Nota Completa

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La CINIF, dio a conocer la emisión de la nueva Norma de Información Financiera D-3.
Más Beneficios para un Mejor Desempeño
Por: Alfredo Villas
El pasado 28 de agosto de 2007, el Consejo Mexicano para la Investigación y Desarrollo de
Normas de Información Financiera, A.C. (CINIF), dio a conocer la emisión de la nueva Norma
de Información Financiera D-3 (NIF D-3) “Beneficios a los Empleados”.
Esta norma entró en vigor a partir del 1 de enero de 2008 sustituyendo al Boletín D-3
“Obligaciones Laborales”, y tiene como objetivo establecer las normas para el reconocimiento
contable de los beneficios que las compañías otorgan a sus empleados.
Es importante señalar que dicha norma debe ser aplicada por toda compañía o entidad que
emita estados financieros y que devenga obligaciones por otorgar beneficios a sus empleados.
Después de analizar profundamente la norma estamos convencidos de que ésta tendrá un
impacto significativo en la planeación financiera de las compañías, ya que su principal objetivo
es reconocer aceleradamente el pasivo generado por el otorgamiento de beneficios a los
empleados.
Uno de los principales cambios en relación con el Boletín D-3 es la incorporación del
tratamiento contable de la Participación de los Trabajadores en las Utilidades (PTU),
anteriormente contemplado en el Boletín D-4.
De acuerdo con la norma, los beneficios a los empleados se clasifican en:
•
•
•
•
Beneficios Directos a Corto Plazo
Beneficios Directos a Largo Plazo
Beneficios por Terminación
Beneficios al Retiro
A continuación se presenta una breve descripción de cada uno de ellos, así como el impacto
que trae consigo la entrada en vigor de la norma.
A.
Beneficios Directos a Corto Plazo
Este tipo de beneficios comprende a las remuneraciones que se pagan regularmente a los
empleados, como son sueldos y salarios, tiempo extra, destajos, comisiones, premios,
gratificaciones anuales, vacaciones y primas sobre las mismas, así como la PTU.
La característica principal de estas remuneraciones es que el pago a los empleados se realiza
durante los 12 meses siguientes al término del periodo contable.
La cuantificación de estos beneficios debe hacerse en proporción a los servicios prestados por
los empleados en el período contable con base en los sueldos que perciben actualmente y el
pasivo correspondiente debe reconocerse conforme se vaya devengando, enviando sus
efectos a los resultados ordinarios del periodo.
B.
Beneficios Directos a Largo Plazo
Entre los beneficios de este tipo que señala la norma, el más común para las compañías sería
el otorgado en caso de invalidez temporal o permanente del empleado; siempre y cuando este
riesgo no haya sido transferido a una compañía de seguros.
A diferencia de los beneficios directos a corto plazo, la característica principal de este tipo de
beneficios es que el pago a los empleados se realiza a partir de los 12 meses siguientes al
cierre del periodo contable.
La cuantificación del pasivo por estos beneficios se efectúa mediante la aplicación de cálculo
actuarial para obtener lo que se conoce como Obligación por Beneficios Definidos (OBD), que
representa el valor presente actuarial de los beneficios, calculado con base en los años de
servicio de los empleados a la fecha de cálculo y proyectando los salarios hasta la edad de
retiro.
En cuanto al reconocimiento de este pasivo en los estados financieros, el objetivo de la norma
es que en cada periodo contable siempre se tenga reconocida la OBD, eliminando la
posibilidad de cualquier reconocimiento diferido.
C.
Beneficios por Terminación
Los beneficios por terminación, como su nombre lo indica, son aquéllos que se pagan al
término de la relación laboral cuando ésta se da antes de que el empleado alcance la edad de
retiro.
En este sentido, las compañías tienen la obligación de reconocer el pasivo por los siguientes
beneficios:
•
•
Indemnizaciones por despido que no sean consecuencia de una reestructuración
Prima de antigüedad por muerte, invalidez, despido y separación voluntaria
La cuantificación del pasivo por estos beneficios también se efectúa mediante la aplicación de
cálculo actuarial para obtener la OBD.
De la misma forma que en el caso de los beneficios directos a largo plazo, el objetivo es tener
reconocida en cada período contable la OBD, eliminando la posibilidad de cualquier
reconocimiento diferido. Cabe señalar que el reconocimiento del pasivo por estos beneficios,
en particular lo referente a las indemnizaciones, debió comenzar a partir del 1 de enero de
2005.
En esa fecha, de acuerdo con el Boletín D-3, se dio la oportunidad a las compañías de ir
reconociendo el pasivo correspondiente a los años de servicio ya prestados por los empleados
durante la vida laboral promedio remanente de los empleados que se esperaba recibieran los
beneficios. Con base en nuestra experiencia, dicha vida laboral oscilaba entre 6 y 8 años.
