PAPEL DEL LABORATORIO EN LA VALORACIÓN DEL PACIENTE EN DIÁLISIS PERITONEAL CURSO DE FORMACIÓN CONTINUADA A DISTANCIA 2010-2011 TALLER DEL LABORATORIO CLÍNICO Nº 4 I.S.S.N.- 1988-7469 Título: Taller del Laboratorio Clínico Editor: Asociación Española de Biopatología Médica Maquetación: AEBM Fecha de Distribución: febrero 2011 Papel del laboratorio en la valoración del paciente en diálisis peritoneal Patricia Nogueira Salgueiro (1), Mercedes Lorenzo Medina (2). Ruth Martín Alfaro (2).- (1).- Residente cuarto año Análisis Clínicos, (2) Facultativa Especialista Análisis Clínicos. Sección bioquímica. Hospital Universitario de Gran Canaria Doctor Negrín. Las Palmas de Gran Canaria. 1. La Diálisis Peritoneal La diálisis peritoneal (DP) es una técnica que se utiliza para eliminar las sustancias tóxicas de la sangre, así como el exceso de líquido, cuando los riñones son incapaces de hacerlo debido a alguna alteración en su funcionamiento. La diálisis peritoneal consiste en un procedimiento en el que se infunde una solución de composición y osmolaridad conocida en la cavidad peritoneal a través de un catéter. Esta solución se deja un tiempo de permanencia, durante el cual el agua y los solutos pasan desde los capilares peritoneales al líquido de diálisis a través de la membrana biológica (peritoneo), para posteriormente drenar esta solución (Figura1). Este tratamiento sustitutivo de la función renal, permite prolongar la supervivencia del paciente y la calidad de vida, pero la diálisis en sí misma no cura ni corrige todas las alteraciones provocadas por la insuficiencia renal (1, 2, 3). 458 Figura 1. Mecanismo de la diálisis peritoneal 1.2 La membrana peritoneal Es una membrana serosa semipermeable, formada por tejido conjuntivo tapizado por una capa de células, que es lo que se conoce como mesotelio. La membrana peritoneal consta de dos capas, una que cubre la cara interna de la pared abdominal (peritoneo parietal) y otra capa que recubre las vísceras intraperitoneales (peritoneo visceral). El peritoneo recibe un flujo sanguíneo de 90-120 mL/min y tiene una superficie total aproximadamente de 1,7 a 2,1 m2. 1.3 Catéteres de diálisis peritoneal Para la realización de la diálisis peritoneal se necesita la implantación de un acceso o catéter permanente en la cavidad peritoneal (4). Este permite la entrada y salida del líquido de diálisis en concentraciones adecuadas. Además está diseñado para evitar una posible infección en el orificio de salida cutáneo. El más utilizado es un catéter flexible llamado Tenckhoff. 459 La colocación de este catéter se realiza por vía quirúrgica, en condiciones de asepsia, 1 mes antes del comienzo del tratamiento de la DP para que cicatrice la herida y para que el paciente realice el aprendizaje necesario. 2 . Fundamentos físicos Los principios físicos que se producen en la membrana peritoneal y que dan lugar al fenómeno de la diálisis son: - Difusión - Ultrafiltración - Convección 2.1 DIFUSIÓN Es un proceso que ocurre de forma espontánea, en el cual se produce un transporte de moléculas, a favor de gradiente de concentración, entre dos soluciones (sangre capilar y solución de diálisis) separadas por una membrana semipermeable (membrana peritoneal) hasta llegar a alcanzar el equilibrio (Figura 2). Factores que afectan a la difusión: gradientes de concentración, peso molecular, resistencia de la membrana. El proceso de difusión es muy importante, ya que a través de este mecanismo, se produce el intercambio de iones, sales y otros elementos en la membrana peritoneal. Mediante este proceso se elimina potasio y magnesio, y se produce la absorción o adicción de calcio a la sangre. En cambio la eliminación de sodio y cloro por difusión apenas existe, debido a que las concentraciones de estos iones tanto en plasma como en la solución de diálisis son muy similares. 460 Figura 2. Proceso de difusión peritoneal 2.2 ULTRAFILTRACIÓN Consiste en el movimiento en masa del agua a través de una membrana semipermeable (membrana peritoneal), debido al gradiente osmótico que se produce al introducir, en la solución de diálisis, un agente que es capaz de generar una diferencia de presiones a los dos lados de la membrana. Siendo la fuerza osmótica de un soluto mayor, cuanto menor sea su capacidad de atravesar la membrana peritoneal y, por lo tanto, mayor será su permanencia en la cavidad peritoneal. El agente osmótico más utilizado es la glucosa, que se puede usar como dextrosa monohidrato en disoluciones al 1.5%, 2.5% ó 4.25%. Por tanto, la presión osmótica que se produce es capaz de extraer el agua de la sangre y de los tejidos. El agua atravesará la membrana peritoneal hacia el dializado (5). Si no se añadiera un agente osmótico, una cantidad de la solución de diálisis sería absorbida, lo que produciría una sobrecarga de líquido en el paciente. Volumen de Ultrafiltración = Volumen Drenado - Volumen Infundido En el proceso de Ultrafiltración, principalmente se elimina agua, pero también un cierto contenido en electrolitos, destacando el ión sodio (Figura3). 