UNIVERSIDAD TECNOLÓGICA EQUINOCCIAL MAESTRÍA EN

 i UNIVERSIDAD TECNOLÓGICA EQUINOCCIAL
MAESTRÍA EN EDUCACIÓN Y DESARROLLO SOCIAL
Trabajo de Grado para obtener el Título de Magister en Educación y
Desarrollo Social
El Aporte de la Iglesia Católica a la Educación en el Ecuador
desde La Colonia hasta el Siglo XXI
Autor:
Lcdo. Marco Antonio Acosta Arce
Director:
Ing. Rodrigo Gallegos Riofrío
Quito - Ecuador
Diciembre, 2010
i AGRADECIMIENTO
Gracias a Dios por el don de la vida y a esa Institución humano-divina llamada
Iglesia, convocación de Dios, que tanto bien ha hecho por la humanidad y por el
pueblo ecuatoriano desde la Colonia hasta nuestros días. Gracias a aquellos
hombres y mujeres que son los protagonistas de la historia del Ecuador, a aquellos
que entregaron su vida por el bien de las almas de tantos y ecuatorianos
necesitados de Dios.
ii DEDICATORIA
Para la Santa Madre Iglesia Católica y Apostólica y para aquellos hombres y
mujeres que tanto han dado al Ecuador durante más de quinientos años.
iii RESUMEN
La Santa Iglesia Católica, ha sido una de las principales protagonistas de la educación
en el Ecuador desde la Colonia hasta nuestros días. Este es un hecho histórico
innegable. Negar el aporte de la Iglesia Católica a la educación en el Ecuador y en toda
América sería negar la misma historia.
Con la llegada de los conquistadores españoles a América, también llegaron misioneros,
que no venían con hambre de oro y fortunas, sino con hambre de predicar el Evangelio a
los aborígenes. Una tarea nada fácil, debido a algunas dificultades con las que se
encontraron los religiosos misioneros: una cultura diferente, un idioma diferente, una
religiosidad diferente. Los misioneros tenían que empezar por enseñar y ellos mismos
aprender el idioma de los aborígenes; además tuvieron que luchar por erradicar la
idolatría y lo más difícil todavía inculturar el Evangelio y toda la cultura occidental a la
mentalidad aborigen.
La tarea educativa, por lo antedicho, estuvo en manos de los religiosos, dignos
representantes de la Iglesia Católica, que entregaron su vida a la Evangelización y a la
enseñanza. Los conquistadores que llegaron a América no eran, precisamente, personas
educadas o instruidas, eran únicamente militares y algunos de ellos condenados que
habían venido a América a aventurar a cambio de su libertad. Las únicas personas cultas
que allí vinieron para dedicarse a la tarea educativa eran los misioneros, enviados,
precisamente, para ese fin.
El aporte de la Iglesia Católica a la Educación en el Ecuador, ha sido, por tanto ya sea
por la coyuntura histórica del momento y por todo el desarrollo histórico del Ecuador
desde el tiempo de la conquista hasta nuestros días demasiado valioso y digno de un
encomiable reconocimiento.
iv TABLA DE CONTENIDO
Pág.
CAPÍTULO I
1. INTRODUCCIÓN
1
1.1 Planteamiento del problema
3
1.2 Sistematización del problema
3
1.3 Preguntas de investigación
4
1.4 Justificación del tema
5
1.5 Objetivos
5
1.5.1 Objetivo General
5
1.5.2 Objetivos específicos
5
1.6 Alcance de la investigación
6
CAPÍTULO II
2. MARCO DE REFERENCIA
7
2.1 Marco teórico
7
2.2 Marco Conceptual
11
2.2.1. La Educación
11
2.2.2. La Iglesia Católica
13
2.2.2.1. Etimología
13
2.2.2.2. Iglesia
13
2.2.2.3. Católica
13
2.2.2.4. Características de la Iglesia Católica
14
2.2.2.5. Atributos de la Iglesia Católica
14
2.3 Marco Temporal y Espacial
16
2.3.1. Época Colonial
16
2.3.1.1. Primer período colonial
17
2.3.1.1.1. Encomenderos y doctrineros
17
2.3.1.2. Segundo Período Colonial
18
2.3.1.2.1. Las Mitas y los Obrajes
18
v 2.3.1.2.2. La sociedad colonial
21
2.3.1.2.3. Estado, Iglesia y Cultura
22
2.3.1.2.4. Entre el siglo XVI y el siglo XVIII
23
2.3.1.3. Tercer Periodo Colonial
25
2.3.1.3.1. La “crisis” de mil setecientos
25
2.3.1.3.2. Un siglo difícil
26
2.3.1.3.3. La expulsión de los Jesuitas de Quito
27
2.3.1.3.4. Fin de la época colonial
29
2.3.2. Independencia y Etapa Colombiana
30
2.3.2.1. La Independencia
30
2.3.2.2. Quito “Luz de América”: La junta quiteña (1808-1812)
32
4.2.3. El triunfo realista (1812-1820)
34
4.2.4. La campaña definitiva (1820-1822)
35
4.2.5. El Ecuador en Colombia
35
2.3.3. Época Republicana
37
2.3.3.1. Caracterización de la República
38
2.3.3.1.1. El naciente Estado
38
2.3.3.2. Primer Período Republicano
40
2.3.3.3. Fundación del Estado (1830-1859)
40
2.3.3.3.1. Presidencia de Juan José Flores (1830…-1845)
41
2.3.3.3.2. De la dictadura al “progresismo” (1875-1895)
43
2.3.4. Segundo Período Republicano
44
2.3.4.1. La Revolución Liberal (1895-1912)
44
2.3.4.2. Medio siglo de cultura
46
2.3.4.3. Los Gobiernos Liberales Moderados (1912-1924)
47
2.3.4.4. La Revolución Juliana (1925-1947)
49
2.3.4.5. Un momento de quietud (1948-1960)
50
2.3.5. Tercer Periodo Republicano
52
2.3.5.1. Ascenso del reformismo
52
2.3.5.2. Conciencia de la crisis
54
2.3.5.3. Período Democrático (1979-2011)
55
vi CAPÍTULO III
3. METODOLOGIA
59
3.1. Tipo de investigación
59
3.3. Métodos de estudio
59
3.4. Técnicas e instrumentos
60
CAPÍTULO IV
4. RESULTADOS Y ANÁLISIS
62
4.1. La Educación Durante La Época Colonial
62
4.1.1. Escuelas, Colegios, Seminarios y Universidades
62
4.1.1.1. Enseñanza escolar
63
4.1.1.2. Colegios
68
4.1.1.3. Seminarios
69
4.1.1.3.1. El Primer Seminario
71
4.1.1.3.2. El Seminario San Luis
72
4.1.2.2.4. Universidades
76
4.1.2.2.4.1. La Universidad de San Fulgencio
80
4.1.2.2.4.2. La Universidad de San Gregorio
85
4.1.2. Aportes de las diferentes Congregaciones Religiosas a la
Educación en el Ecuador durante la Colonia
89
4.1.2.1. Labor misionera de los Padres Mercedarios
90
4.1.2.2. Los Franciscanos de Quito y el Colegio San Andrés
90
4.1.2.3. Labor de la Orden de Predicadores en el Reino de Quito
92
4.1.2.3.1. El Colegio San Fernando
93
4.1.2.3.2. La Universidad de Santo Tomás de Aquino
94
4.1.2.4. El aporte de los Agustinos a la Educación en la Colonia
95
4.1.2.5. El aporte de la Compañía de Jesús a la Educación en la Colonia
96
4.1.2.5.1. El colegio de Santa Bárbara
100
4.1.2.5.2. Las tendencias reformistas en el pensum universitario
101
4.2. La Educación durante la Independencia
102
4.2.1. Bolívar y la Educación en el Ecuador
102
4.2.1.2. El último decreto del Libertador sobre la educación
102
4.2.1.3. Reformas dictadas por Bolívar al sistema de enseñanza primaria
103
vii 4.3. La Educación durante la época Republicana
105
4.3.1. La enseñanza pública al comienzo de la República
105
4.3.1.2. La administración del Sr. Vicente Rocafuerte (1835-1839)
106
4.3.1.3. Educación pública – Secularización del Colegio San Fernando
107
4.3.1.3.1. El Colegio Femenino Santa María del Socorro
108
4.3.1.3.2. Fundación del Colegio Militar
108
4.3.2. Retorna la compañía de Jesús en el Gobierno de Diego Noboa, 1850
109
4.3.3. La educación en el gobierno de Gabriel García Moreno (1860-1875)
111
4.3.3.1. La Educación de la Mujer
117
4.3.3.2. La educación secundaria
119
4.3.3.3. Educación indígena
120
4.3.3.4. La Escuela Politécnica
122
4.3.3.5. El Concordato
133
4.3.3.6. El Concordato entre el Ecuador y la Santa Sede
134
4.3.3.7. Nuevos Institutos Religiosos a raíz del Concordato
137
4.3.3.7.1. Jesuitas
137
4.3.3.7.2. Hermanos de las Escuelas Cristianas (1863)
138
4.3.3.7.3. Los Padres de la Congregación de la Misión (lazaristas o vicentinos) 1870
146
4.3.3.7.4. Los Redentoristas en el Ecuador (1870)
147
4.3.3.7.5. Los Capuchinos (1873)
149
4.3.3.7.6. Otras Comunidades
149
4.3.3.7.7. Los Salesianos en el Ecuador (1888)
150
4.4. La educación durante el Período Democrático (1979-2011)
152
5. CONCLUSIONES Y RECOMENDACIONES
153
5.1. Conclusiones
153
5.1.1. Conclusiones en base al Objetivo General
153
5.1.2. Conclusiones en base a los objetivos específicos
154
5.2. Recomendaciones
158
ANEXOS
Anexo 1: Libro III: La Función de Enseñar de la Iglesia
Anexo 2: Declaración Gravissimum Educationis sobre la Eucación Cristiana
Anexo 3: Carta de la Conferencia Episcopal Ecuatoriana sobre la Educación Religiosa
Anexo 4: Catálogo de las Instituciones Educativas de la Iglesia Católica en el Ecuador
160
166
175
177
viii 261
Bibliografía
1 CAPÍTULO I
1. INTRODUCCIÓN
La Iglesia Católica tiene como misión particular la tarea de Evangelizar a todos los
pueblos, según el mandato divino de Jesús: “Vayan por todo el mundo y prediquen el
Evangelio a todas las naciones…” (Mt 28,18). Pero también corresponde al Ser de la
Iglesia el poner en práctica los tres “Munera Christi” (Ministerios de Cristo), a saber,
Gobernar, Santificar y Educar a todos los fieles de la Iglesia. Esto a imitación de Cristo
que ejerce su Misión Redentora de Mesías (Ungido) como Sacerdote, Profeta y Rey.
Así también, la iglesia ejerce este triple Ministerio a través de la tarea profética de
“Anuncio” de la Palabra de Dios y junto con ello, corresponde a la Iglesia la función de
“Educar” la conciencia y la fe de las personas, fomentando en la vida personal, familiar
y social aquellos valores propios de la fe cristiana. También corresponde a la Iglesia la
tarea de Gobierno y Santificación de los fieles. El Gobierno de la Iglesia se concreta a
través de aquellas normas que emanan de la autoridad eclesiástica para regir la vida de
los fieles en materia de fe y costumbres y la Santificación se realiza a través de los
sacramentos y sacrametales, junto con la oración de todo el Pueblo de Dios.
Desde los albores de la evangelización en América, la Iglesia ha asumido como propia
la tarea de “Educar”, ya que junto con la conquista de América y la Colonización de los
pueblos americanos urgía la tarea de enseñar a los aborígenes conquistados el idioma,
las costumbres y la religión que profesaban los conquistadores.
La Conquista de América no tiene solamente un tinte negativo, como muchas veces se
sugiere de parte de algunos historiadores que ven al Descubrimiento de América como
una imposición forzada de las costumbres europeas. Junto con la Conquista, también
hay que reconocer la gran tarea evangelizadora y educativa que ejercieron los
misioneros de la Iglesia Católica, que no vinieron a América con el hambre de oro y
2 riquezas de los conquistadores, sino únicamente con el celo de transmitir a la fe
cristiana a los aborígenes americanos.
El trabajo de los misioneros no consistió únicamente en la predicación del Evangelio,
sino que también se concretó en la creación de miles de centros educativos en todo el
Continente en los cuales se iba a enseñar no sólo el Catecismo y la Biblia, sino también
se iba a enseñar a los aborígenes las ciencias que como fruto del renacimiento europeo
estaban teniendo gran auge a nivel mundial.
Como fruto de la insuperable tarea de la Iglesia en materia educativa desde la Colonia
hasta la actualidad, podemos nosotros encontrar en nuestro país y América una
innumerable cantidad de instituciones dedicadas a la educación de la niñez y la juventud
desde el nivel básico hasta el nivel superior. Y si hacemos un balance del número de
Instituciones Educativas estatales y aquellas que son regidas por religiosos los
resultados saltarían a la vista para que nos demos cuenta del gran aporte que ha hecho la
Iglesia en materia educativa desde el tiempo de la Colonia hasta hoy.
Con este antecedente, nos damos cuenta que ha sido una preocupación primordial de la
Iglesia desde su asentameinto en América y en el Ecuador la Educación de la niñez y la
juventud, como parte esencial de su misión de “Madre y Maestra”, educadora de la fe, la
moral y el saber de las personas.
“El Estado, garante de la educación, debe procurar que la juventud nunca se vea
privada de este sagrado derecho.
La Iglesia, además, consciente de su vocación, da testimonio de la esperanza y
promueve la elevación cristiana del mundo, mediante la cual los valores naturales
contenidos en la consideración integral del hombre redimido por Cristo contribuyan al
bien de toda la sociedad.” (Declaración Gravissimum Educationis sobre la Eucación
Cristiana, Concilio Vaticano II, Roma, 28 de Octubre de 1965).
3 1.1 Planteamiento del problema
La tarea educativa en el Ecuador desde los orígenes de la Nación, durante la Colonia, la
Edad Republicana y hasta nuestros días ha sido una opción preferencial que la Iglesia
Católica ha asumido como propia.
Según la constitución actual de la República del Ecuador (Cfr. Art. 28, 344 y ss.)1, la
educación es una tarea exclusiva del Estado, el cual es garante de la formación
intelectual, humana, espiritual y ética de todos los ciudadanos. Con esta afirmación, se
desconocería de una manera injusta y tajante todo el aporte que la Iglesia Católica ha
hecho con la Nación Ecuatoriana a lo largo de más de 500 años de presencia, desde la
Colonia hasta nuestros días.
A través de algunos grupos afines al actual Régimen se pretende apartar a la Iglesia
Católica de esta actividad iniciada por las primeras congregaciones religiosas. El que
esto se lleve a cabo, sería un atentado históricamente injusto contra aquellos que fueron
los iniciadores y protagonistas activos de la formación de millones y millones de
generaciones en este país.
El presente trabajo pretende responder a la pregunta: ¿Cómo ha aportado
positivamente la Iglesia Católica a la Educación en el Ecuador?
1.2 Sistematización del problema
Ante la actual coyuntura histórica que atraviesa el Estado Ecuatoriano con un Gobierno
de tinte Liberal- Laicista ¿es justo reconocer la aportación de la Iglesia Católica a la
Educación en el Ecuador?
Desde la Colonia hasta nuestros días, una de las principales tareas que han desempeñado
con entrega y tesón los representantes de la Iglesia, ha sido, precisamente, la Educación
de la niñez y la juventud.
Desde la llegada de los primeros Misioneros de las diferentes órdenes religiosas al
Continente Americano hasta nuestros días, la Misión de la Iglesia no ha consistido
1
http://www.scribd.com/doc/6227177/‐NUEVA‐CONSTITUCION‐DE‐LA‐REPUBLICA‐DEL‐ECUADOR 4 únicamente en Evangelizar a los habitantes de este Continente y en particular de nuestro
país es Ecuador, sino que la labor de la Iglesia se ha extendido también a otros ámbitos,
que tienen que ver con la promoción del ser humano.
Imitando a Jesús, el Salvador del mundo, la Iglesia, ha desempeñado tres ministerios a
favor de las personas y la sociedad: La tarea de Santificar, a través de los distintos
sacramentos que la Iglesia celebra y los diferentes actos de culto; la tarea de Enseñar es
también esencial al ministerio y vida de la Iglesia, que se pone en práctica al momento
de guiar a los fieles en materias de fe y costumbres a través de la predicación y la
catequesis; por último, la tarea de Gobernar, que se ejerce en los distintos actos
administrativos, que como Institución humana tiene que poner por obra.
En la presente investigación, hacemos un recorrido histórico de los principales aportes
que ha hecho la Iglesia Católica a través de sus distintas órdenes religiosas a la
Educación en el Ecuador, desde las primeras fundaciones hasta el gran catálogo de
Instituciones educativas que hoy en día siguen estando al frente de la Iglesia y que
dedican todos sus esfuerzos en la educación de la niñez y juventud.
1.3. Preguntas de investigación
Independientemente de la Confesión religiosa a la que pertenezcan los ecuatorianos,
¿será justo reconocer el gran aporte hecho por la Iglesia Católica desde la Colonia hasta
nuestros días?
¿Es la Educación una tarea exclusiva del Estado o debería éste apoyar las iniciativas
particulares o de las Instituciones u Organizaciones, guiado por el principio de
subsidiariedad?
¿Es la Iglesia Católica una de las Instituciones religiosas que más ha aportado
históricamente a la tarea educativa en el Ecuador?
5 1.4 Justificación del tema
El tema elegido, me parece que además de interesante, puede resultar bastante
polémico, dependiendo de la posición de quienes den una opinión al respecto, desde mi
perspectiva de Sacerdote de la Iglesia Católica, me parece muy justo reconocer la gran
labor de la Iglesia Católica en materia educativa y los innumerables aportes hechos a la
misma no sólo en el Ecuador sino en el mundo entero. Por ello, el presente trabajo
investigativo, sin pretender hacer un análisis exhaustivo de cada uno de esos aportes es
simplemente un recorrido histórico de las principales obras, instituciones e iniciativas
de la Iglesia Católica en materia educativa.
No he encontrado un trabajo desarrollado desde esta perspectiva en ninguna de las
fuentes tanto religiosas como históricas; por tanto, en atención a la situación coyuntural
que vive la Iglesia Católica con el Gobierno de turno, he elegido este tema para
desarrollarlo, siguiendo única y estrictamente el método inductivo - histórico
bibliográfico.
1.5 Objetivos
1.5.1 Objetivo General
Presentar de manera ordenada el desarrollo histórico de los aportes de la Iglesia Católica
a la Educación en el Ecuador.
1.5.2 Objetivos específicos
-
Destacar la importancia de la presencia de la Iglesia en materia de Educación.
-
Reconocer la gran labor educativa de la Iglesia a la largo de toda la Historia del
Ecuador.
-
Analizar críticamente los impedimentos de parte del Estado para la actividad
docente de la Iglesia.
-
Discernir si la actual Constitución de la República del Ecuador y las actuales
Leyes de Educación van en contra de las Instituciones educativas de la Iglesia
Católica.
-
Establecer si la promoción de una educación Laica y Gratuita en el Ecuador,
repercute negativamente en los establecimientos de Educación Católica.
6 1.6 Alcance de la investigación
El presente trabajo de investigación histórica está pensado para que sirva de herramienta
de consulta para todos aquellos ecuatorianos y ecuatorianas, miembros de la Iglesia
Católica o ajenos a ella, que quieran conocer o reconocer los aportes de la Iglesia a
nuestra querida Patria a través de la formación intelectual, espiritual y moral de todos
sus ciudadanos y ciudadanas a lo largo de los siglos.
7 CAPÍTULO II
2. MARCO DE REFERENCIA
2.1 Marco teórico
El Papa Juan Pablo II en su libro “Cruzando el umbral de la esperanza” sostiene que
vivimos en una sociedad altamente pluralista. Constatamos un pluralismo cultural,
científico, filosófico y también religioso.
“En este panorama, la Iglesia capta la necesidad urgente de garantizar la presencia del
pensamiento cristiano, puesto que éste, en el caos de las concepciones y de los
comportamientos, constituye un criterio válido de discernimiento. La referencia a
Jesucristo enseña de hecho a discernir los valores que hacen al hombre, y los
contravalores que lo degradan.
El pluralismo cultural invita pues a la Iglesia a reforzar su empeño educativo para
formar personalidades fuertes, capaces de resistir el relativismo debilitante, y de vivir
las exigencias del propio bautismo”. (Juan Pablo II, Papa, Cruzando el umbral de la esperanza
8ª
ed.,
PLAZA
&
JANES,
Barcelona,
1995,
citado
en:
http://es.catholic.net/educadorescatolicos/751/2411/articulo.php?id=21319).
Es sobre todo por estas razones, y porque para la Iglesia la educación es considerada
como un deber y un derecho recibido del Señor Jesús, que en los tiempos actuales y
advenientes esta misión reviste caracteres de urgente e insustituible.
El Concilio Vaticano II en su declaración “Gravissimum Educationis” define los
alcances de esta urgencia insustituible que hoy cobra actualidad, frente a la descripción
de los problemas que han sido tratados anteriormente:
“El deber de educación corresponde a la Iglesia..., porque tiene el deber de anunciar a
todos los hombres el camino de la salvación, de comunicar a los creyentes la vida de
Cristo y de ayudarles con precaución constante para que puedan alcanzar la plenitud de
esta vida. La Iglesia, como Madre, está obligada a dar a sus hijos una educación que
llene toda su vida del espíritu de Cristo, y al mismo tiempo ayuda a todos los pueblos a
8 promover la perfección cabal de la persona humana, incluso para el bien de la sociedad
terrestre y para configurar más humanamente la edificación del mundo”. (Declaración
Gravissimum Educationis sobre la Eucación Cristiana, Concilio Vaticano II, Roma, 28
de
Octubre
de
1965,
citado
en:
http://es.catholic.net/educadorescatolicos/751/2411/articulo.php?id=21319).
La tarea educativa, entre otras actividades eclesiales, mantiene vigencia y trascendencia.
Se le abre un horizonte de gran dinamismo apostólico en el empeño que debemos tener
en la búsqueda del reencuentro con el Señor Jesús, como motivación central de lo que
nos debe animar en el inicio del próximo siglo XXI.
El Papa Benedicto XVI en su “Carta sobre la tarea urgente de la educación” afirma
que la tarea educativa no es una tarea fácil, sobre todo con las nuevas generaciones se
ha tornado más difícil el papel de los educadores:
“Educar nunca ha sido fácil, y hoy parece ser cada vez más difícil. Lo saben bien los
padres de familia, los maestros, los sacerdotes y todos los que tienen responsabilidades
educativas directas. Se habla, por este motivo, de una gran «emergencia educativa»,
confirmada por los fracasos que encuentran con demasiada frecuencia nuestros
esfuerzos por formar personas sólidas, capaces de colaborar con los demás, y de dar un
sentido a la propia vida. Entonces se echa la culpa espontáneamente a las nuevas
generaciones, como si los niños que hoy nacen fueran diferentes a los que nacían en el
pasado. Se habla, además de una «fractura entre las generaciones», que ciertamente
existe y tiene su peso, pero es más bien el efecto y no la causa de la falta de transmisión
de certezas y de valores.
Por tanto, ¿tenemos que echar la culpa a los adultos de hoy que ya no son capaces de
educar? Ciertamente es fuerte la tentación de renunciar, tanto entre los padres como
entre los maestros, y en general entre los educadores, e incluso se da el riesgo de no
comprender ni siquiera cuál es su papel o incluso la misión que se les ha confiado. En
realidad, no sólo están en causa las responsabilidades personales de los adultos y de los
jóvenes, que ciertamente existen y no deben esconderse, sino también un ambiente
difundido, una mentalidad y una forma de cultura que llevan a dudar del valor de la
persona humana, del significado mismo de la verdad y del bien, en última instancia, de
la bondad de la vida. Se hace difícil, entonces, transmitir de una generación a otra algo
9 válido y cierto, reglas de comportamiento, objetivos creíbles sobre los que se puede
construir la propia vida.
La otra cara de la moneda de ese don grande y precioso que es nuestra libertad, con la
responsabilidad que justamente implica. A diferencia de lo que sucede en el campo
técnico o económico, en donde los progresos de hoy pueden sumarse a los del pasado,
en el ámbito de la formación y del crecimiento moral de las personas no se da una
posibilidad semejante de acumulación, pues la libertad del hombre siempre es nueva y,
por tanto, cada persona y cada generación tiene que tomar nueva y personalmente sus
decisiones. Incluso los valores más grandes del pasado no pueden ser simplemente
heredados, tienen que ser asumidos y renovados a través de una opción personal, que
con frecuencia cuesta.
Ahora bien, cuando se tambalean los cimientos y faltan las certezas esenciales, la
necesidad de esos valores se siente de manera urgente: en concreto, aumenta hoy la
exigencia de una educación que sea realmente tal. La piden los padres, preocupados y
con frecuencia angustiados por el futuro de sus hijos; la piden tantos maestros, que
viven la triste experiencia de la degradación de sus escuelas; la pide la sociedad en su
conjunto, que ve cómo se ponen en duda las mismas bases de la convivencia; la piden
en su intimidad los mismos muchachos y jóvenes, que no quieren quedar abandonados
ante los desafíos de la vida. Quien cree en Jesucristo tiene, además, un ulterior y más
intenso motivo para no tener miedo: sabe que Dios no nos abandona, que su amor nos
alcanza allí donde estamos y como estamos, con nuestras miserias y debilidades, para
ofrecernos una nueva posibilidad de bien.
Ante todo, necesita esa cercanía y esa confianza que nacen del amor: pienso en esa
primera y fundamental experiencia del amor que hacen los niños, o que al menos
deberían hacer, con sus padres. Pero todo auténtico educador sabe que para educar tiene
que dar algo de sí mismo y que sólo así puede ayudar a sus alumnos a superar los
egoísmos para poder, a su vez, ser capaces del auténtico amor.
En un niño pequeño ya se da, además, un gran deseo de saber y comprender, que se
manifiesta en sus continuas preguntas y peticiones de explicaciones. Ahora bien, sería
una educación sumamente pobre la que se limitara a dar nociones e informaciones,
10 dejando a un lado la gran pregunta sobre la verdad, sobre todo sobre esa verdad que
puede ser la guía de la vida.
El sufrimiento de la verdad también forma parte de nuestra vida. Por este motivo, al
tratar de proteger a los jóvenes de toda dificultad y experiencia de dolor, corremos el
riesgo de criar, a pesar de nuestras buenas intenciones, personas frágiles y poco
generosas: la capacidad de amar corresponde, de hecho, a la capacidad de sufrir, y de
sufrir juntos.
La educación no puede prescindir del prestigio que hace creíble el ejercicio de la
autoridad. Ésta es fruto de experiencia y competencia, pero se logra sobre todo con la
coherencia de la propia vida y con la involucración personal, expresión del amor
auténtico. El educador es, por tanto, un testigo de la verdad y del bien: ciertamente él
también es frágil, y puede tener fallos, pero tratará de ponerse siempre nuevamente en
sintonía con su misión.
La responsabilidad es, en primer lugar, personal; pero también hay una responsabilidad
que compartimos juntos, como ciudadanos de una misma ciudad y de una misma
nación, como miembros de la familia humana y, si somos creyentes, como hijos de un
único Dios y miembros de la Iglesia. De hecho, las ideas, los estilos de vida, las leyes,
las orientaciones globales de la sociedad en que vivimos y la imagen que ofrece de sí
misma a través de los medios de comunicación, ejercen una gran influencia en la
formación de las nuevas generaciones, para el bien y con frecuencia también para el
mal. Ahora bien, la sociedad no es algo abstracto; al final somos nosotros mismos, todos
juntos, con las orientaciones, las reglas y los representantes que escogemos, si bien los
papeles y la responsabilidad de cada uno son diferentes. Es necesaria, por tanto, la
contribución de cada uno de nosotros, de cada persona, familia o grupo social para que
la sociedad”. (Benedicto XVI, “Carta del Papa sobre la tarea urgente de la
educación”, 21 de enero de 2008 publicada en: http://www.zenit.org/article26166?l=spanish)
11 2.2. Marco Conceptual
2.2.1. La Educación
Debemos definir ¿Qué es la educación?, para poder definir cuál es verdaderamente la
tarea asumida por la Iglesia desde los albores de la Colonia hasta nuestros días en el
Ecuador.
La Enciclopedia virtual wikipedia define a la Educación de la siguiente manera:
“La educación, (del latín educere "guiar, conducir" o educare "formar, instruir") puede
definirse como:
El proceso multidireccional mediante el cual se transmiten conocimientos, valores,
costumbres y formas de actuar. La educación no sólo se produce a través de la palabra:
está presente en todas nuestras acciones, sentimientos y actitudes.
El proceso de vinculación y concienciación cultural, moral y conductual. Así, a través
de la educación, las nuevas generaciones asimilan y aprenden los conocimientos,
normas de conducta, modos de ser y formas de ver el mundo de generaciones anteriores,
creando
además
otros
nuevos”.
(Tomado
de:
http://es.wikipedia.org/wiki/Educaci%C3%B3n).
Con esta definición etimológica podemos afirmar que la tarea de la Iglesia Católica a lo
largo de la historia ha sido esencialmente educativa. La Iglesia siempre ha buscado el
formar a sus fieles en es aspecto científico, filosófico, moral y espiritual. Ecuador, no
podía ser la excepción. Nuestro país ha recibido un aporte muy significativo y valioso a
lo largo de los siglos por parte de la Iglesia Católica.
Una de las definiciones más interesantes nos la propone uno de los más grandes
pensadores, Aristóteles:
"La educación consiste en dirigir los sentimientos de placer y dolor hacia el orden
ético."
12 También se denomina educación al “resultado de este proceso, que se materializa en la
serie de habilidades, conocimientos, actitudes y valores adquiridos, produciendo
cambios de carácter social, intelectual, emocional, etc. en la persona que, dependiendo
del grado de concienciación, será para toda su vida o por un periodo determinado,
pasando a formar parte del recuerdo en el último de los casos”.
Otros conceptos de educación
“La educación es un proceso de socialización y endoculturación de las personas a través
del cual se desarrollan capacidades físicas e intelectuales, habilidades, destrezas,
técnicas de estudio y formas de comportamiento ordenadas con un fin social (valores,
moderación del diálogo-debate, jerarquía, trabajo en equipo, regulación fisiológica,
cuidado de la imagen, etc.).
En muchos países occidentales la educación escolar o reglada es gratuita para todos los
estudiantes. Sin embargo, debido a la escasez de escuelas públicas, también existen
muchas escuelas privadas y parroquiales.
La función de la educación es ayudar y orientar al educando para conservar y utilizar los
valores de la cultura que se le imparte (p.e. la occidental -democrática y cristiana-),
fortaleciendo la identidad nacional. La educación abarca muchos ámbitos; como la
educación formal, informal y no formal.
Pero el término educación se refiere sobre todo a la influencia ordenada ejercida sobre
una persona para formarla y desarrollarla a varios niveles complementarios; en la
mayoría de las culturas es la acción ejercida por la generación adulta sobre la joven para
transmitir y conservar su existencia colectiva. Es un ingrediente fundamental en la vida
del ser humano y la sociedad y se remonta a los orígenes mismos del ser humano. La
educación es lo que transmite la cultura, permitiendo su evolución.” (Tomado de:
http://es.wikipedia.org/wiki/Educaci%C3%B3n).
13 2.2.2. La Iglesia Católica
“La Iglesia católica, cuyo nombre oficial es Iglesia Católica Apostólica Romana, es la
iglesia cristiana más grande del mundo, regida por el Papa (con sede en la Ciudad del
Vaticano) y los obispos. De acuerdo con el Anuario Pontificio 2010, el número de
bautizados en el catolicismo a nivel mundial en 2008 era de 1.166 millones (17,40% de
la población mundial).
2.2.2.1. Etimología
Etimológicamente, la Iglesia designa el sentido de “llamar” o “convocar” y el término
“católica”, no es más que un adjetivo o nota característica que se da a la Iglesia fundada
por Jesucristo:
2.2.2.2. Iglesia
La palabra «Iglesia» ["εκκλησία" (ekklesia), del griego "εk-kαλειν"(ek-kalein) - 'llamar
fuera'] significa 'convocación'. Designa asambleas del pueblo (cf. Hch 19, 39), de
carácter religioso. Es el término frecuentemente utilizado en el texto griego del Antiguo
Testamento para designar la asamblea del pueblo elegido en la presencia de Dios, sobre
todo cuando se trata de la asamblea del Sinaí, en donde Israel recibió la Ley y fue
constituido por Dios como su pueblo santo (cf. Éxodo, 19). Dándose a sí misma el
nombre de "Iglesia", la primera comunidad de los que creían en Cristo se reconoce
heredera de aquella asamblea. En ella, Dios "convoca" a su Pueblo desde todos los
confines de la tierra. El término "Kiriaké", del que se deriva las palabras "church" en
inglés, y "Kirche" en alemán, significa "la que pertenece al Señor".
2.2.2.3. Católica
El término «católico» proviene del griego καθολικός (katholikós), que significa
'universal'. Ignacio de Antioquía da en el año 110 el testimonio más antiguo de este
nombre: "Donde esté el obispo, esté la muchedumbre, así como donde esté Jesucristo
esté la Iglesia Católica" (Carta a los Esmirniotas 8:2). En los tres primeros siglos de la
Iglesia los cristianos decían "cristiano es mi nombre, católico es mi apellido".
Posteriormente se usó el término "católico", para distinguirse de otros grupos cristianos
14 cuyas doctrinas diferían de la línea principal (como los gnósticos).” (Tomado de:
http://es.wikipedia.org/wiki/Iglesia_cat%C3%B3lica).
2.2.2.4. Características de la Iglesia Católica
Dentro de las características esenciales de la Iglesia Católica, encontramos
precisamnente, la tarea de enseñar la doctrina dejada por Jesús; esto es, el mandato
misionero de “vayan por el mundo entero predicando el Evangelio a todas las gentes”
(Mt 28,18):
“La Iglesia católica se ve a sí misma y se proclama como la encargada por Jesucristo
para ayudar a recorrer el camino espiritual hacia Dios viviendo el amor recíproco y por
medio de la administración de los sacramentos (bautismo, eucaristía, confirmación,
penitencia, matrimonio, orden sacerdotal y unción de los enfermos), a través de los
cuales Dios otorga la gracia al creyente.
La Iglesia católica considera que tiene encomendada la misión de elaborar, impartir y
propagar la enseñanza cristiana, así como la de cuidar de la unidad de los fieles. Debe
también disponer la gracia de los sacramentos a sus fieles por medio del ministerio de
sus sacerdotes. Además, la Iglesia católica se manifiesta como una estructura piramidal,
en la que debe cuidar de mantener la unidad de todos los fieles y su obediencia a la
doctrina oficial.
La autoridad para enseñar o Magisterio de la Iglesia basa sus enseñanzas en la Sagrada
Tradición
y
en
las
Sagradas
Escrituras.”
(Tomado
de:
http://es.wikipedia.org/wiki/Iglesia_cat%C3%B3lica)
2.2.2.5. Atributos de la Iglesia católica
De acuerdo al Catecismo de la Iglesia católica, ésta es Una, Santa, católica y Apostólica.
Estos cuatro atributos, inseparablemente unidos entre sí, indican rasgos esenciales de la
Iglesia y de su misión. (CIC, 811).
15 “Los católicos profesan su fe en los cuatro atributos de la Iglesia católica a través del
Credo de los Apóstoles y del Credo de Nicea-Constantinopla, por lo que se las tiene
como Artículo o Dogma de Fe.
Los cuatro atributos de la Iglesia católica son:
Unidad: La Iglesia es una debido a su origen, Dios mismo. Según los católicos Dios es
uno. Es una debido a su Fundador, Cristo. El apóstol San Pablo, en su 1º Carta a los
Corintios, hace referencia a la Iglesia como Cuerpo de Cristo. "Las partes del cuerpo
son muchas, pero el cuerpo es uno; por muchas que sean las partes, todas forman un
solo cuerpo" (1º Co. 12, 12). En otra carta, también Pablo enseña sobre este atributo:
"Mantengan entre ustedes lazos de paz y permanezcan unidos en el mismo espíritu. Un
solo cuerpo y un mismo espíritu, pues ustedes han sido llamados a una misma vocación
y una misma esperanza. Un solo Señor, una sola fe, un solo bautismo, un solo Dios y
Padre de todos, que está por encima de todos, que actúa por todos y está en todos." (Ef.
4, 3-6).Cristo mismo enseña y ruega por esta unidad característica de la Iglesia fundada
por Él: "Que todos sean uno, como tú, Padre, estás en mí y yo en ti. Que ellos también
sean uno en nosotros, para que el mundo crea que tú me has enviado". (Jn. 17, 20-21).
Santidad: la Iglesia católica, a pesar de los fallos y faltas de cada uno de los creyentes
que aún peregrinan en la Tierra, es en sí misma santa pues según sus seguidores Santo
es su fundador y santos son sus fines y objetivos. Asimismo, es santa mediante sus
fieles, ya que ellos realizan una acción santificadora. En la Iglesia católica es quien
contiene la plenitud total de los medios de salvación, y en donde se consigue la Santidad
por la gracia de Dios. Es Santa porque sus miembros están llamados a ser santos.
Catolicidad: con el significado de "universal" la Iglesia católica es católica en cuanto
busca anunciar la Buena Nueva y recibir en su seno a todos los seres humanos, de todo
tiempo y en todo lugar; dondequiera que se encuentre uno de sus miembros, allí está
presente la Iglesia católica. y también, como lo señala el Catecismo de la Iglesia
católica, es católica porque Cristo está presente en ella, lo que implica que la Iglesia
católica recibe de Él la plenitud de los medios de salvación.
16 Apostolicidad: la Iglesia católica fue fundada por Cristo sobre el fundamento de Pedro,
Cabeza de los Apóstoles, y constituyendo en autoridad y poder a todo el Colegio
Apostólico; Pedro y los demás Apóstoles tienen en el Papa y los Obispos a sus
sucesores, que ejercen la misma autoridad y el mismo poder que en su día ejercieron los
primeros, proveniente directamente de Cristo. También es apostólica porque guarda y
transmite las enseñanzas oídas a los apóstoles.
Estos atributos se encuentran en todas las Iglesias particulares que engloba la Iglesia
católica, que son las Iglesias particulares de la Iglesia católica Romana (Rito Latino) y
las Iglesias Rituales Autónomas (Ritos Orientales); todas ellas tienen en común los
mencionados atributos o características esenciales y la autoridad suprema del Supremo
Pontífice como vicario de Cristo en la Tierra.
Por lo tanto, la Iglesia católica se considera a sí misma como heredera de la tradición y
la doctrina de la iglesia primitiva fundada por Jesucristo y, por lo tanto, como la única
representante legítima de Cristo en la tierra, mediante la figura de los obispos, sucesores
sin interrupción de los apóstoles, y herederos, por lo tanto, del mandato de Jesús de
cuidar de su Iglesia (en el evangelio según Juan 21:17, Jesús le dice a Pedro "Apacienta
a mis ovejas"). De allí el lema "Donde está Pedro está la Iglesia" (Ubi Petrus ibi
ecclesia).” (Tomado de: http://es.wikipedia.org/wiki/Iglesia_cat%C3%B3lica).
2.3. Marco Temporal y Espacial
El presente trabajo se enmarca exclusivamente en el territorio ecuatoriano y abarca un
estudio histórico que va desde el tiempo de la Colonia hasta el siglo XXI.
2.3.1. Época Colonial
El Dr. Enrique Ayala Mora divide en su obra Breve Historia del Ecuador al período
colonial en tres grandes períodos, teniendo en cuenta los diferentes aspectos económicosociales. En nuestra exposición utilizaremos el mismo esquema que utiliza el Dr. Ayala
Mora para describir en cada una de las etapas de la Historia del Ecuador, los diferentes
aportes de la Iglesia a la educación:
17 Dividiremos la Época colonial en tres grandes períodos:
1) Primer período colonial: Luego de la conquista y hasta fines del siglo XVI: se dio
un período de asentamiento e inicial consolidación del régimen colonial español.
2) Segundo período colonial: Desde el siglo XVI hasta las décadas iniciales del siglo
XVIII: en el que la actividad económica articulante de la sociedad fue la producción
textil.
3) Tercer período colonial: Desde inicios del siglo XVIII y hasta la Independencia:
caracterizado por la crisis, la readecuación de las relaciones sociales y el agotamiento
del régimen colonial”. (AYALA MORA, Enrique, 2000).
2.3.1.1. Primer periodo colonial
2.3.1.1.1. Encomenderos y doctrineros
Según el Dr. Enrique Ayala Mora, en la primera etapa de la colonización, desde el punto
de vista político-social, hubo un abuso de parte de los conquistadores españoles que
explotaron con sus instituciones de las encomiendas, mitas y más tarde con los obrajes a
los indígenas:
“En la primera etapa de la colonización se produjo el sojuzgamiento y el inicio del
despojo de los pueblos indígenas. Al mismo tiempo se resolvió, en beneficio del
centralismo metropolitano, el conflicto creado por los primeros colonos que intentaron
reproducir aquí el sistema de explotación feudal europeo.
La institución básica de esta etapa fue la llamada “encomienda”, que consistía en el
encargo o “encomienda”, de allí su nombre, que hacía la Corona a un colono español -el
encomendero- de un grupo de indígenas, para que los catequizara y les cobrara el tributo
que estaban obligados a pagar. En pago del beneficio de la cristianización, los indígenas
quedaban obligados a prestar servicios al encomendero. En la práctica se estableció un
mecanismo de extracción de excedentes en forma de trabajo e impuestos, al mismo
tiempo que un instrumento de control ideológico.
Así pues, entre la década de 1530, y la de 1590, es decir hasta la vigencia de las
“Reformas Toledanas” y la Rebelión de las alcabalas de Quito (1592-1593), se extiende
una etapa de asentamiento del poder colonial en la que, por una parte, se establece el
sistema hispánico (fundación de ciudades, diócesis, audiencias, etc.), y se consuman,
por otra, la dominación y el inicio del despojo de los pueblos aborígenes. Todo esto,
desde luego, en el contexto bajo condiciones del encuentro de dos sociedades: De un
lado, la metropolitana, que estaba inmersa en la transición del orden feudal al capitalista
en Europa; de otro lado, la indígena, que experimentaba una aguda crisis de las formas
18 aborígenes de organización social, que precipitaron su derrota”. (AYALA MORA,
Enrique, 2000).
Sin embargo, desde el punto de vista religioso, la Iglesia se preocupó por la educación
de los aborígenes, empezando por lo que para los misioneros era esencial, la educación
en la fe de los indígenas.
La labor misionera se inició en 1553, fundando las doctrinas, reuniéndoles a sus
habitantes que se hallaban diseminados en la selva y montañas, explicándoles las
ventajas que se les ofrecerán al ponerles en contacto los unos con los otros, para la
mutua ayuda, propósito que lo consiguieron, mediante el trato afable y cariñoso que les
prodigaban los misioneros.
Lo que pretendían nuestros religiosos era erradicar la idolatría y la superstición para
implantar el Evangelio, acción que costó muchas vidas que derramaron su sangre, pero
que fue el germen generoso y fecundo para la propagación de la fe. La catequesis fue
misión ardua y difícil, heroica y sacrificada, por lo fragoso de los caminos en la selva,
por la crudeza de los climas tropicales, por la diversidad de los dialectos, por la carestía
de medios adecuados para realizar la obra que se proponían en el inicio de la
evangelización en aquellos tiempos.
Los religiosos misioneros y doctrineros, varones debidamente equipados de ciencia y
virtud, aptos y valerosos para enfrentar difíciles problemas, resueltos y esforzados para
poner en juego toda la sabiduría y santidad, para combatir la barbarie de las tribus
nativas, que trataban de defender sus creencias, religión y costumbres, contrarias a la
sana moral, que practicaban los fieles de la Iglesia Católica.
2.3.1.2. Segundo Período Colonial
2.3.1.2.1. Las Mitas y los Obrajes
En este Segundo Período Colonial, se consolida la así llamada, Real Audiencia de
Quito. La estrategia española de explotación en este período, será la de utilizar la mano
de obra barata de los indios para conseguir una mayor producción metalúrgica, textil y
19 agrícola. El trabajo de los indígenas se convierte, así, en el medio adecuado para la
producción y el sometimiento de los aborígenes ante el yugo español.
La Iglesia, por su parte, aprovecha esta coyuntura histórica para fundar las así llamadas
Escuelas de artes y oficios, donde se instruiría a los indígenas en el arte de la orfebrería,
de la pintura y escultura, del tejido y bordado.
“Desde fines del siglo XVI se abre un nuevo período de la dominación colonial en la
Audiencia de Quito. La estrategia española orientada a hacer de América un centro
proveedor de metales preciosos, había generado una especialización regional dentro del
imperio colonial. La Real Audiencia de Quito emergió entonces como un importante
proveedor de tejidos y alimentos para los grandes centros de explotación minera de
Potosí. Junto a la Encomienda que cada día fue perdiendo importancia hasta
posteriormente ser suprimida, surgió el mecanismo básico de la organización
económica, la llamada Mita. Esta institución de origen incaico reformulada por los
colonizadores, consistía en un determinado tiempo de trabajo obligatorio que los
indígenas tenían que realizar. La Corona distribuía este tiempo de trabajo, reservándose
parte de los mitayos para obras públicas y entregando los demás a los colonos españoles
que requerían de mano de obra. Aunque el trabajo era forzado, tenía que pagarse un
salario, lo cual garantizaba al Estado la posibilidad de que los indígenas dispusieran de
recursos para el pago del tributo.
Los mitayos trabajaban principalmente en la producción textil y la agricultura. Los
llamados obrajes -centros de elaboración de paños- se desarrollaron enormemente, de
manera especial en la Sierra norte y centro. La real Audiencia de Quito se transformó de
ese modo en uno de los centros más dinámicos del Imperio Colonial Español, con una
actividad productiva y de intercambio especializada, y por ello sumamente vulnerable.
Determinado estructuralmente por el hecho colonial, el desarrollo de lo que hoy
conocemos como Ecuador ha sido desde esta época influenciado en forma directa por su
inserción en la economía internacional.
Se definió, pues, una relación de explotación metrópoli-colonia, en la cual las riquezas
producidas iban en parte a manos de los grupos dominantes locales y fundamentalmente
a alimentar el funcionamiento de la economía española, que a su vez era crecientemente
dependiente de los centros más dinámicos de la manufactura y el comercio europeos”.
(AYALA MORA, Enrique, 2000).
Madura en siglo XVII la nación Quiteña, altiva y religiosa, dada a devociones y a las
letras. Las ciudades se organizan y crecen. Y Quito, la capital, se convierte en ciudad
monumental con templos que hasta ahora despiertan admiración y con una asombrosa
obra de ingeniería, arquitectura y urbanismo que logró vencer la más caprichosa y rota
topografía.
20 “Desengañados los quiteños de varias regiones de la Audiencia de la minería, la
economía de la audiencia descanso sobre la industria textil. Mientras en el Puerto
Principal, Guayaquil, en prósperos astilleros se labraban navíos, "De los mejores que se
fabricaban en el Mundo ", y se comercializaba activamente con maderas, cables y de
manera especial el cacao. Con todo esto, más una rica agricultura, los territorios de la
Audiencia prosperaban, a pesar de sequías y terremotos en la Sierra e incendios y
asaltos por parte de piratas en Guayaquil. En el siglo XVIII, esta bonanza se
ensombrecería con las desmedidas alzas en impuestos y la política de la Corona
tendiente a favorecer sus industrias.
Y, comenzando por Quito, varias ciudades lucían gallardos oradores y otras gentes
dadas al pensamiento y las letras.
De manera Quito brillo en todo el mundo hispano por sus pintores y escultores mestizos
e indios. Cumbres son, en el siglo VXII, los pintores Miguel de Santiago y Goribar, en
el siglo XVIII, los escultores Legarda y Caspicara. Tan rica y sostenida tradición de
artistas y talleres, dentro de inconfundibles líneas estilísticas, ha permitido hablar de una
Escuela Quiteña.
El nivel alcanzado por criollos y mestizos en nuestra colonia se mostró en figuras que
cobraron resonancia americana y europea. El latacungueño Ignacio Flores fue en
Madrid profesor de Colegio de Nobles y de vuelta a América, en hora crítica, liberó a la
paz del cerco que le había puesto Tupac Catari, y gobernó después sabiamente la
Audiencia de Charcas; el riobambeño Pedro Vicente Maldonado, abrió el camino de
Quito a Esmeraldas y dibujo un admirable mapa de la Audiencia; viajó con al
Condamine por el Amazonas, y en Europa fue nombrado Miembro Correspondiente de
la Academia de Ciencias de París y acepto en la londinense Royal Society; el
guayaquileño Pedro Franco Dávila inició con su rica colección el Real Gabinete de
Historia Natural de Madrid y fue su primer Director; el Quiteño Espejo fue el gran
reformador de las instituciones quiteñas del XVIII, el gran animador de la economía y
cultura y sentó las bases para un proyecto de autonomía política; El Quiteño José Mejía
se convirtió en figura mayor de las Cortez de Cádiz, asamblea que reinó la inteligencia
de España y América; El Riobambeño P. Juan de Velasco, respetado en Europa por su
ciencia, dio a la Patria la obra que ha cimentado su ser de nación, la historia del Reino
de Quito, y el poeta Juan Bautista Aguirre (cumbre de la Lírica Barroca) y el filósofo y
escritor Ramón Bisecas fueron en Europa consultados de Obispos y cardenales y
admirados maestros y polemistas.”
(http://www.midena.gob.ec/sitios_wrapper/fuerzas_armadas/historia/realaudiencia.htm).
Para terminar con esta somera visión de Quito (hoy Ecuador) en la Colonia, importa
destacar la gigantesca empresa de las misiones de los jesuitas Quiteños en el Oriente
ecuatoriano, que tuvo como ejes el Napo y el Amazonas. Cuando la expulsión de los de
Loyola se contaba tres ciudades (Santa Cruz, de Lanas, Archidona y Puerto Napo) y
treinta y tres pueblos o reducciones en Pastaza, el Napo y el Aguarico y el Marañon
hasta Iquitos. Y a la inteligente tarea de asentar esas comunidades y enseñarse toda
suerte de oficios, debe añadirse una gran obra cartográfica (Iniciada por el Mapa de
21 Amazonas del P. Fritz) de estudio de las lenguas aborígenes y de relaciones de esa
admirable historia en crónicas, informes y diarios, que constituye fascinante capítulo de
la literatura ecuatoriana.
2.3.1.2.2. La sociedad colonial
Una vez que los españoles se habían establecido en el Continente Americano, se formó
una estructura social piramidal muy marcada que diferenciaba claramente la brecha
entre cada una de las clases existentes: blancos, burócratas, encomenderos, obreros,
comerciantes y en lo más inferior de la pirámide social estaban los indígenas y los
esclavos negros traídos de África, quienes eran tratados en la misma forma que los
animales:
“Luego del primer siglo de colonización hispánica, se había definido una estructura
social fuertemente diferenciada y asentada sobre la desigualdad legal. Los blancos,
especialmente los españoles de origen peninsular (miembros de la burocracia civil y
eclesiástica, encomenderos, obrajeros y comerciantes) estaban en la cúspide de la
pirámide social. Ellos controlaban los principales centros de producción económica, así
como la circulación de los bienes. Al mismo tiempo ejercían el poder político tanto en
el nivel de la Audiencia como en el plano local.
En la base de la estructura social colonial, de otro lado, estaban los pueblos indígenas
que sufrieron cambios profundos, pero al mismo tiempo lograron también mantener la
continuidad de varios elementos de su organización. El más importante de ellos fue sin
duda, la lucha por la conservación de las tierras, que en forma paulatina iba pasando a
manos españolas, no sin hallar de parte de las comunidades dura, y a veces exitosa
resistencia.
La mantención de la estructura comunitaria indígena, de sus caciques y formas
culturales, fue usada por los colonizadores como mecanismo para el cobro expedito del
tributo que los indianos debían pagar al soberano español. Pero ello significó también la
persistencia de formas de organización e identidad que permitieron nuevos tipos de
inserción de los pueblos indios en la vida del conjunto social. Sería, pues, un error,
pensar que la diferenciación existente entre la República de blancos y la República de
indios era una barrera de incomunicación, puesto que ambas estaban estrechamente
imbricadas por relaciones de interdependencia y dominación.
Los indígenas aprendieron pronto ciertas técnicas agrícolas, el cultivo de plantas
europeas y la domesticación de animales venidos del Viejo Continente. El Quichua, que
comenzó a ser difundido por los incas, terminó por ser la lengua común de los indios,
por influencia también de los misioneros. Se dio una interrelación de ese idioma con el
Castellano. La Religión, usada por el sojuzgamiento, fue siendo asimilada por los
pueblos andinos y adquirió caracteres de forma de identidad y de expresión de la
resistencia indígena. Muchas veces las formas religiosas y culturales fueron más
22 efectivas para la continuidad aborigen, que las fugas masivas, los suicidios y los
levantamientos violentos que, desde luego, tuvieron gran incidencia sobre todo en
determinados momentos de la vida colonial.
Conforme avanzó la época colonial fue adquiriendo mayor importancia el mestizaje.
Este se originó fundamentalmente entre las uniones de conquistadores y mujeres
indígenas, gestándose de este modo un grupo social intermedio entre blancos e indios
dedicado a ciertas labores agrícolas, al mediano comercio y la artesanía. Los mestizos
bregaron por abrirse campo entre sus dos polos de origen social y étnico y lograron el
reconocimiento de ciertos “privilegios” reservados a los blancos peninsulares, pero
quedaron relegados a una situación intermedia y subalterna en la sociedad, puesto que
no podían demostrar “pureza de sangre”. Solo con el paso del tiempo irían logrando el
reconocimiento de cierta identidad propia que se expresó en varias manifestaciones de
la cultura popular urbana de la época.
Hacia mediados del Siglo XVII, ya en la Real Audiencia de Quito se habían asentado
varios grupos de esclavos negros importados para realizar trabajos en la Costa y en
ciertos valles cálidos de la Sierra. Fue creciendo de ese modo un grupo social que,
aunque minoritario, adquiriría creciente importancia sobre todo en ciertos espacios
regionales. En todo caso, la situación de esclavitud los colocó en el último lugar de la
vida colonial.
Como puede apreciarse, concomitantemente con la diferenciación socio-económica y
étnica, se dio también la consolidación de una sociedad testamentaria que consagraba la
desigualdad. Sus diversos grupos tenían deberes y derechos diversos de acuerdo a su
lugar en la estructura social y el control de la propiedad. Los blancos podían estar
exentos del trabajo, especialmente manual y podían ejercer en forma exclusiva
funciones de dirección política y religiosa. Los mestizos que no pudieran ser
reconocidos como blancos, estaban excluidos de la educación formal y las funciones
públicas. Los indios, y desde luego los negros, se dedicaban exclusivamente al trabajo
manual. En esta sociedad se estableció también una realidad de discriminación de la
mujer, que soportaba fundamentalmente el peso del trabajo familiar.” (AYALA MORA,
Enrique, 2000).
2.3.1.2.3. Estado, Iglesia y Cultura
En virtud del Patronato, es decir, la Institución Eclesiástico – Civil, por la que el Estado
manejaba en gran medida la Iglesia colonial, ya que estaba encargado de colegir los
diferentes cargos eclesiásticos de acuerdo a la conveniencia de Patrono (autoridad civil),
se presentaron grandes abusos. Sólo la Iglesia Católica pudo asumir, en esta época, la
tarea educativa; es más, sólo la Iglesia estaba cualificada para ello. Los más grandes
intelectuales de la época y la mayoría de educadores eran clérigos y fueron los
encargados de formar a los mejores artistas, artesanos e intelectuales:
23 “En todo este cuadro brevemente presentado, el papel del Estado Colonial fue decisivo,
ya que no solo cumplió una función de garante de la actividad económico-social y de las
funciones políticas e ideológicas consiguientes; sino que se constituyó en una suerte de
escenario de las contradicciones entre los intereses metropolitanos y locales, al mismo
tiempo que fue también un activo regulador de las condiciones de reproducción del
conjunto de la sociedad a través de su mediación en el funcionamiento de la mita y la
distribución del trabajo social.
Cuando se habla del Estado Colonial, desde luego, no debe solamente pensarse en la
administración audiencial, sino en todo el aparato político que incluía además los
cabildos y la propia Iglesia, sometida al control estatal. En efecto, gracias a una
concesión del Papa, los soberanos españoles recibieron el derecho llamado de Patronato
sobre la Iglesia americana. Como Patronos se comprometían a protegerla, dotarla de
recursos, al tiempo que ejercían celosamente las atribuciones de nombrar, remover
funcionarios y disponer incluso de cuestiones de culto. De este modo encontramos a la
Iglesia firmemente enquistada en el aparato estatal colonial, ejerciendo un virtual
monopolio de la dimensión ideológica de la sociedad. La burocracia eclesiástica tenía a
su cargo no solo la tarea de la evangelización de las masas indígenas y la función
educativa de los colonizadores, sino que, al imponer su cosmovisión de la Cristiandad
como horizonte ideológico, fundamentaba el “Derecho de Conquista” y consolidaba las
relaciones de explotación imperantes. Junto a esto, la Iglesia fue adquiriendo cada vez
mayor poder económico, hasta transformarse en el primer terrateniente de la Audiencia
de Quito.
La Iglesia era, pues, la única institución con recursos para promover aquello que, para
usar un término de uso común, podemos denominar cultura. Dicho de otro modo, ella
estaba justamente para eso. De allí que no resulta difícil explicar el por qué los más
notables intelectuales de la época fueron clérigos y por qué, también, las
manifestaciones artísticas se desarrollaron bajo la protección de los conventos y con
motivos religiosos destinados a la catequesis. Empero, vale anotar el enorme desarrollo
que logró en términos artísticos la escultura, la pintura y la construcción, asentadas en la
utilización de la mano de obra artesanal aborigen, que no solo copió calificadamente
modelos europeos, sino que introdujo elementos originales que han hecho de nuestro
legado cultural una de las más altas expresiones del arte americano.” (AYALA MORA,
Enrique, 2000).
2.3.1.2.4. Entre el siglo XVI y el siglo XVIII
El Dr. Ayala Mora describe a este período como una época de “estabilidad”, debido a
que se produce una significativa continuidad en la vida política y social del país,
marcado por una total dominación española hacia el pueblo indígena, a quienes se les
impone los duros trabajos de los obrajes, que reemplazan a la actividad minera del siglo
anterior:
“Entre la última década del siglo XVI y las primeras del siglo XVIII, en que se dio la
vigencia del “pacto colonial” que caracterizó al segundo período de la época de
24 dominación hispánica, hubo una notable continuidad de la vida política y social de
Quito, marcada por la relativa estabilidad asentada en el auge económico. Al tiempo que
se robustecía el aparato burocrático colonial, se profundizaba también el mestizaje,
como uno de los rasgos de la sociedad dominante.
Luego de la década de la Rebelión de las Alcabalas, se inició el siglo XVII con la
administración del Presidente Miguel de Ibarra, por orden suya se fundó en 1606 la
ciudad que lleva su nombre. Bajo Ibarra y sus sucesores se continuó la construcción de
varios conventos y templos y se dio comienzo a otros; se ampliaron las misiones; se
regularizó la producción de los Astilleros de Guayaquil. En la Presidencia de Antonio
de Morga, (1615-1636) llegó a su auge la producción textil. Se fundó la Universidad de
San Gregorio Magno, que coexistió con la de Santo Tomás de Aquino. Todo esto,
empero, se dio en medio de un clima de enfrentamiento entre el poder civil y el
eclesiástico y la lucha entre religiosos criollos y peninsulares por el control de las
órdenes religiosas.
Entre mediados de la década de los treinta y mediados de los cincuenta del siglo XVII,
hubo dificultades económicas, al tiempo que se acentuó el acaparamiento de tierras por
los españoles. Quito fue azotada por sequías y pestes, que obligaron a organizar la
atención hospitalaria. Al mismo tiempo vino cierto auge en la producción de obras
artísticas y literarias. En las décadas siguientes, hasta finales de los setenta, las
erupciones del Pichincha destruyeron buena parte de Quito y otras localidades. Se
destacó allí la virtud de la santa quiteña, Mariana de Jesús, cuya vida edificante
contrastaba con el relajamiento de los religiosos y sus interminables disputas. La ciudad
de Guayaquil fue atacada por los piratas, razón por la que se buscó fortificarla mejor.
Para contrarrestar las dificultades económicas, y proteger a la población indígena, el
Rey prohibió el establecimiento de nuevos obrajes. Esta orden la puso en efecto el
Presidente Munive, que inició su gobierno en 1678.
La última década del siglo trajo varias dificultades; fueron años de sequía, agravada por
un terremoto que destruyó Latacunga en 1692, y que se repitió en 1698, causando
graves daños a esa misma ciudad, así como a Ambato y Riobamba. En general,
comenzaba a sentirse una contracción económica que se agravaría el siglo siguiente.
Con todo ello, sin embargo, las actividades productivas y comerciales eran aún grandes.
En 1681 había doscientos obrajes que ocupaban casi treinta mil trabajadores. En
Guayaquil el tráfico marítimo era mucho más intenso que a inicios del siglo y se habían
construido barcos de alto tonelaje.
Además de las universidades, se estableció el Colegio de San Fernando, regentado por
los dominicos, que también fundaron una cátedra de Medicina. Las misiones en la
Amazonía crecieron significativamente, de modo especial las que estaban a cargo de los
jesuitas. Al concluir el siglo, Carlos II devolvió a Quito el derecho de elegir alcaldes,
que le había sido retirado un siglo antes, en la Rebelión de las Alcabalas.” (AYALA
MORA, Enrique, 200).
25 2.3.1.3. Tercer Periodo Colonial
2.3.1.3.1. La “crisis” de mil setecientos
El mil setecientos, es decir, el inicio del siglo XVII, fue para toda la América española
una época marcada por una profunda crisis en todos los aspectos: social, ya que los
diferentes desastres naturales y las condiciones de explotación en que vivían los
indígenas, diezmaron a la población; económica, debido a la depreciación de la
economía a nivel global y política, debido a los diferentes cambios que se sucedieron en
la dinastía monárquica española:
“El inicio del siglo XVIII fue para América Española el comienzo de una nueva etapa.
Al cabo de una aguda crisis manifestada a varios niveles, se abrió en la Real Audiencia
de Quito lo que podría definirse como la tercera y última fase de colonización. Factores
internos y externos incidieron en esta transformación. Después de casi dos siglos de
sobre-explotación de las masas indígenas, éstas se encontraban diezmadas por el trabajo
y las enfermedades traídas por los conquistadores. A esto se sumaron los desastres
naturales que azotaron el país. Varios de los más fuertes terremotos de la historia se
sucedieron en la época, trayendo no solo pérdidas humanas, sino desorganización de la
producción y de las vías de intercambio. Las pestes y enfermedades mataron a
poblaciones enteras.
Estas calamidades internas se agravaron con un acelerado proceso de contracción de la
economía colonial en su conjunto. Los metales, cuya extracción era el centro de la
actividad del imperio americano, comenzaron a escasear. Las minas altoperuanas
sufrieron una grave crisis que impactó también en las zonas proveedoras como la Real
Audiencia de Quito. Los textiles quiteños perdieron vertiginosamente sus tradicionales
mercados, ahora víctimas de la depresión. Los productos similares europeos de mejor
calidad y menor precio, fueron paulatinamente desalojando a los productos de Quito.
Todo esto trajo una acelerada desmonetización de la economía y la consecuente
depresión.
Por fin, las transformaciones de la Metrópoli hicieron también lo suyo en la agravante
situación. En un intento por superar las formas tradicionales que caracterizaban a la
postrada economía española, la nueva dinastía Borbón, llegada al trono luego de un
largo conflicto, trató de implementar un proyecto de modernización que tendía a hacer
de España una potencia industrial, con capacidad para competir con Inglaterra y Francia
y abastecer sus mercados coloniales. En consecuencia, introdujo una serie de
limitaciones al comercio textil de la Audiencia de Quito con otras regiones coloniales.”
(AYALA MORA, Enrique, 2000).
26 2.3.1.3.2. Un siglo difícil
El siglo XVIII puede ser definido como “un siglo difícil”, debido a las conflictivas
situaciones dadas a nivel político, debido a los problemas suscitados con el cambio de la
dinastía monárquica española, el debilitamiento del Imperio español, frente a otras
potencias como Inglaterra y Francia, las distintas revueltas civiles suscitadas en las
principales ciudades de la América española y la supresión de las principales fuentes de
explotación indígena como constituían las encomiendas, las mita y los obrajes. Así lo
describe el Dr. Enrique Ayala Mora:
“Para las décadas finales del siglo XVIII, Inglaterra era el centro del desarrollo de un
sistema capitalista internacional consolidado ya como dominante. Para España,
transformada en potencia de segundo o tercer orden, la pérdida de su Imperio
Americano era cuestión de un momento a otro.
El siglo XVIII se había iniciado en Quito con las noticias del cambio de dinastía en
España y con serios enfrentamientos burocráticos entre funcionarios de la Audiencia.
Estos últimos hechos, entre otros, fueron antecedentes de la supresión del Tribunal de la
Audiencia de Quito, una vez que en 1717 fue creado el nuevo Virreynato de Santa Fe de
Bogotá, al que fueron adscritas las circunscripciones quiteñas. Esta decisión, tomada
con intención de reforma y centralización administrativa, precipitó una época de
inestabilidad y constantes cambios. En pocos años, el nuevo Virreynato fue suprimido,
para ser restablecido de nuevo más tarde en forma definitiva.
Cuando se suprimió ese Virreynato, se adscribió las jurisdicciones de Quito nuevamente
al de Lima, aunque se restableció la Audiencia. Luego de varias indecisiones y medidas
contradictorias, ésta fue puesta definitivamente bajo la jurisdicción de Santa Fe de
Bogotá desde 1739. Los efectos de la crisis económica, que trajeron consigo la
supresión de la mita en los obrajes de comunidad en 1704, sumados al descontento por
los vaivenes audienciales, trajeron un ambiente de descrédito de la autoridad y de la
Corona, que habría de irse acentuando en las décadas siguientes. La situación se
complicó con el recrudecimiento de los conflictos eclesiásticos y las pugnas con el
gobierno civil. La Iglesia, tanto las catedrales como las comunidades religiosas, habían
logrado incrementar su riqueza y control ideológico político.
Entre 1728 y 1736 gobernó la Audiencia el Presidente Dionisio Alcedo y Herrera, un
prototipo de funcionario borbónico que hizo esfuerzos por reformar la administración y
controlar el poder privado y de la Iglesia, especialmente el relajamiento del clero.
Durante su administración, en 1734, llegó a Quito la Misión Geodésica que, además de
realizar extensos trabajos especializados en la Audiencia, influyó poderosamente en la
promoción de los estudios científicos y la divulgación de ideas ilustradas en la élite
quiteña. El más notable del grupo motivado por los geodésicos fue el gran geógrafo
nacional Pedro Vicente Maldonado.
27 Entre los sucesores de Alcedo estuvieron Félix Sánchez de Orellana, el único quiteño
que llegó a ser Presidente de la Audiencia (1745-1753) y Juan Pío Montúfar, Primer
Marqués de Selva Alegre (1753-1761). Después de esta administración se dio un vacío
de poder, generado por el crecimiento de la fuerza económica y política privada y de la
Iglesia. El Estado acentuó, entonces, un esfuerzo de centralización. La medida más
controvertida fue el establecimiento definitivo del Estanco o monopolio de
aguardientes, en 1764. Simultáneamente se impuso también un impuesto de Aduana que
racionalizaba el cobro de la Alcabala. Cuando no se oyeron las protestas de productores
de aguardiente y pequeños comerciantes afectados en 1765, se dio un alzamiento de los
barrios de Quito con actos de violencia y protesta contra el Gobierno. Una vez más, el
protagonismo de los grupos populares urbanos conmovió a la sociedad colonial. Esa fue
la Revuelta de los estancos, que se sumó a una larga secuencia de levantamientos
indígenas, duramente reprimidos por las autoridades.” (AYALA MORA, Enrique,
2000).
2.3.1.3.3. La expulsión de los Jesuitas de Quito
En la Presidencia de José Diguja (1767-1788) se dio una política intervencionista, típica
del reinado de Carlos III. Fue justamente a Diguja a quien le tocó ejecutar la orden de
expulsión de la Compañía de Jesús, la cual debió salir también del resto del Imperio
Hispánico, en 1766. Esa orden religiosa había logrado acumular inmensas riquezas, que
pasaron a poder de la Corona. Esta, a su vez, las vendió paulatinamente a particulares,
con lo cual se reforzó el poder del latifundismo criollo. La corriente de reformas se
acentuó durante la administración del Presidente José García de León y Pizarro, cuando
se implantó en Quito el régimen de intendencias, que limitaba las autonomías locales y
regionales, concentrando el poder en manos de intendentes de diversos niveles, que
respondían directamente ante la Corona. Uno de los resultados de las reformas fue un
incremento de las rentas fiscales, pero con el tiempo perdieron importancia, hasta que
las propias intendencias desaparecieron, volviéndose en algunos casos a las antiguas
prácticas. La fuerza del poder local se hacía sentir.
Hacia finales del siglo XVIII el influjo de la Ilustración se proyecta en toda la América
española. Y junto con los ideales de emancipación, también se metieron algunas
ideologías, sobre todo, de la Francmasonería.
