
también pierden credibilidad, no sólo por sus propios actos, sino porque interesa la
entronización de un nuevo poder. El poder del mercado, que dicte normas, incluso que
pretenda modificar los preceptos constitucionales.
En nuestro caso, el fallecido fundador de la Universidad Francisco Marroquín, Doctor
Rafael Ayau Cordón, impulsó hasta los últimos días de su vida, insistentemente
reformas constitucionales tendentes a legitimar una reestructuración del Estado y sus
instituciones, desde la óptica neoliberal. En contrapartida, otras fuerzas de la sociedad
civil, pretenden también modificaciones constitucionales, desde la óptica de la
“identidad étnica” de los pueblos mayas, pero con ello se corre el riesgo que “se
nieguen los derechos de las minorías, en nombre de una indispensable homogeneidad
cultural.”376 El proyecto se denomina “Pro-Reforma”,377 y que provocó largas
discusiones en el seno de las distintas comisiones del Congreso de la República.
374
CABALLERO HARRIET. Op. cit. Pág. 90
Op. Cit. Pág. 375
376
TOURAINE. Op. cit. Pág. 300
377
www.proreforma.org. Fecha consulta: 27 marzo 2011
375
134 Aunado a esto, la Constitución Política de la República de Guatemala, también se
encuentra bajo el asedio de descalificación y de imputación de todos los males del país,
por parte de una “sociedad civil”378 que se escuda en discursos y recetas de los
organismos internacionales. Este discurso y asedio por parte del movimiento de
sociedad civil y “nuevos movimientos”,379 resta poder a los políticos y a los partidos
políticos, en la conducción de la cosa pública.380 Obviamente, los costos y el desgaste
únicamente corren por cuenta del sistema político nacional.
Este fenómeno no es nuevo. Ya Ortega y Gasset,381 lo reflejaba, cuando trataba lo
relativo a que “al político se le odia más que como gobernante como parlamentario. El
parlamento es el órgano de la convivencia nacional demostrativo de trato y acuerdo
378
El gobierno de turno, acepto la inclusión de una “pre-comisionada de seguridad”, que supuestamente
es la encargada de la modernización y depuración de la Policía Nacional Civil. Esto porque la activista
Helen Mack Chang, desde una ONG, ha cobrado un protagonismo mediático enorme, luego de llevar a
juicio al supuesto autor material del asesinato de su hermana Myrna.
379
“…el ecologismo un modo nuevo de hacer política, caracterizado por la orientación emancipatoria, el
posicionamiento antipatriarcal y antiproductivista…” IBARRA Y LETAMENDIA. “Manual de Ciencia
Política”. Op. cit. Pág. 377
380
No obstante, en el debate respecto al influjo de la sociedad civil en las decisiones políticas y de
Estado, hay autores que reconocen en la sociedad civil una especie de reserva moral societaria, un
último muro de contención ante la avalancha del dios mercado y la globalización. Otros, en cambio, no lo
consideran así de relevante y de positivo su actuar. De esa cuenta, podemos confrontar dos visiones, en
autores como TOURAINE, afirman que la sociedad civil, “En una sociedad dominada por la economía de
mercado, son los movimientos de defensa de los derechos culturales los que mejor la representan; en las
sociedades totalitarias, es un movimiento social total, como lo fue Solidaridad en Polonia, porque ese
movimiento opone a un poder total la liberación de un actor a la vez nacional, democrático y obrero. Si
hoy hay que hablar de sociedad civil, es para afirmar que el Sujeto habla en lo sucesivo por sí mismo; ya
no puede hacerlo de otra manera porque está cercado a la vez por el universo económico del mercado y
las técnicas y por las ideologías comunitaristas encarnadas por estados o partidos políticos.” TOURAINE.
Op. cit. Págs. 106 y 107. Y, otros como ZIZEK, que cuestionan la participación del movimiento obrero en
la caída de los países del bloque socialista, al afirmar que: “En el caso de los partidos obreros del mundo
socialista, el autor Zizek, tiene un controversial punto de vista respecto al papel que jugaron en la caída
de estos regímenes autoritarios, siendo dichos partidos la base misma de sustentación –aparentementede aquellos, y lo explica de esta manera: “De este modo, uno puede seguir soñando que la Revolución
está a la vuelta de la esquina: sólo necesitamos un verdadero liderazgo que sepa organizar el potencial
revolucionario de los trabajadores. De creer tal cosa, cabría entender que Solidarnosc (Solidaridad) fue
originariamente un movimiento obrero, <<traicionado>> luego por sus líderes, vendidos a la Iglesia y a la
CIA…Desde luego, algo de verdad hay en este modo de pensar: lo más irónico de 1953, Hungría en
1956, Solidaridad en Polonia) fueron en origen levantamientos obreros que solo más adelante
desbrozaron el camino a los movimientos <<anticomunistas>> al uso; antes de sucumbir ante el enemigo
<<externo>>, el régimen supo de su falsedad por aquellos a quienes tales <<Estados de obreros y
campesinos>> evocaban como su propia base social. Sin embargo, eso mismo también demuestra que la
revuelta de los trabajadores carecía de todo compromiso socialista sustancial: en todos los casos,
cuando el movimiento explotó, la ideología <<burguesa>>al uso (libertad política, propiedad privada,
soberanía nacional, etc.) se apoderó de él sin levantar revuelo.” ZIZEK. Op. Cit. Pág. 122 y 123
381
ORTEGA Y GASSET, “La España Invertebrada”. Op. cit. Pág. 75 y 76
135 entre iguales.” Existe una doble moral, tanto en la sociedad civil, como en otras formas
de expresión social que, paulatinamente van creando una sensación de repugnancia,
descrédito y censura hacia todo lo que implica política partidista. Y esto también corroe
el sistema político, o por lo menos no lo deja alcanzar la mayoría de edad. No obstante,
el reto para la clase política sigue siendo que “Nunca debemos sentirnos satisfechos
con nuestros éxitos. Debemos refrenar la autosatisfacción y criticar constantemente
nuestros defectos, al igual que nos lavamos la cara y barremos el suelo diariamente
para quietar el polvo y mantenerlos limpios.”382
El contrato social y el poder político:
Cabe recordar a esta altura, el pensamiento de Recaséns Siches, quien afirma que el
Estado constitucional moderno, se halla en el ideario de la democracia liberal.383 Pero
esto no garantiza que en la sociedad globalizada actual se busque o se tenga un criterio
iusnaturalista en todo lo que se legisla y promueve. Esto aplica desde el derecho y
desde la política. Tanto filósofos como políticos, coinciden en que “justicia” consiste en
“dar a cada uno lo suyo”, y esto parece suficientemente claro.
Pero lo difícil de decidir es con qué óptica –jurídica o política- se contará para que la
sociedad determine qué es justo o no. De allí que la afirmación de Rousseau respecto a
que “Lo que pierde el hombre por el contrato social es su libertad natural y un derecho
ilimitado a todo lo que intenta y puede alcanzar; lo que gana en él mismo es la libertad
civil y la propiedad de todo lo que posee,”384 tenga un significado actualizado al día de
hoy. Vivimos tiempos en los que so pretexto de la amenaza terrorista, del narcotráfico y
otros males mundiales, se limitan derechos, se restringen libertades y se acomoda al
derecho a otros fines que no son, precisamente “dar a cada uno lo suyo”, sino más bien
“dar a cada Estado lo que le interese”.
382
MAO TSE-TUNG: “Citas del Presidente Mao Tse-Tung”. “Organicémonos” (39 de noviembre de 1943).
Obras Escogidas, t. III. Op. cit. Pág. 279
383
RECASENS SICHES. Op. cit. Pág. 375
384
ROUSSEAU, Jean Jacques: “El Contrato social”. Edición Integra. Ediciones Escolares, S.L. Madrid,
1999. Pág. 33
136 Esta problemática política y jurídica, ha sido planteada por autores como Bobbio,385 que
advierten que esa pérdida de poder natural frente al poder político, va implícita en la
propia definición de éste, toda vez que derivado de ello, el Estado “…está en posibilidad
de recurrir en última instancia a la fuerza (y es capaz de hacerlo porque detenta su
monopolio)…”. Hoy, en medio de una difusa frontera entre lo justo e injusto, lo legal y lo
legítimo, en la que los criterios de valoración se acomodan al mercado, a los intereses
de las potencias hegemónicas, o de la potencia unipolar estadounidense, para la cual
los únicos países que suscitan su interés luego del 11-S, según Oppenheimer,
empezaban con la letra “I”,386 vuelve a cobrar vigencia y sobrada importancia una
discusión clave. Es acerca de cuál es el papel de los políticos y la política, en la
construcción del Estado postmoderno, o del Estado que afronta la era de la
globalización y el dominio del mercado.
Se evidencia muy fácilmente que se perfila un Estado que, no sólo está sujeto a los
intereses del mercado, que busca imponer “la democracia occidental” a sangre y fuego
en todas las culturas, sino que se percibe la imposición de legislación global
supranacional igualmente impositiva. A nuestro criterio, el influjo de esta tendencia es
tal, que incluso pretende establecer y hacer creer, que se acabaron las ideologías, y
que el capitalismo será el sistema económico dominante para el presente siglo. Esto no
sólo impacta en la producción del Derecho, sino también en la generación de ideas y
estrategias políticas, así como en los sistemas políticos. .
Son innumerables los problemas con que la humanidad va tropezando. Además, vive
un aparente vacío ideológico, debilitamiento de la política o sustitución de ésta por el
mercado y las transnacionales, vemos cómo la crisis de monedas como el dólar
(generada por las grandes multinacionales y que produjo más pobres a los pobres y
más ricos a los ricos), y la del euro (a nuestro criterio producida esencialmente por
385
Bobbio. Op. Cit. Pág. 110
El escritor y periodista Oppenheimer, explica que “…los únicos países que suscitaban interés en la
capital norteamericana en la nueva era de la lucha antiterrorista eran aquellos que empezaban con la
letra “I”: Irak, Irán e Israel. Todo lo demás era, y sigue siendo, secundario.” OPPENHEIMER, Andrés:
“Cuentos Chinos. El engaño de Washington, la mentira populista y la esperanza de América Latina” Op.
cit. Pág. 131
386
137 aniquilamiento paulatino de las soberanías de los países miembros de la Unión
Europea).
Como consecuencia, se han generado movimientos como el de los “indignados”387 que,
irónicamente en contra de la globalización, pero lo primero que logró fue que se
globalizó. Pero, a pesar que se evidencia anomia ideológica, o por lo menos no la han
articulado aún, se pueden ver consignas como: “No es el principio del final, sino el final
del principio”, cuando son desalojados violentamente de plazas en Madrid, Londres o
New York.
Frente a un panorama como este, los políticos están llamados a generar propuesta
coherente, democráticamente articulada, ajustada a los inputs que se generan desde la
sociedad que reacciona ante la avalancha globalizadora y la insatisfacción de sus
necesidades básicas y que evidencia que el Estado ha sucumbido ante los dictados del
mercado y las transnacionales.
Queda pues, como tarea pendiente para la política, llenarse de más sociedad, y a la
sociedad saturarse de política. Esa sinergia puedan incidir en re-direccionar el Estado,
la política y el derecho, y la calidad de políticos y que el Papa Juan Pablo II
vislumbró,388 asuman el poder, en beneficio de la calidad de vida y de la dignidad de los
ciudadanos. Sólo si aceptamos que las limitaciones económicas condicionan el
desarrollo de las personas, podemos vislumbrar en el mediano plazo, sustentadas y
articuladas propuestas que incidan en la producción jurídica para que se generen
cambios esenciales en los órdenes económico, social, cultural y político. Esto
demandará, en países pequeños como el nuestro que “A medida que fragüemos
interacciones democráticas más amplias, debemos distanciarnos de los aliados a las
387
Diario
español
“El
Mundo”,
edición
28
febrero
2012.
www.prensaescrita.com/adiario.php?codigo=S&pagina=http:/www.elmundo.es. Fecha consulta: 7 abril
2012
388
Un artículo de la revista MATER UNITATIS, cita que Juan Pablo II, en cuanto a la participación política
de los laicos católicos, “le pedía a los hombres públicos católicos que exaltaran las dos “c”: más Coraje y
más Coherencia, entre obrar y el hacer, y les pedía que evitaran otras dos “c”: la Cobardía y el
Clericalismo.” www.materunitatis.org/politicos04.html. Fecha consulta: 7 abril 2012
138 pasadas estructuras de poder y también de las nuevas estructuras de poder de los
oligarcas –al menos en la medida que lo permita la realpolitik-.“389
Otros factores condicionantes en la política guatemalteca:
I.
De la invasión del derecho penal en el ámbito electoral:
En Guatemala, como lo afirma Medrano Valenzuela, el delito electoral, “ha existido a lo
largo de los últimos 45 años en la historia política.”390 El Código Penal, Decreto No. 1773 del Congreso de la República, en el Capítulo VI, contiene los “delitos eleccionarios”,
específicamente en el artículo 407. Este a su vez se subdivide en las literales de la “A”
a la “N”. Posteriormente en el año, 2010, el Congreso de la República de Guatemala,
aprobó y puso en vigencia el Decreto No. 4-2010, por virtud del cual se crearon nuevas
tipologías de delitos electorales. Asimismo, mediante el artículo 16 de ese decreto, se
adicionó al artículo 407 del Código Penal, Decreto 17-73 del Congreso de la República,
la literal “Ñ”, que tipificaba el delito de “campaña anticipada”.
Muchas veces la legislación que se genera es producto del devenir y condiciones
históricas en un momento determinado. Otras, como en el caso guatemalteco, existe
fuerte presión de “países donantes”, o “comunidad internacional”,391 que condicionan
algunos apoyos, a que se introduzcan reformas a leyes específicas en la legislación
guatemalteca. Este es uno de los efectos de la “Santa Inquisición” que ya se trató en
páginas precedentes. Por ello, autores como Mikel Caminal Badía,392 con precisión
establecen quiénes son algunos de los actores que inciden en la toma de decisiones en
389
STIGLITZ, Joseph E. Op. cit. Pág. 366
MEDRANO VALENZUELA, Gabriel: Ponencia presentada por el Ex magistrado del Tribunal Supremo
Electoral, en Congreso Iberoamericano de Derecho Electoral. Pág. 30. Monterrey, México, 25 al 27
noviembre 2010.
391
Luego de finalizado el proceso de elecciones generales 2011 en Guatemala, el matutino Siglo XXI,
con fecha 12 de septiembre 2011, reporta que “…los observadores que pertenecen a las misiones
nacionales demandaron la creación de la Fiscalía de Delitos Electorales, a fin de tener instrumentos de
investigación penal acerca de los hechos realizados al margen de la ley en los comicios generales…”
Matutino
Siglo
XXI,
edición
digital.
www.s21.com.gt/archivo?keys=delitos+electorales+&date_filter%SBvalue%5D%5Bdate%5D=&x=7&y=7.
392
CAMINAL BADIA, Mikel (Editor). “Manual de Ciencia Política”. Editorial Tecnos. Madrid, 2005. Pág. 33.
390
139 el ámbito político, al afirmar que: “El <<homo economicus>> es un actor político aunque
no ejerza como tal, o participe en ninguna asociación política, o ni siquiera se moleste
en emitir su voto…”.