461 Figura3. Ultrafiltración según la concentración de dextrosa monohidrato en la solución de diálisis 2.3 CONVECCIÓN Es un fenómeno de arrastre de solutos a través de la membrana por el movimiento del agua. Depende del coeficiente de permeabilidad para cada soluto. Así, vemos que tanto la difusión como la convección, facilitan el paso de sustancias desde el peritoneo al plasma y viceversa. 3. TIPOS DE DIALISIS PERITONEAL La elección del tipo de DP se hará de forma individualizada y deberá adaptarse a las características cinéticas de la membrana peritoneal y a las necesidades de ultrafiltración de cada paciente (6,7). 3.1 Diálisis peritoneal intermitente o aguda (DPI) Es realizada por una enfermera en una unidad de cuidados intensivos generalmente. La duración óptima es de 48-72 horas, ya que se debe usar en procesos agudos que esperamos solucionar con esta técnica. Se puede realizar de forma manual o con una cicladora. 3.2. Diálisis peritoneal continua ambulatoria (DPCA) Se realiza de forma manual. Es una diálisis continua, la sangre se limpia siempre que el líquido para diálisis está en al cavidad peritoneal, y ambulatoria porque se 462 desarrolla en el domicilio del paciente. El volumen empleado en cada intercambio suele ser de 2 litros y su permanencia durante el día es, generalmente, de 4-6 h y por la noche 8-10 h. La pauta de diálisis se individualiza según el paciente. 3.3 Diálisis peritoneal automatizada (DPA) Hace referencia al empleo de sistemas mecánicos (cicladoras). Esto permite programar una pauta de tratamiento (volumen total de líquido de diálisis, volumen de intercambio, tiempo de permanencia) según la dosis de la diálisis establecida. Las fases de drenaje, infusión y permanencia se realizan de forma automática, el paciente sólo tendrá que hacer la conexión y desconexión. En función del esquema de tratamiento establecido, la DPA ofrece 2 variantes, que son: Intermitente, donde existen períodos de tiempo en los que la cavidad peritoneal permanece sin líquido (diálisis seca), y Continua en la que siempre existe líquido en el peritoneo. 5. COMPLICACIONES DE LA DIÁLISIS PERITONEAL Las principales complicaciones de la Diálisis Peritoneal son (8): 5.1 Complicaciones infecciosas La peritonitis es la complicación más frecuente y grave de la diálisis peritoneal. Además, constituye la causa más común de la interrupción de la técnica. Su incidencia depende de la duración de la terapia, de su frecuencia, del tipo de catéter, del líquido de diálisis (si los tapones no están bien desinfectados o por una mala manipulación), del uso de una técnica aséptica rigurosa (por una mala desinfección de la zona con arrastre de gérmenes al peritoneo por la incisión) y de la presencia de infección en la cavidad abdominal o adyacente al catéter. 463 Los microorganismos responsables son a menudo los Gram positivos (S. epidermidis, S. aureus y estreptococos de origen cutáneo), mientras que los Gram negativos tienen una menor incidencia y suelen ser de origen digestivo. El diagnóstico se realiza cuando aparecen dos de los siguientes criterios: - Dolor abdominal (inflamación peritoneal). - Líquido de diálisis turbio con más de 100 leucocitos/µL, de los cuales más de un 50% deben ser polimorfonucleares (neutrófilos). - Cultivo positivo. 5.2 Complicaciones mecánicas o relacionadas con la pared abdominal Entre las complicaciones más frecuentes, se encuentran: - Hernias abdominales (20% en la zona de incisión quirúrgica para la colocación del catéter). - Edema escrotal o labial. - Fugas hacia el espacio pleural. Se manifiestan como derrame pleural, que suelen ceder con reposo peritoneal durante 1 mes. Si no ceden, se indicaría reparación quirúrgica. - Dolor de espalda (por presencia de la solución de diálisis en el tórax). - Dolor abdominal (durante la diálisis suele ser indicador de peritonitis). 5.4 Complicaciones metabólicas Entre las complicaciones más frecuentes, se encuentran: - Malnutrición proteica (La sufren del 22 al 55 % de pacientes). Durante el proceso de DP se va a producir principalmente una pérdida de proteínas y 464 aminoácidos, a través de la membrana peritoneal, de aproximadamente 9 g/día, pero puede ser mayor en caso de coexistir una peritonitis. Otra causa de esta desnutrición es el efecto irritante del dializante en el peritoneo y la distensión abdominal que este produce lo que podría causar sensación de plenitud y saciedad. Para valorar esta malnutrición proteica se utilizará la albúmina sérica que vendrá determinada por su grado de síntesis hepática, ingesta proteica, catabolismo proteico, distribución extravascular y pérdidas peritoneales (por causa de peritonitis, permeabilidad peritoneal alta y