Uno de los verdaderos triunfos de la Francmasonería en su lucha con la Iglesia fue
alcanzar la expulsión de los Jesuitas de todos los dominios españoles, portugueses y
franceses, y luego la extinción de la Orden fundada por San Ignacio de Loyola. Fue la
28 Compañía de Jesús, desde su fundación, una de las más sólidas columnas de la iglesia.
La masonería dirigió siempre contra ella sus baterías, hasta que al fin logró hacer uno de
sus más firmes impactos: odio, intrigas, calumnias, todo se empleó con el fin de
conseguir el exterminio de la Compañía. En esta conjura internacional se dieron cita
cuantos enemigos ha tenido la Iglesia y llegaron a alcanzar del Papa Clemente XIV el
Breve Dominus ac Redemptor, que la suprimió en 1763.
“La Compañía de Jesús se oponía aguerridamente al triunfo de los errores doctrinarios
de la época: jansenistas, regalistas, enciclopedistas se unieron para eso, para destruirla.
El fin era, si fuese posible, acabar con la Iglesia: el medio, aniquilar a los jesuitas, sus
más eficaces defensores. ‘Hay que estrangular al último Jesuita’, decía Diderot;
‘Ahorcar al último rey con la tripa del último Jesuita’, aclaraba D`alembert; ‘Aplastar al
infame’, definía Voltaire. La infame, para ellos, era por cierto la iglesia Católica.
En este complot tuvieron activa parte los masones, primeros ministros en Portugal y
España, el Marqués de Pombal y el Conde de Aranda. El primero obtuvo la expulsión
de los Jesuitas de Lusitania en 1759. El segundo, presionado en el ánimo de Carlos III,
hizo igual cosa en 1767. En el lapso que medía entre ambas fechas, los Jesuitas habían
sido expulsados también en Francia, por maniobras de otro francmasón, el ministro
Choiseul.
Algo tuvo que ver, indirectamente en el asunto, el Reino de Quito, pues un Jesuita
español, enviado desde aquí, el Padre Bernardo Recio, fue el encargado de llevar en sus
baúles documentos y panfletos contra el Rey Carlos III. El viaje Quito-Roma, que debía
hacer en esa ocasión se convirtió, para el Padre Recio, en el último que haría a la
América, y en la espada de Damocles, al fin desatada contra su Orden”. (SALVADOR LARA, Jorge, op. cit. pág. 44.)
El extrañamiento de la Compañía de Jesús de todos los dominios españoles, ejerció
definitiva influencia para el resentimiento de los criollos contra España y la Monarquía
borbónica, no solamente por el impacto negativo que esa acción significó para la
cultura, con el cierre de la Universidades y Colegios, y para la agricultura, al ponerse fin
al racionalizado cultivo vigente en las numerosas haciendas jesuíticas, sino inclusive en
lo personal, pues fueron desterrados de su lugar natal, y con respecto a la mayoría, para
siempre: Un número considerable y selecto de hombres en la plenitud de la vida, junto a
no pocos jóvenes y algunos ancianos, todos ellos pertenecientes a los más granado de la
sociedad hispanoamericana de entonces.
“El resentimiento de los criollos contra España fue indudablemente, una de las causas
motoras, pero una de las menos conscientes por parte de los criollos. Habla
resentimiento por todo, a todo momento y en todas partes, habla sobre todo,
29 resentimientos personales, mas no lo notaban, alucinados como estaban por el ideal de
libertad que de buena fe creían ser el único móvil de sus luchas. Muchos historiadores
americanos tratan de eludir el estudio de esta causa: tal vez la juzgan lesiva a la
dignidad no sólo de los próceres sino, en general, del hombre hispanoamericano. Y este
criterio no es real: no hay como prescindir del sentimiento humano; y es lícito que todo
hombre tenga sus aspiraciones, ilusiones, ambiciones y apetitos, y comprensible que, al
ser contrariado en ellos, reaccione oponiéndose a quien le impide su consecución. Por
otra parte, la rutina de la vida impide ver las grandes injusticias del momento: en
cambio una contrariedad, un disgusto, un resentimiento, permiten que se haga luz en el
panorama, dan lugar a reflexión, aclaran tinieblas. Eso ocurrió con los próceres criollos.
Expulsados los Jesuitas de América, uno de ellos, el cuencano P. Francisco Xavier
Crespo, en una elegía de amarga despedida de su tierra, lanza por primera vez una frase
que es toda una revelación: ‘España, cruel madrastra… Déspota impiadosa’, dice. El
resentimiento impulsaba a la rebeldía, al odio. Menos de cincuenta años después,
América entera ardería en guerra contra la metrópoli”. (SALVADOR LARA, Jorge, op. cit. pág. 44).
“Por otra parte, los Jesuitas desterrados contribuyeron a dar personalidad nacional a sus
patrias escribiendo en Europa las historias de sus respectivos países, tales por ejemplo,
los Padres Cavijero, de México; Molina, de Chile y Velasco de Quito”. (SALVADOR LARA, Jorge, op. cit. pág. 44).
2.3.1.3.4. Fin de la época colonial
La Época Colonia llega a su fin luego de un período de una fuerte y profunda agitación
intelectual en casi todas las ciudades de América. El pueblo cansado de los diferentes
abusos por parte de los españoles empezó a expresar de manera verbal y escrita su
descontento por la situación en que vivían. Actitud que a la postre les llevará a tomar las
armas y a unirse a los ejércitos republicanos al mando de valientes generales que
querían poner fin a tantos siglos de barbarie y abuso de poder:
“La segunda mitad del siglo XVIII fue una etapa de agitación intelectual y cultural en la
Real Audiencia. Se fue gestando un movimiento de reivindicación de lo americano y lo
quiteño, que expresaba el nacimiento de una conciencia incipiente en las élites criollas.
El Padre Juan de Velasco, jesuita riobambeño que tuvo que marchar al exilio por fuerza
de la expulsión, escribió su Historia del Reino de Quito, obra monumental que ponía las
bases de la conciencia quiteña y de la búsqueda de esa identidad, al mismo tiempo que
ponía las bases de la historiografía del Ecuador.
La más grande figura del despertar intelectual y político de la época fue Eugenio de
Santa Cruz y Espejo (1747-1795). Hijo de un indígena y una mulata, fue apoyado por
gente influyente y mediante varios recursos, como el cambio de apellido indígena por el
español con el que lo conocemos, logró evadir las barreras de la sociedad quiteña e
ingresar incluso en la Universidad, en donde obtuvo el Doctorado en Medicina y la
30 Licenciatura en Jurisprudencia y Derecho Canónico. Fue el eje de la cultura ilustrada de
su tiempo y desarrolló una amplia actividad, protegido por los nobles criollos. Por otra
parte, fue quizá el más destacado médico de la Audiencia de Quito. Sus ideas
contestatarias y sus iniciativas de organización le trajeron problemas con las autoridades
españolas, que lo expatriaron y lo encarcelaron. Murió en prisión siendo todavía joven.
Velasco y Espejo son las dos más altas figuras de un momento de definición inicial de
la conciencia quiteña. Los criollos, descendientes de españoles peninsulares, ocupaban
crecientemente el espacio dominante en Quito y buscaban su identidad a partir de
diferenciarse de los europeos y de los indígenas, reclamando para sí el carácter de
explotados respecto de los primeros y consolidando su posición de explotadores
respecto de los segundos.
El fin del siglo XVIII coincidió con el inicio de la Presidencia del Barón de Carondelet
(1799-1807). En ella se dio una clara política pro criolla y al mismo tiempo un esfuerzo
por recuperar las jurisdicciones perdidas de la Audiencia. El Presidente encabezó una
iniciativa de solicitar mayor autonomía para Quito y la creación de una Capitanía
General. A inicios del siglo XIX las tendencias autonomistas estaban a la vista. Los
criollos habían logrado una significativa ampliación de su poder económico,
especialmente con el robustecimiento del latifundio, pero continuaban excluidos del
acceso al poder político. Sus tendencia autonomistas respecto de la metrópoli los
conducirían en pocos años al rompimiento.” (AYALA MORA, Enrique, 2000).
2.3.2. Independencia y Etapa Colombiana
En el período que va desde la primera década del siglo XIX hasta la fundación de la
República, se distinguen dos etapas:
1) Época de la Independencia: A su vez, pueden distinguirse tres momentos en la
Independencia, de 1808 a 1812, de 1812 a 1820 y de 1820 a 1822.
2) Etapa Colombiana: ocupada por los años de vida del país dentro de la República de
Colombia.
2.3.2.1. La Independencia
Durante el período de la Independencia, debido al ambiente de tensión en que se vivía
en toda la América española con los aires de “libertad” que empezaron a surgir desde
inicios del siglo XIX, no se dan grandes avances en el ámbito educativo. Más bien, cabe
destacar que en esta época hay un auge de los ideales independentistas que empiezan a
circular en las aulas de clase, inclusive, contagiando de ese espíritu patriótico a la niñez
y a la juventud.
31 Surgirán en este período, también, los primeros aires de liberalismo femenino en la
figura de Manuela Sáenz, Manuela Cañizares y Manuela Espejo. Mujeres que vieron al
movimiento independentista como la oportunidad para reclamar por la defensa de sus
derechos.
El Dr. Enrique Ayala Mora, en su obra…, reconoce que la Independencia
Latinoamericana responde a la influencia de las Revoluciones Francesa y
Norteamericana, que contagiaron al mundo entero, como también al influjo de la
masonería, que hizo mucho daño a la Iglesia Católica durante este período. La acción de
las logias fue intensa y permanente en los tiempos emancipadores, pero al no haber
acceso de profanos a los archivos de esta fraternidad, se ha exagerado mucho sobre la
participación masónica a favor de la independencia, hasta el extremo de haberse
convertido esta aseveración en verdadero mito exento de análisis y crítica, casi un
auténtico dogma. En realidad, hubo masones tanto entre los patriotas como entre los
realistas; hubo unas sociedades secretas libertarias que fueron efectivamente masónicas
y otras que actuaron sin serlo a favor de la Independencia, a cuyo efecto se formaron al
modo de las masónicas, sin participar de su ideología en ese tiempo claramente
antirreligiosa:
“El proceso de emancipación latinoamericana ha sido interpretado desde diversos
puntos de vista. La corriente hispanófila adjudica el hecho al “mal ejemplo” de la
independencia norteamericana, a la penetración de las ideas de la Revolución Francesa,
o a las maquinaciones de la Masonería Internacional. La vertiente liberal ha mantenido
la versión heroica de una epopeya que conquistó la Libertad, dejando atrás y para
siempre la Noche Colonial, identificada con el despotismo, la ignorancia y el
clericalismo. Una perspectiva científica tiene que superar estas interpretaciones. Sin
minusvalorar el contenido y proyecciones del hecho -sin duda de primera importanciaes preciso explicarlo por sus motivaciones estructurales.” (AYALA MORA, Enrique,
2000).
Sin embargo, continúa el historiador Ayala Mora, la principal causa de la Independencia
no hay que buscarla en la influencia internacional, sino que se debe a causas internas,
que luego de algún tiempo de crisis del régimen colonial, desencadenó la ira de los
grupos explotados contra las fuerzas realistas:
“No puede discutirse, sin dejar de lado las incidencias internacionales, que la principal
causa de la independencia es de carácter interno. La crisis de los mil setecientos afectó
definitivamente al equilibrio de poder que se había establecido entre el Estado Colonial,
32 representante de los intereses metropolitanos, y los grupos de propietarios locales. Al
consolidarse el sistema hacendario, la burocracia estatal perdió su injerencia en la vida
económica. La mayoría de los trabajadores quedaron vinculados en forma directa y cada
vez más estrecha al poder latifundista. Por otra parte, las trabas comerciales implantadas
por la Metrópoli, afectaban cada vez más a los grupos importadores y exportadores. De
este modo, las clases terratenientes locales y los incipientes grupos comerciantes habían
consolidado su control de la economía nacional, en tanto que la burocracia española
conservaba exclusivamente el manejo del sistema político. Este divorcio tenía que
resolverse tarde o temprano en favor de las clases dominantes locales, que una vez que
manejaran ya el aparato productivo, se lanzarían, de un momento a otro, a la lucha por
captar el poder político. Los Cabildos que tenían a su haber una vieja tradición de
protesta de los criollos cobraron a fines del siglo XVIII enorme importancia.
Los grandes protagonistas de la Independencia fueron, pues, los notables latifundistas, a
los que se sumaron lo que podríamos denominar grupos medios de la sociedad colonial,
los intelectuales, que dieron un sesgo radical al proceso. Los grupos populares urbanos,
fundamentalmente artesanales y el pequeño comercio, fueron reticentes al principio, y
solo apoyaron a los notables patriotas en estadios posteriores de la independencia. En
las masas indígenas, protagonistas de repetidos alzamientos en las décadas previas,
había la conciencia de quienes eran los beneficiarios de la autonomía, justamente los
terratenientes que habían contribuido a la sangrienta represión de esos alzamientos.”
(AYALA MORA, Enrique, 2000).
2.3.2.2. Quito “Luz de América”: La junta quiteña (1808-1812)
El pueblo Quiteño vive a inicios de siglo un ambiente teñido de sangre y de dolor, como
fruto de la masacre del 2 de agosto de 1810. Algunos grupos de patriotas se habían
levantado en contra de la Monarquía. Es así que, Quito se convierte en la primera
ciudad en América Latina en pronunciar su primer grito de independencia el 10 de
agosto de 1809. El intento de independencia se vio frusatrado por la falta de apoyo de
las otras ciudades y como fruto de este fracaso, varios patriotas fueron encarcelados y
masacrados dentro de la cárcel realista un año más tarde.
“La intervención napoleónica en la península ibérica, tornó a las autoridades de los
Virreinatos y Audiencias en representantes del usurpador. Así surgió en América la idea
de sustituirlas por Juntas, integradas por criollos, que gobernarían a nombre del
“Monarca Legítimo”. En Quito fue develado un intento de este carácter en 1808. Sin
desanimarse por el fracaso, los conspiradores resolvieron integrar la Junta Soberana que
se hizo cargo del mando el 10 de Agosto de 1809. El Marqués de Selva Alegre fue
nombrado Presidente. En el acto tuvo particular importancia la acción de Dña. Manuela
Cañizares.
La vida de la Junta fue extremadamente precaria. El apoyo esperado de Cuenca,
Guayaquil y Pasto no pudo conseguirse. En las dos primeras ciudades las autoridades
españolas controlaron la situación. En Pasto la ciudad se pronunció por la causa realista.
33 Las milicias quiteñas no lograron atraer a los grupos populares y tampoco alcanzaron un
nivel aceptable de organización. El Virrey de Lima envió una fuerza militar que cercó la
ciudad de Quito. El de Bogotá dispuso la invasión por el Norte. Viéndose débil y
vencida, la Junta Soberana prefirió disolverse. Las autoridades españolas ofrecieron en
principio “perdón y olvido”, pero apresaron a cerca de una centena de revolucionarios y
los castigaron con sentencias de muerte y expulsiones. La reacción se despertó y el 2 de
agosto de 1810 el pueblo de Quito se lanzó a la toma de las prisiones y cuarteles. Este
fue el pretexto para la carnicería llevada a cabo por las tropas realistas.” (AYALA
MORA, Enrique, 2000).
En este ambiente de resentimiento, de ira y de luchas internas, es obvio que en el alma
del pueblo quiteño, iba a nacer un claro ideal de libertad y rebeldía. Es así como en las
aulas de las escuelas y colegios también iban a flotar esos sentimientos de libertad y de
lucha contra el yogo de la corona. No iban a parar ahí los intentos de libertad por parte
de las fuerzas independentistas:
“La llegada a Quito de Carlos Montúfar -hijo del Marqués de Selva Alegre- nombrado
Comisionado Regio por el Consejo de Regencia español, motivó la formación de una
nueva Junta de Gobierno en la que Montúfar fue el gobernante efectivo. Un Congreso
expidió los “Artículos del Pacto Solemne de Sociedad y Unión entre las Provincias que
forman el Estado de Quito”. Esta primera Carta Constitucional establecía la división de
poderes; un gobierno electivo, representativo y responsable, y el principio de la
alternabilidad en las funciones públicas. Pese a sus elementos “republicanos”, reconocía
como Monarca a Fernando VII. Esta Junta también duró poco. Fue vencida por las
fuerzas españolas. A finales de 1812, el país estaba de nuevo firmemente controlado.
Los protagonistas del proceso fueron poderosos latifundistas, para quienes la burocracia
española era impedimento para el control del poder político. Una vez instalados en el
mando, no solamente suprimieron las contribuciones de los blancos, manteniendo las de
los indios, sino que hicieron desaparecer la constancia de las cuantiosas deudas que
habían contraído con la Corona por compra de tierras. Los nobles criollos -justo es
reconocerlo- fueron muy conscientes de su papel de usufructuarios de la libertad. Sin
embargo, no es posible entender el sesgo ideológico del proceso, sin la participación de
intelectuales venidos de las capas medias, los “radicales” del proceso, como Quiroga y
Morales.” (AYALA MORA, Enrique, 2000).
Aunque algunos historiadores, entre ellos el Dr. Ayala Mora vean a la Iglesia como una
aliada de la corona española, la misma historia se encarga de desmentir tal afirmación,
ya que entre los próceres de la Independencia podemos encontrar los nombres de varios
sacerdotes y religiosos que tiñeron de sangre la historia de la República. Entre ellos
encontramos al sacerdote quiteño José Riofrío, capellán de las tropas patriotas. Durante el
alzamiento de Cuenca del 3 de noviembre de 1820, entre los connotados próceres también
aportaron valientemente sacerdotes para la gesta independentista; entre ellos el cura José
Peñafiel, Juan María Ormaza y Javier Loyola. La intervención del obispo José Cuero y Caicedo
34 contribuyó a detener los enfrentamientos y pacificar la ciudad. Solo la intervención conciliadora
del Obispo Cuero y Caicedo, hizo que se detuviera la matanza y los desmanes que se producían
durante horas interminables.
Dignos representantes de la Iglesia Católica, que también lucharon en contra del abuso
de los españoles y que transmitieron a sus alumnos y hermanos de Congregación ese
gran ejemplo de lealtad y patriotismo:
“El fracaso militar de la Junta Soberana se ha adjudicado a la poca respuesta popular
que logró el movimiento. No cabe duda de que ésta fue una causa de peso. El pueblo se
dio perfecta cuenta de que esa libertad en nada le beneficiaba. Solo cuando la dirigencia
insurgente logró imponer su propia visión de la independencia como necesidad general,
obtuvo cierta movilización de artesanos y pequeños propietarios. En esta lucha por el
control de las masas que se dio entre los protagonistas de la emancipación, la burocracia
eclesiástica en forma mayoritaria fue un baluarte del realismo.” (AYALA MORA,
Enrique, 2000).
4.2.3. El triunfo realista (1812-1820)
La unidad nacional sería la clave para conseguir la Libertad definitiva. De eso se dieron
cuenta todos los grupos independentistas que luchaban por un
mismo ideal:
comerciantes, terratenientes, artesanos, religiosos, indígenas y mestizos. Así que lo
único que hacía falta para lograr el triunfo definitivo sería el surgimiento de un líder
nacional que unificara a las fuerzas libertarias:
“De 1812 hasta 1820 se vivió una tensa calma en la Real Audiencia de Quito. En
España, se precipitaban los acontecimientos. Vuelto Fernando VII al trono, desconoció
la Constitución de Cádiz e inició un gobierno autocrático, reaccionario y represivo. Esto
se hizo sentir en América. Dejando de lado cualquier avance constitucionalista o
autonomista, el Rey intentó volver a las colonias a la situación vivida antes de las
guerras napoleónicas. Esto solo precipitó la ruptura.
Durante la segunda década del siglo XIX, los impulsos independentistas fueron
madurando en Guayaquil. El respaldo a las autoridades realistas, registrado frente a los
movimientos de Quito (1809-12), dio paso a la demanda por la total autonomía. Las
acciones contra el puerto de los marinos ingleses al servicio de la independencia del
Cono Sur, demostraron que los españoles carecían de los recursos necesarios para
defender Guayaquil, cuya vida estaría cada vez más a merced de las fuerzas navales
insurgentes. El hecho pesó en una ciudad de comerciantes, a la que llegaban
regularmente noticias de los triunfos de Bolívar y San Martín.” (AYALA MORA,
Enrique, 2000).
35 4.2.4. La campaña definitiva (1820-1822)
El aporte de este líder nacional llamdo Simón Bolívar y de su brazo derecho, el General
Antonio José de Sucre, fueron fundamentales para conseguir la Independencia
definitiva. Ya que sin ese espíritu de unidad impulsado por Bolívar hubiera sido
imposible conseguir dicho objetivo. Aunque más tarde el ideal de unidad quedaría sólo
en un sueño del Libertador:
“Los notables guayaquileños proclamaron su independencia absoluta el 9 de octubre de
1820. José Joaquín de Olmedo fue la gran figura del pronunciamiento. Junto a él
estuvieron, entre otros, Febres Cordero, el Jefe Militar; Escobedo, Jimena, Roca y
Espantoso, que formaron parte de las Juntas, Provisional y Suprema, que se sucedieron
en el mando. El ejemplo porteño impulsó varios movimientos en el interior. El más
importante de ellos fue el de Cuenca, que proclamó su independencia el 3 de noviembre
de ese mismo año 1820.
Luego de algunos éxitos, el ejército guayaquileño sufrió una seria derrota que lo obligó
a replegarse. En estas circunstancias se recibió el refuerzo enviado por Simón Bolívar
que destacó a su mejor General, Antonio José de Sucre para que dirigiera las
operaciones. Además del encargo militar Sucre traía la comisión de gestionar el ingreso
de Guayaquil a Colombia, pero la resistencia obligó a postergarla. Luego de un primer
intento no exitoso, Sucre logró seguir a la Sierra y llegar cerca de Quito. En la mañana
del 24 de Mayo de 1822 se enfrentaron los dos ejércitos en las faldas del volcán
Pichincha, ubicado junto a la capital. Los realistas fueron derrotados y obligados a
capitular. Esa batalla definió el curso de la independencia ecuatoriana. Quedó pendiente
en el Sur la independencia de Perú.” (AYALA MORA, Enrique, 2000).
4.2.5. El Ecuador en Colombia
El historiador Ayala Mora, resume la anexión del Ecuador a la Gran Colombia de la
siguiente manera:
“Luego de la victoria, los notables quiteños resolvieron la anexión del distrito a
Colombia. Cuenca había hecho otro tanto semanas antes. Las cosas en Guayaquil iban
por diverso camino. Los protagonistas del 9 de octubre eran un grupo de propietarios
agrícolas cada vez más vinculados al comercio exterior. En las décadas finales de la
Colonia, la explotación cacaotera había crecido, las relaciones con los mercados
peruanos se habían intensificado y los nexos con Europa eran cada día más estrechos.
Bolívar tuvo que hacer uso de la fuerza militar para conseguir la anexión del Puerto a
Colombia. Lo que hoy es Ecuador quedó integrado a Colombia con el nombre de
Distrito del Sur, que a su vez fue dividido en tres departamentos que seguían las
antiguas unidades regionales, con capitales en Quito, Guayaquil y Cuenca.
36 Se suele dividir en dos etapas la existencia de Colombia. Durante la primera, en
ausencia de Bolívar, gobernó Santander. La segunda, desde 1826, fue la del gobierno
personal del Libertador. El Vicepresidente Santander imprimió en su administración un
sesgo liberal. Organizó juntas de protección de la agricultura y el comercio, impulsó una
política librecambista, declaró ilegal el trabajo gratuito de los indígenas, estableció un
salario mínimo, impuestos directos e impulsó seriamente la abolición del tributo
indígena. Esta política lo enfrentó con las oligarquías latifundistas y algún tiempo
después, con el propio Bolívar.” (AYALA MORA, Enrique, 2000).
En este ambiente de constantes luchas y enfrentamientos a nivel interno y externo, el
papel de la Iglesia es más bien pasivo y prudente. Los protagonistas de este período de
Independencia, de anexión a Colombia y su consecuente desmembración serán Bolívar
y sus tropas libertarias. Surgen en este tiempo figuras en el ámbito político-militar, pero
no se destacan personajes de la Iglesia. Eso responde también a la política impuesta por
la dictadura de Bolívar, con un tinte algo anticlerical. Por lo que los aportes de la Iglesia
Católica en materia educativa en este período son casi nulos:
“Luego de su experiencia política en Perú, el Libertador fue dando un giro que le llevó a
enfatizar los rasgos conservadores de su política. El impulso movilizador de las
campañas de la independencia, su política de liberación de los esclavos y de integración
de los pardos e indios dio paso a una actitud de alianza con los sectores godos. El temor
de la movilización popular y del federalismo fueron llevando a Bolívar a un
planteamiento centralista y no participativo. “No aspiremos a lo imposible -insistía- no
sea que por elevarnos sobre la región de la libertad, descendamos a la región de la
tiranía. De la libertad absoluta se desciende siempre al poder absoluto…” En su
propuesta de Constitución para Bolivia proponía un Presidente vitalicio, un senado
hereditario y otras instituciones cercanas a la monarquía. Los conservadores se
agruparon alrededor de Bolívar, en tanto que Santander congregaba a los liberales y
partidarios del federalismo. Bolívar, que vio que en el conflicto se resquebrajaba la
unidad de Colombia, optó por la Dictadura, pero esto agudizó las tensiones y la
dispersión. Al fin, en 1830 renunció al poder.” (AYALA MORA, Enrique, 2000).
Era de esperarse que si Bolívar no contaba con el apoyo de todos los sectores en su afán
de construir una única nación con todos los países independizados, su proyecto de la
Gran Colombia iba pronto a fracasar. Sobre toso por los intereses de los sectores más
poderosos de los países liberados: latifundistas, militares y políticos de la oligarquía
capitalista, que propugnaban un regionalismo irrenunciable:
“El período grancolombiano fue de gran agitación para el Distrito del Sur. La guerra de
emancipación del Perú absorbió enorme cantidad de recursos. El actual Ecuador llegó a
pagar por esa guerra tres veces más que el resto de Colombia. Luego, en 1829, cuando
las tropas peruanas invadieron el país, también los Departamentos del Sur sufrieron la
37 carga más pesada del esfuerzo bélico. Aunque el ejército invasor fue vencido por Sucre
en Tarqui (27 de febrero), las pérdidas ocasionadas fueron cuantiosas. Se firmaron
acuerdos de paz y posteriormente un Tratado de Límites, pero el conflicto territorial
quedó pendiente.
Los latifundistas quiteños resistieron las políticas de Santander, especialmente las
medidas librecambistas que afectaban la producción textil, y las reformas igualitarias
que intentaban afectar la estructura jerárquica corporativa, tan acentuada en la sociedad
quiteña. Junto a su rechazo al Gobierno central colombiano, los notables de Quito
aceptaron entusiasmados la idea de la Dictadura de Bolívar. En Guayaquil, los
terratenientes y comerciantes del puerto, reticentes en principio a la anexión,
encontraron que las políticas de Santander les favorecían. Por ello su lealtad a Colombia
mientras en Quito había agitación. Pero cuando cayeron las exportaciones en el segundo
quinquenio de los años veinte, y se reactivaron vínculos de comercio con Lima, las
tendencias autonomistas renacieron. Las rebeliones de esclavos los llevó a pensar en la
necesidad de mayor represión. En cuanto a Cuenca, también experimentó una
reactivación del comercio con Perú. Esto reafirmaría sus reivindicaciones de autonomía.
Por motivaciones diversas y hasta contradictorias, los grupos dominantes regionales del
Distrito del Sur fueron llegando al rompimiento con Colombia.
Se han mencionado muchas causas que explicarían la desmembración del gran país
ideado por Bolívar. Lo que es claro es que al conflicto de intereses entre las oligarquías
regionales, se unió la inexistencia de una clase social con capacidad para llevar adelante
un proyecto nacional que fuera más allá de las presiones localistas y regionales. A las
causas de dispersión interna, hay que añadir la política de debilitamiento de potencias
capitalistas interesadas en que no se consolidara un gran Estado, sino unidades políticas
pequeñas, débiles y manejables.” (AYALA MORA, Enrique, 2000).
2.3.3. Época Republicana
En el estudio de la Época Republicana, pueden establecerse tres grandes períodos:
1) Desde la fundación hasta fines del siglo XIX: en que se inició la Revolución Liberal;
2) Desde la revolución Liberal hasta 1960: en que el capitalismo ecuatoriano sufre una
transformación profunda;
3) Desde fines de los sesenta hasta nuestros días. A su vez, en estos períodos pueden
distinguirse etapas o momentos diversos, que son los que constituyen los acápites que
siguen.
38 2.3.3.1. Caracterización de la República
2.3.3.1.1. El naciente Estado
El nacimiento del Ecuador como República se da en un ambiente de divergencias
regionalistas entre las principales Sedes de Quito, Guayaquil y Cuenca. Los dueños de
la tierra serían la clase dominante que también estaría al frente del gobierno del país, o
por lo menos serían los que influirían de manera decisiva en la elección de los
mandatarios que gobernarían el país.
“El 13 de mayo de 1830 las Corporaciones y Padres de Familia de Quito, resolvieron
“Constituir un Estado Libre e Independiente, con los pueblos comprendidos en el
Distrito del Sur y los más que quieran incorporarse, mediante las relaciones de
naturaleza y de recíproca conveniencia.” Semanas después se reunió en Riobamba la
primera Asamblea Constituyente. Uno de los problemas que afrontaron los padres de la
Patria fue el cómo bautizarían al nuevo país. El tradicional nombre de Quito, herencia
indígena mantenida por la Real Audiencia, despertó resistencia entre los representantes
guayaquileños y cuencanos. En aras de la “unidad nacional” se resolvió llamar al nuevo
Estado como lo habían hecho los sabios franceses que lo visitaron años atrás para hacer
estudios sobre la línea Equinoccial. De este modo nació el Ecuador.
La característica del país desde su nacimiento fue la profundización de las tendencias
regionales. Tres espacios que habían surgido del último periodo colonial se
consolidaron. La Sierra Centro-Norte con su eje Quito, retuvo la mayoría de la
población y la vigencia del régimen hacendatario. La Sierra Sur nucleada alrededor de
Cuenca, tuvo características diversas, con una mayor presencia de la pequeña propiedad
agrícola y la artesanía. La cuenca del río Guayas con su centro en Guayaquil,
experimentó un acelerado crecimiento del latifundio cada vez más vinculado a la
exportación y sufrió una declinación de la pequeña propiedad agrícola.
Estas regiones mantenían precarias, por no decir inexistentes relaciones entre sí.
Estaban vinculadas económicamente al sur de la actual Colombia, al norte del Perú o a
la costa pacífica, pero no constituían entre ellas un mercado que las articulara, con
niveles mínimos de interdependencia.
Las guerras de la independencia deterioraron más aún los frágiles vínculos económicos
y sociales entre las regiones y significaron también una etapa de recesión del comercio
internacional que, con la ruptura colonial, fue orientándose cada vez más hacia las
potencias capitalistas, especialmente a Gran Bretaña, que luego de las dos primeras
décadas de la República se constituyó en el principal proveedor, al mismo tiempo que el
principal importador de nuestro cacao. El desarrollo del comercio externo aceleró el
crecimiento poblacional y económico de la Costa, pero no logró articular toda la
economía del país sino hasta las décadas finales del siglo XIX.
39 Ecuador nació, pues, dominado por los grandes latifundistas, señores de la tierra,
detentadores del control regional. La mayoría de la población eran campesinos
indígenas, sujetos a la hacienda por el vínculo del concertaje. En algunos lugares de la
Sierra y Guayaquil, se mantenía la esclavitud de los negros y la pequeña propiedad
campesina, así como relaciones de corte precapitalista denominadas precarias. En las
ciudades, concentradas en su mayoría en la sierra, vivían grupos de artesanos y
pequeños comerciantes con una cúpula de burócratas, clérigos y propietarios rurales.”
(AYALA MORA, Enrique, 2000).
Las haciendas serían los espacios en los que transcurriría la vida de los ecuatorianos. De
esta manera el terrateniente mantenía un dominio casi total sobre la vida y decisiones de
la clase servil de la hacienda. Los indígenas, los negros traídos del África y los mestizos
nacidos de los abusos de los españoles a las indias eran, prácticamente, esclavos que
trabajaban para el señor feudal. La república del Ecuador no nace, entonces, en un
sistema democrático, sino en un sistema feudal esclavista.
En este contexto, la educación como es de suponerse solo estaba destinada a los hijos de
los terratenientes y con un poco de suerte a algunos mestizos que con el reconocimiento
de los padres blancos o con el padrinazgo de los religiosos podían acceder a este
privilegio.
La educación para la mujer estaba totalmente vetada, ya que la mujer tenía como única
ocupación las labores domésticas y las manualidades.
“La realidad sociopolítica del Ecuador en las primeras décadas de la República, fueron
la inestabilidad y la desarticulación. El control terrateniente reemplazó a la autoridad
metropolitana y se desplazó por ello a instancias regionales y locales, asentados en el
régimen hacendatario. En estas circunstancias el proyecto nacional que se plantearon los
criollos que fundaron el Ecuador, distó mucho de expresar a la mayoría de la población.
No pudieron unificar a la comunidad cultural y social de todos los ecuatorianos, sino
que consolidó una ruptura entre las clases dominantes y el pueblo. Se mantuvo un férreo
control oligárquico por medio de una votación restringida de tipo censatario que excluía
a las mujeres y los no propietarios, de la mantención de mecanismos de represión y
manipulación ideológica de los campesinos y trabajadores urbanos.
La fundación de la República no significó, pues, el establecimiento de un Estado
Nacional. Esta sería una tarea que cubriría prácticamente toda la historia republicana del
país. Se pasó de la identidad criolla de los fundadores a una identidad mestiza o blancomestiza que supuso la incorporación de amplios sectores populares al proyecto nacional.
Este largo proceso, empero, no ha estado exento de conflictos. No solamente aquellos
que enfrentan a los detentadores del poder, del control de la economía y la sociedad
toda, con las mayorías de trabajadores sujetos a explotación; sino que también aquellos
40 que ponen frente a frente a esa comunidad nacional blanco-mestiza, crecientemente
dominante, y a los pueblos indígenas que viven la continuidad de los habitantes andinos
de antes de la conquista ibérica.
La naciente república surgió sobre bases de explotación económica-social y étnica de
los indígenas. Y a lo largo de toda la historia, si bien se han dado cambios democráticos
importantes y actos de resistencia india también significativos; no se ha logrado
establecer la realidad plurinacional del Ecuador, que supone la aceptación de su
diversidad dentro del marco de un solo Estado, que respete la educación, la lengua, el
derecho a la tierra de los pueblos indígenas.” (AYALA MORA, Enrique, 2000).
2.3.3.2. Primer Período Republicano
El Primer Período Republicano estuvo marcado por claras diferencias entre los
diferentes grupos de personas. Dichas diferencias serían de tipo regional, racial, político
y también de género:
“Aunque la Independencia significó una seria ruptura y un rápido cambio de tipo
político para el Ecuador, muchos rasgos de la sociedad colonial pervivieron más allá de
la fundación de la República. El fuerte sentido corporativo y estamentario continuó más
allá de las fórmulas republicanas; se mantuvo la discriminación racial; la exclusión de la
mujer de la vida política; fuertes elementos aristocratizantes continuaron articulando las
relaciones sociales, la cultura y la ideología; tradiciones paternalistas siguieron rigiendo
las relaciones sociales. Solo el paso de las décadas y el agudizamiento de la lucha social
provocó cambios significativos.
Desde el primer momento de la vida del Ecuador, se patentizó una tensión y
enfrentamiento entre las oligarquías regionales dominantes, especialmente de la Costa y
de la Sierra. Desde luego, ambas tenían intereses comunes, pero también existían
muchos motivos de tensión, como el control de la mano de obra, siempre escasa en el
Litoral; y la mantención de medidas aduaneras proteccionistas, que defendían la
producción textil serrana, pero limitaban el comercio. El conflicto irresoluto convirtió al
Ejército (controlado por los veteranos de la Independencia) en árbitro de la lucha por el
poder. Su vinculación a una u otra fracción generó esas alianzas caudillistas,
características de la época.” (AYALA MORA, Enrique, 2000).
2.3.3.3. Fundación del Estado (1830-1859)
El analfabetismo en la gran mayoría de la población sería la tónica y la estrategia de los
terratenientes para perennizarse en el poder. La participación en la política y la cultura
estaba únicamente restringida a los propietarios terratenientes. En este contexto la
Iglesia tendría un papel importantísimo en la educación de los indígenas y esclavos, ya
que la preocupación de los religiosos era la de evangelizar a estos grupos explotados
41 con la Catequesis. Aunque muchas veces haya sido criticada la tarea de la Iglesia,
aduciendo que la instauración de la fe cristiana constituía una manera ideológica de
dominio a las clases explotadas, hay que destacar que la Catequesis era el único medio
por el cual muchos indígenas y esclavos negros salieron del analfabetismo. De esta
manera, nuevamente se destaca la labor positiva de la Iglesia como la única Institución
que se preocupaba por la educación de aquellas clases oprimidas en la naciente
República.
“En la organización del nuevo Estado, la mayoría de la población había quedado al
margen de la integración cultural y política. Los congresos y más órganos del gobierno
eran, fruto de una participación electoral limitada al grupo reducidísimo de notables
propietarios. Detrás de las fórmulas liberal-democrático-republicanas, sobrevivía una
sociedad jerarquizada, estamentariamente organizada, en la que la autoridad se
justificaba por “derecho divino”.
Frente a la solidez relativa de las instituciones del poder local y regional, el Estado
central era notoriamente débil. La descentralización era, pues, la norma prevaleciente.
Tanto a nivel de la propia estructura hacendataria, como en los órganos regionales,
principalmente en los municipios, se concentraba un enorme poder. Educación,
servicios, obras públicas, beneficencia, estaban en manos de organismos autónomos o
semiautónomos. Al Estado central le quedaba el manejo de la fuerza pública y de un
reducido plantel burocrático.
Los ingresos fiscales, provenientes en buena parte de la “contribución” o tributo
indígena, estancos y diezmos, se gastaban en el mantenimiento de la alta burocracia, el
ejército y el clero. La Iglesia, heredera de su poder colonial, tanto económico como
ideológico, siguió inserta en el Estado republicano, que reclamaba sobre ella el derecho
de Patronato, o sea de controlar los nombramientos de la jerarquía, a cambio de
mantener a la Religión Católica como oficial y excluyente, financiando a sus ministros
y garantizando sus prerrogativas y propiedades. Esta situación se volvió cada vez más
conflictiva y desató varios enfrentamientos ideológicos. Al ser reconocida como oficial
la religión católica, la Iglesia mantuvo bajo su control la mayor parte del sistema
educativo, por cierto muy precario y dedicado solamente a una porción bajísima de la
población.
La mantención del tributo indígena hasta la década de los cincuenta, fue síntoma de la
continuidad colonial en la relación con los pueblos indios del país, que vieron más que
antes invadidas sus tierras comunales y reforzados los mecanismos de sujeción al
latifundio.” (AYALA MORA, Enrique, 2000).
2.3.3.3.1. Presidencia de Juan José Flores (1830…-1845)
“El General Juan José Flores, venezolano, que había desempeñado la función de Jefe
del Distrito del Sur, fue designado Presidente del nuevo Estado por la Asamblea
42 Constituyente de Riobamba. Una vez en el poder, Flores se dedicó a consolidar una
alianza de gobierno entre el tradicional gamonalismo latifundista de la Sierra, al que se
había vinculado por matrimonio, y los altos mandos del ejército, integrados en su gran
mayoría por extranjeros.
Empezaba el General Flores su mandato con las mejores relaciones con la Iglesia
ecuatoriana, tanto en esta primera elección papular de mayo, en que es aclamado por
todas las ciudades en sus actas, como luego en la Primera Constituyente de Riobamba,
en la que fue elegido por Presidente el General Juan José flores, casi por unanimidad, el
11 de septiembre de 1830.”
El floreanismo, como se llamó popularmente a la primera alianza caudillista de nuestra
historia, recogió la tradición conservadora del bolivarianismo.
Todavía en la época colombiana, cuando los quiteños se inquietan a recibir leyes y
decretos del Gobierno del Centro que ordena cerrar Conventos, poner trabas al ingreso
de novicios, apoderarse de los bienes inmuebles de las comunidades religiosas,
arrendarlas y establecer síndicos que manejen sus fondos, los religiosos acudieron al
general Flores para que apelara ante el Libertador, entonces ausente en el Perú. Flores
acogió la súplica de los religiosos quiteños y escribió a Bolívar:
“Acompaño una representación que hacen a V.E. tres Prelados respetables del Ecuador.
Los Regulares de Quito están alarmados con la ley que previene que se administren sus
fondos por síndicos particulares. Dicen que esto es destruir el derecho de propiedad, sin
utilidad para el público. Sino para cuatro ambiciosos arrendatarios”.
Vuelto Bolívar del Perú a Quito, en septiembre de 1826, atendió a ésta y a las restantes
necesidades religiosas de la región; anuló la Ley de supresión de conventos; devolvió
muchos de ellos a sus dueños. Dio ordenanzas para asegurar la observancia regular en
los monasterios, sujetándolos al Prelado diocesano, ya que se hallaban separados de sus
superiores europeos; puso impedimentos a las secularizaciones fomentadas desde
Bogotá.
43 2.3.3.3.2. De la dictadura al “progresismo” (1875-1895)
Entre las dos décadas de 1875 a 1895, luego de la caída de García Moreno, se
sucedieron algunos gobiernos que van desde la dictadura al liberalismo, en donde cada
uno de ellos trataba de conservar o disolver la herencia de 15 años del garcianismo:
“El período comprendido entre 1875 y 1895 se desenvolvió en medio de repetidos
intentos de superar la contradicción entre el poder político y el poder económico,
heredada del régimen garciano. La oligarquía latifundista, especialmente su aliada, la
Iglesia Católica, lucharon por conservar el poder que habían alcanzado con el régimen
anterior. Las clases dominantes guayaquileñas, en cambio, en la medida en que
consolidaban el control de la economía nacional, reclamaba para sí mayor injerencia en
la dirección del país. Varios intentos de superar, o al menos equilibrar, este conflicto
básico, se sucedieron en el período. Primero el régimen aperturista, luego la dictadura y
por fin una suerte de camino medio, que terminó por fracasar en vísperas de la
Revolución Liberal.
En las elecciones convocadas a la muerte de García Moreno, triunfó el Dr. Antonio
Borrero, candidato de una alianza de moderados y radicales que barrieron al
garcianismo sucesorio. Aferrado a un legalismo inconducente, Borrero fracasó en la
búsqueda de una salida para la sustitución de la Carta Negra. Ante esto, los grupos más
agresivos de la oligarquía costeña, respaldaron las proclamaciones de la dictadura del
General Ignacio de Veintemilla. Instalado en el poder, luego de vencer la resistencia
serrana, Veintemilla inició su gobierno con medidas liberales que enfrentaron a la
Iglesia. Tiempo después, ya elegido Presidente Constitucional, cambió su actitud y
realizó un gobierno oportunista y estéril.
Cuando Veintemilla concluyó su período y se lanzó a una nueva dictadura, una especie
de cruzada nacional -la Restauración- lo echó del poder. Durante la campaña se
definieron por primera vez las fuerzas políticas ecuatorianas. El garcianismo se
reorganizó como amplia coalición cuando en 1883 se fundó la Unión Republicana.
Empero, desde el inicio se dio en ella una división entre los ultramontanos, que luego
adoptaron el nombre de Partido Católico Republicano, y los progresistas, de orientación
liberal católica. Las fuerzas liberales se bifurcaron también. De un lado emergió la
figura de Eloy Alfaro con su opción radical montonera; de otro se estructuró una
corriente moderada que en 1890 constituyó el Partido Liberal Nacional. De este modo
comenzaron a constituirse incipientes instituciones políticas en el país, aunque el
aparecimiento de los modernos partidos todavía tomaría varias décadas. Al mismo
tiempo, en las últimas décadas del siglo XIX se dio una reactivación del artesanado, que
constituyó organizaciones que cumplirían un papel muy importante en la ulterior
movilización popular.
Con el triunfo de José María Plácido Caamaño en la Constituyente de 1884, tomó fuerza
la alternativa tercerista del progresismo, que favorecía la rápida adaptación del país a las
nuevas condiciones creadas por la evolución del sistema capitalista internacional,
evitando al mismo tiempo, la separación de la Iglesia y el Estado. En el Gobierno de
Caamaño, famoso por sus actos de represión, pero fundamentalmente en el de su
44 sucesor Antonio Flores (1888-1892) se desarrollaron los conflictos que definieron la
época: reforma del régimen bancario, sustitución del diezmo, renegociación de la deuda
externa, contratos ferrocarrileros.
En el gobierno del último progresista, Luis Cordero (1892-1895), la posibilidad de
supervivencia de la fórmula liberal-católica llegó a su límite. La presión de
conservadores y liberales quitó espacio a una alternativa que no pudo afrontar las
definiciones radicales. Cuando por un negociado de Caamaño, Gobernador del Guayas
y hombre fuerte del régimen, la oposición acusó al Gobierno de haber “vendido la
bandera”, Cordero cayó. Semanas después, el 5 de junio de 1895, se proclamó en
Guayaquil la Jefatura Suprema de Eloy Alfaro. Con ello se inició la Revolución
Liberal.” (http://www.scribd.com/doc/14173572/Enrique‐Ayala‐Mora‐Resumen‐de‐Historia‐
del‐Ecuador).
2.3.4. Segundo Período Republicano
2.3.4.1. La Revolución Liberal (1895-1912)
La Revolución Liberal significó para el Ecuador el inicio de una época de gran
crecimiento económico para los sectores agrícolas, sobre todo, del litoral, debido al gran
boom del cacao. Además, las transformaciones implantadas por el liberalismo
(separación de la Iglesia y el Estado, educación laica, libertades de conciencia y culto,
etc.) significaron en el aspecto político-religioso el inicio de un laicismo exagerado, en
el cual se buscaba desplazar por completo a la Iglesia de la tarea de la Educación. La
intervención de la Iglesia en el gobierno ha sido continua incluso intensa con García
Moreno, pero casi nula con Alfaro.
El General Eloy Alfaro se había vuelto una figura legendaria del movimiento radical.
Combatió por años en el campo y en la prensa contra el régimen, hasta que fue
nombrado, en su ausencia, Jefe Supremo por el pronunciamiento del 5 de junio de 1895.
Como tal dirigió la campaña militar triunfante que instauró el liberalismo en el poder.
Conforme las iniciales reformas fueron implantadas, los conflictos con la Iglesia
arreciaron. La conspiración conservadora mantuvo en alerta al Gobierno, empeñado en
fundar centros de educación laica y construir el ferrocarril.
“El sostenido incremento de la exportación cacaotera y del comercio de importación,
trajeron consigo un proceso de acumulación cada vez más significativo de capital, al
mismo tiempo que más estrechas vinculaciones con el mercado mundial. Se consolidó
así el predominio de los sectores capitalistas dinámicos de la economía nacional y la
implantación de lo que se ha dado en llamar el “Modelo Primario Agroexportador”, bajo
45 el que se mantuvo la regionalización del país, pero se rearticularon diversas formas de
producción, desde las más tradicionales hasta las más modernas que significaron la
ampliación de relaciones de tipo salarial no solo en las ciudades, especialmente en
Guayaquil, sino también en algunos espacios rurales.
El auge de las exportaciones cacaoteras provocó la consolidación, al interior de la
oligarquía costeña, de una fracción de comerciantes y banqueros, diferenciada de los
propietarios rurales. Ese grupo, al que podemos llamar con propiedad burguesía
comercial, fue el sector que logró la dirección política con la “transformación” liberal.
En el golpe de estado y la Guerra Civil de 1895, sin embargo, aunque el beneficiario
político fue la burguesía, los sectores sociales más dinámicos fueron el campesinado
costeño, movilizado en las montoneras, los artesanos, especialmente de Guayaquil y la
intelectualidad media liberal divulgadora de las ideas radicales.
Esta fue una etapa de consolidación del Estado Nacional en el Ecuador. Ello supuso, por
una parte, un programa orientado a la integración económica de las regiones naturales
mediante obras como el Ferrocarril Guayaquil-Quito. Por otra parte, el proyecto liberal
trajo también la transformación político-ideológica de mayores proporciones registrada
en el país. El Estado recobró el control sobre amplias esferas de la Sociedad Civil que
estaban en manos de la Iglesia. La educación oficial, el Registro Civil, la regulación del
contrato matrimonial, la beneficencia, etc., fueron violentamente arrebatadas de manos
clericales y confiadas a una nueva burocracia secular. Del mismo modo, la Iglesia fue
despojada de una buena parte de sus latifundios, mediante la llamada Ley de Manos
Muertas.
La Revolución liberal, significó un gran salto. El predominio político e ideológico de la
oligarquía clerical-reaccionaria fue desmontado por la burguesía y sus aliados, cuyos
mecanismos de dominación y reproducción ideológica suponían el establecimiento, al
menos en principio, de ciertas garantías y de libertad de conciencia y educación. No
puede empero hablarse de una “transformación frustrada” o de una “traición al credo
liberal”. La revolución halló sus límites en los de su principal protagonista. Es decir,
que estuvo determinada por los intereses de la burguesía que ni necesitaba arremeter
contra la estructura latifundista de la Sierra, ni podía abolir el poder regional
terrateniente.
Derrotadas, pero no destruidas en su base económica fundamental, las fuerzas del
latifundismo cerraron filas alrededor de la Iglesia Católica, afectadas en sus más caros
intereses. De este modo, el conflicto político de la época se dio entre el Estado Liberal,
que expresaba los intereses de la burguesía y consolidaba su poder gracias al soporte del
ejército y grupos medios, y la Iglesia Católica, dirigida por el clero y la vieja
aristocracia, respaldados por sectores artesanales organizados.” (AYALA MORA,
Enrique, 2000).
En 1901 se patentizó la división liberal. El General Plaza, elegido Presidente de la
República, fue constituyendo su fuerza propia. El alfarismo tenía cierto sesgo popular,
tanto que el placismo venía a ser la alternativa oligárquica. Plaza llevó a cabo las
reformas liberales más radicales. Al fin de su gobierno intentó impedir la vuelta de
Alfaro, pero el Viejo Caudillo llegó una vez más al poder, por vía del golpe.
46 En la segunda administración alfarista (1906-1911) se emitió la Constitución de
1906, la Carta Magna liberal, y se concluyó la titánica obra del Ferrocarril Trasandino.
Luego de dejar el poder en 1911, y de una efímera ausencia en Centroamérica, Alfaro
volvió al Ecuador intentando ejercer el arbitraje en una situación conflictiva. Tomado
preso luego de una derrota militar, se lo condujo a Quito junto con varios tenientes, en
enero de 1912. Allí fueron bárbaramente asesinados y sus cadáveres incinerados por las
turbas, agitadas por una oscura alianza de adversarios liberales y derechistas furibundos.
2.3.4.2. Medio siglo de cultura
Durante la primera mitad siglo XX se desarrolló en el Ecuador una gran difusión de la
cultura, sobre todo, en el ámbito literario y artístico. Aparecen aquí muchos escritores,
pintores y políticos de tinte liberal, que en cada una de sus obras querían transmitir su
descontento hacia el modelo Conservador y hacia la doctrina que la Iglesia Católica
transmitía, tal vez, como fruto de una educación laicista que edichos escritores
recibieron durante el gobierno de Eloy Alfaro. La reaación Católica ante este auge de
intelectuales y políticos anti-católicos estuvo en manos del Obispo Federico González
Suárez, figura representativa de la Iglesia Católica, quien a través de sus obras defendió
con valentía la doctrina cristiana y difundió las principales verdades de fe a través de
sus obras de catequesis cristiana:
“El siglo XX en el Ecuador se inició con el auge de la polémica sobre el establecimiento
del Estado Laico, de la que fueron protagonistas ideológicos, por parte del liberalismo,
además del propio Don Eloy, Abelardo Moncayo, José Peralta, Roberto Andrade y
Manuel J. Calle, entre otros. De otro lado, además de los jerarcas católicos
tradicionalistas, dominó la escena de la reacción católica el Arzobispo Federico
González Suárez y sus discípulos. En Cuenca, la gran figura de la tendencia fue el
ensayista y poeta Remigio Crespo Toral. El debate sobre el laicismo se extendió toda la
mitad del siglo XX y en el se comprometieron las figuras más destacadas del
pensamiento ecuatoriano, transformándose en el eje de la contienda política.
También a inicios del siglo fue quedando atrás el auge del romanticismo, para dar paso
a tendencias realistas, que en la novela tuvieron su máximo exponente en Luis A.
Martínez, autor liberal de A la Costa. El modernismo tuvo sus más importantes
representantes en los poetas de la Generación Decapitada. Por otra parte, ya en la
segunda década del siglo, se dieron atisbos de desarrollo de un pensamiento científico,
que se desarrolló bajo el influjo positivista. Se destacaron en esta línea Belisario
Quevedo, Alfredo Espinosa T. y Julio Endara. Unos pocos años más tarde tuvo cierto
impacto la presencia del arielismo, cuyos máximos exponentes fueron Gonzalo
Zaldumbide y José María Velasco Ibarra.
47 Como se anotó ya, el socialismo tuvo un enorme impacto en el pensamiento y la cultura
desde los años veinte. Bajo su influencia se dieron numerosos ensayos en el campo de la
sociología y la Pedagogía. Y también generó una corriente literaria de gran aliento,
cuyos más importantes exponentes fueron los integrantes de la llamada Generación del
30. La obra más conocida es la novela “Huasipungo”, de Jorge Icaza. En la poesía
descollarán Jorge Carrera Andrade y César Dávila Andrade. En el ensayo se destacó
Leopoldo Benites Vinueza.
Entre los cuarenta y los sesenta se dio un gran auge de la producción artística, que en la
plástica tiene representantes como Mideros, Kingman y Guayasamín. Todo este
desarrollo, junto con el ya mencionado de la Literatura, se consolidó con la creación de
la Casa de la Cultura Ecuatoriana (1944), cuyo fundador, Benjamín Carrión, ensayista,
crítico, biógrafo y narrador, fue más allá de eso, se constituyó en un gran organizador y
suscitador. El impulso del pensamiento y el arte siguió viniendo de sectores de
izquierda, que hallaron ese espacio de contestación y de protesta. Se mantuvieron, sin
embargo, ciertas disciplinas, especialmente la Historiografía, en donde el control de la
derecha clerical siguió teniendo caracteres de cuasi-monopolio.
En la primera mitad del siglo XX también la sociedad y la vida cotidiana
experimentaron sensibles transformaciones. Ciertos elementos de modernidad
permearon las rígidas normas tradicionales. En todo ello, el desarrollo de los medios de
comunicación tuvo mucho que ver. Los periódicos regularizaron su publicación y ya
desde la primera década del siglo circulaba una media docena de diarios. El cine, las
vistas como se lo llamó al principio, se popularizó muy pronto. La radiodifusión cubría
ya todo el país hasta mediados de siglo. Por estas vías la influencia cultural foránea y la
dependencia adquirieron nuevas dimensiones.” (AYALA MORA, Enrique, 2000).
2.3.4.3. Los Gobiernos Liberales Moderados (1912-1924)
Ante los acontecimientos Plaza recomendó que se creara una jefatura suprema, pero fue
rechazada tal idea y se prefirió que el presidente de la Cámara de Diputados tomara el
gobierno, para luego llamar a elecciones, las que pusieron a Leonidas Plaza como
presidente el 1 de septiembre de 1912.
Un año más tarde (1913) en Esmeraldas se crea una insurrección opositora al gobierno,
tal insurrección estaba liderada por Carlos Concha Torres, ex-oficial de Alfaro.
Para 1914 la economía del país se adentraba en una incertidumbre la cual se demarcaba
debido a las consecuencias que podría dejar la segunda guerra mundial; lo sucedido
explica Alfredo Pareja Diezcanseco: “La guerra en la selva esmeraldeña diezmó al
ejército y agotó las energías económicas de la nación. El gobierno tuvo que recurrir a
empréstitos del Banco Comercial y agrícola para sostener la guerra civil; creció la deuda
del estado con esta institución bancaria, la misma que continuó emitiendo billetes, con
48 lo que puso en peligro nuestra moneda, subieron los precios y el país se puso al colocó
al borde de la bancarrota.
Frente a esto, el gobierno ecuatoriano decretó que el estado respaldaría su deuda con
rentas y bienes, que estaba prohibida la exportación del oro físico y se emitía la Ley
Moratoria, conforme la cual se suspendía el canje de billetes por oro metálico, mientras
la nación garantizaba la emisión de papel.” (Pareja Diezcanseco, Breve Historia del
Ecuador, tomo 2, p. 78).
Elegido Presidente de la República en 1916, Alfredo Baquerizo Moreno, terminó con la
turbia de Esmeraldas con la concesión de la amnistía general y dos años después
terminó con el concertaje de los indios.
En 1920 llega al poder José Luis Tamayo y el Ecuador vivió una crisis cacaotera debido
a la falta de demanda del producto en el mercado internacional, también en estos años se
forman las primeras organizaciones en Guayas, que iniciaron huelgas para reclamar al
gobierno una alternativa a la crisis que se vivía; que en 1822 tales turbias fueron
reprimidas sangrientamente en Guayaquil por el ejército y un año más tarde en la
hacienda Leito en Tungurahua.
Llegó 1924 y Gonzalo Córdova fue candidato del Banco Comercial y Agrícola para la
Presidencia del Ecuador; a reaccionar contra el fraude electoral estaba el conservador
Jacinto Jijón y Caamaño quien participaba en desmascarar a la bancocracia.
Córdova obligado por una enfermedad, delegó a Alberto Guerrero Martínez la
presidencia.
A los hechos, una Liga de Militares Jóvenes en la noche del 9 de julio de 1925
destituyen a Córdova del mando y arrestan a los líderes de la plutocracia: Urbina Jado y
Leonidas Plaza.
Esta etapa está caracterizada políticamente por el resquebrajamiento del idealismo
liberal radical protagonizado por Eloy Alfaro en otro donde vela por los intereses
plutocráticos los cuales eran designado con la sucesión de gobernares llamados liberales
moderados.
49 2.3.4.4. La Revolución Juliana (1925-1947)
Como insurrección a la inconformidad económica principalmente, planteada por los
gobiernos plutocráticos, el 9 de julio de 1925 la liga de jóvenes militares estaban a
cargo de Ildefonso Mendoza Vera, los cuales apresaron a determinados gobernantes y
posteriormente, formaron la Junta de Gobierno Civil en la cual participó Luis Napoleón
Dillon, quien era uno de los mentalizadores de tal insurrección. En marzo de 1926 se
nombró a Isidro Ayora Presidente Provisional.
“Como consecuencia de esta asesoría –a la que se ha criticado de no haber entendido la
realidad nacional y de haber propiciado una excesiva burocratización y papeleo- se
crearon instituciones que aún tienen trascendental importancia en el desenvolvimiento
de la vida nacional: el Banco Central, la Superintendencia de Bancos, la Contraloría
General de la Nación, la caja de posesiones, etc.
Con la llegada del año 1930, en nuestro país se sintieron en toda su fuerza los efectos de
la crisis económica mundial. El descontento aumentó día a día; a mediados de 1931 el
pueblo acudió a los cuarteles en busca de armas. Ayora designó al Coronel Luis Larrea
de Alba, (…), como su ministro de Guerra, (…). El pueblo se lanzó en contra del
batallón que respaldaba a Larrea (…). Larrea entregó el poder al Presidente del senado,
el ex presidente de la república, Alfredo Baquerizo Moreno. Como encargado del Poder,
Baquerizo Moreno convocó a elecciones para octubre de 1931.” (cit. Diezcanseco
Pareja, Alfredo, breve historia del Ecuador, tomo2 pp. 87, 89, 90).
“En un momento de debilidad de la burguesía comercial, el latifundismo serrano se
lanzó a la conquista del poder y logró el triunfo presidencial con Neftalí Bonifaz. Su
descalificación por el congreso provoco la llamada Guerra de los cuatro días (1932), en
la que jugó un destacado papel la Compactación Obrera controlada por la derecha.” (cit.
Ayala Mora, Enrique, resumen de historia del Ecuador, p.95)
“Derrotados los ´compactos´ -partidarios de Bonifaz organizados en la Compactación
Obrera Nacional (CON), de composición mayoritariamente artesana- asumió
provisionalmente el poder Alberto Guerrero Martínez, presidente del Senado. Este
convocó a elecciones, ganando uno de sus favorecidos, Juan de Dios Martínez Mera,
miembro del Partido Liberal.
Después Martínez Mera el 19 de octubre de 1933, se encargó el poder a Abelardo
Montalvo, quien convocó a elecciones de las que saldría ganado el presidente de la
Cámara de Diputados y candidato del conservadorismo, José María Velasco Ibarra.
Velasco se posesionó de la presidencia el 1 de septiembre de 1934 y fue derribado el 20
de agosto de 1935.” (Op. cit. Luna Tamayo, Milton, en: Ecuador: las raíces del presente,
pp. 150, 151)
“Federico Páez ejerció por dos años una dictadura civil (1935-1937) encomendada por
los altos mandos castrenses, (…). Fue derrocado por el General Alberto Enríquez Gallo,
que en el corto lapso que gobernó al país como Jefe Supremo (1937-1938) llevó
50 adelante políticas nacionalistas y expidió el Código del Trabajo. Enríquez entregó el
poder a una Asamblea Constituyente (1938) que fue disuelta por el Presidente, que
designó, Aurelio Mosquera Narváez, quien con esta medida intentaba parar la ´amenaza
izquierdista´ y consolidar el poder en manos de la oligarquía liberal. A su muerte
repentina le sucedió Carlos Alberto Arroyo del Río (…), quien planificó desde el poder
su elección como Presidente Constitucional en 1940, bajo el interinazgo de su coideario,
Andrés F. Córdova.
En 1944 Arroyo del Río cayó del poder ante una reacción popular << (la Gloriosa)>>
que tuvo como figura a Velasco Ibarra, que volvió por segunda vez al poder apoyado
por una heterogénea coalición socialista, comunista y conservadores (ADE), que
capitalizó el descontento popular.” (cit. Ayala Mora, Enrique, resumen de historia del
Ecuador, pp. 95, 97)
“En agosto de 1947 su Ministro de Defensa, coronel Carlos Mancheno, lo destituyó a la
fuerza a través de un golpe que se lo denominó ´manchenazo´.” (cit. Luna Tamayo,
Milton, en: Ecuador: las raíces del presente, p. 152)
Con la revolución juliana se dieron grandes cambios en la estructura del aparato estatal
tales como la creación de instituciones públicas, a la vez que representaba una necesidad
de cambios económicos, políticos y por ende sociales, sin embargo fue también el inicio
de una gran inestabilidad política vivida por el país durante toda la etapa la cual llevó a
incertidumbres sociales que eran dirigidas por los pretendientes del poder.
2.3.4.5. Un momento de quietud (1948-1960)
En 1948 se eligió como presidente de la República a Galo Plaza Laso hijo de Leonidas
Plaza. Con el inicio de su gobierno, el Litoral ecuatoriano comenzó a producir el banano
como un nuevo producto que se enfrascaba en el modelo primario Agroexportador del
país; este auge del banano en el Ecuador es consecuente de la crisis que vivía
Centroamérica debido a las plagas. Este inicio también significó la alternativa del la
nación hacia una industrialización.
Las obras y la contingencia para el desarrollo del país fueron analizadas por el
organismo de la Naciones Unidas CEPAL en 1952, cuyas siglas significan -Comisión
Económica para América Latina-.
“En la misma línea, el Estado, siguiendo con el libreto, desarrolló el mercado interno,
para lo cual, impulsó un agresivo programa de construcción de carreteras, empero la
mayoría de ellas unirían los dos tradicionales polos Quito y Guayaquil, y a sus zonas de
influencia.
51 Con esto, de alguna manera, se ampliaría significativamente el espacio nacional, mas
también se consolidaría el Estado bicentralista, que impidió el desarrollo más
equilibrado de todo el territorio nacional.
Sin embargo, la modernización de fines de los cincuenta, también fue producto de las
políticas continentales de seguridad impulsadas por Estados Unidos, como respuesta a
la ola revolucionaria levantada en toda Latinoamérica.
Tempranamente, el modelo ´ecuatoriano´ de ´sustitución de importaciones´ comenzó a
mostrar sus debilidades. En los sesenta al reducirse el flujo de dinero proveniente del
banano, bajaron los recursos para financiar el aparato estatal que dinamizaba el proyecto
industrializador.
La crisis de los exportadores de banano y la crisis del Estado se la trasladó, como
siempre, a través de medidas tributarias y monetarias, a los hombres del pueblo.” (Cit.
Luna Tamayo, Milton, en: Ecuador: las raíces del presente, pp. 153-156).
En la cuestión política de la etapa abría de resaltar lo expuesto por Enrique Ayala Mora
en: resumen de Historia del Ecuador:
“Los tradicionales partidos políticos (Conservador, Liberal y Social) vivieron una época
de regularidad en su funcionamiento, pero al mismo tiempo tuvieron que habituarse a
coexistir con nuevas fuerzas que surgían”. (AYALA MORA, Enrique, 2000)
Para 1952 Velasco Ibarra se consagró Presidente de la República con la más alta
puntuación electoral en toda la vida republicana del país. Su llamado tercer velasquismo
consolidó las fuerzas conservadoras de la nación. Durante su gobierno retornaron
algunas inconformidades en la gente, las cuales protestaron; empero fueron cubiertos
con obras como la construcción de nuevas escuelas y el establecimiento en su gobierno
del orden democrático.
Este tercer velasquismo fue el que mejor terminó (1956), considerando las revueltas de
los dos anteriores.
Con 1956 el Ecuador tuvo un nuevo presidente, cuyo gobierno fue de toque liberal,
Camilo Ponce, destacado conservador, tuvo que afrontar la caída de la exportación
bananera, además de revueltas populares al finalizar la etapa, la cual la más grande fue
en Guayaquil, que fue duramente reprimida por el gobierno.
“El inicio de los sesenta estuvo marcado por una profunda crisis económica, sobre la
cual se montó Velasco Ibarra para ascender al poder en 1960. En efecto la masa
empobrecida de las urbes, principalmente de la costa, siguió tumultuosamente al viejo
52 caudillo populista, quien trituró verbalmente a los responsables del deterioro económico
y regó de esperanzas a las zonas marginales, cuya población entusiasmada lo colocó en
la presidencia de la República otra vez.
Velasco no pudo contener la crisis económica y, menos aún, canalizar la cada vez más
explosiva situación social avivada por la ola revolucionaria cubana. Tuvo que ceder ante
las presiones de los intereses de los exportadores y devaluar la moneda. Perdió
legitimidad y desató una ola represiva para contener la creciente explosión social. Sin
respaldo político y sin autoridad los militares lo tumbaron, entregando la primera
magistratura al vicepresidente Carlos Julio Arosemena Monroy (…).
En la etapa se mantuvo una relativa estabilidad política, económica y por ende social; si
al empezar la etapa se puede observar que el auge del nuevo producto de exportación, el
banano, permitió al Ecuador ver una nueva perspectiva de industrialización, esta fue
decayendo y con ella, la estabilidad política que generaba la comprensión entre los
políticos que buscaban un país industrializado; cuando las exportaciones se tornaron
críticas, entonces reaparece la crisis en el escenario ecuatoriano. Pero el Ecuador tuvo
también grandes sobresaltos culturales.” (Enrique Ayala Mora, en: resumen de Historia
del Ecuador, p. 100, 101).
“El siglo XX en el Ecuador se inició con el auge de la polémica sobre el establecimiento
de Estado Laico, (…). El debate del laicismo se extendió toda la, mitad del siglo XX y
en el se comprometieron las figuras más destacadas del pensamiento ecuatoriano,
transformándose en el eje de la contienda política.
Entre los cuarenta y los setenta se dio un gran auge de la producción artística, que en la
plástica tiene representantes como Mideros, Kingman y Guayasamín. Todo este
desarrollo, (…), se consolidó con la creación de la Casa de la Cultura Ecuatoriana
(1944) cuyo fundador, Benjamín Carrión (…).”(Enrique Ayala Mora, en: resumen de
Historia del Ecuador, p. 102).
El Ecuador tuvo un momento de quietud política-económica y auge un nuevo producto
durante la etapa de 1948 y 1960, sin embargo no faltaron las caídas, que colocaron al
país como antes de esta etapa.
2.3.5. Tercer Periodo Republicano
2.3.5.1. Ascenso del reformismo
Se entiende por “reformismo” a la época de desarrollo y transformación de todas las
estructuras del Estado. Constituye la oportunidad para realizar los diferentes cambios
sociales, políticos, económicos, educativos, de salud en el País, a partir de la
elaboración de un cuerpo de leyes coherente y orientado hacia un fin: La transformación
de la realidad nacional.
53 En este período surge y se destaca la figura de Monseñor Leonidas Proaño, quien estuvo
al frente del Movimiento Indígena. Monseñor Proaños se convirtió en el “Desfensor de
los derechos de los indios”. En las diferentes comunidades indígenas impulsó enormes
campañas de alfabetización, además que con sus predicaciones y enseñanzas despertó la
conciencia del pueblo indígena, que luego se levantó para reclamar sus derechos:
“Desde los años sesenta hasta el fin de los setenta o inicio de los ochenta, se dieron
profundas transformaciones de la sociedad ecuatoriana. No se trata solamente de un
cambio en el producto básico de exportación (banano por petróleo), sino de un
agotamiento del modelo agroexportador y del surgimiento e inicial consolidación de un
nuevo modelo de dominación. Un esfuerzo de modernización y racionalización de la
estructura, acompañado de los consiguientes conflictos y tensiones sociales, fue la
forma concreta que asumió este proceso en el que se produjeron significativas
variaciones en la ubicación de los grupos sociales, al mismo tiempo que se definían
cambios en las relaciones dependientes del Ecuador. La situación internacional en su
conjunto, particularmente la de la metrópoli norteamericana, sobredeterminaron la
acelerada transformación de la realidad del Ecuador.
