ISSN 0326 1263 PODER JUDICIAL DE LA NACIÓN CÁMARA NACIONAL DE APELACIONES DEL TRABAJO PROSECRETARÍA GENERAL BOLETÍN MENSUAL DE JURISPRUDENCIA Nº 343 MAYO „2014 OFICINA DE JURISPRUDENCIA Dr. Claudio Marcelo Riancho Prosecretario General 1 DERECHO DEL TRABAJO D.T. 1 1 19 4 c) Accidentes del trabajo. Acción de derecho común. Art. 1113 Cod. Civil. Responsabilidad del empleador. Dueño o guardián. Trabajador agredido durante la jornada de trabajo. En el caso el actor fue víctima de una agresión mientras se encontraba cumpliendo sus funciones de vigilador en el andén de una estación de tren. Tal como lo sostuviera la C.S.J.N. “… se sirve de una cosa o de una actividad quien se vale de ella obteniendo un provecho, es decir, quien tiene la posibilidad de obtener un beneficio jurídico de ella, asume la calidad de guardián jurídico” (R. 1738 XXXVIII, “Rivarola, Mabel Angélica c/Neumáticos Goodyear SA”, sentencia 11.07.2006). En el caso, la demandada asumió la calidad de guardián jurídico por ser quien se benefició con el trabajo del actor al obtener una ganancia que tiene su origen en el negocio que explota, y por ello, la coloca en la obligación de responder en el plano del derecho común pues existe nexo causal adecuado con el daño (artículos 1109 y 1113 del Código Civil). Sala VIII, Expte. Nº 32.144/09 Sent. Def. Nº 40224 del 26/05/2013 “Barbara Javier Alejandro c/Mapra Empresa de Seguridad SRL y otro s/despido”. (Catardo-Pesino). D.T. 1 1 19 4) Accidentes del trabajo. Acción de derecho común. Cosa riesgosa. Conducción de un transporte público de pasajeros (colectivo). Actividad riesgosa. Reacción violenta de los pasajeros. Las actividades riesgosas también ingresan en el ámbito del art. 1113 Cod.Civil, quedando así equiparadas a las cosas dañosas o riesgosas a que esa norma se refiere. Sin duda, las tareas de un chofer de colectivo en la actualidad suponen una actividad riesgosa. La interacción, como fue en el caso, con un grupo de personas que en el fondo del transporte dormían y que al llegar a la terminal, y frente al requerimiento del chofer a descender, reaccionaron de manera violenta y agresiva provocando en el actor daños físicos con consecuencias de diversa índole constituyeron el elemento riesgoso y peligroso al que se refiere la norma. Sala VI, Expte. Nº 32.386/2009 Sent. Def. Nº 66362 del 19/05/2014 “Sánchez Jorge Ricardo c/Provincia Aseguradora de Riesgos del Trabajo SA y otro s/accidente-acción civil”. (CraigRaffaghelli). D.T. 1 1 19 5) Accidentes del trabajo. Acción de derecho común. Culpa del empleador. Deber de previsión. Trabajador agredido durante la jornada de trabajo. Frente al daño sufrido por el actor, existe responsabilidad del empleador en tanto tiene una obligación de seguridad a su cargo respecto de sus trabajadores con fundamento general en el art. 1198 Cód. Civil y, en forma específica, en el art. 75 L.C.T. (en el caso el actor fue víctima de una agresión mientras se encontraba cumpliendo sus funciones de vigilador en el andén de una estación de tren). En ambas normas, lo que se regula es el deber de previsión al que todo contratante debe ajustarse tanto al momento de celebrar como de ejecutar cualquier clase de contrato. Si bien sobre la reparación de los daños causados por accidentes o enfermedades de trabajo, el art. 75 remite en forma excluyente y con efectos derogatorios a un subsistema autónomo regulado específicamente por la Ley de Riesgos de Trabajo, a partir de la doctrina sentada por la C.S.J.N., en el fallo del 21.09.04, in re “Aquino, Isacio v. Cargo Servicios Industriales SA” se ha juzgado la inconstitucionalidad de la limitación del acceso a la reparación civil, no tarifada, de los daños derivados del accidente de trabajo contenida en el art. 39, inc. 1, ley 24.557. Y en el caso, planteada la tacha de inconstitucionalidad del art. 39 de la citada ley, corresponde hacer aplicación de tal doctrina. Sala VIII, Expte. Nº 32.144/09 Sent. Def. Nº 40224 del 26/05/2014 “Barbara Javier Alejandro c/Mapra Empresa de Seguridad SRL y otro s/despido”. (Catardo-Pesino). D.T. 1 1 19 8) Accidentes del trabajo. Acción de derecho común. Derechohabientes. Hija del trabajador fallecido que se presenta iure sucessionis invocando la representación del padre del causante que había fallecido. Existencia de un acuerdo homologatorio previo celebrado por la madre del causante y sus empleadores donde se fija una suma a percibir como todo concepto. Dicho acuerdo hace cosa juzgada frente al planteo de la hija del causante. En el caso, un trabajador de profesión albañil fallece en un accidente de trabajo. La actora no se presenta en juicio por iure propio como hija del trabajador, sino iure successionis al invocar la representación (art. 3549 Cod.Civil) del padre del causante en reclamo de los derechos resarcitorios que a este último le correspondían a la fecha del deceso como consecuencia de la muerte de su hermano paterno (art. 361 Cod.Civil) con fundamento en el derecho común. La madre del trabajador fallecido y las demandadas, en otra causa, habían celebrado, por el mismo hecho, un acuerdo conciliatorio que fue homologado por el juez interviniente y en la cual, quien se había presentado como única causahabiente y legitimada para formular el reclamo en razón del previo fallecimiento del padre del causante de conformidad con lo reglado en el art. 18 de la ley 24.557, manifestó haber percibido una suma de dinero convenida y que nada más reclamaría vinculado con la extinción del vínculo. El monto convenido, fue abonado por las demandadas y percibido por la madre del trabajador fallecido. Resulta plenamente operativa la doctrina emergente del fallo plenario Nº 137 de la C.N.A.T. en los autos “Lafalce, Ángel c/Casa Enrique Schuster SA”, en cuanto establece que un acuerdo de esa índole “…hace cosa juzgada en juicio posterior donde se reclama un crédito que no fue objeto del proceso conciliado”, en la medida que los presupuestos fácticos que en la causa denuncia la actora en sustento del reclamo en esta nueva acción de indemnización por daños y perjuicios con fundamento en el derecho común y previo planteo de 2 inconstitucionalidad del art. 39.1 L.R.T. resultan idénticos a los que motivaron la acción y posterior conciliación alcanzada por quien invocó la calidad de única legitimada para reclamarlos y los demandados, de modo que aquella conciliación produce efectos de cosa juzgada en las posteriores actuaciones iniciadas por la hija del trabajador fallecido. Sala X, Expte. Nº 52.539/10 Sent. Def. Nº 22446 del 18/06/2014 “Chamorro Vázquez Lucy c/Capozzi Bruno y otros s/accidente- acción civil”. (Stortini-Brandolino). D.T. 1 19 4 c) Accidentes del trabajo. Acción de derecho común. Dueño y guardián. Custodio/vigilador. Posturas incómodas dentro del vehículo. En el caso el actor alega padecer cervicalgia y lumbalgia como consecuencia de las tareas desarrolladas para su empleadora durante larguísimas jornadas, en un reducido vehículo como acompañante custodio/vigilador, en posiciones sumamente incómodas y disfuncionales acordes a una persona de su edad y contextura física. Funda su reclamo en el art. 1113 del Cod.Civil. La demandada ensaya como defensa que las tareas de custodia, el actor las realizaba no siempre con vehículos de su propiedad, circunstancia que resulta intrascendente, por cuanto, puede la demandada no ser “dueña” de la cosa, pero esto no implica que no sea “guardiana” de los vehículos mientras se encuentran afectados al servicio encomendado por su parte. Probado el nexo de causalidad entre la las dolencias y las tareas desarrolladas por el actor, cabe responsabilizar a la demandada con fundamento en la responsabilidad objetiva prevista en el art. 1113 del Cod.Civil. Sala VII, Expte. Nº 17.045/2011 Sent. Def. Nº 46622 del 19/05/2014 “Rodríguez Pedro Oscar c/Consolidar ART SA y otros s/accidente-acción civil”. (Fontana-Ferreirós). D.T. 1 1 19 12) Accidentes del trabajo. Acción de derecho común. Prescripción. Comienzo del cómputo. El art. 4037 del Código Civil establece que el plazo de prescripción de la acción por responsabilidad civil extracontractual es de dos años y, al respecto, nuestro Máximo Tribunal ha sostenido que lo verdaderamente preponderante para comenzar el cómputo de la prescripción es el efectivo y real conocimiento que la víctima posea respecto del daño a ella inferido (CSJN, 16/12/86, LL 1987-B-255) y los perjuicios sufridos (CSJN, 3/11/88, LL 1989-C-815). Sala VIII, Expte. Nº 54.060/2012 Sent. Int. Nº 36195 del 26/05/2014 “Cabrera Velázquez, Olga c/Liberty ART SA s/accidente-acción civil”. (Catardo-Pesino). D.T. 1 10 bis Accidentes del trabajo. Ley de Riesgos. Denuncia del siniestro que el empleador efectúa a la aseguradora. Art. 6 del decreto 717/1996. A partir del momento en que la A.R.T. recibe la denuncia del siniestro cuenta con 10 días hábiles para aceptarlo o rechazarlo o decidirse por suspender el plazo mediante notificación fehaciente. Debe notificar fehacientemente al trabajador la decisión. La solución adoptada por el art. 6 del decreto 717/1996 es la misma que la prevista en el Derecho Comercial de los Seguros, según el art. 56 de la ley Nº 17.418: el silencio ante la denuncia implica aceptación del siniestro. La aceptación de la denuncia implica la admisión del presupuesto fáctico y jurídico de la presentación, como así también el consentimiento del carácter laboral del infortunio, y que no mediaron causales de exención de responsabilidad. Sala VIII, Expte. Nº 32.144/09 Sent. Def. Nº 40224 del 26/05/2014 “Barbara Javier Alejandro c/Mapra Empresa de Seguridad SRL y otro s/despido”. (Catardo-Pesino). D.T. 1 10 bis Accidentes del trabajo. Ley de Riesgos. Inconstitucionalidad del pago en forma de renta periódica. Demandada que transfiere el capital a compañía de seguros de retiro meses después de la traba de la litis. No puede considerarse que la percepción de algunas modalidades o adelantos, constituyan “un acto positivo del abandono del interés de la actora”, como adujo la demandada, ya que la parte actora había exteriorizado claramente su decisión de percibir la indemnización por muerte en un solo pago al iniciar la acción judicial varios meses antes de aquella transfiriera el capital a una compañía de seguros de retiro. Distinto fue el caso en que esta Sala consideró que la aseguradora había ajustado estrictamente su conducta a la normativa aplicable, al depositar, con razonable inmediatez respecto del infortunio, el capital a la orden de la AFJP respectiva, tal como lo establecen los arts. 15.2 y 18 de la ley 24.557. En ese caso se tuvo en cuenta que, “hasta ese momento, no había mediado ninguna objeción de la beneficiaria, pues ésta recién le notificó a la ART su oposición a la forma del pago en renta periódica un mes después de que aquélla le comunicara que había realizado el depósito” (Sala IV, 23/3/08, S.D. 93146, “Pagés, Beatriz Eloisa c/CNA Aseguradora de Riesgos del Trabajo SA y otro s/juicio sumarísimo”). Sala IV, Expte. Nº 44.198/2011 Sent. Def. Nº 97986 del 30/05/2014 “S.G.A. c/Provincia ART SA s/accidente-ley especial”. (Guisado-Marino). D.T. 1 10 bis Accidentes del trabajo. Ley de Riesgos del Trabajo. Ley 26.773. Actualización de las indemnizaciones a partir de su sanción. La vigencia de un sistema de actualización como el que surge de la ley 26.773 pone en cuestión los fundamentos de la Acordada CNAT Nº 2357 que dispone a los fines de la actualización de las sumas indemnizatorias el promedio de la tasa activa fijada por el Banco de la Nación Argentina en sus operaciones de préstamos. Dicha tasa resultaba ajustada a derecho en tanto su aplicación en el marco de lo dispuesto por la ley 25.561 implicaba no solamente la reparación de la mora incurrida, sino también preservar el crédito del trabajador, de carácter claramente alimentario, ante la alteración de las variables económicas vigentes desde el año 2002. Dado que se trata de un 3 índice de actualización basado en los incrementos salariales, la aplicación lisa y llana de la tasa de interés prevista conforme el Acta Nº 2357 resulta inadecuada tratándose de la ley 26.773. Ante la aplicación de un índice de actualización del capital de condena (RIPTE), corresponde morigerar la tasa de interés aplicable, la que debería fijarse en el 12% anual. A partir de ese momento, y ante el eventual incumplimiento del deudor, debe aplicarse la tasa activa que fija el Banco de la Nación argentina en sus operaciones de préstamos (conf. Acta CNAT Nº 2357). (Del voto de la Dra. Fontana, en minoría). Sala VII, Expte. Nº 16.637/2009 Sent. Def. Nº 46657 del 28/05/2014 “Moñagorri Gladys Mabel c/MAPFRE Argentina ART SA s/cobro de salarios”. (Fontana-Ferreirós-Rodríguez Brunengo). D.T. 1 10 bis Accidentes del trabajo. Ley de Riesgos del Trabajo. Ley 26.773. Actualización de las indemnizaciones a partir de su sanción. En relación a la actualización de las indemnizaciones por accidentes a partir de la sanción de la ley 26.773, los intereses aplicables a partir del Acta 2357 (tasa activa del Banco de la Nación Argentina) equivale, al menos aproximadamente, al costo que el acreedor impago debería afrontar para obtener, en el momento del vencimiento de la obligación el monto que el deudor moroso hubiese retenido, a la vez que pone en cabeza del deudor la responsabilidad por el resarcimiento de aquel costo, sea este real o equivalente en términos de postergación de consumos o privaciones en que el acreedor hubiese debido incurrir para hacer frente a la falta de pago oportuno de su crédito. Dicha tasa resulta apropiada para ser aplicada a los créditos judiciales, no advirtiendo razones para apartarse de ella en el caso de los créditos resultantes de accidentes del trabajo a partir de la sanción de la ley 26.773. (Del voto de la Dra. Ferreirós, en mayoría). Sala VII, Expte. Nº 16.637/2009 Sent. Def. Nº 46657 el 28/05/2013 “Moñagorri Gladys Mabel c/MAPFRE Argentina ART SA s/cobro de salarios”. (Fontana-Ferreirós-Rodríguez Brunengo). D.T. 1 10 bis Accidentes del trabajo. Ley de Riesgos del Trabajo. Ley 26.773. Actualización según RIPTE. Supuesto en que no procede. La norma del inciso 5 del art. 17 de la ley 26773 queda excluida de su aplicación, en el caso, dado que la primera manifestación invalidante se produce con anterioridad a la publicación de la ley 26.773 en el Boletín Oficial. De ninguna manera puede seguirse de la textualidad de la norma que ella se aplique a las relaciones jurídicas en las que el pago se encuentre pendiente ni tampoco que la hipótesis del inciso 6 del artículo 17 de la ley 26.773 establezca un plazo especial de aplicabilidad de la ley. Lo que el inciso 6 establece son las condiciones de cálculo del RIPTE complementando el enunciado del art. 8 de la norma que carece de precisiones al respecto. Sala V, Expte. Nº 12.298/2008 Sent. Def. Nº 76196 del 29/04/2014 “L., C.E. p/si y en rep. de su hija men. L.,M.B. y de su nieta D.S. c/T.Y.S.S.A. y otros s/indem. por fallecimiento”. (Arias Gibert-Zas). D.T. 1 10 bis Accidentes del trabajo. Ley de Riesgos. Ley 26.773. Aplicación del RIPTE a las obligaciones no canceladas al momento de su entrada en vigencia. Beneficio del art. 3 ley 26.773. Debe procederse a la aplicación del índice RIPTE que prevé el art. 17, inc. 6 de la ley 26.773 a las obligaciones emergentes de la ley 24.557 que no hubieran sido canceladas con anterioridad al momento en el cual entró en vigencia la primera, es decir, en tanto subsistan consecuencias jurídicas del infortunio que no estuvieran satisfechas en el momento indicado. En cambio cuando se trata de un accidente anterior a la vigencia de la ley 26.773, no corresponde admitir el derecho de la víctima a la indemnización adicional que prevé el art. 3 de la mencionada ley, pues este beneficio no existía en el esquema normativo anterior y, por lo tanto no puede considerarse una obligación no satisfecha. (Criterio mayoritario sentado por el Dr. Maza y la Dra. Gónzalez en los autos “Ronchi, Jorge Hugo c/Consolidar ART S.A. s/accidente-ley especial SD Nº 102453 del 11/11/2013. El Dr. Pirolo adhiere al criterio). Sala II, Expte. Nº 21.382/12 Sent. Def. Nº 103151 del 16/05/2014 “San Martin Washington Marcelo c/La Segunda ART SA s/accidente ley especial”. (Pirolo-González). D.T. 1 1 10 bis Accidentes del trabajo. Ley de Riesgos del Trabajo. Ley 26.773. Inaplicabilidad al caso de las mejoras introducidas por la ley 26.773. Ello no implica desestimar el planteo del actor fundado en la insuficiencia, injusticia e iniquidad de la reparación en caso. No resultan aplicables al caso las mejoras introducidas al respecto por la ley 26.773, ni por el dec. 1.694/2009, pues el accidente tuvo lugar con anterioridad a la publicación de las mencionadas normas en el Boletín Oficial. Sin embargo ello no implica desestimar el planteo del actor, quien ha cuestionado desde el escrito de inicio por injusta, insuficiente e inequitativa la reparación prevista en el sistema de riesgos del trabajo para el caso concreto. Así, la C.S.J.N. en el caso “Aquino” se ha expedido acerca del valor de la vida humana, y en “Milone” señala que debe evaluarse si la indemnización consagra una reparación equitativa, o sea, que resguarde el sentido reparador en concreto. En este contexto, corresponde declarar la inconstitucionalidad e inconvencionalidad de los arts. 14.2.a de la, ley 24.557 y 3 del dec. 1694/2009, en tanto su aplicación al caso determina una indemnización injusta, insuficiente e inequitativa. A los fines de cuantificar la reparación pretendida, es justo y equitativo tomar como parámetro el importe pertinente fijado por el art. 4, inc. a) de la resolución 34/2013 de la Secretaría de Seguridad social del Ministerio de Trabajo, Empleo y Seguridad Social. (Del voto del Dr. Zas, en mayoría). Sala V, Expte. Nº 38.140/2011 Sent. Def. Nº 76302 del 23/05/2014 “Quispe, Augusto Juan c/MAPFRE Argentina ART SA s/accidente-ley especial”. (Arias Gibert-Zas-Raffaghelli). D.T. 1 10 bis Accidentes del trabajo. Ley de Riesgos. Ley 26.773. Intereses. 