"Año del Bicentenario de la Declaración de la Independencia Nacional" Superior Tribunal de Justicia Corrientes XK2 38346/1 En la ciudad de Corrientes a los veintinueve (29) días del mes de julio de dos mil dieciséis, constituyéndose el Superior Tribunal de Justicia conforme a la integración dispuesta a fs. 62 de la presente causa, con su miembro titular Doctor, Luis Eduardo Rey Vázquez y Jueces Subrogantes de los Sres. Ministros del Superior Tribunal de Justicia, Dras. Nidia Alicia Billinghurst de Braun, Martha Helia Altabe de Lertora, María Herminia Puig, con la Presidencia del Doctor Guillermo Horacio Semhan, asistidos de la Secretaria autorizante, Doctora Judith I. Kusevitzky, tomaron en consideración el Expediente N° XK2 38346/1, caratulado: "CARATULA PROVISORIA EN: INCIDENTE DE REGULACION DE HONORARIOS PRESENTADO POR EL DR, RICARDO A. MALDONADO EN EXPTE N° 38346, EN AUTOS: SITRAJ CORRI ENTES S/DENUNCIA - CAPITAL - EXPTE 4976 DE T.O.P. 2." Los Doctores Luis Eduardo Rey Vázquez, Nidia Alicia Billinghurst de Braun, Martha Helia Altabe de Lertora, María Herminia Puig y Guillermo Horacio Semhan, dijeron: ¿QUE PRONUNCIAMIENTO CORRESPONDE DICTAR EN AUTOS? A LA CUESTION PLANTEADA EL SEÑOR PRESIDENTE DEL SUPERIOR TRIBUNAL DE JUSTICIA DOCTOR GUILLERMO HORACIO SEMHAN, dice: I.- Contra la resolución Nº 546, dictada por el Tribunal Oral Penal Nro 2 de la ciudad de Corrientes, que resolvió no hacer lugar al recurso de apelación interpuesto por la defensa técnica y confirma el auto de regulación de honorarios Nro 1775, con costas; el encartado con el patrocinio letrado, interpone recurso de casación a fs. 04/8 vta.. II.- En forma sintética, los agravios del recurrente son los siguientes: - Primer Agravio (Porcentaje etapa instructoria):. Sostiene que corresponde regular 1/3 de la base regulatoria por toda la actuación en la etapa instructoria, de acuerdo al art. 14 párrafo 3ro ley 4188 y no el 50%. - Segundo Agravio (“Reformatio in pejus”): Afirma que la anterior regulación Res. Nº 1990, ascendió a la suma de $ 1.041.944, confirmada por Res. Nº 03 de la alzada, que dio lugar a la Sent. Nº 85 23/09/2009 del S.T.J. y ahora por Res. Nº 1775 se elevó a $ 5.568.653, por lo que aumentó un 500% en perjuicio de su defendido, único apelante. - Tercer Agravio (Prescripción Incidentes): Arguye que la alzada en errónea aplicación de la ley rechazó el planteo de prescripción cuando la obligación de pagar prescribe a los dos años desde que feneció el pleito (2007) o ceso su intervención (art. 4032 C.C.) y el pedido de regulación de los incidentes fue en el 2010 (8 años). - Cuarto Agravio (Límite de responsabilidad): Manifiesta que la Alzada de modo arbitrario sostiene que el tope del 25% (art. 505 del C.C.) no incluye las incidencias cuando la norma establece la expresión “los honorarios profesionales de todo tipo” por lo que deben ser incluidos. Por otra parte sostiene que la responsabilidad no excederá el 25% “del monto de la sentencia” por lo que solicita la limitación de los honorarios. - Quinto Agravio (Cómputo de intereses): Propugna que no corresponde adicionar intereses al monto de la condena, sino el monto la sentencia a que alude el art. 505. También estima la prohibición de todo tipo de actualización (arts. 7 y 10 ley 23.928 y art. 4 ley 25.561). - Sexto Agravio (Cosa Juzgada): Destacan que el S.T.J. hizo lugar a la casación para reducir a 1/3 el monto de $ 1.041.944, que habiendo triunfado no ha obtenido la reducción, sino que ha aumentado a $ 5.568.653, lo que configura un exceso jurisdiccional. Así detalla que la Sent. 85 del S.T.J. revocó el punto 2º de la Res. Nº 1190 “únicamente en lo que fue materia de agravios”, por lo que el resto de la resolución es Cosa Juzgada, con el "Año del Bicentenario de la Declaración de la Independencia Nacional" Superior Tribunal de Justicia Corrientes -2Expte. N° XK2 38346/1.absurdo que quien no recurrió ve incrementada su pretensión. - Séptimo Agravio (Inconstitucionalidad): Critica que el tribunal de alzada haya considerado extemporáneo los planteos de inconstitucionalidad deducidos de los arts. 30 del DL 100/2000 y 64 del DL 159/01, que fue introducido en el informe de la Apelación contra la Res. Nº 1775 lo que configura un exceso ritual manifiesto. III.- A fs. 27/40 presenta informe de casación el Dr. Maldonado y sostiene que la Res. Nº 546 es autosuficiente y resulta una derivación razonable del derecho. En primer lugar sostiene la taxatividad impugnaticia en relación a la interpretación restrictiva del recurso de casación y en forma subsidiaria responde cada uno de los agravios. IV.