Santiago, diecisiete de septiembre de dos mil nueve

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Santiago, diecisiete de septiembre de dos mil nueve.
VISTOS, OIDOS LOS INTERVINIENTES Y CONSIDERANDO:
PRIMERO: Tribunal e intervinientes. Que los días dos, tres, cuatro, siete,
ocho, nueve, diez, once y doce de septiembre de 2009, ante la Sala del
Segundo Tribunal de Juicio Oral de Santiago, integrada por los jueces don
Rafael Andrade Díaz, quien la presidió, por doña María Luisa Riesco Larraín y
don Carlos Iturra Lizana, se llevó a efecto la audiencia de juicio oral en causa
RIT N° 103-2009, seguida en contra de Maria Eugenia Darrigrande Moreno, 41
años, nacida el 9 de enero de 1968, en Santiago, cédula nacional de
identidad Nº 9.151.653-5, soltera, profesora, domiciliada en Ana María Carrera
5132, Las Condes, Santiago, actualmente en prisión preventiva en el CPF
Santiago.
Fue parte acusadora en este juicio el Ministerio Público, representado
por los Fiscales Adjuntos Lorena Barudi Labrín, y Patricio Cooper Monti,
domiciliada en Avenida Pedro Montt N° 1606, y actuó como querellante doña
Jessica Salinas Arriagada, representada por los abogados Carolina Marín
López y Mauricio Álvarez Alvarado.
La defensa del acusado estuvo a cargo de los abogados defensores
privados Miguel Soto Piñeiro, José Antonio Mecías Espinoza, Eduardo Rosado
Silva y Maximiliano Urrutia Quezada, todos domiciliados en Valentín Letelier N°
1373 oficina 501, Santiago.
SEGUNDO: Acusación. Que tanto el Ministerio Público como la
querellante fundaron la acusación deducida en contra de la imputada, según
se lee en el auto de apertura del juicio oral, en los siguientes hechos:
Que, desde agosto del 2007 al interior del Establecimiento Educacional
Liceo Polivalente Santa Juliana ubicado en Av. México 755 Recoleta, en
donde la acusada Maria Eugenia Darrigrande Moreno ejercía funciones como
Profesora Jefe del 6° año básico A y Jefe de Unidad Técnica Pedagógica de
dicho establecimiento educacional, procedió a comenzar una fase de
seducción en contra de su alumno de 12 años de edad de iníciales S.A.J.S. a
través de regalos y atención preferencial, para luego comenzar a ejecutar
actos de significación sexual consistentes en tocaciones en el cuerpo de su
alumno y besos en la boca, lo que se realizaba en dependencias de Liceo,
para posteriormente a contar de septiembre 2007 aproximadamente, hasta el
23de noviembre del 2007, comenzar a llevar a su víctima en horas de la tarde
de los días viernes hasta un departamento ubicado en calle Libertad N° 1290,
Escala K Dpto. 501, en Santiago, en donde procedía a realizar actos sexuales
con su víctima consistentes en besos, tocaciones en su cuerpo y penetración
vía vaginal del menor a la imputada con eyaculación en su interior, lugar en
que llegaba la víctima con la imputada en el vehículo de esta, previamente
de pasarlo a buscar la mayoría de las veces en las intersecciones de Av.
México con Recoleta, lugar en donde era recogido la victima para ser
conducido hasta el departamento.
Sostuvo el Ministerio Público y la querellante que los hechos descritos son
constitutivos del delito reiterado de abuso sexual, previsto en el artículo 366 bis
del Código Penal en relación con el artículo 366 ter del mismo cuerpo
normativo, atribuyéndole a la acusada participación en calidad de autora, de
conformidad a lo dispuesto en el artículo 15 Nº 1 del Código Penal.
Agregaron que respecto de la acusada concurre la circunstancia
atenuante de responsabilidad penal descrita en el artículo 11 N° 6 del Código
Penal, esto es, su irreprochable conducta anterior y le perjudica la
circunstancia agravante prevista en el artículo 368 del Código Penal.
Finalmente los sostenedores de la acción penal requirieron se imponga
a la acusada, la pena de 15 años de presidio mayor en su grado medio en
conformidad a lo establecido en el artículo 366 bis del Código Penal y 351 del
Código Procesal Penal y accesorias generales y especiales contempladas en
el artículo 372 del Código penal y que correspondan en derecho, con
condenación en costas.
La parte querellante, adhiere a la acusación fiscal en todas sus partes.
TERCERO: Alegatos de apertura. Que en su alegato de apertura el
Ministerio Público, señaló que el caso que el Ministerio Público presenta ante el
tribunal es el de un niño de 12 años, Sebastián, quien en interior de su colegio,
El Liceo Polivalente Santa Juliana, ubicado en Avda. Recoleta 755, Recoleta,
cuando cursaba 6° básico, comenzó a vivir lo que a su temprana edad, no
correspondía, su despertar sexual, en manos de su profesora jefe, la acusada,
doña María Eugenia Darrigrande Moreno, quien era su profesora jefe y
además
jefa
de
la
unidad
pedagógica
de
dicho
establecimiento
educacional. La acusada, desde agosto de 2007 inició una fase de seducción
y acercamiento con su alumno, a través de regalos y atención preferencial,
logrando una cercanía más allá de lo normal de la relación profesor alumno,
transgrediendo los límites naturales de la confianza y del respeto permitido,
dando paso a ejecutar actos de significación sexual, consistentes en
tocaciones en el cuerpo de su alumno y besos en su boca, lo que se realizaba
en dependencias del liceo, actos que fueron aumentando su intensidad,
vulnerando cada vez más el bien jurídico protegido, la indemnidad sexual de
Sebastián, en forma grave y reiterada. Y, así que a contar de septiembre de
2007 hasta el 23 de noviembre del mismo año, comenzó a llevar a su víctima
en horas de la tarde, todos los días viernes a un departamento ubicado en
calle Libertad 1290 Nº 501 Santiago, en donde procedió a realizar actos
sexuales con su víctima, ya no solo consistentes en besos y tocaciones, sino
que lo inició en la sexualidad, le enseñó a tener relaciones sexuales, logrando
que el niño la penetrara por vía vaginal, incluso eyaculando en su interior, lo
que se ejecutaba cada vez que se encontraban o llegaban al lugar. A este
departamento la víctima era llevada, luego de pasarlo a buscar en vehículo,
en la intersección de Avda. México con Recoleta. Es así, que una relación
profesor alumno, se desnaturalizó, por el actuar de un adulto, convirtiéndose
en una relación propia entre una mujer y un hombre, sólo que la mujer tenía 40
años y que el hombre era un niño, tanto física como psicológicamente, de tan
solo 12 años. Un niño que no conocía de la sexualidad más allá de lo que se
enseñó en su colegio o conversaba con sus iguales, con curiosidad e
inquietudes propios de su edad; que jugaba a la pelota con sus amigos, que
era un excelente alumno y un referente entre sus pares. Una mujer, la
acusada, de 40 años, madre, profesional de la educación, con más de 14
años de ejercicio como profesora, referente de sus pares, al ser jefe de UTP,
quien en su calidad de profesora, y más aún de profesora jefe, tenía la función
de entregar valores, conocimiento apoyo, dar ejemplo, ser una coadyuvante
en la formación integral de los niños que tenía a su cargo. Sin embargo usó y
abusó de su condición de docente, de la confianza y cercanía del niño,
transgredió los límites, siempre estando conciente de su ejecutar, realizando
cada uno de los actos necesarios parra lograr su objetivo, seduciendo,
encantando, manipulando, coaccionando, quería, sabía y podía, y lo logró.
Pudo parar, era ella el adulto, una mujer de 40 años, era ella la que debía
poner los límites, era ella la profesora, y sin embargo, aún cuando la víctima se
dio cuenta que no era correcto lo que estaban haciendo, que ya no le
gustaba, que quería volver a jugar a la pelota, que le interesaba una niña de
su edad, y quiso terminar, ni aún así paró, sino que coaccionó a su víctima,
con
que
estaba
embarazada,
obligándolo
a
continuar
con
ella,
ocasionándole un estado de angustia tal, que llevó a cortarse uno de sus
brazos. En este caso lo que se ha vulnerado es la indemnidad sexual, en forma
grave y reiterada, en donde se interrumpió abruptamente la infancia de un
niño de 12 años, iniciándose su vida sexual en forma temprana, inadecuada,
acelerando su desarrollo natural y sano en su vida sexual, saltándose etapas
propias y esenciales en el crecimiento de todo ser humano, en el área de la
sexualidad. Como todos los delitos de abusos sexuales, existen dos versiones de
los hechos, la de la víctima y la de la agresora, el tribunal, al ponderar la
prueba rendida, podrá evaluar y valorar, cual se acerca más a la realidad, de
cómo ocurrieron los hechos. La de un niño de 12 años, que jamás habría
contado, porque era leal, noble, a tal extremo que nunca dijo nada, incluso
entre sus iguales guardó su secreto, silenciosamente, hasta que el 23 de
noviembre de 2007, donde se supo la verdad, al ser increpado por sus padres
sobre la identidad de la supuesta polola. Una verdad desgarradora para los
padres
de Sebastián, para la madre que había confiado en ella,
preguntándole, en su calidad de profesora jefe, si sabía lo que le estaba
pasando a su hijo, que había notado cambios en su conducta y en su estado
físico, pidiéndole ayuda, cuando ya la acusada estaba abusando de su hijo y
era la responsable directa de lo que estaba ocurriendo; para un padre, que ve
los mensajes de texto que la acusada le envió desde su celular, Nº77722786, al
celular de su hijo 8444874, ese mismo 23 de noviembre, y pudo observar el
tenor de estos, confirmando que entre doña María Eugenia Darrigrande y su
hijo, no había una relación tan solo de profesor a alumno. Es así cómo el 23 de
noviembre se supo, que la polola de Sebastián, a la que iba a visitar todos los
viernes en la tarde, era su profesora jefa, una mujer de 40 años, la acusada. La
versión de un niño que depondrá en el juicio, versión que ha sido consistente
en el relato, durante toda la investigación desde el inicio, entregando detalles
que sólo una persona que vivenciara los hechos, podría aportarlos,
describiendo el departamento donde habían ocurrido los hechos, con una
precisión que sólo se da cuando se ha ido muchas veces al lugar, con una
precisión que sólo se da cuando se está mucho tiempo en el lugar; donde no
se visualizan ganancias secundarias en su declaración, porque no ganaba con
develar el secreto, no tenía razones para inventar, mentir o engañar, con un
relato creíble, válido y con la existencia de un daño asociado a su vivencia
sexual prematura, un niño que le tenía aprecio, a su “seño”, la quería y no
quería que le pasara nada. Este es un caso donde la nobleza de los niños es
usada en beneficio de los adultos, donde los códigos de silencio y las
lealtades, se usan para lograr la satisfacción sexual de los adultos. Hoy, se
ignora si la acusada declarará en juicio, pero a través de sus dos
declaraciones en la etapa de investigación, la primera, en marzo de 2008 y
marzo de 2009 la segunda, una vez se puede apreciar qué pueden hacer los
adultos para ocultar su actuar, para no asumir su responsabilidad, con
declaraciones exculpatorias, acomodaticias, minimizadoras y victimizantes,
llegando a decir que el menor había sustraído un chip de su celular, para auto
mandarse
los
mensajes
que
la
incriminaban,
dentro
de
toda
una
confabulación en su contra por parte de los padres e incluso de los demás
profesores del establecimiento educacional, negando absolutamente todos
los cargos, circunscribiendo su actuar a lo propio de una profesora jefe,
preocupada por su salud, que el niño nunca estuvo en el departamento, en
circunstancias que el niño describe con forma clara, precisa cómo era ese
departamento, la ubicación de las habitaciones, los dormitorios, incluso,
indicando, cuando se le exhibieron las fotografías, después de su descripción,
que había habido cambios, o al conocer los antecedentes de investigación un
año después, que sí, que había ocurrido algo, pero solo una vez sólo en el
departamento, jamás en el colegio, cuando no pudo resistirse a la seducción
de un niño de 12 años, endosando la responsabilidad a su víctima y
minimizando la suya. Hay además, prueba abundante que se rendirá en juicio,
a través del cual se conocerá la develación de este abuso sexual develado en
el tiempo, qué se hizo cuando se tomó conocimiento por las autoridades de
colegio y la familia, cuándo se inició la fase de seducción, cómo se inició,
cómo tenía acceso la profesora al niño en el colegio, cuando se iniciaron y se
terminaron los abusos y quien fue el sujeto activo, y su calidad. Es así que se
escuchará la declaración de los compañeros de Sebastián, que darán cuenta
de una en forma reiterada, cómo se comunicaban misivas, por papelitos,
cómo se veían juntos, lo que extrañó a todos los niños y les llamó la atención; al
padre, madre y abuela del niño, que indicarán cómo tomaron conocimiento
del hecho, los cambios de conducta del menor, cómo la abuela indicará que
todas las tardes después del colegio los viernes a ducharse, a perfumarse, para
después salir y llegaba en horas de la tarde hasta el hogar de su abuela. A
miembros de la comunidad estudiantil del Liceo Polivalente Santa Juliana, al
Director que denunció, al conocer los antecedentes, frente a la denuncia que
hicieron sus padres en el colegio de lo que estaba aconteciendo. La psicóloga
del colegio, a la que el niño le develó la naturaleza y la entidad de los abusos,
a la profesora de inglés, lenguaje y comunicación y naturaleza y sociedad, y
las inspectoras del colegio, todas ellas, que constataron y vieron conductas
inadecuadas, propias de una relación clandestina al interior del colegio.
Incluso, algunas presenciaron conductas de relevancia sexual de la acusada
hacia el niño, que darán razón de sus dichos y serán corroborados por
planimétricos que darán cuenta que sí, podían ver, que tenían visibilidad
desde los puntos que se encontraban. Un tercero, don Carlos Andrés Contardo
Fuentes, dueño del almacén donde Sebastián iba a realizar las llamadas
telefónicas, cuyo número apareció en el tráfico de llamadas, autorizado
judicialmente,
del
celular
de
la
imputada,
que
dan
cuenta
del
comportamiento del menor cuando hacía esas llamadas, propia de quien
habla y tiene una relación sentimental, sin olvidad que quien la tenía, era un
niño de 12 años. Peritos fotógrafo que dará cuenta de la filiación fotográfica,
el planimétrico, que será incorporado como otra medio de prueba, que dará
cuenta de la ubicación de las personas y la visibilidad de ellas; Mauricio
Ortega
Alarcón
y
María
Alejandra
Galáz
Silva,
peritos,
uno
de
Telecomunicaciones y la otra del OS 9, el primero de los cuales, dará cuenta
del contenido del celular del niño y la cantidad de mensajes contenidos en el
mismo, la segunda dará cuenta de todo el tráfico de llamadas que existió
entre profesora y alumno y los mensajes de texto que se enviaron, don Andrés
Rosmanich, que dará cuenta de la anamnesis del niño, que se trata de un
menor de 12 años, de un niño, pero que sí tenía la capacidad de erección,
penetración y eyaculación; Doña Patricia negrete Castro, que dará cuenta
del informe que se hizo a la acusada respecto de señales o lunares en su
cuerpo, donde se da cuenta que existen lunares señalados en su oportunidad
por el niño en el cuerpo de la acusada, que sólo se podían haber observado a
través de la desnudez de ésta; doña Pamela Aedo, psiquiatra del Servicio
Médico Legal, que dará cuenta de un informe de credibilidad y daño
asociado, donde se establece claramente que el relato es creíble, válido y
que existe un daño, doña Jazmín Cassis, psicóloga del Instituto de Criminología
de la P.D.I, que dará cuenta del perfil psicológico de la evaluada, la acusada
aquí presente; doña Andrea Bahamondes, Jefa del Servicio de Psiquiatría del
Servicio Médico Legal, que dará cuenta que la acusada no tenía ninguna
enfermedad mental que la hiciera incapaz o que la limitara en la capacidad
de hacerse responsable de los hechos de la acusación, que estaba conciente,
tenía voluntad y podía decidir, por lo tanto, es sujeto de responsabilidad. Todo
esto corroborado con prueba documental, los otros medios de prueba y
prueba material, la billetera incautada con la foto de la profesora, el celular y
prendas de vestir incautadas en el departamento donde ocurrieron parte de
los abusos. En definitiva, a juicio del Ministerio Público, después de una larga
investigación, con extrema acuciosidad, donde el principio de objetividad
primó, bajo todos los elementos necesarios, para crear la convicción en la
fiscal que llevó la investigación, que los hechos habían ocurrido como el niño
lo declaró, constatado con prueba documental, fotográfica, pericial, cree el
Ministerio Público que el tribunal adquirirá la convicción, más allá de toda
duda razonable, para condenar a la acusada aquí presente por el delito de
abuso sexual reiterado en contra de un menor de 14 años, Sebastián. Así
también se determinará, cual era la calidad que tenia y detentaba la
acusada, frente a su víctima, que la hace sujeto de la agravante especial
contemplada en el artículo 468, porque ella era su maestra, era su profesora
jefe, no solamente del año que cursaba, 6º A, sino que venia siendo su profesor
jefe, desde 5º, 2006. Por lo tanto, a juicio del Ministerio Público, la pena
solicitada es proporcional, en relación al desvalor, al nivel de vulnerabilidad y
daño al bien jurídico protegido, que es la indemnidad sexual. Todo niño tiene
derecho a vivir una sexualidad sana, todo niño tiene derecho a iniciar esa
sexualidad de acuerdo a las etapas que le corresponde vivir. Nadie, menos un
adulto, tiene derecho a adelantar la sexualidad de acuerdo a las etapas que
le corresponde vivir, menos cuando el niño es menor de 12 años.
La querellante expuso que en el desarrollo de este juicio identificaremos
una serie de conceptos que son comunes en este tipo de delitos. En primer
lugar, el secreto que debe ser mantenido por la víctima de hechos que
muchas veces no alcanza a comprender, en su totalidad y gravedad; la
presión psicológica a que son sometidas las víctimas en el evento de la
develación de lo ocurrido y por cierto, la culpa del ofendido, de convertirse en
causante de un quiebre familiar. Tal como lo manifestó el Ministerio Público,
cree que será posible acreditar con los medios de prueba presentados en este
juicio, en primer lugar, la existencia de los hechos en que se funda la presente
investigación y la congruencia que estos guardan en relación con los cargos
por los cuales se ha formalizado la investigación y se ha acusado a la
imputada María Eugenia Darrigrande Moreno. Como tales hechos se
comprenden el tipo penal materia de la acusación, como abuso sexual del
artículo 366 bis, en relación al artículo 366 ter, al cumplir con todos los
elementos normativos y descriptivos de los delitos, será acreditado cómo la
afectada tuvo acceso al menor, y la dinámica abusiva que utilizaba, debido a
ser ella la profesora jefe del curso de Sebastián, en el que se encontraban
durante el año 2007, teniendo la confianza suficiente para acercarse a él, y no
solo a eso, acercarse a él con intenciones distintas a las que todo educador
debiese tener con un educando con un alumno de la edad que tenía
Sebastián al momento en que se inicia esta situación, 11 años de edad. En el
desarrollo del juicio veremos, a través de testigos, cómo se produjeron los
hechos materia de esta larguísima investigación la forma cómo los padres
tomaron conocimiento de los abusos de que fue víctima su hijo por parte de
quien ellos creían era un ente protector y que vulnerando toda confianza
depositada en ella por el cargo que ocupaba, profesora jefe y jefa de UTP del
colegio donde se desempeñaba, abusó sexualmente del hijo de ellos,
afectando la indemnidad sexual del menor y por cierto su desarrollo
psicoemocional. Por último cree que se logrará demostrar a calidad de autora
de la acusada, en tales ilícitos, en contra del menor Sebastián ya indicado.
Para poder contextualizar cómo ocurrieron los episodios abusivos y lograr una
convicción inequívoca de parte del tribunal, quiere señalar que Sebastián es el
hijo mayor de de 3 hermanos, nacidos del matrimonio de sus padres, don Luis
Alberto Jeria y doña Jessica Salinas, grupo familiar que ya no vive en el mismo
domicilio, debido a que los padres se encuentran separados, a la fecha,
aproximadamente hace 4 años. A raíz de la separación, los hijos del
matrimonio tenían una dinámica de vida, que se repartía entre el domicilio de
la abuela paterna, donde actualmente vive el padre, durante las tardes,
después del colegio y durante las noches, con la madre, que los pasaba a
buscar, después del trabajo. Sebastián ingresa al liceo Polivalente Santa
Juliana, en kínder y ha cursado sus estudios hasta el día de hoy, siendo un
alumno destacado entre sus pares, estando siempre en el cuadro de honor,
por sus resultados académicos. Es así que en el año 2006, cuando cursaba
quinto básico, se le designa como profesor jefe a doña maría Eugenia
Darrigrande Moreno, con quien lleva una relación inicialmente normal, de
respeto y afecto, de la misma manera que el resto de sus compañeros,
situación esperable, por lo demás, debida a la edad de los menores. Es
durante el transcurso del año 2007, que Sebastián experimenta una cierta
nostalgia debido a la separación de sus padres, comienza a echar de menos
a su padre, con quien no tiene una relación muy presencial y empieza a
experimentar una serie de situaciones, precisamente por la separación de los
mismos. Es en ese contexto se muestra vulnerable y pide ayuda, para
conversar sobre los problemas que le ocurren en la casa. Pide ayuda, en
primer lugar, a la psicóloga del colegio y a su profesora jefe, doña María
Eugenia Darrigrande, con quien logra formar víctimas de confianza durante el
año anterior, donde ésta empezó a ser su profesora jefe. Por esta situación e
cercanía, forma un vínculo distinto del que se forma entre un alumno y una
profesora, iniciándose una etapa de seducción al interior del establecimiento
educacional, a través de regalos, de cartas, de manuscritos que se enviaban
entre ella y el menor, para luego derivar en un interés sexual de ella para con
el menor. Tal como lo indicó, los hechos se iniciaron en el interior del colegio,
con abrazos, con caricias y besos en la boca, al interior de alguna de las salas
del establecimiento, la sala de videos, la bodega, en más de alguna ocasión,
en alguna otra sala, incluso en la sala de profesores, para luego llegar a tener
relaciones sexuales al interior del departamento que tenía la profesora
ubicado en calle Libertad 1290 501, en la comuna de Santiago, distinto del
domicilio que compartía con sus padres en la comuna de las Condes y lleva al
niño ahí, a tener la primera relación sexual. Es a partir del primer beso se forma
entre ellos un vínculo que se prolonga por aproximadamente 3 meses, al cual
se pone término, debido a que el menor ya no quería seguir con esta
situación, porque le empezó a gustar una niña del colegio de la misma edad,
situación que le manifiesta a la profesora, y fue a raíz de esta situación, en un
afán de mantener al menor a su lado y continuar con esta relación que se
formó entre ellos, que ella se encontraba embarazada, generándole al menor
una situación de responsabilidad con el hecho, para luego derivar en una
situación de angustia extrema, que se refleja en el intento del menor de
agredirse físicamente, cortándose los brazos. La develación de los hechos se
produce a raíz del permiso que solicita Sebastián a sus padres para ir a una
fiesta en viernes, a una fiesta donde su supuesta polola y pasar la noche en
esa fiesta. A raíz de la negativa de los padres de darle permiso, el menor
insistentemente lo realiza y los padres le condicionan la ida, dejándole
simplemente cosas que todo parte solicita, la dirección donde iba a ir, el
teléfono donde se le va a ubicar y el nombre de la polola. Sebastián hace pie
atrás, pero igualmente concurre en la tarde al domicilio de la profesora,
mantiene una relación con ella y vuelve a su hogar. Ante la duda de la madre
y la molestia de la madre por haberse ido de la casa el menor, sin avisar en
qué lugar estaba, es que ya, con la insistencia de ella y de su padre, deciden
tomar el toro por las astas, toman al menor y lo llevan hasta el domicilio que
éste les señala, donde supuestamente vivía su polola y permanecen ahí por
una hora. Fue tal la insistencia de los padres por saber quién era la polola, que
Sebastián ya no aguanta la presión y señala, claramente que su polola era su
profesora, su “seño” María Eugenia Darrigrande Moreno. Como es de suponer,
los padres no dieron crédito inicialmente a lo señalado por el menor, por lo
cual querían ponerse en contacto con la profesora, con la cual tenían una
cercanía, pro ser su profesora jefe. Concurren al almacén del frente, donde
normalmente concurría el menor a llamar a la profesora, donde se deciden
comunicar con ella. La profesora no contestaba el teléfono entre celulares,
pero sí contesta el llamado del almacén. La madre escucha el diálogo que
tiene la profesora con el menor, señalándole éste que ya no había aguantado
y le había contado a su madre. Ante el nerviosismo de las respuestas de la
profesora, dio claras luces, al ser poco categórica la negativa de la profesora,
que lo que estaba señalando el menor era cierto. El lunes de la semana
siguiente, concurren al colegio para poner en conocimiento los hechos a las
autoridades y ver la posibilidad de enfrentar a la profesora y ver qué sucedía.
La profesora no concurre ese día lunes, presenta una licencia médica, pero de
todas maneras los padres ponen en conocimiento de los hechos a las
autoridades del colegio, se inicia la denuncia por parte del director del mismo,
lo que da origen a esta investigación que nos convoca hoy, en este juicio oral.
Los episodios abusivos se encuentra acreditados por una serie de
antecedentes, pericias y testimonios que se recabaron en la etapa de
investigación Dentro de los peritajes, ciertamente a juicio de la querellante,
dentro de los de mayor trascendencia, es el que se realizó por la psicóloga
Pamela Aedo, del Servicio Médico Legal, que consistió en un peritaje de
credibilidad y daño del menor, que arroja como resultado que el relato del
niño víctima es creíble y que presenta daño asociado a la vivencia de abuso,
descartando de plano la existencia de ganancia secundaria o la motivación
para declarar en falso. Por otra parte, respecto de la acusada, la pericia
realizada por la psiquiatra Andrea Montes, jefa del área de psiquiatría del
Servicio Médico Legal, que tenía por objeto efectuar un examen de facultades
mentales de la acusada, y que se realizó lo más cercano a la ocurrencia de los
hechos, cuando ya la imputada había ingresado al Centro de Orientación
Femenina a cumplir la medida cautelar de prisión preventiva. Se señala que la
imputada se encuentra sin alteraciones mentales que pudiesen determinar
algún grado de inimputabilidad en los abusos que cometió y por cierto, lo que
quiere decir que tiene sus funciones psíquicas, inteligencia, voluntad y
conciencia, indemnes. Un gran enigma dentro de este juicio, es saber la teoría
del caso que tiene la defensa, quienes manejaron diversas hipótesis durante la
investigación de lo que ocurrió entre la imputada y el menor víctima, siempre
atribuyendo responsabilidad a terceros, del hecho de que la imputada se vio
envuelta en este juicio. Se echaba la culpa a un complot, al menor de ser
seductor, que se arrojó sobre la profe, se echó la culpa a las profesoras, se
llegó incluso a decir que la madre del menor, había tenido una relación con
una ex pareja de la profesora, circunstancia que no es cierta, es más, durante
la etapa de la investigación, en marzo de 2009, la profesora presta
declaración ante la fiscalía y los intervinientes del juicio, reconociendo la
existencia de los hechos, tal cual como se los ha imputado el Ministerio Público.
La querellante, cree que la profesora no tenia conciencia de lo ilícito de los
hechos, que no había intencionalidad abusiva en su comportamiento, de la
prueba que se presentará, será descartada de plano por los miembros del
tribunal. Por lo expuesto, es que estima que los miembros del tribunal
alcanzarán el convencimiento necesario, para aplicar la pena solicita por el
Ministerio Público y la querellante, en la acusación como autora del delito
reiterado de abuso sexual, de carácter reiterado, en la persona del menor de
iniciales SAJS.
La defensa, por su parte, afirmó que entiende que lo que el tribunal va
a encontrar a la vuelta de este juicio, va a ser pura y simplemente la comisión
de uno de aquellos delitos de abuso sexual tipificados en el artículo 366 bis del
Código Penal. Se trata de un abuso sexual puro y simple, respecto del cual no
concurre, ni la circunstancia calificante del 368, ni se podrá acreditar la
reiteración a que alude el artículo 351 del Código Procesal Penal. Respecto de
la calificante, lo que el 368 hace en definitiva respecto del delito del artículo
366 bis, es establecer una suerte de abuso por prevalimiento, es decir, no basta
la sola concurrencia de la calidad formal aludida en el 368, se requiere
además, el uso o más exactamente, abuso en una relación de prevalimiento
de esa calidad formal, vale decir, que se haya aprovechado una posición de
poder, en el marco de esa calidad formal y además, como en toda
circunstancia agravante, que ello haya sido hecho con dolo directo, sea cual
sea, el tipo de dolo que el tipo base requiere, las agravantes requieren de dolo
directo, particularmente una agravante de prevalimiento, que no solo alude a
un mayor desvalor del injusto por un mayor desvalor de acción, sino que alude
a un mayor disvalor de culpabilidad, por un mayor desvalor de intención. En
otros términos, como entiende se acreditará en el juicio, tratándose de una
relación que era vivenciada como paritaria, no existió el prevalimiento de la
posición de poder ni el dolo correspondiente a ese prevalimiento, que permita
aplicar la agravante, sin recurrir a responsabilidad puramente objetiva. Derivar
la aplicación de la agravante de la sola calidad de profesora jefe, sin
acreditar los restantes extremos objetivos y subjetivos, es afirmar la existencia
de responsabilidad objetiva, contra el principio de culpabilidad, constitucional
y legalmente reconocido en nuestro país. Respecto de la reiteración del 351,
corresponderá
al
Ministerio
Público,
acreditar,
inequívoca
y
circunstanciadamente la reiteración. Entiende la defensa, al tenor de la
certeza existente en la investigación, sobre dicha reiteración, que no logrará su
propósito, difícilmente sobre la base sólo de las declaraciones del menor, que
a ese respecto resultan a lo menos equívocas, podrá acreditarse la existencia
de la reiteración que se reclama. En todo evento, aún cuando hubiere
antecedentes de reiteración, estamos ante un supuesto paradigmático de
delito continuado, existe el mismo bien jurídico lesionado, existe una forma
homogénea o de igual significación de lesionar el bien jurídico. Tratándose de
un delito contra bienes jurídicos personalísimos, se da la identidad de víctima y
además, que es lo que determina el carecer pietista de la construcción del
delito continuado, se da igualdad de ocasión en cada una de las comisiones.
Al haber igualdad de ocasión en cada uno de los desenlaces, se da la menor
culpabilidad que justifica el carácter pietista del delito continuado y además
se da la circunstancia procesal, que contra reo, viene siendo el fundamento
del delito continuado, no solo en la jurisprudencia chilena sino también en la
jurisprudencia comparada. El superar una certeza, en la acreditación de cada
una de las acciones, mediante la apreciación del conjunto, como delito
continuado. Resumiendo, no se podrá acreditar la reiteración, no bastan para
ello las solas declaraciones del menor, que a ese respecto son intrínsecamente
ambiguas, pero aún cuando hubieren antecedentes en relación a esa
reiteración, de todas formas concurre un delito continuado, lo que lleva a
reducir la posibilidad de aplicar el artículo 351 del Código de Procedimiento
Penal, y el régimen de acumulación jurídica, que el mismo establece para el
concurso real o material de delitos. En otros términos, no concurre en este caso
un concurso real o material susceptible de ser sancionado en el régimen de
asperación contemplado en el artículo 351 del Código de Procedimiento
Penal. Adicionalmente, mediante peritos particulares y públicos, se acreditará,
que favorece a la acusada la atenuante del artículo 11 Nº 1 en relación al 10
Nº1, esto es, una imputabilidad disminuida, que atendido el número y la forma
en que se encuentra acreditada, debería entenderse dotada de los efectos a
que se refiere el artículo 73 del Código Penal. O sea, se acreditará la
imputabilidad disminuida, del 11 Nº 1, en relación al artículo 73. En este
contexto, el resultado final de este juicio será una sentencia por una situación
pura y simple del artículo 366 bis, sin ninguna calificante y entiende que sin
posibilidad de apreciar un conjunto real o material de delitos.
CUARTO: Declaración de la acusada. Que en el transcurso de la
audiencia la acusada, debidamente informada de sus derechos en presencia
de sus abogados, decidió renunciar a aquel que le permite guardar silencio y
prestó declaración sobre los hechos materia de la acusación.
Señaló que su intención es narrar los hechos de acuerdo a cómo
ocurrieron, pero hará hincapié que sólo narrará lo sucedido, y en otra
oportunidad dará las explicaciones que motivaron tal conducta. Es profesora
hace 18 años de Educación General Básica, durante esta trayectoria, ha
ejercido en 3 colegios, en especial en el ramo de educación matemática, 14
años en el Liceo Polivalente Santa Juliana de Recoleta, siempre tomando
cursos y alternándolo con la Unidad Técnica Pedagógica. El año 2006 tomó un
curso completo, atendiendo las necesidades socioeconómicas, ese año fue
muy productivo, tanto en las relaciones con sus alumnos como con sus pares,
en su desempeño en la dualidad de sus funciones – aclara que la U.T.P, es la
encargada del diseño e implementación de las políticas educacionales, que
se aplicaban ramo a ramo y profesor a profesor, en concordancia con los
lineamientos de la dirección y del Ministerio de Educación. Esta dualidad
empezó de a poco a recaer en su persona. En el año 2007 tomó el mismo
curso, ahora Sexto año A, en el cual Sebastián continuaba, era un alumno
excelente, el año anterior y líder natural del curso, en ese mismo año, él llegó
renunciando la jefatura, ya que tenía muchos problemas de índole familiar. En
el transcurso de ese año, Sebastián se le empezó a acercar, indicando que
tenía muchos problemas, ella lo derivó a la psicóloga del colegio que lo
atendió y le entregó a ella sus resultados, como profesora jefe, en otras
oportunidades, le volvió a solicitar, y ella lo volvió a derivar, eso era ya la
tercera vez, iba mucho a la oficina porque quería conversar con ella, porque
sentía mucha pena, porque había mucho problemas en su casa. En este
quehacer y desarrollo de funciones, ya que estaba con muchos quehaceres,
se suscita el problema en que una alumna del curso sufre un aneurisma
cerebral, ella era la mejor amiga del menor, esto provocó un grave problema
a nivel de curso e afectó mucho a la comunidad escolar, porque la menor
estaba en riesgo vital y el tema de la muerte para los menores es muy fuerte,
entonces se tuvo hacer cargo de esa responsabilidad, porque estaban todos
muy impactados. Desde antes de ser profesora, nunca ha quedado
indiferente ante los problemas que la rodean, y eso es lo que provocó su
vocación profesional docente. Ella estaba con muchos problemas, el director
le delegó este problema también, los fines de semana tenían que ir al hospital,
al Roberto del Río y aquí empieza su drama personal. Como a fines del mes de
octubre, esta situación intensa de Sebastián hacia ella, al principio la
agobiaba, porque tenía tantos problemas, que al principio la cansaba, pero
después de un tiempo, le empezó a parecer divertido e ingenioso y más allá,
sin hacer segunda o tercera lectura, empezó a sentirse halagada con sus
piropos. En forma irracional, no sabe cómo sucedió su actitud, las
conversaciones partieron porque él le colocaba música en el MP3, en su oído
y le contaba muchos problemas de índole familiar, y le afectó bastante que un
primo había violado a la hermana. En base a eso empezaron a tener más
conversaciones, esto le preocupó mucho, coincidió que la abuelita paterna lo
había echado de la casa. Después quedaron de verse a fines de octubre, se
vieron en un On the Run, en un servicentro, ella lo llevó en su auto, se sirvieron
una comida rápida y ahí fue el primer beso. Esto, aunque no dejó de
preocuparla, ya sentía una atracción por él y en ese momento manifestaron
mutuamente su sentir. Como no podían verse en el colegio, empezaron las
comunicaciones vía telefónica y después acordaron, para estar tranquilos, ir a
su departamento, el día 9 de noviembre. Ese día pidieron una Telepizza, de ahí
ya se sentaron en el sofá, comenzaron a besarse y acariciarse y se dirigieron al
dormitorio y ahí, quedaron en ropa interior ahí empezaron mutuamente a
acariciarse, y juntos se tiraron a la cama y él eyaculó encima suyo. Por este
hecho no se sintió mal, pero después de algunos minutos entró en pánico, lo
hizo que locamente se vistieran y lo fue a dejar a su casa, al día siguiente, le
grabó una foto que ha sido bien diseminada en los medios, y como es
subterráneo, cuando salió como a la 1 de la mañana del evento, con su
familia, encontró una serie de mensajes, que decía que a la hora que fuera, lo
llamara. Ella lo llamó como a las 02:00 de la mañana y el día martes de la
siguiente semana, la mamá le mandó un e-mail, la señora Jessica, para que
viera si era una niña la que molestaba a Sebastián hasta altas horas de la
noche y que ella lo ayudara, y ella hasta en su plano de introspección
personal, jamás le había ocurrido algo así en su vida personal y no sabía cómo
borrar tamaño error. Tiene una hija y lo único que quería era desaparecer,
cometió muchos errores. Él siguió y ella no hallaba cómo decirle, porque él
estaba muy entusiasmado y no quería herirlo. El 13 de noviembre, se juntaron
en San Gerardo con Recoleta, en una plaza, ella le compró un helado y
conversaron. Él le dijo que la quería mucho, ella le dijo que ella también, pero
que esto no tenía futuro, que era una relación sin sentido. Después de ese día,
él le insistió todos los días que se vieran el 23 de noviembre, porque quería
inventar a los papás que tenía una fiesta, ella le dijo que era imposible, porque
ella dormía con su hija y segundo, porque ella es anulada legalmente y que ni
a su hija, que es más grande, ella le permitía dormir afuera, y se vieron en una
plaza. Ahí lo llevó en taxi, porque ella había tenido un accidente y su auto
estaba en el servicio técnico. Fueron a conversar, pero cuando ella lo dejó de
ver, vio en su carita el enojo, y se fue muy preocupada y en el mismo taxi que
lo dejó a él, se fue a y hacer una diligencia, después llegó a su casa y le dijo su
hija, “mamá, llamó la mamá de un alumno tuyo, ¿tu has sabido algo de
Sebastián? Ella le dijo “no, por qué, y su hija le contestó, porque están muy
preocupados, han llamado al colegio, parece que algo le pasó”. Ella estaba
aterrada, no sabía qué hacer, su mamá la invitó a cenar, cenaron con su
familia, pero ella estaba preocupaba y le empezó a mandar mensajes de
texto en los que le decía que ella no quería enojarlo, y la cosa es que después
de una hora de los mensajes, la llamó del mismo número que él la llamaba, la
llamó la mamá, ella no sabía que era la mamá, creía que era él, y ahí empezó
a decirle si ella sabía algo, que su hijo le decía que estaba enamorado de ella,
y ella le dijo no señora, son cosas de niño. Después de eso, le vino terror que la
siguieran llamado, fue al baño y le sacó el chip al celular, ella no entiende
mucho de esas cosas, no sabía si era lo más importante, y tiró el chip y la
cadena, y se puso a gritar a su hija, su hija llegó, su hija llamó a sus padres y la
llevaron en una crisis a la Clínica de la Universidad Católica y ahí la llevaron a
psiquiatría, donde la tomó el doctor Mardones. Esa es la narración. Más
adelante dará las explicaciones. Quiere agregar que se siente liberada,
porque siempre ha sido respetada, valorada por su hija, ex-alumnos y en esta
etapa de su vida, cuando tenía 39 años, se sentía en una isla, muy sola, con
muchos problemas personales y profesionales.
En el recinto del colegio era una relación de igual a igual, de un
alumno, pero ella no lo veía como un alumno al cual formar, ella lo separó de
los demás alumnos, no lo veía igual que los otros alumnos, ella lo separó. O sea,
dentro del colegio era alumno, pero ella llegó a verlo de distinta forma, en el
colegio lo conoció, pero no se desarrolló la relación en el colegio, nada la
pueda comprometer, por eso le llama la atención dichos de sus colegas que
dicen que la vieron en bodegas, sala de profesores, o en la misma sala yendo
a ver a Sebastián, cuando en primer lugar, Inspectoría General, todo el D.A.E.,
que es el Departamento de Atención al Estudiante, que son: psicóloga,
psicopedagoga, orientador y jefe de U.T.P, cuando hay un alumno en
problemas, tienen la facultad de sacarlo de clase. Eso lo hizo no solo con
Sebastián sino en el marco de su carrera, lo hizo durante años. Otra cosa,
bodega no cree, porque la manejaba un asesor del director; sala de videos,
siempre estaban ocupadas. En dos oportunidades lo sacó cuando le contó lo
de la violación de la hermana y que la abuelita lo había echado de la casa,
y fue en la sala de profesores, y en presencia de la señorita Ana María
Guerrero, la inspectora general y la otra vez ante la inspectora de patio. Todas
sus acciones, fueron en base a sus labores de jefa de U.T.P., el mismo director a
veces la llamaba a la UTP y la hacía ir a buscar alumnos. Ahora, una de las
labores en la reforma educativa, es como jefa de U.T.P., tienen todo el
derecho de ir, con el director, o sola o con asesoras de U.T.P., o coordinadoras,
a supervisar clases.
Cuando se dio cuenta que esto estaba mal, no cortó la relación,
porque ella estaba mal, hizo muchas tonteras, se sentía sola, no hallaba qué
hacer, no quería hacerle más daño a él ni hacerse daño, pero no sabía cómo
afrontar el problema.
Ella tenía responsabilidades, por su cargo, hay un Reglamento Interno
en el colegio y dentro de éste, están las funciones que debe tener la jefa de
U.T.P., explica que hay que tener capacidades para desempeñar esa función
y ella tenía estas capacidades. Refiere que ese año ella partió mal, porque
terminó el año anterior con una relación de pareja con violencia intrafamiliar,
una persona muy cercana a su familia murió, tenía a su hija en su primer año
de carrera, a su padre con bronconeumonía, su rendimiento no era el mismo
que años anteriores, y además se le vino el problema que el Director le delegó
otras responsabilidades, porque hasta el Bingo debió realizarse con los
apoderados, en otro establecimiento. Su rendimiento no era bueno, quería a
final de año hablar con el director, no se sentía bien, por algo tuvo licencias.
Expresa que jamás besó ni tocó a Sebastián en el colegio, no
intercambió mensajes en papel con el niño en el colegio, no entiende a qué
se refiere eso. No recibió en ningún momento papelitos de él en la sala.
Ella no dijo que se encontraba agobiada con Sebastián, dijo que al
principio sí, pero al finalizar, fue un proceso en que terminaron los dos llorando,
fue un proceso de amargura, ella quería que esto terminara, sabía que esto no
era racional, pero no quería dañarlo a él. Después del hecho de 9 de
noviembre, para ella fue el acabose, en términos de introspección personal.
Terminar no es algo fácil, fue algo doloroso, era primera vez que le pasaba
algo así, era como un amor platónico, no quería hacerle daño. El día 23 no
fueron al departamento, no tuvieron relaciones sexuales ese día, ese día fue la
última vez que se vieron, estuvieron llorando los dos, pero ella vio algo raro en
su cara, cuando se despidieron. Ella quedó muy angustiada, eso antes de que
la llamara la madre. Antes de ir a su casa, fue a hacer diligencias, para que no
se le notara en su cara, después le mandó varios mensajes, le mandó muchos
mensajes, no tantos, era uno, como largo, era uno, y los mensajes tienen
lógica, unos con otros. Le decía que le pudiera entender su despedida,
porque no tenía lógica lo de ellos.
Contraexaminada por Fiscalía si ese día terminó la relación con
Sebastián, y responde “sí”. Agrega que su número de teléfono a esa época
era 77722786.
La señora fiscal exhibe a la testigo, la hoja 160 de la carpeta
investigativa, ofrecida en el auto de apertura como otros medios de prueba N°
8, dice que ella lo envió, que él le decía Seño, siempre ha sido conocida
como Seño Eugenia, por años. El último mensaje es de fecha es 22 de
noviembre, es del día anterior, y el de arriba, no sabe de qué se trata. Ella es
muy cariñosa, hasta su perro le dice amor de su vida. Preguntada indica que
las letras mayúsculas, TAM significan “Te Amo”. Consultada si le dice te amo a
su perro, dice sí.
El número 13, “amor perdóname, de verdad” es por haber terminado
con él.
El número 12, dice “nunca más te limitaré”. Le consulta la señora fiscal si
lo estaba limitando, y responde que eso lo habían estado conversando en la
plaza, el día 23, venía la época de navidad, y ella le dijo, que estar con ella
era una limitación, porque era una relación anormal.
Consultada si por eso ella renunció a él, dice que sí.
El Nº 9, “sé que no quieres hablar, y el tiempo te dirá que de tanto
amarte y sentir celos por ti, te perdí, nunca te dejaré de amar”. Consultada si
sentía celos, responde que no sabía lo que sentía, ese día estaba muy mal,
cometió muchos errores, hasta lo del chip, la verdad es que no se acuerda por
qué lo dijo ni por qué lo hizo;
El Nº 11, que es anterior al de los celos “amor discúlpame, algún error
que yo haya cometido no volverá a pasar, mi corazón es bueno, te lo voy a
demostrar. La Romina es amorosa, y lucha”. Le pregunta la señora fiscal quién
era Romina, y responde que ella no conoció a Romina, de la casa, consultada
si había una niña que participó en una obra de teatro en el colegio, dice que
no era a ella a la que se refería Sebastián. Ella los otros cursos sólo les veía
U.T.P., sólo en una obra de teatro tuvo que hacer con el 6º B, “Despertar”. Sabe
que hay una niña Romina, de 6° B, no era la misma. Celos de ella no tenía.
Consultada si el día viernes terminó con Sebastián, dice sí.
El Nº 5: “te propongo algo, el lunes me lo contestas. Mejor de lo digo el
lunes, no te molesto más, te he cansado”. Dice que no se acuerda de la
intención de eso, esta esa noche, llegó a la clínica, estaba en estado de
pánico. Ese día tomó contacto con el padre de Sebastián, muy angustiada y
desbordada y el padre de Sebastián ahí le dijo “señorita, yo tengo el celular
de Sebastián y al mismo celular del que estoy recibiendo los mensajes, me está
llamando usted”. Él vio los mensajes en el teléfono de Sebastián. Ella estaba
muy mal. Ella lo llamó, si hubiese estado más cuerda, habría pensado que del
mismo celular al que enviaba mensajes, ahora converso con el papá,
imaginaba que Sebastián tenía el celular, porque muchas horas lo llamaba y
no contestaba, lo llamaba porque quedó muy preocupada por la cara tenía
en la plaza, ella estaba muy mal.
El colegio es un establecimiento en que ha costado mucho partir con la
U.T.P., cuando ella partió, hace 14 años, ganaron la excelencia académica,
considera que aportó bastante, antes del problema, porque tenían pocos
recursos, toda la parte productiva, y de a poco se fue formando esto, antes
hacía de todo. Tiene una psicóloga, jefe del departamento de atención
estudiantil, ella sólo evalúa y deriva a instituciones, no hace seguimiento, en
este caso tomó a Sebastián por requerimiento del director, porque estaba en
el plano legal del establecimiento. La psicóloga, Claudia Ponce, la última vez
que ella le pidió que viera a Sebastián, le dijo que no tenía cupo, porque tenía
todos los alumnos del SIMCE, esto, cuando Sebastián le contó que habían
violado a la hermana. Esto, en septiembre. Esto se lo contó como secreto,
porque le tenía mucha confianza. Son tantos los niños con problemas, que a
veces la psicóloga no daba abasto con todos los requerimientos. En su curso
marcó el problema de la Ayleen, todos los días la llamaban los apoderados y
los adultos, ahí empezó a acercársele Sebastián, porque su mamá no lo
dejaba ir a verla, porque encontraba que no era lógico, que cómo los niños
etc. Ahí empezó a llamarla, preguntando cómo estaba la Ayleen.
Le consulta la señora fiscal si en su primera declaración declaró que
Sebastián le sacó el chip del teléfono celular, responde que hizo muchas cosas
inconvenientes, que no fueron racionales, tuvo muchas equivocaciones, pero
ahora está rectificando, diciendo lo que ocurrió. La segunda vez, volvió a
declarar, dijo que esto es la verdad. Reconoce que tuvo contacto corporal
una sola vez con Sebastián, dentro del departamento. Ese año estaba con
tratamiento médico, con un apoyo familiar firme, el año anterior estaba sin
tratamiento, por eso no puede equipararlo a lo que dijo antes. La verdad es lo
del 11 de marzo de 2009 es la misma verdad de ahora.
Después no volvió a decir que ella nunca le dijo a nadie que ella sólo se
involucró con Sebastián como profesora.
Fiscalía, como prueba nueva, incorpora un artículo del diario “Las
Últimas Noticias, 9 de julio de 2009”, en que se lee: “tres solas preguntas
directas, ahora, ¿niega haber tenido una relación con el niño?” “Sí, la niego en
la forma que la han tratado, porque están hablando de abusos sexuales
reiterados, cosa que no sucedió, tenemos medios de prueba que acreditan lo
contrario”. “¿Qué sucedió entonces “voy a salir a relucir mi verdad, que yo soy
inocente, que traté de ayudar, me involucré más de lo necesario, a lo mejor
por ayudar un alumno”. “¿Hubo algo sentimental?”, “Hubo una relación
afectiva de profesor a alumno, y más allá de querer ayudarlo en los momentos
en que sus papás estaban con problemas”.
Preguntada expresa que fue peritada por el doctor Giorgio Agostini y su
equipo, no se acuerda en qué fecha, pero fue entre septiembre y diciembre.
En marzo también. Mantuvo la misma versión de hoy, en esa pericia, porque es
la última. También la mantuvo ante la psicóloga del Instituto de Criminalística,
no recuerda bien, no dio la misma ante la psiquiatra del Servicio Médico Legal,
ahí dijo lo mismo que la primera vez, que negó todo. Ante el presentencial de
Gendarmería, dijo lo mismo que hoy día. En marzo de 2008 declaró la primera
vez en el Ministerio Público con la abogada asistente, dio sus descargos, le
pregunta la señora fiscal, si son los mismos que dio en un documento llamado
“meditaciones”, que entregó al director del colegio, ella dice que se lo dio por
la confianza que tenía con él. En dos oportunidades volvió al colegio con su
familia, a ver lo del finiquito, en marzo, cuando firmó el finiquito.
Preguntada indica que le hizo un regalo a Sebastián, en una
oportunidad, para su cumpleaños, era una simple billetera, iba envuelta en
papel de regalo, lo compró con su mamá, es habitual en ella, regalar a los
alumnos con problemas económicos, la compró en Panamtur y su mamá la
ayudó a elegirla. Fue más bien como un agradecimiento por haber actuado
en la obra del natalicio de Bernardo O’Higgins, no fue con la intención que le
están dando tanto. A Sebastián le regaló una foto suya, dos meses después, él
se la pidió, ella estaba con un trámite que había hecho, él se la vio, y le pidió
una, esto fue mucho tiempo después, ella había ido a una diligencia y
Sebastián se la pidió. Este es su juicio oral, antes no lo había tenido. La billetera
debe haber costado $1.500 pesos, no era italiana. Parece que era oscura,
Sebastián no le había dicho que quería billetera, había pensado con su mamá
en un juego de lápices, pero cuando estuvieron en el negocio, la vio y la
encontró bonita.
La señora fiscal exhibe a la testigo la evidencia N° B1: La acusada
examina la billetera, y dice, es parecida, debe ser, es, costó baratísima. La
foto es la que ella le regaló el 1 de octubre. Al principio Sebastián la agobiaba
con sus problemas, pero después empezó a encontrarlo entretenido.
En toda relación profesor alumno, sobre todo cuando se tiene un
alumno con problema, hay un proceso, ese año ella estaba con problemas
personales, entonces, además de sus funciones, que son del ciclo, cuando al
principio el alumno le empieza a contar el alumno y todo lo que tenía encima,
cuando él le empieza a contar y ya no lo veía la psicóloga, son 45 alumnos en
un curso, al principio se encontró agobiada de este requerimiento constante
del menor.
Su medio de comunicación, ya que no podían verse en el colegio y
esas pocas veces que se vieron, era a través del teléfono.
En dos
oportunidades lo sacó de la sala, cuando él iba al U.T.P., a requerir su
atención, entonces ella dentro de sus múltiples cosas, tenía que ver un
espacio, y además tenía 9 horas de clases en su curso, ella tenía que
acomodarse y explicarles a sus colegas, por eso le llama la atención de sus
colegas, cuando ellas saben que ella lleva supervisando las clases, hay una
serie de coordinaciones, no es solo ir a la clase.
Diría que eran más llamadas telefónicas en un plano diario, después de
las 18.00 horas, hartas, no puede decir un número, es indeterminado para ella,
pero sabe que son varias.
Ella veía a Sebastián de igual, en el poco tiempo que duró esto, que
estaba en esa irracionalidad y lo veía como su pareja, ella llegó a enamorarse,
primero en forma platónica. Para ella fue muy terrible el acercamiento sexual
ya lo explicó.
Este curso lo tomó dos años, al final del año anterior, la apoderada, la
mamá, le había robado a la secretaria del director el celular, por ende el
director le tenía prohibida la entrada a la madre, el padre veía poco al menor,
entonces la psicóloga llamó al padre y se comprometió con ella se concurrir a
las reuniones de apoderados y no fue, la madre tenía una relación muy
distante, incluso a una apoderada le tiró el pelo, era una relación muy distante
con ella. Ella no llamó a la madre, recuerda que después, ella le envió una
comunicación por Messenger.
Ella le envió un mensaje después, no recuerda en qué tiempo, con puros
apelativos de ofensas, no recuerda si fue en enero o febrero.
La señora fiscal exhibe a la testigo la Prueba documental N° 14, NUE
461352, que consiste en una carpeta con 6 hojas de papel en el interior. La
testigo lo examina y manifiesta que esos son los correos que ella le respondía a
Yahoo, su correo es mdm36@ Hotmail.com. La señora fiscal le exhibe el
documento Nº 2 de la carpeta, lee la fecha, 20 de octubre de 2007, lee
“estimada señora Jessica, agradezco sus hermosas palabras. Es Ud. Una gran
persona, luchadora y perseverante en el amor a sus hijos. Una vez le pregunté
a la señorita Sonia cómo era Ud. como apoderada, y ella me contestó
excelente, tiene toda la razón, en el colegio va a quedar un gran recuerdo de
Ud. y su familia. Espero que todos sus esfuerzos se concreten en la crianza y
profesión de su hijo y todos sus ideales, se cumplan, además, no se olvide que
Ud. es joven y mujer también debe cumplir sus sueños personales. Éxito y
saludos, se lo desea, María Eugenia Darrigrande”.
A continuación lee el mensaje de 24 de octubre, “Gracias, Ud. es una
persona de muchos valores y gracias por su apoyo de verdad. Le agradezco a
Dios por conocer una persona tan buena y abierta como Ud. Yo soy un poco
introvertida como persona, me cuesta un poquito hablar de mis cosas
personales, pero yo también he pasado por problemas como persona, me ha
costado un poco salir, pero lo he logrado de a poco, por mi hija, por mis
padres, que ya están de edad, pero de verdad, de a poco uno va contando
sus problemas. Yo no le cuento a mi alumno que yo le escribo, pero en todo
caso, llegó muy contento por su logro en la prueba que rindió ayer, la felicito,
la estima mucho, gracias por su amistad, yo también la considero muy
cercana”
Otro día, 23 de octubre, “Sra. Jessica, no se preocupe por la inasistencia
de su hijo, hoy no se rindió ninguna prueba. En el colegio se estaba al tanto del
motivo. Espero que haya sido un éxito su examen, es UD. muy buena madre,
Dios la tendrá que premiar por su esfuerzo. En relación a mi núcleo familiar,
hemos estado con altos y bajos como en la vida, me han tocado hartas
cosas, le pido a dios fuerza para ser fuerte de los míos, ya que me necesitan.
Esperando que los suyos se encuentren bien, la saluda, María Eugenia
Darrigrande Moreno, profesora a su servicio.
Cuarta hoja: “8 de octubre de 2007 Señora Jessica: junto con saludarla,
que esta conversación es de las dos y que nadie se enterará. Mire, el
rendimiento de Sebastián es excelente, tiene un 6.7, se ve saludable, sociable
con sus compañeros y a Ud. la quiere mucho. Yo a Ud. la entiendo como
mamá, él está teniendo cambios por su edad, está creciendo. Es normal que
le gusten las niñas, terrible sería que fuera asexuado, he visto tantos casos
como profesora. Mire, le doy un consejo que a mi también me ha resultado,
Converse con él, no lo castigue, no le de restricciones muchas, porque como
está en la edad de la rebeldía, no va a hacer más, hágale cariño, póngale
límites, pero con ternura, este período va a pasar. Hay varios niños que me
escriben cartas, que las niñas le terminan, lloran, vuelven y no se atreven a
contarle a su mamá. La niña no es que sea mala, es de la misma edad, es un
pololeo a lo mejor primero, después le va a gustar otra y así, lo importante es
que él siempre sienta que Ud. es su mamita. Tranquila, lo que pasa es que Ud.
es muy buena madre y a nadie nos enseñaron serlo. El miércoles va a haber un
tema de reunión que me gustaría que Ud. participara y es el tema. Todos los
niños de la están igual, lo que pasa es que ahora hay más tecnología, Mp3,
Mp4, celular, Internet, el mismo reggaetón, Ud. ha escuchado las canciones
de ahora cómo son. Antes nosotros teníamos más restricciones. No se
preocupe, este periodo va a pasar, lo importante que le está yendo bien en el
colegio, y él sabe que el paso para irse al Instituto es importante. Lo que le voy
a contar es para Ud. pero todas las niñitas de curso le escriben cartas, lo
buscan y le mandan correos, es natural. Esté tranquila, y que Dios la bendiga”.
Todos fueron respuestas al correo de la madre de Sebastián,
El del 8 de octubre, debe haber sido porque la madre estaba
preocupada, hay un requerimiento del colegio, todos los sub centros de
padre, profesor jefe y apoderados manejan sus correos y teléfonos, más
encima había más comunicación con los apoderados.
Todos fueron correos en respuesta de la madre, doña Jessica. El último
debe haber sido porque la madre estaba preocupada, ella se puede poner
en el lugar de ella. Hay un requerimiento del colegio todos los centros de
padres manejan un profesor jefe con apoderado, manejan sus correos y sus
teléfonos y más encima, hubo más requerimientos del director, ahora que
estaban con el problema de Ayleen. Esa es la visión suya de la señora Jessica,
lo que dijo antes es la visión del director, otra es la visión de ella. De acuerdo a
ella, era una buena madre, pero mala apoderado, porque no iba nunca a las
reuniones. Ella le está manifestando, que la señorita Sonia que fue la jefa de
curso de Sebastián, siempre le había hablado muy bien de ella, ahora, ella,
como jefa de U.T.P., vio otras situaciones, cuando fue a buscarla la secretaria
del director, que le habían robado el celular. Es bien aprehensiva, bien buena
madre la señora Jessica.
De acuerdo al mensaje, la madre de Sebastián le consultó por
Sebastián en octubre, en noviembre le mandó un mensaje que lo llamaban
hasta altas horas de la noche, eso fue después del 10 de noviembre, el día que
ella se graduó, eso lo tiene muy convincente, pero en ese que leyó, habla de
que estaba muy preocupada, porque el niño ya estaba en otra etapa. Es otro
el tema.
Cuando ella fue con Sebastián a su departamento, no recuerda si
conversaron con los conserjes; se supone que ella siempre los saluda, tiene
muy buena relación con ellos, cree que sí que los vieron los conserjes, porque
ella conversaba con los conserjes cuando iba a retirar correspondencia.
Consultada si entre sus funciones en la U.T.P., si había cursos de
prevención en materia sexual, responde que sí, desde 4º básico, lo realizaba la
profesora de religión, la orientadora y la psicóloga del colegio, ella no
participaba en eso, sólo participaba en la programación y la coordinación de
las asambleas generales con los apoderados, invitaban a la directiva de cada
curso, y ellos, los UPT, de todos los niveles, les ponían los temas, y ellos tenían
que hacer los reuniones con los subcentros., G.P.T. es reunión de profesores, se
establecen por departamentos, cada jefe de U.T.P., les da tareas a cada jefe
de departamento, se establecen los objetivos generales.
Consultada si ella tenía conocimiento que el abuso sexual a un menor
es un delito, responde que lo tuvo después, en el momento no estaba bien
ella, no lo vio como abuso, lo vio como un par, estaban de mutuo acuerdo, no
lo vio como algo que ella estaba forzando, ni limitando ni obligando.
La relación sexual fue el 9 de noviembre en su departamento.
Consultada donde se juntaba con Sebastián, si no podía hacerlo en el colegio,
se juntó con él dos veces en la plaza, dos veces, no más, además de la
relación sexual.
QUINTO: Elementos del tipo penal. Que para que se configure el tipo
penal del delito de abuso sexual, previsto y sancionado en el artículo 366 bis
del Código Penal, se requiere: a) que el sujeto pasivo o víctima del delito sea
una persona menor de catorce años de edad; y además b) consistir, la
conducta del agente, en realizar abusivamente una acción sexual distinta del
acceso carnal, entendiéndose por tal, de acuerdo con lo dispuesto en el
artículo 366 ter del mismo cuerpo legal, cualquier acto de significación sexual
y de relevancia, realizado mediante contacto corporal con la víctima, o que
haya afectado los genitales, el ano o la boca de la víctima, aun cuando no
hubiera contacto corporal con ella.
SEXTO: Medios de prueba del Ministerio Público. Con el propósito de
acreditar los hechos en que se funda la acusación deducida, el Ministerio
Público rindió la siguiente prueba testimonial:
a) Declaración del menor de iniciales S. A. J. S., Sebastián, de 14 años
de edad, soltero, estudiante de 8° año de educación básica. Indicó que el
año 2007 vivió a principios de año con su papá, y a fin de años, en la tarde
con su papá y en la noche con su mamá. Él iba al colegio, como la casa de su
papá queda cerca del colegio se iba para allá, y después, su mamá lo iba a
buscar, sus padres se habían separado hace más o menos 4 años. No vivía con
nadie más, su mamá y sus hermanos Braulio y Yanira. En la casa de su padre
vivían sus abuelo y su abuela se llama Luisa. Respecto de la rutina en su
colegio en el año 2007 dice que en la mañana se levantaba, a las 8.30 iba a
clases salía a las 16.00 horas, los viernes a las 15.00 horas. De lunes a jueves se
iba a la casa de su papá y los días viernes, hasta julio, agosto, también.
María Eugenia Darrigrande era su ex profesora jefe, de quinto hasta
sexto, realizaba matemáticas y geometría, tenían más de 6 clases con ella, a
la semana. En relación con ella, a principio de año, era normal, respeto hacia
ella, como lo ha hecho siempre, con todas las profesoras. En ese tiempo, julio,
a principios de agosto, tuvo un problema familiar, pero fue algo único, hubo un
problema con su papá, a principios de agosto, donde él se tuvo que ir de la
casa de su papá y se quedó viviendo 1 o 2 semanas con su mamá, durante
toda la semana. En esa semana no vio a su padre, a sus hermanos los vio 15 a
20 minutos, cuando la señorita María Eugenia lo llevó al frente, a ver a Braulio.
Él le contó a la señorita María Eugenia de la situación, se lo contó porque le
tenía confianza, porque era una persona que le entregó confianza y él no
dudó en pedir “ayuda”. Él contó cosas personales a ella, como este problema,
problemas familiares, cuando murió su abuelo, también le contó que su
hermana tuvo un abuso sexual, se lo contó porque necesitaba desahogarse,
necesitaba contarle a alguien y ella le daba mucha confianza, ella le juró que
nunca se lo iba a contar a nadie, dijo que jamás lo iba a contar y él confió
completamente en ella. Desde 5° a 6° a mitad de año, su relación con doña
María Eugenia fue de alumno profesor, a mitad de año hubo unas cartas
amorosas, que cambiaron la relación, las cartas decían, “te quiero, me estoy
enamorando de ti”, ya no era la relación profesor y alumno, estas cartas
llegaron cuando a él le faltaban días para su cumpleaños, que es el 27 de
agosto. Explica que para el acercamiento quiere decir confianza, cuando
tenía problemas familiares, se lo contaba a ella; era como una amiga. Las
primeras cartas fueron cartas amorosas, que él no entendía, porque venían
con iniciales, se las pasaba ella o se las daba a unos compañeros para que se
las entregara a él; en cada palabra ponía solamente las iniciales. Se le pide un
ejemplo y se le entrega una hoja en la que el testigo escribe “compré una
bolsa” y abajo, las iniciales de esa frase “c.u.b.”; agrega que él supo el
significado de esas palabras, cuando fue a preguntarle qué quería decir esas
iniciales, se las leyó una por una y se ella se declaró. Le preguntó en una reja,
en el segundo piso, en el colegio, ella le pasó la carta, salió, y él le dijo que le
dijera qué decía la carta, porque no entendía, ella le dijo, salgamos un poco,
él estaba en clases con ella, y cuando llegaron a la reja le dijo qué era cada
inicial, se le estaba declarando, él quedó impactado, porque era su profesora,
pero no le dio mayor importancia, después volvieron a la sala. Los días
siguientes, para su cumpleaños, le regaló una billetera y una caja de
chocolates, y una carta que decía, feliz cumpleaños. Las cartas no quedaban,
porque ella le decía que las tenía que botar, y él las botaba, la billetera era
negra con manchas de color, no sabe si ella regalaba a los otros alumnos para
su cumpleaños. Ese día estaban en clases con la señorita Gloria y la llamó por
teléfono y le dijo si podía autorizar a Sebastián para que saliera, la billetera
venía envuelta en papel de regalo con una florcita blanca, chiquitita, la
billetera venía en una caja celeste con verde, colores mezclados, con blanca,
decía marca Italy. Cuando ella se la pasó la billetera él sintió que era un
regalo, que le estaba haciendo señales de que algo estaba ocurriendo, pero
era un regalo, se lo mostró a alguien más, porque todos sus compañeros le
fueron a preguntar qué era. Todos sus compañeros lo supieron. De ahí la
profesora empezaba a entregarle muchas cartas, diciéndole que lo quería, se
las entregaba a él o a un compañero para que se la entregara a él, venían
dobladas, en papel de cuaderno de matemáticas. Después de ese regalo, la
profesora lo sacaba constantemente de la sala. Eso ocurría todos los días, pero
variaba, no era todos los días y a cierta hora, pero variaba, le comunicaba a
la profesora que lo necesitaba y cuando era clases con ella, le decía,
Sebastián tengo que hablar contigo, salgamos un momento de la sala. Si eran
cosas pequeñas salía y se quedaban en la entraba a la sala, cuando no, era
en la sala de video, en la básica, en el primer y segundo piso. Doña María
Eugenia no le hizo otro regalo en el colegio, él tenía siempre la billetera en su
poder, después de un tiempo de su cumpleaños, ella se sacó una foto de
carnet y le dijo que la pusiera en su billetera, esa foto la sacó un caballero del
colegio, le sacó una foto a ella y otra a él, él no le pidió la foto, sino que ella le
dijo que tenía que guardarla en su billetera. Esto fue a principios de octubre.
Antes de eso ocurrió harto, mucho más que las cartas. Después de las cartas,
semanas después, en la sala de video, ocurrió un beso y semanas después,
relaciones sexuales. El regalo de cumpleaños se lo hizo dos días después de su
cumpleaños, el primer beso en la sala de video fue una o dos semanas
después. Recuerda que estaban en educación física y ella le solicitó a una
compañera que la fuera a buscar, ella estaba en la sala de video, su
compañera le dijo que la profesora lo estaba llamando, él fue y ella le dijo que
necesitaba hablar con él, que cerrara sus ojos, y le dio un beso, no había
nadie más en la sala de video, en ese momento, cuando estaban los dos solos,
la puerta estaba cerrado, el beso fue en los labios. Él se sorprendió, totalmente
y su reacción fue inmediata, la quiso alejar de él, poniéndole los brazos
encima de los hombros, alejándola de él, pero ya había ocurrido. Luego de
ese beso le dijo que era un regalo y que se tenía que ir a clases. Después de
eso ocurrieron más besos, más cartas y más salidas de clase. Los besos eran
siempre en la sala de video, generalmente, recuerda que una vez, en la tarde
fue en la sala de profesores, pero casi siempre fue en la sala de videos. El
primer beso no fue de lo mejor, pero los segundos, fueron variando, porque
fueron más largos, eran besos, ya no fue un piquito. El piquito es juntar los labios
y un beso es más tiempo con los labios y acariciándose entre labios. Recuerda
que se acariciaban los cuerpos, ella le tocaba la espalda y los brazos, él le
tocaba los hombros y los brazos. Al principio a él le pareció horrible, pero
después se fue acostumbrando, iba al llamado de la profesora, porque, al
principio lo llamaba, le contaba cosas y ocurrían besos, cosas así. Él le sentía
mucha confianza, mucha, mucha confianza, sentía cariño por ella, porque
igual ella lo ayudó en sus problemas. Siempre se mantuvo en besos, así, en el
colegio. Fuera del colegio cambió. Un día, una semana después de los besos,
ella le dijo si un día viernes podían salir a comerse algo, él le aceptó, le dijo que
si, sin problemas. Fueron en su auto a una estación de servicios, donde
comieron una hamburguesa, luego él le dijo, “ya, qué hacemos”, ella le dijo
“vamos”, “donde vamos”, y se dirigieron a su departamento, ubicado en calle
Libertad con Mapocho. Ese día él se fue desde el colegio a la casa de su
papá, se bañó, se vistió y se quedaron de juntar en México de Recoleta, él se
subió, se dieron un beso común, en la cara, para saludar. Comieron y de ahí
fueron al departamento. Ese día entraron al departamento, él se sentó en un
sillón, ella se puso encima suyo y empezó a darle besos, ya no en la cara, eran
besos con lengua. Luego de eso lo llevó a la pieza y ocurrió el acto sexual.
Cuando entraron a la pieza, recuerda que ella se sacó la parte de arriba de su
ropa, se sacó la parte de abajo y le sacó a él la parte de arriba. En eso
estaban en la cama, se siguieron dando besos, él se bajó los pantalones y
ocurrió la penetración. Ella le enseñó como se hacía, agarrándole el pene e
introduciéndolo en su vagina. Ese día ocurrió dos veces, que se acuerda y
después de eso, semanalmente, todos los viernes. La posición era él encima de
ella, siempre se ocupó la misma, excepto una o dos veces, en que ella se
sentó encima suyo, cuando él estaba acostado. Él eyaculaba dentro de ella.
Consultado cómo lograba la erección seguida, responde que ella lo excitaba,
le tocaba los genitales.
En su departamento, esto ocurría todos los viernes, siempre de la misma
forma, esto ocurrió hasta 23 de noviembre de ese mismo año. Ese día ocurrió lo
mismo de siempre, pero su mamá intervino, porque salía todos los viernes, creía
que iba donde su polola. Él les mentía, les decía que iba donde su supuesta
polola.
Recuerda que una semana antes, ella le había pedido si podían
quedarse toda la tarde, la noche entera y se iba a su casa al otro día. Él les
mintió a sus papás diciéndole que iba a una fiesta, donde su polola, toda la
noche, había quedado en que iba a decir la dirección y todo, pero no ocurrió
así, porque su mamá estaba muy desesperada llamó muchas veces, y él
apagó el celular y él volvió a su casa. Su mamá lo estaba esperando con una
expresión no agradable, desesperada y le dijo que la tenía que llevar donde
su polola a ver si era cierto y él le dijo que no era necesario, porque la fiesta
no iba a ser porque su polola se había enfermado.- a su mamá no le interesó y
le dijo que igual la llevara al lugar donde iba todos los viernes a quedarse. Se
fueron donde su papá, a la vuelta, a un taller y le preguntaban donde iba
donde iba y él no les dijo nada. Entonces su mamá le dijo, vamos a tomar un
taxi y vamos ir donde vive tu polola, él no la llevó donde su polola, la llevó
donde vivía su profesora, en la calle Libertad con Mapocho. Cuando iban en
el taxi su mamá le iba quitando el celular, porque le llegaban reiterados
mensajes, llamadas pero él no le quería pasar el celular a su mamá, por miedo.
Cuando llegaron allá, se bajaron golpearon, y obviamente no iba a haber
nadie, porque ese departamento no se ocupaba. Él le decía que su polola
estaba en el hospital. Entonces su mamá esperó, esperó, esperó y dijo que si
había alguien iba a llegar, obviamente no iba a llegar nadie, porque nadie
vive ahí. Estuvieron esperando hasta que su papá llamó a su mamá y le dijo
que le preguntara en conserjería, llegaron ahí y él le dijo “no mamá, vámonos”
y se fueron al auto de su papá. Su papá y su mamá le preguntaban que quien
vivía ahí, desesperados, y él no quería decirlo, porque era su profesora y era su
polola, pero no era algo normal, se daba cuenta que no era normal.
Explica que la relación seguía porque semanas antes del 23 de
noviembre, ella le dijo que estaba embarazada y él se sintió con la culpa de
que cómo la iba a dejar así, por eso se sintió obligado yendo todos los viernes
a su departamento. Él quería terminar, por el desgaste físico, a él le gustaba
otra niñita, Romina, del colegio, las discusiones con sus papás, ya no quería
seguir. Él le dijo a la profesora, que le gustaba otra niñita y que quería
terminar, esa era la primera razón. El nombre de la niña era evidente porque su
acercamiento hacia la niña se veía, él se le declaró a la niña. Eso pasó en la
obra de teatro empezó, ahí se dieron un beso y la profesora se enfadó, él fue a
buscar la billetera, le pasó la billetera terriblemente, enfadada, y su mamá se
dio cuenta de eso.
Cuando la profesora le dijo que estaba embarazada, a él se le destruyó
la vida, era muy chico, tener un bebé, era horrible, sólo pensaba que era un
bebé y que supuestamente se tenía que hacer responsable de él. La relación
con ella continuó. Confiaba mucho en ella, y le creyó de inmediato. Lo
primero que pensó fue quitarse la vida, cortarse los brazos, ya no quería seguir
viviendo, por la presión de su mamá, que viniera a eso, se cortó el brazo
izquierdo con un corta cartón, en la sala.
El 23 de noviembre, en el auto, cuando iban en dirección a la casa, su
papá y su mamá le decían, “quién es quién es”, “no, no les voy a contar”, su
papá estaba muy molesto, y entonces él le dijo “sabís qué, es mi profesora” y
ahí su papá, le dijo “no, es una mentira más”, decía eso, porque él le mentía
todos los viernes, le decía que iba donde su polola y cortaba el teléfono,
además ellos dos discutían todo el tiempo por las salidas de los viernes.
Sus padres lo llevaron a su casa con sus hermanos y a la profesora la
llamaron y quedaron que se iban a juntar al otro día. Fueron, él también fue,
pero la profesora no estaba. Él se fue donde su abuelita y quedaron en ir el
lunes. La profesora no fue al colegio, les contaron que había tomado licencia.
Sus padres hablaron con el director y la psicóloga. Indica que antes del 23 de
noviembre, no le contó a nadie, pero después le contó a la psicóloga y a su
familia. A la psicóloga le contó que no era su polola, que se había dado un
beso con ella, que había ocurrido todo esto, pero no estaba muy claro,
porque no contó todo al tiro. Le contó todo a la psicóloga y a sus papás el día
miércoles, que tuvo relaciones sexuales. Después de esto, no tuvo contacto
físico, pero en enero o febrero hablaron por Messenger, le dijo que se iba a
matar, que iba a matar a su papá, a su mamá, a toda su familia si él contaba,
pero él le dijo que ya era demasiado tarde, porque él había contado hace
mucho tiempo.
Él se contactaba con ella por su teléfono celular, 84444874. Agrega que
también la llamaba desde un teléfono público, cerca de la casa de su mamá,
hablaba cuando era necesario, no se acuerda a qué horas, pero fue super
poco, una vez en la noche y otra vez en la mañana, que fue ese mismo día 23.
Refiere que ella nunca le dijo terminemos, él le había pedido muchas veces
que terminaran, cuando él le dijo que le gustaba otra niñita, ella dijo “ya, te
voy a dejar volar”, pero nunca fue por iniciativa de ella. Nunca sintió que ella
quería que se retirara de ella.
Preguntado señala que el departamento de la profesora tenía al
principio un espejo, después había un living, comedor, un pasillo que se dirigía
a la cocina, en el otro lado había un baño, una pieza de su hija que estaba
frente al baño y la pieza central al fondo, con una cama, una tele, un
computador, velador a los dos lados de la cama. En esa pieza no había nada
especial, pero al principio, al entrar a la casa, había un mueble y cosas de
Brasil y fotos de ella. No recuerda el color de las paredes, la cama era de dos
plazas. Al departamento había que entrar por conserjería, había un patio, una
torre, luego se subía y después había que entrar al departamento, no entraron
nunca con el auto, el auto quedaba en la calle. El auto era un Corsa, plomo.
La señora fiscal exhibe al testigo algunas fotografías ofrecidas en Otros
medios de prueba, D 3, fotos del sitio del suceso.
Al ir examinándolas, el testigo dice, ante la fotografía N ° 1, es la entrada
del departamento donde iban todos los viernes, donde está el conserje; la
fotografía N ° 2, es lo mismo; la fotografía N ° 3, es un estacionamiento que
había fuera de los departamentos, ella no estacionaba ahí, estacionaba al
frente, en la calle; la fotografía N ° 4 es un pasillo, donde se tramitaba a las
torres donde estaban los departamentos, venía después de conserjería; la
fotografía N ° 6, es la puerta de su departamento; la fotografía N ° 8, es la vista
del living hacia la entrada, no se ve el sillón a que se ha referido; la fotografía
N ° 9, es el comedor; la fotografía N ° 10, es el mueble donde estaban las cosas
de Brasil, al principio de la entrada del departamento, sabe que eran de Brasil,
él cuando entraba, siempre las miraba, porque le gustaban; la fotografía N °
11, no se alcanza a ver bien el espejo, pero había un espejo; la fotografía N °
14, es la cocina; la fotografía N ° 15, es el baño; la fotografía N ° 16, es el baño;
la fotografía N ° 19, es la cama central. Esa la última cama donde se realizó el
acto sexual fue la única cama. Eso es la última pieza. Cuando él iba tenía ropa
de cama de colores, nunca blanco, también estaba el computador, en la foto
no está; la fotografía N ° 20, es lo mismo, pero vacío; la fotografía N ° 21, el reloj
nunca estuvo, es la pieza, pero cambiaron la tele, era diferente, no es la
misma, la otra era más antigua, grande y cuadrada; la fotografía N ° 22, es lo
mismo; la fotografía N ° 24, ahí está el cubrecama de la cama de la otra pieza,
esa era la pieza de la hija. El cubrecama era el de la otra cama, esa tele
estaba en el otro dormitorio, las cortinas también, la almohadas, la alfombra;
la fotografía N ° 25 es lo mismo, la misma pieza de la hija, pero todo cambiado;
la fotografía N ° 26 es la tele que estaba en la pieza central que ahora está en
la pieza de la hija; la fotografía N ° 32 es al foto donde está ella con la hija,
estaba en la pieza central, en la cómoda; la fotografía N° 35, es el auto.
Cuando tenían relaciones sexuales, ella estaba desnuda, tenía 3
lunares, bien marcados en sus piernas.
La señora fiscal exhibe al testigo la fotografía N ° 5 del set D 1: indica el
lugar donde están los tres lunares, están en la pierna izquierda (En la parte
superior central del muslo izquierdo); fotografía N ° 4: son los lunares, los que él
se fijaba eran esos tres. También tenía pecas, lunares, en la espalda y en los
hombros, tenía hartos, bastantes.
Preguntado expresa que su celular era Nokia con cuerito a los lados,
que prendía luces, era azul. La señora fiscal exhibe al testigo la evidencia E 2,
el testigo lo examina y dice es mi celular, el que tenía el 2007, ahí recibía los
mensajes, es el que le quitó su padre en el auto.
Acto seguido le exhibe la evidencia material E 1, al examinarla, dice es mi
billetera, adentro estaba la plata y una foto de su ex profesora. Es la fotografía
a que se refería.
Consultado señala que no tiene motivo para inventar esto, no gana
nada, al contrario, muchas preguntas, mucho daño psicológico, todo horrible.
Todo el mundo ha sabido del caso, le preguntan en el colegio, mal, mal. Todo
deprime. Después del 23 de noviembre contó esto, no con ganas de contar,
porque prefería que nadie supiera, ni a sus mejores amigos, porque no tenía
que contárselos, no podía contárselos.
Agrega que siempre doña María Eugenia le decía que nunca tenía que
contárselo a nadie, que las cartas tenía que botarlas, quemarlas, al principio
sentía culpa, porque sentía que estaba defraudando a su profesora, que le
había dado mucha confianza, pero después, con la ayuda psicológica, se dio
cuenta que no tenía que sentir culpa. El psicólogo Erick lo ayudó, al principio
iba a verlo constantemente, ahora va solo lo preciso, cuando tiene problemas
o ahora cuando tenía que venir al juicio, porque está nervioso, contar todo de
nuevo, no le gusta. Lo ayudó también el psicólogo del colegio.
Actualmente siente que la profesora le destruyó la vida, no toda,
porque está recién comenzando, con ella fue horrible, problemas consecutivos
con su mamá, no es odio, es rabia.
La única amenaza que tuvo es esa vez por Messenger, que ella iba a
matar a su familia, se iba a matar ella, su papá, su mamá y sus sobrinos.
Fue presidente de curso en quinto, completamente, pero en sexto,
parece que a mitad de año lo sacaron del puesto. No recuerda si renunció o
lo sacaron.
Explica que Ayleen, tuvo una enfermedad cerebral y todo el curso
estuvo afectado, él fue a verla, con su profesora un día de septiembre. Su
mamá no quería que fuera, pero le pidió permiso a su papá y le dijo “ya, pero
tenís que llegar a esta hora, porque si no, castigado”.
Las cartas fueron más de 50, hartas, casi todos los días, muchas, días
antes de su cumpleaños, hasta el 23 de noviembre. No se quedó con cartas,
porque si no la profesora lo retaba, decía que tenía que botarlas; indica que
no las mostró a nadie, no podía mostrarlas.
Las cartas al principio lo
sorprendían, pero después ya no era anormal como al principio, hablaban de
lo que pasaba. Refiere que la carta redactada con iniciales fue una.