Todo esto se traduce en la práctica, a que exista una influencia directa o indirecta que
insufla exigencias de legislación electoral. Expertos penalistas como el Dr. Guillermo
Portilla Contreras, le denominan como la “social democracia penal”,393 y una mentalidad
de tolerancia cero que, como en el caso guatemalteco, criminaliza las aportaciones
dinerarias del dios mercado,394 para el financiamiento de campañas políticas. Incluso,
se llega a extremos de afectar la actividad del proselitismo –derecho constitucional
inherente a los partidos políticos- previo a una convocatoria de elecciones, con lo cual
se mina la construcción de ciudadanía395 plena, por ejemplo.
Así las cosas, y ante una actitud de tolerancia cero, ya no sólo se aplica el derecho
penal con especial dedicatoria a prostitutas, homosexuales, inmigrantes, etc., sino que
es aplicada en el ámbito político partidario. El argumento que se maneja es que el
derecho es esencialmente coercible,396 y por lo tanto se sacrifica el proselitismo, que
implica consolidación e institucionalización de los partidos políticos. O, como en la
mayoría de casos, simplemente existe bastante presión mediática, inducida o no, para
que el Congreso de la República apruebe tal o cual ley, sin que se repare en las
implicaciones futuras, grado de colisión constitucional que puedan tener, etc., o
393
Dr. Guillermo Portilla Contreras. Clase Magistral, UPV-URL. Guatemala, septiembre 2011.
CABALLERO HARRIET. Op. cit. Pág. 197: “La única diferencia estriba en que esta vez no estará
atado a una estructuras resultantes de un orden divino, sino, en su condición de individuo consumidor, a
un marco ordenado por el nuevo <<dios-mercado>>.”
395
Al respecto, resulta interesante el pensamiento de TOURAINE cuando afirma que “La ciudadanía
reduce el individuo al ciudadano, es decir aquel que acepta las leyes y necesidades del Estado, que sólo
tiene derechos si cumple deberes, si contribuye a la utilidad colectiva, el interés general; pero al mismo
tiempo, la ciudadanía afirma que el poder político no tiene otro fundamento legítimo que la soberanía
popular. Dentro de la idea nacional, la frontera entre la idea republicana de voluntad general, preñada de
amenazas autoritarias, y la idea democrática de la ley de la mayoría, nunca es neta.” TOURAINE. Op. cit.
Pág. 210
396
Ibid. DEL VECCHIO. Pág. 356.
394
140 simplemente que se ponga en tela de duda si hubo o no tráfico de influencias en la
aprobación de determinada ley.397
Otras veces, lo que se pretende es romper con el influjo de los “poderes ocultos,”398 que
pueden incluso penetrar los cimientos del sistema electoral, influir en los resultados y
manipulación de un proceso electoral y, en el peor de los casos, como en lo relativo al
financiamiento de campañas políticas, inyectar con fondos de oscura procedencia los
presupuestos de los partidos políticos. Por eso, estimo importante la afirmación de
Durán Barba, acerca de que: “La nueva democracia no puede existir sin un proceso de
diálogo permanente entre los líderes y los ciudadanos de esta sociedad en que este
tipo de gobierno se ha ampliado y profundizado.”399
Pero tampoco considero dable que, por presiones internacionales, de la “sociedad civil”
u otros poderes paralelos u ocultos, nos mantengamos en una constante modificación
de normas que, como en el presente caso, inciden en la estabilidad democrática cuyo
proceso arrancó en 1985. Caso contrario, sería la confirmación de lo que el ex
presidente del gobierno español Aznar, advierte, al señalar que “…La democracia
requiere mucho tiempo, porque hay que interiorizar comportamientos de respeto y de
tolerancia que no se aprenden de un día para otro… Eso lleva muchos años, pero es lo
que nos hace falta: alcanzar una normalidad democrática y no aburrirnos de ella…Uno
de nuestros defectos tal vez sea la falta de constancia. Nos cansamos demasiado
pronto de las cosas, sin justificación.”400
El poder se ejerce para satisfacer las necesidades del individuo que vive en sociedad.
Por lo menos, desde el punto de vista conceptual y teórico. Y cuando hay divorcio entre
poder y ciudadanía, entre administrados y administradores, tenemos necesidad de
volver a la reflexión acerca de los fines del Estado y quién tiene la preeminencia: éste o
quienes lo constituyen. Bobbio enfatiza claramente esta problemática al insistir que “El
397
Como afirma ANSALDI, “En América Latina el Congreso es la institución con más pérdida de
confianza ciudadana entre 1997 y 2002.” Op. cit. Pág. 107
398
“Los Poderes Ocultos”. Op. Cit. Pág. 233-240.
399
DURAN BARBA. Op. cit. Pág. 144
400
Ibid. AZNAR, Pág. 87
141 individuo es primero que el Estado; el individuo no es para el Estado sino el Estado
para el individuo.”401
Ante la falta de consensos con actores políticos y ciudadanía, y la presión de la
“comunidad internacional”, tiene vigencia el axioma que aporta Ansaldi, al citar a Torres
Rivas, en el sentido que “…no deberían separarse los esfuerzos del peace-making, del
peace-keeping y el peace-building.”402 Es así como el Congreso de la República de
Guatemala, en el pleno ejercicio de sus funciones y atribuciones constitucionales,
decretó la norma contenida en el Decreto Número 4-2010, que fuera impugnada por
parte de dos secretarios de partidos políticos, que denunciaron la inconstitucionalidad
total del Decreto, por parte de uno de los impugnantes y –en forma parcial- su artículo
16, por parte de otro, que tipificaba el delito de “campaña anticipada”.
Medrano Valenzuela, al referirse a la puesta en vigencia de esta nueva generación de
delitos eleccionarios, la denomina “Una quinta etapa surge primero en el año 2004, al
dictarse por el Congreso de la República el Decreto 10-2004 y luego en el 2006, con el
Decreto proferido por el mismo organismo e identificado con el número 35 de ese año,
ya que en éstos, que contienen las últimas reformas a la Ley Electoral y de Partidos
Políticos, se deciden suprimir las normas sobre delitos políticos403 y faltas electorales,
con lo que la protección al proceso electoral en materia penal se redujo a lo establecido
en la ley ordinaria… Es bajo esa normativa que se celebraron las últimas elecciones en
el país, año 2007, pero resultó insuficiente pues no pudo llenar los vacíos para asegurar
una tutela judicial efectiva en el ámbito electoral, con lo que no se estuvo a la altura de
los estándares internacionales, como dio cuenta la Misión de Observación Electoral de
la Unión Europea en su informe correspondiente…” 404
401
BOBBIO, Norberto. Op. Cit. Pág. 163
ANSALDI, Waldo. Op. cit. Pág. 514
403
MONZON PAZ, Guillermo Alfonso., “Introducción al Derecho Penal Guatemalteco- Parte Especial”,
Impresiones GARDISA. Guatemala, 1980. Pág. 212: “Delito Político sería, pues el que ofende un derecho
político. Todo depende, por consiguiente, del sentido que se le dé al término. Político, sería, el delito que
lesiona los derechos primarios de seguridad del Estado… o el que lesiona derechos políticos de los
ciudadanos e incluso el que ataca los derechos sociales.”
404
Ibid. Medrano Valenzuela. Pág. 19
402
142 Pero la reacción no se hizo esperar. Y una vez más, la Corte de Constitucionalidad, fue
sometida a prueba en su poder y grado de institucionalización que ostenta como
máximo organismo jurídico en materia de disputas constitucionales. Nuevamente el
poder político o “establisment” político guatemalteco, reaccionaba contra medidas que
tienden a limitar su grado de control e influencia en la conducción de la cosa pública.
Creemos que es importante destacar que cuando se generó el “autogolpe” del 25 de
mayo de 1993 del presidente Jorge Antonio Serrano Elías, que dispuso disolver el
Congreso de la República, la Corte Suprema de Justicia y la misma Corte de
Constitucionalidad, éste algo tribunal declaró el golpe inconstitucional y legalmente
nulo.405 La historia política del país registra, que este tipo de resoluciones incluso han
costado la vida a magistrados que, como Epaminondas González Dubón, quien presidía
la Corte que declaró la inconstitucionalidad del autogolpe.
Pero volviendo al tema de las denuncias de inconstitucionalidad respecto al Decreto 42010, una general y otra parcial, ya con una buena historia de fallos constitucionales, la
Corte de Constitucionalidad, dictó sentencia dentro de los expedientes acumulados:
1119 y 1273-2010, con fecha diecisiete de febrero dos mil once.406 El fallo constitucional
consideró, entre otros, los siguientes argumentos:
a) Que las inconstitucionalidades promovidas, una era en relación a la totalidad del
Decreto No. 4-2010 y la segunda, en forma parcial, por dirigirse a denunciar la
inconstitucionalidad únicamente de su artículo 16;
b) El legislador reformó y adicionó artículos del Código Penal, referentes –en su
mayoría (salvo el artículo 19)- al Derecho Penal Electoral;
c) Se consideró el argumento de uno de los accionantes que afirmaba que el legislador
inobservó el artículo 123 de la Ley Orgánica del Organismo Legislativo, puesto que al
pretender reformar una ley de rango constitucional –como lo es la Ley Electoral y de
405
ROBLES MONTOYA, Jaime: “El Poder Oculto”. Fundación Soros. Guatemala, septiembre 2002. Pág.
91-93
406
CORTE
DE
CONSTITUCIONALIDAD.
Sentencia:
www.gob.gt/siged2009/mdlWeb/frmConsultaWebVerDocumento.aspx?St_DocumentoId=815981.html&St
_RegistrarConsulta=yes&F=fraseabuscar. Fecha de consulta: 24 de septiembre 2011.
143 Partidos
Políticos-407,
debió
previamente
requerir
dictamen
de
la
Corte
de
Constitucionalidad. Sin perjuicio que, conforme artículo 175 de la Constitución Política
de la República, se requiere para este tipo de reformas a leyes constitucionales, el voto
favorable de las dos terceras partes del total de diputados que integran el Congreso;
d) Que conforme el artículo 253 de la Ley Electoral y de Partidos Políticos, todo lo
concerniente a los delitos y faltas electorales, se regirá por el Código Penal
guatemalteco. Por tanto, el legislador sí posee facultades para regularlo por medio del
procedimiento establecido para leyes generales ordinarias y que no tienen rango de ley
constitucional;
e) Respecto al artículo 16, que tipificaba el delito de “campaña anticipada”, que se creó
al añadir el artículo 407 literal “Ñ” al Código Penal, se pretendió sancionar a quienes
realicen o ejecuten, por cualquier medio de difusión, actividades para dar a conocer
candidatos a cargo público de elección popular, con anticipación a la convocatoria que
realice el Tribunal Supremo Electoral, en lo sucesivo denominado simplemente TSE;
f) Relativo a la “campaña electoral”, el artículo 219 de la Ley Electoral y de Partidos
Políticos la califica como libre. Esta no tiene más limitaciones que las establecidas en
esa misma ley, la moral, el derecho de propiedad, o el orden público. Y advierte que
ninguna autoridad podrá impedir, limitar, restringir o tergiversar la propaganda electoral;
g) También se consideró lo relativo a la literal e) del artículo 21 de la Ley Electoral y de
Partidos Políticos, respecto al máximo de gastos de financiamiento de las campañas
electorales,408 a razón del equivalente de un dólar de los Estados Unidos de América,
por cada ciudadano empadronado hasta el treinta y uno de diciembre del año anterior a
las elecciones;
h) Penalizar la “campaña anticipada”, viola el artículo 223 de la Constitución Política de
la República, al establecer un límite al funcionamiento de las organizaciones políticas
por medio de una pena a una prohibición que no se encuentra regulada previamente en
la ley constitucional de la materia, la Ley Electoral y de Partidos Políticos;
407407
LEY ELECTORAL Y DE PARTIDOS POLITICOS, Decreto No. 1-85 de la Asamblea Nacional
Constituyente. Editorial Tribunal Supremo Electoral. Guatemala, 2007.
408
El matutino “Prensa Libre”, edición del sábado 24 de septiembre 2011, en la página 3, da cuenta que
los dos partidos que entrarán al balotaje de segunda vuelta electoral, “…han sobrepasado el techo
máximo autorizado de inversión en campaña electoral…” Ver: www.prensalibre.com.gt.
144 i) Finalmente, la Corte de Constitucionalidad, resolvió sin lugar la acción de
inconstitucionalidad general total promovida por Manuel Antonio Baldizón Méndez, en
contra de la totalidad del Decreto 4-2010 del Congreso de la República. Pero, en
cambio, declaró con lugar la acción de inconstitucionalidad general parcial promovida
por el partido político “Victoria”, a través de su secretario general Abraham Rivera,
respecto al artículo 16 del Decreto No. 4-2010, que tipificaba el delito de campaña
anticipada.
Posteriormente, el Tribunal Supremo Electoral, TSE, interpuso recurso de aclaración y
ampliación, que fue resuelto con fecha 21 de febrero 2011. Este fue declarado sin lugar
por la Corte de Constitucionalidad, y de oficio,409 se revoca la suspensión provisional de
los artículos 1 al 15, 17 y 18 del Decreto No. 4-2010 del Congreso de la República, los
cuales quedaron vigentes. Se oficializaron únicamente 10 delitos electorales. Sin
embargo voces de políticos consultados como Nineth Montenegro,410 calificaron de
“importantísimo” el fallo de la Corte de Constitucionalidad, sobre todo por las sanciones
para quienes incurran en financiamiento ilícito.
Pero aplicando las leyes de la dialéctica,411 el cambio dialéctico del sistema de partidos
políticos, de la legislación penal electoral y de las instituciones electorales, son
ineludibles e insoslayables. Sobre todo, si hacemos eco del pensamiento de Del
Vecchio,412 que afirma que “…hay que sostener el principio de que la ley se refiere
lógicamente, con la imperatividad que le es propia, a todos los que componen el orden
jurídico.” Esto implica que necesitamos una legislación que responda a los nuevos retos
del quehacer político, en el tema del financiamiento político y hacer prevalecer la ley.
Para nadie es un secreto, que existe el financiamiento ilegal, que proviene no sólo de
grupos económicos poderosos, en busca de afianzar sus cuotas de poder vía su
409
CORTE DE CONSTITUCIONALIDAD: Resolución de fecha 21 de febrero 2011, a los Recursos de
Aclaración
y
Ampliación,
interpuestos
por
el
Tribunal
Supremo
Electoral.
www.gob.gt/siged2009/mdlWeb/frmConsultaWebVerDocumento.aspx?St_DocumentoId=815981.html&St
_RegistrarConsulta=yes&F=fraseabuscar. Fecha de consulta: 24 de septiembre 2011.
410
Matutino
Siglo
XXI,
edición
digital
del
17
febrero
2011.
www.s21.com.gt/archivo?keys=delitos+electorales+&date_filter%SBvalue%5D%5Bdate%5D=&x=7&y=7.
411
POLITZER, Georges: “Cursos de Filosofía”. Ediciones de Cultura Popular. México, 1978. Pág. 104105.
412
Ibid. DEL VECCHIO: Pág. 356
145 influencia en la estructura del Estado, el mero tráfico de influencias y, con más énfasis
en las dos últimas elecciones en nuestro país, lo relativo al narco-financiamiento.
Si bien son extremos difíciles de probar, esto no implica que no existan o que cerremos
los ojos ante una realidad cada día más latente, y ante el riesgo inminente de una
cooptación total de las instituciones estatales. Es decir, No puede entonces, seguir
postergándose la discusión seria, profundo y con visión de largo plazo del tema del
financiamiento a los partidos políticos. No importa si estamos hablando si este es
público o privado. En ambos casos, deberá legislarse para determinar con precisión los
dos extremos fundamentales: la fuente y el monto. Luego de establecidos los
mecanismos para establecer lo anterior, la ley debe blindar que, dicho financiamiento
tenga los tres destinos básicos: campañas electorales, el funcionamiento ordinario de
cada entidad partidaria, y lo relativo a las actividades que busquen capacitar a los
cuadros partidarios, o actividades permanentes, su caso.