- A la vista corrida el Sr. Fiscal General, a fs. 42/43 vta., dictamina que debe hacerse lugar parcialmente al recurso de casación atento a que la Res. Nº 1775 ha resuelto más allá de lo ordenado en Sent. Nº 85 y por ello no podía haber sido confirmada por el “a quo”. Sostiene que “[…] lo único que debía efectuar el A quo es distinguir las regulaciones que correspondían a Maldonado por el período en que se encontraba vigente la ley 4122/4188, de los que se habían devengados bajo la vigencia del Dto. Ley 100/00 pero sin que lo autorice a modificar la base (como actor civil y querellante), ni el porcentaje que se había considerado aplicable […]”. En igual sentido, estima que “[…] dicha regulación jamás podría haber superado, como lo hizo, el límite de la regulación efectuada por la Resolución Nº 1190 pues, como acertadamente dice el recurrente, la misma había quedado firme y consentida para el beneficiario de tales honorarios y sólo había sido apelada (por altos) por la representación de Romero Feris. Con ello, se vulnera claramente el principio de la reformatio in peius y el de la cosa juzgada […]. -vide fs. 42 vta. /43- y desestima el resto de los agravios. V.- En primera medida debo advertir que este Cuerpo tiene dicho que “[…] Conforme a nuestro ordenamiento procesal, (art. 494 del CPP), lo atinente a la regulación de honorarios en instancias ordinarias, constituye en principio, materia ajena al recurso de Casación, y solo procede hacer excepción, cuando la resolución impugnada se apartó de la reglamentación normativa prevista para el caso, con el consiguiente menoscabo de los derechos constitucionales en juego. […] Es decir que salvo casos de arbitrariedad manifiesta y demostrada, la regulación de honorarios profesionales, no alcanza a ser materia de casación [...] Sent. Nº 83/09. En el “súb júdice” el casacionista sindica la arbitrariedad del decisorio en crisis. En consecuencia, se debe verificar, en primer lugar, a fin de habilitar el análisis de este Alto Cuerpo, si la misma se compadece con la mentada doctrina de la arbitrariedad de la Suprema Corte de Justicia de la Nación ya que como lo tiene dicho el cimero tribunal por “arbitrariedad” debe entenderse el grosero error, la manifiesta iniquidad, la profunda distorsión o apartamiento de la ley, la desproporcionada, exorbitante o írrita situación que genera algo que por sus defectos, deja de constituir un fallo válido propiamente dicho para pasar a convertirse en un absurdo jurisdiccional. Sin perjuicio de lo expuesto, no puedo soslayar del análisis de estas actuaciones que es la segunda ocasión que este Alto Cuerpo debe avocarse al tratamiento de la cuestión, en razón que por Sent. Nº 85/09 dirimió lo atinente a la primera regulación efectuada. En ese sentido, ante la existencia de ese primer pronunciamiento de este S.T.J. es dable recepcionar la metodología adoptada por la C.S.J.N., quien en reiteradas ocasiones ha establecido que cuando se encuentre en juego la inteligencia de un pronunciamiento anterior del Tribunal en la misma causa, son los integrantes de dicho Cuerpo quienes se encuentran en mejores condiciones para desentrañar el alcance de sus propios fallos (causa M.426.XLII “Mendizabal de Etchart, Edita c/Kenny, Aldo Federico”, sentencia del 18 de noviembre de 2008, entre muchos otros). Sin ánimo de adelantar ideas, revisada la resolución puesta en crisis, se aprecia que en la especie se ha configurado el alegado vicio de "Año del Bicentenario de la Declaración de la Independencia Nacional" Superior Tribunal de Justicia Corrientes -3Expte. N° XK2 38346/1.arbitrariedad por cuanto advierto en el decisorio un grosero error en la interpretación y un apartamiento a las leyes de tal magnitud, que justifica el ingreso de este Alto Cuerpo a la revisión del auto recurrido, por cuanto el juzgado instructor al proceder a la nueva regulación de la forma en que lo hizo, excedió el pronunciamiento propiciado por este S.T.J. en la Sent. Nº 85/09. Sin embargo ello, será abordado en el tratamiento de cada agravio, especificando en cada caso en particular la solución que se propicia, sin respetar la cronología propuesta por los recurrentes, en tanto no existen reglas rígidas relativas en la forma en que deben ser resueltas las cuestiones debatidas por el Tribunal, con el único fin de facilitar su comprensión. VI.- Quinto Agravio: En primera medida abordaré el presente acápite en tanto el mismo determina la base regulatoria sobre la cual se debe regular honorarios. Así debo aclarar que el cómputo de los intereses es efectuado según la reserva de los mismos en el Punto Nº 3 de la Res. Nro 1190, punto que ha pasado en autoridad de cosa juzgada al no haber sido discutida su procedencia en aquella oportunidad. Sin olvidar que la Sent. Nº 8/02 de la entonces llamada Cámara Criminal Nº 2, en el Punto 2) estableció hacer lugar a la acción civil interpuesta, condenando al hoy recurrente a pagar a la Municipalidad de la ciudad de Corrientes la suma de $ 8.790.900,00 en concepto de indemnización por los daños y perjuicios causados, más los intereses de Tasa Pasiva para Uso de la Justicia que publica el Banco Central de la R.A., los cuales serán calculados sobre los montos y desde las fechas que se indican en los considerandos hasta su efectivo pago. Dicho monto con posterioridad fuera rectificado por Auto Nº 423/02 por la suma de $ 8.045.900,00, que