La de cumpleaños no fue una carta con iniciales, fue una carta escrita
en hoja de cuaderno, que decía “feliz cumpleaños”. La carta con iniciales fue
la primera carta amorosa que le mandó, decía que ella se estaba
enamorando de él, que lo encontraba como el alumno sobresaltante a él, lo
central era que se estaba enamorando de él. El primer beso fue terrible,
porque nunca le ha gustado darse besos con personas mayores. Él pensó en
reclamar, pero ella le dijo que tenía que quedarse callado, tampoco lo iba a
hacer. El primer día que fue al departamento, ella andaba vestida como fue
al colegio, no se acuerda detalladamente él andaba con blue jeans,
zapatillas y una polera café, que era lo habitual. Cuando llegaba a la casa de
su abuela, sólo se bañaba cuando ocurría el acto sexual.
Cuando lo sacaba de clases le recordaba que no tenía que contarle a
nadie, que tenía que juntarse el viernes. Cuando eran cosas más grandes, era
que se iban a dar besos.
Antes de esa primera vez, no fue nunca a la casa de la profesora, no
conocía ni la calle.
Para evidenciar contradicción el señor defensor le hace leer un párrafo
de su declaración policial, de 17 de enero de 2008, reconoce su firma lee “en
otra oportunidad fuimos juntos a ver a una compañera de curso que estaba
enferma, después lo llevó a su departamento, ubicado en la calle Libertad,
entre Esperanza y Mapocho, ese día llegamos y ella se sacó toda la ropa de la
parte de arriba y él le dijo que no estaba bien, y que se vistiera, lo cual hizo
más tarde, me llevó a su casa. El viernes siguiente me invitó nuevamente a su
departamento, yo acepté y me llevó, en esa oportunidad tuvimos relaciones
sexuales”. Consultado al respecto, refiere que sí había ido antes de tener
relaciones sexuales, al departamento.
Los viernes se juntaban después del colegio, más o menos 15:15 o 15:30
y después volvía tipo 18:00 o 19:00, a la casa de su papá. Iban en el auto de la
profesora, un Corsa plomo, la última vez no fue así, fueron en taxi. Sabía que
su profesora vivía con su papá, no habitaba el departamento todos los días,
por eso él sabía que ese día no iba a volver nadie al departamento.
Habían ido donde la Ayleen antes, lo principal no se había cometido la
relación sexual, que fue lo que más lo marcó; ese día él la paró cuando ella se
sacó la ropa, solo sed dieron besos; indica que la relación sexual fue al viernes
siguiente pero fue lo mismo que los besos, se dejó llevar, le pasó lo mismo con
la relación sexual, la primera vez no sentía curiosidad, pero después si.
b) Dichos del menor de iniciales M. A. C. G., Mauricio, de 15 años, quien
señaló que el año 2007 estudiaba en el Liceo Polivalente Santa Juliana, estudia
ahí desde 2005, cree, ingresó en cuarto, en el 2007 estaba en 6° A, tenía 11
años, su profesora jefe era la señorita María Eugenia, fue profesora suya en 5° y
6°, hacía matemáticas y era Jefa de U.T.P., conoce a Sebastián, es su amigo,
compañero de curso. Indica que la relación con él fue distinta en el 2007 ya no
tenía la confianza de los años anteriores, antes le contaba todo y ese año no
le contaba casi nada; no sabe por qué cambió, ese cambio fue con los
demás también según cree, el cambio fue antes del cumpleaños de Sebastián
en agosto, 27 o 28 de agosto. Sebastián era buen alumno era presidente de
curso cuando estaban en 5° básico, no recuerda si también en 6°.
En el 2007, no notó una relación especial entre Sebastián y la profesora
María Eugenia, la señora María Eugenia iba a escuchar la clase de Sociedad.
Respecto de Sebastián nunca no hizo nada.
Consultado si la señorita María Eugenia sacó a Sebastián de la sala, dice
que sí, no se acuerda cuantas veces, salía como 15 minutos, si no eran 15
minutos, era menos, nunca más.
Para refrescar memoria la señora fiscal le exhibe su declaración
prestada en fiscalía, reconoce su firma, según lee, declaró ante el Ministerio
Público, el 30 de noviembre de 2008, y vio a la profesora sacar a Sebastián
entre 10 y 15 veces, y por entre 10 y 30 minutos, fuera de la sala. Consultado al
respecto, responde es como dice ahí, era más de 15 minutos. No sabe donde
iban cuando la profesora lo sacaba de la sala, una sola vez, hablaron fuera de
la sala, se veía a través de la ventana, tenían la cortina abierta.
Para
superar
contradicción,
la
señora
fiscal
exhibe
al
testigo
nuevamente su declaración ante el Ministerio Público y el testigo lee “pero a
veces se quedaban conversando fuera de la sala, lo cual podía ver, ya que la
puerta de la sala quedaba abierta”.
Consultado al respecto el testigo dice una pura vez lo pudo ver con la
puerta abierta. Lo vio por la ventana y por la puerta.
La mayoría de las veces lo iba a buscar a la sala y lo sacaba. Una vez,
cuando fueron a ver una película a la sala de video con una profesora, la
señorita le pidió un tiempo a la otra seño para quedarse con Sebastián en la
sala. Después de una media hora, llegó Sebastián a la sala de video. No le
contó qué había estado haciendo.
Ayleen, una compañera, tuvo una enfermedad, él la fue a ver con la
señorita y tres compañeros más. Maira, Alexandra y Jeremy. A él y a otros
compañeros la profesora los llevó en su auto a la entrada del metro Dorsal, en
el auto iba también Sebastián y Kevin. Bajaron Kevin y él, Sebastián y la
profesora quedaron en el auto. No sabe a donde se dirigían ni la fecha.
Para refrescar memoria la señora fiscal le exhibe su declaración ante el
Ministerio Público, luego de leer el párrafo destacado, luego dice que eso fue
en el mes de septiembre.
A Sebastián lo empezó a sacar después del cumpleaños de él,
Él no tenía ni el teléfono ni el correo electrónico de la profesora, a
algunas personas del curso del curso se los dio, Alexandra, Francisca y no se
acuerda de otras personas. En ese año no recuerda cuantos alumnos había en
su curso, como 40 o 41, había más hombres.
Escuchó que pasó algo distinto a lo normal entre María Eugenia y
Sebastián, llegó un día llega al colegio y una compañera comenta que supo
que la señorita le había dado un beso al Seba, no supo como ella se enteró de
ello, él pensó que era mentira, porque no creía que “la seño” pudiera hacer
algo así, porque era una buena profesora con ellos y para que hiciera algo así,
no cree.
Para evidenciar contradicción, la defensa exhibe al testigo la
declaración en el Ministerio Público, y el testigo lee “una compañera de curso,
Francisca, le comentó a mi compañero Kevin, quien a la vez me comentó a
mí, que alguien había visto a la profesora darle un beso en la boca a
Sebastián”. Él no le preguntó a Francisca si era verdad lo del beso.
La profesora no hacía regalos de cumpleaños a todos los alumnos, que
él sepa, le regaló una billetera al puro Seba, él se lo dijo, la vio por fuera, no la
registró por dentro, no recuerda cómo era la billetera, se la regaló en su
cumpleaños.
Preguntado indica que él nunca fue al departamento de la
profesora María Eugenia.
c) Aseveraciones del menor de iniciales C. F. G. A, de 14 años, dice que
en el año 2007 cumplió los 12 años, a mitad de año, en ese tiempo estudiaba
en el Liceo Santa Juliana, estudiaba ahí desde pre kinder, el año 2007 estaban
en sexto, eran como 45 o menos pero 40 y algo, compañeros de curso, eran
más hombres, su profesora jefe en ese tiempo, era la señora María Eugenia
Darrigrande, ella era también la jefa de U.T.P., a ellos les impartía matemáticas,
eran hartas horas en la semana, a ella le iba más o menos, no bien, pero
tampoco le iba mal.
El curso tenía una buena relación con la profesora, en lo personal, ella
tenía una excelente relación con Sebastian cuando él tenía problemas, le
contaba cosas a ella y ella le daba consejos, él tenía el Messenger de la
profesora, conversaba con ella, no todos los alumnos eran cercanos a ella, los
que tenían problemas le contaban y ella les decía lo que opinaba y les daba
un consejo, a esas personas les daba su Messenger. En horas de clases,
Sebastián estaba mucho tiempo con ella, en la sala de clases, se mandaban
papeles, cosas así. Eso para algunas personas era normal, porque cuando uno
tenía problemas se acercaba a la profesora harto tiempo, y Sebastián se
estaba mucho con ella. A veces sacaba la silla de un puesto y se iba a sentar
al lado de ella.
Algunos compañeros comentaban que ellos podían estar juntos, que
tenían una relación. A veces, cuando estaban en otra clase, llegaba la
señorita María Eugenia, Sebastián le decía que quería hablar con ella y la
señorita maría Eugenia le pedía permiso a la profesora, para hablar con él. Los
papelitos eran hojas de cuaderno, se las intercambiaban. Se escribían cosas.
No era habitual que la señora María Eugenia hiciera regalos a los alumnos.
Cree que la mamá de Sebastián se había separado del papá, parece
que tenía problemas, porque una compañera una vez le preguntó a Sebastián
por qué se acercaba tanto a la profesora y él le dijo que era porque tenía
problemas. Preguntado señala que él no conoció el departamento de la
profesora.
Agrega que cuando lo sacaba de la sala, él veía que se quedaban en
la entrada, porque a veces dejaban la puerta abierta. Recuerda que los dos
se pasaban los papelitos.
Para evidenciar contradicción, el abogado defensor la hace leer su
declaración ante el Ministerio Público, dice que era su firma en ese tiempo, la
fecha es 20 de noviembre de 2008. y lee “incluso Sebastián le entregaba
papelitos doblados, lo cual vi muchas veces, la profesora después lo sacaba
de la sala de clases”.
Consultado al respecto, dice que podía ser que no fuera en la misma
clase que lo retiraba, a veces él le pasaba papelito, ella se lo respondía, o
cualquiera de los dos se quedaba con el papel, no se fijó quién se quedaba
con el papel. Cuando estaban en clases de ella, nunca lo sacaba, no tenía
para qué si ella estaba ahí. Era cuando estaban en las otras clases.
Ella podía ir a la sala a dar una indicación, como que dejaran limpia la
sala. Pero que le entregara un papel cuando estaban en otra clase, no se
acuerda.
Él se acuerda que los acercamientos eran mutuos, a veces ella llegaba,
y Sebastián le decía que quería hablar con ella, y se sentaba al lado de ella y
empezaban a hablar. No recuerda a Sebastián molesto por esta cercanía.
Los demás no se comunicaban con la profesora con papelitos con la
profesora.
d) Declaración del menor de iniciales C. A. U. M., de 13 años, dice que
cumple años el 25 de septiembre y que estudia desde prekinder en el Liceo
Polivalente Santa Juliana. El año 2007 estaba en 6 A, la profesora jefa durante
5º y 6º era la señorita María Eugenia Darrigrande. En su curso eran más
hombres, era un curso bueno, es que con la señorita María Eugenia se unieron
harto, era buena profesora y como persona también, siempre los apoyaba,
ellas les podían contar las cosas, siempre fue así.
Ella tenía su celular, la llamaba a veces, cuando tenía alguna duda, de
repente de colegio o cosas así, también conversaba con ella en clases. Nunca
chateó con ella, pero de repente se mandaban e-mail, en la tarde, ella tenía
el mail, lo tuvo por el motivo de que tenían una compañera enferma, Ayleen,
también se comunicó dos veces con ella por mail, por problemas en el
colegio. Para evidenciar contradicción, la señora fiscal exhibe a la testigo su
declaración en el Ministerio Público, ella reconoce la firma y lee la fecha, 22
de octubre de 2008 y el párrafo destacado “yo nunca he chateado con la
profesora por Messenger ni por correo electrónico, pero sí le mandó dos fotos
de Ayleen, y nada más”. Consultada al efecto, dice que mandó mensajes por
lo de Ayleen, no recuerda bien qué dijo esa vez, pero sí le mandaba correos
por lo de Ayleen.
Ella veía habitualmente a la señorita todos los días, en clases y en la sala
UTP, de repente para estar con ella, para conversar.
Para ella no era diferencial la conducta que tenía con Sebastián,
porque cuando ella necesitaba hablar con ella, siempre se ofrecía. Sebastián
decía que le contaba sus problemas familiares y por eso conversaba con la
profesora. Era habitual que Sebastián se acercaba a ella, cuando estaban en
clases de matemática y le empezaba a preguntar cosas o empezaban a
conversar. A veces lo sacaba de la sala. Ella entraba le preguntaba a la
profesora respectiva si lo podía sacar, y la profesora le decía que sí y
Sebastián salía y conversaban fuera de la sala de clases, eso era de repente.
La sala tenía cortinas, y habitualmente estaban cerradas, a veces
quedaba la puerta abierta y ahí se veían conversando. Estuvieron un tiempo
en obra de teatro, en noviembre, por ahí y también sacaba a otras persona,
para preguntarles cosas de la obra, cosas así, no se acuerda en qué época
sacaba a Sebastián, si antes de la obra o después. En clases, habitualmente
Sebastián la llamaba para que conversaran, ella iba, se agachaba y se
ponían a conversar.
Ella más de una vez vio que Sebastián le dejaba papeles a la señorita,
doblado, así como cuadrado, lo hacía en la clase de matemáticas. A veces la
profesora dejaba el papel al lado u otras veces lo abría, lo leía y lo dejaba
guardado, no recuerda si después hacían algo con Sebastián.
Ella la fue a ver una o dos veces a Ayleen Torrejón, que estaba enferma,
ella fue una vez con la profesora, y de repente iba con sus compañeras.
A Sebastián lo conoce desde pre kínder, es un buen compañero, nunca
tuvo nada malo, que decir de él, pero era un poco hiperkinético y
extrovertido, le molestaba que se tiraba así como chistes un poco subidos de
tono hacia las compañeras, esto desde que estaban como en quinto.
e) Testimonio del menor de iniciales G. E. L. K, de 15 años, quien
manifiesta que estudia en el colegio Santa Juliana desde 4°, en el año 2007
estaba en 6° A, actualmente está en 8° A, en ese tiempo eran como 43 o 42
alumnos en el curso, más hombres, era un curso ordenado, él tenía 13 años en
esa época, jugaban a la pelota, contaban chistes, de doble sentido y simples,
de todo, las revistas pornográficas no eran tema en ese tiempo, el tema sexual
no era tema, indica que tenían pololas, de los otros cursos, no del mismo. Se
miraban no más, y eso era todo. Eran como todos iguales, sus amigos eran
Mauricio, Kevin, Sebastián, Omar, que ya no está en el curso, llegaban
temprano en la mañana a jugar a la pelota. A las compañeras de curso no las
molestaban, como que no se fijaban en ellas, iban a jugar a la pelota.
Sebastián era igual que todos, estaba con ellos conversando, eran todos
parecidos, le gustaba contar chistes, etc. En el segundo semestre notó que
Sebastián cambió, como en agosto o septiembre, estaba como decaído, no
tenía ánimo de nada, de repente jugaba con ellos a la pelota, él nunca se
atrevió a preguntarle, después sí. Sabía que tenía problemas. En su físico
estaba igual. En la sala de clases le llamó la atención que no le daban ganas
de hacer nada. Él no se ha cortado los brazos, pero Sebastián tenía unos
cortes en los brazos, (indica la muñeca,) eran cortes con cuchillo tip top, corta
cartones. Esto se lo vio en la sala, no se acuerda si eran recientes. Cuando se le
preguntaba qué le estaba pasando, decía que era porque tenía problemas.
Antes no le vio esas lesiones, esas lesiones coincidieron con el cambio de
carácter de Sebastián. Los cortes fueron al principio del segundo semestre.
En ese tiempo su jefa de curso, era la señorita María Eugenia, súper
buena persona, buena profesora, a él lo ayudó harto, para estudiar, a él no lo
sacó nunca de la sala, a Sebastián sí, a nadie más. Era a veces, en las clases
de otra profesora, no sabe a donde iban, porque ellos estaban en clases. No
era habitual que la profesora les hiciera regalos a los alumnos.
Señala que sabe por qué está acá, por el problema que tuvo Sebastián
con la seño; indica que el se enteró cuando salió en las noticias. Sebastián
nunca comentó de eso, no lo vio pavonearse ni hacerse el grande. Cuando
salió eso, él no lo habló con Sebastián, no se atrevió a decirle, cuando vio eso.
Al principio no lo creía, porque igual era difícil, porque la señorita era súper
buena con ellos, nadie iba a pensar que iba a pasar eso, ella era buena
profesora, les enseñaban todo bien. No la vio alterada, ni nerviosa el año
2007. Piensa que Sebastián no mentía, porque a esa edad, sería mucho
inventar algo así, nunca lo vio mentir ni engañando a los profesores, era un
buen alumno, era buen estudiante, le gustaba hacer las tareas y todo eso.
Expresa que es amigo cercano de Sebastián. No se atrevía a
preguntarle a Sebastián cuáles eran los problemas que tenía.
Él no tenía confianza con algún profesor del colegio, se prefería a
guardar sus cosas para él, no le gustaba contar las cosas que le pasaban.
Entiende que era grave que Sebastián se cortara los brazos, pero no se lo
contó a nadie, cuando le vio los cortes no sangraban, no sabe si eran
profundos, eran varios cortes. Últimamente tampoco ha hablado de este caso
con Sebastián.
f) Declaración de Jessica del Carmen Salinas Arriagada, quien expone
que su grupo familiar está compuesto por sus tres hijos, Braulio, 9 años,
Sebastián de 14 y Yanira, 5 años, está separada de hecho de su esposo desde
hace 6 años. En el año 2007 vivía en la comuna de Independencia con sus
tres hijos, pero cuando ellos entraban a clases, se quedaban con el papá, en
el tiempo de los primeros meses del año, que era como invierno, se quedaban
con los abuelitos durante la semana si llovía, porque ella llegaba tarde del
trabajo y si estaban acostados se quedaban ahí, los llevaba los fines de
semana para su casa, en la comuna de Independencia. El domicilio del padre
de los niños estaba a una cuadra del colegio, en la comuna de Recoleta.
Normalmente si quedaban en la casa del papá, en las mañanas los iba a
dejar el papá y el abuelito los iba a buscar y en las tardes que era la hora de
regreso, ella los iba a buscar, llevaban un cambio de ropa, para que la ropa
del colegio les pudiera durar. Esto ocurría en primavera y no había frío, desde
septiembre, dependía de la temperatura. En agosto de 2007 estaban con el
papá, pero se iban con ella. En el año 2007 la dinámica cambió, tuvo un
problema familiar con la abuelita, para castigarlo, tuvo a Sebastián ella, una
semana, sin ver a su padre, a sus hermanos los vio, porque ella le pidió a la
profesora que los ayudara, porque Sebastián tenía pena, cuando sucedió esto
y le pidió que lo ayudara y ella se acercó a la profesora jefe de Sebastián,
María Eugenia Darrigrande, para informarle lo que estaba pasando y los
ayudara como familia y ella intercedía, para que cruzara el hermano, para
que pudieran verse. Ella se acercó a ella, porque le tenía confianza. Esto
ocurrió antes del cumpleaños de su hijo, que es el 27 de agosto. Esto duró una
semana porque ella conversó con el papá, y le pidió por favor al papá que
esas cosas no se hacían, que ya había entendido que no le tenía que faltar el
respeto a su abuelita. A principio del año 2007, Sebastián era niño, jugaba a la
pelota, nunca tuvo problemas con él, en ninguna parte, es tranquilo, ningún
problema, pero de repente, algo cambió. Ella vio un cambio en él, en esa
semana, cuando la abuelita le pidió que estuviera una semana afuera a él le
dolía el pecho, esa semana le tocaba su cumpleaños, y después de su
cumpleaños él empezó a recibir regalos, que no habían llegado antes, porque
no había ido. Desde ahí empezó a presentar problemas. Los regalos eran
peluchitos, pero a ella le llamó la atención un regalo, una billetera de
“Carteras Italianas”, que venía en una caja que decía “Carteras Italianas”. Su
hijo le dijo que se la había regalado una compañera, pero a ella le parecía
mucho para una compañera. Sebastián tenía muchas billeteras, si le gustaba
la U de Chile, ella se la compraba, porque a ella le gustaba chochear a su hijo.
No usaba las billeteras que ella le regaló, usaba la que le regaló la
compañera, no había visto otros regalos así. Recibió cartitas, peluchitos,
chiquititos o que las mamás le hacían llegar, después, esos regalos no le
llamaban la atención.
Observó un cambio físico en su hijo, su hijo no la miraba a la cara, dejó
que el pelo le creciera, se tapaba y miraba al suelo, ya no la miraba, empezó
a adelgazar, tenía unas ojeras muy grandes en su cara. Estaba súper arisco, no
la dejaba acercarse a él, eran súper amigos, compinches, cuando tuvo
problemas con su abuela se lo contó al tiro, pero, pero después se empezó
esto, ya no la miraba. Ella iba a buscar a sus hijos a la casa del padre.
Sebastián le pidió que le pasara una tenida diferente los días viernes, le pedía
llevar los jeans y las zapatillas, porque los fines de semana ella los viste lindo, los
demás días los vestía con buzo. Ella le dijo que sí, porque pensó que lo pedía,
porque quería verse bonito. No les mandaba siempre muda de ropa interior,
sólo uno diario si se tenían que quedar, si no, se iban con el slip diario y se
duchaban en su casa, cuando ella los iba a buscar. Esto empezó a ocurrir
después del cumpleaños, pero en cuanto la actitud, no sabe cuando empezó
a producirse.
Ella creía que estaba pololeando, y él le dijo que le gustaba una niñita
que era hija de la profesora, ella lo veía adelgazando y que no podía
acercarse a la niñita. Ella por eso se lo preguntó a la profesora, primero
personalmente y después por correo, porque estaba muy desesperada,
todavía se acuerda el correo que le mandó, esto fue después de fiestas
patrias. Ella se acuerda que le respondió, no se preocupe, preocúpese si su hijo
fuera asexuado.
La señora fiscal incorpora, a través de lectura realizada por la testigo, la
hoja 4 de la prueba documental C 14, consistente en una carpeta
transparente, con fuelle color morado, que contiene 6 hojas tamaño oficio.
Al observar su contenido, la testigo dice que a Investigaciones de Chile
ella le dio su clave de acceso, este es uno de los correos. Es el correo que la
profesora le había enviado, luego lee: “señora Jessica, junto con saludarle,
que esta conversación es entre las dos y que nadie se enterará. Mire, el
rendimiento de Sebastián es excelente, tiene un 6,7. Se ve saludable, sociable,
con sus compañeros. Y a usted, la quiere mucho. Yo a usted, la entiendo como
mamá, él está teniendo cambios por su edad, está creciendo. Es normal que
le gusten las niñas, terrible sería que fuera asexuado, he visto tantos casos
como profesora”.
Comenta la testigo que es un correo del 8 de octubre de 2007, de la
señora María Eugenia Darrigrande. Ese documento es la respuesta a su
mensaje, porque su hijo iba a postular al Instituto Nacional ese año, como ella
lo veía cambiado, pensó que también había cambiado las notas, para saber si
ella también lo veía diferente. Siempre le preguntaba a doña María Eugenia
por su hija, y cuando ella la dejaba tranquila, ella le daba las gracias, la dejó
tranquila, porque le dijo que todos los niños estaban teniendo cambios. Ella le
preguntó a Sebastián qué le estaba pasando, le dijo que era una niña del
colegio, de otro curso, que le gustaba, que la mamá era profesora, ella sólo
quería saber quien era la niñita que le gustaba a su hijo, ella no iba a
desconfiar, porque si la mamá era profesora. Se quedó tranquila con la
respuesta de la profesora, porque ella confió, porque era la profesora, por qué
iba a desconfiar, era tan tranquilo, tan callado, ella respetaba lo que ella
decía. Preguntada indica que nunca la denunciaron por la sustracción de un
celular, y es falso que tuviera prohibido el ingreso al colegio. El papá y ella eran
los apoderados en el colegio, el papá era el apoderado, pero ella firmaba las
reuniones de apoderados, tiene 3 niños, y se dividían con el padre las salas,
para poder estar en todas las reuniones de apoderados.
Se enteró de lo que ocurría con su hijo porque hubo una semana en
que él empezó a pedirle permiso para ir a una fiesta toda la noche, nunca
había ido a una fiesta, y empezó el día lunes anterior a decirle, con que
“dame permiso para ir a una fiesta”, “¿para donde quieres ir?”, “a una fiesta
con un compañero”, “pero ¿qué compañero?”, “es que es un compañero”;
después era una polola. Era una fiesta en la cual él estaba pidiéndole permiso
para quedarse. Entonces, toda la semana, “no”, “no”, “no”, y en un momento
le dijo: “ok, te puedo dar permiso, necesito dirección, necesito teléfono,
necesita saber quién es, necesito saber todo, para yo ir a conversar con la
mamá del niño, para ir a dejarte en la casa y después te voy a buscar”.
El jueves habían tenido de nuevo la misma discusión, el día viernes, dijo,
“algo raro tiene en la cara, algo raro”, ella estaba en una reunión y dijo, “me
voy a retirar de la reunión” y llamó por teléfono y dijo “mamá, no te
preocupes, no hay fiesta, mi polola se me enfermó, no hay fiesta”. Esto fue
como a las 15.30 horas, más menos, era la hora de salida. Él llegó a la casa,
pero se cambió de ropa, se duchó y salió. Ella lo llamó, y no le contestó el
celular, ella lo buscó por todas partes, en el colegio, en el celular, en el
teléfono de la profesora, porque ella se lo había dado, y él había dicho que la
profesora iba a la fiesta, habló con la secretaria, le dijeron que la profesora se
había retirado temprano, habló con la hija de la profesora por el celular y le
dijo, “mi mamá está en clases”. Ella llamó al papá al celular y le preguntó si él
le había dado permiso para salir, y le dijo que no. Ahí ella casi se murió de la
angustia, llamó a la abuela también y le dijo que se había ido. Ahí ella empezó
a investigar. A ella la llamó para preguntarle si sabía donde estaba su hijo, si
había ido a la fiesta. Después se retiró de su trabajo, un poco antes, le pidió
permiso a su jefe y se fuel tiro a la casa de su suegra, cuando llegó, estaba su
hijo, tienen que haber sido como a las 19.00 horas, él estaba ahí, pero tenía
una cara de desesperación, de angustia, era tremenda la cara que tenía su
hijo, ella lo tomó y le dijo, “ya, esto no puede seguir así, ¿qué te pasó?” “no, es
que no hay fiesta no te preocupes”, “no, si, me voy a preocupar, ahora me
contai que pasa así que vamos donde tu papá, al taller”. Llegaron al taller y el
papá le dijo, “dile quien es tu polola pus, si total”, “es que no te va a gustar”, “¿
por qué no te va a gustar”, “porque tú, porque aquí, porque” “no, dime ¿quién
es tu polola?, inmediatamente lleva a tu mamá”. Lo obligó, porque él a ella le
decía que no, que se prefería quedar ahí. Estaban los dos con el padre y lo
obligaron que la llevara, caminaron a Recoleta y ella le dijo, “ya, tomemos un
taxi, cómo te vas tu de aquí para donde tu polola” y la quedó mirando, con
cara de asustado. Tomemos un taxi, páralo”. “Señor, le dijo, el niño le va a
decir adónde vamos. Y la queda mirando y le dice, mamita, vamos a Libertad
con Mapocho. Todavía se acuerda y él empezó a decirle al taxista como irse.
Tomaron el taxi en Avda. México con Recoleta. De a poco empezó a decirle
al taxista como llegar, porque iban discutiendo en el auto, porque ella empezó
a decirle, pero cómo llegaste a Libertad con Mapocho. Es que allá vive mi
polola, pero ¿cómo
llegaste allá hijo?. Y allá llegaron, a Libertad con
Mapocho. Era un condominio, era la primera vez en su vida que ella había ido
a esos lugares, él entró, ella lo siguió, el entraba como Pedro por su casa,
pasaron una entrada y después subieron un piso y ahí era supuestamente a la
casa de su polola. En la entrada había una caseta, pero ella no miró si había
alguien ahí, ella iba preocupada por su hijo, solamente de saber. Ella golpeó, y
ahí estuvo una hora parada, afuera del departamento, Sebastián le dijo que
estaba enferma, que estaba en la posta, y ella le creyó, porque necesitaba
creerle, era tanta la angustia que ella necesitaba creerle, le dolían los pies y le
dijo “bajemos un rato, y esperamos, como sabes si llega”. Se sentó a la
entrada del condominio, por dentro, en el lugar donde se estacionan los autos,
porque le dolían las piernas de estar tanto parada. En eso recibió un llamado
del papá de Sebastián, y le dijo, “cómo seguís esperando Jessica, anda donde
el conserje”, y ahí, fueron donde el conserje y le preguntaron. Ella se metió
dentro de la caseta, había una cámara grabando y había un libro, ella le dijo
“señor, ¿le puedo hacer una consulta, quien vive en este departamento?” él le
dijo: “¿por qué?” y ella le dijo “porque mi hijo dice que venimos a buscar a la
polola y la polola no llega” y él le dijo “señora, ahí vive una señora que viene a
buscar solamente correspondencia”, y le dijo, “péguele al tiro no más”. El
papá dijo, “yo voy con los dos niños, espérame ahí”. Ella lo tomó, lo retó,
estaba tan desesperada. Ella no sabía que pensar, tenía tanto miedo, estaba
desesperada, lo zamarreaba, le decía “dime, por favor, por favor cuéntame
Sebastián”, Sebastián se agarraba la cabeza, ella estaba al lado de él.
Cuando llegó el papá a la esquina del condominio, donde hay una iglesia, a
esperarlos. Ellos subieron al auto, el papá estaba tan enojado que le quitó el
celular. El papá le dijo, “ahora nos vas a decir”, porque ahora nos vas a llevar,
nos vamos a ir al tiro al Salto, pensando que la polola era de Recoleta. Iban en
tan malas condiciones, que en Recoleta con Guanaco los paró un carabinero,
se baja su marido y algo le dijo la carabinero que él le dijo “tenemos un
problema familiar tan grave”, y ella le dijo “hijo, dime la verdad, si a mi no me
interesa, dime la verdad Sebastián, si a mi no me interesa”, y él se agarra la
cabeza y dice, “mi profesora, mi profesora. Subió su marido al auto y ella le
dijo “Beto, mira lo que me dice, que es su profesora”. Ellos todavía incrédulos,
se dieron la vuelta por Avenida. México y la fue a dejar a la casa, con los tres
niños, él se llevó el celular y las cosas que más le gustaban, que eran sus
zapatillas. Él en la casa, lo abrazó y le dijo: “hijito ¿de verdad, es tu profesora?”
y le dijo:“sí mamita”. El celular sonó todo el rato, cuando ellos iban en el taxi
sonaba a cada rato y él lo terminó apagando, y después de eso, cuando su
marido se lo quitó, su marido lo prendió y lo dejó adelante, en el auto, donde
está el manubrio. Ya eran como las 22.00 horas, si es que no más.
Él le dijo “es mi profesora”, ella le dijo: “pero tu profesora jefe,
Sebastián” y él le dijo, “sí mamá”. Ella lo abrazó, lloraron harto y vio que le
volvieron a brillar los ojos, porque la pudo mirar a la cara y le dijo “mamá, me
dolía aquí”, (se toma el pecho) y ella le dijo, “ya hijo, mañana te compro
zapatillas”. Fueron a la esquina, desde donde él llamaba siempre, porque ella
trató de llamar desde su celular, pero ella no le contestó. Entonces Sebastián
llamó, habló con ella, pero cuando le tocó hablar a ella, ella gritaba, le decía,
“no señora, Ud. está equivocada, Ud. está equivocada”, y ella le dijo, “de qué,
si todavía no le he preguntado, no, si Ud. está equivocada, está equivocada,
pero si todavía no le digo de qué”. Le dijo “juntémonos mañana, yo voy
mañana al colegio, juntémonos mañana porque hoy no podemos, tenemos
un tremendo problema, juntémonos mañana” Ella gritaba tanto y le decía
“deme con su hijo, deme con su hijo”, y ella le dijo “¿Sebastián, por qué grita
tanto? y su hijo le dijo, “porque ella no quiere que le cuente nada”.
Ella le empezó a preguntar a su hijo de a poquito. El día real fue el 23,
él le contó. El sábado fueron al colegio, el conserje dijo que no había ido,
fueron a buscarla, para escucharla. En ese intertanto, ellos se acostaron y la
llama su marido que le dijo “prepárate, porque tenemos que ira al colegio
mañana”, ella le dijo ya, porque veía a su hijo llorar. Fueron al colegio y le
dijeron que ella estaba enferma, que había llamado, ella dijo, vamos el lunes, y
ya no estaba, estaba la licencia.
El lunes estaba su marido, fueron a hablar con el director, entró una
psicóloga, y no tiene claro, si entró otra persona más, porque querían que
escuchara. Al director le dijo “Sabe le dijo, mi hijo dijo que la profesora es su
polola, tengo un problema con mi hijo, tuvimos un problema el fin de semana,
y el problema que mi hijo está pololeando y dice que la polola es la
profesora”. El director la miró y dijo “ya señora, nosotros vamos a investigar y la
vamos a llamar”. Ese día lunes, del colegio ella se fue a trabajar, el niño se
quedó en clases, como si nada hubiera pasado, porque nadie sabía nada y
todavía ellos no sabían nada más.
El día miércoles de esa semana el director los mandó a buscar y la
psicóloga le dijo, “su hijo tiene que contarles algo”, y ahí su hijo les dijo que él
había estado con su profesora, ella preguntó “¿besos?”, y le dijeron “más que
besos” y su hijo le dijo que había tenido sexo con ella. No le dijo donde, ese día
sólo lo abrazaron y lloraron con él, y por eso estaba tan hundido, delgado,
demacrado.
Además Sebastián no era capaz de inventar algo de esa naturaleza,
porque él nunca mintió, ella sabía que salía los viernes, ella creyó en él, porque
le volvió el color, él era un niño. Ella le preguntaba cosas, pero cuando él
quería hablar. El colegio al tiro puso demanda, que era lo que le correspondía
al colegio. Ella fue mamá, primero lo ayudó, después escondida de él, buscó
abogada, para poner orden de que no se acercara, sin saber si era verdad o
no, en un juzgado de familia o algo así, y eso hizo, hasta que él quisiera hablar.
Después de mucho rato de haber ido al colegio y de conversar con él,
conversó con un psicólogo y le preguntó qué podía hacer y le mostró una foto
de cómo era él antes y cómo estaba. El psicólogo le dijo, “déjalo, él se puede
ir muy para adentro, o te va a contar, déjalo estar”.
En relación al celular, el papá le dijo que estaban llegando muchos
mensajes de texto al celular de su hijo, al otro día se los pasó. No hizo nada,
guardó el chip, el celular y lo escondió. Escribieron los mensajes en un papel,
para contarlo en el colegio, los mensajes de textos que ellos sabían que eran
del celular de ella, el papá de Sebastián los escribió en una hoja de papel de
cuaderno de matemáticas.
La señora fiscal exhibe al testigo el documento signado C 15 en el auto
de apertura, la testigo lo examina y dice, son los mensajes de texto que su hijo
recibió esa noche, el papá los escribió, se entregó en el colegio.
Explica que ella se puso como su mail “Cariñobueno”, por sus hijos, ese
es su correo electrónico.Expresa que ella envió los correos. Llamó a ENTEL para
saber cómo los podía pasar a su correo los mensajes del celular, lo hizo porque
quería que no se le fueran a borrar, para que no se fuera a perder el chip,
porque su hijo, hasta esas alturas, no estaba convencido de entregar todas las
pruebas, “decía sí mamá”, entonces a ella le daba susto que se pudieran
perder. Su hijo estaba como recién tratando de hablarlo todo, de contarlo
todo, entonces ella pensó guardarlo como respaldo.
La defensa exhibe a la testigo el documento signado D8, “mensajes de
texto salientes N º 14”. Ella tiene ese correo Yahoo, que es el “cariñobueno”.
Los mensajes que reenvió a su correo, son esos. La número 12 es 27 del 11
2007, y la número 11, es 26.22-2007.
Sólo veía pena y angustia en su hijo, de todo de lo que vivió, nunca
mostró cara de contento, ni de felicidad, su cara era de angustia fue lo que a
ella le llamó la atención, su hijo tenía 12 años. Sebastián era un niño tranquilo,
deportista, tenía muchos amigos y amigas, que ella conocía, le decían “hola
tía” cuando entraba al colegio. En cuanto a su desarrollo sexual, era chiquitito,
no tenía nada, era un niño que vivía cuidado por ellos y los abuelitos, no tenía
experiencia sexual, ella lo sabía, porque ella le decía, “bueno y?” y él le decía
“ya, no”, era un bebé, era chiquitito, en el colegio era intachable, desde pre
kínder hasta que pasó esto, su hijo nunca presentó problemas, tenía promedio
sobre los otros niños, 6,7, 6,5, era caballerito, jugaba, no era agrandado, no
salía a la calle, ella nunca lo ha dejado salir ni andar parado en las esquinas.
Siempre ha andado en auto, lo han cuidado, protegido, no se manejaba en
las calles de Santiago, ni ella. Fue capaz de explicarle al taxista donde iba,
porque alguien lo llevaba, porque si no ¿cómo iba a llegar si no, cómo? Su hijo
no sabe tomar locomoción colectiva y además, en micro, no tenía cómo
haber llegado, supuso que había ido en taxi, él dejó claro que era en Libertad
con Mapocho, vamos a unos departamentos, ella iba muy nerviosa, y ahí él
empezó a darle las indicaciones, cuando él daba las indicaciones imaginó
que él había ido en taxi, porque en micro no tenían como haber llegado al
lugar que fueron. Agrega que con exactitud no sabe cómo le dio las
instrucciones, porque ella iba retándolo, sólo fue claro que era en Libertad con
Mapocho, y ella le dijo, dígale al taxista donde vamos y él empezó
seguramente a darle las indicaciones, pero ella iba muy nerviosa.
Para evidenciar contradicción, el señor defensor le exhibe un párrafo de
su declaración ante la policía, previa delegación de Fiscalía, reconoce su
firma, es el 2 de mayo de 2008, lee a continuación, “al subirnos a un auto, no
supo guiar, y sólo nos dijo que quedaba en Libertad con Mapocho”.
El celular, tenía unas protecciones de goma a los lados, tenia como
azul, era el más moderno que había en esa época, se lo habían comprado
para la navidad. La señora fiscal exhibe a la testigo la evidencia signada D 2
en el auto de apertura, al examinarlo ésta dice que es el celular de su hijo, de
ahí se sacaron los mensajes que se transcribieron y que después ella transfirió a
su correo.
Ellos se ponían de acuerdo con el papá para hacerles regalos a los
niños, les regalan lo que puede, ese año él quería un celular y ellos, por sus
notas, siempre hacen esfuerzos, se lo regalaron el 6006, cree que el número
siguió, porque él, jugando a la pelota, había hecho tira el anterior. En el
cumpleaños de 2006 le regaló a su hijo una cámara digital, ese día ella le
cantó el cumpleaños feliz, él le pidió llevarla al colegio, ella le dijo que sí, y él
sacó fotos en el colegio.
El dolor que ella tiene es tan grande, hasta el día de hoy ve sufrir a su
hijo, es un quiebre, tiene culpa, porque no hizo algo cuando le vio la cara de
pena. Su hijo era un niño chiquitito por qué habiendo tanto niño grande se lo
hizo a su hijo. Qué mal le hizo la vida a ella para que hiciera algo tan grave a
su hijo, no hay momento en que no sientan que esto está encima.
Preguntada indica que Sebastián ha tenido proceso reparatorio en un
servicio de víctimas de abusos sexuales donde la envió la fiscalía, ha estado
ahí un año, o algo así, con una persona que lo ha ayudado mucho, se llama
Eric Leiva, es el psicólogo de su hijo. El trabajo ha sido bueno, porque su hijo
estaba mal, se le estaba cayendo hasta el pelo, ella no sabía cómo ayudar, su
hijo confió en él y lo pudo ayudar, hizo un papel importante.
El problema con su abuelita fue un problema de falta de respeto,
imagina, él le levantó la voz a su abuelita, esto fue antes del cumpleaños, duró
una semana.
Su hijo se dejó crecer el pelo, para taparse los ojitos, para taparse toda
su carita, se planchaba el pelo, no era pokemón, era un peinado como
príncipe.
El papá le quitó las zapatillas, como una forma de castigo, porque son
cosas importantes, a él le gustaban y ellos se las regalaron porque se las
merecía, pero como no se la merecía, se las quitaron.
Sebastián supo del problema que hubo en su casa, se lo comentó a la
profesora. Le afectó mucho, estaba tan angustiado, pero eran tantas las cosas
que estaban pasando. Esto ocurrió el mismo año. La delgadez de Sebastián
no se corresponde, a ella le contó su hija, él la llevó al médico para saber si era
verdad o mentira, su hijo nunca supo si era verdad o mentira, nunca supo, su
cara demacrada empezó mucho antes, entre septiembre y octubre.
La billetera la guardaba en la mochila, ella registraba la mochila de su
hijo, siempre, pero no la billetera, ella le daba plata para que comprara dulces
en el colegio.
Cuando llegó al condominio, era tanta su angustia que llegó y entró,
pero había un conserje que se daba vueltas, pero nunca le preguntó nada.
Sebastián se quedaba en el colegio, en el polideportivo, los días viernes,
supuestamente. El día de la fiesta, no le dio teléfono, lo le dio dirección, no le
dijo con quién, ella se daba cuenta que no le quería decir en qué lugar iba a
estar, estaba tan amarillo, que uno podía pensar cualquier cosa, estaba
desesperada, había descartado el colegio, porque su hijo ha ido desde pre
kínder, ella se había acercado a la profesora, le había dicho “sabe, veo a mi
hijo diferente, mi hijo ha cambiado de actitud, lo veo demacrado con los ojos
hundidos, dijo que le gustaba una niñita, Ud. me puede ayudar?” Ella descartó
el colegio por la seguridad que le dio doña María Eugenia, por correo y por
voz. También descartó la casa donde está, ella pensó ese día específico, lo
vio más angustiado que nunca, delgado y demacrado. Consultada si llegó a
pensar que consumía drogas, dice que no sabe, no sabía qué le pasaba. Ese
día ella fue a ver a la polola, porque supuestamente la polola estaba enferma,
hasta ese momento tenía que ver donde era la fiesta y por qué se había
enfermado la polola.
Ella trabajaba todo el día. No veía a su hijo en la tarde.
g) Dichos de Luisa del Carmen Márquez Márquez, quien señaló que vive
en la comuna de Recoleta, en Avenida México, en el año 2007 vivía con su
esposo y su hijo Luis Alberto Jeria Márquez, que es casado y está separado de
su señora desde hace varios años. Su hijo tiene 3 hijos, que siempre han estado
con ella porque la mamá trabajaba y su hijo también, entonces siempre le han
dejado sus nietos a cargo, ahora no duermen en su casa, el año 2007 dormían
en su casa y a veces no los iban a buscar; la llamaban por teléfono diciendole
que no iban a poder llevárselos, y entonces los niños se quedaban con ella. En
invierno se los llevaban a veces y a veces se quedaban ahí, como siempre se
hacía. Su nieto mayor se llama Sebastián. Sebastián es un niño normal,
encuentra ella, lo tuvo desde guagüita. En el año 2007 estaba demasiado
agresivo, muy violento, no actuaba como siempre era con ella, muy tierno y
tranquilo, empezó a portarse mal, no quería estar solo, no recuerda si esto fue
antes o después de su cumpleaños, que es el 27 de agosto. Notó cambios
físicos en su nieto, estaba muy delgado, andaba siempre inquieto, demasiado
nervioso, no quería hablar ni quería conversar, ella le hacía preguntas, se
quedaba callado, quería estar solo, no quería dar explicaciones de nada.
Cuando empezó con este problema que tuvo el niño, lo llamaban siempre por
celular o iba a llamar al frente. En ese tiempo su esposo estaba en cama, con
una enfermedad terminal y ella tenía mucho que hacer, pasaba preocupada
de su esposo y no tenía tiempo para estar con el niño, su esposo falleció el 14
de octubre de 2007.
En la semana no notó nada especial en su nieto, de lunes a jueves salen
a las 16.00 horas. Todos los días viernes de la semana el niño llegaba
rápidamente, apurado, a cambiarse de ropa, no quería almorzar, decía que
no tenía tiempo y se mandaba a cambiar, no lo veía hasta horas de la tarde,
en que regresaba. No recuerda la fecha en que esto empezó.
Para refrescar memoria, la señora fiscal exhibe a la testigo su
declaración prestada en fiscalía con fecha 17 de noviembre de 2008, luego
de leer un párrafo previamente marcado, responde que vio los cambios entre
agosto y noviembre de 2007. Dice que era notorio que había adelgazado, no
tenia apetito, puro pasaba encerrado no más, puro hablar por teléfono.
Estaba más delgado y todo, porque no comía.
h) Testimonio de Luis Alberto Jeria Márquez, quien señala que vive en la
comuna de Recoleta desde hace 2 años, vive con su madre y en las tardes,
llegan sus hijos Sebastián, de 14 años, Braulio de 10 años y Yanira de 5 años.
Sus hijos concurren el colegio Santa Juliana, que está a 3 cuadras de su
domicilio, siempre han ido a ese colegio. En el año 2007 Sebastián asistía a 6°
año básico A, su profesora jefe era la profesora Darrigrande, Sebastián en el
año 2007 era un niño normal, muy consciente de su actividad, que era su
estudios, muy bueno, como hijo a él le llamaba la atención por lo preocupado
que ha sido por si mismo, de él, sus estudios, su familia sus hermanos. Para él
era un niño ejemplar. En el año 2007, a fines hubo un cambio, en el segundo
semestre escolar. Su estado físico, lo vio más delgado, su cara cansada,
decaído, lo notó de alguna forma deprimido, un poco decaído de sus
actividades diarias y por lo tanto, le dio una preocupación, sin realmente lo
que pasaba. Habitualmente en la semana, él llegaba del colegio, almorzaba
en su casa, hacía tareas, tele, se entretenía mucho, alegre, hasta que llegaba
su mamá y se iba. Su horario escolar era de 8.00 de la mañana a 16.00 horas y
el viernes, hasta las 15.00 horas. Los cambios fueron los días viernes, empezaron
después del cumpleaños de Sebastián y antes de las fiestas patrias. Llegaba a
las 15.00 se preocupaba mucho de él, se tenía que duchar, cambiarse ropa,
verse muy bien, ni siquiera almorzaba, que tenía que salir, que tenía que salir. Él
lo asociaba a su entorno, a sus amigos, él siempre decía que tenía que ir a
juntarse con su polola, con sus amigos. A él le llamó la atención y pensó que
podía sentirse mejor saliendo, además el horario no había presión, él era el
encargado de darle los permisos. Sebastián no iba a fiestas ni se quedó a
alojar afuera, nunca le pidió permiso para alojar afuera de su casa. No se
acercó mucho a él porque pensaba que tenía problemas con alguna polola,
con su entorno, con sus amigos, le dio en ese sentido, un espacio. Una vez
Sebastián le pidió permiso para ir a una fiesta un día viernes, quería ir, esto fue
en noviembre, empezó a pedir permiso una semana antes a pedir permiso,
decía que era una fiesta donde un amigo, que iba a haber muchos amigos,
que él quería estar ahí,como nunca había salido, como que se preparó para
esa fiesta, ellos le dijeron que no en principio. El 23 de noviembre fue el día de
la fiesta, ahí de una forma se enteró de casi todo.
Ese fue el día de la fiesta que él pidió permiso con una semana de
tiempo, llegó la hora de la fiesta, y ellos le dijeron que fuera, pero les tenía que
dar la dirección y el teléfono de donde estaba. Se comprometió a llamarlos y
avisarles donde estaba cuando llegara allá. Pasó el tiempo y no les avisó la
mamá empezó a llamarlo y a hacerle las preguntas y él se negaba, hasta que
entre tantas llamadas de la mamá y algunas suyas, Sebastián optó por venirse
diciendo la fiesta estaba mala y que no se iba a quedar. La hora de regreso
de Sebastián siempre era alrededor de las 19.30, 20.00 horas, volvió como esa
hora, no les contó donde estaba ni les dio el teléfono, y a la mamá y a él les
llamó mucho la atención, cuando llegó la mamá estaba esperando y él llegó
y ahí la mamá estaba indignada con él. Él estaba trabajando cerca de donde
ellos estaban, en un taller mecánico, a una cuadra de su casa. La madre se
dirige con Sebastián al taller, lo llamó, él sale, y entre los dos lo presionan para
que diga donde estaba, él se sigue negando a decir, y en un momento de
presión, les dice que estaba en Libertad, en las fiesta de sus amigos, la mamá
le dice, “ya, nos vamos a ir a Libertad, vamos a tomcar un taxi y vamos al tiro
para allá. Se fue en taxi con él y él le dijo, voy a buscar a los otros niños y te
sigo en el auto. Llegó a Libertad unos 20 minutos después que ellos a Libertad
y se estacionó en la esquina, era Libertad a una cuadra de Balmaceda,
entonces llama a la mamá y le dice qué pasa, hay alguien, está la fiesta, y ella
le dice que había estado golpeando y no había nada, se suponía que había
una fiesta de niños. Él le dijo que bajara a hablar con el conserje, ella va y
habla con el conserje, y este le dice que no había fiesta, que al niño no lo
había visto y que a ese departamento solo llegaba una mujer- de vez en
cuando. Ella se devuelve al auto con su hijo, retándolo, tironeándolo, él estaba
con sus dos hijos en el auto y él llega al auto y se sube con la mamá, y no les
cuenta todavía donde había pasado la tarde, que era una gran inquietud
para ellos. En eso le dice que estaba con un amigo, que era Pancho, él
conocía la casa de Pancho, le dijo, ya voy a la casa de Pancho, seguían con
la inquietud fueron para allá, él iba muy enojado, en el camino a la casa de
Pancho, cruza una comisaría, lo para una camioneta de Carabineros, él había
tomado un auto del taller, y andaba sin licencia, sin carnet, sin papeles ni
nada. El le cuenta que andaba con sus hijos, la mamá y andaba buscando el
lugar donde había pasado la tarde su hijo y no les quería contar. Cómo sería
su cara que el carabinero le dice tome, siga no más. Le llamó la atención esto
y más se enojó, retó un poco fuerte a su hijo, le quitó los regalos que le había
hecho hace poco, las zapatillas, el celular y el MP3, el celular sonaba en el
trayecto, él lo apagaba, como que contestaba, lo llamaban y él cerraba. Él le
quita el celular y lo deja en el tablero, seguía llamando y cortando. Él se dirige
a la casa de Pancho, a dos cuadras su hijo estaba muy nervioso y él peor, ahí
le cuenta que no, que él estaba con la profesora Darrigrande y que ella era su
polola. Él se descompuso, se le vino el mundo al suelo, porque que su hijo con
11 o 12 años contara eso. Explica que le creyó. De ahí, en ese momento
Sebastián explotó un poco, fue un desahogo. Recuerda que se dirigieron al
colegio en ese mismo instante, él estaba como a 8 o 10 cuadras del colegio,
era ya como a las 20.30 horas, entra al colegio y le dicen que la profesora
Darrigrande no está, pero que el día sábado iba a estar porque iba a hacer
unos exámenes de admisión. Subió al auto, le preguntó la madre qué hacían,
ella estaba muy indignada y lo demostraba; él no lo demostraba tanto porque
quería escuchar a la profesora Darrigrande. A todo esto, el teléfono seguía
sonando, se daba cuenta que al teléfono seguían llegando mensajes. Fue a
dejar a la mamá y a los niños a su casa y él se devuelve a la suya, la verdad es
que iba muy mal, se paró fuera de la casa, sigue sonando el teléfono,
recibiendo mensajes, tienen que haber sido dos llamadas, como que llamó y
cortó, era muy tarde, más de las 21.00 horas, él toma el teléfono de Sebastián
y se pone a leer los mensajes perdidos, eran como 11 o 12, y todos era como
una continuación de lo mismo, era algo amoroso, una pelea, él no entendía
pero tenía claro que era algo amoroso, pero viéndolo, se negaba a aceptar
lo que veía y con un número arriba y habían dos llamadas perdidas del mismo
número. Él no entendía muy bien qué pasaba, sólo quería saber qué pasaba.
Estaba arriba del auto, sólo quería saber la verdad de lo que estaba pasando.
En ese momento recibe la llamada de la profesora Darrigrande a su celular
personal, él tenía el teléfono de la profesora, porque le tenía confianza. Lo
llama y le dice que lo llamó la mamá, insultándola y tratándola de lo peor, Ud.
señor Jeria, no vaya a pensar lo mismo”; que no piense mal de ella, “su hijo dijo
que éramos pololos, que habíamos salido juntos”, y que no piense mal de ella.
Ella lo único que hace es disculparse, disculparse, dos o tres minutos y en el
momento en que lo deja hablar, él le dice “profesora Darrigrande, yo quiero
que Ud. me explique lo que yo tengo en mi mano; yo tengo en mi mano el
celular de Sebastián y hay dos llamadas perdidas suyas, tengo además, 11 o
12 mensajes que se refieren a una relación, a una disculpa o a un enojo y Ud.
me está llamando del mismo celular, del que han llegado las dos llamadas
perdidas y los 11 o 12 mensajes”. La profesora Darrigrande se queda
totalmente callada, no le responde, de alguna forma debe haber quedado
muy complicada, no le contesta más, le dice “mañana veámonos,
conversemos del tema”. Recuerda que en algún momento le dijo “pero venga
para acá, a mi casa, y conversemos” y después, sobre la misma le dice, “mejor
que no, porque mi papá está muy enfermo”. Ella ese encontraba un poco
alterada, descompuesta. Él asimilaba los mensajes a una relación amorosa,
pero se negaba a creer lo que veía. Tenía la chance de que iba a hablar al
día siguiente con la profesora y le podía dar a entender otra cosa, no lo quería
creer.
Esto fue un día viernes como a las 23.00 horas. Con la mamá se pusieron
de acuerdo de llegar al otro día a las 11:00 o a las 12:00, porque la profesora
tenía que hacer exámenes a unos niños. Fueron, pero les dijeron que no había
ido y no sabían de ella. Con la mamá decidieron ir entonces el lunes a primera
hora. Llegaron al colegio, preguntaron por la profesora y les dicen que no está
y que había presentado una licencia. Con la mama decidieron hablar al
Director, conversaron con el Director, Sebastián estaba presente. Él le
manifestó exactamente todo lo que les pasó el día viernes, de hecho, su
señora le manifestó todo al director, porque ya no tenía ninguna respuesta de
la profesora y quería que el director estuviera al tanto. Ese día lunes no sabían
otrosdetalles, sólo sabían que era una relación simple, por decirlo así. Ese día el
director llama ala psicóloga, se junta la psicóloga con su hijo ese mismo día y
le hacen como una terapia, cosa que al otro día los hace juntarse de nuevo,
la psicóloga, él, el director y Sebastián y la mamá, la psicóloga los hace
conversar el tema otra vez, y él le preguntó si él había tenido alguna relación
con la profesora, si se había acostado con la profesora, le dijo, “quiero saber si
te acostaste con la profesora, sí o no”, él le dice que sí, le dice, “una, muchas
veces”, “sí, -dice-, muchas, varias veces”, no le preguntó si eran 5, 6 o 7. En ese
momento no les dijo ni cuando ni donde, sólo que sí se había acostado con
ella. Eso a él le descompuso mucho. No podía entender lo que pasaba. Ese
día le entregó una hoja al director con todos los mensajes que el había
sacado del celular, y el número del celular, que era el número de la profesora,
y los anotó con fechas y horas, los anotó, para que viera la continuidad de los
mensajes, y el número de la profesora.
La señora fiscal le exhibe la prueba documental C 15, el testigo indica,
estos son los mensajes que le llegaron a Sebastián desde el momento en que él
le quitó el teléfono hasta última hora, en que él estuvo en su casa, pensando
en lo que pasaba, este documento lo escribió él, y se lo entregó al director del
colegio.
La conducta de Sebastián en los viernes, fue durante todos los fines de
septiembre, todos los fines de octubre hasta el 23 de noviembre, el día que él
se enteró de casi todo.
Para él de alguna forma lo que le estaba pasando a su hijo, era lo peor
que le podía pasar a un niño, con mayor razón si era su hijo, porque pensaba,
imaginaba a una mujer con su hijo, a él, siendo un niño, de qué forma lo pudo
haber manipulado para llevarlo a donde lo llevó, eso es lo que a él le duele,
hasta el día de hoy.
Hasta antes de que esto se supiera, tenía el mejor concepto de la
profesora Darrigrande, era una excelente profesora, en las reuniones se
destacaba, muy apegada a los niños, para él, antes de, era lejos una
excelente profesora, intachable y cree que viéndola a ella en ese entonces,
eso le dio chance de hablar con ella, a darle confianza, hasta darle su
teléfono y tener ella el suyo. Era muy buena relación si algo pasaba con
Sebastián, ella se lo hacía entender, si tenía que conversar con él, lo podían
hacer a cualquier hora, porque él estaba a dos cuadras del colegio, era tal la
confianza que se entregaban los teléfonos, además que Sebastián era un muy
buen alumno, así que casi todo eran felicitaciones. No le dijo que Sebastián
estaba con problemas con él, él le contó que estaba separado con la mamá,
que era una preocupación que ella le había entendido que había tenido su
hijo. No tiene claro cuantos años fue la profesora jefe de Sebastián, pero ya
venía de antes. El apoderado de Sebastián era él, en el colegio necesitan
para ser apoderado, y él dio firma y nombre era él, en ese instante. Recuerda
haber ido a ver una obra de teatro, Sebastián participaba en todo, tenía muy
buena relación con su grupo, era el mejor alumno, cree que lo apegaba más
a la profesora, por lo mismo, era un niño destacado. Que él se haya dado
cuenta, no tenía ninguna tendencia. (se le está consultando si es pokemón) un
poco se dejó crecer el pelo. A él le gustaba una compañerita de curso, no
recuerda su nombre.
Cuando Sebastián cuenta y habla, desde ahí estuvo muy mal, estuvo
muy preocupado, es muy extraño esto, porque su hijo, imagina que él se sentía
culpable, porque en algún momento dijo, “yo ya les conté, pero yo no quiero
que le pase nada a la profesora”.
A él no le contó por qué no había terminado con la profesora, ese
tiempo de pregunta él no se las podía hacer, no le daba la fuerza, no quería
saber mucho detalle, el detalle que quería saber, ya lo sabía.
El celular de su hijo era un Nokia, como con una vueltecita, que le había
regalado él. El Ministerio Público le exhibe la evidencia material E 2, y dice, es
el celular. A ese celular llegaron todos los mensajes y las dos llamadas
perdidas, fueron esos mensajes los que él puso en el papel, de su puño y letra.
Supo en algún momento que las relaciones habían sido 6 o 7 veces, en
su departamento, la mayoría de ellas. Del colegio no supo ningún detalle,
nadie le dio alguna explicación, algún “yo ví esto”, hasta el día de hoy, que
sabe muchas cosas más, que le llama mucho la atención por qué no le
habrán contado.
La profesora se encuentra en la audiencia, está con un chaquetón
negro y beatle negro, puede ser. La acusada dice su nombre, María Eugenia
Darrigrande Moreno.
Su hijo de ninguna forma estaba preparado para tener relaciones
sexuales, completamente no.
Consultado por defensa si su hijo pudo haber cumplido el sueño infantil
de tener relaciones sexuales con una profesora, responde que en ningún caso,
porque un sueño es algo lindo, que de alguna forma para uno es un bien, y
obviamente para él no ha sido nada lindo, todo lo contrario. Su hijo está en
terapia reparatoria desde hace más de un año, le ha ayudado mucho, ha
sido de gran utilidad.
Los días viernes su hijo llegaba siempre a las 15.00 horas, se quedaba en
su casa, si jugaba a la pelota jugaba con su hermano, en el patio de su casa.
Cuando él salía a jugar a la pelota, eran casos puntuales, muy pocos, cada
dos meses una vez, previo permiso. No recuerda que haya ido al polideportivo
del colegio.
Empezó a pedir permiso para salir con amigos, no vio nada extraño, sí
había una preocupación, en el sentido de empezar a darle permiso todos los
viernes, antes no le daba permiso y si empezaba a darle permisos, tiene una
preocupación, porque está empezando a salir, independiente de que saliera
con sus amigos, su preocupación estaba siempre, es un niño. A su hijo lo
notaba decaído, triste, él lo relacionó con una polola. Lo veía triste, en algún
momento lo notó delgado, y lo relacionó con lo mismo. Para él fue normal
darle permiso, porque había mejorado el tiempo, pero en octubre empezó a
preocuparse porque lo notó más delgado.
Recuerda haber ido varias veces a Investigaciones, para evidenciar
contradicción el señor defensor exhibe al testigo su declaración de en
Investigaciones, reconoce su firma, lee la fecha, 7 de mayo de 2008, y “en el
mes de octubre de ese mismo año, mi padre falleció, por lo que tuve que
llevar gran parte de su atención hacia su mi madre y también asumir una
cantidad de gastos, que conllevó. No obstante, nunca perdí la atención con
mis hijos y sólo me percaté que Sebastián estaba más delgado y andaba
como triste, lo que en parte atribuí al fallecimiento de mi padre”.
Cuando Sebastián llegaba del colegio, él estaba en su casa, para
almorzar con ellos, cuando estaba su mamá, también, lo esperaba que
llegara, él es independiente, trabaja libre. Si bien en algún momento algunas
veces no almorzaba con él, él trabaja independiente, entonces entraba y salía
muchas veces, porque tenía que ver a su papá, nunca perdió la atención de
sus hijos.
Nuevamente para aclarar contradicción, la defensa le exhibe la misma
declaración policial “pero igual, cuando llegaba los días viernes, él se ponía
muy inquieto, llegaba del colegio, se bañaba, se cambiaba de ropa y salía
rápidamente, sin decir nada. Hago presente que a la hora que Sebastián
llegaba, yo me encontraba trabajando la mayoría de las veces y sólo llegaba
a buscarlo, cuando llegaba su mamá”.
Consultado al respecto, dice en ese octubre, él no estaba cuando
llegaba Sebastián.
Volviendo a los hechos, le dice el señor defensor que la señora Jessica
dijo que ella estuvo una hora con Sebastián en el departamento de la
profesora, esperando que llegara alguien, y él responde que esa es la versión
de ella, claramente.
El segundo semestre, en octubre, cree que su madre tuvo unos
problemas de conducta con Sebastián, tiene que haber sido a fines de
septiembre u octubre, pero ahí había un problema con su padre, que se
estaba muriendo. El no intervino en ese conflicto. Supo que hubo problema de
insolencia. Sebastián era muy cercano a su abuelo. Se afectó por su
fallecimiento. Su padre falleció el 14 de octubre y los cambios él los notó desde
fines de septiembre, no asocia los cambios a su fallecimiento, el fallecimiento
fue repentino, lo diagnosticaron en febrero y murió en octubre, los últimos
meses fueron muy difíciles, cree que de alguna forma eso afectó a Sebastián.
El día 23, al principio no hubo permiso, después le dijo que le daba
permiso con condición que diera dirección y teléfono, había confianza, y para
él era un lugar seguro, sí iba a darle permiso teniendo 12 años. La excusa para
no dar dirección y teléfono Sebastián dijo que la fiesta estaba mala, no se lo
contó directamente a él, después lo supo por la mamá, no era una polola
enferma, se supone que hubo una fiesta.
Después de que se enteraron llegaron al colegio, con sus niños y la
mamá. En relación a la visita a Ayleen en el hospital, la autorizó, si iban en
conjunto amigos o compañeros de la enferma y con la profesora, tenían que ir
en conjunto.
Conocía el rendimiento de su hijo en el colegio, no recuerda bien, debe
ser más de 6, nunca ha retado a sus hijos por las notas. Hubo un bajón en las
notas, uno no lo puede ver en el momento, cuando le llegan las notas, había
un 5, pero no puede ubicar cuando fue, sabe que él es muy preocupado, no
le pone atención a sus notas.
Tiene algo claro, hasta el momento, de un episodio de agresión sexual a
otro de sus hijos. Sebastián lo sabe, no tiene claro cuando lo supo, seguro que
le tiene que haber afectado un poco. No tiene claro cuando se enteró
Sebastián, sí sabe cuando él lo supo, fue 3 días antes que muriera su papá,
pudo haber sido el 10 de octubre.
No tiene claro si fue el 14 de septiembre a un acto al colegio, sus hijos
siempre actuaban. No recuerda si ese día fue Sebastián a ver a Ayleen, no
recuerda haber hablado con la profesora, no lo recuerda ya, mucho tiempo y
muchos actos de por medio.
i) Declaración de Héctor Iván Ponce Ovalle, cédula de identidad Nº
4.851.563-0, profesor del Liceo Polivalente Santa Juliana, Avda. México 755, del
que es director, desde 1981, indica que realiza las funciones que corresponden
a un Director de acuerdo al Estatuto Administrativo, eso significa participar en
la planificación, dirigir, supervisar y evaluar, funciones que pueden ser
delegadas en otros organismos, la norma indica que en la institución escolar,
son funcionarios internos los que manejan derivaciones de funciones o asumen
funciones de docencia. Él delegaba funciones, conforme a lo que indica el
Estatuto Administrativo, en 2 situaciones, en la parte pedagógica, en un área
que se llama Unidad Técnico Pedagógica, en la parte administrativa, en lo
que se llama Inspectoría General. La persona a quien se delega la conducción
de la Unidad Técnica Pedagógica, debe tener el título de profesor, que tenga
experiencia en docencia, que tenga entusiasmo, que tenga dedicación a su
función y que tenga una visión más o menos global sobre lo que es un plan de
estudios y un programa de docencia. Es función del director determinar la
estabilidad de una persona y de su emocionalidad, en cuanto las técnicas
que maneja para distinguir si una persona es estable o no. Lo otro ya es un
problema de técnicos que están fuera del ámbito escolar. Corresponde a
todo director tomar alguna decisión apenas ve que empiezan a haber
desestabilizaciones individuales o grupales, buscar el orden y componer lo que
se llama un clima escolar adecuado, conforme a los programas de estudio, las
metas del colegio y el plan anual de trabajo, el año 2007, con la U.T.M., hay
que estar trabajando todas las semanas o quincenalmente para ver los
avances
del
programa
establecido,
muchas
veces
hay
acuerdos
y
desacuerdos y de eso se conversa y se busca el consenso. Cuando son dentro
de la experiencia educativa o rutina educativa, alteraciones de divergencias
por razones técnicas o por apreciaciones distintas de enfoques personales
sobre algún tema, evidentemente, lo que se busca es armonizar, las
conductas y las opiniones de las personas. Cuando se observa que una
persona, miembro de cualquier instancia de una institución, a lo cual él
también está sometido, mantienen conductas que se estiman más allá de lo
normal, es necesario tomar medidas, o separación el funcionario, suspensión
de los funcionarios o envío a los organismos pertinentes.
Refiere que entre el 10 de octubre y el 20 de noviembre, no estuvo en
el colegio por razones laborales, realizó funciones fuera del establecimiento, y
en los tiempos anteriores sólo tuvo información de desacuerdos en la Unidad
Técnico Pedagógica, pero no las estimó de una gravedad suficiente. Cuando
se reintegró al colegio, en el caso específico, si se refiere a María Eugenia
Darrigrande, estaba con licencia médica. María Eugenia es una profesora que
asumió como profesora, conforme a unas certificaciones que él hizo el año
2008, de lo que recuerda, fue una buena docente, reconocida en su labor
por padres, reconocida en su labor por alumnos, y reconocida por sus labores
por sus pares, ocupó la parte de la U.T.M., como miembro de la unidad
técnica pedagógica por capacidad de trabajo y en eso se desempeñó, se
incorporó a la unidad, cerca del 2000.
En un concepto estructural y
administrativo, la Unidad Técnico Pedagógica tiene un jefe, las demás
personas que integran una unidad pedagógica, cuando así se estructura, por
varias personas, cada una ocupa una coordinación o una jefatura de las
partes. El Colegio Santa juliana tiene niveles de educación parvularia, básica y
medida, tiene un jefe de UTP conforme a lo que señala el Estatuto
Administrativa. Las otras personas, por rutina puede decirse son jefes de partes,
llámese de parvularia, llámese educación básica o llámese educación media,
la profesora Darrigrande estaba ocupando el trabajo de coordinar y supervisar
el trabajo de la educación del segundo ciclo de educación básica, conforme
a la normativa actual, de 5°s a 8ºs años. Ser miembro de una U.T.P., significa de
alguna manera ser jefe de un grupo de docentes y ser jefe de un área del
colegio. Sus funciones son las que le corresponden a una U.T.P., que son:
participar en la planificación del área, informarse y trabajar y opinar sobre el
conjunto del ciclo completo, que es educación básica en este caso, de
establecer las coordinaciones con otros ciclos, cuando corresponde; de
supervisar planificación de profesores, orientar la planificación de profesores,
de orientar o aconsejar en el ejercicio de la docencia o colaborar en la
revisión de pruebas, para que éstas sean mejor elaboradas y registren lo que
se quiere registrar conforme a los objetivos de una planificación escolar o de
un programa escolar. La función de evaluar a los docentes del área, es del
director, pero es una posibilidad del director consultar o pedir opinión para la
evaluación de los docentes. En su colegio hay 1860 alumnos, distribuidos en
tercios semejantes, la básica tenía entre 950 a 1000 alumnos, en el 2007, que es
la matrícula habitual del colegio. La observación de las clases de otros
profesores, es una actividad que se recomienda la actual tecnología
educativa, en que los equipos técnicos, los que tienen esa atribución, pueden
entrar a presenciar las clases, incluso a grabarlas si lo desea, esto estaba
apareciendo en Chile en algunos colegios, en su colegio se ha hecho en
varias oportunidades, planificadamente que se hiciera todas las semanas o
todos los meses, en algunos casos, en la educación media más que en la
educación básica, pero quedaba liberado como una facultad de la U.T.P., sin
necesidad de autorización suya, para decir entre a la sala o no entre a la sala,
vaya a esta hora o no vaya a esta hora. En todo caso eso debe ser informado
al director en las reuniones técnicas pertinentes. Consultado si se le informó
que la profesora Darrigrande visitaba reiteradamente las salas de clase, o las
clases de sus colegas del ciclo, responde que eso se trabaja de manera
organizada y sistematizada y eso se hace cuando la Unidad Técnico
Pedagógica y la Inspectoría general, se reúne con el director en una tarea
que se llama equipo de gestión, y ahí se informa, por lo general, y lo que
interesa al director es cómo se está procediendo, o cuál es la visión que tienen
los organismos, sea de tipo técnico pedagógico o administrativo pedagógico,
que es la Inspectoría General, para determinar cómo están funcionando las
planificaciones, cómo están funcionando los desempeños de los profesores,
específicamente en lo que son las metas programáticas. Las situaciones
accidentales de relaciones interpersonales, salvo que sean muy elocuentes,
salvo que sean muy extrañas, salvo que sean muy anómalas, no se consideran,
hasta donde él vio y escuchó, hasta octubre, y antes de octubre, porque en
octubre y noviembre no estuvo en el colegio. Coincide con el tiempo de
septiembre, que también representa en los colegios alguna anomalía.
Consultado si se le informó alguna anomalía por parte de doña María
Eugenia Darrigrande, en las clases de doña Ana María Guerrero, doña Leonor
Lazo, doña María Gloria Prado o doña Otilia Romero, que hiciera necesaria
una presencia más constante de la jefa de U.T.P. básica, en esa sala, responde
que no.
El día 26 de noviembre estando él en su oficina, fue informado que los
pares de su alumno Sebastián necesitaban hablar con él, les pidió unos
minutos, los hizo pasar, los atendió y ahí le expusieron verbalmente y por escrito
después de la situación que les preocupaba y estaban investigando y querían
tener información acerca de una relación que ellos estimaban más allá, de lo
que su hijo se había contado, que se daba entre éste y la profesora María
Eugenia. Los antecedentes que le dieron, -incluso le mostraron una hora donde
aparecía un registro manuscrito de llamadas telefónicas-, le hizo considerar
que el tema era severo, dado que se estaban traspasando los límites de una
relación normal entre profesor y alumno, conforme a lo que los padres le
decían, por lo cual llamó al estudiante, quien no le dio mayores datos y
después
de
una
conversación
más
o
menos
larga
le
señaló
que
efectivamente, él era amigo de la profesora Darrigrande. Insistió con un poco
de fuerza verbal, de vehemencia, no fuerza física, buscando los datos que le
habían dado los papás entonces le reconoce que sí son conversaciones que
tiene con la profesora y reconoce que incluso, cuando él pregunta, acerca
del lugar de las conversaciones, le dice que veces ocurrieron dentro del
colegio y a veces fuera del colegio, específicamente recuerda que le dice
que una vez se había juntado con la profesora en un auto a conversar. Hecho
eso, buscó a la psicóloga del colegio, envió al alumno a la sala, conversó con
la psicóloga, le dijo en lo que estaban y le pidió que se incorporara al estudio
del caso y a conversar con el alumno, conforme a las técnicas que ellos
manejan, que son distintas a las de los profesionales de la educación.
Como procedimiento, ya en ese tiempo, se hacía intervenir a la
psicóloga en varios casos porque hoy día las relaciones profesores alumnos, se
ven bastante congestionadas muchas veces por ciertas actitudes de
agresividad, o por confidencias que les hacen los alumnos les hacen a los
profesores por maltrato intrafamiliar o problemas de distinto tipo, por eso, es
hábito hoy día, y más desde ese 26 de noviembre de 2007, que el colegio
Santa Juliana esté requeriendo el apoyo de profesional interno y externo. Se
atiende una población que porcentualmente se acerca al 40% del alumno
que son alumnos de familias con muchas presiones sociales y ambiental.
Después de conversar con la familia, el alumno y la señora psicóloga,
conversó con otros funcionarios del colegio, a la familia les pidió unas horas, se
volvió a reunir al día siguiente y les informó que estaban buscando datos, el
miércoles se juntaron, él ya tenía unos cuantos datos, que le decían que era
bueno proceder a investigar, consultó con el abogado del colegio, le
recomendó una profesional, se entrevistó con ella y le planteó que existía el
artículo 175 del Código Procesal Penal que lo obligaba a una función y que se
asegurara bien, al máximo posible, de constatar la efectividad de los hechos,
manifestándole que su obligación era hacer la comunicación a la fiscalía. Al
otro día se juntó con los padres, diciéndole que los antecedentes que él tenía
más lo que ellos señalaban, la acusación que hacían contra la docente,
traspasaba la capacidad personal para hacer la investigación y tenía que
cumplir con lo que decía el artículo 175, acordaron asistir donde la abogada
Marisol García Carrera que los atendió y les dio el sentido del documento que
debían hacer. La familia fue informada que debía hacer las denuncias y que
el colegio debía poner los hechos en conocimiento del tribunal. Así se hizo en
el documento que está en poder de las autoridades y como director solicitó la
investigación del hecho que se aplicara lo previsto en el artículo 182, hecho
que no sucedió. Vino directamente al Ministerio Público con la psicóloga y el
representante legal del colegio y encontraron que estaba cerrado; dejaron
constancia en el cuartel móvil de la calle y al día siguiente, él vino solo, a
estampar la denuncia. El colegio vivió un proceso muy triste y duro, incluso
niños pequeños fueron buscados por profesionales de otros ámbitos para dar
la noticia. Los documentos que le dio el padre él lo guardó, no le correspondía
entregárselo
a
terceras
personas,
lo
que
habría
correspondido
era
entregárselo a la fiscalía. No recuerda si acompañó alguna documentación,
no está seguro, salvo que hubiera venido la declaración de los padres, pero no
recuerda. Fueron días muy difíciles, con muchos rumores y comentarios,
afectando a muchas personas, por lo que él, al interior del colegio, tomó la
decisión de decir a los profesores que se tuviera mucho respeto mientras el
tribunal no determinara lo que correspondía y que quien tuviera información
relevante, viniera a la fiscalía, porque lo otro era cometer errores, una vez tuvo
que amonestar a un periodista que tuvo una conducta éticamente indigna,
entonces, la preocupación de guardar la documentación fue lo más rigurosa y
severa posible. Los documentos él los guardó en su oficina. No está seguro de
haber entregado la hoja manuscrita, él tiene copia.
La fiscalía exhibe al testigo el documento C 15: al examinarlo el testigo
dice, es una hoja de papel cuadriculado, en el extremo derecho aparecen
números. No retiene memorísticamente, ni una aproximación de lo que
aparece como texto, debiera ser lo que le entregó el padre. Al final del primer,
segundo texto, dice “TAM”, que le llamó la atención. Agrega que emitió un
comunicado con carácter de declaración pública, fue sumamente fastidioso
ese tiempo, porque aparecieron una serie de personajes, con distintas
versiones, que tenían la verdad etc., entonces hizo la declaración a los centros
de padres se fue informando con mucha cautela, y optó por hacer una
declaración en que decía que lamentaba los hechos, que no tenían
conocimiento de éstos en el colegio así como se estaban planteando, que
habían sido cuestiones externas, que lamentaban mucho lo sucedido y
entregaban a la justicia chilena que aclarara la situación, que ellos se habían
acogido al cumplimiento estricto de la norma y volvieron a citar el artículo 175
y el artículo 182.
Exhibe la fiscal al testigo el documento signado C 11, está firmado por
él, no es la declaración pública a que se estaba refiriendo, es el texto de lo
que pidió a fiscalía, con eso hizo la solicitud de inicio del procedimiento.
“Santiago, 29 de noviembre de 2007. El día 26 de presente, atendí a los padres
del alumno Sebastián Jeria Salinas, de 12 años de edad, que cursa el Sexto
Año A, del colegio a mi cargo. Sr. Luis Jeria Marquez y la Sra. Jessica Salinas
Arriagada, quienes expusieron su preocupación en los cambios de conducta
de su hijo y la relacionaban con la profesora María Eugenia Darrigrande, con
quien tendría una vinculación afectiva mayor a la alumno profesora.
También me informaron, que habían realizado contactos con la
profesora con el objeto de reunirse y saber de la situación, y que cómo no se
había llevado a cabo una reunión acordada entre ellos, venían a poner en mi
conocimiento la situación.
Me comprometí a indagar sobre el tema y a reunirnos al día siguiente,
Martes 27 del presente, día en que concurrieron ambos padres y los atendí
informándoles de mi indagación al interior del establecimiento, que reflejó en
ese momento una verificación de la preocupación de los padres, estos a su
vez me informaron que habían reunidos más datos que señalaban un fuerte
compromiso afectivo del niño, por lo cual, procedía a derivarlo a la psicóloga
del establecimiento y a insistir ante funcionarios del colegio sobre la necesidad
de confirmar lo planteado verbalmente por los padres. El día miércoles, los
padres no asistieron al colegio, dado que nos habíamos comprometido a
reunir información, para realizar los procedimientos de apoyo y protección al
menor y formalizar legalmente este hecho.
Hoy Jueves me he reunido con el padre Sr. Jeria en el curso de la
mañana y hemos acordado asistir a una consulta profesional legal mañana 30
de Noviembre, y yo a realizar la denuncia correspondiente, en que señalo la
preocupación y aprehensión de los padres en que existe una vinculación
afectiva y aparentemente sexual entre nuestro alumno y su profesora jefe.
Tanto los datos aportados por el alumno a sus padres como a nosotros, me
hacen responder a lo que impone el artículo 175 letra E del Código Procesal
Penal.
Dado que estos hechos no están legalmente acreditados, es que
solicito se mantenga la reserva del los mismos con el fin de no afectar la
estabilidad del menor, y de las personas involucradas, a sí como el prestigio del
establecimiento educacional que represento; Art. 182.C.P.P. Héctor Ponce O.
Directora Liceo Santa Juliana. Timbre, Liceo Polivalente Santa Juliana.
Dirección.”
Señala que la Policía de Investigaciones pidió documentación y se la
llevaron, por inexperiencia no dejó constancia del nombre de los funcionarios y
los documentos que entregaba. Eran referidos a la hoja de vida del alumno y
las consultas que hicieron los funcionarios se referían a lo mismo, a pedir
información acerca del colegio, a pedir información acerca de personas y
acerca de lo que como director sabía. En cada curso existe un libro de clases,
es una obligación legal cada curso, en Chile, para que exista como tal, tiene
que tener un libro de clases, que es un documento público. A cada niño se
hace evaluación de hábitos, no solo anual, diaria, en educación básica es
necesario y cada día es más necesario y eso se está extendiendo a educación
media, y como docentes están fracasando, véase como visten los
universitarios hoy en día. Refiere que el director firma un informe que en el
colegio es de tipo parcial, de tipo semestral, y el anual es un documento oficial
que no se puede intervenir, sino en los esquemas que presenta el diseño que
ha hecho el Ministerio de Educación, por lo cual no se pueden hacer
apreciaciones. Por ejemplo, ahí no hay orden y presentación personal, sí en los
documentos internos que son la comunicación oficial del colegio hacia los
padres, se puede colocar comentarios sobre conducta, sobre presentación
personal, sobre relaciones con los compañeros, etc.
Después de realizada la denuncia, fue a la casa de la familia
Darrigrande, lo hizo por una razón ética y por respeto a sus padres y también,
hoy día, pensándolo, por querer conversar con ella, si era posible, aunque
estaban con licencia médica, para que le dijera lo que había sabido. En su
formación de profesores, ellos están preparados para lo que es ignorante,
mejorarlo e ilustrarlo, esa es una máxima metodológica, técnica, filosófica y
ética. A los padres les informó lo que había hecho, le habría parecido de poca
calidad humana que ellos se hubieran enterado mediante otro medio, más
cuando los vio en el colegio, trabajando codo a codo con su hija,
colaborando y con otros profesionales, para hacer apoyos de otros alumnos,
que no es el joven del que estamos hablando en este caso, de lo que él
conoce.
El objeto suyo fue informarles a los padres, él no sabía el estado en que
estaba la profesora María Eugenia, recuerda que después bajó, la vio con los
efectos físicos o afectivos que deben haber estado en ese momento
condicionando su espíritu, y procedió informarles a los padres. Ahora, no le
correspondía agregar antecedentes que debían estar en uso exclusivo de la
fiscalía, o sea, no puede estar informando con una mano una cosa y con la
otra mano otra cosa.
Indica que él escuchó a un joven que le señaló, cuando hizo
preguntas acerca de los datos que le habían entregado los padres, le negó
hechos, o distrajo hechos, conforme a lo que fue viendo después, por lo cual
no puede estar dando juicios categóricos de algo que no tenía certeza en ese
momento. Define disfrazar hechos, que él tenga conocimiento de una
realidad y los adorne, o los llene de avalorios para que no se vea el fondo del
tema, puede ser que también los minimice, los disminuya, los atenúe.
