UNA DÉCADA DE CONSERVACIÓN DEL HUEMUL T OMP K INS C ONSE R VAT ION B OL E T ÍN V IDA SILV E S T R E N ÚME R O 1 , A G O S T O D E 2 0 1 6 E DI T OR I A L El Parque Nacional Patagonia C ON T E NID O PAG.01 Editorial: El Parque Nacional Patagonia Conservación Patagónica surge te como Valle Chacabuco y En- en la escena de la conservación trada Baker— se encuentra en en Chile en el año 2004, con la una zona ecológicamente pri- propuesta concreta de creación vilegiada de la Patagonia, en la del Parque Nacional Patagonia, transición del bosque andino y PAG.09 a través de la compra de la Es- la estepa patagónica. Por casi 30 El hábitat del huemul y la densidad de tancia Valle Chacabuco (68.000 años, el Estado chileno ha re- huemules en el Valle Chacabuco ha), una de las estancias gana- conocido esta zona como un si- PAG.11 deras más grandes de la región tio prioritario para la conserva- Estado poblacional del huemul y factores de Aysén en el sur de Chile. El ción de la biodiversidad, lo cual limitantes en el Valle Chacabuco Parque se conformaría a través ha sido ratificado por las auto- de la unión de las reservas na- ridades responsables del Minis- cionales Lago Jeinimeni y Lago terio del Medio Ambiente y por Cochrane (Tamango) con el Va- las encargadas de las áreas pro- PAG.17 lle Chacabuco, conformando así tegidas (Corporación Nacional Interacciones entre perros y huemules una sola área de protección, el Forestal) y de la protección de PAG.19 Parque Nacional Patagonia. los recursos naturales (Servicio PAG.05 Los inicios del Proyecto Huemul en el futuro Parque Nacional Patagonia PAG.15 Interacciones entre pumas y huemules El ganado doméstico y la actividad El sector del Parque Pata- Agrícola y Ganadero), así como ganadera como amenazas y factores gonia —conocido popularmen- por diversas comisiones de ex- limitantes para el huemul B OL E T ÍN V IDA S ILV E S T RE NR .1 AGO S T O DE 2 0 16 PAG.21 Sales minerales y el huemul PAG.22 El ciervo rojo y el huemul PAG.23 Cambios numéricos en la población de huemules del futuro Parque Nacional Patagonia PAG.26 El modelo de guardaparques monitoreadores y controladores de amenazas: El caso del huemul en Valle Chacabuco PAG.27 Cochrane: El refugio del huemul PAG.28 Las personas detrás del monitoreo y cuidado del huemul: • Daniel Velásquez • Delmiro Jara Paisaje del futuro Parque Nacional Patagonia. PAG.30 Ficha Técnica: Huemul del Sur prioridades, ha sido la recupe- (South Andean Deer) A través de la creación del ración de un “famoso descono- PAG.33 Parque Nacional Patagonia se cido”, el Huemul del sur, ciervo logra el objetivo de la conserva- nativo patagónico y en peligro ción a lago plazo de los ecosiste- de extinción, cuya población mas y especies presentes en la mundial hoy se estima en me- zona. Tan importante como ello, nos de 1.500 individuos. El des- es el hecho de que este Parque medrado estado poblacional del revolucionará la economía local huemul es un síntoma y una se- basada en el turismo de natura- ñal del estado de crisis que en- leza asociado a una infraestruc- frentan los ambientes naturales tura de uso y acceso público de en la actualidad. pertos y científicos. calidad. Este Parque se trans- Afortunadamente hoy la formará en un polo de atracción zona del lago Cochrane, inclu- turística para la región de Ay- yendo el sector norte del Par- sén, dinamizando así la econo- que, alberga aproximadamente mía local, y transformándose en el 10% de la población mundial un aporte al desarrollo de la re- estimada de la especie, consti- gión y las comunidades locales tuyéndose así en una zona clave aledañas. para la conservación del huemul Dentro de los objetivos de Agradecimientos en el largo plazo. conservación de especies nati- Veinte años antes de que vas del futuro Parque, una de las se comprara el Valle Chacabu- PÁGIN A 2 B OL E T ÍN V IDA S ILV E S T RE NR .1 AGO S T O DE 2 0 16 co, la Reserva Nacional Lago Cochrane (Tamango) estuvo a punto de ser desafectada. Afortunadamente a comienzos de los años 80, se observaron los primeros huemules en la zona, lo que cambiaría el destino de la Reserva, así como la relación de la comunidad de Cochrane con el heráldico ciervo andino. A mediados de la década de los 90, CONAF ya realizaba gestiones para asegurar la protección del hábitat de los huemules de la ribera norte del lago Cochrane y de áreas aledañas a Tamango, la cual ya en ese momento, constituía un referente mundial y obligado en cuanto a huemules. Sin embargo, estas áreas pertenecían a la vecina Estancia ganadera Valle Chacabuco, donde se manejaban más de 30 mil ovinos y 3 mil bovinos. La posibilidad de materializar aquellas aspiraciones planteadas por CONAF, en cuanto a asegurar tierras y hábitat para la conservación del huemul en la zona del Lago Huemul en un bosque de lengas en otoño. Cochrane, se concreta el año 2004, a través de la adquisición de la Es- deras, cerca o entre poblaciones de dores y conservacionistas. tancia Valle Chacabuco por parte la especie, con el fin de asegurar los En estos diez años de com- de la fundación Conservación Pa- desplazamientos normales, la ex- prometido trabajo de la unidad de tagónica. A partir de ese momen- pansión de la población y la disper- Vida Silvestre del Parque Patago- to, Conservación Patagónica pasa sión de individuos. nia —a través del equipo de guar- a sumarse a los pioneros esfuerzos Aunque queda camino por re- daparques, médicos veterinarios, realizados por CONAF en la zona, correr, con el pasar de los años ve- técnicos, voluntarios y otros co- proporcionando más hábitat y cui- mos de manera muy optimista que laboradores— se han desarrolla- dado a los grupos de huemules de son cada vez más las personas que do actividades para monitorear y la zona. Los esfuerzos por aumen- se preocupan por contribuir de ma- conservar los huemules en la zona. tar el hábitat para el huemul se nera concreta a la conservación del Esto ha sido posible gracias al im- encontraban en perfecta sintonía huemul y su causa. De esta manera portante apoyo financiero de do- con las recomendaciones cientí- se han venido potenciando en for- nantes e instituciones, quienes se ficas, las cuales indicaban que los ma importante las acciones des- han sensibilizado por la frágil con- sitios prioritarios para la conser- plegadas por las instituciones del dición del huemul, así como por la vación del huemul debían incluir Estado, las ONGs, y la sociedad civil necesidad de implementar medidas hábitat adecuado a lo largo de la- en general, incluyendo a investiga- que contribuyan a monitorear y re- PÁGIN A 3 B OL E T ÍN V IDA S ILV E S T RE NR .1 AGO S T O DE 2 0 16 cuperar sus poblaciones, lo que in- perado, pero el camino ya estaba por la explotación ganadera de la cluye el control de los factores de firmemente trazado. El objetivo es otrora Estancia. En el camino, he- amenaza. ambicioso, significa aunar fuerzas mos comprendido mejor el rol y el Estamos convencidos de que y voluntades para lograr que au- impacto de los predadores sobre el este es el momento para compartir menten las poblaciones de nuestro huemul patagónico. También he- los logros y aprendizajes del trabajo amenazado ciervo. Afortunada- mos quedado sorprendidos con los realizado, y de dar a conocer parte mente, la conciencia y las acciones hallazgos de enfermedades propias de la realidad a la que se enfrentan se han incrementado considera- del ganado en el huemul y el im- los huemules en su medio. Además, blemente, y a diario se suman per- pacto producido por el paso pun- de plantear desafíos y oportunida- sonas en esta cruzada. tual de un ciervo rojo por una de las des para que más personas se su- Han sido diez años de traba- áreas principales de huemul. Esto men en evitar que el huemul avan- jo en Valle Chacabuco desde que se es parte de lo que queremos difun- ce hacia la extinción. avistaron fugazmente un par de tí- dir en este primer boletín de una El liderazgo impulsado por midos huemules en zonas que has- serie de Vida Silvestre que preten- Douglas y Kris Tompkins, funda- ta entonces eran ocupadas intensi- demos compartir con ustedes y que dores del proyecto, y su visión de la vamente por el ganado doméstico. esperamos que les resulte grato. ◊ urgencia por actuar para conservar No conocemos experiencias simi- los huemules y el hábitat remanen- lares en la Patagonia, donde una Cristián Saucedo Gálvez te han resultado claves para avan- extensa área ganadera haya de- zar de manera decidida en este es- jado espacio a la restauración na- fuerzo que es de largo aliento, pero tural, con miras a promover la re- Director de Conservación, Parque Patagonia, Conservación Patagónica–Chile donde la audaz y visionaria ruta ya cuperación del huemul. Hemos está trazada. A lo largo de este re- logrado una tendencia sostenida corrido, desafortunadamente al- al alza de su población y sus áreas gunos han partido antes de lo es- de uso, ocupadas pocos años atrás Huemul macho en un paisaje invernal del Parque Patagonia. PÁGIN A 4 B OL E T ÍN V IDA S ILV E S T RE NR .1 AGO S T O DE 2 0 16 Los inicios del Proyecto Huemul en el futuro Parque Nacional Patagonia Desde hacía décadas existía con- La posibilidad de contribuir en la compra de la Estancia Valle senso general respecto de la nece- activamente a la conservación del Chacabuco (68 mil hectáreas), adi- sidad de conservar la zona del Valle hábitat y poblaciones del amenaza- cionando en los años siguientes al- Chacabuco y Entrada Baker, pero do huemul en la Estancia Chacabu- gunos predios, conformando así un dada su condición de estancia ga- co y en la zona del Lago Cochrane, área de 80 mil hectáreas. nadera tradicional parecía remota fueron algunas