estancias largas de líquido peritoneal). Un problema de la albúmina es que no es útil para valorar los cambios recientes o en cortos períodos ya que su vida media es prolongada y cuando se detectan descensos en la albúmina plasmática ya existe una malnutrición grave y desde meses antes. Otras proteínas plasmáticas, como la transferrina y la prealbúmina han demostrado ser índices fiables ya que tienen una vida media muy corta y reflejan los cambios recientes en el estado de nutrición. Uno de los inconvenientes de la transferrina es que en los pacientes en diálisis peritoneal refleja simplemente el estado de los depósitos de hierro y especialmente tras el uso de la eritropoyetina. Por todo ello es muy importante el tratamiento dietético en estos pacientes, ya que si la ingesta de proteínas es la adecuada se minimiza la presencia de hipoalbuminemia. La malnutrición es uno de los principales condicionantes de morbilidad y mortalidad en pacientes en DP, los requerimientos nutricionales van a consistir en una ingesta 465 calórica de 35 Kcal/Kg/día formada por: hidratos de carbono 50-60%, lípidos 30%, proteínas 10-15%. - Hiperglucemia: es la complicación metabólica más frecuente de la diálisis peritoneal. La morbilidad y la mortalidad son más altas en los pacientes diabéticos que en los que no lo son, siendo las causas principales de mortalidad las enfermedades cardiovasculares y las infecciones. Durante la diálisis, a través del peritoneo se absorben aproximadamente entre 100-200 gramos de dextrosa diaria, que procede de la solución de diálisis. Esta sobrecarga de glucosa produce el agotamiento de las células pancreáticas secretoras de insulina, por lo que se produce un estado de hiperglucemia en el paciente. De ahí que en estos pacientes, haya que prestar una especial atención en el control de las glucemias, sobre todo en los pacientes diabéticos. Además, en presencia de peritonitis, la absorción de glucosa aumenta, provocando así una situación de hiperglucemia manifiesta, incluso en ausencia de diabetes. En estos pacientes se debería controlar los niveles de glucosa, hemoglobina glicosilada e insulina. -Obesidad. En los pacientes de DP, se puede observar frecuentemente una ganancia de peso significativa, debido a la sobrecarga de glucosa crónica intraperitoneal. Después de 5 años, el paciente sometido a DP puede llegar a aumentar en un 20% su peso corporal. -Hiperlipemia. La pérdida de proteínas en DP hace que aumente la síntesis hepáticas de proteínas para compensar estas pérdida de albúmina produciendo que se sinteticen también toda clase de proteínas dentro de las cuales estará las lipoproteínas, por lo tanto se producirá un aumento del colesterol total y del c-LDL, 466 además de todo ello la exposición continua de glucosa del dializado va a conllevar un hiperinsulinismo por estimulación continua del páncreas y aumento de resistencias periféricas a la insulina, lo que va a inducir la lipogénesis aumentando la secrección de VLDL. También vamos a encontrar hipertrigliceridemia producida por una disminución de la actividad del enzima lipoproteinlipasa y de la lipasa hepática (9). -Alcalosis y acidosis metabólicas. En insuficiencia renal crónica suele haber acidosis metabólica debido a la carga de hidrogeniones que se produce por el catabolismo de las proteínas, mientras que si acontece diarrea o vómitos se produce deshidratación con contracción del volumen extracelular que, a su vez, conduce a alcalosis metabólica. -Pérdidas de micronutrientes: vitaminas hidrosolubles (C, B1, B6, fólico) y minerales (zinc), estos son debidos a la pobre ingesta, cuantitativa y/o cualitativa de alimentos y a las pérdidas por diálisis. 6. ALTERACIONES ANALITICAS 6.1 Metabolismo fósforo- calcio 6.1.1 Fósforo: El 85% del contenido total del fósforo en el organismo se encuentra combinado con el calcio del tejido óseo y el resto se encuentra dentro de las células. Está regulado por la hormona paratiroidea (PTH), la cual controla su excreción renal, por la vitamina D que regula la absorción intestinal y la liberación de este a nivel óseo y por la función renal que regula su eliminación. 467 Existe una gran correlación entre el contenido de proteínas y fósforo de la dieta, así se ha visto que la ingesta de 1g/Kg/día de proteínas supone un aporte de 1047± 37 mg/día de fósforo. La retención de fósforo comienza a producirse cuando la función glomerular disminuye a 20-25 mL/min, es este uno de los factores fundamentales en el desarrollo del hiperparatiroidismo secundario, así en los pacientes con IRC y diálisis se debe reducir la ingesta proteica para evitar la hiperfosfatemia, pero siempre teniendo en cuenta que estos pacientes necesitan un aporte adecuado de proteínas para evitar un grado de desnutrición debido a la pérdida de estas a través del dializado. 