Ensayo: Energía geotérmica como fuente en la matriz energética chilena La energía geotérmica es aquella que puede obtenerse del calor proveniente del interior de la Tierra. En Chile, este es un tema que toma cada vez mayor relevancia, debido a la dependencia internacional a los combustibles fósiles y al alza exagerada de los costos monetarios que presentan éstos. La explotación de esta fuente energética en el país podría, en un futuro próximo, provocar grandes cambios a nivel ambiental, político y económico. El proceso geotérmico consiste en que el calor interno emanado en las profundidades de la tierra, calienta las capas rocosas y las aguas encontradas en las placas subterráneas más profundas. Estas últimas por ejemplo, al ser calentadas suben a la superficie por diferencia de presiones, en forma de gas o líquido, a través de grietas y fisuras en los suelos, llevando consigo temperaturas que alcanzan los 400°C. Estos calores pueden ser usados directamente para la calefacción o bien, ser transformados a otros tipos de energías, como la eléctrica. Chile se caracteriza por tener inmensos recursos explotables de energía geotérmica, prueba fiel de ello es la alta actividad volcánica y sísmica a lo largo del país. En la zona centro-sur, según estudios geológicos de la Pontificia Universidad Católica (PUC), las temperaturas en la que se encuentran estos fluidos subterráneos están entre los 200-250°C. De estos fluidos se pueden obtener calores suficientes para utilizarlos en diversas áreas industriales. La extracción del agua vapor a tan altas temperaturas, al no existir ningún tipo de combustión, reduciría exponencialmente el impacto ambiental actual, generando deterioros sólo por la perforación a los suelos y por la extracción del fluido de los yacimientos. Sin embargo, si éste vuelve a ser inyectado, generando circuitos cerrados con el exterior, esta acción negativa se anula. Económicamente, en la actualidad es un proceso inviable, ya que los combustibles fósiles son más baratos, de más fácil acceso y explotación. La fabricación de una industria geotérmica, según un análisis realizado en la PUC en el año 2009, considerando todo su proceso, es decir, exploración, confirmación, permisos, excavación del pozo, recopilación del vapor e instalación de la planta generadora, tardaría aproximadamente 7 años, lo cual es una cifra muy elevada con respecto a otras tecnologías como la eólica o la fotovoltaica. Estudios estadísticos de la Universidad George Washington, en el año 2009, nos indican que el costo promedio de la energía producida por una central geotérmica es US$ 83 MWh, lo cual es más barato que el suministro energético chileno (diciembre 2013) que circunda los US$ 128 MWh. Sin embargo, según investigaciones de la Geothermal Energy Association en el año 2005, el costo de inversión para un proyecto típico tiene un promedio entre los 3000 y 3500 US$/kW, lo cual es muy valor muy alto, y es por ello que los gobiernos no se arriesgan a destinarle presupuestos económicos importantes. La energía geotérmica es una gran herramienta que tiene el país en caso que los precios de los combustibles fósiles siga su alza desmesurada, o bien, la distribución y el racionamiento internacional siga su entorpecimiento. Nos daría importante independencia energética, pudiendo aplicar sólo políticas nacionales con respecto a los precios que se le impongan. La explotación incluso reduciría importante impacto ambiental, principalmente por no liberar gases de combustión que potencian de sobremanera el calentamiento global y el efecto invernadero. En Chile se podría convertir en un eje principal dentro de la matriz energética nacional. Tecnológicamente avanza en forma prometedora y se espera que en un futuro próximo podamos gozar de sus beneficios.