Modulo_4_Ficha_8

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Como formador de formadores en participación infantil, tenemos un reto: promover
aprendizajes y contribuir en el desarrollo de capacidades para que los tanto los niños, niñas,
adolescentes y adultos que ustedes acompañan, sean promotores de participación activa y
protagónica. Los principios que movilizan el rol como formadores solo tendrán sentido, si los
aprendizajes están en coherencia con el rol activo y protagónico de quienes participan.
Por ello, empecemos haciéndonos algunas interrogantes desde nuestro rol como formadores:
¿Qué habilidades, conocimientos y actitudes necesito
como formador en Participación infantil?
¿Cómo se aprende activa
y protagónicamente?
¿Cuáles son los puntos de partida de cada uno? ¿Qué
saben, qué manejan, con qué habilidades cuentan?
¿Qué necesitan aprender los que
promueven participación infantil?
¿Qué condiciones y
recursos personales y de
contexto se requieren?
¿Cómo puedo darme cuenta que
todos estamos aprendiendo y las
estrategias están funcionando?
En un proceso de formación será necesario identificar algunas ideas claves:
 Conocer a los participantes: sus saberes y experiencias previas, contexto, expectativas,
es decir reconocerlo como persona con gran potencial.
 Conocer los contenidos que vamos a desarrollar: manejar fundamentos, enfoques,
teorías diversas y actualizadas desde una perspectiva crítica y abierta a la innovación.
 Conocer el proceso de aprendizaje: cómo se produce, qué debemos hacer para
generar aprendizajes en otros, cómo hacemos para generar experiencias significativas
y protagónicas.
 Manejar estrategias y recursos metodológicos para promover aprendizajes centradas
en la participación activa y protagónica del que aprende.
 Contar con habilidades personales de comunicación, empatía, afecto y compromiso
no solo con su tarea pedagógica, sino también con la participación infantil y
adolescente.
 Estar abierto a la innovación, la diversidad, el cambio y la participación.
En esta ficha reflexionemos sobre el aprendizaje y nuestro rol
como formadores y promotores de participación…
1
1
Entendemos a la participación como un proceso de aprendizaje, que debe promoverse desde las
instituciones básicas de inclusión de niños, niñas y adolescentes, como son la familia, la escuela y la
comunidad. Participar es todo lo que los niños hacen cotidianamente.
La participación podría pensarse como un proceso con diferentes momentos: el de acceso a la
información, a la conformación de opinión propia y a la posibilidad de expresarla a otro que la
escuche y tome en cuenta al momento de decidir.
Toda práctica de participación debe promover el reconocimiento y empoderamiento de los derechos
de niños, niñas y adolescentes, afirmando que la participación no es un derecho más sino que es un
derecho que transversaliza los restantes. (Aporte Argentina 2009)
Cuando vivimos en sociedades con fuertes antecedentes de autoritarismo y desconocimiento de las
opiniones de los otros la promoción de la participación no puede limitarse a abrir espacios donde los
niños, niñas y adolescentes participen espontáneamente. Correríamos el riesgo de que en esos
espacios se reproduzcan las modalidades de relación adulto-niño, las manipulaciones de parte de los
adultos, y la imitación de estos por parte de los niños.
Poner en juego las potencialidades de los niños, niñas y adolescentes como ciudadanos plenos
requiere desestructurar una serie de representaciones y prácticas tradicionales. Estas no solo están
presentes entre los adultos sino que también los niños y adolescentes incorporan en su experiencia
de vida elementos que inhiben y distorsionan sus potencialidades para participar. Participar implica
aprender a expresar las diferencias con respeto, a escuchar a los otros, a ser responsables en sus
afirmaciones y propuestas, a saber representar y ser representado. Implica habilidades,
herramientas normas, valores, aprendizajes.
Promover la participación requiere políticas y acciones favorecedoras, que estimule potencialidades,
orienten, eduquen en las formas que toma la participación y los valores que la sostienen. En esto se
basa la afirmación: “a participar también se aprende”. (PROPIA, 2008).
Cabe entonces preguntarnos ¿Cómo se aprende?, ¿Dónde se aprende?, ¿Cuál es el rol de los
adultos y las instituciones en ese proceso de aprendizaje?
Veamos la experiencia de una docente, cuyo testimonio muestra cómo aprendió a realizar
proyectos participativos de cuidado del ambiente con sus alumnos. Podrás verlo entrando al
siguiente link:
http://www.youtube.com/watch?v=fPznNoIShp0
1
IIN- OEA. La Participación de Niños, Niñas y Adolescentes, A 20 años de la Convención sobre los derechos del niño. Mayo 2010.
