Campaña de Biodiversidad 2004 0800-BOSQUES 24hs., 365 días de servicios gratuitos al país y su economía UNA ESPONJA PROTECTORA O 1.500 MILLONES DE PÉRDIDAS A CAUSA DEL DESMONTE Entre marzo y abril del año 2003 la Argentina debió enfrentar la primera gran catástrofe climática del siglo XXI. La provincia de Santa Fe sufrió una de las peores inundaciones de las que se tenga registro, en 10 días cayeron 400 mm que afectaron 220.000 hectáreas perjudicando a la población y a las principales actividades económicas de la zona. El saldo de la catástrofe fue de 130.000 damnificados, 30 muertos, 28.000 viviendas dañadas y pérdidas por más de 1500 millones de U$S1. Las fuertes precipitaciones y las inundaciones se hicieron sentir en el sector tambero, el corte de las rutas provinciales y los caminos rurales impidieron la recolección de la leche de los tambos de una de las mayores cuencas lecheras de la región; el sector ganadero también se vio seriamente afectado particularmente por la falta de pasturas naturales, el estrés hídrico e incluso un aumento de la incidencia de enfermedades. En la catástrofe de Santa Fe, que fue especialmente crítica en la Ciudad capital, uno de los factores coadyuvantes para que se transformara en una verdadera tragedia fue la pérdida sostenida durante las últimas décadas de superficie boscosa en las cuencas de ríos como el Salado. Según los investigadores de la Facultad de Ciencias Agrarias (FCA) de la de la Universidad Nacional del Litoral (UNL), si en la cuenca del río Salado hubiera habido una mayor superficie boscosa, el riesgo de inundación de la provincia de Santa Fe podría haber sido menor. "El bosque hace un uso más efectivo del agua, dado que absorbe mejor el agua de lluvia que interceptan las copas de los árboles evitando que ésta llegue al suelo -explica Gustavo Marino de la cátedra de Ecología, de la FCA-. El agua que escurre de la superficie del bosque es mucho menor que la que escurre de superficies cultivadas; y al mismo tiempo, la cantidad de agua que consume un bosque es mucho mayor que la que consume cualquier cultivo"2. Los bosques y los montes, como otros ecosistemas, producen bienes y servicios críticos para el funcionamiento de la vida en la Tierra; en este informe, para simplificar, nos referimos a los bienes y servicios de los bosques como servicios en general. Los servicios que proporcionan los bosques no son adecuadamente valorados por los mercados si se comparan con la valoración que se hace de los servicios tradicionales de la economía de mercado, frecuentemente a los primeros se les otorga poco peso relativo en las decisiones políticas. Sin embargo, las catástrofes ocurridas por ejemplo en la Provincia de Santa Fe permite mensurar en términos monetarios los costos asociados a la pérdida de la protección y los servicios que brindan los bosques. ESTADO DE LOS BOSQUES Hasta el año 2000, la cubierta boscosa del la Tierra cubría 3.900 millones de has, aproximadamente el 30% de la superficie del planeta, pero cada año la cubierta de 1 “Inundación en Santa Fe: Mirando hacia el Futuro", Fundación HABITAT & Desarrollo y Centro de Información de las Naciones Unidas http://www.habitatydesarrollo.org.ar/NoticiasVer.php?IdNoticia=17 2 Cuidar el bosque; diario El Litoral; 10 de enero de 2004 http://www.litoral.com.ar/index.php3/diarios/2004/01/10/medioambiente/MED-01.html 2 árboles del mundo va retrocediendo. La Organización de Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO) informó que entre el año 1990 y el 2000 se produjo una pérdida neta de 94 millones de has. Los países en desarrollo perdieron en su conjunto 130 millones de has. y los países industriales ganaron 36 millones de has3. Mientras las tierras cultivadas se reconvierten en bosques en los países industrializados, los bosques de los países en desarrollo se transforman en tierras de cultivo, pastizales y tierra degradada. Históricamente, los bosques fueron manejados con criterio selectivo y minero, es decir cosechando los productos maduros y más valiosos explotando el yacimiento hasta agotarlo. Bajo esta práctica la superficie arbolada era notablemente más estable, retrocediendo sólo cuando la tierra era convertida a agricultura u otros usos no forestales. Actualmente, la práctica de desmonte con topadoras posibilita que los bosques puedan ser segados tal como se hacen los agricultores en los cultivos tradicionales por ejemplo con el trigo, el “clearcutting” ha reducido muchísimo los costos de “limpieza” del bosque para convertir al bosque en monocultivo agrícola. Los bosques nativos argentinos conforman un mosaico Actualmente los único en el mundo de