de las fuertes ra- Se trataba de una oportuni- la posibilidad de que ello pudiera zones que impulsaron a Douglas y dad única para la conservación del materializarse. Sin embargo, pro- Kristine Tompkins a proponer la huemul y las áreas protegidas de ducto del sobrepastoreo histórico creación del futuro Parque Nacio- Aysén, que permitía asegurar la en la zona y los bajos precios del nal Patagonia en la región de Aysén continuidad física de dos Reser- ganado y lana, los propietarios de- en Chile. Fue así como, a través de vas Nacionales administradas por cidieron poner en venta a la Estan- la fundación Conservación Pata- CONAF y colindantes con el Valle cia Valle Chacabuco en el año 2004. gónica se involucraron en el 2004 Chacabuco (Figura 1). La R.N. Lago Cochrane (Tamango) por el sur y la R.N. Lago Jeinimeni por el norte. La propuesta de creación de este Parque permitiría potenciar y establecer un “puente y corredor natural continuo” entre las áreas protegidas administradas por CONAF, contribuyendo a la recuperación numérica y conservación del huemul, así como de los bosques de lenga y estepa patagónica que se extienden a lo largo del Valle Chacabuco. Esta oportunidad posiblemente no se repetiría de nuevo, por lo que bien valía la pena tomar el desafío de sacar esta iniciativa adelante. Hoy esa visión está tan vigente como cuando se concibió hace un poco más de diez años atrás y actualmente se combina perfectamente con una estrategia de desarrollo basada en la conservación, el turismo de naturaleza y de Parques. Con la visión de crear el futuro Figura 1. Mapa del futuro Parque Nacional Patagonia conformado por la Estancia Valle Chacabuco y las R.N. Lago Jeinimeni y Cochrane. Parque Nacional Patagonia y avanzar en la conservación del huemul fue que a partir del año 2004, el re- PÁGIN A 5 B OL E T ÍN V IDA S ILV E S T RE NR .1 AGO S T O DE 2 0 16 tiro gradual del ganado doméstico drían en riesgo al huemul? de la Estancia pasó a ser una de las Así fue como comenzamos re- prioridades para Conservación Pa- tirando el ganado y el alambrado tagónica. Esto con el fin de que el de aquellos sectores que contenían huemul recuperara territorios y hábitat apto para huemules, espe- porciones de bosque que había per- cialmente los asociados al bosque dido a lo largo de más de cien años de lenga y sectores de matorral ale- de ganadería extensiva en la zona. daños a la porción norte del Lago Asociados al hecho de que el Cochrane. A través de esta acción, territorio de la Estancia se convir- buscábamos mejorar la conectivi- tiera gradualmente en un Parque, dad de áreas fragmentadas don- surgían una serie de interrogantes de sabíamos que había huemules, científicas relacionadas con la es- como Tamango y La Baguala (ver pecie entre las que destacaban (Fi- Figura 3), con aquellas áreas de la gura 2): Estancia donde lo que más se ob- • Con el retiro del ganado y los servaban en ese momento eran cercos ¿La población de huemul se vacas con terneros, y lo más raro y René Millacura (Q.E.P.D.), primer guardaparque vería beneficiada y aumentaría? ocasional era encontrarse con al- involucrado en el monitoreo del huemul. • Si se cumple la ley y no se le gún huemul. da caza al puma y al zorro, aparte de Proyectábamos que las áreas calidad para ellos. Dada su privi- que se retiran las “presas domés- boscosas de la Estancia ubica- legiada ubicación, con un poco de ticas” ¿Cuáles serían los efectos de das entre ambos sitios resulta- tiempo y paciencia, podían trans- estos predadores sobre el huemul? rían atractivas para los huemu- formarse en un área importante, lo ¿Aumentaría la predación? ¿Pon- les, convirtiéndose un refugio de que nos motivó a trabajar en ellas CADENA ALIMENTICIA EN UN ECOSISTEMA PATAGÓNICO en primera instancia. Desde el primer momento el objetivo relacionado al huemul era claro. Resultaba prioritario que generáramos las Puma condiciones para que el huemul recuperara cuanto antes aquellos te- Zorro rritorios que había perdido en el tiempo, a consecuencia de la actividad ganadera. Sabíamos de la observación muy ocasional de huemules en al- Oveja gunas áreas de la Estancia, por lo que era necesario conformar el pri- Liebre mer equipo de guardaparques para empezar a buscarlos. Contactamos e invitamos a René Millacu- Huemul Guanaco ra a tomar el desafío de ser el primer guardaparque para monitorear Come adultos y crías Come solo crías Figura 2. Cadena alimenticia de un ecosistema patagónico. huemules, y a los pocos meses se sumó a estos esfuerzos Daniel Velásquez, quien en esas fechas se PÁGIN A 6 B OL E T ÍN V IDA S ILV E S T RE NR .1 AGO S T O DE 2 0 16 Figura 3. Sectores de Huemules monitoreados por Conservación Patagónica (Puesto Baker, Puesto Huemul–Tejuela) y por CONAF (Tamango y La Baguala) aledaños al lago Cochrane. encontraba apoyando un traba- dónde estaban, cuántos eran, su el trabajo con los huemules. jo de investigación de huemules sexo y edad estimada, con el pro- Teniendo en cuenta la expe- en la zona del Tamango. Delmi- pósito de determinar la condición riencia con que a esa fecha contá- ro Jara, quien por muchos años se de inicio de esa población y poder bamos junto a CONAF, capturan- había desempeñado como pueste- detectar cambios que se produjeran do y monitoreando huemules con ro y vaquero en la Estancia, pasó a lo largo del tiempo. Se iniciaba así radiocollares en Tamango, deci- a ser el tercer integrante de este un trabajo de terreno maravilloso y dimos a partir del 2005, extender equipo. Entre los tres se combina- desafiante, que comenzaba a forjar esta modalidad de monitoreo de ban años de experiencia en terre- un equipo humano de excelencia, huemules hacia algunos sectores no en la zona, conocimiento sobre donde el compromiso era absoluto. del lago Cochrane y el futuro Par- huemules, y lo más importante, un En paralelo, debíamos definir que. Esto nos permitiría combinar compromiso para el cuidado y pro- los lugares para instalar a los guar- el exigente trabajo de búsqueda tección de los mismos. daparques en algún refugio. Para para la observación de huemules La información sobre hue- ello, decidimos utilizar y reacon- en terreno, con aquella informa- mules que manejaban puesteros y dicionar los puestos rústicos here- ción individual generada a partir ovejeros, quienes por años traba- dados de los tiempos de la Estancia, del seguimiento de huemules ra- jaron en la Estancia, resultó cla- específicamente el Puesto Tejuela, diomarcados. De esta forma, fue ve para dirigir el trabajo inicial de Puesto Huemul y Puesto Baker, los posible que los guardaparques ela- terreno. Planificamos trabajos por que se ubicaban en zonas cercanas boraran un registro individual de sectores y programamos recorridos al hábitat de huemules (Figura 3). huemules, incluyendo a los que no que se debían realizar en busca de De alguna forma, estos tres sitios estaban marcados, y asignando un huemules y evidencias de su pre- pasaron a ser las bases de opera- nombre a cada uno basado en ca- sencia, fueran estas huellas, he- ciones desde las cuales los guar- racterísticas individuales que los ces, huesos, astas, pelos o marcas daparques organizaban sus salidas hacían distinguibles. Es así como en los árboles. Era necesario reco- y recorridos, recibían voluntarios y se fue creando un sistema de mo- nocer en terreno a cada huemul, colaboradores que se sumaban en nitoreo de huemules, en el cual PÁGIN A 7 B OL E T ÍN V IDA S ILV E S T RE NR .1 AGO S T O DE 2 0 16 prevención de posibles enferme- Por ello, muchas veces la localiza- dades, además del retiro de los pe- ción de un huemul poco habituado rros asociados a la ganadería. o “arisco” podía tomar casi un día Durante los extensos recorridos a pie o a caballo en busca completo y varias horas de caminata de los guardaparques. de huemules o de la señal de sus Gradualmente, el trabajo de transmisores, los guardaparques, seguimiento de huemules mar- además del equipo básico consis- cados pasó a consumir una parte tente en libreta de notas, GPS y bi- importante del tiempo, esfuerzo y noculares, contaban con un recep- dedicación de los guardaparques en tor y antena de radio-telemetría sus labores rutinarias. A su vez los que les permitía el seguimien- huemules se fueron habituando a to cercano de algunos ejemplares la presencia de sus solitarios, pero marcados y el registro de la infor- permanentes guardianes. El ras- mación obtenida. treo clásico combinado con el ra- Los huemules viven en grupos dio-seguimiento pasó a ser clave Huemul macho con radio collar pequeños, por lo general de menos para monitorear los números po- en Valle Chacabuco. de cinco individuos, dependiendo blacionales de los grupos de hue- de la estación del año. Además, lo mules y los desplazamientos que los guardaparques locales juga- hacen en bajas densidades. Es de- realizaban. Gracias a esto ahora era ban un rol principal, lo que suma- cir: pocos individuos con respec- posible estimar con mayor preci- do al control de factores negativos to al área total, ocupando prefe- sión el éxito reproductivo de algu- en la zona, como la remoción de rentemente ambientes de bosque nos individuos y la sobrevivencia, los cercos ganaderos, el retiro del y montañas, lo cual en general di- tanto de huemules adultos como de ganado doméstico y, por tanto, la ficulta encontrarlos en terreno. juveniles o de crías. ◊ Guardaparque Daniel Velásquez realizando radio telemetría en el lago Cochrane. PÁGIN A 8 B OL E T ÍN V IDA S ILV E S T RE NR .1 AGO S T O DE 2 0 16 El hábitat del huemul y densidad de huemules en el Valle Chacabuco Durante estos años de trabajo he- les durante cada estación. Por este torialidad del huemul puede sig- mos podido