MONTEVIDEO URUGUAY - MIÉRCOLES 10 DE NOVIEMBRE DE 2010 - Nº 36 energía SUPLEMENTO MENSUAL La eficiencia como estrategia La DNETN analiza los nichos de eficiencia energética en todos los sectores. Pág. 3. Sin acceso a la energía Un nuevo informe de la AIE augura que un tercio del mundo seguirá sin energía. Pág. 7. Dilma sin dilema El nuevo gobierno de Brasil asume con la ruta energética trazada. Pág. 8. La policía montada enfrenta a manifestantes que bloquean las vías del tren, el domingo, cerca de Harlingen, Alemania. La llegada de un convoy con desechos nucleares a Alemania ha desembocado en bloqueos de vías y enfrentamientos violentos entre policías y activistas antinucleares. FOTO: EFE, JOCHEN LÜBKE Los núcleos de la controversia La propuesta de la energía nuclear no es nueva en Uruguay. Repasamos la historia y los argumentos principales que alimentan la discusión. Págs. 4 y 5. O2 MIÉRCOLES 10 DE NOVIEMBRE DE 2010 Desafío energético Diferentes visiones del futuro de la energía en Uruguay fueron presentadas en seminario de la CURI Por primera vez en la historia energética del país figura la energía eólica entregando a la red pública. Autoridades de UTE aseguran que el crecimiento de la demanda de energía que se producirá hasta 2015 se puede cubrir con energía proveniente del viento y de los residuos forestales. Según Óscar Ferreño, gerente de Generación de UTE, la demanda de energía actual en el país es de 9.300 GW/h al año y crecerá a 11.050 GW/h al año para 2015, es decir, casi 19%. La demanda actual se cubre con las represas y las centrales térmicas, y empieza a aparecer la energía eólica, que representa 0,7% de la generación total. Durante el seminario “Energía, el desafío para el Uruguay”, organizado por el Consejo Uruguayo para las Relaciones Internacionales (CURI), el jerarca indicó que el potencial hidráulico está explotado casi en su totalidad, aunque no se avizora el final de su vida útil, lo cual sí sucede con las centrales térmicas construidas en la década del 50 (Central Batlle), que generan 250 MW y que para 2020 estarán al final de su vida útil. “Por eso se trata de un tema que hay que resolver mañana”, dijo Ferreño. Estas centrales no funcionan permanentemente sino ante situaciones de escasez de energía, por lo que la nueva central de ciclo combinado planificada, que generará entre 400 y 500 MW y que podrá funcionar con gas de regasificación (cuando exista la planta regasificadora) o con gasoil, “resolvería los problemas habituales ocasionados por la sequía, que cada vez van a ser peores, ya que la generación hidráulica va quedando más pequeña respecto de la demanda”, comentó el gerente de UTE. Eólicos y biomásicos De todas formas, Ferreño aseguró que “si 2015 es un año medio hidráulico, el crecimiento de la demanda se podrá cubrir con eólica y biomasa”. Según las previsiones de UTE, dentro de cinco años la energía eólica representará 16% de la demanda y la biomasa, 14%, mientras que la térmica y la hidráulica significarán 6% y 64%, respectivamente. La meta para esa fecha es contar con 300 MW eólicos realizados por privados, 150 de los cuales se adjudicarán mediante una licitación de UTE que ya está en curso. “Todavía no está definido cómo se van a concretar los otros 150, pero es probable que se haga de la misma manera”, aclaró Ferreño. Agregó que hay otros 45 MW, adjudicados en una licitación anterior (de los cuales está funcionando Nuevo Manantial, con 10 MW, en Rocha), además de los 20 MW del parque eólico Los Caracoles, en Maldonado, propiedad de UTE. El jerarca señaló que “si bien el potencial eólico de Uruguay no está bien deter- Óscar Ferreño. FOTO: VICTORIA RODRÍGUEZ El potencial eólico en Uruguay es mucho más de lo que necesita el país”. minado, es de varios miles, mucho más que las necesidades energéticas que podría tener el país”. Para 2015 el gobierno prevé generar 200 MW a partir de biomasa (residuos forestales y de la agroindustria), cifra cercana a su potencial que, según Ferreño, podrá llegar como máximo a 300 MW. Como resultado del llamado a licitación de UTE para generar a base de eólica y biomasa, se adjudicaron 43 MW de generación a partir de biomasa. La empresa Fenirol, ubicada en Rivera, entrega 10 MW a la red pública. Despacho problemático Ferreño destacó que “la generación eólica ha tenido un desarrollo explosivo a escala mundial”, lo cual queda claro si se tiene en cuenta que “en 1995 en el mundo había instalados 4.800 MW y hoy estamos llegando a los 200.000 MW. Esto se explica por una mayor conciencia del problema ambiental”. Añadió: “Uruguay tiene ventajas comparativas en lo que hace al desarrollo de la eólica, ya que se trata de un mercado de electricidad pequeño en relación con el territorio. Por otra parte, es un gran complemento con la hidráulica: si sobra viento se ahorra agua y como hay una muy buena interconexión con Argentina (2.000 MW y nuestro pico máximo de consumo está en 1.700 MW), si falta viento podemos traer energía de Argentina y si sobra, venderle. Casi todo el territorio nacional tiene buenos vientos a 90 metros de altura de entre seis y nueve metros por segundo, es decir, de características similares a aquellos en los que los europeos desarrollaron la tecnología de los molinos”. Otra ventaja es el precio. Lo que UTE paga por el MW/h de energía eólica es “del orden de los 90 dólares y el costo variable de una máquina térmica está en 120 dólares, o sea que la primera empieza a ser muy competitiva frente a los derivados del petróleo”. Pero “el problema de la eólica es el autodespacho, porque la energía aparece cuando hay viento”. “En el sistema eléctrico la generación debe ser igual a la demanda, el despachante debe preverla y cubrirla con las máquinas en orden de costos, poniendo las más baratas primero. La eólica es intermitente y no despachable; debe considerársela una demanda negativa”, explicó. Solar térmica: la mejor En el mismo seminario, Álvaro Bermúdez, que se desempeñó como director de Energía durante el gobierno de Jorge Batlle, llamó a no pensar “que con la biomasa y la eólica vamos a solucionar nuestro problema de aquí a mediano