El visible y rápido cambio gestado en el agro, junto a un proceso de desarrollo industrial
y el robustecimiento del capital financiero, marcan la tónica del período. Un nuevo
cuadro de ubicación, contradicciones y alianzas de los sectores sociales se iban
configurando. Y en el plano más estrictamente político se dio una expansión sin
precedentes del ámbito del Estado junto con el resquebrajamiento de los tradicionales
frentes y organizaciones políticas. Las Fuerzas Armadas, a tono con el proceso de
modernización y complejificación del Estado, fueron desarrollando cierto espacio de
autonomía en su acción política, que se expresó en sus recurrentes asunciones del poder
dictatorial.
A inicios de los años sesenta, la protesta social se intensificó bajo condiciones de
influencia internacional del triunfo de la Revolución Cubana y el ascenso de la lucha
antimperialista continental. Pero aunque el sentimiento pro-izquierdista se difundió
mucho, las organizaciones de izquierda sufrieron quiebras internas. El Partido Socialista
Ecuatoriano se dividió en varias alas y el Partido Comunista afrontó igual situación. Las
fuerzas tradicionales, conservadorismo y liberalismo, empezaron, por su parte, a sufrir
cuarteamientos. De este modo, así como dentro del aparato del estado, en la escena
política fueron surgiendo tendencias reformistas y modernizantes, que habrían de
consolidarse en la década de los setenta.
Pero los cambios no se circunscribieron al estado y la escena política. Los años sesenta
estuvieron marcados por el inicio de profundas transformaciones de la sociedad toda. La
creciente urbanización; la difusión de medios de comunicación, entre ellos la radio y la
televisión; el crecimiento significativo de la educación, son ejemplos de ello. Pero quizá
el aspecto más visible fue el profundo cambio de la Iglesia Católica, que fue
abandonando su actitud apologética antiliberal y enfatizado cuestiones sociales. Fue así
como surgió una corriente de cristianos renovados y comprometidos con la lucha de los
pobres, cuya máxima figura es Mons. Leonidas Proaño, quien tuvo que enfrentar la
54 persecución de las dictaduras e inclusive de la propia jerarquía eclesiástica.” (AYALA
MORA, Enrique, 2000).
2.3.5.2. Conciencia de la crisis
El Dr. Enrique Ayala Mora hace un anális crítico bastante completo sobre la crisis que
experimentó la cultura ecuatoriana durante las décadas que van de los años setenta a los
noventa, influenciada por diferentes factores políticos, económicos, artísticos y sociales
de índole interna y externa:
“En las décadas que van de los sesenta a los noventa, la cultura ecuatoriana experimentó
una aceleración en su desarrollo, caracterizada por los efectos de una crisis inicial, del
gran auge de los setenta y de una nueva y aún más profunda crisis en los ochenta y
noventa.
En medio de la elevación del clima contestatario de los años sesenta, alimentado por la
influencia del triunfo cubano, se fue gestando una ruptura con las formas culturales
tradicionales. El debilitamiento de las organizaciones de izquierda, dentro de la escena
política nacional, en una coyuntura en la que el marxismo y el socialismo estaban en
ascenso, las confinó en su accionar casi exclusivamente a la Universidad y otras
instituciones de cultura. El arte militante fue la constante. Así se dieron importantes
desarrollos en la Literatura, especialmente en el relato, y en la plástica. La música
popular y de protesta, así como la influencia del rock en los niveles sociales más
elevados, canalizaron las expresiones contestatarias prevalecientes.
En la década de los setenta y bajo el régimen de sucesivas dictaduras, la ausencia de
participación electoral reforzó más aún el aislamiento de movimiento artístico de la
escena política nacional. Por otra parte, una inédita cantidad de recursos económicos
generados por la exportación petrolera, se canalizaron desde el Estado al mecenazgo
artístico y cultural, así como a la educación. Pero si bien eso evitó rupturas
espectaculares, más bien alimentó el desarrollo artístico de línea crítica y el crecimiento
de las instituciones educativas, especialmente la universidad, que se planteó una nueva
reforma, cuyo mentalizador fue Manuel Agustín Aguirre.
En los años de auge y los ulteriores de crisis en los ochenta, ya no fueron la literatura y
la plástica las formas más desarrolladas de la conciencia, como en los años treinta, sino
las ciencias sociales. El pensamiento económico tuvo exponentes como el propio
Aguirre, en tanto que la Sociología llegó a sus épocas de madurez científica con el
trabajo de ensayistas y pensadores de izquierda como Agustín Cueva. También en el
campo del análisis socio-económico se destacaron Fernando Velasco Abad, visionario
mentalizador de la renovación socialista, y Osvaldo Hurtado Larrea, dirigente político e
ideólogo del ascenso reformista.
En el campo de la Antropología se han dado significativos avances, y en la
investigación histórica las últimas décadas han atestiguado un rápido giro de posturas
conservadoras a tendencias crítico-progresistas que se han sistematizado en la Nueva
55 Historia del Ecuador. La Filosofía y la Historia de las ideas han experimentado un
significativo impulso con trabajos decisivos de Hernán Malo y Arturo Andrés Roig.
En medio de un vigoroso despertar indígena y afroecuatoriano, las manifestaciones de
cultura popular han cobrado mayor fuerza, aunque la masificación de los medios de
comunicación, especialmente de la televisión, fuertemente influenciada por contenidos
exógenos, representan una presión muy fuerte de desnacionalización y dispersión
cultural. Las mujeres, al cabo de varias décadas de reclamo por mayor participación
política, han encontrado también ciertos espacios en el desarrollo de la cultura. Su
contribución al sistema educativo es mayoritario.” (AYALA MORA, Enrique, 2000).
2.3.5.3. Período Democrático (1979-2011)
La posición de la Iglesia Católica y la actitud del Gobierno hacia la Iglesia siempre ha
sido de cooperación y de diálogo. Casi todos los gobiernos de turno, durante el período
democrático han demosatrado un gran respeto a las Iglesia y han reconocido el papel
histórico que tiene la misma en el país.
En 1979 Jaime Roldós y Osvaldo Hurtado asumen el poder constitucional; dando inicio
a una nueva etapa en la que retornaba la democracia. El 24 de Mayo de 1981 Jaime
Roldós muere en un accidente aéreo, con lo que el vicepresidente Hurtado asumió la
presidencia.
Después del alternativo gobierno de Hurtado le preside León Febres Cordero del partido
Social Cristiano de 1984 a 1988 quien en su gobierno ejecutó formas neoliberales dando
a los banqueros y comerciante una emancipación de la exportación y su poder
económico.
En la administración del mandatario Febres Cordero, Ayala Mora, p.112, dice: “desde
su inicio, la administración de Febres Cordero enfrentó a las demás funciones del
Estado y a la oposición que denunció sistemáticamente numerosos hechos de corrupción
gubernamental y violaciones a los derecho humanos.”
En 1988 el candidato Rodrigo Borja de la Izquierda Democrática, es elegido Presidente;
como, ante la contra de la derecha. En su gobierno, Borja planteaba la reconstrucción de
la democracia en el país, así como la exoneración del neoliberalismo, entablándose una
mejora en la economía del Ecuador.
56 Con las elecciones de 1995 se eligió presidente a Sixto Durán Ballén, en su gobierno se
asentaron las bases para un modelo empresarial; que en conjunto con políticos de viejos
partidos, promovieron a la modernización del Estado mediante las privatizaciones del
sector público, por lo que retornaron los conflictos de los grupos sociales. E incluso
hubo escándalos de corrupción, que involucraron al vicepresidente Alberto Dahik, quien
se vio obligado a salir del cargo y salir del país.
En 1995 el Ecuador tuvo enfrentamientos graves con tropas peruanas, al hecho, el
gobierno acogió la unidad nacional, deteniendo al invasor.
Ecuador ha sido la democracia más inestable de América Latina desde hace un decenio.
Desde 1996 ha tenido ocho presidentes, tres de los cuales fueron derrocados por el
Congreso y por las protestas callejeras. El Estado de derecho se ha ido debilitando
progresivamente y, pese a los muchos intentos de reforma, como la promulgación de
una nueva Constitución en 1998, el sistema político se ha vuelto en gran parte
disfuncional. Además, Ecuador sufrió una de las peores crisis económicas del
continente, con hiperinflación y el desplome de su sector bancario en 1999.
Comenzando por la destitución del presidente Abdalá Bucaram por el Congreso y las
protestas callejeras en 1997, la regla en este país han sido los gobiernos temporales
débiles.
Para el siguiente gobierno es necesario recalcar lo dicho por Juan Paz y Miño Cepeda,
en: “Ecuador las raíces del presente”, (p. 172, 173): "En las elecciones de 1996 triunfó
el líder popular Abdalá Bucaram, auspiciado por el PRE. Pero su gobierno apenas se
sostuvo seis meses. Durante ellos Bucaram hizo gala de sus propios espectáculos de
tarima. Además, de las acciones de gobierno aprovechó un estrecho círculo de
empresarios, familiares y amigos. La imagen del Estado como botín político y
económico ha escandalizado a la opinión pública nacional, (…). Por algunas horas
sucedió a Bucaram su Vicepresidenta Rosalía Arteaga. Como consecuencia de los
arreglos políticos a su interior, el Congreso designó finalmente a Fabián Alarcón
Rivera, dirigente de FRA, como sucesor constitucional en calidad de presidente
Interino."
57 En la Asamblea de 1998 expide una nueva Constitución que cambió a la de 1979.
Además encaminó las nuevas elecciones de donde fue elegido Presidente a Jamil
Mahuad, quien dos años más tarde, en enero del 2000 la inconformidad de la sociedad
ante la política del mandatario, lo llevaron a su destitución; esto a través de un
Triunvirato, encabezado por el General Carlos Mendosa, el abogado Carlos Solórzano y
el representante indígena Antonio Vargas; sin embargo tal triunvirato duró poco y el
Congreso nombró al vicepresidente Gustavo Noboa como nuevo jefe de Estado.
El gobierno de Rafael Correa, del movimiento Alianza País (AP), quien asumió la
presidencia en enero y disfruta de una tasa de aprobación sin precedentes, está aplicando
una “terapia de choque” para contener a la desacreditada oposición y allanar el camino
para la celebración de una asamblea constituyente (AC) cuyo propósito es producir “un
cambio profundo, radical y rápido”. Esto propició uno de los choques más fuertes entre
las ramas del poder desde el retorno a la democracia en 1979, incluida la destitución,
por parte del Tribunal Supremo Electoral, de 57 congresistas de la oposición en marzo,
medida que provocó violencia callejera. El presidente Rafael Correa, elegido en
noviembre de 2006 y posesionado de su cargo el 15 de enero de 2007, ha prometido
realizar un “cambio rápido, radical y profundo” en Ecuador. Es algo que sin duda
requiere un país que durante el último decenio ha sido la democracia más inestable de
América Latina.
Correa, un economista joven que durante poco tiempo ocupaba el cargo de ministro de
Economía en el gobierno de Alfredo Palacio (2005-2007) y era prácticamente
desconocido en el terreno político, llegó al poder con el apoyo de un movimiento
político iniciado por intelectuales de izquierda después de la caída del presidente Lucio
Gutiérrez en abril de 2005. Su gobierno se considera como la vanguardia de una
“revolución ciudadana” que promete enterrar los males del antiguo sistema. Estos
incluyen el poder de veto de los partidos tradicionales en el Congreso que, según
indican las encuestas, la mayor parte de los ecuatorianos percibe como corruptos; la
politización de instituciones estatales clave, entre ellas el sector judicial y la Corte
Electoral; la marcada pobreza y desigualdad social; y la capitulación de las élites frente
a intereses extranjeros. La campaña electoral de Correa puso énfasis en su promesa de
celebrar una asamblea constituyente encargada de redactar una nueva Constitución; su
58 propuesta recibió un respaldo abrumador en el referendo del 15 de abril de 2007 y en la
actualidad ocupa un lugar central en las políticas gubernamentales.
La condición actual del país, es el espectro de las circunstancias vividas a través de la
historia.
59 CAPÍTULO III
3. METODOLOGIA
3.1. Tipo de investigación
Investigación
estrictamente bibliográfica, en base a referencias históricas y a
investigaciones realizadas por los diferentes autores a los que nos remitiremos en
nuestro trabajo.
3.2. Prueba de hipótesis
No realizaremos una comprobación numérica de la hipótesis, debido a que nuestra
investigación es estrictamente bibliográfica. Sin embargo los diferentes documentos
históricos y las distintas Instituciones emblemáticas de nuestro país dedicadas a la
educación de la niñez y la juventud, dan fe de los grandes aportes que la Iglesia Católica
ha hecho a la Educación en nuestro País desde la llegada de los primeros misioneros a
nuestro continente hasta nuestros días.
3.3. Métodos de estudio
Los métodos que utilizaremos en el presente trabajo son los siguientes:
A) El Inductivo el cual se fundamenta básicamente en el raciocinio ya que implica un
análisis organizado, coherente y lógico del problema de investigación. En nuestro
trabajo partimos, de hecho, de la Inducción. Del análisis de casos particulares, llegamos
a una afirmación general. Partimos de la enumeración de los diferentes aportes de las
Congregaciones Religiosas de la Iglesia Católica o de algunos personajes en particular,
para llegar a afirmar que “la Iglesia Católica ha hecho valiosos aportes a la Educación
en el Ecuador, desde la Colonia hasta el presente siglo”.
B) El método deductivo, según plantea Carlos Méndez en su texto sobre Metodología.
“A partir de situaciones generales se llegan a identificar explicaciones particulares
contenidas explícitamente en la situación general.
60 En nuestro tema, en la gran Institución Iglesia Católica, se enmarcan las diferentes
Congregaciones Religiosas y algunos personajes, pertenecientes a la misma, que con su
trabajo comprometido, han hecho en nombre de la Iglesia encomiables aportes a la tarea
educativa en el Ecuador. De ahí que, por deducción diremos: “La Iglesia Católica con
sus representantes y con sus diferentes Congregaciones Religiosas, pertenecientes a
la misma, ha hecho valiosos aportes a la Educación en el Ecuador desde la colonia
hasta el siglo XXI”.
C) Otro método conocido es el que se conoce como del Análisis y Síntesis; para lo cual
el investigador inicia su análisis identificando cada una de las partes del fenómeno para
posteriormente llegar a un conocimiento integral y más complejo. En otras palabras, un
análisis cuidadoso descompone el todo en partes para su estudio y la síntesis relaciona
esos elementos y genera explicaciones a partir de su estudio detallado.
En nuestro tema, partimos del Análisis de cada uno de los aportes de las diferentes
Congregaciones Religiosas que se hicieron presentes en el Ecuador desde el tiempo de
la Colonia hasta nuestros días o de algunos insignes personajes de la Iglesia Católica
que han trabajado desinteresadamente por impulsar la Educación en el Ecuador. En la
Síntesis relacionamos las diferentes fundaciones de Escuelas, Colegios, Universidades u
otras Instituciones Educativas con la Misión de la Iglesia Católica de Enseñar a la niñez
y a la juventud, justificando así su gran aporte a la sociedad ecuatoriana.
D) Especialmente, nos basaremos en el Método Histórico- Crítico, ya que la presente
Disertación tiene un contenido estrictamente histórico - Bibliográfico. A través de la
Investigación Bibliográfica, recurriendo a las fuentes históricas hemos extraído los
principales textos a través de los cuales se demuestra el aporte positivo de la Iglesia
Católica a la Educación de la niñez y la juventud ecuatorianas.
3.7 Técnicas e instrumentos
Información Cuantitativa y Cualitativa.
Nuestra principal técnica se sustenta en la Investigación. En nuestro caso, la
investigación será estrictamente bibliográfica.
61 Toda investigación sustenta sus procesos en datos expresados bajo diferentes
magnitudes que luego de ser recopilados clasificados, analizados e interpretados se
convierten en información de carácter cuantitativa.
De hecho, al finalizar nuestra exposición. Presentaremos un catálogo completo de todas
las Instituciones educativas que hoy están regentadas por entes de la Iglesia Católica en
nuestro país.
De otra parte, en toda investigación es necesario considerar la información cualitativa la
cual puede estar expresada, por ejemplo, en términos de normas, reglamentos, leyes,
decretos, manuales e instructivos que de una u otra forma pueden contribuir o limitar
determinadas decisiones relacionadas con una investigación en el marco de regulaciones
o estímulos.
62 CAPÍTULO IV
4. RESULTADOS Y ANÁLISIS
4.1. La educación durante la Época Colonial
4.1.1. Escuelas, Colegios, Seminarios y Universidades
Una vez organizada la vida colonial, las tareas pedagógicas estuvieron en manos de los
religiosos, necesariamente ellos eran los más aptos para ese propósito, si tomamos en
cuenta que los primeros inmigrantes peninsulares que venían a la conquista de estos
territorios, tenían más de aventureros y guerreros que de maestros y pedagogos.
“La obligación misma de cumplir con las tareas de evangelización hacía que por fuerza
los misioneros se involucraran en la enseñanza y que naciera de ellos la iniciativa de ver
la forma, por rudimentaria que fuera, de abrir aulas para instruir no solamente a los
indígenas sino también a los niños criollos y mestizos, hijos de los primeros pobladores.
Los primeros años fueron de conocimiento de los pueblos a los que se debía cristianizar,
lo que obligaba a los misioneros a comenzar por el aprendizaje de las lenguas y
dialectos que hablaban los pueblos nativos, además, entender su mentalidad, costumbres
y hábitos, y reconocer sus valores culturales.” (BORGES, Pedro, Misión y civilización
en América, Ed. Alhambra, Madrid-España, 1987, págs. 53-55)
Luego venía la tarea de transmitirles y hacerles entender las primeras palabras que
nuestros indígenas deberían acostumbrarse a usar del castellano para de esta manera ir
eliminando la terrible barrera del idioma, que en aquellos días separaba a las dos
repúblicas, la de los indios de la de los españoles. De la oralidad, se pasaría a lo escrito,
con el andar del tiempo.
Se ha dicho que los primeros años fueron un período en que se cristianizaba
educándose, puesto que los religiosos, por su parte, tenían que capacitarse antes de
recibir una parroquia; estaban obligados a conocer más lenguas y dialectos en la medida
que se iban ganando más pueblos en las diferentes regiones quiteñas. Para ello se
establecieron cátedras de lenguas nativas en los conventos. Los clérigos debían pasar y
aprobar los cursos como un requisito más de aptitud para presentar sus nombres a las
oposiciones de beneficios. Enseñar y aprender el castellano, enseñar y aprender las
63 lenguas y dialectos locales serían los primeros esquemas de enseñanza en los territorios
de Quito.
“Desde los primeros tiempos de conquista se estableció en Quito una Escuela para la
enseñanza de la lengua del Inca, escuela que estuvo confiada a los Dominicos. Sus
catedráticos recibían de la Caja Real los valores correspondientes a sus salarios y en sus
aulas se formaron los primeros seminaristas quiteños para aprobar esa materia
obligatoria como parte de la formación de misioneros”.2
4.1.1.1. Enseñanza escolar
Dentro de la historiografía nacional sigue siendo afirmación no rebatida el que los
franciscanos fueron los que establecieron en su convento el primer plantel escolar del
período hispánico de que se tiene noticias. Para 1552 se hallaba en funcionamiento con
el nombre de Colegio San Juan Evangelista. Fray Francisco Morales, siguiendo la
experiencia adquirida por su comunidad en México, organizó este plantel con la
finalidad de educar tanto a los hijos de los caciques de los indígenas principales, y de
educar y amparar a todos los indígenas, mestizos y españoles huérfanos, y a personas de
cualquier condición para que en forma gratuita aprendiesen gramática, canto llano,
canto de órgano, leer, escribir y las oraciones de la Iglesia.
Esta obra demostraba el espíritu democrático y de solidaridad de los franciscanos en
beneficio de los menos favorecidos de una sociedad marcada por contrastes y
contradicciones. Era por lo tanto una escuela popular y gratuita concebida en base a la
experiencia de los frailes menores. Además se enseñaba Quichua a fin de propender a la
unificación idiomática entre el propio sector indígena. En el territorio de la Audiencia
de Quito se hablaban más de veinte idiomas, son contar con los dialectos; numerosos
pueblos no hablaban la lengua del Inca.3
Poco tiempo duró este plantel, en 1555 fue reedificado y se cambió su nombre por el de
San Andrés, pero mantuvo el mismo espíritu, finalidad y programas de enseñanza. Dada
su importancia, recibió apoyo del Gobernador de Quito, Gil Ramírez Dávalos, quién
solicitó al Virrey del Perú que la Real Hacienda lo socorriese. En respuesta a este
2
GONZÁLEZ SUÁREZ, Mons. Federico, Historia General de la República del Ecuador, Tomo 3, Imprenta del Clero, Quito, 1892, pág. 329. 3
Ibíd. págs. 334‐338. 64 requerimiento, se le adjudicó dos pueblos de indígenas en vía de encomienda para su
sostenimiento, el mismo gobernador pidió se instruyera al Obispo y Cabildo para que no
pusiesen impedimentos para que los niños asistan a recibir sus clases.
Las rentas recibidas resultaron cortas, lo que no permitía que el colegio funcionase
regularmente. Hay que tener en cuenta que en él había internado y seminternado, a los
alumnos se los asistía en la salud, se les dotaba de útiles escolares y se pagaba a los
profesores. El cuerpo docente estaba formado por religiosos y seglares y entre éstos
últimos, algunos eran indígenas; algunos profesores contaban con ayudantes, que venían
a ser parte del profesorado.
El Colegio San Andrés presentaba ciertas características de un Instituto Normal en el
que se preparaban maestros que en su turno difundían las primeras letras y artes,
especialmente, la música y los oficios. De allí salían albañiles, carpinteros, barberos,
plateros, pintores, imagineros. Era, en resumen, escuela de primeras letras, escuela de
artes y oficios y casa de huérfanos, que tenía especial predilección por los indígenas y
por los más pobres.
A pesar del poco tiempo que duró el plantel, sus resultados fueron permanentes porque
la capacitación que dieron a los artesanos que se formaban allí, fue útil para la sociedad
colonial cuando esos egresados se iban incorporando al mercado de trabajo con alguna
destreza u oficio mediante atender las demandas sociales y ganar dignamente su
sustento.4
Ante la imposibilidad de que los franciscanos continuaran manteniendo su colegio, más
que por razones de carácter económico, por la oposición que se les hacía, el Tribunal de
Quito determinó suspender las labores de enseñanza de los franciscanos y entregarlo a
la comunidad del los Padres Agustinos. Por esta determinación, la instrucción básica de
indígenas, blancos pobres y mestizos pasó de Colegio San Andrés al Colegio de San
Nicolás de Tolentino, regentado por los frailes de San Agustín, quienes siguieron el
modelo pedagógico de los franciscanos y mantuvieron la gratitud de la misma.5
4
TOBAR DONOSO, Julio, 1953, La Iglesia, modeladora de la nacionalidad, Ed. Prensa Católica, Quito, Págs. 216‐220. 5
Ibid. Pág. 221. 65 Por los mismos años los mercedarios también contaban con una escuela de primeras
letras en su convento, también para la enseñanza de los hijos de los caciques e hijos de
los españoles pobres, a esta escuela también concurrían las niñas. Había sido organizada
por fray Martín de Victoria. La historiografía y la falta de fuentes documentales no
permite seguir la huella de este establecimiento durante la Colonia, hay un vacío de
información hasta llegar a 1817, año en el cual, el Provincial de Quito solicitó a Julio
Fernando VII la apertura de una escuela, la cual se estableció junto a la capilla de San
Juan de Letrán.6
En toda la audiencia, durante el siglo XVI, administradas por religiosos, se
establecieron escuelas de primeras letras para la enseñanza de huérfanos indígenas.7
Más tarde, en 1668, pocos días después de fundado el Colegio San Fernando, el
provincial de predicadores estableció una escuela en los portales del establecimiento
para la enseñanza de la niñez; pobres y ricos, aprendían a leer, escribir y la Doctrina
Cristiana. Este plantel tenía el nombre de Escuela de la Caridad.8
Así como en las áreas urbanas hubo atención a la enseñanza de la niñez, en las zonas
rurales la preocupación sobre este tema estuvo presente, aunque con más limitaciones.
Las escuelas del campo estuvieron regentadas por los párrocos y doctrineros, su
principal interés era difundir el castellano, sin embargo en muchas de ellas el maestro
era el sacristán o el maestro de capilla, personas con notorias limitaciones pedagógicas,
lo que repercutiría en los resultados. Estas tareas se las hacía en cumplimiento de las
constituciones conciliares y sinodales de Lima y Quito que responsabilizaban a párrocos
y doctrineros el establecer en sus parroquias o doctrinas aulas para escuelas de primeras
letras, en donde los niños de la feligresía aprendiesen castellano, a leer y escribir, a
cantar y contar y las oraciones de la Doctrina Cristiana.9
Además de los franciscanos, mercedarios, dominicos y agustinos, en los colegios de los
Padres de la Compañía de Jesús de Guayaquil, Loja, Cuenca, Ibarra y Latacunga se
mantenían escuelas primarias y clases de gramática latina. A comienzos del siglo XVIII
6
PROAÑO, Fr. Luis Octavio, om, La Orden de la Merced y la Educación en el Ecuador, Quito, 1999. TOBAR DONOSO, Julio, op. cit. Págs..221‐222. 8
VARGAS, Fr. José María, Historia del Ecuador, siglo XVI, Edit. Santo Domingo, Quito, pág. 197. 9
MORENO EGAS, Jorge, Las Doctrinas de la Audiencia de Quito en los siglo XVI y XVII, Revista del IHEE, nº 11, Pág. 21, Quito. 7
66 se estableció en Quito la Comunidad de los Hermanos de Belén, no solamente
encargados del cuidado de los enfermos del Hospital de la ciudad, sino también para la
enseñanza de los niños, servicio éste que se sumaba a otros que esa comunidad, nacida
en Guatemala, prestó en tierras quiteñas.10
A lo largo de la época hispánica la enseñanza primaria estaba casi totalmente en manos
de la Iglesia, el número de alumnos que pudo ser atendido por los maestros de primeras
letras pagados por los Cabildos fue marcadamente menor con respecto al número de
niños que pasaron los las aulas regentadas por el clero secular y de los conventos.
Las escuelas dirigidas por seglares eran pagadas, lo que limitaba el número de alumnos
que pudiesen asistir, el carácter gratuito de las otras era un incentivo que podía ser
aprovechado por todos. Las aulas de los planteles del sector eclesiástico estaban abiertas
preferentemente para los varones, no hubo escuelas especiales para las niñas. Los
esquemas y valores que regían a la sociedad de esos siglos y que pesaban sobre el
comportamiento y actitudes de las personas, daba muy poca importancia a la formación
de la mujer, y esto hacía que la enseñanza fuese fragmentada con preferencia para el
hombre. Sin embargo, las niñas de la élite o aquellas cuyos padres tenían el deseo y los
medios para hacerlo, tenían el derecho a acceder a alguno de los monasterios femeninos
de vida contemplativa o al beaterio, y con autorización del prelado entraban en la
clausura para recibir instrucción de parte de las religiosas. Para la ciudad de Quito, el
convento de las religiosas de la concepción y el Beaterio desempeñaban esa función, a
ellos concurrían las hijas de las familias importantes de la capital para aprender a leer,
escribir, manualidades, repostería y, en fin, todo aquello que tenía que saber una mujer
que con el tiempo estaría dirigiendo un hogar y una casa. Siendo estos espacios un
privilegio para las élites, lógico es comprender que las niñas mestizas, indígenas o
negras no tuvieron acceso a esta clase de formación. Fue frecuentemente que familias
acomodadas pagasen a maestros de primeras letras para que en sus casas enseñasen a
leer, escribir y contar a sus hijos e hijas.
Los resultados de la enseñanza escolar no solamente dependían del número de escuelas
que abrían sus aulas de manera gratuita para instrucción de la niñez, dependían también
10
GONZÁLEZ SUÁREZ, Mons. Federico, op. cit. Tomo 5, págs. 14‐15 67 de la capacidad pedagógica de los docentes, de la importancia que daba la sociedad a la
formación de sus hijos y de la utilidad que la gente de entonces veía en mandar a sus
hijos a que aprendiesen a leer, escribir y contar. La respuesta a estas motivaciones
variaba dentro de los distintos sectores sociales. Las actitudes de los habitantes de las
áreas urbanas, no eran las mismas que los habitantes del campo. Los sectores urbanos y
los sectores rurales no tenían las mismas motivaciones y estímulos, el peso de las
estructuras sociales y económicas tenían diferentes formas de respuesta entre unos y
otros.
Los criollos, mestizos, indígenas y africanos de las ciudades vivían en un entorno en
que se medían las diferencias, donde saber leer y escribir tenía importancia, y era la
base para una instrucción superior futura, que garantizaría mejores situaciones, si había
la ocasión para hacerlo; no así los habitantes de áreas rurales, para quienes la enseñanza
escolar no les reportaba mayores beneficios prácticos. Para los indígenas, más útil era
ocupar a sus hijos desde muy temprana edad para que juntos con los padres, colaboraran
en la labranza de la tierra, o les ayudaran a completar tareas en un obraje.
Los niños indígenas representaban una fuerza de trabajo útil para el jefe de familia que
podía desaprovecharse si los mandaban a la escuela. Las tareas y roles que el sistema
colonial determinó para el indígena y para el africano, para el habitante rural en general,
demandaban poco de una formación formal en un plantel, más útil y efectivo fue que los
niños desde pequeños se fueran involucrando junto con sus progenitores o junto a las
cabezas de comunidad en el cultivo de la tierra, el cuidado de los animales, en las
labores de los obrajes, en las cuadrillas que cumplían trabajos dentro del turno de la
mita, en un taller artesanal, en la arriería llevando los fardos de los mercaderes de un
lugar a otro dentro de las rutas del comercio colonial; esa era la escuela práctica de
formación.
Las estructuras sociales y económicas coloniales precipitaron al fracaso la enseñanza
escolar de la Colonia. Si consideramos lo que cronistas de la época comentaban sobre el
número de habitantes que sabía leer y escribir a nivel global, era una sociedad
analfabeta y si tomamos en cuenta que la mayor parte de la población era indígena. No
todos los mestizos iban a la escuela, ni los africanos ni las mujeres de todos los estratos.
Podemos decir que no faltó por la Iglesia, la falla fue del sistema. De otra parte, al igual
68 que en el caso de las mujeres, la enseñanza resultaría fragmentada en beneficio de los
habitantes urbanos. Pero no hay que perder de vista que las escuelas de enseñanza
primaria de la Iglesia siempre tuvieron abiertas sus puertas de manera gratuita para
todos.
4.1.1.2. Colegios
Quienes han estudiado la evolución histórica de la educación en la Presidencia de Quito
afirman que el despegue en la formación de la juventud en estas regiones en el período
hispano a nivel secundario arranca con la llegada de los religiosos de la Compañía de
Jesús. Poco tiempo después que se estableció esa comunidad comenzó a gestionar la
autorización para la fundación de un plantel de segunda enseñanza, que arrancó de la
escuela elemental que con el nombre de San Jerónimo habían organizado en su primera
casa, en la parroquia de Santa Bárbara.
En 1588 inició el curso de gramática y en 1591 se abrió filosofía y con estas cátedras
nacería el Colegio San Ignacio. La enseñanza era completamente gratuita, solamente los
internos pagaban por su alimentación. En la medida en que la Compañía de Jesús
llegaba a otras ciudades y villas, la oportunidad para seguir los estudios medios, se
hacía presente en gran parte del territorio de la Audiencia, era una alternativa de
superación para la juventud local. La enseñanza intermedia comprendía siempre otros
cursos de gramática que podían ser complementados con cátedras introductorias de
filosofía, no se comprendía la existencia de un colegio sin la gramática.
Para la época de la expulsión de la Compañía de Jesús del Imperio Español y sus
dominios, en la Presidencia de Quito se hallaban establecidos y en pleno
funcionamiento, a más de en Quito, Colegios en: Cuenca, fundado en 1532; Popayán,
fundado en 1640; Ibarra, establecido en 1684; Latacunga, fundado en 1693; Riobamba,
que se organiza a comienzos del siglo XVIII; Guayaquil, fundado en 1705 y el de Loja,
fundado en 1727.
Los Colegios de Cuenca, Popayán, Ibarra, Latacunga, Riobamba, Guayaquil y Loja,
paralelamente mantenían escuelas de primeras letras; en la de Guayaquil, con la
69 supervisión de los jesuitas, colaboraban como docentes, seglares. En la Residencia de
Ambato, organizada en 1747, se dictaba un curso de gramática.11
En los Colegios de la Compañía de Jesús mencionados, al igual que en sus escuelas de
primeras letras, la enseñanza era gratuita para ricos y pobres. A sus establecimeintos no
solamente asistían jévenes nacidos en nuestra Audiencia, sino también oriundos de los
virreinatos vecinos y aún de lugares más lejanos. El cuerpo de docentes de la
comunidad estaba compuesto de religiosos nativos de América, de España y de otros
países europeos que habían llegado a esta provincia pese a la resistencia del Consejo de
Indias para autorizar la venida de religiosos extranjeros.
En el Convento de San Francisco existían también aulas de Artes y Teología,
seminarios y noviciado, contaba con lectores de Teología Escolástica, Lógica, filosofía.
A fin de mejorar los estudios, fray Dionisio guerrero consiguió la erección del Colegio
San Buenaventura en la segunda mitad del siglo XVII y también el Colegio de Misiones
que se estableció en Pomasqui. En el Colegio de San Diego, también de los
franciscanos, se dictaban Filosofía y Teología.12
En el Convento de la Merced existían aulas para dictar cursos de gramática y latín para
sus novicios, a las cuales podían concurrir seglares.13
4.1.1.3. Seminarios
Paralelas a las necesidades de enseñanza de la niñez y de la juventud, desde los
primeros tiempos de la vida colonial se hizo sentir y como una urgencia también la
necesidad de capacitar al clero, regular y secular, con programas de estudios superiores.
Al fundarse las órdenes regulares y establecer sus noviciados, fue imprescindible
establecer cátedras para instrucción y enseñanza de los religiosos. Los dominicos
organizaron sus programas incluyendo clases de latinidad, Teología, Escolástica y
Moral, a las cuales podían acceder seglares.
11
TOBAR DONOSO, Julio, 1953, La Iglesia, modeladora de la nacionalidad, Ed. Prensa Católica, Quito, Págs. 230‐233. 12
VARGAS, Fr. José María, Historia de la Cultura Ecuatoriana, Edit. Casa de la Cultura Ecuatoriana, Quito, Págs. 222‐224. 13
MONROY, Fr. Joel, O.M., El Convento de la Merced de Quito 1700‐1800, Imprenta del clero, Quito. 70 El Concilio de Lima de 1567 ordenó a los obispos la fundación de Seminarios y
colegios de niños; fray Pedro de la Peña, obispo de Quito, fundó un Seminario Menor
en su propia casa con la Cátedra de Humanidades; ese pequeño Seminario servía para
formar a los clérigos. Una vez trasladado el plantel a la Catedral se llamó a los
Dominicos para atenderlo ya que habían reorganizado los estudios de su comunidad y
tenían experiencia. Luego de la muerte de Monseñor de la Peña, el Cabildo Eclesiástico
trató de consolidar la existencia de ese Seminario y para ello consideró que la mejor
alternativa era entregarlo a la dirección de los religiosos de la Compañía de Jesús.14
También en los conventos de los Dominicos de Cuenca, Loja y Pasto existían cursos de
gramática, artes y rudimentos de Teología con los que podían los estudiantes alcanzar
las órdenes menores. Los Agustinos y Mercedarios tenían también su programa para
religiosos y seglares. Las comunidades, unas y otras, se daban la mano para
perfeccionar a sus miembros.15
El 22 de junio de 1592 el rey de España había expedido una Cédula por la cual pedía
que el Obispo de Quito fundase cuanto antes un seminario bajo el patronazgo de la
Corona. El 15 de junio de 1594 fray Luis López de Solís, contando con la autorización
del Virrey del Perú y del Provincial de la Compañía de Jesús, y satisfaciendo los deseos
del Cabildo civil, puso este Seminario bajo la dirección completa de los jesuitas que con
acierto y dedicación lo venían dirigiendo. En honor al Prelado de Quito y fundador del
establecimiento se le puso el nombre de San Luis. Él redactó los Estatutos y
Constituciones del Seminario en colaboración de los Jesuitas, en ellos se contenían las
condiciones de admisión de los alumnos, la distribución del tiempo, maneras de
dirección y enseñanza, obligaciones de los seminaristas y administración de los bienes,
además sería autónomo en sus relaciones con la Audiencia. A este Plantel de estudios
superiores ingresaron en ese año cuarenta colegiales hijos de los conquistadores y de la
élite colonial.
14
TOBAR DONOSO, Julio, La Iglesia, modeladora de la nacionalidad, Ed. Prensa Católica, Quito, 1953, Págs. 223‐225. 15
TOBAR DONOSO, Julio, Págs. 225. 71 4.1.1.3.1. El Primer Seminario
En la expedición de Diego de Almagro y Benalcázar encontramos como acompañantes
a los presbíteros Francisco Jiménez y Juan de Ocaña, que prestaron servicios religiosos
a los conquistadores. Del sacerdote Diego Riquelme sabemos que reemplazó al primer
párroco de la villa de san Francisco. Al fundador de Baeza (1556), Gil Ramírez
Dávalos, acompañó en la fundación de la villa el sacerdote español Manuel Díaz. Eran
también españoles con otros muy numerosos que llegaron, Miguel cabello Balboa y
Lope de Atienza, misioneros auténticos y autores de nota, respectivamente, de
Miscelánea Antártica, La verdadera descripción de Esmeraldas y Compendio historial
del Estado de los indios.
Al segundo Obispo, Monseñor Pedro de la Peña, organizador de la Diócesis, debemos la
fundación de lo que podría llamarse primer seminario en el año de 1566: comenzó la
gran obra humanística, de segunda educación, en la propia casa del Obispo. Además de
filosofía y Teología, dadas por los padres Juan Aller y Antonio Hervias,
respectivamente, catedráticos dominicos bien formados. El P. Aller no era un
improvisado: ya había dado clases en la Universidad de Lima; y el P. Hervias, que cursó
sus estudios filosóficos y teológicos en Salamanca y Valladolid, respectivamente, tuvo a
cargo las lecciones de Teología. Debieron de ser satisfactorias la doctrina y
personalidad del Padre, cuando fue promovido al Obispado de Cartagena. La enseñanza
de la lengua general del Inca corrió a cargo del lingüista P. Hilario Pacheco. Un grupo
selecto de clérigos salió de esta primera fundación, tales como el P. Diego Lobato, que
fue confesor del propio Ilmo. Pedro de la Peña.
Alrededor de 300 sacerdotes fueron ordenados por el Obispo de la Peña en el Primer
Seminario, lo que no fue del agrado de muchos, que acusaron al prelado de muy
condescendiente para ordenar presbíteros. De estos 300, apenas cuatro eran mestizos. Se
había anticipado el Obispo al criterio de Felipe II, que, por cédula de 2 de diciembre de
1568, prohibía incorporarlos en el sacerdocio.
72 4.1.1.3.2. El Seminario San Luis
El centro de estudios del segundo Obispo vino a ser un esbozo del Seminario San Luis,
cuya fundación corresponde propiamente al cuarto Obispo de Quito, el agustino Fray
Luis López de Solís. Este se constituyó formalmente en el Seminario de la Diócesis,
siguiendo la norma del Concilio Provincial de Lima (1567), conforme al Concilio de
Trento. El célebre Seminario de la Diócesis, que llevó el nombre del prelado, se fundó
el 12 de octubre de 1594 (carta del Obispo a Felipe II).
El 15 de junio de 1594 había entrado en Quito Fray Luis López de Solís con
autorización del Virrey de Lima y del Provincial de la Compañía de Jesús para poner el
Seminario en manos de los Jesuitas. Frente al Sagrario se construyó el primer plantel;
pero más tarde pasó al solar en que vemos levantada la iglesia de la Compañía de Jesús.
Prestigio sólido llegó a tener pronto el San Luis. Los maestros eran veteranos de letras y
virtud en Europa, y sus sabios Estatutos sirvieron de fuente de inspiración para
seminarios de Nueva Granada y Argentina. Tenía el plantel 22 becas en beneficio de
niños pobres, además de 24 que daba el Obispo, y en 1676 el Rey añadió 4, con
quinientos pesos anuales de la Real Hacienda.
Cuando llegó el primer decenio de la fundación del Seminario (1604), el Obispo decía
al Rey entre otras cosas: “han salido (del colegio) muchos clérigos virtuosos y con
buena suficiencia que ahora son curas con grande aprovechamiento de los indios y
descargo de la conciencia de Vuestra Alteza…" (TOBAR DONOSO, Julio Dr., La Iglesia modeladora de la nacionalidad, pág. 228).
En 1622 se erigió, adjunta al Seminario de San Luis, la Facultad Mayor o Universidad
de San Gregorio Magno, contribuyendo al engrandecimiento y fama del Colegio, al que
acudían desde Panamá y Popayán jóvenes de la mejor sociedad para el aprendizaje de
las Humanidades, Latín, Filosofía, Teología, Escritura Sagrada y aun Derecho
Canónico. Con justicia, pues, Carlos II le honró y condecoró con los títulos de
Seminario Real y Mayor, el 18 de marzo de 1697.
73 Las gestiones de los jesuitas para el establecimiento de una Facultad Mayor con el
privilegio de conferir los grados de Bachiller, Licenciado, Maestro y Doctor en Artes y
Teología, se iniciaron el año de 1617. El 8 de agosto de 1621 el Papa Gregorio XV
expidió su breve Insuper eminente. El 2 de febrero de 1622, Felipe IV comunicó por
Real Cédula el Breve de Gregorio XV, recomendando su cumplimiento.
Por orden de Monseñor Solís se edificó una sección destinada exclusivamente a los
hijos de los Caciques para que instruidos en asuntos de la Religión de Cristo, pudieran
transmitirla en sus comunidades. Nunca fue excesivamente grande el número de los
alumnos del Seminario, de treinta y cinco a cuarenta, y se lo regentó como si fuere otra
Casa de la Compañía de Jesús: severidad en los estudios y vida espiritual profunda. Sus
directores lograron importantes donaciones que les permitieron establecer veintidós
becas destinadas a niños pobres, el Obispo tenía para su disposición veinticuatro, la
Corona en 1676 añadió cuatro para las cuales la Real Caja entregaba 500 pesos anuales,
estas becas reales no estuvieron destinadas a quien las necesitaba por carecer de
recursos económicos, sino a los hijos de las altas autoridades de la Audiencia.
Era, por tanto, otro establecimiento de estudios de carácter gratuito, solamente los
internos, llamados también Colegiales, estaban obligados a cubrir los derechos de
manutención y para los cuales el Seminario también buscó fondos para ayudarles a
cubrir esos gastos. Los internos, a veces, pagaban por su manutención en especie, en los
libros de matrículas, frecuentemente, se anotaba que entregaban al Colegio cereales,
miel y otros artículos comestibles por cuenta de la pensión.
Los programas de estudios permitían formar tanto a los jóvenes que continuarían la
carrera religiosa en el Colegio Máximo de la Compañía como a los seglares; a los
primeros se les ofrecía Gramática Latina y Teología, y a los seglares el programa
completo de primeras letras.
Hasta el año 1688, el Seminario de San Luis, juntamente con el Colegio franciscano de
San Andrés, establecido en 1555 por Fray Francisco Morales; y el agustiniano de San
Nicolás Tolentino fundado en 1581, y su Universidad de San Fulgencio, creada el año
de 1586 prestaron grandes servicios a la educación, especialmente de los llamados a las
órdenes sagradas.
74 En 1688 se estableció en Quito otro centro notable de enseñanza el Convictorio de San
Fernando con su Universidad de Santo Tomás de Aquino. Iniciada la fundación en
1671, por los dominicos Fr. Jerónimo de Cevallos y Fr. Ignacio de Quezada, la llevó a
feliz término en 1688, Fr. Bartolomé García, rindiendo óptimos frutos hasta establecida
la República.
La expulsión de los jesuitas el año de 1767, por orden de Carlos III, debilitó el
organismo de la Iglesia Ecuatoriana. Con justicia sintió honda amargura en su alma el
Presidente Dr. Dn. José Diguja, al ejecutar la despótica orden del monarca.
Expulsados los Jesuitas, el Presidente Diguja que había incautado la Corona, también
los bienes del Seminario San Luis, nombró Rector al Maestrescuela Dr. Dn. Antonio
Viteri; Vicerrector, al futuro Obispo patriota, Dr. Dn. José de Cuero y Caicedo; y
profesores, a conspicuos frailes franciscanos, con quienes el Seminario continuó
produciendo los antiguos frutos de virtud y aprovechamiento.
El Presidente, resolvió restituir al Obispo el gobierno espiritual del Seminario.
Entonces, el señor Obispo Ponce y Carrasco, reclamó las temporalidades del Colegio,
entablando juicio reivindicatorio. Enfurecido contra el Obispo, el Presidente José
Diguja clausuró el Seminario. Cosa de diez años permanecieron desiertos los claustros e
interrumpidos los estudios.
El año de 1784, el Sr. Obispo Blas Sobrino y Minayo pactó una transacción con el
Presidente Juan José de Villalengua y Marfil; y el 8 de enero de 1786, en medio del
júbilo general, con la asistencia del Obispo y Presidente, de los Cabildos, Religiosos y
Nobleza, tornaron a abrirse las puertas del Seminario San Luis.16
Fue elegido Rector el futuro Obispo de Santa Marta, Dr. Dn. José Alejandro Egüez y
Villamar, vicerrector el Dr. Dn. Mariano Barahona y Maestro de Sala, Dn. Rafael
Quiñónez, las cátedras estuvieron a cargo de acreditados eclesiásticos.
16
El Obispo Minayo legó por testamento la suma de 6000 pesos para la dotación de maestros a la Cátedra de Teología Moral. 75 Con la reapertura del Colegio Seminario San Luis, coincidió la refundición de las dos
facultades mayores existentes, en una sola, creándose entonces sí, una verdadera
Universidad: la de Santo Tomás de Aquino. Esto suscitó de parte de los Dominicos, un
largo y ruidoso pleito contra el Rector y Claustro de la nueva Universidad, hasta cuando
el rey Carlos IV, por Cédula de 20 de junio de 1800, aprobó dicha fusión.
En 1790, a Mons. Minayo le sucedió en el Obispado el Dr. José Pérez Calama, varón
cultísimo y fomentador de la cultura, Rector del Seminario en cuyo cargo se mantuvo
casi doce años, fue nombrado en 1791 el Provisor y Vicario General Dr. Dn. José duque
de Abarca que puso en gran predicamento al centro de estudios de la Presidencia de
Quito.
Honor y gloria de la Iglesia es un clero ilustrado y virtuoso. El Seminario de San Luis,
trabajó en esta primera época de su vida, y a medida de los tiempos, por cumplir
debidamente su misión. Díganlo, si no, entre otros, los quiteños Gaspar de Villarroel,
Obispo de Santiago de Chile; José Javier Aráuz, Obispo de Santa Fe; Juan Machado de
Chávez y Mendoza, Obispo de Popayán; Mateo Joaquín Rubio y Arévalo, Oidor,
Presidente interino de la Audiencia, Obispo de Cebú y Popayán; el santafereño
Francisco de Figueredo, Obispo de Popayán y Arzobispo de Guatemala; los limeños
Andrés García Zurita, auxiliar de Guamanga y titular de Trujillo; Andrés Paredes y
Armendáriz, Obispo de Quito; el prenombrado José Alejandro Egüez y Villamar, nativo
de Alausí y Obispo de Santa Marta; Manuel Nicolás rojas y Argendoña, de Santiago de
Chile, Obispo de Santa Cruz de la Sierra; José de Cuero y Caicedo, de Cali, Obispo de
Cuenca y de Quito; Francisco Javier de Fita y Carrión, de Sibambe, Obispo de Cuenca.
Hubo otros ilustres que sin recibir la mitra destacaron por su saber, virtud y ejecutorias
como un modesto párroco Cura del Quinche: el Dr. Dn. José Antonio Maldonado (en
175) cura del Sagrario, de la Academia de París, de quien escribe Monsieur de la
Condamine lo que sigue: “Este eclesiástico virtuoso juntaba a todas sus cualidades
amables, el encanto de la modestia, el que muy rara vez se acompaña de un mérito
superior. Le hallé en el Quinche que acababa de llegar a un viaje que había hecho de
tres leguas de montaña para confesar a un indio; tomando por descanso el estudio del P.
Malebranche: ocupación singular para un cura de la Indias Españolas; aunque es verdad
76 que este ejemplo saca por consecuencia, pues el que lo daba, era más propio para
gobernar una diócesis, que un curato de indios”.17
4.1.1.4. Universidades
Desde 1570, por iniciativa de fray Pedro de la Peña, se envió ante la Corte de Felipe II
el pedido de que se estableciera una Universidad en esta ciudad. El Cabildo Civil se
unió a esta solicitud y también hizo llegar su representación ante el monarca. La
Audiencia emitió informe favorable sobre el tema en 1581, la razón fundamental de este
interés nacía del número suficiente de estudiantes que cursaban en los conventos y que
deseaban continuar sus carreras con estudios superiores.18
Los religiosos agustinos que habían asumido la dirección del Colegio que antes fue de
los franciscanos comprendieron la justa aspiración de la sociedad para contar con un
establecimiento de estudios superiores y aprovechando de un viaje a Roma que debía
realizar el superior de Quito, Padre Gabriel Saona, solicitaron al Pontífice Sixto V el
permiso para establecer la Cátedra de Estudios Superiores en el Convento de San
Agustín. De otra parte, los agustinos interesaron a Felipe II el fundar una Universidad
en la Capital de la Audiencia de Quito. El Papa autorizó a los regulares de San Agustín
conceder los grados de Bachiller, Licenciado, Doctor y Maestro en Arte, Teología,
Cánones, Leyes y Medicina. La Bula del Pontífice data de 1603, pero la autorización del
Consejo de Indias, extendiendo el pase, demoraría hasta 1621.
Los religiosos sin esperar la determinación del Consejo, por decisión del capítulo
celebrado en diciembre de 1603, procedieron a erigir la Universidad de San Fulgencio
para entregar solamente a los religiosos de esa orden los títulos académicos autorizados
por Roma. Una vez conocido en Quito el pase regio, varios sacerdotes y regulares de los
otros conventos siguieron los programas que ofrecía esta Universidad y obtuvieron
17
Juan de Dios Navas, “Semanario de San Luis en la Colonia, 1594 a 1809”, Boletín de la Academia Nacional de Historia, págs.. 38 a 46, vol. XIII, núms. 36 a 39, año de 1936. 18
VARGAS, Fr. José María, Historia de la Cultura Ecuatoriana, Edit. Casa de la Cultura Ecuatoriana, Quito, 1965, págs. 65‐67. 77 grados académicos. Entre 1679 y 1769 se registran el nombre de cincuenta y siete
estudiantes que obtuvieron grados superiores en San Fulgencio.19
Parece que este Centro Educativo no tenía el dinamismo que otros, por ello, fray
Joaquín Izerta, como visitador de la Orden en 1775, limitó el derecho de conceder
grados superiores solamente a los alumnos de los agustinos, aquello sería un anuncio de
la supresión de la Universidad, lo que se concretó mediante Cédula Real de 25 de
agosto de 1786, firmada por Carlos IV que contiene el Decreto de extinción de este
Centro de Educación Superior.20
La Santa Sede, por Bulas de 22 de octubre de 1552, de 16 de agosto de 1561 y de 13 de
mayo de 1578, había dado facultad a la Compañía de Jesús para graduar a nivel superior
tanto a sus religiosos como a sus alumnos, años más tarde obtuvieron privilegios
adicionales; Felipe IV, por Cédula de 2 de febrero de 1622, autorizó la ejecución del
breve pontificio de Gregorio XV de agosto de 1621, que autorizaba a los Obispos
graduar a los que hubieren estudiado cinco años en los colegios de los jesuitas, cuando
en el mismo lugar no hubiere universidades de estudios generales.
En ese mismo año, 1622, el Padre Florián Ayerve, Provincial en Quito de la Compañía
de Jesús, presentó el breve ante la Audiencia para que sea pregonado, con el cual quedó
constituida la Universidad de San Gregorio autorizada a conferir grados académicos y
siguiendo el ejemplo del Colegio de Bogotá, intentaron alcanzar la facultad para graduar
en Cánones y Leyes, incluyendo al materia de Cánones en Teología Moral. Esta
propuesta fue negada por el Consejo de Indias, pero tiempo después se permitieron estas
cátedras a condición de que fuesen enseñadas por seglares.
En 1704, los programas del Colegio de Quito se equipararon con los del Colegio de
Bogotá y el programa incluyó Latinidad, Filosofía, Teología Moral, Dogma, Cánones y
Derecho civil. Más tarde, los jesuitas alcanzarían de manera perpetua la supresión de la
obligatoriedad de contar con docentes seglares.21 El ciclo de estudios duraba tres años,
19
VARGAS, Fr. José María, Historia de la Cultura Ecuatoriana, Edit. Casa de la Cultura Ecuatoriana, Quito, 1965, págs. 67‐70. 20
TOBAR DONOSO, Julio, La Iglesia Modeladora de la Nacionalidad, Edit. Prensa Católica, Quito, 1953, págs. 67‐70. 21
TOBAR DONOSO, Julio, op. cit., págs. 228‐236. 78 al término de los cuales se graduaban tanto los alumnos del San Gregorio como algunos
regulares y aquellos que habían seguido sus estudios en otros institutos, y recibían el
título de Doctor en Filosofía y Teología, Cánones y Leyes. Comenzaban los cursos el
día de San Lucas Evangelista y se anunciaba la nómina de profesores y la materia que
cada uno enseñaría.22
Desde el siglo XVI, el Convento de san Pedro Mártir de la Orden de Santo Domingo
había tenido un colegio o un estudio general con facultad de conceder títulos
académicos, estaba administrado por un Regente, un presentado o Viceregente, un
Maestro de Estudios y los Profesores. El grado de Lector se daba una vez aprobados
siete años de estudios, el Lector podía llegar a Presentado luego de siete años
ininterrumpidos de Profesorado y el Presentado a Maestro en Teología con siete años de
enseñanza, era pues, una carrera larga. Los tres primeros años estudiaban Lógica,
Metafísica y filosofía y los cuatro siguientes, la Suma Teológica de santo Tomás y
como complemento Sagradas Escrituras, Derecho Canónico e Historia de la Iglesia. A
más de los estudiantes de la Orden, concurrían a este plantel algunos clérigos y
estudiantes seglares.23 Para 1624, en el Colegio de los Dominicos, se hizo sentir clara la
aspiración de sus estudiantes de coronar sus estudios, también con grados superiores, se
presentaron las solicitudes a las autoridades del poder civil y eclesiástico, pero no se
concedió el permiso, porque la propuesta no se encontraba respaldada con la suficiente
dotación de rentas. El Capítulo Provincial de 1676, acordó llevar a efecto la fundación
de un Colegio para seglares y una Universidad, se obtuvieron recomendaciones de las
autoridades locales, civiles y eclesiásticas y para obviar la negativa que pudieren darles,
indicando que en Quito ya existía el Colegio de San Luis y la Universidad de San
Gregorio. Todos estuvieron de acuerdo en afirmar que esos Institutos no abastecían las
aspiraciones de muchos estudiantes que deseaban grados académicos, que la emulación
entre las dos Universidades servirían de adelanto en los estudios, que el pensamiento de
Santo Tomás sería el mejor respaldo doctrinal para eclesiásticos y seglares y que los
dominicos no solicitaban renta alguna de la corona. Más tarde se indicó que la
comunidad entregaba unas casas que poseían en la esquina de la plaza, se comprometía
a comprar las aledañas y adecuarlas para el Instituto, se donó la hacienda de Tocache y
22
VARGAS, Fr. José María, Historia de la Cultura Ecuatoriana, Edit. Casa de la Cultura Ecuatoriana, Quito, 1965, págs. 75‐76. 23
VARGAS, Fr. José María, Historia de la Cultura Ecuatoriana, Edit. Casa de la Cultura Ecuatoriana, Quito, 1965, págs. 185‐186. 79 las tiendas de los portales del Colegio. Luego de los trámites en Roma y en España, los
dominicos recibieron la Cédula de 10 de marzo de 1683, que les facultaba la fundación
del Colegio de San Fernando, bajo el Real Patronazgo y el pase de la Bula Pontificia de
Inocencio XI que facultaba al Colegio San Fernando fundar una Universidad de Santo
Tomás, que concediera grados en Ciencia.
Los religiosos de la Compañía de Jesús impugnaron estos documentos, manifestando
que las rentas ofrecidas por los Dominicos no eran suficientes para sostener el Colegio
de San Fernando. En este conflicto, el Presidente de Quito, Don Lope Antonio de
Munive, respaldaba a los predicadores, no así el Prelado, Señor de la Peña y
Montenegro, que se hallaba de parte de los Jesuitas. A pesar de que la fundación del
colegio quedó suspendida, la comunidad dominicana continuó adecuando el edificio
para Colegio y Universidad, había comprado la casa contigua y conseguido dotar tres
cátedras de Cánones que serían dictadas por seglares y orientadas para estudiantes
seglares que desearen estudiar Jurisprudencia, además, habían recibido en donación
otras haciendas y los religiosos que profesaban en esos días, donaban sus legítimas al
colegio. Con la muerte del Ilmo. Alonso de la Peña, las cosas se facilitaron en llegar a
Quito. Una Cédula Real de 21 de septiembre de 1685, que le ordenaba dar posesión a
los predicadores de la Universidad de Santo Tomás, los Frailes debían presentar el breve
que les autorizaba dar grados al igual que las Universidades de México y de Lima. El 28
de junio de 1688, tuvo lugar la posesión del colegio, poco tiempo después, en agosto de
ese año, se firmó un documento de Concordia entre Jesuitas y Dominicos, en el cual
cada comunidad establecía sus aspiraciones, se precisaron los exclusividades, tanto para
la una como para la otra y las relaciones y actos públicos en que los dos Institutos
debían Patrocinar y participar. En la práctica, la Universidad de Santo Tomás fue el
Centro de estudios eclesiásticos del clero regular, San Gregorio seguiría ofreciendo
grados superiores al clero secular y a los alumnos de los Jesuitas.24
El programa de Humanidades del Colegio comprendía: Gramática, Retórica y
Humanidades; el de Filosofía: Artes y diversos tratados de Filosofía; el programa de
Teología: Dogma y Moral; además, Derecho civil, Derecho Canónico, Medicina y
Sagrada Escritura. Filosofía dictaban los religiosos graduados del Convento, Cánones,
24
VARGAS, Fr. José María, Historia de la Cultura Ecuatoriana, Edit. Casa de la Cultura Ecuatoriana, Quito, 1965, pág. 219. 80 Leyes y Medicina, sacerdotes y seglares. Los certificados de finalización de estudios los
extendían luego de que los estudiantes hubieren aprobado tres años de estudios para
Artes, cuatro años para Teología, los certificados para los cursantes de cánones,
Medicina y Leyes, se seguían según los programas de las Universidades de México y
Lima.25
Con la expulsión de la Compañía de Jesús en 1777, quedaban sin dirección numerosos
planteles educativos de todo el territorio quiteños, el Colegio y Seminario de San Luis
se entregó a los franciscanos, la Universidad de San Gregorio fue extinguida por Cédula
de 1769, los Colegios que los Jesuitas habían regentado en las otras ciudades
desaparecieron. Los dominicos siguieron regentando el colegio de San Fernando y la
Universidad de Santo Tomás. Por Real orden de 1786, autorizó a la Junta de
Temporalidades para que en base a los estatutos de la Universidad de San Gregorio y la
Universidad de Santo Tomás se hiciese una refundición para una nueva Universidad,
manteniendo el nombre de Santo Tomás; se unificaron Cátedras y se debía dar posesión
de ellas a los más beneméritos; los grados se darían a nombre del Rey por el
Maestrescuela de la Catedral, las rentas para las Cátedras provenían de las asignadas en
las dos Universidades. La nueva universidad nacía según el modelo de las
Universidades de México y de Lima. La Sede de la Universidad de Santo Tomás se
trasladó al colegio Mayor y Seminario de San Luis. En los estatutos se señalan los
estudios de Prima y Vísperas de Teología Dogmática, recomendando la doctrina
tomista, Teología Moral, Prima de Leyes y Cánones, Vísperas de Cánones, Instituta,
Filosofía, Medicina y Latinidad.26
4.1.1.4.1. La Universidad de San Fulgencio
Fue la Universidad de San Fulgencio, regentada por los Agustinos el primer Centro de
estudios superiores en Quito. Hubo un proyecto anterior, de acuerdo a una Cédula Real
de Felipe II, firmada en Badajoz el 5 de agosto de 1580. Entre los prenotandos, observa
Descalzi, se pondera “cómo Quito era una ciudad que iba ennobleciéndose en edificios
y multitud de gente”. Este documento regio fue presentado por el Procurador Juan de
25
VARGAS, Fr. José María, Historia de la Cultura Ecuatoriana, Edit. Casa de la Cultura Ecuatoriana, Quito, 1965, págs. 193‐218. 26
Ibíd. Págs. 309‐324. 81 Londoño y aprobado por la real audiencia de Quito el 2 de noviembre 1581.27 Incluso se
había propuesto adaptar para ello la casa de Santa Bárbara, que había sido el primer
Convento de los Agustinos, adquirido después por el Obispo para construir un
hospital.28 Por motivos desconocidos, el documento no cuajó.
El P. Gabriel de Saona, como Prior de San Agustín y Vicario Provincial, que había
apoyado la idea, retomó la iniciativa y se propuso conseguirla para los agustinos, ya que
consideraba necesaria una Universidad en Quito, “para la formación de clérigos e hijos
de españoles en aquella tierra”. Un viaje a España y Roma, le facilitarán las gestiones.
En la ciudad eterna, donde pasó una larga temporada, tuvo fácil acceso a la Santa Sede,
a la que propuso el proyecto de crear la Universidad. Se ganó la voluntad el Pontífice y
obtuvo la Bula Inteligente quam Domino grati, que firma en Roma el Papa Sixto V, el
día 20 de agosto de 1586, “junto a San Marcos con el anillo del pescador, segundo año
de nuestro Pontificado”.29
El documento pontificio, después de considerar justas las razones expuestas en las
peticiones, como eran la numerosa población de Quito, la distancia de otro centro
semejante, la capacidad de la casa agustiniana, en la cual hay algunos maestros y
profesores eruditos, etc., se concede a los religiosos agustinos de la Provincia de Quito,
la fundación de una Universidad de Estudios Generales.
Con esta aprobación en la mano, el celoso agustino Saona, pasa a Madrid, a fin de
solicitar el pase regio, ya que solo así, la concesión papal tendría el rango legal a efectos
civiles. La solicitud consta como presentada con fecha de 17de marzo de 1587. El Placet
Regio tardaba en llegar, por lo cual, el solicitante regresó a quito, ya entrado el año de
1589 con la apreciada Bula.
27
DESCALZI, R., La Real Audiencia de Quito, Claustro en los andes, quito, 1978, pág. 276. PANIAGUA, J., Los Agustinos en la audiencia de Quito, en Agustinos en América y filipinas, Actas del congreso Internacional, Valladolid‐Madrid, 1990, pág. 278. 28
Ibid, pág. 276. 29
SANTIAGO, G. de, “Centros Agustinianos de cultura en Archivo Histórico Agustiniano” (1920) págs. 79‐
80. 82 Piensan algunos que el centro debió comenzar a funcionar de inmediato con carácter de
Universidad Pontificia. Así, la The Catholic Encyclopedia y otros, por ejemplo M.
Rodríguez de la Cruz, ya que no se comprende que una espera de 14 o 15 años.30
No Así González Suárez, cuyo sentir es que no comenzaría hasta 1603, fecha de la
aprobación de los Estatutos.31 No lo ven tan claro Jijón y Caamaño y Tobar Donoso, a
pesar de la tardía aprobación oficial de la Curia Generalicia de la Orden, según patente
firmada por el Prior General, fray Hipólito de Ravena, con fecha del 1 de septiembre de
1602.32
El Obispo de Quito, Fr. Luis López de Solís, agustino, fue un gran promotor de la
Universidad de Quito y acudió con insistencia y diversos razonamientos ante el rey
Felipe II y, fallecido éste, ante Felipe III. En carta de abril de 1601 manifiesta: “En
diversas flotas pasadas he enviado informes al rey Felipe II… para recabar la fundación
de Universidad, ya que en todo el reino del Perú no hay tierra más dispuesta que Quito
para este efecto”.33 Y a continuación insiste en la necesidad y urgencia de obtener esta
gracia para tantos motivos.
¿Llegó el deseado veredicto real? Parece ser que sí, aunque se demoró. La citada bula
de Sixto V pasó al consejo del 5 de febrero de 1621 y éste pide el dictamen del fiscal,
que responde el 24 de mayo de 1622 con algunas limitaciones.34
Sorprendentemente, quizás por pura fórmula ordinaria, la bula pone una condición:
“Mientras y hasta que el rey Felipe establece otra Universidad de estudios generales en
dicha ciudad”. De hecho, se funda la de San Gregorio Magno, dirigida por los Jesuitas,
el año 1620 y después la de Santo Tomás, de los Dominicos y las tres seguirán
30
SANTIAGO, G. de, “Centros Agustinianos de cultura en Archivo Histórico Agustiniano” (1920) págs.. 79‐
80. Íbidem. 31
GONZÁLEZ SUÁREZ, Federico, op. cit. Pág. 348 32
SANTIAGO, de G. op.cit. pág. 82 33
A.G.I., Quito 76, núms. 29, 66. El Obispo de Quito 1603. Citado por CARMONA, F., op.cit. págs. 158‐
159. 34
Manual de Patentes y la bula de la Universidad de San Fulgencio de Quito. Biblioteca Jijón y Caamaño. Citado por éste, “disertación acerca del establecimiento de la Universidad de Santo Tomás en Quito”, en boletín de la Academia Nacional de Historia, vol. V (1922), 8. 83 funcionando al mismo tiempo. La de San Fulgencio seguiría en pacífica posesión de
hecho y derecho con toda normalidad hasta 1786.
Desarrollo de la Universidad
Los términos de la bula ofrecen una concesión bastante amplia, tanto en lo concerniente
a materias cuanto al alumnado; no es una simple Facultad de Teología únicamente para
los propios religiosos de la Orden, según se verá. Dice el texto: “Lean, enseñen e
interpreten la Teología, el Derecho Canónico y Artes Liberales así como cualesquiera
otras facultades lícitas y ciencias públicas”. Y añade a continuación: “Estudien en sus
Facultades los hermanos de la misma Orden y otros cualesquiera escolares, ya sean
laicos o clérigos seculares y de cualesquiera de las Órdenes regulares, incluso de las
mendicantes, cualquiera que sea su origen (de procedencia) o de cualquier lugar que
vengan”.35
Podría conceder los grados de Bachiller, Licenciado, Doctor y Maestro, así como otros
grados y diplomas de lícita facultad.
Los Estatutos de la Universidad no se aprueban hasta el 20 de diciembre de 1603. Así
consta en Actas del Capítulo Provincial intermedio. Con este motivo se reúne el
Definitorio, el Provincial. Fray Agustín Rodríguez, los definidores, Fray Diego
Mollinedo, Fray Juan de Figueroa. Al fundarse San Fulgencio, dice el Sr. Jijón, se
hicieron los nombramientos de Rector y catedráticos.36 Entre los más conspicuos
catedráticos de San Fulgencio hay que citar al P. Fray Basilio de Rivera.
En estos estatutos se establece la fórmula para otorgar los grados de Artes, Teología ,
Cánones, Leyes y Medicina.37 La colación de grados se daba por el consejo general,
formado por el Rector y cuatro Consejeros, responsables del gobierno de la
Universidad.38 Sugiere Tobar Donoso, que “los frailes soñaban con grandes progresos;
35
SANTIAGO, de G. op.cit. pág. 80, Texto de la bula. JIJÓN Y CAAMAÑO, J., op.cit., pág. 14. 37
Ibíd., pág. 7. 38
GONZÁLEZ SUÁREZ, F. op.cit. págs. 248‐249. 36
84 por eso los Estatutos fueron ambiciosos y establecieron aún el modelo de conferir el
doctorado en medicina, enseñanza que habría de fundarse en Quito un siglo después”.39
Los estudios de San Fulgencio hasta 1620 fueron únicos, tuvieron momentos de gran
prestigio, que resalta el mismo Jijón y Caamaño al hablar de los títulos otorgados en
1638 a Álvaro Cevallos Bohórquez, a quien el Obispo Oviedo recomendaba para una
canonjía.40 “Todavía a mediados del siglo XVII era el centro más importante, asegura
Fernando Campo, que aporta como prueba un manuscrito, conservado en Salamanca,
sobre la Honras Fúnebres celebradas en la iglesia de San Agustín de Quito con ocasión
de la Reina Isabel de Borbón.41
La Universidad tuvo su época de decadencia, naturalmente; pero resulta anecdótico y
chocante hablar de signo de tal decadencia el que un zapatero de Popayán llegó a
obtener el doctorado en ella sin saber latín, deduciendo que se concedían grados a la
ligera. Llega a hablarse de decadencia en términos muy duros por parte del benemérito
González Suárez, como decir que se concedían grados desprestigiados.