verificar la marca- hábito, es catalogado como una nificar que en una determinada da preferencia que tiene el hue- especie ramoneadora, a diferencia zona, los huemules dominantes mul por los ambientes de bosque del guanaco que es un pastoreador residentes limiten la llegada, per- de lenga y matorral de ñirre, com- alimentándose de un mayor volu- manencia y el establecimiento de binados con sectores rocosos y de men de pastos y otras plantas que nuevos huemules. fuertes pendientes. Esto se debe crecen cerca del suelo. Cuando comenzamos a traba- a la presencia en estos ambientes Tanto machos como hem- jar en las primeras áreas de hue- de una mayor diversidad de espe- bras de huemul son territoriales, mul en Valle Chacabuco (aledañas cies vegetales para alimentarse y a conformando familias pequeñas. a Puesto Huemul o Puesto Tejuela), un menor riesgo de predación. Los Nuestros datos de seguimiento su observación era ocasional, se- huemules evitan los sectores de muestran que los ámbitos de ho- guramente como consecuencia de pastizal y estepa patagónica, los gar de huemules en la zona del la actividad ganadera. Con el pa- cuales en general son ocupados por Parque fluctúan entre 400 y 1.200 sar de los años, fue posible obser- el guanaco. Desde el punto de vista ha (Corti 2008; Gill y cols., 2008). var un aumento gradual en las can- de su alimentación, el huemul pre- Aunque puede haber algún grado tidades de huemul en las mismas senta una amplia y variada dieta, de superposición entre ellos, se áreas, lo cual significó aumentar en siendo muy selectivo, buscando los restringe a ciertos individuos con casi cuatro veces las densidades de brotes y hojas más tiernas de hier- los cuales se tienden a agrupar de huemul, pasando de 0,35 huemu- bas, arbustos, matorrales y árbo- manera más recurrente. La terri- les/Km2 (2006) a 1,3 huemules/Km2 Huemules en bosque de lenga, uno de sus hábitats preferidos en Valle Chacabuco. PÁGIN A 9 B OL E T ÍN V IDA S ILV E S T RE NR .1 AGO S T O DE 2 0 16 (2015). Estas densidades son de las más altas registradas, y posiblemente son propias de lugares que han alcanzado su capacidad de carga; siendo solamente inferiores a las registradas en el P. N. Bernardo O’Higgins. Es posible que esto se relacione al hecho de que el huemul no es una especie que forme rebaños o manadas, si no que vive en grupos pequeños que de manera muy extraordinaria pueden alcanzar los seis individuos. Posiblemente debido a la alta Una hembra de huemul cuidando a su cría. densidad de huemules alcanzada en Puesto Huemul y Tejuela, ha sido por el sur, con la de Valle Chacabu- más tarde fue reencontrado jun- posible observar que algunos ejem- co por el norte. Los desplazamien- to a un grupo de huemules en otra plares machos jóvenes y adultos (y tos identificados han variado en- área. Justamente en la zona que Si- probablemente hembras), que no tre los 8 y 16 km, lo cual supera con lencio había elegido como su hogar, establecen territorios, se dispersan creces los movimientos habituales el proyecto Hidroaysén pretendía hacia fuera del área donde nacie- de un huemul. construir una de las centrales hi- ron. Estos dispersantes son claves Uno de los casos más nota- droeléctricas en el río Baker. Este para mantener la conectividad en- bles fue el del huemul “Silencio”, huemul se convirtió en un símbolo tre las subpoblaciones de huemul el cual nació en la desembocadu- más de la defensa del Baker y de la de las cuencas de Lago Cochrane ra del Lago Cochrane y cinco años Patagonia. ◊ Huemul “Silencio”, quien luego de dispersarse fuera del Parque, se estableció en un predio privado a orillas del río Baker, en la zona de influencia del Proyecto Hidroaysén. PÁGIN A 10 B OL E T ÍN V IDA S ILV E S T RE NR .1 AGO S T O DE 2 0 16 Estado poblacional del huemul y factores limitantes en el Valle Chacabuco Conscientes de los medios que Crías de Huemules contábamos en términos de guardaparques y logística, decidimos concentrar el trabajo en dos zonas Puesto Huemul – Tejuela 2006-2014 20 Hembras Adultas específicas de Valle Chacabuco: Puesto Huemul – Tejuela y Puesto Baker, que en total compren- Crías 15 Machos Adultos dían una superficie aproximada de 75 Km2. Fue así como durante los primeros recorridos realizados en 10 los años 2005 y 2006 encontramos evidencia muy escasa de presencia de huemules, los cuales en ese entonces no sobrepasaban la me- 5 dia docena de ejemplares bastante dispersos en el sector de Puesto Huemul – Tejuela, y una cantidad similar en el sector del Baker. No disponíamos de información histórica previa detallada en 0 2006 2007 2008 2009 2010 2011 2012 2013 2014 Figura 4. Tendencia demográfica de los huemules en el sector conocido como Puesto Huemul – Tejuela. Se puede apreciar el aumento general de la población y el aumento gradual de la proporción de machos en ésta. cuanto a la situación numérica y de amenazas de los huemules en estas zonas, solamente de relatos Crías de Huemules y Bovinos descriptivos. Temporada tras tem- Sector Baker 2006-2015 porada, producto del trabajo permanente y sistemático de los guar- 30 daparques en estos sectores, fue posible ir registrando información de lo que estaba sucediendo numéricamente con los huemules en estos sectores y determinar algunos de los factores de mortalidad que se encontraban actuando. Entre los años 2006 y 2014 en la zona de Puesto Huemul-Tejuela pudimos observar un patrón muy claro en la población de huemules, existiendo una tendencia permanente al incremento en la cantidad de individuos, pasando de seis a 26 Huemules 25 Bovinos 20 15 10 5 0 2006 2007 2008 2009 2010 2011 2012 2013 2014 2015 Figura 5. Relación negativa entre la cantidad de ganado bovino y la de huemules en el sector conocido como Baker. huemules adultos (Figura 4), lo que PÁGIN A 1 1 B OL E T ÍN V IDA S ILV E S T RE NR .1 AGO S T O DE 2 0 16 representa un incremento de más de cuatro veces. Algo que nos llamó la atención, fue el hecho de que los Mortalidad Huemules Adultos (%) Puesto Huemul – Tejuela 2008-2015 (n=11) machos representaban el doble de la cantidad de hembras. 9,1 A su vez, en la zona del Río Baker detectamos una tendencia inicial al aumento en la cantidad de huemules, pasando de cinco a Perros 45,5 Pumas un máximo de 19 huemules adultos 45,5 hasta el año 2009. A partir del 2010 Desaparecidos y a consecuencia de actividad ganadera irregular en esta zona, algunos de los grupos de huemules se dispersaron hacia predios privados alejados del área posible de monitorear. Ello redujo localmente Figura 6. Factores de mortalidad de huemules adultos en la zona de Puesto Huemul – Tejuela en Valle Chacabuco. los grupos de huemules de la zona del Baker a aproximadamente en- tenido relativamente estable, pese mitante, tal como es posible apre- tre ocho y diez huemules, número a que continúa estando presente el ciar en la Figura 5. que en los últimos años se ha man- ganado como factor negativo y li- Un aspecto importante en el PÁGIN A 12 B OL E T ÍN V IDA S ILV E S T RE NR .1 AGO S T O DE 2 0 16 monitoreo era conocer los factores que estaban causando mortalidad en la población de huemules. Así, entre 2008 y 2015 para el sec- Crías de Huemul Nacidas (%) R.N. Tamango y Puesto Huemul – Tejuela entre 2008 y 2014 (n=65) tor de Puesto Huemul – Tejuela, tal como se observa en la Figura 6, se encontró una proporción similar (45%) de huemules adultos muertos 25 13 por su predador natural (el puma) 33% alcanzan la edad adulta y huemules “desaparecidos” y a los cuales se les perdió su registro, no 87 75 pudiendo ser nuevamente observados. De particular atención re- Machos sultó el impacto de los perros en Hembras casi un 10% de los huemules monitoreados. Estos perros, como predadores introducidos, en su mayo- Figura 7. Porcentaje de crías de huemul nacidas ría provendrían de la localidad de en la zona del lago Cochrane incluyendo crías detectadas Cochrane y alrededores, consti- en la R.N. Lago Cochrane y Puesto Huemul – Tejuela tuyendo una importante causa de en Valle Chacabuco entre los años 2008 y 2014. mortalidad. En cuanto a la sobrevivencia anual de huemules adultos de Puesto Huemul – Tejuela, ésta alcanzó valores cercanos al 90%, encontrándose en valores similares a Mortalidad Crías de Huemul (%) Puesto Huemul – Tejuela 2008-2014 (n=14) los descritos previamente para la 7,7 población de huemules de la R. N. Tamango por el Proyecto Huemul – 30,8 Darwin (Saucedo & Gill, 2004) y por Corti (2010), por lo que no parecie- Caza ra que el componente adulto de la Pumas población estuviera amenazado. La sobrevivencia de las hembras adultas de huemul destaca como el Zorros 53,8 7,7 Enfermos componente más importante para la mantención e incremento numérico de la población de huemules. Figura 8. Porcentaje de causas de mortalidad de Los huemules comienzan a reproducirse a partir de los tres años, crías de huemul en zona del Puesto Huemul – Tejuela entre los años 2008 y 2014. las hembras paren solo una cría o PÁGIN A 13 B OL E T ÍN V IDA S ILV E S T RE NR .1 AGO S T O DE 2 0 16 cervatillo por año. Por ello es muy importante conocer la sobrevivencia que tienen las crías, ya que del éxito de su supervivencia, depende que aumente la población de huemules. En el caso específico de las crías en la zona del Puesto Huemul – Tejuela en Valle Chacabuco, entre 2008 y 2014 alcanzaron una sobrevivencia anual cercana al 50%, la cual es superior a aquella estimada por Corti (2010) para la zona de la R.N. Tamango. Al analizar la información de crías nacidas en la R. N. Lago Cochrane y Puesto Huemul entre los años 2008 y 2014, fue posible determinar que el 75% de las crías nacidas correspondieron a machos, y un 25% a hembras (Figura 