o largo plazo”. Si bien tiene una declarada postura pro nuclear, se autodefinió como “defensor de la eólica y de la biomasa, pero fundamentalmente de la solar térmica”. Pero, acotó, “tenemos que ver todo el panorama donde, por supuesto, también está la energía nuclear”. En coincidencia con Ferreño, mencionó el problema del despacho de la eólica y algunas otras limitaciones, como el hecho de que “las turbinas eólicas no se pueden ubicar en cualquier lado porque tienen accidentes como cualquier máquina”. “Además, requieren inversiones muy importantes para obtener probablemente porcentajes muy bajos de energía a lo largo del año”, puntualizó. Por otro lado, los molinos “son máquinas muy grandes y requieren esfuerzos mecánicos muy importantes”. “Por eso ahí está la tecnología que nosotros tenemos que comprar en su totalidad, porque no la hemos desarrollado. Eso es otro tema: la educación, el conocimiento” que es necesario adquirir. Con respecto a la biomasa dijo: “En un país como el nuestro, donde la forestación se fue desarrollando con mucha coherencia a lo largo de los últimos gobiernos, tenemos que pensar que la biomasa va a competir con otras industrias: con quienes fabrican celulosa, con quienes utilizan el mismo recurso para la leña. Además, hay una limitación territorial que permitirá alcanzar 200 MW como máximo de generación, por lo cual el tema va a pasar. Tal vez se justifique en algún momento en que haya forestación específicamente para energía; hay árboles, plantas o arbustos que tienen muy buen rendimiento energético y que no compiten porque no son utilizables para otras industrias”. Ante este panorama, el ex director de Energía estimó: “La solar térmica es probablemente la que más vamos a poder aprovechar y la mejor a corto plazo. Es una alternativa atractiva para calentamiento de agua, uno de los consumos eléctricos más importantes en el hogar uruguayo. Hay que darle una promoción a la industria local y tiene que haber una tecnología internacionalmente aceptable disponible en el mercado. La solar térmica nos puede beneficiar tremendamente si se logra la sustitución de los calefones”. Virginia Matos MIÉRCOLES 10 DE NOVIEMBRE DE 2010 O3 La fuente más limpia Los potenciales de ahorro energético estuvieron en debate entre actores privados y el gobierno El 26 de octubre, en la sede de la Dirección Nacional de Energía y Tecnología Nuclear (DNETN) se desarrolló un taller de evaluación de las medidas de eficiencia energética que el país podría llegar a tomar. Formó parte del trabajo de una consultoría que realiza la Fundación Bariloche (ver recuadro) a pedido de la DNETN y con apoyo de sus técnicos, en un momento de transición en el que se está cerrando el Proyecto de Eficiencia Energética y se prepara la puesta en funcionamiento de la Unidad de Eficiencia Energética. El Proyecto de Eficiencia Energética se inició en 2005 y se ha financiado mediante una donación del Fondo para el Medioambiente Mundial (GEF, por sus siglas en inglés), por intermedio del Banco Mundial, que aportó 6.875.000 dólares, y con fondos del Ministerio de Industria y Energía y de UTE, que en conjunto aportaron 8.200.000 dólares. Como forma de darles continuidad a los objetivos de ese proyecto, en setiembre de 2009 se aprobó la Ley de Eficiencia Energética que, entre otras cosas, crea la Unidad de Eficiencia Energética en la órbita de la DNETN. Esto significa que se institucionaliza dentro de la estructura ministerial una división específica para elaborar y guiar las políticas en esta materia. La ley encomienda a la DNETN elaborar un plan de eficiencia energética a 15 años y la realización de este taller es parte de este proceso. La ley también creó el Fideicomiso Uruguayo de Ahorro y Eficiencia Energética, que se financia a partir de la obligación de las empresas distribuidoras de energía de aportar 0,13% de sus ventas anuales, lo cual podría redondear unos cinco millones de dólares anuales de aportes al fideicomiso. Este fondo también se nutrirá de la obligación de las nuevas centrales de generación basadas en combustibles fósiles de aportar 1% (por única vez) del valor de su inversión. Con esos fondos la Unidad de Eficiencia Energética financiará diferentes tipos de actividades de su competencia, especialmente para pagar los Certificados de Eficiencia Energética. FUNDACIÓN BARILOCHE La Fundación Bariloche fue creada en 1963 y se ha constituido con en correr de los años en un referente para América Latina en la producción de conocimiento, capacitación y consultoría. Concibió el Modelo Mundial Latinoamericano (más conocido como “Modelo Bariloche”) en la década de 1970, en oposición al Informe del Club de Roma, la primera alarma global sobre el agotamiento de los recursos naturales. Particularmente, el IDEE-FB se dedica desde 1978 a la investigación, capacitación y asistencia técnica en el campo de la economía, planificación y política energética. Calentador solar de agua en una vivienda de Lagomar, Ciudad de la Costa. FOTO: SANDRO PEREYRA La DNETN establecerá cada año sus metas de eficiencia energética y pondrá los certificados a disposición de las empresas interesadas. Al final del año la DNETN comprará los certificados de aquellas empresas en función de la reducción de consumo energético que hayan alcanzado. Esto les permitirá reembolsar parte de la inversión realizada. Eficiencias en debate Daniel Bouille, director del Instituto de Economía Energética de la Fundación Bariloche (IDEE-FB), abrió el taller distinguiendo dos acepciones de eficiencia energética, apoyado en conceptos provenientes de la economía: la eficiencia productiva (menor cantidad de energía por servicio energético entregado) y la eficiencia asignativa (mayor uso de recursos renovables abundantes). La primera está relacionada especialmente con las tecnologías más eficientes pero también con el cambio en ciertas prácticas, ya sea en el ámbito productivo o doméstico, que resultan en un uso menos intensivo de energía. Para ejemplificar el concepto de eficiencia asignativa en el caso uruguayo el especialista mencionó el caso de la promoción de la energía solar