En su práctica de director no tiene relaciones de confianza con los
alumnos y profesores, sino que tiene confianza en los roles que ellos deben
desempeñar. No se trata de jerarquía administrativa, no se trata de eso, sino
que quien tiene que dar algunas muestras de encausamientos, o de causes o
finalidades, en lo posible debe ser lo más ajeno a lazos afectivos continuos, o
reiterativos, debe
resolver problemas
y no debe estar entrando en
comunidades afectivas, por lo menos ese es su juicio, lo que no implica que
eso sea una práctica en educación, hay quienes se enlazan mucho con los
alumnos, uno de esos casos, aunque no era docente, es el Padre Hurtado.
Sebastián es un alumno más, antes y después, él, como director, ve cosas
generales del colegio y los casos particulares con alumnos, los ve cuando así
se indica el procedimiento. Hay otras personas que tienen que estar a cargo
de las relaciones directas, llámense los profesores jefes, los profesores de curso,
de asignaturas, llámese el orientador, llámese la psicóloga, la inspectora
general o también los jefes de UTP frente alumnos que tienen escaso
rendimiento. El director, por ser un colegio de mil y tantos alumnos, no tiene
tiempo de estar resolviendo o estableciendo lazos,. Visita cursos y conversa
con cursos, si hay algún problema de conducta, llama al alumno y lo ve con el
inspector general y el profesor jefe. Escasamente habla con los alumnos.
Explica que ese día que visitó a la familia Darrigrande, no conversó con
María Eugenia, ella no bajó, estaba muy afectada, no recuerda y espera no
haber cometido un delito si paternalmente le puso la mano en la cabeza, no
recuerda eso, si lo hizo o no, si lo hizo, a veces es su practica de ponerle a las
personas la mano en la cabeza. En el colegio no recuerda haberla visto en
ese estado, la vio sí muchas veces vehementemente defender a alumnos o
señalar que no se estaba procediendo con justicia en alguna competencia,
porque sus alumnos estaban siendo damnificados frente al juicio de jueces en
competencias o en otras cosas. También la vio defender a sus alumnos, por
razones de tipo notas, u otras preocupaciones, con vehemencia, pidiendo con
claridad que se hiciera un mayor análisis de lo que estaba sucediendo.
Expresa que en el año 2008 recibió un documento en que ella hacía
una declaración, que pedía leyera a los profesores, él no leyó la declaración a
los profesores, era como un planteamiento de posición personal, el término
exacto no lo recuerda, pero tiene el recuerdo de una reflexión, de una
consideración, ahora, sinonímicamente puede ser una meditación, o una
opinión, para que se le escuche, pero el término exacto no lo recuerda, texto
menos. Fue al inicio del año 2008, no recuerda la fecha exacta. Se dejó una
copia del documento. No es conocido por nadie. Que recuerde no se lo
entregó al funcionario de la policía de investigaciones, era un documento
interno, no competía entregarlo a Investigaciones..
El Ministerio Público exhibe al testigo el documento signado C 13. Quien
lee el título, “Meditaciones”. Lee igualmente los dos últimos párrafos: “Si he
enviado estas palabras al Director del Colegio, Sr. Ponce, solicitándole que
ellas sean leídas en Reunión de profesores, es porque pienso que lo que me
está sucediendo a mí pudiera repetirse, afectando a otros profesores del
Establecimiento, lo que sería grave. También es porque intuyo que muchas
personas pueden haberme condenado “a priori”, sin conocer los hechos”.
María Eugania Darrigrande Moreno. Santiago, Diciembre del 2007.”
Indica el testigo que es el documento que doña María Eugenia le
entregó y debe decir que estaba equivocado al decir 2008, porque fue en
2007.
Preguntado explica que conforme al Estatuto Administrativo, al
contratar a un profesor, debería pedirse aparte del título profesional, que es
básico, el currículo donde se señalen las labores y experiencia pedida y muy
eventualmente se pide, en el colegio se dejó de pedir antecedentes que
emitía el Registro Civil, salvo en certificado de nacimiento, pero ni el Liceo
Santa Juliana y en general los colegios con subvención del Estado, tienen
recursos para hacer mediciones psicológica de los profesores, generalmente
se hace una entrevista, a veces las hace él, a veces la U.T.P, y la Inspectoría
General. La profesora Darrigrande fue entrevistada por otras personas y
también conversó él con ella y le pareció una persona bastante expedita en
sus contestaciones y en el manejo de lo que a él le interesaba, por esa razón
se contrató. Consultado si ella se mantuvo así responde que generalmente los
profesores se mantienen así, hasta octubre, después empiezan a alterarse un
poco, porque el trabajo escolar es sumamente exigente, pero hay una línea
de estabilidad en su trabajo, hay un documento que él hizo en su oportunidad,
en que señaló que en el año 2007 observaron en María Eugenia algunos
enojos, que debieron explicarse después.
Durante el segundo semestre de 2006 presentó licencias médicas más
reiteradas y durante el 2007 también su salud se vio afectada.
El 23 de noviembre cree no haber estado en el colegio, asumió el 26 de
noviembre y mediante una comunicación interna y una comunicación
pública informó a la comunidad, porque estaba bastante preocupada. Los
padres le manifestaban preocupaciones de todo tipo “Director, ¿cómo me
asegura que mi hija no vaya a ser sujeto de esto?”, -pregunta del director-, “¿A
qué se refiere, a lo que está pasando?” “Leí el diario La Cuarta”, “¿Tiene
confianza en el colegio?, “Sí, tengo confianza en Ud. Director, por eso estoy
hablando, que Ud. me asegure”, “¿En quién más tiene confianza?” “En los
profesores”. Además indica que les decía a los apoderados “Entonces si quiere
venga todos los días a dejar a su hijo, entre a las salas de clases y vea qué
pasa.”
La asistencia no disminuyó, la matrícula no disminuyó, se informó de
inmediato al Ministerio de Educación, también.
No tenía conocimiento de que había una medida de restricción de
acercamiento de la profesora al menor, no sabe cuando, tendría que pedir
que se le especificara las fechas.
Preguntado señala que doña Maria Eugenia ingresó al colegio el año
1994 aproximadamente. Las licencias médicas hoy y en el año 2007, vienen
selladas y es ilegítimo abrirlas para ver la información, es privado entre el
enfermo y el tratante. En la misma declaración que leyó, señaló que había
hecho indagaciones en el colegio, es lo que le corresponde, le hicieron pensar
que era bueno, junto con los antecedentes que le había entregado la
psicóloga y los padres, preguntó a los profesores de educación básica,
algunos señalaron no haber visto nada, otros haber visto a Sebastián con la
profesora, en conversaciones, tanto el salas como en patio, como en la sala
de UTP. Se lo dijeron la señora Otilia Romero, la señora María Gloria Prado.
Si por tipo sexual se entiende contacto carnal, sólo la señora Otilia le
señaló que en un momento en que estaba en la sala de audiovisuales, que es
una sala con cortinas, ahí vio acercarse a la profesora y a Sebastián. Eso se lo
dijo en ese momento, pero después han variado las declaraciones de los
profesores y él les dijo que las hicieran directamente en la fiscalía. La señora
Otilia se refirió a un acercamiento facial y probable contacto bucal, él no
estaba presente, la señora Otilia lo observó de una cierta distancia, cuando se
está trabajando con alumnos y en ese momento, cree que estaban señalando
en una obra de teatro, puede ocurrir que un docente se acerque a un
alumno, más allá de lo debido. No recuerda con exactitud las palabras de la
señora Otilia, tampoco ha sido oficio de su vida recordar palabras de las
personas.
Explica que cuando se hace teatro escolar, los profesores pueden
acercarse a una persona fácilmente, incluso hablarle a 5 o 10 centímetros.
Ahora, el acto de besarse, como acto de tipo bucal, no lo considera como
actos entre docente y alumno, o como docente y dicente, sino que lo
considera como una relación que va más allá de esa tarea.
Consultado señala que fue donde la familia Darrigrande a explicar que
había hecho una denuncia y fue con el profundo respecto que como
funcionarios públicos él los conoció. Le pareció no correcto, o no bueno de su
parte, aunque figure como ingenuo, que eso fuera notificado por vías oficiales
o por los diarios, esa fue su actitud, ahora, si ha hecho una denuncia y se ha
comprometido a ciertas consideraciones, no puede estar dando señales de
afirmar o desmentir hechos, señaló a la familia lo que había hecho y lo que
había sucedido, pero no en el tema de estar diciendo afirmo esto, dijo esto o
aquello. No le correspondía hacerlo, en ese momento. Con el menor habló el
día 26 y después cuando no le convencieron sus declaraciones y por eso pidió
ayuda a otros especialistas del colegio. En la conversación él le preguntó qué
le había pasado, que sus padres habían hecho una acusación, que qué
sucedía y él le dijo que nada. Cuando él le empezó a plantear algunos de los
temas que sus padres le habían dicho, le dijo que no, le dio la sensación que
temía mucho por la seguridad profesional de la profesora, y también,
seguramente, por su situación. Generalmente cuando los alumnos son
sometidos a entrevistas con el Directora o con otras autoridades intermedias,
se tiende a minimizar o a decir las cosas de una forma distinta de cómo se
anda buscando.
Antes se refirió a personajes nefastos, por quienes llegaban con
micrófonos o con papelitos, o memurandum, a consultar en nombre de
instituciones periodísticas, acerca de lo que había pasado, porque había que
difundir la verdad y le daban la oportunidad para que él hablara y dijera la
verdad. Los personajes nefastos son para esa situación, no está diciendo que
los periodistas sean nefastos, estaría haciendo una generalización.
No tiene capacidad para recordar las palabras que usó la señora
Romero.
j) Declaración de Claudia Alejandra Ponce Cardenas, quien manifiesta
ser psicóloga del Liceo Polivalente Santa Juliana, que tiene enseñanza desde
pre kínder a 4º medio. Ella se desempeña, con horario más regular, desde el
año 2004 e ingresó con algunas horas el año 2002. Ella coordina el
Departamento de Atención de Estudiantes, que consta de tres profesionales,
psicopedagoga, orientador y ella, atiende a alumnos derivados por los
profesores, con problemas de conducta, problemas de notas, de aprendizaje
y separan, para mayor comprensión de los profesores, el área emocional. La
mayoría de los niños se los deriva el profesor jefe y ese es el protocolo que se
acordó, área el proceso de derivación también hay alumnos que consultan
de forma espontánea y de acuerdo a la gravedad de lo que sea, se atienden
de forma inmediata, se acuerda con ellos una hora. Cuando un alumno tiene
problema, los alumnos saben que para pedir hora, hay que hacerlo a través
de la profesora jefe y algunos le preguntan a ella y ella les dice el
procedimiento que hay que seguir. A Sebastián lo conoce desde el año 2005,
cuando iba en 4º básico, porque en una actividad del colegio se intervenía en
sala con los 4ºs básicos, posteriormente le fue derivado, por la profesora jefe, a
solicitud de la madre, ese mismo año, por el tema de la separación de los
padres, que había sido hacía un mes. Esa fue la primera vez que derivado
Sebastián al departamento. En el año 2007, -ella en las declaraciones
anteriores dijo 2006-, pero fue en 2007, fue derivado por su profesora jefe por
presentar preocupación por Sebastián, en este caso, sus conductas un tanto,
cambios de vestimentas, pero principalmente la razón, al hablar con el menor,
fue por un tema familiar que hubo en el periodo en que él estaba con su
padre en el día, y al parecer con la abuela, que lo echaron de la casa, algo
recuerda de ese tema. Esto fue a fin de julio o principios de agosto. La
profesora jefe el año 2007 era María Eugenia Darrigrande. Ella no le pidió
nuevamente atención, y ella nunca se negó, cuando ella está atrasada la
respuesta es esperar el orden de llegada, porque los profesores para derivar,
anotan la fecha, el nombre del alumno y el curso y ella tiene que ir por orden
de la lista. La vez que lo atendió, Sebastián estaba bastante complicado por
unl tema familiar, estaba con algunos disgustos con el papá, siempre su
entrevista por derivación, fue el tema del papá, que él pedía y solicitaba más
tiempo, por esa discusión que hubo y cómo le afectó. Sebastián quería
compartir más tiempo con el papá, porque el papá trabajaba mucho, y lo
veía poco, en el día Sebastián se quedaba en la casa del papá y el papá
trabajaba en un taller, cerca de ahí, entonces poco podía compartir con él,
pero convivencia diaria. A Sebastián lo entrevistó sólo esa vez, después,
Sebastián buscaba para conversar, se desahogaba y después quedaba bien.
No hubo más problemas, hasta que no pudo participar en una obra de teatro,
y hasta entonces no hubo otra entrevista, él cuando tenía problema acudía,
cuando lo agobiaba algún problema, se desahogaba y seguía funcionando.
El día lunes 26 de septiembre el señor Ponce ao llama a su oficina y le
hace saber de este reclamo que están haciendo los papás que piden que se
averigüe y le pide a ella que entreviste al alumno para tener más información.
En resumen, lo que logró al final de una hora y media de entrevista, reconoció
que se habían besado, para llegar a ese relato, fue bastante difícil, porque él
al principio negaba todo tipo de relación, relataba todo como si fuese una
amistad, cosa que le pareció sospechoso, le pregunta qué temor tenía,
porque ella notaba, a raíz de ciertas contradicciones que empezó a
manifestar, que tenía algún temor, y entonces él dijo que temía que a la
profesora la echaran del colegio. Él la protegió, y a ella le costó mucho
obtener la confianza, pero finalmente logró que le dijera que se habían
besado. Esa información se la comentó al señor Ponce, como resultado de la
entrevista y lo instó a que conversara con los papás, porque si no se los iba
tener que decir ella. El señor Ponce dijo que quería seguir investigando. Al día
siguiente
tuvo
entrevista
con
Sebastián
y
los
padres,
que
estaban
preocupados que hubiera ocurrido algo más que el beso. Hizo subir a
Sebastián y le habló diciéndole que tener una experiencia no acorde a la
edad podría traer ciertos daños y que debía contar lo ocurrido para que se le
pudiera ayudar. Al tener a los padres presente, Sebastián tuvo una postura
más cabizbaja, de apoco empezó a relatar los eventos, reconoció que había
habido más que besos, ella le pregunta: “¿qué más?” Le dijo que caricias. Ella
le pregunta si las caricias eran sobre la ropa o bajo la ropa, le dice que al
principio sobre la ropa y luego bajo la ropa. En esta conversación había varios
silencios y después ella le pregunta: “Sebastián, ¿pasó algo más?” y él
dice:“sí”, tuvimos relaciones sexuales”; le pregunta: “¿hubo penetración?” y le
dice:“si”. Le vuelve a preguntar,“¿qué es penetración?” y le dice: “mi pene
entró en su vagina”. Le comentó que fue en su departamento los días viernes y
algunos martes. No recuerda que haya manifestado cuantas veces, sólo relató
que había sido los días viernes. Esto habría ocurrido después de su cumpleaños
hasta la fecha que esto se supo. Le preguntó si habían ocurrido este tipo de
conductas en el colegio y dijo que no. En las primeras entrevistas, manifiesta
sentirse atraído por ella, reconoce sentirse apoyado y escuchado por ella, en
el fondo, sentir un afecto hacia ella. Se reunió con Sebastián en dos
oportunidades más y coincidió ya con el término de clases. Al final, ya la última
sesión, reconoció haber estado bastante intranquilo, porque él quería terminar
la relación y no pudo, entonces se sintió presionado. Manifestó dos cosas, la
primera fue que las veces que él intentó alejarse, María Eugenia entraba a la
sala el lunes siguiente, bastante enojada, gritaba a sus compañeros, y él sentía
que no era justo que sus compañeros pagaran por eso, y lo segundo que le
manifestó, es que ella le había dicho que estaba embarazada, al preguntarle
qué sentiste cuando te cuenta esto, él dice, “mucho susto”.
Explica que las profesoras retiran a los alumnos sólo cuando hay una
actividad en que se necesita el alumno, generalmente las actividades fuera,
empiezan, la actividad de teatro, en noviembre. Generalmente ella ve regalos
de los alumnos a los profesores, para el día del profesor. Cada vez que
Sebastián pasaba por un mal momento, la buscaba para conversar, tenía
acceso a conversar con ella, no le manifestó que también le pedía ayuda a la
profesora jefe. El día martes, cuando los padres asisten, le muestran el celular
donde estaban los mensajes y las transcripciones de los mensajes en una hoja.
Consultada si supo de regalos de María Eugenia a Sebastián dice que
Sebastián le mostró una billetera con la foto de María Eugenia adentro y le
mencionó un perfume.
Al niño le costó hablar, porque la estaba protegiendo, parcializó al
principio la información, sólo le comentó lo de los besos. El estado emocional,
cuando conversaba con ella era angustiado, asustado, lo resumiría en esas
dos palabras. La develación fue el viernes anterior de ese lunes, 23 de
noviembre, si no se equivoca. El día lunes se entera que María Eugenia no
asistió a una actividad de evaluación de alumnos para admisión del día
sábado. De eso se enteró porque el lunes supo que el viernes María Eugenia
había tenido una crisis, que había habido un intento de suicidio y por eso la
mamá había llamado para disculparla, porque el día sábado no iba a asistir al
colegio. La señorita María Gloria Prado fue quien recibió el llamado, a ella le
interesó para saber de qué teléfono la había llamado, y era desde su celular.
Al Ministerio Público hizo un informe de las entrevistas y las conversaciones que
sostuvo con Sebastián, fue el primer semestre del año 2008, no recuerda la
fecha exacta.
La señora fiscal exhibe a la testigo la prueba documental signada C 12,
la testigo lo reconoce, dice que es un informe que ella envió a fiscalía, cuando
se le solicitó un informe psicológico y antes de enviar eso, les comentó que no
podía hacer un informe psicológico, porque ella al alumno no lo evaluó con
tests, entonces era difícil hacer una evaluación psicológica, por eso remitió un
informe de las entrevistas que tuvo con el menor. Esto es de fecha 7 de mayo
de 2008. No le pareció que el niño estuviese falseando hechos, había una
coherencia entre lo afectivo y el relato y lo afectivo, generalmente puede
observarse que cuando hay mentira, no hay una correlación entre los que
estoy diciendo y lo que estoy sintiendo. En este caso, cuando quería
protegerla, él estaba asustado por el simple hecho de exponerla a esta
situación, luego, hay una emoción más tendiente hacia la pena, aunque no
logró manifestarse el llanto ni la pena, pero sí había una postura más hacia
adentro.
Refiere que captó que Sebastián quería protegerla, porque empezó a
tener contradicciones sobre el relato, de que se juntaban los viernes, que la
pasaba a buscar, donde se juntaban, que conversaban. Él manifestó que ella
lo escuchaba y apoyaba, ella, al indagar por los afectos, le dijo, “bueno,
debe ser agradable que esta persona por la que tu sientes algo, también te
escuche y te apoye, ¿no te habrás confundido?” Entonces él dice que lo más
probable es que se haya confundido”, eso ya era como extraño. Después
tenía otras contradicciones, respecto a los días y los horarios, no lo tiene claro,
pero ella le expuso, una y le expuso otra, le dijo “bueno, si esto ocurre, cómo
esto otro” y ahí él como que quedaba en blanco, luego había un silencio,
luego reconocía y avanzaban un poquito más. Ella conoce a doña María
Eugenia desde el año 2002, cuando ella llegó ella fue una de las persona que
la acogió, junto a la señorita Ana María, conversaban bastante, ella le
solicitaba algún tipo de opinión, dada una mala relación con otra profesora y
fue una de las primeras personas con la que ella empezó a tener cercanía
laboral en el colegio.
Indica que en el último periodo, después de las últimas licencias, se
alteraba con bastante facilidad y sus reacciones no calzaban con el estímulo
que la provocaba. De hecho ella se lo expresó al director del colegio y él optó
por quitarle un poco de responsabilidad, que eran meses como de bastantes
actividades extra y se empezó a dar funciones a otras profesoras, pero sin
perder su calidad de Jefa de UTP, que según ella recuerda, la mantuvo.
Recuerda que la menor Ayleen tuvo un accidente cerebral, estuvo muchos
días hospitalizada, Marpia Eugenia fue una participante activa en esta tarea,
estaba muy presente en esta actividad, fue al hospital, se organizó un bingo,
por la información que ella tiene, esta participación de María Eugenia, era
voluntaria, no escuchó al director encargárselo. El 26 de octubre María
Eugenia no estaba en el colegio y después no volvió a ejercer su labor, no la
vio después.
Sebastián es un niño bastante inteligente, muy perceptivo, con mucha
capacidad de darse cuenta, con bastantes recursos, muy educado, normal.
De esta situación se informó a las profesoras que se había hecho la
denuncia, de acuerdo a los artículos legales, se insistió la confidencialidad
porque también había un artículo legal establecía eso durante la investigación
y se dijo que cualquier persona que supiera algo de eso, lo dijera en fiscalía.
Agrega que durante un periodo de tiempo, los papás juntos a dejar a
los niños al colegio, ella le preguntó a María Eugenia si los padres habían vuelto
y ella le respondió que no, después ella le consultó a Sebastián y él dijo que él
ya sabía que ella le había preguntado si sus padres se habían reconciliado,
porque María Eugenia y que ésta le contó.
Una vez enterándos del reconocimiento de la existencia de relaciones
sexuales incluso el día lunes, el día anterior, empezó a hablar con las
profesoras, porque dada la gravedad debía tener más información y la
profesora María Gloria, se suponía que ese día viernes, a María Eugenia le
habían robado el chip de su celular, al confirmar con la profesora María Gloria,
que a ella la habían llamado desde el teléfono celular de María Eugenia, a
ella no le cuadraba con el robo del chip. De esto tomó conocimiento cuando
el padre de María Eugenia fue a dejar la licencia al colegio, le pidió hacer una
averiguación sobre la pérdida de este chip.
Posteriormente a toda esta situación en U.T.P.m, las otras profesoras,
recordaron que ella ingresó a U.T.P., preguntando cómo se vería embarazada.
Eso ocurrió en la misma época.
Sebastián dijo que iban a pocas cuadras del colegio, cruzando
Recoleta, hacia el cerro, que en una oportunidad fueron cerca del Parque los
Reyes y ahí manifestó que se habían dado el primer beso, le dijo que la
relación sexual fue en el departamento. Ella entrevista profesores, no evalúa,
cuando los profesores solicitan cuando están pasando alguna situación en la
que necesitan orientación si están pasando una situación personal y cuando
están sobrepasado por alguna situación con algún alumno. María Eugenia no
le pidió ayuda en forma privada, pero sí, al final, cuando tenía que conversar
con el señor Ponce, le pedía a ella que la acompañara, porque al parecer él
no la entendía, y ella se ponía nerviosa. Esto sucedió en las últimas ocasiones,
como a principios de octubre o noviembre.
Ella no vio que la profesora tuviera problemas con los profesores, de
hecho vio su trato como el de cualquier profesora, cuando se enojaba, la vio
alzando la voz.
Durante este periodo de altos y de bajos, al año siguiente, en el 2008
Sebastián reinició las clases en forma tranquila, no presentó mayor problema,
después empezó a bajar las notas, hubo reclamos de los profesores porque
estaba hablando mucho, funcionaba aparentemente bien. Cuando lo
conversaban, su respuesta era “ si yo estoy mal, me preguntan qué me pasa” y
él no quería responder qué le estaba pasando, cada vez que se hablaba del
tema del juicio, del enfrentamiento de repetir y repetir nuevamente la historia,
él decaía, costó, de hecho tuvieron algunas entrevistas, porque ella insistía en
la terapia de reparación, porque ella, al no ser experta en el tema, aparte de
poder contenerlo, ella solicitaba terapia de reparación para que él iniciara el
proceso de elaboración de este tema, y tuvieron varias entrevistas, porque él
no quería, dado que era nuevamente repetir, y eso a él le afectaba mucho.
Hasta que inició su terapia y ahí ella se hace un lado, para que el psicólogo se
haba cargo y después de eso la buscaba porque no había asistido o porque
no era suficiente y quería conversar con ella. En la medida que se acercó la
fecha, cuando ya hubo claridad, empezó a verse bastante angustiado, caída
de pelo, ya el martes, en la última conversación, un día antes de que él tuviese
que declarar, estaba bastante mal.
No supo que el alumno se jactara de los hechos, de hecho ella estaba
encargada de hacer el seguimiento, hablaba con profesoras para ver cómo
él se comportaba, cómo él estaba, qué observaban, las profesoras le decían
que estaba bien, nunca obtuvo información sobre ese tema.
En la primera entrevista en el año 2005, el tema de la separación de los
padres, esa fue la solicitud de la madre. El tema de la separación sí era tema,
pero él estaba afectado por estar alejado de su papá. Eso es lo que él
manifestó en ese minuto. Todo estaba relacionado con el tema del padre.
Mencionó que él se sentía el mensajero entre sus padres.
Sebastián no le comentó una situación de abuso o violación a alguno
de sus hermanos.
El motivo de su entrevista del año 2007, fue porque lo echaron de la
casa de la abuela, no recuerda claramente qué le dijo esa vez, pero lo notó
afectado en su manera de relatar los hechos, era más bien molestia,
sentimiento de injusticia. Ella no tenía conocimiento que Sebastián se acercara
a la señorita María Eugenia, de hecho, si después de la entrevista el decía que
se sentía apoyado por su profesora, eso le da a entender debe haber sido así,
de hecho, así funciona dentro del colegio.
Preguntada indica que no es usual que los alumnos tengan fotografías
de las profesores en las billeteras, eso es una apreciación suya, no revisa las
billeteras de los alumnos.
El extravío del chip lo supo por terceros, el teléfono no estaban en
conocimiento que se le hubiera extraviado. Ella es psicóloga, egresó el año 99
y se tituló el año 2002, es magíster en adolescencia, no en trastornos sexuales
de adolecentes.
Ella habló de “protegió”, porque hasta ese minuto, ella no sabía qué
información era verdadera o falsa para poder tener claridad sobre los hechos,
ella estaba indagando su actitud que era de evadir o proteger. Él asumía su
responsabilidad en cuanto al afecto que tenía hacia ella y que ella le
correspondía y por eso se sentía apoyado y escuchado, era afecto de él
hacia ella, en ese momento.
Respecto del embarazo, no ocupó el término amenaza, la forma como
ella tiene las entrevistas es en base a lo que ellos van manifestando y en esa
entrevista iba de un tema a otro y si él cambia, ella no sigue indagando al
respecto. De este tema conversaron someramente sobre eso, él dijo “cómo
pude haber creído eso”. El más se centró en esto como cierta culpa que él
tenía cuando maría Eugenia llegaba a la sala y retaba a todos sus
compañeros. Su labor era de contención, no de reparación y el contener
apunta a ella escuchar y de alguna manera brindar el espacio para que él se
pueda desahogar. Ella estaba brindando apoyo. La racionalización de
conductas, no es contención, es intervención.
k) Ana María Guerrero González, indica que es profesora básica del
Liceo Politécnico Santa Juliana desde hace 31 años 8 meses, es inspectora
general de básica desde el año 1994. Conoce a Sebastián desde jardín
infantil, es un niño alegre, respetuoso, buen alumno, es un niño que se
compromete con sus compañeros, participa en distintas actividades del curso.
Este año no sabe cómo están las notas, los años anteriores eran muy buenas,
hasta sexto y séptimo básico, no sabe cómo le fue el primer semestre de este
año. María Eugenia la conoce porque llegó a trabajar si no se equivoca en
mayo de 94, con ellos, como profesora básica. En el año 2007 era profesora
básica del 6° A, Sebastián era alumno de su curso. La relación de María
Eugenia con sus pares era normal, era una relación de profesoras, no de
grandes amistades pero sí de buen compañerismo.
Preguntada explica que generalmente los profesores no entregan datos
personales a ningún alumno. Otilia Romero es una buena profesora, una
persona muy dedicada también a sus labores educativos y lleva como 12 años
con ellos. Sebastián siempre fue líder, desde chico, cuando jugaban futbol era
el capitán del equipo, el más importante jugador que tenía el equipo de su
curso. Era un niño bien apetecido con las niñas, buen compañero con todas,
por ahí, al final, supo que había una niña que tenia interés en él, Romina
Riquelme, pero no era de su curso, era de otro curso.
Sebastián no pudo seducir a una mujer de 40 años, porque era un niño,
una guagua para ella, todavía, ella lo ve así, no cree que él pueda seducir a
una persona adulta.
l) Dichos de Mercedes Elizabeth Clavero Lara, quien indicó que es
inspectora de patio del Liceo Polivalente Santa Juliana, desde el año 2005,
actualmente es inspectora de 5º básico y 6º básico. María Eugenia
Darrigrande era profesora de básica del 6 A. Al joven Sebastián lo conoce de
vista, así individual no. Conversaron la situación de lo que estaba pasando con
la profesora, el director les hizo el alcance que estaba pasando esa situación,
no recuerda cuando fue. Ella recuerda una mañana que iba a la sala de
profesores de básica, donde tiene su casillero de asuntos personales, no pudo
abrir la puerta, estaba cerrada con llave, es una sala que tiene que estar con
la puerta abierta, le pareció extraño y no se pudo abrir, golpeó y tampoco, le
pareció extraño, se quedó un rato y al rato desde el interior de la sala de los
profesores, aparece al joven Sebastián, él la miró y le sonrió y de ahí escuchó
la voz de la profesora Darrigrande, no sabe lo que dijo, sólo escuchó su voz. La
luz estaba apagada, ella no entró, se fue. No volvió a encontrar la sala
cerrada, era octubre de 2007, por ahí, estaba claro, había solar, ella hizo el
comentario después. Es habitual que la profesora reciba a alumnos, pero no
con la puerta cerrada. No recuerda que haya estado la profesora con
Sebastián y ella en la sala de profesores, tampoco recuerda que ellos hayan
llegado y a ella la hayan hecho salir. Ella reconoció la voz de la profesora,
puede dar fe que era ella.
m) Testimonio de Maria Gloria Prado Lazo, quien dijo desempeñarse
como profesora básica del Liceo Polivalente Santa Juliana, de Recoleta,
desde hacen 17 años, como profesora de 6°s y 5°s. Al joven Sebastián le hacia
clases de naturaleza y sociedad, María Eugenia era la jefa de curso del 6ºA y
jefa de U.T.P., su relación con María Eugenia era bastante buena, ella hacía
clases al 6° A como 6 veces a la semana, en varias oportunidades la señora
María Eugenia lo sacó de clases para conversar con él y la otra cosa que le
llamó la atención, fue una vez que al joven Sebastián le bajó un ataque de
taquicardia, la mandaron a llamar a la sala, estaba muy alterado y la
profesora estaba llorando, porque no quería que le pasara lo mismo a la niña
Ayleen, ella estaba muy conmovida y lloraba mucho porque Sebastián estaba
en esas condiciones. Ella le preguntó una vez que por qué lo sacaba
continuamente y le dijo que porque tenía problemas familiares el niño y que
ella como profesora jefe podía sacarlo cuando pudiera, sólo sacaba a
Sebastián. A veces Sebastián estaba 5 o 10 o 20 minutos afuera, pero volvía a
clases. Esto lo habían visto con las otras colegas, Otilia Romero y Leonor Lazo
les llamaba la atención, pero no encontraban respuestas a nada. En una
ocasión ella estaba haciendo clases en el 6° C y llegó la señora Otilia Romero
muy alarmada, contándole que había visto a María Eugenia dándole un beso
a Sebastián, ella le dijo que se calmara que ella iba a ir a ver, pero cuando
llegó a la sala, ya estaba cada uno en su puesto y ella no vio nada. No se dio
cuenta a la dirección, quedó así no más. Sebastián era un excelente alumno,
de 6, 6 y tanto, era muy participativo. No le contaron nada más que les
llamara la atención. En algunas oportunidades ella estaba haciendo clases
ella y el niño recibía llamadas por celular y le decía, “me llama la seño”, “pero
que venga a buscarte”, “no, tengo que salir”. A veces ella misma iba a la sala
y decía, tengo que hablar con él, y salía. María Eugenia iba a su clases, como
era jefa de UTP tenía derecho de ir a su sala y ella una vez le preguntó por qué
iba, y María Eugenia le dijo que porque era entretenida, pero se sentaba
entremedio de los alumnos, en diferentes partes, entre diversos alumnos y a
veces, al lado de Sebastián, no recuerda si conversaban o tenían algún tipo
de acercamiento. Esto ocurrió como 5 o 6 veces, también le sucedía lo mismo
a la señora Otilia, ella el comentó que le parecía raro que fuera tanto, porque
no lo había hecho nunca. Ella trabaja hace 17 años en el colegio y María
Eugenia no se quedaba durante sus clases. Una vez la profesora Leonor fue a
la sala del 6 A a exponer un trabajo que habían hecho los niños en el día del
profesor, tocó la puerta porque estaba cerrada con pestillo, ella estaba
haciendo clases en el 6 B y le preguntó “¿donde están los niños?”, y ella le dijo
que habían bajado a la sala de video con la profesora Otilia, que es la jefa de
curso del 6 B . Pasaron 20 o 30 minutos, salió el joven Sebastián, bajó a la sala
donde estaba Otilia, volvió a entrar, volvió a cerrar la puerta, estuvo 15 minutos
más, salió doña María Eugenia desde la sala del 6 A y a los 5 minutos salió
Sebastián. La sala de clases están generalmente abiertas. Doña Leonor le dijo
que estaba cerrada con pestillo, con dentro. Ella pudo observar lo que relata,
porque las salas quedan en diagonal, no podía ver hacia adentro, porque las
salas estaban con cortinas.
Cuando ella le preguntó por qué sacaba tanto el niño, a veces le
respondía muy alterada que ella era la jefa de UTP y podía sacarlo cuando
quisiera.
Lo del beso fue en la sala de video y Otilia le dijo que una vez vio que
en la sala de Sexto A, la profesora con sus alumnos estaban jugando al juego
de la botella, parece que una de las penitencias era darse besos. Ella no lo
vio, esto fue entre septiembre y noviembre. Casi todos los alumnos tenían el
celular y el correo electrónico de la profesora. No sabe los problemas que
tenía Sebastián, no había otros alumnos con problema, ella la veía conversar
también con otros alumnos, pero no sabe si eran problemas personales.
Ayleen tuvo un problema cerebral grave, María Eugenia era la jefe de
curso, Sebastián tuvo un problema cardiaco, no le llamó la atención tanto eso,
pero sí le llamó la atención la forma cómo ella estaba desesperada, llorando,
encima, muy cerca del niño Sebastián.
n) Dichos de Leonor Inés Lazo Jopia, quien indicó ser profesora de
educación básica del Liceo Polivalente Santa Juliana desde el año 1992, hace
clases a 5°s y 6°s básicos, también el año 2007, imparte inglés, matemática y
sociedad. Al 6° A le impartía sólo inglés, dos veces por semana, la profesora
jefe era la profesora María Eugenia Darrigrande, Sebastián era alumno de ese
curso. Era un alumno con buen rendimiento escolar, generalmente 6,2 era un
alumno responsable y respetuoso frente al profesorado, María Eugenia era
también Jefe de UTP del nivel 5° y 6°, ella no visitó su curso ni retiró alumnos de
su curso. Ella era profesora jefe del 5°A. Había colegas que le comentaban
que el alumno salía de la sala de clases en algunas ocasiones, no sabe por
qué salía. Ella como jefa de U.T.P., tenía dentro de sus actividades visitar las
clases, a veces ella se acercaba al curso a anunciar actividades extra
programáticas puntuales que se iban a realizar y era esporádicamente. En una
oportunidad vio juntos a la profesora con Sebastián, era un recreo, las 15.00
horas, tocaron la campana, ella se puso en la escala a la entrada de su sala,
para avisar a los niños que ingresaran, ella se sentó en el escaño, a conversar,
como habitualmente hacen los alumnos. En el día del profesor, se le ocurrió
hacer un diseño en forma de corazón, con unas manitos blancas y llevaba
impreso el curso y el nombre del profesor, días después, para no desperdiciar
el material, ella pasó entregándolo para que se mantuviera en el diario mural
del curso. Cuando llegó al 6 A, tocó y la puerta estaba cerrada por dentro,
trató de abrir y no pudo, sabe que no estaba cerrada por fuera, las puertas de
las salas tienen dos aldabas y candado, no tiene manilla. En ese momento no
tenía candado. Golpeó como 2 o 3 minutos, divisó a la profesora del 6 B, María
Gloria, que le hace señas que había alguien, se veía por la ventana, (señalizó
con el índice) trató de mirar por las cortinas, pero no se veía hacia adentro.
Esto fue a las 14.15 o 15.00 horas, esto fue en octubre. Sus colegas le
comentaban que la profesora Maria Eugenia entraba a su sala a observar las
clases. Se enteró del problema en noviembre de 2007, el director puso esta
demanda, no recuerda si él se lo informó. La relación de María Eugenia con las
otras profesoras, llegó el momento en que ella tuvo un cambio de humor, de
repente era relajada, alegre, pero bruscamente se iba al polo opuesto, su voz
se ponía bastante en alto, no sabe los motivos de ello, ella se relacionaba con
el grupo de profesores, cambiaba muy de repente su humor, subía la voz que
se alteraba. También tuvo cambios en su físico, de haber sido un poquito
gordita, empezó a cambiar su forma física y también la forma de vestirse, algo
más jovial, cuando se afina la silueta, con la dieta de Herba Life, en marzo, ya
tenía la silueta más marcada, en su figura.
Agrega que no había un comentarios al interior del colegio, aparte del
hecho de la visita de la profesora a la sala de clases de otros colegas. Todos
los profesores son cercanos a los alumnos, en el sentido de comunicación y
orientación, María Eugenia estaba en la media, como todos los profesores.
ñ) Declaración de Otilia Eliana Romero Rojas, quien manifestó ser
profesora de educación básica desde hace 41 años, en el Liceo Polivalente
Santa Juliana, desde hace 11 años, donde impartía la asignatura de Lenguaje
y Comunicación en el año 2007, a los 3 sextos y quinto A y B. La profesora jefe
del sexto A ese año era la profesora Darrigrande Moreno, era además jefa de
la Unidad Técnico Pedagógica. A Sebastián ella le impartía la asignatura de
Lenguaje y Comunicación, en 6°, no está segura si en 5° también. Era un
alumno normal, igual que todos, tranquilo, un buen alumno, responsable.
A comienzos del segundo semestre del año 2007, notó un cambio entre
Maria Eugenia y Sebastián, la primera vez que observó algo, fue en un
momento en que ella estaba haciendo reforzamiento de lenguaje en su sala, 6
° B, que estaba diagonal a la sala de la Srta. María Eugenia, vio salir a
Sebastián de la sala de 6 ° A y miró para ambos lados, pero no hacia su sala,
ella estaba sentada en la mesa al medio de la sala y no la vio, y el niño se
entró, ella quedó mirando, y más o menos a los 5 minutos, salió María Eugenia,
arreglándose su cabello y como 5 minutos después salió Sebastián, le llamó la
atención porque ellos estaban solos en la sala con las cortinas color damasco,
corridas, ella se lo comentó a dos colegas, a Leonor Lazo y María Gloria Prado.
Después observó que María Eugenia sacaba al niño reiteradas veces de
clases, ella no sentía el celular del niño, pero parece que él recibía mensajes
en su celular y seguramente cuando recibía los mensajes, e niño se paraba y le
decía, seño, me llama la seño María Eugenia, y como ella era su jefa, ella le
daba permiso para que saliera. Esto ocurrió muchas veces, y una vez, cansada
porque se lo sacaban, y no le dio permiso, entonces, María Eugenia subió, y le
enrostró furiosa, por qué no lo había dejado salir, ella le dijo el niño estaba
perdiendo demasiadas clases de lenguaje y ella le dijo, yo soy tu jefa, tu no
sabes para que yo lo llamo. Ella estaba bajo sus órdenes, y el niño salió.
Después dijo, si alguna vez me levantan una calumnia aquí en el colegio, yo
seco en la cárcel al que lo haga, mi padre es abogado, mi hermano es
abogado, mi sobrino es abogado, por eso ella le tenía mucho temor a María
Eugenia. Ella también iba a su sala, y hacía salir a Sebastián. A Sebastián ella lo
sentía incómodo, como que miraba, como que le daba no se qué salir de
clase. En realidad, ella vio un acosamiento de María Eugenia a Sebastián.
María Eugenia hacía la asignatura de matemáticas en ese curso y después
venía lenguaje. Ella permanecía durante el recreo con sus alumnos, y varias
veces ella se quedaba en su clase, ella creyó que iba a supervisar su clase,
pero después se dio cuenta que no era así. Sebastián se sentaba siempre en el
primer puesto, pero ella lo llevaba al final de la sala, a veces, diría muchas
veces, ella se sacaba su chaqueta, y la ponía sobre sus rodillas y las de
Sebastián y conversaba con él, ella ya se ponía nerviosa, porque ella ya
visualizaba algo que pasaba entre ellos. En el año 2007 con María Eugenia les
tocó preparar una obra de teatro que escribió una prima de María Eugenia,
ella necesitaba la sala de video para preparar la obra, antes de eso María
Eugenia había mandado un mensaje al niño y el niño había bajado, pero el
niño no regresó a clases, en 2 horas, ella sabía que estaba con María Eugenia.
Tocó el recreo y el niño no regresó. Ella quería ensayar la obra de teatro, fue a
la sala de video, estaba cerrada con las cortinas corridas, que eran de color
azul marino. Entonces ella fue donde María Gloria y le dijo “¿puedes ir a ver a
la sala de video si está ahí María Eugenia con Sebastián?”, y me dijo “no, no
quiero ir”. Le dije a Leonor, “¿puedes ir a ver si está ahí con Sebastián?”, y
tampoco quiso. La puerta no estaba cerrada, estaba semi junta, en un rincón,
Sebastián estaba sentado, María Eugenia de pie, con su chaqueta negra
medio abierta, como Sebastián es alto, ella estaba inclinada hacia él. Ella
quedó perpleja, sus compañeras dijeron que a ella no le salía la voz, a ellas les
dijo,”chiquillas, no saben lo que vi en la sala de video, María Eugenia lo
estaba besando a él, en la boca”. No era piquito. Ella no se lo comentó a
nadie más, porque Maria Eugenia, en varias oportunidades, como tenía un
cargo en el colegio, jefa de U.T.P., y ella tenía buenas relaciones con el
Directo, decía que el director le creía todo lo que ella decía, por ese motivo,
ella se calló.
Refiere que el día 24 de noviembre de 2007, María Eugenia y ella tenían
que ir a tomar el examen de admisión, y el 23 de noviembre, que fue el último
día que vio a María Eugenia en el colegio, en la noche recibió como a las
23.45 horas, un llamado telefónica de la mamá de María Eugenia, mi hija no
podrá ir al colegio, porque está en estado de shock, ella sentía gritos y llano al
otro lado del teléfono, ella le preguntó a la señora si era Maria Eugenia y dijo
que “sí”, y le pidió que se contactara con alguien para que la reemplazara,
ella llamó a la jefa d UTP del primer ciclo, María Isabel y le dijo, y ella le
preguntó, “¿pero qué le pasó?”, porque hasta ese día María Eugenia estaba
bien en el colegio, ella le dice, no supe, pero la sentí llorar y gritos. Al día
siguiente, la señorita Silvia las llama muy asustada a su oficina, las hace entrar y
les dice que hace pocos instantes recibió un llamado de la casa de María
Eugenia, donde les dicen que anoche María Eugenia intentó suicidarse. No
sábado ni domingo tuvieron noticias de la casa de María Eugenia. El día lunes,
le informaron que habían ido los padres del menor, a contar lo que pasaba
entre María Eugenia y Sebastián, en la noche, cuando llegó del colegio, como
a las 18.00 horas, en su teléfono recibió como 26 llamadas de María Eugenia,
ella miraba el visor y no se atrevía a contestar, eran tantos los llamados que los
oídos le dolían. Contestó y ella le dijo por qué no me contestaba, porque ella
tiene una voz muy prepotente, cuéntame, ¿fue alguien al colegio? y ella le
dijo “no María Eugenia, no ha ido alguien”, sabiendo ya que habían ido los
papás del niño a hablar con el director, “¿es cierto, no me estás mintiendo?”,
“no María Eugenia, no ha pasado nada”. Esa fue la última vez que habló con
ella. Después de que el director se informó de todo lo que estaba sucediendo
entre María Eugenia y Sebastián, él empezó a indagar, a llamar de a una a las
profesoras, hasta que él supo lo que ellas habían visto, ella le contó que había
visto a María Eugenia dándose un beso. No le dijo que era un probable
acercamiento bucal, está conciente que siempre ha dicho beso, lo afirma
ahora, tampoco dijo “probable”. Ese año el segundo semestre comenzó el 2
de agosto de 2007. María Eugenia empieza a sacarlo de clases entre
mediados de agosto hasta noviembre de 2007, el beso lo vio en septiembre, a
fines. La obra de teatro se dio el 17 de noviembre de 2007 y antes de la obra
de teatro ellas la tenían que preparar, la obra de teatro la prepararon entre las
dos, pero María Eugenia, casi al final de la obra, la dejaba sola preparando la
obra y todos los integrantes de la obra de teatro se ponían en el medio de la
sala de video y ella casi siempre se instalaba con Sebastián en las últimas sillas,
siempre a solas con él, y siempre se sacaba su chaqueta, nunca lo va a
olvidar, y la colocaba encima de las rodillas de ella y Sebastián, poco apoyo
encontró de parte de ella para la obra, porque estaba más con Sebastián que
preparando la obra. En algún momento ellas necesitaban un televisor, ella
sabía que no había, y María Eugenia decía que no, que en la bodega había,
ella decía que no, que eran pantallas de televisores viejos, en un momento
dijo, “yo voy a ir a buscar el televisor”, y fue con Sebastián, se demoró
bastante, pasaron 20 a 25 minutos, ella esperando, y entonces fue a la
bodega donde supuestamente ella decía estaba el televisor, en eso abrió la
puerta de la bodega, que estaba oscura, estaban María Eugenia y Sebastián,
y él se pudo muy nervioso, ella tomó una escoba y se puso a barrer la bodega,
y le dice, “no hay televisor, pero nos va a servir para la obra esta pantalla”,
era una pantalla de computador vieja, el niño la tomó y la llevó al frente, a la
sala de profesores de básica y después él la llevó a la sala de video. La obra se
dio un día sábado. Ese día a María Eugenia le habían dado la orden de que
quien coordinaba las obras de teatro, que era el profesor de lenguaje de
enseñanza media, que era don Raúl Yáñez, ese día a María Eugenia le
correspondía coordinar la obra, y a ella le habían dado la función de cuidar a
los actores de 6 ºA y 6 ° B, María Eugenia le cambió, no quiso coordinar la
obra. Cuando correspondió actuar a 6 A y 6° B, tuvieron que esperar entre 20 y
30 minutos que la obra saliera, en ese lapso algo pasó entre María Eugenia y
Sebastián, no sabe qué, pero ella observó como que Sebastián quería sacarle
celos a María Eugenia y en ese momento Sebastián se le estaba declarando a
una alumna suya, que se llama Romina Riquelme. Ella miraba a Sebastián y
Romina, María Eugenia estaba indignada y le decía que hiciera algo, para
que los separara, y ella le decía que no podía decir nada y María Eugenia
estaba pero, ahora que sabe lo que estaba pasando entre ellos, eran unos
celos espantosos de lo que pasaba con Romina. El 19 de noviembre María
Eugenia habló con ella y le dijo que Romina Riquelme estaba llena de piojos,
ella le dijo que no tenía piojos, María Eugenia dijo que había revisado a su
curso, ella le dijo que no conocía los piojos ni las liendres. Era un día de sol, y le
dijo, yo te voy a revisar tu curso, revisó las niñas de todo su curso, con dos
lápices, Romina no quería que la revisara, estaba muy nerviosa. Cuando llegó
a la cabeza de Romina dijo “esta niña está plagada de piojos”, ella le miraba
la cabeza y no le veía nada. Ella le dijo a Romina retírate, la niña se puso a
llorar, le preguntó si era efectivo y ella le dijo que no y que se tranquilizara, la
niña se puso a llorar. Jamás nadie había revisado a sus alumnos, primera vez
en toda su docencia. A veces algunas profesoras lo hacían pero no era
frecuente. Ella sabía que no tenía piojos, porque los piojos se reconocen,
algunos niños según María Eugenia tenían liendres, pero no informó nada. No
se envió comunicación a los apoderados para que se hiciera tratamiento. En
toda su historia docente, jamás observó una situación similar entre profesor y
alumno. No habló antes, porque María Eugenia tenía un cargo y el director el
Sr. Ponce la tenía muy bien catalogada y según versiones de María Eugenia,
hay una tía, que era amiga del Sr. Ponce, no lo tiene claro, pero había algún
acercamiento entre ese familiar de María Eugenia y el señor Ponce. No tenía
enemistad con María Eugenia, incluso se comunicaban, ella no tenía
problema con María Eugenia, solamente esto, que se ve en la obligación de
relatarlo, porque ella es madre y no le habría gustado que a su único hijo le
hubiera sucedido esto.
Las salas de clase de 6 ° y 6 °B se encuentran en el segundo piso, la sala
de video se encuentra en el primer piso, en el segundo patio. En el año 2007, la
sala de 6 B estaba en forma diagonal al 6 B, hubo cambio, en la sala del 6ºA
estaba el 5º B y en la sala del 6 B estaba el 5 A, que ahora es 6 A.
La señora fiscal exhibe a la testigo fotografías del set D 3, (se trata de
una construcción de dos pisos, en forma de L, se observa en el segundo piso,
salas, que dan a un corredor y unas escaleras en el corredor, para bajar al
primer piso) Al observar la fotografía N° 47 ella dice: es el segundo piso, donde
el año 2007, la última sala es la de 6Am, indica donde esta 6 B, indica al final
del pasillo, y dice que es el 5°. Ella era profesora jefe del 6 B. la fotografía 48, es
la puerta del Sexto A. la puerta de la sala tiene pasadores, y candado, por el
interior hay pestillo para mantener la puerta cerrada; la fotografía 52, es un
candado se usaba para cerrar las salas por fuera. Fotografía Nº 69 es la sala
de video, justo encima, en el segundo piso, está el Sexto B. La sala de
profesores se encontraba a la entrada, frente a la bodega del colegio.
Preguntada señala que nunca supo los motivos por los cuales María
Eugenia sacaba a Sebastián de la sala. Al comienzo, ella creía que ella iba a
supervisar su clase, pero después se dio cuenta que era para estar junto a
Sebastián.
Tiene entendido que en la clase de estudio y comprensión de
sociedad, de la profesora María Gloria Prado, también le sacaba al alumno,
no sabe que a otra profesora se lo haya hecho. En estos momentos que ya
sabe la verdad, cree que María Eugenia la utilizó, a ella la debe haber
encontrado hasta tonta, porque es débil en el sentido que le tenía terror a ella,
pánico, se sentía como utilizada. Le tenía terror por su forma de ser, era muy
violenta para decir las cosas, había momentos en que llegaba de muy buen
humor, pero tenía un carácter muy cambiante, se violentaba, era de carecer
violento. Experimentó un cambio físico también, los últimos días del 2007 se dio
cuenta que su manera de vestir era como que quería aparentar ser niñita, se
puso extensiones, siempre ella la observaba, ella se arreglaba, se pintaba los
labios antes de ingresar a la sala de 6 A. En una oportunidad, estaban en la
hora de almuerzo y ella dijo, delante de todas las profesoras que estaban
almorzando, y ahora que saben todas lo que sucedió, ella dijo “quiero tener
una guagua” y lo escucharon varias profesoras que ahora lo han recordado, y
una le preguntó “qué va a decir tu hija Andrea”, y dijo que ya lo había
conversado y Andrea le había dicho que ella la iba a ayudar a criar esa
guagua. Esto fue en el segundo semestre, septiembre, octubre de 2007.
Ella fue Jefa del A.D.L.E., no fue nunca jefa de U.T.P., cuando Maria
Eugenia iba a su clase, al comienzo no, porque pensaba que la iba a
supervisar, no la molestaba la forma cómo se dirigía a ella, pero después de
que los vio salir de la sala de clases, primero ella y después Sebastián, pensó
que iba a su sala para estar con él. En su sala se sentaba al lado de Sebastián.
Refiere que era María Eugenia la que buscaba a Sebastián, no Sebastián a
ella, eso lo llama acoso.
Ella supo que Maria Eugenia estaba jugando a girar la botella entre la
profesora y los alumnos, pero no lo vio, sabe que jugaban a la botella y la
penitencia, a lo mejor las demás lo pueden haber visto, ella no lo vio. Cuando
cambió su vestimenta, empezó a usar vestidos cortitos, parecía niñita.
Ella le temía porque sabía que en su familia había muchos abogados.
Ella no contó al director cuando vio a María Eugenia besando a Sebastián, ella
debería haberlo hecho, pero el director a lo mejor no le habría creído a ella.
María Eugenia decía que todo lo que ella le decía, el director se lo creía, ella
era jefa suya, era superior a ella, pensaba que no le creerían.
Tenía buena relación con la señora María Eugenia, durante ese tiempo
cambió, era otra persona en el 2007, cambió mucho. La prepotencia y
violencia fue más notorio en el 2007. Nunca tuvo un problema personal con
María Eugenia.
Para evidenciar contradicción, la defensa la hace leer su declaración
policial de 3 de junio de 2008, reconoce su firma, lee “hubo una ocasión en
que Sebastián se paró de su banco y me dijo que María Eugenia lo había
llamado a su oficina, que le había enviado un mensaje. A estas alturas ella no
toleraba esta situación y simplemente no lo dejé salir, a los 5 minutos
aproximadamente, llegó María Eugenia furiosa, me enrostró frente a los
alumnos, que ella era mi jefa, y que si llamaba a Sebastián yo debía dejarlo
salir. Ante eso, no pude hacer nada más y tuve que dejarlo ir”.
En ese momento sí tuvo dificultad con Maria Eugenia. Nunca en todos
sus años de profesora alguien le había llamado la atención frente a sus
alumnos.
Le consulta la defensa si sus alumnos son importantes para ella,
responde “por supuesto”, le consulta si su trabajo es importante para ella,
responde sí; le pregunta el señor defensor, qué es más importante para ella, si
sus alumnos o su trabajo, responde “los alumnos”. Le dice el señor defensor
cómo si viendo lo que estaba ocurriendo con su alumno y la profesora, no lo
contó a las autoridades que deberían saberlo, dice, no lo conté” le pregunta,
entonces, qué es más importante para Ud., responde “en realidad, parece
que Uds. no comprenden bien que María Eugenia, que ella la notaba muy
allegada al director. Reitera que eran más importantes sus alumnos que su
trabajo.
Ella fue a la casa de la señora María Eugenia en dos oportunidades
parece. En una oportunidad María Eugenia estaba con licencia, el motivo no
lo supo bien, y fueron con las dos colegas que declararon anteriormente a
verla, para saber de ella. Una vez las invitó al cumpleaños de su hija, a un
restaurant, el año 2005, 2004, fue al Gasby. Ahora tienen una nueva jefa de
U.T.P., que les exige mucho más. Ellas no sabían de su evaluación en U.T.P., ella
no siempre entregaba las planificaciones a tiempo, se las pedía María
Eugenia, no tuvo problemas por eso.
o) Dichos de Carlos Andres Contardo Fuentes, quien aseveró que es
comerciante y que en el año 2007 tenía un almacén de barrio, almacén de
abarrotes, en su domicilio. Conoce a Jessica Salinas y a su hijo Sebastián, eran
de la población y cuando él puso el negocio, se transformaron en clientes.
Sebastián compraba todo tipo de cosas, él compraba incluso más que su
mamá. Iba en las mañanas, tarde y noche, era bien constante con el tema.
También hacía llamadas de su teléfono público N° 7352540, llamaba al papá
en las mañanas, casi siempre, porque cree que el papá tenía que ir a dejarlo
al colegio, lo llamaba como apurándolo, porque generalmente estaba
atrasado para ir a buscarlo, levantaba la voz por eso, el negocio es chico, así
que era fácil escucharlo. En las noches también era el horario que más
marcaba, como de las 22.00 horas, él en ese tiempo cerraba como a las 23.00
horas, y él quería puro cerrar, pero esperaba que llamara. No sabe a quién
llamaba. En la mañana era como “apúrate, apúrate”, porque el papá estaba
siempre atrasado, pero en las noches, era como más íntimo, ahí no
escuchaba, porque era muy suave. Él hablaba bastante diferente, en la
mañana con la voz bien alta, y en la noche, hablaba mirando hacia la calle, y
con voz baja. Nunca le preguntó con quién hablaba. Esto fue en el año 2007,
como los últimos meses, recuerda noviembre, y a pesar de que era un teléfono
público, no era tan habitual que la gente ocupara el teléfono, el dividendo no
era tanto como lo que gastaba, era un problema para él. Sebastián tenía un
carácter bien agradable, él lo bromeaba, porque Sebastián es de la “U” y él
es del Colo-Colo, lo molestaba harto con ese tema, escuchaban el mismo tipo
de música, él siempre tiene la música puesta. Él comentó que cuando le hacía
una broma no lo pescaba, porque él es bien pesado, cambió el carácter de
Sebastián, estaba como para adentro. Él pensó que Sebastián estaba muy
preocupado de su hermano, pensó que se estaba haciendo responsable del
hermano, porque la mamá estaba trabajando. Dejó de llamar como a fines de
año. Antes de las 23.00 horas, era reiterado el tema. Las llamadas al papá eran
cortas, “apúrate”. En la noche era un poco más de plata, el celular eran 200
pesos por 50 segundos, el teléfono fijo, más de un minuto. En celular caen dos
monedas. Los fines de semana no recuerda haberlo visto en las noches, le
parece haberlo visto en la tarde, en las noches él, generalmente no estaba. Él
le hizo bromas, él se reía.
p) Testimonio de José Manuel Castro Aguilera, conserje, con domicilio
laboral en calle Libertad 1290, comuna Santiago Centro, trabaja ahí desde
hace 4 años, quien aseveró que conoce a doña María Eugenia Darrigrande,
como a cualquier residente. No la veía tanto. Con él trabajan 6 conserjes y un
rondín, trabaja 12 horas, dos días trabaja de día y dos días de noche. Su
función es atender al público y la gente que entra y sale regularmente. El
condominio es grande, tiene 13 torres y cada torre tiene como 24
departamentos. Hay como 260 departamentos. Los días festivos transita más
gente llegan visitas, más de 1000 personas diarias, entran y salen. La gente
que regularmente es de ahí son caras conocidas, ellos hacen control a las
personas que no conocen. Cuando las personas llegan acompañadas, entran.
Es posible que doña María Eugenia haya entrado con alguien y él no se diera
cuenta, aunque la otra persona lo haya visto a él. Los residentes circulan libres,
si alguien entra, es porque vienen con un residente, porque supuestamente es
conocido de la persona, cada persona tiene el deber de saber a quién lleva a
su casa.
La señora fiscal exhibe al testigo la fotografía Nº 1 del set ofrecido como
D 3, “Otros medios de prueba”, al observarla, indica: es la entrada del
condominio, hay otra entrada en Esperanza con Yungay. En un día normal, un
conserje está ubicado en Libertad y otro en Esperanza, y otros días cambian.
Ahí está conserjería, hay un monitor, un libro de novedades y un libro de
reclamos. Para que una persona diga lo que hay en el interior, tiene que haber
entrado al lugar.
Explica
que
la
señora
Darrigrande
va
esporádicamente
al
departamento, más se ven los papás o la hija, es relativo, a veces se la vez una
vez al mes, o dos veces al mes, ella iba a buscar las cuentas. En el segundo
semestre del 2007 la veía en los movimientos que acabo de mencionar, él
nunca la vio ingresar con un menor, siempre entraba con el papá, la hija,
estando él de turno, nunca se ha dado el tema, para conversarlo, es como
cualquier residente no más.
q) Dichos de Tatiana Andrea Avendaño Correa, cabo segundo de
Carabineros, con desempeño en el año 2007, en la Sexta Comisaría de
Recoleta, donde estuvo casi dos años. Hacía ahí servicio de guardia, donde se
acogen denuncias, se recibe a los detenidos y se acogen las constancias y a
las personas que tienen alguna solicitud a Carabineros. Señaló que El 18 de
diciembre de 2007m, cerca de las 9,00 estaba de servicio de primera guardia y
llega una denunciante con un menor, ella estaba de cabo de guardia, se
veían muy afligidos, la señora se veía con el rostro demacrado, ojos muy
hinchados y lloraba, el menor estaba con los ojos hinchados, hundidos, esta
parte color café, (indica ojeras) muy callado el menor. Lo que le llamó la
atención fue que el menor andaba con polera de manga larga, eran las 9.00
de la mañana y hacía mucho calor. Cuando entraron ella le preguntó qué
necesitaban, la hizo pasar al módulo de denuncias o constancia y ahí la
mamá le contó que el niño había sido abusado por la profesora jefe. La
denunciante era la madre del menor Jessica Salinas se puso a llorar, ella trató
de entenderla, como mujer qué le estaba pasando y el menor estaba como
ido, como metido en sí, ido, como no estuviera en ese lugar en ese momento.
Le empezó a consultar qué le pasaba y empezó a hablar con el menor,
diciéndole que tenía un hermano de su edad, que su hermano era su amigo y
ella podía entender cómo hablaban ello, le costó mucho hablar con el menor,
pero al final accedió a hablar con ella, porque trataron de crear una
comunicación, entre el niño y ella y ahí empezó a contarle lo que le estaba
pasando. Le contó que desde el día de su cumpleaños, el 27 de agosto de
2007, había tenido una relación con su profesora jefe, del tiempo que había
pasado, tenía mucha pena, se sentía muy mal, porque su profesora le había
dicho que estaba embarazada, que abortaría el bebé, que no se preocupara
por nada y que no le contara nada a sus padres. Que la profesora lo sacaba
de clases, lo llevaba a la sala de video y le empezaba a tocar sus partes
íntimas y lo besaba, que le mandaba recados, mensajes a su celular, que le
había regalado una billetera y una foto tamaño carnet. Dijo que inicialmente
esto fue en el colegio, donde él cursaba 4° básico y posteriormente en un
departamento que tenía la profesora, la polola decía él, en la calle Libertad,
en la comuna de Santiago Centro, donde en varias oportunidades llevó al
menor. Sabe que iba con frecuencia al lugar, no recuerda los días, le relató
que primero había empezado con besos en el sexto básico, y posteriormente
en el departamento de la profesora, tuvieron sexo. Declaró el menor que esto
había pasado en muchas oportunidades. La madre tomó conocimiento el 23
de noviembre de 2007 en el transcurso de la tarde, ella quería saber quién era
la polola de su hijo, porque el niño se ausentaba mucho del domicilio, quería
saber donde vivía la polola y que había notado muchos cambios físicos en el
niño, tenía cambios en el rostro y se notaba retraído, ya no era el mismo niño
de antes. Fueron, la mamá se subió al auto y le dijo que ella lo acompañaría al
departamento de su polola, el niño la llevó hasta el departamento de calle
Libertad, esperaron mucho tiempo ahí y el niño le confesó que su polola era la
profesora jefe. Manifestó que el colegio se había hecho cargo de una
denuncia y que hasta esa fecha ella no había sido citada por ninguna fiscalía
ni tribunal, por eso decidió denunciar el hecho. Señala que el niño se
encontraba con el rostro demacrado, ojos hinchados, con esto negro(se
refiere a ojeras) ella lo podía comparar con su hermano, que es del mismo
porte más o menos, pero es un niño sano. Se notaba que tenía los ojos
hundidos e hinchados por llorar. Ella lo percibió como un niño, de hecho, su
hermano se veía mucho más grande que Sebastián, el menor, es delgadito,
bajito, con rostro de niño. Lo que le relató el menor, le dio mucha pena y tomó
la decisión de suicidarse y se cortó las venas en su muñeca izquierda, cuando
es menor le dijo eso, ella le solicitó que mostrara su muñeca, y él en su mano
izquierda portaba una pulsera de la U, gruesa, se la sacó y debajo de eso,
tenía cortes, no muy profundos, para la edad de él, sí, eran varios cortes,
algunos cicatrizados, con costra y otras recientes, eran varias. El niño se tuvo
que levantar la polera de manga larga, sacarse la pulsera, para mostrárselas.
Dijo que se las había realizado con cortacartón. Ella le creyó al niño, ha
trabajado varios años en el servicio de guardia, el relato del menor, al ver su
cara de sufrimiento, a ver sus lágrimas, no le dio duda, y la forma que tenia, sus
ojitos, su cara demacrada. No se veía presionada por el adulto que lo
acompañaba, todo su relato fue fluido, todo se lo dijo de su boca, después se
le tomó relato escrito, como víctima y él escribió lo mismo, de su puño y letra.
Le exhibió la billetera que le había regalado para el cumpleaños, era una
billetera color negra con unas figuras de color afuera, dentro había una foto
tamaño carnet, era la foto de la profesora del menor. Ella tomó la billetera
como medio de prueba, y lo remitió a la fiscalía, más el teléfono celular donde
el menor dijo que se comunicaba con mensajes de texto con la profesora.
La señora fiscal exhibe al testigo la evidencia material E1 dice es la
billetera que le fue entregada por el menor, la que mantenía en su interior una
foto tamaño carnet, de la profesora, el menor le dijo que era de su profesora,
de su polola, exhibe la fotografía a que hace referencia. Ella inició la cadena
de custodia.
Al observar la evidencia material E 2, dice es un celular azul gris marca
Nokia, de la compañía ENTEL PCS, es el celular con que dijo el menor que le
llegaban los mensuales de texto de la profesora, el niño manifestó que todo
fue después del cumpleaños, primero la situación del colegio y después la del
departamento. Un hecho que el menor le manifestó que hubo un momento en
que él no quería y la profesora seguía tocándolo en el departamento. Dijo que
esto fue más de una vez. En el liceo donde el menor cursaba 6 básico, lo
besaba, le mandaba cartas, recados, lo llevaba a la sala de video. No ha
trabajado en una unidad especializada en menores, pero como hace
atención de público, al hacerles la instrucción, les enseñan la atención a
menores que pueden haber sido víctimas de un delito o víctimas ellos mismos.
Hay que tratar de tener una empatía con el menor, tratarlos como lo que son,
tratar de llegar a ellos fácilmente, sin presionar en sus declaraciones, cuando
son detenidos o cuando son víctimas, tener una comunicación fluida, usar el
mismo lenguaje de ellos, para obtener más información, sin presionarlo. No es
perito, pero sí tomó contacto con el fiscal de turno y él le ordenó acoger la
denuncia y enviar al menor para que fuera examinado por un psicólogo
forense y por un perito forense, para la parte física.
Explica que usó la comunicación con él, el menor tenía mucha pena, le
costaba hablar, estaba muy metido en lo que le estaba pasando, ella trató de
tener una mayor cercanía con él, fue una entrevista. Ella le creyó todo lo que
le dijo el menor, ella no es juez para determinar si es verdad o mentira, pero
partiendo de la base que los dos estaban acongojados, no le cupo duda de lo
que le estaban relatando. Le creyó al menor lo que le dijo que se besó con la
profesora en la sala de video. Su deber como carabinero es acoger la
denuncia, poner los antecedentes a disposición de fiscalía y otros peritos serán
quien digan si dijeron o no la verdad.
Indica que fue el niño el que le dijo que se trató de suicidar. El señor
defensor exhibe al testigo su declaración policial, y lee “la señora me señaló
que su hijo había intentado suicidarse, haciéndose cortes en la muñeca
izquierda, por lo que le pidió al menor que le mostrara”. Interrogado al efecto,
responde que inicialmente la información sobre el suicidio, se la dio el menor, y
luego, al entrevistar a la madre le dijo lo mismo que el menor. Esta denuncia
fue el 18 de diciembre. No recuerda si le dijo cuando había intentado
suicidarse, tenía heridas con costra y otras muy recientes. La impresión es que
habían pasado como 3 o 4 horas de que se había cortado.
r) Declaración de Max Freddy Castillo Castillo, , cabo primero de
Carabineros, con desempeño en la Sección de Investigaciones policiales,
(S.I.P), de la Sexta Comisaría Recoleta, también en el año 2007, quien aseveró
que en enero de 2008 recibió una instrucción particular de orden de investigar
del fiscal señor Alejandro Godoy Donoso en que se le pedía que se levantaran
unos Messengers de una víctima de abuso sexual, que buscara testigos, que
buscara domicilio de la denunciada, verificara un vehículo particular de la
denunciada. Se acercó a la víctima y denunciante, con la finalidad que
aportara los testigos si los había, ella le manifestó que se entrevistara con el
director del Liceo Polivalente Santa Juliana de Recoleta, que era testigo, o
sabe si ocular o de oídas de los hechos. La secretaria dijo que estaba de
vacaciones, fuera de Santiago. Luego se traslada al domicilio ubicado en
calle Libertad, se entrevista con el conserje, con un guardia, con la finalidad
de verificar el domicilio de la denunciada, y le señalan que María Darrigrande
vive en el lugar, departamento 501, escalera K, Santiago Centro, en el tercer
punto verifica en el sistema del Registro Civil que tiene carabineros respecto de
las placas patentes, y consulta la patente del vehículo, y le arroja un vehículo
Corsa color gris, de propiedad de la denunciada. La víctima le dice que era
color gris o plateado.
Para refrescar memoria le exhibe un párrafo de su declaración en
fiscalía, de 24 de octubre de 2008, interrogado al respecto, dice que la
patente era VB2121, era un automóvil Chevrolet, modelo Corsa color gris que
estaba a nombre de la denunciada señora María Darrigrande.
Conforme a la instrucción se trasladó al domicilio de la denunciante con
la finalidad de recabar los antecedentes que se necesitaban, no se logró,
porque había un problema con el PC, y la denunciante le entregó impresa, en
6 hojas, con mensajes.
La señora fiscal exhibe al testigo la evidencia C 14, dice es una carpeta
con 6 impresiones de mensajes del Messenger, son los que recibió e inició
cadena de custodia. La cadena de custodia se inició como Messenger. Lee la
cadena de custodia NUE 461372, está su firma, su nombre y su letra, una
carpeta con la cantidad de 6 hojas que tienen impresos los correos Messenger
que fueron enviados a la denunciante. No le entregaron dirección ni clave
para acceder a los correos, ella le entregó la carpeta. Le parece que es una
denuncia directa a la fiscalía. No recuerda si la patente se la aportaron o iba
en el parte denuncia. Cuando le llegó la instrucción, al entrevistarse con la
denunciante, dijo que ha tenido que concurrir a la policía de investigación es
a declarar, ante esa situación, y por la victimización, le pidió instrucciones al
señor fiscal y la señorita su asistente le dijo que entregue los antecedentes a la
Brigada de Delitos Sexuales.
s) Testimonio de Andres Sebastián Saez Carrasco, , subinspector de la
Policía de Investigaciones, Brigada de Delitos Sexuales, desde hace 5 años,
desde el año 2005, quien indicó que dentro de las diligencias que realizó,
concurrió al liceo Polivalente Santa Juliana, en la comuna de Recoleta, se
entrevistó con el director Héctor Ponce, declara sobre los hechos denunciados
y le hace entrega de un informe de los hechos de los que tomó conocimiento,
después entrevista a la psicóloga Claudia Ponce, que declara sobre los
mismos hechos y señala las entrevistas que tuvo con el menor, adjuntándole un
informe como profesional, finalmente, con la subinspectora María Gacitúa,
concurrió al domicilio de la señora Darrigrande, la cual autorizó la fijación de
su domicilio y de su vehículo particular, el domicilio era en la calle Libertad
1290, era un edificio, en un condominio cerrado, no recuerda las
características del vehículo, lo fijó fotográficamente, era de color gris. La
importancia de la fijación del vehículo, era porque según los antecedentes
que se habían obtenido en la investigación, era ahí donde la señorita
Darrigrande transportaba al menor. La subinspectora María Gacitúa estaba a
cargo del procedimiento, el informe se evacuó en abril del 2008 y la orden le
fue asignada en febrero de 2008, la orden la suscribía la fiscal señora Lorena
Barudi Labrin, no tuvo conocimiento de que esto se estaba investigando
paralelamente. La subinspector Gacitúa hizo las fijaciones fotográficas, él la
acompañó. Dentro de la documentación que se le hizo entrega en el
establecimiento, respecto de la profesora Darrigrande y su curriculum laboral,
antecedentes sobre su desempeño en el colegio, y respecto del menor, por
parte de la psicóloga, una entrevista que había tenido con él y unas
transcripciones telefónicos que el menor mantenía con la señora Darrigrande,
hacían mención a mensajes de texto, cree que era en papel oficio, estaban
escritos a mano alzada. La imputada manifestó que residía en calle Libertad,
no hubo ningún impedimento para realizar la fijación. La fijación se realizó
cuando la orden estaba a cargo de la Subinspector Gacitúa, ya no estaba a
su cargo.
t) Declaración de Daniela Paz Johnson Fica, Subinspector de la Policía
de Investigaciones en 2007 se desempeñaba en la Brigada de Delitos Sexuales
Metropolitana, y señaló que Tomó declaración a la madre de la víctima, al
padre de la víctima y al menor, en enero de 2008. Fueron tomadas en la
unidad, las presenció el Subinspector Juan Gallardo, esta diligencia formaba
parte de la orden de investigar, que tenía el Inspector Juan Gallardo. El menor
relató que asistía al colegio Santa Julia, que la profesora jefa doña María
Eugenia Darrigrande, desde el año 2007, aproximadamente a mediados de
año, comenzó a mediados del 2007, a decirle cosas, como que era un buen
alumno, que tenía que ser el mejor, después, para el cumpleaños del menor,
que fue en agosto del mismo año, le regaló una billetera, días después le
regaló una fotografía de ella, esto fue a fines de agosto del mismo año,
pasado una semana del colegio, le insinuaba cosas como que él le gustaba,
que se estaba enamorando, y posteriormente de unas semanas, lo empezó a
invitar a comer los días viernes, generalmente, lo llevaba a la sala de videos
del colegio, donde le decía que le gustaba, que estaba enamorada de él y le
daba besos en la boca. Ella lo sacaba de la sala, tenía la facultad de hacerlo,
lo sacaba y lo llevaba para allá, dice que lo llevó reiteradas veces a la sala de
video. También mencionó que los hechos ocurrieron en otro lugar, que lo
invitaba a comer que lo llevó reiteradas veces a un departamento que ella
tiene en calle Libertad, los días viernes lo invitaba a comer antes de ir al
departamento, y lo llevaba al departamento también, después del colegio. Le
dijo que la primera vez que fueron al departamento, fueron primero a ver a
una compañera que estaba enferma y después, en el departamento, ella se
desvistió se sacó toda la ropa de la parte superior, y que el menor le dijo que
eso estaba mal, que se vistiera, posteriormente, todos los viernes del mes de
octubre, después del colegio, ella lo invitó al departamento y tenían relaciones
sexuales. No quiso entrar en detalles, tuvo como una reacción media extraña,
como que le dio vergüenza le da la impresión, de expresar las relaciones
sexuales. El niño le manifestó que no quería seguir con eso y al decirle esto a su
profesora, ella se negó y le dijo que estaba embarazada, el menor se
sorprendió y se asustó y lo único que quería era que la mamá no supiera nada.
Esto fue en el mes de noviembre de 2007, cuando estaban en el
departamento. Él le dice que no quiere seguir yendo al departamento con ella
y ella le dijo que no, que continuaran yendo. Mencionó que le contó a la
mamá, cuando ya lo presionaron para que dijera lo que estaba ocurriendo,
pero tenía miedo de contar lo que estaba pasando, le dijeron que iba a ser
padre, eso le dio mucho temor, aparte que a la mamá no le gustaba que el
niño saliera el viernes en la tarde, y estaba teniendo problemas con la mamá y
le daba miedo que supiera más encima que era con la profesora, porque él
inventó que tenía una polola, pero una niña, de su edad. El día que se
descubre todo esto, él va con el papá al departamento donde ella lo llevaba,
lo el papá le quitó el teléfono de donde lo llamaba la profesora, los papás
hablaron con la profesora, se pusieron de acuerdo de juntarse con ella en el
colegio el día lunes, fueron al colegio y la profesora estaba con licencia
médica. No recuerda que el menor le mencionara que él tuvo contacto con
la profesora.
u) Testimonio de Maria Margarita Gacitúa Lorca, Subinspectora de la
Policía de Investigaciones, quien expresa que en el año 2007 trabajaba en la
Brigada de Delitos Sexuales, trabajaba las ordenes de investigar que llegaban
de fiscalía de los juzgados de familia, basado fundamentalmente en el ámbito
de los delitos sexuales. En relación a este caso, en abril, de 2007 recibió una
orden de investigar de la Fiscalía Centro- Norte, de la Fiscal Lorena Barudi en
base a esa orden de investigar, tomó las declaraciones de los familiares del
menor afectado, papá mamá y abuela, al conserje del edificio donde iba la
señora Darrigrande, a compañeros de curso del afectado, a profesoras del
establecimiento donde estudiaba el menor, efectuó fijaciones fotográficas de
la casa de la señora María Eugenia, su vehículo y en el establecimiento
educacional, además le tocó tramitar una orden del Juzgado de Garantía,
solicitando tráfico de llamadas de la señora maría Eugenia, lo cual llevó a la
compañía Claro y también solicitó unas actas de autorización para intervenir
los teléfonos de los familiares del menor, que en el fondo eran los que él
utilizaba. A medida que recibía las órdenes, ella informaba a la fiscal de las
cosas nuevas que iban saliendo a medida de las entrevistas. También pidió un
peritaje que se realizó en diciembre de 2008, que se envió a fiscalía, y hubo
otras órdenes que también diligenciaron otros oficiales, bueno primero este
caso lo había recibido otro colega, Andrés Sáez y después se envió a ella,
para juntar las causas. Mientras ella lo estaba trabajando, no recuerda que
haya estado investigando carabineros, a menos que sean pericias solicitadas
por la fiscal. La fijación fotográfica fue del Liceo Polivalente Santa Juliana que
queda en Avda México, esto como en junio de 2008, también efectuó la
fijación fotográfica de la vivienda de la señora María Eugenia en Libertad 1290
y la fijación del vehículo de ella, un Chevrolet Corsa color plateado que ella
tenía. Señala que efectuó una fijación de la intersección de Avda. Recoleta
con México, que era el lugar donde se señalaba que ellos se juntaban a la
salida del colegio. Se efectuó una pericia con personal de Lacrim en el
colegio, luego de entrevistar a las docentes, la idea era ilustrar las
concordancias con el lugar físico, por ejemplo, decían yo desde esta sala vi tal
situación, entonces la idea era fijar el lugar de forma de que eso se
corroborara. En base a las entrevistas que ellas dieron, se fijó la sala de clases
del menor, que era 6º A en ese tiempo, la sala de video, que queda justo en la
parte inferior de la sala de 6º B, y una bodega, eran los lugares donde los
docentes observaron conductas extrañas entre la docente y el menor.
Recuerda que la señora Otilia Romero dentro de todo lo que le señaló, le
cuenta que un día estaba con dos docentes y observa que en la sala de
video estaba sola con el menor, ella abre la puerta y observa que ellos se
estaban dando un beso en la boca. El vehículo de la imputada se fijó porque
el menor con la docente se iban en ese vehículo al domicilio de Libertad. El
edificio de Libertad era un condominio, tenía una caseta al momento de
ingresar, eran departamentos azules, un pasillo largo, frente al block donde
ella iba, había un estacionamiento, era en un 5 piso, al ingresar se ve un
mueble de madera, un espejo al costado estaba el comedor, el living al lado y
había un pasillo que colindaba junto a estos dos, y venía la cocina, por el
frente y un poco más abajo estaba el baño y después venían dos dormitorios.