4 La tasa activa fijada por el Acta 2357 de la C.N.A.T. a raíz del dictado de la ley 25.561 no modula únicamente intereses moratorios, sino que también refleja la alteración de la variables económicas vigentes desde el año 2002 con carácter claramente resarcitorio, por lo que de aplicarse en forma conjunta el RIPTE y dicha tasa de interés se estaría admitiendo un doble mecanismo de recaudación del valor de la prestación debida. Por eso en uso de las facultades conferidas por el art. 622 del Cód. Civil (CSJN in re “Banco Sudameris c/Belcam SA y otros” del 17/5/94) cabe aplicar sobre la indemnización establecida y su adecuación por el RIPTE, un interés moratorio del 12% anual. (Ver voto de la Dra. González en la causa “Ronchi, Jorge Hugo c/Consolidar ART SA s/accidente-ley especial” SD 102453 del 11/11/2013). Sala II, Expte. Nº 21.382/12 Sent. Def. Nº 103151 del 15/05/2014 “San Martín Washington Marcelo c/La Segunda ART SA s/accidente ley especial”. (Pirolo-González). D.T. 1 10 bis Accidentes del trabajo. Ley de Riesgos. Ley 26.773. Intereses. La tasa de interés fijada por el Acta Nº 2357 resulta inadecuada si se repara en que el importe que se sugiere diferir a condena se obtiene mediante la utilización de un índice de actualización monetaria (RIPTE). Es por ello que debe morigerarse y ser fijada en el 12% anual, desde la fecha del accidente del trabajo sufrido hasta el momento en que venza el plazo de intimación de pago previsto en el art. 132 L.O. disponiéndose que, a partir de ese momento, y frente al eventual incumplimiento del deudor, corresponderá aplicar la tasa activa que fija el Banco de la Nación Argentina para el otorgamiento de préstamos, según plantilla que difunda la Prosecretaría General de la C.N.A.T., y como así también si llegare a operar un nuevo reajuste del RIPTE, estando incumplida la sentencia, se aplicará el mismo. (Del voto del Dr. Raffaghelli, en mayoría). Sala VI, Expte. Nº 23.023/2012 Sent. Def. Nº 66329 del 12/05/2014 “Bustos Maximiliano Daniel c/Asociart ART SA s/accidente-ley especial”. (Raffaghelli-Craig-Fernández Madrid). D.T. 1 10 bis Accidentes del trabajo. Ley de Riesgos. Ley 26.773. Intereses. Si bien la ley 26.773 dispuso su ajuste con el coeficiente de evolución del RIPTE desde enero de 2010, con lo que recuperó su valor en términos reales respecto del Dec. 1694/09, ello no alcanza para recuperar el valor real de la previsión originaria del decreto 1278/00. La adecuación de la tasa de interés atento el carácter alimentario del crédito laboral debe tener como premisa alentar el pago inmediato de las obligaciones pendientes, desalentar litigios judiciales y debe ser suficiente para compensar las deudas que pudo haber tomado el trabajador siniestrado en substitución de su ingreso disminuido o impago. La aplicación de la tasa activa promedio mensual que publica el Banco Central de la República Argentina para las operaciones de descuentos comerciales, compensará la inmovilidad nominal del RIPTE durante el semestre y la rentabilidad frustrada actuando como factor conminatorio de cumplimiento. (Del voto de la Dra. Craig, en minoría). Sala VI, Expte. Nº 23.023/2012 Sent. Def. Nº 66329 del 12/05/2014 “Bustos Maximiliano Daniel c/Asociart ART SA s/accidente-ley especial”. (Raffaghelli-Craig-Fernández Madrid). D.T. 1 10 bis Accidentes del trabajo. Ley de Riesgos. Ley 26.773. Intereses. Compatibilidad con la aplicación del RIPTE. El concepto de mora está referido a la dilación o tardanza en cumplir la obligación, por parte del deudor. Es decir que los intereses compensatorios constituyen el reconocimiento de la privación que sufre el damnificado por no disponer del capital desde que naciera la deuda. De lo contrario se vería perjudicado el trabajador, al ver disminuido el valor de su crédito por el mero transcurso del tiempo. Resulta una génesis distinta en torno a la aplicación del índice RIPTE previsto en la ley 26.773 y la aplicación de intereses, como accesorio del capital, pues en el primer caso se trata de la aplicación de un coeficiente de actualización, mientras que el segundo responde a la privación que sufrió el acreedor por el no uso del capital. Sala VII, Expte. Nº 18.667/12 Sent. Def. Nº 46706 del 30/05/2014 “Rosa, Alejandro Maximiliano c/La Segunda ART SA s/accidente-ley especial”. (Rodríguez Brunengo-Ferreirós). D.T. 1 10 bis Accidentes del trabajo. Ley de Riesgos. Ley 26.773. Modo en que debe ser aplicado el índice RIPTE. Los arts. 8 y 17 apartado 6 no disponen la actualización de las obligaciones indemnizatorias adeudadas sino de los importes del art. 11 apartado 4 de la ley 24.557 y de los valores de referencia de los arts. 14 y 15, convertidos en mínimos garantizados por el decreto 1694/2009, montos a los que los jueces deben acudir a la hora de determinar la cuantía dineraria de las reparaciones correspondientes. Las expresiones contenidas en los considerandos y en el texto de los artículos de las resoluciones 34/2013 y 3/2014 de la Secretaría de Seguridad Social parecen inequívocas al limitar los alcances de la operatividad del RIPTE sobre “los valores de las compensaciones dinerarias adicionales de pago único determinadas en el art. 11 de la ley 24.557 y sobre los pisos mínimos establecidos en el Decreto 1694/09”. (Ver voto del Dr. Maza en la causa “Giménez A. c/Provincia ART SA, SD 103033 del 21/04/2014). Sala II, Expte. Nº 21.382/12 Sent. Def. Nº 103151 del 16/05/2014 “San Martín Washington Marcelo c/La Segunda ART SA s/accidente-ley especial”. (Pirolo-González). D.T. 1 10 bis Accidentes del trabajo. Ley de Riesgos. Ley 26.773. Posibilidad de introducir su aplicación al caso con posterioridad a la traba de la litis. Corresponde tratar en la Alzada los planteos referidos a la posibilidad de introducir peticiones relativas a la aplicabilidad de los beneficios emergentes de la ley 26773 en cualquier etapa del proceso posterior a la traba de la litis, en tanto se hubiera respetado el principio de bilateralidad (este fue el criterio manifestado por la mayoría, Dr. Maza y Dra. González, en la causa “Ronchi, 5 Jorge Hugo c/Consolidar ART SA s/accidente ley especial” SD 102453 del 11/11/2013. El Dr. Pirolo adhiere por razones de economía procesal, pero considera que darle tratamiento a las cuestiones que no fueron sometidas a consideración del juez de primera instancia en el escrito de demanda, podría implicar fallar extra petita, soslayar el principio de congruencia, y, por esa vía, afectar la garantía al derecho de defensa en juico de la contraparte). Sala II, Expte. Nº 21.382/12 Sent. Def. Nº 103151 del 16/05/2014 “San Martín Washington Marcelo c/La Segunda ART SA s/accidente-ley especial”. (Pirolo-gonzález). D.T. 1 10 bis Accidentes del trabajo. Ley de Riesgos. Ley 26.773. RIPTE. Situaciones a las que se aplica. Art. 3 Cód. Civil. Resulta procedente la aplicación inmediata del decreto 1694/09 con las modificaciones de la ley 26.773 pues repara equitativamente y adecuadamente el perjuicio sufrido (art. 19 CN) y no importa una violación del principio de irretroactividad de la Ley, sino su aplicación inmediata. Dicha aplicación rige las consecuencias en curso de un accidente. Esto en función del art. 3 del código Civil que prescribe que las nuevas leyes se aplicarán a: 1) las nuevas situaciones o relaciones jurídicas que se creen a partir de la vigencia de esta Ley, y 2) las consecuencias que se produzcan en el futuro, de relaciones o situaciones jurídicas ya existentes al momento de vigencia de la Ley. En estos casos no hay retroactividad, ya que la nueva ley sólo afecta a las consecuencias que se produzcan en el futuro. (Ver en el mismo sentido el precedente “Serrano Silvina Irene c/Mapfre Argentina ART SA s/acción de amparo” del 30/08/2012, SD 64278). Sala VI, Expte. Nº 19.484/2011 Sent. Def. Nº 66353 del 15/05/2014 “Curt Mario César c/SMG ART SA s7accidente-ley especial”. (Craig-Raffaghelli). D.T. 10 bis Accidentes del trabajo. Ley de Riesgos. Ley 26.773. Supuesto en el que al momento de su entrada en vigencia no se había cancelado el pago de la reparación adeudada. El inciso 6 del art. 17 de la ley 26.773, dispone la aplicación del índice RIPTE para las prestaciones de la ley 24.557, y contrariamente a lo que surge de otras normas de la misma ley, en este caso no se sujeta la aplicación de aquél a ninguna otra consideración ni plazo, por lo que corresponde concluir que a partir de la entrada en vigencia de la ley 26.773, las prestaciones de la ley 24.557 deben ser ajustadas según el índice mencionado. Por otra parte, esa conclusión resulta en un todo de acuerdo con lo dispuesto por el art. 3 del Cod.Civil en tanto dispone que las leyes son aplicables a las consecuencias presentes de relaciones y situaciones jurídicas preexistentes, lo que ocurre en el caso en tanto habiéndose cancelado el pago de la reparación adeudada existen consecuencias presentes del infortunio que dio origen al reclamo. Sala VII, Expte. Nº 16.637/2009 Sent. Def. Nº 46657 del 28/05/2014 “Moñagorri Gladys Mabel c/MAPFRE Argentina ART SA s/cobro de salarios”. (Fontana-Ferreirós-Rodríguez Brunengo). D.T. 1 10 bis Accidentes del trabajo. Ley de Riesgos del Trabajo. Ley 26.773. Supuesto en que no se aplica. En el caso queda excluida la posibilidad de aplicación de las disposiciones de la ley 26.773 ya que la primera manifestación invalidante se produce con anterioridad a la publicación de la mencionada ley en el Boletín Oficial. En esta inteligencia la norma del inciso 6 del art. 17 de la dicha ley no determina la aplicabilidad del RIPTE a todas las causas sino las pautas de ajuste que se aplicarán desde su entrada en vigencia a las contingencias cuya primera manifestación invalidante se produzca con posterioridad a la publicación de la ley. De ninguna manera puede seguirse de la textualidad de la norma que ella se aplique a las relaciones jurídicas en las que el pago se encuentre pendiente ni tampoco que se establezca un plazo especial de aplicabilidad de la ley. Lo que el inc. 6 establece son las condiciones de cálculo del RIPTE complementando el enunciado del art. 8 de la norma que carece de precisiones al respecto. La excepción a esta situación es la existencia de gran invalidez atento lo establecido en el inciso 7 del art. 17 que establece que el importe y la actualización de las prestaciones por gran invalidez se aplicará “…con independencia de la fecha de determinación de esa condición”. A contrario sensu, al no tratarse en el caso de prestaciones por gran invalidez, ha de estarse a la fecha de la primera manifestación invalidante. (Del voto del Dr. Arias Gibert, en minoría). Sala V, Expte. Nº 38.140/2011 Sent. Def. Nº 76302 del 23/05/2014 “Quispe, Augusto Juan c/MAPFRE Argentina ART SA s/accidente-ley especial”. (Arias Gibert-Zas- Raffaghelli). D.T. 1 10 bis Accidentes del trabajo. Ley de Riesgos. Omisión de examen preocupacional. En función de lo dispuesto por el art. 9 del Decreto 1338/96 como la eximición de responsabilidad contemplada en el art. 6 de la ley 24557, va de suyo que si no se realizan los exámenes preocupacionales u ocupacionales correspondientes, la empresa para la que preste servicios el trabajador y consiguientemente la A.R.T. resultarán responsables y dicha omisión creará la presunción de que las dolencias de que se trate tendrán relación de causalidad adecuada con las tareas cumplidas. Para desvirtuar dicha presunción la empleadora demandada y, en su caso, la A.R.T., deberán demostrar acabadamente que las tareas no han causado daño alguno. Sala VI, Expte. Nº 15.673/2010 Sent. Def. Nº 66324 del 07/05/2014 “López Francisco Eduardo c/Ardas SRL y otro s/accidente-acción civil”. (Fernández Madrid-Craig). D.T. 7 Aportes y contribuciones a entidades gremiales. Cuota sindical. Cuotas de solidaridad a cargo de empleados de UTEDYC. Art. 41.2 del C.C.T. 462/06. En el caso, los actores, empleados del Club Universitario de Buenos Aires, demandaron a UTEDYC a fin de que se declaren inaplicables a su respecto las disposiciones del art. 41.2 del CCT 462/06 por considerar que la cuota de solidaridad allí establecida resulta excesiva y, por lo tanto ilegítima. Es deber del Poder Judicial como parte del Estado Nacional controlar la existencia de la 6 razonabilidad de este peculiar instrumento jurídico denominado “cuota de solidaridad” puesto que, un uso irrazonable por las partes del C.C.T. pone en riesgo la libertad sindical garantizada por el Convenio Nº 87 de la O.I.T.. En el caso, en la medida en que el sindicato actuó en beneficio de todo el personal comprendido en el C.C.T. 462/06 en las negociaciones realizadas, no puede válidamente concluirse que medió una indebida retención por parte de la empresa, ni que el sindicato ha incurrido en una práctica ilegal al perseguir el cobro de la contribución en cuestión. La cuestión se centra en evaluar la razonabilidad del alcance temporal de la contribución. Sólo puede justificarse en cierta medida o proporci/ón pero no para regir sine die. Sala II, Expte. Nº 1.845/2010 Sent. Def. Nº 103109 del 13/05/2014 “Vaccaro Maximiliano Gabriel y otros c/Unión de Trabajadores de Entidades Deportivas y Civiles UTEDYC s/acción declarativa”. (González-Maza). D.T. 7 Aportes y contribuciones a entidades gremiales. Cuota sindical. Cuotas de solidaridad a cargo de empleados de UTEDYC. Art. 41.2 del C.C.T. 462/06. La validez de las llamadas cuotas de solidaridad depende de que abarquen tanto a trabajadores afiliados como no afiliados. La incidencia práctica de la norma establecida en el art. 41.2 de la C.C.T. 462/06 afecta exclusivamente a los trabajadores no afiliados a la entidad sin límite temporal, y en una medida primero idéntica y luego muy aproximada a la cuota sindical de quienes voluntariamente asumieron dicha carga, y a cambio de otros y mayores beneficios. La cuestión central en la materia no se ubica en la procedencia o validez de este tipo de cláusulas sino en la importancia económica que éstas puedan revestir ya que podría implicar de hecho casi una afiliación forzada respecto de quienes no se han asociado voluntariamente al sindicato, lo que resulta atentatorio contra la libertad sindical individual en su faz negativa. Si la incidencia económica de la contribución (medida en base a porcentuales del salario o por su duración en el tiempo) resultara de alguna forma asimilable a la obligación asumida voluntariamente por los afiliados al sindicato, se estaría desalentando por vía indirecta la eventual afiliación de los trabajadores a otras entidades gremiales que, en tal caso verían casi duplicado el costo de su participación en la vida sindical. Sala II, Expte. Nº 1.845/2010 Sent. Def. Nº 103109 del 13/05/2014 “Vaccaro Maximiliano