Es muy elocuente, sin embargo, el juicio del no menos sabio, don Julio Tobar Donoso,
historiador ponderado y justo. Dice: “Se ha dicho que la Universidad agustiniana fue
pródiga en concesión de títulos y que a esa facilidad se debió su rápido descrédito. Mas,
los documentos publicados hasta aquí, permiten colegir que aquella acusación es
desmesurada.42 Para hacer esta afirmación, aduce las siguientes pruebas documentadas:
“De 1679 a 1769, según el cuadro publicado por el doctísimo investigador Jacinto Jijón
y Caamaño, se graduaron solamente 56 individuos extraños a la Orden. Y las
circunstancias de que acudiesen a San Fulgencio personajes de la estatura científica y
moral del doctor José Antonio Maldonado, hermano de Don Pedro Vicente, para ganar
la borla académica en Teología (1729), bastan para presumir que el desmedro de la
fama del Instituto, no era sensible”.43
39
TOBAR DONOSO, J. op.cit. pág. 235. JIJÓN Y CAAMAÑO, J., op.cit., pág. 9. 41
Biblioteca Universitaria de Salamanca, Ms. 2126, fol. 6‐33, citado por CAMPO DEL POZO, Fernando, “Historia de la provincia agustiniana de San Miguel de Quito en el Nuevo Reino de Granada”, en Estudio Agustiniano, X, (mayo‐agosto, 1975), pág. 308. 42
TOBAR DONOSO, J. op.cit. pág. 235. 43
Ibíd. 40
85 Con ocasión de la visita del P. Joaquín Iserta, enviado de roma con espíritu reformador,
el 15 de octubre de 1775, levanta acta e informa sobre el lugar de la Universidad de San
Fulgencio, títulos que podía conferir, amén de otros detalles de interés para apreciar la
buena marcha del centro. Con todo, dispone de reducción de grados a sólo miembros de
la Orden.44 Una Cédula Real de Carlos IV, expedida el 25 de agosto de 1786, prohíbe
dar grados a los propios sujetos de la Orden, con lo cual, queda suprimida. Conocidas
son las circunstancias sociopolíticas de estos años.
Falta un buen estudio documentado para conocer la personalidad y preparación del
personal docente, así como también de los alumnos, sin duda ilustres en muchos casos,
etc. Muchos de los documentos sobre estas cosas, lamentablemente hoy se hallan
extrañados o quizá perdidos.
4.1.1.4.2. La Universidad de San Gregorio
Después de tres decenios de enseñanza en el Colegio Seminario San Luis, se sentía la
necesidad de estimular a la juventud con la concesión de grados académicos a los
alumnos más aventajados. Esta justa aspiración halló su cumplimiento durante el
Obispado del Ilmo. Señor Fray Alonso de Santillán. Efectivamente, a petición del
General de la Compañía, el Papa Gregorio XV expidió, el 8 de agosto de 1621, el breve
In Supereminenti, por el que facultaba a los Jesuitas de América y Filipinas conferir a
sus alumnos los grados académicos. El 2 de Febrero de 1622 dio el Rey el pase al
documento pontificio y el 15 de septiembre el Padre Provincial Florián de Ayerve lo
presentó a la Audiencia para su ejecución. Ese mismo día se organizó en Quito un acto
solemne, en el cual colocaba la bula en un estandarte de terciopelo, se lo exhibió por las
calles principales de la ciudad, al son de música y en medio de lucida cabalgata.
Desde la erección de la Universidad, bautizada con el nombre de San Gregorio, actuó
como Secretario Diego Rodríguez Docampo, quien en 1650 escribió la Descripción y
relación del estado eclesiástico del obispado de San Francisco de Quito. Como testigo
presencial trazó el proceso constructivo del templo y edificio de la universidad y
semblanza de los religiosos que enseñaron en el plantel. Hacia 1650 la iglesia estaba
44
Ibíd. Puede verse también el Archivo del Convento de De Agustín de Quito, Libro de Actas de 1775, fol. 86 concluida en sus tres naves, con retablo mayor, altares laterales y sacristía. A
continuación de la sacristía, se habían construido tres claustros de dos pisos: en la planta
baja del primero funcionaban las aulas de Teología, Artes, Retórica y Gramática; en la
del segundo se ubicaban el refectorio y oficinas y en el tercero el Noviciado y
enfermería; en la planta alta de los tres claustros se hallaban las celdas de los 50 a 60
religiosos, que atendían a las cátedras y servicios de la iglesia.45
El Padre Mercado señala el año 1659 como el de la conclusión del teatro, en que se
daban los grados y lo describe así: “Es una pieza sobre muy hermosa, muy capaz: tiene
dos órdenes de asientos, bajos los unos, altos los otros, sus respaldares y barandillas
atraen la vista por estar con curiosidad labradas. Señoréase a un lado del teatro la
cátedra, y todo se corona con un retablo muy bello.” (Historia de la Provincia de la Compañía de Jesús, tomo III, pág. 62).
El 18 de octubre, día de San Lucas Evangelista, se inauguraba con solemnidad el Curso
anual. En esa fecha aparecían en un cartel los nombres de los profesores y las materias
que se iban a enseñar. Concluido el ciclo de estudios, los alumnos beneméritos de la
borla y muceta de magisterio o doctorado, recibían con veinticuatro horas de
anticipación las materias sorteadas para el examen, que duraba una hora. Previamente se
realizaba la hora llamada de tentativa “en que arguyendo los maestros y respondiendo
los discípulos se hacía juicio de que eran merecedores o no del premio que pretendían y
luego cada uno de los maestros daba o negaba su voto según según el dictamen de su
ciencia y conciencia”.
El mismo Padre Mercado relata así la ceremonia de los grados: “Después de los grados
s procede a un solemne paseo por las calles más principales de la ciudad, yendo cada
uno de los doctores y maestros en el lugar que le compete por la antigüedad de su grado,
llevando en sus cabezas los bonetes con sus borlas y pendientes las mucetas de sus
cuellos mostrando en sus colores los grados de sus dueños, blanco y negro a los
doctores; negro y azul a los maestros. Los que solamente son doctores, llevan la borla
sólo blanca, pero los que con el doctorado mezclan el magisterio llevan la borla con
45
Relaciones Geográficas de Indias, Tomo III, apéndice 1. 87 mezcla de blanco y azul.” (MERCADO, Pedro, Historia de la Provincia del Nuevo Reino de Quito y de la compañía de Jesús, tomo III, pág. 62).
Rector de la Universidad era el mismo rector del Colegio, a quien competía por ley
conferir los grados, que ordinariamente cedía el uso de este derecho al Obispo titular.
Los grados que se obtenían en la Universidad eran de Bachilleres, Maestros en Artes y
Doctores en Teología.
El secretario de la Universidad escribía en 1650 lo siguiente: “Las diligencias de estilo
han sido ante mí, Diego Rodríguez Docampo, Secretario de dicha Universidad desde
que se erigió por el año 1622, hasta este corriente de 1650, de la cual han salido más de
160 maestros y 120 doctores, unos ya muertos y otros vivos, que son predicadores en
esta Catedral y en las ciudades de este Obispado, con gran aprobación de sus letras e
ingenio, como lo publica la evidencia general que de este favor del cielo se ha
concedido a esta Provincia”.
La Universidad de San Gregorio contaba con una copiosa biblioteca, que contenía obras
de consulta sobre las materias que se enseñaban. Puede formarse idea de su caudal por
el testimonio de un testigo, que llegó a conocer el estado en que se hallaba a principios
del siglo XIX, tal como la había dejado el Doctor Espejo, antes de su fallecimiento. La
depredación primera se verificó con la presencia de las tropas de Lima al mando del
Comandante Manuel Arredondo, enviado para debelar el pronunciamiento libertario de
1809. Escribe al respecto Manuel José Caicedo en su Viaje Imaginario:
“No es de poca consideración la orden que se dio por el señor Presidente (Ruiz de
Castilla) a instancias de los limeños, para que se desocupara la biblioteca pública para
que sirva de cuartel. Para formar concepto de lo extraordinario de esta providencia, es
necesario saber que la pieza donde se hallan colocados los libros, que componen más de
diez mil volúmenes, es la más magnífica que hay en toda América. Estanterías de buena
madera pintada a chinesca con perfiles de oro, estatuas colocadas sobre el famoso
barandillaje dorado que circunda esta hermosa sala, las cuales denotan las facultades a
que corresponden los libros de aquellos cánones, un pavimento de madera sólido, y
sobre todo una biblioteca digna de una ciudad ilustrada: todo se iba a perder en un
momento, atrasándose también el adelantamiento público por esta falta… El
bibliotecario se opuso a esta lamentable ruina y consiguió preservar de ella a este
soberbio y magnífico edificio; pero no de que su antesala se hiciese almacén de tabacos,
poniéndose para seguridad otra llave, con lo cual se ha conseguido dejar sin uso la
88 biblioteca.” (Biblioteca Ecuatoriana Mínima: Cronistas de la Independencia y de la República, 1960).
Los fondos de esta biblioteca pasaron a constituir la base de la actual Biblioteca
Nacional, no sin que hubiesen desaparecido muchos libros de la antigua de San
Gregorio. Como por milagro se ha conservado el caudal de textos manuscritos, que se
guardan en el Archivo Nacional de la Casa de la Cultura Ecuatoriana. Un análisis
prolijo de esta colección permite valorar el estado a que llegó la Universidad de San
Gregorio, en el campo de la enseñanza del siglo XVII.
Al Padre Miguel Sánchez Astudillo debemos el estudio y bibliografía de los textos y
catedráticos que componen este Patrimonio Cultural. El número de manuscritos
asciende a 370, a los cuales se añaden 33 que se conservan en diversas bibliotecas. La
suma total integra 408. Del examen del contenido se desprende que 11 manuscritos son
copias procedentes de estudios superiores de centros españoles, 3 de italianos y 5 de
americanos fuera de Quito. En cuanto a los autores consta que 35 no enseñaron en la
Universidad de san Gregorio y 23 de quienes se duda su presencia en Quito.
En cambio, se sabe con certeza que 71 profesores extranjeros enseñaron en la
Universidad y consignaron la materia en un volumen manuscrito. Catedráticos
nacionales fueron 21, de los cuales 5 eran lojanos, 4 quiteños, 3 del Guayas, 3 de
Cuenca, 3 de Riobamba, 2 de Ibarra y 1 de Ambato.
De este cuadro estadístico se desprende que el mayor número de catedráticos eran
europeos, que trasladaron a la Universidad de Quito el método y corriente doctrinal de
sus países de procedencia, España e Italia. Se advierte también la proporción con que
correspondían los Colegios nacionales dirigidos por los Jesuitas.
En cuanto a las materias que se enseñaban, la colección ofrece datos que permiten
apreciar el valor que se concedía a las diversas asignaturas. De los 408 volúmenes, 193
corresponden a Filosofía y 208 a Teología. La Filosofía comprendía entonces la Lógica,
la Física y el Tratado del Alma. En la equivalencia actual esos textos manuscritos se
distribuyen así: 57 sobre Lógica y Crítica, 10 sobre Cosmología, 9 sobre Ontología, 6
sobre Sicología y 51 volúmenes mixtos, con tratados varios. La Teodicea y la Ética se
89 reservan para el ciclo de Teología. La Teología estaba dividida en las cátedras de Prima
y de Vísperas, que equivalían a Teología Dogmática y Teología Moral. A la primera
corresponden en los textos manuscritos 65 tratados de Dios Uno, 11 sobre Trinidad, 11
sobre Verbo Encarnado, 18 sobre la Gracia, 14 sobre las Virtudes Infusas, 4 sobre los
Novísimos y 20 sobre tratados dogmáticos varios, entre los cuales figuran las
controvertidas discusiones sobre la Ciencia Media y la Disputa De Auxiliis.
De la Teología Moral se han conservado 15 tratados sobre los Sacramentos, 9 sobre los
Actos Humanos, 7 sobre los Preceptos, 6 sobre los Pecados, 4 sobre la Conciencia, 1
sobre Leyes y 16 volúmenes mixtos.
Al grupo literario pertenecen tan sólo 6 volúmenes y uno de Cuestiones Gramaticales.
Eugenio espejo debió conocer la colección de estos manuscritos. En todo caso, de su
contenido y método de exposición oral formuló un juicio personal en su Nuevo
Luciano.
Por lo visto, es fácil formar idea del prestigio que gozaban los Jesuitas en el siglo XVII.
A su Colegio y Universidad concurría la juventud estudiosa de Quito, para obtener
grados académicos en Artes, Filosofía y Teología. Del Seminario San Luis procedía el
clero secular que servía en parroquias y doctrinas.
4.1.2. Aportes de las diferentes Congregaciones Religiosas a la Educación en el
Ecuador durante la Colonia
4.1.2.1. Labor misionera de los Padres Mercedarios
En el Oriente Amazónico, en el Callejón Interandino y principalmente en la Costa del
Pacífico, empezaron los mercedarios su labor misionera con ardor y notable éxito.
Trataban de abrir caminos para facilitar los viajes y consiguen, como el que va desde el
Valle de Caranqui al mar, atravesando la Cordillera del Pailón.
90 Su trabajo en la Costa marca una trayectoria histórica. La Orden de la Merced, como un
privilegio, toma a su cargo la Costa, desde Esmeraldas, atravesando Manabí, luego la
Provincia del Guayas, Los Ríos y el Oro.
4.1.2.2. Los Franciscanos de Quito y el Colegio San Andrés
Los frailes franciscanos tuvieron, por así decirlo, una Ardorosa dedicación en la tarea de
civilizar y evangelizar a los indios. Erigido el Obispado de Quito por el Papa Paulo III,
a ruego del emperador Carlos V, el 8 de enero de 1545, vino como primer Obispo de la
nueva diócesis el Bachiller Pizarro y su Capellán en el Perú. Celoso de su ministerio y
deseando, sin duda alguna, establecer sobre bases de severa disciplina su recién fundada
diócesis, no vio con buen ojo la acción casi absorbente de los franciscanos en la
conversión de los naturales. A su juicio, la enseñanza de la doctrina cristiana a los
indios debía ser reglamentada por el Obispo, a quien tocaba hacer respectivos
repartimientos entre sacerdotes y frailes.
Ese acudir de la gente desde muchas leguas a la redonda al Colegio San Andrés, ya para
aprender la doctrina cristiana, ya para ser bautizada, ya, en fin, para recibir de los frailes
las nociones siquiera elementales de “lectura, escritura, buenas costumbres y policía”,
chocaban al Obispo, que veía de esa manera menoscabada su autoridad de Pastor.
Por otra parte, el mismo Cabildo de Quito apoyaba al Obispo en sus exageraciones y
pretendía “que la dicha doctrina debía de hacer a su discreción o cuando y en la parte y
lugar que quisiese”. Eso lo dieron a entender ambas autoridades, repetidas veces, a los
religiosos franciscanos, los cuales, a su vez, respetaban tales argumentos, apoyándose
en el mandato evangélico: “Evangelizare pauperibus missit me” y en los magníficos
resultados que habían tenido en poco tiempo los Franciscanos, cuando la acción
sacerdotal del clero diocesano había sido débil en estas tierras, por la escasez de clérigos
o por las continuas guerras civiles entre los mismos conquistadores.
Al principio, los religiosos sortearon con cristiana resignación la pésima y escandalosa
conducta de las autoridades, y entendiendo que ella se debía a recelos y envidias muy
propias del humano corazón, recurrieron a medidas indirectas, como fue la de elegir en
calidad de patrón del Colegio al mismo Emperador; pero viendo luego que la
91 persecución no calmaba y el escándalo crecía, pidieron a la Real Audiencia de Lima una
protección más directa contra molestias que podían traer como consecuencia lógica la
clausura del Colegio.
La Real Audiencia, comprendiendo todo el mal que tan desmedido celo por la disciplina
eclesiástica iba a causar a la civilización de América, dictó inmediatamente, el 3 de
septiembre de 1555, una Provisión de patronazgo real, tomando bajo su protección al
dicho Colegio y prohibiendo al Obispo, al Cabildo y a toda persona, embarazo o
impedimento a la magnífica y laudable obra que hacían los franciscanos de Quito en
beneficio material y moral de sus moradores.
Mas como ni así cesaron las persecuciones del Cabildo y del Obispo, la Audiencia de
Lima, a instancias del propio Virrey, don Andrés Hurtado de Mendoza, Marqués de
Cañete, dictó una nueva Provisión Real, amparando a los religiosos contra la porfiada
campaña del Obispo. Esa Provisión, dada el 14 de marzo de 1561, es decir, quince días
antes de la muerte del Virrey, es todo un reconocimiento oficial de la obra de los
primeros franciscanos en Quito y en especial de la realizada por el primer Colegio que
fundara el P. Morales.
En ella se prohíbe al Obispo impedir a los indios la asistencia al Colegio y el que los
frailes doctrinen fuera de él, en cualesquiera pueblos de la comarca quiteña, y se obliga
a devolver a los religiosos los indios sustraídos por el Obispo, y para quitarle,
definitivamente, toda gana de seguir en su porfiada persecución a los religiosos, le
amenaza con la pena “de perder la naturaleza y temporalidades” que tuviere en el reino
y “mas dos mil pesos de oro” para la Caja real.
La vida de este Colegio, del cual con mucha razón dijo repetidas veces la Real
Audiencia de Lima “que ennoblecía grandemente la ciudad de Quito”, no fue efímera.
Tomado por el rey bajo su Patronato y ayudado eficazmente por los Virreyes, en
especial por el Marqués de Cañete, cuyo nombre llevaba, la cooperación de la población
de Quito le dio vida centenaria. Hasta 1675 siguió su obra civilizadora, y si murió,
cargado de años y de méritos, fue para resucitar en nueva forma: la del Colegio San
Buenaventura, fundado por Fr. Dionisio Guerrero, del cual salieron hombres y
religiosos eminentes. Pruébalo la gran cantidad de obras de filosofía y teología que,
92 manuscritas e inéditas, se conservan en sección especial en la Biblioteca del Convento
de Quito.
4.1.2.3. Labor de la Orden de Predicadores en el Reino de Quito
El Maestro General, Tomás de Vío Cayetano, quien más tarde fue Cardenal, escribió el
3 de octubre de 1509 una carta al Vicario de la Provincia de España y le decía: se manda
en cuanto puedo la autoridad de la Orden, envíe con el beneplácito del Rey de España
quince religiosos a la Isla Española, situada en el mar Indico, a fundar Conventos y a
predicar la Palabra de Dios y les dé un Vicario.46
Hechos los preparativos, los primeros dominicos que viajaron a América procedentes
del Convento de San Esteban de Salamanca, fueron: fray Pedro de Córdova, fray
Antonio de Montesinos, fray Bernardo de Santo Domingo de Loaysa y Mendoza, fray
Domingo de Villamayor.47 Iban a residir en la Isla Española. La partida oficial se
formalizó a fines del mes de Junio o primeras semanas de julio de 1510.
Estos primeros religiosos llegaron al puerto de Santo Domingo a principios del mes de
Septiembre de 1510.48 Después de fundar el Convento en el año 1511, iniciaron su labor
de Evangelización.
La catequesis y enseñanza de las verdades cristianas fueron los primeros pasos de la
acción apostólica de los Dominicos. El Padre Fray Pedro de Córdova es considerado
como el primer misionero catequista de las tierras de América. En la ciudad conoció a
un joven sacerdote misacantano, llamado Bartolomé de las Casas. Se unieron en íntima
amistad. Fray Pedro fue su maestro, fue amigo y modelo de planificador de la
colonización pacífica a principios de 1541.49
Un dominico que había de recorrer la Costa Ecuatoriana fue el Padre Tomás de
Berlanga. Vino de España en octubre de 151, en el grupo de dominicos dirigido por el
46
Reg. Litterarum Fr. Tomas de Vio Cayetano, O.P. Mag. Ord. 1508‐1513, Roma, 1535. Boria, Fray Rubén, O.P.; De Córdova, Fray Pedro, O.P. (1481‐1521), Ed. Unsta Tucumán‐Argentina, pág. 63. 48
Boria, Fray Rubén, op. cit., pág. 63. 49
Boria, Fray Rubén, op. cit., pág. 73. 47
93 Padre Domingo de Mendoza con destino a la Isla Española. Con este personal y traído
por el P. Pedro de Córdoba, se constituyó el primer convento dominicano de América.
Fue aprobado por el Capítulo General de 1518.50
El Maestro General, fray García de Loaiza nombró por primer Prior y Vicario
Provincial al Padre Tomás de Berlanga, como se fundaron otros conventos, el P.
Berlanga viajó a Roma y consiguió del Capítulo General de 1531 la erección de la
Provincia con el nombre de Santa Cruz. Él mismo fue nombrado primer Provincial. En
1522 dio el hábito dominicano al clérigo Bartolomé de las Casas, quien se preparó para
ser el defensor más heroico de los indios, luego fue candidatizado para Obispo.
4.1.2.3.1. El Colegio San Fernando
En septiembre de 1676 se reunió en Quito el Capítulo Provincial. Se eligió como
Superior Mayor al Padre Maestro Fray Jerónimo de Cevallos y Definidor al Padre Fray
Ignacio de Quezada. La elección fue muy bien recibida.51 Resolvió también fundar un
Colegio de segunda enseñanza y dio todos los poderes al Padre Definidor, a fin de que
procediese a obtener las licencias necesarias.
Se veía la necesidad de un nuevo Colegio por el aumento de jóvenes. No bastaba el
Colegio de San Luis de los Padres Jesuitas. El Padre Quesada obtuvo informes de
autoridades e instituciones. Todos estuvieron de acuerdo en la fundación del Colegio.
Hizo el viaje, llegó a la Corte en 1679. Presentó todos los documentos al Real Consejo
de Indias y obtuvo el reconocimiento de la necesidad de la fundación del Colegio San
Fernando,52 pero se dilató su presentación hasta el Capítulo Provincial.
Fue elegido el célebre Padre Fray Bartolomé García, religioso de cualidades
intelectuales y virtudes admirables, hizo muchas obras en bien del Colegio. El Padre
General le nombró Visitador y Vicario General de la Provincia Dominicana. Fundó una
Escuela de la Caridad, donde se han educado tantos hombres célebres, como el Ilmo.
50
Acta Cap. Gener. Ord. Predicatorium, vol. IV, pág. 1712. Informe del Cabildo del 5 de junio de 1677, V.G. 3ª. Serie, V. 29. 52
A.G. de Y, 77 1‐43, Año 1683. 51
94 González Suárez. Sin embargo se presentaron algunos obstáculos para la fundación del
Colegio. Se opuso la Compañía de Jesús. Pero se superó todo.
El Colegio de San Fernando se inauguró el 28 de Junio de 1688 con grandes
solemnidades y la presencia de la Audiencia, del Obispo, los Cabildos eclesiásticos y
secular, los Superiores de todas las comunidades Religiosas, sacerdotes, religiosos y de
numeroso público seglar.
Posteriormente el Colegio experimentó las vicisitudes de los Gobiernos. Así, en 1862,
sobrevino el fin del Colegio. El señor Dr. Antonio Flores Jijón, representante del
Gobierno del Ecuador, había hecho un contrato con la Superiora General de las
Religiosas de los Sagrados Corazones. La Legislatura de 1865 aprobó el contrato y
determinó que para el establecimiento del Colegio de niñas de la Religiosas de los
Sagrados Corazones en la Capital del Estado, da el edificio conocido con el nombre de
San Fernando, con todas sus pertenencias, a saber: fundos rústicos, casas, tiendas,
capitales a censo y rentas”.
Así terminó el colegio San Fernando. Pero ha sido restaurado nuevamente a mediados
del siglo XX y funciona en una parte del Convento de Santo Domingo.
4.1.2.3.2. La Universidad de Santo Tomás de Aquino
Otra gran obra de los dominicos, fue la Universidad de Santo Tomás de Aquino, creada
en 1688 en el Colegio San Fernando, instituida por el sabio y virtuoso religioso de la
misma Orden, Fray Bartolomé García. La Cédula de S.M.C. y la del Santo Padre se
expidieron en 1683, pero se llevó a la ejecución en 1688, a causa de algunas
dificultades, que se superaron con facilidad.
Inocencio XI promulgó el breve, en 1682, de la fundación de la Universidad en el
Colegio de San Fernando. Debía estar bajo la dirección del los Padres Dominicos,
previa Licencia y beneplácito del Rey y con la calidad de quedarse hasta que S.M.C.
erija otra a semejanza de las de Lima y México. El Consejo de Indias dio el decreto de
pase a dicho breve el 26 de junio del mismo año. Más, al tiempo de ejecutar la
fundación, se opuso el ordinario de Quito y expresamente la Compañía de Jesús,
95 considerando subrepticio el breve y la aprobación de S.M.C. se planteó un pleito, pero
se concluyó aceptando algunas condiciones por ambas partes.53
El P. Fray Bartolomé García trabajó con gran empeño y solicitud para la fundación de la
Universidad en el Colegio San Fernando. Fue coetáneo de los Padres Jerónimo de
Cevallos (1679) y Fray Ignacio Quesada (1692). Hizo donaciones al Colegio San
Fernando y fundó una Escuela de Caridad para niños de toda condición. El Cabildo de
Quito informó al Rey sobre sus méritos pidiendo que sea promovido al Obispado de
esta Iglesia. Fue nombrado Obispo de Puerto Rico por Carlos II, pero murió antes de
consagrarse.
La Universidad cobró mucha fama. Concurrieron numerosos alumnos, especialmente
por la enseñanza de Medicina. Había también el Derecho Civil, Canónico, Retórica,
Lengua Inca, Artes, Sagrada Escritura, Teología y Gramática. El Rectorado estuvo
siempre a cargo de Religiosos Dominicos.
El Ilmo. Sr. González Suárez hace este elogio: honra que nadie puede discutir a los
dominicos y mérito del Padre Fray Ignacio de Quesada para con la posteridad es el
haber sido ellos quienes dieron impulso a los estudios con la fundación de las cátedras
de Cánones y de Jurisprudencia Civil, que hasta entonces no se había establecido en la
Capital de la Colonia… La primera idea de establecer en Quito la enseñanza de la
Medicina, se debe a los religiosos de Santo Domingo, y ellos fueron así mismo los
primeros en reconocer, cuán necesaria era la fundación de Cátedras de Matemáticas en
los Colegios de Quito.54
Con el cambio de gobiernos, la Universidad pasó a seglares. Se convirtió en lo que hoy
es la Universidad Central.
4.1.2.4. El aporte de los Agustinos a la Educación en la Colonia
Muy pronto sintieron los Agustinos la inquietud de evangelizar en el Nuevo Mundo
descubierto, como lo habían hecho anteriormente en misiones del oriente, Persia y la
53
54
La Corona de María, 1910, Enero Nº 122, pág. 32. GONZÁLEZ SUÁREZ, Federico, Historia General, Tomo VIII, págs. 28 y 29. 96 India. Llegarían al Ecuador tras una larga experiencia en México, donde estaban desde
1533, y al Perú, desde 1548 con el P. Agustín de la Santísima Trinidad, y en el 1551 con
un grupo de doce. Salieron de España animados por el espíritu misionero del Santo
Obispo de Hipona, impulsados por Santo Tomás de Villanueva, Provincial de Castilla,
entre otros superiores, imbuidos del mismo espíritu.55
La fundación oficial del convento de San Agustín de Quito, data del 22 de julio de
1573, pero ya unos diez o doce años antes se habían establecido en la ciudad, en lo que
hoy es la Parroquia de Santa Bárbara. Los Cronistas de la época y los historiadores, con
González Suárez a la cabeza, están plenamente de acuerdo con esta afirmación.
A fin de dar solidez a la presencia agustiniana en Quito y su Real Audiencia, Fr. Luis
López de Solís, a la sazón, Provincial de la Provincia del Perú y más tarde Obispo de
Quito, decidió con su Consejo, fundar el indicado convento, acorde con las
constituciones de la Orden y sentar las bases para la nueva Provincia agustiniana en
aquel Reino. Así se expresa el cronista: “Disuelto el Capítulo, el P. Provincial, en el
segundo año de su gobierno, por orden de su majestad, envió al R. P. Fr. Luis Álvarez
de Toledo con el P. Fr. Gabriel de Saona a fundar la Provincia de Quito, año de 1573.”
(CALANCHA, A., y TORRES, B., Crónicas Agustinianas del Perú, Ed. P. Manuel Merino, OSA, Madrid 1972, I, pág. 48).
Amplia y rica es la labor de los Agustinos en esta época. Realizaron obras de
imponderable valor, como es, aparte de la evangelización, una valiosa tarea educativa.
Tenían como norma la creación de escuelas elementales para indígenas en las mismas
doctrinas. Uno de los preceptos del vademécum de los agustinos en México y el
Virreinato del Perú, decía lo siguiente: “Poniéndoles (a los indígenas) escuelas donde
aprendiesen a leer, escribir y contar, haciéndolos aprender oficios y artes políticos”
(culturales), etc.” (CALANCHA, A., Crónica moralizada, edición de Barcelona, 1639, pág. 356).
Por otra parte crearon varios centros de educación en zonas urbanas. El primero se
instaló en cuenca. En 1574 tramitan la fundación del convento de San Agustín en la
55
Con todo, el primero de los agustinos en llegar al Nuevo Mundo fue el Padre Vicente Requejada, que, desde 1527, recorrió Venezuela y Colombia y murió en 1575 en Villa de Leiva. Puede verse en Arch. Hist. de Tunja, Libro 7, citado por el P. E. Terán en Convento de San Agustín de Quito en su IV Centenario, Quito, 1917, pág. 12. 97 ciudad del Azuay, que llegaría a ser una de las más cultas del país. Contaban con la
ayuda del Cabildo de la ciudad para construir casa e iglesia, a condición de crear una
escuela de gramática, dirigida por el padre Fr. Luis de Quesada, acompañado por Fr.
Agustín Tapia56.
Otro centro educativo fue el Colegio san Nicolás de Tolentino en Quito, heredero del
San Andrés de los Franciscanos, los cuales se vieron obligados a dejarlo para atender
otras tareas prioritarias para ellos y lo entregaron a la Audiencia el 20 de febrero de
1581. Ésta lo puso en manos de los Agustinos, a pesar del interés del Obispo, Ilmo. Fr.
Pedro de la Peña, por unirlo a la Catedral a fin de tener un coro de cantores.
Ante algunas objeciones, el P. Saona defendió los derechos de la Orden para poseer
bienes en beneficio de dicho Colegio, negado por el Prelado; la comunidad agustiniana
asumió la responsabilidad del mismo y destinó para ello una casa que tenía detrás de la
sacristía de su Iglesia, esto es, justamente en la convergencia de las actuales calles Mejía
y Guayaquil.57 La finalidad era educar a niños pobres e hijos de Caciques, cometido que
se cumplió perfectamente durante muchos años. No menos importante fue el Colegio de
Santa Catalina Mártir, fundado a la sombra de la Universidad de San Fulgencio el 2 de
julio de 1652.
Durante el período colonial numerosos agustinos ilustres dieron esplendor a la iglesia
quiteña y ejercieron benéfica influencia en la sociedad ecuatoriana con su predicación,
docencia, letras y testimonio. Entre otros sobresalieron Fr. Luis López de Solís, IV
Obispo de Quito, organizador de esta diócesis; Fr. Gaspar de Villarroel, Obispo de
Santiago de Chile, de Arequipa y Arzobispo de Charcas, nacido en Quito, aunque
profesó de agustino en el convento de Lima.
4.1.2.5. El aporte de la Compañía de Jesús a la Educación
La Compañía de Jesús se estableció en el Reino de Quito en julio de 1586. Fue la última
orden religiosa en llegar al país; desde la fundación de Quito hispánico en 1543,
56
Archivo Histórico Municipal de Cuenca, IV Libro de Cabildos, fols. 18v‐19, citado por PANIAGUA, J. Agustinos en la Audiencia… pág. 275. 57
PANIAGUA, J. op. cit. Pág.276‐277. 98 estuvieron presentes los franciscanos, dominicos, mercedarios, luego los agustinos,
formando una cadena de conventos alrededor del núcleo de la pequeña Villa. Igual cosa
encontramos en las restantes ciudades que se fueron fundando.
La Compañía de Jesús fue la última en llegar, porque era la más joven orden religiosa:
solo fue establecida por Ignacio de Loyola en 1540, y se propagó de inmediato por
Europa, por áfrica y por la India y Japón; mas a los dominios americanos del Rey
Católico solo llegó en 1568. En abril de ese año arribó a Lima un grupo de jesuitas
enviados por Francisco de Borja, a petición de Felipe II. Tenían orden de extenderse por
el norte y por el sur, tan pronto como les fuera posible. Llegó por fin a los jesuitas de
Lima la petición oficial del Obispo de Quito, el dominico Pedro de la Peña, y de la Real
Audiencia. Respondiendo a esta invitación, el provincial Juan de Atienza destinó a
cuatro religiosos para que bajaran a fundar casa en el Reino de Quito: eran los padres
Baltazar Piñas, superior, Diego González de Holguín, Juan de Hinojosa, y el hermano
coadjutor Juan de Santiago. Partieron el 11 de abril de 1586 y llegaron a la capital de la
Audiencia al atardecer del 19 de julio. Todos eran peninsulares.
González Holguín (1552-1618) fue aceptado por el padre Piñas para trabajar en las
Indias, a donde arribó en 1528; residiendo en el Cuzco y otras regiones, llegó a dominar
tan perfectamente el idioma quichua, que compuso una gramática y su vocabulario. Un
ejemplar de la gramática posee el convento de Santo domingo de Quito y el
vocabulario, el archivo de la Compañía de Jesús (IDHEE, Revista Nº 3-4, Quito, 1978,
p. 42)
En 1600 volvió a Perú, donde publicó la Gramática de la lengua quichua y arte nuevo de
la lengua inga, 1607.
Cuando en Quito se supo que los jesuitas venían en camino, la audiencia, los dos
Cabildos, los vecinos, los aguardaban con inmenso alborozo y expectativa del fruto
espiritual y cultural, poniendo en no pequeño compromiso a los expedicionarios. La
actitud de estas organizaciones no deja de sorprender, si consideramos que Quito y su
territorio disponían de numeroso y selecto clero, como lo atestigua nada menos que el
austero y celoso fray Pedro de la Peña, O.P.
99 A pesar de ello, los jesuitas eran ardientemente solicitados por las villas y ciudades, y
esto por dos razones principalmente, por dos necesidades importantes que hasta
entonces no habían podido ser plenamente atendidas: a) la educación sistemática de la
niñez y juventud en escuelas y colegios; b) las misiones encaminadas a cristianizar
profundamente a los indios.
Quito poseía, de acuerdo a las repetidas informaciones de la época, una población muy
densa de indios, mayor proporcionalmente a la de otros distritos, que desbordan el celo
y posibilidades de sus párrocos. Eran bautizados, pero su cristianismo no pasa de ser
superficial, se hallaba conviviendo en extraña amalgama con sus antiguas supersticiones
y hechicerías; la iglesia sentía la necesidad de hallar un método y una institución que se
dedicara a una misión apostólica en gran escala a favor de los naturales. Y los jesuitas
habían dado muestra de saberlo hacer.
Venían, en efecto, provistos de nuevas experiencias de apostolado; de las directivas de
los Concilios Limenses, hablaban perfectamente el idioma indígena. Traían consigo
unos pocos libros muy útiles y, prácticamente, nada más.
Su venida tenía mucho de aventura e incertidumbre, aún no sabían donde residir; habían
sido llamados; pero nadie había ofrecido el fundarles una casa, una iglesia, donde
ejercer sus ministerios, donde establecer colegio.
Ellos, por su parte, empezaron sus ministerios, dando comienzo a las pláticas a los
indios en quichua, lo cual fue acogido con asombro y entusiasmo por los naturales. Era
una auténtica novedad, aunque por otra parte el cumplimiento de las normas de los
Concilios de Lima y del Sínodo del difunto obispo Peña (Monumenta Peruana, VI,
Roma, 1970).
De entonces en adelante se seguiría este uso y sistema por religiosos y doctrineros. El
siguiente obispo, Luis López de Solís, impondrá la predicación en idioma indígena
como obligación ineludible de sus párrocos.
100 Audiencia, Cabildo y gente principal conferenciaron sobre los medios de subsistencia
que hiciera posible el establecimiento de los religiosos recién llegados. De entonces en
adelante, no les faltaría casas ni haciendas y otros medios de mantenerlos.
A los pocos días los llevaron en procesión suntuosa, como era de costumbre a tomar
posesión de su primera casa e iglesia, la de Santa Bárbara, patrona de la ciudad. Desde
entonces, ya podían quedarse y desarrollarse en la Audiencia de Quito.
4.1.2.5.1. El colegio de Santa Bárbara
Con la llegada de refuerzos de personal desde Lima, se dio un gran paso en la historia
cultural de la nación, mediante la fundación del primer colegio formal en el reino de
Quito, en 1587.
La Compañía de Jesús trataba de establecer un Instituto de segunda enseñanza a la
manera y usanza de los europeos, donde se dictaban cursos de latinidad y de cultura
clásica y demás, base de todos los restantes conocimientos. Nada menos que con cien
jovencitos llegaron a sus aulas, llegando a 150 poco después: “demostraban vivo
ingenio y promesas de halagadora cosecha intelectual”. Se añadió una cátedra de lengua
quichua a cargo del erudito Padre González Holguín.
El local de Santa Bárbara padecía de varios inconvenientes, a más de ser prestado,
resultaba estrecho para el creciente número de alumnos y para los proyectos de construir
convento, iglesia y otras dependencias; se lamentan además de que estaba muy retirado
el sitio, en
un arrabal de la ciudad, y distante de Tiánguez, lugar de reunión y
predicación de los naturales. Así, pues, los jesuitas acogieron entusiastas el ofrecimiento
que les hizo Luis de Cabrera, de venderles su casa, que había sido de Don Rodrigo de
Bonilla; podían también adquirir la vecina que les ofrecía Benito Gutiérrez, que él
obtuvo de Juan de la Vega.
No pudieron quedarse allí, por el pleito que interpuso el Convento de San Agustín. Pero
sus amigos y el mismo Presidente Barros les facilitaron la compra de la casa del
canónigo Alonso de Aguilar, al sur de la Catedral, separada de ella por la quebrada o
guayco de El Tejar. La compraron a crédito, en 11.500 pesos (1590).
101 Los amigos y padres de familia que seguían angustiados, los vaivenes del pleito, los
llevaron al nuevo local en jubilosa comitiva. Hubieron de reparar el edificio al costo de
500 pesos, porque lo hacían al modo nuevo, posiblemente con cal y ladrillo. En el
extremo sur construyeron una capilla provisional en honor a San Jerónimo, patrono de
la ciudad; esta vez fueron los indígenas cofrades los que construyeron la iglesia y su
capilla, “llevando voluntariamente, ellos mismos a hombros el material, y despertando
la admiración de la ciudad”. Este hecho aseguró la permanencia de la Compañía de
Jesús en el Reino de Quito.
En 1597, de común acuerdo el Obispo Solís y su Cabildo, y de la otra parte el recto
Diego Álvarez de Paz y su comunidad ignaciana resuelven trocar las propiedades: el
Colegio pasa al local occidental, al sur de la quebrada, a las casas deterioradas que
fueron del Dr. Pineda de Zurita; el Seminario, al frente, al nuevo edificio reconstruido
por los Jesuitas, y separado de la Catedral por el guyco o quebrada. Había sitio para
Seminario y Colegio de Caciques (Arch. S.I., Quito).
4.1.2.5.2. Las tendencias reformistas en el pensum universitario:
Se presentan con una triple orientación en Quito: primero, la que había venido
predominando en la extinguida Universidad jesuítica de San Gregorio, de grandes
avances cientifistas como el abandono del sistema tolemaico y adopción del
copernicano, empuje del newtonismo, predominio naturalista y atisbos de racionalismo
cartesiano, etc., segundo, la acción renovadora promovida por el Obispo de Quito don
José Pérez Calama, y tercero, las críticas a la enseñanza formuladas abiertamente por el
Dr. Francisco Eugenio de Santa Cruz y Espejo. Se vincula con estas líneas de influencia
la que ejerció don Miguel Jijón y León, primer Conde de Casa Jijón, perseguido por la
inquisición acusado de leer libros prohibidos. Estos tres personajes tuvieron papel
preponderante en la “Sociedad de Amigos del País de Quito”, de efímera vida, al
comienzo autorizada por el Presidente de la Real Audiencia pero no, finalmente, por el
Rey.
102 4.2. La Educación durante la Independencia
4.2.1. Bolívar y la Educación en el Ecuador
Una de las mayores preocupaciones del Libertador, fue la reconstrucción de la
educación en todos los países bolivarianos, lo mismo que en Venezuela, que del Perú y
desde luego en el Distrito del Sur – el Ecuador.
Implantó el sistema lancasteriano para multiplicar escuelas, restauró colegios
secundarios, legisló sobre la Universidad Central, reformó las leyes exageradamente
liberales y laicas que dictaron en marzo de 1826.
4.2.1.2. El último decreto del Libertador sobre la educación
El Libertador que tantas veces había legislado sobre educación, sobre colegios y
universidades, respecto a sus funciones y reglamentos, dictó la última ley educativa en
Popayán, a 5 de diciembre de 1829.
Se trataba de una reforma muy amplia de la enseñanza primaria, secundaria y
universitaria, con capítulos largamente meditados, perfectamente definidos, como lo
eran los decretos o resoluciones de mayor importancia que dictó en su vida.
Esta ley vino a ser, sin que él lo sospechara, su testamento, en un aspecto de la vida
republicana que siempre le pareció de primordial importancia.
Bolívar le llamó Decreto adicional al Plan de estudios dado a 3 de octubre de 1826.
Expresa que la experiencia, los informes de la dirección General de Estudios y las
subdirecciones mostraban que el Plan General contenía artículos que no se cumplían o
que no producían los efectos que se propusieron. Por eso dictaba los artículos
modificativos.
Las líneas generales de la reforma tienen estos puntos:
103 1. Acepta la enseñanza oficial y también la privada, al menos para el nivel
primario.
2. Permite libertad del sistema pedagógico en los tres niveles de enseñanza.
3. Precisa las materias de cada área: primaria, secundaria y universitaria.
4. Muestra inmensa preocupación por la educación e instrucción religiosa y
moral, particularmente en los años de la enseñanza elemental; señala
reglamentos minuciosos en su favor.
5. En la superior da regulaciones sobre el sistema de exámenes, pases de año; al
tenor de la vida universitaria, en que se esfuerza por enraizar los institutos
superiores republicanos con la tradición de sus antecesores, los centros de
Estudios Generales y Colegios mayores de la era pasada.
4.2.1.3. Reformas dictadas por Bolívar al sistema de enseñanza primaria (Popayán,
5 de diciembre de 1829)
Las leyes que dictó el Libertador el último mes de 1829, en Popayán, sobre el régimen
de enseñanza primaria van encaminadas a renovar ciertos usos de los siglos pasados,
que habían sido olvidados y desechados por los legisladores bogotanos, influidos de la
pedagogía de la Revolución Francesa. En siglos anteriores, el cura párroco, el doctrinero
de los pueblos, como persona que estaba perpetuamente en el pueblo, dedicado por su
oficio y profesión a buscar el bien de sus feligreses, bajo la vigilancia episcopal, había
tenido un influjo decisivo en las escuelas rurales según prescripciones de los Concilios y
Sínodos del siglo XVI.
Estas disposiciones fueron las que renovó el Libertador con los artículos siguientes:
104 Art. 1
“Los curas de las parroquias serán miembros natos de las Juntas Curadoras de
las escuelas primarias o de enseñanza mutua; y como tales, inspectores de dichas
escuelas. Sus funciones serán:
Promover el pronto establecimiento de las escuelas de parroquia, donde no las
haya.
Celar que los maestros enseñen a los niños la moral y la religión cristiana en
toda su fuerza; y que no aprendan a leer en libros capaces de corromper la una y
la otra; ni que de modo alguno reciban en las escuelas lecciones o ejemplos que
puedan pervertir sus corazones.
Estar a la mira para que los maestros cumplan con la asistencia diaria, y con
todos sus deberes. Y dar cuenta al juez respectivo para que remedie cualquier
falta.
Excitar a los padres de familia para que pongan a sus hijos en la escuela; y los
mantengan allí hasta que aprendan a leer y escribir.
Promover en cada parroquia el pronto establecimiento y conservación de la Junta
Curadora del decreto de 3 de octubre de 1826.
Art. 2
Se encarga a los reverendos obispos supervigilen estos encargos.
Art. 3
Los maestros conducirán a los niños a la iglesia los domingos y días de fiesta, a
los sermones o pláticas doctrinales.
Art. 4
En todas las escuelas de enseñanza primaria, de niños y niñas, se enseñará un
catecismo de doctrina cristiana, el señalado por el obispo. Los prelados
procurarán que se imprima el número suficiente de ejemplares.
Art. 5
Después que sepan los niños el catecismo arriba expresado, se les enseñará el
Fleuri, a fin de que adquieran una idea más completa de la religión que
profesamos.” (Gaceta de Colombia, N‐469, 13‐VI‐1830).
La presencia y decretos del Libertador secundados por el Gobierno, la Iglesia y el
pueblo del Ecuador, reconstruyeron la educación en gran manera, como lo demuestran
los informes de los Ministros y la prensa.
105 4.3. La Educación en la Época Republicana
4.3.1. La enseñanza pública al comienzo de la República
Otra importante herencia dejó Bolívar al General Flores, fue el restablecimiento de los
planteles educativos y legislación para la educación religiosa en ellos. Restableció el
Colegio de “San Ignacio” de Guayaquil, 1822; el “Bernardo Valdivieso” de Loja y el
“Imbabura”, en Ibarra.
Por lo dicho anteriormente ya se había atendido con mucho empeño a la restauración de
la educación, la primaria con el apoyo de los Conventos masculinos y femeninos y la
aplicación del método Lancasteriano de enseñanza mutua. Se restablecieron varios
colegios y Bolívar legisló sobre la Universidad Central. Mas las revoluciones que
convulsionaron al País en la primera administración del General Flores: la invasión de
Luis Urdaneta, en 1830; y luego la revolución Chihuahua que duró por más de un año,
paralizaron la educación.
En su segunda administración intervino el General Flores en el Colegio San Ignacio,
aprobó su entrega al Obispo de Guayaquil, en calidad de Seminario, febrero de 1839; y
luego declaró oficial al “Colegio del Guayas” que entonces fundara como particular el
pedagogo Dr. Teodoro Maldonado González en 1844, con jubilosa aprobación de José
Joaquín de Olmedo.
Este Colegio se llamará después San Vicente; y por fin, Vicente Rocafuerte.
Estadísticas de la Educación Primaria, por Departamentos – 1828
Los referentes a la educación primaria, por Departamentos son como sigue:
Departamento del Ecuador o Quito
1573
Departamento del Azuay
1860
Departamento del Guayas
1829
Departamento de Manabí
920
_________________
6181
106 Si añadimos el alumnado femenino, que en ese entonces tenían una educación
independiente, el de los colegios y universidad, la población estudiantil podía pasar de
6.500, en poco o en mucho.
La prensa de la época da otros datos sobre escuelas en el Ecuador:
“En la ciudad de Quito se mencionan seis: dos en el barrio de la Catedral; y sendas en
los de Santo Domingo, San Francisco, la Merced, Santa Bárbara, San Blas, San
Sebastián. El señor José Vásquez, profesor de la universidad, regentaba una privada en
su casa.
Y en la provincia se mencionan las de la Magdalena, Chillogallo, Machachi, Sangolquí,
Zámbiza, Guayllabamba, Yaruquí, Tumbaco, Latacunga, donde Gaspar Merizalde
enseñaba latín a 30 jóvenes a 15 pesos al mes.” (Cristóbal Gangotena, BANH, vol. VII, N‐18, Quito, 1923).
Directa e indirectamente controló Flores el Gobierno desde 1830 a 1845. La época se
caracterizó por la revuelta permanente, el desbarajuste administrativo y el abuso de los
soldados, dueños del país. Ni el esfuerzo organizador y sistematizador de Vicente
Rocafuerte, que llegó al Poder (1835-1839) mediante un pacto con su enemigo Flores,
pudo superar estas realidades de la etapa inicial.
Cuando el Caudillo se hizo elegir Presidente por una segunda y hasta una tercera vez y
puso en vigencia una constitución, la Carta de Esclavitud (1843), que establecía la
dictadura perpetua, la reacción nacional acaudillada por la oligarquía guayaquileña lo
echó del poder (1845). Los años subsiguientes los pasó organizando invasiones al
Ecuador con mercenarios extranjeros, al servicio de España y el Perú.
4.3.1.2. La administración del Sr. Vicente Rocafuerte (1835-1839)
El Presidente Flores terminó su primer período presidencial el 10 de septiembre de
1834; dejó el mando y se retiró a La Elvira. Retirado Flores, Guayaquil nombré Jefe
supremo a Rocafuerte y llamó al Gral. Flores a enfrentar a Valdivieso, que invadía la
provincia con poderosas tropas. Este General obtuvo la victoria de Miñarica, con la que
se terminó la revolución y restauró y volvió a establecerse el país, como lo reconoció
Rocafuerte, y mejor aún Olmedo en su epinicio la Oda al Vencedor de Miñarica.
107 4.3.1.3. Educación pública – Secularización del Colegio San Fernando
Sabemos que la situación económica del Estado ecuatoriano era precaria. Rocafuerte
trató de remediarla por un Decreto elaborado con el Ministro Francisco Tamariz: hizo
una reforma en derechos de aduanas y otros puntos, en febrero de 1836.Se suscitó una
oposición general contra el decreto, especialmente entre los financistas de Guayaquil.
Se reunió un Congreso Extraordinario con el fin de revisar las leyes de hacienda; y en él
fueron derogados los Decretos de Rocafuerte. Por otra parte, seguía la pobreza del fisco.
Para la educación primaria otra vez apeló el Presidente a las Comunidades que ya desde
años atrás regentaban escuelas primarias. Y el 26 de febrero de 1836 se dictó un Decreto
Orgánico de Instrucción Pública
Basándose en él, Rocafuerte dictó un Decreto a 25 de febrero de 1836:
“Queda secularizado el Colegio San Fernando que ha estado a cargo de los Padres de
Santo Domingo de esta ciudad.
Las rentas del Colegio se administrarán por el colector general de las rentas de la
enseñanza”, Vicente Rocafuerte. (Registro, 11).
El Colegio fundado con autorización real en 1683 había educado a muchos jóvenes de la
sociedad quiteña, incluso a José Joaquín de Olmedo.
De nada valieron los reclamos del Prior, Fray Felipe Molina. Se argumentaba que era
imposible mejorar el programa de estudios; que aún se defendía el sistema solar de
Tolomeo. Mas consta en el archivo del San Fernando, conservado en la Universidad
Central, que ya desde finales del siglo anterior se enseñaba el sistema heliocéntrico de
Copérnico.
Al año siguiente, el congreso de 1837 aprobó la secularización del San Fernando. Y
añadió Art. 2: “Para la provisión de cátedras se tendrán presentes la capacidad y méritos
de los religiosos dominicos, y aún se les preferirá en igualdad de circunstancias.”
(Registro II, 345).
108 4.3.1.3.1. El Colegio Femenino Santa María del Socorro
La Fundación de este primer Colegio Femenino en Quito se realizó también
secularizando o apropiándose de la “Casa del Beaterio” fundada por religiosos de la
Merced para mujeres recogidas, “beatas”.
En el Mensaje a la Legislatura de 1837 ponderó Rocafuerte el éxito de este Colegio:
“En vez de beatas que allí existían, 10 hijas de mártires de la Independencia y 77
señoritas asisten y hacen rápidos progresos”.
El Obispo Arteta accedió a esta secularización bajo condición de que se conservaran
algunas beatas en el local. Su petición no fue atendida.
4.3.1.3.2. Fundación del Colegio Militar
Este acontecimiento tiene de particular el discurso de inauguración pronunciado por
Rocafuerte, el 7 de julio de 1838.
“No os dejéis nunca seducir por el brillo de la filosofía irreligiosa. Consultad los valores
de la vida de Washington, del Cid, Gonzalo de Córdova, de Juan de Asturia; son otras
tantas pruebas de que la Religión no incompatible con el verdadero valor; al contrario,
ella protege con sus seráficas alas a los varones esforzados”.
El Colegio Militar se refundó en el Colegio San Buenaventura junto a San Francisco
(Calle Bolívar).
En los primeros años del período marcista (llamado así porque la revuelta antifloreana
fue en marzo de 1845) gobernaron los civiles Vicente Ramón Roca (1845-1849) y
Diego Noboa (1849-1850), hasta cuando un nuevo conflicto de poder no resuelto, dio
espacio para un nuevo arbitraje militar. El más popular de los Jefes del Ejército, Gral.
José María Urvina, luego de ser por un tiempo el “hombre fuerte”, fue designado primer
Dictador, y luego Presidente Constitucional por una nueva Asamblea Nacional (1852).
Urvina consolidó la alianza entre la oligarquía comercial costeña y las Fuerzas
Armadas, y llevó adelante un programa de corte liberal, que incluyó la abolición de la
esclavitud y la supresión del tributo indígena y la implementación de medidas a favor de
109 los campesinos serranos. Todo esto generó una feroz reacción del latifundismo
tradicional que declaró la guerra al urvinismo.
La desastrosa negociación de la deuda externa y el intento de arrendar Galápagos a
extranjeros, fue motivo para que la oposición contra el Gral. Francisco Robles, heredero
de Urvina, adquiriera fuerza. Diversas revueltas seccionales provocaron en 1859 una
crisis de disolución. En Quito, Guayaquil, Cuenca y Loja, se formaron gobiernos
autónomos. El Perú ocupó varios territorios y bloqueó el Puerto Principal. Los países
vecinos negociaban la partición del país. Llegó un momento en que todo el sistema
amenazó venirse abajo con el peso de las contradicciones entre las oligarquías
regionales. Luego del fracaso de varias alternativas, la aristocracia quiteña, con García
Moreno a la cabeza, logró triunfar en la Sierra, y tomar luego Guayaquil
4.3.2. Retorna la compañía de Jesús en el Gobierno de Diego Noboa, 1850
Los Jesuitas habían sido solicitados desde que restableció la Orden del Pontífice Pío VII
el 7 de agosto de 1814; y en España, Fernando VII el 7 de agosto de 1814, el 15 de
mayo de 1815, derogó la Pragmática de Carlos III y abrió las puertas a la Compañía de
Jesús. Desde Italia retornaron más de cien sacerdotes.
El Ecuador envió repetidas invitaciones para el retorno de la Orden Ignaciana: Los
Cabildos de Quito, cuenca, Loja remitieron peticiones. Y de manera especial el Dr.
Benigno Malo, Ministro del Presidente Juan José Flores en 1843.
Volvieron, por fin, en forma casual en 1850.
El Gobierno de la Nueva Granada había obtenido del General de la Orden P. Juan
Roothaan el envío de los Jesuitas, que llegaron en 1845: fundaron colegios en Bogotá y
Medellín, colegio Seminario en Popayán, Noviciado en Pasto, con gran disgusto de los
liberales masones.
Mas al subir al gobierno el Partido Liberal, con el Presidente Hilario López, el
Congreso decretó la expulsión de los Jesuitas el 21 de mayo de 1850. Los Jesuitas de
Bogotá, Medellín y los españoles de Pasto fueron remitidos a Santa Marta, camino de
110 Panamá. Los jóvenes de Pasto con su Superior P. Pablo de Blas se dirigieron al
Ecuador, y fueron muy bien recibidos y aposentados en Ibarra.
Los Jesuitas desterrados en Popayán llegaron a Santa María; de allí resolvieron pasar a
Panamá y embarcarse para Guayaquil, donde sabían que serían bien recibidos.
Providencialmente en el mismo vapor, volvía de Europa el Dr. Gabriel García Moreno,
que los reconoció y protegió con generosidad y destreza. Pues en Buenaventura había
abordo la Nave el Gral. José María Obando, colombiano, enemigo jurado de los
Jesuitas. Pero García Moreno burló sus planes.
Al llegar a Guayaquil desembarcó madrugado, pidió entrevista al Presidente Interino
Diego Noboa; obtuvo de él permiso para que desembarcaran los ocho sacerdotes y
cuatro hermanos coadjutores, y aún, que permanecieran país.
De inmediato desembarcaron sigilosamente los Jesuitas, fueron presentados al Señor
Obispo Garaycoa, que los acogió con todo afecto y los aposentó comodamente. Obando,
al verse burlado juró vengarse, y lo conseguirá más tarde.
Ante la Convención Nacional, reunida en Quito, el 8 de diciembre de 1850, se
presentaron más de 50 000 firmas a favor de los Jesuitas; de suerte que el Presidente
Diego Noboa pudo decir en su mensaje: “Que era general el clamor de los ecuatorianos
por el restablecimiento de la Compañía”.
La Convención, luego de prolijo debate, decretó:
“Puesto que son indudables las ventajas que ofrece a la república y a la iglesia el
Instituto de la compañía, en orden a la mejora de las costumbres, la propagación del
Evangelio, progreso de la enseñanza.
Decreta:
Se admite en la República el Instituto de la compañía de Jesús”
Luego se les hizo entrega de su antiguo templo y de una parte de la casa donde se
aposentaron, y a donde llegaron en desfile solemne que les preparó la ciudad.
111 4.3.3. La Educación en el Gobierno de Gabriel García Moreno (1860-1875)
En la historia republicana del Ecuador hay un personaje clave, cuya acción no solo se
proyecta en el siglo XIX, sino que sobrepasa los siglos y sobrevivirá, tanto en cuanto
subsista el Estado Ecuatoriano o la historia hable de él. Este es el Presidente Gabriel
García Moreno. Vivió del 24 de diciembre de 1821 al 6 de agosto de 1875. No alcanzó a
cumplir sus 54 años, pero su paso quedó escrito con caracteres indelebles en la historia
nacional.
En 1845, ya se lanzó a la actividad política luchando contra el Gobierno autocrático del
General Juan José Flores, primer presidente de la naciente República y participó
activamente en la Revolución que lo derrocó el 6 de marzo. Recibió la investidura de
Abogado, años más tarde, el 30 de marzo de 1848.
Desde esta fecha desemboca en la vida pública. Ocupará diversas funciones, que se
anotarán, sin duda, en un capítulo biográfico suyo.
En estas líneas, únicamente abordaremos su influencia en la educación antes de su
gobierno y durante su gobierno en sus dos períodos presidenciales.
En un opúsculo publicado en 1851, titulado “Defensa de los Jesuitas” escribe García
Moreno estas líneas:
“En ninguna forma de gobierno es tan importante la instrucción pública, como en la
democracia; porque si el pueblo es corrompido, su soberanía es la omnipotencia del mal
y si es ignorante, su libertad es una quimera peligrosa, es la libertad de un ciego que
camina a la aventura, al borde de un abismo”.
Continúa su razonamiento:
“Por esto, como Republicano por convencimiento, y demócrata de corazón, he deseado
vivamente que la luz de la civilización cristiana difunda sus rayos en nuestro horizonte
tenebroso. Me creí feliz el día en que los Jesuitas respiraron el aire de mi para,
persuadido, con razón, de que contribuirían eficazmente a destruir la ignorancia en que
nos dejó el régimen colonial y la corrupción que nos han legado cuarenta años de guerra
y anarquía”.
“Si alguna vez hay un gobierno que sepa dar impulso a nuestra imperfecta y decadente
educación pública y la extienda por todos los ángulos del Estad, al alcance del pobre y
desvalido; un gobierno que, respetando la Religión y la humanidad, no permita que la
112 oprimida y numerosa raza indígena siga, como hasta aquí, reducida a la clase de
envilecidos parias, sin más derechos políticos que el privilegio exclusivo del tributo y
los honores de animales de carga; un gobierno que se proponga cerrar la era de los
trastornos, de las dictaduras y de las proscripciones y hacer que el país prospere a la
sombra de una paz dichosa; un gobierno, en fin, que se avergüence de que el nombre
ecuatoriano sea la befa de la América y el desprecio de la Europa; dirá a la Compañía de
Jesús: ‘Id y enseñad, despertad al pueblo del letargo del embrutecimiento; abrid los ojos
de este soberano dormido, para que no se deje arrebatar el cetro; difundid el saber y la
piedad desde las playas del Pacífico a las orillas del Amazonas; llamad al seno de la fe y
de la vida social a las tribus que pueblan nuestras selvas y preparad en las generaciones
nacientes la futura felicidad de este país desdichado”.
“Entonces si, por el influjo civilizador del cristianismo, las discordias civiles
desaparecerían o a lo menos perderían el carácter de encono con que hoy se ostentan; el
pueblo tendría voluntad y fuerza; terminaría la soberanía del sable y el árbol de la
libertad no sería un árbol de bayonetas.” (DONOSO, Julio Tobar, García Moreno y la Instrucción Pública, 2da. Edición, 1940, Editorial Ecuatoriana; págs. 49 y sigs).
Esta cita, aunque un tanto extensa, prueba la primera preocupación del estadista que se
proyecta con una visión de futuro, examinando las realidades ya sufridas. Era
indispensable una reforma fundamental al sistema de instrucción pública, que se venía
implementando en la naciente República del Ecuador.
Propugnaba una educación orientadora, enmarcada en los principios cristianos. Era un
católico luchador y convencido del valor de las ideas que eran razón de su vida.
En 1856 fue Alcalde del Municipio de Quito y su primer afán fue incrementar el
número de escuelas en la Provincia de Pichincha.
Nombrado Rector de la Universidad Central del Ecuador de Quito, en 1857, realizó una
encomiable labor de mejoramiento en la parte estructural del edificio y en el incremento
de la biblioteca, “con erogaciones de su propio peculio, por ser insuficientes los fondos
universitarios para llevar a cima sus proyectos”, lo afirma el doctor Antonio Mata,
Secretario de la Instrucción Pública, en ese tiempo.
García Moreno más que abogado fue un científico, un hombre de estudio, matemático,
químico, investigador de la naturaleza, botánico. Aparte de su cátedra oficial, dictó en la
Universidad diversas conferencias sobre la Química aplicada a la agricultura y la
industria.
113 Como Rector y luego como Presidente de la República se convirtió en el primer gran
realizador de la reforma universitaria, que serviría de modelo en América y fuera
aplaudida en Europa.
Como legislador, en el Senado de 1857–58 impulsó una Ley de Instrucción Publica
bien estructurada, pero no logró ver coronado su anhelo.
Los debates mantenidos en el Congreso deben analizarse con amplitud y se observará el
realismo con el cual García Moreno enfrenta los problemas. Se hablaba de crear una
Universidad en Cuenca y el argumento con una exposición, que reposa en los libros de
actas del Senado. Entre otros de sus razonamientos, lo dijo con franqueza:
“Sería muy difícil plantear la Universidad (en Cuenca), ya por la deficiencia de rentas,
ya por la escasez de profesores, escasez notoria, aun en la capital de la República.”
“La Universidad propiamente hablando, es un establecimiento de enseñanza universal”
dijo y siguió ahondando en su criterio. En Quito había las facultades de jurisprudencia,
Medicina y Teología. Multitud de médicos y abogados salían a buscar empleos, al
margen de sus estudios. Era necesario abrir otras carreras útiles y productivas. Además
había que formar profesores.
Preparó el proyecto de ley, ya referido, estableciendo las enseñanzas primaria,
secundaria y superior, bajo la dependencia de un Congreso General, con autonomía y
Consejos Académicos Distritales. Buscó trasplantar el sistema Francés a nuestro medio,
para lograr la superación académica. Era enemigo de la injerencia del estado oficial –
militarista, por añadidura- que pretendía poner obstáculos a la libertad de enseñanza. Se
sentían dueños del país en esos años los Generales José María Urvina y Francisco
Robles. Ambos lograron ejercer la Presidencia de la República.
La crisis que sufrió el país en 1859, con cinco gobiernos regionales, en las provincias
del Austro, en Guayaquil, en el centro del país, en Quito y con los dos jefes militares ya
nombrados, fungiendo como dueños del poder nacional, logró superarse gracias a la
mano dura del joven líder que frisaba en los 38 años y que encabezaba la resistencia
antimilitarista, en la ciudad de Quito.
Con García Moreno se configura la nacionalidad ecuatoriana. Uno de sus ms fanáticos
críticos, el escritor Benjamín Carrión Mora afirma contundentemente:
“La ecuatorianidad propiamente tal, comienza a perfilarse con García Moreno. La
ecuatorianidad fijadora de linderos nacionales, de linderos espirituales. De linderos
políticos. La ecuatorianidad del material humano…fue vigorosamente iniciada por este
gran ecuatoriano, aun no juzgado definitivamente” (CARRIÓN, Benjamín, 1942, Cartas al Ecuador, Editorial Gutenberg, pág. 35).
114 Carrión califica a García Moreno como “personaje excepcional, el más resueltamente
excepcional de la historia ecuatoriana durante la República.” (CARRIÓN, Benjamín, 1942, pág. 36).
El movimiento Revolucionario logra el triunfo definitivo, con la toma de Guayaquil, se
convoca a una Asamblea Nacional Constituyente y ésta, el 10 de enero de 1861, nombra
Presidente interino al Dr. García Moreno, y el 10 de marzo, le elije Presidente
Constitucional.
El historiador Julio Tobar Donoso, en su obra ya citada, resalta la preocupación
sobresaliente del mandatario:
“En el breve, pero sustancioso y profundo discurso que pronunció, el día en que tomó
posesión del cargo, expresó ya elocuentemente su grande y firmísimo anhelo de
procurar el mejoramiento de la abatida Instrucción Pública y de asentarla sobre la base
inconmovible de la religión, sin la cual, la obra sublime de la educación de los pueblos,
solo puede ser vanidad, polvo y ruido.” (Op. cit. Pág 114).
El Dr. Emilio Uzcátegui, ilustre jurista, historiador y pedagogo, ubicado en las filas del
socialismo marxista ecuatoriano, en su más notable y voluminosa obra: “Historia de la
educación en Hispanoamérica”, ganadora del premio Tobar y del premio Universidad
Central, en 1973 y reeditada en 1975, tiene el capítulo XVIII con el título “Desarrollo
de la Educación en el Ecuador” y en él, una sección especial: “El Presidente de la
Instrucción”, dedicado a García Moreno.
Este capítulo íntegro, es una separata en la colección de “Cartillas de divulgación
ecuatoriana”, Nº 3., editó la Casa de la Cultura Ecuatoriana, en 1976. Fue ampliamente
difundido.
Desde su función presidencial, en 1861, afirma Uzcátegui:
“Emprende en toda su magnitud la tarea de organizar y difundir la Educación Pública,
con una eficacia e intensidad sin precedentes en el País”
Añade, dada su posición ideológica estas líneas:
115 “Prescindimos de analizar el aspecto político de sus administraciones que ha sido muy
censurado por su autoritarismo, por ser extraño a los propósitos de nuestra obra.”
(UZCÁTEGUI, Emilio, Historia de la Educación de Hispanoamérica, 2da. Edición, Editorial Universitaria, Quito, 1975, págs. 299 y ss.).
Con honestidad, Uzcátegui reconoce:
“Al hacerse cargo de la Presidencia de la República, la primera vez había declarado que
su más firme anhelo era mejorar la Instrucción Pública y quería asentarla sobre la base
de la religión. Así lo hizo en sus dos administraciones, 1861-1865 y 1869-1875. Dos
hechos son indiscutibles a este propósito: que la educación tuvo un inusitado
florecimiento y que se produjo en función del catolicismo.” (UZCÁTEGUI, Emilio, págs. 299 y ss.).
La Constituyente de 1861, si bien no dio paso al Proyecto de Ley Orgánica de la
Instrucción Pública, el Presidente creó la Academia Nacional científica y Literaria, con
capacidad legislativa, en la materia.
Los primeros académicos fueron: Dr. Gabriel García Moreno, General Juan José Flores
– Presidente de la Constituyente- los doctores Mariano Cueva, Rafael Carvajal, Carlos
Aguirre, Pablo Herrera, José María Espinosa, Manuel Angulo, Manuel Bustamante,
Guillermo Jameson, Joaquín Tobar, el Dr. Y Coronel Francisco Javier Salazar
Arboleda, Coronel Gabriel Salvador y el Ing. Sebastián Wisse.
Pese a los problemas en la discusión de la Ley Orgánica y a los conflictos financieros
del escaso presupuesto estatal, el Presidente fue a realizaciones prácticas. Estaba
convencido de la real ausencia de preparación en el escaso magisterio nacional. Hizo
venir profesores franceses –Hermanos de las Escuelas cristianas- para canalizar la
Primera Enseñanza y acudió a la Compañía de Jesús para la Segunda enseñanza. Para
cubrir necesidades primordiales no le importaba al presidente, poner de su sueldo lo
faltante.
Los Hermanos Cristianos reunían calidad y competencia reconocida en Europa y los
Jesuitas, igualmente. Los métodos de enseñanza de las dos Comunidades estaban
actualizados.
Los primeros religiosos de las Escuelas Cristianas llegaron en Febrero de 1863.
Abrieron su Primera Escuela en Cuenca, el 4 de Mayo de 1863 con 240 alumnos, que
116 contaron con el apoyo municipal para la dotación del local. En Quito abrieron el 3 de
agosto del mismo año con 225 alumnos. Dos años después, en Quito, tenían 427.