Fiscalía exhibe a la testigo fotografías signadas D 3, en el auto de
Apertura, que fueron tomadas por esta testigo. La fotografía Nº 1, es la entrada
del condominio, está la numeración y la caseta donde estaban los guardias; la
fotografía Nº 2 es la numeración del condominio, se observan los edificios y el
acceso; la fotografía Nº 3 es Liberad, el estacionamiento y el acceso; la
fotografía Nº 4 es un pasillo, indica donde empieza al pasillo hacia el
departamento de la señora María Eugenia; la fotografía Nº 5 es un pasillo y
estacionamiento interior; la fotografía Nº 6 es la puerta del departamento; la
fotografía Nº 7 es la numeración. Era el lugar donde se señalaba que habían
ocurrido los hechos; la fotografía Nº 8 es el interior de la casa, se ve el espejo,
la puerta de acceso da de forma directa hacia un espejo, una mesa café, es
el comedor más acá el living; la fotografía Nº 9 es el comedor y una mesa con
una impresora, la fijación fue en junio de 2008; la fotografía Nº 10 es un mueble
con figuras; la fotografía Nº 11 es un acercamiento al espejo y al mueble de
madera con fotografías; las fotografías Nºs 12 y 13, son acercamientos a las
fotografías; la fotografía Nº 14 es la cocina; las fotografías Nº 15, 16, 17 y 18,
corresponden al baño; la fotografía Nº 19 es la habitación señalada como
habitación principal, esto era para corroborar los dichos del menor, el menor
hablaba de una habitación con una cama de dos plazas con dos veladores;
la fotografía Nº 20, es lo mismo, señaló que el cubrecamas no era el mismo que
cuando él iba, que el que estaba en la otra habitación, era el que
correspondía a esta cama cuando él iba; la fotografía Nº 21, dijo que no era la
tele que estaba cuando él iba; la fotografía Nº 22 es un acercamiento; la
fotografía Nº 23 es una vista del interior hacia el exterior; la fotografía Nº 24 es
la otra habitación, con la tele y el cubrecama que él señala estaba al otro
lado; la fotografía Nº 25, es un acercamiento; la fotografía Nº 26 es la tele que
él señala que estaba al otro lado; la fotografía Nº 27 los dos veladores y la
mesa; la fotografía Nº 28 son cuadros de las habitaciones; la fotografía Nº 29
hay unas fotos ; las fotografías Nº 30, 31, 32, 33 y 34, son fotos; la fotografía Nº
32 es la fotografía que estaba en la otra pieza, estaba la señora María Eugenia
con su hija. El menor hizo una descripción antes de que se le exhibieran las
fotografías, después se le exhibieron y ahí él hizo las correcciones, ella estuvo
presente en ese momento las preguntas las hizo la fiscal Barudi, ella no notó
que hubieran preguntas inductivas; las fotografías Nºs 35, 37 38 y 39 son
distintas vistas del vehículo Chevrolet Corsa que el menor habla que utilizaban
para desplazarse, también habla que tenía esta especie de parrilla que tiene
arriba; la fotografía Nº 36 muestra la patente VB 2121; las fotografías Nºs 40 y
41, son vistas del interior del vehículo; la fotografía Nº 42 es la intersección de
Avda. Recoleta y Avda. México, lo tomó porque se señala ese lugar como el
punto de encuentro, estaba en la misma calle del colegio del menor; las
fotografías 43. 44 y 45, son otras vistas de las intersecciones donde ellos se
juntaban; la fotografía Nº 46 es el liceo Santa Juliana, ella efectuó una fijación
y el perito, en diciembre, realizó otra; la fotografía Nº 47 es la numeración; las
fotografías Nºs 48 y 49 son vistas del frontis; la fotografía Nº 50 es una vista de
la recepción; la fotografía Nº 51 esta vista, indica donde estaría la sala de
profesores. Una vez entrevistadas los docentes, se entrevistó a una inspectora
de patio que señala que trató de abrir la puerta y estaba cerrada, le pareció
extraño, porque esta puerta no se cierra, ella permaneció ahí, y salió Sebastián
y se escuchó la voz de la señora María Eugenia, todas las salas tienen pestillo
por dentro; las fotografías Números 52 y 53 corresponden al acceso de la sala;
las fotografías 54, 55 y 56 son tomas del interior de la sala; la fotografía Nº 57 es
frente a la sala de profesores, corresponde a una bodega. Una profesora Otilia
Romero señala que necesitaba un equipo para su clase, y la señora María
Eugenia y el alumno fueron a la bodega a buscarlo, y como tardaban mucho
en volver, ella fue a ver, le pareció muy extraño que cuando la vio, la señora
María Eugenia se puso a barrer; las fotografías números 58, 59, 60, 61 y 62 son
vistas del patio de los alumnos más grandes; en la fotografía Nº 63 se aprecia
una reja que divide los sectores de los alumnos de la media de los alumos de la
básica; la fotografía Nº 64 son salas de la básica; la fotografía Nº 65 es el patio
de la básica; la fotografía Nº 66 es el acceso al segundo piso y las sales de
clases, los niños estaban en clases; la fotografía Nº 67 es la sala del menor,
indicada con una flecha; las fotografías Nºs 68, 69 y 70 son acercamientos a la
puerta, que tiene candado por fuera: la fotografía Nº 71 es por dentro; la
fotografía Nº 72 son las ventanas que ahora estaban sin cortinas, anteriormente
sí se usaban, se lo dijeron las docentes y el inspector, eso se le informó en forma
general, porque ella preguntó por qué no había cortinas, y le dijeron que
debido a esta situación, se retiraron las cortinas; la fotografía Nº 73, es una
fotografía con vista hacia el exterior, ahí se ve que la docente observó desde
la sala del fondo, hasta esta sala, la señorita María Gloria Prado observó que la
docente y la menor permanecieron en una clase, quedando solos, cerraron
las cortinas, la puerta se cerró, la señorita Leonor Lazo vino a la sala pero no
pudo entrar, después, sale Sebastián, vuelve y después la docente sale,
actualmente hay visillos, antes había cortinas gruesas por las que no se podía
ver, la distancia entre sala y sala no puede señalarla, pero es suficiente para
poder ver si alguien salía; la fotografía Nº 74 es la sala desde donde la señora
observó hacia la otra sala; la fotografía Nº 75, arriba es la sala del 6ºB que tenía
visión hacia la sala de 6º A, y la sala de video, que está justo abajo, la
fotografía 76 es la sala de video con los alumnos en clase; la fotografía Nº 77
muestra que tiene pestillo por dentro; la fotografía Nº 78,es otra vista, antes ahí
había cortinas y ahora no.
A los conserjes del edificio se les tomó entrevista, cuando ella entrevistó
a los conserjes, ninguno dijo haber visto ingresar a la docente con otra persona
que no haya sido el padre y el hijo, se hizo un set fotográfico y reconoció el
niño las fotos 5 y 9, que correspondía a don José Castro Aguilera y a don
Germán Herrera Arcos. El set incluía fotografías de los conserjes y otras más
que se ponen, para no tener una mirada preconcebida, el niño directamente
los apuntó, dijo “yo lo vi a él y a él, y ellos me vieron”. Eran alrededor de 16
fotografías las fotos venían con el números, sin nombres. Ella fue al condominio,
habló con la administradora y le solicitó las personas que trabajan en los
accesos de calle esperanza y calle libertad, puede que haya más conserjes,
pero se limitó a esos.
La señora fiscal exhibe a la testigo: Otros medios de prueba D2: al
observar la fotografía N° 1 (son 6 fotografías) dice que son algunos conserjes
que ella entrevistó y dentro de ellas, el menor señaló al Nº 9, don José Castro, y
en la fotografía Nº 2 a Germán Herrera, que correspondía a la fotografía 5. Lo
que esto indica, es que el menor concurrió al lugar, y los reconoce, si un menor
no ha ido, podría haber señalado a cualquier otro, porque ella puso en el set
personas que no tenían nada que ver con el tema, había 2 o 3 fotografías de
personas que no eran conserjes. Era la primera vez que veía las fotos. Por lo
que recuerda, de las 12 personas, 7 serían conserjes del edificio. Los otros, son
detenidos también del ámbito de abuso sexual.
Señala que estuvo presente en la declaración del menor en fiscalía, la
idea era establecer que el menor describiera con mayor detalle el lugar y al
percatarse de la forma cómo lo describe, da a entender que el menor estuvo
ahí, por el nivel de detalle, lo que más le llamó la atención fue la descripción el
baño, dio detalles que una persona memoriza cuando ha ido en más de una
ocasión, especialmente si se está nervioso, no se memorizan detalles del lugar
cuando se va una sola vez. De acuerdo a la versión del menor, esto habría
ocurrido entre agosto y noviembre de 2007. Se confrontó las declaraciones de
los docentes y los alumnos, que concuerdan, tenemos una constante de sacar
al menor de la sala, concurrir a observar clases, los menores lo repiten, había
conductas extrañas, la profesora se acercaba mucho, más allá de los
problemas que tenía el menor antes, la misma señora María Eugenia había
derivado al menor donde la psicóloga, las docentes presenciaron un delito.
Había bastante concordancia. Eran compañeros de trabajo, no ve que ellas o
los menores tuvieran algún otro fin para hablar de estas cosas, además la
concordancia daba para pensar que no había algo más. Las docentes
señalaban que la conducta de que ella retiraba al alumno de la sala se lo
hicieron saber y ella reaccionó de forma alterada, diciendo que era la jefa y
podía retirarlo cuando quisiera, ese es el conflicto que ella observó, pero todo
iba hacia el menor. Una inspectora general, Ana Guerrero dice no haber
observado nada en su horario laboral, pero sí describió que doña María
Eugenia tenía una conducta muy voluble en relación a los compañeros de
trabajo. Entrevistó niños, Mauricio, Jeremy, Camila, Catalina y Alexandra, la
mayoría hablan de hechos de 2007 a mediados, señalan que la señorita iba a
la sala, sacaba al menor, que presenciaba la clase, había rumores en el curso
que se juntaban en los recreos y que esto les llamaba la atención. La mayoría
hablaba bien de ella, que era exigente, no obstante, señala que los retaba
cuando se portaban mal y todos concordaban en el tema de los gritos, que
gritaba cuando se portaban mal. Pero en general hablaban bien de ella.
Tomó conocimiento que la separación de sus padres, que fue una situación
que a él le afectaba bastante, la psicóloga señala que atendió al niño
cuando tenía 9 años, pero vio que tenía herramientas suficientes como para
poder salir adelante. No necesitó derivarlo con otro especialista, en el año
2006 también doña María Eugenia le pidió que viera el niño, por un problema
que tenía con el padre, pero también salió adelante.
Indica que a la señora María Eugenia se la detuvo en el domicilio de los
padres, de la comuna de Las Condes, y se concurrió a Libertad, había
antecedentes que decían que no vivía ahí, pero al ver la pieza encontraron
una gran cantidad de ropa interior, había cosas que daba a entender que ella
iba ahí, que no era una casa deshabitada. Detuvo a la acusada con el
inspector Juan Gallardo y la inspector Hellen Días. Se la detuvo en Ana María
Carrera 51, domicilio de los padres. Ingresaron, al principio se les puso
problemas, se informó la orden, estaba un hermano presente, se le explicó la
situación, ella, estaba muy alterada, en un minuto, pero después se mostró
llana a cooperar, una vez que estuvo detenida. No hubo oposición de parte
de ella. La mamá y la hija estaban alteradas y es normal, después la situación
se dio. Se tomaron fotos de ropa interior negra, porque el menor hablaba de
ropa interior negra. Le llamó la atención la descripción detallada, que el niño
pudiera decir, cuando yo fui, esta mesa no estaba aquí, o que dijera, aquí
estaba un mueble café grande o que justo abriendo la puerta, hay un espejo,
son pruebas físicas y concluyentes.
La señora Otilia no le comentó que la señora María Eugenia jugaba a la
botella con ellos, a los menores les complicaba bastante hablar, fueron bien
escuetos, se les dijo que ella venía a entrevistarlos por lo que ellos sabían que
pasaba con Sebastián, ellos lo sabían, porque era un comentario en el
colegio. Para dar una apreciación criminalística, debe llevar una investigación
previa. Expresa que además llevó un oficio del Juzgado de Garantía a la
compañía Claro, era la orden del juez y ella lo llevó.
La fijación fotográfica fue voluntaria, ella habló con la señora María
Eugenia y ella lo autorizó, se contactó telefónicamente con ella acordando
concurrir al departamento, no se acuerda donde se juntaron, recuerda que
salieron después a ver el auto, fue con un colega, con Andrés Saez. Agrega la
testigo que estaban las tres, con Leonor Lazo y María Gloria Prado, que ella va
y ve la situación. Al menor le exhibió las fotos del departamento, desconoce lo
que se iba a hacer en juicio.
Refiere que ella entrevistó a los conserjes que estaban en la portería de
Libertad, que era los que ha nombrado, solamente uno no la conocía, los
demás sí la ubicaban. Conocían algunos a los padres y otros a la hija, no
reconocieron al menor. Ellos tenían turnos, dos turnos de día, dos de noche y
dos días libres, era de lunes a domingo, dos días libres, dos días turno de día y
dos días turno de noche, es lo que señaló don Germán. A estas dos personas
se les volvió a entrevistar en vista de los reconocimientos, pero don José Castro
dijo no recordar al niño, pero puede ser que el menor lo haya visto a él, lo dejó
como en el aire.
Consultada explica que en sus tres años de escuela se le hizo
psicología, tiene especialidad en delitos sexuales, tiene un seminario en
Canadá. No tiene expertice en estructura de memoria. Dentro de su carrera
casi todos los días entrevista a menores, es muy difícil que un menor recuerde
con tanto detalle, un lugar si va una o un par de veces, eso no es esperable, es
muy poco esperado y probable que esto ocurre, esto lo dice en base de la
experiencia.
No es un conflicto que se haya generado entre ellas por rencillas, sino
que la señora María Gloria y la señora Otilia le preguntan cual era la razón
para sacar tanto al niño de la sala de clases y en base a esas preguntas ella
reacciona. El término voluble lo atribuye a que era cambiante. Los niños no
dijeron que se habían dado besos, pero sí que se acercaban bastante.Al niño
se le pidió describir el lugar y después se le exhibieron las fotos y empieza con
las correcciones. Al sitio del suceso no fue con el menor.
La ropa interior se levantó en presencia de la señora María Eugenia, era
color negra, alguna tenía como pintitas, lunares, era para demostrar que el
lugar no estaba deshabitado, si había ropa interior indicaba que iba más de
un día.
La señora fiscal exhibe a la testigo la evidencia E 3: 615521 es el NUE son
cuatro sobres, es la ropa interior que se levantó en Libertad, un calzón negro
sin marca, un sostén negro, sostén negro con estampados y un calzón negro.
Esa ropa fue encontrada en la pieza principal, estaba la cama y frente había
un mueble, un closet, recuerda haber ido a esos cajones, había una cantidad
considerable. La casa estaba amoblada completa y todo limpio.
Prueba pericial.
1.- Rinde declaración Mauricio Ortega Alarcón, quien manifestó que es
ingeniero de ejecución
en electricidad, con mención en electrónica y
comunicaciones, actualmente se desempeña como perito del Laboratorio de
Criminalística de la PDI. El 22 de mayo de 2008 la fiscalía Regional
Metropolitana Centro Norte, solicita mediante oficio, a Laboratorio de
Criminalística Central, de la PDI, específicamente a la sección electro-
ingeniería periciar un teléfono celular marca Nokia modelo 3220 con la
finalidad de obtener información que pudiera estar registrada en la memoria
del equipo celular de información que pudiera ser de utilidad a la causa
investigada. Esa pericia se le endosó a él, él retiró el equipo de la sección
custodia del Lacrim Central, procedió a periciarlo, cargó su batería, que
estaba desgastada, lo individualizó, con su correspondiente número email,
también individualizó la tarjeta Sim instalada, operador de servicio Entel PCS y
procedió a acoplarlo al software de extracción de información de teléfonos
celulares, un software forense Móvil Edit, en su versión 2.6, mediante conexión
infrarroja que es una de las prestaciones que tiene el equipo celular y extrajo la
información contenida tanto en los registros del equipo como en la tarjeta Sim,
encontró información de agenda telefónica, llamadas entrantes, llamadas
salientes, llamadas perdidas y mensajes de texto entrantes y salientes.
Básicamente eso, lo plasmó en un informe pericial Nº323 –mecánico y lo
remitió a la fiscalía que solicitó el peritaje.
El software es ocupado por distintas policías alrededor del mundo,
Inglaterra, Alemania EEUU, Australia, este software entra a la memoria del
equipo y a nivel de hardware, bajo nivel, extrae información, no a nivel de
usuario. Nivel de hardware es nivel de equipamiento, de electrónica.
Primeramente tiene que acoplar el teléfono al software a través de algún
puerto de comunicación, entre el equipo y el teléfono celular, lo hizo por
conexión infrarroja, hay distintos tipos de conexión, conexión serial, conexión
infrarroja, y el software analiza instantáneamente el equipo y extrae la
información que se necesite.
El señor fiscal exhibe al perito la evidencia material E2, el perito examina
la cadena de custodia, dice, “son mis sellos, corresponde al teléfono celular,
que tiene ciertas características que me permiten reconocerlo como tal”.
La agenda telefónica son los nombres de contactos, asociados a los
números telefónicos, el registro de llamados, entiéndase llamadas entrantes,
que son las llamadas recibidas, llamadas salientes, que son las llamadas
emitidas, llamadas perdidas, que son las llamadas recibidas, pero no
contestadas, y mensajes de texto recibidos y enviados.
El Ministerio Público exhibe al perito otros medios de prueba D 8, lámina
10: lo que se ve es un extracto de la agenda telefónica, son tres columnas, la
primera un ordenamiento, la segunda los nombres de contactos que están
grabados en el equipo celular, asociados a los números, en la tercera
columna. Lámina 11: es continuación de la misma tabla, lee el número 77:
nombre de contacto “seño” número asociado 77722786 si no se equivoca, o
63, se ve la continuación, después viene llamadas entrantes, una sola entrada,
son 5 columnas, la primera un ordenamiento, contacto número asociado,
fecha en que se emitió la llamada y hora en que se emitió la llamada. Cuando
no aparece nada en contacto, no lo reconoce el equipo como asociado a
algún nombre de contacto: lámina 12: la tabla 3 registro de llamadas salientes,
que son llamadas emitidas, también son 5 columnas, tenemos 11 entradas,
columna contacto, columna número, fecha y hora en que fueron emitidas,
salientes; la tabla siguiente es la tabla de llamadas perdidas, son las llamadas
realizadas de algún número telefónico y que no son contestadas. La lámina 13,
es la última entrada de la tabla Nº4 y tenemos los mensajes de texto entrantes.
Son 6 columnas, la primera es de ordenamiento, en la segunda aparecen los
nombres de contactos asociados a números telefónicos, en la tercera figuran
los números, en la cuarta aparecen la fecha y hora en que fueron emitidos los
mensajes y los mensajes propiamente. La fecha y la hora no se registra en el
teléfono, es un registro de la compañía: la Lámina 14, mensajes de texto
salientes, son 6 columnas como en el caso anterior, ordenamiento, contacto,
número de horas en que fueron emitidas y mensajes de texto. El número 900 es
un número de servicio programado por el operador en el teléfono, son
mensajes de email, llegan al buzón de despacho del operador y se
despachan a medida que lo recibe.
El señor fiscal le exhibe parte de su informe y señala que el número de
email viene siendo como el Rol único Tributario del equipo celular, es el
número internacional de identificación del equipo móvil, es un número que
está normado por la Unión Internacional de Telecomunicaciones, e identifica e
individualiza el equipo telefónico y lo hace único en la red. Se plasma en una
etiqueta posterior que está bajo la batería y también se registra digitalmente
en el equipo.
El señor fiscal exhibe al perito la evidencia E 2, reconoce el teléfono
celular peritado. Fiscalía le solicita que lea el email. El perito saca la tapa
posterior, retira la batería, indica la placa identificatoria del equipo que instala
el fabricante. Aparece ahí el número email, 355400/00/340920/1. Es el número
que él informó en su informe pericial. El email del aparato es único e irrepetible.
El chip es el módulo identificador de suscriptor, involucra toda la información
de abonado, que está asociado a la compañía, también tiene un número de
serie física que lo individualiza, pero no es el teléfono propiamente tal. El email
individualiza el teléfono, el equipo, no el chip. Para individualizar el chip hay
otro número de serie física, ICCD, que es el número identificador de tarjeta de
circuito que viene impreso sobre el chip y también viene grabado digitalmente
dentro del mismo dispositivo.
2.- Maria Alejandra Galaz Silva,
cabo primero de Carabineros,
especialista en criminalística con mención en investigación policial. Trabajó en
el departamento OS9 en la sección análisis y la fiscal Lorena Barudi le hace
entrega del tráfico telefónico 77722786 el cual consta de 1650 registros entre el
7 de agosto y el 31 de diciembre de 2007 y le hace entrega del informe
pericial Nº323 de la PDI de la Sección de Audio y Fonética de ellos y le señala
que dentro dela pericia que ella necesita realizar, le entrega 4 números
telefónicos a objeto de determinar si estos se encuentran o no en el tráfico
telefónico. Los números telefónicos que le hizo entrega son los teléfonos
84444874, que dice víctima, también le hace entrega del teléfono 92114483,
que dice mamá; y el teléfono 82908370 que dice papá y un teléfono del
negocio que es el 27356540, teléfono negocio. Cuando le hace entrega de la
planilla excell que es un formato XLS, se exportaron los registros a TXT y se utilizó
un software denominado Análisis Notebook, versión 6.0 que es un software de
diseño gráfico que permite analizar gráficamente la información contenida en
el tráfico, las planillas excell que es la originaria del tráfico telefónico. Al
importarlo, ella usa un software que se denomina Análisis Notebook que es
versión 6.0 que capta toda la información y la grafica colocando en el centro
el número investigado y a su alrededor los números de contacto. Se consulta al
software si los números papá, mamá, victima y negocio se encontraban en
este tráfico concluyendo que efectivamente el teléfono de la víctima figuraba
en 445 oportunidades, el teléfono de la mamá en 2, el del papá en 5
oportunidades y el del negocio en 61 oportunidades. También se le solicita
verificar si el Simcard había sido removido, el Simcard es el chip del teléfono.
Se concluyó que el día 23 del 11, el chip fue utilizado con el mismo número
email que finaliza en 519, sólo había sido removida la Simcard el día 26 del 11
de 2009 a las 14.45 00, y cambiado al email que finaliza en 432. La pericia
establece
como
conclusión,
que
efectivamente,
los
cuatro
números
entregados se encontraban en tráfico telefónicos y la Simcard o chip del
teléfono no había sido removido sino hasta el 26 del 11. A las 14.45.00. figura en
los registros del tráfico telefónico el número del email, sólo figura cambiado en
esa fecha y hora, finaliza primero con el número 519 y luego lo cambia al que
finaliza en el número 432, son 15 dígitos, pero son muy largos para aprenderlos.
El tráfico telefónico contiene tres números y cada número es
independiente y dependiente entre sí. El chip depende de un número que es
ICID, que si el teléfono cambia, y se mantiene el número, -cuando se pierde
por ejemplo- la compañía mantiene el número pero cambia el ICID, en este
caso, siempre se mantiene con el teléfono que finaliza en 566. Además, si se
hubiese sacado al chip antes o después, queda registrado, como quedó el día
23 del 11 y fue inserto en otro aparato móvil el día 26 del 11 a las 14.05, si se
hubiere sacado antes, cada movimiento queda registrado en el tráfico, en el
rubro email.
Se le exhiben: Otros medios de prueba, el signado D 10, del auto de
apertura, al observarlo dice acá estamos viendo el importe del Software de
Análisis Notebook que permite graficar el teléfono investigado el 7722786 y en
su contorno están todos sus números o mallas sociales, de contacto, sean estas
llamadas entrantes, llamadas recibidas o mensajes Cms. Se destacó los
números que se solicitó en la pericia. En el centro está el 7722786, es el número
sometido a la pericia. El número 84444874 es el que se le solicitó si estabas
dentro del tráfico, y efectivamente, se encontraba el número señalado, hay
455 llamadas, sean llamadas entrantes llamadas salientes y mensajes Cms. El
teléfono 22114483, se singó con el nombre de mamá, también registra
contactos telefónicos con el teléfono periciado, en dos oportunidades; el
teléfono del papá 82908370, quien registra 5 contactos telefónicos. El número
27352540 es el teléfono que dice negocio, es un teléfono de red fija que
registra 61 contactos telefónicos al teléfono periciado. En relación a la red
social, el que más contactos tenía era el teléfono de la víctima, que tiene 455.
Se le exhiben: Otros medios de prueba, el signado D 11: explica que
estamos viendo el día 23 de noviembre de 2007, en el cual el teléfono que se
encuentra sometido a pericia con ya una descripción un poco más detallada
referente a las comunicaciones que sostuvo el día 23 del 11. En el centro se
muestra el detalle de todas las comunicaciones que se mantuvo. Se puede ver
llamadas entrantes, el día 23 del 11 del 2007 a las 10.26 PM, 22.26.00 en formato
24, con 16 y 55 segundos de duración. Estos contactos son con el teléfono de
la víctima, exclusivamente. Salidas Cms se refiere a que el teléfono sometido a
pericia realizó un mensaje Cms y lo envió al teléfono que figura de la víctima.
Indica la fecha, el horario, formato 24, formato D8, y la duración. El teléfono
del papá, el día 23, registra dos comunicaciones, dos llamadas entrantes, a las
22.39,00 y a las 12.50.00.Llamadas entrante significa que el número del papá
llama al teléfono investigado. El teléfono del negocio tenía 3 comunicaciones
el día 23. A las 20:16 pm, 10:17 pm, 07:54 am. Llamada salida, el teléfono
investigado llama al teléfono del negocio. El teléfono de la mamá tenía 2
comunicaciones a las 22.23, a las 22.27.
A continuación se le exhibe el Plano signado D 12: indica que estamos
viendo el importe de la planilla original del XLS o el formato Ecxcel que se
conoce en el paquete de office, en la columna está el número de código que
otorga la compañía, que es el número de entrada llamante,201, son mensajes
de Cms, la fecha, la hora, 08. 24, la duración, la duración en segundos, existen
dos formatos, los dos son válidos. El origen, el teléfono sometido a la pericia
que es el 7722786, el teléfono de los números de contacto, el email que
corresponde al código del aparato móvil, es un código que refleja el aparato,
consta de 19 o 20 números generalmente, el ICID, que es el número de registro
que va acompañado con el número, este número es el Simcard, y el número
original del Simcard. Esta identificación va a la mano con el número telefónico.
Es el número que acompaña al chip, técnicamente, no se puede aprender el
número, sería muy largo, es el que otorga la compañía, pero si yo quisiera
cambiar el número telefónico o mantenerlo, ese número siempre va a ser el
mismo para la Simcard. El 77722786, tiene el número ICID que finaliza en 566,
eso no cambia. Queda reflejado el cambio de email, que se realizo, siempre
se mantuvo finalizado el 519, hasta el día 26 del 11, a las 14.05,00, en el cual
cambia, y tenemos un nuevo número que finaliza en 432, registrándose el
mismo número telefónico con la misma descripción de la Simcard. Se cambió
el chip de un aparato móvil, no así la Simcard. Según lo que refleja el tráfico
telefónico antes de la fecha, no existe modificación en el email, se mantiene el
519.
A petición de la defensa, se le exhibe nuevamente la imagen D 12. y se
le consulta qué significa que el mismo número figure como teléfono de origen
y de destino, responde que eso obedece a un tema técnico. Cuando yo llamo
por teléfono, este teléfono, cuando nosotros vemos las comunicaciones que
suben, suben a una malla de comunicación, y pasan a una central. Esas
centrales, cuando el teléfono está ocupado o está fuera de cobertura, le
devuelven un box, un mensaje, que en el fondo me hace un registro como del
mismo teléfono mío, indica que es un tema de comunicaciones. El del día 24
es un box, no es un Cms., indica que le hace un rebote virtual, desde la central
de la compañía hacia mi teléfono, por eso me registra el mismo teléfono, no es
que yo haya llamado o se me haya llamado sobre los mismos teléfonos. Así
funciona el tema de la central de las compañías, es una gaceta central que
tienen las compañías. Cuando no aparece email, es porque la compañía no
captó el email o fue muy corta la duración de la llamada que no alcanza a
captarlo. No sabe el email que actuó en esa precisa llamada. Llamadas de
destino 0, dependiendo de la compañía, puede valerse a un servicio que yo
pueda llamar o a teléfonos que no arrojan información, una troncal o una
compañía, pero en este caso se refleja el tráfico tal cual es y queda en 0.
A continuación el señor fiscal le exhibe otros medios de prueba, D 9: 14
análisis gráficos Software de Análisis Notebook. Al observar la imagen Nº1, dice
que estamos viendo el extracto dela planilla XLS con las comunicaciones que
se sostuvo solamente con la víctima el día 23 del 11 de 2007. Son los contactos
del día 23. La imagen Nº 2, en comparación con el informe pericial que se
desarrollo en la PDI, se comparó los mensajes que levantó la PDI del teléfono
de la víctima, con los números del tráfico telefónico a objeto de comparar las
horas, si son contestes con los levantados en el teléfono móvil y tenemos un
desfase de 1,5 a 2minutos, que obedecería al horario del servidor que tenga la
compañía y estos desfases al teléfono en el que figura el registro. Los horarios
son muy similares y desfasan sólo en 1 a 2 minutos, el desfase obedece a los
horarios de los servidores. La imagen Nº 3. Al igual que el otro es el extracto del
detalle de las planillas XLS en el cual se reflejan las llamadas entrantes que se
realizaron al teléfono investigado o periciado, con el teléfono de destino, en
este caso el del papá, en cuyo caso es entrante, el papá llama al 7722786 en
dos oportunidades, a las 12.50 pm y a las 10.39 pm. El siguiente también es un
extracto de detalle con las dos comunicaciones que registra el 23 del 11 el
teléfono de la mamá, el 92114483, como llamada entrante, vale decir, que el
teléfono 22114483, llama al teléfono 7722786. La que sigue son las tres
comunicaciones que también tuvo el día 23 del 11 el teléfono del negocio, el
27352540 con el teléfono llamadas salida, en este caso cambia, sometido a
pericia, 7722786, realiza 3 contactos, en los horarios desde las 7.54, 22. 16 y
22.17; imagen 4: la última es una grafica que permite reflejar una Simcard o un
chip, son los emails históricos que ha tenido desde que se inicia el tráfico
telefónico con los 1.650 registros, teniendo con el email 519, son 740 llamadas,
una con esta email, que es la que da inicio a la vida del teléfono en el tema
del tráfico y 196 con el 432, que fue incorporado posteriormente el día 26 del
11 de 2007. Es el último mail que se registra. Indica el primero, el segundo y el
tercero. El número 519 se mantiene constante hasta que cambia con e 432 el
26 del 11. El día 23 no hubo cambio, sólo el día 26 que fue cambiado con el
que finaliza en 432, el tráfico telefónico analizado es desde el 7 de agosto de
2007 al 31 de del 12 de 2007, con 1560 registros. Existe una comunicación que
da origen al tráfico telefónico el 7 de agosto de 2007 donde muestra un email
distinto, luego pasan dos meses y se incorpora el 519 hasta el día 26 del 11 de
2007 en que se cambia por el 432. Del mismo Simcard se efectuaron las
comunicaciones, el Simcard es el teléfono el 77722786 y lo que cambió, es el
equipo móvil, el aparato. Yo retiro la Simcard, la inserto en el 519, la retiro el día
26 del 11, y la vuelvo a insertar en el 432. El tráfico telefónico el día 23 y hasta el
día 26, refleja que no es posible que la Simcard haya sido botada y no se haya
incorporado ningún otro teléfono, es más, si bien existen los mensajes Cms. la
plataforma de los mensajes Cms, no viene informando el email, está en
blanco,
el
día
23
del
11
a
las
22.00
horas
se
realizan
llamadas,
aproximadamente a las 20.00 con el mismo equipo y el mismo Simcard, hasta
el día 26, por lo tanto, el Simcard permaneció en el equipo móvil hasta el día
26 y se generaron comunicaciones con ese teléfono y con ese Simcard.
El tráfico de llamadas lo recibió en formato XLS, es Microsoft Excell , del
paquete de Office. La el tráfico estaba estructurada con el número del
registro, vale decir el sentido, el 21201, que es el código, el sentido, la fecha, la
hora, la duración, el número del teléfono, el email y el ICID que le fue enviado.
Acto seguido el Ministerio Público exhibe a la testigo el documento C 4.
Es un tráfico telefónico impreso del teléfono 7722786, de todas las láminas, a
ella le llegó formato digital, pero también lo había visto impreso, es lo mismo.
Sobre esta base se somete lo que le llega en archivo digitalizado.
El chip, sometido a situaciones extremas de agua o calor, es difícil que
siga funcionando, porque usa circuitos de contacto, si es extremo calor o
mucho frío se puede dañar. Si lo pone al agua, lo saca al tiro lo seca bien,
puede que siga funcionando, depende de la fabricación del chip.
3.-
Rodrigo
Muñoz
Berrios,
perito
fotógrafo
de
la
Policía
de
Investigaciones de Chile el 22 diciembre de 2008 entre las 10.20 y las 12. se
concurrió al liceo polivalente Santa Juliana, en compañía de la planimetrista
Gladis. Y la subinspectora Maria Margarita Gacitúa Lorca, se procedió a fijar
accesos, patio de enseñanza media y el patio de enseñanza básica, el
documento visual que corresponde al elemento visual fotográfico, es el sí un
elemento probatorio, respecto de la pericia que se realizó en esa ocasión y en
ese lugar. Tomó 95 fotografías, bajo la instrucción del oficial a cargo, que tenía
todos los antecedentes del caso. Se empieza individualizar el lugar, a fijar el
frontis, su numeración, de ahí se empieza de la general a lo particular, de lo
particular al detalle y del detalle al máximo detalle, desde arriba hacia abajo.
La señora fiscal exhibe al perito fotografías del set D 3: la fotografía Nº 1
es el frontis del establecimiento, se aprecia la reja de acceso principal y el
acceso, parcialmente; la fotografía Nº 2 es un acercamiento a la reja de
acceso, se observa parcialmente numeración, el nombre del colegio y la
puerta del acceso al sector de portería; la fotografía Nº 3 es un acercamiento
a numeración; la fotografía Nº 4: es un vista al interior de la portería, a izquierdo
y derecha dos pasillos de acceso y el acceso principal al patio de enseñanza
media. En el interior del colegio se encontraba el patio de enseñanza media
que es el que se ve al fondo, y por un pasillo de acceso a mano derecha, se
llega al patio de enseñanza básica, que está separado por otra reja; la
fotografía Nº 5 es una vista a uno de los pasillos de acceso, se observa una
puerta por la que se ingresa a un pasillo de distribución que lleva hacia patio
de enseñanza básica; la fotografía Nº 6, corresponde a un contraplano de la
foto 4, está el ingreso principal y el otro ingreso mencionado en las fotografías
anteriores, es el que estaba a izquierda en la fotografía donde se muestra el
patio de la enseñanza media; la fotografía Nº 7 es el patio de la enseñanza
media, se observan diversas edificaciones, una, la otra, indica donde está el
otro acceso al patio de enseñanza básica y un corredor de distribución hacia
la enseñanza media; la fotografía Nº 8 es otra vista del patio de enseñanza
media, indica ahí el pasillo de distribución y a sala de computación; la
fotografía Nº 9 es un acercamiento a una de las edificaciones mencionadas
con anterioridad, es el pasillo de ingreso al corredor de distribución hacia la
enseñanza básica; la fotografía Nº10 es un acercamiento a ese acceso, se ve
una reja que está abierta, indica donde está el pasillo de acceso a enseñanza
básica; la fotografía Nº 11, es otra vista del patio de enseñanza media; la
fotografía Nº 12, es otra vista del corredor hacia la enseñanza básica desde la
enseñanza media, indica donde está el otro acceso a la enseñanza básica, en
el fondo; la fotografía Nº13 es el patio de enseñanza media, en el que indica el
acceso a otras dependencias donde estaría la sala de computación; la
fotografía Nº 14 es un acercamiento a ese sector, se observa el pasillo de
distribución que da al sector de portería y parcialmente a la puerta de la sala
de computación; la fotografía Nº15 es un acercamiento a la puerta de la sala
de computación; la fotografía Nº 16 es una vista del pasillo de acceso que
lleva al sector de portería; la fotografía Nº 17 es un acercamiento al otro
acceso que está al interior de la sala de portería, hacia el pasillo de enseñanza
básica. Se observa el ingreso cerrado. El sector de portería es donde está el
acceso hacia la calle y hacia el patio de enseñanza medida y el área básica
estaría por portería a mano derecha; la fotografía Nº 18 es una vista captada
desde el acceso hacia el pasillo de distribución de enseñanza básica, se
observa acceso a otro lugar y una escalera al segundo piso; la fotografía Nº
19, es un acercamiento al lugar antes indicado, acceso al segundo piso y otras
dependencias; la fotografía Nº 20, es un contraplano de la fotografía 18, se
observa el acceso a la portería; la fotografía Nº 21 es el pasillo de distribución
hacia la enseñanza básica, se indica un sector; la fotografía Nº 22 es un
contraplano de la fotografía anterior, se observa parcialmente, hacia la
derecha, la sala de profesores. Le da la impresión que es la única sala de
protecciones del lugar; la fotografía Nº 23, es una vista del sector, acceso a la
sala de profesores, al patio de enseñanza media, una multicancha y el acceso
al fondo al sector de enseñanza básica, el edificio y los patios de enseñanza
básica. Indica cual es la puerta de la sala de profesores, no sabe a qué
corresponde la puerta que está al frente; la fotografía Nº 24 es un
acercamiento de la puerta de acceso a la sala de profesores; las fotografías
Nºs 25, 26 y 27 son vistas al interior de la sala de profesores, se indica un sector
donde habría sido visto el afectado con la imputada, según la versión de la
oficial policial, subinspectora María Gacitúa Lorca, quien tiene mayor
conocimiento del caso y le iba haciendo referencia directa a la labor
investigativa que ella iba haciendo y planteaba los lugares de interés que le
interesaba plantear dentro de los informes. En las ventanas hay cortinas, y
soportes para colgar las cortinas, son cortinas que evitan ver de adentro para
afuera y de afuera hacia adentro. No sabe a donde da la puerta, le da la
impresión que es un acceso a un baño, o una sala de guardar, una pequeña
bodega. Descarta que sea entrada o salida. No se cercioró de lo que estaba
al otro lugar. En la foto 27 se observa el velo y parcialmente lo que está
ocurriendo afuera, o lo que está afuera como edificaciones, y cosas por el
estilo. Por lo que se acuerda, tenía un acceso, sería la puerta que indica; las
fotografías números 28 y 29 son vistas de la sala de la profesores, en la 28 se ve
un sector donde están los lockers y refrigeradores y microondas, y en la 29
casilleros de madera, que son más artesanales; la fotografía Nº30 es otra vista
al corredor que va en dirección a la enseñanza básica, acceso a la
enseñanza media. La sala de profesores estaría más al sur de la fotografía; la
fotografía Nº 31 es la barrera que tiene la multicancha, indica el acceso al
sector de enseñanza básica y el acceso a la multicancha; la fotografía Nº 32
es el acceso al costado de la sala de profesores hacia el patio de enseñanza
media; la fotografía Nº 33, está captada del pasillo de distribución de
enseñanza básica; las fotografías Nº 34. 35. 38. 37 38 y 40, son vistas de la
multicancha, el acceso a ésta, y el sector contiguo, indica donde está la sala
de profesores. Esta al costado izquierdo del arco de fútbol, en relación a la
fotografía; la fotografía Nº 39 es un acercamiento a la reja de protección de la
multicancha y vista desde el interior hacia la sala de profesores, la puerta azul
es la sala de profesores; la fotografía Nº 41, es una vista hacia el sector del
patio de enseñanza básica, reja que limita el acceso entre enseñanza básica y
media, la sala de profesores está contigua a la multicancha; la fotografía Nº 42
es el acceso al sector de enseñanza básica hay diversas edificaciones; la
fotografía Nº 43 es un acercamiento al acceso, indica donde está la
enseñanza básica; la fotografía nº 44 es otra vista desde el patio de enseñanza
básica hacia las edificaciones, se indica escalera de acceso al segundo piso;
las fotografías Nºs 45, 46, 47, son dos vistas desde el pasillo en el segundo nivel,
acercamiento a la escala, la 47 es una vista hacia el pasillo de la enseñanza
básica del segundo nivel, se indican dos accesos, dos puertas,
una
correspondería a la sala del niño, - sala del 6ºA el año 2007- que sería hoy el
5ºB y la otra sería hoy 5ºB; y que el 2007 correspondería a 6º B, la del fondo; la
fotografía Nº 48 es un acercamiento al acceso antes indicado; la fotografía Nº
49 es un acercamiento a la puerta. Una vez abierta, tiene un cerrojo con
candado, se observa señalética: la fotografía Nº50 es un acercamiento a la
señalética, correspondía al 5ºB en 2008; Las fotografías Nºs 51 y 52, son
acercamientos al cerrojo y candado de la puerta: la fotografía Nº 53 y 54, son
vistas interiores de la sala, se observa el ventanal y mobiliario, se realizó la vista
con la puerta abierta para ver si se puede ver desde dentro de la sala hacia
fuera, y se podía; la fotografía Nº 55, es también la sala, se tomó la foto poder
establecer si se podía ver hacia fuera, se podía; la fotografía, arriba se
observan rieles de cortinas, por lo que en algún momento debieron haber
cortinajes; la fotografía Nº 56, es un acercamiento a la ventana, se ve el interior
e la otra sala de clase; la fotografía Nº 57 es una vista interior..; la fotografía Nº
58, es un acercamiento al picaporte de la puerta, por su costado interno, eso
era para mantener la puerta cerrada, sólo tenía ese en el interior y por fuera
un cerrojo con candado; la fotografía Nº 59 es otra vista del pasillo, se observa
la otra sala y la puerta abierta; la fotografía Nº 60, es una vista de la sala y de
la puerta abierta; la fotografía Nº 61 es un acercamiento a la puerta, se
observa señalética del 5º A, que correspondía en el 2007 al 6º B; la fotografía
Nº 62 es un acercamiento a la puerta abierta se observa picaporte o cerrojo
en un superficie, junto con su candado; la fotografía Nº 63 vista al interior de la
sala, se observan cortinajes; la fotografía Nº 64 es otra vista de la sala, se
observa ventanal, parcialmente el pasillo de acceso a estas salas y la otra sala
de clases y la puerta abierta. No ve rieles de cortina arriba, ni siquiera soportes;
fotografía Nº 65, es un acercamiento a la ventana. Desde aquí se ve lo que
está ocurriendo dentro de la sala, se ve la oficial policial y la perito
planimétrica; él tomó la fotografía con un lenta gran angular, estaba a 75 o 50
centímetros del muro y en un ángulo de 45 grados en dirección a la puerta.
Aunque no es su área, cree que puede ser una sala de 6 x 3 o 4 x 3, esa vista se
pudo haber tomado desde atrás y se habría mantenido igual, el pilar podría
interferir con la vista de la puerta de la otra sala si la fotografía se toma en el
centro de la sala; las fotografías Nºs 66 y 67 son otras vistas al interior de la sala
de clases; la fotografía Nº 68, es una vista en oposición, se observa la otra sala
de clases, el pasillo de distribución y la esclarea de acceso; la fotografía Nº 69
es otra vista del pasillo de distribución hacia abajo. Se observa la escalera y se
indica otra sala de clases que correspondía a la sala de video, o audiovisual,
esa sala tenía indicios de haber tenido cortinajes completos; la fotografía Nº 70
es la sala audiovisual, esa sala está abajo y se puede ver desde arriba, desde
la escalera de acceso al segundo piso, al final de la escalera; la fotografía Nº
71 es un acercamiento a la puerta; la fotografía Nº 72 es la puerta cerrada. Se
observa en su exterior cerradura o cerrojo: la fotografía Nº73 es un
acercamiento a la cerradura; la fotografía Nº 74 es una vista de la sala de
clases; la fotografía Nº75 es otra vista a la sala de clases, arriba se ven soportes
de cortina, rieles de cortinas, lo que indica que las ventanas en algún
momento estuvieron clausuradas con cortinas; las fotografías 76, 77 , 78, 79 y 80
son acercamiento al ventanal a los soportes, a las barras de cortina y uno de
los rieles de cortina; la fotografía Nº 81 es una vista al armario, se indican
sectores donde hay rieles de cortinas; la fotografía Nº 85 es una vista interior del
riel; la fotografía Nº 86 es otra vista del interior de la sala de clases, hay diversos
soportes de cortinas en ambos ventanales; la fotografía Nº 87 es otra vista de
la sala de clases; la fotografía Nº 88, 89. 90, 91, 92 y 93, son acercamientos al
ventanal, rieles de cortina que están sobre los ventanales, y otros soportes de
cortina; la fotografía Nº 94 es la puerta de acceso a la sala de video por el
lado interno, de adentro hacia afuera; la fotografía Nº 95 es un acercamiento
al cerrojo.
Señala que la funcionaria Policial Gladys Bastías fijó planimétricamente
todo el recorrido, desde el acceso del colegio, sector de portería, sala de
computación, patios, sala profesores, salas de enseñanza básica y las salas,
que se fijaron una a una. La sala de video tiene que tener una iluminación
tenue o sin iluminación para poder hacer la proyección. Las cortinas debieron
ser negras o de un tono más oscuro. Los lúmenes es la cantidad necesaria de
luz que debe existir en un lugar para permitir la visualidad de algo. En esta sala
cuando él hizo la fijación, no estaban los equipos de protección, pudo ser un
data show, un televisor o algo más grande. Con la luz que aparece en la foto,
la proyección no se va a ver con toda la definición requerida, por la cantidad
de luz que se está viendo, sin cortinas, no se puede hacer una proyección en
esa sala, aporque tiene ventana con entrada de luz por la ventana y por el
costado izquierdo también.
4.- Andres Rosmanich Poduje, médico cirujano, del Servicio Médico
Legal. Señala que realizó un peritaje de sexología forense que efectuó el 18 de
diciembre de
2007, en
dependencias del Servicio Médico Legal le
correspondió examinar a un menor de 12 años, de iniciales SAJS, residente en
Recoleta. Venía acompañado por su madre y refería que entre septiembre y
noviembre de 2007, a fines, el 23 de noviembre, había mantenido relaciones
sexuales vaginales con una profesora, en varias ocasiones. La madre
contribuyó con información, señalando que su hijo había presentado cambios
en su conducta, especialmente tendientes a agresividad con sus compañeros
y autoagresivo, agresivo contra él mismo. El menor refería que esta profesora lo
había llevado a su departamento y ahí había tenido relaciones sexuales. La
madre señaló que su hijo era de buen rendimiento escolar. En el examen del
joven, se presentaba en buenas condiciones generales, se veía buen estado
nutricional, presentado adecuadamente, tranquilo. En el examen de la
extremidad cefálica no presentaba lesiones, en el cuello tampoco, era
simétrico, sin lesiones, el tórax también era simétrico no presentaba lesiones, el
abdomen plano, no presentaba lesiones y en las extremidades inferiores y
superiores, no apreció lesiones tampoco. En el examen genital, presentaba
genitales externos masculinos de aspecto y desarrollo normales para la edad,
el prepucio era normal, se retraía en forma adecuada y permitía apreciar el
glade peneano de aspecto normal, el meato y uréter eran normales, no se
apreciaban lesiones, el escroto erra normal y en su interior se encontraban los
testículos también de volumen normal para la edad del menor. En el examen
de la región anal, encontró piel perianal normal, el orificio era normal, el tono
del esfínter anal era normal, los pliegues anales también, no se apreciaban
lesiones. Por lo tanto, se concluyó que el menor no presentaba lesiones en el
examen genital ni anal, se solicitó al fiscal que sometiera a este menor a un
examen psicológico y en tercer lugar, dentro de las conclusiones, se puso que
era conveniente que se enviara a este menor a un servicio de salud público
para descartar alguna enfermedad de transmisión sexual que no puede
descartarse con un examen físico. Esto porque el niño refería haber tenido
actividad sexual con una mujer adulta que ya había tenido actividad sexual. Él
no encontró ningún estigma, pero hay enfermedades venereas que son
subclinicas, no dan manifestación en el examen y para asegurarse, le sugirió
al fiscal que lo sometiera a una batería de exámenes para descartar
enfermedades
como
hepatitis,
gonorrea,
sífilis,
que
pueden
estar
asintomática.
En el examen de sexología forense ellos básicamente tratan de precisar
si los órganos sexuales de la persona corresponden a su edad cronológica, si
presentan alteraciones en su desarrollo, o de tipo traumática o por la
administración
de
alguna
sustancia.
Cuando
hay
antecedentes
de
traumatismos en el examen extragenital, se prefiere enviar a la persona al
servicio de clínica-lesiones.
Preguntado explica el perito que a los 12 años, se produce en la gran
mayoría de los jóvenes la primera eyaculación y tienen ya capacidad de
erección peneana, en todo caso, no va a ser igual a la de un adulto en
cuanto a la duración, pero sí hay erección y eyaculación. La capacidad de
fecundación es baja, porque la maduración de los testículos hace que
todavía en ese periodo se produzcan espermeos de mala calidad, de poca
capacidad de fecundar. En los casos en que se requiere una mayor precisión,
se derivan a estos pacientes al servicio de urología, que se estudie la
capacidad
de
los
espermios
para
fecundar,
hay
que
hacer
un
espermeograma. Un niño puede tener 12 años cronológicamente y ser
psicológicamente inmaduro y no tener idea de su capacidad de fecundación
o viceversa. El examen se hace habitualmente por partes, se examina de la
cintura hacia arriba, posteriormente se hace que se vista de la cintura hacia
arriba, luego se desviste de la cintura hacia abajo, para examinar ano y
genitales.
En una penetración pueden quedar señales físicas, pero son fugaces,
son básicamente el enrojecimiento del blandes, del frenillo, edema del frenillo,
enrojecimiento del prepucio, pero son fugaces, y el examen que se hizo al
menor fue el 18 de diciembre, y la última vez que estuvo en contacto con la
profesora, según dijo, fue el 23 de noviembre.
5.- Patricia Negretti Castro, médico cirujano del Servicio Médico Legal.
Como perito del Servicio Médico Legal le tocó examinar el 22 de agosto de
2008, a María Darrigrande Moreno de 40 años. Ella concurría para realizar un
examen físico y describir nevos o lunares en su cuerpo, en su examen físico
describió una cicatriz rosada de 5x 3 cm. en la nalga derecha, retráctil y
deprimida; una cicatriz blanquecina lineal transversa de 11cm. en el
hipogastrio, que ella atribuía a una cesárea, y múltiples nevos o lunares, en el
dorso, en la cara anterior del tórax, en el abdomen, en los brazos, en
antebrazos y en la cara anterior de las extremidades inferiores. Se tomó fotos
de estos nevos. Dorso es la cara posterior del tórax. Describió, en el dorso, en la
cara anterior del tórax, en el abdomen, en los brazos, antebrazos y en la cara
anterior de las extremidades anteriores, para ser observados, el cuerpo tendría
que tener descubierto el tronco, las piernas y los brazos.
La señora fiscal exhibe a la perito las fotografías D 1, al observar la
fotografía N° 1 señala que es el rostro de la examinada, tenía nevos cerca de
los ojos, en la nariz, en la parte inferior de la cara, el mentón y alrededor de los
ojos, también se puede ver en los hombros; la fotografía Nº 2, es el hombro
derecho, y se observan también en toda esa área: la fotografía Nº 3, es la cara
anterior del tórax, había nevos en toda la cara anterior, desde los hombros
hacia abajo: la fotografía 4, la cara anterior de los muslos, por la cara interna
también había por la cara anterior; la fotografía Nº 5, el abdomen, se observan
nevos en todo el abdomen. La cicatriz está sobre el monte de Venus; la
fotografía Nº 6 es la cara lateral del tronco, principalmente a nivel de la
cadera. se observan; la fotografía Nº 7 es la cara izquierda del tronco, se
observa por la cara anterior del abdomen, por la cara lateral del tórax
izquierdo, no se ve tanto en la cadera; la fotografía Nº 8 es una foto con mayor
cercanía y se observan nevos en la cara lateral izquierda del tórax y del
abdomen se ven nevos; la fotografía Nº 9 es el brazo derecho, en que se
observan nevos en todo el brazo; la fotografía Nº 10, la cara posterior del brazo
izquierdo, también se observan nevos; la fotografía Nº 11, cara lateral del brazo
derecho, fotografía Nº 12, brazo izquierdo, la cara lateral también; fotografía
Nº 13 la cara anterior del abdomen, en que se observan nevos periumbilicales;
la fotografía Nº 14 el hipogastrio que está tapado, pareciera ser parte de la
cicatriz de la cesarea; la fotografía Nº 15, no se ve; la fotografía Nº 16 es la
cara posterior del tórax el dorso, no distingue nevos a no ser en la zona lumbar
izquierda, requiere más cercanía; fotografía Nº 17 se distinguen los nevos en la
cara superior de la cara posterior del tórax y algunos más abajo.
6.- Pamela Aedo Errázuriz, médico cirujano especialista en psiquiatría
infanto juvenil del Servicio Médico Legal. En su calidad de perito del Servicio
Médico Legal procedió a realizar evaluación de Sebastián, adolescente de 12
años 7 meses, con fecha 16 de abril de 2008 a solicitud de la Fiscalía
Metropolitana Centro Norte, en causa de abuso sexual, donde se le solicitaba
evaluación de credibilidad del testimonio y evaluación de daño psicológico y
emocional a raíz de los hechos de la investigación. Se aprecia en esa
evaluación, un adolescente de aspecto físico acorde a su edad cronológica,
una talla mayor que la esperable, ordenado y limpio, vestido de uniforme
escolar, el que se muestra bastante adecuado en la situación de entrevista,
manteniendo la distancia social, haciendo alusiones claras a lo que le había
sucedido, presenta lenguaje acorde a su edad, en lo expresivo y comprensivo,
narrativa bastante buena, extensión de vocabulario mayor de lo esperado
para su edad, abundante, destaca en su estado emocional, en sus afectos,
una concordancia entre los contenidos verbalizados y sus emociones,
destacando labilidad emocional y angustia cuando hace alusión a los hechos
de la investigación; el pensamiento se encuentra en la etapa hipotético
deductiva, donde logra el uso de la lógica y abstracciones, con capacidad
cognitiva adecuada a su edad, logra diferenciar la mentira del error,
aludiendo intencionalidad a la mentira y apareciendo como no sugestionable
a la evaluación clínica. La metodología empleada para esta evaluación es la
que emplean a nivel del Servicio Médico Legal como protocolo en los casos
de abuso sexual que consta de varias etapas, una primera etapa es la lectura
de los antecedentes aportado por la fiscalía; la entrevista conjunta con adulto
responsable, para determinar antecedentes biográfico relevantes y de su
desarrollo no relacionados con la causa; una entrevista con adulto
responsable para definir los hechos de la investigación a través de un relato
espontáneo y luego más dirigido y finalmente la entrevista individual
semiestructurada al adolescente, que también presenta etapas, con el fin de
definir desde el adolescente el motivo de consulta, sus habilidades y
capacidades como elementos que fueran relevantes para los hechos. Esta
entrevista también tiene etapas, una primera de introducción donde se dan
las indicaciones del proceso, se definen los límites y reglas para la entrevista;
se determina el concepto de verdad mentira y su capacidad de sugestión,
segunda etapa más narrativa, donde a través de un relato espontáneo, no
asociado a los hechos, en este caso se usaron elementos biográficos y de su
vida cotidiana para determinar su capacidad narrativa, para finalmente
asumir la narrativa de los hechos de forma espontánea, que se transcribe
totalmente en el informe, sin interrumpirlo, y se registra en el mismo. Finalmente,
se hacer revisión de los antecedentes y elementos aclaratorios, con el fin de
que el perito tenga claridad de los dichos del adolescente y se confrontan las
situaciones, para hacer el cierre con elementos no amenazantes. En este caso
se deriva a evaluación psicológica complementaria para determinar
indicadores de abuso y daños asociados. Se realizan las conclusiones, en base
a esta metodología, donde se usa la evaluación de validez de testimonio,
donde se aplica la entrevista no estructurada, los criterios de contenido, que
son el C.B.S.A., se aplica el listado de validez, del S.V.A. se evalúa la presencia
de psicopatologías y se realizan las recomendaciones. En base a esta
metodología se determinan los siguientes resultados: Se trata de un
adolescente, producto de relación formal entre sus padres, de 10 años de
convivencia, que estarían separados hace dos años, ambos padres están
presentes, ambos están a cargo de la crianza de los hijos, siendo Sebastián el
mayor de tres hijos de la relación. La madre alude que había notado
elementos de cambio de conducta de su hijo que le llamaron la atención,
empezó a pedirle más plata de lo habitual, todos los viernes empezó a salir en
la tarde, se le desaparecía, situación que le llamó mucho la atención, incluso
empezó a preocuparse más de su forma de vestir, empezó a usar ropa distinta,
lo cual también le llamó la atención, lo atribuyó inicialmente a su edad pero
después le empezó a preocupar, incluso, fue al colegio a hablar con la
profesora jefe para indagar si había alguien, una chica que le pudiera
interesar y estuviera teniendo problemas. Para el cumpleaños recibió una
billetera de cuero italiano, dice la madre y un perfume caro, de parte de su
polola, señala que lo llamaba después de las 22.00 horas y también en la
madrugada. A raíz de todos estos cambios conductuales, los padres le retiran
el celular y a raíz de esta medida disciplinaria, el padre detecta mensajes de
texto donde la polola le decía que lo amaba y a raíz de esa situación el
adolescente empieza a hablar progresivamente, y dice que la polola era la
profesora jefe, con la cual tenía una relación cercana, que lo sacaba de
clases, le mandaba mensajes de texto al celular y que los viernes salía con ella
y lo llevaba a su departamento donde había tenido relaciones sexuales con
ella. También le daba besos, señala la madre también. La madre alude que el
adolescente en un momento dado, él quiso salirse de la relación y fue
amenazado por la profesora, diciéndole que estaba embarazada y que
quería a matarse, situación que le produce una angustia que lo lleva a
cortarse en sus brazos. Posterior a ello, la madre indica que no solo hubo
cambios en el adolescente, sino que alteraciones familiares, incluso ella habría
perdido su trabajo. Respecto de lo que el adolescente señala, él alude a
episodios diferentes bastante bien identificados, los indica como “Esto empezó
justo un día antes de mi cumpleaños donde ella me manda una carta en la
que dice que me amaba, que estaba enamorada de mí, posterior a eso él va
indicando una serie de episodios, un día lunes me sacó de clases y me pasó
esta carta donde decía que me amaba, otro día un día jueves, me sacó de la
clase cuando yo estaba en educación física, incluso hace referencia a las
condiciones climáticas, estaba lloviendo dice, y me llevó a la sala de video y
ahí me pidió que le diera un beso, él quedó paralizado, no sabía qué hacer y
finalmente empieza a tener una relación más cercana con la profesora, iba
ocurriendo todo esto en el colegio, hasta que un día fue fuera del colegio, ella
lo invitó a comer, le dijo que lo esperara en una calle en Recoleta, fueron a
comer hamburguesas y papas fritas, a Avda. Perú, y que después lo habría
llevado a su departamento donde tuvieron relaciones, cuando se le pregunta
qué tipo de relaciones, él claramente alude a relaciones sexuales, lo que
habrían hecho en una cama de dos plazas, él se habría colocado encima de
la imputada y la habría penetrado. Él va indicando que esta sería su primera
experiencia, que lo habría dejado complicado, sin embargo, con el tiempo y a
medida que se van repitiendo los episodios, dice que se le va haciendo más
difícil, y dice que no le gustaba y quería salirse de la relación, situación que se
percibe limitado, porque la imputado se lo impide, lo amenaza y le señala que
estaría embarazada, situación que lo complica notablemente, y en ese
momento dice “yo no sabía qué hacer y comete estos cortes en sus brazos”.
Incluso, el adolescente a medida que va pasando el tiempo, va tomando
conciencia de esto, y señala que esta situación le incomodaba, que le
gustaba una niñita de su edad y que le habría gustado salir a jugar a la pelota.
En base a estos antecedentes, en base a una evaluación sexológica que se
hace en diciembre en el Servicio Médico Legal, que no habría presentado
lesiones, junto con un apoyo sicoterapéutico que se hizo en el curso de
octubre a diciembre de 2007, que recibió a nivel escolar con una frecuencia
alta de 2 a 3 veces por semana, se concluye lo siguiente. Se evalúa a
Sebastián.. adolecente de 12 años 7 meses, quien fue derivado de la fiscalía
de la Región Metropolitana Centro Norte, en causa de abuso sexual con los
antecedentes de la carpeta investigativa, el reporte materno, el auto reporte
del adolescente, solicitando evaluación de credibiliad del testimonio y
evaluación de daño. Se aprecia un adolescente con habilidades sociales y
personales acordes a su edad, que le permiten buscar apoyo cuando se siente
sobrepasado. Él hace un relato de los hechos que resulta ser creíble y válido,
aparece un relato con una estructura lógica, con elementos inestructurados,
con abundantes detalles de la situación abusiva y de contexto y tiempo,
menciona lugares, espacios, horarios, ambientaciones diversas, lo señala tanto
a nivel escolar como extraescolar. Hace mención a su estado mental
personales, donde se siente incómodo, con rechazo, se percibe amenazado,
muy angustiado en relación a esa amenaza, hace alusión a la afectividad de
la imputada, en términos de que estaría enamorada de él, hace también
referencias a interacciones, conversaciones, con correcciones y con una
situación de tipo de abuso con seducción y coacción y amenaza. Hace
referencia como su agresor a su profesora jefe, con la cual él define que tenía
una relación relativamente cercana, se percibe apoyado por esta profesora,
que le ayudaba no solo en elementos escolares sino también en áreas de
conflicto y problemáticas familiares. El reconoce que esta situación le habría
generado daño, se percibe dañado en lo personal, sino también a nivel
familiar le había causado problemas porque había tenido que estar mintiendo
para salir los días viernes, por ejemplo. Él además señala que era una situación
de la que va tomando conciencia, a pesar de vivirlo como primera
experiencia, señala, “yo nunca había tenido esta experiencia”, sin embargo,
logra percibirla como inadecuada por su edad y porque se trataba de su
profesora. Respecto del daño, es coincidente la evaluación psicológica
practicada con la evaluación psiquiatrita, donde se determinan alteraciones
emocionales importantes, con angustia elevada frente a los hechos, donde
aparece también una alteración de la psicosexualidad, fundamentalmente
respecto de su imagen corporal, no parecen elementos alterados de su
identidad sexual, sin embargo aparecen elementos muy auto agresivos que lo
hacen que actúe en algunos momentos en forma impulsiva. Sus relaciones con
sus padres son de alta exigencia, él tiene muy buenos rendimientos escolares,
es alumnos de 6,7 promedio y ha incorporado a sus padres con mucha
autoexigencia, que lo definen desde lo cognitivo y esa exigencia, dado que él
ha rendido bien todo este tiempo. Aparece mucha culpa y vergüenza, que lo
hacen tener una actitud de retraimiento importante. Respecto al daño,
además, se detecta a nivel de la parte más psiquiátrica, un trastorno
adaptativo con elementos auto agresivo que hace que se reactive su vivencia
cada vez que alude a los hechos. La situación de entrevista, que fue bastante
prolongada, con bastante relato de parte del adolescente, él se angustia
notablemente cuando empieza a habar de los hechos. Esta situación se
reactiva en enero de 2008, cuando recibe los mensajes en el messenger de
parte de la profesora, y se vuelven a reactivar, cuando se reintegra al sistema
escolar, y la visualiza a lo lejos con el resto de los compañeros en el sistema
escolar. Él señala su rechazo a mantenerse cercano a ello, porque la percibe
como una persona dañina para él. En base a esto, se indica reincorporar a
Sebastián a apoyo psicoterapéutico, dado que ha empezado a reactivarse
elementos ansiosos relacionados con su corporalidad que pudieran afectar su
psicosexualidad
futura,
favorecer
apoyos
a
los
padres
a
través
de
psicoeducación para que mantengan una acogida y entreguen seguridad y
protección más adecuada a la etapa de desarrollo del adolescente. Evitar
nueva reevaluación, porque genera problemas de victimización y realizar
evaluación de la imputada, lo psicológico y psiquiátrico, dado que representa
una figura con un rol público donde tiene relación con otros niños que pudiera
ser dañino a futuro, en el caso de tener alguna patología.
Consultada expone que el C.B.S.A., es la metodología de análisis de
validez de testimonio, y lo que intenta es contar con elementos que
diferencien un relato imaginario de un relato real, ese es el objetivo de la
metodología.
Para
esa
metodología
se
emplea
una
entrevista
semi
estructurada que permita un relato espontáneo de los hachos de parte de la
presunta víctima de abuso sexual en este caso y a ese relato se aplican
criterios de análisis, que posterior a ello se hace el análisis más cualitativo de los
hechos, comparando con una serie de elementos de la investigación, de tal
modo que con esa metodología, no sólo se integra no solo el relato de la
víctima, sino que se integran además con el análisis de la estructura como se
genera la entrevista y de todos los elementos asociados de otro tipo de
investigación, declaraciones previas, otras evidencias etc. Con esa integración
se define la validez del testimonio y la credibilidad.
Indica que respecto del análisis de criterios, el adolescente presentaba,
estructura lógica, habían elementos inestructurados, había una serie de
detalles respecto al contexto abusivo, él señala cómo había realizado la
situación de la penetración, por ejemplo, él hablaba de contexto, de tiempo,
“era día lunes, era día jueves”, espacio, hablaba de horarios, decía “estuve de
las17.00 hasta las 18.00 horas”, “esto pasó en la sala de video del colegio”,
“esto pasó en un departamento”, él va dando una serie de detalles, además
va señalando interacciones, yo hice esto y ella respondió de esta otra forma,
por ejemplo, dice “ella me quiso dar un beso, yo quedé paralizado y la paré”,
y lo señala con un gesto echando para atrás a la imputada. Hace referencia
también a conversaciones, “ella me dijo que me amaba.” Hace referencia a
cómo se sentía “yo ya no quería estar en eso”. Esos son unos de los criterios
encontrados, él presenta los primeros 6 criterios de análisis de contenido, que
son los más importantes y deben estar presentes en todo relato creíble y
válido.
De acuerdo a las características de este adolescente es altamente
poco probable que él haya inventado la situación, aparece un relato
bastante creíble con elementos vivénciales importantes, que hacen pensar
que es válido y no ha sido inducido por terceros. Además, él aparece poco
sugestionable, no aparecen elementos gananciales tampoco en su relato, de
hecho él tenía más beneficios al estar ahí, lo sacaba a comer, decía él, le
regalaba bebida, lo sacaba de clases, lo ayudaba en muchas áreas
emocionales a nivel de su familia y respecto de las motivaciones de terceros,
la madre busca justamente apoyo en la profesora para resolver la conflictiva
de su hijo, por lo tanto, no aparecen elementos que pudieran ser secundarios
a una ganancia.
Refiere que no puede hablar en precisión de cómo era la carta, sólo la
mencionó y mencionó el contenido, decía que en principio le dijo como en
siglas, le puso detalles, no directamente, no le puso la frase completa, y
después sí le habría dicho que lo amaba y eso fue cuando le dio el beso, esto
es para demostrarte como te amo.
De acuerdo al relato del adolescente no aparece como un hecho
único, aparece más bien como un hecho que se repite en el tiempo que se da
todos los días, en distintos lugares, de hecho el decía “esto pasaba todos los
viernes”, por tanto no era una relación de un episodio único, de una sola vez.
Consultada explica que si para uno, como adulto, cuando hay un
embarazo no planificado, no esperado, le impacta, la situación del
adolescente es mayor, sobre todo que él tenía 12 años, él había
supuestamente embarazado a su profesora, una persona que era una
autoridad, de respeto, por tanto, esa situación le generó una angustia y
genera una angustia intensa, con desesperanza con elementos que él hace
evidentes con esta ideación que tiene de hacerse cortes, que concreta en
cortes en los brazos, frente a una situación ele es francamente inmanejable, él
no sabía qué hacer frente a ese hecho en particular.
Esa es una situación que lo limita a tener alguna posibilidad de decidir
algo por él, de hecho decía, “yo no sabía qué hacer y tuve que mantenerme
en esto, porque no me dejó hacer otra cosa”.
La madre lo que señala es cambio en su forma de funcionamiento, el
adolescente se vuelve más distante, empieza a salir mucho más, no avisaba
donde iba, a ella le preocupa, porque señala que no era la forma habitual de
actuar de Sebastián.
Explica que Labilidad emocional significa que va haciendo su relato y
va también quebrándose en su relato, va hablando, va poniendo más
temblorosa su voz, se angustia, cuando empieza a hablar de los hechos,
interrumpe, no es la fluidez con que habla frente a hechos no amenazantes,
frente ahechos escolares, frente a situaciones que no lo implican en lo
vivencial. Hay un componente afectivo que hace que él vaya cambiando su
tono de voz, su relato más continuo.
En relación la abundancia del lenguaje del adolescente, lo que llamó su
atención, dada la cantidad de evaluaciones ya realizadas con otros niños de
esta edad, es que él lograba tener un relato con muchos detalles, con mucha
precisión, daba importantes elementos de contexto con buena expresión
verbal, lo que daba bastantes contenidos a su testimonio y eso era rico en
términos de elementos verbales, más que en otros casos, que cuando se
quiebran frente a situaciones, más bien bloquean sus relatos. En este caso, él
hablaba mucho, tenía mucha verbalización.
Sostiene que era poco probable que fuera un discurso aprendido, los
discursos aprendidos tienen un formato, que tienen un inicio y un final, sin
interrupciones. Acá, en general, no se daba eso, había bloqueos, en algunos
casos, no tan marcados, pero habían saltos, por ejemplo, él está hablando de
una cosa y empieza a hablar de otra. Cuando es un relato aprendido, en
general hay elementos que son más continuos, no hay saltos lógicos, que no es
la situación de Sebastián, donde aparecen elementos de haberlo vivido.
Cuando uno tiene un relato vivido, va acordándose de ciertas cosas, y
cuando aparece un recuerdo, habla de ese recuerdo independiente de que
siga o no la frae. Entonces, esos saltos lógicos nos hace pensar que es poco
probable que sea un relato aprendido.
Preguntada en relación a la diferencia entre mentira y error, dice la
perito que él lo que claramente señala es que en la mentira hay una
intencionalidad, a diferencia del error, que es algo más accidental, y él lo que
señala además, es que la mentira va generando otra mentira y que finalmente
lo van a sorprender, porque ya no va a poder sostener más la mentira. A eso se
refería y hacía claramente la intención, en términos de que uno hace la
mentira, a diferencia del error, que es un accidente.
En cuanto a su percepción de la relación que mantuvo con la
profesora, refiere que él decía que en un principio era una relación de alumno
profesora,
él
la
cataloga
así,
alumno
normal,
profesora
normal,
y
posteriormente él hace alusión de que eso habría ido cambiando, donde él
señala como un enamoramiento que hubiese ido pasando, del cual después
él quiere salirse y no logra hacerlo, no puede salirse de la relación y que a raíz
de la intervención que hace el padre al detectar en el celular estos mensajes,
él logra liberarse de esa situación y se siente más aliviado. El la define de esta
forma, era una relación normal, donde él le podía contar cosas de colegio,
cosas de sus problemas familiares, dado que estaba teniendo problemas en su
casa, pero que después se hace esta situación de enamoramiento, donde él
no se puede salir.
Consultada si para que se produzca un enamoramiento en el
adolescente es importante la fase de seducción, responde que cuando se
habla de enamoramiento en los adolescentes, hay una fase de idealización
de la persona, de lograr ciertos beneficios de esta persona de la que
supuestamente empieza a enamorarse. Tiene que haber un proceso de
seducción previa, el adolescente se siente acogido por la profesora, se siente
escuchado por ella, se siente apoyado en muchos elementos en que él
estaba complicado, desde su casa y desde su situación escolar, por tanto, sí
hay una seducción previa.
Preguntada si la situación de seducción se vio facilitó por la condición y
calidad de la persona que lo seducía, responde que en este caso particular,
claramente hay una situación de autoridad, ella lo sacaba de clases, le daba
regalos, obviamente en esta calidad de autoridad tiene mucha mayor
influencia sobre el adolescente, él no tenía mucho que hacer ahí para evitarlo,
no podía negarse, en cierta medida.
Claramente no aparecen ninguno de esos elementos de seducción en
Sebastián, él señala que esta es su primera experiencia y cuando la plantea
como su primera experiencia, dice, “no fue bonita”. Además, aparecen
elementos de vergüenza, de culpa, muy intensos, que de haber sido seductor,
tendría otra conducta, haría alarde de la conquista, diría “me conquisté a mi
profesora”, hice tal, cosa, como trofeo, dadas las condiciones y dada la edad,
en que el conquistar a niñas, y además el conquistar a un adulto, tiene toda
una relevancia en el grupo de pares. Él no hace nada de eso, por el contrario,
siente mucha culpa, mucha vergüenza de lo que está sucediendo, tampoco
aparece una conducta seductora en la entrevista, que se detectan en el
adolescente elementos que pudieran seducir al entrevistador, él no tiene
ninguno de esos elementos, cada vez que habla de los hechos, baja su
mirada, se silencia un poco, situación que también podría haberse puesto más
seductor con el entrevistador, situación que tampoco aparece.
Consultada si en todas las fases, -seducción concreción y coacción-, la
persona que las realizó, tenía claridad acerca de esa conducta, responde que
a ella le parece que sí hubo todo un proceso, no es que lo hizo de un día para
otro e impulsivamente, cree que hay un proceso, que lo describe Sebastián,
ella le daba regalos, le compraba bebidas, le compraba almuerzo, después lo
invita a comer, lo saca a pasear, hay todo un elemento que va progresando
hasta que lo lleva al departamento. O sea, empieza a nivel escolar y después
lo traslada fuera del sistema escolar, lo cita fuera del sistema escolar y se lo
lleva al departamento, y en el departamento tiene claramente una conducta
más activa. A ella le parece, desde lo que relata Sebastián ella aparece
bastante clara en los distintos elementos, además ella utilizaba distintos medios
de comunicación, se comunicaba a través de cartas, correos electrónicos,
mensajes de texto, hay toda una situación que va armando un contexto en
ese sentido.
Requerida acerca de por qué se solicitó un informe psicológico
complementario, responde dada la complejidad del caso, que se trata de un
adolescente, se solicitó el informe psicológico un poco para precisar con
mayor claridad los elementos de daño emocional. Ese fue el objetivo principal,
lo evacuó la señorita Ximena Navarro, ella lo incorporó como parte integrante
del suyo, porque en su metodología de trabajo, cuando tienen alguna duda o
necesidad de enfatizar algunos elementos, solicitan evaluación psicológica
complementaria, que la integra al informe psiquiátrico principal.
Indica que ella puede hacer evaluaciones más bien de tipo
psiquiátrica, de psicopatología, y en el ámbito de la psicología, donde se
aplican evaluaciones de tipo proyectivas, se asocian y se pueden
correlacionar con los hallazgos psiquiátricos, en este caso son concordantes,
son consistentes ambas evaluaciones.
Consultada cómo explica que el menor nunca haya hablado de esto
espontáneamente, responde que ella percibe que en todo este proceso
también se dio lo que cabe, que es la ley del silencio, donde frente a
situaciones de amenaza, situaciones que angustian, él se mantiene en silencio
y se siente limitado a poder hablar de los hechos. Él logra hablar de los hechos
sólo cuando es sorprendido, en una situación bastante indirecta, de hecho, la
develación es casi forzada por los padres, donde el padre al retirarle el celular
detecta esta situación y progresivamente estos padres, en una situación de
bastante insistencia de la madre frente a conductas que le parecían muy raras
en su hijo, va insistiendo y él va logrando, frente a esta presión sentir que debe
hablar y frente a esta angustia extrema, en que se hace los cortes, cuando se
le amenaza con el embarazo, ya se siente sobrepasado y siente que necesita
hablarlo, entonces va ocurriendo todo este proceso, que parte de que el
agresor seduce a la víctima la engancha, la atrapa, se atrapa el mismo en la
situación, no sabe cómo salir, y finalmente, frente a la amenaza, se mantiene
el silencio.
Señala que la evaluación se realiza en una sesión única pero bastante
prolongada, que dura alrededor de 4 o 5 horas, con los recreos o pausas
necesarias cuando se ve que la persona está agotada, la evaluación
completa dura alrededor de 12 horas, donde se hace el análisis y se integran
todos los hechos, la lectura de los antecedentes y la integración de todos estos
antecedentes. Ese es más menos el periodo que demora este tipo de
evaluaciones.
La metodología implica que se de una consigna dado que se tiene ya
claridad de cómo es su narrativa, entonces le señala, le dice, así, por ejemplo,
“Sebastián, después de que me has contado todas estas cosas que haces tú,
en tu vida cotidiana, necesito que me cuentes lo que te ha pasado, el motivo
por el que estás acá, y me cuentes igual como me contaste las otras cosas, yo
no te voy a interrumpir, no te voy a preguntar nada hasta que me digas todo
lo que tu puedas decirme”, con eso se deja hablar al adolescente, no
interrumpe, no hace preguntas en ese momento. En este relato en particular,
no hubo necesidad de hacer preguntas, porque fue un relato bastante
extenso y con bastante detalles, incluso a ella le costó registrarlo, porque eran
mucha cantidad de observaciones que hizo el adolescente, por tanto, no tuvo
necesidad en esa primera etapa de formular preguntas. Posteriormente sí se
hacen preguntas más bien dirigidas para precisar algunos elementos, no
entendidos, por ejemplo, cuando él habla de relaciones sexuales, se le
pregunta, “¿a qué te refieres por relaciones sexuales?” o”¿qué son para ti las
relaciones sexuales?” de manera de poder entender y saber si entiende lo
mismo que está diciendo el adolescente. Cuando él decía, por ejemplo, “y yo
terminaba en ella” entonces se le pregunta, “¿qué es terminar en ella?” O sea,
siempre utilizando palabras o dichos generados por el propio adolescente, no
se ponen preguntas espontáneas, salvo que dijera “¿cuando ocurrió esto?” o
“¿te acuerdas tu desde cuando está pasando esto?” siempre preguntas
abiertas de modo que él puede explayarse respecto de sus dichos.
Consultada si algo le llamó particularmente la atención en cuanto a la
dinámica que manifestaba del abuso, responde que la verdad es que él
manifiesta claramente situaciones distintas a nivel escolar, que era distinto nivel
de cuando ya estaba en el departamento, hace detalles, va generando toda
una dinámica en que va mostrándose él muy incómodo en la situación, cree
que eso es lo que llamaba mucho la atención, que él no estaba contento con
lo que le estaba pasando y él va tomando conciencia progresivamente que
esto no es lo que él quería. Èl hace incluso alusión en algún momento y llama
la atención en eso, a que él quería ir a jugar a la pelota, o sea, él no quería
estar ahí, prefería ir a jugar a la pelota, incluso le menciona a la imputada que
le gustaba una niñita de su edad, lo que habla claramente de que sus
intereses y sus expectativas eran distintos a los que estaban en juego ahí.
Refiere que el C.B.S.A., es parte de la metodología completa del análisis
de validez del testimonio, es una parte más, por sí solo no tiene ninguna
utilidad, hay que integrarlo a toda la entrevista, hacer la integración con el
resto de los antecedentes, las declaraciones previas, valorar consistencia, no
solo de declaraciones, sino también consistencia afectiva, de lenguaje, de la
lógica, hay que integrar todo eso, si no, no tiene ningún sentido. Los criterios
de validez, son elementos cualitativos, es una evaluación de tipo cualitativa
que implica una metodología de trabajo, no es aislada, se van determinando
los distintos criterios y va definiendo las distintas situaciones y en base a esa
integración, hace la evaluación global del testimonio.
Preguntada por las fases de un abuso sexual van a depender
claramente de si es intrafamiliar y extrafamiliar y de los extrafamiliares si es
conocido o desconocido. Se da una dinámica distinta cuando es por alguien
conocido o desconocida. Los abusos con desconocidos son más violentos,
que implican otros delitos, robos, asaltos, agresiones físicas severas y son
episodios únicos, en ese efecto, es poco probable que se de una dinámica
abusiva, dentro de los conocidos, se da una dinámica y en esas condiciones
hay etapas, que tienen que ver con que el agresor selecciona a la víctima e
inicia la etapa de seducción, donde esta víctima empieza a recibir regalos,
empieza a ser reconocida para luego viene una etapa de mayor
profundización de la agresión, donde le dice a la víctima que empiece a
mostrarle su cuerpo, para después ser tocada para que después la víctima
toque al agresor, y finalmente se da la situación del atrapamiento, donde la
víctima se siente parte y participante activo de los hechos, para luego
aparecer la revelación cuando se siente sobrepasada, aparece la ley del
silencio, aparece la retractación, cuando se percibe no apoyado, ese es el
proceso que se ve en los abusos.
Requerida por el sesgo por parte del entrevistador, explica que lo
controlan con la aplicación rigurosa de la metodología y a través de la
evaluación con un otro, se hace un sistema de doble ciego de la
metodología, con otra persona del equipo y ahí se van dando cuenta si ha
habido preguntas más inductivas o no.
Sobre la metodología aplicada al daño, es una gran pregunta que se
está tratando de resolver en una mesa de trabajo, fundamentalmente han
percibido que es clínico, se determina el daño con evaluación clínica, tal cual
el médico frente a un hecho médico, va al médico y el médico hace la
evaluación clínica, y dice esto es apendicitis, colon irritable, eso mismo se
hace a nivel psiquiátrico, con una entrevista psiquiatrita clínica, luego de la
evaluación del testimonio, luego, se hace la evaluación clínica, porque los
elementos de daño hay que buscarlos, muchas veces la víctima no se da
cuenta de su daño y eso se complementa con evaluaciones proyectivas de
daños, en caso necesario. Es parte de la metodología y de la forma cómo hay
que hacer el análisis, en las situaciones de abuso hay sólo dos testigos, el
agresor y la víctima, por lo tanto, es indispensable la entrevista individual a
solas, para evitar toda interferencia de un tercero en las entrevistas. Por eso en
niños, limitan las entrevistas dejando a los padres, en casos muy excepcionales
se mantienen los padres, en niños más pequeños, y de no poder hacerlo así, lo
hacen a través de un espejo bidireccional, en que el padre puede estar
observando y se le puede decir al niño “tu papá está detrás del espejo, no
estás solo”. Cuando hay un tercero que quiere participar en la entrevista, es
útil el espejo, para que no interfiera directamente en la entrevista.
Claramente hay una vivencia que el adolescente le da una
connotación sexual que él percibe dañina, él señala que no fue adecuado
hacerlo, y aparece mucha culpa y vergüenza, lo señala como inadecuado,
en términos que era su profesora, que no sabía qué hacer con la situación y
que no era adecuado por la edad.
Puede haber problemas futuros, sobre todo porque él tiene una forma
de funcionamiento en el desarrollo de su personalidad que es de alta
exigencia, él tiene mucha exigencia en lo personal, hay toda una imagen
personal, una autoimagen en términos de su corporalidad que pudiera
alterarse y que pudiera llevarlo a problemas futuro. Ahora, él tiene habilidades
personales que lo hace que pueda salir exitoso de esa situación, con el apoyo
necesario. Él estuvo en apoyo terapéutico, y cuando ella lo vuelve a ver, él
reactiva su sintomatología al momento de hablar de los hechos, lo que habla
de que aún no ha integrado completamente como una experiencia que
pueda aprender de ella.
Cuando se generan las relaciones interpersonales futuras, los apegos, se
generan en los primeros vínculos, en las primeras relaciones significativas que
son los padres. Desde ahí van surgiendo las formas cómo vamos a enfrentar las
situaciones de conflicto, las situaciones con las personas. En este caso,
Sebastián incorporó sus figuras parentales con altas exigencias, son padres con
altas exigencias, por tanto, él tiende a valorar, frente a cualquier situación de
conflicto va a valorarla con altas exigencias también, por tanto, esa es su
forma de funcionar, de hecho, va a ser así y por esta razón es probable que
sienta más culpa, y más vergüenza, en razón de estas altas exigencias que ya
tiene incorporadas en su forma de ser, por tanto, él igualmente, independiente
ya de sus figuras vinculares, él per se, como persona, va a valorarlas de esa
manera, esa es su forma de funcionar.
Consultada si antes del examen al menor se le han hecho preguntas
directas, inductivas, podría afectar el resultado, responde que eso es posible,
fundamentalmente en niños menores, en niños menores es más probable que
preguntas inductivas o sugestivas, pudieran alterar la memoria y pudieran
alterar un relato futuro. Eso en niños mayores no es tan así, los niños mayores
son menos sugestivos que los niños menores, por tanto, es menos probables. Sin
embargo, de acuerdo a lo que tiene en la mente del análisis que se realizó de
la metodología, de los antecedentes, de las declaraciones previas, no le
aparecieron preguntas sugestivas en esas entrevistas, no le pareció haberlas
leído, en otras entrevistas de niños que se ven a niños más pequeños, hay más
preguntas sugestivas, y eso porque los niños dan menos relato. En este caso, no
fue necesario hacer preguntas, se preguntaba qué te pasó, y él se largaba a
hablar, y hablaba fluidamente con estas interrupciones que decía, pero
hablaba claramente de lo que le sucedía. Ella le decía, “¿pasó algo más?”, y
volvía a dar un extenso relato. No aparecen elementos para sospechar que
hubiese habido preguntas sugestivas previas.
