“Los cuidados paliativos son la aplicación de la alta pericia clínica

ENTREVISTA
Javier Rocafort especialista en cuidados paliativos
“Los cuidados paliativos son
la aplicación de la alta pericia
clínica, la comunicación
exquisita y el apoyo ponderado
a las familias y a los pacientes
Javier Rocafort, director médico del Hospital Centro de Cuidados Laguna de la Fundación Vianorte-Laguna
Marga Ferrándiz
Licenciado en medicina y
cirugía por la Universidad de
Navarra y doctor en medicina
por la Universidad de Navarra, Javier Rocafort es también especialista en medicina
familiar y comunitaria, máster
en cuidados paliativos y máster en dirección médica y gestión clínica.
Al acabar la carrera, fue
médico interno residente en
el hospital San Juan de Dios
de Pamplona durante tres
años. “En esa época se acababa de poner en marcha en
dicho hospital una de las unidades de cuidados paliativos
pioneras en España, dirigida
por el doctor. Jesús Viguria.
Fue también la primera unidad de cuidados paliativos de
la Orden Hospitalaria en nuestro país. Aquel contacto precoz con los cuidados paliativos cambió para siempre mi
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rumbo profesional”, señala el
doctor Rocafort.
PREGUNTA.- Ha sido usted
presidente de la Sociedad
Española de Cuidados Paliativos. Esta es una especialidad
poco conocida aún por los
ciudadanos. ¿Podría explicarnos brevemente en qué consiste?
Javier Rocafort.- Los cuidados paliativos son una disciplina sanitaria especializada
orientada a garantizar la mejor
calidad de vida posible en los
pacientes en fase avanzada o
terminal de su enfermedad.
P.- Llevan ustedes más de 20
años luchando por el reconocimiento y la implantación de
los cuidados paliativos. ¿Qué
cobertura hay a nivel nacional?
J.R.- Aunque se podría decir
que el desarrollo en los pri-
San Juan de Dios | marzo-abril 2014
meros años de este siglo fue
bastante bueno y que hay
cierta cobertura en todas
las autonomías, lo cierto es
que queda mucho por hacer
hasta llegar a lo que podría
considerarse como suficiente. España aspira a ser
un país avanzado en todos
los aspectos, por lo que no
podemos conformarnos con
un desarrollo moderado.
Quedan pendientes grandes
cuestiones, como la equidad
en el acceso a los cuidados
paliativos, la dotación adecuada de los equipos, la acreditación de la especialidad, la
dotación de unidades de cuidados paliativos para niños o
la implantación en la universidad, entre otras.
Compartir con un paciente sus
últimos 15 o 20 días puede resultar
tan enriquecedor como acompañar
10 años a un adulto sano
ENTREVISTA
Javier Rocafort especialista en cuidados paliativos
El doctor Javier Rocarfot en el Hospital Centro de Cuidados Laguna.
P.- ¿Y cuál es el escenario
óptimo de implantación que
ustedes defienden?
tación hay de los cuidados
paliativos en sus centros sanitarios?
J.R.-Aquel en el que todos los
ciudadanos tengan acceso a
toda la gama de recursos, a
los equipos domiciliarios y a
los hospitalarios. Aquel en el
que existan suficientes camas
de agudos y de media-larga
estancia y en el que aseguremos que todos los profesionales tengan la capacitación adecuada. Aquel en el
que los nuevos profesionales
sanitarios hayan aprendido
en la universidad las bases
del tratamiento paliativo, de
forma que se puedan incorporar estos conocimientos a
la atención primaria y especializada. Aquel en el que la
población esté bien informada y sepa cómo acceder a
los recursos.
J.R.- Nunca habrá palabras
suficientes para agradecer el
papel de determinados profesionales e instituciones para
abrir paso a una nueva especialidad, muchas veces contra
corriente, asumiendo grandes
riesgos y buscando aportar
la máxima calidad asistencial.
Entre estas instituciones han
sido esenciales San Juan de
Dios y la Asociación Española
Contra el Cáncer. Después han
sumado sus esfuerzos fundaciones como la Fundación
Vianorte Laguna, en la que
trabajo, y que se dejan la piel
para que continúe el desarrollo adecuado. En general, las
instituciones con una visión
cristiana han apostado fuerte
por los cuidados paliativos, lo
que ha supuesto que casi en
la totalidad de los hospitales
de San Juan de Dios existan
P.- Y en el caso de San Juan
de Dios, ¿qué nivel de implan-
unidades de cuidados paliativos con gran solera y prestigio. También son referentes sus profesionales y, de su
mano, las actividades docentes gestionadas por la Orden.
P.- ¿Puede un paciente pedir
que se le apliquen cuidados paliativos? ¿Cómo debe
hacerlo?
J.R.- Tiene derecho a ello.
La cartera de servicios del
Sistema Nacional de Salud
incluye la atención al final de
la vida. No todos los pacientes
necesitan un servicio específico de cuidados paliativos:
sólo los más complejos- que
son el 40% aproximadamente
de los que tienen una enfermedad avanzada- los precisan. La mejor vía para solicitarlos es hablar con su equipo
de atención primaria, cuando
están en el domicilio, o con su
médico responsable, cuando
están en el hospital.
P.- ¿Cómo afecta a los especialistas en cuidados paliativos el contacto constante
con la muerte?
Los paliativistas tenemos mucho más contacto con la vida
que con la muerte. La vida al
final de la vida es, sin duda,
mucho más intensa. Compartir con un paciente sus últimos
15 o 20 días puede resultar tan
enriquecedor como acompañar 10 años a un adulto sano.
Estas experiencias convierten
a los profesionales de cuidados paliativos en personas privilegiadas que podemos contemplar el espectáculo de la
vida desde un balcón inigualable. También sabemos entender la muerte como algo normal, incluso como algo que da
sentido a la vida.
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