Uno de los primeros matriculados en Cuenca fue el niño Francisco Febres Cordero
Muñoz, quien después de sus estudios ingresó a la Comunidad y llevó el nombre de
Hermano Miguel y es el primer ecuatoriano elevado a los altares. Fue beatificado por
Pablo VI en 1970 y canonizado por Juan Pablo II en 1984.
En su obra, el historiador Tobar Donoso explica el programa inicial de estudios:
1. Instrucción Moral y Religiosa. 2. Lectura española, francesa y latina. 3. Escritura con
ortografía y gramática y estilo en español y francés. 4. Aritmética en sus principales
operaciones aplicadas al sistema métrico decimal, al comercio y a la industria. 5.
Historia sagrada y profana antigua y moderna universales y nacional. 6. Geografía física
y política, especialmente del Ecuador y Cosmografía. 7. Geometría práctica, dibujo
lineal y de adorno, agrimensura, levantamiento de planos y principios de Arquitectura.
El Gobierno y el Municipio de Quito entregaron a los Hermanos de la Salle una quinta
en las afueras de la ciudad (Hoy, el sector del Barrio de San Blas) para sus prácticas
agrícolas.
Por problemas diversos, inclusive climáticos, en Guayaquil solo pudieron abrir una
escuela en 1870.
Uzcátegui presenta en su obra el siguiente cuadro estadístico de crecimiento escolar:
AÑOS
NÚMERO DE ALUMNOS
1867
13 595
1871
14 731
1873
22 458
1875
32 000
No se logró cumplir el deseo de García
Moreno de establecer Normales para la
preparación de maestros, pero en el Noviciado de los Hermanos se cubría esta
preparación.
117 Debe anotarse que en el presupuesto estatal de 1861, las rentas para educación no
pasaron de 18 000 pesos, en Segundo Período Presidencial de García Moreno se
elevaron a 100 000 pesos.
Con el apoyo de los municipios, que proveyeron de mobiliario y materiales de
enseñanza, se fueron abriendo más y más escuelas y creció la matriculación. Solo en
Quito la Escuela de La Salle, en 1875 tenía 1015 alumnos, sin contar con los estudiantes
del Noviciado.
También crecieron en Cuenca y Guayaquil y se abrieron escuelas en Latacunga,
Portoviejo, Guaranda y Loja.
4.3.3.1. La Educación de la Mujer
La educación de la mujer fue otra de las grandes preocupaciones de García Moreno. La
muy escasa preocupación que se tenía de formar a la mujer, hacía que también en la
docencia femenina fuera muy reducido el personal.
El Presidente logró que de Francia vinieran religiosas de la Comunidad de los Sagrados
Corazones y la Educación Perpetua, especializadas en la educación femenina.
En 1862, ya se encontraban cerca de 20 educadoras para abrir colegios –así se
denominaron las escuelas femeninas- en Cuenca y Quito.
En Riobamba empezaron las religiosas de los Sagrados Corazones, con su Colegio el 16
de junio de 1872 y en Guayaquil se abrió el 9 de octubre de 1874.
Estas religiosas trajeron para sus planes, los programas de mayor adelanto en Europa,
implantados en Prusia en Institutos Superiores Femeninos, incluyendo además
Instrucción Religiosa, Lectura, Caligrafía, Aritmética, Gramática Castellana, Geografía,
Bordado y Costura.
Por disposición de García Moreno, el Arzobispo de Quito, José Ignacio Checa y Barba,
firmó el 10 de mayo de 1871 un contrato con la Comunidad de las Hermanas de la
118 Providencia, para encargarse de Hospicios, educación de pobres y huérfanas, escuelas
gratuitas y pensionadas.
En sus afanes, el Presidente decidió impulsar la enseñanza técnica de la mujer con el
ejercicio de profesiones manuales y comercio, a más de labores y pintura.
Las religiosas de la Providencia se instalaron en Quito, a partir de 1872. Fue extenso el
programa de estudios en sus Institutos. Es el mismo Tobar Donoso quien reproduce
esquemáticamente el programa básico: Historia Sagrada, Historia de la Iglesia, Historia
Antigua y Moderna, Caligrafía, Gramática, Castellano, Elementos de Literatura,
Aritmética, Sistema Métrico, Geografía Física, Política y Descriptiva. Geografía e
Historia particular del Ecuador, Principios de Estilo Epistolar, Aritmética Comercial,
Elementos de Física, Teneduría de Libros de Contabilidad, Lenguas Francesa, Inglesa,
Alemana e Italiana, Música Vocal, Lecciones de piano, Dibujo Lineal, de Adorno y de
Paisajes, Pintura sencilla y de flores y adornos, Ejercicios de declamación y de
gimnasia, coser y cortar trajes y camisas, bordar en hilo, lana, seda y oro, hacer encajes,
puntos de aguja, de cruz y “crochet”, fabricar flores artificiales.
La mujer, con todo esto, incluidos los ejercicios físicos, no muy bien vistos en esa
época, permitían el desarrollo armónico del espíritu y del cuerpo, para cumplir tareas
hogareñas y poder también obtener apertura para otras actividades.
Pronto se instalaron en Latacunga en el colegio de Santa Teresa y en 1875 se disponían
a abrir sus colegios en Ibarra, abato y Guayaquil.
En 1870 se contrató los servicios de la Religiosas del Buen Pastor, para encargarse de la
Cárcel de Mujeres y la reeducación femenina y otras tareas educacionales,
principalmente femeninas.
El 2 de junio de 1871 la Casa de Expositores de San Carlos, encomendada a las
Hermanas de la Caridad de San Vicente de Paúl, ya desde 1857, García Moreno se
empeñó en que estas religiosas dirigieran casas de beneficencia y escuelas de niñas
pobres.
119 En 1873 nació en Riobamba la Fundación de Religiosas Marianitas, organizadas por
Mercedes de Jesús Molina y Ayala –elevada a los altares en 1985 por SS. Juan Pablo IIpara dedicarse al cuidado de niñas huérfanas y pobres. Su actividad educativa fue
ampliando poco a poco con el respaldo gubernativo.
Aparte de los Colegios oficialmente religiosos, en mayo de 1870 se fundó en Loja el
“Colegio de las Hijas de María”, dirigido por un grupo de sacerdotes seculares y
seglares católicos, que fue de mucha utilidad en la ciudad sureña.
Las escuelas de niñas que en 1857 eran sólo 41 en todo el País, en 1875 eran 164.
Hay que anotar que la ley de Educación que dictó en 1871, estableció la obligación de
establecer “necesariamente una clase de niñas, completamente separada de la de los
niños” en las poblaciones o sitios donde había solamente una Escuela General. A decir
verdad, sin ser lo más adecuado, acaso en ese tiempo era aceptable, esta posición prueba
la preocupación presidencial por la educación femenina.
4.3.3.2. La educación secundaria
García Moreno sostenía que “fundar Colegios sin tener Escuelas es una anomalía de
pésimas consecuencias”, así lo afirma en una carta personal a Dn. Juan León Mera,
citada por Tobar Donoso. (DONOSO, Julio Tobar, op. cit. Pág. 251).
Los religiosos de la Compañía de Jesús, tomaron las riendas de la gestión de la llamada
Segunda Enseñanza Secundaria. En Quito el Colegio de “San Gabriel” como colegio
nacional significó la continuación mejor de lo que fue desde la época colonial el
Colegio seminario de “San Luis”. La “Ratio Studiorum” norma educativa de los Jesuitas
canalizó, con sus preceptos y programas, los sistemas pedagógicos más adelantados en
la época.
Formación religiosa, formación moral, formación cívica, formación científica,
formación clásica, todo de primera calidad. De aquí salieron con sus mejores bases,
quienes serían luego profesionales universitarios que se destacaron en las letras, en el
derecho, en la ciencia, en la política.
120 En Riobamba, en 1869 se fundió en uno solo el Colegio y el Seminario, pero en 1871, el
mismo García Moreno, separó el Seminario, con sus específicos fines y el Colegio
Nacional de “San Felipe Neri”, que dirigían los mismos Jesuitas.
En Cuenca, la Compañía de Jesús, desde 1869, también tomó la dirección del Colegio
Nacional, el cual se fortaleció con una nueva modalidad desde 1871.
El Colegio de “San Vicente” de Guayaquil, bajo la dirección de Hijos de San Ignacio,
llegó a los más altos niveles de prestigio de 1869 a 1875.
La Literatura, la Filosofía, la Historia -en todas sus ramas– la Física, las matemáticas, la
química, las Ciencias Naturales, fueron dictadas en sus cátedras por brillantes sabios
jesuitas de diversas nacionalidades, todos europeos.
Al mismo tiempo, en Quito, el Colegio de “San Fernando” de la Comunidad de Padres
Dominicos, que para entonces ya era centenario, seguía manteniendo su prestigio y
recibía todo el apoyo estatal.
4.3.3.3. Educación indígena
La educación de los indígenas, fue preocupación especialísima del Presidente García
Moreno. Fue para él, algo así como una idea motriz fundamental en todos sus actos
administrativos y políticos, la consolidación de la nacionalidad ecuatoriana.
La nacionalidad casi inexistente, cuando nace la República, encuentra recién un
cimiento sólido con su gobierno, con su profundo conocimiento de la realidad
ecuatoriana, con su clara visión de estadista, con su férrea voluntad de ejecutor de
grandes planes con visión de futuro.
Si bien jamás ha habido en el Ecuador una segregación racial, como la han tenido otros
países, no se puede negar cierta marginación del indio cultural y social y
consiguientemente, también económica y política.
121 Emilio Uzcátegui dice textualmente sobre este tema:
“El visitador de los Hermanos Cristianos Yon José quiso formar maestros indígenas y
con este objeto trajo a Quito cinco indiecitos de Loja. El Presidente se interesó por el
aumento de este número y ordenó al Hermano que viajara también a buscar nuevos
alumnos en Otavalo, Cotacahi y San Pablo. De los doce indígenas que se preparaban
para el Magisterio en 1875, cinco fueron a ejercerlo en Imbabura y Loja. Quedaron
otros diez a los que el Gobierno costeaba alimentación, vestuario y útiles de enseñanza.
Además, en algunas de las poblaciones de la región oriental, los Jesuitas mantuvieron
escuelas para los indios, con una población total de quinientos escolares.” (UZCÁTEGUI, Emilio, Op. Cit. Pág. 308).
Tobar Donoso amplía los conceptos anteriores con estas palabras:
“García Moreno atendió también con celo la instrucción de los indios del territorio
oriental, por medio de los padres de la Compañía de Jesús, que comenzaron la obra de
evangelización suspendida en el siglo XVIII. En el segundo período de su Gobierno, se
defendió afanosa y prácticamente la integridad nacional y entre los medios que se
escogitaron, ninguno más importante que el procurar la incorporación de los indios a la
civilización cristiana, por medio de una enseñanza rudimentaria, si, pero vivificada por
la fe, elemento cimental de la cultura popular.” (TOBAR DONOSO, Julio, op. cit. Pág. 411).
De entre los primeros magistrados ecuatorianos del siglo XIX, es García Moreno el que
mayor reconocimiento debe tener de parte del indigenado nacional.
Además, debe relievarse su defensa práctica y efectiva de la soberanía ecuatoriana en la
conflictiva sección amazónica, colindante con el Perú. Fueron las misiones católicas,
apoyadas por el Gobierno Garciano, las verdaderas defensoras de nuestra integridad
territorial.
En nuestro territorio amazónico los jesuitas con sus misiones cumplieron una
sobresaliente y plausible tarea evangelizadora y cultural.
El Presidente era un convencido de que el factor religioso y la formación cristiana,
fomentados en la instrucción pública eran elemento esencial para el fortalecimiento de
la nacionalidad y de la unidad ciudadana.
Todos los analistas serios de la obra Garciana juzgan que si se hubiera mantenido unos
cuántos años más el Normal Indígena, se habría producido un profundo cambio social, a
122 todo nivel. Archidona, Loreto y otros pueblos asentados en las orillas del río Napo,
fortalecieron nuestra soberanía territorial en la selva amazónica.
Jesuitas, dominicos, mercedarios y otras Comunidades que evangelizaban a los
habitantes aborígenes de nuestra región amazónica, fueron expulsados de su misión
durante el gobierno del Presidente Eloy Alfaro, a comienzos el siglo XX y por la misma
ruta que los religiosos regresaban a Quito, Ambato o Cuenca, ingresaban los invasores
del Perú para ir tomando posesión de nuestro territorio.
4.3.3.4. La Escuela Politécnica
Se instaló la Facultad de Ciencias y Escuela Politécnica de Quito, con un acto solemne
religioso y académico, el lunes 3 de octubre de 1870. En el templo de la Compañía de
Jesús, recién restaurado, luego de los estragos del terremoto de 1868, se celebró la Misa
del Espíritu Santo, y se le invocó con el Himno “Veni Creator”; los profesores
presentaron juramento de fidelidad a la fe católica, con la fórmula prescrita por Pío IV,
en manos del delegado apostólico Mons. Vanutelli.
El Nacional, diario oficial de la época, con fecha 6 de octubre, refirió en largas
columnas el singular acontecimiento.
La idea de establecer en el Ecuador un ciclo de estudios científicos completos, de
instalar un observatorio astronómico de primer orden, debió haber brotado de la mente
de García Moreno cuando cursaba ciencias químicas especialmente, en si forzada
permanencia en París entre 1855 y 1856.
Maduró esta idea cuando ejerció el rectorado de la Universidad Central de Quito, pues
trató de este tema en la legislatura de 1857. Había pedido al científico botánico y
químico Jameson, residente en la capital, que dictara su especialidad en la Universidad.
Y él mismo enseñó Química, utilizando el pequeño gabinete que trajo desde París. Pero
todos eran esfuerzos incipientes y desorganizados. Mas no lo olvidó este hombre tenaz.
Llegó su hora 13 años más tarde, en 1869, en que dio los pasos conducentes a la
fundación de una Facultad de Ciencias, con tal rapidez y acierto, que deja sorprendido al
que lo considera. Era solo Presidente Interino y en vísperas de elecciones; ni eso, ni la
123 falta de todo le detiene. Carece de edificio, de profesores, de gabinetes, de biblioteca, de
una ley que le faculte a innovar los programas de enseñanza. Pero se lanzó a la aventura
científica con tenacidad incontrastable. Se apoyó en la Iglesia y en los Superiores de la
Compañía de Jesús. Les exigió mucho y lo consiguió todo.
El 29 de julio, en Sesión de la convención reunida en la iglesia de la Compañía de Jesús,
fue elegido Presidente el Dr. Gabriel García Moreno; por 28 votos entre 30. El 10 de
agosto prestó el juramento constitucional y asumió la Presidencia, en Sesión habida en
la Catedral Metropolitana.
Disponía de leyes suficientes para sus proyectos educativos y se aprestaba a establecer
la Facultad de ciencias. Pero no recibía respuesta de Roma del Padre Beckx. Le explicó
la razón Hernáez: su carta había ido sin firma, don Gabriel contestó el 31 de agosto: “A
mi regreso de Guachalá le convenceré de que la falta de contestación no admite excusa
alguna”.
Con todo, volvió a escribirle con el mismo objeto, a 9 de octubre de 1868:
“Aprovecho la ida a Roma de Mons. Vicente Pastor, nuestro encargado de negocios
ante la Santa Sede, para reiterar a V.P.M.R. las súplicas que le dirigí en mi carta del 17
de febrero de este año. Ya que hasta ahora ninguna contestación he recibido. Me
aseguran que mi carta llegó a manos de V.P.M.R., aunque sin firma… Sea de esto lo
que uere, lo importante es que V.P.M.R. me envíe los profesores para la Facultad de
Ciencias, y para el Colegio de Latacunga: ya que el de Cuenca está establecido; y ya
que vienen los misioneros para el Napo.
Mi objeto al establecer la enseñanza fundamental de ciencias es evitar el peligro que
hoy corren nuestros jóvenes al salir de los colegios de la Compañía. No teniendo ellos,
sino conocimientos incompletos y elementales, tienen que ir a países extranjeros para
aprender lo que ignoran; y regresan de ordinario sin fe ni moral, para servir de medio de
corrupción en el país.
Si por desgracia la compañía de Jesús no puede acceder a mis justos deseos, es
necesario se me hable claro. En caso de negativa, buscaremos otra Orden que se digne
aceptar el cargo de instruir a la juventud destinada a reemplazarnos.
Me permito hacerle dos indicaciones, porque las creo convenientes para el bien del
Estado y de la Iglesia:
La Primera se refiere a erigir en Provincia esta parte de la Misión Colombiana, porque
el Provincial residente en España no puede atender a las necesidades de este País; ni
manifiesta interés alguno por el porvenir del catolicismo en América.
124 La Segunda es que nombre otro superior, o se envíe un Visitador. El Reverendo Padre
Hernáez es muy bueno, pero no muy apto para el mundo. Haga de éstas indicaciones
V.P.M.R. el uso que tenga a bien.
Soy del parecer de que si vienen los profesores de ciencias, determinen aquí los
instrumentos, colecciones, libros que necesiten para plantear la enseñanza. Yo me
encargaré de hacerlos venir de Europa, por cuenta del Gobierno. Más tarde se podrá
erigir un buen Observatorio Astronómico bajo la línea equinoccio y a 3000 metros de
altura sobre el nivel del mar, en la meseta que habitamos. Para lo cual nos ayudará el
Reverendo Padre Secchi de V.P.M.R. atento y S.S.
García Moreno” (Archivo Romano; S.J.).
El Padre Beckx contestó a García Moreno, el 26 de enero de 1870:
He recibido la muy apreciable de V.E. de 9 de septiembre, en la que insiste en la
petición de cuatro profesores de ciencias, y me da varias indicaciones para el mejor
arreglo de esa Misión. V.E. conoce que los hombres no se improvisan.
Si la Compañía no hubiese abierto tantos Colegios en la República, procediendo más
despacio, habría tomado tiempo para que su juventud se formara, fácilmente podría
contar hoy mayor número de sujetos capaces de desempeñar esas cátedras que V.E.
desea confiarnos…
Ahora se quiere que cargue con nuevos colegios, cuando haciendo un esfuerzo, acaba de
emprender y abrir las difíciles e importantes Misiones del Marañón. Suplico, pues, a
V.E. que se persuada de nuestra buena voluntad…
Vengo ahora a las indicaciones que se sirve hacerme V. E.: … Sobre la erección de esa
Misión en Provincia y la mudanza del Superior. Acerca del primer punto, digo a V.E.
que deseo se pueda verificar, pero para ello se necesita una Casa del Noviciado y otra de
estudios para nuestros jóvenes. Estas Casas, según nuestro Instituto, deben tener rentas,
para manutención, libros, instrumentos, viajes, etc.
Cuando esto pueda alcanzarse y haya suficiente número de novicios, se podrá pensar en
el proyecto, que yo acepto; y favoreceré con todas mis fuerzas.
En cuanto al Padre Hernáez, me parece que no tiene más defecto que ser él demasiado
bueno; pero en cambio, no le faltan cualidades excelentes que le recomiendan. Estoy
haciendo, sin embargo, diligencias para encontrar un sujeto que pueda ir a ésa como
Visitador, y que pudiera luego suceder al Padre Hernáez que lleva ya muchos años de
Superior.
Y por esto, aun cuando no hubiera otra cosa, necesita quien lo reemplace. Espero que
pueda llevarse a cabo este plan.
Agradezco mucho la buena voluntad de V.E., el interés que tiene por la Compañía y la
confianza con que nos honra; pero le suplico, por ese mismo amor que le profesa, y por
el mismo bien de esa Misión, que nos deje obrar libremente, dándonos tiempo, y que no
125 nos obligue a precipitar las cosas; y nosotros procuraremos darle gusto en todo lo
posible.
Pedro Beckx, S.J.” (Archivo Romano)
La Convención Nacional de 1869 decreta el establecimiento de la Escuela Politécnica.
La marcha seguía a pasos agigantados: La convención empezó por dictar una nueva Ley
Orgánica de Instrucción Pública, cuyo título IV, “De la Enseñanza Superior”, dice:
Art. 42: La enseñanza superior se compondrá de las Facultades siguientes; de Filosofía
y Literatura, ciencias, Jurisprudencia, Medicina y Farmacia, Teología.
La Facultad de ciencias Matemáticas y Naturales comprenderá dos secciones: Ciencias
Físicas y Matemáticas, Ciencias Naturales. (Leyes y Decretos Convención N.) Mas el
Proyecto de sustituir la Universidad tradicional por una Politécnica, venía tratándose
desde Julio, y pasó por las tres discusiones, sobreponiéndose a la oposición. Todavía en
la tercera del 23 de agosto, se le hicieron retoques, quedando así: (Francisco Miranda
R.S.J., o.c., pág. 39)
Agosto 30. Establecimiento de la Escuela Politécnica
La Convención Nacional del Ecuador
Considerando:
1. Que las empresas nacionales sobre la construcción de carreteras, caminos de
herradura, mejora material de ciudades y puertos, así como la necesidad
premiosa de desarrollar ciertas industrias llamadas a influir poderosamente en el
progreso y felicidad de la República, exigen con urgencia la formación de
hombres capaces de desempeñar con aciertos y lucimiento los destinos públicos,
que requieren conocimientos fundamentales en Matemáticas, Ciencias Naturales
y otros estudios indispensables para el ejercicio de ciertas profesiones de
importancia:
2. Que desde los grados anexos de las Facultades de Jurisprudencia y Medicina
pueden optarse en muchos colegios de la Nación, la Universidad de Quito ha
dejado de ser un establecimiento necesario en el sistema de Instrucción Pública.
Art. 1
La Universidad establecida en la capital del Estado, se convertirá en Escuela
Politécnica, destinada exclusivamente a formar profesores de tecnología,
ingenieros civiles, arquitectos, maquinistas, ingenieros de minas y profesores de
ciencias.
Art. 2
La enseñanza que ha de darse en dicha escuela se dividirá en secundaria o
enciclopédica, y en superior o especial.
126 Art.3
Las materias que deben estudiarse en cada una de las divisiones expresadas en el
art. Anterior, la duración de los cursos, requisitos para los exámenes, orden y
demás por menores indispensables para la ejecución de este decreto, se fijaran en
los reglamentos o estatutos que al efecto diere el poder Ejecutivo.
Art. 4
Los fondos de la escuela:
1. Los pertenecientes a la Universidad, con excepción de lo que importe el
sostenimiento de las facultades de jurisprudencia y medicina, las cuales pasaran
al colegio nacional de esta ciudad, o a otro establecimiento adecuado.
2. La mitad del producto de las erogaciones que se hagan en todos los colegios,
para optar los grados de Licenciado y Doctor.
Art. 5
El poder ejecutivo dará de las rentas nacionales la suma necesaria para hacer
venir del extranjero los profesores necesarios, con quienes se hará contrato
especial para las enseñanzas que debe dar.
Art. 6
La instrucción dada en la escuela politécnica será gratuita, en consecuencia no se
cobrará a los estudiantes derecho alguno por sus matriculas, exámenes ni títulos.
Comuníquese al poder ejecutivo para su ejecución y cumplimiento. Dado en
Quito, capital de la república, a 27 de agosto de 1869.
El presidente de la Convención, R. Carvajal.
El secretario, Víctor Laso.
Palacio de Gobierno en Quito a 30 de agosto de 1869.
Ejecútese: Gabriel García Moreno.
El Ministro del Interior, Francisco J. Salazar.
El Padre Beckx ofrece profesores.
Por fin llego respuesta de Roma para el presidente. Se la entrego muy alborozado el
Padre Hernáez refiriéndole las generosas expresiones del padre general, especialmente
las frase “Me esforzare por satisfacerle plenamente”. No menos contento quedo el
mandatario. A si lo refiere al padre Beckx. (31-XI-69).
A 27 de mayo de 1870, el Padre Beckx escribió al superior de Quito:
“Luego de pocas semanas viajarán los profesores pedidos por el Excmo. Señor
Presidente. Se preparan y disponen para desempeñarse bien. Espero le darán cumplida
satisfacción” (Arch. S.J., Quito).
Los tres profesores elegidos fueron, Juan Bautista Menten, Teodoro Wolf y Luis Sodiro,
se hallaban en París, comprando cuanto útil y pedagógico les fue posible, como
127 colecciones de muestras, libros, instrumentos. Se embarcaron el 9 de julio en el Vapor
Francés Europa, y llegaron a Quito el 20 de agosto de 1870.
Se había cumplido el ambicioso sueño de García Moreno; y ellos sólo eran la
vanguardia de otros más que vendrían de inmediato.
No había tiempo que perder; de prisa se remodelaba el vetusto edificio de la
Universidad, en el antiguo local venerando de la Universidad de San Gregorio; y a prisa
se disponían los profesores para empezar los cursos de la Politécnica, en el próximo mes
de octubre. Todo había que improvisar, aún el idioma en que explicarían sus altas y
desconocidas materias. No daba tregua don Gabriel. Así, pues, a los pocos días, el 28 de
septiembre de 1870, fueron publicados los programas de la Facultad de Ciencias de
Quito.
Primer año, 1870 a 1871.
Se los dio a publicidad con orgullo comprensible, empleando una página entera de El
Nacional.
El Padre Agustín Delgado, Superior y Visitador en el Ecuador
El 27 de mayo de 1870 informó el Padre Beckx al Padre Hernáez que enviaba al Padre
Agustín Delgado, de 44 años, como sucesor suyo. Hernáez quedó de Rector del Colegio
Nacional de Quito.
El Padre Hernáez estableció la Misión y apoyó decididamente al Presidente García
Moreno, gracias a él se fundan los Colegios Seminarios de Quito, Guayaquil,
Riobamba, Cuenca, La Politécnica y los puestos de Misiones en el Oriente Amazónico.
Lo hizo con poca ayuda de la Provincia de Castilla, y aún con críticas de su parte, lo
confesaba el Provincial cumplido al Padre Delgado: “Los Superiores de aquí no tuvimos
parte sino para reprobarlo” (13-XI-72). Y está bien mencionar que Federico González
Suárez calificó al mandatario diciéndole: “El severo, el descontentadizo García
Moreno” (“Memorias íntimas”).
128 Bases del contrato con los Profesores de la Facultad de Ciencias, 21 de septiembre
de 1870
El nacional publicó el contrato entre el Ministerio del Interior e Instrucción Pública,
Francisco J. León, y el Visitador, Padre Agustín Delgado, por el cual los Profesores
Manten, Wolf y Sodiro, recibían 600 pesos anuales cada uno, igual que los restantes que
vendrían. El gobierno sufragaría los gastos de excursiones científicas, de mantenimiento
de museos y gabinetes y observatorio, a partir del 1 de octubre de ese año.
Crecimiento y apogeo de la Politécnica
El “Diario del Colegio” narra puntualmente los acontecimientos impresionantes del
desarrollo de la Politécnica; la llegada de los nuevos Profesores, cuya lista y
profesorado se expone en un cuadro elocuente. Los arribos de cajones grandes, aparatos
científicos traídos por mulas.
Al día siguiente, muy de mañana, se presentaba el Señor Presidente a verlos y
presenciar su funcionamiento. Bien lo calificaba el Provincial cumplido: “Un jefe de
Estado, ebrio de lo que se llama entusiasmo por la ciencia”. Y los profesores que lo
sabían, desempacaban los aparatos y se desvelaban estudiando los prospectos y
probando su funcionamiento. Y esto una y otra vez; hasta el agotamiento.
Labor de la Politécnica en beneficio del País
En un breve resumen, se pueden destacar algunos hechos:
Luis Sodiro dedicó su ciencia al estudio de la Botánica y Agricultura.58
En 1874 publicó un estudio compendioso sobre la flora ecuatoriana. Empieza por referir
que quedó sorprendido y cautivado por la asombrosa vegetación que contempló al subir
de Guayaquil a Quito. El Ecuador era el paraíso de las plantas; si bien lamenta el
limitado estudio, y éste debido a visitantes extranjeros. Sabemos que Celestino Mutis
58
SODIRO, Luis, S.J., “Ojada sobre la Vegetación Ecuatoriana”, 1874, Anales de la Universidad de Quito, Nº 1 1883. 129 trató de estudiar la flora quitense y convidó para ello al Doctor Eugenio Espejo, en
1787; proyecto que se frustró por las prisiones que padeció el Doctor de Santa Cruz y
Espejo.
Sodiro explica la razón geográfica de la riqueza botánica del Ecuador: se debe, dice, a
las condiciones únicas del país, situado en la mitad del mundo posee cerros altísimos,
cuyo límite de nieve perpetua esta a 4800 metros; esto es la altura del Monte Blanco, y
2000 metros sobre los Pirineos. Dispone de toda suerte de climas, que no varían por
estaciones como en Europa. Y, por dicha, Sodiro dispondrá de medios y de años para
estudiar esta excepcional botánica.
Un año antes de este estudio había fallecido el botánico W. Jameson, a quien rinde
homenaje por su herbario y la Sinopsis. Mas comenta: “Jameson no agotó la infinita
riqueza vegetal del Ecuador” “En efecto comparando el número de las especies
contenidas en la Sinopsis, con las de las familias correspondientes que hemos podido
colectar en tres años, hallamos que estas exceden en una tercera parte a las precedentes.
Pero quizá sus meritos son superiores por el estudio de agricultura y las enseñanzas
prácticas de cultivo de cacao, plátano, cascarilla, caucho, pastos, el ganado, etc.
Luis Dressel, químico, analiza 28 fuentes termales del país; y el agua potable de Quito,
que se recogía en cántaros para el servicio doméstico, en las contadas pilas de la capital,
la de las Llagas, esquina del Panóptico, Plaza Mayor, de San Francisco, de la Carnicería
(Teatro Sucre), Guápulo. Comprueba que el agua que vierte no era tan mala como se
decía; filtradas con carbón y arena serían muy potables.
Teodoro Wolf, como un anticipo de la monumental Geografía y Geología del Ecuador
de 1892, presentó en 1873 la Crónica de los Fenómenos Volcánicos y Terremotos del
Ecuador. Fue el estudio más serio y documentado de esta historia geológica del país, el
que corrige las opiniones populares, algunas recogidas por el propio historiador Padre
Velasco, y nos dejó la Crónica segura a partir de 1541 hasta 1868, el Terremoto de
Ibarra, “horrorosa catástrofe”.
130 Juan Bautista Menten merecería un largo capítulo, el profesor que por su múltiple
capacidad era el predilecto del señor presidente, el cual presenció el 17 de marzo de
1872 un acto científico en su honor, en que por primera vez se utilizaba un proyector
para exhibir maravillosas placas del satélite terrestre y escuchar las explicaciones de la
naturaleza lunar de los labios del sabio Menten.
José Colberg: se le debe primeramente el tratado de aritmética general y algebra, 187,
declarado texto oficial para los colegios y facultad de matemáticas. Luego sus relatos
del viaje al Ecuador, que recogió en un libro de 530 páginas, dos mapas y 150
ilustraciones: Nach Ecuador = hacia el Ecuador, narración científica y cultural de su
viaje desde Southhampton a Quito. Obtuvo cuatro ediciones en alemán se lo ha
traducido en partes y editado por el centro de publicaciones de la PUCE, 1977.
El régimen de la Politécnica
Calendario: Las matrículas se habrían el 15 de septiembre; el curso empezaba en
octubre y duraba hasta el 31 de julio.
Ya en 1872 se daba un total de 76 horas de clases semanales, y 21 de laboratorio.
Ayudas a los estudiantes
Fueron de muchas clases: La escuela preparatoria: que es agradecida por la Prensa –El
Nacional de 13 de noviembre de 1874- “En ella se daban clases especiales de
matemáticas, abreviación de cálculo, rudimentos de ciencias naturales, dibujo y lenguas
francesa, inglesa, alemana”, para disponer a los jóvenes a los cursos regulares.
Becas: Los estudios serán gratuitos; las becas se daban a los estudiantes de Provincia; o
de escasos recursos, para mantenerse en la ciudad. Con beca estudiaron alumnos
prominentes, como Belisario Quevedo, Alejandro Sandoval, Antonio Sánchez, Eloy
Herrera, Eudoro Anda, Lino M. Flor, Alejandrino Velasco, Gualberto Pérez, Augusto
N. Martínez, Manuel Barba y otros. Todos, en cambio, se comprometían a estudiar sus
materias por cinco años, aunque con el salario debido; los becarios debían dar una
garantía de mil pesos de que completarían adecuadamente sus estudios.
131 Tutores: Una vez matriculados, el decano les señalaba el profesor que se encargaría de
tutelar sus cursos y actividades académicas, que eran muy nutridas y exigentes.
Los Programas: Se publicaron en la Imprenta de Gobierno, lo mismo que los severos
sistemas de exámenes escritos y orales. El escrito duraba seis horas; el cual, aprobado
por los profesores, se pasaba a un examen oral de dos horas ante el Tribunal designado.
Logros de la Politécnica y los Politécnicos
El Presidente García Moreno, en el mensaje del 10 de agosto de 1871, sintetizaba así la
labor de éste y los institutos complementarios que iba estableciendo en el Ecuador:
“La nuevas generaciones hallarán abiertas a su inteligencia y laboriosidad carreras
variadas, hermosas y fecundas; y dentro de algunos años de asiduo y perseverante
trabajo, el Ecuador llegará a rivalizar en saber y civilización con las naciones más cultas
del mundo”.
Igual anhelo había tenido el Dr. Eugenio de Santa Cruz y Espejo, que fue precursor en
proyectos de levantar de la “desidia” –como el decía- al país que había brillado por su
laboriosidad, arte e industria textil y agrícola en los siglos XVI y XVII; y entonces se
encontraba decaído y anémico.
Igual pensamiento tenían los profesores alemanes politécnico, y a seo enderezaron su
labor. Ellos mismos testificaron que lo consiguieron en buena parte, pese a que el
grandioso Instituto Politécnico sólo duró seis años.
Cursos variados y complementarios
Mirando de arriba abajo, en la cúspide estaba la Facultas de Ciencias para la formación
de Ingenieros e investigadores en las diversas ramas. Luego la propia Politécnica para
carreras intermedias como ayudantes de laboratorios, etc.:
“La enseñanza técnica, completamente descuidada en los años pasados, se planteará y
difundirá sucesivamente en todos los establecimientos de Instrucción, desde la Primaria
hasta la Politécnica anexa a la Facultas de ciencias”. Prometía el mandatario, para ello,
132 se construía el Protectorado, o Escuela de artes y Oficios “una escuela de Artes
Mecánicas para Jóvenes”. Y otra para chicas. Una Escuela Agronómica, el
Conservatorio de Música y Bellas Artes, la Escuela de Cadetes para el Ejército.
La Politécnica logró sus objetivos, se ha dicho, primero porque siembra la semilla de la
educación como la quería García Moreno: Variada, científica, profesional. De allí en
adelante, aunque con interrupciones, se mantendrá esa benéfica educación.
Prepararon los Jesuitas alemanes a profesionales ecuatorianos que les sucedieron como
ingenieros, cartógrafos, químicos, astrónomos, geólogos, etc. Consigna Gualberto
Pérez, ingeniero y cartógrafo de valía en su folleto “Recuerdo Histórico de la Escuela
Politécnica” y F. Miranda Rivadeneira en su obra citada, y Jorge Villalba en “Los
primeros ingenieros ecuatorianos y su labor por el País” (PUCE, 1972). Ellos
constituyeron la segunda generación de profesores junto con el P. Luis Sodiro, que
permaneció estudiando la flora, dando clases de agricultura científica hasta su muerte en
1906.
Crisis de la Politécnica en 1875
A partir del terrible 6 de agosto de 1875, el asesinato del Presidente, los superiores de la
Orden y los profesores previeron la caída y muerte también de la obra también
apreciada por él. Y esto porque la Politécnica era la obra de un hombre, García Moreno,
más que de una Institución que la respaldara. Él había forzado, con mano más o menos
delicada, valiéndose de general de la orden, a fundar y llevar adelante una obra, que
dadas las circunstancias no era mirada como actividad propia e indispensable de la
Compañía de Jesús, ni la de Alemania, ni menos la de Castilla.
En realidad, no existía contrato claro para su fundación y mantenimiento, como los
hubo para los colegios o misiones orientales. Sólo hubo solicitud y concesión de unos
cuantos profesores científicos como colaboradores de un establecimiento dependiente
del Estado ecuatoriano. No se podía esperar que las provincias Jesuitas alemana o
castellana, proveyeran indefinidamente de profesores especializados cuando allá se
necesitaban para sus obras. Lo dice claramente al P. Delgado, el Provincial de Castilla,
Padre Cumplido: “No enviaré la segunda expedición si no pagan por la primera”.
133 Pese a lo dicho, el Padre Cumplido, enviaba expediciones, algunas excelentes, aunque
un solo sujeto experto en Matemáticas, el estudiante Ricardo Cappa y Manescau, que lo
era por haber sido oficial de marina. Fue el único español que trabajó como estudiante
de Mentes y publicó un Tratado de Cosmografía, con una selecta colección de
problemas Geodésicos, Astronómicos y Náuticos (Bruselas, 1877). Más adelante, Cappa
se dedicó a la Historia y publicó 20 volúmenes sobre la Etapa Hispánico-Americana,
insistiendo en los aspectos económicos, industriales, náuticos. Es obra de altísimo
mérito.
Había pues, que prever casos de salud, de agotamiento de estos profesores que debían,
acomodarse a una vida muy distinta, a veces penosa, de aquello que era usual en su país.
Y ocurrió que el Visitador y superior Delgado fue muy exigente en imponer las
costumbres españolas a los alemanes, hombres ya maduros y recargados de trabajo.
Asuntos pequeños pero fastidiosos. Lastimosamente, el P. Delgado, al decir del mismo
Padre Beckx, no gustaba al señor Arzobispo, no a García Moreno, ni a los americanos
tampoco.
Se trató, pues, de remediar esta dificultad con el nombramiento del nuevo superior, que
lo fue el P. San Román, a finales de 1874;y con la venida de un alemán como rector de
Quito y Decano, el Padre Clemente Faller, ex Provincial de Alemania; pero continuaron
las dificultades internas y un sordo descontento de los profesores teutones. Hubo antes,
en la antigua provincia de Quito números profesores germanos en el centro de europa;
se diría que todos ellos se adaptaron maravillosamente a la pobreza de privaciones de
un País subdesarrollado; y congeniaron con americanos y españoles. Más adelante,
ocurrirá cosa parecida; y hemos llegado a conocer y venerar a éstos Jesuitas generosos y
tan americanizados.
4.3.3.5. El Concordato
El nombre, si nos atenemos a la metodología, nos dice: concordar, poner los corazones
de acuerdo, arreglar los arreglable por medios algo más amistosos, llegar al
entendimiento de las mentes por el sentimiento de los corazones. Echar en juego esa
razón del corazón, pascaliana según se dice, pero pauliana en la vida de la Iglesia, para
armonizar las razones del cerebro o de la dialéctica, según postulados que salen de lo
134 usual en los caminos del Derecho o de la política. Si no se busca en el orbe de la caridad
o del amor, el Concordato es un subterfugio como cualquier otro, como son tantos
tratados que los Estados celebran entre sí, o tantos pactos que los vencedores han
impuesto a los vencidos, o tantos instrumentos de paz que no hacen sino decretar una
nueva guerra.
La esencia de los Concordatos consta en establecer que de un lado hay una comunidad,
una ekklesía que demanda ciertas normas de reconocimiento por parte del Estado y la
busca por intermedio del padre de la Cristiandad, el Papa. Comunidad, Estado,
Pontífice. Pero comunidad y Pontífice son unanimidad, por lo cual el acto tripartito, al
parecer, es un acto bilateral.
Entre las normas de universal convivencia y justicia, los concordatos establecen otras
que son peculiares de estos pactos, que no aparecen ni tienen por qué asomar en tratados
interestatales de índole común. Y es que la Iglesia como ser histórico y permanente, es
“Enseñanza”: el magisterio que le impuso el Divino Fundador. No es, entonces, derecho
o deber. El Magisterio es el Ser de la Iglesia y este Ser necesita explicitarse, de manera
primordial, en los Concordatos. Madre y Maestra, la Iglesia, portadora de Cristo sobre
el tiempo, es la “Palabra del Señor” entre los hombres. Si la Iglesia no enseña, deja de
ser Iglesia. Por tanto, el orden de la enseñanza, junto con la implícita libertad para
hacerla, figura en los concordatos y los configura como documentos de orden espiritual,
al mismo tiempo que de Derecho Internacional.
Junto a esta primera urgencia, en los Concordatos pueden ir otras disposiciones que
complementan, facilitan, esclarecen las relaciones entre la Iglesia y el Estado.
Documentos de valor positivo como son, no pueden ser impermeables a la circunstancia
histórica envolvente. Pero su esencia trascendental es la que les define.
4.3.3.6. El Concordato entre el Ecuador y la Santa Sede
Las relaciones entre los Estados y la Iglesia Católica se han desenvuelto a veces
pacíficamente por el mutuo respeto de las funciones de cada una de las dos Potestades
soberanas. En muchas ocasiones los soberanos Pontífices han hecho concesiones a favor
de los príncipes cristianos por medio de actos unilaterales, formulados generalmente en
135 bulas o constituciones apostólicas. En otras ocasiones ha sido necesario llegar a
acuerdos o tratados internacionales, llamados Concordatos, porque en ellos se resuelve
coordinar la acción del Estado y de la Iglesia, reconociendo los derechos de cada uno.
El más antiguo Concordato que se recuerda es el de Worms del año 1122 entre el
Emperador germánico y el Papa. En cambio, las relaciones de la Santa Sede con los que
ahora son Estados de América, arrancan de la Bula “Eximia devotionis” de 1501, que
concedía a los reyes de Castilla, con la Bula Universalis Ecclesiae del año 1508. Este
privilegio de índole personal, fue ejercitado durante el largo período hasta la
emancipación de América Hispana y permitió la administración y gobierno de la Iglesia
en este Continente, tan alejado de Roma, dados los medios de comunicación de
entonces. No faltaron abusos de los reyes, pero, en general, se puede calificar de
positiva su intervención, que favoreció las misiones, la fundación de Diócesis, la
edificación y mantenimiento de iglesias, la difusión de la catequesis y la evangelización
entre las múltiples razas indígenas.
Producida la Independencia en las primeras décadas del siglo XIX, casi por inercia,
varios de los nuevos Estados, pretendieron continuar con el único sistema que era
conocido en el Continente, es decir, con el Patronato. En Colombia en 1824 se dictó una
Ley de Patronato, por la cual se regulaba minuciosamente la vida de la Iglesia,
sometiéndola a estricta tutela y vigilancia por parte del Estado. Muchos de los próceres,
sin embargo, aspiraban a una regulación de las relaciones con la Iglesia mediante un
Concordato. Colombia procuró entablar negociaciones diplomáticas con la Santa Sede,
pero tropezó inicialmente con la dificultad de no estar aún reconocida su existencia por
los demás Estados, mientras que España se oponía activamente al tal reconocimiento.
La Santa Sede, ante la dificultad, optó por una vía intermedia: proveer a las necesidades
más urgentes de las iglesias locales de América, sobre todo, mediante el nombramiento
de obispos, pero declarando que estos actos rigurosamente eclesiásticos, no constituían
un reconocimiento político de los nuevos Estados. Simón Bolívar manifestó su deseo de
organizar las relaciones conforme al Derecho Internacional y en bien de la Patria y la
religión, interesándose por los asuntos religiosos; así, por ejemplo, solicitó al Papa la
elevación de la iglesia quiteña a Arzobispado.59
59
Cfr. Castillo Illingwort, José Santiago: La Iglesia y la Revolución Liberal, pág. 92, Quito, Banco Central, 1995. 136 Cuando el Ecuador se separó de Colombia, en su Primera Constitución, del año de
1830, declaró que el Estado en ejercicio del Patronato, está obligado a protegerla (a la
Religión del Estado, la Católica), y a ésta, respetar”. La intención era recta y
correspondía a la profunda fe de los asambleístas y de toda la Nación, pero
evidentemente, se incurría en un error al pretender ejercitar el Patronato, que terminó
con la dominación de los reyes de Castilla en nuestro país. En las sucesivas
constituciones se fluctúa entre la reproducción de esta fórmula y otra en la que no se
mencionaba el Patronado, pero siempre reconociendo a la Religión Católica como la
única y oficial del Ecuador. Podemos calificar esta situación de “confusa”, ya que la
Iglesia nunca reconoció este Patronato republicano, pero, por otra parte, lo toleró ante
situaciones que no dejaban otra salida posible. Así, por ejemplo, el Presidente Vicente
Rocafuerte “en ejercicio del Patronato”, resolvió desmembrar la Diócesis de Cuenca y
crear la de Guayaquil, designando al nuevo Obispo, el ilustre guayaquileño Francisco
Javier de Garaicoa, y el Papa accedió a darle la investidura eclesiástica, la misma que
negó a otro candidato que pretendía el mismo Rocafuerte que pretendía que fuera
nombrado Obispo de Cuenca. Los presidentes Roca y Noboa, igualmente pidieron
expresamente el nombramiento de Obispos presentados por ellos en ejercicio del
pretendido Patronato y obtuvieron los nombramientos, por tratarse de personas idóneas,
en tanto que el Presidente Urvina quiso imponer un eclesiástico que no reunía las
cualidades propias de un Obispo, y encontró el sistemático rechazo de la Santa Sede.
En ciertos casos la injerencia del Estado en los asuntos eclesiásticos resulta más
arbitraria e hiriente para la Iglesia, por tratarse de materias rigurosamente religiosas,
como por ejemplo, el decreto de 8 de abril de 1839 sobre secularización de religiosos60
y también se produjeron intervenciones francamente hostiles como la expulsión de la
Compañía de Jesús, ordenada por el Presidente Urvina.
Simón Bolívar, como afirma el Dr. Julio Tobar Donoso,61 tuvo siempre el alto
pensamiento de que la Iglesia debe gozar de una absoluta libertad y protección de parte
del Gobierno, y se empeñó en regularizar esta situación. Ignacio Sánchez de Tejada fue
el primer diplomático enviado por Colombia a la Santa Sede y sirvió también al
Ecuador en los primeros años. Por medio de él se tuvieron los contactos, los primeros
60
61
Registro Auténtico de la Legislación, vol. II, pág. 527. TOBAR DONOSO, Julio, Monografías históricas, pág. 428, Quito, 1937. 137 contactos con la Santa Sede. Pero Rocafuerte nombró a Don José Modesto Larrea, como
el encargado de negocios en París y ante la Santa Sede para obtener que el Papa
confirmara la iniciativa de crear el Obispado de Guayaquil. Esta gestión la culminó con
éxito el delegado de la Nueva Granada, Fernando de Lorenzana, quien siguió por
muchos años sirviendo voluntariamente también al Ecuador.
El Presidente General Francisco Robles llegó a la convicción de que no bastaba ni las
medidas de fuerza para someter a la Iglesia y pretendió conseguir, mediante un
Concordato, que se le reconociera el derecho de Patrona, tal como figuraba en la Ley
colombiana de 1824, para lo cual designó al ex presidente General José María Urvina
representante ante la Santa Sede; pero este desistió de tal empeño, dándose cuenta de
que la Iglesia no cedería en ningún caso las atribuciones que corresponden a su propia
naturaleza de sociedad religiosa.
4.3.3.7. Nuevos Institutos Religiosos a raíz del Concordato
4.3.3.7.1. Jesuitas
Los Padres de la compañía fueron desterrados por Urvina en 1652, y llamados
nuevamente por García Moreno en 1862 para hacerse cargo de la Segunda Enseñanza.
El presidente, a raíz de su elección, había escrito apremiantes cartas al Superior de la
Misión granadina y luego al General de la Compañía, pidiéndoles que le enviasen
cuarenta o cincuenta religiosos para fundar simultáneamente seis colegios en su Patria.
Impaciente estuvo García Moreno, porque los superiores de la Compañía no podían
cumplir; mas, en los primeros meses de 1862 vio ya en parte realizados sus afanes.
El 28 de marzo de dicho año llegaron a Guayaquil los Padres Luis Segura, Heladio
Orbegozo y Manuel Pieschacón; el 29 de julio los Padres Francisco Javier Hernáez,
Miguel Franco, Manuel Fernández, Antonio Borda y Anastasio Silva; y el 12 de agosto,
varios de ellos, con su Superior, el Padre Hernáez, entraron en Quito, donde fueron
acogidos con la cariñosa y tradicional deferencia de todas las clases sociales.62
62
Recuerdo del quincuagésimo aniversario del establecimiento de la Compañía en el Ecuador. 138 El Ejecutivo y el Superior de la Compañía celebraron el 28 de julio de 1863 un contrato
que, con algunas modificaciones, fue aprobado en la Legislatura del siguiente año: la
Nación faculta, por medio de él, a los superiores de la Orden para que establezcan casas
y colegios de educación, fomenten las misiones de la región oriental, así como para que
adquieran bienes muebles e inmuebles; el Gobierno debe sufragar los gastos de los
Padres que, de común acuerdo, vinieren para el servicio de los colegios de Quito y
Guayaquil y de los que en adelante instituyere el Poder Ejecutivo; los miembros de la
Orden no pueden ser despedidos sin un desahucio de ocho meses y sin que se abone a
cada uno la cantidad de setecientos pesos para el viaje.
El colegio de Quito se abrió el 9 de septiembre de 1862. Tuvo al principio un carácter
mixto, pues, a solicitud del Arzobispo de Quito, Mons. José María Riofrío Valdivieso.
Los Jesuitas se encargaron del Seminario de san Luis, en cuyo edificio funcionó el
plantel hasta 1865.
En 1863, luego de celebrarse en contrato, los Padres asumieron la dirección del Colegio
San Vicente de Guayaquil, y en 1864, el colegio San Felipe de la ciudad de Riobamba
con la competente dirección del Padre Enrique Terenzianí.
Más tarde correrá a cargo de los jesuitas la dirección del Observatorio Astronómico de
Quito. También se les confió la responsabilidad de organizar la Biblioteca Nacional. Y
en el año de 1870, la fundación y dirección de la célebre Escuela Politécnica. Y desde
luego, los miembros de la Compañía volverán a las misiones del Napo, que tuvieron que
abandonar en malhadada hora.
4.3.3.7.2. Hermanos de las Escuelas Cristianas (1863)
El Presidente Gabriel García Moreno se preocupó con mucho afán de la educación en
sus diversas fases y estamentos; hacia el año1860, la labor educativa había venido muy
a menos, y se necesitaba la presencia de comunidades docentes para inyectar nueva
vitalidad. La ocasión se presentaba oportuna, con motivo del viaje del canónigo y Deán
de la Catedral de Cuenca, Dr. José Ignacio Ordóñez, para concertar un Concordato con
el Vaticano. El magistrado le recomendó, por de pronto, traer miembros del Instituto de
Hermanos de las Escuelas Cristianas, para la educación primaria de los niños
139 ecuatorianos, y Hermanas de los Sagrados Corazones de Picpus para regentar colegios
de niñas.
Hallándose ya en París, Monseñor Ordóñez, se entrevistó con el Superior General,
Hermano Felipe Bransiet, y el 12 de septiembre de 1861, le presentó una solicitud
pidiéndole siquiera tres religiosos. El superior manifestóle que no podía acceder a sus
deseos, pero que reuniría 10 jóvenes religiosos en la capital francesa para que
aprendieran la lengua española, y pudieran, dado el caso, hacerse cargo de tres escuelas
en el “lejano país”.
Al partir el Señor Ordóñez para Roma, dejó el cuidado de llevar a buen término aquel
asunto al Ministro Plenipotenciario en París, Don Antonio Flores Jijón.
El 27 de marzo de 1862 se ajustó el contrato entre el gobierno de la República y el
Instituto fundado por San Juan Bautista de la Salle. El 3 de julio siguiente la Legación
ecuatoriana anunciaba al Hermano Felipe, que el Presidente García Moreno había, con
fecha 10 de mayo, ratificado dicho contrato. Entre tanto, diez hermanos se afanaban en
aprender español. Inesperadas dificultades administrativas retardaron cuatro meses la
salida, que debía efectuarse en el mes de septiembre de 1862.
El 28 de enero de 1863 salieron de Francia con dirección al puerto inglés de
Southampton, del cual zarparon el 3 de febrero. Entre sus compañeros de viaje se
encontraban el Canónigo Ordóñez y su hermano Carlos, que habían de ser sus
introductores en el suelo ecuatoriano.63
El 24 de febrero, luego de las escalas en Sto. Tomás y Colón los viajeros llegaron a
Panamá. Y desde esta ciudad del Lasallanos tomaron el vapor “Valparaíso” que los
conduciría al Puerto de Guayaquil. Nadie vino a su encuentro, si los hermanos no
echaron de menos en ningún aparato exterior en su recepción, no fue lo mismo
tratándose de las condiciones locales y las consiguientes incomodidades de la estación
de invierno.
Al día siguiente, 1 de marzo, Monseñor Ordóñez, celebró la Misa para ellos,
previniéndoles contra posibles decepciones y desengaños, pues en ninguna de las
63
PASCAE, Remigio Germán, Los Hermanos de las Escuelas Cristianas en el Ecuador, obra inédita en tres tomos. 140 ciudades donde debían establecerse –Guayaquil, Cuenca, Quito- se había previsto
dotarles de edificios mediamente cómodos para su labor escolar, menos aún para la
vivienda comunitaria.
El 2 de marzo principió la dispersión: tres Hermanos: Gedeón, Paterniano y Lorenzo
quedaron en Guayaquil. Los Hermanos Agulis, Apolo y Juniano se encaminaron hacia
Cuenca, y los hermanos Albano, Yon, José, Adolfo y Julio subieron a Quito, soportando
una serie de penalidades.
En la capital, luego de unos días de hospedarse en casa del señor José María Lasso,
recibieron para iniciar su apostolado educativo, el viejo convento de Nuestra Señora del
Socorro o Beaterio. El Presidente García Moreno con poco tacto político y dejándose
llevar de su temperamento exaltado, por poco echa a perder la fundación, considerando
que los Hermanos habían llegado en tiempo muy inoportuno, incluso de “conflicto
internacional” con Colombia. Además, los señores Ordóñez se habían permitido
adelantar de su peculio el dinero requerido para el viaje.
Serenados los ánimos, las cosas tomaron otro sesgo, pero siempre quedó en el ánimo de
los primeros religiosos franceses al sabor amargo de la decepción.
No habiendo encontrado sitio adecuado, los hermanos que habían quedado en
Guayaquil, pasaron a Cuenca, ciudad en la que se abrió la primera escuela Lasallana de
habla hispana, el 4 de mayo de 1863, siendo uno de los primeros inscritos el niño
Francisco Febres Cordero Muñoz, que más tarde abrazaría la vida religiosa con el
nombre de Hermano Miguel.
El apostolado del Hermano Miguel en Quito, viene caracterizado por una progresión de
dinamismo, fervor y caridad: de la tercera clase a inspector de los cursos elementales;
de profesor de cadetes en la Escuela Militar, a encargado de preparar los niños para la
Primera Comunión, para recalar, finalmente, en la función de director y prodirector de
la comunidad.
La Revolución liberal del 5 de junio de 1895, marca la hora de la prueba para la
fundación ecuatoriana. En una época difícil y crispada como aquella, muchos hermanos
estaban ya con un pie en el estribo. No faltaron los vacíos y deserciones. Una vez
141 pasada la crisis, se sosegaron los ánimos y comenzó la reorganización del Distrito en
tres oportunidades, el santo asume la responsabilidad del Noviciado. La primera vez
durante siete meses, a partir del 2 de febrero de 1869. La segunda en 1901, pasó dos
años con los novicios. Finalmente, el año de 1905, éstos se beneficiaron durante cuatro
meses de las sabias directrices del experto director, quien consignó en uno de sus
escritos:
“El Distrito del Ecuador ha sufrido muchos quebrantos: importa, pues,
prepararle religiosos denodados, estables a prueba de bomba”
(Pensamientos).
Fácil sería caer en la fase ditirámbica al evaluar su quehacer pedagógico con los niños o
su labor catequística, apreciada por todos. Poseedor del lenguaje pulcro y al ritmo de
palabra fácil y convincente, llegaba sin mayor dificultad a la inteligencia y corazón de
sus educandos, cerciorándose de que sus explicaciones fueran comprendidas por los más
retrasados. Conocía las aptitudes y sus alternancias en el proceso del aprendizaje:
“No extrañaremos –decía- al observar diferentes mudanzas y vaivenes en
la conducta de nuestros alumnos… Estos cambios son inherentes al
temperamento de los niños. Importa, pues, sobrellevarlos con gran
paciencia, reprimiendo las expresiones de enojo, de descontento que
pudieran escapársenos, porque es inútil, y aún peligroso, echar a los
niños en cara, con demasiada frecuencia, su ligereza y aturdimiento”
(Pensamientos).
Con razón escribió el Cardenal Pablo Vega, S.J., con el motivo de la beatificación del
Hermano Miguel:
“Fue sobretodo el amor a Cristo el que lo convirtió en gran pedagogo que
en su trato con los niños podía ocultar los rayos deslumbradores de su
talento y de su saber literario para adaptar su luz a las posibilidades de la
mente infantil y acercarlas así a aquel que es luz infinitamente suave y
amorosa para los más pequeños y para cuantos tienen corazón de niños.
Todas las cualidades de su rica personalidad fueron puestas muy
integralmente al servicio de esta vocación de educador y catequista. La
dignidad de los modales, la alegría franca e irradiante, la noble
sinceridad, la mansedumbre y suavidad, la laboriosidad infatigable, la
energía indominable, la fidelidad” (Cardenal Pablo Muñoz Vega .S.J. Exaltación del Beato Hno. Miguel, en la casa Generalicia de los HH EE.CC. Roma 31 de octubre de 1977).
142 “Subrayemos en particular esta característica, ya que la ha destacado la
voz del Papa en sus preciosa homilía de la Beatificación. El beato Miguel
aunque frágil físicamente fue granítico moralmente en todo cuanto traía
el deber de la fidelidad a Dios, ya fuese en seguir su vocación al Instituto
de las Hermanos de las Escuelas Cristianas ya en el cumplimiento de su
austera regla, ya en la defensa de los derechos y la libertad de la Escuela
Católica” ((Cardenal Pablo Muñoz Vega .S.J. Exaltación del Beato Hno. Miguel, en la casa Generalicia de los HH EE.CC. Roma 31 de octubre de 1977).
El “Patrono de los Catequistas” no se contentó con ser Ministro de la Palabra, con sus
lecciones henchidas de fe y de convicción. Su gran capacidad de trabajo le impelió a
traducir y componer obras catequistas desde las elementales hasta las superiores y de
consulta, como la Historia Sagrada en tres cursos; la explicación de la doctrina cristiana,
la explicación del catecismo, dividida en tres partes: Dogmática, Moral y Litúrgica. Este
último trabajo que le llevó no poco tiempo y desvelos, no logró editarse a pesar de haber
sido aprobado por el maestro del Sacro Palacio, el dominico Lapidi, por diversas
razones, y por cuanto de Roma habían anunciado la edición del Catecismo llamado de
Pío X y del cual hizo una propia traducción el Hermano Miguel. A este trabajo de
compositor, había que agregar el Devocionario de la Niñez y cantidad de poesías y
cánticos religiosos.
Con razón anota el doctor Salvador Lara:
“Necesariamente el Hermano Miguel fue conducido por el Magisterio al campo
inmenso de la composición escrita, predominantemente didáctica. De la lectura
voraz debió pasar a la recopilación de textos selectos, a la formulación de
reseñas, notas, apuntamientos críticos, a la elaboración de esquemas para futuro
desarrollo y, en fin, a la preparación definitiva, minuciosa de sus propios textos,
cada vez más experimentados en el diario ejercicio de las enseñanzas, más
afinados en contacto con los mismos párvulos, para cuyos diverso niveles de
instrucción estaban compuestos”. (SALVADOR LARA, Jorge, El Hermano Miguel, gramático y escritor, Domingo 7 de octubre de 1984, Diario “El Comercio” de Quito. Salvador Lara escribió en este rotativo una serie de artículos sobre algunas facetas del Hermano Miguel, que iba a ser canonizado el 21 de octubre de 1984 por el Papa Juan Pablo II). Dice al respecto el insigne Honorato Vásquez… “se aniñaba para hacerse más atrayente
e inteligible a los pequeñuelos. Y tal predilección hizo que su docta pluma no escribiese
preferentemente sino para los niños. Y aquí es donde hay que admirar la labor literaria
del Hermano Miguel, labor anónima, porque la humildad movióle a omitir su nombre en
los libros a los que ya es tiempo se lo restituya… Entre todo cuanto escribió, nada
143 admiró tanto como la serie de libros sobre la lengua castellana. No conozco en la
literatura de España ni de América, otros que puedan rivalizar con ellos en claridad,
método, precisión y un tal intento ideológico que es el propio discernir del niño…”
El que ha profundizado en la tarea lingüística del Hermano Miguel, ha sido el
académico Hernán Rodríguez Castelo, quien se expresa así:
“La figura lingüística del Hermano Miguel es tan sólida como para no
pedir dádivas; tan alta como para menospreciar el elogio barato; tan
sugestiva como para invitar a la búsqueda, esto es lo más serio; tan
recatada, que pone a prueba todos los saberes, investigativos y críticos”
(RODRÍGUEZ GASTELO, Hernán, El Hermano Miguel lingüista, Pág. 26, 1978).
El 14 de noviembre de 1887, el santo salió de Quito para Guayaquil, donde se embarcó,
en compañía de su amigo el doctor Carlos R. Tobar, rumbo a Europa.
En París tuvo oportunidades de saludar al gran filólogo colombiano don Rufino Cueva,
con quien estrechó lazos de amistad y averiguar pormenores relativos a la edición de
algunas de sus obras.64 A principios de febrero de 1888 estuvo ya en Roma para la
solemne ceremonia de la beatificación del Venerable Juan Bautista de la Salle por el
Papa León XIII, durante la cual, según su propia expresión “sintióse allí como arrobado
hasta el tercer cielo”. Luego de tres semanas de estancia en la ciudad Eterna, regresó a
Francia, desde donde retornó al Ecuador junto con el Provincial Hermano Bernón y tres
nuevos colegas, con la memoria enriquecida con tantos y tan variados recuerdos, con el
corazón henchido de dulcísimas emociones. (20 de junio de 1888).
Con nuevo brío reanudó sus labores escolares, educativas y catequísticas, atendiendo de
preferencia a estas últimas, y desde luego a la composición de nuevos textos, entre los
que sobresale la célebre Gramatiquilla infantil. Además de su consagrada dedicación al
estudio y enseñanza de la Lengua Castellana, escribió con fortuna una gran variedad de
composiciones poéticas: Himnos, odas, cánticos, etc. Célebres, entre todas, las que
ofrendó a la gloria del Beato Juan Bautista de la Salle.
64
En realidad la entrevista con Rufino José cuervo tuvo lugar más bien al regreso del Hermano Miguel de Roma, como se desprende de una de sus cartas. 144 En 1890, a instancias de distinguidas familias de la sociedad quiteña, se fundó el
Pensionado o Instituto de la Salle, como establecimiento de enseñanza primaria y, dos
años más tarde, con el carácter de enseñanza secundaria. El Hermano Miguel fue
designado inspector de dicho Instituto y profesor de gramática castellana. En esta época
elaboro tres textos de gramática y uno de literatura.
El día 2 de agosto de 1892 el Hermano Miguel fue recibido en la Academia Ecuatoriana
de la Lengua, a propuesta de los académicos Juan León Mera, Miguel Egas y Carlos R.
Tobar. Y ocupo la silla del general y diplomático Dn. Francisco Salazar. El
recipiendario, después de haber elogiado al difunto general, pronunció su discurso en
torno a la influencia del cristianismo, sobre la moral, las ciencias y las artes.
En 1906, la Academia Nacional de Venezuela, nombróle a su vez, miembro
correspondiente de ella. Mas nadie lo supo sino cuando, después de la muerte del
favorecido, apareció el diploma que como a tal le designaba. Francia, por su parte, le
condecoró con las “Palmas Académicas”.
El académico cuencano, también se daba tiempo para incursionar en el campo de la
polémica, para defender a sus colegas académicos de supuestas incorrecciones
idiomáticas. No faltaron las penas: sus mejores amigos fueron víctimas del ciclón
revolucionario del 95. La misma comunidad Lasallana, estuvo al punto de ser expulsada
del país: lo fue por lo menos, de su antiguo edificio el Beaterio, y se habría cerrado
definitivamente la escuela de Quito si no afrontara valientemente el problema un
prelado como Monseñor González y Calisto… gracias a él se abrió en el cebollar la
Escuela de la Sagrada familia y el 19 de marzo de 1896, y los hermanos pudieron así
continuar su magisterio y permanecer en el Ecuador.65
Conocedores de sus dotes y virtudes, los superiores del Instituto lo llamarán a Europa, a
la cual irá por segunda vez. El viaje lo efectúa con el asistente Viventien-Aimé. Su
presencia parecía necesaria, para que juntamente con un equipo de Hermanos
especializados trabajará con eficiencia en completar la colección de manuales didácticos
en lengua española para el Instituto Lasallano.
65
SALVADOR LARA, Glorificación del Hermano Miguel, Artículo publicado en El Comercio, el jueves 11 de octubre de 1984. 145 Por poco tiempo estuvo en París donde se le ofreció una nueva oportunidad de
entrevistarse y departir con el filólogo colombiano Rufino Cuervo.
De la capital francesa pasó el santo, a la casa Generalicia, situada en Lembecq-les Hal
(Bélgica). El clima afectó a su precaria salud y hubo de ser trasladado a Premiá de Mar,
junto a Barcelona, donde se había iniciado una Casa de formación que acogía a jóvenes
de varias nacionalidades. Y mientras seguía con su trabajo de compositor de obras
didácticas, el Hermano Miguel daba a los aspirantes lecciones de español. Las obras
urgían; traducción del Catecismo de Pio X, un curso de Historia Eclesiástica y una
Historia del Ecuador. Conocerá los disturbios de la Semana Trágica (julio 1909). A raíz
de dichos acontecimientos vivirá ocho días en el Colegio Bonanova de Barcelona.
Retorno a Premiá y al quehacer de elaborar nuevos textos que saldrán, esta vez,
formando parte de la novísima colección Bruno.66
Desgraciadamente, el local que se les asignó a los Hermanos ere húmedo y malsano, lo
que provocó serios trastornos y enfermedades en el personal. Por otro lado, no bien se
abrieron las clases en Cuenca y posteriormente, en Quito (agosto, 63), una brecha se
abrió en la comunidad Lasallista y brotó el descontento. Los cambios del personal
decretados por el Hermano Albano, Visitador, no arreglaron la situación, y un grupo de
Hermanos prefirió salir del País con destino a Norteamérica y otros a Francia. A los que
se agregaron los afectados por enfermedades y dolencias en la ciudad de Cuenca.
Víctima de la fiebre tifoidea, falleció el Visitador, Hermano Albano, a quien se le
sepultó en medio de la consternación general. Sucedióle el ilustre pedagogo Hermano
Yon José. Cuando todo parecía terminar en fracaso, la providencia suscitó en la ciudad
de Cuenca una vocación excepcional: el Hermano Miguel, que, juntamente con los
novicios que ingresaron en la ciudad de Quito, garantizaba el porvenir de la obra. Pronto
llegaron Hermanos de Norteamérica y Francia ante las instantes súplicas de García
Moreno, ya en su segunda presidencia. Con este valioso aporte, se abrió un risueño
porvenir y comenzó el Instituto a extenderse a varias ciudades del país. Además, en la
misma casa de el Beaterio, merced al empuje del Hermano Yon José, se organizaron
66
Apellido castellanizado de Edmond Brunhes (Hno. Gabriel Mane) que llegó a ser superior general del Instituto. 146 cursos para maestros, se publicó el Reglamento de Escuelas Primarias, que debería
servir de base para la organización escolar, y cuya aplicación produjo excelentes frutos.
En beneficio de la raza indígena, el Hermano Visitador estableció una especie de
Normal con pocos y escogidos alumnos indios, reclutados de las provincias de Loja,
Imbabura y Tungurahua, pero que tuvo efímera existencia. Con Hermanos europeos de
varias nacionalidades, traídos de Estados Unidos, se estableció el Protectorado Católico,
especie de Escuela de Artes y Oficios, que prestó sus servicios casi por una década. De
los países vecinos, solicitaban informes de los métodos y obras Lasallanas: Colombia y
Chile fueron los primeros beneficiados de la presencia de Hermanos de las Escuelas
Cristianas, después del Ecuador.
Con la muerte de García Moreno, la obra Lasallana sufrió un colapso; pero, superando
las dificultades, tomó gran vigor, llegando a su apogeo, en vísperas de la Revolución
Liberal, que nuevamente, la debilitó por un tiempo, hasta la llegada de un numeroso
contingente francés, venido a raíz de la persecución combista de 1904.67
4.3.3.7.3. Los Padres de la Congregación de la Misión (lazaristas o vicentinos) 1870
El 8 de septiembre de 1870 desembarcaron en playas ecuatorianas, para la fundación de
casas de beneficencia, los padres Lazaristas Juan Ceaverie y Juan Stappers, quienes
habían venido con las primeras Hijas de la Caridad.
Gobernaba la Arquidiócesis de Quito en aquellos días, el Ilmo. Señor José Ignacio
Checa y Barba. De viaje a Europa el año de 1869, para el Concilio Vaticano I,
convencido del éxito sobresaliente alcanzado por la Congregación de la Misión en los
Seminarios, firmó a principios del año 1871, un Convenio con el General de Lazaristas,
Rvdo. Padre Juan Bautista Etienne, para que los Hijos de San Vicente de Paúl, se
encargaran del gobierno y enseñanza del Seminario Conciliar de Quito.
