Unidad 2. ¿Cómo oriento mi vida?

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2.5 La libertad vista como un problema
Unidad 2. ¿Cómo oriento mi vida?
Desarrollo Humano
Unidad didáctica 2:
¿Cómo oriento mi vida?
ACTIVIDAD 2
Instrucciones: A continuación se te ofrecen distintos modos de plantear
el concepto de libertad, por favor léelas atentamente y elabora una idea a
favor y otra en contra para cada una de ellas. Sigue el ejemplo.
La libertad consiste en la liberación de la determinación instintiva del obrar.1
La libertad es el arte de elegir lo que me conviene y me permite vivir mejor.2
La libertad es la capacidad de autodeterminación y presupone la razón que
valora los motivos, delibera y elige.3
Guarda el archivo con tu nombre y apellido (Por ejemplo, si mi nombre
es: Nina Silvia Márquez Alcaraz, el archivo lo debo salvar como
Nina_Marquez.doc primer o único nombre+guión bajo+apellido paterno).
No uses acentos.
Envía el archivo a la cuenta: [email protected]
1
Véase, Erich, Fromm, El miedo a la Libertad, Argentina, Paidós, 1999
Véase, Fernando, Savater, Ética para Amador, Buenos Aires, Paidós, 2000
3
Véase, Raths, L., Harmin, M., y Simon, S., El sentido de los valores y la enseñanza, México,
Uthea, 1967
2
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2.5 La libertad vista como un problema
Unidad 2. ¿Cómo oriento mi vida?
Ejemplo:
“La libertad consiste en la liberación de la determinación
instintiva del obrar”
A favor…
En contra…
SI porque la libertad está más allá No porque el ser humano no se rige
de cualquier tipo de determinación o conduce por sus instintos, en
fisiológica
todo caso habrá que replantearlo.
1. “La libertad consiste en la liberación de la determinación
instintiva del obrar”
A favor…
En contra…
2. “La libertad es el arte de elegir lo que me conviene y me
permite vivir mejor”
A favor…
En contra…
3. “La libertad es la capacidad de autodeterminación y
presupone la razón que valora los motivos, delibera y
elige”
A favor…
En contra…
Comentario sobre la actividad:
Estos tres acercamientos nos permiten apreciar que, independientemente
de que hay una serie de factores ajenos a nuestro control, en cambio hay otros
que sí podemos gobernar, si empleamos adecuadamente el intelecto.
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2.5 La libertad vista como un problema
Unidad 2. ¿Cómo oriento mi vida?
Existen modos automáticos de actuar que proceden de una conciencia
egoísta, que es la primera que se manifiesta en el ser humano. Sobre este
asunto volveremos más adelante en el curso.
Cuando el hombre se hace capaz de reflexionar y de valorar las cosas,
puede aprender a evitar los actos impulsivos. Esto es una expresión cabal de su
libertad. Entendemos, que no es posible actuar en libertad si no empezamos a
reflexionar. En este sentido podemos afirmar que la auténtica libertad se apoya
en el conocimiento de la verdad. Y dado que la razón es la capacidad de
comprender las cosas, quien desee conquistar su libertad, deberá ejercitar su
razón. Cuando esto ocurre, naturalmente encontramos que los deseos podrán
equilibrarse con los requerimientos colectivos. El hombre libre descubre el bien y
opta por él. Su voluntad dirigida al bien hace posible que exprese su libertad, es
decir, cuando su carácter ha sido orientado hacia fines positivos y productivos el
ser humano es libre.
Es importante mencionar que hay personas que por ignorancia viven
esclavas de su pensamiento egoísta y creen que son libres porque hacen lo que
les place. Mientras no aprendan a pensar que sus actos tienen efectos en los
demás, actuarán en forma impulsiva, obedeciendo a motivos irracionales de los
cuales no han tomado conciencia.
Muchos estudiosos del tema afirman que por más extraña que parezca
una conducta, siempre deriva de lo que la persona juzga como mejor para ella,
en un momento determinado. Podríamos pensar entonces que lo que las
personas hacen es expresión de sus capacidades; es decir, que hacen lo que
pueden, dadas las circunstancias, pero que en muchas ocasiones lo que hacen
no es todo lo que podrían llegar a hacer.