térmica y de los biocombustibles. Hizo hincapié en que la eficiencia energética apunta a tres objetivos: económicos (reducir la dependencia de combustibles fósiles importados), ambientales (reducción de la contaminación) y sociales (reducción de la factura energética AHORRO EN ILUMINACIÓN RESIDENCIAL En el caso del sector residencial, el ahorro total en iluminación por el cambio de lámparas incandescentes por las de bajo consumo es de 26,8 kTep, lo que representa 67,9% del consumo en iluminación y 10,3% del consumo total de electricidad del sector residencial. De ese potencial teórico de ahorro, 95,9% se lograría en el sector residencial urbano. haciendo más accesible la energía a toda la población). A nivel productivo, también señaló la importancia de hacer más competitiva la industria nacional al reducir los costos energéticos mediante la eficiencia. Costos, barreras, beneficios y oportunidades Un análisis de las políticas de eficiencia energética requiere evaluar estos cuatro componentes: cuánto cuestan las medidas, qué beneficios aportan (en las tres dimensiones de la sustentabilidad), cuáles son las barreras y obstáculos a enfrentar, y cuáles son las nuevas oportunidades productivas que emergen. En este sentido Bouille fue enfático en afirmar que la aplicación de políticas de eficiencia energética abre un abanico de nuevas industrias y servicios que se hacen necesarios para cumplir con los nuevos requisitos. Por su parte, la consultora Hilda Dubrovsky hizo un repaso de las medidas que el país ha ido tomando en esta materia, como la creación de la Unidad de Eficiencia Energética, la Ley de Energía Solar Térmica y los llamados a compra de energías renovables y cogeneración. Entre otros conceptos, expresó que la eficiencia energética puede orientarse al manejo de la demanda pero también “aguas arriba” del usuario, es decir, en el proceso de generación, transmisión o distribución de la energía. Particularmente hizo referencia a la “tarifa inteligente” de UTE, que si bien no puede identificarse como una medida de manejo de la demanda explícitamente, al desplazar el consumo de las horas pico de consumo produce ahorros en la transmisión y la distribución. Luego de las presentaciones iniciales se analizaron y debatieron las diferentes oportunidades de ahorro y eficiencia energética en todos los sectores: residencial, industrial, transporte, comercio y servicios. Este ejercicio servirá para pasar del “potencial teórico” de ahorro a una estimación del potencial posible de acuerdo a la realidad económica y productiva de cada uno de los sectores. Se espera que los insumos finales de este proceso de consultoría de la Fundación Bariloche sirvan para delinear la política de eficiencia energética que adoptará el país en los años venideros. O4 MIÉRCOLES 10 DE NOVIEMBRE DE 2010 El convoy con 123 toneladas de residuos radiactivos en once contenedores especiales Castor se detiene en la estación ferroviaria de Kehl (Alemania), en su viaje rumbo al depósito atómico de Gorleben, el sábado . FOTO: EFE, ULI DECK El debate nuclear Razones y sinrazones de una discusión que lleva décadas en Uruguay Las fuentes radiactivas existen en la naturaleza, empezando por el sol. Las artificiales están tan cerca de nosotros como el consultorio de nuestro dentista o el detector de humo de un apartamento. La ciencia ha desarrollado numerosas aplicaciones de las propiedades radiactivas de muchas sustancias, en campos que van desde la medicina hasta las aplicaciones militares, pasando por la conservación de alimentos y la medición de parámetros ambientales. Otra aplicación es la de utilizar masivamente material radiactivo para producir vapor y generar electricidad. Eso se logra mediante centrales termonucleares de potencia. Esas centrales son similares a cualquier central térmica en el hecho de que el generador propiamente dicho está acoplado a una turbina de vapor. La diferencia está en que, si bien el vapor puede producirse por la combustión de petróleo, carbón, biomasa o por la concentración de energía solar, en las centrales termonucleares se genera utilizando la radiación emitida principalmente por el uranio 235. La necesidad de aislar los elementos radiactivos del ambiente representa la mayor diferencia entre las centrales nucleares y todas las otras, ya que se debe construir un núcleo para contenerlos, dentro del cual se ubican, además, el sistema de refrigeración y el generador de vapor. Desde fines de los 70 el tema ha estado sobre la mesa. Brasil y Argentina comenzaron la construcción de sus centrales por aquella época. En este artículo se resumen algunos de los argumentos que alientan el debate en el Uruguay de hoy. Si bien se reconocen varios tipos de centrales termonucleares, todas son básica y estructuralmente similares y difieren solamente en su potencia, el sistema de enfriamiento y la concentración de material radiactivo en el combustible utilizado. Hoy en el mundo existen, de acuerdo con la World Nuclear Association1, 430 centrales en operación. Otras 58 están en proceso de construcción y 130 instalaciones han sido cerradas y están a la espera o en proceso de desmantelamiento. Más de la mitad de las plantas en operación se ubican en cuatro países: Estados Unidos, Francia, Japón y Rusia. La construcción de nuevas centrales, mientras tanto, se concentra en China, Rusia, Corea e India, sin que ninguna se agregue a las existentes en Estados Unidos o Canadá, y sólo dos están en construcción en Europa Occidental2, ambas en complejos con plantas termonucleares ya existentes y con importantes retrasos y sobrecostos en su construcción. Panorama regional En la región, Cuba abandonó la construcción de dos plantas a fines de los 80, mientras que México, Brasil y Argentina operan dos centrales cada uno, lo que completa las seis centrales latinoamericanas. La más antigua es Atucha 1, en Argentina, que se comenzó a construir en 1968 y se inauguró en 1974. La segunda central Argentina, Embalse, ubicada en Córdoba, demandó diez años para su puesta en operación en 1984. Del lado brasileño, Angra 1, que comenzó a operar en 1985, fue construida