67
PASCAL, Germán R. op. cit. y MUÑOZ BORRERO, Eduardo, El Instituto de la Salle en el Ecuador (1963‐
1977. 147 Por el mes de septiembre de 1872, llegaron los Padres Pedro Schumacher y Opiato
Gaudrefroy, y un año después los Padres Neuman y Claudouvich, con los Hermanos
Clemente Overaft y Pedro Mentzen.
En diciembre de 1872, los recién llegados Lazaristas, con la colaboración de los
canónigos Juan de Dios Campuzano y Pedro Rafael González y Calisto, abrieron el
Seminario Mayor en los claustros del antiguo noviciado de San Francisco, instalando
tan solo el primer curso de Teología, pues los demás cursos superiores y el Seminario
Menor, continuaron por unos meses con la dirección de los Jesuitas. El año de 1873,
con el arribo de los Padres Neuman y Claudouvich, todo el Seminario Mayor pasó a San
Francisco; y en noviembre de 1874, también el Menor, quedando definitivamente en
esta fecha ambos seminarios, bajo la dirección de los padres lazaristas.68
Los seminarios carecían de local propio y adecuado. Para subsanar esta deficiencia,
Monseñor Checa compró algunos terrenos adjuntos a los parroquiales de Santa Prisca y
resolvió edificar allí ambos seminarios. Dadas las dificultades, hubo de buscarse sitio
para el Seminario Mayor San José, cuya primera piedra fue bendecida el 21 de
noviembre de 1882 en el caserío de Santa Clara de San Millán. El edificio estuvo listo el
19 de marzo de 1884.
“El alma del plantel y su diestro organizador, así en la parte intelectual como en la
material, fue el Padre Schumacher, futuro obispo de Portoviejo, varón que si pudo tener
defectos por la vehemencia de su temperamento, fue en cambio maestro afamado
director modelo de instituciones incipientes. Gracias a su labor, el Seminario y la
formación del clero adelantaron rápida y brillantemente” (TOBAR DONOSO, Julio, García Moreno y la Instrucción Pública, Pág. 266).
4.3.3.7.4. Los Redentoristas en el Ecuador (1870)
Esta vez, son los Obispos Ignacio Ordóñez de Riobamba y Estévez de Toral, de Cuenca,
los interesados en la traída de los celosos misioneros Redentoristas, cuyo fundador fue
el célebre doctor de la Iglesia, San Alfonso María de Ligorio, para sus respectivas sedes
68
NAVAS, Juan de Dios, Memoria Histórica del Seminario de San Luis en la época Colonial y en la Republicana, 1594‐1924, Boletín de la Academia Nacional de Historia, Págs. 57‐59, Núms. 36 al 39. 148 episcopales. Ambos prelados aprovecharon de su estancia en la Ciudad Eterna con
motivo del Concilio Vaticano I de 1870 para solicitar al superior Padre Mauron, el
suficiente número de religiosos para las lejanas fundaciones. Mas fue necesario una
insinuación del Papa Pío IX, para que el General accediera a este acariciado anhelo
prelaticio. Las circunstancias permitieron que el Padre Mauron escogiera la Provincia
Galo-Helvética para el envío de los primeros misioneros al lejano Ecuador.
Cuando todos los arreglos se consolidaron, el Padre Mauron firmó una declaración, el 8
de abril de 1870 en la que manifiesta que con aprobación de Pío IX “se funda la casa de
Cuenca y juzgamos oportuno encomendar esta misión a la provincia Galo-Helvética”.
En la misma fecha, día de Nuestra Señora de los Dolores, expide solemne documento,
por el que encomienda a la Provincia y de manera particular al Padre Aquites
Desurmont, la nueva fundación.69 Este tuvo que desprenderse de un sacerdote de gran
valía como el padre Didier, para ejercer el superiorato de las Misiones de América
Latina.
El 5 de mayo de 1870, fue el día de la entrada triunfal de los Redentoristas en Cuenca,
donde se hicieron cargo de la vieja y ruinoso iglesia de San Agustín. Los primeros
tiempos serán de muchas privaciones y contratiempos.
El grupo destinado a Riobamba vino en dos etapas. Los padres Juan Didier
(luxemburgués) y el Hermano Teófilo Richter (alsaciano), el 4 de julio de 1870, subirán
a la sierra, en compañía de los Padres Lazaristas e Hijas de la Caridad. Riobamba les
dará cálido recibimiento; pero al tratarse de buscar convento e iglesia encontraron
similares dificultades que en Cuenca, aceptando por fin, el ruinoso conventillo e iglesia
de San Agustín para iniciar su apostolado.
Días después, llegaba el segundo grupo de Riobamba (29 de julio de 1870) integrado
por los Padres Celestino Etienne (belga), José Bibona (siciliano) y el Hermano novicio
Álvaro Tornero (español).
69
RIVERA, Néstor J. C.SS.R., Presencia Redentorista en el Ecuador, 1870‐1990, Obra inédita de más de 300 páginas. 149 Superando no pocas dificultades los Padres del Smo. Redentor de ambas comunidades,
se lanzarán a edificar nuevas iglesias y conventos. La iglesia de Riobamba será
consagrada, finalmente, en 1881. Y la de Cuenca, realizada con grandes esfuerzos y
mingas bajo la inspiración del Hermano Juan, el 8 de diciembre de 1888.
La Iglesia Ecuatoriana debe mucho a la Comunidad del Santísimo Redentor, que se ha
desempeñado con gran celo apostólico en la obra de las misiones populares, predicación
de ejercicios al clero, pastoral indígena, y organización de un culto puntual y digno en
los templos a su cargo. Santos y sabios personajes han descollado en su seno, que, por
desgracia han pasado al olvido.
4.3.3.7.5. Los Capuchinos (1873)
El Presidente García moreno quiso también conseguir religiosos capuchinos, para ello
escribió a Pío IX. Este, a su vez, al Padre General, y este último contestó:
“La cosa es fácil, puesto que puedo contar con los Capuchinos recién expulsados de la
República del Salvador”. Entonces el Presidente mandó 1.200 pesos para la navegación
hasta Guayaquil. Desembarcaron en dicho Puerto a fines de junio de 1873 y fueron
abandonados con 300 pesos para su viaje hasta Quito. De aquí, partieron a Ibarra para
establecer un convento, base de su acción apostólica. Una Misión predicada en Tulcán
hizo época y fue la oportunidad para que la ciudadanía pidiera un convento con su
respectiva iglesia para dicha población. También un grupo de estos religiosos estuvo en
Manabí, donde soportaron una serie de penalidades, hasta su salida con motivo de la
Revolución Liberal. Superior Provincial de los Capuchinos, traído por García Moreno,
fue el célebre fraile Miguel Prats.
Al advenimiento del liberalismo, los capuchinos fueron expulsados del país y sólo
retornaron bien entrado el siglo XX.
4.3.3.7.6. Otras Comunidades
Con el fin de fundar una Escuela de Agricultura, llegan invitados por García Moreno
dos monjes Benedictinos a fines de 1874 y visitan la Meseta de Canchacoto (Manabí),
150 donde piensan fundar una escuela, una colonia y un convento. Pero la muerte del
Presidente deja sin realizar este proyecto.
Según testimonio del Dr. Pablo Herrera, colaborador de García Moreno, este dirigió
también sus letras a Don Bosco, pidiéndole padres Salesianos. El Santo y visionario
educador turinés tenía listo el grupo de sus discípulos para el Ecuador, pero la muerte
del primer magistrado no favoreció el intento, y éstos excelentes religiosos, vendrán
sólo trece años después, en tiempo del Presidente Caamaño.
Muchos años después de la aprobación del Concordato, llegaron traídos por el
carismático Mons. Ignacio Ordóñez en el año de 1887 los Misioneros del Sagrado
Corazón de Jesús de Issoudum, fundados por el Presbítero Jutio Chevalier. Debían
hacerse cargo de la construcción de la Basílica del Voto Nacional, pero ciertas
desavenencias con el Cabildo Eclesiástico, que no estaba de acuerdo en que estos
sacerdotes rigieran sin condiciones la iglesia del Sagrario. Estos abandonaron el País en
el año de 1892.
También por poco tiempo estuvo en el Ecuador otra Comunidad de Sacerdotes
Corazonistas; los sacerdotes del Sagrado Corazón de Jesús de San Quintín, dirigidos por
ese entonces por el Canónigo Dehón. La iniciativa de traerlos al Ecuador fue del
venerable Padre Julio Matovelle, que, en el afán de fusionar su naciente comunidad de
Oblatos, con religiosos franceses, que tenían más o menos la misma finalidad, pensaba
que su Instituto funcionaría fácilmente, pero, no sucedió así, porque los pocos
sacerdotes que llegaron, no se conformaron con los puntos de vista de Matovelle, quien,
a su vez, pensaba, luego de la salida de los Misioneros del Sagrado Corazón de Jesús de
Issoudum, podrían hacerse cargo de la obra de la Basílica. Por algún tiempo, los
misioneros traídos por Matovelle, pasaron a Manabí, pero a poco salieron sin pena ni
gloria. La fusión con los oblatos apenas duró un año, 1888-1889.
4.3.3.7.7. Los Salesianos en el Ecuador (1888)
Los primeros salesianos llegaron a Quito el 28 de enero de 1888. El grupo de componía
de ocho religiosos sacerdotes, un clérigo y tres coadjutores, a los pocos días (31 de
enero de 1888), moría su fundador Don Bosco en Turín. Como superior estaba el Padre
151 Luis Calcagno, el cual traía las bendiciones del Santo para la naciente obra. El
Arzobispo Ignacio Ordóñez, hábil negociador en la traída de varias comunidades
religiosas, tuvo su papel de importancia en la de los salesianos, lo mismo que el Dr.
Carlos R. Tobar, que fue quien, ante el Congreso, auspició su venida. Incluso el Papa
León XIII, influyó en el ánimo del fundador para que cediera a sus mejores hijos para
este propósito. El Presidente José Plácido Caamaño, se constituyó en admirador y
protector, encargándoles la dirección del protectorado Católico, después Escuela de
Artes y Oficios, que en primera instancia estuvo a cargo de los Hermanos de las
Escuelas Cristianas.
El 5 de febrero, los recién llegados, acogieron al primer interno, al huérfano de padre y
madre Rogelio Proaño y el 18 de febrero, dieron inicio al Primer Oratorio festivo, la
obra fundacional más popular de Don Bosco.
Artes y Oficios con 14 talleres, entre éstos el de tipografía, dotada de excelente
maquinaria. El nivel cultural se elevó notablemente y el número de estudiantes tuvo un
crecimiento acelerado. La acción salesiana se extendió a diversos lugares de la
República. Así, en 1891, se inauguran en Riobamba los talleres de Santo Tomás:
mecánica y herrería, sastrería y zapatería, albañilería y talabartería. En 1893, en la
ciudad de Cuenca, los Salesianos se hacen cargo de la dirección de un internado de la
Escuela de Artes y Oficios. En 1894, por iniciativa el venerable Padre Matovelle, llegan
a Gualaquiza los primeros misioneros.
Los años 1895 y 1896 constituyeron el fortalecimiento de la obra salesiana en nuestro
país; la Revolución Liberal dióle un zarpazo; pero pudo convalecer robusteciéndose con
nuevas energías.
Los hijos de Don Bosco dejaron definitivamente el Protectorado y pusieron redoblado
esfuerzo en el popular barrio de la Tola.
Años más tarde, en 1904, el Gobierno propuso al Colegio Don Bosco como modelo en
toda la República por la orientación, instrucción y formación que daba a sus alumnos en
sus talleres de Artes y Oficios.70
70
Cfr. Presencia Salesiana en el Ecuador, Primer Centenario 1888‐1989, y el último libro publicado por el historiador Salesiano P. Antonio Guerriero, sdb con el mismo motivo. 152 4.4. La educación durante el Período Democrático (1979-2011)
La posición de la Iglesia Católica y la actitud del Gobierno hacia la Iglesia siempre ha
sido de cooperación y de diálogo. Casi todos los gobiernos de turno, durante el período
democrático han demosatrado un gran respeto a la Iglesia y han reconocido el papel
histórico que tiene la misma en el país.
Como fruto de esa cooperación histórica entre la Iglesia y el Estado, se han creado un
sinnúmero de Instituciones Educativas Particulares y Fiscomisionales cuya única
finalidad es la de brindar a los niños y jóvenes ecuatorianos una educación de calidez y
calidad con espíritu cristiano, inspirada en el carisma de cada una de las Congregaciones
o Casas religiosas que las han creado.
Sin embargo, con la promoción de la educación fiscal y laica, en el Gobierno del
Economista Rafael Correa, a raíz de la actual Constitución, la Educación Particular que
brindan las Instituciones Católicas se ha venido a menos, ya que la mayoría de las
familias, sin importar el aspecto educativo o formativo de sus hijos, prefiere una
educación gratuita a otra que signifique una erogación económica mensual, que
perjudique si situación económica quebrantada por la crisis nacional y mundial.
153 5. CONCLUSIONES Y RECOMENDACIONES
En base a los objetivos vamos a determinar algunas conclusiones y recomendaciones,
partiendo del objetivo general y de los objetivos específicos.
5.1. Conclusiones
5.1.1. Conclusiones en base al Objetivo general:
Objetivo General: Presentar de manera ordenada el desarrollo histórico de los
aportes de la Iglesia Católica a la Educación en el Ecuador.
Después de haber hecho un recorrido histórico de la Evolución histórica de la
Educación en el Ecuador, a simple vista nos damos cuenta que el principal aporte de la
actividad educativa a la sociedad ecuatoriana, ha venido por parte de la Iglesia Católica,
principalmente, por el aporte de las distintas Congregaciones religiosas que se han
hecho presentes en nuestro País.
Las épocas en las que se puede apreciar con mayor abundancia el aporte de la Iglesia al
Ecuador son la época Colonial y durante el Período Republicano se destaca la figura del
Dr. Gabriel García Moreno, quien puso todo su esfuerzo y dedicación a luchar por la
formación de la niñez y juventud ecuatorianas.
Las manifestaciones culturales del naciente Ecuador adquirieron los caracteres elitistas
y regionales de la sociedad toda. La débil identidad nacional se expresó en el
pensamiento, la literatura y el arte. En las primeras décadas de fundación del nuevo
Estado, justamente en la primera mitad del siglo XIX, la Ilustración fue la forma
dominante del pensamiento ecuatoriano. Vicente Rocafuerte, político activo y
Presidente entre 1835 y 1839, fue su figura más descollante.
154 A principios de la República se destacaron las figuras del poeta José Joaquín de
Olmedo, del periodista Fr. Vicente Solano y del polemista y político Pedro Moncayo y
Esparza. Con el esfuerzo educacional de García Moreno, se dio impulso a la cultura, de
modo que las décadas finales del siglo XIX estuvieron caracterizadas por un auge, cuyas
más altas figuras fueron Juan León Mera, ideólogo de la derecha, crítico literario y
nuestro primer novelista, y Juan Montalvo, máxima figura del liberalismo, cuyas obras
habrían de ser la base ideológica de la transformación. Pero en las formas de cultura
popular y en la vida cotidiana, se dio más bien un fenómeno de continuidad colonial, a
veces no reconocido por nuestros historiadores.
También en la arquitectura y la plástica se dio esa continuidad colonial a que se ha
hecho referencia, aunque en la pintura se destacaron varios maestros como Pinto, que
innovaron la antigua tradición religiosa con elementos costumbristas y retratos de los
generales de la Independencia. Aunque se ha estudiado muy poco la cultura popular,
puede decirse que ésta se mantuvo creativa y vigorosa en el siglo XIX; justamente en
sus postrimerías se dieron los primeros trabajos de sistematización del quichua y de
recolección de tradiciones y cantares populares.
A fines del siglo XX e inicios del siglo XXI, el Ecuador enfrenta nuevas realidades y
desafíos. Ha sobrepasado los doce millones de habitantes. La mayoría de ellos viven en
la Costa, aunque la Sierra conserva una alta proporción. La Amazonía y Galápagos
tienen una población mucho menor, pero a estas alturas su territorio está saturado. El
Ecuador es el país de Sudamérica con más alta tasa de crecimiento poblacional. Las
ciudades han crecido en forma significativa en las últimas décadas. Guayaquil sobrepasa
los dos millones y Quito el millón y medio. Con el crecimiento de otras ciudades y
desde hace tiempo la mayoría de la población del país es urbana. Todo ello ha
profundizado varios problemas y ha generado otros nuevos, al mismo tiempo que ha
cambiado ciertos caracteres de la lucha social y la identidad cultural.
5.1.2. Conclusiones en base a los Objetivos específicos
Objetivo específico 1: Destacar la importancia de la presencia de la Iglesia en materia
de Educación.
 Durante el tiempo de la Colonia, cabe destacar, no sólo se hicieron presentes en
el territorio americano y ecuatoriano conquistadores ávidos de riqueza y tesoros,
155 sino también, se hicieron presentes misioneros ávidos de evangelizar a los
aborígenes americanos.
 En un principio, la tarea educativa se conjugaba con la tarea evangelizadora, esto
es, se educaba con el Evangelio. Sin embargo, los mismos misioneros se dieron
cuenta que la evangelización era imposible sin una previa educación. Así se
inició, entonces, la gran tarea educativa de los indígenas en los distintos aspectos
de la cultura occidental y en el aspecto científico y literario.
 Es, sobre todo, laudable la actividad que esas primeras comunidades religiosas
que pisaron suelo americano tuvieron que realizar, sobre todo al enfrentarse con
un mundo totalmente ajeno a las costumbres y europeos y en el cual había que
iniciar un proceso, por lo demás difícil y aparentemente imposible.
 Con la llegada de las primeras Órdenes religiosas al Continente americano se
inició una ingente fundación de un sinnúmero de Instituciones educativas, desde
las más rudimentarias y elementales, hasta las entidades más emblemáticas a
nivel internacional, las mismas que han aportado notablemente para mejorar el
nivel de cultura de nuestros pueblos.
Objetivo específico 2: Reconocer la gran labor educativa de la Iglesia a la largo de toda
la Historia del Ecuador.
 Es preciso reconocer la inigualable tarea de la Iglesia en materia de educación.
Todos los ecuatorianos deberíamos estar agradecidos con la Iglesia por el gran
aporte que ha brindado a nuestra patria y a toda América Latina desde los
tiempos de la Colonia hasta nuestros días. Después de más de 500 años de
historia, la cantidad de establecimientos católicos dedicados a la educación es
innumerable, debido a que las Órdenes Religiosas encontraron en la educación el
mejor espacio para la Evangelización y la difusión de la cultura.
Objetivo específico 3: Analizar críticamente los impedimentos de parte del Estado para
la actividad docente de la Iglesia.
En los gobiernos de Veintimilla y Eloy Alfaro tuvo lugar la expulsión de los Jesuitas del
Ecuador, acontecimiento que afectó negativamente a muchos niños y jóvenes del
Ecuador, que tuvieron que abandonar sus estudios a consecuencia del cierre de los
establecimientos regentados por los Jesuitas y obligando de esta manera a recurrir a las
156 establecimientos del Estado laico, que en la mayoría de los casos iba a promover una
ideología contraria a los valores religiosos sembrados por los padres Jesuitas.
Objetivo específico 4: Discernir si la actual Constitución de la República del Ecuador y
las actuales Leyes de Educación van en contra de las Instituciones educativas de la
Iglesia Católica.
En la Sección quinta, Art. 26 de la Constitución se dice que la Educación es una tarea
ineludible del Estado. De esta manera, como que se excluye a las demás Instituciones
religiosas o civiles de esta responsabilidad. También cabe decir que la primera
educadora de la vida de las personas constituye la familia, primera escuela doméstica de
la conciencia y de la vida de todo ser humano:
Art. 26: “La educación es un derecho de las personas a lo largo de su vida y un deber
ineludible e inexcusable del Estado. Constituye un área prioritaria de la política pública
y de la inversión estatal, garantía de la igualdad e inclusión social y condición
indispensable para el buen vivir.
Las personas, las familias y la sociedad tienen el derecho y la responsabilidad de
participar en el proceso educativo.”
En el artúculo 28, ppor otra parte, se dice que la educación responde únicamente al
interés público estatal y no debe estar al servicio de intereses corporativos o
indivuduales. Además, se afirma que la educación será universal y laica. De esta
manera, se excluye cualquier tipo de educación en la fe y en la moral de las personas.
Art. 28.- “La educación responderá al interés público y no estará al servicio de intereses
individuales y corporativos. Se garantizará el acceso universal, permanencia, movilidad
y egreso sin discriminación alguna y la obligatoriedad en el nivel inicial, básico y
bachillerato o su equivalente.
Es derecho de toda persona y comunidad interactuar entre culturas y participar en una
sociedad que aprende. El Estado promoverá el diálogo intercultural en sus múltiples
dimensiones.
El aprendizaje se desarrollará de forma escolarizada y no escolarizada.
La educación pública será universal y laica en todos sus niveles, y gratuita hasta el
tercer nivel de educación superior inclusive.”
En el artículo 29 la Constitución cae en una contradicción, ya que si en el artículo 28 se
promivía y se preferenciaba una educación laica, regida por el Estado, en este artículo
157 en cambio, se promueve la libertad de cátedra y además se dice que los padres de
familia están en libertad de escoger para sus hijos la educación que responda a sus
principios religiosos y morales. Por esta razón, el Estado debería también apoyar y
reconocer a aquellas Instituciones de la Iglesia o de la sociedad civil que tratan de
difundir una educación en la que se difundan los valores de acuerdo a la confesión a la
que cada uno pertenezca.
Art. 29.- “EI Estado garantizará la libertad de enseñanza, la libertad de cátedra en la
educación superior, y el derecho de las personas de aprender en su propia lengua y
ámbito cultural.
Las madres y padres o sus representantes tendrán la libertad de escoger para sus hijas e
hijos una educación acorde con sus principios, creencias y opciones pedagógicas.”
Objetivo específico 5: Establecer si la promoción de una educación Laica y Gratuita en
el Ecuador, repercute negativamente en los establecimientos de Educación Católica.
Si bien es cierto que la educación gratuita auspiciada por el Estado es un valor positivo
para todos los ecuatorianos, sobre todo, para las familias de escasos recursos, sin
embargo repercute a los establecimientos particulares, que se quedan sin una gran masa
de estudiantes que prefieren una educación gratuita antes que otra que signifique una
erogación económica significativa.
La mayoría de Instituciones católicas se mantienen con los aportes que los padres de
familia entregan mensualmente por el servicio que se brinda a sus hijos, pero ante la
oferta de la gartuidad de la educación promivida por el Estado, muchos de esos padres
de familia, por la coyuntura socioeconómica actual en que vive el país, prefieren las
Instituciones estatales a las particulares.
En este panorama, luego de un largo recorrido histórico de enriquecimiento cultural por
parte de la Iglesia Católica a nuestro país, el reto de brindar una educación de calidad a
los niños y jóvenes ecuatorianos de hoy y de las futuras generaciones, no puede ser una
tarea exclusiva del Estado, sino que la tarea que otras Instituciones del sector privado,
sobre todo de la Iglesia, debe ser respetada y apoyada por el Estado.
158 5.2. Recomendaciones
Sin desmerecer el esfuerzo y la preocupación del Estado por la educación de todos los
ecuatorianos, sin embargo, vale la pena sugerir algunas recomendaciones, con el fin de
que en lugar de desconocer el gran trabajo de la Iglesia Católica en materia de
educación, el Estado, inspirado en el principio de subsidiariedad, apoye y promueva
todas las iniciativas que partan de la Iglesia para el beneficio de la niñez y juventud
ecuatorianas:
 El Estado debe reconocer que son los padres de familia los que tienen la
obligación y el derecho de educar a sus hijos; los padres católicos tienen también
la obligación y el derecho de elegir aquellos medios e instituciones mediante los
cuales, puedan proveer mejor a la educación católica de los hijos. También
tienen derecho los padres a que la sociedad civil les proporcione las ayudas que
necesiten para procurar a sus hijos una educación católica.
 El Estado únicamente debe preocuparse por brindar a las familias las
herramientas para el crecimiento intelectual, científico o cultural de los niños y
jóvenes, pero en lo que se refiere a la educación espiritual y moral de los hijos,
la tarea de la Iglesia y de las familias es insustituible.
 Una verdadera educación debe procurar la formación integral de la persona
humana, en orden a su fin último y, simultáneamente, al bien común de la
sociedad. La educación no tiene sólo que ver con la adquisición de
conocimientos. Los niños y los jóvenes han de ser educados de manera que
puedan desarrollar armónicamente todas sus cualidades físicas, morales e
intelectuales, adquieran y desarrollen una serie de valores y capacidades que les
permitan hacer con responsabilidad un buen uso de su libertad, y se preparen a
participar activamente en la vida social.
 El Estado debería aprovechar toda la infraestructura y la logística que posee la
Iglesia Católica, apoyando para que en aquellos mismos establecimientos se siga
brindando una educación de calidad y no malgastar recursos creando nuevas
instituciones de índole laical, en donde no se van a promover o respetar los
principios cristianos, sino que se va a propiciar una formación aconfesional y
muchas veces, sin valores.
159  El Estado, la Iglesia Católica y demás Instituciones de la sociedad civil deben
trabajar de manera conjunta por un objetivo común. Ni la Iglesia debe oponerse
a las políticas estatales, sino más bien orientarlas desde sus propios principios, ni
el Estado debe interferir en las iniciativas que por naturaleza y por derecho
competen a la Iglesia Católica. Al contrario, tanto la Iglesia como el Estado
están llamados a la concertación y a la ayuda mutua, para que una tarea tan
delicada como es la Educación de la niñez y la juventud no se vea afectada por
impedimentos de tipo ideológico, sino que esté orientada a hacer de nuestros
niños y jóvenes hombres y mujeres de bien para la sociedad y para el mundo.
160 ANEXOS
ANEXO 1
LIBRO III: LA FUNCION DE ENSEÑAR DE LA IGLESIA
TÍTULO III: DE LA EDUCACIÓN CATÓLICA (Cann. 793 – 821)
(Tomado del Código de Derecho Canónico:
http://www.vatican.va/archive/ESL0020/_INDEX.HTM)
TÍTULO III.
Canon 793.
1. Los padres y quienes hacen sus veces tienen la obligación y el derecho de educar a la
prole; los padres católicos tienen también la obligación y el derecho de elegir aquellos
medios e instituciones mediante los cuales, según las circunstancias de cada lugar,
puedan proveer mejor a la educación católica de los hijos.
2. También tienen derecho los padres a que la sociedad civil les proporcione las ayudas
que necesiten para procurar a sus hijos una educación católica.
Canon 794.
1. De modo singular, el deber y derecho de educar compete a la Iglesia, a quien Dios ha
confiado la misión de ayudar a los hombres para que puedan llegar a la plenitud de la
vida cristiana.
2. Los pastores de almas tienen el deber de disponer lo necesario para que todos los
fieles reciban educación católica.
Canon 795.
Como la verdadera educación debe procurar la formación integral de la persona
humana, en orden a su fin último y, simultáneamente, al bien común de la sociedad, los
niños y los jóvenes han de ser educados de manera que puedan desarrollar
armónicamente sus dotes físicas, morales e intelectuales, adquieran un sentido más
perfecto de la responsabilidad y un uso recto de la libertad, y se preparen a participar
activamente en la vida social.
CAPÍTULO I.
DE LA ESCUELA
Canon 796.
1. Entre los medios para realizar la educación, los fieles tengan en mucho las escuelas,
que constituyen una ayuda primordial para los padres en el cumplimiento de su deber de
educar.
161 2. Es necesario que los padres cooperen estrechamente con los maestros de las escuelas
a las que confían la formación de sus hijos; los profesores, a su vez, al cumplir su
encargo, han de trabajar muy unidos con los padres, a quienes deben escuchar de buen
grado, y cuyas asociaciones o reuniones deben organizarse y ser muy apreciadas.
Canon 797.
Es necesario que los padres tengan verdadera libertad para elegir las escuelas; por tanto,
los fieles deben mostrarse solícitos para que la sociedad civil reconozca esta libertad de
los padres y, conforme a la justicia distributiva, la proteja también con ayudas
económicas.
Canon 798.
Los padres han de confiar sus hijos a aquellas escuelas en las que se imparta una
educación católica; pero, si esto no es posible, tienen la obligación de procurar que,
fuera de las escuelas, se organice la debida educación católica.
Canon 799.
Deben esforzarse los fieles para que, en la sociedad civil, las leyes que regulan la
formación de los jóvenes provean también a su educación religiosa y moral en las
mismas escuelas, según la conciencia de sus padres.
Canon 800.
1. La Iglesia tiene derecho a establecer y dirigir escuelas de cualquier materia, género y
grado.
2. Fomenten los fieles las escuelas católicas, ayudando en la medida de sus fuerzas a
crearlas y sostenerlas.
Canon 801.
Los institutos religiosos que tienen por misión propia la enseñanza, permaneciendo
fieles a esta misión suya, procuren dedicarse a la educación católica también por medio
de sus escuelas, establecidas con el consentimiento del Obispo diocesano.
Canon 802.
1. Si no existen escuelas en las que se imparta una educación imbuida del espíritu
cristiano, corresponde al Obispo diocesano procurar su creación.
2. Allí donde sea conveniente, provea también el Obispo diocesano a la creación de
escuelas profesionales y técnicas, y de otras que se requieran por especiales
necesidades.
162 Canon 803.
1. Se entiende por escuela católica aquella que dirige la autoridad eclesiástica
competente o una persona jurídica eclesiástica pública, o que la autoridad eclesiástica
reconozca como tal mediante documento escrito.
2. La enseñanza y educación en una escuela católica debe fundarse en los principios de
la doctrina católica; y han de destacar los profesores por su recta doctrina e integridad
de vida.
3. Ninguna escuela, aunque en realidad sea católica, puede adoptar el nombre de escuela
católica sin el consentimiento de la autoridad eclesiástica competente.
Canon 804.
1. Depende de la autoridad de la Iglesia la enseñanza y educación religiosa católica que
se imparte en cualesquiera escuelas o se lleva a cabo en los diversos medios de
comunicación social; corresponde a la Conferencia Episcopal dar normas generales
sobre esta actividad, y compete al Obispo diocesano organizarla y ejercer vigilancia
sobre la misma.
2. Cuide el Ordinario del lugar de que los profesores que se destinan a la enseñanza de
la religión en las escuelas, incluso en las no católicas, destaquen por su recta doctrina,
por el testimonio de su vida cristiana y por su aptitud pedagógica.
Canon 805.
El Ordinario del lugar, dentro de su diócesis, tiene el derecho a nombrar o aprobar los
profesores de religión, así como de remover o exigir que sean removidos cuando así lo
requiera una razón de religión o moral.
Canon 806.
1. Compete al Obispo diocesano el derecho de vigilar y de visitar las escuelas católicas
establecidas en su territorio, aun las fundadas o dirigidas por miembros de institutos
religiosos; asimismo le compete dictar normas sobre la organización general de las
escuelas católicas; tales normas también son válidas para las escuelas dirigidas por
miembros de esos institutos, sin perjuicio de su autonomía en lo que se refiere al
régimen interno de esas escuelas.
2. Bajo la vigilancia del Ordinario del lugar, los Moderadores de las escuelas católicas
deben procurar que la formación que se da en ellas sea, desde el punto de vista
científico, de la misma categoría al menos que en las demás escuelas de la región.
163 CAPÍTULO II.
DE LAS UNIVERSIDADES CATÓLICAS
CATÓLICOS DE ESTUDIOS SUPERIORES
Y
OTROS
INSTITUTOS
Canon 807.
La Iglesia tiene derecho a erigir y dirigir universidades que contribuyan al incremento
de la cultura superior y a una promoción más plena de la persona humana, así como al
cumplimiento de la función de enseñar de la misma Iglesia.
Canon 808.
Ninguna universidad, aunque sea de hecho católica, use el título o nombre de
universidad católica, sin el consentimiento de la competente autoridad eclesiástica.
Canon 809.
Cuiden las Conferencias Episcopales de que, si es posible y conveniente, haya
universidades o al menos facultades adecuadamente distribuidas en su territorio, en las
que, con respeto de su autonomía científica, se investiguen y enseñen las distintas
disciplinas de acuerdo con la doctrina católica.
Canon 810.
1. La autoridad competente según los estatutos debe procurar que, en las universidades
católicas, se nombren profesores que destaquen, no sólo por su idoneidad científica y
pedagógica, sino también por la rectitud de su doctrina e integridad de vida; y que,
cuando falten tales requisitos, sean removidos de su cargo, observando el procedimiento
previsto en los estatutos.
2 Las Conferencias Episcopales y los Obispos diocesanos interesados tienen el deber y
el derecho de velar para que en estas universidades se observen fielmente los principios
de la doctrina católica.
Canon 811.
1. Procure la autoridad eclesiástica competente que en las universidades católicas se
erija una facultad, un instituto o, al menos, una cátedra de teología en la que se den
clases también a estudiantes laicos.
2. En las universidades católicas ha de haber clases en las que se traten sobre todo las
cuestiones teológicas que están en conexión con las materias propias de sus facultades.
164 Canon 812.
Quienes explican disciplinas teológicas en cualquier instituto de estudios superiores
deben tener mandato de la autoridad eclesiástica competente.
Canon 813.
El Obispo diocesano ha de procurar una intensa cura pastoral para los estudiantes,
incluso erigiendo una parroquia, o, al menos, mediante sacerdotes destinados
establemente a esta tarea; y cuide de que en las universidades, incluso no católicas, haya
centros universitarios católicos que proporcionen ayuda, sobre todo espiritual, a la
juventud.
Canon 814.
Lo que se prescribe para las universidades se aplica igualmente a los otros institutos de
estudios superiores.
CAPÍTULO III.
DE LAS UNIVERSIDADES Y FACULTADES ECLESIÁSTICAS
Canon 815.
En virtud de su deber de anunciar la verdad revelada, son propias de la Iglesia las
universidades y facultades eclesiásticas ordenadas a la investigación de las disciplinas
sagradas o de aquellas otras relacionadas con éstas, y a la instrucción científica de los
estudiantes en estas materias.
Canon 816.
1. Las universidades y facultades eclesiásticas sólo pueden establecerse por erección de
la Sede Apostólica o con aprobación concedida por la misma; a ella compete también la
suprema dirección de las mismas.
2. Todas las universidades y facultades eclesiásticas han de tener sus propios estatutos y
su plan de estudios aprobados por la Sede Apostólica.
Canon 817.
Ninguna universidad o facultad que no haya sido erigida o aprobada por la Sede
Apostólica, puede otorgar grados académicos que tengan efectos canónicos en la
Iglesia.
165 Canon 818.
Las prescripciones de los cánones 810, 812 y 813 acerca de las universidades católicas
se aplican igualmente a las universidades y facultades eclesiásticas.
Canon 819.
En la medida en que lo requiera el bien de una diócesis o de un instituto religioso, o
incluso de la Iglesia universal, los Obispos diocesanos o los Superiores competentes de
los institutos deben enviar a las universidades o facultades eclesiásticas a jóvenes, a
clérigos y a miembros de los institutos que destaquen por su carácter, virtud y talento.
Canon 820.
Procuren los Moderadores y profesores de las universidades y facultades eclesiásticas
que las diversas facultades de la universidad colaboren mutuamente, en cuanto la
materia lo permita, y que esa colaboración se dé también entre la propia universidad o
facultad y las demás universidades o facultades incluso no eclesiásticas, de forma que el
trabajo en común contribuya al mejor progreso de las ciencias mediante congresos,
programas de investigación coordinados y otros medios.
Canon 821.
Provean la Conferencia Episcopal y el Obispo diocesano a que, en lo posible, se creen
institutos superiores de ciencias religiosas en los cuales se enseñen las disciplinas
teológicas y aquellas otras que pertenecen a la cultura cristiana.
166 ANEXO 2
DECLARACIÓN
GRAVISSIMUM EDUCATIONIS
SOBRE LA EUCACIÓN CRISTIANA
PROEMIO
El Santo Concilio Ecuménico considera atentamente la importancia decisiva de la
educación en la vida del hombre y su influjo cada vez mayor en el progreso social
contemporáneo. En realidad la verdadera educación de la juventud, e incluso también
una constante formación de los adultos, se hace más fácil y más urgente en las
circunstancias actuales. Porque los hombres, mucho mas conscientes de su propia
dignidad y deber, desean participar cada vez más activamente en la vida social y, sobre
todo, en la económica y en la política; los maravillosos progresos de la técnica y de la
investigación científica, y los nuevos medios de comunicación social, ofrecen a los
hombres, que, con frecuencia gozan de un mayor espacio de tiempo libre de otras
ocupaciones, la oportunidad de acercarse con facilidad al patrimonio cultural del
pensamiento y del espíritu, y de ayudarse mutuamente con una comunicación más
estrecha que existe entre las distintas asociaciones y entre los pueblos.
En consecuencia, por todas partes se realizan esfuerzos para promover más y más la
obra de la educación; se declaran y se afirman en documentos públicos los derechos
primarios de los hombres, y sobre todo de los niños y de los padres con respecto a la
educación. Como crece rápidamente el número de los alumnos, se multiplican por
doquier y se perfeccionan las escuelas y otros centros de educación. Los métodos de
educación y de instrucción se van perfeccionando con nuevas experiencias. Se hacen,
por cierto, grandes esfuerzos para llevarla a todos los hombres, aunque muchos niños y
jóvenes están privados todavía de la instrucción incluso fundamental, y de tantos otros
carecen de una educación conveniente, en la que se cultiva a un tiempo la verdad y la
caridad.
Ahora bien, debiendo la Santa Madre Iglesia atender toda la vida del hombre, incluso la
material en cuanto está unida con la vocación celeste para cumplir el mandamiento
recibido de su divino Fundador, a saber, el anunciar a todos los hombres el misterio de
la salvación e instaurar todas las cosas en Cristo, le toca también una parte en el
progreso y en la extensión de la educación. Por eso El Sagrado Concilio expone algunos
principios fundamentales sobre la educación cristiana, máxime en las escuelas,
principios que, una vez terminado el Concilio, deberá desarrollar más ampliamente una
Comisión especial, y habrán de ser aplicados por las Conferencias Episcopales y las
diversas condiciones de los pueblos.
167 Derecho universal a la educación y su noción
1. Todos los hombres, de cualquier raza, condición y edad, en cuanto participantes de la
dignidad de la persona, tienen el derecho inalienable de una educación, que responda al
propio fin, al propio carácter; al diferente sexo, y que sea conforme a la cultura y a las
tradiciones patrias, y, al mismo tiempo, esté abierta a las relaciones fraternas con otros
pueblos a fin de fomentar en la tierra la verdadera unidad y la paz. Mas la verdadera
educación se propone la formación de la persona humana en orden a su fin último y al
bien de las varias sociedades, de las que el hombre es miembro y de cuyas
responsabilidades deberá tomar parte una vez llegado a la madurez.
Hay que ayudar, pues, a los niños y a los adolescentes, teniendo en cuenta el progreso
de la psicología, de la pedagogía y de la didáctica, para desarrollar armónicamente sus
condiciones físicas, morales e intelectuales, a fin de que adquieran gradualmente un
sentido más perfecto de la responsabilidad en la cultura ordenada y activa de la propia
vida y en la búsqueda de la verdadera libertad, superando los obstáculos con valor y
constancia de alma. Hay que iniciarlos, conforme avanza su edad, en una positiva y
prudente educación sexual. Hay que prepararlos, además, para la participación en la
vida social, de forma que, bien instruidos con los medios necesarios y oportunos,
puedan participar activamente en los diversos grupos de la sociedad humana, estén
dispuestos para el diálogo con los otros y presten su fructuosa colaboración
gustosamente a la consecución del bien común.
Declara igualmente el Sagrado Concilio que los niños y los adolescentes tienen derecho
a que se les estimule a apreciar con recta conciencia los valores morales y a aceptarlos
con adhesión personal y también a que se les estimule a conocer y amar más a Dios.
Ruega, pues, encarecidamente a todos los que gobiernan los pueblos o están al frente de
la educación, que procuren que la juventud nunca se vea privada de este sagrado
derecho. Y exhorta a los hijos de la Iglesia a que presten con generosidad su ayuda en
todo el campo de la educación, sobre todo con el fin de que puedan llegar cuanto antes a
todos los rincones de la tierra los oportunos beneficios de la educación y de la
instrucción.
La educación cristiana
2. Todos los cristianos, en cuanto han sido regenerados por el agua y el Espíritu Santo
han sido constituidos nuevas criaturas, y se llaman y son hijos de Dios, tienen derecho a
la educación cristiana. La cual no persigue solamente la madurez de la persona humana
arriba descrita, sino que busca, sobre todo, que los bautizados se hagan más conscientes
cada día del don de la fe, mientras son iniciados gradualmente en el conocimiento del
misterio de la salvación; aprendan a adorar a Dios Padre en el espíritu y en verdad, ante
todo en la acción litúrgica, adaptándose a vivir según el hombre nuevo en justicia y en
santidad de verdad, y así lleguen al hombre perfecto, en la edad de la plenitud de Cristo
y contribuyan al crecimiento del Cuerpo Místico. Ellos, además, conscientes de su
168 vocación, acostúmbrense a dar testimonio de la esperanza y a promover la elevación
cristiana del mundo, mediante la cual los valores naturales contenidos en la
consideración integral del hombre redimido por Cristo contribuyan al bien de toda la
sociedad. Por lo cual, este Santo Concilio recuerda a los pastores de almas su gravísima
obligación de proveer que todos los fieles disfruten de la educación cristiana y, sobre
todo, los jóvenes, que son la esperanza de la Iglesia.
Los educadores
3. Puesto que los padres han dado la vida a los hijos, están gravemente obligados a la
educación de la prole y, por tanto, ellos son los primeros y principales educadores. Este
deber de la educación familiar es de tanta trascendencia que, cuando falta, difícilmente
puede suplirse. Es, pues, obligación de los padres formar un ambiente familiar animado
por el amor, por la piedad hacia Dios y hacia los hombres, que favorezca la educación
íntegra personal y social de los hijos. La familia es, por tanto, la primera escuela de las
virtudes sociales, de las que todas las sociedades necesitan. Sobre todo, en la familia
cristiana, enriquecida con la gracia del sacramento y los deberes del matrimonio, es
necesario que los hijos aprendan desde sus primeros años a conocer la fe recibida en el
bautismo. En ella sienten la primera experiencia de una sana sociedad humana y de la
Iglesia. Por medio de la familia, por fin, se introducen fácilmente en la sociedad civil y
en el Pueblo de Dios. Consideren, pues, atentamente los padres la importancia que tiene
la familia verdaderamente cristiana para la vida y el progreso del Pueblo de Dios.
El deber de la educación, que compete en primer lugar a la familia, requiere la
colaboración de toda la sociedad. Además, pues, de los derechos de los padres y de
aquellos a quienes ellos les confían parte en la educación, ciertas obligaciones y
derechos corresponden también a la sociedad civil, en cuanto a ella pertenece disponer
todo lo que se requiere para el bien común temporal. Obligación suya es proveer de
varias formas a la educación de la juventud: tutelar los derechos y obligaciones de los
padre y de todos los demás que intervienen en la educación y colaborar con ellos;
conforme al principio del deber subsidiario cuando falta la iniciativa de los padres y de
otras sociedades, atendiendo los deseos de éstos y, además, creando escuelas e institutos
propios, según lo exija el bien común.
Por fin, y por una razón particular, el deber de la educación corresponde a la Iglesia no
sólo porque debe ser reconocida como sociedad humana capaz de educar, sino, sobre
todo, porque tiene el deber de anunciar a todos los hombres el camino de la salvación,
de comunicar a los creyentes la vida de Cristo y de ayudarles con atención constante
para que puedan lograr la plenitud de esta vida. La Iglesia, como Madre, está obligada a
dar a sus hijos una educación que llene su vida del espíritu de Cristo y, al mismo
tiempo, ayuda a todos los pueblos a promover la perfección cabal de la persona humana,
incluso para el bien de la sociedad terrestre y para configurar más humanamente la
edificación del mundo.
169 Varios medios para la educación cristiana
4. En el cumplimiento de la función de educar, la Iglesia se preocupa de todos los
medios aptos, sobre todo de los que le son propios, el primero de los cuales es la
instrucción catequética, que ilumina y robustece la fe, anima la vida con el espíritu de
Cristo, lleva a una consciente y activa participación del misterio litúrgico y alienta a una
acción apostólica. La Iglesia aprecia mucho y busca penetrar de su espíritu y dignificar
también los demás medios, que pertenecen al común patrimonio de la humanidad y
contribuyen grandemente al cultivar las almas y formar los hombres, como son los
medios de comunicación social, los múltiples grupos culturales y deportivos, las
asociaciones de jóvenes y, sobre todo, las escuelas.
Importancia de la escuela
5. Entre todos los medios de educación, el de mayor importancia es la escuela, que, en
virtud de su misión, a la vez que cultiva con asiduo cuidado las facultades intelectuales,
desarrolla la capacidad del recto juicio, introduce en el patrimonio de la cultura
conquistado por lasgeneraciones pasadas, promueve el sentido de los valores, prepara a
la vida profesional, fomenta el trato amistoso entre los alumnos de diversa índole y
condición, contribuyendo a la mutua comprensión; además, constituye como un centro
de cuya laboriosidad y de cuyos beneficios deben participar a un tiempo las familias, los
maestros, las diversas asociaciones que promueven la vida cultural, cívica y religiosa, la
sociedad civil y toda la comunidad humana.
Hermosa es, por tanto, y de suma importancia la vocación de todos los que, ayudando a
los padres en el cumplimiento de su deber y en nombre de la comunidad humana,
desempeñan la función de educar en las escuelas. Esta vocación requiere dotes
especiales de alma y de corazón, una preparación diligentísima y una facilidad constante
para renovarse y adaptarse.
Obligaciones y derechos de los padres
6. Es preciso que los padres, cuya primera e intransferible obligación y derecho es el de
educar a los hijos, tengan absoluta libertad en la elección de las escuelas. El poder
público, a quien pertenece proteger y defender la libertad de los ciudadanos, atendiendo
a la justicia distributiva, debe procurar distribuir las ayudas públicas de forma que los
padres puedan escoger con libertad absoluta, según su propia conciencia, las escuelas
para sus hijos.
Por los demás, el Estado debe procurar que a todos los ciudadanos sea accesible la
conveniente participación en la cultura y que se preparen debidamente para el
cumplimiento de sus obligaciones y derechos civiles. Por consiguiente, el mismo Estado
debe proteger el derecho de los niños a una educación escolar conveniente, vigilar la
capacidad de los maestros y la eficacia de los estudios, mirar por la salud de los
170 alumnos y promover, en general, toda la obra escolar, teniendo en cuenta el principio de
que su función es subsidiario y excluyendo, por tanto, cualquier monopolio de las
escuelas, que se opone a os derechos nativos de la persona humana, al progreso y a la
divulgación de la misma cultura, a la convivencia pacífica de los ciudadanos y al
pluralismo que hoy predomina en muchas sociedades.
El Sagrado Concilio exhorta a los cristianos que ayuden de buen grado a encontrar los
métodos aptos de educación y de ordenación de los estudios y a formar a los maestros
que puedan educar convenientemente a los jóvenes y que atiendan con sus ayudas, sobre
todo por medio de asociaciones de los padres de familia, toda la labor de la escuela
máxime la educación moral que en ella debe darse.
La educación moral y religiosa en todas las escuelas
7. Consciente, además, la Iglesia del gravísimo deber de procurar cuidadosamente la
educación moral y religiosa de todos sus hijos, es necesario que atienda con afecto
particular y con su ayuda a los muchísimos que se educan en escuelas no católicas, ya
por medio del testimonio de la vida de los maestros y formadores, ya por la acción
apostólica de los condiscípulos, ya, sobre todo, por el ministerio de los sacerdotes y de
los seglares, que les enseñan la doctrina de la salvación, de una forma acomodada a la
edad y a las circunstancias y les prestan ayuda espiritual con medios oportunos y según
la condición de las cosas y de los tiempos.
Recuerda a los padres la grave obligación que les atañe de disponer, a aun de exigir,
todo lo necesario para que sus hijos puedan disfrutar de tales ayudas y progresen en la
formación cristiana a la par que en la profana. Además, la Iglesia aplaude cordialmente
a las autoridades y sociedades civiles que, teniendo en cuenta el pluralismo de la
sociedad moderna y favoreciendo la debida libertad religiosa, ayudan a las familias para
que pueda darse a sus hijos en todas las escuelas una educación conforme a los
principios morales y religiosos de las familias.
Las escuelas católicas
8. La presencia de la Iglesia en la tarea de la enseñanza se manifiesta, sobre todo, por la
escuela católica. Ella busca, no es menor grado que las demás escuelas, los fines
culturales y la formación humana de la juventud. Su nota distintiva es crear un ambiente
comunitario escolástico, animado por el espíritu evangélico de libertad y de caridad,
ayudar a los adolescentes para que en el desarrollo de la propia persona crezcan a un
tiempo según la nueva criatura que han sido hechos por el bautismo, y ordenar
últimamente toda la cultura humana según el mensaje de salvación, de suerte que quede
iluminado por la fe el conocimiento que los alumnos van adquiriendo del mundo, de la
vida y del hombre. Así, pues, la escuela católica, a la par que se abre como conviene a
las condiciones del progreso actual, educa a sus alumnos para conseguir eficazmente el
bien de la ciudad terrestre y los prepara para servir a la difusión del Reino de Dios, a fin
171 de que con el ejercicio de una vida ejemplar y apostólica sean como el fermento
salvador de la comunidad humana.
Siendo, pues, la escuela católica tan útil para cumplir la misión del pueblo de Dios y
para promover el diálogo entre la Iglesia y la sociedad humana en beneficio de ambas,
conserva su importancia trascendental también en los momentos actuales. Por lo cual,
este Sagrado Concilio proclama de nuevo el derecho de la Iglesia a establecer y dirigir
libremente escuelas de cualquier orden y grado, declarado ya en muchísimos
documentos del Magisterio, recordando al propio tiempo que el ejercicio de este
derecho contribuye grandemente a la libertad de conciencia, a la protección de los
derechos de los padres y al progreso de la misma cultura.
Recuerden los maestros que de ellos depende, sobre todo, el que la escuela católica
pueda llevar a efecto sus propósitos y sus principios. Esfuércense con exquisita
diligencia en conseguir la ciencia profana y religiosa avalada por los títulos
convenientes y procuren prepararse debidamente en el arte de educar conforme a los
descubrimientos del tiempo que va evolucionando. Unidos entre sí y con los alumnos
por la caridad, y llenos del espíritu apostólico, den testimonio, tanto con su vida como
con su doctrina, del único Maestro Cristo.
Colaboren, sobre todo, con los padres; juntamente con ellos tengan en cuenta durante el
ciclo educativo la diferencia de sexos y del fin propia fijado por Dios y cada sexo en la
familia y en la sociedad; procuren estimular la actividad personal de los alumnos, y
terminados los estudios, sigan atendiéndolos con sus consejos, con su amistad e incluso
con la institución de asociaciones especiales, llenas de espíritu eclesial. El Sagrado
Concilio declara que la función de estos maestros es verdadero apostolado, muy
conveniente y necesario también en nuestros tiempos, constituyendo a la vez un
verdadero servicio prestado a la sociedad. Recuerda a los padres cristianos la obligación
de confiar sus hijos, según las circunstancias de tiempo y lugar, a las escuelas católicas,
de sostenerlas con todas sus fuerzas y de colaborar con ellas por el bien de sus propios
hijos.
Diversas clases de escuelas católicas
9. Aunque la escuela católica pueda adoptar diversas formas según las circunstancias
locales, todas las escuelas que dependen en alguna forma de la Iglesia han de
conformarse al ejemplar de ésta. La Iglesia aprecia también en mucho las escuelas
católicas, a las que, sobre todo, en los territorios de las nuevas Iglesias asisten también
alumnos no católicos.
Por lo demás, en la fundación y ordenación de las escuelas católicas, hay que atender a
las necesidades de los progresos de nuestro tiempo. Por ello, mientras hay que favorecer
las escuelas de enseñanza primaria y media, que constituyen el fundamento de la
educación, también hay que tener muy en cuenta las requeridas por las condiciones
172 actuales, como las escuelas profesionales, las técnicas, los institutos para la formación
de adultos, para asistencia social, para subnormales y la escuela en que se preparan los
maestros para la educación religiosa y para otras formas de educación.
El Santo Concilio exhorta encarecidamente a los pastores de la Iglesia y a todos los
fieles a que ayuden, sin escatimar sacrificios, a las escuelas católicas en el mejor y
progresivo cumplimiento de su cometido y, ante todo, en atender a las necesidades de
los pobres, a los que se ven privados de la ayuda y del afecto de la familia o que no
participan del don de la fe.
Facultades y universidades católicas
10. La Iglesia tiene también sumo cuidado de las escuelas superiores, sobre todo de las
universidades y facultades. E incluso en las que dependen de ella pretende
sistemáticamente que cada disciplina se cultive según sus principios, sus métodos y la
libertad propia de la investigación científica, de manera que cada día sea más profunda
la comprensión de las mismas disciplinas, y considerando con toda atención los
problemas y los hallazgos de los últimos tiempos se vea con más exactitud cómo la fe y
la razón van armónicamente encaminadas a la verdad, que es una, siguiendo las
enseñanzas de los doctores de la Iglesia, sobre todo de Santo Tomás de Aquino. De esta
forma, ha de hacerse como pública, estable y universal la presencia del pensamiento
cristiano en el empeño de promover la cultura superior y que los alumnos de estos
institutos se formen hombres prestigiosos por su doctrina, preparados para el
desempeño de las funciones más importantes en la sociedad y testigos de la fe en el
mundo.
En las universidades católicas en que no exista ninguna Facultad de Sagrada Teología,
haya un instituto o cátedra de la misma en que se explique convenientemente, incluso a
los alumnos seglares. Puesto que las ciencias avanzan, sobre todo, por las
investigaciones especializadas de más alto nivel científico, ha de fomentarse ésta en las
universidades y facultades católicas por los institutos que se dediquen principalmente a
la investigación científica.
El Santo Concilio recomienda con interés que se promuevan universidades y facultades
católicas convenientemente distribuidas en todas las partes de la tierra, de suerte, sin
embargo, que no sobresalgan por su número, sino por el prestigio de la ciencia, y que su
acceso esté abierto a los alumnos que ofrezcan mayores esperanzas, aunque de escasa
fortuna, sobre todo a los que vienen de naciones recién formadas.
Puesto que la suerte de la sociedad y de la misma Iglesia está íntimamente unida con el
progreso de los jóvenes dedicados a estudios superiores, los pastores de la Iglesia no
sólo han de tener sumo cuidado de la vida espiritual de los alumnos que frecuentan las
universidades católicas, sino que, solícitos de la formación espiritual de todos sus hijos,
consultando oportunamente con otros obispos, procuren que también en las
173 universidades no católicas existan residencias y centros universitarios católicos, en que
sacerdotes, religiosos y seglares, bien preparados y convenientemente elegidos, presten
una ayuda permanente espiritual e intelectual a la juventud universitaria. A los jóvenes
de mayor ingenio, tanto de las universidades católicas como de las otras, que ofrezcan
aptitudes para la enseñanza y para la investigación, hay que prepararlos cuidadosamente
e incorporarlos al ejercicio de la enseñanza.
Facultades de Ciencias Sagradas
11. La Iglesia espera mucho de la laboriosidad de las Facultades de ciencias sagradas.
Ya que a ellas les confía el gravísimo cometido de formar a sus propios alumnos, no
sólo para el ministerio sacerdotal, sino, sobre todo, para enseñar en los centros
eclesiásticos de estudios superiores; para la investigación científica o para desarrollar
las más arduas funciones del apostolado intelectual. A estas facultades pertenece
también el investigar profundamente en los diversos campos de las disciplinas sagradas
de forma que se logre una inteligencia cada día más profunda de la Sagrada Revelación,
se descubra más ampliamente el patrimonio de la sabiduría cristiana transmitida por
nuestros mayores, se promueva el diálogo con los hermanos separados y con los nocristianos y se responda a los problemas suscitados por el progreso de las ciencias.
Por lo cual, las Facultades eclesiásticas, una vez reconocidas oportunamente sus leyes,
promuevan con mucha diligencia las ciencias sagradas y las que con ellas se relacionan
y sirviéndose incluso de los métodos y medios más modernos, formen a los alumnos
para las investigaciones más profundas.
La coordinación escolar
12. La cooperación que en el orden diocesano, nacional o internacional se aprecia y se
impone cada día más, es también sumamente necesaria en el campo escolar; hay que
procurar, con todo empeño, que se fomente entre las escuelas católicas una conveniente
coordinación y se provea entre éstas y las demás escuelas la colaboración que exige el
bien de todo el género humano.
De esta mayor coordinación y trabajo común se recibirán frutos espléndidos, sobre todo
en el ámbito de los institutos académicos. Por consiguiente, las diversas facultades de
cada universidad han de ayudarse mutuamente en cuanto la materia lo permita. Incluso
las mismas universidades han de unir sus aspiraciones y trabajos, promoviendo de
mutuo acuerdoreuniones internacionales, distribuyéndose las investigaciones científicas,
comunicándose mutuamente lo hallazgos, intercambiando temporalmente los profesores
y proveyendo todo lo que pueda contribuir a una mayor ayuda mutua.
174 CONCLUSIÓN
El Santo Concilio exhorta encarecidamente a los mismos jóvenes a que, conscientes del
valor de la función educadora, estén preparados para abrazarla con generosidad, sobre
todo en las regiones en que la educación de la juventud está en peligro por falta de
maestros.
El mismo Santo Concilio, agradeciendo a los sacerdotes, religiosos, religiosas y
seglares, que con su entrega evangélica se dedican a la educación y a las escuelas de
cualquier género y grado, los exhorta a que perseveren generosamente en su empeño y a
que se distingan en la formación de los alumnos en el espíritu de Cristo, en el arte
pedagógico y en el estudio de la ciencia, de forma que no sólo promuevan la renovación
interna de la Iglesia, sino que sirvan y acrecienten su benéfica presencia en el mundo de
hoy, sobre todo en el intelectual.
Todas y cada una de las cosas contenidas en esta Declaración han obtenido el
beneplácito de los Padres del Sacrosanto Concilio. Y Nos, en virtud de la potestad
apostólica recibida de Cristo, juntamente con los Venerables Padre, las aprobamos,
decretamos y establecemos con el Espíritu Santo y mandamos que lo así decidido
conciliarmente sea promulgado para la gloria de Dios.
Roma, en San Pedro, 28 de octubre de 1965.
http://www.vatican.va/archive/ESL0020/__P2K.HTM
175 ANEXO 3
Carta de la Conferencia Episcopal Ecuatoriana sobre la Educación Religiosa
La Conferencia Episcopal Ecuatoriana agradece al Señor Dios por algunos logros
recientes en materia de educación. Al extender a todo centro escolar particular la
posibilidad de ser cofinanciado por el Estado, al garantizar la educación no estatal y al
prever un currículo de estudio integrado por elementos procedentes también del ideario
de cada institución, la nueva Ley Orgánica de Educación Intercultural traerá ciertamente
un significativo avance para la vigencia de la libertad educativa en nuestro país.
Sin embargo, la plena libertad de educación seguirá siendo en el Ecuador una
prerrogativa de la que la mayor parte de ciudadanos queda excluida. Y esto, gracias a la
Asamblea Legislativa que, por una mayoría circunstancial, ha restringido el derecho
constitucional que ampara a todos los padres de familia a escoger para sus hijos la
educación según sus principios y creencia. Este derecho se niega a todos los que – en
gran parte por razones económicas – deciden acudir a los establecimientos del Estado.
El derecho que se ha negado consiste en la posibilidad de que, a los estudiantes cuyas
familias libremente lo solicitaren, se les imparta una enseñanza religiosa y moral en
cualquier establecimiento, de acuerdo con las propias convicciones. Por ser una
asignatura curricular, esta enseñanza es algo bien distinto de la catequesis y de la
educación en la fe, realizada en iglesias y centros de culto. Se trata de una enseñanza
que integra la propia tradición religiosa, conforme a la conciencia familiar, en la
formación cultural completa. Además, los mismos derechos educativos se refieren
también al tipo de educación de la afectividad y de la sexualidad, que jamás puede
prescindir de la participación de los padres.
Los Obispos del Ecuador recogemos la voz de una gran mayoría de familias
ecuatorianas, de innumerables educadores y de amplísimos sectores de la sociedad (no
sólo católicos) que, hoy más que nunca, sienten la tarea grave de la educación como su
primera responsabilidad y no están dispuestos a ceder sus derechos por ningún cálculo
político o vetustos prejuicios ideológicos.
176 Como nos recuerda el Papa Benedicto XVI, sólo una esperanza razonable y el amor a la
vida son el alma de una verdadera educación. La sed de la verdad y del auténtico bien,
que caracteriza el corazón de la niñez y de la juventud, no pueden quedar abandonados
ante el desafío de la vida; no deben sucumbir a la imposición de un mal entendido
laicismo estatal. La libertad educativa es un precioso tesoro que nunca dejará de
interpelar a una sociedad democrática.
Sólo una educación que eduque a la razón y a la libertad, según los principios religiosos
y morales de la familia, podrá ofrecer a la convivencia civil las propias bases del bien
común
garantizado
por
un
auténtico
Estado
de
Derecho.
La
evidente
inconstitucionalidad de lo actuado por la Asamblea que, para “precautelar la educación
laica”, no ha tenido reparo en coartar los derechos constitucionales de los ciudadanos
merece una movilización general de la conciencia ciudadana; a través de sus legítimas
organizaciones, la sociedad tiene todo el derecho de acudir a las instancias competentes
previstas por el marco constitucional vigente, y hacer valer así sus justas razones.
Quito, 2 de marzo de 2011
SECRETARÍA GENERAL DE LA CONFERENCIA EPISCOPAL ECUATORIANA
177 ANEXO 4
CATÁLOGO DE LAS INSTITUCIONES EDUCATIVAS DE LA IGLESIA
CATÓLICA EN EL ECUADOR
COLEGIO CONGREGACIÓN PROVINCIA CIUDAD DIRECCIÓN TELÉFONO FINANCIAMIENTO NIVEL JORNADA Comunidad
1
Colegio
De Religiosas
San
Franciscanas
Antonio De
Misioneras
Padua
De La
Calle Roberto
Carchi
Tulcán
Sierra 7023 Y
2988494
Bolívar
No Existen
Datos
Bachillerato
No Existen
Datos
Inmaculada
2
10 De
Diócesis de
Agosto
Loja
3
12 De
No Existen
Octubre
Datos
12 De
No Existen
Octubre
Datos
14 De
No Existen
Mayo
Datos
14 De
No Existen
Mayo
Datos
4
5
6
7
8
9
141
Diócesis de
Loja
20 De
No Existen
Marzo
Datos
24 De
No Existen
Mayo
Datos
10
Loja
Napo
Napo
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No Existen
No Existen
No Existen
No Existen
No Existen
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Datos
Datos
Datos
Datos
Datos
Fiscomisional
Pre-Primaria
Matutina
Fiscomisional
Primaria
Matutina
Fiscomisional
Pre-Primaria
Matutina
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Primaria
Matutina
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No Existen
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Datos
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Las Palmas
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Datos
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Pastaza
Aros.T
ola
No Existen
Datos
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Datos
No Existen
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Datos
Datos
Datos
Datos
Datos
Fiscomisional
Primaria
Matutina
Fiscomisional
Primaria
Matutina
No Existen
Yavisuno
Datos
Morete cocha
No Existen
Datos
Congregación
Santa
39
Mariana de
No Existen
No Existen
No Existen
No Existen
No Existen
Datos
Datos
Datos
Datos
Datos
Fiscomisional
Primaria
Matutina
Pichincha
Quito
Napo
Tena
Jatunyacu
Guaya
El Oro 1219 y
quil
Quito
Jesús
11
6 De Marzo
12
No Existen
Datos
No Existen
Datos
Hijas De Los
Sagrados
86
Corazones De
Guayas
Jesús Y De
Pre-Básica,
2448794
Particular
Básica,
Matutina
Bachillerato
María
13
Gonzalo
86
Arquidiócesis
Guayas
Durán
Aparicio y
2800415
Fiscomisional
Callejón
14
Abdón
Calderón
15
Abya Yala
Seglares
Hermanos
Guayas
Sucumbí
Bachillerato
Matutina
Pre-Básica,
Sambo
Km 1 vía a
rondón
Samborondón
Lago
Recinto San
Básica,
2830387
Particular
Básica,
Matutina
Bachillerato
91145430
Particular
Medio
semipresencia
178 16
Maristas
os
Agrio
Fe y Alegría
Pichincha
Quito
Alborada
Seglares
Guayas
Alfonso
No Existen
Barba
Datos
Afraser - Fe
Y Alegria
17
18
19
Imbabura
Vicente
l
No Existen
No Existen
No Existen
No Existen
No Existen
Datos
Datos
Datos
Datos
Datos
2970352
Particular
Milagr
12 de Febrero y
o
24 de Mayo
San
No Existen
Pablo
Datos
918011
No Existen
Datos
Pre-Básica,
Básica
Matutina
Primario
Matutina
Comunidad
Alfonso
de Hermanos
Del Hierro
Cristianos de
Pichincha
Quito
Pichincha
Quito
Pichincha
Quito
Loja
Calvas
No Existen
No Existen
No Existen
No Existen
No Existen
Datos
Datos
Datos
Datos
Datos
No Existen
No Existen
No Existen
No Existen
No Existen
Datos
Datos
Datos
Datos
Datos
No Existen
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Datos
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Datos
Datos
Datos
Datos
Datos
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EDUC.
Ayuda
BASICA
Particular sin
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Ayuda
BACHILL.
la Salle
20
Aliñambi
21
Católica
Comunidad
de Religiosas
Alvernia
Franciscanas
Misioneras de
la Inmaculada
22
Amada
Jumbo -
Diócesis de
Santa
Loja
Teresa
23
América
24
América
Hermanos
Maristas
Hermanos
Maristas
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Los Ríos
do/Que
vedo
Los Ríos
Bolívar y
Décima Cuarta
Queve
Av. Walter
do/Que
Andrade
vedo
Fajardo
52750505
52752031
MATUTINA
MATUTINA
Comunidad
25
De Religiosas
Anexo La
Franciscanas
Victoria
Misioneras
Imbabura
Ibarra
Pichincha
Quito
Napo
Tena
No Existen
643091
Datos
No Existen
Datos
Secundario
Matutina
De La
Inmaculada
26
27
28
Angel De
Diócesis de
La Guarda
Loja
Angel San
No Existen
Gabriel
Datos
Ángela
Aspiazu De
Chambers
29
No Existen
Datos
Guayas
Guaya
quil
No Existen
No Existen
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No Existen
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Datos
Datos
Datos
Datos
Datos
Fiscomisional
Primaria
Matutina
Shiguachocha
No Existen
Datos
Clda. Kennedy ,
calle Dr. César
Pre-Básica,
2292834
Particular
Andrade
Básica,
Matutina
Bachillerato
Arcadio
Mendieta-
No Existen
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Datos
Loja
Gonza
No Existen
No Existen
No Existen
No Existen
No Existen
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Datos
Datos
Datos
Datos
Datos
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72606934
Fiscomisional
2490827
Particular
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30
Aurelio
Espinoza
Polit
31
No Existen
Datos
Baltasara
Diócesis de
Calderón
Loja
Zamora
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e
Cóndor
Guayas
Guaya
Cdla. 9 de
quil
Octubre,
Inicial y
Básica
Pre-Básica,
Básica,
Matutina
Matutina
179 De
Alberto Avellán
Bachillerato
Rocafuerte
32
Básico
Artesanal
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No Existen
No Existen
No Existen
No Existen
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Datos
Santiago
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Datos
Datos
Datos
Datos
Datos
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Datos
Básica
Nankamaku
33
Beato Juan
Sto.
XXIII
(Educ.
No Existen
Domingo
Inicial Y
Datos
de los
Tsáchilas
1ero
Santo
Domin
3752Rosita de Sarón
go
220/081046
591
Matutina
Básica)
34
Congregación
Bernardino
Santa
Echeverría
Mariana de
Imbabura
G.
No Existen
Suarez
Datos
918566
No Existen
Datos
Primario
Matutina
Jesús
35
Borja N° 1
36
No Existen
Datos
Pichincha
Quito
Pichincha
Quito
Napo
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Tungurah
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No Existen
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Datos
Datos
Datos
Datos
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No Existen
No Existen
No Existen
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Datos
Datos
Datos
Datos
Datos
Fiscomisional
Primaria
Matutina
Hijas De Los
Borja N° 3
Cavanis
Sagrados
Corazones De
Jesús Y De
María
37
Buen
Pastor
38
Arquidiócesis
C. Arte.
Leonardo
Seglares
Murialdo
39
No Existen
Achiyacu
Datos
PICHINCHA Y
AV. LOS
032 840216
Fiscomisional
03 2422319
Particular
INCAS
8vo-10mo y
Bachillerato
MATUTINA
HIMNO
C.E. San
Hermanos
Tungurah
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NACIONAL
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Maristas
ua
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121
Inicial, EGB
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MATUTINA
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40
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Juan
Fe y Alegría
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Datos
Fiscomisional
Medio
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Datos
Básica
No Existen
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Datos
Bachillerato
Fiscomisional
Primaria
Matutina
Fiscomisional
Primaria
Matutina
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41
Sto.
