SESIÓN SOLEMNE DE LA SOCIEDAD ',Y'. MEDICINA Y CIENCI.-\S \ATURALES. CONTENIOO: '1. 1. \~Y()lt:\tF. T'El. SF.CHEL\I:fO IJl¡¡-¡-O)l l'EDHl1 n, PI';C'{"H:-;U IlJ·:r. J'RP.SlllF,\lY. SE~n¡;. \'HuYH:SI)K JlISU'!{SU .\L\.Or:\lI(:1} Ill, n', . C. ,- lBA~E'l. )11t:ll1tJ,SEX 1-. , \\\:1, :'1'01--\-; l){)(.j'pH OjO~I(\. BOnOT.\., LllPItF.XT.I llF: s/I.n;snu: l' \:";II',\~í",,-lR8r.. Este libro fue Digitalizado Por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República,Colombia IN}i'ORMJ4~ , IJEIDO POR EL DOCTOR PEDRO MhRIA IBAREZ. SECRETARIO DE lA SOCIEDAD DE MEDICINA Y CIENCIAS NATURALES DE BOGOTA, ~:N TiA 8E8101<SOI,EMNE DEI, 27 DE MAR~ODE 1886,' I OUMPLOcon un <leber-imp'uesto por el Reglamento de .la Sociedad, y hábilmente desempeñado por mis ante~ '(Jesores~al irlformal'Osde los trabajos en que se ha ocupado la Oorporación en el doble período que hoy termina. La agitada política del país impidi6que en,1885 se celebrase como de costumbre sesi6n solemne anual, pero nÚ que la ,Sociedadcontinuase con,perseverancia y energía la labor iniciadtt en el mes de Enero de 1873, apartada fi~chade fundación de la Socieda,d; , Animados de yerdadero ,patriotismo, sin tener en mira gajes de lucro JíÍ ambiciosa,s aspiraciones, y sin otra re~ ~ompeusa que la satisfacci6ndel deber cumplido, os habéis congregado periódicamente, coadyuvando al sostenimiento del movimientociehtífico en este foco,de luz. ' Siento legítimo orgullo por el honor que me dispensasteis al elegirme y reelegirrne Secretario de la Oorpora~ ci6n-pol' eleeción no Tn\lYacertada. En análogo caso al en que yo llleballo dil'igió p.. ToséOaicedo Rojas á sus colegas {lela Academia! Oolmnbiana las siguieptes pala~ bras: "Voí:iotros y ~'oharemos cuenta que queda un vacío en los Anales de la Academia en el presente año; pero mlte vnest.railldl1.lgen~iaespero que han de excusal'me mi . buella volnntad y mejores deseos;" , Este libro fue Digitalizado Por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República,Colombia -2- Hace dos aiio~, d 27 de Febrero de 1884, tuvo lugar la Última se¡;iólI Holenllle, y ('n ella prestó Jlromesa de cumplir ('011 los deberes (le miembro activo el fiellOr doctor Da,nid B. Corollado, quien pl'esent6 tomo Te¡.;is de incorporación un trabajo illtitlllado: .A11ato11lia cl'ínica 6 pUlltO.~ allat6micos de 1'lferml(~ia pa-ra 1(1, .Llledicina, y la Cirugía, que vertió á nuestro idioma del in~lé~, haciendo importante sClTicio Ú la ]~scllela médica njlCional, la ellal carecía de 1111texto en cm;teIlano sohrn tan illtel'esantc matcria.. El ¡.;eiior (loctor Coronado posda, llntes de recibir el Iliplolll a de mit'mbro de nÚmero de la Sociedad, títulos: de (loctor en 1I1eJicin:t y Cirugía de la Univcrf:\idad naeional, de la Facultad de l\Iedieill:t de París y dd Colegio Ucal de CiJ'lljanoH Je LOlHlres. Seis meses desplu<;¡,;,ell elllles de Agosto d(~1884, alcanzaron igual hOllor IOH señores doctores Gabriel Durán Borda y .Josué Gómez, ambos titulados en la. Univenddad de Frl\neia, y el priillero en la n:lciollal. El señor doctor Górnez presentó como 'l'csis 1In estudio qne llamó: Método vurath'o de Lí.~ter y SU.~trallsflfrmacio/les, y el SeflOl' doctor Durán Borda intituló la. suya: Obserl'UdolH~s .~obre un tl/mor san:01llatoso en ti n ll'Í/10 di! tres a110.~,y la. acompaiió con la pieza. anatolllo-patológica y con algunas preparaciol'e¡.; histoI6gicas.}i~stn trab~jo llamó vuestra aWllci6n por los puntos ue contacto ql~ tiene con las ubl:icrvacionel'l de los seiíorcs tloctoreB Rouley y Nocal'd, quienes encontraron en un tumor Bt'mejallte Ull'hongo de forma radiada, denominado antimmlycis, causa de la enfermeuad. En la (¡Itima sesión ordinaria del mes de (ktubic de 1884, t:llé presentado como candidato el sellOr <lodor Luis J!'onllegra, quien l'rcsentl, COlllOTcsis tic incorporación un estudio impreso ('n francés, intitulado: Epiteli{)mas glan,duhl1:es enqll'i.~tadoll del t'do d'~lpalada'r, trahajado ('n , París, y que sirvió al autor tic Tesis de gmdo en la Uni"ersidall de Francia. El ¡.;eiíol' doctor' ]i'onnegra ha sido honnulo con tliplolllal'l Ile diversas asociaciones científicas resideutel-l ell París. Este libro fue Digitalizado Por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República,Colombia Hace más de un año que fué recibido miemhro activo de la Soeiedad el modesto y distinguido botánico señor doctor 'iVenceslao' Sandino Groot, autm' de un notable estudio sobre Plantas medicinales de Oolombia, en su mayor parte inédito, y del cual presentó algunas páginas impresas, como Tesis de incorporación, mereciendo singulares elogios del señor doctor B. Medina, autorizada voz en la materia. En Octubre de 1885 fué presentado como candidato el señor doctor Antonino Gómez Oalvo, titulado en la Universidad, nacional. Su Tesis de incorporación: Ob.~er1:acionessobre la ]JÚstTtla maligna, hechas en los Estados de Santander !I Boyacá, fué juzgada como trabajo de Dotoria importancia. A fines del año último fué presentado, como T~sis de incorporación del antiguo y afamado profesor señor doctor .Juan de Dios OarI'asquilla, un trabajo ilamado: Datos sobrlla aclimataoi61i de la a'rracaCJu~en E'll'ro]Ja, impreso en Bogotá. Esta completa monografía, digna de ser' conocida en Europa, según la respetable opinión del señor doctor Sandino Groot, di(l entrada en la Sociedad al señor lloctor Oarrasquilla. :La Sociedad envió diplomas de miembros correspondientes,' por conducto de la Honorable Legaeión de su país, á los señores doctores Adof\) Murillo .Y Agustín Orrego Luco, chilenos, y aceptó como tales ~tl distinguido ])ro1'e. sor de Ciencias Naturales de Nantes, Viand de GI'and Marais, y á nuestroilustrado colega y comp~ttriota, señor doctor Ign¡wio Gutiérrez Ponce, residente en París, quieu se ha distinguido por Sil amor al país y por sus trabajos literarios y eientíficos. Son, en la actualidad, eandidatos aceptados, el señor doctor ,Juan D. Herrera, y el señor Ijrofi~sor de Ciencias Naturales, D. ,lavierTapia. La impol'tancia científica de las 'resis que liemos mencionado,;, la notoria eapaéidad de sus autores, tenida en cuetlta al votar su recepeión y honrados con el título de miembros de la Corporación, han redundado en bien de ésta, y los liuevos miembros llenan el vacío-en ella dejado por los. ansentes, señores doctol'es Pío nengif(), Rafael Este libro fue Digitalizado Por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República,Colombia -4Rocha Oastilla, .José Y. Uribe lt.Y Jesús Olaya Lavcrde, radicados en el extranjero, y reemplazan á los señores doctores Guillermo León, Manuel Uribe ¿{ngel y al señor protesor Nicolás Sáenz, ausentes de la capital. Al regreso de tan ilustrados miembros, la Sociedad, con tan lucido, numeroso y respetable personal, de seguro seguirá adelante en su paertica laoor, coadyuvando de una manera más uecisiva ue lo qne á primera vista parece, al buen nombre y 110nra ue la Patria y al sostenimiento y progreso de los estudios nacionales de :Medicina'y Ciencias Naturales . n • El sefior D. Luis M. Merlano, de Sincé, em'ió á la Sociedad muestras de algunos vegetales usados como agentes terapéuticos en ell~stado d~ Bolívar . .El estudio de las plantas medicinales que creet'l' en el país tiene la doble importanoia de enriquecer la Terapéutica, modificando la aplicación de medicamentos usados por el einpirisIllo, á veces con sorprendentes resultados, y de el'eal' -nuevos artículos de exportación, de los cuales tanto necesita el eomel'cio de la U<'pílhlicH. III El segundo Illédieo titulado por hL Universidad nacional, el señor doct~)rMarcos lf. Lom, quien falleció no bace mucho tiempo en la ciudad de Zipaquirá; flOmeti6 al estudio de la Sodedad el último ue sus trabajo.s que llamó: Cirugía dt! parto,y. Aconsejó en él cicltQ proceder ope•...dtorio para extraPl' la placenta en los c.asos de retención prolongada, mt~todo que no fué juzga.do ventajoso por los Reñorcs d()ctol't·~ Bal'l'eto y Buendía, ell~'a respetablc opinión fll~ apl'Ob:ÚIa por la Societtad. La Honorable .J uuta general tll' Beueficencia del exg~ta(l() de Cnndinamal'C'll, so!i"it{. (~()nsejo «le la tinguido Este libro fue Digitalizado Por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República,Colombia -5Sociedad sobre un asunto de grande interés local y social: la traslaci6n del antiguo y espacioso Hospital de San Juan de Dios á UI1 lugar situado fuera del área de población. J.lOS sQñores doctores Oastañeda, Ooronado, Gómez (Proto) y Osorio, trabajaron asociados el informe del caso y acertadamente lo subdividieron así: 19 Descripción minudosa del a,ctual Hospital (á cargo del señor doctor Oastañeda); 29 Oondiciones topográficas y arquitectónicas que debiera tener el nuevo Hospital (á cargo del señor doctor Proto Gómez); 89 Oondiciones higiénicas de los' Hospitales en genei'al (ácal'go del señor doctor Oaronado); y 49 Valor del actual edificio del Hospital y rentas que produce y costo de la construcción del nuevO. y rentas que produciría (á cargo del señor doctor Osorio). Ilustrada la Oorporación por el anterior informe, que discutió y aprobó, teniendo presente que el Hospital tiene 19 espaciosas salas para enfermos con 818 camas y todas las piezas necesarias para el servicio, ~'uera de 88 locales de la parte baja que se hallan en arrendamiento; que el local tiene buenas condieiones higiénicas, y que dado caso que se construyera UIlO nuevo, con el capital producido por la venta del que existe, aquél quedaría sin la considerable renta de los 83 locales arrendados, la Sociedad se manifest6 partidaria del sostenimiento del Hospital de San .Tuan de Dios. 1m señor doctor Guillermo Muñoz, .de Guateque, envió nna Observación de hehnintiasis del hígado, y la acompañó de algunos helrnilltos, los cnales estudiados por el señor doetor Pizarro, fueron clasificados en el gmpo de los vesiclllosos, que forma el género lIidátide. l~a Sociedad excitó al señor doctor M~lflOZ{t continnar sus importantes investigaciones. VI 1m señor doeto!' Ignacio o-utiél'rezPonee fué designado por e! Gobierno Nacional para representar á Oolombia Este libro fue Digitalizado Por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República,Colombia -0- en el Uongreso médico que se reuní6 en Copenlwgne en el mes de Agosto de 1884. I .•a nota eu qne solkitaua el serlor doctor Gutiérrcz las Iucci$ de la Soeiedad, se extraYió, y en consecuencia la Corporación no plulo coadyuvar, como lo pedía el representante, á fucilital'le el ueserilpeño de su honrosa. comisión. VIl El señor doctor :Manuel Uribe Ángel, miembro correspondiente, envió una Observa.ción sobre de,~a'rrolloprecoz, tomada por el señor doctor' Marco A. Botel'O en el EstM:lo de Antioquia, y la acompañó d~ comprobantes oficiales. Ella fué publicada, en atención á Sil importancia, en la Revista ilfédica. VIII U n trabajo intitulado Trata'miento lJa1'usit'Ícidl(, dl~ la lepra, oriJ.,>inaldel sCllor doctor Gabriel J. Castaiieda, fué presentado á la Sociedad. El autor, de años atl'áil, ha estudiado con especial atención esta ti'rrible enfermedad, y en la citada monografía resume el resultado de sus investigaciones. IX al estudio de l((.'1 fiebres presentó el señor doctor J08ué Gómez un ('xt€lIS0 trabajo, que aun estudian en comisión 108 seiíore¡,; doctores Corona.do y Plata. Azucl'O. Con el título Contribución del Magdalena.-Obsen'adones, x El Instituto Smithsonian, de Washington, rC'spetable a.sociación científica, la qne ba estrechado l'cladoncs con la Sociedad, solicitó la el(~cción de veinte nombrcs eolOlnbianos, notables en las ciclIcias físic.'\s, naturales y médicas, con el tín de incluírlos en un Di-rectorio UlIiVlJ'fSal, formado por el Instituto. Fueron elegidos los seflOl'es : Este libro fue Digitalizado Por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República,Colombia -7.Andrés Posada A., Antonio Vargas V., Oarlos Balen, Carlos Miehelsen, Evaristo García, :U-'rancisco Bayón, :U-'ranciscokIontoya, .José María l~uendía, Juan de Dios Oarrasquilla, Iáborio Zerda,Luis l~onnegra, Manuel Ponce de León, Manuel Ul'ibe A.; Nicolás Osorio, Pío Rengifo, Rafael Nieto París, Ratitel Hocha Oastilla, Vicente de la Hoche, Vicente l~estrepo y Wenceslao Sandino Groot. El señor Madrazo, Secretario de la Real Academia de la Historia, de Madrid, comunieó al señor doctor Liborio Zenla el nombramiento de miembro correspondiente, con que dielm Academia le ha llOnrado por sns trabajos históricos, etnológicos y arqueológicos sobre los Muiscas. De estos trabajos del señor doctor Zerda el Profesor Vilhelrn Boyé, arqueólogo y miembro de la Sociedad Real de Anticuarios del Norte, en Oopenhague, presentó á dicha 001'poración una Memoria sobre Oundinamal'ca y El .Dorado, basado sobre los trabajos del señor doctor Zerda. En esta Memoria de Boyé, traducida á varios idiomas, se hacClí merecidos elogios al alltor de El .Dorado. De otros sabios ha recibido también felicitaciones y yoces de aliento, y entre ellos del l:)rofesor A. Bastian, Vicepresidente de la Sociedad Btnológica de Berlín. di Me complazco en hacer mención de estosjustos honores tributádos á nno de los miembros fundadores de la Sociedad, que aparte de ellos continÚa consagrado al estudio. <le las ciencias. naturales y médicas con lucimiento. XI I.¡a honorable J·unta central de Sanidad del extinguido Estado de Oundinamarca consultó á la Sociedad sohre la conveniencia, de dictar medidas pl'Ofilácticas que evitasen el· desarrollo de la epidemia de cólera asiático, enfermedad que desde mediados de 1884 afligió los países del Sur de ]Juropa. Ya, en años anteriores, la Sociedad había estudiado las cuarentenas; mas, por fortuna, el no haberse propagado la epidemia á las costas de Amériea, permitió dar fin á este asunto y trauquilizar los temores fundados de la .Junta de Sanidad .. Este libro fue Digitalizado Por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República,Colombia -8l\fás tarde, :í. mediados de Octuure de 1885, pOI' excitación de la, misma honorable .Junta, estudió la Sociedad la epidemia de c6lera esporádico, que con notahle intensidad se desarrolló en Bogotá y sus inmediaciones, desde mediados de Septiembre ,lel mismo año. El intorme que sobre el cólera nostm,~ tmuajó, con acierto, el señor doctOl' J.Juis Fonnel:,F}'a, discutido y aprobado poI' la Corporación, fué tI'a..<;¡l)ritoá la honorable .Junta centml de Sanidad, y aoogido en las colurnna..'i <lel pel'i6dico semi-oficial La Na(}wn, y en, parte l'epI'Oducido cn Las Notic-ias, XII El seiíor Presidente de la Junta Directiva del Asilo de niños desampamdos, doctor Rafhel Pulido, excÍU; á la. Sociedad á coadyu\'ar á la creación de un Di!lpensario Ó botica qUé diese medicamentos gratuitamente {~la clase pobre. I .•a Corporaci6n, como cuerpo colegiado, 110 pudo prestar apoyo á tan filantr6pica idea, por "el' distinto su ohjeto y diferentes sus tendencias, pero los miemhros ofi-ecicron cooperar individu:tlmente á la. realización de la botic:\ para los pohres. El fallecimiento del señor docror Pulido impidió que se llevase ;t eaho tan caritativa idea. XUI El seÍln)' D. Claudio Vericel, Veterinario, presentó nI Gobiemo nacional un bien elaborado Iuforme sobre la mala calidad <le las (~arnes expelldidas (m el mercado de Bogotá, asunto de interés general, que fué detenidam<:'ote considerado por la Sociedad. LO!'; sefJores doctores Buendfa y Osorio, comisionadof'\ para <:'stu<liarel citado JnfoI'lne, opinaron que las C1lUJ('S dt'scompl1est~I~, de animales Iwci(1m;muertos é inft~ctados de gérmenes contagiosos para el hombl'e,-como el tubérculo y los el}uinococo!', estos últimos causa de la téllia y kl ladl'el'Ía,-ut.~bíau ser sustraídas del mercado, como reconoci<lamcnte ~tjudiciales. Este Informe, saneiollado por la Sociedad, fiJé trasCJ'ito al Gobierno nacional y al sefior Alcalde de la ciudad, indicando en él la necesidad imperiosa de crear mataderos públicos, Este libro fue Digitalizado Por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República,Colombia -9sujetos rt l{eglamentos dictados por profesores de Higiene, para impedir la venta de cal'lJes descompuestas,previniendo así el origen de las distintas enftmnedades que nacen de sn uso eonlO alimento. XIV La epidemia qtW afligió la ciudad de 'rocaima en los últimos seis mcse¡; de 1884 y los siete primeros del siguiente alío, llamó la atención de la Corporación. El máximum de mortalidad causado por ella, el cual aleanzó al 25 por 100, tuvo 1ugar en Agosto de 1884. La variedad de formas, la intensidad, la dnración de la fiebre perniciosa y el tratamiento empleado para cOlnbatil'la, fueron conocidos de la Sociedad por el interés que el señor doctor OSO"" rio tomó en adquirir datos con el fin de comunieárselos. xv I,a corteza de un árbol llamado vulgarmente gmnizo, de la familia de: las rubiáceas, el cual crece en las mismas regiones que la quina, fué presentado {t la Sociedad con la aseveraei6n de que tenía propiedades terapéuticas idénti~as {t las de la simarruba, de la que podía ser rival 6 sueced{tneo. El analisis químico de ella fité encomendado al seflOr profesor l\1ichelsen, y terminado que ¡;ea, eorresponderá {t los señores profesores de cHniea estudiar las proI)iedades terapénticas que se le atribuyen, y si realmente las posee, fijar la dosis á que debe administrarse y la forma farmacéutiea que más fheilite su uso. XVI Algunas mazoreas de maíz l1cladcro, reeogidas en las inmediaeioues de la ciudad de I,a-Mesa, fueron enviadas á la Sociedad. Nombrado en comisión, para baeer el estudio, el señor doetor Durán B., vióse obligado á iuterruffi-· pir las experieneias por lutberse acabado el maíz enfermo. Este libro fue Digitalizado Por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República,Colombia -10XVII Un asunto de importancia pam el .CUt'TpOmédico n¡r cional ocupó la atención de la Socierlad en varia.'! y sucesivas sesiones. Hablo del Reglamt3nto sobre kt.'I Juntas d~ midioos. Traba:jado, como proyecto de Acuerdo, por el señor doctor Proto GÓrne7., y a.dicionado por los señores doctorcs José M. Bllendfa, Gllillermo Le6n y Nicolás Osorio, fllé a.probado y sancionado por la Corporaci6n. Carecíamos, los médicos, de reglas para formar Juntas que estuviesen de acuerdo con nuestro caráctel' y costumbres, pues las que existían, copiadas de códigos de otros países, presentaban cou freouencia dificultades é inconvenientes. ~"íja el "Regla,mento" la conducta qne deben seguir 108 médicos cuando se solicite el COlICI1I'80 de sus conocimientos; se reprimen las indehida¡;¡ exigencia.'! de 10¡;¡enfermos y sus allegados, que con frecuencia. atectahan el honor del profesorado; protege á '.08 médicos en sus relaciones, é impide desavenencias peljudiciales; es, en realidad, un lazo de uni6n entre los que ejCl:cell el dificil sacerdociode la medicina. XYIll El señor D. Ramón Cuéllar, profesor de Ciencias n¡r turales, miembro de la Sociedad g('ológica de Francia y .de la Academia de minas de Freiberg, obseqlli¡) á los miembros de ]a Co\'pomei6n con UII folleto intitulado: Estudio sobre la.'1aguas minerales en general, el cual comprende un estudio detallado sobre las aguas tennales de las vertientes de Sáehica. XIX En el mes de Octnhre de] año último comuuicó el señor doctor Nieolás Osorio á la Sociedad, que con pequeña dosis tIe una planta llamada vulgarmente mata,cucaracha, suministrada por el señor doctor Wenoeslao Este libro fue Digitalizado Por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República,Colombia -11- Sandiuo Groot, rcmitida del Et;tado del OauéH, ba.bí¡j, hecho cxperimwias en asocio del ¡.¡eílOr doctor IJu¡~ UI'1-. cOOchea, de )¿~ti propiedades tóxiCalS de ella, y que las cl'eía de tantn. impurtancia, que la-s Ro:netía al e$tndiode la Socit>dad. Es~_plan~ mal clasificada, SO'¡!;Í111 intorme del señur uoctHf 8andino Ol'uot, hasta que el señor profesor Uentbam la colooó en las Bia:áuas, que pertenecen,al género Ryani«; sobl'e el cllal han emltidu los botániCQs opipillnes poco conformes, probablemente ¡lOr no haber di~puesto, al olasificar la. planta., de ejemplares eompleto$ pala-aprovoobar todos RUS caracteres, tiene boy, oompl'Obadas como estáu las propit~dades túxi~\S lIt) h\ eswcie .eliltudiada, verdadero valor, y el interés de clasificada. acertadamente es ma.yor. 1'res especies de ella se cOllocen en el país. Ensayada la. influ;ión de hojas de ulla de ellas en perros y pollos, á pequeña dosis-pol' ingestión y por el método subcutá· neo, produjo la muerte rápidamente, siendo de advertir que los animales que sirvieron para la. experimentación emn de edades diversas y de tallas diferentes. !.;os sintomas presentados pOl' 108 animale8 enyeoeuados, son semejantes á lo¡;¡ produddOi!; por la estJicnina: coutracciones y cpnvlllsioucs violentaH de 10&mlÍ86Ulo6, sacudidas en la regil)ll del cuello por aeoosos, dificultadpara respirar, trisIDus y ligidez, especiaImentedel tren poiKerior, y síntomas semejantes á JOítque present{l,nlo6 envenenados con la. bella<lona,-vómito, dik.taei6n de la . -pnpiia ete. Ln experimentación se repitió en pI'esencia de la Sociedad, y 108 resultados de ella os dieron el conveooimiento de qtle el veneno es, ;Í lo meno:-l, tan activo como 1:. estricnilla, y, en coulreCuencia, e.st{\ llamado {\ ocupar lugar en la Terapéutica, y quizá {\ ser nna nnem faente de comercio ':i de riqueza para el' país. El señor llroíesor D. CaI'los Balen extr<\Ío el alcaloide de est.'l. planta, ,Y el sefÍOl' doctor Sandiuo Groot experimentó las semillas r, frut.o de ella, adquiriendo la e·ollvlcción de que es t,H1 tóxico cúlOO hy; hl~as. Me permit.o consignar el ltecho de que el ácido sálioo que coutienen algunas plantas, como el cl~tlko,dismiuuye la Este libro fue Digitalizado Por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República,Colombia -12acdón venenosa. d(~ la planta, estudio hecho por Pi mismo profesor, xx }i}l sefio\' doctor Rafael }i'ranco pidió á la Sociedau que estudiase la acción terapéutica del té de Bogotá, durante la epidemia de cólera no,<¡tras, de que antes hemos hablado, Es indudable que la, infusión .de e8ta planta, que ha dado lllgal"á fj'ecllcntes discusiones, aalma los principales síntomas de la enfermedad, cuando es benigna, sin duda por la considerable éantidad de ácido tánico que encien-a, á la vez que por la acci6n excitant.e qne tiene, nacida de los principios aromáticos que contiene, XXI El seño\' D. Manuel Gutiénez, de .Jerez de la ]'rontcm, en }<}spaiia, solicitó tle la Sociedad que, previo ensayo' y anali8h~ de los vinos qUfl expende la casa de que es socioAgente, se le expidiese certificado de su buem. {~:llidady pwpiedadeR alimenticias y terapéutic.'l8, con el derecho de darle publicidad. Oído el infbrme de la comisión-seflo}, doctor B. Medina-favorable ¡Í, los vinos, como ya lo habían sido el de la Academia· méuico-quil'Í1l'giea .I ('I-ezana y el del Congreso médico internacional de Sevilla, rcunido con el fin de estudiar 1m, vinos en 1882, fu(\ trascrito al solicitante. XXI[ l~l ¡;efíor Pr()ft~sor Jlichell-;cn present6 una. iutcresante Memoria :<labre el an{lli.~ís q/límico del Jlan que se con,~ume ml Bogotá, estudio de alto illterés y nuc\·o entre no~otros. :g1J (.1 comprueba. el auLor que el pan en Bogotá no tiene soda, como generalmente se cree, ;-,',cn comwcuencia, qtW Sil liSO IlO es cansa de la a111~rnia,tan frecuente en la ciudad. AtrílJ\l'y(~ el sabo!' agrio, y á Veees desagradahle del pan, n ) á la SOlht frawlnlcntalIll'ute agrt'gada allabrical'10, sino al íteido acét.ico (lesHrrollado po)' la mala prepara~ Este libro fue Digitalizado Por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República,Colombia - l:~__ o ClOn. Bste Informe, como todos los que tienen relaci6n (Ion la Higiene pública, tiene alta importancia, y desvane.cerá el temor de que el uso del pan cause enfermedades, pues que no eoritiene elementos perniciosos á la salud. XXIII El señor Secretario de Gobierno de la Hepública, con fecha 16 de 1!Jnero del año en curso, pidi6 el voto de la Sociedad sobre las medidas profilácticas que debieran tomarse para evitar la propagaei6n de una epidemia de fiebre tifoidea, desarrollada en aquel mes en el Pall6ptico. Comisionados para elaborar e1 Informe el señor doctor Daniel E. Coronado y el que habla, lo presentamos opor':' tunamente, indicando la neeesidad de tomar medidas para establecer un verdadero Hospital en aquel J~¡.;tableciTlliento, cons~jo que fué atendido por el señor Secretario de .Gobierno del Distrito l~edcral. XXIV l.Ja.SOeiedad, como todas las asociaoiones eientíiicas ,de carácterpermaJiente, extendió diplomas {t sus miembros, legalmente autorizados, (pIe les sirviesen de testimonio de honor, y llegado el caso, de comprobante de que lt eUa pertenecen. XXV Desde el mes de Agosto de 1884 se reúne la Soeiedad ·en un local capaz y decente que hace parte del edificio de Santa Inés, ocupado por las Bscuelas Universitarias de Medicina y Ciencias naturales. J.Jas salas fueron decentemente adornadas por disposición de los señores doctores .Tosé Vicente Uribe R, Manuel Laza Gran y LiboI'Ío Zerda, los dos primeros {t la sazón Secretarios de Estado, en los Despachos de Iustruceión públiea y ~-'omento, respectivamente, .Yel 'Último, !leetor de las Bseuelas men.donadas, y los tres ,médicos (}p merceida reputaeión. l¡jll ulla de ('stas salas se ('OIlHcrva.el 1\111seo de A na- Este libro fue Digitalizado Por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República,Colombia -14tornfa. patol6giea, pl'ilIH~I'O d(· su Cl(lf;{' ('fl Colollloia, al cuitlatlo del Secretario. XXVI Dos concnrsos an:ttolllo-patológlcos en los per·fodos qne hoy terminan. abrió fa Sociedad 'El Museo se enrique- ció con las siguientes piezas: 1:'- La presentada pOI' 1m; s<:>Í1oresAlfrcdo Garcés y :Manuel Prados O., acornpafmd:t de nmt observaci{m intitulada: Cont'ribución al diagnóstico d-ife-rc1l(nal clínico '!/ g,natomo-patológieo entre la·fiebre tifoulea y la- tube-rcuIQsis y entre é,~ta y la. disenteria, basado 1m la.'1lesiones intestina-les (con l1iezas anat6mica.'i) de estas enfe;rmedatk8. 2:'- La presentada por los s(·fiores Alberto Hestrepo y Manuel Prados O.,-Osteitis-sin oblServaeióll. 3~ Un fihro-sarcoma th·l maxilar illft-'riol', qlw ahraza la mitad izquierda deL lIUCSO, pie7.a pl'(>sentada por lo,.. señores Eloy E. Gom:ález, Marco A. Rotero y Manuel Prados O. 4~ .Ateceiones del tubo digestivo, enferm(>dad •.le Hoc- kins, pieza presentada por d ~cñor Manuel Prados O. 5~ El señor Ezeqniel Ahadía. present6 I\na fractura. oonminut.iva de la hó\'eua y base del cráneo, seguiúa de muerte rápida POI' compresión. Reunid:t la comisión de la mesa en 5 del corriente mea de Marzo, adjudic6 diploma de 1~ clase: al señor :Manuel Prados O., por las piezas 1~, 2~, 3!- J' 4!l; diploma de 1~ clase al señor Ezequiel Abadfa pOI' la pj(>za 5~, y diplomas de 2~ cla.<ie {t lol'l señores Alfrerlo Gal'cés, Alherto Re8trepo, Eloy E. González y Marco A. Botel..-) por la colaboración en la presentllci6n de las pie?.as 1~,.2~ Y :J!-. Las einco piezas mencionadas se conservan en el MU8eo de la Sociedad. XXVII La. Revista. MéiMc((, órgano de la Sociedad, ('(~da(~tada en los tl'CS últimos aílos por {>l¡,;eflllr doctor Niculá ..•Osorio, apareció con rehrularidad hasta el nÍlmero 101, segun- Este libro fue Digitalizado Por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República,Colombia -15do de la serie IX, correspondiente al mes de Noviembre de 1884. 11a mala situaciÓn fiscal del Gobierno, que auxiliaba la publicaeión,impidi6 que apareciese en el año pasado. Este periódico ha dado cabida en sus columnas, Ú más de los actos oficiales de la. O\)rporación, Ú observaciones, extractos de trabajos científicos, estudios botánieos, químicos, fitrmaeol6gicos, terapéutieos, pato16gieos, quirúrgicos é hh:;tóricos. Bs el único periódico científico que ha tenido larga vida entro nosotros y el único que ha tenido influencia positiva en t~lprogreso de la medieina nacional. Sería demasiado largo entrar á hacer apreciaciones sobrc los trahajoR científicos en él publicados; baste decir que en el índice de autores figuran todos los nombres de los natul'alist~Ú; y médicos de la RepÚblica, con contadas excepciones. En él e¡.;tán compilados los trabajos sobre medicimt nacional, por mil camms distinta de la medicina de otros países, que tiene}l altura, clima, alimentos, costumbres é industrias difenmtes del nuestro. A más d~ este valor local, si así puede decÍl'ge, tiene la Revista el interés de consignar noticias soure los Iluevos métodos operatorios, los agentes terapéllth:os descubiertos ó estudiados últimamente y sobre las entidades patológicas mal cono~ pidas hasta el presente. , Bstas condiciones hacen la publicaei6n de la, llevista, necesaria, y annqne ella, fuera, que no lo es, el Único resultado de los traba¡j0s de ]a, Sociedad, ésta debería estar satisfecha de la obm emprendida. Al hablar, al principio de este InfcH'lne, del personal de la Sociedad, no tnve,por fortuna, que lamentar la pérdida de ninguno de sus miembros; no rne sucede lo mismo al tratar de los colaboradores de la lle"ista Mld'ica. ~rI'es de ellos han fhlleeido en el curso del doble período que hoy termiila. El, sefior doetór Po/lro l~ablo OervantlJsj distinguido médico y aventajado literato, antiguo profesor de clínica en los Hospitales militares y civiles; profesor en los 00legios de San Bal'tolomé y del Espíritu Santo; Inspector de la Escuela de Medicina en 186:'5; miembro delOonst'jo de Medicina del Estado y autor de numerosos trabajos científicos, literarios é históricos, falleció el 2 de Agosto Este libro fue Digitalizado Por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República,Colombia -16- (le 18S..J-. N lIe\"(~ IlJeS('$ alltes escribió, haciellllo el elogio fíuwbl'e del seillll' lIodor.T uan de Dios 'l'avera, las siguientes IÍncas.. que lile pel'mito trascribir al terminal' este cortú recuerdo de su autor, quien de 8egUl'Ono pClIs6que sCl'virían pam honrar 1m propia. memoria: H Y ya lo .bemos dicho otro vez: el mero deseo de buscar una profesión lucrativa, carece del poder bastante para conducir al hombre á la alta dignidad que representa el médico; @iI indispensable poseel' especiales condiciones qlw pueden llamarse de organización, poderosas á levantar al .l.lOmbre de la esfera común, nada menos que para asemejarlo en muchos casos á la Providencia."-El señor doctor Oer-cantes, por su instrucción, talentos y filantropía, es digno de un puesto en la. ,jerarquía en (jue él mismo colocó al benemérito doctor Tavera. En la ciudad de Zipaqnirá murió, algunos mc¡.;es después, el señor doctor .ftfa.rcos M. LOrlt,,va nomhrado en ~.8te Informe. Médico titulado por la Universidad cn 1869, se distinguió por su laboriosidad y asiduidad en colaborar en la R,evi.~ta Médica. En 1884 murió ~n Colón el seiíOl' doctor Lisantlro Sa4/vedra, también hijo de la Universidad, autor de diversos trabajos que fueron publicados en la Rev'istct. En el Museo de la Soeietlad se conservan varias piezas anatomo-patoló~ica~ que presentó á 108concursos. En la ofi:' cina \le vacunaci(m quc creó la. Honorable .Junta de Sanidad prestó con acnciositlad servicios de importancia. Debo recordar aquí el lloUlhre dellleñor doctor .LucUtJlo Laverde, colombiano, médico de la. Fac::ultad de Parls, fallecido prematuramente ell aquelh~ ciudad, dOJl(h~ ~ había radicarlo y l'jercfa su profesión con éxit~l. XXVIII La :::;ociedad ha redhitlo aJ/.{lllloliIihl'os deutíficol>. La. obra iutitulada: J.lfemoria ,~ob-,.ela.'I agua" potaJJles de la oopital dI! .i.'l:Uxico, ('sel'ita por el 8t~ñor (¡netor Pcñafiel, y la doua.da }lOl'el Ml'flOI' Spl'retario tle Relacioues Exteriores, ílriginal del sellO\' doctor Bomé y BOllfil sobre Fie&TC al1Klrilla; dispm¡o la Hocietlatl que I';C I'xtmetas('u y pnbli. (~11"'1I los extmctos. Este libro fue Digitalizado Por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República,Colombia -liXXIX En la sesión ordinaria que tuvo lugar el sábado" de Noviembre de 1885, eligÍl) la Sociedad, en votaci6u secreta, cumpliendo lo (.li~puest.opor el " Reglamento," 108 siguientes dignata.rios y empleados: Presidente, señor doctor LEONOIO BARRETO. Vicepresidente, " AnRAHAM Ar AJUClO. Secretario, Tesorero, Redactor do la "PFnmo MARÍAlB..L~z. "GABmJ<~I~ llevi8ta, . NICOL,\" J. OASTAÑED.A. OSORIo. Habiéndose excusado el señor doctor Oastañeda de servir el cargo {le Tesorero, fué elegido para. reemplazarlo el señor doctor G. DURÁN BORDA. ,. xxx No terminaré esté largo Informe sin consignar en él, á nombre de los miembros de la Socie'daa, ulla expresión de- agt'atleeimiento al señor profesor Micbelscn, por el celo y c.onsagmci6n con qne ba desempeñado las funciones de President{l de la Corpomeión y por el interés que ba tomado en la próspera ma.rc]¡a de ella. Los señores dootores úW$tañeda y Barreto son dignos<lel aplauso de la Sociedad por 108 ser\'icio¡; qne la han prestado como Vicepresidente y Tesorero, respectivamente; y el señor doctor Osorio por el aciert.o con que ha dcsempeñado la. árdua tare:l de redactar la Revista Afédica, periMico que honra á sns autores y al país, como que e¡.;resultado de verdadero y sóliuo adelanto .. Los dignatarios y empleados d(~la Sociedad que hoy empiezan {~ejercer sns funciones no t~~ndl'án que bacer -para merecer el a.gradedmicnto de ella-sino imitar la. (lOnduchl de los que ho,Y l:e8an d(~ regida, con excepción de la del qne hahla, pÚI' cuyos esfuerzos se ha sostenido en tall l)J'iIIallt(~ llie .. Bogotá, l\farr.o 27 de 1~8(). PBDRO M. 1B.\.ÑEZ, Heeretat'ill. Este libro fue Digitalizado Por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República,Colombia DISCURSOS DE LOS PRESIDENTES DE LA SOCIEDAD DE MEDICINA Y CIENCIAS NATURALES EN LA. SESION SOLEMNE DEI, 27 DE MARZO DE 1886. SEÑOR: Al cumplir con el grato deber de posesionaros del puesto de Presidente de esta importante Sociedad, permitidme p.acer especial meuci6n de la fraternal benevolencia que nuestros ilustrados consocios acostumbran dispensar al jefe para faciUtarle el desempeño de sus delicadas funciones. Unidos por los estrech<ts vínculos de la ciencia, trabajamos para, ella,en beneficio de la.humanidad, agregando nuestro contingente :1la obra de las generaciones qu~ nos han precedido, y preparando el campo á las que nos seguirán; obreros de un día, mi economizamos esfuerzo alguno :1fin de comple~ar fielmente nuestra tarea; por eso vos y nuestros consDcios,á la cualidad· de ser entusiastas investigadores, agregáis generosa liberalidad prest:1ndonos mutuo 'S' eficaz apoyo. En estas, tan favorables condiciones,' seguÍ'o es que impulsaréis con buen éxito nuestra obra, y que durante vuestro período presidencial la Sociedad de Medicina y Ciencias Naturales, atilladamente dirigida .por vuestra conspicua experiencia, adquirirá valiosos méritos· nuevos para continuar ocupando, con todo el brillo aeostumbrado, el distinguido lugar que le pertenece entre las corporaciones sabias. He dicho. Este libro fue Digitalizado Por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República,Colombia -20- SEÑOlt DOCTOIt: Las bené\'olas manifestaciones qne acabáis de harerme por el alto honor que esta Sociedad me ha conferido eligiéndomc su Presidente, sin más mérito de mi parte que mi constante y entusiasta amor por la ciencia, serán un grato recuerdo en mi humilde vida. Vuestra~ sabias reflexiones, con especialidad la del fraternal apoyo que me prestarán mis honorables consocios, me animan, me inspiran la confianza, que SiDellos no tendría, de que me sería dado llenar la alta misión qne se me encarga. Al llegar á la silla que ha Hido ocupada por Sarmiento, Vargas Reyes y por otros de los más eminentes profesores del país, no puedo menos que sentinne poseído de viva l~moci611y de grande respeto por ellos .. • Esos hombres de ardiente fe en la ciencia y de perseverancia incontrastable, han sabido conducir esta l'e$petable Corporación, sin que nu¡ca pierda el carácter que le corresponde por la altura de sus miras y la impol'tancia. de sus fines. :M:allteniéndola dentro desu propia y exclu8iva órbita, que es la del adelanto de las ciencias médicas, tisicRs y naturales, lJan obtenido para ella cll'espeto y las simpatías de lal-!asociaciones semejantes en el extl'aDjero, y en gcneral la eon¡,;ideración d(' todos los filántropos del país .. 'ran ft~CUl\(hL lauor ha sido seeundada por los unánimes y cntusiastas csflwrzos de los dem{ts Uliembros de la Corporación, quienes inspirados por el amor á la verdad y á la beneficellcia, que SOl1los resultados finales del estudio de los conocimicntos (¡tiles á la humanidad, han competido con singular abnegadóll ell invcstigaciones científicas de todo g(~[lt'ro,aun ('n medio de las más alarmantes epidemias y en los más Illortífcro¡,; y asoladorcs cHillas. Ellos jamás estiman (:Illllplida S\I sagrada misi611 sino cuando al terminar sus consuelos para con el desgl'aeiado, han podido recoger algunas obscryaciones que hagan surgir mayor I\1Z en los c:ampos de la cÍeneia. Este libro fue Digitalizado Por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República,Colombia -21El valiente esfuerzo y la gloria qne l~ll'cficja. sobrc el que obtiene por los justos medios resultados positivamente útiles para. la especie humana, son naturales inoontivos para los impulsos grandcs y generosos de la juventud estudiosa, la cual ha probado con hechos incontestables quc Higue decidida. t'l ejemplo de sus mal~strOI$ sin que sean hastantes á detcuerIa en su noble camino los obstáculos Ili los peligros. Agregan~ á I'sto la recíproca. cooperaci6n que esta Sociedad eTH~llelltra mi las extranjeras, unas veces directalIlcok y (Itras por medio de los socios que á la vez gozan tiel honor de pertenecer á ésta y á aquélla:;;; y sobre todo, es parte Ú comunicarle vigor y respetabilidad, la. benévola .v eficaz consideración que siemprc le ha. tlispensado el o-obiemo (l nombre de la Patria. Con ei;L:'ts circunstancias la SociedaJ ba podido coru;ervar8e siempre acti \':.\y diligente al través de las vicisitudes del país, y fin existencia l)areCI~flcfinitivanwut·c asegurada para lo porvcuir. Sel' el primer colaborador en la guarda, y conservaci6n de tan sagrado tesoro, es, pucs, el deber que me imponéis; y si la grandeza de él cá& me arredra, los elementos de que se compone f;on también bart{) poderosos para que pueda deeir, como lo espero, al entregar este l>uesto á. mi honorable sucesor, que la 80ciedadha hallado en la. natu· raleza nuevas fuentes de progreso para las artes, la. ind1l3tría. y el comercio; alcanzado grande.s medios para.a.1ivar la humanidad doliente, y difundido por extenso conocimientos útiles. Si así fnere, mi satisfac.ción será' completa. He dicho. Este libro fue Digitalizado Por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República,Colombia DISCU1~,SO PRONUNCIADO };~ J,A SY.SIÓN SOLEMNI<;DE LA SOCIEDAD DE MEDICINA Y CIENCIAS NATURALES ~xccte,l\l;'>~"'" ;jCi'M 9Defe'j'll)" EL 27 ')f"., l",'"\I " m; MARZO Dl!l 1886. ;J.í,,, .• .i\':¡;]"Gi.,t)o), .>e.w~ l~lr.t~.·HOillte.~1er1o~e.\' En este mismo recinto, 30 aflO¡'; há, la bueua. voluntad de mis compafieros {le estudios me hizo órgano {le su agradecimiento para. con nuestros maestro8: no pudiendo declinar este honor, correspondí á él hasta donde lo permitieron mis fuerzas; y los profesores {~ quienes me dirig{ acogieron benévolos, mis palabras. Hoy me haJlo en caso semejante: designado para dirigida en este acto solemne á la honorable concurrencia, honor que tampoco he pO(lido declinar, reclamo vuestra indulgencia. Permitidme empezar mi razonamiento desahogando la. pem\ con que contemplo, entre los vuestros, un a.sient() que la muerte ha dejado vacío; el asiento que infaliblemente habría ocupado esta. noche un ilustre huésped de Bogotá, el Exce]entísimo Sefior Antonio Soffia, que jamás, mientras residió en esta ciudad, faltó á acto alguno de aq\}cllos en que había de }ll'omoverse Ó de hacerse brillar algo que tuvietle que ver con ell'rogl'eso ó el bienestar de este país. 1<":\ se mostró siempre amigo de este Instituto, y una de las pruebas con que lo acreditó fué la de habernos puesto en comunicación con la Sociedad de Medicina de Santiago de Chile. Ya el señor Secretario, en su luminoso informe, ha dado noticia de los trabaJos en qne se ha ocupado la Sociedad y de los socios que han sido a.dmitidos, y ha honrado la memoria de los colegas (1\le hemos pcrdido. n .. r. Este libro fue Digitalizado Por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República,Colombia -24La ciencia es tall vasta y los asuntos de que pudiéramos tratar tan variados, que me h¡1 sido difícil fijarrnc en alguno para llam~r sobré él vuestra atención on este acto. J-,laman :~Ipresente la de todml nuestros coneiudadanos las cuestiones de higiene pÚblica, por lo cual, y por el sumo interés qne cn<;icrralJ, no Le vacilado en escoger llna de ellas para argumento <lemi discllrso. Cuanto la hígiclle privada interesa [t, cada particnlar, interesa la pÚblica :í los pueblos. Los gobiernos no pueden mirar eon illdiferclleía materia tan iU1port:tn1A~.De la solicitud y cf;llIel'Ocon que se la. mire depende el T1Jant~Ilimiento del \'igor de la l'a¿a, (lUC es uno de los elementos de prosperidad y pujanza de nna Ilación. El hombre es ser esmlCialmcnte sociable: cuando, reuniéndose cada 11110 eon otros forma agrupaciones, no hace sino obedecer á su instinto, satisfilcer una necel:5idad natural; de las asociadones resultan la fuerza, el cambio de conocimientos, el progrcl:5o, en una palabra, la d viJización. Mny lejos estoy de participar ue las ideas de " el cantor del estado salvaje." J-,as agrupaeiones, agregáudose á su vez una." á otras, forman pueblos; pero tal agregación, no obstante que es natural, trae consigo peligros de que hay que cnsefiar :.t los pueblos á precaverse, so pena de "er (lue lo que debía ser para ellos eondición de vida y de a<lelantamiento venga á ser caus:t de ruina y de lUuerte. La higiene pública estudi:t todos los problemas de la existencia en común. Hoy que la ciencia ha derramado sobre ella luz abundante, incunir1an en grave responsabilidad los gobiernos, los hombres cultos y todos los que, por cualquier título, tienen deber de velar por la conservación y por el bienestar de 108 pueblos, si no diesen á aquel ramo de la ciencia y á sus aplicaciones· pr{tctica .., toda la importancia que en sí tienen. Bntre estas aplicaciones escogeré, para discurrir sobre ella, una en que, en la época presente, nos han forzado la necesidad y una <10101'081\ experiencia á fijar la. atención: las alcantarillas. Cuando se contemplan las fabricas de este género que nos llan dl'jado los antiguos, el ánimo queda arrebatado de admíraci6n, pero el corazón se contrista al recordar el Este libro fue Digitalizado Por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República,Colombia -25número de vidas 'lue su construcción hubo de costar. Para la de las inmens.:'\8 cloacas de Babilonia, Gelón sacrificó numerosos prisioneros del ejército de Amftca.r. HablanOOdela8alcalltaIillas cónstruídas por TarquiDo elAntigtro, se expresa Amptll'e en est>os términos: "Cerca de 18 siglos han pasado desde que lllinio hablaha, con asombro de la alcantarilla de 1'al'quin6, y lo qne á él le admiraba nos .tdmim ahora á nosotros, y .í otros llenará de igual admiración durante muchos siglos." llossuet, refiriéndose :1 aquellas mismas fábricas, asegura quc Roma no tuvo que avergonzarse de ellas cuando vino {t ser scúora del mundo. Pero tantas fncron la..'l víctimas de su construcción, que con su ~angI'e podrían torIllarse torrentcs que las colmaran. Hacer obras grandiosas economizando vidas, tle manera que los artífioef.l puedan contempladas ~a consumadas, es la má.., gloriosa conquista llc la higiene. J.108 monumentales trahajos de los antiguos han hallado émulos en los modernos. Detengamos nuestra consideración en las admirables alcantarillas de París. En el reinado de Luis XIV uo había sino 3 kilómetros de alcantarilla cubiert-a, y en el aúo pasado de 1885, formaban una red subterránea de 5;~5 kilómetros, de los cuales 175 son navegables por los barcos-compuertas. M. Belgrand calcula que ueutro ue 14 aúos esta rcd alcanzará á 1,000 kilómetros. La red cowctom de 'Asuieres es de mayores dimensiones que la cloaca máxima de Tarquino el l\.ntiguo: tiene {).kilómetl!GS 154wetros de longitud, 4 metr08 4.0 centímetros de altura y 5 metros 60 centímetros de ancho, J' está provista de do~ aceras de á 90 centímetros. Cuando la Asociación científica de }l'rancia en 1869 yisitó esta. fábrica, M. Belgrand tuvo la satisfacci6n de mostmI'la con una especie de coquetería, según la expresión de '}f. Mayel'. AIH se admiran el estado de las aceras, la limpieza, la, comodidad, la solidez y la buena disposición de las reja!;. Si volvemos la vista á ese gigante que se llama l~ondres, tendremos &mbién mucho que admirar en orden {~ las obras de que estoy tratando. - Muchos inconvenientes ofrecían sus alcantarilla8, que al principio habían sido construídas sin unidad de plan; Este libro fue Digitalizado Por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República,Colombia -26- pcro, para. corregir sus defectos, no tardaron en ponerse en acción la enérgica iniciativa y los potentes capitales ingleses. Mr. Alfredo l)nrand· Claye, en un estudio muy reciente describe el estado en qne Londres se hallaba antes de los grandes trabaJos de saneamiento, y de los enérgicos remedios que se han opuesto al mal. "Cada marea alta, dice, detenía las aguas infectas, y en cada marea b~a éstas caían al Támesis y formaban ¡In lodo inmundo cuyas pestilentes exhalaciones obligaron una vez á los miembros do las Cámaras á levantar la sesi6n para huír de los salones de 'Vestminster; y la situación fué haciéndose cada día peor, pues de todas las casas de la ciudad se an:ojaban las inmundicias directamente á las alcantarillas. Organizóse un servicio metropolitano de trabajos públicos; á cada orilla del Támesis se hicieron tres grandes colectores que recogían las aguas de las alcantarillas en una extensión de 132 kil6metros, saneaban 30,432 hectáreas y trasportaban la corriente de aguas impuras á una distancia de 30 kilómetros del puerto d~ Londres. Cuando en el curso de este desagUe faltó el necesario declive en medio de los pantanos que rodean á Londre8, se establecieron para levantar el agua potentes máquinas de vapor con la fuerza de 2,380 caballos. De esta mauera se alTOjan diariamente 400,000 metros cúbicos de agua en el Támesis marítimo, en un sitio en que este río no tiene menos de 700 metros de ancho y en que va recorriendo una región despoblada. La obra de saneamiento está terminada y los habitantes de Londres han quedado libres de las frecuentes y nocivas exhalaciones de sus aguas inmundas. Las impurezas se empujan hasta un punto distante de todo centro de población, ~ donde vienen á ~ezclarse con cnorme¡.;masas de agua constantemente agitada por las mareas. Aun se pudiera parar )¡L atención en las ciudades de Nueva-York y l!'iladelfia,cuyas alcantarillas admiran por su buena construc<'Íón y SUB condiciones higiénicas. Por desgracia no se puede decir otro tanthde las demás ciudades de nuestra. América, muchas de las cuales, por el mal estado de SIlS desagUes, pagan un fuerte tributo á, la muerte. Este libro fue Digitalizado Por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República,Colombia -27En Bogotá !ie ha comenzado ya á cOllstl'uír alcantariHas, y hay fabricados algullos kilómetros; sería harto deplOl-able qQe; ya que á gmn COito y batallando con i~teR diflcultaile8;--Ne est.á dando e6&J*SO, no Sto. diera ~ á lo que dicta la expel'icnciá. y la ciencia tiene demosttaQo. Mé permit-o mencionar aquella. ••{le laH comliclonescou que deben construirse las alcantal'illas que considel'O ad.'lptables entre nosotros. Los ingenieros no están acordes acerca de la nlJturaleza de los materiales que deben emplearse cn ellas. MI'. C01'field, que adopta la teoría de las alcantarillas permeablp,S, prefiere los ladrillos y ac-onseja empleados tIc un espesor proporeionado á la presión que lleben sufri!'. A pesar de opinión tan respetable, se han adoptado en muchas par~s los materiales impermeable¡;.En París se ba eeh~ mano á veces de la buena mampostería cnidadosarAut-e cimentada. La forma de las alcantarillas ha de ser ovoidea., por sor la que ofrece menos roce, más solidez y mayor economía de materiales. La-aJDPlitnd es de mucha importancia. Una alcantarilla no debe medir menos de 1 metro 50 centímetros de altura interior y 1 metro de ancho, {l fin de que pueda recorrerla U1I hombre cuando convenga. limpiarla ó ejecutar algún trabajo para su (,'oD3ervación. Bien se (~mprende, por lo demás, <¡ue su capacidad debe gaanlat, proporción oon el caudal de agua qU0~ destinada á recoger. En 108 países int-ertropicalcs, en que la (',antidad de agua, á camm de la.••lluvias, puede ser excesiya, no lo l'Iel'á ninguna de las precauciones que se tomen para prevenir los desastres qne pouría ocasionar una falta de previsión. El declive de las alcantarilla..,; intluye, eom(J t~S notorio, sobre la facilidad y rapidez de la cQrril'1Ittl lid agua y de las materias q\le arra~tra. OOl'fidtl CI'Ct' qUl._\ un desnivel de 5 á 4 nlilímetros por metro es suficiente en hts alcantarillas de la,-'o! ealles,·~· t> l 1 por ~() al 1 por :m Ni las de las habit-a-ciones. J;08 de¡;a.giit,s de lIstas (leben desembocar en la alcantarilla princilJaI ell 1111 puoto elevado, esto es, más cerca Este libro fue Digitalizado Por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República,Colombia -28de la hóveda que del tondo, á fin de evitar el reflujo que podría establecerse con una lluvia copiosa. La profundidad que lla de t~nel' una alcantarilla varía. segÚn las condiciones de cada localidad. Las superficiales son malsanas por lo difícil que es conseguir hacerlas perfectamente impermeables. Las a.lcantarillas debeu iabricarse según un plan general para. que el enlace de tDdas entre sí no ofrezca dificultade¡.;. :1fucho se ~I:t discutido sobre las bocas que las alcantarillas pueden llevar; y aun ha habido quien opine que 110 dt~ben hacérseles. En ciert.'ts poblaciones estas hocas ~e hacen pn cualesquiera puntos de la superficie de las calles y van provistas de rejas de hierro; este sistema no evita que ¡;uhan y se mezclen eon el aire las exhalaciones de lae materias arrastradas por el agua. )<1. Millerat inventó otro sistema que consiste en el uso de una cubeta de palastro C01lbáscula, que se abre de afuera bacia adentro cuando la llena el agua de la lluvia, y vuelve á tapar la boca luégo que se vacía. Aun este sistema tiene 'el inconveniente de que la cubeta se llena con facilidad de tierra, de ,piedras, de hasuras ó de otras materias y deje de funcioÚar. Para obviarlo se ba propuesto colocar antas de cada boca un enrejado tupido, para detclIcr los clIcll>oS s6lidos. Bsto sólo presta utilidad cnando se mantiene la reja cn constante y esmerada limpieza. Por regla general, si las alcantarillas están constl'Uídas con todas las condicione¡.; qne las hacen perfectas,. (,'OillO las de París, si la COl'rilénte qne baja pOI' ellas es abundante, no se opone ¡Í, la higiene el lIUO t,cngan bocali ni el que estas bocas estéll siempre ahiertas, pncfl no habrá ex}¡alaeioucs que puedan salir por ellax. El desagUe de las alcantarillas, ('¡.;to es~ la extremidad interior de ellas, dehe aITeglarse de manera que las aguas al salir no hallen tropiew y quc por consiguiente no SI> formen depósitos de las inmullllicia¡.; que sacan de l:t pobl:wión. Este punt.o merece mIlY p:uticnlarmente la aWIld6n (le nucstros ingenicros, pues es fácil discnnlr qué males se seguirían de que t.ales depósitDs ¡.;ctbrmaran en las afueras (le l~ogot.á, que v(\ndrían :'t cOT!\'crtirsc' en imnen~r Este libro fue Digitalizado Por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República,Colombia -~l;I- foeos.de infección. En mi concepto, no el' fácil evitarlo, así por la falta de desnivel del terreno á que van las aguas que salen de la ciudad, como por no haber una corriente bastante copiosa con que puedan ir á confundirse dicha·s aguas. Así, no habría esfuerzo ni precaución que fuera excesivo para completar las obras que se están llevando á {jabo en esta ciudad, haciendo no sólo que las aguas y las in-, mundicias la atraviesen, sino también que se alejen de ella. No hay que perder de vista que las alcantarillas, por más que sean un poderoso medio de desinfectar el aire, pueden venir á trasformarse ellas mismas en focos de infección. Oon efecto, si no se lavan con la frecuencia y el esmero debidos, las materias inmundas qne están destinanas á contener se van adhiriendo á su fondo y á sns paredes, se corrompen y exhalan por las bocas vapores .stilentes. En tiempos lluviosos nada o poco habrá que 1racer para mantenerlas en estado de limpieza; pero en tiempo de sequedad es forzoso lavadas por alguno.de los méto~os q1.feban solído emplearse. En las que se están fabricando en Bogotá conviene practicar aberturas y colocar en ellas compuertas que de tiempo en tiempo detengan el agua y produzcan, al ser levantadas, corrientes capaces de arrastrar todas las materias que pueden depositar~e. I;as precauciones que deben tomarse al construír las alcantarillas tienden Ú evitar el desarrollo de epidemias. Pettenkofer ha demostrado la propagación de enfermedades infecciosas qne tien.en origen en la inhibición de sustancias pútridas en el suelo de las calles. < Las simultáneas excavaciones en varias calles, la remoción de la tierra yel estancamiento de las aguas sucias, contribuyeron en gran manera á aumentar y tal vez á producir la. epidemia de colerina que en el arlO pasado afligió {L Bogotá. El autor recientemente citado opina que el desarrollo del cólera en una población es proporcionado á la eantidarT de sustancias orgánicas que se ballen depositadas en el subsllelo; y algunos autores consideran la colerina como el mismo cólera morbns en forma, benigna. Es de la inclllnbencia de los gobiel'l1os atender á todas las empl'es~.s y ;1 todas las obras de públíea utilidad que son .superiores á losreeursos y á las fuerzas de los particulares. 80S Este libro fue Digitalizado Por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República,Colombia -30Es oblígación\suya promover y .llevar á c~bo todo 10 que siendo inasequible para éstos, es necesario para el bienestar de los asociados, para desviar decllos las calamidades que pueden amenazados y para hacedos gozar de comodidades. Entre estas cosas ninguna, después del orden y la moralidad Pvblica, merece más atenci6n que la pública higiene, sin la cual el hecho natural y necesario de asociarse los hombres se convierte en causa .de ruina y de destrucci6n. Así 10 han comprendido casi todos los gobiernos de los países cultos, y así se han esmerado en poner en práctica las prescripciones de aquella ciencia para mantener la salubridad públic~l. Pero el ser la higiene una ciencia, está demostrandó quwacci6n de un gobierno en el sentido de que hablo de~r dirigid~t por quien haya hecho estudios competentes, y que, por lo mismo, no hay gobierno que no necesite de algnna corporaci6n científica á quien ocurrir siempre que se trate de poner en práctica algumt de las prescripciones de la higiene, prescripciones que no puedeu jamás aplicarse con acierto si no se estudia á la luz de la ciencia lo que conviene hacer en cada caso particular. N o existe entre nosotros ninguna corporaci6u que tenga especialmente aquel desUno; pero existe la, Sociedad de Medicina y de Ciencias Naturales, en la que hay protesores de todos los ramos que pueden relacionarse con la higiene y en la que se llacen estuIJios sobre ellos. Ya más de urja vez ¡la mostrado esta Asociaeión su amor al bien público y RIlS patri6ticas disposiciones á auxiliará l~tSautoridades en lo que es de su competencia. El Gobierno, pues, debe conta¡' (~nlo .sucesivo con sn concurso y con su bUt;ua voluntad, y favorecerá indirecta pero ~fieazmente al público si Hworece á este Instituto. l~ara dar una prueba práctica de lo que acabo de afirmar, he escogido como argumento de este discurso un punto qne puede pa,l'ecer árido en demasía, pero cuyo estudio es indispensable para el buen éxito de una empresa (la de construír alcantarillas (m Bogotá) que llama actualmente la ~ltenci6n yen la, que están ~~atra.ba:jando las autoridades y los pal'ti'eulares. NICOT.lÁS Ot~rOIUO. Este libro fue Digitalizado Por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República,Colombia MEMORIA SOBRE LA mSTORIA DEL ESTUDIO DE LA BOTANICA EN LA NUEVA PRESENTADA GRANADA, RESI'ETU08A.MENTE A LA SOCIEDAD DE NATL'RA- LISTAS NEOGRANADINOS, l'OR FLOlmNTL.','O VEZGA, MIElImRO FUNDADOR DE LA. MISMA. BOTÁNICA INDÍJENA. Aun permanece envuelto en la noche del mistorio el orijen de los primeros habitantes de estas rejiones, i con 61la época de su advenimiento, apesar de las prolijas indagaciones que con tal objeto se han hecho por los historiadores de la conquista de nuestra AmÚrica. Si al~una vez se lograra salir de estas dudas (lo que no es mui uuprobable, teniendo en cuenta el rápidr, engrandecimiento de las ciencias i elincremeuto inesperado de los deseubrimientos arqueolójicos en los tiempos que corren) se podría enronces saber con certidumbre dcsde cuándo llan sido c0ntemplados i esplorados nuestros frondosos oquedales i espesos bosques; desde cuando la hoja del tabaeo ha deleitado nuestros sentidos i el delicado fruto del eaClLO hit sido saboreado por los homhres, recibiendo la poética denominacion de aJ,Únenlo de l08 dio8e8 (theobroma); desde enando, en una palabra, nuestra rica i hermosa naturaleza equinoxial ha cautivado el pensamiento humano con la profusion de sus secretos i de sus dones, desde cuando ha abrazado la imaji- Este libro fue Digitalizado Por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República,Colombia -2nacíon con el fulgor dc su majestad i tocado el sentimiento 'Conlos encantos de su infinita belleza. Pero sea lo que se qwera de ese oríjen i de esa época, todo hace creer que desde el momento en que el suelo americano fné hollado por plantas humanas, su vigorosa i variada vejetacion fllé a la vez admirada i estudiada. oon cuidado. Por qué? Porque, en efecto, estaba cn el mas Íntimo e inmediato interes person.al de aquellos primeros moradores, cualesquiera que fuesen su actividad física e intelectual, su amor al trabajo, su inclinaeion al plncer, su an.cion a lo bello i su grado de cultura moral, el aplicarse al estudio de los seres vejetales, fuera incoherente i caprichoso, fuera mas o m{mos metódico; al conocimiento dc sus propiedades salutífcras o deletereas; a la averiguacion de sus cualidades económicas, industriales i agrícolas, i a la invencion de medios apropiados para estraer los accites, aromas, resinas, venenos, gomas, bálsamos i demas jugos o materias peculiares a cada órden o especie vejetal, no ménos que a la observacion- de los medios i requisitos mas propios para la pronta jerminacion, desarrollo i fructificacion de las especies notables por la p!-rticularidad dc sus formas, por lo pintomsco de sus C010l'ldos,o por sus condiciones de nutricion, de medicacion i de industria. Ásí que, todo lo concerniente a las plantas debió 8er para los indi08 materia predilecta de observacion i de trabajo intelectual, por la estrecha relacion que tienen con el bienestar, comodidad i progreso de las sociedades. 1si a estas meras conjeturas se agrega el hecho bien confirmado de que los aboríjencs eran mui adictos a las plautas i. a las flores, como lo ad virtieron.l?s cronistas de la conqUIsta, no es de estrañar que la tradiclOn hay'~ encomiado la sabiduría de aquellos pueblos en punto a la vejetacioll que 108 rodeaba. Todavía Be ven en las poblaciones de indios reducidos a la vida civil, individuos de esta. raza que bajo el nombre dc yerbatero8 goz8Jl.de crédito como curanderos entre sus cofrades, i curan en realidad algunos casos de enfermedad con sustancias vejetales; i esto, no obstante que los indíjen8s incorporados en la sociedad civilizada parece que lejos de mantener la robustéz intectual i la fuerza física de sus antiguos padres, caminan volozmente ácia el envilecimiento i aun ácia la cstincion absoluta. Se sabe ademas que en las tribus salvajcs que pueblan Este libro fue Digitalizado Por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República,Colombia -3nuestras inmensas rejiones incultas, lar;personas elejidas para el desempello de las funciones del gobierno i del culto de sus respectivas tribus, sobrcsalen por lo eomun en el conocimiento de los vejetales de las enmarcas que ocupan, i poseen secretos preciosos sobre las aplicaciones de est08, principalmente a la curacion o alivio de las dolencias que mas 108 afectan o a que están lias espuestos. 1 de paso séame permitido notar, que eRta predileecion cleccionaria en favor de los indios botánicos prueba cn mi concepto, aunqllo débilmente, que nuestros ahoríjenes, que segun Blumenbach constituyen una raza especial (lile (!l llama ?'aza americana, descienden de los antignos cjipcios, cartajine6es i fenicios, pues tambicn en estol:' antiguos puehlos los gobernantes i sa(~erdoteseran eselusivos sabedores de los secretos sobre las virtudes de las plantas preciosas, te cuyo:; efectos asombroso:;,como dice Zea,:;e apropiaron para aturdir la razon." xx Ahora bien, investigar cual fuera la estension e impol'tanda de los conoeimientos botánicos que tu vieran los aboríjencs, seria ciertamente una ubra digna de toda clase de csfnerzos, por el provecho incalculallle <IUO de ella pudieran reportar las ciencias i las tlrtl~8; pero desgraciadamente los conquistadores, en lugar de ser acusiosos en hacerse amar de aquellos para escudriñar, por medio del cariño, su índole i sus inclinaciones; para ol¡tener la l'evelacion espontánea i por tanto completa de sus anales i tradiciones, i para apoderarse ¡¡inviolencia de SIlS monumentos artísticos i de BUS secretos, parece que mas bien se empeñaron por sus crueles manejos en correr un vdo tan denso sobre las antiguedades, modo de ser moral i ¡;ociali civilizaeion de las sociedades indíjenas, que tal vez no serán bastantes a penetrarlo, al m6nos en mucho tiempo, ni la mas constante solicitud ni la mas aSldua i perspicaz observaéÍon. Las crónicas que han llegado hasta nosotros, mni pocas noticias nos suministran sobre este asunto, i a mas de sor pocas adolecen de deficiencia i oscuridad. Echasc de ver por e8to que en 108 primcros años de la cunquista la mayor parte de los españoles qno arribaban a las'playas de nuestro pais no eran verdadcroBcolonos,sino aventureros codiciosos, sin educacion moral ni intolectual, sin intencion de esta- Este libro fue Digitalizado Por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República,Colombia -4hlecer su vida i su sangre en estos lugares, sin aspiraciones nobles i elevadas, sin otro deseo, ni otra mira, ni otro pensamiento que llevar el hacha fatídi('a del exterminIO a todas las moradas indíjenas, i estender por todas partes el horror de la desolacion, con el objeto de atesorar cuantiosas riquezas para volverse a disfrutarlas a su tierra natal. Los primeros jesuitas que vinieron a scmbrar en el corazon de los sal.ajes la fecunda simiente del cristianismo, tampoco dejaron indicacion alguna sobre la historia social i natural de los indíjillas, seguramente porque, sistemáticos como han sido siempre los micmbros de esta comunion relijiosa, quisieron comenzar por el principio el estudio de fodo lo relativo a esta raza, para poder contar con mejor i mas seguro éxito. De aquí el empeño que pusieron en aprender los diferentes idiomas indíjenas. 1110 hai que dudarlo: Riel rei Carlos IIIno hubiera decretado la breve salida de estos sacerdotes del territorio sometido a su poder, salida qne tuvo lugar en 1767, siendo virei del Nuevo Reino de Granada el Teniente jeneral, marques de la Vega de Armijo, D. Pedro Messía·de la Zerda, los jesuitas habrian legado a la posteridad la narracion minuciosa i exacta de las leyes, costumbres, índole i progresos de todo jénero de los pristinos moradores de esta parte del continente. Su consagradon a la lingiiicultura indíjena correspondió mui bien a SIlS deseos, pues ya sablan espresarsG con facilidad en los varios dialectos, habian entrado en estrecha comunicacion con 108 indios, i se preparaban para acometer vastas emprcsas industriales i do comercio i navegacion, de seguro ll111iconducentes a la pronta i perfecta conver,;ion de esos salvajes a la vida civilizada, i eficazes para desenvolver la riq neza i felicidad del pais i para abrir paso a la emigracion. :MasDios, que dirije la suerte i el destino de las cosas i de los hombrcs; Dios, qne vela sin cesar por el trinnfo de su eaU8a,que es la de la verdad i el progreso, habia dispuesto que esta espléndida América fuese con el tiempo ancho i digno teatro de una nueva i hennosa. evolucion social que debiera tener por inmediato resultado la libertad de las facultades lllllnanll.i!,la. independencia individual, la. igualdad de los derechos i la soberanía de los pueblos. Por Cl-'O, dcspncs de haberla sustraido por largos siglos a la opresion de la vi~ia rcyedad, ocultándola entre los marca, lA libró de la vara de los jesuitas, quienes a la larga, au- Este libro fue Digitalizado Por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República,Colombia -5mentando sus riquezM, su infiueneia i su poderío, _tal vez¡ habrían conc.luido por extralimitar BU miBion relijiosll. para enseñorearse enteramente de laR colonias. En verdad es un becho l'emarcable que el descuhrimiento i colonizacion del Nuevo Mundo se verificara cuando la humanidad, por 108 adelantos de la civilizaeÍon cristiana, estaha próxima a empezar una nueva edad histól'iea caracterizada por la fraternidad de todos los hombres, de todos 108 pueblos i do todas las razas. Parece que la Providencia ha procedido en esto como un buen padre con Sll.S hijos. El agrieultor ¡;eneillo miéntras ve crecer a sns PC(ltwiiuelos, los éduca en el trabajo del campo fertj], i lue,2:(1que la.e(lad los ha tornado fuertes, raeionales i lllcsunll]o8, leil asigllll.un pedazo de terreno para que ejercitando sus miemhros i desplegando su laboriosidaJ., hagan aplicacion de lo que han aprendido de la razon i de la esperieneia, i produzeau buenas cosechas, acreditando con su amol' a las faenas i su buen comportamiento, que no desmcrccian el favor que la bonda(l pat~rnálleB dispensó. Pero volviendo a nuestro principal objeto, i por poco qno se reflexione sobre el cstado de los indios en la época de la conquista, es evidentc, C11 buena sindéJ'csi8, qne los q,uehabian organizado sociedade::;r('jidas pUl' gohiernos const1tuidos, los (inc de un dia para otro levantaban (:iércitos de cml.Tentamil i mas hombres, lo::;(lUl) tenian leyes penales i de organizacion i procedimientu judicial, los qne 80Stenian cultos relijiosos provistos de h'mplos, cánonc6, s:werdotes i pontific\ls, los que l'espetahan 1111 derecho de jentes que abarcaba 108 casos de paz i lle guerra, seguramente llo miraron con indiferencia el estudio de la naturaleza rica, multiforme, exhuberante. que lo;,;cimnndaha. Si en tiempo de los jesuitas, cuando los espltñoll''l habian arraba.do el territorio muisca, el mas <:'ivilizado i poderoso de los estados indíjenas contonidos dentro de 11)s límites de la actual Nuova Granada; cuando con SUR atro(,iclades hahian enjimdrado en el alma de los pobres naturales, el espanto, el dolor i el abatimiento; si on eso tiempo, dip:o, todnvíll hahia mucho (lllé saber i qué admirar, i qw[· 110 ;;Qria cuando oiwntabf\ en todo S'U albedrío i esplendor la existencia do esas sociedades? 1hinembargo <leesto, ll11lipoco, casi liada, corno ánts dije, nos dejaron los dceculJridorcs i primeros colonizadores Be Este libro fue Digitalizado Por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República,Colombia -6~11 pun~Qa noticias sobre la civilizacion indíjena. Mas bicn podemos encontrar algunas, 60bre todo 6i se refierún a conocimientos botánicos, en los escritos de los ilustres naturalistas que para gloria de nuestro pais florecieron a fines del siglo pasado i principios del presente. xxx Hé aquí las que me ha sido dado rooojer. Spn pocas, pero no carecen de intereso Oportuno creo consignar al pié de cada. una de ellas las reflexIOnes a que naturalmente dan máIjen, para diseriminar lo que tengan de útil, de verdadero, de verosímil o de falso. A.