Gabriel y otros c/Unión de Trabajadores de Entidades Deportivas y Civiles UTEDYC s/acción declarativa”. (González-Maza). D.T. 13 6 Asociaciones profesionales de trabajadores. Encuadramiento sindical.Conflictos de encuadramiento sindical suscitados entre dos o más asociaciones sindicales. Carencia del empleador de legitimación activa para intervenir en ellos. El empleador no tiene legitimación activa para impugnar la decisión de la entidad gremial de grado superior o, en su caso, la de la autoridad administrativa laboral, por la que se define un conflicto de encuadramiento sindical suscitado entre dos o más asociaciones sindicales. Decidir una disputa entre gremios relativa al encuadramiento sindical, significa definir cuál de esos sindicatos está llamado a ejercer la representación colectiva de un conjunto determinado de trabajadores/as. Predicar que un empleador puede participar en la elección del gremio con quien tendrá que negociar sobre los intereses colectivos de los/as trabajadores/as, es algo así como decir, en el plano individual, que el empleador demandado en un juicio laboral, tienen la potestad de opinar o decidir acerca de quién va a ser el abogado de la persona trabajadora que le reclama un crédito, aserción que cualquiera consideraría insensata o ilógica. Sala I, Expte. Nº 19.545/13 Sent. Int. Nº 65.564 “Federación Argentina de Empleados de Comercio y Servicios c/Comité Arbitral de la Confederación General del Trabajo s/ley de asociaciones sindicales”. (Vázquez-Vilela). D.T. 13 6 Asociaciones profesionales de trabajadores. Encuadramiento sindical. Derecho de libertad sindical. No intervención estatal y patronal. Ley 23551. El derecho de libertad sindical se encuentra garantizado desde la más alta grada del derecho positivo, por el art. 14 bis C.N. y el Convenio 87 de la Organización Internacional del Trabajo sobre Libertad Sindical y Protección del Derecho de Sindicación (1948), ratificado por la Argentina mediante la ley 14.932. Dentro de los poderes colectivos negativos que son reflejo y se derivan del derecho de libertad sindical, se ubican, entre otros, además del principio de la no intervención estatal, que recoge el art. 56 de la ley 23.551, la regla de no intervención patronal. Justamente el llamado principio de pureza, que sólo admite que se aglutinen trabajadores/as o empleadores/as y que no haya margen para la constitución de asociaciones mixtas, se explica desde la vigencia de la libertad sindical. La prohibición de la intervención estatal y de la de intervención patronal son consagradas por el art. 6 de la ley 23.551 de Asociaciones Sindicales. No puede reconocérsele al empleador la potestad de intervenir en las controversias de encuadramiento sindical, puesto que si se le permitiera opinar acerca de quién debe representar al colectivo de personas que le prestan servicios dependientes, se estaría indirectamente habilitándolo a intervenir en la elección del sujeto que representará al sector que pugna con sus intereses particulares. Sala I, Expte. Nº 19.545/13 Sent. Int. Nº 65.564 “Federación Argentina de Empleados de Comercio y Servicios c/Comité Arbitral de la Confederación General del Trabajo s/ley de asociaciones sindicales”. (Vázquez-Vilela). 7 D.T. 15 Beneficios sociales. Art. 103 bis L.C.T.. Plan médico-asistencial. No posee carácter remuneratorio. El art. 1 del decreto reglamentario 137/97 dispone que “…los gastos efectuados para el pago de servicios médicos de asistencia y prevención al trabajador o a su familia a su cargo se considerarán como “gastos médicos” y su reintegro por parte del empleador tendrá el carácter de beneficio no remuneratorio”. Es concepto se asimila a la mención de los “gastos médicos” expresados en el art. 103 bis L.C.T. y caracterizados como beneficios sociales no remuneratorios, de modo que se trata de un aporte extra que no se concede en función del tiempo del trabajador ni de su rendimiento. No es una contraprestación del trabajo sino una protección que se otorga en ocasión y en la medida de ciertas necesidades emergentes del trabajador. Constituye un modo de asunción, por parte del empleador, de una contingencia social que puede aleatoriamente afectar o no a sus empleados. Consecuentemente, no procede otorgar a dicho concepto carácter remuneratorio. Sala X, Expte. Nº 17.434/11 Sent. Def. Nº 22427 del 13/06/2014 “Fernández César Daniel c/I.P. SA y otro s/despido”. (Stortini-Brandolino). D.T. 15 Beneficios sociales. Sumas percibidas en concepto de “Vistage”. La participación del actor (gerente general) en las reuniones de CEOs a las que accedía por suscripción del servicio “VISTAGE” contratado por su empleadora, tenía por finalidad el otorgamiento de cursos de perfeccionamiento y seminarios para altos ejecutivos, circunstancia que lo encuadra en las previsiones del art. 10 bis inc. h) L.C.T. como beneficio social, esto es como una prestación ajena a la base remuneratoria. Sala X, Expte. Nº 17.434/11 Sent. Def. Nº 22427 del 13/06/2014 “Fernández César Daniel c/I.P. SA y otro s/despido”. (Stortini-Brandolino). D.T. 18 Certificado de trabajo. Multa del art. 80 L.C.T.. Intimación prevista en el art. 146/01 cuando media negación de la relación laboral. Improcedencia. Ante el caso de que la empleadora haya negado la existencia de relación de trabajo, para la procedencia de la multa del art. 80 L.C.T. no debe exigírsele al trabajador la remisión de la intimación prevista por el dec. 146/01 y constituir en mora al empleador luego de transcurridos treinta días de la extinción del vínculo, ya que la aludida negativa del contrato de trabajo revela su postura adversa al reclamo de entrega de certificaciones laborales. Sala I, Expte. Nº 17.254/2008 Sent. Def. Nº 89838 del 15/05/2014 “Cabrera Alberto Daniel c/Jacmel SA y otro s/despido”. (Vilela-Vázquez). D.T. Cesión o cambio de firma. Transmisión de la explotación. Extensión de la responsabilidad solidaria al cedido. Arts. 225 y 228 L.C.T. Para que se configure el supuesto previsto en los arts. 225 y 228 L.C.T., basta para ello con que quien lo explota sea desplazado por un nuevo titular en el establecimiento de que se trate, pues las normas de referencia consagran un concepto amplio de transferencia del establecimiento por lo que, cualquiera fuera el título por el que se concrete la transferencia o transmisión, la circunstancia dirimente para establecer la extensión de responsabilidad es si ha habido un cambio en la titularidad en la explotación comercial o industrial de un mismo establecimiento o negocio. Por aplicación de la doctrina establecida en el acuerdo Plenario Nº 289 “Baglieri Osvaldo D c/Nemec Francisco y Cía SRL y otro” (8/8/97), resulta indudable que la demandada debe hacerse cargo de las obligaciones emergentes del contrato de trabajo ya extinguido que la actora había mantenido con quien tuvo a su cargo la explotación del establecimiento (lavadero de autos) con anterioridad a la transferencia, transmisión o cesión de la explotación empresaria aun cuando haya mediado una transferencia de fondo de comercio, porque la ley 11.867 no desplaza la operatividad de las normas de orden público laboral que regulan la transmisión de un establecimiento. Sala II, Expte. Nº 34.853/11 Sent. Def. Nº 103137 del 14/05/2014 “De los Santos Jaqueline Elizabeth c/Bocchietti María Zulema s/extensión resp. solidaria”. (Pirolo-Maza). D.T. 27 18 g) Contrato de trabajo. Contratación y subcontratación. Solidaridad. Casos particulares. Art. 30 L.C.T.. Solidaridad del art. 32 ley 22250. Ámbito de aplicación. El párrafo incorporado por la ley 25013 al art. 30 L.C.T. no establece que sus normas sean aplicables a las relaciones regidas por el estatuto de la construcción independientemente de lo establecido por el art. 32 de la ley 22.250; sino que, por el contrario, ello sólo es posible dentro del marco de solidaridad específico previsto por el citado art. 32 del estatuto. La cuestión tiene significativa importancia porque el art. 30 L.C.T. exige que exista coincidencia entre la actividad de la contratista y la normal y específica propia del establecimiento del contratante principal; en tanto que el art. 32 de la ley 22.250 sólo prevé la posibilidad de extender solidariamente la responsabilidad contemplada en la norma a los empresarios, propietarios y profesionales cuando éstos se desempeñen “como constructores de obra”. Por lo tanto, en el esquema previsto por el referido art. 32 –dentro de cuyo marco específico de regulación pueden considerarse aplicables las disposiciones del art. 30 L.C.T.- sólo es posible extender la responsabilidad en forma solidaria al contratante principal, en la medida que éste despliegue una actividad comprendida en el ámbito de la industria de la construcción (Voto del Dr. Pirolo al cual adhiere la Dra. González por razones de economía procesal). Sala II, Expte. Nº 22.062/07 Sent. Def. Nº 103163 del 16/05/2014 “Farías Manuel domingo c/Gamma SRL y otros s/despido”. (Pirolo-González). D.T. 27 18 g) Contrato de trabajo. Contratación y subcontratación. Solidaridad. Casos particulares. Empresa de la construcción contratista de Telecom. Inexistencia de responsabilidad solidaria de Telecom. 8 La construcción de obras no es una actividad que pueda considerarse incluida en el objeto propio de la que despliega en su establecimiento Telecom Personal S.A. por lo que no se verifica el presupuesto esencial contemplado por el art. 30 L.C.T., en tanto su actividad específica propia no coincide con la de quien le proveía el servicio para cumplir con el objeto de referencia. Es evidente que una empresa que se dedica a la prestación de servicios de telefonía móvil no desarrolla la actividad específica propia del establecimiento de otra que se dedica a la construcción de obras. De allí que no pueda extenderse la responsabilidad de la empresa constructora a Telecom Personal S.A.. El párrafo incorporado por la ley 25.013 al art. 30 L.C.T. no desplaza el régimen de solidaridad previsto por el art. 32 de la ley 22.250 ni opera en forma “paralela” a éste ni, por lo tanto, desplaza la operatividad de la doctrina que emerge del Ac. Pl. Nº 265. (Voto del Dr. Pirolo al cual adhiere la Dra. González por razones de economía procesal). Sala II, Expte. Nº 22.062/07 Sent. Def. Nº 103163 del 16/05/2014 “Farías Manuel domingo c/Gamma SRL y otros s/despido”. (Pirolo-González). D.T. 27 18 j) Contrato de trabajo. Contratación y subcontratación. Solidaridad. Condena al Estado. El Estado Nacional no es sujeto de la L.C.T., es decir del derecho del trabajo en su totalidad, y, por lo tanto, no puede ser convertido en tal por una vía indirecta como la dispuesta en los arts. 29, 30, 31 ó 225 a 229 de dicha ley. La única forma en que un organismo de la administración resulte alcanzado por una norma laboral –sea cual fuere- es que, con anterioridad al acto en virtud del cual se formula el reclamo, hubiera habido expresa sujeción de aquel a dicho régimen, es decir, que la aplicabilidad de cualquier disposición del derecho del trabajo depende de un acto expreso en ese sentido o bien de una disposición del derecho administrativo (art. 2 inc. a L.C.T.). Por lo tanto, mientras no exista ni lo uno ni lo otro la administración pública resulta ajena a la órbita del derecho del trabajo y, por ende, a la extensión de responsabilidad. Sala X, Expte. Nº 49.143/11 Sent. Def. Nº 22313 del 16/05/2014 “Gillert Daniel Marcelo c/Fundación Madres de Plaza de Mayo y otros s/despido”. (Stortini-Brandolino). D.T. 27 5 Contrato de trabajo. De empleo público. Trabajador de la Comisión Nacional Reguladora del Transporte. Relación de trabajo regida por la L.C.T.. La Comisión Nacional Reguladora del Transporte es una persona jurídica estatal de carácter público. El decreto 1388/96 que dio origen a la entidad autárquica, en su art. 3 dispuso que “La Comisión Nacional de Regulación del Transporte de la Secretaría de Obras Públicas y Transporte del Ministerio de Economía y Obras y Servicios Públicos se regirá en su relación con el personal, por las prescripciones contenidas en la ley 20.744 –L.C.T.”, lo cual al ser emanado del PEN configura conforme lo prevé el art. 2 de la L.C.T., un acto expreso de voluntad de incorporación al régimen de la citada ley. Sala II, Expte. Nº 14.656/2012 Sent. Def. Nº 103210 del 30/05/2014 “Bento Arturo Damián c/Comisión Nacional Reguladora del Transporte s/despido”. (Pirolo-Maza). D.T. 27 24 Contrato de trabajo. Empleados de AFJP. Remuneración. “Bonus calidad de atención”. No cabe hacer lugar al reclamo efectuado por la trabajadora que se desempeñaba como informadora externa para la A.F.J.P. demandada por diferencias indemnizatorias y salariales pretendidas por considerar que mediaron rebajas comisionales, puesto que no se dedicaba a la venta de productos de retiro, sino que el “bonus extra” por ella percibido es un rubro que la AFJP demandada liquidaba considerando variables vinculadas con la calidad de atención a los clientes y que no puede ser asimilado a las comisiones que pretende. Sala II, Expte. Nº 49.547/2009 Sent. Def. Nº 103150 del 16/05/2014 “Dure María Ileana c/Máxima SA AFJP y otros s/despido”. (Pirolo-González). D.T. 27 21 Contrato de trabajo. Ley de Empleo. Multas de los arts. 8, 9, y 10 de la ley 24.013. Prescripción. Los arts. 8, 9 y 10 de la ley 24.013 no establecen obligaciones de tracto sucesivo que puedan ser divididas en períodos, sino indemnizaciones únicas que, de conformidad con lo establecido por el art. 256 L.C.T., comienzan a prescribir a partir de su exigibilidad. Salvo la disposición establecida en el art. 11, in fine de la misma ley –según la cual a efectos de calcular las indemnizaciones de los arts. 8, 9 y 10 sólo se computarán las remuneraciones devengadas hasta los dos años anteriores a la fecha de entrada en vigencia de la Ley Nacional de Empleo- no existe para atrás límite alguno en el cómputo de los salarios, ya que éstos funcionan sólo como módulo de cálculo y, al no ser créditos ni derechos, no se encuentran sujetos a extinguirse por prescripción. Sala I, Expte. Nº 17.254/2008 Sent. Def. Nº 89838 del 15/05/2014 “Cabrera Alberto Daniel c/Jacmel SA y otro s/despido”. (Vilela-Vázquez). D.T. 27 17 Contrato de trabajo. Profesiones liberales. Integración a la empresa para el logro de los fines de esta. Si bien cuando se trata de trabajadores con conocimientos específicos del área que les compete, como en el caso de los profesionales, suele faltarle fuerza a la nota de dependencia técnica, presente en otros contratos de trabajo, ello no implica en modo alguno que deba descartarse la existencia de relación laboral, porque justamente esa capacidad de desenvolverse con independencia dentro del marco del área específica determinada por su especialidad o sus conocimientos, es uno de los extremos tenidos en cuenta por un empleador a la hora de incorporar a su plantel a este tipo de profesionales. Lo que importa considerar en el caso de los trabajadores 9 profesionales es si están integrados junto con otros medios personales y materiales a la empresa demandada para el logro de los fines de ésta, ya que como consecuencia de las sensibles modificaciones en su inserción en el campo social que han sufrido las profesiones liberales, la excepcionalidad que antes se asignaba al desempeño como dependiente hoy ya es un fenómeno común. Sala X, Expte. Nº 49.143/11 Sent. Def. Nº 22313 del 16/05/2014 “Gillert Daniel Marcelo c/Fundación Madres de Plaza de Mayo y otros s/despido”. (Stortini-Brandolino). D.T. 27 14 Contrato de trabajo. Transitorios. Art. 29 y 29 bis L.C.T.. Cuando se trata de una agencia autorizada a suministrar mano de obra a terceros, y no se prueba la eventualidad de los servicios, no cabe considerar a la intermediaria como “empleadora” sino como simple responsable solidaria por haber intermediado en forma fraudulenta. Si no está probada la eventualidad de los servicios, resulta indiscutible que la usuaria asumió el carácter de empleadora directa de éstos y que, por lo tanto, resulta responsable como tal por las obligaciones derivadas del vínculo. (Criterio mayoritario de la Sala, al cual adhiere por razones de economía procesal el Dr. Pirolo). Sala II, Expte. Nº 12.197/2012 Sent. Def. Nº 103134 del 14/05/2014 “Pintos Patricia Alejandra c/IBM Argentina SA y otro s/despido”. (Pirolo-Maza). D.T. 27 14 Contrato de trabajo. Transitorios. Arts. 