Calasanz I
Seglares
Domingo
de los
Tsáchilas
42
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Calasanz II
No Existen
Domingo
Datos
de los
Tsáchilas
43
Capitan
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44
Capitan
Santo
Domin
go
Coop. Villa
Florida calle
Mantilla # 301
Matutina
Ing. Luis
Santo
Frente a la
Domin
Heriberto
go
Maldonado
3752-394
Matutina
Comunidad
de Hermanos
Cristianos de
Orellana
Orellan
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No Existen
Datos
la Salle
Católica
Pastaza
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237
No Existen
3700-159
180 Edmundo
Datos
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45
Comunidad
Cardenal
Bernardino
Echeverría
Av. Del
De Religiosas
Franciscanas
Misioneras
Guayas
Espínd
Bombero, km.
ola
5.5. vía a la
Pre-Básica,
2353950
Particular
Matutina
Bachillerato
Costa
De La
Básica,
Inmaculada
46
Cardenal
De La
Torre
47
Cardenal
Richard
Cushing
48
Cardenal
Spellman
De Varones
49
Cardenal
Spellman
Femenino
50
51
Loja
Hermanos
Maristas
Hermanos
Maristas
No Existen
Datos
Cardenal
Congregación
Bernardino
Del Buen
Echeverría
Pastor
Carrera
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Bruno
52
Diócesis de
No Existen
Datos
Pichincha
Guayas
No Existen
No Existen
No Existen
No Existen
No Existen
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Datos
Datos
Datos
Datos
Datos
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Pichincha
Tena
Pichincha
Quijos
Imbabura
Calvas
Guayas
Casimiro
Soc. Bfcia.
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De Señoras
Cavanis
Diócesis de
Domingo
Borja 3
Loja
de los
53
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Napo
Pastaza
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Sto.
Víctor Manuel
(30) y G.
Pre-Básica,
2471201
Matutina
No Existen
No Existen
No Existen
No Existen
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Datos
Datos
Datos
Datos
Datos
No Existen
No Existen
No Existen
No Existen
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Datos
Datos
Datos
Datos
Datos
Primario
Matutina
No Existen
915203
Datos
Calle 6ta. Y Av.
José Carrera
Mushullacta
Km 3 margen
No Existen
Datos
Pre-Básica,
2953055
Particular
Básica,
Bachillerato
No Existen
Datos
2743-220
izquierdo
Tsáchilas
Básica,
Bachillerato
Vía Quininde
Quito
Particular
Rendón
No Existen
Datos
Fiscomisional
Primaria
Matutina
No Existen
Básica /
No Existen
Datos
Bachillerato
Datos
Básica,
No Existen
Bachillerato
Datos
Comunidad
54
De Religiosas
Cayetano
Franciscanas
Tarruell
Misioneras
Urb. Jaime
Guayas
Tena
Roldós Mz. 1,
2491573
Particular
Solar 19
De La
Inmaculada
55
56
Ceb Juan
Dominicas de
Morona
Guaya
No Existen
No Existen
No Existen
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la Enseñanza
Santiago
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Datos
Datos
Datos
Datos
No Existen
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Datos
Datos
Datos
Datos
Matutina
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Educ. Bás.
De Apli.
Pedag.
Dolores
Salesianas
Hijas de
Morona
María
Santiago
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Matutina
Auxiliadora
Sucre.
57
Centro Art.
Dorotea
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Diócesis
Loja
Matutina
181 58
Centro Art.
Francisco
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59
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Datos
Loja
Lago
No Existen
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Datos
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Datos
Datos
Matutina
Centro Art.
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Valdivieso
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Loja
Quito
Matutina
Alvarado
Congregación
60
Centro Art.
Santa
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Jesús
Misionera De
Las Escuelas
De Caridad
Loja
Antonio Y
Marcos
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61
Centro
Básico
Artesanal
No Existen
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Datos
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Datos
Datos
Loja
Quito
No Existen
No Existen
Datos
Datos
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María
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62
Centro De
Audición Y
Lenguaje
CEAL
63
Congregación
De Padres
Josefinos
Fiscomisional
Centro De
Formación
Artesanal
Comunidad
Tungurah
Dolores
Diocesana
ua
Quito
Rocafuerte
1755 y Quito
03 2820234
Fiscomisional
Sopeña
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64
Centro De
Formacion
Artesanal
Leonor
No Existen
Datos
Pichincha
Quito
No Existen
No Existen
Datos
Datos
Fiscomisional
Heredia
65
Centro De
Formación
Comunidad
Artesanal
de Padres
Madre
Escolapios
CACIQUE
Tungurah
ua
Calvas
ANTONIO
032 751112
No Existen
Datos
Particular
No Existen
Datos
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Gertrudis
66
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Centro De
Formación
Artesanal
Madre
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Comunidad
de Padres
Escolapios
Morona
Santiago
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do/Que
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No Existen
2988494
Datos
Fiscomisional
No Existen
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Datos
Datos
No Existen
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Datos
Datos
"
67
Centro De
Formación
Artesanal
No Existen
Datos
Queve
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do/Que
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No Existen
No Existen
Datos
Datos
Fiscomisional
182 María
Auxiliadora
68
Centro De
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No Existen
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Datos
Datos
No Existen
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Datos
Guaya
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Datos
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Sierra 7023 Y
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Guaya
No Existen
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Arquidiócesis
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Quito
Pichincha
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Ibarra
Particular
MATUTINA
No Existen
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Datos
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69
Centro De
Formacion
Artesanal
Porras
Fiscomisional
Garces
70
Centro Del
Muchacho
Hermanas
Trabajador
Oblatas
Particular
No Existen
Datos
MATUTINA
N° 1
71
Centro Del
Muchacho
Trabajador
Arquidiócesis
Pichincha
Fiscomisional
No Existen
No Existen
Datos
Datos
N° 2
72
Centro
Desarrollo
Comunidad
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Salesiana
Pichincha
Particular
No Existen
Datos
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Paula
73
74
Centro
Salesianas
Educativo
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María
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Auxiliadora
Pichincha
No Existen
Datos
No Existen
Matutina y
Datos
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No Existen
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Particular
Centro
Educativo
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o
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No Existen
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Pastaza
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75
Centro
Educativo
Comunitari
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Intercultura
l Bilingüe
Congregación
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Carchi
Pastor
Huamb
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Datos
Particular
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76
Centro
Educativo
Comunitari
o
No Existen
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Santo
Loja
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go
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Valladares
No Existen
No Existen
Fiscomision
No Existen
Datos
Datos
al
Datos
183 77
78
Centro
Congregación
Educativo
Misionera De
De
Las Escuelas
Educacion
De Caridad
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Antonio Y
Cristobal
Marcos
Colon
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Las Palmas
2448794
Las Palmas
2800415
No Existen
No Existen
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Datos
Datos
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Centro
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De
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Quito
Napo
Quito
Napo
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79
Centro
Educativo
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María
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2830387
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Matutina
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80
Centro
Educativo
De
Educacion
No Existen
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Datos
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91145430
Santo
Domingo
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81
Centro
Educativo
No Existen
La
Datos
Loja
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No Existen
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Datos
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Particular
No Existen
Datos
Inmaculada
82
Centro
Educativo
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83
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Pastaza
la Caridad
Particular sin
Fiscomision
Ayuda
al
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No Existen
o
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918011
El Oro 1219 y
No Existen
No Existen
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Quito
Datos
Datos
Datos
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Matutina
Centro
Educativo
Particular
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García
Compañía
de Hijas de
Napo
la Caridad
No Existen
Datos
Particular
Matutina
Moreno
84
Centro
Educativo
Padres
Particular
Mercedarios
San José
Santo
Pichincha
Domin
go
Matutina
184 85
Hermanas
Centro
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Educativo
Hijas De
Sagrada
Los
Familia
Sagrados
Napo
Santo
Gonzalo
Domin
Aparicio y
go
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Km 1 vía a
No Existen
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No Existen
Fiscomisional
Particular
Matutina
Particular
Particular
Matutina
No Existen
No Existen
No Existen
No Existen
Datos
Datos
Datos
Datos
52750505
Fiscomisional
Fiscomision
No Existen
al
Datos
52752031
Particular
Fiscomision
No Existen
al
Datos
Fiscomision
No Existen
al
Datos
Datos
Corazones
86
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Familia
87
Guayas
Comunidad
de
10 De
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de la
Guayas
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88
89
90
91
92
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12 de Febrero y
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14 De
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141
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is
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Guayas
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Imbabura
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Pichincha
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643091
No Existen
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Datos
Datos
No Existen
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2292834
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Particular
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MATUTINA
No Existen
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Loja
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86
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Vicariato
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591
(VAM)
No Existen
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Hijas de
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Datos
Datos
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Dolores
Sociedad
Bosco, SDB
Sucre.
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Dorotea
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la Enseñanza
Loja
Comunidad
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Loja
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Concepción
103 Centro Art.
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Francisco
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Hermanas
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Loja
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105 Comunidad
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Loja
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Centro
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Datos
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Fiscomisional
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Audición Y
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Seglares
Loja
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Formación
Instituto de
Artesanal
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Pichincha
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471
1755 y
Quito
No Existen
Datos
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108 Centro De
Comunidad
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Morona
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Santiago
Mazzarello
Auxiliadora
Limón
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a
No Existen
No Existen
No Existen
No Existen
No Existen
Datos
Datos
Datos
Datos
Datos
No Existen
No Existen
No Existen
No Existen
Datos
Datos
Datos
Datos
"
111 Centro De
Formación
Artesanal
María
Auxiliadora
112 113 Padres
Salesianos
Congregación
Azuay
Cuenca
2829474
Salesiana
Centro De
Instituto de
Formación
Catequistas
Chimbor
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No Existen
Artesanal
Dolores
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Datos
OSCUS
Sopeña
Pichincha
Quito
Pichincha
Quito
Pichincha
Quito
Pichincha
Quito
Pichincha
Quito
Av.
Canónigo
32961104
Particular
Ramos S/N
Primaria y
Secundaria
Centro De
Formacion
Instituto
Artesanal
Perpetuo
Porras
Socorro
No Existen
No Existen
No Existen
No Existen
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Datos
Datos
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Datos
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No Existen
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Datos
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No Existen
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Datos
Datos
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No Existen
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Datos
Datos
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No Existen
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No Existen
No Existen
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Datos
Datos
Datos
Datos
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Comunidad
No Existen
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Datos
Fiscomisional
Básica
Garces
114 Centro Del
Muchacho
Compañía De
Trabajador
Jesús
N° 1
115 Centro Del
Muchacho
Compañía De
Trabajador
Jesús
N° 2
116 Centro
Desarrollo
Infantil Sta
Paula
117 Instituto De
Hijas De
María
Centro
Educativo
Arco Iris
Católica
Del Sur
118 del 13 de
Centro
Educativo
Comunitari
o
Intercultura
No Existen
Datos
Diciembre de
Pastaza
Pastaza
2000/
Resolución No.
082-DIPEIBP
187 l Bilingüe
Ecuador
119 Centro
Educativo
Resolución No.
Comunitari
o
No Existen
Intercultura
Datos
Pastaza
Pastaza
081 DIPEIBP/
Comunidad
No Existen
15 de
Sarayaku
Datos
Fiscomisional
Básica
Fiscomisional
Básica
2795-217
Fiscomisional
Básica
2886-531
Fiscomisional
Básica
2884-770
Fiscomisional
2885-172
Fiscomisional
noviembre 1988
l Bilingüe
Simon
Hurtado
120 Centro
Educativo
Comunitari
o
No Existen
Intercultura
Datos
Pastaza
Pastaza
Resolución No.
085-DIPEIBP
l Bilingüe
Comunidad
Teresamam
a
No Existen
Datos
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Valladares
121 Centro
Educativo
De
Educacion
Basica
No. 14279 del
No Existen
Datos
Pastaza
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28 de
Septiembre de
1960
Cristobal
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Noviembre
y las Balsas
Colon
122 Centro
Educativo
De
Educacion
No Existen
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Datos
del 28 de
Pastaza
Pastaza
Recinto los
Octubre de
Ángeles
1989
Mons.
Leonidas
Proaño
123 Centro
Educativo
De
Educacion
Basica
Mons.
No. 101-DPNo Existen
Datos
Pastaza
Pastaza
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septiembre de
1990
Tomas
Av.
Gonzales
Suárez
Barrio
Pre básicaBásica
Cumandá
Romero
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124 Centro
Educativo
Educacion
No Existen
Basica
Datos
Santo
Calle 9 de
No. 01/06
De
Pastaza
Pastaza
Octubre y
UNIV-DPDPEP, del 18 de
Mayo de 2006
Domingo
De Guzman
Av. Mons.
Alberto
Zambrano
Pre básicaBásica
188 125 Centro
Educativo
La
Inmaculada
126 Centro
Educativo
Medalla
Milagrosa
127 GIRASOL
Compañía de
Hijas de la
Caridad
Tungurah
ua
ES 0-30
Pillaro
126
LAS
032 873198
Particular
2287145
Fiscomisional
0.52.600.462
Particular
Inicial y EGB
ILUSIONE
S
Compañía de
Hijas de la
Carchi
Bolívar
Caridad
IV 053 27-11-
Gran
1936
Colombia
Artesanal
Básica
Centro
Educativo
Particular
Padres
Mercedario
Mercedarios
No
Manabí
Existen
Datos
García
NO.2623.05.1967 No. 311-
Calle
Bolívar y
Preprimaria -
Montalvo
15.02.1995
Primaria y
Secundaria
Moreno
128 Centro
Educativo
Particular
San José
129 Hermanas
Doroteas
Hijas De Los
Azuay
Sagrados
Cardenal
De La
Torre
131 Arquidiócesis
Guayas
Hermanas
Oblatas
Pichincha
Arquidiócesis
Guayas
Cushing
132 Cardenal
Spellman
De Varones
133 Cardenal
Spellman
Femenino
134 Cardenal
Bernardino
Echeverría
135 136 Comunidad
Salesiana
Datos
Hijas de
María
No Existen
Datos
Datos
Guaya
U.E. # 538,
Bombero,
quil
julio 23/2004
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Pre-Básica,
2353950
Particular
Quito
Guaya
quil
Básica,
Bachillerato
No Existen
No Existen
No Existen
No Existen
No Existen
Datos
Datos
Datos
Datos
Datos
2471201
Particular
Víctor
U.E. # 640,
Manuel
diciembre
(30) y G.
11/1996
Pre-Básica,
Básica,
Bachillerato
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No Existen
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No Existen
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Datos
Datos
Datos
No Existen
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No Existen
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Datos
Datos
Datos
Datos
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No Existen
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Datos
Balleni
U.E. # 0091,
ta
agosto 1/2000
Pichincha
Quito
Pichincha
Quito
Auxiliadora
No Existen
Datos
Congregación
Sánchez
Del Buen
Bruno
Pastor
Casimiro
No Existen
Peretti
Datos
Imbabura
Guayas
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Congregación
Sto.
Cavanis
Misionera De
Domingo
Borja 3
Las Escuelas
de los
De Caridad
Tsáchilas
Tena
Santo
Domin
go
(1978-11-02)
915203
No Existen
Datos
Calle 6ta. Y
Av. José
Primario
Pre-Básica,
2953055
Particular
Carrera
Básica,
Bachillerato
Mushullact
No Existen
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Datos
Fiscomisional
Primaria
No Existen
Básica /
Datos
Bachillerato
Vía
No Existen
Quininde
Datos
Km 3
margen
No Existen
Salesianas
Carrera
137 Datos
2250800
a la Costa
Cardenal
Richard
No Existen
Av. Del
Echeverría
130 No Existen
Corazones
Cardenal
Bernardino
Paute
2743-220
189 Antonio Y
izquierdo
Marcos
Cavanis
138 Cayetano
Tarruell
Seglares
Guayas
Guaya
# 1139, mayo
quil
13/1976
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Roldós Mz.
2491573
Particular
1, Solar 19
Básica,
Bachillerato
Salesianas
139 Ceb Juan
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Morona
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No Existen
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Datos
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Loja/L
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Datos
Datos
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Datos
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Datos
Datos
Datos
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140 Cent.
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De Apli.
Pedag.
Dolores
Sociedad
Bosco, SDB
Sucre.
141 Centro Art.
Dorotea
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Dominicas de
la Enseñanza
Loja
Comunidad
142 Centro Art.
de Dominicas
Francisco
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Valdivieso
Inmaculada
Cataco
Loja
cha/Pal
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Concepción
143 Centro Art.
Mons.
Francisco
Valdivieso
Hermanas
Oblatas
Loja
Alvarado
144 Centro Art.
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Jesús
145 Comunidad
de Hermanas
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Loja
Marianitas
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Centro
Básico
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Artesanal
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Morona
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No Existen
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María
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No Existen
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Datos
Datos
Datos
Datos
Datos
03 2820234
Fiscomisional
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146 Centro De
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Lenguaje
Seglares
Loja
CEAL
147 Centro De
Formación
Instituto de
Artesanal
Catequistas
Tungurah
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Dolores
Dolores
ua
o
Sopeña
Sopeña
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471
1755 y
Quito
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No Existen
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190 148 149 Centro De
Comunidad
Formacion
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Artesanal
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Inmaculada
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Concepción
Pichincha
Quito
No Existen
No Existen
No Existen
No Existen
No Existen
Datos
Datos
Datos
Datos
Datos
032 751112
Particular
8vo-10mo
CACIQUE
Centro De
Formación
Hermanas
Artesanal
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Madre
s
Tungurah
ua
TISALEO
Tisaleo
364
Y
ANTONIO
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150 Centro De
Formación
Salesianas
Artesanal
Hijas de
Morona
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María
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No Existen
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Datos
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151 Centro De
Formación
Artesanal
María
Auxiliadora
152 153 Padres
Salesianos
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Cuenca
2829474
Salesiana
Centro De
Instituto de
Formación
Catequistas
Chimbor
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No Existen
Artesanal
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Sopeña
Pichincha
Quito
Pichincha
Quito
Pichincha
Quito
Pichincha
Quito
Pichincha
Quito
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32961104
Particular
Ramos S/N
Primaria y
Secundaria
Centro De
Formacion
Instituto
Artesanal
Perpetuo
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Socorro
No Existen
No Existen
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Datos
Datos
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Datos
Datos
Datos
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No Existen
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Datos
Datos
Datos
Datos
Datos
Diciembre de
Comunidad
No Existen
2000/
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Datos
Fiscomisional
Básica
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154 Centro Del
Muchacho
Compañía De
Trabajador
Jesús
N° 1
155 Centro Del
Muchacho
Compañía De
Trabajador
Jesús
N° 2
156 Centro
Desarrollo
Infantil Sta
Paula
157 Instituto De
Hijas De
María
Centro
Educativo
Arco Iris
Católica
Del Sur
158 del 13 de
Centro
Educativo
No Existen
Comunitari
Datos
Pastaza
Pastaza
Resolución No.
o
191 Intercultura
082-DIPEIBP
l Bilingüe
Ecuador
159 Centro
Educativo
Resolución No.
Comunitari
o
No Existen
Intercultura
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Pastaza
Pastaza
081 DIPEIBP/
Comunidad
No Existen
15 de
Sarayaku
Datos
Fiscomisional
Básica
Fiscomisional
Básica
2795-217
Fiscomisional
Básica
2886-531
Fiscomisional
Básica
2884-770
Fiscomisional
2885-172
Fiscomisional
noviembre 1988
l Bilingüe
Simon
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160 Centro
Educativo
Comunitari
o
No Existen
Intercultura
Datos
Pastaza
Pastaza
Resolución No.
085-DIPEIBP
l Bilingüe
Comunidad
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No Existen
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Valladares
161 Centro
Educativo
De
Educacion
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No. 14279 del
No Existen
Datos
Pastaza
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28 de
Septiembre de
1960
Cristobal
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Noviembre
y las Balsas
Colon
162 Centro
Educativo
De
Educacion
No Existen
Basica
Datos
del 28 de
Pastaza
Pastaza
Recinto los
Octubre de
Ángeles
1989
Mons.
Leonidas
Proaño
163 Centro
Educativo
De
Educacion
Basica
Mons.
No. 101-DPNo Existen
Datos
Pastaza
Pastaza
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septiembre de
1990
Tomas
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Gonzales
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Barrio
Pre básicaBásica
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164 Centro
Educativo
De
Educacion
Basica
Santo
Calle 9 de
No. 01/06
No Existen
Datos
Pastaza
Pastaza
Octubre y
UNIV-DPDPEP, del 18 de
Mayo de 2006
Domingo
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Alberto
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Pre básicaBásica
192 De Guzman
165 Centro
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La
Inmaculada
166 Centro
Educativo
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Milagrosa
167 GIRASOL
Compañía de
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Caridad
Tungurah
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Pillaro
126
LAS
032 873198
Particular
2287145
Fiscomisional
Inicial y EGB
ILUSIONE
S
Compañía de
Hijas de la
Carchi
Bolívar
Caridad
IV 053 27-11-
Gran
1936
Colombia
Artesanal
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Centro
Educativo
Particular
Padres
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Mercedarios
No
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Existen
Datos
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NO.2623.05.1967 No. 311-
Calle
Bolívar y
Preprimaria 0.52.600.462
Particular
Montalvo
15.02.1995
Primaria y
Secundaria
Moreno
168 Centro
Educativo
Particular
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169 Centro
Educativo
Sagrada
Familia
170 Centro
Educativo
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171 Cesar
Antonio
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172 Cesar
Augusto
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173 174 Hermanas
Doroteas
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No Existen
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Datos
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No Existen
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Datos
Particular
EGB
Particular
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Datos
Secundario
Fiscomisional
Primaria
Fiscomisional
Pre-Primaria
Fiscomisional
Primaria
0.52.310.145
Particular
Secundaria
2449312
Particular
2250800
Corazones
AVENIDA
Hermanos de
la Sagrada
Familia
Tungurah
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DE LAS
2009 y 002-dp-
AMÉRICA
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032521877-032520049
BRASIL
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Comunidad
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Tungurah
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No Existen
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Datos
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Concepción
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Datos
No Existen
Datos
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Datos
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Datos
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No Existen
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Datos
Datos
490(1966-0829)
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Datos
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654(1987-06-
ola
06)
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Miravalle
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690177
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Datos
No Existen
Datos
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Datos
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Ciudad De
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Arquidiócesis
Manabí
Juventud
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,
346-DT
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Pre-Básica,
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193 28/2002
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Sociedad
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Datos
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Datos
Datos
Datos
No Existen
No Existen
No Existen
No Existen
No Existen
Datos
Datos
Datos
Datos
Datos
32961628
Particular
Congregación
179 Col. La
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de los
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las Escuelas
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Datos
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23-58 y
Colón
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Colegio
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Morona
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Datos
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Datos
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Datos
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Datos
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Datos
Datos
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Nocturno
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Morona
Méndez
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Morona
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184 Indanz
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Limón
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2290349
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2290185
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Universidad
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Azuay
Cuenca
Azuay
Cuenca
No Existen
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No Existen
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Datos
Datos
2839188
No Existen
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Datos
Datos
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186 Compañía de
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4097604
Colegio
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Apostólico de
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Galápago
s
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Resolución
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644
Artesano y
052 529 126 /
Cormorane
162
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187 Colegio
Vicariato
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Apostólico de
Morona
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No Existen
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No Existen
No Existen
No Existen
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Méndez
Santiago
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Datos
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188 Colegio
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Colegio
Comunidad
Hermano
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No Existen
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1980
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0.52.764.991
Particular
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Loja/L
No Existen
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No Existen
No Existen
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Datos
Datos
Datos
Datos
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Particular
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(Nocturno)
193 194 Colegio
Congregación
José
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las Escuelas
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Loja
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Juan Pablo
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Loja
Loja
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196 Colegio La
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Congregación
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677
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032823663-032823198
Particular
EGB y
Bachillerato
Inmaculada
Concepción
198 Colegio
Congregación
León
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León
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2280171
Fiscomisional
Básica
Bachillerato
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la
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Providencia y
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Concepción
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200 Colegio
Madre
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Hermanas
Oblatas
Azuay
Cuenca
Azuay
Cuenca
No Existen
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Datos
Datos
No Existen
No Existen
Datos
Datos
2844404
No Existen
No Existen
Datos
Datos
No Existen
No Existen
Datos
Datos
Hijas De Los
Sagrados
Corazones De
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2822087
María
Avenida
201 Colegio
Manuel
González
Rocafuerte
Diócesis de
Machala
El Oro
Pasaje
1012 / 07-08-68
entre
Primero de
2915-191
Privado
Básico Bachillerato
Noviembre
y Pi
202 Colegio
Miguel
Universidad
Cordero
Católica
Azuay
Cuenca
No Existen
No Existen
Datos
Datos
No Existen
No Existen
Datos
Datos
2885-171
Fiscomisional
Bachillerato
2290176
No Existen
Básica
2290017
Datos
Bachillerato
62880173
Estatal
0.52.616.073
Fiscomisional
Secundaria
No Existen
No Existen
Datos
Datos
2839188
Crespo
203 Colegio
Nuestra
Señora De
Pompeya
9 de
Comunidad
de Dominicas
de la
No. 267 del 30
Pastaza
Pastaza
Inmaculada
de mayo de
Octubre
732 entre
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1949
Zambrano
Concepción
y Cap.
Jardín 090-8
204 Colegio
Pablo
Muñoz
Vega
sept. 1998 Esc.
Compañía de
Hijas de la
Carchi
Caridad
Montúf
0292 - 28
ar
nov.1926 Colg:
0379 30 de sept.
Rocafuerte
11-10 Y G.
Moreno
1959
205 Puerto
Colegio
Padre
P.
Miguel
Capuchinos
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206 co de
762 del 30-091969
Calle
Rocafuerte
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BásicoBachillerato
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Colegio
Pedro
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Arquidiócesis
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Jipijap
007961-10-08-
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a
1974
de la Iglesia
No Existen
No Existen
Datos
Datos
Colegio Nº 069
La Junín
15 de octubre
Sn. Olmedo
de 1956
Y Colón
Gómez
207 208 Colegio Pío
Hogar de
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Colegio
Sagrado
Corazón De
Hermanas
Bethlemitas
Azuay
Cuenca
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Tulcán
2828032
2981120
Fiscomisional
Básica
Bachillerato
196 Jesús
San
209 Colegio
Hermanas
San Miguel
Bethlemitas
Bolívar
Miguel
nº29, 1957-09-
de
23
211 Colegio
Franciscanas
San
Misioneras de
Vicente
María
Ferrer
Auxiliadora
Colegio
Santiago
Fernández
García
212 Colegio
Santo
Domingo
De Guzmán
213 Loja
Comunidad
de Padres
Loja
Escolapios
de la
Inmaculada
032989044
37 Partidas
Fiscales
Inicial, Básica
y Bachillerato
Loja/L
No Existen
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Datos
Datos
Datos
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Datos
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de enero
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1351
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032-822174-032421892
Particular
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Bachillerato
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Concepción
Colegio
Técnico
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Comunidad
Salesiana
Pichincha
Quito
No Existen
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Datos
Datos
Datos
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032 748641
Fiscomisional
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Colegio
Técnico
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Comunidad
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006217 y 1023
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Bachillerato
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Colegio
Técnico
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Datos
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Pastaza
Comunidad
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Datos
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2000
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Bachillerato
No Existen
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Datos
Datos
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072241586 - 07
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Bachillerato
No Existen
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Datos
Datos
No Existen
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Datos
Datos
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216 Colegio
Congregación
Técnico
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San J0se
Josefinos
Pichincha
Quito
Fundación
217 Colegio
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No. 071 Del 15
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2003
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Básico
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Inmaculada
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3760-168
2770-557
197 Tsáchilas
220 Conservato
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Teatro Y
Danza La
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Congregación
PEDRO
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Mercedarias
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BARRIO
Jesús
SAN JUAN
032 854568
Fiscomisional
No Existen
Datos
Comunidad
221 Conservato
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rio Superior
Franciscanas
De Musica
Misioneras
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Pichincha
Quito
No Existen
No Existen
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No Existen
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Datos
Datos
Datos
Datos
Datos
29 y la E
2844232
Particular
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Datos
Datos
Datos
Datos
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Datos
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Datos
Datos
Datos
Datos
Datos
2444155
Particular
Inmaculada
Hijas De Los
222 Corazón De
María
Sagrados
Corazones De
Guayas
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Guaya
# 016, junio
quil
6/1966
Pre-Básica,
Básica
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Arquidiócesis
Pichincha
Quito
Pichincha
Quito
Loja
Calvas
Pichincha
Quito
Pichincha
Quito
Loja
Calvas
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224 Cristo Del
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225 226 Cristo Rey
Curia
Metropolitana
De Quito
Diócesis de
Loja
Cristo Rey
Curia
-
Metropolitana
Amaguaña
De Quito
Comunidad
227 Cristo Rey
- El
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De Religiosas
Franciscanas
Misioneras
De La
Inmaculada
228 Cristóbal
Diócesis de
Colón
Loja
Rosa Borja
Padres
229 Cristóbal
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Colón
Congregación
Guayas
Guaya
U.E. # 117,
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quil
Enero 22/1992
115 y
Archid
No Existen
230 231 232 No Existen
Colon
Datos
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233 De La
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Napo
Congregación
De Padres
Guayas
Josefinos
Hermanitas
Guayas
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44(1965-11-30)
Guaya
# 584, mayo
quil
10/1966
Guaya
U.E. # 0147,
San Pablo
No Existen
Datos
No Existen
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Fiscomisional
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Fiscomisional
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2453950
Particular
2256692
Particular
Cuenca
Bachillerato
Maracaibo
Salesiana
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Básica,
Km 51/2
Básica,
Bachillerato
Pre-Básica,
198 Asunción
de la
quil
enero 26/2005
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Básica,
Asunción
Bachillerato
Congregación
234 de las
Hermanas de
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Inmaculada
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Guayas
Guaya
U.E. # 3588,
quil
agosto 09/1996
Guaya
U.E. # 248,
quil
mayo 20/1998
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2101 y
Pre-Básica,
2400300
Particular
Colombia
Básica,
Bachillerato
Inmaculada
Concepción
235 De La
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Compañía de
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Guayas
Caridad
Eloy Alfaro
y Gómez
Pre-Básica,
2400328
Particular
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Básica,
Bachillerato
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Guayas
Guaya
quil
U.E. # 0001050,
de Julio y
septiembre
Callejón
28/2006
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Pre-Básica,
2342614
Particular
Básica,
Bachillerato
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237 Diocesano
No Existen
Bilingüe
Datos
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No Existen
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Datos
Datos
952846
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Secundario
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238 Divina
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Hermanitas
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Sto.
Domingo
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Tsáchilas
No
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Datos
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2392-195
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Datos
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Primaria
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Guaya
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quil
julio 24/2001
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Arquidiócesis
Guayas
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2496945
Particular
Bachillerato
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Guayas
Guaya
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mayo 04/2005
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Guayas
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4502 y
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25/1968
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Pre-Básica,
2448853
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Guaya
Básica,
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Primaria
Fiscomisional
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quil
4/1989
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Quito
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Quito
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Guayas
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Congregación
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72310124
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Básica,
Bachillerato
Comunidad
256 El Cebollar
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Loja
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Loja
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Fiscomisional
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32960966
Particular
Primario
2929-727
Particular
32930859
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32900514
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Hermanas
277 Oblatas De
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Diócesis de
Loja
Loja
Comunidad
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Córdova
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302
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Loja
Comunidad
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Loja
Calvas
Hermanas
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293 294 295 Diócesis de
Loja
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Congregación
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Loja
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10-95
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297 Esc. Virgen
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Bolívar
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011 / 24-04-59
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Loja
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Loja
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Santa
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Olmedo Y
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2980471
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Particular
No Existen
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Datos
Datos
Datos
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Jesús
Esc. Y
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Colegio
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Loja
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Datos
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Pastaza
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302 Escuela
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Hermanas
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Particular
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303 Escuela
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307 2723179
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14- DT- 14-05-
Calle 8 y
1985
Avenida 26
0.52.621.997
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Primaria
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Datos
0.88.324.297
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Primaria
(VAM)
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1
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Seglares
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304-DEM-1968
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312 Olmed
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304-DEM-1968
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0.52.334.212
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Hermanas
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Azuay
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Azuay
Cuenca
Pichincha
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2275117
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313 Escuela
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314 315 Universidad
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Escuela
Congregación
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Particular
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Jesús
Av. 13 De
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Católica
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2839188
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2290349
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1986
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2290184
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52
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Vicariato
103-DT-17-111981
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032 746822
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0.52.634.687
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DECM-18-02-
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0.52.602.098 0.94.520.0
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319 Escuela
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320 Escuela
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304-DEM-1968
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2434108
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Escuela
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Fiscomisional
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No Existen
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586/3752-92
Datos
Básica
No Existen
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Datos
Datos
0.52.649.327
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Primaria
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0.94.069.325
Fiscomisional
Primaria
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0.07.792.068
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Escuela
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304-DEM-1968
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366 Escuela
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0379 30 de sept.
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1958
367 Escuela
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Seglares
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Datos
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Datos
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371 Comunidad
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032 824771
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Primaria
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Congregación
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Escuela
Particular
Comunidad
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027-DP-DECM
0.52.644.184 -
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Escuela
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0.52.334.046
Fiscomisional
Inicial, Básica
y Bachillerato
Primaria
210 Comunidad
381 Escuela
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San
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Fiscomisional
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0.97.575.774
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Primaria
0.91.469.386
Fiscomisional
Primaria
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Básica
0.52.670.008
Fiscomisional
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0.92.124.546
Fiscomisional
Primaria
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Santa
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Napo
Aros.T
Chucapi
Orellan
490(1967-03-
S. José
No Existen
a
03) 22H00452
Payamino
Datos
Tena
No Existen
Quilluyacu
No Existen
No Existen
31(1970-10-30)
ola
Datos
218 Velasco
Datos
Datos
Datos
Ibarra
489 Jose Maria
Velasco
Ibarra
No Existen
Datos
490 José María
Velaz
Diócesis de
Santo
Domingo
Napo
Sto.
Domingo
de los
Tsáchilas
Tena
64(1956-09-25)
Quilluyacu
No Existen
Datos
Fiscomisional
Primaria
No Existen
No Existen
Datos
Datos
Km 47 Vía
No
Existen
Datos
Aloag
No Existen
Santo
Datos
2177-270
Domingo
(Tandapi)
Misioneras
491 Jose Maria
Velaz
Hijas De La
Sagrada
Pichincha
Quito
Napo
Tena
Napo
Quijos
Familia De
No Existen
No Existen
No Existen
No Existen
No Existen
Datos
Datos
Datos
Datos
Datos
Fiscomisional
Primaria
Fiscomisional
Medio
Fiscomisional
Primaria
Fiscomisional
Primaria
Nazaret
492 Juan
Bautista
Chimbo
493 No Existen
Datos
183(1946-1020)
Boca Puní
No Existen
Datos
Juan
Bautista
No Existen
Montini-
Datos
4281(1971-1020)
Borja
No Existen
Datos
Diurno
494 495 Juan Jose
No Existen
Flores
Datos
Juan Leon
No Existen
Mera
Datos
Orellana
Napo
Orellan
04(1952-09-23)
a
22H00442
Archid
ona
06(1964-10-23)
Carashino
Lushian
No Existen
Datos
No Existen
Datos
Congregación
496 de las
Isla
Hermanas de
Juan Martín
la
Moye
Providencia y
Guayas
Trinitaria,
Guaya
# 083-P,
quil
ABRIL 16/1995
de la
Coop.
2426704
Particular
Desarrollo
Pre-Básica,
Básica
Comunal
Inmaculada
Concepción
497 498 499 500 Juan
No Existen
Montalvo
Datos
Juan
No Existen
Montalvo
Datos
Juan Pablo
No Existen
Ii
Datos
Juan Pablo
Ii
501 502 503 504 Fe y Alegría
Juan Pablo
No Existen
Ii
Datos
Juan Tanca
No Existen
Marengo
Datos
Juan Tanca
No Existen
Marengo
Datos
Juan Tanca
No Existen
Marengo
Datos
1939(1956-10-
Napo
Tena
Napo
Tena
Orellana
Loreto
Pichincha
Quito
Imbabura
Ibarra
Napo
Tena
Napo
Tena
(1984-10-21)
Tálag
Napo
Tena
85(1949-02-28)
Tálag
13)
No Existen
Datos
139(1956-10-
Av.J.Monta
No Existen
13)
lvo
Datos
7582(1987-0409)
Loreto
No Existen
Datos
Fiscomisional
Primaria
Fiscomisional
Primaria
Fiscomisional
Medio
No Existen
No Existen
No Existen
No Existen
No Existen
Datos
Datos
Datos
Datos
Datos
No Existen
No Existen
Datos
Datos
1015(1985-0920)
Tena
Tálag
952337
No Existen
Datos
No Existen
Datos
No Existen
Datos
No Existen
Datos
Secundario
Fiscomisional
Medio
Fiscomisional
Pre-Primaria
Fiscomisional
Primaria
219 505 Juan
Misión
Wisneth
Franciscana
Zamora
Chinchip
e
Zamor
a
Barrio
30238
Yaguarzon
72606595
Fiscomisional
2448060
Particular
go
Pre-Básica y
Básica
Congregación
506 de las
Hermanas de
Juan XXIII
la
Providencia y
Guayas
Guaya
# 1458, junio
quil
19/1962
Eloy Alfaro
2101 y
Colombia
de la
Básica,
Bachillerato
Inmaculada
Concepción
507 Juan Xxiii
No Existen
Datos
Napo
Archid
ona
27(1958-07-29)
Shicama
No Existen
Datos
Fiscomisional
Primaria
Comunidad
508 De Religiosas
Juan XXIII
Franciscanas
Misioneras
De La
Zamora
Chinchip
e
Pre-básica,
Jorge
Yantza
za
25912
Moquera y
072300151
Armando
072300048
Fiscomisional
básica
Bachillerato y
Superior
Arias
Inmaculada
509 510 Juana
No Existen
Arteaga
Datos
Juana
No Existen
Arteaga
Datos
Napo
Tena
Napo
Tena
Pichincha
Quito
50(1973-11-12)
No Existen
Mondaña
Mondaña
Datos
No Existen
Datos
No Existen
Datos
Fiscomisional
Primaria
Fiscomisional
Pre-Primaria
Hermanas
511 Oblatas De
Julio Maria
Matovelle
Los
Corazones
Santísimos
No Existen
No Existen
No Existen
No Existen
No Existen
Datos
Datos
Datos
Datos
Datos
De Jesús Y
De María
Febres
512 Julio María
Hermanas
Matovelle
Oblatas
Guayas
Guaya
U.E. # 000536,
Cordero
quil
junio 20/2006
3613 y la
Pre-Básica,
2460959
Particular
Bachillerato
13
513 514 Julio María
No Existen
Matovelle
Datos
Kinder José
Fidel
Hidalgo
Hermanas
Corredentoras
Imbabura
Azuay
San
No Existen
No Existen
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Datos
Datos
No Existen
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Datos
Datos
Sininca
No Existen
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y
Datos
Datos
No Existen
No Existen
Datos
Datos
Cuenca
Básica,
918531
2880442
No Existen
Datos
Primario
No Existen
No Existen
Datos
Datos
No Existen
No Existen
Datos
Datos
No Existen
No Existen
Datos
Datos
Congregación
515 De Hermanas
Kinder La
Terceras
Merced
Mercedarias
Azuay
2877144
Del Niño
Jesús
516 Kinder
Vicente
Escandón
517 Kolping
Universidad
Azuay
Cuenca
Fundación
Sto.
Santo
No Existen
Bypass
Kolping
Domingo
Domin
Datos
Chone-
Católica
2834037
3751-971
No Existen
Datos
Bachillerato
220 de los
go
Quevedo
Tsáchilas
Urb. Dos
Esteros
Comunidad
518 De Religiosas
La Cacha
Franciscanas
Misioneras
De La
Zamora
Chinchip
e
El
Pangui
Padre Luis
32788
Bastidas
Pre-básica,
72310126
Fiscomisional
Básica y
Artesanal
Inmaculada
519 La
Consolata
520 521 522 523 La Cruz
Arquidiócesis
Diócesis de
Loja
La
No Existen
Dolorosa
Datos
La
No Existen
Dolorosa
Datos
La
Misión
Dolorosa
Franciscana
Guayas
# 36, enero
El Fortín,
No Existen
quil
18/200
Lot. Atlanta
Datos
No Existen
No Existen
No Existen
No Existen
No Existen
Datos
Datos
Datos
Datos
Datos
001(2001-07-
Colonia
No Existen
01)
Naranjito
Datos
Fiscomisional
Primaria
Pimam
No Existen
No Existen
No Existen
Primario Y
piro
Datos
Datos
Datos
Secundario
Paland
No Existen
No Existen
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Datos
Datos
42526970
Fiscomisional
Básica
2390319
Particular
Loja
Calvas
Napo
Tena
Imbabura
Zamora
Chinchip
e
Pre-Básica,
Guaya
937050
Particular
Básica,
Bachillerato
Dr. César
524 La
Dolorosa
Seglares
Guayas
Guaya
# 293, abril
quil
14/1958
Andrade
López Y
Pre-Básica,
Abel
Básica,
Bachillerato
Gilbert
525 La
Dolorosa
Compañía De
Fe Y
Jesús
Pichincha
Quito
No Existen
No Existen
No Existen
No Existen
No Existen
Datos
Datos
Datos
Datos
Datos
La Florida
52764267
Fiscomisional
Inicial
Alegria
526 La Florida
No Existen
Datos
El
Manabí
Carme
n
No. 194714/06/2002 E.I.
13-0416/05/2002
Comunidad
527 De Religiosas
La
Franciscanas
Inmaculada
Misioneras
De La
Zamora
Chinchip
e
Jorge
Zamor
Nro. 046 04-11-
Mosquera y
072605125-
a
1936
Pasaje San
072605123
Pre-básica,
Fiscomisional
Básica y
Artesanal
Francisco
Inmaculada
528 La
No Existen
Inmaculada
Datos
Imbabura
Cotaca
No Existen
No Existen
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Datos
Datos
Milagr
U.E. # 268,
Montalvo
No Existen
o
octubre 02/1998
1017 y
Datos
915879
No Existen
Datos
Juan
529 La
Inmaculada
Seglares
Guayas
Pre-Básica,
Particular
531 La
No Existen
Inmaculada
Datos
La
Congregación
Inmaculada
Franciscana
Imbabura
Pichincha
Otaval
No Existen
No Existen
o
Datos
Datos
Rumiñ
No Existen
No Existen
No Existen
ahui
Datos
Datos
Datos
922577
Básica,
Bachillerato
Eloy Alfaro
530 Secundario
No Existen
Primario Y
Datos
Secundario
No Existen
No Existen
Datos
Datos
221 - Sangolqui
De María
Francisca De
Las Llagas
532 La
Inmaculada
Concepción
533 La
Inmaculada
Concepción
534 La Libertad
No Existen
Datos
No Existen
Datos
Diócesis de
Loja
Imbabura
Ibarra
Imbabura
Ibarra
Loja
Calvas
Guayas
Durán
No Existen
No Existen
No Existen
Datos
Datos
No Existen
No Existen
Datos
Datos
No Existen
No Existen
No Existen
No Existen
No Existen
Datos
Datos
Datos
Datos
Datos
Colinas del
No Existen
Valle
Datos
954134
955139
Datos
No Existen
Datos
Primario
Secundario
Congregación
535 De Hermanas
La Merced
Terceras
Mercedarias
# 1434,
noviembre
29/2005
Del Niño
Particular
Pre-Básica,
Básica
Jesús
536 La
Presentació
n
537 Misioneros
Claretianos
La
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Presentacio
De La
n
Presentación
Guayas
Guaya
# 6, abril
quil
15/1971
Pichincha
Quito
Pichincha
Quito
Napo
Tena
Imbabura
Ibarra
Imbabura
Ibarra
Pichincha
Quito
Loja
Calvas
Leonidas
Plaza 2700
2331155
Particular
y Bolivia
Pre-Básica,
Básica
No Existen
No Existen
No Existen
No Existen
No Existen
Datos
Datos
Datos
Datos
Datos
No Existen
No Existen
No Existen
No Existen
No Existen
Datos
Datos
Datos
Datos
Datos
Sumino
No Existen
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Datos
Fiscomisional
Primaria
Congregación
538 de las
Hermanas de
La
la
Providencia
Providencia y
de la
Inmaculada
Concepción
539 540 541 La Salle
La Salle
La Salle
No Existen
Datos
No Existen
Datos
No Existen
Datos
27(1981-01-29)
No Existen
No Existen
No Existen
Datos
Datos
No Existen
No Existen
Datos
Datos
No Existen
No Existen
No Existen
No Existen
No Existen
Datos
Datos
Datos
Datos
Datos
No Existen
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Datos
Datos
Datos
Datos
Datos
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EDUC.
Ayuda
BASICA
Particular con
EDUC.
Ayuda
BASICA
Particular
Pre-Básica,
950173
958964
Datos
No Existen
Datos
Primario
Secundario
Comunidad
542 La Salle -
de Hermanos
Conocoto
Cristianos de
la Salle
543 544 Lantadilla
Las
Mercedes
545 Las
Mercedes
546 Laura
Diócesis de
Loja
Babaho
Seglares
Los Ríos
yo/Bab
ahoyo
Babaho
Seglares
Los Ríos
yo/Bab
ahoyo
Salesianas
Guayas
Playas
Km. 1 y
671, abril
med. Vía
26/1993
Montalvo
Km. 1 y
601,11 de
med. Vía
Sept./1990
52734805
Montalvo
U.E. # 0005267,
52734805
Av. 25 de
2760917
222 Vicuña
Hijas de
diciembre
Septiembre
Básica,
María
19/2001
y Zenón
Bachillerato
Auxiliadora
547 548 León XIII
Diócesis de
Loja
Leonardo
No Existen
Murialdo
Datos
Macías
Loja
Napo
No Existen
No Existen
No Existen
No Existen
No Existen
Datos
Datos
Datos
Datos
Datos
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2762(1968-12-
Av.Rocafue
No Existen
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18)
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Datos
Fiscomisional
Medio
U.E. 1368,
La D y
noviembre
Nicolás
21/2005
Segovia
No Existen
No Existen
No Existen
No Existen
No Existen
Datos
Datos
Datos
Datos
Datos
Guaya
U.E. 000646,
Dolores
quil
julio 2/2005
Sucre
2449410
Particular
Calvas
Hermanas
549 Leticia
Doroteas
Alvarado
Hijas De Los
Avilés
Sagrados
Guayas
Guaya
quil
Pre-Básica,
2345619
Particular
Básica,
Bachillerato
Corazones
Congregación
550 Liceo
De
Matovelle
Misioneros
Pichincha
Quito
Oblatos
551 Liceo
Panamerica
Seglares
Guayas
no
552 Pre-Básica,
Básica,
Bachillerato
Liceo
Particular
Religioso
Hermanas
Mixto José
Oblatas
El Oro
El
Guabo
Avenida
24201
Panamerica
2950-384
Privado
2495414
Particular
72606945
Fiscomisional
Primaria
na y Sucre
María Mora
González
553 Lola
Arosemena
De Carbo
554 555 Coop.
Soc. Bfcia.
De Señoras
Guayas
Misión
Cepeda
Franciscana
Zamora
Chinchip
e
Los
Cardenales
557 Lourdes
Covien
30/2009
47A, solar
Básica,
Bachillerato
Yacua
mbi
Vía a
1972
Yacuambi
Inicial y
Básica
Guasmo
Los
Seglares
Guayas
Jesús
556 noviembre
quil
18
Lorenzo
Amigos De
Guaya
Guaya
# 107, abril
Central,
No Existen
quil
5/1999
Coop. 7
Datos
Particular
Pre-Básica,
Básica
Lagos
Fe y Alegría
Diócesis de
Loja
Pichincha
Mejía
Loja
Calvas
No Existen
No Existen
No Existen
No Existen
No Existen
Datos
Datos
Datos
Datos
Datos
No Existen
No Existen
No Existen
No Existen
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Datos
Datos
Datos
Datos
Datos
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52334219
Fiscomisional
Inicial
Limonchict
No Existen
a
Datos
Fiscomisional
Primaria
No Existen
No Existen
No Existen
No Existen
No Existen
Datos
Datos
Datos
Datos
Datos
No Existen
No Existen
No Existen
No Existen
No Existen
No. 1947-
558 Lucecita
No Existen
Datos
Manabí
Olmed
14/06/2002 E.I.
o
13-0365/05/2002
559 560 Luciano
No Existen
Trinchero
Datos
Luis
Alfonso
Crespo Ch.
561 Luis Fidel
Diócesis de
Loja
Hermanas
Napo
Tena
Loja
Calvas
Pichincha
Quito
(1964-10-23)
223 Martinez
Datos
Oblatas De
Datos
Datos
Datos
Datos
Los
Corazones
Santísimos
De Jesús Y
De María
562 Franciscanas
Madre
Misioneras de
Bernanda
María
Auxiliadora
Jorge
Zamora
Chinchip
e
Zamor
Nro. 2693 30-
a
12-1981
Mosquera y
Pio
Básica,
72605568
Fiscomisional
Jaramillo
bachillerato y
Artesanal
Alvarado
Congregación
563 Madre De
De Las
La Divina
Hermanas
Gracia
Murialdinas
Pichincha
Rumiñ
No Existen
No Existen
No Existen
No Existen
No Existen
ahui
Datos
Datos
Datos
Datos
Datos
242(1976-11-
General
No Existen
07)
Gallo
Datos
Fiscomisional
Pre-Primaria
Fiscomisional
Pre-Primaria
No Existen
No Existen
Datos
Datos
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564 565 Madre
No Existen
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Datos
Madre
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Sotomayor
No Existen
Datos
Napo
Tena
Napo
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566 Madre
Misioneras
Domingo
Laura
Lauritas
de los
Tsáchilas
567 Madre
Maria
Berenice
568 569 Manuel
Angulo
572 No Existen
Datos
De
Misioneras
Romero De
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Massabot
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t
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No Existen
Noviembre
Datos
y Cueva
Celi
Pichincha
Quito
No Existen
No Existen
No Existen
No Existen
No Existen
Datos
Datos
Datos
Datos
Datos
Napo
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50(1973-11-22)
Archidona
ona
Fiscomisional
Pre-Primaria
Imbabura
Ibarra
No Existen
No Existen
Datos
Datos
Pichincha
Quito
No Existen
No Existen
No Existen
No Existen
No Existen
Datos
Datos
Datos
Datos
Datos
Hermanos
Maristas
Guayas
Pichincha
Sambo
2024142
Particular
rondón
Quito
abril 25/1939
Margarita
Salesianos
Bosco
Congregación
Maria
Augusta
643006
No Existen
Datos
Primario
Guayas
Guaya
quil
Católica
Pichincha
Quito
Bolívar y
Sucre
Pre-Básica,
Básica
No Existen
No Existen
No Existen
No Existen
Datos
Datos
Datos
Datos
2449364
Fiscomisional
El Oro y
abril 10/1963
Lorenzo de
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Pre-Básica,
Básica
No Existen
No Existen
No Existen
No Existen
No Existen
Datos
Datos
Datos
Datos
Datos
Datos
Datos
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574 No Existen
No Existen
Padres
573 2742-280
Identes
Comunidad
Champagna
Datos
Comunidad
Manuela
Marcelino
Datos
No Existen
Anunciación
Datos
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571 De La
Margarita
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570 Hermanitas
No Existen
Teresa
Existen
27)
Borja
Comunidad
Madre Pia
Madre
No
674(1980-11-
224 Urrutia
Salesianas
575 María
Hijas de
Auxiliadora
María
Guayas
Guaya
U.E. # 0023,
quil
abril 27/1999
Auxiliadora
576 Maria
No Existen
Auxiliadora
Datos
Napo
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Pichincha
Quito
938(1978-0902)
Km 19.5
vía a la
Pre-Básica,
2871110
Particular
Costa
Pto. Napo
Básica,
Bachillerato
No Existen
Datos
Fiscomisional
No Existen
Datos
Salesianas
577 Maria
Hijas de
Auxiliadora
María
No Existen
No Existen
No Existen
No Existen
No Existen
Datos
Datos
Datos
Datos
Datos
U.E. # 046-03,
Km 2 vía a
mayo 14/2003
Naranjito
Auxiliadora
578 María
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579 María
Bernarda
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580 María
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581 Maria De
Nazaret
582 María
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583 584 585 Franciscanas
Misioneras de
María
Guayas
No Existen
Datos
Soc. Bfcia.
De Señoras
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Manabí
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Guayas
588 Pichincha
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Guayas
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No. 194714/06/2002 E.I.
13-141-
No Existen
Inmaculada
Datos
Maria
No Existen
Inmaculada
Datos
María
No Existen
Inmaculada
Datos
Napo
Napo
Napo
quil
Quito
52674880
Fiscomisional
2390954
Particular
Inicial
4/05/2009
mayo 4/1912
Kennedy y
César
Pre-Básica,
Básica
No Existen
No Existen
No Existen
No Existen
No Existen
Datos
Datos
Datos
Datos
Datos
2480901
Particular
Guaya
U.E. # 0000292,
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quil
mayo 04/2007
Fco. De
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142(1948-10-
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18)
Archid
1492(1969-08-
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Manabí
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(1927-11-05)
Guayas
Playas
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Jesus
Hijas de la
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14/06/2002 E.I.
Santa
13-034-
María
No Existen
Datos
No Existen
Datos
No Existen
Datos
Fiscomisional
Pichincha
Datos
Fiscomisional
Medio
Fiscomisional
Primaria
52764267
Fiscomisional
Inicial
U.E. 129-DAJ,
Roldós y
octubre 12/2001
Asisclo
Pre-Básica,
2760006
Particular
Básica,
Bachillerato
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Guayas
No Existen
5/05/2002
María
Fe y Alegría
Archidona
Básica,
Bachillerato
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Sagrados
Corazones De
Pre-Básica,
No. 1947-
Hijas De Los
María
U.E. # 105,
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11/2000
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No Existen
No Existen
No Existen
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Datos
Datos
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Datos
Guaya
quil
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589 Bachillerato
Guasmo
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Maria
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Guaya
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Datos
Sotomayor
Básica,
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Compañía de
Goretti
Luisa
Particular
Cdla.
Maria
María
2727356
Auxiliadora
586 587 Bucay
Pre-Básica,
Pre-Básica,
2854150
Fiscomisional
Básica,
Bachillerato
225 Caridad
590 591 Mariana De
Instituto
San
Jesús
Santa
José de
nº318, 1918-11-
Martínez
Mariana de
Chimb
04
Barba
Jesús
Mariano
Negrete
592 Los
Cardenales
593 Lourdes
Bolívar
Metropolitana
Pichincha
Mejía
Pichincha
Mejía
De Quito
Fe y Alegría
Diócesis de
Loja
Loja
Calvas
10 de
Particular con
032988020
Agosto
o
Curia
Bolívar y
19 Partidas
Fiscales
Inicial y Ed.
Básica
No Existen
No Existen
No Existen
No Existen
No Existen
Datos
Datos
Datos
Datos
Datos
No Existen
No Existen
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Datos
Datos
Datos
Datos
Datos
No Existen
No Existen
No Existen
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No Existen
Datos
Datos
Datos
Datos
Datos
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52334219
Fiscomisional
Inicial
Limonchict
No Existen
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Datos
Fiscomisional
Primaria
No Existen
No Existen
No Existen
No Existen
No Existen
Datos
Datos
Datos
Datos
Datos
No Existen
No Existen
No Existen
No Existen
No Existen
Datos
Datos
Datos
Datos
Datos
No. 1947-
594 Lucecita
No Existen
Datos
Manabí
Olmed
14/06/2002 E.I.
o
13-0365/05/2002
595 596 Luciano
No Existen
Trinchero
Datos
Luis
Alfonso
Crespo Ch.
Diócesis de
Loja
Napo
Tena
Loja
Calvas
Pichincha
Quito
(1964-10-23)
Hermanas
597 Oblatas De
Luis Fidel
Martinez
Los
Corazones
Santísimos
De Jesús Y
De María
598 Franciscanas
Madre
Misioneras de
Bernanda
María
Auxiliadora
Jorge
Zamora
Chinchip
e
Zamor
Nro. 2693 30-
a
12-1981
Mosquera y
Pio
Básica,
72605568
Fiscomisional
Jaramillo
bachillerato y
Artesanal
Alvarado
Congregación
599 Madre De
De Las
La Divina
Hermanas
Gracia
Murialdinas
Pichincha
Rumiñ
No Existen
No Existen
No Existen
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No Existen
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Datos
Datos
Datos
Datos
Datos
242(1976-11-
General
No Existen
07)
Gallo
Datos
Fiscomisional
Pre-Primaria
Fiscomisional
Pre-Primaria
No Existen
No Existen
Datos
Datos
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600 601 Madre
No Existen
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Datos
Madre
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Sotomayor
No Existen
Datos
Napo
Tena
Napo
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602 Madre
Misioneras
Domingo
Laura
Lauritas
de los
Tsáchilas
603 Madre
Comunidad
Maria
Hermanitas
Berenice
De La
Pichincha
No
Existen
Datos
Quito
674(1980-1127)
No Existen
Datos
Av. 6 de
No Existen
Noviembre
Datos
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2742-280
Celi
No Existen
No Existen
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Datos
Datos
Datos
Datos
Datos
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226 Anunciación
604 605 Madre Pia
No Existen
Margarita
Datos
Madre
Teresa
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606 Manuel
Tobar
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607 608 No Existen
Datos
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Misioneras
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Massabot
Marianitas
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Imbabura
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Pichincha
Quito
Hermanos
Maristas
Margarita
Salesianos
Bosco
Congregación
Guayas
Pichincha
Sambo
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Quito
Guayas
Guaya
quil
Maria
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Católica
Pichincha
Quito
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No Existen
Datos
Datos
No Existen
No Existen
No Existen
No Existen
No Existen
Datos
Datos
Datos
Datos
Datos
2024142
Particular
abril 25/1939
643006
No Existen
Datos
Primario
María
Hijas de
Auxiliadora
María
Guayas
Maria
No Existen
Auxiliadora
Datos
Datos
Datos
Datos
Datos
Datos
2449364
Fiscomisional
El Oro y
abril 10/1963
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Garaicoa
Pre-Básica,
Básica
No Existen
No Existen
No Existen
No Existen
No Existen
Datos
Datos
Datos
Datos
Datos
abril 27/1999
Quito
Básica
No Existen
quil
Pichincha
Pre-Básica,
No Existen
U.E. # 0023,
Tena
Sucre
No Existen
Guaya
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No Existen
Auxiliadora
612 Datos
No Existen
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611 Pre-Primaria
No Existen
Salesiana
610 Fiscomisional
Archidona
Padres
609 No Existen
50(1973-11-22)
Identes
Comunidad
Champagna
Archid
Comunidad
Manuela
Marcelino
Napo
938(1978-0902)
Km 19.5
vía a la
Pre-Básica,
2871110
Particular
Costa
Pto. Napo
Básica,
Bachillerato
No Existen
Datos
Fiscomisional
No Existen
Datos
Salesianas
613 Maria
Hijas de
Auxiliadora
María
No Existen
No Existen
No Existen
No Existen
No Existen
Datos
Datos
Datos
Datos
Datos
U.E. # 046-03,
Km 2 vía a
mayo 14/2003
Naranjito
Auxiliadora
614 María
Bernarda
Butler
615 María
Bernarda
Bittle
616 María
Carbo De
Aspiazu
617 Maria De
Nazaret
618 Franciscanas
Misioneras de
María
Guayas
Bucay
2727356
Particular
No Existen
Datos
San
Manabí
Vicent
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Básica,
Bachillerato
Auxiliadora
No. 194714/06/2002 E.I.
13-141-
La Loma
52674880
Fiscomisional
2390954
Particular
Inicial
4/05/2009
Cdla.
Soc. Bfcia.
De Señoras
Guayas
Guaya
quil
mayo 4/1912
Kennedy y
César
Pre-Básica,
Básica
Andrade
Compañía de
Hijas de la
Pichincha
No Existen
No Existen
No Existen
No Existen
No Existen
Datos
Datos
Datos
Datos
Datos
Guaya
U.E. # 0000292,
Guasmo
quil
mayo 04/2007
Sur, Coop,
2480901
Particular
Quito
Caridad
María
Misioneras
Estrella Del
María Stella
Guayas
Pre-Básica,
Pre-Básica,
Básica,
227 Mar-Daniel
Maris
Fco. De
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619 620 621 Orellana
Maria
No Existen
Goretti
Datos
Maria
No Existen
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Datos
Maria
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Inmaculada
Datos
Napo
Napo
Napo
622 623 María
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Inmaculada
Datos
María
Luisa
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Sotomayor
624 Manabí
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626 627 632 01)
Archid
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Carme
(1927-11-05)
Guayas
Playas
Jesús Y De
Santa
13-034-
María
U.E. 129-DAJ,
Roldós y
octubre 12/2001
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Guayas
Compañía de
Pichincha
Caridad
Marista –
Hermanos
Colegio
Maristas
Matilde
Santisteban
Soc. Bfcia.
De Señoras
Medalla
Diócesis de
Milagrosa
Loja
Particular
Pre-Básica,
Bachillerato
No Existen
No Existen
No Existen
Datos
Datos
Datos
Datos
Pichincha
Mejía
Pichincha
Quito
Napo
Tena
Napo
Tena
Pichincha
Quito
Loja
Pre-Básica,
2854150
Bolívar y
10 de
Fiscomisional
Básica,
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Particular con
032988020
Agosto
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Guayas
Básica,
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Datos
2760006
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be
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Mario
52764267
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Datos
Primaria
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No Existen
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quil
04
Mario
Medio
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Datos
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Guaya
nº318, 1918-11-
Metropolitana
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Datos
Fiscomisional
5/05/2002
María
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No Existen
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Fe y Alegría
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14/06/2002 E.I.
Hijas De Los
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No. 1947-
Santa
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633 ona
Jesús
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631 1492(1969-08-
San
Cesar
630 18)
Archid
Instituto
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Mariana De
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628 142(1948-10-
n
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625 Archid
El
María
Reina-
Bachillerato
19 Partidas
Fiscales
Inicial y Ed.
Básica
No Existen
No Existen
No Existen
No Existen
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Datos
Datos
Datos
Datos
Datos
No Existen
No Existen
No Existen
No Existen
No Existen
Datos
Datos
Datos
Datos
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Fiscomisional
Primaria
Fiscomisional
Primaria
006(1978-1105)
283(1978-1107)
Pto. Salazar
Quisacocha
No Existen
Datos
No Existen
Datos
No Existen
No Existen
No Existen
No Existen
No Existen
Datos
Datos
Datos
Datos
Datos
2390955
Particular
Fco. Urvina
Básica,
Guaya
# 688, mayo
quil
31/1960
Gonza
No Existen
No Existen
No Existen
No Existen
No Existen
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Datos
Datos
Datos
Datos
Datos
2402644
Particular
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Bachillerato
Cacique
634 Medalla
Padres
Milagrosa
Lazaristas
Guayas
Guaya
# 13, julio
quil
10/1962
Álvarez
206 y
Calixto
Romero
Pre-Básica,
Básica
228 635 Mediterran
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636 Mena
Caamaño
Católica
Católica
Pichincha
Quito
Pichincha
Quito
Pichincha
Quito
Pichincha
Quito
No Existen
No Existen
No Existen
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Datos
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Datos
No Existen
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Datos
Datos
Datos
Datos
No Existen
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Datos
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Datos
No Existen
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Datos
Datos
Datos
Datos
No Existen
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Datos
Datos
Datos
Datos
Datos
2463480
Particular
Fundación
637 Mena Del
Mena
Hierro
Caamaño Del
Vesp.
Hierro
Portilla
Congregación
638 De Hermanas
Mercedaria
Terceras
Patria
Mercedarias
Del Niño
Jesús
639 640 641 642 643 Mercedes
Comunidad
Castro
Franciscana
Mercedes
Comunidad
De Jesús
de Hermanas
Molina
Marianitas
Mercedes
Comunidad
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de Hermanas
N° 2
Marianitas
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Misioneras
Hierro
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Antonio
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644 No Existen
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Pichincha
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Guayas
Guaya
# 8, febrero
quil
19/1968
Avilés y la
28 ava.
Xavier De
Arquidiócesis
No Existen
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Datos
Datos
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Datos
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Datos
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18869(1980-07-
Av.02 de
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24)
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Datos
Fiscomisional
Medio
Pichincha
Quito
Guayas
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Calderón
# 39, abril/1959
Mons.
Maximilian
o Spiller
646 No Existen
Datos
Pastaza
Arquidiócesis
Guayas
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647 Mons.
Roberto
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648 649 María Stella
Guayas
Maris
Km.36 vía
No Existen
09)
Puyo
Datos
Datos
Guaya
# 99, agosto
Coop.
quil
21/1981
Santiago
Guaya
# 51, abril
2483341
Fiscomisional
quil
27/1982
2480707
Particular
Central,
Coop.
Unión de
No Existen
Datos
Orellana
Napo
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50(1973-1-12)
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No Existen
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22H00392
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1997(1981-10-
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No Existen
16)
Noviembre
Datos
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Fiscomisional
Básica
Primaria
Pre-Básica,
Básica
Pre-Básica,
Básica
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No Existen
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1001(1959-09-
Pre-Básica,
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Particular
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Pastaza
501 y
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645 Básica
No Existen
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Francisco
Pre-Básica,
No Existen
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Fiscomisional
Primaria
Fiscomisional
Medio
229 650 651 Monseñor
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Antonio
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Monseñor
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Emilio
Cecco
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Jorge
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655 656 Datos
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Misión
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658 Datos
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657 No Existen
Monseñor
Maximilian
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Datos
Datos
Datos
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(1984-10-01)
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Fiscomisional
Pre-Primaria
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Primaria
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Muyuna
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42527011
Fiscomisional
72603145
Fiscomisional
Inicial y
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Nro. 2947 10-
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07-1992
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0647(1982-11-
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57(1941-02-25)
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17(1964-12-10)
Cotundo
378(1979-1001)
378(1979-1001)
Tena
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Datos
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Datos
No Existen
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Bachillerato
Fiscomisional
Pre-Primaria
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Primaria
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Primaria
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Pre-Primaria
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660 Monseñor
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72606815
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Inicial y
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No Existen
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Datos
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Orellana
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16(1974-02-15)
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Datos
Datos
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Fiscomisional
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Arquidiócesis
Guayas
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Guayas
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Básica,
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Primaria
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Pre-Básica,
2271257
Particular
Básica,
Bachillerato
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Congregación
674 Nuestra
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Guayas
Guaya
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16/2009
Pre-Básica,
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Particular
Básica,
Bachillerato
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Jesús
Congregación
675 Nuestra
Madre De
La Merced
De Hermanas
Terceras
Mercedarias
Pichincha
Quito
No Existen
No Existen
No Existen
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Datos
Datos
Datos
Datos
Datos
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Jesús
Guasmo
Hermanitas
676 Nuestra
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Señora
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Guayas
Guaya
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Sur, Coop.
quil
julio 08/2000
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Pre-Básica,
2481282
Particular
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Básica,
Congregación
677 Nuestra
Señora De
Fatima
De Hermanas
Terceras
Mercedarias
Pichincha
Quito
No Existen
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No Existen
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Datos
Datos
Datos
Datos
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Jesús
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Nuestra
Señora De
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Guadalupe
Datos
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14/06/2002 E.I.
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13-054-
I
6/05/2003
Nuestra
No. 1947-
Señora De
No Existen
Guadalupe
Datos
Manabí
Portovi
14/06/2002 E.I.
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13-049-
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Señora De
No Existen
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Nuestra
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52340124
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Inicial
10/05/2003
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No. 1947-
Nuestra
III
681 52340124
3/05/2003
II
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Nuestra
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No Existen
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Datos
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52764267
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Quito
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Diócesis de
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Loja
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14
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Quito
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# 23 de 1993
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Pre-Básica,
Básica
Chiquito
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Hermanas
Señora De
Oblatas de
La Santa
San Francisco
Esperanza
de Sales
Nuestra
Señora De
Los
Dolores
688 Nuestra
Señora Del
Carmen
689 Nuestra
Señora Del
Quinche
Manabí
Manta
Pichincha
Mejía
Manabí
Jama
64-P-04-22-
Calle 14 y
1960
Avenida 6
No Existen
No Existen
No Existen
No Existen
No Existen
Datos
Datos
Datos
Datos
Datos
En trámite
Jama
Fiscomisional
Inicial
Hijas De La
Inmaculada
Concepción
De La
Caridad
No Existen
Datos
Comunidad
Hermanitas
De La
Anunciación
Guayas
Guaya
quil
U.E. 0001049,
septiembre
Sur. Coop.
Quinche
Datos
Guasmo
Reina del
28/2006
No Existen
Pre-Básica,
2486759
Particular
Básica,
Bachillerato
232 690 Nuestra
Señora Del
Rosario
691 Nuestra
Señora Del
Rosario
692 Nuestra
Sra. De La
Merced
693 694 Congregación
Santa
Catalina De
No Existen
No Existen
No Existen
No Existen
No Existen
Datos
Datos
Datos
Datos
Datos
U.E. # 0001606,
Av. 26 de
noviembre
Septiembre
2030209
Particular
05/2008
y Ayacucho
Alpach
No Existen
No Existen
aca
Datos
Datos
Orellan
(1959-10-01)
a
22H00380
Pastaza
(1969-10-01)
Pitacocha
Guaya
U.E. 053-03,
Alborada,
quil
mayo 28/2003
IV etapa
Pichincha
Quito
Guayas
Balzar
Siena
Congregación
Santa
Catalina De
Siena
No Existen
Datos
Ntra.Sra.
No Existen
De Loreto
Datos
Imbabura
Orellana
Loreto
Pre-Básica,
Básica,
Bachillerato
610558
No Existen
Datos
No Existen
Datos
Primario
Fiscomisional
Primaria
Fiscomisional
Primaria
Ntra.Sra.
