las bibliotecas escolares en el contexto educativo y bibliotecario

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LAS BIBLIOTECAS ESCOLARES EN EL
CONTEXTO EDUCATIVO Y BIBLIOTECARIO
Gómez Hernández, José A. El proceso de organización de la biblioteca escolar: del modelo a la
aplicación. Murcia: Universidad. Facultad de Ciencias de la Documentación, 1998
A. Reforma educativa y biblioteca escolar
Entre las distintas cuestiones que se le exigen al sistema educativo, la
formación lectora ocupa un espacio importante. El sistema educativo debe
contribuir a crear lectores competentes, a promover actitudes reflexivas y
críticas ante los distintos medios de transmisión y difusión de la cultura y a
despertar interés por la lectura. Por otro lado, el alumno debe disponer de
las estrategias necesarias para ser capaz de aprender por si solo, en donde
la recogida, selección y recuperación de la información tienen una
importancia vital.
Ahora bien, esta responsabilidad de formar a los más jóvenes en el
ámbito de la lectura es una responsabilidad compartida entre la escuela y
otras instancias sociales. En este punto, cabe destacar la importancia
decisiva de las familias y de los medios de comunicación para conseguir los
objetivos mencionados anteriormente, y que deberían ser objeto de
reflexión. Sin embargo, el sistema educativo no puede eludir el papel que
debe desempeñar. La escuela debe comprometerse con el objetivo de
capacitar a los estudiantes para resolver por sí solos los problemas de esta
índole que se les plantearán a lo largo de su trayectoria personal y
profesional.
La implantación de la reforma educativa ha dado lugar a una serie de
modificaciones en el currículo escolar, ya que se ha optado por un modelo
más abierto y flexible. Además, se ha realizado una profunda revisión de los
objetivos y los contenidos que han de ser objeto de enseñanza y
aprendizaje en las diferentes etapas educativas. En dicho modelo aparecen
los conceptos básicos relativos a la lectura entendida en un sentido amplio:
lectura de distintos tipos de textos y con diferentes finalidades; medios de
comunicación; nuevos soportes y medios técnicos para su lectura (cintas de
audio y vídeo, soportes informáticos...), etc. Asimismo, se insiste en la
adquisición de procedimientos como la lectura crítica y comprensiva, la
utilización de variadas fuentes de información y documentación, la
adquisición de técnicas de trabajo científico y el desarrollo de estrategias
de búsqueda, recuperación y transmisión de la información.
Por otra parte, se defiende una nueva concepción del aprendizaje que
pone el acento en la actividad a desarrollar por el propio alumno y en la
importancia de desarrollar estrategias para el aprendizaje autónomo
(aprender a aprender). Evidentemente, estas propuestas sugieren una
intervención educativa atenta y comprometida con la lectura. En este nuevo
planteamiento la biblioteca escolar se perfila como nuevo e importante
ámbito educativo: espacio de comunicación e intercambio. De esta manera,
una biblioteca escolar integrada en el Proyecto Educativo y Curricular del
Centro constituye un recurso pedagógico de primer orden.
B. Un nuevo modelo de biblioteca escolar
Por tanto, debemos concebir la biblioteca escolar como un espacio
dinámico de recursos y servicios de información que han de cumplir un papel
primordial en el aprendizaje de los alumnos. La biblioteca escolar se
configura de esta manera como un elemento básico para establecer una
verdadera cultura comunicativa y de aprendizaje permanente en los centros.
Lamentablemente, hasta ahora, la biblioteca escolar en nuestro país se ha
concebido como un servicio opcional y complementario a las tareas docentes,
ligado fundamentalmente al área de Lengua y Literatura; en muchos casos,
se ha limitado a ofrecer una simple colección de libros más o menos
organizada, lo que dista mucho de los planteamientos que estamos
exponiendo aquí.
Por lo tanto, el modelo de biblioteca escolar que estamos planteando se
puede definir como un nuevo lugar de aprendizaje, que alberga una colección
organizada y centralizada de todos aquellos materiales informativos que
necesita el centro para desarrollar su tarea docente, bajo la supervisión de
personal cualificado, y cuyas actividades se integran plenamente en los
procesos pedagógicos del centro y se recogen, por tanto, en el Proyecto
Educativo de Centro, Proyecto Curricular de Centro y Programación General
Anual.
En la figura anterior, hemos definido la biblioteca escolar como un nuevo
lugar de aprendizaje, con diversidad de materiales, con una gestión
centralizada y abierta al exterior. Vamos a ver cada uno de estos aspectos:
Un nuevo lugar de aprendizaje
La principal razón de ser de la biblioteca escolar es la de apoyar la
totalidad del currículo. Debe ser un nuevo lugar de aprendizaje en el que
alumnos y profesores tienen a su alcance una gran diversidad de recursos
educativos y pueden poner en práctica una metodología más activa y
participativa. La biblioteca escolar se transforma así en un lugar de
encuentro, un espacio de comunicación e intercambio en el que desarrollar
experiencias interdisciplinares y abordar los contenidos transversales al
currículo. La utilización de la biblioteca escolar plenamente integrada en el
proceso pedagógico del centro favorece la autonomía y la responsabilidad de
los alumnos en su aprendizaje. Es el lugar idóneo para la formación de los
escolares en el uso de las diversas fuentes de información y para fomentar
la lectura como medio de entretenimiento y ocio.
No sólo libros: diversidad de materiales y fuentes de
información.
De acuerdo con su función, el fondo de la biblioteca escolar debe incluir
todo tipo de materiales informativos. La exclusividad de la palabra impresa
como soporte de la información ha dejado de ser una realidad hace muchos
años. Por consiguiente, además de libros, revistas, periódicos y otros
materiales impresos, la biblioteca deberá disponer de fotografías,
diapositivas, transparencias, mapas, globos terráqueos, gráficos, discos,
cintas, películas, juegos, objetos táctiles, etc. Todo ello, sin olvidar los
soportes introducidos por las nuevas tecnologías: discos compactos, CDROM, vídeo interactivo, programas de ordenador, bases de datos en línea,
acceso a Internet, etc.
Gestión centralizada
La biblioteca debe reunir todos los materiales informativos del centro,
aunque por falta de espacio se vea obligada a distribuir sus fondos por
diferentes lugares del centro. En cualquier caso, la gestión debe estar
centralizada en la biblioteca, bajo la supervisión del responsable, de manera
que se garantice la organización y disponibilidad de todos los materiales.