6.1.2 Calcio El calcio es el segundo catión intracelular más predominante, es el mensajero inorgánico más importante en la célula. La absorción gastrointestinal de calcio en los pacientes en diálisis peritoneal depende de diferentes factores, como el grado de uremia, la duración de la enfermedad renal en fase terminal, el fósforo sérico, la hormona paratiroidea, la vitamina D3 y la ingesta de calcio. El 40% del calcio plasmático se encuentra unido a proteínas, principalmente la albúmina y ésta unión es pH dependiente. El calcio ionizado del plasma (calcio libre) se considera la fracción fisiológica del calcio, la fracción difusible y la que participa en el intercambio de DP. La hipocalcemia es frecuente en pacientes en diálisis peritoneal por el déficit de vitamina D3 aunque también podemos encontrar hipercalcemia por la administración de suplementos de calcio, por soluciones de diálisis con altas concentraciones de calcio y vitamina D3. 468 El exceso de calcio es contraproducente en los pacientes con IRC en diálisis pues se deposita en los tejidos blandos extraóseos, vasos, válvulas cardiacas, etc., favoreciendo la enfermedad cardiovascular. 6.1.3 Hormona paratiroidea (PTH) La PTH es una hormona peptídica de 84 aminoácidos. Es secretada por las glándulas paratiroides, en respuesta principalmente a los niveles de fósforo sérico y del calcio iónico. Su acción es incrementar los niveles séricos de calcio, favoreciendo la reabsorción osteoclástica de calcio del hueso, en el túbulo renal y la absorción intestinal. A nivel intestinal aumenta también la absorción intestinal de fósforo y aumenta la pérdida renal de fosfatos. El hiperparatiroidismo secundario es una complicación frecuente de la IRC y se caracteriza por un incremento en la síntesis de PTH que aparece aún antes de que se inicie la diálisis. Los factores responsables para su desarrollo son: hiperfosforemia e hipocalcemia, niveles séricos bajos de vitamina D3, hiperplasia paratiroidea, resistencia esquelética a la acción de la PTH, acidosis. Este se puede evitar debido a que hoy en día existen líquidos de diálisis con concentraciones de calcio. La absorción de calcio desde el líquido peritoneal permitiría alcanzar niveles normales de calcio en plasma y con el uso de quelantes de fósforo evitaríamos la hiperfosfatemia, con todo ello conseguiríamos disminuir la producción de hormoma paratiroidea (PTH) o incluso suprimirla. Esto podría llevar al paciente a desarrollar una enfermedad ósea adinámica, debido a que el hueso del paciente con IRC muestra una resistencia a la acción remodeladora de la PTH sobre el hueso y está ajustado para trabajar con niveles altos de la misma, cuando esta se 469 encuentra en niveles normales se produce un bajo remodelado, dando lugar a un defecto en la formación de la matriz y en la mineralización ósea. 6.1.4 Vitamina D3 (1-25 dihidroxi-vitmaina D3 , calcitriol) La vitamina D3 se obtiene de la dieta y por acción de los rayos ultravioletas, debe de sufrir una serie de transformaciones metabólicas en el hígado y riñón antes de ser biológicamente activas. Sus principales acciones son incrementar la absorción intestinal de calcio y de fósforo, la reabsorción de calcio a nivel renal, liberación de calcio y fósforo a nivel óseo y regular la secreción de PTH. El mantenimiento de niveles adecuados de calcio y fósforo normaliza la PTH y evitan la necesidad del uso de vitamina D. En estos pacientes existe un déficit de vitamina D3 por defectos en la metabolización a nivel renal. 6.2 Trastornos electrolíticos 6.2.1 Sodio El sodio es el principal catión extracelular del cuerpo humano y se excreta sobre todo por los riñones. La hiponatremia acompaña con frecuencia a la hiperglucemia grave en los pacientes diabéticos en diálisis debido al paso osmótico de agua desde el compartimento intracelular al extracelular. Debido a que no se produce la diuresis osmótica secundaria a la hiperglucemia el exceso de agua plasmática no se excreta y la hiponatremia se mantiene. También es producida por la depleción intracelular severa de potasio y fosfatos con paso de agua al espacio extracelular en el curso de estados hipercatabólicos. Puede producirse hipernatremia durante la diálisis cuando se utilizan recambios de corta 470 permanencia y dextrosa elevada, para intentar eliminar una gran cantidad de líquido, lo que conlleva a una mayor ultrafiltración de agua que de sodio. 6.2.2 Potasio El potasio es el principal catión intracelular del cuerpo. La regulación precisa de su concentración es de extrema importancia para el metabolismo celular y se controla sobre todo por medios renales. La hipopotasemia puede aparecer en aquellos pacientes que se someten a diálisis peritoneal con un potasio normal, esta se produce por la absorción de glucosa procedente de las bolsas de diálisis (aumento de la liberación de insulina) y por la presencia de acidosis asociada a esta diálisis lo que provocaría la entrada del potasio hacia el interior de las células, disminuyendo por lo tanto su nivel plasmático. La hiperpotasemia aguda es más frecuente en pacientes que han dejado de dializarse durante unos días, su forma crónica es poco frecuente en pacientes sometidos a diálisis peritoneal debido a la absorción de glucosa. 