2
2
Sin desconocer la importancia de que dentro de la educación en derechos, los textos y
programas escolares incluyan el principio/derecho a la participación, aprender a participar no
es estar informado de los conceptos, tratados y textos legales. Es incorporar como experiencia
de vida la pertenencia a espacios colectivos donde las opiniones de cada uno importan, donde
se deben acatar ciertas normas para que todos se expresen con libertad, donde muchas veces
se deben aceptar decisiones que no coinciden plenamente con los deseos de cada uno, pero
que reflejan la postura tomada por un colectivo que nos incluyó, escuchó e intercambió
argumentos para llegar a esa decisión.
Se trata de aprendizajes dialógicos donde niños, niñas y adolescentes aprenden junto a los
adultos que interactúan con ellos, y a otros niños y adultos que participan indirectamente de
estas experiencias descubriendo que otras formas de relacionamiento intergeneracional son
posibles, que dar un lugar diferente a los niños no es sinónimo de caos, sino de un orden
diferente que contribuye a mejorar la calidad de vida de todos y todas.
Diego Pólit (2007) describe las tareas educativas que deben desarrollarse en el proceso de
construcción de una convivencia participativa. Las mismas se basan en promover:
 Que las personas expresen sus propios puntos de vista sobre la realidad de sus familias,




de la escuela, de su barrio, de la comunidad y apoyarles para que identifiquen en esa realidad
los elementos positivos y los negativos.
Que esas personas reconozcan en ellas mismas las capacidades para hacer esas
transformaciones y el derecho a hacerlas; apoyarlas en la búsqueda y construcción de
soluciones propias como parte de la tarea educativa.
Que esas personas reconozcan que las otras personas con que comparten sus vidas tienen
opiniones y puntos de vista propios, y diferentes sobre esas mismas realidades, apoyarlos para
que dialoguen y que juntos construyan mejores formas de convivencia.
Que las personas confronten, se cuestionen sus propios puntos de vista a la luz de lo que
plantean las otras personas con que dialogan, a la luz de lo que plantean los niños, niñas y
adolescentes. Y a la luz de lo que los educadores o facilitadores y los materiales del proyecto
aporten para la reflexión. Y apoyarlos para que desde esa confrontación vuelvan a construir y a
poner en práctica nuevas formas de convivencia.
Que los adultos reconozcan que los niños, niñas y adolescentes también son personas con
opiniones y sentidos propios, y que tienen la capacidad y el derecho a participar dentro de la
familia, de la escuela, de la comunidad, y apoyarles para que entre todos construyan formas de
relación que hagan que la vida sea más agradable, digna y justa para todos.
En última instancia se trata de promover el análisis crítico de la vida cotidiana desestructurado
las modalidades autoritarias que desconocen el derecho a la expresión y la participación de
todas las personas y promoviendo, en su lugar la construcción de nuevas formas de
relacionamiento basadas en el respeto a la dignidad y los derechos de todos.
2
IIN- OEA. La Participación de Niños, Niñas y Adolescentes, A 20 años de la Convención sobre los derechos del niño. Mayo 2010.
3
Actividad para la Bitácora
¿Qué habilidades reconozco en mí para ser formador de formadores en participación infantil?
¿Qué otras habilidades considero que debo desarrollar y qué condiciones debo generar?
4
¿Cómo se construyen aprendizajes
significativos y protagónicos?
3
Te invitamos a escuchar a un maestro latinoamericano que brindó aportes significativos en la
construcción del rol de los formadores que apuestan por una educación activa y protagónica
centrada en el que aprende:
Paulo Freire, educador brasileño e influyente teórico de la educación.
Podrás verlo entrando al siguiente link:
http://www.youtube.com/watch?v=SUlkH4JBmEk&feature=related
Actividad para la Bitácora
La intención de un proceso de capacitación y de todo formador o formadora, es lograr promover
aprendizajes en los que participan, por ello un aspecto central de esta ficha será reflexionar sobre
cómo se produce el aprendizaje protagónico y qué pasa cuando se aprende. Para ello te invitamos a
reflexionar sobre las siguientes interrogantes.
Cuando vemos a un grupo de personas que se están aprendiendo, ¿cómo sabemos que la situación
está siendo significativa para ellos y ellas?
Intenta algunas respuestas:




…Que estén contentos y disfruten ¿será suficiente para que la actividad sea significativa?