incluso la C.S.J.N. en autos “SITRAJ CORRIENTES S/DENUNCIA – CAPITAL” (Expte. S-1957/04 de la C.S.J.N) resolvió rechazar los recursos extraordinarios por inadmisibles, por lo que el pronunciamiento se encuentra firme y consentido. Amén de lo expuesto, es el trámite previsto conforme el art. 4 y 67 ter de la Ley 4122/4188. Así entendió este S.T.J. en Sent. Nro 38/06 (civil) en cuanto los intereses integran la base regulatoria en la regulación de honorarios, del siguiente modo: ”[…] La ley 4122 en su artículo 3 dispone que en toda clase de juicio en que se demanden sumas de dinero la base regulatoria será el monto de la demanda actualizada por depreciación monetaria con más los intereses y si bien es cierto que la ley 23928 y 25561 derogaron cualquier posibilidad de indexación también es cierto que indexación y tasa de interés no son la misma cosa [...]” BANCO DE GALICIA Y BUENOS AIRES S.A. C/ GANADERA CELE S.A. S/ EJECUTIVO. Criterio reiterado en Sent. Nº 39/07 (civil) que dijo “[…] Ahora bien. El artículo 4° de la ley 4188 dispone que “En toda clase de juicio en que se demande sumas de dinero o bienes susceptibles de apreciación monetaria, la base regulatoria será el monto de la demanda actualizado por depreciación monetaria hasta el último índice oficial publicado al tiempo de la regulación, con más los intereses correspondientes, o el que resulte de la sentencia o transacción si éstas últimas fueran mayores”. Esa normativa arancelaria era la vigente durante el período en que el letrado del caso cumplió su tarea profesional, de manera que, ni el legislador, ni mucho menos la jurisdicción podría, en virtud del nuevo decreto ley arancelario o de su interpretación, arrebatar o alterar el derecho patrimonial adquirido al amparo de la legislación anterior, pues se afectaría la garantía de la inviolabilidad de la propiedad (CSJN; Fallos: 306:1799; 319:1915; 328:1381, entre muchos otros). VII. Casi huelga señalar entonces, que habiendo progresado la demanda de cobro, constituyendo la obligación al pago de interés uno de los capítulos de la condena, corresponde por mandato legal que la regulación sea efectuada computando tales intereses y hasta el momento de la liquidación respectiva. Es, por otra parte, la manera de salvaguardar la justa retribución profesional pues, siendo los intereses devengados desde la mora y hasta el efectivo pago los que forman parte del beneficio económico obtenido por el litigante vencedor merced a la intervención de quien le prestó la "Año del Bicentenario de la Declaración de la Independencia Nacional" Superior Tribunal de Justicia Corrientes -4Expte. N° XK2 38346/1.asistencia profesional letrada, de computarse como base regulable únicamente a los réditos generados hasta la sentencia resultarán emolumentos desproporcionados con el interés económico que el abogado defendió exitosamente en el pleito. Siendo inaceptable de tal manera el argumento que refiere a una “autonomía” entre el crédito percibido por el ejecutante y la obligación por honorarios de su letrado, ya que sin la labor del abogado -de cuya retribución se trata- la condena misma pronunciada en la sentencia no existiría […]”. Expte. Nº 26006/06, caratulado: “VISAN S.A. C/ ACHITTE EDUARDO ALFREDO Y OTROS S/ EJECUCIÓN HIPOTECARIA”. También la C.S.J.N. dijo “[…] los intereses integran el monto del juicio a los fines de regular los honorarios de los abogados […]” (Corte de Justicia de la Nación, Cap. Fed.: A0032212 La Plata Remolques S.A. c/ Bs. As. Pcia. s/repetición, 04/05/95). A su turno también el Art. 30 del Dec. Ley Nro 100/00 y 159/01 establece que “A los efectos de la regulación de honorarios la depreciación monetaria e intereses, si correspondiere, integran el monto del proceso.” [...] la inclusión de intereses en la cuantía del asunto a los fines arancelarios corresponde ministerio legis en virtud del artículo 30 del Decreto Ley N° 100, tras la modificación introducida por el Decreto Ley N° 159, prevé, en efecto, que a los fines de la regulación de honorarios, “la depreciación monetaria e intereses, si correspondiere, integrará el monto del proceso” [...] Sobre tales bases, pierde virtualidad en el ámbito de la provincia de Corrientes la tradicional doctrina de la Corte Federal, que considera que por ser los intereses el resultado de una contingencia esencialmente variable y ajena a la actividad profesional, no cabe su acumulación al capital, a los fines regulatorios. Obvio resulta señalar que ello es así ante el expreso tenor disonante de la norma correntina, y la conocida doctrina de la propia Corte Nacional que declara ajenas a su revisión las cuestiones regidas por el derecho público local, en tanto privativas de los tribunales locales, en virtud del respeto debido a las atribuciones de las Provincias de darse sus propias instituciones y regirse por ellas [...] S.T.J. Sent. Nº 91/09 (civil) “INCIDENTE DE REGULACION DE HONORARIOS DEL DR. EDUARDO D. ANDERSON, EN AUTOS: PELOSO ANDREA RAMONA POR SI Y