6.2.3 Magnesio El magnesio es un catión intracelular y cofactor enzimático importante. La hipermagnesemia es frecuente en los pacientes en diálisis peritoneal, y es debido al balance positivo como resultado de la insuficiencia renal y la relativa alta concentración en el líquido de diálisis. Se ha descrito que existe una relación inversa entre las concentraciones de magnesio y los niveles de PTH, sugiriéndose la posibilidad de que la hipermagnesemia suprime la secreción de PTH y por tanto puede contribuir al desarrollo de la enfermedad ósea adinámica frecuente en estos pacientes. La hipomagnesemia ocurre principalmente en pacientes malnutridos. 471 6.3 Alteraciones hematológicas 6.3.1 Anemia La anemia es frecuente en pacientes sometidos a DP es consecuencia de un déficit en la producción de eritropoyetina, siendo este el regulador primario de la producción de eritrocitos, es una anemia hipoproliferativa, normocrómica y normocítica, con cifras bajas de reticulocitos. La causa secundaria de anemia en estos pacientes es el déficit de hierro por pérdidas gastrointestinales. 6.3.2 Alteraciones en la coagulación Se encuentra en estos pacientes un grado de hiperagregabilidad plaquetario relacionado con la hipoalbuminemia, a través de un mecanismo parecido al que ocurre en el síndrome nefrótico, esto es debido a que la albúmina transporta ácido araquidónico necesario para la producción de tromboxano, el cual se relaciona con la actividad plaquetaria. Por lo tanto si hay hipoalbuminemia hay mayor cantidad de ácido araquidónico disponible para la síntesis de tromboxano con la consecuente hiperactividad plaquetaria con tendencia a la hipercoagulabilidad (10). Las alteraciones de la coagulación que podemos encontrar son: hiperfibrinogenemia, actividad elevada de factores II, VII, VIII, IX, X, XII, altas concentraciones de proteína S, y niveles normales de antitrombina III y proteína C, por todo ello los pacientes sometidos a diálisis peritoneal tienen mayor tendencia a la hipercoagulabilidad (síntesis cooperativa hepática en respuesta a las pérdida de proteínas). 472 6.4 Cambios en la volemia Los trastornos relacionados con el balance de líquidos, como la hipovolemia y/o la hipervolemia, pueden aparecer en los pacientes que reciben DP. La hipervolemia se produce por una sobrecarga vascular debida a que el balance entre las entradas y la salida es positivo. El balance debe de ser siempre negativo, que salga o drene más del líquido que entra, se debe de tener en cuenta también el volumen de orina en las 24 horas, de manera que la suma de ambos elimine el exceso de líquidos que le sobra al cuerpo. El balance positivo se manifiesta por aumento de peso, presencia de edemas de partes blandas y aumento de la tensión arterial, ultrafiltración escasa, llegándose a hiponatremia sólo en el caso de que el cuadro clínico evolucione a un estado de anasarca. La hipovolemia se produce por ultrafiltración excesiva o en el contexto de un cuadro clínico de diarreas y vómitos. Suele manifestarse por un descenso de la presión arterial, sed intensa, cansancio, calambres y datos de hemoconcentración (como elevación del hematocrito, de las proteínas plasmáticas y del ácido úrico), junto a una alteración en la concentración de sodio en plasma; si la deshidratación es hipertónica, el sodio se eleva, mientras que si se pierde más sodio que agua (hipotónica) el sodio disminuye. En el caso de la hipovolemia, debida a una diálisis peritoneal aguda, se recomiendan actuaciones del tipo de modificar la pauta de diálisis o aumentar la ingesta de agua y sal. En el caso de una situación de hipervolemia, se recomienda incrementar la concentración de dextrosa en la solución de diálisis. Si la situación persiste, habría 473 que sospechar un trastorno de ultrafiltración de la membrana peritoneal o un incumplimiento, por parte del paciente, de una ingesta masiva de líquidos y sal. 7. Soluciones de Diálisis Las soluciones de Diálisis Peritoneal contienen agua, agentes osmóticos, tampones y electrolitos (11). 