diversidad biológica y de paisajes. bosques nativos Millones de años necesitaron los bosques para formarse, sin ocupan solo el 14% embargo hoy ocupan solo el 14% del territorio nacional, del territorio nacional, mientras que en el año 1914 ocupaban el 39% de la mientras que en el año superficie4. La principal causa de pérdida de superficie de 1914 ocupaban el 39% bosques nativos en nuestro país es el avance de la frontera de la superficie agropecuaria, es decir el desmonte para agricultura y en menor medida para ganadería. Desde hace más de una década el cultivo de soja es el principal factor de eliminación de bosques nativos, principalmente en el noroeste y noreste del país, debido a una coyuntura de precios internacionales favorables, infraestructura de transporte y portuaria preparada, un ciclo húmedo en el que predominan las lluvias sobre los períodos secos, nuevas semillas mejoradas junto con un paquete de insumos intensivos y la falta de una política territorial y ambiental adecuada del gobierno nacional5. En algunos sitios la situación es realmente alarmante, por ejemplo en la provincia de Entre Ríos sobrevive solo el 10% de su bosque nativo que hoy se encuentra amenazado por la decisión del gobierno provincial de no aceptar una medida de emergencia ambiental; en la vecina provincia de Santa Fe subsisten solo el 13% de los bosques que existían en el año 1935 y en la provincia de Córdoba solo el 9% de sus bosques se mantiene en pie. 3 Food and Agriculture Organization (FAO), Forest Resources Assessment 2000, www.fao.org/forestry/fo/fra/index.jsp , 2001 4 Naumann, M.; Madariaga M., Atlas Argentino, SAyDS, INTI, GTZ, Buenos Aires, 2003 http://www.medioambiente.gov.ar/bosques/bosques_nativos/parque_chaquenio/default.htm 5 Pengue, W.; Sustentables, ¿Hasta cuándo?, Le Monde diplomatique; edición Cono Sur, 2000 3 Superficie con bosque en Argentina en el año 2000 (km 2 ) 1935 Bosques total Córdoba Santa Fe San Luis Tucumán Jujuy Chaco Santiago del Estero Salta Formosa 1.072.600 138.000 59.000 60.000 19.800 18.700 82.000 107.000 107.000 40.000 2000 331.904 13.308 8.253 9.255 7.930 9.391 51.018 69.115 71.292 33.008 Superficie desmontada (km2) 740.696 124.692 50.747 50.745 11.870 9.309 30.982 37.885 35.708 6.992 % remanente 30 9 13 15 40 50 62 64 66 82 Fuente: elaborado en base a Naumann, M.; Madariaga M., Atlas Argentino, SAyDS, INTI, GTZ, Buenos Aires, 2003 EL VALOR DE LOS BOSQUES Los boques nos son valorados adecuadamente y generalmente el mercado o los responsables en la adopción de políticas desconocen su verdadero valor, por ejemplo, en el momento de diseñar planes de desarrollo que requieren de la eliminación de la cobertura boscosa (tal como es el caso de los desmontes en Argentina). Se puede definir los distintos tipos de valores de los boques: • Valor de uso directo, está relacionado por la explotación directa como, extracción de madera y fibras para la construcción y la confección de objetos, forraje para el ganado, biomasa para generación de energía (carbón vegetal), fibras y pieles para vestimenta, productos comestibles, turismo, recreación, educación o cualquier otro producto o servicio que tenga un precio en el mercado. • Valor de uso indirecto, se refiere al valor de la función del bosque, estrictamente los servicios ambientales que presta. En la Tabla de Bienes y Servicios se presentan varios ejemplos, entre ellos la función de los boques para regular las cuencas hidrográficas. • Valor futuro, está íntimamente relacionado con el potencial de los bosques para proporcionar medicinas, recursos genéticos y otros asociados a la biodiversidad, (este es el motivo por el cuál, en la mayoría de los casos, los laboratorios farmacéuticos e institutos de investigaciones transnacionales se interesan en la conservación de los bosques nativos de países en desarrollo y plantean el patentamiento de los recursos genéticos y germoplasma que pudieran hallar). Es imprescindible no ignorar el valor de los bosques en el momento de la toma de decisiones, ya que la rentabilidad de la actividad productiva que se realice probablemente no compense los costos asociados a los impactos ambientales que pueda ocasionar la desaparición de la cobertura boscosa del suelo. 