7). Además, solamente un tercio de las crías monitoreadas alcanzó la edad adulta, de las cuales el 13% correspondió a hembras. Es importante considerar que estos resultados provienen de una muestra de las crías nacidas en la causas de muerte de las crías de cols. (2004) y Corti (2008), y con lo población de huemules del Lago huemul, se relacionaron a causas detectado en el extremo norte de Cochrane, y en caso de que esta no naturales y asociadas a activi- la distribución del huemul en los situación fuese generalizada po- dades humanas, como son la caza Nevados de Chillán, VIII región dría tener consecuencias en la re- y enfermedades asociadas a la ga- (López y cols. 2011). cuperación numérica del huemul nadería. La tendencia demográfica de El hecho de que pumas y zo- la población de huemules del área Al examinar las causas de rros como predadores naturales monitoreada ha continuado al alza, muerte de las crías de huemul de representen las principales fuen- pese a la presencia permanente e Puesto Huemul – Tejuela entre los tes de mortalidad de huemules impacto de predadores. Ello da años 2008 y 2014, fue posible de- adultos y crías, constituye parte cuenta de que la predación si bien terminar que se encontraron ma- de una realidad ecosistémica, en está actuando sobre la población, yoritariamente asociadas a la acti- la cual el huemul como herbívoro no la estaría amenazando. De to- vidad de sus predadores naturales, mayor constituye una presa tra- das maneras, este aspecto requiere siendo los zorros responsables de dicional. Esta situación es concor- del incremento en el área de mo- aproximadamente un 31 % de la dante con lo que se ha observado nitoreo considerando que estamos predación y los pumas de un 54% en sectores cercanos como la Re- tratando con poblaciones de redu- (Figura 8). El 15% restante de las serva Nacional Tamango por Gill y cido tamaño. ◊ en la zona. PÁGIN A 1 4 B OL E T ÍN V IDA S ILV E S T RE NR .1 AGO S T O DE 2 0 16 Interacciones entre pumas y huemules En condiciones naturales los hue- Cantidad Porcentaje 980 79,5 Oveja 45 3,7 crías, y el puma quien además de Liebre 187 15,2 crías, preda sobre huemules adul- Huemul 9 0,7 Zorro 1 0,1 Caiquén 3 0,2 Armadillo 7 0,6 Presa mules han evolucionado con conductas que les permiten evadir en Guanaco forma efectiva a sus dos predadores naturales principales: el zorro, quien ataca exclusivamente a tos. Es importante tener en cuenta que esta convivencia entre el huemul-presa y sus predadores se ha extendido por más de 10 mil años en el ecosistema patagónico. El hábito del huemul de vivir en grupos pequeños, en bajas den- Figura 9. Presas detectadas en puntos de monitoreo sidades y pasar inadvertido dada la GPS y radio telemetría de 29 pumas monitoreados en el Parque Patagonia entre 2008 y 2015 (n= 1.232). coloración de su pelaje en sectores de bosque y matorrales, sumado a una limitada emisión de ruidos (a tamiento durante las primeras se- gunos factores antrópicos o asocia- excepción de la época de celo), re- manas de vida, es una clara estra- dos a actividades humanas, como sulta favorable para reducir el ries- tegia contra la predación natural. la predación por perros, la caza y go de predación. El hecho que las El huemul no ha evolucionado la transmisión de enfermedades crías permanezcan solas durante y no cuenta con mecanismos de de- del ganado doméstico. En conse- largos períodos entre el amaman- fensa eficientes para enfrentar al- cuencia, el impacto que estos fac- Mortalidad Huemules Adultos (%) Mortalidad Huemules Adultos (%) R.N. Tamango 2005-2007 (n=19) R.N. Tamango 2008-2015 (n=21) 4,8 10 19 20 50 Perros Perros Caza Pumas Pumas Desaparecidos 20 19 57,1 Desaparecidos Vejez Figura 10. Mortalidad de Huemules adultos en la Reserva Nacional Tamango entre los períodos 2005-2007 y 2008 – 2015. PÁGIN A 15 B OL E T ÍN V IDA S ILV E S T RE NR .1 AGO S T O DE 2 0 16 tores tienen sobre las poblaciones desplazamientos que realizan en la de huemules, es sumamente im- zona del Parque. El guanaco cons- Gracias al monitoreo de pu- portante y se suma a aquellas cau- tituye la presa preferida del puma mas, tanto en los sectores de Va- sas naturales de mortalidad, por lo con un 80% de preferencia, lo que lle Chacabuco como en Taman- que es fundamental implementar dista del 0,7% representado por el go, hemos podido verificar que no medidas de control efectivas que huemul (Figura 9). hay ejemplares de puma que ha- significativas (Figura 10). También existían interrogan- yan mostrado una marcada prefe- El impacto del puma sobre el tes respecto de la medida en que el rencia por predar sobre huemules. huemul es una de las principales impacto del puma como predador Los huemules que fueron predados razones que motivó el inicio en el podría jugar un rol limitante en la incluyeron a huemules en diversa año 2008 del programa de moni- persistencia del huemul en la zona condición física y diferentes eda- toreo del puma en la zona del Valle de la R.N. Lago Cochrane (Taman- des y sexo, por lo que se estima que Chacabuco y futuro Parque Nacio- go). Sin embargo, al comparar los se trata de una interacción oportu- nal Patagonia. Luego del monitoreo huemules adultos muertos y pre- nista y normal dado el rol que cum- de 29 pumas ha sido posible esta- dados por puma entre los años ple el puma como predador tope y blecer algunos patrones respec- 2005-2007 y 2008-2015, es posible principal de grandes herbívoros en to de su alimentación, dieta y los observar que no sufrió variaciones este ecosistema. ◊ aborden esas causas. PÁGIN A 16 B OL E T ÍN V IDA S ILV E S T RE NR .1 AGO S T O DE 2 0 16 Interacciones entre perros y huemules Los perros constituyen una de las mayores amenazas para la con- Mortalidad Crías de Huemul (%) servación de poblaciones de hue- R.N. Tamango 2005-2007 (n=18) mules. Aunque cueste creerlo, en general el huemul cuenta con limitadas estrategias de evasión y 5,9 5,9 5,9 Desaparecidos defensa frente al ataque y perse- Perros cución de cánidos como son los perros domésticos. El huemul a lo largo de su evolución presen- 29,4 23,5 Zorros Caza ta hoy conductas y hábitos - como el tratar de pasar inadvertido, rea- Enfermos lizar algún escape con una carrera de corta distancia o la búsqueda 29,4 de refugio en algún sector escar- Accidentes pado - para hacer frente a la amenaza que representan pumas y zo- Figura 11. Porcentaje de causas de mortalidad de huemules crías en la R.N Tamango entre los años 2005 y 2007. rros. Sin embargo, estas conductas son muy poco efectivas contra los perros, incluso buscando refugio res de hasta un 20% (Figura 10). La terior abandono por parte de hue- en cursos de agua como arroyos o cercana ubicación de la Reserva a la mules de aquellas zonas que fre- lagos. ciudad de Cochrane, sin duda con- cuentaban habitualmente, como tribuye a esta situación. aquellas asociadas al río Cochra- Desafortunadamente, a lo largo de estos diez años de tra- Como ejemplo de esta realidad, ne (R.N. Tamango) y Puesto Baker, bajo, la interacción entre perros durante los años 2005 y 2007 en la donde hoy muy ocasionalmente se y huemules va en franco aumen- R.N. Tamango se detectó el impac- les observa. Esto tiene directa rela- to en diferentes zonas del río y to de perros sobre crías y huemu- ción con varios registros de ingre- Lago Cochrane. Esto es producto les adultos, en forma importante y so de perros a áreas de huemul, así del crecimiento y expansión urba- sistemática. Es así como se llegó a como a ataques de éstos sobre crías na de Cochrane, combinados con registrar aproximadamente un 30% y huemules adultos, generalmen- el escaso control de estos anima- de crías muertas por perros (Figu- te con consecuencias fatales (Lara les, tanto en el medio urbano como ra 11), con una importancia equi- y cols., 2012; Lara, 2013; Saucedo y rural. valente a la mortalidad producida Gill, 2004; Corti, 2008). Una muestra de la importan- por zorros. A ello se suma el hecho, de cia que pueden llegar a tener los Los perros han tenido impor- que algunos perros asociados a perros como factor de amenaza y tantes consecuencias, no solo en la áreas periurbanas y rurales tran- mortalidad de huemules, queda de mortalidad de huemules, sino que sitan por áreas donde viven gru- manifiesto al observar la mortali- también han influido en los secto- pos de huemules y los persiguen, dad detectada en huemules adultos res que ahora ocupan. Es así como tal como se ha observado en el de la R.N. Tamango entre los años durante estos años, ha sido posible sector de Puesto Baker. Con gran 2005 y 2015, la cual alcanzó valo- registrar el desplazamiento y pos- preocupación observamos un au- PÁGIN A 1 7 B OL E T ÍN V IDA S ILV E S T RE NR .1 AGO S T O DE 2 0 16 mento de esta amenaza, tal como lo indican los primeros dos registros realizados por el guardaparque Daniel Velásquez, del ingreso de perros y muertes de huemules en el sector de Puesto Huemul en invierno y primavera del año 2015. Esto posiblemente sea un indicio más de la tendencia y gravedad que está alcanzado este creciente problema que aqueja a las poblaciones de huemules. Aunque los eventos y oportunidades en las que ingresan los perros son puntuales, son siempre importantes dada la alta vulnerabilidad del huemul. Además, el impacto puede ser aún mayor si ocurre en la época de nacimiento de crías, pudiendo tener graves consecuencias sobre la sobrevivencia de los huemules y el futuro de la población. No se debe perder de vista la compleja problemática asociada a los perros como amenaza al huemul y que además presenta serias implicancias para la salud humana (hidatidosis, basura, ataques a personas) y efectos sobre la economía campesina (predación de ganado menor por perros), entre otros. Por ello, el abordaje del problema que representan los perros sin supervisión y manejo requiere de una preocupación permanente e implica la activa participación y colaboración de la comunidad junto a autoridades, instituciones y diversas organizaciones. ◊ PÁGIN A 18 B OL E T ÍN V IDA S ILV E S T RE NR .1 AGO S T O DE 2 0 16 El ganado doméstico y la actividad ganadera como amenazas y factores limitantes para el huemul Desde el comienzo del programa de se fue implementado y mientras forma, y través de los análisis rea- conservación del huemul en Valle realizábamos las capturas de al- lizados en laboratorio, fue posible Chacabuco se estableció la nece- gunos huemules para equiparlos detectar evidencia de la exposición sidad de retirar los cercos y el ga- con radiocollares que permitieran del huemul a agentes de enferme- nado doméstico (ovino y bovino) su monitoreo, aprovechamos la dades infecciosas del ganado do- de los sectores de huemul, ya que oportunidad para evaluar el esta- méstico, específicamente al virus existían antecedentes que permi- do sanitario de los huemules y de de la diarrea viral bovina (Corti y tían asumir la conveniencia de im- esta forma generar información. cols., 2013), el cual causa abortos, plementar estas medidas en favor Para ello, se realizaba un examen nacimientos de crías débiles y pér- de la recuperación poblacional del físico, así como la obtención de al- didas económicas en explotaciones huemul. gunas muestras biológicas (sangre ganaderas. A medida que el programa y tejidos) de cada huemul. De esta Es muy posible que este hallazgo esté relacionado al hecho de que en áreas donde antes hubo ganado en Valle Chacabuco, se ha detectado casi un 8% de crías de huemul que nacen débiles y/o que mueren a los pocos días de nacidas (Figura 8). Esta mortalidad de crías podría estar relacionada a esta infección o la de otros agentes infecciosos provenientes del ganado doméstico. Con el apoyo del trabajo de laboratorio, observamos y diagnosticamos casos de huemules cursando cuadros activos de sarna ovina, siendo algunos muy severos, presentando costras y descamación (González-Acuña, 2009). Cuando los ácaros afectaban las orejas, las secreciones y engrosamiento de la piel, incluso afectaban la capacidad auditiva de los huemules, dejándolos más vulnerables a la predación por pumas. Por ello, fue necesario por prime- Registro fotográfico de 2007 en Cerro Tamango que evidencia el ra vez implementar tratamientos contacto directo entre huemules y ganado que, además de perros, con antiparasitarios en algunos de trae consigo el riesgo de transmisión de enfermedades. los huemules afectados. PÁGIN A 19 B OL E T ÍN V IDA S ILV E S T RE NR .1 Pese a que se pudo demostrar la exposición del huemul a estos AGO S T O DE 2 0 16 ma inmune muy simple, siendo ello aún materia de investigación. de la especie. Tal como se observó en la zona dos agentes infecciosos, es muy Un claro ejemplo de otra en- del Puesto Baker, la distribución probable que una serie de otros fermedad que aqueja a los hue- de la actividad ganadera en zo- agentes estén siendo transmitidos mules corresponden a los más de nas aledañas al Valle Chacabuco desde el ganado hacia el huemul, 10 casos de abscesos y “protube- es un factor limitante para la re- sea a través del contacto directo o rancias” observadas en huemu- cuperación numérica del huemul indirecto. La evidencia al respec- les de la R.N. Cerro Castillo des- y la mantención de la conectivi- to es limitada, la información difí- de el año 2014. De un par de ellos, dad entre poblaciones. Ello debi- cil de obtener y los efectos sobre el se logró aislar la bacteria causante do a que el ganado produce un des- huemul en general, bastante des- de la linfoadenitis caseosa, la cual plazamiento del huemul, y además conocidos. En algunos casos, puede provendría del ganado ovino y ca- estas áreas pasan a ser focos de que estas infecciones no le causen prino, aledaño a la Reserva. Ade- agentes infecciosos y enfermeda- la muerte en forma inmediata al más, jugarían un rol clave las le- des, así como de otras amenazas huemul, pero sin duda reducen su siones en la piel causadas por los asociadas al ganado, como son los aptitud y el aporte que hacen en el cercos, así como insectos hema- ataques de perros, los cuales son medio silvestre, ya sea a través de tófagos como los tábanos. Hoy, se empleados frecuentemente para una menor sobrevivencia o afec- desconoce el impacto y la mortali- el arreo y movimiento del ganado. tando la sobrevivencia de las crías. dad que produce esta enfermedad El impacto de los perros sobre los Algunos expertos afirman que en los huemules, ya que constitu- huemules ocurre, a través de ladri- los huemules serían especialmente ye una situación que comienza a dos, persecuciones, mordeduras y sensibles a la infección y las enfer- ser monitoreada por CONAF y el predación directa, los cuales se van medades causadas por agentes in- SAG. Se suma la creciente preocu- sumando como factores negativos, fecciosos del ganado, consideran- pación manifestada por la socie- que en conjunto continúan actuan- do que evolucionaron en ausencia dad civil exigiendo medidas con- do sobre las poblaciones de hue- de éstos, y presentarían un siste- cretas en el cuidado y protección mules de la zona. ◊ Ganado doméstico en zonas de veranadas ubicadas en hábitat de huemul. PÁGIN A 2 0 B OL E T ÍN V IDA S ILV E S T RE NR .1 AGO S T O DE 2 0 16 Sales minerales y el huemul A modo de ensayar la aceptación y usarlos de manera recurrente. In- ron hembras que parieron crías de el efecto que podría tener el ofre- cluso algunas hembras les enseña- mayor peso. Sin embargo, también cimiento de sales minerales a los ron a sus crías a utilizarlos. Esta es registramos que algunos huemules huemules en su medio natural, se la primera vez que se documenta no manifestaron interés alguno en dispusieron bloques minerales en la aceptación de bloques minera- los bloques. Es probable que exis- algunos sectores de uso habitual en les por huemules, pese a que había tan algunos elementos minerales el Valle Chacabuco. Para reducir los sido intentado en numerosas opor- deficientes en la dieta natural del riesgos de predación, la ubicación tunidades anteriormente. huemul y que el aporte que realizan de los mismos se cambiaba fre- Pese a que cuantitativamen- estos bloques pueda resultar bene- cuentemente en la medida que se te no fue posible medir el efec- ficioso en algunos casos, tal como detectaba la presencia de pumas, a to de los bloques de sales, obser- ha sido observado en otras espe- través del monitoreo con cámaras vamos que aquellos huemules que cies de ciervos, pero por ahora no trampas o a través de huellas. accedieron a los bloques presenta- contamos con evidencias sólidas al Pudimos observar que varios ron mejor pelaje y aspecto, condi- respecto. ◊ huemules aceptaron y pasaron a ción de astas, y además se registra- Registro en cámara trampa del uso de bloque mineral por familia de huemules en el sector de Puesto Huemul, Valle Chacabuco. PÁGIN A 2 1 B OL E T ÍN V IDA S ILV E S T RE NR .1 AGO S T O DE 2 0 16 El ciervo rojo y el huemul A lo largo de la distribución del primera vez en el Parque Patago- afortunadamente en los años si- huemul existen abundantes ante- nia la llegada de un macho de cier- guientes se cuenta con avistamien- cedentes que indican que con la lle- vo rojo a una de las zonas de pre- tos y registros de ciervos rojos en gada de especies exóticas, como el ferencia por parte de los huemules. las zonas de Bahía Murta, Puerto ciervo rojo o el jabalí, el huemul se Posiblemente este ciervo provenía Tranquilo, Puerto Sánchez, Valle ve fuertemente desplazado, dismi- de Isla Macías. El impacto de su lle- del río Leones y Tortel. nuyendo en cantidad, incluso lle- gada sobre los huemules fue enor- Sin ninguna duda, el ciervo gando a desaparecer. No está to- me, afectando la rutina, conducta rojo es una nueva y creciente ame- talmente claro cómo esto ocurre, habitual y la ocupación de los terri- naza que ha llegado para quedarse aunque se sugieren varias formas, torios utilizados por algunos gru- en el sur de Aysén, y que gradual- desde la competencia por recursos, pos de huemules de esa zona. Los mente va incrementando su distri- territorialidad y la extrema agresi- huemules se observaron nerviosos, bución hacia zonas con huemules. vidad del ciervo rojo, hasta la po- asustados y abandonaron en forma Esta situación requiere la imple- sible predación de crías de huemul permanente zonas que utilizaban mentación de algunas acciones por jabalíes. en forma rutinaria. Afortunada- efectivas en el marco de la ley de Hasta el 2010 la distribución mente, el ciervo invasor perma- caza, las cuales pueden ser promo- del ciervo rojo conocida en la por- neció pocos días en el sector y se vidas por parte de las autoridades, ción sur de la región de Aysén se desplazó hacia la zona sur del Lago contando con la colaboración acti- ubicaba en los alrededores del río Cochrane, siendo registrado días va de la comunidad para controlar Mañihuales y cercanías de Puerto posteriores en un predio privado la dispersión de esta especie con un Chacabuco. Sin embargo, ese año junto a ganado doméstico. Des- enorme potencial invasor. ◊ fueron ingresados desde la región de Los Ríos, ciervos rojos y gamos específicamente en la zona de la Isla Macías en el Lago General Carrera, con el fin de establecer un criadero con fines de caza. Ello se realizó ignorando que los ciervos son excelentes nadadores y el probable escape de ciervos que ocurriría desde la isla hacia el continente. También se desestimó el