7.1 Agentes osmóticos: El poder osmótico de estos agentes va a depender del número total de moléculas osmóticamente activas en la solución. Las de bajo peso molecular tienen un gran poder osmótico, pero atraviesan la membrana peritoneal con gran rapidez, por lo que se deben utilizar en períodos de tiempo más cortos, para conseguir una mayor ultrafiltración. Las de elevado peso molecular retinen más agua. Los principales agentes osmóticos son: - Glucosa: Existen bolsas de diálisis con diferentes concentraciones. Estas soluciones tienen el inconveniente de que la glucosa se absorbe fácilmente, conduciendo a una baja ultrafiltración y a complicaciones metabólicas severas (hiperinsulinemia, hiperglucemia, hiperlipemia y ganancia de peso). Además, la glucosa afecta a los mecanismos de defensa peritoneal por inhibición de la fagocitosis y de la actividad bactericida. - Aminoácidos: Consiste en una solución de aminoácidos esenciales y no esenciales. Se recomienda su utilización en pacientes diabéticos, malnutridos o en aquellos con peritonitis recurrentes; así se minimizarían las elevadas pérdidas diarias de proteínas que se producen en la DP. 474 - Icodextrina: Es un polímero de la glucosa que produce una ultrafiltración mantenida durante un largo periodo de tiempo. Se utiliza en pacientes con sobrecarga de fluidos y baja ultrafiltración peritoneal. 7.2 Electrolitos en las soluciones - Sodio: Las concentraciones de sodio en las soluciones de DP varían entre 130-137 mmol/L. Las eliminación de sodio plasmático es por difusión y depende de la concentración del agente osmolar y de la ultrafiltración. Una concentración baja de sodio en las soluciones previenen las hipernatremias. - Calcio: La solución de DP contiene 1.25, 1.35 ó 1.75 mmol/L de calcio. La concentración de calcio iónico de esta solución es mayor que la de la sangre. Por lo tanto se favorece la difusión de calcio del dializado a la sangre, provocando hipercalcemia, favorecida esta última también por el uso de quelantes del fósforo con calcio. Para evitar todo esto se pueden usar soluciones con sólo 0.625 mmol/L. - Magnesio: Las soluciones contienen entre 0,25 y 0.75 mmol/L. Esta última puede producir hipermagnesemia, que disminuirá en nivel de PTH, empeorando la enfermedad ósea. 7.3 Tampones de las soluciones - Tampón acetato: Controla la acidosis en la DP, pero puede causar dolor abdominal en el momento de la infusión, además de pérdida de ultrafiltración y peritonitis esclerosante. - Tampón lactato: Se utiliza en concentraciones de 35 y 40 mmol/L, pero también se asocia con dolor y encefalopatía por absorción excesiva. - Tampón bicarbonato: Se encuentra disponible en concentraciones de 34 y 40 mmol/L, corrigiendo la acidosis de una forma más fisiológica. 475 7.4 Interferencias analíticas por las soluciones de diálisis Diversos estudios han mostrado que la administración de líquidos de DP conteniendo icodextrina produce interferencias con ensayos específicos para la determinación de la glucosa y la amilasa sérica. La icodextrina interfiere en los ensayos de glucosa al utilizar métodos basados en pirroloquinolinaquinono deshidrogenasa (GDH PQQ) dando una sobreestimación de los niveles de glucosa. Cada cadena de sacáridos generada por el metabolismo de la icodextrina tiene un grupo reductor libre de glucosa localizado al final, esto puede reaccionar con la GDH PQQ en el kit de ensayo produciendo unas lecturas de glucosa falsamente elevadas(12). El uso de disoluciones con icodrextrina produce un descenso (70 a 90%) en la amilasa sérica. Debido a que la icodextrina actúa como un inhibidor competitivo en el ensayo de la actividad de la amilasa, ya que los oligosacáridos utilizados normalmente en el ensayo de la amilasa y la icodextrina, tienen ambos idénticos enlaces de 1,4-alfa glucosídico. Se recomienda en estos casos la utilización de la lipasa sérica para el diagnóstico de la pancreatitis, ya que la icodextrina no interfiere en este ensayo (13). 8. VALORACION DEL PACIENTE EN DP (12, 13, 14, 15 ) 8.1 Monitorización clínica Se le realizará una exploración física controlando su función cardiopulmonar, el estado de hidratación y el orificio de salida del catéter. Si el paciente está deshidratado se reducirá el número de intercambios y se usarán soluciones con bajas concentraciones de dextrosa, y deberá recomendarse la ingesta 476 de sodio y agua. La hiperhidratación se corregirá incrementando la frecuencia de los intercambios y aumentando la concentración de las soluciones. Se le realizará un electrocardiograma, ecografía abdominal, RX tórax y electromiograma de forma anual. 8.2 Analítica de control Los pacientes que están en tratamiento con DP, debido a las complicaciones que pueden sufrir por la propia DP, y a las alteraciones debidas a la enfermedad renal crónica (ERC) deben ser monitorizados con controles analíticos que incluyan, al menos bimensualmente, un hemograma, y concentraciones plasmáticas de urea, creatinina, electrolitos, calcio, fósforo, proteínas y glucosa. Si queremos realizar un control más completo del paciente debemos incluir la determinación de Hb A1c, transaminasas, CK, GGT, ALP. Patrón de hierro (hierro, transferrina, ferritina, índice de saturación de transferína (IST), la capacidad total de fijación del hierro (TIBC) y hemograma para evaluar la anemia de estos pacientes producida principalmente por la carencia relativa de eritropoyetina (EPO). Se determinará la hormona paratiroidea (PTH) debido a la alta prevalencia de hiperparatiroidismo secundario a la hipocalcemia y a la disminución de niveles circulantes de calcitriol. Se debe también realizar bimensualmente una analítica de orina de 24 horas que incluya glucosa, urea, creatinina, iones, calcio, fósforo, proteínas y magnesio, y que nos permitirá valorar la función renal residual. 