Anímate a elaborar el siguiente listado:
APRENDEMOS SIGNIFICATIVA Y PROTAGÓNICAMENTE CUANDO:




3
Adaptado de la Guía “Contruyendo aprendizaje protagónico en el aula”. Milagros Castillo Fuerman, ONG GID -Generación de
Innovaciones para el Desarrollo y Save the Children. Perú - 2006.
5
Con estos elementos, tratemos de analizar qué pasa cuando se aprende.
Recuerda un APRENDIZAJE que hayas adquirido recientemente sobre algo de la vida cotidiana que
no sabías y que ahora estás seguro que manejas muy bien y podrías aplicarlo a cualquier situación,
anótalo y responde a las siguientes preguntas:
Aprendí a: “_________________________________________________________________”
¿Por qué o para qué tuviste que aprenderlo? _____________________________________
¿Sabías algo o conocías algo sobre lo que querías aprender? _________________________
¿Cómo lograste aprenderlo? __________________________________________________
¿Cómo se evidencia que aprendiste? ___________________________________________
Después de anotar tu experiencia personal, revisa cada paso confrontándola con la de un docente4
que compartió el siguiente aprendizaje:
Aprendí a cambiar el sistema de una cocina de kerosene a gas
¿Por qué / para qué tuviste que hacerlo?
Fidel: Me di cuenta que era más económico el sistema de gas, no se deteriora, no requiere de
tanto mantenimiento y se ensucia menos la cocina.
Fidel se animó a emprender este nuevo reto por que la tarea respondía a una necesidad
inmediata, tenía mucho sentido para él hacerlo.
Reconocemos que el punto de partida de un aprendizaje es que debe estar provista de sentido
para el que aprende, esto le permite involucrarse natural y espontáneamente en la situación de
aprendizaje.
 Logra despertar el interés y deseo de participar en el que aprende para sumarse a la tarea.
 Es la propia persona que aprende, quien le encuentra o atribuye un sentido, despertando su
curiosidad y su deseo de involucrarse.
 Responde al contexto al que pertenece: está ligada a su vida cotidiana, sus intereses,
aspiraciones, problemas y necesidades.
 Es útil, puede usar el aprendizaje “ahora”, en su realidad inmediata, le permita “saber hacer”,
poder desempeñarse y manejar situaciones.
Por ello, podemos afirmar que un aprendizaje es significativo y protagónico cuando:
Esto nos lleva a dar una mirada muy crítica a los aprendizajes que proponemos como
formadores y los contenidos que seleccionamos al planear situaciones de aprendizajes.
4
Profesor: FIDEL BUSTAMENTE BASURTO C.E. “SAN ANTONIO” de TANTA – HUAROCHIRÍ- Lima, Perú.
6
Sigamos analizando la experiencia de Fidel para encontrar otros aspectos:
¿Cómo así te animaste a hacerlo tu mismo? ¿Sabías o conocías algo?
Fidel: Yo sabía algo de cocinas, además me gusta hacer arreglos en la casa tengo
herramientas y sé soldar, cambiar tubos, además soy muy curioso.
¿En qué momentos hiciste uso de lo que sabías?
Fidel: En varios momentos, cuando comencé a desarmar, a unir piezas, al volver a armar.
RECUPERAR EXPERIENCIAS Y SABERES PREVIOS
Entonces, podríamos decir que tenía saberes previos (Ausbel). Cuando aprendemos
encontramos un primer aspecto que está presente en varios momentos del aprendizaje:
Si partimos reconociendo que el aprendizaje ”no se adquiere simplemente, ni se recibe, ni es
copia de la realidad, sino que es una construcción del sujeto que aprende”. De manera que los
conocimientos no “entran” a los sujetos, sino que son producidos por ellos mismos.
Entonces podemos afirmar que el aprendizaje, al ser un proceso interno, individual que se
produce en cada persona de manera especial y diferente, tiene un propio punto de partida.
Recoge sus propios saberes y los pone en juego cuando se produce un nuevo aprendizaje.
Este proceso de recuperación de saberes, no consiste en interrogar a la persona sobre lo que
sabe del tema. Dependerá del tipo de aprendizaje que se va a lograr, el identificar la estrategia
que permita poner en juego sus saberes. Por ejemplo, te darás cuenta que en cada ficha de
este curso hemos presentado situaciones diferentes para iniciar los aprendizajes propuestos,
algunas veces eran videos, otras láminas, noticias, historietas o casos; los cuales buscaban
movilizar tus experiencias y saberes previos, tus esquemas mentales anteriores, tus afectos,
creencias, opiniones, etc. No era un simple aspecto decorativo en las fichas, tenía una clara
intención formativa y pedagógica.