Del
No Existen
Perpetuo
Datos
Pastaza
No Existen
Datos
Socorro
695 Nuestra
Madre De
La
Seglares
Guayas
Pre-Básica,
2271257
Particular
Básica,
Bachillerato
Alborada
Congregación
696 Nuestra
Madre De
La Merced
De Hermanas
Terceras
Mercedarias
Guayas
Guaya
quil
Del Niño
U.E. # 000839,
septiembre
Av.
Kennedy y
Dr. César
16/2009
Pre-Básica,
2390395
Particular
Básica,
Bachillerato
Andrade
Jesús
Congregación
697 Nuestra
Madre De
La Merced
De Hermanas
Terceras
Mercedarias
Pichincha
Quito
No Existen
No Existen
No Existen
No Existen
No Existen
Datos
Datos
Datos
Datos
Datos
2481282
Particular
Del Niño
Jesús
Guasmo
Hermanitas
698 Nuestra
de Nuestra
Señora
Señora De La
Guayas
Guaya
U.E. # 066-03,
Sur, Coop.
quil
julio 08/2000
Juan
Pre-Básica,
Bachillerato
Péndola
Visitación
Básica,
Congregación
699 Nuestra
Señora De
Fatima
De Hermanas
Terceras
Mercedarias
Pichincha
Quito
No Existen
No Existen
No Existen
No Existen
No Existen
Datos
Datos
Datos
Datos
Datos
Crucita
52340124
Fiscomisional
Inicial
52340124
Fiscomisional
Inicial
Del Niño
Jesús
700 No. 1947-
Nuestra
Señora De
No Existen
Guadalupe
Datos
Manabí
Portovi
14/06/2002 E.I.
ejo
13-0546/05/2003
I
701 Nuestra
Señora De
Guadalupe
No Existen
Datos
Manabí
Portovi
ejo
No. 194714/06/2002 E.I.
13-049-
Los
Arenales
233 II
702 3/05/2003
No. 1947-
Nuestra
Señora De
No Existen
Guadalupe
Datos
Manabí
Portovi
14/06/2002 E.I.
Los
ejo
13-050-
Tamarindos
Nuestra
Señora De
La
Anunciacio
n
704 Nuestra
Señora De
La Nube
705 Fiscomisional
Inicial
10/05/2003
III
703 52340124
Nuestra
Señora De
La Paz
Comunidad
Hermanitas
De La
Pichincha
No Existen
No Existen
No Existen
No Existen
No Existen
Datos
Datos
Datos
Datos
Datos
Gonza
No Existen
No Existen
No Existen
No Existen
No Existen
namá
Datos
Datos
Datos
Datos
Datos
52764267
Fiscomisional
Inicial
Quito
Anunciación
Diócesis de
Loja
No Existen
Datos
Loja
El
Manabí
Carme
n
No. 194714/06/2002 E.I.
Paraíso La
13-031-
14
22/04/2002
Hermanas
706 Nuestra
Doroteas
Señora De
Hijas De Los
La Paz
Sagrados
Pichincha
Quito
No Existen
No Existen
No Existen
No Existen
No Existen
Datos
Datos
Datos
Datos
Datos
2582212
Particular
0-52.629.777
Particular
Primaria
Corazones
Guasmo
707 Nuestra
Señora De
Fe y Alegría
Guayas
La Salud
Guaya
quil
Oeste,
# 23 de 1993
Coop.
Esmeralda
Pre-Básica,
Básica
Chiquito
708 709 Nuestra
Hermanas
Señora De
Oblatas de
La Santa
San Francisco
Esperanza
de Sales
Nuestra
Señora De
Los
Dolores
710 Nuestra
Señora Del
Carmen
711 Nuestra
Señora Del
Quinche
712 Nuestra
Señora Del
Rosario
713 Manabí
Manta
Pichincha
Mejía
Manabí
Jama
64-P-04-22-
Calle 14 y
1960
Avenida 6
No Existen
No Existen
No Existen
No Existen
No Existen
Datos
Datos
Datos
Datos
Datos
En trámite
Jama
Fiscomisional
Inicial
Hijas De La
Inmaculada
Concepción
De La
Caridad
No Existen
Datos
Comunidad
Hermanitas
De La
Guayas
Guaya
quil
Anunciación
U.E. 0001049,
septiembre
Sur. Coop.
Pre-Básica,
2486759
Particular
Básica,
Bachillerato
Quinche
Congregación
Santa
Catalina De
Pichincha
Quito
Guayas
Balzar
No Existen
No Existen
No Existen
No Existen
No Existen
Datos
Datos
Datos
Datos
Datos
U.E. # 0001606,
Av. 26 de
noviembre
Septiembre
2030209
Particular
05/2008
y Ayacucho
Siena
Nuestra
Congregación
Señora Del
Santa
Rosario
Catalina De
Datos
Guasmo
Reina del
28/2006
No Existen
Pre-Básica,
Básica,
Bachillerato
234 Siena
714 Nuestra
Sra. De La
Merced
715 Nueva
Alianza
No Existen
Datos
Católica
Imbabura
Pichincha
No Existen
Alpach
No Existen
No Existen
aca
Datos
Datos
No Existen
No Existen
No Existen
No Existen
No Existen
Datos
Datos
Datos
Datos
Datos
San Roque
52334219
Fiscomisional
Inicial
032 872384
Particular
Inicial y EGB
52330125
Fiscomisional
Inicial
0.52.921.059
Fiscomisional
Secundaria
2450855
Fiscomisional
Quito
610558
Datos
Primario
No. 1947-
716 Nuevo
No Existen
Amanecer
Datos
Manabí
Olmed
14/06/2002 E.I.
o
13-03022/04/2002
717 Obra Ed.
Madre
Gertrudis
Cevallos
Hermanas
Sacramentina
s
24 DE
Tungurah
Cevall
ua
os
MAYO
122
FELIPA
REAL
No. 1947-
718 Ojitos De
No Existen
Dios
Datos
Manabí
Tosagu
14/06/2002 E.I.
a
13-039-
San Miguel
5/05/2002
719 Oswaldo
Barrio Alex
Álvarez
Barza - Fe
Fe y Alegría
Manabí
Manta
Y Alegría
1268-
Vía al
31.08.1999
Aeropuerto
y Av. 114
No.2
Salesianas
720 P. Cayetano
Hijas de
Tarruell
María
Guayas
U.E. # 000279,
quil
marzo 17/2009
Otaval
No Existen
No Existen
o
Datos
Datos
Auxiliadora
721 P.
Doménico
Leonati
722 P. Marcos
Bentazzo
723 P. Marcos
Bentazzo
724 725 726 729 De Padres
Babaho
Los Ríos
yo/Bab
Josefinos
ahoyo
Congregación
Babaho
De Padres
Los Ríos
Josefinos
No Existen
Datos
P.Ottorino
No Existen
Todescato
Datos
Padre
Imbabura
Congregación
Gianotti
Verdoya
728 Datos
P.Emilio
Carlos
727 No Existen
No Existen
Datos
Padre Cesar
No Existen
Bertoglio
Datos
Padre Cesar
No Existen
Bertoglio
Datos
Padre Cesar
No Existen
yo/Bab
ahoyo
Orellana
1324 y C.
Ballén
921365
Pre-Básica,
Básica
No Existen
Primario Y
Datos
Secundario
Particular sin
EDUC.
Ayuda
BASICA
Particular sin
ED. BAS. Y
Ayuda
BACHILL.
Fiscomisional
Primaria
Fiscomisional
Medio
Fiscomisional
Primaria
Fiscomisional
Pre-Primaria
Fiscomisional
Primaria
Fiscomisional
Primaria
Av.
183, marzo
Universitari
4/1996
a y J.
52735890
Agnoletto
Av.
623, junio
Universitari
18/2002.
a y J.
52735890
Agnoletto
Orellan
30(1952-09-23)
a
22H00424
1997(1981-10-
Cotapino
Ahuano
Napo
Tena
Napo
Tena
Napo
Tena
Napo
Tena
27(1958-01-19)
Atahualpa
Pastaza
Pastaza
77(1980-09-09)
Quillu-allpa
16)
(1969-10-01)
No Existen
Shiripuno
Atahualpa
Datos
Carchi
Guaya
No Existen
Datos
No Existen
Datos
No Existen
Datos
No Existen
Datos
No Existen
Datos
No Existen
235 Ricci
730 Padre
Fco.Tramar
rollo
731 735 736 Mena
Datos
No Existen
Datos
Padre Juan
No Existen
De Velasco
Datos
Padre Juan
No Existen
De Velasco
Datos
Padre
Sodiro
Datos
Padre
Padre
Renato
Selva
Padre
Ricardo
Nardi
741 Padre
Ricardo
Nardi
742 Padre
Victor
Carbone
743 Datos
No Existen
Selva
740 No Existen
Padre Luis
Renato
739 Franciscana
Longo
Trinchero
738 Misión
Padre Jose
Luciano
737 Datos
No Existen
Padre Isasi
734 No Existen
Padre Hugo
732 733 Datos
No Existen
Datos
No Existen
Datos
No Existen
Datos
No Existen
Datos
No Existen
Datos
Datos
Napo
Tena
Napo
Tena
Zamora
Chinchip
e
Orellana
Napo
Napo
Napo
Napo
Datos
No Existen
Datos
No Existen
No Existen
No Existen
Datos
Datos
Datos
Orellan
50(1973-11-12)
Pto. S.
No Existen
a
22H00035
Miguel
Datos
Nva.
No Existen
Esperanza
Datos
Aros.T
ola
(1963-11-17)
Aros.T
No Existen
Nva.
No Existen
ola
Datos
Esperanza
Datos
No Existen
Limonchict
No Existen
Datos
a
Datos
Calmitoyac
No Existen
u
Datos
Tena
Archid
ona
Napo
Tena
Orellana
11)
Los Ríos
No Existen
za
Tena
Napo
410(1979-10-
Cambira
Yantza
Napo
Orellana
50(1973-11-02)
23(1958-01-19)
No Existen
Cruzchicta
Datos
164(1975-1208)
Cruzchicta
No Existen
Datos
No Existen
Datos
Orellan
(1969-10-01)
Pto.
No Existen
a
22H00414
Murialdo
Datos
Tena
817(1982-0615)
Pto. Napo
No Existen
Datos
Fiscomisional
Primaria
Fiscomisional
Primaria
Fiscomisional
Básica
Fiscomisional
Primaria
Fiscomisional
Primaria
Fiscomisional
Pre-Primaria
Fiscomisional
Pre-Primaria
Fiscomisional
Primaria
Fiscomisional
Pre-Primaria
Fiscomisional
Primaria
Fiscomisional
Primaria
Fiscomisional
Pre-Primaria
Fiscomisional
Primaria
Orellan
056(1998-02-
22 de
No Existen
a
09) 22H00403
Marzo
Datos
No Existen
No Existen
No Existen
No Existen
No Existen
Datos
Datos
Datos
Datos
Datos
Puerto
No Existen
No Existen
No Existen
No Existen
No Existen
Quito
Datos
Datos
Datos
Datos
Datos
Guaya
U.E. # 85/mayo
Bolivariana
quil
25/2001
, Avda.
2287553
Particular
Particular
Mixto
Catolico
Católica
Pichincha
Quito
Domingo
Savio
744 Particular
Santiago
Apostol
Hermanas
Oblatas de
San Francisco
Pichincha
de Sales
Clda.
745 Pasionista
Padres
Pasionistas
Guayas
Pre-Básica,
Bachillerato
Libertador
746 Paulo VI
Diócesis de
Loja
Loja
Calvas
No Existen
No Existen
No Existen
No Existen
No Existen
Datos
Datos
Datos
Datos
Datos
Básica,
236 Congregación
747 Paulo Vi
De Padres
Pichincha
Quito
Pichincha
Quito
Napo
Tena
Imbabura
Ibarra
Josefinos
748 Pedro Luis
Calero
749 750 751 752 Siervas De La
Madre De
Dios
Pedro
No Existen
Savio
Datos
Pens. Mixto
No Existen
La Victoria
Datos
Pensionado
Padres
Tungurah
Ambat
La Merced
Mercedarios
ua
o
Pichincha
Quito
No Existen
No Existen
No Existen
No Existen
No Existen
Datos
Datos
Datos
Datos
Datos
No Existen
No Existen
No Existen
No Existen
No Existen
Datos
Datos
Datos
Datos
Datos
06(1964-10-23
Pto. Napo
Fiscomisional
Primaria
No Existen
No Existen
Datos
Datos
No Existen
Datos
643091
No Existen
Datos
Primario
Bolívar
0091-dt
0546 y 5 de
03 2820707
Particular
EGB
Junio
Pensionado
Pedro
Hermanos
Pablo Borja
Maristas
No Existen
No Existen
No Existen
No Existen
No Existen
Datos
Datos
Datos
Datos
Datos
03 2820055
Particular
Nº 2
Clda. SAN
753 Pensionado
San
Alfonso
ALFONSO
Padres
Tungurah
Ambat
Redentoristas
ua
o
LAS
644
LIMAS Y
EGB y
Bachillerato
AGUACA
TES
Comunidad
754 Perez
De
Pallares
Misioneras
Pichincha
Quito
Manabí
Manta
No Existen
No Existen
No Existen
No Existen
No Existen
Datos
Datos
Datos
Datos
Datos
52622501
Fiscomisional
Inicial
No Existen
No Existen
Datos
Datos
No Existen
Básica /
Datos
Bachillerato
Identes
755 756 Perpetuo
No Existen
Socorro
Datos
Sto.
Gracia
Laicos
(Unidad
Domingo
de los
Tsáchilas
Educativa)
Hermanos
Domingo
Maristas
de los
Tsáchilas
Sto.
758 Pio Xii
Hermanos
Domingo
Maristas
de los
Tsáchilas
759 760 761 No
Existen
Datos
Moreno
No Existen
Espinoza a
Datos
lado de la
Quirino
No Existen
Granziera
Datos
Raúl
Hermanas de
Gonzáles
la
Astudillo
Providencia
Raúl
Congregación
Iglesia
Orellana
Sto.
Domingo
de los
Tsáchilas
Sto.
Santo
Domin
go
Santo
Domin
go
Av. Rio
No Existen
Toachi #
Datos
400 y 6 de
Av. 6
No Existen
Noviembre
2750-563/2767-
No Existen
Datos
y Abraham
984
Datos
50(1973-1-22)
a
22B00008
Domin
go
Santo
Bachillerato
Calazacón
Orellan
Santo
2750-270
Noviembre
Pto. Colón
No Existen
Datos
Fiscomisional
Primaria
No Existen
Básica /
Datos
Bachillerato
No Existen
Pre básica /
Vía Chone
No Existen
Km 2
Datos
margen
3700-859
derecho
No Existen
Vía Chone
3843-116
nuestra
Sto.
757 Pio Xii
Murciélago
Julio
Piera
Brucoleri
El
En trámite
3700-868
237 Gonzáles
de las
Domingo
Domin
Astudillo
Hermanas de
de los
go
la
Tsáchilas
Datos
701 Km 2
Datos
Básica
Fiscomisional
Inicial
Providencia y
de la
Inmaculada
Concepción
No. 1947-
762 Rayito De
No Existen
Luz
Datos
Manabí
Santa
14/06/2002 E.I.
Ana
13-037-
La Unión
No Existen
Datos
5/05/2002
Hijas De Los
763 Regina
Pacis
Sagrados
Corazones De
Guayas
Jesús Y De
El Oro
Guaya
U.E. # 935,
quil
agosto 22/2005
1219 y
Pre-Básica,
2448794
Particular
Quito
Básica,
Bachillerato
María
764 Reina Del
CisneCalvas
765 Reina Del
CisneGonzanama
766 Remigio
Crespo
Toral
767 Remigio
Crespo
Toral
768 769 770 771 772 773 774 Diócesis de
Loja
Diócesis de
Loja
No Existen
Datos
No Existen
Datos
Republica
No Existen
De Panama
Datos
Rio
No Existen
Aguarico
Datos
Rio
No Existen
Putumayo
Datos
Rio
No Existen
Putumayo
Datos
Rosario Del
Curia
Alcazar N°
Metropolitana
1
De Quito
Rosario
Congregación
Sánchez
Del Buen
Bruno
Pastor
Loja
Loja
Napo
Napo
Fe y Alegría
No Existen
No Existen
No Existen
Datos
Datos
Datos
Datos
Datos
Gonza
No Existen
No Existen
No Existen
No Existen
No Existen
namá
Datos
Datos
Datos
Datos
Datos
Luz de
No Existen
América
Datos
Fiscomisional
Primaria
Fiscomisional
Pre-Primaria
Fiscomisional
Primaria
Fiscomisional
Primaria
Fiscomisional
Pre-Primaria
Fiscomisional
Primaria
Aros.T
ola
No Existen
Luz de
No Existen
ola
Datos
América
Datos
Pastaza
Pastaza
Napo
Tena
Napo
Tena
Pichincha
Quito
Guayas
Pichincha
De Padres
Sagrada
Hermanas
26)
(1971-10-01)
No Existen
No Existen
Datos
Shiguacoch
No Existen
a
Datos
Huambuno
Datos
No Existen
Datos
No Existen
Datos
No Existen
No Existen
No Existen
No Existen
No Existen
Datos
Datos
Datos
Datos
Datos
U.E. 096,
Huancavilc
noviembre
a 1917 y
12/2003
Esmeraldas
Rumiñ
No Existen
No Existen
No Existen
No Existen
No Existen
ahui
Datos
Datos
Datos
Datos
Datos
2776115
Particular
Guaya
quil
10(1972-10-18)
Pre-Básica,
2450074
Particular
Guayas
Salinas
U.E. # 292,
Espinoza
junio 16/1997
Larrea y
Pre-Básica,
No
No Existen
Vía Patricia
Básica,
Bachillerato
San José
Sto.
Básica,
Bachillerato
Carlos
Pumapunta
Alto
Josefinos
776 73660(73-09-
Huambuno
Congregación
Rubira
(1971-12-01)
Aros.T
Tena
Alegria
775 No Existen
Napo
Rotary
Club- Fe Y
No Existen
Calvas
3868-092
No Existen
No Existen
238 Familia
Dominica
Domingo
Existen
Pregoneras
de los
Datos
del Rosario
Tsáchilas
Datos
Datos
Pilar 45
Datos
Km mas 24
santa maría
del To
777 778 Sagrada
Soc. Bfcia.
Familia
De Señoras
Sagrado
Corazón De
Jesús
779 Sagrado
Corazón De
Jesús
780 No Existen
Datos
No Existen
Datos
Guayas
Guaya
quil
Imbabura
Ibarra
Imbabura
Ibarra
Pichincha
Quito
Manabí
Sucre
Manabí
Sucre
Manabí
Sucre
U.E. # 0001052,
septiembre
Av. 25 de
julio y
Francisco
28/2006
Pre-Básica,
2440070
Particular
Básica,
Bachillerato
Segura
No Existen
No Existen
No Existen
Datos
Datos
No Existen
No Existen
Datos
Datos
No Existen
No Existen
No Existen
No Existen
No Existen
Datos
Datos
Datos
Datos
Datos
Los Caras
52690370
Fiscomisional
Inicial
52690370
Fiscomisional
Inicial
52690370
Fiscomisional
Inicial
No Existen
No Existen
Datos
Datos
No Existen
No Existen
Datos
Datos
953507
950615
Datos
No Existen
Datos
Primario
Secundario
Sagrado
Corazon De
Hermanas
Jesus
Bethlemitas
Bethlemitas
781 Sagrado
Corazón De
Jesús I
782 Sagrado
Corazón De
Jesús II
783 Sagrado
Corazón De
Jesús III
784 Sagrados
Corazones (
Unidad
Educativa)
785 Sagrados
Corazones (
Unidad
Educativa)
No Existen
Datos
No Existen
Datos
No Existen
Datos
Hermanas
Doroteas
Hijas De Los
Sagrados
Corazones
Hermanas
Doroteas
Hijas De Los
Sagrados
Corazones
E.I. 13-1424/05/2009
E.I. 13-143-
Las
5/05/2009
Delicias
No Existen
En trámite
Datos
Coop.
Sto.
Domingo
de los
Tsáchilas
No
Existen
Datos
Alianza
No Existen
calle Tarqui
Datos
tras la
2727-324
iglesia
Católica
Coop.
Sto.
Domingo
de los
Tsáchilas
No
Existen
Datos
Alianza
No Existen
calle Tarqui
Datos
tras la
2727-324
iglesia
Católica
Hijas De Los
786 Sagrados
Sagrados
Corazones
Corazones De
Centro
Jesús Y De
Pichincha
Quito
No Existen
No Existen
No Existen
No Existen
No Existen
Datos
Datos
Datos
Datos
Datos
0.52.921.059
Fiscomisional
No Existen
No Existen
María
787 Sagrados
Corazones
Fe Y
013.DT.14.05.1
Fe y Alegría
Manabí
Manta
Alegría
985 - 094.DEM
-17.02.1970
No.2
788 Sagrados
Hijas De Los
Pichincha
Quito
No Existen
Vía al
Aeropuerto
Preprimaria Primaria
y Av. 114
No Existen
Barrio Alex
No Existen
239 Corazones
Sagrados
Rumipamb
Corazones De
a
Jesús Y De
Datos
Datos
Datos
Datos
2792252
Particular
Datos
María
789 Av. 27 de
Franciscanas
Salitre
Misioneras de
María
Guayas
Salitre
# 001190, junio
23/1981
790 No Existen
Agustin
Datos
y Av.
Samborond
Auxiliadora
San
Noviembre
Napo
Tena
09)
Puní Alto
No Existen
Datos
Fiscomisional
Pedro
Agustín
Agustinos
Guayas
Guaya
U.E. # 00027,
Moncayo
quil
mayo 20/1999
525 y Luis
San Andres
Comunidad
Franciscana
Pichincha
Quito
2566011
Particular
Bachillerato
No Existen
No Existen
No Existen
No Existen
Datos
Datos
Datos
Datos
Datos
San
2970010
Particular
Antonio
Ambato
Franciscana
De Frailes
Guayas
Menores,
Milagr
U.E. # 00025,
109 y
o
mayo 25/1999
Presidente
795 796 San
No Existen
Antonio
Datos
San
No Existen
Antonio
Datos
San
Antonio De
Padua
797 San
Antonio De
Padua
798 San
AntonioTaparuca
Comunidad
Franciscana
Comunidad
Franciscana
Diócesis de
Loja
Pre-Básica,
Básica,
Bachillerato
Estrada
Ofm.
794 Básica,
No Existen
Orden
793 Primaria
Pre-Básica,
Urdaneta
792 Bachillerato
ón
1001(1959-09-
791 San
Básica,
005(1995-11-
San
No Existen
27)
Antonio
Datos
86(1963-10-06)
Tena
No Existen
No Existen
Datos
Datos
No Existen
Datos
Fiscomisional
Pre-Primaria
Fiscomisional
Primaria
No Existen
No Existen
No Existen
Datos
Datos
Datos
No Existen
No Existen
No Existen
No Existen
Datos
Datos
Datos
Datos
No Existen
No Existen
No Existen
No Existen
No Existen
Datos
Datos
Datos
Datos
Datos
Guaya
U.E. # 00368,
Prosperina,
quil
abril 26/2005
calle 4ta.
2253312
Particular
Napo
Tena
Napo
Tena
Pichincha
Quito
Pichincha
Quito
Loja
Calvas
No Existen
Datos
Congregación
799 San
de los
Benildo-La
Hermanos de
Salle
las Escuelas
Guayas
Pre-Básica,
Básica,
Bachillerato
Cristianas
800 San Camilo
No Existen
Datos
El
Manabí
Carme
n
13 de abril de
San Camilo
52764267
Fiscomisional
Inicial
No Existen
No Existen
No Existen
No Existen
No Existen
Datos
Datos
Datos
Datos
Datos
Pensilvania
52330125
Fiscomisional
Inicial
2009
Comunidad
801 de las Hijas
San Carlos
de Caridad de
Pichincha
Quito
San Vicente
de Paúl
802 San
No Existen
Cayetano
Datos
Manabí
Tosagu
No. 1947-
a
14/06/2002 E.I.
240 13-0385/05/2002
803 804 805 806 San Daniel
No Existen
Comboni
Datos
San Diego
San Diego
San
Fernando
807 San
Francisca
De Sales
808 No Existen
Datos
Comunidad
Franciscana
El
Imbabura
Limon
al
Imbabura
Ibarra
Pichincha
Quito
Pichincha
Quito
Manabí
Manta
Comunidad
Dominicana
Del Ecuador
Hermanas
Oblatas de
San Francisco
No Existen
Francisco
Datos
809 San
Misión
Francisco
Franciscana
No Existen
Datos
Datos
No Existen
No Existen
Datos
Datos
No Existen
No Existen
Datos
Datos
No Existen
Datos
No. 009.DPDECM-
Imbabura
Zamora
Chinchip
e
Ibarra
648685
No Existen
Datos
Primario
No Existen
Primario Y
Datos
Secundario
No Existen
No Existen
No Existen
Datos
Datos
Datos
No Existen
No Existen
No Existen
No Existen
Datos
Datos
Datos
Datos
0.52.611.352
Particular
Primaria
643646
Fiscomisional
Secundario
Avenida 6
y Calle 14
28.01.2003
de Sales
San
No Existen
No Existen
No Existen
Datos
Datos
650888
Jorge
Zamor
Nro. 480 21-09-
Mosquera y
072605129-
a
1963
José Luis
072606199
Fiscomisional
Básica y
Bachillerato
Tamayo
Comunidad
810 San
Francisco
De Asís
De Religiosas
Franciscanas
Misioneras
Guayas
Carchi
Guaya
U.E. # 256,
quil
mayo 20/1997
De La
2800 y San
Pre-Básica,
2451913
Particular
Martín
Básica,
Bachillerato
Inmaculada
811 San
Francisco
De Asis
812 San
Francisco
De Sales
Instituto De
Misioneras
Hijas De La
Pichincha
Quito
Pichincha
Quito
Pichincha
Quito
Napo
Tena
Napo
Tena
Pichincha
Quito
No Existen
No Existen
No Existen
No Existen
No Existen
Datos
Datos
Datos
Datos
Datos
No Existen
No Existen
No Existen
No Existen
No Existen
Datos
Datos
Datos
Datos
Datos
No Existen
No Existen
No Existen
No Existen
No Existen
Datos
Datos
Datos
Datos
Datos
Fiscomisional
Medio
Fiscomisional
Primaria
Iglesia
Hermanas
Oblatas de
San Francisco
de Sales
Comunidad
813 San
De Religiosas
Francisco
Franciscanas
Del
Misioneras
Alvernia
De La
Inmaculada
814 San
Francisco
Javier
815 San
Francisco
Javier
816 No Existen
Datos
No Existen
Datos
San Gabriel
Compañía De
- Colegio
Jesús
1793(1981-1006)
No Existen
Datos
490(1966-08-
Yuralpa
No Existen
29)
Derecho
Datos
No Existen
No Existen
No Existen
No Existen
No Existen
Datos
Datos
Datos
Datos
Datos
Pto. Napo
241 No. 1947-
817 San Ignacio
No Existen
De Loyola I
Datos
Manabí
24 de
14/06/2002 E.I.
Padre
Mayo
13-046-
Lasso
52344172
Fiscomisional
Inicial
52344172
Fiscomisional
Inicial
13/05/2002
818 San Ignacio
De Loyola
II
819 San José
820 No Existen
Datos
No Existen
Datos
Manabí
Imbabura
24 de
Bejuco de
Mayo
Guadalupe
Natabu
No Existen
No Existen
ela
Datos
Datos
Congregación
San José
De Padres
Guayas
Salinas
821 822 San Jose
San Jose
No Existen
Datos
No Existen
Datos
noviembre
26/2001
Pastaza
Pastaza
Napo
Tena
No Existen
Datos
Av. 22 de
# 1607,
Josefinos
909230
Diciembre
No Existen
y 10 de
Datos
Pre-Básica,
Particular
No Existen
Curaray
482(1948-08-
San
No Existen
12)
Antonio
Datos
Datos
Básica,
Bachillerato
Agosto
(1968-10-01)
Secundario
Fiscomisional
Primaria
Fiscomisional
Medio
Comunidad
823 De Religiosas
San José
Franciscanas
Misioneras
Guayas
Olmedo
Milagr
U.E. # 022,
o
junio 9/1994
De La
100 y 9 de
Pre-Básica,
2970009
Particular
Octubre
Básica,
Bachillerato
Inmaculada
824 SAN JOSÉ
(Hnas
Ministras
De La
Caridad
Hnas
Ministras de
la Caridad
Sto.
Domingo
de los
Tsáchilas
Santo
Domin
go
No Existen
Vía Chone
Datos
Km 2 1/2
3700-540
No Existen
Pre básica /
Datos
Básica
S.V.P)
825 San José
De La
Beneficenci
a De
Luis
Dominicas de
la Enseñanza
Guayas
Guaya
U.E. # 292,
Urdaneta
quil
junio 27/1997
205 y G.
Particular
San Jose
Hermanas de
De La
la
Providencia
Providencia
Pichincha
Quito
Pichincha
Quito
Básica,
Bachillerato
Córdova
Señoras
826 Pre-Básica,
2310133
No Existen
No Existen
No Existen
No Existen
No Existen
Datos
Datos
Datos
Datos
Datos
No Existen
No Existen
No Existen
No Existen
No Existen
Datos
Datos
Datos
Datos
Datos
Comunidad
827 San Jose –
de Hermanos
La Salle
Cristianos de
la Salle
Congregación
828 San JoséLa Salle
Tomás
de los
Hermanos de
Guayas
las Escuelas
Guaya
U.E. # 793,
Martínes y
quil
julio 18/2005
Baquerizo
Escrivá
Arquidiócesis
Guayas
Guaya
# 048, febrero
Bombero,
quil
28/2003
km. 5.5. vía
a la Costa
Particular
Básica,
Bachillerato
Av. Del
San José
María
2563085
Moreno
Cristianas
829 Pre-Básica,
2352251
Particular
Pre-Básica,
Básica
242 No. 1947-
830 San Juan
No Existen
Bautista
Datos
Manabí
Santa
14/06/2002 E.I.
Las
No Existen
Ana
13-140-
Cucarachas
Datos
Fiscomisional
Inicial
6/04/2009
831 San Juan
No Existen
Bosco
Datos
Imbabura
Ibarra
No Existen
No Existen
Datos
Datos
Padres
832 San Juan
Salesianos
Bosco
Congregación
U.E. # 0000112,
quil
enero 16/2006
Napo
Tena
35(1967-10-1)
Pusuno
Loja
Calvas
No Existen
No Existen
Datos
Datos
Imbabura
Ibarra
No Existen
No Existen
Datos
Datos
Salesiana
833 834 835 San Juan
No Existen
Bosco
Datos
San Juan
Diócesis de
De La Cruz
Loja
San Juan
No Existen
Diego
Datos
No Existen
Datos
Carchi
Guaya
Guayas
950251
1312 y C.
2450864
Particular
Ballén
No Existen
Primario
Pre-Básica,
Básica
Fiscomisional
Primaria
No Existen
No Existen
No Existen
Datos
Datos
Datos
Datos
954567
No Existen
Datos
Primario
Calle
836 San Juan
Evangelista
Hermanitas
de la
Asunción
Sto.
Domingo
de los
Tsáchilas
No
Existen
Datos
Coronel
No Existen
Donoso y
Datos
Elías
2392-195
No Existen
No Existen
Datos
Datos
Escobar
tras la Igles
837 838 San Juan
Diócesis de
Evangelista
Loja
San
Leonardo
Murialdo
839 San
Leonardo
Murialdo
No Existen
Datos
No Existen
Datos
Loja
Calvas
Napo
Tena
Napo
Tena
No Existen
No Existen
No Existen
No Existen
No Existen
Datos
Datos
Datos
Datos
Datos
72(1948-09-29)
Ahuno
Fiscomisional
Primaria
Fiscomisional
Pre-Primaria
652(1981-1126)
Ahuano
No Existen
Datos
No Existen
Datos
Cdla.
840 San Luis
Seglares
Guayas
Guaya
# 815, mayo
Sopeña,
quil
7/1979
frente a la
2493457
Particular
Básica,
Bachillerato
Iglesia
841 842 San Luis
Compañía De
Gonzaga
Jesús
San
Maximilian
o Kolbe
845 846 Datos
San Luis
843 844 No Existen
Imbabura
Pichincha
Parroquia
Sto.
Nuestra Sra.
Domingo
de la
de los
Asunción
Tsáchilas
San Miguel
Diócesis de
Arcángel
Loja
San Pedro
No Existen
De Tena
Datos
San Pedro
No Existen
De Tena
Datos
Loja
No Existen
No Existen
o
Datos
Datos
No Existen
No Existen
No Existen
No Existen
No Existen
Datos
Datos
Datos
Datos
Datos
3760-961/3761-
No Existen
584
Datos
Quito
920059
Datos
Secundario
Coop. Juan
Santo
Domin
go
Eulogio
No Existen
Paz y Miño
Datos
barrio La
Básica
Merced
Calvas
Napo
Tena
Napo
Tena
No Existen
No Existen
No Existen
No Existen
No Existen
Datos
Datos
Datos
Datos
Datos
Fiscomisional
Primaria
Fiscomisional
Pre-Primaria
(1994-05-16)
No Existen
Tena
San Pedro
Datos
No Existen
Otaval
No Existen
Datos
No Existen
Datos
243 847 848 San Pedro
Diócesis de
Mártir
Loja
San Pedro
No Existen
Pascual
Datos
Loja
Calvas
Imbabura
Ibarra
Pichincha
Quito
Pichincha
Quito
Pichincha
Quito
Pastaza
Pastaza
Imbabura
Ibarra
No Existen
No Existen
No Existen
No Existen
No Existen
Datos
Datos
Datos
Datos
Datos
No Existen
No Existen
No Existen
Primario Y
Datos
Datos
Datos
Secundario
No Existen
No Existen
No Existen
No Existen
No Existen
Datos
Datos
Datos
Datos
Datos
No Existen
No Existen
No Existen
No Existen
No Existen
Datos
Datos
Datos
Datos
Datos
No Existen
No Existen
No Existen
No Existen
No Existen
Datos
Datos
Datos
Datos
Datos
(1983-10-01)
Jesuscocha
Fiscomisional
Primaria
No Existen
No Existen
Datos
Datos
950251
Fiscomisional
Secundario
2391454
Particular
955841
Congregación
849 De Hermanas
San Pedro
Terceras
Pascual
Mercedarias
Del Niño
Jesús
850 San
Vicente
851 Comunidad
Dominicana
Del Ecuador
San
Vicente De
Padres
Paul -
Lazaristas
Colegio
852 San
Vicente
Ferrer
853 No Existen
Datos
Sánchez Y
No Existen
Cifuentes
Datos
No Existen
Datos
Congregación
854 de las
Av. Del
Hermanas de
Santa Ana
la
Providencia y
Guayas
Guaya
quil
mayo 2/1944
Ejército
702 y Av. 9
Pre-Básica,
Básica
de Octubre
de la
Inmaculada
Concepción
855 Santa
No Existen
Bertila
Datos
Napo
Tena
Pichincha
Quito
Pichincha
Quito
Pastaza
Pastaza
400(1979-0319)
Tena
No Existen
Datos
Fiscomisional
No Existen
Datos
Comunidad
856 Santa
de Dominicas
Catalina De
de la
Siena
Inmaculada
No Existen
No Existen
No Existen
No Existen
No Existen
Datos
Datos
Datos
Datos
Datos
No Existen
No Existen
No Existen
No Existen
No Existen
Datos
Datos
Datos
Datos
Datos
Fiscomisional
Primaria
Concepción
857 858 Santa
Compañía de
Catalina
Hijas de la
Laboure
Caridad
Santa Clara
No Existen
Datos
1001(1959-0909)
Sta. Clara
No Existen
Datos
Comunidad
859 Santa Clara
De Asis Tabacundo
De Religiosas
Franciscanas
Misioneras
Pedro
Pichincha
Monca
yo
De La
No Existen
No Existen
No Existen
No Existen
No Existen
Datos
Datos
Datos
Datos
Datos
No Existen
No Existen
No Existen
No Existen
No Existen
Datos
Datos
Datos
Datos
Datos
Inmaculada
860 Santa Cruz
Curia
De La
Metropolitana
Pichincha
Quito
244 Providencia
De Quito
Hermanas
861 Santa
Dorotea
Doroteas
Hijas De Los
Pichincha
No Existen
No Existen
No Existen
No Existen
No Existen
Datos
Datos
Datos
Datos
Datos
La Estancia
52674880
Fiscomisional
Inicial
No Existen
No Existen
No Existen
No Existen
No Existen
Datos
Datos
Datos
Datos
Datos
Macha
No Existen
No Existen
No Existen
No Existen
No Existen
chi
Datos
Datos
Datos
Datos
Datos
2282247
Particular
Quito
Sagrados
Corazones
862 Santa
No Existen
Gema
Datos
San
Manabí
Vicent
e
No. 194714/06/2002 E.I.
13-05322/04/2003
Congregación
863 Santa Juana
De Arco
de los
Hermanos de
Cariam
Loja
las Escuelas
anga/C
alvas
Cristianas
864 Santa Luisa
De Marillac
865 Compañía de
Hijas de la
Pichincha
Caridad
Santa Luisa
Junta de
De Marillac
Beneficencia
Guayas
Guaya
quil
Piedrahita y
abril de 1949
Av. Del
Ejército
Pre-Básica,
Básica
Coop. 17
866 Santa
Sto.
María De
Communio
Domingo
La Trinidad
Sanctórum
de los
(Escuela)
Tsáchilas
Santo
Domin
go
de
No Existen
Diciembre
Datos
frente al
3707-875
No Existen
Datos
Básica
parque
ecológico
Coop. 17
867 Santa
Sto.
María De
Communio
Domingo
La Trinidad
Sanctórum
de los
(Jardín)
Tsáchilas
Santo
Domin
go
de
No Existen
Diciembre
Datos
frente al
3707-875
No Existen
Datos
Pre básica
parque
ecológico
Comunidad
868 Santa
De Religiosas
María De
Franciscanas
Los
Misioneras
Ángeles
De La
Av. 25 de
Guayas
Guaya
# 75, noviembre
Julio y
quil
21 del 2004
Santa
2493910
Particular
Pre-Básica,
Básica
Mónica
Inmaculada
Comunidad
869 Santa
De Religiosas
Maria De
Franciscanas
Los
Misioneras
Angeles
De La
Pichincha
Quito
No Existen
No Existen
No Existen
No Existen
No Existen
Datos
Datos
Datos
Datos
Datos
El Florón
52430431
Fiscomisional
Inicial
vía Puerto
2068028
Particular
Pre-Básica,
Inmaculada
870 No. 1947-
Santa
María De
No Existen
Los
Datos
Manabí
Portovi
14/06/2002 E.I.
ejo
13-04413/05/2002
Ángeles
871 Santa
Fundación
Guayas
Olón
# 721, julio
245 María Del
24/1995
López
Básica,
Fiat
Bachillerato
Hermanas De
872 Santa
La
Maria
Congregación
Eufrasia
Del Buen
Pichincha
Quito
No Existen
No Existen
No Existen
No Existen
No Existen
Datos
Datos
Datos
Datos
Datos
2601793
Particular
2451108
Particular
Pastor
873 Santa
Congregación
María
Del Buen
Eufrasia
Pastor
Coop.
Guayas
Guaya
# 0270, mayo
Brisas del
quil
15/1996
Salado, Isla
Santa
De Las
María
Hermanas
Goretti
Murialdinas
Guerrero
Guayas
Martínez
Guaya
U.E. # 739,
quil
julio 12/2005
Santa
Maria
Mazzarrello
876 Santa
María
Mazzarrello
877 878 880 881 Diócesis de
Loja
Instituto
Santa
Jesus
Mariana de
Centro
Jesús
Santa
No Existen
Marianita
Datos
Santa
Santa
Marianita
De Jesús
884 Santa Rosa
Santa Rosa
Quito
No Existen
No Existen
No Existen
No Existen
Datos
Datos
Datos
Datos
Datos
Maldonado
Guayas
Guaya
U.E. # 433,
1403 y José
quil
mayo 22/1996
de
No Existen
Datos
No Existen
Datos
Pre-Básica,
2451567
Fiscomisional
Guayas
Loja
Pichincha
Imbabura
Imbabura
Napo
Básica,
Bachillerato
Antepara
Chimboraz
Pre-Básica,
Guaya
U.E. # 0020,
quil
enero 11/2000
Gonza
No Existen
No Existen
No Existen
No Existen
No Existen
namá
Datos
Datos
Datos
Datos
Datos
No Existen
No Existen
No Existen
No Existen
No Existen
Datos
Datos
Datos
Datos
Datos
Otaval
No Existen
No Existen
o
Datos
Datos
Caranq
No Existen
No Existen
ui
Datos
Datos
Quito
Quijos
026(1954-1015)
o 1819 y
2402525
Particular
Maldonado
Borja
Básica,
Bachillerato
920449
651143
No Existen
No Existen
Datos
No Existen
Datos
Primario
Primario
Fiscomisional
Primaria
52330125
Fiscomisional
Inicial
52674880
Fiscomisional
Inicial
2956184
Particular
Básica,
Datos
No. 1947No Existen
Datos
Manabí
Tosagu
14/06/2002 E.I.
La
a
13-061-
Estancilla
7/03/2005
No Existen
Datos
Arquidiócesis
Manabí
Guayas
San
No. 1947 del 14
Vicent
de junio de
e
2002
Colime
# 385,
Santa
Martha I
Santa Rosa
Bachillerato
No Existen
Auxiliadora
Mariana De
De Jesus
885 María
Santa
Marianita
883 Hijas de
Marianitas
De Jesús
Pichincha
Salesianas
Jesús
Santa
Callejón
Básica,
Auxiliadora
de Hermanas
Marianita
882 María
Comunidad
Jesús
879 Hijas de
Mariana De
Mariana De
Pre-Básica,
Salesianas
Santa
Santa
1003 y
Nájera
De San José
875 Básica
Trinitaria
Congregación
874 Pre-Básica,
246 886 887 Santa Rosa
Santa
Teresa De
Avila
Diócesis de
Loja
No Existen
Datos
Loja
Orellana
s
diciembre
y 29 de
15/1987
Abril
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No Existen
No Existen
No Existen
No Existen
No Existen
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Datos
Datos
Datos
Datos
Datos
Orellan
25(1970-05-25)
a
22H00401
Fiscomisional
Primaria
Ávila
Bachillerato
No Existen
Datos
Congregación
888 de las
Hermanas de
Santa
la
Teresita
Providencia y
Pichincha
Quito
No Existen
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Datos
Datos
Datos
Datos
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No Existen
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Datos
Datos
Datos
52764267
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Inmaculada
Concepción
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889 Santa
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Teresita
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Santiago
(VAM)
890 Santa
No Existen
Teresita
Datos
Limón
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El
Manabí
Carme
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No. 194714/06/2002 E.I.
Santa
13-042-
Teresa
6/05/2002
Comunidad
891 De Religiosas
Santa
Franciscanas
Teresita
Misioneras
La
Guayas
Liberta
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De La
Pre-Básica,
U.E. # 0060-AJ,
Barrio 10
abril 12/2000
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1953(1978-09-
Misión
No Existen
12)
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Datos
No Existen
No Existen
No Existen
No Existen
No Existen
Datos
Datos
Datos
Datos
Datos
2785234
Particular
Básica,
Bachillerato
Inmaculada
892 893 894 Sante
No Existen
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Datos
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Diócesis de
Apóstol
Loja
Napo
Loja
Santiago
De Las
Arquidiócesis
Guayas
Praderas
895 Santiago
No Existen
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Datos
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No Existen
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Datos
Napo
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Calvas
Guaya
U.E. # 00263,
quil
marzo 10/2005
Tena
Fiscomisional
Clda.
Pradera 1,
No Existen
Datos
Pre-Básica,
2495007
Particular
calle 2da.
Básica,
Bachillerato
00315(1978-11-
Yuralpa
No Existen
28)
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Datos
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52430431
Fiscomisional
Primaria
Fiscomisional
Inicial
No Existen
Primario Y
Datos
Secundario
No. 1947-
896 Manabí
Portovi
14/06/2002 E.I.
ejo
13-04513/05/2002
897 898 Santísimo
No Existen
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Domingo
890 Santo
Domingo
De Guzmán
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Imbabura
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No Existen
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Datos
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Datos
Datos
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16/1998
5ta.
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Comunidad
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de la
Inmaculada
Guayas
Guaya
quil
916006
Pre-Básica,
2882561
Particular
Básica,
Bachillerato
247 Concepción
Comunidad
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Domingo
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Inmaculada
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No Existen
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Concepción
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Domingo
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1717(1992-1106)
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Miguel
Diócesis
Domingo
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3750-610
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y Súa
Guasmo
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894 Santo
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Jesús Y De
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Guaya
# 66, febrero
quil
9/1984
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897 No Existen
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898 Semillitas
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de Landshut,
Alemanas
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890 No Existen
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No Existen
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03(1971-05-06)
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Particular
Pre-Básica,
Básica
Domingo
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Tsáchilas
Los Ríos
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Fiscomisional
Pre-Primaria
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Primaria
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42526968
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No Existen
No Existen
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Datos
Básica
Particular con
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BACHILL.
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Básica
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go
Km 4 1/2
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Coop.
Datos
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Diócesis
2480348
Cívico
899 Simon
Coop.
Centro
María
895 Norte,
ma/Urd
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639, febr.
oro, vìa
6/1992
Recinto La
52942689
Julia
Sistema
Educativo
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Conferencia
al
Episcopal
Cotopaxi
Latacu
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Quito y
No. 072
Rumiñahui
2800491
Intercultura
l Cotopaxi
891 892 893 Sta. Juana
No Existen
De Chantal
Datos
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Comunidad
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Imbabura
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10 de
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12/1906
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920533
906148
52730189
No Existen
Datos
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Secundario
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EDUC.
Ayuda
BASICA
248 894 895 896 897 898 Jesus
Marianitas
Stabile
Seglares
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Congregación
Por El
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Cambio
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Congregación
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De Padres
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Josefinos
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Guayas
Pichincha
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Napo
Guaya
# 0211, marzo
26 y
quil
17/1982
Maldonado
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Datos
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490(1966-07-
ona
29)
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No Existen
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Los Ríos
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Pre-Básica,
2471113
Particular
No Existen
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Datos
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Ayuda
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No Existen
Datos
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550, junio
Universitari
3/1969
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52730015
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Congregación
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Tecnico
la
Domingo
Ecuador
Providencia y
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Tsáchilas
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Datos
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Inmaculada
Concepción
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Fe y Alegría
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Cuenca
Azuay
Cuenca
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Cuenca
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Cuenca
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Cuenca
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Cuenca
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163(1956-10-
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29 y
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11/2000
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Datos
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Datos
Datos
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Datos
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2847984
2888141
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Básica,
Bachillerato
No Existen
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Datos
Datos
No Existen
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Datos
Datos
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2844061
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U. E.
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897 898 Hermanas
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Comunidad
2844404
4097604
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Miguel
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Datos
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Datos
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Datos
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Particular
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Cuenca
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Cuenca
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Cuenca
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2250203
2816998
2270143
2818174
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Datos
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62881521
Estatal
03 2841007
Particular
2980-497
Particular
2930-685
Particular
U.E.
La
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5955 / 30-01-58
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2030 / 23-01-93
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Hermanas
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2980-766 /
2980-928
Particular
Calle
2378 / 01-08-71
Olmedo y
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2 1/2 Vía a
2943-010
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Datos
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Medio
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Medio
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1245
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No Existen
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Datos
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32961901
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52731405
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Básica y
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No Existen
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Hermanas
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Loja
Loja
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Dominicas
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Loja
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María
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Hijas de
María
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Auxiliadora
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Auxiliadora
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Hermanos
Marista -
Maristas
Cataco
Loja
Bachillerato
Hermanos
Marista-
Maristas
No Existen
No Existen
No Existen
No Existen
Datos
Datos
Datos
Datos
Datos
32961601
Fiscomisional
Guayaquil
y 5 de
Junio
Básica y
Bachillerato
No Existen
No Existen
No Existen
No Existen
Datos
Datos
Datos
Datos
Datos
No Existen
No Existen
No Existen
No Existen
No Existen
Datos
Datos
Datos
Datos
Datos
No Existen
No Existen
No Existen
No Existen
No Existen
Datos
Datos
Datos
Datos
Datos
Loja/L
No Existen
No Existen
No Existen
No Existen
No Existen
oja
Datos
Datos
Datos
Datos
Datos
32930188
Particular
Macará
Loja
No Existen
No Existen
cha/Pal
tas
Unidad
Educ.
anga/C
alvas
/Macar
á
Macará
944 Básica y
reyes
Catacocha
943 Fiscomisional
Manuel
Auxiliadora
940 32936218
Unidad
Educ.
Mons.
Diócesis de
Alberto
Loja
Olmed
Loja
o/Olme
do
Zambrano
P.
945 Unidad
Educ. San
Francisco
De Asís
946 947 de Padres
Loja
Escolapios
Unidad
Hermanas
Educ. San
Oblatas de
Chimbor
Francisco
San Francisco
azo
De Sales
de Sales
Unidad
Educ. San
José De
Calasanz
948 Comunidad
Comunidad
de Padres
Loja
Escolapios
Alausí
Calle
No Existen
Maldonado
Datos
N.57
Básica y
Bachillerato
Loja/L
No Existen
No Existen
No Existen
No Existen
No Existen
oja
Datos
Datos
Datos
Datos
Datos
Espínd
No Existen
No Existen
No Existen
No Existen
No Existen
ola
Datos
Datos
Datos
Datos
Datos
No Existen
No Existen
No Existen
No Existen
No Existen
Datos
Datos
Datos
Datos
Datos
No Existen
No Existen
No Existen
No Existen
No Existen
Unidad
Educ. San
Diócesis de
Vicente De
Loja
Loja
Paúl
949 Unidad
Educ. Santa
Mariana De
Jesús
950 Unidad
Comunidad
de Hermanas
Macará
Loja
Marianitas
Comunidad
/Macar
á
Loja
Loja/L
254 Educ. Santa
de Hermanas
Mariana De
Marianitas
oja
Datos
Datos
Datos
Datos
Datos
Celica/
No Existen
No Existen
No Existen
No Existen
No Existen
Celica
Datos
Datos
Datos
Datos
Datos
32960056
Fiscomisional
Jesús
951 Unidad
Educ. Santa
Teresita
952 953 Comunidad
Santa Teresita
Loja
Unidad
Sociedad
Educ. Santo
Salesiana de
Chimbor
Rioba
No Existen
Tomás
San Juan
azo
mba
Datos
Apóstol
Bosco, SDB
Loja/L
No Existen
No Existen
No Existen
No Existen
No Existen
oja
Datos
Datos
Datos
Datos
Datos
32961568
Particular
2885-173
Fiscomisional
0.52.615.558
Fiscomisional
Av.
Gonzalo
Dávalos s/n
Basica y
Bachillerato
Unidad
Educ.
Vicente
Anda
Diócesis de
Loja
Loja
Aguirre
Congregación
954 de las
Unidad
Educa. La
Providencia
Isabel de
Hermanas de
la
Chimbor
Rioba
No Existen
Godín 37-
Providencia y
azo
mba
Datos
57 y Av. 9
Basica y
Bachillerato
de Octubre
de la
Inmaculada
Concepción
955 Unidad
Educativa
Hermanos de
San
la Sagrada
Vicente
Familia
Pastaza
Pastaza
Ferrer
956 Acuerdo No
Av. Ceslao
1040 del 22 de
Marín S/N
Septiembre
y Álvaro
1959
Valladares
Unidad
Educativa
"Madre
Laura
Unidad
Educativa
A Distancia
958 Unidad
Educativa
A Distancia
Bachillerato
Calle
Misioneras
Lauritas
Manabí
Rio
009-DECM-15
Olmedo y
chico
-06-2005 2005
Juan
Primaria y
Secundaria
Montalvo
Montoya"
957 Básica -
No Existen
Datos
No Existen
Datos
Imbabura
Ibarra
Napo
Tena
No Existen
No Existen
Datos
Datos
1544(1991-10-
Barrio 13
No Existen
29)
Abril
Datos
652847
No Existen
Datos
Fiscomisional
Secundario
Medio
Vía Flores,
959 Unidad
Educativa
Babaho
Seglares
Los Ríos
A Distancia
yo/Bab
ahoyo
Lotiz.
1544, oct.
Virgilio
29/1991
52732439
Fiscomisional
Zúñiga,
ED. BAS. Y
BACHILL.
Calle A
960 Unidad
Educativa
A Distancia
De Bolívar
961 Unidad
Calle 7 de
Diócesis de
Guaranda/Co
nvenio CEE-
Bolívar
ME-
Guaran
nº1544 de 1991-
da
10-29
032981498
Chimbor
Rioba
No Existen
Av.
: 11 Partidas
Ed. Básica y
Fiscales, 25
Bachillerato
Bonificados
(Obispado)
10 de
agosto
CONFEDEC
Convenio
Fiscomisional
mayo 509 y
32604818
Fiscomisional
Basica y
255 Educativa
ME-CEE
azo
mba
Datos
Bachillerato
Canónigo
A Distancia
Ramos y
De
Augusto
Chimboraz
Torres
o
962 Unidad
Barrio
Educativa
A Distancia
Experiment
al Mons.
No Existen
Datos
Pastaza
Pastaza
No. 512 del 7
Cumandá,
de Febrero de
Avda.
1990
González
2883-713
Fiscomisional
72242734
Fiscomisional
0.52.639.456
Fiscal
BásicaBachillerato
Suárez
Alberto
Zambrano
963 Unidad
Educativa
Conferencia
A Distancia
Episcopal
Cañar
Azogu
es
La Salle
964 164 Del 29 De
VIA A
Octubre De
ZHIGZHIQ
1991
UIN
Básica,
Bachillerato
Unidad
Calle Juan
Educativa
A Distancia
P. Jorge
Seglares
Manabí
Portovi
ejo
Montalvo y
1544-DT
17 de
Medio
Diciembre
Ugalde
Paladines
Hermanas
965 Unidad
Educativa
Amalia
Uriguen
Oblatas De
JULIO
Los
Corazones
Cañar
Deleg
Santísimos
No.139.- 04 De
MARIA
Junio Del 2004
MATOVE
7210216
Particular con
Ayuda
Básica
LLE
De Jesús Y
De María
Hermanas
966 Unidad
Educativa
Corazón De
María
Oblatas De
074 15 De
Los
Corazones
Cañar
Biblian
NICALAS
Octubre De
MUÑOZ
1995
Santísimos
Particular con
Pre-básica,
Ayuda
Básica
052.632.558 -
No Existen
Primaria y
052.631.559
Datos
Secundaria
Particular con
Pre-básica,
Ayuda
Básica
72230135
De Jesús Y
De María
Calle Cristo
967 Unidad
Conpañía de
Educativa
Jesús (Padres
Cristo Rey
Jesuitas)
Manabí
Portovi
ejo
Rey entre
001-AJ-DECM
Sucre y
Baquerizo
Moreno
Hermanas
968 Unidad
Educativa
Emilia
Merchán
Oblatas De
Los
Corazones
PANAME
Azogu
0996 -Da 2 De
es
Junio De 1993
Zamora
Zamor
Nro. 3366 23-
Logroño y
Chinchip
a
07-1992
Naya
Cañar
Santísimos
RICANA
72240532
SUR
De Jesús Y
De María
969 Unidad
Educativa
Crecerá
72606181
Fiscomisional
Básica y
Bachillerato
256 e
Experiment
al A
Distancia
De Zamora
Chinchipe
970 Unidad
Educativa
Fe Y
Alegría
971 Av. San
Conpañía de
Jesús (Padres
Carchi
Tulcán
Jesuitas)
Nº 187- 15 abril
Francisco
2982968
1985
Y Adolfo
2986802
Fiscomisional
Pre básica
52527095
Fiscomisional
Medio
52526288
Fiscomisional
Bécquer
Unidad
Educativa
Franciscanas
Fiscomisio
Misioneras de
Galápago
Sta.
015-DPEG-
nal San
María
s
Cruz-
2000
Francisco
Auxiliadora
Floreana y
José J.
Olmedo
De Asís
972 Unidad
Educativa
Franciscanas
Fiscomisio
Misioneras de
Galápago
Sta.
015-DPEG-
nal San
María
s
Cruz-
2000
Francisco
Auxiliadora
Av. Baltra
y Charles
Binford
Pre-primario
y Primario
De Asís
973 Unidad
Educativa
Hermanos de
Fiscomisio
la Sagrada
nal Verbo
Familia
Bolívar
Guaran
da
31-08-1958
Avd.
Fiscomisional:
Cándido
10-10-1981
Rada 301
032980702/032
982176
Fiscomisional
Inicial, Ed.
: 82 Partidas
Básica y
Fiscales
Bachillerato
Divino
974 975 Unidad
Orden
Educativa
Franciscana
Franciscana
De Frailes
San Diego
Menores,
De Alcalá
Ofm.
4 DE
Cañar
Azogu
es
005 12 De
NOVIEMB
Noviembre De
RE Y AV.
1999
DE LA
Particular con
072245816
Ayuda
2886-509
Fiscomisional
Pre-básica,
Básica,
Bachillerato
VIRGEN
Barrio
Unidad
Educativa
Intercultura
No Existen
l Bilingüe
Datos
No. 149 del 2
Pastaza
Pastaza
de Mayo de
2003
Amauta
Intipungo
Av. Juan
Montalvo y
Pre básicaBásicaBachillerato
González
Sur
Ñampi
976 072240019
Unidad
Educativa
Intercultura
l Bilingüe
Fray
No Existen
Datos
Pastaza
Pastaza
No. 351 del 19
de Julio de 2005
Km. 27 Vía
Puyo-
Pre básica2884-228
Fiscomisional
Macas
BásicaBachillerato
Agustin
Maria Leon
Hermanas
977 Unidad
Oblatas De
Educativa
Los
Julio María
Corazones
Matovelle
Santísimos
DECIMO
La
Cañar
Tronca
l
1324 D.A 22 De
Julio De 1993
OESTE Y
TERCERA
NORTE
De Jesús Y
SEXTA
72420744
Particular con
Básica,
Ayuda
Bachillerato
257 De María
978 Unidad
Educativa
Julio
Pierregross
e
Ciudadela
Congregación
De Esclavas
Del Divino
Manabí
Manta
040-DECM
Barbasquill
Primaria y
0.52.620.608
Particular
0.52.690.385
Particular
2800766
Particular
U.E.
4-07 Y
072240086
Particular con
Básica,
EMILIO
072243728
Ayuda
Bachillerato
Particular con
Básica,
Ayuda
Bachillerato
2800133
Particular
U.E.
0.52.627.259
Particular
2205112
Fiscomisional
o vía a San
Secundaria
Mateo
Corazón
Congregación
979 de las
Unidad
Hermanas de
Educativa
la
La
Providencia y
Inmaculada
de la
011-DT-18-03Manabí
Sucre
1986- 2045-DT20-08.1976
Malecón y
Matheus
Primaria y
Secundaria
Inmaculada
Concepción
980 Unidad
Educativa
La
Inmaculada
Comunidad
Antonia
de las Hijas
de Caridad de
Cotopaxi
San Vicente
Latacu
nga
Vela y
No.
Tarqui
7062
de Paúl
Congregación
981 de las
Unidad
Hermanas de
Educativa
la
La
Providencia y
Providencia
de la
SERRANO
Cañar
Azogu
es
1993 86-04-10
ABAD
Inmaculada
Concepción
LUIS
982 Unidad
Educativa
La Salle
Comunidad
de Hermanos
Cristianos de
Cañar
Azogu
es
la Salle
No 1647-DpecS 26 De Julio
De 1990
CORDERO
302
ENTRE
SOLANO
072240281
072240392
07224
Y SUCRE
Congregación
983 Unidad
de los
Educativa
Hermanos de
La Salle
las Escuelas
Cotopaxi
Latacu
nga
Quija y
No.
Gral. M
Cristianas
984 985 986 Unidad
Hermanas
Educativa
Oblatas de
Leonie
San Francisco
Aviat
de Sales
Unidad
Salesianas
Educativa
Hijas de
María
María
Auxiliadora
Auxiliadora
Unidad
Educativa
María
Comunidad
Salesiana
Avenida
Manabí
Manta
140-19.02-2002
108
Primaria Secundaria
Juan
Carchi
Tulcán
Nº 263 de 8 de
Montalvo
Diciembre de
Y José
1998
Martínez
Básica Centro
Artesanal
Sn.
Calle 123 y
Manabí
Manta
008-DECM
124 y
Avenida
105 y calle
Preprimaria 0.52.923.773
Particular
Primaria y
Secundaria
258 Auxiliadora
987 110
Unidad
Salesianas
Educativa
Hijas de
María
María
Auxiliadora
Auxiliadora
Av. La
Bolívar
Calum
No Existen
Naranja y
a
Datos
Pedro
032974160
Monar
Particular con
Inicial. E.
Una Partida
Bás. y
Fiscal
Bachillerato
Congregación
988 Unidad
De Hermanas
Educativa
Terceras
María De
Mercedarias
La Merced
Del Niño
Calle
Manabí
Portovi
02-2010-AJ-
España y
ejo
DPEM
Av. Del
Pre básico 0.52.930.364
Particular
Primaria y
Secundaria
Ejercito
Jesús
Hermanas
989 Unidad
Educativa
Mariana De
Jesús
Oblatas De
PARQUE
Los
Corazones
Cañar
Santísimos
El
No. 659 32 De
CENTRAL
Tambo
Junio De 1988
Y RAMON
72233107
Particular con
Pre-básica,
Ayuda
Básica
Particular con
Pre-básica,
Ayuda
Básica
BORRERO
De Jesús Y
De María
Hermanas
990 Unidad
Educativa
Mariana De
Jesús
Oblatas De
PARQUE
Los
Corazones
Cañar
Santísimos
El
659 De 23 De
CENTRAL
Tambo
Junio De 1998
Y RAMON
72233107
BORRERO
De Jesús Y
De María
Congregación
Calle
Unidad
De Hermanas
Andrés
Educativa
Terceras
Mercedes
Mercedarias
De María
Del Niño
María
Jesús
Mendoza
991 992 Manabí
Portovi
ejo
034-DEMC
Cedeño y
Rafael
Primaria 0.52.647.027
Particular
Básico y
Bachillerato
Unidad
Educativa
Comunidad
Mixta
de Dominicas
Bilingüe
de la
Saint
Inmaculada
Dominic
Concepción
Pichincha
Quito
No Existen
No Existen
No Existen
No Existen
No Existen
Datos
Datos
Datos
Datos
Datos
2812405
Estatal
U.E.
No Existen
Primario Y
Datos
Secundario
Particular
U.E.
School
993 Unidad
Av.
Educativa
Monseñor
Conferencia
Leonidas
Episcopal
Cotopaxi
Latacu
nga
Iberoameric
No. 1154
ana y
México
Proaño De
Cotopaxi
994 Unidad
Educativa
Oviedo
995 Unidad
Educativa
Particular
No Existen
Datos
Hermanas
Franciscanas
Imbabura
Cotopaxi
Ibarra
Salced
o
No Existen
No Existen
Datos
Datos
Sucre y
No. 917
Gonzales
Suarez
951732
2726146
259 Mixta San
Francisco
De Asís
996 Unidad
Educativa
Pedro
Arquidiócesis
Manabí
Schumache
Tosagu
a
2021.07.1971
Calle San
Pedro s/n
0.52.330.149
Particular
Primaria y
Secundaria
r
997 Unidad
Educativa
Sagrada
Familia
998 Siervas del
Hogar de la
Manabí
Madre
Portovi
005-08AJ-
ejo
DPEM
Playa Prieta
Sagrado
Corazón De
No Existen
Datos
No 4526 del 18
Pastaza
Palora
de Abril de
2006
Sagrado
Corazón De
Hermanas
Bethlemitas
Cotopaxi
Latacu
nga
Orellana
No. 29
1714 y
Educativa
Comunidad
Salesiana
Salesiana
Educativa
San
Francisco
De Sales
1002 Unidad
Educativa
San Gabriel
1003 Unidad
Educativa
Santa Luisa
De Marillac
1004 1005 San Francisco
Manta
San Gabriel
Misioneros
Cañar
erte
Hijas de la
de Sales
176-1951-04.09
Rocafuerte
1967 - 0427-
y Treinta de
16.09-1966
Septiembre
0.52.620.158
Fiscomisional
Básica
U.E.
Mariana de
14902 16 De
SAN
Junio De 1972
GABRIEL
Primaria y
Secundaria
0.52.644.180 0.52.644.4
Particular
Primaria y
Secundaria
72420117
Particular con
Básica,
Ayuda
Bachillerato
S/N
Manabí
Tosagu
a
No. 049-DT
Santa Lucia
Vía a
0.330.213
Particular
0.52.616.980
Fiscomisional
Primaria y
Secundaria
Chone
Manabí
Portovi
ejo
Oliva
016-DECM
Bolívar
Guaran
da
Manabí
Chone
Miranda y
Pre básico -
Vicente
y Azuay
032980978
209
1094-13.06-
Colon y
Primaria y
Secundaria
7 de mayo
21-08-1958
Jesús
Congregación
Preprimaria-
CALLE
Instituto
Santa
108 y Calle
No. 053-13.07-
Particular
Pre básica -
Barrio
Caridad
Magdalena
Tronca
l
Compañía de
San Francisco
Unidad
Rocafu
La
Seglares
Santa
Jesús
Manabí
Asociación
Oblatas de
Mariana De
2813535
106 y 108
de Sales
Educativa
Santa
1006 Oblatas de
Hermanas
Educativa
Fiscomisional
Avenida
Manabí
Hermanas
Unidad
Unidad
2312-865
Guayaquil
Unidad
Unidad
14 de
Sánchez de
San José
1001 Secundaria
Septiembre
Jesús
1000 Ayuda
de
Unidad
Educativa
Primaria y
Agosto y
Febrero - 6
Jesús
999 Particular con
Calle 10 de
Unidad
Educativa
0.80.860.874
0.695.406
Particular con
Inicial, Ed.
19 Partidas
Básica y
Fiscales
Bachillerato
Particular
Primaria y
260 Educativa
Santa
1063
Benito
Santa
Mariana de
Santos
Mariana De
Jesús
Macay
Secundaria
Jesús
Comunidad
1007 Unidad
de Dominicas
Educativa
de la
Santa Rosa
Inmaculada
Cañar
Cañar
No 1325-Da 22
VIA A
De Julio De
QUILLOA
1993
C
072235021
Particular con
Pre-básica,
072235989
Ayuda
Básica
Concepción
1008 Unidad
Educativa
Sta.
Mariana De
Jesús
1009 1010 Santa
Mariana de
Hermanas
Educativa
Oblatas de
Stella
San Francisco
Maris
de Sales
Unidad
Técnica
Particular
Bilingüe
"Redemptio
"
Manabí
Portovi
ejo
Córdova
017-DECM
51.22.05-1930 Manabí
Manta
124 y Juan
Montalvo
Jesús
Unidad
Educativa
036.AJ.DECM.
06.11.2006
Avenida 6
y Calle 14
De Hermanas
Terceras
Mercedarias
Manabí
Jipijap
052.632.689
Pre básica Particular
Primaria y
Secundaria
Primaria y
0.52.611.352
Particular
0.52.600.475
Particular
a
0.52.685.566
Particular
2810185
Particular
U.E.
Particular sin
EDUC.
Ayuda
BASICA
Calle 10 de
583- DT
Agosto 701
y Montalvo
Del Niño
Secundaria
Inicial. Básica
y Bachillerato
Jesús
Congregación
Av. Sixto
De Hermanas
Duran
Educativa
Terceras
Técnico
Mercedarias
"Mercedes"
Del Niño
Eloy Alfaro
Jesús
yB
Manabí
Bolívar
No.085-del 01-
Ballén,
02-2002
entre calle
Unidad
Primaria y
Secundaria
Av.
Educativa
Técnico
Comunidad
Industrial
Marianista
Cotopaxi
Latacu
nga
Velasco
No. 133
Ibarra y
Jaime
Hermano
Roldós
Miguel
Catara
1013 Urdaneta
052.631.539 -
Congregación
Unidad
1011 1012 Congregación
Diócesis
Los Ríos
Francisco
ma /
10, mayo
Burgos,
Urdane
6/1959
Intersecció
ta
52942232
n Bolívar
Coop.
1014 Veinte De
Abril
Fe y Alegría
Guayas
Guaya
# 412, junio
Sergio
No Existen
quil
11/1956
Toral,
Datos
Particular
Básica,
Bachillerato
Perimetral
1015 1016 Virgen Del
Madres
Consuelo
Agustinas
Yaguarzon
Misión
go
Franciscana
Pichincha
Zamora
Chinchip
e
Quito
Zamor
a
No Existen
No Existen
No Existen
No Existen
No Existen
Datos
Datos
Datos
Datos
Datos
85603678
Fiscomisional
Básica
Zumba y
22183
Orellana
261 Bibliografía
LIBROS:
ALBORNOZ PERALTA, Oswaldo, s.f. Historia de la acción clerical en el Ecuador,
Quito, Ediciones Soltierra.
ANDRADE, Roberto, 1984 Historia del Ecuador, tomos I-IV, Quito, Corporación
Editora Nacional.
Archivo Histórico Municipal de Cuenca, IV Libro de Cabildos, fols. 18v-19, citado por
PANIAGUA, J. Agustinos en la Audiencia… pág. 275.
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