POR SUS HIJOS MENORES C/ DON ROBERTO S.A. Y/O QUIEN RESULTE RESPONSABLE S/ ORDINARIO”. Ahora bien, respecto a la mentada violación de los arts. 7 y 10 según ley 23.928 texto según ley 25.561, a pesar que los recurrentes solo realizan una mención al pasar sin brindar mayores fundamentos de peso para ser considerado con un mínimo de seriedad. Propicio recordar que este S.T.J. por Sent. Nº 96/14 expreso que “[…] la Corte Suprema de Justicia de la Nación, en su actual composición, mediante sentencia dictada el 3 de julio de 2009 en la causa "C.866. XLII, Candy S.A. c/AFIP y otro S/Amparo" hizo lugar al ajuste por inflación solicitado por una empresa, pese a la existencia de la ley 23.928 ratificada por ley 25.561. Vale decir que el parámetro no es opinable: El acreedor tiene derecho a recibir una cantidad de dinero que le permita adquirir bienes en la misma proporción que si hubiese tenido el dinero en tiempo oportuno. En ello consiste el mantenimiento del poder adquisitivo del peso argentino […]”. Consecuentemente, no se evidencia la mentada arbitrariedad atento que la primera regulación fuera practicada el 03/10/2002 (Res. Nro 1190) y la segunda fuera efectuada casi 8 años después más precisamente el 29/09/2010 (Res. Nro 1775). Por lo que, la diferencia existente entre una y otra regulación de honorarios reside que la primera regulación tuvo como base regulatoria solo el capital según Sent. Nro 8/02 rectificada por Auto Nro 423/02; a saber, $ 8.045.900 y la segunda regulación la actualización de lo adeudado al 17/09/2010 ergo la suma que asciende a $ 22.076.743,76. Por consiguiente, haber tomado esta última suma como base regulatoria se condice con lo expresado por este Cuerpo en tanto “[…] Que las regulaciones de honorarios de los profesionales intervinientes deban hacerse tomando como base los valores determinados en la fecha más próxima al momento en que aquellas se "Año del Bicentenario de la Declaración de la Independencia Nacional" Superior Tribunal de Justicia Corrientes -5Expte. N° XK2 38346/1.practican, importa lisa y llanamente la aplicación de lo que la Corte Suprema Nacional califica como el "principio de la realidad económica litigiosa" -a partir del precedente "Pinamar c/ Conduar"; 28/12/76-, que impide prescindir de los valores reales en juego cuando ellos han sido determinados en los autos [...] S.T.J. INTERLOCUTORIO 119/14 (civil) autos caratulados “BONOMI DE ROMERO, MARTA EMMA C/ PEDRO MARTINEZ Y MARIA ANDREA AGUIRRE S/ REIVINDICACION EXPTE. N° 5388 S/ ELEVAR EXPTE. PRINCIPAL”. En razón de los fundamentos brindados propicio el rechazo del presente. ASI VOTO. VII.- Primer Agravio: Continuando con los agravios basta decir que el párrafo 3ro del art. 14 establece con meridiana claridad los requisitos para que pueda regularse el tercio. Así, el hecho penal tuvo que haber dado lugar a la promoción del respectivo juicio civil en dicha sede, situación totalmente disímil al presente, donde la acción civil fuera interpuesta en sede penal, dicha circunstancia opera como obstáculo para la aplicación del referido parágrafo. Tal extremo no puede ser considerado como signo de arbitrariedad o falto de razonabilidad en tanto el tribunal solo procede a la aplicación lisa y llana de la ley, máxime cuando la diferencia arancelaria para regular conforme lo peticiona la defensa, hoy recurrente, estriba justamente en la promoción o no del respectivo juicio civil en una u otra sede, lo que no ha acontecido en el “sub examine”. Párrafo aparte es de advertir que amén de no prosperar el tercio por no reunir los requisitos de procedencia establecidos en el marco normativo, aún en el hipotético caso que así hubiera sido, surge del propio texto de la ley que el 1/3 corresponde “[…] por toda la actuación en la etapa de instrucción […] 3er párrafo “in fine” del art. 14, ergo utiliza la palabra “toda” e “instrucción”. Cuando la regulación de la acreencia de la actuación en la calidad de actor civil en sede penal, se realizó habiendo determinado la aplicación de lo prescripto en el art. 14 párrafo 6to que remite a la escala del art. 2 de la Ley 4122/4188, en principio el 14% aplicable al 100% (dos etapas: instrucción y debate) por ello se halla circunscripto en un 50% habida cuenta que su actuación profesional se registró en una sola etapa (instrucción) de la conjugación de ambas normas arancelarias y no como interpreta el recurrente, que se aplicó el 50% del monto de la condena civil a la etapa instructoria, por lo que propicio el rechazo del mentado agravio. ASI VOTO. VIII.