Es decir, un aprendizaje es significativo y protagónico cuando se conecta con sus saberes
culturales previos y permite a la persona recuperarlos cuando aprende.
Ahora regresemos a la experiencia de nuestro amigo Fidel:
¿Fue suficiente recuperar los saberes previos para lograr adquirir un nuevo aprendizaje?
Fidel: Tuve que hacer algunas consultas revisé algunos manuales que tenía, probé varias
veces con cuidado, hice mediciones, comparaciones, hice varios intentos, uní piezas, corregí
errores.
Además le preguntamos: ¿Recuerdas que pasó en ese momento a nivel de pensamiento?
Fidel: Creo que me fui dando cuenta de la manera correcta de hacerlo, sentía que descubría
cosas nuevas, iba validando algunos supuestos que me había hecho. Y también ocurrió en
distintos momentos.
7
¿Qué le ocurrió a Fidel?
En esos momento se estaba dando una reestructuración del pensamiento a nivel interno,
pero que implicaba
una
permanente
ELABORACIÓN DEL NUEVO SABER
interacción con su
medio: socializar el aprendizaje. Se presentó en Fidel otro aspecto del proceso de
aprendizaje:
Existe una vinculación entre el conocimiento previo y el nuevo saber. Se moviliza la actividad
interna a nivel de pensamiento, que es la que permite relacionar lo nuevo, con lo disponible
en la estructura interna, en un proceso paralelo de asimilación y acomodación (Piaget).
Finalmente le preguntamos a Fidel:
¿Cuándo te diste cuenta que aprendiste a hacerlo?
Fidel: Cuando lo hice, lo probé y vi que me había salido bien, además
fácil que resultaba
INCORPORACIÓN A LA VIDA
contado a algunos
familiares explicando
han pedido que los ayude, estoy seguro que lo puedo hacer otra vez.
me di cuenta de lo
hacerlo. Le he
amigos
y
cómo se hace y me
Fidel se dio cuenta que aplicó el nuevo saber y puede hacer uso de éste en otras situaciones.
Vemos el otro aspecto del proceso de aprendizaje:
Un aprendizaje es significativo y
protagónico, cuando puedes hacer uso
de éste en situaciones útiles de la vida.
Cuando logras que el nuevo saber se
incorpore a uno o más esquemas,
reviviéndolos,
modificándolos,
reconstruyéndolos, en un proceso de
equilibrio y reequilibrio. Por ello lo
que se aprende protagónica y significativamente dura toda la vida.
En esta experiencia vemos presente también un elemento importante: Los aspectos se
presentan en distintos momentos del aprendizajes por ello tiene una estructura circular:
Es por eso que no se trata de establecer pasos o secuencias en una actividad sino de
considerar los aspectos lógicos que están presentes en una situación al fomentar aprendizaje
protagónico.
Recordemos que aprender no es:

Escuchar con atención al docente o formador.
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Repetir fielmente las palabras del que educa.
Copiar
información
que El aprendizaje es un proceso interno, personal, donde la persona
activa sus propios mecanismos, recursos, procesos de construcción
escucha o lee.
mental, que lo hacen único y particular.
Por el contrario, el
Es vivido individualmente y se enriquece en interacción social, tiene
APRENDIZAJE
PROTAGÓNICO, es tener como punto de partida las experiencias y saberes previos de quien
aprende al ser puesto en contacto con el nuevo saber, desencadena
la oportunidad de:
un conflicto que moviliza mecanismos internos hasta modificar lo
EXPLORAR
aprendido
anteriormente, convirtiéndolo
enINTENTAR
un nuevo y más
VOLVER A
ENSAYAR
completo aprendizaje, posible de ser aplicado en cualquier situación.
EQUIVOCARSE
OPINAR
PREGUNTAR
DEBATIR
CONVERSAR
MOVERSE


RECAPITULEMOS Y REVISEMOS LA SIGUIENTE DEFINICIÓN:
En este sentido el rol del formador al promover aprendizaje
protagónico, es:
 Identificar, reconocer y valorar a cada niño, niña,
adolescente o adulto que aprende como persona,
sujeto de derechos, es decir con gran potencial, con
saberes previos y una cultura que debe utilizarla al
construir aprendizajes.