-Los sacerdotes de Bochica, deidad que tenia sus templos en las poblaciones de Sogamoso, Chia i otras, " vivian en estos emplos siempre célibes, guardando abstinencia, durmiendo poco i comiendo ménos, consÍBtiendo su alimento en la yerba llamada hayo. " La planta de este nombre debe poseer virtud anafrodisiaca, i tanto por esto cuanto por que debe contener muchos principios alíbles, seria de desear tambiep su adquisicion. R-Cúldas, el ilustre Cáldas, siempre infatigable obrero de la. ciencia, ha dejado la nota sigUlente, consiWlada en una memoria <{lw sobre el influjo del clima en l088eres ()rga1Lizad,fJ8 pul¡licó en el " Semanario" de 1808: -" En 1803, dice, recorrí las selvas dilatadas de Mira" Bogotá, Santiago, Cayapas, &.a por colectar las plantas de est{)8 paises ferazes i ardientes. Me !U;ompafíaba un Indio Noánama, célebre en el arte de curar a los mordidos de serpientes, de que abundan estos lugares. Cuando yo me esestremecía a la vista de alguna i manifestaba mis temores, el N oánlj,ma me sosegaba i me decia: No temaS, blanco, yo te curaré si te pica. Procuré de todos modos mereeermc su amistad, i halagaba BU pasion por la bebida, le hacia presentes; i cuando creí que poseía su confianza, le pedí me manifestase sus sc<~retosi sus yerbas. Convino, pero eon reservas, i siempre ocultándose de los demas compafíer08 de nuestras expediciones botánicas. De repente, 6e desviaba, COjílLun ramo, i a solas me decia.: Esta es buena contra. Yo observa.ha, fijal¡a cljénero, disenaba i describia la es-: peeie. Varias veces repitió esta oper!U;ion,i yo conocí muchas contras, usando dollonguaje de mi companero. 1)01'0 Este libro fue Digitalizado Por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República,Colombia -7lo que me admiro í llamó toda mi atcncion, fué que todas las plantas que me presentó como eficaces en laIDordediUiI de las serpientes, eran de un solo jÚnero; todas eran Beskriaa. i Cómo este rústico jamás equivocaba el jénero, este jénero tan vario i caprichoso? La experiencia, un uso dilatado, una casualidad feliz han ensenado segurameute a los moradorcs de los paioos en que abundan 138 serpientes que tal planta es un remedio poderoso. La neecsídad, la mas imperiosa de todas las leyes, 11abrá obligado a buscar un 8uccdaneo en caso de faltar la yerba conocida. Las formas, cllHíbito, algunos caracteres mas notables, loa habrán guiado en la comparacion de las especies; el suceso habrá correspondido a sus esperanzas, i la ciencia médica de loa sa.lvajes ha admirado a los filósofos. Un llOmbre que no ha oído j amas los nombres de Linnco, de fa.milias, de jéneros, de especies; un hombre que no ha oido otras leeciones que las de necesidad i el suceso, no vodia ronnir nueV(} o diez especies blijo de un jónero, qne el llama Contra i los botlt· nicoa Be8le:ria, ain ~ue tuviese un fondo de conocimientos i de csperiencias fellZes en la curacíon de los desgraciados a. quienes habian mordido las 8Crpientes. N o pretendo que se c1'e:\sobre su palabra; pero estos hechos debcn llamar nuestra atencion i estimularnos a que Jlagamos esperiendas con todas las beslcrias. Por fortuna el jéne1'o está abundantemente e¡¡pareído en los paises ardientes i templados, i no falta en IOi! fri06. Sí corresponde el sttceso i qué conquista para la humanidad ! " Las consid.eraciones del imnortal naturalista i padre de la patria son tan ~G"811das, tan justas i tan claras, 5Iueme parece llamarán sériamente lttstencion de 108 botanicos i médicos amantes de la deuda idel progreso. Ella&,despues de afirmar mis precedentes raciocinios sobre lo que debió ser la botánica indijena cuundo los indios tenían existencia libre i feliz, comprenden dos plllltos principales, i dan lugar a las inducciones siguientes: 1." que viviendo aquellos entrelas selvas i los matorrales, i por consiguiente pudiendo observa~ sin ~nterrup~ion to~oB 108 fenóJl~enosi accidentes de la veJetaclOn, qU1za eran 1 son aún IllUl naturales en BU taxonomía, pues todo hace inferir que esta tiene por base aclamas del hábito esterior de 1aa plantas i de la consideracion de ciertos órganos, la semejanza de cualidades de aplica.cion, i seria por lo tanto roui importante averiguar Este libro fue Digitalizado Por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República,Colombia -8<lu{llcsson sus reglas de c1asificacion, o su metodolojía, para tenerlas presentes en las controversias i discusiones que sobre este mismo asunto dividen a los slthios; 2.a que sabiéndose que muchas especies del jénero de las bcslerias se aplican como remedios poderosos contra la mordedura de las serpientes, seria una obra útil al público i altamente meritoria para los qne qui"icran emprendcrla, colectar todos los individuos de este jénero, i hace!; oportunamente , esperimentos, por otra parte aprobadas i aun aconsejados en el presente caso por la sana moral médica, pues que hai probabilidades de acierto que los justifilluen suficicntemcnte, i ningun daño que temer. Procediendo de tal numera podriamos llegar lt saber dos cosas: 1.a m¡{llesson las especics de que habla Cáldas, i descríbirlas si no lo están; 2.a si es verdad que son eficaces contra la mordedura de las serpientes, i en este caso cuáles tienen accion lilas pronta i enérjica contra el veneno, con lo que la materia médica haria una adquisicion de alto precio. Pudiera ser qne tambien curasen la hidrofobia, i entónces seria una de las mas estimables ofrendas qne pudicran ponerse en el altar de la civilizacion. C.-Asegú¡·ase (lue los indios poseian el secreto de ablandar el oro por medio de sustancias vejetales, i qne se han hallado obras de este metal en que se notan las arrugas o pliegues de la },lid de los dedos como sucede cuando se amolda la cera. 1amLien se dice que Bevalian igualmente de sustancias ve.ietales para consolidar esas obras despues que habian reeihído la última mau;). Como se ve, esto e3 verdaderamente de sorprender. Si fuera cierto (i no sale de los confines de lo posible), bien empleados serian todos los sacrificios que se hicieran para desentCl'rar i revelar al mundo tan bello descubrimiento. Por lo que a mí toca, me inclino a pensar que, cono· ciendo los indios los medios ordinarios de hacor cambia}' de estado físico a los mctales, i habiendo llegado hasta nosotros los instrumentos do que se servian para tal operacion, así como algunas obras que dan seflales de haber sido fabricadas por estos medios, el descubrimiento referido es poco digno de crédito, a no ser que por egoismo del que lo hiciera hubiera caido en el olvido de SlIS sucesores; porque es claro que al'haber sido conocido por todos, los medios (;OillUllCS, d.ispeuuiosos como son de trabajo i de tiempo, Este libro fue Digitalizado Por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República,Colombia --9de ninguna manera ha.brían merecido la preferencia de loe indios. Para ml'jor apoyar estos conceptos, copiaré 10 que ti. propósito dice el señor Ezequiel UrieoeeLca en su interesante Jlerruy,.ia 80bre las alltiguedade8 neo-granadinas, p{~jina 40: "L08 indijenas de la Nueva Granada, dice, conocían el oro, la plata i el cobre. Sal)ian fundir el metal, vaciarlo, soldarlo, i tal vez batirlo. D sabun para fundirIo de ciertos hornillos que, segun Alcedo, se han encontmdo en las cercaníaB de Guatavita, pero de los CHalesno da dCBcripcioll alguna. Sabemos que 108 peruanos usaLan hornillos provistos de tuhos de cobre para conducir el aire con que acrecentaban el fuego, i no es de,dudar que UIla maniobra semejante acompañase alos de los p,'natavitas; o hien podian haber mlado estos, como' los antiguos ejipcios, cañas de madera, cuyo estrellO era guarnecido con una punta o lámina metálica. Los crisolos que usaban los guatavitas no son conocidos, pero tengo el placer de poder mostrar los que los armas usaban, los cuales serian puestos en la mitad de ca.rbones candentes hasta que se derritiese el oro que contenían, al uso de los ejipcios, quienes muehaiJ yeces no se 8enian de hornilla.8. En alg-Il!lode estos cri801c8aun se 1m encontrado el oro derretido, lo cual IlO !lOSdeja duda de su uso. J~osmoldes que 108 peruanos usahan para vaciar sus obras eran de cierto barro mezclado con yeso, Tenian estos tambien el arte de cincelar sus obras con tanta perfeccion, que no se distingue en ellas la menor desigualdad que del molde resultara. Parece que el modo probable de ejecutar los guatavit11.ssusoLras era elsiguicllte: en una matriz compnesta de dos partcs, se echaba el metal dcrretido, lo cual dejaba la superficie de la lámina metálica al enfrian;e sin pulimento, debido a las burbujas de aire, pero nUlcho lllas a la superficie áspera que el molde o matriz debia tener a causa de la imperfeccion con que preparaban el barro de que so servian i euya tcstura granulosa se imprimia en la plancha metálica. Que esta era fundida, i no batida, i que la matriz se componia de dos parles, se d~ja mui bien ver (aquí llama la atencion a una de las lámina;; quo acompafiall la .Memoria,) pues en las orillas de esta fil:,'1ll'ahai pedazos de metal derretido i allí pegado, cuya superficie no nivela ni con el uno ni con el otro lado de la lámina, está en medio, i seria,. pues, la p~rte del metal que salió por la rendija qne de,laron entre SI las dos partes de la matriz al cerrarla, i que n~ ajustaban bien. " Este libro fue Digitalizado Por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República,Colombia -10D.-En lin cuaderno autógrafo del botánico granadino Francisco Javier Matis se lec la siguieute relacion sobre el descubrimiento de la mikania gu(tCo, conveniente de conocer por mas de lUl motivo. El benemérito pintor de la Espedicion botánica refiere las cosas con una injenuidad que despierta ternura e in teres.K ótasc al par que la sencillez del hombre suno de corazon,el acento de la verdad lisa i llana, que a la \"ez que redunda en honor del autor, presenta en los mas claros términos i hasta con candidez los detalles del hecho. Matis no era hombre literario; no era mas que un botánico práctico, entusiasta, un botánico del bosque i de la montaña. Por esto he tenido que correjir en BU escrito, al intentar trascribirlo, los frecuentes en·ores {)rtográficos (pIe padece, conservulHlo empero orijinalla coordinacion. Dice así: "En la ciudad de Mariquita en el año de 1788 se hiZo el descubrimiento del guaco por Francisco Javier Matis, por haber hallado al negro PlO, eeclavo de don José Armero, con una culebra viva en las ma.nos;i haberle pro~untado a dónde la habia cojiao. -Dijo que a la venida de la hacienda de BU amo. -¿ A qué te adivino, le dije, las contras de que usas? -i A que quizá, contestó, sabrá BU merced·~ -bíjele que usaria del bejuco earare ~ -Contestó que sí. , -De la necha ~ -Que sí. -De la fi'uta del bnrro? -Que sí. -1 fuera de esas usaría otras 1 -A lo que me contestó: hace poco dcscubrí otra qne me parece es mejor que las nombradas. "1 sacando del bolsillo una hoja me la mostró, i refiriéndome cómo hahía sido el descubrimiento dijo: - Que estando desherbando unas yucas en la hacienda de iU amo, vino una águila que nombran guaco, i se paró en un árbol: que estuvo cantando fluacó, guacó, &.a i que luego Be dej{¡ caer entre el bosque; i oyéudole dl.\r alctazos, le causó curiosidad de ir a ver que eran dichos aletazos ; i vió al águila en accion de cojer la culebra, la cual se le prendió, i en el instante levantó el vuelo, i BO fuá. El negro la si~ió para. ver donde iría a caer, i vió que a la ceja del bosque se Este libro fue Digitalizado Por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República,Colombia -11sentó) i comió de las hojas del bejuco guaco) i retrocedió en busca de la culebra) 1 la halló en el mismo sitio, i la. 00jió i se la llev6 a comérsela a otra parte: qne fué el negro i reconoció de las hojas que l¡abia comido, i reflexionó: cuando este animal ha COIllldode este bejuco, buena ~ontra será..- Ya he aplicado, añadió) a seis, el zumo puro bebido i frotado en las picadas, i ninguno ha muerto. - Díjele: buen descubrimiento has hecho. "Comuniquele al senor doctor :Mútis dicha noticia, a lo que me pregtmtó : -i U. vió si esa culebra tenia colmillos? -No, señor; pero era coral, i esas tienen colmillos. -Díjome: a otra que U. vea, haga que le muestre los colmillos . •, Yo creí que pensaba el doctor Mútis que el negro les sacaba 108 colmillos, i despucs ya podia jugar con ellas. Pues si él pensó así, yo tambien . . " Al cabo de quince días apareció el negro con otra culebra taya. -Preguntele dónde la habia cojido. -En la orilla de la quebrada tal. -Dígole: i i esa tendrá colmillos ¡ -Sí, mi amo. -i Qué harémos para verIe 108 colmillos? " I.ia tomó con la mano izquierda por cerca de la ca· beza, i con unas tijeritas cerradas que le metió entre la boca i las abrió, pude verIe los colmillitos. "CoIUuniquele al doctor Mútis dicha observacion, i me dijo: vió los colmillos ~ -4)1, serior. los víó ~ --SI, senor. -Díjome: vaya U. i traiga.me el negro. Fui en bl18Ca de (,1, i lo traje. -Díjole el doctor Mútis: el señor Matia me ha. dicho ql1étÚ juegas con las culebras i que cstás curado. -Sí, mi amo. -Te atreves a curar al señor Matis? --Sí, mi amo. -Yo te avisaré cuándo; no dejes de pasar acá. eiempl'e que vengas de la hacienda, i traeme de cuantas cosas ha- -tY. -tY. Este libro fue Digitalizado Por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República,Colombia -12llares p,or esos bosques, sean culebras, cucarroncs u otros animahllm;, que yo te regalart>. " Al otro dia fui al campo i bosques, i traje tres matas chicas de g'uaeo, i las 8cm bré en la huerta.. " Al cabo de cineo meses algo mas, apareeieron los 8cfíores doctor l' galde, canÚnigo, el padre Ahal'cz, jesuita, i el doctor don Pétlro Fennin de V árgas; i al tiemp~ de comer, el doctor :MÚti8 lcs rc11riv la noticia del guaeo dic\~.ndoleg: -Tenl;\o una emprcs.a entre !llaDOSque !Si llego a verificarIa sera cosa que asolllhre a todo el mundo. -Díjolc el doctol' V árga:::: señor, una cosa como esa llo. "e debe d~iar al tiempo, i sí se debe poner por obra. -Dijo el doetor 11útis: si (¡uieren mandaré donde don .J os{~ArlUcl'O por el !legro. -Sí, señor, uijo el doctor Yárgas . •• ::Mandó el doctor )Iútis reeado a dicho scí1t)r Armero. Contestó no estar el negro en la ciudad, que al otro dia vendria. En efecto, al otro dia apareció como a las tres de la tarde. -DijÚlc el doctor 3Iú'tis: estos señores quieren que IOf" (mrcs; vc si te atreve:,. , --He&pondió quc ;;l. -Díjole el docto!' Várgas: vamos a la obra. --Díjole elllcgro: no, mi amo, ahora no; eso ha de Be!' pOl' la mañana. -Bien, dijo el señor V árgas; preven lo que sea necesado, i ven ac:t por la mañana. " Llevé el negro a la huerta, i cojimos hartas hojas de las dicha::; matas qu~ habia sembrado hacia lUas de cinCo. meses, que estaban mili viciosas; vinimos. a la cocina, machacamos bien las hojas, las envolvimos en un trapo, csprimimos el zumo, i lo gnardamos eT\ un vaso. " Al ot\'l) dia nos inoculó el zumo quince. Matis fu6 el pl'ill1ero~ luego el doctor Pedro :Fermin tic V árgm:, i despnes los dC'lllas dependientes de la Botánica. La inocula<:ion fué en las manos, pechos i piés, tajándome con una navaja de harba, tres tajos en el cútis, i untarmc el zumo l'l\l'O, i una cucharada del zumo puro que tomÓ. Dieziocho inciciones me hizo, i lo mismo ejecutó con los demas. -El doctor V árgas le dijo: i i ahora podemos cojer una ~ulebra 1 -Sí, señor. a Este libro fue Digitalizado Por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República,Colombia -13-i 1 ~i nos pica ¡ -No tenga cuidado, mi amo. -Pues anda i tráenos una. "Fué el ncgro i nos trajo una taya-('1uiR, como una vara algo mas de larga; la puso en el í:'uclo. -El dicho senor Vár~as Ic dijo: fla cojo? -Sí, mi amo, i no ve Sil mcreed CÓ!110 la ('ojo yo? "lla alzÓ, i 8C la envoldó en el hrH7.') iUluíerdo, la sobó por encima, i la culehra no hizo aedon de pictlrlo ; púsola en el ¡.;nclo. " 1 Matis le IIlctiÚ ámhns mancs por dehajo i la lm"allt/!; "ohit) la culebra i le olit. las mallO": pÚso]a en el suelo. " ~ig'nit') el doeto!' V úrg-,l:> i In alzÚ: hizo la misma acdon de oler las mallOS: pÍ1sola en el Rudo. " r por mas i por mas quc lcs illstÚ a los demas curados (l\1e la alzaran, no hubo otro que se atreviera a alzarla. "Cojíla segunda vez; hizo la misma accian de olermc las matlOs. -DígolC5 a 106 demas: ¿ vcn ustedes? ¡ i e hÍll con miedo! No fué posible .. " Yo, Mati8, me qned(' pensando: si la culcbra no pica a alguno, no qucdo satist'edlO de la cnraeion. :Me re¡;o]YÍ n irritarla llU(~iendo l'eflex ion: i, q Il~' ]l\lcde ser? aunque me pique, a(]ní está 01 curandero a. <¡\líen le tengo fé. En efecto, lile agaché i le fui rascand() por encima; algo se encojia; i ya que lliO acerqull a la cahc;:l\, como a una cuarta poco mas o ménos, revolvi(¡ con lijereza i se me prendió, cla vándomc dos colm ¡!lo;; en los dos dedos centrales de la mallO derecha. En el illl'itántc me apret.é con la mano izquierda para c:<prilllir el \"(,nel1o. El negro, que tenia en la boca h~ja maswl.da del die!w guaco, llW' tOIll(~ la mano i chupó donde le mostré me hallia picado, i CSClI1liÓ, i me dijo: '-N o tenga su me~ccd cuidado . . "El doctor :MÚtis, quc cstaba aeompanado de los sacerdotes que estahan obsel'\-ando, dijole al neg-ro : -'l'onllt tu culebra i lIéYatela, i no te vayas de la cindad. no BOa.que vayamus !Ltener alguna novedad con Matis.. -No, mi a\JlO, no me ir{\ "Todos se quedaron en espeetaeion (:OIl!O es uatura], i yo me flú a mi u¡.;iento a Regnir en la pintura. "El doctor MÚt,Ís Be clltrÚ en 1n, ante-sala i tomó Ull libro, i de rato en rato me prcgllntaull: Este libro fue Digitalizado Por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República,Colombia -14-Querido, i siente usted algo ~ ~No, sefior. -Cuidado; al punto que usted sienta alguna novedad, avise usted .• "Hasta el otro dia me preguntó el doctor Y árgas si habia scntido alguna novedad.-Díjele que no. -Díjole al doctor Mútis: sefior, el arresto de MatÍ8 nos ha hecho ver la certidumbre de la contra. -Así es, dijo el doctor Mútis; ese fué mucho arresto por quedar satisfecho de la contra. "El doctor Pedro FCl'min de Várgail hizo la descrípcion de eBte descubrimiento, i lo remitió a esta capital en dicho año, i aquí la estamparon en el periódico que entónces se publicaba .. " Se propagó en MaI'Í(iujta dicho descubrimiento, i futtal el abuso, que se convIdaban 106 muchachos a ir a. buscar culebras a los bosques i quebradas, i soBa yo enoont.rarlos ~or las calles jugando con culebras; hasta que u1\ dia pico una taya a uno de ellos en una vena que le hizo verter el chorro de sangre, i le pusieron cataplasma de, hojas de g'uaco machacadas, i le envolvieron un trapo, i siguieron jugando con ella. Llegaron a la orílla dél 1'i¡. Gualí, i se les antojó bañarse. 1 en el instante que entrÓ el llicado en el agua, le cauSÓescalofrio con temblor, i tuvieron los compañeros qne llevado alzado a ¡;U CiI.$3, i la madre anduvo en carreras para conseguir al negro Pio para qne 10 curase, 1 hasta 10 administraron, porque se vió en riesgo de espirar. 1 de aquí tomaron miedo, i se dejaron de buscar culebras. "En el año de 1795, en la MeS8~grande, anduve 00'jiendo plantas para la Botánica. Ocurrió llamarme arriba de Tella para que viese unas mujeres a quienes habia mordido un perro rabioso que bajÓ mordtendo a cnantos enC6ntrahll., racionales i no racionales. Yo las vi, i premedité: el guaco destruyc el veneno de l~s víboras que es IDa& pronto en cansar la muerte: a este le hará mas bien. En efecto, mandé al herbolario que iba conmigo, diciéndole: -Anda i húscamc por aquí el guaco, i traem~ hartas hojas. De pronto lo baIló por ahí. -Digo a las mujeres: machaquen 1)iende estas hojaB i pónganse en las m~rdeduras con trapos que h\8 contengan. i por nueve dias toma1'Ím del cocimicnto de estas hojas, un Este libro fue Digitalizado Por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República,Colombia -15vaso por la mañana, otro a las once, i Gomaa las cuatro de la tarde, otro. Esto cura a los envenenados por las culebras; mejor hará a este veneno. Yo cada quince días paso por aquí; me avisarán si ocurriere alguna novedad. "1 seguí en tni espedicion. "1 despues cada vez que pasaba preguntaba si había alguna novedad. -Que no. " Pasados mas de cincuenta dias volví a preguntar. -Me éontestaron que no habia tenido novedad alguna. -Díjeles que no tuvieran cuidado, que yo había oido decir que hasta los cuarenta dias solia resultar el mal, i qlle , ya habian pasado mas de cincuenta. , " Comuniqué dicha aplicaciol1.al señor Mútis, i le mandé un tercio de guaco. Al tm'cer dia de haberlo recibido se le apareció uno de. los señores Rívas, diciéndole: -Sefíor,i qué hago que los mejores caballos de Chamisera se me están muriendo del mal de rabi!)., i a cuantos están mordiendo les están pegando dicha enfermedad ~ ",Mostróle el señor Mútis mi carta, i dijóle: -Vea U. la noticia que me ha comunido lflatis; lleve U. el guaco i deles a beber. Lo hicieron así i se curaron dichos caballos. Con lo que se rectificó dicha aplícacion. "1 d~sde esa fecha se ha estado aplicando contra la hidrofobia a los animales i alas racionales. " En Guatavíta en el año de 1821 el doctor José' de Várgas i Alzáte me refirió haberse visto desahuciado por junta de médicos el año de 99, en términos que ya tenia tratado el entierro; que apareció el doctor Peñuela, cura de San Benito, quien le aplicó el guaco, ise le contuvim'oJl los accesos de' sangre. 1don Nicolas Cárdenas al otrodia a las cinco de la mañana se fué a la Mesa-grande a traer dicho guaco, porque' aquí no se halló, i volvió a las cinco de la tarde trayendo dicho ~uac~, i en el acto se lo dieron, eon lo que cesaron dichos vomitas. 1quedó curado, i hasta el año de 1848 murió. 1 dicho sujeto Nícolas vive en Hato-vieJO." Hasta aquí-lo relativo al descubrimiento del guaco. Dije al principio que mediaba mas de un motivo para 'que ftleraconvenienteconocer la relacion preinserta, -i es llegada la ocasion de emitir las razones en que se apoya este juicio. Este libro fue Digitalizado Por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República,Colombia - 1íi - 1.0 Ante todo delle ll(Jtar~e que tal descuhrimiento ha (~ausado en el mundo iluRtrauo una jcnoral sensacion de sorpresa i ue placer; SClIl;lWiolljusta, tanto por 8U valor practico cuanto por las circunstancias que lo acompañaron i las que lo siguieron a virtud de la prudente desconfianza de Matis. 1 sincrnhargo, en Europa, i tal vcz tambien aqlú cn América, ]10 sahcll todos los hombres de ciencia a quiiln pertenece ClI definitiva el honor de hauer enriquecido la botánica m{ldica eon la rnikania guaco i 8U8 aplicaciones . .Aunque la mayor parte de los autores 10 atribuycn conjuntmnente a }iatis, .Múti6 i Zea, hai otros mui respetables IIue creen que concsponde a ~rÍltis csclusivamcllte. Entre estos se halla la ma;,;alt!l ngurn científica del siglo: el baron de llullluoldt. .llé aquí cÓmo se esprcsa sobre ~te punto en €-tI biografía de :Mútis: "El nombre, dice, de este hotánico eélebl'c se liga talllbieu a nn <lescubrimien1l> (lue ha llamado mucho la atcueion en América. Se sabia (lue los indios i los negros que trabajaban en ellavad0 de oro i de platilla en la provincia del Chocó, poseían lo qne ellos llamaban el secreto de una planta que era el antídoto mas poderoso contra la lIHwdedura de las serpientes venenosas. :Mútis llegÓ a descuurir e,;te misterio, i a hacer conoCCl'esta planta: es de la familia de las compne:>tas, íconocida en el pais bajo cl nombre de bPjUCQ de !fUOOO. Lo!> señores IIumboldt i BOllpland la han :figurado los primeros. (V. la ?nikania gua,co, en las PlantmmquinOctillleN, tomo II, páj. 85, p1. 105.) La planta tiene un olor nauseabundo. que parece afG'Ctarlos Órganos del olfato de las víboras: el olor del gnaco se mezcla sin duda a la traspiracion cutánea del homhre. Se cree que cuando uno se ha curado, es decir, introducido, inoculado, en el si,;tema dérmico el jugo del guaco, puede conturBe garantizado contra el daflO de 1& mordedura de las serpientes, dUl'l\.1fteun ticmpll mas () 1l1énoslargo. Esperiencias. arriesgadas heehas en la (''asa de Mútis por los señores Zea, V árgas i }Iatis, en las cuales Be les ha visto manejar impunemente las víboras mas vent;)losas~han sido descl'Ítas en el " Semanario de A~ricl1ltura" de Madrid, 1798, tomo VI, páj. 397. Como Be ha hallado el guaco en muchos valle¡; calientes de los Andes, desde el Perú hasta Cartajena de indias, i en las montañas de Barinas, un gran nlunero de personas deben su eumcion a este hello descuhrimiento de Mútis. Si 8e conservan en el Este libro fue Digitalizado Por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República,Colombia -·li alcohol las hojas i los tallo~ de C!ltu planta, que a menudo 80 ha. confundido C011 la ayupana, e~ de temcr que pierdan 8U.valor. El guaco !lO se CTH~uentra aÚn cn tndoR los puntoa en que aUIllHIH.11 1M serpiente,,; VCllP11tJsas." Ahora hicII, esta discrepancia delllue~tra claril.mcute qne sobl'e tal punto lit Opillioll no cstÚ fijada nninn-salmentc, que hai Yll.eilacion, que no existe completa ccrtidlllnbré; i es bueno que toda duda seR (lisipada por clltel'O, Para tal l.,'Íecto el doclll1lento de Mati~ antel'iol'llH'ntc copiado arroja toda la luz apetc(·ihlc. Léjos de mí la illtcncioJl de dar mas <:rédito al dihu.iullt<.' granadino que al ('t·k·1'l'e ,;abio prllsia11o; empero, viemlo las cosas illlparciallllellt<.', soi (le parecer que debemos atenemos en la. presente di!'('usioll a las palahraadeI.primero, Los pensamiento.:; c"presaclos en él trasllnto IIue so aeaba de n~r; los forlllul\¡ Humb()ldt repasando lo que !lohre la materia hahia. leido, i recordando (luizás alguuos lijel'os informes \'el'bale!lque le diera Mútis; fuentes ámbas que no pueden ser mas exactas que el (licho Ue Mati6, cuyo carácter personal ¡re. distinguía por la lIlas escrupulosa veracidad. AdmuRs, tic sabe que c;;te de"euhl'illliento tuvo lugar c\I[uvlo 1bti:; era cmpleado 8nlllllterIlo de la Espedi\:ion botánica, dl~ <¡ue )lúti~ era jefe Hlpel'ior; i no se debe oh'idlu' que eIl ~·,;ta cbse de cstlllllceill1ielltos existe por lo regll1al' cicrto ~radu de mallcomuni(llld tanto CIIlos tmbajos i pellas que imponen, como <.,In las velltajas i fama que.procuran; mancomunidad q\lc no siempre es lllas onerosa, pero que siempre es mas provechosa para el individuo que en ellos haee eal¡cza. De Inunera (pie, ya pOI' la.s razonc,; e!'pne;.;tas, i ya teniendo en cOllsideracion, por uua parte, (P1O Matis debia. eonocer mucho mejor que Humboldt los untecedentt'S j l>onnenores de este descubrimiento, i por otra, que la relacion de aqnel e"tá ·CÓllSOIlll. con lo que sobre el mismo asunto ha. creido el púhlico de su pail:l ¡con ]0 que dicen tlUS contemporáneos i amig-.os, pal'el~e incuestiollable qne tal relacioll e" un doenmeÚto digllo de toda fe. 1 hicn, ¡({Ut· rc::;ulta de este dOCllllWlltO? Quc' Mlttis, ll.UnqllL' es eil~rtl) (]ue adllUil'ió para la cicncia i la publicidad b mikani(l guaco; aunque es cierto ([ue hizo de esta planta una prueha. herói(~a en que, por tl'illllto a la Callf'll de la verdad i del bien jeueral, exp1l8'j su propia vida, con todo, lIO es acreedor e¡;chu;i\'o a la gforin quc estel:ll- Este libro fue Digitalizado Por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República,Colombia -18llazgo deba reportar. ta sagazidad i buen sentido del negro Pío reclaman en justicia una gran .rarte de los lauros. Por lo demas, el descubrimiento es indljena en ~n oríjen, ora se le deba a él, ora a los indios del Chocó. 2. Vamos ahora a examinar el grado de valor que tengan los esperimentos hechos con la mikainia g'U4CQ contra el veneno de las serpientes. El esperimento resultante del arrojo de Matis, me atrevo a aseverar que nada prueba, i diré por qué. Matis tan luego (:omo sintió herida sn mano por los colmillos de la culebra, se apretó con la otra mano para esprimir el veneno, i ademas el negro Pio le chupó la mOl·dedura.,es decir, que hubo aplicacion de dos de los principales medios que aun en el dia son la última palabra de la ciencia contra este accidente, a saber: la 5UOcion, la compresion i la cauterízacioll; i está demostrado f}Ueaplicando inmcdiatamenté los dos primeros ajcntes terapcuticos, como sucedió en el caso de Mátis, el vÍruB no produce nin~lln funesto resultado. Por consiguiente, su arrojo fué inútil, pnes dejó en pié la dificultad que con ól ¡;cpropnso rcsolvcr. N () seria lo mismo si una vez mordido por la EOI'piente,no hubiera hecho uso de ninguno de ellos. Mas, los esperimentos subsecuentes a e8te de Matia, prueban en favor del guaco de un modo concluyente. Tal ea el hecho de que los muchachos de Mariquita jugaban mucho con las culebras sin haber sido mordidos por ellas.; i prueba mas todavía el de que mordido uno de ellos, que c¡:,tahit sin duda curado, no sufrió otras novedades qne las provenientes <.lela copiosa hemorrujia consecutiva a la. ruptura de un vaso importante, a cuyo accidente se añadió la posterior accion sedati va del agua fria. En efecto, por una parte aquí no se hizo uso de la sllccion ni de la eomprcsion, i por otra los sín.tomas desarrollados del\plles del haí10 fueron, segun parece, los de todas las pérdidas súbitas de sangre en cantidad considerablc. Afortunadamente el mudlacllO no murió; pero aunque semejante desgracia hubiera acontecido, no por esto habría dejadCl de ofreccr un dato de mucha importancia para justificar la virtud IH'e,"cutiva del guaco contra el vcneno de las scrpicn teso 3.° Tocante a su aplicacion contra el vÍl:us hidrofóhico, sn éxito en los casos referidos parece demostrar que tambien .goza dc virtud en esta enfermedad. Para que BC palpe bien 0 Este libro fue Digitalizado Por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República,Colombia -19la trascendcncia de cate punto, trascribiró el siguiente acá,pite de la. Pat(Jlojía interna del afamado profesor M. GriIsol16;-artículo ráMa: "Contra la rabia. dcclarad a, dice, ae 111m. empleado una multitud dc remedios; 106 principal~ son : las sangrías bajo todas las formas; la belladona, 61 opio, el musgo, el alcanfor, el castoroo, el arsénico, el mcrcurio, el nitrato de :plata, las cantáridas, el amoniaco, el sulfato de quinina, el acido cianhí<.lrico,el cloro &a, todo 2. dósis con frecuencia ODOl"ll1CS; el galvanismo, i hasta la mordedura dc la víbora i las iuyceeiones dc agua en las venas. Esta. enfermedad es tan tenible, tan necesariamente fatal, que justifica todos los medios que contra ella puedan emplearse. Esperamos que a fuerza de er.perimcntar (porque en este caso la esperimentacion es un deber para todos nosotros), ulgun jenio feliz cncontrará algun dia el específico. " . A propósito de esto debo recordar, qno en el tomo prímaro de-loa Tpabajos.,eientifieo8 del ilustrado médico granadino doctor Antonio V árgas RÓ;vcs, consta qne él ha obtenido buenos efectos de la aplieacion de la pasta de Viena sobre la herida causada por 108 dicntes del animal rabioso, haciendo ademas tomar al paciente por 111gul108dia8 un poco de cedron disuelto en alcohol o en aguardiente. L03 hidrófohos tratados P9f este método no han sufrido despues ataques de rabia.,Jo cual es veruaderamente un811ceso llltll"8.villosoen una enfermedad tan mortífera i tan invulncra.ble hasta el dia. E.-En otroclladerno tamhien autÓgrafo del mismo botánico Mutis se lee lo si¡z:uiente: "Un sujeto de vcrdad'me ha roferido·un caso que sucediÓ el ano de 1824 en csta capital (Bogotá) con un indio tegua, aquien un médico qui1>o examinar en medicina. Que el diCho indio le dió unayerbita diciÓnd"ole,qne la oliera i le dijera qué y~rha ora ~~ué virtud,tenia. Que a poco mt? de haberla ohdo el medH:o, se salto en sang"l'epor las na.rlees; i viendo que no paraba la ¡mn~re, le Jijo al indio (pIe con qué se la contenia.. El indio le contestÓ: tú qne eres médico, detenla. Tuvo el m{'dico qU\~¡mplicarle se la contuviese. Sacó el dicho indio otra yerba i le dió que oliese, i sele contuvo el flujo. " Este relato se halla en el manuscrito de:;pu~s de unas líneas en que el autor describe sorncramcnte el jénel'o de Este libro fue Digitalizado Por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República,Colombia -20llúng'os llall1adop<,ziza, Esta ei¡'cunstancia indnce a pewmr que tal H~7. cn~yÓ dotadas de alguna de las propiedades hemornijica o hemostcítica las especies de es~ jÚnero. Si así 110fuera, 110podria esplicarse por qué razon Matis il1terca16 tal cuento en un mero apuntamiento de plantas conocidas por él. Pero si se tiene en cuenta que Q la idea del f'ér siempre se asocia la de sus atribntos, i si se aplica esta regla de criterio en la }lrei-iente ocasiol1, nada habrá (}ué estrañar, i la curiosidad ¡.;cverá estimulada a eRperimentar todas lag ciipecies de jJ¿zi.za. Pasmosa es la simple lectura del hecho, el eual ~icrce ademas grandc atractIVO sobre la facultad ouser\"lHlora, i nORda a comprender hasta dónde llegaba el saber bot:ínico dc los indios. F.-Hace muclto tiempo Illle los indios se hacen temer por Ull \'CllCllO "iolcnto que lleva cl nombre de CU1Ylre, con el cnaluntan la }lnnDl de sus flechas i causanul1a llluer~ instantcí.nea e inevitable. El padre Gumilla, a quien se deben las primeras noticias drcuniitUlwiada5 sobre este veneno, dice que la tribu cave1'1'i~, la Illas inhumana, hruta i carnicera de cuantas en en tiempo 5e lllan tcnian en las l'i bcl'as del Orinoco, retenia el secreto de su orí.ien i fabricacion, logrando una pingiie renta 11l'O\'cnientc dcl conSUJllO Ijue las demas naciones bárharas hacian de tal sustancia. Esta, segun el mismo pa(lre, no tiene sabor ni aCI'imonia especial: se pone en la boca i 8e traga 6in ric;;go ni peligro alguno, con tal que ni en las encías ni en otra parte de la hoca haya herida con sangre, porqne toda su accion es contra este líquido, en tanto grado que tocar una gota de sangre, i (:uaj arse la del cuerpo con la velocidad dc1l'ayo, todo cs nno. 1.:na herida leve, 11I1rasg\lño igual al que hiciera la punta de un alfiler, acarrea una muerte tan pl'(mta que el indh'iduo "apenas pucde decir tres veces Jesus." El padl'e crce que el efecto del eur'aJ'c es ertft-iar 1'l. sangre súbitammlte, i pamlizar la cireulacion de este fluido, por cuya razono dice que 19s indios no tienen el menor csl'.rúpull) en eomerse la caza que hacen con sus flechas en,·enenlld:ls. "Es de saber, continúa el reverendo misionero, qne toda la ponzoña del '_'/U'a·re se IIri.iina de una raíz del mismo nomhrc, tan siuglda¡' i única, qne solo es raíz de sí misma, sin arrojar ,iamas hojas ni retoi1os; i annqne crcce, siempre va l!scondida, digamoslo así, temcrosa de manifcstltl' su oculta Este libro fue Digitalizado Por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República,Colombia -- 21 malignidad; i para que se escondiese mas le señaló el Autor de la naturaleza, no la tierra cornun al rosto de las plantas, 8ino-cl cieno podrido i corrupto de aq uellas lagunas que IlO tienen desague: de manera que sus agua¡; Rolo en caso de grave nccesidad se beben, por ROl' gruesa;.;, de lIlal color, peor sabor, i de hedor correspondicllt(~. Entre el cieno corrupto sobre que (leseansun ítquellas agua,; pestíferas, nace i crece la raíz del curare, pal·to lt.;jítimu de touo aqnel eonjunto de inmunclieias; ¡;aean los indio;.; (,aI.'Ii're8 esta,; raízes, cuyo culor es pardo, i def;lmc" de lanulas i hcdla,; pedazos hts machacan i ponen cn ollas gralHlps a t'U('go il'nto: buscan para esta faena la yic.i:l mas inÚtil íkl Plll'hlo, i cnando esta e:lC lliluerta a \'iulcllcias dd Yfl ho dl' las olla::;, como regularmente acontece, lUl'go snstituyell otm dellllismo calibre ('n su lugar, sin que ('Ilas repugnen este empleo, ni el vccindario o la parentela lo lle\'e a mal; pum; ellas i ellos Baben que este C8 el paraucro dc las vioja¡;. ARí cOrilOse va entibiando el agua, va la pobre anciana amasando su muerte, miéntras de olh en olla va e;;tl'egando a(plClla raíz machacada para que con mas faeilidad vaya cspelil'ndo su tÓsigo e¡n el jugo de qne se va tintnrando elllgua, q!le no pa8a de tibia, hasta tomar el color de arrope clal'O : entl'1I1eesla maestra esprimc las raíces con tudas a(luellas poe;ls fuerzas ttul' 811 eda(lle permite, dejando caer el ealdo íhmtro de la olla, i las arroja. como inútiles: luego añade leña, i empieza de rccio el cocimiento; i a poeo rato de henil' las ollas, ya atosigada, eae muerta, i entra la segunda, que a veces escapa, i a veces no. "Cobra finalmente punto el cocillliento, merma la tercera parte del caldo, i condensauo ya, grita la des\'entlllada cocinera, i acude al punto el cacique con lo" capitanes i eL rooto de la jente del puelJlo al eXúllICIl del curan, i a '-el' si está o nó en su del)ido punto: i aquí ('ntra la mayor admiracion de toda c8ta rara maniobra. :Moja el cacique la punta de una ntra en el curare, i r.lmi:,;mo tiempo lmo de los n:ocetoncs concurrentes con la pnnta de un hueso se hace nna herida en la piel11R, mmlo ÍJ brazo, donde le da gana, i al asomarse la sar:gre por la hoca de la herida, acerca el cacique la punta de la vara con el Clli'ai'i?, sin tocar la Ballgrc, }lorque si la tocara i retroeedieru, infic:onara toda la de las venas, i muriera luego el paciellte: si la sangre que iba a salir retrocede~ ya esta el ycneIlO en SI1 punto; Este libro fue Digitalizado Por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República,Colombia -22si !;'.equeda asomada i no retrocede, le falta J'a poco; pero si la sang¡'e corre por afuera como naturalmente debe correr, le falta mucho fueg-o: i así le mandan a la triste anciana, que prosiga en su maniobra, hasta que repetidas despues las pruebas llc>cesarias, aquella natural antipatía con que la sangre se retira violentamente de su contrario, les mani~ tiesta que ya el curare subió a su debida i suma actividad . ................................................................................................. •. " Yo he tenido muchas veces el curare en mis manos, i aunque no Boitestigo ocular de la referida maniobra, tengo su illdiddual noticia por tan seguros conductos que no me dan lugar a la menor duda o sospecha . •. •. .. •. .. •. .. •. •. .. .. •. .. .. .. •. •. .. •. .. •. .. .. .. .. •. •. •. •. •. •. •. •. •. •. .. •. .. .. .. •. .. .. .. .. .. •. •. •. •. "Ni es ménos digna de sabcrse la duracion de estc yeneno; esto cs, la obBtinacion con quc mantiene toda su actividad i vigor hasta que se acaba de gastar todo, en medio de tene¡lo los indios sin resguardo alguno, sin tapar las oIlitas en que lo compran, sin evaporarse, ni perder un punto de su mortal eficacia. Esto es mucho; pero en fin, como. allí está junto i conden¡;ado, no es de admirar que se mantenga toda su actividad. Lo singular i digno de reparo es, que una vez untadas las puntas de las flechas con mui corta cantidad, tal que apénas llegará a un adarme lo que recibe cada punta, en aquella corta cantidad mantiene i guarda su fuerza largos alios, tantos cuantoo gasta el dueno de la aljaba o carcax en gast..".rlas. De mOdo que hasta ahora no se ha espCl'imentado <ltlepor lnrgos anos que aquella corta untura haya estado Rinresguardo algimo en la punta de la flecha, haya jamas sido menor la fuerza del maligno curare. ¡'ola una cosa reparé en varios viajes de aquellas selvas, i era que al sacar los indios las flechas de la aljaba, o par& matar monos o jabalíes, o para los rebatos repentinos, lo mismo era tener la flecha envenenada en sus manos que revolver la punta del veneno, i metérsela en la boca. })reQ11ntéles la causa, movido de mi continua i natural curiosi~ad, i me respondieron siempre: que con el, calor de la boca i U. humedad de la saliva, se aseguraba m(UJel tiro, (J//.tiva'lid() la actividad del curare. " Estos párrafos servirán de punto de partida en~l exátnen de todo lo concerniente al curare, asI como han servido a todos los viajeros europeos que han venido a estudiar nuestra Este libro fue Digitalizado Por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República,Colombia -23- naturaleza, i que han regresado a su pala con los cooocimientos bastantes sobre la.p1"ocedencia iprepal'&cionde es- te veneno. Re de advertir que los primeros historiadores de los indios tuvieron la debilidad 1I10ral de acojcr como incontesr tables alg-unas relaciones fantástica;;, enn tal q uc fucsen ma.ra.v.illosas, a :fin de eseitar la admil'aciL'll de los pueblo['. europeos; i cuando, sometidas estas rL,laeítlllCS a la prueba de.laobservacion razonada, se vió que lmhian sido desmentidas en el todo o en parte, elllpezo a ¡'HIl:iil' en los ánimo8 gensatos cierta desconfianza por las 1loticills qnc do estos paisesllevaball a ultramar los viajeros llll<mimos en el mUIldo cientílico. Esta descunfiallza prudujo su efecto: los sabios emprend iel"OIl traspasar los mares para hacer nuevas inql1isicionea, i mereed a su cclo la verdad ha lucido libre de nubes. Sin duda Hna de las eosasquc mas impresion hicieroll en Europa, fllé la existcnqia de este veUCllO tan sumamente aetivQ{cn medio de pueblos tan ostremadamente i~norall~-; no es estraño, pues, que tambil1l1 .haya sido de las que mas han cautivado la solicitud de los viajeros, resultando de aquí (lile Ia relacion del padre Gumilla ha sido rectificada ffil todo lo sustancial. Despues se han estudiado las propkdades físieas i químicas del curare, iSIl aedon sobre la CCOIlOlltÍa animal; se han descubierto modos de tratar el envenena1lliento por esta sustancia, i se han hcchoooperiencias para sabor qué servicios puede prestar Ida medicina. Lasluce8 quo han podido adquiriJ'8o sobre todos estos puntos se ltallunl'eunidas en lln opúsculo pllbli~lidoen-fraDcee; enlH55, por ol señor Almro Reinoso; ol~-&dema8 de oontene¡· las indagaciones de otros sabios, espnestai OOD: mótodo i claridad, cncierra tambicncsperienciaspropias del autor, tan precim;as por el talento con que lAS na--verificado, como por la importancia de sus consecuencias. De cOOBiguiente-,para ilnstrar el presente })unto, nohai, que hacercftsi otra COS¡t qnc trasladar las ideas ~ él reunidaS. I-IóaqDÍ epilogadas todas la!:!euestiones que lacieneia se ]1S. propnesto rei'olvcrsobre esta matoria : a--¿ E" o lw. sido COlllllIl a las naciones indíjenas de.toda la Amériell. el \1;;0 del curare ~ Segun los mas competentes escritores sobre 108 salvajes nol'te-a.merioallos, éstos jamas han acostumbnKio eitvencnarSlli!lllaetas. Bosc c& el único que dice lo coJitlário, agreJU.IO D8 lSIW. 3 Este libro fue Digitalizado Por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República,Colombia -24gando que la ascIepíadea, llamada por Walter 'V'incetoxíeon ~nocarpo8, i por 1Iíchaux gonolobu8 mac)'opf¿yllu8t pasa. en el pais por la planta de quc los salvajes se servian en otro tiempo para empom:ofiar sus flcchas. Por lo dernas, fuera de los feroces insulares llamados caribes, que empleaban el jugo del manzanillo, apellidado por Cardan manzana de la muerte, solamente las trihus de la Amériea del Sur han usado i usan hoi dia, para la caza no mas, de saetas envenenadas. 0-1 Todas las hordas sur-americanas llaccn uso delcurare? En otros términoR: é E~ idéntica la naturaleza de los venenos de todas las tribus? Espericncius, observaeiollcs i análisis químicos hechos cuidadosamente, han demostrado que todos ellos contienen un mismo principio activo i que no se diferencian por ningun carácter físico ni por ninguna accion especial sobre la economía animal. J~n corroboracion de esta idcntiJad puede <,itarse la analojía ortolÓjiea que guardan los vocablos con que lo han denominado las diversas hordas: se le llama curare, worara, l1rali, wurali, wourari, woorari, W()l1'aru, UJouralí, urari, 011ra'l'Y,voord/ra. l,a ciencia ha preferido darle el primer nombre, que es el mismo con que 10 designan nuestros salvajes. c-i Es exacto que, como lo dice el padre Gumilla, elcurare procede dc una planta acuática, i es cierto el modo dc preparacion que él espone 1 . La Condamine, Antonio de mlQa, Charles W aterton~ Humboldt i Richard Schomburgk convienen todos en que •. el princiYJio tÍJxico del curare proviene del jugo de una liana, al cual añadcll algunas tribus otras sustancias vejetales o animales, ya para condensar el vcneno, ya para au· mentar su actividad. "Este veneno, dice Ulloa, no es otra cosa que el :jugo de una liana o bojuco, de cuatro dedos de ancho, plano de ámbos lados, dc color morellllzco, que crece en los lugares húmedos i pantanosos. J.os indios 10 partcn en pedazos que machacan un poco i ponen dm;pues a hervir. tuego que retiran del fuego la vasija, el licor forma por el resfriamiento una especie de jelatina, con la que frotan la punta de sus flechas. Antes de scrvirsc de ellas las humedecen con saliva." Waterton dice que una vid nombrada. wourali es la base principal del vcoono ; a esta vid 8e reunen segun él : una raíz Este libro fue Digitalizado Por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República,Colombia -25mu~amarga, i d~s espe~icsde plantas bl!lbosasque~ontienen un Jugo verde 1 glutInoso: dos espeme8de hornngllS; una mUl grnesa i negra) i tan vcnenosa qnc RU picaollra causa fiebre; i otra pequeíia i roja que 8e anida bajo las hojas de un arhusto: una cierta cantidad de pimienta de Caycna, i los colmillos molidos de ciertas serpientes, dcspnes de algu-n tiempo de haber sido estl'llidos. Este Último ingrediente c&recc ue ohjcto, pues e¡;,tá probado (pIe la picadura hecha por un diente de culebra, pasados algunos dias de separado del animal, nn ocasiona nin~un accidente; lo que confirman las cspcricncias hcchas pOI'los HcfíoresJ~ollssingault i Pelouz~, por las cuales han demostrado que el cnrare no tiene veneno de vivora. Ademas, IIurnboldt ha dicho: "Es absolntamente fabo que se mezclen al ClIl'are,sangre, veneno de' víbora i otros ingredicntes." Débese a este gl'lmde hombre h pintoresca i animada descripeion siguiente del modo de preparar el curare; " Ouando llegamos a la.Esmeralda, dice, la mayor parte de 108 indios volvian de una escursion que habian hecho al Est.e, ma.'l allá del rio Padamo, para reeojer fu'/)ias o frutos de bertholletia i l:t liana (pIe da el eurare. Tal regreso cm celebrado por Ulmfiesta q\le se llama cn la Illision la fiesta d8la8,jUVW8, semejante a nuestras fiestas de las siegas i de las vendimias. Las mujeres habian preparado grande ac~ pío de ]icores fermentados; por espado de dos dias no hubo un indio qM no estuviera. embriagado. En 108 pueblos que tienen mucho aprecio por los frutos de las palmeras i de algunos otros árboles útiles a la alimcntaeion del hombre, la. época de la recoleccion de estos frutos es 8el1alada.por reg~ijos públicos. El tiempo se divide segunlas fiestas, que se suceden de una manera invariable. N osotrostuvimos la/fortuna de dar con un indio mimos borracho que liIJ8 compañeros, i qUl':se ocupaha en preparar el veneno curare con planta.srecien rccojidas. Este indio era el químico ,de la.tribu. Encontramos en su casa grnndes calderas de arcilla, hechas para la cQecionde los jugos vejetales; vasijas m~n05profundas, de¡;tinada8, por su ancha. superficie, ala evaporacion; hoja,"s de~plátano rolladas en forma de cucurucho, para filtrar-líqUIdos mas o mÓnoscargados de sustancias estoposas. Remaba en csta cabaña, trasformada en un ·laboratorio químico, el mayor órden i cImas grande aseo. . "El indio que debia instruimos es conocido en la mision Este libro fue Digitalizado Por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República,Colombia -26eon elnom hre de amo del c'lt}'(l}'e,. tenia cse aire Foplado í ese tono dc pedantería que cn otro tiemp(; se les jmplltab1~ a los boticarios en :Europa. " Yo sé, decia, que los blancos tienen el secreto de fahricar jaLon i esa pólvora negra que tiene el dcfedo dc hacer ruido i ahuyenhrr lós animales 61 se les. erra el tiro. El curare, que nosotros preparamos de pa~re a .hijo, 08 sup,eríor a todo 1(; <I!leustedefl sahe!1 hacer alla abaJO (mas alla de los mares ). J"o sacamos del Jugo de una yerba, i mata pasito, sin que se sepa de dónde parte el golpe." . " Esta operacion química a que daba tanta importancia el amo del Cllrare, nos pareciÚ mui sencilla. 8e da a la liana que sirve en la Esmcralda para la p¡'eparaeion del veneno, el miSIIlOnomhre que lleva en las florestas de Javita: es el Óf;jUCO de Jnauacure quc se halla en auulld:ulCia a-l oriente de la mision, sobre la máIjen izquierda del Orinoco, mas allá del rio Amaguaea, en los terrenos montuosos i ~raníticos de GURyana i de Yumariqnin. N o obstante que los haces de b~ilIeo qlIe vimos ,en la CatlB del indio estaban enteramente desprovistos de hojas, no nos quedó la menor duda de r¡ue pro\'cnian de la misma planta de la finnilia de las stryehneas (mui parecidlt al rOllhamon de AlIblet) que habiamos examinado en la selva de Pimichin. Se emplea indiferentemente el 1IuwaCU'i'e fresco o desecado despnes demuchas semanas. Elj Ilgo de la lisna recientemente eojida no se ticne como venen080 ; tal vez no obra de una manera sensihle sino cuando cstá fuertemente concentrado. La corteza i una parte de la albura son las que encierran esro terrible veneno. Se raspan con 1m cllchillo las ramas de 11UJ¡vacure de 4: a {)líneas de diámetro; la corteza separada es machacada i redneida a filamentos IIlui delgados BObre una piedra demoler harina de yuca (manioc). Como el jugo venenoso es amarillo, toda esta. masa hc/).r:osatoma el mllr mo color. Se coloca luego ell un embudo de 9 pulgadas de alto i 4-pulgadas de abertura. De todos los utensilio8 del laboratorio, -el embuno era el que ·mas nos ponderaha el amo del curarc. Repetidas veces nos preguntaba si por allá abaJo, es decir, en Europa, habiamos visto .lamas alguna cosa eomparablc a su emhudo. Era éste una hoja d~ banano enroscada sohre sí misma en forma de cono i <:010cada en otro cucurucho mas fuerte de hojas de palmera. Todo este aparato era sostenido por nna armazon lijera Este libro fue Digitalizado Por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República,Colombia .-- 27 ,'le peciolos de palma. Se comienza por hacer en frio una infusion, derramando ag-ua sobre la materia estoposa., ,jue es la corteza molida de 1/Ullmcil/'e. U no. agua amá.rilla. filtra, durante muchas horas, gota a gota, a traves del em- \>udo de hojas. Esta agna filtrada es elli(~or venenoso; pero noadquicre fuerza sino concentrímdola pOI' cvaporacioD, a-la JllanCra de las molasas, en un gran v:\so de arcilla. El indio nos invitaba de tiempo en tiempo a, prohar el liquido; segun el gusto mas o 111('110S amargo, se juzga si la concen· tracio11 pOI' el fuego ha sido suficiente . .King"un peligro se corre en esta operadon, pues el cural'e no es dclctÚreo sino cuando se pOJ}€ en contacto iJlllledi.t\to con la ¡;allgrc. Tampoco son nocivos los vapores qlle se dc¡.;prcnden de la caldera, por mas quc hayan dicho lo contral'io 108 misioneros del Ol'inoeo. Fontana, en SllS uellas l"~pcriCJwias sobre d veneno de los tÚ'U7n(L8 del río de las Amazonas, ha probado hacell1ucllO tiempo que los "a}>or{'8 que esparce este veneno cuando se le proyecta so1>I'c carbones candentes ~~en respirarse .sin telnor, i quc 08 falso1 como lo ha n.nllndado:M. de La Conuamine, (lIle las indias condenadas a muerte, hayan perdido 1a vida p<ll'Iv:; vapores del vcneno .de 108 tir:uma8. "El jugo mas concentrado del1JUl7YtcllJ'{' 110 es bast.'tnte ~peso para adhcril'se a las flecha;.;.;'>;o es, pues, sino para. <lar cuerpo al veneno, qne se YÍcrte en la infusion concentl-a.rlll. <ltro jugo vejetal estremamente glutinoso i 6acOOOde un árbol de anchas hojas, nombrado k¡/'(l('ay«ero. Oreyiendo este árbol a una distan(,ia mui gral1de de la Esmeralda, i 08tando por entúnces tan desnudo de flores i de frut(ls como el bejuco de 1iW'VfWUre, no nos fué posible determinarlo botánicam en te . ." En el momento en qu~ el jugo glutinoso del árbol kl,raMguero se derrama en ellwOl" venenoso bi€n concentrado i mantenido en ebullicion, éste se ennegrece i se. coagula en una llIaBa .de consistencia de brea o de jarabe espeso. EsUl. masa es el curare Jd cmncrcio. Cuando se oye deci r a 10:< iudios qU(~el kiraeaf/IIl'i'(¡ es tan nec.esa.rio· CIJ la t'abricacÍlln dd ven.cno como el bejuco 1iw/vaottre, se puedo caer en error, suponiendo qno el primero· contiene t.ambien algun principio deletl'reo, cuando IIO sirve (como sucederia con el algarrobo i cualquiera otra sustancia go- IllOsa) sino para dar mas cnerpo al jugo concentrado del Este libro fue Digitalizado Por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República,Colombia -28CUl'are. El camlio de color qne esperimenta la mezda ~ debido a la descoI11posieion de un hidrm'o de carhono, El hidrójeno arde, i el carbono qneda en libertad. Se vende el curare en frutos de crcscentia." Hasta aquí la descripcion de HumboldL Mas tarde Schomburgk encontró floreada la liana de que habla aquel naturalista, sobre las orillas del Pomcroon i del -&1"ur11, en Gnayana; i asignándole su verdadero lugar en la ciencia,ladcscribió bajo el nombre de8tl'yohnoa torcifera. (DE CANDOLLE. PrOdr01n1t8 sY8te11U¡tis natu1'ali8 ngni ,¿·egetalM. Pars nona. Parisiis, 1845, p. 16-ENDLICHER. fi)ncl¡iridion botani{}um, emhiben.qcl(h~.~eset o/'dines planta1'u7n, &e. V iennre, 1841, p. 2fJl-1Je.~(;i"':pC1:on del doctor KWTZSCH en el . folleto Reclu:l'l:hcs S/lí' le CU1'IlTt, 1855, p. 4.) AsistiÓ talllhien a. la preparadon del vcneno; i es de notar la cOlwordnncia que hai cntre lo que dicc haber visto i 10 que reparÚ llumboldt. SCf?un Schomhurgk, se toman ramas ticrnas de strydmo8 tO;&lj'ertt de 2 a 3 piés de largo, se les monda la corteza i la albura, i se lcs mezcla con otrlts cortezas en las proporciunes siguientes: Planta mari (slryelmos loxiferfl ............••....•• 2 Iihras. Yakki (slrydlllOs sehomhnr¡.(kii) .........•...•.... t de lib. Arimaru (slryehnos co¡;ens) ......•...•........... t id. Tarircn¡,( ('!) ..••••.••..•.••••••••••••• t id. "'okarino (?) ..•..••.•••..•..•......•••••• t onza. TararcInn ('r) .•••.•••.•.•..•.••.••••••••••••.••• ·1 id. MUl'aInll (?). Una cantidad mui corta de escamas del bulbo de cs~a planta. ],[anuca (una xantltoJo:yJea). oo •••••••• oo •••• El indio f¡lhricante agregÓ ademas cierto número de plantas que emp1eÚ en cantidad indeterminada, i cuyos nombres botánicos no ha tlado ScllOIIIburgk. Puso despues a co(:er en agua las sustancias qne Be habian pesado, dmallte cuarenta i ocho horas. La decoccion fué filtrada por medio de un embudo lleno de yerba mui fina, i derramada cn vasijas pequerías de tierra que se pusieron al sol para cvaporarla. Pasadas tres horas do ovaporacion, se afíadió el jugo mucilajinoso de las escamas de 1l1nramn, ya lllencioliado, que tlíó en el instante al 1í(luido una consistencia jelatinosa. El indio derramÓ ent{mccs este estrado en ~filabazas, i en cada una de ellas puso cuatro pedazitos de palo de m:mllca. Despucs de esta adieion, esruso el cstracto a la evaporacíon al sol hasta la consistencia del jugo de regaliz; luego Este libro fue Digitalizado Por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República,Colombia -29cubrió las calabazas con hojas Je palmera. A los tres dias concluyó la operac10n~ Tal ea, en pocas líneas, la prepara. racion que vió S<:hornburgk • Ahora bien, cotejados los tmbajos de todos estos viajoros con la relacion del padr~ Humilla i qué queda en pié de todo lo que dice? Bien })OCO, pues la mayor parte de BUS aseveraciones han ido a tierra: resulta que no son los indios caverre8 los únicos que fabrican el curare, puesto que tambien las hordas del Amazonas i de los demaspa.rajes de la América del Sur saben prepararlo; qne no es una. raíz fétida i desnuda de hojas i flores la que lo suminiiltra; que el pretendido suplicio de las yiejas CHfalso, visto que IIumholdt lo niega, rotundamente, que Ullos. i Schom·burgk no lo mencionan, i que 1Vaterton no solamente no hace memoria de él, sino que asc~ura que durante la prcparaeion del curare no es permitido a las mujeres C&8adas ni a las j6\'enes solteras ·estar presentes, de miedo que el labahou, o espíritu malo, les haga daño; i finalme~te, que tampoco es cicrto lo de la prueba del veneno hecha por el cacique i los capitanes de su naCÍon. He dado mas importancia a 10H datos de 11umholdt, porque, aparte de otros moti\"os, este viajero ilustre los obtuvo en lOB mismos sitios 'l\1e 8ujirieron las notiÓas del padre Humilla. He oido decir que desde tiempos remotos so ha. creido que los indios del Chocó envenenan sus fleehas con las es· c~ncias de la parte dorsal de la piel de cierta rana. Lo que acaba. de verse parece tener fuerza para refutar tal especie. ti - J Cuáles son las propiedades físicas i qní micas del curare ~ :íh curare se presenta hajo la forma de un estra.eto sólido, negro, de un Il8pecto resinoso; pul vcrizado,es de unoolor moreno amalillento; su sabor eH escesivamente amargo, pero nada acre ni pieante. Er éter sulfúrico apénas tiene una débil acoion sobre olcllrare; solamente le quita un poeo de materia grasa. El alcohol obra mncho mas activamente; la tintura alcohólica es de nn hellorojo, i mui amarga. El cura.r~ se rehlandece en el agtla i a{:aba por disolyersc en gran part.e; la soluciuu acuosa tiCllB un color rojo ¡mbido i mucho amargor; ell1'ojece lijcr.amente el papel azul de tornasol; el amoniaco, la potasa í 108 earbonatos de las mismas bases no.la precipitan, como taJ.Ilpoco losoxa1atol:l alcalino8; pero sí Este libro fue Digitalizado Por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República,Colombia -30la precipitan en abundancia la tintura de nuez de agalla, el ácido gálico i los galatos; el precipitado, quc es de un blanco amarillento, se disuelve enteramente en el' alcohol i en los ácidos. Ademas de la CltNJIí'Ína, que constituye eu prin(,.jpio activo, el curare contiene: llna ¡mstancia grasa, goma, una materia colorante roja, rcsina i una. sustancia vqjeto-animal. El curare calcinado deja cenizas compuestas de sílice, alumina i magnesia .. El procedimiento que han empleado los señorc8 Boussingault i Roulin para cstracr el principio acti vo del curare es el siguiente. Dcspncs de haber tratado l'epetidas veces el curare en polvo por el alcohol hirviendo, la tintura alcohólica La sido evaporada; i tratado el residuo por el agna, ha dejado indisuelta una corta cantidad de una resina morena. La 801ucion acuosa descolorada por el earbon animal, ha sido precipitada por la infusion de nuez de agalla: el precipitado, en forma de bellos copos, de un blanco amarillento, encierra indudahlemente todo el principio ama¡'go, pues el licor queda casi sin sabor; despues ¡;eintrodujo ell'reclpitado ~ien lavado en un matraz con un poco de agna,se calentó hasta el hervor, i luego 8e le agregó ácido oxálico en cristales : la disolucioll del galato se verificó inmediatamente. El licor ácido fuÓ tratado por la magnesia í filtrado: cm cntónccs alcalino; evaporado, ha dado un residuo que se ha di&l1elto casi enteramente en el alcohol; la disolu~ion alcohólica ha. ¡;ido concentrad!} i sometida a la evaporacion espontánea. El principio amargo así obtenido tiene una consistencia de jarabe, i para desecarlo es preciso pOllerlo bajo una campana, cerca de un vaso con ácido sulfúrico concentrado, por cuyo medio tOllla una consistencia córnea. Pelletier i Pétroz preparan la curarina por otro proc&dimiento. Tratan el estracto alcohólico del curare por el éter para desembarazarlo de la grasa i de la resina, disuelven el rcsiduoen el agna, precipitan los cuerpos estraños por el subacetato de plomo, i sustraen el esceso de sal de plomo por el hidrójello sulfurado. En seguida mezclan el liquido con earbon animal para descolorarlo, lo filtran, lo evaporan, afl'(~jan el ácido acético agregando al líquido ácido sulfúrico estcndido en alcohol absoluto, espe}en el alcohol por la eyaporacion, precipitan el áeido sulfúrico por el hIdrato de barita i separan el oseC80de C8tCúltimo Este libro fue Digitalizado Por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República,Colombia -31por el ácido carbÓnico; CIl fin, concentran cllicor al ba.fiomaría, i desccan la cm'arina bajo la caml)ana de la máqíili1a neumá.tica. . Pero cunlqlliera que sea el procedimiento qne se siga para obtener-la curarlna, ésta se prcl'cnta. siempre hajo la. fonna de UIla masa r;Ólida, tmslúcid!l. i film tra.spal'cnte, en capas delgadas, de un color amarillo pálido: atrae fuertemente la humedad del aire; Cii mui ióoluhle cn el SgtlS i en el aleohol, insoluble en cl étcr i en la e~ellcia de trementina. Su disolucion tiene un subol' esec:;ivamentc-amargo, enrojece el papel dc cúrc\1ma, i restable(~l' el color azul al papel de tornasol enrojccido por Ull {u·ido. La solueion acuosa nentraliza lo" ácido,,; las sale::; <¡!le f()rma. con los ácidos s\llfílrico, elorhídrico i ae{~tico SOl! toda::; mui Holublc8. i es impo,;ible ohtcllcrlas crbtalizadas. (:llHlItlu ¡;c somete la. curarina a la aecion del calor, se carboniza esparciendo espeso!! vapores qne, 8i se les respira, pl'OdU<:Cll nna scnllacion de amargor mui desagradable: de~pues tle la combustionqueda un residuo apéna;:; apreciable, qne nada tiene de alcalino. T.a cUl'arina tratada por P\ ácido nítrico concentrado, adquiere un color l'ojo de sangre, 1 el áei/lo sulfÚrico tambicn eonel~ntl'ltdo, le cOllluniC'a un ucHo tinte (].(, laca carmir,ada. La nuez de agalla precipita la 8olucioll aCllosa, i el precipitado 08 soluble en el aleollOl; igualmente la precipitan 10$J>iclor\lros de pll\.tino i de mercurio. Finalmente, seguJl el doctor Heintz, la curarina contiene nítl'ÚjcllO. e-iQu(~ accíon t'jcrec el cnml'e 8ouJ'e la economía animal ~ Antes de estudiar 108 efecto~ que Jl1'oduce una YCZ a.bsorbido, parece lójico csponel' las cOlldieiom;s (lue exije 8'1 introdu/wion en el torrente rirculatol'i<). 1.° Condi(}iolle.~ de alJsol'do-1't, El curare. a diferencia de 108 demas venenos i virus, n() es ahi'OI'hido ;;ino cuando 8e pone directamcnte en contacto con la sangre, o cuando 6C introduce en 106 pulmones, El padre Glllllilla ha Rido tal vez el primer viajero que ha insistido detenidamente sohre la propiedad que pre6enta el curare de no ser absorbido cuando ;:;e introduce en el tubo dije¡;tivo, en tanto q-lte lo es cuando se pone en una herida, por llIlIi peqnel'la. qne ,-<'!lta sea, I,a Condamine tambien ha hecho mcncion de la como pleto. in/)cuidad do1 curare siempre que no se ponga en contacto con la sangre: asegura que rOl' largo tiempo se Este libro fue Digitalizado Por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República,Colombia -32alimentó csclusivamente con carne de animales mucrto~ con flechas envenenadas, i que muchas veces durante la masticacion sacó de su boca la punta del dardo. Posteriormente a e8tos dos viajeros, Humboldt ha confirmado SUB relaciones. Segun él, en las vegas del Orinoco no se come, por lo eomun, gallina que no haya muerto por la picadura de una f1e~ha envencnada, i los misioneros pretendian que no tenia buen gusto la carne de los animales, si no seempleaba este medio de n'latal'los. El padre Zea"que acompañaba a H.umboldt en su viaje, enfermo de fiehre intermitente, todas las mafíanas mandaba desde su hamaca que le llevaran con la gallina destinada para su comida, una flecha envenenada para matal'la; o]Jcracion que, por la importancia <pIe le daha, no queria confiar a nadie, apesar de su habitual estado de debilidad. K lle¡;tro conso<:Íoseñor HiIlcstrosa i yo hemos comido tambien gallina muerta con curare. IIumboldt i Bonpland tragaron con frccuencia i sin el menor inconveniente, pequei'las porciones de curare,&! llue siempre le hallaron ut ~uBto amargo rrmi agradulJle. Asimismo, i con igual Úxito, el seí'lor B incstrosa i yo heTIlOBprobado el curare .. 11 na vez demostrado q\lCel curare no es absorbido por las das dijesti nls, restaba esplicar este hec1lO.Lo!';Sres. Pclouze i Bcrnard pensaran que tal vez este veneno era mudifieado, dijerido por los jugos ~ástricos, de tal manera qne perdia todas sus propíedadeH deletéreus. Con el objcto de yerifical' esta sllposicion echaron curare cn jugo gástrico de perro a Hna temperat\ll'a de 38° a 40° cent'Íf(Tados,por espacio de cnayenta i ocho hOl:as,pa~ad~s las cuales picaron algunos ammales con este .Jugo gastnco saturado de curare: los animales murieron como de Ol"dinario. Repetida i variada de diversos modos l.(.staesperiencia, ora fuera del animal, ora en el animal vivo: despues (le h!berle hecho tragar enral'e a un perro, ab¡'iéndole luego una fístula en el estómago, i sacándole el jugo gástl'ico, llan reconocido que ('ste siempre tenia todas las propiedades mortales de nna disolncion de enrÚc. l?ractieacla uná operaeion semejante con los otros l1r¡uiclosintestinales, la saliva, la bílis, el jugo luncreático, se oht,uvo el mismo resultado. De mancra qnc, éjoí\ de verifil~:u'se la hipÓtesis, los heehos demostraron, qne ninguno de estORtluidos dest.ruia, por Sil contacto cOll el curare, las propiedades tóxicas de esta sustancia. l Este libro fue Digitalizado Por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República,Colombia -33Persistiendo los mJemos señores en ave¡'igual' la cansa~ han lleg:tdo a concluir que, por un privil~jio particular, la membrana mncosa del estómago i del intestino no se deja atravesar por el principio tÍlxico del curare, apesar de la 601ubilidad de éste, La siguiente cspericncia lo hace evidente: si se toma fresca, la membrana mll('~¡;;a~ástriea de un animal (perro o con~jo) rocien mnelto, i se adapta a un endosmÓmetro, dc modo que la ,mpedIcic 1lI11eosa mil' •• á.cia afuera; i si en seguida f;C hunde el cnuosmÚmetro, conteniendo aguR azncarada, en una disoludon acuosa de curare, se ,"erÚ r¡ue al cabo dc dos o tl'l'S horas la endósmo¡;i8 se ha vcrificado: habrá subido el nivel en el tubo endosmométrieo, i no obstantl', cllí(l'tido en (',J contenido no ofrecerá la mellor traza de veneno, eOlllo pnede comproba.r8e inoculándolo a los animales, Bi H' prolol\ga el tiempo de la eí"pet'iencia, podrá tener lugllr la endfnwlOsis del ve· neno; pero se notará a la '-ez qlW. la memhrana se ha i qne el moco así como el e'piteliulll han sufrido alteraeion, i han permitido por c~ta cin'llllstancia la imbihicion o la enuósmosis del principio lwti\"() dd cnrare, Tan cil,rto'e¡; ('sto~ (ple si en lugar de f'lo)l1ear para esta csperieneia nna IIlcm bl'ana sana i f!'C~('Il, se hllee uso de una ya alterada, la endósIllosis del lí(1\lid •• tÚxieo se cumple inmediatamcnte. Eñ el animal \'ivo tamllien se puede' hacer patente esta misma l)J'opicdad de la memlmma lJIUcosa intestinal. Todo ebto condl1('c l\ la demo8tracion de que entre sustancias perfeetamente soluhles en apariencia i depuestas en la superficie de la Ul(WOSa gHstl'O-intestinal, las hai que pueden permanecer en ('DlItaeto eOIl ~sta sin ser absorbidas, i de consiguiente "in mallife"tar su accion sobre el organismo. En este caso ¡,:e cuenta precisamente moditicado, el principio acti "0 del curare. Los St'&:, Pdouze i Bernard han e&perimentado sncesivamentesoore las membranas mucosa!';de la v~iiga, de las fosas nasales, de los ~jos; manifesttllluoSll ell ellas- COIl<;tantemen te la misma ealidad de resi;:;tenein. a la ahsorcion del principio del ('mare. Un perro ha l'C'tcnido en.-la vejiga una in}'eeeioll de ciSte vcneno, por ('~pa('i() dc. seis a o<JlO horas, sin (PW el animal haya sentido ningun a(:cidentc; la orina qne cspelió despues, tenia todas las propiedadc;.i tóxicas del curare. Sábesc en el dia que para. que una parte del organismo Este libro fue Digitalizado Por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República,Colombia -34l:iirva para la int.roduccion de sustancias venenosas en la economía, es menester que esté en relacion con las otras partes por medio de vasos, i que la absorcion no se. hace cuando solament.e e.