- Séptimo Agravio: Al respecto, es dable señalar que recién en el informe de ley incorpora la alegada inconstitucionalidad y este S.T.J. ha expresado que “[…] el defensor al presentar el Informe de Ley, en esta instancia extraordinaria, no se limita a informar sus agravios primigenios, sino que en realidad formula otro recurso de casación, introduciendo razonamientos, citas doctrinarias (ver fs. 719/721 vta.), transcripciones de pruebas (ver fs. 718 vta.), y fundamentos que no existían en el escrito recursivo, incluso a fs. 719, el defensor dice " […] otro motivo de casación […]", lo cual es absolutamente inadmisible en esta instancia, y con tal proceder ha provocado la invalidez de su informe de fs. 717/723, en los términos del art. 499 del CPP. En consecuencia, este último no se considerará […]” criterio reiterado en Sent. N° 161/11 entre muchas otras. Por aplicación de la doctrina imperante emanada del fallo "Casal", "Salto", "Martinez Areco" de la C.S.J.N. este Tribunal casatorio debe realizar una tarea de revisión amplia de la causa a los efectos del resguardo de la garantía de la doble instancia que exige como regla que el imputado tenga la posibilidad de someter la totalidad del contenido de la sentencia de condena al escrutinio del tribunal del recurso, aunque con dos importantes precisiones que fijan los límites de la garantía: quedan fuera del examen las cuestiones vinculadas con la inmediación propia del debate oral y tampoco tal reexamen puede ir más allá de los agravios planteados por el recurrente, de otra manera más que un recurso la revisión seria el fruto de una elevación en consulta a la alzada. […]” Sent. Nº 68/07, entre muchos otros. Sin perjuicio de ello, es dable recordar que éste S.T.J., “in re” "Año del Bicentenario de la Declaración de la Independencia Nacional" Superior Tribunal de Justicia Corrientes -6Expte. N° XK2 38346/1.Sent. Nº 33/06 sostuvo que: "[…] En reiteradas oportunidades el más alto tribunal de la Nación señaló que la declaración de inconstitucionalidad de una ley o de alguna de sus partes es un acto de suma gravedad institucional que deba ser considerada como última ratio del orden jurídico […]". Aún en el extremo que este Alto Cuerpo decida adentrarse a resolver sobre dicho cuestionamiento, en aplicación de la doctrina del “máximo rendimiento” de la C.S.J.N., se encuentra “ab initio” imposibilitado por tanto el recurrente limita su queja a la falta del tratamiento por el T.O.P., sin reflejar los fundamentos de la pretendida tacha de inconstitucionalidad por lo que este tribunal casatorio se ve limitado en su intervención. ASI VOTO. IX.- Tercer Agravio: En cuanto a la prescripción aludida respecto a los honorarios sentenciados en los incidentes se aprecia que el mismo ha tenido en consideración la regla que en materia de prescripción de los honorarios profesionales se debe respetar la aplicación de una interpretación restrictiva, toda vez que en caso de duda debe optarse por el régimen más favorable a la subsistencia del derecho del acreedor, máxime si se tiene en cuenta el carácter excepcional y la naturaleza alimentaria del crédito en cuestión. Así también que todas las medidas tendientes a la determinación de los honorarios, interrumpen el curso de la prescripción conforme lo sostiene la doctrina. De la presentación efectuada por el Dr. Maldonado a fs. 27/40 vta., más precisamente a fs. 31/33 realiza un raconto procesal de los avatares del trámite de regulación de sus honorarios solicitados desde la primera oportunidad (15/08/2001) reiterada con posterioridad (24/07/2002). Por ende, no puede razonablemente considerarse que el pedido de regulación ha prescripto, en virtud de considerar la voluntad del abogado quien siempre mantuvo firme su propósito de cobro. Lo precedente cobra mayor relevancia, al tener en cuenta que a partir de la sanción del nuevo Código Civil y Comercial, sin perjuicio de su aplicación efectiva o no, al tema que nos ocupa lo cual no abordaré por exceder el tratamiento del presente. Sin embargo, lo considero útil para ilustrar la temática en cuestión, se encuentra reglado en los artículos pertinentes (2544-2559), sin cambios sustanciales y solo aclaran temas obscuros discutidos jurisprudencialmente, con la anterior redacción. En definitiva, el art. 2546 establece que “[…] Interrupción por petición judicial. El curso de la prescripción se interrumpe por toda petición del titular del derecho ante autoridad judicial que traduce la intención de no abandonarlo, contra el poseedor, su representante en la posesión, o el deudor, aunque sea defectuosa, realizada por persona incapaz, ante tribunal incompetente, o en el plazo de gracia previsto en el ordenamiento procesal aplicable […] y a su turno el art. 2547 complementa lo siguiente “[…] Duración de los efectos. Los efectos interruptivos del curso de la prescripción permanecen hasta que deviene firme la resolución que pone fin a la cuestión, con autoridad de cosa juzgada formal […]. ASI VOTO. X.