 Conocer el potencial real y todas las posibilidades que
tienen quienes aprenden para lograr el desarrollo de su máximo potencial. Es decir
conocer la distancia entre sus capacidades actuales y las que puede alcanzar a partir
de un proceso pedagógico de intervención docente centrada en el que aprende
(Vigosky). Esto implica reconocer no solo sus características y necesidades, sino
también manejar información sobre el desarrollo evolutivo del grupo con el que
trabaja y los contenidos que necesitan adquirir para desempeñarse eficazmente en su
contexto.
 Manejar estrategias y recursos pedagógicos centrados en el protagonismo del que
aprende, con un enfoque holístico. Es decir la organización del ambiente, los
materiales, el lenguaje cotidiano, las actitudes y diseño y evaluación de las sesiones,
deben permitir la participación protagónica de los participantes.
Terminemos revisando el testimonio de un adulto facilitador de procesos participativos5:
Desde hace varios años vengo impulsando la participación infantil. Desde la escuela con alcaldes o
alcaldesas de Municipios Escolares, creando espacios para aprender a organizarse con sus compañeros y
movilizar cambios en su escuela, votando por sus representantes y realizando elecciones; aplicando
estrategias en los que las niñas y niños proponen ideas a sus maestros para desarrollar proyectos en
5
Mujer adulta, miembro de la ONG GID, Generación de Innovaciones para el Desarrollo - Perú
9
aula; motivando a docentes a que aprenden a tomar acuerdos y normas de convivencia
participativamente con sus alumnos para regular la convivencia en grupo; construyen responsabilidades
de acuerdo a las necesidades del aula; aprenden a evaluar promoviendo auto reflexión, procesos de
análisis colectivo, co o hétero evaluación; y muchas otras experiencias enriquecedoras. Pero recordé
que los niños que participan en estas experiencias tienen hogares, van a sus casas y a sus barrios, tal vez
fortalecidos con todas estas prácticas y se encuentran con sus familias y comunidades: espacios
complejos, diversos, con particularidades, desafíos y cambios, ¿en cuántos de esos cambios participan
éstos niños y niñas? y ¿cómo promovemos su participación protagónica?
10
En uno de los encuentros que hicimos en la ONG con adolescentes desarrollamos un ejercicio personal
para elaborar un proyecto personal y entre las actividades hubo una que les proponía imaginar cómo se
veían de aquí a 10 a años, entonces les pedimos que compartieran un sueño personal, algunos me
conmovieron. Me llamó la atención cómo muchos de estos sueños estaban relacionados con los
desencuentros familiares y las decisiones que toman los adultos al margen de la opinión de los niños y
niñas. Uno de ellos comentó: “Cómo me gustaría juntar a mis padres y hermanos, ir con todos a
comernos un pollo con muchas papas fritas y jugar en el juego de pelotas”. Podría parecer un simple
almuerzo familiar dominguero, pero resultaba que juntar a todos los miembros de su familia a comer en
una misma mesa, parecía un sueño muy difícil de alcanzar.
Si pensamos en cómo las opiniones de los niños, niñas y adolescentes pueden tener alguna importancia
a nivel comunal, político o nacional, eso parece aún más inalcanzable. Justamente en una de esas
asambleas con líderes adolescentes en Cajatambo, ciudad que para llegar hay que recorrer 12 horas de
viaje y aún no sales de Lima…. -esto puede dar una idea de lo inaccesible y difícil que resulta llegar allíes una ciudad que está a más de tres mil metros de altura; mucho frío, pobreza y abandono. Pues bien,
allí estábamos tratando de promover participación infantil…. estábamos elaborando planes de trabajo
con los alcaldes y alcaldesas escolares de esta zona para que ellos mismos puedan contribuir con el
bienestar de su comunidad. Uno de los grupos de pronto nos sorprende con una de sus propuestas:
“Queremos una piscina comunal”. En ese momento pensé: ¿cómo le saco al niño la idea de la piscina…?
¿Con tantas otras necesidades urgentes y carencias que tienen? era mejor pensar en ideas más viables,
que ellos mismos puedan proponer y participar en su ejecución.
Bueno, la experiencia me ha enseñado a no apresurarme e indagar, así que le pregunté al representante
del grupo ¿Por qué y cómo creen que lo pueden lograr?... y mientras me fundamentaba, venía pensando
que lo siguiente sería lograr un análisis de viabilidad para que él mismo aterrizara y se diera cuenta que
eso no era posible -Desde mi punto de vista ¿qué hacíamos pensando en una piscina en un lugar así?-,
mientras pensaba en mis siguientes preguntas para ayudarlos a reflexionar, escuchaba sus argumentos.