Esta concepción de la biblioteca escolar como servicio centralizado difiere
mucho de la organización de bibliotecas de aula o de departamento, que no
pueden ser consideradas como bibliotecas en sentido estricto, sino que son
fundamentalmente rincones de lectura habilitados en el aula o pequeñas
colecciones de documentos de consulta para un equipo de docentes.
La creación de la biblioteca de centro no implica la desaparición de las
numerosas bibliotecas de aula existentes, sino su transformación con una
nueva perspectiva. Las bibliotecas de departamento también se deben
transformar paulatinamente y sus colecciones deben pasar a formar parte
de la biblioteca del centro. No obstante, algunos documentos pueden
permanecer prestados al departamento durante un curso entero, si es
necesario. La gestión centralizada permite saber en todo momento de qué
documentos se dispone y dónde se encuentran, así como hacer una mejor
selección para la compra de nuevos documentos, evitando que se dupliquen
innecesariamente. Esto es imprescindible para crear una colección
equilibrada que responda a las necesidades reales y que aproveche al
máximo el presupuesto disponible.
Abierta al exterior
La biblioteca escolar, como el centro del que forma parte, no puede
permanecer aislada. Es preciso que se relacione con su entorno social y
cultural colaborando, por ejemplo, con bibliotecas de su barrio o localidad,
asociaciones culturales e instituciones públicas y privadas. Además, ninguna
biblioteca escolar, por muy bien dotada que esté, puede responder a todas
las peticiones de documentación, sobre todo las que se refieren a
documentación muy especializada. Así, para atender las demandas de
alumnos y profesores, tendrá que colaborar con las bibliotecas públicas, con
los Centros de Profesores y de Recursos y con otros centros o servicios de
documentación educativa, para atender las necesidades de alumnos y
profesores.
C) Concepto y modelo de biblioteca
La biblioteca escolar es un espacio educativo, un centro de recursos
documentales multimedia al servicio de la comunidad educativa.
La biblioteca escolar está integrada en el proyecto educativo y en el
proyecto curricular de los centros, y debe fomentar métodos activos de
enseñanza y aprendizaje, y especialmente la autonomía del alumnado en el
proceso de aprendizaje.
La biblioteca escolar debe favorecer el cumplimiento de todos los
objetivos educativos y no sólo de los académicos: transversalidad,
igualdad de oportunidades, acceso a la cultura en igualdad de condiciones,
y específicamente el fomento de la lectura.
La biblioteca escolar debe estar integrada de forma estable en el
organigrama de los centros, y disponer del espacio, el personal y en
general de todos los recursos necesarios para el cumplimiento de sus
funciones.
MODELO Y FUNCIONES DE LA BIBLIOTECA
ESCOLAR
Los usuarios de la biblioteca escolar son todos los integrantes de la
comunidad educativa.
La biblioteca escolar tiene una serie de funciones educativas que afectan
en general a la formación integral de la persona y en concreto al diseño,
desarrollo e innovación curricular:
Fomento de lectura de todo tipo de lenguajes y de todo tipo de
soportes.
Formación en la búsqueda, análisis y tratamiento de la información y la
documentación (educación documental).
Fomento de la expresión y de la creatividad.
Educación para el ocio y el tiempo libre.
Información y orientación.
La biblioteca escolar también tiene funciones de tipo cultural:
Organizar actividades
interdisciplinar.
culturales,
en
su
condición
de
espacio
Proporcionar información cultural sobre todo tipo de actividades,
recursos y servicios externos.
Por último, la biblioteca escolar tiene funciones de tipo técnico:
. Gestionar y organizar las instalaciones y el equipamiento
. Gestionar, organizar y tratar los recursos de información y
documentación.
. Explotar esos recursos elaborando documentación propia, como
dossieres documentales y de prensa, etc.
. Difundir y facilitar el acceso a los recursos propios y a los disponibles
en otras bibliotecas escolares, públicas, CPR, etc.
GESTIÓN DE LA BIBLIOTECA ESCOLAR
El actual marco normativo de la biblioteca escolar en España es
claramente insuficiente y por tanto debe modificarse para facilitar el
cumplimiento de las funciones definidas.
En concreto esa modificación debería recoger los siguientes aspectos
imprescindibles:
El espacio mínimo que indica la normativa debe aumentarse para
aproximarse a las recomendaciones internacionales (0,5 m2 por alumno).
Esas recomendaciones deben matizarse mediante módulos o bandas de
mínimos y la determinación de número de puestos mínimo.
Es necesario que la biblioteca escolar disponga de una ubicación adecuada
que facilite el acceso a la misma y en general favorezca el cumplimiento
de sus funciones y su papel fundamental en los centros educativos.
La biblioteca escolar debe contar con espacios diferenciados que
posibiliten usos simultáneos distintos.
La biblioteca escolar debe contar con el equipamiento necesario para el
acceso y la consulta de todos los soportes documentales.
La biblioteca escolar debe disponer de un mobiliario adecuado a las
distintas etapas educativas.
La biblioteca escolar debe contar con un programa informático de gestión
bibliotecaria.
De forma mayoritaria el Grupo de Trabajo considera que el responsable
de la biblioteca escolar debe serlo a tiempo completo.
De forma mayoritaria el Grupo considera que el bibliotecario escolar
debe ser un docente con formación específica en biblioteconomía.
De forma unánime el Grupo considera imprescindible que la biblioteca
escolar disponga de un equipo multidisciplinar de profesores.
La figura del bibliotecario escolar debe articularse como Jefe de
Departamento o figura similar en primaria.
La biblioteca escolar debe estar presente en el Reglamento Orgánico de
los Centros.
El responsable de la biblioteca escolar deberá ser miembro del claustro
en todo caso y participar en otros órganos del centro, como la Comisión
de Coordinación Pedagógica.
Se debe procurar involucrar al alumnado en las tareas de la biblioteca
escolar.
Se estima necesaria la creación de una nueva especialidad o aptitud de
bibliotecario escolar en los cuerpos de funcionarios docentes.
La constitución del fondo inicial y su crecimiento, la cobertura de todos
los soportes documentales y el equilibrio entre obras de ficción y de
consulta deben acercarse a las recomendaciones internacionales.
Es imprescindible garantizar la necesaria renovación o actualización de
los recursos documentales de la biblioteca escolar.
La biblioteca escolar debe permanecer abierta durante el horario lectivo
y fuera del horario lectivo del alumnado.
La biblioteca escolar debe contar con un presupuesto propio y suficiente
para el cumplimiento de sus funciones.
El presupuesto de la biblioteca escolar debe tender, de acuerdo con las
recomendaciones internacionales, al 10% del presupuesto ordinario del
centro.