477 Una vez al año se debe realizar la determinación de insulina y un estudio completo de lípidos (colesterol, triglicéridos, HDL, LDL, Apo A1 y Apo B), de nutrición (albúmina, prealbumina) y un estudio inmunológico (inmunoglobulinas, C3, C4). También se aconseja la realización de niveles de proteína C reactiva (PCR) la cual es un predictor de mortalidad en los pacientes en DP, además nos ayudará para el diagnóstico temprano de signos de daño en tejidos y de inflamación asintomática (14). Se realizará una serología que incluirá: citomegalovirus (CMV), virus de hepatitis C y B, virus de la inmunodeficiencia humana adquirida (VIH), virus de Epstein Barr (VEB), virus de varicela Zoster (VVZ), anticuerpos diagnósticos para la sífilis (VDRL y FTA). También es recomendable la determinación del CA-125 como marcador de lesión peritoneal, para indicar aquellos pacientes que precisen un reposo o cese de la diálisis peritoneal por daño mesotelial (15). 8.3 Valoración del peritoneo = Test de equilibrio peritoneal (TEP) Es una prueba diagnóstica ideada por Twardowski (16), basada en la relación de concentración dializado/plasma (D/P) de un soluto durante un intercambio peritoneal y en la medida del volumen drenado en un período de tiempo fijado. El TEP permite la clasificación funcional de la membrana peritoneal y la evaluación de la adecuación de la diálisis. Esta clasificación, según la membrana peritoneal, sería: 478 Clasificación *D/P creatinina Volumen drenado Aclaramiento de transportador 4horas (mL) solutos (Diálisis) Tipo de diálisis (Ultrafiltración) BAJO 0,49-0,34 Alto Inadecuada DP a dosis altas /HD Adecuada DPCA/DPA a dosis altas Elevado DPCA/DPA estándar Ideal DPA 2651-3326 mL (Excelente) MEDIO-BAJO 0,64-0,50 Medio-Alto 2369-2650 mL (Buena) MEDIO-ALTO 0,81-0,65 Bajo-Medio 2085-2368 mL (Adecuada) ALTO 1,03-0,82 Bajo 1580-2084 mL (Insuficiente) *D/P creatinina 4 horas =cociente entre los niveles de creatinina en el líquido de drenaje y en el plasma a las 4 horas del TEP. Lo deseable sería que los pacientes tuvieran un peritoneo transportador medio, para así poder eliminar una cantidad suficiente de solutos y, a su vez, poder realizar una adecuada ultrafiltración para drenar el agua necesaria. Por este motivo, la membrana peritoneal tiene que ser evaluada al cabo de un tiempo para detectar cambios en su funcionalidad, ya sean debidos a procesos agudos (peritonitis) o crónicos (esclerosis peritoneal, exposición a los líquidos de diálisis), pudiendo así diagnosticar problemas de ultrafiltración, y tomar decisiones terapéuticas como: cambiar el tipo de diálisis, aumentar el porcentaje de líquidos hipertónicos, e incluso llegar, si la diálisis es inadecuada, a la hemodiálisis. Los altos transportadores están relacionados con una alta mortalidad, debido a la pérdida de 479 gran cantidad de proteínas en el dializado, a la reabsorción de glucosa, a la pérdida de ultrafiltración y a la sobrehidratación (17,18). 8.3.1 Procedimiento de realización del TEP completo La noche previa del TEP se hará un intercambio con glucosa con una permanencia de 8-12 horas. El día de la prueba se drena el líquido del día anterior y se anota el volumen drenado. A continuación se infunden 2 litros de una solución de glucosa en un periodo de 10 minutos, y se van extrayendo muestras del líquido drenado para analizarlas a distintos tiempos. Tiempo cero, que es cuando finalizamos la infusión, y a los 30, 60, 120, 180 y 240 minutos. A las 4 horas tras finalizar la infusión, se drena completamente el líquido de diálisis, esta muestra también se analiza, y se anota el volumen, sumándole las cantidades extraídas para las muestras en los distintos tiempos. Para completar el estudio se realizan dos extracciones sanguíneas, una previa al inicio del TEP, y otra al finalizarlo. En todas las muestras tanto de los líquidos como de sangre se determinan glucosa, urea, creatinina, proteína, sodio y potasio; y para un estudio más completo se determinarían calcio, fósforo y úrico. 8.4 Función Renal Residual La preservación de la función residual (FRR) es la actividad renal que persiste tras el inicio de un tratamiento con diálisis, esta es muy importante para mantener al paciente con buen estadio clínico, al inicio del tratamiento dialítico, y contribuye en un 30-50% del aclaramiento total de agua y solutos. Se recomienda la no utilización de fármacos nefrotóxicos, limitar las soluciones hipertónicas y se utilizarán fármacos 480 inhibidores de la enzima de conversión ya que protegen al riñón y frenan la caída de la FRR (19). 