29 y 29 bis L.C.T.. Sujeto “empleador” pluripersonal. El texto del art. 29 y el art. 29 bis L.C.T. (modif. por la ley 24.013), no autorizan en ningún caso a considerar a la usuaria de servicios prestados por trabajadores contratados por intermedio de terceros liberada de la responsabilidad que compete a un empleador (ni siquiera cuando se trate de servicios eventuales y la intermediaria hubiera sido una agencia autorizada), por lo que la usuaria se encuentra comprendida en la directiva general que emana de esas normas según la cual debe ser considerada como “empleadora” directa de los servicios del trabajador. La usuaria directa y la agencia intermediaria deben ser consideradas como integrantes de un sujeto “empleador” pluripersonal (art. 26 L.C.T.). (Criterio en minoría del Dr. Pirolo, aunque, por razones de economía procesal, adhiere al criterio mayoritario del Dr. Maza y de la Dra. González). Sala II, Expte. Nº 12.197/2012 Sent. Def. Nº 103134 del 14/05/2014 “Pintos Patricia Alejandra c/IBM Argentina SA y otro s/despido”. (Pirolo-Maza). D.T. 28 4 Convenciones colectivas. Celebración y homologación. Efectos. Los convenios colectivos de trabajo, una vez homologados por la autoridad de aplicación, adquieren efectos erga omnes para todos los trabajadores y empleadores del ámbito de actividad previsto en ellos, aun cuando no lo hayan suscripto, en la medida en que se los pueda considerar representados real o fictamente mediante la convocatoria que la autoridad de aplicación efectuara al momento de la negociación –art. 4 ley 14.250-, salvo obviamente el caso de los convenios de empresa. Sala IV, Expte. Nº 27.138/2012 Sent. Def. Nº 97907 del 12/05/2014 “Braunstein Tamara Iliana c/Palermo Films SA y otro s/diferencias de salarios”. (Guisado-Marino). D.T. 28 2 Convenciones colectivas. Encuadramiento convencional. Servicios de merchandising. C.C.T. nº 130/75. En el caso la actividad principal de la demandada es la provisión de servicios de merchandising, para empresas comercializadoras de productos de venta masiva en supermercados. Sostiene que dadas las características del régimen de trabajo eventual, sus actividades no se encuentran comprendidas en el acuerdo suscripto por las cámaras empresarias representativas de la actividad mercantil, homologado por disposición C.N.R.T. 5883/91. Si bien es cierto que su actividad empresarial es proveer los servicios descriptos, en locales comerciales de forma permanente o transitoria, ello no implica que sus empleados puedan considerarse eventuales o temporarios. Y por no surgir de la prueba documental registros de empleados bajo la modalidad de personal eventual o temporario, debe concluirse que no hay nada por lo cual la parte actora no pueda estar bajo las pautas del C.C.T. Nº 130/75. Sala VII, Expte. Nº 54.237 Sent. Def. Nº 46695 del 30/05/2014 “Federación Argentina de Empleados de Comercio y Servicios c/Sur Market SA s/cobro de aportes o contribuciones”. (Ferreirós-Rodríguez Brunengo). D.T. 33 1 Despido. Abandono de trabajo. Supuesto en que no se configura. Trabajador que toma su licencia anual por vacaciones sin respetar el procedimiento de la empresa. Si bien, a los efectos de usufructuar su licencia anual, el actor ignoró el procedimiento de la empresa –que responde a la facultad legalmente establecida para la determinación de las fechas de goce, conf. art. 154 L.C.T.-, esta inobservancia o transgresión no puede llevar a considerar que hubo abandono del contrato de su parte, sino una conducta injustificada y pasible de sanción proporcionada en la medida en que desconoció las facultades de organización del empleador, lo que encierra un claro incumplimiento de los deberes a su cargo como empleado subordinado. Y siendo que a su vez informó a la empresa que gozaría de su licencia anual por vacaciones, ello evidencia que no se ha configurado el supuesto específico de abandono de trabajo (art. 244 L.C.T.) dado que no se encuentra presente el requisito subjetivo que la doctrina y jurisprudencia coinciden al exigir el denominado animus abdicativo, es decir la verificación de que medie un comportamiento concluyente del trabajador ausente del empleo que permita concluir que ha abandonado el contrato. Sala II, Expte. Nº 21.304/2010 Sent. Def. Nº 103169 del 22/05/2014 “Maidana Pablo Daniel c/Sagardi SA s/despido”. (Maza-Pirolo). 10 D.T. 33 7 Despido. Gravedad de la falta. Trabajador ausente de su domicilio durante una visita médica. La ausencia del actor en su domicilio que impidió el control médico patronal, podría ser considerado un incumplimiento contractual susceptible de ser sancionado, pero carente de la gravedad que exige el art. 242 L.C.T. para la configuración de la injuria que justifica el despido. Sala IV, Expte. Nº 33.495/2012 Sent. Def. Nº 97944 “Cagliari Marcelo David c/Línea Expreso Liniers SA s/despido”. (Guisado-Pinto Varela). D.T. 33 5 Despido del delegado gremial. Vocal suplente del directorio de un sindicato. Frente al despido del actor corresponde el pago de la indemnización prevista en el art. 52 ley 23.551, ya que al momento del despido era vocal suplente del directorio de un sindicato, es decir que había sido designado en un cargo representativo en un organismo sindical con personería gremial. Si bien no se acreditó en el caso que efectivamente hubiera ejercido funciones, no hay razón alguna para restringir el alcance de la norma. Una posición contraria implicaría colocar en una situación de mayor precariedad al contrato de quien ha sido designado suplente –por decisión de sus electores- pues carecería de la tutela legal aunque, frente al empleador, no deje de ser un representante del sindicato. De otro modo se le asignaría una tutela restringida y condicionada al ejercicio efectivo de la representación, expuesto a todos los riesgos sin gozar de las garantías previstas en la ley. Sala IV, Expte. Nº 46.465/2010 Sent. Def. Nº 97976 del 30/05/2014 “Poggi Bernardo Antonio Dante c/Safe Flight SA s/despido”. (Pinto Varela-Guisado). D.T. 33 12 Despido por maternidad. La adopción se encuentra jurídicamente equiparada a la maternidad. Indemnización de los arts. 178 y 182 L.C.T.. La adopción está equiparada jurídicamente a la maternidad, como lo reconoce la ley Nº 24.714 de Asignaciones Familiares, al establecer una asignación por adopción, por lo que, en el caso, debe ser acogido el reclamo de la indemnización especial peticionada con fundamento en los arts. 178 y 182 L.C.T. toda vez que la accionante puso en conocimiento de su empleadora que había obtenido la guarda con fines adoptivos de un niño con anterioridad a la fecha del distracto. En ese sentido resulta de aplicación la “Convención sobre eliminación de todas las formas de discriminación contra la mujer” de jerarquía constitucional (conf. art. 75, inc. 22 C.N.), el art. 16 1 f), y la “Convención sobre los Derechos del Niño”, también de jerarquía constitucional, que protege la adopción de niños. Sala V, Expte. Nº 13.904/2010 Sent. Def. Nº 76238 del 08/05/2014 “Af Geijerstam Marianne Elena c/Alianza Francesa s/despido”. (Zas-Arias Gibert). D.T. 33 12 Despido por maternidad. Período de excedencia. Art. 183 L.C.T.. Despido discriminatorio. La protección de la maternidad no se agota con la presunción del art. 178 L.C.T. o, lo que es lo mismo, no puede válidamente considerarse que fuera de dicho período no exista la protección legal y/o constitucional tanto para la trabajadora que fue madre como para el interés general del niño. La situación de excedencia reglamentada en el art. 183 y sgtes L.C.T., se encuentra indudablemente comprendida en la protección especial que otorgan los tratados internacionales así como los principios constitucionales, toda vez que no es otra cosa que una extensión del descanso por maternidad obligatorio contemplado por la ley. Si el despido fue producido durante la licencia fundada en descanso por maternidad, como es la excedencia, el distracto resulta ilegal en los términos del Convenio 103 de la O.I.T.; y se encuentra “prohibido bajo pena de sanciones” conforme el art. 11.2 de la Convención sobre la eliminación de todas las formas de discriminación contra la mujer. Sala IX, Expte. Nº 17.839/10 Sent. Def. Nº 19453 del 30/05/2014 “Maidana Amelia Isabel c/Magalcuer SA s/despido”. (Pompa-Balestrini). D.T. 33 13 Despido por matrimonio. Trabajador varón. Presunción. En el caso del trabajador varón no rige la presunción legal que rige respecto de la mujer trabajadora en el art. 182 L.C.T. (despido por causa de matrimonio). Si bien el fallo plenario “Drewes Luis c/Coselia S.A.” ha sentado doctrina acerca del derecho que le asiste al trabajador a percibir la indemnización especial a la que se refiere el referido artículo, lo cierto es que no le otorga esa amplia protección que se reconoce a la mujer en el Título VII de la L.C.T. en materia de presunciones, lo que implica que el dependiente de sexo masculino que pretenda que el despido dispuesto se impute a dicha causa, debe acreditar que su cesantía tuvo vinculación y fue consecuencia del matrimonio contraído. Sala IX, Expte. Nº 47.103/10 Sent. Def. Nº 19416 del 30/05/2014 “Vega Giménez Juan Maximiliano c/Yell Argentina SA s/despido”. (Balestrini-Pompa). D.T. 34 2 Indemnización por despido. Art. 2 ley 25.323. Supuesto de desvinculación por el art. 212, 4º párrafo L.C.T. El recargo previsto en el art. 2 de la ley 25.323 se encuentra limitado a los supuestos de despidos en los que el empleador resulta moroso en el pago de las indemnizaciones previstas en los arts. 232, 233, 245 y 6 y 7 de la ley 25.013. Pero si, como en el caso, la extinción del vínculo contractual se operó en virtud de lo normado en el art. 212, 4º parr. L.C.T., el hecho que deba abonarse una indemnización igual a la contemplada en el art. 245 de dicha ley no autoriza a hacer una interpretación extensiva del incremento del art. 2 de la ley 25.323. 11 Sala IV, Expte. Nº 7.589/2011 Sent. Def. Nº 97968 del 30/05/2014 “Serrano Domingo Faustino c/Laboratorio Elea S.a. s/despido”. (Guisado-Pinto Varela). D.T. 34 2 Indemnización por despido. Art. 1 ley 25.323. Supuesto de improcedencia. Art. 63 L.C.T.. No cabe hacer lugar al incremento indemnizatorio previsto en el art. 1 de la ley 25.323, dirigido a sancionar evasiones registrales defraudatorias, toda vez que en el caso se evidencia que desde el standard de buen empleador previsto en el art. 63 de la L.C.T., de buena fe la demandada pudo haber considerado que tanto lo que abonaba en favor de la actora en concepto de telefonía celular como de diferencia de medicina prepaga no integraba la contraprestación salarial debida a la accionante como consecuencia de su puesta a disposición, no adecuándose en consecuencia a la definición del art. 103 L.C.T.. Sala IX, Expte. Nº 27.440/2011 Sent. Def. Nº 19370 del 15/05/2014 “Salvador Sandra c/La Farmaco Argentina Industrial y comercial SA s/despido”. (Balestrini-Pompa). D.T, 26 8 Industria de la Construcción. Fabricación y transporte de hormigón. Actividad que no encuadra dentro de la industria de la construcción. La fabricación de hormigón, aun cuando luego se lo comercializa para ser afectado a obras de arquitectura o ingeniería, no puede calificarse como encuadrada dentro de la industria de la construcción per se, ya que no se ha siquiera alegado que el desempeño del actor o el producido de su actividad, durante el tiempo en que se desempeñara a las órdenes de la demandada (empresa dedicada a la fabricación de hormigón), se encontrare de alguna manera vinculado a una o más obras determinadas, sino más bien con el transporte de la producción de la accionada a sus distintos contratantes. En relación a las industrias complementarias o coadyuvantes de la construcción propiamente dicha, el inc. b) del art. 1º de la ley 22.250 claramente especifica que será también empleador a los efectos del régimen estatuido, “únicamente con relación al personal que contrate exclusivamente para ejecutar trabajos en las obras o lugares a los que se refiere el inc. a”, es decir en la obra propiamente dicha o en las instalaciones o dependencias de la empresa constructora, por lo que tampoco, bajo este supuesto, podría en el caso considerarse encuadrada la relación habida en el estatuto de la construcción. Sala VI, Expte. Nº 53.034/2011 Sent. Def. Nº 66357 del 15/05/2014 “Berdasco Hugo Alberto c/Horcrisa SA s/despido”. (Craig-Raffaghelli). D.T. 54 Intereses. Supuesto en que media declaración de concurso preventivo o quiebra. De acuerdo con el plenario de la Cámara de Apelaciones en lo Comercial en autos “Club Atlético Excursionistas s/incidente de revisión promovido por Vialtes Oscar Sergio…” de fecha 28/6/2008 “subsiste respecto de los casos regidos por la ley 24.522 la vigencia de la doctrina plenaria fijada por esta Cámara in re “Seidman y Bonder SCA”, por la cual la suspensión de los intereses desde la presentación en concurso preventivo no rige respecto de las acreencias de origen laboral” y si bien dicha doctrina plenaria no resulta de aplicación obligatoria al fuero laboral, resulta insoslayable por la especificidad de la materia…” lo que lo torna aplicable y extensiva al supuesto de quiebra del empleador. A lo expuesto cabe agregar que se compadece con lo dispuesto a través de la ley 26.684 que modificó el art. 129 de la ley 24.522 al disponer que “…tampoco se suspenden los intereses compensatorios devengados con posterioridad que correspondan a créditos laborales”. Sala IV, Expte. Nº 38.341/2011 Sent. Def. Nº 97960 del 30/05/2014 “Vettorazzi Alejandro c/Laiguera Oscar Tomás y otros s/despido”. (Pinto Varela-Guisado). D.T. 56 1 Jornada de trabajo. Extensión. Excepción general permanente al régimen relativo a la limitación de la jornada de trabajo. Art. 3 de la ley 11.544 inc. a). El art. 3 de la ley 11.544 en el inc. a) establece como excepción general permanente al régimen relativo a la limitación de la jornada de trabajo, la situación de quienes ejerzan una función de “dirección” (antes de la reforma introducida por la ley 26.597) o de quienes se desempeñan como “directores” (después de la reforma que introdujo dicha ley). A su vez, el art. 11 inc. a) del Dto. 16115/33 incluye entre los empleados de dirección al “director” (categoría ésta que, junto con la de gerente, son las que se mantienen subsistentes luego de la reforma de la ley 26.597). El primer párrafo del inc. b) del citado art. 11, establece que también se encontrarán exceptuados “Los altos empleados administrativos o técnicos que sustituyan a las personas indicadas en el inciso anterior en la dirección o mando del lugar de trabajo..”