Si lo que se pretendió con la creación de tipos delictivos autónomos en materia electoral
fue regular el accionar o conducta de los políticos en lo individual, de los partidos
políticos en lo institucional y de los demás actores políticos, intrínsecos o extrínsecos a
un proceso electoral, a través del establecimiento de nuevas tipologías penales
electorales, el resultado no fue el esperado. Aunque no es el tema central del presente
trabajo, no podemos dejar de lado que nuestras actitudes frente a la política no
dependen con exclusividad de la existencia de figuras penales. Más importante aún, es
la formación de valores de respeto por la institucionalidad, el Estado de Derecho, las
normas y las conductas coherentes para vivir en sociedad.
Pero esto no lo podemos cambiar tampoco con cursos de civismo, o de formación para
la democracia, ni con aumentar el control sobre los partidos políticos, estableciendo
vigilancia a todo nivel, porque como lo afirma el Dr. Portilla,413 al final de cuentas “… ¿Y
quién controla al controlador?...” De esta suerte, nuestra legislación electoral, en
413
Ibid. PORTILLA CONTRERAS, Dr. Guillermo.
146 materia penal, está expuesta a una permanente “perestroika”414 que nos permita
insuflar más democratización, mejor control del accionar de los partidos políticos y más
transparencia en sus frutos.
En Guatemala tenemos el desafío de formar a la siguiente generación. También es
impostergable
la
consolidación
de
un
sistema
de
partidos
sano,
estable,
institucionalizado y vigoroso. Pero además existe la ineludible responsabilidad de
asumir que “…la estabilidad de las democracias requiere de partidos sólidos…”415 Pero
también de una clase política que tenga claro que detentar el poder político, exige
responsabilidad y rendición de cuentas. Pero como afirma Michels, ante los actos
arbitrarios cometidos por la democracia, “…las masas tienen a su disposición los
medios para reaccionar contra la violación de sus derechos. Estos medios consisten en
el derecho de fiscalizar y destituir a sus líderes.”416 Sólo así se puede garantizar una
mediación de los conflictos entre administrados y administradores, de defensa de
intereses comunes frente al Estado y también frente a otros grupos o Estados.
En una de sus visitas al país, escuché decir al ex presidente español Aznar, que la
tragedia de las maquinarias electorales, es prepararse para ganar una elección, pero no
para gobernar para la siguiente generación. Pero esto presupone, que no debemos
frustrarnos ni cruzarnos de brazos, sino partir estar claros de tener “la convicción de
que los estados existentes sean imperfectos, pero perfectibles.”417
Es común quejarse en Guatemala, respecto que los partidos políticos son simples
maquinarias electorales. O bien se les señala, que aparecen cada cuatro años, ante la
convocatoria a un nuevo proceso electoral. Esto deja entrever que hay exigencia de una
acción proselitista más sostenida por parte de los partidos políticos, y no solamente
propagandística-electoral. Esta exigencia conlleva la toma de conciencia de parte de los
414
“Diccionario de Historia y Política del Siglo XX”. Op. cit. Pág. 557.
AZNAR. Op. cit. Pág. 72.
416
MICHELS, Robert. Tomo I. Op. cit. Pág. 194
417
BOBBIO Norberto. “Estado, Gobierno y Sociedad”: Op. Cit. Pág. 178
415
147 ciudadanos que no basta con tener derecho al voto, que el derecho político no se agota
en la urna, por el contrario va más allá. Implica dejar de ser una masa de votantes, para
convertirse en auténticos electores que inciden en su democracia y en el sistema
mismo. Se genera entonces ese doble valor de los derechos políticos que, autores
como García Máynez,418 consideran “…en una de doble forma: imponiendo
obligaciones o confiriendo derechos…Los derechos políticos son prerrogativas del
ciudadano…”
Y, en cuanto al ejercicio del poder y la conducción de la cosa pública, la ciudadanía
espera que así como “…Los regímenes autoritarios no están asociados únicamente con
proyectos de modernización, sino que se han presentado también como soluciones
temporales a situaciones de crisis agudas…”419 los regímenes democráticos, provean
de bienestar, estabilidad, apertura de corrientes y participación a los ciudadanos que
confían en el sistema democrático, manifestado a través del ejercicio del voto.
Por ello, autores como Duverger420 advierten esta problemática al afirmar que: “Los
primeros partidos fueron organizaciones puramente electorales, cuya función esencial
consistía en asegurar el éxito de sus candidatos: la elección era el fin; el partido, el
medio.” (Las cursivas son nuestras). Esto requiere la formación de nuevas estructuras
de personalidad, de creencias, de valores y una actitud que influya en la acción política
honesta y sin violencia. La presión que el Congreso de la República de Guatemala tuvo
para crear nuevas figuras delictivas electorales, quizá sea fruto de lo que Torres Rivas,
al referirse al actuar de los partidos políticos y la política, en Guatemala, que: “Es un
clima bursátil, oscuro, violento y desesperanzador.”421
.
418
GARCIA MAYNEZ, Eduardo: “Introducción al Estudio del Derecho”. Editorial Porrúa, S.A. México,
1977. Pág. 255 y 257
419
BACA OLAMENDI. Op. Cit. Pág. 8
420
DUVERGER, Maurice: “Los Partidos Políticos”. Fondo de Cultura Económica. México, 2000. Pág. 392.
421
Ibid. TORRES RIVAS, Edelberto. Prólogo. Pág. XIX
148 Es urgente que nuestro derecho penal electoral,422 o legislación penal electoral, tenga
una orientación clara acerca de cuál debe ser el bien jurídico tutelado que, para autores
como Espinosa Torres,423 “…el único bien jurídico tutelado en los delitos electorales es
la libertad de sufragio, que presupone la de asociación, expresión, de competir y de ser
elegido, tener acceso a fuentes de información y existencia de elecciones libres e
imparciales con instituciones que realicen, vigilen el procedimiento electoral…” Al final,
la consolidación de nuestra democracia y sus instituciones es la brújula que debe guiar
las disposiciones en materia electoral, y tomando en cuenta que: “…en la práctica las
democracias modernas exhiben un abanico de instituciones gubernamentales formales,
como cuerpos legislativos y tribunales…”424
El desafío es no sacrificar la formación de ciudadanía, el libre ejercicio de la acción
político-partidista, la formación y consolidación de partidos políticos, so pretexto de
proteger la “…seguridad del Estado…”425 . En todo caso, la temática del bien jurídico
tutelado con la aplicación del derecho penal al ámbito electoral y ejercicio de la acción
partidaria o ideológica, aún no está claramente determinado. Y más aún, no existe
claridad respecto a si al momento de legislar en materia penal para la actividad políticopartidaria, no se desnaturaliza la disposición constitucional que no limita, ni restringe el
accionar de los partidos políticos, especialmente en cuanto a proselitismo.
Encuadra lo anterior en lo que del Vecchio426 denomina “carácter de la juridicidad”, al
afirmar que: “El carácter de la juridicidad es por sí puramente formal, tanto que una
institución jurídica puede ser no sólo diversa sino aún opuesta –en su contenido- a otra
igualmente jurídica.” De allí que la declaratoria de inconstitucionalidad de los tipos
422
Como reflexiona la investigadora del Instituto de Investigaciones Jurídicas de la Universidad
Veracruzana, MARIA DEL PILAR ESPINOSA TORRES: “Por lo tanto, la expresión “derecho penal
electoral” sólo puede aceptarse como denotación para el conjunto de disposiciones referidas a la
conflictividad derivada de la afectación o lesión del bien jurídico libertad de sufragio, pero nunca como
indicadora de un derecho penal especial.” www.letrasjurídicas.com/Volumen/2/espinosa2.pdf.
423
ESPINOSA TORRES, María del Pilar: “El Derecho Penal Electoral Mexicano”. Ponencia presentada
como investigadora del Instituto de Investigaciones Jurídicas de la Universidad Veracruzana.
www.letrasjurídicas.com/Volumen/2/espinosa2.pdf.
424
LIJPHART, Arend: “Modelos de Democracia”. Op. cit. Pág. 12
425
Ibid. PORTILLA CONTRERAS, Dr. Guillermo.
426
Ibid. DEL VECCHIO. Pág. 521.
149 penales anteriormente citados, por parte de la Corte de Constitucionalidad, que juzgó
que tales disposiciones penales no estaban de conformidad con el ideal de Derecho
electoral.
II.
Principales debates pendientes en el sistema de partidos políticos:
Si la democracia es el sistema de gobierno más depurado, el que más garantiza el
respeto a los derechos humanos, el que privilegia la participación directa o indirecta de
la ciudadanía, cabe la pregunta ¿qué hace que tengamos tanto rechazo hacia la
democracia, y que ésta no logre consolidarse plenamente? A estas y otras
interrogantes, pretenderemos darle respuesta, en los siguientes apartados no con
sentido conclusivo sino para generar debate académico, puesto que el debate político
pertenece a los partidos y sus dirigentes hacia lo interno de sus respectivas
organizaciones.
Quizá sea necesario dejar sentada la premisa que “La democracia moderna es
capitalista. Ignorar o subestimar este hecho, como lo hace la literatura sobre la
“transición a la democracia”, ocasiona que muchos rasgos de la política latinoamericana
parezcan anómalos, paradójicos, o contradictorios.”427 De manera que no se entrará en
la discusión ideológica, sino más bien en la funcionalidad y subsistencia de los partidos
políticos, de cara al desarrollo del tercer milenio. En esencia, estimamos importante que
se acorte esa brecha de distanciamiento que existe, a nivel general, entre ciudadanos y
política. Que se puedan tender los puentes legales, prácticos, académicos, sociales e
institucionales, que permitan ese acortamiento del desinterés y divorcio entre sociedad
y política.
III. Pluripartidismo y multipartidismo:
Guatemala, a diferencia de otros países de la región centroamericana, como Honduras
o Costa Rica, ha sido pródiga en el nacimiento de innumerables partidos políticos. Unos
427
ANSALDI. Op. Cit. Pág. 131
150 nacieron previo al conflicto armado interno, otros antes, durante y después de este, y
unos más luego de la existencia de la actual Constitución Política de la República.
Desde la época del criollismo post-independentista, Guatemala contó con dos fuerzas
políticas bien diferenciadas: los liberales428 y los conservadores.429 Los primeros, como
una expresión que buscaba con ahínco tomar distancia de la Corona, y romper con todo
rasgo colonialista. Los segundos, en cambio, pretendían mantener el status quo, una
especie de independencia moderada y paulatina, pero esencialmente sin romper con la
institucionalidad y cordón umbilical respecto de la madre patria.
Ya en pleno siglo XX y hasta los años subsiguientes a 1985, Guatemala tuvo partidos
predominantes, tales como el Movimiento de Liberación Nacional, MLN. Este partido fue
considerado de tendencia de extrema derecha y cuyo lema “Dios, Patria y Libertad”,
afirmaba su esencia “anticomunista”. Nació y fue liderado a instancias de ex miembros
de las fuerzas civiles y militares que apoyaron el derrocamiento de Jacobo Arbenz
Guzmán comandado por el Coronel Carlos Castillo Armas y los mercenarios que la CIA
del gobierno estadounidense le proveyeron. En esencia, el multipartidismo430 siempre
ha sido la tendencia dominante en cuanto a la institucionalidad partidaria en Guatemala
428
“Se recordará que en 1820 la llamada rebelión del brigadier del Riego, había obligado al rey Fernando
VII a jurar la Constitución de 1812, y que ésta garantizaba la libertad de imprenta, lo cual equivaldría hoy
a una ley sobre la libre emisión del pensamiento. Precisamente, bajo el amparo constitucional, el doctor
Pedro Molina fundó un periódico que llamo con el significativo nombre de El Editor Constitucional,
verdadera tribuna desde la cual Molina, Barrundia y sus correligionarios, hablaban sin ambages sobre la
independencia… Alrededor de las figuras de Molina y Barrundia, surgió el partido Caco…El partido Caco
se transformó posteriormente en el partido Liberal. También se les conoció con los motes de: Jacobinos,
fiebres, panteristas, volterianos, etcétera.” POLO SIFONTES, Op. cit. Págs. 168 y 169
429
“Casi simultáneamente apareció otro periódico de contrapartida, jefeado y dirigido por el economista,
licenciado José Cecilio del Valle, el cual llevó el nombre de –El Amigo de la Patria…Por otra parte, en
torno José Cecilio del Valle, y sus amigos, surgió el partido Gazista, de corte más moderado… El partido
Gazista, por su parte, se transformó en el partido Conservador. También se les conoció como: Serviles,
aristocráticos, clericales, ultramontanos, cachurecos, cachos, etcétera.” POLO SIFONTES. Ibid. Pág. 169
430
“…cuando se está en presencia de un acentuado pluripartidismo, la realización de las condiciones
objetivas indispensables para el buen funcionamiento de la forma de gobierno respectiva resulta mucho
más difícil. En efecto, en las formas parlamentarias los gabinetes deberán descansar necesariamente en
una coalición, con frecuencia muy poco cohesionada, lo que determina una notable inestabilidad
ministerial, en tanto que, en las formas presidenciales, el jefe del Estado a menudo no estará apoyado
por una mayoría compacta en el seno del Congreso que quedará debilitado de manera ostensible
respecto a la actuación legislativa de su programa de gobierno.” BISCARETTI DI RUFFIA, Paolo:
“Introducción al derecho constitucional comparado. Las “formas de Estado” y las “formas de gobierno”.
Las Constituciones modernas y 1988-1990: Un trienio de profundas transformaciones constitucionales en
Occidente, en la URSS y en los Estados socialistas del Este europeo”. Fondo de Cultura Económica.
México, D.F. 1996. Pág. 163 y 164
151 y, luego de la puesta en vigencia de la actual Ley Electoral y de Partidos Políticos en
1985, puede decirse que ha existido una auténtica proliferación de partidos, o un
multipartidismo fugaz e inconsistente.
Desde 1985, nacieron a la vida jurídica y política nacional más de medio centenar de
partidos políticos. Ahora, veintiséis años después, prácticamente no subsiste ninguno
de aquéllos. En consecuencia, el sistema político guatemalteco, puede ser catalogado
de multipartidista y altamente mortal en cuanto a la vida partidaria institucional, y con
escaso desarrollo o densidad ideológica. A diferencia de un ejemplo cercano en el área
centroamericana como lo es Honduras, donde existe y prevalece casi un bipartidismo, y
donde los partidos contribuyen a que pueda haber postulaciones mediante elecciones
primarias.
Pero esta “partidorrea” o eclosión431 que ha surgido desde 1985 desproporcionada de
organizaciones políticas que hemos vivido, como ya quedó indicado anteriormente, en
gran medida ha obedecido a presiones y visiones coyunturales, nacionales o
extranjeras
que,
pretendiendo
“acompañar”
el
proceso
democratizador,
han
experimentado diversos énfasis que en nada han contribuido a la consolidación de
auténticas instituciones políticas sólidas y estables.