~táunida por medio de nervios; no es por lo tanto de admirar que el curare no hayaproduc~o ningun cam,bio en la economía animal aplicado sobre los nervios, intactos, o cortados, o simplemente heridos, con t.al que ha~'aIl sido previamente aislados de los músculos i demas parte!:>cercanas. La absorcion se efectúa, aun despues de la seeeioll de los nervios, Hiel miembro se comunica por vasos con el resto de la economía. El curare aplicado directamente sobre la piel intacta, no es absorbido. Los senores Munter i Virchow han mantenido humedecida, dUJ'fUltcllIedia hora, con una disolueion de curare, la pata tra,era de una ralla, i pasado este tiempo el animal no ofreció ninguna senal de sufi·jmiento. Ya Hancroff habia probado que la aplicacion sobre lapiel de una solucion acnosa de estc \'cneno no pmduce accion sensible,aun cuando se evapore i sc seque en el punto en que se h~ya depuesto. Tampoco es absorbido por la membrana de las branI]uias, lo ~lue prue~a qn~ .0¡;ta no es ,endosmóticll. 1)ara el (;urare. (; n pcscadlto VI \'lO cuatro dlas en un kIlogramo de agua con sci" dceígramos de curare, al cabo de los cua.les se le sacÓ, se le l.izo una pequeña lastimadura, i vuelto ll. echar en la disolucion, IlIlU'ió a los ocho minutos. Para que pueda lograrsc esta esperiencia, es indiBpensable que el pez 110 tenga la mas lijcra herida, :Muchas .cces llucede 'lile las hcridas Bontan diminutas, que solamente 8e apercibe uno de ellas cnando el animal ha sido 6uUleljido en el líquido Ycnenoso. SerruIl los sPÍiores Pelonze i Bcrnard, int.roduciendo con todas las precauciones neccsarias alguJl8S gotas de la meneionada disollleion en las vias aéreas, !le "e sobrevenir la' mucrte con la misma mpidez que si se hubiera picado al animal hajo la piel. Esplican esta cBcepeion a las propiedades de las otms membranas mucosas, por la funcion cspecial que debe llenar la mUCOBapnlmonar. Estando, en cfecto, destinada al paso del ail'c, par:i cumplir 10B fenó·· menos de la respiracion, posee una testura especial i se halla desprovista del moco protector que lubrifica las otras bupeJ'ficies que comunican con el esterior; esplicacion que se aviene con las observaciones ya hechas por M. Magcndie Este libro fue Digitalizado Por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República,Colombia •• - 35 - 80brc la estructura i propiedades de la membrana múcosa bronquial. Fontana i 108 hábiles espcrimcntadores lÍntes nombrl\doi', han estndiado tamhien los efectos de una. disolucioJl acuosa de cnrare inycctada en las vcnas. Segun ellos, la OOCiOIl tóxica del curarc cs instnnuinca cnando se le inveota direetamcntc cn los vasos sangllíneoB. V na solucioIl ~cuosa débil de estc veneno inoculada en la vena yugular de lo!! perros i 108 conejos, ha determinado ¡;icmpre una mllene súbita, de tal jénero que los animales no han lanzado un 6010 grito, ni manifestado nin~lIIlll lLjitaciol1convulsiva. El org.anismo es como fulminado, i todos 108 caractérell de la vida de;;apal'ccen ('on la vdo(~idad del relámpago. Introducido el curare bajo la piel será tanto mas prontamente absorbido cuallto mas rico en va..<;os sea. el punto en que se p~nga.2.° Ej,Wt,(j8 def,veneno. Cuando el cnraropenetm en cantidad insuficicnte pal'!\.producir la. muerte, no hace si. no paralizar al animal durante algun tiempo, paaado el cual se rcstablece fát-.ilmcnte. lIumboldt refiere que un carpintero,de una estr(\nrdinaria fuerza muscular Cuvo la imprudC11ciade frotar el curare entre Ims dedos d(lspues do ha.bcr8e herido lijcJ\amcntc, i cay() a tierra atacado do un vértigo (PlOle duró Cerca de medía hora. Oitando el curare es mui aeti vo i se pone bastante cantidad en una herida~ el animal mnere sin arr~jar un grito, ~in convulsiones, sin la menor lllllCl'tra de sufrimiento. V criticada la espcrioncia en un perro, tan luego como el veneno comienza a ser absorbido, sc ]e ve sentarse con cierta. dejadez, como si estuviese fatigado () porezoso; en seguida i6 tiende de largo a,largo, cesa la respiraciou, J'ierde toda sensíbilidad i acaba enteramente tranquHo. Pero M se pone en peqneña porcion o se retarda -su ab8oreion por un oáustico incapaz de prevenirla completamente, ~ntónee& la muerte se presenta de diversa mAnera; el animal esperimenta eonvn Isiones, i Bi 80 ha empleado alguri· có.u¡;tioo, se ve, por decirlo Rsi', la Ularcha del veneno en la econoniÍa, pues las convnlsiones se manifiestan con regularidad. Uná gallina a ]a enal inoculé una pequeñísima cantidad de veneno en el ala dereeha, tardó en morir cuarenta i cinco minutos, habiondo esperimcntado }'epetidas convulsiones quo of\oecian cierto grado de equidistancia cntre al. Este libro fue Digitalizado Por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República,Colombia -36Se ha tratado de averiguar cómo obra el curare sobre la ocoDomía animal, i porqué el curare es un veneno: hé aquí lo que ;;obre esto se sabe. El urari de 108 11UlC'1I8i8 preparado en presencia de Richard Schornhurgk sirviÍl, cinco años despues de ¡;u prepacion, a bs senores Vil'chow i Munterpara hacer espericncias, de las cuales han concluido: Que el curare no es un veneno tetánico; al contrario, produce la parálisis, es decir, l:t ccsacion del movimiento en los músculos voluntarios, miéntras que 'los músculos de la vida o¡·gániea, el intestino, el cor9Zon, continúan moviéndose lmstante tiempo despucs de la muerte; Que de"dú el principio de su accion, produce aturdimiento i e"tllpefaccion, es decir, la cesacion de las fLmciones del cerebro; Finalmentc, que la muerte no es un resultado directo del enyenenamiento, sinó la consecuencia de la cesaaion de los movimientos respiratorios; i es por esto que, si se procura la respiracionartificial hasta que la aceion del veneno sobre el cm'ehro haya cesado, se pueden restablecer completamente las funciones de la vida. Segun las ef1periencias<lelos senores Pelollze i Bernad, el curare anonada completamente las propiedades del Ristemll. nervioso. Se sabe que en los animales que mueren de repente, 108 Ilcnios conservan algun tiempo la facultad de reobrar bajo la influencia de los escitantes mecánicos, ñ¡¡ieOi>o químicos: si se escita un nervio de movimient'), sobrevienen convulsiones en loÚnúsculos a los cuales se fija; si se pellizca la piel, se ven esos movimientos especiales que se 111m determinado con el calificativo de rejf,pj08. Ahora bien, despucs de la muerte por el curare, ninguna de estas propiedades persiste en elanímai, aun caliente; los nerdos se encuentran tan inertes como en un animal frío i muerto largo tiempo antes. "Este hecho de la destl1lccion completa de las propiedades del sistema nervioso, agrega el selior ·Reinoso, es mui importante, no solamente por las consecuencias teóricas que de él se derivan, sino tarnhicn por las aplicaciones que puede tener en la práctica médica, porque el.uso de esta s\U;taneia permitirá al médico disminuir a su grado la escitacion nerviosa." No quiero prescindir de hacer una indicacion. i No parece que una de las aplicaciones que pudiera tener este dcscubri- Este libro fue Digitalizado Por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República,Colombia -- 37 miento scria ocasionar una anestesia mas eficaz en las opera· ej.o~es quirúrjicas que la orijinada por el éter, por el clorofQrmoi por el reciente medio de dirijir la vision úcia un objeto brillante cqlocado a 'pequeña distancia de 108 ojos? É:stá perfL't:ta!nente dHmofltra~o que el cl~rare eauslt ceea?ion de lal) funCIOnes cerebrales 1 anonadaClOll de lU8 propIedades del si~teIlm l\elTioso; i se sabc ademas (iue la intensidad de esto;; efectos c;;th en razon direda de la cantidad de veneno absorbido, pues que si una dÚ¡;ig a produjo nn vértigo de'media hora en el carpintero de que habla lIumboltlt, eS de presumir (lne una d(¡sis 2a produeir.i un \'érti~o de Ulla hora, tal vez con suspension de la aceion iuspimtoria que requiera la aplicadoll de la rcspiraeion artiticial, i así ¡mcesivamente. Pues hien, yo creo qne ::le¡'ia con veniente emmyar, mediante una sél'Íe de esperimento::l bien hecholl, la reso· lucion de los siguientes problemas: ~dada la prop0fL'ion de curariua, se puedo saber con antolaeil I!l i de nn modo l'recioo el eti-'Cto qne ha de causar cierta d{H;js de c1ll'are? ¿ todas las itliQsincrasias sienten el 11lismo grado d~ efecto con una dósis i~al del vcneno? i, se pereibe el dolor en la a~estesia produClda por el curarc, como CIl la de los l~jentes hafta hoi USfLUOS~ Suponiendo, lo que es probable, q \le be o]¡tenga¡ina solucion ~tisfactori::t, la mcdicina qllirú¡:jiea habrá dado un paso inmcuiSo. Por de contado que estos esperimentos doben hacc¡·se en al[ ue110s animales qne por el desarrollo de 8~ organismo Be acerquen mas al homhre, i do acuerdo con los preQeptos de la eien{~i:l. Si yo llllhiera podido proporcionarme uIIa huclIa porcion de (~lll'are, tendria el plllcer de esponer aqui el result ado . . :Es probable que en el (;Tl\'cnenamiento por el curare se encuentrcn en la sangre los lllismos cara.eWrcs que en la·asfixia, i queja mayor parte do lo,; {¡rganos se hallen ~urjitados de ella. Ademas, la accion de este veneno IlObre la economía demncstra mejor qne cualquier otro medio, que en la asfixia el corazon 8igue por 1l.1gun tiempo latiendo i lanzando al organismo sangre neg-ra, sangre que no ha esperirnentado lllodificaciull al~una' pulmonl1l" por no encontrar oxíjcno al atravesar este a})arll.to. La insensi. bilidad completa que acompafía al euveuenamiento podría esplicarse por la propiedad estupefaciente. de la ~e ne- gra; pero la asfixia en este caso no es pr~ueida por la alteracion de la sangre solamente, &ino que es primitiva- Este libro fue Digitalizado Por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República,Colombia -38- mentc determinada por la cesacion de la acoian lIcl'viosa. porque l¡abiéndose visto por las espel'icllcias de respiradon artitieial, de qne TIlasadelante se hablará, que la sangro puede ser modificada pOI' el aire, i~ql1e el animal puede restablecer,;e cuando el contacto con estc fl.uido es suncKmtcrnente pl'olon~ado, si la asfixia proviniera de la falta de sangre oxijenada, es claro q1Ícal aplicarsc la re6pi1'adon artificial reviviria inmediatamente la aceion nerviosa, Entl'c los etectos patentizados en el envenemunicnto por el ellrare; que, como se ha dicho, anonada las propiedades del tiistcma nervioso, llno de los mas importantes es la preseneia del azúcar en las orinas, señalado 1)01'.M. Bernard; efecto qne tal vez puede oponerse como el mejor llrgulIlento a la tCOJ'íaque pretende esplical' tal presencia por una e1'citacion neniosa. f-¿El curare es venCllOSOpara todos los animales 1-Segun las esperienciaR i hu; relaciones de todos los -fisiolojistas i viajeros que han cscrito sobre el curar~, ninguIl animal puede contarse al abrigo do su accíon; pero sí varia' la cantidad de vencno nccesaria para dar la muerte, segun la. talla del animal i su e:ipccie. En jeneral se puede decir IIUClos anirnaleR muercn relativamente tanto mas pronto cuanto qne su respiraeion es mas activa, porque eSÍll eondicion entrafía un movimiento vital mayor, i por c()nsiguiente la absorcion !iCefe<:túa con mas rapidez. Así, los primeros Cll perecer son los paj áros, en seguida los mamiferos, i luego los reptiles. SinemLal'~o, Fontana pretcnde haber herido muchas vivoras COIltlecllas envencnadas con curare, de las cuales ninguna muriÓ; i no vacihL en asegurar que el veneno americano es cnteramente inocente para los animales de sangre fria, como lo es el veneno dc la vÍvora; por lo que, agrega, estORdos venenos tienen grandísima analojía, bien que uno sea de oríjen animal, i el otro un simple jugo vejetal. "Quel'iendo con vencerme, dice el señor Reino&o,de 8i esta asercion dc Fontana era cierta, introduje curare en una pequeña herida hecha en el vientre de nna víbora, i, contra mis csperan7.ll.s,el animal ha muerto. Así, el cnrare envenena las víboras, por lo que sí se distingue del veneno de estos rcptiles, (illCno cs un venl,"l1O para ellos. N o se puede espliclLr el erro!' de Fontana sino admitiendo la mala calidad del veneno do que dispouia." Este libro fue Digitalizado Por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República,Colombia - 3~)g-~Cómo d9be tratarse el envenenamiento }101" (~lenral"e ? Esta cnestion envuelve dos }nlntos: ¿ CÓmo debe prevenirse ° la absorcioll del veneno? ~CÓmo deben detener:ie destrurrsus efectos una vez absorbido~ 1.0 Tratamiento pl'eventÚ·o. Separar o l\iglar del resto tIel organismo la parte envencnada, ampntálldola, echando mano de ligaduras o aplicando ventosa,.; im}Jcdir o retardar la absol'cion del cnrare, valiéndose de cánstieos; contenerIo en una comhiuacion, de manera <J1W se haga inofensivo o ineapa7. de ser ahsorbido: tales hllnlos nwdios a. que puede rcelllTirse ~ara pr,evcn!I' el {~II\·el\(~lIallli('nto. -IJ& l1rnplltacJOn tU\) aplll·ada con :illCeSOpo)' los españoles en tiempo de la conquista de lIucstro cuntinente. Alonzo de Ojcda parece que fué el prinlCJ'() q L1e aconsejó cauterizar con el fuego la herida, o cortal' ell el acto el pedazo de carne infestada, La Condamille tarnhien ha con sí· deradola amputaeion de la parte herida, hecha en el in8tant~, -como uno de los medios mas seguros pam prevenir el envenenamiento. Fontana ha hecho cspericTleias sohre este mismo ohjeto," i ha puesto en claro lo;; ¡mellos rcsultados que se obtienen cortando las partes heridas, <:llando sc !el" puede separal' sin 1)cligl'0 de IIlUCI'tc í ¡¡flte~ que la absoI'> don del curare tenga lúO'ar. -A favor de 1a.<líga~lra puede Cil'CUllSeribirse la accion del veneno, Debe praeticarse Ósta de manera q ne la parte herida quede aislada del resto del organismo. Tan luego como se desata la ligadura, el veneno es ahHOrbido, i el animal muere; de forma (pIe, la ligadura preserva al ani~ mal solamente 1)01' el tiempo qne perrnalJCZC~Laplicadfi. Waterton inoculó el v.eneno en la píe1'lla de un jumento, deapues de haher colocado un vendaje en el punto elejido para 111.operacion; el animal sigui.) "i,'iendo como ,de 01". o.inario, sin manifestar novedad alguna; ller<), quitado el vendaje al cabo de una hora, la mnerte lo f'ol'prendió diez min.utos despues. El señor Heinoso ha heehu tarnhicn la esperiencia: practicada nna 1igadul'a sobre ellll\lslo de un con~jil1o, introdujo no lIIilígrallloB de C\ll':lrc por debajo de la ligadura.; por (~i\pacio de tl'CS horas el animal no espcrimcntó efecto alguno. Dcsatí) ent(mees la ligadura, i ocho minutos despucs el veneno comenzÓ a ol)l'ar; el animal murió pagados cuatro minutos, es deeir, a los doce minutos de haber separado la-ligadura. DeJada ésta dos horas no 1lC Este libro fue Digitalizado Por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República,Colombia -40mas, se presentaron los mioilllOS fen(¡men(l~. Estas espericn cías concuerdatl con las de Brodic i de Fontana 60bre los efectos de las ligaduras. - Watcrton ha acol1f;ejado colocar, si es posible, 11lHt ligadura mui a}lretada al rededor de la parte hcrida, i (tendir imnec1in.tamcnte al cuchillo de amputacion. Pero en lup;ar de ocurrir a la ampntacion, dice el e.eDor ReilIO¡¡'O qne se podria emplear con suceso la li~aclura unida a los cáu¡;ti.c08, csco.iiendo entre tostos el ororno. -Este t:'agflz csperimentauor ha estudiado detenidnmente los eredo!; de 1<18 YelltO¡;¡aS, llep;ando a determinar las condiciones en '111e se les debe emplear. 10 mismo que Sil lllodo de acciono "Hesultll de Iluestras esperiencia:l, dicc, que las \"('ntosa •. aplil'adns {¡)lte:; que se efl'ctÚe h ahsorcioil del veneno, si 8C IO~l'a (l'w ('onseryell el v3do perftletanwnte i sin interrupcion, impiden 'completamente la absorcion tlel-curare en tanto que permanezcan aplicadas; pero todo es quitarlas, i el cm"enCnfintÍPI1to se prochweo Nada parece mas f:ieil, a primern, vista, <luC cstudiar la accion de las ventosas, pues qne se trata simplemente de apli(~arlai\; sincnrhargo, este ]J1111tO nos 11ft pre¡;entado uific-u1tades, :l eausa de la r{¡pidf1. ahsoreion del curare. El H,neno indijena es ahso1'hi~lo (~on tanbt prontitud, que el corto int6nalo que, separa líl inyeeeion i la aplicaeion de la V\mtoSf\ llastf\. })ara dejar entrar en la economía 111 dÚsiil de veneno call1l.Z de CaU"lll' 1" lIIUertll del unimal. Despue,; de algunQs tanteos ]¡CIllO;'; Ih'g'IHlo a preciHar las (~ondi('ion('s de la esperienciíl, por 10 dcmas bastante fáeilefl cle reuuir. lIemos inyectadu bajo la piel de un COTll'ji110 1 et'lltíp:nllllO de curan' diluido en 6 déeiJllos de centímetro cubú de ~l!!,'lIa, i hemos aplicado illme(liatl\mente l111lt ventosa. Miéiltras qlle (.¡ vado snbsi"te sin interrnlwion, el animal no espCl'imeDtl~ efeeto alguno, cualquiera que seRIa duraeíon de la esperiencia; pero tlm pronto como se quita In velltosfl, el (~urare ('8 ahsoJ'hido i prodll{Oc lo,; IIlif.:ll1oi> efecl'os que en las condicione;; ordinarias. 1,a cJ()sis de ~lIl'are que H:! habia inyectado en esta t'Spl'l'il~n('ia (1 ccntígramo) mató a los eon~jillos en tres J1]inllto,.; en 1m: C'ircullstaneias ordinarias. Otra manera ma:; deg-ante de lIncc!' la esperienC'ia es la siguiente: H) irltl'odl\(·\l en nna hpl'idl\ !lCC'ha en el flaneo de 1111con~im(), un pcda7.0 de cunH'C del pl'SO de 511l1ilígl'amos, i se aplica inmuiatmuente la n'ntosa: el animal continu~rÚ hien entró.' Este libro fue Digitalizado Por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República,Colombia -4-1- ta.ntoquo ella esté obrando; perp al quitarla, se h~rá la.. absorcion del veneno, i morirá en breve." - El calor ha sido empleado siempre con suceso, deslie el tiempo de la conquista de Am{~rica. Esbt cautcrizacion puede vcriticarse sea con carbones en ignicion, sca con un hierro enrojecido; i faltando estos ajentes, 3C podria apelar tambien al medio violento, pero seguro, de introducir pólvora en la herida i prenderle fuego. Se ha presentado .la cuestion de saber si \lna sllstancia cáustica. pucde reemplazar al calor. El señor Heinoso piensa que hu.i algunas que pueden cmplearec el1 H~Z del fuego, i aun producir mas seguros resultado;<. Eu efecto, el calor destruye los tejidos, i solamente descoml'(H1Cel vcneno si alcanza a obrar sobro éste. Muchos e:í,usticos alteran profundamente los ~jidos i el veneno. Demas de esto, uu líquido que se cstiende por todas las parteH i que penetra fá.eih!lente en una herida, prcBenta la ventaja de producir una cauteriza.cion mas completa, i de ponersc en permanente contacto con el veneno, cuya huella sigue. -Los señorcs Brainard i Greene han acoIlsqjado el uso aimultánco de las vcntosas i del iodo, (lile obra. como un cáustico. En CBtecaso las veutosas apl>l1:lShacen el oticio de una ligadura, previniendo la absol'ciulI del curare de manera de permitir en seguida obra!' con lo::;eáusticos sobre la parte herida. Despues de quitada la ventosa, el animal debe sn salud solamente al cáustico, porque, como se ha visto, la ventosa únicamente obra miéntras permanece aplicada; el cáustico, al contrario, es nn ajente radical, de l}()useeUenCia9estables. No obiltante lo dicho, no se pueden negar las ventajas "'de las ventosas sobre la ligadilru, en cuan~ impid~ la absorcion del veneno i permiten obrar con 108 cáusticos sobre el tejido que sc ha separado, por decirloasí, del resto del organisIllo. La ventosa no tan BOlo Buspende la absorcion jcneral a virtud de la cesacion <.lela circulaeion, sino que impide adema8 la irnhibicion local que tiene lugar en los casos en qne se pradiea la ligadura. lié aquí, en resúmen, las espcriencias de los scñorCi> Brainard í Groolle. La solucioll iodada quc hall empleado ha sido hecha por medio del ioduro do potasio, en la;; siguientes proporciones: Iodo ....•......... Ioduro de potasio Agua destilada GramOH. 0.50 1:5lJ 2·1 Este libro fue Digitalizado Por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República,Colombia - 4-2 El objeto de estas esperiencias fué saher los efectos causados por el iodo acompanado de la ventosa, i por el iodo !!Olo. Iodo i ventosa. Despues de haber rasado uno de los flancos de un conejillo, han inyectado bajo la piel 2 centíO'ramosi medio'uc curare di¡lUeltosen 60 gotas de agua. Ynmediatamentc han inyectado la misma cantidad de 8olucion de iodo i aplicado ventosas, i el animal no ha manifestado efecto alguno. Iodo 80lo. Inyectadas bajo la piel de un pichon 4: gotas de una solucion de curare <¡ueestaba hecha,con 2 centígramas i medio de vencno i 60 gotas de agua, e inyectadM despuc;; 20 gotas de la solucion iodada, tampoco se manifestó efecto al~uno. Las dÚsis de curare empleadas en estas (los esperiClle1HSproducen la muerte en las condiciones ordinarias. Variadas i multiplicadas estas esperiencias, inyectando el iodo ántes o despues del curare, o al mismo tiempo, los Benores 13rainard i Groone han sacado las conclusiones siguientes: Que la solucion de iodo i ioduro de potasio es, a ciertos límites, un antídoto perfecto contra ~l curare; mezclada 1\ este veneno, igualmente disuelto, destru~'e sus efectos yenenOBOS ; La solucion iodada, inyectada inmediatamente despucs de la solucion de curare, neutraliza completamente sus efectos, siempre que se tenga cuidado de aplicar una ventosa a fin de detener la circulacion hasta que el iodo ha)""a obrado sohre el veneno. N o se produce supuracion ni phdida de sustancia. por la gangrena; ~ En fin, que la solucion iodada. aplicada Bobre la superfi. cie de una l1Crida profunda de los músculos, en la cual 8e ha introducido el curare, previene los efectos del veneno. El sefíor Heinoso ha hecho seis esperiencias para averiguar el modo de accion del iodo, de las cuales ha deducido, que el iodo no destruye el curare, pero que sí lo altera. Do ellas resulta tambien que el iodo es mas eficaz disuelto en el alcohol, qne lo es disnelto en el agua a favor del ioduro de potasio. Inyectada bajo la piel de un concjillo, una mezcla compl\esta de O; il'060 de curare, O,l!'4 de iodo, i alcohol, el animal no esperimentó efecto alguno de intoxicacion. Este libro fue Digitalizado Por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República,Colombia -43- El ácido nitrieo tambien previene el envenenamiento, ohrando como cáustico que altera un poco el curare. Mez· cladas estas dos sustancias, e inyectadas por }'ontana bajo la. piel de un conejillo, no no tÚ efecto alguno; como tampoco despucs de haber inyectado el ycneno solo, i, pasados cuarenta segundos, hallor lavado la herida, primero con ácido nítrico i luego con agua. La potasa posee las mismas propiedades del ácido nítri· co, con la diferencia de que su aceion alterantc es mucho ménos euél:iica. Sillemhargo, do;; espel-icllcias hechas por el señor Reinoso le han probado <Iue ['ctarda la absorcion del curare, i emplca<la cOJlvenicntemente la hace tan lenta que el envenenamiento no tiene lugar, -Et cloro i el broma son Cáll~ticos que dcstrnyen el curare completamente. El doro es etieaz al estado naciente i al estado de libertad. He aquí las esperiellcias <ld scíior Reinoso qne lo demuestran: Cloro naciente, El señor Reinoso ha mezclado hlpoclorito de soda con O, g>' O(lO de curare, agJ'e~lLn<loalgunas gotas dc ácido clorhídrico; lneg~' puso en lu.mczda un poco de carhonato de ~(Jda,i eOI1('lu,\"ó por derramar en ella hiposlIltito dc soda; el licor dablL una rcaecion lllea1i· na, e inyectado bajo la piel de un concjillo, no determinÓ llinglln accidente. Cloro lióre. 0,1(1'06000 curare han sido triturados COI} agua de cloro; en seguida se ha agregado a la mezcla un poco <lecarhonato <lesoda i algunas gota¡; de hipomltito de soda. La mezcla prcsentaha una reaecion alealina, e inyecta<la bajo lu. piel do nn coucjillo, no determinó tampoco ningull accidente. Sinembargo, algqnas veces perecen los animales al cabo de un tiempo mas o ménos larrro, a consecuencia do la herida. e . La sal marina que se forma en estas reacciones no impide la absoreion del cura¡'c. O,"' OHO de curare, mez(~lados con una disolueion saturarla de dornro de sodio, fueron inyectados bajo la piel de nn couejillo, quc muri6 al cabo de siete minutos, El hrolllo, ademas de destruir completamente el enrare, como el cloro, ofrece sobre Óste la ventaja de ser de conscrvacion i uso mas fáeiles, Las siguientes espericneias del senor l{einoso hacen palpablcs SIlSbuenos efectos. Este libro fue Digitalizado Por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República,Colombia -44Se trituraron O,g'060 de curare con '7 centígramos de agua, i se a~"regaron 1 O gota:'! de bromo. En el instante la mezcla tomó un aspecto particular, que auunciaba la existencia de una reacciono Luego se afiadíó carbonato de soda i se derramaron algunas gotas de hiposulfito de soda. La mezcla [resentó una reaccion alcalína, i fuó inyeetada bajo la pic de un conejillo. Durante ochohoras el animal no dió muestras de sufrimiento; pero al cabo de veinticuatro horas cayÓ en el colapsus completo que caracteriza. el envenenamicnto por el bromuro de sodio, i pereció trein. ta horas dcspues de la inyecciono En este caso la muerte fué causada por el bromuro de sodio, i no por el curare. El scfior Heillolw repitió mu(:ha>; veces esta esperionda, ob. teniendo siempre cllIlismo resultado. Para COll,encerse hien dc la parte que en él debía atribuirse al ororIluro de sodio, hizo las dos esperieneias que siguen: 1 gramo de bramura de sodio disuelto en agua, e inyectado bajo la piel de un com;jillo, determinó, al cabo de veinticuatro horas, Ulla muerto acompañada de los mismos caracteres que los de la anterior csperiencia; caracteres que son enteramente diferentes de lo>; que presenta el em-en& namiento por el curare. En éste los animales pierden el movimiento al cumplirse la alJsorcion, en tanto que el uromuro de sodio los escita de tal suerte qus se les ve ajitarse, i se conoce que sienten fuertes dolores. Despues de haber mezclado el bromo al curare, i cuan. do se hubo efectuado la reaccíon, se puso la mezela al bañomaría, hasta la eompleta evaporaeion del bromo cscedente. Luc¡:¿o se agregaron al2:unas gotas de carbonato de soda i de hlpoSlIlfitú de soda. Inyectado despucs el licor, no determinó nillgnn e.ecidentc. En esta csperiencia, come se ve, se procurÓ evitar laf'ormacion del bromuro de soclio, i solo se dejÚ la cantidad de broma necesaria para la descomposieion del curare. Aparte de la prueba que ofrece esta última esperiencia en favor de la a(~cioll del bromo, hé aquí otra, verificada por el mismo selior, (Inc puede eonsidérarse del todo decisí va. :Medio gramo de ('uraro, dÚsis suficiente para matar lIl1H:hos peITos, fuÓ tratado por el bramo: la mezcla, deseml)arazada de este último por medio del carbonato i del hiposulfih. de Borla. fué inyectada bajo la piel de un perro, que no í>ufri{,ni el mas lijero efecto. Este libro fue Digitalizado Por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República,Colombia -45- Todavía es mas perentoria esta esperiencia. Para obtener casi las mismas condiciones en que se encuentra. un animal hcrido por una flecha, el señor ReinoBo introdujo, en una pequeña herida hecha sohre la picrna de un pelTO, 1 decík}'amo de curare diluido en agua. Al cabo de treinta scgnnd'os aproximativamente, cauterizÓ la herida con bromo. El animal uo se envenenó, ni sufrió otra novedad que las consecuencias de la eauterizacion. Estas espcricncias demucstran (lue la accion del bromo sobre el principio activo del curare, e8 ;;in duda descomponente. En efecto, cn In;; sustitueionC8 regulares del cloro~ del bl'omo i del iodo al hidrújeno de los ('ompuestos orgánicos, los c11erposresultantes poseen el mismo volúrncn, la forma, el color, la capacidad de "aturacion~ el mismo ]Joder rotatorio, sin cambiu de las ]Jropiedades químicas fundalllentalcil; adernas, como lo ha probado Laurent respecto de la estrÍcnina dorada, la c¡;pceic resultante de la sustituclon obra sobre la. economía animal, a ;~ual dÓ¡;is,de la misma manera que el alcalóide normal. Ahora bien, la Clll'arina pierde su potencia venenosa despues de ponerse en contacto con el cloro i el hromo; demndo que no esperimenta una simple sustitucion del hic!t'ójcno, sino una verdadera descomposicioll. El seDor ReinoBo es de concepto que pudiera empIcarse el bromo, probablemente con ventaja, pero al ménos eOIl tanto éxito como cualquier otro medio, para cauterizar todas las heridas envenenadas. Aunque cs un cáustico mni activo, se pueden poner a raya su;.;efectos; i por otra parte, es probable que destruya los demas yenCn08 como lo hace con el Cllral'e. "Esperamos, agrega, hacer esperiencias sobre perros mordidos llor otros perro;.; rabiosos, COIllO tambien sobrc el veneno de la víh(¡r!1 i demas BcrpicntL'S venenosas. " Para poner a raya los efectos del bramo, bastará lavar la herida con una mezcla de carllollato i de hiposulfito de soda, merced a la cual el bramo pasa al estado de brornnro de 80din. De esta suerte se puede invijilal' la accion delllromo, i hacerla desapareccr en el mumento en (PlC ¡;e('I'OC <pie ha obrado suficiente i convenientemente. Por lo dcmas, el bramo pncilto sobre la piel, sea la que se quiera su cantidad, solo ohra localmente, es decir, que a la YCZ que cauteriza, sc opone a Sll propia absorcion. "He Este libro fue Digitalizado Por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República,Colombia -46inyeetado, dice el soñor Reinoso, bajo la piel de diversos perros, hasta 8 gramos de bromo, i no he obtenido mas que efectos locales lIlas o ménos intensos." Conviene, no obstante, ser prudente en su empleo, porque goza de una poderosa acti vidad. -Algunas sustancias cáusticas retardan la absorcion del curare, sin alte¡·ar el veneno. Fontana vió que hiriendo la piel de un conejillo, i aplicando algunas. gotas de veneno disuelto en ácido súlfurico, el animal seguia viviendo sin dar señales de sufrimiento. El señor ReinoBo ha hecho muchas esperiellcias sobre el empleo de este ácido, las cuales le han probado: que empleado en diferentes proporciones, puede impedir durante algun tiempo, o prevenir enteramente la muerte del animal, segun el retardo con que se efcctúe la absorcion, retardo que depende del grado de cauterizacion; i que la accion del ácido súlfurico es simplemcnte cáustica. " Para esplicar, dice el sujeto últimamente nombrado, la salud del animal cuando se haee uso de cáusticos que no alteran el enrare, es menester admitir la interrupcion de la ahsorcion normal a virtud de la alteracion de los tejidos. Merced a esta interrupcion, una grandísima proporcion do curare sc encuentra cn ill1I)Osihilidad de penetrar de una vez en la economía, i cn consecuencia ésta puede eliminar las pequeñas cantidades ahsorbidas a proporcion que las va rccibiendo, de tal suerte que el veneno no se acumula jamas en cantidad suficiente para determinar la muerte del animal. "Tal vez pudiera sostenerse victoriosamente que la absorcion es del todo nula, i que ni aun la mas pequefla porcion de veneno penetra en la economía, cuando la cauterizacion ha sido perfecta." El agua de cal i el amoniaco retardan mui poco la abBordan del curare. ~Se ha Cl·cido que el tabaco es un escelente remedio prevcnti \'0. Los españoles, segun }lonardes, lo adquirieron de los indios; i agrega que como el rci de Espafia quisiese eon vencerse de su eficaeia por sus propios ojos, un diA.hizo que se inoelllara eurare a un perro, i se le pusieran en la 11 CJ'ida, poco despues, hojas machacadas de tabaco: "el pcrro se curó con grande admiracion de todos." Desde luego ocurre la duda de si el tabaco ha obrado Este libro fue Digitalizado Por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República,Colombia -- -lj - en este caso como simple cáustico. "Tal Y8Z, llice el sellor Reilloso, la nicotina absorhída haya ~jer('i(lo una accion propiamente 8alndahle, lo que es de ("¡"el't'Se rccordando 8n::; CfectOH conYlllsin¡:> i tetánicOfl :'Olll'C la ('conomía allÍlnal." -Algulla:,; sale.q, sin tambien la absoreiOll S(')' ycrdnlkros ('Úllsticos, retardan del <>nhlrc. Tal(·s son el hrollluro i ioduro dc sodiu, pCl'i) sohre todo d bnmlllro i jodw'o de potasio; sicJJdo digno ¡lp nutar lj 11\; el iodnro de potasio, de UlI gl'l1lHO para al"riba, ('llul(p¡it:nl Ij lIe sea la cantidad (lue se emplee (2, a, +, () :) ~mm()si, produce tasi el mi"ml) efecto ('(lJJreladoll a HIla lllisma d':)sis dI' tllntre. Las do:, primeras sale;< rdal'(lan mui poco la a]¡soreillJ]; las ÚltilllflS algo Illll;;, Hin pa"ar' de yeilltidos milllltos. -Por lo cinc toca a contener el curare en una eom hi Ilaeion insolnble, incapaz de ser ub,u!'oida, es un punto tun importflllte como poco despejado. Solo Be puede decir que, "egun el doctor 'Hcintz, la Clll'al'Ína es pl'eeipitada por ("1 biclol'lll'o de mel'curio; que lIIonlll'des refiere que los espr.fioles acostumbraban mirar las Itel'ídas con suhlimado. 00teniendo huen éxito; que Odedo lo acon"~ia tambien Ínml (·UI'll.1' las heridas hccha;¡; pOI' flecha,; ell \'ellclladas con jugo de manzanilla, i ell fin, lpie se~lllt 0sto la introduccion del biclorUl'o dl~ mercHrio en HIla herida que (:clI1tenga curare, acaso pueda ser proveelwsa. Entre tanto, dehe esperarse (lno, gradas a la esporimentacion, \'cr<ladero pedernal de la intelijencia iD\'cstigadora, se enCl1entre alguna eal !Tl(,tálica que c.'3té dotada dI.' la propiedad enunciada. 2." Tratamif1do de la /ntoJ:¡'e((cio!l. Ha,,;ta el día no i-'l~ conoce ningnll medio sati;;factorio quc sea de facil i jencral aplicacion, ·para combatir i poner a raya los efectos 'del cn!'are una \'Cz absorbido. ~e ha aconsejado la l'cspiracioll artificial, la estricninn, i últimmncntc se ha ensayado por el señor Heinoso la aceion de la electricidad, Una esperi. mentacion seria ha pne,;to en completo descrédito la sal marina i el azÚcar, preconizados por crt'dulos viajeros . . -Pal'cee (lne 13l'odieha sido cllll'imcro que ha ensayado la rcspiracioll :tt,tifieial. Hé aq ni sn csperiencia: introdujo UIl poco de \Vol'ara en una herida J¡cdm en un gato tiern'o, flue a vuelta de pocos minutos fné afectado i cayó en l1li estado de atmdimiento i de semisem,ibilidad, en él qne permaneció cinco cuartos de hora., al cabo de los cuales se renovÓ la aplicadon del n'neno. Cllatrominutos despnes de 5 /'-'iO!'T'J I1R 11'",0, Este libro fue Digitalizado Por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República,Colombia - 48 \- ~"ta repetieíon, la respiracion ces6 entcramcnte, i el animal parecia estar muerto; pero el corazon daha aÚn 104 pulsaciones por minuto. Se le colocó cn nna temperatnra de 85° termómetro de.Fahrcnheit, i sus pulmones fueron iniiado8 a.rtificialmentc, casi cnatro veces por íninuto; la accion del corazon continuó regularmente. La respiraeion artificial fué detenida 1m momentú, i ¡;cvió qne la:> pupilas se dilataban o se contraian cnando se disminuia o se aumentaba la luz; la saliva manaba de su hoca; algunas lágrimas aparecieron bajo sns párpados; pero q lIed6 insensible i sin movirniento. Pasado,; sesenta i cHatro minutos, espel'imelitó lijeras contracciones inyoluntarias de los músculos i manifestó una apariencia de esfuerzus para respi¡'ar; estos movimientos continuaron, haciéndose luego lllU"freeuente,;. 1Tna 110m despues, dió por primera oeasioll signos de sensibilidad cuando era escitado, i respiró c,;pontúncamento veintillos veces eIl uu minuto. Habiendo sido deseontinuada la respiracion artificia.l, estuvo cuarenta minlltosen un profundo sueíio ; luego ~.lJ dcspertó de repente, se paró i se puso a caminar. Al día siguiente se mostró un poco indispuesto; pcro poco a poco se restableciÓ, i acau(, }lor l'ecohrnr su plena. ¡:,alnd. 1Vaterton ¡'cticl'e talllhien otl'll, espcricncia seguida de feliz suceso. cna. burra l'ccibiÚ el vt:ollcno en la e¡:,palda, i murió aparentemente en diez minutos. Se le hizo cntónees una incision en la traquearteria, por cuyo condlleto se le iniló con un fuelle el flpal'ato pulmonar durante dos horas: la existencia sn~pendilh yolvió; la hurra levantó la cabeza i miró a su rededo\'; pel'P hauiclldo sido intcrru~pid8. la introduccioll del aire, vo1\'i6 a caer en una II1uertoaparente. Prontamente se recomenzó la respiracioll artifiCIal, i se continuó rcgularmente por espacio de doi' horas mas. La hurra so levantó luego, i camino sin dar scí1aH de ajitaeion ni dolor. La herida se CIll"Ó sin dificultad; empero, 8U cOllstitucion sufrió Ulla altenwion tan profunda que PQr largo tiempo 8e dudó de su restablecimiento, pues 6e enflaqueció i e8tuvo enferma por mas de un año, hasta que al llegar la primavera empezó a componerse, i ácia mediados del estío estaba gorda i juguetona. "El lector sensible, agrega V{aterton, se complacerá. bastante al saber que el conde Percy, compadccido de S\lS de8g~cia8, la envió de Lóndres a 'Valton-Hall, cerca de Wakefield. Alli la pollina lleva el nombre de wouraUa. Este libro fue Digitalizado Por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República,Colombia - -!9 W ouralia será puesta al, abrigo de la.s escarchas del llviernG, i cuando venga el estío, se nutrirá en los mal; bellos -pastos, no se le maltrará de nillgull modo, i acabará RUS días en paz." -Podo que toca a la estricnina, Virchow ha hecho lllU(lhaa csperiencias con el objeto de saber si el cnrare i la es, tricnina se paralizan mútuamcntc, o llle;jor diellO, si puedcn .ser el contraveneno uno de otra. E"tURiuvcstif,'1wiones 110 le han dado resultados bien couclu.)"cntes, ponpw ninglUw de los dos venenos obral>a con bastante eIleJjía.. Sinembar· go, un perro envenenado i enterltlllcllte pamlizado, se reí:'tablcciÓ, gracias al t.ratamicnto por la cstricnilla, i continw') viviendo sin la menor.pertlll'bacion. " Estas espel'ÍCIlcias,dice el selior H.einoso, merecen ¡.;cr continuadas, i yo estoi seguro de <pw se llegaria a resultados análogos a los que se han obtenido cmp1eando conjuntamente la cstricnina i el éter. El seDar LOJJgetha dCIllOl'trado que e16ter inhalado sus~nde con mucha rapidez, si no todos, al ménos algunos de los efectos debidos al poder reflejo. Adomas, ha, encontrado un hecho L'StremameJJÍt' curioso, i es que se alcanza a minorar o a neutmlizar, en lOH animales sometidos a la esperiencia, 101; peligrosos efeCTO::' detétcr "obre el poder re:flldl)de la mÓdula, por el empleo de la estricnilla, i 108 de la cstricnina i de lQSopiáceos VOl" el éter." -Cuanto a la electricidad, hé a(llÚlo que dice el n:U:i'llUI juicioso escritor: " Yo no hc hecho sino lUla cspcriencia., i no he podido sacar desde luego consecuencia alguna. lIabili. introducido en una heridahecha en un conejo una pequefiu cantidad de curare, i el animal hahia caido insensible al cabo de seis minutos. EntÓJJces, sin perder tiempo, intru· je en el ano uno de los eonductorcs dclaparnto BretúIl, j el otto en la boca; haciendo obrar el instrumento, el ~mimal fué restablecido al cabo de tres cuartos de hora. " Yo no dudo que poniendo a contribueion los conocimientos que cn el dia so poseen sobre el modo de aplicar la electricidad en los casos de asfixia, se llegue a precisar lw condiciones de la aplicacioll del mismo ajente en el CUB(, d~ envenenamiento por el curare. Pero este resultado no pllede ser interesante sino como esperiencia científica: Cl"C(j qr¡.e carece de valor en la. pi'óetica de la medicina, porqUE' en un.desierto-no se puede diSponer de un aparato eléctrico_'; i Este libro fue Digitalizado Por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República,Colombia - ;jl}- /¡-¿ Se puede probar In pre¡;encia del curare en nn cneI- po en ycnenado pUl' esta sustancia? En otras palabras: ¿ Se puede sabel' cuándo la mncrte ha "ido causada por el curare ( ;¡ Es un estudio, dice el sel10r Reinoso, que estll totlayia por hacerse. :Xo conocemos mcdios químicos propios para dcscubrir el curare, i es lln punto de la historia de este veneno (lue aguarda, para sel' aclarado, las investigacionef'. a (rIC el s(~l1orPelouze deLe someterlo." En el pcriÓ(]ico titnla(lo Gazette l,ebdomadaÚ'() de ud,ler:ine et de ehir'Ui'(jie, nÚmcro 12, Parif'., 1857, he leido, a propósito de nllas esperiellcias del sel101'Pélikan sobre la!:' propiedades fisiulÓjicas i toxicolÓjicas del curarc, lo siguiente: "La prescllei:~ del c'urare puede· SC1' fÚeilmente deseuhicrta pUl' las reacciones de la cnrarina, Esta:; reaccioue,. son casi las mismas <¡nc para la estricnina, pero son lila", (~onstantes en a<plel nlcalúidc. El ácido sulfúrico con él eromato <.lepotasa, o con el ferrocianuro de potfisio, o (,(lH d pCl'óxido <le plomo p·ulga, da coloracion~s rÚjll.B111ni hellu5\." ,¡-; Cu~\le&son los nsos del cnrare, i (ln~ ap1icacione:puede ten el' cn la mc<.licina? Como atras he dicho, i como todos 10 saben, el curare L',", empleado actualmente pOI' los Qalvajes de nuestra América para onyenomU' las 111~chasuestinooaB a la caZll, :N<. hai constanl:Ía dc qne los indios usen de esta mi6ma dase tIc saetas en sus gnerras; es ,-erdad que hieren con :t\ocha¡" pero so creo joneralmentc en <]ue son flechas no cm-enenadas, Parécerne (PlChai motivo para admirar este 8in~nlar contl'asto: qne cnundo entro los paises lIlas civilizados i cristianos, i por los lIlUScmincntes publieistas, RC ha di:::cutido la cuestion de saber si eS permitido a los beli.ierulites cn gnerra internacional, hacer uso del veneno, ya saturando éon él las agnas de los pozos i fuente;;, ya untando las lanzas i demas instrulllentos cortantes i punzantes, inclinándose todos a pensar quc si hien lo primero JlO debe admitirse, lo segundo, es deéÍr, el empleo de armas enhcrboladas, es tolerable; es digno de reparo, digo, que a tiempo 'PlC esto se l(iensa i se acepta entro los puel>los cristianos, los bárbaros Jcntiles cOllsideran bárbaro e inhumano el dar I-r:ucrtea sus enemigos por medio del vellcno, a pesar de que (hsponen de uno tan efi<:azcomo es el curare, cuya acclOU eS instántanea, i que ademas de no causar ni largas agonías. Este libro fue Digitalizado Por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República,Colombia -- ,'J ni gri\udes heridl\5', tampo('1) prollucc intensos dolores ni aji~íones }¡orrihlt.~5. Entre las :flc{;has usadas para la caza, unas contienen una eanlid~1 de Y{mcno sufieipnt~ para matar prontftmente a.l animal. i ot¡'flS son untadas de Clll'are JI1ui d<!bil, Q destewplad;¡. Es con este curare destemplado que 6(: h,aee la caza de micos pequeftos cnando 110 s\~trata de matar106 sino de aturdidos solam\Jnte para podcr cojerloB "i\'os. De la misma manem los indios se sirYi..m de curare lIú mui a.ctivo para destrnir las ~t\'cs rapaces. En otra époea los sah-aj{lS méllos corrilo;.; Folian salír a las altas sahanas de Doyad i Cnndinamarea, í COmprOlJletl'l'S(' ('on los hacendadofl, mediante 11na módiea. l'etriliHeioll, a llniquilar lu..."! aves de presa (iue hacian dafío ell 1'1lS dche::,a". El procedimiento de caccl'Ía era bien r::enciJIo. Colocahan el cadáver de una bestia inútil o U{luna res flaca en las inmedi!l.Ciones de un hos(lue, o de una easnchitu, ('11 donde ¡;c ocultahan cui4a.dosamente los cazadores, ohscr\'ímdn mucha quietud i guardando un profundo silencio. A poca:; llOras las H,\-es cmper.ILball .a acudir; i cuando (;r::tn.bttll l,íen clwal'nizadll:';, el indi,) comenzaba a lanz:¡,r SllS Ji(~(']I:¡S agudísimas empapadas de Cllrnr{). El ave lId'ida se lc\'untaha sin alarmar a sus compañeras, ¡;c iLa R. otro Pllllt,1, i allí r::c le veia vacilar i\obre sus patas, entrar en convllbiollcs, i espirar; las demas se~uian saciando COIl alegria su yoraciJad, para sufrir luego por turno la misma suerte. Dtl estB moJo lllataban cuanta!? quer'Íl1u sin eSftWl'ZOS i sin peligro. Tal procedimientu era esllccíalmente aplicado a la caem'ía de condores, -que, ¡;egull Calda", ticnen sentidos csqni.sito~, i }lor esto b mas perlllC* fla imprudencia fmstraba el fin. Segnn Uumboldt, los indios miran el curare como nn esoelente estomu<:::tL Richard Sehombmgk 10 cmplotl la-rgo tiempo contrf\ una fiebre intensa, 6in ohtener b. c\II'acion, pero tambieu Fin espenmcntar efectos dafíosos. Una hcri<la que crda Labé¡'scle formado en UllO de los labios o en la lellRua, 10 determinó a snspcnder inmediatamente (~1emploo de este pretendido fchrifngo. Segun el ilustre cirnjano ingles sefíor Benjamin Urodic, ,--~nlS11ilS12, cuando por primcrl1 \-ez se hadA.1l csperiendas en In~lf\tcrl'a. para \'01' si se podi:t voh-er a la ,ida a }',5 ellvencnado>, con curare, e18cí'lDl" Sewell, uno de los n.sis- BANCO DE ¡.A '... ,' ., BIBLlf'lTr .• - -~,'\ Le" .• .! r '.. ~i' 'n· Ir , <..l. ,-A '"., .'V'iGe> Este libro fue Digitalizado Por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República,Colombia ~!MOQ/lCION rentes H las espl~rieneias, apcrci bido de la l'daj aeion muscular (lne caracteriza el en venenamiento, espresó la idea de que el cmare podria dar buen éxito eu el tratamiento de las convull:1ionestet:ínic,as. El sefíor BrocHe agrega que la esperiencia tuvo lugar, pero que !lO supo el resultado de ella. El señor Reinoéo dice (llW el veterinario. Sewell empleó con Bueesa el curare en dus cahallos atacados de tétano. El primero (Iue ha aplicado el curare al hombre tetánieo es 'IUizÍt el señol' \T ella, m{iUico de Turin, en 1859. Eu dieiembre de ] Si)() habia· emprendido con BUS amigos lo!' prufesores Ercolani i T(¡Jnmasí una lar~a serie de esperien· eias que eunltlllicÚ a la Sociedad de clCIIclas biolójicfls de Tllrin. L,)s re:"ultadns de esta,,; csperieneias fueron: verifiear 11\ aeCi\Hl 1bi,)!{.ji<:a antagónista qne, &obre el sistema nervioso, existe' entre el curare i la c¡.,tl'ienina; i, obrando con l"as prceallcioncs necesarias, neutralizar los efecto •. tt}xico¡,; de hs dm; l'wstancías una por otra .. " Esto SUpllC>,;to, dice el¡,;cfior Vella, habiendo obsel"Vad¡) JIlllclw:,; caso" de tétano en el hospital militar france •. tle Tmin ( domle yo era médico de los heridos de la prime1'H (livi::;ioll ), i cn los C\1l\1eS el omplco de los opiáceos, del (~tel', &.", &.\ ]¡al.i:l thteasí-l.do, me vino la idea de hacer sobré el hombro la aplicaeion de mis e&pcricncias de 1856 . •• LOR primeros ensayos fueron hechos en dos indíyidltIJS atacado;; de tétmw, el uno cuatro i. el otro cinco días ánte;:, a consec\1encia de heridas por golpes de fuego. Se t'IH'Ulltrahall ell nn estado de scrni~asfixhl i en condiciones entCl'alllellte deSe3perlHlas. AUIl en esta circunstancia la 1l1'1i<:fiCioll del emarc tué sobrevcnida de Ulla ~lma i una l'elajaeio!l 1Il11,;clllm' (1110 alh-iÓ mucho a los enfermos. ~inernbal'gn, no pndicl'O!l salvarse. En el tercer caso el l'e,;n1tado (h~ mis tcntatln\S fuá completo, i el enfermo se t~Ill'<'\entcramcnte." Il(~ fl(Plí la obs0rn~cion, seg'un la trae la. Oazette Aebd()'i)t(uluií'¡) de mAdecine id chirlO~qie, número 36, 1859: .. El f:lciente era nn sarjento del .:n. de línea, IlllIDsdo .Alexis T]¡oma8, O treinta i c;nco aíic¡¡.; de euad. herido el 4 de jnnio, en la baialla de Magenta, pc>r tu! ¡,'Úlpe d') bab en el (lié deredlO, que había producido una fractura incomplet:\ del primer metatur,;iuno, con lacellleiou do los telldones i de l:l~ partes CCl'I.'uua.<. El enfermo entró al hospital el 10 de junio. El 13 se hizo l~ estraedon do la bala. EIIG esperimentó un poco de rijitlez en el cuello. 1':1l~ se h~luha atacado do un téll\llo je¡¡eral bien Cílracterizado. ti\' Este libro fue Digitalizado Por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República,Colombia -53A. las doce del día me decidí a la aplícacion dd cnmrc Bubre la herida. La dósis fué, al principio, de 10 cent(gramo, por 49 gramos de agua; pero, aumentándola sucesivamente, la elcvé hnsta nn grarno por 80 gramos do ugua. Pasad,)s tros cuartos do hora, i todavia mdor dCBpl1es de una media hora mas, eualltlO la cantidad dc curare era mas fuerto, cada apE,'aeion era seguida <.leuna diminueion en la I'ijicluz tot,iuica. i en s('guicla lh, \lna relajacion musCUUll' tan completa qnc el enfermo powa inlllediatalllerrtc bcbcr, tonlar al~ur, alimonto, o('inar, sentarse en su cama, &.' " Cuando cesaba la Rccion del enrarc, la pierna derecha (Ul herida) era siempre la primera en ei;pcrimelltar las sacu,lidas tetánicas (¡ue, al principio. reaparecíall con toda BU violencia, En los tres prirnl'l'os dill~ dc este tratamiento c,traordinarío, la absorcioll por la herida 1Jtl'ltl1ha para producir In relajacioll muscular i la el11mll jenc('al do que acabo -le ha]'lar, Despues de csu .• épOC:i !\¡é rnCUl'''[cr [louer en la piema un primer "l'ji~atorio, i ropctir1o el octavo din., n tin de tencr uIIa arw!w super!it')í' nbsorl,cutl'. Dtlrante cuatro ,has las cura('iollcS fueron r('lll)\'adas cnda [res horas. CIl ¿,)~uida cada einco }¡o""~, hasta el ,\uodécirno di". en que la" reul1je a tres i aun a dos V()Cc~eIl las \'cilltiel1.1trn homs. ~ot.<; ,¡ue la heri,h. del pili i las ¡,eridas de ),," \'eji¡;atol'ios no Bufrllm llada de la apEeaciou del ('urare; al cOllll'ario, BUeié'<ltriz;¡"ion marchó con muehll preste7.a. El curlU"c, qno cn los primeros ocho dias ha]'i" tenido [lor efecto constante alejar los accesos, disminuyendo progresimml'nte su inten~ictad, acabó por hacerlos desaparecer enteramente; i ellO d,' jnlio (·1 cllf('l'mo dejaba pOI' la primera '·OY. su lecho, siu e"perimentar l1illj!unn "'lClldida ÍlullY\ll"i,·u. El 1G salió 1'01' capacio de' \lua hora, i el ~;j ,kjó d hospital, rqp'c3nlllÍo 11~'rancia completameute ourado," Comunicada esta obcn'ucion a la ,\.<::tdClllia dc ciencía,; de l>aris, se suscitó sobro ella nIla diH:llsion illtercsante, en la sesion del 9 de itgosto de 1859, en b cU,ll tornaron parte los señores V c1peau, Bemard, ~elTcs, Cloqnet, Rayo1' i J obort. A escepcion del profesor 'Velpc[tll, los cleTlH1S aco.lieron con mas (/ ménos ('lItnsíaslllo el !tedIO relatado por 01 señor Yella. El profl'~'H' Johel'~ dijo: que este hecho h~~laba tan alto, (ine nud~ sCl'i~ domai'ia?o ,de cuanto sc hlCleSe rara aeonscJ3.l'lo, e mducu' a los cll'u,Ianos a haccr uso de el en las circunstancias gru n's i difíciles. :El sel1o1' Velpeau, al'contra1'io, munifestÚ: (pie 1'111 contestar su íntcres, creia del)cl' hacer notar (PIC ue!>ia J:;cracojido ('011 reserva . •, El CUI'are, agregó, es nn ajcnte tan acti \'0, nn venCllo tan pcligl'Oso, que ántes de aceptado Cllmo l'l:meJio, importa haber demostrado bien sn cfieaci,t. Es verdad que por su parte el tétano es tam bien hastan tc temible, i tan rcfractario a las medicaeioncs conocidas, que en n.lgull3. manera todo es permitido, tratándose de esta eufermedad. Empero, errado andaría el que la considerase como ab:>olntamcntc mortal, Este libro fue Digitalizado Por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República,Colombia -54:aun en caso do ser el tútano agudo i tl'aumático, Así, mn"'lOS enfermos se han curado con el opio, el éter, el musgo, el aloanfor, el agua r¡:¡a, el cloroformo; lo que no ohsta para. que casi siempre tenga \lna fatal terminaeion, aun cuando se le trate por estos diverf;os medÍ05. Yo he tenido en la Caridad tres casos de tétano, tambien en el curso de los :1.ITos de 1857 i 1858. Dos de mis enfermos han sllcumbido~ i el tercero se ha curado como cl del hospital de Turin. 1 este enfermo, qne era una jÓvCll que yo había operado de un enorme tumor al cuello, lIO fué tl'atado de otro modo (pIe los otros dos, i (lue muchísimos otros <lue anteriormente he perdido. ;;Estos pocos casos de curacion espontánea í cscepcional ,~f)1llos (pIe han venido poniendo en boga 10ill1umerosos lllc<liol'¡hasta hoi preconizados sucesivamente GOlll0medios eficaces <Ieltétano; i apesar de todo"b enfermedad no deja de ser, como siempre, casi constantemente mortal. ;; En terapéutica, sohro todo, un solo hecho no permite jamas concluir; i como yo lJO YCO aquí mas que UIlO,i eomer \'6te solo hecho me parece l'otleado de varias cansas de el'l'Or,digo (ple, "in rechazarlo, i ántes de dar sn esplicacion i de ;;aear de (~lconsccucncia alguna, es prudente cs})erar ,.;\1 coufirlllacion." Pocos dias habian tl'aSélll'l'ido, cuando se presentó un (~asode tétano en el hospital de la Caridad. Se empleÓ el (:U1'are8in rcsultado, He aquí la.observll.cion (Gazette lu:bdolitarlaire de ¡n¿decine et chiI'Uí'gie, número 38, 1859): "José Beledlle. de 30 ai'ío~ ,le edad. carretero, hahitante ellla clllle Saint.\ndré-deH-Arts, número ]5, l\~i,lo en Erg-llie (Saboya) elltró el 7 de setiem¡,r0 de IB5!) al hospital de la Cnridad, sala S,únte-Vierge, número 53, sen'i"in del seiior Velppan. El día 6 <le setiembre, conduciendo 5n enrrnaje, este hombro ft,,~derribado por el timon, qne lo hirió violentamente en I,¡ rejian escapular derooha; en Sil '~'lida el bram ,lcrecho sostuvo lodo el pesn dol cuerpo . .u di •• siguiente el enfermo fiJé CQnclllci<loal hospital, i hé aqní lo quc "o"n\(; <lel exiÍmen hecho cn 1" viHita dol 8 por la mañana. !Tomhre \'i¡roroHo, temperamento sangllÍne0, eonslitucion rohusta, buena ,,,lurí habitu:\1. Bn el miemhro superior derecho existe una \umefaccion con,¡,lcmb!\) de la !llano. do la mnfieca i de torlo el antcbrn7.o: esto último está "isihlementc (kforllle: la piel estn roja, c'lllimoMda; en algllllo;r punc{)s de la "ara postcrior del carpo la epidérmi" est<, levantada. Vn exámen mas l'rofun,in permite (\¡>scuhrir unn fract:llm simplo del eúbito, situad" R !:Icentímetros '(i' In eHtremiclad inlul'Íor de ('stc hucso. r,n. rcjion eseapnlnr deree·ha est~ hinchadn, i al nivel de la espina del (IlnOplalo exi~te llnR herida eOlltusa, irrc~nlal·. de 2 i~centímetros de esten~i(lTJ. ron el frJlldo de la cual se ve una porc;on de la piel mortitic.'lda: el dolor es Este libro fue Digitalizado Por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República,Colombia 55 iUlIi vi.·o eu este ¡HlutO, se e:<lÍl'ude a la rL~ioll ¿uilar (lt;recha i lÍc-;;! ju.- lados del pecho. El estado jeneral eR satisfllClorio: llalla d.1 fi(,bre, la h:llgua está bUéna, Catnpl:lsmas luudnniz:ldaR Hu\;rl' la. p:=.:palda: el nntC'lll'f.lZO ('~ lH1L'~tu ~n_ hre eojiue.;; loeioues re8ol11tiva~. EL ~ pur la Hl¡l.Uana el <.10101'es sicmpr(' l:n1i y¡n¡ ('Tl la ('~paldl\ i (-[1 f-i lauo c1ereeho dé! t6rax, El mi~mo tratallliL'lllO. A las:) de la tanle el cnférmú ~o quvja dt' ~10 Lnbcr podido ('()nl(,f fin.: con díli<.'llltac!; espel'imeuta (,alumIJI'cs, rijiul:z C!I la~ W:\lltlíbllfas i 11,_,101'('5 é'!i la, rejiollcs frolltal i pariela!. _-\.la~ 8 de la noche ('1 enferwo eS atw'adu lit, UH \'i.)h:I't.O tri:;;mo-.Tt;i ..... T1c gOUlOSOeou g:otu~ de eloroformo, . EllO por la maiiana han ap:ll'\'rido tÚ'.k:::. h;.; f> Ín!l1mn.;; del tÚflr:{\: Ja. cahezn ••,t:i. fllertcnlCnte inclinada :íeia atra,,: ::1 nji"u autcl'ior dd e'll'llo (\:-irc.Íteusa: log estcrno-ma5toídeo'i h[tcPTl l1na :--;dida. ¡'ojJ>.:id,'ralilc: t¡du~ h;~ mlÍ~tll()K llel e!H~l1o r·stiln doloroso:.:. solJI'I~ tcld<) 10",:.:di: la r('jion posterior: c;;~.(: dolor se csticudc Úcia lo,,, lt)mo~; impf)~il)¡b!:ld i;l' t!ol,bl' d l'iH:llu i la l'cjivl: IIQrsal: la l,oca e~d.-entreabierta. ii\S H1:llHlibulil:3 (·,)tl!rilidas: la d('[!it~('iz)n .~ imposihle j la r('spirneiou difí¡'il: ¡ln~io:-:a, i'Q[\'!';1ltl y'Hk (li,;frngTl1útk-n: d pulso varía de no a 100 pUl8aciofi(,'~; la caru {',~l.ll'uhiert-a di:' ~1Hlol'l~:;;;" .:\ ¡Ilt~rntlo:>; irn~gt11flres i ba~tallto l:1l'f(O,::(,ll,t1Íl'rmo grita, i todo:i 8td lnÚsculos entran en una violenta ('olltracejoll. ¡"::-::n;:.: :H'(~;::-::'(J:-; estalleUl al~li~:;·:~ voces con solo tocar al enfermo .. ,Por ausencia tld scílor Yclp0nll, el 6('1101' ~fUll('·ojllzg'u el mso fl¡\·"r¡:¡'i,' al empleo del curar.:, recienteml'lltc pre('olliz:1'·¡o para t.·gt:l terriblo nf(:c-<-lurl por el ::;.euorVella: en su euml1Ui(':H'iul1 al Iu.;.;ti!dtn: i fC'l?lama elcullcur5'oJ,'l ~fior Yulpiull1 medie·o dc ll)s h()~pi(:tL}~. il. ."¡t!i:'ij h:\n ill~(,j¡nc!'pcrto en p! ('1);pleo do e::ita bl1statwia tóxic·;). !-:11:"i ill\'(,~tig'a('¡(¡],t.':=-; l!.'''¡ol('J.i¡(.'~!:-;, 1 lL.í,ecso coa uu:), lancota de' Ullft illCi:-:ioll l (":lltil:](,rr:) i rnl'dio media cld [m\zo iZ<jllif>rdo; i a In, 2 hora:; .¡:. !i¡,nut",; (le la tank, la. hcmorr;ljin, C-Ht;ícasi e0lltcnida! ~t.' (lc'jan ("I'~]' 1'1l la en L1 ¡,ti:':).: <'Ullllik>\'" ~lf'l'¡d¡l Jo:-; g'ota~ <10 ll!::l ae\10~n di.~ CUral"C: que l'llCi01'1';1 lIlt·dh, ~!lilí~Tnmo de c~t:l ;:';'1I:"~. lnnt'ia por ~otn. :\. las 2 i :j0 nlinntos ue la tnnlc se i~ltroduc(':1 do;.<nnc\":v; .~ot:t,. di' «1 mi.sma ,;olllcion, sin niu;:'lln resultado, "1 las 3 se haeo una 1I11cvaht'fi,la dI' 1 I'c'lllÍme'lro ¡medio I'n la rejion ":.ter~gl1porior del ttlr;¡x, a 3 etJntílll('rro~ ck·i;ajo d',~ ia d:\\'Í('l1:a izquk·rda. A las:3 i 15 minutos se itJtrodl1('o rn (':.;la.lllk\';¡ lwrida nna gota. dp- \:;;;1. ~)ll1ciOll soluciol.l ti'JO cDntieuú medio cClld.L:'WlilO d(· ('urare PI.I1'g;')t.l. _ A las;l i 25 minutos sc dl'j" ('''''1' ell la lJ"rida d~1 bruzo una gafa (h> ;:1 nueva i'olucion . .A la:::.H i :12 ulinutos so iutroduce nna l'1:11~\";l(tota de la mÍ:'lm1. 801nc-iOl, l'll J>\herida torácicn ... N"ingull r¿slIItauo: tle~uo ,,1 l'rindpio ,.Id tr"llluic-t1to se ha ('XGrn;n[\(w (~oncuidado el pl1l~o (le ;') en :; 111íI1Ht()~: 10:0-;ElIlit(·:-; (>~tt'C'mfl!-j llnn ~i<lo de ;;2 n 40 pulsGcioncR por miuuto. "\. laR 3 i 40 rnillnlos ;.c iutr(Hlllee en la l:crid,\ >id brazo U:1J.(rán¡;io ,"'_ l"nrar~,puro que I~('~;'-2 C'-cntígramos i nH~ll¡{J, , ' , N lllguna mC:JOl'l.l; los aecc't),;:' S(' lUll'l'I1! al ('(H").tr,'lt'!o. In:1S fr¡:(~t1('nt('~;, A la.~ ~i 20 ¡ninntos acce~(J lllni \'ioI01It'" ,A las 41 ú5 minutos so intrnd!we \lB ~r¡i!t\il() dI..' 1,¡Of.: <:l'Ilt:!t!':1mo:-; j },¡,,, (le curnrc puro Gn b honda torc¡r~¡':n. '. '. •1 las ñ i 12 minutos, con laj"l'iliga de illYl'edoll "n1Jcntánea sc inyet:t:(n, en el t·ejido celular de la rejion ~\lrra-cl>\<¡ieular del'c('hn, ~íne() !'(,tas fÍ •• ¡al:l 801uciQn <le C!lrnl'e~ conteniondo O,:::-r 20 t.l0 curare P(J!' g'l'nmf) de flg'_lf!" Este libro fue Digitalizado Por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República,Colombia -56.\. las 5 i 53 rninulDs, inyec<:ion, por el mismo proeeuimiento, de cinco Iluevas gotas uc la última solucion, en el tejiuo colular de la rejion supra-cla" vieular iZ(IUierua.· , )Tada uo mejoría; desde el principio del tratamiento no se ha podido con" seguir ninguna remision <:n las convulsiones tetánicas do los músculos del cuello; al contrario, el opistótonos es mas i mas pronunciado, i ataca la rejion lumbar; los accesos son lIlaR i maR frecuentes. A 'laR 8 so iUj'e<:tan cn el tejido celular de la rejion supra-clavieular izo ljuierda, ] 2 gotas do la última solucion. El estado del enfermo es llIa" i mn, grave; los accesos se suceden sin in. terrupeion; la intelijenein, hasta entónces intacta, comienza a turbarso; cada cuarto de hora sobrevienen aceCHOSIllui \'iolentos, i es nocesario sujotar al enfermo para impedir <¡uc se precipite fuera de su lecho; la respiracion es mas i mas ansiosa. ' Eu lill. a la~ 10 i J5 llIintltoH de ht no<:he el enfermo muere. En reH'úllIell, deH!le InR 2 i .[;; min~ltoR do la tarde, hastu lns 8 do la noche, ed decir, en ciu<:o horas ll1éuos IlIl <:uario. se han adlllillistrado al en/ormo, sea pn solu<:ion, sea en Sil e~ta'¡o físico nalllr:t1, 27 centí~rantos do ourllre; pero n·) debé creerHe <¡ue toda C,1a <:antidad ha sido absorbida: g'J pueden valuar la;; pérdidas en 7 eentígrnmos 1'01' lo llIén()s. :\sí, en suma, el enfermo ha absorlJido cerca de 20 eentí~ramos de curare, siu que se haya podido notar nin.~l1na mejoría. El 11 a las 7 de la mañana, se hace la autopsía: el cerebro está perfecta. mente sano; b necropsia no ha sido completa, porque el cadáver fué reclamado i saeado del :lnliteatro a lo mejor del tiempo. La herida de la rejion escaplllnr dere<:lta comunica con una fractura múltiple dél OInoplatv; la fosa sub-espiuo",\ est,[ dividida en tres fragmentos: las costillas están intactas." El señor Vulpiun dico (lue 01 curaro empleado on este caso era mui acti \"0, de tal ¡;uerto <1ue dos centígramos disueltos en 3 o 4 gotas de agua eran suficientes para matar UIl pel'ro en 4 horas i media. Agrega que el insuceso del anterior tratamiento no es un motivo para proscrihir toda IlUe\'a tentativa del mi;:;\110 jénero; que los espcl'imentadore" que quieran ensayar el eUnlre debcn ponerse en las mismas condiciones del sefíor Vella; que h aplicacion del cural'e sobre la herida eau¡;ante del tétano tiene tal vez una influencia mlli gmnde en los resultados, aplicarion que no se hizo en el caso últimamente referido; que el valor de este nlleyo l\}ente terap{~lIticono puede j nzgarse definitivamente ¡;ino cuando los ensayos se hayan multiplicado; i on fin, ("!ucen adelante solamente una investigacion empírica prlJducirá algnnos re~lllta<los proycchos08 a la terapéutica, peN <¡ueno :;e puede prever si es al tratamiento del tétano " al de eual(lllier otra enfermedad. que estos resultados podZ'lÍn aplicarse .. Para tCl'minar este punto diré que el señor }'ollin eolllunic/¡ a la Sociedad de cirujía <le Paris, en la sesion del Este libro fue Digitalizado Por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República,Colombia -57- 9 de noviembre de 1859, una obscl',acion de tétano tratado sin suceso por el curare. Esta obsGrvacion ha 8idocali· ficada de preciosa, tantu por la naturaleza aguda 1 hicll marcada del tétano, cuanto por(luGla aplieacion del curare se hizo con todaB 1M condiciollc:; apetd~ibles. G.-Se sabe que los indios primiti V <1'; nu acostumbraban vestirse. SCf,"1lTI el padre Gumilla, tampOéo se vestían los salvajes del Orinoco: e11 slI tiempo, los hombrcs se ponian en larejion pudenda un pedazo de lienzo que l1amabulI unos [!uayuco, otros f/lttl/'Pumaj las nllljcl'es, 1111013 delantaliHos matizados con cuentas de y¡clrio, i otrn8 se cuhrian C0n un pedazo de hebras de l'l-u1"icln "a ll1odo de una li bm de cánamo sue1to." Actualmente lIl11(;hw,; tribus conservan l~. misma desnudez. Lo rcstante del cuel'po lo adornahan los indio;; Ovil pilltaras i jel'oglífieos, mas o mimos estm,agantes, mas o méll(i~ modificados, i dibujados con nn esmero {l1'0J?orcional a li1. mayor o menor solemnitlad de lns eircnustancJas. Estas pin- turas se las haeiau conjugos vcjctalcs carg-lldos de priJl(:iph,~ resin0808 O gomosos, prupio;; para pn'Sel'\'1l1' la accíon de los meteuro:;, i sobre todo, (;011 la piel contra ira la picwl nra de los inseeto;; veneno!>!),;. Los colores mas vÍ\'OS i prOIlIlIlCi}t(los eran mas de ,;\1 agrado, i por esto el roju cra el que llamaba de prcfcrclli'ia au atcncion. Les gustaba hacerlo contrastar con un color sombrío. Se lo proporcionaban cstl'llycndo la parte pulposa. 9.ue cubre los (!Tan~¡.;(lellfdwt~: o bija (bi;¡:a ol'é~lallil,L.) ; o bIen, preparando biqílmna dl/ca, 1lallwdn e/uca por los indios, i descl'iht i figurada por 11umboldt i Bonplan<1 (Y. Planf,a3 mquin-octiale8, t. 1, p. 107). "1-os naturales, dicen estos sabios, saean de sus hoja:;, por la maeeracion en el agua i al baño-maría, una materia cuyo color es casi semejante al del OCI'C calcinado, (1 de lll,l rojo de ladrillo." Segun nuestro compatriota sofio!'Triana. se recojen las hojas cnando comienzan a enrojecerse, o cuando hall adquirido lllla completa madurez, i se les _deja secar. En seg'nida se pOllcn en ulla ('it'rta clllltidad de ag'lia, i se les somete a un fuerte calur, o al llltfio-muría, si e" posible. Luego que el agua se ha apoderado de la materia colorante,· se le agregan alg\lllos pellazos de eortezade arrayan, nJ)mbre "$Iuedesignll. divel'f\a¡.; plantas de los .iénc- ros m/Y1yyia i e~tgenia. El arraya'll hace (kpOllCI' la féculf\ Este libro fue Digitalizado Por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República,Colombia -:"¡,'lj'Gja, (lile se decanta i se hace secar al sol, parn fabricar Ja,; llUlas o masas de diferente magnitud que se encuentran en el (·omercio. Preparada así la dica, se conserva ll1ui hien, i se trasporta fácilmente en frascos tapados o en ca.ias (le hierro hlunco (V. TmANA, ¡Vote su/' la chica. París, 18;)8, p. 3 ). La cll1.:c(¿ dilllicla en agua sirve a la tribu de los carioe.~ para cl1I'ojecerse toda la cabeza; los saliba8 se ell hren con ('!la to(lo el cuerpo; ]02< (itmna.c{)8 1'e ]a ponen en la cara, i se hacen manchas azuladas en el pecho i los brazos con el t'ruto_ del f(e!dpa ame¡'icana: "El emple~ de la olrica" ~icc d sellOI' 'lnan:t, en las antiguas pohlacIOnes de Amel'lca, ·!el¡iC¡ser mni .ienoral e inveterado, porque los restos de es:'il,~ !,oJ¡laciones di,;persadas, <r nc hal}itan las sel vas yírjcnes donde han pudido resistí¡' con suceso al yngo español, todavía hacen uso dc cste colorante, como sus predecesoresJ llO obstante que csos ro"t05 se mantienen separados, i qU{l jamas lla hahido comnnieaeion entre ellos. Los cunas i no<Ínam.rl8 del lado del Pacífíeo, i los ,jíramenaR i apíayes de las riberas del .Meta. hacen ignalmente 11S0de ella. apesar de ('star separado,; po!' la eordilJera de los .Andes, J,a plan. til como qnc ha sido entro ollas nn objeto de cultura espe(:ia1. Lo (l~le p.areee ]ll:Ol.lf\l·lo,es, que est~ ,diseminada por tl)do el pa¡s (1\ neva hrallada), 1 esta facI]ulad de acomodarse a todos los tenclln;; i de aclimatarse en las mas opuest.as c0ndieioncs de vejetacion, creemos que no se encuentra "ino en a(luellas plantas por largo tiempo somtJtidas a la cultura. La frecllencia de la cllicr¿ en estas rc;iioncs, así como In. de otras plantas que los indios emplean hahitualmente, es on Jluestl'O coneepto el indicio cierto de la existencia de una antip:na ]}oblacion indíjena destruida despues de la cOll(plista," .Los indios Rometidos alréjimen civil, aunque !la haeen .\!a nso de la cllim para pintarse el cnerpo, la cmplean sinmnbargo pnm tefíir dife¡'clltcs manllfacturas qne fahrican ('<Jllcafías i fibras y(~jetales, a las cuales saben dar matices yariados, cOlllb lo,; eedazus i cestas de Pandi i Cundai, las ]¡:nnae~s de Casanarc i d<'l Magdalena, las mochilas de ti'lliC, &." Elllplean la dt'coceion de las hojas, en la cmll slllllel:icll los objeto:') durante el tiempo nccesari" para obtener la intensidad de color que quieren. darles. Al prinl:ipio el color es bello i bastllnte subido, pero luego plCrde Este libro fue Digitalizado Por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República,Colombia -- ;j9 - alO'o de e8tas étlalidadcs, como sucede :t Jl1IH;l..tU8 colun',; de 0l1jen vejeta!. Lu:; indios de Pasto i Till13.u:1 cyit.an ~:;tlt pérdid~ éombimmdo In chica con re~illl~. E:;te (;Oll1plIe~t(! lo aphcan soore todo 3.1 urnato d(l oh,leto:-; de madera: ll'd de Ull color rojo subido, i resi:;te t:\1Ito a la aeeioll de 1\1~ ácidos como a la del aire ¡ del tielllpo. El s(;]1or }larck, cÓmml ingl{~¡; l:n anos pa»ado8, ap1i(·¡' la cMw a la pintura, e hizo conocer e:-;ta sn"taIll'ia en 1,{)]!dres; pero, hedHts alguna:; espericIl<:ias en el algodon, la laml, la seda, el éáñalno, \.