riesgo sanitario que representaba el hecho de que estos ciervos pudieran estar infectados con agentes que representaran una amenaza para los huemules y el ganado doméstico (Flueck, 2012), considerando que Registro fotográfico de ciervo rojo en dispersión interactuando con ganado provenían de otra región del país. ◊ doméstico en predio privado en la rivera sur del lago Cochrane en 2012. Días En Julio del 2012 se registró por antes el mismo ciervo fue visto en áreas de huemul en Valle Chacabuco. PÁGIN A 2 2 B OL E T ÍN V IDA S ILV E S T RE NR .1 AGO S T O DE 2 0 16 Cambios numéricos en la población de huemules del futuro Parque Nacional Patagonia En diez años de monitoreo y se- tina, estimando una población de ces mucho mejor conectados entre guimiento cercano de la población 65 huemules, distribuidos en cua- sí, a través del hábitat conformado de huemules por parte del equi- tro zonas principales: Baker, Ta- por los bosques de lenga y las zo- po de guardaparques, el cual se ha mango, Puesto Huemul y La Ba- nas de matorrales asociadas al lago concentrado principalmente en la guala (Figura 12). Esta población Cochrane. Esto implicaría un po- zona norte del Lago Cochrane, ha presentaba en ese momento una sible aumento de la población en sido posible no sólo detectar cam- fuerte fragmentación y grupos de un 100%, junto a un aumento en su bios numéricos y de las zonas que huemules distribuidos de manera distribución en la zona. ocupan los huemules. Este trabajo bastante dispersa, fuertemente in- En la mayoría de los sectores también, ha permitido incremen- fluenciados por la actividad gana- de los cuales se cuenta con infor- tar gradualmente el conocimien- dera extensiva. mación, la cantidad de grupos de to general respecto de la presencia En el año 2015, al sur del Río huemules con el pasar de los años histórica y actual de huemules en Chacabuco ya estimábamos apro- ha aumentado. Sin embargo, en el área del futuro Parque Nacional ximadamente unos 120 huemules, aquellas áreas cercanas a Cochra- Patagonia, tanto en el sector de Va- producto de las acciones de con- ne, ubicadas hacia los bordes y pe- lle Chacabuco como de las R.N. Ta- servación desarrolladas a lo largo riferia del futuro Parque, desafor- mango y Jeinimeni. de los años, como el retiro del ga- tunadamente los huemules han Hasta el año 2005 contábamos nado, el establecimiento de guar- disminuido, tal como lo señalan con información parcial a lo lar- daparques, la remoción de los los resultados de los censos anua- go de la cuenca norte del lago Co- alambrados y el control de perros les realizados en los sectores de la chrane, desde el río Baker y hasta (Figura 13). Estos grupos de hue- R.N. Tamango por CONAF (2015) la frontera con la República Argen- mules se encontraban para enton- y en la zona de Puesto Baker por Figura 12. Distribución y estimación de la cantidad de huemules por sectores asociados al lago Cochrane y río Baker en el año 2005. PÁGIN A 2 3 B OL E T ÍN V IDA S ILV E S T RE NR .1 AGO S T O DE 2 0 16 Figura 13. Distribución y estimación de la cantidad de huemules por sectores asociados al lago Cochrane y río Baker en el año 2015. Conservación Patagónica (2015). registros han ocurrido en el sector actual de las poblaciones de hue- Ello se puede deber a que estos norte del Río Chacabuco, especí- mules en el futuro Parque Nacional huemules están mucho más ex- ficamente en las laderas de Cam- Patagonia, es bastante claro que su puestos a los efectos de actividades po Díaz, Furioso y Cerro Rey, todos distribución se encuentra dividida humanas y otras amenazas, como sectores del Valle Chacabuco. Tam- en dos subpoblaciones, la del nor- la actividad ganadera, los perros y bién se han ido sumando una se- te y del sur (Figura 14). A su vez, la la caza. rie de evidencias del avistamiento conectividad de ambas se encuen- Algo que resulta digno de des- de huemules o de sus huellas, en- tra limitada por la continuidad del tacar y que en pocos lugares ocu- tregadas por parte de caminantes hábitat de lenga y ñirre, la cual en rre hoy, es el hecho de que el tama- y turistas en algunos sectores de la el área intermedia está dominada ño de la población y la conectividad R.N. Jeinimeni. por la matriz estepárica confor- de los grupos de la población sur Considerando el aumento en mada por coirones, neneos y ma- de huemules del Lago Cochrane la observación y registros de hue- torrales. La matriz de bosque en la (incluyendo R.N. Tamango y Va- mules en la porción norte, resul- zona intermedia se ha degradado y lle Chacabuco) han incrementado ta necesario avanzar en el conoci- en muchos casos perdido, a conse- y mejorado notablemente a lo lar- miento de la situación del huemul cuencia de cien años de actividad go del tiempo. Esto es auspicioso y en esa zona, de manera de deter- ganadera, el sobrepastoreo con ga- presagia una esperanza real para el minar con mayor precisión lo que nado, los incendios y la extracción huemul en la zona del futuro Par- está ocurriendo con la población de leña. que Nacional Patagonia. de huemules del sector norte del Pese a lo anterior, en los últi- Por otra parte, es importante Valle Chacabuco y algunos secto- mos diez años, como consecuen- señalar que en forma oportunista res de la R.N. Lago Jeinimeni, así cia de la recuperación del huemul se han realizado numerosos regis- como identificar los factores de que se ha observado en el área, se tros y avistamientos ocasionales de amenaza que están actuando so- ha detectado un incremento nota- huemules en sectores que no han bre ella y de qué forma se pueden ble en los registros de huemules en sido contemplados en el monito- controlar. tránsito y dispersión por áreas de reo sistemático. Muchos de estos Si consideramos la ubicación estepa vecinas a manchones y par- PÁGIN A 24 B OL E T ÍN V IDA S ILV E S T RE NR .1 AGO S T O DE 2 0 16 Figura 14. Subpoblaciones de huemules al norte y sur del Valle Chacabuco. Las flechas indican áreas que deben ser sorteadas por huemules en dispersión, a través de la matriz de estepa para restablecimiento de conectividad y flujo genético. ches de Nothofagus (bosques de len- de los huemules del sur con los del ción de especies vegetales nativas gas y matorrales de ñirres). norte se restablezca, resulta cla- (arbóreas y arbustivas) y realizando A nuestro juicio, los registros ve restaurar la continuidad histó- programas de plantaciones, bus- actuales de huemules en áreas “no rica y pasada de los ambientes de cando recuperar e interconectar habituales” o poco frecuentes, son Nothofagus (bosques y matorrales). ambientes de bosque, sotobosque y claros indicadores de la conecti- Nos parece que pese a ser un am- matorrales perdidos a consecuen- vidad pasada que hoy comienza bicioso objetivo, es realizable a tra- cia de las actividades antrópicas progresivamente a restablecer- vés de un trabajo mancomunado de históricas y recientes que afectaron se entre ambas subpoblaciones. Si organizaciones públicas y privadas, al huemul y a una serie de otras es- pretendemos contribuir y fortale- al alero de un plan de restauración pecies dependientes de estos am- cer a que esta conectividad perdida de largo plazo, realizando viveriza- bientes. ◊ PÁGIN A 25 B OL E T ÍN V IDA S ILV E S T RE NR .1 AGO S T O DE 2 0 16 El modelo de Guardaparques monitoreadores y controladores de amenazas: El caso del Huemul en Valle Chacabuco Nos parece muy valioso el apren- de huemules por radio telemetría dizaje y los logros obtenidos en el y el control de amenazas, tal como trabajo en terreno para monitorear se indica en la Figura 15. rada de “veranadas”. Esto representa un desafío para el equipo de Valle Chacabuco, y proteger las poblaciones de hue- Buscamos replicar este exi- pero también una oportunidad en mul, a través de un modelo que he- toso modelo en los sectores nor- cuanto a seguir recuperando tie- mos denominado “guardaparques te y este del Valle Chacabuco, para rras y hábitat para que el huemul monitoreadores y controladores de progresar en el monitoreo y la re- continúe su camino hacia la recu- amenazas” en el sector sur del Va- cuperación del huemul en estas peración numérica. Los esfuerzos lle Chacabuco. zonas. Estas áreas resultan suma- por controlar el ingreso de ganado Las etapas en que este mode- mente importantes para el hue- doméstico en áreas de huemul de- lo se implementó corresponden a mul, ya que poseen varios y ex- ben constituirse en una prioridad, tres, y tienen como ejes claves: el tensos sectores con buen hábitat, dado la incompatibilidad de la ac- desarrollo de acciones de conser- pero que históricamente han su- tividad ganadera en aquellas áreas vación, la presencia permanente frido del ingreso ilegal de ganado, dedicadas expresamente a la recu- de guardaparques, el seguimiento especialmente durante la tempo- peración del huemul. ◊ POBLACIÓN DE HUEMULES AMENAZAS ACCIONES DE CONSERVACIÓN SITUACIÓN INICIAL IMPLEMENTACIÓN SITUACIÓN ACTUAL Predominan amenazas sobre el huemul Establecimiento de guardaparques e inicio del monitoreo Guardaparques permanentes y monitoreo de huemules marcados Control de amenazas al huemul Incremento en la presencia de huemul Presencia escasa de huemul Figura 15. Modelo “guardaparque monitoreador y controlador de amenazas” implementado en el Valle Chacabuco. B OL E T ÍN V IDA S ILV E S T RE NR .1 AGO S T O DE 2 0 16 Cochrane: El refugio del Huemul Lentamente, como es su forma de ser, el huemul ha ganado espacios en las comunidades de la región de Aysén. La ciudad de Cochrane (3.500 habitantes) ha tenido el privilegio de convivir de manera muy cercana con el huemul. La R.N. Tamango, ubicada a pocos kilómetros de Cochrane, creada El huemul