Previo a la vigencia de la actual Constitución Política de la República, en 1985, y la
correspondiente Ley Electoral y de Partidos Políticos, Decreto Número 1-85 de la
Asamblea Nacional Constituyente, en Guatemala, se habían fundado, según
DISOP/ASIES,432 hasta antes de 1983, siete partidos políticos. Entre 1983 y 1985, siete
partidos más. De 1986 a 1996, veinticinco partidos políticos, y de 1997 a 2003, otros
catorce partidos políticos. Evidentemente, en Guatemala existe “partiditis”, atomización,
poco debate político para fortalecer ideológica y estructuralmente partidos políticos de
corte institucional y, lo más grave, una esencia volátil de las fuerzas políticas nacidas en
431
Según la ASOCIACION DE INVESTIGACION Y ESTUDIOS SOCIALES –ASIES- en el evento
electoral de 1985, participaron un total de 13 partidos políticos. Y, para la elección de 2003, habían sido
inscritos 53 partidos políticos ante el Tribunal Supremo Electoral. Op. Cit. Pág. 187 y 188
432
ASIES. Op. Cit. Pág. 189 y 190
152 el período democrático iniciado en 1985. A la luz de este incontenible surgimiento de
partidos políticos, bien se puede utilizar para estos la adjetivación que hace Sartori, con
respecto a los partidos políticos en África, al denominarlos de <<clientela>> o
<<máquina política>>433 y que seguimos enfrentados con el problema de desarrollar la
política que, en todo caso, precede a la política del desarrollo. De otra manera,
únicamente tendremos en Guatemala, un régimen de “cuasi partidos,” o facciones que
no consolidan el sistema político como tal. Estos solo conducen a tener una democracia
inestable o inviable.434
En esencia, tanto la ley de la materia y sus reformas, establecen los requisitos de forma
y fondo para el nacimiento de un partido político, las fusiones partidas, las alianzas
electorales y lo referente a los comités cívicos que, en esencia, su actuar se limita a
postular candidaturas para los gobiernos locales municipales. El Tribunal Supremo
Electoral y el Registro de Ciudadanos, y el Departamento de Organizaciones Políticas,
son los entes burocráticos que velan directamente por todo lo relacionado con la vida y
operación de los partidos políticos.
En síntesis, puede decirse que en la legislación guatemalteca, hace falta efectuar
reformas parciales a la Ley de la materia, en el sentido siguiente: a) el tema del
financiamiento de los partidos y sus campañas políticas; b) en cuanto a los requisitos
mínimos para constituir y que sea reconocida una nueva entidad política; c) que se
permita la democratización de los partidos, para que dejen de ser dirigidos por
cacicazgos o “pseudo-mecenas”, que lo único que provocan es una distorsión en el
sistema, con el inevitable efecto negativo en la mente de la ciudadanía.
IV. Las alianzas electorales y la institucionalización de los partidos
Al analizar las alianzas electorales en nuestro país, lejos de percibir en ellas un
esfuerzo de consolidación de fuerzas políticas, unificación de visiones y estructuras
433
SARTORI, Giovanni: “Partidos y Sistemas de Partidos” Alianza Editorial, S.A. Madrid, 2009. Págs. 308
y 309
434
SARTORI, “Partidos y Sistemas de Partidos”. Op. Cit. Pág. 418
153 partidarias, esto se traduce únicamente en simple utilitarismo electoral, necesidad de
alcanzar el poder cueste lo que cueste, y sin más compromiso y pacto que la búsqueda
de un resultado electoral, pero en ninguna medida fortalecer el sistema de partidos
políticos, la institucionalidad o las entidades que integran la alianza.
Así hemos visto desfilar varias alianzas electoreras que se desintegran durante el
ejercicio del gobierno, o inmediatamente al abandono del mismo, con el consabido
debilitamiento de imagen ante la ciudadanía y el desgaste del sistema democrático que,
finalmente, es percibido como poco consistente, etéreo y meramente electorero, o fruto
de una simple democracia electorera, “…todo lo cual convierte a Guatemala en el
mayor cementerio mundial de partidos.”435
Para reforzar el argumento que las alianzas políticas en nuestros país, son meros
convenios interesados en ganar una elección y no tanto la consolidación del sistema
democrático. Veamos un ejemplo reciente de este tipo de “alianza electoral”. Con el
arribo al poder de la autodenominada “Gran Alianza Nacional –GANA-“que llevó al
poder al ex presidente Oscar Rafael Berger Perdomo. En los primeros seis meses de
gobierno, uno de sus miembros, el Partido Patriota,436 abandonó la alianza y las cuotas
de poder asignadas a sus dirigentes, entre ellos, el hoy Presidente Constitucional de la
República, General Otto Fernando Pérez Molina. No obstante el panorama anterior, hay
435
TORRES RIVAS, Edelberto, prólogo del libro: “Rendición de Cuentas” de Juan Alberto Fuentes Knight.
Guatemala, F & G Editores. 2011. Pág. XIX
436
“El Partido Patriota (PP) se gestó en junio de 2000, cuando varios ciudadanos de diferentes ideologías
se reunieron con el propósito de constituir una “Alianza Cívica”, convocando a sectores sociales y
políticos a discutir lo que sus miembros consideraban “la agudización de los problemas del país”. El
grupo estimó que la simple discusión de la problemática no iba a tener ninguna incidencia, por lo que sus
miembros decidieron organizarse para participar en la vida política mediante una organización partidaria.
Para el efecto, entraron en contacto con partidos no tradicionales, de esa cuenta, Pavel Centeno, Mario
López Arrivillaga, Christian Ross, Valentín Gramajo y el general retirado Otto Pérez Molina, la figura con
mayor proyección política de la organización, fundaron a finales del año 2000 el comité pro formación del
Partido Patriota. Pérez Molina cobró notoriedad pública como uno de los líderes clave que dentro de la
institución armada se opusieron a la ruptura del orden constitucional intentado por el presidente Jorge
Serrano en mayo de 1993. El 13 de junio de 2002 el Partido Patriota fue legalmente inscrito en el
Departamento de Organizaciones Políticas del Tribunal Supremo Electoral…Según afirman sus dirigentes
y consta en sus documentos, el Partido Patriota es liberal y democrático, ubicándose en un espacio
ideológico de centro amplio.” ASIES. Op. Cit. Pág. 101 y 102
154 autores que afirman que “Cuando sólo accede al poder un grupo o un partido el Estado
acaba siendo el aparato de poder de una oligarquía.”437
Otro de los partidos integrantes de la “gran alianza”, lo fue el denominado Movimiento
Reformador, MR, que sus dirigentes co-gobernaron, pero ya para la siguiente elección,
prácticamente desapareció del espectro político nacional. Y, finalmente, el remanente
de dirigentes que no cuajaron en una u otra de las fuerzas políticas citadas, terminaron
“arrebatando” el cascarón de la estructura partidaria a los financistas que,
originalmente, habían abandonado el Partido de Avanzada Nacional,438 del sempiterno
Alcalde de la Capital, Álvaro Enrique Arzú Irigoyen.
Con esto terminó siendo un partido político satélite del ex partido oficial Unidad
Nacional de la Esperanza,439 con quien cogobernó de 2007 a 2011 y ejerció alianza
parlamentaria, pero siempre tratando de dar una fachada de ser un gobierno de la
437
SANCHEZ AGESTA, Luis: “Principios de Teoría Política. Editorial Nacional. Madrid, 1976. Pág. 252
“El antecedente del Partido de Avanzada Nacional (PAN) es el Comité Cívico Electoral “Plan de
Avanzada Nacional”, que se constituyó en 1985 para conquistar la alcaldía del municipio de Guatemala
en las elecciones generales de dicho año…El núcleo original del PAN se organizó alrededor de la figura
de Álvaro Arzú Irigoyen, quien había adquirido notoriedad pública como Director General del Instituto
Guatemalteco de Turismo (INGUAT) a finales de la década de los 70 y como candidato a la alcaldía del
Municipio de Guatemala en 1982. Entre los fundadores se encontraban personas que posteriormente
adquirieron relevancia como Oscar Berger, Luis Flores Asturias, Roberto Gereda, Roberto González,
Álvaro Heredia, Luis Linares, Rodolfo Mendoza, Luis Pedro Quezada y Carlos Valle…Sus principales
dirigentes consideraban que más que un partido con ideología, el PAN era un partido pragmático que se
sustentaba en valores y principios generales, que podían conciliarse con políticas de diferente orientación
según las circunstancias. En un momento dado, afirma Héctor Cifuentes, algunos líderes citaron textos
de Jacques Maritain para fundamentar la orientación social cristiana que –a su juicio- tenía el partido,
pero los fundadores lo objetaron, pidiendo que se realizada una jornada de reflexión pues no
consideraban correcto que el PAN se adscribiera al socialcristianismo o a cualquier ideología.” ASIES.
Op. Cit. Pág. 27 y 28
439
“Fecha de inscripción: 6 de agosto de 2002…El grupo promotor del comité pro constitución del Partido
Unidad Nacional de la Esperanza (UNE) se comenzó a gestar a mediados del año 2000, en el seno de la
coalición Alianza Nueva Nación (ANN). La coalición, que había llevado como su candidato a la
presidencia a Álvaro Colom Caballeros, obtuvo en las elecciones generales de noviembre de 1999 el
12.36% de los votos válidos (un poco más de un cuarto de millón de sufragios), 9 diputados (2 nacionales
y 7 distritales) y 14 alcaldes, con lo que se convirtió en la tercera fuerza política del país. Dada la cuota
de poder que habían alcanzado, los integrantes de la ANN trataron de fortalecerla. Sin embargo,
diferencias internas tanto en el seno de la URNG como en el DIA, así como las existentes entre estos dos
partidos y la UNID, muy pronto hicieron ver lo difícil que sería mantener la unidad. En septiembre de 2000
Álvaro Colom anunció públicamente que desistía de permanecer en la ANN y que se dedicaría a
promover una “unidad nacional de la esperanza”, incluyente y participativa…El líder del partido, Álvaro
Colom Caballeros, cobró notoriedad pública durante la década de los 80, como promotor de la gremial de
exportadores de productos no tradicionales.” ASIES. Op. Cit. Pág. 121 y 122
438
155 “social democracia”.440 En su esfuerzo de sobrevivencia la GANA, apoyó la inscripción
de la ex primera dama de la nación, aún cuando existían impedimentos constitucionales
que le limitaban postularse como candidata a la presidencia de la república. Y, al día de
hoy, mantiene una cuota de poder con algunos escaños en el Congreso de la
República, a la espera de la convocatoria de un nuevo proceso electoral e intentar
sobrevivir en una nueva “alianza”, para no pasar a integrar el cementerio de partidos
políticos guatemaltecos.
Podríamos decir entonces, que si el autoritarismo es la negación del deber ser, constituido por el sistema democrático- las alianzas partidarias en nuestro país,
constituyen la negación de la consolidación del propio sistema democrático. La
vaguedad, la improvisación, la falta de compromiso y la inconsistencia frente a los retos
del ejercicio del poder “aliado”, lo único que garantizan es el deterioro de la imagen de
los partidos políticos que la integran.
La poca sobrevivencia de los mismos, luego del abandono del poder, y el consabido
desgaste de la democracia como sistema político a ojos de los ciudadanos
insatisfechos, es un hecho probado. Al reflexionar sobre esta problemática, autores
como Rothbard,441 advierten que “Los ciudadanos de un país no sienten interés por
explorar los defectos del sistema por el que se rigen mientras tengan la sensación de
que funciona aceptablemente bien.” Quizá por eso, en el tema político electoral, es
recurrente que existan voces diversas, exigiendo periódicamente reformas electorales
de diversa naturaleza.
Nótese que no se está afirmando que las alianzas políticas sean malas en sí mismas. O
que éstas no deban practicarse en aras de la gobernabilidad o el logro de grandes
consensos nacionales. Porque en todo caso, en política se debe privilegiar antes que la
440
El autor CARLOS TAIBO, caracteriza este tipo de gobiernos como aquellos que “Enmarcados, en
suma, en la llamada Internacional Socialista, todos han defendido, con mayor o menor éxito, la gestación
y consolidación de fórmulas propias del Estado del bienestar. A finales del siglo XX es indiscutible que la
socialdemocracia, aún con graves problemas de identidad, configura una de las grandes corrientes
políticas que operan en el mundo desarrollado.” DEL AGUILAR, Rafael (editor). Op. Cit. Pág. 90
441
ROTHBARD, MURRAY N. “La Ética de la Libertad”. Unión Editorial, Madrid, 1995. Pág. 359
156 competencia,442 el acuerdo y el consenso, en beneficio de la sociedad. En lo que se
hace énfasis es en los efectos colaterales y finales que, históricamente, se pueden
apreciar en la política guatemalteca, donde tales alianzas se convierten en la cicuta
para uno o todos los partidos miembros que la integran, y la atomización de las fuerzas
políticas.
V. Una oferta electoral pobre o carente de confiabilidad:
Ninguna organización política, que se precie de ser democrática, debiera escatimar
esfuerzo o recurso alguno, en la búsqueda de la consolidación y fortalecimiento del
sistema democrático guatemalteco. En otras palabras, los partidos debieran tener como
divisa el servir para la democracia y no servirse de ella. Asumir el poder para servir y no
para servirse de él, debiera ser uno de los principales fundamentos del actuar de los
políticos y de los partidos que ellos integran. En la práctica ocurre exactamente a la
inversa, en la mayoría de casos de la historia reciente nacional, para no ahondar más
en el pasado lejano.
En general, el actuar de los políticos y de la política, está matizado de ausencia de
ética443 y de poco respeto por el electorado y la institucionalidad misma. Pero en temas
de gobiernos corruptos, ineptos o ineficientes, el novelista mexicano Carlos Fuentes,444
retrata de cuerpo entero esta problemática, en su novela “La Silla del Águila”. En uno de
los diálogos respecto al poder, uno de los personajes sentencia. “…te conviene estar
rodeado de pícaros, porque a los corruptos los dominas. El problema para ejercer el
poder es el hombre puro que no hace más que ponerte piedras en el camino.”
442
No olvidemos en ese sentido, que “Los viejos líderes siempre procuran atraer a su carroza a las
fuerzas de otros movimientos nuevos que aún no tienen líderes poderosos, para eliminar desde el
principio toda competencia y toda posibilidad de formación de corrientes intelectuales nuevas y
vigorosas.” MICHELS, Robert. Tomo I. Op. cit. Pág. 208
443
Como lo afirma MICHELS, “En estos tiempos, el principio de que los líderes deben practicar el
renunciamiento económico e identificarse con las multitudes es postulado únicamente por algunos
románticos aislados…” MICHELS, Robert. Tomo II. Op. cit. Pág. 136
444
FUENTES, Carlos: “La Silla del Águila” Santillana Ediciones Generales, S.L., Madrid, junio 2004. Pág.
296
157 Hoy, ante la aparente ausencia de debate ideológico que, en palabras de Francis
Fukuyama consiste en un aparente “fin de las ideologías”,445 también es cierto que hay
un debate respecto al ficticio o real aparente vacío ideológico. Esa anomia ideológica,
atizada por el mercado, que se mueve mejor en un mundo menos ideologizado, con un
Estado reducido a su mínima expresión, o <<Estado mínimo>>,446 irónicamente
contribuye al riesgo del resurgimiento de pos-totalitarismos, neo-autoritarismos.
La insatisfacción de la ciudadanía con la incapacidad de gestión de los gobiernos, el
descontento con el manejo de la economía mundial, y sus efectos devastadores para la
humanidad, y la ineficaz acción que hacen gala los partidos políticos cuando asumen el
poder, son factores clave para dichos extremismos aparentemente ya superados. En el
caso guatemalteco, el actual gobierno presidido por un ex militar,447 demuestra que hay
un telón de fondo que, consciente o inconscientemente, la población impulsa y avala el
surgimiento de regímenes autoritarios.