Preguntada por qué hay que utilizar peritajes de credibilidad para
evaluar los testimonios de los menores, responde que eso tiene que ver con
nuestra cultura, nuestra cultura le cree poco a los niños y en ese sistema, en
que se le cree poco a los niños, y no solo en Chile, sino también en otros países,
se han ido generando estas metodologías a fin de validar a los niños como
testigos válidos. Sin embargo, hay otros países no hacen eso con los niños, en
otros países ni siquiera le toman declaración, basta la sospecha, se hace la
investigación, todo el proceso, y en un proceso terapéuticos, sin que los niños
tengan que ir a declarar, logran comprobar o no los hechos. Son distintas
culturas, distintas formas. En general se plantea si los niños son testigos válidos si
dicen o no la verdad. En la realidad es que los niños mienten lo mismo o igual
que los adultos, no se ha comprobado que mientan más, y mienten de la
misma calidad, a veces los adultos no logramos detectar la mentira en los
niños, salvo que la mentira sea de gran magnitud, que se va sorprendiendo en
esa magnitud. Por lo tanto, esta metodología está un poco para acreditar la
capacidad de testigo de un niño. Es para decir, este niño, es un testigo válido.
El S.V.A. es el análisis de validez del testimonio indica si es válido o no
válido el testimonio y el CBSA es análisis basado en contenido, ese plantea lo
creíble o no creíble. El C.B.S.A., arrojó un testimonio que es creíble. Puede
haber un testimonio creíble y no válido, en el sentido de que tiene los criterios,
sin embargo, no cumple con estructura lógica, las declaraciones son
inconsistentes, hay preguntas que pudieran ser no adecuadas, podría haber
no adecuación de los contenidos por ejemplo del afectos con el lenguaje, en
esos términos aparece como no válido, en general eso es posible de
encontrar.
Agrega que el adolescente y la madre relataron cortes en los brazos, los
que ella vio físicamente.
Consultado si el menor le dio el mismo contexto de detalle respecto de
la amenaza del embarazo, responde que sólo lo mencionó en términos de la
angustia que le generó, en términos que no sabía que hacer, mencionó que le
había mandado un mensaje, señalándole qué nombre le pondría a la
guagua, eso para ella es un contexto. Mencionó que eso se lo había
mandado a través del Messenger.
Respecto de lo que planteó para la imputada, dado que ella cumple
un rol público, y eso lo comentaron a nivel de reunión de equipo, fue
analizado el caso dada la complejidad de la situación, sintieron, como equipo,
debía ser evaluada para determinar elementos de psicopatología, dado que
cumple un rol público y tiene relación con los niños. Esto se determina con
entrevista psiquiatra y con apoyo de evaluación psicológica, para determinar
alteraciones psicológicas. Ella no lo hace, porque su competencia es con niños
y adolescentes. Por eso se deriva a evaluación psiquiátrica adulta, con los
expertos en esa área.
La sicopatología la diagnostica el psiquiatra, la sicopatología es una
competencia del psiquiatra, la sicopatología es claramente un diagnóstico
que lo hace el psiquiatra, no lo hace el psicólogo, el psicólogo trabaja
fundamentalmente con elementos de tipo proyectivo, con elementos
emocionales,
del
funcionamiento
general
de
las
personas,
pero
la
sicopatología es un resorte de psiquiatras, los psiquiatras hacen los
diagnósticos, psicosis, depresión, psicosis, trastornos
de
ansiedad
etc.
Sicopatología es enfermedad mental, enajenación mental, lo que tiene que
ver con patología mental.
La psiquiatría es una rama de la medicina, ella es médico y frente a una
situación, tiene que conocer aspectos médicos de los pacientes que se
evalúan desde la clínica, porque hay patologías médicas que se manifiestan
con trastornos psiquiátricos, y hay trastornos psiquiátricos que se manifiestan
con condiciones médicas, por lo tanto, ella tiene que conocer la patología
médica, física, eso quiere decir que
hay tumores cerebrales que se
manifiestan corporales y son de origen psiquiátrico por lo tanto, al ser médico,
su obligación es conocer, tal vez no tienen la práctica de evaluar físicamente,
para eso están los antecedentes que le hacen referencia, pero no se
contrapone que lo haga en su calidad de psiquiatra. Desde la evaluación
pericial psiquiátrica no procede desnudar a nadie, no tiene la experiencia de
hacer evaluaciones psiquiátricas con pacientes desnudos, salvo que estén
hospitalizados.
Refiere que la evaluación sexológica requiere observación física. Ella no
tiene claridad cuando cometió las agresiones el adolescente, la evaluación
sexológica fue en diciembre de 2007, ella hizo la evaluación en abril de 2008 y
él se enteró del embarazo en enero a marzo, lesiones que antes no habrían
ocurrido.
Esto lo obtuvo por el relato del adolescente, dice que el embarazo lo
supo por Messenger, en enero, eso es coincidente con las situaciones que se
fueron dando, él relata esta situación que lo angustia y toma esta conducta
autodestructiva, situación, que también relata la madre, entonces se hace la
asociación y habrá otros elementos que habrá que comprobar para eso.
Consultada sobre si está segura que el menor se enteró del supuesto
embarazo de la profesora por Messenger, responde que ahora le bajaron
dudas a ese respecto.
Para evidenciar contradicción, la señora fiscal exhibe a la perito un
párrafo de su informe pericial, dice que la fecha de despacho es 14 de julio de
2008, realización de la pericia es 16 de abril 2008. “todos los viernes pasaba lo
mismo, hasta que un día en una obra de teatro yo le dije que me gustaba otra
niñita, porque tampoco era normal y ahí me dijo que estaba embarazada y
ahí se me vino todo abajo, no sabía qué hacer”.
Indica que si la autolesión hubiese ocurrido antes, es probable que el
doctor pudiera haberlo detectado, de acuerdo a esa cronología, también
pudo haber desaparecido y hubiese un segundo episodio de lesiones, que
pudieran haber ocurrido posterior a la evaluación y si fueran más profundas las
lesiones, que fue lo que ella detectó en esa oportunidad.
Es claro él, hace referencia a cuando le hace evidente la posibilidad de
tener esta otra niña que le gustaba, ahí le comenta la imputada la situación
de embarazada, ahí lo que hace es quedarse hacia atrás, no saber qué
hacer, que no podía iniciar la relación con la niñita y tenía que mantener la
que tenía con la profesora.
Refiere que el niño mencionó que había recibido messengers, los
contenidos tenían que ver con que lo amaba y los últimos serían que ella
habría mentido respecto de estos sentimientos y le decía que se retirara de la
situación de la denuncia y en ese contexto, Sebastián le dice que no va a
seguir mintiendo, porque la situación lo complicada.
Claramente, estaban ellos en esta relación de pololeo que manifiesta
Sebastián durante todo este tiempo. Los días viernes, ocurrían estas situaciones
con la profesora y en esta condición de pololeo le aludiría esta situación de
embarazo. Es probable que la situación de auto agresión haya ocurrido ahí,
había una angustia elevadísima, de hecho, cuando lo comenta, se angustia,
visiblemente. De hecho la madre relata haber visto la agresión.
Preguntada indica que la mayoría de las fases del abuso extrafamiliar
de persona conocida, sí aparecen en el relato del menor, aparece la mayoría,
la fase de la seducción inicial, es el agresor el que toma contacto con la
víctima, aparece, el silencio, el involucrarse el propio adolescente en la
dinámica abusiva, aparece la develación que no siempre es espontánea, que
en este caso es forzada, y en este caso no ha retractación, porque el
adolescente se percibe protegido por su grupo familiar que toma las medidas
adecuadas para que él pueda mantener su relato. La fase de retractación no
ocurre en este caso.
7.- Jazmín Kassis Satorres, psicóloga, quien manifestó que en el Instituto
de criminología de la Policía de Investigaciones recibieron una solicitud para
realizar una evaluación por parte de la Fiscalía Centro Norte, a la señora María
Eugenia Darrigrande Moreno, para designar su perfil de personalidad y o algún
trastorno de personalidad que tuviera alguna relación con el delito que se le
estaba imputando. Realizó la evaluación el 27 de noviembre de 2008, entre las
10 y las 15.00 horas. Se informó a la señora Darrigrande sobre el objetivo de la
evaluación, en qué consistía y los derechos que la asistían, dando ella su
consentimiento informado, por escrito, de que daba su consentimiento. La
evaluación consiste en una metodología que consta de 3 instancias, la
primera parte consta de una entrevista semiestructurada para informarse de
aspectos de la vida del evaluado, de la familia, de la historias escolar,
sentimental, salud y lo que fuesen importante y también en este apartado
hacen observación clínica para establecer cual es el correlato analógico y
emocional que se acompaña en este discurso, al hablar de su vida. Luego de
esto, realiza una prueba psicodiagnóstica, Test de Rorschach, prueba que ha
sido validada como una prueba que da información sobre personalidad de los
sujetos, que es lo que se solicitaba, además de ello, es importante resaltar que
esta prueba ha sido validada por la ciencia psicológica para evaluar
personalidad, y al por consistir en estímulos semiestructruados, más difícil de
manejar por los sujetos y más difícil de falsear, luego se hace una entrevista
respecto de los hechos que se investigan y se solicita que realice un relato
abierto y espontáneo y la idea principal es conocer el punto de vista del
evaluado de la situación que está sucediendo. Además de estas tres partes
que se realizan con el evaluado, se hace el análisis criminológico de los
antecedentes y de las declaraciones, para informarse sobre la causa y las
otras declaraciones y pruebas consignadas en el proceso.
Los resultados de su evaluación son, respecto de la historia vital, ella
refiere que su familia está compuesta por dos padres profesionales y jubilados,
dos hermanos varones mayores que ella, por lo cual ella se refiere como
consentida, y regalona, refiere que en su infancia era más bien enfermiza y
esta situación la ubicó en la relación con sus padres. Estos vínculos también
provienen de patrones relacionales, de la familia. materna de origen, que ella
repite con su hija, que tiene 19 años. Respecto a su escolaridad realizó desde
1º a 6 básica, en colegio con modalidad de medio pupilaje, se cambia de
colegio a María Auxiliadora hasta finalizar la educacón media. Posteriormente
realiza estudios de pedagogía general básica en el Instituto Providencia.
Estuvo trabajando en dos colegios hasta que llega al Liceo Santa Juliana de
Recoleta, donde se desempeñó como Jefa de la UTP y jefa de curso, durante
14 años. En relación a sus relaciones amorosas, refiere que antes de casarse
tuvo dos pololeos más bien formales, que se casó a los 20 años, vivieron en
casa de sus padres y tuvieron a su hija, que actualmente tiene 19 años. Hacia
el final del matrimonio, su pareja le comunica que tiene otra persona y
deciden separarse y anular el matrimonio. Pasado algunos años tuvo una
nueva relación de pareja y con este hombre habría vivenciado violencia física,
psicológica y sexual, en una relación tormentosa que habría terminado con
una pelea que derivó en denuncia en la fiscalía oriente. Posterior a esta
relación se mantuvo sin compromiso. En relación a antecedentes de salud,
dice que sufrió una asfixia por vómito, a los 5 días de nacida, luego, a los 5
años se le detecta una epilepsia de petit mal, con sintomatología de jaqueca,
transpiración, convulsiones, por lo que es tratada con fenetoína y fenobarbital,
hasta los 12 años. Además refiere que entre el año 2006 y 2007, empezó con
síntomas de vértigo, consultó con un especialista neurólogo, que le detectó
una lesión hiperintensa en el hemisferio izquierdo del cerebro por lo que fue
tratada con un medicamento denominado neuroactín. Posterior a eso,
empezó con trastornos depresivos, consultó con psiquiatra y fue medicada
con medicamentos como ravotril y alprazolam. En relación a antecedentes
penales, no refiere ninguno como propio, se refiere a un tío materno que
estuvo relacionado con una causa de aborto pero salió sobreseído. Con
respecto a su funcionamiento psicológico es decir, los resultados del Test de
Rorschach, es posible señalar que su flexibilidad ideo asociativa está
adecuada, es decir, la capacidad para asociar ideas y conceptos frente a un
estímulo que se le presenta, pero sin embargo, esta capacidad, aunque
aparece adecuada en monto, no permite una buena calidad de estas
asociaciones, es decir, decae en la calidad, uno puede asociar ideas
respecto a una conversación, alguien habla, la gente que la escucha va
asociando ideas respecto de lo que se está comentando, pero estas ideas
pueden ser adecuadas o inadecuadas, y a eso se refiere su calidad formal, en
este caso, esa cantidad de ideas, no era adecuada totalmente. Con
respecto a su estilo de aprehensión de la realidad, es decir, el tipo de
pensamiento que se puede señalar sobre esta persona, tiene que ver con un
pensamiento de tipo circunstancialmente, que se acompaña de aspectos
nimios y poco relevantes de contexto por ejemplo, estamos en esta sala,
alguien podría decir, aquí se encuentra, público, una persona realizando una
declaración, ese sería un análisis por detalles y un análisis final que engloba
todo esto. En este caso la persona puede percibir son detalles nimios y
circunstanciales que no tienen relevancia en el contexto, por ejemplo, que
ella tiene el pelo rizado. También se pudo observar que existe un pensamiento
globalizador, -lo que ella antes hacía, de poder llegar a la conclusión de que
esto es un juicio-, pero sin embargo, la relación que se establece entre las
partes, no llega a una conclusión concreta e idónea, sino que incurre en
errores conceptuales, a propósito de la dificultad en relacionar estos
elementos. En relación a los controles racionales que la evaluada despliega
para manejarse en la realidad, esto es, la posibilidad de que la razón, el
raciocinio permita dirigir la conducta de una determinada manera. Esto se
analiza desde dos puntos de vista: un control racional que se dispone antes
de la aparición de las emociones y un control racional también que se dispone
posterior a la aparición de las emociones y que va a permitir su modulación,
en ambos controles, ella cuenta con un monto de energía disponible para
controlar los ámbitos, pero en ninguno de los dos ella es eficaz. Ejemplo, si yo
tuviera un examen, una prueba mañana, y hoy tuviera una dificultad
emocional, como terminar con la pareja, tendría que ocupar el control a priori,
antes de que surjan las emociones para poder estudiar, parra poder utilizar mi
raciocinio y mi lógica, a propósito de un ejercicio cognitivo, si logro estudiar y
obtener un buen resultado en la prueba, entonces mi control apriorístico va a
ser efectivo. Si yo necesitara conversar con la persona con la que tuve el
fracaso sentimental, y explicarle mis razones y lo que me ocurre, si le hago
escándalo y me pongo a llorar, sin poder conversar con la persona, mi control
a posteriori va a fracasar, pero si logro comunicar las emociones que me
acogen, por ejemplo, pena, rabia, entonces mi control va a ser mucho más
efectivo. Con respecto de su manera de vivenciar las experiencias y
situaciones, se puede ver una desarmonía, en e se pueden observar ciertas
tenencias de emociones replegadas hacia el interior, que se alejan de lo
consensual, y de lo que uno puede comunicar hacia otros. Por otro lado,
también se ve una expresión impulsiva y lábil de estas emociones, por lo tanto,
esta manera de vivenciar, termina siendo más bien paradójica y des
armónica. Esto se complementa con el área afectiva que se puede analizar
en el test psicológico, que también demuestra una dificultad por estas
emociones más internas, y una expresión lábil impulsiva y descontrolada de
ella hacia el exterior. En términos de sus relaciones interpersonales, se puede
apreciar que existe un gran interés por las relaciones con otros y los asuntos
que tengan que ver con vivenciar con otros, en la evaluada, pero sin
embargo, cae en errores al poder evaluar estas situaciones relacionales. Por
ejemplo, yo visto de blanco y alguien me dice que el blanco no es su color
favorito y pienso que le caigo mal, entonces estoy evaluando mal la relación
interpersonal con esa persona, estoy evaluando mal la conclusión final de lo
que eso pudiera significar. Entonces, imprime gran subjetividad en ese tipo de
evaluaciones de las relaciones interpersonales. Con respecto al área de la
adaptación social, se puede observar que existe un reconocimiento racional
de las normas y de los reglamentos que se establecen consensualmente para
un círculo de personas o una comunidad, pero este reconocimiento se ve
mermado por la dificultad de poder visualizar los distintos aspectos de la
realidad, que son más bien comunes y cotidianos, como esa percepción está
más bien disminuido y mermado por la percepción circunstancial, le es más
difícil hacer que este reconocimiento de lo normativo sea internalizado de una
manera que su conducta vaya acorde a esto. Es decir, se aprecia un
desajuste conductual y una dificultad en la contextualización de las
conductas que uno debería desplegar en las diferentes situaciones. En el
fondo, con esto de la contextualización, una manera de ubicarse en los
diversos escenarios, según se haya establecido consensualmente. A todo lo
que se ha referido, tiene que ver con un análisis cuantitativo del test y además
ella agregó un apartado sobre aquellos fenómenos cualitativos que
acompañan este otro análisis y que se pudieron observar en las respuestas de
la evaluada. Se observó una gran cuantía de respuestas que hablan sobre
adhesividad, pérdida de límites, y falta de ellos, que en general se han
relacionado con cuadros epilépticos, en el análisis del test de Rorschach. Es
una gran cantidad de esos fenómenos, porque pudieran aparecer en
diferentes personas a propósito de características de personalidad, por
ejemplo, dependientes, pero en este caso aparecen en gran cuantía, y en
general, en la literatura se han asociado a cuadros epilépticos. Eso con
respecto al funcionamiento psicológico. Con respecto a los hechos que la
evaluada relata abiertamente, En esta última parte de la entrevista, refiere
que ella tomó el año 2006 un curso de profesora jefe en 5 y 6 básico, el menor
denunciante, era presidente de curso y su mano derecha, el 2007 comenzó
con problemas personales, la demanda con la ex pareja en la fiscalía oriente y
el fallecimiento de un pariente, que la afectaron muchísimo, refiere además
que el menor denunciante llega a este nuevo curso, refiriendo que no quiere
ser más presidente y con una actitud distinta, diferente en relación con sus
otros compañeros y más aceptado sentimentalmente en el grupo de niñas.
Una de las alumnas tiene aneurisma cerebral, ella se hace cargo de las visitas
de alumnos y apoderados, quienes tenían su teléfono y mails para establecer
actividades que pudieran aportar a la alumna enferma. Dice que la madre del
menor denunciante no estaba de acuerdo en las visitas y el menor no tuvo
permiso para visitar a la compañera, refiere que en un acto cívico del colegio
le dice que los padres le dieron permiso, ella lo lleva en su vehículo a ver a la
niña, pasaron antes a un restaurant de comida rápida donde conversaron de
los problemas de relación con los padres, después de la visita lo va a dejar a su
casa. Luego señala que el día 30 de septiembre de 2007, el niño denunció que
había habido una relación sexual entre ellos, pero ella señala que era
imposible, que serían vacaciones de invierno y ella estaba en un paseo
familiar, por lo que las fechas no eran coincidentes. Luego de la visita al
hospital el alumno le empieza a solicitar que lo sacara de la sala de clases, ella
consintió, lo sacaba de la sala llevándolo a la sala de profesores o a la oficina
de UTP, donde había otras profesoras trabajando. Un día el menor le solicitó
que quería conversar, ella le dijo que se fuera a cambiar de ropa, y lo
esperaría en la intersección, cercanas al colegio, ella lo esperó, le dijo que
quería conversar con ella tranquila, y a ella se le ocurrió irse al departamento
que ella tenía, pero que no habitaba, que también se encontraba cerca del
lugar. En ese departamento, el menor se puso a jugar en el computador,
pidieron algo para comer y cuando ella se le acerca al menor que estaba en
el dormitorio donde estaba el computador, el menor le habría puesto la mano
en una pierna y el menor le habría dicho “ seño Ud. es mi vida, seño, yo la
amo”, a lo cual ella respondió con una negativa, yéndose al living comedor
donde habría llegado el menor, y le habría dado besos en la cara y en el
cuello, momento en el cual le refiere tres lunares que tendría en una de sus
piernas. Ante la negativa de ella y el rechazo por esta situación que el alumno
le manifestaba, èl se fue muy enojado, según refiere la evaluada. Luego de
esto, refiere que comenzó a llamarla incesantemente a su celular, a mandarle
mensajes y en una de las llamadas le dice que va a quitare la ida y ella le dice
que se junten para conversar, se juntan en una plaza donde habían estado
antes tomando helados, ella le dice que esta situación no puede continuar lo
que le está ocurriendo y refiere que él estaba muy, muy enojado con ella, lo
llevó en taxi al domicilio y después se fue a su casa, muy acongojada por la
situación. Dice que llegando a su casa recibe una llamada de la madre de la
menor, diciéndole que se había enterado de la situación donde su hijo le
habría dicho que lo amaba y acuerdan juntarse, el lunes siguiente. Pasada
una hora, recibe otra llamada de la madre del menor, y le dice “tú lo
violentaste”, ella se descontroló, sacó el chip y lo arrojó por la taza del baño,
sufre crisis nerviosa, la familia la lleva al hospital y recibe atención médica. El
director del colegio va a su casa y le habría señalado que los padres del
menor se presentaron en el colegio señalando que se habría producido abuso
sexual entre la profesora, que él le había preguntado al alumno si era verdad
lo que sus padres señalaban era mentira.
Respecto a las conclusiones, explica que tanto a la observación clínica
que se realizó en la entrevista, a los datos recabados y a los antecedentes de
salud que la evaluada entrega y a los indicadores que aparecen en el test
de Rorschach, es posible señalar, que desde el Manual de Diagnóstico de
Enfermedades Mentales, D.S.M. IV T.R., la peritada presenta un trastorno
psicótico por enfermedad médica, desde los criterios de ideas delirantes, que
se respaldan con esta dificultad en la lógica asociativa a que se refirió en el
funcionamiento psicológico y además por la dificultad por la integración de sí
misma y de los demás y la dificultad para evaluar de manera objetiva el
entorno. Además, el segundo criterio de este trastorno, tiene que ver con que
exista la concomitancia de una enfermedad médica, como es la epilepsia,
que ella refiere haber padecido en su infancia, con tratamiento entre los 5 y 12
años.
Es importante señalar que esto que refiere ahora, es una hipótesis
comprensiva que se construye a propósito de los datos recabados, pero
necesita, y en el informe se sugiere, la evaluación de un especialista ad hoc,
que puede ser neurólogo o neuropsiquiatra u otro especialista ad hoc que
pusiere solicitar exámenes médicos que pudieren descartar o confirmar la
presencia de esta patología y por lo tanto, su sintomatología relacionada.
Concluyó que era portadora de un trastorno de personalidad, utilizó el
test de Rorschach y la entrevista clínica. Preguntada indica que la examinada
no le dijo que ya había sido evaluada.
Preguntada señala que la epilepsia tiene dos manifestaciones, o dos
formas de establecerse, uno es el gran mal, que tiene que ver con las
convulsiones y provocan mucho malestar conductual, y por otro lado, existe el
petit mal, que son crisis focalizadas en el sistema nervioso, a diferencia del
grand mal, que es generalizado. En cuanto a la sintomatología, el gran mal
debe ser diagnosticado a propósito de la crisis convulsivas y el petit mal a
veces son imperceptibles para alguien que no tenga preparación en estos
temas.
Consultada
si
esta
errada
percepción
de
la
realidad,
podría
corresponder a que una persona diera cuenta de un hecho que la involucra y
ella pensara que es un complot en su contra, responde que podría ser, sigue la
misma línea.
Ella manifestó que el niño le dijo que sus padres tenían dificultades en su
relación de pareja y se había separado y los hermanos estaban separados,
algunos vivían en la casa con la madre y otros con el padre. Recuerda
situaciones de la madre en relación a otra apoderada del curso, con quien
habría tenido una pelea con golpes y una situación de un robo de un celular a
una funcionaria del colegio por parte de la madre del menor denunciante. No
recuerda en qué contexto se lo relató, algunos datos de los que señaló en este
apartado no eran atingentes, incluso tuvo que realizar preguntas que
encausaran al relato de los hechos.
Indica que ella señaló que con esta cantidad de llamados, de
solicitudes de sacarlo de clases, él la llevaba a situaciones extremas y
erotizaba la relación, el menor. Ella dice que él le puso la mano en la pierna y
la habría besado. Ese es el único hecho de carácter sexual que ella refirió.
En el minuto en que ella está relatando este hecho en el departamento
y que él se habría abalanzado sobre ella, ella habría estado con una
minifalda que en este abalanzamiento se habría levantado un poco y le
habría mostrado sus lunares. La verdad es que ella no le vio relevancia para lo
que ella estaba preguntando respecto de la relación que ellos establecían,
quedó como un dato anexo. Aparecía como un dato irrelevante en el
contexto que ella le estaba preguntando.
Refirió que era muy terrible por lo que ella estaba pasando, que había
sido un tiempo muy complejo en términos familiares, como su madre y para su
hija, con el revuelo de la prensa, y ella dice que fue un error haberse vinculado
y ayudado a este menor en las dificultades tenía estas dificultades con sus
padres. Se refería a él como un amiguito, como un confidente pequeño, fecha
específica no le da, pero en el relato se puede distinguir desde ser la mano
derecha hasta esta situación que refiere en el departamento.
Respecto al Manual de Diagnóstico Estadístico de las Enfermedades
Mentales, es un instrumento utilizado por la psiquiatría y la psicología para
poder realizar diagnósticos que sean consensuados por los diferentes
profesionales. La psicología permite realizar diagnósticos mentales en general,
pero cuando son trastornos que correspondan a una rama más psiquiátrica,
siempre solicitan confirmación o una co evaluación que pueda avalar eso.
Cuando se trata de trastornos que corresponden al área de la psiquiatría se
trata con un psiquiatra, no sabe si a esa fecha había sido evaluada por
psiquiatra.
Agrega que la psicosis es una enfermedad mental, ella lo asocia a la
eventual existencia de epilepsia. De no existir la epilepsia, como trastorno
sicótico a propósito de una enfermedad médica, como la epilepsia, su
diagnóstico no podría confirmarse. Para confirmar daño orgánico se requieren
exámenes médicos.
Ellos estudian el cerebro en cuanto tenga que ver con las patologías
cerebrales. El control de impulsos se encuentra en el Neocortex, ubicado en la
zona frontal, es una de las más relevantes áreas del cerebro, porque todas las
áreas están conectadas con el Neocortex, por lo tanto, cualquier dificultad en
un área va a repercutir en el área frontal.
Preguntada indica que no dijo que ella le hizo regalos al menor ni que le
mandó mensajes de texto. Dijo que botó el chip porque le dio una crisis de
miedo, de pánico, una crisis nerviosa, según que ella relata, por los síntomas
que le acompañan, llanto, gritos, a propósito de lo que había escuchado de
parte de la madre del menor. No señaló que ella buscó a los padres del menor
para aclarar la situación. Ella señaló que todo se debió a un error de
interpretación de esta relación que se había salido un poco de control.
Sostiene que los psicólogos no se pronuncian sobre la imputabilidad o
inimputabilidad de un evaluado, no es su campo de acción, corresponde a los
jueces, sabe que se asocia a la posibilidad de que exista un trastorno mental
que avalara la posibilidad de conducta ilícita y que por lo tanto la persona sea
inimputable. En términos de trastorno mental, ellos pueden describir, pero
siempre que se trata de trastornos mentales, se requiere la confirmación por
especialistas, como son los psiquiatras.
El Test de Rorschach, es útil dependiendo de la pregunta que uno se
plantea, no se elige a priori el test que va a aplicar, sino que depende de lo
que se solicita y la entrevista que se haga, se elige el test que sea más
complementario para los fines de evaluación. El Test de Rorschach, es un test
proyectivo, que consta de 10 láminas que son manchas de tinta, por lo tanto,
son estímulos semi estructurados, que incitan en la persona evaluada,
respuestas diferentes que pueden ser de cualquier índole, es una respuesta
abierta, sin tiempo ni indicación específica, y la idea es poder asociar
conceptos, recuerdos, sensaciones de una persona con respecto a los
estímulos. Se utiliza en una amplia gama de escenarios, en lo laboral, lo forense
como en lo clínico, etc., y además, específicamente, se utiliza como
instrumento para poder evaluar la personalidad, pero en él pueden existir
respuestas que han sido descritas por la literaturas, como propias de un
cuadro, por ejemplo, cuadros orgánicos, cuadros epilépticos, los cuadros
narcisistas, los cuadros histéricos etc.
Los tests neuropsicológicos combinan ambas disciplinas, no conoce tests
como el Urio Nebraska, que no está estandarizado en Chile, no están
estandarizados para nuestra muestra.
Cuando se habla de hipótesis comprensiva, lo que está sugiriendo que
es una forma de comprender un fenómeno que está frente a uno como
fenómeno de estudio. Ahora, si se descarta la epilepsia, entonces tendría que
comprender de forma diferente el actuar. Si no hay confirmación de la
epilepsia, su hipótesis diagnóstica quedaría como una forma de comprender,
que no fue confirmada por exámenes médicos y que tendría que ser resuelta
por un profesional ad hoc, con esos exámenes que se dispusieron o que se
podrían solicitar.
Expresa que es la primera vez que viene a juicio oral, ha realizado
informes de diversas fiscalías del país de acuerdo a lo que ahora, perfil de
personalidad
y
existencia
de
trastornos.
Ella
es
postitulo
en
clínica
psicoanalítica de adultos en la U Diego Portales, además tiene un diplomado
de post título de psicología y psiquiatría forense en la U. de Chile y es profesora
de pregrado y post grados de Test de Rorschach y Tests de Relaciones
Objetables, en la U Diego Portales. Ya desde la entrevista clínica venía
observando ciertos elementos sintomáticos, como la falta de límites en la
relación
interpersonal
establecida
con
ella,
como
evaluadora,
y
la
adhesividad de éstas, que ya le llamó la atención, en general los
antecedentes de salud van hacia el final de la entrevista, entonces se
complementaron hacia el final de ésta, también. Cuando ella aplica el test
psicológico y el posterior análisis y todo lo que se hace para poder llegar al
informe, va dándose cuenta que existe una gran cuantía de elementos que se
han descrito en la literatura, como propios fenómenos de los cuadros
epilépticos.
Preguntada indica que Personalidad Enequética es un tipo de
personalidad que se ha descrito desde hace muchos años, en la historia tanto
de la psiquiatría como de la psicología, que se asocia a esas personas que
padecen de epilepsia y se ha descrito justamente como este tipo de se
relaciones adhesivas, con falta de límites, que sobrepasan el contacto
cercano que se pudiera tener con una persona, y no tiene que ver solamente
con personas cercanas a uno, vínculos cercanos, sino que puede ser cualquier
persona.
Ella hace una sugerencia de exámenes a quien le pide el informe, en
este caso, a la fiscalía.
Acorde el D.S.M. IV es la posibilidad de un trastorno sicótico debido a
epilepsia. El diagnóstico de epilepsia es exhaustivo y acucioso, que debe ser
hecho de manera multidisciplinaria, neurólogos, psiquiatras, psicólogos y otros
profesionales afín. Le da la impresión que en el fondo, por existir un diagnóstico
que aparece más bien de una sola zona de esta multidisciplinariedad que ella
indica, no puede confirmarse ni descartarse.
8.- Andrea Bahamondes Moya, médico cirujano, con especialidad de
psiquiatría, del Servicio Médico Legal, en el departamento de salud mental,
expuso que el día 22 de octubre de 2008 entrevistó para peritaje a María
Eugenia Darrigrande Moreno, de acuerdo al protocolo del Servicio Médico
Legal que constituye en una primera parte que identifica a la persona, una
segunda parte en que se recogen antecedentes médicos y judiciales y una
tercera parte en que se invita a la persona a conversar acerca de su biografía
y por último en relación a los hechos y la razón de la pericia, al final, el perito
evacúa conclusiones que sean consistentes con el examen realizado.
Siguiendo este orden, entrevistó a una mujer cuyo nombre ya mencionó, de 40
años, soltera actualmente con el antecedente de haber sido casada y
anulada, es profesora, tiene el grado de pedagoga general básica en un
instituto profesional y durante los últimos 14 años, se ha desempeñado como
jefa de la UTP del Liceo Polivalente Santa Juliana de Recoleta. Dentro de los
antecedentes, está que fue operada de amígdalas sometida a cesárea en
1988 y que en el año 2008 consultó por asociación subjetiva de mareos a
otorrino, que descartó este síntoma, fue examinada por neurólogo que
descartó una causa orgánica que requiriera de tratamiento. No tiene
antecedentes
delictuales
y
entre
los
antecedentes
psiquiátricos,
era
interesante un primer antecedente que ocurrió entre los 5 y 12 años, fue
llevada por su madre a propósito de dolor de cabeza al médico neurólogo
infantil, doctor Meriboski que diagnosticó una epilepsia tipo petit mal, con
fenobarbital, hasta que se suspendió la medicación. Y no volvió a presentar
sintomatología epileptiforme. Esa la manera más protocolar con que se tratan
estos cuadros, siempre se tratan las epilepsias durante ese lapso de tiempo
con ese medicamento. No refirió ningún otro antecedente psiquiátrico, hasta
2007, en que pidió ayuda a un psiquiatra, Dr. Mardones, porque había tenido
sensación de angustia, había aumentado su hábito de fumar, se sentía
ansiosa, inquieta, tenía ganas de salir corriendo y había empezado a notar
que dormía mal. Informa que habían ocurrido una serie de episodios
importantes, a los que asociaba esta sintomatología ansioso depresiva, su
padre había enfermado, su tía materna había fallecido, su madre estaba muy
preocupada por la muerte de su hermana, estaba haciendo un magíster sobre
ciencias de la educación ese año, que la sobrecargaba y se inició esta
situación que finalmente terminó con su detención, recibió un tratamiento
habitual, con diazepam y sertralina, mejoró, el tratamiento lo describió como
beneficioso. Posteriormente conversaron de su biografía, es la menor de 3
hermanos, familia muy unida, en la que fue una niña muy querida, tratada con
mucho
cariño,
una
niña
con
variados
intereses,
actividades
extraprogramáticas, bailar español, tener clases de inglés y piano, y que en la
edad adolecente fue chica con buenas notas, aprobó con 5,8 la enseñanza
media, no tuvo mala conducta, se considera sociable, tiene pocas amigas,
pero son muy buenas amigas, estableció varios noviazos estables y de larga
duración, contrajo relación matrimonial, se casó con una persona que
estudiaba arquitectura en 1988, muy enamorada, su relación terminó porque
él inició una relación de infidelidad que terminó la relación, tuvo una hija que
estuvo muy enferma de chica, hoy estudia ingeniería con quien tiene una
relación con los peros de madre e hija que no parecía de mayor
trascendencia. Dijo que estaba detenida acusada de haber acusado de un
niño, al pedirle que le relatara aspectos que le parecían importantes, le
informó que la madre del niño dijo que había tenido relaciones sexuales al
menor, ella reconocía que el niño era su alumno, atribuía esto a relaciones
torcidas de la madre, que había tenido relaciones con una ex pareja de la
señora Darrigrande, que habría tenido problemas con otro apoderado, con el
director del colegio, que era un complot, se la veía confiada en que las cosas
se iban a resolver bien. Interrogada cómo lo estaba pasando en el centro de
detención, dijo que escribía un libro, que le pasaba los escritos a su padre, que
se entendía bien con el resto de las internas, que estaba en una sección
llamada Esperanza,
que hace pequeños aseos y que hacía clases de
lenguaje a las internas, decía tal vez es lo peor que me ha pasado en la vida,
pero la cárcel no es tan terrible como ola muestran en la televisión. Ella fue
llevada por Gendarmería el día que ella la examinó, con un chaleco clásico
de imputada, con contención de ambas extremidades superiores, iba bien
arreglada, con gusto, graciosa en sus maneras, sonriente y empática con el
entrevistador se dispuso a contestar las preguntas, con lenguaje fino con
vocabulario abundante, de persona educada, con modales sociales que
también denotaban cultura y educación, con no había ningún elemento de
teatralidad pese a lo difícil de los contenidos que conversaron. Tampoco
había ninguna alteración de la psicomotricidad, la conciencia estaba
claramente lúcida, mantenía la atención, la concentración, el alerta durante
toda
la
entrevista,
y
no
hubo
ninguna
evidencia,
ni
fenómeno
ni
protofenómeno que hiciera pensar en un cuadro psicótico. Con esto se refiere
que no había ningún elemento que pudiera llamarse delirante o alteraciones
de la sensopercepción como son las alucinaciones. Con todos estos elementos
concluyó que era posible descartar la presencia de una enfermedad
psiquiátrica en la persona examinada, concluyó que era muy probable que
hubiera tenido un episodio depresivo, leve a moderado, a fines del 2007 que
parecía reactivo a situaciones estresantes que confluían en ese momento, del
que habían mejorado, y al momento del examen no tenía ningún síntoma que
hiciera pensar que el diagnóstico estaba vigente. También concluyó que no
había ningún elemento que hiciera plantear que el antecedente de epilepsia
tuviera alguna trascendencia al momento del examen actual, que su
inteligencia le parecía en un rango normal a normal superior y que su
personalidad si bien podría ser que tuviera algunos elementos de excesiva
rigurosidad respecto al cumplimiento de sus obligaciones no le parecía que
fuera trascendente desde el punto de vista médico legal referirse a ella.
Ella lleva 25 años trabajando siempre en el área pública y ha tenido
muchas posibilidad de ejercer cargos administrativos o clínicos, nunca ha
estado sin estar viendo enfermos, pero al mismo tiempo se ha desempeñado
como jefe de servicio del Hospital Psiquiátrico, El Peral; como subdirector
médico del Hospital Psiquiátrico El Peral; posteriormente fue médico clínico de
una unidad de rehabilitación en el Hospital Psiquiátrico, de ahí fue trasladada
al Hospital San Borja Arriarán para formar el servicio de psiquiatría comunitaria
del hospital; fue primero jefe del hospital de día, posteriormente, ejerció como
jefe del departamento de salud para las personas, también estuvo a cargo del
departamento de atención primaria del servicio de salud metropolitano
central y ha trabajado también como médico clínico en el Hospital Padre
Hurtado y desde agosto de 2007 tiene 44 horas semanales en el Servicio
Médico Legal. El primer año fue jefe del departamento de salud mental, pero
este año se desempeña como médico clínico, hace pericias.
La pericia se solicitaba explícitamente para evaluar facultades mentales
de la examinada, ella entiende por eso, realizar examen psiquiátrico extenso y
minucioso, para descartar enfermedades que pudieran interferir en la
responsabilidad penal que una persona que está involucrada en delitos,
pudiera tener. Ella descarta que haya ninguna interferencia de patología del
ámbito mental, que pudiera modificar la responsabilidad penal de la persona
a quien examinó. Tampoco encontró ninguna evidencia que le permita
aseverar o informar acerca de elementos que pudieran reducir o disminuir la
responsabilidad.
La psicosis es un cuadro que se define como la dificultad de la persona
para darse cuenta o separar lo que es real y lo que es irreal y con frecuencia
del 75% se acompaña de lo que los psiquiatras llaman productividad, es decir
la mente produce ideas o percepciones que no existen. En ese sentido la
psicosis casi siempre se acompaña de productividad delirante o productividad
alucinatoria, la idea delirante tiene un contenido extraño o original, pero la
persona
que
la
presenta
le
defiende
con
certeza
y
una
cierta
impermeabilidad frente a la experiencia. Recuerda un caso que una persona
decaía ser Jesucristo con especiales poderes, por los que había sido enviado
a la tierra y aunque se le dijera que era difícil ejercer los poderes en el hospital
psiquiátrico, no modificaba ni sometía a una crítica a su pensamiento, nada lo
hacía plantearse que pudiera haber un error en su idea. Esa es una idea
delirante, una idea que no se conecta con la realidad ni se intercambia con la
experiencia para mantener la certeza. La alucinación tiene que ver con que el
sujeto percibe elementos, como si escuchara, viera o tocara, pero no existe el
estímulo, es decir, está presente el resultado, pero no está el estímulo.
No encontró ninguna evidencia de que ella hubiera alucinado al
momento del examen y no la informó de alucinaciones en periodos anteriores.
Lo alucinado es lo que se informa como una percepción de los sentidos, se
alucinan voces, experiencias táctiles, pero no alucina una complejidad del
orden de pensar que hay otro pudiera estar, eso no corresponde a una
alucinación. La psicosis es el mayor de los trastornos mentales. Los trastornos
mentales los trastornos psicóticos especialmente, pueden clasificarse de
acuerdo a su causa, como aquellos que son reactivas, que se refieren a la
manera como la mente reacciona frente a los estímulos del medio y la mente
puede reaccionar perdiendo el juicio de la realidad, entonces, algunas
psicosis se clasifican como reactivas, otras se califican como orgánicas,
derivadas de una enfermedad del cerebro y otras, se han puesto en un
terreno borroso, que es el de las enfermedades endógenas, que es una forma
de decir que tenemos menos información que respecto del resto de las
psicosis. Desde 1940 en adelante, el esfuerzo ha sido clasificar cuadros
psiquiátricos y productos de estos intentos, hay dos tomos clasificatorios, uno
propuesto por la Organización Mundial de la Salud, que se llama la
Clasificación Mundial de Enfermedades, que ya va en la versión 10 y la
clasificación que hizo la asociación americana, D.S.M. que son las dos
grandes clasificaciones que usan los psiquiatras y ahí parecen clasificadas las
psicosis reactivas, las orgánicas y las endógenas. El D.S.M. se ha revisado 4
veces y la versión que se usa en la actualidad es D.S.M. IV. Es largo describir
todos los trastornos, pero reconoce los trastornos orgánicos, de droga, de
personalidad, de impulsos, del sueño, los trastornos reactivos a situaciones,
reacciones situacionales y una cantidad amplia de tipología de trastorno, que
para ella sería difícil decirlas de memoria una por una.
Una vez que la D.S.M. establece la clasificación en distintos ítems,
propone que cuando el psiquiatra haga el diagnóstico, se refiera a 5 puntos, a
eso lo llama ejes, la D.S.M. propone en el eje uno, el psiquiatra diga qué
enfermedad psiquiátrica tiene la persona, por ejemplo, esquizofrenia; En el eje
dos, que establezca si hay elementos de la personalidad de esa persona que
son especialmente relevantes para el diagnóstico; en el eje tres, dice que
anote el psiquiatra si hay una enfermedad médica que sea relevante para el
diagnóstico; en el eje cuatro, que se refiere a las circunstancias en que el
diagnóstico se produjo. Por ejemplo, voy a utilizar esquizofrenia, separación
reciente de los padres, habría que poner en el eje cuatro; eje 5 que el
psiquiatra se refiere a cuál ha sido el ajuste que ha tenido la persona a su
funcionamiento rutinario, por ejemplo, en este caso podría ser esquizofrenia
con un ajuste malo porque ha debido estar con licencia los últimos seis meses.
Quiere la D.S.M. que el psiquiatra no solo haga explicito al diagnóstico sino que
el contexto y las dificultades sociales que se asocian a ese diagnóstico. A eso
se le llama ejes.
La clasificación establece que muchas enfermedades pueden tener
trastornos de los impulsos y entonces, en el rubro esquizofrenia, por ejemplo,
habla acerca de cómo la esquizofrenia puede modificar los impulsos de una
persona. Pero de todas maneras, como no todos los trastornos del impulso
caben dentro de los otros apartados, se reserva un item que le puso el nombre
de trastorno de control de los impulsos no clasificados en los otros apartados,
es como dejar abierto el etc. Y ahí se han ido poniendo una serie de
conductas
que
no
caben
claramente
como
parte
de
enfermedad
psiquiátrica, cleptomanía, tendencia a robar pequeñas cosas, piromanía,
tendencia a causar incendios, el juego patológico, es decir, son pequeñas
conductas que el sujeto maneja mal en un área específica, que no pueden
ser consideradas enfermedades mentales y por eso se utilizó el capítulo de
trastornos de impulsos que no caben dentro de otros apartados. A ella no le
parece que en el examen que ella hizo, exista ningún elemento que permita
sospechar un control de impulsos, por el contrario, le pareció una persona que
lograba tanto en sus emociones, como en sus movimientos como en su
conducta, una forma adecuada, mesurada, más bien sobria, sin nada
estrepitoso, teatral ni dramático.
La psicosis orgánica en términos generales, es un cuadro de alteración
del juicio de realidad que tiene como causa una enfermedad cerebral,
porque en psiquiatría el cerebro y la mente son entidades aparte. Los
occidentales actuales pensamos que la mente se aloja en el cerebro, pero
hay que recordar que otros pensaron que la mente se encuentra en el
corazón o en otras partes del cuerpo. La mente es una construcción que
proviene del ámbito de la filosofía que compartimos, y que puede enfermarse
a propósito de una enfermedad del cerebro, tumores, traumatismos,
intoxicaciones, infecciones, cuadros degenerativos y epilepsias.
Una psicosis orgánica tiene que producirse en un contexto de
organicidad cerebral y cuando la corteza del cerebro está alterada da
indicadores clínicos que son fáciles de ver en el examen, esos indicadores son
una pobreza de la capacidad de comunicación, un empobrecimiento tanto
del lenguaje como de la riqueza simbólica que tiene el lenguaje, aparece una
tendencia a perseverar en el mismo contenido, a ser circunstancial, detallista
y pobre en lo que se dice, porque lo esencial de la corteza, que es la
capacidad simbólica, es lo que se ha dañado. Cuando una persona presenta
esa sintomatología, uno está obligado a buscar las causas de esa
sintomatología y sólo ahí podría decir que el paciente que está examinando
tiene probablemente una enfermedad de origen cerebral, porque hay
evidencia clínica de que la corteza cerebral ha perdido habilidades. A ella no
le parece que en el caso de la examinada hay elementos que permitan
plantear organicidad cerebral.
Le epilepsia es un tema controvertido, en todos los tratados de
neurología y psiquiatría hay un párrafo que dice, la epilepsia ha sido cargada
de un estigma muy grande a través del tiempo, y por lo tanto, la neurología y
la psiquiatría se han dedicado de reducir el estigma que acompaña a los
pacientes epilépticos, que han sido acusados de tener fuerza inusual, sed de
sangre, actuar de manera in impulsiva, hasta que ven que el otro esté muerto
etc. Todo eso ha sido desvirtuado por la ciencia. Lo que hoy día se sabe, es
que la epilepsia es la expresión clínica de un funcionamiento anormal de las
neuronas,
que
si
se
logra
registrar
eléctricamente
con
un
electroencefalograma, se va a dar cuenta que todas confluyen a un
funcionamiento sincrónico. Si eso si clínicamente se acompaña
de la
evidencia de que alguien cae al suelo, tiene movimientos tónico clónicos, se
muerde la lengua, se le relajan los esfínteres, etc., se llamará epilepsia, sobre
todo si tiende conspicuamente a recurrir en el tiempo, porque podría ser que
cualquier persona sin tener epilepsia haya experimentado crisis convulsiva,
pero si eso aparece con un patrón estereotipado y recurrente, entonces se
hace el diagnóstico de epilepsia. Ahora, si la epilepsia puede a través de
muchas convulsiones seguidas, provocar un daño difuso de la corteza, está en
discusión, pero es posible que hayan tenido a propósito de una crisis
traumatismos craneoencefálicos a repetición y esto haya podido generar un
daño cerebral más definitivo.
Es indispensable decir que los impulsos son los deseos o las motivaciones
que todos tenemos para hacer algo de manera súbita y sin reflexión
entremedio. Eso significa que cualquier cosa que sea planificada o que dure
en el tiempo, reiterándose una y otra vez, no tiene las características
impulsivas, es impulsiva. La conducta de una paciente con esquizofrenia que
durante una entrevista tiró una corchetera y después quedó inmutable, es
decir, ella deseó lanzar y sin ninguna reflexión la lanzó. En el plano de lo
normal, el impulso también existe, una persona que ha decidido bajar de peso,
pero frente a la primera bandeja en un coctel, se come todas las empanadas,
es una persona que actuó con un deseo que se contrapone a lo que había
sido su plan o su voluntad. Es decir, la impulsividad, es una gama de
experiencias, que van desde la normalidad más absoluta, pero que también
puede por supuesto, constituir un trastorno. ¿Cuándo constituye un trastorno
ese llevar a cabo el deseo pensando poco? Cuando produce problemas o a
la persona, por ejemplo, alguien consulta al psiquiatra, porque a propósito de
su tendencia atarantada al tomar decisiones, ha cambiado el rumbo de su
vida y ha perdido el trabajo, por ejemplo, o también puede ser que sea causa
de consultas cuando ha originado perjuicio a los demás. El que la parte del
cerebro que se dedica a que uno sea atinado apropiado y lleve adelante una
vida planificada con un objetivo, es el lóbulo frontal, es el lóbulo frontal el que
hace de todo el resto de las actividades del cerebro, una actividad
armoniosa, es el que –como se ha dicho- el que lleva la melodía, los demás
lóbulos del cerebro son las notas, es lo que nos hace esencialmente humanos.
Consultada sobre qué significa elementos focales epileptiformes
responde que epileptiforme es que adopte la forma de una epilepsia, nada
más que eso. Esa es una palabra que se utiliza con frecuencia cuando se
concluye o informa un electroencefalograma, porque hay formas que pueden
adoptar las curvas del electroencefalograma que pudieran llegar a tener la
forma de las curvas de la epilepsia, entonces, es frecuente que los
electroencefalografistas utilice el término, no hay elementos epileptiformes o
hay elementos epileptiformes que podrían hacer sospechar epilepsia, o
cuando dice no hay elementos epileptiformes, eso significa que él pudiera
haber observado ligeras desviaciones eléctricas de un trazado absolutamente
normal, pero que está interesado en descartar que esas pequeñas
alteraciones adopten la forma de una epilepsia. La epilepsia es un diagnóstico
clínico, por lo tanto, el electroencefalografista siempre va a ser muy riguroso en
no decir hay epilepsia, el electroencefalografista sólo va a decir no hay
elementos eléctricos que permitan plantear ni sospechar el diagnóstico de
epilepsia. Eso lo podría decir el electroencafalografista, pero es el clínico, ya
sea neurólogo o psiquiatra, el que va a arribar al diagnóstico, cuando
comparando los elementos eléctricos, con la historia pormenorizada del
paciente, piense que se constituye el diagnóstico de enfermedad epiléptica.
Consultada sobre qué es un elemento focal paroxístico, responde que
eso
sí
ya
categóricamente
corresponde
al
lenguaje
del
electroencáfalografista, la crisis convulsiva está un poco antes, anunciada, por
una abrupta y súbita aparición de ondas más lentas y largas, que aparecen y
se van, de un momento a otro, a eso se llama paroxismo, es algo de aparición
repentina y desaparición abrupta.
Consultada sobre qué es una lesión protuberiaxial lateralizada a la
izquierda del cerebro, de origen desmielizante, alcanza a producir o es un
daño orgánico relacionado con la región frontal, responde que supone que se
está refiriendo a la región anatómica del cerebro que se llama protuberancia,
es un área del cerebro, y que es protuberante, sobresale y la protuberancia
tiene una parte de sustancia blanca, que es lo que se diferencia de la
sustancia gris en el cerebro, que es donde están los cuerpos de las neuronas y
sustancia blanca, donde están los nervios, los axones, las dendritas, y en
ocasiones puede ser que se observen áreas en la que se ha perdido una grasa
aislante que tienen los axones, que se llama mielina, que pueden observarse
como áreas jaspeadas, menos densa, en un examen como la resonancia,
entonces supone que se refiere a un área en que se ha perdido la mielina, en
una región del cerebro que se llama la protuberancia. Ese es un hallazgo que
habría que clínicamente, compararlo con la clínica para decir si tiene un
significado especial. Todos los exámenes imaginológicos, todos, lo que
recogen son hallazgos, o sea, datos, sólo el clínico es quien lo transforma en
información fiable. Si el clínico puede, en relación a un examen, confirmar su
sospecha clínica, entonces es examen tiene significación para la enfermedad.
Pero, sería largo explicar que personas totalmente demente clínicamente,
tienen una resonancia normal, o personas que están clínicamente en
prefectas condiciones, tienen un quiste dentro del cerebro que ocupan ¼ del
área intracraneana, sin que se de cuenta. Son sorpresas que hacen que el
clínico comprenda que el diagnóstico en neurología, tiene que ser con la
clínica, no con una imagen aislada, una imagen sin clínica no tiene
fundamento. Ella examinó a la señora Darrigrande y puede decir que de su
examen no hay elementos clínicos para pensar en organicidad cerebral ni en
actividad epiléptica actual, de manera que cualquier elemento que haya
aparecido en un examen, es un dato interesante, hay que ver si crece o cómo
se comporta, pero no le sirve para arribar a ningún diagnóstico ni soportar el
diagnóstico, no le es un dato relevante, es un hecho que no le sirve ni para
confirmar ni descartar nada, porque no está la clínica que ella necesita para
haber sospechado que algo en el cerebro pudiera estar afectando si algo en
el cerebro pudiera estar afectando, le sirve de mucho que le digan, doctora
aquí hay algo, pero cuando clínicamente no tiene nada, no le sirve que le
digan que hay algo ahí, es un dato no más.
Expone consultada, que la enfermedad está a cargo de la medicina y
el especialista médico que se encarga de las enfermedades mentales es el
psiquiatra, ella diría que en bastante trabajo inter especialista con el
neurólogo, que es el que se hace cargo del cerebro, pero indudablemente
que es el médico.
Descarta un trastorno psicótico, porque no hay ningún elemento que le
permita hacer el diagnóstico de trastorno psicótico por lo tanto no hay razón
para la búsqueda de una causa de algo que no tiene sustento clínico.
Consultada si cuando la entrevistó la entrevistada tenía capacidad de
comprender el acto que e le estaba imputando, si tenía la capacidad de
querer y poder realizar la conducta que se le estaba imputando, responde
que no sabe si quería, pero la persona estaba en condiciones mentales de
realizar lo que los datos judiciales informaban porque ella la paciente le dijo
que no lo había hecho lo que los datos judiciales le informaban. Ella la
examinó el 22 de octubre de 2008, ella explicaba lo que estaba sucediendo
como un mal entendido de personas mal intencionadas.
El lenguaje psiquiátrico utiliza lo mismo que la Real Academia dela
Lengua Española, impulso es el deseo o motivo afectivo que induce a alguien
a hacer algo súbitamente, y sin reflexión.
Personalidad eneketica es una manera de ser que se encuentra
desdibujada en las últimas clasificaciones y que intenta describir un carácter
que ha sido declarado como aceitoso, el sujeto es pegajoso, se va sobre el
otro más de lo deseable, lo toca más de lo deseable, le habla más de lo
deseable, se entromete más de lo deseable, dice un detalle una y otra vez,
insiste en decir, si se le pide que cambie el curso en la conversación, quiere
quedarse en la circunstancia y seguir repitiendo. Ese es un carácter, no es una
enfermedad, se ha asociado a que personas que tiene epilepsia podrían con
más facilidad desarrollar ese carácter que otras personas. No le pareció ningún
elemento que permitiera concluir en eneketismo en la examinada.
Preguntda que es el Peting, indica que no lo ha usado nunca, pero
significa el afecto que uno siente por una mascota.
Su conclusión fue que descarta una enfermedad psiquiátrica que
pudiera modificar la responsabilidad sobre los hechos que se investigaban.
Estima que no fueron necesarias las pruebas psicológicas. Ella piensa
que en el trabajo conjunto del psiquiatra y psicólogos, habitualmente los
psiquiatras piden psicólogo en cuanto a las características de personalidad del
entrevistado, si hay dudas, por ejemplo, alguien se muestra, no enfermo, pero
demasiado paranoide u obsesivo, ella solicita la participación de un psicólogo
que abunde en información sobre los rasgos de personalidad. También le
interesa a ella en los informes, es que cuando no hay ningún elemento que
apunte a un trastorno, no entregar información que pudiera a ojos no expertos
teñir lo que se comprende, de manera que para ella es importante decir, que
no solicita algo categóricamente, porque no tiene ninguna relevancia sobre la
causa y lo que se está discutiendo y si empieza a decir cosas entre oscura y
sombra, puede ser que al otro le enturbie su capacidad de tomar
conocimiento delo que está sucediendo. Por eso le interesa ser categórica.
Sin duda en el reporte, aunque ella negara la participación y
encontrara que esto obedecía a un mal entendido, ella sabía muy bien
distinguir por qué la estaban acusando, de qué la estaban acusando y que
era compartido por todos, relaciones sexuales con un niño corresponde a un
mundo de lo que no se debe hacer o que los demás van a sancionar. En ese
sentido ella tenía capacidad para reconocer lo que los demás consideran
lícito o ilícito.
Preguntada
expone
que
la
epilepsia
tiene
varias
formas
de
presentación, en 1980 una asociación que se llama Liga contra la Epilepsia se
pusieron de acuerdo para utilizar un lenguaje unitario y decidieron que la
epilepsia se puede dividir en dos tipos, las generalizadas y las focales. Las
generalizadas se dan siempre con compromiso de conciencia y las focales,
tienen una expresión dependiendo de donde esté ubicado el foco epiléptico.
Por ejemplo, si el foco epiléptico está ubicado en el lugar del cerebro que
comanda el movimiento de mi brazo, es probable que yo tenga una crisis en
que yo mueva mi brazo, que no se generalice, y no pierda la conciencia. De
las generalizadas, hay algunas que se comportan, que son las más con la
clásica caída al suelo, con movimiento tónico clónico de todo el cuerpo, un
periodo de amnea, relajación de esfínter, mordedura de la lengua y
recuperación de la conciencia. A eso llamaron los franceses, epilepsia grand
mal. Si son con compromiso de conciencia, pero no gran mal, las ausencias
que tienen los niños en el colegio, se ha llamado petit mal. Entonces, la
epilepsia petit mal, es una epilepsia generalizada que no se acompaña de la
crisis tonicoclonica clásica.
Señala que el electro encéfalo grama es el registro de cambios de
polaridades eléctricas que se producen en la corteza, eso es bien importante,
porque son puestos en la superficie del cráneo, son puestos una serie de
electrodos, los electrocenfalografistas son los más llamados a informar de eso,
pero son varios canales, 32 canales y eso lo mandan a decir en el informe.
Cuando se observa una crisis epiléptica, observa que todos los electrodos se
endentecen, agrandan la onda, y todos van al mismo tiempo haciendo el
mismo dijo, paroxísticamente. Es decir abruptamente todos los canales
empiezan a hacer una onda ancha y amplia que desaparece una vez que
termina el episodio clínico de epilepsia y eso lo comparten el petit mal y el
Grand mal, que son formas de epilepsia generalizada, es decir, que
comprometen la totalidad de la corteza.
Los electroencefalogramas detectan esto en el momento de la crisis esa
es una de las grandes cosas discutidas, razón por la cual la clínica es tal
fundamental, porque en el fondo, desde el punto de vista eléctrico, la única
forma que se tiene para decir que un fenómeno eléctrico es epiléptico, que se
hubiera puesto el electrodo cuando el sujeto está teniendo la crisis, ahora se
está desarrollando una especie de Hallter de epilepsia en que la persona
puede permanecer con los electrodos puestos durante bastante tiempo, para
ver si se logra registrar eléctricamente el fenómeno que coincida con lo que se
ha pensado pudiera ser una epilepsia desde el punto de vista clínico.
Supongamos que una persona, después del ejercicio, sienta olor a florero de
cementerio, ratón muerto en el tejado, son curiosas las descripciones. Si se
logra registrar eléctricamente con un Hallter, al mismo momento en que el
sujeto dice ahora estoy sintiendo el olor a florero de cementerio, ahí se tiene el
diagnóstico. Es difícil y requiere de harta ciencia. El fenómeno eléctrico se da
durante la crisis misma. La crisis generalizadas, donde alguien pierde la
conciencia, se queda mirando fijo y después cae al suelo, tiene una crisis y se
recupera, tienen bastante poca duda diagnóstica. El problema es que alguien
puede tener una crisis focal, ubicada en el lugar donde los olores son
procesados en el cerebro y él, lo único que va a contar, es que siente olor a
florero de cementerio. En ese caso, el tener el correlato eléctrico es mucho
más importante y ahí va a observar que al mismo tiempo en que el sujeto
percibe el olor, el electroencefalograma le muestra la alteración y entonces se
tienen los dos elementos confluyendo, para decir, esta es una epilepsia focal,
que está ubicada probablemente en el área donde se procesan los olores en
el cerebro del sujeto y a ese sujeto hay que someterlo a toda clase de
exámenes, porque puede tener un tumor.
Indica que las ausencias son un tipo de petit mal. Durante la crisis, hay
compromiso de conciencia, también en el Grand mal, son generalizadas, y no
focales.
Preguntada señala que no entrevistó a personas que la hubieran
observada ni ella comentó tener la impresión de que algo curioso hubiera
ocurrido, lo que sí hacen las personas que tienen epilepsia. Las personas que
tienen epilepsia y han tenido una crisis, no son personas a las que les pase
inadvertido lo que les pasó, hasta los niños pequeños, estaban en clases
atendiendo lo que dice el profesor, se desconectan y después vuelven a
conectarse con lo que dice el profesor. Estamos hablando de fenómenos
paroxísticos, cosas que ocurren en segundos. Si una persona estaba
atendiendo a la clase de matemáticas y de pronto hay algo que se saltó, lo va
a decir, esto no pasa desapercibido, forma parte de un sentimiento de
ansiedad, saber lo que está pasando, nadie va a dejar de contarlo, así como
que no hubiera sucedido nada.
Consultada expresa que le preguntó a la imputada qué síntomas había
tenido en la infancia, porque además hay un antecedente que tuvo vómito a
los 5 días y la madre dijo que había estado asfixiada. Le preguntó si en la
actualidad tenía alguna molestia de orden epiléptico, que a sus ojos pudiera
parecer epiléptico. Ella le pregunta, de esa enfermedad de la que tuvo
tratamiento durante 7 años, ha tenido alguna evidencia en los años
posteriores, que haya sido vista como epilepsia, y ahí le dijo que en el año 2006
había tenido mareos y ella se interesó saber si había sido evaluado por un
neurólogo y le dijo que sí, y que éste descartó que el mareo tuviera causas
orgánicas.
No supo que la imputada presentara alguna lesión cerebral, eso no es
importante porque no había clínica que orientara a que lo que apareciera
como lesión le fuera útil clínicamente. Es importante y va a volver a decirlo, los
exámenes de laboratorio confirman o avalan la clínica, no la reemplazan de
manera que, tener exámenes de laboratorio que muestran algo que no está
respaldado por la clínica, no es de utilidad para el médico. Para el médico es
de gran utilidad, si teniendo un elemento clínico, logra obtener la confirmación
en el laboratorio.
Reitera que la epilepsia se puede dividir en generalizada y focal, todas
las
generalizadas
cursan
con
compromisos
de
conciencia,
generalizadamente, y estas se dividen en dos: las tipo Grand mal que
clínicamente aparecen con caída al suelo, y las petit mal, que son con
compromiso de conciencia, como puede ser una ausencia, pero que no
tienen la expresión clínica grandilocuente dela tipo Grand mal, esas son las
dos generalizadas. Aparte de esas, existen las focales no se acompañan de
compromiso de conciencia, como podría ser el movimiento del brazo, porque
está anormalmente funcionando la parte eléctrica que condiciona el
movimiento del brazo, sin embargo, su conciencia persiste lúcida. Eso no es
mal petit mal, es siempre una de las alternativas de la generalizada y siempre
es con compromiso de conciencia, se puede ver, es frecuente en los niños, se
ve la mirada fija y hace un movimiento de deglución, y en ese momento está
perturbada la conciencia, pero no cae al suelo ni tiene crisis tónico clónica,
pero es generalizada.
Prueba Documental.
El Ministerio Público, incorporó al juicio mediante lectura resumida, los
siguientes documentos:
1.- Certificado de Nacimiento de Sebastián Alexis, emitido por el Servicio
de Registro Civil e Identificación chile con fecha 8 de enero de 2008, del que
aparece: Circunscripción Independencia; Nº de Inscripción 4754, Registro S3;
año: 1995; RUN 19.163.321-0; fecha de nacimiento: 27 de agosto de 1995;
Nombre del padre: Luis Alberto Jeria Márquez; RUN:12.874.101-1 Nombre de la
madre: Jessica del Carmen Salinas Arriagada, RUN:12.651.392-5 firma timbre,
funcionario autorizado Elisa Romero El Cader, Abogado Jefe.
2.- Antecedentes Familiares de la victimas emitido por el Registro Civil,
del que consta el nombre de los padres, y los hermanos, Braulio Alonso y
Deyanira Alexandra.
3.- Carta de Fiscal Claro Chile S.A Don Ricardo Gebauer Tocornal
emitida el 10.09.08 que da cuenta del envió por correo electrónico del trafico
de llamados del Teléfono 07-7722786 entre los meses de agosto y diciembre
del 2007 y copia del correo electrónico respectivo.
4.- 52 hojas impresas de Tráfico de llamadas enviadas por correo
electrónico del Teléfono 07-7722786 entre los meses de agosto y diciembre
del 2007.
5.- Carta de Fiscal Claro Chile S.A Don Ricardo Gebauer Tocornal
emitida 05 de noviembre del 2007 que da cuenta del numero de IMEI, de SIM
Card, marca y modelo del teléfono celular N° . 07-7722786 y del cambio del
SIM Card original fue cambiado el 26-11-07.
6.- Fotocopia autorizada de Pagina N° 1 del Libro de Clases del 6° año
A año 2007 del Liceo Polivalente Santa Juliana, de la que aparece como
profesor jefe Srta. María Eugenia Darrigrande Moreno, y aparecen las
asignaturas que se imparten.
7.- Fotocopia autorizada de la lista del Curso 6° básico A año 2007 del
Liceo Polivalente Santa Juliana, entre los alumnos se nombra a Sebastián.
8.- Copia Autorizada de Evaluación de Hábitos e Integración Social de
la victima año 2007 y 2008, en la que aparece haber logrado los principios de
responsabilidad,
lealtad,
honradez,
fraternidad,
tolerancia
y
área
de
desarrollo. Indica el documento que el hábito se ha logrado, cuando está
ingresado a su conducta cotidiana. El alumno tiene sólo una D, en el ámbito
acepta fracasos y se esfuerza por superarlos, lo que significa en desarrollo,
cuando existe una manifestación ocasional.
9.- Fotocopia autorizada de Hoja de Observaciones Personales de la
víctima del año 2007 cursando 6° año básico A, entre el 23 de abril y el 10 de
diciembre, en que, la primera anotación de abril es tira papeles, realizando
desorden en la sala de clases, luego anotaciones positivos por participar con
entusiasmo en acto del día del Carabinero, luego por su participación en el
acto de Glorias Navales,, por colaborar en acto cívico de fiestas patrias con
responsabilidad, en noviembre participa en obra teatral despierta. Las demás
anotaciones son por haberse pegado en la frente, se le envía a la profesora
jefe, el 27 de junio; el 21 de noviembre, en taller de computación, se señala
que ingreso a las 15.20 horas, indicando que se encontraba enfermo y por lo
tanto estaba en la sala de clases. Esta situación se ha repetido en varias
ocasiones, siempre el alumno aprovecha la oportunidad par quedarse fuera
del taller; el 22 de noviembre UTP: Sebastián tomó conocimiento de la sanción
establecida y por loa cual inspectoría general informa que no participará en la
revista de gimnasia; 26 de noviembre: Dirección: Se conversa con alumno y se
le remite a DAE, para evaluar situación planteada por padres y referida a
conversaciones y mensajes de Sebastián con docente del curso; 10 de
diciembre: sale de la sala.
10.- Certificado Anual de notas del año 2007 de la víctima, con la
siguiente puntuación: lenguaje y comunicación: 6,4; inglés: 6,5; matemáticas:
6,5; estudio y comprensión de la naturaleza: 6,6; estudio y comprensión de la
sociedad: 6,9; educación tecnológica: 6,6; educación artística: 7,0; educación
física: 6,3; religión: muy bueno; promedio final: 6,6: asistencia 98%. Es
promovido a séptimo año de enseñanza básica. Profesor Jefe María Angélica
León Ramos, Director Héctor Ponce Ovalle. Timbre: Liceo Polivalente Santa
Juliana. Santiago,28 de diciembre de 2007;
11.- Carta emitida por Héctor Ponce O. Director Santa Juliana de fecha
29.11.2007, ya transcrita.
12.- Informe sobre entrevista a S. J, de fecha 07.03.08 suscrito por
Claudia Ponce O, del siguiente tenor: “Liceo Santa Juliana. Av. México Nº 755Recoleta. Teléfonos: 6293851-6226973. Santiago, 7 de marzo de 2008. INFORME
SOBRE ENTREVISTAS A SEBASTIAN.. El día 26 de Noviembre del año 2007, tomo
conocimiento del caso a través del Director del colegio Sr. Héctor Ponce,
quien me solicita entrevistar al alumno Sebastián .. Esta entrevista la realizo el
mismo día, en la primera parte el menor describe los hechos y su ocurrencia,
indago sobre sus afectos en esta relación, reconoce atracción hacia ella.
Observo interés en protegerla y dejar claro que esto era sólo una amistad,
hacia el final de esta sesión y ante la evidencia de sus contradicciones, me
informa lo siguiente
- Se reunían los días Viernes después del horario de salida (16.00 hrs.), ella
lo esperaba en su auto en las cercanías, se quedaban conversando dentro del
auto.
-En una ocasión fueron al Parque los Reyes, siendo aquí según lo
expuesto por él, donde se besaron.
En referencia a su interés en protegerla, pregunto ¿qué te preocupa? Él
responde “que la echen”. Aten la situación del beso lo insto a conterle a sus
padres.
La siguiente entrevista se realiza el día Miércoles 28, en esta ocasión
junto a los padres quienes deseaban tener claridad sobre todo lo sucedido
entre Sebastián y su profesora, ya que según ellos debe haber ocurrido algo
más que “sólo besos”. En esta ocasión el menor refiere haber ido a su
departamento en varias ocasiones, le expuse la importancia de que dijera
todo lo ocurrido entre ellos para que así, pudiese él recibir la ayuda necesaria
para entender y superar este hecho Transcribo extracto de la conversación:
¿Pasó algo más entre ustedes? Breve silencio “sí, caricias” ¿sobre o bajo
la ropa? “al principio sobre… después debajo” Sebastián de caricias bajo la
ropa a lo otro hay un paso ¿hay algo más que quieras decir?.... tuvimos
relaciones sexuales ¿hubo penetración? ¡sí” Sebastián ¿qué es penetración?
“mi pene entró en su vagina”
Una parte de lo conversado con los padres posterior a la salida del niño
de la oficina, es la necesidad de que este sea atendido por un especialista del
área, y que mientras esto no ocurra, se le brindará el apoyo necesario.
El suceso próximo a esta entrevista es la realización de la denuncia por
parte del Director el día 30 de noviembre.
Las siguientes dos entrevistas se realizaron los días 3 y 7 de Diciembre, el
objetivo era visualizar su estado emocional, en mi oficina se observa decaído,
desganado, distinto a mis observaciones en patio, ante esto refiere “tengo que
andar bien, si ando mal todos preguntan ¿Qué te pasa? ¿qué te pasa? Y no
quiero que nadie sepa”
En la última entrevista se aprecia en él mayor conexión entre lo hechos
ocurridos y su estado emocional, “estoy cansado de todo esto… quiero que se
termine, aunque está recién empezando, porque mi mamá quiere que vaya
presa y no lo vuelva hacer con otro niño ¿qué piensas de eso? Sí, que está
bien. En esta oportunidad aparece nueva información en relación a que al
parecer, en el último tiempo, él no estaría queriendo mantener esta relación
dice “yo ya quería parar, pero cuando lo hacía la seño llegaba al curso
retando a todos, gritaba y se enojaba por cualquier cosa”.
Esta fue la última conversación sostenida con Sebastián, ya que finalizó
el año escolar.
Este
informe
lo
he
realizado
con
los
extractos
de
nuestras
conversaciones, que a mi parecer aportan mayor información al caso. Claudia
Ponce O. Psicóloga. RUT 11.822.001-3”
13.- Escrito denominado Meditaciones, suscrito por María Eugenia
Darrigrande Moreno
en diciembre del año 2007, del tenor siguiente:
“Meditaciones. Yo, María Eugenia Darrigrande moreno, RUT 9.151.653-5, escribo
esto para aclarar mis ideas en estos momentos tan difíciles. Aún ignoro cual es
la denuncia que se ha presentado en mi contra, pero quiero expresar a través
de estas palabras, lo que siento como persona y profesional.
He meditado que soy una profesora que tiene una trayectoria de 14
años, en este establecimiento, durante los cuales no sólo practiqué la
docencia, sino también realicé cursos de perfeccionamiento, los que me
valieron ser nombrada jefe de UTP de Enseñanza Básica. Actualmente también
tengo una jefatura.
Son varias las generaciones de alumnos a las que he ayudado a formar
y nunca hubo quejas de nadie. Más aún, he recibido muchas muestras de
afecto, tanto de los apoderados de aquellos estudiantes, como de mis ex
alumnos, que en muchas oportunidades me han visitado para contarme
acerca de sus logros académicos, y también, para presentarme a sus familias.
Todo este reconocimiento se deba a que los educadores muchas veces
debemos actuar como padres, orientadores, psicólogos, y en ocasiones, de
enfermeros, según las circunstancias.
Mi vocación de maestra se manifestó desde que era muy pequeña. En
mi familia fue forjada con valores morales y cristianos los que están acreditados
en mi currículo. También me he perfeccionado a lo largo de mi trayectoria
profesional con los con los principios que en educación se conocen como
“transversales” y en los cuales se acentúan los aspectos éticos.
Antes de puntualizar los hechos ocurridos, debo señalar una cualidad
inherente a la función de educadora, este es mi excesiva sensibilidad ante los
problemas que aquejan a mis alumnos. Sus dramas personales me conmovían
profundamente. Nunca he cerrado las puertas de mi corazón para
escucharlos, aconsejarlos y tratar de solucionar aquellas cosas que los hacen
sufrir.
Tal fue el caso, durante este año, de la alumna Ayleen Torrejón, que
todos ustedes conocen. No sólo ayudé a organizar el Bingo que se hizo para
ayudar a sus padres económicamente, sino que también en muchas
ocasiones, tanto padres y alumnos me solicitaron que los transportara en mi
automóvil para visitar a la niña, lo que yo hacía. Recuerdo algunos de mis
alumnos que me lo pidieron: Daniel Latuz, Mauricio Carrasco, Catalina Urzúa,
Jeremy Fuenzalida y otros, entre los que incluyo al alumno cuyos padres han
hecho la denuncia.
Ahora voy a empezar a puntualizar hechos: primeramente, indicar, que
Quinto y Sexto año Básico fui Profesora Jefe de este alumno, su cambio fue
radical en cuanto a sus acciones y actitudes. En el año 2007, inició ao escolar,
renunciando a ser de la Directiva.
1)El alumno Sebastián este año y como producto de sus dramas familiares
sucesivos, debió ser derivado a la Psicóloga del Establecimiento, Sra. Claudia
Ponce Ordenes. La especialista informó a UTP que se había entrevistado con el
padre del menor; don Luis Jeria; el que había quedado como apoderado, ya
que la señora Jessica Salinas, madre del menor, había hecho algunas
acciones inconvenientes en contra del Colegio.
2) Mi visión como profesora jefe del muchacho es que el alumno tiene una
personalidad cambiante, extrovertido, sociable con sus pares y líder del curso.
Cuando no asiste, éste se comporta más tranquilo, por sus problemas familiares
constantes, llegaba constantemente atrasado y su madre lo llamaba durante
las horas de clases y en horarios de recreos y después de éstas, quedaba muy
raro, molestia que le provocaba no sólo a mí en la interrupción de las clases
sino también a mis colegas. En los recreos se le observaba siempre
escuchando música en su MP3.
3) En el segundo semestre del año 2007, los problemas se agudizaron, producto
del problema grave de la compañera de curso Ayleen Torrejón, en el cual él
se sentía con recargo de conciencia porque era el único compañero y a la
vez muy cercano a ella, que no había podido ir a verla al hospital, me llamaba
constantemente para saber de ella. Como profesora Jefe, tuve que apoyar
constantemente al curso, ya que éste se encontraba muy afectado por la
gravedad de la situación.
4) En el mes de Agosto, el alumno me informó que había tenido un problema
familiar grave. La abuela paterna lo había echado de la casa por ser insolente
con el abuelo y tuvo que irse con su madre. De ahí la conducta de Sebastián
empezó a cambiar, molestaba a sus compañeros.
5) Lo anteriormente señalado le produjo angustia, pues fue separado de sus
hermanos. Lloraba constantemente. Su madre me informó que lo había
llevado al Hospital Roberto del Río, en donde se le dijo que tenía un problema
al corazón y que estaba siendo tratado con Ibuprofeno.
6) Yo solicité que me enviara el Informe Médico para poder pedir su eximición
en el ramo de Educación Física, pero éste nunca llegó.
7) Preocupada por la salud del alumno, La madre me solicitó, si podía enviarle
mi email, ya que para ella era más fácil comunicarse conmigo mediante esta
vía. Ella me informaba que el padre no quería saber nada del niño.
8) Luego las cosas cambiaron, pues en el día del alumno estaba en la casa de
su padre quien vivía con los abuelos y en la noche la madre los retiraba a él y
a sus hermanos para llevarlos a su casa en Independencia.
9) Tiempo después faltó a clases pues falleció el abuelo paterno.
10) Desde ese entonces empezó a acercarse a mí, solicitándome que lo
ayudara a través de mis consejos. En los recreos iba a buscarme
constantemente a la UTP, me llamaba fuera del horario de clases, desde su
domicilio, que por favor le devolviera el llamado, se sentía desesperado, que
sus padres vivían discutiendo, llego a decirme que se quería suicidar, y que yo
lo escuchaba más que sus padres, que yo era como una madre para él.
Producto de la insistencia del niño y sus cambios conductuales, además de su
baja en su rendimiento escolar, hecho que significó no quedar admitido en el
Instituto Nacional. le solicité a la Psicóloga que lo reevaluara junto a Macarena
Pineda, dijo que no habían cupos, habiendo uno lo tomaría, pero como una
de mis funciones como profesora jefe es asumir el rol de apoyadora y
orientadora me sentí en la obligación de orientarlo. Yo sentía pena por él y
deseaba que pudiera solucionar sus problemas. Incluso, a veces, solicité la
autorización de los profesores para sacarlo de clases con el objeto de que
pudiera tener atenciones de apoyo, sin que esto perjudicara sus actividades
escolares.
11) El alumno empezó a hacerme confidencias, contándome asuntos
familiares. Enuncio una de ellas que un primo había violado a su hermana
menor. Ignoro si aquellas cosas eran verdad. Pero mi sentido maternal me
hacía llevarme el problema hasta la casa que muchas veces lo llamé,
devolviéndole el llamado, ya no soportaba más.
12) Me preocupaba mucho la facilidad que los padres, le permitieran asistir a
fiestas pokemonas, lo cual hasta él fumaba, pero me solicitó que no se los
dijera. Le dije que mi papel era educar y tenía el deber de hacerlo, además,
estábamos aplicando el Proyecto de Prevención de Drogas “Quiero Ser”.
13) La conducta de Sebastián empezó a empeorar. Se arrancó de clases con
un grupo de compañeros, y yo, como profesora jefe, junto con la Inspectora
general los sancionamos, retirándolos a todos de la Revista de Gimnasia. Esto
está acreditado en el Libro de Clases.
14) Los padres no comparecieron cuando fueron citados.
15) Otro hecho que le afectó mucho fue que lo cambié de puesto para que
mejorara su conducta y no lo dejé de coordinador del Campeonato de
Fútbol, había que darle otras oportunidades a otros alumnos. Se acerco a mí
para decirme que este año nos iba a ir mal, ya que él no coordinaba.
16) La última vez en que el alumno antes citado, se acercó a mí para pedirme
consejo fue el día 23 de Noviembre. Me contó que la situación entre sus
padres era insostenible. Que él iba a hacer “una grande” con tal de unirlos. Mi
situación de salud o estaba muy delicada, tenía que dejar listos los exámenes
de admisión que se tomaban al día siguiente, con todos mis funciones y
problemas que tenía hambre, lo acompañé al Casino para que almorzara.
Antes de yo retirarme, me rogó que le prestara el celular para llamar a su
padre. Yo cometí el error de prestárselo. En ese momento me llamaron de la
UTP, y sólo después de diez minutos me acordé de pedírselo de vuelta. Fui a la
sala de clases a pedírselo y me fui a la UTP a trabajar, a continuación atendí
en mi hora de atención de apoderados a la Sra. Ana María Guerra,
apoderada de Mauricio Carrasco, nos fuimos juntas al metro, ya que yo no
andaba movilizada, ya que el Lunes 19 de Noviembre me chocaron,
constancia que fue efectuada en la 17º Comisaria de las Condes. Luego de
esa situación, me vine al Apumanque, ya que sentía una angustia y luego
retorné a mi casa, en la noche me vino una angustia más grande, que me
derivó ir el sábado 24 de Noviembre al Médico ,lo cual, me diagnóstico
Depresión y 15 días de Licencia Médica.
17) Todo ese día mi celular no funcionó. Esa noche, extrañada, le pedí a dos
familiares entendidos en el tema que lo revisaran. Ellos descubrieron que le
habían sacado el chip.
18) El lunes 26, mi padre, Orlando Darrigrande, me compró uno nuevo con el
mismo número. Todo esto puede ser comprobado.
19) Yo no sé que es lo que se pretende con respecto a mí como persona y
también como profesional. Sé que lo que se decida no está en mis manos,
pero sí en la de profesionales que creo que al analizar los datos y analizarlos
podrán comprobar mi inocencia.
20) En estos momentos confío en la justicia divina, en primer lugar, y también
me apoyo en mi conciencia la cual no tiene nada que reprocharme, pues
siempre he sido una persona correcta, que ha entregado su vida a la
enseñanza, dando de sí lo mejor.
21) Cualquiera persona que me conozca bien se dará cuenta y comprenderá
que yo, como madre de una hija universitaria a la que adoro y de la cual me
siento orgullosa, jamás le daría a ella el dolor de saber que su mare pudiera
haber cometido un acto incorrecto, y tampoco a mis padres que me han
apoyado en todo momento.