. Y si bien, en el caso, la actora no se desenvolvió en el ámbito de una empresa comercial o industrial dentro de la cual pueda considerarse posible su integración a un directorio, la disposición contenida en el párrafo anterior deviene analógicamente aplicable al caso, pues la función de dirección allí descripta es asimilable a la que cumplió la actora en su propia vivienda y domicilio, mientras trabajó para la asociación demandada que le otorgara la custodia de niños. De allí que, en el marco del iura novit curia, cabe concluir que su situación se encuentra alcanzada por la excepción legal permanente antes mencionada. Sala II, Expte. Nº 10.183/2011 Sent. Def. Nº 103195 del 28/05/2014 “Laferrara Rosa Ramona c/Comunidad de Familias Aleluya s/despido”. D.T. 56 1 Jornada de trabajo. Extensión. Trabajo prestado en las tardes de los sábados y los domingos. El trabajo prestado en las tardes del sábado y los domingos no reviste el carácter de extraordinario por la sola circunstancia de haberse ejecutado en ese lapso normalmente destinado al descanso, si no media exceso de la jornada de trabajo establecida por ley o por convenio colectivo. De tal modo, el cumplimiento de tareas en sábado y domingo no implica necesariamente que el trabajador pueda reclamar los recargos establecidos en el art. 201 LCT sino, por el contrario, el goce del 12 descanso compensatorio de la misma duración, según el art. 204 LCT, en virtud de que la jornada de trabajo y el descanso semanal son institutos diferentes, cuyo ámbito de actuación no debe confundirse. La violación del descanso semanal le da al trabajador derecho a gozar de uno similar al que fue privado. Si en cambio, se trabaja más allá de los topes legales en un día de descanso, sí corresponde el pago de las horas excedentes con un recargo del 100% por ser extra (en tanto se ha sobrepasado el máximo de jornada permitido) y porque fueron trabajadas en día de descanso (art. 201 L.C.T.). Sala II, Expte. Nº2.472/12 Sent. Def. Nº 103129 del 14/05/2014 “Leguizamón Ramona Marta Belén c/Inversora Alimenticia SA y otros s/despido”. (González-Maza). D.T. 56 13 Jornada de trabajo. Guardias pasivas. No constituyen horas extraordinarias. Las horas comprendidas en una guardia pasiva no pueden considerarse como trabajo en tiempo “extra”. Las horas extraordinarias son las que se ejecutan en un trabajo ejecutivo de acuerdo a lo que surge del art. 197 L.C.T. 1º párrafo. Ello no ocurre en las guardias pasivas, ya que el trabajador puede disponer con libertad de su tiempo, en tanto no sea requerido por el empleador. Al no prestarse efectivamente el servicio, ese salario pasivo no debe llevar recargo aunque exceda el límite de la jornada legal. Sala II, Expte. Nº 12.197/2012 Sent. Def. Nº 103134 del 14/05/2014 “Pintos Patricia Alejandra c/IBM Argentina SA y otro s/despido”. (Pirolo-Maza). D.T. 78 Quiebra del empleador. Arts. 196 y 197 L.Q.. Continuación de la empresa. Nuevo contrato de trabajo con los trabajadores. El art. 196 de la ley 24.522 establece que “La quiebra no produce la disolución del contrato de trabajo, sino su suspensión de pleno derecho por el término de sesenta (60) días corridos. Vencido ese plazo sin que se hubiera decidido la continuación de la empresa, el contrato queda disuelto a la fecha de declaración en quiebra…”. Si se decide la continuación de la empresa, el síndico establecerá dentro del término de diez días corridos qué trabajadores continuarán en la empresa y, en este caso, se celebra un nuevo contrato de trabajo, lo que significa la pérdida de la antigüedad (cfme. Art. 197 parr. 2 L.C.Q.) y sólo quedan exentos de lo dispuesto en los arts. 196 y 197 de la L.C.Q. los casos en que la continuidad de la explotación se encuentre a cargo de una cooperativa de trabajadores o sujeto de derecho constituido por trabajadores de la fallida. Sala II, Expte. Nº 20.350/2011 Sent. Def. nº 103193 del 28/05/2014 “De Notta Constanza c/Ciccone Calcográgica SA y otro s/despido”. (Maza-González). D.T. 81 bis c) Responsabilidad solidaria. Responsabilidad de directores y gerentes. Registración de la trabajadora con fecha posterior a la real. La registración de la actora en una fecha de ingreso posterior a la real (conducta dolosa y en violación de la ley), genera la responsabilidad del socio gerente codemandado en los términos de los arts. 54, 59, 157 y 274 de la L.S., pero sólo respecto de los perjuicios que sean consecuencia de esa ilicitud. Ello es así, porque la acción de responsabilidad contra los directores está sujeta a los presupuestos de la teoría general de la responsabilidad civil, entre los que se encuentra la adecuada relación de causalidad entre la inconducta y el daño causado. (Del voto de la Dra. Marino. La Dra. Pinto Varela deja a salvo su postura sosteniendo que no corresponde limitar la condena del socio, sin embargo dado que la mayoría de la Sala establece la limitación de su responsabilidad, por razones de economía procesal, adhiere en el tema a la propuesta de la Dra. Marino). Sala IV, Expte. Nº 22.424/2011 Sent. Def. Nº 97982 del 30/05/2014 “Ibarra Claudia Beatriz c/La Sala SRL y otro s/despido”. (Marino-Pinto Varela). D.T. 81 Retenciones. Art. 132 bis LCT. Ley 25.345. Presunción. Existe una contradicción lógica entre sostener que medió clandestinización total de la relación laboral y sostener que hubo retención de aportes a los organismos de la seguridad social. Ello, a su vez, conspira también contra la aplicación de las presunciones de los arts. 71 L.O. y 55 R.C.T., por lo que cabe desechar el recurso fundado en el art. 43 de la ley 25.345. (Del voto del Dr. Arias Gibert, en minoría). Sala V, Expte. Nº 20.222/09 Sent. Def. Nº 76299 del 23/05/2014 “Chávez, Gerardo Raúl c/Las Maloyas SA s/despido”. (Zas-Arias Gibert-Raffaghelli). D.T. 81 Retenciones. Art. 132 bis L.C.T.. Ley 25.345. Rebeldía de la demandada. Presunción de ausencia de depósito. La rebeldía de la demandada hace presumir que incurrió en la ilicitud que predica el art. 132 bis L.C.T., es decir la retención de aportes no depositados. La situación de rebeldía procesal y la ausencia de prueba en contrario demuestran que la demandada no ingresó los aportes correspondientes al trabajador con destino a los organismos de seguridad social, no obstante haber efectuado los descuentos pertinentes conforme surge de los recibos de haberes acompañados. (Del voto del Dr. Zas, en mayoría). Sala V, Expte. Nº 20.222/09 Sent. Def. Nº 76299 del 23/05/2014 “Chávez, Gerardo Raúl c/Las Maloyas SA s/despido”. (Zas-Arias Gibert-Raffaghelli). D.T. 83 19 Salario. Asignaciones no remunerativas. Cláusulas convencionales. Cabe declarar la inconstitucionalidad de las cláusulas convencionales que desconocen el carácter remunerativo de una asignación creada por ley. En este sentido la CSJN en los autos “González Martín c/Polimat” sostuvo la inconstitucionalidad de aquellas cláusulas convencionales que 13 otorgan a un rubro salarial una naturaleza nominativa distinta a la que corresponde a su esencia expresamente prevista en la ley de fondo. En este sentido el Convenio Nº 95 de lo OIT define que a los efectos del convenio, el término “salario” significa remuneración o ganancia, sea cual fuere su denominación o método de cálculo, siempre que pueda evaluarse en efectivo, debida por un empleador a un trabajador en virtud de un contrato de trabajo escrito o verbal, por el trabajo que este último haya efectuado o deba efectuar o por servicios que haya prestado o deba prestar. Existiendo una “pugna” entre lo dispuesto en una convención colectiva y lo dispuesto en dicho convenio, debe prevalecer este último. Ello por cuanto se trata de una norma de jerarquía supralegal, habiendo sido ratificado por nuestro país (cfr. Art. 75, inc. 22, párr. 1º de la C.N.). Sala VII, Expte. Nº 6.967/2012 Sent. Def. Nº 46691 del 30/05/2014 “Remo Héctor Francisco y otros c/Telecom Argentina SA s/diferencias de salarios”. (Ferreirós-Rodríguez Brunengo). D.T. 83 12 Salario. Propinas. No integran el salario. C.C.T. 125/90. Mero acto de liberalidad del cliente. No cabe considerar a las propinas como integrativas del salario porque contrariamente a lo que ocurría durante la vigencia de anteriores convenciones colectivas, el art. 44 del C.C.T. 125/90 establece la prohibición expresa de recibir propinas y la exclusión explícita de la posibilidad que se les otorgue el carácter remuneratorio que genéricamente les acuerda el art. 113 L.C.T.. No puede soslayarse que el art. 44 del convenio referido, específicamente contempla que, en función del mencionado adicional la eventual entrega de propinas al trabajador por parte del cliente se considerará un mero acto de liberalidad de este último sin ninguna consecuencia, o ningún efecto para la relación de empleo entre trabajador y empleador y no originará derecho alguno a favor del trabajador. (Criterio mayoritario sostenido por el Dr. Pirolo y la Dra. González. El Dr. Maza adhiere por razones de economía procesal, dejando a salvo su opinión en contrario). Sala II, Expte. Nº 21.304/2010 Sent. Def. Nº 103169 del 22/05/2014 “Maidana, Pablo Daniel c/Sagardi SA s/despido”. (Maza-Pirolo). D.T. 83 2 Salario. Rebaja salarial. Convenio 95 O.I.T.. Salario en dólares. Para la condena que se estipula en dólares se fija un interés del 6%. La sentencia no impone conductas a futuro. El derecho de los trabajadores a percibir su remuneración de acuerdo con el nivel alcanzado antes de la imposición patronal se encuentra expresamente protegido por el Convenio sobre Protección del Salario de la OIT Nº 95 (ratificado por el dec.-ley 11.594/56), aplicable a todas las personas a quienes se pague o deba pagarse un salario (art. 2 ap. 1). El art. 6 de dicho convenio establece la obligación de prohibir a los empleadores que limiten en forma alguna la libertad del trabajador de disponer de su salario, en tanto que el art. 8 sólo autoriza descuentos de acuerdo con las condiciones que surjan de la “legislación nacional”, un contrato colectivo o un laudo arbitral, por lo que aparece clara la imposibilidad de establecer una deducción por vía de una decisión unilateral. Y siendo en el caso que la reducción del salario no fue fruto de un acuerdo oneroso y expreso con el trabajador, a raíz del cual éste obtuviera otro beneficio (principio de irrenunciabilidad), la reducción unilateral del salario luce injustificada. En la medida en que los importes de condena fueron establecidos en una moneda estable como el dólar estadounidense, no corresponde aplicar una tasa que contemple variables de ajuste frente a la depreciación del signo monetario. Cabe aplicar sobre el monto diferido a condena una tasa del 6% anual desde que el crédito fue exigible. Sala II, Expte. Nº 10.212/10 Sent. Def. Nº 103190 del 28/05/2014 “Flores Olivera Hugo Edgardo y otros c/Embajada del Uruguay en la República Argentina s/diferencia de salarios”. (PiroloGonzález). D.T. 83 2 Salario. Rebaja salarial. Decisión unilateral por parte de la empleadora. Salarios en dólares. Resolución injustificada. En el caso, los actores, empleados de la Embajada del Uruguay en la República Argentina, sufrieron la disminución de su remuneración que percibían en dólares, aunque continuaron percibiéndolo en esa moneda. La decisión de reducir el salario no provino de un acuerdo previo con los trabajadores sino que fue adoptada en forma unilateral por la embajada y sólo comunicada a sus dependientes a través de la novación del contrato que reconoce la demandada. Aunque los actores hayan aceptado percibir su salario disminuido con posterioridad a esa novación contractual, lo cierto es que la rebaja no aparece como derivada de una real negociación de las partes de la que puedan considerarse ambas beneficiarias, sino de una imposición unilateral de la empleadora. Sala II, Expte. Nº 10.212/10 Sent. Def. Nº 103190 del 28/05/2014 “Flores Olivera Hugo Edgardo y otros c/Embajada del Uruguay en la República Argentina s/diferencia de salarios”. (PiroloGonzález). D.T. 83 Salario. Salarios en especie. Uso del vehículo y del celular. El art. 103 L.C.T. recepta el denominado concepto amplio de remuneración al disponer en su primera parte que está constituida por todo lo que el trabajador perciba como consecuencia del contrato de trabajo, en oposición al concepto estricto que sólo considera remuneración a la contraprestación debida por el empleador por la ejecución de la prestación laboral. En consecuencia, cabe considerar remuneración en general a toda prestación que supone un ingreso efectivo o evita un gasto. Y en el caso se trata de un empleado ejecutivo a quien la adjudicación del vehículo y del celular evitó el gasto que el actor hubiera realizado y, en consecuencia, importó una ventaja patrimonial que debe considerarse contraprestación salarial. Sala X, Expte. Nº 17.434/11 Sent. Def. Nº 22427 del 13/06/2014 “Fernández César Daniel c/I.P. SA y otro s/despido”. (Stortini-Brandolino). 14 D.T. 83 8 Salario en especie. Medicina prepaga. Carácter remuneratorio. Cabe sostener la índole remuneratoria del parcial abonado por la demandada en concepto de medicina prepaga, ya que dicho concepto no se encuentra previsto entre los beneficios sociales enumerados taxativamente en el art. 103 bis de la L.C.T. según versión innovada por la ley 26.341, que en su inc. d) alude expresamente a supuestos distintos del analizado: “…reintegros de gastos de medicamentos y gastos médicos y odontológicos del trabajador y su familia, que asumiera el empleador previa presentación de comprobantes emitidos por farmacia, médico u odontólogo…”. Sala IX, Expte. 27.440/2011 Sent. Def. Nº 19370 del 15/05/2014 “Salvador Sandra c/La Farmaco Argentina Industrial y Comercial SA s/despido”. (Balestrini-Pompa). D.T. 83 8 Salarios en especie. Uso del celular. Supuesto de carácter salarial. Cabe otorgarle carácter salarial a la suma que la empleadora abonaba por el mantenimiento de la línea telefónica celular de la demandante, por desprenderse de las declaraciones testimoniales que ésta la utilizaba durante los fines de semana y el período de vacaciones, con lo cual en la realidad le daba un uso en su beneficio personal. Sala IX, Expte. Nº 27.440/2011 Sent. Def. Nº 19370 del 15/05/2014 “Salvador Sandra c/La Farmaco Argentina Industrial y Comercial SA s/despido”. (Balestrini-Pompa). D.T. 96 Vacaciones anuales pagas. No es viable el reclamo patrimonial de vacaciones adeudadas por cuanto las vacaciones no gozadas no son compensables en dinero ya que su dación persigue un fin higiénico y la preservación de la salud del asalariado (cfr. Art. 162 L.C.T.). Sala I, Expte. Nº 17.254/2008 Sent. Def. Nº 89838 del 15/05/2014 “Cabrera Alberto Daniel c/Jacmel SA y otro s/despido”. (Vilela-Vázquez). D.T. 97 Viajantes y corredores. Tareas de captación y entrenamiento de “consultoras/revendedoras”. Puede decirse que la actividad del viajante se centra en torno de la información y persuasión de la clientela, para llegar a la venta directa o a la obtención del pedido. En este entendimiento, no encuadran en las previsiones del estatuto del viajante de comercio las tareas que cumplía la actora como “gerente de zona” esencialmente orientadas a la captación y entrenamiento de las “consultoras/revendedoras”, de modo que sus tareas no apuntaban a la persuasión de potenciales clientes. El cobro de las mercaderías que la actora efectuaba respecto de las entregadas a las vendedoras que reclutaba, hace a la operatoria comercial del denominado sistema de “venta directa” y en modo alguno implica que realizara por si la concertación de operaciones de venta de productos a la clientela como actividad principal que califica a la actividad profesional del viajante. Sala X, Expte. Nº 29.553/111 Sent. Def. Nº 22338 del 27/05/2014 “Cechini Dora Virginia c/Transbel SA s/despido”. (Stortini-Corach). D.T. 97 Viajantes y corredores. Vendedor que ofrece productos que comercializa el demandado. Se reúnen en el caso del trabajador que prestando servicios fuera del establecimiento ofrecía y vendía en forma habitual productos que comercializaba el demandado, las características enunciadas en el art. 2 de la ley 14.546, norma ésta que enumera las notas tipificantes que tienen el valor de guías para orientar al juzgador en la investigación de si una determinada relación está amparada por el estatuto del viajante de comercio. Es trabajador subordinado quien pone su energía de trabajo a disposición de otra persona o empresa, resultando indiferente para su determinación que los interesados le hayan denominado de otra forma de manera que se pretenda excluir la tutela de normas de orden público como son las que rigen el contrato de trabajo. Sala I, Expte. Nº 17.254/2008 Sent. Def. Nº 89838 del 15/05/2014 “Cabrera Alberto Daniel c/Jacmel SA y otro s/despido”. (Vilela-Vázquez). D.T. 98 b) Violencia laboral. Ambiente de trabajo nocivo/hostil. Daño psíquico y físico. Exclusión de condena a la aseguradora. La actora, empleada directa de una empresa que la destinara a prestar servicios de limpieza en un centro de salud, fue víctima de hostigamiento por parte de un superior y de violencia laboral. Sufrió politraumatismos como consecuencia de una caída que ocurrió luego que el encargado la tomara con sus brazos y le diera un fuerte empujón. Todo ello generó un daño psíquico y físico respecto del cual las codemandadas deben responder con fundamento en el primer párrafo del art. 1113 del Cód. Civil, en cuanto establece la responsabilidad civil del principal por los daños causados por el hecho del dependiente. La condena sólo debe afectar a las codemandadas y no a la aseguradora de riesgos del trabajo codemandada por la actora. El hecho generador de los daños en el caso no califica como accidente de trabajo según el art. 6 de la ley 24.557. El ámbito de la ley de riesgos del trabajo se circunscribe –con la salvedad de los accidentes in itinere-, a aquellos siniestros que sufren las personas trabajadoras a causa del tipo de actividad, de las condiciones del lugar en que es prestada la fuerza de trabajo, como derivación de los útiles o herramientas que se utilizan o cosas que se encuentran en el establecimiento, aunque no sean utilizados por el afectado. La violencia interpersonal, aún laboral, pero que no tiene relación con la modalidad en que son organizadas las actividades laborales, no está alcanzada por la cobertura asegurativa prevista por la ley 24.557. (Del voto de la Dra. Vázquez, en mayoría). Sala I, Expte. Nº 19.473/2009 Sent. Def. Nº 89844 del 16/05/2014 “S.A. c/Los Soles Internacional SA y otros s/despido”. (Vázquez-Pasten-Vilela).