Pues bien, dijo que en la comunidad habían tenido unas piscinas termales y que hace mucho tiempo no
funcionaban porque un huayco cayó cerca a uno de los conductos por los que ingresaba el agua del
subsuelo y que realizando una faena comunal el domingo junto con sus padres, podrían limpiar las
zanjas, así podían volver a contar con sus piscinas públicas. No me quedaron más preguntas.
El grupo explicó y recordó a los demás los beneficios para los niños, niñas, adolescentes y las familias en
general, contar con estos espacios de recreación y sobre su derecho a jugar y divertirse, que no hacía
falta más que palas, organización y trabajo colectivo, entonces preguntó ¿quiénes se apuntan? Por
supuesto que su argumento fue tan convincente, que yo también quería participar en esa faena. Me
animó saber que estos espacios de opinión y consulta podían generar toda una movilización en la
comunidad. Me pregunté ¿por qué dejaron pasar tanto tiempo para tomar esta decisión en la
comunidad? era tan fácil preguntarles y escuchar a los niños, hay mucho que pueden decirte y aprender
de ellos. Están allí siempre, mirando lo que ocurre, son parte de la comunidad, sintiendo las mismas
carencias y necesidades de los adultos, a veces ven las cosas más claras que nosotros y sus soluciones
suelen ser menos complejas y viables, pero no siempre los escuchamos.
Como formadores en participación infantil, creo que podemos comenzar a movilizarnos, pues ahora
además como padres, madres o ciudadanos tenemos una responsabilidad y una oportunidad de cambiar
la historia, cada día, desde lo más cotidiano hasta lo más complejo, desde nuestros hogares, desde
nuestro barrio, desde nuestro país.
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Por eso una tarea urgente es:
LA FORMACIÓN DE LOS PROMOTORES ADULTOS
6
Toda la bibliografía consultada coincide en que para promover la participación resulta
fundamental que los adultos comprendan y acepten que los niños, niñas y adolescentes son
personas capaces de pensar, reflexionar y opinar sobre lo que sucede en los colectivos e
instituciones de que forman parte. Esta comprensión no debe limitarse al plano discursivo sino
que debe ponerse en acto cuando los puntos de vista de los niños difieren con las de ellos,
deben ser capaces de escuchar, abrir un espacio de reflexión, “poner sus certezas entre
paréntesis” para habilitar una autentica interacción democrática.
Linares (2000) sostiene la necesidad de una constante revisión de los procesos a través de la
crítica y la autocrítica, para evitar, entre otras cosas, una tendencia común en los adultos a
pensar y actuar en nombre de los niños y, en ocasiones a “poner en sus mentes nuestros
pensamientos en sus bocas nuestras palabras”.
Si entendemos el derecho a la participación como un proceso que se desarrolla en todos los
ámbitos de la vida de los niños, niñas y adolescentes, familia, escuela y comunidad, es
necesario que los adultos responsables de estos espacios reconozcan, faciliten y estimulen
cotidianamente este derecho. La participación no puede ser exclusividad de los especialistas
sino que debe atravesar e impregnar todas las actividades y espacios de trabajo con la infancia
y la adolescencia, de allí la necesidad de una formación más generalizada de todos aquellos
que trabajan con niños y niñas.
Los gobiernos locales deben contar con programas de difusión y promoción de esta nueva
institucionalidad.
Paralelamente, debe pensarse la función del promotor en aquellos espacios específicos
convocantes de niños, niñas y adolescentes, para el ejercicio de la participación.
En primera instancia debe recibir capacitación técnica basada en la promoción de todos los
derechos consagrados en la Convención sobre los Derechos del Niño y fundamentalmente en
el derecho a participar. Asimismo, deberá disponer de herramientas metodológicas
facilitadoras del trabajo grupal, favoreciendo la interacción y la comunicación entre los
participantes. (Aporte Argentina 2009)
La ONG CINDE-Colombia enuncia un conjunto de principios que guiaron el proceso de
formación para la participación infantil y adolescente en el marco del Programa Nuevas Voces
Ciudadanas. Veamos los más destacados de ellos:



6
La formación para la participación no es un proceso técnico llevado a cabo por
expertos. Es un proceso de la transformación en la convivencia que se desarrolla entre
iguales a partir de sus diferencias.
La formación no es prescriptiva sino reconstructiva.
El juego y los lenguajes de expresión artística no son herramientas pedagógicas. Son
lenguajes que propician eventos de comunicación y construcción de significados entre
los sujetos.
IIN- OEA. La Participación de Niños, Niñas y Adolescentes, A 20 años de la Convención sobre los derechos del niño. Mayo 2010.