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2.5 La libertad vista como un problema
Unidad 2. ¿Cómo oriento mi vida?
El tema de la falta de libertad ha sido, también, ampliamente discutido por
Skinner y otros autores de la escuela psicológica denominada como
conductismo. De acuerdo con Skinner, es posible controlar el comportamiento
de las personas, siempre y cuando se tenga cuidado de disponer un ambiente
tal, que premie las respuestas deseadas y sancione las conductas indeseables.
Tal postura fue ampliamente expuesta y defendida en su escrito Walden Dos4, el
cual recibió serias críticas por parte de quienes abogan por la libertad y la
capacidad de autodirección. Skinner suponía que es posible predecir el
comportamiento de una persona, controlando su ambiente. Esta posición ha
quedado sumamente cuestionada, pues no todas las personas actúan igual ante
una misma circunstancia, incluso ante reforzadores que se esperarían infalibles.
Hay algo que pertenece al individuo, algo que le corresponde sólo a él y le
confiere singularidad; es la base de sus decisiones y se denomina libre albedrío.
Sin embargo, debemos aceptar que sí hay respuestas automáticas. Es
claro, por ejemplo, en el comportamiento de las masas. Cómo unos contagian a
otros de sentimientos diversos y en un momento determinado, una persona en
particular se sorprende a sí misma llevando a cabo acciones que nunca imaginó
que podría realizar. ¿Es que acaso estamos atados? ¿Habrá personas más
libres que otras? ¿Cómo romper las ataduras que nos impiden la libertad?
Más adelante, cuando abordemos el tema de las adicciones y la
codependencia apreciarás cómo se relaciona la falta de libertad con una gran
cantidad de comportamientos que suponemos elegidos por propia voluntad.
Ante el cuestionamiento de ¿por qué en ocasiones actuamos como lo
hacemos aun cuando nuestras acciones no nos conducen a la felicidad? Tal vez
deberíamos recordar que no todo depende del simple querer ser felices, sino
4
Puedes descargar el libro completo en la siguiente dirección electrónica:
http://www.franjamoradapsico.com.ar/home/descargas/libros/skinner/B.%20F.%20Skinner%20%20Walden%20dos.pdf
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2.5 La libertad vista como un problema
Unidad 2. ¿Cómo oriento mi vida?
que como entidades singulares y sociales, nuestras acciones se ven afectadas
por la dinámica de la vida psíquica aunada con la de la vida comunitaria, por
ejemplo:
“A un tiempo fascinantes e insoportables, los hechos y las cosas de la
modernidad dominantes manifiestan bajo la forma de la ambivalencia aquello
que constituye la unidad de la economía capitalista: la contradicción
irreconciliable entre el sentido del proceso concreto de trabajo/disfrute (un
sentido “social-natural”), por un lado, y el sentido del proceso abstracto de
valorización/acumulación (un sentido “social-enajenado”), por otro.”5
Tal vez preguntarnos si nuestras acciones pueden ser realmente libres,
tenga como petición de principio, el que pudiéramos dar respuesta a si es
probable que haya elección alguna que carezca de contradicción. Lo cual
pareciera tener una sólo respuesta: no. Te invitamos a que des tu respuesta,
como un ejercicio independiente. Examina tus reflexiones. Si una persona
estable, que ejercite su capacidad de decisión, puede experimentar incapacidad
para disfrutar de la vida, del trabajo, y dificultad para establecer relaciones
íntimas constructivas, a qué se debe. También abundan las manifestaciones de
ansiedad y los sentimientos personales de inadecuación ante los retos. Todo
esto nos hace percatarnos de que la libertad, en realidad, representa una
problematicidad que hay que elaborar día a día. Cabe acentuar cómo es que los
discursos institucionales doblegan las facultades humanas para someter su
ejercicio, por ejemplo, el que “para no dejar de existir, la libertad del ser humano
ha tenido, paradójicamente, que negarse como libertad política, soberanía o
ejercicio de autarquía en la vida social cotidiana”6, resulta digno de análisis,
pareciera que el autogobierno es sólo una ilusión, cuando históricamente es el
acto inaugural con el que se abre el espacio de circulación de lo social.
5
Bolívar, Echeverría, Las ilusiones de la Modernidad, México, UNAM. El equilibrista, 1997, p.
158
6
Ibíd., p. 172
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