- A continuación trataré en forma conjunta el Segundo y Sexto agravio, en tanto ambos planteos en forma relacionada cuestionan el alcance de la Sent. Nº 85/09, desde dos aspectos diferentes, si bien interrelacionados entre sí. A saber, la “reformatio in peius” y “cosa juzgada”. En primera medida, surge de la simple lectura de la Sent. Nº 85/09 de este S.T.J., que al pasar a resolver el recurso interpuesto se dijo que “[…] Se selecciona del marco recursivo, exclusivamente la afectación al derecho de defensa por la falta de traslado de la promoción del incidente de regulación de honorarios y el ámbito temporal de aplicación de las leyes arancelarias, de acuerdo al modo de resolver las cuestiones a tratar. La regulación de honorarios respecto al condenado Agustín Collantes, se encuentra firme y consentida, con garantía para el beneficiario del instituto de la cosa juzgada, por lo tanto es inconmovible. […] A continuación en el acápite que nos interesa sostiene que “[…] Por no cumplimentar el juez de grado esta doctrina que proviene de la Corte Suprema de Justicia de la Nación y además, por apartarse de la normativa arancelaria aplicable al caso, corresponde dejar "Año del Bicentenario de la Declaración de la Independencia Nacional" Superior Tribunal de Justicia Corrientes -7Expte. N° XK2 38346/1.sin efecto la Resolución Nº 03 del 6 de febrero de 2009 de la Alzada que obra a fs. 63/65 y revocar el punto 2º) de la Resolución Nº 1190 del 3 de octubre de 2002 obrante a fs. 11/12 de la instrucción únicamente en lo que fue materia de agravio, remitiendo la incidencia a origen para que se proceda a una nueva regulación […]” vide Sent. 85/09. Particularmente el Segundo Punto que fuera dejado sin efecto en virtud de la revocación decía “[…] REGULAR LOS HONORARIOS PROFESIONALES del Dr. RICARDO ALBERTO MALDONADO, por su actuación en el principal en la Primer Etapa del Proceso como apoderado de la parte Querellante y Actora Civil, respecto y a cargo de RAUL ROLANDO ROMERO FERIS, en la Suma de Pesos UN MILLON CUARENTA UN MIL NOVECIENTOS CUARENTA Y CUATRO ($ 1.041.944.-) por los fundamentos dados en los considerandos, y de conformidad a las normas establecidas por las Leyes 4.122 y 4.188 […]”. Res. Nº 1190. Desde tal perspectiva es dable afirmar que este S.T.J. ordena revocar “únicamente” el Punto 2º) de la Res. Nº 1190 y solo en dicho extremo o alcance ha impedido que dicho pronunciamiento adquiera firmeza o efecto de cosa juzgada. Lo que conduce necesariamente, a otro razonamiento que el resto de la resolución ha pasado en autoridad de cosa juzgada, al haber ordenado incluso que se remita a origen a efectos de que se proceda a una nueva regulación de honorarios, pero solo para arribar a dos montos diferenciados, de acuerdo a la normativa arancelaria vigente en cada periodo, esa era la función encomendada y a la que debía sujetar su accionar el instructor. En virtud a ello, el juzgado instructor debió acotar su proceder en la nueva regulación de honorarios, en cumplimiento de la Sent. Nº 85/09, que sentencio “[…] Al quedar comprendido el tiempo de desarrollo del proceso bajo la vigencia de la ley 4122/4188 y el Decreto Ley Nº 100/2000, corresponde la aplicación de ambas normas, teniendo presente el tramo procesal que le cabe a cada una de ellas y de ese modo obtener dos montos para la distinción de los dos periodos […] vide Sent. 85/09. Así, al haber ordenado el S.T.J. una nueva regulación “[…] únicamente en lo que fue materia de agravio […]”, es dable precisar que el juzgado instructor no podía variar los porcentajes y artículos utilizados en la primera regulación, al considerar aplicable la ley 4122/4188, en lo que respecta a dicha ley, pues se trata de cuestiones ya preclusas, que tuvo su paso recursivo por este S.T.J., por tanto se encuentra cubierta por la cosa juzgada que conlleva el efecto de tornar irrecurribles e inmutables las resoluciones jurisdiccionales. En relación al tramo comprendido en el Dec. Ley Nº 100/00 y 159/01 no surge dificultad en su aplicación por cuanto originariamente en la primera regulación no fue considerada por lo que no se encontraba sujeto a porcentajes aplicados con anterioridad y podía establecer los porcentuales, en base a los artículos a aplicar. Ello, por la sencilla razón que no es posible desconocer la preponderancia del principio de la “reformatio in peius”, habiendo sido el único recurrente, la defensa, y quien en definitiva logró la revocación del anterior pronunciamiento por su sola actividad recursiva. Así este S.T.J. en Sent. Nº 45/13 (fuero laboral), dijo que“[…] La reforma en perjuicio es, bien se sabe, una limitación de jerarquía constitucional que veda al tribunal ad quem empeorar la situación del único apelante, esto es, cuando no ha mediado recurso también por parte de un contrincante [...]”