\:-.",se ahallllonÚ su empleo, P(ll' falta de mediu:,; de fijar el (~()l(jr. t"i alguna vez i;() llega :¡ zanjar este inC'oI1Hlnientc, la ckir:a :"cl'á uno de J1\le~tro" Ilias importantl'" producto,; e01llcl'eialL'", El seí1ór TriallH es de CUllcepto lj lIe el o!J:;t(wu!o CllCOllt1"<\do en esta" l.,;periencías proviene de In insolnbílidad 11! la ckicrt en el :lgua, en el alcobol, ]a" soluciones alca1ina~ i otros vehículo:> de las materias colurantcs. ,; Esta ms.olllbilidlld, dice, que la d~jlt ("JI suspcnsion en el1íqnido i qlll' impide la reaccioIl en virtwl de la cnalla materia coloranh' penetra las fihras, depende de la manera de prepararla. Es probaole que lit adicion de cortcza do (lí'j'({yan en ellirpl1do rojizo, haga proeipitar, C01\ la materia colorante, la park resinosn. de la planta, prod ueiendo a:=;íun eUUlpucsto imu1uble. Esta idei1. se apoya en el hecho \le (lHe los indio:; 01,tienen tinturas bl1.stante buenas i durablcs, por el emplei' directo de las hojas en lugar del estrado comercia1. RUCll(; seria lmecr ensayos con la h(~ja de la ph\1lta, operanrlu ('0IllO los indíjenas lo hacen COIl buen exito, l~lIallTlellte :-l' podria, si~uiBndo la idea que sujiel'c la misma. pl'cparal':Íoll. empapar las telas u fihras que se qniel'an teñir, en nna (kúoccion de corteza de arraya7l, (mtes dc ¡;ometerlas l1. h iní!uencilL del líqnido preparado con las hoja.." de ('l¡lea, maceradas o en dccoecíon. Pudiera scr que el agua de coro teza de arrayan hicicse p¡'ccipital' en el tejíuV' mi¡;;mQ la materia colorante roja, i que de esta IIlllnera ~e (rhtu\'il'~l' la fijeza de color que se desea." La fécula de cM('(~ empleada en la pintura al óleo, da Ull eulo!' hastante bello qne ya perdicndo su intensidad con el tiempo . .Apesar de e¡;to, scgun el sen~H' Tril1llll., al$Uno8 ('(1lIocedorcs atribuyen a la c/i ¡ea el hcllo colorido d.e los ropajes que se adn;iru en los cuadros de V ásqllez. " I.Ja ddctT, dice el mismo escritor. tiene algunas propio- Este libro fue Digitalizado Por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República,Colombia -60.lades medicinales de que se podria sacar provccho. Se le emplea, eOl11ootras especies de la misma familia, en los casos de algunas afecciones sifilíticas, i esto proviene quizá de la cualidad astrinjente que estas plantas poseen. La fécula diluida en agua se usa como diaforético en el Orinoco, como lo testifica el señor Bonpland. El señor Manuel Qmjano, médico de Bogotá, me ha asegurado haber curado con la cJ¿ica algunas pústulas de la sutura de los labios, de oríjcn venéreo segull él. Nos inclinamos a creer que la capa de chicrt que cubre a manera de ornamento el cuerpo dcsnudo del indio, espnesto a todas las intemperies de un clima, ora ardiente, ora húmedo, ora tempestuoso, í que obra por sus propiedades a la vez cmolientes i astrinjentes, contribuye a conservar a la piel el gl'ado de suavidad, de elasticidad i de frescor que le cs necesaria. Si e::;toes así, la fécula de cMclt debe ser mui útil en muchas ci.l'cunstancias para las enfermedades de la piel." . H.-La palmera llamada kunthia nwntana (V. Planta rEquill{)ctiales, t. II, p. 120) ha sido estimada por los indios de Barbacoas como nn remedio mas a,ctivo que el jugo del famoso guaco contra la mordednra de las serpientes venenosas. Se lc llama calla de la 1Jíóol'a, o ca¡w, de San Pabw_ El primero de estos nomores le viene de SllSpropiedades medicinales; el segundo recuerda el lugar donde vejeta cou mas aoundan(',ia. "La·c6bña de, la 'lYÍoora,. dicen Ilumboldt i Bonpland, ofrece el primer ejemplo de una propiedad antivenellosa descubierta en una palmera." Esta palmera tiene 7 a 8 centímetros de altura, i su estructura ::;nparece a la de la éafía de azúcar. Contiene un jugo a,bundante i de un sabor lijeramente azucarado; jugo IIue consern1 el tronco, aun hecho pedazos, durante algunos me¡.;cs.El enfermo masca 108 paquetes de fibras leñosas i tra~a eljug'o, a,la vez que se aplica soore la herida el tejido fibroso humedecido con saliva. " Uno se pregunta, a,ñaden los autores supramcncionados, qué casualidad puede haber conducido a los hombres a un descubrimiento tan importante, i se asombra de la sagacidad de los indíj<mas qllcJ1an adivinado que el tallo leñoso, casi insípido, de una pcqneila palmera, encierra un poderOBOantIdoto." l.-Los indios del Orinoco conocían el CofJ08 outY1'acea, con cuyas hojas cubrían todas sus cabañas, i la bignonia Este libro fue Digitalizado Por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República,Colombia -61;;¡.pellidadajacal'anda obtusifolia, cuya lWlllcl'U blanca, dulce i flexible empleaban CIl sus piraguas, i les scrvia para hacer SU8 cunaletos o remos. x"V Tales son los datos nU\8 notahlcs <1uehe podido adquiri,' sobre la botánica indíjcna. Distante cstoi (le creer que sean los únicos quc haya, pues apesar del deplorahle abandono con que se han mirado las alltigii.edadcs i cOlloeimicnto8 de los aboríjenes, no tengo la persuadon de hahl'r pasado revista a tO(las las indagacioIlcs heehas i C'ontiadas a la im· prontu por JlUciStros antepasados. TUIllpoco be me oculta que esta partc (k mi Memoria po(]ria l':itCIll]CI':il'lllucho mas, haciendo Ull inventario ddcniJo de las plantas oleráceas de los indíjenas, algunas de las cnales form:t11 l!Oi el principal sustento de la poblacion ci ,'ilizada qne ocupa el tcrritorio donde aquello;; moraban a tiempu de la COllt¡llista; C011l0 talIlhien enumerando algunos de los n~ctal('s empleado:;: por ellos en la tintura, ell la cOl1strucciol\ de sus embarcaciones i dc SUiShogares i ea la manuf:wtlll'n de ;;lISutensilios domé"ticos. Empero, me Jt(. propllcsto apl'nn¡:; tocm' aquello", puntos de fin hi"toria natllrall1ll~llO'; (~Ol]()('idU:i('ntre llOSOtras, mas averiguados por la eiclll:Í:t i mas tl'a;;cclldcntalt~:;, a fin l1e escitar el celo cicntífico de ll1H~;;tTOS compatriotas en f'aYOl'de los conocimientos botánicos de lOí; indios, puc~ la ci \,i1izaeÍon debe aprcF11l'al'iJe a Siwar de la oscuridad de los desiertos, a cualquiera costa, los tesoros intelectuales que aun quedan de nna raza en otro tiempo feliz, desgra(·iada hoi i condenarla a desaparecer, tal HZ no mni tarde, de la superficie de nuestro lllnncta. Sc concibe sin c1i:ficutad que habiendo pasado la,.pl"ímitiY:R poblacion indíjena por calamitosa¡; viciFitudes) hasta tener que refuj iar~e en las florestas l¡¡¡.lJía.¡;:par:l premuniJ'S€' contra.:lapersecuslOn de los colonos, los mdlofl han C;;~)Crimenta.do una degradacioll profunda qne tanto ha debIdu desVirtuar su parte orgánica como eelipsar sn ser espiritual. Al tiempo de la conquista formaban sociedadeiS regularmente organizadas; hoi son hordas errantes por las soledades de nuestras densas selva¡.;. En esta transicion, todo ha declinado : su fuerza, su intelijencia i sus sentimientos. 1apesal' de esta exinanicionde todas sus facultades,sou dueños de conocimientos preciosos que si entraran cn el dominio de Este libro fue Digitalizado Por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República,Colombia -G2llé.::itracicw:ia la l'llriquccl'rian p¡·ofusamclltc. La materia médica, sohrc todo, haria adquisicioncs de mucha importancia; i cscasado e;; decir' (111(' la materia médica cs la rama lilas interesante de la eicncia 11llll1anll, puesto <lile pemar l~lrlos mcdios de prolongal' lo,; dias del hombre sobre la tierra cs pensar cn e1lllasjigantcsco paso de la ci,-ilizaciun. Es pel'lllitido sospeelwr <ll1C tal YCZlos indios reducidos a la vida ci vil, han Yenido rcYelaJl(lo a los colonos cspaíiolcs sns secretos tcrapéuticos mas comunes i trivialcil, i que es de a<lu~ que IJl'()Yiene prol>al>lemcnte la multitud de medicamentos n;ietales que forman hoi la materia m{ldica de !luestl'O pueblo pobre p ignol'alltc. Como quiera q ne esto .:;(;',},10 cierto cs (l1lC exi::itell lílllchas plantas, principalíllentE' herbúceas i Sal'lllentosas, (]HC ticnen ad<luirida grande reputacion IIIcdiciual entre la jellte de los campos, i la cicncia debe pedirlcs cuenta de esa I'epntaeion, por medio <le:m:ilisis <luímicos i de e:;perimentos formales que den n. eol\O(:er si es verdad quc gozan de virtúd curativa, o si su erédito dcpende de la preocnpacion no mas. Los médicosdel pais, en su mayoria, no se han fijado hasta ahora sobre l'..':ito;al contrario, lum dL'sdciiado los remedios populare~, ¡ aun 110 ha sido mI'O (lile ~e mofen de los curanderos indíjellas,. sin fl(Jyertir que casi todas las aplieaeiones Íú'rapéuricas de lo;,:ajelltes lIatul'ale,.; han sido empíricas en sn prinL"¡pio, i que mucho;; de los remedios de mas poderosa aétiyidad de (P1Cal prC6ellte se gloria la ciencia, han sido ántes !','medios elllpÍricos de llIlcst!'.) pueblo, acojidos con entllsiaslllo i ]lI'c<~onizado:;des1'llCS 1'01'la sabiduría de ultramar. I hien, "i la mayor 1'arte de los pocos adelantos que ha hL-Chola materia lll('dica en los {dtirnos siglos los debe a h ~\..mÓ¡'ien, apesar' de que la vcjctadon multímoda de los .\.ndes pel'llulIlcec ell su mp,ior porcion inesplorada e inesplotada, ¿ 110 es justo creer q ne Dios parece reservar a la América el honor de lenmta¡' la ¡;iencia de la salud i dé la vida a lln alto punto de poder i de verdad? I el interes llIaterial, el estíu11llo de la gloria, el sentimiento patri6tico, la dignidad de nue¡.;tra sangre, el amor a la humanidad, t,)(los los' rC;;('l'tes <plC 111llC'-enel espíritu i el COraZtlll ¿ no 6L?I',tnsufieicutes para impulsamos a cooperar a la obra del ]>ro "'reso uni vcr¡.;al con todos 108recursos que la naturaleza Il();; la distribuido ~ ;J 1 Este libro fue Digitalizado Por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República,Colombia -- 63 - J,A. ESPEDlCION BOTÁNICA. 1 Despues de afanarme en buscar las borradas huellas de los botanieos indíjenas, sin poder encontrar lIl11S que Hno que otro rastro de su inncg-able sabel', entro con placer en un campo mas vasto i fecuÚdo, a la maner¡~ qne el herbú';zadlll' entusiasta colocado sobre 1:1 eillll~ de una altura ~stéril coronada solamente por algunos pálidos matices de verdor, aballClona rcgocijndo la emincncia. al divisar al pié de ella ulla csplanada frondosa, florida i llena de lozanía. Bello 1)8 el camino qlW nos resta recorrer. El gohierno espanol hizu mucho por las ciencias naturales en 108 últi· mas anos de Sll mando, tanto cn sus pusesiones del lado sIl{, como dcllado acá delmlte, si hien 08 incuestionable qne con esto no hacia mas que obedecer al espÍ1'itu del tiempo, pue.s .lamas se .ha culti~:ado !~ hotánica, en El~ropa con n~lls paslOn que a ¡mcs del s¡gl¡, X V 111. "1< lures 1 plantas, (hce CéRar CantÚ, (Lne se crian hujo paralelos mui lejanos, i con G8peeiulidad cn la Australia, cmi(lueeian nuestras sehas i llucstros jardill06; i la llegada de un nuevo arbusto o de llna tior se festejaba tanto como en otra época la de los galeones cargados de oro mejicano." Frutos de esa pasion por las plantas fucron las J~¡;pedidones botánie:l,s creadas por ltt eOl'te de Madrid, en d Pe¡"Ú, Méjico, Nneva Granada i Filipinas; establecimientos 'lue aunquc teuian por ob,juto ieneral el estudio de todos los ramos de la naturaleza física, debian contracrse en particular a l!i coleccioll, dibujo, taxonomía, usos, fitonilIlia i fitografía de In, vejetacion de sus respectivos territorios. La. ,le la Nueva (frailada, cuya historia me propongo referir, trabajÓ con magnífico éxito hasta el ailo de 1810, en que l.)(:mrricron los acontecimimltos que nos separaron de la tntula del gohiel'l1o c,spano!. Las tempeiitades que desató 1n. magna revolncion de la. independencia, no solo suspendieron sns operaciones, SillO que incluJeron en la universal dev1l8tacion del pai8 ca&i tr;.d08 los frutos de la dilatada labor emprcndida hastaaquelentónces con el :fin de formar la historia natural de esta rejion; mas, apCBar de los dcsass••••••••••D. b';(', f) Este libro fue Digitalizado Por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República,Colombia -64tres q\lc de;:;trnycron muchos trabajos, de las peripecias .que hicieron nmlograr otros i de hLS violencias que nos privaron del conocimiento_de muchos hechos preciosos '1 de mnclws ideas útiles sepultadas en jérmen con 10B cerebros do los mas ilustres mártires de la independencia, el corazon se enorgullece al narrar las glorias de la cienc!u en nuestra patria, i el espu'itn goza do una alegria ~meJanto a la del que, condenado a contemplar largo tiempo las sombras de la oscuridad, percibe al fin con libertad las dclieias do la luz. lI. La historia imparcial tenclr{¡que decir sicmpre, cn honn¡ del gobierno español i delbuen carácter de los granadinos, que el tiempu trascurrido desde el segundo terdo del siglo pasado hasta el dia de IIuestra ernaocipaeion política, forma una época gloriosa pam el estudio de las {'iencÍas útiles en ll\leBtro pais. En honra del gobierno espafíol, porque fué en csto lapso de tiempo que permitió los estudios serios i prádicos, i ausilió con mano fuerte las cmpresas científicas; cuando (mtes, al contrario, habia puesto todos sus conatos en mantener al pueblo sumido en la mas ciega ignorancia, oprimido i embaucado en las mas groseras preocupaciones. En honra de 108 granadino,>,porque no obstante el desprecio que por ellos manifestaba el gobierno colonial; no obstante la tenebrosa i letal influencia de la Inquisieion, eterna vergiicnza de la historia de España; 110 obstante las prohibiciones comerciales e induBtriales i todas las trabas i dificultades que la ferrea· tiranía habia cstablecido para embarazar el Ylwlode la intelijencia americana, la Colonia pobre, subyugada, duramente esclavizada, brotó, tan pronto como las cadenas de la servidumbre se destemplaron u~ poco, hombres admirables que asombraron al mundo con sus luccb i sus virtudes relevantes. Un virei que ya he tenido ocasion de mencionar, el seUor MessÍa de la Zerda, hombre de integ}"idad i de eonsagracion al trabajo, nombrado por Cárlosill i fosesionado del mando el 24: de febrero de 1761, fué el que a mismo tiempo que marcó el principio de esta época feliz para las cienCIas natura.les,echo tambien lOBfundamentosdenuestra independencia nacional. Antes que las gra.ndeucvolucioncB aparez- Este libro fue Digitalizado Por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República,Colombia - ti!> - ~anen forma depronnnci~lllientos i de hatall:u:;, existen cn la ca.beza de los hombres de jonio en forma de ideas, así eOD\I) en un imperceptible grano de p<,len se contiencn en forma de rudimentos todos los materiales orgánicos de un árbol corpulento. Ademas, Dios ha e¡:¡talilecido en SUR ohras un encadcnamiento de cansas i efecto" tan inflexihle, tan rigoroso, \1\le nada pueden contra él todas la" fncrza.s del hombre. Mucha" veces se ponen los medios que se ('roon huenO!; para llegar a un tin determinado, i re;;l1ha qne se va a parar al fin upucsto, tal '-ez al t{~rmillo (le <¡ue (1ueriamos alejarnos nUlS i mas. Por otra parte... 1\JlU idea, una verdae! envnehc en sí mislIla una fllerza de jel"lllillacion infinitamente mas po(lerosa (pie la volulltad llUlllana;-por eso no es raro que las revoluciones sean oura de 110mores (1ne no han pensado cn ello, como no lo es que traspaHen cllímitc que 6U¡.: caudillos han querido asigllarles de Hntemano. El sefior }'fessÍi\ de la Zerda trajo de España, en compañía ~llya, un hombre de intelijcllcia i de coraZOll, cuya grande alma I'cuo~llba (k cioncia j de amor a la .América. Así fnÚ que el virei, tal vez sin nperei1yil·se de las eonsceueneias !)ue hahria de produeir la perm:men<:Ía de IDI Babio cn medio de un pueblo ignorante, aídado, de8potizado, pero poseido de ener:jía i fuerza illtelcctnallat~nte, pnso e,)Jl es() solo la hase de la rejeneracion moral i social de la X ueva Granada. Ese gran !Sahio 01':\ el doctor José Celestino Mútis. tiI N aeido en la ciudad de Cádiz el 6 de octu hro de 1732, hizo allí BUS estudios de gramática latina, matemáticas, fi- losofía i parte de teolojía. Una inclinacion precoz a la 8(1ledad i a los libros habia augurado ya los rápidos progreso!; que hizo en estos ramos, concluidos los cuales vistió la beca del real Colújio de San Fel'llando de aqoolla misma ciudad, con el fin de estudiar anatomía, cirnjía i medicina practica; hab'iendo pasado despues a la ciudad de Sevilla. a completar sus conodmientos i recibir los grados correspondientes. Trasladado a Madrid en 1757, rcjentó allí la clase de anatomía cn ealidad de profesor suplente. Tres aí'íos permaneció en la capital de España, mostrando siempre mas gusto por las escUl'Biones botánicag- que por la visita de los - Este libro fue Digitalizado Por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República,Colombia -66hospitales; i fllé entÓnces qne tuvo la fortuna de hacerse conocer del célebre naturalista de Upsala, quicn deseaba poseer en BUS hcrbarios las planta;; de la. pL'Ilínsnla. I"a corte en cste tiempo emprendía mandar algunos jóvenes de gran talento i apHcaeion al estudio, a Paris, Lóndres, Leyden i Bolouía, para que se perfeccionaran en las ciencias naturales. Lno de los cscojidos era Mútis. j Qué consideraciones, qué distinciones no le hubieran tributado los hombres ilustrados en el demnso de ese viaje! ¡Qué no hubiera alH·endido con esa disposicion superior i ese amor dicidido por las ciencias qne lo l~levaban tan arriba del nivel comUll de la IlUmalli<ladt j Qué serie continua de agradables impresiones, de muelles recreos, de honestos goces científicos i soeiales no se le esperaba! ' Pero' ocurri¡l a la sazon el nombramiento del señor Mcssía de la Zerda para virei del N ue\"o Reino de Granada; i como este caballero era un personaje eminente de la nobleza i de la milicia cB}luñola,gran cruz de la órden de San Juan, necesitaba un médico de instruccion a quien confiar su salud en el dilatado viaje que iba a tener. "])cspucs de lal'~as meditaciones i consultas, recayó la eleccion sobro el,lóven Mútis. Por una parte se le presentaba UIla carrera brillante i ~loriosa; por la otra una serie de trabajos, un )aisoscuro 1 colonial. :Muchos días balanceó en medio de a incertidumbre, i muchas semanas pasaron ántes de resolverse. El silcncio, la paz, los bosques de la América tuvieron mas atractivos sobre Sil corazon que la gundeza i la pompa de las cortes de EUI'opa. lJn plan atrevido i sabio 6C presenta a sus ojos. I,as selvas de la América, la ¡;oberbia vejetadoIl de los trÓpicos i del ecuador, la oscuridad i la ignoralwia de las ricas producciones del N IWYO Continente, le resolvieron a recorrer i a examinar esta preciosa poreion de la monarquía. Aquel mundo, se deda, dsitado rápidamente por Fellillée, Plumier, Loeiling i otros poco,; botunicos, yace hasta hoi desconocido: sus riquczas son inmensas. I Qué call1l?otan vasto para inundar de conocimientos a la Europa, 1 para coronarme de gloria! "En 1760 desembarcó en Cal'tajena de Indias, año para siempre memorable en los fastos de nuestros conocimientos, i año en q ne comenzaron a rayar 1ll.Sciencias útiles sobre nuestro horizonte. Apénas pisó las costas de la N lleva Granada, comenzó a colectar sus amadll.S plan- l Este libro fue Digitalizado Por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República,Colombia -67tas i a dCf\cribirla!l. (Hizo larga. man8i~)n en Cartl\jen~ Turbaeo i Il(lnda). " Establecido en Bogotá (alío de 17Gl), se eonsagró con (le la vejetadoll de la cima de 108 Andes, i al consuelo de lo,,;ellfcrmos. Entónces estableció correspondencia con m ndlO.:i sabios de la Europa; t->ntónces remitia colecciones i di~ci1os qne le merecieron los elojios mas li;:onjeros ; entDnees se In asociÓ a la Academirt de Estockolmo i a otras soeiedades {le aquella parte toda!> f>US fUeI'Y.ll.s al r('eonocimiento (jel mundo. "Deseoso de difundir sns ('ono('imicntos, tomó ti. su cargo la ensei1anza de las matemáticas en el COI(diO mayor de N nestra Senora del R()~mrio, de (fiJe oUtll vo real aprobaeion (tomÓ poscsion (le la d.tedm d día 13 de marzo de 17(;1). En aquella épo<:a ;:0 comenzÓ a \lir cn c1Ueino que la tierra jiralm sobre su eje i al rcdedor del sol, i que se debia poner cn el número· de los planetas. i Ouánt-(;to) dis- gustos le CO¡;¡tó persuadimos esta YOrfhd eaIMal en 11\ l\S- trono mía. ! A pesar de la obstinaciml de Iluo~tr()s padre~, se formaron muchos jÚvcncs, i s\' difnndiel"Oll los conocimientos astl'()nÚmicos." (Y. Semanario de lit jVucva (;1VJr nada, artículo nccro](,jieú). El haron de IIumholdt hahlnndo sohre elite incidente(je la.v!da. d.c MÚtis, dico: .• , Xo s}n }1H\lIietud vieron 10$ do1111111Ca1106 (lUO lasl¿erf;Jw8 de CO]JtJ'nu'o, ya profesadas por Bou,puer, Hollin i La Condamine cn Quito, penetraban en la N ueva Granada; pewel "irei pl'Otcjia :1 :Mútis contra los reliji(}sos, qne (pierÍ:m 'lile la tier·ra p{mnaneciem inmóvil. Par lo denll\B, poco a poco fueron acostumbrándose a lo qlic ellos apellidaban aún las k¡pó~ de lfJ, nue'!.'tJ jiIo8qfia .. ,j IY Las líneas necrolóji(~as anteriormente copiadas, línea..~ tienl.a8, trazadas entre jcmidos i lágrimas, dlctadas por la admiroeion i el dolor imnediatament<l de;:;pues del faUooílltiento de :Múti~, contiulCn BU "ida en compendio hasta 1772. En este aíJo dejÓ de mandar su protector el vireí Zerda., qne hahia. gobcmado con acierto i buenos deeeo8, í sostenido su dignida.d con entereza, dejando el BoHo el 31 de noviembrc de 17'72 para regresar a la península. Zerda invitó a Mútis a que se "ti} viera con él, in~rponÍcnd() la ano Este libro fue Digitalizado Por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República,Colombia -68tigua amistad que lo,; unia, reeord:mdole las grándezas de la metrópoli, e;;citándole los afectos do la patria i de la familia, ponderándole los halagoR de la civilizacion i aguijoneando su ambicion con los favon.'S que le prodig-aria el gobierno en atencÍoll a su fama i talento; pero Mútis se nogÓ i -resolvió vidr i morir aquí. "¡Tanto amaba a la América, a su;; selvas i a su profunda tranquilidad! " En el mismo afío en que Zerda partió para.Espana, i a 108 cuarenta de edad, Mútis, unido ya L'Strechamcnte al Autor de la creaeion por la contemplacion de sus maravillas i por su despreJlClimicnto de la::; pasiones que ajitan al COll1un de nuestro lin¡~ie, quiso cm;anehar Hlas su amor i su adoracion a Dio,., i rceihi{¡ las sagradas Órdenes del sacerdacio católico. Desde cnt{¡necs sns <lias se dl~li7.aron maniOameute por diez alios, dividiendo ¡;IlRhoras entro el altar i la oracion por una parte, i la natllmleza i los pobrcs doliClltes por otra. Era ¡;ucl'rdotc de la ciencia i de la humanidad paciente, pero <{neria tambien tener el 8acerdocio espiritual; i una vez conseguido, lo desempenÓ con tanta pureza i exactitud como había llenado los otros. :El In'c8bitcrado y íno a l:;er el complemento de BUS uRpiraciones; i "1 tardó en. adoptado fu{~por<pw, como hombre inmaculado i temeroso de j)ios, no queria (;&po]\erlo a que la voz clcl deber fuese ahogada por los tumultos dc la fogosa jun:mtud. Pero no se crea (Ino el altar disminuyó su fervor por la:; ciencias; lé.ios de c~o, parcce que lo avivÓ mas i mas. L06 oficios odesiÚstico6 eran solamente el recreo de su existencia; todos los dias deda misa, por lo regular en las jglesias de ~al1ta CJam i Santa Jc¡·trúdis; el breviario era sn arpa: cuando el tedio corroia 811 corazoIl, o ¡;US micmbroB estaban can¡;udo;; del trabajo, leia himnos relijiosos; lma que otJ·a \'ez administraha el sacro viático al agonizante, ponia el Ílleo al nífío o al ne(¡fito, o santificaba onll sn abi;()lllcioll la conciencia del pecador arrepentido. Mas en cmmto a sus horas vcrdaderamente activas, todas las pasaba en el Colcj ia, en 108bosques i montañ!\s, en su bufete, úl! su oficina de farmacia, o el! la cahecera de los enfermos. Durante c;;os diez anos hizo dos eseursiOnl'R lejanas. Una al Norte de la Hepúlllica, en que especialmcnte se dedicó a reconocer la v~jetacion de la antigua provincia de Pamplona. "1<'u6 en la :Montuosa, dice Ilumboldt, que eOlllenzo BU gran :Flora de la JS'lleya Granada." La otra. 1& Este libro fue Digitalizado Por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República,Colombia -69hizo por etterritorio de la cstinguida provincia de :Mari9.uita, cuyos ricos bosques ejercieron siempre mncho atractIVO en su intelijencia. Asimismo fné en eBUt {~poca.de su vida que descubrió i clasificó varias especies de cinchana; en 1772 reconoció las primeras. v En 17S3 tomÓ la's riendas del gobierno el arzobispo don AntDnlo Oaballero i GÓngora. Virei intelijcnte, activo e interesado en el adelanto de los pnchlml <~()ntc[¡idos en su jurisdieeion, solicitÓ de la corte española qne enviam dOl:! mineralojistas háhiles para fomcntar ellahúrét) do las minas del pais, favoreció 111. rednccion de ó;ahajes i la colonizacion, i i'1)l'mÓb~.io Sil respoll8abilidad la Espedicion botáni. ea, de 1a cual nombró diloector al sahio :}Iútiso El arzobispovirei puso en conocimiento de la corte de :Madrid este pro:recto, i la corte lo aprobó como consta de la siguiente "REAL ('Í;;n'CLA. " El Rei--Por cuanto conviene a mi servici0, i bicn a mis vasallos, el exámen i conocinlÍento mdÚdieo dc las pr(ldll("(;ioncs llaturalcl:l de mis Jomilliob de .1\.mériea, no 8010 IHlra promovcr 108 progreso::; de las ciencias físicas, sino t:unbien para desterrar las dudas i alteraciones que hai en la llwdieina, tintura i otras artes importantes, i para alimentar el comercio, j que se f(uornell herbario;; i eolec<:Íones de productos naturales, describielldo í delineando las plantas <lue se encuentren en aquellas mis fértiles provincias para enriqueeer mi gabineto de hi,;toria natural ijardin hotánico de la corte, i remitiendo a"España semillas i raíces vivas de las plantas i árboles mas Útiles, seílaladamente de las (pIe se empleen o merezcan emplearsc en la medicina i cn la construeeion naval, para <¡ue :;e connaturalicen en los \-arios climas conducentes de c::ta península, !:lin omitir las ohscrvaciones jeográtieas i a¡;trouÓmicas que se puedan hacer de paso en adelantamiento de estas ciencias; he reliucHo, couformándome con lo que me ha propuesto mi virei-arzobispo de Santafé,que a (tiemplo de l~ cspcdidon botánica qne de mi superior órdense está haciendo en la Amórica meridional (esta espedicion comprendia todo el Este libro fue Digitalizado Por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República,Colombia -70I'ireinuto del Perú), se ejecute otra con igual objeto ipara mismos importantes fines en mis dominioBde la Alll~rica septentrional poruotánicos i dibujantes españoles, a 9uiene¡; i a cada uno Bele¡; despachará separadamente Sil cedula o nombramiento. 1 hallándome informado de la 60bresaliente instruccion en la botánica, historia natural, física i matemática, que cúnClll'ren en don José Celestino :M:útis,igualmente que de Sil acreditado amor i fidelidad a mi real per,;<ma,de su buena conducta i ardiente celo por los l'rogrcílOB de las ciencias que, sin estipendio alguno, ha enseñado i promovido a sus espensas durante su dilatada residencia en aqnellas partes por medio de variaB obras que tiene es.critas i ha ofrecido a mi 60berana disposicion i de 101:; deseuhrimientos que 1m hecho de plantas útiles, sCiíaladamentc del con8iderabílisimo de los árboles de la <plina en los montes inmediatos a la"capital del Nuevo "l{eino de Granada, he venido en nombrarle por mi primer botánico i astrÓnomo de la esprcsada espedicioD por la América septentrional que se confía a su direccion, bajo las órdenes del arzobispo virei i de las condicioncs siguientes: 1.~ Se le entregará por una vez la gmtifieacion de 2,000 doblolles para ucsempefiarse i costear la conclusion i perfeceion de última llIano que ha de dar a sns manuscrit08 para dirij:r!os a mi \'Ía rcservada de Indias ántes de emprender la espedicion ; 2. Durante ésta, i hasta nueva órden, gozará el sueldo de 2,000 pesos, mÓnc<]ade Indias, en cada un año; ;P De cuenta de mi re:;tlhadenda se le proveerá de los libros e instrumentos botánicos i astronómicos que ha pedido i pidiere para el desempeño de sn comision ; 4. En lo demas se arreglará a las instruccioncs que he mandado forme con Sll acuerdo el arzobi&po-virci para -que se logren por fruto de las observaciones de esta espedicion el adelantamiento de la botánica, historia natur~ jcografía i astronomía, i jeneralmente todos los objetos i fines importantes qne abraza el plan propncsto por el mÍbmo don José Celestina Mútis en sus representaciones.. " Por tanto, mando a mi arZobis~virei gobernador i capitan jencral del K uevo Reino de Granada, a los rejenws de mis audiencias, oficinas reales' i demas tribunales de aquel reino, hayan i tengan al espresado don .Tosé Cc11i)&-tino Mútis por mi primar botánico i astrónomo de la citada 108 R R Este libro fue Digitalizado Por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República,Colombia --ilcspedicion, guardándole i ha<:iéndolc guardar las honras i preeminencias que le corre:<pondan para el buen éxito de ella, satisfaeiénd,Jle los oficios realcs (le las ('~ia8 de Santatc la gratificacion de 2,000 doblones por una yez. i 2,OOUpesos «:n cada un año, o con la corre8pondicntc Órden de mi al'cobispo-virei i en virtud ésta lo,.; (le cuales(luiel'a otras cajas de aquel vireillato, i eOIl relenwionc;:; de media. annata, que en virtud de esta cédnla i l·(~t'iho del interesadú s0l.ltsará en cuenta lo que ¡;e satisfa~a, qHe aHí es mi n.lnnta , i que de la presente se tome i:azoIl en la Contadnría jcneral del Consejo de Indias. " Dada en San Lorenzo el Ucal, a 1.0 de lIovicrnlrr<.' de 1783 . ue •(y" EL nn. ,; Jf¡8,; dt! Galuez." Con la c{~dula anterior vinieron de España, pura :Mútil', bajo la cubierta del virci Caballel'o i (iÓng-ora, un diplol11? de miembro corresponsal dd ,Tardin botánico de Madrid~ i una carta que le diríjía el Rabio dirpdol' de este estttlleeimiento, don Casimiro GÚI\lI'Z de Ol'teg-a, mani!'e:;tándnlc (~ll los mas espl'csivos términus su aprecio i admiracioTl, así como el jÚbilo que le causaba la l'l'l'e(~ion de la Espcdicion. "En el lltWYO establecilllicnt(., le deeia, del rea.l J al'dj)l botánico de Madrid se ha considerado como satisfacdon propia de cada individuo de la junta In, <Iue en todos nosotros haprodncido la noticia <le la Espedieion por la .AmGrica ¡;,etentrional. 1 así por manifestar s:¡ gratitud a su E¡¡celencia (el virci-arzobj¡;pu), j el apl'ce10 que hace de usted, como por la utilidad qne 8e propone rccojcr, para el mismo Jardin, de tan Útil empresa, La resuelt(. despachar a 118ted el título de socio correspondiente, (lile con esta misma fecha dirijo ll. mallO del escelelltí¡;¡imo señor ministro de Indias para que p,ueda usted l'ccibirlc pOI' las del befior virei, co· mo una debil prueba de la estimucion ([lle profesamos a sn mérito." :Mútis se llenÓ de contento al vor fundada la Eir pedicion, prot(jida por la corte, :ljll'ohada por los sabios i alentada por el virci; igualmcnte (¡HC al enterarse de los testimonios de afecto que le en \'ÍabflIl los lladrcs de la ciencia. Escribiendo al doct.ul' Eloi Y·alenzne a 80bre estas cusas, con fecha 31 de diciembre de 1783, le decía; "A no ser tan larga, le copiaria la carta. de Ortega, para no retar- Este libro fue Digitalizado Por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República,Colombia -72darle tanto este gusto, en que considero a usted tan interesado como a mí mismo." YI Por los términos en que está redactada esta real cédula. se viene en cuenta <le(lue, para el establecimiento de la Espcdicion hotánica, mediaron representaciones i propuestas hechas por Mútis al arzohispo-virei, i ann directamento a la corte de la metrÓpoli. Tal vcz pondria a la vista. del ••.irei sus particulares lucnbracioncs científicas; tal vez tendría con M confcrelll~ias verbales en las cuales, movido por el amor a las cieneÍas, le demostraria eOIlpersuasiva elocncncia la U1jente llceesitlad i las grandes ventajas de la Espedieion. A esto afíadiria razones de bulto: le pretientaria las colecciones de plantas, de animales i de minerales rccojidas por él; lc mostraria. esqueletoR, i cortezas, i fmtos de la" especies vejetales mas preciosas, descubiertas i descrita" por {~l,í quizá tambien le ensei1aria algunas láminas botánicas dfbnjadas por su propia mano. Adema:; (le estos motivos, el arzohíspo-virei i la corte <10España dehieron sentir la ínf1neTlcia de otros UUIJmas poderosos, I,a Espc(licion ol'gaIJizada en el Purú producía buon éxito, lraciemlo conocer ]a" prcciosidades natumles de a~uella estensa Colonia; haciendo remi"iones a Espafía, para sn :w1imataeion, de las especies n~.ietales señaladas por su utilidad o S1lhclleza, e hinchando de satisfaccioll i de or~ullo a la real corte (ple se contemplaha sefiora de tantas l'lqu~ zas j de tantos done,; natmales. Por otra parte, lIlútis babia descnhicl'to ya i heellO eOIloccr n,!gnIJas cinchonas de loa hos(ples cercanos a Bogotá, i hallia dicho, para qne se oyera lÓ,i(-,s, qne la robusta i pilluwcsca vejctacion del K nevo . Reino de Granada cm superior a ]a de las otras r~iíoncs amcricanas. Entímces él arzohispo-virci, absulutamente cunfiado cula apro])acion del gal¡inete español, cuyo respeto i estim:wion habia sahido captarse por sus servicíos paeifieadore:; en ]a inmortal insurreccion socorrana de 1781, no debió yacilar en deel'etar por sí mismo la EspeJicion. VII Como se ve en la cétlula, esta Espedieion tenia por objeto, no solo la coleccion, descl'ipcion, clasificacíon, nomen- Este libro fue Digitalizado Por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República,Colombia -73clatura i dilmjo de las plantas, sino tambicn de 108 pro.." ductos de los otros dos rcinos, animal i mineral, i adernas . hacer obscrvaeiones astronómieus i jeográficas. Por consiguiente, tal multiplicidad de fines grandiosos requeria por una parte muchas intelijeneias eulti,adas a propÓsito, laboriosas i aficionadas al estudio, i por otra, fuertes erogaciones pecuniarias en pago de sueldos, en eonstrnccion de edificios, cn compra de instrumentos i ap(l.rato8 científicos, en viátieo de viajes, en trasporte de eolcc<:i(>lles, &c, &c, pues a<plÍ no hahia observatorio astron6mico, ni habia instrulIlcntos adecuado,.., par:, escudriñar los ciclos, ni habia jardin hot:ínico, ni gabincte, ni co!e<:eiOl\es particulares, ni tampoco habia mu::;eos ~<, mineralo.iia i zo(,lojía, ni locales apropiados a estos ohjetns, l'al'a esta empresa, pue::" no ISO cOlltalm con otros elcJ]lentos <pie la ilu;,;trada i fil'me voluntad de:'llÚtis, la pl'oll~ceion .lel gohicrno, i las cajas realeó' abicl'tas. 1\Iútis i dineJ'o; liÓ atPlí el principio, la hase de la Espedieion botánica. V llT. Ann(]lw la real c('(1111ano lIcgt, a Bogotá hasta el alío de 1T~.J, sil~elllba,rg~, ~:LK,;pedicion cOJl1cnzÚ ¡~ o!)l'a: desde <Iue la creo el nrm Cnlmllcro en l11ar7.0de 1 it\¡); I desde este momento todo vari,', en la vida de :Mútis, El Ilutlll'fdista aislado, de tranquilo ]¡ IImor, <¡ne csploraha ;:010 i <'nnndo era Sil voluntad la vejetacion de los distritos aledafws a la <:apital, <¡ue estudiaba solo lo;,;m:rravillosO}; fen6menu::; (h· la creaeioll, <plCtrah:~jaha solo, i tOllo lo hacia a Sil albcdl'í!l, ~(' "i() de repente colocado en Ilna CSCC'1HI espneiosa, roueada ¡Jp innumerahle::; afanes i difieultades, de los <¡ue IlO lHldiel'a tl'íullfnr un alma ]lOCO templada, N oIIlbrado jete de Ull complicado estalilecimicnt<) científico, qlle ahrazaha ell su" esclll'siones i SIlS val'in." tareas toda la illlllellSa estension dd vircinato (en a<Jlld ellt(>Il(~CScomprendia no solo el territorio <}Iw l!Oí se llama .N ue\":1 Granada, Bino tUlIlhicIl el que forma actualmente la Hq,Úbliea de! E<:nador), tenia que rpglulI\cntm' e! Úrdell ce(\n{¡Ini(~o del <~sta!de<'ill\iL'llto; tenia (lile !l\I,;ear personuS)lOlll'adas i aficionadas a la cip!wia para dades los emple()S,\~llsefl,indoles prill1cl'o¡;u oiicio i SllS deheres, sin duda gratuitamentc; tenia <pIe dirijil' por sí mismo con la pluma en la manO' las descripciones ¡1<\ Este libro fue Digitalizado Por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República,Colombia -74,dasificaeion científica, i con el pincel el dibujo de las plantas i de los dcmas objetos; tenia que trazlU' los planos de los edificios que se necesitaha levantar, i vijilar Sil const.ruccioIl; tenia que ser arquitecto, astrónomo, jeógrafo, hot.ánico: médico, piutor, disector, preparador; ('Jl una palabra, tenia que ser director i subalterno, maestro i operario, i estar en todos los detalles i en todas partes, ensefíando, contestando las interrogaeione¡;, resolviendo las objecioll.Cs ¡dando instrncciones para todo. Pero ot.ra dificultad aun mas pesada i mui peligrosa se le presentaba; tenia que arrostrar la estolidez i rebatir las ll!'l!OCupaeionesq ne se oponian a la, realizacion de la empresa. La simple cnnneiacion de las verdades cientíUCRS era mal reeibida por todas las clases sociales, que bl~io el ll..-)peetode la instruecion no se distinguian cn nada; todas Ul'allvulgo, igualmente ignorantes i superstieiosas, pues la pal'te noble, en su mayoría, no sabia mas que haeer árbolC!! jcnealójicos i rec:itar oraciones rclijiosas; i así, creyéndose Cl)n derecho a juzgar todas las doctrinas, las teorías i los hechos eientífieos, miraba de 1'eojo todo lo que pn~nalm (;O!l su ignorancia, tachando de heréticos i pCl:jndiciales los adelantos intelectuales, i tiznando por de contado con las miiillla3 notas a los individuos que Be dedicaban a promover el progTeso <lela Colonia. Felizmente la Espedicion era patrocinaua por 11narzobispo ilustrado, i autorizada i cDstcadll.pM el gobierno cÍ\'il; empero, ni aun esto era hastante a destruir las sospechas i voeinglel'Ías del fr,natismo encrespado. ¡Siempre lílSgl'll.l\deshombres son mártires de 8U grandeza! j Siempre las ideas lluevas tienen qne bordlj;ll'escollos peligl'osOS!¡Siempre 108 intereses del presente, 1101' ilejítilllos que sean, tienen devotos aferrados, enemigos f()rmidables de todo progreso! IX Si a tantos embarazos Mútis no hubiese podido oponer mas qne sus solas fuerzas, difícilmente hubiera podido veneerlos; pero afortunadamente cont.aba ya con un eaope!"ador dilijente e ilustrado, tan templado como él en el sagrado fuego de la ciencia i de la virtud. Era el doctor Valenzuela, su primer discípulo. Eloi Valenzuela nació en la ciudad de Jiron, Estado Este libro fue Digitalizado Por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República,Colombia -75de Santander, por los Míos de 175G. A los doce aiios de odad comenzó a estudiar gramática latina, i a los quince entró a cursar filosofía en el' C()lejio del Rosario de Bogotá.. Luego sc cOllsagró al e8tudio de la tcolojía i cánones, terminado el cual obtuvo pOI' oposicion la CÍltOO1'8 de filosofía un el mismo eolejio. FUll entónces qne empezó a recibir lecciones de :Mútis sobre matemática¡; e historia natural; lecciones (1ne a sn turllo aproyceharon laB alnmnoR di: Valcnzucla, Cultivada S1\ intelijencia tanto como cntún CC8 era duhlc, pensÓ en rceibir 'las saH'radas Órdenes, i las recihi\¡ de manos del arzobispo Cahallero i Góngora, de quien fué por algun tiempo familiar i secretario. Ansten. en el cnmplimicnto de ¡;m;dehere"" ohediente a b voz de S11 conciencia, constante en sus proyectos, dotado de buenas dispo8iciones intelectuales, delicado de sentidos para g07..ar de los cncantos de la naturaleza pero fuerte para sobrellevar las fatigas de la herborizaéÍon, nadie habia mas a propÓsito que Valenzueln, para secundar a .Mú.tis en su magna, fv'mprcsa; i como entendia hien el latín i habia aprendido a, fondo las verdades que hasta S1\S días se sabian sohre llnatomía, fisiolojía, organografía i elasiiieac-ion vejetal, pocliflde8empeñar sati"faetoriamcnte las funciones de subjefe de la Esp(,dieion. Así fué que tan luego como el virci-Hl'zobil'-po la creÓ,:Mútis comprometiÓ a Valeuwela para quc fuese tm compañero en los trabajos de organizacion i en las tareas científicas de este establecimiento .. Era talla homojeneidad de índole de esto;:; dos salJio¡;; habia tal concordurwia en sus iuclinaciones i sus pcmmmientos, que jnntos videron algunos anos en frecuente contacto de razon, ocupados en \lna misma cla<;cde (lI11:haccres, tratando grandes cuestione,.; cn que pudiera resentirse el amor propio, sin ofenderse jamas, consenanda lÚempre la mejor armonia, i profesándose mútuamcnte el JUas tierno afecto. "Descansa mi corazon cuando hahlo con usted-Quisiera no soltar la pluma de la mano cuando estoi eseribierl<lo a usted: "tales eran las frases con que Mútis tcr:ninulHt casi todas las cartas (llW cscribia a su colega; cartas de a cuatro pájinas llenas de pormenores propios de una estrecha amistad, mezclados con lar~os conceptoe sobre puntos eontrovertibles de la ciencia delas plantas. Por Sil parte, la;; que Valenzuela dirijia a Mútis bien interesantes serian cuando éste le decia en 1783: "Cada carta Este libro fue Digitalizado Por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República,Colombia -76de usted es para. mí tan apreciable como lo eran las mías para el gran Linneo, C]uien~i hoi viviera celebraría no ménos la sabia correspondencia de usted/' Mútis respetó altamente las virtudes de Valen¡mela, i no dejÓ de tributar honor a su talento: lo llamaba S1t cstíJnadísimo compañero i am1:go. Tal era el hombre destinado para ser el primer colaborador de Mútis. x lcna "ez hecho cargo lfútis de la direccion de la Espe(lidon " j qnÚ campo tan glorioso i tan vasto se presento a Sil c('lo infatigahle! dice el mismo artículo necrolÓjico de 1'.'( Ó'wuzl1a/ /o. Heanilllado con las liberalidades del SoberallO,}Jroyectóel grande i soherhio edificio de la Floi'a de Bogotá, obra inmensa, para cuya ejccucion no alcanza la vida de un hombre solo. Comenzó por elejir un centro oportullo para sus operaciones científicas. Mariquita le pareció que reunia todas las proporciones que buscaba. En efecto, sitnada esta ciudad al pié de 108 Andes de Quindío, en un valle fecundo i en las cercanías del Magdalena, le presentaba los vejctales de todas las temperaturas i de todos los lliveles. Aquí formó los pintores, aquí colectó innumerahles plantas, aquí se hizo una parte de las grandiosas láminás que no 80 pueden ycr sin admiracion, i que los SlIrbios de Enropa han comparado a las del célebre Smith; aquí escrihió, i aquí desempeñó tantas comiHioncsdel gobierno, i tantos otros ohjetos. Son mlli estrecho8, a~rega El 8ellu¡,nal'io, los límites de este papel para decir lo que este satio infatigable ejeclltó en los siete años de su residencia en Mariquita." lIé aquí una de las comisiones del gobierno que desempeíió Mútis. No bastando a las demandas del comercio i del consumo el mercurio qne se beneficiaba únicam~mte en lluancavélica del Perú i en las minas de .Almaden en Espafía, el virei C.aballero se vió urjido a frocurar el descubrimiento de tan positiva riqueza en e suelo sujeto a sU mando. Esta causa.unida al deseo que abrigaba de presentar al rei de España la realizacion de hechos importantes durante BU administracion, lo impulsó a comisionar a Mútis para que reconociese los terrenos metalífcros con el- fin do ver si se logr.a.batan feliz hallazgo. 1 en efecto, Mútís rev Este libro fue Digitalizado Por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República,Colombia -77conoció variaslocalidadcs, i tUYOla sutisfaccion de presentar al virei algunas mucstras de ¡;ulfuro de níercurio reeojida,; en las montañas de Quindío, i principalmente en nna quebrada que se llamó" del V crlllcllon." Las muestras fueron remitidas a la corte, i resultaron de eseelente calidad. Conjctúru¡;e que no se p;'oyectó su lau(m'~oporque la¡; mucstra;! se encontraron en tenenos de aluviull, sin hanar las vetas madres. Otro hecho no mél)os importante i honroso para }IÚtis es el siguielltc.-IÁa teniLle enferllledad de la viruela, nativa de la Etiopia, que pa,¡ó a Espafta (~()nlas incursioJ\cs de los árahes i que, scgun dicen, nos la condujo a América un Boldado dc la cspedieion de PÚnfilo de Kanáez, haeia 110n'orosos estrago¡; cn el Xueyo TIl'Íno por los años de 1782. EntÚnee¡; el gran Mútis, animado t:uu bien por las eseitaciones del .irei-arzobispo, propuso varios metodos curativo8 (no he podido yer ninguno) que inf'nlldi() en la pollacion hasta donde le fué posible, i sc aplieÓ C01l todas sus fuerzas a. la curacíon de los enfermos i a ('ontener los progresos de la epidcmia. No lll{~nosdilijente ~c manifestÚ cuando el mismo virei int'entó atajar la propagacion de la lepra elefunciaca (l'w sordamente minaba la p()ll!uciun. Exalllinando :Mútis el oríjen de e¡;ta a¡;oladora d1llencia, i las probabilidades de euracion, propuso al vireí, para que éste lo hiciese a la corte de Espai1a, que se avcriguase cuál era el aceite de palma que usaban para sus uncióneslos naturales de Africa, i con las que se pre¡;cr\aban de esta lepra. Situados aquellos i cstos paises ha,io ig'ual latitud, era casi seguro que las aplicaciones medicinales de allá debian surtir el mismo saludable efecto aquí, XI Habiendo renunciado Caballero i Góngora sus dos empleos de arzobispo i virei, movido por el deseo de volver a su suelo nativo 1 tal vcz alucinado con la esperanza de ser bien colocado en la corte, consignú el mando de virei en manos de su sucesor Francisco Sil i LÚmus, jefe de eseua· dra, con fecha 8 de enero de 17H9. Caballero fué promovido al obispado de Córdova, despues de haber fomentado con noble empefio el bien del vueinato, que durante sn administracion dió nn gran paso en la via del progreso. Este libro fue Digitalizado Por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República,Colombia -78La in;:;tl'llccjoll de la juvúlltud m~iorÓ mucho, pues hizomontar cátedras de matcm:íticas en los Colejios del Rosario í San Bartolomé, e introdujo textos modernos en las clases ya existentes. "Tomó interes, dice nuestro historiador Plaza, cn colectar fondos para dotar mejor a los profesores i crear otras cátedras, procllrándose nn fondo de ciento tI'einta mil pesos. Supel'ior a las preocupaciones de su tiempo, trabajÓ con ardol' en arrancar el monopolio llniyer-¡;itario II los regulares dc Santo Domingo i fundar un In&tituto científico público, que se redimiese de la tutela ign~ nmte i el1coj ida de 1111 convento i }.Jlldiese servir de verdal1em fanal, mejorando los estudios i secnlarizando los ramos de elll3eñaIlZa, entre los eUlllcs contaba como de premiosa llljcneill los de J¡ot:illica, química i metalu~iia, pues j':l e8taha bien mareada la !'i<1l1ezade la colonia cn Sil agric;11tura i en sus metales," l1ustracion pública, industria, beneticeneia, colonizacion, mi"iones, hacienda, gobierno eclesiástico, en todos estos asuntos puso su mano reformadora, si 110 siempre con entero acierto, al ménos con buenas miras i e~píI'Ítu prugresista, J es dc presumir que MÚtis, su amigo i cOllse,icro, le inspirara los mejores proyectos i estimulara la enCl:iía de Sil carlÍctcl' para acometcrlos. Eu 10 quc parece (jlle Caballero desplegó mas celo fuÚ en el rflmo (le minas. Las de oro i plata de Pamplona i ~lari1uita que yaeian abandolladas, 6in qne sus predeceson~s 1111¡iesenpodido l){lllerlas en csplotal:Íoll, recibieron Iluevo i1llpnbo, gra(~ias a los e5fuerzos del arzohispo-virei. Los viaje" qne hizo 1\IÚtis a esas provincias tuvieron por objeto prineipal examinar el estadu de la~ millas, i, calculll,ndo los eastus q \le scria preciso hacer para yol ver a espIotadas comparados eon los rendimientos que podrian reportar, ver si em posible S\l elaboracioll. Por indicaciones de ~IÚtis se ell1pl'l~ncliÍJde nue\'o el beneficio de esas minas, i se hizo venir a la X um'a Granada al hábilmineralojista .José D'Eluyar, hermano del famoso Fausto D'Eluyar, director de las minas de Mlljico. Aquel reconoció los antiguos venero:>' arjentíf'eros 1 auríferos, como tambien la ;íliua de esmeraldas de .Muzo, i enseñó métodos metalúrji(lOSqne hasta cntÓnccs eran ignorados aquí, superiores Q los conocidos por su economía 1 presteza. Para Mútis i V nlcnzuela debió ser mas¡;ensible que para ningun otro iudividuo de la Colonia el inmenso vacío que Este libro fue Digitalizado Por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República,Colombia -79dejaba el a.rzobispo-virei, pues ámbos habian sido estimados con predileccion por él. Por otra. pltrte, como era el padro de la E¡¡pedicion -botánic.a, i le habia impartido una proteccion i asistencia sefialadas, ést~ debiÓ resentirsc de la. falta de aquel amparo poderoso. \' el'dad es que los demas vireyes tuvieron 108 mayores miramientus i consideraciones por e"tc establecimiento; pero Cl' una lei de órden universal qne el qne crea, inventa ti prodnce algo, tenga eon10 que ha creado, invcntado o producido, nna l'claciolJ moral semcjante a la relaciull metafísiea que Dios ha puesto entre la eausa i el efeeto. Ese mismo amor ¡:mulime que nolS profesan nuestros padres, arqu(~tiJlo de la;:;relacione¡; del sentimiento motul, se re\-e!:t tambicn, annque en gradoli infinitamente menore", en todas la:::produeeíones humanas. El arzobisp(j-virci es uno de lus gohernantes espailoles mas acreedores a la gratitud de la ciencia en npest-ro país, XII. Al partir Caballero para Espafia la Espedicion contaba ya i;eis año.., de "ida i habia l(¡~rado rCl1!JÍr los meuios pr(:cisos para la lonnacioJl de la },'!(})'a nt(J-f/l'anarlinll, 01)1'8. eon la cual f;(J prometia Mútis sorprender al mundo cientifico, así por el acopio de conocimientos nuc\'os que debia contener como por su correcto estilo i la elegancia de SU8 tipos i dibujos, _ Singular fuó el esmero que desplegó Mútisen cUanto al dibujo de las planta¡;, i mnchos estorbOS huho de l'cm-ovcr para hacerse a buenos artistas. Cuando llegó a Bogotá l10 habia en esta ciudad mas hombre qne supiera algo de pinturaque don JoaquinGllti6rrez, diseípulo <.lelmaestro Ban· Jera, fllle se cree ha.b.ía recibido al¡hma ensefianza de los contemporáneos del divino Vásqucz. L~pintura, que tanto floreció en nuestro país en tiempo de este inmorta.l artista, habia dccaido hasta tal punto que ya no se yeian a mediados del siglo }Jasado sino pintorreadores de puertas i balcollc:s: los grandes pintores del siglú XVII habian desaparecido sin trasmitir a BUS discípulus ninguna de las dote::; .le su injellio, de tal suortc que parecía no ser este el país donde pucos años ánteshabian nacido í vivído, para gloria i adelanto del arte, 100 Figueroa i V:íS(luez. De los discípulos de Gnti6rrez, don Pab1() Antonio ~"~a~DEl~60. 7 Este libro fue Digitalizado Por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República,Colombia -80- GarcÍa fué el que, segun parece, manif'e¡;tó mc¡jor dispo· sicion artística i aficion al pincel; como Guti{·rrez tuviese poco que ensenarlc, bien pronto lo sobrepujÓ. Luego que Mútis conoció a Garcia trató de proteje~lo, desenvólviendo su talento i refinando su gusto; i algunos años ántes de la Espedicion 10llevÓ a Muzo, donde empezó a enBayarlo en el dibujo de plantas, insectos i reptiles. García retratÓ al óleo varias especies de vejctalcs i animales, i de estos retratos formó 1I1útis lIIla colecciou que vió Humboldt i calificó de prcciosa. Jóven eutónces, pues habia nacido en 1744, bogotaIlO, hijo de padres distinguidos, de espíritu activo, de amable fisonomía, e inclinado desde su vrimera infancia al dibujo, la escultura i la arquitectura, Garcia se gralljeó sin esfuerzo la benevoleilda de M.út4s,i al establecerse la Espedicion tomó un puesto en ella. El gobierno colonial habia decretado que, el director tuviese 1Ul segundo iun de:1ineador: el segundo fué Valenzuela, como se ha vísto ; tocó a García ser el delineador. Quiso 1I1útis,por indicacion de Linneo, que los objeto!! naturales se pintaran segun su tmnafio natural i al miniado, en lugar de hacer cuadros al aceite, como anteriormente se hahia ,criticado. Gareía no sabia miníar, i era el único dibujante que tenia la Espcdicion. ?, Qué hacer? Ocurrió Mútis a su hiblioteca, i hallando un librito en frances que daba reglas sobre esta clase de pintura, se las tradujo a García, quien las retuvo i meditó bien, i a pocos días presentó en miniatura el zarcillcjo, cluetoga¡,Jt'l'a oanescens, que fué la primera planta pintada eIl la Espedicíon. Pero como eran innumerables losjéneros i especies que se dcscubrían cada dia, i como este' modo de pintar al mi· niado era sumamente tardío i dispendioso, García solo no bastaba para dar evasion a los trabajos gráficos, i se conoció qne eran necesarios muchos dibujantes para poder delinear las especies mas notables. Habitaba cntóncos en Cartajena el pintor Pablo Caballero, oriundo de aquella ciudad i justamentc afamado en su profesion. Mútis le escribió invitándolo para que tomase a BU cargo una plaza en la Espedicion, i Cal>allero no vaciló en dejar su ciudad natal, para trasladarse a Mariquita. Allí permaneció apénas quince dias, pues impuesto de las funciones qne le tQcam desempellar, i considerando qne el trabajo no correspondía al mérito de su pincel i que el sueldo era mlli exiguo, se Este libro fue Digitalizado Por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República,Colombia -81denegó l\ servir i regrcsÍl a Cartajena. Entónces Mútis encargÍl a Espafia un buen pintor, i dospues do largos meses de e8pera llegó un peruano llamado Seollstian :Méndez que habia sido en la penínsulít moledm' I.le colores del eélebre pintor :Mens. j\,{Íltis,convenciJ.o en ln'eYe de su ineptitud, le ofreciÓ coste:wle el via.ie de vuelta, per\) M(·nuez resolvió radicarse cn Bogotá., donde se ca:".'!,yiviÓ pobre i murib en la ma;; lastirno"a miseria. De dia en dia se ]¡aeia mayor In falta de brazos en la. 8eccion de pintura. V alil'llllo,,~ de la intercesion del arzohispo-virei, solicitÓ Múti", de Quito, algunos dihlljantes, auu<pw no fueran J.el todo ]¡Úbile~: i en el entretanto animÓ a unos jóvenes neo-granadinos para 'Pie se aplicaran al arte en la misma c:u,:\ de la E,,;pedieion en Mariquita, c08telÍndolos de bs fimtlos con que el gobierno mantenia el establecimiento. El único de estos jó,enes que uesarrolló talento i lle~Ó a.ser él mas sobresaliente pintor de la Esvedicion, fué .J:<rancis~Javier Matis. Nacido en Guáduas, Estado de Cundinamarca, en octuhre de 1774, salió ue su pais a los diez i ocho años para fijarse en Hogot(t, donde encontrÓ protee:tores que fayorecicl'fln sus llohles aspiraciones artísticas; i enumlo eut!'() cn ];L Especlieion (~stabaprovisto de regularcs eonocimientos i de alguna prá.etiea en el uiuujo. Allí tliÚllesue el primer dia eOllstantcs pruebas de sujcnio i de su la1}ol'iosidad; i corno las cualidades de laintelijencia seduécn tanto a las grandes almas, Mútis no tardÓ en dispensarle un cariño paternal. Persuadído dc que Matis no era un hombre cumnll, le enseñÓ principios (le botánica i le confiÓ su ejemplar (~e Linnco para que estudiasc. Pocos meses le bastaron a Matis pura hacerse hot:ínico : felizmente se uni':' al talento, al gusto, a la aplicaeion, el gran recurso del ~iel'cicio continuado i bien dil'iji(10. Garcia quiso separarse de la Espedicion a los cuatro ·ai'íos, por amor a su clima natal i un tanto rendido por el trabajo; pero :.3Iútis lo interesó para que no abandonara su cargo hasta que no se hallara una persona competente para reemplazado. XlII El año de 1786, condecorado ya )f{¡tis con los honores literarios de corresponsal del J ardia botánico de Madrid, sooio de la real Academia. médica de aquella corte, de la. Este libro fue Digitalizado Por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República,Colombia -82real Academia de deudas de Est~kolmo i de la Sociedad Vascongada, se le pmpuoo restituirse a Madrid para obtener una "cátedra de medicina; pero así como no habia vacilado en sacrificar la esperanza de visitar las mas célebres Lnivcrsidades de Europa a las ventajas de una escursion a las rejione:; sur-americanas, tampoco tardó en resolverse a continuar sus servicios científicos en la Nueva Granada; i resignado a concluir aquí sus dias, renunció abiertamente la propncsta. Siguió esplorando la vejetacion de los Andes de Quindío i de las rioeras del alto :Magdalena i SIlS rios tributarios, hasta 1700, en <[uedl:jó de residir en :Mari(luita i se trasladó a BogútÚ. El temperamento de aquella localidad, unido a las tard18 literarias, comenzaron 11 arruinar 811 preciosa salud; pero al trasladarse a la capital no tuvo tanto en mira restablecerse, cuanto reconocer i diseñar la vejetacion elevada. Comenzó a colectar otra vez las plantas de las altas planicies i montañas, i se dedicÓa dar la última mano a los trabajos iniciados en Mariquita, trabajos inmensos, para cuya conclusion no bastó el resto de sus arros, i en los cuales Valenzuela tenia acaso ~amqjor parte. Aquí perfeccionó su obra favorita, la Historia de los árboles de (Juhw, i empezó utras de !la menor importancia. La Espedicion se reglamentó m~jor, i rodeada de recnrso~ Í comodidades que no habia podido proporcionarsc en :Mariquita, pudo funcionar con mas desahogo i celeridad. "Para esté establecimiento, dice llumboldt, se destin[¡ un vasto edificio de la capital, c¡uecontenía los herharios, la escuela de dibujo i la biblioteca, una de las mas bellas i ricas que jamas se hayan consab:rrado,en parte alguna de Europa, a un solo ramo de historia natural." XIV Un año ántes de su venida de :Mariquita (e131 de jnlío de 1789), habia tomado posesion del cargo de \;irei el conde don José de Ezpeleta, mariscal de campo. por haber sido promovido al vireinato del Perú el señor Jil i Lémus. Seguramente no se pllede mostrar cn la larga lista de los vireyes uno que igualara a Ezpeleta en cualidades de hombre de estado. La administracion de este conde participó de su carácter personal; su gobierno fuá ilustrado, vigoroso, benéfico; llevó a cabo muchas mejoras materiales, Este libro fue Digitalizado Por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República,Colombia -83sin descuidar el fomento del buen gusto litl~rario, la educacion, el progreso de las-ciencias i la aclimatacion de las costumbres cultas. "Persuadido de que los papeles públicos i la imprenta son el vehículo de las luces, hIZO venir de la Habana a don Manuel del Socorro Rodriguez, hombre de buena litertura i tie cscelentes costumhrcs, a (!uien puso de bibliotecario, i le oncargó la rcdaeeion de mi papel sema- . nal titulado Pe')'wdico de 8anMfé de Bo(/otd (aDo de 1791, enero 1.0) Est\.l fué el primer papel periÓdico que desde la conquista se publicara en 1\ UCYll. Granada. Fllrt gran parte ?e empleaba en ar~íeulos sobre literatura e historia natur!l, lllsertándo6e tamlncn algunos estrados d(~ gacetas cspanolas. SirviÓ mucho para inspirar a lajllHlltnd granadina el gusto pOI' la literatnra i lmcnos estlldio~, n lo (¡ue tamhieu conrihuyÚ su rcdaetúl' Socorro, qne ;se cUlllplaeia en dar lecciones i cn formar a los j.'¡venes SU8 amigos. En aquel per,iód,ico se publicaron algulllls descuhrimientos del doctor Mútia 60bre las quinas oficina1es o aplieahles a la mcdicina; las ciencias, la humanidad redbieron e1 beneficio de conocer mejol' este. especifico m:mtl'fllíu; fiehres." (V. REBTREPO, Histona de la rcvolneion de la HepÚLlicCl de Colombia, 1858, tomo 1,° l)ájina 37.) xv Pasados ocho años de constantes fatigas iensayos, pro'te de los cuales se emplcó en allanar tropiezo •., en formar ofi- ciales aptos e idóneos, en regularizar lo,; oficios, en fundro.' un órden de op eraci 011es, en cOT!¡;eguirin!3tl'lllnentos i materiales, en acumular los elelllentos indi~pen¡;able8 para el cumplido desem!wl1o de la Bspcdicioll, las faenas de ésta ¡;e hicieron mas llevaderas. Ya no pesaba sol)ro los hombros incansables de MÚtis toda 1ft cargft ahrmnndora dcl.principio; pues 8i cnt[mecs lIO bal¡ift tenido lllas ausiHarea que el doct.or Valenzuela i Garda. ahora contaba con dibujantes hábiles qne desempeñaran los trabajos gráficos, i herbolarios adicl'trado8 en la anatomía de 1m;flores i en el modo de disecar las plantas .. El dodor YaleIlzuc1a se retirÓ de la Espedicion a los 33 anos de edad, a causa dc,haber sido nombrado por el virci Ezpeleta preceptor de sus hijos, a cuya educacion estuvo consagrado dos años. Luego obtuvo el curato de Bucara- Este libro fue Digitalizado Por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República,Colombia -84manga, donde fijÓsu residencia definitivamente. Su Íntima conexion con 1;lútis, su la¡'ga i asidua participacion en las tareas de aquel establecimiento, su carácter activo i laborioso i BU claro talento le procuraron un caudal inmenso de conocimientos i una prof'llIlda versacioll cnla ciencia de las plantas, que fné en adcll1ntc BU ciencia favorita. El delineador Gl1rcía tambien se retirÓ a los r;cis anos de fUlldadlt la Espedicion, i en BU lug-ar quedó don Salvador Rizo, de Oartajena, Estado de Bolívar, mUl háhil en el dibujo, honrado, mui activo i bastante illtelijente. Francisco Antonio Zea, lino de 108 pcrsollt~jes mas célebres quc ha dado la ~ neva Granada, fué el sucesor de Valenzucla. Saci\lo en 1;[edellin, Estado de Antioquia, porlos aíios de 177tJ, i enviado aliado de su tio Félix Hcstrepo, que era profesor de filosofía en el Seminario de Popayan, aprovechÓ sus lecciones, despues de haber estudiado el idioma de IIorueio i Cicero!\, los autores antiguos i 10B principios do retórica. Aprendió tambien el griego i algunas lenguas vivas, quo le facilitaron la lectura de buenos libros, i Se dedicÓ luego a las cienéÍas de Newton i Descartes. El1 1785, concluid';}s sus tres Clll'SOS de filosofía, 8ignió los de tcolojía, en los que empleó algun ticmpo, contrayendo siempre su atencion <.lepreferencia a la literatura, la física i la historia natlll·al. En el Seminario hizo amistad ('OB SU condiscípulo el doctor Camilo de Tórres, amistad estrecha que jamas se desmintió. "En 171:)8, dice nuestro historiador Plaza, pasó Zea a Bogotá para ser en el Cul~íio de San Barto1ome un sobresaliente prof'ewr. Hus ol'aciolles académicas en la apertmR de la ensefíanza, su lIeféuilo inserto en el peribdico que entÓnces se redactaba en la capital i su gusto en las buenas letras que difundia, jencralizando el idiOlTll1. frances aun en el bello sexo, que apénas se cultivabl, todo manifiesta el caudal de luces que poseía Zea, i su anhelo por espureir la ~s!rucci()n ~n sn pa~l'i::. A la fiI.(~sofíade Goudin, a .la }ur¡sprlldencHt de \' JI1W1 a la teoloJI!l.de Gonet se sucedre'ron l1Ile\-OSi lUll1ino:wsmétodos de ensefíallz!l.,i Zea fué de los prin¡el'os <11",e pre1l1dinroll la anrora de un dia radiante para la N Ile\'a Granada." ]~a enscfíam;a que tuvo a SI1 cargo en San 13artololl1éfué la de latinidad. Conocía perfcct:nnente este idioma, i los estudiantes le veían tOllos los días pasearse por los claustros recitando ycrsos de ViIjilio, Este libro fue Digitalizado Por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República,Colombia -85Ovidio i Horacio, o suyos propios, i SOll1'iéndose de complacencia al acabar de pronunciar el último vocablo latlno. DeB<luidaba la compostura esterior de su persona, la limpieza. de sus miembros, el arreglo de sus ¡;aoellos, porque -le parecia que. quitar a los estudios 111~UllOS minutos era hacer una gran pérdida. Como Valenzllela, a la yez que daba lecciones, las reeibia de MÚtis, tambien sobre matemáticas e historia natural; i se 1m didlO (¡ue fué el mas notable de sus discípulos por Sil talento, su alma natoniana i su ardiente"amor a la verdad. Era, pucs, el hombre mas calculado para reemplazar a Valcnzllela en la EHpcdicion. XVI lié aquí el personal i sueldos de los empleos de este estableeÍmiento, sq,Cfun'el E~ta.do jr:1!(md de todo el Virc,¿nato de Santafé /f'e BO(fot(í, publicado en 1704 por don J oaquin Duran i Diaz, capitan del batallon ausiliar de la misma (~iu dad: Director, José Celestino 1f útis. Agregado para la parto científica, :Fmncisco A. Zea. Oficial de plnma, Francisco J avior Za\"al'ain. Pintor 1.0 Salvador Rizo (mayordomo de la casa). 2.° Antonio COl-tOZ. 3.° Vicente Sánchez. 4.° Antonio Barrionuevo. 5. o Nicolas Cortez. ~.o Erancisco Javier Corte7. . • 1." .Frandsco Vi1Iarroel. 8.° Francisco Jl1Yicr :DIati::;. 9.° :Manuel Roales. 10. Mariano Hinojosa. 11. Manuel Martíncz. 12. Manuel J"osé Jirouza. 13. :Félix Tello. 14. José Joaquín Pérez. SL'ELDOS: 8 2,000 ])irector . A~rcgado . (~)ficial de pluma ... Pintores segun su trabajo 500 500 2,000 Total $ 5,000 Este libro fue Digitalizado Por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República,Colombia -86El primer pintor i mayordomo de la Espedi<:ion tenia efectivos sei:;cientos pesos de los dos mil, i los demas como sigue: el segundo, dos pesos diarios; tercero, cuarto, quinto, sesto i sétimo, a doce reales diarios; octavo, noveno, d~cimo, undécimo i duodécimo, ocho reales; el décimotercio, seis reales; el uécimo-cuarto, cua.tro. Segun la Guía defora8t.erox del Nuevo Reino de Granada, publicada en 1793 por el mismo capitan Duran j Diaz, ademas de los empleados ántes nombrados habia los siguientes: en la parte científica, fuera del agregado principal Zca, i en clase ue meritorios, José de M útis i Sinforoso Mútis sobrinos del direetor, i Juan J3autista Aguiar; i un empleado especial para la formacion de herbarios icustodia de colecciones, que era don José Antonio Candamo. A escepcion de Hizo i Matis, los demas dihujantes eran ecuatorianos. 1,a Espedicion tuvo otros pintores neogranadinos cnsefiados lior García: Francisco Dáyila que aibujó los planos del puente del Comun, Camilo Quezada, i Pedro Almanza. Trasladada de :Mariquita a Bogotá, se estableció en ella una escuela de dibujo, de la cual crajefe el sefior Rizo. Esta escuela alcanzó a contar treinta i dos alumnos que iban al local a las cuatro de la mafiana, oían misa en f(¡rmacion a las cinco, se desuYllnCLuan i comenzaban su oficio a las seis. Nada gastauan de S11 propia cuenta: allí se lea daba alimentos, papel, colorc8, lápices, pinceles i todo lo necesario para aprender el arte. XVII En 1794 dejó Zea el lllgar que ocupaba en la Espedicion. Las ideas de libertad, de independencia, de gobierno propio, habian encendido ya el corazon de 108mas precIaras granadinos. El asomhroso alzamiento socorrano dc 1781, léjos de caer en el olvido, habia 8ido guardado con carifio en la memoria de los colonos distinguidos, como una leccion elocuente de lo que puede la voluntad unísona de un pueblo contra el poder opresor. Por otra parte, el inespcrado desenlace que tuvo aquel imponente grito de libertad, desenlace que ofreció un hOTI'oroso ejemplo de lo poco escrupuloso que era el gobierno espafiol en materia de infi.dencias, habia desper- Este libro fue Digitalizado Por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República,Colombia -87tado en la sociedad colonial un Údio jeneral contra los mandatarios; i sclladll.8 ya con sal1~re socorrana las ideas, habian adquirido el prestijio májieo, el ascendiente omnipotente que siempre les dan la pcrsecucioll i clrnartirio. Zea, ilustrado como XarÍílo el1 el moyimicnto europeo. dueño de buenos libros modernos que estudiaha sin cesar; dotado de csquiz:;ito sentimiento i de talellto ti losf>fico, habia formado su fe política i social en los ueeretos de la Asamblea Constituyente fran(~esa que pl'oclam{, los Derechos del Hombre, i el! los autores <]ue prepararon eOIl su~ escritos aquella gran rcyolucion. 