en 14 años y Angra 2 demandó 25 años para su puesta en operación en 2001. Las centrales mexicanas Laguna Verde 1 y 2 entraron en operación en 1990 y 1995 luego de 14 y 18 años de construcción, respectivamente. Para completar el panorama nuclear regional, tanto Argentina como Brasil tienen cada uno una planta en construcción, Atucha 2 en Argentina desde 1981 y Angra 3 en Brasil desde 1983. Periplo nacional En Uruguay la crisis petrolera de 1979 y el impulso nuclear regional de principios de los 80 llevaron a que se planteara en diferentes ámbitos la posibilidad de incorporar un reactor nuclear de baja potencia con fines de investigación y generación de electricidad. Esta idea se abandonó totalmente con la puesta en funcionamiento de las represas hidroeléctricas de Salto Grande y Palmar, en 1982. En 1988 se planteó la posibilidad de un tratado de cooperación nuclear con Canadá, que se trató repetidas veces en el Parlamento hasta 1992. Paralelamente, la Dirección Nacional de Energía definía en 1991 que un emplazamiento probable para una central termonuclear sería la zona de la represa de Palmar, siendo necesario realizar estudios para determinar la conveniencia de esa opción. Ese mismo año, en el ámbito parlamentario se legisló que la instalación de una central termonuclear de potencia, ya sea ésta pública o privada, deberá ser autorizada por ley (artículo 215 de la ley 16.226) y en 1997, por el artículo 27 de la ley 16.832, se prohibió el uso de energía de origen nuclear en el territorio nacional. El tema de la energía nuclear reaparece en ámbitos oficiales en 2005 con el Plan Energético 2005-2030 de la Dirección Nacional de Energía y Tecnología Nuclear (DNETN). En él se propone estudiar la opción, al igual que la posibilidad de incorporar carbón y gas a la matriz energética. En 2006, en un documento de la DNETN se presentan aspectos para el análisis de la alternativa nuclear. Durante 2007 son presentados al Parlamento al menos dos informes en los que incluso se llega a recomendar el modelo y fabricante de la “central termonuclear a instalar en Uruguay”. Las declaraciones del entonces presidente de la República, doctor Tabaré Vázquez, en ocasión de sus visitas a Israel y Corea llevaron el tema a la prensa en 2008, cuando se resaltó la voluntad de esos países de participar en un eventual plan nuclear uruguayo. Hacia fines de 2008 se presentó el informe “Análisis para la eventual puesta en marcha de un programa nuclear para la generación eléctrica en Uruguay”, preparado por un grupo técnico multidisciplinario, el cual recomienda seguir las directivas de la Organización Internacional de Energía Atómica (AIEA)3. Sobre esta base se designa una comisión multipartidaria nuclear para estudiar la opción nuclear, comisión que debiera estar integrada por tres representantes del Poder Ejecutivo, tres del Frente Amplio y uno por cada uno de los partidos con representación parlamentaria4. En 2009 la cuestión energética estuvo presente en los programas de gobierno de todos los partidos en la campaña previa a las elecciones de octubre. En el tratamiento del tema la opción nuclear no era mencionada por el Frente Amplio ni por el Partido Nacional, que sí hablaban de diversificar la matriz energética. El programa del Partido Independiente la mencionaba como tema a estudiar y en el programa del Partido Colorado se expresaba la necesidad de que Uruguay cuente con al menos una central termonuclear en los próximos seis o siete años y que, mientras tanto, debiera alquilar algún reactor nuclear. Específicamente se refiere el programa al proyecto de la empresa rusa Rosatom, consistente en instalar reactores nucleares en barca- MIÉRCOLES 10 DE NOVIEMBRE DE 2010 zas, proyecto que no se espera que esté operativo hasta 20125. Una posición absolutamente contraria al uso de energía nuclear es la que manifiesta en su programa Asamblea Popular. En diciembre de 2009 la Comisión Nuclear encargó, con fondos estatales, la realización de una encuesta sobre la percepción pública de este tema, uno de cuyos pocos resultados conocidos es que el 62% de la población quisiera disponer de más información sobre el tema. En febrero de 2010, la multipartidaria sobre temas de energía –algunos de cuyos integrantes lo son también de la Comisión Nuclear– recomendó diversificar la matriz energética nacional y dentro de ese esquema culminar con los estudios de viabilidad de la opción nucleoeléctrica propuestos por esa comisión. En agosto pasado, en el proyecto de presupuesto nacional se asignó casi un millón de dólares para la fase uno de esos estudios. Finalmente, en octubre, por iniciativa de la Universidad de la República, se realizó un juicio ciudadano en el que ninguno de los 15 jurados estuvo a favor de la implantación de una central termonuclear en el actual estado de la tecnología. Los matices del jurado van desde la negativa absoluta hasta considerar la posibilidad de aceptarla si los avances tecnológicos minimizan el riesgo asociado al emprendimiento. Paralelamente, se pidió transparencia a la Comisión Nuclear y que se dé difusión a sus informes y encuestas. La opción nuclear Una de las razones esgrimidas a favor de instalar al menos una central termonuclear en Uruguay es que los países vecinos ya utilizan esa tecnología y, en consecuencia, estamos expuestos a los riesgos de un accidente nuclear. Si bien el argumento es débil, es al menos parcialmente cierto para el caso de Atucha en Argentina, que se encuentra a menos de 100 kilómetros del centro de Buenos Aires y de Nueva Palmira. Las centrales brasileñas, por el contrario, distan más de 1.700 kilómetros de la frontera y, por otra parte, los estados de Rio Grande do Sul, Santa Catarina y Paraná se han declarado por ley libres de centrales nucleares. También se pregona que la energía nuclear es “energía de base”, disponible y controlable, en contraposición con las fuentes renovables, que al depender de “combustibles” como el sol, el viento y el agua no están siempre disponibles. Eso también es cierto, aunque es preciso matizar que la utilización conjunta y complementaria de las fuentes renovables en