4 SERVICIOS QUE PROPORCIONAN LOS BOSQUES Los bosques proporcionan una gran variedad de bienes y servicios como se detalla en la tabla siguiente, en algunos casos los servicios son directos y en otros indirectos. Una función esencial de los masas boscosas es la conservación del agua, las observaciones generales indican que los árboles en pie retienen tres veces más agua que un suelo desmontado. La deforestación por el contrario incrementa el riesgo de inundaciones, acelera el proceso de erosión del suelo, inhibe la recarga de los acuíferos y pone en riesgo la vida de la fauna y la flora que habita en los bosques. El bosque actúa regulando los déficits estacionales de agua, como una esponja o como los glaciares en el sur de Argentina, absorben agua en momentos de gran caudal y la liberan de a poco cuando el agua escasea en la estación seca. Bienes y Servicios proporcionados por los bosques Bienes y Funciones servicios 1. Regulación del clima 2. Moderación de la temperatura 3. Disturbios ambientales 4. Cuencas hidrográficas 5. Agua 6. Erosión y sedimentos 7. Suelos 8. Ciclo de nutrientes 9. Contaminación 10. Refugio 11. Alimentos y medicinas 12. Materiales 13. Recursos genéticos Ejemplos Regulación de la composición atmosférica, Balance de CO2/O2, afecta la formación de nubes regulación de la temperatura global y las precipitaciones Regulación de procesos Proporcionan sombra y barrera rompevientos en zonas climáticos locales urbanas y rurales Protección ante tormentas, control de inundaciones, mitigación de la desertificación y recuperación ante Amortiguación de perturbaciones ambientales cambios ambientales que pueden ser controlados por la cobertura boscosa Regulación de las cuencas Provisión de agua para la agricultura (irrigación y riego), hidrográficas actividades industriales (molienda, etc.) y transporte Almacenamiento y retención Abastecimiento de reservorios y acuíferos de agua Retención de suelo y Prevención de la pérdida de suelo por el viento, sedimentos deslaves, y otros procesos erosivos Procesos de formación de Acumulación de materia orgánica suelos Fijación de nitrógeno (N), fósforo (P) y otros elementos o Producción, y retención de nutrientes. Mejora de la calidad y rendimiento de cultivos nutrientes vecinos Recuperación del exceso de Descontaminación nutrientes y otros compuestos Nursery, refugio contra predadores hábitat de especies Hábitat de flora y fauna migratorias, etc. Producción de alimentos y Hierbas, granos, nueces, frutas, hongos, peses, presas medicinas para caza o recolección, agricultura de subsistencia Producción de materiales Producción de madera, fibras, combustible, forraje, etc. Fuente de materiales y productos biológicos Productos medicinales y para la ciencia, genes resistentes a patógenos y pestes, especies ornamentales (mascotas y variedades de plantas para horticultura) 5 Son bien conocidos los productos que proporcionan los bosques, pero son menos conocidos los servicios que también proporciona. Principalmente la regulación del clima, el control de inundaciones, la conservación del suelo, el mantenimiento del ciclo del agua, la acumulación y el reciclaje de nutrientes y además el esparcimiento y la recreación; todos ellos son claves para sostener cualquier sistema económico. Uno de los más valiosos servicios proporcionado por los bosques es su rol en el ciclo de lluvias en regiones interiores alejadas de las costas convirtiéndolas en zonas productivas y habitables. Si se continúa destruyendo los bosques, los desiertos podrían extenderse aún más, este es el caso de la Argentina donde las zonas áridas y semiáridas ocupan el 75% del territorio y amenazan con expandirse debido a la reducción de la superficie forestal natural asociada a la expoliación con objeto maderero y energético, el sobrepastoreo y el desmonte para ganadería y agricultura6. Los bosques retiene agua en el interior de los continentes, se ha comprobado que la deforestación de algunas regiones produjeron una reducción del transporte de humedad tierra adentro además de una declinación de las lluvias. Los bosques también acumulan nutrientes, particularmente en zonas cálidas donde los nutrientes están almacenados en la biomasa. En muchos casos los suelos tienen poca materia orgánica y tienen poca capacidad de retener nutrientes. Si el bosque es incendiado para hacer pasturas para ganado y luego cultivos, estos crecerán bien en los primeros tiempos porque los nutrientes se mantienen en las cenizas. Pero una vez que las cenizas hayan desaparecido los nutrientes habrán desaparecido con ellas. Esta es la causa por la muchas veces la tierra se vuelve infértil rápidamente y luego es abandonada. En un trabajo publicado por Nature7 se estimó que los servicios por hectárea por año ascienden a 969 dólares y los compara con los 800 dólares que producen por año/hectárea en el cinturón del maíz de Estados Unidos, uno de las regiones agrícolas más productivas del mundo. Servicio u$s//has/año Regulación del clima 141 Control de la erosión 96 Producción, y retención de nutrientes 