1,a fe (h· la;; almas enÓljicas es viva como el fue~o del ('ido. rn:t \CZ per,;\Iadillo Zea de la boJlt1Rd de aquellos pl'incipios, los alll':lz(, (~on ardol', i cmpezÚ a consagrar1es reposo, intdijclleia, aetividaJ, ilustraciOll, ju\'entlld i touo cuanto Dios le hallia dado. Se le juzgÚ eOlllo sedieioso, a consecuencia <.le la traduceion i publicacion de los Derechos del Hombre, en la cual hizo cabeza :K ar:iño, i tambicn por eroerlo eomplicado en 1ft rooacc:iol1 de algunos pHsquincR rcyolucionarios que aparecieron entónees en Bogotá; i en dicil'mhl'e de 1795 fué rcmitido preso a EspaDa cn llllioll d(~ Xal'iño:i otro;.; trece ciu{ladanos (pie, lOegnl1las causa:; (k E'it :l(lo, resnltaron 1'esponsah1c¡.;.AhelTo.fado en el fnerte de Cádiz, permancciÓ en ac[ne1b Jll'ision dos aDOR. D¡¡¡'antc los cinco que GcsempcnÓ el destino de agregado principal en la Espediciún i cwíntn no emiquecióde luces su entendimiento privil~iiado! Si entró siendo literato distinguido, hombre talentoso i has! ante n ntrido (le \'eruad, salió sabio de primer (lrden, yeteralw en la botlÍn iea i prúctico en el análi:>is i la Ob8el'\"I1Cio11,Únicas armas con (1110el espíritu investigador puede abrirse paso en los oscuros campos ue Ir. invencion .. , El :Ministro Godo)', dice Plaza, descubl'ieu(lo en Zea dotes inteleetuales nada ColIlunes, lo hizo }l0Ber e'\ libertad i lo envi{) a Francia conllna li1ision cient1fica i el ;-neIdo de seis mil francos anualcs. DespUú8 de una reBidellcia de tres años cn Pari¡; volvió a :MadriJ, i en lugar uel permlso (lllU wlicitall:lpara volver a la América ohtuvo la }Jlaza ue Director adjullto, i maR lluelallte la de primer Director del Gabinete 1Iot:i.nico de la corte, en 1804-. Zea siguió descmpeñando e~tus destinos i mcreclendo entre tanto los nombramientos honoríficos de miernhro de la. Sociedad médica de emulacion, de la Filomática, de la Este libro fue Digitalizado Por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República,Colombia -88de Farmacia, de la de los Observadores del Hombre, de la de Oiencias, de Artes i alllena literatura de Paris," En 1805 fué nombrado catedrático de botánica de la Universidad de ~Iadrid, i el dia 17 de abril, cn que tomó posesion de la cátedra, pronunció un discurso sobre el mérito i utilidad de esta ciencia, que, por la esactitud de sus apreciaciones i la rectitud de sus conceptos, mereció los honores de la impl'esioll por cuenta del gobierno. Los modernos botánicos espMioles hacen de Ól g-randes elojios: i lo miran como una jJroduccion destinada triunfar de los desdenes del tiempo. Dejaremos al ag¡'eg-ado de la Espedicion, al humilde colono alllerieano, al l'rOi;() de CÚdiz, proscrito por sUs ideas de independencia i liLel·tad patria, colocado en :Madrid eOlllODirecto!' Jd primer establecimiento de ciencias naturales i corno profesor de la primera Universidaq del poclero8o reino espai1ol, para volver a hablar de su maestro Mútis. ' a XVIII. El 2 de enero de 1797 ccsÚ en el gobierno el conde Ezpeleta, dc;:;pues de llabor administrado- el vireinuto siete años. La Espedicion llevaba trece de existencia, la corte de Espafía redanlllha sus trabajos con instancia por COllducto del virei, j sinembargo Ezpeleta no hacia ell cumplimiento de estas escituciones sino trasmitir1as al sefíor Mutis para que se impusiera de ellas. En la relacion que dejó a JlU Sllcesor tiobre el estado en qne quedaban los asuntos del gobierno, fecha 1." de diciembre de 1796, dijo: "Para descubl'ir i dar a conoce¡"científicamente los espllcíficosque, para alivio de la humanidad, ha prodigado en este reino ht naturaleza, se diguÚ ~" JIrI. destinar a este vireinato una Espedicion botánic¡t cuyo director es don José Celestino Mútis" sujeto mui respetable por sus vastos eonocimientos, por Sil celo del bien pÚhlico, por sn aplícaeion a estos útiles trabajos i por su virtud, Este digIlOeclesiástico habia fijado su residencia i In.de sn Espcdicíon en la eiudad de Mariquita, i habiendo estim,lllo conveniente trasladarse a esta capital lo ha verificfHlohace euatro afíos mediante los ansílío;:;que al intento le faeilit{·, Con este motivo he tenido el gusto de reconocer parte del fruto de sus tareas en muchos Este libro fue Digitalizado Por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República,Colombia -89i bellísimos dibujos de considerable poreion de plantas de estas rejiones, lo que me hace creer mui adelantada su obra, por cuya conclusion insta repetidas veces la corte; pero la delicadeza i la misma prolijidad de su autor la detienen sin duda, a pesar de la espectaeion del mini:;tel'io i del pÚhlico, i considerando yo que las ohras Ilel cntendimiento no pueden ni deben precipitarse me he cerrillo a dar noticia a don JOS(~ Cclestino Mútis de las realos (Jl'dene;; del asunto, i a franqucarlc cuantos ausilios me ha pedido pura el desempeño de su comision," Gran,lc fné el apoyo quc prestÚ Ezpddu a la Especlicion: contriuuyÓ con todos los rc('uJ's()S que estaban a sn a.lcance mlmillistrati ~'o para el llwjor lOg'ro de su" filH..'S,i Mútis recihiÚ de su autoridull los tratallli¡mtoi\ mas honorables, El ilustre sa]lio le dedicó, ell pl'llcoa ue su agradecimiento i como 1111 testimonio del alto eoneepto que le merecia el virei, un nuevo jéucro de phmtas de la gran familia Ile las sinantéreas, descubierto i descrito por él bajo el nombre de e.zpcldia, aumcntado des)Jncs pOI' UUIlluoJdt i Bonpland con otras dos especies, e::pddia a¡y¡cntea, e,zpeletia COI'Írnoosa. XIX .Ezpdeta tuvo un sucesor digno dc él. El vireillato, que habia saboreado los beneficios de un gobierno algo liueral durante s '.1mando, nada tuvo que estraíiar bajo la administracion de don Pedro Mcndilllleta, tenicnte .icneral del ejército espafiol, slIjcto que reunia 1m; prendas del homhre polític.¡ a las dclmilitar denouado i a las del cortesano mas cumplido. Todas las empresas lawluhlcs acometidas por sus antecesores, las continuÓ COIIel mismo interes <l11esi hubiesen sido inieiadas por ('1. Ilnstl'fHlo, la educacion de la juventud i el adelanto de las CiClWi:h;fueron ohjctos especialmente atendidos en Sil tiempo. CreÚ Hila cátedra de medicina en el C()l~iil) del Rosario (le HClgutÚ, unjo la inspeccion del doctor :J\Iigl1c1Isla, tI HC la ,..inÍó ~rÍLtis; f'ué esta la primera vez q ¡le se enseñÚ forl1wlmentc en 'la Nueva Granada b eiencia de Hipócrates i de Srdellharn, l~a Espediciol1 recibiÚ tamhien de su autoridad la proteccion i los ausilíos quc nccesitó, hasta que al despuntar el siglo prcwn.te, se ahrieron para ella nuevos horizontes. Este libro fue Digitalizado Por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República,Colombia -90- xx Dos Babios vifl:ieroseuropeos, Alejandro baron de Humboldt i Amadeo BOIlpland, que venian a recorrer el continente americano, cargados de una coleccion considerable de instrumentos de fí¡;ica i astronomía, desembarcaron en Cartajolla el 28 de marzo de 180l. IInmboldt, nacido en Prusia en 1769, habia heredado vastas propiedades i destinado SllS rentas al cultivo de las ciencias. A los yeintiun afios comenzó sus viajes Eor Europ_a,·ia los veintisiete había visitado ya la Alemania, Polonia, Francia, Suiza, una parte dQInglaterra, Italia, nun~rÍa i España. Restituido a ,I\\ris en 1J84, pensó en visitar el Oriente con fines científicos, i aun se puso,en camino, permaneciendo en :Marsella dos meses; pero los acontecimientos que en aquel tiempo ¡;ecumplian en Ejipto i Persia hacian mui peligrosa la nawgacioll del Mediterráneo, i por esto no se embarcó. Cansada su pacieneia, pensó en volverse a España, con la esperanza de encontrar medios de pasar pronto a Berbería; mas, do repente abandonó este proyecto porque Bepresentó a sus ojos ulla perspectiva mas grande. Despues de residir algunos meses en :Madrid, obtuvo de esta corte el permiso de visitar sus colonias del N llevo :My.ndo. Al instante llamó de Paris a 'su amigo Bonpland, dotado de eonocimientos profundos en la botánica i la zoolojíu, i sin pérdida de tiempo se embarcaron en la Coruña, i dcspnes de haber tocado en las islas Canarias, en donde escala¡·un el pico de 'reides para v:isitar su cráter, continuaron S11 viaje i arribaron por el mes de julio de 1800 a Cumaná. El resto del ano lo emplearon en recorrer la COl>ta de Paria, las misiones de los chaimas, laE¡provincias de Cumaná i Barcelona i la Guayana espanola. Luego se internaron en los valles de Aragua, donde pudieron admirar la pompa de la '·e.iet~'l.ciontropical. DespncB atravesaron los Llanos de Barcelona, ese inmenso territorio, esa larga BUcesion de desiertos estériles que en una estension <fe 200 millas no presentan llll arroyo, ni una .floresta, ni yerba ver(le; muchos días echaron en c5ta travesía sin ver lID arbusto, ni una cabaña, i sOfortallJo un calor de 4:3, 30 a 4:6, 10 centígrados. De San 1<ernando, situado en las. orillas del Apure, entraron en el Orinoco por 108 7° latitud norte, i na- Este libro fue Digitalizado Por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República,Colombia -91vegando sus anchas aguas llegaron a la conflnencia del Guaviare, de donde salieron 11. 1ag misioncs de Santa. De aquí pasaron por tierra a las fuentes del famoso Rioncgro, i siguiendo las corrientes de este rio llegaron al fuerte de San Cárlos. De este punto regresaron al Orinoco por el Ca· siquiari, i de aquí a la mision de la Esmeralda, donde vieron preparar el curare; querian tocar en las cabeceras del Orinaco, pero no. se.10 permitieron la~ tribus de indios que encontraron, prmclpa1mente los gU((lC08, hombres de tez clara, estatura pequeña i sanguinarias inelillaeiones. Bajaron ,lucero el Ormoco con lilla navegacion pcnosa, sufriendo taIta ~e provisiones i continuos torrcntes de lluvia; i yjÓndos(' obligados a buscar abrigo i alimento en las selvas, JlO hallaron mas que nubes <le inseetos venellO~08 i UJI mísero sustento salvaje. Escapados de tantos peligros i privaciones, volvieron a Cumaná, atravesando las llanuras de la m.Ísion de los caribes, En esta ciudad descansaron algunos dias; i cuando hubieron recuperado sus fuerzas, mui debilitadas C11 esta escursion, se fueron para Cuba, corriendo frecllentes azares en la navegacíon: cn aquella isla permanecieron tl'e~ meses. Allí pcnsÚ IllllIlholdt en pasar a V cracruz, atravesar a .lléjico, llegar a Acaplllco, embarcarse para :Filipinas, i dirijirse de aquí a Constantinopla, deseando encontrarse con el capitllll frances BuwlÍn quc proyectaba hacer un viaje al rededor del mundo. Una f~a noticia qne sobre la salida de este eapitall l'eeihieron eifCuba, lo•. obligó a mudar de ruta; i para evitar cualquier fracal;{I, enviaron directamente a Europa las (:o]ecciones i manuÍ'cnto;; que habían formado en Sil escursioll por las rejiones d~l Orínoco. J~aruta que tomaron fué la c1eCartajena; i en marzo de 1801 fletaron un buque i se hieieron a la vela, pel'IllItlleciendo algun tiempo ell el mar por falta de vientos favorables. IJegados a Cartajena, proyectaron dirijirse a PQ.namÚ, i traspol'tal'sú a Guayaquil o Lima, donde,. tiadOi5 en la noticia recibida en Cuba, aguardaban encontrar al caIJitan Baudin; pero ademas de qne la estacion estaha mui avanzada, dcseaban conocer a Mútis, cuyo nombre era yu célebre en Europa, ver SIlS colecciones, examinar sus trabajos, i esplorar ellos tambien la natural~á andina. Despues dl! seis dias de maneion en Cartajena, dondt; Este libro fue Digitalizado Por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República,Colombia -92Hu¡nbol<lt hizo obsern1.eioncs astronómicas, empezaron los dos sabios SIlS escursiones botánicas, mincralÚjicas i zooló.iieas, por los bosquC'A'lde Turhaco. 1.uego subieron el .Magdalena, llegaron a Honda cargados de colecciones i observaciones, i <le aquí se trasplantaron a Bogotá por entre florestas de rnelástomas i cinchonas. 35 dias gastaron cn esto viaj e. XXI Menuinucta recibió a los viajeros con benevolencia, i presentado;; a :Mútis fueron tratados por él con la mas culta urbanidad. Colocados los tres sabios a igual altura en grandeza de seutimientos i en e1evacioll de espíritu, bien pronto la amistad enlaz(, sus corazones en nombre de la ciencia i por la gracia del jonio. Mútis les abriÓ las puertas de la Espedicion i les mostró llanamente sus herbarios, sus colecciones zoolÓjicas i mineralójicas, sus instrumentos, sus manuscritos i sus dihujos. " Hacíanse, dice lIumboldt, 108 dibujos de la Flora de Bogotá en papcl gralld--aigle, i se escojian al efecto las ramas lilas cargadas de flores. La análisis o anatomía de las partes de la fnwtificacion se ponia al pié de la lámina. Por lo jeneral se representaha caJa planta en trcs o <:uatl'o hojas grandes, en color i en Ilegl'O a la vez. Parte de los colo'res p-rocedian de materias colorantes indíjenas, deseonocidas cn Europa. J amas se ha hecho coleccion alguna de dibujos Illas lujosa, i aun podria dccirse que ni en mas grande escala. :MÚtis hahía tomado por modelos las obras de botánica mas admir:1.<las en su tiempo, las de Jacquin, de L'Hel'itier i del abate Cavanilles. El aspecto de la v~jctacion i la fisonomía de las plantas se copiahan con la mayor fidelidad; los botánicos modernos que estudian las afinidades de los V(detalcs segun la insercion i la adherencia de los (¡rganos florales, acaso habrian deseado UIla amllisis mas detallada <le los frutos i granos. Cuando los 6eñores IIumboldt i Bonpland residieron en Bogotá en el afío de 1801, i gozaron de la noble hospitalidad acMútis, éste apreciaba en 2,000 el número de los dibuj06 ya temlínad08, entre los cuales se admirahan cuarenta i tres especies de pasifioras j ciento yeinte de or<plídeas." 1_os viajeros se fijaron particularmente en las láminas trabajadas por Rizo i Matis. Este libro fue Digitalizado Por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República,Colombia -93Queriendo e.llos reconocer la vejetacion de los alrededores de Bogotá, :Mútis encarg() a Matis para (J11e 108 guiase, i éste les señaló todas las especies pOI' sus nombres bot{micos, desempeñando su cOlllisioll con la habilidad de un herborizf1.dor csperto. Ijuego visitaron las minas de Mariquita, de SI1Utn1H\ i de Zipu(1l1i¡'á, el pucnte natural (le Incononzo i la, cH"cada de TC'Jucndarnn. Cuatr() mescs permanecieron en Bogotá esplol'ando los llosqucs de las eercallía8, examinando 1:1.;;rocas, luwielldo ohsl'l'vlH:iones astronÚmicas, ñsicas i jcúg-níficas, i formando colc(~ciOlWSde ]08 tres reinos. ilustrados en todas las dencius naturales, adornados de vastos conocimientos en todas las lllatel'ins (lel sllhm', dotados de las lIlas grandes facnltadn; mentaJe", acabados de salir de en medio de la dvilizacion europea, lIumboldt i Bonplalld est.imularon e ilm\traron la in'tc1i.icnc1a de Mútis con SUEl luminosas conversaciones i. ¡:llS dil"cusiones científicas. Cuarenta afios hacia que Múti8 hal)ia dejado la Europa, i aunque los libros i los periódico:, lo imponían de 108 adelantos de las cienda" i de la marcha de las sociedades ultramarinas, la palahm hahla(}a es sicmp¡'c lUas insinuante, mas espl'eé va, lilas lat:t \l'lC In palabra escrita. Pero 1)01'est.a mi¡.;rna 11erm:mencia en Am{·rica, c0l1sagrada instante 1'01' instante al estndio de ¡:,nsvejdales, de sus animales, de su corteza tl'rrea, (le sus fenómenos físicos, :Mútis ora la encal'nacion de la eicncia natural de los Andes; i agregando a esta eondicion su imtn1<'cion variada j profunda, i sn esmerada educaeion, rennia en si mismo todos los títulos i medios para fe('nndizar, c\\mo maestro consumado, el ya hien eultivado talento de los ilnstrcl) viajeros. :Mas aún: la Espedicion botánica, rica de lihros i de materiales científicos, a~10l11el'ados en diez i Biete afios de perenne lahor ; dcsempeííada i servida por un cuerpo numeroso de homhres iutelijentes i acuciosos, eada uno de ellos profesor en su oficio; foco de las lucc:;, de las invenciones i de los dcscu brimientos útiles de todo el vireinato; plantel grandioso de la ciencia, EÍn igual en (~steni en el vieio mundo, por el teatro de sus trabajos, por 108 recursos de subsistencia con qne contalJa, por la inmejorable calidad de 6U8 empleados, atesoraba inmensas obscrvaciones i ele- . mentos nuevos dc historia natural, mucho mas que suficientes para dar pábulo a la sed. de secretos cOBillolójicos i Este libro fue Digitalizado Por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República,Colombia -94al criterio filosófico i escelso de hombres como IInmboldt i Bonplanu. Al yísítarla estos sabios, hallaron recopilada en sus estantes la natul':tleza de las rejiones equinoxiales de .América, coordinada, esc~iída, clasiñcada e interpretada por Mútis, Valenzl1ela, Zca i los demas aiscípulos del pri, mero. Se puede decir que, aunque los dajerlls hubieran pcrmaneeido dopo anos en América, no habrian podido ohtencr tantos datos a(~erea de la corteza física de estas re· .i iones, eOlllo los q ne hallaron acumulados en la casa de la Espedicion. Segnramente no se hacen cargo de esta circunstancia los que, mar\1yillándose del éxito de e;;to viaje me· morable, dicen que parece increible. XXII En setiembre de 1801 salieron para Quito, llevando en sucorazon las mas dulces memorias, i en su cabeza unagran "urna de ideas adquiridas Gn Bogotá. Al atravesar los Andes de Quindio tnvieron que caminar trece dias por entre el fango, sin hallar camino traficado, hasta que tocaron en Cartn~o .. Anduvieron el valle del Canca f.:ntodas direcciones, i luegu se dirijictoll a Popayan, de dOllde escribir, Humboldt a :Mútis, con feeha 10 de noviembre, lo siguiente: " La situacion de Popayan es deliciosa. lIna campiíía risueña i variada, bella ycjetacion, clima templado, el trueno mas m~~iestuoso qne jamas se ha oido, las producciones de los trÚpicos al frcnte de las cimas ncyadas de los Andes i de hocas que yomitan humo i lLguas sulfurosas: esta mezda de 10 grande i de lo bello, estos contrastes tan variadOE', que la mano del Todopoderoso ha sabido colocar en la mas perfceta armonía, llenan el alma de las mas grandes ~ interesantes ímájenes. I~os habitantes de esta ciudad ticnen Ulla cultura lll;who mayor de ]0 I¡Ue p'U(1iera esperarse, pero mueho menor de 10 que ellos se lmaJinan. Aquí todos rece· tan por(lllC han leido a Tissot ; todos saben química i física porque han visto el .E8pectáculo de la Naturalez(t. Por 10 demas, es mui dÚbil el alJlor a las eiencias de que tanto se lisonjean estos hahitantes. Ninguno ha querido acompaiiarnos en nuestras cscnrsiones difíciles, ni nos ha preguntado el nombre de una planta ni de TIna piedra. Ninguno lHt examinado las maravillas que tiene al rededor de 6í, tales como las hocas del volcan, 8U altura, rm 6ituacion, Este libro fue Digitalizado Por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República,Colombia -95~len 'que esta reprension puede h~ersc a toda la A.mériea. A. pesar de esto, me satisface mucho ver aquí buenas disposiciones, una efervescenoia intelectual que no era cono.eida en ] 760, desoo de poseer libros i de conocer los nombres de los hOlnbres célebres, una conversacion que rueda sobre objetos mas interesantesfluc elnacimicnto de cali~ .dad ... _Todo .esto forma,un hucn aguero ; pero terno mucho que no pasen de aquí, si no fC muda cnterarneute el plan .de educacion, si no 8e les haee entender que no se puede aprendec todo en dos dias, i <pHlvale lllas saher poeo como se sepa. h;en. N ucstro espíritu es como el agnn., cine pierde de profundidad a medida que se estiende por el terreno. Por lo demas, la física, las ciencias que faltan a todos lOIi amerieano8, no pueden cehar raices profundas sino en una jen~ra<:ioll robusta i en~tjioca. i Qilé se puede esperar de unos jóvenes rodeados i tlervidos de esclavos, que temen los ra.yos del 601 i las gotas del rocío, que huyen del trabajo, que cuentan siempre /Con el dia de mañana., i a <lulenes .aterra la mas-lijera incomodidad 1 Estos jÓvenes no pueden dar sino una raza afeminada e incapaz de los sacrific:os que piden las ciencia.s i la sooi(ll.lad." En esta misma carta hal¡la.ba IIumboldt a },fÚtis, en términos escepdonales, del doctor .Fran<:Íseo ,f O¡;{, de Oáldas, que .entónces residía en aquella ciudad, donde había visto la primera lnz, entregado con t()da. su alma al estudio práctico de 108 fenómenos. ñsicos i celestes, a la observaOiOR de los vejetales i a trabajos jeográficos. Grande i mui grata fué la sorpresa de 108 viajeros al dar con aquel hombre dota.do de singulares dones intelectuales; i como llevasen ca.rtas de recomendaekm de Mútis, afectuoao ami~o de CliMas, les a.brió fraternalmente su coruon i ros trató oon la mas cordial franqueza. Esta.ba a.lSS{l.Zonen el verdor de su edad: nacido (Jn 1771, acababa de cumplir treinta atlas, que habia empleado en el estudio de lállletl'a8 elási. cas, de 111. filosofía, {le las matemáticas, de las cioodoo naturales i de la jurisprudencia. u Hizo (dice su ilustrado discípulo el Sr. Lino de Pombo, én la preciosa ;J[c1iI<Yr1:a ld.¡¡thrica, llena de interesantes por~eno~, .(ple, ~~bre la v!?~, carácter; trabaj06.r:i~ntí:fic08i literanos 1 serV1CIos:patnoticos de Caldas, p-nbheo en " La Siest&," bello periódICO de Bogotá, dado :a ·}m en~852)1 hizo.sll8 primeros estudioS de latinidad i ñloBoña en el Este libro fue Digitalizado Por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República,Colombia -96Colejio Seminario de la ciudad de Popayan; i uno de (:atedr:í.ticos, el doctor Félix Restrepo, hombre de instruccion i talento, advirtiendo en él aficion i dis~8ieiollC8 admirables para el estudio de las matemátlcas. lL!\1pO cstimularlo i dirijirlo de tal modo llue, no BOloaprendio Cáldas en pOCOil dias los diminutos prineipios matemáticos contenidos en los escasos i anticuados< libros que en ~ttclla época se encontraban en el pais, como Euclides, Woltio i el padrc Tosca, ~illo que por 108 esfuerzos de su jellio i de su perseverancia, dejó pronto mui atras sus 'textos de leccion i a 1mrcspetahl~ maestro. Tan granae era 01 eutusiasmo del jÚven estudiante por la ciencia de sus simpatías, que se trasnochaba de ordillRl'i(, cultivándola, i solía la aurora sorprcu(lerle olvidado de sí sobre sus prohlemas. Advertidos sus padres de Cl;ai) frecuente::; djilias, He las prohibiel'On, i aun lo privaba de luz su madre a la hora regular de acostarse, para que durmiera; pero él dáhasc al'bitl'ioB para eludir Sil tierna vijílancia, tinjiéndose dormido, i tarde de la noche se procuraba 'vela encendida para continuar BUS tareas. - "Cone1nidos (Inc fueron 1101' Cáldas los cursos reglamentarios de íilosofía, enviáronlc al Coll'jio mayor del H08ario de Bogotá, en donde obtuvo la heca el 21 de octubre de 1188 ; i solo por complacer a su familia siguiÓ los estu<liof'de jurisprudencia, sin perjuicio de los únicos de snagrado, pues dedicaba gran parte del tiempo a las cien(ihti físicas i matemáti(Jas, i con particnlaridad ti. la astronomía. Coronó ¡;1i c,'tncra, corllo ha solido decil'6e, alcanzando los grad~ de, bachiller, l~cellC~ad? i doctor en ?crech?, .pero flÍendo aponas un medIano.l unsta: su vocaclOn deClclida era otra.; i 8U solitarios t\iel'cieios privado.s,adivinando como Paseal lo que 110 hallaha cn los libros, O descubriéndolo por investigaciones Berías, se habia formado ya regular matemático, i astrÓnomo teórico." El señor Pombo Jto nos dice si MÚtis fué o no maestro de Cáldas. Ni teng-o yo a la vista doculUcnto algtmo fehaciente en qne poder fund~l" \In concepto aseverativo a e8tc respecto; pero -¡;i se tiene' presente que cuando hubo venido Cáldas a Bogot», Be estableció en e¡,¡ta capitt\lla Espedicion \'¡ot¡lJlioo, de rcgr-ea6 'de :Mariquita ;' i sí no Be olvida ~jl:een a<plel tieI~.po~joo.tabll. Múti.slma c~tcdra~c ma.tematlCas en el COICJ10 dol RqsanQ, de que Caldas era SUB Este libro fue Digitalizado Por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República,Colombia -97será lícito conjeturar por lo m<Ínos que este B8.bio, entónces ávido de conocimientos llllltemátie08 i f'ísicOs,;e alumno, fuclinado l\ la contemplacion de la naturaleza, 110 tan solo aprovechara las lecciones qnc pl'Of'ci\ullll 1vI(¡tis en el Colejía, sino q ne, ademas, le suplicara el f¡l Val' de admitido en 8U g¡Lhinetc pl\rticnla-r i en los tratH~ios tic la Espedieion: allí para recibir lec~doncs de jcografía, astronomía e historia natural; aquí para hacerse perito en las tl ise·ecíones, desro-illciorie8, clasificacioncs idiseños. No se cOlldhe cómo OOdas, que pul' su vehemente aficioll al saher i pOI' su carácter per¡:;cWCl"alltc, no perdollalHl medio de Ruquirir luces i de proporcionari\e l'l'(,un;os para hacer adelallk)B en. los ramos de su pl'ellilcccÍoll, descllidam l'cculTir al eficaz apoyo de un sallio tan ver~ado en dIos, tan competente para tlirijir sn instl"llCcion i su talentu eon}(. el Renor Mútis. "Por el año de 1793, continúa el señt)!" Pomuo,re~resÓ a. Popa.yau, i forza.do por cil'cnnstancia¡;; domémea.¡¡, Iinbo de dedicarse acspeeulaciones raten-L¡; mercantiles en el:territorio de Timnná i la Plata, qne le salierollUlal i qtH~ pudo' abandonar al fin, resuelto a consagrarse a SUR ocnpadones favoritas; a rcdncir a la práctica ~1;S conoeimientos jeomét¡'ieos i astrollÍ>lnicoi\, aunque dt'~l'ru\"i¡;to de 108 medios indi8pellsables, i esease" sobre todo, d(~recursos pecu. niarios. Hizo, en eonsccneJl(~ia,eIl 17!Jfi, \lB ll1WVO vIaje a la capi.tal para buscaralhl11l1os libros, Illll}'ores luces i al- gunos instrumentos; i 110 habiendo encontrado éstos, '\Tiendo, como él mismo refiere, que era necesario snplir con la obstinaeion cuanto le falta ha, iC()1\centrar",c dentro de eí propio, determinÓ empezar fabricímdolos, en 01 6ilenéio i en Taoscuridad de Popayan, cn el COI·;u:on de los Alldct=), toInando por guía lasO?H;ei'M~~8 {(8frollÓmica8 del célebre marino espaiíol Don Jotju Juall; por artífices Rusiliares, a U11 carpintero, un herrero i un platero; i púrrnat,e· J'ÍaleS, Q(1I1eUos de IIue le fuesc' dado disponer." FJ!l la ya cit.ada Jlli11fw'ria l'(8tárica, puede verse el modo <;omo aqncl sáhio fahrieÚ a cimas pena,.; algunos instrumentos, i 01 trabajo l¡ne le costÚ conseguir otros, para-fija!' la posicion jeogrÚfiea de su eilldad natal, i con los caaleti calcnló Y<lrias otras hltitude~ i lOlljitudcsquc, rcctificadardespues ("Ull lUni huenos instl"l1rnentos europeos, resultaron (}i~repar llllli poco, . _~f·~tl~<; desu segnndo viaje allogotá, agregKel auto.r,'¡ Este libro fue Digitalizado Por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República,Colombia -98durantesTl c''Ortal'esideneia aquí,yahabia trah~iado haBtante con el barómetro, i publicado algunas de susouservaciones barométricas en el periódico titulado "CÚ'l'reo CurÍoEO;'~ de manera que a la edad de veintil:lciilaños ~'Staba en la plena posesion de todas las dotes intelectuales, natmales i adquirida~ i lloeiollcspr:icticas necesarias para acometer, con feliz éxito, la alta empresa que meditaha de la carta jeueral del antiguo vireinato, para servir útilmente a la astronomía como centinelll. i esplorador del hemisferio sustral celeste en la vecindad del ecuador, i para ser el fllDdador de la buena ensefíallza de las eiencias exactas en el pais de au nacimientt>." XXIII A la llegada de IIumholdt i Bonplaml a Popayan ya Cáldas habia reunido un herbario con¡~iderable que contenia las plantas de las feraces comarcas del Callea, i había hecho observacioneB sobre la jeografia de las plantas no ménos importantes que las observaeiones 8stronómicas i fisic88 de que se ha hecho referencia. Todas estas observacione,s paB:U'OI~ a la car~era de los ilu?tres "iajeros. Ademas, Caldas habla descubIerto ya que las nwntafia8 se pueden medÚ' cO"n el terrnóme"bro, C01nO 8e hace con el barómetro ; descubrimiento que formuló en el siguiente problema ~ .Dado el caJ.,(tl' del agua h'irviendo en un lugar, hallar la elev{k,-ion correlativa del mercurio 1m el barómetro, i la altura del lugar 80&1'e el nivel del mar. "Los pormenores de este descubrimiento importante, dice el señor Pombo, debido orijinariamente al contra. tiempo de la rotura de un termómetro inglés por la estromidad superior del tubo estaban ya consignados en nna memoria de Cáldas, firmada en Quito en abril do 1802, i que dió a luz un amigo suyo el año de 1819 en Burdeos~ con illllllmerables errores tipogr'.ilicos. Veamos lo que de ella aparece. " Forzado a rehabilitar su termómetro roto observa que, despues de fijados con rigorosa exactitud 108 términos ordi· narIOSinferior i saperior de la nueva escala termométriea. a saber, el de la cOlljelacion i el del a~ua en ebullicion, i de trazada ll\ escala, di vidiendo el espacIOintermedio en 80 partes ignales, rcsultaban los grados demasiado pequeña¡;; Este libro fue Digitalizado Por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República,Colombia -99en comparacion con los primitivos, e indicada con incre" mento notable la temperatura de Popayan. Reconoce desde luego que hai error : advierte mas tarde no poder élderivarse del término de la conjelacion, igualmente fria en todas las latitudes i alturas segun sus propios esperimentos; acordes con la doctrina corriente, i que provenia por tanto de estar deprimido el término superior de la escala ; deduce de aquí que. el calor del agua hirviendo no era e~ Popayan el mismo que en Lóndres, que calor igual debia Buponerpresionigual atmosférica; lee, medita, ensaya·correcciones sobre bases hipotéticas inferidas de alguna frase vaga de un libro viejo, i se persuade al fin de que era necesario buscar el grado de calor del agua en aquella loca. lidad, de un modo directo. " Oon qué viveza de colorido, con cuánta animacion i entusiasmo prOfesionalpinta su elegante pluma las dudas que le asaltari, las cuestiones que en su mente se encadenan, las soluciones que vislumbra, su firme propósito de perseguirlas por voluntad i por deber, i hasta la simple 8ucesion de los. hechos! "De un esfuerzo en otro, de raciocinio en ('aciocinio, viene Oáldas a parar con inefable gozo a esta serie de con" secuencias.-" El calor del agua hirviend,¡¡)es ;propor{lional " a la presionatmosférica: la presion atmosferica es pro" PQrcional a la altura sobre el nivel del mar: la presion " atmosférica sigue la misma lei que las elevaciones del " barómetro, o, hablando con propiedad, el barómetro no " nos enseña otra Msa que la presionatmosférica: -luego "el cedor. del agua 1W8indioa la pre8ion atmo8.férioa del " m,i8momodo que el barómetro,. luego puede aarn08 laa "el'evaoion.e8.d.e l08 Z,ugare88in neoe8idad delbarómetro,i " oon t{J;Uta, 8eguridad como él.", Pero modesto siempre i desconfiado de sus alcances, nuevas reflexiones rebajan a sus ojos el mérito de ·la dMuccion final, considerándola demasiadoobvia"i Sl.) rehusa a consentir enla idea de que ella no hubh~se9Currido ya, de tiempoatras, a algun Babia europeo. Oons\lltando,sinembargo, la Fí8ioa e8perimental de Sigaud de la Fond, 10 mas moderno que encuentra, nada h~lla parecido a sllteorÍa: i aun jnzga'~odavía imposible Que a tan grande8 hombre8 Be h~tbie8en'ocultado tale8 pequeñeoe8.· "Qué dudas 1esclama ,: qué suerte tan .triste la -' denn americano I Despues de'lUuchostrabajos, si llega Este libro fue Digitalizado Por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República,Colombia - 100 " a. encontrar alguna cosa nueva, lo mas que puede decir "eS,1W e8t¿ en m,i8 libro8. l Podní alg,m pueblo de la "tierra llegara ser 6abio sin nna acelerada comunieacion " con la culta Europa? ¡Qué tinieblas las que Il08 cercan I " Pero ya dudamos, ya comenzamos a trabajar, ya dceea" mos, i esto es haber llegado a la mitad do la carrera.!' "Un buen termÓmetro de DoIlond, cerrado en Lóndres, qne afortunadamente consiguió Cáldas. en que halló exactalilente el término del hielo, i que usÚ con todas las pre.cauciones del eaSOdespues de haberlo marcado con lQ,escala de Heaurnur i habcrle adaptado un nonio quo daba décimos de gmdo, vino a confirmar BU principio fundamental sobre el calor del agua hirviendo; el cual resultÓ ser de 75",65 en POl)ayan, a 22 pulgadas 11.2 líneas de a1tur¡¡. ua,rométriea. A esta observacion ag¡'egÓ otras muclll\S, hechas en puntos de diferente nivel con presencia del termómetro i del barÓmetro, no solo a las inmediaciones de Popayan sino taml>ien en la Illui accidentada vía de tránsito de Popayan a Quito, con oeasion de un viaJe a aquella ciudad cmprendido por asuntos particulare8 en 1801, i todas aparecieron ratificando la conjeturada PTOporcionalidl.l.d. > ., t •••••••••••••••••••.••••••••••••••••••••••••••••••• . "Aguardaha Cáldas con impaciencia la llegl1iJa del baron de Ilnml>oldta Popayan para sujetar a su juicio la teoría que, con tanto esmero, había creado i :perfeccionado, i saher al fin si era nueva. El ilustre vi~lero solo pudo citarle otra teoría imperfecta i precaria, indicada por Sucio, de que ya {~Illahia tenido conocimiento por la obra de monsieur Si~aud, hasada en la ¡;;impleobservacion termométrica de la temperatum. "r. CÓmo es posible, dice "nuestro malanmtllrado compatriota, l}ueel temple de la " atmósfera n~rialldo hasta el.infinito en un misIllo nivel, "en quo inflnp:m el lugar, la reflexion, un viento, una "nube, la hora, pueda servÍr con fijeza para determinar la " eIevacion? A Ull cuando se supongan dos observadores " qne do convenio observen al mismo momcnto, cuántas "eaus;as locales, i lJal'tim¡]ares a cada estaéion, alterarán " el licor del termÓmctro! j Qué raro, (1ué difícil hallar " un dia perfectamentc soreno! i solo esta cirennstancia, "qué limitado hace el método de IIoherden i de Sucio! " Por el contrario el del agua.hirvicndo presenta toda la Este libro fue Digitalizado Por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República,Colombia - 101 - "oomodidad, torb la precision que se pueden apetecer. "Que sea el tiempo serono, nublado, frio, caloroso, con "Tiento; (IUO el observador esté a euhierto o espucstoi el ,. agna hirviendo indicará siempre en el termÓmetro un "calor proporcional a la prpsion," "EntrÓ, pue,'" Cáldas en ])08e8ion de SlI de¡;;cubrimiento: i apcsar de la noticia que de (·1 tUYO 1I nmbolJt, apesar del llU'go tkmpo tl"asc'lll'l'ido, todavía !lO >le le COlluce cn Enropa, segun parC(~I~, i mui !Joco ell llucstro propio pais, cÍrennstauc1ada, impresa I'TI Hurdeos en lSHl, en cAAtellano, i pOI' un orijinal (lue habi¡t mntilado (·1Yol'az (,onU'jen de Illlestras costas, saliÓ, tomo ya :-;('dijo, plagada de errores, i, adema,.;, no ha tenidu eíl'<..nlacioll: será conveniente l'cimJ>l'illlirla, csptll'ga<1~t de bUS gran:;; defectos SllmefllOl'ia cOn amor e intclijencia, no m(;nos en lwnm del grato nomhre dé su autor que para utilidad COTllllll. " Indi"pensable, aunq'le lwnoso, es ]¡aecr aqui notar qne el baron de Hnmholdt no COl'icspondiÚ de la manera qlle 6l'&de esperarBe a la. confianza i noble fnmqnez!\ de Cáldas, on lo relativo a Sil descubrimiento del priJl<'ipio innlriable do variahilidad dd ('alor del agua en t~ll1t1lieioll; ¡lO obstante haberlondmitido COlllO orijiJlal dcspnci' de ('eder t'¡ campo en la objeei()Tl que pTf>lHlSO (h ']1/1< el mlm' (/;;1agua ¿lariaha Il h~ mi8ma pre~~¿onluu,ta IUI (1/'((((0. ¡;egnn lo afirma CÚldas en su :Memoria, i TIa ohstante hall(:'!'8e apro\'eehado de él en el Cllr80 ¡;nh¡;t~cnt'lIte de su» ('sp]orHcioIles cientÍfica¡;. En lsoa dir:ijió aqucl sabio (](,sde (';'uayatluil 1\1 domo!' .TOS(l Ce!<1¡;tiIlo:MÚtis el 1'1'iJl\1'1' hf>i'f[lll'jo de su Ouddro fi,.,iw d.~ las l'~jilH¿eN l'f~uatoJ'ia!i',~: cste hOl';(l'l('jo fué pllbli(~adopor C,Udas en " El ScmaJlario~l de 1809, fielmente. traducido del l'e:>pcetivo Jl1RI\Il!icl'ito, i nada se hablaba en (,1de oh¡.;el'vaeiones del' señor Baron ni de persona a~~na. sobre el calor d~~lag~ul,:Mas tarde el Ouadr<> reci~ hlQnotahle eusan<:he 1 pultmento (le mano de 1'oU autor, 1 así ensaJlcltado i perfeccionado Be le eneUl'lltra; ;Tlsorto, en español, ('1m la <~ol'l'cspolldiente advl'l'li'neia. en la reimpre:;ion del S"lllltnflrio J¡edw. <111 l'al'i" en 1S4-!Jpor el señor Acosta: allí ltai \lna secdon (·t>H d l'lltmbezHmiélJto"Grado de (':tlor cid a~ua hirviente u diversM alturas," IJn que se lee lo <]lit' ,,¡,,'ue : "El grado d0 c<'\lo1' que adquieren los líquidos ál1tes ., de-hervir, depende del peso de 111. atmÓsfera; i como este BANCO DE A !U\ BIB',IOTeC/\. LU¡::'·~1. ,. A.'" A ''-''-' T-'-~;cION Este libro fue Digitalizado Por la Biblioteca('2A Luis••.• Ángel Arango del Banco de la República,Colombia - 102 " peso varía como las alturas sobre el nivel del mar, cada " a.ltura tiene su término o punto de ebullicion eorres~n¡: diente .... (Sigue una tabla). En el curso de mis VIajes " hice muchas esperiencias sobre el hervor del agua en las " cimas de los Andes: me propongo publicarlas, i con ellaa " otras ejecutadas por MI'. Cáldas, natural de Popayan, físico distinguido, que se ha consagrado con un ardor sin " ejemplo a la astronomía i a muchos ramos de la historia ¡¡ natural. ... &3." ¡¡ Ni una sola palabra acerca del descubridor de ese principio en América, por sus propios i aislados esfuerzos!" ¡( XXIV Poco tiempo permanecieron Humboldt i Bon:rland en Popayan; empero, merced a los estensos conoCImientos que, sobre aquella localidad, habia adquil'ido Cáldas, esta corta estancia bastÓ para sus miras científicas. De Popayan se dirijieron a Quito, reconociendo al paso la naturaleza de Pasto i de los valles que median entre el Guáitara i aquella ciuda.d. AsociÓseles Cáldas, que desde mucho tiempo lÍntes habia pensado hacer' un viaje 3 la presidencia de Quito, con el fin de esplorar la vejetaeion i levantar la carta corogl'áfica de aquel pailS; i como conocia bastante las comarcas de Pasto, su compañía no tan solo fué grata, sino de grande utilidad para los sabios estran jeros. "Mucho estimó el Baron sus talentos, admirado de ver un astrónomo por su propío esfuerzo; i corno el verdadero sabio es como el sol que brilla mas miéntras mas comunica !lU luz, no'dudó aquel viajero adelantar los conocimientos de su nuevo amigo, obteniendo en cambio sus observaciones i la cooperacion a 6U6 trahajos. Felizmente para tan b~ena compañía, ella caminaba sobre los pasos de Bonguer 1 La Condamine, aquellos sabios que habían venido ántes a Quito a verificar la idea del gran N ewton sobre la figura de la tierra. N uestros viajeros confirmaron la exactItud de muchos de sus cálculos, reformaron otros, hicieron nucvos adelantos, subieron a las altaa cimas del Pichincha, Chimborazo &.', terriblcs maravillas de la Creacion, con el valor que infunde la ciencia, sin temer el yelo escesivo, ni las lavas de estos volcanes. De allí bajaron a las vaata. o Este libro fue Digitalizado Por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República,Colombia - 103 selvas que adornan 108 valles del Ecuador, lugares encant&dospara el amigo de la naturaleza, en donde la vejeta. cion es tan activa i siempre lisonjea sns ojos la corpulencia i el verdor de los árboles. Cáldas tnvo la pena de ver embarcar en Guavaquil a sus compafieroBi amigos: quedó solo continuando sus tareas, colectando i determinando plantas nueva8~ levantando cartas jcográficas i haciendo observacioncs de astronoUlía." (LA BAGATE:LA, .J[emoria biográfica de la NUe'¿'(t Granada, 1852, número 3. llumboldt i Bonpland recorrieron las rejiones que baña el caudaloso Amazonas, permanccieron luego en Lima algunos meses, se dirijieron lllas tarde lÍcia :3I{~ji('odonde hicieron larga residencia, dcspues se encaminaroll ácia 108 Estados lJnídos, i de aquí regresaron ti Enropa. No seguimos detenidamente sus huellas por a<JllCllospaises, porque eso saldda·de los límites que 1108 hemos trazado. Grandes rios, montafias colosales, voleanCil,eata.rata8~ selvas seculares, veneros de preciosos metales, todo lo vioroni examinaron con el cuidado que les permitia la rapidez de sn viaje. Miéntrss que Humbúldt interrogaba 108 ciclos, golpeaba las rocas, media la altura de las cadenas .andinas, determinaba la posicion jeográn('(\ de los lu~res i bu,scaha las causas i leyes de los fenÓmenost'í8icos, .!:Sonpland enriquecia el catálogo botánico uniyersal con nuevas especies, i aumentaba la fannÍa del mundo con animal{'$ desconocidos. N o méno8 que todos los ramos de la cosmolojía, hicieron con<J.,uistasde alta importancia la antropografia, la etnograha, lalin~iiistica i la economía política. En efecto, Ilumboldt hizo inmensas observaciollCi sobre la constitucion fisiolÓjicade los aboríjenes, sobre la. orgnnizacion social de las diversas tribus, sobre BUS costumbres, sus dialectos, su modo de vivir; sobre el .1(.nerode administracion que habia planteado en sus colonias el gobierno espaí'lol,sobre el número i calidad de la poblacion hispanoamerieana, sobre las fuerzas productivas que esta poblacion podía de1o;cllvolveri sobre el gran continjcnte de valores con que }lodia contribuir al eomercio; ob.,ervaeiones utilísimas que han sorddo i servirán para illl"trar poderos;\mente grandes cuestiones socialcs, políticas i relijiosas. Por espacio de cinco aíios respiraron el ui¡'c embalsamado de las vírjenes rcjioues americanas: cuatro aflos do estudios constantes, proseguidos sin descanso; cnatro años U ) Este libro fue Digitalizado Por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República,Colombia - 104 - uc continno movimiento, dé inccsante actividad orgánico. e intelectual, durante los cnales pasearon el continente de tillO a otro cstrcmo, dcteni{mdose tan solo en las ciudade8 mas populosas a fin de arrccrlar colecciones, escudriñar· la índole de los gobiernos i de los hombres, fijar los descubri· mientos i da.r forma literaria a los resultados mas trascendentales de sus afanosas perquisiciones científicas. Vida errante i atareada; vida árdua, llena. de flLtigaR, de inmi.l, llentes peligros, de amargos trances. Sinembargo, por con,;ecneneilL de este movimiento tan sucesivo conio dilijonte, impulsado por el anJlClo de la verdad i alentado por él deleite de la imajinlLcion, hallaban a cada paso en. cantos supremo;; en las infinitas vistas, siempre val'iadas, siempre espllmdidas, qne oí't'ccen los cielos i la tierra de AmÚriea .•. Dedicado, dicc lIumboldt, desde mi primera .i u ventud al estudio de 'la naturaleza, sensible a la belleza. agreste de un s11elo erizado de montañas i cubierto de antiguos bosques, he hallado en este viaje goces que me han <:ompeIlsado de las privaciones consiguiente8 a una vida; Ia.boriosa i casi siempre ajitada." xxv "Fruto del viaje dc Cáldas de Popayan a Quito en el año de 1801, diee el señor .Pomho, fué una Jremor¿l1, sobre la niuelac¡on de la.~planta..~ qlle Se miltÚJan en la1JéCÚulad del EunadOl', qnc fúl'mÚ i remitió en HW2 al señor l\fúl1Í8) a quien la dedicaba. Ese trabajo qne contenia important.es obsen"acioncs aplicables a diyel',;os eulti\"os, i (~Ollc;;peci&lidad al del trigo. era ensayo de otro mas Útil i grandioso rpw meditab:t, i para el cual continuó recojiendo l~lateri!l.les }>or largo tiempo: el de la Jeoflrafía de la8 plr(uta8 del "ire/nato de Srtl/,t(,;f'é ,/: 81(. carta botJ.ni{'a con perfiles de las varias ram ificacio/lcs de los Andes en la cstension de llUeve ;.;rados de lat.itud. qnc diescn a conoce!' la altura en que vejeta cada plantn, el (~lima de qne necesita para vivir, i el que m~jor convicne a su desarrollo." 1.Hti8 le escribiÓ en 1~O.2, de Bogotá, partieipándúle que lo habia agreglL<lu a la Espedicion botÚllica, i hacién. dole saher que :'la }ll'illcipnJ encargo era colcetar las plantas de la pl"e~idctlcia de Quito, espocialmente laH quinas; le· vantar la carta corogl'áíica; hacer observaciones astro1l6- Este libro fue Digitalizado Por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República,Colombia - 105 micas, bal'Ométricas i termométricas; furmar la estadística de aquella SOCCiOIl del vireinato, i delicribir los US05 i costumbres de la poblacion. Cálda:; H(:eptÓ; i en julio de 1802, despnes de lwuer observado en l"¿uito el í'o1sticio de este mes, empezó sus escursioneí3 por lo:' cOJTejilllientos de 11)arrl\. i Otan-llo, (:011 cuya carta regre::;Ú a aquella ciudad. donde se ocupÓ cn fijar su latitud. "plJl' illlstallcias, agrega el señor Pornl,o, del presidente Baron tie CaroIldclet, i por reeolllcndacioll de J\lútis. se compl'lJll\ctiÚ a esplorar el territol'iu por clOllllc se }Jn>tendia ¡tbril' un Huevo camillo (le Ihal'Ta Ú('ia la embocadura dd río Santiago en el llltU' Pacítieo. ll:ulIado camilH. de Malbucho. Pendró, en efecto, en [HIncHo;; h08qllcs enrnaraflauos, solitarius i malsano:" i descIlljJe[IÚ :;n comision cumplida i slitísfadoriam~Dtc on julio i agosto de 1803. lcvantando el plano topogrMieo con millllcioso trazado del curso de 10:-; ríos, i con detenninacion ::tl"tronÚmiea i harométricll de todos lo::;puntos importantes. Hizo llumer-osa..<; heroorizaciollcs, cortó el perfil del tenClll) dcsue la níeVl~ perpetna. hasta 01 oCl'ano, estableciÓ la altura dd mercurio i 01 grado de calor del agna b irvÍelldo al ni "el del mar; i nI cabo de jmlcdhlc;; pell:uidades, !Se retiri> ('nf'ermo de calcnturas 11'10 10 mantuvieron 1'01' 1I111(:hos mc::;e::;oIl estado yalctutiilllwio."· Durnntc $U convalecencia en Qnito, prc}Jaró Cáldas nueV06 medios para una la.rp:a c¡;cuY8ion :will. el Sur de esta ciudad: la eual prineipió ellO de .1n110de lt1-04-. Recorrió los éorrejimientúb de Ltl.t8.ctlllga, 1I aIllIIlJ.to. Uiobamba i Ala.uw, la goherllaeion de (\tenca i el correjímiento de Loja hllsta los confines del Perú ; i el % dc diCiembre del mi81110año e&tnvo de regreso en Quito, ('on cinco especice de quinas i gran llÚmer-o·dc otrM planta¡;.; lUultitud de observaciones astl'onómicas, l)(U'orn{'t ,·iea:-: lllctcorolÓjicas i sohre el calor del agna; medida¡,¡ i dibujos do los restos de varios palacios, fortalezas i caminos de los antignos Incas, i 11U& lápida de m:Í.rlllol blanco de la8 colocadas por La Condamine con inscripciones relatiyas a la medicion:del meridiano terrostre, la cualllabia scn"jJo por largos años de puente cn una aeequia,i quitada de allí iba ascr-per- forada. para col'lC~\fb de re.li1hen otra H(:cquia. Pasados tres mesee., deatinados'a dijerir tordenar los mt.~s que:-ltahia cQlootado, émproudió marcha. pa~ Este libro fue Digitalizado Por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República,Colombia - 106 Bogotá (28 de marzo de 1805). En el tránsito recojió diversas especies de quina i muchas plantas de diferentes familias que halló en las demarcaciones de Pasto, Popayan, Cali, la Plata, Timaná, ~ eiva i toda la hoya del alto Mag-dalena; i ellO de diciembre se,presentó en Bogotá con nn acopio distribuido en diez i seis cargas, que contenian, segun la relacion oficial del mismo Cáldas, nn herbario rcg. petable de cinco a seis mil esqueletoR, dotl volúmenes de descripciones, muchos diseños de las plantas mas notables~ semillas, cortezas de las útiles, algunos minerales, el material necesario para formar la carta jeográfica de la mitad del vireinato, la carta botánica i la zoogrática, los perfile~ de los Ándes en mas de nueve grados, la altura jcométrielL de las montañas mas célebres, mas de mil i quinientas alturas de diferentes pueblos i montañas deducidas barométricamente, un número prodijioso de obselTacioDes meteorolójicas, otro de observaciones 8stronómicas i magnéticas, i algunos animales i aves; con mas, una coleccion de eptir pas o impresiones de las plantas vivas sobre el papel, idos volúmenes descriptivos de usos, costumbres, poblacion, agricultura, industria, tintes, recursos de todo jénero, literatura, vicios, enfermedades endémicas &,a en el país recorrido. Tal fué el fruto de Sil viaje de Popayan al Ecuador. Cuatro años de duras fatigas le bastaron para reunir, en homenaje a la ciencia, todas las preciosidades i todas lu. pa.rticularidades notables de una de las mas bellas zonas del continente. Mútis lo recibió COn la lIlas afectuosa. cordialidad, i admiró su actividad científica, comparable solamente a sí misma. El ardoroso sabio payancs superó en mucho sus esperanzas: habia triplicado el tiempo bajo 8UB manos impacientes e incansables. XXVI Desde que Mútis se estableció en Bogotá, uno de sus mas ardientes deseos fué la ereccion de un observatorio astronómico ~n esta ciudad; pero no pudo realizarlo durante 108 últimos años del siglo pasado, porque las dernM atenciones de la Espedicion no se lo permitieron. En 1800, desahogado ya de muchas, en razon de la pericia que habian adquirido 108 empleados ensefiados i reJimentad08 por Este libro fue Digitalizado Por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República,Colombia - 107 él, pensó en comenzar la ccnstruecion del ohservat.orio que exíJtc hoí, i habló CQU tal objeto al vil'ci: un _110~1)* no podía m6nos de prestar Slt eft_~Ji !ll'l?y,0. para una obra !an land~ble i ben6fica a .las cieDcia~¿ coinoMéummieta MutIS nÓ tuvo ncce¡:lldad de lllstar mucho a fin de qUé el tesoro del vii'cinato le pasara las Sllllla~ que rcqucria.líL empresa. Dado el pusoprineipaI, solicitÓ al al'(l'litecto DoIlliu~o Petrez, pa~lre eaI?uchino, para (pie f<",l'lllUSelos planos 1 tomase a SI1 1Il1llcchato (;¡trgo la ~Jecnelon de la ohra, ;;ujiriÚlHl()le 1.fútis la ideA. .ieneral dd edificio i l'cseryándose la lOuperior dircccion de los tmllajo;;. Empcz~rollse estos el:!t de mayo de 1802, i >ie"i:!lIil:l'OIl sill (ldclleioIl, merce •.l,a la lleti\~idad i zdo dd mayordomo de la Espedicion f'(~l1ol' Hiz •.•. 'l'erlllillÓse la obra el 20 de agosto d~ 1.803, eOllsist\mte en 1I1llt torr(~ oet(lgouH U(\ 4: metros 2~ celltíllletros de hldo i 18 metrus W eelltÍmetrus de altura, coronada por una n:r.utea i divida cu tres cuerpos, de los cuales d mediano tiene un cielo }¡cmi¡;t'Órico perforad u para dar paso :~un rayo de luz que eae sobre la meridiana trazada en el pavimento; la escalera sulJ(~ en cspiml por otra torre c\wctrang-1I1ar adherida a 11lla de las caras ¡lc la princi:pal, de ~3,~5 metros de e~ey¡\eio~l, conteniendo cnl,a cstr(!nlHlad superIOr un pe1lueno gablllet •.~ •.le ohscrvaclOn cubierto por bÚveda CUIlranura de 1Iorte a SUl·. EnClIlmtranse reunidas en este primer terllplo el'ijidu a Urania en ti nuevo eontinBnt<? como dice Cáldas. las dos condiciones dlJ la buena arquite~tura: belleza i 8olitiez. COlTlol~!\6tronoJiiía estaba incluida en el plan científico de la Espedicion, el go. biemo espafiol, a solicitud de )Iútis, manlló algunos instrumentos para el observatoriu, este sabio proporcionó algunos, i otros fueron donados por el señor Jus{~Ignaeio Pombo, de Cartajena; por manera que a fines de 18051a Especticion tenia un buen ohservatorio prodsto de 101> instnunentos i libros necesarios para emprendc¡' (;011 fruto una serie de ohservacioncs a¡.;tron(llnicas. Llegado qUQ hubo Cáldati a Rogot;¡, Mutis le }úzo entrega del ohservatol'io, i Cáldas lo estrenó cmpezando por trazar la lIlCl'idiallH i lIIuntar los in:itrlllllentos, que aun pel'rnaneciuTl Cll(;¡~juna(los. Ayudado por un sirviente de clara compronsion, a quien enseñÓ algunos rudimentos de a8tronomÍa,. priucipió Uáldas, dice el benor rombo, "una serie metódica de ubsérvaciones ll.atronóllIicas que compren. 1 DIC':IDf~JlK D1: 1%0. 9 Este libro fue Digitalizado Por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República,Colombia - 108 día las alturas diarias meridianas del sol, las de las estrella.s. las 110chos despejadas, los eclipses de luna i de sol, las inmersiones i emersiones de los satélites de JÚpiter, las ocultaciones dé astros por los planetas, i demas fenómenoS celestes notables; i series de ob8ervaciones diarias, a tres horas diferentes con el barómetro, el termómetro i cllligrómetro: adernas de tt'ahajos especiales sohre las refracciones astronómicas alllivcl i latitud del observatorio; de la reviaion, coordinacion i complemcntacioll de sus apnntamientos anteriores; de algunas operaciones jcorn{·tricas hechas en los alrededores de la ciudad, COIllO la qlle tuvo por objeto medir la altura del ceno nevado de Tolima ; i ;.:illperjuicio de sus c¡uchacercs ell su calidad de agregado a la Espedicion hotanica." " La época mas dichosa de la vida de CÚldas, agrega el mencionado hiÓgrafo, fueron los años en <J.uegozÓ de la plena i pacífica posesion del observatorio. Digno sacerdote ae la divinidad tutelar de aquel santuario elegante, consagrado fervorosamente a su. culto, pasaba allí la mayor pllirte del día con su" libros, con SUB instrumentos, o con la. pluma. en la mano, en las diversas tareas científicas a qnc se habia dedicado; }lrrsaba allí tambien parte de la noche si el estado del ciclo era favorable pa.ra la~ obsclTaciones astronómieas; i allí le amanecia tras de pocos mtos de inquieto suono en su catre de camino, cuando así lo demandaha la. (~ircunstancía grltve de' algull notable fenómeno celeste. en pariente inmediato i dos o tres amigos íntimos, incapaces de abusar de su confianza, i algull jovencito que recibía de élleecioncs de matemáticas, eran las Únicas personas a quienes franqueaba sin disgnsto la entrada de aquella su habitu3;1 residen<:Ía, en que el es}>írit\~ de órden todo lo regulaba 1 el menor acto de perturbuclOn era nn crímen." en XXVII .A la vez quc se formalizó la acoeion astl'onómica i jcográfica de la Espedicion con habersc encargado Cáldas do 8US operaciones, logró lIútis tambien cstablecer en regla lit de z9olojía,poniéndola a cargo del inmortal naturalista J01:ie Tadeo Lozano. Nacido en Bogotá el 30 de enero de 1771 ; condecorado a. los diez años de edad con la becá.' del Colcjia del Rosario, Este libro fue Digitalizado Por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República,Colombia - 109 - 't\ortde cstlldió latinidad, filoBofia, matemáticas, ciencias naturá:les i medieina, sobrcsaliendo en esta fucultadhuta el punto de rcjentar la cátedra de su rnll.(~stro, doctor Isla, éaaildo {'ste no podia hacerlo; trasp0l'tlldodespuee a Espa1'l.1I., cuyas Universidades fl'ecuclltó con aprovechamiento i cuyos mu¡:;eos i bibliotceas visitó con ánimo úbi;el'vador; dedicado luego allí mismo 11la l'~lrrCra de las armas i enrolll.do en la. ~uardia de corp8, en cuyo cuerpo hizo la campaña del Rosellon ¡laja las {¡nlute~ del Conde de la Union, alcanzando el grado de eupitan e ilw-'1J'[lIIdose en el arte de la guerra; restituido en 17Ui :1 Sil chIllad nati ni, lH)r eausa de su mala salud; ]'('cibido con aplauso por :;u,; paisanos, i honrado inmediatllmcnte por el Cabildo de la capital eou el destino de alcaltle ordinario, que ejerció con dig'nidnd ; jóvcn, de fácil <':d!tlpJ'(~llsi(Jn. de raza)} desJlI:jada. de pl'ollta intuicioll, Lozano hahia podillo adquirir, ademas de la práctica en los usos del \Hnndo culto, adcmas de ese criterio fino i segurQ que da ]¡\ rcsid<.~ncia fructuosa en los grandes centros de la ciVilizacion í del poder, donde el contacto con los llOmbrcs eminentes i las eo;;as pal'ticn1are:,; I'Palza las iueas, ensancha el espíritu i enseña a manr:iar los sutile" I'(,snrtes del coraZOll humano; habia podido adcl'liJ'il' una euncacion superior, ilustraeioll esp~lciosa, estcnsos i eompletos eonocimientoa en ciencias naturales, juicio grave i aquella sublilllacion del pensamiento qne impulsa al hombre en 1'01:; de l'ejíones ignotas de verdad. Vástago de ulla f}unilia distinguida pOI' la antigiiedad de sn l\iecutoria, por Sil riqueza i sus rehldones con los pcrsonajes de la corte, Lozano 11ahia encontrado en España lJl'illantc acojidll; pe1'() ni las comodidndes, ni los sedudores placeres de1\fadl'id, ui las atencione:; -aristocráticas aletargaron SllS facultades cspil'itmlles: empleó el tie/npo útilmente en pelfeeeional' sus primeros eatudios i en hacer otros sohre la diplomacia, la cstuofstica i las diversas formas de gohierno de Europa. Hegrcsado a Bogotá, acreci{¡ Sil ya cuantiosa fOl'tnna con la dvte de su esposa, hija de su hermano .T oi5é l\IarÍa, marqucs cle San .fOlje; ¡fuI' cntÓllecs ¡pie, abstraido de 1us afanes comunes de la vida, i retil'ado a sus posesiones rurales, se cqnsa'!Tó a cultivar todos los ramos de la historia natural, pc;'l) ~spe. cialmcnte 1ft ciencia de Euffon i Cnvier, en medio de una biblioteca selecta i rodeado de una naturaleza abundante en'vejetales i animales de todas clases, i particnlá.rmente en Este libro fue Digitalizado Por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República,Colombia - 110 reptiles e insectos. En 1801, T.ozano se lIniÓ al doctor Luí;s Azuola para publicar "El Correo Curioso," periódico d~ lieratura, artes i cicncias, q \lC cesÓ en el mismo ano, i en el cual ins~rtó Cáldas algnuall observaciones barométrica&. E¡,;tc fué el seglllldo pCl~lólEco dado a luz en la Colonia. Al recibir elllomhramicnto de miemhro dle h Espedicion hotánica. cncal'l!ado de su parte zoolÚj iel\, no vaciló en contestar a Múti:s :satisfactori:llllent{~; i desde este momento redoblÓ Sil estndiÚ i 1I1nltil)lieó sus· c:s<m¡'&io·nese indagacioncs eon el /in de fOl'lllar la P;umiít ewu¡illama?''lUlwa, o sc¡\ la cole<:ei(JlI, dihujo, descl'ipdon i clasificacioll. costUlnlH'c~, dl'.racioll i pl'opie(1ades de 11):; animales d~'l vil'einato. XXYIII Con la entmdn de Lozano a la }:sJ>cJieion se ('l}lnplct(, el pen;onal de este ilH;titnto, i se dió cima a Sil phn eient~ neu. EstablllcillA en un local grande i c{¡modo; <:011 obseryatodo astronómico provisto de libros i de bllelws tcodolitos, cron{Jlllctl"08, tele:;copios, oetantes, grafúmctl'os, acromútico;;, anteojos IIlClwre:s i dumas instrumentos neccsarios ~ (;011 e;,;celente bihlioteca, regula¡" jal'din lJOt:íníl.'o, no pocos in8tl'nmentos de fí",¡ea i algllno~ apamto::l (Plími(,o::l; eon bastante,; dibujantes, algunos de ellos superlatiYament~ peritos, que disponian de papel, colores, pinceles i dema!! utensilio8 l'L'\}\leridos, tOtlo de superior l.'alidad i en harta cantidad; con la acti\·idad e intelijenda de Rizo, ~{ati8 i los jó,·enes ~[útis sobrinos del dircet'll'; i eon el jenio í el vasto saber de C:íldas i Lozano, la Espe<1icion no solamonte correspondia ya (le sobm al espíritu de la roal cédula q!le le dió existeneia legal, sil10 que aun traslimitaba 111" idea iencral que de ella se lutbia fOI:iado )[Útis en 1783. La Flora, neog)'anadiltfl, empezada veinticinco años ántcs. era ya \lna obra volmllino:sa <1'10rej istrab¡L gran parte de la vejehcion de los Estados de Cundinamarca, Bo)'aeá" SantaIlder i el Cauca no 1II{'110S que de la vecina Hepública del Ecuador; habia una blwnfl. coleccion de minerales hecha por :Mútis, D'Elllyar i Cáldas; los dibujos de plantas i animales ascendian ~'a a mas de 2,000 láminas de una admirable ejecucion; el herbario era mui rico i la coleccion zoolójicacontaba preciosos esqueletos; finalmente, poseianso mllc1iaB observaciones barométricas, tcrmométricas i utro- Este libro fue Digitalizado Por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República,Colombia -- 111 - ? innumerahles datos je~~rltfiC08, cstadlstJe05 1 s()bre la mdole, costnml11'CS, rchJlOIi, dialectos i materia médica. de los indiol'i del vireiIl1\to. IIé aquí cÓmo, por efecto de la incontrastable perseverancia de Mútis, de la no intcl'\'\lll1pida {~oop('raeion del gohierno i de las buenas disposiciones de l(IS g'¡'anlltlinoti para. h\s eieneias, se lle"Ó por fin :1 cf~'dt) d lIIagno proyecto dc la E"pedicion. La Europa salJia admirt) al pri· mel'O, aplan<liÓ al ¡.;egulldo i ad<¡uil'¡() llna idea ventajo8a <lel vigor espiritual de'! puúblo T\c0¡2:rall:tdillO. Linneo prodam"J .la glorilt de :Múti", di(Oielldo I}\\C ,,\\ nombre serift recordado en todo;; lo;; ti cm pus. i p"jHkrall<lo SllS altos mcreeimicntos ell la (·¡(,!H·ja. El (,l·\t-bre naturali;taespaí1ol CavRnil1cs le d(,.licÓ SU" ohras, i 1.; aclallll) sapi{.'ntísinw val'un, digno de ;.;el' saludaducoJl1o l'1 prírwipe de los bOÍlí.nicos americanos, i de su' colo(:ado ell tl'C' los prímerOl; de Elll'OjJa: In lwnorml1 IWj¡il'nti'~!5iill i 'I'i ri JI ídi8, qui j1l'N: rnerito 7,ofa)t-i"IJI'llIn 'in Amé/'iriJ fJi'¿rt(;ll)-~ 8f1lutatw', Jebd- nomicl\5, m~d~da8 jeodésieas, ({'_te etiam inte~' p,.¡maf '8 l E'il)'()'p'("~ (,O/Oé<l7'i. :XXIX ~{Cl\(]inlleta habia t.eI'lI¡jn~!tl(i i:'ll pcríodo el 17 <le 8(L tiemhre de Is0;3, í regl'l'''aJú a E~paila d",jamlo profundll.s simpatí.Ls cn el yireiuíl.to, por el ¡nleres qnc tomÓ en 811 bienandanza, por el acierto de Sil;:;l)J'ol'ide]H)ias gubel'llativa.s :Í por Sil ear;wter personal tall s¡¡:tl-e COIl1U'hidalgo. La Espedicion, lo" llomures de ('~tlldio::i, la daFe alta de la sociedad, el pucl>lo, todos :,inticI'()JlllIl:lnillletnente el hondo vacío qne dejalm lllplCI ealw.llero oh::;eq¡¡io,;o, ilustrado :Í tan celo::io de 5tl deher CHillO de i:'1l (!en'dll). Sllccdióle el tenlcnt(' jenerf\l AntA)nio Amar i Bnrl)()!I, hOlllhl'e de"tituido de tOllo Illt,rit,o, i~nOl'aIlte (m lo,; asunto>; administratiVO", i sin talento ni'aetil'idad para la polítiea lli para la milicia; em¡wl'O, .i usto e:; d('('il' q IW ll('atando .-in apatía la¡; oÓrdclw¡,; <.leSil )'ci ell lo relati~'o :l h E"lwdieioll, t'avoreci\; .sus de:iiguil)"; a ('oll!l\I\tamiellto (le ~\1 Útis. xxx Consideremos ahora la illfluencia de :MÚtis i de la Espedi(,ion cn la cultura intelectual de la sociedad colonial; ¡para aprecíarla oel.>iduUlcntc, tomCTllOS COIllÚ pnnto de partida Este libro fue Digitalizado Por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República,Colombia - 112 el sistema de educacioll <pIe se observah:,1, a la yenída de l'quel sahio, en los poc<),;Colqjios que había. en el vireinato. "Se gastaban cuatro años, dice nuestro historiador Plaza, p3.l'a empk>ar a la juventud. en 108 principios de latilli!lad, rooargándoles la memoria con reglas aprendidas en el mismo idioma i sin la suficiente esplicacion de ellas, .ni .lOí? ejercicios prácticosqne son mas poderoso's que las mism~ I'Cglas.Esta clave conf'U:iai enredada les servia de base para ¡ldquírir el conocimiento de una prosodia superficial. Sí se hacia la traducciou de algUlws poetas latinos, esta era estrictamente literal í aj u,;ta<1a.a la leccion del profL':>O)', descuidando de esta manera el conocimiento de las belleuls de esos autores i perdiendo la oportunidad de acompañar las nociones hist(¡ricas, mitolt,jicas i literarias f[11ede paso se podian inculcar para alumbrar mas el espíritu de los alum1l0S, l.. a medida de alg'llnos yerso" latinos sin conoceroc la literatlll~a poética, cOI;lpletaba el curso de latinidad .. " En el estudio de la filosofía se impendi:Ul tres años, i bajo este enunciado se consWI'raha el primero a la cnsctianza de la IÚj¡ca i en la ClIlJ el preceptor' discurria, pOI' medio de las nniversales, las categorías, los cntes i ot,'os disparates de esta la:'~l,; i a~uzaha el injenio de sn;; discípulos con la fOl'tnaciUlIde silojismos e;,('ol:ísticos figurados en las fnises májieas de B(~,.bal'a, Celarem, Dar;, Ff;río, Baraliptrm, palabras <piepor sí Bolas emhot.an la inte1ijencia mas clara, El seg-nndo año se dedicaba ~ la metafísica, estndio qne acababa de oscurecer la poca luz que el talento pudiera con8el'Val'; í el último año escola,' se tt'ascurria aprendiendo la física, i:'in instrnlllentos, sIn Oll8c\'\'acionea pl'áctica8 i sin conocer los adelantos qne ellta ciencia hahia hecho. Las lecciones de estas matCl'ias se da.ban en alta ~'oz, dictando el profesor i escribiendo los alumnoí;. "Tel'tninada e;,ta jerga escolástica en que se eonferÍa un grado de suficiencia con el titulo caido cn ridículo de bachiller, los ¡;alones de facultad maJor recibian a esta juventud que corría desalada en busca de una (t'lÍmcra. El derecho canónico, el civil que era el estudio de las leyes ¡'omanas i la teol().iía oran las ciencias que coro'lahan la carrera literaria de un jÓven: pocos eran los <lile se con· ';A.g,"abana los estudios médicos establecidos hacia pOC08 A.l.1os,Murillo, Gonzálcz i otros escritores rancio:! eran l~ lÚmbl'ol'as en el derecho eclesiástico; Vinio i Kecslo.8 textpa Este libro fue Digitalizado Por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República,Colombia - 113 eivik>s, i de peor jaez 108 de las ciencias teolójicas. Un ex;.men 60bre un P\lDtO cOJ;locidode a.ntemano en es~ materias i la aprobacion consiguiente recababa.n y~. ~ derecho al lallreando para c.ubrlr80 eon el bonete .del doctorado. Si la profosion era la del foro, habia que sufrir l~ nuevo cxlÍmen en la Audiencia, cuyos ,otos eran accesibl~ a106 emI?ei1os, a la humillacion i al rango que se ocupaba en la SOClCdad." . Tal era la. instruccion que recibian los jóvenes en áquel tiempo, gastando cOn escaso fruto sus mas floridos anós, commmiendo su memoria en estÓriles ejercicios i agotando su in.ienio en banales dispntas. Vino .l\{útisell1761, i habiendo notado el atraso de los Colejíos, formú la resolucioll de dcsterrar de ellos la enseñanza peripatética i reemplazarla coIl las matemáticas ek-lI\cntales, la jeografía, la física, la mdafísica i la lújica, segun 108 principlOs i los adeLantos modernos de estas ciencias, en las cuales era mui versado. Tarnhien los Colejios i Universidades de Europa habian esperimcntado una reforma semejante. Para llevar a ef'eeto este proyecto vistió la beca del Culejio del Rosario; i hemos visto que en 1762, ,m ano despues de su llegada, tomÚ a :m car~o la CDSefia.nza de las matemáticas cn este Colejio. j Cuanta no ftlé la sorprcsa dc la sociedad santafercña cuando vió que, ~n vez de vanas argucias, se estudiahan en la clasc de Mútls la aritmética, la jeometría, la cOS11lograt'íll. i la física! TronarO;lllos convcntos, declamar.on los canónigos ilos antiguoe. ~ofistas contra las ciencias ex-actas, al)Q5trofándúlas con .~ sarcástico nomhre de nUt!vafil{)80fia, cllYos teoremas i teorías calificaron de hi pótc"is ; pero )[útis, seguro del poder de la .vcrdad i apoya¡lo e1~la proteccíon de los vireyes M~íf de la Zel'da, Manuel Guirior ~Manuel Antonio Fló,rez, llevb adelante el estandarte de la reforma sin cuida~ de talei vocifcraeioncs . Diez i sicte años despues, a la par que él enzcñaba \8 nueva filosofía en el Rosario, concurria a I;J~ casa todás 4s noches un jóven colejial de San Bartolorné, a qui~ habia hccho nOlllorar catedrático uc filosofía de este ColejiQ. el cual iha a recibir cada nQ<:hede boca de Mútis la leccion 9,ue debia .esplicaral ;sig~lÍe",te~a a .';IIS d!sdpu19s. E.~ie Joven, l~o naCido en M\1d:e11I.!1 .e:u.1./60, 1 f:)nVl~Q..O .~ Uogoij, <lue hubo ~~J1dlllrdoell~tln con .un sll.cerdQte tio 811YO, Este libro fue Digitalizado Por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República,Colombia - 114 - se habia captado el afecto <le M útis por su talcnto i aplieacion, por su modestia i su precoz sensatez. Adcmas, habia traido cartas de recomendacion dc su ciudad nativa para Mútis, lo que no dejÓ de contribuir al cariño espe· cial q uc estc sabio le manifest6 siemprc. Ese jóvcn <;atedrático cra el doctor FÓlix Restrcpo, destinado a u ser ma~ tarde un patriota puro i ardiente, un bienhechor de la humanidad i un majistrado ejemplar, despucs de haber sido Uno de los padres de la ciencia en su pais. ){útis le enseñó cuanto sabia de IIlatclllátic!l.s, i le comunicÓ tumbien gran parte de SIlS conocimientos en ciencias naturale", Tre~ años pennaneciÚ Rcstrepo aprendiendo i enseflando u la \·oz la Il\lCnl. filosofía. Tel'lninado el curso, i coronada sn carrel'll. de :tbogado, ¡;e diri.i iÓ a Popayan con el fin de rejentar la cáteura de filosofía ud Seminario; lIamábanlo con instaneÍa los vecinos notaules de aquella ciudad, i lo animaba tambien d "irei FIÓI·ez. Allí se eonsagró del todo al estudio i a la educacioIl. Un discípulo suyo llenÓ su puesto en el Colejio de San Rartolom(~. De Ctita mancra la rcforllla iniciada por :Mútis pcnetró en los· tres Cole.iios, ílllieos cn que se daba instruecion en todo el "N"IICYO Heino, Valenzucla tomÓ a esta sazon la cátL'dra de filosofía del Rosario, i :Mútis quedÓ cn JiuCl-tad hasla 1783, en lIue se emprendiÓ la Espedicion quC', hrin"dando ceoo a todas las aspiraciones científicas, coneenlró en su scno el talcnto en todas sus manifestaciones, i fué la que mas cont~ribuyó ~ despcrta~ l.a razon, iufundir.:l ~eseo del pl'Ogl'eso ¡·eltuuJelpar el esp1l'ltu del funesto senorlO de las preocupaciones i de los errores. H.estrepo formó cn el Seminario de Popayan escelentc8 diseíplllos. Entre los muchos que allí aprendieron rudimentos de matemáticas, cien'cias físicas e historia natural bajo Sil dircccion, sohrcsalieron, adcmas de Zea i C:íldas, Oamilo 'l'Órres, Mignel Porn bo i Antonio Ulloa, Trasportados a Bo~otá, todos tres se. dedicaron al ejercido de la~ le,)"c:;,pero sin abandonar jamas el estudio dc la naturaleza: Tórres fué el qnc ménos cllltivÓ las ciencias natmalcs, por Ber mas aficionado a la literatura gl'ie~a i latina, la historia, la elocuencia i el foro; Pomho i U lIoa adelantaron RUS conocimientos en la Espedicion i bajo el rectorado de Mútis, qne les profesó particular amistad. En Bogotá se impregnaron de la nueva filosoÍlll. i reci- Este libro fue Digitalizado Por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República,Colombia -115 bieron luz de )fútis, :Manuel Rodrígncz Toríce¡¡, José Fertiá.ndez Madrid, FI'l1tos Joaquin GntiÓrrez .•Tos6 María Gutiérrez, Custodio García. Royim, .fn;:tl Gl'egorio G-ntiérrez • •José :María Halazar, Emig-dio Jknitez i otrus ciudadanos qne de~pue6 sin'icron a 8U pais i IlIHl'ier(ln por la libertad . •Toa.quin CamacllO, nativo de Tllllja, Estallo de Boyacá, iiló80fu del pcripato on su principio, pero convertido a la refOrJIH1 fil{)sútica por su tmto frc<'nentc con )IÚtis; vicerector luc9;o cn el Colcjio del Rosario, dOllde cnseñó las l.eyes espai101as i las matemátk·as. ('()Il el !Dl'jor método; dcspncs lllajistl'ado de Pall1p!olla. por gnwia del gohierno ~ololljal. en atmwion n "lIS ~r!llJlll)::i ltWl'S i a ,,\1 acelHlraoa morrdidatl; ahog-ado eSpl'l't;¡, nntlll'alnlí'ntc .in'sto i lImigo de lo huello; "allio lllliH'r"al, 11L'l!'¡ (le yirtlllles. sc distinguía cn l'stc circulo de hOlllhrcs iJIIstnulos, porque" mllaba con pasilln el e:;tudio de la nfitnraJpza, pOH'yendo \ln jenio obscl'vlHlor capaz de c1c\,¡u'le nI rall,!,ro lll' innmtor si se 1111hiera empefíarlo en sedo. i llen¡])H l:')lTespnnn.cneia familiar con el célebr,c ~fl1tis i con el (~,irectoJ' del ramo de zoolojía en las mat.erHIS de sn en<':tJ'(r('. ])i,;tín~niasc tamhicn )fal'ía Caha] qne. lll),;pnc~ de llal,er estudiado cn el Culcjio del ¡{,¡sal·in 1Il' Bogo\:t la filosofía planteada por MÚtis, J¡izo ,-¡aje a Paris ('011 el fin deap¡'cndcI' química, i n~sidi(, seis alíos ell ¡1(jllella metrÓpoli de la cieneia dedicado ea,,¡ e"du:3inllllclltc a los labora.torios. Perfeccionado en el an:ílisi" tjllilll:CO, en los e8pcrimentos i en la manípulacioll, ,-ol,'i(¡ il. Sil patria rieo de conocimiellto,;, i dcscoso de propagarloi' ('litro sus cOIleinda- .