** 15 D.T. 98 Violencia laboral. Ambiente de trabajo nocivo/hostil. Daño psíquico y físico. Extensión de condena a la aseguradora. En el caso la actora, padece una incapacidad psíquica del 10% TO como consecuencia del ambiente laboral hostil en el que desarrollaba sus tareas de limpieza en un centro de salud donde había sido destinada por su empleadora directa. Si bien las aseguradoras de riesgos del trabajo responden por los daños causados por los accidentes y/o enfermedades profesionales generadas por el hecho o en ocasión del trabajo (art. 6 ley 24.557), no es menos cierto que dichas aseguradoras tienen a su cargo, en lo esencial y por mandato, precisamente de la ley 24.557, la obligación de prevenir accidentes y/o enfermedades que tengan relación directa con el desempeño laboral generando su incumplimiento responsabilidad en los términos del art. 1074 y concs. del Cód. Civil. De haber cumplido la aseguradora con las obligaciones que tenía a su cargo, se habría evitado o por lo menos mitigado el daño que hoy día padece la actora. Por ello debe ser condenada solidariamente junto a la empleadora directa y a la entidad sanatorial donde desarrolló sus labores. (Del voto de la Dra. Pasten, en minoría). Sala I, Expte. Nº 19.473/2009 Sent. Def. Nº 89844 del 16/05/2014 “S.A. c/Los Soles Internacional SA y otros s/despido”. (Vázquez-Pasten-Vilela).** PROCEDIMIENTO Proc. 23 Conciliación obligatoria. Demanda ante el SECLO. Efecto interruptivo de la prescripción. La disposición del segundo párrafo del art. 7 ley 24.635 resulta manifiestamente inconstitucional, en su contradicción con el art. 257 L.C.T.. Esta contradicción entre la ley de forma y la ley de fondo debe zanjarse a favor de la segunda, tal como surge de la interpretación armónica de los arts. 31 y 75 inc. 12 Const. Nac., y doctrina de la C.S.J.N. (Fallos 276:401). Esta solución encuentra sustento en la propia normativa y doctrina civil relativa a las diferencias entre la suspensión y la interrupción de la prescripción. Ya el Plenario Nº 52 de la C.N.A.T. estableció que la reclamación administrativa interrumpe la prescripción de las acciones judiciales por cobro de salarios, y luego el art. 257 L.C.T. receptó positivamente dicha doctrina al disponer que la reclamación ante la autoridad administrativa del trabajo interrumpe el plazo de la prescripción por un plazo no mayor de seis meses. Quien acude al procedimiento ante el SECLO está demostrando claramente su intención de abrir la instancia judicial. Es decir que la “demanda de conciliación” debe considerarse como una actividad del acreedor demostrativa del interés en ejercitar el derecho que le asiste, y por ende, conforme art. 4017 Cod.Civil, el efecto de esa presentación debe ser sin ninguna duda la interrupción del plazo de prescripción. Sala VII, Expte. Nº 26.531/2008 Sent. Def. Nº del 19/05/2014 “Baez Ramona María c/CAN Aseguradora de Riesgos del Trabajo SA s/accidente-acción civil”. (Fontana-Ferreirós). Proc. 39 1 a) Excepciones. Competencia material. Accidente en que un agente del Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires fue parte. Competencia de la Justicia Nacional del Trabajo. Resulta competente la Justicia Nacional del Trabajo para entender en la acción entablada contra una A.R.T. por un agente del Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires (una enfermera del Hospital Tornú que afirma haberse accidentado cuando ingresaba a trabajar). La comprensión de los empleados y funcionarios del sector público en las leyes de protección contra los accidentes de trabajo nunca fue materia de discusión, pues ya la ley 9.688 lo incluía. Las leyes posteriores (23.643 y 24.028) y la 24.557 siguieron en esa línea e incluyeron en sus disposiciones a empleados y funcionarios públicos, por lo que mal podría considerarse que no fuera competente la Justicia Nacional del Trabajo en casos como el presente. La circunstancia de que la acción por accidente de trabajo haya sido entablada por un agente del Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires no desplaza la competencia de la Justicia Nacional Laboral si aquélla se encuentra fundada en la Ley de Riesgos. Sala VII, Expte. Nº 69.138/2012 Sent. Int. Nº 36395 del 16/05/2014 “Gonzalia Cecilia Belén c/Provincia ART SA s/accidente-ley especial”. Proc. 39 1 a) Excepciones. Competencia material. Competencia de la Justicia Nacional del Trabajo ante el caso en que el Estado Nacional sea parte. Empleado público como sujeto tutelado por las leyes laborales. Resulta competente la Justicia Nacional del Trabajo para entender en una causa en la que los actores, que aducen desempeñarse en la Dirección Nacional de Migraciones, demandan para que se declare el carácter remuneratorio de las sumas que perciben en concepto de adicional denominado S.I.M. (servicio de inspección migratoria). El empleado público también debe ser considerado “sujeto de preferente tutela”, como ha señalado la C.S.J.N. en el caso “Vizzoti”, conclusión que consideró no sólo impuesta por el art. 14 bis sino también por el Derecho Internacional de los Derechos Humanos, que cuenta con jerarquía constitucional a partir de la reforma constitucional de 1994. Por su parte, y en relación a lo que surge del art. 20 ley 18.345, la intención del legislador fue tipificar al Fuero Laboral como un fuero altamente especializado por razón de la materia, de modo que sería competente para entender en todo litigio emergente del contrato y/o relación de trabajo y/o donde se discuta la aplicación, interpretación y proyección de leyes laborales. 16 Sala VIII, Expte. Nº 50.769/2012 Sent. Int. Nº 36191 del 26/05/2014 “Tejada Emelina del Valle y otros c/Estado Nacional Dirección Nacional de Migraciones s/diferencias de salarios”. (CatardoPesino). Proc. 39 1 a) Excepciones. Competencia material. Reclamo contra el Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires por despido indirecto. Competencia de la Justicia Nacional del Trabajo. Resulta competente la Justicia Nacional del Trabajo para entender en una causa donde un trabajador inicia demanda contra el Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires por despido indirecto. Ello así, toda vez que el empleado público también debe ser considerado “sujeto de preferente tutela”, como lo ha señalado la C.S.J.N. en la causa “Vizzoti”, conclusión que el Alto Tribunal consideró no sólo impuesta por el art. 14 bis, “sino por el renovado ritmo universal que representa el Derecho Internacional de los Derechos Humanos, que cuenta con jerarquía constitucional a partir de la reforma constitucional de 1994 (Constitución Nacional, art. 75 inc. 22)”. Corresponde que todas las normas que se dicten para regular la relación de empleo público sean adoptadas, interpretadas y aplicadas a la luz de los principios del derecho del trabajo. Sala VII, Expte. Nº 53.358/2013 Sent. Int. Nº 36397 del 16/05/2014 “Oreguy Rodolfo Miguel c/Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires s/despido”. Proc. 39 1 a) Excepciones. Competencia material. Reclamo contra el Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires por despido indirecto. Competencia de la Justicia Nacional del Trabajo. Si el empleado público está amparado por el art. 14 bis C.N., y en consecuencia su relación dependiente con la administración debe ser regida por normas que recepten los principios del derecho del trabajo, en especial el protectorio y todos los que del mismo se derivan, en ese caso no se puede negar que los conflictos vinculados con el empleo público deben ser competencia de la Justicia del Trabajo, en tanto rama especializada precisamente en relaciones en las que rige el orden público laboral. No se requiere que la relación laboral en cuestión esté regida por la L.C.T., en tanto los Jueces Laborales no son jueces de dicha, tal como queda demostrado cuando se asume sin controversias la competencia para dirimir asuntos regidos por el Estatuto del Periodista, por el Estatuto del Trabajador Rural, y tantas otras normas estatutarias. Sala VII, Expte. Nº 53.358/2013 Sent. Int. Nº 36397 del 16/05/2014 “Oreguy Rodolfo Miguel c/Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires s/despido”. Proc. 49 Honorarios. Honorarios de profesionales en casos de transacción. Los profesionales están alcanzados por los efectos indirectos de la transacción, entre ellos, el monto del proceso que resulta de ella, con lo cual, la cuantía económica del pleito para la regulación de los honorarios de todos los profesionales está representada por el monto que resulte de la conciliación. Sala IV, Expte. Nº 5.601/2013 Sent. Int. Nº 51308 del 28/05/2013 “Torres Evangelina Noelia c/Grupo de Operadores SA s/despido”. (Pinto Varela-Guisado). Proc. 54 Intervención de terceros. Contratos de afiliación del empleador con varias aseguradoras. En los supuestos en que existen contratos de afiliación del empleador con varias aseguradoras durante el lapso de prestación de servicios del trabajador, y ante la eventualidad de enfermedades que podrían originarse por la prestación de tareas a través del tiempo, la aseguradora demandada puede citar como tercero a otra u otras aseguradoras pues podría llegar a tener una acción de regreso contra la anterior o anteriores aseguradoras contratadas por el empleador. Sala IV, Expte. Nº 22.947/2013 Sent. Int. Nº 51305 del 28/05/2014 “Torres Rosa Gladys c/La Caja ART SA s/accidente-ley especial”. (Guisado-Pinto Varela). Proc. 54 Intervención de terceros. Demanda contra la A.R.T. con sustento en el derecho civil. Pedido de citación del empleador. Procede la citación del empleador a pedido de la aseguradora de riesgos del trabajo, en casos en que se le demanda a ésta la reparación integral de los daños y perjuicios derivados de un accidente de trabajo (o de una enfermedad profesional) con sustento en el derecho civil, dado que la aseguradora, en caso de resultar vencida, podría intentar una acción de regreso contra el empleador. No ocurre lo mismo cuando el reclamo se funda en la ley 24.557, o sea en la ley especial. Ello así, toda vez que en este supuesto la aseguradora no podrá entablar una acción de regreso contra el empleador, ya que ella es la responsable de las prestaciones de la ley de riesgos del trabajo. Sala IV, Expte. Nº 46.315/2013 Sent. Int. Nº 51306 del 28/05/2014 “Pardo Abelardo Jorge c/Berkley International ART SA s/accidente-ley especial”. (Marino-Guisado). Proc. 61 2 Medidas cautelares. Codemandado rebelde. Solicitud de embargo preventivo sobre sus bienes. Contestación de demanda por los otros codemadados. Improcedencia de la declaración de embargo preventivo en los términos del art. 62, inc. b) L.O.. Ante la presencia de una pluralidad de demandados y la contestación de demanda formulada por uno de ellos, resulta improcedente disponer el embargo preventivo en los términos del art. 62, inc. b) de la L.O. sobre los bienes de la codemandada rebelde. La existencia de otros codemandados que han contestado la acción obsta a que se tengan por verosímiles las circunstancias que han sido objeto de negación por aquéllos, de manera que la cautela resulta admisible sólo en la medida de los derechos que, a partir de las constancias de la causa, puedan considerarse verosímiles. 17 Sala IV, Expte. Nº 25.280/2014 Sent. Int. Nº51329 del 30/05/2014 “González Meléndrez Roberto Agustín c/Pinta Bien SA y otros s/accidente-acción civil –Incidente”. (Pinto Varela-Guisado). Proc. 61 2 Medidas cautelares. Embargo. Subasta. Adquisición del dominio a favor del comprador. Posesión del inmueble. Inmueble ocupado por inquilino. Traditio brevi manu. La transmisión del inmueble vendido en subasta se perfecciona con la aprobación, pago del precio y toma de posesión por el comprador–art. 577 del Cód. Civil-. En estos casos, el mandamiento respectivo puede diligenciarse aunque el inmueble esté ocupado, pues es independiente de la desocupación propiamente dicha, que puede venir luego por vía de incidente o por juicio aparte. El mandamiento de posesión no es un mandamiento de lanzamiento y, salvo que el inmueble esté libre de ocupantes, implicaría una entrega solo formal. En caso de que el inmueble subastado se encuentre ocupado por un inquilino, se hace innecesaria la tradición de la cosa para adquirir la posesión, ya que puede recurrirse a la llamada traditio brevi manu (art. 2387 del Cód. Civil). Si bien este instituto ha sido expresamente consagrado en el Código Civil para el supuesto de transmisión voluntaria de las cosas ningún impedimento existe para aplicarlo cuando se trata de la transmisión forzosa mediando orden judicial. En esta hipótesis, la autoridad del juez suple la actuación del anterior posesor. Sala IV, Expte. Nº 9.266/1999 Sent. Int. 51244 del 14/05/2014 “Atrrua Luis Alberto c/Montecroce Rosa dominga y otro s/despido”. (Pinto Varela-Guisado). Proc. 61 Medidas cautelares. Trabajadoras que alegan haber sido activistas sindicales. Medida cautelar de reinstalación. La libertad sindical no se limita a proteger a quienes invisten una representación o se postulan formalmente para ejercerla, sino que se extiende a todo trabajador o activista. Y en el caso, hay indicios razonables de la posible existencia de una decisión empresaria dirigida a desprenderse de dos trabajadoras que instaran activamente la acción colectiva tendiente a lograr una mejora en las condiciones de trabajo, todo lo cual amerita, que de acuerdo a los elementos acompañados en el sumario marco de la cautela, no se deba ahondar en lo concerniente a una representación del personal aún con la presencia de delegados, ya que las medidas como la de la especie no requieren una suerte de certeza que seguramente se obtendrá o no. La presencia de una sucesión de datos cronológicos, temporal y casualmente conectados entre sí, hacen presumir la existencia del recaudo fumus bonis iuris. El peligro en la demora se encuentra configurado ya que lo que está en juego son derechos constitucionales, en concreto: el libre y adecuado ejercicio de los derechos gremiales de los trabajadores (arts. 14 bis y 16 C.N.). (Del voto del Dr. Catardo, en mayoría) Sala VIII, Expte. Nº 1.301/14 Sent. Def. Nº 40216 del 23/05/2014 “A.D.Y. y otro c/K. & S.G. & C.K.A.T. s/medida cautelar”. (Pesino-Catardo-Ferreirós). Proc. 61 Medidas cautelares. Trabajadoras que alegan haber sido despedidas por ser activistas gremiales. Medida cautelar de reinstalación. Las actoras solicitan la medida cautelar de reinstalación. El único sustento de la pretensión reinstalatoria es el haber sido activistas en un conflicto y haber hecho campaña por una lista alternativa a la de la conducción sindical. No hay pruebas de la participación de las actoras en el conflicto aludido, ni tampoco las hay con referencia a la campaña por la lista opositora a la conducción actual. Por ello, no se advierte cumplido el recaudo del peligro en la demora, pues de admitirse la pretensión de las demandantes, obtendrían su reincorporación con el consiguiente pago de daños y perjuicios, lo que importa tanto como que la sentencia a dictarse no resultaría de difícil o imposible cumplimiento, con relación a dos personas que al momento de su despido no gozaban de la protección específica que la ley 23.551 otorga a los representantes elegidos por los trabajadores. En estos casos, deben analizarse con suma precaución los elementos que se arriman como sustento de la medida, pues de lo contrario con la sola manifestación del requirente se interdictarían facultades propias otorgadas al empleador por la L.C.T., transformando en normal lo que debería ser excepcional. (Del voto del Dr. Pesino, en minoría). Sala VIII, Expte. Nº 1.301/14 Sent. Def. Nº 40216 del 23/05/2014 “A.D.Y. y otro c/K. & C.K.A.T. s/medida cautelar”. (Pesino-Catardo-Ferreirós). Proc. 78 3 Recurso de apelación. Efecto con que se concede el recurso. Art. 110 L.O.. Excepción. Resolución que tuvo por desistida la producción de la pericial médica. Si bien el art. 110 de la ley 18.345 establece que, salvo el caso de desalojo y las medidas cautelares, todas las demás apelaciones se tendrán presentes con efecto diferido hasta que se dicte sentencia definitiva, corresponde, en el caso, declarar bien concedido con efecto inmediato el recurso de apelación interpuesto por la actora contra la resolución mediante la que se tuvo por desistida de la producción de la prueba pericial médica propuesta por su parte, y renuente en la producción de la ofrecida por la accionada, como consecuencia de no haber dado cumplimiento en debida forma a la intimación que disponía que dentro del plazo de diez días confeccionase, diligenciase y acreditase el diligenciamiento del oficio dirigido a la Obra Social de Maestranza. Si bien la recurrente admite expresamente no haber cumplido con la carga de acreditar el diligenciamiento del mentado oficio, la resolución de grado, que concede el recurso de apelación con efecto diferido, luce de excesivo rigor formal frente a la circunstancia concreta de obrar en autos los estudios realizados por el demandante, los que dan cuenta de que el diligenciamiento del oficio fue efectuado en fecha muy anterior a la del auto cuestionado. (Del voto del Dr. Arias Gibert, en mayoría). Sala V, Expte. Nº 34.700/11 Sent. Int. Nº 30955 del 23/05/2014 “Ramírez, silvia Cristina c/Dart Sudamericana SRL y otro s/accidente-acción civil”. (Arias Gibert-Zas-Raffaghelli). 