Las funciones de la biblioteca escolar deben concretarse en una serie de
servicios tales como consulta y lectura en sala, préstamo, educación
documental y formación de usuarios, orientación, etc.
La biblioteca escolar debe trabajar en red y no de forma aislada.
La biblioteca escolar debe contar con unos servicios centrales de apoyo.
Síntesis: La aportaciones y actuaciones de la biblioteca escolar
EXIGENCIAS DEL
SISTEMA EDUCATIVO
QUÉ OFRECE LA
BIBLIOTECA ESCOLAR
CÓMO ACTÚA
El sistema educativo tendrá
como principio básico la
educación permanente. A tal
efecto preparará a los
alumnos para aprender por
sí mismos.
- Lugar de reunión de
información múltiple. En
soportes variados.
- Biblioteca virtual.
Los bibliotecarios diseñan con los
docentes de otras áreas programas de
formación de usuarios, de búsqueda
documental, para enseñar a localizar la
información, a organizarla y a restituirla.
- Abierta en horario
extraescolar.
Contribuye a establecer criterios de
selección de las fuentes.
- Préstamo de materiales.
Desarrolla programas de animación
lectora.
- Espacio de integración
social. Contiene materiales
diversos que atienden a
intereses variados, no
únicamente es criterio de
elección el nivel escolar.
Ayuda al trabajo personal de los
alumnos.
La efectiva igualdad de
derechos
- Lugar de estudio y
realización de tareas
escolares (apoyados por un
equipo).
La formación personalizada
que propicie una educación
integral en conocimientos,
destrezas y valores morales
de los alumnos en todos los
ámbitos de la vida.
- Documentación relativa a
los temas transversales.
Ofrece dossiers.
Preparación para participar
activamente en la vida
social y cultural.
- Variedad de literatura y
otros recursos, que
responda a intereses
diversos.
Programa de estudio dirigido.
Proporciona ayuda metodológica al
estudio.
- Elabora materiales.
- Organiza exposiciones.
- Acceso a otras
- Propicia grupos de discusión en torno a
instituciones del entorno que un tema.
colaboren en proyectos.
- Propicia la intervención de
colaboradores externos.
- Centro de información de
actividades culturales.
- Desarrolla programas de lectura
relacionados con el gusto literario y la
literatura de ocio.
- Invita a autores, ilustradores y otros
agentes culturales.
- Prepara actividades culturales.
- Soporte de promoción y
animación entre acciones de
diversos agentes.
Introducción: cómo se debe enfocar el proyecto.
Integrar la biblioteca escolar en los procesos educativos del centro,
organizarla y dinamizarla requiere la realización de toda una serie de tareas
bastante complejas que suponen, además, la introducción de cambios
importantes en el centro. El proyecto de organización de la biblioteca es el
reconocimiento implícito de que no se puede hacer todo a la vez, sino que se
deben concentrar los recursos en un número limitado de objetivos,
abordándolos poco a poco con una planificación realista.
Las bibliotecas escolares cuentan, en general, con escasos recursos, que
deben ser muy bien aprovechados. Por ello, es muy importante que la
selección de objetivos se haga de forma consciente y meditada, de tal modo
que se pueda ir mejorando la biblioteca paulatinamente, curso a curso.
Para el modelo que proponemos para diseñar proyectos de Bibliotecas
Escolares nos basamos en la experiencia del Ministerio de Educación y
Cultura, y se ha utilizado en muchos centros educativos dentro del programa
de Bibliotecas del PNTIC, habiéndose confirmado como un instrumento útil
para la definición y organización del trabajo. Comprende cuestionarios para
el análisis de la situación inicial, una definición de objetivos a largo plazo,
sugerencias de iniciativas que se pueden emprender para conseguirlos,
sugerencias para la identificación de las tareas implícitas y una serie de
impresos para simplificar las tareas de planificación.
Al elaborar el proyecto de la biblioteca, habrá que tener en cuenta los
siguientes aspectos:
El proyecto de la biblioteca deberá ser un documento consensuado
entre y con todos los miembros del claustro, puesto que pasará a formar
parte de la Programación General Anual y en la mayor parte de los casos
supondrá una revisión del Proyecto Educativo y del Proyecto Curricular
del centro.
Es fundamental partir de una valoración de la situación inicial y de las
posibilidades y de los recursos reales, así como de las demandas del
entorno.
Es necesario ser realista a la hora de elaborar el proyecto, pues lo
importante es ir creando mecanismos útiles y eficaces que sienten las
bases para conseguir en el futuro objetivos más ambiciosos.
Es aconsejable formular objetivos e iniciativas abarcables, de forma
clara y precisa. Todo ello con el fin de facilitar la puesta en práctica del
proyecto y su evaluación.
SERVICIOS DE LA BIBLIOTECA ESCOLAR
Para que la biblioteca sea un lugar donde la comunidad escolar pueda
recurrir en búsqueda de cualquier tipo de información, y articule todas las
actividades de formación de usuarios y lectura, debe desarrollar los
siguientes servicios:
Facilitar el acceso a la biblioteca, a través de la implantación de
un horario de apertura adecuado.
La lectura en la propia biblioteca.
El préstamo de fondos.
La difusión de información en el centro.
La formación de usuarios
La animación a la lectura
Los principales usuarios de los servicios de la biblioteca son los que
forman la comunidad escolar, fundamentalmente alumnos y profesores.
Cuando la biblioteca escolar es el único centro bibliotecario de su entorno,
puede ser adecuado plantearse la prestación de servicios al resto de la
población, en caso de contar con medios adecuados. Para ello, habría que
articular previamente algún tipo de convenio con el Ayuntamiento, lo que
facilitaría el intercambio de servicios entre las dos instituciones.
Acceso a la biblioteca: el horario de apertura
Una condición esencial para que la biblioteca escolar pueda prestar sus
servicios es que ofrezca a sus usuarios un amplio horario de apertura. Lo
ideal es que sea superior al horario lectivo, pero esto no es posible en la
mayoría de los centros escolares por lo que hay que organizar el máximo de
servicios en el horario lectivo.
Puede distribuirse el horario de la biblioteca de forma fija asignando
unas horas a cada curso, o puede articularse un sistema de acceso libre; en
cualquier caso se debe asegurar que los usuarios puedan acceder a la
biblioteca de forma regular.
Mónica Baró y Teresa Mañá consideran lo más idóneo para la biblioteca
escolar un sistema mixto que combine las dos alternativas, pues esto
permite un aprovechamiento óptimo de los recursos.