22) En la prensa se destaca el maltrato físico que muchos profesores reciben,
ya sea por sus alumnos o de los apoderados. Creo que lo que se está
haciendo conmigo es mucho peor que una agresión física, pues afecta mi
honor como persona y como profesional. Y lo peor es que mi única falta fue
haber sido bondadosa y comprensiva.
Si he enviado estas palabras al Director del Colegio, Sr. Ponce, solicitándole
que ellas sean leídas en la Reunión de profesores, es porque pienso que lo que
me está sucediendo a mí pudiera repetirse, afectando a otros profesores del
Establecimiento, lo que sería grave.
También
es
porque
intuyo
que
muchas
personas
pueden
haberme
condenado “a priori”, sin conocer los hechos.
María Eugenia Darrigrande Moreno
Santiago, Diciembre del 2007”
14.- Seis hojas que contienen correos impresos de MSM enviados por la
acusada a la denunciante doña Jessica Salinas Arriagada, que se encuentran
en custodia mediante NUE 461372.
Hoja 1: Yahoo. Correo. De: María Eugenia Darrigrande Moreno; para
[email protected],[email protected]
[email protected];[email protected],[email protected];pasaqu
@hotmail.com,[email protected]; fecha: Fri. 05 Oct 2007 12:14:23-0400
Mujeres rompamos el silencio Amémonos.
Hoja 2: Maria Eugenia Darrigrande Moreno [email protected]. Para
[email protected] asunto: gran persona. Fecha <Sat 20 Oct 18.39:01-0300
Estimada Sra. Jessica: Agradezco sus hermosas palabras. Es usted, una gran
persona, luchadora y perseverante en el amor a sus hijos. Una vez, le pregunté
a la Srta. Sonia como era usted como apoderada, y ella me contestó
excelente y tiene toda la razón. En el Colegio va a quedar un gran recuerdo
de usted y su familia. Espero que todos sus esfuerzos se concreten en la crianza
y profesión de sus hijos, y todos sus ideales se cumplan y además no se olvide
que usted, es joven y mujer también debe cumplir sus sueños personales. Éxito
y saludos se los desea María Eugenia Darrigrande.
Hoja 3: De: Maria Eugenia Darrigrande Moreno [email protected].
Para [email protected] asunto amistad: divino tesoro; fecha: Wed. 24 Oct.
2007, 18.24-0300. Gracias, es usted una persona de muchos valores, y gracias
por su apoyo de verdad, le agradezco a Dios por conocer a una persona tan
buena y abierta como usted. Yo soy un poco introvertida como persona, me
cuesta un poquito de hablar de mis cosas personales. Por yo también he
pasado por problemas gravísimos como persona, me ha costado un poco salir
pero lo he logrado de a poco, por mi hija, por mis padres que ya están de
edad. Pero de verdad de a poquito le voy a ir contando de mis problemas. Yo
también no le cuento a mi alumno, que yo le escribo. Pero en todo caso, llegó
muy contento por sus logros en la prueba que rindió ayer, la felicito y la estimo
mucho, Gracias por su amistad, yo también la considero muy cercana ami.
De: Maria Eugenia Darrigrande Moreno [email protected]. Para
[email protected] Asunto- Tranquila; fecha Tie-23 Oct.2007 19.38:55 -0300
Sra. Jessica: No se preocupe por las inasistencias de su hijo, hoy no se rindió
ninguna prueba. En el colegio se estaba al tanto del motivo. Espero que haya
sido un éxito su examen. Es usted, muy buena madre. Dios la tendrá que
premiar por su esfuerzo. En relación a mi núcleo familiar hemos estado con
altos y bajos como es la vida, me ha tocado hartas cosas, le pido a Dios fuerza
para ser el fuerte de los míos, ya que me necesita. Esperando, que usted y los
suyos se encuentren bien, les saluda María Eugenia Darrigrande M. Profesora a
su servicio.
Hoja 4: Ya transcrita.
Hoja 5: Bandeja de entrada, donde aparecen los siguientes coreos de
María Eugenia Darrigrande Moreno: Sigan Esperando: mar. 13 nov. 2007; lindo,
lun 12 nov. 2007; hermoso regalo, lun 12 nov 2007; respuesta jue 08 nov 2007;
reportándose vie 02 nov 2007; horóscopo vie 02 nov 2007;
Hoja 6: De:Maria Eugenia Darrigrande Moreno [email protected].
Para [email protected] Asunto Sigan esperando. Tue 13 nov. 2008 23:23:31.
0300;
De:Maria Eugenia Darrigrande Moreno [email protected]. Para
[email protected] Asunto: Respuesta. Fecha:Thu, 08 nov. 2007 22.59:040300 ·Srea. Jessica: Gusto en saludarla, mire, le entiendo su inquietud, mañana
voy a averiguar bien y le respondo por correo. Esperando que usted se
encuentre bien.
15.- Documento que contiene transcripción a mano de lo siguiente:
hora 21, 28 49 fecha 23, 11, 2007; fono 77722786:TE OFENDI;
hora 21, 31, 32 fecha 23, 11, 2007; fono 77722786:EL LUNES TE ENTREGO EL
REGALO DE LA MICHELLE
hora 21, 40, 59 fecha 23, 11, 2007; fono 77722786: TE PROPONGO ALGO EL
LUNES ME CONTESTAS, MEJOR TE DIGO EL LUNES, NO TE MOLESTO MAS TE HE
CANSADO
hora 21, 51, 23 fecha 23, 11, 2007; fono 77722786: AMOR AHORA SI ES EL
LULTIMO PERDONAME.
hora 21, 56, 09 fecha 23, 11, 2007; fono 77722786: NO PUEDO DORMIRME TE
PUEDO LLAMAR.
hora 22, 15, 29 fecha 23, 11, 2007; fono 77722786: BUENAS NOCHES MI VIDA QUE
AMANESCAS BIEN. TAM.
hora 22, 57, 47 fecha 22, 11, 2007; fono 77722786:AMOR DE MI VIDA LLEGUE
BIEN GRACIAS POR TU APOYO.TAM.
hora 2O, 39, 38 fecha 23, 11, 2007; fono 77722786: AMOR PERDONAME DE
VERDAD NUNCA MAS TE DAÑARE. TAM
hora 21, 10, 28, fecha 23, 11, 2007; fono 77722786:CARIÑO NUNCA MAS TE
LIMITARE PUEDES VOLAR Y TE DEJARE VOLAR, EL AMOR NO DEBE DAÑAR VIENE
EPOCA DE NAVIDAD Y EN NUESTROS CORAZONES DEBE REINAR LA PAZ Y EL
hora 21, 10, 35 fecha 23, 11, 2007; fono 77722786:AMOR. DISCULPAME ALGUN
ERROR QUE YO HAYA COMETIDO NO VOLVERA A PASAR MI CORAZON ES
BUENO Y TE VOY A DEMOSARR. LA ROMINA ES UNA NÑA AMOROSA Y LUCHA
hora 21, 10, 40 fecha 23, 11, 2007; fono 77722786: POR SU AMISTAD QUE YO NO
HARE
hora 21, 10, 42 fecha 23, 11, 2007; fono 77722786: SÉ QUE NO QUIERES HABLAR
EL TIEMPO TE DIRA QUE DE TANTO AMARTE Y SENTIR CELOS POR TI TE PERDI
NUNCA TE DEJARE DE AMAR.
hora 21, 28, 44 fecha 23, 11, 2007; fono 77722786: LO UNICO QUE DESEO ES QUE
SE TE QUITE EL DOLOR DE CABEZA Y TU FELICIDAD LA LUNA ESTÁ HERMOSA EL
LUNES HABLEMOS YA SÉ QUE NO QUIERES HABLAR PERDONAME SI.
Evidencia material. También se incorporó evidencia material, mediante el
reconocimiento que de ellas efectuaron en la audiencia los diversos testigos y
peritos según se indicó en cada caso, la siguiente evidencia:
a) Una billetera color negro con distintos colores en cuyo interior
mantiene una fotografía de la acusada NUE 461329.
b) Un teléfono Celular Marca Nokia de Color Azul de ENTEL PCS NUE
461320.
c) Un calzón con estampado negro, un Calzón sin marca negro, un
sostén negro sin marca, un sostén con logotipo, NUE 615521.
Otros Medios de Prueba.
1.-
Set
de
17
fotografías
correspondientes
a
complemento del Informe Médico Legal N° 4274-08/ 27.08.08.
la
acusada
2.- Doce fotografías correspondientes a reconocimiento efectuado por
la victima respecto a los conserjes del edificio en donde se habría cometido el
delito.
3.- Set de 153 fotos de los sitios del suceso, vehículo de la acusada y
recorrido de la víctima.
4.- Imagen grafica de Agenda telefónica, de llamadas entrantes,
llamados salientes, de llamadas perdidas, de mensajes de texto entrantes y
de textos salientes del Celular Marca Nokia Modelo 3220 numero 8444874 de
ENTEL PCS.
5.- Cuatro Imágenes de la Graficas de Analistas Notebook de llamadas
entrantes y salientes desde el Teléfono N° 77722786.
6.- Un Plano que contienen Informe ANALYST”S NOTEBOOK del análisis
de Teléfono Móvil N° 77722786.
7.- Un Plano que contienen Informe ANALYST”S NOTEBOOK del análisis
de Teléfono Móvil N° 77722786 el día 23.11.07.
8.- Imagen Grafica de exportación de registros del Tráfico Telefónico N°
77722786 para establecer si el SIM Car (chip) 77722876 fue removido el día
23.11.2007.
SEPTIMO: Medios de Prueba de la Defensa. Por su parte, la defensa
presentó el testimonio de:
a) Jaime Patricio Samuel Darrigrande Moreno, contador auditor, trabaja
en Pedro de Valdivia de la comuna de Providencia, habitualmente va a
almorzar a la casa de sus padres, aproximadamente entre 13.30 y 2.15, eso
varía en ocasiones, si tiene reuniones etc. El día 5 de diciembre, al entrar a la
casa había un caballero que él no conocía y sus padres se lo presentaron
como el señor Héctor Ponce director del colegio, él tenía mucha referencia
por el nombro, por su hermana, pero no lo conocía personalmente. En esa
oportunidad estaban sus padres conversando con él, él se sentó al lado, su
mamá le ofreció, te, café, el señor Ponce dijo que quería un vaso de agua y
empezó a relatar los acontecimientos, de lo que se acuerda es que una vez
que los padres del menor fueron a hacer la acusación con su hermana porque
se le acusaba por tener relaciones indebidas entre María Eugenia y el menor,
el señor Ponce se vio en la obligación como director del colegio, de hacer la
denuncia, y por deferencia a la familia, él le había ido a comunicar
personalmente a sus padres, porque sus padres estaban bien involucrados en
el colegio iban a las actividades de su hermana. Posteriormente de ese
hecho, el señor Ponce remitió al niño para que fuera a une entrevista con la
psicóloga y al día siguiente, eso relataba el señor Ponce, él tuvo una entrevista
con el niño y después de finalizar la entrevista, el niño le había comunicado
que le dijo, “sabe señor Ponce, todo lo que le dije a la psicóloga es mentira”.
Después de ese hecho, el quedó preocupado de la situación, porque él ha
visto delitos económicos, él hace investigación de delitos económicos y sabe
lo que es una querella criminal, también quedó incrédulo, porque como
hermano sabe que su hermana llevaba años haciendo clases con niños, era
muy buena, incluso llevaba a los niños a la nieve, llevaba a los niños a la playa,
se involucraba bastante con los niños, aunque su mamá le decía siempre que
no se involucrara tanto. Después de esa situación, como él tenía que regresar
al trabajo, se despidió del Sr, Ponce, se retiró y almorzó en una dependencia al
lado y al rato llegaron sus padres porque el señor Ponce se había retirado.
Estaban sus padres y la nana desde hace 13 años, la Flor. María Eugenia no
estaba, estaba en su habitación sufriendo una depresión, cuando él llegó, no
bajó a saludar al director. Él no sabía que su hermana había declarado, él
dice que quedó incrédulo, porque su hermana una vez que falleció una tía
muy querida, cuando terminó con Luis Zúñiga, que terminó en los tribunales
con un arraigo, desde entonces ella está viviendo con depresión, después de
estos hechos, se acentuó más.
b) Flor María Ceballos Garrido CNI N°9.379.858-8, domiciliada en calle
Esplendor N°3740 de la comuna de Recoleta, cédula de identidad N°
9.379.858-9 asesora de hogar. En ese momento la mandaron a buscar un vaso
de agua para el señor Ponce y cuando volvió, escuchó que el señor Ponce le
decía a la mamá de la señorita María Eugenia que no se preocupara, porque
el niño después de que lo habían llevado al psicólogo, había dicho que eran
puras mentiras. Era como las 13.00 o 13.30 horas, no recuerda muy bien. Esto
fue el día 5 de noviembre. María Eugenia no estaba presente en ese
momento, bajó a almorzar, como a las 13.30, el señor Ponce se retiró como a
las 13.30. Trabaja hace 13 años con ellas, vio crecer a la hija, también a los
padres.
c)
Rosa Eugenia Moreno González, chilena, nutricionista, jubilada,
cédula de identidad N° 3.283.568-6 el 5 de diciembre de 2007 más o menos a
las 11.00 don Héctor Ponce llamó telefónicamente a su marido y le dijo que
quería conversar personalmente sobre un hecho delicado que se había
presentado en el colegio que dirige y que prefería hacerlo personalmente, por
deferencia hacia ellos. Lo pasaron al living y empezó a narrarles que unos
apoderados, padres de un alumno de 6° básico, declaraban que su hijo tenía
relaciones con su hija María Eugenia. Manifestó el señor Ponce que él se vio en
la obligación de contar esto a las autoridades pertinentes, por ser directo y
tenerla responsabilidad del establecimiento, manifestó al señor Ponce que
envió al alumno al psicólogo para que relatara todo lo sucedido. El señor
Ponce quedó bastante preocupado por lo que le contó la psicóloga de lo que
había narrado el niño y al día siguiente lo llamó a su oficina y le preguntó qué
había entre la profesora y él y al cabo de un rato el niño le dijo “sabe señor
Ponce, lo que le expresé a la abogada y a la psicóloga, es mentira”.
Posteriormente se conversó con el señor Ponce respecto de la licencia de su
hija y dijo que estuviera tranquila, porque le iba a nombrar un reemplazante.
Estaban presentes su hijo Jaime y la nana Flor Ceballos, que le llevó un vaso de
agua en medio de la conversación que tuvieron. En septiembre, los días
viernes, hay muchos cumpleaños de familiares, de sus hijos, el viernes 7 de
septiembre, su hija llegó como a las 15.00 horas, fueron al Apumanque y
comprar un regalo para un niño Marcos Rivera, el 28 de septiembre, recuerda
que fueron apuradas a comprar un regalo a su hijo Jaime que está de
cumpleaños al día siguiente, fueron tipo 15.00 y volvieron 18.00 o 18.30, porque
ella es friolenta y le gusta acostarse temprano. El 20 de septiembre, posterior
de la parada militar, como adultos mayores que participan en actividades,
bailan tango, les regalaron 4 entradas para asistir al parque intercomunal de
La Reina con su hija y su nieta Andrea, su marido no fue, porque su marido
había estado con bronconeumonía. Fueron en auto, recorrieron la artesanía
de Mendoza, chilena, vieron rodeo, escucharon conjuntos folklóricos, parece
que eran los Jaivas y comieron anticuchos. Llegaron a la casa oscura, de
noche. Era día jueves. El viernes, recuerda que su hija estaba de vacaciones y
se quedaron haciendo vida familiar, los 4, siempre salen juntos, han ido incluso
al extranjero, le habría parecido extraño que un día de vacaciones su hijo
haya ido a ora parte.
María Eugenia estuvo presente en algún momento, primero estuvo en su
escritorio y después bajó, saludó al director y él la trató muy cortésmente.
María Eugenia estaba muy preocupada porque al día siguiente se iban a
tomar exámenes de admisión en el colegio, y le dijo llama a Otilia Romero
para avisarle. María Eugenia estaba angustiada, ella llamó desde su dormitorio
y a su lado estaba su nieta, María Eugenia no lloraba estaba como demasiado
tranquila, decaída, como sin ánimo, muy preocupada por el asunto del
examen de admisión. Era muy buena profesora dicen los alumnos y muy
responsable, para ella faltar al día siguiente, era terrible. Esto fue tarde, como a
las 23.00 horas, estaba angustiada. Con su marido y su hija María Eugenia
fueron en dos oportunidades al colegio, donde don Héctor Ponce, por razones
laborales, fueron a dejar la licencia. Maria Eugenia no le dijo nada de su
teléfono celular. Posteriormente a través del juicio, ella supo que había
destruido el chip de su celular, lo supo a través de las declaraciones de ella.
Conocía al señor Ponce, habían ido en fiestas que su hija organizaba, en la
parte artística, desde los 6 a los 19 años, bailó flamenco, tiene muy
desarrollado el temperamento artístico, después cuando ellos entraron a
aprender tango, ella se interesó también en aprender tango y entró a la
academia del profesor de ella y su marido.
d) Orlando Humberto Darrigrande Moisan, chileno, abogado, jubilado,
cédula de identidad N° 2.775.463-5, abogado, el día 5 de diciembre de 2007
recibió una llamada telefónica al teléfono fijo, de Héctor Ponce Ovalle que
era el director del Liceo Santa Juliana, manifestándoles que tenía mico interés
de conversar con él y su señora, por una situación muy delicada que se había
producido en el colegio, en relación a un menor de nombre Sebastián y que
quería hacer esta información en forma personal, por la estimación que tenía
con la familia. Se pusieron de acuerdo y lo estuvieron esperando, llegó como a
las 13.00 horas, lo hicieron pasar, se sentó en el living y con su señora
empezaron a escuchar diciendo que los padres del menor habían hecho una
denuncia por un asunto delicado y que el día 26 de noviembre habían
efectuado esta denuncia. Ellos se manifestaron muy sorprendidos y afectados.
Les comenzó a explicar que a raíz de esta denuncia, había derivado al menor
para que lo entrevistara la psicóloga del colegio y un abogado y después de
esa entrevista, la psicóloga le manifestó que el había tenido una relación
indebida con su hija, dijo que él había quedado muy preocupado por esta
situación lo llamó a su oficina y en un momento le dijo dime Sebastián, dime la
verdad y el menor le contestó, “señor Ponce, todo lo que le dije anteriormente
y todo lo que le dije a la psicóloga, era mentira”. Estaban presentes su hijo
Jaime Darrigrande Moreno, que continuamente va a almorzar con ellos y Flor
Ceballos, quien en ese momento le llevó un vaso de agua al señor Ponce, que
lo había solicitado. Es difícil recordar fechas de años anteriores, pero este caso,
afortunadamente por unos cumpleaños fue fácil recordar para él lo que había
sucedido así el viernes 7 de septiembre, llegó su hija en la tarde como a las
16.30 y salió con su señora al Apumanque a comprar un regalo para un
sobrino, marcos rivera que estaba de cumpleaños el 10 de septiembre pero lo
iban a celebrar el 9, otra fecha que se le viene a la memoria es el 20 de
septiembre que su señora, su hija y su nieta fueron al Parque Intercomunal de
La Reina, donde había fonda, rodeo y artesanía y volvieron como a las 21.00
horas, él no pudo asistir porque estuvo convaleciente de una bronconeumonia
estuvo muy enfermo en el mes de agosto. Le es fácil recordar que salieron
también el 28 de septiembre que su señora y su hija salieron a comprar un
regalo para su hijo Jaime que está de cumpleaños el día 29, le consta que el
día 20 estuvo en la casa, porque estaba con feriado escolar, recuerda que se
levantó no muy temprano y almorzó en la casa.
Su hija ya tenía otro celular, porque a raíz de la pérdida del chip, el le
compró otro, de la pérdida del chip tomó conocimiento a través de su señora,
quien tomó conocimiento de eso, por su hija.
e) La menor de iníciales D.I.P.S, 13 años de edad, estudiante del colegio
San Pedro de Quilicura, en el año 2007 estudiaba en el colegio Santa Juliana,
su profesora jefe era María Eugenia Darrigrande, había dos compañeros de
nombre Sebastián. Consultada indica que la profesora María Eugenia, siempre
fue igual con todos, siempre fue muy preocupada por todos ellos, cuando
tenían problemas o cuando tenían malas notas, ella, para su cumpleaños le
regaló una camisola de raso negro, hasta la rodilla, en fechas especiales era
habitual que los alumnos le regalaran cosas, para el día del profesor y su
cumpleaños. Refiere que ella tenía el mail de la profesora. Todos sus
compañeros sabían de su regalo a la profesora, no recuerda si alguno de los
compañeros de nombre Sebastián vio su regalo, pero cree que todos sus
compañeros lo vieron. Como era una fecha especial, todos le llevaron
chocolates y flores, ella les contó lo que era el regalo, porque venía envuelto y
para verlo había que romper el papel. Preguntada indica que a ella María
Eugenia no le hizo regalos, y que cuando los alumnos hacían cosas que no
debían hacer, la profesora los sacaba de clases, eso era como un castigo.
Prueba Pericial.
a) Declaración de Giorgio Agostini Bicentini, psicólogo, quien indica
que es Perito Judicial desde el año 1967, además de Psicólogo ha cursado
estudios de Doctorado y de Magíster en Sociología, doctor en psicología, al
mismo tiempo pertenece a la Sociedad Científica de Sexualidad en Santiago,
ha sido docente de toda la vida, es docente universitario de post grado, jubiló
de la Universidad Católica, es además Presidente de los Peritos Judiciales y de
los Peritos Judiciales Criminalistas de Chile, pertenece a una serie de
sociedades científicas, es Psicólogo acreditado para la Asociación Chilena de
Psicología Clínica, eso significa que puede formar peritos, formar psicólogos.
Expresa que el peritaje consistió en lo siguiente: trabajó con el sistema
de triple ciego, él hace entrevistas, aplica tests, tiene especialistas en tests, en
psicodiagnóstico, además un especialista en hipnosis clínicas, le colaboran
además dos psiquiatras y una neuropsicologa, para todo lo que tenga que ver
con organicidad o problemas que tuviera que ver con algo físico. Después de
las entrevistas clínicas, el examen mental correspondiente, lo repitieron tanto él
como los colegas, y al mismo tiempo, él aplicó unos test, que son Manshower
que permite ver aspectos de personalidad en profundidad. Después Boris
Araos aplicó la hipnosis clínica, que en este caso es una técnica nueva que
permite en profundidad saber la verdad de la persona en este estado, hoy día
la hipnosis, está acreditada mejor que lo que son los test de veracidad. Al
mismo aplica la Programación Neurolingüística para establecer la veracidad
de lo que le están contando y después de eso, también intervino una Asistente
Social Psiquiátrica, quien fue al domicilio de los papás de la acusada, y al
mismo tiempo revisaron todos los antecedentes que aparecen en el informe
que se ha entregado de la causa. Con eso elaboraron reuniones clínicas y
elaboran una conclusión final, donde además del diagnóstico descriptivo,
aplicaron la asimilación al D.S.M. IV R. Explica que el D.S.M. IV es un manual
estadístico que habla de las enfermedades psiquiatras y psicológicas y lo que
pretende es tener una nomenclatura uniforme, para que todos puedan
acceder a ella, distintos profesionales, con criterios parecidos. Esto se divide en
5 ejes, el primer eje nos está declarando si hay una patología severa, vale
decir si puede haber una psicopatología importante, y ahí describieron que
hay una psicopatología importante, que tiene que ver con alteraciones de
tipo psicótico, alteraciones en el manejo de la realidad. El eje 2 tiene que ver
con todo lo que son las alteraciones de personalidad, vale decir, esta persona,
que tiene este cuadro, qué tipo de personalidad subyacente tiene, y en este
caso, tenemos una alteración de personalidad importante, producto del
cuadro epiléptico que ella ha sufrido, que está todavía presente, con la
cronicidad del mismo; después de eso, viene el eje 3, que en el fondo significa
cual puede ser la manifestación que tiene en este instante de tipo social, que
es un problema de tipo legal, está siendo imputada, el eje 4, son las
enfermedades médicas, que tiene que ver con lo que ella tuvo en la infancia,
ella tuvo anoxia y alteraciones producto del embarazo de la mamá, hay
alteraciones de tipo médico desde antes de que naciera, se le suministró un
medicamento que contenía tirodiacida, a la mamá y esa sustancia traspasa la
membrana fetal influye lo que pasa después con el feto y al mismo tiempo
aparece una enfermedad médica que fue tratada durante 10 12 años, por
epilepsia; es una epilepsia catalogada Petit-mal, y finalmente se determina la
adaptación que tiene globalmente, apareciendo que la peritada está en un
puntaje relativamente moderado, porque está afectada. Dentro de las
conclusiones finales, puede concluir que la examinada es una persona cuya
manifestación epiléptica influyó enormemente en su conducta. Dentro de esta
personalidad epiléptica presenta una dificultad principalmente en el manejo
de cierto impulsos, producidos en un momento determinado, precisamente
por lo que pueden ser las descargas subictiales de la epilepsia, que son
descargas que no se notan de buenas a primera. Señala que ella estaba
relativamente controlada con Clonazepam y dejó de tomarlo, lo cual implica
también
que
en
un
momento
determinado,
ella
se
puede
haber
descompensaba. Todo lo que ellos pudieron apreciar y ver, tiene que ver con
estas dos características: un cuadro epiléptico petit mal de base, no hay
donde perderse en eso, todos los antecedentes así lo declaran y al mismo
tiempo se está describiendo cuales son las características de personalidad, ahí
tenemos varios autores, nacionales, Otto Döer, y otros más con los cuales él ha
trabajado, que refleja que estas personas en un momento determinado
pueden descompensarse y hacer un cuadro sicótico, que es una alteración
de la visión de la realidad. En un momento determinado, ella puede confundir
la realidad con mecanismos de su fantasía y por ende actuar de una manera
que para nosotros sería equivocada, pero para ella le aparece como
concordante, esto se ha denominado como una cierta pérdida de impulso.
Explica que todos nosotros manejamos el impulso, fantasía de tipo sexual etc.,
pero ella, en un momento determinado, no fue capaz de manejar el impulso,
de modularlo.
Refiere que lo que hay aquí, es una alteración del sentido de realidad.
Vale decir, ella tiene un discurso interno, donde no distingue claramente, de
repente, entre lo subjetivo personal y lo objetivo que pasa alrededor. Aquí lo
que pasa es lo que ve mucho cuando le toca atender personas que han
sufrido de incesto, y cuando se entrevista a la persona que ha cometido
incesto, hicieron un estudio en profundidad, ocurre el siguiente mecanismo:
nadie ama más a sus hijos que el padre y la madre, pero hay una cosa que el
público no tiene por qué saberlo, todo papá y mamá, a medida que crecen
los hijos tienen fantasías eróticas, fantasías sexuales, lo mismo que les pasa a los
hijos con el papá y la mamá. Freud ya lo planteaba, complejo de Edipo y
Electra, todo padre, al tener esta fantasía, que la trata de manejar, de hecho
puede tener una cierta atracción por su hijo atractivo o su hija atractiva, pero
no corresponde que él tenga relación, el acting out, es decir, es un actuar de
la fantasía. Algunos padres pierden este control y actúan, y tienen relaciones
con sus propios hijos, lo que le ha tocado como perito ver tanto en la clínica
como en el estudio pericial. Aquí lo que estamos suponiendo, es que ella se
enamoró de su “hijo postizo”, y un hijo que además le estaba fomentando
esto, le estaba fomentando precisamente el amor, el cariño, es decir, hubo
una interacción donde por supuesto la responsabilidad es del adulto y el
adulto en ese minuto, al no tener claros estos límites, actuó en un momento
determinado, teniendo lo que se llama “peting”, que aparece en la hipnosis es
decir, juego de tipo erótico, y a continuación, ella, a diferencia de los
psicóticos productivos, ella es capaz después de arrepentirse y dice “no, en
qué estoy metida” es decir, tiene una conciencia a posteriori de un acto que
le fue impropio. Entonces, considera que aquí hay una explicación que forma
parte del perfil de los incestuosos y al mismo tiempo, el hijo postizo, se siente
bastante alagada por el alumno que seduce y logra manejar a la profesora en
términos amorosos, pero insiste, en la pérdida de límites que en la realidad
tiene que tener el adulto, es muy frecuente esto.
Lo observado, señala, se vio reflejado en el examen con que venía, hay
una psicóloga que hizo un informe exhaustivo, muy bueno, donde ya en el test
de Rorschach, aparece cómo la profesora en la respuesta que da, hay una
pérdida de límites, una fijación, en detalle raro en la observación de las
láminas, descripción, es clarísimo donde ella pierde los límites, el test de
Rorchach, es un test de personalidad en profundidad de tipo proyectivo
donde el diagnóstico se hace a través de test. No solamente eso, sino que
además se aplicó un test M.P.I, que es un test usado internacionalmente, de
Minnessota Universidad, y que al mismo tiempo, aquí en Chile lo trajo Fernando
Risseti y se tradujo en Chile y además es la versión oficial en castellano que dio
la Universidad de Minnessotta. En ese caso, se pudo apreciar que también en
este test objetivo, aparecen alteraciones importantes del juicio de realidad de
personalidad de ella, donde hay elementos de tipo psicopáticos, que la
persona en un determinado momento actúa en forma inadecuada, hay una
identificación con lo femenino, hay una serie de cosas, que está establecido
en porcentajes, y la persona más calificada es precisamente Fernando Risseti,
que aplicó la prueba.
Indica que cuando se hace la entrevista clínica, tiene algunos
elementos de adherencia, que es cuando la persona se queda pegada
emocionalmente en cierto contenido, y hay perseveraciones, la persona se
queda y repite contenido temático, contenido inclusive de tipo verbal. Esos
son algunos de los claros indicadores patognomónicos, es decir, aparece este
elemento y se dice, “aquí ya estamos sospechando esto”. Pero, si nosotros
vemos que en algunos test, que aparece respuesta que da una personalidad
de
tipo
epiléptica,
comienza
a
preguntarse
si
hay
una
epilepsia.
Independientemente, cuando se analizan los antecedentes, corroboran que
ella tuvo electroencefalograma alterado, que puede ser normalizado hoy,
todos los autores en epilepsia señalan que uno puede encontrar un
electroencefalograma normalizado, lo cual no significa que la persona no
tenga epilepsia. Entonces, un Petit-Mal, que es una enfermedad que se puede
manejar, estabilizar, pero es crónica, si se descuida su atención, si se
descuidad
su
manejo
medicamentoso
y psicoterapéutico, puede
en
determinado momento alterar el comportamiento. Entonces, la relación
biopsicosocial son los tres factores que están determinando en este caso, muy
claramente. Por ejemplo, bio: hay alteraciones biológicas, que está dando por
la alteración electroencáfalográfica, que ella tuvo hace tiempo, hay una
cantidad de psiquiatras que informan eso, estuvo con depresión además, hay
certificado que así lo acredita, ha estado hospitalizada por crisis meoclónica,
entonces hay antecedentes que cuando se analizan, se dice, aquí hay una
epilepsia, donde ha habido ausencia. En la ausencia, la persona, muchas
veces, cuando se hace la entrevista clínica, difícilmente puede decir algo que
no supo, porque estuvo en un momento ausente, lo que pasa es que cuando
alguien está hablando, de repente la persona queda así (con la vista fija) y no
sabe de qué está hablando, entonces, eso es difícil que se pueda reportar en
una simple entrevista clínica. Ellos desde hace muchos años trabajan
psicólogos y psiquiatras juntos, porque la entrevista clínica, para cualquier tipo
de cuadros no es suficiente, necesitan los exámenes de laboratorio para saber
cuánto tiene de colesterol una persona, por ejemplo, se puede decir en la
entrevista clínica, puedo tomar pulso y decir, creo que tiene fiebre, pero hay
que confirmarlo con el termómetro, para ver si tiene fiebre y cuanta. Tanto es
así que en el Hospital Salvador, las entrevistas se hacen en conjunto, psicólogos
y psiquiatras, que tienen formación médica, y si hay necesidad de
psicofármacos, el psiquiatra receta y si hay necesidad de precisar el
diagnóstico, están los sicólogos especialistas en eso. Trabajan en conjunto muy
bien, la psicoterapia la hacen los psicólogos, de hecho él la enseña a
psicoterapia a psicólogos y los psiquiatras muchos años, en post grado.
Los antecedentes dicen que el cuadro epiléptico tuvo tratamiento,
durante muchos años por esta epilepsia tipo Petit-Mal. Con el tratamiento la
epilepsia no desaparece, lo que hacen los cuadros epilépticos se mantienen
bajo control, de manera que después de muchos años, si el tratamiento ha
sido adecuado, puede manejarse bien, pero a lo largo de la vida, siempre hay
que hacerse controles, porque está latente, no necesariamente manifiesto,
porque aquí hay cuadros epilépticos, lo que dice la literatura, hay factores
genéticos pre disponentes, lo que ocurre también en los ataques de pánico,
hay personas que tiene un gen predisponerte, pero sí pero si no hay ambiente
estresor afuera, no le aparece nada o si no le aparece repentinamente el
ataque de pánico inesperado, porque no sabía que tenía el gen pre
disponente, también incide el ambiente social, es decir, el ambiente donde se
crió.
Refiere que la estructura de personalidad de la señora Darrigrande
principalmente dice relación con lo que ellos llaman alteración de tipo
limítrofe, aquí en encuentra una co-morbilidad, vale decir, hay un cuadro
epiléptico, un cuadro orgánico que hace que aparezca ciertas características
psicológicas. Por ejemplo si la persona tiene un fuerte dolor de muelas, lo más
probable es que se altere el carácter. Entonces, no se puede decir que es de
mal carácter o mal genio, sino que está sufriendo por dolor de muela y
cuando desaparece, la persona recupera su característica natural. Aquí
además de eso, tenemos una estructura de personalidad anormal, es limítrofe,
en el límite de, y en un momento aparece este episodio psicótico Qué significa
aquello: todo ser humano tenemos rasgos normales neuróticos, normalidad
absoluta no existe para nadie, entonces hay esto que está dentro de lo
razonable y uno aprende a manejarse, después vienen los psicóticos, los locos,
que pierden el control de la realidad, pueden tener alucinaciones, auditivas o
visuales, como hemos visto, esta persona que mató un sacerdote, tuvo
alucinaciones, una voz que le decía que tenía que matar, y entre medio, para
esos que no están totalmente psicóticos o totalmente neuróticos, están los
limítrofes, pero, cuando tenemos una estructura de base limítrofe más un
cuadro epiléptico, esto se potencia. Entonces, dentro de la estructura limítrofe,
una de las características es, dificultad para establecer relaciones sanas, tiene
mucha dificultad para las relaciones de pareja, entonces, si analizamos la
historia, vemos que las relaciones de pareja que ha tenido, con alteraciones
bastante importantes, violencia intrafamiliar en fin, con una conducta en un
momento determinado, como perdida del buen sentido de realidad, en
cuanto ha tenido varias relaciones después bastante equivocadas, que no la
han beneficiado. Entonces, ahí vamos viendo que el manejo de sus impulsos
afectivos y sexuales, no los ha podido modular y eso es parte de la estructura
de personalidad limítrofe y en algunos casos, hay personalidades que son
extremadamente violentas, o sea, hay un mal manejo de la agresión, Hoy día
sabemos que el 52% de los delincuentes violentos, son de base de estructura
de personalidad limítrofe. Esa cifra la dio el Servicio Médico Legal, en uno de
los congresos recientes en que estuvo.
Todas estas características indican que la profesora no estaba normal, ni
mucho menos relacionándose con un menor. Es justamente la alteración de
personalidad de base, más estas alteraciones que produce lo que se ha
llamado en algunos casos y se ha reactualizado el término enekéticos, por uno
de los grandes epidelectólogos ingleses, entonces qué nos está diciendo, nos
está diciendo que en ese instante hay una mala identificación de la realidad,
donde ella empieza – ahí está el límite con lo psicótico, con la locura-,
empieza a funcionar a como que este joven puede ser una especie de pololo,
pero por supuesto desubicada en su edad, ahí notamos de nuevo que su
lógica formal no funciona de acuerdo a los cánones que nosotros usamos, sino
que funciona con una lógica muy subjetiva, muy personal, donde se asienta
una cosa bien interesante desde el punto de vista psicodinámico- dice, yo voy
a ayudar a este joven, no hay que olvidar que el joven venía con problemas
familiares importantes, lo declara otro psicólogo que están señalando ahí,
entonces, dentro de la problemática importante del joven, la profesora lo
acoge pensando ayudarlo, cree que la intención de ayuda es real, es
auténtica, legítima, pero donde está el tema, en que en un momento
determinado, esta cosa de ayuda, que todo profesor hace con sus alumnos,–
él también es docente universitario-, y lo hace, pero con un límite claro, de no
confundir lo que puede significar una simpatía, una atracción con un acting
out,- es decir, con un actuar después amorosamente, o sea, tiene que poner
un límite. Entonces, la estructura de personalidad limítrofe, hace que esto no lo
puede diferenciar, y muchas veces hay profesionales que son tremendamente
promiscuas y al mismo tiempo, si nosotros embarcamos ahí toda la alteración
epiléptica, que altera también el comportamiento psicológico de ella,
tenemos una sumatoria en ese instante, entonces, al sumarse eso, obviamente
no está ella en las mejores condiciones para elaborar un juicio crítico, decir
“ya, yo lo ayudo pero hasta ahí no más, yo no me involucro”, si en
determinado momento, al perder el límite, ella se involucró, erróneamente,
pero con una fantasía equivocada, ahí es donde confunde el sentido de
realidad consigo misma, donde se siente que puede ser efectivamente, por
una parte, la mamá protectora, -porque aquí dentro del informe donde él ha
estudiado, donde la psicóloga señala que la mamá no es muy protectora, a
pesar que tiene una mejor relación con ella que con el papá-. Sin embargo,
ella asume el rol protector y como decía antes, respecto del incesto, de pronto
se le pierden los límites y empieza a actuar en forma amorosa, que en ese
caso es una conducta adecuada, que se puede comprender por qué está
ocurriendo, no justificarlo, comprenderlo.
Refiere el perito que él trabaja con equipo de psiquiatras, cuando ellos
manejan la parte farmacológica y al mismo tiempo se hace la psicoterapia,
diría que es manejable, ha tratado muchos cuadros parecidos. Esto por
supuesto se puede manejar, lo mismo que los casos psicóticos, por ejemplo el
joven que mató al sacerdote, con el tratamiento farmacológico, inclusive lo
dieron de alta, pero tiene que seguir controlándose para poder funcionar, aquí
sería una cosa similar. Estos tratamientos duran por lo menos, unos 5 años,
dada la gravedad e intensidad del cuadro, y que necesita medicamento y
psicoterapia. Lo que hace la psicoterapia es que la persona aprende a
manejar los impulsos, porque la persona aprende a no autodestruirse, porque
hay una conducta autodestructiva, ya sea con la relación enfermiza que tuvo
de tipo de pareja como su actuar en este caso, que es hacerlo en forma
autodestructiva, la conciencia de la autodestrucción, que significa que se le
enseña auto cuidado, eso no le ha funcionado, la psicoterapia, además de ser
una psicopedagogía práctica, tiene técnicas muy específicas, que son la
terapia
racional
cognitiva
conductual,
donde
la
persona
aprende
efectivamente a manejarse a si misma, de tal manera que el medicamento es
sólo para estabilizarlo, el resto depende del autocontrol, que es lo que ellos
hacen con toda esta estructura de personalidades limítrofes.
Sostiene que planteó un cuadro psicopatológico importante y eso es
una enfermedad. Señaló recién que las enfermedades mentales, qué hace el
psiquiatra, hacen lo mismo los psicólogos, estudian lo mismo, psicopatologías,
el examen mental lo hacen ambos, pero el psiquiatra necesita la siguiente
fineza, este es un cuadro psicótico o es un cuadro limítrofe, que de repente
tiene un brote psicótico, entonces le solicitan al psicólogo que diferencie el
diagnóstico final, y justamente lo hace el psicólogo. En el Hospital Salvador, se
juntan, porque hacían entrevistas y luego piden a los psicólogos, ejemplo, un
cuadro de paranoide, estaba desconcertada, angustiada, psiquiatras y
psicólogos dijeron estamos con una personalidad alterada, con cuadro
paranoide que no tiene explicación, le preguntaron a él y dijo que la persona
tenía un desdoblamiento de su personalidad, por problemas de duda de
identidad sexual, estaba con crisis si es alteración sexual de tipo lésbico,
formuló la hipótesis y los tests verificaron el diagnóstico final, ellos empiezan a
meterse en el interior de la personalidad con todos estos instrumentos que
tienen, hay más de 10.000 tests y con ese material trabajaban juntos, dicen,
aquí hay un cuadro psicótico, dale antipsicótico entonces el psiquiatra trabaja
con tranquilidad y después el psicólogo hace la sicoterapia. Esto es un acto
conjunto, trabaja con triple ciegos, porque no lo sabe todo, y porque por
tratarse de un cuadro que tiene que ver con lo biológico, por supuesto se
requiere de la intervención de psiquiatra, Priscilla Bobarak y de una
neuropsicóloga que es la Patricia Alegría, es un equipo de trabajan juntos
muchos años. Con toda esa información elaboran el diagnóstico, donde ellos
también analizaron todos los antecedentes clínicos, enfocados, dentro de la
psiquiatría es una neuropsiquiatría, no todos los psiquiatras tienen los
conocimientos necesarios para hacer un diagnóstico fino, para hacer este tipo
de cuadros, tiene que ser un especialista en neuropsiquiatría. Por ejemplo, el
doctor Florenzano decía de epilepsia no me hablen. Si se le pidiera su
diagnóstico como psiquiatra, diría opino qué, en base a la experiencia, y eso
lo tiene clarísimo y por eso trabaja con psicólogos.
Se le consulta si aquí se presentaría una personalidad limítrofe de base y
en los hechos concretos, en la interacción con Sebastián, esta personalidad
limítrofe de base da lugar a brotes psicóticos en los hechos concretos de la
relación con Sebastián estaría sólo la personalidad limítrofe de base o un brote
psicótico, responde que ahí hay una co-morbilidad, hay dos cuadros que
están interactuando juntos, aquí hay elementos psicóticos lúcidos, vale decir,
cualquier persona que la entrevista la va a encontrar normal, no siéndolo, si no
se hace la pregunta específica, aparentemente funciona bien, aquí tenemos
que muchas de estas psicosis lúcidas, significan que el pensamiento está
alterado, no significa que tenga alucinaciones, pero su pensamiento tiene una
alteración formal y de contenido, dentro de la alteración del pensamiento, su
pensamiento la hace percibir la realidad de una manera errada, distinta a la
de los demás y actúa de acuerdo a lo que ella se configuró en ese momento,
se configuró que era una personalidad que estaba ayudando, que era muy
buena, que además tenía problemas en la casa, entonces, en un momento
determinado empezó a sentirse atraída y ahí es donde confunde a este joven
y lo convierte, en su imaginación, en un pololo, entonces ya empieza a tener
relación de mujer mamá, en términos incestuosos y le parece en ese minuto
dentro de su lógica como algo normal, como algo permisible. Ahí está la
alteración del sentido de realidad, una persona con juicio de realidad, pone
límites, dice no, esto n o corresponde. Entonces, ahí es donde se habla de
pérdida de límite.
Confluyen personalidad de base limítrofe, el eje 2; un diagnóstico de
epilepsia con una alteración en momentos determinados, tipo psicótico, eje 1;
y el eje 3, enfermedades médicas, tuvo anoxia y otros cuadros más en la
infancia, también la anoxia influyó en alteración biológica, además, no
olvidemos
que
la
mamá
durante
el
embarazo
tomó
medicamento
antipsicótico, que también sabemos, que lamentablemente se lo recetaron,
cuando influye la permeabilidad de la membrana y traspasa.
Tenemos esta personalidad de base límite, el diagnóstico de epilepsia
que puede dar brotes psicóticos y ambos factores confluyeron en esta
relación para distorsionar su sentido de la realidad.
Consultado si eso afecta la posibilidad de controlar límites, responde
claro, por supuesto, las personas borderline, una de las cosas que tiene, es que
de repente se le disparan los límites. Al no ser psicótico, se mantiene un cierto
juicio de realidad, ejemplo, una persona que dice, de repente me dieron
ganas de tener relaciones con mi pololo, eran las 03:00 de la mañana, me vestí
y partí. Cuidó los límites de velocidad, pero actuó en forma impulsiva, ese es un
cuadro limítrofe pero no psicótico, no está en alteración de decir, bueno, voy
a relacionarme con este hombre, tenga la edad que tenga, era sólo seguir un
impulso. Aquí no, aquí tenemos una alteración severa, donde se pierde
absolutamente el límite, entonces va y actúa. Eso es lo que se llama acting
out. La persona que tiene impulso, por ejemplo agresivos, violentos, qué
hacemos, nos controlamos y lo manejamos, pero esta persona puede perder
el control y ser muy agresivas, la persona que tiene el cuadro de base limítrofe.
Por eso en accidentes del tráfico, la persona se baja y le pega a la otra.
Bueno, ahí hay una pérdida de límite, es un cuadro limítrofe, pero no psicótico,
aquí había de base una psicosis lúcida, es decir, está lúcida, pero está loca.
Lo mismo pasa con un cuadro paranoide. El cuadro era psicótico, no solo su
equipo lo afirmó, sino que también los estudios de otras colegas que vio ahí,
son coincidentes la mayoría que ha aplicado test y visto la cosa en detalle.
Están de acuerdo con eso, porque tienen el instrumento para decirlo, él no
está diciendo esta persona tiene fiebre, lo supe con la entrevista, pero no, está
el termómetro, puedo darle las pruebas de eso.
Consultado explica que el objetivo de su pericia eran dos cosas,
primero, hacer un informe del estado de salud mental y el segundo, tratar de
explicar los hechos delictivos y por qué la persona se comportó de esa
manera, y tratar de explicar cuáles son los hechos delictivos y por qué la
persona se trató de esa manera, y al mismo tiempo lo que se llama hipótesis
estructural e hipótesis dinámica. No recuerda si lo colocó en su informe.
Para evidenciar contradicción, la señora fiscal exhibe al perito un
párrafo de su informe pericial escrito, luego de leerlo, el perito dice que sí
dice lo que él dijo, no tiene fecha, lo reconoce y luego continúa leyendo:
“beneficios de la ley 18.216, libertad vigilada”. Indica que eso es la que hizo
Verónica Díaz y explica que él dijo que trabaja con triple ciego, en un
momento determinado se le preguntó de libertad vigilada, la asistente social
fue e hizo la entrevista, entonces ello lo incluyeron al informe. Acepta que hay
una diferencia en la presentación, el informe final está hecho con todas las
características
que
están
señalando.
Acepta
una
deficiencia
en
la
presentación, nada más, porque el informe final está hecho con todas las
características, Verónica Díaz, que evacuó el informe pericial psiquiátrico,
para ella podría dársele libertad vigilada pero ellos agregaron todo lo que
hicieron. Hay un error seguramente en la presentación de su informe, por
supuesto, que el objetivo es evaluar la personalidad, el antecedente mórbido,
el antecedente psicopatológico, el antecedente que pudiere tener de salud
mental y con todos esos antecedentes, poder evaluar la conducta de la
señora María Eugenia. Esto lo está afirmando ahora. Indica que lo que vale es
lo que está diciendo en este minuto, aunque reconoce que los objetivos del
peritaje, no están explicitados en el informe escrito.
Preguntado expresa que las especialidades de los integrantes de su
equipo son, psicología clínica, área psiquiatrita y área psicosocial. Doña
Patricia Alegría analizó los antecedentes que ellos le presentaron, tanto de la
causa como los resultados de los tests. Su evaluación no se constató en el
informe, eso lo representa él. Él no consignó lo ella que dijo, en ese informe, lo
que dijo el neuropsiquiatra Priscilla Movarak, tampoco lo escribió, lo tiene
personalmente.
Refiere que él realizó una entrevista clínica, con anamnesis, donde
empieza
a
tomar
comportamiento,
la
nota
desde
mímica
de
la
constitución
cara,
de
física,
la
forma
de
expresiones,
aplica
la
neurolingüística,sobre el relato que está contando, hace una revisión de la
historia familiar, escolar y médica. A continuación hace un examen mental,
precisando las condiciones cognitivas con que se presenta, las características
del pensamiento formal, el pensamiento contenido que ella presenta, detectar
que presenta alteraciones como son la perseveración, alteraciones del sentido
de realidad dentro del examen mental, presenta pegajosidad y adherencia a
los contenidos. Él está sobre simplificando el examen mental, luego participó el
test de la figura humana, que da la forma como ella incorpora los rasgos de
personalidad, a través de este test proyectivo, aplica el test desiderativo, que
permite ver lo contenidos más profundos, psíquicos que ella tiene dentro de sí,
a continuación analiza los antecedentes clínicos y los del expediente, lo que
han declarado distintas personas, como los exámenes y los estudios que han
hecho, psicólogos y psiquiatras anteriores. A continuación, solicita la hipnosis,
asiste durante el proceso donde logran precisar que ella había tenido un
comportamiento abusivo, y eso le consta porque él estaba presente. A
continuación solicita que se le aplique el test M.P.I., y pide la información de
eso, para él integrarla dentro del informe. Por lo tanto, toda la información se
analiza en reuniones clínicas, no hace todo él no puede manejar todas las
disciplinas, y resultaron absolutamente coincidentes, con su trabajo personal,
se vertió en el informe, reconoce que no quedó bien expresado, es un detalle
que tiene que ver con la secretaria, pero evidentemente el objetivo es ver cual
es estado de salud mental de ella, y comprender la conducta que ella tenía,
impropia.
Lo que acaba de decir ahora, debería estar consignado en el informe,
tiene muchas causas donde es perito y no pretende saber todos los detalles de
cada uno de sus informes.
Para aclarar contradicción, la señora fiscal exhibe al perito el informe
escrito, éste lo examina y empieza a señalar los puntos que él consignó, dice
que la descripción de petit mal lo hizo él, todo lo que es tioridacina, también
es suyo; participación en la hipnosis también; después, la epilepsia, es
redacción suya con la neuropsiquiatra, dice aplicación del test desiderativo
por Giorgio Agostini. En este caso, en lo orgánico la personalidad como
alteraciones de la misma, fue la conclusión que sacaron con los dos peritos
psicólogo y psiquiatra. Luego, esto es suyo, “se puede aseverar diagnóstico
acorde al uso internacional del DSM IV R, de uso también en Chile: eje uno,
trastorno de control de impulsos, le agregó: elementos psiquiátricos, psicóticos;
eje dos: trastorno relacionado con epilepsia y trastorno limite de personalidad,
después epilepsia y después en el eje 4 es el punto legal y en el eje 5º que lo
elaboró él, es la acomodación que tiene actualmente en la vida, con síntomas
leves, y puntaje de 60. Luego, palabras suyas, “podemos señalar, de acuerdo
a todos los antecedentes recabados, efectivamente, María Eugenia manifestó
algún interés erótico afectivo por el menor, carente de intencionalidad de tipo
abusivo, sino de tipo petting, en una relación simbólico materno filial.” La
bibliografía también la hizo él. El test Desiderativo Mac Over, por Giorgio
Agostini, lo material de los tests lo tiene, y con ese material hace la reunión
clínica. Puso él, estrategia de evaluación. Aquí hay dos objetivos el que
hicieron ellos, es de salud mental de la imputada y el social. La metodología
general la puso al comienzo, que es lo que se hace en todos los informes.
Después viene la metodología que fue de triple ciego,
trabajó con 3
profesionales, la asistente social doña Verónica Díaz, ámbito social de la
evaluada, Boris Araos San Martín, suscribió el informe sobre hipnosis, observa
que él tiene su tesis en hipnosis, formalmente lo redactó Boris Araos; en cuanto
al informe MBI-2, lo evacuó Fernando Risseti, él lo realizó. Él hizo el apartado Nº
8, epilepsia y trastorno de personalidad.
Consultado
señala
que
la
epilepsia
puede
provocar
trastornos
neuropsicológicos, trastornos de conducta, trastorno de voluntad, infantilismo,
impulsividad,
perseveración,
personalidad
enekética,
pegotamiento-
ideoafectivo, estas alteraciones suelen verse en epilepsias globales, y difusa
también y también ideopática no necesariamente gran compromiso de lóbulo
frontal. Cuando es subictial, puede invadir los lóbulos frontales y los él lo
planteó como cosa general y que el 60% de los epilépticos sufre de esto, de
acuerdo a cifra que da Otto Doër, agrega que colocó el porcentaje.
En su informe puso que estas epilepsias suelen verse en epilepsias
globales y con gran compromiso de lóbulo frontal.
En cuanto al compromiso de conciencia, estaban todos de acuerdo, y
que había alteración de pensamiento en la evaluada, todos los del triple
ciego estaban de acuerdo, también Boris Araos San Martín.
Para superar contradicción, la señora fiscal exhibe su peritaje, lee
“entrevista hipnótica, de acuerdo al siguiente procedimiento: fase preliminar, o
preparación, se llevó a cabo antes de comenzar la hipnosis propiamente tal.
En esta fase se conversa con la señora María Eugenia a fin de obtener
información básica de su estado de ánimo y estado cognitivo. Se aprecia un
estado de conciencia lucido, despierto, sin alteraciones del pensamiento y se
encuentra orientada temporal y espacialmente. Se observa relativamente
tranquila y sí una excesiva defensividad”.
Indica que en el momento, como no tiene una psicosis productiva, sino
una psicosis lúcida, en ese momento se notaba así, no tenía alteración de
pensamiento en ese momento. Es muy difícil que no haya estado en esas
condiciones cuando realizaba las conductas con el menor. Una cosa es la
conciencia lúcida en un momento determinado, como dijo, el psicótico que
escuchaba voces, pero estaba lúcido, mientras no se le hiciera la pregunta
parecía normal, lúcido y consciente, eso no significa que la profesora no sea
psicótica. Por eso, aún cuando en ese momento se pudo hacer con lucidez de
conciencia igual ella tiene de base un trastorno que eso no cambia, por el solo
hecho de que en un momento determinado presentarse como ahora,
aparentemente en forma lúcida. La apariencia no significa lo de fondo. De
base al haber una alteración, en cualquier minuto, hay una pérdida de
control,: Una persona que tiene un trastorno de personalidad limítrofe, en
algunos momentos, no todos, pierde el control de sus impulsos, porque los
maneja en base a la fantasía y no en base a la realidad, en otro momento a lo
mejor, y de hecho, como profesora, en muchos momentos actuó bien en otros
campos, depende de qué circunstancia esto aparece, en el caso de los
impulsos eróticos afectivos, que son de los impulsos más fuertes del ser
humano, sin lugar a dudas que eso tiende a aparecer donde se pierden los
límites. El papá es un muy buen papá, pero se convierte incestuoso en un
momento determinado, no toda la vida, y depende de las circunstancias. Hay
personas que se convierten en homosexuales a los 60 años, estaba latente y
ahí apareció, no se dice, esta persona fue homosexual siempre. Es una cosa
subyacente, claro, cuando la persona tiene alteración de personalidad, por
supuesto, en el área afectiva, lo ha señalado, con las relaciones de pareja, la
violencia familiar que ella sufrió, lo ha señalado en varias ocasiones, para
decir, esta persona tiene trastorno de personalidad, no hay donde perderse,
cualquiera que haga el mismo análisis, es por algo, es más que claro lo que
está diciendo.
La conciencia tiene varios grados, una cosa es tener un grado de
conciencia, en que ella pierde las normas de las reglas normales de conductas
y se deja llevar por el impulso erótico afectivo, sin poner el límite, lo que le pasa
a muchas personas, hay embarazos adolescentes, porque en determinado
momento, por el entusiasmo, perdió el control sin hacer prevención, pero aquí
en particular, se empezó a involucrar amorosamente, lentamente y poco a
poco fue perdiendo el límite. No es cosa que de un momento a otro perdió el
límite, como la persona que se baja del auto y apuñala a otro, porque se le
atravesó, ese es otro tipo de pérdida de impulso Aquí estamos hablando que
en un determinado momento, dentro de su lógica, una lógica que es anormal,
en un momento determinado, se empieza a involucrar, se empieza a dar
cuenta que está involucrándose, le cuesta, porque no tiene la fuerza volitiva
suficiente, para decir yo paro así, es un descontrol frente a una relación
amorosa y por eso dijo que aquí hay una explicación psicodinámica clarísima,
eso lo dice porque lo ha visto varias veces, una persona se empieza a
involucrar, lo ha escuchado, una madre le decía yo estoy enamorada de mi
hijo, lo amo, lo adoro, cuando lo estoy acariciando a veces me empiezan a
funcionar las hormonas y paro. Aquí en el caso de ella no, ella continúa, es la
pérdida del límite que hay entre una conducta normal y una conducta
patológica.
La psicosis es una enfermedad mental, una persona que la padece, hay
momentos en que no puede responder de sus actos, de acuerdo a la
característica psicológica por supuesto.
Consultado si la sra. Darrigrande no tenía voluntad para auto
determinarse, para dejar de hacer la conducta que estaba realizando,
responde que puede afirmar, que en esos momentos ella fue sobrepasada por
el impulso sobre el control de voluntad.
Si tenía conocimiento real de lo que estaba realizando, dice que tenía
un conocimiento también difuso, porque tenía una conciencia difusa en esa
instancia, se dejó llevar por los impulsos, a pesar de que a lo mejor podía haber
pensado, como estoy enamorada y es mi pololo, puedo tener algún contacto.
No tenia intencionalidad de realizar las conductas realizadas, de hacer
daño y abusar.
Tuvo 2 entrevistas de 2 horas y media cada una. La trasladaron a su
consulta. No recuerda la fecha. Fue visitada a gendarmería por Verónica Díaz,
muy posterior a que él evacuó el informe.
Preguntado expresa que la profesora le refirió los hechos, al comienzo
trató de minimizarlos, diciendo que ella había tenido sólo juegos eróticos y que
el joven estaba entusiasmado con los juegos eróticos, no afirmó tener
relaciones sexuales propiamente tal. La hipnosis reveló que había tenido
relaciones sexuales y en la segunda entrevista aceptó ese hecho. Contó los
antecedentes que está en el todo el expediente, no quiso poner nuevamente
los hechos. La primera vez no había reconocido los hechos, en los otros
exámenes, no recuerda, lo relevante para él es lo que él y sus peritos analizan,
ellos recurren al expediente luego de hacer su análisis, la información la ve,
después de realizado el análisis. En la primera entrevista dio a entender que
no, que era una maquinación. Lo declarado por ella en la pericia coincidía
con la información de la hipnosis.
Consultado si esta persona con alteraciones, es normal que trate de
acomodar o adecuar sus declaraciones exculpándose, él dijo que tenía una
alteración de conciencia difusa no es lo mismo que estar sin conciencia. Por
ejemplo, si ahora tiembla, la alteración de conciencia la tendríamos todos,
pero no somos inconsciente. Esa alteración ella la tenía, pero después, la
alteración se hace más o menos intensa ella tiene alteración de su
pensamiento, con su fantasía en determinada circunstancia, en ese minuto.
Por otra parte, no es nada raro que cuando tiene contacto con la realidad
trate de hacer una defensa.
Sostiene que la parte que él suscribió fue de epilepsia, Petit-Mal de
Jacks, no cualquier petit mal. El cuadro epiléptico de base estaba vigente,
una característica es la enekesis, no todas, a posteriori le presentaron un
electroencefalograma, después de las entrevistas que tuvo con ella. No
recuerda si el electroencefalograma registraba epilepsia, Además puede
haber un electroencefalograma que puede estar normalizado, eso no significa
que no haya epilepsia no estaba con privación de sueño ni con
fotoestimulación, que es lo que él hubiera pedido. Para los efectos que él
observó clínicamente era irrelevante.
El electroencefalograma está descrito que se pueda normalizar, él
habría
pedido
como
información
clínica
relevante
un
electro
con
deprivación de sueño y fotoestimulación, lo sugirió a los padres, cuando se lo
entregaron, sugirió eso y un Spec. Vio un certificado de un psiquiatra que dice
que la había atendido por depresión, lo vio en los datos que le dieron, vio
informes de psicólogos y coincide con la psicóloga en forma plena, supo de
ello, después de haber evacuado su informe. Era un certificado de que había
sufrido depresión, lo que no le extraña.
La primera entrevista la hizo él, hizo un examen mental anamnesis
clínica, aplicación de test y aplicación de prueba lingüística. La profesora le
hizo relato de los hechos, le dijo que en ese momento se le estaba acusando
de algo que no era tan cierto, que no había tenido relaciones sexuales con
coito, lo cierto era que había habido Petting, que son caricias. La sesión de
hipnosis fue posterior, ella reconoció relaciones sexuales, no se le ocurrió
preguntar, cuantas, esa precisión no la tiene presente, para ellos lo importante
era que ella reconociera o no el hecho, hay una conducta abusadora, si es
uno o más no importa, al haber desorden de personalidad, puede haber más
de una vez, dijo que había sido en el departamento de ella, no recuerda que
haya hablado del petting, es más difícil, porque en el colegio hay más gente
dando vueltas. Para ellos lo relevante fue si hubo o no hubo.
Agrega que el M.P.I.2, es un informe de personalidad. Consiste en 536
preguntas y al mismo tiempo tiene 13 escalas de veracidad y otra parte donde
da si es esquizofrenia, personalidad psicopática, psicopatía, depresión, histeria,
la personalidad de doña María Eugenia correspondía a la escala de
psicopatía.
Le indica el señor querellante que el informe señala respecto del
resultado, dice, “perfil MMPI-2 invalidado. En relación extrema en escala L,
elevación significativa en escala K, son compatibles con actitud de alta
defensividad y autoprotección frente a la tarea de comunicar un auto reporte
de si misma en el inventario. Explica que este resultado relativiza la
interpretación del resto de las escalas en este protocolo recomienda cautela
en las interferencia. La escala L es lies, mentiras, una persona que está
invalidando que está mintiendo y además el rango de psicopatía es alto,
estamos corroborando la hipótesis que ella está en una actitud psicopática.
Ahora, con rasgos de psicopatía alto, está corroborando que ella está con
una actitud psicopatita. Para definir si hay depresión, cosas más finas, no era el
caso, no les interesaba ver otros rasgos, histeroides, depresivos, o cosas por el
estilo, pero sí era importante validar si esta persona estaba fingiendo, estaba
falseando, o si estaba con alteración del estado mental, estaba con
alteración del estado mental, al un punto de que trató mostrarse que era
mejor que lo que es y no pudo.
Consultado si se puede tener un discurso acomodaticio respecto de los
hechos, responde que puede tener un discurso acomodaticio falso y
detectable, en este caso era detectable, intentaba acomodar y no pudo, por
lo menos para ellos, como especialistas, caía por su propio peso, lo que no
quita que a otra persona lo engañe.
Dentro de los protocolos aceptados hoy, tanto por el colegio de
psicólogos como por los congresos a que ha asistido como por el Servicio
Médico Legal, habitualmente la pericia la presenta una persona, se acepta
que el responsable se hace cargo de toda la información.
Él hizo un estudio de lo que había ahí, para ver si había congruencia o
no y las razones que pueden haber sobre eso. Fue un estudio acabado.
Se le pregunta cómo la profesora Darrigrande, con todos estos
problemas mentales, pudo hacer clases durante 14 años y ser jefe de U.T.P., sin
manifestar la psicosis que ha señalado, no hay que confundir área cognitiva
con área afectiva, uno de los premios nobel de física fue una persona que
tenía esquizofrenia, y en su área matemática y física era brillante, en el
manejo afectivo estaba funcionando mal. Aquí, mientras un joven no se le
acercara, como éste se le acercó, no despertó en ella toda esta cosa erótica
que pudo estar despertando. Se produce a través de la interacción, mientras
ella haga clases y plantee la cosa cognitiva puede funcionar, como funcionan
muchos esquizofrénicos, que son brillantes en el área matemática y un
desastre en lo afectivo.
Indica que Lies es uno de los rasgos psicopáticos en términos de
psicopatía general, dentro de la cual está la psicosis, psicosis dentro de esto
está la epilepsia, se refiere a enfermedad mental. Hay una alteración de la
forma como enfrenta la realidad, ella confunde lo subjetivo con lo objetivo
que pasa afuera, dentro de esa alteración de la realidad, está el cuadro
psicótico, dentro de su pensamiento “estrafalario” que no es tan así, en un
momento determinado, ella lo confunde y da como una situación permisible,
de acuerdo a lo que ella en un momento determinado está sintiendo y
pensando, entonces, su sentir hace que su pensamiento sea diferente y ella lo
acepta como algo normal.
Consultado entonces para qué mentir, responde que la persona con
esta alteración no tiene conciencia clara de lo que es, lo correcto y lo
incorrecto, eso permite a la persona tener clara conciencia, “estoy mintiendo”,
que no es lo mismo que “acomodar”, en ese minuto su sensación interna, la
cosa emocional es la que está primando y eso hace que ella tenga “acting
out”, actúa el impulso, en vez de detenerlo.
En cuanto a la actitud de la examinada, en cuanto al informe MMPI 2,
de defensiva, de autoprotección, dentro de la escala de lo que estamos
viendo es que ella no fue veraz, en todo lo que dijo, pero desde el punto de
vista de ella, con su alteración, le parecía lógico formalmente, no siéndolo.
Preguntado expresa que el acercamiento del menor es un elemento
muy importante, más la alteración de personalidad previa y la cosa psicótica
previa. Hay una actitud seguramente seductora, con ganancia secundaria,
desde el momento que hace que el papá y la mamá se preocuparan de él,
eso es ganancia secundaria, incluso una psicóloga lo afirma, no recuerda en
qué informe, lo anotó, está dentro de la carpeta investigativa, está claro, el
papá y la mamá se llevaban mal y con esto logró su atención, de acuerdo a
su experiencia clínica, hay jóvenes poli traumatizados, que se quiebran los
brazos y piernas, con el único afán, inconsciente, de que los padres se
preocupen de ellos, conductas abusivas, de violencia del colegio o bulling,
hay un intento desesperado de llamar la atención, la mayoría de las veces.
Prueba documental.
1) Respuesta del oficio remitido por Osvaldo Rivas, Gerente General de
Automotora Inalco,
2) Factura de servicio de Automotora Inalco N°0190291 respecto de la
reparación del vehículo de propiedad de la imputada y que es de fecha 3112-2007.
3) Orden de despacho y trabajo de Automotora Inalco respecto de las
reparaciones que fue objeto el vehículo de la imputada durante el periodo de
noviembre de 2007.
4) Comprobante compra de repuestos Automotora Inalco N°25506.
5) Orden de trabajo de Automotora Inalco N°126521.
6) Acta de entrega y recepción de transportes Noria y CIA Ltda,
respecto del traslado de un vehículo accidentado.
7) Examen de resonancia magnética del encéfalo de fecha 15 de julio
2009, practicada en Integramédica con hallazgo de impresión diagnóstica
realizado por el doctor Jorge Prieto Neuroradiólogo.
8) Informe de encefalograma de la imputada de fecha 13 de julio de
2009 por el doctor Rafael Paez con el informe y conclusión.
OCTAVO: Alegatos de clausura. Que en sus alegatos de clausura, el
Ministerio Público expuso que, así como se anunció al inicio del juicio, presentó
el caso de Sebastián de 12 años que en segundo semestre de 2007 comenzó a
su despertar sexual en manos de un adulto conocido su profesora jefe de 40
años que además era la jefa de Unidad Técnica Pedagógica del Liceo
Polivalente Santa Juliana, la que prevaleciéndose de su calidad de profesora
jefe y jefe de UTP obtuvo una posición ventajosa, una posición de poder, dada
a partir de la existencia de un vínculo de confianza entre ella y Sebastián
generándose una situación de dependencia para con ella. Logró un
acercamiento con su víctima bajándose de una confianza frente a víctima
que estaba experimentadnos, logrando la base para dar inicio a una
dinámica propia de abuso sexual extra familiar de persona conocida. Lograda
la confianza se prevalió de su calidad de maestra para mantenerla en el
tiempo y asegurar la comisión del abuso sexual mediante sus fases de
interacción sexual abusiva y de silencio. Así en agosto de 207 dio inicio a una
fase de seducción con su víctima, a través de regalo y atención preferencial la
que lograba sacando al alumno cuantas veces quisiera, de las salas de clase,
o ingresando a las aulas para contactarse con él solo mantenerse a su lado,
utilizando su calidad de maestra y Jefe de sus colegas docentes, para
acceder al niño, condiciones que sin duda le daban el poder de realizarlo,
logrando una cercanía más allá de lo normal de una relación alumno
profesora, transgrediendo los límites naturales de la confianza adquirida y
respeto permitido, dando paso, de esa forma, a la segunda fase, la
interacción sexual abusiva, ejecutando actos de significación sexual,
consistentes en tocaciones en el cuerpo de su alumno y besos en la boca, lo
que realizó muchas veces en dependencias del liceo, sala video, profesores y
salas de clases, actos que fueron aumentando en su intensidad, vulnerando la
indemnidad sexual de su víctima, en forma grave y reiterada, pero ya no solo
en el colegio, es así que desde septiembre de 2007 hasta el 23 de noviembre,
los días viernes comenzó a llevarlo a un departamento ubicado en calle
Libertad 1290, 501, Santiago, donde realizó actos sexuales con su víctima, ya
no solo consistentes en besos o tocaciones en su cuerpo, sino que lo inició en
su sexualidad, le enseñó a tener relaciones sexuales, indicando el cómo,
logrando que el niño la penetrara por vía vaginal, incluso eyaculando en su
interior, cada vez que se encontraban. Estas conductas fueron ejecutadas en
todo el periodo abusivo, fueron conductas únicas e indivisibles donde su
voluntad era afectar la indemnidad sexual de Sebastián en cada hecho por
separado, no existiendo una unidad de conciencia colectiva, existiendo un
dolo específico para cada ocasión en que el acto abusivo se manifestaba a
través de besos, caricias, relaciones sexuales, con coito vaginal. Es así que de
una relación profesor alumno se desnaturalizó por el actuar del adulto,
convirtiéndose en una relación propia de adultos, solo que la mujer tenía 40
años, y el hombre era un niño tanto física como psicológicamente, un niño que
no sabía más de sexualidad que lo que se le enseñaba en el colegio o
conversaba con sus pares, con la curiosidad propia de la edad, que nunca
había tenido relaciones sexuales, que jugaba a la pelota con sus amigos, que
era un excelente alumno y referente entre sus pares, una mujer de 40 años,
profesional de la educación, profesora durante 14 años en el Liceo Polivalente
Santa Juliana, referente de sus pares al ejercer la unidad de jefatura de la
unidad pedagógica del siclo básico, quien en su función de profesora, tenía la
función de entregar los valores conocimientos y apoyo, de dar el ejemplo, de
ser una coadyuvante en la formación integral de los niños que tenía a su
cargo. Sin embargo usó y abusó de su condición de docente, de jefa de la
UTP, de la confianza y cercanía con el niño y su familia. Este uso y abuso no
solo tenía por objeto la comisión del delito, sino que evitar la interrupción o
conocimiento, siempre estando consciente de su actuar, el que no fue súbito,
repentino ni único, realizando cada uno de los actos necesarios para lograr su
objetivo, en forma planificada, pensada, llevando a cabo su deseo de actuar
durante
el
tiempo,
reiterada,
seduciendo,
encantando,
manipulando,
coaccionando, quería, sabía podía y obviamente lo logró. Pudo parar, no
había nada que le impidiera interrumpir la conducta abusiva, reiterada en el
tiempo, nada había en su capacidad mental que le impidiera tomar
conciencia de lo que estaba realizando, nada había anormal en ella que la
obligara a cometer sus errores irracionales, como llamó a las conductas
abusivas cuando declaró en el tribunal. Era ella el adulto, una mujer de 40
años, capaz intelectual, mental y emocionalmente, era ella la que debía
poner los límites, era ella la profesora pero aún cuando su víctima, a sus 12
años tuvo la capacidad de tomar conciencia y se dio cuenta que no era
correcto lo que estaban haciendo, que ya no le gustaba, que quería volver a
jugar a la pelota, que le interesaba una niña de su edad, haciendo ver al
adulto que era necesario terminar. Ni aún así paró, por el contrario, tuvo la
capacidad para reaccionar, buscar la forma de mantener la relación
mediante un mecanismo que fuera efectivo, y así coaccionó a su víctima con
que estaba embarazada, obligándolo a continuar con ella, utilizando de esta
forma la tercera fase del abuso sexual, el secreto, el silenciamiento,
ocasionándole un estado de angustia tal que lo llevó incluso a cortarse los
brazos. En este caso lo que se ha vulnerado es la indemnidad sexual de
Sebastián en forma grave y reiterada, donde se interrumpió abruptamente la
infancia de un niño de 12 años, iniciándole en su vida sexual en forma
temprana e inadecuada, acelerando un desarrollo natural y sano de su vida
sexual, saltándose etapas propias y esenciales y esenciales en su crecimiento
integral. En este caso, como en todos los casos de abuso sexual, existieron dos
versiones de los hechos, la de la víctima y la del agresor, el tribunal al analizar
la prueba, deberá valorar, cual es la verdadera, o a los menos, cual es la que
se acerca más a la realidad de cómo ocurrieron los hechos. La versión de
Sebastián que nunca habría contado, porque era leal y noble, a tal extremo
que nunca dijo nada, ni aún a sus iguales, que nunca se jactó de su relación
con su profesora, una versión consistente en el tiempo, durante toda la
investigación, manteniendo sus dichos desde el inicio en cuanto al cómo,
cuando y donde y por quién, con un correlato emocional acorde a lo
vivenciado, concordante con la prueba de cargo, la que cada una por si sola
y todas en conjunto dan un sustento real a su declaración, un relato rico en
detalles, que solo una persona que vivenciara los hechos podría aportarlos,
que sólo podrían estar presentes por experiencias vivenciales, por la claridad y
precisión de los mismos, la descripción de los besos, diferenciando entre los
piquitos y los más intensos, existencia de cartas y sus características, hojas de
cuaderno cuadriculado, su contenido, al principio en siglas luego en palabras
completas, existencia de llamadas telefónicas y mensajes de texto; la forma
cómo la acusada accedía a él, al interior del colegio, la cantidad de veces, lo
que hacía y cómo lo lograba; qué hacía en su rutina los días viernes,
preparándose para encontrarse con su profesora, se duchaba, se perfumaba,
escogía y se ponía la mejor ropa; la existencia de los lunares, forma de
ubicación en el cuerpo de la acusada, que sólo podrían ser observadas por la
desnudez del mismo; descripción detallada del departamento, en cuanto a la
ubicación de los muebles, de los adornos, de fotos, que sólo se puede retener
cuando se ha ido al lugar en forma frecuente y se ha estado en el lugar en
forma frecuente y se ha estado en un lugar por un periodo de tiempo. Un
relato donde no se evidenciaron ganancias secundarias, porque nada ganó
con develar y contar su secreto, por el contrario, el tribunal lo escuchó “todo
mal, todo mal”; que no tenía razones para mentir, inventar, dañar o alegar en
falso, con un relato creíble, válido y daño asociado a una experiencia
traumática y reiterada de tipo sexual, un niño que tenía aprecio a su “seño, la
quería y no quería que nada le pasara, donde su nobleza fue usada en
beneficio de un adulto; donde los códigos de silencio, de lealtades, se usaron
para la satisfacción sexual de un adulto, su profesora jefe, la acusada aquí
presente. Un niño que guardó secreto hasta el 23 de noviembre de 2007,
donde se vio obligado a develar, a decir la verdad, al ser increpado por sus
padres sobre la identidad de su polola. Una verdad desgarradora para los
padres de Sebastián, para la madre que había confiando en la acusada,
preguntándole en su calidad de profesora jefe si sabía qué le estaba
ocurriendo a su hijo, ya que había notado cambios en su conducta y estado
físico, que le hacían sospechar que algo le había ocurrido a su hijo pidiéndole
ayuda, a principios de octubre de 2008, enviándole mensajes por correo
electrónico, cuando ya la acusada estaba abusando de su hijo, una madre
que por los dichos de la acusada, a quien tenía mucha confianza, descartó
que el origen de lo que ocurría a su hijo, ocurría fuera del colegio, desviando
su búsqueda, llegando a pensar que podía tratarse de un problema con
drogas; un padre que vio el mensaje a su hijo ese día, que ésta envió al celular
de su hijo el mismo día 23 de noviembre, que pudo confirmar que entre maría
Eugenia Darrigrande y su hijo, no había una relación profesora alumno y fue
así, como el 23 de noviembre de 2007, se supo que la polola que Sebastián iba
a visitar todos los viernes en la tarde, no era una niña, era su profesora jefe. Una
mujer de 40 años, la acusada, también se ha escuchado la versión de la
acusada, con una declaración, a juicio del Ministerio Público, llena de
contradicciones, sin sustento lógico, aprendida, justificante, aludiendo una
conducta errada, irracional y única, cuyo contenido no concuerda de
manera alguna con la abundante prueba de cargo rendida en el juicio, por el
contrario, es disímil y contradictoria con la mayoría de ella, siendo esta la
última de un conjunto de declaraciones presentadas ante el Ministerio Público,
peritos e incluso ante la prensa, todas ella fueron variando, de acuerdo al
estado de avance de la investigación, o su situación procesal, así inocencia,
marzo de 2008; complot, octubre de 2008; sólo acercamiento erótico,
noviembre 2008; relación sexual, hecho único y por seducción de su víctima,
un niño de 12 años, marzo de 2009; inocencia nuevamente una vez obtenida
su libertad transitoriamente, julio 2009 y por último, nuevamente sólo un
acercamiento erótico, sin penetración y con eyaculación fuera de ella,
septiembre de 2009, ante el tribunal. A través de esta declaración, se puede
apreciar qué son capaces de hacer los adultos para ocultar su actuar y no
asumir su responsabilidad, con declaraciones exculpatorias, acomodaticias,
minimizantes y victimizante. La gran presunta que se hace el Ministerio Público
¿a quién le convenía ocultar la verdad, minimizarla o acomodarla, quién
obtenía un real beneficio con ello? A juicio de la fiscalía, a la acusada; a
quien le convenía convertir su actuar como un hecho aislado, irracional,
impulsivo y único, fuera del colegio, con la única causa, la capacidad
seductora innata, evidente, irresistible de su víctima, su alumno de 12 años, en
donde la calidad de maestra de su víctima no tuvo relevancia para cometer
el delito, todo lo cual es conteste con lo alegado por la defensa al inicio del
juicio: ausencia de reiteración: hecho único; ejecutado por una persona con
una imputabilidad disminuida, al parecer, por no tener control de sus impulsos,
por daño orgánico ocasionado por una epilepsia acaecida a los 12 años, o/ y
por no tener conciencia de su actuar, por tener distorsión de la realidad,
asociada a una psicosis a tipo orgánico, asociado a la epilepsia, no
concurriendo la agravante del 368 del Código Penal. Obviamente en el juicio
se rindió prueba de distinto tipo que ilustró en forma concordante con las
declaraciones de la víctima, cómo develó el abuso sexual reiterado, qué se
hizo cuando se conoció por los padres de Sebastián y por las autoridades del
colegio; cómo y cuando se inició la fase de seducción, dónde, cómo y
cuándo se iniciaron los abusos, cuantas veces eran y cuando eran, donde
terminaron de cometerse, la magnitud de éstos, quien fue el sujeto activo y
cuál era su claridad; quienes observaron la conducta poco frecuente entre
Sebastián y su profesora, una cercanía más allá de la de profesora alumno,
cómo era sacado de clases por ella, que algunas veces se demoraba cerca
de 30 minutos en volver, cómo se comunicaba por misiva, que no recaían
regalos de su profesora y que no conocían su departamento. La mayoría de
estas declaraciones y los elementos aportados por la victima, fueron negados
por la acusada, la existencia de misivas no son tales, la insistencia de sacarlo
de la sala no fueron habituales, a lo menos dijo dos, la insistencia de momentos
prolongados fuera de la sala, tampoco, el hecho de que la profesora indicara
que a todos se les hacía regalos, fue desmentido por ellos, sólo se le hizo a
Sebastián. El padre la madre la abuela de Sebastián que dieron a conocer la
conducta del niño y sus cambios físicos, que dieron a conocer elementos tan
sustanciales en cuanto al cómo y cuando tenía conductas, cómo salía de su
casa todos los días viernes; como se duchaba, se vestía, cómo preparaba un
bolso de muda completa y con la mejor de sus ropas; cómo existía una gran
confianza en la profesora, a la que le creyeron todo lo que decía. Miembros
de la comunidad estudiantil del colegio Santa Juliana, el director, que
denunció,
asegurándose
con
antecedentes
recabados
dentro
de
la
comunicad estudiantil, el que tenía una deferencia especial por la acusada y
su familia, que lo llevó al domicilio de la acusada para comunicar su actuar,
que trató de relativizar lo indicado por testigos presenciales, al hablar de un
tipo de acercamiento facial o aparentemente bucal, antes de referirse a un
beso. La psicóloga Claudia Ponce, a la que el niño le develó la naturaleza de
la relación, que era más de besos, que tuvo que hacer de contención a la
descompensación de Sebastián, que dio razón de sus dichos, que informó
sobre la dificultad de Sebastián para contar lo sucedido, tratando de proteger
a la acusada, descartando, ya de base, de plano, una ganancia secundaria;
la profesora de inglés, doña Leonor Lazo; de lenguaje y comunicación doña
Otilia Romero; de naturaleza y sociedad, doña María Gloria Prado, como de
las inspectoras Mercedes Gaete y Ana María Guerrero, quienes constataron y
vieron conductas inadecuadas, propias de una relación clandestina, puerta
cerrada con cerrojo, salas con cortinas oscuras, todo esto en el interior del
colegio, incluso doña Otilia presenció conductas de relevancia sexual de la
profesora hacia su alumno, un beso en la boca y no un acercamiento
aparente bucal, de acuerdo a lo declarado por el director; quienes dieron
razón de los dichos y fueron corroborados por las fotografías del sitio del
suceso, que dan cuenta que desde sus posiciones tenían visibilidad y podían
ver; que no tenían animadversión contra la acusada y no tenían otra intención
que decir la verdad. Un tercero, don Carlos Fuentes, existencia de llamadas en
el interior de su negocio, las que fueron constatadas con pericia. Funcionarios
de carabineros y policía, una funcionaria que dio cuenta de cómo se
encontraba el niño y qué relató al hacer la develación ya formal al sistema
penal, un funcionario de carabineros que dio razón de sus dichos, qué vio, lo
que observó, que tuvo la capacidad de darse cuenta que había un menor
que estaba siendo abusado, que tomó las primeras evidencias, que son el
celular y la billetera, iniciando las cadenas respectivas, funcionarios de la SIP
que tomó los mensajes que existieron, las respuestas que doña María Eugenia
mandaba a doña Jessica, mensajes que dan cuenta de una relación de
confianza y que además desmienten las aseveraciones de la acusada de que
la señora Jessica era una mala persona, una mala apoderada, que incluso
había sustraído un celular desde el colegio, por lo cual fue prohibido su ingreso
e incluso desmiente lo que ella declaró posteriormente, en su declaración de
peritos, en que supuestamente ésta una relación con una ex pareja, que todo
esto era un complot, que desmiente con las mismas palabras de la profesoras,
enviadas, la naturaleza y respeto de esas palabras y también dan fe, que los
primeros días de octubre, indican claramente que la profesora le dice “no se
preocupe, déjelo, esto es propio de la edad, puede que tenga alguna niña,
pero es natural”, frente a una madre afligida por la situación de su hijo. La
declaración de la funcionaria Gacitúa que dio una explicación clara de todas
las diligencias de una información transversal, donde se informaba todas las
diligencias que formaron la convicción de la fiscal para establecer que los
hechos ocurrieron de acuerdo a la declaración de la víctima, y que era
necesario acusar y traerlo a juicio oral, para que fuera revisado por el tribunal.