í;W(· dan os. Casi todos estos v:noncs, oriundos de clin'rsos punto:; de la Colonia, pero reunidos en la capital, formarou nna soeic(1:td literaria, donde l'asnhan los mas hellos Jias de 811 vid:, ('ultival\(l() las hll1l1anidad('s i las eiellcias lHtturalcs i m~jvrando Sll espíritu i su C<l!';IZOll (~Oll illtel'e~antes lecturas, All11<JIW lll'salm sohl'e ellos la f'omhría i mOIlstruosa mf!IlO de la 11l<Juisieion que, 110 ol'stal1tll resi<1ir el! Cartajenn, abareaha p(ln ;;us !,!;:ll'l'astoda la ('n!llllio.; a¡11l(jue ]1\ prensa cm diminuta i cstaha bajo el pn<ll'1' lle la maf\ tirlÍnien ecnsnra; alllll)UC era prohillida l:t importaeiol] da libros estran.icros, sinemba.r~o ., el 01'0 del país, mfiB poderoso qlle la Inquisieion de Cartajena, haeill. venir da Francia los mejores libros, i con mnehos otros qnc se mi: Este libro fue Digitalizado Por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República,Colombia - 116 eontl'aban en la biblioteca de los sabios jesuitas i en libre· rías particulares, no faltaba pábulo al buen gusto, n~ ~ lí' aplicacion. La envidia, perseguidora del mérito, no :pe~donó a esta juventud que con sarcasmo se llamaba EWSantafé Compañía d<3 los sabios; pero la conducta irreprensible i la dulzura i fuerza de carácter de sus ind~viduos, hizo al fin callar la maledicencia." Tenemo~, pues, que el año de 1806 la Colonia poseiaun ra.millete de hombres eseojidos por su talento, por su er~dicion copiosa en todos los mmos de la cicncia, por BU lenguaje culto, por sus costumbres ajustadas pero dulces, por su dignidad firme pero modesta, por su noule independencia i por la delicadeza de Sil sentimiento. I.iteraturas griega, latina, espaí1ola, inglesa Í fmncesa, }>oesía,matemáticas puras, jcografía, fisica, astronomía, filosofía, derecho público, medicina, lcyes patrias, química, ciencias naturales, todos los ramos del saber tenían sn culto entre estos hombres esclarecidos. Así como la chispa se convierte pronto en llama vi va cuando cae sO'bre buenos combulltl1>le5,la luz derl'llmada por :Mútis i la Espedicion no tardó en producir en ~staHalmas inflamables esa fiebre de ciencia, ese ardor por 100 dcscnhrilllientos qne 108 earacterizabao Tan sabios pOI' su inteli.icncia como por su entusiasmo, 8U am lJicion cra buscar la verdad i su pasion consagrar1e 8U vida en holocausto. Con todo, no se crea qne el espíritu rejenerador liabia vivificado a estos hombres solamente: ellos era.n los mas culminantes de aquella época, eran la flor, el tipo. de l~ Ilociedad; pero todos los que habian merecido una coloca(~on en la Espedicíon, o habian pisado las aulaH de los tres Oolcjios que entónces esparcían la instruccion; .todos 1,08 que habian oido csplicar a Mútis, o a sus discípulos, 108 principil)5 de la ciencia, participaban mas o ménos del entusiasmo científico i de las miras de este s(~hio. Su palabra habia pnrificado tocIos los pCllsarnientol' de las eser.ecencias con que se les habia alimentado; los resplandores de la verdad habían iluminado todas las almas. Como una lárnpal"a atest.ada de luces suspendich\ en medio de la noche en el ámbito de un gran templo, Mútis, abricndo sns labios i estcndiendo sus brazos en la cima de los Andes, había disipado las densas tinieblas en q\le estaba sllmerjida la Colonia. Revelósc el espíritu de la verp.ad en la fogo~ Este libro fue Digitalizado Por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República,Colombia - ]17 - lengua. de Mútis, i la Colonia. se volvió activa, i adquirió el rigor intelectual de una gran nacÍon. Porque no se trataba cntónees de aprender meramente lo que se hallaua en 108 libros europeos: csto era poco pasto para tanto ardor; aqnellos hombres pretendían adelantar las ciencias, rivali2<a.ra los afamados sabios de allende los mares, i ofrecer ala contcmplacion i a la adrniracion de las viejas naciones dilatados horizolltes de nueva ciencia. El jenia de Mútis, plantado cn el feraz suelo Am(~rica i jerminado con asomhrosa rapidez, so habia llIultiplieado en muchos jellioR, como un maeiso grano de rico cande:ll sembrado i rcproducido en el mt.;ior mantillo. Así, la sociedad eolonial, que parecia muerta cuando vjno Mútis, ,)stentaba vida briosa el año de lSOl>: por todas partes He manifestaba una ajitacion saludable, que tenia por objeto las cieneius, el comercio i las artes; era la ajita· cíon del talento í de la actividad en toda su juventud. Sin desconocer la influencia que tu vieran las trascendentale¡¡ reformas llevadas a cabo en los cuarenta i tres años anteriores por los vireyes Messía de la Zerda, :Manuel Guirior, lIanncl Antollio FIÍlrez, Cahallel"O, .J il i L('llIus, Ezpoleta i iI[endinneta, qnicne:<, 11IlO;;('on mas, otros con mónos tiuo, rceursos i uecisioll, pero todo;; eon buena voluntad ácia la Colonia, obedecieron a nna sola tendenéÍa bienhechora: promover su progreso, desterrando poco a poco do la administraciou i de la iglesia 108 abusos mal! perniciosos, corrijiendo algunas corrupte1as, fomelltanclo las Cmpre8a8 materiales i traspurtando de Europa algo de imprentas, litemtura, artes, teatro i denms flores de la civili· zarion; sin dejar de apreciar la parte (lno tn deran en esta ajitacion los libros, periódicos i demas producciones literarlas emanadas de la revolucion íilosóiica que conmovía a las naciones trasmarinas en aqnellorl tiempos, pues que, apesar de la escrn pulosidad o(,n q nc el gohierno esparíol trató de impedí¡' qnc el cont:~iio re\·olneionario llegara a las costas arnericalllls, fIJÓ indieaz toda medida, í hemos visto q ne 'ya en 1795 circulaba el! Hogot:í una traduccion de los Dorecho:'1 del Homhre; sin olvidar estas causas, ha.i que cOIlyenir en qne )lútis primero, i despues la Espedicion botánica, fueron 108 principalcs ajentes de este movi· miento progresista, q ne hacia contraste con la indo1enciIA delirio virei Borbon. ue Este libro fue Digitalizado Por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República,Colombia - 118 XXXI De esta ajitacion una de las manifestacioncs dc mas ent.idad fué la publicacion del periódico titulado EL SEMA~ARIO, quc, reuniendo i cxhibiendo todas las produccioncs dentíficas i litcrarias de aquel haz de fecundas intclijencias, derramó las luces 1)01' todas las poblacioncs dc la Colonia i escitó en el pueb o el gusto por las publicaciones periódicas i por la civilizacion. Cáldas fué el principal promovedor de esta empresa; i, entendiéndosc con los mas ilus· trados de sus condiscípulos í compañeros en la Espedicion rc¡;pccto a la colauoracioIl que dehian prestarle, se con "titllYÓ ell dil'cetor de ella. (T na }lu hlicacion hecha bajo 108 auspicios de CÚlda¡;, en pliegos semanales al principio, i luego en fOl"lna de memorias, alimentada en su mayor p:\I"te con sus propias lucuhraeiones, daha garantías de utilidad, novedad, hello estilo, variedad i estahilidad, a tiempo (tue no existia en 'toda la estension del ,ireinato otro pcriudico que el REDACTORA:mmIcANo, publicado en Bogot:í por el hihliotecario -yranuel del Socorro Rodrígucz, el cual era diminuto, no contenia lllas (JlIO Iloticias i versos i no salia mas que tres veces al mes. ASÍ, desue el 3 de enero de 180B, en <¡ue cÍrculó el primcr númcro, se vió ~1IC el objeto de EL SI<:){A:\ARIO era tan cstenso como bcncfico: la jeograf'ía, la estadística i cl comercio del vireinato, la hotáni(~a, la zoolojía, la astronomía, la física; la literatura, la medicína, todo lo Útil: todo lo bello, todo 10 vCl'(ladero, todo lo importante para la ciencia, la inte1ijoncia, la irnajinacion i la vida; todo esto espllcsto i esplieado en acendrado lengllaj,·, dehia llenar las p:ijinas de esta p1lblieaeion. Por consÍguiente, todos los hombl'es de crudicion i dc talento debian contribuir, cada IlllO en su ramo favorito, c()n S1I parte de trabajos cicntÍficos o literarios; i al efecto los in\'Ító Cáldas dcsde el principio, con las mas QblÍg-antcs palabms, con palahras que pal'(Wiall un mandato de hi, patria reclalllanuo dc sus hijos dístin!!uídos el primer trib1lto dc hama i glol'ia. Los agricultores, los C\ll"íl.8,lo! hacendados i los come¡'ciantes tam bien debian concurrir con flU cuota de conocimientos prácticos para la grande obra de describi¡' el vireiuato ~ajo todos sus aspectos naturales i ;;ocialcs, i difundir las bucnas ideas en)a masa del pueblo. Este libro fue Digitalizado Por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República,Colombia - 119 Cuál fnera. el éxito de esta J?ublictlcion, puede verse en la edicioll formada por el patrlOta historiador Joaquín Acosta (Paris, 1849), la cl1al contiene los escritos mas sus-tanciales (¡no se dieron a luz en aquel periódico, El primer año se alimentó casi cselusi vamentc con producciones de Cáldas: insertÓ Sil .Estado dI! la jeo[fi'aj¡a del 'Jir(;inato con rehvíon a la I'con,(jmí(~ '/: al cOl!wi'cio, su MfYflWrí{t del iJlfll~jo del ditn(/ sO/Ji'e 108 sO',~'" orYl1nizado", del ObSf!/'1,ato('io a8t/'OlIómi('(J de Bogutá, sus Ob8e¡'/)(t!;ionM mef,:o/'oliijl('1t8 lted,l1s 1']/ <t<¡atlm'is7n'(' (~ño, 8U 0118eJ'lJa{,'I>m del ¡>clijPf wta[ de lUlIa <id \) de mayb delS08, i lItro;:; c"él'ito;; (le: Illl'tlOr sigllifieacion ; hHlo;:; (~llm' muestran la va;:;ta et'llllieioll, la fuerza dd talellto i la buena literatura que a<!Ol'll:thall a su auto!'. Las produccione!'o de los c(\labomd()l'e,~ i'¡tet'OIl: umt Jlelf¡,{)i'Í<~ 8ubi'e l!ls 8eí'piente.~,i plan de (Jbli(,:~'vaciune,~ l~(lra ac1<1;I'(1I' la ,ltí8t()~¿a naft¿ral de las que Itabztan en d al' 1'0 J? fllW di; (rrctnadl1,. por Lozano, en la cual resalta el jenio del ilustre zoÓlogo i se echa de ver qnehabia rennido ya muchas investigaciones sobre los animalc:l. del I"ÍI'cinato, i p~U·tiCHlat'lnente t;o· bre los rcptiles; una A"util'ia del1lllÍi¿I'¡'o de pi'l'SOna8 vacunad.as en Bo!!otti d"gt!¡!ln(1!'zrI (I,! 1 SO;"; ¡w8flt' mayo de 1 SOl:l, dU Desci'ipuion Á~ éon un bí'I'1:, , "'1jiu del dÁ'IJ('Uól'idof' de /(t CIWUIH¿ J(duardo Jennt31', por el doetor ~IíglldPomho, eseritu notable por la vehemencia científica i patriótica (1'le respíra; i un (/,1'tícu,lo neerol<iiico del señ(})' J1lútis, cayo autor se ignora, nUn(lllC se conjetnra (iUC pel'tencec (\,(\i.ltlas, XXXII :MiÍtis dcjÓ de exiiltir el dia 2 de &Cticmbre de lS08 ; i el tono profundamente sentido de este artícnlo necl'oJó.iico, semejante al triste murmnllo del viento en los árboles i h~ tumbas de 108 cementeriu;;, deja n'!' cuán amarga 8Olcdad, cuán hondo pesar Cá1l8UI\Hl SIIS agonías en todo el vircinato. Al tocar la 1ll1l0l'tc con "1I yerbt llIano el COl'azon de Mútis, todo;; sus di8(;ípulos i amigo;;, ,,~ decir, todos los hOlllbres de posic:oll i de valel' de la C'lJuIlia, :;intieron el hielo de la tumba cn SlIS alma,;, :MÚ,i,: \;ra el coraZQl1 (le esta· sociedad: a Sil rededor se agrnpaban, para unil'se, ampararse i fortificarse, todas las fu-erzll,S del cSpíritJl, inteli.jcnda, jenio, actividad i voluntad; i como habia.despertado, Une- Este libro fue Digitalizado Por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República,Colombia - 120 trado i puesto en l\iercicio todas estas fuerzas; como habia fa.vorecido toda idea útil, alentado todo pensamiento fecundo e impulsado toda noble virtud; como cuarenta. i ocho años q.ue habia vi vida en el Nuevo Reino los había eml.pIeado en hacer bien a la Colonia, el dolor de su muerte no era ese fugaz dolor que deja un gnerrero al exhalar 8U último aliento en medio de nn pueblo a quien ha deslumbrado eon sus hazañas, sino la orfandad que deja un padre, un redentor, un bienhechor .ienerosa que consagra cmmto es i <manto tiene a la dieha de una sociedad incipiente, a quien le da luz, poder i rospetabilidad. Estatura elevada; contincnte grave; modales fáciles, desembarazados i altamente corteses; rostro noble, circunspecto, imponente, de forma oblonga; frente espaciosa· i 1'uljcnte; mirada penetrante i concentrada; párpados superiores abultados, como los de todo hombre serio en sus meditaciones, en sus juicios, en sus palabras i sns resoluciones: tal era la apariencia jeneral de su respetable fisonomía. Cuando esplicaba 108 principios i los corolarios de la ciencia, sns facciones, de ordinario tacibundas i recojidae, se espandian con el calor del cntusiásmo i se ,bañahan de una dlllee espresioD de aleoTía, como cambia de aspecto la nebulosa montafia al reflejar los primeros rayos del sol levante: sus labios destilaban entónces un leng-uajc flúido, claro i apropiado. I<'ucra de estas ocasiones, hablaba poco; sus respuestas como sus preglUltas eran concisas, i no !le permitia lIsar de chanzas, ni dichos salados: hubiérase creido, segun su sobriedad en chistes i gracejos, que no corria por sns venas una ;;ola gota de sangre eastellena. ~u carácter retraido i parcílocllo le daba un aire misterioso (Jue, si bien infundia veneracion i le impedia gastar el tiempo en conversaciones frívolas, alejaba de su l)ersona todo trato íntimo, teda franqueza, i le privaba de os consuelos que procnra la confianza: el corazon necesita tanto desahogar SUB penas, eomo vaeiar su sangrc. Hombre aus-tero, 811splaceres se reducían a sus aspiraciones; i tan eximío por su conciencia como por su jenio, sns aspiraeionea eran a la \"ez inoccntes, grandes i santas: mereeer la memoria de los hombres por sus servicios a la ciencia, i la memoria de Dios por su 1'éi su acrisolada virtud. Ni la codicia, ni el poder, ni las dignidades tentaron jamas su a.mbicion. Su mayor afan fné siempre servir al progreso Este libro fue Digitalizado Por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República,Colombia - 121 humano, ofreciéndose como un dechado de prendas d~ moralidad, i ofrendando a la causa de la verdad 8US c~iida'des intelectuales. Tal er'3, el hombre que fundó las cienclQS en la Nueva Granada. " Su muerte, dice el artículo necrolójico ántc8 cita-do, tué preciosa a 108 ojos del Scflor. Descansando sobre el te6timonio de su conciencia i 80bre sctenta i siete ailos de virtud, vió llcgltr 611 :fin con tmnquilidad. Sus Últimos dias se emplearon en organizar sns eosas temporales i en dar lecciones de virtud a Sil familia. Himnos, o1'f\CiOnCf; llenas decRridad i de nncíon fUCI'OIl sus Última;; acciones." Ahorlt bien: i, qu{~le deben a MÚti" Ins ciencias? I-Inmbo1dt lo dice en poca;; palabras. "Largo tiempo ántc8 de que en Europa se tuviese eono<'Ímicnto de la;,; obras que preparaha :Mútis (las 0111'a:,; de la Espcdicion), ya su tlomhre Be habia hecho célebre, mereeu R las eomunicaciones de este sabio con Linllco. :NfllChosjéncro:i (a18tollia, 'Mllt!a, barnaaesia, e8callon'ia, manettia, af1'na, l1rat!tys, liWi'Oxyl~lm, bifaría, telipogon, brafeYUli', gomozia i tantos otros publicados en el Suplemento de Linllco) son deuidos a la sagacidad del botánieo (le Santafl'. Hablando del j{'nero l1Wr tUria, Linnco ag-reg"a: lVoJlil'n hmillldale tjaod 1I1111118 wtCM unquam dclebit. ::\f Mis es quien ha hecho conoe(~r, el primero, los vcrd~HI('ros caraetl'res dd i{'T1cl'o cindlUl1a. Como este tmktjo ha venido a ser mní imp'Ol'tallte, nunos a referir lo qne ántes de csbt {~puea se s~dlia sobre las (luínas del Nuevo }lnndo. La Condnmine i .To;;é de J ussieu habían examinado en 17:1~ lns :.írl)01\'s qlll' en las florestas de J,oja dan la corteza fd))"ífllga. El pl'inlerO publicÓ la descripdon i el dibujo de la quina del PcrÚ, cn las )femol'ias de la Academia. Esta ~specíl~es la q~w han hecho eOll.occr lo!; señores Humbo1dt 1 Bonpland haJo el nombre dc clnr:horul tX(n:Jarninea, la cllal han con.flllFlido los 1otánicos lar~ tlCmpo con muchas otras haJo el Jlo11l1Jre vago de Ctnclwn.a tdfiaínllt?:8. 1.•3. di/duma ('(¡Julaminat· (llamada tambien ca8cmilla/iila de Loja, de Cajamuna i de Uritusinga), es la especie lilas rara, mas pl'ccio;;a, i Yel'o~ímjlmentc la mas antigua conucida i cmpleada. Jamas se han cspol'tado de éSta especie, por Guayaquil, puerto del mar del Sur, mas de 100 quintalei:! de co,rtezas por año. J.a esportacion de la. América entera. <etii::4.ñerentcs espeCies de quina) es aI'ÚllUtncntc de 14,000 quirit't\lcs. Este libro fue Digitalizado Por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República,Colombia - 122 "Lillnco había f01'llmdo en 1742 su .Iencro tJinclwnal nombre que debia recordar el de 1Ul "irei del Perú. No habia podido fundar cste jéllct'O sino segun la dcscl'ipcioIl ilÚpCl-f'eeta de La Condamille. En 1758 un Intendente de la :Moncda dc Bogotá (Don MiO'ucl de SUlltistévan) Vi8itó las selvas de Loja i delicubl'ió 10s árholeil de quina (entre Quito i Popayan), en muchos puntos, sobre todo cerca del pueblo de Gllunacn" i del ,;itio de lo,; Corráles. HecojiÚ muestras de GÍndwJ!(t i se lu.s presentÓ a ~lútis. Es segun estas mnestras que se ha lleGlw la primera descI'ipcion exaeta del jénc,·o . .MÚti" se apresurÓ a cI¡¿'ial' a Linaeo la flor i el fruto de la (inina UlllaI'ilIa (etndlOna ~o)'d'¡¡olia): }Jet'O el gran lJaturali::;ta de Fpsala, }lubliealJáo las obser· vaciúlles de },IÚtis (S)",;t, nat. 12ma edie. fol. 16+), confunJió b (plÍna amul'ilIa con la que había descl'ito La Condaminc. Hasta ost¡~ él'(lca la Europa !lO recilJia la corteza febrít'uga {le la quina sino por los pucrtos del lllal' del Sur. No so conocia todavía al norte del paralelo 2° i t de latitud horeal el <Í.l'bolque da esta produccion preciosa. "En 1772 :l\Iútis reeono(~i{¡ la q uillft a seis leguas de Salltuié {le Bvgot<i CIl el mvnte de Tena. Este importante Jescuurillliento fu(~ seguido hien 11l'0l1tv(1773) de otro del mismo yejetal en el c:uuillo de Honda a Villeta i a ll~ mesa de Chinga. lIomos entrado en algunos detalles sourc estos objcto.;, }lOl'<jucll~ quili<~ de la ~ ueva Granada c;;portada po~' Cartajcua de Indias, i cOllsiguicntemcnte por un pUel·to aproximado a EUl'Opa, 11;1. cjcrcido la mas lICn(·!ica illt!ucncia Bobrc la indllst.l'ia col(lllial i sobre la diminlleioll de los precios de las cortezas fehdfugas en el mel'eado del Antig'llo ?lIundo. UIl habitante de Panamú, don ScLat;tian JosÚ López Uuíz, que confiesa {.lmisulO cn sn8 Informos alrei no habel' conouidll las (luinas de Hvnda sino el año de 1774, ha pasado durante llluellO tiempo ¡lOr el verdadcro descubridor de las cascal·ilJas de Santaf(~, 1 a este título ha gozado de una pcnsion de 10,000 francos, hasta que en 1775 el virei Góngo~'a demostró a la corte la prioridad de los derechos de }.fútis. "POI' la misma {'poca (1776) don Franeisco Henjífo cneontr6 la (luina cn el hemisferio austral, sobre los Andes pOI'mUJos de GU8:nm:o. En el ~ia ~e le conoce en todo el largo de las cordIlleras, entre /00 1 1,500 toesas de altura, sobre !lna esten:sion de mas de 600 leguas, desde la paz i Este libro fue Digitalizado Por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República,Colombia Este libro fue Digitalizado Por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República,Colombia - 124 veces en veinticllatro horas bajo la zona tórrida, con tal regularidad, al nivel del mar como en las mas elevadas planicieS, que con cerca de un cuarto de hora de difercu,cia casi puede saberse la ~ora que es por 11uola inspecc,ionaJ,e: la columna. de ,mercuriO.. Parece que,ellta observacion curiosa que tanto haacupa~o a los físic~, i cuyo, descubrí. miento atribuye La.Condamine ( V~e al Ecuador, p. 50) equivocadamente a Godin, habia 8ido hecha en Slll'inam en 1712 (Diario literari? de La Haya pa.ra elaBo de 1772, p. 234). tI ~re BoudlCf (1742) se habla ocupad.o 4c e)la en Chaudemagor; Godin (1737) en Quito; Thibault de Chanvalon (1751) en la Martinica.; La.manon (1786) enel mar del Sur .. Mútis asegura haber encontrado que la luna-cjerce upa influenci~ I:lensil?lesou¡;e d pcríodo i lacstensioll de las variaciones h~arias (CÁLDAs, 8ernanario del.Nuevo Reino de Grq,naiút, tomo I,p. 55 i 361, número 3).. "El homl;>i:Él. que, durante cuarenta i ocho años de t,rar bajos en eINti~vpMundo, desplegó tan il.l¡o1l1brosaaeti'·i-dad, estabad'ota.do por la natllf~ez8 de lamas feliz COllStitueion física:" Su eonversacion era tan variada .como los objetos de ¡;;UB estudÍos. Si algunas veces hablaba con calor, le gustaba. tl\ll1bie,n practicar el arte de escuchar, a que ~a.nta importlitlCia daba Fontenelle, i queJan rara vcia en sn tieníp~)" A,Utlqu~-li.1N,9cup'ado. de una Ci13nci~ q:lC ~lI.ce necesa.no el estudIO ;tn$8 mlDUClOSO de la org!tnl~ac1on. Mútis jathas peJ?d,a de -vista 10,8 grandes problemas de la rlSica del nÚmdo.:' Habia reco.rrido.1as co.rdilleras con el bllorómetrQe~J~ mano.; habia determinado. la. temperatura. media dé est¡¡.sRlanicies ,que forman como. islotes en medh~ del OcéaDO'aéreO; i admirado. del a&p.eCtode la .vej~tacion, que v:aril'a.'p'r?porcioJLq~,~ se desciende a _lpsvalles, o. qu~ se sube a. lw¡ f<lI~a.s_heh~d~de los Andes, tod¡¡.s l~ CUestiones que se co.nexioD8.n,_ can lo. jeografia <k las p\anta,s le~tei~8abau.viYamente',.i,así trató d~conoc,er 10.8 limite!> mas tÚnéno(próx,llltQ~"eIl~r~ l08_~n~1~ ~ enc1Íent.ran_con:fi~adaS, en la. pendiente <ll'l las wontat1as, las dlferentes ef!peCi~dp ~i~cp.pna... :Este gu8~ por las, ciep~iasfí8i~, esta eun.Qsidad'.llctiva.que. se <,liríjé"~inquirir la esplica.ciond~-lOSlenéiÍne~W,a ,de J~,QrgantzaciQn,i de lll"meteorolojía, ~aht~n¡~~;~~ éltpdQ, ,1'fÍ'v~g9t~~ ~~,~~~o lllomento ~{}. ~~ .Vfq.~'f N,iWa., P,5'rw~,,';m.eJorla. snp('X-lO,fldad<iesu .ta~ Este libro fue Digitalizado Por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República,Colombia -- 12:5 - ~nto~e el entnsia.sillo con que rccibia la noticia. de un .le8oabrimicnto importante. No habia visto laboratorios químicos desde 1760;i ¡;inembargo, la lectul'a asídna. d~ 18i8()brasde Lavoisier, de Gu)oton-Morveaui de Fourcroy, le habían snjeridocoÍ1ocimientos mui }?ree1B08 sobre el estado de la química moderna. Mútis aCI/.Jiacon bonda.d a los jóvenes que mostraban disjJosicion para el estudio, i les suministra.ba libros e illstrurÍtcntos: a BUS espensas hizo viajara muchos de ellos. "Despue8 de habcl' hahlado de BU liheralidad i de 108 sacrificios que hacia por las cieneias, es inútil ponderar su desintereso GozÓdurante mucho tiempo de la confianza de 108 vircye>;,que ejercían un poder casi ilimitado en aquellos paises ipero .lamas se valiÓ de su crÓdito sino para 13m' útil a las ciencias, lll\,l'íl. hacer conocer el mérito que gusta dc permanecer ocn to, i para defender eon valor la cansa del infortunio. N o ambiciolJaba otro suceso que hacer triunfar la verdad i la justicia. Llenó COllcelo austero, si Pllede decirse así, los deberes que le imponía el estado que habia abrazado; pero su piedad no buscaba el vano bnUo del renombre: era dulee corno lo es siempre que se encuentra unida a la sensibilidad del corazon j a la elevacioJl del carlÍ.cter." Tal es el .iuicio del grande I-Iumboldt sohre el "ilustre patriarca de 108 botánicos, D. Jooo Celestino Mútis," coro\) le llama en una célebre obra que le dedicó. El 8010 descubrimiento de las quinas en la Nueva Granada bastaria- para hacer caro a llUe8trahistoria el nomhm de Mútis, pncs esta produc(·ion ha reportado al pa.i$ -un incalculable aumento d~ riqueza i consideraciones internacionales; pero el hecho de haber determinado botá.nirnr mente las diversas especies de quina, i comprobado i distinguido tiUS virtudes medicinales de una manera evidente, encarece BU memoria a la ~ratitud de la humanidad entera. Debemos recordar qne euamlo Mútis empezó a consagrar su ateneiona tlstos objetos, reinaban, entre los profesores de medicina. i 108 gobiernos curopeos, una confusion i una incertidumbre tales, acerca de los caractéres i propiedade¡; deJa-quina, que este poderoso febrífugo e6tuvoa pique de ser-dSSOOha.do por los mas eminentes médioos, como &erhave, La Mettrie, Hamazzini i otros, los cuales esperimen.• ~. diarianiente en su práctica. resultados contradict01'Í9ll Este libro fue Digitalizado Por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República,Colombia - 126 - igualdad de casos, viniendo a ser ya superiores en número 108 males II los bienes. Las polémicas sobre la bondad terapéutica de la quina interesaron a todos los médicos, i se dieron a luz las mas opuestas opiniones. Sus mas declarados de-fensorcs, como MOl'ton, no la empleaban sino con los mayores escrúpulos, i casi siempre con desconfianza; i aun estos mismos se preguntaban por qué laqllina, que en los primeros afios de su aplicacioll produjo tan asomhrosos 1'esul-' tados, habia llegn.do a SC!' UIl remedio temible aun en manos de lo;; mas prudentes práeticoí!. En tal situacion, :MÚtis, qlJo habia estudiado la terapéutica de la quilla en medio de esta baraunda de opiniones rlive¡;jentes producidas por los resultados hoterojéneos; Mútis, que pa¡,tieipaba de todas las preocupaciones, temores i de:oconnanzas que ajitaullll a los profesores enropeos, se propuso aprovechar su mansion en América aclarando las dudas. Aquí desplegó, por tanto, grande empeño en resolver estos puntos: .Estando averiguado qi1e las caacarillas tienen admiraole \'irtud febrífuga; estando averiguado, adcmas, que al principio de su aplicaeinIl produjeron los m~jorcs resultados i no se tuvo qne lamentar ningunmal éxito, t de qué depen. nen, pues, lo,.; males qllc aealTea al pro¡,;cnte la admmistracÍon de esta sustaneia f i Dependerán estos males de :llglillos accidentcs naturales inevitables, o de aocidcntes (lue pueden correjirse fácilmente? No habiendo cambiado la nataralez,a de las enfermedades en que se notaron sus huenos efectos, ¿ no parece mas racional creer que lo que hoi 8e llama "quina oficinal" no rellne las mismas éondic ciones de la ca.w;al'ill(¿ que en los primeros tiempos llevaba el mismo nombre I , Persuadidos los médicos. europeos, desde 1638, en que ~mpezó a usarse la quina en EUrO])R, de que no habio. tnlUl que una especie de quina, resolvían estas cuestiones diciendo, que la única corteza oficinal era la de Laja, i que las quinaa de las demas localidades carecian de v-i1'tud, a cansa de ~as circnnstancia8 de clima, latitud, altura del suelo i otral~; i en consecuencia la quina de Loj.a fué @;olicitad~ con esclusion de las demas. Pero pronto las c·ortczalS-Uevadaa de L~ia empeza.ron a burlar las ilusioncs dé los pr~ctioos, i entónce$ so bU8cóla espHc~ion de 'e:'tos ~on~enlOntc&en la ma.durey;de'las eáseans'l eusu ve~.~ 011 Este libro fue Digitalizado Por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República,Colombia - 127 ~~ dijosc que los canntiUos () corter.as tiernas, es tivci-l',liu; (l~ las ramas., eran las eficaces, mién tras que los eorteZon~: () cortezas de tronco, no tenian potencia medicinal; ise dij~ tambienque los canntillo;; frescos eran lllas a.ctivos que lo~ antiguamente cstraidos. MÚtis demostró, dcspncB de 1I1\1(:hos trahajos i observa- ciones: 1.0 que ¡labia divcrsas cspecie~ de (1l1ina, 1MHllle distinguió botánicamente; 2." (ple de estas especies habia cnatro oficinales, aunque pn din~rs() grado, i tenienrl{)C!Úlli. una algnnas propiedade;:; lÚedi(;ina!cs l'ceuliares; 3.° (_PW los cortczones eran lllucllO mas <dif'H<:CS qlll~lo,.; canutillo,,: 4.° que las cortezas eran nllljol'PS " !lll'dirb 'JIlC fuesen lllilfl viejas; 5." que las circunstancias de <:lima, latitud jcogrúfica, altlua del suelo i delllas, lo mi",mo que las yariedades botánicas, elllludu modifi<-ahan las cualidades terapéuticllS de cada especie; 6.° en fin, que los malo!'.(lhsCrva(lo8 en Emopa provenian de la i¡"'>'llorancia de estos hechos, cÓmo tamhien del poco cuidado con que se hacia la e8traccion i comercio de quina, i del mal modo de admini¡;tral' el rcmedio. Hizo notar, en efedo, que J08 obn ..l'os i ('''peenJadores confundian en b cstraccioll i l'll los eHt}>áqnes, no solamente cortcr.as de 1:;,; '-arias c8pc<:1e,;. de quina, sin.! eortczas de torlas (iuillas eon cortczas d,~ ('tl'Oí; árholes parecidos por 811 hálJito esterior, pero lWl'tcllC(·ientes a otros jéncros; i reveló el modu i el tiempo UI que debia propina.l'8e la. quina para que TIa fuera vana su aplicaeioH-, ni Aurticra malos resultados, impugnando a lit vez' algunas pl'ácticaB pcrnieiosas introdneidas por Rydcnhllll1 i otros maestros a este rcspceto. PI'oe!am(" pues, la' 1'trimitívli pr:íctiea llevada a Romn porlo~ jesuílas TEis!rmcros del Perú, de dar la <luina en la apil'exia i de no nc!ministr!wJa en toda su sustancia, ni on porcione,; cXRjerndas, Ilpoyalldo Sll¡; idens en su propia e»periencia Hl<'·t1ica, i flllldando /in" razone,; en la olJBcrvfieion do 108 hcdlOS. A la '.-erda.d, cansa udmiracÍoJl dlmen sentido, el e8pí~ ritu la.horim;o, humanitario i paciente, i la impertnrbflhJc.. constancia con qne :MÚt1B pros'Í:-'''lli(l, po!" larg"os :tilOS, sus invC8tigaeioncs ]lOtánicas 1 ml·dica:; s(!I>1'o la 11uillU, merec(l a las cuales este romedio IwrÚico afiunzó definitivamente sn crédito, i huyeron para siempre las eontrovcrnias<}1H' se habían levafltadoen- pro i en contra. de su encfiela.Al publicar algunllSQe cstas importi\ntes inve5tigaeioneB en Este libro fue Digitalizado Por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República,Colombia - 128 él Pape:! periódico de Santafé de BfJ90úi (número 91, 1793) decía: " Habiendo llegado la oca5ion de anticipar mis particulares descubrimientos sohre nuestrll5 quinas empeí'íado por la real órden de 12 de mayo de 1788, manifestaré los conocimientos adquiridos cn !ni lar~a mansioll de esta parte de América, en que la f'llertc me JHl proporcionado C(}lliObotánico descubrir estos {u:bolcs, donde 5e ignoraba BU existencia; distinguir su:; lt;iítimas especies i variedades de otros inmediatos jéneros tmnbien nuevos; i, como médico, separar las especies oticillalcs de las otras mén08 virtuosas, aunque lejítimas del jéncro; examinar las virtudes eminentes de las primeras, i familial'izarme con. el uso prodijioso de todas las especies de fll\ina, cuando a}Jén3s se hallaba el remedio en la¡; boticas (por el horror quc le tenian jeneralmente médicos i pacicntes) cn algllJll\S pequefiaf, porciones traidas dc la provincia de Loja. "En correspondencia de mis )'ectaB-intenciones i since-!'ísimos descos por el bien de la humanidad, debo prometermc de la jenerosidad de los sabios profesores, que llevarán a bien se les descubra el oríjen principal i algunas de las muchas cansas que han iníiuido en 1m; errores inculpahlemente cometidos por la ciega aplicacion de es-ta (,'()rtcza en el ejcrcicio p,'áctico de la medicina 1)01' siglo i medio_ Todos los facultativos imparciales habrán advertido la insuficiencia de los conocimientos anteriores por el bechc. mismo de no haberse podido concordar sus dictámenes en tan dilatados años: SOI»,:ldo tiempo para Ilue haya sufrido la humanidad mas de 10 qne dehiÓ }Jrometen;c desde la feliz época de tan herÚico descubrimiento, repitiéndose: inclllpablemcnte 1m; CITOrCB flne perpetúan 108 dicterios contra este segundo árbol de la vida, al paso que han retardado los elojios debidos a su mejor aplicacioll. " Ignorada .hasta la presente época la diversidad de Diete especies realmente distintas que con sus respectiva¡,l, variedades militan bajo el jénel"o de quina; ignorado el número de cuatro especk"B l~jítimamente ofieillales, en las cuales residen yil'tudes eminentes de su propia esfera,i el dc tres especies de mcnor ctiéacia en el uso vulgar a que se destinan las ondnules: igTlOl'adosabsolutamente estol; esencialísimos i prévios conocimientos, a nadie podia ocu· rrírsele el pensamicuto de investigar la diitincion de vírtu- Este libro fue Digitalizado Por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República,Colombia -129 des en cada'éspéCie~Era mul naihf~1~;~IÍ;~l'G9ri~eptQ;~l'1'ádo de .ser,úni~a lj~ espeqie. oficÍnal;: 8~R?16r;eti.,~~lla~Jl~.:y1rtu4 l1h1versallunilorme con su éfie~cl,ár~~pec't1v¡acgQtra todas hs enfermedades. en:'que se.ord'6nael J,~ll,1ed~~.I,I.$r ,atribuía Éliempresl~~ayor()IPenOl· acti'vH1!}d~'X~~<:í;iída:d de l,+.corteza, sin;liaJH.)r~epodido descu,brír,' eitqV:~cpns~~~ia esta. bondad; per9. c~eyen40se:firW,~m~nt,e:.quejiiilt,;~t'~nlaqúi~ ná, con. talqu;e fuese Zam~, 8eMc~a, debla.aI?1w~~s(l.QqJ1tta las. c,al~h:turasirit~rri1itentes~ ga~g~(lJ1l},S~ sU~~lta~ii:me$i todo el ca.ta,l%~deenlermed,ades cronwas; 9l~(lnqr refi~ren los autores .. '. ' ' , Despues 4e este trasunto no seráp<,>r deiuas)rascril>ir tambien (¡l ctn;lbso prospec'to d~h)~noipb~~s.i wppiedade~ de las' quii1a:s oticinales,' forrD,a~Oi'púqr~¿1~9,;15or,:M*~is (P~el per;i6aiM~1Íúiliero .11l~octúbT~'ge1.1~3}~en el cual S~ hallanc,o,~~eIidiados sus eSl)~r~ffieW~'osj'pbs~;t"aciories: i ' CINCHONA Hoja oval. t'l 01, ¡¡: , :A':wromú,tieo; '~:eal&6.miCll, ' ~,A.I¡tjp¡r.é9tiqa, !2l d, Antldoto, ¡..' Nervina, ¡ Febrífugl\. , A. au.steró.' :A.pWÍ'().A; acerbo. Astrinj~nte," ACiplll'llda".rahouosa, Antiséptica, ()lltártica, :aíptica, . Policres'ta,Ecfráctica; Profiláctica, " ,,' Muscular. llumara!.' Visceral. Indirectamente febrífllgas. ¡xXXIII Lavísperad~,sn mue~teairliiÓ:Mñ~is' ál vireiBorbon tiha r'epréSéh~acion .~sPQriiéndofe'llu''i()luntad ,acerca del modo !:lomo idebiafarreglarse la corlthiÚll.CíM<lcl la Espedi- Este libro fue Digitalizado Por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República,Colombia -:- ¡a,o_:- ci°H ,de~p,ue~",g~,s,ul'f~U?FiWi~I;l:~?:~ j:~e~OI~lendando. o ~1 g<f; N,ElI'l1 t!)._~j9~~lC!pn.q~(~J;'pl~n,'llfp.}\ab¡a Ideado hacl~ lllU- ~4o:tiqm*,~.,P.~~'~W;t~q_~a.cioil J áa~lanto de las cienci9.Q ~~1~i~9~~;#~::Ni~}'~\~~~{;~~:'};i(~~1~ ';'J~}:r¿ri~e~~~ ~P..,1~R'6~~t?i'Ff,m~~ ,Nl}hq~cá ,rúbTi~~, t~mt~: I q0p:.IO· tltID~ l?~.e;¡.~c9.n.fR1.et~r,s~Nl~~n<:1O 4~ .,l??pcrvatorlO con lopm;. tr~YW~\~9¡; 1~,lm~O¡;l1e -<a\!-q,;auny~r~c!~. ~~ _cuanto a !i,L. EsP~d.}C~(;m" L~lt-?es~o e;I~3;q1I~ ~~qP;?t,noSmf~1'?SO~U.?8 se ~tp.¡>le~6e, ,~~ elll:a~? q~ PBta~I?p.~\11l?'J~onb!!~la,~,~Cald~ encargado de! ae astrononna 1 que Lozano slgl¡Iese en el <{? ~oolQjí~. +\flll,el iP~~n!~an?i9¡¡? b,!!obia.ocupa,do toda. su ~·~rti.,j.,! -~o~. aíi~ ,~~¡~~ fl'e¡U,Pl.!3escaso~ par~.lo-8 ~r~udes _ l,~J,t;:tyoqU~E~.F..oV:1;9j ¡Gl¡ 6en¡p9-,.?s. nada .para 10 mnmto. Al P?w?rIlPI~.~ptl~, n~~s ,'\l,\l,e;. d~.J_a~l~tcrmlpa~a su obra; pU0~ ~l~Ji.cm'?l).Q;lo~I,gahl\~ ~,~Jl~rra otrv S?utlllllento. que ~l a~¡~r de 1a verdad, este sentImlcnto tema tal tenslOll en MutIS que- nihrcadncidm:hte-mtirmtembl"o1';ni la cel'cll.n-a-'pers. .pectiva de la eternidad, P¡¡d~C)'qll,rel aj arlo : cuando el cora~ ;>:011latia en retirada,eI atine. avanzaba ácia el porvcnin ipo-r- sobre-hta-bascnr:r-dc-fa; 1lI uerle, --'TÍ"Ctore-ando'ill" ciencia ~ l>r1ndantlo laurelús ilI lus jenúraciones vonideras. Como lus..gl¡¡d ifldOl"esl~l1Hm{)s] {lue al.entrcg':U:¡¡c a.la mu.crte.sa1 lu<lfihull al César, M4*, hm:cúleo lidiador de la verdad; ~~'!~1ba... ~r~c,~~a l:epr~~~l~~ci0!t, unb~llo ~.majeotuoso salll- ~)~-m- a a ClCn0)a. : No tcstÚ pcrs9na1if.¡ep.tcj pe.r.q,~pnfirió poder legal para. uO hacer el .!:~t~~~:¡~.át ~a:to~do~l?, _señor Rizo, ~_ue~oza}~~ Este mantuvq lás instrucciones verbales que (Te"toda su confianza (1.<> 11e JulIo ac 1808). ~n el mas secreto dcpósit~ le. AAJ,jiaJ~Mú-t-i-s,.~Q..~ 17Ge no.v.iembre del mismq flño en ,Cjgc ptorgó ~Ue5tamQnt.o, en el cual declara qUd ~fútia.-ha-bía dispu<lSto,j1.o:gueluegoque SUB cuentas con e~ .gobieri1o'o¡,tiJ.vjeseh'fé'r~ddas; .~e hicief'c inventario cstrai ¡-udilliu,l ~~ ~~llibr~~~'~;'!{¡UP5e~~parw.'e rodo lo q~e tr,~tar!\ ne botamcalBcJe cntregfti\e en dOnaClOIt a su sobrino Sl11f~ r.os~f.illl}Jrc que éEt.c.f;P. p.np.argara de la continuaillou.de la Flo}'a ?:NJf!l'anad~na,.qUy8?llp&ftas,e todo 10 rcIativ? a astrollOlllla 1 se dcstmara, pbrlfiV'eMarlO, al observatorlo, paraqu. ~,d~..qstq$libl~t\l,viE:~~ opl.íg~.,cjon...de reli.PQnde.r. en ctliJ.lqúlcr, ~H;JPi}peJ ~l1fi~rg~¡lPA~~steostablecjn:u~to j qll~ to<1os-;1!:>s\i13rp~ 'p'in4R~~ ~~wu)~~en~lftfC, ~o.&~9dB9: Este libro fue Digitalizado Por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República,Colombia .....,]31.- l\a.S~osde,Dogotá, j que cll'ffito Upllllibl'ef~8. aí1 ~grc.gan,~)~!\;,ibliotec,ap~blica proyectada; 2,° ql;l.e unos'c~~ '.iAA~;d~.HProsi un l~bQratorio. completo. que, .e(l1l dine~~ ~N.Í1ti~l hahia cornpraJo. en París D. Francisco Antonio. !~"j soh¡¡Jlaba en Cádiz a~a sazan, se hicieran traer a ll(ig9tá i.8C destinara.u, lps l¡hros a la hih1iotúea, i 106 apa- ~tosquímicQS i sustancias al laboratorio proyectado.; 3.° fi· ~4n~nte, qu,e 6Íuo se lleruj¡~ ¡¡l.cabo. lladatle lo que Mútil; .ha.WtJ indic~ocn Sil repre,;cmtadon al virei, toda,; las cosas ántes no.mbradas sc vcp.dieruu, i su yalor ¡;e repa.rtiera outre sus cinco. sobrinas ,Tasé, Sillt'orOi"). Faeuudo, Mieada i Doll1ingo. ~lútis, mejorando. a Sillt'",,,,,o en una 8ei'h~ parte. Ademas dcdal'a Hizo: 1." ([110 todo:; 10..; empleados de la E¡;ped,ic,ion estahan illdcn,miL:ad.os dl.J SllS tralmjo,;, i que MÚtiF }¡¡¡,bia cedido u Ú¡var de Dufía Fl'unei"ea Lec una ca¡;a en Ma:UJuit8; por los.scl'vieioi; qnc ,allí hahi:.t prestado a.la EflPedl{:lOIl,l nfavor de l)oila },~l,\r1a AntUJEn J\fontera 1 Ihu7,; ,~J~rcna de una (luinta en aquella llli8111H> pollladoD, tamllif:R CIl rcwuner.acion ~o bCl'vicio~ a la. E"pedieioll, pero ~br.(\, todo por el ~~ero que habia d(~8plegfld(l en cultinr lUlQS canc,losque habia plantado ::\f Ú 1i" en 1l1l "olar dd !!() biepw, los cuale~ \'lH;arg;clm Cbt\' "ahi¡¡ll! ('llidauo <.k uidm ~ñ\ll'a: i ~." (11ll~];lÚtis era hijo lejítilllu de D . .Tulían,Mútí¡¡ i Ae Vaña Cheguria :Bocio, de Cá,1ir., i (1',c habilL mandach¡ qnc nnclladro d,'llL Santí"illHl Tl'illid:h1 i Ulll'etratu 811)"0 ¡,;e Cl~tl'cgarau ,~n dona.cioJl al monasterio dp Santa lucs, i otro ~etra.to, tambien suyo, al de.1a Enr;cfianZlt, E8tosw1l1os t~.l'l'Únos de las principales d{lIlbllbs del te¡;t¡¡,mclltu, que \1Challli~junto con el j)otl¡!r, en d nichho (le L'Notaría ;;,' d~.Bugotá, protocolo de i1l6trUllll'lltos ll\¡b¡¡eos de 1808~ fvlias 3l~ i siguientes, ()¡ .1,no tiC \'~, c:,tc testamento (S etltii t.oq.p U~lll ref~ren<:Ía coudieional a la r~Jre¡:el1ta~iolldil'ijida por-lítÍ~~.al dJ'ci; do 1llilllCra (llw al'ser :wcptl¡,do;el phw 'lue él }~hia-l)ropllest(), las dOlla(~iulle¡¡ de librOBi lalH..I1'n.,tOl:WScrian efediyaii, i :,i no, paSal'illll ;11 cúmulo de su;; bl®ite, a l() <pw es igual~ a la p!'úpíednd de sus parientd; . . fallecido MÚti¡;, el ,¡reí l1umb!'.:) a bU bcel'otal'io, don J()J';é RaJDOJl de Lciva, juez comi~¡(jlladu para Jo,,> Wi¡wtos {$!#~, J,i;¡;pedicion, :JrÚti,~c:,pir6 11lar; tn~,.; <le la lllafJlilm, l'()q~do ,a.c su s(¡hdnoSiufUl'Q!lO, de C~ldas i de m~(),i estor; ~D;lanQciel'on,\Jnpi6 en JaG~~·~,lp,.~ped.ici<.))l haijta las sA~~n qU{l Rizo ~izo ol,ltrcgadi}J~lla\'Qs8¡l:~eñor I.civa,. Este libro fue Digitalizado Por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República,Colombia - 132 Bajo esas llaves se encontraban algunos bienes de Múti15i. casi todos los de la Espedicion: encontrábanse allí muchQtl, manuscritos sobre las plantas, sobre la meteorolojía i sobre minas, un herbario de 20,000 plantas, mas de5,OOO-láD'ñnas de especies v~jetales lleogranadinas, un semmero, Ub'a coleccion de maderas, otra de conchas, otra de minerales, otra de pieles, i una série de cuadros al óleo que representaban los animales mas notables de la Colonia al natural i con sus propios colores. Este era el sudor de la Espedicion acumulado durante yeinticinco ailos. - -' El gobierno atendió la voluntad de lI{¡tis respecto del al'reglo de la Espedicion; i ·en consecuencia se hIzo cargo de la continuacion dc la FloJ'a su sobrino Sinforoso, Cáldas de las obscrnwiones astronómicas, i Lozano de la Ji'awnia. El encargado de la parte botánica asumió las funciones de }fútis; pero es de saber que no era hombre propio para reemplazarlo, pues c~areciade su vasta i profunda instrucdon, dc su prudencia, de Sil iniciativa, de su abllegacion, de su celo cicntífico i de su actividad i constancia ineontmstables. Esta desacertada eleccion de sucesor solamente pudo hacerla llf{¡tis por amor consanguíneo, i deseoso de prorogar en su sobrino ellllstre de su apellido. La Espedieioll so dividió en tl"es departamentos aislados, porque D. Sínt'oroso no tenia la autoridad del talcnto, ni el prestijio de la edad i de las virtudes relevantcs, ni el fuego del entusiasmo, que tan necesarios eran para hacer de jefe i constituirse en centro de accíon i de unidad; i no obstante obrar como director por ministerio del gobierno, 8\1podel" debia sel"efímcro, como sucede siempre que la natv.raleza 110 contribuye a apoyar con sus dones los poderes que la leí confiel·e al hombre. Cáldas era el llamado, por sus singulares cualidades personales, a llenar el puesto de 1Ilútis; i tenia derecho a esperarlo así, en razon de- SU8 80r,"ici06a la Espedicion, cu)'o herbario lo dcbia gran parte de SllSmas preciosas plantas, i en cuyos manuscritos se hallaban muchos trabajados por él, acaso los mas importantes; i habíéndole dejado comprender Mútis, en conversaciones pri vadas, que seria su digno sucesor, esta circunstancia dehiÚ haccr doblemente amargo el desengaño do Cáldns al cereiorarse de q11C S11 csperanza habia sido vanh. Este <1e~eTJgaí1o dió lugar a una represcntacion que dirijió, ('011 fecha 30 de diciembre, pocos días despucs de la d:fun- Este libro fue Digitalizado Por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República,Colombia - 133 - cion de :MÚti8,al juez comisionado para 10aasnnt06 de la Eapedicion, en que:despuesde relatar 8U8 viajes a la :preside1'icia de Quito, mmescur9iones por el territorio de la 00_Wnia., sus nnmerosas inyet'>tigl\<'.Íones ñ~icas i astronómicas, tiua tro.bajos botánicos i lOi:lmateriales cíentiíioo8 que había traido 8 la Espedieion ; dcs:pnes de hacer manifiesta en los. términos mas vehementes, 1 a veces 111) tanto duros, la in· justicia que con él habi:~ cometido 1t[útis, desmintiendo las promesas que, le había hecho, i poniendo el fruto de sus afanes en manos del nuevo director, que ni gozaba de ba&tante aptitud científica, ni podia tomar mucho interes en hacer llue la ciencia aprovechara a(!llcl frllto, concluye Cáldas pidiendo que se le entrc~ncn sns trabajos botánicos de Quito para organizarlo8 i pUDlicarlus, i que 8e le presten 108 ausilios neccsa.rios para el efecto, es decir, papel, colores, unos pocos pintores dc la Espedicion i el libreu60 de la. biblioteca botánica; i ofrecicndo al mismo tiempo continuar los trabajos del observatorio astronómico con nn moderado pero regular 8ueldo para. su subaistencia. Esta representacioll ha oscitado, desde que el sefior Acosta la inBertó en su edicion ae El. SEM.A...l\{ARIO, la sensibilidad de algunos homhres eminente" que justamente veneran la memoria de Mútis, entre quiencs se cuentan lo!! Beñores Boucharuat i Ddondre, que,. en BUlucida Quinolojírl (París, 1854:), hablando de eBte mismo documento, dicen: "Mútis no ha tenido por detractor, despu<.'8'de BU muerte, sino a Oáldas, ~Il discípulo, con el objeto de obtener del vircinato la entrega de los manuscritos de este sabio, una colocacion i dinero !"' Tal concepto, emitido por autorcs de tanto peso, i repetido tal yez por otr08 lll~joh~ garantía qe aquellos nombres respctables, rebaja sin razOIJ la fama del ilustre Cáldas, sinemuargo de no ser culpablCi1 por ello 10B beneméritos sabios franceses, pues que, no pudiendo CBtl\l'bien informadm; de las drcllnstancias ~rsonales de aquel, de SUB méritos, de BUB servidos a la Eepedicion i del estado en que quedaron él i 8\18 trabajos uespues del fallecimiento de Mút.i¡;, fácil es que hayan sido mdlwidos a errOl·involllntarjo por f»lla de datos positi,os. 1\ o; Cáldas no nceesitabll. de colocaeion ni a.maba el dUlero: todos 8118 compatriota.s 8:lhcmOB que (¿ontaba bastantes medios de sostener su \"ida, i bastanW8 modos de ilUstrar su nombre, con ent.era independencia del poder Este libro fue Digitalizado Por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República,Colombia - 134 l>úhlico. Con su jcnio i su ·aplicllcion superiores, con sus propios rccursos pecnniarios i los de sus parientes i 8.lUigos, era dueño de cultivar, i cultivó con ..igual suceso, ánteé de fundarscla Espodicion, todos los ramos· del ¡;aber. Jam~ se prop~so·hácerfortuna con IiJIU3 trabaj08científieos, ,ni 'lj,bl'igÚel pensamiento de especular mediante su amor a la ciencia: sus miras, elevadas como su talento, se cifraban en scrvir ala· civilizacion universal i al bienestar de su patria, Bin mn8premio que el aplauso de los sabios i la estima de sus conciuda.dmlOs. Fllé solalllcnte cuando He le agotaron sus prdf¡ios recurS03 pecuniarios que, entregado del .todo al observatorio astronÓmico, se atreviÓ a pedir un moderado sueldo para I'U Sil bsistencia i para mantcncrel decoro de este plantel. Eu GlHUlto a los manUi:;critos, tÚ hubicse solicitado todos los de la E;;pedicion, la historia de]Jiera aplaudido, porquo, ¡,;eg!lll dice clnpoderaclo e Íntimo amigo de Mútis, señor Hizo, Jasdescripciones de la Flora que dejó este sabio eran i\1(,<)Jllph:t~Ul,i,tan solo un verdadero profesor, guiándosc lH.r ellas, podia cOllduirlas i ponl..:rms cn'órden; i cs.innoun hll' q!lo en la Colonia no hahía un ·hombre mas illtelijCllte ([\le Cáldas en ciencia~ natnrales, ni de mas talento i consagracioll al trHha.io, ni mas patriota, ni mas desintero¡.;ado, ni mas amigo ~lel illcramento de las cicncias, ni 'mas eonocedor (Lulas'la~ul1a¡; i defectos que habia en los traba.ios de la E;;IH:ldicion. Binembargo,· la verdad es que na reelamó sino lo que le pertenecia. ".Tengo, decía, nn dere(;l1o indisJlutable sobre tudos mis trabajos, porque ellos ¡,;ohan ~jeclltado en la mayor parte a mis espensas." "Yo tongo un dúrechoindisputable sobrc ellos; me.han cOJtadQ mi dinero, mil fatigagi mi salud: so16 )'0 he..visto vivas la,; p1:ant:.l.sde mi herba¡'io, solo yo poseo la clave i solo yo pnedo poner en (mlen. mistrahajos." ¿. Puede tacharse ('ste celo de Cáldas por 811" colecciones i sus manuscrito:;? ; lIai Cll esto algo que merczea reprohacion '1 : La distinciOll de ,las di \'crBf\s lluillas del vireinato habia. lJ~I'ecido, entre sus ocnpacioTll's botánicas, llna atencion preferente, Hahia \'jsto vivas en SllS lugares nativ.os, olr¡;Pl'\·ad~}~eo~eetado, ,00"<1 ue.i~do i, descrito t~da8 las ,cspecies del tOl'f1.toj'W del Ecuadoj' 1 varllls de la :Nueva hranada, i hahía resllclto algunas dudas de trascendencia.. q.ue abrigahan los botÁniC(~ ltOc><:a. de aquel.punto. En efccto, Ze~ Este libro fue Digitalizado Por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República,Colombia - 135 P)l' una pa.rte, i los jefes de la Espedicioll del Perú.'})or oÚ'$i,diliCl.ltian oon calor la cuestion de.ea~1" edas qnintg de I.oja pertenecian a la. misma. cspeciode(;inoh07l4 lfM~ elfoUa que 5e hahia d\lSCuhiertocn el Nuevo Reino, ao'bre la oual Humboldt habia emitido distintos pareceres, i :M:útisn.o habia podido deci¡'nada con scguridad, J-,aspolémicas habían oscurecido mas el punto, eu hll,rarde aclal'al'1a, cuando (Jú'lda ••, rec:()rriendo todaS las locftlidadc8 el) que v~ictl1.ncsh\s plantas i recojiendo es<'rnpulosHi\ observaciones, disipÓ las iucer! idnmbre~. Hablandll del re,m hado de BUS escursionc8 en lo;; departamentos del Ecuador. dice: "En cstós lugares formé los dis<~iio;¡('ti colore:; de todas las quinas <]uo'produce Loja. Aflnlln~ det~Cl'illí me- .nnda ~ escrupulo.samente, aflui formó el bello herbário d.(' ellas, 1 la COlCCClOll eompleta de las corteza8, CUYOB ~aco~ como t&mbien los diseños i esqueletoi' exi5ten en la bfhlil)teCla de MÚtis, i qne pOI' olvido no soinventlu-i~n·otl.'· "No teng~ la meDor duda que sin mis trahajo~ la QWii/{Jltojía de Xúti8 contendría mil dudas i ile-habria l'OOIlCido a ménos de la mitad, ApC'sar de sn pre~encion i de los de~ rcchos de la sangre para (:')11 su sohl'iJj(), ha mandado (jU(~ se puhli(lue este tratado Cl~ Ilornhre de MÚti", (le Cálda¡; i del sobrino, j Tan sefính!dos enlll mis fiel'vicios en ~stc pnnto !" Doloroso es encontrar en esa reprcscntacion algimos tOl1- coptos que ofenden la memoria del sahioMúti&¡ Amar, gural3 hai qile el hombre debe devorar en sílencio,potMIi" s-i:d-eracioll a los nohles sCIltihlientos de t'CS}ieto j-g;'Mitlld. Pero si recordamos qnc Cáldas hahitl, invertido .¡;i.lsm~Í'< plácidos años en colectar materiales parala-Espooieion, esponiendo 3U vida, sacrificando toda ob'a ambición a la (W' servir a las cienciaai empleando su fortuna en <isiosÍlnpt·oboa trabajos; si rccordamoB que, segnn mi} dispo8iciones póstumas de :M:útis, lo¡; afanes de Oá](Tawdebiah qoodnr sin recompensa alguna, iaun podía. soapcchal'se que fueraíl perdidos para la el vilizacion, por CllloCO ~'lidadoi la pliCa: a.ptitud do D. Sinforo8o; &i recordanios que Oá.ldas'había visto fallida BU esperanza, prometida por Mútíll\ 'de Slic. derle en lf1, Espedieion, i que se el'eia demasiado depiilfiid~~ no sin fundamento; con quedar. sÍl"Vimo- ~i()'ta::deJ1e1!dellcia d&l~BÓbriDbf si. r~QtnOtl qurc <:JíadaSh.bil1e~ Uldo·.:alt<Ji ~e~mo&e~ -la: ~dtcri~'i ~lKi M' ··Mi Este libro fue Digitalizado Por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República,Colombia - 136 - última voluntad de Mútis no ¡.;ehacIa caso ni cuenta. de ellos; i si recordamos, por último, que Cáldas era un hombre de tanto jenio í de tan elevado carácter que no podia resignarse a la injusticia ni a la humillacion, el ánimo seinclma a mÍl'sr ll.quella relacion de sus -servicios <lientíficos,' no como un parto de vanidad personal, mui ajeno dele. índole modesta de Cáldas, sino como un desahogo desu.. dignidad i su-conciencilt, como una defensa de su nombre i de su gloria angustiados en presencia del desconocimiento de Mútis. Por otra parte, la historia no está obligada e. favorecer mentirosamente a los hombres emincntes, atribu.yÓndoles dones i aciertos que la naturaleza les ha negado. Reconocer i bendecir 10 que han hecho por el bien jeneral i por la verdad; reconocer i censurar los desa(merdos i las injusticias que han cometido, he aquí su deber sagrado. Si Mútis no tuvo bastante cuidado ni bastante ól'den en la formacion de la Flo-ra, como es cierto; si fuó injusto e infidente con Cáldas por hacer gracia a su sobrino, como tambien es cierto, la historia inexorable la.menta lo primero e imprueba lo segundo. XXXIV No fué sin sufrir sinsabores qne Hizo desempcñó el poder para testar que le habia conferido Múti8, pues la familia de éste, recelosa de la confianza 9,ue su tio habia depositado en el mayordomo de la E8pedlCion, no tuvo reparo en divulgar desdorosas sospechas contra el testador comisario. Estas habladurías DO tuvicron eco al principio, porque todos los hombres sensatos estaban convencidos de su falsedad, ya en razon de la notoria i nunca desmentida prohidad de Hizo, ya tamhien porque eran jeneralmente conocidos los hechos sobre que versaban. Así, la pérfida maledieencia. tuvo que acallarse algun tanto ante la buena opinion de que disfrutaba Hizo i ante la luz de la verdad que todds percibían. Hechos los inventarias de los manuscritos i objetos de la Espedicion, con asistencia del secretario del vlreinato, de comisionados especiales i de los emplea.dos de ella, todo pasó a poder del nuevo director; i fenccidas las cuentas de. Mútis con el gobierno, Rizo entregó a dOD Sinforoso 10& libros botánicQIilque le había dejado Múti8, i Cáldauecibiá Este libro fue Digitalizado Por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República,Colombia - 137 ll.la vez, como encargado del observatorio, los libros dé astronomía donados a éste. Terminado el traspasoi nuevo arreglodelaEspedicion, i concluidos los queh.aceres dela mottuoriade :Mú.tis,aque,.. llaprosigu~ósu!>. trabajos, aunque no ya .conla regularidad i entusiasmo que ántes, sino con ~perezo$a lentitud, como una máquina que' carece de suficiente fuerza motriz. Ning'/lu empleado a?andon~ supuesto, ap~sa!' de l,a poca voluntad <¡ueleteman al dll'ector: el patrIOtIsmo I el amor a la..cienCia ahogaron en sus almas los arranques de la mala pa¡¡ion. Tambien continuó la. publicacion de EL SEMANARIO, bajo 1a~ireccion de Cá!d~s. Desde ~l'~ de,~8:~sto de 180~, Un mes ll>ntesdelfalleCImIento de MutIS, dll'lJ1oaquel sabIO a,..la illlstraci\iln de la Colonilj. una nuevai fogosa cscitadon PHa. qu,e contribuyera a. enriqueccr,con trabaj os útiles, i orijinales, el segundo año de este periódico. Durante el prime;r,ohabia notado. que la, empresa carecia de órden i unidad,) que corría peli¡:¡;rode degradarse el periódico, convirtiélldose en unap9.blicacion de estériles futilidades. Aqvirtió por tanto que él era el solo encargado de recibir, ordenar i correjir las producciones, qlledandoa su cuidado tambien ,e~ejir la~ que hllbieran Clepublicarse. "Las circunsta,nciasen .qnenos hallamo~, dec~a" piden que. dirijamos ,nuestrasmir¡¡,s áda aqlll.~llo:;>objetosde primera necesidad 4ntes de pel1sar en los del lujo. Un pueblo que no ti.enectl¡minos,miyaagricultura, industria, comerci0, casi agoni¡.;an';iioómopuedeocup,ar~e en, proyectos brillantes" i las, 1):1aS vec,esimajinarios?' El. cultivo de una planta, un ca~inQ; c(¡J:l1odoi pronto, el plano ~e un departamento, la latlt,uq. Ua¡,t~n¡.peraturade :lmIugar, el reconocimiento de un río, &:.a,;~~a,son asuntos mas importantes que todas, aquellas cuestiollesruido$as en, que pueden lucir el jenio, l~. eru,d,iy~op;il:¡¡.,e~q(meAcia ..,'.Despues¡ de haberi1;upreso i p~blicadq,,¡::tl~c;l;+qs,ceo¡ten~tE!~i ~eipájinassobre e~tos objet()s brillantes,.i,no, Qlle4lJ.J:l1ol3t¡¡,n pobres i tan miserable,s cOmo állte¡¡,? QI},e q~,r9S, I1jit{¡\lI¡ Gonca10r, eforíj¡;;n de l()~pueblqs d.el:Nl~Y:\f{}:qQ:p.~~)1l'\rtte,<.1ue, 198: an~icuf;\,rips,seAe.sy~len pOI' Slil:9.<il;J¡ Q1;uén~;1YfJ:lt6, ,1atbl'-nj:ula,nosotroE\,mn~cuerdos,in~ q¡¡.g;ileUJ,q$ll¡\S :<;~:';l~¡¡'s ,de.los:cQ~OSque nos,,~fliJen, i estimu., lelU()~~ •.)1nestros'p¡t¡9fe~~re~,,,,. q'lle .pu~quen .•elI:eme4~o ,d~¡ l\\p.ferp?-e~ad\tel¡TIR~c. ;pen~os ~.•;cono,cernuestraspro-, i' e,~~. Este libro fue Digitalizado Por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República,Colombia - ] 38 ';tncia~~ calculemos su cstcllsion, sus tierras de labor, sus' selva&, SUB pastos i sns peñascos. Describamos SllS plano tas i sus 'minerales ; distingamos las producciones útiltltl de la~ que no lo son hasta el dia; compl1remos lo q\1e tcnéini:ie: con lo que nos falta; perfeccionemos aguellosob.ietos, i;lm-. gamos e~fneI'zos para ndqníl'ir estos; apreCiemos los proauetos de nuestra agricultura i dé nuestra industria; médi" ternos detenidamente nnestrltS costaé,nllú,Stros pucÍ'tO$, 106. ríos lHw~g'1.hJes que atraviesan esta ihmónsá Colonia, ~ dlreceion de nuc5tras montañas, la temperatura"la étetá~ don sobre el océano, las ventajas, lo\> obstácnlosquc c~d~ dé}l!1.rtamento ticnc pUl'a hacer !m coniercio con sus \'cduos o ~or~los dOIl1::ls pllchlo~; ?alcn~emos eO~1 la mayor 'fr~~ nllenCla 1 con toda la exactrtud posIble el numero de habl;' tantos de cada pl'odneia j de cadá pueblo; -éBtudielhos'1á, eonstitÚcion física, .el cUl'áctel:, lás virtudes, lósv~ios; lM ocupacioncs del hombre que habitit ba.iode cl11nasbi.hdi~ ferentc:; i aun opuestos; la cdnca/don física Í moral qti6'Se> da actualmente, i la que mas co~ve'nga. á dada punt'o;lii5 enfermcdadeg lIlUg frecuentes, htg epidemias, las tahrft~rle~ crolÓjic'as i cuanto puede mejorar i }lacer feliz al h()iribf~. Si nlgnnos papeles remitidos al eiicargado no sa1íe~en a luz en EL SE)L\NAlHO, SIlS autores 110 deberán formar queja alguna. porque deben ~mpoller que hai motivos poderosos par!'. sU:primirlo!l, Si 110' llctHin el ,plan de EL SI~ANARlO, Bi !lO respetan las leyes, el culto, el gobierno; si en'lugal' de enseñamos aJgnrHt cosa del Reino se divierten en b'agíttelas de ínjl'nio, clltÚnces (Plcdul'án sepnltados sus escritoi' ch el olvido. EL SE)iAXARIO es un papd ¡¡ério, i está COtlsll:g1'ado a mcmorias sÓlidl1.s:-;obrc 105 pllntóB qne. tnáSh'os' lritercsalL Todo asunto frívolo l1otione Iúgal' en $tl plán; 'Í' no lo estrafíarán los espíritus li.ierosque' solo leen por di:; ycrtir algunos momentos de tedio." .' . ' Los hombres de luces correSpdildieron :clebidmnen,t~ id patriótico llamamiento de Cálda~,i EL S:sSUitW:ofité, 'eh su segundo año, tan Incido í tan interesa:rtté como 1<>dweaha BU director. Etnpezó con li:U' c5btito del doet,oi<'Elof V l\~ Ienzl\eli sobre una grama útil para prados artñi'éiále~, ób-servaciones sobro la cana de azúearconocida ;C9Ín~1hombie de otaiti,' una descripción deelh\.;i esperitr'tel1tos'$\>bTo' el!'modo de conservar las oorh~"¡lo~. htievo~i ~frtltóé-~ trahajo altan'llmte notable por 1m'Ó1'ijiírMidi\d;~f> ~Ii' piP Este libro fue Digitalizado Por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República,Colombia - 139 feccion científica i por las reflexiones económico-botánica¡ que contiene. Siguió una. descripeion de la. antigua provincia de Autioquia, llena. de conocimientos preciosos, détallada. i clara, "sustancial i juiciosa.," como la u.pcllida Cáldas, formada por el doctor José Manuel 1{e¡;trepo, ilustn· i VCllcr'1.ule patl"iota qne aun existe, c!(':'PllC:- de haber ser· vido a la. delicia eomlJ hábil observnd'H, j a 1:'1,patria comv hombre de Estado; despues (k haber narrado, como testig(I i como actor, los t;lwesos de la ~]()J'io::;aColoml,ia; dCBpnc~ de haber mCl'C<lidu del illl!wrt;d llulIl huId t particularc:, {Jo1l8ideracimlOs de amistad i la ded ical uria (h~ un j~ncr(' de plantas de la familia de la,:; (JI'(juí(ka,; qlle lleva el nombre (~e r~tr('pia,. despnes de ludH'l' .:ido l1<1nradoJlOl' ¡¡liS conclllrludun,)s con Iv::; mas llUllomhl()::\ empleos; C<ipues de haher contrilmido al progl'Ci>l) del pa.i~, fomentandL' la. agricultura i descmpeñando con intdjjcndn i zelo el del'tino de dil'pctQr de la. Moneda. de Ihgut:i; cn suma, dei'puos de h_aber consagrado ~u nombl'e en la cicncia i 011 la historia, pOl' sus tl'abajos literarios i políticos, 8U talento j ";IlS SC1Tieios a la independcmeia. L!I(~go ~,J.I-;eron iillcesivamente la desc!'ij!(~iull del cnmto de Prado, po!' Sll ihu;trado <.lura doctol'.Tosé1Ianuel C.impo;;; la(k hantigull. pr(lvincil!.de Pamplona, por 01 sal,io doctor.1 onquin O¡¡Ulacho; hi JeOflJ'(ft'Ú! de ta,~ jíltmta8 de Humboldt, tJ';tdncida {l0r Lozano i alwtadll. p(lr Cá.lda.s, IJllblica.don que le g'l'an,leó al direetor álgunll.8 tor-pesimrecti vas de parte de los t'anáticol:l; In descripcion de Bogotá isus a.lrededores pOI' el Plut&rco gl'f¡Dadino, doctor .Iosé :Maria ~alazfl.l'; uua (¡da a la uoclIe, de] dulce vate Madl"id; vados estados de Cl)lfH~l'cio, do poblacion i de hiJl'Olojía; descripciones de plantas nuevas, noticias i observaciones divcr¡,;as sohre u1.ljd,QS pllJ'ticulares i Il.SUlltc"qimportantc>;, entre las cualcs SObl'l'¡,¡alcllnadel CUl'fi de la 1fatallza, doctor Juan Agustin de la Parra i Cano, a quiaIl<:olma de mcrecidos elojios el dil'ector, Esta observa !lioo vcrsa Bl}bre el Ulal modo de culti-'f¡n' el trigo en la. Nnevfl Granada, i ahunda. eIl interes por 811(~xactitud, su pl'ooision i f!U utilidad. CCtldas eerl'{¡ el ano dl~ EL H¡';~fANARIOpublicando un epílogo de las produceiollc;; (!l¡e ClJ (,1 se ha.bian insertado; epílogo que d<::ia traslueil' la sati¡;i'accion i l~ plenitud de ~ozo con 9.uc lo escribió BU autor, a causa d.e 4':d~pl'O~~abi&ll coa . &8: 8-ido,rea.lízadoa,i sUB_eseitMione8 ~lld.· - . 11 Este libro fue Digitalizado Por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República,Colombia - 140 Es C083 quc llama la atencion laelcvacíon de carácter, el espíritu evanjélico i la vasta. ilu~tracion de cierto •• eclesiásticos de aquella época, que comprendían entre 19& debcr€'!f de su ministerio la m~ore. material de &U8 parroquias i la cultura intelectual de BUB feligreses, al mismo tiempo que 8e empeiíaban en el aumento de la civiliza.cÍon jeneral, por el incremento de las ciencias i de las arte&: ilustres sacerdotes, cuya memoria jamas se borrará de los corazones patriotas i agradecidos. En aquel entónce8 los clérigos i los seglarcs ilustrado! ofrecian un bello ejemplo de armonía cordial e intelectual, porque recibian iustruccion en comun, pisaban las mi91nas aulas. oian unas mismas lecciones, cre<..'Íani Beeducaban juntOll í 8egun una 801aregla, i llevaban a la vida 80Cial C\3O~ lazo>; estrechos que se contraen en la cornunídad escolástica. Adornas, los clérigos estudiaban la ciencia fÍsk-a, í los seglarefl eran doctos en la ciencia teolójica, lo que' no dejaba de contribuir a afianzar lll8 afeccionea Í fundar el mútuo respeto entre aquellos hombres. XXXV . El virci Amar i Borbon accedió a 10 que pedía Cálda¡; en la reyresentacion de 9ue &El ha hecho memoria, asignán~ oole mi pesos de dotaC1on anual como· adjunto a la Espcdicion i encargado del observatorio, i mandando que el mayordomo de la Eapcdicion le sumÍ1lÍ8trase papel, colores i oemll8 útiles necesaríos para el deeempeno de 108 trabajoó botánicos i astronómicos que <¡uedaban a su cargo. Cáldas debia informar cada cuatro mesca al gobierno 80bre el estado.de estos trab~jos j i en nno de estos ínfarmes, fechado a 1.°de julio de 180~, participaba estar ocupado con preferencia en tres obras: l.a "Coleccíon de observaciones astronómicll8 hechas en el vireinato de Santafé de Bogotá desde 1797 huta 1805, con todas las que Be han verificado en el real observatorio astronómico de esta capital desde 1806 para adelante; " 2," "Cínchograña, o jeograña de los árboles de la. quina, formada sobre las observaciones i medidaa hechas des<le 1800 ha8ta ;" 3." "Fitografía, o jeografia de la8 plantas del Ecuador f~omparadllll con las producciones T8jetalea de todu Iu Este libro fue Digitalizado Por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República,Colombia - 141 ~onas i del globo entero, formada sohrc mcdidas i observaciones hechas en la. vecindad del Ecuador desde lSOl) hasta. •... " Estas tres obras comprendian la esposieiou de todos lOR grandes fenómeuos físicos, altura sohre clmar, temperatura., meteoros i demas, llonsiJ.erados bajo el punto de vista de su influencia sobre la vejetacioll; la carta botánica del vireinato (Nueva Granada. i Ecuador), con diez i ocho ~randes láminlls de IIJall()8i perfilc8 de los Andes ecuatorIales, tratando separadamente las plantas medicinales, las plantas útilc8 para la subsistencia i las artes, i las de aplicacion desconocida; la rei\olucion dd problcma de saber, dadO-llll lugar de los Andes ecuatorialcs, si hui (fuinas on sus bosques, cuáles especies 80 producen, qué especie prosperará m~ior pUl' el cultivo i qué lugares serán mas adecnados para este cultivo; la jeografía i topografía del país; su carta perfeccionada i completada, i una Memoria especial anexa., relativa a la lonjitud de Quito. Ademas de esto, Cálda.s redactó una :Memoria 8Qbr~las refracciones astronómicas al nivel i latitud delobservatorio, que dedicó i remitiÚ en 1.0 de no\"Ícmbre al virei,jtmto eon uu jénero de planta.s que llamÚ atn(Jí'ia, sin que Be haya. podido saber a qué familia pertenecía, ni qué planta!'; lo farmaban. En Cotomismo año fué nombrado catedrático de matemáticas elementales en el Colejio del Rosa.rio de Bogotá, a cuya clase dedicaba una hora diaria. El acto de ~on t'uénotable, porque, siendo costuwbre que 10B profesores inauguraran sus funciones pronunciando un discurso 80bre la ciencia que ibau a euseñar, i habiendo tenido l~ra la vez la inauguracion de Cáldas con la de un sujeto respetable que se encargaba de una clase de jurlliprlldenci~ éate pronnnció un pequeño discurso i Cáldas no dijo mas que estas palabras: "~oñore6: el ángulo al centro el! duplo del . ángulo a la periferia." Tal concision revela bien eloAr4etcr conereto i profu.ndamente práctico de este singular sabio. XXXVI Hemos llegado ya al memorable año de nuestra independencia. ·.Lo8 hombres iluminado¡; por Yútis i la. Es~~QJ1 no 'p~n soportar por ml'8 tiempo el pesado .Yt1gO de la~o' Este libro fue Digitalizado Por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República,Colombia - 142 narquía espaí101a, i durante el mes de julio de 1810 la ma· yor p:u·te de los pueblos de la Nueva Granada se insurreedonaron contm el pouor tiránico del vimi i dedararon 8U deseo de independencia, cHtillJulado8 por las in8inllacionca de aquellos inlllortales patriotas, que por medio de su correspondencia privada i de sus círculos amigables hablan hecflO claras i manitieHtas al pueblo las injusticias i las ve.jaeiones cometida;; contra la Colonia, i demostrado el derecho, la neccsid~<J, la ll~iellcia que había de romper las cadenas que la unciau a la madl'c patria. El pueblo cambió en })OCOSdias BUBuerte: a la oPl'osion se opuso la libertad; ul '.,,"Obiernoteneuroso del palacio real se sucediÓ el p;obierno de ia plaza pública, aun(iue con las inconsecuencias, los 81'1'0hatos, laH pl'o\'idcncias ineol\su(tas, las vacilaciones i lU8 quimeras que debian surjir de la inc::;pericllcia i de la repentinll transicioll, Todos lus hombres distinguidos de la Colonia tomaron p!\!'te activa en el movimiento de emancipacion; de este número fucron Cúldas, Lozano, Mútis, Rizo i Valel17;lIda. Así, los botá¡.icos, los zoólogos, los astrónomos, los je{'grafoa abandonaron ol teatt.,o Úe [a naturaleza, donde todo L-'l' ,,!\encÍosa magnificeneia, (londo todu es hello i gl'and¡o~o, par:'!. pasar al teatro social, donde todo es ajitacion i contradi(,,~ion, i dOllde al la(lo de lo suhlime se halh siempre la l'nilld:td i la miseria humana. Comprendiendo bien la ,;olelllnidad del acontecimiento, se in vistieron del \"alor i de las virtudes eseepcionales que exijialllas circunstancia¡;, i eel19.ron a un lado sus rnicl'O"copios i sus anteoj(,s para cmpuilar el baston delmajistra1lo o el arma del soldado eívi <:0, A ntes so hahian o(;llpado en estudiar lo (jue rodea al hombre; ahora el hombre i la soeiedad debian absorber todo su pensamiento. Por de pronta era necesario encarrilar la re\'ol ucion, so,:tener la sociedad sobre d qui<;io de la justicia miéntras podía dársele alguna orgunizacion, mantener el entusiasmo dt: los pueblo;; cn favor de Sil propia redenewll, preparar medios de asegurar la inJcpmldencia eontm las prctensioIlt'-l> rcconquistadoras de la ('(·¡'C cf-paflola i dn" sol.wion a la multitud de cuestioneR se('¡¡'Id arias que sU':rcn siempl'ede la;;. nuevas eondieiones que ~i.cJ.l'I'ean 10;; camb' i :, "ocia10s: e1':<. mene3ter convertir a lo.:; vasallos en cindatl'Hlos, iluBtrán· dolos acerca de sus derechos i de sus doberes, infundiéndc Este libro fue Digitalizado Por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República,Colombia -- 1,1-3les valor cont.ra los temorcs, confi:mza en su propia C011ciencia) amor pOI' la libert.ad, obediencia a la patria, dispo¡;icion para sacri1ic:u'Jo todo por ella i resolrwion pa.ra DO volver ll. la ant.igua dominac:on; en una palahra, era menester hacer Ulla llacion indcl'endiente i Jibre, fneite i enér.iica, de un:. Oolonia c"cdll.va, tímida, p ••bre i d(·hil. Para llenar estos objetos se levantaron nI principio tl'ibunas, sc formaron reuniones particulares, se convocaron juntas UlUllicipo.les i se estableciÓ un }l\~riÍldico ti tlll:Hlo DIARIO pOLíTICO, que saJia tr0> veces cada semana, i era redadadó por Camacho i Cáldas. El JH'irnor de estilo, Ja Ú¡erza de raZOIl i la sencillez de los escrito,; (:HC salieron cn el ]lURIO soJamente pueden compararse ·<.:onlo (111(')ll'Odll<.:enlos grand~-s}~lento,; pol!tieos cn las ,!l:teiol,JeoiIlladll~'as, Valenzucl:l dU'IJlO la esplo"lOn (le la Opllll\ln lI1duv~ndll~l-lte en la antI¡;ua provilwia de Palllplonlt, LozaIlo apoyÍ> con 811 grande influcncia el /Sacudimicnto de la e:1pital, i MÚtis i Hizo tambicn ayudal'on C011todas SllS potencias a cLrrocar el podf'1' ú8panol. De esta manera los naturalista:; empleados en la Espedicion apal'ecieron de !lll mOIlH'1lto a otro hom brcE' tic Estado, escritores políti(·o~ i oradoru;, must; olJ,1 ; en su!' discursos, en SlISescritos i CIl Sil" CUt1('('ptos, UIla e;ocuellda, UIla ,;cnsatez i \lIl tino <pIe parceiaIl profesionales. Re v i(, <1\lt'Cáldas i Lozalll) se ]JU"iUl'OIllI1editalHl!ldoa i Hobrecojidos en las primeras hol'as de la re\'olllcion, como los navegantes qne, cllando la tempestad cÓllIiell7.8.a ajitm' d mar, deseonfiun dc poder llegar a ver otra vez en eahm. laB olas. No se escapaba a Sil intclijelleia penetrante la 8ignificacicn de esto::; movimientos, ni podían dejar de temer los tlZ:ll'eS, las continjeneias, los cfl.]JI'¡ehos de la SHert!!. 