HORARIO
LUNES
MARTES
MIERCOLES
JUEVES
VIERNES
9 a 10
3º A
4º A
5º A
6º A
1º A
10 a 11
3º B
4º B
5º B
6º B
1º B
11 a 11'30
RECREO
11'30 a
12'30
ORGANIZACIÓN, CATALOGACIÓN Y CONTROL
12'30 a
13'30
LECTURA EN SALA Y SERVICIO DE PRÉSTAMOS
15 a 16'30
16'30 a 18
PROYECCIONES Y MESAS
REDONDAS
2º A
2º B
LECTURA Y PRESTAMO A PERSONAL NO DISCENTE
La formación de los usuarios en la biblioteca
escolar
La biblioteca escolar ha de emprender una tarea dinamizadora que
acerque sus servicios a los diferentes componentes de la comunidad escolar
y favorezca su crecimiento en relación con la lectura y el manejo de
información. En este sentido, la dinamización de la biblioteca escolar se
puede estructurar en dos ejes principales: la animación a la lectura y la
formación de usuarios.
La formación de usuarios es una tarea pedagógica básica. Todas las
bibliotecas (públicas, infantiles o especializadas) tienen el compromiso de
formar a sus usuarios para garantizar el máximo aprovechamiento de sus
recursos. Sin embargo, en la biblioteca escolar este compromiso es la raíz
que justifica su implantación en el centro puesto que aglutina todo un
proyecto integral como respuesta a su natural vocación formativa.
La formación de los usuarios en la biblioteca escolar va, por tanto, más
allá del simple manejo de instrumentos informativos (índices, catálogos) o
del desarrollo de destrezas de búsqueda. Supone construir un modelo
pedagógico en torno a un espacio de comunicación en el que participe todo el
profesorado, promoviendo experiencias de aprendizaje que desarrollen la
progresiva autonomía informativa de los alumnos y generando procesos de
retroalimentación didáctica que vinculen la biblioteca a la práctica diaria en
las aulas.
Este proyecto implica afrontar un doble reto:
La apropiación del espacio, facilitando el acceso a la información a
partir del conocimiento de las instalaciones de la biblioteca.
La educación documental, mediante el aprendizaje de técnicas de
trabajo intelectual y el desarrollo de la capacidad investigadora
Objetivos y contenidos de aprendizaje de la formación de los
usuarios en bibliotecas escolares:
a) Conceptos referidos a:
Los soportes documentales.
Los tipos de documentos: diccionarios, enciclopedias, monografías, obras
literarias, informes, dossiers, etc.
Título, autor, editorial.
Clasificaciones y organización de la colección.
b) Procedimientos:
Acceder a la información.
Cómo utilizar:
Los instrumentos auxiliares del libro.
Un libro de texto.
una obra documental,
un diccionario de la lengua.
un diccionario enciclopédico,
una enciclopedia,
un atlas,
un plano,
los catálogos manuales,
los catálogos informatizados,
el lector de CD-ROM,
la red Internet o Infovía
Comprensión y tratamiento de la información.
Cómo organizarse para:
Abordar una investigación
Elaborar el resumen de una obra
Reconocer el contexto histórico o geográfico de un relato
hacer una biografía a distintos niveles,
presentar una bibliografía,
hacer un cuadro cronológico,
hacer una exposición escrita,
hacer un dossier documental,
hacer un dossier de prensa,
preparar una exposición oral,
encontrar una información puntual,
hacer una encuesta,
buscar documentos fuera de la biblioteca escolar,
preparar una visita pedagógica,
buscar información sobre profesiones,
preparar un viaje.
c) Actitudes, valores y normas:
tratar adecuadamente los materiales,
considerar la biblioteca como un espacio público compartido,
respetar las normas de préstamo,
despertar una actitud de colaboración,
cultivar el espíritu crítico.
La difusión de la biblioteca en el centro escolar
Es preciso elaborar un plan estratégico a partir del estudio de la realidad de cada
centro, teniendo en cuenta algunos aspectos fundamentales:
PLAN DE DIFUSIÓN DE LA BIBLIOTECA ESCOLAR
Destinatarios
Contenidos
Modos de difusión
El alumnado
El equipo docente
La asociación de padres
Ámbito sociocultural más
cercano: biblioteca
pública, asociaciones de
tiempo libre, museos...
Localización
Horario
Normas y requisitos de
acceso
Equipamiento básico
Tipología del fondo
Servicios básicos
Actividades y programas
concretos
Actitudes
Colaboración con el
profesorado
Diálogo y apertura hacia
los alumnos: ofrecer la
posibilidad de participar
en la gestión de la
biblioteca
Actividades
Charlas de presentación
Visitas en grupo
Organización de diversos
eventos en la biblioteca:
exposiciones, tertulias...
Información de
acontecimientos
significativos
Materiales
Vídeos explicativos
Guía del usuario
Panel informativo
exterior
Guías de lectura
Materiales publicitarios:
octavillas, pegatinas,
carteles.
Técnicas de promoción y difusión
Las posibles estrategias de promoción son muchas y muy variadas, pero su
efectividad puede incrementarse con una adecuada planificación y conjunción de
esfuerzos: cualquier iniciativa general en la que participen varios agentes o, mejor
aún, un plan de difusión que llegue a vincular a todo el centro, serán más efectivos
que las pequeñas acciones aisladas.
En todo caso, para que la información sea completa y eficaz, es preciso
diversificar los medios, partiendo de una actitud de permanente apertura y
atención hacia alumnos y profesores, que se concreta en:
Colaboración con los profesores que participan en proyectos específicos
(concursos, exposiciones, revista escolar): en los docentes más activos
encontraremos buenos interlocutores que, además de ver reforzadas sus
iniciativas con los recursos bibliotecarios, se mostrarán, sin duda, más receptivos
hacia otras vías de colaboración, pudiendo vincular sus esfuerzos al trabajo de
un equipo y a un núcleo de recursos documentales.
Implicación del alumnado, ofreciéndole responsabilidades: permitir que los
alumnos participen directamente en la gestión de ciertos servicios bibliotecarios
es la forma más natural de integrar el uso de la biblioteca en sus hábitos
cotidianos. Hay muchas fórmulas para coordinar esta participación: carnet de
colaborador, plan de ayudantes bibliotecarios, funciones especializadas
(búsqueda en el catálogo, elaboración de dossiers, etc.). Como en cualquier otra
propuesta, es importante informar con claridad acerca de estas posibles
colaboraciones para que nadie se sienta discriminado.