un esquema integrado con la generación mediante biomasa –que puede servir como respaldo– puede asegurar la disponibilidad. Pero si el panorama regional puede servir de marco de referencia, entonces la supuesta disponibilidad nuclear no es tal. Veamos, por ejemplo, que la disponibilidad de Angra 1 en Brasil no ha superado el 40% desde su puesta en marcha. Eso significa que en promedio la planta sólo ha estado disponible 140 días por año, menos que muchos parque Las nucleares brasileñas conforman el 2% de la capacidad de generación de Brasil. Las dos argentinas, el 4%". O5 El ministro de Planificación argentino, Julio de Vido, visita las obras de la central Atucha II. FOTO: PRESIDENCIA ARGENTINA, S/D DE AUTOR (ARCHIVO, AGOSTO DE 2008) eólicos. El mejor registro de operación de la región lo tiene la central de Embalse, en Argentina, que llega a 85%, es decir, una disponibilidad media de 310 días por año o, lo que es lo mismo, no se cuenta con la planta por casi dos meses cada año. Se utiliza además el argumento de que existen múltiples fuentes de combustible nuclear, lo que permite independencia de un proveedor determinado. Eso es cierto hasta que se adopta un tipo de central: entonces la opción se limita a aquellos proveedores que a partir de uranio producen el combustible en la forma y concentración requerida por la planta. Por último, el argumento estrella es que las plantas nucleares no generan en su operación gases de efecto invernadero, lo que también es cierto, si bien ENCUESTA FACTUM La semana pasada El Espectador dio a conocer una encuesta realizada por Factum en la que se revela que 85% de los uruguayos prefiere utilizar energía solar o eólica frente a 13% que se muestra favorable a la nuclear. Además, 88% de los entrevistados declara preferir una energía más cara si contamina menos y sólo 9% se vuelca a favor de una energía más económica aunque resulte contaminante. “La gente quiere apostar a la menor contaminación posible. Decir que es más barato no es argumento para introducir algo que se considera peligroso o contaminante. Esto es contundente. Lo otro es que la energía nuclear provoca rechazo y miedo; casi seis de cada diez personas rechazan la energía nuclear y le temen, consideran que es un peligro para la salud y la vida”, fue el análisis de Óscar Bottinelli. Más información en www.espectador.com/1v4_contenido. php?id=197369&sts=1. como resultado de esa misma operación se generan otro tipo de desechos cuya disposición final es todavía un problema sin resolver que sólo se pospone y queda como herencia de nuestro apetito energético para las futuras generaciones. Cabe agregar que las dos centrales nucleares brasileñas conforman sólo el 2% de la capacidad de generación eléctrica de Brasil y las dos argentinas apenas componen el 4% del parque de generación. La implantación en Uruguay de una sola central del tamaño de Embalse supondría el 23% y una como Angra el 37% de la capacidad de generación con la planta integrada. Eso convertiría a Uruguay en el país más núcleo-dependiente de América, más incluso que Estados Unidos, que dispone de 104 centrales. Eso implica un riesgo operacional para el sistema eléctrico, que podría reducirse con las interconexiones regionales, pero que seguramente obligaría a integrar al sistema potencia de respaldo, lo que aumentaría los costos. Llegando a los costos, quizá el punto más importante a tener en cuenta lo ha presentado en forma inequívoca Wall Street: sistemáticamente los inversores se han negado a financiar nuevas plantas termonucleares por considerarlas riesgosas y con costos finales muy difíciles de definir6. No fue suficiente que en febrero la administración de Barack Obama ofreciera garantías por más de 8.000 millones de dólares para evitar la cancelación de las pocas solicitudes de permisos para nuevas plantas, la última retirada el mes pasado7. Conviene tener en cuenta que casi todos los estados en Estados Unidos tienen ahora legislación que prohíbe trasladar a los clientes los costos de nuevas centrales –nucleares o de cualquier otro tipo– mientras no estén integradas al sis- tema y generando. Ello, a fin de evitar casos como el de la central nuclear de Shoreham, en Long Island (Nueva York), que sólo funcionó dos días, antes de ser cerrada por problemas de seguridad, dejando a los clientes con una deuda de más de seis billones de dólares y el costo de tener que desarmarla y limpiar el sitio, tarea que 20 años después apenas ha comenzado8. En algunos ámbitos de nuestro país se escucha que el crecimiento de la demanda de electricidad llevará a que no sea posible satisfacerla sin incorporar al menos una central termonuclear9. Manteniendo las tendencias actuales, ciertamente necesitaremos nuevas fuentes, pero de esa constatación a afirmar que “el país sólo se salva con una central nuclear”10 hay un paso demasiado grande. Muchas otras fuentes y, especialmente, la eficiencia en el uso, la reducción de pérdidas y la sustitución, por ejemplo con solar térmica para el calentamiento de agua y el acondicionamiento térmico, pueden hacer que mejoremos nuestra productividad y comodidad, sin agregar al sistema eléctrico más que fuentes renovables a base de recursos autóctonos, que son las únicas capaces de garantizar la soberanía e independencia energéticas con respeto a nuestro ambiente. Raúl E Viñas Notas: 1. 2. 3. 4. 5. 6. 7. www.worldnuclear.org. Flamanville 3 (Francia) y Olkiluoto 3 (Finlandia). www.dnetn.gub.uy. Decreto 593/2008 del 05/12/2008. www.rosatom.ru. www.nytimes.com/2010/10/11/business/energy-environment/. www.foxbusiness.com/markets/2010/10/09/constellationdrops-nuclear-loan-guarantee-program/. 