18 Proc. 78 3 Recurso de apelación. Efecto con que se concede el recurso. Art. 110 L.O.. Resolución que tuvo por desistida la producción de la pericial médica. El art. 110 L.O. establece que, salvo el caso de desalojo y las medidas cautelares, todas las demás apelaciones se tendrán presentes con efecto diferido hasta que se dicte la sentencia definitiva. No tratándose de ninguna de las situaciones que excepcionan la regla legal prevista en la norma citada, ni ante el caso de desestimación de citación de terceros que la jurisprudencia dominante de esta Cámara admite como otra excepción al principio del artículo referido, no corresponde conceder el recurso de apelación con efecto inmediato. (Del voto del Dr. Zas, en minoría). Sala V, Expte. Nº 34.700/11 Sent. Int. Nº 30955 del 23/05/2014 “Ramírez Silvia Cristina c/Dart Sudamericana SRL y otro s/accidente-acción civil”. (Arias Gibert-Zas-Raffaghelli). Proc. 78 3 Recurso de apelación. Resoluciones interlocutorias dictadas en audiencias con la presencia de la parte interesada. Art. 96 L.O.. Apelación deducida con posterioridad a la audiencia. Improcedencia. Resulta manifiestamente extemporánea la apelación deducida cuatro días después por la parte actora contra la resolución interlocutoria dictada en la audiencia en la que se encontraba presente. Al respecto el art. 96 L.O. establece que las resoluciones interlocutorias “dictadas en audiencias con la presencia de la parte interesada quedarán firme si ésta no las cuestionare en el mismo acto”. Sala IV, Expte. Nº 24.010/2014 Sent. Int. 51307 del 28/05/2014 “Teruggi Cristian Javier c/Horizonte Cia. Argentina de Seguros Generales S.A. s/accidente-ley especial-recurso de hecho”. (Pinto Varela-Guisado). Proc. 79 Recusación y excusación. Excusación del juez por denuncia en su contra ante el Consejo de la Magistratura. La circunstancia de haberse denunciado a un juez ante el Consejo de la Magistratura no constituye, por sí, fundamento suficiente para admitir una recusación con sustento en la causal del inciso 6 del art. 17 del Código Procesal, pues para ello es indispensable que el Consejo haya dispuesto dar curso a la denuncia. Sin embargo, aun cuando tal motivación no encuadre legalmente en la mencionada causal de recusación, el emplazamiento de la excusación en la segunda parte del art. 30 del código citado da cabida a un plano subjetivo desde el cual los magistrados tienen la facultad –no ya el deber que impone la primera parte del referido art. 30- de excusarse cuando en su fuero interior se verificare alguna razón de gravedad que pudiere perturbar o mortificar el ejercicio pleno de su función jurisdiccional o la prestación del mejor servicio de Justicia en un caso determinado (CNACom., Sala F, 20/05/2010, “Vargas Lerena Álvaro c/Cadena País Producciones Publicitarias S.A. s/ordinario”). Sala IV, Expte. Nº 22.420/2014 Sent. Int. 51276 del 21/05/2014 “Previti Mirta Dolores c/Pereira Omar Osvaldo s/despido”. (Pinto Varela-Guisado). Proc. 79 Recusación y excusación. Excusación del juez por denuncia en su contra ante el Consejo de la Magistratura. A los fines de la excusación, constituye razón de decoro y delicadeza que el juez haya sido denunciado por el ex letrado de uno de los litigantes ante el Consejo de la Magistratura, pues es el magistrado quien en definitiva mejor sabe en qué medida incide en su ánimo la denuncia formulada en su contra, al haber exteriorizado su posible falta de imparcialidad o impotencia de decidir con plena objetividad de espíritu (Cám. Ap. Cont. Adm. Y Tributario de la C.A.B.A., Sala II 13/09/2004, “Ciudad de Buenos Aires c/Martínez, Blanca D.”, DJ 2005-2-1044). Sala IV, Expte. Nº 22.420/2014 Sent. Int. 51276 del 21/05/2014 “Previti Mirta Dolores c/Pereira Omar Osvaldo s/despido”. (Pinto Varela-Guisado). Proc. 78 Recusación y excusación. Improcedencia del planteo de recusación por prejuzgamiento previsto en el art. 17 inc. 7) del CPCCN. Dado el pedido de una “medida preliminar” con carácter de prueba anticipada por parte de la actora y el rechazo por parte de la a quo de esta pretensión por entender no objetivado un temor justificado de que esa medida de prueba se torne imposible o dificultosa durante la etapa de conocimiento, la actora plantea recusación de la magistrada por prejuzgamiento (art. 17 inc. 7 del CPCCN). Resulta inadmisible la recusación articulada toda vez que la juez de grado no se “…ha extralimitado en sus facultades…”, ni se ha pronunciado sobre “…la materia que ha de debatirse en el presente proceso…”, es decir no incursionó en lo concerniente a la cuestión sustancial. Sala X, Expte. Nº 19.474/2014 Sent. Int. Nº 22794 del 20/05/2014 “Guadarmino Silvana Valeria c/Exomed .SA y otros s/despido-(incidente)”. Proc. 79 Recusación y excusación. Principios. Opinión subjetiva del juez. Justificación. El instituto de la excusación persigue la independencia de los magistrados en el ejercicio de su función y el juez que se inhibe espontáneamente de conocer en el juicio por los motivos de excusación que contempla el art. 30 CPCCN, lo hace con el aval de la fórmula genérica y flexible de la norma que alude a motivos de decoro y delicadeza, que atiende a escrúpulos que, en principio, juegan en la opinión subjetiva del juez que se excusa. Esa subjetividad tiene el límite que considere atinado el tribunal que debe resolver el incidente, considerando las circunstancias personales y particulares, así como también las que atañen al servicio de justicia que es, en principio, el valor fundamental a salvaguardar. Por ello, cuando se invocan motivos de decoro y delicadeza en la resolución por la cual se excusó un magistrado, debe suponerse que el juez que 19 los adujo ha efectuado un análisis estricto de ellos y ha llegado a la conclusión de que existe en su yo íntimo, escrúpulos en torno a la eventual objetividad de su desempeño, única situación en la que, por lo demás su excusación se justificaría. Sala VII, Expte. Nº 27.859/2013 Sent. Int. Nº 36514 del 30/05/2014 “Tramontana abna María C/Tamivolt SA s/despido”. Proc. 80 Representación. Representación en juicio de una A.R.T. según su estatuto social. Según el estatuto social de la ART demandada surge que “El directorio en su primera sesión debe designar un presidente y, de considerarlo conveniente un vicepresidente. Este último reemplazará al primero en caso de ausencia o impedimento…” y que “…La representación legal y el uso de la firma social será ejercida por el presidente o, en caso de corresponder, el vicepresidente en caso de ausencia o impedimento del primero…”. En la medida que la facultad del vicepresidente de la sociedad de reemplazar al presidente en su ausencia o impedimento se encuentra expresamente prevista en el Estatuto de la sociedad recurrente, resulta de excesivo rigor formal el recaudo de justificación del motivo de tal ausencia o impedimento pretendido por la parte actora, habida cuenta de que el vicepresidente de la sociedad, en su rol de presidente, tiene las mismas facultades que este último y, por tal, debe considerarse como un verdadero representante legal de la sociedad resultándole imputable a ésta lo actuado por aquél frente a terceros y materia que incumbe a la persona de existencia ideal, en su esfera interna, la eventual falta de configuración de los supuestos que habilitan el mentado reemplazo. Sala V, Expte. Nº 48.387/2012 Sent. Int. Nº 30914 del 20/05/2014 “Canchi, José Ricardo c/QBE ART SA s/accidente-acción civil”. (Zas-Arias Gibert). Proc. 80 Representación. Representación en juicio del consorcio de propietarios. La representación en juicio del consorcio de propietarios sólo puede ser ejercida por determinados profesionales del derecho o por quienes ejerzan una representación legal (cfr. arts. 1, 3 y concs. Ley 10.996), sin que pueda aceptarse la representación en juicio de simples mandatarios convencionales, aun cuando actúen con patrocinio letrado. Sala V, Expte. Nº 46.692/11 Sent. Def. Nº 76271 del 20/05/2014 “Mogro Eleuteria c/Consorcio de Propietarios del edificio Barrio Gral. José de San Martín Edificio 32 s/despido”. (Zas-Arias Gibert). Proc. 91 Temeridad y malicia. Art. 275 L.C.T.. Requisitos. En el caso, resulta inviable la declaración de temeridad y malicia que prevé el art. 275 L.C.T., a la que remite el art. 9 de la ley 25.013. Ello porque no puede soslayarse que la accionada oportunamente abonó lo que estimaba correspondía y si bien dicho pago no ha sido suficiente de acuerdo a lo decidido sobre el punto en la sentencia de grado, debe memorarse especialmente que para la declaración de la sanción en análisis, por disposición legal debe atenderse a la “conducta procesal asumida” (art. 275 L.C.T., 1º párr. in fine), por lo que con base en las constancias concretamente obrantes en las actuaciones no puede aquélla reputarse de carácter temerario ni malicioso. Teniendo en cuenta las especiales características del caso, inclusive dentro del esquema del art. 9 ley 25.013 cabe tener presente que éste admite prueba en contrario atento el carácter iuris tantum de la presunción en cuestión, resultando lo jurídicamente relevante que existen elementos que la revierten y que evidencian que la parte no ha litigado a conciencia de su propia sinrazón (temeridad) ni asumiendo una conducta destinada a obstruir el normal desenvolvimiento del proceso (malicia). Sala V, Expte. Nº 16.456/08 Sent. Def. Nº 76289 del 23/05/2014 “Fontijne, Jaqueline Clasine Constance c/Eecol Electric Argentina SA s/despido”. (Zas- Arias Gibert). FISCALIA GENERAL D.T. 13 5 Asociaciones profesionales de trabajadores. Ley 23.551. Expulsión de un afiliado de una entidad sindical. Cumplimiento estricto de los recaudos formales. Resguardo del debido proceso. Las exigencias adjetivas son trascendentes cuando se trata de analizar la permanencia de un afiliado en el seno de una entidad sindical, y es condición esencial para la validez de lo decidido por el cuerpo colectivo, el acatamiento de los requisitos que conciernen al derecho de defensa en juicio, y entre ellos, el detalle preciso de las causales que se imputan y sobre las cuales cabrá argumentar en resguardo del debido proceso. Esta doctrina garantista, elaborada en torno a lo dispuesto por el art. 16 inc. c de la ley 23.551, impone evaluar, con carácter restrictivo, el cumplimiento de los requisitos formales de una expulsión, en particular, en casos en los cuales surge de manera evidente la existencia de una contienda intrasindical que culmina con la separación del trabajador de su propio grupo de pertenencia colectivo, en el que ha militado por un tiempo prolongado y ha accedido a cargos institucionales de relevancia. Una medida tan trascendente como la expulsión de un afiliado requiere determinar con precisión objetiva y detallada la conducta que se le atribuye y las circunstancias de persona, tiempo y lugar en que habrían ocurrido los hechos ya que son inadecuadas las formas genéricas. El órgano que decide la sanción debe a su vez responder los planteos que efectúa el imputado y que no es eficaz remitirse a una mera iniciativa de expulsión. Fiscalía General, Dictamen Nº 60.314 del 07/05/2014 Sala X Expte. Nº 54.933/2013 “Ministerio de Trabajo c/Pafumi Hugo Alejandro Federación Argentina de Trabajadores de Prensa de Puerto Madryn s/ley de Asoc. Sindicales”. (Dr. Álvarez). 20 D.T. 27 23 Contrato de trabajo. Irrenunciabilidad. Acuerdo de reducción en la remuneración. En el caso, el actor es un trabajador que se desempeñaba como administrativo de la embajada de la República Oriental del Uruguay, que percibía una retribución de USD 1200 y que habría suscripto, posteriormente, un acuerdo por el cual reducía la retribución a USD 840, sin modificación de las condiciones de trabajo. Como considera que la actitud de la empleadora implicó una rebaja salarial impuesta que transgredió el principio de irrenunciabilidad, interpuso una demanda destinada a obtener el pago de las diferencias remuneratorias y al restablecimiento del sueldo originario. La renuncia de derechos se confirma en aquellos negocios jurídicos, como el del caso, en el cual el trabajador da “algo” a cambio de “nada” o cuando, bajo el manto de un acuerdo oneroso, lo que recibe el trabajador a cambio del derecho que abdica es tan mínimo, que no puede ser reputado como contraprestación seria. Los razonamientos descriptos, dejan en claro que, en el caso, no puede afirmarse la existencia de una especie de “novación”, porque no se advierte la existencia de contraprestación alguna o de alteración trascendente del sinalagma contractual. Se trata de una disminución del salario correspondiente a un dependiente que continuaba “haciendo lo mismo” con idéntica jerarquía y sin alterar su jornada. Todo lo expuesto lleva a considerar que nos hallamos frente a una clara y simple rebaja retributiva inoponible al dependiente, siendo el trabajador acreedor a las diferencias salariales. Fiscalía General, Dictamen Nº 60.464 del 23/05/2015 Sala II Expte. Nº 54.294/2010 “Urrutia Zaparrart Conrado María c/Embajada de la República Oriental del Uruguay s/diferencias de salarios”. (Dr. Álvarez). D.T. Contrato de trabajo. Objeto ilícito. Préstamos de dinero en “negro”. Simulación de venta de pasajes turísticos en cuotas a través de tarjetas de crédito. En el caso el demandado, quien fuera intimado para que registre la relación de trabajo, se dedicaba en forma habitual y lucrativa al préstamo de dinero en efectivo en la oficina donde trabajaba la actora. Se trataba de préstamos de dinero en negro que se encubrían bajo la venta de pasajes o paquetes turísticos en cuotas que pagaban los clientes del préstamo con sus tarjetas de crédito y que se instrumentaba en una especie de “contrato-conformidad”. Por su parte la actora se ocupaba de atender a los clientes y gestionar el cobro de los préstamos dinerarios, llevar el detalle de las cobranzas y registros de pago. Es decir la prestación de tareas por parte de la actora lo fue en beneficio de quien brindaba servicios al margen de la ley. En este supuesto la ilicitud proviene de la causa y no del objeto y, en nuestro régimen positivo, la primera queda englobada dentro del segundo. El contrato de objeto ilícito no produce ninguna consecuencia entre las partes dado que el derecho niega toda protección a quienes han procedido con dolo o mala fe (art. 41 LCT). Por lo tanto cabe rechazar la acción tendiente a obtener la indemnización por despido. Fiscalía General, Dictamen Nº 60.417 del 19/05/2014 Sala IX Expte. Nº 53.856/2012 “Marcos Patricia Alejandra c/Candura Claudio Roberto s/despido”. (Dra. Prieto). Proc. 49 Honorarios. Pacto de cuota litis. Prohibición en los juicios por accidentes y enfermedades del trabajo. Si bien en el régimen de la ley 24.557 se omitió toda referencia al pacto de cuota litis y, por ende, pese a las dudas que podían suscitarse, correspondía