Además de esta postura de colaboración, el bibliotecario o bibliotecaria puede
promover algunas estrategias concretas de actuación:
Charlas de presentación: en las aulas, en los seminarios, en las reuniones del
APA, incluso en el patio, es posible reunir a un pequeño colectivo interesado y,
de modo formal o bien desenfadado, presentar el centro de recursos. No se
trata de convertirse en feriante o vendedor ambulante, sino de aprovechar
cualquier posible espacio de comunicación para darse a conocer.
Visitas en grupo a la biblioteca con el fin de mostrar in situ la
configuración de este servicio tanto a pequeños grupos de padres como al
profesorado. Respecto a este colectivo, la organización de una jornada de
docentes en la biblioteca puede resultar el mejor modo de intercambiar puntos
de vista y aumentar el número de colaboradores. Esta toma de contacto puede
ser el punto de partida para desarrollar conjuntamente planes formativos o, en
caso de que exista ya alguna propuesta concreta, experimentar previamente
las actividades programadas para el alumnado y analizar el funcionamiento de
las mismas.
Exposiciones, mesas redondas y otros eventos relacionados con la lectura o
con otros temas educativos y culturales organizados dentro del espacio de la
biblioteca. Estas actividades se verán reforzadas con el correspondiente
apoyo bibliográfico y constituyen, para quienes todavía no la conocen, otra
manera de descubrir un lugar abierto a múltiples propuestas. Las exposiciones
pueden acompañarse de actividades que ayuden a conocer mejor sus contenidos
(talleres, juegos y otras posibilidades didácticas). La programación de estas
actividades en la biblioteca es una interesante vía de aprovechamiento de sus
recursos. Un ejemplo de dinamización de una muestra gráfica en la biblioteca
es la actividad Vamos a reírnos muy en serio del racismo, organizada por el
Centro Internacional del Libro Infantil y Juvenil en colaboración con la
asociación Presencia Gitana.
Conmemoración de acontecimientos significativos: ofreciendo información de
los mismos en la biblioteca, seleccionando bibliografía relacionada u organizando
pequeñas actividades (el carnaval, el día del libro, el día mundial del medio
ambiente., etc.). Hay muchas fechas especiales a lo largo del año que se pueden
aprovechar pedagógicamente.
Guía del usuario: una breve y sencilla información sobre la biblioteca (su
distribución espacial, los horarios, normas y servicios...) en cuya elaboración
pueden participar los alumnos. Es importante definir con prioridad los
principales contenidos que queremos destacar, sin olvidar los aspectos
gráficos, definitivos para obtener un resultado atractivo y claro. Es
importante que esta guía se haga llegar al mayor número posible de
personas
Panel informativo en un lugar visible del centro escolar: Ofrecer un espacio
donde la biblioteca pueda informar de sus nuevas adquisiciones, recomendar
libros, informar de sus actividades o lanzar propuestas de participación.
Elaboración y difusión de guías de lectura: Confeccionar listados
bibliográficos sobre diversos temas, bien en relación con algún área curricular
(para ello es importante prestar atención a las demandas de los profesores y
profesoras), o sugerencias de lectura relacionadas con temas de actualidad o de
especial interés entre el público infantil y juvenil.
Material publicitario: octavillas, pegatinas, carteles, eslóganes, viñetas de
cómic, puntos de lectura. Las técnicas de marketing ofrecen múltiples
sugerencias para publicitar la biblioteca escolar. La iniciativa puede partir de los
profesores responsables de la biblioteca, involucrar a otros docentes (el
profesor de dibujo, por ejemplo, puede preparar con sus alumnos carteles,
cómics u otras formas de diseño) y a los alumnos (exposiciones, concursos de
anuncios, etc.). La originalidad y el sentido del humor son dos buenos aliados
propagandísticos.
Actividades de formación de usuarios
Leer para informarse. Aprender a investigar
El creciente desarrollo de los estímulos informativos, así como la diversificación
de los medios de comunicación con la aparición de nuevas tecnologías han
transformado totalmente el concepto de lectura en nuestra sociedad, creando
nuevas prioridades formativas que permitan asimilar y dominar todos los
conocimientos a los que se puede acceder.
El incremento del número de fuentes documentales y de las destrezas requeridas
para acceder a los nuevos medios hace que la labor educativa resulte, cada vez más
compleja. Se trata no sólo de poner la lectura al alcance de los ciudadanos,
facilitándoles el encuentro con la información, sino de enseñarle a procesarla. Es
necesario crear las condiciones para que el individuo pueda moverse en la ingente
maraña de impactos informativos, apostando por el conocimiento de los procesos
que permitan al lector dominar dicha información.
Es preciso insistir en la necesidad de vincular estos aprendizajes a proyectos de
trabajo específicos. Sólo es posible aprender a aprender mediante experiencias
concretas de aprendizaje. En la consecución de este fin la biblioteca escolar no es
sólo un ámbito educativo más: su organización ha de subordinarse a esta finalidad
formativa asumiendo un protagonismo que, como centro coordinador de los recursos
informativos de la escuela, está al servicio de un proyecto pedagógico global.
El conocimiento de las fuentes de información
Un requisito necesario para saber estar informado es descubrir la posibilidad de
encontrar respuestas con la ayuda de los recursos bibliotecarios. Muchos
estudiantes rechazan la actividad investigadora como resultado de un prejuicio
respecto a la información: en términos generales se considera que el saber es la
acumulación de datos y conocimientos respecto al mayor número posible de
cuestiones. Puesto que la mayor parte de los alumnos y alumnas no encuentran en su
memoria los datos que buscan, afrontan su ignorancia con fatalismo, buscando una
rápida respuesta que les permita dedicarse a otras actividades.
Frente a esta visión negativa es preciso promover experiencias estimulantes en
relación con la búsqueda documental. Se trata de plantear la actividad investigadora
como un reto personal, demostrando que el saber está al alcance de todos si
conocemos las claves que permiten localizar y contrastar la información. En este
sentido el conocimiento de las fuentes de información es el primer recurso que
podemos ofrecer al alumnado.
Una muestra de actividades para el descubrimiento de las fuentes documentales es
la experiencia Tras las huellas de la información, realizado por la Biblioteca de la
Fundación Germán Sánchez Ruipérez en Salamanca
El aprendizaje del proceso de investigación
El diseño de las diferentes tareas formativas que se han venido exponiendo a lo
largo de este capítulo debe integrarse, como ya se ha comentado, en un proyecto
global de educación documental. Se trata de un largo camino de adquisición
instrumental cuyo último aspecto es el aprendizaje del proceso de investigación.