Tres lustros bastaron para que la sociedad guatemalteca, volviese a poner sus
esperanzas y su mirada en los gobiernos presididos por un mensaje y ofrecimiento
“Tolerancia Cero”, “Puño de Hierro” o, como en el caso guatemalteco, de “Mano
Dura”.448 Este viraje lo analiza Kliksberg, sobre todo en el entorno latinoamericano,
445
“Es fácil burlarse de la idea de Fukuyama del Final de la Historia, pero, en la actualidad, el ethos
imperante es <<fukuyamiano>>: se acepta que el capitalismo democrático-liberal constituye, en fin de
cuentas, la mejor fórmula hallada para la mejor sociedad posible y que lo único que cabe hacer es
volverla más justa, tolerante, etc. En la actualidad, la única pregunta auténtica es la de si abrazamos esa
<<naturalización>> del capitalismo o la de si el capitalismo global contemporáneo contiene antagonismos
lo bastante poderosos para impedir su reproducción indefinida.” ZIZEK, Slavoj. Op. cit. Pág. 432
446
CABALLERO HARRIET. Op. cit. Pág. 90
447
El General retirado Otto Fernando Pérez Molina, gana las elecciones de 2011 en Guatemala, en
segundo evento electoral en que participa. Los departamentos donde más votos obtuvo, las verapaces,
en el Norte, y el suroccidente, que fueron escenarios de los más cruentos combates entre Ejército e
insurgencia. Esencialmente, la estrategia de campaña, y el mensaje central a los electores giró en torno
de un discurso que se basó en ofrecer “mano dura”, en el ejercicio de gobierno. Esto en contraposición al
gobierno de Álvaro Colom Caballeros, que ejercía el poder, y que usó el discurso que “Combatiremos la
violencia con inteligencia”. Los resultados obviamente fueron desastrosos en materia de seguridad, y por
lo tanto el principal opositor hizo eco del clamor popular en materia de seguridad, lo que le valió, entre
otras cosas, alcanzar la Presidencia de la República que asumió el 14 de enero 2012.
448
“La inseguridad en Latinoamérica no es un mito. El clima de miedo que se respira en la región no es
infundado. Según la Organización Panamericana de la Salud, un índice normal de criminalidad es el que
se halla entre 0 y 5 homicidios cada 100.000 habitantes por año. Cuando el índice excede los 8
homicidios, nos hallamos ante un cuadro de criminalidad “epidémica”. En América Latina, según estudios
del organismo, la tasa de homicidios es de 25,1; es decir, el triple del nivel de las epidémicas. Ante tal
158 partiendo del incremento de la violencia común, el narcotráfico y el crimen organizado
nacional o transnacional y dado que la democracia liberal no se ha consolidado, el
votante vuelve su mirada al autoritarismo. Y también los efectos llegan a los propios
actores políticos, manifestándose, eventualmente, la intolerancia de la oposición
política.449
VI.
La fiscalización de los partidos políticos:
Actualmente, el sistema legislativo electoral guatemalteco, impone al Tribunal Supremo
Electoral, vía la Auditoría encargada técnica y legalmente de la función fiscalizadora de
las inversiones que hacen los partidos políticos, una vez entre en vigencia el período de
campaña electoral. Para tal efecto, es el TSE, mediante el Reglamento de la ley
Electoral y de Partidos Políticos, quien fija las sanciones que, van desde multas,450
hasta amonestaciones escritas que son publicadas en el Diario Oficial.
Durante la pasada campaña electoral de 2011, el TSE multó por campaña anticipada, a
once partidos políticos,451 los cuales en su mayoría apelaron las sanciones ante los
órganos jurisdiccionales correspondientes. Para tal caso, los medios masivos de
comunicación, en el período de campaña política, tienen la obligación de suministrar los
informes que le son requeridos, en cuanto a las inversiones en radio, prensa y televisión
–abierta y de cable-, que pauta cada partido político. Y, éstos a su vez, tienen
obligatoriedad de presentar sus estados financieros, para acreditar que la captación de
estado de situación, ¿cuál es el tratamiento eficaz? Los mecanismos convencionales no parecen ser la
respuesta adecuada. Para poder tratar una epidemia, lo conveniente es ante todo estudiar detenidamente
las causas, analizar su evolución, el impacto que tienen sobre la sociedad afectada, los síntomas, etc.”
KLIKSBERG,
Bernardo:
“Los
Mitos
de
la
Mano
Dura”.
www.bibliotecacompromisomza.blogspot.com/2008/06/los-mitos-de-la-mano-dura.html/. Fecha consulta:
31 de marzo 2012
449
DEL AGUILA, Rafael: “La Democracia”. Advierte los riesgos de la intolerancia política: “Sin la
tolerancia de la oposición política y sin la convicción por parte de todos los actores políticos de que si uno
es derrotado (electoralmente, por ejemplo) no será por ello eliminado, sin este tipo de tolerancia no es
posible la democracia. Acaso estemos ante un mínimo entre los mínimos, pues sin la tolerancia política
ninguna de las instituciones o procedimientos o reglas democráticas puede funcionar.” Op. Cit. Pág. 155
450
www.politicagt.com/multan-a-cinco-partidos-politicos-porcampana-anticipada/. Fecha consulta: 6 abril
2012
451
www.noticias.latino.msn.com/latinoamerica/guatemala/articulos.aspx?cp-documentid=27880936.
Fecha consulta: 6 de abril 2012
159 recursos coincide con la inversión realizada, y con los techos o límites autorizados
legalmente.
En este sentido, ante la complejidad del tema, se estima que el TSE, deberá ampliar
sus fuentes de información, para verdaderamente ejercer fiscalización a los partidos
políticos.452 Para ello, puede apoyarse en un control cruzado interinstitucional, y no
hacer un deslucido papel de imponer apenas 39 sanciones por campaña anticipada,
cuando por simple apreciación, la sociedad pudo darse cuenta de la acción prematura,
ilegal e ilegítima de los partidos políticos, durante el evento electoral de 2011.453
Así, por ejemplo, debe auxiliarse de la Superintendencia de Administración Tributaria,
SAT, para los temas de facturación de la pauta publicitaria, y que los mismos sean
cotejados con los reportes que hace cada partido político, respectivamente. De igual
manera, existe la posibilidad que para el tema de lavado de dinero u operaciones
financieras sospechosas, o sin respaldo alguno, el TSE pueda apoyarse en la
Intendencia de Verificación Especial, IVE, para detectar operaciones bancarias entre
particulares, medios masivos de comunicación, financistas públicamente declarados por
los partidos políticos y las cuentas bancarias que éstos manejan durante la campaña
electoral. También, es importante que el TSE, proactivamente, pueda celebrar
convenios de cooperación con la Contraloría General de Cuentas de la Nación, CGC,
que como entidad pública y autónoma, fiscaliza a toda la administración pública y a los
funcionarios y empleados públicos que la integran.
Esto con el propósito de establecer aquellos casos en que se desvían fondos públicos
de entidades centralizadas, descentralizadas, autónomas y municipales, en su caso, en
beneficio de determinada campaña política o candidatura en especial. Todo lo anterior,
452
Como lo refiere la cadena CNN, en la legislación electoral mexicana, y de los respectivos estados,
existe un régimen sancionador fuerte por actos que se puedan calificar de “campaña anticipada”. En el
caso mexicano, por su sistema federal electoral, también hay acción fiscalizadora local en cada Estado,
por parte de los institutos electorales respectivos. Lo anterior, sin perjuicio que el Instituto Federal
Electoral, IFE, también imponga sanciones de carácter nacional a los partidos políticos.
www.mexico.cnn.com/nacional/2011/6/30/el-instituto-electoral-multa-a-eruviel-avila-porcampanaanticipada. Fecha consulta: 6 abril 2012
453
Véase: www.prensalibre.com/noticias/TSE-emite-sanciones_0_432556763.html. Fecha consulta: 6
abril 2012
160 sin perjuicio de promoverse las denuncias penales, por los hechos delictivos
específicamente tipificados en el Código Penal que, obviamente, son de carácter
universal, y no propiamente con dedicatoria electoral. Por ejemplo, si existe falsedad
material o ideológica, en la documentación contable que se presente al TSE, con ánimo
de evadir la acción fiscalizadora.
El lavado de dinero y activos, la malversación, el peculado, la usurpación de calidad,
etc., son figuras delictivas que pueden ser denunciadas, sin pretexto de necesitar una
“reforma electoral”, por cuanto la legislación penal guatemalteca ya las contempla. A
nuestro criterio, el TSE, adopta una actitud de “invernar” durante los primeros tres años
previos a cada nuevo proceso electoral. Y, obviamente, cuando más inminente está la
convocatoria para una nueva elección nacional, salen a luz nuevamente las reiteradas
quejas o justificaciones, en su caso, de “no contar con las herramientas legales” o que
la legislación que existe es insignificante para contener el impulso de los aspirantes a
puestos de elección popular.
Derivado de ello, hay partidos políticos y candidatos, a todo nivel, que incluso realizan
campaña electoral anticipada454 y proceden a saturar de propaganda el país. Y, en
algunos casos, sobrepasan el techo de inversión en campaña que autoriza el Tribunal
Supremo Electoral. No necesariamente porque se haya efectuado más campaña, sino
por los costos elevados de la video política y, en general, los medios masivos
disparadores del gasto de campaña. Luego, en un círculo vicioso ya conocido por la
sociedad guatemalteca, el TSE siempre saldrá argumentando que no tiene la
infraestructura legal, operativa y técnica adecuada, para proceder a sancionar o
contener a los partidos en su desborde de activismo electoral.
VII.
El fenómeno del transfuguismo
El fenómeno del transfuguismo, que más elegantemente se puede denominar
“disidencia”, está presente en la política a nivel global. Obviamente, a más
454
www.politicagt.com/tse-busca-sanciones-mas-fuertes-para-infractores/. Fecha consulta: 6 abril 2012
161 institucionalización de los partidos políticos, y consolidación de la democracia y el
sistema de partidos políticos, menos casos de transfuguismo se determinan, lo cual no
tiene que ver necesariamente con las condiciones sociales, económicas y políticas del
país que se trate, toda vez que países grandes, ricos y poderosos a nivel mundial como
Japón, Brasil, Italia y Rusia, tienen altos índices de transfuguismo. Los autores: Petri y
Vargas, al analizar el fenómeno a nivel centroamericano, y lo que ellos denominan
“cultura parlamentaria y disciplina parlamentaria”, establecen que algunos de los
factores que motivan el transfuguismo pueden ser:
•
“ Cambios de orientación ideológica – que estos sean verdaderos o fingidos;
•
Diversas estrategias de oportunismo político;
•
La existencia de una cultura política tolerante y permisiva del transfuguismo;
•
La institucionalización de los partidos políticos y el grado de identificación que
tiene el electorado con “las etiquetas partidarias”;
•
La influencia de los medios de comunicación;
•
Las oportunidades políticas de los legisladores (trayectorias políticas);
•
Las características del sistema de partidos.”455
Ahora, en el caso específico guatemalteco, es interesante que la actual legislatura que
se inició el 14 de enero 2012,456 el partido de gobierno, Partido Patriota, PP, de 59
diputados pasó a tener 62, la oposición del partido Líder, de 14 llegó a tener 24
diputados, y la UCN, de 12 pasó a tener 17, respectivamente. Estas cifras no impiden
que, en el primer semestre 2012, se puedan vislumbrar más movimientos tránsfugas en
todas las fuerzas políticas representadas en el Congreso de la República.
455
PETRI, Dennis P. y VARGAS, Jean-Paul: “Cultura parlamentaria y disciplina partidaria: la
institucionalidad
informal
del
transfuguismo
en
Centroamérica.”
www.ort.edu.uy/facs/.../culturaparlamentariaydisciplinaparlamentaria.doc. Fecha consulta: 31 marzo 2012.
456
Editorial diario PRENSA LIBRE “Transfuguismo crea incertidumbre”, publicado el 19 enero 2012.
www.prensalibre.com.gt/opinion/transfuguismo-crea-desprestigio_0_630536956.html. Fecha consulta: 31
de marzo 2012
162 Evidentemente, nuestro país tiene una fuerte tradición tránsfuga parlamentaria. Ese
fenómeno también se produce a nivel de alcaldías, pero en mínima parte. Por ello,
autores como Fortín, refieren que, en el caso guatemalteco, el 42.86% de los diputados
reelectos al Congreso de la República de Guatemala, de 1990 a la presente fecha, han
cambiado de partido político. Y, el 34.17% de los electos entre 2008-2012, pertenecen a
un partido político distinto por el que fueron electos.457
El sistema electoral458 guatemalteco reconoce dos tipos de diputados electos
popularmente: diputados distritales y diputados por lista nacional. Los primeros
corresponden a la división administrativa de Guatemala en 22 departamentos, en un
territorio de 108,889 Kms.2.459 Y, en el caso del distrito central –municipios del
departamento de Guatemala, se eligen diputados con esa calidad. Esencialmente, las
circunscripciones electorales eligen mediante votación popular: a) un presidente y
vicepresidente, por mayoría absoluta en primera vuelta electoral y, si no se alcanza, se
elige por mayoría relativa en la segunda vuelta; b) En cuanto a los diputados, en la
clasificación ya apuntada, y los alcaldes y concejos municipales, estos se eligen por
representación de minorías por medio del método D´Hondt, y que se establece
mediante la “cifra repartidora”,460 para efectos de la representación proporcional de
minorías; c) También se eligen diputados al Parlamento Centroamericano –
PARLACEN- por el mismo método de elección de los diputados, únicamente que
mediante una lista nacional que cada partido político postula.
457
Este autor compara los porcentajes del transfuguismo en la política guatemalteca, con el resto de
países a nivel mundial (Bolivia, Ecuador, Italia, Brasil, Japón y Rusia), que llega al 30%. Esto implica que
Guatemala tiene un primer lugar en el índice mundial de transfuguismo. A diferencia de los Estados
Unidos de América, que tiene el índice más bajo con apenas 20 diputados en ambas cámaras, entre
1947 y 1997. FORTIN, Javier: “Transfuguismo Parlamentario en Guatemala: Un caso de Altos Costos de
Asociación, Monopolio Partidario y Bajos Costos”. América Latina Hoy. Vol. 54, 2010. Universidad de
Salamanca, España. Pág. 141-166. Ver: www.redalyc.udemex.mx/pdf/308/30813328007.pdf. Fecha
consulta: 31 marzo 2012
458
El autor JUAN HERNANDEZ BRAVO, en “Los Sistemas Electorales”, enfatiza, al referirse a lo que
constituye un sistema electoral, que “…un sistema electoral, cualesquiera se limita a cumplir funciones de
mayor modestia, fortaleciendo o no ciertas tendencia sociales y políticas que ya se encuentran presentes
en un determinado sistema político, y que sus efectos concretos pueden variar si varían las condiciones
sociales y políticas sobre las que actúa.” DEL AGUILA, Rafael (editor). Op. Cit. Pág. 350
459
“GEOGRAFIA ILUSTRADA DE NUESTRO MUNDO”, Editorial Ramón Sopena, Barcelona, 1984. Pág.