su autorización, en la actualidad la ley 26.773 decreta específicamente que en las acciones judiciales con fundamento en otros sistemas de responsabilidad rige la prohibición contemplada en el art. 277 de la L.C.T. (ver en tal sentido el art. 17 apartado 3ºde la ley 26.773), y una interpretación armónica permite afirmar que la prohibición, con mayor razón, atento la naturaleza del Derecho del Trabajo, rige para todo tipo de accidentes o enfermedad laboral. Fiscalía General, Dictamen Nº 60.369 del 13/05/2014 Sala IX Expte. Nº 60.761/2013 “Rodríguez Céspedes Julio César c/SMG ART SA s/accidente-ley especial”. (Dra. Prieto). Proc. 78 3 Recurso de apelación. Resolución que rechazó el pacto de cuota litis denunciado en el escrito de inicio. Resolución que concede con efecto diferido la apelación interpuesta. Procedencia del recurso con efecto inmediato. En el caso, el juez de primera instancia concedió con efecto diferido la apelación interpuesta contra la resolución que rechazó el pacto de cuota litis denunciado en el escrito de inicio. No resulta razonable diferir el tratamiento del recurso de apelación con posterioridad al dictado de la sentencia de primera instancia, pues dicha postura implicaría un innecesario dispendio jurisdiccional. Conceder una apelación con efecto diferido puede producir, en la práctica, similares consecuencias que una apelación denegada y, teniendo en cuenta la naturaleza de la validez o no de “un pacto de cuota litis”, resulta que, en el caso, de no otorgarse tratamiento inmediato a la presente cuestión, su consideración a posteriori de la sentencia definitiva podría tornarse inconducente, o bien traer aparejado un derroche /de recursos absolutamente innecesarios, no sólo para las partes, sino también institucional. Fiscalía General, Dictamen Nº 60.521 del 28/05/2014 Sala IV Expte. Nº 8.810/2014 “Beltrán Javier Marcos c/MAPFRE Argentina ART SA s/accidente-ley especial” (Recurso de hecho). (Dra. Prieto). Proc. 85 Sentencias. Consentimiento de sentencias y resoluciones interlocutorias. Art. 96 L.O.. Si el actor estuvo presente en la audiencia y no puso en tela de juicio lo resuelto, se encuentra precluída toda posibilidad de cuestionamiento ulterior. El silencio allí guardado torna operativa la norma del art. 96 L.O.. El fundamento de la irrevisibilidad aludida no responde tanto a motivos de 21 justicia, como de seguridad y orden, porque la preclusión opera al margen de situaciones que, prima facie, pudieran aparecer como de estricta justicia. Cabe señalar que la institución tiene lugar tanto en el caso de un consentimiento expreso como tácito, puesto que basta la simple conducta omisiva del “no cuestionamiento” para que el acto no pueda volver a discutirse. Fiscalía General, Dictamen Nº 60.335 del 08/05/2014 Sala VI Expte. Nº 46.192/13 “Collella Ricardo Cecilio c/Orellano Ernesto Nicolás s/despido”. (Dra. Prieto). Tabla de contenidos Página 2. D.T. 1 1 19 4 c) Accidentes del trabajo. Acción de derecho común. Art. 1113 Cod. Civil. Responsabilidad del empleador. Dueño o guardián. Trabajador agredido durante la jornada de trabajo. D.T. 1 1 19 4) Accidentes del trabajo. Acción de derecho común. Cosa riesgosa. Conducción de un transporte público de pasajeros (colectivo). Actividad riesgosa. Reacción violenta de los pasajeros. D.T. 1 1 19 5) Accidentes del trabajo. Acción de derecho común. Culpa del empleador. Deber de previsión. Trabajador agredido durante la jornada de trabajo. D.T. 1 1 19 8) Accidentes del trabajo. Acción de derecho común. Derechohabientes. Hija del trabajador fallecido que se presenta iure sucessionis invocando la representación del padre del causante que había fallecido. Existencia de un acuerdo homologatorio previo celebrado por la madre del causante y sus empleadores donde se fija una suma a percibir como todo concepto. Dicho acuerdo hace cosa juzgada frente al planteo de la hija del causante. Página 3. D.T. 1 19 4 c) Accidentes del trabajo. Acción de derecho común. Dueño y guardián. Custodio/vigilador. Posturas incómodas dentro del vehículo. D.T. 1 1 19 12) Accidentes del trabajo. Acción de derecho común. Prescripción. Comienzo del cómputo. D.T. 1 10 bis Accidentes del trabajo. Ley de Riesgos. Denuncia del siniestro que el empleador efectúa a la aseguradora. Art. 6 del decreto 717/1996. D.T. 1 10 bis Accidentes del trabajo. Ley de Riesgos. Inconstitucionalidad del pago en forma de renta periódica. Demandada que transfiere el capital a compañía de seguros de retiro meses después de la traba de la litis. D.T. 1 10 bis Accidentes del trabajo. Ley de Riesgos del Trabajo. Ley 26.773. Actualización de las indemnizaciones a partir de su sanción. Página 4. D.T. 1 10 bis Accidentes del trabajo. Ley de Riesgos del Trabajo. Ley 26.773. Actualización de las indemnizaciones a partir de su sanción. D.T. 1 10 bis Accidentes del trabajo. Ley de Riesgos del Trabajo. Ley 26.773. Actualización según RIPTE. Supuesto en que no procede. D.T. 1 10 bis Accidentes del trabajo. Ley de Riesgos. Ley 26.773. Aplicación del RIPTE a las obligaciones no canceladas al momento de su entrada en vigencia. Beneficio del art. 3 ley 26.773. D.T. 1 1 10 bis Accidentes del trabajo. Ley de Riesgos del Trabajo. Ley 26.773. Inaplicabilidad al caso de las mejoras introducidas por la ley 26.773. Ello no implica desestimar el planteo del actor fundado en la insuficiencia, injusticia e iniquidad de la reparación en caso. D.T. 1 10 bis Accidentes del trabajo. Ley de Riesgos. Ley 26.773. Intereses. Página 5. D.T. 1 10 bis Accidentes del trabajo. Ley de Riesgos. Ley 26.773. Intereses. D.T. 1 10 bis Accidentes del trabajo. Ley de Riesgos. Ley 26.773. Intereses. D.T. 1 10 bis Accidentes del trabajo. Ley de Riesgos. Ley 26.773. Intereses. Compatibilidad con la aplicación del RIPTE. D.T. 1 10 bis Accidentes del trabajo. Ley de Riesgos. Ley 26.773. Modo en que debe ser aplicado el índice RIPTE. D.T. 1 10 bis Accidentes del trabajo. Ley de Riesgos. Ley 26.773. Posibilidad de introducir su aplicación al caso con posterioridad a la traba de la litis. Página 6. 22 D.T. 1 10 bis Accidentes del trabajo. Ley de Riesgos. Ley 26.773. RIPTE. Situaciones a las que se aplica. Art. 3 Cód. Civil. D.T. 10 bis Accidentes del trabajo. Ley de Riesgos. Ley 26.773. Supuesto en el que al momento de su entrada en vigencia no se había cancelado el pago de la reparación adeudada. D.T. 1 10 bis Accidentes del trabajo. Ley de Riesgos del Trabajo. Ley 26.773. Supuesto en que no se aplica. D.T. 1 10 bis Accidentes del trabajo. Ley de Riesgos. Omisión de examen preocupacional.** D.T. 7 Aportes y contribuciones a entidades gremiales. Cuota sindical. Cuotas de solidaridad a cargo de empleados de UTEDYC. Art. 41.2 del C.C.T. 462/06. Página 7. D.T. 7 Aportes y contribuciones a entidades gremiales. Cuota sindical. Cuotas de solidaridad a cargo de empleados de UTEDYC. Art. 41.2 del C.C.T. 462/06. D.T. 13 6 Asociaciones profesionales de trabajadores. Encuadramiento sindical. Conflictos de encuadramiento sindical suscitados entre dos o más asociaciones sindicales. Carencia del empleador de legitimación activa para intervenir en ellos. D.T. 13 6 Asociaciones profesionales de trabajadores. Encuadramiento sindical. Derecho de libertad sindical. No intervención estatal y patronal. Ley 23551. Página 8. D.T. 15 Beneficios sociales. Art. 103 bis L.C.T.. Plan médico-asistencial. No posee carácter remuneratorio. D.T. 15 Beneficios sociales. Sumas percibidas en concepto de “Vistage”. D.T. 18 Certificado de trabajo. Multa del art. 80 L.C.T.. Intimación prevista en el art. 146/01 cuando media negación de la relación laboral. Improcedencia. D.T. Cesión o cambio de firma. Transmisión de la explotación. Extensión de la responsabilidad solidaria al cedido. Arts. 225 y 228 L.C.T. D.T. 27 18 g) Contrato de trabajo. Contratación y subcontratación. Solidaridad. Casos particulares. Art. 30 L.C.T.. Solidaridad del art. 32 ley 22250. Ámbito de aplicación. D.T. 27 18 g) Contrato de trabajo. Contratación y subcontratación. Solidaridad. Casos particulares. Empresa de la construcción contratista de Telecom. Inexistencia de responsabilidad solidaria de Telecom. Página 9. D.T. 27 18 j) Contrato de trabajo. Contratación y subcontratación. Solidaridad. Condena al Estado. D.T. 27 5 Contrato de trabajo. De empleo público. Trabajador de la Comisión Nacional Reguladora del Transporte. Relación de trabajo regida por la L.C.T.. D.T. 27 24 Contrato de trabajo. Empleados de AFJP. Remuneración. “Bonus calidad de atención”. D.T. 27 21 Contrato de trabajo. Ley de Empleo. Multas de los arts. 8, 9, y 10 de la ley 24.013. Prescripción. D.T. 27 17 Contrato de trabajo. Profesiones liberales. Integración a la empresa para el logro de los fines de esta. Página 10. D.T. 27 14 Contrato de trabajo. Transitorios. Art. 29 y 29 bis L.C.T.. D.T. 27 14 Contrato de trabajo. Transitorios. Arts. 29 y 29 bis L.C.T.. Sujeto “empleador” pluripersonal. D.T. 28 4 Convenciones colectivas. Celebración y homologación. Efectos. D.T. 28 2 Convenciones colectivas. Encuadramiento convencional. Servicios de merchandising. C.C.T. nº 130/75. D.T. 33 1 Despido. Abandono de trabajo. Supuesto en que no se configura. Trabajador que toma su licencia anual por vacaciones sin respetar el procedimiento de la empresa. Página 11. D.T. 33 7 Despido. Gravedad de la falta. Trabajador ausente de su domicilio durante una visita médica. D.T. 33 5 Despido del delegado gremial. Vocal suplente del directorio de un sindicato. 23 D.T. 33 12 Despido por maternidad. La adopción se encuentra jurídicamente equiparada a la maternidad. Indemnización de los arts. 178 y 182 L.C.T.. D.T. 33 12 Despido por maternidad. Período de excedencia. Art. 183 L.C.T.. Despido discriminatorio. D.T. 33 13 Despido por matrimonio. Trabajador varón. Presunción. D.T. 34 2 Indemnización por despido. Art. 2 ley 25.323. Supuesto de desvinculación por el art. 212, 4º párrafo L.C.T. Página 12. D.T. 34 2 Indemnización por despido. Art. 1 ley 25.323. Supuesto de improcedencia. Art. 63 L.C.T.. D.T, 26 8 Industria de la Construcción. Fabricación y transporte de hormigón. Actividad que no encuadra dentro de la industria de la construcción. D.T. 54 Intereses. Supuesto en que media declaración de concurso preventivo o quiebra. D.T. 56 1 Jornada de trabajo. Extensión. Excepción general permanente al régimen relativo a la limitación de la jornada de trabajo. Art. 3 de la ley 11.544 inc. a). D.T. 56 1 Jornada de trabajo. Extensión. Trabajo prestado en las tardes de los sábados y los domingos. Página 13. D.T. 56 13 Jornada de trabajo. Guardias pasivas. No constituyen horas extraordinarias. D.T. 78 Quiebra del empleador. Arts. 196 y 197 L.Q.. Continuación de la empresa. Nuevo contrato de trabajo con los trabajadores. D.T. 81 bis c) Responsabilidad solidaria. Responsabilidad de directores y gerentes. Registración de la trabajadora con fecha posterior a la real. D.T. 81 Retenciones. Art. 132 bis LCT. Ley 25.345. Presunción. D.T. 81 Retenciones. Art. 132 bis L.C.T.. Ley 25.345. Rebeldía de la demandada. Presunción de ausencia de depósito. D.T. 83 19 Salario. Asignaciones no remunerativas. Cláusulas convencionales. Página 14. D.T. 83 12 Salario. Propinas. No integran el salario. C.C.T. 125/90. Mero acto de liberalidad del cliente. D.T. 83 2 Salario. Rebaja salarial. Convenio 95 O.I.T.. Salario en dólares. Para la condena que se estipula en dólares se fija un interés del 6%. La sentencia no impone conductas a futuro. D.T. 83 2 Salario. Rebaja salarial. Decisión unilateral por parte de la empleadora. Salarios en dólares. Resolución injustificada. D.T. 83 Salario. Salarios en especie. Uso del vehículo y del celular Página 15. D.T. 83 8 Salario en especie. Medicina prepaga. Carácter remuneratorio. D.T. 83 8 Salarios en especie. Uso del celular. Supuesto de carácter salarial. D.T. 96 Vacaciones anuales pagas. D.T. 97 Viajantes y corredores. Tareas de captación y entrenamiento de “consultoras/revendedoras”. D.T. 97 Viajantes y corredores. Vendedor que ofrece productos que comercializa el demandado. D.T. 98 b) Violencia laboral. Ambiente de trabajo nocivo/hostil. Daño psíquico y físico. Exclusión de condena a la aseguradora. Página 16. D.T. 98 Violencia laboral. Ambiente de trabajo nocivo/hostil. Daño psíquico y físico. Extensión de condena a la aseguradora. Proc. 23 Conciliación obligatoria. Demanda ante el SECLO. Efecto interruptivo de la prescripción. Proc. 39 1 a) Excepciones. Competencia material. Accidente en que un agente del Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires fue parte. Competencia de la Justicia Nacional del Trabajo. Proc. 39 1 a) Excepciones. Competencia material. Competencia de la Justicia Nacional del Trabajo ante el caso en que el Estado Nacional sea parte. Empleado público como sujeto tutelado por las leyes laborales. Página 17. 24 Proc. 39 1 a) Excepciones. Competencia material. Reclamo contra el Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires por despido indirecto. Competencia de la Justicia Nacional del Trabajo. Proc. 39 1 a) Excepciones. Competencia material. Reclamo contra el Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires por despido indirecto. Competencia de la Justicia Nacional del Trabajo. Proc. 49 Honorarios. Honorarios de profesionales en casos de transacción. Proc. 54 Intervención de terceros. Contratos de afiliación del empleador con varias aseguradoras. Proc. 54 Intervención de terceros. Demanda contra la A.R.T. con sustento en el derecho civil. Pedido de citación del empleador. Proc. 61 2 Medidas cautelares. Codemandado rebelde. Solicitud de embargo preventivo sobre sus bienes. Contestación de demanda por los otros codemadados. Improcedencia de la declaración de embargo preventivo en los términos del art. 62, inc. b) L.O.. Página 18. Proc. 61 2 Medidas cautelares. Embargo. Subasta. Adquisición del dominio a favor del comprador. Posesión del inmueble. Inmueble ocupado por inquilino. Traditio brevi manu. Proc. 61 Medidas cautelares. Trabajadoras que alegan haber sido activistas sindicales. Medida cautelar de reinstalación. Proc. 61 Medidas cautelares. Trabajadoras que alegan haber sido despedidas por ser activistas gremiales. Medida cautelar de reinstalación. Proc. 78 3 Recurso de apelación. Efecto con que se concede el recurso. Art. 110 L.O.. Excepción. Resolución que tuvo por desistida la producción de la pericial médica. Página 19. Proc. 78 3 Recurso de apelación. Efecto con que se concede el recurso. Art. 110 L.O.. Resolución que tuvo por desistida la producción de la pericial médica. Proc. 78 3 Recurso de apelación. Resoluciones interlocutorias dictadas en audiencias con la presencia de la parte interesada. Art. 96 L.O.. Apelación deducida con posterioridad a la audiencia. Improcedencia. Proc. 79 Recusación y excusación. Excusación del juez por denuncia en su contra ante el Consejo de la Magistratura. Proc. 79 Recusación y excusación. Excusación del juez por denuncia en su contra ante el Consejo de la Magistratura. Proc. 78 Recusación y excusación. Improcedencia del planteo de recusación por prejuzgamiento previsto en el art. 17 inc. 7) del CPCCN. Proc. 79 Recusación y excusación. Principios. Opinión subjetiva del juez. Justificación. Página 20. Proc. 80 Representación. Representación en juicio de una A.R.T. según su estatuto social. Proc. 80 Representación. Representación en juicio del consorcio de propietarios. Proc. 91 Temeridad y malicia. Art. 275 L.C.T.. Requisitos. D.T. 13 5 Asociaciones profesionales de trabajadores. Ley 23.551. Expulsión de un afiliado de una entidad sindical. Cumplimiento estricto de los recaudos formales. Resguardo del debido proceso. Página 21. D.T. 27 23 Contrato de trabajo. Irrenunciabilidad. Acuerdo de reducción en la remuneración. D.T. Contrato de trabajo. Objeto ilícito. Préstamos de dinero en “negro”. Simulación de venta de pasajes turísticos en cuotas a través de tarjetas de crédito. Proc. 49 Honorarios. Pacto de cuota litis. Prohibición en los juicios por accidentes y enfermedades del trabajo. Proc. 78 3 Recurso de apelación. Resolución que rechazó el pacto de cuota litis denunciado en el escrito de inicio. Resolución que concede con efecto diferido la apelación interpuesta. Procedencia del recurso con efecto inmediato. Proc. 85 Sentencias. Consentimiento de sentencias y resoluciones interlocutorias. Art. 96 L.O.. 25