es el símbolo de la comuna de Cochrane. a fines de los 60, fue la que en pri- Figura en la bandera y el logo de la Ilustre Municipalidad de Cochrane. mera instancia proporcionó protección al hábitat del huemul, tomando ha promovido activamente la va- más relevancia la problemática de la lorización del huemul, a través de Conservación Patagónica ha especie hacia la década del 80. Ya a diversas actividades de educación, contribuido al desarrollo exitoso de principios de los 90, la especie fue sensibilización y participación lo- once ediciones de la Ruta del Hue- declarada animal símbolo de la co- cales, regionales y nacionales. mul, caminata de dos días que abar- muna por decreto municipal. Reserva Nacional Tamango. El programa de educación al ca más de 20 km, y que involucra la Con el transcurrir de los años, aire libre, que ha abarcado aproxi- participación de más de cien cami- la conciencia respecto a la condi- madamente un 80% de la comuni- nantes que recorren desde el Valle ción de la especie ha aumentado dad escolar de Cochrane, ha incluido Chacabuco hasta la R.N. Tamango. considerablemente, lo que ha mul- la temática del huemul y la necesi- Es la actividad educativa al aire libre tiplicado las iniciativas y esfuerzos dad de su conservación y monitoreo más antigua y masiva de la región orientados a proteger el huemul en como elementos importantes que se de Aysén, la cual busca sensibilizar la Patagonia en general. Conser- comparten con niños y jóvenes es- y comprometer a los participantes vación Patagónica lo ha hecho en tudiantes durante las caminatas en respecto del sentido de urgencia y la zona del Valle Chacabuco en las áreas naturales. A nivel comunitario la importancia de cuidar al huemul, cercanías de Cochrane, lo que ha ve- se ha difundido el valor de la especie, como animal símbolo de la comuna nido a fortalecer los esfuerzos pre- a través de la exhibición de pelícu- de Cochrane, así como el ambiente existentes. las y la promoción educativa. Existe donde vive. Conservación Patagónica jun- una activa participación de Conser- Por su parte el gobierno local to a la I. Municipalidad de Cochra- vación Patagónica como miembro ha instalado en la plaza principal de ne, CONAF y otras organizaciones, del Consejo Consultivo Local de la Cochrane diversos reconocimientos al huemul, y ha asumido como lema comunal “El refugio del Huemul”. Sin ninguna duda, la comuna es hoy a nivel mundial, una de las mejores áreas para observar al huemul en su medio natural. Esta condición es excepcional y conlleva una enorme responsabilidad. Para que ello perdure, se requiere del compromiso a largo plazo de la comu- Grupo de participantes de la Ruta del Huemul versión 2016. nidad y las autoridades en su cuidado y protección. ◊ PÁGIN A 2 7 B OL E T ÍN V IDA S ILV E S T RE NR .1 AGO S T O DE 2 0 16 L AS P ER S ONAS DE T R ÁS DEL CUIDADO Y MONI T OREO DEL HUEMUL Daniel Velásquez Daniel Velásquez (1961, Baker) cre- gas (cueros), siendo la calidad de su ció en la zona del Valle del río Colo- trabajos ampliamente reconocida nia vecino al Campo de Hielo Nor- en muestras de la comuna de Co- te. Sus padres provenían de Chiloé chrane, así como por personas que y llegaron a Aysén como pioneros le mandan a confeccionar trabajos a vivir en una zona muy aislada de especiales, principalmente aperos la Patagonia. Desde muy pequeño de caballos. Además, es un aman- aprendió a cabalgar, y a medida que te de los caballos y también de los fue creciendo, comenzó a colaborar cuchillos. Guardaparque Daniel Velásquez en el trabajo familiar de campo con En el año 2004, Daniel fue apoyando el trabajo de investiga- el ganado, haciendo leña o constru- parte del equipo que capturó y ción, para luego convertirse con el yendo y reparando cercos. Cuando trasladó la primera pareja de hue- tiempo y la experiencia en guar- se hizo mayor, tomó el desafío y se mules desde Aysén hasta el Cen- daparque experto en huemules. aventuró en algunos trabajos oca- tro de Reproducción de Huemules Daniel ha participado entusiasta- sionales y permanentes asociados de Huilo–Huilo en la región de los mente en cursos de guía de mon- al cuidado de ganado, esquilas y Ríos. Luego, le ofrecieron la posi- taña con la Escuela de Guías de la como operario en una planta pro- bilidad de sumarse como asistente Patagonia, así como en cursos de cesadora de productos del mar. A y técnico de terreno de un proyec- botánica, arqueología, paleontolo- comienzos del año 2000 y durante to de investigación sobre el huemul gía y primeros auxilios. algunos veranos sucesivos, se des- en la Reserva Nacional Tamango, Daniel hoy reúne una expe- empeñó como guardaparque tran- oportunidad que tomó y fue el ini- riencia y conocimiento único del sitorio y de verano para CONAF en cio de sus trabajos con huemules. huemul en su medio natural a nivel la R.N. Lago Cochrane. Al poco tiempo fue contratado en mundial. Es un experto rastreador Daniel es un gaucho muy há- forma permanente por Conserva- de huemul y de otras especies na- bil y destacado en el trabajo con so- ción Patagónica para que siguiera tivas. Ha participado de numerosas capturas de huemul, y posee una experiencia inigualable en el monitoreo por radio telemetría de huemules marcados. Su pasión y cuidado por los huemules impresiona y contagia, no dejando a nadie indiferente. Como el mismo reconoce, jamás pensó en que algún día realizaría un trabajo tan cercano a los huemules. Cada verano, acompañan a Daniel en el Puesto Huemul, Bella (su esposa), y sus dos hijos, Daniel y Tito. Es un hermoso ejemplo de una Daniel Velásquez junto a sus hijos —Daniel y Cristian—durante la captura familia cochranina comprometida y marcaje de una huemula en el sector del Puesto Huemul con y para el cuidado del huemul. ◊ PÁGIN A 2 8 B OL E T ÍN V IDA S ILV E S T RE NR .1 AGO S T O DE 2 0 16 L AS P ER S ONAS DE T R ÁS DEL CUIDADO Y MONI T OREO DEL HUEMUL Delmiro Jara Delmiro Jara (1947, Chile Chico) se fines de los setenta trabajó por va- crió en el sector del río Claro del rios años en el Valle Chacabuco y en lago Plomo donde junto a su fami- la Municipalidad de Cochrane para lia se accedía a caballo o navegando regresar a la Estancia Valle Chaca- a remo desde el lago Bertrand con buco a comienzos del año 2000. los caballos nadando por el río, lo El año 2004, cuando Conser- que tomaba un poco menos de una vación Patagónica adquirió la Es- hora. Sus padres venían de Villa- tancia Valle Chacabuco, de los tra- rrica, desde la región de Los Ríos, bajadores actuales de Conservación quienes se establecieron primero Patagónica, Delmiro era el único en la zona del Zeballos, luego en el que en ese momento se encontraba Baker, para finalmente arraigarse trabajando en la Estancia. Lo hacía picadas de caballos del Valle Cha- en el sector de lago Plomo. desempeñándose como vaquero de cabuco, lo cual sumado a su tran- Hasta los 14 años, vivió siendo la zona de Puesto Tejuela, teniendo quilidad y reflexión, lo convierten vecino del Campo de Hielo Norte en a cargo más de 400 bovinos. Ante- en un miembro clave del equipo el Plomo, cuando entonces comen- riormente, en la misma Estancia, de captura de pumas durante cada zó su peregrinar por el sur de la re- se había desempeñado cuidando a invierno. Ha sido guía de numero- gión de Aysén. Desarrolló diversos más de 3.500 ovinos en las zonas sas versiones de la Ruta del Hue- trabajos de campo asociados al ga- de Campo Nuevo y Campo Grande. mul, así como de visitas de niños, nado y los alambrados, en campos Delmiro es un hombre de po- jóvenes y adultos mayores al Valle de los ríos Baker y Nef y en las cer- cas palabras, pero muy hábil con el Chacabuco y zona del futuro Par- canías de Chile Chico, Zeballos y caballo, contando con mucha expe- que Nacional. Delmiro está siem- Puerto Guadal. Desde este último riencia en el manejo y cuidado del pre dispuesto a compartir sus ex- sitio trabajó en la Mina y en em- ganado ovino y bovino. Es un pro- periencias de toda una vida en el presas constructoras de caminos. A fundo conocedor de los senderos y campo y su profundo conocimiento Guardaparque Delmiro Jara sobre el sector. Delmiro, como hombre de campo, se siente a gusto mientras esté al aire libre y en terreno, compartiendo tanto con animales domésticos como silvestres. Es un excelente rastreador, le gusta pescar, y ha contribuido significativamente como guardaparque responsable del cuidado y monitoreo de huemules en la zona del Puesto Baker. Delmiro junto a su esposa Ana Pinilla viven en la ciudad de CoDelmiro Jara junto a un huemul marcado en el sector de Puesto Baker chrane y tienen 5 hijos: Rody, Paula, Eda, Evaristo y Mirna. ◊ PÁGIN A 2 9 B OL E T ÍN V IDA S ILV E S T RE NR .1 AGO S T O DE 2 0 16 F ICH A T ÉCNIC A Huemul del Sur (South Andean Deer) Considerando la marcada re- siendo excelentes nadadores. ducción de la distribución y po- Originalmente en Chile el blación del huemul, con esti- huemul vivía desde Rancagua maciones que indican menos de (34º S) hasta el Estrecho de Ma- Nombre científico: Hippocamelus bi- 1.500 individuos, se encuentra gallanes (53º S). Hoy se encuen- sulcus clasificado como en Peligro de tra extinto en varias regiones y Extinción. Para ofrecerle ma- sus poblaciones se encuentran Medidas y Peso: Hasta un metro de yores garantías de protección, fragmentadas. Existe un pe- altura en la cruz y pueden alcanzar los tanto Chile como Argentina queño núcleo en la zona de los 90 kilogramos. lo han declarado como Monu- Nevados de Chillán (36º S), el mento Natural. cual está muy aislado. La espe- Hábitat: Bosque de lenga y zonas de En Chile, el huemul es uno cie reaparece en la zona sur de matorrales de ñire. Puede alcanzar