También en este punto es preciso afrontar una serie de etapas de creciente
complejidad que pueden simplificarse con la estructuración de dinámicas de trabajo
adecuadas y con el apoyo de unos buenos materiales didácticos. Los responsables de
la biblioteca escolar deben ir recopilando estos recursos y elaborar, en
coordinación con el profesorado, sus propios materiales, acordes a las
peculiaridades de sus usuarios.
El periscopio: Un plan formativo que "sumerge" a los participantes en el mundo de
la investigación documental a partir de una propuesta de desarrollo temático cuyo
fin es la preparación de una exposición en el centro.
Hacer un documental es... Dossier y cantar: La realización de un documental en
vídeo sobre un tema elegido por los alumnos es el pretexto para elaborar un dossier
completo sobre esa materia, practicando en equipos de trabajo el proceso de
documentación necesario en toda investigación.
La escritura como actividad documental
Las actividades de escritura, camino de experimentación comunicativa y
de acercamiento a la lectura, adquieren en la biblioteca escolar una
dimensión documental que entronca esta faceta creativa con las destrezas
de búsqueda y procesamiento de la información. El objetivo es ampliar la
función recopiladora de la biblioteca a los textos de los alumnos, bien sean
producciones literarias o escritos de carácter informativo. De este modo la
escritura es valorada en su doble sentido:
Trabajo intelectual válido como proceso de aprendizaje.
Producto personal estimable como recurso documental.
Los escritos de los alumnos pasan a formar parte de los fondos de la
biblioteca convirtiéndose en fuente informativa, en material de referencia
para posteriores estudios o para nuevas creaciones que enriquezcan y
retroalimenten dichos textos.
Este planteamiento puede tener consecuencias directas en la actitud de
alumnos hacia la biblioteca escolar, pues los sitúa en el centro de los
procesos comunicativos de la biblioteca y los convierte en protagonistas del
hecho lector: un papel privilegiado como emisores y receptores.
Gran parte de los materiales elaborados en el aula o en la biblioteca por
los estudiantes puede ser utilizados posteriormente como material
documental: biografías, trabajos monográficos, entrevistas, exposiciones,
dibujos, poemas, cuentos, reseñas bibliográficas Los docentes y los
bibliotecarios deben establecer ciertos criterios que limiten tan extensa
producción para evitar dificultades en su almacenamiento.
Además de estos recursos, la función documental de la biblioteca puede
impulsar la realización de trabajos específicos, con el doble objetivo
propuesto: el desarrollo de aprendizajes (en relación con los procesos
creativos e investigadores) y la producción de materiales de lectura.
Estas actividades de escritura promueven en los alumnos el
entrenamiento en el uso de otros registros lingüísticos. El lenguaje
científico se presenta así como un medio accesible y el conocimiento de sus
claves, como un recurso útil que ayuda a expresar conceptos precisos.
La habilidad para redactar textos informativos ha de enraizarse en el
desarrollo de procesos mentales de cierta complejidad. La recopilación de
información y su integración en un producto con finalidad documental
requiere afrontar una tarea de estructuración mental que organice los
contenidos y los restituya con claridad: índices, esquemas y apartados
deben ser planificados con detalle con el fin de ofrecer un recurso útil para
la biblioteca. De este modo, la escritura es un medio que ayuda a conocer la
metodología del trabajo científico, lo que revierte directamente en el
desarrollo de capacidades para la lectura y el acceso a la información.
Hay muchos proyectos que pueden servir a este fin. Cada biblioteca
escolar puede promover actividades más acordes con sus peculiaridades.
Sirvan, pues, estas sugerencias, como una pequeña muestra de posibles
propuestas para la elaboración de material documental:
Recopilación de leyendas populares de la región: una investigación
práctica de documentación oral a partir de los relatos de los mayores.
Historia local: Estudio de la historia de la ciudad basado en la lectura
de prensa local antigua. Puede circunscribirse a un periodo concreto,
destacable por alguna circunstancia.
Mapa literario peninsular: Señalando las obras que transcurren en
diferentes ciudades de la península ibérica.
Catálogo de personajes terroríficos: Recopilando imágenes y
descripciones que permitan construir una tipología de las criaturas del
miedo: vampiros, brujas, hombres-lobo.
Dossiers temáticos interdisciplinares: Un completo proceso de
búsqueda, estructuración y restitución informativa a partir de fuentes
diversas (prensa, folletos, monografías, consulta a instituciones). Pueden
abordarse temas muy diversos: El SIDA, la violencia en el fútbol, la prensa
y el derecho a la intimidad, la anorexia.
Calendario de efemérides culturales: Anotando fechas significativas
hasta completar el conjunto de celebraciones diarias
¿Cómo entender la animación a la lectura?
La dinamización de la biblioteca escolar comprende la planificación y
desarrollo de programas y actividades de promoción de la lectura que
intenten despertar en cada niño deseos de leer, capacitarles para abordar
todo tipo de textos: informativos, científicos, literarios, etc. y les permita
el poder encarar múltiples situaciones de lectura:
para satisfacer su curiosidad,
para desarrollar una investigación,
para resolver una consulta puntual,
para dar respuesta a intereses personales,
para poner en marcha su imaginación.
La labor de animación a la lectura en la biblioteca escolar consistirá en un
conjunto de acciones tendentes a favorecer el acercamiento del alumnado a
los libros y asegurar su crecimiento lector. Es importante que estas
acciones se inserten en un proyecto de lectura asumido y apoyado por toda
la comunidad escolar y que respondan a un proceso de planificación y
revisión periódica. Animar es algo más que desarrollar simples estrategias
con los libros y en absoluto se puede limitar a un conjunto de acciones
aisladas. Se trata de descubrir con los alumnos la sensibilidad literaria, de
cultivar el gusto y el placer de leer.
Esta meta solo se conseguirá a través de un proceso gradual y continuado
que se inicia con un primer encuentro, un primer contacto entre el lenguaje,
el libro y el niño, que ha de procurarse sea positivo y que se ha de iniciar en
edades tempranas. Este primer encuentro determinará en gran medida el
resto de la andadura. Seguirá luego una segunda fase marcada por
propuestas creativas en torno al libro y las palabras, que ponen en contacto
la lectura con otras formas de expresión: escritura, plástica, oralidad,
teatro, imagen, etc., donde se muestra, estimula, y provoca... Todo ello gira
en torno a un núcleo central definido por la creación de situaciones de
comunicación en las que la lectura cobre todo su sentido.