8. www.nytimes.com/2009/01/04/nyregion/long-island/ 04shorehamli.html. 9. www.acde.org.uy/novedades/novedadesnuclear.htm. 10. www.eltelegrafo.com/index php?idbuscar=4099. O6 MIÉRCOLES 10 DE NOVIEMBRE DE 2010 Datos en reserva Aumentan las dudas sobre los volúmenes de petróleo de la OPEP Desde que las cuotas de exportación de petróleo fueron fijadas en función de las reservas, saber la cantidad real de crudo que existe en el mundo se ha vuelto una de las incógnitas más inescrutables para la planificación energética. Irán, Irak, Kuwait y Arabia Saudita no se esfuerzan en demostrar credibilidad. En octubre Irán e Irak sorprendieron a los analistas de la energía global al anunciar el aumento de sus reservas. El lunes 4, el ministro de Petróleo de Irak, Hussein Chahristani, afirmó que su país disponía ahora de 143 mil millones de barriles de reservas explotables, una cifra 25% mayor que las estimaciones precedentes. Esta reevaluación le permitió a su país desplazar a su vecino Irán del tercer lugar entre los estados con mayores reservas de petróleo del planeta, detrás de Arabia Saudita y Venezuela. Pero la alegría les duró poco a los iraquíes porque una semana más tarde, el lunes 11 de octubre, su homólogo iraní, Massoud Mirkazemi, anunció, en una conferencia de prensa, que Irán dispone ahora de 150,3 mil millones de barriles de petróleo, en lugar de los 138 mil millones que poseía antes. Esto volvía a ubicar a Irán en el tercer lugar, por delante de Irak. Lo curioso es que no hay ninguna razón para explicar el aumento de las reservas declaradas de ambos países, más allá de que pocos días después, el 14 de octubre, se realizaba la reunión de la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP), que fija la cuota de extracción de crudo proporcionalmente al volumen de reservas de cada país miembro. Rouba Housari, directora del sitio Iraq Oil Forum (www.iraqoilforum. com), declaró a la agencia de noticias AFP que el anuncio del gobierno iraquí “es una sorpresa debido a que no ha habido actividad que lo justifique”. Este anuncio debería crear dudas en el seno de la OPEP “en cuanto a la metodología empleada para confirmar las nuevas reservas”, indicó la experta. Desde hace 15 años dicen que sus reservas se sitúan entre 258 y 262 mil millones de barriles; eso no es plausible”. Refinería en Amara, a unos 450 km de Bagdad, Irak. FOTO: EFE, HAIDER AL-ASSADEE (ARCHIVO, DICIEMBRE DE 2009) Vale la pena recordar que en 1982, cuando la OPEP decidió fijar por primera vez cuotas de explotación de petróleo, todos los países aumentaron las reservas declaradas. Entre 1985 y 1991 las reservas globales de crudo se duplicaron como por arte de magia en 300 mil millones de barriles, una cifra superior a las actuales reservas de Arabia Saudita, las mayores del mundo. En el blog “Oil Man”, del periódico francés Le Monde, se publicó en setiembre una entrevista a Robert Hirsch, ex responsable de investigación en carburantes sintéticos del grupo Exxon y autor del primer informe oficial del gobierno de Estados Unidos –durante la administración de George W Bush–, quien se mostraba pesimista respecto de las perspectivas de corto plazo del suministro de petróleo a nivel global. En la entrevista el experto es consultado acerca de su opinión sobre el volumen oficial de las reservas de Arabia Saudita. Transcribimos un fragmento a continuación1. Robert Hirsch: Cada año, desde hace 15 años dicen que sus reservas se sitúan entre 258 y 262 mil millones de barriles; eso no es plausible. Oil Man: ¿Por qué? RH: Porque cada año ellos extraen alrededor de 3.500 millones de barriles; eso quiere decir que encuentran esa misma cantidad todos los años desde hace 15 años. Desde el punto de vista de la estadística es imposible. Hablamos de encontrar algo inalcanzable, y además, en la que los descubrimientos tienen lugar, primero encontramos los campos más grandes y luego los pequeños. Entonces, pretender que usted encuentra lo mismo que produce tiene una probabilidad de entre 50% y 60% de que ocurra en dos años seguidos. ¡La probabilidad de tener 15 años consecutivos es cero! Sencillamente, esto no sucede así. OM: ¿Usted dice que los sauditas mienten sobre sus reservas desde hace mucho tiempo? ¿Qué hay de otros países productores? RH: Digamos que los países de la OPEP juegan con sus cifras oficiales. Veamos a Kuwait, por ejemplo: en los años 80 sus reservas oficiales pasaron de 50 a 100 mil millones de barriles y aun produciendo regularmente mantuvieron sus reservas oficiales en esa cifra, y ellos no han hecho grandes descubrimientos. Después, hace dos años alguien dijo: “Bueno, de hecho es posible que sean 50 mil millones y no 100 mil”. Inmediatamente el gobierno hizo callar a todo el mundo. Nota: 1. Traducido por Édgar Ocampo para www.crisisenergetica.org. BREVATIOS REINO UNIDO El periódico inglés The Independent publicó el 18 de octubre el anuncio del nuevo plan energético del Reino Unido para evitar la crisis energética y reducir las emisiones de gases de efecto invernadero. A pesar de la oposición del Partido Liberal Demócrata al uso de la energía nuclear, el secretario de energía, Chris Huhne, anunció la incorporación de ocho plantas nucleares que estarán operativas entre 2018 y 2025. Sin embargo, el ministro afirmó que la industria nuclear no recibirá ninguna ayuda del Estado para desarrollar las nuevas centrales ni para el tratamiento de los residuos nucleares. El plan también incluye la instalación de energía eólica en alta mar y de paneles fotovoltaicos en los techos de las residencias. BOLIVIA Bolivia confirmó que producirá para 2014 unas 30.000 toneladas de carbonato de litio por año, equivalentes al 30% del consumo mundial anual, mediante la explotación masiva del salar de Uyuni, según reporta la agencia de noticias Reuters. El presidente Evo Morales dijo que el proyecto demandará una inversión de 485 millones de dólares, que será cubierta totalmente por el Estado, y reiteró que eventuales socios extranjeros serán requeridos sólo para un proyecto paralelo de fabricación de baterías, el uso más prometedor del litio. CHINA La potencia instalada de energía eólica en China para 2020 alcanzará los 230 gigavatios (GW), una cantidad equivalente a 13 veces la energía que produce la Presa de las Tres Gargantas, el mayor proyecto hidroeléctrico del mundo, según informó la agencia de noticias EFE. Durante 2009, por cuarto año consecutivo, China duplicó su capacidad eólica, lo que le permitió alcanzar los 25,8 GW. Sin embargo, expertos del sector advirtieron recientemente que la generación de energía eólica