8.5 Valoración de la adecuación de la diálisis Kt/V. El cálculo del Kt/V se basa en la cinética de la urea. Es una medida de la cantidad de plasma aclarado de urea (K x t) dividido por el volumen de distribución de la urea (V), en relación con la superficie corporal del paciente. Es un indicador de calidad de la diálisis y nos permite saber si la pauta del esquema de diálisis es la correcta. Se asocia clínica y estadísticamente con la supervivencia del paciente. El aclaramiento se calcula basándose en la cantidad de soluto eliminado en el dializado corregido por su nivel plasmático (20). Se expresa en litros (L)/días, litros (L) /semana. Desde el punto de vista clínico las mediciones del aclaramiento se centran en la urea o la creatinina por su bajo peso molecular. El objetivo es conocer la función peritoneal y la función renal residual. Las ecuaciones del Kt/V y del aclaramiento de urea son : Cl urea peritoneal/24 horas = (urea en dializado / urea sérica) x Volumen drenado Cl Urea total semanal=(C urea peritoneal/24h+ C urea renal residual/24h) x7 Kt/V semanal= C urea total semanal /V* x SC* *Cl: aclaramiento *V: volumen de distribución de la urea *SC: superficie corporal del paciente 481 Cl Cr peritoneal /24 horas = (creatinina en dializado /creatinia sérica) x Volumen drenado ClCr total semanal =(ClCr peritoneal /24 h + ClCr renal residual /24 h)x 7 x SC *ClCr: aclaramiento de creatinina El Kt/V de urea es la medida clave tanto al inicio de la DP como en el seguimiento de la función renal. Puede haber discrepancias entre el Kt/V total y el ClCr total, pero se debe utilizar el Kt/V porque es más reproducible, es independiente de factores como la secreción tubular de creatinina y se relaciona directamente con el catabolismo proteico. Aclaramiento de creatinina Kt/V (semanal) Recomendación (L/semanal/1.73m2) <49 <1,7 Precaución 50-59 1,7-1,89 Límite 60-69 1,9-2,09 Aceptable >70 >2,09 Buena Figura 4. Valores orientativos de una adecuada DP 9.Ventajas e Inconvenientes de la Diálisis Peritoneal (21) 9.1 Ventajas de la DP Evita la necesidad de acceso vascular, evitando así sucesivas venopunciones Cambios hemodinámicos más graduales No se necesita el uso de anticoagulantes 482 Proporciona una terapia continua que se asemeja más a la función natural de los riñones No es necesario acudir a la unidad de diálisis para recibir el tratamiento Terapia fácil de realizar mientras se viaja Se puede realizar mientras se duerme (DPA) Mantiene más tiempo la función renal residual Menor necesidad de utilización de Eritropoyetina (EPO) Mejor control de la hipertensión arterial Bajo riesgo de Hepatitis C Permite una dieta más libre 9.2 Inconvenientes de la DP Lenta difusión de sustancias tóxicas, por lo que no es adecuada cuando se necesite una rápida extracción de dichas sustancias o de líquido. Desnutrición proteica Hiperglucemia con el consiguiente desarrollo de diabetes Es preciso que el paciente o algún familiar se responsabilicen del tratamiento Posibles ganancias de peso Catéter permanente Episodios frecuentes de peritonitis 10. Conclusión El objetivo por lo tanto de la diálisis peritoneal será conseguir una dosis adecuada de depuración de urea y un balance adecuado de fluidos. La dosis mínima de diálisis peritoneal administrada debe conseguir un: Kt/V de urea > 1.7 por semana y un aclaramiento de creatinina de al menos 50L/sem/1.73 m2. 483 El objetivo mínimo recomendables de ultrafiltración peritoneal neta es de 1,0 L/día (25). Estos objetivos deben individualizarse para cada paciente para lograr una buena calidad de vida, y se considerarán suficientes siempre y cuando el paciente no presente signos de infradiálisis ni de hiperhidratación. El laboratorio jugará un papel importante a la hora de la monitorización del paciente en DP conociendo las variaciones que sufren los parámetros analíticos y ayudando a la buena realización e interpretación de los diferentes estudios de calidad de DP como son el test de equilibrio peritoneal (TEP) o el Kt/V. 484 Bibliografía 1. Clinical Practice Guidelines for Peritoneal Dialysis Adequancy. AJKD 2006;48:98129. 2. Ellam T, Wilkie M. Peritoneal Dialysis. Medicine 2007;35:466-69. 3. Taltersalls J. When to start Dialysis: theory, evidence, and guidelines.Peritoneal Dialysis Today. Contrib Nephrol 2003;140:176-86. 4. Flanigan M and Gokal R. Peritoneal catheters and exit-site practices Howard optimum peritoneal acces: A review of current developments. Perit Dial Int 2005;25:132-39. 5. Bellavia S, Coche E, Eric Goffin. Exploration d’une perte d’ultrafiltration en dialyse péritonéale.Néphrolm 2008; 4:590-96. 6. Mooney A. Decision Making around Dialysis Options.Contrib Nephrol 2009:257260. 7. 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