El verdadero sentido del trabajo de promoción de la lectura en la
biblioteca escolar es posibilitar el salto cualitativo desde el saber leer,
garantizado por una educación de base, hacia el querer leer, de modo
gratuito y libre. Esta perspectiva confiere al trabajo de estimulación del
hábito de la lectura una idea de proceso que ha de iniciarse en las edades
más tempranas, y en el que deben estar comprometidas la familia, la escuela
y la biblioteca. En este proceso, íntimamente ligado al desarrollo afectivo,
intelectual y social del niño, el libro le aporta información sobre el entorno y
sobre sí mismo, debiendo procurar que la lectura esté en estrecho contacto
con su experiencia vital.
Leer es hoy un acto complejo y que no se limita sólo al libro; hay que
capacitar al lector para que sepa interpretar y ser crítico con todos los
mensajes, sean del tipo que sean. Indudablemente hoy se lee más y hay más
necesidad de leer, pero también existe mayor peligro de sucumbir ante
tantos estímulos. Hoy más que nunca se necesitan lectores críticos, capaces
de discriminar y seleccionar. El papel de la biblioteca escolar debe ser
entonces despertar y cultivar el deseo y el gusto por la lectura,
contrarrestando y compensando las desigualdades de acceso al libro y a la
información.
Concepción de lector polivalente
En la sociedad de la información y la comunicación se han producido
profundos cambios que no sólo afectan a los nuevos soportes y formatos,
sino sobre todo a las nuevas formas de construir y de estructurar los
saberes. Estos cambios, forzosamente, han provocado una nueva
configuración de la idea de lector. Un lector polivalente se manifiesta en
una serie de competencias:
Posee aptitudes para utilizar diferentes formas de lectura: lectura
silenciosa, lectura en voz alta, rápida, selectiva, lenta. (Un lector, como
dijimos cuando hablamos de la lectura, que es activo y es capaz de
adaptar su modo de lectura a su proyecto).
Posee aptitudes para apropiarse de diferentes tipos de textos y
escritos. (Textos literarios, científicos, técnicos, descriptivos,
argumentativos, etc.).
Es capaz de leer en diferentes soportes: periódicos, enciclopedias,
pantalla de ordenador, diapositivas, cine.
Construye proyectos de lectura con motivaciones variadas: leer por
placer, por deber, por interés o por necesidad.
Domina o sabe apropiarse de diversos espacios de lectura: biblioteca
escolar, pública, hemeroteca. y de diferentes materiales de lectura y
realiza una práctica reflexiva que le permite regular sus
comportamientos y estrategias respecto a la lectura.
Asumir estos modelos de lectura y lector significa tomar conciencia de
que la lectura es un proceso que se inicia en la escuela infantil y se prolonga
hasta los centros de Educación Secundaria. Hay que tener presente que
aunque la descodificación es imprescindible y decisiva, la lectura está
relacionada con la construcción del sentido. Es ser consciente de que puede
enseñarse a los niños y jóvenes a encontrar sentido a los textos, y que en
ello consiste el placer por la lectura. Y, por último, de que este proceso de
formación lectora y promoción de la lectura no puede ser asumido
exclusivamente por los profesores de lengua y literatura, sino que incumbe a
todo el equipo docente y que el lugar óptimo donde desarrollarlo dentro de
la escuela es la biblioteca escolar. Siguiendo estos conceptos podemos
tender a la búsqueda de un lector que no sólo comprenda sino que disfrute
con la lectura, que la incorpore a su tiempo de ocio como productora de goce
estético.
Animar a leer desde el libro
Es necesario favorecer el acercamiento entre libros y lectores,
descubrirles las posibilidades de utilización de los diferentes modos de
lectura. Por eso, con una responsabilidad pedagógica mayor que la de otras
bibliotecas (públicas, municipales, etc.), la biblioteca escolar debe dinamizar
estos fondos a partir de diversas acciones dirigidas a captar usuarios y
formarlos como lectores. Se trata de favorecer en los alumnos el desarrollo
de sus competencias como "lectores polivalentes", es decir, formar
lectores que no sean meros consumidores de libros, sino sujetos capaces de
variar sus modos de lectura de acuerdo a sus intereses y necesidades.
Es importante que desde sus primeros años los niños y niñas tengan, antes
incluso de aprender a leer, la oportunidad de establecer una relación
afectiva con los cuentos. Esta relación se inicia con la narración oral y la
lectura en voz alta. Más tarde, es necesario favorecer un encuentro más
personal con el libro en el que el lector descubre sus gustos y desarrolla
habilidades en relación con los textos. Este proceso complejo no se consigue
de forma espontánea sino que precisa de adultos mediadores que ayuden a
los niños y jóvenes a desarrollar una práctica reflexiva de la lectura y a
descubrir sus "recompensas".
Fomento de la escritura
El despertar a la escritura se contempla como un proceso gradual que se
inicia en el juego y se potencia la escritura creativa en los talleres de
cuentos dirigidos a las primeras etapas escolares. Esta tarea tiene su
continuación en los talleres literarios en la escuela en los que se intenta que
el alumno conozca más a fondo los diferentes tipos de textos (narrativos,
dramáticos, poéticos, periodísticos,), los procesos de creación y las
estrategias de escritura.
Característica
P
E
R
S
Objetivo básico: explorar
intereses personales.
Audiencia: el autor.
Base para todo tipo de escritura.
Forma
Diarios personales.
Cuadernos de viaje y de trabajo.
Ensayos informales y narrativos.
Escribir a chorro.
O
N
A
L
Tiene flujo libre.
Fomenta la fluidez de la prosa y el
hábito de escribir.
Facilita el pensamiento.
Torbellino de ideas.
Ideogramas.
Recuerdos.
Dietarios.
Listas.
Agendas.
F
Objetivo básico: comunicar,
informar, estandarizar la
comunicación
Audiencia: otras personas.
Es altamente estandarizada.
Sigue fórmulas convencionales.
Ámbitos laboral y social.
Correspondencia comercial,
administrativa y de sociedad.
Cartas.
Contratos.
Resúmenes.
Memorias.
Solicitudes.
Invitaciones.
Felicitaciones.
Facturas.
Objetivo básico: satisfacer la
necesidad de inventar y crear.
Audiencia: el autor y otras
personas.
Expresión de sensaciones y
opiniones privadas.
Busca pasarlo bien e inspirarse.
Conduce a la proyección.
Experimental.
Atención especial al lenguaje.
Poemas.
Mitos.
Comedias.
Cuentos.
Anécdotas.
Gags.
Novelas.
Ensayos.
Cartas.
Canciones.
Chistes.
Parodias.
U
N
C
I
O
N
A
L
C
R
E
A
T
I
V
A
Característica
E
X
P
O
S
I
T
I
Objetivo básico: explorar y
presentar información.
Audiencia: el autor y otras
personas.