139
460
Artículo 203de la Ley Electoral y de Partidos Políticos. Tribunal Supremo Electoral. Guatemala, febrero
2009. Pág. 62
163 El Congreso de la República, actualmente está conformado por 158 representantes,
cuyo número puede incrementarse. Cada Distrito Electoral tiene derecho a un diputado
por mandato legal.461 Sin embargo, la Ley Electoral y de Partidos Políticos, establece
que basándonos en el último Censo Nacional que preceda a la elección, elige un
diputado adicional por cada 80,000 habitantes para aumentar el número de sus
representantes en el Congreso. De esa cuenta, el Distrito Electoral del departamento de
El Progreso, únicamente cuenta con un diputado en el Congreso de la República. Por el
contrario, los Distritos Electorales de los departamentos de San Marcos y
Huehuetenango, poseen juntos un total de diecinueve (19) diputados, casi el 13% del
total del Pleno Parlamentario.
Aquí llegamos al punto de considerar que la representación auténtica en el Congreso
de la República, no es directamente condicionada por la proporcionalidad con que se
eligen más diputados. El punto de discusión es si la representación debe ser
equitativamente más distribuida. Pero a este escenario agreguemos un elemento más:
el transfuguismo parlamentario. El fenómeno del político que emigra, o a veces huye o
se “vende”, de un partido a otro, se manifiesta en el seno del Congreso de la República.
Este tipo de actos políticos públicos, obtienen una incontenible y abundante exposición
mediática e impacto negativo. Los diputados que se postulan mediante un partido
político, juran el cargo de elección, y luego sin más trámite se cambian a otra fuerza
partidaria existente en el Congreso. Otros hasta le dan vida a “bancadas
independientes”, es decir, sin ningún tipo de relación formal con un partido político,
generalmente sin o con imperceptible línea ideológica, con evidente énfasis de costo de
transacción, ubicación pragmática y búsqueda de intereses individuales de sus
miembros.
En este fenómeno político negativo, y que contribuye al deterioro de la imagen de los
políticos y al desgaste de los respectivos partidos y alianzas electorales, se observan
461
Ibid. Artículo 205. Pág. 63
164 dos factores fundamentales que lo alientan y consolidan: a) la débil disciplina partidaria,
y b) la escasa o nula cohesión partidaria. Ambos, constituyen el campo propicio para
que Guatemala tenga el más alto índice a nivel centroamericano, y quizá mundial, de
transfuguismo parlamentario. Y, siendo el Congreso de la República, el organismo
político del Estado, por excelencia, implica que desde allí los pactos, compromisos,
fidelidad, disciplina y cultura política, no tienen mayor fortaleza y densidad.
El transfuguismo a veces, no espera ni tiene límites462 en nuestro país. Ha horadado
colores, ideologías, estructuras partidarias, tiempos, circunstancias y la gobernabilidad
misma. A tal grado que, en la presente legislatura, luego del asesinato de un diputado
electo por el Distrito Electoral de Alta Verapaz,463 el segundo lugar, que fue llamado a
ocupar la vacante en la curul, prácticamente sólo juramenta y días después migra hacia
otro partido político. O el caso del partido político Unidad Nacional de la Esperanza –
UNE-, que recién dejó el gobierno el 14 de enero 2011, cuya bancada se desintegró y
se evaporó vía el transfuguismo en menos de un bimestre de sesiones y vida
parlamentaria. Esto además, posibilitó que el ex presidente del Congreso de la
República, Roberto Alejos, formara una “bancada independiente” o de “corbatas
moradas”, por el color distintivo que eligieron para su vestimenta.
El transfuguismo como tal, no está contemplado en la Ley Electoral y de Partidos
Políticos, y tampoco está prohibido en la Ley Orgánica del Organismo Legislativo. Y, si
constitucionalmente, es lícito hacer todo lo que la ley no prohíbe, pues los políticos
electos se la han tomado en serio en los últimos veinticinco años de desenvolvimiento
462
MILL, al analizar la influencia del gobierno en general, reconoce que “Una de las cuestiones más
discutidas en el período actual, tanto en la ciencia política como en el arte práctico de gobernar, es la de
los límites que deben fijarse a las funciones y a la acción de los gobiernos.” MILL, John Stuart. Op. cit.
Pág. 681
463
El asesinato del diputado reelecto por el departamento de Alta Verapaz, Valentín Leal, y del hermano
de este, un día antes de la toma de posesión de la legislatura que asumió el 14 de enero 2012, sacudió la
entraña del sistema político y la sociedad guatemalteca. Surgieron varias hipótesis, incluso que podría
estar vinculado con el “transfuguismo” que el asesinado había intentando, al pretender migrar de la
bancada del Partido Libertad Democrática Renovadora –LIDER- que postuló al candidato que perdió la
elección presidencial, hacia la bancada del Partido Patriota –PP-, actualmente en el gobierno. PRENSA
LIBRE.
Edición
del
13
de
enero
2011.
www.prensalibre.com.gt/archivo/?test=asesinan%20a%20diputado&minPublishedDate=946706400&max
PublishedDate=133135. Fecha de consulta: 10 de marzo 2012
165 democrático parlamentario. Pero esta facilidad migratoria política o “travestismo”
político, va generando y sumando desgaste y deterioro no sólo a la institucionalidad de
los partidos políticos, sino a la gobernabilidad democrática.
El transfuguismo puede ser considerado desde diversas ópticas:
a)
Como un efecto de la libertad individual del diputado electo, de permanecer o no
dentro de la disciplina y estructura partidaria que lo llevó a la papeleta de elección. A la
vez, constituye una muestra de falta de ética política o ética personal del tránsfuga, es
decir, una expresión de ausencia de moral de parte de la dirigencia política.
b) como un producto consustancial del deterioro de la imagen de los políticos y de la
política, por cuanto el discurso que se argumentó en campaña, es obvio que entonces
fue descarnado, acomodaticio, electorero y sin contenido o sustentación ideológicopartidaria;
c) Que los “tránsfugas”, con el supuesto ejercicio de libertad de acción, están
traicionando a sus electores, en primer lugar, a la organización partidaria que les
postuló y, en última instancia a la nación que en voto cruzado, intentó balancear las
posturas y planteamientos en el organismo político por excelencia, que es el poder
legislativo;
d) El transfuguismo aumenta el descontento de la población para con la política y los
políticos, erosiona la credibilidad en general con el quehacer político;
e) Finalmente, el impacto del tránsfuga parlamentario, impone la necesidad de reformar
la Ley Orgánica del Organismo Legislativo, en el sentido que el diputado que abandone
la fuerza partidaria que lo llevó al escaño, pueda sustituir a éste por el suplente que
corresponda. Con esto, aunque sea desde un punto de vista aspiracional o ideal, el
partido político que sufra el transfuguismo, pueda responder en alguna medida a sus
votantes, respecto de la oferta política legislativa que hicieron en campaña.
166 Si bien es cierto, la Constitución Política de la República reconoce y garantiza
plenamente la libertad de acción, que se traduce en que toda persona tiene derecho a
hacer lo que la ley no prohíbe, esto no significa que no se pueda limitar mediante
prohibiciones específicas464 que pudiesen incorporarse por reformas la Ley Electoral y
de Partidos Políticos y a la Ley Orgánica del Organismo Legislativo, el transfuguismo
que se cierne como elemento altamente erosionador de la credibilidad del sistema
político. Aunque, por disposición del inciso b) del artículo 136 de la Constitución Política
de la República,465 el derecho a ser electo es de carácter eminentemente personal,
también lo es que el bien común prevalece sobre el individual. Y, en este caso, se
deberá legislar en función que el diputado electo, permanezca en la disciplina partidaria
del ente que le incluyó en la papeleta electoral.
Por supuesto, este tipo de prohibición, eventualmente el Congreso de la República, al
momento de conocer una iniciativa de ley en ese sentido, tendría que hacer uso de su
derecho de efectuar consulta previa a la Corte de Constitucionalidad, a efecto de
establecer si, en materia política, al vedar el transfuguismo político-parlamentario, no se
esté violando el contenido del artículo 34 Constitucional,466 que establece el de derecho
de asociación. Y, si una de las formas de asociación es vía el partido político, habría
que establecer si es o no constitucional limitar la migración hacia otra fuerza política,
por parte del diputado, o bien de declararse “independiente”, porque en ambos casos,
se supone, el tránsfuga previamente aceptó el funcionamiento y alcances de
reglamentación interna.
Indudablemente este tipo de cambios sustanciales en el actuar político guatemalteco,
demanda y exige la búsqueda de consensos intra y extra-partidarios. Una buena dosis
de reconocimiento de que no puede existir un sistema político que, en el pensamiento
464
CORTE DE CONSTITUCIONALIDAD de Guatemala. Gaceta No. 91. Expediente No. 536-2007. Fecha
de sentencia: 18 de marzo 2009.
465
Artículo 136, literal b) de la Constitución Política de la República de Guatemala: “Deberes y derechos
políticos. Son derechos y deberes de los ciudadanos: a)… b) Elegir y ser electo…”
466
Artículo 34 de la Constitución Política de la República de Guatemala: “Derecho de Asociación. Se
reconoce el derecho de libre asociación. Nadie está obligado a asociarse ni a formar parte de grupos o
asociaciones de autodefensa o similares. Se exceptúa el caso de la colegiación profesional.”
167 de Habermas, pueda buscar comunicación en búsqueda de común acuerdo y planes de
acción, por ello es importante evaluar su afirmación que “sólo pueden pretender validez
aquellas normas que pudiesen contar con el asentimiento de todos los afectados como
participantes en un discurso práctico.”467
Finalmente, las interrogantes que quedan pendientes de responder, entre otras,
estarían:
¿Es legítimo que un diputado electo por un distrito y que usó como vehículo electoral
determinado partido político, abandone a este último y por consiguiente, varíe la
propuesta partidaria e ideológica en perjuicio del elector que precisamente le otorgó el
voto, partiendo de tales elementos?
¿Hasta dónde se debe respetar la voluntad individual del diputado, para cambiarse de
partido político, versus el mandato que le delegó el elector, quien ya no es consultado
para ese cambio institucional e ideológico?
¿Será el transfuguismo un fenómeno fruto de la inexistencia de raigambre ideológica en
los partidos políticos guatemaltecos?
¿Debieran prevalecer los derechos del diputado electo versus los derechos de los
votantes que delegaron su representación en el partido político y en el elegido?
Y, finalmente: ¿La diputación pertenece al diputado electo o al partido que lo impulsó
política, legal y legítimamente?
VIII.
Los medios de comunicación y el proceso político
En el proceso de formación de la opinión, y en la toma de decisión por una opción
política electoral, juegan un papel determinante los medios de comunicación. El video
político y su respectivo lenguaje audiovisual, así como los sofisticados “spots” o “jingles”
publicitario-propagandísticos de las campañas políticas, constituyen verdaderas obras
467
HERRERA, Asunción: “Jürgen Habermas- El filósofo en el siglo XXI” Editorial Losada Nobel. Oviedo,
España, 2004. Pág. 11
168 de arte. Es el culto a la imagen y toda la parafernalia que implica, lo que termina
configurando, apuntalando y consolidando una tendencia electoral determinada, tanto
en el ámbito local-municipal, departamental, como a nivel nacional en el nivel
presidencial.
Asistimos entonces a un escenario en que, por un lado, los medios de comunicación,
ejercen su papel de “cuarto poder”, con su correspondiente impulso de opinión,
cuestionamiento y seguimiento al ejercicio político. Y, por el otro, esos mismos medios,
impulsan la banalización de los mensajes políticos. Vía la captación de pautas
multimillonarias de los partidos políticos, literalmente se fabrican figuras, se construyen
“personalidades”, y se puede sacralizar o satanizar,468 indistintamente, a candidatos,
partidos
y
propuestas
u
ofertas
electorales.
A
ese
respecto,
el
pensador
estadounidense Thoreau,469 en el siglo XIX, ya afirmaba que “Todo sistema electoral es
una especie de juego de azar, semejante al ajedrez o la brisca, con su ligera tara moral
por aquello de oscilar entre el bien y el mal, con sus derivaciones éticas, pues
naturalmente corre dinero en las apuestas.”
No obstante que pueda existir debate, relativo a si es o no determinante en la voluntad
del elector, el impacto de los medios masivos, incluídos ahora los medios electrónicos,
no podemos abstraernos al hecho que cada día los medios juegan un rol central en el
quehacer político. A tal grado llega este rol que, en países como México, que Carlos
Fuentes denomina la “dictadura perfecta” del Partido Revolucionario Institucional,
PRI,470 luego de más de setenta años de gobierno, fue derrotado por el Partido de
Acción Nacional, PAN. No obstante, hay autores como Naranjo que piensan que “El
estilo folklórico de gobernar de Vicente Fox hizo que pasáramos de la dictadura
perfecta a la caricatura perfecta.”471 Pero como se expresa al inicio del presente trabajo,
468
“Además, los medios hablan con voces diferentes, presentan <<verdades>> distintas. ¿A quién hay
que creer? Los líderes de opinión son las <<autoridades cognitivas>>, aquellos a quienes nosotros
preguntamos quién es digno de confianza y en qué creer. Los líderes de opinión local hacen pues de filtro
y también de prisma para las comunicaciones de masas.” SARTORI, “¿Qué es la democracia? Op. Cit.
Pág. 79
469
THOREAU, Henry David: “Desobediencia Civil”. Op. cit. 1970. Pág. 33 y 34
470
FUENTES, Carlos: “La Silla del Águila”. Op. Cit. Pág. 34
471
NARANJO, Rogelio: “Me van a extrañar”. Ediciones Proceso. México, D.F., 2006. Pág. 11
169 la política en la mayoría de casos se manifiesta en movimiento pendulares. Aunque
algunas veces dura en un extremo –más de 70 años en el caso mexicano con el PRI-,
también retorna cíclicamente. Hoy, Enrique Peña Nieto, está a punto de alcanzar
nuevamente el poder en México, tras dos sexenios del Partido de Acción Nacional,
PAN. Para ello se ha tenido que recurrir, incluso, a explotar la imagen de la actual
esposa del candidato la actriz Angélica Rivera, “La Gaviota”.472 Y en consonancia con lo
que Durán Barba denomina la “videopolítica”, el imperio televisivo Televisa, tiene una
alianza con este político desde su período de Gobernador del Estado de México en
1997.473
En Guatemala, por ejemplo, un buen marketing electoral, ha ido consolidando una
tendencia que no importa quién lo diga, sino como lo diga, lo que al final de cuentas
hace la diferencia entre uno u otro candidato. Hoy importa más el gesto, el tono de la
voz, un puño o un dedo alzado, antes que la propuesta o el aporte para el debate
político. Y menos aún importa hacer el bien para el país y por ende para la siguiente
generación. Más pareciera que el político guatemalteco ha hecho suya la frase
maquiavélica de que “…Y el bien que les hagas no te aprovechará, porque juzgarán
que los has hecho por obligación, y no te lo agradecerán.”474
En síntesis, el papel de los medios de comunicación, ha ido afianzando en los políticos
la premisa que, como en el caso guatemalteco, importa la forma más que el fondo. De
allí que asesores de campaña como Ligorría, establezcan que en estrategia política
existe una “tríada elemental” formada por la teoría política, el marketing y la estrategia.
Y, al referirse al marketing, precisa que es la “…Creación, promoción y venta de líderes,
objetivos, proyectos y programas políticos.”475
472
CRUZ, Francisco y MONTIEL, Jorge Toribio: “Negocios en Familia. Biografía no autorizada de
ENRIQUE PEÑA NIETO y el GRUPO ATLACOMULCO”. Editorial Planeta Mexicana, S.A. de C.V.