Ahora la NIF D-3 señala que el pasivo por reconocer al 1 de enero de 2008, debe reconocerse
en un plazo máximo de 5 años.
Esta situación, en la mayoría de los casos, implica un cargo a resultados mayor que el que las
compañías comúnmente venían realizando por estos beneficios. Sin embargo, para todas
aquellas compañías que comenzaron el reconocimiento en el 2005, este incremento no será
sumamente significativo.
Aunado a lo anterior, las compañías reconocerán durante 2008 el monto total tanto de las
ganancias o pérdidas actuariales pendientes de reconocer al 1 de enero de 2008 como de las
que se generen durante el año.
Para todas aquellas compañías que no han adoptado el Boletín D-3, el pasivo inicial deberá ser
reconocido completamente en 2008.
D.
Beneficios al Retiro
Los principales beneficios al retiro que las compañías otorgan a sus empleados de manera
formal o informal, son comúnmente los siguientes:
•
•
•
•
Planes de pensiones
Prima de antigüedad
Indemnizaciones sustitutivas a pagos por jubilación
Otros beneficios posteriores al retiro (comúnmente seguros de vida, gastos médicos y
despensas)
Al igual que en los dos tipos de beneficios anteriores, la cuantificación del pasivo por estos
beneficios también se efectúa mediante la aplicación de cálculo actuarial para obtener la OBD.
Sin embargo, todavía se permite que el reconocimiento de esta obligación se vaya realizando a
través del tiempo; en particular en lo que se refiere a las modificaciones a los planes de
beneficios y a las ganancias y pérdidas actuariales.
Es importante mencionar que para los planes de pensiones, el pasivo correspondiente a los
años de servicio ya prestados por los empleados al 1 de enero de 1997, se está reconociendo
durante la vida laboral promedio remanente, la cual era superior en promedio a 15 años. De la
misma forma, las compañías que establecieron un plan en una fecha posterior, todavía se
encuentran reconociendo ese pasivo.
Una importante modificación contenida en la NIF D-3 es que el pasivo por reconocer al 1 de
enero de 2008, debe reconocerse en un plazo máximo de 5 años. Es evidente que esta
situación traerá como consecuencia una afectación a los resultados del periodo
significativamente mayor a la que las compañías venían realizando.
Un caso más extremo es el correspondiente a los otros beneficios posteriores al retiro, ya que
el pasivo correspondiente a los años de servicio ya prestados por los empleados al 1 de enero
de 1999, también se está reconociendo durante la vida laboral promedio remanente. Asimismo,
el pasivo por reconocer al 1 de enero de 2008 debe reconocerse en un periodo máximo de 5
años.
En adición a las implicaciones anteriores, existen otros factores que incrementarán el pasivo
por beneficios a los empleados de manera importante, pudiendo destacarse la selección de las
hipótesis financieras. En particular, ahora la NIF D-3 señala que la proyección de los sueldos
de los empleados debe realizarse estimando las posibles promociones durante la vida laboral,
mientras que el Boletín D-3 establecía que esta proyección debía efectuarse asumiendo que
los empleados continuarían en el mismo puesto en el curso del tiempo. Este cambio
evidentemente incrementará el monto de la OBD, por lo que la NIF D-3 estipula que este
incremento en la obligación debe reconocerse afectando los resultados del periodo en un plazo
máximo de 5 años.
Otros cambios importantes que vale la pena mencionar son:
•
•
•
•
Se elimina el reconocimiento del pasivo adicional, del activo intangible y de la partida
deudora en el capital contable
Se consideran los párrafos normativos y aclaratorios del Boletín C-9 “Pasivo,
provisiones, activos y pasivos contingentes y compromisos” referentes a los beneficios
por terminación por causa de reestructuración
Deben considerarse hipótesis financieras nominales y su utilización dependerá de si
nuestra economía cae o no dentro de un marco de contabilidad inflacionaria de acuerdo
con lo establecido en la NIF B-10
Se incorpora el tratamiento contable que debe seguirse cuando se presenta una
adquisición de una compañía
•
Se simplifica la metodología para el reconocimiento de los efectos producidos por una
reducción y/o liquidación anticipada de obligaciones
Como se puede apreciar, la emisión de la NIF D-3 trae cambios importantes en el
reconocimiento contable de los beneficios que las compañías ofrecen a sus empleados, siendo
el objetivo primordial reconocer el pasivo correspondiente en el menor tiempo posible.
Esto obedece a la necesidad de que nuestros principios contables logren la convergencia con
las Normas Internacionales de Información Financiera.
En Aon Consulting nos hemos preparado intensamente para aplicar esta nueva norma con todo
el profesionalismo y la responsabilidad necesarios.
Comunícate con nosotros y permítenos resolver cualquier duda que pudiera tener sobre el
contenido del presente.
Juan Jorge Servín Sotres
Subdirector de Servicios Actuariales | Servicios Actuariales
Dir: +55.5387.6290
[email protected]
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