361 Recreación 66 Otros 305 Total 969 Fuente: Costanza, R., The value of the world’s ecosystem services and natural capital; NATURE, 1997 Los bosques ayudan a controlar la erosión del suelo aportando material orgánico y disminuyendo la velocidad del flujo de agua. Las hojas de los árboles disminuyen la 6 7 Naumann, M.; Madariaga M., [Op cit] Costanza, R.; The value of the world’s ecosystem services and natural capital; NATURE, 1997 6 velocidad de las gotas de lluvia protegiendo el suelo y evitando que se lave, al mismo tiempo un suelo saludable proporciona el medio ideal para que el bosque se desarrolle. Para la estabilización del clima, los bosques también son muy importantes ya que modulan las fluctuaciones de la temperatura entre el día y la noche, es decir permiten disminuir la amplitud térmica. En su biomasa los bosques almacenan enormes cantidades de carbono que de otro modo estaría en la atmósfera en forma de dióxido de carbono (CO2), un potente gas de efecto invernadero causante del cambio climático. En la protección de los cursos de agua y ríos contra la sedimentación, los bosques tienen un papel principal; en algunos casos, la deforestación puede destruir el hábitat de peces y otras especies animales por el incremento de barro en los cursos de agua. La sedimentación también afecta la productividad de las represas que fueron construidas para generación de energía o irrigación. A medida que crece el nivel de sedimentos disminuye la capacidad de generar energía o de suministrar agua para riego. PARQUES, ÁREAS PROTEGIDAS Y BOSQUE NATIVO La superficie total en toda la Argentina de los parques y reservas nacionales abarca 3.580.990 has. En la actualidad, el desafío no es incrementar el número y la superficie de los parques y las reservas sino asegurar la supervivencia de los bosques nativos del país más allá del horizonte de años proyectados. La conservación de las masas boscosas puede suceder únicamente si quienes dependen de ellas o viven en la zona de influencia continúan obteniendo de allí los recursos necesarios para vivir dignamente con prácticas sustentables. Es necesario comprender la relación de las áreas bajo protección con los habitantes, especialmente con las comunidades locales. No es posible asegurar su viabilidad a largo plazo sin involucrar seriamente a los pobladores que viven dentro de las áreas naturales (como es el caso de la Reserva Natural Lotes 32 y 33 de Pizarro, Salta) o en zonas adyacentes. Actualmente la participación de las comunidades debe estar contemplada en el planeamiento de una zona protegida, debe mantenerse durante la toma de decisiones y el establecimiento de la zona, y debe ser continuada en su gestión y su vigilancia, y en la participación de los beneficios que emanan de ella. Se trata de un proceso sumamente exigente y no todos los gobiernos están dispuestos a seguirlo. Con frecuencia, la brecha entre las necesidades para administrar zonas protegidas y la realidad es grande. Presiones económicas y sociales y mala gestión (generalmente falta de apoyo político) siguen dejando las zonas protegidas a merced de la degradación, mientras la falta de financiamiento las amenaza. Por lo general, los parques y reservas naturales se crean con el fin de preservar áreas únicas o ricas en biodiversidad y evitar que colapsen víctimas de la explotación irracional de la madera, del desarrollo industrial o el desarrollo agrícola intensivo a gran escala. 7 Existen numerosos ejemplos de medidas de conservación que, en lugar de empeorar las condiciones de vida de las personas que habitan en áreas protegidas, mejoran sus recursos y su posición económica. Lamentablemente, con frecuencia se promueve que estas zonas sean intangibles dejando afuera a los habitantes locales y privándolos de sus derechos tradicionales, con el único objetivo de crear espacios protegidos que atienden a la preservación de la flora y fauna. Frecuentemente, las zonas protegidas son consideradas como un sacrificio, una carga financiera sobre el Estado más que un bien o una ventaja para la comunidad local y para toda la sociedad. En aquellos ecosistemas boscosos que representan áreas de gran valor o que están seriamente comprometidos porque su estado conservación es delicado es indudable la necesidad de otorgarles estatus de parques y reservas, no todos los bosques pueden ser incorporados a un esquema productivo. Pero el reto, no sólo consiste en aumentar el número y superficie de las zonas protegidas, sino asegurar su viabilidad. Para ello es necesario realizar una comunicación clara para ayudar a comprender el valor de estas zonas y los servicios que brindan a la