'luC hahriau de, eSperil!lcIltl:l'" Por otra Illu·te" ahandonar ;;ua caros estudIOS, su ES¡x."cl1clOn,Sil observatol'¡o, sus q;.wridos bosquos, sus instrumentos de obscl'vacion, SlIS lill1'<)F i sus espcriment08; pcn~ar en (ple los tmbajo" ,elllpezad)~ a eapeulO:J.8de tantas fatigas tal ve;,: be perdenan para .'fl fJÍencia; rúllulleial' el camino seguro de la gloria cienLífÍl°¡¡' para. entral' cn otro, a cuyo lÚnJlillo se entreveia mojO!' la muerte quc b libertad, 110 era por eiel'to cosa que pudicl'r. dejar de apesadumbrar profundamente a espíritu" de aquel temple. Sinemuargo, esta pesadumhre estaba !Hui 1{;jo8d.' la irresolucion i de la flaqueza. de ánimo. Este libro fue Digitalizado Por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República,Colombia - 144 - XXXVII Hallar una organizacion política adaptable a las condiciones del pais, fué el primer problema que emanó de la revolucion; i como aquellos hombres tcnian odio al despotismo, que los habia baldonado, empobrecido i humillado. escluyeron desde el principio toda idea monárquica de la solucion de ese problema. Fundar un gobierno republicall(' en una Colonia estahlecida i dominada siempre por la r, .redad de Espai1a, era empresa de arriesgada i difícil ejceucion ; pero ellos no hicieron alto en 108 peligros ni en lo>; inconvenientes, i prefirieron esponerlo todo, hasta la misma independencia, ántes qne imitar ninguna organizacion cnropea. Desde el 20 de julio se habia aoordado por la junta revolucionaria de Bogotá invitar a las provincias en que estaba dividido el vireinato para la reunion de un Coogrest. que constituyera un gobierno jeneral, sobre las bases de libertad e independencia respectiva de ellas, ligadas únicamente por un sistema federativo; gobierno qne debia residir en Bogotá para velar por la segl}ridad de toda la .Nueva Granada. Intertanto que se reuma el Congreso la Junta creó un gobierno ejecutivo interino compuesto de seis secciones, i cada seccion desempeñada por varios ciudadanos. habiéndose nombrado entre los de la de policía i gobierno a Sinforoso Mútis; i con fecha 2H dejulio dil'Íjióesta junta una circular a las provincias convocando a sus diputado>; para (J'lC, subrogándose en lugar de la junta interina de Bogota, convocara una nueva asamblea jeneral que organizara definitivamente el poder público: cada provincia debía elejir un diputado, i la eloocion debia hacerse segun las reglas que ellas quisieran imponerse. Establecido así un gobierno provisional, gracias a las illsinuaciones de Camacho i Camilo Tórres, i restablecido el público sosiego, la Espedicion siguió funcionando durante el año de 1b11; i tambien siguió publicándose EL SEMA:'<ARIO, en forma de Memorias, habiéndose dado a luz en este año un nuevo jénero de plantas llamado valenztU3Ua. por haber sido dedicado al doctor Valenzuela. Se publicaron varias Memorias a cual mas interl~sante, cuyos autores fueron Cáldas, Madrid, Cama.clH. Este libro fue Digitalizado Por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República,Colombia - 145 i I..ozano, sobre la importancia del cultivo de la cochinilla. que produce la Nueva Granada, i la de trasplantar o. ella la canela., clavo, nuez moscada i demas especería del Asia; sobre las eausas i enracion del bocio; sobre la importanda. de connsturalízar en la Nueva. Granada. la VÚ"Uñu, del Perú i Chile, i sobre nn nuevo instrumento para medir la. degradacion de los eolores: muchos artículos sobre meteorolojía, sobre a.stronomía i sobre la. jcografia del vireinato; una. relacion de los trabaj08 hechos para fijar la lo~itud de Quito; un a.rtículo sobrc aritmétlca política, tomado del almanaque de Gotha, i otro relati vo al uso del alcornoque americano para cnrar las enfermedades del hí~atlo i del pulmon: un estraeto de la rclacioJl de los viajee del baron de IIumboldt, tomado de EL ESPAÑOL de Lóndres i anotado tambien por Cáldas, i otros eS(~rit<)6de intereso Cáldas anunció entónees <J.ueihan a publicarse euatro :Memorias pÓstumas del doctor Pedro Fermin de Várgas, llatural del Socorro, sobre la agricultura, comercio, minas i poblacion de la Nueva Granwa; pero su familia prefiriÓ retenerlas, para hacer de ellas i de otros manuscritos del doctor Vár~as una. edicion completa, que no llegó a reali. zarse. El pa.triotislllo debiera hacer (~ualqnjera cfasc de esfuerzos par: •.llevar a esta dilijencía: ganaría. la historia, ganarian las ciencias, i se salvaria det olvido elnom1>re <.le al!uel sabio. " La. pnblieacion de EL SEHANABIO, dice el precitado señor Pombo, hará época. en la historia de la Nueva Granada: í aq ucl periódico en q ne, ademas de propaga.rse c<r nocimiento¡,; útiles i doctrinas eivilizad01'as, f.O estimulaba at patriotismo i al injenío por medios diversos, uno de ell06 los premios pecuniari08, ha.bria honrado las imprentas de cualquier nacíon culta, i .será título imperecedero de gloria cívica í científica para su redactor." A propósito de premios pecuniarios debe notarse que con fecha 8 de abril de 1809 ofreció el señor José Braximo, vecino de Pa.namá, la cantidad de ochenta. pesos a.l que mejor acertara a eserihir con di~nidad i elc~ancia la historia de la vida. de Mútu, de su eal'i-era de estudios, de sus descuhrimientos i de las obrae útiles que trabajara. Es probable 'lue, a~\1ijoneados por este premio i movido!; del sentimiento de dolor que produjo la muerte de este egrejio varon, IOllildiaeípulo.s i amigos ensayaran a competencia escribir caoo Este libro fue Digitalizado Por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República,Colombia -146 ¡;u elojio biográfico; i no es de Cl'cer que tan mala ha'ya sido la suerte <lue todos C;:iWS ensayos ¡¡;e hayan perdidu para lliempre, Los anticn:trios tal \ ez podrian develar alguno a fuerza dc indagaciones; con lo cnalla historia de las ciencias en nne~t.ro pais recibiria mucha luz, i la gloria. de }fútis se tomaria ma3 reftlljellte, XXXVTIr A ~jemplo de la junta de Bogotá se formaron juntas revolucionarias en las oern:H; provincias. La de Ho~otá habia querido constit.l1il'sc en centro de los movimientos popnlare~ i políticos, considerándose con ba¡;tante derecho para eUo, por estar en la capit.íl, i por contar en su scno la mayo:' parte de los hombl'es eunspicum; del pais; pero bien pronto la Je Cartajena empczÚ a disputarle esta primacía: no qn!30 aceptar la invitacÍo!l de aquella, por suponerIe propÓsitos centl'alistas, i espidió un manifiesto con fecha 19 dc setiembre en qne cscitaba a las provincias a efecto de qne nombraran diputados para un Congreso que se reuniria en 1fedellin con el fin dl~sancionar el sistema federativo, El resul tado de esta eontradicciOIl fué ql1e se introdujo la disct)l'cJia entl'e las diversas .iuntas, que el Congreso no se reuniÓ li! eu Hogohí ni en Medellin, i (1110 cada provincia asumió toda su soberanía cuanJo mas neeesidad tenian de federarse. POI' fin el 240 de diciembre, lt iuvita<:ioll ne la junta de Bogotá, se reunió en la misma eilldad un 8imnlael'O de Congreso compuesto d¡; los diputados de sci¡;; provincias, cuyos 'presidcnte i secretario fueron los señorcf\ -~anuel Bernardo Alnl.rez i Antonio Nal'ifio, La idea fedcrativa habia cOI1<]uistach casi toda la opinion, i tenia por apóstoles a los hOlllbl'es mas prominentes; pcro habia UD partido ecnlnlista, encabezado por N í\riño, que no cesaba. de hacerle oposieion, aunquc cstaba en minoría, El Congreso, influcnciado por N al'ifio, quiso ejercer el mando supremo i central izar la admini,;trRcion, i la.i unta de BogotlÍ le negó la obediencia; aquel trató de anonadarJa. ella se sostuvo porque disponia de la fuerza armada, i el Congreso quedó des:li ¡'ado, Carnacho í Tórrcs contrarrestaron las mi· ras ccntralistas de cste Congreso, i a los dos meses se -disolvió, desPl'eciado i olvidndo de todos, Al cabo, en 1811, la junta de Antioquia, en vista de la urjencia de un Congreso jenera.l, invitó a la. de Cartajena. Este libro fue Digitalizado Por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República,Colombia - 147 para que enviara SllS diputados a Bogotá: esta convino·; pero tal Cong.rcf:o no Re reunió porque al 1legar los diputados, la junta de la capitallw,J¡ia dietado la,; proviJenciaa (',ollvenicntes para dar no la provincia la (;ategorí:-t de naciOT!, a..causa de quP las demas ya hl}bian (¡i,,;pul'sto de sí mismas. Hizo que los padres de familia llombral'llll reprcscntante!>, 108 convoc6, se rcunicron l> ljO el nomhr" du Clj!~jí() CO'lUJtituye¡¡f.(J i cspidiel'On una eonstitud'Jn llotable por 8Uf. -prinCipios lihcntlc;; i su oportunidad, "Esta fl1é, diec el sci'hl\' Restrcpo, unl\ (le la8 asamblea" populares de la jI\' uc\'a Granada, de (~t-ta('p\wa en quo 1mb." reunidas mas luce:> i en qllP ]¡J'iliarol\ t:d('lit(l;; di~tjngllidos: :tllí eslaban los ahogado>:' I;amilo 'IYIl'l'CS, FrÚto,; i ;)osl' Gregorio Gllt.iÓrrez, J osÓ ::\Iaría Ca,.;tillo i f~:lda, .Miguel Pombo, don ;rolje 'radco Ll)zí\.llo i otro" patriotas ilustra, dos. Lo;mllo t'IIÓ lloUlbrado Prcsidente del Colejio, i brillÚ por la faeilidad de su csprcsioIl, la et-ac·.itu<l i abundancia de BUS ideas. Don F¡'úto,:; GuiiÓrrl'1. i don ('amilo TÓrrcs tambicn se bideron célebres; el primcro por la fluidez i elegancia, i el sCg'undo por la fll(~r7.a,cncr,Í ía i cOl1ci"ioll <le sus discursos, Lozano llllbia rcdactado cll'l'\lycet.n de eonstituein:l, que tomÓ en parte de las dd X,)rll.'·,\.ml'riea, i en ,)tra d,) la Ú'ancc"'lL (Jue estableci\¡ el Directorio. Estos prin,~ipios, nn p,wo hetero.i(~lle(l5, I'('('ihicroll l/ljclIios.amente toda la unidad posihle, i fucron nrolIlodados a la l'ituadon politica, a los' nsos, a las costullll/l't ..,,., i a la estension <le! pais qlle ihan a constitui!', Se l() di,') n. esta pl'o\'illeia el nomhl'C de L':(1U10 de CitlulinaJil(JJ'¡;(( 'lile :wt.igllament.t:' llevaba. ,. Las sc;;iollcs públi(~a8 del Colejio (;ollstituyentp. de GulJtlinamarcn, a las qne Mistia Ult (;')llellrH) lllllneroso, el <lecoro i l't';l:lllaridad q ne hu!lo en ellns, el entu;.;iaslllv, en tin, que eseitÓ en 108 ánimos el lllWVll (mIen de eosas; todo contribuyÓ en gran mallera a difundir los eOllocimientos fiel derecho polít;co en la N u(;\"a Granada, i a intl'odudr algun al'l'eglo en los gobiernos lll'()\°ilwialcs. Don JOJ:je Ta(ko Lozano fllé ch~jido Presid(~nte del Poder Ejecutivo, i don .José :María. Domíllguez, Yi(:eprl'sidentco 1\P':'lH4' se pllblieaba la constitueillll de CllJldinalWUO('a el [, de ahril (1811), cuando vino a aumentar d rcgoeijo la llotieia de lá prÍInera victoria que cOllsigllieron lal:i l1¡'IWlS republicanas." Este triunfo fuá el obtenido en Palacé por las fuerzas Este libro fue Digitalizado Por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República,Colombia - 148 del patriota Antonio Baraya sobre las del realista Miguel Tacon, gobernador de Popayan. Lozano ejerciÓ el poder ejecutivo de Cundinamarca hasta el 19 de setiembre de 1811, en que por intrigas del partido centralista presentó, su renuncia. Narifio, promovedor de estas intrigas indecorosas, fué su 8ucesor. Lozano ¡;e retiró a su hogar, satisfecho de haber llenado honradamcnte sus funciones. No hizo esfuerzo alguno por conseryar un poder quc no habia solicitado. Durante su administracion llrobó su modestia, manifestó tanta sobriedad en' el uso de mando qne SIlS enemigos le achacaron debilidad, i dió el primer ~jemplo de la moderacion i de la sencillez de costumbres que debe observar un gobernante democrático. Scmcjante conducta no podia agradar a la poblacioll hogotana de aquel tiempo, habituada a ver el rejio boato i la incontinencia de autoridad de los vireyes; i por esto Lo7.ano, tan popular al principio, dejó el poder sin disgusto del ve(;inda¡'io. " Habia sido llamado, dice el poeta Salazar, de su retiro filo¡;óficopara presidir el Colejio constituyente, mas por el rcspeto debido a su earÚctcr, que por la ventajosa idea que pudiera formarse de sus conocimientos en materia de go· hierno. )fo habia sido un profesor de leyes ni un diplomático ; pero futl grande la sorpresa cuando se le oyó discllrrÍl· sohre estos !l.f:mnt08con el mayor acierto; i convencia de cuanto proponia, con una elocuencia natural, graciosa i ahundante. Su principal talento era hablar en público en el tono mas persuasivo, i divertir, sin pretenderlo, en la ('onversaeion familiar. Se le cedia el primer lugar en cual(luier círculo, sin humillacion del amor propio?' A propÓsito de e8to cuélltase que, previendo el porvenir de revucltas políticas que habia de aflijir a su patria. i las atrocidades que habian de cometer los españoles recon· <}uist:tdores, cuando sus amigos le preguntaban qué suerte corrcria. el pais - « No hai que afanarse, les contestaba en tono jocoso; de aquí a dos mil años esto será" gran cosa; entretanto, vendr{>nlos espaiioles i acabarán eOIl]lOsotros." Libre de empleo púhlieu, volviÓ Lozano a dedicar una parte de Sil tiempo al estudio de los animales, a\ln~e sin desemharazo de ánimo, ya por las ajitacioncs entre :Nariño ('()ll10 jefe del pal'tido eClltl'alista, compuesto de cIlemigo8 de la independencia, i la grande opinion federalista; ya Este libro fue Digitalizado Por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República,Colombia - 149 - por la resistencia que oponian los realistas a los patriotas en el Cauea; ya por el temor de caer otra. vez bajo la coyunda espaflola. XXXIX En cuanto a Cáldas, terminada la puhlieacion del DIAmo pOLÍTICO, que duró de cnatro a cinco meses, volvió a su observatorio i a sus ocupaciones científicas ordinarins, hasta que Nariño, como presidente de Cundiuamarca, lo comprometió a admitir el nombramiento de cal'itan de injenieros cosm('grafos, en cuyo cuerpo figurahan ,1.08(' María Gutiérrez i Luciano D'Elhl1yar. Cálda" tuvo entÓnecs que dc, diearse a la cieneia de la gucrra, en la IJ ue ¡LO tardó en hacer positivos progresos; i'en marzo de 1:"\1.2 reciLiú órden de marchar con 1II1l\ espediciol1 al mando del hrigadier Antonio Baraya qne N ariño enviÚ a las provincias del Norte. cuyo objeto simulado era anexarlas al :Estado de Cundinamarca, i cuyo pretesto ostensible era afrontar la in vasioll de Cúcnta por tropas españolas. Cáldas, federalista sincero, casado recientemente i descoso de montar i roncr en \liil. una imprenta que acahaba de llegado (k lo;; Estados Cní, dos, obedeció con disgusto, porque no :-0 le o(:ultaban Ir.,; miras secretas dc :I\ arii10 ; i se propuso sacar pl'ovedlO eicntifico del viaje, llevando consigo al efecto instrl1luento8 de observacioll. Comenzó a escribir, segun SllS apuntamientos diarios, una série de cartas, de las cuales remitiÓ la primera uesde Tnnja con fecha 2S de marzo; pero ha, biÓndosc pronunciado en Sogamoso la division en que iha enrolado (25 de mayo), en contm del gohiC1'1Iode Cundina marca, i a favor de la federacÍol1, repre;;cntadl1 en un Congreso que a la sazon cstaba reunido cn Tllllja, cesaron la" cartas, que segun la intcn(,"Íon de Ccíldas del,ian fOl'mar mi opÚsculo qne llevaria por título: "Viaje alllorte de San tafé de Bogot:í." • ¡¡ Este pronunciamiento, dico el sei10]' PtHnlHl, produj(. cn definitivaporrcimltadounagllel'l'aci\,jl, favorable a ¡'o>: t'cderalistas cn sn principio, pero que pOI'culpa suya tel·miní. con la denota i dispcrsion de ;;n>; tropa>; en lo;; a¡'\Ieras <1<, B0lJ,0tá el día 9 de enero de 181:~, C:íhla" firmó el aeta de lSogamoso; acompafió gustoso nI ejército del CongreHI, qnc a órdene;¡ de los ,icncrales Baraya i .Joaquin Ricaul'tl' hizo la campaña. de Cundi.namarca; votÓ nogativamentt.: Este libro fue Digitalizado Por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República,Colombia - 150 tm consejo de ¡:!;nerra cuando se trató de ocnpar la capital a viva fuerza, despreciando sus rendidas propueatas de (!apitlllaci\-m; 1 despues de la derrota pudu escaparse con direcoion a Ibagué, pasar luc!?o a Cartago, i salir de allí el 9 de mayo por SnpÍa para Antíoquia, de donde le ¡¡amanan con ínstancia. /( He aq nÍ algnnos fragmentos de una carta su,Ya del r, de mayo escrita de Cartagu a 1In amigo de Bogota: "Ya no sn¡ injeniero, ya Ha soí oncíal de la Unían, ya ~oi \In simpl~l F. J. de C~ldas, i nada mas: en este correo '( dirijo la renuncia. i con cuatro renglones he adquirido le mis verdlll~el"Os imjJmscriptibles, que son mi paz, mi li/( hertad, mi; matem:iríeas i mi quietud ..... Despues qne ((Baraya tu \'0 el arrojo' de atacar tcmeral'iarncnte a Santafé. contra mi voto espreso i contra el de los mejores oficiales de la tI l' iun, yo no puedo vi vil' en ese snelo' que.( rido, poro manchado con h\ sangre inocente de tantas {(víctimas sacrifieadas a la obstiu:Lcion i a la ig'lIoraneia. f< Bcnilito f'ea Dios: mis votos fueron pacíficos: no dobo « ninguna de las muertes ~ieclltadas el dia 9 en Suntafé .... 11 Ya el ob¡;el'\'at,río se acaul> para mí, í deseo que caiga en ((sm\ UIana>: pam \1 lle c;;eapen los ilJstnllllcntOg de su ruina. , .. Haga L1sted este servicio a la poste¡'idad, i aplíti quese sériamentc a la ciencia de Cassini, Keplcl', Copér11 nico i l\iewton : continúe lo que he cOlllenza(Jo, i sostC¡iga ( pOI' e8fllcrzos jen('J'osos i repetidos c1lronor de ese estable11 cimiento, que hace mas para la gloria de Sil patria (J\10 .( esos ejércitos, esos plumajes, esas bandas, esos escudo!; 11 insells:ltos, nec:os, vanos i pueriles" ..... «( e( e( l( XL CálJas hahía sido nomhrado por el Conweso de Tunja ~or()nel de injenieros, i con este empleo fllÓ·acojido por el ~obíemo dd' Estado de Antioquia, que (;;ercia don J nan del Corral. FuÓ (,olllisionado allí para fortificar la frontera del E¿tado, alllCnll.ZaUo pOI' Juan Sámano, que acaoaba de apodcmr8c de \lna parte del Estado del Canea; comision <lllC desempei1Ú en unían del patl'iota Libol'ia lIejía, construyendo fuertes en los pasos del rio Cauca i levantando la carta militar ue la línea, qucdando perfect.amcllte asegurado el Estado. Luego emprendiÓ, invitado por el gobierno, la faul'icacion de armas j ruunicioneB, la Este libro fue Digitalizado Por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República,Colombia - 151 fundacion de una Academia de injcnieros militares í el estahlecimiento de Ulla casa de umoncdacion; i a fuerZit de empeño i de estudio, consiguió fundir imantar consí"" dcrable número de cafiones i obn~es de campaña con lo¡.; nombrcs de los guerreros IlW'> distinguidos de V cnezuela Í Nueva Granada, arreglar nlla nitrería, montar nn moliÍw de J?Ólvora i m(~(pli~~s de arr.lOned:wion, i fUlldir i taladrar fustles. Corral rnllrlO a m(~dtados de l~H, despues de haherlo nombrado director dI' fáhl'ieas l Ílljeniero .icneral del Estado, i de lmlwrlc eOllfcl'ido el Clil pIco ef'ceíi \'() de coronel con el slleldo de 2,400 l)cso~. V camas algullo;; detalks que Ja el sefior J'ombo 80bru estos trabaj os de Cáldas i soLre hl apcrt ura de la Academia dp injenier.)s; "En 7 de fchrero ,le 1;;15, ¡;egnn aviso ofi(~iul de Cá.ldas al gobierno de Antio(juia, de 'f('('I¡:l 6 de marzo, qncí.i{. cQ!'riente un molino de "p0lvora cn otl'O edificio nuevo inlnediato a la nitrcría. U na rueda hidr{mliC'a do 78 pulgadas de radio, de madera trabada por un método ol'ijinal, sin clavazon ni herrllje alg1tLO, mo\"ia (;uatro pilollC¡; de a eienlihms de peso, que daban ha4a;;¡¡ golpes pOI' minutu en 1m; ret;peet.ivo3 morte1'()~: lo,; f¡:]](\1l3 l\[' e3t08 eran pieza;; separada~, (lile (L~ii(;?nsaban sobre tortas cll~ (':lucho: la rm~da podia ser detmlida instantlÍne:illll'llt,>, por el esfuerzo dé un dedo. Cáldas di6 model'ada~ dillll'lbione" '" la máquina, eon la idea de que eran preferible" eljii o trcs pequeños mo" linos a llllO gr:l.llde. "}{ueha,; dificultado,; :in le Pl"C';dll¡'I"OIJ, por falta dt: libros (1110 le ~in:e3cn de guia, pa1"a la fu]](licion i taladw do fusiles; pero IOg'rÚven('l~rlas (( o¡,~tinado en sn empresa" f( armado de paciencia, i ~qHllta(lo ]Ila,.; <le do(~e me,¡es ('!l' 1( tre los carbones i ullincr: de la IIlftI'3tr::lIlZa de Ri()ne~r(J. ((preguntando :.l.la naturaleza, i aITiulelÍn<lolc Ims sccrotoo ((a fucrza de ohservaciollc" i (le espcrimwias." Estas frase;¡ aon de una eomuniC'lwion suya de t' de A ,!:osto de 1815 al gobernado!' del Estado, en (lile inff)rIlIal'll qne podian ya taladrarse diariamellte dOA cnñulll':; de fusil, i a la cual acompañaba por via de H1l1cstra cuatro fusiles c0mpletoH de los de la fáhrie;t acaha(la d(' e;;tahl('c(~r. "},as lOlÍ1lllinas de lJ.mouedheioll estuvicroll cODclllidll& poco despues; de manera qne en octubre creó el gobierno Janeral de las Provincias-Unidas, al cual se habia resenado BANC"':, D~ \ 8IBliQ" :) -;.. ¡ C,"\TALCí.j:\,- 1.\, Este libro fue Digitalizado Por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República,Colombia - 152 nste ramo, la casa dc moneda de Medellin) dcsignando las clases i dotaciones de SIlSempleados. Varias de esas máquinas que no llegaron a servir allá, fueron traidas despnes a la casa de moneda de Bogotá, i resultaron perfectas p~ra sus res,rectivos servicios... " No existia ya el dictador Corral cuando se abrió en Medellin por Oálda..<;, en octubre de 1814, el primer CU1'80 de estudios de la Academia de injenieros, con un estenso discul'so inaugural en que, dando brevemente idea del total plan oe ensa/lanza, se dilataba bastante, especificando, definiendo i recomendando a SIlSjóvenes alumnos las cuaEdades propias de un bueu militar repuhlicano. Allí, en el lenguaje de un tierno padre i de un filósofo, citando con frecuencia a Fenelon i presentando por mooelos a varios ~Ilerreros de la Grecia, de Roma i de la Francia moderna, l(:lS habla del honor verdadero i falso, terminando por condenar el desafío i el suicidio; de la gloria militar en su lejítima acepcion; del valor, de la fidelidad a la patria, de la obediencia i subordinacion) del sufrimiento, del celo i viji. lancia en el cumplimiento de sus deberes: les recomienda el amor i bu(m tratamiento al soldado: i les encarece el desinteres, la modestia, la fru~alidad, huir del juego i de la incontinencia, i ser tan reli.1iososcomo patriotas. I en cuanto a las materias en jeneral del estudio, indica ~ue serian distribuidas en seis tratados, adema8 de los prehminares de aritmética, jcometría, trigonometría, áljebra hasta el 2.° grado, i el conocimiento de la parábola; a saber: 1.0 arquitectura militar i fortificacion; 2.° artillería; 3.° arquitectura hidráulica; 4.° jeografía militar; 5.° tádica enjcneral, j 6.° arquitectura civil." XLI Organizado el pais segun el l!istema federativo, i restablecida la regularidad social que habia sido tan radicalmente alterada a virtud del sacudimiento de independencia i de las diverjencias intestinas, el gobierno jeneral pensó en fomentar el progreso de las cienclas i de la instruccion, en continuar i perfeccionar los trabajos de la El!pedicion i de Cáldas, interrumpidos desde 1811, i en difundir el ~rte de la. guerra i preparar recursos para defender la independencia. Al efecto rnvit6 a Cáldas, en 1815, para que S8 viniese de Antioquia Q la capital, i despue8 de repetidae ina- Este libro fue Digitalizado Por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República,Colombia - 153 t.andas consiguió que hiciera el viaje con su familia . .Ademas publicó en el "Argos de la :N ueva Granada.," del 3 de diciembre d!~mismo afio, la sil~uiente iWIJitamon oJici<il; "El magmfico Atlaa de la .N neva Granada, en que el benemérito Cáldas consagraba a S\1 patria el precioso fruto de sus trabajos je()~ráficOB,i daba oca~ion a los pintores de la Espedicioll botanica de acreditar la perí~ccion a que ha.n llegado en 8\1 arte, fué interrumpido desgraciadamente bien apesar de su autor. Pero el gobierno jellcl'al habicndo visto con satisfaccion los primeros pliego,;, i pcrsuadídose de la importancia i del mérito de la ohra, tUYO a hien Ji,,· poner su continuacion, a que desde Ille~() se prestaron lllui gustosos el coronel de injelliero8 Cáldas i el ciuuadallo ~i[\1'01'080 :Mútis, bajo de cuya inspeccion han de trabajar l.)" artiBtas de la Espedicion botánica. "Inl'truido ahora el P¡·esidente ue las Provinciaa-{Jni· das del estado de este proyecto, i de que sin perjuicio el coronel Cáldas trabaja al mismo tiempo en pnnto menor \lna carta. de la Nueva Granada que pueda servir a la mayor brevedad para las operaciones militare:;, ha tenido a bien mandar qne se manifieste al esprc8ado Cáldas el apre· cio con que se ha informado de sus trabajus; i que por medio de los gobiernos de las Provincial' i de los papeles pÚhlicos sc invite a los intelijentes i (mriosos a que comuni· quen a este injcniero las noticias jeográficas i las cartas impresaa o manuscritos (lue pose~'eren, en illtelijencia que el porte será franco en las Administrnciones d.e correos, {JOnformea la órdcn que se les da, i que cn lo;! llli2mo6 términos se devol verán dicha8 cartas o papele13intactos. Santafé, noviembre 25 de 1815- V ALENZUELA, Secretario de Estado i Relaciones Esteriores." Ni aun enmedio de los afanes de la independencia de· jaron de cultivar las cienciaa los hombres educados bajo la. inspiracion de Múti8. En laa campanas militares, en laa asambleas políticas, en las altaa majlstraturas, en todas partes i en todas situaciones pensaban en ellas. Inflamados por' el amor de la verdad, i nrmemen te convencidos de que ciencia es poder, do que las nacioncB tienen deber de contribuir al adelanto de la civilizll.cion 80 pena de ser reputadll8 eomo bárbaras, de que miéntras mas débil es un pueblo en fuerza. f18ica.ID8.8 nooeeidad tiene de hacerse ~etar i considerar . por su eafuel'B9lJ1i~riOB ia.rti&tiOO8, íde que una nacionali- Este libro fue Digitalizado Por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República,Colombia - 154dad pcquciin. en pobhwion i esc~a de capitales no puede hacer nada por la" ciencias si la~ abandona a la sola accion individual; conveneidot\ de estas verdadet\, sostuvieronl<*> t'.Btablecimientos científicos fundados en la época del virei· nato, estimularon los talentos, i emprendieron nuevaB obras intl~leet'll1tl(':; exijidas por las ciJ"(~unstanei:ls. Si Cl! aqnel tiempo Sl~ hllh¡c/':llcvlllltado una voz aconsejando 1:1 indiferencia .dd gohiel'llo 1 Jl materia de in¡;;tTuccion i pr(¡grcso <.lelas ciencias, se habria oido con lástima, como ~t· oycn las loct1l'lls de un demente. XLTI W7.0, homl!re de ellé~jica fibra i de instintos noble¡;, t~lmLien se cnl'Oló Pillos aeontccimientos de la independencia, Aunqne al prineipio solo consagrÓ a esta emllm su eofU7.0n, por 110 almndDnar ~IIS tareas (:icntífieas, q¡¡e IlO dudaha dejaria]) It fill patria lilas gloria qne la!> di;;encione,; po!íti(:as i los fratricida" campos de sungre, cn1812 resolviÓ cntl'eg-arle Sil brazo, SIl pensamiento i :;11 vida. Cuando viÚ que las arlllu;.; (';.;paf¡ol:l::, di;.;pntaban t.l'1Iellllénte al pucblv alllel'icallO su dl'l'cdlO de independencia, creyÓ qnc la indiferen<:Ía em iuir{llidlld, i ([ne ahorrar la ..•.ida en aquello:, dias era tmi<:iol\ar la p:\tl'ia. l'!la pcrseentiou injnf;ta quc, 11iw;tigaeiollcs dn ¡;llS Ilwlqnericntes i de los cll\-idiosos dt, h connan7.lt (lIle le habia merceido a :Mútis, le dec-]aró Narifío, COll.!O Prc¡:¡idente de Cnndinamarca, e,;calando i allaaando ¡;1I <:asa bajo prete;;to de buscar lo~ Itlannscritos de la. E"pcditiOll qne decian hahÓrselos l'ohndJ Rizo, fU0 motivo VH'a rjlW H]ll'csnO':ll'¿t su l'<ltriÚt.ie:L det('!'llIillacioll, hu· . .-el}(J() (le Ih)g'ot¡i, donde SIlS enemigos gmtllitos lo teniau Hgol.;:~do de <101m', i dil'ijiÓuoose alas p;'o\'illcia~ del N ort{·, <londe ésperahft halla.¡' reposo llloral i ocasioll para tomal' pal'te :¡ :tiv:t en b de:'cllfia del pais .. P:'(~paráhase, en IHV~, Hila espedieion militar nI mall(lt\ del gl'a'l BolíY<1r para libertar a V cnezupla del dominio espaiiol, i lUzo fentÓ plaza de oficial en este ejél'l'ito. En V CneZllCI;,. partieípÓ en!' resi~nacion de !ns lJenalidades i riesg ••;; áe la campaña, 1 ",npcfiÓ con valor sn vida. en lo~ vario:> Clillllmtes glorioso~ ¡"lirios con las fuerzas realista", hastlt que el dc;;'\stl'C de la l)nerta obligó al ~iél'eito independizmtc a cmprelHler U1Ht retirada, aefccto de conscgn,i" dcmcntos de gucl'l'a i de reparar laspérdidae sufriat\i. Este libro fue Digitalizado Por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República,Colombia - 1,)') - Rizo fné comisiunado entÓnce¡; para eO!1ducir un pliego dirijido al Congreso reuuido en Tunja, solieitalldo ausllios bélicos; i en el mes de ¡;etiembl'c de 181+ llegv a esta eiudad, reanimando al paso el patrioti::;mo de las p{,blací(¡!1r¡; del trÚnsito eOIl patÓtieo;; relatos d'l las a !)I'!llín:H:iollCS cometiJas por 11Mr(,(~oll<¡ui"'tadol'e,.; ('n el tl'rritorío \'cllezolan(l, i e(ln l'efkxil)ll(~" sl,tll'e las ealnlllidad('~ '¡He H";¡.iíl'ia!l a los ptwbloil si llO se lill{'i:'lll lH'olil..,,.; i l·¡¡('a("'.~ e"fUerZi)8 panL rehacer d ejl'l't:itu li¡H'l'iad,,!'. Llll~;!'O detrnlJin(¡ pasar a. BogvtlÍ. a "v/' n "'1 faltliiir" 1'1'1'IIIWl' SI", atms('s de Yc:,tnal'ío i (~l!ral's\' las Y!C(.'eras, ai"·¡",ltda.s ('l;J¡ las l,rintc:Ollcs i de::;tellljllallí~as dI' !i¡ '.'altljl;lIi::. Cuando ll\(:íor-al")j'('ah:¡ 1:: lnl!l(!l!¡:¡d::d dOllll'sticu, se .. '1 al 1 pan~ not!·ti l'l'esento, el! s\I '1ii'i-,:::ll' (~1 ,'''Cl'd::Il)I) 11e '1¡lll.'lll\ enl'lt\ de ill'l.lPlI (k ¡,,< ('Olllí::;í"';lldos dI..' la Esp(·di(;¡OIl botániea, UlI plcítt, que k hal1iHll Ilr<lido dllrllllte 'sn nlliic!wia, so· hre aSllnto,; d(~la E"pedi('ioIi ¡ d(~ In tf'st;Uiltntaría de Múti.s: l~izo puso la ("'('PJlCiOll legal de ser t:ilpítH!l aetíyo de la {Tnioll Iwogranadina, i alegÓ 110 ten('l' tiempo ni permiso pam eOlltestar enjuicio ('¡,'íl, pues 1'010 se l,~ babía COllce(¡ido UWt curta [iccneia 11'1111'01':\1. E!Jt{¡l!('c::, pj lllnjj:=,trado judieial <lIw d,~l)í:\ (~,)JlOC('J' I~ll d JlI'~~,,-'('i,,:]l' I'idiú HIJa imt!')l(;(:í',lll .i1ll'Hda r;••hre ,'arios lJtlJltu.~ ('(lllcl;J'llielltcs H la te.:;tamentaría, i Hizo la di¡', sin tardan/.n. (~reYl.'lldo quc con (:;:;toe,-itaría (¡ll(~se le siguif'rnn prt>purcionalltlo molestia;; i (lile ,,0 le cstorbarA. 8U regreso a Ve¡¡('zuda. Pcro no fué ai;í, puc:; a pO('Oi:í tlia8 f'C k orJen¡') ¡¡Traigu en Bogotá, i él o.hede,ei,'¡, [lllllllUC íJJIl1~di;¡tnment(: l'<'d:unÓ ant~: lus comiswnal¡O" ConlTa ,.;elnl:Jml1.: pl'O\')'~I'IWla <¡He lrnstrabn el ()J¡jeU. de su eOlili"ion Ill::itar; 1tIl\::' vll lugar de ser oido, se,le impuso, n. lc)" enton'" días el,' !!alwr [¡(:ello 811 reclamo, arre~fo Cll un enartel, ('('11 centillf'la {Ji: ,'í"fa i absolutamente privad\! de c()mulliea(~ioll. 11astft pasa(los diez j nue· ve día:' 110 ';11]1" el motí\'l¡ legal (k tal arre8to, como no snpo tal1lpo('o que sus ellemígo,; lIabinll heellO correr en el pÚbli('í) esp0(·il~s caluUlniosas (lue lo ,;i!J(!i('al.)un de habcI'8c rolla.!o los rnann03critos du la Esp(,d¡l·io!l i treinta mil re<-,osel! dillel'O de propiedad (k !\IÚt ¡,.;. ZallCrido así por la l'xucrabll' maledíeellcia, estl'echad() por el furor de sns enemigos, perseguido injustamente por la autoridad, conturbada. su inoel'lI0Ía, despedazado su nomln'c, escribiÓ enl.J de 110\-ielllbl'e de 1814 nna larga ~¡ "" .• le;" '12 DS Este libro fue Digitalizado Por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República,Colombia - 156 carta al hrigadier José Ramon de I.eiva, qne acababa de llegar a Bogotá de una campaña, en la cual, precedida una sucinta llurraeion de los hechos que habian tenido lugar desde el fallecimiento de Mútis, con relucion a la Espedi\.lÍonbotánica i a la mortuoria de aquel naturalista, hLochos que habia preseneia(lo el brigadier como juez eornisionado para los asuntos de la Espedicion, le suplica Rizo por COIlclnsion que mire por su honor, que lo proteja contra sus injustos enemigos, para poder marcharse pronto a morir gustoso en los (·ampos de batalla en que se debatía la suerte del pais. "Han aguardado, le decia, a que medipn sei8 años de tiempo para desacl'(~ditar el hOllor de un patriota que no desiste en la defensa da la América, prefiriendo esta a su propia vida! Ya !lOhago caso de veinte i seis años de servicios, ni de la renta que gozaba. Ya todo se ha perdido! Don ~inforoso goza de una gran comodidad; yo 10 trabajé, i él es el que lo disfruta. l Pero Jlorqué me persiguen?" 1 así como esta~ son todas las frases de la carta: gritos de una conciencia pura lacerada por la mentira; ayos de una alma digna ultrajada por la infarnia. Casi todos los otros pintores de la EspedieioIl prestaron tambien su continjente de servicios a la cansa de la independencia, clistingui{mdose entl'e ellos Matis por el entusiasmo ue su patriotismo, hasta el punto de elll'olarse como simple soldado en un batallon llamado "Patriotas," elt· donde fllé aseenclido mas tarde al empleo de teniente guarda-mayor, cuyas funciones, que exijian suma hombría de hien, uesempcuó a placer de sus superiores. XLIlI Cuando empezaban a surtir sus cfectos las providencias tomadas por el gobierno .loneral en 1815, para continuar los trabajos de la Espedicion i cornenZal' nuevas operaciolles científicas bajo la direecion de Oáldas, ocurrió la invasion del territorio ncogranadino por tropas cspañolas, al mando de :M:orillo, Enrile, I.Jatorre i Calzada, que habian disciplinado su ferocidad en las matanzas i el saqueo de las poblaciones venezolanas. Los dos primeros entraron por Cal'tajena, i los otros por los valles de Oúcuta. Esta cspedicion, que inspirada por las doctrinas cristianas, hubiera podido hacer volver a los puebloi3, sin mucho~ esfuerzos, a la. obediencia del gobierno español, no traía Este libro fue Digitalizado Por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República,Colombia - 1;;7 mas programa de pacificacion que el hierro i el fuego: Sli línea de -conducta era esterminar a los patriotas, suprimir' todas las cabe7.as literarias, talar el pais, e illll!l)llcr el dominio 1'e:11 por el lilas horroroso terror, prescindiendo de todo principio de (,ivilizaeioll, de todo selltilllit'lIt() humanú, de toda idea politiea. La prlleha de (¡ue Iv;; IllIcblos c:;taban dispuestos a someterse de uuevo yolnntarimnellte a la autoridad de Espafla cs, que Latot'l'e, el mas político i el ménos cruel de estos jefes, llnhiendo espeflido Il1l indulto en Cipa<¡uirá, poco;; dias :intes de <1irijirse a Bogotá, indulto qne (:oll1prelldia a todos los empleados qlle hubieran coopernuo de cna]lplÍer modo al gritl) de independencia. eonsigniÚ entrar a ('sta eilH1ad, "in resiskn('ia i í:'in oposicion ninguna, el ti de mayo de 1SH; : i <.;omo d ieHe }11'endaf'. de cumplí¡' las ofertas que hal¡ia heeho, fué ae0.liJo con cariño ]Jul' la poh1aeíolJ, (pie desde lnego se preparó a re~ihir C01\ allJOl'ow a 108 (h~lIIas caudiJJOi; c:"pedicionarios, creyendo q no la benignidad de Latorro procedia de un plan humanitario impuesto a la cspediei'jll por la eorto : las gnerras i las querellas ('h·ile", (jlle ha1.iall dividido el país durante lo,.; l~ille() aft"s (PW JJ(~val)all de independencia, hahi:m fatiga(1o i desc;;perado n los lllll'hloH, i c"tos dese:tllan ya \·(ilH~r a la vida de paz (PIC Jwbian disfrutado Ílntes deU'lO, aUlHllle tu deran q ne soportal' los incon V('. nientes del gohierno de los vil'cye", Mas, al acercarse a "p Bogotá Morillo, sabedor de la benignidad que habia mostrado Ll1.torrc, le escribir) dcl camino dándoJe Be,eras Órdencs vara qnc aprehendiera i pusiera 011 ;;cglll'ídau a 108 patriotas, i especialmcnte a los mas ('(lmp¡'omdidos, a quicnes denominaba cal.11:oillaR: Latorre lt~ hiw prcsente que su palabra estaba solemnemente comprometida a nombre del rei de EspaDa; }¡lorillo vermálleeiÚ inexurable, I,atorre tuvo que ooedecer, i el 2~ de mayo de 1S11;,por la noche, este brigadier sorpl'endi() en fiU¡:; eas:t6 a muchos indepen- dientes que dormian c.ontiados en las promcsas que les habia hecho. Alármase la poblaeion al punto, todos los demas patriotas vcn ;J,uc su libcrtad i su vida están en inminente peligro, i mientras que unos, lo,; mas prudentes, tratan de ponerse en vía de sah-acion, otros permanecen en la. ciudad, fiados en un débil resto de esperanza de clemencia. j Infundada i funesta esperanza! El 26 de mayo por la Este libro fue Digitalizado Por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República,Colombia - llíS noche entran a BogotÚ I\Iorillo i Enrile, reprenden hruscawente a Laton'e i Calzada pOl'que habian admitido obsequios de los moradores de la ciudad, los castigan mandando al primero a los Llanos de San Martin i al otro a los valles de CÚcllta a hace¡' penosas campaiías, declaran nulo i de Ilillglln valol' el indulto cspcdido pOl'LatolTl', se cntregan a oir infallJe,., delaeiones i a' re.iistrar lo,.; archivos del gohiel'llo jCllel'al i dcl pal'ticlll;u' del Estado de (~ul}(linalllarcn enlmsca de duculll\'nto,; I'C\'olll<:ionario:,;, i lnc![o haeinan el! las cÍtl'celc,.; de Bo:!ol;í, en el conHmto de la (;'J'(lcn Tcrecm (le San Fl'all\:i"co ¡ l~n el CO!l;Í in <Id [{osal'in, ('ditieio,; todos !lIlIi capa\''';;, a tudo;; lo;; Cill(bdanos patriotas de :BogotÚ (tllC pndiel'un apl'ísiol!HI", llechos 1'00., por el delito de amar a Sil I~at!'i:¡, ]"")1' el de telle!' t:l1\'lltO, pOl' (·1 de "'el' literato;;, al)ogado;; " IlIl'dicos, po!' el dl' tenel' dig'Hid:HI, por el de i',ulJ!'cs:tlil' eu virtild, O po!' el ~k POSCC¡'l'il:\llti<l;;a~ riquezas, pues a(plCllo~ ,icnerales no se proponian utl':t <:{'s<\(l'w apa;far toda luz, destl'llir toJo iut!ujo sohre el pueblo, cstirpar t<jda, fnerza social, COI\ el objeto, decian, de <lile llO qucdase persona alguna ql\e dirijipso otra revolilcioll, ni mcdio de ¡¡aceda. Sellle.i;\Ilte ('ruel torpeza fuÓ la <]ue salvtl la ind(,pende!ll'Ía, ll\les ellal'\k(:ÍI:> el patrÍutislI10 al mas alto grado, ('ondensÚ los sentimientos, f1nilut. las \'ohmtades j lC\,¡\IltÚ a la mayor pOtel\Cilt la PU.i¡lIIZ:1 popular. 1 para <¡ue lUHb faltase al ]¡OlTOI' de esta grande Lecatonfonia <le tlH1a b Hor de Ull IJlleblo, los c;;pedieionarios al1adiel'Oll ala crnel(1ad el (';;(::trllio do las ['Úrmulas jndieialcs ereadas por In <,i\-ilizaciulI para sal\':u' la inoecmcia calnullliada i da¡' reditilc1 a ]a justicia. Asi, aunque de antcmano habiall de:'li~'nad<l las víctimas i dispuesto irrcmisilJlelllente el sae!'itieio, inHmta!'oll un tribunal militar llamado (fO/181:jopO'/¡ía¡¡ode de r¡uer1'({, formado do unO!" ]>0<:.05 oficiales ignorantes de 1a~ le.ves i encmigo,.; eapitalc,: de los amcricanos, cnyo objeto cm declara¡'la muerte a los (:ondenu(los en ¡;ee!'eto por Morillo i Emite, sin permitirlc:,lcvantal' prueha alguna, ni nomhrar defcnsor, ni dejar (llW "liS familias hieie,;cn nada por ellos. Inventaron otro tribunal militar 1bmado COIl,\'{jo deJHl)'1ficacio7l, cuyo destÍIw era indulta!', hajo }>(maspoco ménos tcnihlcs que la mncrtp, a los pa.triotas (¡ue, segnll 1ft \'oluntad de los do;; jefes del ejército, no debían snfl'Ír el último suplicio. 1 pOI' fin, crearon l(~Jltn«~ de seouestros para qne dejara CIl la miseria l\ la8 Este libro fue Digitalizado Por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República,Colombia U)flinocentes familias <le los patriota~, cuyus l,ienes fuerOli eonfiseados eou el mayor rigor. Esta~ Ire~ jU!ltas de cauÍ¡mIes dehían, pn('~, reparti r,;e la ml1('rk, la I'cr;,;c('!leinn, el destierru i la cspropiaeio!l de los patriotas, i el csp:l!ll(l, In de\-astacioIl i el lelTor del pais. XLIV Al aproxilllfu'SC a Hogul;í las tropa~ de LntolTP, lo l'ril!"ipal (lp la fnerza arlllaela l,alri(,ti":l qlll·llahia en esta tindad emigró úe,ia 10:-\Llanos de, Sa!l \L:rti'l, e!l e'¡¡ya l)(']"ceneion mand,') (k~pll(''; ::\lol'illo n al¡ilCl .id':: i lo,; miCIlIl)]'o''; del gohiel'lw .i'>lll:l':11. al~u¡:us illilí!:::'!''' í ;:''1'<111 J¡Úlnel'O (le las l'Cl':-,O!laS llla,..; '·()lllPI'(}IlJ(~tida:.: :'t' dil'iiil>l'oll :·t<.:ia :Xpl,·a j Popayall. ' " "C:dda;.:, (l1('l' l,l ~('!1or l'"mb", 1'ti,', 11110)de los Cjuc emif!'I':1¡'O!l al 'sur. Clln Illlli pocas C"PC!":l]lZ:l'; de' ;.:aIYfH·jull, ¡<i"IIdo un:l (le l'IIa,~ la d,; aleanzar a Cill]¡:u'('al';;(, en el pnerto de la l::ll(,Il:l\"entlll':l ¡;obre el IJl:ll' Pat'iíi('(', qllc sc i'rnstr(J para todu~. P0l'ayan estalla libre tudavía: !,ero la aeeÍu!l reflida i dcsgmeia(ht de b ('lI('hilla del T:tI1l]¡O, del ~!) lIt' junio (1 ~lnl,!,"~" aqlll'lIa (,iudad :1 '¡i"l,,,"¡('i,,u del YeIH:e'(lar S:iJII:UIU, C;ilda,;. ~\1 íU!jlllo :uu:;'.::u i C;"¡III'al[('¡'{) Cllu:I, i otro;. p:tTl'i,,::~,~. H' ol:111tai'Ol! ellt(,!wC',; LII la li<l('icllda d¡' P:ti"I':I,ul.1;(. dio: leguas (li,1 :llIt(:, i allí i'tWI"JIl ;,ol'pl'elldidoi' i arrc,;t:1dos pOI' pj jefe p:t1 iallo Silll'lll :\f IIflllz. Personas (1iversa", todas \"OI'<1e('s, )'efiel'ell qUl' al (',¡]HJ¡ll:il' d misHlo )[ul1oz los pn'~'-,s a PopaY:lII, se (111,'<1'"lIll 1;1l\:O :ttras COl! CálJas, de (,\IYll SIl(')'1:(' e;;taba C()!l\!':1.¡!(·(·id" i 1'01' qlliell le jllten:~:d)all los l'lllJil'fiOS (J¡. Sll t'allliii:!. i 1,.' (ij'¡'el'i,') salvar!o haeil'lldolo ¡!H~:lr a (Jllito, ,.;¡ <1011<1(',~\I1'eJ'¡llt]¡a i se <listin~lIia 1)('1' SIIS ]>l'in(,ipius de 111l111:1.lIida,l D. Toril¡io ~f"111tc':,~ pel'o el .icllero.'iV ('Úlda:" 110 ]¡ahi('lldo o!.>tcllidll ig-llal t'a\'or para ;';11"""JlIpaflC'I'OS de illfortunio. L, 1'l,111l,,(I,i a los poeus dias se le trajo COIl ello!; a l:t capita1. .J IIzU'Úron le snmal'iamonte (;Il ('OIlsejo do g'ueIT:I ktt'ie'lld<.' ('¡panel de su deren:'01' Braulio:\I;'¡ina, 'ufi(~ial del lwtall<ln del 'Llltlho, i fl1l' eondenado a Jlllll'J·te. Tanl,) de pala],],:I, ('(JII ~l'l'('llidHd ¡ ('Jlten'zl, ante' CH' 1l'ihlllla! (]e 1'llm !")I'JII:l, e(lllj() pOI' escrito en ulla e:u'la dirijida alje'JI"l'al ::\l'Il'illll, ('Úlda;; hiw l'reIScntc eu:illto ill1]JOl'tallll al servi(,in dl' la 1!:\(,iOlI qne ;;(' 1<.' eonserva~e la "ida, U\lI1(~lle fucse telllporalmente, i aunqne fuese elIccl'l'udo en UIl caHtillo i eOIl nlla cadena al pié, para Este libro fue Digitalizado Por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República,Colombia - 160 terminar el arreglo de los trabajos de la Espec1icion botánica de que {~l¡;olo tcnia la e1aye, i para completar la coordinll.cion de sus trabajos jeúgráficos i astronÚlIlicos, haciendo sobre todo esto súplicas i proposiciones específica!!. Al:;unos de los yocales del consej o fueron conmovidos hasta verter lágrimas, por el tono i la sinceridad de sus palabras; pero 8U cOlllision no él'a dictar una sentencia, sino mllnplir una Ónlen superior: díjose tambien que el san:suinario .Múl'illo se inelÍnaba a perdonarle, i q ne su sogundo en el mando, el jeneral de marina Enrile, lo desviÓ de selllej un te idl~ao" Este furo!" hienillo de Elll'ilc es tallto mas cstraño i criminal a los ojos de la historia, cuanto qne este soldado era americano, natural dl~ I:t Habana, pariente del ,irei Ezpelota, que tan gratos recllCrdos dejÓ en el vireinato, i ademas se decía amigo de las ciencias exactas i se jactaba de conoccrlas. Aun c1esplles de estar Cáldus preso en Popayan, Móntes hizo esfuerzos desde (~lIito para librarlo de la saña paeifieadora de ~Iurillo i EnriJeo En efecto, la señora Juana S:inchez, que aun \'ÍYl:, reciLiÚ la sllma de cuatro mil pe,:;osql1l~a<l1lel l'<~l'soll:1,ieespai10l le en\'jÓ para comprar la guardia que cu:,todÍaha a CÚlda:;;, i una in:'tl'uceion del camino que debia llevar <le Popayan a Quito; ella misma puso CIl conocimiento del iJIlstre prC>iOeste proyecto, tlieiéndole <ille 'ylL la guardia cstahn comprada, i p1"oponiéndolc que iialíem de la prision vestido con un hábito de fraile, que :;eria cOllllucidu a Quito pOI' guias mui espertos, cn escclentes bagajes )Ocullldado:" hien i¡;;i,;tiJo i bien ¡.:cgllro; i cuando sus f:l\"OreCeUlll'es !lO d udahan <[ue aco,bria con placer est.as indicacio!lc,;, se denegó a la fuga manifestando que de no salvarse .iunto <;Ollsus amigos, i especialmente con su companero 1) lloa, preferia el cadalso. El ;W de octllLl'c de ISW, dos hanquillos elavados en la plaza dc San Francisco de Bogotá, anunciaban que aquel dia iban a ser inmoladas dos víctimas. A la hora de la cjecucion, el batalloll del Tumbo se apostó ell uno de los lados de la plaza: las \"Íctimas salieron del Colejio del Rosario, i desfilaron en Sil presencia, seguidas de una escolta de soldados. Dos sacerdotes las acompafíaban, orando a DioB por la salvacioll de aquellas dos almas catÓlicas. Llegadas al lugar del suplicio, cada una de las víctimas ocupb Este libro fue Digitalizado Por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República,Colombia - Hil - un banouillo: los soldados de la cseolta hicieron el oficio de los v~]'(lugoB, i hI. detonacion de sus descargas no tard6 en avisar a la poblacion consternada que los crueles c8pañoles tenían aquel día t:unbíun su tiest.a de sangre, como las habian t~mido en los anteriore.:i. Pocos días despucl> apal'ccíú en Ull impreso del gohicrno p:witieador lo Biguiente: ¡¡ En :W de oetubrc - doetor FraIH.;i,,(~o Cáldas, injeniero fué }laJ.eueral <ld cJ·l~n.:ito l'eheldu, i l'eneral d(~ brigada·"." sado por las armas por la cHpalJa. i confisl:a¡]os sus hJenes.' ¡Su cOlI1vafíero de su pl i(:io era r lIoa! Este sacrificio de (]{Lldas por su amígo ClIu;t es I\1U:;Ul)ll~gado aún que el del jiruLdillo Fonfn:~de por Sil :unig-o Unco". Alln(!uc Fonfr¿~Jc cr:l casado, !lO tenía bi.ius; C:ilda6 t;lInhiull er¡¡, easa(lo, amaba tíemamente a Sll esposa, i (k.iaLa dos huÓrfanas sin otro amparo que las bgTi1Wls de ~ll Hwdre: ademas, Fonf'rl·dn cm cnfílulo de D¡¡cos, mj{.lltras (¡\le entre Cáldas i rllo:t 11011alJÍa íntimas rclaeiollcs (J¡. parentEsco. fIeeho es este de tan grande i elocucnte signíticacion, que 'por sí solo díee lIlas en favor del eurácter afedwJso i lJIag-nanimo dc C:íldas q ne cuanto plldiem idears<:. Sus modales ;;na ve:::, su trato afable i fnmco, Sil cUl)ycrs:lcic'll :l1lWI¡;)., d(:hian l'lcr atríhub).s consign icutc;; a seluej ante del i('ad cz:t (k sen tim ientos i a t:mto yí!!:Ol' de (:Ol':lZUll. }[are]'l' al ea(1:tlsv con el andar dcs,:mlltu'¡;zado, lento í \:ontelllplati YO'llle le ]labia dado la nat.malcza. Em de reglllar L'statllr:1, colo]' lI1orcno, cuello cortu, pe]o lacio i nogro, rostro redolldo, frente espaciosa i ojoilllegro;; algo lIH'!aucÓlicos. Su eOlllplexioIl robusta ,;c tlcmaerÓ 11n tamo con bs priya(:iullcS i los tOI'meutofi del calabozo. ); o dejó a Sil esposa i a SllS hijos otra herC1j(:la que su numbre illlstre, 11lll'Oe iIllllorta1. Sus hÚbitos de telllplanza i frugalidad no le pt:dian co¡;tosas comodidades lli cuantiosas rentas: iill mcsa era parca, i su tr3:je llIodesto, aseado i sín afectaeion. "y estia por lo regular, dice el sdlo!" Pomh(\. nna levita (le pañO OHcuro que abrochal!:1 i desahrochal¡a sin ccsal' eall1hiando de solapa, de maucra qne dllmban mlli poeo los lJOt01J(~S; i no dejaba de la mano 1Ill lJastoncito flexible. lli (le la hoca un pedacito de t.abaco 1illo torcido."' . Ulloa era b~en díguo de smJ\cjantc actl dI.' tlbncgaClOn del gran Caldas. Hablando Salazar aecrea de UlJoa i del doctor Miguel rombo, dice: "Pocos jÚvenes logra- . ron en nuestro país mas señalada ed ueacion - debieron al Este libro fue Digitalizado Por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República,Colombia - 1G2 fiahío Re~trcp() lo;; cO!locimientos mutcmÚtieos, j una :ti [0~ofía propiamcnte (lieha- al pl'OfllnOO '1\'JlTes sÚlidas nociones de j urii\IJI'\l(;cn<,i:~ ei y il -- al doctOl' Tonorio, antiguo profes()l' de eánones, e"tensa eruuicion de esta facultaJ,-i a la amistad partiell!a¡· de: los sdíores },fÚt,}s i CÚldas luces de cicncias nat\lJ'ulc;;." llal,íase familiarizado UUoa can la ilustro antigiiedad griega i romana, era illdilludo lllas bellas letras i a las helías art(,,,, tanto qllC se hahia heeho nota.r como huen pilltor i c:,cclente eseritor, tCllia un carácter dulce i cnll1pl:wicllle, eran firmcs sus convicciones lihcrale;;, i su illtl're;:lmtc fisonomía no re:;piJ'aha si!lO afcctv i sClltilllielltOi\ ddi<,adns. Estos tlosjín'cnc;; patriota~, }>0111JJO i Flloa, a;;í eOllll, 1<,:,¡¡¡¡:,tn>s 'rol'Íees i Cal)al, <[ue tamI¡ion perccieron ell el :'lIJ>liein, se lli<·iCl'(¡1l dign(,::; ue 1In recuerdo eSJ)('(;iill 1'1I (>,'tn 11Ístol'ia, porqno amaron las ciellcias naturales i ('Olil'cmrol1 al ('o¡}(willlionto de llucstra herll10sa zona h'l'J'ittJl'ial. Si la Espedicion illlbicl':t al<,aTlzado lllejOl"<~Sdl',~tillos, en S\lS plÍjinas ]¡ahl'ian aparecidl) con honor estos nom hn's yonerandos. XLV Lozano fue; el primer miemhro de la Espcdieion (1\le ('ayf> en mnnos de los rc(;ollq \li;;tac1ore~. ne~(k ,m renullcia dc la ]Il'osidcn('ia <lol Estado de Cuudinmnarea, halJia dejado dc tomar palte ¡ldinl. el\ los negocios públicos; i sobmente dejÓ bUS gratos JaI'O;;, pnra ofl'ccel' sus servicios en ol)seq uio de la cOlleiliacioll, <;\lalldo se ngl'ial'On las fmwstas diferencias bu:;eitadas entro el el'loul'e ~ i1.l'ii1o, como jdc de Cunc1inamarca, i el COI\g'I'eS(' fcr1era I renniuo 011T\lnja. Terminadas esta;; difercneias cn 181+. voh·iÓ a Sll vivir sos(lgado i estudioso, Jlaciclldo J¡ien a ÚHlos, i especialmente a 'los cspai10les i criollos enemigos dc la indcpelldeneia, a <¡llicnos favorecía cOlltra el odio i la persecncion de los patriotas, apesar de qne él era 1lI10 de lo:' hombres lilas ('omprometidos en ar¡lldla eall:'a. Pero babil~lldo sido noml>rndo diputado de in. prO\'iná~ del ChocÚ al Último Cougre::;o jencraL reunido en 1~1,\ llO vHeilÚ Sll lJatriotisIllO en aceptar el pne;;to, i propu:,o planes de economía Ilmi hien eaJenlados, j pre30111<', i "citu\'() <,IJl1 una eloenmwia lllll nervio admirables varios pro rectos polítieos i militares <]lle, ¡;;egnn el sentir de un gran" escrito!' contcIIlPOl:áneo. habrian hCC!H) al país mucho bien si ántes se hubieran adopta<lo, pcro er14 Este libro fue Digitalizado Por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República,Colombia -ll;:~- ya tarde para c1I1jll'cnderlos. :lamlts (;l'('.'() <]lIe b lllaldall tIe 108 rc(;oll<juisla<lores llegara hasta d pllllto (le haccr eamicería jeneral ('oa todo,.; l\\s amigos de la llldependen- a ]u <¡\le se ag-reg<\ (}tI\' eil1; e<)1l\l~1 i;¡ eOIl fre(~lIen(;ia el los d811\;1'\ hOllll)l'l':' t;m 1mcllo;; i tall raciouak,.: eOlllO (,1; i COlllu ll\) l¡a],ia ]H'r]>t'tl'adu <leE(u a1gnn0, ni ('1';1 I'Pi'¡wllsabk de nillg!llla j'¡¡lla ]>\\u1]11(',110 podia ill1ajill1ll':'c qlle Sl',le llltrajara. i lllll>:l:o ln(~llOSque se le cnrllknara a lll\ll'l'te. EIl tal ("I,lnnallz:" i ]l(1 Jllldi(~lld<) tigural'H~ (lUlO le \'llI'rall hO::ilill'::i los 1'l';11i":;:::i :l (1\l1('1\(,'; ]:abia proteji<l ••, 110 IJ¡¡isu huir de !';ugofÚ ;tI a('\'I(':11'::i\~ la" tr('pm; espai101Hi'. (¡Il\' lH'l'Il!U lo al'rbaru]J ; ]11 1,,>i(;1'(1l1 ('Jl el C.)I('jiu ,dd HlJ~;ll'itl . •, El :',,{,i,,, ....i,,i(·) l'li('O::i (lias, '¡i(;l' ('J Y:I (,itadu j"wia :-;al1l;ml'~ a la p~'l'dida de ~alll:\f(" ll:liJít,])(jo ~il:1) l:j\ "I:t~(d(t la illíClla :)Olltell('\a IlL: lllllerte prolluJ\('iada (,Olitl'a d i ('Oiltl'a Jo,; sc- <'ITor \ll' fi\lpOIlC¡' n. ¡iOI'lOS Cl'isant() YHI(·lIZIWIH,~Ii!!ll\.'II' .•!,dl", .)1,:,(: C;)'('1.!:()]'ÍI) ~I")'ell", EllliQ'dj,-, Í::Cllí(l'Z i Fr;lll(,iscu ,¡'a\'Íl.'r Garcia }:\'ia, ('1 di;! li d(o'jlllio, a ]():' dus llW"('~ U'11l1¡]\:t(¡;:. de la (,1l1mda de las tl'(JJla~ cSl'afi,,Jallnju (.] lJ):\lldo <.id (-j-utÍ\',J'i'CZ eorOJl('] Latol']'!' propia todu:=- ('!I ~~;1l1\:::"'. hll·· e1(·ln{~lH·ia~j~:l1',i\~1\d.; 1d."; {.lli~~ {~ilJ:í !'ili:!'yt:l'\>íl L'-:<;¡L'.J yic\iJll:\ ~ilIIlq;;>·. a Lt'~·il~~ ¡l:t,cllu dI' ;:\; l,il.'l1 el :-::~U'l'!!!t';¡¡';1 . ]'I'I'('('i;'1 1111'-' d\: 1"" ]iUll]]"'('" I!I:',," ;':':ll::tl'do;:, lit;],.· i aun ]ll;l::i vl(~gallll'- de 1¡¡¡11\.'! íilll1]>lI, :-;U tai:ln1c airosu, ];¡ iígllra o\'atad:] tIl' :,ll (,:11';1, ;--11 lJaI'!.:lfilla i tllpidn, :;IlS oj(Js ehispeantc;:, la "al de sus ()('llrn'iwi:\~, b variedad (lc 511I·Ilu\'crs;\(·i'lll. la ¡'l'"i'illldi,JalÍ i ltlli"l'r~,:i]idad !.le :;lb ('onlJeí1l1ielll'-'~, la ;:.'r,wi;l <1,' SlIS JlI:t1Il'I':t;;, I"do ('olltl'ilJl[i;i en l-l a haee!'1,) i¡¡tCI'I·":tllk. illll:tdll i 1'~·'II('ra(¡". La Ill'lle\'o' lcncia dumillall:l. tO\kiS 1,,- "elltilllil'll,",i b" iaeas ¡le L';,t(~ ilustre sahiu. I)l~ ella Pl'o(·(,dia SII]'(I(':l aptitud para gol)(;l'nar uIJa ::iOl'il'llad 1'11]'('y"]¡ll:i()ll: ¡<:'aUll (·s('dl'li((~ pil(AI) para los til'1l11'0;; d(~ ]¡()llallz:1, Jll'l'() ('ar"I'Ía (k elJc¡jía para los de tempestllosa ajital'i,,¡l. 'j'"J(':do (~,. "kl'I'Y:!\:ic)ll, talento políti('o, taleilto militar, ("kl:l" "l'nl"l'i", tale:; eran •\,,' Cll]to~ ~n8 [l(~lllt:td('s '~1\~lno~ ""j)l't'salil'li("s, d j('e 01 Sl~j-lt .1' ~(d;I%:i.¡·& "J la.' I;l l,~u'! l:tl'ic (luen-(~ulo los lJlaJlllS(~l'ilu:-: de ('~¡l' L",;;t:))'\" tlj,~er\"(ldol'~ (1\10 ;;.(~ha l¡edlO la ~uelTa a 1¡15 l'iI'Jl(·j:ls, Creyéllllolas 11:tY:l 1d,l' (;¡¡!- pahle" dellllll~V() (ll,(j(~l1 (k cosa;;: I,('ro i'i alglin aIlH\J1t(~(le ellas los ha ;;ltlvado del ¡'llrOl' de esto:; ¡'árlll'-l'O~, los aIlligo;> Este libro fue Digitalizado Por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República,Colombia - 1134:- de Plinio i Bllffoll encontrarún allí muchas obscrvaciones útiles. Yo espero (ple no hayan corrido la misma suerte sus escritos políticos multiplicados en la imprenta por todas partes, varios dis(~ursos públicos i algunos periódicos, (~omo EL A:\'TEO,10 m: LAIWA VISTA, &c. :Muchos ~jemplares habrún cuiJo en manos de la Inquisíciol1; pero otros sin duda han alclllJzado hasta países estranjeros, o permanecerún ocultoil en cllugllr donde se formai'oll." XLVI Rízo, quo por lwcesidad do vindicarile de las falsas imputacioncs (lne le hahian filljado sns enemigos, habia permaneeido en Bogotá desde Sil venida de V cnozuela, no pudo C8(:apar dc la pesquisa pacifieadul'a. Aprehendido i encerrado, como SllS COllljJaiícros CAldas i Lozano, en el Colejio del ]losario, f'¡¡{~ eonducído de allí al patíbulo, el 12 de octubre delmislIlo infallsto año (le 1811/. El valor quc hahía mostrado (m las batallas venczolanas, no le a.hando1\(') en la llOl'a del suplicio. Sus bienes fueron eonfiscados, i S\l esposa e ltijos q uCllaron en la miscria. Era alto, ::;anguíne(" (le (:0101' ll\(ll'(~llO, cabello ncgro í crespo, ojos pC(}UelioS, negros i mni Vi\'0S; no podía vérí:iele sin sentir estilllucioll pOI' oill lWl'¡':()lla, i "in (:0111prender que aqnel c\lerpo l~oIltelJia \lll espíritu 1'1'OIJto a todo movimiento í h:íbil para todo tralmjo. La ciencia ha homado su noml)j'(~ cOlloiag¡'¡illdule Illl jénCl'() de plantas llamado l'Ízoa. Sinfol'l)so :Mútis fué captumdo tambicn, i condenado al presídio de Ollloa. en la AI\l('rica centml, a donde fué cowll1cido por la via fragosa de lhagué al Chocó, cn uníon de los seiiures J OSl~ SaellZ San t amaría i Luis Ed nardo AznollL; cm pero, al llegar al htlllO de Panamá, el vireí :Montalvo, que re¡;idia cn Cartajcna, dió órden para que los llevasen a coite puerto, i estando allí se acojicron a un indnlto que pn]¡licÓ el yil'ei en alJllellos dias, Igual '~,la de (Fl}da\ Loz~uo i ~~izo fl~~la ime~te ~e Camacho, 10rres, r l'utos 1 Jo¡.;c l\funa Gutlerrez, G-al'Cla Royim i ea"i toda esa eOllstelaeíoll de homhres eminentes dc'i1ul'l'olladus :.t illlJH1lso de las reformas escolares introducidas pOI,l\1Útis. Los ([l1e pudieroll sah-arse de la segllr homicida fueron lililí }locos, gracias al destierro YOlllutario en Guaya!la i la ií:ib de .1amaica, i a la cmigracioIl a 1m; Llanos de San ~Ial'till i de Cusallurc. :'M:llrieroll arcabueeados por la Este libro fue Digitalizado Por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República,Colombia - 165 cspalda, o ahorcados, ciento ...-cinte i cineo ciudnua.nos de 10Bmas esclarecidos por su saber i su virtu(l, i sus bi~mes fueron confiscados sin esccpcion. Gran nÚme.ro de estos mártires habian cultivado, como ya se ha visto, las ciencias natnrale~, i empleado no pocos desvelos en selTicio de la Espedici, In botánica. La cielll'ia agradeeida llV dclw olvidar sus servicios. XI.VIl Ahora. bien, en la órden jcneral dl'l t~.it··!'eito,(pIe 1forillo hizo promulga!' el ~+ dt' jUllio de 1::I11i, se Ice lo siguiente: , « De árden del E"welentísinw sefíol' .lt'lIcr:d clliere, se avi:3a a los seflOres oficiales i dClIla!; illdi\"id¡ws del ;y'rcito, que mafíal1:t se empic:m la allIlullctla de los I.,ienes seeuestrados en la easa de la BotÚnit'a, pam el ([ue guste eoncurrir a comprar algunos efectos, (pIe scr:tll prct\.~!'idos cn su precio-(\¡¡:DOYA.» . V endillos así los libro:3, instl'lllllcntos ()pt icus, utcn¡.;,ilios de pintura i otros enseres de la ESI)('<Iil'i'lIl. (1i,;pllsieron Morilla i Enrile trasladar a:\Tnd!'id hs ]¡Cl'lJalio;;. pinturas i dcscripciolll'i:l de la flora i la fa 1111 i:i"gl':lll:ldill:,S: i habiéndose dirij ido a E:.;pana EllI'ik ell ll<)\"j('1l1hrl' dl~ 1 ~16. se lle\'() todo,- (·,.;to,.;oh.ietos, con 1ll:1:'; algullos lllapas ¡escritos de Cáldas. lln IWl'IlloSO grano de platillO (·"tl'nido de las millas de );{)\'itn i lllla. rica cu,;todia ]'c!'tmll'eiellte a las monj as de Santa C!ara de l)HIIl plona .. :\ o se i'ahy si todo cs!e a\"í? d(~)Jl'el'iosida,(lcs 1.1C()~'I'il!la(linasfUI' entregado al rel de ESI'Hna; pcro ;;1 esta :HI~/'lgW\tlo 'Ine 10 íuenlll la,.: coleccione" i manuscritos de la Espcdiciolí. ¿ I qlll' ha heelw el gohierIl\) e,.;pailol (IOll los tmhajos de los :MÚlis. de Vnlcnzuela, d(\ Zea, (le CÚldai', de Lozano, de Hizo, de :Matis i delllas mielllbros de la Espcdicion '( En un ,;:l1on del J ardin l>ot:ínieo de ~ladrid. sobre CUYO dintel se V(, esta inseripcioll: "¡{eal Espcdi<-ion botánica del N nevo Heino," se enCllelltran 110i ul vidadas las trp5 mil lámina,; de plantas andinas. cnyo m('rit"o no tic·nc igual, dibujadas por lUzo, 1{ati;; i l'I)Jl1paflcro,;. la tcr('cra parte en colores i las otras en negro. El Be[ío!' Ezequid Uricocchea, que vi:3itú este salon ansioso de hallar los lIlanuscri· tos de aquellos malogrados sahio", i qne me ha suministrado estos datos, agrega: "Tambicn encontl'flllluS llWlS trc:,; rea, Este libro fue Digitalizado Por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República,Colombia - 166 - ]cs "lI'd\~IlCS dirijidas a MÚtis, unas dos cartas de Linncr, i de '\Vildcnow, dit:~ i seis man~jos do plantas, muchas tclarai1as i vcinte í einco oajoncs cerrado>" i Quíl~n llO creería quo entr(> ollos c6tahan las preeiosidaues qne ll\lsdhamos 1 Nadie sabia lo (pie contenían, í COl! ll1\H:ba dijicllltarl se nos 1'aou]t(, )lara ahrirlos. j Porleneeian al viaje de dOIl J·UJ·.io Juan i don Alltonio de Hlloa cn cll'orÚ, llcdlo alI(lJ'a cicn a1ios! X\,cosit:íbamos un g'ollH' selllejanll~ para acallar con !Ille.sl ra-; eSjll'J'Hll7.aS i 11onÚ' como per(l ¡<lr,s todos los trahajos de CÚ!das i do SlIS compaiimo>,." (Yéase EL }.{oSAllO, n úmc!'<) r., lS(i(), ]'iog'rafín (le )[at is). j .lmpl'rdollahk es e!l 1111gohicl'Ilo ei,'jlizallo ;:f'lIlcj:mte d\:sl~llido ~ Tr(~illh :U-IO;;de sahias i lllultipli(::ulns ill'\cstiga('iones sohrc la l!aturalc~a uc los Andes, \"aliall aL:un:l (:osa! Q.1I0 me H'a pCl'lllitido C\'(wal' la;: ;:onltJl'as d(~ 1"os ilustrl's ]lOllIllres <¡IIO ]as l!e\"al'(Jj) n caho, pam sllpljear, en 1l01nl/l'C dI; Sil p:lo['ia, al ;!u!,i(;1'Jlu o;:panol, Ylleh-a sus u.ius ;:;ulm~ ('se salul1, i sa]"o de h, nad" aquellos restos de arall i de sudor por la>, ('i(,lleias! 1>e este modo pudria tnlllhil'1l reparan-\' ell al,,'u d delito (le lC's:H~i\'ilizaci(ln eOllll~tido, en IlOml)r(~ ,1e :l<;~ldg'u],iel'lli>, ]l'Jl' "Jf,)rillo i EllI'ile, al saeritieal' f'\ C:'\l~ <I¡¡;:;, Lozanu i Hizo. X LVITT Se jlu()(le eOlll]lutm' el (:0,;10 total de h ES}ll'c]jcion 1'0t:'tnica eu ~, :2()(),(IIHi. Este (~tllnl'llto, IlIl1i I('.i0;; dIO ser oxa.i(~l'ad ••, es pUl' el cuntl':trio l':lstante ddil'Íelllc. Para l'l'olmr1o ¡Insta. l'('(:'JI'(lnl' 'jUU ell 17:ll, qlll: IlO llabia Ill:lS 'lIlC In:;; 1~IllI'Jcadus sup,,¡'iures i (~Hturee pintores, se ill\'cltiall l'n slleldu,; sulalllcll1e 8 '-¡,(¡(lO allllales; d(,spllcs de este auo hllho lila;: nÚIlll;!'O de pintorés i fuel'oll Illl'.iOl' r('lIl11néradus en ]ll'op(J]'(::ion a sus adelall tos j peru, c]esl'¡'\'(~i:lI1do estus alllIJo.~n¡u;:, i e:tl(:lll:Uldo solamente en;:; ii,U!)!} (d ~asto anual de sil\:ldos de estos (,1111>le<1(lo,;(11l trl·illt<t afíus 'lar¡!os qn(~ JurtJ la ES1,(~C]i,·iull, resulta 1111 pl'uc]uetu de 81:,U,(I()I) . .\n:lrte de e,sl",,, eII11Jle:1l1os, dehe tOlllfll'SO ('n cuenta (,1 su~:¡d" (JIlO ,~allarUll C:íldns i Lozano, qw' 110 l'ndo ha.iar el1 1,,,1,, el til'!I1JIO de Sil'; lll'stillos de :;:.J (;,(11)1.1. :-\i a estas "llm:l" St' :l!!'l'l'~all: 1." la ill \'ertida el! la (·oll.olTlleeion dd O]¡SÚI'V,lt'JI'¡;);' :!." lo gastado ell la psellela (le dilllljo qlle dil'ijia ltizo: ::." la (:olllpra de íllstnllllelllus :lstl'oll(Jlllieus, ll1e;J('.oteres (le pil!tnm, aparatos físicos i químicos, ,-\:c; 4." I Este libro fue Digitalizado Por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República,Colombia - 167 los gastos suusitlial'ios de la Espcdic.:ion: por ejemplo, en escursioncs lejanas, en trasporte de eoleed')lIes, en aclimatacion de plantas estranjera8, l\:c.:. &c.:, s(' verÚ <pie ciertamente es defeetnoso, por defieienk, :1I1ncl (:':J1l1)lllto.Los gastos se hacian de las rentas dd vil'einato, ('1>1\mt-\odo i poil muchn economía; los elllpleado,,; ap(~lIas gallalJHIl para 8n mallllteTleio!l, i !lO lo:, retellia (~Il (" tr:¡]wjo (.) i'ltel'(~S del 1\1(')'0, sino el ;'Illto d(~ la c.:icnc.:;a. El ~rm; \\ 1'1\:" ,,(~~()"tenh (~a:;i de, Sil pito de. altill', (~ ill\'l:rtia im'- "¡ieldo (·n ;-:':':Lti~(~ar o pl'<!nll<ir n, lus pllltO~l'" <]Ile 1ll1l"traiJall !ll:h :,p!W:l<:lllIl (1 1II:t'" talento, l'!l pagar la Imenil "(Jl'l·c.;"['>IJI:.]'·lIcia de ,";11" ajentcs científicos en lo,,: ]n!~ ]'(~" l'~1 i"~1Il0:; tI,·1 I':t''', i l'lt ('StilllllliU' a los YI\'l'Il(:S para qlle ;;t; d"di(:ar:l1\ al !""¡lldio o a la illlitacion de la natlll'nleza. ?\[w'}¡a pal'l(: .11' J:¡., 111l'1I])ra('iolles lumitlO."lh de (':lI:la;; Ill! ha!.H.'i:m tenid,). (·¡·(·.<:to, ¡;i para, "ni'> erogaelolks pl'el'I":\s 110 h t~ I ;Jel'a ('OJl t:\ltl? 1~()Jl las. d~ldIV~I~ (le sus IIlHS re"petable" iltlllg'('S, entl'L' 'lUIL':1I'Sse dl~tJllgUlO .J osé I~ll:\eio Pomho, La R\1l\Ht de peso'" ¡\I\' pr·I'(·íLia I.ozallo apÚnas le bastaha p:wa l'ell1ll 11era¡' a lo~ !'("In!';; qu!' le eLllectallan anilllalcs, El llll'jor r('tl'il'lli,!() Cilé I~iw, p,)rqne tamhicli L'l':\ el (l\\(~ mas tr;dm.i:dm; I'.'\'O ,\1 ],í'iTihnrion no cm tallta 'lill' I'lldi(-",() a]í':\llz;ll'k a la \'1';: )::1':1--i\'ir i l':lra ahorra¡': Yt:l'dad (~,;<lUl' fUt> l)(J~l',~di)!'d,· UII JI1i'dí;¡110haber, pero ll" l\l ;\llquíl'i,') en la E"petlit'iull, .,jl(tl '''111 j:H cspecnlacíolw" lllel't'antiles (1110 ]¡:l(~ia pnr rUl'!';!, :1 1'at,,,, perdido,;. 1)e lo:,; (lema;; pilltIJ!'L)" tarnll()('o sitlil) IlÍllg'1lllo' d"l'llbrc evn el :mo]l\" fin!' allí ,'-l' le,; l'a~:¡l):\. ,-\1 !'Il_·dítal' ('Jl t:luto dc~illkr('''.tailt~ :l1l!(l'~:':(ei(Jn, ta.nt() anhelo (k Ilo\'cdade" eil'lltíij,·:t.:, t;\11:;\ ;¡¡,Ii,·:\("¡nl\:\ la eomtemplaejoll de l:11l<,Ltnrakz:l, t:\lJta ll('j'~l"'l'I':ll!l'ia i tanto espíritu de }Jrop'eso de parte du ]1\ ¡':"lwd;c.:1ll1\' :'t: cllenentra clara la razoll de SlI p/'ol/ijioso (,\;!O i del Ill(Jr que le trihutaron los bumbres de j<"nio de !-:, él"WII. l:no se pre~utlta il\\-olulltariamcllte el\~íl sería \'1 L',;tadlJ de la botánica i de los demas ramos de la ]¡ istoria Jl:lt1lJ'H 1 en In N lleva Granada, si los tl'ahajos mala\'(mtllJ'f!d"s {le los ".IÚtis, Valellzllela, Zca, CÚldas i Lozano bnlJi('r:\1l t<"lí(ln lllejor 8uerte; <}11(' ;H]d:lIltos no hahl'ian Ill~('ho (,SI a" (,i"!I(:ias, el plan pÚstnrrw de :\[Útis 111l]¡icra ,;ido rcalizado; a qll(~ gradó de pcrfeccitlll habl'iHIl llegado los estndio,.: i hs luecs sohre la física (h·1 g-loho, si no hn!)iuran i'ido cvrtadas en flor la~ cabezas privilejiadas de ll\test¡'úS independientcs; i nnal- si Este libro fue Digitalizado Por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República,Colombia - 168 mente, cuán fácil seria hoi en nuestra patria adquirir conocimientos v:tatos i completos sobre la historia natural universal, i sobre la corteza física de la l'ejion quc habitamos, si la fatalidad no se hubiera cebado cn aquellos homures. CIl a<pwllos trabajos i en aquellos magníficos pro.yec;tos. FrofetlL de esta fatalidad, el inmortal Humboldt decia a principios del siglo: "Debemos temer que jamas sea publicada la gran Flora de la Nueva Granada," Miéntrns vivió el gran "MÚt.ispudo haberse publicado parte de Jas descripciolles; pero él era domasiado adicto 8. los establecimientos <pIe habia fundado, i amaba demasiado un país q uc huuia llegado a ser su scgundn patria, para qucrer volvcr a Espafia, i fie lisonjeaua con la idea de podcr establecer una imprenta en la casa de h Espedicion, i enseña¡' fi gmlJar a los miSlllOSjóvcnes q!le hauia enseñado a pintar con tanto suceso. Si España no hnuiera hecho la guerra de reconquista, hoi podria admirar el Inundo sabio aquella ohra colosal, pues el ilustrado gobierno de la Union granadina de 1815 no se hauria parado en gastos para hacer llevar a caho su Pllulieaeioll. Sucediendo lo que sucedió con los manuscritos i la;:; colecciones, alln habrian podido aproyccharse, si Cáldas hu1iera sobrevivido a las catástrofes de la gucrra, pues es seguro que llUhria seguido los pasos de Enrile, i se habria presentado en )Iauriu, i habria logrado reeahar, para la eiellcia, la poses ion de aquellas preciosidades. :Mucho ántes de presentarse la guerra en nnestras costas, ,ya Oáldas pensaua hacer un viaje a Europa con el fin de hacer all:i algunas observaciones astronómicas, ponerse hien al eOlTiciÚe del movimiento científico i entrar en rulaeioll eon las g'l'aTldes il ustraeÍones de aquel continente, i tenia resuelto yerificarJo en 1B20. i Todos tres, C:lldas, Lozano i Hizo, dejaron de existir a los cnarenta i cinco años de edad! Aun no habian alcanzado sus facultades la plen itud de su desarrollo, aun no habian hecho mas <Iue ~je]'(:itarlas, como ejercita clniño sus miemhros para J'obustecerlos, cuando el hado que persigue las empresas grandiosas i los earaeteres eminentes de la familia hispÚnica, vino a echar por tierra, como inrnatUJ'a mies derrihada por fiero aquiJon, todo aquel conjunto de personas i de cosas, que tan bella cosecha de utilidad i de ~loria prometian a 1luestra patria. Pero, Apesar de tantas desgracias, como tuvieron grande voluntad de servir a la Este libro fue Digitalizado Por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República,Colombia - 1 ú9 ciencia i le sir\'iel'on con [t(·ierto i constancia, sus nomhrc& han quedado gralJudo8 en la hi¡;tol'ia del progreso humano i vi vcn cn la memoria de lu,; hOn!l)l"l's sahios. 