Peritos, don Rodrigo Muñoz que dio explicación de las fijaciones fotográficas
por qué se hizo y de acuerdo a qué instrucciones; don Mauricio Ortega
Alarcón que dio cuenta de la información obtenida del celular incautado,
donde se da cuenta de la naturaleza de los mensajes, la estructura, la
continuidad, la cantidad de ellos y las horas que se realizaron, la naturaleza de
los mismos, que son exactamente los mismos que el padre transcribió en el
momento, en una hoja de cuaderno que fue presentado en el juicio, cuando
fue observada dicha información; doña María Alejandra Galaz Silva, que dio
un informe respecto del tráfico del llamados realizados respecto del teléfono
de la víctima y la acusada, que indica que hay más de 400 contactos de
llamados teléfonos entre agosto y noviembre de 2007, que da cuenta de una
conducta reiterada, de un acercamiento, de un nivel de confianza, que da
cuenta de que había una comunicación constante y persistente entre la
acusada y su víctima; don Andrés Rosmanich Poduje, que dio cuenta
claramente que el menor, a pesar de su corta edad, sí tenía la capacidad de
erección, penetrar y eyacular; doña Patricia Negrete, que dio cuenta que
existían los lunares que el niño, dentro del transcurso de la investigación, había
descrito; fijación fotográfica: fotografías que fueron exhibidas al menor que
fueron reconocidas de forma inmediata y natural, indicando claramente de
qué se trataba, que eran tres y la forma de los mismos; doña Pamela Aedo
Errázuriz, que dio cuenta en forma profesional, contundente, sobre los
antecedentes de su peritaje, en cuanto a credibilidad y daño asociado,
criterios de validez, que dio cuenta de la calidad de lenguaje del menor, de
cómo él tenía capacidad de expresar, que no había antecedente de
inducción de terceros, que no podía inventar, por la naturaleza y
características de los detalles; que no era seductor, que no tenía ninguna de
las características de un seductor, que era un niño, que conducen a pensar
que hay ausencia de seducción. Doña Jazmín Kassis trató de levantar una
hipótesis la cual debía confirmarse sobre la existencia de un daño orgánico
asociado a la epilepsia que tenía que descartarse o confirmarse con
electroencefalograma o resonancia magnética, para asociarlo a un trastorno
mental psicótico, de fuente de la epilepsia. Esos informes fueron negativos, no
había daño orgánico, no había daño en la zona frontal donde existe el control
de impulsos, no había ningún elemento objetivo, desde el punto de vista de sus
exámenes, que den para pensar que la acusada padecía de epilepsia, sino
que ya había padecido. El gran ausente, de la prueba rendida, ofrecida por la
defensa, es dicho examen encefalograma, que no fue introducido, no
obstante haber sido ofrecido por la defensa en su oportunidad procesal. Doña
Andrea Bahamondes, psiquiatra, con años de experiencia, a le fecha en que
realizó la pericia era la jefa del Departamento de Salud Mental del Servicio
Médico Legal, con vasta experiencia en clínica, que dio claramente razón de
su pericia, explicó con facilidad para que los que no tenemos conocimientos
científicos pudiéramos entender, que descartó la posibilidad de una epilepsia,
que descartó una psicosis orgánica ocasionada por una epilepsia, porque ella
no constató en su clínica, que no existía ninguna evidencia que indujera a
concluir que existiera daño en la corteza cerebral que hiciera que el cerebro
no funcionara de acuerdo a su funcionalidad natural y obvia, estando sano;
que la clínica le arrojó que era una persona capaz de responder, era una
persona que podía controlarse, que sabía lo que estaba haciendo y
obviamente quería, porque lo realizó, pero se descartó toda hipótesis en
cuanto a la existencia de la enfermedad mental, en cuanto a algún
disminuyera de responsabilidad penal, algún que trastorno de personalidad,
incluso sin necesidad de llevar a cabo peritajes psicológicos, además de la
evidencia documental y la evidencia material. Si se contrarresta la prueba de
cargo, no por la abundancia, por la calidad de la prueba, por la consistencia,
por sí sola y entre el conjunto, con la prueba presentada por la defensa, a
juicio del Ministerio Público se dan por acreditados los hechos de la acusación,
si se hace un análisis muy rápido de la prueba de la defensa, se presentaron
familiares de la víctima, su padre, madre y hermano y nana, que dieron
cuenta de una situación supuesta donde el director dijo que el niño mentía,
aunque el director haber sido interrogado el director, lo niega, que tal vez se
produjo, que tal vez el director, con la relación que tenía con los padres, por la
deferencia, porque era muy grave lo que estaba ocurriendo, minimizó, lo que
era un beso, que se describió y señaló como un beso por la testigo presencial,
él lo describió, como un acercamiento aparente bucal, podría ser,
perfectamente. Dieron coartada un 7 de septiembre y un 20 de septiembre, 7
de septiembre era factible, porque estaba recién en la fase de seducción, 20
se septiembre era recién después del feriado largo y no había ninguna
posibilidad, pero qué dijeron de octubre, noviembre, dieron razón donde
estaba su hija, ¿se preguntó por la defensa si había estado en la casa, a qué
horas llegaba, cómo llegaba? Nada, ¿por qué, porque no sabían dónde
estaba esos días viernes siguientes a la fecha que ellos sí tenían conocimiento?
Una niña que lo único que dijo sobre el regalo que le hizo a su profesora, y que
además es conteste con lo declarado por los otro alumnos, en cuanto a que
no recibía regalos, a que era sacada, pero solamente cuando era castigada y
en cuanto a la relación que tenía con su profesora. La prueba psicológica, del
psicólogo Agostini, donde indica, con un informe que no dice relación con el
presentado en cuanto estructura y contenido, que es un informe que se
instruyó acá, con elementos nuevos de los que no tenía conocimiento la
fiscalía, donde se realiza en distintas fases, entre octubre y marzo, y donde se
concluye en que habría una eventual psicosis, no obstante en el informe
escrito nunca se habla de psicosis, aquí se habló de psicosis. Indica que se
utilizó el sistema de ejes del DSM IV, indicando en el eje 1 que engloba lo que
tiene, las enfermedades mentales, que no está presente, pero sí habla en el
eje 2,trastorno de personalidad psicopatita, hace diagnostico de psicosis,
aludiendo a la ocurrencia de los hechos. Sin embargo, fue preguntado por el
Ministerio Público, cómo podía hacer un diagnóstico de alucinaciones o de un
actuar psicopático o psicosis, si no indagó nada de cómo fueron los hechos,
no preguntó nada, cómo, cuando, donde, cuantas veces, qué lograba, que
sentía, cómo veía al niña, nada. Según él, no era para eso sólo le bastaba
tener conocimiento si había habido algo más y una vez obtenida esa
información a través de la hipnosis, no se consultó nada más y no obstante así,
obviamente, la conducta desplegada podría ser psicótica, a raíz de pérdida
de control a través de daño, dice no había daño en la zona frontal del
cerebro, eso se descartó de plano, además indica que para confirmar su
hipótesis es necesario realizar exámenes neurológicos, pero no reporta ello en
el informe, se lo dice a los padres, lo que dista de la rigurosidad y acuciosidad
exigible a un perito de la naturaleza del presentado en la audiencia; que todo
lo ocurrido, -terminó su declaración – que detonó el problema de conciencia
de doña María Eugenia Darrigrande, su trastorno en el pensar, su conciencia
difusa, única y exclusivamente, por la gran capacidad seductora de la
víctima, lo que detonó que fuera abusado. Obviamente, un informe, un perito
que da cuenta de otras pericias realizadas por sus coadyuvantes, no es lo
mismo que si hubiesen estado aquí los peritos dando razón de su informe,
explicando su metodología en forma clara y precisa. No bastante eso, una de
las cosas que llama la atención de su informe y que en cierta forma es
conteste con las declaraciones de aquí, es el informe que se emite respecto a
la veracidad de la declaración de la acusada y el resultado es que ella es
mentirosa, pero esa mentira, supuestamente, era consecuencia natural de la
psicosis, pero no dijo psicosis, cuando se le hizo la pregunta, habló de una
psicopatología, psicópata, que es una conducta propia de un psicópata.
Mintió a su propio perito y por qué no podía mentir después al tribunal o
adecuar su declaración. Con cada una de las pruebas rendidas en juicio, se
dieron por acreditados, los hechos, la participación, la reiteración y la
agravante del 368 y la prueba que se solicita es la exigida y la necesaria para
reparar y para volver las cosas a su equilibrio, para que doña María Eugenia
Darrigrande se haga responsable de su conducta, una conducta libre, una
conducta consciente y una conducta querida.
Por su parte la querellante señaló que tal como lo anunció en el alegato
de apertura, ha sido posible acreditar los hechos de la investigación que
configuran el delito de abuso sexual cometido en persona de menor de 14
años; la forma de comisión y la participación del acusado. Sebastián de 11
años en agosto de 2007, fecha en que se iniciaron los hechos, es la prueba
más relevante fue la declaración de la víctima, cabe destacar la
concordancia y claridad en sus palabras que se han mantenido, lo que da
cuenta que los hechos fueron vivenciados personalmente, no escuchados,
otorgándole credibilidad a su relato. A través de él se lograron identificar los
conceptos comunes en este tipo de delitos, el secreto, que debe ser
mantenido por la víctima, el daño psicológico, que se dirigía a impedir que se
alejara del lado de la profesora, diciéndole que estaría embarazada,
provocándole angustia que lo llevó a intentar dañarse físicamente y por qué
no, a terminar con su vida. Y la culpa del propio ofendido, de sentirse causante
de un quiebre familiar o agudizar el que existía. Los testigos son personas que
no estuvieron presentes al momento de los hechos, pero que sí presenciaron la
develación del menor, no le resta valor a sus testimonios. Testigos, los
compañeros de colegio, relataron la dinámica que se desarrollo al interior de
la sala de clases en el 2 semestre de 2007, salidas de sala que ella lo iba a
buscar; ingreso a sentarse con el menor, en algunas cátedras, el envío de
papelitos, el regalo de cumpleaños que no hizo a otro, la billetera, que luego
complementó con una foto de ella y etc. Con estos testimonios se demostró la
fase de seducción que inició esta especie de relación entre victima e
imputado, lo que da credibilidad a lo manifestado por el menor en las distintas
etapas de investigación y en el juicio. Los funcionarios del colegio,
presenciaron actitudes de la imputada para con el menor, que distan de la
cercanía que debe existir entre educadora y su alumno, pero dieron cuenta
de hechos en el interior del colegio, de acceso libre o restringido, las más
relevantes Claudia Ponce, la primera que junto a los padres, la que conoció
de la existencia de situaciones reiteradas de relación sexual, a ella le develó
los hechos sexuales, lo que fue ratificado al director quien, a raíz de esto,
formuló la denuncia; Otilia Romero, vio un beso en la boca que le daba la
imputada al menor, con los detalles corporales y de otras actuaciones que le
incomodaban, que fueron ratificadas por los alumnos, entrada y salida de
clases, que fue increpada por la acusada porque no le autorizó la salida, que
los encontró en otros lados, donde no debieran estar. Actitud de soberbia y
prepotencia. Recuerda la forma cómo miró a las profesoras, no miró a otro
deponente en la audiencia, pero a las profesoras las miró con actitud
desafiante, tal cual lo hiciera en el colegio. Cambios de genio y actitudes
desafiantes, a su situación resguardos al tener familia de los abogados, que le
solucionarían cualquier situación que tuviera en el colegio. Esta situación puso
en jaque la denuncia que debió hacer Otilia Romero, es criticable y
entendible. Con estos testimonios se da cuenta de la aproximación física entre
ambos, que existe prevalimiento que en su condición de profesora usó y abusó
para cometer el delito. Pericia de los funcionarios de la PDI que fijaron
fotográficamente el colegio y el departamento donde se reunían, que nos
permitieron situarnos espacialmente. Con esto se acredita la credibilidad del
relato del niño por la congruencia que existe entre su descripción con lo que
se vio del departamento, dando los máximos detalles, y eso nos sirve para
acreditar la reiteración del delito. La pericia a los teléfonos celulares, dan
cuenta de la enorme cantidad de llamados telefónicos, 455 llamados
telefónicos entre agosto y diciembre de 2007, sin contar con los mensajes de
texto, que dan cuenta de la actividad abusiva, casi asfixiante que ejercía la
acusada con la víctima, cabe recordar las diversas versiones que dio la
acusada en relación al teléfono. Profesionales que depusieron en el juicio,
doña Pamela Aedo, que el relato del menor es creíble y el daño concordante
con la experiencia de abuso sexual a que se vio expuesto, esos abusos y no
otros; la psicóloga del CAVAS, doña Jazmín Kassis, que dio cuenta de la
personalidad de la víctima, formulando hipótesis que debía ser descartada o
confirmada por especialistas, reconoce que si no hay epilepsia, se queda sin
hipótesis diagnóstica y se descartó la presencia de epilepsia. Por lo tanto, la
imputabilidad disminuida no se da en este caso, porque no hay indicio alguno
de daño que pudiere afectar el razonamiento de ella, en cuanto a su actuar
cotidiano. El más claro y contundente, fue el informe de doña Andrea
Bahamondes, que señaló que la acusada no presenta trastorno psiquiátrico
que determinase el hecho de no comprender la realidad que la circundan y
que sus problemas epilépticos, no dicen relación con su imputabilidad. La
imputada es responsable de sus actos, distingue lo lícito e ilícito, ella reconoce
que después de la relación entra en pánico. Se entra en pánico por qué,
porque se da cuenta de lo que había hecho, y no después, lo tenía claro
desde antes. Los padres relataron la forma en que tomaron conocimiento de
los hechos, los cambios físicos experimentados por el niño, que los llevaron a
suponer que estaba incluso con problema de drogadicción o sentimentales,
que le gustaba alguna niña de su edad, la angustia de Sebastián el día de la
develación,
que
ellos
fueron
incrédulos,
que
la
incredibilidad
fue
desapareciendo cuando el padre vio los mensajes de texto de la profesora. La
madre pedía ayuda a la profesora y ésta decía a la madre que no se
preocupara por su hijo, ella confió en la profesora, le pidió ayuda a quien
estaba abusando de Sebastián tanto es así, que le dijo que el niño estaba
bien, que era normal y que debía preocuparse si su hijo fuera asexuado. El
padre manifiesta que su hijo no tuvo sueño erótico de tener relaciones con
una profesora, porque un sueño es algo lindo y aquí ha ocurrido todo lo
contrario. Con las declaraciones de ellos, se acreditan los hechos de la causa,
la confianza que los padres tenían en la acusada, configurándose
nuevamente la agravante del artículo del 368, es decir, se prevalió de la
confianza que se tenía en la profesora, el dolo directo desviando la atención
de la madre, gracias a la terapia a que han asistido, se ha logrado la
reparación del daño por los hechos y exposición pública de este caso. Con
este punto se demuestra el daño, asociado a la situación de abuso. De la
prueba de la defensa, es relevante lo manifestado por la acusada que
reconoció los abusos después de años de negarlo, pero una vez más
acomodo los hechos hacia una posición ventajosa a sus interesas, trató de
atenuar en algo los hechos, mitigando el daño, situándose en posición de
víctima de sus propios años, que fue llevada al hecho por el encanto y
seducción de un niño de 11 años, intentando demostrar que al verlo como un
par en rango erario trató de demostrar que no se encontraba en sus cabales,
tratando de justificar de manera poco creíble para una mujer de sus
conocimientos y preparación académica que no sabía que un abuso sexual
en contra de un menor, era delito, esta declaración no es creíble. La
querellante postula que esa declaración se enmarca dentro de la teoría de la
defensa, en orden a demostrar su imputabilidad disminuida. Ella mostró que en
forma idílica veía al niño, que se enamoró de él, que no tenía conciencia de lo
que estaba haciendo, y de ser así, nos lleva a pensar que perdió la razón, pero
la realidad de los hechos, es que ella encontró un medio de satisfacer sus
deseos sexuales y ese medio era el menor, sobre quien podía ejercer el total
control de la situación, recordando que su relación sentimental anterior fue de
violencia intrafamiliar, lo que no ocurriría esta vez, por la edad y el
desconocimiento del menor de las relaciones sentimentales. La prueba de la
defensa no ha sido capaz de contrarrestar el peso de la prueba del Ministerio
Público y la querellante, no aportó nada a la existencia de los abusos, el
informe pericial privado, en nada desvirtuó la prueba de cargo, no fue lo
contundente que se esperaba, fue bastante deficiente. Respecto de la
agravante del 368, opera como agravante, atendido el mayor disvalor del
acto. Para terminar, cree que quedó probado que concurren todos los
elementos del tipo penal constitutivo de abuso sexual del artículo 366 bis en
relación al artículo 366 ter del Código Penal, operando la agravante señalada
y queda acreditada la participación de la acusada como autora del delito
reiterado y en grado de consumado. Por lo tanto, no cabe más que dictar
sentencia condenatoria y solicita se la condene a la pena solicitada en la
acusación.
A su turno la defensa enfatizó que la verdad es que la discusión en este
juicio no es si concurre o no un abuso sexual del artículo 366 bis, lo dijo en su
alegato de apertura, es indiscutido que en este caso, concurre un abuso
sexual del artículo 366 bis. Lo discutible, tal cual también lo dijo en su alegato
de apertura, son tres extremos: de una parte, si se da la agravante del artículo
368; de otra parte si concurre un concurso real o material de delitos del artículo
351 del Código Procesal Penal y en tercer lugar, si concurre una imputabilidad
disminuida, del artículo 11 Nº 1 en relación al artículo 10 Nº 1, ambos del
Código Penal. Vale decir no es discutible que en esta causa se daba dictar
sentencia condenatoria en contra de la acusada, porque es un dato que
existía al momento del inicio de este juicio.
Respecto de la agravante del 368, inequívocamente se dan parte de
los elementos objetivos de la correspondiente circunstancia agravante: la
condición
de
profesora
encargada
de
la
educación
del
menor,
inequívocamente concurre, pero no basta sólo esos elementos objetivos para
dar por concurrente la agravante. La agravante agrava tanto lo injusto como
la culpabilidad. A nivel de lo injusto, la relación entre la agravante del 368 y el
366 bis, da lugar a un abuso sexual por prevalimiento de una posición de
poder. Vale decir, tiene que existir en el marco de la interrelación sexual, son
impertinentes todas las consideraciones relativas a las relaciones con otros
profesores, con los padres del menor, el prevalimiento es en la relación entre
autor y víctima, debe existir de una parte un prevalimiento, esto es, una
relación de poder y de la otra, en el ámbito subjetivo, debe existir un dolo
directo de utilizar y de hacer efectivo el prevalimiento de esa relación de
poder. En cuanto a lo primero, la totalidad de la prueba rendida en este juicio,
indica que la relación sería paritaria, el menor describe su relación con la
profesora como un “pololeo”, identifica a la profesora como su “polola”,
refiere inequívocamente en dos oportunidades, frente a un beso en el colegio
y en su primera visita al departamento, haber detenido a la profesora en sus
intentos de acercamiento, lo que indica una relación paritaria; el tenor de los
mensajes de texto remitidos, indican una relación paritaria de enamoramiento.
Se trataba, en el marco de la inimputabilidad disminuida, de una relación
amorosa, -en la cual no se acompaño antecedente y no lo declaró el menor
ante el tribunal, haya habido un prevalimiento de una posición de poder-. En
ese contexto, falta el segundo elemento objetivo de la agravante del 368,
debe estar acreditado el prevalimiento de una relación de poder entre autor y
víctima. Si la relación aparece descrita como un “pololeo, si la relación
aparece descrita como una relación paritaria, no hay prevalimiento y si en el
plano objetivo no se da ese prevalimiento, tampoco puede darse en el plano
subjetivo. O sea, en el dolo de prevalerse de esa relación de poder, no
concurre, y no concurre pura y simplemente, porque la actitud de ambos
participantes en la relación afectiva, con conductas de significación sexual, es
paritaria, no es que uno de ellos abuse de una posición de poder, además
como elemento normativo de la agravante, la relación de poder debería
haberse expresado en el colegio. En el colegio a lo único que se alude es la
existencia de besos, que han sido recién descritos, o uno de ellos, que ha sido
descrito por la querellante, como “un piquito”, que un beso o caricia en la
espalda reúnan la relevancia que el 366 ter requiere en los actos de
significación
sexual
constitutivos
de
abuso
sexual,
resulta
difícilmente
aceptable. El acto debe ser de significación sexual y además debe ser
relevante. Respecto de la existencia de esos besos en el colegio, qué
concurre, la declaración del menor, que refiere haber frenado el primer beso
que le habrían dado en el colegio, la declaración del director que se refiere a
un aparente acerca miento bucal, y da una explicación en el contexto en la
preparación en una obra de teatro; la declaración de la profesora doña María
Prado, que dice que doña Otilia romero le informó haberles visto besarse, lo
que también dice el director, y la declaración de la profesora Prado alega
además que doña Otilia Romero le señala que doña María Eugenia
practicaba el juego de la botella con sus alumnos, eso es relevante en relación
a las declaraciones de doña Otilia. Doña Otilia refiere que encontraba a la
acusada, prepotente, voluble, abusiva, que le llamó la atención delante de
todos sus alumnos, lo que al menos en indicio de una actitud de
animadversión hacia la acusada, refiere el beso y respecto del juego de la
botella, refiere que no lo vio pero que le contaron, esto que a ella sólo le
habrían contado, ella no tuvo empacho alguno a la profesora Prado, todo lo
cual es indiciario del grado de credibilidad que puede darse a su testimonio.
Vale decir, dentro del colegio, fuera del testimonio del menor, el único
testimonio que alude a un beso, es doña Otilia, con todas las particularidades
a las que hemos aludido, ello supuesto, que difícilmente un beso, incluso
profundo, reúnen las características de relevancia, puede que tengan
significación, pero no tienen la relevancia que exige el artículo 366 ter. Es decir,
respecto de la agravante, ni existió prevalimiento en la relación entre autor y
víctima, no existió dolo de prevalimiento, ni se realizó en la condición de
profesora. Por todas estas razones, entiende que sólo con un criterio formal
objetivo extremo, contrario a un derecho penal de culpabilidad, podría
apreciarse la concurrencia de la agravante del 368. Respecto de la
reiteración, lo único que concurre respecto de la reiteración, son las
declaraciones
de
la
víctima.
La
victima
refiere
pormenorizada
y
circunstanciadamente una relación sexual, en sus declaraciones describe y
narra con detalle solo una relación sexual y agrega que todos los viernes,
durante tres meses y todos los viernes, porque no hace excepciones, se
habrían producido nuevas relaciones sexuales en el departamento, pero no
describe ningún dato adicional respecto de las otras relaciones sexuales, en
qué horario, a qué horas, cómo estaba el día, cómo andaba vestida la
acusada, qué se conversó ese día, cuáles eran las circunstancias de estas
nuevas relaciones sexuales. La victima refiere haber ido dos días al
departamento, fuera de los viernes, un día en el cual no hubo relaciones
sexuales, porque él las rechazó y la descripción pormenorizada de la primera
relación sexual. Dos visitas a un departamento de tamaño relativamente
pequeño, bastan y sobran para describir cómo era el departamento y algunos
elementos adicionales cobre la distribución y algunos objetos, sobre todo por
parte de un menor cuya capacidad intelectual está más allá de toda
discusión, era un alumno con estupendo rendimiento, con notas relativamente
elevadas, perfectamente con una o dos visitas, podía describir aquello que
describió, además, no está acreditado que los cambios que refiere al interior
del departamento, efectivamente se hayan producido, que el cubrecama no
fuera el cubrecama blanco sino el otro cubrecama que estaba en la pieza de
la hija de la acusada, sólo aparece referido por el menor. Después de las
declaraciones del menor, lo único que existen son testimonios de oídas que
nos dicen que el menor dijo, lo que dicen que dijo, vale decir, personas que
declaran que sí dijo lo que dicen que dijo. Este es el caso de los padres, que
dicen que el hijo les dijo que iba los viernes, es el caso del testimonio de la
madre, es el caso del testimonio de doña Pamela Aedo, la psiquiatra infanto
juvenil, es el caso de la carabinera que recibió la denuncia con fecha 18 de
diciembre. Todos ellos refieren la misma versión. Vale decir, lo único que se
puede dar por acreditado, es que el menor ha mantenido una misma versión,
una relación sexual descrita y otras referida genéricamente como los días
viernes, sin hace excepción. El que no haga excepción es relevante, porque
los padres dieron relación circunstanciada, de por qué, a los menos 3 viernes
de septiembre, esa circunstancia no pudo haberse producido, porque la
acusada se encontraba con ellos, había ido a comprar un regalo, se había
cuidado cuidando a su padre, que estaba en casa o se había quedado en
casa. Vale decir, al menos respecto de 3 viernes, la versión dada por el menor,
respecto a esta genérica posibilidad de nuevas relaciones sexuales, resulta
absolutamente desmentida por testimonios circunstanciados. Además, en el
condominio existían 12 conserjes, ninguno de esos 12 conserjes reconocen al
menor. Si él hubiere visitado el departamento todos los viernes, es plausible que
alguno lo hubiese visto, hubiera referido la circunstancia de haberle visto, y no
solo eso, sólo reconoce a dos conserjes, en un reconocimiento en el que de las
12 fotos que se le pusieron reconocer, sólo 2 no eran conserjes. Vale decir, en
ese reconocimiento fotográfico, era prácticamente imposible no reconocer a
alguno de los conserjes. El punto de fondo es, ¿puede una declaración
genérica, de “todos los viernes ocurría lo mismo”, basta para dar por
acreditada la reiteración, sin una referencia pormenorizada de la descripción
de la acción en que el delito consiste, sin una descripción pormenorizada de
aquella conducta que constituiría el tipo penal? Entiende que la prueba
rendida en este juicio, no permite acreditarla, en todo evento, en subsidio, si se
diera por acreditado que concurre en autos un concurso material o real del
delitos, el supuesto que se da, es el paradigma de lo que es la construcción
jurisprudencial, con amplia acogida en nuestra jurisprudencia, del delito
continuado. Existe en el plano objetivo un mismo bien jurídico lesionado, existe
una homogénea modalidad comisiva, “todos los viernes se habría producido,
presuntamente, todo de la misma manera”. Tratándose de delitos contra
bienes jurídicos personalísimos, existe un mismo sujeto ofendido y existe un
mismo contexto, idéntico en todos los casos, en que se habrían producido las
distintas conductas que el contínuum permite unir. Vale decir, se dan todos los
elementos objetivos que requiere la construcción del delito continuado, y en el
plano subjetivo, las dos posibilidades que la elaboración jurisprudencial que el
delito continuado permite dar por acreditada, también concurren: todas las
relaciones se habrían producido en el marco de la misma relación afectiva,
todos los contactos sexuales se habrían producido en el marco de una y la
misma relación afectiva, vale decir, se trata de un abuso prolongado en el
tiempo, donde concurre una voluntad unitaria, lo que no debe confundirse
con la concurrencia del dolo en cada una de las conductas. Es obvio que si
hay un delito continuado, hay dolo por cada una de las conductas, pero ese
dolo individual, respecto de cada una de las conductas que en un delito
continuado tienen que ser constitutiva de delitos autónomos, no quita la
unidad subjetiva del contexto homogéneo en que este delito se produjo. O si
no, la otra alternativa del delito continuado, es la recaída frente a la misma
ocasión y a unas mismas circunstancias en distintos delitos, y si algo concurre
en este caso, es la recaída frente a unas mismas circunstancias, en un mismo
contexto, con una misma voluntad en las distintas conductas constitutivas de
delito. O sea, sea cual sea la construcción del delito continuado que se
acepte, concurren en este caso todos los elementos para apreciar la
existencia de un delito continuado y excluir por ende, la presencia de un
concurso real o material de delitos. A fortiori, el otro elemento practico que la
jurisprudencia de casi todos los países continentales lleva a la afirmación de un
delito continuado, que
es una cierta incerteza en poder probar la
individualidad de cada uno de los delitos concurrentes, también se da en este
caso. Como ya dijimos, una genérica referencia a “los días viernes ocurría lo
mismo”, no es suficiente para dar por acreditado pormenorizadamente la
existencia de las distintas acciones típicas. En la jurisprudencia nacional, a lo
menos desde 1922, con Barlov versus Turo, se ha dado la circunstancia que no
pudiendo acreditarse detalladamente cada una de las conductas imputadas,
pero existiendo la posibilidad de que haya más de una conducta, se aprecia,
por razones prácticas, por razones procesales, la existencia de un delito
continuado. Luego, también por esta razón, debería excluirse la concurrencia
de un concurso material o real de delitos, y apreciar un solo delito de abuso
del artículo 366 bis. Respecto de la imputabilidad disminuida, la verdad es que
lo que ocurre en este juicio es el peritaje de la perito Bahamondes, quien
habiendo sido perito del Servicio Médico Legal, refiere que una entrevista
clínica sin ningún otro respaldo, le permitió descartar cualquier base orgánica
de un eventual trastorno mental y afirmar por ende la presencia de una
imputabilidad
pelan.
Por
contraposición
concurre
la
descripción
del
comportamiento de doña María Eugenia Darrigrande, por parte de los
restantes docentes, voluble, cambiante, imprevisible, y las pruebas periciales
de doña Jazmin Kassis quien le toma un test validado desde antiguo en la
práctica nacional, como es el Test de Rorschach. Frente a ese test, le sale una
hipótesis de diagnostico de una sicosis característica de las personas con base
epiléptica, luego, su hipótesis de diagnostico, es una sicosis vinculada a la
epilepsia. Ella no solo le tomó el Test de Rorschach. Sus conclusiones son
plenamente concordantes con las conclusiones del perito Giorgio Agostini,
quien también se respalda en una batería de tests validados por la práctica,
no se trata de tests que no estén validados en Chile. Vale decir, concurren dos
peritos con diagnósticos coincidentes respecto de un trastorno mental de
psicosis, que podría dar lugar a una imputabilidad pero atendida la forma en
que incide en una conciencia difusa, con problemas de control de impulsos,
con problemas de concienciación de la realidad, entiende que debe
apreciarse en términos de una imputabilidad disminuida, a la que se agrega la
resonancia magnética acompañada, donde consta la existencia de daño
cerebral. Basta leer la resonancia magnética, para constatar que la misma
refiere la existencia de daño. En este contexto, no concurriendo reiteración, no
concurriendo la agravante del 368 del Código Penal y concurriendo una
imputabilidad disminuida, la pena no puede ser la solicitada por el Ministerio
Público sino solo la pena de un delito del artículo 366 bis.
El Ministerio Público replicó que debida la extensa exposición del
profesor Soto, va a tratar de ser lo más sucinta posible, dado que la mayoría
de los antecedentes ya se han vertido en el alegato anterior. En cuanto a la
imputabilidad disminuida, el punto de vista formal hay dos peritos que dieron
un diagnostico similar, pero hay dos elementos sumamente importantes: uno,
la calidad de dichos peritos y la ciencia que profesan, que es la psicología;
dos, desde el punto de vista que fueron hipótesis que debieron ser
corroboradas por exámenes clínicos, supuestamente por estos peritos, para
confirmar o descartar, lo cual se realizó y arrojó, que de acuerdo a los
antecedentes de la carpeta investigativa y el que supuestamente iba a
introducir la defensa, no había una epilepsia ni algún indicio epileptoide al
momento de realizar el electroencefalograma, lo cual además es corroborado
objetivamente por la experiencia clínica, del punto de vista de la psiquiatra,
donde se indicaba que no había ningún elemento objetivo en la conducta
desplegada por la acusada en la entrevista, que diera lugar suponer que
estaba sufriendo algún tipo de epilepsia en el momento de la entrevista o que
fuera sujeto de padecimiento de la misma, profesional que es médico y
psiquiátrica, Profesional médico psiquiatra, que en definitiva, sin soberbia, nos
expuso que la enfermedad mental es una enfermedad y los especialistas
destinados a establecer la enfermedad son los médicos, además, se trató de
una enfermedad mental y se requiere por lo tanto, dentro de la medicina, la
especialidad, que es la psiquiatría. Pero no bastó con esto, aquí hay un
elemento muy importante que se ha tratando de confundir, que es el punto de
vista de una enfermedad mental de psicosis, relacionada a epilepsia, es una
psicosis
orgánica, y
las
psicosis
orgánicas
son las
relacionadas
con
enfermedades al cerebro, es decir, que hay elemento que haya producido un
daño en la corteza cerebral de magnitud tal que produzca un déficit en el
funcionamiento natural del mismo, pero no son tampoco en cualquier parte
del cerebro, sino que en la parte que como dijo la psiquiatra, en forma tan
didáctica, es la que lleva la orquesta, que es el lóbulo frontal, cuando se
produce una situación en el lóbulo frontal, es donde se produce lo que
nosotros conocemos como un descontrol de impulsos, porque es la zona del
cerebro donde radica todo lo relacionado con esa área. También debe ser
una lesión de significación, una lesión que produzca un efecto y
una
evidencia clínica, tanto desde el punto de vista motor como desde el punto
de vista volitivo, desde el punto de vista de la inteligencia, evidencia clínica
que dejó claro, dando relación de sus dichos, la psiquiatra, no estuvo presente.
Por el contrario, fue una persona normal, declaró muy normal, muy buen
concepto se dio de ella, no se dio problema motor, no se dio ningún problema
en su léxico, ningún problema que indicara un daño a nivel frontal o a nivel
cerebral y la resonancia magnética, al que da lugar la defensa, se preguntó
qué era eso y explicó que es un daño mínimo a nivel del cerebro que no está
ubicado en el lóbulo frontal, primero, que no decía relación directa con la
corteza cerebral, segundo, que era una protuberancia que se producía en el
cerebro, que debía ser evaluado, pero que no tenía incidencia en la limitación
de la conducta desplegada. Por lo tanto, a juicio del Ministerio Público, la
hipótesis de imputabilidad disminuida planteada por la defensa, se deba
descartar absolutamente. Incluso, entre los profesiones, Agostini fue más
tajante, dijo que había una enfermedad mental de psicosis, incluso que era
inimputable, la sicóloga fue más realista, pero su hipótesis se basa en la
existencia real de una epilepsia, y no cualquier epilepsia, sino una epilepsia
con consecuencia de tal magnitud en el cerebro, que produjera un daño
orgánico que desestabilizara la conciencia de la realidad o la capacidad de
poder actuar o determinar de la persona, lo que tampoco es, porque estamos
hablando de un petit mal, un petit mal que se presentó desde los 5 a los 12
años, donde no se presentó ningún tipo de evidencia de su presencia, ni
ausencia de ninguna naturaleza, lo que declaró la psiquiatra al hacer la
entrevista y las preguntas respectivas. Si era tan relevante esto de determinar si
la acusada había tenido problemas graves de epilepsia, había tenido
convulsiones, había tenido trastornos, incluso, había tenido algún tipo de
accidente que permitiera la desorganización a nivel cerebral, ¿por qué no se
le preguntó a la familia? Alguna pregunta a la familia, que son las personas
más cercanas, que veían su día a día, ¿se le preguntó derechamente si ella
había tenido algún cuadro epiléptico después de los 12 años? No ¿por qué?
porque no es relevante. Por la misma razón que no se incorporó el
electroencefalograma a la audiencia para que el tribunal lo pudiera apreciar,
porque no es relevante para la teoría del caso de la defensa, porque indicaba
lo contrario a la teoría de la defensa. Por lo tanto, a juicio del Ministerio Público,
por la conducta desplegada, por la naturaleza de la conducta, por la
planificación de la conducta, no estamos hablando de un descontrol de
impulsos, la psiquiatra lo dijo bien claro. La capacidad de control es única,
exclusiva, es inmediata. Tal vez, si hubiésemos mostrado una situación de
abuso, en que la profesora, por x motivo, toma al menor, lo lleva a una sala y
lo empieza a besar tiene relaciones sexuales en forma abrupta, única, tal vez
podríamos pensar que está presente, pero las fases del desarrollo abusivo, no
da señal de eso, da señal de que sabía perfectamente lo que estaba
haciendo, sabía cómo lograrlo, y lo hizo.
Posteriormente se habló de la reiteración, la verdad es que se ha
indicado acá que la única prueba que existe para los efectos de la
reiteración, es la declaración de Sebastián pero hay mucha prueba indiciaria,
que tiene que ser valorada y que es conteste con la prueba de él, hay
situaciones en que fueron encontradas la víctima y la acusada, en
dependencias del colegio, que si bien no fueron observadas conductas de
relevancia sexual, las conductas fueron previas o posteriores, donde la
conducta era propia de dos personas que estaban en un lugar adecuado
para realizar algo que no era posible mostrar a terceros: sala cerrada, pestillo
corrido, cortinas, arreglándose el pelo, saliendo en forma soslayada. Eso ya
indica y no estamos hablando de un solo beso, no sabe si la defensa estuvo en
la misma audiencia, porque el niño fue claro y preciso, muchos besos,
subiendo en intensidad, subiendo en intensidad desde los piquitos a besos con
lengua, que obviamente tienen connotación sexual. Reiteración en cuanto a
la posibilidad de describir cada hecho, el niño fue capaz de describir, por lo
menos muchas veces, al interior del colegio, en distintos lugares, tres: sala de
clase, sala de video, sala de profesores, corroborados, con las declaraciones
de los testigos que sí los sitúan en esos lugares en circunstancias poco
adecuadas para una relación alumno profesor. Además, describir la relación
sexual, incluso el tribunal paró al tribunal cuando quiso hacer consultas más
profundas respecto a las características de la relación sexual, el niño indicó
cómo era la relación sexual, cómo había sido la primera vez, que incluso le
había costado y que la señora María Eugenia le había tenido que tomar el
pene y enseñarle para introducírselo en su vagina, aunque suene crudo.
También indicó cómo él podía obtener su re erección, su reiteración posterior,
a través de la capacidad que tenía doña María Eugenia para hacer la
manipulación de sus órganos genitales para obtener su erección. Incluso,
preguntado por el Ministerio Público si siempre era de la misma forma, se le
solicitó que aclarara la pregunta, es decir, si él siempre estaba sobre la
acusada, él indica que la mayoría de las veces sí, pero en a lo menos una o
dos ocasiones, no tenía claro, habían cambiado la posición, donde ella se
habría subido encima de él. Estamos hablando de un niño, estamos hablando
de un menor, qué quería ¿que lo anotara en un diario de vida, todos los días,
cómo estaba el día, la hora, el olor, la circunstancia? ¿Qué más precisión se
requiere para la reiteración y además están los contactos telefónicos, que
indican de una relación reiterada en el tiempo, no una relación única, una
fase de seducción, una cantidad de contactos telefónicos, se vio la naturaleza
de mensajes de texto, no es una situación de que hubiere sido una vez, esos
mensajes de texto no se ven. ¿Uds. creen que una mujer como doña María
Eugenia Darrigrande, se habría enamorado con una única relación sexual, ni
siquiera con penetración, sólo con eyaculación en su exterior, y habría
realizado todas estas conductas ¿los mensajes celópatas, donde se indica
claramente la existencia de otra niña, donde esa niña existe y donde también
indican que hubo un arranque de celos, frente al conocimiento que había una
situación de interés amoroso distinto de ella. 61 contactos telefónicos con el
negocio, ¿para qué? Bueno, ¿hay reiteración? a juicio del Ministerio Público la
reiteración está clara, precisa, con lo que exige nuestro ordenamiento jurídico.
No se puede hablar de delito único, primero, y tampoco se puede hablar de
delito continuado, porque estamos hablando de conductas únicas y
exclusivas en cada momento, se inicia y se termina, el disvalor es el bien
jurídico protegido, es la indemnidad sexual, en cada una de ella en forma
separada, se vulneró ese bien jurídico. Había un dolo único y exclusivo para
cada situación Mo podemos hablar de este tipo de delitos como si se tratara
de uno solo, no es la realidad desde el punto de vista jurídico. En cuanto a la
agravante del 368, subjetivo, objetivo, objetivo no hay discusión, según la
defensa,
para
la
fase
subjetiva,
tampoco
hay
discusión.
Hay
un
prevalecimiento objetivo, hay un ejercicio de poder, ella iba a sacar al alumno
de la sala, ¿Sebastián, estaba en condiciones de decir, no quiero salir? y
pasaba a llevar a sus colegas. Las colegas indicaron, que frente a la tupé que
tuvieron de decir no tienes por qué sacarlo, las increpó rotundamente,
perdón, según la defensa ese es un elemento de sesgo, de animadversión, el
haber reclamado un hecho que ella estaba sobrepasando todos los límites de
normalidad y haber pedido que se respetara su aula. Eso, para la defensa, es
sesgo y animadversión. A juico del Ministerio Público, hubo prevalecimiento
tanto desde el punto de vista de la obtención de la confianza para lograr el
hecho, la fase de seducción, prevalecimiento, para ocular, se prevaleció de la
condición de confianza que se tenía por sus padres, cuando ocultó la
información, desvió la atención. Si no hay aquí la agravante del artículo 368
que contempla nuestro ordenamiento jurídico, la gran pregunta para el
Ministerio Público, ¿cuándo? Aquí no se trata de una relación paritaria,
¿podemos hablar de una relación paritaria entre una mujer de 40 con un niño
de 12? la indemnidad sexual es lo que se protegiendo en este tipo penal, es un
bien jurídico donde al menor se le desconoce todo tipo de capacidad para
discernir en cuanto a su sexualidad, entonces, a juicio del Ministerio Público,
ninguno de los elementos que descartan la existencia del 368, están presentes,
por el contrario, están confirmados. Además, ¿quién realizó las conductas?
Cómo declaró doña María Eugenia, en plural “fuimos a la cama, nos sacamos
la ropa, nos tiramos a la cama, nos comenzamos a besar”, siempre tratando
de indicar que era mutuo, eso no es así, el propio beso, doña Otilia, que no es
el único beso que hay, son varios- indica la posición de poder, el niño en una
posición más baja, ella encima de él, agarrando, ella besando al menor, y
obviamente, sí ocurrieron hechos de significación sexual al interior del colegio.
Un beso en la boca, desde a un piquito a con lengua, con su profesora jefe o
con cualquier adulto y un menor, es un acto de significación sexual y es de
relevancia sexual, a tal extremo, que a consecuencia de esos besos, la
acusada tuvo necesidad de satisfacer sus deseos sexuales, pero ya no sólo
con los besos, sino que tuvo que llevar al menor para tener relaciones sexuales
y obtener un placer mayor, o una satisfacción sexual mayor de la necesaria.
Por lo tanto, a juicio del Ministerio Público, sí tuvo relevancia sexual.
La querellante replicó que en base a elementos señalados por la
defensa, dice que el hecho que se ha tomado como agravante es que ella
está en posición de ventaja; para ilustrar de mejor manera, el profesor
Rodríguez Collaos, manifiesta, “el fundamento de esta agravante, como fluye
claramente de su texto, es el hecho de encontrarse el autor en una posición
más ventajosa para la ejecución del delito, en razón de que existe un vínculo
jurídico que lo une a la víctima, y que la deja en relación de dependencia
respecto de aquel. Para la configuración de la agravante, en consecuencia,
no basta que el autor esté investido de alguna de las cualidades que la norma
menciona, sino que será preciso que el sujeto pasivo se halle sujeto a la
autoridad que ellas confieren”. En concepto de la querellante, dicha situación
queda de manifestó al ostentar la imputada un vinculo de autoridad respecto
del ofendido. Era la profesora jefe, nunca dejó de decirle la “seño”, nunca
dejó de verla como su profesora. Dijo, lo manifestó la defensa, él la trata
como su polola, da lo mismo lo que el menor pudiera pensar, qué importa el
consentimiento de la víctima, si lo hubiera no estaríamos hablando de delito. El
consentimiento de la víctima, el verlo como un par es problema de ella, el que
el menor la viera a ella como un par, no vale, podría haberse paseado
delante de ella, mostrando todos sus elementos físicos, él es un menor de
edad, la adulta es ella, ella no podía verla como su par, es imposible que eso
se de así, la que tenía la obligación de frenar los ímpetus sexuales del menor,
era ella.
Señala que debía describirse cada una de las relaciones sexuales, la
jurisprudencia la doctrina han sido claras respecto de este punto “los sucesos
establecidos en el juicio oral, comprenden acciones delictivas de abuso
sexual, perfectamente diferenciados entre sí, es un delito que se realiza y se
consuma cada vez que se comete. Tanto la doctrina como la jurisprudencia
han reconocido pleno valor al delito continuado y los requisitos que se exigen
para considerar su existencia, a saber, unidad de autor, identidad del tipo
penal, realizado en distintas ocasiones, un solo derecho violado, que tenga
lugar en un lapso prolongado de tiempo, la unidad de propósito del agente, la
indeterminación procesal, la pluralidad de acciones, pero ciertamente, esta
enumeración está contemplada, y así se ha demostrado en forma profusa por
la doctrina y la jurisprudencia, respectos de delitos cuyo bien jurídico protegido
es de carácter patrimonial. Aquí estamos hablando de bienes jurídicos de
carácter personalísimo, estamos hablando de la indemnidad sexual del menor,
que es el objeto de protección jurídica de más fuerza por parte del legislador,
con un tratamiento más riguroso que bienes considerados de carácter
patrimonial y que sólo respecto de esos bienes jurídicos, es dable aplicar el
delito de carácter continuado, no en delitos de esta naturaleza”. Por eso, a
juico de la querellante, aquí se ha acreditado la comisión de diversos delitos
de abuso sexual, en forma objetiva y en forma subjetiva, independientes entre
sí, por lo que estamos en presencia de delitos reiterados y no continuados por
lo que considera que debe aplicarse necesariamente la norma del artículo
351. Respecto de un punto de la defensa, “aquí los conserjes declararon”,
declaró un conserje y dio la posibilidad de que el menor haya estado. Se
señaló cuales eran los horarios de funcionamiento de los conserjes, 12 horas en
forma discontinuas, y aquí habló de 12 conserjes, no declaró ninguno de ellos,
la defensa había ofrecido 4 conserjes y no declaró ninguno. Si no lo vieron la
primera vez, perfectamente pudieron no verlo las otras veces. Se señala que el
menor señaló una fecha de relación sexual y recuerda a la defensa que la
imputada fue quien dijo que fue una única vez, el 9 de noviembre de 2007,
entonces, ya tenemos una fecha dada por la imputada y tenemos una fecha
dada por el menor. ¿Hay reiteración? Efectivamente. Cree la querellante que
se han dado imprecisiones respecto a todo lo aquí manifestado. Es por ello
que solicita se rechacen las consideraciones de la defensa respecto de la
agravante y respecto del delito continuado, y por cierto la imputabilidad
disminuida de que habla la defensa. Ha señalado con vehemencia, que todos
los exámenes que se han realizado a la profesora, descartan la existencia de
epilepsia que permitiera verla a ella como inimputable o con imputabilidad
disminuida, ella tenía clara conciencia de lo que estaba haciendo, estaba
satisfaciendo sus deseos sexuales. Así de categórico, así lo dijo Pamela Aedo,
que es la mejor prueba pericial que puede tener una causa, es la jefa
nacional de las pericias del Servicio Médico Legal, a nivel de psiquiatría infanto
juvenil, la doctora Pamela Aedo por más que se le trate de disminuir sus
características, por ser dos años, ella constantemente ha trabajado en el
Servicio Médico Legal, llegó a ser jefa de la psiquiatría de adultos. Por lo tanto,
desacreditar la entrevista que ella realizó, no le parece, no corresponde. Es
una entrevista clara y contundente. Por eso solicita se rechace nuevamente
los argumentos presentados por la defensa, en orden a desacreditar la
imputabilidad de la señora María Eugenia Darrigrande Moreno.
La defensa replicó que primer lugar, respecto del carecer psiquiátrico o
psicológico de la imputabilidad disminuida, es relativamente pacifico y no
discutido hoy en día, la verdad es que no conoce a nadie que lo discuta,
primero, que la resolución sobre imputabilidad o inimputabilidad de una
persona,
es
una
resolución
judicial,
los
antecedentes
periciales
son
antecedentes, pero quienes resuelven son los jueces; en segundo término, es
absolutamente
pacífico
que
nuestro
código
no
acoge
una
fórmula
psiquiátrica, y no la acoge, pura y simplemente, porque usa las expresiones
“loco o demente”, que no tienen correlato en psiquiatría. Ningún psiquiatra,
de ninguna escuela de las múltiples escuelas psiquiátricas conocidas, alude al
loco o demente, por eso se entiende que la formula es psicólogo psiquiátrica,
y si es psicológico psiquiátrica, respecto de la concurrencia de los
presupuestos que el juez debe tomar en consideración para poder llevar a
cabo el juicio sobre imputabilidad, pueden ser de análoga utilidad, informes
psiquiátricos y psicológicos. Pero más que discutir sobre la profesión de los
peritos, lo relevante es lo que los peritos dijeron en el juico, todos dicen haber
realizado una entrevista clínica, en dos de las entrevistas clínicas, aparecieron
entrevistas de psicosis, una refirió haber hecho solamente una entrevista clínica
y no haber tomado ningún test de respaldo a esa entrevista. Los restantes
afirmaron tener respaldos en test psicológicos. O sea, no se trata de dos peritos
contra uno, sino del contexto en que se hicieron esas pericias y en ese marco
de referencia, pareciera que dos entrevistas clínicas, con el correspondiente
respaldo en test, tienen más peso que una sola entrevista clínica, respaldada
además por la resonancia magnética, él no se atrevería a señalar que en el
lóbulo frontal está el director de orquesta, basta de pensar en el caso de
Zenón Guajardo, lo lobotomizaron dos veces y volvió a cometer homicidio. La
idea que en el lóbulo frontal puedan estar, corresponde casi a una psiquiatría
conductista, la verdad es que además, por competencia técnica, cree que
ninguno de nosotros está en condiciones de hacer estas afirmaciones. La
misma psiquiatra Bahamondes, que no es Pamela Aeda, Pamela Aedo es la
psiquiatra infanto juvenil, la psiquiatra de adultos que consultó fue la señora
Bahamondes y la señora Bahamondes fue la que señaló llevar dos años
haciendo pericias en el Servicio Médico Legal, pero ella misma afirmó que
para que el electroencefalograma fuera concluyente respecto de la
presencia de epilepsia, se requería un Hallter elétrico, vale decir, la posibilidad
de estar haciéndole constantes electroencefalograma, que en un solo electro
no iba a parecer, o había una gran posibilidad de que no apreciara, porque el
electro debía ser tomado durante el ataque epiléptico y la verdad es que
interna en el centro penitenciario, era imposible realizar ese tipo de exámenes.
Por eso sólo se acompañó la resonancia magnética. Respecto de la
calificante ha sostenido que ésta tiene dos elementos objetivos: primero, la
calidad a la que alude el tipo como elemento normativo y segundo, como
elemento objetivo, el prevalimiento. No hay mayor discusión con lo que señala
Rodríguez Collao, aquí es necesario aclarar, para efectos del 366 bis,
evidentemente no importa el consentimiento del menor, es irrelevante, los
menores no tienen capacidad de disposición sexual, para efectos de dar por
acreditada la concurrencia del delito descrito en el 366 bis, no importa el
consentimiento del menor ni el tipo de relación entre autor y víctima, pero lo
que estamos discutiendo aquí, no es la concurrencia del 366 bis, estamos
discutiendo si concurre o no concurre la agravante del 368, que es una
situación totalmente distinta a la del tipo base. Vale decir, si en el tipo
agravado, en su faz objetiva, se da una relación de prevalimiento, porque si
no, la construcción de la agravante, sería puramente formal, situación de
prevalimiento que además debe reflejarse en la faz subjetiva de la agravante,
como dolo directo y lo que sostiene la defensa, es que entre dos personas,
como lo ha reconocido el querellante, se visualizaban a sí mismos, como una
pareja de pololos, no existe esa relación de prevalimiento. Sostiene
adicionalmente, que no se acompañó ninguna sola prueba, ni siquiera el
menor hizo referencia a esta situación de poder que diera lugar a una
situación de prevalimiento. En todo evento, el prevalimiento es objetivo.
Respecto de la reiteración, declaró en el juicio uno solo de los conserjes, pero
Magali Gacitúa, funcionario de carabineros, a cargo de la investigación,
señaló haberlos entrevistado a todos ellos y que ninguno de ellos reconocía al
menor, ella fue la que hizo el reconocimiento fotográfico en que de 12 fotos
había a lo menos 7, porque eso no quedó claro, de conserjes. Respecto del
delito continuado, hay abundante jurisprudencia de apreciación de delitos
continuados en delitos de abuso sexuales. Enrique Cury Urzua, llega a sostener
expresamente en la última edición de su manual, que un delito de
significación sexual, como es el incesto, será siempre continuado, por la
naturaleza misma de las cosas. El mismo criterio puede aplicársele al delito de
abusos sexuales. Para que haya un delito continuado, tienen que haber delitos
distintos, si es una hipótesis en que concurren varios delitos separados, eso no
entra en discusión y cada delito debe concurrir con todos los elementos,
objetivos y subjetivos, lo que pasa es que hay un factor que le da continuo, ese
factor se compone de elementos objetivos y elementos subjetivos, como refirió
anteriormente. No hay ninguna razón para que un delito contra la
autodeterminación
sexual
no
pueda
ser
estimado
continuado.
Hay
jurisprudencia y abundante doctrina al respecto y como recuerda hoy, al
pasar, Enrique Cury afirma expresamente que el delito de incesto, por la
naturaleza misma de las cosas, es siempre continuado. Luego, aún cuando se
pudiera apreciar la existencia de antecedentes que indicaran una reiteración,
en el caso que en concreto nos ocupa, ocurriría un delito continuado.
NOVENO: Valoración de los medios de prueba. Respecto de la
valoración de las pruebas y su idoneidad para tener por establecido, tanto el
hecho punible como la participación que le habría cabido a la acusada, será
necesario efectuar algunas consideraciones previas para explicitar algunos
criterios o presupuestos que subyacen en la decisión que el Tribunal comunicó
en la audiencia respectiva, en aras de justificar razonablemente aquella
decisión de condena. Las cuestiones que a la luz de los antecedentes
requieren una breve atención previa, se vinculan al tipo de conocimiento que
los jueces adquieren respecto de los hechos en un juicio penal; al estándar
probatorio que dicho conocimiento debe sortear y, por último, a si las
contradicciones o insuficiencias en los dichos que emanan de la prueba
testifical incide, necesariamente, en la credibilidad de dichos testigos o si, en
cambio, son un aspecto a escrutar respecto de los hechos que es dable tener
por probados con dicha prueba, a la luz de criterios de contrastación.
Respecto del primer aspecto, esto es, el tipo de conocimiento que los
jueces adquieren de los hechos debatidos en el juicio, valga comenzar
poniendo de relieve una cuestión que parece obvia, pero que, sin embargo,
no siempre se la tiene debidamente en cuanta: los hechos de relevancia
penal sometidos a juicio siempre son –inevitablemente—hechos del pasado.
No cabe revivirlos en todos sus contornos, pues ya fueron y se esfumaron con el
transcurso del tiempo. Lo que se presenta al juicio son pruebas o evidencias
que refieren a esos hechos ya fenecidos. A partir de las pruebas producidas en
el presente, se aspira a inferir cómo ocurrieron, en realidad, aquellos
acontecimientos del pasado. Esa inferencia en torno al establecimiento de los
hechos adopta, naturalmente, la forma de una inferencia inductiva y, por lo
mismo,
el
conocimiento
probabilístico.
Como
adquirido
señala
por
Perfecto
esa
vía
Andrés
es
necesariamente
Ibáñez,
“acoger
metodológicamente el carácter de inferencia inductiva de la averiguación de
los hechos, supone a la vez asumir algo que, no obstante su aparente
obviedad, tiene una relevancia que no debe desconocerse. Me refiero al dato
de que con ello se sitúa reflexivamente el quehacer cognoscitivo del juez
respecto de los hechos en el ámbito de las explicaciones probabilística, que
son las que permiten afirmar algo, pero sólo, y si la derivación es correcta, con
un alto grado de probabilidad”. (Andrés Perfecto, Ibáñez. Acerca de la
motivación de los hechos en la sentencia penal, en Doxa: Cuadernos de
Filosofía del Derecho, núm. 12 (1992), pp. 257-299).
Por lo mismo, no caben aquí certezas de ningún tipo, y recurrir a
apelativos como certeza de tipo moral, intima convicción o cualquier otro
adjetivo que refiera a procesos psicológicos que se suscitan internamente en
los jueces o estados del alma que éstos experimenten, lejos de sortear el
problema, lo agravan en la medida que convocan una concepción
subjetivista de la valoración probatoria, no susceptible de justificación racional
y que, por lo mismo, impide el control público de la decisión.
De lo dicho se sigue, entonces, que un estándar probatorio, desde el
más exigente hasta el menos riguroso, se funda siempre en el manejo de las
probabilidades como horizonte infranqueable de conocimiento. Un estándar
probatorio muy exigente, minimiza la probabilidad de dar por probados
hechos que no han acontecido pero, como contrapartida, maximiza la
probabilidad de no dar por probados hechos que efectivamente han
ocurrido. No existe, como se aprecia, un compromiso con la verdad
ontológica, sino una decisión respecto de la probabilidad de error. Un
estándar probatorio muy exigente aspira a minimizar la probabilidad de
condenar a un inocente, al tiempo que maximiza la probabilidad de absolver
a un culpable; y uno muy poco exigente tendrá el efecto contrario. La
robustez del principio de inocencia, por un lado, y la posibilidad de una
efectiva persecución penal, por otra, se debaten en ambos extremos de la
ecuación. Desde este punto de vista un estándar probatorio es, en rigor, una
decisión político criminal respecto de la ratio admisible de falsas condenas y
falsas absoluciones que estemos dispuestos a tolerar colectivamente.
Pues bien, dicho lo anterior, conviene consignar que ni el legislador ni la
doctrina han logrado precisar en qué consiste el estándar de convicción que
expresa la formula “más allá de toda duda razonable” a la que debe atenerse
el Tribunal. Ni aún en el sistema judicial anglosajón, del cual hemos importado
esa
regla,
existe
tal
delimitación,
pues
se
trata
de
un
concepto
eminentemente indeterminado. Sin embargo, parece evidente que “más allá
de toda duda razonable” no puede entenderse equivalente a “más allá de
toda sombra de duda”, pues en este último caso, de exigencia extrema, sería
necesario descartar por completo cualquier otra versión de los hechos distinta
a la inculpatoria, mientras que se admite comúnmente que nuestro estándar
de convicción permite la existencia de otras hipótesis posibles aunque
improbables de ocurrencia de los hechos.
En este orden de ideas, al establecer los hechos en base a las pruebas
disponibles en el proceso, lo que se exige a los jueces es que entreguen
motivos que puedan justificar aquella decisión de un modo razonable,
intersubjetivamente compulsivo, en el sentido de que sean razonamientos
compartidos o al menos compartibles por otras personas también razonables.
Desde esta perspectiva, el umbral de la duda razonable exige que la
hipótesis condenatoria resulte fuertemente acreditada con las evidencias
disponibles, que éstas refuten la versión alternativa de los hechos –cuando
existe dicha versión—o que al menos se puedan descartar otras hipótesis, en
competencia con la acusatoria, que permitieran explicar aquellas evidencias
de un modo diverso al que se alberga en la decisión de condena.
En lo referente a si las contradicciones o insuficiencias en los dichos que
emanan de la prueba testifical incide, necesariamente, en la credibilidad de
dichos testigos o si, en cambio, son un aspecto a escrutar respecto de los
hechos que es dable tener por probados con dicha evidencia, a la luz de
criterios de contrastación sistemática, se hace necesario explicitar algunas
cuestiones vinculada a la valoración misma que el Tribunal hace de la pruebas
ofrecidas en el juicio.
Al igual que lo hemos hecho en otras ocasiones, creemos necesario
exponer aquí sucintamente cuáles son los criterios o formas de análisis en virtud
de las cuales se asigna valor a las pruebas, fundamentalmente respecto de la
prueba testimonial y pericial, que es la que suele estar atravesada por
versiones contrapuestas, que generan mantos de duda respecto de su
veracidad, y que las defensas suelen estar atentas a evidenciar. Aquella
siempre es una labor ardua, no sólo por la gran cantidad de testimonios y
afirmaciones vertidas en el juicio, muchas veces contradictorias unas con
otras, sino también porque las más de las veces no proporcionan información
directa sobre los hechos que se requiere probar y sólo recaen en
circunstancias externas o meramente contextuales, no siempre útiles para ese
propósito. Por lo demás, las características algunos delitos, como el que es
objeto de este juicio, suelen proporcionar mayores dificultades para esclarecer
los hechos. En efecto, como suele ocurrir en delitos de esta naturaleza, su
perpetración no se produce en medio de testigos presenciales, ni dejan rastros
físicos fácilmente interpretables, por lo que su ocurrencia ha de ser establecida
mediante un contraste sistemático entre la versión que entrega la víctima,
afirmando la ocurrencia de aquellos hechos, y la del presunto agresor que
ordinariamente negará su existencia, o le atribuirá connotaciones diversas.
Desde esta perspectiva, las declaraciones de testigos y peritos se
abordan, por parte del Tribunal, en un primer examen de credibilidad, que en
otras ocasiones hemos denominado credibilidad interna. Se trata de
establecer el valor o la credibilidad que es dable asignar a los dichos del
testigo o perito, aisladamente considerado. En este punto, un dato básico o
previo, comúnmente aceptado, se vincula a la contaminación de intereses en
el proceso, que actúan como incentivos para una declaración falsa. Suele
señalarse a este respecto que el testimonio que proviene de las víctimas del
delito, así como el entregado por parte de los acusados de cometerlo,
particularmente cuando de estos últimos se pueden derivar beneficios de tipo
procesal o carcelario, están cubiertos por un manto de dudas inicial, que
algunos llaman causales de incredibilidad subjetiva. Pero, además de su
posición relativa en el juego complejo de los intereses procesales, la
credibilidad interna de un testimonio se pondera también en base al
testimonio mismo, y no sólo escrutando las sospechas que se ciernen sobre el
sujeto que lo emite. Desde el punto de vista del relato mismo, cabe ponderar
aspectos como la plausibilidad, que exige que el relato no contraríe las
máximas de la experiencia, ni los conocimientos científicamente afianzados, al
tiempo que no pugne con los antecedentes contextuales, fácticos y
emocionales en que se suscitan los acontecimientos. Un relato plausible, es un
relato que describe el acontecer de un modo razonablemente factible de
corresponder a la realidad de dicho acontecer. Se requiere, igualmente,
ponderar la coherencia interna del testimonio, en el sentido de que éste no
presente aspectos contradictorios, que lo hacen entrar en pugna consigo
mismo, a la luz de una lógica elemental del discurso. Por último, también la
credibilidad de un testimonio se mide a la luz de su consistencia, esto es, a la
circunstancia de haber sido mantenido sustancialmente inalterado a lo largo
del tiempo.
En segundo término, sopesada ya la credibilidad interna del relato de
un testigo o perito y ponderando, como ya se dijo, su posición relativa en el
juego de intereses relevantes que se agitan en el proceso, la plausibilidad de
su versión de los hechos, la coherencia interna de que debe estar revestida y
la consistencia de la misma; cabe hacer un segundo escrutinio, que podemos
denominar credibilidad externa. En este segundo nivel de análisis, lo relevante
ya no es la credibilidad que suscita el testigo o perito aisladamente
considerado, sino la concordancia o armonía que su versión de los hechos
guarda con el resto de los antecedentes incorporados al juicio. Se trata, como
es posible advertir, de un análisis sistemático de aquel testimonio con el resto
de las pruebas, en busca de antecedentes de corroboración. Así, un relato
resulta más atendible en la medida en que todo o parte de su contenido
aparece corroborado por antecedentes externos, vale decir, por otros medios
de prueba de generación independiente o autónoma al testimonio que se
pondera. Desde luego, aquellas otras evidencias pueden no prestar sustento
alguno a la versión que se analiza, e incluso pueden refutarla, en la medida en
que aquellas otras pruebas aparecen incompatibles con dicha versión.
Todos estos factores han de ponderarse, desde luego, sin perder de
vista el dato cierto de la complejidad humana, que hace que dos personas
que han presenciado un mismo hecho, jamás lo relatarán de un modo
idéntico y que una podrá reparar en detalles o aspectos que para la otra
pasarán inadvertidos, al tiempo que los énfasis o apreciaciones podrán ser
también diversos, en la medida en que la mirada de cada individuo es
irremediablemente singular e irrepetible.
Este último aspecto, referente a la individualidad de la percepción de
los hechos, acaso auto evidente y, por lo mismo, no necesitado de mayor
fundamentación, no siempre se pondera en todo su alcance. No sólo la
mirada de cada testigo es esencialmente singular e irrepetible, sino que
además su testimonio en juicio siempre será referente a hechos del pasado,
como decíamos más arriba, por lo que su relato consistirá en una actualización
de la memoria que conserva respecto de esos hechos. Señalamos, respecto
de la consistencia de un relato, que ésta consiste en la circunstancia de haber
sido mantenido sustancialmente inalterado a lo largo del tiempo, lo que no
significa idéntico. Aquí se genera una paradoja respecto de la consistencia en
el relato de un testigo, que consiste en que la mantención inalterada,
“uniforme y perfecta” de su versión a lo largo del tiempo –consistencia
extrema—lejos de abonar su credibilidad la debilita sobremanera, pues resulta
indiciaria de un relato aprendido de memoria o inoculado por terceros. Del
mismo modo, tres testigos que relatan “exactamente igual” un acontecimiento
–concordancia extrema—impresionan inevitablemente como portadores de
un discurso previamente acordado entre ellos. En ambos casos, ofende la
razón un calce perfecto de las versiones en términos de consistencia, en el
testigo individual, y de concordancia entre un testimonio plural. En el caso de
los varios testigos, al igual que en el testimonio singular, las discrepancias
esperables emanan de la naturaleza individual de las personas y aquellas
discrepancias serán más o menos relevantes, en la medida que sean
razonablemente explicables a la luz del contexto en que percibieron los
hechos y la plausibilidad que le otorgue el resto de las evidencias.
Hechas estas breves consideraciones, podemos abocarnos a valorar las
pruebas rendidas principiando por aquellos aspectos menos controvertidos,
para finalizar con aquellos otros que suscitaron mayor controversia.
Conviene hacer presente, además, que en la parte de esta sentencia
referente a los medios de prueba rendidos, se ha procedido a una
transcripción prácticamente literal de los dichos vertidos por los diversos
testigos y peritos, motivo por el cual se evitará, en esta parte, hace referencia
a aquel contenido más allá de lo estrictamente necesario, partiendo de la
base de que la comprensión y reconstrucción de los razonamientos que aquí
se efectuarán supone el conocimiento previo de aquellos relatos o contenidos,
los que lógicamente se han vaciado en acápites previos al presente análisis
para posibilitar su comprensión.
No ha suscitado controversia la circunstancia de que los hechos
sometidos a juicio se han producido, al menos en su inicio, en el
Establecimiento Educacional Liceo Polivalente Santa Juliana, pues lo que se ha
controvertido por la defensa es el contorno o significación de los hechos allí
ocurridos, más no la identidad de dicho lugar. Prácticamente la totalidad de
los testigos que depusieron en la causa, pertenecientes o vinculados a la
comunidad escolar, han referido individualizadamente aquel establecimiento
educacional. Por otra parte, tampoco ha sido controvertido el hecho de que
dicho establecimiento educacional está ubicado en Avenida México N° 755
de la comuna de Recoleta. Así lo afirmó su director, el testigo Héctor Iván
Ponce Ovalle, y dicho domicilio se desprende igualmente de la evidencia
fotográfica del establecimiento. De manera que aquel es un hecho, o
circunstancia espacial que puede darse por establecida y, cada vez que los
testigos refieren el establecimiento educacional o Liceo, inequívocamente se
refieren a ése establecimiento educacional, ubicado en la dirección
señalada.
En seguida, tampoco ha suscitado controversia la circunstancia de que,
parte de los hechos sometidos a juicio, se han realizado en un departamento
ubicado en calle Libertad N° 1290, Escala K, Departamento 501 de la comuna
de Santiago. Así, cuando la acusada refiere a “su departamento”, cuando el
ofendido menciona haber ido con ella al “departamento de Libertad”,
cuando los padres del menor señalan haber concurrido al “departamento
ubicado
en
calle
Libertad
con
Mapocho”, están
refiriendo
también
inequívocamente a aquel ubicado en la dirección que se acaba de señalar.
Por lo demás, dicho lugar ha sido ampliamente referido, por los testigos José
Manuel Castro Aguilera, Andres Sebastián Saez Carrasco, Maria Margarita
Gacitúa Lorca y ha sido precisada la dirección por el testigo Max Freddy
Castillo Castillo, la que se desprende así mismo de las impresiones fotográficas
exhibidas de aquel lugar. De modo que la identidad o ubicación de aquel
sitio, puede quedar establecida sin mayores inconvenientes.
Tampoco ha sido objeto de discusión el hecho que durante el año 2007,
el ofendido de iniciales S.A.J.S era alumno del 6° año A de educación básica,
y que a esa época la acusada se desempeñaba como profesora jefe de
aquel curso, y que además ejercía funciones como jefa de la Unidad Técnica
Pedagógica, todo ello en el referido Establecimiento Educacional Liceo
Polivalente Santa Juliana. Resultaría enteramente ocioso, para quien esté
medianamente enterado de las pruebas rendidas en el juicio, citar aquí los
testimonios que dan cuenta de estas últimas circunstancias. Baste decir que
aquellas circunstancias han sido referidas por el ofendido y la acusada, los
testigos menores de edad M.A.C.G, C.F.G.A, C.A.U.M, G.H.L.K, los padres del
menor ofendido Jessica del Carmen Salinas Arriagada y Luis Alberto Jeria
Márquez, y los testigos pertenecientes a la comunidad escolar de aquel
establecimiento, Héctor Iván Ponce Ovalle, Claudia Alejandra Ponce
Cardenas, Ana Maria Guerrero González, Mercedes Elizabeth Clavero Lara,
Maria Gloria Prado Lazo, Leonor Inés Lazo Jopia y Otilia Eliana Romero Rojas.
También aquellas circunstancias aparecen refrendadas por la evidencia
documental incorporada al juicio, consisten en fotocopia autorizada de la
pagina N° 1 del Libro de Clases del 6° año A de 2007 del Liceo Polivalente
Santa Juliana; fotocopia autorizada de la lista del Curso 6° básico A año 2007
del Liceo Polivalente Santa Juliana; copia Autorizada de Evaluación de
Hábitos e Integración Social del menor S.A.J.S año 2007 y 2008; fotocopia
autorizada de Hoja de Observaciones Personales y Certificado Anual del año
2007 del mismo menor, todas referidas al establecimiento educacional de la
referencia.
Tal vez la última cuestión no controvertida en el juicio, dice relación con
la edad del menor de iniciales S.A.J.S a la época que se viene refiriendo.
Muchos testigos hicieron alusión a su cumpleaños, pero para mencionar sólo
un antecedente que despeja dudas sobre el particular, es del caso remitirse a
la prueba documental nuevamente, específicamente al Certificado de
Nacimiento del menor de iniciales S.A.J.S, y de Antecedentes Familiares del
mismo, emitidos por el Servicio de Registro Civil e Identificación, de los que se
desprende que su fecha de nacimiento es el 27 de agosto de 1995, de modo
que el día 27 de agosto de 2007, cumpleaños referido ampliamente por los
testigos, aquel menor cumplió 12 años de edad.
Resumiendo, en lo que hasta aquí hemos analizado respecto de hechos
o circunstancias que no han causado controversia en el juicio, pero que, no
obstante, encuentran asidero en múltiples pruebas vertidas en la audiencia –
como se indicó en cada caso—sin encontrar evidencias en contrario,
podemos dar por establecido que los hechos sometidos a juicio se han
producido, al menos en su inicio, en el Establecimiento Educacional Liceo
Polivalente Santa Juliana, establecimiento educacional que está ubicado en
Avenida México N° 755 de la comuna de Recoleta; que parte de los hechos
sometidos a juicio, se han realizado en un departamento ubicado en calle
Libertad N° 1290, Escala K, Departamento 501 de la comuna de Santiago; que
durante el año 2007, el ofendido de iniciales S.A.J.S era alumno del 6° año A de
educación básica, y que a esa época la acusada se desempeñaba como
profesora jefe de aquel curso, y que además ejercía funciones como jefa de la
Unidad Técnica Pedagógica, todo ello en el referido Establecimiento
Educacional Liceo Polivalente Santa Juliana; año en el cual, específicamente
el día 27 de agosto de 2007, aquel menor cumplió 12 años de edad.
Como se advierte, hasta aquí no hemos determinado qué hechos son
los que se suscitaron en aquellos lugares, y tampoco el espacio temporal más
específico en que se habrían producido. Este ha sido el centro de la
controversia, donde surgen discrepancias fundamentales entre lo aseverado
por la víctima y la acusada, donde se juegan los aspectos de credibilidad bajo
criterios de contrastación sistemática que hemos aludido más arriba, y en
torno a los cuales giran la teoría acusatoria y la versión de la defensa.
Requiere, por lo mismo, un análisis más detallado de la valoración efectuada
por el Tribunal, para justificar la decisión de condena dada a conocer en el
veredicto. Comenzaremos con la prueba de cargo para analizar su fiabilidad y
concordancia, y finalmente con la prueba de la defensa, para averiguar si
aquella prueba refuta o al menos modifica los hechos que es dable tener por
establecidos con la primera.
En primer término, contamos con el testimonio de la víctima el menor de
iniciales S.A.J.S. Cuando refiere a la génesis de la situación señaló que “desde
5° a 6° a mitad de año, su relación con doña María Eugenia fue de alumno
profesor, a mitad de año hubo unas cartas amorosas, que cambiaron la
relación, las cartas decían, “te quiero, me estoy enamorando de ti”, ya no era
la relación profesor y alumno, estas cartas llegaron cuando a él le faltaban
días para su cumpleaños, que es el 27 de agosto”. Añade que las primeras
cartas fueron cartas amorosas, que él no entendía, porque venían con
iniciales, y luego él supo el significado de esas palabras, “cuando fue a
preguntarle qué quería decir esas iniciales, se las leyó una por una y se ella se
declaró”. Señala que le preguntó en una reja, en el segundo piso, en el
colegio, ella le pasó la carta y él le dijo que le dijera qué decía la carta,
porque no entendía, “ella le dijo, salgamos un poco, él estaba en clases con
ella, y cuando llegaron a la reja le dijo qué era cada inicial, se le estaba
declarando, él quedó impactado, porque era su profesora”. Los días
siguientes, para su cumpleaños, “le regaló una billetera y una caja de
chocolates”. Añadió que “después de ese regalo, la profesora lo sacaba
constantemente de la sala” y que “semanas después, en la sala de video,
ocurrió un beso y semanas después, relaciones sexuales”. El menor precisa que
el regalo de cumpleaños “se lo hizo dos días después de su cumpleaños, el
primer beso en la sala de video fue una o dos semanas después y que después
de eso ocurrieron más besos, más cartas y más salidas de clase”. Los besos
eran siempre en la sala de video, generalmente, recuerda que una vez, en la
tarde fue en la sala de profesores, pero casi siempre fue en la sala de videos.
Recuerda que se acariciaban los cuerpos, ella le tocaba la espalda y los
brazos, él le tocaba los hombros y los brazos.
Respecto
a los hechos acontecidos fuera del colegio, señaló
concretamente que “fuera del colegio cambió. Un día, una semana después
de los besos, ella le dijo si un día viernes podían salir a comerse algo, fueron en
su auto a una estación de servicios, donde comieron una hamburguesa, luego
se dirigieron a su departamento, ubicado en calle Libertad con Mapocho. Ese
día él se fue desde el colegio a la casa de su papá, se bañó, se vistió y se
quedaron de juntar en México de Recoleta, él se subió, se dieron un beso
común, en la cara, para saludar. Comieron y de ahí fueron al departamento.
Ese día entraron al departamento, él se sentó en un sillón, ella se puso encima
suyo y empezó a darle besos, eran besos con lengua. Luego de eso lo llevó a
la pieza y ocurrió el acto sexual. Cuando entraron a la pieza, recuerda que ella
se sacó la parte de arriba de su ropa, se sacó la parte de abajo y le sacó a él
la parte de arriba. En eso estaban en la cama, se siguieron dando besos, él se
bajó los pantalones y ocurrió la penetración”. Agrega que “ese día ocurrió dos
veces, que se acuerda y después de eso, semanalmente, todos los viernes. La
posición era él encima de ella, siempre se ocupó la misma, excepto una o dos
veces, en que ella se sentó encima suyo, cuando él estaba acostado. Él
eyaculaba dentro de ella”. Finalmente, en lo que hasta aquí nos importa, el
menor indicó que “en su departamento, esto ocurría todos los viernes, siempre
de la misma forma, esto ocurrió hasta 23 de noviembre de ese mismo año. Ese
día ocurrió lo mismo de siempre, pero su mamá intervino, porque salía todos los
viernes, creía que iba donde su polola. Él les mentía, les decía que iba donde
su supuesta polola”.
Pues bien, los dichos del menor, que se han transcrito en sus aspectos
más relevantes, resultaron para el Tribunal plenamente creíbles. En primer
término, porque es un relato plausible, pues se mantiene una secuencia lógica
de desarrollo de los acontecimientos que bien puede corresponder a cómo se
suscitaron éstos en la realidad, y esa versión no desafía –más allá de sus ribetes
de fondo—al sentido común o las máximas de experiencia. En seguida es un
relato que guarda estricta coherencia interna, pues no contiene aspectos que
entren en pugna entre sí, al tiempo que, como ya dijimos, contiene una
secuencia perfectamente lógica de desarrollo temporal y espacial de los
acontecimientos. Fuera de su posición relativa en el proceso, no se advierte en
los dichos de menor, ni en la forma en que prestó declaración ante el Tribunal,
que estuviera motivado por una animadversión hacia la acusada, que jugara
como un factor para emitir una declaración radicalmente falsa o destinada a
exagerar los hechos en perjuicio de la acusada. Más aún, la falta de incentivos
externos para una alegación en falso, vinculadas generalmente a lo que se
conoce como “ganancias secundarias” no se divisan en el presente caso. De
hecho, el concepto de ganancia secundaria está más bien vinculado a
procesos de develación espontáneos o voluntarios, cuyo no es el caso, pues
aquí más que una develación ha existido un descubrimiento forzado de los
hechos abusivos. Cabe recordar, además, que según lo señaló la psicóloga
del colegio Claudia Alejandra Ponce Cardenas, que fue la primera en
entrevistarlo con mayor detenimiento respecto de los hechos, señaló lo
dificultoso que resultó y que “lo que logró al final de una hora y media de
entrevista, reconoció que se habían besado, para llegar a ese relato, fue
bastante difícil, porque él al principio negaba todo tipo de relación, relataba
todo como si fuese una amistad, cosa que le pareció sospechoso, le pregunta
qué temor tenía, porque ella notaba, a raíz de ciertas contradicciones que
empezó a manifestar, que tenía algún temor, y entonces él dijo que temía que
a la profesora la echaran del colegio. Él la protegió, y a ella le costó mucho
obtener la confianza”.
Es evidente que luego de haber estado sometido a terapia psicológica
producto de estos hechos, en parte por los sentimientos de culpa que
evidenciaba en un principio, referidos por la pericial pertinente, la visión que el
menor tiene actualmente de los acontecimientos relatados aparece mucho
menos solidaria con la acusada, que lo que aconteció en un principio.
Pero valorando el testimonio del menor desde el punto de vista de la
consistencia de su relato, esto es, desde la perspectiva de su mantención
sustancialmente inalterada en el tiempo, cabe advertir que este parámetro se
encuentra plenamente superado. En efecto, los aspectos centrales de su
versión de los hechos entregada en el juicio, se corresponde esencialmente
con aquel que, en diversos momentos de la investigación y ante diversos
testigos o peritos refirió respecto de los hechos. Tempranamente, entregó una
versión ante la psicóloga Claudia Ponce, consistente con lo informado en la
audiencia. La referida testigo, señaló que el menor le refirió que lo ocurrido
habían sido más que besos, que también hubo caricias y que esas caricias
eran sobre la ropa y luego bajo la ropa, y que preguntado le confesó que
“tuvimos relaciones sexuales” con penetración de su pene en la vagina, y
comentó que fue en su departamento los días viernes y algunos martes. La
testigo precisó que “no recuerda que haya manifestado cuantas veces, sólo
relató que había sido los días viernes. Esto habría ocurrido después de su
cumpleaños hasta la fecha que esto se supo”. Por otra parte, la testigo Tatiana
Andrea Avendaño Correa, funcionaria de carabineros quien tomó la denuncia
de los hechos, refirió que luego de varios esfuerzos por ganarse la confianza
del menor, finalmente logró que este le contara lo sucedido. Señaló la testigo
que el menor “le contó que desde el día de su cumpleaños, el 27 de agosto
de 2007, había tenido una relación con su profesora jefe, del tiempo que
había pasado, tenía mucha pena, se sentía muy mal, porque su profesora le
había dicho que estaba embarazada, que abortaría el bebé, que no se
preocupara por nada y que no le contara nada a sus padres. Que la profesora
lo sacaba de clases, lo llevaba a la sala de video y le empezaba a tocar sus
partes íntimas y lo besaba, que le mandaba recados, mensajes a su celular,
que le había regalado una billetera y una foto tamaño carnet y
posteriormente en un departamento que tenía la profesora, la polola decía él,
en la calle Libertad, en la comuna de Santiago Centro, donde en varias
oportunidades llevó al menor. Sabe que iba con frecuencia al lugar, no
recuerda los días, le relató que primero había empezado con besos en el sexto
básico, y posteriormente en el departamento de la profesora, tuvieron sexo.