México, D.F. 2011. Pág. 283 y 291
473
Ibid. Pág. 140
474
MAQUIAVELO, Nicolás: “El Príncipe”. Editorial Universitaria. San José Costa Rica, 1997. Pág. 85
475
LIGORRIA CARBALLIDO, Julio: “Estrategia Política desde el Diseño Operativo”. Fundación Cánovas
del Castillo y Centro Interamericano de Gerencia Política”. España. 2002. Pág. 51
170 Y si nuestros líderes políticos son un constructo del marketing, la descalificación, la
vulgaridad o el ataque, también hay que reconocer que las sociedades de masas, en
materia política, absorben más fácilmente este actuar político. Así, el impacto de una
cultura televisiva de “talk-show”, en el caso de los mayores, y del videojuego, en el caso
de los más jóvenes, genera condiciones propicias para que, como electores, no
demanden mayor contenido a sus candidatos, excepto el espectáculo que puedan
generar. En el caso guatemalteco, todo ello es posible con el significativo y “generoso”
aporte del monopolio televisivo que controla el mexicano Ángel González. A tal extremo
ha llegado esta determinante fuerza en los políticos guatemaltecos que en el veterano
diputado Mario Taracena Díaz-Sol en plena campaña anterior, al referirse a este
magnate dijo que era el “Ángel de la democracia” para Guatemala…
El ejercicio político no está comprometido con el ejercicio serio del poder, sino con la
elección como fin, y no como medio. Esto implica que se pueda tener, en la mayoría de
casos, excelentes oradores y manejadores de imagen, pero pésimos administradores y
conductores del poder, propiamente dicho. A eso quizá obedezca, la frustración y el
desencanto del ciudadano con la democracia como sistema político. La relación
políticos-medios de comunicación, es ineludible, determinante e insustituible, en un
mundo informatizado y virtualmente dependiente. Asistimos indudablemente, a un
proceso en que “La democracia se ha ampliado, porque se ha despolitizado y se ha
vulgarizado”, como lo afirma Durán Barba.476
Si ya en Guatemala es frecuente escuchar que tenemos una democracia formal pero no
participativa, en lo futuro terminaremos adjetivando nuestra democracia quizá de
democracia mediatizada, o “videocracia”477 o del “homo videns”, como la califica Sartori.
Y, con ello, podría incrementarse, al menos en países latinoamericanos como el
nuestro, que se pueda volver a autoritarismos ya superados. En ese sentido, Thesing,
advierte que “antes que nada quiero dejar en claro que no existe una antinomia entre
476
DURAN BARBA, Jaime y NIETO, Santiago. Op. cit. Pág. 58
SARTORI, Giovanni. “El Homo Videns. La Sociedad Teledirigida”. Editorial Taurus, México, D.F. 1999.
Pág. 159
477
171 democracia y Estado, como muchas veces se presupone. La democracia y el Estado
son indivisibles. Forman una unidad.”478 .
Un ejemplo claro del riesgo de involución hacia autoritarismos, supuestamente ya
superados en Latinoamérica, lo constituye el ascenso vertiginoso del presidente Hugo
Chávez, quien “Saca de las sombras uno de los más antiguos fantasmas de
Latinoamérica: la revolución.”479 Un hombre que sin tener control de los medios, fue
dando golpes mediáticos importantes en la mente de los venezolanos, descalificando a
los partidos políticos y la clase política, propiamente dicha. Prácticamente, de golpista y
encarcelado, pasó a tener el poder casi total en aquel país, anulando incluso a los
medios de comunicación. Total el chavismo logró entender desde sus inicios que “el
público está, pues, determinado por un interés común que le hace atender a ciertos
hechos.”480.
IX.
Crisis de credibilidad e institucionalidad de los partidos
Habitualmente, se habla de crisis de credibilidad de los partidos políticos y de los
políticos. Frente a otras instituciones, los ciudadanos perciben mejor el papel de las
iglesias, los cuerpos de bomberos, etc., frente al desempeño de los políticos. Esto quizá
tenga explicación en el razonamiento maquiavélico de que “…los hombres, cuando
reciben bien de quien esperaban mal, son más agradecidos con su benefactor; así el
pueblo se convertirá más rápidamente en amigo del príncipe, que si él mismo lo hubiera
llevado al principado.”481
En materia de credibilidad de la política por parte de la sociedad y los administrados,
propiamente dichos, Aznar482 advierte que “la mejor política no consiste en hacer los
mejores discursos, sino en los mejores hechos.” Pero los detractores no sólo son los no
478
THESING, Josef: “Del Pensamiento de Josef Thesing”. Revista ASIES No. 3. Guatemala, 2009. Pág.
56 y 57
479
MARCANO, Cristina y Alberto Barrera Tyszka: “Hugo Chávez Sin Uniforme- Una historia personal”.
Grupo Editorial Random House Mondadori,, S.A. Caracas 2004. Pág. 31
480
SANCHEZ AGESTA, Luis. Op. cit. Pág. 271
481
MAQUIAVELO, Nicolás. Op. Cit. Pág. 88 y 89
482
AZNAR, José María. Op. cit. Pág. 14
172 políticos, también algunos que ejercen el poder auto descalifican el trabajo de
gobernantes y políticos. Así por ejemplo el presidente venezolano Hugo Chávez, a las
cumbres latinoamericanas o regionales, se expresa peyorativamente diciendo que “Los
presidentes vamos de cumbre en cumbre y los pueblos de abismo en abismo.”483
Con simpleza puede decirse que haciendo un símil con la cita bíblica de que no se cae
la hoja del árbol sin voluntad del Creador, podemos decir que no cae en la urna el voto,
sin la inversión en dinero que implica el ejercicio de la democracia representativa y
formal. La democracia como tal, es un producto caro, y los políticos con virtud, escasos
y casi una rareza.484 Es interesante que, respecto al dinero en términos de poder,
“…hablando en términos absolutos, mientras más dinero se tiene, menos virtud se
posee, pues el dinero se interpone entre el hombre y su objetivo y se lo ofrece sin
esfuerzo.”485 Las campañas políticas han venido convirtiéndose en verdaderas
inversiones multimillonarias, toda vez que ante el avance y desarrollo de los medios
masivos de comunicación, y su cercano competidor, constituido por los medios
electrónicos. Hemos pasado a tener una “video política”, en el cual “El mensaje de los
candidatos y de los gobernantes aparece en ese contexto de espectáculo.”486
Sin parangón con las campañas políticas efectuadas en el pasado, la postmodernidad y
las leyes del mercado –especialmente el marketing- se han adueñado de las agendas y
prioridades de los políticos, de los partidos y de la política en su conjunto.
Prácticamente, el aspecto mediático y manejo de imagen, ha pasado a sustituir el
discurso, el debate y el planteamiento ideológico. Asistimos quizá, a la última fase de
los partidos como inspiradores del planteamiento y exposición racional de propuestas
ideológico-políticas, hacia un estadio de mercantilización de la política.
Hoy, se observan candidaturas que con suficiente soporte de inversión propagandísticopublicitaria, demuestran que con el debido maquillaje, camuflaje, manipulación de
483
MARCANO, CRISTINA y BARRERA TYSZKA. Ibid. Pág. 317.
“…los extremos de la virtud se asemejan a los del amor en que su mérito proviene precisamente de su
rareza, de su condición de obra maestra única, de hermoso exceso.” YOURCENAR, Op. cit. Pág. 147
485
THOREAU, Op. Cit. Pág. 53
486
DURAN BARBA, Jaime y NIETO, Santiago. Op. Cit. Pág. 95
484
173 necesidades del votante, o falazmente concebidas en sus mensajes,487 cualquier oferta
electoral, incluso las carentes de sustentación, raciocinio o lógico, pueden provocar en
el votante eventual inducción al voto.
Lo anteriormente expuesto nos pone ante la ineludible responsabilidad de ver que el
tema del financiamiento488 para los partidos políticos, constituye uno de los elementos
fundamentales y determinantes en la consolidación del régimen de partidos políticos. A
la vez, condiciona la institucionalidad de estos y el desarrollo de ciudadanía plena y no
meramente electoral, por parte de los votantes.
Al echar un vistazo de algunas de las expresiones que matizan la política
latinoamericano, no podemos ignorar que, en materia de financiamiento político, y sus
costos hay algunas relevantes. En la construcción de liderazgos y figuras con
posibilidades de acceder al poder, está la advertencia del político mexicano Carlos
Hank González que, curiosamente su frase más conocida, la que lo hizo famoso, “Un
político pobre es un pobre político”.489 En ese sentido, es necesario también no dejar de
lado el hecho que la percepción ciudadana, y las expresiones de la “sociedad civil”
guatemalteca, cuando se toca esta temática, son relativamente contrarias a que se
promuevan las modificaciones de la actual Ley Electoral y de Partidos Políticos, en
cuanto a que se pueda financiar a los partidos políticos desde el financiamiento público.
487
En la recién finalizada campaña electoral de 2011, por la presidencia en Guatemala, un candidato no
dudó en aparecer con una Biblia en una mano, otra en la Constitución, bendiciendo con estilo casi papal
en cada uno de sus mítines. Además, saturó los medios masivos con su ofrecimiento de establecer un
bono para los trabajadores públicos y privados, sin ofrecer una fuente de financiamiento lógica, legal y
técnicamente sustentable. Únicamente concretándose a ofrecer, artificiosa e irresponsablemente, que
impuestos que ya se pagan por parte del contribuyente, fuesen direccionados para dicho laboral, pero
ocultando que el Estado entraría, son semejante oferta, en más déficit fiscal del que ya arrastra
inveteradamente.
488
Al respecto, es interesante que el informe de Acción Ciudadana (capítulo en Guatemala de
Transparencia Internacional), tiene una interpretación del financiamiento de la campaña de los partidos
políticos en el evento electoral 2011, en que afirma: “La inversión en publicidad de los partidos supera el
límite de Q48 millones de quetzales fijado por el Tribunal Supremo Electoral. A la vez que se nota una
inversión que rebasa ampliamente los presupuestos presentados por las agrupaciones partidistas al TSE.
Se
evidencia
también
la
intención
de
ocultar
la
fuente
de
financiamiento.”
www.accionciudadana.org.gt/Documentos/Mirador2011/Primer%20Informe%20Mirador%20Electoral%20
FINAL.pdf. Fecha consulta: 14 de abril 2012
489
CRUZ, Francisco y MONTIEL, Jorge Toribio: “Negocios en Familia. Biografía no autorizada de
ENRIQUE PEÑA NIETO y el GRUPO ATLACOMULCO”. Editorial Planeta Mexicana, S.A. de C.V.
México, D.F. 2011. Pág. 236
174 Actualmente, Guatemala tiene un financiamiento político mixto. Por mandato de la Ley
Electoral y de Partidos Políticos,490 los partidos políticos tienen derecho a
financiamiento público –a posteriori y condicionado- a los montos de votos alcanzados
en la postulación de candidatos para la Presidencia de la República. La otra fuente de
este financiamiento mixto, proviene de las aportaciones privadas que, en la
prácticamente, se convierten en el principal soporte de las campañas políticas. Esto
último deviene en una serie de compromisos clientelares, ofertas de privilegios y
prebendas y, en general, que el gobernante que resulte electo, asuma el poder con una
serie de “acreedurías” de financistas privados, de diverso origen y con multiplicidad de
intereses y énfasis.
Así las cosas, en cuanto el financiamiento público que reciben los partidos políticos,
tiene un límite máximo de gastos de campaña electoral que, conforme la literal b) del
artículo 21 de la Ley Electoral y de Partidos Políticos, será “…a razón del equivalente
en quetzales de un dólar de los Estados Unidos de América, por ciudadano
empadronado hasta el treinta y uno de diciembre del año anterior a las elecciones.”491
Es así como, para la reciprocidad en el pago de aportes privados a las campañas
políticas, pueden ser nombrados –a veces- directamente los financistas y, en la mayoría
de casos, sus delegados o representantes, con los consabidos compromisos del pago
490
Artículo 21 de la Ley Electoral y de Partidos Políticos, establece que:”Del financiamiento de las
organizaciones políticas y campañas electorales: Corresponde al Tribunal Supremo Electoral el control y
fiscalización de los fondos públicos y privados que reciban las organizaciones políticas para el
financiamiento de sus actividades permanentes y de campaña. El reglamento regulará los mecanismos
de fiscalización. El Estado contribuirá al financiamiento de los partidos políticos a razón de el equivalente
en quetzales de dos dólares de los Estados Unidos de América, por voto legalmente emitido a favor, (el
subrayado es nuestro) siempre que haya obtenido no menos del cinco por ciento (5%) del total de
sufragios válidos, depositados en las elecciones generales. El cálculo se hará, tomando como base la
mayor cantidad de votos válidos recibidos, o para los cargos de Presidente y Vicepresidente de la
República o en el Listado Nacional para los cargos de Diputados al Congreso de la República. Se
exceptúa del requisito del cinco por ciento (5%), a los partidos que obtengan por lo menos una diputación
al Congreso de la República, quienes recibirán igualmente el financiamiento. El pago del financiamiento
se efectuará dentro del período presidencial correspondiente, en cuatro cuotas anuales iguales y durante
el mes de julio de cada año. En caso de coalición el financiamiento se distribuirá conforme lo determine el
pacto de coalición. Los comités ejecutivos nacionales tienen la obligación de descentralizar los fondos
públicos que reciban, trasladándolo a los comités ejecutivos departamentales y municipales el porcentaje
que dicho comité acuerde…” Tribunal Supremo Electoral, febrero 2009. Pág. 6 y 7
491
Ibid. Literal e) del aartículo 21 de la Ley Electoral y de Partidos Políticos.
175 de las facturas políticas, y de velar por el direccionamiento de contratos diversos en el
Estado, obtención de privilegios específicos, legislación ad-hoc a los intereses de
financistas, etc. Y, ante este panorama, cabe reflexionar respecto de la trascendencia
del financiamiento en la salud sistémica del quehacer político en Guatemala.
Veamos dos ejemplos concretos:
En el gobierno de Oscar Berger Perdomo, tuvo como uno de sus financistas y eventual
“delfín”492 político a Eduardo González Castillo, quien se desempeñaba como Secretario
Ejecutivo de la Presidencia, que la estructura administrativa de ese entonces, fue una
especie de “superministro”. Pero, el futuro de este financista de campaña, fue cortado
de tajo, fruto de una escandalosa “quiebra” bancaria de la entidad que el padre de éste
había fundado años atrás. No sólo perdió la virtual candidatura presidencial, sino que al
día de hoy, se encuentra sometido junto con su padre y demás directivos del
desaparecido “Banco del Café”493 y “off-shore” correlacionadas, sujeto a prisión y
pendiente de enfrentar debate oral y público para el tribunal penal los sentencie.
En otro caso, durante el gobierno de Alfonso Portillo Cabrera, su principal financista, el
ex banquero, Francisco Alvarado McDonald,494 se le acusó de haber recibido de fondos
del Estado mil quinientos millones de quetzales, que se transfirieron a los hoy
desaparecidos bancos “Promotor” y “Metropolitano”, ante la quiebra de dichos entes.
Luego, este financista fue sometido a proceso penal. Este, a su vez, ripostó en contra
del ahora ex presidente Portillo Cabrera, por una mansión que le había proporcionado y
otros apoyos de campaña. Hoy, el ex presidente guarda prisión y se encuentra
pendiente de que se confirme un procedimiento de extradición hacia Estados Unidos de
América. El financista está libre y el dinero del erario público aún no se recupera.
492
Delfín “…Título que se daba al primogénito del rey de Francia desde 1439…” Diccionario de las
Américas. Editorial Plaza & Janes. Barcelona, 1995.
493
Diario PRENSA LIBRE de Guatemala. Edición digital del 16 de diciembre 2011.
www.prensalibre.com/noticias/captura-Eduardo_Gonzalez-Bancafe-international_0_610139149.html.