1~()mOun homenaje al talento laborioso i fuerte, pero infortunado, Uti rayo de csa gloria so proyecta solJl'l' TIlw:;tl'O país, j i es el único quo ro;;plamlece con lwstante hrillo Cl! lIuestros anales eíeuilico;; ~ XLIX Los ilustrcs Ilatiu'alistas que fueron yidimflS de la rahia del poder esp:lfwl SOIladmirables ullte la jlu,;tcridad que los recuerda. no ;;0[0 {~OlnOSllbio,.;.i'ino ('lllllO b'-llnln'es do virtud <:Ívica. ¡CUÚll ('ierto es qlH~ ];L eielleia es la l)as(~ TIlas firme de la sana moral! l-te;;pcta rl'll las custulIlllJ":s razonaLlcs de BUtiempo, uarH[o ejemplo dt: severidad ell Sil obscrnmcia; levantaron Sil voz cOlltra los hÚl¡ito,; empírieos lllle llna usanza illvcterada lwbiu sunciolladu, dando ¡crcion del valor con (tue dehl;ll ::;(¡8tenerse 8iempre las cOllviccionce. dL~tadas por la razoll ; i fueron dechado de la;.: mas grandes de las virtudcs sueiulcs, el :llllor a b llllllHlIli\bd i el patriotismo. Animado,; de estos st~lltirniclltos, dl'splep:aron un tcson suprcmo en glorifi(·:\r a f'ul':lÍs c:on 811takllto: i una YCZ (ll1(' conocieron sus lkrcl·ltus Il:\tlll'ales i l'0líril'os, procuraron haeerlos ¡;fcetiros, hasta l't'l'ller la vida hen')icamcnte cnla dcmanda. Al qncrer f'llnda]' una patria libre i digna, C11 C11YOseno pndie"en tener \'ahida lu;; lLOlIll,J'csdesllcl;edados i las familias l'\'l'l';egllidas de toda8 las razas i dc todos los pueblo;; ; qu{~ S(¡!cIlIIlC f'l'olL';;ta lanzaron eontm el miscrable egoísmo de ea;;t<l que 1,)s habia tenido "ujctos a un aislamiento de csda\"()s ~ ¡c11:'tn elocucnte PI'Of'c,;iOIlde 1ilantropía universal publicaroll ante la faz del nmnc1o, entónces todavía mui SllhY11g[\(lopor las prcLJeuplll;ioncs esclusivi,,· tas i las malas sll.iestiones de la avari{;ia! . Es raro que las sociedades tengan la fclicidad de ser servidas, ell tiempo;; de innon\.ciones e;;,trcpitosas, por hombres de tan sobrcsalientc m{·ri to intelm~tllal, i 80bre todo tan honrados, como los qne lncieron (,ll lo:; azar080S dias de nuestra emalwipacion polítics.. Y o de~e\lhro mi cabeza, oh pa.dres de la patria, para rendir mi homcnaje de reverencia a la inte~ridad de vuestra eonciencia: i a la delicadeza dc vuestro honor. Sí; vuestros hijos i vuestroB nietos sahen que, bajo palabra de honor dada. a los jefcs de las guardías Este libro fue Digitalizado Por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República,Colombia - líO ~lno el1:3to(1iahan nlcstl'aS pOi:>tl'imeras :,Igollías, podíais salir de la 1,risiull, i '¡ne a ella vohíaí,; e,;crupl~losamente despue,.; de aearjei:~l' a vucstras t~sposas i a v.ues~ros hijos; saben que hasta la Y1Spem del e,ldalso CllIllp]¡stels nl<'stras promesa,; reli.iiosamelltc, í saben que nllllca vacilástei¡.; entre la vil intidelleia i la panll'usa llluel't<~ l Las .ieneraeiones libres <]ue de \"Il<'stl'a pl'l'('i,,:-,a sangre !tan !l!'uta(lu, estlln satísfeella." de :-'1Iilllll;wlIlada 1'l'u.iclliL'. Esas lIl:lIwhas <]11e afeau algunas ycees a lus gl'undes l\Ulllhl'es de la ltlllllallidad, lW empall:lI1, no, vuestra ItlL'll101'ia: de en Ilwdio de los eSCOIlJ¡,ros q\W :¡m"nt()!ll', la fltl'la ret'('lH\nistad"ra, Y1l1'stras SOIIll,ras ;-;c lCV:l1lt:lll cnhicstas, i la Jlistol'ia las contempla ro" dellllas de lltz i de pllreza l 1\ () tipllcn, cicrt:\ 1I1t'ntt', J",; anah,s de 1I11estra ulagna rr?\'olnei!)ll t'",,,.; epÍs'I(liu;; dd \'i(,iu, (~apa d(~ ei(~110 (llle a yeee,;; t~nYllehe la illl:í,jen de los hOllll)l'cS d('."(·ol1ante~, COlllu cnYl1eh-e en la Jlatul':~le!.a las IIUU¡ hl'illantl:s pit'dl'<ls - esos C'pisodios o lle a "crgiiclIzan !:l. p]ll1n:l e infectan la n:llTaeion. ~ o ticne '~Cllalida~IL''' eOlllo la,; de Miml'eau i Danton, no tiene IO(~lII':ls sallguinal'Ífls (,(HilO las de Marat i Canic!', ni lit'llC c~as ('OlT\11¡ci()Il(~'; d(~ la inteli.ien(:ia, esa lepm del alma, t',(l!1 (llle ('~('alldalizaI'Oll a »ic>s i allll\llldo los sacerdote.:; de 1n nada en el Último :-::iglo. Tal H'Z ll:llmí. quien pueda l'l'pl'c)t~h:ll' a los padres de la l'at¡'ía d Lahor ;,:id•., llIas cstl'iet:Wlt.'llte jI16t'-'s (pie .\l'Ístides i lllas se\'cl'<.lS que ('atl'll: pcro .i:l1l1flS podrá el11'o::itrársclcs ni la c"dieia de ('l'll';P, ni la :lIllllicioJl de Catililln, Ili la cl'llf'ldall dc aqnel ,Alt';Íawlro ¡-ir:tno de h"re", Jli¡I,s'lInfl. de esas pasionc:i il('¡'amI a s, llingullo ..le esus i'C'ntilllicnlos destrl1<5tores (pIe sue, len elltl'vlliz:\l'SI? i COlltllllclil' la so¡;iedad. L i De!lditus scais, o]¡ llatlll'ali,~tHi(, lwírtirf'¡; del saLer, dd pfltri'ltislllO i de la iilantl'Opía ~ Talento i scntimiento, cielleia i \·irtl1d, la;; du,; ,;ublill1c¡,; hellezas i las dos sublimes fllerz:ls del c,;piritn, todu lo reunisteis feliwwnte. Algulla~ de esa" huella:; espll'l1dcntes que dejíu;tei:-;, han sido di¡">"11amente ;;eg'llida;;; tan ;lulo mlH, ln mas cara para HJSotros, la llUella de Yllcstm (~ieneia pn~dileeta, pCl'lllaneCe aún casi solitaria. ¡ Perded enidac1o, sillcmbargo, fIue \'uestro reino ~e acer<5a l Este libro fue Digitalizado Por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República,Colombia -171~ LA BOTÁNICA DESDE 1810 HASTA 1859. I Esparcidos por el terror i ocultos en lugarcs donde DO pudicse pcnctrar la sana de Morillo i Sámano, permane'" . cieron 108 restos dc la EspedicioIl bofánica durante los últimos años de la lucha sangricnta por la independcncia. Estos restos Be reducian a Valenzneltl, enra de Bucaramanga, qne por escrúpulos de su deber sacerdotal fué el que méuos tratÓ de escapar de la persccncioll, Matis i sus compañeros pintores, lea i los señores :Mútis, sobre todo Sinforoso, ardiente patriota dejado con vida tal vez por consideraeiOIla su sangre. El sudo ncogranadino era ya un ~ran desierto: la guerra, loa patíbulos i el destierro no hablan dejado en su ancha superficie casi ningun hombre notable por el talento i las armas. De los pocos habitantes que tcnia en 1810 la Nueva. Granada, habían perecido mas de 2,500 hasta 1818; i estos eran la :flordel espíritu, del valor i del patriotismo. II Dejamos a Zea. en Madrid en 1805, en cuya. cindad permaneció, despues de haberse casado, hasta 1807, desem~ peliando con admirable habilidad SllS ~mrleos cíéiltffiOOIl, redactando el MERCURIO DE EBP4~A 1 e SF..MANAmO DE .AGRICULTURA, importantes publicaciones tenidas entónees i hoi mismo como de las mas notable¡¡ de la lengua eapanola, i escribiendo tambien algunas }'femorias sobre las quinaa de la Nueva Granada. iuna bellísimadescripcion de la ca;;cada de Tequendama. "En la época de la revolucion de Aranjuez, dice su biógrafo Plaza, fué nombrado por el nuevo gobierno miem" bro de la Junta reunida en Bayona, en 1808; luego se le. confirió la direccion de t'rDa parte del Ministerio de lo. I~ terior, i mas adelante la Prefectura de Málaga, cuyo des~ tino conservó hasta la retirada del ejército frances, ácía fines de 1812. Afiliado en el bando de los afrancesados se, tuvo que trasladar a Inglaterra, en donde permaneció h~ ta 1814, de donde IlSli6para reUnirse con el Jeneral':BoHvar, ácia. el cual lo llamaban sus simpatías amerioanRs." 13 .••• 1lI. P' 1811. Este libro fue Digitalizado Por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República,Colombia - 172 Al pisar los franceses la frontera de España, proporcionaban a la América una coyuntura m:ui favorable, que ella supo aprovechar, para romper las cadenas coloniales. Oualquiera que fuera el l-xito de su invasion en el suelo ibérico, los resultados dI' esta invasion para los americanos siempre serian bnenos; porque, triunfantes, habría independencia. americana incmellta, por lo ménos dependellcia digna j justa; i dcsal{~jados,siempre la Amérieareportaria la ,·enta.ia de poder disponer de tiempo para armarse i prepararse a sostener su voluntad. Jj..demas, los franceses llevaban en las puntas de sus bayonetas el programa.dplos pueblofl, cuando en España reinahan sin op05icion a.lguna el absolutismo i la Inquisicion. ¿ CÓmo, pues, no había de ser Zea de los afrancesados? Por otra parte, buenas disposiciones veria él en el nuevo gobierno para protejer los intereses americanos, cuand'o so hizo uno de sus lJlas decididos partidarios i de sus mas intelijentes servidores. Despues de haber hecho una corta 1Uansion en Jalllaica i vist.o que no podia pasar a NuevaG~~nada por estar subyugado este país por ::\forillo, Zea llegó A.:V enczucla, donde a la Sll.zon hacia prodijios de táetica i de valor militar el gran Bolívar, i fllé nombrado CIlel acto Intendente jeneral del admirable e.iército independiente. ta reyolucioIl necesitaba. de Hila cabeza tan biel~ lkgani~da e ilustrada comO la dé Zea: ell.\j(1rcito adquiriÓ 1m tono que no habia tenido,Bolí ,al' empezÚ a dirijir la 'PlJJí,tic.a. i la guerra con mas cordura i Ul¡tStino, i la causa deja imlependenciacomenzó a tomar mayor consistencia. Era que hasta entónces solo había luchado con 108 cspaíloJes en Venezuela. el , .ienio guerrero, al cual acahaba. gea~iar~ el jenio político; i desde ese mOq1cntograndes i pron~, resultados debian sellar la gloria de la revoluciono . 1) III J~as ciudades i prO\·íncías que ]$)lJ;mlUl independientes habian rqdimido de la esclavitud cSrp#ñóla,no tenían aún fuero' civil ni majistrados formalcs; .Bolívar i sus lugartenientes ejercian a un tiempo en esas comarcas un mando ilimitado i arbitrario, i esto podia ceder a. la larga en perjuicio de la misma independencia. Zea conferenció con el libertador sobre tales inconvcnient~ i peligros, i de estas conferencias sUl:iió la creacion,. cle l,m);Ooniejo de Estado, I Este libro fue Digitalizado Por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República,Colombia ~Ol\ - 173 residencia en la ciudad de .Angostura, dJvidido en tres .departamentos administrativos, hahiendo sido nombrado Zaa pn~:;idt'nte del de Hlldenda i i'í egocios de Estado. Mas tarde, cuando las falanjes esplliiola~ habian d(Úadolihl'c g\"lln pllrtn del territorio venezulano. Zea llyudÚ a fo\lIOntar]¡i reunion de un Congreso llue diera a V cnozuela llIla forma pulitica definida, i eilllcntara la cnmneipa.eion i d crédito de a([ud pueblo; i este Con)!rc~o lllPHlOl'3.ble Sl.~ instaló en Ang();.;tul'a, en t'ehrcr'o de .lSlfl, nomhrÓ a Zca para !in 1'I"csidcll!(', aprobó todas las l':·,,\·idl~l\('in¡.; militares i políticas dictadas por J~olí"ar, organiz/I el [Joder llúl/lico i clijió para prcsidente del Poder E.iceuliH/ a Bolínu' j para \'iecprcsidellte a Z~a. En poco 1ll('Il(lS <le 11n ano que Juraron las sesiones de este Congreso, las eHlllpaílas fueroll mas pnmtil.s, mas gloriosas i fecundas, i la camm. de la independencia se tornó mas grata a 108 puehlos, mas imponcnte a los enclIligoR, i ma'" simpátiea i respetahle a las nadones. Lejislan(lo en las cálidas riberas del bajo Orinoco, h~io 1ft SOlllbra de selvas secula.r:s,. en medio. de sangre i {¡samentas, amenazado por nn e.lerclto de reahstas cruelBs e implacables, i ¡,odeado por otro ejército eJe patr'iotas, altivo, aguerrido, ~W\,:,t\llllbrado ya a las via:; de hcellO, cse COllOTeso, sinemlJargo, tuvo tnnto decoro, tanto acierto, tanta ~utoridad, que ilO dej1'>ni una débil señal de infamia, ni un desatino, ni una lmella de debilidad. Compuest0 de hombres prominentes, los raudales de elocllcncia que manaron <le allí, se estendieron' por todo cl ámbito americano, pasa.rún -los mares i fueron a enc.antar las vi~ias civilizaciones.· La palabra de Zea sobresalIa en medio de aqnel cuerpo de, oradores, como sobresale. el Chimborazo en medio de las a.lturAS andinas.. Despuesue resonar en las olas del gran rio i en el follaje de los altos montes, aqnellos ooos Be trasmitian a los ángulos del mundo por las prensas del Co- RREODEL ORlNOC.o, periódico qne dirijia el mismo Zea, i que scrm de órgano oficial al Congreso i a In. administracion. IV iPrincipió el Congreso por organizar la. República de V.enezucla i. acabó por crear ~ Colombia. I:Saneionóse la le1 i:iobre UllIOll de Venezucla 1 Nueva Granada e117 de diciembre de 1819, por unanimidad de votos,Critre los cua¡.es debemos notar, fuera del de Zea, el del sentimental Este libro fue Digitalizado Por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República,Colombia -174 pIleta í ,:;aMo escrÍtor Salazar, hijo de Antí0'JuÍa, .]nc tantas ocasioncs 11e nomhrado en este escrito, i <pie escapado .le las gaITas de JforilIo se habia .refujiado CIlGuayana, í Illego había sido elejido miem bro del Contrre;;.o, llabiendo escrito durante las sesiones i publicado en EL COlnmoD.EL ORINOCO vurias poesías l)utrióticas llenas de fuego i de 811h1imc inspiraciun, i im :Mcmoria biográfica tle la Kueva Granada, de la cual hemos bebido mucha iw;trllccion sobre varios de los hombres q HC figuran en esta. Despues de haber firmado 10& diputados la lei, Zea que presidia el Oongreso, se puso ell pié i dijo en alta voz: " La República de Colombia (jueoa constituida. ¡Viva la Repú.blica de Colombia! " Aquel mismo día se hicieron las elecciones de altos majistrad08; BolíVéll·fué nombrado presidente, i Zea vicepresidente. Con su elocucncia templada i arrebatadora, Zea CSpllSO al Congreso, que aunque euatro veec¡; hahia renunciado la vicepresidencia de la Hepúblíca de Venozuela, p'Ol'que las circunstancias requerian mas bien un poder mIlitar que un poder civil, sinembargo, creyendo que ahora podia ser útil a la patria, aceptaba la segun.da dignidad de Colombia, "cuyos pueblos, deda, especialmente la Nueva Granada, mi país nativo, han mirado siempre con l)enevolencia mis esfuerzos por BU libertad. Yo manifesté desde nifío este deseo, desde niño padecí por él, por él he vuelto a América, por él vivo i por él moriré! Acepto con agradeciendo la vicepresidencia, que desempeñaré miéntras crea que puedo ser útil, í que' re~ nuneiaré cllando piense que no lo lIOi. La acepto con el objeto de cooperar a la ejecucíon de 108 grandes planes que. el Congreso tiene meditados en favor no solo de Colombia sino de toda América, í de contribuir a consolidar la :reunion dichosa qne acaba de establecerse. Este no es ma& que el primer }lllSO de una carrera inmen8a." Grande fue el empel10 de Zea por la fundacion de Co. lombia, tal vez mas grande tIue el de Bolívar: cabeza el uno, í brazo el otro, de la gran República, Colombia debia anunciarse al IDundo con esplendoro8a maje.tad. Cerró sus sesioJles el Conpreso en enero de 1820, i al ponerRe en rC('-eíJO, Zca termino el ejercicio de la presidencia de esta corporaeion, escribiendo un razonado, enéJjico i mlli bello IDl\niflesto a los pueblos colombiaJ¡oi, en que les habla de las ventajalil i de- la necesidad de con8~&r la nueva nacionalidad. Este libro fue Digitalizado Por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República,Colombia - 175 - Pero Colombia debia hacerse reconocer en la familia de las naciones, i debia fortalecerse con todo jénero de rcenr~(JSrara sostener su reeiellte independencia i libertad, Nu liRIlla en todo Colombia un hombre mas propio i hábil que el vicepresid(>nte para desempeflar estas dos grandes misiones, En consecuencia Bo\í "al' le cf'-pide las credenciales, el vicepresidente se pone en camino, llehra a Iimdres, a ~fn.drid, a Paris, donde nada le ('uje de novedad, ni oiellcia.s, ni horuhrcs, ni lenguas, ni eostumlll'cs, hace COllO(.:(~ra Clllol\l lli:L por mcdio de lihrtj" i artielllos de periÚ<lico escritos con RU plnlUa cle oro, 1:;0 dirijo oficiahnente a las cortes i a los ministros, (~;;rC('OIlO<:idoi ('oIlsi(Jprado por las prineipales potencias COlllo a,kme diplomático de nn plleh](J (iue l!ti conquistado su imlepcndclJeia a fllcrza de herois!llo i de Yirtnd, lleva en t,'illnf'J ]>Ol'todas pal·t(~;; el nombre de Colombia, al'ranea a lo;; pocta;; cánticos, i salutaciones a los filÚsofoB, en loor de Colombia, hasta qne, minada su salud por los trabajos i las contrarias grl\.ltde.'i cllladot!es de su vida, el primer "i(~epre:;iden te de Cololll ¡da muere en la aldea de Bath, cerca de I~únJre", elju(;\"(:s:!í.; de novicrnbre de 1822. v Con Zea murió la última esperanza (pIe pudiera haberse t<~lIido sobre readqui¡'ir la" (;oleeciones i lllanll~CI'ito8 de la Espedicion, o sobre hacer <¡ lIe la ciencia apro\-eehara esos matl:ri:dcs tan preciosos, En dedo, como ,ya se ha. visto, él h:thia sido el ;:e~nndo cOJr\paflcl'o del gran 7\hítis, i pm' la Írldole de sns fllnciollcs como tal, Hna hncn<t parte de los 1l1:1I¡11~(~rit(l8 debían proceder de su pluma; dl~ mancra 1) lIe, illtert'sado por SlI propia gloria i la de sn patria, tal n~z hahria. podido n~eabar, (~()T\ Sil infllljo (le ministro diplt)rnát:i(~o, la ent¡'ega o el apron!chamiento de los trabajo,; i Illatel'i:dl!.s de la Espedit'ion i de C¡í/das, Aparte (le CRto, el nwjor catedrático de cosllIolojía, i sobre todo de bot:tllica, ll:ira Colomhia, h uhier'a I:;ido e~te ~:1.hioulli verBal, :\I1J¡ cn enmpal"aeio!l con el ~1'!l.1Iillútis, (~OllC:Uda,; i non Valenzuela, poJ'(llle nadie teIli(\ mas luces qlle l>l, Ili llW8 persnasi va i sed udora elocuencia, ¡ T l) Ut· fecundo en retlultados tl'l\seenclentales hubie¡'a sido el <¡ue el gnm Zea, cuyas lecciones no dejahan qn6 ellvidiar (mando Sil voz resOllaha en la lJ ni verdad i el Real J ardin botánico de Ma- Este libro fue Digitalizado Por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República,Colombia - 1'76 drid, hubiese enaltecido eon cUas el nombre de Colombín. i restablecido en BU país, de rica naturaleza, cse gusto i e~l' entusiasmo por ella, apagados cruelmente ),lor la clIchiIla l)a<:Íficadora ! Durante su ajitada pcrmanencia en Venc;.;mJa. ya en los campamclltos entendicndo en la ecollomía del cjácito i suministl'3.nuo Sil CO\lS~jopara los planes lllilitares, )'a en Angostura. dirijiendo los tmlmjos It;iis1ati\'os, edllllldo los t'ull<1¡tmclltos de ulla fllerte l1a<~ionalidad i estahleciendo su fisonomía política, no era posible que Zea dedicase largo;; ratl/S a las cscursiones botÚnicas, apesar de 11al1ar"e rodeado de una n~ietacion qne com'ida a esplorurla . .A lo ltUU; mitigaría las fatip:~ de la política i los contratiempos de la gllcrm con alg-lIl1as familiarcs cOli\"(~rbaci(,ncs sohn~ 10& fCllórncllos de la fisiolojía ye,ieta], soln'e la armónica distribucion ue la:>IJlulltas cn la superficie del globo () sobre la proteccioll (PH) las socicdades europea,; prestan a los j.ardincs, gabilldes i eulcceiolles naturalcs, como illdi~pellsaules para el pl'Ogreiio UC estas ciencias. Entúll{:cs IOnrostro un poco incglllar, Sil hora de fonna oratoria, sn nariz cn]'\'a i larga, Sll f¡'cnte am:ha i SllS ojos PC(jltCi1os, vivos, briil:\1\t~~s i"\'elad<Js por 110ndas órh~tHs, espl'csHl'iall 1a dulce serellidad ¡¡ne cOlllnllican sielllprt~ a las fUl'ciclICS las re-creaciolle;; físicas. A \'cces se turbaria ('sta serenidad, reco!'(hw(lo. u{'(¡mpalIado de su p;,l,i~1I10 SabzaJ', lo;; lloml,re;; d~ MÍLtis, C:iluas. Lozano, CUlll;\l·l10, I'omho, Cahal, To1'Íees, UJlon, ter dos e';oS allligos i (;oDlpafieFlJS suyos asesinad,,:, eu ]08 ca,lalsos espaflOles, i dC;;~ll\(lgand(J ínnbos sn "orazoll en rios de tlorcs i de lúgrimas. La contemplacioll de los lugarcs de sus estudios:i. (le ::,usmas gratas L"span5iones .i"vcnilm;, ahora regados con S:lIlg're <¡ lIcrida. ue;:;ollldos i oprjlll ¡dliS l11tjO la dura l)]anta de I();; l'etoIlfjlli"tadol'es, les arrancaria ti~l'Ilof. lamento;; i vchemente& illl]ll'Ccacione&. Lít pl-l'dida de tantos tralmjo8 científico;; (;Omo los que cayeron bajo la manfi) devastad'ora de Enrile, b orfanda<.l i la mi;;(;ria de tanta,; familias ilustl'~s mutiladas i confis(·adas; lue,!.!;o la libertad qne acababa de eon(jllistal' el suelo g¡'anadino, debida a los triullfos admirahles de GáJllcsa, Bomm i ]3onw{¡; despnes h, idea de elH'UlllilIUl';;e, Zea para Enropa' i 8alazflr l>ara el Nortc-AmÚriea, ámbos (~Olligual objeto,.teniendo ambos que rumncim' all'etol'llo de la patria, a la vista dt: Este libro fue Digitalizado Por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República,Colombia ---'177108 pal,jenOOS i de los amigos, de, sus paaeos infan~iles, de planteles escolares, de su cielo, de su ho~r lCl~ BUS montelJ nativos, todoe¡;to, ora alternado, or~ 81mu~tane~, SUB les traería ~mcesivamellte, o a la YCZ,dolor 1 alegna, ammacioll i desfallecimiento, (,.jegas resoluciones i vacilaciones angll¡;tiosas .. j 1 COlll0 los huesos de Zea, en Albion, reposan tambien en cstralljcra tierra, en el cementerio del radre Lachaise, 108 del milinente Salazar! VI Mnerto Zea, quedaron Mútis, Yalcnzuela i Matis. MÚtiti fll(~ elejido diJ,utado al COllgreso renuido en Cúcuta en 1821, que ratificÓ la ercflcÍoll de Colombia heclm pUl' el de A Jl~()stnra; a;.i~tiÓ a las ;'C~iOI1l'Sde"de el primero ha¡;ta el Últilllo dia, pnso sn nomlm~ al piÚ de 1a COIlstitncion eoloml,i:ma espedida por aqnel Congreso, i luego se dirijiÓ a B(wotÍ1, donde faUeeió el 24 de agú¡;to de 1822. Patri(,tft vell(~mente i conStánte desde HIles del siglo pasado hasta el dia de Sil muerte, llHIH,:lt traIlbijió con la dominaeion e:;panola, ni dt:i<'l fíl,;;tro algullo (h·:-;doroso para su menlOl'iH Cll 811larga calTt'ra de inquietudcs i sufl'illliellto~ po\' la lilH,'rtad'e ínJepCl1lIellcia de su patJ'ja, Entre 108 poeo;; jl'l!t'r();; bot:lnicos publicados )lO\' la Espedicioll ántes de 1:1¡tucrra de 1816, se encuentra el C01ul1.lf:(fi"ia consagra- do a vi por el gran Cáldas con estas palabras: !Ioa gen-u,~ D. Sinpl101'mn --,-JHd1"8 et COnfmeYI'(l, qui ()in·cliOna1'-umIIí8toril/m I't JIÓnoqrapltÚlfll perfecít, aV8o!¡'it, el .F'l.-oram Bo!/ot'-:7i,sl"li¿ a,~8idIlO ZaO(YN d ,stl/dio paí'r!t. T.as pl'eviciones fatales ue Cáldas acerca de la poca llU bilidad i poca dilijencia de don Sinfol'oso, habían sido d<:l todo desmentidas por lo;; rpsultados. Conociendo seguramcnte la injusticia que habia comdido sn tio al sohreponerlo a Cálda¡;:,don ~inforoso lwhia pnesto los medios de hacerse digno de &(luclla elcedon. Por otra parte su carácter apacible, su fisonomía noble i Sil fina educacion dehieron &!anjear1e a la larga las simpatías de :5l1BadjIlIltoB Cáldas i Lozano. Valcnzlwla, 'ya anciUllo i achacoso, no por eso dejÓ de ser llA.sta el tin (le BUSdias un eul'l1 ejurnplar, ni abandonó jamas el cultivo de la ciencia de las phntas. Sus funciones como párroco tenían una cstensiún vastÍsima, pues comprendían el dogma, la moral iel progreso intelectual i Este libro fue Digitalizado Por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República,Colombia - 178 material de sus feligrcses. Persuadido de que una industria, un camino, un nuevo método de cultivo, un constante buen ejemplo, contribuyen Ulucho mas a la moralidad del pueblo q\le los mas elocucntes discursos i las mal> razonadas insinuaciones, estableció cn su cnrato la manufactura de tejidos de algodon i el cultivo de esta sementera i del trigo, hizo montar un buen molino harinero a las orillas del rio Suratá, fomentó la apertura de vias de comunicacion, i no dió lugar a que su conducta fuese motejada por nadie. La huerta de su casa en Bucal'amanga era un pcqnefio jardin botánico bencficiado por sus propias manos, dondc reunia algunas veces a los principa.les vecinos para darIes lecciones prácticas de cultIvo i aclimatacion vejetal. Siempre a.migo del adelanto de las luccs, tué uno de los nombres que mas contribuycron al establecimicnto de los estudios médicos en la Nucva Granada, ofrecicndo de su peculio premios pecuniarios a los estudiantes que sobresalieran en ellos, i redactó la constitucion del Colejio de :Mompos, habiendo sido nombrado rcctor i catedrático del mismo 00lejio, empleos que no desempeñó porque su }lrelado no quiso otorgarlc licencia. Despues llaber llevado una vida de virtud i de estudio, tuvo un fin tanto mas horroroso cuanto mas inesperado: unos hombres de apellido Breton, entraron por la huerta de su casa a prima noche, lo sorprendieron CII su cuarto de estudio sentado en una hamaca, le dieron dos puñaladas mortales, i al dia siguiente, 31 de octubre de 1833, cspiró, a los setenta i ocho ai'ioscuatro meses i cuatro días de edad. Valenzuela conoció a todos los ascsinos, cntre quicncs iba nn ahijado suyo, pero no quiso rcvelar sus nombres; la justicia los dcscubriÓ despues, i les impartió su castigo. j Caprichosa crueldad del destino! Aquella cabeza encanccida, aqncIlaestatura alta i patrial'cal, aquella fisollomia severa, grave, rodeada de esc resplandor celestial que despiden la buena conciencia i la.:; meditaciones relijiosas, aquella persona venerablc, tanto que el Libcrtador ]30lívar no llegó u haularlc jamas sin quitarse el sombrero, no parccía estar,espucsta a los golpe¡:. alcvosos del pufial asesino. Tanto patriotismo, tanto espíritu tanto amor a Dios i a los hombres, debian prometerle una' muerte natural i tranquila. Aun vivia l\fatis cuando murió Valenzuela; i g-ra.cill.s a la vida de Matis, eomomas adelante se verá, no CllYÓ en ae Este libro fue Digitalizado Por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República,Colombia - 1i9 - a.b80luto 01vido en la Nueva Granada la ciencia que en 1810 era CanlUIl i familiar entre los hombres distinguidos del pRÍs. El órden de los hechos me impone la necesidad de interrurnpir e8tc asunto para hablar de la espedicion científica de los s~ñores Mariano Edulmlo de Rivero, .Juan Bautista Boussingault, doctor H.oulin, .Justino María Goudot i ames .Bourdon. .r "VII Al partir para Europa el sahio Zea, recibiÓ entre las instruc<lÍones que le diÓ el Liberta(!o!' Holíyar, la de Úwilitar en aquel contilrente llls medills de IH,.)\llo,Cl' ell Colombia la instrllc<:Íon públiea, i prilJ(~ipalItlcllte ]elSCiell(~iali naturales, entre las (:\lales debia mCl'eeel' ulla atellcion especial el fainO de mineralo.iia. Ap('llas acalladu de establecCl'se ell Paris, Zea contmtó a los sahios mencionados, (iUC con cscepcion de Hivero, orilllldo dell'erú, todos eran franceses, Rh'ero, sinelllhargo, hahia hecho SllS estlldios en aquella capital, i en union de! Hr. BOllssin~nult ,,"e habian (listill~uído como al n IIl1l0Sd(~la Eí'Cllela ]{pal de minas de Francia. El doetor ROlllill el'il Ya 1111 Ill~dico ¡ un natura.lista notable, i los sd'iorcs (;'Jllll¿t j Hourdoll H' habian ;:;efíalado 1'01' Sll aplieaeiuJl en el Museo (k Historia natural de París, El sofior Hivero se cOlllprometi(" en 1.0 de mnyo de 1822, a consegui¡' en Europa utla eoleeeion wínera]Ój iea, una biblioteca de deucias n,ttllrall'í'\, nTla coleeeion de instrumentos físicol'i i astronólIlieos i lIil Iahoratorio, i a presentar todos esto" objetos al g'ohi('!'lIo de Colomhia; n, COII· tribuir a la fonnac:ÍolI de un-- Museo cl(~ lli"toria natural, cuyo plau presentaria {·l mismo al gohiel'llo, dando a h vez clIantas indicaciones pudiesen facilitar su lllas prollta i completa rcalizacioll; a p('l'lIlall(-'C(~rlln afio ell no~ot;'t, atendiendo a la flllldaeion i al'rcg'lo de una Eseue1a lIaeioJla! dl~ millas en esta ciuda(!, que dehia el¡lIfol'lllflrSe en t~do lo posibl~ a la de P:~!'i,;; j a Yllcar;:ul'i'e de l~l l>in"(~: clOn de las IIllllas colombianas, ;:11I l'l'I'r.!,mur (~Rtllerzo III tmbajo ltlgllll" para dar a (·~te illll"'l't:Lllte ramo ('1 Ill:\~ fuerte illlPlllso, a en}'o efed!) el J>J'(',;idclltc de la HepÚblica debía eOllferirle el título i fa(:\¡Jr;ull~s ('orrespondíentes, Al cumplimiento de estas estiplllaeioncs, clIIpefió m repntad<Jll cientifica entre los sahios de Europa, hajo d Este libro fue Digitalizado Por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República,Colombia - 180 concepto de <!lle el gobierno colombiano le prestase toda la proteccioll IIcecsaria para q ne no fuc\'an dc"lncit1os "liS trabajos en tan grande i glol'iosa empresa, El gobierno por !:inpal'te dehia costea¡' al senor Rivera sn ,"iflje a Colomhia, i de aquí al pncrto del Callao; i dnr:lnte;,n residencia ell este 1mb debia pagade UII sueldo allual de 4,()OO pesos fuerte,; desdo el día de su cmbarque ell la costa europea, i en caso dl~ retardarse {·stc, desde el 1." (le i LIlid dcl mismo ano de 1S:2:2. AdellJas, debia cOllcederle ~l gol,iel'llo una gl'lltilicaeioll de 3,000 francos por el tmlHljo (le formar las colect:iunes i de prOel11'ar los elementos 1'J'ccisos para el buell l~xit() de la espedicioll, i darle tambicn 1111alojamiento c0ll1!'e!('lIte a su empleo, Desplegó el s(~TIor l~i\'ero tal eSlllCl'" i tal illteres ell <lne se llevltSe al callO esta espedi(~iOIl,1] lIe Zc·;¡ lo l'cco!llendÚ lI111i partie¡:lal'lllcnte al go1iel'lIt) CUIOlllbiallo, amen de <j ne él gozaha de ulla aeeptuciVil 110elllllll11 en Europa como hombre de eil'!wia, El seiI'.J!' Bous~ingalllt se compromotiÍl, en 28 de mayo dell1li~lIlO MliJ, a desclllj>enal' por cuatro afíos H!la cátedra J~ IIlilll:l'aloj[;l o de (lllÍmiea en la Escuela de millas; a cjC]'("'{', ]¡:ljl) las <')l'dene~ del Sem'otal'io de 10 lllterior, las flllWiuill'S d(~ injellicl'O de millas cnando este ClICl'pOse estaltlccic'l'¿l; a :w"ili:H' al senur TIÍ\'cro para k flJl'lnacioll del gabilll'll' IlliIleral'\iieo. i a estar a SllS Ílrd('llI'S illllwdiata,.: (~1I(ud\) lu (;ollee¡'!liI'Ilte a la ensefíaIlza i al ~('I'\"i(;io de la E:,ellt']:l. Ell c;1I111Jioél golJierIlo del,ja evstearle el viaje de \'\'llÍda Í vuelta, pagarl~-lllCul:j[lUllllellte un slwldo anu~d de 1,-1:1)1) jW;')S fncl'tes de\-Cllgados desde el día de su ClrIl¡are·J. dark (~Ild edifi(,io (le la Escnela Illl alojallliento de(,elll e, i l'sped irlc ti tll lo de }!l'Ofesor tan lllego (;ulllO llegara a CO!.>ill J,ia, El d"dul' Uoulill se (;ompl'oll1etiú a dl'Sellll)efJ~u' la eát.edra dI' jjsjolo.;Í;t i de anat.omía eomparada l'l! el proyectado. }[u::,en de l1i"roria llatllral: a cOlltriuuir flcti\-alllente a la ¡i;r¡llac;ulI del :JfllSCO,110solo en lo relaii\'o a Sil ramo, sino en todo~ los dellllls; í a prestar SIlSsen'ici<)ií en la ell,.;ci1auza d\~l",; ",lrios ralllOS científicos (}IlCk eran eonocidos, ¡;iC'111[ll'll (lile el gubienlO 1;0 lo exijiese i lo relll1lTleraSe, EII I'dl'iIJli(,ÍOl! de (~sta~ ol,]ígaciones el g'obiemo debía pagarIo l11eJislifdll1l'lIte dnrante los seis primeros ní'í(,s UlI sueldo fl-1I11:d de 1,·±oO pesos fllertes, dade alojamiento decente l'll el e~tal,lc(;jlll¡ento, eostcurle el viaje de vcniJa abonán- Este libro fue Digitalizado Por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República,Colombia - 181 dole el "ucldo de su empleo desde el (lia de SlI embarco, i Vasadó aquel nÚmero de años, propol'cíollal'Je dístincionet:' i ventajas PCl'SOJ]ale8 en'atcncion a lo~ méritos (Jll(~ hubiese contraído i 8e1'\'ieios que hubiera pl'(~st8.00, eOliserynÚdo al mismo tiempo el sueldo i emolumento.; d(· Sll cÚtedra . .El "dwl' Goudot, mni peritocl1 l'r(~l';l.rnl' i fUl'lnar culecciOlJ¡''; 7.oulÚjicas, se compl'onlt'tit): a J,t·rmaJll.~cer seis años v!¡ CololIl bia ejerciendo este r:lIllU, l'(:l'O de:=;tillado sobrctndo a la ietiolojín., sin dejar (le tl'nb,¡jar ell h~s demas partes ¡lu la, 7.oulojía; i tnmoien a ayudar al sefior Rivcro ,en b t'ol'J11aeioll del Museo i estar a la;; (ll·el ('llCS i1~rnediatas (le \~l: (klli~ndo recibir del gobicl'llo :-;1I(1 lws(lS ¡"tlCl'tCS ch· suel(lo Hl\ual, l'a~ados por meses, Jcsdv el dia (k "il a!Tibo a lIl1 pne!'!o colombiano, i \lB alojamil'lltu dvcul1e t~n el esta ble(:i El 111¡ell ti), c¡ue "iyc e11 D¡,ignt:í, ¡ :l quicn he tellielo e) !.:'1I::,1·ode tratar, tnn bnen (:(Ikcciolli;.:ta i preparador C(lIno nondl)t, se obligÓ a pcnlllll1eeu' <llllií s¡'i~af¡os, de¡;tin:1do particularmente a la Clllulllll]ojía, sin d,jar dI' trabnj:ll' ell lns otros ramo;; para la Ú'l'lI;a(·ioll Jd 'Museo; ganando pe)]' est()s ser\'i(:i(,s t:OO llC':'()'; f'l¡cr\\,S :l!Jllales, los 'costo;.: d,_' :'¡¡ ,-i:¡ie de "Cllida j "¡¡(o¡';). i ¡!!i a;"jallliclltl> decent('. ' . Tal 1'tl(' el pen':(l1lal i tale:=; las (:011(1;(',,>1:(';': de !:t c51,edicion (':ell!inl:a (·ren.da i cll\'iada a (\'!('l1,1,i" !>ej1" d iIllllortal ZI;:l, : El. ('\)11~'l'\'SO eol()mhinIlo de' 1132;-; u!,id;¡"I_ C(·ll feell:l 28 de julio, lIn de('reto ll.])J·()l>ando esta;.: (:(ll\t l"ta~. i estfll¡le(.iendo ell Ho!!otá 1111 Mnseo dI; histori:: ¡¡al lira! i \lna E,,¡clld!! ~"~ll\)r BOllrdon, de n1ill~rb, mnell(l e:npdiu cnlos C/\l\ticnen El (,Ólchre cstndista Friíj¡\'i~(:LJSulo tOllJ@ en la sanci()n de (',;te c1eérd(), casi literallT1l'llte bs id,~as t¡tlL~ ('II,\"US l'! artí- e:opre;,Ú en 1111 intill'lllC (pie presclltÓ ul Sen:ul'l, e1l 1:¡¡ion du los i't~nadorc" .JLmnel .JosÓ Hurtado j Jer(Jl\imo T(>Irc~. La::; di~posi(,ioll('" sustnn<:iales del dcu'do son J:-¡", ~;g'¡¡¡nTlt(''": el 'Museli t(,lldl"Ía c:itedrRs de lllillera!ojía i .1(·,,1.. .1;:\, de química jellf'ral i aplieada a l!ls arte", de ¡"¡~'''<JI¡(::t, de matenuitit·a,;, de' fbiea, de astronomía, de agTi\"1I1 t 11l'n, (h, zoolojía. de :l!wtolllía ('umpal'ada, d(~ entoI\H,!u.ii¡¡. dt, (:oneld!i()lojía i d •..dilllljO: la Escuela la" telldria de lllaklu¡ítiea~ simples i aplicadas ft las máquinas, de fL,j('a, de I!!illemlo- jía ijeulujín, de esplotaeioll, de químÍ<:n allalltiea i llIetl\- Este libro fue Digitalizado Por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República,Colombia - 182 lútjlca, de jeometría descri/,)tiva i de dibujo: 8e cobral'jan para rentas <le estos estah ecimientos, un peso por cada marco de oro reducido a la lei de 22 quilates, i un real por (~ada marco de plata reducido a 11 dineros de lei, que se introdujeran en las Casas de moneda de la República para 9n Rmonoda.cion: los profesores de la Escnela tendrian ohligacion de ensayar graeiosamente cloro i la plata qne les preselltaran los particula¡'es, i darian una boleta firmada en q 110 constase la lei del metal presen tado: ám bos establecimientos esta¡'ian bajo la. inmediata inspeccion del gohienlO, por medio del Secretario de lo Intcrior, i bajo un reglamento económico formado por el Ejecutivo; i por fin, las asignaciones hechas a los profesores contratados 110 estal'ian sujctas a ninglln descuento. Los sujetos indicados cllmplieron apénas en parte SIIS obligaciones, pues ni ellos tomaron mncho cmpeflo en lIevarlas a cabo, ni el Ejccutivo colombiano acti,'Ó la realizacion de la Esenela i el Museo, porqne la contribucion decretada para el sostenimiento de estos establecimientos !la pudo plantearse, í porque como la. guerra de independencia no se habia terminado, el Tesoro no alcanzaba sinu Jiitl"a los gastos del ej{~rcito i del gIJbici'IlO. Así, el señol" J1ivero se encaminó a poco tiempo para el Perú, el señor BOll"singault se compl"(llnetió a diri.iir las minas de plata de Santa Ana, Itlego se fué para Quito i mas tarde regrcsÚ a Europa, aSl como- el doctor Roulin ; Goudot permitneeÍó en el país i JHlce poco mas de catorce año:; muriÓ en Honda. i el señor Bourdon se estableció en Bogotá. L<Js señores Riv()!'o i Boussingault hieiel"OIl ulla e8(~ursion aJas ,"iheras de! }[eta, le"anta~~m mapas de aquellas localidades ¡ examina!'on el paÍa en sus aspedos físico, .ie()lf~iico i millemlÓjico. Puedell \"erse los frutos científicos de eMos ilustres sahios ClI la (Joll'ccion de JIemorias del 8cfíor Hi vero, ~1I los Anales de química ifisica i en los Viaj('.Ycimt~fi(~oó' <J 108 Anrle8 ecuatorr:alr'8 del sefíor BOllssingault, traducidos al castellano por el Jencral Acosta, i tambien en los artículos del IJi('r;Íonm'i() di! h¿~t(}rianatural, donde tamlJicn se hallan algullos del doetor Ronlin i de Gondot. En Bogotá ,lejal' )1l lInMu~eo }'cgularrnente provisto de objetos natnrales del país i lllui b-icn ordenado, que prouto descuidó el gobierno, i }l()1'lo mislIIo se perdió totalmente. I Este libro fue Digitalizado Por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República,Colombia - 183 - YIII Como venia diciendo, :Matis entró en relacíon de amí¡;tad, por los ai'los ue 1820 - 21, con un sacerdote mui dado al estudio de 111 natnraleza, oriundo de Tuluá, Estado de! Cauca, donde naeiÓ el 25 de agosto de 1776, i de donda pa.0 a Bo~otá a la edad de diez i llueve allos, cn cuyos Colejios hizo'estudios de latinidad, retórica, filosofía, derecho civil i tcolojía, uespues de los cuales recibió g-radol!académicos i se t~'a8Iadó a Popayan, cuyo oLispo le connrió el presbiterado. Este sacerdote j] nstrc era el Dr. ,1uan :María Céspedes. Se habia aficionado a'la hotániea a los treinta afios de ;;\1 "ida, leyendo un (~jemplar del "':;,l/stlwma Plantal'um de Linneo, que halló en una po__ ada. Patriota de coraZOll, habia senido con decísion a la cansa de la indcpcndClH'ia. pero sin haber podido nunca entrar en relacio!les con loto>naturalistas de la Espcdicion botánica, apesar de habcI'lo deseado vivamente: tan solo tuvo una entre\"Ísta Iijera con Oáldas en AntiQquia. Pasadas las borrasca& de la gnerra, i sabiendo que ann existi:. },f atis, hizo conocimiento con (~l,i le snplicó qne le cOlllunieasc SIlS luc-cs botánica>!, no lo q ne e8tn \'0 presto }[atis, PUCii el venerable pintor amaba las plantas con toda esa pasion qne habia sabido im,pirarle el gran Mútis, i le placia la idea de tener un campanero tan entusia&ta como él en la contemplacion de la naturaleza. Con esta singular aplicacion, Céspedes aprovechó en poco ticmpo los conocimientos de Matis, i el año de 1825 fueron comisionados ámbos, en union del sefíor Rivero, por el gobierno colombiano, para hacer nna csploracion de los monumentos indios del antigno pueblo de San Agustin, en la comprension de Timaná, i para. examinar las plantas de aquella comarcl!.; esploracion qlle dió )l0r rcsultado, una coleccion de las plantas mas notables, 1 la copia i mensura de los diversos monumentos de piedra rcpresentando ídolos, mesas de sacrificios i varios animales, como tigres, micos, &c, gue existen en aquella localidad, i que han sido descritos 1 dibujados hace poco tiemp() por la Comision corográfica. El doctor Céspedes siguió ejercitándo8e en la herborizacion, en la anatomía i en la el88ifi~acion vejetaI, con una constancia admirable: colliagraba a 108cstudios botánicos Este libro fue Digitalizado Por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República,Colombia - lS-i (~\1antos ratos le de.iaba libres su uestino eclesiástico, i hada largas i penOHas cscul'sioncs con bastante fl'cclíencia. La mas notable de estas ?scursione,¡ fué la q ne Yel'iJicó en ls:n a las nlOntafía¡.; dd Opon, Estado de Santandel'. Partió de la eiudad del SOCUITO el 21 de ag-osto, acompafíado de veinticuatro hombres armauos, i llevando pl'o\'isiones para bastantes dias. En aquellas selvas permancció como mes i lIledi.) con el seITor .IosÓ María Ortiz, n'cino de Zapatoca mlli conocedor de la handa de lUontal1as incnltas que a la. l'ibel'a orielltal del Magdalena se comprende entre d Ca\'HI'e i l'l Sogamoso. Luego dejó la soledad, despues de haue¡' vi\'ir]o fratemalmente eonlas tribus salvajes que la recorre'·]). Hablando de estos aborí.ienes, decia: " A pénas habr{¡ en la espl~(,ie humana porcion tan paeífica como esta." Sacó una. familia de seis indios, una coleecion de plantas, i algunas precio\'idades minerales i animaleo. El dodor Céspedes determinó dos jéneros huU.nicos qne llamó bolivaí'l:a. i 8antanderia, en honor de los .Jeneralcs Bolívar i Santander, i cstableció una nueva familia (lllC denominó 1no8que¡'iacecÚ, dedicada al :finado Arzobispo Manuel José Mo;;q llCl'a; pel'0 110 se ha verificado aún la cxactitud de estos trabajos, i por consiguiente ni lo;; .iéncl'os ni la familia h.an ¡.;ido reconocidos en los catálogos bot.ánicos, Tambien sc tmsmitieron los conocimientos de ){atis al doctor Manuel :M. Qlli.iano, médico de Popayan, patriota decidido i lcj islador cololll biano, que hizo algnnas pu blica. ciones uotállico-médicas en el Eco DE l'EQ(;¡';~DA)[A, periódico publicado en 1829, i en EL CONSTITL'CIONAL DE CuNDL."AMARCA, puhlicado en 1833. Así mismo se aprovechó de ellos el malogrado J eneral injeoiero J oaquin Acosta, historiador de la. colonia, escelente químico, jeógrafo i joologo que deRpncs de haber servido a su patria como guerrero eientítict), como profesor i como estadista, pereció de una fiebre en 1852. IX No solamen te Céspedes, Quijano i Acosta aprovecharon las luces de 1htis ; tam bien procurÓ adquirir1as, i las adlJID-rió a fuer"ia de constancia i de paciencia, el Dr. Fl'anClSCo. Bayon. Hi.io de un abogado intelijente, pero huérfano a los tres años de vida, i pobre, i sin hermanos, i sin protectores, el Dr. Bayon, hoi de edad de cuarenta i tres años, médico i Este libro fue Digitalizado Por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República,Colombia - 1% botánico disting-uido, residente en Bogotá, su país nativo, presenta un ejcmplo de lo que pneden la inclínaeion al saher i. la perscH~ran('ia en bu;;('ar 10;; medio" de aleanzarlo, enluelw. COll lo;; oh"tácnl08 <¡\le opone la. ao\'er;:idad i <]ue lIlnltiplil~a eun t'l'cclleneia la mala org:mizHdon de la <:11"0J1an~ao Empezó :t :dicionarse a la ]wtÚllica, a;<i"tiu!Hlo por mera emoi"sillad n nn:t clase (lllC dal!tl1fatis, pur (:umi¡;;ion dd gohiel'l1o cO].>111hiano, ('11 el Colcjio de San Bartolonll.'· de Bogc.t(¡, (lel CIl:l] cm. alumno l'éll;;iollfldoo En lS30 1'e \.oariÚ di, cated.l':itieo. ' pues en lllgar. d() continuar M !ttis, entrÓ a da¡- lcceiu!lc;; el doctor CÓsI1L,dc!', i el <lodor lhyv!l asistió tallJJ¡icll a ellas. Esta;: (los emCf¡:1l1;r.a8 dnl'uron mui poco ti(,tI1 po, Por'l:le cnt{)}1(Oc,:el glluiernn, por la cxigui(\n,d de Sil;: r\,('1I10"0,, I'(·ntístico:" no i"Ollll'lltaba (~on tesoH mas l)stU(iio;; qne loi' de ciencia;; po]íti(';!s, úniclls rcputadus CllIrJO de a1>;;o]nta nece.sidad para cOllSolidar en este pní¡;; \as institnciol1l:s rep\lblican~s i garantizar llt perpetuidad la ind(~pcndcncía; pero el doctor Rayon no abundonÚ por esto el estudio de las plantas, i siglliÓ d c.ielllplo de ::\Iatis i (X'spedes, (,')llcurriendo eOll el]!);; a escUI';iiones ff.('iles i hnn:s por 1,:, alrededores de Hugot:i i ]os puelllos (le la.g imncdial,l(l]¡('''o Muertu el aOdOl' Céspedes (:Z1 de enero de 1848 en (-i-nusca), pUl" rcs1l1 tíLS de haherlo tallado u 11ya.lo atra vc\'()sado en UIl (;Hminc, del depnrtamclItl) de \' Ók¡;, C!luna cscnr.sion . (Plé hi:w, en 1845, a la quehrada de la Corcohada, no le <1\llldÚ a "Matis lilas compHi1ero de amor a h\R plantas qne el doctor Hayon; i aunque agohiado pOI' sus much~ afios, 110 se esclIsaba ::;inembargo de salir a paseOR botá.nicos por la>; sabanas i montafias que circundan a Bogotá, cuando al efecto 10 invitaba su nuevo discípulo, quien muchas veces se cargaba a S11S espaldas al senecto dibnjanteo-en las subidas de difícil acceso o en los pasos incóIllodos del sendero, por tal de que le mOf\trara Ulla orquídea., un helecho, U1Hl hromclia: cualquier planta que, vista ántes, deseaba COl1oecr cienttficamenteo 00n 'estas 'leeeioneg practicas el doctor Hayon tenia ya ulla magnífiea base de estudios lllteriore;;:; i :t8í, no tardó en pedir:a Europa lmenoslibros elementales i de clasíficacion, que al fin le llegaron. Matis no tenia noticia de otras obras que de las de Ljnneó, i sus conochníentoB, .aunque preeioso8'l}or ser prácticos, tenían el inconveniente de ue re- Este libro fue Digitalizado Por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República,Colombia - 186 posar en los errores del si~tema Jinneano. El qne le hizo conocer la;; cla,;ificacioncs razolJuhles de Jnssiell, i los adelantos debidos a este slluio, a Hichard, n, De Candolle, a Miruel, a Dntl'Oclwt i otm;; ilustres botánicos, adelantos referentes a la anatomía, fisiol(~jía, patolojía i deseripcion de las plantas, fnll el doctor Hayan; i a él i.al doctor CésI,edes Be debió tambielJ el que las obras elementales de Richard i J n¡:8ieu cm peza8eu a c8tar en mallOS de la juventud dedicada a la medicina. El DI'. Bayon ha si(lo el primer catedrático neogranadino quc ha cllscñado en el país la filosofía de la botánica. )1no110 ántes de fallecer :Mutis (5 de noviembre de 1851 en Bogohi), el doctor Bayoll habill rejentado \'a¡·jas "0';08 cátedras de botánica, en los Colqjius de San Dartolomé i del Rosario, a los jóvenes emprelJdian la eal'fera mÓdica, para la cual requerían os reglamentos uni\'el'sitarios, las leyes i los decretos públicos, alguna instruccion en esta ciencia. Los deheres del profesorado fueron un mui poderoso estímulo para hacerlo avanzar en conocimientos, i así, cuando falleció el anciano :Matis, ya no le hacían falta sus espliclll~iOlws .. __ :Matis vivió pobre i murió rodeado de miseria: gracias a una pequeiía pension que L' asignó el Oongreso, bajo la administracioIl I.ópez, un año ántcs de Sil defuneion, no tUYO qne apelar a la misericordia pública para sostenerse en BUS últimos dias. Con BU mnerte perdio el país el último resto de la E8pedicion botánica, resto vcnerable i glorioso que mereció de los ilustres viajeros Humboldt i BOnpland la dedicatoria de un nuevo jénero de malvaceas que lleva su nombre, mati.yia. Su cuerpo de regular tamano, se había encorvado bastante con el peso de·la edad; pero siempre Sil fisonomía revelaba bienel alma noble, anjelical, llena de virtud i de dulznra que aun le daba animaciQIl. 1ue X Al bajar a la tumba Matis, un discípulo del doctor Bayon, que tambien habia otdo algunas esplicacionea de aquel anciano, empezaba a escitar las miradas de su patria, l>or BU decidida cOllsagracion al estudio de las plantaa. Este jóven, hijo de Bogotá, hoi residente en Europa, donde trabaja sin fatigarse por hacer conocida cntre 108 sabios europeos i en el mundo culto parte de la flora. neogranadina, Este libro fue Digitalizado Por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República,Colombia ~ 187 es el doctor JO,Sé Triana. Como miembro de la ComieioD corográfica, estimulado por la administra.cion López, recorriÓ con cl sahio J cneral Codazzi gran porcion del territorio de la República, i colectÓ un herbario mni considerable, del cual he visto 38 volúmenes conteniendo 3,950 especies, clasificadas jenéricamente segun el método del profesor Endlieher, agregando sus nombres vulgares, la altura barométrica i sus aplicaciones populares. Entre los jéneros danaca, Ql'01nU8,dichrornena, dW8corea, sy8irinokllnb, antJ¿lti'i'um, maclura, bro88Únmn i otros de las artocarpeas, margiricarpu8, i varÍos jéneros de las papillonacea¡.;,melastomaccas, urticaccas i chenopodeas, hal mnchas plantas acreditadas en la masa de los pueblos por sus virtudes mcdicinales o SllS aplicaciones económicas. Ya he dicho en otm parte de esta ~lemoria que es en esta. te~ péntica de nnc;;tro pueblo americano que ha encontrado sus m~iOl'es progresos en los últimos 6iglos la ciencia do los medicameutos, i por cousiguiente es inútil recomendar la importancia de esas observaciones curiosas del 6cflor Triana. De las gramíneas, hai 5-1 especies no detorminadas jenéricamcnte, i 8 de las rubiaceas; bien se sabc cuán útiles son estas familia:;, i por lu mismo es de suponerse que cntre las especies ignoradas haya algun8.Bno méno8 preciosa;,; que las ya conocidas. En el rel'iódico titulado "Neogl'alladi!~o Jl (1850-1852) publicó e senor Triana una. serie de artículos sohre plantaB útiles de la Nucya Gra· nada, tan bien escritos como cuajados de importantes observaciones. Es de esperarse que no paso mucho tiempo sin que ten~amos el gusto de ver la obra hotánica de costosas i de laboriosÍsimas proporciones que está preparando para publicar en Europa. Esta obra, fruto de largos i penosos trabajos, en que 110 :;010 ha invertido sus mejores años, sino que le ha costado la alteracion de su salud, será una gran base de progrcso i un gran título de gloria para su patria. Xl Tres sabios estran.icros, los señores J. Linden, Eujenio Rampon i IIermann Karsten, el primero Director hoi del J ardin zoolÓjico de Bruselas i viajero por este país en 1842184:3, el segundo médico distinguido que vivió en nuestro sucIo bastantes afl05, i despues de casarse fué a establecerse en PRl'is, donde ~de actualmente, i el tercero miembro_ Este libro fue Digitalizado Por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República,Colombia -. 188 .-de la Unin:rsidad de Berlin, que estuvo aquí el! 1856-155r. e hizo CF;Cllrsionesi determinacioncs botánicas en asocio del !\efior Trialla, hall contrihuido lllni eficazmellÍ(: a haeer co~ nacer las M(luezaS natnn¡}e,; de Tluestro país, i lllCreCe11nna mencion particular en estas pájilla¡;;, sollrc todo el doct.or Hampon, cuyo Tlombre es i debe ser e:lrísimo para lús neog-ranadinos, yU(;S dllrallte Sil larga permanencia ell X neva Granada dio jigantesco imJllIlso a los est.ndius médico::; i de historia natmaJ, arre~lÚ el g-abillctc mincra!Ú.iieo i nlOStró el mayor interes por la dit'usioll de las eil'll('ias naturales entrelajU\·elltlld estudiosa. Tampoco dehelllos olvidar los scrvicios dpl señor Lew~" químico qne cllsef¡Ó esta ciencia en el Colejio del ltosario, i. mucho ménns al Jeneral Codazzi, infatigable .ieÓgmfu i ar(jlleÓlogo qne muriÓ ('11 nuestras playas atl:'l11tiea,; euando llevaba y'" lllui avanzado el trabajo de levantar la Cl\rta. de la ~ ueya Gnmnda. Es digno de recordarse tamhien el sefíor Schlim, viajero distinguido, que esplorÓ hnce poco tiempo los uosqucs de Ocaña con mui buen éxito. El señor Ancízar, ilustrado compatriota qne acompafió alsefíor Codazzi en ellevantamiel1to de las c:lrtas corográncas del ¡ntel'ior neogranadino; el sefior Bcnedicto Domíllguez, compañero de Cáldas i de Cabal, astrÓuolllo de :t<jueTIa época, qne aun existe, i qne ann (:ultivu (~()I\ entusin~rno esta ciencia; el señor J en aro Balderrama (lllC se lllt aplicado tambien con suceso a las ciencia" naturales, de lo cual hac1ado pruebaí'\ arreglandocl Único gabinete zoolójico que hai en Bogotá i publicando algullos buenos artículos dc viaje a las ri.beras del :Meta; los Dres. :M. 1\1. ¿aldÚa i Pastor Ospina, quc han manifestado sielllpre'particlllar zelo por la esploracion de nuestro;; tesoros yejctales, animales i mincrales; el doctor Antonio Y Úrgas RÚye""quc ha ensefiado con fruto la ciencia de I.uyoisier i Berzelins durante algunos años, i quc ha sido nn fuerte apoyo para la jUH'Dtud médica; el scfíor Lindig, cosmólogo m·ui recomendable, qne ha hecho bcllísimas colecciones de todos los reinos naturales, i 80bre todo de la criptogamia i entomolojía de los alrededores de Bogotá -- todos estos sujetos son acreedores s la gratitud. de l.as ciencias naturales .. U n estadIsta Ilustre, el J en eral T. C. do }fosqucJ'a, bOl" Gobernador del Estado del Cauca, ha hecho simpático 6U lIombre entre IOI!sabioh tamo por su a.plicacion al estudio Este libro fue Digitalizado Por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República,Colombia -- lR9 -- de nuestra naturaleza, cuanto por el apuyo vigoroBo que he. prestado a la radiel!.eion de la;; eionr'ias 1l<ttnrales en nuestr.o país, ell:mdo ha ('.ien~ido al¡:nna vartu. del poder público, Como l'rc:,idente de la N l1V\"ft Granada 11845 -lS4-S) diÓ taij fllcrk impulso a este uhjeto, qlle Vi; .k entóllces que data \'(~rdad(?r[llllente el reJlfleimicJI io <le la::; ciencias nl1tnraje;.; (~lltre JlO>i(t\ro~. Aden!as, ba J¡ceho j pnhlicado útiles i largas "h~ernl(;iorw;; mctí'()l'oIÓjiea;;, i C"lT\O miembro de la Socillda<ljuo,rrátiea de X nen~ Y ot·k ('::;eribiÓ una mni 611;Jtallciosa J\[etlloria soh¡'c la jeogmfia lH~ogmlladiIllt, que ~olltielll~ ha,;tant".., notieia;; f'obre animales j plautas de uso (;wlllil[lli(~o. inullf'trial i medicinal. XII Po.;o:; días ~llltes del aiÍl' de ] S;') 7, fUPI'OIl in,itauoB a un Cerhlll\Cll (Ir) lHJt:Lllic:1 ell d Colejit) de ~al1 BartolomÓ, lag }locos ¡I(.mbr,',; illtelijc¡¡te,; cn e"la ciellcia que habia en Bogot:í. Lo,; altulIllUs Slblelltallll'~ ,'rall ~l·i::;, eutre quienes HC contaha d q lle bto pS('I'ilH.~: el (':Ii ,~dr:'tti(~() l'm el doctor E,;lo" .¡"VI'!ll''': Iml,i:m (~lll':-'ado ]¡r.tÚlIir:a por cspacio de do:; aflu,; e:,(:a';t.,':, dUl':11JIl: ]0;; ('ll:tle:" p:tra f:n:ilitar el esBay()!!. tudio i !¡at:('rlo ciacioll llla,; pl"U\"~('busu, ]l:lLian eúll el JlUlllorC d(~Cáldas, formado una aso- COllll1.llt]O en 8n seno tamo bien a los doetores BaY(lll i Lihol'iu Zerda. C1,;ociacion que tenia f'U l'cgl:-Unl'lllt.>, sus cÚllliRione,; ecoJl(Hniea,; ieielltificaB. uia~ lle herh(¡riza(~ioll, SIlS ;;C,;iOllt~,; ,;olelllJ1e,;, sus setiio!lOS (I\'dillal'ius para discll,;iones te()}'icas, i tambiCll sus noBllf: ehe¡.; de i¡¡occnte:; J'tlgOCi.iospal'8. divertir <,1trabajo, Esta sociedad de e:-,tudi:llltes "ig'uiÚ af'í !tl/'uJada l1a¡:;t~L mediados (le .innio de UtiU, en CJue el ]JI'I,t'I)SOr d(~ mineralojía i ljnÍl1liea dd ('ulejio del J{osal'iu~ <lodor E, Urieoechea. mi estimado lllal'stl'o i amigo, qUt'l'ientlo ellsayal' a los estudiantes t'1I la,; eselll"siolll';; .ieol'-'ií(~as i lIlillcralÓjicas, escítÚ al eatt·(!l·:íti(~() de bot:lIli('a, ;'¡odor .B:l~-un. 'para. que, ;'CIl!)j.]a-; l:l~ dos ('l:\s('~, :-")l¡¡eie.'(· I;::~t ('~i'¡¡:'3ion \'ariada i lll't'\"('[w:,a 1"" ),-,:; J1,lilt'O;; de: ~c._r"¡¡·;'·l'l'at\', ¡¡lt:llllontaíi:: a t'ny~.1 1»11', d q"¡¡"lOa _B:l.~l)tÚ. Fu':' de ¡>~a. C':::·eur~iOll (Jue, Jlul' la dil¡jclIt.· :;¡i¡!iaLi','_l tI,·J ';o(lÍul' I"l'í.~u~,('lt(':i, ll;wiÚ h -S(j('i\~dad de;\ .t!Hj'aJi¡:;t:<~ a ([Hi"ll tlil~() el !tonor de preselJtal' ,.'.sta ::\lclllOl"ia, 'lile Lahia cltlp('zaclu:~ meditar con el fin .Ir: presental'la a la antia:na Socil'lh.-l Cí:ldll.s, Este libro fue Digitalizado Por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República,Colombia - 190 Quiera Vios que 01 espectáculo de lo pasado, imperf'ectam9nte descrito en estas hojas, aliente a la Sociedad en el camino del progreso, i que sea como un faro que evite 108 desalientos 1 los estravÍos ! Me he detenido en las fazes política, social i moral de los naturalistas de la Espedicion, tanto como en su faz científica, porque el objeto principal de esta Memoria es estimular a los qne quieran dedicarse en nuestra patria a las ciencias naturales, a ser tan eminentes como sus antepasados, cuya universalidad i profundidad de conocimientos i cuyo carácter moral ]08 asemeja.n tanto a. Aristóteles, a Cnvier, a Humboldt, a Arago. j Quiera Dios que esa perspectiva gloriosa despierte la noble emulacion del vasto saber i de las relevantes virtudes r j Este libro fue Digitalizado Por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República,Colombia ~\DVEHT.ENCIAS . . J. . En la pájina 4.·, ren~lon 10, ántes de la palabra indíJ'ena8 se omitió en In imprenta poner el adjetivo primitivos. Debe, pues, leerse primitit·os indíjttws. Hago esta correccion porque es sustancial. 2.1\ Dije en la pá.jiua 141 que el jénero amaria determinado por Cáldas no Sl! !labia e. llué familia pertencl'Ía ni qllé plantas lo formaban; despue~ he baIlado una cvleccio!l completa del SDIAXARIO de 1810, i he visto allí la descripcion de lIn jéllero publicado por la Espedicion con el mismo nombre de amana, dedicado ul Vlrei AllIar i Borbon. Luego he consultado con cuidado la obra del profesor Eudlicher, i taml:>ien se encllcntm cn ella descrite, aun que bajo el nombre de bnuhiní{l, familia de las papillonaceas. :i.e. El ilustrn zoólogo Lozano tiene lIn jéncro de!\Crito por Sinforoso Mútis, que lleva elllombrc de lozanía, fhmilia. de las vochysiace3s, entre los publicados por la Espedicion en el S~;MANARlO. el cnal se halla dC5crito tambieD enla obra de Endlicher; pero es diWla de saberse la dedicatoria, que dice así: Genus dic'ltum D. Georgio 7'hadao Lozano, Americano naturl% scrutatore, et flOstrre Expeditionis SOCUJ, q?ÚFaunre Cundinamarquensis priman Centuria))) íconibus ''Plendidissim¡:, propriis expensis optime absoluit. i Ctinll1Jl in luam publi<:am prodirtt, el Zoologiam N. R. Gmnatensis íllcereptam .1utor compkret f 4." Así mismo hai tres j';ner0s en la misma obra que llevan el nombre de caldasia. De ellos el que dellicó el ilustre Mútia (José Celestino) a ClÍlt:lae, lleva tambien el dc helosís, familia de las balanopborcas. i aunque la descripcion dillereen algo de la que hizo aquel sabio, i que corre en EL SElo1A~ARlO, sinembargo. no copio mas que la dedicatoria, que dice: Hoc genus 'in memlfriam Franeisci Josephi d~ CtÍldas, I)ui plantas Cinclumas, pnuertim, et observa/iones astl'OlltnnUM. geode3íeas. bonnnetricas in regúmibus Andium a¡quatoríalibus coU.egít, atullit. el Flora7ll Bogo/ensem grneribus spcciesbu.,que multis rJila¡;it. 5.· El ilustre Cáldas dedicó un jénero de plantas a SU jeneroso protector José Ignacio Pombo, bajo el nombre de pombea. Este jénero, así como el valenzU/llia i el Cbn81Jegria, se encucntran como ann DO descritos en la obra del profesor Endlicher. Las dcscripciones las he hallado en la )'3 citada coleccion del SEJo[ANARtO, i con el fin de que sean conocidas, he resuelto insertarlas aquí. Al publicar cstos jéneros ¡los caldaGia, amaria i lozania, Cáldas espu80 en dos artículos los motivos que tenía la Espedicion para hacerlo; i como catea artículos contienen ideas interesantes, he creido conveniente que las descripciones vayan precedidas de un estracto de ellos. Hablando de la Espellicion, uespues de la muerte del gran Mútis, dice (fltbrero de 1810): .•• D. Sinforoso Mútis, sobrino i diacípulo del di~tor de la Espedicion de Bogotá, quedó encargado de la parte botá.nica i de todo lo ciontífico al) esas obru. Se le dieron. por adjuntes i IlOI.boradorea a D. Jorjo T~ Loulio i • Este libro fue Digitalizado Por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República,Colombia Hl:! --Ei uujetu }J,·inl.'jl;~Jl UiI!:" l.,\l~uiu t·~ urgatJ¡;.~~r l(l~ l1ii.'HU~,'~·if.o~ z.w:óiicos u~ j,llltís i COlllpletar la p,\I¡¡;a l'undi",,'nnr'lJ)l·."ll ,lo <]lle h('r,los l'uÍllírndo \lU"~ ¡,nt1estra~. El mio (':; la a~t.f(H1<1rrIÍ{'¡. <:} vh.sern.Jtvril)l ;;1 (r¡..r¡l~j¡z::(:i(·I1 ¡:e 11)5 ma· n\1;.tcr¡~o9 melco!'<)lójicoH. de cstp ~abi(), i del b?r}¡:lI'io, de.;.;!..'rip(';Cl!"J(':' i di~('iiú~ que bll'!l C!l la pruvincia (~e (Jníto d('~,l.~ 1802 j!::~ia UW,J. ]). ~:tjr:lfkr Hizq qw·.j/) CI)(';¡r~¡Hlt) de COl11P:C'I:llo la~ ~rrtl;díl!:-:a~ i ~(.I,",·rL::n .. l;¡fliiti:l:--' de i:L:'¡ qll¡~ nas i de la Fiura: JcimiJlas que llu :-t' },l\;(·dctl Ver ~~Il fHhllir:w;{.'l:. i ('[1 qUe ~f;> tllu¡liíicsta. ID (!U6 puede el jt:nio nm(>r:e:u:.o L:1~()b c:;n'ct:ÍOi.l de 11ll L(,llibrl' lf1í. CO!110 ~lÚtis .• D. ~i:lforoso ~1~ti~ 1:a (~(;rl'c~p('JIld¡do a j.'l~ intelH';O}:e;.:. de ~':tl di~no tio i n hlB e~penl\;z:ts di.:l gobil'r1W, .Al':dla tk ('Ol1lpl(:t:lr (.j tr;¡LI(kJ (j¡-. ;(l~ ¡illinns: ha fUfm;H.lo 111lil }J\'('tilcivll en IjtW da \lun iJf~a \.'1:\1':.\uc la oIJI':l. dd e¡.;t<~do en q\Jo la dejó el uiflllit.O dil'edor. 1a:-: :weiulH::--de f.:He i 1;J~ :dtpl'<l(\i~)n('~ qUé ha- hec}¡o. bigltu d r{'ntado LO("di('o-}¡j~t{')J'iel) ¡.le las qllilla~. i tCl'Illilla ('(I!l k.., dl'::;criI;('ioIIOS l.,ot;iuk'H:-3 d~~ tuua!) la:-- ('!kpceics i de lodHS 1;1<::.ynrivdad(:ti l..pie> produc(' el dú ~~lIltaf{;. .Aql1Í :::B ill(>orpvrarol1 b::- qw.' ~l'('(ji (:11J,oj<l, Cllene;), \')n.:illal lJuito i Pop:\yall. A llura :-:r' ocupa ('Il la grande ohra de la Flura (h J?(i~r·(ltÚ. 1.1.,::'; ))llmerOSO~ il1diridw':-; qlll' la (,()}lIp()nVll~ UIl herllario illm('l::-;n. 111:lfI1l~('t'¡U';": ,·olllmj}J(·:-;o_~ i dC80f'd(>nados, la J:¡Jta dI...'10:-; {¡ltilll(l;o1. t~scrito:-:' d~~ l{)~ Lllt:lllir'p:--: del PPrJ'1. li'J llumboldt i de los (',:-:critol'l's T/.'ci(·lJtcs. son o~ros l~lllto;-; ll\):-:Ll{'ulps qt\f: UV1Y"l retardar (.':';lfl (Jura dÚsic:.:a ¡ deseadu de tO(]\lS lo~ ~abio:-:. 1'í:r{l 1",)lI~ider:1tilhl que la~ dil:lcíon(>? han ~idu tlJ[Je~tH~ a la Flol'<l do Hq,r()l:l. qlH~ .Tarquín. la l"lora del PerÚ. la de :'¡ejieo, See. Haenk, Ilumboldr, ·1"'1l "rrebatndo Ill¡a parte de sus r:llllc1':1~: que su!=) mas bellos dpsclllJ('iIl~i('ntw"; bc,."J¡o,S PU ~P()l':l!i ¡Hui :1rH.erj(}rc~a las (.'~etlr~iolJ(o~ de <\lltléllos! l'tlcdnn hoi en (,trns lIlnu~)~~l1IU· ellas \-e~~('s c:-itrp{JPiH!o,S}H,1' la rljer(>za ¡ por la 1'1'eeípiL:\~i{)u ell' f-::tlS1'IlbJil\'ldore·;.:, ha l'\'t'ldo (,1 L'1¡(';¡rg'Hdu lie ];¡ ,'arte cielititit';l, con :)(,llt'l'dn llP :;;u~ ('(llauoradClrcs. llHt~ llada e~ lll:t:-, intd'l':-'alitt' Iple h p!'í\llt:l l¡l\l,li(':\ciolJ de lo:.: jl:~ nerus f]ue di.'\.l\'l1 COIlstlUl1r td ¡"l¡;pt.' }¡'r)(j(tlnc-q·,.,· !'n:JliJ·'IiJI)/S •• ' ~r' trata de n~c~ gurar lo~ jélll..!l'oS q\lt ..~ (: ,Il inde('llJ:l' ('(ll\starwi¡l hallÓ (.} iiIlSU'ó: ~1.Úti;-:., se t 1';11n, <le qw ..\ lus c:-;.rranj('ro¡.:¡ terminen su!-; e{J~)qui~ta:=; sob"e la Flora 0:0 BOg'orár f...:Ollqulsta:.; qlJe di:';11lilJilycn la gloria (le la naeÍoll i la de )1\íti:-:. AcordaudorHJs que ;.Vonu.:n !Jc>.ne(il:UJi~ tdpoté aon Jte('e.~·,~·I.O·¡'(J si~/lti¡¡<:an,s, arbitral'ium ideo d'li'i polesl. qlle el illlstro Liuneo n·tllvo los nOlllLJre~ de los prolllOVeu.Ol'es de la eiellcia~ i qlle rC'lijiosame!Jte consen'ú 1<>s d0 l,,~ bot:illícoo ilustres i J:.\¡orio~o:;. 1,('!Uos creídu qlle rodelllu~ iUlllOrlalizal' l(l~ Ilomorcs de los proteetol'('s de la Flor¡\ ,le BOg'ot", i de I(¡~'1"t: ¡"!ll :iYlldado a reeojcr SIlS luateria:lcs. ~J:w)n~n1:Jtlsat'emo~, j:llllU:-; (,oll~agr:\rr'HlO~ lIing'tilla plauta por in~ tf?'l'PS ¡ pOf .1dllJ..1cinTl. X IW:--tI'HS 1Jlall():-) 110 Cl'llir:l.tl jalll:t:5 lilll¡·(·ks a 1:'1 e~lhrzi.\ del pO(kro:=:;o sin llJúri~0: }aun·les que solo pel'teIlf:-(\t:ll al patril\1a i al ~:dJiCr, Esta r~vdacion ,.~ g'l':lta a los sabios emopeo", i la bot,'";''''' la lT\euídna. la economla. la:; arte>;, el go!Jieroo, la patria. val¡ a recojer los frllto~ de t;Ultos gasto~, de Wntos desvelos, de tantos "¡'ljes i de tan lar¡:a espera. Ya llegó ellllomento en <¡ue lc>s ell"ídiosOH ue la ¡;loria de .\fÚtis ('alleu : ya ne· harán esta pre¡rullta l. qué ha pu\¡lic~dl) 1¡útis'{ Ahora vcr;," que nna f('rall'k obra exije afio~. !1luuit.1cion. P\;!so. i mauurarso lentamente cu c:l silelldo del gahinete, Xo eo(,' el ln,:r¡to en f,mllar l'loras, no en hailar", al otro laú" del ocÓallo: cst~í. (lB í~)!'nl:1l'laghi0lt. f>n liO innnd;tr el n1UndD bot;~lllCO con jt~Ll rOH fill;:,:O~.e(!,.livo(~'ld"s, :lj¡>lI(l~.f'Il nu tOldar tr(>~ e.":'UHHbrc . ; l''::l,l1idCl:;por llUO, i :-.aC.'1rdo ~ll t:unilia. n:lt-llral a \lIla J!ramn. para ('olol..'arh t':J Ia:j Jl101Hll1ltl':1~.:1 Ll.l('ll'O hal)1;\1)(lo d,' J) .f{l~~; lOT,;';t,j{l I'omhn di{'t': .. Este )¡o!l11Jre Bill~.?::!lar con un~tjdll~ros¡dad ,:::i'n(-:it'~}li'1D. "d~rr~l1ll(, a Illanos lk~ll::l~ t.'l diuero i ~llS' Jib:, r:\~ida~L'.> iJ:1l":l qtie ;ro rcc:)rrie~e l:t par~c rncridinnal d(,1 vircirl:lto" .:\po.rnr ,una clCllcia Q,la~ 1\0 I'() r>rQf(~¡.;a. h8<JC1' ¡ras!.os Ú(' cc.lt1sid01':\ciotl sin esperanza de rul) Este libro fue Digitalizado Por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República,Colombia Hl:l r:'.ornpct¡:-;n, vcrífic;rlos dI..: la:..• dOlH::l1!:l, por in ~ttti{l} pvr la es raro. d¡~.:lrJ1().s ~w'>(jr. ,'.\I¡l'.1 i-J.Jt!\~ n(.'~t:tr(¡;;.. Ya lo J~e-dicho, i GUIJ\'it:llt: n~pctirln~ tPW J:!)l'\):"~. ¡n:"'~rilWI'!lto_:":. dj¡¡,-'ro~ ~O(lO C'U,Jlito POUlil t'~pi.?-rn~ \lB hijo d\..' nI} p:ulrl' j\-'I¡(:ro"u~ rCCII!i el..: ,..:!¡ zn:lno. llC'sp',H.'s de: ('í:lto ¿ nD :-lpra. jn~:iI q: .~.la plallta ]IJa.": h;:l~u de n~¡ CfJh.'{;{~iunli ...,yc el nowbrc de 1,(JJtlot:.ft? ¡, X() t~.'\ UIla dIJíi:::¡cioll ::-:n¡...:ratla t:~ n\('f~~l:Willll(,IJtO'! ¿:\o tiene 1111intl'rc~ g-r{1nci(: la patria r.'n honrar 1:\ "¡nlld j cu ::!rII"/rtalizHr n lU!1 eluUadau<J8 1:n;lIenH~rit()8'¡l ~.~.o es L~ l)~·ilI.:íT:i o\J1,:· 1.c¡on de \In ('sl'ritor }H·\.'~;.;nUll" h . .:; <1('{'iODl'::' jl..·IJerO~a~ 1 LlI~n:1:': !IV Juntar.":". l)i.'1 ,llil'!(,)L' Y;;';\:'lIi1kJa: •. E~ll.' cdn~() t·{'k::-i¡i7':~':('0.(:~h,,' \'irtulJso (, Hl\~trn\lf) patriot:), fu',: (-1 pri1l~r,!, Ú;,'-'.('l,HIlo dd C'f,::('l.ire ~[lí.ti~;, ¡ aY\\lk) a pDllcr los flll;,dn~ ¡'ú1' (.:i prrJC-fl.'~;t) pusll·ridad. :"J iDcnt(Js ·11~la le ohliF':" :t dcs;.rr:h't Flo!'a dI! HOu:'(d,l, td~)~ a {'l111l'.::;¡r i¡¡..; ¡;rr0i 11\\\3 ir· (.'l!col!·H,i:,ll·) 1;] mr.tlH\ I¡;i(..':', caraln:1l12:a. tan d:\k" ¡;ll{lll\~iJ 1l:l1111li.'L:·.-- !:¡;":TI:1Jil.": ¡~:.>:::¡¡¡, ;lltlj:-" 1),> 11. ('011 ¡t1('('~, ~f!ll (¡" 1\\1 ~l)hi:-:.: .. '~~¡"1\;(,.'(" ~;tlf\)ni>o j¡f)1ll1')"'; ¡!L. rt:t.'l!!'.<':{) d dI' 1(1:;: l';- '11It.'l"idfl. 1<''';\ll:~~~l.'i{~H de l'u.lti,;;I(f'!l!J, (!11t~ lWnJ'<'I:-;1I Estt., jr~\(:IJ, dC,'Hitl,,- F:r.Jl'<l,l':lra ,ir ::t \"'\Ida, (..'()1\tah"l~t('I~, "['11 <.,1 ('I'i::"::II:~O i l'l Hdt'\·":-...!a UlI l"!(,~vHd(l, li{' dl.:'J Ii:ll'rLi~JfI, El v~ ~\l l'adn~, d l'S L·"TCI:ld{,. i ¡,aH di~'ll;t d~" ;'1::-) \"¡r[~i.:,.,...~ La 1,,1::,:,l':[~!"-' ~:;...;!,·t~P:-flS la t'.~r:r!:: d¡'stino 1ll;'~ í l··!', 1;"II:;¡~:i~i ..; Cll 1:1~~('hfl,S :¡hil!nl~)[t:\l' dt',":Pilt·.-: 1 :1 ~;¡llt}¡lcal' Uli ('OI':lZfj!l 1::¡Litillitp:i ;d la lit!- d(! Bu- i f..~q~:n ..'t·oI1l1H?1l~.n :~,¡;g-rJl;í:-in ut:> 1 f1j¡llJltH'.4a estado <le Laber ~Hg'rad(), <1,f.'or:~_(¡lilr compla(-'D modf) ('ste í 1n uot.:.i.niea." {¡ido las lecc:íoll(..'H (¡'~:,p::t's de lwllt"r I'i.:currid() 1<1:-'('¡'r\?nllía~ o.e la C'apiwl! \~jsit() CUnHJ 1,ll\~;i¡Jj('l> l:ts !'J"fl\'itleins dd S',~"¡)rro, ~l(jl:1pll:-:~ CarUtj('n[\: í pusÚ a yef lo qlle p!'íld::('CH l()~ \)CI~qllt'':; de la isla do Cub::!, .1\ I arríLo de (:~(as C()~tíl':i ~llfhÚ un TlH\lfr:"jio el) <1lll' ~al\':J1l(l() la vida perdió la c(..• lect'i(>ll dc phmtas qne b~hia verificadu, En Cuba \'u!dÓ a f(Jrr¡¡;~r su llerl)nrio de las pl:tnras que l)Toduce C~a isl;1. f' ¡lizo I'l'Il¡j~¡(\t\(·~ lHll1H~n'."':i~5 U0 l'~qlld(,t(;s i :;olUiJIns :1.1célebre- CavaJiill('~. C('ltlO llin.;\·'II1' dd Ht·:¡J J~IJ'd>i, De> Clll!tl rl'gf(!-:.¡'J en lSO¡;. i towú a- BU dt,j ('t::I,I..trc ){líti¡.:.. p:l1:a tbrll's la últ.inla lJwno, 1 \'ar,;.!D In...; 1 l." d:::d:lrll .'-0, (':1 l'·.~i rk J:¡ i.:::(:t¡¡H~·¡(Jn 'j\\O lwgtJ de ~Il'; t;lfl:n3. d·:· ~t1.:3 t:.l.lentof:. de ~ll ,':¡)': :';,-;' ;llll;¡\'!¡' i d(' ;~\l amisl<..ll:, he (p.tcrido hOIlrJ.r su Hombre con el }5· llC-rfl qtH~ 'tlinra pllh\i(.',ww::,;,·l De LOZd'¡(); '. Vi p"i)!i('o cono,'(' bien las lucei!, los trub~jos literarios do esto luni!::'" de las ('it'l¡l_·ias,ll I[c a~i'\í las de ..;eripl'ioDCS (Jfr('(.':d:.~: df! ;':,11¡iiJ:::lrl~ ti,), i:-; I!l()ECU PEXTAXDRIA, L\lCXZt:EUA. (;enu8 lWL'1J8 ud Flora; }J":JfJteTtsis Prodromum perlillen,~. Mas. CAL. Pcrillll1d~w¡ mnnophylluffi, 5-partitull1; lnciníis pntenti3simia, liDe/lri- bU8 ae\\li~. Con. P"t:¡\c\ '" uvatn, a('11(:1. patelitis~imn, laeiniiR cnlycis duplo longiora et cjtl~ ¡¡"le¡ insertO!; alterna. Xl.'ctarillm receptnCtlIac'elltll, pent.agolJum, colorat'llIl. ~TA~1. Fila"!tli!'! [,, lll.'ctnrio inserta, coróllil·minora; aidJ¡r;rce didimre. !-'"minn. in lJW<Cll]Oflor".., ,e,l subt\lH "illnón,. C'l persistells.-COR. Gt in mnsc!1:(¡ jJora •.-I'IST. GC)'men rotllnullm, par\"lllll, bisulc·"ltnlll. Slyli 2. viilo~i,,¡'cvoll\ti. Stil~lmata obtns:¡.-PERlC. Nux bncCllta, oblonga, glabra, quadriltlctllarí8. terrasl'erma (Sill{oroeo M.útis). Species uniea. ~""rbor. Folla ovata; integerrima, alterna, apice acumínata. impAri f,inulIts. VIOTNlt~rmin31!.'~ eorirnbo-·ra"PlOo~i. in Me", pl'duncnli •. <'AL. Fl Este libro fue Digitalizado Por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República,Colombia -- 194- -et pedicellis villo3is, colorn~í~, bracteatis; bracteis ver\icillatill, linearibull, colorotis. Observatio 1: .!.liqunnao invenillntllr racemi hermaphroditi. Observatio 2: SempeT 2 vol 3 sel"i,,:! abortiva ut in caryocar. Habitat in temperatis hlljllS N. R. Grauatensis. Genus dieatum D. D. Eloi Valenzuela, qui primu9 discipulus D. Josepbi C. Mútis, in erectiono Expeditionis BlJLanicre fuitconsors et eolaboralor. ICOSAXDRA. MOXOGYNIA.. COXSlJEGRIA. Peri<Lnthium monophylulIl. coriacellffi. 2-gonnm, turbinatum, limbo ,fido. plano, patente, .1aeiniis laneeolatis, intus ¡;labris, cxtus tornentosis i persistens. STA}!:.Filamel1tn filiformill (12-14) fauci ealyeis inserto, et limbo breviora: antherre subrotundre, biloculares, villosre. p<>linealbo. PISTo Germen oblongnffi: styl!J.3 aliformis busi VillOSllS,stnrninnm longitudine: stigma pcuisiliforrne. PERIC. Cnpsula unilocularis, oblonga, villosa, calyce involuta. SEllES. Unicum, oblongum. (Francisco José de Caldas). Spedcs 2. Frutices: Folia alterna, allt impari pinnata: Flores racomosi, terminales. Observatio 1. Calyx in una anglllis echinatis, in alterna muticis. Observatio 2. Stamina in \lna 20-24, in altera 14-16, et ad lcosandram potius quam ad Dodeeandram adnUlDeramus. Roe gen\ls D. Sinphoroso Mútis eL Consnegra, qui Cinchonarum Histo· riam et Monographiam perfccit, absolvit, et Floram Bogotensem assiduo la· boro llt studio parat. PEXTA.NDRIA MONOGYNIA. C¿L. PO.lrBEA.. novum a.d CoUer,tionemQuitense:m atli=, et Florre Bo!Joten"U!genel'ibu-, a.dnu~randl.lm. C.\L. Perianthium monophyllum, snperum, 5-fidum i laciniis ovatis, acutia i GenUU8 persistens. Coa. Petala 5, obtusa, calyee longiora, decidua. SU3l. Filamento, 5. sllbulata, erecta: antherre oblongo, biloculares. PIST. Germen inferum: st¡¡lus cilindricus, staminibus paulo longior: stigm4 capitatum, dl.:pressum. P¡';RIC. Capsllla hemisf:.erica, calyce coronata, bilocularis, 2-valvis. SEXo Numerosa, minima, oblong-a, dÍ8sepimento afixa. Species una: Frute:r. Folía lanceolata, integerrima, alterna, glabra, apro:rimata: flores ra08lUia simplicibus, terminalibus, nutantibus. ROe GENUS 1,. ~um JOSEPHO IGNACIO PODO. allli>Ñ tt gratitudinis 8ignum, FranciM;w J08ephu.s de Cálda.! C01l$ecTcwit. 6." Dije en la pá.jina 114 que no habia mas Colejios en el Nuevo Reino que 108 de San Bartolomé i del Rosario en Bogotá, i el Seminario de PopaYlln. Debo agregar que tambien había Seminari08 en Cartajena, Quito ¡Panamá. 105 comalearecil)il.'TOUi¡u<llme<nte rllflJrmRS dehida~ :11!<ffin ~{lítí.• \. Este libro fue Digitalizado Por la Biblioteca Luis Ángel Arango del Banco de la República,Colombia