Basado en hechos objetivos.
Ámbitos académico y laboral.
Informa, describe y explica.
Sigue modelos estructurales.
Forma
Informes.
Exámenes.
Cartas.
Ensayos.
Manuales.
Periodismo.
Literatura científica.
Noticias.
V
A
Busca claridad.
Entrevistas.
Normativa.
Instrucciones.
P
E
R
S
U
A
S
I
V
A
Objetivo básico: Influir y
modificar opiniones.
Audiencia: otras personas.
Pone énfasis en el intelecto y/o
las emociones.
Ámbitos académico, laboral y
político.
Puede tener estructuras
definidas.
Real o imaginado.
Editoriales.
Cartas.
Panfletos.
Ensayos.
Opinión.
Publicidad.
Anuncios.
Eslóganes.
Peticiones.
Artículos de literatura científica.
Animar a leer desde otros medios
La lectura no se limita necesariamente al código verbal. Vivimos
rodeados por una multiplicidad de medios y lenguajes: el cine, la
televisión o los anuncios publicitarios forman parte de nuestra cultura.
Lamentablemente, este contacto con los medios de comunicación es más
una relación de consumo que una postura crítica de lectura.
Formar lectores supone integrar todo tipo de lenguajes en el programa
de lectura del centro, promover una visión global que interrelacione los
medios y preparar a niños y jóvenes para acceder, de un modo crítico, a la
oferta de lectura que ofrecen las nuevas modalidades audiovisuales.
Hemos de desarrollar, por lo tanto, iniciativas concretas de actuación
en una doble línea
Leer con los medios: se trata de explotar, desde las diferentes materias,
todas las posibilidades didácticas que ofrecen los medios audiovisuales,
como parte integrante del fondo de la biblioteca escolar, pudiendo
generar líneas de trabajo interdisciplinar a partir de temas transversales:
educación para el consumo, educación para la paz, igualdad de
oportunidades.. Del mismo modo, estos medios pueden ser un paso
intermedio hacia la literatura, ofreciendo, con la posibilidad de
interrelacionar los lenguajes, nuevos elementos de estímulo y motivación.
Leer los medios: hacer conocer los códigos que utilizan los diferentes
medios, facilitando una interpretación de los mensajes que ofrecen. Se
trata de valorar estas lecturas en sí mismas como otro ámbito de
alfabetización que contribuye al desarrollo de una visión libre y autónoma
ante el mundo.
Medios
Aspectos trabajados
Posibles actividades
1.1)
Elaborar
catálogos
de
personajes, paisajes, etc.. a partir
1)
Análisis
de de la recopilación de ilustraciones
estereotipos
tomadas de distintos álbumes.
transmitidos en la
1.2) Analizar elementos comunes en
literatura infantil.
diferentes imágenes de un mismo
tema.
La
ilustración
2.1) Secuenciar, en varios dibujos,
diferentes momentos de un cuento
2) Estudio de la narrado.
narración mediante las
2.2)
Mediante
símbolos
que
ilustraciones.
representan a los personajes,
construir una historia en imágenes
3) Descubrimiento de
la
capacidad
evocadora de historias
que
ofrecen
las
imágenes.
El cómic
1) Análisis de los
recursos
expresivos
del cómic: metáforas
visuales, movimientos
cinéticos, bocadillos,
onomatopeyas.
3.1) Crear textos a partir de
ilustraciones aisladas (diapositivas,
mural, etc.)
3.2) Observando pequeños detalles
de las imágenes de un cuento, crear
una pequeña historia paralela.
1.1)
Elaborar
e
intercambiar
repertorios
gráficos,
reuniendo
ejemplos de cómo son representadas
algunas situaciones: dormir, correr,
enamorarse.
1.2) Escribir un relato completo a
partir de una sola viñeta, marcando
los antecedentes y las consecuencias
de la acción que se presenta (tener
en cuenta, para ello, todos los
detalles expresivos).
2)
Experimentación
del lenguaje del cómic
como otra forma de
creación y expresión
artística.
2.1) Llevar a cabo un taller de
creación de cómics (argumento,
guión técnico, composición de
páginas
y
desarrollo
de
la
historieta).
2.2) Adaptar una noticia, fotografía
o relato literario al lenguaje del
tebeo.
La
fotografía
1) Desarrollo de las 1.1)
Realizar
fotomontajes
posibilidades
relacionados con temas como el
expresivas
que humor, la sorpresa.
permite el trabajo a
partir de fotografías.
2) Utilización de la
técnica
fotográfica
como
recurso
narrativo.
2.1) Elaborar un cuento ilustrado,
partiendo de un clásico , con
fotografías realizadas por los
alumnos.
Los
niños
pueden
representar el cuento y decorar los
escenarios.
2.2)
Construir
una
historia
secuenciada, acompañada o no de
texto, con fotografías realizadas
por chicos y chicas. Ej. :Un día en la
escuela.
La
publicidad
1) Análisis crítico de 1.1) Exponer imágenes aparecidas en
los
mensajes prensa y posterior debate.
publicitarios.
1.2) Diversos talleres que relacionan
este
medio
con
las
áreas
transversales. Ej.: La mujer en la
publicidad.
2) Estudio de los 2.1) Recopilar y visionar anuncios
estereotipos en la grabados por los alumnos en la
publicidad.
televisión
para
realizar,
posteriormente,
diferentes
actividades de análisis: debates,
tertulias, mesas redondas, etc...
La música
1) Investigación sobre 1.1) Preparar un disco-fórum por
diferentes corrientes parte de un grupo de alumnos,
y estilos musicales.
documentándose en la biblioteca
para presentar la audición a sus
compañeros.
2) Desarrollo de la
capacidad creativa y
las posibilidades de
relación entre música
y literatura .
2.1) A partir de un cuento, construir
la banda sonora:
con interpretaciones musicales del
alumnado.
buscando fragmentos apropiados
entre grabaciones musicales.
2.2)
Escuchando
una melodía,
describir por escrito la historia que
nos sugiere.
El cine
1) Estudio de las
relaciones existentes
entre
cine
y
literatura.
1.1) Una vez leída una narración,
proyectar en la clase un fragmento
de una película que cuente la misma
historia. Analizar los diferentes
recursos empleados en uno y otro
lenguaje.
1.2) Comparar diferentes versiones
cinematográficas de una película
basada en una obra literaria.
2)
Potenciar
aprendizaje
técnicas
cinematográficas
fines creativos.
1.3)
Convertir
cinematográfico
el
literaria.
de
en
una
con 2. 1) Taller de cine.
un
guión
narración
Descargar