. A mayor abundamiento, la aludida frase “[…] en lo que fue materia de agravio […]” indica con clara solvencia que se refiere en exclusividad a la aplicación de la ley arancelaria vigente al momento de la prestación y solo con referencia a la regulación de honorarios a cargo de la defensa de Romero Feris, único recurrente, siendo ese el único sentido que es dable asignar a dicha expresión. En síntesis, corresponde dejar sin efecto la Resolución Nº 546 y revocar el Punto 1º de la Resolución Nº 1775, debiendo girarse con suma "Año del Bicentenario de la Declaración de la Independencia Nacional" Superior Tribunal de Justicia Corrientes -8Expte. N° XK2 38346/1.urgencia al magistrado correspondiente a efectos que proceda en el plazo de 15 días, a rectificar la regulación la que deberá ser efectuada sin variar los porcentajes acordados en la primera regulación, ni adicionar nuevos artículos que no hayan sido contemplados en la primigenia Resolución Nº 1190, en referencia a la ley 4122/4188. Con el único fin de evitar una interpretación parcializada, al momento de readecuar la regulación de honorarios, deberá tener en consideración lo siguiente: A) En forma general que: - La base regulatoria, (capital) más los intereses (hasta el 17/09/2010) realizada en la Resolución Nº 1775. - La división en dos etapas, correspondiendo los emolumentos solo a la etapa de instrucción. - El doble carácter de intervención del profesional como Actor Civil y como Querellante Conjunto, sin olvidar su actuación como procurador. - La Ley Arancelaria vigente en cada periodo, Ley Nº 4122/4188 (02/08/99 al 03/12/2000), y el Dec. Ley Nº 100/00 y 159/01 (04/12/2000 al 10/12/2001). B) En particular, respecto a la Ley Nº 4122/4188, que denominaré primer periodo, deberá regular conforme a los siguientes límites: - En su calidad de Actor Civil, art. 14 párrafo 6 º en relación con el porcentaje (14%) según art. 2. (Punto XI – a) Res. Nº 1775). - El Derecho Procuratorio, conforme al art. 39, (50%). (Punto XI – b) Res. Nº 1775). - En su calidad de Querellante Conjunto, art. 14 párrafo 4º, deberá limitar su regulación al 35% establecido en oportunidad de la Res. Nº 1190 y no el 50% calculado en la Resolución Nº 1775 (Punto XII), al que no deberá adicionar otro importe sino exclusivamente el 35% acordado. - A mayor abundamiento, se deberá excluir del cálculo el aumento convenido en el Punto XI – c) de la Res. Nº 1775), es decir el 60%, al haber sido incorporado recién en la segunda regulación. C) En relación al Dec. Ley Nº 100/00 y 159/01, que identificaré como segundo periodo, deberá limitar el porcentaje establecido en la Res. Nº 1775. A saber, el 15,5% como actor civil y el 15,5% como querellante conjunto, ambos acordados en los Considerandos XVII y XVIII, respectivamente. D) En lo atinente a las incidencias, no hay objeciones que plantear al cálculo y mérito efectuado en los Considerandos XX, XXI –a) y b). E) Por último, el Considerando XXII deberá tener en consideración el art. 730 del C.C. y C, conforme a lo resuelto en el apartado siguiente. XI.- Cuarto Agravio: Previo al responde, es dable precisar que a partir de la entrada en vigencia del nuevo Código Civil y Comercial de la Nación, el anterior art. 505 del C.C., encuentra actual regulación en lo prescripto en el art. 730, segundo párrafo, del C.C. y C., el que reproduce la redacción anterior, sin presentar modificación alguna. Sin perjuicio de ello, la jurisprudencia entiende al respecto que el art. 730 (ex art. 505) “[…] en forma mayoritaria considera que sólo limita la responsabilidad del condenado en costas por los honorarios devengados, más no respecto de su cuantificación. Además, y de conformidad con sus antecedentes parlamentarios, el objeto de la norma es asegurar el acceso de la justicia de todos los sectores de la población que con frecuencia ven dificultado el ejercicio de sus derechos debido a la onerosidad de los honorarios profesionales y demás gastos del proceso […] Código Civil y Comercial de la Nación analizado, comparado y concordado, Primer Tomo, Artículos 1 – 1429, "Año del Bicentenario de la Declaración de la Independencia Nacional" Superior Tribunal de Justicia Corrientes -9Expte. N° XK2 38346/1.Alberto J. Bueres, ed. Hammurabi s.r.l., 2da reimpresión, 2015, Pág. 468. Dicha intelección de la normativa propiciada por la doctrina, en alguna medida ya fue materia de pronunciamiento en similar sentido por este S.T.J. con anterior composición, donde se expresó que el mencionado artículo solo determina los alcances de la responsabilidad por el pago de las costas a diferencia de la cuantía de los honorarios. Así dijo que “[…] El precepto sancionado (añadidura al art. 505, C.C.) no está referido a la cuantificación de los gastos y honorarios judiciales, sino a la responsabilidad del deudor para el pago de las costas. No dice que el costo del proceso, incluidos los honorarios a regular conforme el arancel, no puedan superar el 25% de la condena, sino, antes bien, admite expresamente que lo superen cuando condiciona la prorrata al supuesto en que "las regulaciones de honorarios practicadas conforme a las leyes jueces arancelarias o usos locales... superen dicho porcentaje". Los deben practicar la regulación de honorarios conforme "a las leyes arancelarias locales". […]” S.T.J. INTERLOCUTORIO Nro295 04/12/1996 “COPANCO INGENIERIA SOCIEDAD ANONIMA C/ ESTADO DE LA PROVINCIA DE CORRIENTES Y/O DIRECCION PROVINCIAL DE VIALIDAD S/ DEMANDA CONTENCIOSA ADMINISTRATIVA" - PEREZ CHAVEZ, JOSE OSVALDO - PISARELLO, ANGEL CELSOR - ACOSTA, JOSE VIRGILIO. En similar sentido la C.S.J.N. ha expresado