Fecha consulta: 8 marzo 2012.
494
Diario PRENSA LIBRE de Guatemala. Edición digital del 17 de agosto 2003.
www.prensalibre.com.gt/noticias/sombra-corrupción-Istmo_0_75593424.html. Fecha consulta: 8 de marzo
2012.
176 Los dos ejemplos anteriores, son una pequeña muestra de lo que significa, y la
trascendencia que tiene, el considerar seriamente en nuestro país todo lo relacionado
con el financiamiento privado de los partidos políticos, sin más control por parte del
Tribunal Supremo Electoral que la auditoría que se practica en las pautas publicitarias,
y la eventual imposición de sanciones nada sustanciales o disuasivas, en su caso. No
obstante lo anterior, Guatemala no aparece calificada en el Índice de Opacidad
Financiera (IOF), a nivel mundial, a diferencia de Estados Unidos de América, que
ocupa el primer lugar.495
Obviamente, a semejante potencia unipolar y hegemónica, jamás la “comunidad
internacional”, le va a imponer que cambie su legislación o que modifique su sistema
financiero nacional. Pero ni siquiera se atreve la comunidad internacional, a pedirle que
proceda a someter a juicio a los prisioneros de Guantánamo. Mucho menos se atreverá
a entrometerse en sus sistemas financieros que han llevado al colapso la economía
mundial, entre otros males. Pero este problema no es patrimonio exclusivo de
Guatemala. En el resto de Centroamérica, se tiene noticias de casos como el de Costa
Rica, en que el ex presidente Abel Pacheco,496 fue delatado por su propio ex canciller,
de haber recibido para su campaña presidencial, fondos provenientes de un acaudalado
y cuestionado empresario panameño.
495
Los 3 primeros lugares en el INDICE DE OPACIDAD FINANCIERA –IOF-, los ocupan Estados Unidos
de América, Luxemburgo y Suiza, como lo reporta Tax Justice Network. http://taxjustice.blogs.com.
496
Ibid. Prensa Libre. Edición digital del 17 de agosto 2003.
177 CONCLUSIONES
1. Los deberes del Estado de Guatemala, se enmarcan en garantizarle a los habitantes
de la República, la vida, la libertad, la justicia, la seguridad, la paz y el desarrollo
integral de la persona. Para el cumplimiento de tales deberes, es imprescindible contar
con normativa específica, actualizada, viable en su aplicación y que responda a esas
garantías que tiene como imperativo, que el Estado las proteja.
2. La legislación guatemalteca, en los últimos 45 años ha contado con tipificación de
figuras delictivas de naturaleza eleccionaria. Aún, cuando el sujeto pasivo de dichos
delitos no ha estado taxativamente delimitado, se entiende que unas veces será el
Estado, otras los mismos partidos políticos y los políticos, en su caso. No obstante,
puede advertirse que en los últimos años, se ha incrementado la presión diversa, para
tipificar delitos electorales, mediante reformas tanto a la Ley Electoral y de Partidos
Políticos, como al Código Penal.
3. Las distintas “generaciones” de reformas al Código Penal y, desde 1985, a la Ley
Electoral y de Partidos Políticos, han sido fruto de la presión internacional o mediática
local, y ante ello sus contenidos invariablemente han sido atacados y denunciados de
inconstitucionalidades. Debido a esto, la última generación de reformas, contenidas en
el Decreto No. 4-2010, se considera que no llenó la expectativa anhelada, y la justicia
constitucional falló declarando parcialmente inconstitucional su texto.
4. Al día de hoy, existen en la legislación guatemalteca electoral, delitos y faltas
electorales de poca incidencia y trascendencia para vertebrar, consolidar e
institucionalizar el derecho penal electoral. Y, lo más grave, se continúa generando
violencia electoral, por compra de votos, “acarreo” de votantes, actitudes clientelares
por parte del partido de gobierno de turno, quema de papeletas electorales, obstrucción
de comicios electorales, desobediencia a los techos máximos aprobados para inversión
en campaña electoral, etc.
5. La legislación electoral guatemalteca, urge de una sistematización y adaptación a
los tiempos actuales en que, desde Internet, los partidos políticos pueden sobrepasar
sus techos autorizados para inversión propagandística, al amparo que no existe
legislación específica en esa materia. Pero en esa misma medida es importante que la
178 institucionalidad electoral juegue un papel más protagónico, proactivo y de vanguardia,
no meramente administrativo y un simple organizador de eventos electorales.
6. A lo largo de la historia guatemalteca, se puede apreciar que el quehacer político no
contribuye a la consolidación del Estado de Derecho ni al fortalecimiento de la
democracia, puesto que existen frente al Estado contrapoderes corporativos, y otras
expresiones desde la sociedad civil, en abierta competencia de poder, lo cual ha sido la
tendencia desde la Independencia497 nacional, al día de hoy.
7. Si bien es cierto, el derecho penal electoral no es la panacea para lograr el que
existan procesos electorales transparentes, ordenados y con suficiente credibilidad,
también lo es que se necesita de normativa penal que ponga límites al exceso, al
clientelismo, al abuso, a la contaminación de los capitales electorales con fondos de
ilícito origen, y a la violación abierta de las disposiciones que en materia electoral dicte
el Tribunal Supremo Electoral en sus reglamentos.
8. Los partidos políticos en Guatemala, con representación en el Congreso de la
República, están demandados a apoyar las reformas a la Ley Electoral y de Partidos
Políticos, la cual es insoslayable, y una buena parte de las mismas, deberán ser las
figuras delictivas eleccionarias, que hoy brillan por su ausencia. Dialécticamente, todo el
quehacer político nacional, se mantiene en permanente cambio, en movimiento, y la
legislación penal electoral, debe ir acorde con esa exigencia dialéctica.
9. Con la existencia de figuras delictivas específicas en materia electoral, o sin las
mismas, la institucionalidad y la justicia guatemalteca no puede obviar la facultad
sancionadora que tiene para la prevalencia del Estado de Derecho. Excusarse que no
se cuenta con legislación penal idónea, es bastante discutible. Para efectos de
financiamiento partidario ilegal, existe la Ley de Lavado de Dinero y Activos, para la
alteración de documentación o suplantación de identidades, existen tipificados los
delitos de falsedad material o falsedad ideológica, la usurpación de calidad, etc. Ante el
incumplimiento a sanciones del Tribunal Supremo Electoral existe el delito de
desobediencia, etc. Entonces, es sintomático que permanentemente tanto el Ministerio
497
El escritor Mario Monteforte Toledo, al explicar lo que para él significó la independencia nacional, con
ironía afirma: “INDEPENDENCIA GUATEMALTECA. Es la historia más ridícula del mundo. Estaban en la
Capitanía General reunidos todos los “próceres” cuando Gabino Gainza, que era un mediocre,
gobernador de la capitanía, firmó el acta de independencia. Así nació la república: sin un tiro ni gota de
sangre. La sangre vino a chorros después.” PERDOMO ORELLANA y GUINEA DIEZ. Op. cit. Pág. 112
179 Público como el Tribunal Supremo Electoral, se escuden en justificar su poca o nula
diligencia y pro actividad, en que no existe legislación penal electoral específica.
10. En Guatemala, el influjo del “homo economicus” y las leyes del mercado, han
generado un proceso de adelgazamiento del Estado, y como consecuencia, también a
un vaciamiento de la política. Existe un permanente desgaste a la institucionalidad de
los partidos políticos. Obviamente, éstos últimos también han puesto su cuota
sustancial para que ese status quo se genere y se perciba cada vez más.
11. Cualquier legislación que se ponga en vigencia, en materia de delitos electorales,
debe advertir que no se debe sacrificar ni confundir proselitismo con propaganda
política, propiamente dicha. Caso contrario, la falta de institucionalización y arraigo de
los partidos políticos en la población, seguirá siendo nula, débil o escasa.
12. Para la consolidación del sistema de partidos políticos en Guatemala, es necesario
hacer modificaciones en la Ley Electoral y de Partidos Políticos, que puedan permitir la
formación de auténticos partidos, y no de meras maquinarias electorales o clientelares.
Entre las principales reformas estarían: a) aumentar el monto autorizado de gasto en
propaganda política; b) aumentar el financiamiento público para los partidos políticos; c)
que por mandato legal, los partidos destinen un porcentaje razonable del financiamiento
público, para la formación política de sus afiliados; d) que se aumente el número de
afiliados para mantener vigente una organización política; e) que se legisle lo relativo al
transfuguismo parlamentario, determinando que, como mínimo, un diputado electo
deberá permanecer en la bancada partidaria con la que fue electo, la mitad del período
de la legislatura; f) que el Estado, por ser el titular de las frecuencias radiales y
televisivas, establezca que los medios masivos de comunicación deben ceder espacio
en todos los horarios a la propaganda electoral institucional, con mensajes formativos
ideológicos y de formación de ciudadanía; g) que el Tribunal Supremo Electoral, sea el
ente que imparta justicia electoral, y que sus resoluciones tengan carácter definitivo y
concluyente de cualquier asunto relacionado con la materia electoral; h) Que las
renuncias de los afiliados de una organización política sean expresas y debidamente
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82. TOURAINE, Alain: “¿Podremos Vivir Juntos?". Fondo de Cultura Económica.
México, D.F. 2000
83. UNIVERSIDAD RAFAEL LANDIVAR: “Acuerdos de Paz”. Guatemala, 1998.
84. YOURCENAR, Marguerite: “Memorias de Adriano”. 6a. Edición. Debolsillo.
Editorial Sudamericana, S.A. Buenos Aires, 2009.
85. VILA, Samuel: “Enciclopedia de Citas Morales y Religiosas”. Editorial CLIE.
Barcelona, 1976.
86. WEBER, Max: “Ética Protestante”. Editorial Gradifco. Buenos Aires,
Argentina. 2007
87. ZIZEK, Slavoj: “En defensa de causas perdidas”. Ediciones Akal, S.A. Madrid,
España. 2011.
Ponencias:
1. ESPINOSA TORRES, María del Pilar: “El Derecho Penal Electoral Mexicano”.
Ponencia presentada como investigadora del Instituto de Investigaciones
Jurídicas
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Universidad
Veracruzana.
www.letrasjurídicas.com/Volumen/2/espinosa2.pdf
2. MEDRANO VALENZUELA, Gabriel: Ponencia presentada por el Exmagistrado
del Tribunal Supremo Electoral, en Congreso Iberoamericano de Derecho
Electoral. Pág. 30. Monterrey, México, 25 al 27 noviembre 2010.
3. ZAFFARONI,
Eugenio:
“El
enemigo
en
el
derecho
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www.renuevodeplenitud.com/blogs-cristianos/el-enemigo-en-el-derecho-penaleugeni-raul-zaffaroni.html.
187 Consultas Electrónicas:
a) Jurisprudencia de la Corte de Constitucionalidad:
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“SERRANAZO”.
Expediente
No.
225-93
del
4
de
junio
1993.
www.cc.gob.gt/siged2009/mdlWeb/frmConsultaWebVerDocumento.aspx?St_Document
oId=791733.html&S. Fecha de consulta: 24 de marzo 2012
Sentencia CORTE DE CONSTITUCIONALIDAD. No. 1089-2003 de fecha 14 de julio
2003.
www.cc.gob.gt/siged2009/mdlWeb/frmConsultaWebVerDocumento.aspx?St_Document
oId=798305.html.&S. Fecha de consulta: 18 de marzo 2012.
CORTE DE CONSTITUCIONALIDAD: sentencia del 8 de agosto 2011. Expediente No.
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marzo 2012.
www.gob.gt/siged2009/mdlWeb/frmConsultaWebVerDocumento.aspx?St_DocumentoId
=815981.html&St_RegistrarConsulta=yes&F=fraseabuscar. Fecha de consulta: 24 de
septiembre 2011.
b) Jurisprudencia de Corte Suprema de Justicia de Guatemala:
SENTENCIA CORTE SUPREMA DE JUSTICIA: AMPARO No. 1014-2011. Se
consideró que pudiese existir fraude de ley, al haber renunciado el cargo de pastor
evangélico, única y exclusivamente para poder postularse a la candidatura presidencial,
admitiendo tener impedimento constitucional, conforme literal f) del artículo 186 de la
Constitución Política de la República. Asimismo, se hizo énfasis en que dicha
188 prohibición no viola derecho humano alguno, puesto que busca hacer congruente la
laicidad del Estado. www.oj.gob.gt/amparos/. Fecha de consulta: 23 de marzo 2012
c) Consultas electrónicas:
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Edición
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www.elpais.com/artículo/internacional/Yemen/hunde/violencia/vuelta/Saleh/elpepuint/20
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Pág. 1. www.prensalibre.com.
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Siglo
Veintiuno
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Guatemala.
www.s21.com.gt/archivo?keys=delitos+electorales+&date_filter%SBvalue%5D%5Bdate
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www.letrasjuridicas.com/Volumen/2/espinosa2.pdf.
Diario Prensa Libre. www.prensalibre.com.gt/noticias/comunitario/Lucha-hambre-Q3mil-millones_0_6773732641.html. Fecha de consulta: 31 marzo 2012
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www.pnud.org.gt/data/publicacion/Estudio_Latinob_2010.pdf. Fecha consulta: 11 marzo
2012
www.prensalibre.com.gt/noticias/comunitario/Lucha-hambre-Q3-milmillones0_6773732641.html. Fecha consulta: 31 de marzo 2012
LATINOBAROMETRO:
www.pnud.org.gt/data/publicacion/EstudioLatinob2010.pdf.
Fecha consulta: 11 marzo 2012
PNUD:
www.desarrollohumano.org.gt/sites/default/docs/informes/capitulos/AF_capitulo_9.pdf.
Fecha consulta: 11 de marzo 2012
UNIVERSIDAD
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VANDERBILT:
www.vanderbilt.edu/lapop/insights/I0812es.pdf.
Fecha consulta: 6 abril 2012
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189 Diario
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País.
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1
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Matutino
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SISTEMA
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INTEGRACION
CENTROAMERICANA
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www.sica.int/busqueda_archivo.aspx?Archivo=leys...1... Fecha de consulta: 7 abril
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IGLESIA EL SHADDAI Guatemala. www.elshaddai.net. Fecha de consulta: 23 de marzo
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PROREFORMA: www.proreforma.org. Fecha consulta: 27 de marzo 2011
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Vespertino
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Edición
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ENCICLICA:
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190 Vespertino
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Hora”.
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2012.
www.lahora.com.gt/index.php/nacinoal/guatemala/actualidad/157290-maximo-cajalofrece-su-testimonio-desde-españa-por-I. Fecha consulta: 25 abril 2012.
Matutino
Siglo
Veintiuno.
Guatemala
20
marzo
www.s21.com.gt/nacionales/2012/03/20/pdh-patrulleros-son-ley-san-juansacatepequez. Fecha consulta: 2 de abril 2012
191 2012.
Anexo:
Transición Semáforo Estabilidad Democrática Estabilidad Autoritaria Crisis Política
Se manifiesta:
Se manifiesta:
a) Militarización de
la sociedad.
b) Control social y
político.
c) Corporativismo.
d) Clientelismo.
e) Actitud
represiva.
f) Opacidad de la
gestión pública.
g) Violencia
Potencial o real.
h) Eventual
ilegitimidad.
a) Institucionalidad. b) Tolerancia. c) Obediencia a reglas. d) Prevalece normativa constitucional. e) Transparencia f) Negociación. g) Rendición de cuentas. h) Actitud democrática. 192 
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