en China está entrando en una “burbuja” por exceso de inversión al calor de los beneficios fiscales promulgados por el gobierno. De hecho, se calcula que más de una cuarta parte de las turbinas instaladas en suelo chino no están conectadas a la red eléctrica. MIÉRCOLES 10 DE NOVIEMBRE DE 2010 O7 Pobreza energética En 2030 habrá la misma cantidad de personas sin acceso a la energía La Agencia Internacional de Energía (AIE) presentó ayer, 9 de noviembre, su Prospectiva Mundial de la Energía 2010. Como todos los años, esta agencia conducida por la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) presenta su análisis del estado de la energía en el mundo y sus perspectivas futuras. Como adelanto del informe, la agencia liberó anticipadamente su capítulo número 8, especialmente orientado a la situación de la pobreza energética en el mundo, que comentaremos en esta edición. El documento estima que hay 1.400 millones de personas (más del 20% de la población mundial) que no tienen acceso a la electricidad y 2.700 millones (40% de la población) que dependen de la biomasa para cocción. Lo peor que afirma el estudio es que para 2030 estas cifras no sufrirán cambios significativos. En particular para América Latina el informe calcula que existen 31 millones de personas sin acceso a la electricidad y que 85 millones aún utilizan biomasa (leña, residuos vegetales o estiércol seco) para cocinar. Como era esperable, los peores indicadores se dan en el África subsahariana, donde apenas 31% de las personas accede a los servicios eléctricos. La agencia recuerda una vez más –ya viene siendo repetido por todas las agencias internacionales desde hace décadas– que el uso de biomasa para cocinar en la forma en que lo hacen estos sectores pobres tiene severas consecuencias para su salud y para el ambiente. Las personas encienden fogones dentro de las casas sin chimeneas ni ventilación y sus habitantes respiran los gases tóxicos de la combustión. Las mujeres y los niños –que habitualmen- te permanecen más horas dentro del hogar– son los más afectados. La Organización Mundial de la Salud –cita el informe– estima que un millón y medio de personas muere prematuramente cada año por esta causa. La AIE calcula que para solucionar este problema en 2030 se necesita una inversión global de 33 mil millones de dólares anuales para llevar la electricidad a las poblaciones que aún carecen de ella y 2.600 millones anuales para hacerles llegar mejores opciones de cocción. Toda esta inversión representa menos de 3% de los fondos que se proyecta destinar al sector de la energía en todo el mundo en ese período. En particular para América Latina sería necesaria una inversión de siete mil millones de dólares hasta 2030 para alcanzar el 100% de cobertura eléctrica y dos mil millones para que las modernas fuentes de cocción sean accesibles a todos los habitantes. Mientras hacen falta estas inversiones para llevar energía a los sectores más empobrecidos, los subsidios a los combustibles fósiles en los países en desarrollo alcanzaron 252 mil millones de dólares sólo en 2009. El reporte de la AIE recomienda revisar la política de subsidios para que, sin afectar a los más pobres, pueda destinarse parte de esos fondos a cubrir el déficit de los sectores sin acceso a la energía. El documento también contiene el rango de países en función del Índice Trabajos en el tendido de electricidad para Pueblo Quintana, en Salto. FOTO: FERNANDO ALONSO de Desarrollo Energético, un indicador que reúne cuatro variables: consumo de energía per cápita, consumo residencial de electricidad per cápita, porcentaje de uso de las modernas fuentes de combustible en los hogares, y cobertura eléctrica. De acuerdo con este índice Uruguay se ubica en el tercer puesto entre los más desarrollados, luego de Venezuela y Argentina. O8 MIÉRCOLES 10 DE NOVIEMBRE DE 2010 La presidenta electa, Dilma Rousseff, y el presidente Luiz Inácio Lula da Silva durante una conferencia de prensa en el Palacio de Planalto. FOTO: WILSON DIAS, ABR A mais grande do mundo Cómo será la política energética de la flamante presidenta de Brasil, Dilma Rousseff “Soy su brazo derecho e izquierdo”. Así define Rousseff su relación con el presidente saliente, Lula da Silva1. La llegada de esta ex guerrillera al sillón presidencial de la superpotencia sudamericana constituye el clímax de una carrera política en la que empezó a destacarse hace ocho años. El propio Lula relata cómo lo deslumbró durante una reunión con expertos en asuntos energéticos: “En 2002 apareció una compañera con un ‘ordenadorcito’ en la mano. Empezamos a debatir y me di cuenta de que ella tenía un diferencial respecto de los demás, porque venía con la práctica del ejercicio como secretaria de Minas y Energía en el estado de Rio Grande do Sul. Me quedé pensando: ‘Creo que ya he encontrado a mi ministra de Energía’”2. Rio Grande do Sul fue uno de los pocos estados que se salvaron de los apagones que en aquel momento azotaron a gran parte del país. Rousseff logró revertir la grave situación “volcando su atención a tratar de modificar la red eléctrica del Estado, trabajando con las compañías privadas para aflojar los cuellos de botella en las instalaciones que ya existían y desarrollar la energía eólica y otras fuentes alternativas”3. En 2005, al caer el entonces jefe de gabinete, José Dirceu, acusado de corrupción, Lula la designó en ese cargo. Creciendo rápido Como jefa de gabinete, Rousseff tuvo la responsabilidad de gerenciar el Programa de Aceleración del Crecimiento (PAC), cuyo objetivo es “el crecimiento de la economía, con inversión en obras que reduzcan las desigualdades En lo que será la continuidad del gobierno de Lula, los planes en materia energética de la presidenta electa, Dilma Rousseff, priorizan la seguridad en el abastecimiento con un fuerte protagonismo de la energía hidroeléctrica. La mandataria también propone profundizar la participación de la biomasa y la energía eólica, de escasa relevancia en la actualidad. La nuclear seguirá avanzando. y generen más calidad de vida entre los brasileños”4. Según el gobierno, el programa