que “[…] la citada disposición – en referencia al art. 1° de la ley 24 432 – no contiene limitación alguna en lo que al monto de los honorarios a regular judicialmente se refiere. Antes bien, se alude exclusivamente al alcance de la responsabilidad por las costas, cuestión distinta de la relativa al monto de los honorarios. Una inteligencia diversa, por otra parte, llevaría a concluir que la previsión allí contenida en orden al prorrateo careciera de sentido u obedeciera a un error de técnica legislativa, pues es evidente que si lo que la ley estuviera disponiendo fuera un tope para el importe de las regulaciones judiciales de honorarios, sobreabundante resultaría la disposición del párr. 2° según el cual ‘Si las regulaciones de honorarios practicadas conforme a las leyes arancelarias o usos locales, correspondientes a todas las profesiones y especialidades superan dicho porcentaje, el juez procederá a prorratear los montos entre los beneficiarios […]” C.S.J.N. in re: “Costa, Francisco e Hijos Agropecuaria c/ Buenos Aires, Provincia de”, del 12-09-96, voto del doctor Fayt, en Rev. D.T., abril 1997, pág. 738. De lo expuesto se colige, que no resulta de aplicación el ex - art. 505 del C.C., art. 730 del C.C. y C., con el alcance incoado por los recurrentes, es decir como limitativo de la cuantía de los emolumentos (honorarios) que se fijen, sino más bien y lo que configura una hipótesis totalmente distinta, a la responsabilidad por esas costas. Es solo respecto a este último extremo que el mismo es procedente, sin perjuicio que al realizar la rectificación de la nueva regulación a ser practicada por el magistrado, conforme a los parámetros de este pronunciamiento y a lo detallado en el apartado anterior, al tratar lo referido al segundo y sexto agravio. En resumidas cuentas, si al momento de fijar los honorarios se constata la superación del 25%, del monto total de la condena incluido los intereses, el juez en la etapa procesal oportuna, aplicará lo relativo de la referenciada normativa (art. 730 C.C. y C.). Por último, lo relativo a la temática de los incidentes los mismos deben considerarse comprendidos en el tope sobre costas del 25% del art. 730 del C.C. y C., en razón que el propio texto de la ley al emplear la frase “[…] los honorarios profesionales de todo tipo allí devengados […]” no establece diferenciación alguna, debiendo tener presente la interpretación desarrollada en el parágrafo precedente. Para finalizar, no escapa a este Tribunal que la mayor cifra final obtenida en la regulación obedece sencillamente a la aplicación en definitiva del criterio de la C.S.J.N., que fuera expresado al responder el quinto agravio del presente, ergo el cómputo de los intereses y el principio de la realidad económica litigiosa, precedentemente. extremos sobre lo cual ya he hecho mención "Año del Bicentenario de la Declaración de la Independencia Nacional" Superior Tribunal de Justicia Corrientes - 10 Expte. N° XK2 38346/1.Por ello, es que corresponde dejar sin efecto la Resolución Nº 546 de la Alzada que obra a fs. 20/23 y consecuentemente revocar el Punto 1º) de la Resolución Nº 1775 del 29 de septiembre del 2010, debiendo remitir la incidencia a origen, para que en forma urgente, en el plazo de 15 días se proceda a rectificar la regulación, con el alcance y conforme a los parámetros del presente pronunciamiento. Por los fundamentos expuestos, propongo hacer lugar parcialmente al Recurso de Casación articulado y disponer que las costas del recurso de casación deducido sean por el orden causado. ASI VOTO. A LA CUESTION PLANTEADA EL SEÑOR MINISTRO DOCTOR LUIS EDUARDO REY VÁZQUEZ, dice: Que adhiero al voto del Doctor Guillermo Horacio Semhan, por compartir sus fundamentos. ASI VOTO. A LA CUESTION PLANTEADA LA SEÑORA JUEZ SUBROGANTE DOCTORA NIDIA ALICIA BILLINGHURST DE BRAUN, dice: Que adhiero al voto del Doctor Guillermo Horacio Semhan, por compartir sus fundamentos. ASI VOTO. A LA CUESTION PLANTEADA LA SEÑORA JUEZ SUBROGANTE DOCTORA MARTHA HELIA ALTABE DE LERTORA, dice: Que adhiero al voto del Doctor Guillermo Horacio Semhan, por compartir sus fundamentos. ASI VOTO. A LA CUESTION PLANTEADA LA SEÑORA JUEZ SUBROGANTE DOCTORA MARIA HERMINIA PUIG, dice: Que adhiero al voto del Doctor Guillermo Horacio Semhan, por compartir sus fundamentos. ASI VOTO. En mérito del presente Acuerdo, el Superior Tribunal de Justicia dicta la siguiente: SENTENCIA N° 135 1º) Hacer lugar parcialmente al recurso de casación. 2º) Dejar sin efecto la Resolución Nº 546 de la Alzada que obra a fs. 20/23 y revocar el Punto 1º) de la Resolución Nº 1775 del Juzgado de Instrucción. 3º) Remitir la incidencia a origen, para que en forma urgente, en el plazo de 15 días proceda a rectificar la regulación de honorarios, conforme a los parámetros establecidos en el presente pronunciamiento. 4º) Costas por el orden causado. 5º) Insertar y notificar.- Fdo: Dres. Guillermo Semhan-Luis Rey Vázquez-Nidia Billinghurst-Martha Altabe-Ma. Herminia Puig.