12
El proceso de formación para la participación posibilita a los formadores renunciar al deseo de
“poner en sus cabezas nuestros pensamientos y en sus bocas
nuestras palabras”.
La sistematización del Programa Nuevas Voces Ciudadanas
(CINDE-Colombia) enumera los principios pedagógicos que
permiten a los adultos ponerse en el lugar de los niños o
niñas.





La propuesta de formación busca ampliar la capacidad de
reflexión y acción de los formadores.
La participación no en un discurso, es una práctica que
cobra vida tanto en el espacio de formación como en el
interior del equipo del proyecto.
Durante el proceso de formación se hace visible la vida cotidiana de las personas
implicadas en él.
La formación se realiza desde lo que cada quien es y desde lo que tiene.
La creatividad es un bien social
Dibujo: ONG GID
“Un elemento crucial en todo el proceso de participación de los niños y niñas, es la relación
que se establece entre el adulto, (con sus diferentes denominaciones: asesor, acompañante,
colaborador etc.) y los propios niños y niñas de las experiencias o proyectos. Esta es una
cuestión fundamental a tomar en cuenta, ya que en base al tipo y la calidad de la relación
entre estos dos actores se van a generar las diferentes formas y enfoques de participación
infantil”. (Espinar A. 2005)
El viejo dicho “haz lo que yo digo, no lo que yo hago” ayuda a ilustrar este nudo de
problematicidad. El adulto opera ante el niño como un “modelo alternativo” a los otros
adultos que ejercen unilateralmente el poder sobre ellos. Por tanto debe transmitir
credibilidad a través de la coherencia entre sus actos y lo que pregona.
Las características de las relaciones entre niños y adultos en el marco de proyectos o
experiencias participativas definen en su parte sustantiva la evolución de estos procesos así
como los impactos y efectos formativos sobre los participantes.
El análisis de la práctica nos da cuenta de algunas desviaciones o formas de manejo
inadecuadas a los fines, principios y valores de las experiencias participativas:
 Adultos que en sus actitudes concretas, y especialmente en aquellas instancias más
críticas dan muestra de que no tienen la auténtica voluntad de compartir su cuota de
poder.
 Los que no logran sostener aquellas situaciones en que los niños y niñas cuestionan sus
actitudes ya sea en su rol de facilitador como en su vida cotidiana.
 Los que piensan que por estar en un espacio participativo pueden renunciar a su
coedición de adultos mimetizándose con los niños y/o renunciando a su condición de
adulto. No se trata solo de “dejar hacer” a los niños y niñas, sino de aportarles
herramientas, sostener los procesos y acompañarlos en la construcción de nuevas
modalidades de relación que sean sustentables en distintos escenarios.
 Los que olvidan sus responsabilidades y pretenden traspasárselas a los niños
claudicando de su lugar como adultos.
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De acuerdo a la experiencia del Programa de Participación infantil y adolescente de Uruguay,
PROPIA, los promotores de participación (ProPar) deben tener en cuenta en su trabajo los
siguientes aspectos:
1. Promover la Participación, en el entendido de que además de ser un derecho desarrolla la
capacidad de las personas de trabajar en colaboración con los demás. Para que esto sea
posible hay que tener presentes los tres pasos: Información, Opinión y Escucha.
2. Favorecer la información acerca de sus derechos. La etapa en la cual los niños/as y
adolescentes reciben información acerca de cuáles son sus derechos, de qué forma se
ejercen, la responsabilidad que implica el ejercicio de cualquier derecho, resulta en
nuestra perspectiva fundamental para la participación.
3. Promover la opinión de los niños, niñas y adolescentes. Generar los mecanismos y
dispositivos adecuados que promuevan en niños/as y adolescentes la posibilidad de
formarse opinión y opinar sobre los temas que los afectan.
4. Escuchar a los niños, niñas y adolescentes. Esto implica:
 Dar voz a los niños, niñas y adolescentes, cuyas opiniones, anhelos y aspiraciones rara
vez hallan eco o atención.
 Promover mecanismos prácticos de participación.
La intermediación tiene sus riesgos, y algunos de ellos tienen
que ver con:
Control. Se pueden limitar y restringir los derechos de los
niños/as y adolescentes, más allá de su autonomía progresiva.
Filtrado. El adulto puede negarse a transmitir algunos
planteos.