ya dio sus frutos: en 2007 y 2008, la economía brasileña creció por encima de la meta prevista (5%) y en 2010 ocurrirá lo propio. Por otra parte, las obras de generación y transmisión en el sector energético crecieron 38% entre 2006 y 20095. Los objetivos energéticos del PAC 2 son “asegurar el abastecimiento combinando fuentes limpias y renovables, aumentar la producción de petróleo, construir navíos para explotar hidrocarburos en aguas profundas, hacer énfasis en los combustibles renovables, la eficiencia energética y la investigación mineral”. De acuerdo con el Plan Decenal de expansión de energía 2008-2017 del Ministerio de Minas y Energía, el consumo energético del país en 2008 fue de 434 TWh, y se prevé que llegue a 700 TWh en 2017. Para responder al crecimiento de la demanda, las fuentes de energía prioritarias según el PAC son la hidroeléctrica, la biomasa, la eólica, la nuclear y el gas natural, en ese orden. Más represas El gobierno asegura en el Plan Decenal que “Brasil ya es uno de los países con una de las matrices energéticas más limpias”. La condición de “limpia” que se le atribuye se debe a la importante participación de la energía hidroeléctrica. Según Dilma, “la hidroelectricidad abasteció el 85% de nuestra demanda de energía eléctrica en 2009”6. “Y sólo utilizamos un tercio del potencial energético de nuestros ríos para la generación de electricidad, lo que significa que tenemos todas las condiciones para mantener elevada la participación de las energías renovables en los próximos años, principalmente con la entrada en operación de las represas de Río Madeira y Belo Monte”, en la Amazonia. El aprovechamiento energético de los ríos amazónicos ya desató en Brasil un amplio rechazo, en el que se unen indígenas, el Movimiento de los Afectados por Represas –que dice representar a un millón de personas expulsadas de sus tierras–, numerosas organizaciones ambientalistas y científicos7. Según el Plan Decenal, actualmente hay 669 represas en el gigante norteño y otras 47 a estudio, lo que da la pauta de que la energía hidroeléctrica seguirá siendo la principal fuente para atender el crecimiento de la demanda de energía. Rousseff considera que “el imperativo es que la construcción de nuevas usinas esté en armonía con el medio ambiente”. “Y eso es posible. Si Brasil no hubiera optado en el pasado por el uso de la hidroelectricidad y se hubiera inclinado por las termoeléctricas que funcionan con combustibles fósiles, los daños al medio ambiente serían mucho mayores”, argumentó8. Eólica costosa En respuesta a los reclamos de ambientalistas por mayores inversiones en fuentes alternativas, el ministro de Minas y Energía, Márcio Zimmermann, contrapuso los costos. El consorcio que construirá Belo Monte ofreció un precio de 77,97 reales (44 dólares) por megavatio/hora, mientras que la energía eólica costó 148 reales (84 dólares) en la última subasta, el año pasado9. Aunque admitió que el costo de la eólica cayó casi a la mitad en los últimos seis años, aseguró que la hidroelectricidad igual seguirá siendo la más barata por mucho tiempo. El plan energético brasileño prevé cuadruplicar la generación de energía eólica en los próximos diez años, pero pese a ese aumento su participación no llegará siquiera a representar 4% del total, mientras que la biomasa se mantendrá en torno a 5%. Nuclear Brasil posee dos centrales nucleares, Angra I, de 657 MW, y Angra II, de 1,35 GW, ambas ubicadas en el municipio de Angra dos Reis, estado de Río de Janeiro. En 2007 “Lula dio luz verde a la construcción de Angra III, abandonada hace más de 20 años y que costará 3.600 millones de dólares. Además, se prevé concluir el programa nuclear de la Marina brasileña, que implica la fabricación de un submarino y la conclusión del ciclo del uranio para producir energía nuclear”10. La presidenta electa confirmó que dará andamiento a la construcción de Angra III porque permite “conservar el conocimiento acumulado sobre energía nuclear que debe ser transmitido a futuras generaciones”. Comentó que esta fuente “fue responsable del 2,5% de toda la generación energética del país en 2009 y que podría ser una fuente importante cuando el potencial hidroeléctrico se reduzca”11. El gobierno brasileño planea tener cuatro nuevas plantas nucleares en funcionamiento hacia 202012. Biocombustibles y gas “El avance de la industria de la caña se debe principalmente al mercado de combustibles, legado de Pro-alcohol, un programa que data de los años 70 y alienta el uso de etanol para reducir la dependencia de las importaciones de petróleo. La nafta que se vende en Brasil contiene una mezcla de 25% de alcohol. Por otra parte, más de 70% de los automóviles producidos en el país puede funcionar con gasolina o alcohol. En la actualidad hay cerca de seis millones de unidades de este tipo”13. Según el Plan Decenal, en 2008 el consumo de caña fue de 15.909 Kteps y para 2017 se proyecta un consumo de 22.162 Kteps. En tanto, mientras que en 2008 la demanda de biodiesel fue de 1.130 mil metros cúbicos, en 2017 será de 3.495 mil. La debilidad de Brasil en el sector de la energía es el gas natural. Durante el primer semestre de 2008, el consumo nacional fue de 59,4 millones de metros cúbicos por día, de los cuales 30 millones procedían de Bolivia14. Con el objetivo de reducir la dependencia del país vecino, se destinan 18,2 millones de dólares entre 2008 y 2012 para aumentar la producción gasífera. Virginia Matos Notas: 1. “Dilma, la hija del lulismo”, www.elmundo.es, 01/11/2010. 2. Ídem 1. 3. “Llega a la presidencia en Brasil la mujer que revirtió la crisis energética en 2002�, www.matrizenergetica.com.ar, 01/11/2010. 4. www.brasil.gov.br. 5. Ídem 4. 6. Política Energética � PT�, www.agendasustentavel.com.br, 24/09/2010. 7. “Sed de energía en Brasil multiplicará represas en la Amazonia”, IPS, 07/06/2010. 8. Ídem 6. 9. Ídem 7. 10. Ídem 6. 11. Ídem 6. 12. www. chilerenovables.cl, 23/04/2010. 13. “Brasil, paraíso del etanol”, www.biodisol.com. 14. Ídem 13. energía Coordinación: Gerardo Honty Corrección: Rosanna Peveroni Diseño: Manosanta Edición gráfica: SandroPereyra