de los tres ciervos nativos, jun- Palena, siendo las regiones de zonas de estepas de altura. to al pudú y a la taruca. Es de Aysén y Magallanes, los prin- aspecto robusto, pudiendo ser cipales refugios de la especie. observado solo o en pequeños En Argentina se distribuía grupos familiares. Los machos desde el sur de Mendoza (33º se caracterizan por poseer en su S) hasta la provincia de San- cara una mancha negra con for- ta Cruz (49º S). Se ha extingui- ma de “Y” y tienen astas (corna- do en la Provincia de Mendoza mentas) habitualmente bifur- y la porción norte de Neuquén, cadas que pueden llegar a los 30 siendo el sector las Lagunas de cm, las cuales pierden en invier- Epulafquen (36º S), el registro no. Las hembras no poseen as- más norteño de la especie, y las tas y normalmente se encuen- Provincias de Chubut y Santa tran acompañadas de la cría de Cruz, como las más promiso- la temporada, y un macho. Po- rias para asegurar el futuro de seen un pelaje denso y grueso, la especie. ◊ Distribución geográfica: Es un animal exclusivo del sur de Chile y Argentina y la Patagonia en general (mapa de distribución). Su distribución original se ha reducido dramáticamente. Viven en forma aislada y fragmentada en las zonas de bosque andino patagónico y sectores peri glaciares, tanto en áreas protegidas como en predios privados y fiscales. Alimentación: Es una especie ramoneadora, consumiendo hierbas, hojas de arbustos y árboles, que varían con la latitud y estación del año. Celo: Otoño Período de gestación: Las hembras gestan durante siete a ocho meses aproximadamente. PÁGIN A 3 0 B OL E T ÍN V IDA S ILV E S T RE NR .1 Crías: Nace solamente una por parición, de color uniforme (sin manchas) la cual permanece la mayor parte del tiempo echada durante las primeras dos semanas, con el fin de pasar inadvertida a los predadores. Se desplazan sólo para ser amamantadas por períodos cortos por la madre. Son muy vulnerables e indefensas frente al ataque de perros y no deben ser tomadas por las personas. Amenazas: La reducción y modificación de su hábitat (reemplazo de la vegetación nativa), la actividad ganadera y las enfermedades transmitidas por el ganado, la caza furtiva, el ataque por perros, introducción de especies silvestres (ciervo rojo y jabalí), obras de infraestructura (caminos, centrales energéticas y minería) y el desarrollo turístico no planificado. ¿Qué hacer si me encuentro con un huemul o un grupo de huemules? Ser paciente y quedarse quieto, dándole algunos minutos para que el huemul se acostumbre a nuestra presencia, siempre dejando alguna vía de escape; Registrar el momento con fotografías respetando una distancia en que se observe tranquilo y sin presionarlo; Comparte las fotos por internet especificando el lugar del avistamiento y la observación con personal de guardaparques, profesionales y personas que se preocupan de su conservación. AGO S T O DE 2 0 16 B OL E T ÍN V IDA S ILV E S T RE NR .1 AGO S T O DE 2 0 16 Mapa de distribución del huemul en Chile y Argentina. Las celdas negras indican registros de presencia de la especie. (Tomado de Vila y cols., 2006) PÁGIN A 3 2 B OL E T ÍN V IDA S ILV E S T RE NR .1 AGO S T O DE 2 0 16 Agradecimientos Todo lo logrado y avanzado con res- naldo Saldivia, Jaime Gutiérrez, La Ilustre Municipalidad de pecto a la conservación del huemul Jorge Pérez, Pedro Isamitt, Omar Cochrane, a través del Alcalde Pa- en la zona no hubiese sido posible Ojeda, Marcos Ramírez (Q.E.P.D), tricio Ulloa y Javier Muñoz han ju- sin la colaboración y compromiso José Urrutia, Piero Caviglia, Javier gado un papel clave en la crecien- de muchas instituciones y perso- Subiabre, Jorge Abello y Claudio te promoción y compromiso en el nas. Queremos agradecer muy sin- Manzur. desarrollo de la Ruta del Huemul, ceramente el apoyo de todos, aun- Mención aparte merecen Her- así como en la visión y difusión del que es probable que nuestra lista nán Velásquez quien fue adminis- concepto “Cochrane, el refugio del resulte incompleta y existan omi- trador de la R.N. Tamango por más Huemul”. La Municipalidad de Co- siones involuntarias. de diez años y Paulo Corti, a quien chrane ha gestionado exitosamen- Queremos agradecer al Minis- como Conservación Patagónica te fondos para el desarrollo de una terio de Agricultura y a los servi- apoyamos constantemente al de- serie de actividades asociadas al cios quienes tienen directa compe- sarrollo de su tesis de doctorado, a Huemul y al aire libre en general. tencia con la protección y cuidado través de la cual fue posible la ge- Han sido fundamentales la buena del Huemul, como son la Corpora- neración de conocimiento cientí- disposición de los profesores y di- ción Nacional Forestal (CONAF), el fico inédito sobre el huemul en el rectores de la Escuela Hernán Me- Servicio Agrícola y Ganadero (SAG) área de Tamango y sectores de Va- rino Correo y el Liceo Austral Lord y a sus funcionarios. Destacamos lle Chacabuco. Con ambos posi- Cochrane para el desarrollo de ac- el apoyo de los médicos veterina- blemente sería posible acumular tividades relacionadas al huemul rios Srs. Dennis Aldridge y Julio meses de conversaciones e ideas y la conservación de su ambiente. Cerda, así como el de otros funcio- para conservar y proteger a nues- Una referencia especial a Don Juan narios como Andrés Gómez, Her- tro huemul. Guillermo Opazo, Director del Li- El equipo durante la captura de un huemul. PÁGIN A 3 3 B OL E T ÍN V IDA S ILV E S T RE NR .1 AGO S T O DE 2 0 16 ceo por su activa participación y miso y esfuerzo del experimen- sido posibles gracias al compro- respaldo con la Educación al Aire tado equipo de guardaparques de miso y aporte financiero de cola- Libre. Conservación Patagónica confor- boradores como Duncan and Ellen Agradecemos también el apo- mado por Daniel Velásquez, René McFarland, Weeden Foundation, yo constante de amigos y colegas Millacura (Q.E.P.D), Delmiro Jara, Manfred-Hermsen Stiftung (MHS), que comparten el interés y la preo- Cristián Rivera y Arcilio Sepúlve- además de otras organizaciones y cupación por la condición del Hue- da. Agradecemos la la buena dis- donantes anónimos. mul y la conservación de su hábitat posición del equipo administrativo Agradecemos el incondicio- como son Rody Álvarez, Luigi So- y de finanzas ubicado en Pto. Varas nal apoyo y entusiasmo de Ignacio lís, Fernando Vidal, Verónica Vene- y Pto. Montt. Jiménez, quien nos instó a difun- gas, Ingrid Espinoza, Jorge Molina, Un reconocimiento muy es- dir los resultados de este trabajo, y Cristián Restrepo, Eduardo Pavez, pecial al permanente apoyo en- cuya colaboración fue fundamental Jürgen Rottmann, Jim Williams, tregado por Paula Herrera, Martín para generar este primer boletín. Jimmy Valdés, Wolfram Heise, Fe- y Benjamín Saucedo, quienes han Finalmente quisiéramos agra- lipe Henríquez, Ramón Henríquez sido pilares fundamentales para el decer a todos los funcionarios, ac- y Rodrigo de los Reyes Recabarren. desarrollo de este trabajo, sumán- tivistas, técnicos, conservacio- También a la reciente aparición en dose en forma entusiasta a la cau- nistas, científicos, compañeros, la escena regional de la Agrupación sa del Huemul. Además, aceptando familiares, voluntarios y ciudada- Cultural de Protección al Huemul el hecho de estar separados o dis- nos, quienes de diferente manera y de la Patagonia. tantes en más de alguna fecha es- en sus particulares estilos han co- pecial. laborado durante todos estos años El trabajo en terreno en directo contacto con los huemules El desarrollo de las activida- fue realizado gracias al compro- des relacionadas al Huemul han para impedir el avance del huemul hacia la extinción. ◊ Familia de Daniel Velásquez en sector del Lago Cochrane. PÁGIN A 3 4 B OL E T ÍN V IDA S ILV E S T RE NR .1 AGO S T O DE 2 0 16 B IB L IO GR A F Í A Corti P. 2008. Organisation sociale, dynamique de population, et conservation du cerf huemul (Hippocamelus bisulcus) dans la Patagonie du Chili. Dissertation, Université de Sherbrooke, Canada. Corti P, Wittmer H.U. and Festa-Bianchet M. 2010. Dynamics of a small population of endangered huemul deer (Hippocamelus bisulcus) in Chilean Patagonia. 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Lago Cochrane (Tamango): Reseña Histórica para dos temporadas reproductivas de ataques y predación en un ASP. CONAF. Lara, J. 2013. Captura de un perro en sector Embarcadero de la R. N. Lago Cochrane. Informe CONAF. López, R.; P. Carrasco and P. Corti. 2011. Los Huemules de Chile Central: 37 años de esfuerzo para su conservación. Codeff, Seremi M.A. Biobío & FZS. Saucedo, C. and Gill, R. 2004. The endangered huemul or south Andean deer Hippocamelus bisulcus. Oryx 38 (2): 132-133. Saucedo, C. and R. Gill. 2004. Huemul (Hippocamelus bisulcus) ecology research: conservation planning in Chilean Patagonia. IUCN SSC/ Deer Specialist Group Newsletter 19: 13-15. Saucedo, C. 2008. Huemul herido por perros y consecuente muerte en la R.N Tamango. Informe Conservación Patagónica. Vila, A. R., R. López, H. Pastore, R. Faúndez, and A. Serret. 2006. Current distribution and conservation of the huemul (Hippocamelus bisulcus) in Argentina and Chile. Mastozoología Neotropical 13:263-269. [email protected] wwww.conservacionpatagonica.org wwww.parquepatagonia.org Textos: Cristián Saucedo | Diseño: Andrés Stubelt Citar como: Saucedo, C. 2016. Una década de conservación del huemul. Boletín Vida Silvestre Nº1. Conservación Patagónica. Agosto 2016. 36 pp. Fotografía: Francisco Erize Chantal Henderson Paula Herrera Jorge Molina Javier Muñoz Peter & Beverly Pickford Hernán Povedano Cristián Saucedo Luigi Solís Daniel Velásquez Linde Waidhofer Beth Wald Benjamín Wilcox