Modificación. Como intermediario que es, un adulto puede
“falsificar información”, o “modificarla”. (Albernaz, L. 2008)
Dibujo: ONG GID
Según los aportes de Horna Castro P. (2006), el facilitador o educador deberá manejar una
metodología que incluya al menos los siguientes elementos:
 Considere las experiencias previas de los participantes.
 Permita y facilite la participación de todos.
 Optimice el logro de los objetivos propuestos sin sacrificar el proceso del grupo.
 Promueva la producción individual y colectiva.
 Sea flexible a los cambios y situaciones que se puedan presentar.
 Favorezca la interacción y la comunicación entre los participantes.
 Incluya técnicas y dinámicas adecuadas a las edades y características de los
participantes cuidando que estas no queden disociadas de los procesos de análisis y
reflexión (Horna, Castro, 2006).
A su vez Save the Children destaca algunas precauciones a tener cuando la participación se
enmarca en eventos o consultas colectivas:
 Cuidar que las conclusiones grupales sean producto de procesos democráticos donde
todas las opiniones sean escuchadas y tomadas en cuenta.
 Tenga en cuenta que las intervenciones extensas no ayudan a la comunicación.
 Las presentaciones ante otros espacios deben reflejar un trabajo colectivo con buen
nivel de participación de modo que los niños y niñas se sientan reflejados en ese
producto colectivo.
14
Actividad para la Bitácora
-
¿Cómo podemos enfrentar situaciones que evidencien desviaciones o formas de
manejo inadecuadas a los fines, principios y valores de las experiencias participativas?
¿Cómo podemos evitar situaciones de riesgo o preocupaciones planteadas por L.
Albernaz y Save the Children en la intermediación adulta al promover participación?
Te sugerimos que en ambos casos propongas ejemplos de tu contexto en los que se evidencien
estas situaciones.
Te recomendamos la siguiente Bibliografía complementaria
Textos y artículos complementarios:
-
-
IIN- OEA. La Participación de Niños, Niñas y Adolescentes, A 20 años de la Convención
sobre los derechos del niño. Mayo 2010.
http://www.iin.oea.org/IIN/Pdf/publiclibrilloESPAÑOL.pdf
Lansdown, Gerison, Evolución de las Facultades del Niño. Save the children – UNICEF.
Florencia Italia- 2005.
Roeders, Paul. Aprendiendo juntos. “Un diseño del aprendizaje activo”. GTZ 1998.
http://ciberdocencia.gob.pe/archivos/aprendiendo_juntos.pdf
Mª Luz Rodríguez Palmero. LA TEORÍA DEL APRENDIZAJE SIGNIFICATIVO. España 2004.
http://cmc.ihmc.us/papers/cmc2004-290.pdf
Videos sugeridos:
Paulo Freire, Constructor de sueños Parte III: Paulo Freire (1921-1997) propone una
pedagogía de la pregunta para la liberación de los oprimidos, es decir, de la mayor parte de la
población del planeta. La educación se plantea como un proceso dialógico de ida y vuelta,
orientado a romper el silencio esclavizante y recuperar la palabra negada. Según Freire
educador y educando, a través del diálogo franco, aprenden, enseñan y reinventan la historia.
http://www.youtube.com/watch?v=t_nghrWiq1M&feature=related
Aprendizagem Colaborativa
http://www.youtube.com/watch?v=YqTZh9LFEPw&playnext=1&videos=2sTuJ2JMz8s&feature=mfu_in_order
FORMACIÓN DE PROFESORES TUTORES COMO FACILITADORES DE LA CONVIVENCIA comentarios
de participantes del proceso de formación de profesores tutores y las ruedas de convivencia
con estudiantes de todos los ciclos básicos de 220 escuelas medias de gestión oficial de la
provincia, en mayo se reanudaron los encuentros con los tutores que participan de este
proyecto desde 2009. http://www.youtube.com/watch?v=MmsgQg0wUXU&feature=related
Glosario de términos que te pueden servir para enriquecer información:
Aprendizaje significativo: es el proceso interno, personal y protagónico que experimenta
quien incorpora nuevos aprendizajes. Es cuando la propia persona que aprende, le encuentra o
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atribuye un sentido, despertando su deseo de aprender y participar, responde al contexto al
que pertenece, está ligado a su vida cotidiana, a sus intereses, aspiraciones, problemas o
necesidades; parte de sus conocimientos previos, se construye utilizando sus recursos
personales así como los de su contexto y es útil, puede aplicarse en su realidad inmediata, le
permite poder desempeñarse, manejar y enfrentar situaciones de la vida diaria.
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Recuerda revisar lo que aprendiste y registra tus respuestas en tu autobiografía/historia de
vida:
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