sociedad, entre los cuales la contribución a la mitigación de la pobreza es el más importante. Esto sólo habrá de suceder si los habitantes locales se convierten en verdaderos socios y beneficiarios de las zonas protegidas, en lugar de ser considerarlos como factores de perturbación y degradación. MANEJO SUSTENTABLE DE LOS BOSQUES Actualmente existen numerosos ejemplos de bosques manejados acorde a criterios de sustentabilidad social, económica y ambiental. Varios son los mecanismos para verificar el cumplimiento de esos criterios, uno de ellos es el sistema promovido por el Consejo de Manejo Forestal (FSC según sus siglas en inglés), mediante este sistema se identifican con un sello internacional los productos obtenidos bajo criterios de sustentabilidad. En el mercado mundial de la madera, los productos certificados representan hoy el 7%8. Además de la madera existen una amplia gama de productos del bosque con potencialidad económica: los productos forestales no madereros; se trata de flores, hongos, frutos, musgos y raíces que pueden ser explotados bajo un manejo sustentable y certificarlos con el sello FSC. En este caso la certificación incluye todo lo que el bosque contiene además de la madera, es decir se certifica el bosque. El Consejo de Manejo Forestal es una organización internacional sin fines de lucro, que desde 1993 apoya el manejo ambientalmente apropiado, socialmente benéfico y económicamente viable de los bosques. Está formado por representantes de organizaciones sociales y ambientales, la industria de la madera y representantes de pueblos indígenas9. En Brasil se ha desarrollado un programa nacional de certificación. El CERFLOR, es un sistema para la certificación de materiales provenientes de los bosques. Esta iniciativa es 8 9 www.fsc.org op cit 8 atractiva para la industria de la pulpa y el papel desde el punto de vista económico ya que al obtener eco-etiquetas se asegura el acceso a mercados de valor. La certificación está dirigida a distinguir los productos forestales brasileños de aquellos de otros países que no hacen un manejo sustentable de sus bosques.10 LA PROPUESTA DE GREENPEACE Es indudable que evitar los desmontes contribuye a proteger los servicios que proporcionan los bosques, la conservación de éstos en buen estado es esencial para recuperar la salud del planeta, reducir el riesgo de inundaciones, la erosión del suelo, mantener el ciclo de lluvias tierra adentro, mantener el balance de dióxido de carbono en la atmósfera (CO2) y restituir la capacidad de recarga de los acuíferos. Greenpeace exige una moratoria de dos años inmediata para todos los desmontes sobre superficie forestal, el período de moratoria está destinado a elaborar y establecer un plan de ordenamiento territorial que permita salvar los últimos bosques que quedan. El ordenamiento territorial debe tener en cuanta criterios sociales, ambientales y económicos para definir cuáles son las actividades productivas acordes para cada ambiente de bosque, debe incluir criterios para la certificación forestal y otros mecanismos que agreguen valor y competitividad a los productos del bosque, el aprovechamiento de los recursos forestales no madereros, el turismo, etc. La propuesta no es descabellada ni irreal. Actualmente está en vigencia la Moratoria a los Desmontes en la provincia de Santiago del Estero, elaborada por Greenpeace con el apoyo de la Pastoral Social del Obispado y Mesa de Tierras de Santiago del Estero, el Grupo de Reflexión Rural y el Prodemur. Finalmente, la Moratoria fue instaurada por el Interventor Federal, Dr. Pablo Lanusse, el 17 de junio de 2004. La Ley 6657 suspende por un plazo de 6 meses prorrogables por otros 3 el otorgamiento de permisos de desmonte, somete a revisión y verificación todos los permisos otorgados y propone la elaboración de un plan zonificación y ordenamiento del uso del suelo. Iniciativas similares han sido impulsadas en otras provincias, en Entre Ríos se ha decretado la Emergencia Ambiental, que lamentablemente la administración del Jorge Busti a derogado de modo que hoy la justicia de esa provincia debe resolver la vigencia de la Ley de Emergencia Ambiental. En la provincia de Santa Fe, legisladores y funcionarios del poder ejecutivo provincial están analizando proyectos para declarar la emergencia forestal provincial y disponer la prohibición de los desmontes descontrolados que han dejado prácticamente sin bosques a esa provincia. Contactos: Campaña de Biodiversidad Greenpeace (011) 4962-0404 10 Schwartzman, S; et al , Global Deforestation, Timber, and the Struggle for Sustainability: Making the Label Stick, New Zealand, 2000 9