Declaró el menor que esto había pasado en muchas oportunidades”. Por su
parte Daniela Paz Johnson Fica, Subinspector de la Policía de Investigaciones,
quien entre otras diligencias investigativas tomó declaración al menor, indicó
en la audiencia que éste le señaló que “para el cumpleaños del menor, que
fue en agosto del mismo año, le regaló una billetera, días después le regaló
una fotografía de ella, esto fue a fines de agosto del mismo año, pasado una
semana del colegio, le insinuaba cosas como que él le gustaba, que se estaba
enamorando, y posteriormente de unas semanas, lo empezó a invitar a comer
los días viernes, generalmente, lo llevaba a la sala de videos del colegio,
donde le decía que le gustaba, que estaba enamorada de él y le daba besos
en la boca. Ella lo sacaba de la sala, tenía la facultad de hacerlo, lo sacaba y
lo llevaba para allá, dice que lo llevó reiteradas veces a la sala de video.
También mencionó que los hechos ocurrieron en otro lugar, que lo invitaba a
comer que lo llevó reiteradas veces a un departamento que ella tiene en calle
Libertad, los días viernes lo invitaba a comer antes de ir al departamento, y lo
llevaba al departamento también, después del colegio. Le dijo que la primera
vez que fueron al departamento, fueron primero a ver a una compañera que
estaba enferma y después, en el departamento, ella se desvistió se sacó toda
la ropa de la parte superior, y que el menor le dijo que eso estaba mal, que se
vistiera, posteriormente, todos los viernes del mes de octubre, después del
colegio, ella lo invitó al departamento y tenían relaciones sexuales”.
En fin, lo relatado por el menor a los peritos del Servicio Médico Legal
Andres Rosmanich Poduje y Pamela Aedo Errázuriz, sin necesidad de
transcribirlos también acá, se condice esencialmente con el relato aportado
por el menor en la audiencia de juicio oral.
Como puede apreciarse de los diversos testimonios referidos o
reproducidos en parte más arriba, recogidos por diversos testigos y peritos a lo
largo de la investigación, no cabe sino concluir que la versión entregada por el
menor de iniciales S.A.J.S, que se viene analizando, ha resultado altamente
consistente a lo largo del tiempo.
Pero en materia de credibilidad de su testimonio, es atingente examinar
la pericia que le fue practicada con el específico fin de analizar este aspecto.
En efecto, la perita Pamela Aedo Errázuriz, médico cirujano especialista en
psiquiatría infanto juvenil del Servicio Médico Legal, procedió a realizar
evaluación de Sebastián, donde se le solicitaba evaluación de credibilidad del
testimonio y evaluación de daño psicológico y emocional a raíz de los hechos
de la investigación. Luego de explayarse en la metodología aplicada y el
procedimiento de evaluación del menor, indicó que “se aprecia un
adolescente con habilidades sociales y personales acordes a su edad, que le
permiten buscar apoyo cuando se siente sobrepasado. Él hace un relato de los
hechos que resulta ser creíble y válido, aparece un relato con una estructura
lógica, con elementos inestructurados, con abundantes detalles de la
situación abusiva y de contexto y tiempo, menciona lugares, espacios,
horarios, ambientaciones diversas, lo señala tanto a nivel escolar como
extraescolar. Hace mención a su estado mental personales, donde se siente
incómodo, con rechazo, se percibe amenazado, muy angustiado en relación
a esa amenaza, hace alusión a la afectividad de la imputada, en términos de
que estaría enamorada de él, hace también referencias a interacciones,
conversaciones, con correcciones y con una situación de tipo de abuso con
seducción y coacción y amenaza”. Agregó que el menor reconoce que esta
situación le habría generado daño, se percibe dañado en lo personal, sino
también a nivel familiar le había causado problemas porque había tenido que
estar mintiendo para salir los días viernes. Concretamente respecto del daño,
esta perito señaló que es coincidente la evaluación psicológica practicada
con la evaluación psiquiatrita, donde se determinan alteraciones emocionales
importantes, con angustia elevada frente a los hechos, donde aparece
también una alteración de la psicosexualidad. Respecto al aspecto específico
de credibilidad que nos mantiene ocupados, esta profesional enfatizó que “de
acuerdo a las características de este adolescente es altamente poco
probable que él haya inventado la situación, aparece un relato bastante
creíble con elementos vivenciales importantes, que hacen pensar que es
válido y no ha sido inducido por terceros. Además, él aparece poco
sugestionable, no aparecen elementos gananciales tampoco en su relato”.
Pues bien, parece razonable concluir a estas alturas, que la versión de
los hechos entregada en la audiencia por el menor de iniciales S.A.J.S,
aparece como altamente creíble, según todos los parámetros que se han
examinado en los párrafos anteriores, concernientes a la plausibilidad de su
testimonio, la coherencia interna de que está dotado, la consistencia
fundamental que ha mantenido a lo largo del tiempo y a la ausencia de
estímulos externos o ganancias secundarias que evidencien un interés
manifiesto en entregar una declaración falsa o que, al menos, lo muevan a
exagerar o agravar artificiosamente sus connotaciones para perjudicar a la
acusada, todo lo cual resulta plenamente coherente con la pericia destinada
a establecer, precisamente, la credibilidad y validez de su testimonio. No hay
razones para no creer en sus dichos.
Ahora bien, consecuentes con los criterios según los cuales el Tribunal
asigna valor a las pruebas, señalados al principio de este acápite, cabría
efectuar un análisis sistemático de dicha versión, mediante sus contrastación
con otras evidencias vertidas al juicio, de origen independiente o autónomas
al relato del menor, para indagar si en aquellas otras evidencias existen
antecedentes que permitan corroborar lo señalado por el ofendido. Cabe
aquí tener presente que lo señalado por diversos testigos y peritos, en lo que
“escucharon decir al menor” acerca de los hechos, no constituyen evidencias
independientes o autónomas a su relato. En esa parte son testimonios de
oídas, que sirven para ponderar la consistencia del relato, como lo hemos
analizado más arriba. Sin embargo, respecto de las circunstancias en que
obtuvieron o escucharon el relato del menor, no constituyen testimonios de
oídas, sino directos, pues refieren hechos apreciables directamente por los
sentidos del testigo o perito, según el caso.
Parece conveniente comenzar en esta parte, por lo aseverado por la
misma perita Pamela Aedo Errázuriz, quien pesquisó en su informe los daños
asociados a los eventos abusivos. La profesional indicó que “respecto del
daño, es coincidente la evaluación psicológica practicada con la evaluación
psiquiatrita, donde se determinan alteraciones emocionales importantes, con
angustia elevada frente a los hechos, donde aparece también una alteración
de la psicosexualidad, fundamentalmente respecto de su imagen corporal, no
parecen elementos alterados de su identidad sexual, sin embargo aparecen
elementos muy auto agresivos que lo hacen que actúe en algunos momentos
en forma impulsiva”. La perita refirió ampliamente este aspecto de su pericia,
al igual que el anteriormente señalado, y lo que importa destacar en esta
parte es que, efectivamente, la profesional advirtió la presencia de un daño
asociado a los eventos que motivan este juicio.
No obsta a lo señalado anteriormente señalado, el resultado del peritaje
practicado por el médico del Servicio Médico Legal, Andres Rosmanich
Poduje, quien realizó un peritaje de sexología forense al menor. En efecto, en la
conclusión de su informe aseveró que luego de efectuados los exámenes de
rigor “concluyó que el menor no presentaba lesiones en el examen genital ni
anal”. Tal aseveración no es extraña, pues los delitos de esta naturaleza, salvo
el caso que se efectúen utilizando fuerza o violencia en la víctima, suelen no
dejar rastros físicos de su perpetración, de modo que la ausencia de daño
físico asociado en nada corrobora ni refuta lo dicho por el menor. En todo
caso, respecto a la verosimilitud de su relato, cabe aquí consignar que este
perito, preguntado al respecto, señaló que “a los 12 años, se produce en la
gran mayoría de los jóvenes la primera eyaculación y tienen ya capacidad de
erección peneana, en todo caso, no va a ser igual a la de un adulto en
cuanto a la duración, pero sí hay erección y eyaculación”.
En cuanto a las conductas que el menor refiere se habrían producido en
el interior del colegio, cuya génesis se sitúa en las proximidades de la fecha de
su cumpleaños, aparecen ellas convenientemente corroboradas por diversos
testimonios y antecedentes. En lo referente a que su profesora, luego de
declarado su enamoramiento por él, procedió en innumerables ocasiones a
sacarlo de la sala de clases, se rindió el testimonio de compañeros de su curso
que confirmaron aquel aserto. En efecto, lo señalado por los menores de
iniciales M.A.C.G, C.F.G.A, C.A.U.M. y G.H.L.K, es plenamente concordante al
respecto. El primero recuerda haberse percatado que “vio a la profesora
sacar a Sebastián entre 10 y 15 veces, y por entre 10 y 30 minutos, fuera de la
sala”, y que comenzó a sacar al menor después de su cumpleaños; el segundo
relata que “cuando estaban en clases de ella, nunca lo sacaba, no tenía para
qué si ella estaba ahí. Era cuando estaban en las otras clases”, ahondando
también en las comunicaciones a través de cartas o papelitos escritos y sus
características, también concordantes con lo aseverado por la víctima; y el
tercero señaló respecto de este asunto que “era habitual que Sebastián se
acercaba a ella, cuando estaban en clases de matemática y le empezaba a
preguntar cosas o empezaban a conversar. A veces lo sacaba de la sala. Ella
entraba le preguntaba a la profesora respectiva si lo podía sacar, y la
profesora le decía que sí y Sebastián salía y conversaban fuera de la sala de
clases, eso era de repente”, y también refiere las comunicaciones escritas
entre ambos y las características de aquellos mensajes. En fin, refieren también
el evento de una compañera enferma, y el regalo de cumpleaños recibido
por el menor de parte de la acusada. Este último aspecto aparece también
corroborado por la evidencia material pertinente, consistente en una billetera
con fotografía de la acusada, plenamente concordante con la descrita y
referida por la víctima.
El resto de testigos pertenecientes a la comunidad escolar, también
prestan sustento a las aseveraciones del menor, respecto a cómo se fueron
desarrollando os hechos en el interior del liceo. Lo señalado por las profesoras
Mercedes Elizabeth Clavero Lara, Maria Gloria Prado Lazo, Leonor Inés Lazo
Jopia y Otilia Eliana Romero Rojas, guarda armonía, a este respecto, con lo
señalado en la audiencia por el ofendido. La primera recuerda un evento
consistente en que “una mañana que iba a la sala de profesores de básica,
donde tiene su casillero de asuntos personales, no pudo abrir la puerta, estaba
cerrada con llave, es una sala que tiene que estar con la puerta abierta, le
pareció extraño y no se pudo abrir, golpeó y tampoco, le pareció extraño, se
quedó un rato y al rato desde el interior de la sala de los profesores, aparece
al joven Sebastián, él la miró y le sonrió y de ahí escuchó la voz de la profesora
Darrigrande, no sabe lo que dijo, sólo escuchó su voz”. Prado Lazo, refiriendo
también este aspecto, señala que “ella le preguntó una vez que por qué lo
sacaba continuamente y le dijo que porque tenía problemas familiares el niño
y que ella como profesora jefe podía sacarlo cuando pudiera, sólo sacaba a
Sebastián. A veces Sebastián estaba 5 o 10 o 20 minutos afuera, pero volvía a
clases. Esto lo habían visto con las otras colegas, Otilia Romero y Leonor Lazo
les llamaba la atención, pero no encontraban respuestas a nada”. También
refiere esta testigo que en una oportunidad llegó “la señora Otilia Romero muy
alarmada, contándole que había visto a María Eugenia dándole un beso a
Sebastián, ella le dijo que se calmara que ella iba a ir a ver, pero cuando llegó
a la sala, ya estaba cada uno en su puesto y ella no vio nada”, evento que
también es relatado específicamente por la profesora referida en su
testimonio. Lazo Jopia también refiere eventos en los que habría estado a solas
la profesora con este alumno en la sala del curso, en momentos en que ella
golpeaba la puerta cerrada, sin obtener respuesta. Finalmente la profesora
Romero Rojas, luego de referir ampliamente las sacadas de clases que la
profesora hacía del menor, relata la oportunidad en que, estando junto a las
otras testigos, ninguna quiso ir a ver si en la sala de video estaba la acusada
junto al menor, por lo que decidió ir ella a ver lo que ocurría, señalando que
“la puerta no estaba cerrada, estaba semi junta, en un rincón, Sebastián
estaba sentado, María Eugenia de pie, con su chaqueta negra medio abierta,
como Sebastián es alto, ella estaba inclinada hacia él. Ella quedó perpleja, sus
compañeras dijeron que a ella no le salía la voz, a ellas les dijo,”chiquillas, no
saben lo que vi en la sala de video, María Eugenia lo estaba besando a él, en
la boca”. No era piquito”. Por su parte, Ana Maria Guerrero González, no
aportó antecedentes de interés para el ejercicio que estamos realizando.
A todo esto, cabe agregar las impresiones fotográficas del Liceo que
fueron agregadas al juicio. En ellas se aprecia la disposición de las salas, la
efectividad de que una de las testigos haya podido observar lo que relató, ya
que existe campo visual entre las salas que ocupaban el 6° A y el 6° B de aquel
año, en el segundo piso, se aprecia claramente el tipo de cerradura de las
puertas, que se cierra por dentro con un pestillo, y las evidencias de haber
tenido cortinas las salas en cuestión, y específicamente la sala de videos o
medios audio visuales. Estas impresiones fotográficas fueron largamente
explicadas por el perito Rodrigo Muñoz Berrios, una a una, señalando a qué
lugares específicos del liceo se referían cada una de ellas, y también fueron
referidas por otras testigos, profesoras, en lo pertinente de sus declaraciones.
Explicó el perito que los detalles que muestran la evidencia de haber habido
cortinas, se condice con lo explicado en el colegio, en el sentido que luego de
estos eventos, se decidió retirarlas.
Todos estos antecedentes visuales y testimoniales concernientes al
contexto físico y espacial, a la vez que a los sucesos indicados por el menor
que allí se suscitaron, encuentran sustento en las evidencias que han referido
más arriba.
Ahora bien, en lo que respecta a los hechos producidos en el
departamento de la acusada de calle Libertad, señalados por el ofendido en
su declaración, también hay antecedentes externos a su testimonio que los
corroboran de un modo fundamental.
En efecto, también los padres y la abuela del menor, los testigos Jessica
del Carmen Salinas Arriagada, Luisa del Carmen Márquez Márquez y Luis
Alberto Jeria Márquez han sido coincidentes señalar los cambios de actitud
percibidos en el menor en aquel segundo semestre del año 2007,
modificaciones en su aspecto físico y fundamentalmente, los cambios en su
rutina específicamente los días viernes de cada semana, en el sentido de que
aquellos días el ofendido llegaba presuroso del colegio a bañarse, pero
fumarse, ponerse su mejor ropa y salir con destino a, lo que hasta ese entonces
se evidenciaba como una polola, y llegar de vuelta alrededor de las 19 horas.
También los padres del menor refieren que una semana antes del viernes 23
noviembre, su hijo les solicitó autorización para asistir a una fiesta en la que
permanecería toda la noche. También en este último aspecto anotado,
coinciden plenamente con lo aseverado por la víctima. Por otra parte, en lo
que se refiere al contexto en que se produjo el descubrimiento de los hechos,
específicamente el día 23 noviembre 2007, los padres del menor no sólo son
coincidentes entre sí, sino que también en este aspecto sus aseveraciones
guardan plena armonía con lo relatado por la víctima en torno a los
acontecimientos de aquel día 23 noviembre. No es del caso reproducir aquí
como cada uno de ellos relató el contexto y pormenores en que se produjo el
descubrimiento, baste señalar que aquel se condice no sólo con lo expresado
por el menor, sino también con los aspectos temporales y espaciales en que
tuvo lugar aquel evento, y específicamente respecto del lugar físico que ya
hemos identificado como el departamento ubicado en calle Libertad,
perteneciente a la acusada.
Respecto de ese departamento, cabe destacar que el menor fue
capaz de hacer una descripción pormenorizada del interior del mismo,
entregando incluso detalles concernientes a la modificación de las ropas de
cama, televisor y otros objetos que había en su interior, explicaciones que
fueron plenamente ilustradas en el reconocimiento de las impresiones
fotográficas que muestran dicho inmueble.
Los funcionarios policiales Max Freddy Castillo Castillo y Maria Margarita
Gacitúa
Lorca,
depusieron
ampliamente
respecto
de
las
diligencias
practicadas respecto de este departamento que se viene refiriendo,
incluyendo entrevistas con los conserjes o cuidadores del mismo, descripción
de su ubicación, detalles reflejados a través de las impresiones fotográficas
tomadas del lugar, de evidencia material consistente en ropa interior de la
acusada, recogido desde el mismo, incluyendo además fotografías de el
vehículo modelo corsa color plomo, también referido por el menor como el
medio de transporte en que habitualmente se trasladaba junto a la profesora
a aquel departamento. Todo esto es consistente con las explicaciones
respecto de la rutina que se lleva en aquel condominio, proporcionadas por el
conserje José Manuel Castro Aguilera. A este respecto, el reconocimiento
fotográfico efectuado por el menor a instancias de la subinspectora Gacitúa,
respecto de dos de los diversos conserjes que trabajan en aquel condominio,
no resultan de interés relevante para los propósitos que aquí estamos
analizando, al tiempo que se comparte la observación formulada por la
defensa, en el sentido de que aquel ejercicio carecía probabilísticamente de
posibilidades reales de resultar negativo. Con todo, el menor ofendido no sólo
relata que la concurrencia a aquel departamento se efectuaba casi todos los
viernes, coincidente con lo que señala su familia según hemos visto; también
indica
el
medio
antecedentes
de
locomoción
externos;
y
utilizado,
describe
también
detalladamente
corroborado
el
interior
por
del
departamento, de un modo que denota gran familiaridad con el mismo, lo
que también aparece confirmado según hemos visto; sino que describe las
relaciones sexuales mantenidas con su profesora en aquel lugar. Respecto de
este asunto, entregó detalles de lunares que está mantenía en sus piernas y
otras partes del cuerpo, afirmación que también encuentra sustento o
corroboración en las impresiones fotográficas incorporadas al juicio, de
diversas partes del cuerpo de la acusada, las que fueron además descritas y
explicadas por la perito Patricia Negretti Castro, quien evacuó su pericia
destinada, precisamente, a pesquisar aquellas características corporales
relatadas por el menor.
Por otra parte, el análisis de los diversos antecedentes recogidos en las
diligencias
policiales
desarrolladas
por
los
funcionarios
policiales
pertenecientes a la Brisexme de la policía de investigaciones, y explicadas
ampliamente por los testigos Andres Sebastián Sáez Carrasco y Daniela
Paz Johnson Fica, respecto de los testimonios recogidos de parte de la familia
del menor y del ofendido mismo, como los recogidos por parte de profesores y
autoridades del establecimiento educacional, guardan perfecta armonía con
lo que hasta aquí se viene analizando, al tiempo que proporcionan
consistencia a los relatos recibidos por ellos en el curso de aquella
investigación, toda vez que esos testimonios coinciden en lo fundamental, con
lo aseverado en la audiencia por esos mismos testigos.
En fin, todo lo relativo a los aspectos comunicacionales entre la víctima
y su profesora que contextualizan lo que se viene analizando y le prestan
soporte a lo indicado por el menor, aparece también ampliamente
corroborado por las pericias practicadas por los funcionarios policiales
Mauricio Ortega Alarcón y Maria Alejandra Galaz Silva, quien es entregaron
amplias
explicaciones
y
análisis
respecto
de
los
teléfonos
celulares
involucrados en dicha comunicación, perteneciente a los involucrados en la
misma, y dieron cuenta de el tráfico de llamadas y mensajes de texto, tanto
entrantes y salientes de entre esos mismos equipos, entre los meses de agosto y
noviembre del año 2007, los que son consistentes con la evidencia material,
documental y gráfica que da cuenta de aquellas pericias. Incluso las
comunicaciones que menciona el menor realizadas, en ocasiones, desde un
teléfono público cercano a su domicilio, aparecen también confirmadas por el
testigo Carlos Andres Contardo Fuentes, propietario de aquel teléfono público,
al tiempo que los mensajes de texto enviados profusamente el día 23
noviembre por parte de la acusada al menor ofendido, que aparecen
impresos y transcritos en la evidencia documental incorporada al juicio, no
dejan sombra de dudas respecto del tenor de dichas comunicaciones, todo lo
cual se condice, con lo aseverado por la víctima en la audiencia.
Ahora bien, lo aseverado por los testigos presentados por la defensa,
Jaime Patricio Darrigrande Moreno, Rosa Eugenia Moreno González, Orlando
Humberto Darrigrande Moisan y Flor María Ceballos Garrido, no logran refutar
en lo fundamental la concordancia de las pruebas de cargo que se han
analizado en los párrafos anteriores. En efecto, lo que señalan haber
escuchado decir al director del liceo Héctor Iván Ponce Ovalle, en el sentido
de que el menor le habría afirmado que todo lo que le relató a la psicóloga
del colegio, Claudia Alejandra Ponce Cardenas, era mentira, no merece una
apreciación que sobrepase tal vez una deferencia de su parte, puesto que en
la audiencia de juicio oral el testigo Ponce Ovalle en ningún momento refirió a
que el presunto aserto de parte del menor, y tampoco este último refirió algo
semejante en su testimonio, de manera que no puede tenerse por cierto
aquello que los testigos de oída presentados por la defensa dijeron escuchar al
señor Ponce Ovalle, relativo, a su vez, a lo que éste último habría escuchado
del menor ofendido, cuando estos dos últimos prestaron un testimonio diverso
en la audiencia del juicio oral.
Por otra parte, lo señalado por los padres de la acusada, referente a
que los días viernes del mes de septiembre que singularizadamente indicaron,
su hija habría estado compartiendo durante la tarde distintas actividades junto
a su grupo familiar, no merece mayores cuestionamientos. Sin embargo, cabe
advertir que aquella circunstancia no pugna con los hechos que es dable
tener por establecidos con las pruebas de cargo.
En efecto, es posible tener por establecido que las visitas que el menor
refiere efectuaba al departamento de la acusada los días viernes de cada
semana, han debido efectuarse, según el propio tenor de los dichos del
menor, semanas después de iniciados los contactos o eventos amorosos en el
interior del liceo, los que a su vez habrían comenzado unas semanas después
de la fecha de su cumpleaños, de modo que no se aprecian inconvenientes
probatorios para situar aquellas concurrencias al departamento de la acusada
a partir del mes de octubre de 2007.
Respecto de la cantidad de ocasiones en que esto habría sucedido, el
menor indicó que a partir del primer evento ellos se produjo cada viernes de la
semana. Su familia, también señaló lo relativo a sus salidas cada viernes por la
tarde. Sin perjuicio de ello, el ofendido no sólo relato el contorno específico de
su primer encuentro sexual, sino también explícito que la mayoría de los casos
se efectuaba aquel contacto sexual de un modo similar, aunque describió que
en algunas oportunidades lo realizaron de un modo diverso, que también
explícito en su testimonio. Señaló también, que el día viernes 23 noviembre de
2007, se realizó el último encuentro sexual de ese tipo. Aún que la acusada se
limitó en su declaración a reconocer sólo un encuentro de evidente
connotación sexual el día 9 de noviembre, las evidencias que se han
analizado en este acápite mueven a prestar mayor credibilidad a lo
aseverado por la víctima. Sin embargo, uniendo únicamente los dos extremos
del período en que aquellos se produjeron, la diversidad indicada por el
menor, y aquel único evento reconocido por la acusada, llevan a descartar
que en la especie no exista determinación procesal respecto a que dichos
contactos fueron indudablemente más de uno.
El resto de las evidencias, fundamentalmente de tipo documental,
incorporadas como prueba de cargo, y que profusamente refieren a
declaraciones, comunicaciones o actitudes mantenidas por la acusada a lo
largo de la investigación, denotan una absoluta falta de consistencia en las
versiones que ésta ha mantenido respecto de los hechos a lo largo de la
investigación, no hacen sino ratificar que respecto del contraste sistemático
que cabe efectuar respecto de la credibilidad interna y externa que merecen
ambas versiones, los antecedentes abrumadoramente prestan sustento a los
dichos del menor, lo que unido a aquellos otros aspectos no controvertidos,
pero también probados, con el que iniciamos la ponderación de las pruebas,
permiten configurar, más allá de toda duda razonable, los hechos que es
dable tener por acreditados con el mérito de las distintas evidencias vertidas
en el juicio.
Finalmente, en lo que concierne a las pericias practicadas a la acusada
respecto de su estado mental, por parte de las peritos Jazmín Kassis Satorres y
Andrea Bahamondes Moya, y de la efectuada por el perito de la defensa
Giorgio Agostini Bicentini, si bien son comentadas con mayor detalle en otra
parte de esta sentencia, valga señalar aquí que la ponderación de todos ellos
no adolece de lo que hemos denominado credibilidad interna, en el sentido
de que algunos de ellos impresione como menos fiable que los otros, sino que,
ponderándolos como un antecedente más de los múltiples incorporados en la
audiencia, mediante un análisis sistemático, se ha estimado que las
explicaciones proporcionadas por Kassis Satorres y Agostini Bicentini, se
avienen más con las restantes pruebas del juicio, en el sentido de que todas las
actitudes y conductas desplegadas por la acusada, ampliamente referidas en
aquellas otras pruebas, encuentran una mejor explicación al abrigo de los
hallazgos clínicos y de test que éstos últimos expusieron, de modo que es sus
afirmaciones
encuentran
correlato
mejor
fundado
en
aquellos
otros
antecedentes, lo que ha llevado al tribunal a dar crédito a sus conclusiones.
DECIMO: Hechos acreditados. Que del mérito de las pruebas rendidas
por el Ministerio Público y la parte querellante, consistentes principalmente en
la declaración de la víctima, la menor de iniciales S.A.J.S, de los testigos
M.A.C.G, C.F.G.A, C.A.U.M, G.H.L.K, Jessica del Carmen Salinas Arriagada,
Luisa del Carmen Márquez Márquez, Luis Alberto Jeria Márquez, Héctor Iván
Ponce Ovalle, Claudia Alejandra Ponce Cardenas, Ana Maria Guerrero
González, Mercedes Elizabeth Clavero Lara, Maria Gloria Prado Lazo, Leonor
Inés Lazo Jopia, Otilia Eliana Romero Rojas, Carlos Andres Contardo Fuentes,
José Manuel Castro Aguilera, Tatiana Andrea Avendaño Correa, Max Freddy
Castillo Castillo, Andres Sebastián Sáez Carrasco, Daniela Paz Johnson Fica y
Maria Margarita Gacitúa Lorca; de los peritos Mauricio Ortega Alarcón, Maria
Alejandra Galaz Silva, Rodrigo Muñoz Berrios, Andres Rosmanich Poduje,
Patricia Negretti Castro, Pamela Aedo Errázuriz, Jazmín Kassis Satorres y Andrea
Bahamondes Moya; de la prueba documental consistentes en un certificado
de nacimiento del menor de iniciales S.A.J.S, y de Antecedentes Familiares del
menor emitido por el Servicio de Registro Civil e Identificación; Carta de Fiscal
de Claro Chile S.A, emitida el 10 de septiembre de 2008 que da cuenta del
envió por correo electrónico del trafico de llamados del Teléfono 07-7722786
entre los meses de agosto y diciembre del 2007 y copia del correo electrónico
respectivo; 52 hojas impresas de Tráfico de llamadas enviadas por correo
electrónico del Teléfono 07-7722786 entre los meses de agosto y diciembre
del 2007; Carta del Fiscal de Claro Chile S.A, emitida el 5 de noviembre del
2007, que da cuenta del numero de IMEI, de SIM Card, marca y modelo del
teléfono celular N° 07-7722786 y del cambio del SIM Card original
experimentado el 26 de noviembre de 2007; Fotocopia autorizada de Pagina
N° 1 del Libro de Clases del 6° año A año 2007 del Liceo Polivalente Santa
Juliana; Fotocopia autorizada de la lista del Curso 6° básico A año 2007 del
Liceo Polivalente Santa Juliana; Copia Autorizada de Evaluación de Hábitos e
Integración Social del menor S.A.J.S año 2007 y 2008; Fotocopia autorizada de
Hoja de Observaciones Personales y Certificado Anual del año 2007 del mismo
menor; Carta emitida por don Héctor Ponce, Director del Liceo Polivalente
Santa Juliana, de fecha 29 de noviembre de 2007; Informe sobre entrevista al
menor S.A.J.S, de fecha 07 de marzo de 2008, suscrito por Claudia Ponce,
psicóloga del referido Liceo; Escrito denominado Meditaciones, suscrito por
María Eugenia Darrigrande Moreno, en diciembre del año 2007; 06 hojas que
contienen correos impresos de correo electrónico enviados por la acusada a
la denunciante doña Jessica
Salinas Arriagada; Hojas que contienen
transcripciones a mano de mensajes de texto obtenidos de un teléfono celular;
evidencia material consistente en Una billetera color negro con distintos
colores en cuyo interior mantiene una fotografía tamaño carné; Un teléfono
Celular Marca Nokia de Color Azul, de la empresa ENTEL PCS y cuatro prendas
de ropa interior; además de diversos set de impresiones fotográficas
correspondientes a la imputada, a los sitios de ocurrencia de los hechos y a
imágenes gráficas de análisis computacional de agenda y registros de
llamadas entrantes y salientes de teléfono celular; evidencias debidamente
valoradas, se han estimado como acreditados los siguientes hechos:
Que, desde septiembre de 2007 al interior del Establecimiento
Educacional Liceo Polivalente Santa Juliana, ubicado en Av. México 755 de la
comuna de Recoleta, en donde la acusada, una docente que ejercía
funciones como Profesora Jefe del 6° año básico A y Jefe de Unidad Técnica
Pedagógica de dicho establecimiento educacional, realizó actos de
significación sexual consistentes en besos en la boca a su alumno de 12 años
de edad de iníciales S.A.J.S, con el que luego, entre el mes de octubre y hasta
el 23 de noviembre del 2007, en horas de la tarde de los días viernes, en un
departamento ubicado en calle Libertad N° 1290, Escala K Dpto. 501 Santiago,
procedió a realizar actos sexuales con el mismo menor consistentes en besos,
tocaciones en su cuerpo y penetración vía vaginal del menor a la imputada
con eyaculación en su interior.
UNDECIMO: Calificación jurídica de los hechos acreditados. Que los
hechos referidos precedentemente importan para el Tribunal la calificación
jurídica de abuso sexual reiterado, cometido en perjuicio de una persona
menor de catorce años de edad, en grado consumado, previsto y sancionado
en el artículo 366 bis, en relación al artículo 366 ter, ambos del Código Penal.
En efecto, los hechos que se han dado por establecidos, han consistido en
acciones constitutivas de contacto corporal, provistas de una evidente
significación sexual y relevancia, de aquellas previstas en el citado artículo 366
ter, las que fueron ejecutadas en reiteradas ocasiones durante el lapso de
tiempo que se ha señalado, tanto en el interior del Liceo como en el
departamento antes señalado. De este modo, el Tribunal estima que las
pruebas de cargo incorporadas al juicio superan el estándar probatorio que
exige nuestra legislación procesal penal, para dar por establecida la
reiteración de conductas punibles, de modo consistente con el señalado en la
acusación.
En efecto, del análisis sistemático de las pruebas rendidas, según se
analizó detalladamente en la parte pertinente de esta sentencia, aparece
suficientemente establecida para estos jueces la fisonomía y circunstancias de
perpetración, de diversos ataques de significación sexual de que fue objeto el
ofendido, en diversos contextos situacionales y temporales, tanto en el interior
del Liceo como en un departamento perteneciente a la acusada, que
permiten tener por configurada tanto la tipicidad de aquellas conductas
aisladamente consideradas, como la reiteración con que fueron desplegadas
en el transcurso del tiempo que se ha señalado.
Que de este modo, se desestima la alegación de la defensa, en orden
a que estemos en presencia de un delito continuado. Desde luego, no se la
rechaza bajo el argumento de que, en la especie, se ha configurado una
reiteración de delitos, ya que semejante afirmación no sería más que una
tautología que elude el fondo del problema. Tampoco se la rechaza
recurriendo al expediente sencillo de que una parte de la doctrina no presta
acogida a este instituto tratándose de atentados sexuales, ya que aquella
posición es francamente minoritaria en nuestro medio, por lo que no importa
un argumento decisivo a este respecto. Se hace necesario justificar la decisión
del Tribunal mediante un análisis, aunque sea somero, de la fisonomía y
requisitos del delito continuado, para explicitar el motivo de fondo de su
rechazo.
Puede definirse el delito continuado como aquel constituido por dos o
más acciones u omisiones separadas por un cierto tiempo que, no obstante
integrar cada una de ellas por separado la misma figura fundamental de
delito, se valoran como uno sólo en razón de la homogeneidad de sus
elementos.
Nótese que se trata en el fondo de una ficción, que consiste en valorar
como una sola –y sancionar como un único delito—a una multiplicidad de
conductas, ejecutadas en distintos contextos situacionales, cada una de ellas
típica y, por lo mismo, dolosa. Como se aprecia, de poco sirve la alegación de
que, en los hechos del juicio hubo la realización de varias conductas delictivas,
cada una típica, pues dicha circunstancia se encuentra entre los presupuestos
del delito continuado.
En efecto, suele señalarse que para estar en presencia de un delito
continuado deben concurrir una serie de requisitos, tanto objetivos como
subjetivos. Requisitos objetivos serían la pluralidad de acciones u omisiones,
cada una de ellas típica; la unidad de ley violada o la realización del mismo
tipo penal básico; y, para la mayoría, se requiere también la identidad del
sujeto pasivo, al menos tratándose de atentados sexuales u otros bienes
personalísimos. La configuración de estos elementos objetivos apenas
encuentra discrepancias en la doctrina y la jurisprudencia.
Más controversial resulta, en cambio, la configuración de los requisitos
de índole subjetiva, referidos a la unidad de designio, propósito, intención o
dolo desplegado por el delincuente en cada una de sus conductas típicas,
puesto que este componente subjetivo es el que permitiría aglutinar en uno
solo los múltiples delitos verificados en el plano fáctico, y darle el tratamiento
de un hecho singular. Interesa destacar aquí que es este aspecto subjetivo el
que ha de justificar el tratamiento más benigno que se persigue con la figura
del delito continuado.
A este respecto se han propuesto básicamente dos posturas. De una
parte, quienes exigen la concurrencia de una unidad del elemento subjetivo,
sea que se lo conciba como dolo, resolución o propósito; y de otra parte los
que reclaman una cierta homogeneidad entre las diversas resoluciones o
dolos.
La unidad del elemento subjetivo supone un único dolo o resolución que
abarca, desde un
principio, la totalidad
de
las acciones delictivas
desplegadas. Se le critica, con justa razón, que aquella unidad subjetiva
difícilmente puede justificar un tratamiento más benigno –como el que supone
el delito continuado—ya que revela en el sujeto una suerte de premeditación
para cometer todos y cada uno de los delitos, y en nuestro medio la
perseverancia en la intención delictiva, lejos de disminuir el reproche penal, lo
incrementa, motivo por el cual cabría descartar esa postura por resultar
dogmáticamente inconsistente.
Por otra parte, y en este mismo orden de ideas, cabría observar que la
mera homogeneidad entre las diversas resoluciones o dolos, por sí sola no es
suficiente para justificar el tratamiento más benigno del delito continuado. La
circunstancia
de
que
dos
o
más
resoluciones
delictivas,
adoptadas
sucesivamente, sean iguales e incluso idénticas, no es fundamento suficiente
para reclamar su tratamiento unitario. Parece razonable, para ese propósito,
complementar
aquella
homogeneidad
del
dolo
del
agente, con
la
circunstancia de que ella vendría configurada por obedecer todas las
resoluciones delictivas a circunstancias externas semejantes. Así, podrá
afirmarse la existencia de un delito continuado cuando el individuo haya
actuado sucumbiendo en múltiples ocasiones, a la tentación provocada por
las mismas o semejantes circunstancias motivantes a la comisión delictiva. Sólo
así resultaría posible afirmar que su reprochabilidad es menor, en la medida en
que sus actos revelan una voluntad más débil, con lo que el tratamiento
unitario y favorable de las diversas acciones adquiere justificación, y guarda
consistencia con el resto del ordenamiento jurídico penal.
Pues bien, es esta última circunstancia de carácter subjetivo –decisiva
como hemos visto, para proveer de justificación a la ficción que se viene
comentando—la que el Tribunal estima ausente en los hechos ventilados en la
causa. No se ha tratado, en la especie, de que la acusada haya sucumbido
en
múltiples
ocasiones
a
la
tentación
provocada
por
unas
mismas
circunstancias externas y motivantes, sino que ella se ha procurado cada una
de esas circunstancias, lo que impide calificarlas como externas u objetivas,
sino más bien como situaciones enteramente propiciadas.
Por último, la fundamentación procesal que se ha invocado, referente a
la indeterminación de que adolecerían los distintos hechos delictivos
cometidos, cabe desestimarla ya que, como se señaló al valorar las pruebas,
es posible singularizar varios eventos abusivos, ocurridos en distintas fechas y
con diversas características.
DUODECIMO: Participación. Que, la participación de la acusada Maria
Eugenia Darrigrande Moreno, fue estimada por el Tribunal en calidad de
autora del delito descrito precedentemente, de conformidad a lo dispuesto en
el artículo 15 N° 1 del Código Penal, pues tomó parte en la ejecución de
aquellos hechos de una manera inmediata y directa, participación que resultó
establecida con el mérito de la misma prueba antes referida, y principalmente
por la incriminación directa que de ella efectuó en la audiencia la víctima,
confirmada en términos de consistencia y credibilidad por los demás
antecedentes de cargo vertidos en la audiencia, y fundamentalmente por el
departamento
en
que
esos
hechos
fueron
perpetrados,
vinculado
inequívocamente a su persona.
Circunstancias modificatorias de responsabilidad penal.
DECIMO TERCERO: Peticiones de las partes. Que, en lo referente a las
circunstancias que modifican la responsabilidad criminal, el Ministerio Público
estimó que en atención a que el tribunal acogió una atenuante adicional y la
que el Ministerio Público había reconocido en la acusación, y a su vez, acogió
la hipótesis del Ministerio Público en cuanto a la reiteración del delito y
configuración de agravante especial, solicita se haga aplicación de la pena
en definitiva que en definitiva corresponda a derecho, que se aplique la
agravante y la reiteración, que se compensen o se apliquen las atenuantes, y
en ese tenor, que se considere el artículo 69 en relación a la extensión del mal
causado y se aplique a la acusado la pena de 10 años, de acuerdo al
ordenamiento vigente. Se solicita dicha pena, en atención al disvalor realizado
al menor, al despliegue de la conducta ejecutada en contra del menor, que
desde el punto de vista de tipo penal, la conducta en sí misma no configura
un tipo penal más gravoso, esto es, el delito de violación, pero no obstante
eso, es un tema de tipicidad, por ello se fue por el abuso sexual, pero si se ve
desde el punto de vista del disvalor, la vulnerabilidad, y la desprotección y
sobre todo la trasgresión del bien jurídico protegido, que es la indemnidad
sexual, obviamente se tiene que hacer un símil con la violación, aquí no hay
que olvidar, que de acuerdo a los hechos por los que fue condenada la
acusada, hubo penetración del menor hacia la víctima, en ese sentido, no
solamente se trataron de meras tocaciones superficiales en el cuerpo del niño,
sino que hubo conducta de relevancia sexual, mucho más profunda y dañina
al bien jurídico protegido. En ese sentido, es absolutamente plausible la
aplicación del artículo 69 y del tramo mayor de la pena, que es de 10 años de
presidio mayor en su grado mínimo.
La querellante por su parte adhirió a lo manifestado por la fiscalía, 10
años corresponde a la pena justa teniendo en consideración la extensión del
daño causado al menor, que ha requerido hasta ahora de terapia, que ha
surgido el efecto esperado y teniendo en cuenta el disvalor, no se contempla
la violación de mujer a hombre, pero aquí no hubo relación paritaria, una
mirada diferente de un adulto a un menor, siendo ella la que debía haber
resguardado la diferencia etárea.
La defensa, por su parte, señaló que además de lo ya pronunciado en
el veredicto, debe hacerse cargo de las atenuantes que a entender de la
defensa, benefician a su representada. Quiere traer a colación la minorante
del artículo 11 N°9, la defensa analiza la atenuante bajo dos parámetros
mínimos, la presentación de la acusada en la primera diligencia del juicio,
donde narra las circunstancias del delito, más allá de la concordancia que
pueda tener con el resto de la prueba rendida en autos,
nunca ha
entorpecido las diligencias de investigación, además su imputabilidad está
disminuida, por lo que existen pequeñas diferencias, no tienen carácter
sustancial. Trae a colación el número 7 del numeral 11, esto es, que se ha
intentado reparar el mal causado y las ulteriores consecuencias, doña María
Eugenia es una profesora, con un ingreso de alrededor de $600.000 la suma
consignada, corresponde a su finiquito, por lo que consignó $ 2.000.000, a fin
de que el menor pueda terminar el proceso reparatorio. Por último, hace
presente que más allá de la sola lectura de su extracto de filiación, favorece a
la acusada en caso paradigmático su irreprochable conducta anterior, aquí
testigos acusadores incluso, han hablado de una persona que ha tenido una
vida ordenada, proactiva, que ha ayudado, potenciado la formación de
menores, estamos hablando de una persona que ha ejercido como profesora
durante 14 años, es una persona que renunció a colegios importantes y con
mejores sueldos, ha intervenido su grupo familiar como parte del mismo
ejercicio y potenciado por ella. En atención de que la asisten 4 circunstancias
atenuantes, solicita se imponga a la acusada la pena de tres años de presidio
menor en su grado medio y hasta 5 años y se le otorgue el beneficio de
libertad vigilada. En el informe de gendarmería se señala que no es que no
esté apta para estar en el medio libre, sino que necesita un tratamiento
psicológico y que dentro de gendarmería no se le puede otorgar.
El Ministerio Público y la querellante, solicitan el rechazo de la minorante
del artículo 11 Nº 9, porque no colaboró durante la investigación ni aún en el
juicio oral, la de reparar el mal causado, indica que no hubo intención de
reparar con celo el mal causado, por el contrario, denostó al menor y a su
familia, no procede pretender comprar la reparación de un niño, ni siquiera
pidió perdón. Recuerdan, asimismo, que medios económicos ha tenido.
Insisten que por la extensión del daño, la pena debe ser de 10 años. Respecto
de la Libertad Vigilada, señalan que no se cumple con lo contemplado en la
letra c) del artículo 17 de la ley 18216.
DECIMO CUARTO: Antecedentes probatorios. Que, respecto de las
circunstancias modificatorias en comento, el Ministerio Público y la querellante
incorporaron al juicio la siguiente prueba documental:
1.- Extracto de Filiación y Antecedentes de la acusada María Eugenia
Darrigrande Moreno, en que figura sin anotaciones anteriores a esta causa.
2.- Informe Presentencial de la acusada María Eugenia Darrigrande
Moreno emitido con fecha 03 de Marzo de 2009 por el Centro de Reinserción
Social de Santiago, que señala, respuesta a la fiscalía. “Evaluados los
antecedentes de la imputada María Eugenia Darrigrande Moreno, este
Consejo Técnico advierte que la necesidad de intervención profesional,
sobrepasa la naturaleza y los objetivos del sistema de libertad vigilada de
adulto, situación que determina una ineficacia de una acción de contexto de
este
tipo
de
medida,
debido
principalmente,
a
que
se
advertirían
antecedentes en la evaluada, que requerían una intervención del área de
salud mental, tales como sentido de realidad alterado, con deficitaria
integración de su identidad, vivenciado mecanismos de defensa rígidos, e
insuficientes para hacer frente a la internición de impulsos, afectos, y
ansiedades,
como
también
se
advirtió,
excesivamente
sensibles
a
circunstancias ambientales, proclive a desplegar respuestas emocionales o
reacciones con insuficiente impregnación de control. Conjuntamente se
advierte una red familiar disfuncional, caracterizada por el establecimiento de
límites difusos, que habrían obstruido el desarrollo individual de la evaluada,
percibiendo la receptividad frente a sus padres, como agentes de apoyo y
resolución de conflicto. Considerando lo anteriormente expuesto, no se sugiere
el ingreso de la imputada María Eugenia Darrigrande Moreno, a la medida de
libertad vigilada del adulto. Firma Margarita Morales Pérez, Presidente del
Consejo Técnico, Jefe del Centro de Reinserción Social de Santiago.
3.- Resolución del 3° Juzgado de Garantía de Santiago, donde se
autoriza el Tráfico de llamadas de fecha14-08-2008.
Por su parte la defensa presentó prueba testimonial, consistente en los
dichos de:
a) Clotilde Muñoz González, profesora, quien señaló que entró a
trabajar después que jubiló de la escuela municipal, entró a la Escuela Santa
Juliana, donde doña María Eugenia era su jefe técnico, ella trabajaba en el
primer siclo, ella no tuvo problema era una persona abierta, comprensiva, la
ayudó, no eran amigas pero era su jefa y después con el tiempo la fue
conociendo y apreciando cada vez más por su manera de ser, era una
persona humanitaria, siempre la ayudó mucho, cada vez que tenía una duda,
ella la ayudaba. Diría que era un poco fuera de lo normal, la encontraba muy
tierna, se daba mucho por los alumnos, era buena compañera con sus
colegas y no todas las personas son iguales. Después de 4 o 5 años, la conoció
por intermedio de Herbalife, fuera del colegio, fueron a asados, a casa de sus
hermanos a tomar once, ahí la conoció más como persona, se podía ser
amiga y sincera con ella, porque era una persona que era tal cual se
demostraba. Se retiró del establecimiento educacional, la echaron el director
del colegio la echó. No le quedó claro el motivo, lo supuso, pero como las
suposiciones no valen, no reclamó, no hizo acción legal por el despido. Aclara
que Herbalife es una institución que ayuda a bajar de peso, ella empezó a
tomarlo y después se puso también, para poder venderlo.
b) Jerson Eric Díaz Rojas, 20 años de edad, soltero, estudiante, indica
que conoce a María Eugenia Darrigrande, hizo su enseñanza básica, pre
básica y media en el Liceo Polivalente. La conoció como autoridad del
colegio, años previos a que fuera su profesora jefe, era una persona
intachable, muy fuerte, siempre recalcando los valores, la responsabilidad, era
una persona muy de piel, era una persona de igual a igual, no tenía diferencia
con profesores, alumnos, auxiliares. No tuvo una experiencia similar con otros
profesores, ella fue destacada, para él y para muchas personas más, es una
persona destacada. Fue profesora, consejera, amiga y la sintió en un
momento como su madre. Siempre estuvo ahí con sus alumnos, fueran como
fuera, ella nunca hizo diferencia con ningún alumno, siempre apoyó al alumno
bueno, al malo, al desordenado, no discriminó, como hacen ciertas profesoras,
que tienen afinidad sólo con un grupo de alumno. Él participó en las
vacaciones de invierno, un paseo a la nieve que organizó ella, él, hasta 6°
básico, aparte del paseo de fin de año, nunca había habido actividad extra
programática, era cumplir un sueño de conocer la nieve. Se financió con plata
de los apoderados y fondos que se reunieron en el curso, a través de rifas,
completadas, lo realizaban los alumnos, con el apoyo de ella. Todos los paseos
fueron organizados por el colegio, no sabe si se lo solicitó, él egresó de
segundo medio, en el año 2003, en ese periodo era una persona tranquila,
volvió a verla, en el mismo colegio, porque tiene un hermano que sigue ahí y él
asistía como apoderado de su hermano, en el 2007 estaba en primero medio.
La vio en las primeras veces que tuvo reuniones de apoderados las veces que
iba, la pasaba a ver, la vio bien, normal, como siempre. No la vio el segundo
semestre de 2007.
Prueba pericial.
La defensa rindió prueba pericial consistente en la declaración de
Verónica Florencia Díaz Muñoz, asistente social, quien manifiesta que el primer
contacto que tuvo fue con los padres de la imputada, con quien sostuvo
varias visitas para conocer la historia de vida de la imputada y en marzo de
este año la entrevistó a ella en el centro penitenciaria. María Eugenia es una
mujer de 41 años de edad, de profesión profesora, estudió en un instituto
profesional, trabajó en el colegio Coyancura, es la menor de un grupo familiar,
la menor y única mujer, su padre abogado, la madre nutricionista, inicialmente
formaba parte de una familia extensa, vivían con la abuela materna, se
independiza la familia cuando ella tenía 15 años, y se fueron a vivir en la
comuna de Las condes, de pequeña presentó anoxia, posteriormente
presentó síntomas como pérdida de conciencia, descontrol de esfínteres, inició
tratamiento neurológica porque le diagnosticaron epilepsia petit mal, estuvo
siendo tratada hasta los 12 años. Una profesora le diagnosticó retraso en el
desarrolla psicomotor, por eso la madre la incorporó a clases de baile. Ella
estuvo
bastante exigida, la madre estableció con ella un vínculo de
protección, la permanencia de ella en el colegio, estaba relacionada con el
lugar de trabajo de la madre, que siempre quiso tenerla cerca por si algo le
ocurría. Tuvo una relación normal con sus hermanos, muy querida por su
padre, que fue un motivo de felicidad, fue muy estudiosa, cuando se
embarazó, tuvo problemas, la obligó a suspender la carrera, la hija tuvo
problemas, cuidó a su hija, fue muy buena madre, muy preocupada, por estos
problemas de salud, problemas cardiacos, luego reinicia sus estudios y la
madre renuncia al trabajo, renuncia a su trabajo anticipadamente y se dedicó
a cuidar a su nieta. Mantuvo la relación de pareja durante 6 años, se separa
cuando el marido se titula. En la entrevista que sostuvo con la imputada, le
impresionó como una persona muy colaboradora, bastante veraz, tenía
conciencia del hecho se le estaba imputando, tenía una actitud de querer
reparar y sabía que cometió una falta. Concluye que la imputada puede ser
beneficiaria de la medida de libertad vigilada, principalmente porque ella
podría acceder a tratamiento psicológico que le permitirá acceder a un
tratamiento psicológico, que le permitirá lograr un mejor conocimiento de su
persona y tenga un comportamiento más adecuado, por otro lado, su
privación de libertad no le permite ejercer el rol materno, además el hecho de
poder estar en el medio libre, le permite incorporarse laboralmente, manifestó
el deseo de no seguir ejerciendo la docencia, tal vez trabajar en el negocio de
sus hermanos, lo que le permitirá financiarse ella, su hija y las medidas
reparatorias que se han propuesto, por otro lado, incorporarse al país, porque
estando presa no hace ninguna contribución social, se transforma una carga
para el Estado, es una persona que puede, con tratamiento, estar en el medio
libre. No encontró comportamientos erráticos en su vida normal ni peligrosa
para el medio ambiente.
Agregó que la red de apoyo social es muy adecuada, es una persona
que cuenta con mucho apoyo, padres tremendamente preocupados de ella,
apoyo de sus hermanos, y apoyo social de parte de sus compañeras de
trabajo y de los apoderados de los alumnos con los que se relacionó a lo largo
de su desempeño profesional. Es adecuada y preocupada por su hija, siempre
pendiente de ella. Debe ser objeto de psicoterapia, que entiende no se
puede realizar en reclusión. En lo principal, si ella es objeto de psicoterapia,
esto la va a cambiar en términos positivos, y eso redundaría en una mejora en
la calidad de las relaciones con su núcleo familiar. El encierro afecta de forma
negativa a su hija, la presencia de un miembro de la familia en situación de
cárcel es un elemento generador de stress a nivel familiar y eso se transforma
que las personas vayan haciendo enfermedades, y cuando están trabajando,
disminuyen su productividad. Es un factor negativo, en términos familiares.
Aclara que es asistente social con especialización en peritaje social, con
formación en salud mental y experiencia clínica. Una persona adecuada es
una persona que puede desarrollarse normalmente, establecer vínculos,
desarrollar trabajo, que puede tener relaciones de amistad y establecer
relaciones entre las personas. Tiene conocimiento de que ella se arrepintió de
la situación, que en términos futuros esperaba lo mejor para él y su familia. Tuvo
a la vista los antecedentes de la investigación, tuvo a la vista sus versiones
anteriores, esta posición la toma una vez que reconoció la falta. No recuerda
la fecha exacta pero tiene conocimiento que reconoció su participación al
equipo que trabaja con él. Trabajó dos años en el colegio Coyancura, una
compañera le ofreció trabajo en el colegio Santa Juliana en Recoleta.
Reconoció haber tenido una relación de amistad muy cercana con el
menor y haber estado esta situación que se encontraban en día viernes, en el
auto. Ese es el hecho conocida por ella. Lo cometido es una falta, no ahondó
en detalles de la relación que tuvo con el menor. El conocimiento que tiene, es
que hubo contacto, pero no relación sexual, propiamente tal. Se siente
arrepentida en términos de que una mujer adulta no puede estar involucrada
en esta situación con el menor. En el centro de reclusión ha sido muy
colaboradora con la situación de cárcel. Desea reparar el daño cometido,
tiene conocimiento que hay un acuerdo reparatorio, tiene que ver con
reparación económica. En el informe, está puesto cuando ella da los
antecedentes, da cuenta de su irreprochable conducta anterior, la
colaboración eficaz, la reparación económica, y además ser portadora de
una patología. Las personas tienen derecho a reparar, a arrepentirse y
enmendar los errores que cometen en la vida. No sabe la calidad que se
pueden hacer en confinamiento, no descarta que pueda realizarse terapia en
el centro de reclusión, no da lo mismo la situación en que se encuentre la
persona en psicoterapia y los profesionales que hagan psicoterapia. A la
conclusión a que arribó, es respecto de los hechos que ella investigó, en el
equipo, a veces trabajan en ciego, para no contaminarse, como profesional
tiene que ser capaz de mantener distancia, se trabaja en equipo, pero eso no
significa que todos estén averiguando lo mismo, ella va en el ámbito social.
Prueba documental.
Finalmente introdujo prueba documental, consistente en:
1.- Copia de Resolución dictada por el 3° Juzgado de Garantía de
Santiago donde se tienen por acompañados los comprobantes de depósitos
judiciales, de fecha 17 de julio de 2009.
2.- Copia de Resolución dictada por el 3° Juzgado de Garantía de
Santiago donde se tienen por acompañados los comprobantes de depósitos
judiciales, de fecha 22 de julio de 2009.
3.- Copia de comprobante de depósito judicial por $500.000 N° 8642854
de fecha 28 de mayo de2009.
4.- Presupuesto Clínica San José, Centro de Salud Mental.
DÉCIMO QUINTO: Agravantes y Atenuantes. Que este Tribunal estima
que perjudica a la acusada la calificante prevista en el artículo 368 del Código
Penal, puesto que, en concepto de este Tribunal, la imputada se encontraba a
la época de los hechos precisamente en una de las situaciones previstas en
dicha norma.
En efecto, la norma aludida se refiere a “autoridad pública, ministro de
un culto religioso, guardador, maestro, empleado o encargado por cualquier
título o causa de la educación, guarda, curación o cuidado del ofendido”
haciendo alusión a autoridades o personas que por su profesión, función u
oficio se encuentran especialmente abocados a dicha educación o cuidado.
El fundamento de esta agravante, como es sabido, descansa en el hecho de
encontrarse el autor en una posición más ventajosa para la ejecución del
delito, en razón de que existe aquel vínculo que lo une a la víctima, y que deja
a ésta en una situación de dependencia respecto de aquel. En el caso que
nos ocupa, el ofendido se encontraba efectivamente sujeto a la autoridad de
la acusada, quien no sólo era a la sazón su profesora, sino que también era la
profesora jefe de su curso y ejercía, además, autoridad general respecto del
profesorado, en su condición de jefa de la Unidad Técnico Pedagógica del
ciclo básico del Liceo.
Por otra parte, cabe descartar que en la especie se configure una
situación de responsabilidad puramente objetiva o derivada del cargo, como
alegó la defensa, ya que de los hechos tal cual han sido ventilados en el juicio
se desprende que la incubación e inicio de las conductas reprochadas lo fue
en el marco de las actividades escolares, y que sí se efectuó por parte de la
imputada un prevalimiento de su condición de docente para llevar a cabo
dichas conductas, y por otra parte se satisfacen los requerimientos subjetivos
de la calificante, concernientes al conocimiento de su situación ventajosa y al
querer hacer uso de ella de un modo sistemático. Dichas circunstancias
impiden, al mismo tiempo, estimar que en los hechos se configuró una relación
paritaria entre ofendido y ofensora, dotada de horizontalidad o trato
igualitario, pues aquello supondría la posibilidad de adherir y compartir
decisiones por parte de la víctima, cuestión que el Derecho descarta en el tipo
penal que nos ocupa.
Que en concepto de estos jueces, favorece a la acusada la
circunstancia atenuante prevista en el artículo 11 N°1 en relación al artículo 10
N°1 del Código Penal alegada por su defensa, esto es que en la comisión de
los hechos, actuó con su imputabilidad disminuida, al haberse acreditado en
el juicio que si bien la imputada reconoce racionalmente las normas, tal
circunstancia se ve mermada por la dificultad en la percepción de la realidad,
de manera que le es más difícil hacer que este reconocimiento de lo
normativo sea internalizado de una manera que su conducta vaya acorde.
Ciertamente no le corresponde al Tribunal resolver una controversia
científica respecto de los hallazgos clínicos informados por diversos peritos, o
dirimir si la psicología y la psiquiatría son ciencias o disciplinas auxiliares o
complementarias, o si a alguna de ellas le compete la palabra final o exclusiva
respecto del estado mental de un imputado, con interés jurídico penal. En
cambio de todo aquello, lo que sí le corresponde a los jueces es discernir si, en
un caso concreto, atendida la multiplicidad de evidencias y circunstancias
particulares que dibujan su contorno, el estado mental de un imputado
aparece relevante a los ojos del Derecho para efectuar la adjudicación de
responsabilidad penal por su conducta.
En este orden de ideas, no hemos perdido de vista que la perito
psiquiatra del Servicio Médico Legal, informando específicamente respecto de
lo que se ha denominado “responsabilidad penal” de la acusada, ha
señalado que ésta se encuentra plenamente conservada. Aquella opinión
profesional, sin perjuicio de que no obliga al Tribunal –el que debe darle la
ponderación que corresponde a un informe pericial, de un modo sistemático
con el resto de las evidencias vertidas en el juicio—se encuentra contradicha,
según hemos visto, por el dictamen de otros dos peritos, señor Giorgio Agostini
Bicentini y señorita Jazmín Kassis Satorres, ambos psicólogos, quienes se
encuentran perfectamente acordes en que los hechos tuvieron lugar durante
un episodio psicótico, provocado tanto por una crisis aguda de la enfermedad
psiquiátrica que padece, cual es el trastorno de personalidad o personalidad
limítrofe o “border line”, que actúa en concomitancia o en co morbilidad, con
una enfermedad médica, como es la epilepsia, causante también de efectos
psicológicos, cuyos síntomas fueron detectados por ambos especialistas en los
exámenes clínicos y en tests proyectivos, diagnóstico este último que se
corresponde con los antecedentes de la anamnesis aportada por la
examinada, aunque la perito Kassis lo presentó únicamente como hipótesis
comprensiva, sujeta a ratificación de neurólogo o neuropsiquiatra, pero que
resultó corroborado por profesionales de dicha especialidad, que forman
parte del equipo pericial del señor Agostini. En fin, contrastado todo aquello
con los antecedentes propios del caso –acreditados con el resto de las
evidencias de cargo—que configuran una suerte de enamoramiento irracional
de la acusada respecto del ofendido, con actitudes celópatas incluidas,
configuran un cuadro que adquiere mejor explicación al abrigo de las dos
opiniones periciales que se vienen comentando, antes que con aquella que se
desestima.
En efecto, se sentía primero enamorada y luego obsesionada por un
adolescente de 12 años, hasta el punto de no considerar tal hecho objetivo y
representárselo subjetivamente como un igual; y según lo manifestado por
testigos se puso extensiones en el pelo y cambió su vestuario por uno juvenil—
casi infantil, dijo una de sus colegas—en el convencimiento que de esa forma
lograría verse en igualdad etaria con el adolescente; gritaba y amenazaba en
momentos de enojo; ingresaba a sacar al menor de clases cada vez que tenía
deseos de hacerlo; realizaba otros comportamientos indicativos de una
relación amorosa clandestina, en conocimiento de que estaba siendo
observada por la comunidad escolar; inventó un embarazo y amenazó con
suicidarse para mantener vigente la relación; envió al adolescente, sin ninguna
precaución, innumerables mensajes alusivos de lo que ocurría, cuando éste
quiso terminar la relación; evidenció a terceros sus celos incontrolables, hasta
el punto de humillar a la enamorada del adolescente frente a todos sus
compañeros
y
por
último,
cabe
recordar
todas
las
insustentables
explicaciones que entregó con la pretensión de ocultar los hechos, como que
se le subió la falda y por eso el adolescente sabía de los lunares que hay en sus
piernas; que el adolescente le robó el chip de su celular y se mandó auto
mensajes, entre otros hechos, todos los cuales hacen evidente a estos jueces,
la ausencia de un razonamiento bien conservado.
Acreditada dicha circunstancia de modo razonablemente consistente
con el conjunto de evidencias disponibles en el juicio, creen estos jueces que
la prudencia indica a lo menos mitigar el reproche penal dirigido a la
acusada, desde que dicho reproche recae siempre en quien ejecuta una
conducta ilícita pudiendo haber obrado conforme al Derecho, por lo que ese
juicio de reproche se efectúa bajo el presupuesto de que los destinatarios de
la conminación penal son sujetos dotados de capacidades cognitivas
adecuadas para comprender el mandato legal, y además poseedores de la
capacidad de ajustar su conducta a dicho imperativo, condiciones ambas
que en la acusada comparecieron de un modo imperfecto, según la referida
evidencia pericial.
Con todo, para efectos de determinar la pena en su oportunidad, la
referida circunstancia atenuante será considerada en su efecto general, y no
en aquel efecto especial que se establece en el artículo 73 del Código Penal,
como ha solicitado la defensa, pues esta norma al hablar de “mayor número
de requisitos” se refiere exclusivamente a las eximentes que los tienen
enumerados expresamente, como la legítima defensa, y no a una situación
indivisible del punto de vista de los mismos, como la que aquí se ha acogido.
Que en lo referente a la circunstancia atenuante de colaboración
sustancial al esclarecimiento de los hechos alegada por la defensa, prevista
en el número 9 del artículo 11 del Código Penal, será desestimada ya que la
acusada negó sistemáticamente los hechos cometidos en perjuicio del menor,
que configuran el delito materia de la acusación, en torno al cual intentó
persistentemente echar un manto de dudas y oscuridad. Un examen
desapasionado de los elementos probatorios rendidos a lo largo del juicio,
lleva a concluir que los dichos de la imputada nada aportan al
esclarecimiento de los hechos ni de su participación, y ambos extremos
resultaron acreditados con la declaración de la víctima y los demás testigos y
peritos aportados por el órgano acusador, de un modo que satisface los
requerimientos de convicción razonable que establece nuestra legislación
procesal penal. No se divisan, como argumentó la defensa, diferencias
menores o accesorias entre lo declarado por la acusada y los hechos que se
han dado por establecidos con las pruebas de cargo, sino diferencias
sustanciales que impiden apreciar en su declaración un propósito de
colaborar en el esclarecimiento de los hechos.
Igualmente, respecto de la segunda atenuante invocada, prevista en el
N° 7 del artículo 11 del Código Penal, en concepto de estos jueces procederá
su rechazo puesto que, en esta materia, se concuerda con lo alegado por
parte del Ministerio Público y querellante, en orden a lo exiguo y
extemporáneo de las consignaciones efectuadas por la acusada. En efecto,
la mitigante en estudio si bien exige ponderar el “esfuerzo” realizado para
reparar las consecuencias dañinas del acto en relación a las facultades
económicas del hechor, dicho esfuerzo no puede verse del todo desvinculado
de la gravedad de la ofensa irrogada. En ese aspecto, ha sido convicción del
estos jueces que dada la entidad y proyecciones del daño causado, la
inculpada ha podido hacer un esfuerzo de contribución económica que vaya
más allá de lo que permiten sus ingresos ordinarios, y pudo haberlos efectuado
en tiempo anterior a los realizados, que dan cuenta de consignaciones hechas
a un mes y medio de iniciada la audiencia del presente juicio, lo que parece
más un intento tardío de configurar una atenuante, que un intento honesto por
procurar celosamente repara el mal causado o sus ulteriores consecuencias,
de modo que la petición que en este sentido invocara la defensa deberá ser
desestimada.
Que en lo referente a la circunstancia atenuante de irreprochable
conducta anterior de la imputada, además de serle reconocida por el propio
Ministerio Público y la querellante, ella se encuentra suficientemente
acreditada con el extracto de filiación y antecedentes de la acusada, sin
anotaciones ajenas a esta causa, por lo que procede acoger esta atenuante
de responsabilidad en su favor.
DÉCIMO SEXTO: Regulación de la pena. Que el delito de abuso sexual
cometido en la contra de una persona menor de catorce años se encuentra
sancionado, en el artículo 366 bis del Código Penal, con la pena de presidio
menor en su grado máximo, siendo éste el marco penal a partir del cual ha de
procederse a la individualización de la pena.
Sin embargo, dicho marco penal ha de sufrir la variación que resulta de
aplicar en este caso la calificante especial prevista en el artículo 368 del
Código Penal, conforme a la cual se deberá imponer a la responsable la pena
señalada al delito con exclusión de su grado mínimo, de lo que resulta un
marco penal compuesto únicamente por el presidio mayor en su grado
mínimo.
Ahora bien, por tratarse de delitos reiterados de una misma especie, y
en atención a lo establecido en el inciso segundo del artículo 351 del Código
Procesal Penal, procede aplicar la pena prevista para el delito más grave–ya
determinada en presidio mayor en su grado mínimo, según se expresó—
aumentada en un grado, de modo que la sanción a imponer resulta la de
presidio mayor en su grado medio.
Pues bien, hechos los aumentos anteriores, destinados a determinar el
marco penal, y aplicadas ya las normas concursales del caso, procede dar
aplicación a la normativa prevista en los artículos 62 y siguientes del Código
Penal. En este nivel de análisis, ha de considerarse que favorecen a la
acusada dos circunstancias atenuantes generales –la de irreprochable
conducta anterior y la de imputabilidad disminuida—sin que le perjudiquen
agravantes de este tipo, por lo que, de conformidad a lo dispuesto en el
artículo 67 del referido Código, el Tribunal podrá imponer la pena inferior en
uno o dos grados, según sea el número y entidad de dichas circunstancias.
Para la mayoría del Tribunal, efectuando la ponderación que mandata
la norma citada, resulta adecuado al caso efectuar dicha rebaja en dos
grados, tomando en consideración no el número, sino la entidad de las
circunstancias atenuantes que comparecen a favor de la sentenciada.
Por una parte, la circunstancia atenuante de irreprochable conducta
anterior se configura, en la especie, con mayor intensidad que en otros casos.
La acusada es una mujer de 41 años de edad. Aquel no es un dato que por sí
sólo permita graduar el mérito de la conducta pretérita de la imputada, pero
al menos es un factor que ha de tomarse en consideración para dicha
ponderación. Es innumerable la jurisprudencia de nuestros Tribunales que le
otorga valor al rango etario de los imputados, incluso para decidir si, en un
caso particular, se hace procedente la calificación de dicha atenuante. El
razonamiento transcurre, como es sabido, en que no da lo mismo que una
persona se haya mantenido fiel a los mandatos del Derecho durante 20, 40 ó
60 años de vida. Sin perjuicio del antecedente que se acaba de anotar, el
mérito de la conducta anterior de la sentenciada fluye de los demás
antecedentes incorporados al juicio, en particular de la propia prueba de
cargo. En efecto, los testigos que depusieron en la audiencia, pertenecientes a
la comunidad escolar en que ella se desempeñó, fueron contestes en señalar
que su desempeño pretérito fue siempre sobresaliente, destacando por sobre
la media en lo concerniente a preocupación y atención del alumnado,
méritos que le valieron desempeñarse como profesora jefa de la Unidad
Técnico Pedagógica del ciclo básico de aquel Liceo.
Por otra parte, la circunstancia atenuante de imputabilidad disminuida
que también la favorece, no sólo se desprenden de las pruebas de cargo y de
descargo rendidas sobre el fondo de la controversia, sino que aparece
ratificado, además, en el informe presentencial practicado por Gendarmería
de Chile a la sentenciada, e incorporado al juicio en la audiencia prevista en
el artículo 343 del Código Procesal Penal. De ese cúmulo de antecedentes
fluye que no sólo las conductas objeto del reproche penal que aquí se ha
hecho, han sido desplegadas por la acusada en el marco de una evidente
anomalía mental o psicológica, sino también aquella permite al menos
explicar su errática conducta posterior a los eventos de cargo, pues su
capacidad de controlar su conducta e imprimirle una orientación arreglada a
los mandatos y prohibiciones del ordenamiento ha estado deteriorada. Pues
bien, la circunstancia atenuante que se viene comentando merece, para los
jueces de mayoría, una entidad también superior a otras que pueden
comparecer
a
favor
de
todo
acusado,
contempladas
en
nuestro
ordenamiento penal, ya que la atenuante de imputabilidad disminuida tiene
la particularidad de que incide directamente a nivel de la culpabilidad, que
constituye el fundamento, medida y límite de la sanción penal en un estado
democrático de derecho, lo que mueve a estimar su concurrencia en una
entidad acorde a ese delicado presupuesto.
Sin perjuicio de lo dispuesto en la disposición legal citada, al imponer la
sanción a la acusada, el Tribunal lo hará procurando comprender en ella los
distintos desvalores involucrados en este caso, considerando para ello tanto la
importancia del bien jurídico afectado, como la entidad del ataque, todo ello
en atención al principio de proporcionalidad de las penas, acorde con el cual
la gravedad de la reacción penal debe guardar concordancia con la
gravedad del hecho delictivo que se castiga, motivo por el cual el grado de
presidio menor en su grado máximo al que se arriba mediante la rebaja que se
ha decidido adoptar, se impondrá en su extremo superior.
DÉCIMO SEPTIMO: Beneficios alternativos. Que la mayoría del Tribunal ha
estimado que, en concordancia con la regulación de pena establecida en el
considerando anterior, resulta procedente conceder a la sentenciada el
beneficio de la Libertad Vigilada del Adulto, contemplado en el artículo 15 de
la Ley 18.216.
En efecto, no obstante que el informe presentencial practicado a la
acusada resultó ser negativo, es un hecho pacífico en la doctrina y la
jurisprudencia de nuestros Tribunales que aquel informe constituye sólo un
antecedente más, que no obliga a los jueces de la instancia a atenerse a sus
conclusiones, al que deben darle la ponderación que corresponde a una
opinión pericial o técnica, dentro del contexto de las demás probanzas
rendidas por los intervinientes, especialmente en este caso la prueba
documental, testimonial y pericial incorporada por la defensa en la audiencia
prevista en el inciso final del artículo 343 del Código Procesal Penal, pero
también los demás antecedentes incorporados por los intervinientes durante
las diversas audiencias del juicio oral.
En ese orden de ideas, un examen atento de dicho informe revela que
el motivo fundamental para no sugerir la incorporación de la sentenciada a
este beneficio, consiste en que “la necesidad de intervención profesional
sobrepasa la naturaleza y objetivos del sistema de Libertad Vigilada del Adulto,
debido a que se advertirían antecedentes en la evaluada que requerirían una
intervención en el área de Salud Mental”. Pues bien, aquel reconocimiento de
que la intervención de un Delegado de Libertad Vigilada, por sí solo, resultaría
impotente para proveer al objetivo de Reinserción Social –habida cuenta de la
necesidad de intervenir en su Salud Mental—no autoriza a concluir que, en
consecuencia, debe quedar en régimen de encierro, ya que semejante
razonamiento conlleva la aplicación de un criterio peligrosista que no se
aviene con nuestro sistema de justicia penal.
Además, resultaría una paradoja insostenible que el estado deficiente
de salud mental de la sentenciada, por una parte le haya valido un menor
reproche penal, concurriendo a una rebaja de la pena; y por otra, le jugara en
contra, determinando el cumplimiento de esa pena bajo régimen de privación
de libertad.
De las exigencias contenidas en el artículo 15 de la ley especial, las
contenidas en las letras a) y b) no requieren mayores comentarios, pues se
cumplen plenamente. Las exigencias de la letra c) de dicha disposición,
merecen mayor justificación. En ellas se refiere a informes de antecedentes
sociales y características de personalidad de la sentenciada. Con ese
propósito se cuenta con la opinión favorable de la perito asistente social
presentada por la defensa, doña Verónica Florencia Díaz Muñoz quien en el
marco de su pericia tomó contacto con los padres de la imputada, con quien
sostuvo varias visitas para conocer la historia de vida de la imputada y en
marzo de este año la entrevistó a ella en el centro penitenciario. La profesional
aseguró que la sentenciada cuenta con una adecuada red de apoyo familiar,
pues es la menor de un grupo familiar, la menor y única mujer, su padre
abogado, la madre nutricionista y sus hermanos profesionales. La red de
apoyo social es muy adecuada, es una persona que cuenta con mucho
apoyo, padres tremendamente preocupados de ella, apoyo de sus hermanos,
y apoyo social de parte de sus compañeras de trabajo y de los apoderados
de los alumnos con los que se relacionó a lo largo de su desempeño
profesional. Estos antecedentes proporcionados por la perito, concuerdan con
los demás incorporados al juicio. En la secuela del mismo se evidenció, por
parte del Tribunal, el apoyo de sus padres y hermano, todos los que prestaron
declaración durante la audiencia. Es también un hecho indiscutido que la
sentenciada se trata de una mujer profesional, de amplia trayectoria y
habitualidad laboral, que posee además los recursos para desempeñar
labores productivas en otras áreas, pues manifestó a la perito el deseo de no
seguir ejerciendo la docencia, y tal vez trabajar en el negocio de sus
hermanos, lo que le permitirá financiarse ella y su hija.
Por otra parte, lo relativo a la conducta anterior evidenciada por la
sentenciada, ha sido ya destacado en su contexto y antecedentes, en el
considerando en que se regula pena, por lo que se evitará efectuar dichas
observaciones nuevamente en esta parte. Finalmente, lo concerniente a su
conducta posterior al hecho punible y la naturaleza, modalidades y móviles
determinantes del delito, nos mueven al punto de inicio. En ellos se ha
evidenciado el déficit mental que alude el informe presentencial, en
concordancia con las demás pruebas periciales y testimoniales valoradas en
su oportunidad. Acreditada la concurrencia plena de los demás requisitos
legales del artículo 15, en sus letras a), b) y c) se trata de discernir, en definitiva,
si su alteración mental es obstáculo para este beneficio. Más arriba ya
respondimos de manera negativa a esta interrogante, pues resultaría
paradojal. Por lo demás, los antecedentes sociales y familiares de la
sentenciada que se vienen comentando, sumado a la prueba documental
incorporada por la defensa en la audiencia del artículo 343 del Código
Procesal Penal, llevan a estos jueces a estimar, fundadamente, que la
intervención profesional que requiere la sentenciada a nivel de su salud
mental, invocado como necesario en el informe presentencial, sí se llevará a
efecto en el medio libre, y que la sentenciada cuenta con los recursos, el
apoyo y las condiciones para que ello efectivamente se lleve a cabo, por lo
que dicho requerimiento no obsta al otorgamiento del beneficio.
Finalmente cabe tener presente que la consagración en la ley de
beneficios alternativos al cumplimiento de una sanción privativa de libertad,
obedece al hecho de que el legislador ha querido privilegiar el otorgamiento
de tales beneficios, es decir, la ley prefiere que, concurriendo las exigencias
pertinentes, los tribunales opten por la posibilidad del cumplimiento alternativo
a las penas de privación de libertad y, por lo tanto, para restringirlos se han de
tener muy buenas razones, las que a juicio del Tribunal en el caso de la especie
no comparecen.
Por estas consideraciones y lo dispuesto en los artículos 1°, 11 N°6, 14
N°1, 15 N°1, 18, 24, 26, 29, 50, 67, 69, 366 bis, 366 ter y 372 del Código Penal; y
artículos 37, 47, 108, 295, 296, 297, 314, 315, 324, 325, 340, 341, 342, 344, 346, 348
y 351 del Código Procesal Penal, y ley 18.216, SE DECLARA:
I.- Que se CONDENA a Maria Eugenia Darrigrande Moreno, cédula
nacional de identidad Nº 9.151.653-5, ya individualizada, a la pena de CINCO
AÑOS de presidio menor en su grado máximo, accesorias de inhabilitación
absoluta perpetua para derechos políticos y la de inhabilitación absoluta para
cargos y oficios públicos durante el tiempo de la condena y al pago de las
costas del juicio, por su responsabilidad de autora del delito de abuso sexual
reiterado, previsto en el artículo 366 bis en relación con el artículo 366 ter,
ambos del Código Penal, efectuados en la persona del menor de iniciales
S.A.J.S, y perpetrados entre el mes de septiembre y el 23 de noviembre del año
2007, al interior del Establecimiento Educacional Liceo Polivalente Santa
Juliana, ubicado en Av. México 755, comuna de Recoleta, y en el
departamento ubicado en calle Libertad N° 1290, Escala K Dpto. 501, de la
comuna de Santiago, de esta ciudad.
II.- Que, conforme a lo razonado en el considerando décimo séptimo
de esta sentencia, se concede a Maria Eugenia Darrigrande Moreno el
beneficio de la Libertad Vigilada, previsto en el artículo 15 de la ley N° 18.216,
debiendo quedar sujeta por el término de CINCO AÑOS al tratamiento y
observación del delegado de Libertad Vigilada que señale Gendarmería de
Chile, y cumplir con las demás condiciones establecidas en el artículo 17 de la
mencionada ley. Del mismo modo, el beneficio que se le otorga queda sujeto
a la condición de que la sentenciada no ingrese ni acceda a las
inmediaciones del hogar o del establecimiento educacional del ofendido, en
los términos previstos en el artículo 30 de la referida ley.
Si por cualquier motivo el beneficio que se le otorga le fuere revocado,
deberá dar cumplimiento efectivo a la pena corporal impuesta, la que se le
contará desde que se presente o sea habida para ese efecto, y le servirá de
abono los trescientos noventa y siete días que se mantuvo privada de libertad
por esta causa, entre el 11de agosto de 2008 y el 8 de julio de 2009, y entre el
15 de julio de 2009 hasta la presente fecha, según se desprende del certificado
emitido por la señora Jefe de la Unidad de Administración de Causas del 3°
Juzgado de Garantía de Santiago.
III.- Que, por tratarse de un delito contemplado en el párrafo quinto del
Libro II del Título VII del Código Penal, y de acuerdo a lo previsto en el artículo
372 del referido Código, se impone a la acusada la pena accesoria de
sujeción a la vigilancia de la autoridad durante los diez años siguientes al
cumplimiento de la pena principal. Esta sujeción consistirá en informar a
Carabineros cada tres meses su domicilio actual. El incumplimiento de esta
obligación configurará la conducta establecida en el artículo 496 N° 1 del
Código Penal. Que, en el mismo sentido, se impone a la acusada la pena
accesoria de inhabilitación absoluta temporal para cargos, oficios o
profesiones ejercidos en ámbitos educacionales o que involucren una relación
directa y habitual con personas menores de edad, por el mismo lapso de
tiempo.
Devuélvase al Ministerio Público y la defensa la prueba documental y
material acompañada, según el caso, una vez ejecutoriada la presente
sentencia.
Devuélvanse los depósitos de que dan cuenta las resoluciones de fecha
17 y 22 de julio del presente año, libradas en causa Rit 5109-2008 del 3°
Juzgado de Garantía de Santiago.
Ofíciese, en su oportunidad, a los organismos que corresponda para
comunicar lo resuelto y remítanse los antecedentes necesarios a la señora Juez
de Garantía de esta causa para la ejecución y cumplimiento de la pena.
Dése cumplimiento con lo dispuesto en el artículo 17 de la ley 19.970
que crea el sistema nacional de registros de ADN.
Se previene que el Juez Sr. Rafael Andrade Díaz, concurre a la decisión
de condena, pero estimó del caso aplicar a la condenada Maria Eugenia
Darrigrande Moreno, una pena de seis años de Presidio Mayor en su Grado
Mínimo, sin derechos a beneficios de cumplimiento alternativo de dicha pena
corporal, por su responsabilidad de autora del Delito Reiterado de Abuso
Sexual previsto en el artículo 366 bis del Código Penal, puesto que en opinión
de quien previene, perjudicándole la agravante del artículo 368 del Código
Penal, que excluye el grado mínimo de la pena asignada al delito por la
norma indicada, y considerando la reiteración de conductas ilícitas y que
beneficia a la condenada dos atenuantes, aquella prevista en el artículo 11 N°
6 del Código Penal, de irreprochable conducta penal pretérita y la de
imputabilidad penal disminuida, prevista en el artículo 11 N ° 1 del mismo
Código, en relación con la eximente del artículo 10 N ° 1, de dicho Código, y
en tal virtud, fue de opinión de rebajar la pena que autoriza el artículo 67 del
Código Punitivo, sólo en un grado y aplicar el quantum de pena ya referido.
REGÍSTRESE.
RUC N° 0700960901-0
RIT N° 103-2009
Código Delito: (623)
Redactada por el juez don Carlos Iturra Lizana y la prevención por su
autor.
PRONUNCIADA POR LA SALA DEL SEGUNDO TRIBUNAL DE JUICIO ORAL EN LO
PENAL DE SANTIAGO INTEGRADA POR LOS JUECES DON RAFAEL ANDRADE DÍAZ,
DOÑA MARÍA LUISA RIESCO LARRAÍN Y DON CARLOS ITURRA LIZANA.
Confecciono La presente acta, don Mario Milton Godoy Ortega, Administrativo Primero
Titular, dejando constancia que es solo un resumen de lo obrado en audiencia, el cual se
encuentra integro en:
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